UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE SANTO DOMINGO
(UASD)
PRESENTACION
Sustentantes
Ana Ramírez ........... CD5292
Trabajo:
Familia 5.1
Asignatura:
Enfermeria En Salud Escolar
Profesor/a:
Sixta Bello Manzanillo
Cuestionario Ampliado
Regla Universal de la Crianza
La regla universal de la crianza, según el Dr. José Dunker, establece que los niños deben ser
criados en un entorno que equilibre amor y límites. Esto significa que, aunque el afecto
incondicional es fundamental para el desarrollo emocional del niño, también es crucial
establecer normas claras y consistentes que guíen su comportamiento. Este equilibrio ayuda a
los niños a sentirse seguros y valorados, lo que les permite explorar el mundo con confianza y
aprender de sus experiencias.
Además, esta regla enfatiza la importancia de la comunicación efectiva entre padres e hijos. Los
padres deben ser capaces de expresar sus expectativas y las razones detrás de las reglas
establecidas. Al hacerlo, no solo se fomenta un ambiente de respeto mutuo, sino que también
se enseña a los niños a comprender la importancia de las normas sociales y cómo estas les
benefician en su vida cotidiana. En resumen, la crianza efectiva se basa en una relación sólida
que combina amor y disciplina.
Excepción a la Regla Universal de la Crianza
La única excepción a la regla universal de la crianza es cuando hay situaciones de abuso o
negligencia. En estos casos, la prioridad debe ser siempre la seguridad y el bienestar del niño.
Cuando un niño se encuentra en un entorno donde su integridad física o emocional está en
riesgo, es fundamental intervenir inmediatamente, ya sea buscando ayuda profesional o
denunciando la situación ante las autoridades pertinentes.
Esta excepción subraya la importancia de reconocer que no todos los entornos familiares son
saludables o seguros. Los padres deben estar dispuestos a buscar apoyo externo si sienten que
no pueden proporcionar un ambiente seguro para sus hijos. La intervención temprana puede
marcar una gran diferencia en el desarrollo y bienestar del niño, asegurando que reciba la
protección y atención que necesita para crecer adecuadamente.
Regla por Parte
• Parte 1: Proveer amor incondicional es esencial para el desarrollo emocional del niño.
Este amor debe ser constante y no depender del comportamiento del niño; es decir, los
padres deben demostrar afecto incluso cuando el niño comete errores. Este tipo de
amor crea un sentido de pertenencia y seguridad en el niño, lo cual es fundamental
para su autoestima y confianza.
• Parte 2: Establecer límites claros y consistentes es igualmente importante. Los niños
necesitan entender las expectativas y las consecuencias de sus acciones para
desarrollar un sentido de responsabilidad. Las reglas deben ser justas y aplicadas con
firmeza, pero también con comprensión. Esto les ayuda a aprender sobre las normas
sociales y cómo sus acciones impactan a otros.
• Parte 3: Fomentar la independencia y responsabilidad implica darles oportunidades
para tomar decisiones adecuadas a su edad. Los padres pueden permitir que los niños
participen en tareas del hogar o tomen decisiones sobre actividades extracurriculares.
Esto no solo les enseña habilidades prácticas, sino que también les brinda confianza en
su capacidad para manejar situaciones por sí mismos.
Parte 4: Mantener una comunicación abierta y honesta significa crear un espacio donde los
hijos se sientan cómodos compartiendo sus pensamientos y sentimientos sin temor a
represalias. Los padres deben escuchar activamente, validar las emociones de sus hijos y
proporcionar orientación cuando sea necesario. Esta comunicación bidireccional fortalece la
relación familiar y ayuda a resolver conflictos de manera constructiva.
Diez Hábitos que los Hijos Deben Aprender en Casa
1. Respeto hacia los demás: Este hábito se puede enseñar modelando comportamientos
respetuosos entre todos los miembros de la familia. Los padres deben demostrar cómo tratar a
otros con dignidad y consideración, así como establecer consecuencias cuando se produzcan
faltas al respeto.
2. Responsabilidad en las tareas: Asignar tareas adecuadas a su edad ayuda a inculcar el
sentido de responsabilidad desde pequeños. Por ejemplo, un niño puede comenzar con
pequeñas tareas como sacar la basura o poner la mesa, aumentando gradualmente su carga
según crezca.
3. Manejo del tiempo: Enseñar a los niños a planificar sus actividades diarias fomenta
habilidades organizativas importantes para su futuro académico y profesional. Utilizar
calendarios o listas puede ser efectivo para mostrarles cómo dividir su tiempo entre deberes
escolares y ocio.
4. Resolución de conflictos: Fomentar una comunicación efectiva entre hermanos ayuda a
resolver disputas sin recurrir al grito o al conflicto físico. Los padres pueden intervenir como
mediadores enseñando técnicas como "hablar sobre lo que sientes" o "escuchar antes de
responder".
5. Empatía: Practicar la escucha activa al hablar sobre sentimientos fomenta la empatía en los
niños. Se les puede animar a reflexionar sobre cómo se sienten otros ante ciertas situaciones,
ayudándoles así a desarrollar una comprensión más profunda hacia las emociones ajenas.
6. Autocuidado: Inculcar hábitos de higiene personal desde temprana edad crea conciencia
sobre su salud física e imagen personal. Enseñarles rutinas diarias como lavarse las manos o
cepillarse los dientes contribuirá significativamente al desarrollo de buenos hábitos.
7. Trabajo en equipo: Realizar actividades familiares en conjunto refuerza este hábito esencial
para su vida futura tanto personal como profesionalmente. Jugar juegos cooperativos o
participar juntos en proyectos comunitarios son excelentes formas de practicarlo.
8. Apreciación por la educación: Valorar el aprendizaje diario puede hacerse mediante
conversaciones sobre libros leídos o temas interesantes discutidos durante las comidas
familiares, creando así un ambiente donde el aprendizaje sea visto como algo positivo.
9. Gratitud: Practicar el agradecimiento regularmente puede incluir actividades como
mantener un diario donde anoten cosas por las cuales están agradecidos cada día; esto les
ayudará a enfocarse en lo positivo en lugar de lo negativo.
10. Manejo del dinero: Enseñar sobre ahorro y gasto responsable desde pequeños prepara a
los niños para tomar decisiones financieras informadas en el futuro; por ejemplo, se les puede
dar una mesada con instrucciones sobre cómo ahorrar parte de ella.
Apoyo y Confrontación
El apoyo implica brindar ayuda emocional constante y recursos necesarios para el crecimiento
del niño; esto incluye estar presente durante momentos difíciles o celebrar logros importantes
con entusiasmo genuino. Cuando un niño siente que cuenta con el respaldo incondicional de
sus padres, desarrolla una mayor autoestima y confianza en sí mismo.
Por otro lado, la confrontación se refiere a enfrentar comportamientos inadecuados o
desafiantes con firmeza pero siempre desde una perspectiva constructiva; esto implica no solo
señalar lo incorrecto sino también guiar al niño hacia alternativas más apropiadas. Es crucial
abordar estos momentos con empatía, explicando claramente qué comportamientos son
inaceptables y por qué es importante cambiarlos.
Estrategias
1. Estrategias de Apoyo: Estas incluyen refuerzos positivos como elogios por logros académicos
o esfuerzos personales; también abarcan brindar recursos emocionales durante momentos
difíciles como pérdidas personales o fracasos escolares; esto crea un entorno donde los niños
se sienten valorados e importantes.
2. Estrategias de Confrontación: Consisten en establecer consecuencias claras por
comportamientos indeseables; esto puede incluir limitar privilegios si no cumplen con ciertas
normas establecidas previamente; sin embargo, estas estrategias deben ejecutarse
manteniendo siempre un enfoque constructivo donde se ofrezca orientación sobre cómo
mejorar.
3. Crianza Equilibrada: Esta combinación implica saber cuándo apoyar al hijo emocionalmente
mientras se le confronta por acciones inapropiadas; encontrar este equilibrio permite
ofrecerles un entorno seguro donde puedan aprender tanto del éxito como del fracaso sin
temor al rechazo ni al castigo excesivo.
Postulados de una Familia Saludable
Comunicar abiertamente sentimientos y pensamientos es fundamental; esto significa crear
espacios seguros donde todos puedan expresarse sin miedo al juicio ni represalias; fomentar
esta apertura permite resolver conflictos antes que escalen mientras fortalece vínculos
familiares sólidos basados en confianza mutua.
Establecer reglas claras y justas asegura que todos comprendan las expectativas dentro del
hogar; estas reglas deben ser discutidas colectivamente para garantizar consenso familiar;
además, es esencial aplicar consecuencias coherentes cuando se infrinjan estas normas para
mantener un sentido adecuado del orden familiar.
Fomentar relaciones afectivas fuertes entre todos los miembros crea una atmósfera cálida
donde cada persona siente pertenencia; compartir momentos significativos juntos como
vacaciones familiares o cenas regulares contribuye significativamente al fortalecimiento de
esos vínculos emocionales tan necesarios dentro del núcleo familiar.