CIENCIAS SOCIALES –
GEOGRAFIA ARGENTINA
FECHA: JUEVES 13 DE MAYO
TEMA: PRIMERAS CORRIENTES COLONIZADORAS DE ARGENTINA
Hacia 1526, Sebastián Gaboto, llegaba a las costas del sur
de América con el encargo recibido de la corona española
de continuar la exploración hacia el oeste atravesando el
estrecho descubierto por Magallanes en busca de las islas
de las Especerías. Pero el navegante veneciano, ya Piloto
Mayor del Reino, al llegar a estas costas, impactado por
relatos sobre una tierra llena de riquezas, a las que se
llegaba ingresando por la boca de aquel "mar dulce"
descubierto por Solís –en realidad el ancho río al que se
conocería desde entonces como de la Plata– decide
internarse en él y explorándolo descubre la embocadura de
otro: el Paraná. Navega por éste hacia el norte hasta que al
llegar a la confluencia de un río más pequeño, el Carcarañá,
halla en esas costas el lugar apto para hacer pie en tierra
firme resolviendo desembarcar y construir allí un fuerte al
que llamó Sancti Spíritu, que sería el primer asentamiento
español en tierra argentina.
Luego de un año de exploraciones por toda la zona sin encontrar la soñada Sierra de la
Plata, y acosados por los ataques de los indios, los
pobladores resuelven abandonar el fuerte y regresar a
España.
Con los relatos llevados por aquellos exploradores a su
regreso, estos territorios cobrarían suma importancia para
la corona española, no solo por fabulosas riquezas que
poseerían estas tierras, sino por la necesidad de
ocuparlas para oponer una valla a los portugueses, que
no cesaban de avanzar sobre ellos, a pesar de que el
Tratado de Tordesillas se los otorgaba a España.
Los colonizadores españoles acometieron entonces la
tarea de explorar, tomar posesión del territorio y
establecer poblaciones en el actual territorio argentino en
los sitios que consideraron estratégicos. Avanzaron desde diferentes lugares de partida tomando
tres rumbos bien definidos por los que llevaron poblamiento estable a sendas franjas del territorio.
CORRIENTE COLONIZADORA DEL ESTE
La primera corriente de población llegó directamente desde España e ingresó por el Río de
la Plata siguiendo los pasos de Gaboto. Pedro de Mendoza fue el adelantado que dirigió esta
populosa expedición, que contaba con entre mil doscientos y mil quinientos integrantes. Llegaron
a las costas del Plata en febrero de 1536
e inmediatamente, allí mismo, Mendoza fundó un fuerte
que llamó Santa María de los Buenos Aires. Sin
embargo, el entusiasmo inicial que alentaba a esta
empresa colonizadora se perdería rápidamente, pues no
les fue fácil hallar alimentos para tantos hombres como
los que habían venido. Asimismo, las relaciones con los
nativos que en un principio fueron buenas, se fueron
deteriorando, y los indígenas terminaron sitiando y
quemando la fortaleza, poniendo en emergencia la
situación de los colonizadores.
Abatido por las circunstancias, Mendoza envió hacia el norte un contingente en busca de
provisiones. Este intento colonizador que estaba a punto de fracasar va a dar un giro imprevisto
cuando el 15 de agosto de 1537, antes de regresar a Buenos Aires, uno de los exploradores
españoles puso las bases de un fuerte al que llamó Nuestra Señora de la Asunción por la festividad
religiosa del día. Cuatro años más tarde, en 1541, Domingo Martínez de Irala, la haría oficialmente
ciudad instituyendo en ella el primer cabildo en estas tierras. Esta fundación consolidó el dominio
español en el Río de la Plata; los sobrevivientes de la fortaleza de Buenos Aires se establecieron
allí, formando una población estable donde de la unión de los españoles con mujeres naturales
nacieron los primeros criollos de la zona.
El viejo anhelo de establecer una población en la
entrada del Río de la Plata no había desaparecido, es
por ello que se encargó a Juan de Garay la fundación
de una ciudad en el camino hacia la boca del Plata.
Nació así, la ciudad de Santa Fe sobre la margen
derecha del río Paraná, junto al río San Javier, en el
lugar llamado Cayastá, el 15 de noviembre de 1573.
Garay dejó allí un grupo de criollos como sus primeros
pobladores. Años más tarde, la ciudad fue trasladada
más al sur, rebautizándola con el nombre de Santa Fe
de la Vera Cruz.
Siete años más tarde, algunos pobladores asunceños
responderían al ofrecimiento de Garay de asentarse en
el mismo lugar donde Mendoza había establecido el
puerto de Buenos Aires. Viajaron desde Asunción con
víveres, herramientas de labranza, semillas, armas y
ganado, y el 11 de junio de 1580 Juan de Garay declaró
fundada la ciudad de la Trinidad y Puerto de Santa María de los Buenos Aires y designó a los
miembros del cabildo.
La segunda corriente colonizadora tuvo como punto de partida el Virreinato del Perú, y su
propósito fue avanzar hasta la desembocadura del Río de la Plata.
La primera expedición que ingresó por el norte logró llegar hasta el viejo fuerte Sancti Spíritu
fundado por Gaboto, pero un motín de los soldados puso fin a la empresa colonizadora y regresaron
al Perú. Aunque esta expedición terminó en fracaso,
el largo camino recorrido por los sobrevivientes
proporcionó valiosos datos que fueron aprovechados
a su regreso por las autoridades.
CORRIENTE COLONIZADORA DEL NORTE
En 1549, con precisas instrucciones de fundar una
ciudad, Juan Nuñez del Prado salió de Potosí, con
apenas cien hombres. Un año más tarde, en las
cercanías de la actual Tucumán, fundó una población
a la cual llamó con el nombre de El Barco, en
recuerdo de El Barco de Avila, en España. Esta ciudad será trasladada dos veces: la primera vez
fue para evitar problemas de jurisdicción territorial con otros adelantados; y la segunda, en 1552,
fue a causa de la constante hostilidad de los indios sobre la población. Sin embargo, esta no sería
la última vez: en 1553, Francisco de Aguirre, proveniente de Chile, trasladó a la ciudad de El Barco
un poco más al norte y le dio el nombre de Santiago del Estero, tal como se la conoce en la
actualidad, constituyendo la más antigua de las ciudades argentinas. Esta zona del Tucumán, de
gran extensión puesto que abarcaba todo el actual noroeste argentino, se transformó en una región
de encuentro de las expediciones provenientes de Lima, de Asunción y del Río de la Plata.
Resultaba por ello de suma importancia la fundación de ciudades allí, que sirvieran de enlace entre
tan distantes regiones. Con este objetivo se erigen dos nuevas ciudades: San Miguel de Tucumán
y Nueva de Tierra de Promisión, en 1565, y Córdoba de la Nueva Andalucía, en 1573.
El proceso fundacional no se detuvo allí, en 1582 se funda San Felipe de Lerma, hoy Salta; en
1591, la denominada Todos los Santos de la Nueva Rioja, nombre original de la actual ciudad de
la Rioja; y un año después en el Valle de Jujuy se funda la actual ciudad homónima, que bautizada
en su creación como San Salvador de Velazco.
CORRIENTE COLONIZADORA DEL OESTE
Con este plan partió una expedición con 38 hombres en 1561 liderada por Almagro y Jufré.
Atravesaron la cordillera de los Andes y tras un mes de caravana llegaron los colonizadores al valle
de Huentota y fundaron Mendoza del Nuevo Valle de la Rioja. Al año siguiente, Juan Jufré la hizo
trasladar a un sitio más adecuado para la población.
El mismo Jufré, en 1562, fundó la ciudad de San Juan de la Frontera, cuyo nombre se debe
su patrono San Juan Bautista. Posteriormente, el río San Juan arrasó la ciudad y la misma fue
trasladada al sur de su primitiva ubicación.
En agosto de 1594 nace la ciudad de San Luis de Loyola, aunque luego se le cambiaría su
denominación por la de San Luis de la Punta de los Venados. De ahí el nombre de “puntanos” con
que se conoce a los habitantes de la actual provincia.
Debe hacerse notar que al producirse la Revolución de 1810, al amparo de estas ciudades
originarias y sus radios de influencia, se formaron las primeras provincias argentinas, tomando de
aquellas sus nombres.
ACTIVIDADES:
1- Lee el texto e indica:
- ¿Por qué los españoles buscaron conquistar estos territorios?
- Origen de cada corriente colonizadora. Ciudades que se fundaron.