0% encontró este documento útil (0 votos)
2K vistas887 páginas

Mi Joven Amante

La historia sigue a Wei Wuxian, un omega de la secta Jiang, quien fue comprometido desde niño con Lan Wangji, un alfa de la secta Lan, en un matrimonio arreglado. A medida que se acerca su primer encuentro, ambos jóvenes enfrentan la presión de sus familias y las expectativas de sus roles en la sociedad, mientras luchan por encontrar el amor verdadero en medio de tradiciones restrictivas y conflictos personales. La narrativa explora temas de amor, violencia, y la complejidad de las relaciones en un mundo donde la jerarquía de alfas y omegas define el destino de sus personajes.

Cargado por

adalizc12
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
2K vistas887 páginas

Mi Joven Amante

La historia sigue a Wei Wuxian, un omega de la secta Jiang, quien fue comprometido desde niño con Lan Wangji, un alfa de la secta Lan, en un matrimonio arreglado. A medida que se acerca su primer encuentro, ambos jóvenes enfrentan la presión de sus familias y las expectativas de sus roles en la sociedad, mientras luchan por encontrar el amor verdadero en medio de tradiciones restrictivas y conflictos personales. La narrativa explora temas de amor, violencia, y la complejidad de las relaciones en un mundo donde la jerarquía de alfas y omegas define el destino de sus personajes.

Cargado por

adalizc12
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 887

Mi joven amante

Posted originally on the Archive of Our Own at http://archiveofourown.org/works/23172004.

Rating: Explicit
Archive Warnings: Graphic Depictions Of Violence, Major Character Death
Category: M/M
Fandoms: 魔道祖师 - 墨香铜臭 | Módào Zǔshī - Mòxiāng Tóngxiù, 魔道祖师 |
Módào Zǔshī (Cartoon)
Relationships: Lan Zhan | Lan Wangji/Wei Ying | Wei Wuxian, Jiang Cheng | Jiang
Wanyin/Lan Huan | Lan Xichen, Jiang Yanli & Jin Zixuan, Jiang Cheng |
Jiang Wanyin/Wen Chao, Meng Yao | Jin Guangyao/Nie Mingjue
Characters: Wei Ying | Wei Wuxian, Lan Zhan | Lan Wangji, Lan Huan | Lan Xichen,
Jiang Cheng | Jiang Wanyin, Jiang Yanli, Nie Mingjue, Nie Huaisang,
Jiang Fengmian, Jin Guangshan, Jin Zixun, Wen Ning | Wen Qionglin,
Wēn Qíng, Wen Ruohan, Wēn Cháo, Wen Zhuliu
Additional Tags: Post-Canon, Omega Verse, Alpha/Beta/Omega Dynamics, Weddings,
Spoilers, Underage Rape/Non-con, Gang Rape, Underage Sex
Language: Español
Stats: Published: 2020-03-16 Completed: 2023-07-25 Words: 462,310
Chapters: 123/123
Mi joven amante
by Jessisaylu

Summary

~ Wei Ying, desde el primer momento que te vi, supe que éramos destinados ~

Era tradición que al nacer un niño en una secta prominente, incluso antes que darle un
nombre, se le daba un matrimonio arreglado.

Y sienguiendo esta tradición fue que Wei Wuxian, un omega perteneciente a la secta Jiang,
fue comprometido a los cinco años con un niño recién nacido llamado Lan Wangji, un alfa
perteneciente a la secta Lan.

Doce años después, el primer encuentro entre ambos jóvenes debía darse como el inicio del
cortejo entre el joven alfa de solo 12 años y el omega de 17. Un encuentro que de ser exitoso
dará paso al compromiso real, y de ser un fracaso concluirá con el fin de la alianza entre
ambas sectas.

¿Podrán Lan Zhan y Wei Ying enamorarse? ¿O su primer encuentro terminara con su
inminente separación?
Chapter 1

“¿Escucharon la noticia? ¡El aterrador patriarca Yiling se llevó a los perros Wen a los
túmulos funerarios y secuestro a Lan Wangji con él!”

“¿¡Lan Wangji!? ¿¡El joven orgullo de Gusu!?”

“¡Así es!”

“¿Cómo sucedió algo así? ¡Hanguang Jun es el cultivador más fuerte de esta generación!
¿Cómo pudo caer en las sucias garras de Wei Wuxian?”

“¿No lo sabias? Wei Wuxian y Hanguang Jun son esposos, al nacer fueron comprometidos
según la tradición, luego se conocieron e hicieron el periodo de cortejo de forma exitosa,
estaban a punto de casarse cuando los Wen atacaron, y en medio de la guerra tuvieron una
boda privada en un lugar desconocido. Después de que el Patriarca de Yiling comenzó a
realizar sus prácticas oscuras, el compromiso fue roto, pero aun así ellos siguieron juntos
defendiendo que se habían casado hace tiempo”

“¡Me parece difícil de creer! ¿Acaso Wei Wuxian y Lan Wangji no se llevan por 5 años de
edad?”

“Todos comentan como Wei Wuxian, ese omega despreciable, pervirtió al joven maestro Lan,
durmiendo en su cama y teniendo relaciones con él todavía cuando apenas se había iniciado
el tiempo del cortejo y Lan Er Gonzi tenía solo 12 años”

“¡Despreciable!”

“Oh no… Pobre Hanguang Jun… Seguro fue hechizado por ese despreciable omega, debe
estar en contra de su voluntad en los túmulos funerarios ¿Qué querrá hacer Wei Wuxian con
el pobre Lan Wangji preso en su horrible hogar?”

“¿No es obvio? ¡Wei Ying se va a embarazar de él para salvar su asqueroso pellejo! Cuando
la unión de las 4 sectas más prominentes alcance a los perros Wen y a su horrible general
fantasma, lo único que salvara su podrido cuerpo será tener un hijo de un Lan”

“¡Pobre Hanguang Jun!”

“Debemos encender incienso y orar por el bienestar de Lan Er Gonzi”

“Y pedir por la muerte del despreciable Wei Wuxian”

“Pero no lo entiendo… ¿Cómo fue que ellos se conocieron? ¡No tenía idea de que llegaron a
casarse! ¡A penas era unos niños al conocerse!”

“Es una historia memorable, ven, te contare como fue que Wei Wuxian se ganó el corazón del
joven maestro Lan Wangji”
Capítulo 1.

El paisaje en Yunmeng era acogedor, en medio del atardecer, la luz violeta y amarilla del
cielo despejado se reflejaba en el agua de ese lago lleno de lotos, haciendo lucir el lugar aún
más hermoso ante los dorados ojos de Lan Wangji.

¿Ese era el hogar de su prometido? En su imaginación, el joven de ojos dorados y piel blanca
como la porcelana, había imaginado a su pareja como un joven dulce y recatado, el cual
recogía semillas de loto en las mañanas y aceptaba sus lecciones de manera gustosa por la
tarde, para luego leer a la luz de las velas en su habitación, y dormir cuando las cigarras
comenzaban su canto y la luna refulgía en el cielo.

Era tradición que cuando un niño nacía en una secta prominente, incluso antes de darle un
nombre, se investigaba su género y se le daba un matrimonio arreglado. Así fue como se
decidió para sus padres, para su hermano, e incluso para él mismo. Era una tradición que no
debía romperse jamás.
La familia Lan era conocida por dar alfas, su padre fue un alfa, su tío también lo era, su
hermano mayor y el mismo por obvias razones genéticas, también obtuvieron estas
características. Por lo que ni bien nació, se lo unió con otra familia que se caracterizaba por
dar a luz a jóvenes omegas, la familia Jiang.

La hija mayor de los Jiang, Yanli, había sido prometida al próximo líder de la secta Jin, el
alfa Jin Zixuan; y ambos ya se encontraban a punto de contraer nupcias. Por otro lado, su
propio hermano, Lan Xichen, había sido prometido con otro de los omegas de la casa Jiang,
el joven Jiang Cheng, y ambos se encontraban en su tiempo de cortejo.

Mientras que, el joven Lan Zhan, él cultivador más joven de aquella generación, había sido
prometido al final, con un omega que no pertenecía en si a la casa Yunmeng Jiang, pero que
había sido criado por ellos desde los 3 años, así que cuando Lan Wangji nació, fueron
comprometidos de inmediato.

La diferencia entre Lan Zhan y su prometido era de 5 años, en la que él era el menor y el
omega era el mayor. Eso era ligeramente inusual, pero no tan raro. No se habían visto jamás,
ya que en la temporada de cortejo que había tenido su hermano con el joven Jiang Cheng, fue
este quien viajo a Gusu el solo, y no llevo a ninguno de sus hermanos consigo. Y aunque en
esa corta visita hace un año, el joven Wangji recibió una detallada descripción de su
prometido por el omega Jiang Cheng, las palabras “Alegre, algo alocado, muy bromista y
algo molesto” no satisfacían por completo su curiosidad.

Lan Zhan realmente quería tener frente a sí mismo a ese joven con el que pasaría el resto de
sus días.

En el mismo bote que su hermano, Lan Xichen dejo a los demás discípulos de la secta que los
acompañaban para acercarse a este, decidiendo hablarle un poco: “Wangji ¿Te encuentras
bien?”
En la proa del barco, aun mirando los lotos debajo del bote, brillando con la luz del sol, Lan
Zhan le respondió a su hermano con voz tranquila: “Si”

El mayor comprendiendo bien a su hermano, se paró a su lado, admirando el paisaje de igual


manera: “En las noches, el agua que rodea Lotus Piers se llena de niebla y le da un aspecto
mucho más hermoso al lago. Incluso me recuerda a nuestro hogar cuando la niebla es
demasiado densa”

Mirando de reojo a su hermano, Lan Wangji trago un poco de su propia saliva. Tenía
demasiadas preguntas, tantas que se arremolinaban en su cabeza como un completo caos;
pero no podía pronunciar ninguna, como si estuviera mudo.

“Es normal sentirse nervioso, Wangji” Dijo Lan Xichen, comprendiendo fácilmente los
sentimientos de su hermano “No estás en camino a conocer a una persona cualquiera, estas a
punto de conocer a aquel que se convertirá en tu esposo, el padre de tus hijos, tu pareja de por
vida. Es una persona especial”

Sintiéndose más nervioso aun con sus palabras, Lan Zhan soltó un suave suspiro, mirando
nuevamente el agua llena de lotos: “¿Y si yo no le gusto? ¿Si no le agrado?”

Sonriendo de forma amable, Lan Xichen sintió el deseo de darle un par de palmadas a su
hermano para consolarlo, pero sabía que ese gesto empeoraría las cosas, ya que Wangji
odiaba el contacto físico, por lo que decidió consolarlo con sus palabras: “Eso no sucederá,
ten confianza en ti mismo, como alfa y como Lan eres excelente, seguramente tu prometido
se enamorará de ti de inmediato”

Suspirando algo inconforme, Lan Wangji prefirió no decir nada al respecto, quedándose en
silencio al lado de su hermano, mientras que a la lejanía ya podía observar lo que parecían
amplios muelles de madera, al igual que otras barcas alrededor de estas.

Por fin podía ver muelle de loto.

***

“¡Apresúrate Wei Wuxian!”

Sonriendo de manera divertida, Wei Ying bebió un último sorbo de su jarra de vino, mientras
que de manera perezosa se acercó a la puerta deslizable de su habitación, abriendo esta con
una sonrisa, recibiendo así a su hermano.

“¡Wei Wuxian!” Lo regaño Jiang Cheng, observando a su hermano: “¿Aun no estás listo?”

Haciéndose a un lado en la puerta, Wei Ying le permito entrar a su hermano a su habitación,


mientras que se dirigía nuevamente a un espejo que tenía ahí, dispuesto a peinarse, dándole
un nuevo sorbo a su jarra con vino ni bien estuvo frente a su reflejo.

Suspirando exasperado, Jiang Cheng entro en la habitación detrás del mayor detrás de este,
prácticamente arrebatándole de la mano aquella jarra de fuerte vino de loto, mirándolo
molesto: “¿Quieres dejar de beber? ¡Eres un irresponsable!”
“Por favor Jiang Cheng, no seas así, que malo” Se quejó Wei Ying, fingiendo demencia:
“¿No ves que estoy nervioso? Hoy es un día importante…”

Sonriendo de una forma ligeramente maliciosa, Wei Ying tomo una cinta roja que colgaba de
su espejo, llevando está a sus labios, para comenzar a peinar sus largos cabellos negros con
sus dedos, dispuesto a peinarse con su usual coleta alta.

Era verdad, Wei Wuxian entendía que aquel día era muy importante, realmente especial.
Jamás creyó que por su condición se le seria arreglado un matrimonio, no era de una cuna
noble como Jiang Cheng, su padre no era el líder de una secta y su madre no era una dama,
pero tan solo por ser criado y prácticamente adoptado por los Jiang se le arreglo un
matrimonio a los 5 años.

¿Qué sabia de su prometido? No mucho. Era un Lan, una secta que se caracterizaba por vestir
de blanco todo el tiempo, como si siempre fueran a un funeral, con cintas blancas en la frente
y una elegancia sin igual. Wei Ying había conocido al hermano mayor de su prometido hace
ya varios meses, y se había llevado bastante bien con él, incluso habían jugado todos juntos
en el muelle de loto en un par de ocasiones, así que no se había llevado tan mala impresión de
la familia de su prometido.

Pero por las cosas que le había dicho Jiang Cheng, comenzaba a dudar. Su hermano menor
había descrito a su prometido como un niño serio, muy responsable y recto, con una gran
moral y casi imperturbable. Cuando Wei Ying pregunto si Lan Zhan jugaba, la respuesta fue
negativa ¿Un niño que no jugaba? Eso le parecía increíble.

Su prometido era un alfa de alta cuna, de tan solo 12 años, de una casa prominente, y que le
ofrecía al “pobre” Wei Ying un gran futuro. Y es que si el hijo de Jiang Cheng y Lan Xichen
rechazaba el volverse líder de la secta Gusu Lan, el hijo de Wei Wuxian con Lan Wangji
pasaría a ser el líder de inmediato ¿Qué más podía pedir un omega de tan bajo nivel para su
futuro? Hijo de un sirviente y un cultivador errante ¿No es acaso lo mejor que alguien pudo
ofrecerle?

Esas eran palabras que todos siempre repetían a su alrededor, tanto que Wei Wuxian se había
agotado de escucharlas ¿Qué quería un omega de tan bajo nivel para su futuro? Él quería ser
feliz, quería buscar a ese alfa o beta que le hiciera detener el aliento, que lo enamorara con
solo una mirada, alguien de quien pudiera admitir estar enamorado con orgullo. Wei Wuxian
no era una máquina de hacer bebes, ni mucho menos un objeto para realizar una alianza entre
dos clanes. Si el pequeño niño que se atrevía a pedir su mano aquel día no llenaba sus
expectativas, le diría adiós sin temor, aun si era expulsado de la secta Jiang por su osadía.

Prefería terminar en la calle antes de ser infeliz toda su vida.


Capítulo 2.

Terminando de peinarse, sujetando bien aquella cinta roja sobre su cabeza, Wei Wuxian se
sonrió a sí mismo en el espejo, sintiéndose muy bien aquella tarde.

Mirándolo de reojo, bastante molesto, Jiang Cheng solo pudo resoplar, tomando a su hermano
de un brazo: “¿Ya has terminado de alistarte? ¿Sabes qué hora es?”

“Ya sé, ya se, vamos” Dijo Wei Ying rendido, cansado de ser regañado por su hermano.

Volviendo a soltar un resoplido, Jiang Cheng comenzó a caminar fuera de la habitación,


dejando la botella de vino en una mesa cercana, aun tomando de un brazo a Wei Ying,
jalándolo consigo al exterior. Por su parte, el mayor solo sonrió, caminando tranquilamente
detrás de su hermano, nada nervioso o preocupado.

Jiang Cheng había estado como loco desde esa mañana, no solo había supervisado
personalmente el arreglo de la habitación de su prometido Lan Xichen, también había
ordenado a los sirvientes hacer una comida especial para este, e incluso se había tomado la
molestia de comprar unos dulces extranjeros de un comerciante esa mañana como regalo de
bienvenida. Para luego pasarse buena parte de la tarde arreglándose, escogiendo ropa lujosa y
arreglándose bien el cabello. Todo esto solía hacer reír a Wei Wuxian, pues luego su hermano
negaba estar enamorado y solo se sonrojaba cuando le hablaban al respecto, intentando lucir
tan desinteresado como siempre, aun cuando en ese mismo instante estaba temblando por el
nerviosismo de ver a su prometido otra vez.

“A-Cheng, vas muy rápido” Se quejó Wei Ying, soltándose del agarre en su brazo: “¿Por qué
estás tan apresurado? Viste al maestro Lan hace tan solo 10 días cuando fuiste a Gusu con
nuestro padre…”

Molesto, Jiang Cheng lo miro de reojo, aun caminando con dirección a los muelles fuera de
la residencia de la secta Jiang: “Wei Wuxian ¿Qué estas intentando insinuar?”

“¿Tanto extrañas sus atenciones?”

Sonrojándose hasta casi ponerse morado, Jiang Cheng desvió la mirada, caminando más
rápido aun: “¡Tu realmente tienes la piel de la cara muy gruesa! ¡Desvergonzado!”

Wei Ying volvió a reír satisfecho, caminando con un paso lento detrás de su hermano, nada
nervioso, decidiendo tomarse su tiempo. Sobre su cabeza, el sol sobre Yunmeng había
comenzado a desaparecer, dejando en el cielo el rastro de su luz y amenazando con anochecer
en pocos minutos. Pasando por las puertas principales de la residencia, encontró a una gran
procesión de personas esperando en los muelles.

No solo estaban Jiang Fengmian y Madam Yu, sus padres adoptivos, junto a sus hermanos
Jiang Cheng y Jiang Yanli, había personas que ni siquiera eran de su secta ahí. Y es que sus
afilados ojos rápidamente se fijaron en un alto joven de rostro serio un punto bermellón en la
frente, el egocéntrico prometido de su Shijie, el “pavo real” Jin Zixuan, un hombre al que
Wei Wuxian despreciaba profundamente ¿Por qué estaba él en su presentación con su
prometido? No lo sabía, tampoco entendía por qué había varios Jin con él, y por qué muchos
de los aldeanos se habían arremolinado ahí en botes e incluso alrededor de la familia Jiang
¿Realmente todos estaban tan emocionados por aquel acontecimiento? ¿Por qué Wei Ying no
lo estaba?

Siendo visto por su hermana, Wei Ying solo pudo acercarse a ella con los mismos pasos
perezosos de siempre: “Shijie…”

Jiang Yanli, sonriendo animada, hizo un espacio a su lado para permitirle acercarse,
mirándolo lleno de adoración: “A-Xian esta despeinado ¿Acaso no se miró en el espejo antes
de salir?”

Soltando la mano de su prometido, Yanli se acercó a su hermano para pinar su flequillo y


parte de su coleta con los dedos. Cruzando miradas con Jin Zixuan, Wei Wuxian se contuvo
para no ser mezquino con este, bajando la cabeza para que su hermana pudiera arreglar su
peinado de una forma más cómoda, sintiéndose nuevamente regañado: “Si me vi en el
espejo…”

“Tan tarde” Dijo de pronto Madam Yu, dándose cuenta de que Wei Ying había llegado: “¿Así
planeas representar a la secta Yunmeng Jiang?”

Wei Ying solo pudo hacer un pequeño puchero con la cabeza baja, frunciendo los labios ante
este comentario: “Yo no represento a la secta Yunmen Jiang…” Se quejó en un susurro.

“¿Acabas de decir algo, mocoso insolente?” Pregunto Madam Yu, realmente molesta.

“No dije nada, nada…” Dijo Wei Ying en voz alta, ya rendido ante que todos lo regañaran.

Levantando la cabeza al estar finalmente listo, pudo observar como el arrogante novio de su
Shijie había estado sonriendo de forma divertida, sin siquiera girarse a mirarlo, algo que hizo
hervir aún más la sangre de Wei Wuxian, el cual sin decir nada solo puso observar como su
Shijie lo tomaba otra vez de la mano de manera tranquila.

Pronto su atención fue distraída por los aldeanos que los rodeaban, que comenzaron a soltar
exclamaciones de asombro, mirando como a lo lejos los barcos de la secta Gusu Lan ya
habían comenzado a visualizarse. Eran solo 5 pequeñas barcas que tenían el estandarte de la
secta Lan, navegando a la deriva con lentitud. Cada uno de los barcos llevaba jóvenes
discípulos que venían de visita a Yunmeng, teniendo en la parte central a los que serían los
principales discípulos de la secta: Lan Xichen y Lan Wangji. Toda esa corte de jóvenes Lan
se quedaría por un par de semanas, y un par de días después de que estos se retiraran, seria
Wei Ying el que debería ir a Gusu a pasar un tiempo; claro, en caso de que todo saliera bien
en ese tiempo de cortejo.

Girándose en dirección al mar frente a él, Wei Ying intento tomar una posición más relajada,
aunque siguió con los labios fruncidos, mirando aquellos barcos aproximarse a los muelles,
cada vez más cerca.
Pronto, en medio del fuerte viento que recorrió los muelles de un segundo al otro, Wei
Wuxian relajo su expresión, respirando un poco más profundo de lo usual. A cada segundo
que pasaba, y mientras esos barcos se acercaban más y más al muelle, un olor desconocido
comenzó a llenar a Wei Wuxian, haciéndolo sentir mareado.

Había pasado su vida alrededor de omegas, pero no era la primera vez que olía feromonas
fuertes, no solo provenientes de alfas pertenecientes a su propia secta, también de su propio
hermano Jiang Cheng cuando este estaba en celo y Wei Ying debía cuidarlo. Las feromonas
siempre tenían un efecto adormecedor, dulces o fuertes, el efecto siempre era el mismo,
atontaban su pensamiento y lo hacían sentir vulnerable; aunque no era algo que Wei Wuxian
no pudiera manejar. Si se concentraba lo suficiente, podía dejar ese efecto de lado, y seguir al
lado de ese omega o alfa que soltaba aquella fuerte fragancia.

Pero en aquella ocasión, todo fue diferente, y es que por más que Wei Wuxian intentaba
concentrarse, no podía dejar de tener sentimientos de adormecimiento, mientras que sus
mejillas habían comenzado a sonrojarse aun en contra de su voluntad ¿Qué era ese olor tan
agradable? Era un aroma definitivamente atractivo para sus sentidos, uno que lograba
tranquilizarlo y ponerlo muy excitado al mismo tiempo, jamás había tenido un sentimiento
igual en su vida, el cual aumentaba a cada segundo que aquellos barcos se acercaban a los
muelles.

En medio de todo su mareo, escuchando las campanas ceremoniales de Yunmeng sonar


recibiendo a los invitados, de forma involuntaria, Wei Ying también comenzó a esparcir sus
feromonas, atrayendo la mirada de todos los alfas y omegas presentes, que pudieron olerlo en
medio de la multitud. Wei Ying intentaba controlarse, presionando sus manos en puños e
intentando concentrarse, pero no podía dejar de sentirse mareado por el aroma, desconcertado
por toda la situación. Y aunque tanto Madam Yu como Jiang Fengmian lo hubieran regañado
por estarse comportando de una manera tan indecente en privado, no podían hacerlo justo en
ese instante, ya que los botes de la secta Lan estaban prácticamente en sus puertas, y no
querían quedar mal ante sus invitados.

Pronto el barco que encabezaba la procesión de botes de la secta Gusu Lan llego al puerto
principal de Lotus Piers, era el bote que llevaba consigo a los principales discípulos de la
secta Lan. Y como era costumbre en la presentación formal del prometido, el primero en salir
del bote fue el joven Lan Wangji.

Un nuevo golpe de feromonas deslumbro a Wei Wuxian, el cual con las mejillas
completamente sonrojadas y ya sin poder controlarse, vio al pequeño niño bajar en el muelle
con una elegancia impropia de alguien de su edad, moviéndose de tal manera y con tal finura
que Wei Ying no pudo hacer más que sorprenderse.

Pronto, el joven Lan Er Gonzi avanzo por el muelle de madera en dirección a la familia Jiang,
cargando su espada en una mano y con la otra apoyada agradablemente en su espalda,
causando la admiración de todos los presentes al observar un niño tan joven pero tan
hermoso. Al llegar frente a sus mayores, Lan Zhan hizo una elegante reverencia, notándose
tan serio como era usual.

Y aunque todos alrededor de Wei Ying correspondieron la elegante reverencia y se notaron


ampliamente agradados con el joven maestro Lan, Wei Wuxian solo se quedó estático,
perdido, cada vez más pesado por esas feromonas tan fuertes que desprendía ese niño,
solamente pudiendo mirar esos hermosos ojos dorados que le devolvían la mirada con cierta
fiereza.

Dirigiéndose a su prometido y avanzando en su dirección, Lan Wangji hizo una reverencia


mucho más elegante y pausada de ser posible, presentándose de una manera formal ante este:
“Wei Wuxian, es un gusto conocerte finalmente”

Y aunque Wei Wuxian sabía que todas las miradas estaban centradas sobre él en ese mismo
instante, no pudo corresponder el saludo, ni siquiera pudo hablar o moverse, mirando
fijamente esos ojos dorados y ese rostro tan agradable de aquel que era su prometido.
Mientras que en su interior, su omega había comenzado a rugir en su cabeza unas palabras
que no tenían sentido para este: Lo deseo, lo deseo, lo deseo…

Fue entonces cuando perdido, abrumado por tantas sensaciones, Wei Wuxian no pudo evitar
seguir las ordenes de su omega, pronunciando en una voz muy baja aquello que tanto se
repetía en su cabeza: “Te deseo…”

Aquellos de la familia Jiang, los únicos que lo habían escuchado, palidecieron ante estas
palabras, sintiéndose muy avergonzados por el atrevimiento de aquel omega que presentaban
como parte de su familia.

Pero Lan Zhan, imperturbable, lo miro a los ojos en silencio, sin responder a sus provocativas
palabras aun.
Capítulo 3.

Después del primer encuentro de los prometidos, Wei Wuxian fue llevado prontamente a sus
habitaciones, tomando como excusa ante todos que había sido una descompensación por el
mal clima. Cuando ya estuvieron a solas finalmente pudieron entender el extraño proceder
del joven omega, y es que de pronto su celo había comenzado a aparecer.

Así que de forma rápida y por orden de Madam Yu, la cual le temía al escándalo que podía
ocasionarse si se sabía esto, a Wei Ying se le dio de beber un té de hierbas especial, solo
conocido por médicos y curanderos especializados, el cual actuaba como un potente
“inhibidor” del celo de los omegas; un té del cual Wei Ying no solo necesito una taza, si no
varias para tranquilizarse.

En medio de aquel problema, los demás miembros de la secta Lan fueron conducidos a sus
habitaciones con su equipaje, pidiéndoles acomodarse antes de ir al banquete principal por la
celebración del compromiso. Y es que a diferencia del resto de discípulos de la secta Lan,
que dormían en habitaciones compartidas; los dos jades de la secta tenían habitaciones
propias cada uno, muy cercanas, pero completamente privadas la una de la otra.

Pronto la noche cayó sobre Muelle de loto, y la celebración comenzó.

Con todos los miembros de ambas familias en el salón principal, la celebración comenzó,
teniendo en mesas centrales a las 3 parejas de próximos esposos; siendo una mesa para Jin
Zixuan y Jiang Yanli, otra mesa para Lan Xichen y Jiang Cheng, y la mesa principal al centro
del salón a la vista de todos para Lan Wangji y Wei Wuxian.

Y aunque el festín había comenzado hace varios minutos, y la mayoría de los presentes ya
había comenzado a comer con gusto, Wei Wuxian aún no había regresado de sus aposentos
después de su “descompensación”, así que solo en su mesa, Lan Zhan espero pacientemente a
que este llegara.

Tras varios minutos después de iniciada la celebración, un poco más controlado gracias a la
infusión de hierbas, Wei Ying finalmente apareció en la fiesta de su compromiso.
Acompañado por dos doncellas omegas empleadas de su tía, después de haberse arreglado
nuevamente la ropa y el cabello, aún tenía las mejillas ligeramente sonrojadas y seguía
teniendo un leve olor a sus feromonas.

Cuando este puso un pie en el salón, prontamente todas las miradas viajaron a él, ya que
todos los invitados se encontraban expectantes de su primer encuentro en condiciones con el
joven jade de Gusu. Intentando hacer las cosas bien en esta ocasión, Wei Wuxian pronto
ubico a su pequeño prometido en medio de todo ese festín, acercándose a este alegremente.

Cuando ya estuvo frente a él, hizo una reverencia elegante, para luego presentarse de la
misma forma que Wangji lo había hecho con él: “Lan Wangji, es un gusto conocernos
finalmente”
Con el mismo rostro serio y apacible de siempre, Lan Zhan solo pudo corresponder el saludo
haciendo una reverencia desde su sitio, sin pronunciar palabra. Pero sin dejarse desilusionar,
Wei Ying se sentó confiadamente al lado del menor, muy sonriente: “Disculpa la tardanza,
Lan Er Gonzi, me sentí muy mal de pronto”

Ante la cercanía de ambos en la mesa, Lan Zhan se apartó del mayor con un suave
movimiento, imponiendo una cierta distancia entre sus cuerpos. Este hecho no fue
desapercibido por Wei Wuxian, el cual mirando al menor de reojo, solo pudo suspirar,
dejando de sonreír.

Viendo que su pareja estaba finalmente en su mesa, Lan Wangji comenzó a comer. Tomando
unos palillos de la mesa, y decidiendo ir primero por el arroz, tomo un cuenco fino de
porcelana con el blanco contenido, comenzando a comer en silencio.

Wei Ying se sentía bastante confuso por el comportamiento de este, y solo pudo atinar a
tomar otro juego de palillos para comenzar a comer el estofado de carne de res con verduras
picadas, notando como su cuerpo aún seguía caliente después de tanto.

Aun así, el mayor no se rindió, y decidió comenzar a hacer conversación con el menor: “Lan
Zhan, Lan Zhan… ¿Tuviste un buen viaje?”

Algo sorprendido por escuchar su nombre por parte del mayor, Lan Wangji se giró
directamente en su dirección, asintiendo suavemente ante su pregunta y respondiendo: “Si”

“Ya veo, que bueno. Escuché que el viaje desde Yunmeng hasta Gusu es bastante largo, de
dos noches y tres días, que debes alojarte en dos lugares diferentes para pasar la noche, y
hacer un largo camino a pie por las montañas”

Sin decir nada ante esto, Lan Wangji volvió a comer en silencio, metiendo cantidades
considerablemente pequeñas de arroz en su boca, comiendo con lentitud y elegancia. A
diferencia de Wei Ying, el cual metía grandes trozos de la carne en su boca, comiendo con
mucha brusquedad y poca etiqueta.

“¡Debes estar muy cansado! Tantos días de viaje agotarían a cualquiera. Aun así espero que
tus aposentos en la residencia Jiang sean de tu agrado, un lugar cómodo y espacioso ¡Tu
habitación seguramente es incluso mejor a la que yo tengo aquí!” Bromeo Wei Wuxian,
bastante contento.

Sin embargo, aunque el menor había escuchado la broma de manera clara, no sonrió en lo
absoluto, absorto en su comida. Ante lo que solo consiguió que Wei Ying se esforzara más en
hablarle, intentando hacerlo sonreír.

“¿Fue cansador? Eh… Lan Zhan… ¿Me escuchas?”

Suspirando, sintiéndose algo exasperado, Lan Wangji decidió responder: “No fue cansador”

Sonriendo alegre, Wei Wuxian se sintió satisfecho con la respuesta: “¡Eso es muy bueno!”
Sin dejar de sonreír, Wei Ying no pudo evitar fijarse en otra de las mesas cercanas, en la cual
estaban su hermano y el hermano de Lan Zhan. Con solo verlos, Wei Ying supo que su
relación era diferente; ambos sentados muy juntos, casi uno encima del otro, hablaban en
susurros, luciendo muy íntimos. Lan Xichen abrazaba suavemente a Jiang Cheng por la
cintura, manteniéndolo muy cerca de su propio cuerpo, hablando con el de manera feliz.
Mientras que Jiang Cheng, correspondiendo esta alegría de una forma algo cohibida,
cuidadosamente le daba de comer a su prometido con sus propios palillos, ya que como este
lo estaba abrazando no podía hacerlo por si mismo.

Aquella escena, a Wei Ying se le hizo realmente hermosa, y suspirando, volvió a mirar al
pequeño niño junto a él ¿Podría hacer algo así con el pequeño maestro Lan? No perdía nada
intentándolo ¿Verdad?

Sonriendo de forma maliciosa, Wei Ying tomo un poco de tofu con salsa picante, uno de sus
platos favoritos, con sus palillos. Y con cuidado, acerco la comida al joven junto a él: “Lan
Zhan, abre la boca…”

Sorprendido, mirando aquellos palitos acercándose a su boca, Lan Zhan se apartó


rápidamente, mirando enfadado al mayor junto a él: “¿Qué haces?”

“Te doy de comer ¿No es obvio?”

Ante estas palabras, Lan Zhan puso un rostro extraño, mirando a Wei Ying como si fuera un
estúpido, alejándose aún más de este ante su insistencia.

“¡Vamos! ¡Abre la boca!” Pidió Wei Ying, frunciendo ligeramente el ceño ante su obvia
negativa: “Si no te apresuras el tofu se caerá y se desperdiciara…”

“No gracias”

“¡Vamos Lan Zhan!” Siguió insistiendo el mayor.

Comenzando a molestarse, Lan Zhan puso una mano frente a sus labios, intentando detener
así el peligroso avance de aquellos palitos con tofu a su boca. Aun así, pudo sentir como el
suave alimento se chocaba contra su mano con la insistencia de Wei Ying de alimentarlo, aun
en contra de su voluntad: “No, en serio gracias, pero no quiero”

“No seas tímido ¿Acaso no somos cercanos? ¡Déjame hacerlo!”

Esas palabras fueron lo último que Lan Zhan necesitó para enfurecerse, poniéndose de pie de
golpe de la mesa, tomando una servilleta para limpiar su mano, realmente desagradado.
Sorprendido ante esto, Wei Ying se quedó estático, mirando al menor con ese rostro que
había dejado de ser serio para mostrarse molesto.

“Wei Wuxian, muchas gracias por su hospitalidad y por esta agradable cena” Pronuncio Lan
Zhan con un tono que aparentaba normalidad, haciendo una elegante reverencia para su
mayor: “Pero el viaje desde Gusu a su hogar ha sido muy largo. Por favor perdóneme, debo
retirarme ahora”
Sin que Wei Ying siquiera pudiera responder, Lan Zhan tomo a su espada Bichen de la mesa
de la cena, para luego partir con paso apresurado con dirección a sus aposentos privados, ante
la atenta y sorprendida vista de todos los presentes.

El tofu finalmente termino escapando de los palillos para caer justamente al lugar donde
antes había estado Lan Zhan hace tan solo unos segundos, haciendo fruncir el ceño de Wei
Ying. Suspirando algo avergonzado y muy molesto, intentando aparentar normalidad, Wei
Wuxian tomo comida nuevamente de la mesa frente a él, comenzando a comerla en silencio.

Nadie necesitaba saber que su primer encuentro había sido realmente desastroso.
Capítulo 4.

¿Cercanos? ¿Así lo había llamado su prometido la noche anterior?

Lan Zhan no pudo evitar resoplar furioso, mientras terminaba de arreglar sus túnicas. Era
muy temprano, a penas las 5:30AM, pero a su alrededor todos los discípulos Lan ya se
encontraban despiertos, así como el mismo.

Después de tomar un baño relajante, Lan Zhan se cambió de ropa, usando en esta ocasión un
traje color jade, muy elegante y fino. Peinando su largo cabello negro y poniéndose la cinta
blanca en la frente, el joven maestro Lan espero un poco antes de salir de sus aposentos, aun
perdido por todas las cosas que habían sucedido el día anterior. Ya listo, salió de sus
habitaciones para ir a desayunar con las personas de su clan, los cuales al igual que él,
siempre se levantaban a las 5 Am. De esta manera paso un inicio de mañana tranquila con
todos los miembros del clan Lan, que eran más calmados que los del clan Jiang.

Más tarde, casi a media mañana, el recinto que había sido designado para los miembros del
clan Lan fue visitado por el líder de clan, Jiang Fengmian y su hijo, Jiang Wanyin, además de
otros tantos discípulos del clan Yunmeng Jiang. Toda esa comitiva fue a encontrar a los
miembros del clan Lan con intención de guiarlos para enseñarles Muelle de loto.

La visita por el cortejo entre Wei Wuxian y Lan Wangji se había programado a mediados de
abril, justamente a inicios de primavera. Así que en Lotus Pier era una época muy especial,
pues era la temporada destinada a la recolección de Lotos y nueces de agua, por lo que tanto
discípulos de la secta Jiang como jóvenes campesinos alrededor de Lotus Pier se metían al
agua con cestas de paja para tomar las hojas de loto y las nueces, en medio de risas y juegos
entre ellos. Y aunque algunos de los miembros de la secta Jiang invitaron a los miembros de
la secta Lan a acompañarlos a jugar en el agua, estos se notaron bastante reacios a hacerlo.

Así que siguiendo al líder y a su hijo, los visitantes de la secta Lan recorrieron Lotus Pier
como en una visita turística, pasando por salones representativos de la secta, lugares de
reunión como pequeños parques y plazas, los lugares que los discípulos usaban normalmente
para entrenar, e incluso por el lugar de las habitaciones privadas de los miembros de la secta
Jiang.

Pero en este recorrido, Lan Zhan no presto mucha atención, quedándose serio y callado.
Podría ver frente a él a su hermano y al joven Wanyin tomados de la mano, conversando en
susurros mientras caminaban lentamente detrás del líder de Yunmeng.

¿Lan Zhan se sentía celoso? Tal vez un poco, ya que aunque no quería admitirlo, la visita no
había salido en lo absoluto como lo había planeado. Desde su primer encuentro con su
prometido, todo fue bastante desastroso, ya que el mayor aparentemente había perdido el
control y se había enfermado, aunque nadie le explico que había sucedido en ese instante en
las puertas de Lotus Pier. Eso fue extraño hasta para el mismo Lan Zhan ¿Por qué el omega
había comenzado a oler de una manera tan agradable de pronto? No lo entendía, fue un olor
que nunca antes había sentido o conocido, fue tan... Agradable que realmente llego a
considerar que aquello fue algún tipo de incienso o perfume que ponían el ambiente de
Yunmeng de manera usual. Pero pronto se dio cuenta de que esto no era así, ya que aquel
dulce aroma solo había podido olerlo dos veces: En su encuentro con su prometido y cuando
ambos cenaron juntos. Por lo que termino concluyendo que aquel aroma provenía del joven
omega que siempre se sonrojaba al mirarlo a los ojos.

¿Wei Wuxian le molestaba? Un poco, tal vez más que eso, pero era su prometido. Lan Zhan
debía ser paciente con el ¿No es verdad?

En su corta vida no había podido pasar mucho tiempo con otros omegas, solo con su madre la
cual murió cuando era muy joven, y luego con el mismo Jiang Cheng cuando fue a visitarlos
por un par de meses a Gusu. Pero después de eso, su conocimiento sobre otros omegas era
nulo, y es que Wei Wuxian terminaba siendo el tercer omega con el que había pasado tanto
tiempo acompañado.

¿Todos los omegas eran como Wei Wuxian? Lan Zhan creía que no, pues un género no te da
una personalidad. Pero eso no respondía como es que el mayor podía ser tan confiado al
tratarlo, intentando alimentarlo y diciendo que ambos eran cercanos. Eso le había molestado a
Lan Zhan, pues apenas si se habían conocido, y ese supuesto "adulto" con el que estaba
comprometido ya andaba por ahí suponiendo que se conocían, intentando intimar y tocarlo.
Eso era realmente molesto.

Y es que de solo pensar que debía pasar tiempo a solas con el mayor le revolvía el estómago
a Lan Zhan, si este se había atrevido a hacer cosas vergonzosas con él en medio de tantas
personas, temía las cosas que podría hacerle cuando se encontraran a solas. Pero tal y como le
había prometido a su hermano, seria amable y un poco menos rígido. Debía comenzar a
llevarse bien con su prometido.

Pasando por un vistoso salón con las puertas cerradas, el líder de la secta Jiang se detuvo
frente a sus puertas, girándose para sonreírle de forma amigable al joven Lan Wangji: "Este
es el pabellón de la biblioteca en Yunmeng, no es tan grande o vistosa como la biblioteca de
Gusu, pero escuche que Haguang Jun tiene una especial afición por la lectura, así que sus
puertas siempre estarán abiertas para el joven maestro Lan"

Siendo sacado de sus pensamientos por las amables palabras del líder de la secta Jiang, Lan
Zhan hizo una reverencia de forma agradecida, mirando de reojo aquel gran edificio con
arquitectura tradicional y las puertas cerradas, terminando de hacer la reverencia: "Muchas
gracias líder de la secta"

Jiang Fengmian sonrió de manera tranquila para el menor, continuando su camino hasta la
entrada de Lotus Pier: "Así terminamos el recorrido por Yunmeng. Siéntanse libres de
disponer su tiempo y de pasarse por las orillas del lago, es tiempo de recolección, así que los
jóvenes suelen tirarse a al agua para jugar un poco"

Saliendo de la residencia, Jiang Fengmian fue seguido por la caravana de visitantes de la


secta Lan, los cuales maravillados observaron como aquel lago, que el día anterior cuando
llegaron estaba tranquilo y vacío al recibirlos, ahora se encontraba con varias persona de
diferentes edades que jugaban y reían entre ellas, nadando o tirándose al agua.
Y era en medio de esas personas que Wei Wuxian se encontraba riendo y jugando,
acompañado por otros discípulos de la secta Jiang. Con la túnica levantada hasta más arriba
de las rodillas, los pies descalzos, y casi todo su cuerpo mojado, reía y jugaba con los otros
miembros de la secta, sin preocuparse por recoger lotos o nueces de agua, estando en ese sitio
solo para jugar.

Al verlo ahí, Jiang Cheng frunció el ceño y lo miro enfadado. Aunque el mayor se lo había
prometido, al final Wei Ying no apareció ni un solo minuto en el recorrido que habían
planeado darles a los miembros de la secta Lan, los cuales a propósito se encontraban en ese
sitio específicamente por él y su compromiso. Y es que Wei Ying no solo había decepcionado
a su hermano, Jiang Fengmian se notaba igual de disgustado, mirando al joven omega a la
distancia con el rostro serio.

Al darse cuenta de que todos se encontraban ahí, Wei Wuxian maldijo por lo bajo, dejando de
jugar para acercarse a la orilla. Al despertarse a media mañana, antes de que su tío y su
hermano partieran, les había prometido a ambos que los alanzaría en el recorrido por
Yunmeng, para saludar formalmente a su novio y agradecer a toda esa comitiva que había
venido por su compromiso. Pero después de vestirse y desayunar, fue alcanzado por algunos
otros discípulos de su secta, los cuales lo invitaron a jugar con ellos al lago, y aunque se negó
al inicio recordando sus deberes, finalmente por la insistencia de los jóvenes, Wei Ying
termino cediendo y acompañando a estos a jugar, aunque tenía planeado hacer esto solo por
unos minutos y luego ir realmente a la visita guiada de su tío. Sin embargo aquellos minutos
terminaron convirtiéndose en horas que pasaron volando en medio de su diversión, y término
sin llegar a tiempo para visitar a la secta Lan y su joven prometido.

Y mientras Wei Ying caminaba en medio del gentío para acercarse con una sonrisa culpable a
la orilla, los miembros de la secta Lan se habían dispersado. Jiang Fengmian, viendo a los
jóvenes ya más distraídos, volvió al interior de la residencia, lanzándole una última mirada de
advertencia a Wei Ying a la distancia antes de irse. Mientras que Jiang Cheng y Lan Xichen
también se alejaron del resto del grupo, siendo seguidos de cerca por Wangji, el cual miraba
todo con curiosidad.
Capítulo 5.

Y mientras Wei Ying caminaba en medio del gentío para acercarse con una sonrisa culpable a
la orilla, los miembros de la secta Lan se habían dispersado. Jiang Fengmian, viendo a los
jóvenes ya más distraídos, volvió al interior de la residencia, lanzándole una última mirada de
advertencia a Wei Ying a la distancia antes de irse. Mientras que Jiang Cheng y Lan Xichen
también se alejaron del resto del grupo, siendo seguidos de cerca por Wangji, el cual miraba
todo con curiosidad.

"¿Y todos los lotos se comen?" Pregunto Lan Xichen curioso, caminando de la mano con
Wanyin al borde de los muelles.

Sonriendo y pegándose más el, Jiang Cheng comenzó a guiarlo por los muelles con dirección
a un grupo de doncellas recolectoras, las cuales habían dejado sus cestas con frutos en el
muelle, jugando mientras recogían las plantas muy cerca de la orilla: "No todos los lotos se
comen. En Yunmeng hay dos tipos de lotos, los que vienen en las hojas más pequeñas son los
comestibles, sus semillas son tiernas y dulces"

Acercándose a las doncellas con una sonrisa, Jiang Cheng hizo una elegante reverencia antes
de agacharse y tomar de las cestas de ellas un loto con muy buen aspecto, enseñándole este a
Lan Xichen. Y Lan Wangji, muy curioso, se acercó un poco más a ellos, mirando el loto en
las manos de Jiang Wanyin con atención.

"Y hay otro tipo de loto, los que son un poco más amarillos y vienen en hojas más grandes"
Siguio explicando Jiang Cheng, tomando otro loto muy diferente al primero de las cestas de
las doncellas: "Estos no se comen, si lo intentas tus dientes se romperán..."

Sonriendo de forma agradable, Lan Xichen tomo el loto no comestible de las manos de Jiang
Cheng, mirándolo con atención: "Ya veo, si no se comen ¿Entonces para qué sirven?"

"Los dos lotos nacen de una semilla común, las semillas de los lotos que no son comestibles
se dejan secando al sol para luego ser plantados a inicios de marzo, cuando hay un gran
festival de faroles en Yunmeng, que intenta traer prosperidad para la nueva cosecha de este
año"

Asintiendo bastante interesado, Lan Xichen acerco el loto con más atención a su rostro,
mirando fijamente aquellas semillas, que eran más grandes que las de los lotos comestibles.
Por su parte, Lan Zhan se acercó más y más a las cestas de las doncellas, quedando al lado de
su hermano, mirando todo con igual de atención.

Siendo notado por una joven doncella, la cual no sabía que el menor era el prometido por el
cual se había hecho aquella gran celebración, tomo una flor rosa de loto del agua,
acercándose traviesamente a Lan Wangji para entregársela: "Para el joven maestro..."

Siendo tomado por sorpresa, Lan Zhan no pudo hacer más que quedarse petrificado por unos
segundos, antes de reaccionar y tomar la flor de la mano fría y húmeda de aquella atrevida
doncella, agradeciendo su regalo haciéndole una reverencia: "Muchas gracias"
La joven doncella, muy sonrojada y deslumbrada por la elegancia del joven jade, fue recibida
por sus amigas en medio de risas, aun sin perder de vista al joven niño frente a ella. Por su
lado, Hanguang Jun, bastante curioso, miro aquella hermosa y húmeda flor con atención,
apreciado su hermoso color rosa con un ligero blanco en la raíz, con un tallo verde muy puro
y sin ninguna espina. Curioso, Lan Zhan acerco aquella flor a su rostro, oliendo su aroma con
atención, quedándose nuevamente pasmado.

Era un aroma conocido, y aunque nunca antes había visto una flor como esa, tenía la
impresión de que el olor que esta desprendía era adorablemente conocido, como si hubiera
estado cerca de este por horas. Y es que mientras más olía ese dulce perfume, Lan Zhan mas
se daba cuenta de lo delicioso que era, y es que aquel aroma pronto se estaba convirtiendo en
uno de sus favoritos.

Ya más cerca de la orilla, Wei Wuxian pudo finalmente ubicar a su hermano ya los dos jades
en uno de los muelles. Con una sonrisa algo nerviosa en el rostro, rodeo el grupo de coquetas
señoritas para subir al muelle de un salto, sorprendido a Lan Wangji y siendo mirado con
profundo enfado por Jiang Cheng, el cual en silencio lo seguía juzgando por no haber ido esa
mañana a recibir a los discípulos Lan.

"¡Lan Zhan!" Dijo Wei Ying animado, intentando aparentar que nada malo había sucedido:
"¡Buenos dias!

Apartando la flor de su rostro, Lan Zhan se quedó mareado por un segundo, entendiendo por
fin donde era que había sentido aquel familiar aroma, mirando fijamente al mayor frente a él.
Y es que el aroma de las feromonas de Wei Ying olían a flores de loto.

"Wei Wuxian" Lo regaño Jiang Cheng muy molesto, tomando a su hermano del brazo para
reprenderlo: "¿Se puede saber dónde estabas?"

Suspirando cansado, Wei Ying se soltó del agarre de su hermano, mirándolo con mala cara:
"Jiang Cheng... Por favor no me mires así. Vine al lago porque aún me sentía con algo de
fiebre, el agua fría y calmada me ayuda a sanar"

"¡Tú no estabas aquí para sanar! ¡Tú estabas jugando!" Lo acusó Jiang Cheng, intentando
tomarlo del brazo nuevamente.

De forma amable, Lan Xichen intervino en la pelea tomando del brazo a Jiang Cheng,
separándolo de su hermano: "Esta bien A-Cheng, lo importante es que él está aquí ahora"

"Pero..." Intento replicar Jiang Cheng, aún muy molesto.

"Está bien" Volvió a decirle Lan Xichen, logrando controlar un poco el temperamento del
menor: "Vayamos a comer, ya es casi el medio día"

Mirando muy molesto a Wei Ying, Jiang Cheng contuvo su ira por su novio, comenzando a
caminar de vuelta a la residencia de la secta Jiang, tomado de la mano por Zewu Jun. Y al
pasar junto a Wei Wuxian, Jiang Cheng murmuro molesto: "Irresponsable"
Rodando los ojos y cruzándose de brazos, Wei Ying soltó un bufido, mirando a su hermano
irse: "¡Si te escuche!"

"¡Qué bueno! ¡Ojala lo hicieras todos los días!" Replico Jiang Cheng lo lejos.

Frunciendo el ceño, Wei Ying se cruzó de brazos molesto, olvidando por completo que tenía
a su joven jade aun en frente. Pero Lan Zhan, sin querer ser dejado de lado, volvió a acercarse
al mayor, mirándolo desde abajo, saludándolo: "Wei Wuxian, buenos días"

Siendo devuelto a la realidad por las palabras del menor, Wei Ying observo como Lan Zhan
hacia una suave reverencia para saludarlo, sonrojándose con esto y respondiendo de manera
igual con otra reverencia: "B... Buenos días... Oye Lan Zhan... Lo siento por no aparecer esta
mañana, quisiera tener una excusa pero..."

"Está bien, no te preocupes por eso"

"Gracias..." Susurró Wei Ying un poco más aliviado. Observando como el menor se giraba
para comenzar a caminar lejos de muelle, Wei Ying lo siguió, sin poder dejar de observar la
flor de loto en las manos del menor: "¿Y por qué vinieron aquí? ¿Iban a jugar?"

Sin dejar de caminar, Lan Zhan le respondió: "Yo no juego"

Poniendo una cara extraña, Wei Ying apresuro sus pasos para caminar hasta el frente de Lan
Zhan, deteniendo su avance y encarándolo.

"¿No juegas?"

Ante la pregunta, Lan Zhan solo negó con la cabeza, notando la sorpresa del mayor.

"¿Ni un poco?"

Lan Zhan volvió a negar con la cabeza, sintiéndose algo incómodo.

"¿Y las escondidas?"

"Mmm..." Respondió Lan Zhan desinteresado.

"¿Algun juego de caceria o sobre correr?" Siguió insistiendo Wei Ying.

"Mmm..."

"¿Y nadar? ¿Tampoco te gusta?"

"Mmm..." Dijo Lan Zhan, encogiéndose de hombros.

Suspirando rendido, Wei Ying se apartó del camino, comenzando a caminar al lado del menor
con dirección al interior de Lotus Pier, aun incrédulo porque este no jugara.

Y sin querer dejarse vencer, Wei Ying se atrevió a preguntarle: "¿Entonces que te gusta
hacer?"
Girándose un poco, aun caminando al lado del mayor, Lan Zhan lo tomo delicadamente de la
mano para detenerlo, y ante un confuso Wei Ying, Lan Zhan acomodo ligeramente el cabello
del mayor, para luego poner la flor de loto delicadamente en su oreja, mirando fijamente lo
lindo que había quedado el mayor.

Algo confuso, dejándose hacer, Wei Ying no entendio la indirecta, sonrojándose un poco por
tener los dorados ojos de Lan Zhan sobre sí mismo de una manera tan fija, solo pudiendo
hacer una pregunta estúpida: "¿Te gustan las flores?"

Suspirando algo exasperado, Lan Zhan soltó el brazo de Wei Ying para seguir caminando al
interior de la residencia de los Jiang, respondiendo con un exasperado: "Mmm"

Sin sacar la flor de su cabello, y luciéndola incluso de una manera orgullosa, Wei Ying siguió
caminando al lado del joven maestro Lan al interior de Yunmeng, mientras seguía hablándole
y preguntándole cosas, recibiendo solo "Mmm" como respuesta a todas sus preguntas.
Capítulo 6.

¿Cómo se había imaginado a su prometido antes?

Lan Zhan no había conocido a muchos omegas en el pasado, pero todos los que alguna vez
había conocido eran muy diferentes a Wei Wuxian, completamente distintos físicamente. Su
prometido tenía unas piernas delgadas y muy largas que subían de manera perfecta a unas
caderas anchas, que en ese instante pudo notar debajo de sus túnicas húmedas, notando
también la pequeña cintura que esta tenia, junto con unos hombros algo estrechos, y unos
rasgos faciales hermosos.

Desviando su mirada para ver a Jiang Cheng, el omega más cercano junto a su mesa en la
gran sala de Yunmeng, donde todos se encontraban almorzando, Lan Zhan pronto se dio
cuenta de que en realidad este no era tan lindo como su prometido, o que por lo menos no le
gustaba tanto como Wei Ying.

"¿Y el pescado? ¿Si comes pescado?" Pregunto Wei Ying distraído, comiendo su almuerzo
con calma.

Después de entrar en Lotus Pier, todos fueron al salón principal de la residencia, donde
poniendo diferentes mesas para los discípulos, y mesas privadas para las parejas, todos
comían la deliciosa comida que los Jiang servían para ellos, teniendo pequeños banquetes
cada vez que comían de esa manera.

"Mmm" Respondió Lan Zhan con calma, tomando un poco más de sopa de carne con setas de
invierno, bebiendo esta con gusto.

Wei Ying por su parte, se divertía haciéndole preguntas al menor mientras comía,
aprovechando que este aparentemente estaba dispuesto a responder cualquier cosa, y se
encontraba bastante cooperativo "¿Y las nueces de agua?"

"No las he probado"

Sorprendido, Wei Ying levanto la mirada para observarlo, incrédulo. Y es que el omega había
vivido su vida entera comiendo aquellas deliciosas nueces y las semillas de loto, tanto así que
le costaba pensar que alguien no las había probado.

"¿En serio? ¿Nunca?"

Ante la pregunta, Lan Zhan negó con la cabeza, terminando a comer la sopa para comenzar a
atacar el arroz y el estofado de carne, ya sin poder negar que la comida de Yunmeng era
deliciosa: "Nunca, porque no hay nueces de agua en Gusu"

"¿Y lotos?"

Recordando el dulce aroma que aun podía saborear proviniendo del mayor, Lan Zhan se
distrajo por un segundo, mirando al mayor de reojo: "No, tampoco hay lotos en Gusu"
Sintiéndose algo decepcionado con aquellas respuestas, Wei Ying también comenzó a atacar
aquel delicioso estofado: "¿Qué harás hoy en la tarde?"

"Ya que tu padre me dio permiso, planeo visitar la biblioteca de Yunmeng"

"Ugh... Biblioteca..." Susurro Wei Ying, aun comiendo: "Tengo una idea ¿Y si estamos juntos
toda la tarde?"

Un poco más intrigado por aquellas palabras, Lan Zhan se giró para ver al mayor, esperando
a que este terminara de explicar su punto. Al tener la atención de Lan Zhan, Wei Ying
también dejo de comer para mirarlo, girándose en su dirección para explicarle: "Como
prometidos, debemos pasar tiempo juntos, en realidad estas aquí para eso específicamente...
Así que pensaba que en las tardes y noches, podemos hacer primero lo que tú quieras, como
ir a la bilioteca... Y luego podemos hacer algo que me guste a mí. Así pasamos tiempo juntos
y comenzamos a llevarnos mucho mejor"

Al escuchar estas palabras, Lan Wangji no puede evitar entrecerrar ligeramente los ojos,
mirando al mayor con desconfianza: "No voy a jugar contigo"

Viéndose descubierto, Wei Ying solo puede reir, apoyándose suavemente en el brazo del
menor, mirándolo muy divertido: "¡Lan Zhan! ¡Yo no solo quiero jugar todo el tiempo!"

Mirándolo de una forma muy seria, Lan Zhan prefiere no decir nada al respecto, aun
comiendo su comida en silencio. Al ver esto, Wei Ying sonríe, decidiendo explicarse un poco
mejor: "Hanguang Jun, Hanguang Jun ¿Por qué siempre piensas mal de mí? No quiero jugar,
en realidad quería que tomemos un paseo por Yunmeng"

"Mmm" Respondió Lan Zhan nada interesado, pues ese mismo día ya había tenido un
recorrido por parte de Jiang Fengmian.

"Es verdad Lan Zhan, me sentí muy mal por no poder ir hoy en la mañana, quiero mostrarte
mis lugres favoritos por aquí"

"¿Sin juegos?"

Suspirando, Wei Ying accede, abrazándose suavemente al brazo del menor: "Sin juegos"

"¿Lo prometes?"

"Lo prometo"

Mirándolo de reojo, aun abrazado a él, Lan Zhan comienza a sentir como su propia túnica
comenzaba a humedecerse por las mojadas prendas que tenía Wei Ying después de su larga
mañana jugando en el lago afuera de Yunmeng. Así que de manera elegante, intento apartarse
un poco, haciéndole entender al mayor que no le gustaba lo que este estaba haciendo.

"Disculpa" Dijo Wei Ying captando la indirecta, soltando lo más rápido que podía a Lan
Zhan, apartándose de este algo sonrojado.
Aun mirándolo, Lan Zhan no pudo evitar observa su húmeda ropa, la cual se pegaba mucho
al cuerpo del mayor, tragando un poco de saliva, pues con su ropa mojada se podía ver
mucho mejor aún su delicada figura, haciendo que de manera culpable no pudiera apartar su
mirada de este.

"¿No tienes frio?"

Sorprendido por la pregunta, que en realidad era la primera que el menor le hacía, Wei Ying
dejo su comida para verlo: "No, es una primavera calurosa, así que estoy bien"

"No traes zapatos, y estas completamente mojado"

Ante estas observaciones, Wei Wuxian intento cubrirse de una mejor manera, intentando así
no preocupar al menor: "Estoy bien Lan Zhan, no te preocupes"

Poniéndose serio, sin poder creer o confiar mucho en las palabras del mayor, Lan Zhan no
dijo nada más, tomando sus palitos para intentar terminar de comer su almuerzo. Y sin previo
aviso, Lan Zhan observo como Wei Ying se acercaba a él para besar una de sus mejillas con
cariño solo por unos segundos antes de separarse, dejando un sentimiento extraño en el joven
jade, que miro incrédulo a Wei Ying después del beso.

"Muchas gracias por preocuparte por mí, Lan Zhan" Agradeció Wei Ying guiñándole un ojo,
para luego volver a tomar sus palitos para comer.

Sintiéndose algo perdido, con las orejas ligeramente rojas por la vergüenza, Lan Zhan
mantuvo la calma y solo pudo susurrar: "Mmm..."

Haciendo reír a Wei Ying con aquella respuesta, Lan Zhan se quedó avergonzado, sin poder
evitar pasar sus dedos por su mejilla, justamente en donde Wei Ying lo había besado.

Había obtenido el primer beso de su omega, y eso en secreto le encantaba a Lan Zhan.

***

Aburrido, Wei Ying solo pudo seguir mirando fijamente al menor frente a él, intentando así
que Lan Zhan lo mirara y entendiera que estaba muriendo del aburrimiento. Pero el menor no
le hizo caso en lo absoluto, y aunque Lan Wangji obviamente se dio cuenta de los penetrantes
ojos de Wei Ying sobre sí mismo todo ese tiempo, lo ignoro por completo, sin apartar la vista
del libro que tenía frente a él, muy concentrado.

"Lan Zhan... ¿No es mucho tiempo ya? ¿Qué estás leyendo con tanta atención?"

Desviando la mirada de su libro por solo unos segundos, Lan Wangji miro a su prometido con
la cara seria, antes de volver a leer: "Estoy leyendo la historia de tu secta"

Ante esta respuesta, Wei Ying puso una cara extraña, llena de escepticismo. Se encontraban
los dos solos en la gran biblioteca de Yunmeng, una sala que Wei Wuxian había visitado
pocas veces en su vida, y de esas pocas veces casi siempre había sido por un castigo que se le
había impuesto en su propia secta; Wei Wuxian no era una gran amante de la lectura. Sin
embargo, al terminar de almorzar, después de que Wei Ying fuera a cambiarse la ropa
mojada, Lan Zhan pidió expresamente ir a la biblioteca, ante lo que Wei Wuxian tuvo que
acompañarlo a regañadientes. Despues de todo, había sido su propia idea de pasar juntos la
tarde.

"A demás, dijiste que haríamos lo que yo quisiera hasta que sonara la campana que indicaba
las 4 pm" Le recordó Lan Wangji, notando el desespero por el aburrimiento en el rostro del
mayor.

Ante esta frase, Wei Wuxian no dijo nada, pues aquellas pocas horas restantes que quedaban
hasta que se cumpliera ese plazo se le hacia una eternidad. No entendía como Lan Wangji
estaba leyendo un libro para los niños de su secta, uno que el mismo Wei Ying había tenido
cuando era más joven, ya que todos los discípulos de la secta Yunmeng Jiang debían saber su
historia; sin embargo Lan Zhan no era discípulo de la secta Yunmeng Jiang, y aunque se iba a
casar con Wei Ying, no debía adoptar las costumbres de este si no quería, Wei Ying no
planeaba tomar las costumbres de Gusu solo por casarse con Hanguang Jun.

Y es que cuando entraron a esa gran biblioteca, aunque Lan Zhan tuvo acceso para tomar
libros prohibidos sobre la secta Yunmneg, o incluso libros de pelea del estilo de la secta, el
directamente fue por libros de historia. Sin entender su proceder, Wei Ying solo pudo sentarse
frente a él en una mesa baja que el menor había escogido para leer, intentando distraerse
haciendo pequeñas cosas con papel o dibujando, pero esto solo sirvió la primera hora, luego
de eso la silenciosa espera a la campana de la media tarde se había vuelto una tortura.

"Lan Zhan... El objetivo de estar juntos en la tarde es hablar y conocernos mejor, no


sentarnos en silencio aburriéndonos el uno al otro"

Sin apartar la mirada de su libro, Lan Wangji solo respondió con un seco: "Mmm..."

Frunciendo los labios ante esta respuesta, Wei Ying miro al menor enfadado: "Que apático
eres..."
Capítulo 7.

Frunciendo los labios ante esta respuesta, Wei Ying miro al menor enfadado: "Que apático
eres..."

Volviendo a tomar una hoja de papel, Wei Ying comenzó a doblar esta con maestría entre sus
dedos, comenzando a hacer una pequeña grulla de papel, mirando de reojo a Lan Wangji de
vez en cuando, observando su imperturbable rostro. El menor era de una belleza admirable,
con los ojos dorados y las pestañas largas, tenía una piel muy clara y tersa, con un rostro de
facciones agradables y finas, coronadas por un largo cabello negro y esa cinta blanca en su
frente. El joven alfa apenas tenía 12 años, ni siquiera había tenido su primer celo, y con su
altura llegaba tan solo al hombro de Wei Wuxian; pero aun así, el joven Wei Ying no podía
dejar de admirarse al ver a la joven belleza de Gusu frente a él, pensando en cómo sería este
cuando creciera, recordando el hermano del joven alfa, Zewu Jun, concluyendo que si Lan
Wangji se parecía aunque sea un poco a su mayor seria definitivamente hermoso.

Dejando de doblar papel, Wei Ying suspiro, mirando fijamente el rostro del joven Jade,
perdiéndose en lo hermoso que era, deseando secretamente el poder acariciar sus mejillas y
poder besar sus labios. Aunque este fuera solo un niño, siempre que se encontraba mucho
tiempo a su lado, Wei Ying sentía como si fuera a perder el control de un segundo a otro, lo
que terminaba poniéndolo realmente nervioso.

"¿Qué sucede?" Pregunto Lan Wangji de pronto, sorprendiendo a Wei Ying.

"¿Q... Que sucede? ¿De qué?" Pregunto Wei Wuxian intentando lucir inocente.

"Me has estado mirando por mucho tiempo"

Dándose cuenta de que el menor siempre supo que lo miraba, las mejillas del joven omega se
enrojecieron mucho, volviendo a llevar sus dedos al papel que tenía en frente para doblarlo:
"Lo siento Hanguang Jun, no quería molestarte"

Volviendo a levantar la mirada de su libro, por tan solo unos segundos más, Lan Wangji miro
fijamente a Wei Wuxian, antes de seguir con lo suyo: "Esta bien, puedes mirarme"

Negándose ante las palabras del menor, muy avergonzado, Wei Wuxian siguió haciendo
pequeñas grullas de papel, sin mirar ni una sola vez al joven jade que tenía en frente,
sintiéndose muy avergonzado. Cuando la campana de Yunmeng sonó por fin, dándole a
entender a ambos que había llegado la media tarde, lo que significaba que su tiempo en la
biblioteca finalmente había terminado, Wei Ying solto un suave ruidito de felicidad.

"¡Por fin!" Dijo Wei Ying contento, dejando de hacer las grullas de papel.

Suspirando algo desilusionado por escuchar la campana, Lan Wangji observo las pocas hojas
que le quedaban del libro, dándose cuenta de que probablemente no podría terminar de leer
esa tarde, lo que lo entristecía ligeramente, pero prefirió no decir nada, ya que entendía que
ahora era el turno de Wei Ying de decidir a donde irían.
"Bien, vamos" Dijo el mayor, poniéndose de pie de un salto, realmente animado por poder
salir de ahí.

Cerrando el libro con cuidado, y poniéndose de pie de la manera más elegante que podía, Lan
Zhan siguió al mayor fuera de la biblioteca: "¿A dónde iremos?"

"Voy a darte mi propio recorrido por Yunmeng ¡Te mostrare mis 5 lugares favoritos en Lotus
Pier!"

Bastante intrigado por las palabras del mayor, Lan Zhan camino hasta ponerse al lado de su
prometido, caminando junto a él por los edificios y los caminos de Lotus Pier. Pronto, se dio
cuenta de que visitarían un pequeño claro rodeado de árboles y con algunas estructuras de
piedra que casi colindaba con el exterior del edificio de la secta, un lugar muy pacifico, pero
no el más hermoso que se tenía en la residencia de los Jiang.

"Ya estuvimos aquí en la mañana" Explicó Lan Zhan, caminando cada vez más cerca del
claro.

"¿En serio? Seguramente debe ser porque mi tío sabe que este lugar es uno de mis favoritos"

Caminando dentro del claro con el menor, Wei Wuxian rápidamente se acercó a uno de los
árboles, tocando la corteza con cariño.

"¿Por qué te gusta este sitio?" Pregunto Lan Zhan, parándose en medio del claro, a algunos
metros del mayor.

"Bueno, cuando era más joven y recién llegue a Yunmeng, no me dejaban salir al bosque. A
mí siempre me gusto correr por ahí y trepar árboles, así que solíamos jugar con mis hermanos
aquí. Al final, cuando crecimos, ellos ya no pasaban por aquí, pero yo sigo viniendo casi a
diario a jugar solo, me gusta aquí"

Mirando bien al mayor, Lan Zhan observo como Wei Wuxian tocaba amablemente aquellos
árboles, como si realmente fueran algo preciado para él, sonriendo y luciendo muy contento.

"¿Cómo jugabas aquí?" Pregunto Lan Wangji, en un impulso de estupidez.

"Trepábamos árboles, corríamos, jugábamos a las escondidas... También nos perseguíamos


entre los arboles"

"Mmm"

Sonriendo de forma traviesa, Wei Ying dejo el árbol para caminar en dirección al joven de la
secta Lan, observando su serio y frio semblante, el cual aun así no podía evitar esconder
cierto interés, mirando los arboles fijamente.

"Oye Lan Zhan..." Dijo Wei Ying caminando en su dirección: "¿Qué sueles hacer para
divertirte en Gusu?"

Dejando de mirar los árboles para ahora concentrar su atención en el joven omega, Lan
Wangji pestañeo algo confundido por la pregunta, tomándose su tiempo antes de responder:
"Leer, reformular las reglas de mi clan, aprender música..."

Poniendo una cara extraña, Wei Wuxian interrumpió al menor con cierta molestia: "Ugh...
¿En serio? ¿No hacen nada más en Gusu?"

Observando como Wei Ying se paraba frente a él, y como se agachaba ligeramente para poder
verlo al rostro, Lan Zhan trago un poco de saliva de forma disimulada antes de responder:
"Tenemos muchas reglas, no es tan simple"

"¿Te prohíben correr?"

"Si"

"¿Trepar arboles?"

"Mmm"

"No puede ser ¿Qué más te prohíben? ¿Comer?"

"En exceso, también está prohibido"

Ante estas respuestas, Wei Ying puso una cara extraña, aun mirando fijamente al joven Lan
frente a sí mismo. No podía creer que su pequeño prometido había crecido con tantas reglas y
tal rectitud, entendiendo un poco mejor porque es que aquel niño se comportaba de esa
manera tan recta, siempre serio y con tantas negativas ante sus intenciones.

Sonriéndole de forma tranquila, Wei Ying no pudo evitar sentir cierta lastima por el menor,
mirándolo a los ojos: "Lan Zhan, Lan Zhan... Hay tantas cosas que te perdiste en tu vida,
debes dejar de ser tan rígido, realmente las cosas mejorarían entre los dos"

"¿Y qué debo hacer entonces? ¿Aceptar tus juegos así nada más?"

"No te matara ¿Verdad?"

Sin poder evitarlo, acercándose más al joven Lan Wangji, Wei Wuxian beso suavemente una
de sus mejillas, notando como el pequeño se había sorprendido y había retrocedido de golpe,
Wei Ying no pudo evitar reír. Ante sus labios tuvo la suave mejilla de Lan Zhan, la cual se le
hizo tan suave y hermosa como un algodón, haciéndolo desear aún más al menor.

Sonrojándose, Lan Wangji retrocedió de un salto, tocando su mejilla completamente


avergonzado: "¿¡Pero qué crees que haces!?"

"Te di un beso... ¿Qué pasa? ¿Quieres otro?"

Viendo como el mayor comenzaba a caminar en su dirección, nuevamente con un semblante


amenazante, Lan Zhan comenzó a retroceder en dirección a los arboles: "¡Wei Wuxian! ¡No
te atrevas!"

Riendo divertido, Wei Ying comenzó a avanzar más rápido, observando como Lan Zhan por
su parte se graba dándole la espalda, comenzando a correr hasta los arboles de aquel pequeño
parque, huyendo del mayor. Viendo a su joven prometido comenzar a correr, Wei Ying no
pudo evitar reír, comenzando a perseguirlo, observando como Lan Wangji corría en medio de
los arboles rápidamente, huyendo.

"¡Corre Lan Zhan! ¡Corre!"

El menor, jadeando un poco, con la adrenalina en todo su cuerpo, siguió corriendo de un


árbol a otro, sintiendo su corazón palpitando en medio de la emoción de aquella persecución,
sin entender por qué comenzaba a divertirse con eso.

Riendo y aun corriendo detrás del menor, cruzando el claro y envolviéndose entre los árboles,
Wei Ying siguió jugando con el menor: "¡Corre Lan Zhan!"

Jadeando un poco cansado, tras un par de minutos más de aquella persecución, Wei Ying paro
en medio del claro, mirando como detrás de un árbol, Lan Wangji también se había detenido
y lo miraba desde su posición: "Venga Lan Zhan, ya es mucho, dejemos de jugar"

Sin poder evitar lucir algo triste, Lan Zhan miro a su prometido fijamente, mientras que Wei
Ying solo se quedó algo sorprendido, observando al menor con esa carita tan deprimida, aun
escondido detrás de ese árbol ¿Acaso al menor le había gustado ese juego?

"¿Quieres seguir jugando?"

Asintiendo rápidamente, Lan Wangji le respondió con un animado: "¡Mmm!"

Sonriendo satisfecho, Wei Ying tomo algo de aire, antes de volver a correr: "¡Corre Lan
Zhan! ¡Voy por ti!"

Más animado, Lan Wangji volvió a correr de un lado al otro, sintiendo los pasos rápidos de su
gege detrás de él, además de sus risas animadas, que lo llenaban de felicidad.

"¡Sigue corriendo! ¡O si no te besare de nuevo!"

Al escuchar estas palabras, Lan Zhan deja de correr, quedándose quieto en medio de aquel
prado, girándose de golpe para mirar al mayor detrás de él, que corría riendo en su dirección.
Al final, en medio de ese absurdo juego, ambos terminaron encontrándose.

Ya frente al mayor, Lan Zhan lo miro desde abajo con seriedad: "Me encontraste"

Pestañeando algo confuso, Wei Ying sonrió algo nervioso, mirando igualmente al menor: "Si,
te encontré"
Chapter 9

“¡A-Qing!” Gritó Xiao Xingchen, mirando el bosque con temor.


Mo Xuanyu no podía comprender lo que estaba ocurriendo, ya que con el paso de las horas,
la joven beta no había aparecido, perdiéndose en el bosque desde el mediodía.
Como era de esperarse, Xiao Xingchen se encontraba alterado buscando a su hija adoptiva en
medio de la maleza, temiendo que alguna criatura maligna la hubiera herido en el bosque.
Pero a diferencia de su esposo, Xue Yang se encontraba algo distante, perdido en sus propios
pensamientos, mientras caminaba detrás de Xiao Xingchen pero sin decir nada.
“A-Chen… Paremos por un minuto” Suplicó Xue Yang: “Estoy mareado…”
“Lo siento A-Yang, regresemos a casa, estas enfermo, no deberías estar en el bosque” Se
disculpó Xingchen, girándose para tomar a su omega entre sus brazos.
La versión que Xue Yang les había contado dictaba que él y A-Qing habían peleado, así que
la joven molesta se había ido al bosque y luego desapareció. No era la primera vez que A-
Qing y Xue Yang peleaban, y en las ocasiones previas Xiao Xingchen solía encontrar a la
joven escondida en el bosque o en alguna de las casas de la ciudad Yi, exigiendo con molestia
que Xue Yang se disculpara con ella antes de regresar, así que en la mente del alfa esa era la
situación que estaba ocurriendo.
Por su parte Xue Yang no había dicho nada en absoluto, lucia muy intranquilo, incluso en un
par de ocasiones Mo Xuanyu lo escucho decir que todo aquello era su culpa, luciendo
realmente miserable a la vez que muy débil.
“No te preocupes, yo voy a encontrarla, revisare las casas más alejadas de la ciudad, seguro
está escondida ahí esperando a que vayas a disculparte” Dijo Xiao Xingchen, regresando a su
casa y dejando a Xue Yang cuidadosamente en su cama.
“Me disculparé con ella, en verdad lo haré” Aseguró Xue Yang, acariciando suavemente su
abdomen mientras miraba a su alfa.
“Sé que lo harás…”
Xiao Xingchen le besó suavemente la frente a su omega, antes de salir de la habitación,
encontrándose con Mo Xuanyu quien los había estado siguiendo todo ese tiempo.
“Cuida a A-Yang mientras no estoy, buscaré a A-Qing y la traeré de regreso a salvo” Aseguró
Xiao Xingchen, mirando al omega.
“Lo hare Xiao Gonzi, no debe preocuparse” Aseguró Mo Xuanyu.
Después de acariciar suavemente la cabeza de Mo Xuanyu, Xiao Xingchen tomó su espada,
caminado fuera de la casa para seguir con la búsqueda de la joven.
Aun confundido por la situación pero decidiendo cumplir con la petición que el alfa le había
hecho, Mo Xuanyu entró en la habitación de Xue Yang, encontrándolo sentado en su cama,
tan pensativo como había estado toda la tarde.
“Xue Gonzi, debería estar acostado…” Dijo Mo Xuanyu alarmado.
“¿Por qué te está buscando Jin Guangyao?” Preguntó Xue Yang sin irse por rodeos.
Después de regresar a casa, Xue Yang consideró seriamente atrapar a Mo Xuanyu y
entregárselo a Meng Yao para acabar con aquel desastre, después de todo su esposo estaba
lejos en otra parte de la ciudad, y aun en su estado le sería sumamente fácil atrapar a Mo
Xuanyu para entregarlo a Song Lan.
Pero Xue Yang no quiera hacerlo, aun si su propia vida y la de toda su familia estaba
amenazada de tal manera, Xue Yang no quería entregar a un inocente a Meng Yao, sabiendo
lo que él le haría a Mo Xuanyu cuando lo tuviera en sus manos.
“¿Cómo es que tu…?” Dijo Mo Xuanyu aterrado.
“Cuando era niño, vivía en las calles. Fui uno de los tantos niños omegas que fueron
abandonados por sus padres, nunca conocí a mi familia, y solo vivía escapando de otros alfas
y recogiendo comida del suelo. Un día no pude escapar más, y fui encontrado por un señor
alfa quien me secuestró, me llevo a su residencia y me hizo cosas horribles, por un largo
tiempo pensé que iba a matarme. Pero al cumplir 7 años, una persona me compró. Nunca
supe a lo que se dedicaba ese hombre, solo sé que vendía omegas, y me vendió a mí porque
tenía una cierta afinidad para el cultivo” Explicó Xue Yang.
“¿Te vendió a Meng Yao? ¿Por eso haces todo esto?”
“Me vendió a la secta de la familia Su, en Gusu” Explicó Xue Yang con frialdad: “Ellos me
entrenaron en el cultivo, pero no solo hicieron eso, buscaban a una persona que pudiera
controlar energía resentida, porque querían que creara algo importante, un sello muy
poderoso que solo pude hacerse con energía resentida… ¿Esa historia te suena familiar?”
En silencio, Mo Xuanyu cruzó miradas con Xue Yang, sin saber si debía correr o si debía
quedarse ahí, aun dudando sobre las intenciones de aquel omega tan misterioso.
“Cuando cumplí 12 años me llevaron a la secta Jin, como un aprendiz más en la torre Koi, ahí
conocí a Meng Yao. Yo ya podía controlar la energía resentida, así que me llevaron ahí solo
para poder crear el sello, pude leer y estudiar los libros que creó Wen Shima, los cuales están
en poder de Meng Yao, aunque tu probablemente ya sabes eso. Ellos me hicieron cosas
horribles, eran mis dueños, así que me obligaron a atacar a personas que no quería, y me
obligaron a usar la energía resentida para sus propósitos, aunque nunca pude crear el sello del
tigre de estigio, no era lo suficientemente fuerte para llenar el acero de energía resentida…”
“No es cuestión de fuerza” Dijo Mo Xuanyu con suavidad: “Debes usar energía resentida que
ya existe en este mundo. Si encuentras un circulo de tragedias, la cual estuvo maldecida por
esa energía, puedes maldecir el acero lo suficiente para crear el sello.”
“Así que lo descifraste…” Dijo Xue Yang sorprendido: “¿Cómo lo hiciste?”
“Observando a Wei Wuxian, por que la clave en realidad no estaba en Wen Shima, estaba en
él” Explicó Mo Xuanyu: “Wen Shima solo creo los planos para el sello, pero nunca lo creo en
realidad. Estando en los túmulos funerarios, Wei Wuxian recuperó la espada maldita de Wen
Shima de las profundidades de una caverna, la espada estaba rota, así que uso la mitad del
acero para reparar a su espada Suibian y devolverla a la vida, y uso la otra mitad para crear el
sello. Él uso la serie de desgracias de la historia maldita de Wen Shima y su prometido para
crear el sello, y se tenía que encontrar una serie de desgracias semejante para poder crear uno
nuevo.”
“Entonces Wei Ying nunca maldijo el acero por sí mismo… Él uso acero maldito. Nunca lo
hubiera pensado…”
“Nunca se le ocurrió a nadie, porque nadie sabe trabajar el acero como mi familia, no
entienden cómo tratarlo y como darle propiedades espirituales. En realidad Wei Wuxian
tampoco lo comprendía, o eso creo yo, seguramente buscó esa espada maldita solo para
reparar a Suibian, y uso el resto del acero para crear el sello, no fue algo intencional pero creó
algo increíble…”
Mo Xuanyu sabia como trabajar el acero espiritual, su familia se había especializado por años
en crear espadas y armas espirituales, así que no había persona más preparada que él para
entender como forjar el acero o darle propiedades especiales, esa era la razón por la cual
Meng Yao lo había escogido para cumplir la tarea que Xue Yang nunca pudo terminar.
“Entonces lo tienes, el sello del tigre de estigio” Dijo Xue Yang, poniéndose serio de nuevo.
“¿Eso es lo que quieres? No esta aquí conmigo, prefiero morir antes que dártelo a ti o a Meng
Yao” Dijo Mo Xuanyu con valentía.
“Entonces tu y yo tenemos algo en común, yo tampoco quiero darle ese sello a Meng Yao, y
tampoco quiero poseerlo.”
“¿Qué?” Preguntó Mo Xuanyu sorprendido.
“La energía resentida es mejor controlada por omegas, pero lo que le hace al cuerpo de uno
de los nuestros… Podrías terminar peor que Wei Wuxian si sigues usándola de forma tan
descuidada. Ahora tengo un alfa, una familia, no quiero arruinar mi vida y mi cuerpo usando
ese tipo de cultivo lleno de veneno” Explicó Xue Yang con frialdad: “¿Por qué creaste ese
sello maldito? Sabías que Meng Yao lo quiere para revivir a su estúpido alfa, y sabias que si
lo creabas traerás desgracias a este mundo, le diste un arma que solo él puede usar…”
“Yo también puedo usarlo” Dijo Mo Xuanyu convencido.
“No, en realidad no puedes. Si hay una persona en este mundo aparte de Meng Yao que
puede usar esa cosa sin morir en el intento, es Wei Wuxian, y te aseguro que él tampoco está
interesado en usarla, no después de lo que le paso. Creaste un arma que solo Meng Yao puede
usar…”
Luciendo ligeramente arrepentido, Mo Xuanyu susurró: “Volví a crear el sello para
vencerlo… Creí que era la única cosa que me daría la fuerza suficiente para matarlo…”
“Lo creíste mal, temo que nosotros no somos lo suficientemente fuera para usarlo, así que
debemos destruirlo antes de que llegue a manos equivocadas. Pero tal vez no estabas del todo
equivocado… Podemos usar el sello para atraer a Meng Yao, y después de acabar con él,
podremos destruir esa cosa.”
“¿Atraerlo?” Preguntó Mo Xuanyu confundido.
“Él me ordeno que te atrapara, y se llevó a A-Qing para asegurarse de que seguiría sus
órdenes…”
“Suena como algo que A-Yao definitivamente haría cuando alguien se rehúsa a obedecerlo.”
“Por eso debemos ser cuidadosos, si queremos que A-Qing no sea dañada por ese demente,
voy a necesitar que confíes en mí.”
Mo Xuanyu guardo silencio, sin aceptar la petición de Xue Yang, pero sin negarse tampoco.
***
Sacudiéndose las manos, Xiao Xingchen cerró la puerta de esa vieja casa desolada,
descartando un nuevo sitio en el cual A-Qing pudo haberse escondido. Saliendo nuevamente
a la obscura noche de la ciudad Yi, Xiao Xingchen se sintió sorprendido cuando alguien puso
algo en su espalda, inmovilizándolo.
“A-Chen… De verdad lo siento…”
“¿A-Yang?” Preguntó Xingchen sumamente confundido.
Sintiendo un gran dolor en su corazón, Xue Yang observó cómo su alfa se desplomaba en el
suelo, con un sello de sangre colado en su espalda, el cual lo inmovilizaba y pronto lo dejaría
inconsciente.
“De verdad lo siento mucho” Se disculpó Xue Yang, arrodillándose a su lado en el suelo,
acunando la cabeza de su alfa en su regazo: “Pero no puedo perderte, y si él sabe que tu estas
aquí, te usara como una debilidad para dañarme…”
“¿Por qué…?” Preguntó Xingchen, cada vez más débil y adormilado.
“Cuando todo esto termine, prometo que te diré toda la verdad, aun si me odias por ello…
¿Sabes una cosa? Vamos a tener un pequeño alfa, pronto cumpliré un mes de embarazo,
deberíamos empezar a pensar en nombres, yo estaba pensando en llamarlo Zichen… Deberé
disculparme con él después de todo…”
Xue Yang no estuvo seguro de cuantas de sus palabras fue que Xiao Xingchen escuchó, ya
que mientras acariciaba suavemente sus cabellos, el mayor se había quedado dormido.
“¿En verdad esto es necesario?” Preguntó Mo Xuanyu muy nervioso, acercándose a Xue
Yang con paso lento.
“Lo es. Jin Guangyao sabe bien como herirme para vencerme, y la forma más fácil es ir por
mi familia, así que en un combate usaría a mi alfa para vencerme. Sin él o A-Qing presentes,
no voy a tener ninguna debilidad más que mi propia fuerza física, entonces él y yo estaremos
igualados para pelear.”
Al escuchar esas palabras, Mo Xuanyu bajó la mirada con tristeza, ya que podía notar todos
los problemas que le había causado a Xue Yang disculpándose silenciosamente con él por
todas las molestias que le había dado.
“Ayúdame, tómalo de los tobillos, debemos llevarlo a casa para esconderlo” Le pidió Xue
Yang.
Limpiando algunas de las lágrimas de sus mejillas, Xue Yang se puso de pie, y con ayuda de
Mo Xuanyu comenzaron a llevar el cuerpo inconsciente de su alfa de regreso a su casa. En el
lugar, Xue Yang ya había preparado un lugar donde dejar a su esposo, en el lugar donde solía
dormir A-Qing, habían preparado un ataúd con almohadas y varias sabanas para mantenerlo
caliente durante sus sueños.
Con mucho esfuerzo, los dos omegas lograron poner el pesado cuerpo de ese alfa en el ataúd,
cubriéndolo con las frazadas y dejándolo cómodo sobre las almohadas. Antes de cerrar el
ataúd, Xue Yang de forma temblorosa tomó una carta, la cual puso en las manos de su alfa
con delicadeza, dejando un beso cariñoso en sus labios, aparentando una despedida.
“¿Qué es eso?” Preguntó Mo Xuanyu con curiosidad.
“Es una carta en la cual le explico A-Chen toda la verdad, si la situación se complica y A-Yao
me asesina, quiero que él sepa la verdad por mis palabras, no quiero que me odie aun cuando
me vaya” Explicó Xue Yang.
Después de darle una última mirada a su alfa, Xue Yang cerró la tapa del ataúd, camuflándolo
entre las demás cajas de madera del lugar, encontrando un escondite perfecto para su alfa en
medio de todo ese caos.
“De acuerdo, ahora debemos prepáranos. Mañana casi al medio día él y Song Lan vendrán,
tenemos que prepararnos si queremos vencerlo” Explicó Xue Yang.
“¿Song Lan?” Preguntó Mo Xuanyu.
“Es el viejo compañero de cultivo de Daozhang, él una vez vino a casa y… Eso no interesa”
Dijo Xue Yang negando con la cabeza: “Es un cadáver resentido bajo la orden de tres
personas. Hice el mismo procedimiento que Wei Wuxian con el general fantasma, pero logré
controlarlo mejor con clavos de acero, tres de ellos en su nuca. Un clavo es mío, otro de
Meng Yao, y otro de ellos… Voy a tener que deshacerme de los tres clavos antes de pelear
con Meng Yao.”
“¿Pero no es mejor acabar de una vez por todas con Song Lan?” Preguntó Mo Xuanyu.
“Daozhang nunca me lo perdonaría, en realidad… No creo que él vaya a perdonarme después
de todo esto cuando se entere de la verdad, pero de cualquier manera, no puedo deshacerme
de Song Lan, es algo por lo que nunca me perdonaría” Explicó Xue Yang: “Necesito que
confíes en mí, mañana voy a atarte, y cuando ellos lleguen fingiré que voy a darte como
intercambio por A-Qing. Cuando ellos la traigan aquí, voy a encargarme de Song Lan y luego
iré por Meng Yao. Esto es importante A-Yu, cuando empiece a pelear con Meng Yao, debes
deshacer tus ataduras y tomar a A-Qing, los dos deben correr al lugar donde escondiste el
sello del tigre de estigio. Cuando tengas el sello, sin importar como termine mi pelea con
Meng Yao, no dejes de correr hasta que encuentres a alguna de estas personas: Wei Wuxian o
su esposo, Jiang Wanyin, o Nie Huaisang. De todas las sectas son las únicas personas que no
se ven influidas por Meng Yao, ellos te mantendrán a salvo y se aseguraran de que tú y A-
Qing puedan seguir vivos aun después de destruir el sello.”
“Hablas de esto como si no fueras a sobrevivir…” Dijo Mo Xuanyu confundido.
“Cuando todo haya terminado, seguramente A-Chen vendrá a buscarlos a los dos, no hables
mal de mí con él, ¿De acuerdo? Solo mantén a salvo a A-Qing hasta que Xiao Xingchen
venga por ella, es lo único que te pido a cambio de ayudarte con esto.”
“Lo hare…” Prometió Mo Xuanyu, entendiendo que Xue Yang estaba preparándose para
morir.
“De acuerdo, espero que no tengas sueño, porque esta noche tu y yo vamos a encargarnos de
llenar este lugar de trampas” Dijo Xue Yang caminando fuera de la casa: “Si Meng Yao
quiere venir a jugar, espero que este preparado para las consecuencias de sus actos.”
Mo Xuanyu solamente pudo asentir con la cabeza, caminando detrás de Xue Yang, aun sin
saber bien lo que él tenía planeado en mente, pero confiando ciegamente en quien pensaba
que sería su salvador.
***
Cuando el medio día finalmente llegó, la densa niebla alrededor de la ciudad Yi se vio
interrumpida por tres personas, las cuales se acercaron a la casa principal de la ciudad, donde
dos personas los esperaban.
Quitándose la máscara de arcilla que traía, Meng Yao mostró una amplia sonrisa en sus
labios, observando como fuera de esa casa se encontraba Xue Yang, y detrás de él se
encontraba la persona que había buscado por tantos días.
“Vaya, vaya… Tal y como esperaba de ti, eres el mejor de mis perros, Xue Yang” Dijo Meng
Yao complacido.
Acercándose a ambos con paso calmado, Meng Yao fue detenido por Xue Yang, quien se
interpuso entre él y Mo Xuanyu, desenvainando la espada Shuanghua y apuntando a Jin
Guangyao con ella. Al ver esa reacción, Meng Yao notó de mejor manera a Xue Yang, quien
estaba cubierto con las túnicas blanquecinas de su alfa, desprendiendo un fuerte aroma a sus
feromonas por todo el lugar.
“Primero, entrégame a A-Qing” Ordenó Xue Yang.
“¿Por qué te comportas de una forma tan hostil? Es claro que voy a regresarte a esa niña, solo
estaba jugando con ella cuando me la lleve, no debes comportarte de esa forma…”
“Sin mi hija, no hay intercambio. Tráela aquí y te regresare a Mo Xuanyu para que hagas lo
que quieras con él, pero primero quiero tener a A-Qing aquí conmigo, en mis brazos.”
Ordenó Xue Yang.
Por un momento, Jin Guangyao consideró la petición de Xue Yang, después de todo no tenía
ningún motivo para sospechar que Xue Yang tenía un plan oculto, pues acostado en el suelo
afuera de su casa, se encontraba Mo Xuanyu, con los brazos y las piernas atadas, con una
mordaza en la boca y lágrimas corriendo por sus mejillas, mirando a Jin Guangyao con terror.
“Espero que no hayas sido demasiado brusco con él, A-Yu es mi hermanito menor, es
preciado para mi” Dijo Meng Yao con un tono de burla: “De acuerdo, me parce algo
razonable. Traeré a la niña, pero nadie más se moverá de este sitio hasta que yo regrese.
Cuando la traiga aquí, te la daré al mismo tiempo que tú me regreses a mi hermanito. Pero
debes comprender que estoy confiando en ti A-Yang, en tu lealtad hacia mi causa, ¿No tienes
ninguna intención oculta con esta petición, no es verdad?”
Xue Yang no respondió a esas palabras, mirando fijamente a Meng Yao, quien no dejaba de
sonreír con mucha burla.
“Espero que no estés traicionándome A-Yang… No te gustara lo que puedo llegar a hacerte si
me traicionas” Amenazó Meng Yao antes de retroceder.
Dándole una última mirada amenazante al contrario, Meng Yao tomó un talismán de
transportación de sus túnicas, y después de cubrir su rostro con la máscara nuevamente,
desapareció frente a los ojos de los presentes.
Relajando su posición y volviendo a envainar a Shuanghua, Xue Yang preparó la siguiente
parte de su plan, encarando a los dos acompañantes de Meng Yao, que se habían quedado
frente a él en la ciudad.
Mirando a Xue Yang con burla, el segundo hombre enmascarado pregunto: “¿Por qué te
vestiste de esa forma? ¿Acaso planeas engañarme vistiéndote como si fueras tu alfa?”
“No planeo engañarte a ti…” Susurró Xue Yang.
Tomando una venda blanca de sus túnicas, Xue Yang no dudó y la puso sobre sus ojos,
encarando finalmente a Song Lan, quien cambió de inmediato su aura al ver a Xue Yang,
confundiéndolo por un instante con la persona que él tanto estaba buscando…
Presenciando aquel espectáculo confundido, la segunda persona enmascarada quiso
preguntar, viendo como Xue Yang desenvainaba su espada de nuevo, como si se estuviera
preparando para atacarlos.
Sin embargo algo diferente ocurrió. A lo lejos, entre las calles desoladas de la ciudad Yi, una
fuerte explosión sonó, al igual que varios gritos de confusión.
“¿Qué demonios? ¿Alguien está invadiendo este sitio?” Preguntó el segundo hombre
enmascarado.
Muy confundido, pues aquella intromisión no estaba en sus planes, Xue Yang también miró
en dirección a los gritos y las explosiones, sin saber que decir.
“Maldita sea, esto no es bueno, no puede haber testigos de esto” Dijo el hombre
enmascarado: “Song Lan, encárgate de ellos.”
Antes de que Xue Yang pudiera detenerlo, el cadáver resentido se elevó saltando sobre una de
las casas, dispuesto a buscar a los intrusos que habían llegado a la ciudad.
“Espero que estés comportándote de esta forma tan extraña porque sabias que llegarían
intrusos… Eso es correcto, ¿Verdad Xue Yang?” Preguntó el hombre enmascarado.
Una vez más, Xue Yang no respondió, presionando fuertemente la espada de su alfa entre sus
manos, sin saber que debería hacer.
“Debemos encargarnos de los invasores, cuando terminemos con ellos, regresemos aquí para
esperar a A-Yao, Lianfang-Zun no debe tardar en regresar.”
Suspirando con furia, viendo que Song Lan su primer objetivo se había ido, Xue Yang cruzó
miradas con Mo Xuanyu, antes de verse obligado a aceptar, teniendo que acabar con esos
inesperados visitantes antes de poder continuar con su plan.
Aunque al pensarlo de forma cuidadosa, Xue Yang no consideraba aquella intromisión como
algo verdaderamente malo, ya que en medio de toda la confusión, separando a ese dúo tan
peligroso, Xue Yang pensaba que sería más fácil poder deshacerse de Song Lan.
A pesar de que hacer eso podría conllevar en la muerte de sus inesperados visitantes.
***
“Sizhui… ¿Estás seguro de que es este sitio?” Preguntó Jingyi confundido, mirando la
entrada de una ciudad desolada.
Aun con la brújula en una de sus manos, Sizhui asintió con la cabeza: “La dirección de la
brújula no ha cambiado, este es el lugar indicado.”
Dudando por un momento, ya que ese sitio desolado y lleno de niebla no le daba un buen
presentimiento en absoluto, Jingyi levantó la mirada, leyendo el nombre de aquel lugar: “Yi
city.”
Habían caminado durante toda la noche, y después de casi un día entero llegaron a ese sitio,
llenos de la emoción de poder intervenir en esa situación tan peligrosa y hacer la diferencia,
probarse como cultivadores tratando de que dejaran de considerarlos unos niños sin
experiencia. Aunque Jingyi quería ser la voz de la razón y negarse a entrar a ese sitio tan
peligroso, sentía que había sido un gran esfuerzo para todos llegar hasta ese sitio y no quería
decepcionar a nadie negándose a entrar ahí y vivir la aventura que todos deseaban, así que
decidió acceder aun si le parecía algo incorrecto.
“De acuerdo, pero con precaución, este sitio parece mucho más peligroso de lo que aparenta”
Ordenó Lan Jingyi, tomando la delantera para guiar a todos los cultivadores de su secta.
Caminando detrás de su primo, Lan Sizhui observó con mucha curiosidad aquel lugar
desolado, tratando de adivinar desde donde podría haber venido aquella fuerte energía
resentida, que era tan potente que afecto varios kilómetros a su alrededor. Sin embargo
ninguno de ellos podía ver nada, y mientras más se adentraban en las laberínticas calles de
esa ciudad vacía, Sizhui se sentía cada vez más desconcertado, sin entender nada de lo que
ocurría a su alrededor, hasta tal punto que ya no podía recordar cual fue el camino que había
tomado hasta llegar a ese sitio.
“¿Qué fue eso?” Preguntó Jingyi deteniéndose en seco.
“¿Qué cosa?” Preguntó Sizhui tan confundido como su primo.
Escuchando varios pasos y gritos, Sizhui y Jingyi se giraron en dirección a una de las calles
desoladas de la ciudad, por la cual pronto se vieron varios jóvenes de túnicas doradas y otros
de túnicas color verde claro.
“¿Los Jin y los Ouyang?” Preguntó Jingyi confundido: “¿Qué demonios hacen ellos aquí?”
Sizhui lució tan confundido como su primo, pero mientras esos ruidosos jóvenes se acercaban
corriendo, pronto todos los miembros de la secta Lan pudieron ver de lo que escapaban,
observando a varios cadáveres resentidos correr detrás de los jóvenes cultivadores, luciendo
aterradores y dispuestos a atacarlos.
Siendo alcanzados por los asustados cultivadores de las otras sectas, pronto todos los jóvenes
inexpertos comenzaron a correr despavoridos, viéndose rodeados por cada vez más cadáveres
resentidos, los cuales salían de las casas o de cualquier lugar obscuro, como si aquella fuera
algún tipo de trampa para cualquiera que hubiera ido a esa ciudad.
“¡Van a alcanzarnos!” Gritó uno de los omegas de la secta Ouyang aterrado.
“¡Muévanse de mi camino!” Ordenó Jingyi.
Tomando uno de los talismanes de sus túnicas, el joven alfa Lan uso su energía resentida para
activarlo, lanzándoselo a uno de los cadáveres resentidos, el cual explotó con fuerza,
llevándose consigo a varios de los otros cadáveres que los seguían. Aquello no iba a detener a
la horda de seres malignos que los perseguían, pero por lo menos les daría un poco más de
ventaja, especialmente a los débiles cultivadores de la secta Ouyang, quienes al ser omegas se
quedaban mucho más rezagados que los demás.
“¿Te encuentras bien?” Preguntó Lan Jingyi acercándose al omega que había gritado:
“¿Puedes continuar? Déjame ayudarte…”
Ante la sorprendida y encantada mirada de todos los demás cultivadores de esa secta
solamente para omegas, Jingyi tomó a esa débil cultivadora omega sobre su espalda,
quedándose en la retaguardia del grupo, para asegurarse de que ninguno de los demás
cultivadores necesitara ayuda o se estuviera quedando retrasado. Esto no fue pasado por alto
por Zizhen, quien mirando a Jingyi realmente encantado, se sonrojó mucho, pensando en lo
encantador que se veía aquel alfa ayudando a todos los demás omegas a su alrededor.
Mientras que desde la parte frontal, guiando y siendo protegido por los Jin, Jin Ling soltó un
bufido, pensando que Jingyi solo estaba alardeando y buscando atención de ese grupo de
omegas, mirándolo con enfado.
Todos continuaron corriendo, hasta llegar al final del camino, un callejón sin salida.
Sintiéndose muy asustado, Sizhui pronto vio como Jin Rulan se ponía frente a él, tomando su
arco para apuntar a esos cadáveres resentidos, disparándoles con muy buena puntería
intentando alejarlos, aunque era una situación sin salida, pues ellos no iban a poder
deshacerse de todos, quienes seguramente terminarían atacándolos.
Tomando su espada, dispuesto a ser el primero en pelear con aquella horda de seres malignos,
Jingyi pronto observó cómo dos personas descendían del cielo como sus salvadores,
encargándose de los seres resentidos con relativa facilidad y rapidez.
“¡Hanguang-Jun! ¡Wei Gonzi!” Dijeron todos los miembros de la secta Lan emocionados.
Chapter 10

“¡Hanguang-Jun! ¡Wei Gonzi!” Dijeron todos los miembros de la secta Lan emocionados.
Después de vencer a todos los cadáveres resentidos Wei Wuxian rápidamente se giró para ver
a los jóvenes cultivadores detrás de él. Suspirando, el omega se acercó a Sizhui, tomándolo
suavemente de las manos.
“A-Yuan, ¿Te encuentras bien?” Preguntó Wei Ying en un susurro, genuinamente preocupado
por su hijo.
Bajando la mirada con algo de vergüenza, Sizhui respondió: “Si, A-Die.”
Volviendo a envainar su espada, mirando como un extraño gas comenzaba a emanar de los
cadáveres resentidos, Lan Wangji retrocedió, acercándose a su esposo y a su hijo.
“¡Papá!” Dijo Sizhui alegre, soltándose del garre de Wei Ying para acercarse a Lan Wangji.
Sonriendo con suavidad, Wei Ying observó cómo su cachorro iba a abrazar de forma efusiva
a su padre, teniendo una actitud completamente opuesta a la que demostraba con su padre
omega. De cierta forma, Wei Wuxian estaba habituado a que eso ocurriera, Sizhui siempre
había sido más frio y cerrado con él, Wei Ying no dudaba que su hijo lo quería, pero por
alguna razón siempre había sentido su rechazo, aunque jamás pudo comprender la razón…
“¿Puedes sentir ese olor?” Preguntó Lan Wangji, acariciando suavemente la cabeza de Lan
Sizhui.
Cerrando los ojos, Wei Ying olfateó el aire, para luego susurrar: “Huele agrio… Veneno.”
“Mmm…”
Al escuchar esas palabras, los jóvenes cultivadores que anteriormente lucieron aliviados por
que no hubiera más cadáveres a su alrededor, lucieron nuevamente tensos.
“¿Cómo que veneno?” Preguntó Jin Ling asustado.
“Saquen la lengua, este es veneno que puede sentirse en el aire, necesitamos encontrar a las
personas que están envenenadas ahora mismo” Pidió Wei Ying.
Tímidamente, todos los cultivadores presentes sacaron la lengua, demostrando que varios de
los cultivadores de la secta Jin y Ouyang estaban envenenados, pero pocos de la secta Lan lo
estaban. Esto debido a que Lan Jingyi se aseguró que los miembros de su secta corrieran
rápido, siendo uno de los pocos envenenados al quedarse atrás para proteger a los demás.
“Bueno, no hay nada que hacer, supongo que deberemos encargarnos de esto…” Dijo Wei
Ying, girándose para ver a su alfa.
“Mmm…”
Interrumpiendo a Wei Ying, rápidos pasos se escucharon en lo alto de uno de los techos de
las casas cercanas, y en un rápido movimiento, Lan Wangji desenvainó su espada,
bloqueando el ataque directo de una flecha que había ido en dirección a Wei Wuxian.
Mirándose sumamente relajado, ya que sabía que su alfa lo defendería sin importar la
situación, Wei Ying se giró en dirección a ese misterioso hombre, quien vestido con extrañas
túnicas y una máscara, parecía ser un cultivador fuerte.
“¿Acaso fue él quien creo estos cadáveres?” Preguntó Wei Ying en un susurro: “No… Esto
debió haberlo hecho otra persona, no siento ningún rastro de energía obscura en ese tipo…”
Sin esperar otro ataque, Lan Zhan saltó al tejado de esa casa, atacando con fuerza a ese
extraño, pero siendo rápidamente replegado por el contrario, quien también había
desenvainado su espada. Esto causó aún más curiosidad en Wei Ying, quien viendo a su
esposo pelear con el desconocido, pudo notar que el misterioso hombre parecía conocer y
pelear con las técnicas de la secta Lan, teniendo una pelea bastante pareja con Lan Wangji.
“¿Un miembro de la secta Lan? No… Es imposible…” Susurró Wei Ying más para sí mismo
que para los demás.
Saliendo de su asombro al recordar que estaba con niños, y aún más al recordar que estaba en
medio de un momento peligroso por el envenenamiento, Wei Ying miró a los jóvenes y les
dijo: “Deben cargar a los que estén envenenados, tenemos que irnos de aquí, o ese cultivador
enmascarado podría atacarnos otra vez.”
Wei Ying no dudaba de su alfa, pero los accidentes ocurren, y no quería quedarse en las calles
con esos dos peleando en los tejados de esa forma tan fuerte. Confiando en que su alfa
regresaría a salvo, Wei Ying decidió buscar algún lugar donde pudieran esconderse hasta que
todo terminara.
“Demonios… ¿Por qué tenemos que cargar a los que están envenenados?” Refunfuñó Jin
Ling.
“El veneno se distribuye más rápido si hacen esfuerzo físico, necesitamos tiempo antes de
encontrar un antídoto” Explicó Wei Ying.
Sin tener más opción que obedecer, Jin Ling se acercó a Lan Jingyi, ayudando a los demás
miembros de la secta Lan a cargarlo, siendo Jingyi el alfa más pesado de los presentes.
“Que amable por sujetar mis hombros, líder de la secta Jin…” Se burló Jingyi, sin
desaprovechar la oportunidad de molestar a Jin Rulan.
“Cierra la boca, voy a dejarte caer” Amenazó el alfa menor, sin estar de ganas de soportar los
tontos juegos de Jingyi.
De forma preocupada, siendo uno de los omegas que fue rescatado por Jingyi, Ouyang
Zizhen caminó detrás de Jin Ling, mirando cada vez más preocupado a ese alfa Lan, quien a
pesar de lo ocurrido no lucia nada asustado, y tenía tiempo de hacer bromas incluso.
Asegurándose de que todos los cultivadores heridos estuvieran siendo llevados por sus
compañeros, Wei Ying decidió alejarse de los ruidos de la pelea de su alfa y ese desconocido,
ya que su prioridad era mantener a los jóvenes cultivadores a salvo en esa situación.
“A-Die, ¿Estamos buscando algún lugar en específico?” Pregunto Sizhui siguiendo de cerca a
su padre.
“Una cocina que podamos usar, este lugar luce bastante desolado pero no abandonado,
alguien ha estado renovando las casas, debemos buscar alguna casa que tenga una cocina con
comida” Explico Wei Ying.
Decidiendo ayudar a su padre, Lan Sizhui tomo la delantera, y comenzó a caminar entre las
diversas casas abriendo las puertas para ver su interior, inspeccionado cada una de las
viviendas para buscar un lugar renovado.
“¡A-die! Esta casa parece estar renovada recientemente…” Aviso Sizhui.
Wei Ying había notado que quien sea que hubiera estado renovando aquellas casas se había
enfocado primero en los edificios que tenían todavía alguna estructura, así que había casas en
medio de la destrucción que ya estaban listas para ser habitadas de nuevo.
“Entremos entonces, no hay tiempo que perder” Dijo Wei Ying, indicándoles a los jóvenes
cultivadores que entraran en la casa.
Cargando a todas las personas que estaban infectadas con veneno, los cultivadores entraron
en aquella casa, en la cual Sizhui estaba encendiendo algunas velas, bajando cuidadosamente
a los heridos para dejarlos sentados en el suelo.
Aun cargando a Lan Jingyi, Jin Ling soltó un bufido, casi dejando caer al alfa mayor cuando
lo ayudo a sentarse, causando regaños de sus demás compañeros, y solamente risas de Jingyi,
quien disfrutaba de ver al menor molesto.
“¿Necesitas ayuda en algo más, A-Die?” Preguntó Sizhui de forma amable.
“Ayúdame en la cocina, veamos que tenemos disponible” Pidió Wei Ying, cerrando la puerta
de la casa tras asegurándose de que todos los cultivadores ya estuvieran en el interior y a
salvo.
Viendo como Sizhui se marchaba con su padre, Jin Rulan no perdió el tiempo, así que se puso
de pie y fue detrás de ellos.
“¡Yo también voy a ayudar!” Dijo Jin Rulan con seguridad.
Wei Ying se giró algo confundido, pero permitió que su joven sobrino fuera con ellos.
Mientras que Sizhui se sonrojo ligeramente, caminando al lado de Jin Ling en dirección a la
cocina de la casa.
Viendo como Jin Ling caminaba detrás de su primo como un cachorro perdido, Lan Jingyi no
pudo evitar fruncir el ceño con desagrado. De haber tenido la oportunidad, él hubiera ido
detrás de ese alfa tan molesto para impedir que siguiera molestando al menor.
Decidiendo atender al cultivador que amablemente lo había salvado, Zizhen trajo un poco de
agua, que le ofreció a Jingyi de forma cuidadosa.
Saliendo de su enfado, Jingyi enfoco su vista en aquel amable cultivador, tomando el agua
que este le ofrecía: “Gracias por su amabilidad…”
“Debería ser yo quien le agradezca” Dijo Zizhen con la voz suave: “Gracias por haberme
salvado y a los miembros de mi secta.”
“No hay nada que agradecer…”
“¿Puedo saber cuál es su nombre?”
“Soy Lan Jingyi, el próximo líder de la secta Gusu Lan” Se presentó el alfa.
“Yo soy Ouyang Zizhen, hijo menor del líder de la familia Ouyang en Lanling” Se presentó
el menor haciendo una reverencia rápida.
Al verlo, Jingyi no pudo evitar sonreírle con amabilidad. Podía oler las feromonas de nervios
que tenía el contrario, luciendo extremadamente adorable a sus ojos, muy dulce y lindo con
aquella túnicas de tono verdoso y su cabello negro libre en su espalda.
“¿Quiere sentarse aquí conmigo a conversar?” Pregunto Jingyi con calma: “Seguramente
tendremos que esperar un tiempo para ver la milagrosa cura de mi tío, y no será nada
agradable.”
Secretamente Jingyi temía por su futuro al ver a Wei Wuxian entrar en la cocina de aquella
casa, ya que de manos de su primo, ya había escuchado las aterradoras leyendas sobre la
cocina de su tío.
***
Encontrando la cocina de la casa al final de un pasillo, Wei Ying encontró aliviado comida y
especias necesarias, así que inspeccionando todo con cuidado, se giró en dirección a Jin Ling
para pedirle:
“Trae agua del pozo a las afueras de la casa. Se cuidadoso A-Ling, si alguien viene por ti voy
a tener que salvarte” Dijo Wei Ying.
“Muy gracioso tío, no me pasara nada” Dijo Jin Rulan con confianza.
No quería lucir débil en frente de su omega, así que de forma obediente, salió de la casa por
una de las puertas laterales llevando consigo una cubierta de madera, en búsqueda del agua
suficiente.
Sonriendo al ver a ese joven alfa tratar de lucir tan fuerte y decidido, Wei Ying tuvo un
recuerdo algo tonto de su infancia, girándose para ver a Sizhui, el cual estaba muy sonrojado
mientras limpiaba la cocina.
“¿Que ocurre, A-Yuan? ¿Te sientes nervioso cerca de A-Ling?” Pregunto Wei Ying con una
sonrisa.
“En absoluto” Se negó Sizhui de inmediato.
“Tu padre y yo nos conocimos cuando teníamos una edad similar a la tuya y a la de Jin Ling,
son lindos recuerdos en mi memoria.”
“Pero tú eras algo mayor que papa” Dijo Sizhui.
“Así como tú eres mayor que A-Ling” Le recordó Wei Ying: “Cuando inicie su periodo de
cortejo se llevaran muy bien, no te sientas presionado por ello, puedo notar que A-Ling está
verdaderamente interesado en ti, las cosas van a salir muy bien…”
Con mucha vergüenza, Sizhui bajo ligeramente la cabeza, ya que no le preocupaba como tal
la diferencia de edad, pensando en cómo él no se sentía suficiente para estar con un alfa de
alta categoría como Jin Ling, sintiéndose muy apenado cuando el menor demostraba algún
tipo de interés en el, mientras las palabras de su primo y todo lo ocurrido dando vueltas en su
mente una y otra vez.
Trayendo varias cubetas de agua, Jin Ling no pudo evitar fijarse en el rostro sonrojado y tan
dulce de su omega, mientras entregaba el agua a Wei Ying, quien había empezado a cocinar
arroz.
“¿Arroz glutinoso?” Pregunto Jin Ling mirando lo que Wei Ying estaba haciendo: “¿Porque
estamos cocinando esto? ¿No teníamos que hallar una cura?”
“No te adelantes, la paciencia es una virtud” Respondió Wei Ying.
“Creí que aprenderíamos algo importante” Se quejó el menor, mirando a su tío, recordando
todas las cosas que le habían dicho de él.
“¿Cuál es la necesidad de la prisa? Prometo enseñarte algo verdaderamente importante si
esperas el tiempo” Dijo Wei Ying con calma: “Deberías aprender más de tu madre y pasar
menos tiempo con tu tío Jiang y tu padre.”
Negando con la cabeza divertido, Wei Ying comenzó a servir el arroz glutinoso en platos de
cerámica que Sizhui había limpiado. Después de servir todos los platos necesarios, Jin Ling y
Lan Yuan llevaron todos los tazones con arroz glutinoso a sus compañeros, los cuales
miraron algo confundidos los platos de comida.
Al recibir su tazón de arroz, Lan Jingyi no pudo evitar sentirse algo pálido, observando de
reojo a su primo, ya que Sizhui lo estaba mirando fijamente, esperando que probara la comida
de su padre con una sonrisa. Luciendo muy confundidos, todos los cultivadores tomaron los
platos con arroz, comenzando a comerlos, para luego empezar a quejarse del sabor.
“¡Esta demasiado picante!” Se quejó uno de ellos.
“Dejen de quejarse, la medicina no debe ser agradable” Los regaño Wei Ying: “Además no
esta tan picante, son muy exagerados…”
Siendo el único que no había probado su arroz, sabiendo que no tenía más opción, Jingyi
tomo el tazón, comenzando a comerlo haciendo varias muecas, ya que el sabor era tan picante
que llegaba ser nauseabundo. Viendo las muecas de asco que hacia Lan Jingyi, Zizhen no
perdió el tiempo y rápidamente le ofreció otro poco de agua, preocupado porque el mayor no
sintiera tanto dolor. Este acto no fue pasado por alto por parte de Sizhui, quien con curiosidad
observo como su primo era atendido por ese omega, de una forma algo sospechosa.
“¿El picante es un antídoto para el veneno?” Pregunto Jin Ling algo confundido.
“No el picante, el arroz glutinoso es un antídoto” Explico Wei Ying.
Sorprendido, Jin Ling asintió con la cabeza, tomando nota de aquel dato. Pero volviendo a
girarse en dirección a su tío, pregunto: “¿Entonces por qué es tan picante?”
“No esta picante…”
Interrumpiendo la conversación entre Wei Ying y Jin Ling, fuertes ruidos se escucharon fuera
de la casa. Abriendo ligeramente una de las ventanas para mirar el exterior, ya que saliendo
de la niebla, todos vieron como un cultivador completamente vestido de blanco se
desplomaba en el suelo, mientras que en su espalda, una criatura extraña se movía a toda
velocidad en dirección a uno de los techos de las casas cercanas.
“Demonios…” Susurro Wei Ying viendo a ese desconocido en el suelo, sin saber qué hacer.
“No podemos dejarlo ahí, esa cosa volverá por él y lo va a asesinar” Dijo Jin Ling mirando lo
mismo que Wei Ying.
“Lo se…”
Wei Wuxian temía secretamente por el veneno en las calles de aquella misteriosa ciudad. Ya
que no sabía cuántos cadáveres habían sido infectados, y no quería poner en peligro a los
niños bajo su cuidado, sabiendo que tenía poco tiempo para pensar en cual cosa iba a
priorizar.
“De acuerdo, vamos a hacer esto rápido. Abre la puerta para mí cuando veas que estoy cerca,
no antes o después, no dejes que el polvo del exterior entre a la casa, ¿De acuerdo?” Le
ordeno Wei Ying al menor.
Asintiendo con la cabeza, Jin Rulan fue detrás de Wei Ying, abriendo la puerta para el
dejándolo salir de la casa y cerrándola de forma inmediata. Los demás cultivadores que aún
estaban comiendo parte del arroz glutinoso lucían algo confundidos, sin entender bien lo que
estaba ocurriendo a las afueras de la casa en la que se encontraban.
Después de un par de segundos, fijándose en todos los movimientos de Wei Ying por una de
las ventanas, Jin Ling volvió a abrir la puerta, dejando que Wei Wuxian entrara en la casa
llevando consigo al herido cultivador vestido de blanco.
“Miren… ¿Acaso esa es Shuanghua?” Pregunto uno de los cultivadores de la secta Jin.
Pronto todas las sorprendidas miradas se dirigieron al misterioso hombre vestido de blanco,
el cual portaba en su cinturón la espada llamada Shuanghua, una espada bien conocida por
leyendas que se contaban entre sectas.
“Entonces él es… ¿Xiao Xingchen?” Pregunto Lan Jingyi igual de sorprendido que los
demás.
“Disculpe Lan Gonzi, ¿Quién es Xiao Xingchen?” Pregunto Zizhen visiblemente confundido.
“¿No lo conoces? Fue bastante popular después de la guerra de la secta Wen, él y su
compañero de cultivo Song Zichen ayudaron a regresar el orden en Qishang, y eran
admirados por todos” Explico Lan Jingyi: “Xiao Xingchen es un cultivador que viene de la
montaña de los inmortales, como el padre del maestro Wei. Bajo al mundo humano tras ver el
caos que ocasiono la muerte de Wen Ruohan, y después de unirse con el maestro de cultivo
Song, los dos recorrían las sectas mas problemáticas, ayudando a poner todo en orden y
salvando a los inocentes.”
Tras la muerte de Wen Ruohan en Qishang, rápidamente inicio una lucha interna de todas las
sectas de la región para ver quien se volvería el nuevo dirigente máximo de Qishang,
pensando que toda la familia Wen estaba acabada tras la muerte de Wen Xu, el último
heredero. Pero aún quedaba una fuerte familia Wen, la cual tras ser “rescatada” de los
túmulos funerarios, fue nombrada como la nueva secta dominante en la región de Qishang,
devolviéndole sus territorios ancestrales en Yiling, y coronando a la beta Wen Qing como la
líder de su secta.
Obviamente esto no fue tomado de buena manera por todas las sectas en la región de
Qishang, algunos no querían a más personas de la secta Wen al mando de sus tierras, tratando
de iniciar una nueva guerra como en los tiempos de Wen Shima para reclamar su puesto
como los más importantes de la región. Los tiempos obscuros no abandonaron las tierras de
Qishang por varios meses más, en los cuales la nueva secta regente Jin trato de aplacar el
nuevo intento de revolución, pero sin poder lograrlo ya que se encontraban bastante débiles
después de los estragos de la guerra.
Fue entonces cuando figuras importantes como Xiao Xingchen y Song Zichen tomaron
importancia, junto con otros cultivadores errantes sin secta, los cuales buscando evitar otra
guerra, se encargaban de aplacar las revoluciones en las sectas que trataban de sublevarse, y
ayudaban a aquellos que se habían quedado sin hogar después de todo el desastre,
volviéndose héroes conocidos por todos los ciudadanos.
“Ya veo…” Dijo Zizhen muy interesado en aquella historia: “¿Y por qué todos parecen tan
sorprendidos por verlo de nuevo?”
“Desapareció hace varios años” Explico Lan Jingyi con seriedad: “Aun después de que la
situación en las demás sectas se había tranquilizado, Xiao Xingchen y su compañero de
cultivo continuaron con su importante misión ayudando a las personas en Qishang, según me
dijeron Xiao Xingchen deseaba crear su propia secta, pero Song Zichen quería continuar con
su trabajo como cultivador errante. Enfrentándose a un poderoso enemigo en una de las
sectas que seguían causando problemas, Song Lan termino herido, después de eso según se
cuenta Xiao Xingchen lo llevo de regreso a la montaña de los inmortales donde literalmente
le dio sus ojos a su compañero, y después de eso desapareció. Song Zichen continúo con su
labor como cultivador errante por algunos años más, hasta que también desapareció… Es una
sorpresa encontrarlo después de tanto.”
“Entonces tal vez no estaba desaparecido, siempre estuvo en un lugar como este” Señalo
Zizhen.
Wei Ying conocía algunas de las leyendas referentes a Xiao Xingchen, pero nunca lo había
visto personalmente, ya que cuando este se volvió famoso Wei Ying se encontraba en
reclusión con su alfa. Aun así se sentía curioso por lo ocurrido con ese famoso cultivador, y
ayudándolo a entrar en la casa, dejo que este se sentara apoyando su espalda en una pared.
Traía sus túnicas blancas manchadas de tierra, con una venda blanca en sus ojos, Wei Wuxian
no podía ver todo el cuerpo del contrario, pero si un agarre en su cuello, lo cual le daba a
entender que había peleado con alguien bastante fuerte.
“Iré a traer arroz glutinoso” Dijo Jin Ling mirando el estado de Xiao Xingchen, corriendo en
dirección a la cocina.
“Xiao Gonzi, ¿Puede escucharme? ¿Sabe dónde se encuentra?” Pregunto Wei Ying.
Xue Yang no se había desmayado, y a pesar de la venda que cubría sus ojos, estaba
perfectamente consciente del lugar en el que se encontraba y con quien… Reconociendo con
mucha facilidad la voz y el aroma de flores de loto de Wei Wuxian.
“Si, puedo escucharlo” Respondió Xue Yang, imitando la voz de su alfa.
“Por favor manténgase sentado, pronto le daremos algo para el veneno y curaremos sus
heridas” Pidió Wei Ying.
Regresando rápidamente desde la cocina, Jin Ling le ofreció a Wei Ying un nuevo tazón lleno
de arroz glutinoso picante.
“Por favor coma esto” Pidió Wei Ying acercando el tazón a los labios del contrario: “Se
encuentra a salvo ahora.”
Dudando un poco, sintiendo el olor desagradable de aquella cosa que le ofrecían, Xue Yang
no tuvo más opción que abrir la boca y tomar un bocado, ya que estaba demasiado débil para
pelear, debía mantenerse en su papel hasta poder recuperarse y plantarle cara a un enemigo
tan inesperado como Wei Wuxian.
“¿En verdad me encuentro a salvo aquí?” Preguntó Xue Yang controlando no burlarse de sus
salvadores, ya que podía presentir lo que estaba por ocurrir.
Como era de esperarse, Wei Wuxian noto lo mismo que Xue Yang, y dejando el tazón en el
suelo, rápidamente se puso de pie, atento a lo que iba a ocurrir.
En pocos segundos, alguien atravesó una de las ventanas de la casa, sin herir a ninguno de los
cultivadores en el interior, ya que su atención parecía estar fija en el repentino invitado de
túnicas blancas que tenían en la casa. Siendo más rápido que aquel cadáver, Wei Ying no
perdió el tiempo, lanzándole un sello el cual dejó al misterioso hombre de túnicas negras
petrificado, sin moverse.
Wei Ying sabía que debía encontrar una solución rápida, ya que usar un sello de ese tipo solo
iba a ser una solución momentánea, ya que por la fuerza del cuerpo del cadáver,
probablemente este rompería el sello y volvería a moverse muy pronto. Buscando respuestas,
Wei Wuxian se giró con la intención de interrogar al supuesto Xiao Xingchen, sin embargo
aquel hombre aparentemente había vuelto a desmayarse, dejando a todos sumamente
confundidos.
“Bueno… Supongo que no hay opción” Dijo Wei Ying mirando a su hijo: “Sizhui, ¿Trajiste
tu Guqin?”
“Si A-Die” Dijo Lan Yuan aun algo asustado por todo lo que había ocurrido: “¿Qué es lo que
quieres que haga?”
“Necesito que me ayudes con tus habilidades tocando Interrogación. Tu padre me dijo que te
has vuelto muy bueno en las últimas semanas, así que toma esto solo como una práctica, ¿De
acuerdo?”
Sizhui asintió suavemente con la cabeza, sacando su instrumento musical y sentándose en el
piso cerca de su padre, preparándose para tocar.
Sizhui había tenido un inicio de entrenamiento para ser cultivador bastante tardío, tras haber
estado encerrado junto a sus padres casi hasta los 10 años, Sizhui tuvo que esforzarse mucho
y entrenar para alcanzar a los demás cultivadores de su edad en su propia secta. Aun así el
joven Lan Yuan era bastante bueno en muchas te las túnicas de su propia secta, siendo una de
esas Interrogación, la cual había aprendido de su propio padre desde hace casi un año, siendo
esa la primera vez que intentaría realizarla solo y con un espíritu maligno.
“¿Estás listo? Pregúntale cuál es su nombre” Pidió Wei Ying.
Poniendo sus dedos sobre las cuerdas de forma temblorosa, Sizhui siguió las órdenes de su
padre, tocando una suave melodía, recibiendo una respuesta pocos segundos después.
“No puede ser…” Dijo Lan Sizhui confundido: “Dijo que su nombre era Song Lan.”
Al decir esas palabras, todos los cultivadores en la sala lucieron sumamente confundidos, ya
que no podían entender como un cultivador tan fuerte como Song Zichen había terminado en
ese estado, y persiguiendo al que supuestamente era su mejor amigo en tales circunstancias.
Sin embargo Wei Ying permaneció bastante serio, atento a cualquier movimiento que Song
Lan hiciera, decidiendo enviarle un mensaje de emergencia a Wen Ning, ya que Wei Wuxian
temía que aquella situación se saliera de control. Normalmente seria Lan Wangji quien se
encargaría de alguien como Song Lan si las cosas se complicaban, pero ahora su esposo se
encontraba resolviendo sus propios problemas con aquel cultivador misterioso, y en medio de
tantos cachorros y sin un arma, Wei Ying temía no ser suficiente, requiriendo la ayuda de la
única persona que creía que podría ayudarlo en una situación así: Otro cadáver resentido que
le era fiel.
“Bien… Supongo que es una sorpresa, será muy triste informar de esta noticia a las demás
sectas” Dijo Wei Ying con seriedad: “Sizhui, pregúntale ahora quien fue su asesino.”
Con los dedos aún más temblorosos por la sorpresa que acababa de llevarse, Lan Yuan toco
nuevamente las cuerdas de su instrumento, recibiendo una respuesta casi inmediata.
“Qin Su” Dijo Lan Yuan, muy sorprendido.
Esto causo una verdadera sorpresa en todos los presentes, incluyendo a Wei Ying, quien no
podía creerlo. Qin Su era la nueva dama de la secta Moling Su, esposa del mejor amigo de
Lan Wangji, el aclamado cultivador Su She, madre de varios hijos y miembro de la rama
principal de la secta Lanling Jin; Wei Ying no podía creer que una dama tan famosa como
ella en verdad fuera una asesina.
“¿Estás seguro de lo que dijo?” Cuestionó Wei Ying.
“Lo estoy” Aseguró Sizhui: “Ese no es un nombre común dicho por fantasmas, así que con
esta nota y esta nota… No hay duda, dijo el nombre de Qin Su.”
Con la confirmación de Lan Yuan, los susurros y rostros de sorpresa se hicieron más visibles
en todos los cultivadores presentes, especialmente entre los miembros de la secta Jin, quienes
se notaban ligeramente ofendidos, defendiendo a Qin Su cómo era obvio. Y solo Jin Ling se
mantenía algo apartado de ellos, mirando fijamente a Sizhui como si tratara de descifrar si
sus palabras eran verdaderas.
Mirando a los ojos de Song Lan, observando esas cuentas negras vacías y frías, Wei Ying
supo que tenía que encontrar respuestas rápido, ya que el sello podría romperse más rápido de
lo que esperaba.
“Jin Ling, ¿Trajiste la campana ceremonial de tu madre?” Preguntó Wei Ying con seriedad.
“Si, siempre la traigo conmigo” Dijo Jin Ling saliendo de las sombras: “¿Por qué?”
“No hay otra forma, debo hacer Empatía para resolver este acertijo.”
“Eso es muy peligroso, A-Die” Dijo Sizhui alarmado, ya que su padre nunca lo había hecho
tan lejos de su alfa: “Yo puedo seguir haciendo las preguntas que tú quieras con
interrogación.”
“No lo dudo A-Yuan, tu técnica es increíble, tu padre tiene razón, has mejorado mucho. Pero
me temo que nosotros tal vez no seamos capaces de hacer las preguntas correctas para
obtener las respuestas necesarias, y no tenemos tiempo para divagar de esa forma. Tengo que
verlo…”
Cruzando miradas con Sizhui, que se notaba muy afligido por la situación, Jin Ling se acercó
aún más, mostrando la campana ceremonial típica de la secta Jiang, la cual siempre traía
consigo en su cinturón, una clara herencia de su madre que le habían entregado en su
momento de nacimiento.
“Si hay algún problema y no despierto en 10 minutos, debes despertarme. Después de eso
todos deben salir corriendo, no quiero que me esperen” Le ordeno Wei Ying.
“Lo hare tío Wei” Aseguro Jin Ling.
Confiando en su sobrino, Wei Wuxian volvió a fijar su mirada en el cadáver resentido que
tenía frente a sí mismo, notando que tenía una vieja herida en el cuello, como si alguien le
hubiera dado una puñalada fatal con una cuchilla muy pequeña, siendo esa la posible causa
de su muerte.
“Déjame ayudarte, así que por favor, muéstrame como terminaste en este terrible camino”
Pidió Wei Ying, acercando una de sus manos para tomar uno de los hombros del contrario:
“Empatía…”
Al terminar de decir esas palabras, en un parpadeo vio a lo lejos una casa en medio de la
niebla, probablemente en ese mismo pueblo.
Y luego solo obscuridad.
Chapter 11

Se sintió como caer en una gran piscina de agua negra. A pesar de todas las veces que había
usado esa técnica en el pasado, Wei Ying aun no podía acostumbrarse a ello, sintiéndose
como un intruso en los recuerdos y las memorias de los demás. Considerando eso algo
desagradable al inicio…
Pasando ese gran mar de aguas negras, abrió los ojos, encontrándose en unas ruinas, muy
similares a un cementerio. Sin entender lo que estaba haciendo en ese lugar, Wei Ying se giró
en todas direcciones, hasta finalmente escuchar rápidos pasos desde una de las direcciones.
“¿Dónde se fue?” Preguntó una voz firme y fuerte de un alfa, vestido con túnicas
completamente negras.
“Lo perdí hace un rato…” Dijo otra voz, viniendo algunos pasos detrás de aquel alfa.
Mirando a esas personas, Wei Ying se dio cuenta que uno de ellos era Song Lan, y aun sin
haberlo visto antes, la otra persona que lo acompañaba supuestamente debía ser Xiao
Xingchen, haciendo sentir algo confundido a Wei Ying, quien ya había “conocido” a Xiao
Xingchen ese mismo día, y esas dos personas se veían algo diferentes.
“Tal vez porque han pasado años desde este recuerdo…” Susurro Wei Ying, aunque seguía
muy confuso por lo que podía ver.
Girándose en dirección a su compañero muy molesto, Song Lan le dijo: “¿Por qué no lo
mataste?”
Escuchando esa pregunta, Xiao Xingchen dudo un momento, recibiendo nuevamente
palabras duras de Song Lan: “Hemos estado persiguiendo a ese omega desde hace semanas,
el solo causa calamidades en todas las sectas que pisa, tenemos que acabar con él.”
“Lo sé” Dijo Xiao Xingchen, luciendo muy arrepentido.
“¿Entonces por qué decidiste no actuar? Lo tenías a pocos centímetros de tu espada, pudiste
haber cortado su pecho, pero tu simplemente…”
Antes de que Xiao Xingchen pudiera reaccionar, un ataque llego desde la nada. Ambos alfas
reaccionaron a ese ataque y lo esquivaron con facilidad, volviendo a desenvainar su espada y
poniéndose alertas.
“¡Deja de jugar! ¡Muéstrate!” Ordeno Song Lan con furia.
Sin embargo las ruinas se mantuvieron en silencio, como si no hubiera nadie alrededor de
ambos hombres, solo un paraje silencioso. Entonces atacando desde la espalda, un hombre
salto desde lo alto, atacando a Xiao Xingchen. Era un hombre bajo, el cual vestía con túnicas
negras y una máscara que protegía su identidad, mostrándose claramente como un omega.
Reaccionando con algo de confusión, Xiao Xingchen apenas pudo cubrir el ataque de la
espada de aquel omega enmascarado, luciendo evidentemente perturbado. Pero aquel omega
aparentemente no había atacado al alfa vestido con túnicas blancas con una intención de
dañarlo, parecía solo como si estuviera jugando con él, algo que fue muy fácil de determinar
para Wei Ying, que gracias a sus movimientos de pelea, supo que ni Xiao Xingchen ni el
desconocido estaban peleando en serio.
Reaccionando con molestia al darse cuenta de que su compañero una vez más estaba
reaccionando con debilidad ante aquel extraño, Song Lan decidió intervenir, acercándose a
ambos con rapidez con la clara intención de acabar con todo de una vez por todas.
Pero tal vez esa había sido la intención de aquel omega enmascarado, quien pasando de Xiao
Xingchen, se puso frente a Song Lan, lanzándole un extraño polvo rojizo directamente al
rostro, antes de que Song Zichen pudiera tocarlo.
Entonces el calmado paraje se rompió cuando los gritos desesperados de Song Lan sonaron
por todos lados, acompañados de las suaves risas de aquel omega, quien volvió a desaparecer
con rapidez.
“¡Zichen!” Corriendo a su compañero aterrado, Xiao Xingchen lo sujeto de los hombros,
evitando así que el débil cultivador Song Lan cayera al piso.
Sin embargo no obtuvo respuesta, ya que Song Lan no paraba de gritar, cubriendo su rostro
con sus manos tembloroso, impidiendo que Xiao Xingchen pudiera hacer algo para ayudarlo.
“¡Debiste acabar con el cuándo tuviste oportunidad! ¡No voy a perdonarte por esto!” Grito
Song Lan furioso, intentando soltarse del agarre de Xiao Xingchen, quien horrorizado trataba
de ayudarlo como sea.
Antes de que el recuerdo pudiera cambiar, Wei Ying pudo observar como gotas obscuras de
sangre caían al suelo, en un espectáculo horroroso.
Una vez más se hundió en aquel gran mar de color negro, antes de abrir los ojos en un prado
verde, tan hermoso que parecía irreal. Acostado al lado de Song Lan, Wei Ying observo muy
sorprendido como el alfa de túnicas negras tenía sus ojos de regreso… Pero en realidad no
eran sus ojos, ya que antes Song Lan tenía el iris de color negro, y ahora eran de un bonito
color grisáceo, muy parecidos a los ojos del padre de Wei Wuxian.
Abriendo los ojos tan confundido como Wei Wuxian, Song Lan se sentó de golpe en medio
del prado, mirando a todos lados varias veces, como si estuviera buscando algo con
desesperación.
“Xingchen…” Susurro Song Lan desesperado, sin ver a su compañero a su lado.
Pronto Wei Ying comprendió lo que había ocurrido. En medio de su desesperación, Xiao
Xingchen había llevado a Song Zichen a la montaña de los inmortales, donde habían
conseguido reparar sus ojos… Pero probablemente con el costo de su propia visión.
Lo último que Song Lan tuvo de su amado Xingchen fue una carta que este la dejo antes de
marcharse, en la que brevemente se disculpaba por todo lo que había ocurrido, prometiendo
no buscar nunca más a Song Lan, y pidiéndole que fuera feliz.
Wei Ying paso varios días al lado de Song Lan, sintiendo su enfado, ya que no solo estaba
enojado por la situación del omega que los había vencido a ambos, también estaba molesto
por que Xiao Xingchen lo hubiera abandonado. De esta forma Wei Wuxian comprendió que
había mucho más que un simple compañerismo de cultivadores entre ellos, y que a pesar de
ser alfas, ambos eran amantes, algo que probablemente habían mantenido en secreto ya que
ese tipo de relaciones era prohibido en la mayoría de los clanes.
Ante sus ojos, Wei Ying observo como Song Lan dedico el resto de sus días en buscar
venganza, quería encontrar a ese misterioso omega que lo había herido, quien era un
desconocido que vagaba por las viejas sectas de Qishang, hiriendo a los pocos pobladores
que quedaban, buscando algo que nadie conocía. Siguiendo las pistas correctas, aun después
de varios años, Song Lan encontró el nombre de aquel desconocido: Xue Yang.
La información que le pareció interesante de todo ese asunto, eran las habilidades del tal Xue
Yang, quien era un omega que cultivaba usando energía resentida, lo que Wei Ying
consideraba imposible, ya que nadie más que el sabia como hacer muchas de la técnicas que
Xue Yang usaba.
¿Acaso Wen Shima había contactado a mas omegas que el después de ser liberado de los
túmulos funerarios? Wei Ying no había considerado antes esa opción, sin embargo después de
conocer a Xue Yang, comenzó a pensar que era una posibilidad.
Y a pesar de la búsqueda incansable de Song Lan, pronto las pistas terminaron en Lanling,
donde aparentemente habían acabado con ese alborotador pocos meses después de que Song
Lan perdiera la vista, y el propio Jin Zixuan había certificado su muerte. Sintiéndose
decepcionado, Song Lan supo que no iba a poder llevar a cabo su venganza, ya que había
estado enfocando su odio en una persona aparentemente muerta.
Finalmente pudiendo perdonar al saber que el origen de su odio estaba acabado, Song Lan
decidió enfocar sus esfuerzos en lo que había perdido, pensando en buscar a Xiao Xingchen.
Encontrar el paradero de su amado no fue tan difícil como seguir la pista del “difunto” Xue
Yang, ya que en Qishang todos sabían sobre la ciudad Yi, aquel lugar devastado por la guerra,
que estaba siendo refaccionado por Xiao Xingchen, quien planeaba formar su propia secta en
el futuro.
A pesar de que Song Lan había considerad a Xiao Xingchen su alma gemela, ambos tenían
sueños diferentes, ya que Song Lan deseaba ser un cultivador errante para siempre, conocer
tierras nuevas, salvar a los inocentes, convertirse en uno de los mejores cultivadores del
mundo. Sin embargo Xiao Xingchen tenía ambiciones un poco más altruistas, ya que él había
abandonado su montaña inmortal al ver todo el sufrimiento que había dejado atrás la guerra,
y tenía el sueño de formar su propia secta, que convertiría en un refugio para cualquier
persona que necesitara ayuda.
Así que de cualquier manera, Song Lan siempre supo que su futuro al lado de Xiao Xingchen
no existía, y que ambos terminarían separándose en algún punto de sus vidas. Sin embargo
queriendo ser egoísta, aun si eso significaba abandonar sus sueños, Song Lan deseo volver a
ver al gran amor de su vida cuando el odio se disipo en su corazón, y busco a Xiao Xingchen
para quedarse a su lado, aceptando formar una secta junto a él por el amor que sentía por ese
alfa.
Viajando a Qishang nuevamente, Song Lan se dirigió a la aldea poblada más cercana a la
ciudad Yi, donde busco información sobre su amado y lo que había estado haciendo esos
años.
“Oh… El señor Xiao” Dijo uno de los comerciantes a los cuales Song Lan pregunto: “Viene
cada semana para comerciar semillas o madera, con las cuales compra materiales para
construcción, es un cultivador formidable. Ahora que tiene una familia, se ha vuelto más
serio…”
“¿Una familia?” Pregunto Song Lan casi sin aliento.
Igual de sorprendido que el alfa, Wei Ying escucho aquellas noticias, pudiendo prácticamente
sentir como el corazón de Song Lan se rompía al escuchar esas palabras.
“Efectivamente joven maestro, Xiao Gonzi se casó hace un par de meses con su omega
destinado, un joven de Lanling con el cual adoptaron a una niña, son una familia muy
adorable, todos estamos agradecidos con ellos por cuidar de A-Qing, el omega Xue es muy
buen padre…”
“¿Xue?”
Un estremecimiento recorrió la espalda de Song Lan, quien una vez más sintió el odio
recorrer su cuerpo, aquel resentimiento por las heridas pasadas…
“¿Sabe cuál es el nombre del esposo de Xiao Gonzi? ¿Es de este pueblo?” Pregunto Song
Lan.
“No, es un extranjero, de Lanling según me dijeron. Nos dijo que su nombre era Xue Mei,
aunque tal vez ese es su nombre de cortesía, ya que sus invitados de Lanling lo llaman Xue
Yang, así como Xiao Gonzi a veces lo hace…”
Al escuchar esa información, Song Lan se sintió en una pesadilla, ya que no podía creer que
el origen de su odio y aquella persona llena de mal que había acabado con su relación con
Xiao Xingchen, ahora estaba casado con su amigo, viviendo una vida feliz al lado del hombre
que amaba.
Necesitando más información al respecto, Song Lan recorrió el pueblo entero por un día
entero, preguntando a todos los pobladores por el misterioso Xue Yang, del cual todos tenían
opiniones maravillosas, hablando de él como si fuera un santo.
Sin embargo hubo otro asunto que llamo la atención de Song Lan y Wei Ying, ya que los
misteriosos cultivadores de Lanling que acudían a esa ciudad pobre y apartada parecían ser
viejos conocidos de ambos.
“Algunas veces Xue Gonzi es visitado por otro omega, un cultivador de túnicas doradas y un
punto rojo en la frente, muy pequeño y delgado, no quiero ser impertinente pero… Es el
omega más hermoso que he visto en mi vida” Dijo una de la comerciantes alfa del lugar
luciendo algo sonrojada. “Según me dijeron es alguien importante de Lanling, y se
encuentran a solas o a veces acompañados por otra mujer en uno de los hoteles del pueblo,
donde solo beben juntos o comen algo.”
¿Hermoso y túnicas doradas? Aun sin necesitar ver su rostro, Wei Ying sabía que estaban
hablando de Jin Guangyao, y la mujer probablemente era Qin Su. Ahora lo que Wei Ying no
comprendía, era el motivo de Jin Guangyao, ¿Por qué un cultivador como él se juntaría con
un criminal que se hizo pasar por muerto en un lugar tan apartado como este?
Las dudas solo comenzaban a volverse más y más fuertes, y solo había una forma de
encontrar las respuestas que necesitaban: Encontrar al culpable.
Siguiendo las indicaciones de los pobladores de la ciudad, Song Lan fue a la ciudad Yi por el
bosque, evitando el camino principal al pueblo con la intención de encontrar a Xue Yang por
sorpresa. Sin saber que estaba cometiendo un error, ya que en ese mismo instante Xiao
Xingchen y A-Qing viajaban por el camino principal de la ciudad al pueblo, dejando solo a
Xue Yang por varias horas en el pueblo. Aquella noche justamente era el celo de Xiao
Xingchen, y el alfa había acudido al pueblo para pasar un par de horas con A-Qing jugando y
comiendo en el lugar, antes de dejarla por un par de días en el hotel del pueblo, hasta que su
celo terminara. Pasando esos días en el pueblo, A-Qing escucho por unos rumores que un
misterioso alfa de túnicas negras que incluso habían dibujado para ella, había ido a hacer
preguntas muy extrañas sobre sus padres, algo que le resulto curioso, pero no demasiado
inusual, ya que sus padres tenían visitas de otras sectas a veces, considerando que aquel
extraño era una persona normal, y olvidándose del asunto pronto…
Finalmente llegando a la ciudad Yi y recorriéndola por algunos minutos, Song Lan se guio
con las conocidas feromonas de Xiao Xingchen por ese sitio desolado, encontrando una
funeraria, que era el lugar más renovado, y probablemente donde se estaba quedando el alfa
con su familia. Mirando aquel lugar, Song Lan presiono uno de sus puños con furia, ya que
pudo notar con claridad el aroma de la feromonas dulces de un omega, unas feromonas que
confirmaron que aquella persona que le había hecho daño hace tanto tiempo estaba ahí
dentro, era Xue Yang.
Entrando en la casa silenciosamente, Song Lan encontró a Xue Yang en su cama, cubierto en
las feromonas de Xiao Xingchen, aparentemente cansado después de haber tenido una noche
de pasión con su alfa.
“Maldito bastardo…”
Abriendo los ojos al escuchar esas palabras, Xue Yang se notó sorprendido por un segundo al
ver a ese alfa frente a su cama, pero relajando rápidamente su expresión, cubriendo mejor su
cuerpo con las sabanas, mirando a Song Lan con una expresión seria.
“¿No te da pena? Estas viendo a un omega desnudo en su cama, que poco honorable.” Se
quejó Xue Yang, tomando la situación con calma.
“¡No hables de honor, basura!” Grito Song Lan, desenvainando su espada y amenazando a
Xue Yang con ella: “¡Voy a acabar contigo, maldito asesino!”
“¿Puedo vestirme primero?”
Era claro que Xue Yang estaba tomando todo aquello como una broma, mirándose sonriente
y hasta desafiante con Song Lan.
“¿Crees que no lo hare? Te casaste con Daozhang, lo engañaste, acabaste con sus ojos, eres la
causa de todas sus penas” Lo acuso Song Lan.
“¿Yo acabe con sus ojos? Creo que no estamos hablando de lo mismo, porque puedes verme
con claridad, ¿Quién acabo con los ojos de quién? Y sé que no vas a hacerlo, porque amas a
Daozhang tanto como lo hago yo, y nunca te atreverías a hacerle daño de esa forma…”
Aprovechando su cuerpo desnudo, Xue Yang se sentó en su cama y se giró ligeramente,
levantando su cabello y mostrando su nuca, en la cual se veía una gran mordida de un vínculo
en su nuca.
Al ver esa marca, que solo podía significar que su gran amor se había vinculado con ese
delincuente, Song Lan bajo su espada un segundo, mirando horrorizado la escena: “No… Él
no lo hizo…”
“Lamento que te hayas enterado de las buenas noticias de esta forma, pero Daozhang y yo
somos destinados, así que el no dudo en marcarme casi al segundo día cuando me conoció, y
luego esperamos muy poco para casarnos. Tú no vas a hacerme daño, porque si me lastimas,
Daozhang también sufrirá. Y tú idea tonta de matarme, ¿Sabes el daño que le causaras a Xiao
Xingchen si le haces eso a su destinado y omega vinculado? Debes estar loco de solo pensar
en hacerlo.”
Xue Yang sonrió con burla, observando el rostro devastado de Song Lan, tan desesperado, tan
triste.
“Cuando él sepa quién eres y lo que hiciste, ese dolor se olvidara, yo curare el dolor de mi
Daozhang después de acabar con tu asquerosa existencia.” Aseguro Song Lan.
“No creo que puedas hacerlo, aun si tu amor es tan grande, el amor de Xiao Xingchen me va
a pertenecer para siempre. El dolor de perder a un destinado es lo peor de este mundo, ¿En
verdad planeas hacerle eso al hombre que tanto dices amar?”
Song Lan y Xue Yang cruzaron intensas miradas por varios segundos, Song Lan lleno de ira
y tristeza, y Xue Yang con burla y algo de miedo. Finalmente cansado de esperar, Xue Yang
se puso sorpresivamente de pie de la cama, encarando a Song Lan.
“De acuerdo, asesíname. Pero déjame vestirme primero, ten un poco de educación con un
omega aunque sea” Pidió Xue Yang.
Song Lan no respondió, ya que se encontraba en shock, sin poder creer que había perdido a
su Daozhang con el más terrible de sus enemigos, debatiendo cual era el mejor movimiento a
dar en ese punto, ya que no quería causarle daño a su amado lastimando al que era su
destinado, pero su odio era más fuerte aun, queriendo acabar con Xue Yang sin importar el
costo.
Moviéndose con normalidad, Xue Yang fue a buscar sus túnicas interior eres en una silla
cerca de una ventana abierta. Antes de que Song Lan pudiera darse cuenta, Xue Yang lanzo
un sello fuera de la ventana, que pronto ilumino el cielo con una señal, el tipo de señales
típicas que usaban las sectas.
“¿Qué crees que haces?” Acercándose a Xue Yang con rapidez, Song Lan puso su espada
contra el cuello del omega, de una forma claramente amenazante.
“Vaya, me descubriste” Dijo Xue Yang riendo un poco más nervioso, levantando las manos
en forma de sumisión, dejando caer la sabana de su cuerpo y mostrándose desnudo frente al
alfa.
“¿A quién demonios llamaste?”
“¿No querías ver a Daozhang? Lo siento, mi alfa me dijo que debía avisarle si un extraño
venía a casa, y eso fue lo que hice.”
A pesar de sentir un ligero nerviosismo por la idea de reencontrarse con su amado de esa
forma, Song Lan dudo razonablemente de esas palabras, ya que en el cielo se veían millares
de partículas doradas, como si fuera una señal de la secta Lanling Jin.
Después de lo que habían averiguado, Wei Ying le dio la razón al alfa, dudando
razonablemente de Xue Yang, temiendo que este hubiera llamado a sus misteriosos
colaboradores, que Wei Ying consideraba que eran miembros de la secta Jin, aunque no podía
saber si Song Lan había llegado a la misma conclusión.
“Estas mintiendo” Dijo Song Lan furioso: “Eres una ramera asquerosa, que uso sus
feromonas de omega para seducir a mi Daozhang, el jamás se hubiera casado con una basura
como tu…”
“¿Estás seguro? Piensa en eso con más cuidado, incluso antes de verme, tu Daozhang evito
mi muerte más de una vez, tal vez porque su alfa me reconoció de inmediato como su
destinado. Sabes bien que el destino es invencible… Lo lamento por eso.”
“¿Vas a disculparte ahora por haberme quitado la vista?” Pregunto Song Lan furioso.
“No… Me disculpo por esto.”
Antes de que Song Lan pudiera seguir hablando, una espada atravesó su cuello desde su
espalda, siendo tan fuerte que salió por su boca.
Wei Ying miro aterrado, viendo como aquella espada salía por su cuello, haciendo un
completo desastre, incluso cortando su lengua y parte de su boca de forma irreparable.
“Es una lástima de verdad” Dijo Xue Yang con burla, mirando a Song Lan caer al suelo: “Ya
no podrás insultarme y decir tus mierdas con esa lengua, eras gracioso, lástima que nunca
más podré escuchar tus bromas.”
Pronto dos personas enmascaradas aparecieron desde la espalda de Song Lan, asomándose
hacia él, aparentemente burlesco.
“A-Yang… Tengo un encargo para ti” Dijo de pronto la voz suave de un omega, quien se
quitó la máscara, dejando ver que era uno de los misteriosos hombres con túnicas negras y
máscaras de arcilla.
“¿En verdad, A-Yao? ¿En estas circunstancias?” Pregunto Xue Yang molesto.
“Una vez me dijiste que eras capaz de crear algo como el general fantasma, ¿Por qué no lo
haces con él?” Sugirió Meng Yao.
“Pero el…”
“Oh, es un cultivador tan fuerte, será una bestia maravillosa. Solo usa esos clavos malditos
que tanto presumes que podrían controlar a Wen Ning, y úsalos en este tipo, vamos…”
Luciendo muy nervioso por un segundo, antes de que Song Lan pudiera cerrar los ojos, Wei
Ying también pudo notar un deje de arrepentimiento extraño en sus ojos, algo indescifrable.
“De acuerdo, lo hare…”
***
Abrió los ojos con el sonido claro de la campana espiritual de su clan.
Incluso antes de despertar, Wei Ying sintió el frio acero de la espada Jiangzai contra su
cuello, de una forma muy amenazante.
“No debiste hacer algo como esto, Xue Yang” Dijo Wei Ying, dirigiéndose al cultivador de
túnicas blancas y una cinta blanca sobre sus ojos.
Tal vez por suerte o una conexión mucho más profunda con Wei Wuxian, Xue Yang había
intervenido de inmediato en el momento preciso del recuerdo de Song Lan, en el cual los
misteriosos acompañantes del malvado omega Xue Yang revelaban sus rostros. Sin embargo
Wei Ying pudo ver a uno de esos misteriosos hombres, Jin Guangyao, y por lo poco que pudo
escuchar antes de despertar, Wei Ying comprendió lo que había ocurrido con el alma
atormentada de Song Lan.
Al verse acorralados por aquel misterioso cultivador que había atacado a un Wei Ying
inconsciente de un momento al otro, Jin Ling nervioso hizo sonar la campana espiritual, sin
saber que más hacer.
“¿En verdad? ¿Por qué no debería?” Pregunto Xue Yang con calma, quitando la venda de sus
ojos, comprendiendo que ya no tenía ningún motivo para seguir pretendiendo que era su alfa:
“Lan Wangji está muy lejos de aquí, seguramente muy entretenido, y no podrá venir a
salvarte.”
Sentándose cuidadosamente en el suelo, Wei Ying cruzo miradas amenazantes con Xue Yang,
antes de dirigirse a todos los asustados cultivadores, que veían la escena con impotencia:
“Niños, salgan de aquí y esperan fuera de la casa.”
“¡Claro que no haremos eso!” Se negó Jin Ling de inmediato.
“A-Die, yo voy a quedarme.” Dijo Sizhui de inmediato.
“No, dije que salgan todos” Ordeno Wei Ying, con más firmeza en su voz, mirando a los
jóvenes cultivadores con seriedad: “Voy a estar bien, pero necesito que salgan de aquí y se
comporten, pronto estaré con ustedes.”
Cruzando miradas con su hijo por un momento, Lan Sizhui se quedó en silencio, como si
estuviera entendiendo un mensaje sin necesidad de palabras con su padre. Así que cambiando
su actitud de forma radical, Sizhui salió de la casa rápidamente, siendo seguido por los
sorprendidos cultivadores de las demás sectas.
Sin embargo Jin Ling se mostró un poco más reacio a obedecer esa petición, decidido a
mantenerse con Wei Ying para cuidarlo. Aun así tras recibir una burlona palmada por parte
de Lan Jingyi en la cabeza, Jin Rulan finalmente se sintió obligado a salir, entendiendo que
ellos no podían hacer nada en esa situación y lo mejor era confiar en las palabras de Wei
Ying.
Cuando las puertas de la casa finalmente se cerraron, dejando solos a Xue Yang y Wei
Wuxian, el omega vestido con túnicas negras se levantó cuidadosamente del piso, sin dejar de
ser amenazado por Xue Yang, quien se mostraba muy atento a cualquiera de sus
movimientos.
“¿Entonces cuál es tu plan? ¿Quieres mantenerme de rehén o algo así para asegurarte de que
no te asesinen después de todo lo que hiciste?” Preguntó Wei Ying.
“Esa suena como una idea muy buena, pero no es en lo que estoy pensando. Porque para ser
sincero, tengo un pedido que hacerte” Dijo Xue Yang de forma sorpresiva.
“¿Un pedido? ¿Por qué debería yo ayudarte?” Cuestionó Wei Ying.
“Porque tengo una linda espada en tu cuello, además te lo aseguro, cuando termine este día,
vas a estar muy contento por haberme ayudado.”
“No creo que eso vaya a pasar.”
A pesar de no haber conocido antes a Xue Yang, Wei Ying sentía un verdadero desagrado por
su persona, sintiendo que aquel omega no era más que un triste hombre que había acabado
con la vida de varias personas inocentes. Así que planeaba cooperar con él, por lo menos
hasta que su plan tuviera efecto y pudiera salir de ahí sin mayores complicaciones.
“Te aseguro que sucederá” Dijo Xue Yang con confianza.
Wei Ying continuó notándose escéptico, preguntando: “¿Qué quieres?”
“Quiero que liberes a Song Zichen de un tipo de control muy especial, sin dañar su alma o
acabar con el procedimiento que realice para volverlo un cadáver viviente.”
“¿Un tipo de control?”
“Levanta su cabello y míralo por ti mismo…”
Curioso por las palabras del contrario, Wei Ying avanzo hasta el cuerpo congelado de Song
Lan, quien permanecía atrapado por el sello que había puesto en su pecho, aunque este no iba
a servir por mucho más tiempo, probablemente solo un par de minutos, hasta que volviera a
ser incontrolable.
Poniéndose a espaldas de dicho cadáver, Wei Ying cuidadosamente levantó su largo cabello
negro, observando su nuca, donde había una larga cicatriz a penas curada, probablemente de
la herida que llevo a Song Lan a la tumba cuando alguna de las personas misteriosas con
máscaras de arcilla habían penetrado su cuello con una espada.
Sin embargo había también otra cosa que llamaba su atención, tres clavos largos, los cuales
estaban profundamente encajados en su nuca, dirigiéndose hacia su cráneo.
“¿Qué demonios es eso?”
“¿Te gustan? Son mi propia invención. Puse un sello poderoso en ellos, que te permite
controlar cadáveres resentidos sin necesidad de usar música u otros elementos” Explicó Xue
Yang.
Pensándolo con detenimiento, Wei Ying noto que Song Lan era un cadáver resentido que
seguía las ordenes de Xue Yang y probablemente más personas, pero aparentemente Xue
Yang no usaba música como Wei Ying cuando quería controlar a este cadáver, así que eso
hizo que Wei Ying se sintiera curioso al respecto.
“¿Y qué quieres que haga con esto?” Preguntó Wei Ying confundido.
“Yo sé cómo poner este tipo de sellos para los cadáveres, pero mi poder no están fuerte como
para quitarlos. Necesito que tú los quites, pero sin dañar el alma de Song Lan, quiero que su
alma quede intacta en su cuerpo después de que sea liberado.”
“¿Por qué quieres algo como eso? Si Song Lan recupera su consciencia y vuelve a ser libre,
lo primero que hará probablemente será intentar matarte después de todas las cosas que le
hiciste.”
“Así que lo viste… Bueno, debí haberte detenido antes de que intentaras esa tontería de
empatía” Se lamentó Xue Yang algo molesto: “Tú no estás aquí para cuestionar mis
decisiones, solo haz lo que te digo.”
Viendo la espada en su cuello y sabiendo que Xue Yang no dudaría en matarlo si lo
desobedecía, Wei Ying suspiro, viéndose obligado a hacer lo que el contrario le decía.
Usando su energía resentida, trato el alma casi fragmentada de Xue Yang, la cual no le fue
difícil volver a restaurar. Después de eso comenzó a remover con cuidado cada uno de los
clavos de acero, notando como cuando sacaba cada uno de ellos, el alma del alfa volvía a
fragmentarse un poco, y después de repararla, esta parecía ser más fuerte.
“Así que controlaste su espíritu y de esa forma su voluntad…” Dijo Wei Ying, sacando dos
de los clavos: “Tendré que detenerme ahora.”
“¿Qué? ¿Por qué?”
“Su alma se ha fragmentado demasiadas veces en muy poco tiempo. Tenemos que dejarlo
tranquilo unos minutos si deseamos que quede integro después de liberarlo de todo el
control” Explicó Wei Ying, girándose en dirección a Xue Yang con una sonrisa: “¿O temes a
lo que vaya a pasar cuando saque todos?”
Xue Yang se notó un poco más serio de lo usual al ver el único clavo dentro de Song Lan,
susurrando: “Ojala sea el mío…”
Sorpresivamente, Xue Yang bajó su espada, volviendo a envainarla y dejando de amenazar a
Wei Ying, quien se quedó estupefacto, ya que no esperaba ser liberado de ese modo.
“Supongo que debería disculparme por haberte amenazado, pero no me hubieras ayudado si
no te lo hubiera pedido, y sabias que no iba a hacerte daño” Dijo Xue Yang notándose más
relajado.
“¿De un asesino de masas impredecible, esperabas que lo dudara?” Preguntó Wei Ying
confundido.
“Si, aunque tal vez no fue lo más correcto.”
Retrocediendo hasta una de las paredes de la casa, Xue Yang le entrego a Wei Ying la espada
de su alfa, la cual Wei Wuxian recibió cada vez más confundido, ya que no esperaba en
absoluto ser liberado y luego armado por alguien como Xue Yang.
“Debo irme ahora, pero necesito que tengas esta espada, tu sabrás cuando usarla y a quien
defender con ella” Explicó Xue Yang: “Tengo algo que hacer, así que me iré primero, ¿De
acuerdo? Solo libera a Song Lan de todo cuando haya pasado el tiempo suficiente para no
dañarlo, confió en tu buena voluntad para entregarle su espada a mi alfa cuando todo haya
terminado.”
“¿Qué es esto?” Preguntó Wei Ying sin entender nada: “Te comportas como un asesino a
sangre fría en los recuerdos de Song Lan, y ahora… ¿Simplemente te vas? ¿No vas a
matarme o mantenerme como tu rehén? ¿No esta Jin Guangyao preocupado de las cosas que
vi?”
“Tal vez está preocupado, no lo sé, podrías preguntarle en un par de minutos. Los años pasan,
Wei Gonzi, y las personas pueden cambiar, especialmente cuando se ven tan influidos por un
corazón tan puro como el de un alfa como Xiao Xingchen.”
Por un instante, Xue Yang toco su nuca con suavidad, antes de darle la espalda a Wei Ying y
caminar hacia la puerta con paso rápido.
Sin embargo tal vez mencionar el nombre de Xiao Xingchen no había sido la mejor idea, ya
que recobrando poco a poco su fuerza y su movilidad, Song Lan teniendo un poco más de
control de su cuerpo, reaccionó violentamente al escuchar ese nombre, rompiendo su sello y
dirigiéndose detrás de Xue Yang a toda velocidad para intentar atraparlo.
Sin embargo cortando el ataque con rapidez, un joven de túnicas rojizas de puso frente a
Song Lan, deteniéndolo golpeando su pecho y tomándolo del cuello, en un claro intento de
detenerlo.
Los asustados jóvenes cultivadores que todavía seguían fuera de la casa se hicieron a un lado,
presenciando frente a sus ojos una batalla de dos cadáveres resentidos, los cuales comenzaron
a pelear de forma feroz.
“¡A-Ning!” Dijo Wei Ying corriendo fuera de la casa: “¡Llévalo lejos! ¡No cerca de los
niños!”
Wen Ning, quien había acudido ante la llamada sorpresiva de Lan Sizhui, asintió suavemente
con la cabeza, tomando a Song Lan de un brazo para arrojarlo con fuerza a otra casa más
lejana, donde ambos continuaron con su pelea. Wen Ning con la intención de someter a su
contrincante, y Song Zichen queriendo liberarse para ir en búsqueda de Xue Yang.
Suspirando con cansancio, Wei Ying se acercó nuevamente a los jóvenes cultivadores, que
observaban la escena estupefactos, sin entender aun lo que estaba ocurriendo, así como Wei
Ying, quien a no podía comprender mucho a pesar de haber visto las memorias de Song Lan,
teniendo más preguntas que antes.
“¡A-Die!” Dijo Sizhui, corriendo hacia su madre para abrazarlo.
“Estoy bien, A-Yuan, lo hiciste bien” Susurró Wei Ying, correspondiendo el abrazo de su hijo
con alegría.
No era muy común que Lan Sizhui abrazara a Wei Wuxian, ya que mientras las
demostraciones de cariño eran comunes entre Lan Yuan y Lan Wangji, Wei Wuxian y su hijo
tenían una relación más lejana, algo que dolía a Wei Ying, pero nunca había querido
presionar al menor por eso. Así que recibir esa muestra de cariño genuino de su cachorro,
hacían sonreír realmente contento a Wei Ying, quien cuidadosamente acaricio los cabellos del
menor.
“¿Estas bien?” Preguntó Lan Sizhui, mirando a su padre preocupado.
“Estoy bien, estoy bien, no pasó nada…” Aseguró Wei Ying.
Pronto Wei Wuxian fue rodeado por los ansiosos jóvenes, quienes intentaban buscar
respuestas a lo ocurrido. Algo que Wei Ying no pudo dar con toda claridad, comentando
como tenía que liberar a Song Lan de un control que nunca antes había visto, y que Xue Yang
simplemente lo había liberado, dejándole a cargo esa espada de una hermosa tonalidad
blanquecina.
“Me dejo la espada… ¿Pero para qué?” Preguntó Wei Ying confundido: “Él sabía que todos
ustedes también tienen espadas, en caso de necesitar defenderlos simplemente podría haber
pedido una de sus armas prestadas. ¿Pero dejarme esto? ¿Por qué?”
“Se fue en esa dirección” Dijo Lan Jingyi, quien a pesar de la conmoción, pudo ver
claramente como Xue Yang corría en medio de la niebla en una de las serpenteantes casas de
la ciudad Yi.
“Bueno, tal vez deberíamos seguirlo, o encargarnos de Song Lan, o buscar a mi esposo…
Ah… Todo esto es tan extraño” Se lamentó Wei Ying, sin saber que podía hacer,
especialmente teniendo a su cargo a tantos jóvenes sin querer ponerlos en peligro.
Acercándose suavemente a Jingyi, Ouyang Zizhen le entrego un pergamino algo arrugado,
que había encontrado colgado en una de las puertas de las casas cercanas. Ese era uno de los
tantos mapas que Xiao Xingchen había creado para la ciudad, para poder ubicarse entre las
casas que todavía necesitaban reparaciones y como llegar a su propio hogar donde tenía todos
los materiales, es decir la funeraria donde vivía con su familia.
“Bueno, si nosotros estamos aquí…” Susurró Lan Jingyi, mirando el pergamino: “Y Xue
Yang se fue en esa dirección, tal vez se dirige al lugar que está marcado en el mapa como
“casa”, ¿Habrá vuelto a su casa para esconderse?”
“Bueno, si quería esconderse podría haber usado cualquiera de estas casa, y aun sería mejor,
ya que cualquiera podría ir a su hogar para buscarlo, sería la primera opción lógica” Razono
Wei Ying: “No… Seguramente hay algo ahí, deberíamos seguirlo.”
Todos los niños asintieron emocionados, mientras Jingyi le entregaba a Wei Ying el
pergamino con el mapa que habían encontrado, comenzando a caminar por la ciudad con
lentitud, intentando esconderse para saber a qué se enfrentaban.
Mientras que en la mente de Wei Ying solo unas palabras se repetían: Xue Yang le había
pedido defender a una persona, ¿Pero a quién?
Chapter 12

Parándose en el centro de aquel gran patio de tierra, Jin Guangyao ladeo suavemente la
cabeza, mientras que dos de sus ayudantes dejaban a una inconsciente A-Qing en el suelo.
Frente a él, solo se encontraba Xue Yang, quien lucía algo agitado, todavía parado frente a
Mo Xuanyu, quien no se había quitado sus ataduras.
“¿Qué te paso? ¿Y nuestros amigos? Creí haberles dicho a los tres que se quedaran aquí hasta
que regresara…” Dijo Jin Guangyao molesto.
“Lo dijiste, pero hubo un inconveniente” Respondió Xue Yang, tratando de aparentar
normalidad: “Unos de tus viejos amigos vinieron hasta aquí en búsqueda de tu hermano,
parece que Mo Xuanyu es una persona muy requerida estos días…”
“¿Viejos conocidos?”
“Estamos teniendo una pelea muy interesante con Lan Wangji y Wei Wuxian…”
Manteniéndose detrás de una casa, escuchando aquella conversación atentamente, Wei
Wuxian presiono fuertemente la espada Shuanghua entre sus dedos, atento a cualquier
movimiento peligroso para atacar.
Mientras que Jin Ling y los demás miembros de la secta Jin se encontraban estupefactos, sin
entender por qué se encontraba en ese sitio Jin Guangyao.
“Maldita sea… Así que ellos también lo saben” Dijo Jin Guangyao furioso: “Bien, no
tenemos tiempo para esto, hagamos el intercambio y vayámonos de aquí antes de que esos
idiotas metan sus narices en esto.”
Con mucha seguridad, Jin Guangyao comenzó a caminar en dirección a Mo Xuanyu con la
intención de llevárselo, sin embargo fue detenido por Xue Yang, quien se puso frente a él,
poniendo su espada en el cuello de un aparentemente asustado Mo Xuanyu, en una forma
muy asustada.
“No, no, no… Así no es como funciona” Dijo Xue Yang con calma: “Primero regrésame a A-
Qing, luego te lo vas a llevar.”
“¿Crees que tu pones las reglas en esto?” Preguntó Jin Guangyao molesto.
“Si, lo creo, porque tú tienes mucho más que perder con cada segundo que pasas aquí. No
hay problema por mí, podemos quedarnos aquí dialogando, te aseguro que Lan Wangji con su
agudo olfato llegara aquí en pocos minutos. Y si tu no me regresas a mi hija a salvo, voy a
cortarle el cuello, y lo que sea que quieras de este chico se ira con ella.”
“Bien… ¿Qué quieres?”
“Despiértala, quiero verla caminando, y que venga a mi lado. Después de eso me hare a un
lado, y podrás hacer lo que quieras con este chico” Exigió Xue Yang.
Girándose en dirección a sus dos ayudantes, Meng Yao asintió con la cabeza, indicando así
que aceptaba las órdenes arbitrarias de Xue Yang.
Acercándose a la joven que permanecía inconsciente, uno de aquellos hombres dejo caer una
cantimplora de agua sobre su cabeza, despertando a la asustada chica, quien al ver en donde
se encontraba trato de gritar y luchar.
“¡A-Qing! Ven aquí…” Dijo Xue Yang con firmeza, intentando evitar que siguieran
lastimando a la joven.
Aún muy débil y algo mareada, A-Qing se puso de pie a duras penas, caminando rápidamente
en dirección a su padre, mirando con temor a todas esas personas desconocidas a su
alrededor. Escondiéndose en la espalda de Xue Yang, la joven solo miro asustada a Meng
Yao, ya que aquella joven parecía sentir un gran temor por ese hermoso omega.
“Bien, ya tienes lo que quieres, ahora hazte a un lado” Ordenó Jin Guangyao, apurado por
intentar escapar de ese sitio.
“Si, bueno, respecto a eso… Lo siento, creo que te mentí un poco.”
Tomando a Jin Guangyao por sorpresa, Xue Yang levanto su espada, comenzando a atacarlo,
obligándolo a retroceder.
Entendiendo que esa era su señal, Mo Xuanyu corto las cuerdas de sus ataduras en menos de
un segundo, y poniéndose de pie tomo a A-Qing de la mano, comenzando a correr fuera del
lugar lo más rápido que podía.
“¡No lo dejen escapar! ¡Atrapen a mi hermano!” Ordeno Meng Yao a sus ayudantes.
A pesar de la traición de Xue Yang, Jin Guangyao aparentemente tenía su atención
únicamente fija en Mo Xuanyu, ordenando a todos ir detrás de él, como si fuera su prioridad.
Finalmente comprendiendo las palabras de Xue Yang, mirando la espada en sus manos, Wei
Ying decidió intervenir, saliendo de su escondite para empezar a enfrentar a uno de los
ayudantes de Jin Guangyao, tratando de evitar que alcanzaran a Mo Xuanyu y a A-Qing.
Viendo a Wei Ying avanzar de esa forma, los jóvenes cultivadores de la secta Lan y algunos
de la secta Ouyang también decidieron intervenir en la pelea, corriendo detrás de Wei Ying
para pelear con los invasores y algunos cadáveres resentidos que se encontraban ahí.
Mientras los diferentes grupos corrían a la vez por la ciudad Yi, pronto todas las peleas se
vieron unidas, ya que Xue Yang y Jin Guangyao peleaban mientras perseguían a Mo Xuanyu
y A-Qing, mientras que todavía sobre los tejados, Lan Wangji peleaba contra el primer
enmascarado que ellos habían encontrado, y en la parte inferior Wei Wuxian y los juniors
peleaban sin parar contra los demás invasores.
Viéndose superado por Xue Yang, temiendo que Mo Xuanyu volviera a escapar por su
interferencia, Jin Guangyao decidió llamar a Song Lan: “¡Song Zichen! ¡Atrapa a Mo
Xuanyu!”
Al escuchar esas palabras, tanto Xue Yang como Wei Wuxian se pusieron expectantes, ya que
habían quitado la mayoría de los clavos de control, pero había quedado uno… El cual le
pertenecía a Jin Guangyao.
Escuchando las órdenes de su amo a lo lejos, Song Lan dejo de pelear con Wen Ning, y
acudió a la llamada con rapidez. Viendo que Song Lan se había escapado de su agarre, Wen
Ning fue detrás de él, pero ya era demasiado tarde, pues se había acercado demasiado a Mo
Xuanyu.
“¡Para ahora!”
Xue Yang sabía que Song Lan ya no podía escuchar sus órdenes, pero aun así no pudo evitar
ponerse en medio, bloqueando el ataque de ese fuerte cadáver resentido, recibiendo un fuerte
golpe en un hombro, que lacero su piel dejando caer su sangre al suelo.
“A-Ning ayúdame, tenemos que mantenerlo sujeto” Ordeno Wei Ying, comprendiendo que
era hora de quitar el ultimo tipo de control.
Volviendo a sujetar a Song Lan por la espalda, abrazándolo fuertemente y sujetando sus
brazos, Wen Ning tuvo que usar toda su fuerza para mantenerlo quieto. Acercándose a Song
Lan con toda la velocidad que podía, Wei Ying volvió a levantar su cabello, y sin estar seguro
de que podría mantener el alma de Song Zichen intacta, terminó sacando aquel pequeño
artefacto de acero de su nuca.
De pronto el cuerpo de Song Lan dejo de moverse, y se desplomo en los brazos de Wen Ning,
quien apenas pudo soportar el peso y casi se desploma al lado de Song Zichen.
Viendo a Song Lan desplomarse, Wei Ying se sintió muy asustado, temiendo haber cometido
un error, y dejando caer la espada se acercó a Zichen y Wen Ning, intentando detectar cual
había sido el problema para poder solucionarlo. Mientras Wen Ning miraba todo muy
confundido, sin comprender como un simple clavo de acero había causado un problema
semejante a una ser que era como él.
Sujetando la herida de su hombro lleno de dolor, Xue Yang miro preocupado como Song
Zichen se había desplomado en el suelo, pero recordando cuál era su principal motivo para
esa pelea, se giró y corrió detrás de Mo Xuanyu y su hija, los cuales ya habían desaparecido.
Mo Xuanyu sabía que el plan de Xue Yang había fallado, ya sea por la intervención de los
cultivadores no invitados, o tal vez porque ellos nunca tuvieron una oportunidad. De
cualquier manera, Mo Xuanyu comprendía que ya no había donde escapar, y debía rendirse
antes de que ocurrieran más desgracias por su causa.
Tirando de la mano de A-Qing hasta una casa cercana, Mo Xuanyu se vio arrinconado por Jin
Guangyao, quien entre toda la confusión que había causado Song Lan, aprovecho para
adelantar a Xue Yang, alcanzando a su hermano y la joven que trataban de huir de él.
“¿Ya te rendiste, A-Xu?” Pregunto Jin Guangyao, encontrando a su hermano arrinconado en
esa casa.
Poniendo a A-Qing en su espalda, Mo Xuanyu se giró y observo a su hermano mayor,
sintiéndose nervioso pero sin querer demostrarlo: “¿Por qué haces esto? Tú me alejaste en
primer lugar, así que solo por favor… Déjame ir.”
“¿En verdad me harás ir hasta allá? No eres un niño obediente A-Xu, todo esto es tú culpa.
Solo se obediente y ven, ¿De acuerdo?”
Le extendió al menor una mano suavemente, a la que Mo Xuanyu miro con temor. Pero
viéndose atrapado, recordando que estaba con A-Qing, temió que su hermano le hiciera daño
a ella por su causa, sabiendo bien que Jin Guangyao era capaz de eso y mucho más solo para
volver a llevárselo con él.
“Espera, podemos seguir corriendo, no vayas a…” Viendo que Mo Xuanyu comenzaba a
avanzar en dirección a Jin Guangyao, A-Qing trato de detenerlo, tomándolo del brazo.
“Está bien A-Qing, voy a volver, y te prometo que juntos vamos a ir a la ciudad a jugar toda
la tarde” Dijo Mo Xuanyu con una sonrisa llena de felicidad.
Soltándose del agarre de la joven, Mo Xuanyu avanzo en dirección a su hermano mayor,
tomando su mano, y aceptando seguirlo fuera de la casa en la que se encontraban.
Despertando de golpe, Song Zichen trato de atacar a Wei Ying, siendo a penas detenido por
Wen Ning, quien adivinando sus intenciones se puso encima de él para detenerlo.
Viendo que su omega estaba en peligro, Lan Wangji recibió un corte en el pecho de su
contrincante, quien no dudo en atacarlo a la primera distracción del cultivador de la secta
Lan. Sin embargo Lan Wangji también reacciono a este ataque, levantando a Bichen para
apuñalar en el abdomen al misterioso hombre, dejándolo casi inmóvil.
Saliendo de la casa y viendo que sus demás acompañantes habían sido casi derrotados, Jin
Guangyao dio la señal con un silbido, indicándoles así que había conseguido lo que vino a
buscar, teniendo a Mo Xuanyu de la mano firmemente sujetado.
Uno de los tres acompañantes de Meng Yao se encontraban en el suelo derrotado, y al
escuchar la señal, los otros dos enmascarados tomaron sellos de sus túnicas, lanzándolos al
suelo para desaparecer frente a los demás.
Tomando un sello de sus túnicas, Meng Yao fue detenido por Xue Yang, quien se puso frente
a él con firmeza.
“¿Vas a seguir tratando de pelear?” Preguntó Jin Guangyao, mirando la herida sangrante de
Xue Yang.
“Llévame” Pidió Xue Yang con firmeza.
“¿Te has arrepentido de tus pecados?”
“Solo llévame…”
Sin dejar de sonreír, Meng Yao tomo el sello de sus túnicas y lo lanzo al suelo,
desapareciendo junto a Mo Xuanyu y Xue Yang.
Recuperando poco a poco la consciencia, Song Zichen miro frente a sí mismo el rostro
preocupado de Wen Ning, mirándolo a los ojos intrigado.
“¡Wei Ying!” Dijo Lan Wangji asustado, bajando del tejado para acercarse a su omega.
“Estoy bien, Lan Zhan, todo está bien…” Dijo Wei Wuxian con una sonrisa, sujetando su
cuello con una mano.
Al despertar, Song Lan casi lo había tomado del cuello para herirlo con gravedad, pero
gracias a la rápida intervención de Wen Ning, eso no había ocurrido.
“Lan Zhan, estas sangrando…” Dijo Wei Ying asustado, notando el pecho herido y lleno de
sangre de su alfa.
Todos los enmascarados habían desaparecido, y los jóvenes cultivadores ahora solo se
encargaban de los pocos cadáveres resentidos que Xue Yang había despertado, siendo
cuidadosos con el veneno para no infectarse de nuevo.
Finalmente interviniendo en la pelea, los miembros de la secta Jin avanzaron guiados por Jin
Rulan, acercándose a uno de los enmascarados tirados en el suelo, quien había muerto gracias
a sus heridas.
Jin Ling había reconocido de inmediato el tipo de pelea que estos habían usado, las técnicas
de su propio clan, así que tomando la máscara que cubría su rostro, se la arrebato con fuerza.
De esta forma dejo al descubierto el rostro de un cultivador alfa que el conocía bastante bien,
era un alfa de su secta, uno de los mejores cultivadores de su secta.
“Tengo que hablar con mi padre, ahora” Dijo Jin Ling, poniéndose sumamente serio al ver
todo lo que ocurría a su alrededor.
Quedándose estático en su sitio ante la atemorizante y atractiva mirada de Song Zichen, Wen
Ning a penas reacciono para levantarse del otro alfa al escuchar la voz de Wei Ying,
notándose tan preocupado por su alfa.
Poniéndose de pie después de que Wen Ning se bajara de su cuerpo, Song Lan camino en la
misma dirección en la que había ido Jin Guangyao, comprobando que también había
desaparecido, llevando consigo a Xue Yang y Mo Xuanyu, dejando solo a la pequeña A-
Qing, quien estaba llorando muy asustada.
Ayudando a su alfa a ponerse de pie, Wei Ying camino detrás de Song Lan, encontrándose
con el mismo escenario que el alfa. Así que con una sonrisa amable se acercó a la pequeña
joven beta, ofreciéndole una mano para tranquilizarla.
“Hola pequeña, mi nombre es Wei Ying, ven conmigo, vamos a un sitio más cómodo, ¿Te
parece?” Pregunto Wei Wuxian con amabilidad mirando a la asustada pequeña en el sitio.
Aceptando la ayuda de Wei Ying, sin poder dejar de llorar, A-Qing tomo su mano y salió a su
lado de aquel sitio, acercándose al grupo de cultivadores, quienes ya habían logrado acabar
con todos los cadáveres resentidos de la ciudad.
“¿Sabes dónde está tu padre, pequeña?” Pregunto Lan Wangji, viendo a la niña acercándose.
A-Qing inmediatamente negó con la cabeza, ya que durante toda la pelea Xiao Xingchen no
se había asomado ni por un solo instante, permaneciendo desaparecido para todos.
Siendo el que mejor lo conocía, todavía manteniéndose en silencio, Song Lan se dirigió a la
casa funeraria en el centro de la ciudad, donde pudo captar el aroma de las feromonas de su
viejo amigo, guiándose por estas a la sala de los ataúdes.
Siguiendo a Song Lan a cierta distancia, Wen Ning también llego a la casa funeraria, donde
observo silenciosamente desde la puerta, mirando como Song Zichen levantaba todos los
ataúdes para encontrar a su amado.
Abriendo uno de los últimos ataúdes, Song Lan finalmente encontró el cuerpo inconsciente
de Xiao Xingchen, con ese sello que había dejado Xue Yang en su cuerpo. Tomando el sello
de papel, Song Lan lo deshizo entre sus dedos, liberando el cuerpo de Xiao Xingchen, quien
despertó agitado, sin recordar nada de lo que había ocurrido, girándose en todos lados
confundido.
“¿Pero qué…? ¿Dónde estoy?” Pregunto Xiao Xingchen cada vez más asustado.
Sin poder hablarle o demostrar que estaba a su lado, Song Lan cuidadosamente le acarició
una mejilla, para luego acercarse a él y darle un cariñoso beso en los labios, sin poder
controlar su alegría de volver a verlo después de tantos años.
“Zichen…” Susurro Xiao Xingchen, recociendo a su gran amigo solo con ese beso.
Mientras Wen Ning observaba todo aquel escenario realmente confundido, sin poder entender
como dos alfas se comportaban de una forma tan cariñosa… Y tampoco por que se sentía tan
deprimido al saber que Song Lan ya tenía a una persona a quien amaba.
Chapter 13

Después de lo ocurrido en la ciudad Yi, todos los cultivadores acudieron al pueblo habitado
más cercano, decidiendo descansar un poco antes de decidir qué hacer. Era obvio que tenían
que convocar una reunión con todas las sectas después de todo lo que habían presenciado,
pero en el criterio de Wei Wuxian lo que estaba ocurriendo tal vez era mucho más peligroso
de lo que imaginaban, así que quería proceder con cuidado.
Después de todo, Wei Ying había recibido de A-Qing algo sumamente preciado y poderoso.
“¿Tienes idea de la razón por la cual tus padres nos hicieron venir a este pueblo primero?”
Preguntó Jingyi, mirando a su primo frente a él, ambos comiendo calmados junto al resto de
su secta: “Sé que hablaron del veneno y que debíamos descansar, pero yo no puedo creer que
solo sea eso, hay algo muy raro en todo esto.”
Mirando hacia la parte superior del hotel en el que se encontraban comiendo y descansando,
Lan Yuan se preguntó lo mismo de forma silenciosa. Sus padres nunca habían tenido secretos
con él, así que esa reacción de tratar de mantenerlo apartado era sumamente extraña a sus
ojos, temiendo que lo que ocurría fuera algo más serio de lo que imaginaba.
“Tal vez debería preguntarles, pero ahora mismo están con un curandero tratando la herida de
papá, voy a esperar un poco antes de subir” Dijo Lan Sizhui, mostrándose algo nervioso.
“Si… Tal vez deberías hacerlo luego, tu padre se veía muy nervioso cuando trajeron a Lan
Gonzi herido al hotel.”
En medio de la charla de toda la secta Lan, los cuales trataban de especular sobre lo que
estaba ocurriendo, Sizhui se giró suavemente, sintiendo la fuerte esencia de las feromonas del
alfa Jin Rulan fuera del hotel.
Las cosas con la secta Jin habían estado muy tensas desde que todos notaron que Jin
Guangyao estaba involucrado en aquel incidente, nadie quería decirlo en voz alta, pero solo
había una palabra que resonaba en la mente de todos: Traidor.
Era algo poético que Jin Guangyao, quien se había opuesto durante años al cultivo de energía
resentida, estuviera involucrado en una serie de crímenes con este tipo de cultivo. Y después
de verlo secuestrar a un joven inocente y ser acusado de haber herido a una joven beta, no
solo era un traidor a su secta y las leyes que él mismo había promulgado, era un criminal.
Desde que esto se supo y los rumores comenzaron a sonar, la secta Jin tomó una respetuosa
distancia de los demás, en una situación que era muy difícil para alguien como Jin Ling. El
joven heredero de la secta Jin era el sobrino del traidor, en uno de sus primeros trabajos como
líder de su grupo, y tenía que afrontar la terrible decisión de lo que debía hacer su secta con el
asunto de Jin Guangyao, ya que con su padre fuera de labores y su reemplazo siendo culpado
del crimen, el siguiente en la línea de mando era Jin Ling.
Sizhui solo podía imaginar la difícil situación que estaría afrontando ese joven alfa en un
momento tan difícil.
“Iré a tomar un poco de aire” Dijo Sizhui, sintiendo a Jin Ling bastante cerca.
“¿Quieres que vaya contigo?” Preguntó Jingyi.
“No… Creo que el joven de la secta Ouyang llegó al hotel, ustedes parecen buenos amigos,
así que deberías pasar más tiempo a su lado.”
“No te hagas ideas, él solo está agradecido conmigo por haber salvado a algunos de sus
integrantes de su secta, no hay nada más.”
“¿Entonces él no te gusta?” Preguntó Lan Yuan con una sonrisa divertida.
“¿Eso importa? Aun si me gustara, yo ya tango una prometida en la secta Yunmeng Yu” Le
recordó Jingyi.
“Bueno, para eso está el periodo de cortejo, para romperlo si es que no te gusta tu matrimonio
arreglado, ¿No es verdad?”
Tomando suavemente la mano de su primo, Lan Yuan lo miró a los ojos por un par de
segundos, poniéndose de pie para salir del hotel a ir a buscar a Jin Ling. Cediendo de esa
forma su lugar para Ouyang Zizhen, quien había entrado al hotel junto a su secta, y se acercó
rápidamente a Jingyi para tomar el lugar a Sizhui, comenzando a hablar animadamente con el
heredero de la secta Lan, después de haber tomado mucha confianza con ese alfa.
Saliendo del hotel, Sizhui se guio por su olfato, encontrando pronto a Jin Ling, quien estaba
parado cerca de uno de los puertos del lugar, un poco apartado de los demás miembros de su
secta, quienes estaban en los alrededores del hotel, dudando sobre si debían o no entrar con
sus demás compañeros cultivadores, temiendo su rechazo por los recientes acontecimientos.
Caminando lentamente al puerto, Sizhui se sintió algo nervioso, mirando la espalda de su alfa
tan frio y serio, luciendo tan pensativo mirando hacia la nada.
“Hola A-Ling…” Dijo Lan Sizhui tímidamente, acercándose al alfa algo tembloroso.
“Lan Gonzi, ¿Por qué esta aquí?” Preguntó Jin Ling sorprendido, girándose en dirección del
omega.
Esa había sido la primera reacción honesta de Jin Ling, estaba tan distraído pensando que no
se dio cuenta de que el joven omega se había acercado a él, girándose para mirarlo
sorprendido.
Sin embargo Sizhui no se lo tomó a mal, sonriendo y mirando al menor a los ojos: “Quería
asegurarme de que estabas bien.”
“Gracias Lan Gonzi, eres muy amable, pero en realidad no creo que vaya a estar bien por
ahora” Respondió Jin Rulan algo cabizbajo.
“Sabes que puedes llamarme por mi nombre, ¿No es verdad? No debe haber este tipo de
seriedad entre nosotros…”
“Sizhui.”
Escuchando al alfa llamarlo por su nombre, Lan Yuan se acercó un poco más a él, y aun
sabiendo que no lo tenía permitido al no haber iniciado el periodo de cortejo aun, lo tomó
suavemente de la mano, sin dejar de mirarlo a los ojos.
“Lo siento… Lamento que tengas que pasar por esto tu solo, pero no debes olvidar que
también tienes apoyo en mi familia, mi A-Die estará encantado de hablar contigo, y yo… Sé
que no puedo ser de ayuda para ti en estos momentos, pero aun así haré lo posible para
servirte de algo, así que por favor, no pases por esto tu solo” Pidió Sizhui en un susurro.
“Es solo que a veces... Lamento ser el heredero de esta secta. Mi madre está en un momento
tan delicado, y yo soy el único de mis hermanos que no puede estar con ella por cumplir mis
deberes aquí. Ahora mi padre también debe ser perturbado por esta situación, y después de lo
que todos vimos esta tarde, yo ya no sé nada de mi familia. ¿En verdad todos los miembros
de la secta Jin somos tan terribles?”
“No creo que toda tu familia sea terrible, tu no lo eres” Aseguró Sizhui con firmeza: “Todo
este asunto se resolverá, yo estoy seguro de eso. Así que por favor no te angusties y no te
aísles tu solo, nadie puede juzgarte por los errores de tu tío, así que deja que te ayudemos con
esta pesada carga, déjame ayudarte.”
Al sentir a ese omega tan cerca, con esas amables palabras y su aura tan pura, Jin Rulan por
un momento quiso besarlo. Sentía una conexión especial con Lan Yuan, algo que su alfa no
había sentido con otro omega jamás, deseando quedarse en ese muelle a su lado para siempre.
“Quédate conmigo aquí un momento, ¿De acuerdo?” Pidió Jin Ling en un susurro.
“Me quedaré todo el tiempo que quieras, A-Ling.”
Quedándose juntos en el muelle por un par de minutos más, hablando en susurros hasta que
Jin Ling pudo tranquilizarse, Sizhui llevó a todos los miembros de la secta Jin al interior del
hotel, donde se unieron con los demás jóvenes cultivadores de las otras dos sectas, quienes
los recibieron de una forma cálida. Ya nadie mencionaba el asunto sobre Jin Guangyao, y
solo hablaban emocionados sobre su aventura de esa tarde, comiendo y pasando la noche
juntos.
***
“De verdad… Lo lamento mucho.”
Cerrando los ojos con tristeza, Song Lan vio a Xiao Xingchen, quien frente a él se sentía tan
distante, como una vieja memoria que volvía a él para recodarle un pasado que nunca tuvo un
final.
Ellos ya no podían comunicarse, la única forma que tenía Song Lan de comunicarse con otros
era mediante la escritura, sin embargo Xiao Xingchen ya no tenía ojos para leer sus palabras,
y aunque Song Lan todavía podía escucharlo… Xiao Xingchen estaba hablando al vacío.
Tras su despertar, Xiao Xingchen buscó desesperado a su familia, enterándose del terrible
destino de su omega y viendo a su hija aterrorizada. Al ver esa reacción, Song Lan se dio
cuenta de que las últimas palabras que le había dicho Xue Yang antes de morir eran verdad,
en el corazón de Xiao Xingchen ya no había espacio para nadie más que no fuera aquel
omega y la vida que había construido a su lado, ya que a pesar de volver a estar juntos
después de tanto tiempo, Xiao Xingchen solo se preocupaba por Xue Yang, sin darle
oportunidad a Song Lan de acercarse a él nuevamente.
De cierta forma, Song Lan sabia esto incluso antes de volver a encontrarse con Xiao
Xingchen, pero la confirmación era dolorosa. Le había contado su historia a Wei Wuxian, y
después de dejar en claro todas las implicaciones de la familia Jin en su muerte, Song Lan
creía que había terminado sus deberes en aquel lugar.
Había acompañado a Xiao Xingchen y los demás hasta aquel pueblo, donde Xiao Xingchen
había alquilado una habitación para él y su hija, logrando que A-Qing durmiera a duras
penas, y con la niña ya descansando, se acercó a Song Lan para ofrecerle sus disculpas.
“Lamento que mi esposo te haya hecho tanto daño, yo en verdad no lo sabía, pero yo…
Confió en el corazón bondadoso de Xue Yang, y yo sé que tú también sabes que las personas
con un corazón tan obscuro pueden cambiar. Así que por favor, olvida todo el odio en tu
corazón, y ayúdame a encontrar a mi familia” Le pidió Xiao Xingchen, tomando la mano de
Song Lan suavemente.
Xiao Xingchen había ido con los demás cultivadores por una razón clara, necesitaba su ayuda
para tratar de salvar a su familia. Pero escuchando las suplicas de Xiao Xingchen, Song Lan
solo se acercó a él, dándole un cariñoso beso en la frente, antes de alejarse y dejarlo solo.
Aun sin verlo, Xiao Xingchen supo que su amigo se había ido, así que cabizbajo regresó a su
habitación de hotel, donde permanecía su hija, decidiendo quedarse a su lado.
Song Lan sentía que ya nada en su vida tenía sentido, sus motivaciones siempre habían
dependido de otras personas, ya sea por el odio o por el amor. Pero ahora que estaba
completamente solo, en esas circunstancias que lo mantenían en medio de la vida y de la
muerte, Song Lan solo podía pensar en una cosa: Quería desaparecer.
“Song Gonzi, ¿Ya se retira?”
Girándose en dirección a esa voz, Song Lan encontró a un alfa, el cual por sus túnicas rojizas
le daba a entender que pertenecía a la secta Wen, y por su semblante pudo notar que era de su
misma especie.
Entonces Song Lan lo recordó, era el otro cadáver resentido que lo había detenido cuando
trato de atacar a los demás cultivadores, pero esos recuerdos eran vagos en su mente, ya que
estando bajo el control de otro, su mente funcionaba de una forma distinta.
Al ver al contrario, Song Lan de inmediato hizo una reverencia, deseando disculparse por
haber tratado de herirlo.
“No es necesario que se disculpe conmigo, yo lo entiendo mejor de lo que cree, perder el
control de su cuerpo hasta hacer cosas que no desea, y herir personas que aprecia. Lo
comprendo, así que no debe preocuparse por eso” Dijo Wen Ning, sonriendo y luciendo algo
tímido.
Levantando la mirada, Song Lan se sintió curioso por ese alfa. Había sido convertido en un
cadáver resentido cuando todavía era joven, antes de cumplir 20 años, así que tenía una
apariencia más pequeña que Song Lan, quien se preguntaba como hubiera lucido si nunca se
hubiera vuelto de esa forma.
Wen Ning comprendía que Song Lan no podía hablar, aun así ante la vista tan fija del alfa que
parecía estarlo analizando, no podía evitar sentirse nervioso. Durante mucho tiempo Wen
Ning había deseado conocer a otra persona como él, y ahora que la tenía en frente, no podía
evitar desear acercarse a él, con algo más que simple curiosidad, era la primera vez que Wen
Ning sentía algo como eso por otra persona desde la muerte de Wen Xu.
“Sé que tal vez pueda sonar algo egoísta… ¿Pero podría quedarse haciéndome compañía
hasta el amanecer?” Pregunto Wen Ning tímidamente: “¡No tengo ninguna intención oculta!
Pero… Como usted sabrá nosotros no podemos comer o dormir, y las noches se hacen largas
estando solos. Sé que usted debe irse, pero por esta noche, seria agradable contar con su
compañía.”
Song Lan en realidad no tenía ningún plan al irse de ahí, no tenía a nadie que lo esperara o
algún propósito que cumplir. Así que ante esa tímida y dulce propuesta, por ese chico que le
daba tanta curiosidad, Song Lan asintió con la cabeza aceptando quedarse.
“Eso es maravilloso… ¿Quiere ir a dar un paseo por el bosque? Seguro será divertido, y
podremos cazar algún cadáver resentido que este por ahí para pasar el rato” Propuso Wen
Ning con una sonrisa en su rostro.
Una vez más, Song Lan asintió con la cabeza, caminando al lado de Wen Ning, quien
continúo hablando sin parar, mientras ambos caminaban entre los árboles.
***
“Muchas gracias por su ayuda” Dijo Wei Ying, haciendo una reverencia mientras despedía a
ese curandero de sus aposentos.
Regresando al interior de aquella habitación de hotel, Wei Ying se encontró con Lan Wangji,
quien recientemente había sido tratado por la herida del corte en su pecho, la cual no había
sido demasiado profunda, pero aun así necesito un par de puntadas y ser vendada.
“¿Dolió demasiado?” Preguntó Wei Ying, regresando al lado de su alfa, poniéndose de
rodillas junto a la cama a su lado.
“No.”
“Aun así debes mantenerte acostado, ¿De acuerdo? Yo iré a traer la cena para los dos” Pidió
Wei Ying.
“Mmm…”
Lan Wangji se encontraba algo distraído, ya que en su mente solo repetía una y otra vez la
pelea que había tenido con ese misterioso enmascarado, preguntándose como podía saber las
técnicas de pelea de su clan, reclamándose a si mismo por haber sido herido por aquel
desconocido.
“¿Estas bien?” Pregunto Wei Ying algo preocupado, entendiendo que su alfa se encontraba
perturbado.
“Deberías deshacerte de esa cosa” Señalo Lan Wangji.
En el centro de la habitación, rodeada de varios sellos, se encontraba aquel sello de acero, el
probable causante de todo aquel desastre.
Después de que A-Qing fuera rescatada, llevo a Wei Ying una de las casas más apartadas de
la ciudad, donde se encontraba el tan deseado sello que Mo Xuanyu había creado en base al
sello del tigre de estigio, ya que Jin Guangyao no se lo había llevado al secuestrar a Mo
Xuanyu, siempre había estado escondido en la ciudad Yi.
“Lo hare, pero primero quiero estudiarlo” Explico Wei Ying: “Su energía es diferente a mi
sello del tigre de estigio, o al que pude ver en los recuerdos de Wen Shima. Quiero saber que
es esa energía tan diferente que siento en ese sello…”
“Estas jugando con cosas peligrosas de nuevo, terminaras dañando tu cuerpo otra vez, solo
deberías tirarla” Dijo Lan Wangji con seriedad.
Girando su mirada en dirección a su alfa, Wei Ying pregunto molesto: “¿Crees que mi cuerpo
actual está en este estado a propósito?”
Lan Wangji prefirió no responder esa pregunta, pero era clara que la respuesta a esa pregunta
era un claro “si”. Entonces ambos sintieron un gran abismo entre ellos, algo que no habían
sentido desde hace varios años, ya que Lan Wangji y Wei Wuxian se encontraban divididos
sobre sus opiniones de esa peligrosa situación.
Chapter 14

Una gran noticia recorrió todas las sectas, ya que se llamaba a todos los líderes a una gran
reunión en la secta Yunmeng Jiang, con una noticia tan urgente que no podía esperar.
Después de salir de la ciudad Yi, todos los cultivadores se reunieron en Lotus Pier, un lugar
que Wei Wuxian consideraba seguro y alejado de Jin Guangyao después de todo lo que
habían visto.
Aun sin saber de lo que se trataba, Jiang Wanyin recibió a todos los líderes de las demás
sectas en su hogar. Mientras que Lan Xichen, Wen Qing y Nie Huaisang acudieron al lugar
representando a sus respectivas sectas. Mientras que como una sorpresa para todos, Jin Rulan
representó a la secta Lanling Jin en dicha reunión, ya que padre seguía cuidando de Jiang
Yanli en su difícil embarazo.
Aunque nadie sabía lo difícil que sería esa reunión para todos los miembros de la familia Jin.
Cuando todos los lideres finalmente estuvieron reunidos, se miraron entre ellos visiblemente
confundidos, ya que la mayoría no comprendía lo que estaba sucediendo.
Sin hacer esperar más a los líderes de las sectas, Lan Wangji y Wei Wuxian finalmente
aparecieron en la sala principal de la secta Jiang, trayendo consigo como invitados a Xiao
Xingchen y Song Lan, sorprendiendo a la mayoría, quienes los reconocieron como esos
famosos cultivadores que habían desaparecido hace tanto tiempo.
“Gracias por haber acudido a nuestro llamado, estimados líderes de todas las sectas” Dijo
Wei Ying comenzando a hablar de forma solemne: “Pero lamentablemente esta reunión no
trae noticias agradables, ya que debemos informarles respecto a un incidente alarmante que
involucra la secta Lanling Jin y sus líderes…”
Ante la mirada sorprendía de todos los líderes de las sectas, Wei Wuxian comenzó a explicar
todos los sucesos extraños y criminales relacionados con Jin Guangyao desde que llegaron a
la villa Mo, terminando con el desafortunado y sangriento suceso en la ciudad Yi.
Como era de esperarse, todas las miradas se centraron en Jin Ling y sus consejeros, los cuales
eran los más sorprendidos de todos los presentes, ya que se sentían insultados con semejantes
acusaciones. Todos ellos con excepción de Jin Ling, quien prefería mantener un silencio
respetuoso.
Después de las acusaciones de Wei Ying, fue el momento de Xiao Xingchen, quien se paró
frente a todos los líderes para comentar lo que había ocurrido con Xue Yang y Mo Xuanyu,
pidiendo la ayuda de todos los líderes para poder rescatar a su esposo.
Terminando así con Song Lan, quien ayudándose de un pergamino y una pluma, escribió una
carta para todos los presentes, en los cuales no solo acusaba a Jin Guangyao de haberlo
convertido en un cadáver resentido, también a Qin Su de ser su asesina, ya que fue ella quien
le ordenó a uno de sus sirvientes acabar con él en la ciudad Yi.
Cuando todos los argumentos fueron expuestos, hubo un silencio incomodo en toda la sala,
mientras las miradas seguían fijas en los cultivadores de la secta Jin, esperando que ellos
dijeran algo para defenderse.
“La secta Lanling Jin acepta y confirma todas las acusaciones” Dijo Jin Ling de pronto,
sorprendiendo a todos los presentes.
“Líder de la secta, pero…” dijo uno de los ayudantes de la secta, intentando callar a Jin Ling.
“Yo estuve ahí, concejal. Yo vi personalmente a mi tío llevarse a la fuerza a Mo Xuanyu y a
Xue Yang, además de cultivar con magia resentida” Dijo Jin Rulan con firmeza: “La secta Jin
se hará cargo de sus errores, y este es un error. Por lo cual en nombre de mi padre y de toda
mi secta, voy a pedir perdón a todas las personas a las cuales se le ha causado daño,
prometiendo tratar de solucionar nuestros errores y atrapar a los criminales de nuestra secta
para dar un castigo justo.”
Al escuchar las palabras de su sobrino, Jiang Cheng no pudo evitar sonreír con suavidad,
muy orgulloso de las palabras de Jin Rulan, quien sonó muy maduro al aceptar todos los
errores de su secta y disculparse por ellos.
“Tío Wei Ying, usted contará con todo el apoyo de mi secta y de sus cultivadores, solo debe
decirnos a donde tenemos que ir, y nosotros nos encargaremos de acabar con Jin Guangyao”
Dijo Jin Rulan con firmeza.
Una vez más, las palabras de Jin Ling causaron gran conmoción entre todos los presentes,
especialmente entre los miembros de la secta Jin, quienes no estaban nada contentos con la
idea de ponerse en contra de sus propios miembros.
Sin embargo Wei Ying no prestó atención a eso en absoluto, sintiéndose algo sonrojado, ya
que era la primera vez que Jin Ling le hablaba de una forma tan cariñosa llamándolo “tío”, y
no pudo evitar sentirse conmovido por ello.
Reaccionando a duras penas, sabiendo que tenía que continuar con la reunión, Wei Ying se
aclaró la garganta y dijo: “Hemos localizado varios edificios en los cuales Jin Guangyao
podría estar en control de los rehenes, entonces todas las sectas enviaran un par de
representantes para vigilar el lugar. Cuando localicemos a Jin Guangyao, debemos reunirnos
nuevamente, y entonces decidiremos como atacar, ya que nuestra prioridad es proteger a los
rehenes y recuperar el cadáver del desaparecido Nie Mingjue.”
“Wei Gonzi, usted ha comentado que Jin Guangyao ha comenzado a usar un tipo de cultivo
con energía resentida, ¿No será demasiado peligroso para todos los miembros de nuestras
sectas el enfrentarlo?” Preguntó Wen Qing.
“Es por eso que nos reuniremos nuevamente después de ubicarlo, es importante no atacarlo
sin un plan, porque nosotros tenemos la mayor parte de posibilidades de ganar en esta
situación” Explicó Wei Ying.
“¿Y cómo tenemos tantas posibilidades?”
“Tenemos esto, un arma que podemos usar con Meng Yao, que lo acabará sin problemas.”
Tomando un pequeño saco de cuero de sus ropas, Wei Ying se lo mostró a todos los
presentes, la cual contenía el sello de Mo Xuanyu, el cual le había entregado la pequeña A-
Qing cundo estuvieron en la ciudad Yi.
Al ver ese objeto, Lan Wangji volvió a molestarse, saliendo de la reunión ante la vista
sorprendida de todos, dejando solo a su esposo.
Aun así Wei Ying no retiro sus palabras, y aunque se sentía algo triste por el abandono de
Lan Wangji, Wei Ying continuó explicando cómo planeaba usar ese nuevo sello en contra de
Meng Yao.
“¿Entonces Mo Xuanyu creó una copia del sello del tigre de estigio?” Preguntó Lan Xichen
confundido.
“No exactamente… aunque ambos sellos surgen de la enseñanzas de Wen Shima, este sello
es diferente… Es el… Yin de acero”
Wei Ying sabía que ese sello era diferente al que él alguna vez creó en el pasado, podía
sentirlo en su energía. Tal vez por la previa experiencia de Mo Xuanyu en saber trabajar el
acero, o porque de alguna forma pudo transmitirle otras propiedades. De cualquier forma,
Wei Ying notaba que aquel objeto era diferente, y tal vez mucho más poderoso que su Sello
del tigre de estigio.
Después de repartir las regiones en las cuales todos los líderes de las sectas debían mandar
cultivadores para investigar, la reunión finalmente terminó, y al anochecer todos pudieron
salir de la secta para regresar a casa.
Siendo uno de los primeros en salir del lugar, Nie Huaisang se alejó de Lotus Pier
rápidamente, algo que llamó la atención de Wei Ying, ya que su amigo se veía visiblemente
perturbado después de recibir las noticias de lo que pasó en la ciudad Yi. Y aunque Wei Ying
podía comprenderlo, ya que se trataba de una amenaza a su omega destinado con el secuestro
de Mo Xuanyu, Wei Wuxian temía que su amigo hiciera una locura.
Ya que al terminar todo, Nie Huaisang lucia furioso.
Saliendo de la reunión primero, Wen Ning buscó directamente a Song Lan, luciendo nervoso
y emocionado a la vez.
“¿Y cómo te fue?” Preguntó Wen Ning acercándose a Song Lan con nerviosismo.
Luciendo tan relajado como era usual, Song Lan solamente sonrió, acercándose a Wen Ning
para acariciarle una mejilla con suavidad. Algo ante lo que Wen Ning no se negó, sonriendo
con felicidad, luciendo muy cercano a Song Lan.
“Estaba pensando que nosotros también podríamos ir a investigar, tal vez deberíamos ir a este
lugar por nuestros propios medios…” Dijo Wen Ning algo temeroso, mostrándole un mapa a
Song Lan: “El maestro Song me dijo que le gustaba viajar ayudando a los demás, yo también
quiero hacer eso, mi deseo es poder viajar con usted…”
Saliendo de la reunión, Wen Qing pudo notar a su pequeño hermano tan feliz rondando a
Song Lan, viéndolo animado después de mucho tiempo.
“¿Estas preocupada por él?” Preguntó Wei Ying viendo lo mismo que Wen Qing.
“No preocupada, triste tal vez” Respondió la líder de la secta Yiling Wen: “Después de
convertirse en un cadáver resentido A-Ning perdió la motivación de su vida, y siempre estaba
en mi secta, sin ningún deseo, solo continuando hacia adelante. Sé que es egoísta, pero era
feliz de tener a mi hermano a mi lado, siempre trataba de hacerlo feliz, pero… Sé que no
tiene una vida a mi lado. Tal vez encontró una vida al lado de ese hombre, Song Lan es una
persona decente, así que no estoy preocupada porque A-Ning se vaya con él, tal vez solo
estoy triste porque mi hermano finalmente va a dejarme.”
“El nunca dejara de ser nuestro pequeño A-Ning, ¿Lo sabes verdad?” Pregunto Wei Ying
acercándose a la joven para abrazarla por los hombros: “Es bueno que él tenga a alguien con
quien pasar su vida, ahora es un ser inmortal, y cuando tú y tus familiares se vayan, ¿Que va
a quedarle? Song Lan es probablemente la única persona en el mundo que sea como él, y me
hace feliz saber que A-Ning ya tiene a alguien con quien pasar la eternidad.”
“Si, supongo que no estoy preparada para dejarlo ir, pero… Estoy verdaderamente feliz de
que A-Ning lo haya encontrado, a la primera persona que puede amar después de Wen Xu.”
Ambos entonces se quedaron mirando a la pareja, mientras Wen Ning le mostraba a Song
Lan emocionado el mapa, hablando sin parar sobre las preparaciones de su viaje. Mientras
que Song Lan se mantenía en silencio, sonriendo suavemente, abrazando al menor por la
cintura, mientras lo escuchaba hablar sin parar.
Saliendo de la reunión algo tembloroso, Jin Ling de inmediato fue a buscar a Lan Sizhui,
quien había sido su más grande apoyo para la reunión.
“Lo hiciste bien A-Ling, fuiste un gran líder” Lo animo Sizhui, viendo a su abatido alfa
saliendo del lugar.
“No creo ser tan bueno… Ahora todos los consejeros de mi padre me odian, porque creen que
le he dado la espalda a mi secta…” Dijo Jin Ling tristemente, acercándose a Sizhui con la
mirada baja.
“Oye, hacer las cosas correctas no le agradara a todo el mundo, pero como líder debes pensar
en el bienestar de todos en Lanling, y arrestar a Jin Guangyao los mantendrá a salvo, ser un
buen líder implica hacer lo correcto, no lo que les guste a tus consejeros…”
Sintiéndose apoyado por las palabras de Sizhui, Jin Ling se acercó a él, abrazándolo con
fuerza. Haciendo reír al menor de esta forma, ya que este se sentía algo avergonzado por el
abrazo, pero también muy feliz de tener a su alfa tan cerca.
“A-Cheng, por favor espera…” Pidió Lan Xichen yendo detrás de Jiang Wanyin.
Terminada la reunión, Jiang Cheng quiso escapar de Lan Huan, pero este fue detrás de él con
rapidez, tomándolo de un brazo para evitar que se fuera.
“¿Qué es lo que quieres?” Pregunto Jiang Wanyin molesto.
“¿Iras tú mismo a buscar a Jin Guangyao con tus cultivadores?”
“¿Qué clase de pregunta tonta es esa? ¡Claro que iré yo mismo! Soy el líder de esta secta, es
obvio que voy a ir a apoyarlos, no voy a quedarme aquí sentado sin hacer nada” Dijo Jiang
Cheng molesto.
“No lo hagas… Por favor.”
Sonrojándose mucho, Jiang Cheng sintió que el cuerpo de Lan Xichen se acercaba demasiado
al suyo, hablándole de la misma forma cariñosa y suave del pasado cuando los dos todavía
eran prometidos.
“¿Puedes sentirlo? Tus feromonas están comenzando a oler diferentes, estas cerca de tu ciclo
de celo” Dijo Lan Huan en un susurro.
“¡Claro que no!” Respondió Jiang Cheng molesto: “Tú no puedes saber eso…”
“Lo es mejor que cualquier otra persona, conozco a tu omega. Por favor, no seas imprudente,
no lo hagas…”
“Metete en tus asuntos, y recuerda, tu y yo ya no somos nada” Dijo Jiang Cheng muy
avergonzado, soltándose del agarre en su brazo con fuerza, alejándose de él lo más rápido que
pudo.
Dejando así a un abatido Lan Xichen, quien solo pudo verlo irse.
Sin embargo esto no pasó desapercibido por todos los presentes, ya que ignorando a su primo
y Jin Ling por primera vez en varias semanas, Lan Jingyi observó la curiosa escena entre su
padre y el líder de la secta Jiang. Y es que esa interacción revivió extraños sentimientos en su
interior, ya que de alguna forma las feromonas de Jiang Cheng le resultaban conocidas,
aunque no sabía la razón.
Aquella noche estuvo llena de misterios.
***
Cuando sus ojos se abrieron, pudo sentir el frio piso debajo de su cuerpo, y la obscuridad a su
alrededor.
Algo asustado, Mo Xuanyu se encogió en su propio sitio, pensando que estaba en un lugar
horrible.
Pero mientras sus ojos se acostumbraban más a la obscuridad, se dio cuenta de que estaba en
una celda acostado en el suelo, con las manos atadas detrás de su espalda.
“¿Dónde estoy?” Preguntó Mo Xuanyu cada vez más asustado.
“Silencio, es mejor si no se da cuenta de que estas despierto.”
Girándose en dirección de esa voz, Mo Xuanyu encontró a Xue Yang, quien estaba en la
celda detrás de él, aparentemente en la misma condición que el menor, encerrado y con las
manos atadas.
“¿Dónde estamos?” Pregunto Mo Xuanyu asustado.
“No lo sé, después de salir de la ciudad, me desmayé y desperté aquí” Respondió Xue Yang.
“¿Y cuánto tiempo ha pasado?”
“Yo desperté poco antes que tú, así que no estoy tan seguro. Pero según mis aproximaciones,
un día o un día y medio.”
“Eso es demasiado tiempo…”
Mo Xuanyu no podía evitar sentirse aterrado, había pasado demasiado tiempo desde que no
estuvo cerca de Jin Guangyao, la persona culpable de su locura. Así que estar ahora tan cerca
y en un peligro tan grande, ponía realmente nervioso a Mo Xuanyu.
“¿Cómo fue que te viste involucrado con este demente?” Preguntó Xue Yang: “Yo apenas
pude escapar de él…”
Mo Xuanyu estuvo a punto de responder, pero ambos fueron interrumpidos al ver que una
puerta lejana se abría, y varios pasos se acercaban a ellos.
Asustado, Mo Xuanyu se encogió en su sitio, viendo como varios hombres se acercaban a las
celdas, encabezados por Jin Guangyao, quien sonreía amablemente como siempre.
“Así que ya estas despierto… Es bueno saberlo, podrás empezar a trabajar” Dijo Meng Yao
dirigiéndose directamente a Mo Xuanyu: “Tráiganlo.”
Gritando con miedo, Mo Xuanyu vio a varios de esos extraños hombres entrando en su celda,
acercándose a él para tomarlo de los brazos, obligándolo a ponerse de pie y salir de la celda.
“¡Maldito Meng Yao! ¡Déjalo tranquilo!” Gritó Xue Yang furioso.
Y a pesar de los intentos de Mo Xuanyu de resistirse y seguir gritando, Jin Guangyao lo saco
de aquella celda y aquel sótano, llevándolo a unas escaleras que lo dirigían al exterior.
Entonces Mo Xuanyu observo el lugar en el que se encontraba, que parecía una especie de
templo, en el cual caminaban sin parar varios hombres que parecían monjes, visiblemente
atareados con sus tareas.
Siendo arrastrado hasta el centro de ese templo, Mo Xuanyu se encontró con una gran mesa,
en la cual rodeada de sellos, se encontraba un cadáver, el cual desprendía una gran energía
resentida.
“Por tu desobediencia perdimos el sello del tigre de estigio, el cual amablemente le cediste a
Wei Wuxian. Pero ya que eres tan hábil para crear este tipo de objetos malditos, supongo que
no hay ningún problema en crear uno nuevo para mí, ¿No es cierto?” Pregunto Meng Yao con
calma.
Observando aquella horrorosa escena, temblando de miedo, Mo Xuanyu se atrevió a
preguntar: “¿Y qué vas a hacer con eso?”
“¿Acaso necesitas una razón? ¡Solo hazlo! No te estoy pidiendo un favor, A-Yu, te estoy
dando una orden…”
“A-Yao… Yo… No puedo crear otro para ti, no es algo tan simple. Tengo que cargar el acero
con energía resentida, por eso tarde tantos años para crear mi Yin de acero, y…”
“¿Años? Tienes un día, o voy a cortar tu cuello” Lo amenazo Meng Yao: “Los sellos no
podrán contenerlo por más tiempo…”
Levantando la mirada, Mo Xuanyu observo aquel cadáver en la mesa, ¿Acaso Meng Yao
planeaba hacer algo con él? El joven omega no podía saberlo, ya que estaba demasiado
confundido con la situación, mirando a su hermano lleno de miedo.
“Crea un nuevo sello para mí, Xuanyu, o despídete de tu asquerosa e inútil vida…”
Chapter 15

Después de la reunión tan intensa que tuvieron en la secta Jiang, todos se dividieron en
diversos equipos, registrando los lugares en los cuales podrían encontrar a Meng Yao, tales
como propiedades viejas de la secta Nie, o sitios que le pertenecían a la secta Jin.
Todos tenían la orden de solo encontrar a Meng Yao y avisar a los demás, para planear la
mejor forma de rescatar a los rehenes sin poner a nadie en peligro. Y a pesar de que esas
órdenes las había dado su propio esposo, Lan Wangji no confiaba en el buen juicio de Wei
Ying, así que había ido al lugar menos probable al lado de su esposo, esperando evitar un
confortamiento con Meng Yao.
“Hum… Lan Zhan ha estado muy callado desde ayer” Se quejó Wei Ying, apoyado en el
borde de la bañera, mirando a su esposo.
“Siempre soy callado” Respondió Lan Zhan, distraído leyendo un libro.
“No conmigo, ¿Qué te pasa? ¿Acaso estás enojado con tu esposa?”
“Mmm…”
“Vamos… No hagas eso, habla conmigo…”
“Termina de bañarte” Dijo Lan Zhan de forma cortante.
Algo molesto, Wei Ying se cruzó de brazos molesto, hundiéndose aún más en esa bañera,
refunfuñando en silencio.
Habían llegado al pueblo de origen de Jin Guangyao, un lugar pequeño y en los límites de las
tierras de la secta Lanling Jin. Nadie esperaba que Meng Yao estuviera en ese lugar, ya que
era demasiado obvio, y aunque Wei Ying había deseado ir a otro sitio a investigar, fue Lan
Wangji quien insistió ir a ese sitio, llevándolo directamente a un hotel, donde ambos estaban
descansando un poco antes de empezar a buscar pistas.
“¿Terminaste?” Pregunto Lan Wangji.
“No puedo levantarme… Tengo mucha pereza…” Dijo Wei Ying un molesto.
Suspirando resignado, sabiendo lo que quería su esposo, Lan Wangji dejó su libro de lado por
un momento, poniéndose de pie para ir a buscar a Wei Ying a la bañera. Pero siendo tomado
por sorpresa, Lan Wangji sintió como su omega lo tomaba de un brazo, y tiraba de él con
fuerza, haciéndolo caer dentro de la bañera.
“¡Wei Ying!” Dijo Lan Wangji molesto, cayendo sobre el cuerpo de su omega.
“¡Te caíste de verdad!” Dijo Wei Ying entre fuertes risas.
Frunciendo el ceño, Lan Wangji sintió como los brazos de su omega se enredaban en su
cuello, dándole un estrecho abrazo.
“No te enfades conmigo, A-Zhan…” Pidió Wei Ying en un susurro: “No entiendo bien por lo
que estas molesto, pero de verdad lo siento, no lo hare de nuevo.”
“No deberías disculparte por lo que no conoces, Wei Ying.”
“Tú no quieres hablar conmigo, ¿Cómo quieres que lo sepa? Solo perdóname, ¿De acuerdo?”
Aun viendo el rostro serio y algo molesto de su alfa, Wei Ying le dio un beso, sintiendo como
el cuerpo de Lan Wangji se relajaba.
Ambos no habían tenido sus “todos los días” desde que iniciaron ese viaje en la villa Mo, y
aunque era casi una semana, para ambos eso era bastante tiempo. Así que Wei Ying
desesperado abrió las piernas, deseoso de sentir a su alfa de nuevo.
Dando una suave mordida en los labios de su omega, Lan Wangji llevo sus manos a las
caderas del menor, acariciándolas con deseo. A pesar de su enfado, no podía negar que le
encantaba el cuerpo de Wei Ying, deseando hacerlo suyo cuanto antes.
Una de las manos de Lan Wangji bajo de las caderas del menor dejando una suave caricia,
acercándose al miembro del omega para presionarlo suavemente entre sus dedos, sacando un
gemido de Wei Ying.
“Lan Zhan…” Suspiró el omega, temblando del deseo.
“Wei Ying está muy duro…”
Bajando sus labios por el cuello del menor, sacando más gemidos, Lan Wangji alcanzó los
pezones de Wei Wuxian, llevando uno de estos a su boca para estimularlo.
“Lan Zhan… El agua se está desbordando…” Dijo Wei Ying preocupado, mirando el agua
comenzar a caer de la bañera.
“Mmm…”
“No puede no importarte… En serio Lan Zhan…”
Jadeando y gimiendo con placer, Wei Ying sintió su miembro y sus pezones siendo
estimulados, y pronto los dedos traviesos de su alfa bajaron a su entrada, rozándola por el
exterior con suavidad.
“No uses más el Yin de acero…” Pidió Lan Zhan en un susurro.
“¿Que?” Preguntó Wei Ying confundido, abonando todo el placer que había sentido.
“Me escuchaste, no quiero que lo uses.”
Al ver el rostro serio de su alfa, Wei Ying pensó que él le estaba haciendo una broma, así que
soltó unas carajadas, pero Lan Zhan no cambió su expresión, luciendo tan frio y serio como
antes.
“Lan Zhan, sabes que nuestra única oportunidad contra Meng Yao es usar el sello, no es tan
grave, no pasará nada” Dijo Wei Ying restándole importancia al asunto.
“¿Recuerdas lo que pasó la última vez que lo usaste?”
Borrando su sonrisa, Wei Ying se perdió en sus pensamientos por un momento, recordando
como al lado de Wen Ning había ocasionado una gran herida en su alfa por accidente, ya que
el sello era incontrolable, y gracias a eso le dio su cuerpo a Wen Shima ocasionando una
masacre.
“No quiero que mueras” Dijo Lan Zhan angustiado.
“No voy a morir Lan Zhan, será la última vez, todo va a estar bien” Respondió Wei Ying,
volviendo a restarle importancia al asunto.
“¿Entonces quieres que te vea morir?”
Antes de darle tiempo a Wei Ying de responder, Lan Wangji soltó el cuerpo del omega y se
puso de pie, saliendo de la bañera.
“Lan Zhan espera…” Pidió Wei Ying entristecido.
“Termina de bañarte, tenemos trabajo que hacer” Respondió Lan Wangji de forma seca.
Suspirando, Wei Ying supuso que sería mejor no intentar discutir más, su alfa estaba
realmente molesto con él, así que decidió terminar de bañarse, mientras que al otro lado de la
habitación Lan Wangji se quitaba la ropa húmeda.
Los dos tenían que investigar cuanto antes.
***
“Entonces… No hay nada aquí” Dijo Wei Ying caminando por las calles de aquella ciudad
silenciosa.
Había muy pocos pobladores en ese sitio, y a los pocos a los que les preguntaban al respecto,
negaban conocer algo sobre Jin Guangyao o haber visto a alguien de la secta Jin por el lugar,
así que Lan Wangji y Wei Ying decidieron recorrer el lugar completo por última vez antes de
regresar al hotel y dormir, dando por terminado su recorrido en ese lugar.
“¿Dónde fue que nació Jin Guangyao en este lugar?” Preguntó Wei Ying curioso.
“No fue en ninguna casa, fue en un burdel” Respondió Lan Wangji.
“Oh… Es verdad, lo había olvidado.”
La historia del origen de Meng Yao era bien conocida, un pequeño niño omega hijo de una
prostituta que tuvo sexo varias veces con Jin Guangshan. Cuando su madre murió y evitando
que lo convirtieran en una prostituta, Jin Guangyao escapo a Lanling buscando la ayuda de su
padre, trayendo consigo un pequeño cofre bañado en oro, que era el regalo que Jin
Guangshan siempre le daba a sus prostitutas favoritas, y que lo confirmaba a él como su hijo.
Pero las cosas no habían salido tan bien, ya que Jin Guangshan rechazó a Meng Yao como su
sangre, arrojándolo por las escaleras de la torre Koi, terminando así en manos del líder de la
secta Nie, quien había estado presente en ese momento por casualidad, quien lo volvió su
sirviente principal y lo llevó a su secta…
Esa era una historia que Wei Ying había pensado varias veces desde que se enteraron que
Meng Yao era la persona detrás de aquel desastre, ya que Wei Ying consideraba aquella una
historia muy heroica, el cliché del omega desvalido que cae en las manos de un tipo rico, que
de una forma extraña consigue ser reconocido por su padre y casarse con el hijo del hombre
que lo rescato, volviéndose así un omega rico y un héroe en la guerra… ¿No era una historia
demasiado conveniente?
“Espera… ¿Dijiste un burdel?” Preguntó Wei Ying sorprendido.
“Mmm…”
“Lan Zhan, no vimos ningún burdel por aquí” Razono Wei Ying.
Ambos habían recorrido el pueblo entero un par de veces ese día, pero no habían pasado por
ningún burdel, ¿Era ese el verdadero lugar en el cual Meng Yao nació?
Decidiendo encontrar más pistas, Wei Ying se acercó a una de las tiendas cercanas,
decidiendo buscar información del supuesto burdel.
“¿El burdel donde nació Jin Guangyao? Ese lugar no existe hace varios años ya… Poco antes
de que él fuera a Lanling el burdel se incendió, así que ya no existe” Explico la anciana.
“¿El burdel se incendió cuando él aún estaba aquí?” Pregunto Wei Ying sorprendido.
“Eso es correcto, joven maestro, el líder Jin nunca escapo del burdel, esos son rumores de la
gente. Lo que pasó fue un gran incendió que acabó con el dueño de Meng Yao, y sin el dueño
de los omegas del burdel, todos escaparon, eso incluye a Jin Guangyao quien fue a buscar a
su padre” Explico la anciana.
Esto dejo a Wei Ying estupefacto, había escuchado por los labios del propio Meng Yao la
historia de cómo él había escapado del burdel tras la muerte de su madre, en una historia
dramática, que te hacía sentir mucha tristeza del tipo de vida que vivió Jin Guangyao en ese
burdel.
¿Acaso alguna cosa que él dijo era verdad?
“¿Puede indicarme el lugar donde estaba el burdel, señora?” Pidió Wei Ying amablemente.
“Ese lugar ya no existe, ahora hay un templo cuidado por unos monjes, una obra de la secta
Moling Su…” Dijo la anciana.
“¿La secta Moling Su? ¿Por qué una secta de Gusu hizo algo como eso en Lanling?”
Pregunto Wei Ying confundido.
“Por la bondad de la señorita Qin Su obviamente, la nueva esposa del líder Su She, ellos
construyeron un templo hace 5 años en ese lugar. Solo sigan el camino principal en dirección
a esa montaña, cuando encuentren unas escaleras deben subirlas, y llegaran al templo…”
“Gracias, señora…” Dijo Wei Ying, muy agradecido, haciendo una reverencia para la mujer.
Mientras más sabían sobre esa historia, a Lan Zhan y Wei Ying se les hacía más extraño. ¿Por
qué una secta de Gusu haría una obra tan cara en Lanling? ¿Porque en ese sitio en específico?
Gracias al testimonio de Song Lan ya sabían que Qin Su estaba involucrada en los crímenes
de su hermano, pero ahora Wei Wuxian comenzaba a sospechar que su esposo, Su She,
también estaba involucrado. Aunque Wei Ying no se atrevió ni siquiera a sugerirlo, ya que
conocía la estrecha relación que tenía su esposo con Su She, ambos siendo mejores amigos
desde la más tierna infancia, así que sin querer herirlo, Wei Ying no dijo nada.
“Un lugar adecuado para un burdel” Dijo Lan Wangji, cuando encontraron las escaleras del
templo.
“¿Lugar adecuado? ¿A qué te refieres?” Preguntó Wei Ying.
“Fuera del pueblo, por el camino principal para atraer viajeros, en un lugar apartado y
privado…”
“Pareces saber mucho de burdeles, Lan Zhan…” Dijo Wei Ying riendo.
“Mmm…”
Sin dejar de reír, Wei Ying siguió a su esposo escaleras arriba de esa montaña, encontrándose
poco después con aquel templo completamente blanco, el cual tenía las puertas cerradas y
varios monjes custodiando la puerta.
“Buenas noches jóvenes maestros, lamento impedir su paso, pero el templo está cerrado el
día de hoy” Dijo uno de los monjes con amabilidad.
“¿En verdad? Es una pena, queríamos pasar solo un segundo para rezar un momento y dejar
un poco de incienso” Dijo Wei Ying, intentando ver a través de las puertas cerradas.
“Lo lamento jóvenes maestros, pero nadie puede pasar” Respondió el monje de la misma
forma amable, impidiendo el paso de Wei Ying.
Wei Wuxian estuvo a punto de insistir, pero se quedó en silencio, viendo a uno de los monjes
que custodiaban la puerta, quien tenía en su cinturón una espada muy específica, la cual de
color negro y con el aroma de unas feromonas muy específicas, Wei Ying reconoció de
inmediato.
“Usted va a dejarnos pasar…” Dijo Lan Wangji de forma amenazante, intentando acercarse a
ese monje, pero siendo detenido por Wei Ying.
“Vaya esa es una buena espada…” Dijo el omega con una sonrisa: “¿Acaso tiene un
nombre?”
Todos los monjes en el exterior se pusieron muy tensos, notando que lo habían arruinado
todo, luciendo muy serios y molestos de pronto.
“Deben retirarse ahora” Dijo otro de los monjes.
“Una disculpa, no queríamos causar molestias, nos iremos ahora al lado de mi querido
esposo…”
Ante la mirada de un confundido Lan Zhan, Wei Ying tomo a su alfa de la mano, y tiró de él
para llevarlo de regreso a las escaleras, saliendo de ahí con rapidez.
“¿Viste su espada?” Preguntó Wei Ying con una sonrisa.
“No…”
“Era Jiangzai, la espada de Xue Yang” Explico Wei Ying: “Si la espada está ahí, significa que
también lo está Xue Yang y Mo Xuanyu, lo encontramos…”
***
“¡Tenemos que atacarlos ahora!” Dijo Wei Ying exaltado.
“No vas a romper tus propias indicaciones, tenemos que esperar a los otros” Respondió Lan
Wangji, tomando las cosas con calma.
“No podemos esperar a que Meng Yao se haga más fuerte, tenemos que atacarlo ahora.”
“No somos suficientes tu y yo, tenemos que esperar a los otros.”
“¡Tenemos el Yin de acero!”
“No, es mi última decisión, vamos a esperar” Respondió Lan Wangji de forma rotunda.
Bufando de forma molesta, Wei Ying se sentó en la cama de aquella posada, mientras su
esposo se acercaba a una de las ventanas, comenzando a enviar mariposas mensajeras a todos
los demás líderes de las sectas.
Wei Ying sabia cuáles eran las intenciones de Lan Zhan, intentar escudarse en los otros para
evitar que Wei Wuxian usara el sello del Yin de acero, iban a mantenerse al margen para que
Wei Ying no tuviera oportunidad de pelear.
Pero Wei Wuxian quería pelear, se sentía furioso por todas las cosas malas que había hecho el
bastardo de Meng Yao, y planeaba vengarse cuando tuviera la más mínima oportunidad.
Lan Wangji no iba a frenar los deseos de Wei Ying.
Terminando de enviar todas las mariposas mensajeras, Lan Wangji se giró de nuevo hacia el
interior de la habitación, comprendiendo que su omega estaba molesto.
Pero la habitación ya estaba vacía.
***
Avanzando silenciosamente por los árboles, Wei Ying finalmente pudo ver frente a él ese
templo, y trepando un árbol con facilidad, pudo acceder a uno de los techos, avanzando de
forma escondida por ese sitio, intentando ver todo el interior.
Sin sorprender al omega, Lan Wangji había tenido razón, ya que adentro de ese templo había
un pequeño ejército, de varios de esos monjes, los cuales sostenían espadas y parecían estar
practicando, preparándose para una batalla.
Wei Ying quería enfrentar a Jin Guangyao cuanto antes, así que había acudido a ese sitio de
incognito, rodeando el templo para acceder desde la parte trasera. Afortunadamente no tenían
guardias en los techos, así que Wei Ying pudo avanzar silenciosamente por ese lugar,
buscando algún tipo de entrada al templo, o ubicar a Meng Yao entre todos esos monjes.
“Acaba con el líder, y todos los demás caerán…” Susurro Wei Ying, sin dejar de caminar por
ahí de forma silenciosa.
“¿Estás seguro de que estas buscando al líder?”
Girándose en dirección de esa voz, que le había resultado muy conocida, Wei Ying se
encontró con ese tipo enmascarado que se había peleado con Lan Zhan, y que fue el único
capaz de herirlo.
A penas bloqueando un rápido ataque de ese hombre, Wei Ying no tuvo más opción que bajar
del techo en el interior del templo, donde pronto fue rodeado por varios de esos monjes, que
no dejaron de apuntarle con sus espadas.
“Vaya, tenemos un invitado inesperado” Dijo la voz animada de Meng Yao, que salió
tranquilamente del templo.
“Tu…” Dijo Wei Ying, sonriendo con burla: “¿Acaso estabas escondiéndote?”
“¿Esconderme? No, en absoluto, en realidad estoy supervisando algo importante adentro del
templo” Respondió Jin Guangyao con calma: “Gracias por facilitarme la cosas, en realidad…
Yo también estaba buscando la forma de traerte aquí, supongo que tu amablemente lo hiciste
por tu propia voluntad, gracias…”
“¿Traerme aquí?” Pregunto Wei Ying desconcertado.
“Por supuesto, Wei Gonzi, me temo que usted debe ayudarme con algo muy importante”
Respondió Meng Yao de forma misteriosa: “Sígame por favor…”
Antes de que Wei Ying pudiera negarse, recibió un fuerte empujón desde su espalda, era
aquella persona enmascarada, quien lo obligó a avanzar. Sin tener más remedio, viéndose
rodeado por todos esos monjes y con ese tipo en su espalda, Wei Ying comenzó a caminar al
interior de ese templo, luciendo muy enfadado.
Recordaba la voz del hombre que estaba detrás de él, pero no podía recordarla, ¿Quién era el
secuaz de Meng Yao en ese desastre?
Chapter 16

“¿Entonces este es tu lugar de nacimiento?” Preguntó Wei Ying, caminando lentamente


detrás de Meng Yao.
“¿Mi lugar de nacimiento? No… En realidad, no sé dónde nací” Respondió Meng Yao,
siendo sincero.
“¡Meng Yao!” Dijo el alterado hombre detrás de Wei Ying
“¿Por qué te preocupa tanto? Vamos a matarlo después de que haga lo que tiene que hacer,
¿Que importa si sabe la verdad antes de eso? Si lo sabe, tal vez podrá descansar felizmente
después de la muerte” Respondió Jin Guangyao con calma.
“No te recomiendo tratar de asesinarme, la última persona que trató de hacerlo no terminó tan
bien…” Dijo Wei Ying con seriedad.
“No voy a cometer los mismos errores que Wen Chao, no soy un idiota, voy a matarte, y al
hacerlo me voy a asegurar de que tu corazón deje de latir antes de quemar tus restos. Te lo
aseguro, no hay nada que deba temer.”
Wei Ying sintió un estremecimiento, ya que parecía que Meng Yao estaba en completo
control de la situación, y era Wei Ying quien estaba en problemas.
Pero Wei Ying también tenía un as en la manga, ya que no había mostrado el Yin de acero
aun, que se encontraba bien escondido entre sus túnicas y reteniendo su energía resentida. Un
arma que Wei Ying planeaba usar en el momento preciso, para acabar con Meng Yao de
forma segura, y poder rescatar a los rehenes con seguridad.
“¿Dices que este no es tu lugar de nacimiento? ¿Por qué?” Preguntó Wei Ying confundido,
mientras seguían caminando por aquel gran templo, el cual tenía varias habitaciones infinitas
y llenas de lujo.
“Por qué no nací aquí, en realidad no sé de dónde vengo, mucho menos quienes son mis
padres. Fui comprado por el dueño de este burdel cuando era un bebé, ya que soy un omega
me compraron para ser una prostituta, ese es mi verdadero origen.”
“Pero Jin Guangshan…” Susurro Wei Ying confundido.
Soltando varias risas, Meng Yao se giró un momento, mirando a Wei Ying a los ojos: “¿En
verdad crees que Jin Guangshan es mi padre? Tal vez eres más tonto de lo que pensaba,
después de haberme descubierto el otro día, pensé que lo habías descubierto… No soy un
Jin.”
Todas aquellas revelaciones estaban dejando estupefacto a Wei Ying, quien incluso llego a
pensar que no podía creer en las palabras que decía Meng Yao, pero algo muy en lo profundo
de su mente le decían que era verdad, todo lo que Jin Guangyao estaba diciendo era cierto.
“¿Por qué lo hiciste, mentir?” Pregunto Wei Ying cada vez más serio.
“¿Por qué lo hice? ¿Por qué no le preguntas al tipo que está detrás de ti? Estoy seguro de que
él tiene muchas más respuestas de la que yo tengo…” Dijo Meng Yao de forma burlona,
antes de continuar: “Cuando tenía 14 años fui comprado por dos personas importantes de dos
sectas, ellos estaban buscando algún omega que se pareciera a los Jin, y que ya estuviera bien
entrenado para ser una prostituta, así fue como ellos me compraron y me obligaron a mentir
diciendo que era el hijo de Jin Guangshan.”
“¿Y por qué te obligaron a hacer eso?”
“Quien sabe… Tenían varios planes para apoderarse de la secta Lanling Jin, así que me
usaron como moneda de cambio. Ya que mi padre me había rechazado, me obligaron a
seducir al líder de la secta Nie y luego a su hijo, luego me entregaron a los Wen para que
sedujera a Wen Ruohan y lo enloqueciera, para luego finalmente entregarme a mi “padre”
para que lo asesinara. ¿Lo entiendes ahora? Por eso necesitaban a una prostituta como yo
para sus planes…”
La cabeza de Wei Ying estaba hecha un caos en ese instante, así que apenas pudo seguir
caminando, comenzando a comprender que solo una persona había sido la causante de tantos
problemas, tantas muertes… Wei Ying no podía comprenderlo.
“¿Y por qué no te revelaste? ¿Por qué no intentaste evitarlo? Tantas personas sufrieron por
esos deseos, todas las cosas que ellos hicieron…”
“Los perros nunca muerden la mano de su amo” Dijo el hombre en la espalda de Wei Ying.
Cerrando los ojos, Wei Ying finalmente pudo identificar de quien era la voz que tenía en su
espalda.
“Bienvenido, Wei Wuxian, necesito tu ayuda con esto…” Dijo Meng Yao, entrando en aquel
salón.
Aquel lugar algo apartado, una habitación sellada y bien iluminada, que en el centro tenía un
pequeño altar, donde estaba el cuerpo despedazado de Nie Mingjue, rodeado de varios sellos
de contención que Wei Ying conocía bien, con la pequeña figura de un omega en el suelo,
escribiendo varios símbolos con las manos temblorosas.
“Veras, Wei Gonzi” Dijo Meng Yao abrazando al contrario por los hombros: “El cadáver de
mi ex esposo está lleno de energía resentida, así que necesitamos tu ayuda para limpiar esa
energía y destruir su cadáver, porque ha comenzado a convertirse en… Una verdadera
molestia para nuestros planes.”
“¿Y cómo quieres que haga eso?” Preguntó Wei Ying molesto.
Sería bastante simple para él hacer algo como eso con simples sellos, pero parecía que Meng
Yao quería otra cosa de él.
“Bueno, ya que supongo que no tienes contigo el sello que mi querido hermano menor
amablemente creó, necesito que crees un nuevo sello del tigre de estigio, y que con esa
poderosa herramienta lo elimines” Dijo Meng Yao, mirando a Wei Ying a los ojos: “¿Puedes
hacerlo?”
Wei Ying guardó silencio, ¿Meng Yao sabía que no era necesario el sello para destruir el
cadáver de Nie Mingjue? Wei Ying no lo sabía, pero la mirada extraña de Meng Yao le daba a
entender que la omega probablemente sabia más de lo que decía, queriendo usar el sello para
otra cosa… Aunque Wei Ying no entendía para qué.
“Hola A-Yu… ¿Me recuerdas?” Preguntó Wei Ying en un susurro, acercándose al centro de
aquella sala.
Con mucho cuidado, Wei Ying se agacho al lado del tembloroso joven, quien seguía
escribiendo aquellos símbolos en el suelo sin detenerse.
“Maestro Wei…” Susurró Mo Xuanyu muy asustado, levantando ligeramente la mirada.
“¿Qué estás haciendo?”
Wei Ying sabia con un solo vistazo que Mo Xuanyu no iba a poder crear un nuevo sello en
esas condiciones, así que probablemente solo estaba ganando tiempo, para intentar evitar de
esa forma que Jin Guangyao le hiciera daño.
“No te preocupes, tu solo confía en mí, pronto vamos a salir de aquí” Dijo Wei Ying con
confianza.
“¿Cómo puede estar tan seguro?”
“Bueno… Tengo a una persona ahí afuera que ya debe estar buscando la forma de
sacarme…”
Con una sonrisa, Wei Ying pensó en su alfa, sabiendo bien y confiando con más que su
propia vida en que Lan Zhan iría a salvarlo.
Pronto Wei Ying dejó se sonreír, escuchando a lo lejos los pasos de dos personas, y por el
olor de las feromonas, supo de inmediato de quien se trataba.
“¿Acaso estás loco?” La voz chillona y enfadada de Qin Su se escuchó de pronto, rompiendo
con toda armonía: “Hacer todo este desastre, de verdad eres un incompetente” Se quejó la
joven.
“Hermana, lo siento mucho, pero es algo que debo remediar sin falta” Dijo Jin Guangyao,
apartándose por un momento de Wei Ying y Mo Xuanyu en la habitación: “El cadáver
resentido de mi esposo debe ser purificado, y para eso necesitamos un nuevo sello del tigre
de estigio. Cuando todo eso termine…”
“¿Y crees que esto va a terminar bien? Todos en la secta Jin ya saben que somos traidores, y
cuando Wei Wuxian y Mo Xuanyu salgan de aquí…”
“¿De verdad crees que ellos van a salir de aquí?” Preguntó Xue Yang con una sonrisa
malvada.
Al escuchar esa charla, Wei Ying supo que estaban en peligro, ya que Jin Guangyao no estaba
bromeando al decir que planeaba asesinarlos. Previendo el peligro, Wei Ying supo que tenía
que sacar a Mo Xuanyu de ahí cuanto antes, probablemente no iban a poder esperar a Lan
Wangji como él había deseado.
Para sorpresa de todos los presentes, Qin Su levantó la mano y le dio una bofetada a Meng
Yao, quien se quedó en silencio, mirando a su hermana con un rostro inexpresivo.
“¡No olvides tu lugar, Meng Yao!” Dijo Qin Su alterada: “Tú no puedes tomar este tipo de
decisiones por tu cuenta, ¿Qué clase de perro desobediente eres? ¡Debiste consultarme antes
de tomar esta decisión tan complicada!”
Y aunque los gritos de Qin Su no se detenían, Meng Yao no dijo nada en absoluto, mirando a
la joven con desprecio, demostrando finalmente el odio que todos ellos se tenían.
“Jin Gonzi, encontramos a nuevo intruso, probablemente estaba siguiendo a la señorita Qin
Su” Dijo uno de los guardias, interrumpiendo la pelea de improvisto.
Los mismos monjes trajeron arrastrando a un joven alfa vestido con túnicas doradas, quien
despojado de su espada y luciendo furioso, miro a Qin Su y Jin Guangyao lleno de rabia.
“Oh… Jin Ling, ¿Qué hiciste?” Preguntó Meng Yao, luciendo verdaderamente perturbado
por primera vez en medio de la noche.
“Maldición… ¿Qué haces aquí, Jin Ling?” Preguntó Wei Ying en un susurro, viendo a su
sobrino en aquel lugar.
Con la presencia del menor, la situación solo podía ir a peor, ya que ahora Wei Ying debía
encargarse de proteger a dos personas, haciendo que su plan de escape fuera más complicado,
pero todavía su única salida.
“No tengo opción, voy a tener que pedirle ayuda” Susurró Wei Ying para sí mismo.
Aprovechando que Jin Guangyao y Qin Su estaban nuevamente distraídos peleando, Wei
Ying se escabulló hasta el lugar en el que se encontraba su sobrino, muy disgustado y
molesto por haber sido atrapado.
“Mocoso idiota, ¿Qué haces aquí?” Lo regañó Wei Ying molesto.
“¡No soy un mocoso! ¡Y mucho menos un idiota! Yo hice lo que debía para intentar recuperar
el honor de mi secta…”
“Cierra la boca, idiota” Lo regañó Wei Ying molesto: “¿Te das cuenta de lo que hiciste? Eres
el heredero de la secta Jin, no puedes morir aquí.”
“No voy a morir…”
“Créeme, si no me haces caso, vas a morir” Le respondió Wei Ying de forma severa: “Ahora
cállate y escúchame, cuando te dé la señal, quiero que hagas esto…”
Jin Guangyao y Qin Su continuaron discutiendo por varios minutos, en los que Wei Ying
volvió a acercarse a Mo Xuanyu, fingiendo a su lado que preparaban símbolos para crear un
nuevo sello. Pero en verdad Wei Ying estaba haciendo una cosa distinta, usando el Yin de
acero para intentar despertar al cadáver de Nie Mingjue, algo que estaba funcionando de una
forma un poco más lenta de como Wei Ying había esperado.
Wei Ying no estaba seguro de poder hacerlo, ya que el cadáver de Nie Mingjue estaba lleno
de energía resentida, tanta que Wei Ying nunca había visto un cadáver en tal estado. Pero él
confiaba que aun sin su flauta, tal vez silbando un poco, podría controlarlo el tiempo
suficiente para sacar de ahí a todos los rehenes, dejándole todo el desastre a Jin Guangyao.
Pero para eso necesitaba quitar todos los sellos de control que había sobre el cadáver, algo
que lamentablemente, Wei Ying estaba haciendo de una forma muy lenta.
“¿Qué demonios ocurre?” Preguntó una voz familiar, entrando en la sala de improvisto.
Girándose incrédulo, finalmente pudiendo reconocer a la persona de la que se trataba, Wei
Ying vio a Su She, quitándose la máscara y revelándose como el ayudante de Meng Yao, ese
que había herido a Lan Zhan en su batalla en la ciudad Yi.
“Dementes, pude escuchar sus gritos al otro lado de la habitación, ¿Qué ocurre?” Preguntó Su
She molesto.
“Estaba haciendo entrar en razón a tu querido A-Yao, para explicarle como nos arruinó a
todos…” Dijo Su She molesta.
“No te preocupes por eso, sabes que Meng Yao tiene una idea para todo, si las cosas salen
como él planeo, ya no tendremos ni que preocuparnos de la secta Jin para el día de mañana.”
“¿No tendremos?” Preguntó Meng Yao: “Es bueno que estén aquí los dos, porque quería
hablar respecto a nuestra asociación forzada… Me temo que ya no me conviene compartir
mis ganancias con ustedes…”
“¿A qué demonios te refieres?” Preguntó Qin Su furiosa.
“Voy a tener que hacerlos desaparecer…”
Poniendo un rostro de desagrado, Meng Yao asintió con la cabeza, indicándoles a sus
guardias que se acercaran a Qin Su y Su She, tomándolos de los brazos y logrando
someterlos con mucha facilidad.
Viendo el espectáculo, Wei Ying se puso de pie intentando detenerlo, pero ya era demasiado
tarde, pues desenvainando una espada, Meng Yao no dudó y asesino a la pareja frente a todos
los presentes, dejándolos estupefactos.
“Me dijiste que necesitabas acero maldito” Dijo Meng Yao como si no hubiera pasado nada,
acercándose a Wei Ying y Mo Xuanyu con paso calmado: “Usa esto.”
Sorprendido, Mo Xuanyu recibió la espada de Meng Yao, aun manchada de sangre de sus
recientes víctimas, cuyos cadáveres cayeron desplomados en el piso de la entrada.
“Dejen de perder el tiempo, necesito ese sello, ahora” Ordenó Meng Yao con furia.
“¿Por qué haces esto?” Preguntó Wei Ying desconcertado: “Ella era tu hermana…”
“¿Lo era?” Cuestionó Meng Yao, encarando a Wei Ying: “Oh… Pobre maestro Wei… Creo
que te has confundido, porque Qin Su y yo no compartíamos ni una gota de sangre en
común.”
“¿Qué?” Peguntó Jin Ling en un susurro, tan desconcertado como todos los demás.
“Permíteme contarte la historia… De cómo fue que esas dos ratas, me convirtieron en esto.
Después de todo, es una duda que vale la pena resolver para ti, ya que vas a morir.”
Chapter 17

Meng Yao nació siendo el único hijo omega de una prostituta de una ciudad pequeña, nunca
supo quién era su padre, y pasó muy poco tiempo con su madre. Al ver que era un omega, el
dueño de aquel burdel lo tomó como su propiedad incluso antes de que él pudiera caminar, y
desde que tenía razón se le enseñó una sola cosa: Como complacer a otros hombres.
El joven omega nunca tuvo una infancia normal, crecer en un burdel viendo todo tipo de
cosas, sin moralidad, y viéndose a sí mismo como un trozo de carne… Incluso antes de saber
quién era, Meng Yao ya pensaba en sí mismo como su realidad, un objeto para satisfacer a los
demás.
Pero su suerte cambió el día de la muerte de su madre, cuando tenía poco más de 12 años. Ya
había sido entrenado como una prostituta, y por su belleza clásica de Lanling, su dueño
estaba esperando vender su virginidad al mejor postor el año siguiente, después de que
tuviera su primer celo.
Poco sabia Meng Yao que su comprador no iba a desear su cuerpo para satisfacerlo, y en
realidad iba a comprar una cosa completamente distinta.
“¿Entonces es él?” Preguntó la voz chillona de una mujer.
Bajando la cabeza con temor, Meng Yao fue llevado a una casa rica de una familia
acomodada en Lanling Jin, temía ser follado por un hombre mayor y malvado, pero en
cambio fue comprado por… Una pequeña joven omega como él, la cual aparentaba tener su
misma edad.
“Es el único hijo de la mujer, señorita Qin, y es el más parecido al joven Jin Zixuan…”
Respondió el empleado que lo había llevado al burdel.
Acercándose a él con paso calmado, Qin Su le levantó el rostro con su abanico, mirando a
Meng Yao a los ojos con una expresión fría.
“Dime niño, ¿Quieres cambiar tu suerte?” Preguntó Qin Su con una sonrisa: “Si tú me haces
un favor, te prometo la seda más cara, y la miel más dulce, pero debes volverte mío…”
Meng Yao no tenía nada que perder, así que sin dudarlo respondió: “Si, lo haré.”
Qin Su sabía quién era su padre desde que era una niña, pero aun así no comprendía porque
ella no era cubierta de sedas doradas en la torre Koi, y por qué tenía que guardar el secreto de
su sangre. Ella era una joven ambiciosa, y como una omega de alta cuna, quería que sus hijos
compitieran por el liderazgo de la secta Jin, algo que no iba a poder lograr, a menos que fuera
reconocida como una hija de Jin Guangshan.
Algo que Qin Su decidió hacer con la ayuda de uno de sus hermanos.
El plan era simple, Qin Su compró a Meng Yao del burdel llevándose consigo todas las cosas
de su madre, lo cual incluía una pequeña caja con adornos dorados, que la madre de Meng
Yao había guardado como un tesoro hasta el día de su muerte. Qin Su no sabía si Meng Yao
era su hermano de sangre, tampoco le importaba, lo unció que ella había buscado era el hijo
de otra mujer que tuviera la misma caja dorada que ella, y que se pareciera lo suficiente a su
medio hermano como para derretir el corazón de la secta Jin, algo que consiguió con Meng
Yao.
Qin Su entonces envió a su nueva compra a Lanling, donde la tarea de Meng Yao era simple,
arrastrarse hasta Jin Guangshan, conmoverlo con su rostro hermoso y la bonita caja dorada
que él les daba a todas sus prostitutas, y luego rogar por ser conocido. Para ello habían
inventado toda esa historia dramática, en la que Meng Yao supuestamente escapó del burdel,
intentando evitar ser una prostituta… Y todo lo demás.
Pero algo que ellos no contemplaron fue la idea de que Jin Guangshan no fuera tan idiota, y
terminara rechazando al pobre omega, quien humillado terminó rodando por unas escaleras,
rechazado por su propio padre.
Sin embargo la suerte de Meng Yao no fue tan terrible, ya que si logro compasión de algunas
personas presentes ese día, en las que estaba el líder de la secta Nie, quien lo acogió en su
casa, dándole el puesto de un sirviente, sin otras ideas maliciosas… Al inicio.
“Esto no es tan terrible” Le dijo Qin Su la siguiente vez que se encontraron: “Con el apoyo de
una secta grande como la de Qinghe Nie, podrás hacer más ruido y ser exitoso la próxima
vez, solo necesitas un esposo poderoso como el líder de la secta.”
“¿El líder? ¿De qué etas hablando? Es solo un hombre amable, él jamás ha hecho nada malo
conmigo…” Dijo Meng Yao sorprendido.
“Eso es algo que se puede solucionar con facilidad, dale estas gotas en su té, y la lujuria de un
alfa se volverá incontenible. No tengas miedo, el líder Nie jamás te ha hecho daño, además…
¿Cómo podrías rechazar volverte la esposa de un alfa tan bueno? Solo embarázate de él y el
asunto estará solucionado.”
Meng Yao nunca estuvo de acuerdo con ese plan, se sentía muy agradecido con el líder de la
secta Nie por haberlo acogido, y ese hombre siempre había sido un alfa decente con él. Pero
bajo la presión de Qin Su, Meng Yao drogó al líder de la secta Nie, perdiendo su virginidad
con él de una forma horrible, con un alfa en celo que ni siquiera pudo reaccionar al momento.
Pero aquel plan falló ligeramente, ya que algo que Qin Su desconocía, era que aquellas gotas
que inducían el celo en los alfas era venenosa, así que con el paso de los días, mientras Meng
Yao seguía intentando quedar embarazado de ese hombre, ellos terminaron haciendo que el
líder Nie enfermara, y finalmente terminara falleciendo.
Y aunque Qin Su no sabía los efectos de aquella droga, Meng Yao si, y prefirió callar… Ya
que él finalmente tuvo un deseo.
Meng Yao creció su vida entera sin aspiraciones reales, era un pedazo de carne, como
siempre le habían dicho, y por eso jamás había deseado nada. Eso cambió cuando conoció a
Nie Mingjue…
Meng Yao solía pensar que era amor a primera vista, se enamoró de ese alfa ya
comprometido, el cual estaba muy fuera de sus posibilidades, pero el cual era codiciado por
ese omega, quien intentó hacer cualquier cosa para estar con él… Hasta asesinar al padre de
este.
Nie Mingjue nunca lo supo, aunque Meng Yao pensó que él probablemente lo omitía ya que
lo amaba demasiado, pero ambos nunca hablaron de lo sucedido con su padre, y cuando el
líder Nie murió, la misma noche de su deceso, ambos tuvieron sexo por primera vez, y Nie
Mingjue quedó flechado para siempre con Meng Yao. A-Yao, quien había aprendido desde
muy joven que hacer con su cuerpo y como complacer a un alfa, le quitó a Nie Mingjue su
virginidad de tal forma que el alfa se volvió un adicto a ese omega, sin mirar a otro nunca
más…
Teniendo ese “hechizo” sobre Nie Mingjue, fue el nuevo alfa de la secta Nie quien terminó
cumpliendo los deseos de Qin Su, haciendo que Jin Guangyao fuera reconocido como hijo de
Jin Guangshan, y por consiguiente también lo fuera ella, finalmente ambos siendo incluidos
en la torre Koi.
“No vas a casarte con Nie Mingjue de inmediato” Dijo Qin Su cuando ambos ya estuvieron
en la torre Koi.
“¿Qué? Ya hice todo lo que me pediste, tú no puedes…” Intentó negarse Meng Yao.
“Tú me perteneces, A-Yao, como un perro, ¿Lo olvidaste? Yo te compre de ese burdel… Y
ahora si lo deseo, puedo revelar tu secreto, tú no eres hijo de Jin Guangshan, solo el hijo de
otra prostituta a las afueras de Lanling, ¿Crees que tu amado Mingjue se casara contigo si lo
sabe? Probablemente volverá a correr a los brazos del hermoso Wen Xu cuando lo sepa, un
omega de verdadera cuna noble, no como tu…”
Bajo esas amenazas, Meng Yao tuvo que bajar la cabeza, y aceptar los planes de su hermana,
quien decidió fijar su mirada en otra secta… La secta Lan.
Qin Su odiaba secretamente a Jiang Wanyin, ya que él era el único omega de una secta
prominente que si era el heredero, a pesar de ser un omega. Qin Su lo odiaba por que ella
había sido rechazada de la línea sucesoria de Lanling Jin, a pesar de ser un par de meses
mayor que Jin Zixuan, ella fue apartada. Así que Qin Su quería desquitarse con su nueva
pareja de la secta Lan y Jiang, usando para eso una vez más a Meng Yao, quien tenía una
misión clara.
Meng Yao siempre supo que no podía acercarse a Lan Xichen de la misma forma que a los
demás alfas, él era un alfa correcto, que no se fijaba en el sexo, era más cariñoso y creía en el
amor. Así que Meng Yao se vendió a sí mismo como un omega asustado, el cual temía del
alfa Nie Mingjue, y así logro atrapar a Lan Xichen, quien despertó un instinto protector con
él, y ambos se “enamoraron”.
Ese fue un tiempo triste para Meng Yao, él amaba a Nie Mingjue, y sufría al ver a su alfa
siendo rechazado. Además de sentir asco por cada beso que le daba a Lan Xichen, al cual
siempre miró con aprecio, pero no era el alfa que él amaba, así que cada beso que se daban
quemaba su piel.
Aun así los planes de Qin Su nunca surtieron efecto, y Lan Xichen escogió a Jiang Cheng
sobre Jin Guangyao, terminando así con los planes de Qin Su… Momentáneamente, y
permitiendo que Meng Yao pudiera casarse con su amado Mingjue.
Los años que pasó al lado de su alfa fueron muy felices, Meng Yao amaba realmente a Nie
Mingjue, fue la primera cosa que amo en verdad, incluso más que a los hijos que tuvieron
juntos… Meng Yao estaba obsesionado con su alfa, y la vida hubiera sido buena, de no ser
por los Wen.
Las cosas cambiaron después de que Meng Yao escapara de la secta Wen y regresará a casa.
Era un héroe, pero su alfa lo trataba distinto, después de haber asesinado a Wen Xu, y con
ciertas pruebas de que Meng Yao no era tan inocente como parecía, Nie Mingjue comenzó a
sospechar su omega no era tan puro, y comenzó a rechazarlo.
“Puedo enamorarlo… Yo aún puedo… Puedo hacerlo” Se dijo a sí mismo, viendo a su alfa
cada vez más distante.
Fue entonces que la actitud de Mingjue comenzó a cambiar, volviéndose más violento. Y
aunque Meng Yao nunca supo porque, pronto comprendió que su alfa estaba siendo
envenenado en su contra por música maldita, como él lo había hecho con Wen Ruohan en el
pasado. Y la única persona capaz de hacer eso, era su hermana y su nuevo esposo, quienes
querían volver a tener completo control sobre Meng Yao para sus sucios planes.
Con el paso del tiempo Qin Su comprendió que no iba a poder tener la secta Jin por las
buenas, así que después de conocer el terrible poder de Wei Ying con el sello del tigre de
estigio, ella le ordeno a Meng Yao crear su propio sello. Para esto Meng Yao usó a dos niños,
Xue Yang quien terminó escapando, y su propio hermano menor, Mo Xuanyu, a quien le
enseñó los pergaminos de Wen Shima y lo persuadió para crear el sello.
Pero poco sabía Meng Yao que su felicidad estaba pronto a terminar, y que perdería lo que
más amaba en el mundo.
Tras una fuerte pelea, Meng Yao fue obligado por su alfa a decir la verdad de lo que ocurrió
en la secta Wen durante el secuestro, Meng Yao lo dijo todo, como fue el culpable de la
locura de Wen Ruohan, como había torturado a Lan Qiren y Wen Xu, y como se había
aprovechado de la situación para volverse un héroe. Mingjue no soportó la verdad, y
comenzó a golpearlo, una pelea que fue detenida por el propio Mo Xuanyu, quien terminó
asesinando a Nie Mingjue para salvar a su hermano, clavándole una daga en el pecho.
De esta forma Jin Guangyao se llenó de dolor, odiando a su salvador, Mo Xuanyu, quien a su
vez ya no era un niño inocente, ya que había escuchado toda la verdad de su propio hermano.
Fue entonces que Meng Yao lo envió lejos, evitando que Mo Xuanyu le dijera la verdad a Jin
Zixuan, Meng Yao fingió que Mo Xuanyu intentó entrar en las habitaciones del líder de la
secta Jin cuando este estaba en celo, y de esa forma lo enviaron de regreso a la villa Mo,
donde Meng Yao tenía planeado asesinarlo… Algo que nunca pudo cumplir por que tuvo
cosas más difíciles de las que encargarse.
El cadáver de su esposo se había llenado de energía resentida, después de saber toda la
verdad, Nie Mingjue lleno su espíritu de ira, ya que el dolor de saber la verdad de su omega
fue demasiado fuerte. Así que Meng Yao se vio obligado a ocultar el cuerpo de Mingjue en
las criptas de la secta Nie, comenzando a cultivar el mismo con energía resentida buscando
crear su propio sello del tigre de estigio, ya que no planeaba renunciar a su gran amor, ni
aunque este estuviera muerto…
***
“¿A qué te refieres con que no vas a renunciar a él ni aunque este muerto?” Preguntó Wei
Ying confundido.
“¿De verdad creías que necesitaba el sello para destruir a la secta Jin?” Cuestionó Meng Yao
con una sonrisa: “Eso nunca me importó, no soy Qin Su… Quiero ese sello para otra cosa,
una mucho más importante.”
Volviendo a mirar en dirección al cadáver de Mingjue, el cual estaba cada vez con menos
sellos, aunque Meng Yao no podía notarlo.
“No puedo hacerlo” Se negó Wei Ying de forma rotunda.
“Ya lo hiciste una vez, ¿No es así? Wen Ning estuvo en tu poder por varios años aun sin
convertirse en un cadáver, ¿Por qué no podías hacerlo ahora?”
“La conversión de Wen Ning a un cadáver viviente fue muy diferente, él no estaba muerto
cuando lo encontré, estaba agonizando, fue entonces cuando comencé con la transición. Tu
alfa está muerto hace mucho tiempo, y su alma está demasiado fragmentada, ni siquiera yo
puedo…”
“¡Entonces deberás ir al inframundo y traerlo para mí!” Gritó Meng Yao furioso, tomando a
Wei Ying del cuello de sus túnicas: “¡Si mi alfa no vive, tu tampoco!”
Fue entonces que la situación entera fue interrumpida, ya que un destello violeta se vio en la
puerta, la cual fue derrumbada con mucha facilidad por Zidian… La ayuda ya había llegado.
“¡A-Ling, ahora!” Gritó Wei Ying, dándole la señal a su sobrino.
Como era de esperarse, Lan Wangji fue a rescatar a su omega, pero no acudió solo, ya que
tras haber informado a todas las sectas de que habían encontrado la guarida de Jin Guangyao,
Jiang Cheng y Lan Xichen fueron los primeros en llegar, acudiendo los tres a resguardar a sus
rehenes.
Ante la mirada incrédula de Jin Guangyao, los tres recién llegados se encargaron de acabar
con todos sus guardias y monjes, terminando ellos solos contra Meng Yao, el cual en menos
de un minuto había perdido a todo su ejército.
“¡Atrás! ¡O le cortaré el cuello!” Amenazó Meng Yao.
Con un rápido movimiento, Jin Guangyao puso un hilo cortante en el cuello de Wei Ying,
resguardándose en su espalda. Pero Wei Wuxian no se notaba asustado, manteniendo fija su
vista en su alfa, quien empuñando su espada, se acercaba a ellos con paso lento.
“Viniste…” Dijo Wei Ying emocionado.
“Siempre voy a venir por ti” Dijo Lan Wangji con seriedad.
“Aun si tu estás enojado…”
“Siempre voy a venir por ti, Wei Ying, porque te amo.”
“Y yo te amo a ti…” Susurro Wei Ying, conmovido de ver a su alfa en ese sitio.
“¿De verdad creen que es momento para reconciliarse de forma amorosa? ¡Mira en la
situación en la que te encuentras!” Le reclamó Jiang Cheng furioso, también acercándose al
lugar con su espada.
Wei Ying no pudo evitar reír, sintiendo como su cuello era ligeramente cortado por Jin
Guangyao, el cual estaba cada vez más nervioso.
“Quiero que salgan del salón y cierren esta puerta, prometo entregar a todos los rehenes a
salvo, pero antes tienen que hace algo por mi…” Pidió Meng Yao con firmeza.
“¿Y tenemos que creerte?” Cuestionó Jiang Cheng.
“¡Te estoy dando mi maldita palabra!”
“Lamento decirlo, pero ahora tu palabra no vale nada…”
Ajeno a toda la pelea que se estaba dando a su espalda, Mo Xuanyu se puso de pie
lentamente, mirando aquel altar con un poco más de detenimiento, ya que casi todos los
sellos que envolvían el cuerpo de Nie Mingjue se habían roto, y el cadáver comenzaba a
moverse.
“¿Maestro Wei…?” Dijo Mo Xuanyu asustado.
“Lo siento pequeño A-Yao, pero tu tiempo se ha acabado…” Se burló Wei Ying, siendo el
primero en sentir la energía resentida que comenzaba a llenar el lugar.
Sin previo aviso, el cuerpo de Nie Mingjue se levantó, soltando un grito espectral que dejo a
todos atontados, mientras que una tormenta de energía resentida se sintió por todo el lugar.
Por la sorpresa, Meng Yao soltó el hilo cortante, dejando a Wei Ying libre. Mientras que
todos los demás se pusieron alerta de inmediato, ya que Meng Yao había dejado de ser la
principal amenaza en ese sitio, ahora era el cadáver incontrolable del que alguna vez fue el
líder de la secta Nie.
Gritando aterrado, Mo Xuanyu se alejó corriendo del altar, en el momento preciso en el que
el cadáver comenzó a atacar, yendo directamente hacia Wei Ying. Casi sin respirar, Lan
Wangji logró detener el ataque de aquel cadáver, pero era demasiado fuerte incluso para él,
algo que alarmo a su esposo.
“¡Para! Vamos… Debes obedecer…” Gritó Wei Ying, intentando lazarle un sello de control
para mantenerlo quieto, aunque no había funcionado.
Saliendo de las celdas con ayuda de Jin Ling, quien había ido a liberarlo por orden de Wei
Ying, Xue Yang se asomó a aquella sala enorme, encontrándose con el cadáver de Nie
Mingjue fuera de control, atacando a Lan Wangji y Wei Wuxian, quienes intentaban usar
todas sus técnicas para detenerlo, aunque no era suficiente.
“¡Tenemos que encerrarlo, ahora!” Dijo Xue Yang, entrando en la batalla de igual forma.
“No creo que funcione, está muy enojado” Respondió Wei Ying.
“¿Tienes una mejor idea? No se puede exorcizar, y tu alfa ni siquiera puede tocarlo con su
espada, tenemos que contenerlo o no habrá oportunidad.”
Negando con la cabeza, Wei Ying confió en Xue Yang, sirviendo de distracción para su alfa,
mientras Xue Yang preparaba un ataúd con varios símbolos escritos con su propia sangre, los
cuales iban a servir de prisión para ese peligroso cadáver.
Cuando Xue Yang estuvo listo, ambos omegas usaron sus silbidos para ordenarle a Nie
Mingjue que fuera hacia el ataúd, algo que no estaba funcionando al inicio, pero que debido a
tanta insistencia, finalmente logró su cometido, haciendo que Nie Mingjue retrocediera hasta
el altar, donde estaba el ataúd preparado para él.
Y todo hubiera salido de acuerdo al plan, de no ser por Meng Yao, quien repentinamente salió
de las sombras, acercándose a su alfa con una sonrisa, viéndolo despierto.
“Mingjue… Mi amor…” Dijo Meng Yao enloquecido, acercándose a su alfa para abrazarlo.
“No…” Susurro Wei Ying incrédulo, mirando a ese tonto omega, que había logrado llamar la
atención nuevamente de aquel cadáver, rompiendo su hechizo.
Wei Wuxian intentó detener lo que iba a ocurrir, pero ya era demasiado tarde. Nie Mingjue
reaccionó de forma violenta al ver al origen de toda su ira, y tras arrancarle un brazo a Meng
Yao, tomo al omega del cuello, y prácticamente rompiéndole los huesos, ambos entraron
juntos a ese ataúd lleno de símbolos, el cual Xue Yang cerró de inmediato.
El mal se había ido finalmente…
Chapter 18

Viendo la luz de un nuevo día, Wei Ying se sintió aliviado de ver que todo aquel problema
había terminado.
Ahora Lan Xichen, Lan Wangji y Xue Yang se estaban encargando de aquel ataúd, mientras
que más de sus aliados llegaban al lugar, buscando ayudar con el rescate de los prisioneros y
ver los crimines de Jin Guangyao, algo que aparentemente interesaba mucho más de lo que
Wei Ying había creído a un inicio.
“¡A-Die!”
Siendo sorprendido en el exterior del templo por los brazos de Lan Sizhui, Wei Ying
reacciono confundido, correspondiendo el abrazo de su asustado hijo, quien parecía haber
llorado.
“Estaba tan preocupado… Papa dijo que te había secuestrado el demente de Jin Guangyao, y
yo temía que te hiciera daño…” Dijo Lan Yuan entre sollozos.
“No dejo de llorar toda la noche” Dijo Lan Jingyi quien estaba detrás de su primo viendo la
escena.
Sintiéndose enternecido por la reacción de su cachorro, Wei Ying lo estrecho fuertemente
contra su pecho, disfrutando secretamente de aquella atención. Por lo general Lan Yuan
siempre se comportaba de esa forma cariñosa con Lan Zhan, pero rechazando a su padre
omega. Así que recibir ese estrecho abrazo y sentir el cariño del menor hacían sentir muy
contento a Wei Ying.
“Está todo bien A-Yuan, todo realmente bien… Así que deja de llorar o voy a llorar yo, todo
está bien” Aseguro Wei Ying sonriendo.
“Tenía miedo de perderte mama…”
Abriendo mucho los ojos, Lan Yuan se dio cuenta de lo que dijo, levantando la mirada para
ver a un sonriente Wei Ying, quien no se había molestado en absoluto por las palabras de su
cachorro, acariciándole la cabeza con cariño.
“Lo siento…” Se disculpó Lan Sizhui de inmediato.
Mirando detrás del templo, Lan Jingyi sorpresivamente dijo: “Debo retirarme un momento.”
En una situación normal, Wei Ying se hubiera preocupado más por ver a su sobrino irse de
esa forma, pero ahora solo podía ver a su cachorro, así que lo ignoro por completo.
“Está bien, ¿Por qué te disculpas? Que tonto” Se burló Wei Ying riendo suavemente: “Antes
me llamabas así todo el tiempo, me daba vergüenza, pero lo adoraba en secreto… ¿Por qué
dejaste de hacerlo?”
Bajando la mirada con algo de tristeza, Lan Sizhui finalmente se atrevió a decir: “Cuando era
pequeño, el día que hirieron a papá y tu enloqueciese, te seguí al bosque, tú me sujetaste y me
dijiste que no eras mi madre verdadera…”
Quedándose en blanco, Wei Ying no pudo creer las palabras de su cachorro, ya que él no
recordaba aquel suceso.
“Ustedes me habían dicho que yo era su hijo, pero después de eso, cuando me prohibiste
llamarte mama y me dijiste que no eras mi padre… Deje de hacerlo porque creí que te
molestaba.”
“A-Yuan, mírame, tu eres mi hijo, mi único y más amado hijo. Lo siento, no recuerdo lo que
hice, la energía resentida en mi cuerpo tal vez… Pero eso no es excusa suficiente, no quería
herirte o decirte esa tontería, y es mentira. Soy tu madre, así que por favor, ya no odies por
eso…” Pidió Wei Ying muy arrepentido.
Sonriendo finalmente al recibir esa disculpa que tanto había deseado por varios años, Lan
Sizhui dijo: “Te amo mama…”
“Yo también te amo, mi dulce cachorro…”
Entonces ambos se unieron en un fuerte abrazo, resolviendo sus problemas después de tantos
años. Mientras que a lo lejos, aun desde el templo, Lan Wangji observo a su hijo y a su
esposo reconciliándose finalmente, algo que lo hizo sonreír, pues comprendió que había
recuperado a su familia.
***
Jadeando con fuerza, Jiang Cheng logro arrastrarse hasta un cobertizo detrás del templo, sus
feromonas salían de su cuerpo descontroladas, mientras un calor lo invadía todo.
“No por favor… Aquí no…” Sollozo el omega asustado.
Lan Xichen no se había equivocado, y Jiang Cheng tuvo su celo en ese mismo momento.
Había estado relativamente bien hasta llegar al templo, sentir las feromonas de Lan Xichen
había sido demasiado, precipitando su caída mucho más pronto de lo esperado.
“Tengo que esconderme… No… No puedo…” Temblando fuera de control, Jiang Cheng se
derrumbó en el suelo, mientras sentía una humedad incomoda en sus piernas, y su
consciencia a punto de perderse en el deseo.
Si se desmayaba de esa forma en ese lugar extraño, Jiang Cheng temía lo peor, esa pesadilla
por la cual había pasado innumerables veces en su mente, no podía permitir que volvieran a
abusarlo de esa forma… Pero ya no podía defenderse más.
“¿Mama?” Pregunto Lan Jingyi, asomados por la puerta con cuidado, sintiendo su corazón
palpitando fuertemente en su pecho.
En medio de sus sueños, Lan Jingyi podía oler unas feromonas muy específicas, eran dulces,
como el olor de la lavanda, y tan tranquilizadoras que lo hacían dormir. Jingyi a veces
pensaba que estaba alucinando, ya que nunca antes había sentido unas feromonas como esas
en su vida fuera de sus sueños, pero pronto lo entendió, eran un recuerdo.
Jingyi alguna vez tuvo una madre, y aunque todos le dijeron que había muerto, él pensaba
que tal vez en sus breves momentos juntos, esas feromonas quedaron impregnadas en su
mente. Pero durante el resto de su vida, especialmente al volverse un cultivador y comenzar a
salir de su secta, gran fue su sorpresa al sentir esas feromonas a veces cuando visitaba otras
sectas, cuando iba a torneos y se acercaban a él los cultivadores Jiang, o cuando estaba cerca
de su primo quien iba constantemente a Lotus Pier de visita.
Entonces la duda comenzó a crecer en la mente del alfa, ¿Su madre en verdad había muerto?
¿Quién era su madre?
Jiang Cheng siempre fue cuidadoso, se había separado de Lan Xichen y renunciado a su
cachorro. No quería causarle más problemas a Lan Jingyi, así que siempre lo miraba a la
distancia, se consideraba a sí mismo un omega sucio, así que recibir noticias de los logros de
su hijo mediante Xichen eran suficientes, manteniéndose alejado de su hijo pero siempre
mirando desde lejos.
Hasta que Jingyi lo encontró. Estando fuera del templo pudo sentir ese aroma, la feromonas
de sus sueños, pero mucho más fuertes. Así que sin querer perder la última oportunidad que
tenía, Jingyi siguió ese aroma, encontrándose con el líder de la secta Jiang tirado en el piso,
en medio de su celo.
Levantando la cabeza a duras penas, Jiang Cheng observo a su cachorro en el marco de la
puerta, creyendo que era una alucinación… ¿Cómo podría saber Jingyi que era su hijo si
nadie se lo había dicho?
“¿A-Yi?” Pregunto Jiang Cheng en un susurro: “A-Yi… Te extrañe tanto… Te has vuelto un
cultivador tan fuerte, siempre me haces sentir orgulloso… Me hace feliz saber que seguiste
las indicaciones de mama y eres un niño bueno, lo lamento tanto… Me hubiera gustado estar
ahí para ti… Lamento haberte dejado…”
Lan Jingyi se quedó helado al escuchar esa revelación, ¿Acaso el líder de la secta Jiang
acababa de confesar que era su madre? ¿Era verdad?
Cada vez más perdido en el calor de su cuerpo, Jiang Cheng intento quitarse la ropa, soltando
el cinturón de sus túnicas, sintiéndose cada vez más agitado. Reaccionando de inmediato,
sintiendo a su alfa actuar de forma protectora con aquel omega, Lan Jingyi soltó su espada y
entro en aquel almacén, acercándose al contrario para evitar que se quitara la ropa.
“Espera mama, está bien, todo está bien, no hagas eso” Pidió Jingyi con la voz suave,
tomando las muñecas de Jiang Cheng para detenerlo.
“Duele… A-Yi me duele… Llama a mi alfa por favor…” Suplico Jiang Cheng cada vez más
fuera de control.
“Tranquilo, pasara pronto, ven conmigo.”
Como cualquier hijo alfa que había sido bañado por las feromonas de su padre omega desde
su nacimiento, Lan Jingyi no reacciono de una forma lasciva ante las feromonas del celo de
su madre, se sentía algo ahogado por ellas, pero estaba acostumbrado. Por el contrario, al
saber que su madre estaba sufriendo, lo hizo reaccionar de una forma protectora, soltando sus
feromonas de forma tímida, tomando el cuerpo de Jiang Cheng para estrecharlo contra su
pecho, sosteniendo y abrazando a su madre con delicadeza.
“Respira profundo, solo deja que mis feromonas te tranquilicen” Pidió Lan Jingyi con
suavidad.
“Tengo miedo.”
“Está bien mama, me quedare aquí, aun si es todo tu celo, me voy a quedar contigo.”
Soltando un fuerte gemido de dolor, Jiang Cheng quiso volver a quitarse la ropa, siendo
detenido una vez más por Jingyi, sollozando el nombre de su alfa: “Xichen… A-Huan me
duele…”
Jingiy sabía que no era suficiente, aun si llenaba a su madre con sus feromonas, a menos que
recibiera las atenciones de su padre el calor y el dolor no desaparecerían, preocupando mucho
al menor, quien estaba pasando el celo de un omega por primera vez.
Sintiendo el aroma de las feromonas de un omega, los miembros de la secta Ouyang se
acercaron con rapidez al almacén. Ellos eran una secta de omegas, y sabían mejor que
cualquiera como olía el celo de un omega, temiendo que estuviera ocurriendo algo horrible.
Pero al llegar, todos se encontraron sorprendidos, viendo a Jingyi abrazando de esa forma tan
suave a Jiang Cheng, sin hacer nada, solo tranquilizándolo.
Y el más sorprendido de todos era el hijo del líder, Ouyang Zizhen, quien miro a Jingyi con
las mejillas muy sonrojadas.
¿No todos los alfas eran monstruos? Durante toda su infancia, Zizhen escucho por parte de
sus padres, dos omegas, que todos los alfas eran monstruos, que devoraban omegas cuando
estaban en celo y los hacían sangrar. Pero ahora Zizhen veía a un alfa que no hacia eso,
estaba sosteniendo a un extraño de forma suave, evitando que hiciera cosas vulgares por el
calor, y dándole sus feromonas con suavidad para calmarlo.
Viendo a ese grupo de omegas alarmados asomándose desde la puerta, Lan Jingyi sonrió de
una forma algo apenada, sosteniendo con un poco más de firmeza a su madre, la cual estaba
cada vez más fuera de control.
“Maestros de la secta Ouyang, lamento que este no sea un momento tan oportuno para una
visita, ¿Podrían ser tan amables de regalarme un poco de agua y cerrar la puerta?” Pidió Lan
Jingyi con amabilidad, sin dejar de lucir calmado.
Ninguno de los omegas estaban convencidos, nadie sabía del vínculo entre Jingyi y Jiang
Cheng, así que temían que fuera solo una distracción de aquel alfa para hacerle algo malo a
Jiang Wanyin. Aun así Zizhen se impuso ante los demás miembros de su secta, intentando
calmarlos y convencerlos de que Lan Jingyi era buena persona.
“Está bien, él no le hará daño. Solo déjenme darle un poco de agua, y vayan a buscar ayuda”
Pidió Zizhen.
“Pero maestro, ese alfa es peligroso, podría hacerles daño a los dos al mismo tiempo, si entra
en celo por las feromonas…” Dijo uno de los cultivadores omegas.
“Yo soy fuerte, y voy a evitarlo. Ustedes vayan por ayuda, hablen con los miembros de la
secta Jiang y el líder de la secta Lan, ya escucharon que el líder de la secta está llamándolo”
Pidió Zizhen con una sonrisa, tomando una cantimplora de sus cosas: “Es una orden, soy su
líder.”
Los demás omegas de su secta no lucían tan convencidos, pero ante las órdenes de su líder no
pudieron hacer nada, viéndolo entrar al almacén él solo, mientras ellos regresaban al templo
por ayuda.
“... Cuando eras pequeño, solía ponerte sobre mi pecho para dormir todas las noches… Pero
ahora te has vuelto tan grande, ¿Por qué sigues creciendo? Eras mi cachorrito, tan pequeño,
de este tamaño” Dijo Jiang Cheng dulcemente, haciendo señas con las manos.
Al verlo Lan Jingyi no pudo evitar reír: “¿En serio? ¿Era tan pequeño?”
“Y no te gustaban al zanahorias… Odiaba eso, no podía darte de comer, solo querías leche,
todo el tiempo… Pequeño cachorro mimado” Lo regaño Jiang Cheng, tirando suavemente de
una de las orejas del alfa.
“Auch… Aún siguen sin gustarme las zanahorias, pero si mama me lo pide, puedo comerlas.”
“Mentiroso… Mi A-Yi se ha vuelto un guerrero tan fuerte y grande, puede vencer a un
ejército de mil hombres él solo, tu padre siempre me dice que eres el mejor cultivador de tu
secta… Me siento tan orgulloso…” Susurro Jiang Cheng, acercándose a besar la frente de
Lan Jingyi.
Sin poder evitarlo, el alfa sonrió contento, abrazando a su madre con fuerza, sintiéndose
completo finalmente, disfrutando de sentir ese cariño que había perdido hace tanto tiempo.
“Gracias por pensar eso de mí, mama…”
Quedándose en la puerta, Zizhen se sintió algo mareado por la intensidad de las feromonas de
Jiang Cheng, sin poder comprender como Jingyi las soportaba de una forma tan calmada,
sonriendo y abrazando a Jiang Cheng con dulzura.
“Oh… Ouyang Gonzi” Lo saludo Jingyi, finalmente notando su presencia: “Lo lamento, este
no es el mejor momento para una reunión.”
“Lo comprendo, vine a traerte… Agua.”
Tragando un poco de saliva, Zizhen se acercó a Jingyi, entregándole la cantimplora,
recibiendo un gruñido por parte de Jiang Cheng, quien estaba comenzando a actuar de forma
territorial ante la presencia de otro omega.
“Gracias, puedes retirarte ahora” Dijo Jingyi recibiendo la cantimplora, sosteniendo a Jiang
Cheng con un poco más de firmeza para intentar evitar un desastre.
“Si no le molesta, yo… Me voy a quedar” Susurro Zizhen con firmeza, volviendo a
retroceder hacia la puerta: “Es peligroso dejar a un alfa solo con un omega en celo.”
“Yo no le haría nada a mi madre jamás” Dijo Jingyi de inmediato, luciendo algo sorprendido:
“Eso es… Horrible, es mi mama, nunca podría dañarlo.”
Aquellas palabras volvieron a confundir a Zizhen, quien vio como Jingyi cuidadosamente le
daba un poco de agua a Jiang Cheng, intentando calmar el calor de su cuerpo.
“¿Y si hace cosas lascivas?” Pregunto Zizhen en un susurro.
“Entonces lo abrazaría más fuerte, es mi madre, jamás podría” Volvió a negarse Jingyi en un
susurro.
El joven omega volvió a guardar silencio, viendo a ver como Jiang Cheng luchaba para
intentar quitarse la ropa, siento detenido por Jingyi, quien quería mantener el pudor de su
madre, susurrándole cosas tranquilizadoras y soltando más de sus feromonas.
“No lo entiendo… En mi secta, todos me dijeron que los alfas no soportan estar con un
omega en celo” Susurro Zizhen cada vez más mareado, incluso creyendo que iba a vomitar
por la densidad de las feromonas con olor a lavanda en aquel lugar tan pequeño: “Me dijeron
que todos los alfas son abusadores, que se comportan como animales… ¿Entonces por qué tu
estas tan tranquilo?”
“Supongo que no soy como otros alfas…” Respondió Lan Jingyi, notándose completamente
normal, sin reaccionar para nada ante esas feromonas cada vez más fuertes.
“Que presumido…”
Entonces ambos rieron, mientras Zizhen finalmente se sentaba en el piso, todavía atento a
cualquier acto de Jingyi, quien se notaba completamente normal, conteniendo a su madre,
quien se veía cada vez más afectado por el afecto del celo en su cuerpo.
Como ambos esperaban, la ayuda no tardó en llegar, y tras un par de minutos las puertas del
almacén se abrieron nuevamente, siendo auxiliados por los miembros de la secta Jiang y el
propio Lan Xichen acompañado de su hermano.
“A-Cheng…” Alarmado, Lan Xichen fue el primero en entrar en el almacén, acercándose a
su hijo y al omega: “¿Estas bien? ¿Sabes quién soy?”
Sintiendo el aroma de las feromonas con el aroma del océano, Jiang Cheng se soltó de Jingyi,
ahora enfocando su atención en ese otro alfa, acercándose a él para abrazarlo con fuerza.
“A-Huan… Duele…” Sollozo Jiang Wanyin aferrándose fuertemente a su alfa.
“Lo sé, estas muy caliente, ¿Quieres que te lleve a casa?” Pregunto Xichen en un susurro.
“Quiero que me folles fuerte…” Pidió Jiang Cheng fuera de control, dando una suave
mordida en el cuello del alfa.
“De acuerdo, debemos sacarte de aquí cuando antes.”
Sin sentirse tan seguro, pero sabiendo que era lo mejor, Lan Jingyi soltó a su madre, dejando
que su padre lo sacara de ahí de forma apresurada, seguramente en dirección a Lotus Pier.
Caminando fuera del almacén, Jingyi se encontró con su tío, quien lucía tan serio como
siempre, pero luciendo bastante orgulloso.
“Tu padre hablara contigo después” Dijo Lan Zhan con tranquilidad.
“¿A dónde lo lleva? ¿Puedo ir con ellos?” Pregunto Jingyi preocupado.
“Lo llevara a Lotus Pier, y no puedes ir, no por ahora. Regresa a la secta Lan.”
Muy preocupado, Lan Jingyi observo a su padre subiendo en su espada con su madre,
volando lejos del lugar tras cruzar solo un par de palabras con los miembros de la secta Jiang,
quienes eran los más preocupados.
Tembloroso, Jingyi toco sus manos con suavidad, su cuerpo entero olía fuertemente a las
feromonas de su madre, y ahora el solo temía por el futuro de Jiang Cheng temeroso por la
salud de ese omega como un buen hijo.
“Lo hiciste bien” Dijo Lan Zhan de pronto.
“¿Eh?”
“No cualquier alfa guarda la compostura de esa forma con un omega en celo, aun si no
reaccionaste a sus feromonas, no todos pueden controlar a un omega en celo, bien hecho.”
Dándole una última mirada a su sobrino, Lan Zhan se alejó nuevamente en dirección al
templo, ya que tenía que buscar a su esposa e hijo.
Suspirando con cansancio, Lan Jingyi se sacudió las manos, pensando en ir a lavarse un poco
a un rio cercano, ya que las feromonas de su madre eran demasiado fuertes.
“¡A-Yi! Paso algo genial…” Dijo Lan Yuan siendo desde la multitud de pronto, viendo a su
primo alejarse: “Eww… ¿Por qué hueles así?”
“Es una larga historia, pero estoy feliz” Respondió Lan Jingyi con una sonrisa.
“Hueles a feromonas de omega, muchas feromonas de omega” Lo acuso el menor: “¿Qué
hiciste?”
“Basta, no me molestes, solo ayúdame, necesito una buena percha de ropa mientras me
limpio un poco.”
“Eres una basura, ¿A quién estas llamando percha de ropa?”
Siguiendo a ambos primos hasta el rio, Ouyang Zizhen tomo el valor, y decidido en su
objetivo se acercó a ambos, viendo como Jingyi ya se había quitado sus túnicas y solo estaba
usando un par de pantalones blancos.
“Oye, alfa diferente a los demás” Dijo Zizhen con la voz temblorosa: “Quiero que te cases
conmigo.”
Ante aquella propuesta tan extraña, ambos primos Lan se giraron en dirección al omega de
túnicas verdes, el cual estaba muy sonrojado y lucia muy nervioso.
“¿Ouyang Gonzi?” Pregunto Jingyi confundido: “¿Disculpe?”
“No actúes como un tonto, cásate conmigo y ven a la secta Ouyang, vuélvete líder a mi lado.”
Ambos primos Lan se quedaron de piedra, mientras trataban de procesar aquella extraña y
nada usual forma de petición de matrimonio.
***
“Joven maestro Mo, tengo algo que le pertenece” Dijo Wei Ying con una sonrisa.
Después de haber arreglado todas las cosas con su hijo y con el enemigo finalmente vencido,
Wei Ying busco a Mo Xuanyu para devolverle el sello del Yin de acero.
Después de la pelea, Mo Xuanyu se sentó un poco alejado de los demás, seguramente
esperando a su alfa o a su hermano, el que apareciera primero para llevarlo a casa.
“Oh… Wei Gonzi, muchas gracias” Dijo Mo Xuanyu poniéndose de pie de inmediato,
haciendo una rápida reverencia para el mayor.
“Deberías decirle a tu hermano al respecto, seguro querrá… Destruirlo. Pero eso ya es tu
decisión. No te preocupes por la secta Jin, si quieres puedo interceder por ti para que te
acepten de nuevo como cultivador.”
“No es necesario, maestro… Yo… No planeo regresar a la secta Jin, tengo algunos asuntos
pendientes en Qinghe” Respondió Mo Xuanyu tímidamente, aceptando la pequeña bolsa de
cuero con su sello de manos de Wei Ying.
“Ya veo… ¿Y tú asunto se llama Nie Huaisang de casualidad? Solo bromeo, te deseo mucha
felicidad al lado de tu alfa, es un gran hombre te cuidara bien.”
Sonriendo contento, Wei Ying finalmente le entrego aquel pedazo de acero a su propietario,
quien reaccionó de una forma tímida, sin siquiera atreverse a mirar al mayor al recibir su
objeto más preciado.
“Hiciste un buen trabajo con eso, ¿Acaso recibiste ayuda de Wen Shima?” Cuestiono Wei
Ying con seriedad.
“¿Wen? No, temo que no he conocido a nadie de la secta Wen jamás” Respondió Mo
Xuanyu, mintiendo con mucha habilidad.
Wei Ying no se notaba tan convencido, así que continuo hablando: “Es un espíritu muy
peligroso, y podría desear más que tu ayuda. No debes hablar con él, ¿De acuerdo?
Tranquilizaras mi corazón si me prometes no hacerlo.”
“Descuide maestro, no lo hare…”
“Eres un niño muy bueno, ¿Te lo habían dicho?” Pregunto Wei Ying, dándole un par de
palmadas en la cabeza: “Ten cuidado con esa cosa, yo también tuve un sello de energía
obscura como el tuyo, y daño mi cuerpo. Al ser un omega, debes ser muy cuidadoso con
eso…”
“Oh no… Este sello no podría dañarme jamás, es diferente al sello del tigre de estigio”
Respondió Mo Xuanyu con seguridad: “Lo construí de tal forma que no solo controle energía
resentida, también la absorba y elimine.”
“¿Que?” Pregunto Wei Ying confundido.
“Si, la mayoría de la gente no sabe cómo hacerlo, pero hay técnicas antiguas de mi clan que
explican a la perfección como hacer algo semejante, así que yo perfeccione la tónica, y cree
algo que nunca se había visto antes. Incluso podría ayudarlo…”
Dejando a Wei Ying estupefacto, Mo Xuanyu llevo una de sus manos al pecho del contrario,
justamente donde estaba su núcleo dorado.
“Su núcleo ha sido invadido por energía resentida, tanto que casi lo ha destruido y eso
mantiene a su omega dormido. Pero con mi sello puedo eliminar toda esa energía de su
cuerpo, seria doloroso y tendría que confiar en mí, pero podría volver a tener un núcleo
dorado y ser un omega funcional” Explico Mo Xuanyu con una sonrisa misteriosa.
“¿Confiar en ti?” Pregunto Wei Ying algo confundido.
“Solo es una opción, maestro Wei. Al final, solo será su decisión.”
Una vez más, Wei Ying guardo silencio.
¿Acaso debería intentar volver a ser normal?
Chapter 19

“¿Estás seguro de que esto va a funcionar?” Preguntó Wei Ying, comenzando a sentirse algo
nervioso.
“Bueno, es la primera vez que intento algo como esto, pero no se preocupe maestro Wei,
tenga confianza en mí” Pidió Mo Xuanyu, escribiendo con rapidez algunos símbolos en
talismanes: “Esta es la forma en la que eliminamos energía resentida de algunas armas
espirituales, nunca se ha hecho con una persona, pero ya que tenemos el Yin de acero, la
energía será potenciada y podremos conseguirlo.”
Al inicio, Wei Ying no se sentía nervioso por todo ese asunto, ya que pensaba que no tenía
nada que perder, y si funcionaba estaría contento, pero si fallaba no ocurriría nada. Pero
mientras veía todas las preparaciones de Mo Xuanyu, quien no era un cultivador propiamente
dicho, Wei Ying volvió a sentir miedo.
“Esta listo, puede venir aquí al centro de los talismanes, por favor” Pidió Mo Xuanyu tan
dulce como siempre.
“Espero que esto no me mate…”
“Yo también lo espero.”
Frunciendo el ceño con algo de desagrado y temor, Wei Ying no tuvo más opción que
obedecer, acercándose al lugar donde le indicaba Mo Xuanyu, en medio de varios talismanes
esparcidos por el suelo.
Con las manos temblorosas, Mo Xuanyu tomó el Yin de acero de la bolsa de cuero que lo
contenía, y en un rápido movimiento lo apunto en dirección a Wei Ying. Sintiendo una
extraña energía a su alrededor, mientras los talismanes se iluminaban de una forma algo
extraña, Wei Ying no tuvo ni tiempo de preguntar cuando sintió aquel extraño trozo de acero
tocar su pecho suavemente.
Entonces un grito escapó de los labios de Wei Wuxian, aquel sello había quemado su piel, le
dolió tanto que para el omega se sintió como si alguien arrancara su núcleo dorado,
haciéndolo gritar y caer al piso lleno de dolor.
“¡Maestro Wei!” Dijo Mo Xuanyu asustado, deteniendo el ritual de golpe.
Jadeando adolorido, Wei Ying toco su pecho mientras estaba acostado en el suelo. Ni siquiera
su piel estaba herida, el dolor había sido interno, tan doloroso que él no creía haber sentido
algo así jamás.
“¿Qué demonios fue eso?” Preguntó Wei Ying entre jadeos.
“Bueno, el sello tendría que haber absorbido toda la energía resentida de su núcleo y parte de
su cuerpo” Explicó Mo Xuanyu en un susurro: “¿Se encuentra bien?”
“Si… Creo…”
Con el paso de los minutos, el dolor desapareció por completo, aunque Wei Ying no se sintió
diferente. Entonces después de hablar con Mo Xuanyu, Wei Ying concluyó que no había
ocurrido nada, sin importar el motivo, la idea de Mo Xuanyu no fue efectiva.
“Lo lamento maestro, no quise darle falsas esperanzas de volver a recuperar a su omega” Se
lamentó Mo Xuanyu.
“Descuida, yo ya me he resignado a ser como un beta por toda mi vida, así que no debes
sentirte culpable por ello. Espero que puedas seguir estudiando las propiedades de tu sello, y
tal vez en un futuro puedas ayudarme” Dijo Wei Ying intentando consolar al menor, aunque
estaba mintiendo, ya que no planeaba someterse a un ritual como ese de nuevo.
Ambos entonces guardaron todas sus cosas, y regresaron al templo, donde había llegado más
gente y aseguraron por completo aquel ataúd.
“¡A-Yu!” Gritó Nie Huaisang, mirando finalmente a su omega.
Tímidamente, Mo Xuanyu aceptó que aquel alfa lo abrazara, atrayéndolo a sus brazos y
besando sus mejillas. Wei Ying solo pudo sonreír viendo a su amigo, hace mucho tiempo que
había esperado ver a Huaisang al lado de su omega, y no podía evitar sentirse aliviado de que
fuera alguien tan amable como Mo Xuanyu.
“Ahora tendrás que lidiar con Jin Zixuan para pedir su mano, mucha suerte” Susurro Wei
Ying para sí mismo, dejando a la cariñosa pareja sola.
Caminando entre todas las personas a su alrededor, Wei Ying no pudo evitar sentirse algo
extraño, tocando la marca en su nuca, la cual había empezado a sentirse entumecida. Tal vez
era por el cansancio o por el corte en su cuello, pero Wei Ying no había sentido algo como
eso desde hace años, cuando aún tenía a su omega.
Sin tardar mucho más, Wei Ying se encontró con Lan Wangji, quien estaba junto a Sizhui y
los demás juniors, dándole indicaciones.
“¿Dónde estabas?” Preguntó Lan Zhan angustiado, viendo a su omega regresar.
“Con Mo Xuanyu, estaba hablando con él” Dijo Wei Ying, sonriendo suavemente: “¿Qué
ocurre? ¿Y tú hermano? Creí que él tenía que llevarse a los niños a Gusu…”
“Esta algo ocupado” Explicó Lan Zhan, mirando fijamente al mayor, notando algo extraño en
este: “Tu hermano entró en celo y mi hermano lo llevó a Lotus Pier.”
“Rayos… ¿Deberíamos ir con ellos?”
“Tal vez después, tenemos que llevar a los niños a Gusu, y entregar el informe a mi tío” Dijo
Lan Wangji, tomando los deberes que debieron ser de Lan Xichen.
“No hay nada que hacer… Entonces vayamos ya, tenemos un viaje de varios días hasta Gusu,
y lidiar con los niños será cansado.”
“Mmm…”
Reuniendo a todos los miembros de su secta, Lan Wangji comenzó a dirigirlos por los
caminos al lado de su omega, fijamente dejando todo el caos de aquella ciudad, y regresando
a casa después de varios días intensos.
Caminando lado de su esposo, Wei Ying se tomó de su mano y suspiró con algo de
preocupación.
¿En verdad estaba bien que dejara a Jiang Cheng solo en ese momento?
***
Se sentía confundido, en medio de su celo, Jiang Cheng solo podía aferrarse a esas túnicas
blancas, y respirar el aroma de las feromonas de ese alfa como si fueran una droga.
“¿Xichen?” Preguntó Jiang Cheng en un susurro, aclarando un poco su mente.
“Hola A-Cheng, ¿Cómo te sientes?” Preguntó Xichen con suavidad.
Llegando finalmente a Lotus Pier, los sirvientes rápidamente los llevaron a ambos a la
habitación principal de la secta, donde Xichen quiso dejar a Jiang Cheng, pero el omega
seguía aferrándose a él con fuerza, así que Lan Huan decidió esperar un poco, dándole aquel
té de hierbas que todos los omegas bebían en su celo, hasta que este aclarara su mente y
pudiera dejarlo.
“Me duele” Dijo Jiang Cheng con sinceridad.
“Tranquilo, solo intenta dormir un poco, ya va a pasar” Lo consoló Lan Huan, acariciándole
el cabello con suavidad.
El plan del alfa era hacer dormir a Jiang Cheng, y cuando este estuviera inconsciente, salir de
sus aposentos y regresar a Gusu, donde se encerraría por un par de días para evitar
inconvenientes. Era normal que como un alfa estuviera reaccionando a las feromonas del celo
de Jiang Wanyin, y aunque se mantenía tranquilo por el momento, temía que al regresar a
casa pudiera entrar en celo así como el menor.
“Tuve un sueño maravilloso” Dijo Jiang Cheng, apoyándose en uno de los hombros de Lan
Xichen: “A-Yi vino a verme, me abrazó y me dijo que me quería, se sintió tan real por un
momento…”
“Ya veo…” Respondió Xichen, prefiriendo guardar el secreto por el momento, planeaba
decirle la verdad a Jiang Cheng, pero cuando ambos estuvieran conscientes, ya que no quería
alterar al menor ahora mismo.
“¿Crees que él me odie?”
“No, en absoluto” Se negó Lan Xichen de inmediato.
“Hablas como si ya lo supiera… Que tonto eres…”
Acercándose mas al alfa, sin dejar de aferrarse a sus túnicas con fuerza, Jiang Cheng quiso
besarlo, aunque Lan Xichen lo rechazo, intento poner un poco de distancia entre ellos.
“¿Por qué haces esto?” Preguntó Jiang Cheng dolido: “¿Acaso no quieres hacerlo conmigo?”
“No se trata de eso, A-Cheng. No quiero que te arrepientas cuando despiertes.”
“¿Por qué me arrepentiría?”
“Porque yo sé que tu no quieres que lo haga, tu verdadero yo consciente. Yo quiero hacerlo,
siempre he querido, pero no puedo…”
Bajando la mirada con tristeza, Jiang Cheng comenzó a soltar las túnicas del mayor,
alejándose un poco de este.
“¿Es por lo que me hicieron esos otros alfas? ¿Sientes asco?” Preguntó Jiang Cheng en un
susurro.
“¿Qué? Claro que no…”
“Yo siempre he pensado… ¿Por qué no morí cuando él lo hizo? ¿No es lo que dicen los
cuentos?” Se lamentó Jiang Cheng: “Pero no puedo morir, aun si él está muerto… No quiero
seguir viviendo…”
Como era usual en las leyendas, se decía que cuando un alfa se vincula con un omega y el
omega muere, el alfa continua con vida y puede vincularse con otro omega. ¿Pero qué pasa
cuando el alfa muere y el omega no? En los cuentos los omegas fallecen de formas trágicas,
muriendo de amor por sus alfas destinados. Pero en la vida real Lan Xichen conocía varios
casos de omegas que sobrevivieron a sus alfas, y vivieron una vida tranquila, pero pocos de
esos omegas viudos volvieron a casarse, y ninguno intentó vincularse con otro alfa de nuevo.
¿Acaso eso también era posible para ellos?
“Basta, no digas eso” Pidió Lan Xichen dolido, tomando a Jiang Cheng de la mano con
suavidad.
“Lo lamento… Si no hubiera cometido tantos errores, tú y yo estaríamos casados ahora,
tendríamos una familia feliz, y A-Yi hubiera crecido conmigo. Pero no pude hacerlo… Aun si
tú me lo pediste después de la guerra, no quería hacerte eso… Eres el líder de una secta
poderosa, ¿Cómo podrías estar con un omega ya marcado y deshonrado? No quise casarme
contigo porque no quería herirte…”
Sin poder soportarlo más, viendo finalmente la fragilidad de Jiang Cheng, Lan Xichen lo
abrazó con fuerza, escuchándolo sollozar.
Durante todo ese tiempo Lan Xichen pensó que Jiang Cheng lo había rechazado ya que no lo
amaba por el vínculo con ese otro omega Wen. Nunca había pensado que Jiang Cheng lo hizo
por pensar que no era digno, algo que Lan Xichen ni siquiera había considerado…
“No me importa eso, nunca lo pensé. Sin importar lo que te haya pasado, sigues siendo mi
Yin Yin, y yo quiero casarme contigo. No pienses esas cosas horribles de ti, eres perfecto y
hermoso, yo de verdad te amo…” Dijo Lan Xichen en un susurro.
“A-Huan… Por favor no me dejes… Lo siento, yo también quiero casarme contigo, de
verdad lo siento…”
Entre lágrimas, Jiang Cheng recibió un cariñoso beso de aquel alfa, quien dejándose llevar
por aquellas feromonas, comenzó a quitarle las túnicas al menor, dejándolo desnudo en poco
tiempo.
“Hermoso… En cualquier lugar que vea o toque, eres hermoso y perfecto” Dijo Xichen,
tocando la delgada cintura del omega con suavidad.
La respiración de Jiang Cheng estaba muy agitada, el omega no dejaba de pensar que Xichen
merecía algo mejor que él, así que temía que ese alfa se diera cuenta al tocarlo, que no era tan
bonito o puro como los otros omegas, y que finalmente lo rechazara.
Sin embargo Xichen no parecía estar pensando en eso, bajando hasta la entrepierna del
menor, introdujo su miembro en sus labios, comenzando a estimularlo con suavidad, mientras
dos de sus dedos viajaban a la entrada del menor, comenzando a penetrarlo y prepararlo.
Reaccionando como un omega sin experiencia, Jiang Cheng tembló y jadeo confundido,
apenas pudiendo entender los sentimientos de placer de su cuerpo. Jiang Wanyin no tuvo
sexo con un alfa por varios años, y no quería recordar cómo había perdido su virginidad, así
que sentir los dedos de su alfa dándole tanto placer y sus labios estimulándolo de esa forma,
lo hicieron venirse muy rápido, entre gemidos cada vez más fuertes.
“Lo siento… A-Huan…” Dijo Jiang Cheng asustado, dándose cuenta de que se había venido
en su boca.
Pero esto no parecía incomodarle a Lan Xichen, quien sonriendo con su usual amabilidad,
acaricio suavemente las piernas del menor, intentando tranquilizarlo.
“A-Cheng es hermoso, muy lindo…” Le dijo Xichen: “No tienes que disculparte, a mí me
gustas, absolutamente todo de ti. Así que no tienes que disculparte, yo estoy aquí para hacerte
sentir bien y amarte.”
Sonrojado, Jiang Cheng se aferró fuertemente a las frazadas de su propia cama, sintiendo los
dedos de Xichen moviéndose lentamente pero de forma placentera en su interior, hasta
dejarlo preparado para recibirlo, y con una nueva erección.
Separándose de Jiang Cheng para quitarse la ropa, Xichen finalmente sacó sus dedos del
interior del menor, comenzando a quitarse sus túnicas, para quedar desnudo frente al omega.
Por la vergüenza, Jiang Cheng tomó una de las almohadas de su cama y el abrazo, girándose
para darle la espalda al alfa, quedándose sobre su abdomen en la cama mientras temblaba con
suavidad.
“Está bien A-Cheng, lo hare suavemente” Dijo Xichen subiéndose sobre el omega,
acariciando sus nalgas con suavidad.
Cerrando los ojos, Jiang Cheng sintió su respiración aún más agitada, mientras los recuerdos
comenzaban a acumularse en su mente de nuevo, mientras sentía algo duro comenzar a
pasarse sobre su entrada y entre sus nalgas.
Entonces cuando Lan Xichen comenzó a entrar en él, un grito escapó de sus labios,
intentando patear al alfa y sacárselo de encima.
“¡No!” Gritó Jiang Cheng alterado: “¡Por favor detente! ¡No quiero!”
“Hey… A-Cheng, soy yo, mírame, soy yo.”
Abriendo los ojos asustado y girando su cabeza, Jiang Cheng miró a Xichen, quien
suavemente lo sostenía de las caderas, manteniéndolo quieto en la cama.
“Soy yo, jamás te haría daño” Dijo Xichen, deteniendo sus movimientos por completo: “Te
amo…”
“Lo siento, yo no… No me di cuenta… Yo solo recordé cuando ese bastardo me mordió,
dolió tanto y yo te estaba llamando, me dolía…”
“Está bien, no hay nadie aquí más que tú y yo, así que no pienses en eso, solo piensa en
mí…”
Volviendo a cerrar los ojos, Jiang Cheng sintió las manos de Lan Xichen en su cabello,
levantándolo y dejando su nuca al descubierto.
“¿A-Huan?” Preguntó Jiang Cheng algo asustado.
Pero Xichen no respondió, y mirando la marca en el cuello del menor, no esperó más tiempo,
mordiendo su piel en el mismo lugar en el que estaban las cicatrices de los diente del otro
alfa, sacando un grito de sorpresa y dolor de Jiang Cheng.
“¡A-Huan!” Gritó Jiang Cheng asustado.
“Ahora eres mío, estamos vinculados” Susurro Lan Xichen, abrazando al omega en la cama.
“Pero yo ya no puedo…”
“Olvídalo, ¿Recuerdas lo que te dije? Solo estamos tú y yo en esta habitación, y ahora tú eres
mío. Mi omega, mi lindo A-Cheng…”
Sintiendo como Lan Xichen lo giraba en la cama, Jiang Cheng recibió un beso apasionado en
los labios, mientras algo comenzaba a entrar en él, sacando un gemido de placer de sus
labios.
Aunque su mente intentaba jugarle una mala pasada y obligarlo a recordar de nuevo todo lo
que le había pasado, Jiang Cheng ya no pudo hacerlo, absorto en todos los sentimientos que
le daba Lan Xichen en ese momento, y sintiéndose feliz de haberse vinculado con el alfa que
amaba finalmente.
Jiang Cheng no sabía si era posible, pero prefería ignorarlo, si Lan Xichen decía que ambos
estaban vinculados era verdad… Y Jiang Cheng iba a creerle.
“No cierres los ojos, solo mírame” Pidió Xichen en un susurro, terminando aquel beso
apasionado: “Recuerda como tomo tu virginidad ahora…”
Jadeando con placer al sentir todo el miembro de Xichen en su interior, cada vez más
excitado, Jiang Cheng hizo lo que el alfa le había pedido, abriendo los ojos para mirarlo.
“Si… A-Huan es el primero… Soy el omega de A-Huan…” Dijo Jiang Wanyin lleno de
placer, aferrándose al alfa con fuerza.
“Te amo, mi lindo A-Cheng…”
***
Abrió los ojos y se sentó de golpe, mientras tocaba su nuca con las manos temblorosas.
“¿Qué… Que pasa? Me estoy ahogando…” Jadeo Wei Ying, cubriendo su rostro con sus
manos de inmediato, sintiéndose cada vez peor.
Se encontraban en un pequeño campamento improvisado, donde después de comer algo
sencillo, todos los miembros de la secta Lan se habían ido dormir. Acostado lado de su alfa
en una pequeña manta, Wei Ying se había sentido algo extraño todo el día. El calor
comenzaba a aumentar en su cuerpo, y por breves momentos creía sentir aromas, fuertes
feromonas de algunos alfas y omegas a su alrededor, pero era algo momentáneo… Así que
Wei Ying creía que estaba alucinando.
Pero ahora que había despertado, en media madrugada, Wei Ying creyó que se estaba
ahogando, podía sentir las feromonas de todos a su alrededor, tan fuerte y potente que le
dieron nauseas. No pudo olerlos por varios años, así que tener esa exposición después de
tanto tiempo fue demasiado para él, quien tuvo que levantarse torpemente para correr a unos
arbustos, intentando alejarse de ese aroma cuanto antes.
“¿Wei Ying?”
Despertando de inmediato al sentir a su omega moverse, Lan Wangji confundido vio al
mayor correr a unos arbustos, así que algo somnoliento fue detrás de él. Pero al acercarse al
lugar, Lan Wangji se quedó de piedra, ya que pudo sentir el claro aroma de las flores de loto,
¿Cómo era posible? Su omega no dejaba salir sus feromonas desde hace años, ¿Cómo pudo
sentirlo después de tanto?
“Lan Zhan… Lan Zhan ayúdame, algo extraño está pasando… Lan Zhan…” Gimoteó su
omega desde la obscuridad, entre sollozos.
Recordando lo que tenía que hacer, Lan Wangji entró entre aquellos arbustos, encontrando a
Wei Ying sentado un poco más allá, visiblemente afectado, mientras lloraba asustado.
“Aquí estoy, Wei Ying, ¿Qué ocurre?”
“No puedo… duele…” Gimoteó Wei Ying, tomando una de las manos de su alfa para llevarla
entre sus piernas: “¿Qué ocurre? Duele… Lan Zhan… Ayúdame, estoy enfermo...”
Una vez más, Lan Wangji sintió una gran extrañeza. Tocando la entrada de su omega con
suavidad, pudo sentir lo húmeda y caliente que esta se encontraba, mientras que las
feromonas del mayor comenzaban a sentirse mucho más fuertes aun, como si hubieran estado
retenidas por mucho tiempo, y estuvieran escapando fuera de su cuerpo sin control.
Sollozando asustado, Wei Ying se aferró fuertemente a su alfa, pegando su rostro contra el
cuello del contrario, sintiendo sus feromonas. Era diferente, no era como las demás
feromonas que casi lo hacen vomitar, el olor del sándalo hicieron que Wei Ying se sintiera
tranquilo, incluso llegando a mojarse más, comenzando a desear el tacto de su alfa cada vez
más…
“¿Qué me está pasando? ¿Qué ocurre?” Preguntó Wei Ying asustado.
“Wei Ying, creo que estas entrando en celo.”
“No… Es imposible, ¿Cómo? Mi omega está muerto… Yo no… ¿No puedo?”
Entonces Wei Ying recordó lo que hizo con Mo Xuanyu aquella mañana, después de escapar
del templo, ¿Acaso aquella tontería había funcionado?
“Lan Zhan… Creo que mi omega está vivo…” Dijo Wei Ying emocionado.
Al escuchar esa noticia, Lan Wangji se notó tan sorprendido como el mayor. Lan Zhan podía
sentir nuevamente al omega de Wei Ying, quien se notaba en completo descontrol,
aparentemente confundido después de haber despertado en el cuerpo del omega.
“¿Pero cómo…?” Preguntó Lan Zhan muy sorprendido.
Agachándose frente al mayor, Lan Wangji tomó el rostro de Wei Ying entre sus manos,
mirando sus ojos violetas muy brillantes, viéndose tan confundido como el menor.
“Creo que estas en celo Wei Ying” Dijo Lan Wangji.
“¿En verdad, Lan Zhan? Ha pasado tanto tiempo que había olvidado como se sentía… No lo
entiendo, esto es tan raro, no puedo comprenderlo.”
“No me importa, como sea que haya pasado… Es realmente bueno, estoy feliz.”
Uniendo su rostro con el del mayor en un beso, Lan Wangji comenzó a subirse sobre el
cuerpo del mayor, acariciando su delgada cintura sobre la tela de sus túnicas, disfrutando de
sentir nuevamente al omega de Wei Ying, sintiéndose como una pareja completa después de
tanto tiempo.
Chapter 20

Con el final del invierno y el inicio de la primavera, la época más esperada por todos había
llegado, con la temporada de bodas iniciando con la ceremonia más esperada, la boda de Lan
Xichen y Jiang Cheng.
6 meses habían pasado desde la muerte de Jin Guangyao, y durante todo ese tiempo, muchas
cosas buenas le habían pasado a todos.
Iniciando por Jiang Cheng y Lan Xichen, los cuales con sus asuntos pasados arreglados,
iniciaron una relación formal, descubriendo poco después que Jiang Cheng tenía un par de
días de embarazo. Ante el posible escándalo, se tuvo que hacer los preparativos de una boda
rápidamente, ya que ninguna de las dos sectas involucradas quería tener rumores por un
embarazo fuera del matrimonio. De esta forma, Jiang Cheng finalmente renunció a su puesto
como el líder de la secta Yunmeng Jiang, viviendo en Gusu pocos días antes de la boda,
siguiendo el destino que siempre debió tener.
Finalmente sabiendo la verdad de sus orígenes, Jiang Cheng y Lan Jingyi se volvieron muy
cercanos, tanto que parecían un padre y un hijo que nunca se había separado. Y fue gracias a
esta nueva relación parental que Jingyi pudo terminar su compromiso con la secta Yu, con su
aliviada prometida alfa, la cual tampoco quería casarse con él. Y siendo un alfa nuevamente
soltero, Jingyi se comprometió casi de inmediato con Zizhen, en una relación muy
controversial en la secta Ouyang.
La secta Ouyang en Lanling había sido creada por omegas y para omegas, aunque en los
recientes años abrieron sus puertas para betas, aunque sin dejar que ningún alfa entre a sus
tierras más que para cortas visitas. Así que cuando Ouyang Zizhen, el heredero de la secta, se
pronunció ante sus padres con la petición de casarse con un alfa, fue un gran escándalo dentro
d la secta, en una unión que parecía imposible. Sin embargo gracias a la intervención de Jiang
Cheng y Wei Ying, omegas muy respetados, la secta Ouyang aceptó el compromiso, haciendo
un trato con la secta Lan y Jiang al respecto.
Todos sabían que Jingyi era el heredero de la secta Gusu Lan, peo sus hijos no seguirían con
la línea sucesoria de la familia Lan, ya que los hijos de Jiang Cheng y Lan Xichen serían los
próximos herederos al liderazgo, haciendo a un lado a Jingyi. Pero ahora el hijo único de la
secta Ouyang tendría que rechazar su apellido para casarse con el próximo líder de la secta
Lan, así que se hizo un acuerdo en el que los hijos de Jingyi y Zizhen serían los próximos
herederos de la secta de omegas, dejando así los problemas sucesorios de ambas sectas
resueltos, permitiendo que Zizhen liderara la secta Lan al lado de Jingyi en Gusu, hasta que
los hijos de Jiang Cheng y Lan Xichen tuvieran edades apropiadas para tomar el mando,
cuando ambos se retirarían a la secta Ouyang y dejarían que sus hijos se volvieran los líderes.
A Jingyi no le interesaba el asunto de la sucesión, estaba aliviado de que todas las situaciones
políticas estuvieran solucionadas, pero en el fondo solo quería casarse con su omega.
Iniciando su periodo de cortejo, Jingyi se enamoró perdidamente de Zizhen, ese omega tan
fuerte pero algo inocente, así que el alfa solo esperaba poder casarse con su prometido el
próximo año, con un tiempo de compromiso corto, pero adecuado para la edad de ambos.
Viendo que la vida completa de su familia y su linaje estaba a salvo después de tantos años,
Lan Qiren comenzó a planear su retiro fuera de la secta Lan. No tenía claro si se recluiría en
soledad en las montañas, o si viajaría por el mundo como siempre había deseado, pero ya
comenzaba a planear su retiro, teniendo como tiempo limite el nacimiento del primogénito de
Lan Xichen, planeando irse después de conocer a su nieto.
Con los asuntos de la secta Lan solucionados, la secta Jin también tuvo que resolver sus
problemas, quedando prácticamente en ruinas después de saber sobre la traición de Jin
Guangyao. La secta Nie no hizo comentarios al respecto, y solo pidió que el cuerpo de su
difunto líder fuera enterrado de forma apropiada, para evitar que un desastre así volviera a
ocurrir. Algo que fue cumplido por la secta Jin, quienes se encargaron de resguardar el ataúd
que contenía los cadáveres resentidos de Jin Guangyao y Nie Mingjue, manteniéndolo en un
lugar seguro. Mientras que los hijos de Meng Yao fueron destituidos de sus cargos, pero
gracias al gran cariño que tenía Huaisang por sus sobrinos, todavía mantuvieron el apellido
“Nie”, a pesar de no tener más derechos de sucesión, pudieron mantenerse como
cultivadores, teniendo un algo rango en la secta Nie.
Después de la traición, Jin Zixuan fue juzgado por ser un líder incapaz, pero gracias a la
ayuda de su esposa y el apoyo de la renovada secta Jiang, los Jin lograron mantener su
supremacía en Lanling, esforzándose por demostrar que todavía eran una familia poderosa y
un clan digno. En todo este desastre, Jin Ling se sintió contento de que Sizhui no rompiera el
compromiso, ya que cualquier otro omega hubiera evitado terminar casándose con un alfa de
una familia con una reputación tan manchada, pero a Sizhui poco le importaba, continuando
con el compromiso con Jin Ling, el cual empezaría con su periodo de cortejo ese mismo año
durante el verano. Y aunque ambos jóvenes se amaban en secreto, todavía no podían
comprender que son destinados, iniciando una relación lenta pero llena de cariño.
Y finalmente, el destino de la secta Jiang también se había arreglado, teniendo un nuevo líder,
y un futuro prometedor. Al final del invierno, después de mudarse de la secta Gusu Lan, Wei
Wuxian fue nombrado como el nuevo líder de la secta Jiang, con su próximo hijo como el
heredero de la secta. Wei Ying jamás había ambicionado el liderazgo de dicha secta, pero
ahora siendo un hombre maduro y con su propia familia, estaba aceptando la responsabilidad
con mucho orgullo, teniendo un trabajo en equipo al lado de su alfa, comenzando así a ser
unos lideres tan buenos como lo había sido Jiang Cheng en su momento.
Pero esa no fue la última sorpresa para el nuevo líder Jiang, ya que casi al mismo tiempo que
su hermano, descubrió que estaba esperando un cachorro, el cual fue nombrado de inmediato
como el nuevo heredero de la secta, y proclamado un alfa por los curanderos de Yunmeng.
De esa forma el nuevo cachorro de Wei Wuxian fue el hijo más esperado por todas las sectas,
en aquel que denominaban un “milagro”, ya que el omega de Wei Ying había despertado para
darle un hijo y nuevo heredero a su secta.
De esa forma llegaron al primer día del verano, en el cual una gran fiesta se estaba dando en
todo Gusu, recibiendo personas de todas las sectas, los cuales venían a dar sus felicitaciones
y sus respetos a la pareja.
Caminando entre los salones de Gusu algo apresurado, Wei Ying caminaba lo más rápido que
podía, con su prominente vientre, el cual le hizo las cosas mucho más difíciles que su primer
embarazo. Un omega embarazado de un alfa siempre era algo problemático, ya que causaba
gran debilidad y malestar en el omega, algo que Wei Ying estaba experimentando de primera
mano.
“¡A-Ning!” Dijo Wei Ying sorprendido, caminando rápidamente hacia su amigo.
Acompañando a su hermana, en la que probablemente era su última reunión social en mucho
tiempo, Wen Ning estaba acompañado de Song Lan, quien se había vuelto su compañero
oficial. Al inicio fue un poco difícil para Wen Qing, la cual siempre deseo tener a su hermano
menor a su lado, pero ella comprendía que Wen Ning merecía encontrar su lugar, y aun si eral
otro lado del mundo, ella deseaba que Wen Ning fuera feliz. De esa forma Song Lan fue bien
recibido en la secta Yiling Wen, como un familiar, comiendo y durmiendo con la familia de
Wen Qing como otro más. Y aunque Wen Ning no se había casado con su alfa, ambos
consideraban que estaban unidos de por vida, y estaban planeando dar el próximo paso.
Song Lan siempre había deseado viajar por el mundo ayudando a los más débiles, un sueño
que ahora compartía con Wen Ning. Los dos alfas habían planeado un viaje muy largo, de
varios años, en los cuales irían a las poblaciones más allá del territorio de las sectas, lugares
algo pobres o con líderes autoritarios, personas que ambos esperaban ayudar. Planeando así
su viaje para el verano, una buena época para viajar, y que les daría el tiempo suficiente a
ambos de acabar con sus tareas pendientes antes de irse.
“Wei Gonzi” Lo saludó Wen Ning igual de alegre, acercándose al omega para hacer una
reverencia, la cual fue imitada por su silencioso compañero, el cual con una sonrisa también
hizo una reverencia para Wei Ying.
“Qué bueno que vinieron, es agradable rodearte de tus seres queridos en una boda.”
“Si, A-Lan y yo estamos contentos de poder venir aquí a verlos a todos antes de irnos. Le
estaba mostrando la secta Lan a mi alfa, él nunca lo había visitado antes.”
“Es un lugar hermoso, aun en esta época del año, tengo escalofríos…” Se burló Wei Ying con
una sonrisa: “No se vayan demasiado lejos, la ceremonia está a punto de iniciar.”
“No lo haremos maestro, muchas felicidades por la boda de su hermano” Respondió Wen
Ning con una sonrisa.
Devolviendo el gesto, Wei Ying también hizo una ligera reverencia, antes de continuar con su
camino, admirando desde lo lejos lo bien que se veían ambos alfas. Wei Ying se sentía
secretamente aliviado de que Wen Ning hubiera encontrado a alguien como Song Lan para
pasar su vida a su lado, Wei Ying sabia lo dura que podía ser la eternidad en soledad, así que
teniendo un compañero en igualdad de condiciones, que nunca lo abandonaría y que nunca
moriría, era lo que Wei Ying siempre había deseado para su gran amigo, agradeciendo de
forma secreta a Song Lan, quien finalmente iba a darle felicidad a su querido A-Ning.
Continuando con su camino, Wei Ying llegó a una sala de té cercana al salón principal de la
secta, donde estaban varios omegas rodeando a Jiang Cheng, quien completamente vestido de
rojo, estaba temblando de los nervios.
“¿Dónde demonios estabas?” Reclamó el omega: “¡Te tardaste demasiado!”
“Lo siento A-Cheng… Creo que olvidas que no puedo correr” Se burló Wei Ying, entregando
la pequeña caja de madera que había ido a recoger.
“Aun así eres demasiado lento, yo también estoy embarazado, y no soy tan lento como tu…”
“Pero yo estoy embarazado de un alfa, ¿Sabes lo difícil que es?”
“Dejen de pelear ustedes dos, no se comporten como niños” Intervino Jiang Yanli, tomando
la caja de madera para abrirla y tomar el objeto que había en su interior.
Todos decían que Jiang Cheng iba a dar a luz a un omega, Wei Ying no estaba seguro, aun no
podía sentir las feromonas del pequeño. Pero en el caso de que fuera verdad, sería un gran
cambio para la secta Lan, ¿Cuántos años habían pasado desde que un omega no era el líder y
heredero de la secta? Seguro sería un gran positivo cambio para todos…
“Aquí esta, la peineta de papá” Dijo Yanli con una sonrisa, tomando el bonito objeto dorado,
para ponerlo como el ultimo accesorio en el cabello de Jiang Cheng.
Saliendo de su retiro en ese gran acontecimiento, Yu Ziyuan y Jiang Fengmian asistieron
como invitados a la boda, más unidos y felices que nunca. Pero habiendo llegado como uno
de los últimos invitados, Jiang Fengmian les dio la peineta con la que se había casado algo
tarde, ocasionando que toda la ceremonia se retrasara, ya que era el deseo de Jiang Cheng el
casarse usando aquel bonito adorno de oro en su boda.
Aquella peineta era de oro brillante, adornado con hermosas flores de loto. No fue un regalo
exclusivo para la boda, fue el primer regalo que Yu Ziyuan le dio a su omega cuando ambos
se conocieron en su juventud, una peineta que Fengmian usaba orgulloso la mayor parte del
tiempo, así que tenía un gran peso sentimental, y que Jiang Cheng también quería lucir con
orgullo en un día tan importante.
Con todo su atuendo finalmente terminado, todos los omegas presentes se alejaron por un
momento, admirando la belleza de Jiang Cheng, quien vestido de rojo y con las mejillas
sonrojadas, era un hermoso novio omega esperando su boda.
“Puedes decirles que ya estamos listos, llevaremos a A-Cheng al salón en cinco minutos”
Pidió Yanli a una de las sirvientas.
“A-Cheng… Te ves hermoso…” Dijo Wei Ying emocionado, admirando a su hermano.
“No llores, idiota, si lloras voy a llorar también” Lo amenazó Jiang Cheng, esforzándose por
mantener su semblante serio a pesar de todas sus emociones.
Sonriendo de forma burlesca, Wei Ying quiso decir algo más, pero mirando por una de las
ventanas del salón, observó algo que atrajo su atención de inmediato.
“Debo salir un momento, regresare antes de la ceremonia para llevarte al salón…” Dijo Wei
Ying apresurado, caminando fuera de aquel salón casi corriendo, para la sorpresa de todos los
presentes.
Muy cerca del salón de la ceremonia, un grupo de miembros de la secta Nie rodeaban a un
joven de túnicas doradas, el cual de forma dulce jugaba con las flores de invierno, las cuales
comenzaban a marchitarse por el inicio de la temporada calurosa.
Haciendo reverencias a todos los miembros de dicha secta, Wei Ying se acercó a Mo Xuanyu,
el cual al verlo llegar rápidamente se puso de pie, haciendo varias reverencias avergonzado.
“Has vuelto a maquillarte” Observó Wei Ying.
“Si… Mi alfa me lo permite, A-Sang dice que es bonito” Respondió Mo Xuanyu, de la
misma forma tímida de siempre.
“Lo es, muy hermoso.”
Después de la muerte de Meng Yao, Nie Huaisang pidió la mano de Mo Xuanyu a los Jin de
inmediato, negándose a permitir que su omega destinado se separara de él nuevamente. Y
aunque era una petición inusual, Jin Zixuan lo permitió, sintiéndose culpable por todo lo que
su secta le había hecho a los Nie, y por todo el apoyo que recibieron de Huaisang incluso
hasta la actualidad, Jin Zixuan no solo permitió que Mo Xuanyu se comprometiera con el
líder de la secta Nie, también le permitió ir a Qinghe para vivir al lado de su alfa hasta que se
realizara la boda.
Pero nadie lo vio como algo extraño, pues Huaisang era el alfa que mejor reputación tenia
entre todas las sectas, un alfa correcto, sin malicia, el cual adoraba pintar y era un gran líder.
Todos pensaban eso, incluso su mejor amigo lo hacía, hasta que comenzó a sospechar de algo
extraño al respecto… Huaisang no permitía que nadie hablara a solas con Mo Xuanyu,
siempre rodeándolo de guardias y sirvientes, Wei Ying ni siquiera había podido hablar con él
en la secta Nie para agradecerle su ayuda. Por alguna razón, Huaisang tenía a su omega
apartado y encerrado de todos los demás.
Lan Wangji le había dicho que ese no era un comportamiento inusual en un alfa, los cuales
tenían el instinto de apartar a todos de sus omegas, como perros en celo. El propio Lan Zhan
le había confesado tener sentimiento de querer encerrarlo para tenerlo solo para él, así que
justificaba a Huaisang asegurando que solo estaba siguiendo sus instintos al estar
descontrolado después de ver a su destinado en peligro, pero por alguna razón Wei Ying no
podía creerlo, y algo le resultaba muy sospechoso al respecto.
“Solo quería agradecerte por tu ayuda, no había tenido la oportunidad de hacerlo hasta ahora”
Dijo Wei Ying, intentando sonar inocente: “Como veras estoy nuevamente embarazado, y eso
solo fue gracias a ti…”
“No es nada, maestro Wei… En verdad yo no tengo tantos méritos, solo supe hacer algo
usual con un sello y una técnica de mi familia, no es algo tan trascendental.”
“Claro, pero tú lo ideaste… Realmente inteligente. Hablando de eso, de tu sello, ¿Cómo fue
que creaste el Yin de acero?”
Mo Xuanyu no era tonto, y viendo las claras intenciones de Wei Ying de intentar averiguar la
verdad, levantó la mirada para sonreír de forma misteriosa.
“Usted debería saberlo mejor que yo, maestro Wei, solo el acero maldito puede usarse para
crear algo como eso” Respondió Xuanyu.
“¿Y de dónde sacaste ese acero?”
“Solo la muerte de una persona que ha terminado con la vida e ilusiones de un inocente
pueden maldecir el acero, usted uso la espada de Wen Shima, la cual acabo con la vida de su
alfa, un hombre que traicionó a su prometido y ocasionó una guerra. Me pregunto… ¿Acaso
hay un hombre que haya causado tales males y haya muerto recientemente?”
Sin necesidad de palabras, Wei Ying supo de inmediato de quien estaba hablando Mo
Xuanyu.
“!A-Xian!” Lo saludo un feliz Huaisang, quien llego al lugar tras ser avisado por uno de sus
temerosos guardias, quienes veían a Wei Ying como un peligro.
Fingiendo que todo estaba en orden, Wei Ying se giró para abrazar a su amigo, el cual en un
movimiento disimulado lo alejó de su omega, interrumpiendo su conversación de una forma
muy sospechosa.
“Vaya, estas enorme, mi sobrino seguro será un alfa enorme” Lo halagó Huaisang.
“Cállate, ¿Me estás diciendo gordo? Eres un tonto…”
Olvidando por un momento su rabia, Wei Ying rio contento, dejando que Huaisang lo tomara
de la mano para alejarlo aún más de su omega, quien inocentemente siguió jugando con las
flores.
“Lamento si A-Yu dice cosas incoherentes aun, sabes que tiene problemas mentales, pero
estamos trabajando al respecto…” Dijo Huaisang de forma sorpresiva, aunque Wei Ying no
le había preguntado al respecto.
“Oh vaya… Si, lo imagino” Respondió Wei Ying ligeramente incomodo: “¿Entonces me dijo
solo locuras?”
“No sé lo que te haya dicho, pero si te ofendió de alguna manera…”
“¿Sabes cómo se crea un sello maldito, A-Sang?” Preguntó Wei Ying suavemente: “Se usa
acero maldito, un acero especial el cual acabe con la vida de alguien que asesino a un
inocente. Así que fue interesante saber que el sello de A-Yu fue creado con la daga que usaste
para asesinar a tu hermano.”
Al decir esas palabras, Huaisang dejó de sonreír, y se mostró serio por primera vez en todo
ese tiempo.
“Oh vamos… No pongas esa cara, ¿Creías que no iba a descubrirlo? Fue muy obvio, solo
debías pensar en tus mentiras, y cualquier podría adivinarlo.”
“No sé a qué mentiras te refieres” Dijo Huaisang de inmediato.
“Me dijiste que conociste a Xuanyu en la secta Mo, ¿Lo hiciste? Es claro que no… Estaba
buscando una conexión, ¿Cómo fue que tú conociste a Xuanyu en la secta Jin? Es por que ya
sabias que él estaba estudiando los pergaminos de Wen Shima, y quisiste usarlo, como todos
los demás. Mi hermana me dijo que la noche en que murió tu hermano no fue un sirviente
quien te llamó para salvar a Meng Yao, fue Xuanyu, él acudió a ti antes que aun guardia o su
hermano alfa, te llamó a ti…”
“¿Fue A-Yu?” Preguntó Huaisang sorprendido: “Vaya, no lo recuerdo… Esa noche es tan
complicada…”
“Deja de mentirme, por favor, solo… Para.”
Dejando ver su verdadera personalidad por un momento, Nie Huaisang tomo a Wei Ying
firmemente de un brazo, asustando al omega, quien jamás había sido tocado de forma ruda
por aquel amable alfa.
“¿Qué mentiras, A-Xian? ¿Quién crees que soy?” Preguntó Huaisang molesto: “Has
inventado una curiosa historia en tu mente, en la que yo siempre manipulé a A-Yu para que
me ayudara a eliminar a mis enemigos, primero con mi tonto hermano que asesinó a mi gran
amor, luego a la zorra de su esposa que intentaba poner a sus bastardos como líderes de mi
secta, y para finalmente darme un arma tan poderosa que muy pronto me volverá el líder más
fuerte. ¿Crees que hice eso?”
Analizando las palabras de su amigo, Wei Ying se quedó en blanco, sin poder creer que
finalmente había obtenido una confesión… Y finalmente un motivo.
“¿Lo hiciste por él? Por… ¿Wen Xu?” Preguntó Wei Ying sorprendido: “¿Tu lo amabas?”
Wei Ying jamás había contemplado esa posibilidad, pensar que su amigo, el cual había
rechazado a todos los omegas desde que era un niño, lo había hecho porque añoraba al omega
de su hermano… ¿Eso era posible?
“Él no lo merecía. A-Xu una bonita rosa roja, sostenía mis manos con delicadeza cuando
pintábamos, y me abrazaba diciéndome lo mucho que me quería. Cuando veías a una persona
tan radiante, un omega tan hermoso, ¿Acaso hay algún alfa que no lo haya amado?
Probablemente el tuyo, porque ya era tu destinado. Pero todos los demás alfas, cualquiera al
que le preguntaras… Ellos habían amado y atesorado a Wen Xu más de como lo hizo mi
hermano, mi querido hermano, que le rompió el cuello con sus propias manos por órdenes de
su zorra. Cuando lo vi quemarse en una fosa común esa noche, sabía que iba a acabar con
ellos, así que lo hice, enloquecí a mi hermano y luego atrape a su zorra, ahora los dos están
en un pequeño ataúd sufriendo juntos por la eternidad, ¿No es esa la felicidad que buscaron
juntos?”
Entonces todas las piezas encajaron en la mente de Wei Ying. Fue Huaisang quien volvió
loco a su hermano con las canciones prohibidas de la secta Lan, las cuales seguramente había
aprendido en su tiempo de estudio en Gusu, entrando a la biblioteca escondida gracias a su
ingenio. Después había armado una escena con ayuda de Mo Xuanyu, quien se volvió su
cómplice desde muy niño, que termino con Huaisang apuñalando a Mingjue para “defender”
a Meng Yao. Luego Huaisang convenció a Wen Xu de crear el Yin de acero, inventando el
supuesto peligro que significaba Meng Yao, quien dejo de buscar a Mo Xuanyu después de
que saliera de su secta, y liberando el cadáver de Nie Mingjue de las criptas para atraer a Jin
Guangyao, poniendo a ambos hermanos en contra por última vez.
Terminando su plan con la muerte de todos aquellos quienes habían asesinado a Wen Xu, y
con lo que Huaisang siempre había deseado: Ser el líder de la secta Nie con todos los
herederos de su hermano fuera del plano, su omega destinado a punto de casarse con él, y el
instrumento más poderoso el cual algún día iba a usar para acabar con todas las sectas.
“¿Quién eres?” Preguntó Wei Ying mirando a su amigo a los ojos.
“La persona de siempre, solo que tú nunca lo habías visto…”
Mirando los ojos verdes de su amigo una vez más, Wei Ying soltó un jadeo cuando el alfa lo
soltó, mientras Huaisang volvía a tener la misma actitud de siempre, cubriendo su rostro con
un abanico lleno de dibujos, mientras sonreía con amabilidad.
“Fue divertido poder contar estas historias locas y que no puedes probar, pero creo que
nuestro tiempo terminó, tu hermano está saliendo para ir a su ceremonia, A-Xian…” Dijo
Huaisang con una sonrisa.
“No te vas a salir con la tuya para siempre, esa es una promesa.”
“¿Y qué harás? ¿Vas a detenerme? ¿Contaras tus improbables teorías a tu alfa? No creo que
lo hagas…”
“No, solo voy a confiar en el karma” Dijo Wei Ying con una sonrisa, mirando detrás de
Huaisang por un momento: “Y te doy un consejo, intenta buscar hierbas para dormir, cuando
conoces a tu destinado y este te abandona, lo que más duele es dormir, no puedes hacerlo si
no lo tienes cerca… Es muy doloroso, casi como morir.”
Sonriéndole al que alguna vez fue su mejor amigo, Wei Ying se giró para ir a buscar a su
hermano, el cual volvió a regañarlo por tomarse tanto tiempo hablando con Huaisang.
Bufando con molestia, Nie Huaisang se giró de inmediato, viendo solo a sus guardias, pero
no a su omega.
“¿A-Yu?” Preguntó Huaisang aterrado.
Con el tenso momento entre Wei Ying y su líder, todos los guardias se habían distraído, y
dejaron de vigilar a Mo Xuanyu, el cual ya no estaba entre las flores de invierno, y había
desaparecido.
“¡Encuéntrenlo ahora! Él nunca ha venido a Gusu, no puede estar lejos… Malditas flores de
invierno, su aroma es tan fuerte que no me permite oler las feromonas de A-Yu, ¡Encuentren
a mi omega!” Ordenó Huaisang, cada vez más alterado.
Pero a pesar de las palabras del líder de la secta Nie, Mo Xuanyu se movió por la secta Lan
como si la hubiera conocido desde siempre, desapareciendo entre las flores marchitas,
llevándose consigo el Yin de acero y la felicidad de Nie Huaisang, quien ya sabía que su
omega llevaba un par de días de embarazo del heredero de la familia Nie. Durante la boda, no
se vio a ningún miembro de la secta Nie, dejando sus asientos vacíos…
Decidiendo olvidar el pasado, intentando concentrarse en su felicidad y el futuro, Wei Ying
tomó a Jiang Cheng de la mano, acompañándolo hasta le entrada de aquel salón, adornado
con hermosas flores de loto y adornos con copos de nieve, en una decoración que hacía
alusión a ambas sectas. Abriendo la puerta, Wei Ying estuvo listo para dejar ir a su hermano,
quien lentamente caminó en dirección a Lan Xichen, quien ya lo esperaba en el altar.
Entrando por otra de las puertas del salón, Wei Ying busco a su alfa, quien rápidamente lo
recibió con un abrazo, mientras la ceremonia comenzaba.
Cerrando los ojos y oliendo las feromonas de Lan Wangji, Wei Ying susurró: “Lan Zhan,
estoy muy feliz…”
Capítulo 8.

Ya frente al mayor, Lan Zhan lo miro desde abajo con seriedad: "Me encontraste"

Pestañeando algo confuso, Wei Ying sonrió algo nervioso, mirando igualmente al menor: "Si,
te encontré"

Luciendo expectante, Lan Zhan siguió insistiendo tras unos segundos, repitiendo sus
palabras: "Me encontraste"

Quedándose en blanco por algunos segundos, hasta que finalmente entendido lo que Lan
Zhan quería, Wei Ying sonrió complacido, preguntándole al menor: "¿Quieres que te bese?"

Desviando la mirada sonrojado, Lan Zhan se tomó su tiempo en responderle al mayor de


manera afirmativa: "Mmm"

Sonriendo algo enternecido, Wei Ying volvió a agacharse frente al menor, y tomando su
rostro entre sus manos, volvió a besar una de sus mejillas con cariño, notando como el menor
se estremecía entre sus manos, y como se ponía más tímido aun.

"¿Te gusto?"

Bajando la mirada, Lan Zhan asintió: "Mmm"

"¿Quieres otro?"

Aun sin poder mirar al mayor por la vergüenza, Lan Zhan volvió a asentir: "Mmm"

"¡Entonces atrápame!"

Siendo tomado por sorpresa, Lan Zhan observo como Wei Wuxian lo soltaba, para comenzar
a correr entre los árboles, con esa risa llena de vida y felicidad. Reaccionando lo más rápido
que pudo, Lan Zhan comenzó a perseguir a Wei Ying por los árboles, observando como cada
vez acortaba más distancia con el joven omega que riendo seguía corriendo.

Viendo esto también, Wei Wuxian acelero aún más sus pasos, gritándole al menor: "¡No vas a
atraparme Lan Zhan!"

Sin responder, Lan Zhan también hizo lo mismo, comenzando a sentirse retado por el mayor,
algo en lo que no perdería. Corriendo así por varios minutos, en medio de la estridente risa
del mayor, Lan Zhan finalmente pudo atrapar a Wei Ying sujetándolo por la cintura con
firmeza, evitando de esta manera que el menor pudiera escapar.

Aun riendo, Wei Ying se dejó atrapar, siendo prontamente arrinconado: "Bien, bien,
Hanguang-Jun me atrapaste, eres buen cazador"

Lan Zhan no dijo nada ante sus palabras, arrinconándolo contra un árbol con firmeza,
decidido a no dejarlo ir hasta que este le diera su premio por haber ganado, esperando
expectante.

"Ya está ¿No es verdad? ¿Podrías dejarme ir Lan Zhan?"

Negando rápidamente con la cabeza, Lan Zhan se puso de puntitas, intentando asi acercar su
rostro al del mayor, apenas lográndolo por su altura: "Mmm"

Entendiendo finalmente lo que el menor quería, Wei Ying volvió a reír: "Hanguang-Jun,
Hanguang-Jun... Lo siento, olvide tu premio"

Volviendo a tomar el rostro de Lan Zhan entre sus manos, Wei Wuxian se atrevió a besar los
labios del menor, a penas con un suave toque, pero que fue suficiente para espantar al joven
Lan, el cual retrocedió de un salto cuando sus labios se encontraron, muy sonrojado.

"¡Lan Zhan! ¡Arruinaste el momento!"

Riendo divertido, Wei Ying solo pudo ver como el avergonzado Lan Zhan se tocaba los
labios de inmediato, evitando mirarlo, cada vez más rojo. Pensando que tal vez se había
pasado en aquella ocasión, Wei Ying dejo de sonreír, suspirando, decidiendo acercarse al
menor para disculparse.

Pero Lan Zhan, subiendo la vista de pronto, volvió a acercarse a Wei Ying para arrinconarlo
de nuevo contra aquel árbol, mirándolo a los ojos fijamente: "De nuevo"

Bastante sorprendido por el proceder el jade, Wei Ying solo pudo sonreír algo confuso,
mirando los dorados ojos expectantes que lo miraban desde abajo: "¿Eh? ¿A qué te refieres
Lan Zhan?"

"De nuevo, hazlo de nuevo"

Siendo ahora él quien estaba avergonzado, Wei Ying desvió la mirada, sintiendo su corazón
comenzando a latir rápidamente ¿Cómo es que ese pequeño niño podía resultar tan
encantador cuando quería? Wei Ying no lo sabía, pero ahora siendo él quien temblaba, no
supo cómo escapar de aquel sitio, bajando la mirada.

"Lan Zhan yo..."

"Tú me besaste ¿No es así?"

Asintiendo con algo de vergüenza, Wei Ying le respondió: "Lan Zhan lo siento, a veces me
apresuro demasiado, soy muy bromista así que..."

Interrumpiéndolo y estirando mucho su cuerpo, fue Lan Zhan el que beso los labios del joven
omega, sorprendiendo a este, él cual solo pudo corresponder el beso hasta que se separaron,
notando como sus mejillas se volvían completamente rojas por la vergüenza.

"No te arrepientas por lo que hiciste, Wei Wuxian debes comenzar a tomar la responsabilidad
de tus acciones"
Sin saber que decir, completamente deslumbrado por el menor, Wei Ying respondió tras unos
segundos: "Lan Zhan, yo..."

Saltando por la sorpresa, como si realmente estuvieran haciendo algo indebido, Lan Zhan y
Wei Ying se separaron de golpe, escuchando como a lo lejos la campana de Yunmeng sonaba,
indicándoles que era la hora de la cena. Mirándose a los ojos, ambos muy sonrojados, no
supieron que decirse por un rato.

"Bien, bien, volvamos, estoy hambriento" Dijo Wei Wuxian, intentando terminar con aquella
situación tan extraña.

Asintiendo a sus palabras, Lan Zhan se acercó al mayor para tomarlo cálidamente de la mano,
mientras comenzaba a caminar a su lado fuera de aquel pequeño parque lleno de árboles,
volviendo a los caminos principales de Lotus Pier. Y aunque Wei Wuxian intentaba apartar lo
que había sucedido de su mente una y otra vez, y mirando de reojo a su joven prometido al
lado, Wei Ying sintió un nuevo e increíble deseo de besarlo, antojándose de esos suaves y
cálidos labios rojos, tragando un poco de saliva.

Y sin poder aguantar más, mientras caminaban a solas en dirección al comedor principal de
Yunmeng, Wei Ying detuvo su avance, volviendo a encarar a Lan Zhan para besarlo. En esta
ocasión, el joven jade no se notó tan sorprendido, pero aun así sus ojos se abrieron más de lo
usual al haber sido besado de aquella forma. Mientras que Wei Wuxian, con los ojos cerrados
para evitar acobardarse en medio del beso, unió sus labios con los de su prometido por unos
segundos más, antes de separarse de este, muy sonrojado.

"Lan Wangji, yo soy Wei Wuxian, y jamás me arrepiento de las cosas que hago"

***

"A-Cheng ¿Tu ya te has besado con Lan Xichen?"

Siendo tomado por sorpresa ante esa pregunta, Jiang Cheng se giró de forma disimulada para
ver a Wei Wuxian, el cual caminaba más tranquilo de lo usual a su lado. Después de la cena,
todos se despidieron de manera formal de aquellos invitados Lan, y junto a varios otros
discípulos de su secta, se dirigieron todos juntos a sus habitaciones en Yunmeng. Era verdad
que el joven Wei Ying había estado especialmente extraño aquella noche en la cena, hablando
en susurros con Lan Wangji y sin dejar de estar sonrojado, pero Jiang Cheng no había notado
nada extraño hasta ese instante.

Presionando los labios con furia, Jiang Cheng le pregunto a su hermano: "Wei Wuxian ¿Qué
fue lo que hiciste?"

A la defensiva, agradecido de que su hermana estuviera distraída hablando con otros


discípulos de la secta, Wei Wuxian respondió: "¡No hice nada!"

"¿Entonces por qué me preguntas algo como eso?"

Decidiendo pensar en que responder, ya que obviamente Wei Ying no podía confesar la
verdad así como así, le respondió con una mentira: "Jiang Cheng siempre se ve tan unido a
Zewu-Jun que tengo curiosidad ¿Hasta donde llegaron en su relación? ¿Te besó? Siempre se
andan tomando de la mano tan pegados"

Sonrojándose de golpe por sus palabras, Jiang Cheng presiono la mandíbula con ligera
culpabilidad, realmente molesto con Wei Wuxian: "¿¡Que está mal contigo!? ¡Claro que no
hicimos nada! ¡Eres tan...!"

"Perdón, perdón, olvídalo..." Lo interrumpió Wei Ying, intentando acabar con aquella
situación que se había puesto incomoda.

Respirando profundo para tranquilizarse, Jiang Cheng pronto se dio cuenta de su error,
tomando a su hermano del brazo para evitar que escapara: "Bien, lo siento. Voy a responder
tus preguntas"

Sin poder escapar, fue ahora Wei Wuxian quien respiro con resignación, lamentándose en
silencio por haber preguntado algo como eso, regañándose por no haberse mantenido en
silencio.

Tomando aire, Jiang Cheng decidió responder: "Claro que aún no he besado a Lan Xichen,
eso está mal. Somos cercanos, claro, ambos entendemos que seremos pareja en un futuro, por
eso nos tomamos de la mano y a veces nos damos abrazos. Pero Wei Wuxian, besar a tu
prometido, alguien a quien no conoces ni siquiera hace un año, eso está mal"

"Odio esas ridículas reglas del tiempo de cortejo..." Se quejó Wei Wuxian en un susurro.

"No lo entiendes, no es por las reglas. Aunque muchos de los matrimonios arreglados llegan
a consumarse, hay un gran porcentaje de ellos que no lo hace, el tiempo de cortejo no son
unos meses, llegan a ser años; mira a nuestra Shijie, ella conoce a su prometido desde que
tiene 14 años, y tan solo después de 5 años de cortejo les están permitiendo casarse. Muchas
cosas suceden en el tiempo de cortejo, Wei Wuxian ¿Y si no terminas casándote con Lan
Zhan? ¿Y si el compromiso se rompe?"

Con las palabras de su hermano, Wei Ying sintió una extraña opresión en su pecho, ya que
desde que había conocido al joven Lan Zhan lo había tomado como su prometido, y de solo
pensar que este podía no llegar a serlo, un dolor indescriptible lo inundaba todo.

Continuando con su sermón, Jiang Cheng le dijo: "¿Tienes idea delo escandaloso que sería?
Ustedes aún no están unidos, ni siquiera han pasado un año de cortejo juntos ¿Te parece
apropiado? Yo sé que puedes llegar a ver a Lan Zhan como un niño pequeño, adorable; pero
él es un alfa, no debes olvidarlo ni subestimar eso jamás. Está bien que creas que puedes
vencer a todos pero... ¿Y si entras en celo frente a él? ¿Y si besarlo despierta tu celo de
pronto? ¿Crees que él se controlara?"

Wei Ying no supo que responder ante aquello, solo pudiendo suspirar: "A-Cheng... Yo... Bese
hoy a Lan Zhan"

"¡Tarado!"
Con el grito, los demás discípulos de la secta, incluida Yanli, se giraron a verlos
sorprendidos, observando a un furioso Jiang Cheng y a un avergonzado Wei Wuxian.

Preocupada, Yanli les pregunto a ambos: "A-Cheng, A-Xian... ¿Se encuentran bien? ¿Qué
pasó?"

Riendo de manera culpable, intentando controlar a Jiang Cheng a su lado, Wei Wuxian
respondio: "Nada Shijie, nada, sabes cómo es nuestro hermano con las bromas"

Prefiriendo no decir nada al respecto, Jiang Cheng siguió caminando muy molesto,
observando a su Shijie sonreír enternecida.

"A-Xian, no jueguen así" Les dijo Yanli antes de seguir su camino y su charla con los demás
discípulos de la secta.

Esperando a que todos se distrajeran, Jiang Cheng solo pudo tironear fuertemente del brazo
de Wei Ying, realmente enojado: "Tarado, eres un inconsciente..."

"Déjame ya por favor... Me estas lastimando"

Soltando finalmente a Wei Ying, Jiang Cheng se cruzó de brazo, resoplando furioso: "Solo te
pido que seas cuidadoso, no dejes a nuestra secta en la vergüenza..."

"Por favor A-Cheng" Se quejó Wei Wuxian.

Mirándolo enojado, Jiang Cheng no le respondió, caminando más rápido para alejarse de su
hermano, realmente molesto por este, comenzando a considerar si no sería buena idea tal vez
mencionarle a Lan Xichen lo que Wei Ying le confesó.

"Seré cuidadoso, nada malo sucederá" Fue lo último que dijo Wei Ying, convencido,
siguiendo a su hermano en medio de la noche, envuelto por la niebla de Yunmeng.
Capítulo 9.

El tercer día después de la llegada de Hanguang-Jun a Yunmeng, Wei Ying decidio llevarlo a
jugar al agua.

"Y este, Lan Zhan, es mi lugar favorito en todo Lotus Pier".

Mirando los muelles y las personas en el agua, Lan Zhan solo pudo asentir: "Mmm".

En esos días, el joven Jade progresivamente había comenzado a ceder ante muchos de los
caprichos de Wei Wuxian, no solo llegando a jugar con él con gusto, si no también
comenzando a responder muchas de sus preguntas y comenzando a aceptar ser tomado de la
mano y ser besado a veces.

Por su parte, Wei Ying, cada vez más contento por poder romper aquel extraño escudo de
frialdad en el menor, realmente llegaba a esforzarse mucho por hacer bien las cosas, para que
el joven Lan no se decepcionara o se enfadara con él. Para esa ocasión exactamente, Wei
Ying había visitado solo el lago esa misma mañana, y al recorrerlo, ubico un lugar en un
muelle algo lejano, con hojas de lotos y nueces aun disponibles, y aunque el agua estaba algo
alta, Wei Ying ubico ese sitio como el lugar perfecto para intentar hacer que Lan Zhan entrara
a nadar con él.

Esa calurosa tarde de primavera, el lago de Yunmeng se encontraba a rebosar de personas,


muchos discípulos de la secta Jiang se encontraban jugando, y aunque muchos de la propia
secta Lan igual se encontraban ahí, ninguno de los jóvenes vestidos de blanco se había
metido al agua, quedándose en la orilla. Ubicando aquel muelle algo alejado, Wei Ying tomo
de la mano al joven Jade, comenzando a dirigirlo en esa dirección.

"Hanguang-Jun, Hanguang-Jun, debemos jugar aquí, ven".

Siguiendo al mayor, pero aun resistiéndose un poco, Lan Zhan lo siguió al final del muelle,
soltando su mano con suavidad: "No entrare al agua".

Fingiendo un poco de tristeza y decepción, Wei Ying hizo un puchero, mirando fijamente al
joven detrás de él: "¿Por qué no? ¿Me dejaras entrar solo?"

Ante esta pregunta, Lan Zhan desvió la mirada algo molesto, evitando mirar a Wei Wuxian:
"Mmm".

Sonriendo y decidiendo dejar de presionar a Lan Wangji, Wei Ying le dio una caricia en la
cabeza antes de responderle: "Esta bien, está bien, no entraras. Que malo Hanguang-Jun".

Prefiriendo no responder, Lan Zhan se quedó en su sito, observando como Wei Ying se
quitaba las botas y las dejaba en el muelle, para luego tomar su túnica y sus pantalones para
subirlos un poco, dejando al descubierto sus piernas. Al ver aquella escena, Lan Zhan trago
un poco de saliva, notando por fin esas delgadas y largas piernas blancas, con muslos
ligeramente gruesos en su parte mas superior, muy cerca de esas amplias caderas, las cuales
siempre evitaba mirar, pues le daban sentimientos extraños, el ver las caderas o las nalgas de
Wei Ying lograba un efecto extraño en su cuerpo.

Terminando de arreglarse y sin notar la mirada de Lan Zhan sobre su cuerpo, Wei Ying sonrió
alegre: "Bien, ya estoy listo, entrare".

"¿Qué haré yo entonces?"

"Toma una cesta de paja de uno de los muelles, yo te entregaré las nueces y los lotos que
saque, y tú me ayudarás a sostenerlos".

"Mmm".

Haciendo lo que el mayor le pedía, Lan Zhan camino por ese mismo muelle hasta encontrar
una cesta de paja vacía. Después de sacudir y limpiar un poco la cesta, Lan Wangji regreso
con el mayor, el cual ya se había metido al agua, y había comenzado a chapotear un poco en
medio de las claras aguas del lago.

Al observar a su joven prometido regresar, Wei Ying dejo de salpicar en el agua, mirándolo
con una sonrisa: "¿Estás seguro de que no quieres entrar?"

Caminando hasta el borde del muelle, aun sosteniendo la cesta, Lan Zhan asintió: "Mmm".

"Bien".

Decidiendo respetar las decisiones del menor, Wei Wuxian comenzó a sumergirse en el agua,
tomando de esta las hojas de loto y las nueces, disfrutando de sentir su cuerpo mojado y de
poder calmar así un poco el calor que había estado sintiendo en esos días. Mientras que Lan
Zhan, arrodillándose en el muelle, de manera diligente le ofrecía la cesta al mayor para que
en esta depositara todos los frutos que iba sacando lentamente del agua, notando como en
pocos minutos ya varias nueces y muchas hojas de loto comenzaban a llenar la cesta.

"Lan Zhan... Me canse..."

Aun sosteniendo la cesta, Lan Wangji le dijo: "Entonces sube y descansa".

"¿Pero por qué no vienes mejor tú aquí abajo conmigo? ¿Por qué no quieres entrar al agua?"

Mirando al mayor con seriedad, dándose cuenta de que Wei Ying seguía insistiendo, Lan
Zhan no pudo evitar suspirar algo exasperado: "Wei Wuxian, yo no quiero entrar".

"¿Y si te lo pido?"

Lan Zhan desvió la mirada de manera incomoda de inmediato, notándose bastante infeliz,
pero al mismo tiempo algo emocionado, pues una parte en su interior realmente quería entrar
en el agua con su prometido.

Aun insistiendo, Wei Ying volvió a suplicar: "Por favor Lan Zhan..."
Suspirando rendido, Lan Wangji dejo la cesta en el muelle, accediendo por fin a las
peticiones del mayor: "Esta bien".

Sonriendo contento, Wei Ying observo como el joven jade se quitaba las botas y se arreglaba
la ropa con algo de torpeza, imitando lo mismo que había hecho Wei Ying antes de entrar al
agua. Al estar listo, y con una elegancia sin igual, Lan Zhan salto al lago fuera del muelle,
casi sin salpicar agua, haciendo reír a Wei Ying, que aplaudió contento el proceder de su
prometido.

Siendo observado por todos los demás miembros de la secta Lan, Hanguang-Jun se sintió
algo avergonzado, avanzando en dirección a su prometido, mirándolo fijamente, notando lo
contento que se veía.

Cuando ambos estuvieron más cerca, Wei Ying termino rodeando a Lan Wangji con sus
brazos, realmente emocionado, abrazándolo por algunos segundos: "Gracias por bajar a jugar
conmigo".

Dejándolo abrazarlo, Lan Zhan volvió a susurrar: "Mmm".

"Bien, entonces ahora te voy a enseñar como recoger nueces y hojas de loto en el agua".

Dejando de abrazar al menor para tomarlo de la mano, Wei Ying comenzó a guiar al joven
maestro Lan por el lago, justamente a esos lugares donde él sabía que había nueces de agua.
Sumergiéndose en al agua, y explicándole así a Hanguang-Jun como debía tomar las nueces
de las profundidades. Y aunque el menor no lo imito y se limitó a quedarse en el agua,
mirándolo, sin mojarse más de lo necesario, entendió por completo las palabras y la
explicación de Wei Ying.

Y es que en medio del agua, rodeado de lotos, Lan Wangji había comenzado a sentirse
extraño de nuevo, porque era como si el aroma natural del mayor, ese que desprendía de vez
en cuando, un dulce aroma a lotos, se intensificaba cuando estaba en el agua, oliendo mucho
mejor. Teniendo una gran tentación de tocarlo, cuando Wei Ying tomo nuevas nueces de las
profundidades para luego ponerlas en la cesta sobre el muelle, fue tomado de un brazo por
Lan Wangji, el cual lo acerco a su cuerpo.

"¿Lan Zhan? ¿Qué haces?"

Respirando profundo, encantado con el aroma del mayor, Lan Wangji le dijo: "Te atrape".

Pestañeando algo confuso, Wei Ying no pudo evitar sonreír, soltando las nueces para centrar
toda su atención en el menor: "Me atrapaste, pero aun así sigo sin entender..."

Lan Zhan no pudo evitar fruncir la nariz, molesto por que no lo entendieran, tirando más del
brazo del mayor como haciendo un berrinche, para luego señalar sus labios con su otra mano:
"Eso".

Entendiendo por fin a lo que el menor se refería, Wei Ying sonrió: "Oh... Quieres un beso,
está bien".
Soltándose del fuerte agarre que el joven jade había hecho en su brazo, Wei Ying se acercó
aún más a él en el agua, tomándolo del rostro con cuidado, para acercarse y comenzar a besar
sus mejillas, sonrojándose al sentir como Hanguang-Jun igual había correspondido el agarre
rodeándolo por las caderas con los brazos. Aquella era la primera vez que Lan Zhan tocaba
de esa manera al mayor.

Intentando no lucir avergonzado, Wei Wuxian siguió repartiendo besos por el rostro del
menor, por sus mejillas y su frente, haciéndolo lenta y pausadamente: "Esto es por ser bueno
y no dejarme jugar solo..."

Dejándose hacer, muy feliz, Lan Zhan respondió con un contento: "Mmm"

Sintiéndose algo avergonzado, aun en medio de toda esa gente, Wei Ying se atrevió a darle un
beso en los labios, haciendo aquel un toque un poco más largo, rozando los tibios labios de
Hanguang-Jun con los suyos por varios segundos hasta finalmente separarse.

"Y eso fue por ser tan valiente y pedirme un beso, Lan Zhan"

Las mejillas del joven jade se sonrojaron de pronto, presionando más fuerte a Wei Ying entre
sus brazos, mirándolo fijamente a los ojos Lan Zhan le dijo: "De nuevo".

Riendo, Wei Ying se dejó presionar con fuerza contra el cuerpo del joven jade, sintiendose
algo lastimado, pero sin quejarse: "¿Otro beso?"

Asintiendo, Lan Wangji volvió a decir: "De nuevo".

Riendo por el atrevimiento del menor, Wei Wuxian acaricio suavemente las mejillas de este,
antes de acercarse a él y darle otro beso en los labios, en esta ocasión un poco mas largo,
esperando satisfacer al menor.

Dejándose besar otra vez, suavizando su expresión, al terminar Lan Zhan no soltó su agarre
sobre las caderas del mayor, haciéndolo más fuerte incluso, deseoso de más: "De nuevo".

Poniendo una expresión de dolor, Wei Ying rápidamente bajó sus manos a los brazos del
menor, realmente adolorido por el fuerte agarre en sus caderas: "Hanguang-Jun... Auch...
Duele, me estas apretando mucho".

Notando que había lastimado a su omega, Lan Zhan rápidamente deshizo el agarre en sus
caderas, sin saber cómo reaccionar ante lo arrepentido que se encontraba por haberlo dañado:
"Wei Wuxian... Lo siento".

Sonriendo aun un poco adolorido, Wei Ying volvió a besar la frente de Hanguang-Jun,
mirándolo a los ojos: "Lan Zhan, no es necesario que me atrapes siempre que quieras un
beso. Solo debes pedirlo, y yo siempre te daré lo que necesites".

Antes de que el menor pudiera responder si quiera, Wei Ying volvió a besar sus labios, por un
tiempo largo, atreviéndose a darle una suave lamida a los labios de este antes de separarse,
escuchando como Lan Wangji había soltado un jadeo de sorpresa con la lamida.
Volviendo a tomarlo de la mano, mirándolo a los ojos de manera muy traviesa, Wei Ying le
dijo: "Yo haré todo para complacerte, Lan Zhan... Seré tu esposo ¿No es verdad? Úsame tanto
como quieras, aún si es todos los días, yo aceptare todo lo que tú me propongas".

Wei Wuxian no estaba seguro de que el menor entendiera a que se refería, después de todo
era bastante joven; y aunque de cierta manera le gustaba la idea de poder corromper al joven
jade, Wei Ying decidió tomar las cosas con un poco más de calma, ya que tampoco quería
terminar asustándolo. Afianzando su agarre en Lan Zhan, Wei Wuxian comenzó a dirigirlo a
una parte más honda del lago, donde podrían nadar.

"Eres realmente fuerte Hanguang-Jun, de verdad fuerte..."

Aun ligeramente sonrojado, Lan Zhan volvió a tocar sus labios, bastante consternado por lo
que acaba de pasar, llenándolo de un ligero pánico: "Lo siento".

"¡Ya te dije que está bien! ¡Ahora sigue jugando conmigo!"

Asintiendo a las palabras del mayor, Lan Zhan lo siguió obedientemente por el lago a una
parte más honda, prefiriendo ignorar a las personas que estaban cerca de ambos, mirándolos
fijamente.
Capítulo 10.

Tomando cuidadosamente la hoja de loto de las manos de Lan Wangji, Wei Wuxian soltó un
par de risas divertido: "¡Lo estás haciendo mal!"

Sintiéndose algo frustrado por sus torpes movimientos al tomar las semillas de loto y al
pelarlas, Hanguang-Jun no dijo nada en lo absoluto, solo pudiendo observar de reojo como
Wei Ying tomaba las semillas y las pelaba con mucha facilidad.

"Debes hacerlo así, lento, de esta manera la semilla no se romperá o se maltratara cuando la
tomes".

Mirando como Wei Ying había logrado tomar una semilla casi de forma perfecta, Lan Wangji
solo pudo susurrar: "Mmm".

Volviendo a reír por la obvia frustración del menor, Wei Wuxian termino de pelar aquella
semilla de loto, ofreciéndosela al menor: "Abre la boca"

Haciéndose para atrás intentando rechazar la semilla, Lan Zhan miro al mayor con cara algo
seria: "¿Por qué quieres dármela de comer?"

"Son las reglas, yo pele la semilla, yo debo dártela".

"No creo que eso sea verdad".

"Te lo prometo, está en el reglamento de la secta Yunmeng Jiang, junto con no hacer enfadar
a Madam Yu por tonterías y tener cuidado con la comida con ajo porque a Jiang Cheng no le
gusta".

"Patético".

Riendo divertido, Wei Ying observó como su joven prometido desviaba la mirada algo
sonrojado, intentando no hacer contacto visual con el otro: "Vamos Lan Zhan... Solo por esta
vez".

Ya había pasado una semana desde que la comitiva de los Lan había llegado a Yunmeng, y
mientras los demás discípulos se habían llevado muy bien con los jóvenes de Yunmeng, Wei
Wuxian y Lan Wangji habían tenido un lento acercamiento, pasando casi todos los días
juntos, aprendiendo lentamente a soportarse.

"¡Lan Zhan!"

Suspirando resignado, sabiendo que Wei Ying no dejaría de molestarlo por lo obstinado que
era, Lan Zhan finalmente accedió a comer la semilla: "Esta bien".

Sonriendo satisfecho, Wei Ying acerco sus dedos a los labios de Lan Zhan, depositando en
estos la pequeña semilla de loto, observando como el menor se había sonrojado un poco,
aceptando la semilla para comerla en silencio. Prefiriendo no decir nada para no hacerlo
sentir mal y que no aceptara comer de sus dedos de nuevo, tomo las ultimas semillas de esa
hoja para comerlas por sí mismo, saboreándolas contento.

Se encontraban en uno de los tantos salones de Yunmeng, esos que se usaban para tomar el
té, sentados muy cerca de la puerta abierta de esta, comiendo las semillas de aquellas hojas
que habían recogido hace tan solo un par de días. Aquel día de primavera había sido
especialmente caluroso, uno de esos días en los que Wei Ying amaría poder estar en el lago
jugando. Pero sabiendo que era muy poco probable que su Hanguang-Jun aceptara entrar en
el lago otra vez por un tiempo, prefirió quedarse con él en medio del calor, ya que había
comenzado a disfrutar realmente de su compañía.

Tomando una nueva hoja de loto de la cesta, Wei Ying tomo la primera semilla, observando
como al pelarla esta estaba casi blanca: "¡Bien! ¡Está bien madura!"

"¿Eso es bueno?" Pregunto Lan Wangji con curiosidad.

Wei Ying asintió, comenzando a pelar las semillas, dejándole ver a Lan Zhan que cuando le
quito la cascara esta semilla era casi de color blanco, parecida al algodón: "Cuando las
semillas son maduras son más dulces y más blancas ¿Ves?"

Curioso, Lan Zhan observo aquella semilla casi blanca entre los dedos de Wei Ying, el cual
después de enseñársela a la menor, acerco está a sus labios, dándosela nuevamente de comer.
Abriendo la boca obediente y aún muy avergonzado, Lan Zhan dejo que Wei Ying le diera la
semilla, maravillándose del sabor en silencio, ya que realmente sabía mucho mejor que las
otras que había comido.

Sonriendo satisfecho, Wei Wuxian observo como el rostro de Hanguang-Jun se llenaba de


una cierta sorpresa, sintiéndose muy contento de que hubiera comido una buena semilla de
loto: "¿Viste? Si sabe muy bien".

"Mmm".

Sin dejar de sonreír, Wei Ying siguió tomando semillas de la hoja del loto, pelándolas para
dárselas en los labios a su Hanguang-Jun, mientras charlaba con el joven jade de temas
triviales, disfrutando de comer junto al menor. De esa manera fueron vistos por Yianli, la cual
caminaba tranquila en dirección a las cocinas de Yunmeng portando una sombrilla, y al ver su
joven hermano junto a su prometido en el salón del té con las puertas abiertas, decidió
acercarse a ambos para saludarlos, sin poder evitar sentirse enternecida al darse cuenta de lo
cercanos que estos se habían vuelto.

Sorprendido, dejando de comer semillas de loto, Wei Wuxian observo a su hermana


acercándose, haciéndole una pequeña reverencia: "Shijie..."

Correspondiendo la reverencia con elegancia, Yanli miro a ambos jóvenes frente a ella
realmente contenta: "A-Xian, Hanguan-Jun ¿Estan descansando?"

Haciendo una reverencia elegante de igual manera, Lan Zhan no pudo evitar sonrojarse un
poco, sin saber si la joven los había visto a ambos en ese plan tan romántico dándose de
comer el uno al otro, prefiriendo dejar que Wei Wuxian hablara.

"Teniamos planeado ir al lago otra vez, pero está haciendo mucho calor... Shijie... No quiero
ni moverme".

Sonriendo divertida con la respuesta de su hermano, Yianli no pudo evitar negar suavemente
con la cabeza: "A-Xian aún te comportas como un niño... ¿Por qué no van al campo de
entrenamiento? Escuche que muchos de los chicos están ahí jugando".

Wei Wuxian ladeo la cabeza algo intrigado, y es que como parte de su fiesta de compromiso
en Yunmeng, muchas de las actividades para los jóvenes se habían suspendido, y entre ellas
estaban los entrenamientos. Por lo que el "jugar" en el campo de entrenamiento, a Wei
Wuxian en realidad le sonaba como que los discípulos más jóvenes habían decidió entrenar
un poco mientras su tio no estaba.

"Jiang Cheng está ahí" Dijo Shijie con calma.

"¿Jiang Cheng? ¿Y por qué no está con su prometido?"

Interviniendo en la conversación, Lan Zhan decidió responderle esa pregunta a su prometido:


"Mi hermano esta con el líder de la secta Jiang, está ayudando con el papeleo".

Suspirando algo melancolica, Yanli también asintió ante las palabras de Lan Zhan, diciendo:
"Igual que A-Zixuan".

Aquel día había sido el designado para hacer la revisión de las finanzas de la secta, después
de todo, la boda de Yanli ya se había programado para dentro de solo 3 meses, así que tanto
la secta Jin como la secta Jiang debían revisar cuidadosamente sus presupuestos para la
ceremonia. Jiang Fengmian y había anunciado que ese día se encargaría de revisar los papeles
de los gastos por sí mismo, pero algo que Wei Wuxian nunca imaginó fue que pediría ayuda
de los dos otros próximos líderes de la secta Lan y Jin.

"Ya veo... Entonces esa es la razón por la cual no estas con el pavo real".

Suspirando resignada, Yanli regaño a su hermano: "A-Xian, no lo llames así".

Frunciendo el ceño molesto, Wei Ying se cruzó de brazos, como siempre que escuchaba de
ese pedante y molesto tipo: "Esta bien Shijie..."

"Se bueno A-Xian, y te preparare hoy mi sopa de semillas de loto con costilla de cordero".

Los ojos de Wei Wuxian casi se iluminaron, mirando a su hermana realmente emocionado:
"¡Gracias Shijie!"

Sonriendo contenta, Yanli solo asintió, comenzando a alejarse de ambos jóvenes: "Te
preparare un cuenco para esta noche".

Mirando a Hanguang-Jun junto a él, Wei Ying sonrió: "Shijie, preparara un cuenco para Lan
Zhan también por favor..."
Sorprendiéndose un poco, la joven Jiang se giró por solo unos segundos para mirar a la pareja
que seguía sentada cerca de la puerta. Era la primera vez que Wei Ying le pedía que preparara
su sopa para alguien más que no fuera el mismo, lo cual no podía evitar sorprenderla,
accediendo de inmediato: "Entonces también preparare un cuenco para el joven maestro
Lan".

Sintiéndose aludido, Lan Zhan hizo una nueva reverencia, muy agradecido: "Muchas gracias
señorita Jiang".

Sonriendo nuevamente, Yanli siguió su camino a las cocinas de Yunmeng, sintiéndose algo
sonrojada por las elegantes palabras del joven Lan Wangji. Este realmente sabía cómo ser un
seductor.

Aun muy emocionado por comer la sopa, Wei Ying se tomó del brazo de Lan Zhan,
comenzando a contarle sobre la sopa de su hermana: "¡La sopa de loto con costilla de cordero
de mi hermana te encantará, Lan Zhan! Es tan deliciosa que no podrás quitarte el sabor en
semanas, y solo querrás comerla una y otra vez..."

Dejando que Wei Ying lo tocara y lo jalara un poco, Lan Zhan solo lo miro fijamente,
respondiéndole con su usual: "Mmm".

"Es tan deliciosa... Recuerdo que de pequeño era lo único que quería comer, eso en el
desayuno y en la cena, me encantaba. Incluso creo que su sopa es mágica, cuando estas
enfermo te devuelve a la vida, te hace sentir mejor".

"Mmm".

"¿Entiendes lo que te digo? Una sopa mágica, deliciosa..."

Sonriendo ante la emoción del mayor, que cuando hablaba tanto y sonreía de esa forma, se le
hacía especialmente lindo a Lan Zhan, el cual mirándolo fijamente sintió un gran impulso de
acariciar su rostro. Y aunque pensó seriamente en hacerlo, decidiendo contenerse, ya que esas
demostraciones de afecto aun eran demasiado para el joven Hanguang-Jun.

"¿Entonces quieres ir a entrenar?"

Asintiendo a sus palabras, Lan Zhan le respondió: "Si tú quieres ir, iremos".

Sin dejar de sonreír, Wei Ying volvió a tirar del brazo del joven Lan, muy contento: "¡Si
quiero ir!"

Lan Zhan solo sonrió un poco, dejando que Wei Ying lo jalara hasta hacer que se pusiera de
pie, mientras volvía a hablar de la mágica sopa de loto de su hermana.

***

Caminando por los verdes prados de Yunmeng, ambos prontamente llegaron a un tipo de
coliseo, el cual tenía pisos de piedra y colindaba en la parte posterior con el bosque de Lotus
Pier, un lugar que por lo general tenia varas máquinas de entrenamiento, entre muñecos y
otras cosas; pero desde hace días, por el compromiso, se encontraba vacío. Sin embargo, en el
lugar, habían varios grupos de personas, entre algunos discípulos que iban a charlar o a jugar,
o grupos de niños más jóvenes que estaban con Jiang Cheng entrenando de verdad.

Parándose justo en la entrada, Wei Ying se volteó para ver a Lan Zhan, aun sin dejar de
sonreír: "Y este es mi tercer lugar favorito en Yunmeng".

Mirando todo con curiosidad, Lan Wangji se dio cuenta de lo diferente que era del lugar de
entrenamiento de Gusu, el cual se encontraba en los interiores de un dojo: "¿Y cómo entrenan
aquí?"

Sujetando a Suibian con un poco más de firmeza, Wei Wuxian comenzó a caminar al lado de
Lan Wangji por el campo de entrenamiento, mirando a todos los que estaban ahí:
"Principalmente artes marciales, aprender el uso de la espada, y usamos los arcos con las
cometas".

"¿Cometas?"

Antes de ir al campo de entrenamiento, ambos habían ido por sus espadas, cargándolas
consigo mientras caminaban por el lugar. Aquella no era la primera vez que Wei Wuxian veía
a Bichen, pero si era la primera vez que la veía tan de cerca, llenándolo de curiosidad,
pensando en cómo podría pedirle a Hanguang-Jun que la dejara sostenerla por un rato.

Asintiendo a su pregunta, Wei Ying señalo hacia el bosque: "Hacemos volar cometas hechas
por nosotros mismos, y cuando ya están en alto disparamos las flechas a ellas. El que derribe
la cometa que llegue más lejos es el ganador".

Bastante curioso con aquella peculiar forma de entrenar, Lan Wangji solo asintió: "Mmm".

Pronto, la pareja fue notada por un grupo de alfas. Estos eran de la promoción de Jiang
Cheng y Wei Wuxian, por lo que eran los discípulos mayores, y entre ellos estaba un alfa
arrogante, el cual en secreto odiaba a Wei Wuxian, ya que no podía soportar que el omega
tuviera un poder espiritual más grande que el suyo, y de que en cierto momento de su vida lo
hubiera rechazado y se hubiera negado a salir con él.

Haciendo comentarios en susurros con sus compañeros, el arrogante alfa de la secta Yunmeng
Jiang miro con cierta burla a Wei Ying, pronunciando: "¿Lo vieron? Su novio es tan pequeño
como un llavero..."

A pesar de que ese grupo de alfas había estado hablando en susurros, debido a que Wei Ying
y Lan Zhan habían estado pasando junto a ellos en su camino por el campo de entrenamiento,
el mayor pudo escuchar claramente las palabras de ese alfa, intentando contenerse, ya que
aunque Lan Wangji también los había escuchado aparentemente no estaba enfadado o
irritado, aun mirando todo con curiosidad.

Sin embargo, el otro alfa, celoso y ciertamente posesivo con ese omega que antes le había
gustado, siguió con sus ataques al joven Jade, mirándolo con mucho desprecio: "Todos dicen
que los discípulos de la secta Lan son tan elegantes y cuidadosos que ni siquiera salen de
cacería nocturna, con esas ropas tan blancas... Seguramente ese pequeño niño alfa ni siquiera
sabe usar esa espada, debe ser un accesorio de belleza, como esa bonita cinta en su frente".
Furioso por las palabras del alfa, Wei Wuxian intento apresurar el paso, tomando
cuidadosamente a Lan Wangji del brazo, conteniéndose mucho para no estallar. Realmente no
quería iniciar una pelea a puños con otro alfa frente a su prometido, le había costado mucho
lograr que Lan Wangji dejara de mirarlo como un salvaje o un imbécil, y no iba a arruinar
todo su progreso solo por un alfa idiota.

Sin embargo, el alfa de la secta Jiang, notando que Wei Wuxian no reaccionaba por los
ataques al joven Lan, decidió atacarlo de frente entonces, esperando así su preciada pelea con
el omega: "Y ese Wei Wuxian, omega desagradable. Seguro aceptó ese compromiso por que
no tenía más opción, ya es tan mayor... Acepto casarse con un alfa menor que él solo porque
nadie más lo quería..."

Ante estas palabras, fue Lan Zhan quien reacciono, dejando de caminar y girándose de golpe,
aun a pesar de los esfuerzos de Wei Ying por seguirlo jalando, encarando al alfa detrás de él,
mirándolo con la cara más seria que nunca.

Sintiéndose feliz por poder lograr una reacción por fin, el alfa de la secta Jiang dejo su grupo
de amigos con una sonrisa burlona, encarando a Lan Wangji: "¿Qué pasó niño alfa? ¿Te
molesta que digan las verdades de tu unión con ese asqueroso omega?"

Preocupado, mirando de manera furiosa al alfa de su propia secta, Wei Ying tomo a su
prometido del brazo rápidamente, intentando que siguiera caminando: "Lan Zhan, vamos,
tengo muchas cosas que mostrarte aun".

Aun con ese rostro serio, impropio de su edad, Lan Wangji ignoró por completo a Wei
Wuxian, mirando fijamente a los ojos al otro alfa, realmente enojado: "Cuida tus palabras".

Con aquella frase dicha por un niño, todos los alfas de la secta se rieron, mientras que el alfa
de la secta Yunmeng Jiang se acercó de manera amenazante a ambos.
Capítulo 11.
Chapter Notes

Hola a todos!

Si, esta es la primera vez que me dirijo a ustedes en Ao3, y primeramente es para
agradecerles por leer este fanfic, esperando que les esté gustando mucho, aclarando que
acepto todas sus críticas y recomendaciones de igual manera.

También es para anunciar que este es el capítulo prohibido en Wattpad, así que aquí
estará sin censura y disponible para todos los que quieran leerlo de esta forma.

Sin más, los animo a leer la obra en Wattpad si lo desean, y a seguirme en mi página de
Facebook donde pongo otro tanto de cositas interesantes.

(Pensaba poner una advertencia o alguna mamada así por eso de que aquí hay un menor
"lastimado", pero me parecen estupideces, así que simplemente disfruten el capitulo y
entiendan por qué wattpad es tan ridículo al obligarme a censurar algo como esto)

Muchas gracias por leer el capítulo!

Un beso! ❤️
Link a la obra en Wattpad:
https://my.w.tt/CMTe7HPe55

Link de mi página de Facebook:


https://www.facebook.com/Jessisaylu/

Aun con ese rostro serio, impropio de su edad, Lan Wangji ignoro por completo a Wei
Wuxian, mirando fijamente a los ojos al otro alfa, realmente enojado: "Cuida tus palabras"

Con aquella frase dicha por un niño, todos los alfas de la secta se rieron, mientras que el alfa
de la secta Jiang se acercó de manera amenazante a ambos, notando como Wei Wuxian
rápidamente se ponía en su camino: "¿Qué cuide mis palabras? ¿Quién te crees que eres,
mocoso?"

Mirándolo con obvio desprecio, Lan Zhan solo le dijo: "Tu no estas calificado para hablar
conmigo, eres de un nivel demasiado bajo, y tu poder espiritual es demasiado pobre".

Algo asustado, Wei Wuixian intento interponerse entre ambos alfas, poniendo a Lan Wangji
detrás de él; pero el joven jade rápidamente se movió de su sitio para quedar nuevamente
frente a ese altanero alfa de la secta Jiang, mirándolo desde abajo, notando lo furioso que el
otro alfa se encontraba.

"¿Entonces crees que un pequeño niño como tu puede vencerme en una pelea? ¡Eres
ridículo!"

Mirándolo de manera escéptica, Lan Wangji solo dijo: "No necesito ser mayor para ganarte,
yo siempre seré más fuerte que tú. Patético"

Cada vez más enojado, el alfa de la secta Jiang grito: "Vénceme entonces ¡Quiero cortarte
con mi espada!"

Ahora si realmente preocupado, Wei Wuxian se puso justamente frente al joven Lan Wangji,
tomándolo de los hombros para evitar que se escapara de nuevo: "Lan Zhan, en serio no es
necesario. Yo no estoy molesto ¿Entiendes? Déjalo pasar. Por favor no pelees con él".

Wei Wuxian había luchado varias veces contra ese alfa arrogante, un tipo muy musculoso que
no tenía demasiada técnica, pero si una fuerza abrumadora al dar sus golpes. Y aunque todas
las peleas que habían tenido las había ganado, eso había pasado por que habían sido peleas
reguladas y controladas, nunca habían tenido una pelea seria sin autoridades que pudieran
intervenir en medio.

Girándose para ver a Wei Ying con más calma, Lan Zhan le dijo: "Pero a mi si me molesta".

"¿Por qué? Déjalo, ese imbécil siempre es así. Por favor no caigas en sus provocaciones, no
pelees con él".

Asintiendo a sus palabras, Lan Zhan observo de reojo como le extendían su espada al otro
alfa, el cual muy enfadado la desenvaino mirándolo también a él: "Él puede decir lo que
quiera de mí, no me importa. Pero si alguien dice o hace algo en contra de Wei Ying, yo me
encargare de matarlo".

Con estas palabras, el corazón de Wei Ying se aceleró por un segundo, mirando los dorados
ojos de Lan Wangji, los cuales ahora se habían vuelto muy fieros, quedándose en silencio,
pues no sabía que responderle.

Viendo aquella escena, el alfa de la secta Jiang resoplo molesto, blandiendo su espada de un
lado al otro: "¿Qué pasa niñito? ¿Tu prometido te dijo el miedo que me tiene?"

Atreviéndose a acariciar una de las mejillas de Wei Ying, Lan Zhan intento tranquilizarlo
para que lo dejara pelear: "Wei Ying, está bien".

"Lan Zhan... Es en serio... No pelees por favor"

Aun acariciando una de sus mejillas, Lan Zhan logró zafarse del agarre en sus hombros,
separándose del mayor: "Estaré bien".

Lan Zhan no se encontraba en Gusu, y no estaba bajo su reglamento de 3000 preceptos. Así
que podía pelear si quería, mirando fieramente al alfa frente a él, comenzando a avanzar en su
dirección.
Haciéndose a un lado con los demás discípulos, Wei Ying solo pudo mirar angustiado a su
joven prometido en aquella escena, susurrando: "Lan Zhan por favor no lo hagas"

Sonriendo arrogante, el alfa de la secta Yunmeng Jiang se quedó a una distancia prudente del
joven jade, provocándolo una vez más antes de comenzar la pelea: "Creí que te acobardarías,
Wei Ying parece más tu madre que tu esposa. Temía que le hicieras caso a tu madre"

Presionando las manos en puños por esa provocación, sosteniendo a Suibian fuertemente
entre sus dedos, Wei Ying no pudo hacer más que observar a Lan Zhan desenvainar a Bichen,
preparado para pelear. Mientras el otro alfa seguía riéndoseos de forma altanera, en un rápido
movimiento, Lan Wangji corrió en su dirección y dio su primer ataque con mucha rapidez,
golpeando varias veces al otro alfa con Bichen. Y el mayor, sorprendido, apenas si pudo
cubrirse.

Al ver aquella rapidez y ese tipo de técnica desconocida para todos ellos, los miembros de la
secta Yunmeng Jiang guardaron respetuoso silencio, observando como Lan Zhan golpeaba al
otro alfa con todas sus fuerzas en una de las piernas para tirarlo al piso y luego separarse de
este, mirándolo con superioridad.

Furioso por haber sido tirado al piso en menos de 5 segundos por aquel joven Lan, el alfa de
la secta Jiang se apresuró a ponerse de pie, siendo ahora este quien levantó su espada para
atacar a Hanguang-Jun, lanzando un ataque directo, el cual hizo estremecer a Wei Ying con
terror, teniendo un impulso de correr a defender al menor. Pero Lan Zhan, con un elegante y
suave movimiento, fue capaz de esquivar el ataque con facilidad, interponiendo a Bichen y
empujando la hoja de la espada contraria, para volver a revertir el asunto y comenzar a atacar
al contrincante con rapidez y fuerza, solo permitiendo ver los reflejos azules de su espada
moviéndose rápidamente y cortando el aire.

Finalmente sin poder defenderse, el alfa de la secta Jiang retrocedió con un quejido,
observando un largo corte por todo su pecho, por el cual comenzó a filtrarse la sangre. Lan
Zhan estaba siguiendo al pie de la letra las reglas de un combate amistoso, atacando con la
parte menos filosa de su espada, y haciendo pequeños cortes finos con Bichen, dispuesto a
lastimar al contrincante, pero sin ser letal. Pues esto era un combate amistoso entre dos
miembros de una secta, no una pelea real en la cual debían matar al otro.

Bastante sorprendido por la habilidad de su prometido, Wei Ying se quedó en su sitio,


observando como el alfa retrocedió ante los ataques de Lan Zhan, diciéndole a este: "Bastante
bien niño, supongo que eres más fuerte de lo que aparentas"

Sin responder a las provocaciones del alfa frente a sí mismo, Lan Zhan no abandono su
posición de defensa, mirando fijamente al mayor frente a él, alerta ante su siguiente
movimiento. Pronto, el otro alfa volvió a atacarlo, en esta ocasión con un poco más de fuerza,
siendo nuevamente repelido por Lan Zhan, el cual aparentemente aburrido por la fácil pelea,
volvió a revertir el ataque y en pocos movimientos de su espada, nuevamente corto
ligeramente la piel del otro pero ahora en su espalda.

En medio de los ataques que se hacían cada vez más constantes, Wei Ying pudo notar que el
discípulo de la secta Junmeng Jiang no iba con ataques usuales para un entrenamiento, él
estaba usando técnicas agresivas de su clan, unas que ellos tenían prohibidas practicar con
otros discípulos para practicar, pues eran muy peligrosas para el contrincante.

"Lan Zhan..." Susurró Wei Ying angustiado, cada vez más preocupado por el bienestar de su
prometido.

Al ver lo que sucedía, Jiang Cheng abandono a los niños con los que entrenaba para acercarse
a Wei Ying, igualmente alarmado: "¿¡Que están haciendo!?

Wei Ying no pudo responder, aun con las manos presionadas en puños, observando como su
joven novio había hecho una elegante vuelta en el aire, quedando al lado desprotegido de su
contrincante. Viéndose con el camino libre, Lan Wangji golpeo fuertemente en el abdomen
del otro alfa con la empuñadura de su espada, haciéndolo doblarse de dolor, y pateando una
de sus piernas, volvió a derribarlo en el piso.

"Discúlpate" Ordenó Lan Zhan con los dientes presionados, observando a su contrincante en
el piso.

Poniéndose de pie nuevamente, furioso, el alfa de la secta Jiang solo pudo mirar a su
contrincante más enojado aun al darse cuenta de que este era más fuerte que él, internando
provocarlo de nuevo para distraerlo: "¿Así planeas proteger el honor de tu omega? ¿Sin
atacar?" Preguntó burlándose de los ataques del joven Lan, de los cuales no podía defenderse
por completo, terminando con el cuerpo lleno de cortes delgados.

Aun sin responder, los dorados ojos de Lan Zhan se fijaron solo por un segundo en Wei Ying
antes de volver a mirar al mayor frente a él, tan serio y calmado como era usual.

Con seriedad y volviendo a levantar a Bichen dispuesto a atacar, Lan Zhan exigió
nuevamente: "Discúlpate".

"Patético... Eso dijiste hace rato. Pero aquí el único patético eres tú, y aunque no quieres
demostrarlo estás cansado, como el niñito asustado que eres. Regresa a casa con tus mil
reglas mocoso, no eres contrincante para mi" Continuo el alfa con el mismo tono altanero:
"Voy a acabar ahora".

Notando que no iba a vencer al joven Lan, el alfa de la secta Jiang decidió usar una técnica
letal, aun sabiendo que estaba prohibida incluso en su propia secta por lo agresiva que era.
Volviendo a avanzar en dirección a Lan Zhan, el alfa de la secta Jiang hizo un movimiento
que Wei Ying conocía bien, pues era bastante complicado de realizar y solo unos pocos
discípulos de la secta lo conseguían. Consistía en acercarse al contrincante por el lado
izquierdo de sus cuerpos, y fingiendo hacer un ataque alto que iría directamente al cuello,
girar de inmediato para dar un fuerte golpe en el centro de sus pechos sobre el esternón para
lograr deshacer su defensa, y luego bajando su espada nuevamente, terminar apuñalándolos
profundamente en el centro del abdomen, asesinando o causando una lesión sumamente grave
al contrincante. Un tipo de ataque muy austero para usar con alguien en un combate
supuestamente amistoso.

Notando las intenciones del otro alfa antes que cualquiera, el cuerpo de Wei Ying se movió
como por instinto, lleno de pánico: "¡Lan Zhan!"
Corriendo rápidamente, pudo ver como en una fracción de segundo, el alfa de la secta
Yunmeng había lanzado el ataque alto con su espada, y después de ser hábilmente bloqueado
por Lan Zhan, dio un giro sobre sí mismo para golpear con todas sus fuerzas el pecho del
menor, el cual con una cara llena de dolor se replegó y escupió un poco de sangre. Sonriendo
de forma arrogante, el alfa volvió a levantar su espada, preparado para el movimiento final
del ataque, a punto de apuñalar el abdomen de Hanguang-Jun.

Pero de pronto, Suibian abandono su funda y fue directamente por la espada que amenazaba a
Lan Zhan, y aunque evito que la hoja de esta se introdujera en su abdomen, al ser expulsada
de la mano del otro alfa esta sí pudo cortar el antebrazo derecho de Lan Wangji con
profundidad, haciendo que este también soltara a Bichen.

Poniéndose frente a Lan Zhan para protegerlo, Wei Ying comenzó a arder en furia,
amenazando directamente al discípulo de la secta Jiang con Suibian, poniendo está en su
cuello, haciéndolo retroceder: "¿¡Pero qué te pasa!? ¡Pudiste matarlo!"

El desarmado alfa, antes arrogante, notando que Wei Wuxian estaba realmente furioso,
retrocedió aterrado, notando como la afilada hoja de Suibian comenzaba a introducirse en su
cuello: "¡Wei Wuxian perdóname! ¡No lo hagas por favor!"

"¡Debería asesinarte ahora! ¡Maldito cerdo!" Rugió Wei Wuxian en un grito, realmente
furioso.

Realmente dispuesto a cortarle la garganta al alfa frente así mismo, Wei Wuxian fue detenido
por una suave y pequeña mano que lo tomo de la muñeca con firmeza, haciéndolo retroceder:
"Wei Ying" Dijo Lan Zhan, tirando con más fuerza del mayor: "Basta, ya es suficiente".

Mirando de reojo a su alfa, los ojos de Wei Wuxian se llenaron de lágrimas, y soltando a
Suibian, Wei Ying rápidamente se abalanzó sobre Lan Zhan: "¿Estas bien? Dime que estas
bien, por favor..."

"Estoy bien, tranquilo".

"Lan Zhan, Lan Zhan... ¡Te dije que no lo hicieras!" Reclamó Wei Ying sin dejar de abrazar
al menor: "¡Nunca me escuchas!"

Desviando la mirada culpable, Lan Zhan solo pudo mirar al aterrado alfa de la secta
Yunmeng Jiang que se sujetaba el cuello adolorido, mirando también la escena.

"No hagas eso de nuevo, por favor Lan Zhan, no me preocupes así otra vez..."

Estrechándolo con toda su fuerza entre sus brazos, Wei Wuxian siguió llorando apoyado en el
hombro del menor, mientras que Lan Zhan, sin quejarse en lo absoluto, lo dejo llorar
tranquilo, abrazándolo también por la cintura con su brazo izquierdo el cual no estaba herido.

Pronto, poco después de escuchar todo el alboroto y ser advertidos por los sirvientes, Jiang
Fengmian y Lan Xichen llegaron corriendo al área de entrenamientos, encontrándose con la
terrible escena.
"¡Wangji!" Dijo Lan Xichen alarmado, notando que su hermano estaba sangrando,
acercándose más en su dirección: "¿Qué fue lo que paso?"

Por su lado, el líder de la secta Jiang se acercó a los demás discípulos presentes y al alfa
arrogante de su secta, acompañado por Jiang Cheng, exigiendo explicaciones y dando
castigos de inmediato.

Y aunque Zewu-Jun pronto llego al lugar donde su hermano se encontraba y lo tomo


inmediatamente del brazo derecho para ver la herida que no dejaba de sangrar, Wei Wuxian
no soltó al menor ni por un segundo, deshecho en lágrimas, llamando así la atención de Lan
Xichen, pues a pesar de que su hermano era el herido, era Lan Wangji quien estaba
tranquilizando a su prometido.

"¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué?" Siguió repitiendo Wei Ying en medio de sus incesantes
sollozos.

Sintiéndose muy mal, Lan Zhan solo pudo dar torpes caricias en la espalda de su prometido,
intentando tranquilizarlo: "Wei Ying, perdóname".

"¡No lo hare! ¡No quiero perdonarte! ¡Estoy muy enfadado!"

A pesar de la tensa situación, Lan Xichen solo pudo sonreír un poco, mirando a la joven
pareja abrazada, enfocando sus ojos en el arrepentido pero contento rostro de Lan Zhan. Y es
que el menor a pesar de sentirse triste por haber hecho sufrir a Wei Ying, también se notaba
muy contento de que el mayor lo hubiera cuidado de esa forma.

"Te odio mucho ahora..."

Bajando la mirada, Lan Zhan solo dijo: "No me odies por favor..."

"¡Lan Zhan! ¡Eres un tonto!"


Capítulo 12.

Finalmente la noche había caído sobre Lotus Pier y todo había terminado por tranquilizarse
después de aquellos inusuales acontecimientos que habían tenido lugar en la tarde. Con
castigos dados y ya todo más en paz, Lan Wangji fue llevado a su habitación privada en
Yunmeng por su hermano Lan Huan, donde fue visitado por un curandero para sanar su
herida.

Y aunque no era lo usual, nadie le impido a Wei Wuxian el acompañar a su prometido a su


habitación privada.

"Eres un tonto... Realmente un tonto..." Siguió reclamando Wei Ying, tomando fuertemente al
joven jade de la mano, sentado junto a él en la cama.

"Lo siento..." Se disculpó Lan Wangji en un susurro, con la mirada baja por el
arrepentimiento.

Mirando esto a cierta distancia, Lan Xichen solo pudo sonreír, sintiéndose bastante
enternecido al observar aquella interacción entre ambos. Y aunque en una situación normal,
lo obvio hubiera sido que Wei Wuxian calmara a su prometido después de ser herido, en
realidad era Lan Wangji el que tenía que consolar al mayor, tranquilizándolo con suaves
palabras y sin soltar su mano.

Ambos jóvenes se encontraban en la cama de Lan Wangji, sentados en el borde, mientras que
uno de los curanderos más experimentados de Yunmeng había asistido al lugar para tratar la
profunda herida del brazo del joven jade, limpiando esta y haciendo pequeñas puntadas antes
de cubrirla con una gaza. Ya un poco más calmado, dejando de llorar, Wei Ying se había
sostenido de la mano izquierda del menor con fuerza, mientras que aun reclamándole a Lan
Zhan por su imprudencia, no podía apartar los ojos de la herida del menor, observando
realmente desagradado como esta era atendida de una forma tan dolorosa, algo que lo hacía
apenarse mucho por Lan Zhan. Pero el menor, ni siquiera perturbado, solo se notaba
arrepentido disculpándose ante cada reclamo de su omega, sin prestarle mucha atención a su
herida.

Tras un par de minutos, el curandero finalmente termino de atender al joven jade, el cual
haciendo una reverencia de agradecimiento, le dijo a este: "Muchas gracias por su ayuda".

Aliviado de que aquella tortura finalmente hubiera terminado, Wei Wuxian también le
agradeció al doctor de una forma temblorosa: "Muchas gracias por sanar a mi Lan Zhan".

Siendo el único que había prestado real atención a las palabras dichas por ambos menores,
Lan Xichen se apresuró a decir: "Muchas gracias por su ayuda, por favor, déjeme
acompañarlo a la salida".

El curandero, mirando a ambos jóvenes en la cama, también dándose cuenta de lo que habían
dicho, hizo una reverencia rápida, antes de seguir al elegante próximo líder de los Lan a la
salida de aquella habitación privada dándoles unos segundos de privacidad a ambos jóvenes.
"¿Realmente estas enfadado?" Pregunto Lan Wangji viéndose solo con el mayor.

Sonriendo ya un poco más tranquilo, viendo que Lan Zhan había dejado de sangrar y su
herida ya estaba curada, Wei Wuxian negó con la cabeza, respondiéndole: "No, solo un poco
asustado".

Con cuidado, Lan Zhan acaricio los delgados dedos de su prometido que descansaban sobre
su mano, intentando así darle un poco de confianza después de lo que había sucedido: "Estoy
bien".

"Lo se... Y me alegra. Me hace feliz que nada malo le haya sucedido a Lan Zhan"

Volviendo de nuevo con ambos menores, Lan Xichen pudo observar como su hermano
sonreía ligeramente, aun tomando de la mano al joven omega con cuidado, sosteniéndolo
como si Wei Ying realmente fuera lo más delicado del mundo. Avergonzándose un poco por
ver semejante escena, el mayor se aclaró la garganta, acercándose a ambos para hablarles.

"Ya es bastante tarde, la cena debe haber terminado hace mucho en el salón principal de
Lotus Pier, yo iré a buscar a Wanyin para tranquilizarlo un poco también ¿Debería pedir que
les traigan la cena aquí?" Pregunto Lan Huan con calma, sin molestarse por ver a ambos
jóvenes tan cercanos.

Escuchando a su hermano, Lan Wangji se sintió algo avergonzado: "Hermano ¿Hacer algo
como esto es apropiado?"

"Claro que lo es ¿Por qué no lo seria?" Interrumpió Wei Wuxian de pronto: "No estamos
haciendo nada malo, estas herido y es mejor que no salgas, solo cenaremos juntos".

"Wei Ying, esta es mi habitación..."

Sonriendo ante las palabras explosivas de ambos menores, Lan Xichen decidió responder a
sus dudas: "El joven maestro Wei tiene razón, Wangji es mejor que cuides tu salud por unos
días, esa herida no es tan poca cosa. Confió en ambos, y sé que no harán nada inapropiado,
por eso puedo dejarlos aquí sin sentirme preocupado".

Respirando algo resignado, pero a la vez alegre, Lan Zhan susurro: "Gracias hermano".

Sonriendo por una última vez, Lan Xichen se giró para salir de la habitación, dispuesto a irse.
Sin embargo, Wei Ying el cual no había dejado de mirar al hermano de Lan Zhan, razono en
las palabras dichas por este, algo curioso.

"Xichen-Ge ¿Tu ya has llevado a A-Cheng a tu habitación?" Pregunto Wei Ying curioso.

Parándose frente a la puerta, Lan Xichen se giró ligeramente para ver nuevamente a los
menores en la cama: "No, él no ha entrado en mi habitación, ni en la que tengo aquí o en la
de Gusu".

"¿No confías en mi hermano?".

"No confió en mí mismo" Confeso Xichen con una sonrisita.


Haciendo que Wei Ying se sonrojara un poco con su respuesta, Lan Xichen finalmente salió
de la habitación, caminando tranquilamente por Lotus Pier con dirección al comedor
principal para cenar.

Aun pasmado, Wei Ying dejo que Lan Zhan se soltara de sus manos, y con cuidado se
levantara de la cama para ir a un baúl en su habitación que tenía su ropa, dispuesto a
cambiarse.

"¿Lan Zhan, que haces?" Pregunto Wei Ying siguiéndolo con la mirada.

Abriendo el baúl con suavidad, Lan Wangji respondió: "Estoy lleno de sangre".

Reparando en las palabras de Lan Wangji, Wei Wuxian fijo sus en las blancas túnicas del
menor, el cual debido a la sangre que había salido de su propia herida, estaban llenas de esta
roja sustancia. Volviendo a sentirse mal por lo sucedido, Wei Ying suspiro, aun con la mirada
fija en el menor, el cual sin preocuparse demasiado, soltó su cinturón y comenzó a cambiarse
sin ningún pudor frente al omega. Tragando un poco de saliva, Wei Ying vio el cuerpo
desnudo de su pequeño alfa cuando este se quitó la ropa, admirando ese cuerpo aun delgado
por su joven edad, pero en una excelente forma, el cual debido a sus entrenamientos
comenzaba a ganar músculos y un buen tamaño.

Sonrojándose mas por sus propios pensamientos, Wei Ying rápidamente aparto la mirada, ya
que no quería causar ningún efecto fisiológico no deseado en su cuerpo por ver tanto el
hermoso cuerpo de su prometido. E intentando distraerse para no ver al hermoso jade aun
semi desnudo frente a él, decidió fijarse en las demás cosas que tenía el menor en su
habitación.

Fue de esta manera que se topó con un extraño instrumento en una mesa, el cual atrajo su
atención de inmediato: "Lan Zhan ¿Qué es esto?"

Aun arreglando su segunda túnica interna, Lan Wangji aparto su mirada del baúl con su ropa,
mirando como Wei Ying curioso se levantaba de la cama para caminar a observar más de
cerca su instrumento musical, el cual estaba delicadamente posicionado en una mesa baja de
su habitación: "Es mi Guqin"

"¿Guqin? ¿Qué es eso?" Pregunto Wei Ying maravillado, parándose justo al lado del
instrumento, agachándose un poco para poder verlo mejor.

Con curiosidad, Wei Ying llevo una de sus manos para tocar las firmes cuerdas de diferentes
diámetros que tenía aquel instrumento, el cual era de un color blanco tan puro como el de su
prometido, hecho de madera fina y con unos acabados hermosos. Para Wei Ying, ese
definitivamente era el instrumento adecuado para una belleza tal como la de su Lan Wangji.

"Es un instrumento musical, muy típico de mi secta, pues con él se logra una técnica de pelea
única: La cuerda asesina del clan Lan"

Más interesado aun, Wei Ying se atrevió a mover una cuerda con sus dedos, escuchando el
hermoso sonido que esta había soltado solo con tocarla: "¿En serio la usas para atacar?"
Poniéndose la túnica exterior, Lan Wangji respondió: "Mmm".

"¿Y solo para eso? ¿No puedes hacer nada más con ella?"

"Es un instrumento musical además de un arma, así que sí, claro que puedo hacer más cosas
que solo atacar, también se tocar canciones en ella y usar otras técnicas de mi clan como
"interrogación" o tocar melodías para calmar el Qi de las personas".

Asintiendo ante las palabras del menor, bastante interesado, Wei Ying dijo: "Era obvio, un
instrumento tan lindo como este, tan fino y delicado no tenía que ser solo un arma. Toca algo
para mi ahora..."

Terminando de vestirse, poniéndose el cinturón blanco que siempre adornaba sus ropas, Lan
Wangji se giró en dirección al mayor para verlo, notando como este pasaba sus manos de
manera delicada por el Guqin, como si lo acariciara: "¿Mmm?"

"Por favor Lan Zhan..." Suplicó Wei Ying, sentándose al lado de esa mesa baja: "Realmente
quiero escuchar cómo suena..."

Decidiendo acceder a las peticiones de su novio, Lan Wangji cerró el baúl con la ropa, y
caminando de la misma manera elegante de siempre, se acercó a la mesa baja que tenía el
Guqin, y con un movimiento muy simple, se sentó frente a la mesa posicionando sus manos
sobre el instrumento musical.

Mirando a su prometido en silencio, Wei Ying no pudo hacer más que admirarse, pues el
menor era extremadamente elegante, tal vez demasiado. A diferencia de sí mismo, el cual aun
en ese instante tenía las piernas abiertas y se sentaba de una forma bastante grosera. Pero sus
malos modales no parecían incomodar al joven Lan, el cual solo lo miraba de reojo y jamás le
decía nada.

"¿Qué debería tocar para ti?" Preguntó Lan Zhan.

Sonriendo de forma traviesa, Wei Ying se apoyó en le mesa con los codos en esta: "Algo
lindo que me haga recordar este momento para siempre".

En los planes del joven jade al inicio había estado tocar una canción simple, una canción
clásica en su instrumento. Pero al escuchar las palabras del mayor, lo único que pudo pensar
fue en "Aquella canción", esa hermosa melodía que había comenzado a componer desde que
había llegado a Lotus Pier, esa que había comenzado a tocar desde la primera vez que vio a
ese hermoso omega en el muelle. Era la canción que había compuesto para Wei Ying desde la
primera vez que lo había visto y se había enamorado perdidamente de él.

Moviendo sus dedos por sí mismo, tocando la canción con mucho sentimiento, Lan Zhan
observo como el omega lo miraba fijamente, con una expresión pasiva y muy hermosa, una
expresión que el menor quería mantener en su memoria.

"Es una canción hermosa..." Susurró Wei Ying, realmente conmovido por la melodía:
"¿Cómo se llama?"
Capítulo 13.

"Es una canción hermosa..." Susurro Wei Ying, realmente conmovido por la melodía:
"¿Cómo se llama?"

Sintiéndose algo cohibido por el alago ante una canción propia y que ni siquiera estaba
terminada, Lan Zhan respondió: "No tiene nombre..."

"¿No la tiene? ¡Pero si es hermosa! Debes ponerle nombre, de verdad Lan Zhan. Creo que no
había escuchado algo tan hermoso como esto jamás..."

"Lo haré Wei Ying".

Al escuchar su nombre dicho por los labios del menor de esa manera, Wei Wuxian no pudo
evitar sonreír realmente contento, acercándose más a este para apoyarse delicadamente en su
hombro: "¿Te diste cuenta de que ahora me llamas por mi nombre? Me encanta..."

Sonrojándose un poco por sus palabras, Lan Wangji siguió tocando la melodía, pero en esta
ocasión con los dedos un poco más temblorosos, sintiéndose igualmente nervioso por el
contacto de su cuerpo con el del mayor, volviendo a sentir ese aroma tan dulce y delicioso
que de este emanaba.

"Lo siento, de verdad" Volvió a disculparse el menor, dejando de tocar.

"¿Por qué sigues disculpándote? Ya te dije que está bien, aun me molesta un poco pero..."

"No pude controlarme, cuando ese alfa hablo de ti de esa manera, yo solo quise matarlo por
lo que dijo, quería protegerte".

Suspirando enternecido, Wei Ying se pegó aún más al menor, y sintiéndose mucho mejor al
darse cuenta de que Lan Zhan no se alejaba, el mayor susurró: "Lan Zhan, Lan Zhan... No
porque soy un omega significa que soy débil, no debes protegerme, yo puedo hacerlo solo".

"Sé que no debo. Pero yo quiero hacerlo"

Quedándose sorprendido por las palabras del mejor, Wei Ying dejo de apoyarse en su hombro
para levantar el rostro y mirarlo a los ojos, sintiéndose muy avergonzado. Con unas pocas
palabras, aquella frase había sido lo más lindo que había escuchado el mayor, algo que no se
esperaba para nada de ese frio y joven alfa.

Mirándolo a los ojos de la misma manera, aun demostrando arrepentimiento, Lan Wangji
siguió hablando: "¿Qué clase de esposo seré si ni siquiera puedo defenderte de lo que dicen
las personas?"

"Lan Zhan... No me importa, pueden decir lo que quieran de mí, pero mientras tu sepas quien
soy y mi verdad para mi es suficiente".
"No es suficiente para mi".

Suspirando un poco, Wei Ying se dejó envolver por aquel delicioso aroma que emanaba de su
joven jade, ese mismo aroma que había sentido la primera vez cuando se conocieron en
Muelle de Loto ¿Acaso Lan Zhan sabía que soltaba sus feromonas de esa manera? Wei Ying
no estaba seguro, ni siquiera sabía si el menor había tenido un celo de alfa alguna vez. Pero
estando en ese sitio cerrado, justamente donde su prometido dormía, todas esas feromonas
parecían estar concentradas, oliendo cada vez incluso mejor.

Acercándose al menor, abrazándolo cariñosamente por el cuello, Wei Ying susurro: "Esta
bien Lan Zhan, por favor protege este frágil cuerpo de cualquiera que quiera dañarme...
Como mi marido preserva mi pureza..."

Sonriendo con sus propias provocadoras palabras, Wei Ying espero unos segundos antes de
besar los labios del menor, el cual con esas palabras tan traviesas dichas por su prometido, se
había sonrojado un poco, aceptando el beso con torpeza.

Al terminar el beso, los dorados ojos del jade se desviaron, sin dejar de pensar en las palabras
dichas por Wei Ying, Lan Zhan se atrevió a preguntar: "¿Acabas de llamarme tu marido?"

"¿Acaso está mal Lan Er Gonzi? Tú lo serás... Tarde o temprano yo me vestiré de rojo, usare
un hermoso velo dorado, y tú también usaras ropa roja con esa linda cinta blanca en la frente.
Tendremos una fiesta maravillosa, con incontables jarras de vino y la comida más picante del
mundo, y en la noche... Cuando estemos solos tu deberás quitarme la ropa, el atuendo de la
boda y..."

Sonrojándose con el pensamiento de las palabras de Wei Ying, Lan Zhan dijo:
"¡Desvergonzado!" Causando una risa por parte der mayor, el cual poco después volvió a
besarlo.

"Mi dulce alfa, Lan Wangji ¿Acaso es que no sabes cómo debe culminar nuestra noche de
bodas?" Preguntó Wei Ying de forma traviesa, sintiéndose muy tentado a romper la inocencia
del jade, tomando una de las manos del menor para llevarla a su abdomen, manteniéndola ahí
para luego hablar: "¿Acaso mi alfa no sabe cómo hacerme un bebe? Algún día deberé tener
un pequeño Lan Zhan en mis brazos, que usara una cinta blanca y tendrá unos lindos ojos
dorados... Pero si Lan Wangji no sabe cómo hacerlo..."

Manteniendo su mano con delicadeza en el abdomen del mayor, sintiendo cuan suave era
este, y disfrutando en secreto de esa cercanía, Lan Zhan le respondió: "Claro que se hacerlo".

"¿Si sabes?" Pregunto Wei Ying incrédulo, riendo de nuevo: "¿Entonces por qué no me
muestras?"

"¿Qué quieres que te muestre?"

"Todo lo que sabes..."

Siendo tomado por sorpresa, aun concentrado en acariciar el suave abdomen del joven
omega, Lan Wangji no pudo evitar ser tirado en el piso al lado de esa pequeña mesa. Siendo
esa la intención de Wei Ying, el cual rápidamente se subió sobre el menor ni bien lo había
tirado al piso, quedando a pocos centímetros de su rostro, mirándolo fijamente a los ojos.

"¿Qué haces?" Preguntó Lan Zhan con la voz firme.

"¿No ibas a enseñarme? Que malo eres Lan Zhan... Me dejaras con las ganas de saber que fue
eso tan interesante que te enseñaron..."

Sin embargo, Wei Wuxian sabía que eso tal vez era demasiado, Lan Wangji aún era un niño,
incluso el mismo no sabía ese tipo de cosas a su edad, solo se le fue explicado cuando tuvo su
primer celo a los 14 años. Así que decidiendo terminar con su broma, beso suavemente la
frente del menor en un símbolo de cariño, para luego levantarse con cuidado. Pero lo que el
joven omega no espero en lo absoluto, fue que Lan Zhan se lo impidiera, rodeándolo por la
cintura en un rápido movimiento, para luego pegarlo nuevamente a su cuerpo en el piso, sin
dejar de mirarlo.

"¡Lan Zhan!" Se quejó Wei Ying sin poder evitar caer sobre el cuerpo del menor, sin poder
levantarse otra vez, pues seguía siendo sujetado por la cintura: "Me asustaste, no sabía que
querías..."

Decidiendo interrumpir al mayor, Lan Zhan presiono sus brazos con mayor fuerza en la
cintura de Wei Ying, atrayéndolo más a su cuerpo: "¿Qué querías que te enseñara?"

Por un segundo, Wei Ying sintió temor. Nunca antes en su vida había estado de esa manera
con un alfa, tan cerca, siendo sujetado tan fuertemente y a la fuerza; así que finalmente
entendió las palabras de Jiang Cheng, mirando de forma nerviosa a su pequeño jade. A pesar
de su dulce apariencia, Lan Wangji era un alfa, y no era un alfa cualquiera, era el alfa que el
omega de Wei Ying reclamaba como suyo, así que de cierta manera, su conexión era mucho
más fuerte que con cualquier otro. Pero Lan Zhan no se atrevería a hacer algo ¿Verdad?
Todos siempre hablaban de la elegancia y educación de todos los Lan, los alfas más decentes
de todos, por lo que Lan Zhan no sucumbiría ante sus instintos de alfa ¿No es así? ¿Entonces
por qué Wei Wuxian se encontraba tan asustado?

"B... Basta. Lan Zhan, déjame levantarme".

La expresión del menor siguió tan impasible como siempre, y ante esas palabras, lo sujeto
más firme y más fuerte aun, pegando por completo sus cuerpos, logrando sacar un jadeo por
parte de los labios de Wei Wuxian. Pero aun así Lan Wangji no parecía estar contento, así que
decidió seguir insistiendo: "¿Qué debo enseñarte?"

Ya sintiendo verdadero miedo, como si fuera una presa acorralada, comprobando que debido
a las feromonas de Lan Zhan, las cuales podía sentir mejor desde su posición,
verdaderamente no podía levantarse, Wei Ying susurro con la voz temblorosa: "N... Nada...
Hanguang-Jun fue una broma, una broma ¿De verdad planeas tomarte las bromas tan en
serio?"

"A mí no me pareció una broma".


Aprovechando esa cercanía, Lan Wangji hundió su rostro en el cuello del mayor, oliendo con
descaro su dulce aroma a lotos, suspirando con este. Sin poder resistirse, Wei Ying solo pudo
soltar un pequeño jadeo cuando sintió la respiración del contrario contra la piel desnuda y
sensible de su cuello. Comenzaba a sentirse como un pequeño animal indefenso frente a un
aterrador depredador, perdiendo sus fuerzas y dejándose caer sobre el pequeño cuerpo de su
alfa, y aunque en su conciencia realmente quería salir escapando, muy asustado, de cierta
manera no le molestaba ser devorado por el menor.

Temblando un poco, Wei Ying volvió a pedir: "Basta, no hagas eso... Déjame levantarme, no
estoy jugando..."

Separándose del cuello del mayor, volviendo a mirarlo a los ojos, Lan Zhan subió solo una de
sus manos por la espalda de este hasta su nuca, sujetándolo de forma firme para evitar que
escapara: "Yo no estoy jugando".
Capítulo 14.

Separándose del cuello del mayor, volviendo a mirarlo a los ojos, Lan Zhan subió solo una de
sus manos por la espalda de este hasta su nuca, sujetándolo de forma firme para evitar que
escapara: "Yo no estoy jugando".

Sin previo aviso, Lan Zhan unió sus labios con los de Wei Ying, sorprendiendo el joven
omega, el cual soltó un jadeo mientras sus mejillas se teñían de rojo.

Era verdad, Lan Wangji no tenía ni idea a lo que Wei Ying se refería. El jamás había tenido
un celo de alfa, y aunque ya lo habían llevado a ver a su prometido, lo poco que sabía el
menor de ese tema era que Wei Ying podía quedar embarazado, y que cuando lo hiciera seria
de sus hijos. Pero el joven Lan no tenía idea de cómo se realizaba el acto en si, por lo que
pensando que Wei Wuxian solo quería que se besaran, algo que le agradaba mucho al menor,
lo forzó a un beso.

Pero por otro lado, Wei Wuxian, quien si sabía bastante acerca del sexo, tal vez demasiado
gracias a los libros de Huaisang-Ge que guardaba en su habitación, se encontraba en
completo Shock, temiendo por aquello, ya que realmente no quería perder su virginidad de
esa forma, volviendo a suplicar: "Por favor Lan Zhan, por favor, no quiero hacerlo, no así..."

Sintiéndose algo dolido, Lan Wangji no lo soltó y solo pudo mirarlo realmente triste: "¿Hice
algo mal? ¿Por qué no quieres besarme?"

Pestañeando muy confundido, Wei Ying dejo de estar asustado pensando que Lan Zhan lo
violaría, mirándolo incrédulo: "¿Qué? ¿Besarnos?"

"Eso querías que te enseñara ¿Verdad? Así se hacen los bebes ¿Verdad?"

Sin poder aguantarlo, Wei Ying tuvo un ataque de risa, abrazándose a su pequeño alfa en el
piso, sin poder tranquilizarse: "¡Verdaderamente eres muy inocente, Hanguang-Jun!"

"¿Inocente?"

"Yo adoro besarte, Lan Zhan besa tan bien... Pero no me refería a eso exactamente".

Pensativo, reconsiderando las palabras del mayor, Lan Wangji no pudo entender de que
hablaba: "¿Entonces a que te referías?"

Sonriendo nuevamente, muy provocativo, Wei Wuxian abandono por completo aquella
anterior apariencia frágil y asustada, atreviéndose a darle un nuevo beso a su joven alfa, y al
terminar le susurró: "Si te dijera, ya no sería un secreto".

Sin que pudiera preguntar, Lan Zhan sintió como Wei Ying volvía a unirse en un beso con él,
con la diferencia que ahora la traviesa lengua del mayor se había colado entre sus labios y
recorría su boca libremente. Ante esta acción, Lan Zhan soltó un jadeo de sorpresa, abriendo
mucho los ojos, pero sin apartar al mayor, solo pudiendo corresponder aquel apasionado beso
con torpeza, siendo la primera vez del jade en tener un beso así.

"¿Y te gusto?" Pregunto Wei Wuxian tras un par de segundos, al terminar el beso.

Con las mejillas completamente rojas, mirando al mayor fijamente, Lan Zhan pidió: "De
nuevo".

Riendo algo avergonzado, Wei Ying tomo el dulce rostro del menor entre sus manos,
volviendo a acercarse a este para besarlo, susurrando sobre sus labios: "Las veces que
quieras, Hanguang-Jun..."

Sin embargo, justo antes de que ambos volvieran a besarse de aquella forma tan apasionada,
escucharon como la puerta de la habitación se abría, logrando que ambos se separaran de
golpe, teniendo una apariencia obviamente culpable, como si realmente hubieran estado
haciendo algo muy malo.

Las personas que habían abierto la puerta no hicieron ningún comentario, ya que no habían
visto nada tampoco. Eran los sirvientes de la secta Yunmeng Jiang, los cuales habían entrado
con bandejas con la cena de esa noche, que habían traído para ambos jóvenes por petición de
Lan Xichen. Dirigiéndose a otra parte de la habitación, una que estaba separada por unos
paneles bien decorados, dejaron la comida bien ordenada en otra mesa baja que quedaba casi
al lado de una ventana, y encendiendo algunas velas para iluminar mejor la cena de ambos
prometidos, se retiraron con educación.

Viendo que la cena ya estaba servida, Lan Wangji y Wei Wuxian también se levantaron,
agradeciendo las atenciones de los sirvientes con una reverencia, se dirigieron a esa parte
apartada de la habitación para comer. Sentándose frente a frente en esa mesa baja, como era
usual, Wei Wuxian ataco primero la comida más picante, mientras que Lan Zhan
educadamente tomaba primero el arroz para comerlo con calma.

Hablando de cosas banales, ya habiendo olvidado por completo lo que había sucedido hace
tan solo unos minutos, los rápidos ojos de Wei Wuxian se fijaron en esa túnica blanca
manchada de sangre que había dejado Lan Wangji en el piso cerca de su baúl con ropa, y
bastante curioso, Wei Ying decidió preguntar por ella.

"Hanguang-Jun, Hanguang-Jun ¿Por qué dejaste esa túnica en el piso?"

Girándose de manera disimulada, para ver también la túnica en el piso, Lan Wangji dijo: "La
tirare".

Aun sin apartar sus ojos de la fina prenda de tela, Wei Wuxian se quejó: "¿Pero por qué? Se
nota tan fina ¿No te molestaría tirar algo como eso? Tu clan realmente debe tener mucho
dinero..."

"Está llena de sangre, y está rota. No puedo usarla así".

"¿Entonces solo la tiraras y ya?"


Volviendo a comer, desinteresado, Lan Zhan susurro: "Mmm".

Sin apartar la mirada de la túnica, volviendo a comer, esto no quedó tan claro para Wei
Wuxian, el cual no iba a dejar pasar algo como aquello.

***

Después de tener una cena tranquila y bastante amena, Wei Ying abandono la habitación
privada de Lan Wangji poco antes de las 9 Pm, la hora en la que el menor debía dormir. Sin
embargo, en un descuido del joven jade y ayudado por uno de los sirvientes, el mayor logro
llevarse consigo aquella túnica rota y manchada de sangre que Lan Wangji había usado ese
día.

Dirigiéndose al área de las habitaciones privadas de los miembros de la familia Jiang, no fue
a su habitación, si no que desvió su camino y se dirigió al pabellón privado de su hermana,
Yanli. Algo inseguro, viendo aun luz desde el interior, Wei Wuxian dio algunas vueltas en el
exterior antes de atreverse a tocar la puerta de su Shijie. Yanli, la cual se había quedado
leyendo un libro antes de dormir, se sintió sorprendida al escuchar los golpes en su puerta
pues era muy tarde, pero al abrirla y darse cuenta de que era Wei Wuxian, solo sonrió de
forma amigable.

"A-Xian, pasa" Dijo Yanli abriendo la puerta de la habitación para su hermano, dejándolo
entrar en esta.

Asegurándose de no ser visto por nadie, pues no sería apropiado que ambos jóvenes se vieran
a esas horas, Wei Wuxian entro rápidamente en la habitación de su hermana, cerrando la
puerta detrás de sí mismo: "Gracias Shijie".

Yanli, la cual estaba usando solamente sus túnicas interiores, volvió a sentarse en uno de los
cómodos sillones de su habitación, y al ver mejor a su hermano con las luces de las velas de
su habitación, no pudo evitar preguntar: "A-Xian ¿Qué es eso?"

Sonriendo algo avergonzado, mirando de igual manera las túnicas manchadas de Lan Zhan en
sus manos, Wei Wuxian se acercó a su hermana, sentándose a su lado en el sofá: "Son las
túnicas de Lan Zhan ¿Shijie, supiste lo que paso hoy?"

Sonriendo amablemente, Yanli asintió con suavidad, alargando una de sus manos para
acariciar el rostro de su hermano menor con cuidado, antes de responderle: "Si, me lo dijeron
¿Estás bien?"

"Estoy bien, no salí herido, pero Lan Zhan..."

Notando la tristeza en el rostro y la voz de su hermano, Yanli se sintió preocupada,


decidiendo preguntarle al menor al respecto: "A-Xian ¿Qué sucede?"

Tomando el valor para hablar con su Shijie, Wei Wuxian pidió: "Shijie, necesito que me
ayudes con algo".

***
Aquella mañana Lotus Pier amaneció con un clima bastante pesado, el cielo nublado y una
ligera lluvia cayendo desde el amanecer. Aparentemente aquel día sería bastante frio, con una
de las típicas lluvias de primavera, por lo que la mayoría de los discípulos de las sectas
presentes en Yunmeng se quedarían en interiores haciendo sus actividades.

Eso sería exactamente igual para los miembros de la secta Lan, los cuales habían desayunado
en sus propias habitaciones privadas, y desde bien iniciada la mañana, no habían salido.

Lan Zhan había decidido entonces pasar el rato con su hermano mayor, Lan Huan, el cual
tranquilamente leía un libro mientras el menor practicaba con su Guqin. Desde que en la
noche anterior Wei Ying había alabado sus dotes para tocar el instrumento, Lan Wangji se
había tomado mucho más en serio practicar con este, pues quería ser mucho mejor y mejor
para poder seguir conquistando al joven omega.

Sabiendo esto de ante mano, aun si su pequeño hermano no se lo había comentado, Lan
Xichen no se opuso a que el menor tocara y practicara a pesar de la herida en su brazo,
sentándose frente a él en esa mesa baja y disfrutando secretamente de la música que Lan
Zhan tocaba, hablando con él cada cierto tiempo: "¿Cómo se encuentra tu brazo Wangji?"

Dejando de tocar por un momento, Lan Zhan cambio la página del libro con las partituras que
aprendía antes de seguir tocando, para luego responderle a su hermano: "Bien".

"¿Ya no te duele?"

"Nunca dolió".

Lan Xichen solo pudo sonreír con las palabras de su joven hermano, sin saber bien si Wangji
realmente había dejado pasar por alto semejante herida, o si era su por propio orgullo al haber
sido vencido en su primera pelea real, así que prefirió no hacer comentarios. Ese día el
próximo líder de la secta Lan tenía planeado encontrarse con Jiang Cheng a media mañana,
donde seguramente tomarían el té en uno de los tantos salones de Yunmeng destinados para
estos. Y debido a la lluvia, en la tarde, probablemente volverían a quedarse en esos salones o
irían a pasar el rato en la biblioteca.

Por lo general, sus encuentros con el joven Jiang Cheng no eran tan alocados como los que su
joven hermano tenía con Wei Wuxian. Ellos no iban al bosque a jugar o se metían al lago casi
a diario. Jiang Cheng prefería los paseos tranquilos y calmados por los parajes de Yunmeng,
y aunque no leía libros, si le gustaba aprender nuevas técnicas de combate y mejorar su
cultivo, así que a espaldas de su padre Lan Xichen solía practicar junto a él y enseñarle el
método de pelea de Gusu. Mientras que en sí, lo que a Lan Xichen le gustaba era
simplemente estar con Wanyin, ya sea caminando por ahí teniendo conversaciones para matar
el tiempo, esperándolo en la orilla del lago a las afueras de Lotus Pier mientras este recogía
nueces y lotos, o simplemente sentados tomando el té; para Lan Huan, el estar con su querido
A-Cheng era suficiente.

Decidiendo preguntarle algo a su hermano en esta ocasión, Hanguang-Jun dejo de tocar el


Guqin por un momento poniendo su mano extendida sobre las cuerdas para que no emitieran
sonido, levantando la mirada para ver a su hermano: "El método de pelea de tu novio es
excelente, impecable ¿Lo has estado ayudando?"
Dejando su libro por un segundo, Lan Xichen miro igualmente a su hermano, sonriendo al
verse descubierto: "Si, hemos estado practicando desde hace algunos meses. No solo aquí, en
Gusu también".

"Le has enseñado algunas técnicas de nuestro clan, Jiang Wanyin logro combinarlas con sus
propias técnicas, es impresionante" Lo alagó Lan Wangji.

Decidiendo corresponder el alago, Lan Huan le dijo: "Escuche que tu prometido, el joven
maestro Wei también es excelente. Su cultivo es superior a casi todos los demás, a pesar de
ser un omega se ha posicionado debajo de mí en la lista de los cultivadores más prometedores
de esta generación, debes estar sorprendido".

Asintiendo a las palabras de su hermano Wangji respondió: "Mmm".

"¿Has visto pelear al joven Wei?"

"No necesito verlo para saber lo superior que es al resto".

Y aunque aquello pudo haber sonado presuntuoso por parte del joven Lan Wangji, era
completamente cierto. No solo porque Wei Wuxian lo había protegido el día anterior,
demostrándole su rapidez y su excelente control con su espada espiritual. En todas esas
semanas Wei Wuxian le había enseñado a Lan Zhan su alto nivel en la cultivación sin
siquiera quererlo, ya sea jugando en el bosque cuando casaban faisanes o trepaban los
árboles, volando en sus espadas por puro placer, o aquella ocasión en la que se divirtieron por
una tarde entera haciendo cellos y muñecos de papel entre ellos. Wei Wuxian era todo un
prodigio, y era Lan Zhan quien comenzaba a aprender cosas del mayor, esperando que en un
futuro, cuando su nivel de cultivo mejorara, el también pudiera pedirle a su prometido omega
que entrenaran juntos.

Riendo ante las palabras del menor, que habían resultado extremadamente serias al decir
aquello, Lan Xichen le respondió: "Entiendo, es agradable escucharlo".

"Mmm..."

Dándosepor satisfecho con las pocas palabras que cruzaron, Lan Zhan se dispuso aseguir
practicando, sin embargo fue interrumpido al escuchar unos tímidos golpes en su puerta, que
sorprendieron a ambos jades. Lan Xichen, que era el más cercano a la puerta, dejo de lado su
libro para ponerse de pie elegantemente, dirigiéndose a la puerta de la habitación para abrirla.
Capítulo 15.

Dándose por satisfecho con las pocas palabras que cruzaron, Lan Zhan se dispuso a seguir
practicando, sin embargo fue interrumpido al escuchar unos tímidos golpes en su puerta, que
sorprendieron a ambos jades. Lan Xichen, que era el más cercano a la puerta, dejo de lado su
libro para ponerse de pie elegantemente, dirigiéndose a la puerta de la habitación para abrirla.

En el exterior se encontraba Wei Wuxian, el cual sosteniendo una sombrilla en una mano y
unas túnicas blancas bien dobladas en la otra, hizo una reverencia al ver a Zewu-Jun en la
puerta.

"Buenos días Zewu-Jun".

Correspondiendo la reverencia y haciéndose rápidamente a un lado en la puerta para dejar


pasar al menor, Lan Xichen respondió: "Buenos días maestro Wei".

Cerrando la sombrilla algo tembloroso y dejando está en la puerta, Wei Ying entro en la
habitación de Lan Zhan con una sonrisa tímida. Ubicando a su joven alfa sentado frente a su
Guqin en otra parte de la habitación, se apresuró a caminar en su dirección, saludándolo
alegremente: "¡Buenos días Lan Zhan!"

Mirando fijamente al mayor, Lan Wangji respondió haciendo una reverencia desde su sitio y
susurrando: "Mnn..."

Ante los ojos de Lan Wangji aquella aparición por parte de Wei Ying era extraña. El mayor
no solo llevaba la misma ropa que el día anterior, también tenía un rostro cansado y se notaba
algo desaliñado; y una apariencia que pasaba desapercibida para otros como Lan Xichen, ya
que Wei Ying era descuidado por naturaleza, no fue pasada por alto por Lan Zhan. Y es que
sus sospechas se confirmaron de cierta manera cuando vio en las manos de este esas túnicas
blancas, que rápidamente reconoció como suyas.

"Vaya... ¿Ahora es "Mnn" en vez de "Mmm"? ¿Por qué?" Pregunto Wei Ying curioso,
sentándose e forma descuidada al lado del menor.

Asintiendo a sus palabras, Lan Zhan intento explicarse: "Mnn... Yo... Quiero ser más
divertido"

Al escuchar sus palabras, Wei Wuxian estallo en carcajadas, ya que aquel cambio no le
resultaba gracioso en lo absoluto, en realidad le resultaba adorable. Escuchando su
conversación, Lan Xichen se acercó a ambos menores con paso lento, pensativo, y es que
aunque había escuchado también el usual "Mmm" de su hermano, no había notado ningún
tipo de cambio como lo había hecho Wei Wuxian; lo que para el mayor solo significaba una
cosa: Ambos habían comenzado a notar cosas que los demás no en el otro. Ambos realmente
habían comenzado a habituarse el uno al otro.

Aun riendo un poco, Wei Wuxian se apoyó sobre el hombro del menor, para luego decirle:
"Eso fue gracioso, muy gracioso, me hiciste reír..."
Sorprendido ante las palabras de su prometido, Lan Zhan lo miro ilusionado: "¿En serio?"

"Si, si, muy gracioso y dulce".

Sonrojándose un poco, Lan Wangji desvió la mirada, contento pero igualmente avergonzado
por las palabras del mayor: "Me gusta mucho cuando Wei Ying sonríe, quiero hacerlo sonreír
siempre".

"Siempre que este con Lan Er Gonzi voy a sonreír, porque él me hace feliz..."

Sintiéndose algo incómodo, e incluso lago celoso, Lan Xichen pudo ver como Wei Wuxian
besaba suavemente una de las mejillas de su hermano, el cual reacciono sonriendo un poco y
abrazando delicadamente a Wei Wuxian por la cintura. Era una imagen tan dulce que Lan
Huan tuvo que desviar la mirada, no solo porque lograba sonrojarlo el ver a su joven
hermano de esa manera con alguien más, también por que al ver ese tipo de actos tan
cariñosos lo llevaban a pensar en Jiang Cheng, y en el hecho de que a pesar de que aunque ya
se conocían hace casi un año, ni siquiera se habían besado en la mejilla.

Respirando profundamente, regañándose a si mismo por haber tenido semejante envidia,


camino con paso decidido a la mesa baja en la que se encontraba el Guqin y ante la cual
ambos menores se encontraban besándose, para tomar su libro y hacer una reverencia.

"Joven Wei, Wangji, los dejare solos para que puedan hablar tranquilos" Dijo el mayor con
tono calmado.

Sonriendo contento y muy pegado a Lan Wangji, Wei Wuxian le dijo: "Muchas gracias
Zewu-Jun".

Correspondiendo la reverencia con un ligero movimiento de cabeza, Lan Wangji dijo


agradecido: "Mmm".

Sorprendido por lo que había escuchado, Wei Ying lo miro directamente al rostro para
preguntarle: "¿Ahora es "Mmm" de nuevo?"

Asintiendo ante las palabras de su prometido, Lan Zhan susurro: "Mmm".

"¿Cuándo usaras el "Mnn" entonces?"

Encogiéndose de hombros Lan Zhan susurro: "Mnn".

Riendo otra vez, Wei Ying lo miro divertido: "Ya veo..."

Lan Xichen por su parte solo pudo mirarlos a ambos en silencio, retirándose nuevamente
pensativo. Y es que por más que lo analizaba, el "Mmm" de su hermano seguía siendo
completamente igual ante su percepción.

Esperando a que Zewu-Jun se fuera, e interrumpiendo a Lan Wangji con lo que este quería
preguntarle, Wei Wuxian le extendió muy complacido las túnicas doblas que había traido
consigo: "Tómalas, no seas tímido..."
Sin poder decir nada, Lan Zhan desenredo sus brazos de la cintura del mayor para tomar las
túnicas blancas que había traído Wei Ying consigo. Solo con tocarlas supo que eran suyas,
pues había un sello espiritual muy especial que se ponía en las túnicas y en los hilos con los
que se realizaba la ropa de la secta Gusu Lan. Reconociendo aquellas prendas como las
túnicas interiores y la túnica exterior que había usado el día anterior en la pelea, Lan Wangji
desdoblo la túnica exterior del conjunto, mirando sorprendido como esta estaba
completamente limpia, y el corte que debía tener en el brazo derechos hecho por la espada de
aquel alfa de la secta Jiang ya no estaba ahí.

"Yo pensé... Que tus túnicas eran demasiado bonitas como para que las tiraras. Así que las
lave e hice algunas puntadas en el corte que tenían" Explico Wei Wuxian algo cohibido,
mirando como Lan Zhan había extendido aquella túnica en la mesa baja para examinar la tela
sorprendido, para luego intentar explicarse un poco mejor: "Pero obviamente no lo hice solo,
yo no sé coser o esas cosas, mi Shijie es experta, asi que..."

La túnica que Lan Zhan tenía entre las manos había terminado de una manera impecable, casi
tan perfecta como antes del corte, ya que si mirabas muy de cerca y con atención el brazo
derecho de la túnica, aun se podía ver una pequeña y casi imperceptible marca del lugar
donde se había cortado la tela. Bastante sorprendido, antes incluso de pensar en agradecerle
al mayor, los pensamientos de Lan Zhan fueron al hecho de que él había cosido aquello con
sus propias y delicadas manos, así que en un rápido movimiento tomo la mano izquierda del
mayor para verla. Y tal y como había esperado, en los dedos de Wei Ying se podían ver
pequeños puntos de color rojo, justamente aquellos donde este se había pinchado con la aguja
al coser.

Riendo más avergonzado aun, Wei Wuxian rápidamente retiro la mano, muy apenado de que
el menor hubiera visto sus descuidos, diciéndole: "No pasa nada, no me duele".

Mirando nuevamente el rostro cansado y el aspecto desaliñado de su prometido, Lan Zhan se


lamentó: "No dormiste por hacerlo".

"Te digo que está bien, yo quería hacerlo".

Dejando las túnicas limpias sobre la mesa, Lan Wangji se puso de pie y tomando a Wei Ying
de un brazo, lo jalo hasta su cama. Siendo tomado por sorpresa, y algo débil debido a que no
había dormido, Wei Ying se puso de pie como pudo para ser jalado por el menor, y luego
prácticamente arrojado contra la cama.

"¡Aiya!" Se quejó Wei Wuxian, habiéndose golpeado ligeramente la cabeza: "¡Lan Zhan me
dolió!"

Preocupado, Lan Wangji se sentó al lado del mayor, mirándolo fijamente: "¿Te lastimé?"

"¡Lo hiciste! ¿Por qué me arrojas a tu cama? ¿Qué te pasa?" Reclamo Wei Wuxian muy
enfadado.

Mirándolo fijamente, Lan Zhan respondió: "Duerme".

Sintiéndose confundido, Wei Ying se sentó en la cama y preguntó: "¿Eh? ¿Por qué?"
Volviendo a empujarlo para que se acostara en la cama, Lan Zhan explico: "Te ves muy
cansado, duerme".

"¿Estas jugando? No me molestes, no voy a dormir Lan Zhan..."

"¿No?"

"¡Claro que no!" Se negó Wei Ying, haciendo un ademan de querer volver a levantarse de la
cama.

Sin embargo, el joven alfa, el cual no quería dejar ir al omega, rápidamente lo sostuvo por la
cintura, y con ambas manos, presiono en la parte superior de la cadera de Wei Wuxian, muy
cerca de su columna vertebral. Sintiendo este toque tan fuerte, en el que los delgados dedos
del menor se hundieron en su carne, Wei Ying soltó un jadeo de dolor, volviendo a tirarse en
la cama, pero en esta ocasión ya sin poder moverse.

Furioso, dándose cuenta de que estaba inmovilizado y de que su cuerpo no respondía, Wei
Wuxian reclamo: "¿¡Que hiciste!? ¡Lan Zhan! ¿¡Que te pasa!?"

Acomodando suavemente al mayor en su cama, arreglando las almohadas y soltándole el


cabello para que se sintiera mas cómodo, Lan Zhan se explicó: "No es nada malo, es
pasajero, solo presione unos puntos de acupuntura en tu espalda".

Mas enfadado aun, Wei Ying le reclamo: "¿Es en serio? ¿Y qué planeas hacer? ¿Obligarme a
dormir?"

".... Mmm".

"¡Lan Zhan!"

Quejándose un poco, sintiendo un dolor punzante en su espalda, además de un


adormecimiento en todo su cuerpo, Wei Ying miró realmente molesto al menor, volviendo a
quejarse en pocos segundos: "¡Lan Zhan, duele mucho! ¿Ya lo habías hecho con alguien
antes?"

Negando ante sus palabras, Lan Wangji siguió acomodando al mayor en su cama,
cubriéndolo con las frazadas y mullendo su almohada: "No, tu eres el primero".

"¡Duele tanto! ¡Seguro lo hiciste mal!"

"No lo hice mal, aprendí bien la teoría".

Furioso, Wei Ying presiono fuertemente los dientes, mirando al menor realmente enfadado:
"Lan Zhan, la teoría es una cosa, la práctica es otra. Me lastimaste en serio, quítame esto
ahora".

Suspirando, Lan Zhan hizo como si no escuchara nada, aun acomodando al mayor en la
cama, evitando el contacto visual con este, enfureciendo a Wei Ying mucho más aún.

"¡Lan Zhan! ¡Quítalo, ahora!" Le exigió Wei Ying realmente furioso.


"No puedo, no sé cómo" Confeso Lan Wangji finalmente.

Solo estas palabras bastaron para que Wei Wuxian enfureciera de verdad, mirando a Lan
Zhan como si quisiera golpearlo, pero al tener su cuerpo de esa manera, solo pudo quedarse
en silencio, mirando a Lan Zhan lleno de ira. Dándose cuenta de esto, el menor rápidamente
pensó en una forma de aliviar el dolor del mayor, y recordando otras tantas cosas que había
leído, creyó encontrar una solución.

Sin perder al joven Lan de vista, Wei Ying observo alarmado como este se acostaba a su lado
en la cama, debajo de las frazadas. Esto asusto mucho al mayor, el cual termino
preguntándole: "¿Qué haces?"

"Tranquilo, solo quiero ayudarte a dormir".

Sin poder resistirse, Wei Ying fue abrazado en la cama, y siendo ligeramente girado, sintió
como las pequeñas manos de su alfa habían comenzado a presionar la piel de su espalda con
suaves y lentos toques, que en pocos segundos lo hicieron sentir bien.

Cerrando los ojos y soltando un suspiro por lo bien que se sentía, Wei Ying susurró: "Lan
Zhan..."

Notando que el mayor se había relajado, y que probablemente se dormiría por lo bien que se
sentía, Lan Wangji solo le dijo: "Duerme".

Comenzando a sentirse realmente cómodo, Wei Wuxian no pudo evitar apoyarse por
completo en su joven alfa y en la cama, comenzando quedarse dormido, susurrando: "No
creas que olvidare esto, Lan Zhan, cuando despierte y pueda moverme, me las pagaras..."

Sonriendo, Lan Wangji siguió acariciando su espalda con cariño, susurrando: "Mmm".

"Es en serio..."

"Mnn..."

Suspirando, ya sin poder responder más, Wei Ying comenzó a quedarse dormido, mientras
pensaba en aquella peligrosa habilidad del menor al inmovilizarlo de esa manera. Y es que si
Lan Zhan hacia eso para forzarlo de alguna manera, no había forma en la que Wei Ying
pudiera resistirse, terminaría completamente inmovilizado y a disposición del menor. Eso lo
aterraba, pero aun confiaba en su Hanguang-Jun, creyendo que aunque este fuera un alfa, por
su inocencia y educación, jamás le haría daño y no lo forzaría a nada.

Aunque obviamente había decidido ignorar el hecho de que ese mismo instante estaba siendo
forzado por el menor.

Mientras que Lan Zhan, secretamente encantado de tener al mayor durmiendo en sus brazos,
se quedó admirando a Wei Ying durmiendo, sin dejar de acariciarlo, aun cuando este ya
estaba dormido y Lan Zhan sabía que este ya no podía sentir dolor.

Acercándose a su frente para darle un cariñoso beso, aun recordando la túnica y el esfuerzo
de este, Lan Zhan le susurro: "Gracias Wei Ying..."
Teniendo a Wei Ying de esa manera en sus brazos, tan tranquilo y calmado, con ese aroma
que le encantaba, y permitiéndole sentir su cuerpo cálido y caliente; Lan Zhan concluyo que
definitivamente no le molestaría para nada dormir así todos los días de su vida.
Capítulo 16.

Tres semanas después de la llegada de la secta Lan a Yunmeng termino la época de


recolección en el lago, y se inició la celebración de la nueva cosecha, un hermoso festival en
Lotus Pier que se caracterizaba por un millar de hermosas lámparas con forma de loto que
eran lanzadas al cielo como una ofrenda para tener una buena cosecha el próximo año.

La siguiente semana de esa celebración se daría el tiempo de siembra, en la que tomando


todas las semillas recogidas de los lotos no comestibles, las personas de Yunmeng volvían a
entrar a los lagos pero en esta ocasión para plantar esas semillas, tirándolas al agua y
pisándolas sobre la tierra para asegurar que nacería ahí una nueva planta.

Por lo que esa noche, el festival de la nueva cosecha en Lotus Pier, sería una noche de
celebración para toda la secta Jiang, un espectáculo nunca antes visto para los miembros de la
secta Lan. Vistiéndose con sus mejores galas, los jóvenes de la secta Lan fueron a los muelles
a las afueras de Lotus Pier cuando la noche cubrió el cielo, la hora en la que el festival se
avivaría con más fuerza y comenzarían las celebraciones.

Lan Wangji esa noche portaba de forma orgullosa una túnica exterior de color jade, la cual
cubría dos túnicas interiores de color blanco, exactamente esas que Wei Wuxian había
limpiado y reparado para él. Al salir de la residencia de los Jiang, acompañado por todos
aquellos miembros de la secta Lan, el joven alfa atrajo la mirada de la multitud de inmediato,
y al igual que su hermano mayor, mientras caminaban a reunirse con sus parejas, se los
admiraba en silencio por su deslumbrante belleza.

Mientras que tanto Jiang Cheng como Wei Wuxian habían llegado a los muelles hace un buen
rato, casi desde el inicio del festival. Ambos llevaban túnicas tradicionales de la secta
Yunmeng Jiang, de colores de diferentes tonalidades violetas, con delicados bordados de
lotos en su extensión, y con un corte muy fino y elegante; aquella era la ropa que distinguía a
la familia Jiang de los demás habitantes de Yunmeng que habían asistido a la celebración.

Por el festival, Jiang Fengmian había invitado a otras familias pudientes de la zona a
presenciar el espectáculo, por lo que desde la mañana, Lotus Pier se había llenado de otras
familias ricas o de otras sectas de cultivación, las cuales solo se quedarían por esa noche, y
que admirarían el hermoso festival de la noche de Yunmeng. Entre esos invitados se
encontraban representantes de la familia Jin y Nie, los cuales habían ido debido a la presencia
de Jin Zixuan en Yunmeng, y eran la pareja de cultivadores Jin Guangyao y Nie Mingjue, una
pareja de prometidos que estaban a pocos meses de contraer nupcias.

Corriendo y jugando en el muelle, junto a otros miembros de su secta, Jiang Cheng no pudo
evitar fijarse en esa peculiar pareja, la cual acompañada de Jiang Yanli y Jin Zixuan recorrían
los muelles de manera tranquila: "Pff... Esa perra..."

Dejando de jugar por un minuto, abandonando a los jóvenes cultivadores con los que pasaba
el rato, Wei Wuxian se acercó a su hermano a ver que era aquello que este miraba con tanta
atención, bastante curioso, preguntándole: "¿De qué hablas A-Cheng?"
Cruzándose de brazos molesto, Jiang Cheng se explicó: "Meng Yao, ese omega"

"¿El prometido del líder de la secta Nie?"

"¿Ya lo viste? Fue reconocido como un Jin hace tan solo un año y medio, y ya porta las
túnicas propias de la secta y ese punto bermellón en la frente"

Observando la indumentaria de este, Wei Wuxian se encogió de hombros, respondiéndole


tranquilo: "No veo el problema, Meng Yao y el pavo real parecen llevarse bastante bien. A
demás dicen que es un buen cultivador a pesar de ser un hijo bastardo de Jin Guangshan, he
escuchado algunas cosas de él..."

"¿De verdad Wei Ying?" Se burló Jiang Cheng, haciendo una agria expresión: "¿Y en esas
cosas que te dijeron hablaron también de su tormentosa relación con su prometido?"

Al escuchar esas palabras, Wei Ying pasó una de sus manos por los hombros de su hermano,
intentando tranquilizarlo. Como cualquier historia proveniente de una secta prominente, él
también había escuchado de los rumores de Meng Yao. Este supuestamente era el hijo de una
prostituta, el cual cuando murió su madre fue vendido a la secta Nie como acompañante por
ser omega, ahí fue instruido como cultivador al darse cuenta de que tenía cierto poder
espiritual; y también fue ahí cuando su prometido se encapricho de él.

Reclamándole a su hermano, Wei Ying le dio un golpe en la cabeza, intentando hacerlo


reaccionar: "¿De verdad crees esos rumores? Vamos Jiang Cheng, sabes lo mentirosa que es
la gente..."

Girándose molesto a su hermano, el joven Jiang replico: "¿Y lo que paso con Zewu-Jun?
¿Eso también es mentira?"

Suspirando, Wei Ying no supo que decir, pues ya no tenía idea de cómo negarse ante aquello.
Después de convertirse en un cultivador algo famoso, y de haber rogado de forma incansable
ante su padre, Jin Guangyao finalmente consiguió ser reconocido como un Jin, abandono a
los Nie y fue a vivir a Laling Jin. Y aunque Nie Mingjue tenía ya un compromiso planeado
con el hijo mayor de los Wen, Wen Xu que era un omega, rompió este compromiso para
prácticamente obligar a Jin Guangyao a ser su prometido, usando todo el tipo de presión que
pudo sobre los miembros de la secta Jin para lograrlo.

Fue en medio de este tormentoso intento de realizar un compromiso que todo se salió de
control, y una noche en la que hubo una conferencia de jóvenes cultivadores en Lanling,
Meng Yao se escondió la noche entera en las habitaciones de Lan Xichen para escapar de Nie
Mingjue, el cual lo había estado persiguiendo para pedirle una y otra vez que aceptara ser su
prometido. Según la versión de ambos cultivadores, nada sucedió esa noche, tan solo se
quedaron hablando y esperando a que todo se tranquilizara con Nie Mingjue, el cual
apropósito tenía un terrible temperamento.

Pero desde ese suceso, y por prácticamente un año, hasta que Meng Yao finalmente acepto el
compromiso con Nie Mingjue, todos dijeron que el joven omega Jin se había enamorado
perdidamente del próximo líder de la secta Lan. No solo visitó Gusu múltiples veces con la
excusa de aprender a tocar el Guqin, en todas las conferencias y eventos en los que coincidía
con Lan Xichen, ambos se la pasaban pegados. Una actitud que fue terriblemente criticada,
pues ambos eran alfa y omega, además que Lan Huan tenía un compromiso pendiente y
Meng Yao aún no había seguido lo que dictaba la tradición.

Unos meses después de iniciadas las habladurías, todo termino cuando Jin Guangyao
finalmente acepto el compromiso con el líder de la secta Nie. Algo que secretamente
resultaba curioso para Wei Wuxian, ya que Meng Yao acepto el compromiso un mes después
de que Lan Xichen hizo su primera visita a Yunmeng y conoció a Jiang Wanyin. En la cabeza
de Wei Ying eso obviamente era una tontería, pues quería creer que entre ellos nada había
sucedido, principalmente por no dañar a Jiang Cheng; pero hasta él no podía evitar pensar
que había algo muy raro en ese asunto.

Ese problema de rumores que duro casi un año entero antes que Zewu-Jun y Jiang Wanyin se
conocieran dio lugar a un gran resentimiento entre ambas parejas. Nie Mingjue en secreto
siempre miraba con cierto desprecio a Lan Xichen, mientras que Jiang Cheng y Meng Yao no
ocultaban su odio el uno por el otro, sin hablar ese y mirándose de forma enfadada cada vez
que se cruzaban.

Suspirando e intentando darle confianza, Wei Ying le dio otro golpecito en la cabeza a su
hermano antes de responderle: "No hagas un drama de esto, el que está comprometido con
Zewu-Jun eres tú, no él. Ahora ambos tienen otras parejas, seguro no pasará nada".

Aun mirando molesto a Meng Yao, Jiang Cheng respondió: "Eso es lo que quieres creer".

"Jiang Cheng..." Lo regañó Wei Ying.

Sin embargo ambos no pudieron seguir hablando, pues vieron que los jades de Gusu se
dirigían hacia ellos. Sonriendo amablemente, Wei Wuxian se apresuró a correr en dirección a
ambos hermanos Lan, ansioso por poder ver a su joven prometido.

"¡Lan Zhan!" Dijo Wei Ying alegremente: "Bienvenido al festival de la cosecha en


Yunmeng".

Sonriéndole ligeramente, Lan Wangji hizo una reverencia para su prometido, para luego
decirle: "Es un honor acompañarte en esta festividad".

Riendo, Wei Ying también hizo una reverencia siguiéndole el juego al menor: "Oh... Mi gran
e imponente alfa ¿Jugara conmigo esta noche también?"

Sin entender el doble sentido de aquella frase bromista dicha por Wei Wuxian, Lan Zhan
asintió: "Mmm".

Sonriendo de forma divertida al ver a su hermano ser engañado de esa manera, Lan Xichen
no dijo nada, haciendo una reverencia igualmente para saludar a Wei Wuxian: "Joven maestro
Wei".

"Zewu-Jun, buenas noches" Respondido Wei Ying de forma educada, respondiendo la


reverencia.
Viendo a su hermano con los dos jades, Jiang Cheng resoplo, acercándose a estos con pasos
más calmados, aun con una mueca de molestia en su rostro. Acercándose a su prometido,
Jiang Wanyin solo pudo decirle: "Xichen".

Al escuchar el tono de voz de su hermano, Wei Wuxian puso los ojos en blanco, pensando en
lo grosero que estaba siendo con su prometido, aun cuando este no había hecho nada en lo
absoluto. Pero sin dejarse intimidar, conociendo bien esa personalidad tan tosca del menor,
Lan Huan no abandono su sonrisa amable, acercándose más al menor para acariciar una de
sus mejillas mirándolo a los ojos.

"A-Cheng, te ves realmente hermoso esta noche" Lo alagó Lan Huan dulcemente.

"Deja de decir tonterías" Lo regañó Jiang Cheng, molesto.

Poniendo los ojos en blanco, Wei Wuxian tomo del brazo a su hermano de forma amigable,
regañándolo: "¿De verdad? Te está diciendo que eres lindo, podrías darle un beso para
agradecerle".

Poniéndose muy rojo con esas sugerencia, Jiang Cheng le grito a Wei Wuxian: "¡Claro que
no! ¡Eres un desvergonzado!"

Solo pudiendo reír ante la ocurrencia del joven Wei Ying, Lan Xichen tomo delicadamente la
mano de Jiang Cheng, entrelazando los dedos del otro con los suyos de forma cuidadosa. Lan
Huan no estaba apresurado, y aunque le daba gracia que Wei Ying siempre los estuviera
molestando, el esperaría a Jiang Cheng de forma paciente, después de todo había logrado
entender bien a su prometido y su especial temperamento.

"¡Solo fue una sugerencia!" Dijo Wei Ying riendo al ver a su hermano tan enfadado.

"Eres... Eres tan..." Dijo Jiang Cheng furioso, y soltando un fuerte suspiro, tomo fuertemente
a Lan Xichen de la mano para tirar de él: "¡No quiero volver a verte por toda la noche!"

Riendo Wei Wuxian solo pudo ver como su hermano, completamente rojo por la vergüenza,
se atrevía a alejarse en medio de la multitud con su sonriente y agradable novio. Aun
burlándose de Jiang Cheng a la distancia, Wei Ying se sorprendió cuando sintió como alguien
tiraba de su túnica para llamar su atención, girándose para ver de quien se trataba, se
sorprendió al ver a Lan Zhan intentando llamar su atención, nada contento de haber sido
dejado de lado por el mayor.

"¿Lan Zhan?"

Mirándolo a los ojos, Lan Wangji Le dijo: "Tu estas más lindo, realmente hermoso".

Sonrojándose mucho por las palabras del menor, Wei Ying sintió aquello como una especie
de karma, pues era ahora el quien no sabía que decir ante las palabras de su prometido:
"Hanguang-Jun se ve muy guapo hoy, realmente lindo..."

"Te dije que estas lindo, ahora agradéceme de forma apropiada" Pidió el menor.
Dándose cuenta de sus palabras, Wei Ying no pudo evitar reír, agachándose ligeramente para
besar los labios de su prometido un par veces con cortos y suaves toques, sonrojados aún más
y sintiendo como el menor lo abrazaba por la cintura con delicadeza. De cierta manera, Wei
Ying se había dado cuenta de que Lan Wangji se había vuelto un real adicto a los besos que le
daba, sin perder ninguna oportunidad para pedirle aquellas atenciones.

Separándose de sus labios y mirándolo a los ojos, Wei Wuxian le pregunto: "¿Entonces te
gustó?"

"Mmm".

"¿Quieres otro?"

Asintiendo contento, Lan Zhan susurro: "Mmm".

Sonriéndole igualmente contento, Wei Ying accedió, diciéndole al menor: "Esta bien, pero
será el último por un rato, hay muchas cosas que quiero mostrarte en el festival".

No muy contento, Lan Wangji respondió: "Mnn"

"No luzcas molesto... Antes ni siquiera te gustaban y te la pasabas huyendo de mí. Se bueno y
juega conmigo ¿Está bien?"

Suspirando resignado, Lan Wangji solo pudo suspirar: "Mmm".

Volviendo a acercarse al menor, Wei Ying le dio un beso un poco más largo, uniendo sus
labios por algunos segundos más, atreviéndose incluso a lamer uno de los labios del menor al
terminar para provocarlo, notando como el joven Lan ahora no se alejaba con estas acciones,
luciendo no muy sorprendido con su actuar.

"¿Ahora si vamos a jugar?"

"Mmm".
Capítulo 17.

a feria de los faroles en Yunmeng tenía varias actividades para todos los visitantes,
dividiéndose tanto entre los muelles como en las regiones fuera de estos, tenía varios sectores
bien divididos, entre los que resaltaban aquellos puestos que se encargaban de los juegos del
festival y de aquellos que se encargaban del comercio.

Pasando de aquellos botes y puestos en los que pobladores de Yunmeng se encargaban de


comerciar sus productos, Wei Wuxian dirigió a Lan Wangji directamente a aquella parte de la
feria en la que había juegos.

Pasando de "magos" y de algunas otras atracciones como teatros para niños y otros, Wei Ying
dirigió a Lan Wangji a su juego favorito en toda la feria, uno que además era verdaderamente
popular.

"Es muy simple" Le explico Wei Ying a su joven alfa: "Solo debes pagar para comprar aros
¿Ves todos los juguetes que hay en el piso? Lo único que debes hacer es ensartar el aro en
uno de los juguetes, aquel que logres encerrar con el aro es tuyo..."

Con atención, fijando sus ojos en aquellos juguetes de todas las formas que se encontraban en
el piso, Lan Wangji no hizo ningún comentario al respecto. De cierta forma, Lan Zhan se
sentía curioso de que Wei Wuxian se sintiera tan atraído a un juego de ese estilo a pesar de su
edad, ya que en ese puesto de juegos solo se podían ver niños de edades similares a las del
joven alfa. Pero prefiriendo no decir nada ante la infantil actitud de su novio, Lan Wangji
siguió escuchando atentamente.

"... Aquellos que están más lejos son los mejores y los más costosos, pero los más difíciles de
conseguir"

"¿Quieres jugar aquí?"

"¡Si quiero!" Dijo Wei Ying emocionado: "Por favor consigamos muchos juguetes juntos..."

Encarando a su prometido, Lan Zhan le pregunto: "Si quieres lo juguetes podemos


comprarlos".

Tomando dinero de su túnica, Wei Wuxian puso una cara enfadada para el menor: "El punto
no son los objetos que consigamos, el punto es jugar con esto pues es divertido..."

Aun sin entender el punto, pero prefiriendo no discutir con el mayor, Lan Wangji solo pudo
decir: "Mmm".

Sonriendo nuevamente contento, Wei Wuxian tomo aquellas monedas que había logrado
ahorrar de sus trabajos en cacerías nocturnas en la secta y pago vario aros para jugar. La
familia Jiang era indudablemente rica, una de las sectas más poderosas de cultivo, y la familia
más influyente en Yunmeng. Pero debido a la mujer alfa, Yu Ziyuan, la señora de la secta,
Wei Ying y sus hermanos habían crecido con mucha disciplina, y eso también contemplaba el
dinero.

Aunque eran ricos, a Wei Ying no le entregaban el dinero así nada más, cuando era joven no
tenía ni una sola moneda para sí mismo, y solamente cuando comenzó a practicar como
cultivador y a hacer cacerías nocturnas que pudo obtener algunas monedas de los trabajos que
hacía. Y aunque muchas de esas monedas las gastaba casi inmediatamente en licor, el cual
bebía a escondidas para no molestar a Madam Yu, había ahorrado un poco de dinero para el
festival.

En silencio, viendo como el omega pagaba los aros y regresaba a su lado, Lan Wangji decidió
esperar a que Wei Ying empezara el juego para observarlo. Así que el mayor, tomando uno de
los aros por los que había pagado, mordiéndose un labio y apuntando bien, lanzo este en
dirección a los juguetes que estaban en ese stand, fallado los primeros intentos y frunciendo
el ceño.

"¡Soy malo en esto!" Se quejó Wei Ying, para luego reírse de sí mismo: "Vamos Lan Zhan,
inténtalo"

"Mmm..."

De forma obediente, acercándose al contrario Lan Wangji tomo los aros restantes y los
examino en sus manos antes de lanzar uno. Con mucha puntería y habilidad, el joven alfa
logro encerrar en un aro un juguete cercano a ellos, sorprendiendo a Wei Ying, el cual no
pudo evitar reír y aplaudir emocionado, observando la audacia de su prometido al hacer
aquello.

"¡Muy bueno! Seguramente es suerte de principiante" Dijo Wei Ying riendo, observando
como al menor le entregaban aquel juguete que había ganado.

Sin responder, Lan Zhan tomo el juguete con una de sus manos, mientras que con la otra
volvió a tomar un aro para lanzarlo. Y ante la sorpresa de todos los presentes, con los dos
últimos aros que le quedaban, Lan Wangji logro conseguir otros dos juguetes, dejando a Wei
Ying sin habla.

"Lan Zhan... ¿Tu sabes que este juego es realmente difícil verdad? ¡Lo haces lucir
extremadamente fácil!"

Tomando sus otros dos juguetes, Lan Wangji solo pudo pestañear algo confundido, antes de
asentir a las palabras del contrario: "Es fácil".

Resoplando incrédulo, Wei Wuxian solo pudo observar con cierta envidia y hasta enfado
aquellos juguetes en las hábiles manos del joven maestro Lan, recordando que en todo su
tiempo jugando aquel juego en los festivales de Yunmeng, pocas habían sido las veces en las
que había conseguido ganar aunque sea uno de los premios. Esto debido a que los juguetes
que se extendían por el piso tenían diferentes formas e incluso alturas, así que apuntar era
demasiado complicado. Y sin embargo ahí estaba Lan Wangji, habiendo ganado tres juguetes
sin fallar ni una sola vez.
"De verdad eres increíble..." Susurro Wei Ying riéndose de nuevo.

Sin sonreír, solamente con un ligero sonrojo en sus orejas, Lan Wangji se apresuró a
acercarse a su prometido para entregarle todos los juguetes, para luego decirle: "Para ti, son
todos para ti".

Siendo ahora Wei Ying quien se sonrojo, apenas pudo tomar aquellos juguetes, sintiéndose
muy avergonzado pero realmente enamorado del contrario por aquel dulce detalle, sonriendo
y agachándose para besar una de sus mejillas: "Gracias, mi alfa Lan Er Gonzi".

Sintiéndose muy contento, Lan Wangji dejo que Wei Ying lo besara, y mirando aquellos
juguetes en el piso, el menor considero seriamente seguir ganando más de aquellos pequeños
artefactos para el contrario, considerando cuantos debería ganar para obtener un nuevo beso
de su omega.

Volviendo a ponerse erguido, Wei Ying miro contento los tres juguetes en sus manos, y
volvió a reír muy feliz: "Eres realmente increíble Lan Zhan. Es una pena que no tenga más
dinero, seguramente si compráramos mas aros podrías ganar la tienda entera para mi..."

Escuchando sus palabras, el joven Lan pregunto intrigado: "¿Dinero?"

"Si, solo necesitaríamos unas cuantas monedas más..."

Apresurándose, Lan Wangji tomo un saco de cuero de sus ropas, la cual se apresuró a
entregarle a su prometido, diciéndole: "Toma".

Sin entender nada, Wei Wuxian tomo aquella bolsita como pudo para luego abrirla,
observando como en el interior había más riqueza de la que había visto en su vida, varias
láminas de jade amontonadas, quedándose con la boca abierta, mirando a Lan Zhan sin saber
que decir.

"¿De dónde sacaste esto Hanguang-Jun?"

Con sinceridad, sin entender la sorpresa de su prometido, Lan Wangji respondió: "Me lo dio
mi padre para mi viaje, me dijo que debo comprarle cosas lindas a mi esposa para hacerla
feliz".

Sin poder evitarlo, Wei Wuxian comenzó a contar aquellas piezas de jade, quedándose cada
vez más sorprendido, pues para ese festival el solo había llevado unas monedas, mientras que
Lan Wangji había traído una fortuna.

"Un segundo... ¿Yo soy tu esposa verdad?" Preguntó Wei Ying.

Pensándolo por un segundo, Lan Wangji respondió de forma afirmativa: "Mnn..."

"¡Hanguang-Jun! ¡Cómprame licor!"

"¿Licor?"
Olvidando por completo los juguetes, Wei Wuxian rápidamente tomo al menor de la mano
para alejarse junto a este de los juegos infantiles, apresurándose para dirigirse al sector de
comercio, donde poniéndose de puntitas para ver entre los visitantes pronto ubico aquello que
buscaba: Los comerciantes de vino.

Debido a que Wei Ying debía ser criado como un "omega respetable", tenía prohibido beber
alcohol hasta que cumpliera mayor edad, una regla muy estricta dada por madam Yu, la cual
usualmente se quejaba del comportamiento poco "propio" de Wei Ying como un omega.

Y aun sabiendo que era prohibido, Wei Wuxian siempre se las había arreglado para poder
comprar licor y poder beberlo a escondidas. Así que después de darse cuenta alegremente de
que su dulce alfa tenía una gran fortuna, no dudo ni un segundo en pesar en comprar aquello
que tanto le prohibían.

Caminando junto a su prometido por el distrito comercial a gran velocidad, Lan Zhan se tomó
de su mano y lo siguió con un semblante muy serio, pasando por los muelles hasta esos
comerciantes los cuales vendían sus productos en botes alrededor del muelle. Avanzando
cada vez más hasta una parte que estaba un poco más alejada del resto, ambos se internaron
en la parte final del muelle, donde Wei Ying finalmente pudo ubicar un gran bote que vendía
licor al final de este.

Sonriendo satisfecho, Wei Wuxian se acercó al bote en medio de todos los compradores,
observando los diferentes tipos de vino y otros licores que vendían en este, tipos de bebida
típicos de Yunmeng, hechos en su mayoría de lotos o sus derivados.

"Bienvenido joven maestro" Lo saludo el vendedor al reconocer a Wei Ying como parte de la
familia Jiang por las túnicas que traía: "¿Desea probar alguno de nuestros vinos? Puede tomar
un poco de muestra joven maestro, por favor bébalo, es un honor para nosotros..."

Haciendo una reverencia agradecido, Wei Ying tomo de las manos de ese vendedor un vaso
de arcilla el cual contenía un líquido claro pero de un aroma fuerte, que a Wei Ying le hizo
agua la boca, deseando beberlo.

Por otro lado, Lan Wangji como cualquier otro alfa, teniendo un olfato mucho más sensible
que el resto, se apartó disgustado soltando la mano de Wei Ying, mirando fijamente aquel
recipiente de arcilla con ese líquido con un olor tan fuerte y desagradable que impresionaba
sus sentidos.

Sorprendido al sentir como su mano era soltada, Wei Ying se giró para ver a su pequeño alfa,
sonriendo con cierta malicia: "¿Qué sucede Lan Zhan? ¿Quieres que te deje beber un poco
primero?"
Capítulo 18.

Sorprendido al sentir como su mano era soltada, Wei Ying se giró para ver a su pequeño alfa,
sonriendo con cierta malicia: "¿Qué sucede Lan Zhan? ¿Quieres que te deje beber un poco
primero?"

Observando como Wei Ying se acercaba nuevamente a él con aquella cosa que olía tan mal,
Lan Zhan se apartó ligeramente: "¿Qué es esa cosa?"

"Es el mejor vino de loto de todo Yunmeng" Explico Wei Ying realmente contento, dándole
un sorbo a aquel recipiente con el trago: "Sumamente delicioso..."

"Huele mal".

Riéndose de la dulce inocencia de su joven prometido, Wei Ying termino de beber el vino y
volvió a acercarse a Lan Zhan, abrazándolo suavemente por el cuello: "¿Y ahora? Yo también
lo bebí, Hanguang-Jun ¿Acaso yo también huelo mal?"

De forma disimulada, Wei Ying soltó ligeramente sus feromonas para su alfa, mirando
fijamente su rostro para ver su expresión. Sin embargo Lan Wangji no hizo ningún tipo de
gesto, dejándose abrazar y mirando a su omega a los ojos. Al ver que su nuevo plan de tentar
a su joven alfa había fracasado, Wei Wuxian volvió a estallar en carcajadas, besando
suavemente una de sus mejillas antes de separarse de él.

"Entiendo, entiendo. Que malo Hanguang-Jun" Se quejó Wei Ying: "¿Realmente huelo tan
mal?"

Con las orejas ligeramente sonrojadas por la vergüenza, Lan Zhan se apresuró a decir: "Wei
Ying no huele mal, huele como... Huele como las flores. Huele muy bien".

Curioso, ya que por sí mismo no sabía cuál era el olor único de sus feromonas, Wei Wuxian
se atrevió a preguntar: "¿Cuáles flores?"

Avergonzado por sus propias palabras, Lan Zhan se negó a seguir hablando: "Mmm..."

"¡Que malo Hanguang-Jun!"

Riéndose de nuevo, Wei Ying decidió dejar de lado ese asunto, volviendo a girarse para
comprar su licor, sabiendo que todas las personas de su propia secta y los mismo vendedores
los miraban fijamente y debía tener aunque sea un poco de pudor.

Concentrando entonces en el vendedor de licores, Wei Ying observo el gran número de


botellas de vino que tenía en su bote, preguntándose a sí mismo: "¿Cuántos debería
comprar?"

Bajando su mirada a la bolsita de dinero de Lan Zhan, Wei Ying se dio cuenta que podía
comprar incluso todas las botellas si quería con ese dinero que el menor inocentemente le
había entregado. Así que suspirando algo resignado, decidiendo no pasarse con aquella
broma, Wei Wuxian decido comprar solamente 4 botellas de vino, lo cual solamente le
costaría una lámina de jade.

Observando como aquel vendedor le entregaba las botellas con el trago a Wei Ying, Lan
Zhan rápidamente se apresuró a tomarlas en vez del mayor, sorprendiendo a omega.

"¿Lan Zhan?" Pregunto Wei Ying algo confuso: "¿Qué haces?"

"Es pesado, yo lo cargare".

Sonriendo encantado por las palabras del pequeño alfa, Wei Ying dejo que su joven alfa
sujetara sus compras, mientras que los vendedores que habían presenciado aquel dulce acto
también sonrieron ante la dulzura de ese pequeño alfa.

Haciendo reverencias de gratitud, ambos prometidos volvieron a caminar por ese muelle de
regreso. Extendiendo una de sus manos, Wei Ying tomo entonces una de las botellas de vino
de las manos de Lan Zhan, comenzando a beberla con gusto.

"¿A Wei Ying le gusta el licor?"

Tomando un sorbo generoso de aquel delicioso vino, Wei Ying rápidamente respondió: "Me
encanta, pero está prohibido para los omegas en Yunmeng, raras veces puedo beberlo".

Razonando sus palabras, Lan Zhan respondió: "Entonces me encargare de que tengas todo el
vino que desees en Gusu. Así querrás quedarte por siempre".

Volviendo reír por sus palabras, Wei Ying lo miro de reojo: "Jiang Cheng me conto que en
Gusu tienen como 2500 reglas, y que entre esas está prohibido beber alcohol en el Receso
entre las nubes ¿Cómo hará entonces mi dulce alfa para conseguir licor para mi ahí?"

"Eso no importa, si hace feliz a Wei Ying yo lo conseguiré" Prometió Lan Zhan.

Sintiéndose nuevamente tentado a decir tonterías, Wei Wuxian dejo de caminar y se agacho
para ver a Lan Zhan a los ojos, con una sonrisa muy divertida le preguntó: "¿Y que hace feliz
a Lan Zhan? ¿Qué te gusta tanto que te hace sonreír?"

Con seguridad Lan Wangji respondió: "Wei Ying".

Sonrojándose mucho por la vergüenza, volviendo sentirse vencido por la dulzura de su alfa,
Wei Wuxian no supo que decir ante semejantes palabras, solo pudiendo mirarlo a los ojos.
Mientras que Lan Zhan, fijándose en todos los juguetes que Wei Ying cargaba solo con uno
de sus brazos, se apresuró a tomarlos también para cargarlos.

"Dámelos, son pesados, y los llevare por ti"

Sin poder evitar que su alfa tomara todas sus cosas, Wei Ying le dijo: "No esta pesado..."

Sin prestarle atención, Lan Zhan finalmente cargo todas las cosas de Wei Wuxian: "Lo está,
demasiado pesado para ti. Descuida, yo puedo llevarlo todo".
Riendo ante las palabras de su inocente alfa, Wei Ying dejo que Lan Zhan cargara sus
juguetes y las botellas de alcohol que acababan de comprar, para luego seguir caminando por
ese muelle de regreso a las puertas de Yunmeng, donde tenían planeado volver a jugar.

Sin embargo, volviendo a pasear por el sector comercial, Wei Ying se topó de frente con
Jiang Cheng, el cual lucia extremadamente perdido.

"¿A-Cheng?" Pregunto Wei Ying confuso, mirando al contrario: "¿Qué haces aquí?"

Mirando a su hermano molesto, Jiang Cheng resoplo molesto, cruzándose de brazos: "No era
a ti a quien quería ver..."

Poniendo una cara molesta, Wei Ying dio un nuevo sorbo a su vino antes de responder: "Que
malo eres Jiang Cheng..."

Acercándose a ambos omegas, Lan Wangji prontamente se dio cuenta de que su hermano no
estaba con Jiang Cheng, así que curioso pregunto: "¿Y mi gege?"

"A él es a quien estoy intentando buscar" Se explicó Jiang Cheng: "Estaba mostrándole cosas
del festival y de un minuto al otro le perdí la vista..."

Entendiendo mejor la situación, observando lo lleno que se había vuelto todo de un segundo
al otro, Wei Ying tomo al pequeño Lan Zhan de la mano antes de responder: "Vamos fuera de
los muelles, podemos intentar buscarlo desde ahí..."

Pensando en aquellas palabras más razonables, Jiang Cheng asintió aceptando aquella
propuesta, guiando a la pareja por el muelle. Mientras que poniéndose frente a de su pequeño
alfa, Wei Ying lo dirigió en medio de la multitud temiendo que este también se perdiera,
teniendo que girarse varias veces en su dirección para asegurarse de que Lan Zhan siguiera
tomado de su mano siguiéndolo.

Después de varios segundos de caminar en medio de la multitud, los tres salieron a las
puertas de Lotus Pier, observando ahí una escena que los puso tensos a todos, pero
principalmente a Jiang Cheng.

"Por favor líder de la secta Nie" Pidió Lan Xichen de la misma forma amable de siempre, con
una sonrisa agradable: "Seamos un poco más corteses, estamos dando un espectáculo..."

Furioso, sin parecer prestar mucha atención a las suaves palabras de Lan Xichen, Nie
Mingjue siguió presionando a su prometido, el cual aparentemente asustado se escondía
detrás de Lan Huan: "¡Responde mi pregunta Meng Yao! ¿Qué estabas haciendo ahí atrás?"

Siendo el espectáculo de todos los presentes, aquella absurda discusión comenzó por que
Meng Yao aparentemente había buscado a Zewu-Jun para saludarlo. Ambos apartándose de
sus respectivos prometidos, cruzaron un par de amables palabras a solas al pie del muelle,
donde fueron encontrados por Nie Mingjue, el cual no tardo en iniciar una de sus típicas
escenas de celos.

"¡Respóndeme Meng Yao!" Exigió Nie Mingjue nuevamente.


El omega de la secta Jin, aparentemente asustado, se tomó de la ropa de Zewu-Jun para
ocultarse detrás de este con más ahínco, escondiendo su delgada y pequeña figura detrás de
ese alfa.

"Perdóneme líder de la secta Nie..." Se disculpó Meng Yao con una voz dulce.

Pronto los susurros de los divertidos habitantes de Yunmeng se hicieron escuchar alrededor,
todos hablando al respecto de aquello que aparentemente era su principal entretenimiento.

"¿Qué acaso no es ese el alfa prometido del heredero de la secta?"

"¿Por qué está protegiendo a otro omega?"

"¿Por qué no está con el heredero Jiang?"

Ante estas habladurías muy cerca de sí mismo, Jiang Cheng no pudo evitar bajar la mirada
tristemente, observando como el atrevido Meng Yao se había abrazado a la cintura de Zewu-
Jun, aparentando debilidad y escondiéndose detrás de este con un rostro lastimero.

Poniendo una voz más enérgica, Lan Xichen se puso muy serio: "Líder de la secta Nie, esta
no es la forma de hablar con su prometido".

Nie Mingjue, mirando con desprecio y odio a Jin Guangyao respondió: "Él es un omega
inservible, no merece ningún tipo de respeto de mi parte".

Poniéndose firme, Lan Xichen respondió entonces: "No porque él sea un omega significa que
es inservible, aun si no es su prometido o algo suyo merece el mismo respeto que cualquier
persona aquí presente, incluso el mismo respeto que un alfa"

Riéndose de las palabras defensoras de Lan Xichen, Nie Mingjue respondió entonces:
"¿Meng Yao se merece respeto? Ten cuidado con ese omega de la calle o..."

Saliendo de la multitud con un paso altanero propio de su secta, Jin Zixuan rápidamente se
entrometió en aquella penosa escena, mirando fríamente al prometido de su hermano menor.

"Hermano Nie" Dijo Jin Zixuan con el tono de voz muy serio: "Discúlpese de inmediato,
acaba de insultar a un omega de la secta Jin, mi hermano. Tenga por seguro que esto será
inmediatamente informado a mi padre".

Sin decir nada más, terminando con aquella discusión tonta de forma abrupta, Jin Zixuan
tomo delicadamente a su hermano de un brazo para hacer que dejara de abrazar a Zewu-Jun,
alejándolo de ambos con el mismo rostro sereno y serio.

Y mientras se alejaba, aun mirando a Lan Xichen de reojo, Jin Guangyao dijo en un susurro:
"Perdóname A-Chen".

Resoplando furioso, mirando a su prometido alejarse, Nie Mingjue rápidamente hizo lo


mismo dejando a un muy serio Lan Xichen en aquel sitio, el cual lo observo seriamente irse.
Al haberse terminado semejante espectáculo, todas las personas se apresuraron a seguir su
camino, terminando con todo. Y mirando a su serio prometido en medio de la multitud, Jiang
Cheng se negó a llorar, presionando sus manos en puños.

Siendo el primero en darse cuenta de esto, sumamente preocupado, Wei Ying soltó a Lan
Zhan para tomar a su hermano de un brazo: "A-Cheng estoy seguro de que esto fue una
confusión".

Bajando la mirada tristemente de nuevo, Jiang Cheng respondió tristemente: "Él no dudo en
dejarme solo para venir a hablar con su querido amigo. Aun si esto ocasionó una confusión,
él me dejó para hablar con su querido Meng Yao, no dudó en abandonarme en medio de la
multitud para ir con él"

"A-Cheng..."

Suspirando tristemente, Jiang Cheng se soltó bruscamente del agarre de Wei Ying,
comenzando a caminar en medio de la multitud en dirección a Lotus Pier.

Mirando a su hermano, Wei Ying rápidamente pregunto: "¿A dónde vas Jiang Cheng? El
festival apenas ha comenzado..."

Tristemente, Jiang Cheng respondió: "Ya he tenido suficiente de este festival por una noche".

Realmente desesperado por aquella situación, Wei Ying volvió a tomar a un confuso Lan
Zhan de la mano, siguiendo a su hermano: "A-Cheng espera..."

"¡Déjame en paz Wei Wuxian!" Le grito Jiang Cheng realmente furioso, girándose para
encarar a su hermano: "¡Quiero estar solo! ¡Aléjate maldita plaga!"

Suspirando resignado ante tales insultos, Wei Ying lucio realmente triste, dejando a su
hermano en paz, solamente pudiendo sus usurar mientras lo veía irse: "A-Cheng..."

Aun tomado de la mano de su prometido, Lan Zhan también observo al líder de la secta Jiang
entrar apresurado dentro de Lotus Pier, sin entender nada en lo absoluto, pues aunque había
presenciado la discusión, el pequeño alfa Lan estaba muy lejos de entender aquellas
complicadas situaciones entre alfas y omegas y compromisos entre sectas, solamente
pudiendo tener sus ojos en Wei Ying.

Dándose cuenta de que su prometido lucia realmente triste, Lan Zhan se apresuró a tomar una
de las botellas de licor que sostenía para ofrecérsela a Wei Ying: "No estés triste..." Pidió el
menor realmente preocupado.

Bajando rápidamente la mirada, Wei Ying volvió a sonreír con tal dulce acto, tomando
aquella botella de licor contento: "Gracias Lan Zhan".

Todavía triste por lo sucedido, Wei Ying se agacho para volver a besar los labios de su alfa,
olvidando aquel mal y triste rato gracias a los dulces actos de su Hanguang-Jun.
Capítulo 19.

¿Cuál era el deber de un alfa?

Esas eran preguntas que Lan Xichen se había hecho muchas veces a lo largo de los años, y
aunque la gente siempre esperaba demasiadas cosas del próximo líder de Gusu, el joven Lan
nunca creía cumplir las expectativas de todos los que lo rodeaban.

Su familia, sus amigos, incluso los consejeros de su secta... Lan Xichen estaba seguro de que
les había fallado a ellos aunque fuera una sola vez en su vida. Y aunque había logrado
aprender a vivir con el dolor de tener demasiadas expectativas sobre sus hombros que no
podía llegar a cumplir, Lan Xichen se enorgullecía de no haber decepcionado a una persona
especial en su vida, hasta ahora...

Respirando profundamente, Lan Xichen se acercó a la puerta corrediza de esa habitación, y


sonriendo de la forma más amable que pudo, ligeramente temeroso, toco la madera de la
puerta esperando que su prometido pudiera abrirle.

"¿Quién es? ¡Dije que no quería ser molestado!" Rugió Jiang Cheng desde el interior: "Wei
Wuxian, si eres tú voy a matarte..."

Sonriendo un poco más al escuchar sus enfadadas palabras, sin ver la puerta abrirse, Lan
Xichen respondió: "YinYin, soy yo".

Un silencio se hizo por unos segundos en el interior de la habitación, hasta que Jiang Cheng
se acercó a la puerta y sin abrir respondió: "Lan Huan, ya te había dicho que no me llames así
¿Qué quieres?"

"YinYin, por favor..."

"¿No estabas ocupado? Parecías muy divertido ahí afuera ¿Por qué estás aquí ahora?"
Reclamo Jiang Cheng, negándose a abrir la puerta de su habitación: "No quiero importunar tu
reunión con tu querido amigo de Laling".

Entendiendo la molestia en las palabras de Jiang Cheng, Lan Xichen decidió ir con calma, lo
que menos quería era enfadarlo más, así que retrocediendo un poco de la puerta, intento
explicarse: "YinYin no te enfades por favor, solo fue una confusión ¿Por qué querría estar
con alguien más que no fuera mi hermoso YinYin?"

En privado, cuando ambos no debían comportarse como los herederos de Yunmeng y Gusu,
tanto Jiang Cheng como Lan Xichen eran más cariñosos el uno con el otro. Se llamaban por
nombres de cariño, y llegaban a tomarse de las manos e incluso a darse abrazos, algo que
para ambos era un comportamiento incluso algo desvergonzado.

"Lan Huan, lárgate" Dijo Jiang Cheng furioso, a punto de volver a llorar por la ira que había
sentido hace pocos segundos.
"YinYin, ábreme".

"¡No! ¡Vete al demonio!"

"Eso sería una pena, porque compre un dulce con la forma de un lindo cachorro para mi
YinYin ¿No quieres verlo?"

Apoyándose contra la puerta de su habitación, Jiang Cheng se mordió un labio dudando,


sintiendo a su alfa aun fuera de la habitación. Después de un par de minutos dudando, se
limpió las lágrimas de las mejillas para abrir la puerta, mirando a Lan Xichen con el ceño
fruncido.

"YinYin ¿Puedo pasar?" Pregunto Lan Xichen de la misma forma amable de siempre.

Entrando en su habitación fingiendo demencia, Jiang Cheng se encogió de hombros,


intentando lucir desinteresado: "Has lo que quieras".

Aun furioso, el joven Wanyin camino a su cama, donde se sentó con los brazos cruzados y un
rostro de obvia molestia. Por su lado, Lan Xichen sonrió amablemente, entrando detrás de su
prometido y cerrando la puerta detrás de él. Con curiosidad, recorrió la habitación del menor
con sus ojos, antes de caminar a la cama también, sentándose junto a él.

"Mira YinYin, te traje un dulce" Dijo Lan Xichen, ofreciéndole al molesto joven un dulce de
azúcar con la forma de un perro.

De reojo, mirando aquel dulce de azúcar muy propio de Yunmeng, Jiang Cheng refunfuño
antes de aceptar el dulce y prácticamente arrebatárselo de las manos a Lan Xichen, el cual no
dejo de sonreírle.

"Bien, si era lo único que querías puedes irte, tu mejor amigo te espera".

Tomando suavemente una de las manos del contrario, Lan Xichen comenzó a hablar para
intentar explicarse: "YinYin ¿Recuerdas de lo que hablamos el primer día que nos
conocimos? ¿Lo que me pediste?

"¿Eso que tiene que ver ahora?" Pregunto Jiang Cheng de forma brusca, realmente furioso.

Sin dejarse intimidar, el primer jade de Gusu continuo con su explicación, tomando
suavemente al contrario de la mano con delicadeza: "Me pediste que te respetara por ser
omega, que te diera tu lugar, que sin importar lo que pasara o lo que dijeran las personas, yo
no podía hacerte menos por tu género. YinYin me dijo entonces el valor de las decisiones y
las vidas de los omegas, por que estabas en contra de como otros líderes y otros alfas los
disminuían por su género, y que tu querías luchar entonces por hacer un mundo más libre y
mucho más justo para todos los que son como tú".

Recordando bien esas palabras, pues Jiang Cheng las había prácticamente ensayado en
soledad antes de conocer a Lan Huan hace ya 10 meses, el joven omega solamente pudo
asentir aún muy enfadado, pues esas no solo eran sus propias ideas, eran las ideas que
Madam Yu, un alfa y su madre, le habían inculcado desde su nacimiento. Su madre siempre
le había explicado su lugar y la decencia de ser un omega, algo que siempre calo en el
espíritu de Jiang Cheng.

"YinYin, yo no puedo ver sufrir a otro omega, no puedo soportar saber que alguien es injusto
con una persona que es como tú, porque recuerdo todo lo que he aprendido de ti, las cosas
que me enseñaste, y entiendo que como alfa yo tengo que hacer algo".

"Sigo sin entender Lan Huan" Lo interrumpió Jiang Cheng: "Si viniste para recordarme algo
que ya sabía entonces puedes irte ahora, lo que me dices es algo que yo se incluso mejor que
tú, así que no necesito que me lo repitas" Sentencio el menor furioso, alejando bruscamente
su mano del contrario, sin querer mirarlo si quiera.

"YinYin, mi querido YinYin, por favor piénsalo bien, sin dejar que el odio por A-Yao nuble
tu corazón" Pidió Lan Xichen: "¿A ti te parece normal su compromiso? ¿Te parece justo para
él? Yo te he contado cientos de veces todo lo que ocurrió esa noche cuando el acudió a mi
habitación, como me conto que prácticamente fue obligado a su matrimonio cuando él ama a
otro alfa, lo mal que lo trata el líder de la secta Nie, y lo mucho que lo repudian ahora todos
los de la secta Wen por la ruptura de lazos que él técnicamente causo. Esto no es su culpa, y
A-Yao no tiene nadie que lo defienda, ni su propia familia, ha vivido encerrado toda su vida
solo por ser un omega ¿No debería hacer yo algo entonces? ¿No es lo que YinYin me ha
enseñado?"

Ablandando ligeramente su corazón, Jiang Chen miro al contrario de reojo, comiendo su


dulce unos segundos antes de responder: "Lo entiendo, y estoy agradecido de tener un
prometido tan justo y honorable con omegas, ellos son un género desfavorecido a los que
siempre ayudare, sin importar los errores o celos que tenga. Pero aunque todos hemos notado
ese victimismo en esa tortuosa relación por parte de la relación entre el líder de la secta Nie y
el joven Meng Yao, hasta tú tienes que admitir que hay ciertas cosas raras en esa historia".

"¿Estas sugiriendo que Meng Yao me está engañando cuando acude a mi llorando a causa de
su prometido?"

"No lo sugiero, lo sé" Dijo Jiang Cheng, con mucha seriedad: "No confió en ese omega A-
Huan, no confió en la forma en la que sonríe con su prometido y luego acude a ti llorando, no
confió en su extraño tipo de cultivo, y no confió en la labor poco usual que cumple en la secta
Jin. No me gusta la forma en la que es tratado por su prometido o su familia, la forma en la
que se lo disminuye por ser un omega, pero eso no significa que crea en las cosas que dice y
mucho menos en todo el dolor que dice padecer".

Sonriendo de forma amable, notando que el menor finalmente se había relajado, Lan Xichen
se atreve a acariciar una de sus mejillas, algo ante lo que Jiang Cheng no se niega, aun
comiendo su dulce gustoso.

"Por favor YinYin, entiendo tu desconfianza ante alguien como Meng Yao, ha tenido malas
habladurías a su espalda desde que ingreso en la secta Jin ¿Pero acaso no todos somos
víctimas de esos rumores? No juzgo ni planeo cambiar tu forma de pensar de él, es un buen
amigo mío, pero antes quiero pedirte que escuches su historia, que lo conozcas, quiero que tú
y ese omega que también es preciado para mí se lleven bien" Pidió Lan Xichen.
Volviendo a refunfuñar y poniendo una cara extraña por un segundo, Jiang Cheng frunció el
ceño, haciendo reír a Lan Xichen, el cual no dejo de acariciar el rostro de Jiang Cheng,
atrayéndolo más en su dirección para abrazarlo, sintiéndose ligeramente en paz al tenerlo en
sus brazos con las cosas solucionadas.

"Por favor YinYin, ayúdame a proteger a ese omega" Pidió Lan Xichen con su típica dulce e
ingenua actitud.

Suspirando resignado, aun comiendo ese dulce, Jiang Cheng levanto la mirada para ver esos
ojos azules muy serenos que tenía su prometido, sonrojándose un poco. El olor de las
feromonas de Lan Huan era mucho más sobrio que el de su hermano, el cual a veces incluso
solía deslumbrar ligeramente a Wanyin, pues ese fuerte aroma a un incienso desconocido que
liberaba Lan Wangji no solo causaba efecto en su prometido, a veces también lo hacía en los
omegas cercanos, algo que le llevaba a pensar a Jiang Cheng que el niño realmente debía
aprender a controlarse con su hermano, al igual que su hermano debía aprender a comportarse
como un omega digno frente a su prometido Lan.

Sin embargo Lan Huan tenía feromonas suaves que a Jiang Cheng le recordaban al océano,
un aroma delicioso a espuma de mar, que a veces cuando se paseaba en barco por el lago de
Yunmeng lo hacía suspirar su nombre. Lan Xichen era tan puro y fuerte como el agua, y en
cada brisa marina que Jiang Wanyin respiraba no podía evitar pensar en lo mucho que le
gustaba y como había comenzado a amarlo.

"Entiendo" Dijo Jiang Cheng finalmente, después de tantos minutos de silencio: "Hare mi
mejor esfuerzo por ayudar a Jin Guangyao junto a ti, porque si tú crees que es lo correcto lo
será, y yo quiero hacer el bien por siempre a tu lado A-Huan".

Sonriendo realmente contento al ver aquel rostro hermoso finalmente tranquilo, Lan Xichen
sintió un impulso desconocido, un impulso que lo llevo a sostener a Jiang Cheng mas cerca
de su cuerpo y luego darle un cariñoso beso en una mejilla, sorprendiendo mucho al
contrario, que sonrojo por completo su rostro.

"¡A-Huan!" Grito Jiang Cheng, soltándose de ese apretado abrazo de golpe: "¿¡Que crees que
haces!?"

Dejándolo apartarse, Lan Xichen volvió a sonreír de manera amable, sintiendo sus orejas
sonrojarse ligeramente después de haberle dado su primer beso a su omega: "Fue un beso de
amor YinYin"

"¡Es impropio! ¡No puedes hacerlo!"

Poniéndose de pie de la cama de golpe, Jiang Cheng lucio completamente sonrojado y


avergonzado, temblando y sujetando su mejilla con una de sus manos, aparentando que
podría tener un colapso por la vergüenza.

Poniéndose de pie con calma, y acercándose al contrario con cierta precaución, temiendo ser
golpeado por este, Lan Xichen se disculpó: "Perdóname YinYin, yo realmente me deje llevar.
Te amo demasiado, y pensar en besarte..."
Luciendo más avergonzado aun, Jiang Cheng se apresuró a decir: "¡No lo digas!"

Sonriendo, Lan Xichen tomo al contrario cuidadosamente de la cintura, abrazándolo con puro
cariño, sin dejar de soltar sus suaves feromonas para el omega, esperando así poder calmarlo
por fin. Y después de varios segundos, logrando recobrar la calma, Jiang Cheng correspondió
el abrazo para luego volver a separarse, aun con las mejillas rojas.

"No lo hagas de nuevo" Pidió Jiang Cheng con seriedad: "Sabes que no podemos, las reglas
de cortejo lo establecen de forma clara. Lan Huan, tú tienes prohibido besarme".

Sonriendo de una forma triste pero resignada, Lan Xichen asintió ante las palabras del
contrario, tomándolo delicadamente de la mano: "Lo entiendo YinYin, no volverá a suceder
jamás".

Asintiendo ante las palabras del contrario, Jiang Cheng también tomo la mano de su
prometido, comenzando a tirar de el para sacarlo de su habitación: "Volvamos al festival".

"Claro YinYin..."

Desviando la mirada avergonzado por un segundo, Jiang Cheng dejo que Lan Xichen lo
guiara por su habitación hasta la puerta de salida de su cuarto, abriendo para él la puerta. Y
bajo la luz de la luna, Jiang Cheng volvió a quedarse deslumbrado ante la belleza de su
prometido, mirando fijamente ese rostro sereno y sonriente del contrario, solamente pudiendo
pensar en una cosa: Que él también quería besarlo.

Y temblando ligeramente, presionando aquel dulce con una de sus manos casi hasta
romperlo, Jiang Wanyin no pudo esperar más y rápidamente se acercó a Lan Huan para besar
una de sus mejillas con un toque sumamente rápido, volviendo a ponerse completamente
rojo.

Sonriendo por el atrevimiento del contrario, Lan Xichen solo se quedó en silencio para no
avergonzar demasiado a su pobre omega, el cual siguió con aquel ataque de pánico y
vergüenza, luciendo extremadamente adorable.

"Te amo YinYin" Le dijo Lan Xichen con dulzura.

Aun lleno de pánico, Jiang Cheng trago un poco de su saliva nervioso antes de responder: "Si
yo también te amo... O lo que sea..."

Riendo por aquellas dulces y agresivas palabras, Lan Xichen volvió a tirar de la mano de su
omega para sacarlo de su propia habitación, dirigiéndolo de nuevo al festival a las afueras de
Yunmeng, donde pronto comenzarían a soltar las linternas.
Capítulo 20.
Chapter Notes
See the end of the chapter for notes

"... Así que esa es la razón por la que ambos estaban peleando" Termino de explicar el mayor,
aun tomado de la mano de Lan Zhan.

Saliendo de aquel pequeño teatro para niños aun tomado de la mano de su prometido, Lan
Wangji guardo respetuoso silencio, pensando en las palabras que el mayor acaba de decirle.

Después de aquel lamentable espectáculo en el que Jiang Wanyin se fue del festival y luego
fue perseguido por su prometido, Wei Ying intento pasar el mal rato alejándose del tumulto
para poder tranquilizarse. Después de lo que había visto quiso ir a golpear a Lan Xichen, sin
embargo a duras penas se contuvo pues sabía que era el hermano mayor de su alfa, y no
quería tener problemas por un posible mal entendido con alguien a quien en un futuro
consideraría familia.

Fue así que Wei Ying, escapando de la multitud, fue a uno de los lugares más apartados de
todo el festival, una pequeña carpa donde artistas ambulantes presentaban escenas cómicas
para niños. En los festivales Wei Wuxian amaba ir a esos teatros, pues la comedia tonta y sin
sentido bebiendo un buen vino le resultaba agradable. Sin embargo su intención al ir ahí fue
intentar relajarse después de lo sucedido y mantener distraído a Lan Zhan mientras lo hacía.

Después de varios minutos cuando el cielo oscureció aún más el show término, así que ya
más tranquilo y después de haberse bebido todas las botellas de vino que habían comprado,
Wei Ying salió del teatro acompañado de su joven alfa. El cual solamente cargando consigo
los juguetes que habían conseguido hace rato, decidió aclarar sus dudas con Wei Ying.

"¿Por qué se enojó tu hermano?" Pregunto Lan Zhan sin rodeos.

Fue así que de una forma simple, Wei Ying camino al lado de su alfa por los muelles y le
explico la delicada situación entre un alfa y un omega: "Mi alfa debe entender que no todos
los omegas y los alfas se comprenden bien entre ellos, hay muchas confusiones que dan lugar
a celos y envidia entre parejas"

"¿Celos?"

"Exactamente. Los alfas suelen ser muy posesivos con los omegas, así que cuando ven a su
omega acercándose a otro alfa suelen reaccionar de una forma demasiado instintiva, dejan a
su alfa interior tomar el control y muchas veces se dejan llevar por esos sentimientos. Eso
paso hace unos minutos, el líder de la secta Nie se sintió celoso de Zewu-Jun, y A-Cheng se
sintió celoso ce Meng Yao. Así que como entenderá el joven Lan Er Gonzi, probablemente
esta pelea no haya sido más que una terrible confusión"

Reparando de una forma profunda en las palabras de su prometido, Lan Wangji se puso más
serio para decir: "Patético".
Al escuchar esas palabras tan frías y dudas Wei Ying no pudo evitar reírse, tomándose
fuertemente de la mano de su alfa y mirándolo con diversión: "¿Eso significa que mi alfa no
se pondría celoso con nada?"

Mirándolo con obvio escepticismo y frialdad en su rostro, Lan Wangji respondió sin dudar:
"Patético".

Levantando una ceja bastante divertido con el proceder de su pequeño prometido, Wei
Wuxian no pudo evitar preguntarle al contrario: "¿Entonces mi joven alfa definitivamente no
se sentiría celoso si yo coqueteo con alguien más?"

Con el mismo tono serio de siempre, mirando al contrario de reojo, Lan Wangji dijo con un
tono desafiante: "No".

"Entonces probémoslo..."

Riendo divertido, Wei Ying soltó la mano del joven maestro Lan y acercándose a la orilla de
aquella playa tomo una hermosa flor de loto de las tranquilas aguas del lago de Yunmeng.
Mirando bien a su alrededor, Wei Ying fijo su vista en dos hermosas señoritas bien vestidas
que justamente paseaban por los muelles en ese instante. Por el aspecto de estas hermosas
mujeres beta, Wei Ying pudo suponer que provenían de una de esas familias ricas que habían
venido por el festival.

Usando ese típico tono ligeramente arrogante y una actitud seductora, el omega de la secta
Yunmeng Jiang se acercó a ambas para hablarles: "Bellezas desconocidas, no pude evitar
fijarme en sus hermosos rostros y su elegante figura, por favor acepten esta flor como un
regalo de mi parte por semejante belleza que ahora adorna Lotus Pier gracias a su presencia".

Sin embargo antes de que Wei Ying pudiera siquiera extender aquella flor en dirección a las
jóvenes, la mano de Lan Wangji lo tomo de la muñeca y lo alejo con rapidez. Las señoritas al
ver a ese joven alfa que prácticamente había corrido a su encuentro, no pudieron evitar reír
entre ellas, fijándose en las sonrojadas orejas del menor y su rostro con una mueca de enfado.

"¿Qué sucede Lan Zhan?" Pregunto Wei Ying riéndose también, girándose para ver a su
pequeño alfa que aún lo sujetaba firmemente de la muñeca: "¿Acaso te pusiste celoso?"

Presionando los dientes furioso, ya sin poder ocultar sus celos por aquel omega que su alfa
reclamaba como suyo, Lan Zhan exclamo furioso: "No".

Y sin decir más palabras, el joven maestro Lan comenzó a tirar de Wei Ying para alejarlo de
aquellas mujeres rápidamente, haciendo reír al omega de la secta Jiang.

"¡No le des flores a nadie!" Exclamo Lan Zhan furioso.

Riéndose Wei Ying se dejó tironear de aquella manera algo brusca, tomando aquella flor de
loto para acomodarla en su cabello como un adorno: "No lo hare si mi esposo me lo
ordena..."

"¿De verdad?" Pregunto Lan Zhan dejando de caminar para mirar a su pareja.
"Claro gege" Dijo Wei Ying con confianza: "Prometo no hacerlo mientras mi lindo esposo
este mirando, cuando Lan Zhan se vaya tal vez..."

"¡Desvergonzado!"

Después de aquel desafortunado evento con las jóvenes doncellas en los muelles, Wei Ying
tuvo que usar sus mejores tácticas para contentar a su joven alfa Lan Wangji, ya que desde lo
sucedido este se notaba mucho más posesivo y más brusco de lo usual, tomando a Wei Ying
fuertemente de un brazo y alejándolo de todos, incluso gruñendo a otros alfas que confusos
pasaban junto a ellos.

"Gege por favor para" Pidió Wei Ying entre risas, siendo arrastrado a toda prisa entre la
multitud de los muelles: "Mi fuerte alfa me está lastimando..."

Sin embargo, aunque Lan Wangji había escuchado claramente las palabras algo adoloridas de
su mayor, no detuvo su rápida marcha, arrastrando al contrario sin contemplaciones, aún más
debido a su estridente e incontrolable risa.

"¡Gege me haces daño!" Se siguió quejando Wei Ying.

Sin embargo Lan Wangji no se detuvo hasta llegar a una parte mucho más apartada del
festival, cerca de la residencia de los Jiang donde había una pequeña área de descanso en
medio de un prado, donde casi no había personas. Observando ese lugar solitario, Lan Wangji
arrastro a Wei Ying a este sitio, y buscando una pequeña banca que estuviera cerca de un
muro, sentó en este al mayor a la fuerza, para luego poner sus dos brazos alrededor del
cuerpo de este y sostenerlo muy pegado al muro con todas sus fuerzas.

Viéndose atrapado, Wei Wuxian no opuso ninguna resistencia, sabiendo lo mucho que le
gustaba a su alfa mantenerlo inmovilizado aparentemente. Y solamente pudiendo reír, se dejó
presionar fuertemente contra aquella pared del muro exterior de Lotus Pier, decidiendo
esperar a que el alfa de Lan Wangji se tranquilizara antes de intentar hacerlo entrar en razón.

Aun abrazado fuertemente al delgado cuerpo de su omega, Lan Zhan tuvo que tomar fuertes
inspiraciones para calmarse, pegando su rostro al cuello de Wei Ying para dejarse calmar por
su suave y delicioso aroma.

Ya más tranquilo y con la mente tranquila, Lan Wangji pidió: "No vuelvas a hacer eso,
jamás".

Al escuchar aquella orden, Wei Ying volvió a estallar en fuertes carcajadas, mirando al menor
con diversión y lujuria: "¿Por qué no debería hacerlo gege? Pensé que mi alfa no se ponía
celoso".

Con los dientes presionados con furia, Lan Zhan dijo: "Wei Ying... No".

Dándose cuenta de que tal vez había ido demasiado lejos otra vez, Wei Ying perdió
ligeramente su sonrisa, sintiendo unas fuertes feromonas muy potentes proviniendo del
cuerpo de su alfa, que de solo sentirlas lo hicieron sentir mareado: "Entiendo Lan Zhan, está
bien".
"Promételo".

"¿Qué cosa?"

"Que no volverás a hacerlo" Exigió Lan Zhan con más determinación aun: "Te digo que no
Wei Ying, no..."

Sintiéndose mas mareado aun con esas fuertes feromonas que incluso le impedían pensar,
Wei Ying solo pudo asentir suavemente con la cabeza: "Esta bien gege, no lo hare de nuevo
Lan Er Gege".

Sintiéndose solo un poco más tranquilo con las palabras de Wei Ying, Lan Zhan dejo de
poner un rostro enfadado, acercándose nuevamente al cuello de su omega para lamerlo
suavemente, negándose a soltarlo.

Y aunque el joven alfa probablemente no se daba cuenta, era claro para Wei Ying lo que
estaba sucediendo, y es que el alfa de Lan Wangji lo estaba marcando como su propiedad con
sus feromonas, unas que tenían un olor agresivo y atemorizante, que seguramente se
impregnarían en la ropa y el cuerpo del omega incluso por días después de que terminara el
festival. Y sintiendo esas lamidas en su cuello que incluso llegaban a su nuca, ese lugar tan
peligroso, Wei Ying se sonrojo mucho, poniendo sus manos en el pecho de su alfa intentando
separarlo, cada vez más sonrojado.

"Está bien Lan Zhan, ya lo prometí..."

Sin dejar de lamerlo, solamente pudiendo obedecer a su alfa, Lan Wangji pronuncio: "Te dije
que no".

Cada vez sintiéndose más pesado al respirar, Wei Ying intento forcejear de nuevo, cada vez
más débil: "Lan Zhan detente, no puedo respirar..."

"¡No!"

Con estas duras palabras, Lan Wangji levanto el rostro del cuello del mayor para mirarlo a los
ojos, dejándole ver al contrario que sus ojos se habían vuelto de un color mucho más dorado
y brillante, algo que acero peligrosamente el corazón del joven omega, que asustado se dio
cuenta de que alfa estaba tan fuera de control que probablemente incluso entraría en celo.

"L... Lan Zhan..." Susurro Wei Ying algo temeroso: "Lo siento..."

Subiendo sus manos al rostro del menor, Wei Ying lo tomo delicadamente, y acariciando sus
mejillas le dio un cariñoso beso en los labios, solamente intentando tranquilizarlo.
Reaccionando ligeramente tras ese beso, Lan Zhan aflojo la fuerza que tenía sobre todo el
cuerpo de Wei Ying, comenzando a abrazarlo gentilmente por la cintura, pegándolo mucho a
su cuerpo pero sin forzarlo. Mientras que Wei Wuxian, sintiéndose mejor debido a que el olor
de aquellas fuertes feromonas había comenzado a desaparecer, siguió con aquellos gentiles
besos sobre los tibios labios del menor, hasta que finalmente pudo sentirlo calmado.
Volviendo a sonreír, Wei Ying finalmente dejo de besar a Lan Zhan, separándose un poco de
este para observar a los ojos al menor, el cual volviendo a su tono normal lo miraba
igualmente, algo sonrojado por los besos pero aparentemente normal.

"Hanguang-Jun, Hanguang-Jun... Que malo. Presionaste tan fuerte mis espalda que creí que
me romperías varios huesos, que alfa tan posesivo y malo..."

Sintiéndose mucho más avergonzado por estas palabras, Lan Wangji sintió sus orejas arder
por la vergüenza, bajando la mirada rápidamente apenado: "Wei Ying lo siento".

Riéndose despreocupado, Wei Wuxian volvió a darle otro beso corto al menor, sintiéndose
nuevamente relajado y tranquilo: "Lan Zhan, que miedo. Creí que ibas a comerme. Pero fue
divertido, creo que lo hare más a menudo".

"¡Wei Ying!"

"Perdón, perdón, perdón... Perdóname Lan Zhan, no lo hare, es una promesa, una promesa..."

Mirando al contrario de forma desconfiada, Lan Wangji respondió: "Es una promesa".

Asintiendo con seguridad, Wei Ying también afirmó: "Es una promesa".

Respirando un poco más tranquilo, Lan Wangji aflojo por completo la fuerza de su abrazo,
solamente sosteniendo al contrario delicadamente por la cintura, mientras que contento se
dejaba acariciar las mejillas y aun dar besos cortos en los labios, sintiéndose completamente
en paz con aquello.

Sonriendo al ver al menor finalmente tranquilo, Wei Ying le dio un último beso en la frente
antes de separarse de él: "Bien Lan Zhan, ya es bastante tarde, seguramente ya deben estar a
punto de lanzar las linternas, debemos apresurarnos".

Soltando la cintura del mayor y permitiéndole ponerse de pie, Lan Wangji susurro: "Mmm".

Poniéndose de pie de aquella alejada banca, Wei Ying se sacudió ligeramente la ropa,
frunciendo el ceño al ver el piso: "¡Lan Zhan! ¡Dejaste caer los juguetes y se rompieron!"

Dándose cuenta de que al abrazar a Wei Ying había dejado caer esos preciados juguetes que
había conseguido para el mayor en el juego, Lan Wangji dijo realmente arrepentido: "Wei
Ying lo siento, perdóname..."

"Eran míos Lan Zhan, tú me los regalaste..."

Sintiéndose muy mal y demostrando a penas su desesperación, Lan Wangji se sostuvo


rápidamente de la mano de Wei Ying, para luego decirle dulcemente: "Ganare toda la tienda
de juguetes para ti, también comprare todo el vino, todo el licor que tú me pidas. Solo no te
pongas triste".

Riendo de nuevo, Wei Ying se agacho un poco para besar dulcemente una mejilla del menor:
"¡Era una broma Lan Zhan! No me importan los juguetes, me gusto más el abrazo que me
diste".
Suspirando algo molesto, Lan Zhan solo pudo decir: "Mnn..."

Aun riéndose por su atrevimiento, Wei Ying tomo alegremente la mano del menor para luego
caminar dando algunos saltitos de vuelta a los muelles, aun riéndose por haber engañado de
esa forma a su pequeño alfa.

"Pero ahora que lo dijiste... Supongo que puedes comprarme más alcohol después de que
termine el festival" Dijo Wei Ying animado.

Resignado después de haber sido engañado de esa forma, Lan Zhan solo dijo: "Mmm"

"¿Todo el alcohol de aquella tienda Lan Zhan?"

"Mmm".

"¿Todo de verdad?"

"Mmm".

Chapter End Notes

Hola bebés!
Lamento mucho la espera, se que deje este fanfic algo abandonado en esta plataforma,
pero estoy intentando ponerme al día con todos los capítulos, así que voy a intentar subir
2 o 3 cada día.
Muchas gracias a todos por su espera, y espero poder cautivarlos aun mas con estos
capítulos que se vienen por delante.
Un beso y un abrazo!
Capítulo 21.

Como era usual en el festival, a cierta hora de la noche, tanto niños como adultos se reunían
en diversas tiendas especiales en los muelles para hacer sus propias linternas. Estas linternas
hechas de papel especial adornado con lotos y con un armazón de una madera muy liviana
debían ser hechas desde lo más básico por todos los que querían participar en el festival, para
luego ser lanzadas al cielo pidiendo deseos por sus propietarios. Y en el caso de las parejas,
una sola linterna para ambos significaba prosperidad.

Fue de esa manera que Wei Wuxian y Lan Wangji, al igual que el resto de las parejas,
decidieron hacer sus linternas juntos, siendo Wei Ying el que se encargaba de hacer el
exterior de la linterna y Lan Zhan el interior.

Con trazos firmes y rapidos, Wei Wuxian dibujo cuidadosamente en aquel papel delgado,
preparando así los diseños de la lámpara. Mientras que el joven Lan, siendo instruido por uno
de los hombres que vendían las linternas, de una forma muy elegante preparaba el armazón
de la linterna con algunas varas de madera delgada, creando pronto la estructura de la
linterna, esa donde se debía poner el papel.

Observando que ya estaba listo, Wei Ying se acercó a su alfa con una sonrisa, escondiendo
detrás de su espalda ese papel que ya había pintado, para preguntarle al menor: "Lan Zhan
¿Ya podemos terminar de armar la linterna?"

Tomando el armazón de madera de la mesa en la que había estado trabajando con otros niños,
Lan Zhan asintió: "Mmm"

"Ya veo... Hiciste un buen trabajo para ser tu primera vez" Lo alagó Wei Ying riendo un
poco, poniéndose justo al lado del pequeño alfa para observar como el menor aun hacia el
armazón de la linterna, muy concentrado.

"Mmm..." Respondió Lan Wangji, aun mirando fijamente la madera entre sus dedos.

Suspirando algo aburrido, Wei Ying levanto la mirada para observar al resto de personas que
se encontraban en aquella pequeña tienda donde se armaban linternas, en la que además de
varias personas de Yunmeng, se encontraban las otras parejas que habían ido de visita a Lotus
Pier por el festival.

Mirando primero a su Shijie con Jin Zixuan, Wei Wuxian no pudo evitar rodar los ojos con
molestia, sintiéndose realmente exasperado al ver a su hermosa hermana con ese insoportable
alfa, ambos riendo mientras que juntos pintaban en el papel que adornaría el exterior de su
linterna.

Decidiendo pasar de ellos con molestia, Wei Ying se fijó en su hermano Jiang Cheng con
Zewu-Jun. Ambos habían regresado tras unos minutos al festival ya un poco más tranquilos,
y cuando llego el momento de armar la linterna Jiang Wanyin se negó a que Lan Huan tocara
cualquier cosa, excusándose detrás de su experiencia armando linternas en los anteriores
festivales, Jiang Cheng se encargó de armar tanto el armazón de su linterna como decorar el
exterior.

Sin embargo para Wei Ying quedo más que claro que aquella no era la intención de su
hermano, pues mientras hacia su linterna se jactaba de sus habilidades con su prometido y las
otras dos parejas que los rodeaban, presumiendo sus habilidades y todas sus destrezas
manuales. Al verlo Wei Ying solo pudo suspirar con cierta resignación, observando como
Jiang Cheng con un tono de sabio se tomaba el tiempo de explicarle a Jin Guangyao sobre
cómo realizar la estructura de la linterna con mucha arrogancia.

"Solo debes doblar el papel de esta manera para asegurarlo en la estructura de la linterna"
Explico Jiang Cheng con un tono bastante arrogante en su voz: "Así podrás asegurarte de que
el papel no se va a desprender cuando las linternas sean soltadas al cielo".

Asintiendo mientras sonreía de forma agradable, Meng Yao respondió: "Muchas gracias
Jiang Wanyin, eres realmente hábil con las manos".

Encogiéndose de hombros con falsa modestia, Jiang Cheng dijo: "Usted tampoco se queda
atrás joven Jin, es bastante bueno para ser su primera vez".

"¿Lo soy? Me siento bastante torpe ahora mismo".

"Para nada, es realmente bueno Meng Yao".

"Muchas gracias Jiang Wanyin" Respondió Jin Guangyao con cortesía.

Al ver la hipócrita cortesía con la que tanto Jiang Cheng como Jin Guangyao se sonrieron el
uno al otro, Wei Wuxian solo pudo fruncir ligeramente la nariz, Ambos se notaba realmente
disgustados el uno con el otro, sin embargo fingían amabilidad, tomándose de las manos con
sus respectivos prometidos y sonriéndose amablemente, haciendo sus linternas el uno junto al
otro.

Por su parte, tanto Lan Xichen como Nie Mingjue sonreían ligeramente también, abrazando y
ayudando a sus prometidos como podían, mientras que Jiang Cheng y Jin Guangyao
hablándose el uno al otro de forma amable, insistían en hacer todo el trabajo por sí mismos,
denotando arrogancia disfrazada de amabilidad.

Aun atento a este divertido espectáculo, Wei Ying fue distraído cuando sintió como alguien
cuidadosamente lo tomaba de la mano reclamando su atención.

"Esta listo" Exclamó Lan Zhan, mostrándole al mayor como había terminado con la
estructura de madera que sostendría la linterna.

Volviendo se sentirse contento y sonriendo realmente feliz, Wei Ying se fijó en el excepcional
trabajo de su prometido, agachándose ligeramente para besarle a este una mejilla antes de
decirle: "Es un excelente trabajo Hanguang-Jun, muy bueno de verdad; parece como si esta
no fuera tu primera vez haciendo esto..."

Algo cohibido por las halagadoras palabras del mayor, Lan Wangji respondió: "Mmm..."
Riendo feliz por lo avergonzado que se notaba el joven Lan, Wei Wuxian pregunto: "¿Quieres
ver qué fue lo que dibuje para nuestra linterna gege?"

Asintiendo Lan Wangji respondió: "Mmm".

"Entonces prepárate".

Sin dejar de sonreír realmente contento, Wei Ying tomo el papel ligero y especial en el que
había hecho el diseño de su linterna, en el que de una forma delicada y con un simple dibujo
en el centro se podían ver a dos pequeños conejos en lo que parecía un prado. Mirando el
dibujo, Lan Wangji se quedó callado admirándolo en silencio, mientras que por solo unos
segundos sus mejillas se sonrojaron ligeramente y una leve sonrisa de felicidad se dibujó en
sus perfectos labios.

Observando aquella expresión de felicidad en el menor, Wei Ying dijo comentó: "A Lan Zhan
le gustan los conejos ¿No es verdad?"

El mayor se había dado cuenta de esto cuando ambos habían ido al pequeño teatro en el
festival. En medio del espectáculo se mostraron varios animales a los espectadores, y cuando
los artistas mostraron y acercaron pequeños conejos blancos al público, Lan Wangji por un
segundo pareció haber brillado, extendiendo felizmente sus manos a uno de estos animales
para acariciarlo con dulzura, luciendo realmente triste cuando estos pequeños y esponjosos
animales volvieron a ser llevados fuera del escenario.

Al verse descubierto, Lan Zhan pestañeo un par de veces antes de negarse a las palabras
dichas por el contrario: "No, no me gustan".

"¿Mi gege está seguro? Los conejos son tan lindos, a mí también me gustan".

Luciendo nuevamente feliz y esperanzado, Lan Wangji preguntó: "¿En serio?"

Contento y sin dejar de mostrar su dibujo, Wei Yin asintió para luego responder: "Claro, me
gustan. Me gusta comerlos..."

Al escuchar estas palabras, Lan Wangji lucio aterrorizado por un segundo, mirando a Wei
Ying sin saber que decir, mientras que Wei Wuxian solo se reía realmente divertido, tomando
la estructura de madera de la linterna para poder prepararla y terminarla.

La noche siguió su curso y cuando la mayoría de los pobladores tuvieron listas sus linternas,
todos fueron a los muelles de Lotus Pier, donde después de unas palabras conmemorativas
del líder de la secta Jiang Fengmian, encendieron sus linternas para soltarlas al cielo.

Apartándose un poco del resto de las parejas para evitar sentirse nuevamente incomodo, Wei
Wuxian junto a Lan Wangji se acercaron a uno de los muelles con un poco más de gente y ahí
encendieron su linterna. Esperando al momento indicado, junto a todas las demás personas de
la secta, ambos prometidos liberaron su linterna de papel observando como esta se elevaba
hasta el cielo perdiéndose con otras cientos de hermosas y brillantes lámparas de papel, que
en pocos segundos iluminaron el cielo dejando a la vista uno de los más hermosos
espectáculos que alguno de ellos había podido ver alguna vez.
Al ver las linternas elevarse, Wei Ying rápidamente entrelazo sus dedos junto a sus manos
muy cerca de su rostro, comenzando a pedir así el deseo que correspondía para aquel festival,
al igual que casi todas las personas que en ese mismo instante los rodeaban.

Sin embargo, los dorados ojos de Lan Wangji no se dirigieron al cielo donde ese centenar de
lámparas seguían elevándose, se dirigieron a ver a su prometido. Wei Ying mirando fijamente
el cielo se veía hermoso ante los ojos de Lan Zhan, el cual en silencio lo admiro fijamente.

Bajando la mirada para ver a Lan Zhan después de un rato, Wei Ying le pregunto: "¿Mi gege
ya ha pedido un deseo?"

Mintiéndole, ya que en realidad esa había sido su menor preocupación, Lan Wangji susurro:
"Mmm".

"Ya veo... Yo también lo pedí..."

Bajando la mirada, Lan Zhan tomo delicadamente al mayor de la mano, atreviéndose a


preguntar: "¿Qué pediste?"

"¿De verdad quieres saber?"

"Mnn".

Sonriendo de forma enternecida, Wei Ying se agacho para mirar al menor a los ojos,
fijándose bien en el rostro de este antes de responder: "Pedí casarme con mi Lan Zhan lo más
pronto posible".

Al escuchar estas palabras, Lan Zhan casi tiene un colapso, sintiendo su rostro arder de
inmediato, aunque seguramente casi ni se había sonrojado en su apariencia. Solo pudiendo
ver a Wei Ying, se dejó rodear por los brazos de este, pegándose mucho a él.

Continuando con su confesión, una que había planeado desde hace varios días, Wei Ying
continuo hablando: "Yo estoy enamorado de Lan Zhan, de él por completo, quiero tener una
vida feliz a su lado, ir a vivir a Gusu con mi esposo y volverme un buen compañero. Lan
Wangji, me gustas, creo que realmente te amo... ¿Tú me quieres a mí?"

Quedándose en blanco por la sorpresa, Lan Wangji no supo que responder. En su cabeza,
miles de frases se daban por segundo, y aunque una parte de él quería gritarle a Wei Ying que
sin duda lo amaba, que lo había querido desde el primer momento, y que también quería
pasar su vida a su lado... Solo pudo quedarse en silencio, mirándolo embobado, como si fuera
un idiota.

Sonriendo amablemente, Wei Ying no hizo un escándalo al respecto. Sabía que su alfa aún
era un niño, que a diferencia de él no tenía tal madurez emocional o mental. Así que besando
una de sus mejillas, intento tranquilizarlo.

"Lan Zhan, Lan Zhan... Está bien. No te pido una respuesta ahora, si aún no me amas deja
que te enamore a lo largo de todos los años que pasaremos juntos. Aun si es ahora, o en 10
años, yo esperare a que estés listo para responderme y para que podamos casarnos".
Sintiendo un dolor muy profundo en sí mismo debido a que no había podido ser capaz de
responder a los sentimientos del mayor, Lan Zhan solo pudo susurrar un triste: "Mmm"

Sonriendo y sin detectar la tristeza en la voz del menor, Wei Ying se acercó a este para darle
un beso en los labios, quedándose ahí por varios segundos antes de separarse, susurrándole:
"Es un beso de amor, Lan Zhan".

Lan Wangji solo se quedó en silencio, mirando fijamente el rostro del mayor, el cual
finalmente dejo de abrazarlo para volver a pararse erguido tomándolo de la mano
nuevamente, siguió viendo las lámparas de papel en el cielo, esperando pacientemente a que
los demás espectáculos de aquel festival comenzaran. Y aunque Wei Ying se había distraído
por completo en aquel hermoso espectáculo, Lan Zhan no pudo hacerlo, girándose
ligeramente para ver a las personas detrás de ellos en los muelles, muchos de los cuales no
veían las linternas y habían comenzado a hablar.

"Ese Wei Wuxian, es un desvergonzado" Dijo una mujer de alta clase, una invitada de los
Jiang para el festival: "Tentando así a su alfa. Está buscando más que un simple compromiso,
está buscando que ese alfa suyo lo tome a la fuerza. Besándolo y abrazándolo en un lugar
público, no quiero ni pensar en las cosas que hará con este a solas".

Otra mujer, una que Lan Zhan si había visto antes y era originaria de Yunmeng, contestó:
"Siempre ha sido así, un desvergonzado. Como omega no sabe cuál es su lugar, siempre
cultivando y peleando como si fuera un alfa. Debería entender que su lugar está en casa
cuidando a su familia y a sus hijos".

Negando con la cabeza, una tercera mujer intervino: "Pobre madam Yu, teniendo que
soportar de esa manera a ese omega rebelde. Algún día terminara ocasionando una desgracia,
seguro terminara lastimando a ese pobre joven Lan"

Luciendo resentida e incluso celosa la primera mujer dijo: "Los Lan no saben con quien se
metieron. Wei Wuxian terminara manchando a ese joven Lan. Definitivamente terminaran
arrepintiéndose de ese compromiso".

"Wei Wuxian solo trae mala suerte. Debería intentar aprender de su hermano Jiang Wanyin
que es un omega digno".

"Si ambos siguen así de pegados, seguro Wei Wuxian terminara manchándolo a él también.
El joven heredero de Yunmeng también terminara comportándose como una ramera".

Eso basto para poner furioso a Lan Zhan, el cual presiono los dientes con furia, a punto de
girarse para pelear con aquellas viejas y defender a su prometido; pero fue prontamente
detenido por Wei Ying, el cual cariñosamente volvió a abrazarlo.

"Lan Zhan, está bien" Le susurro con cariño: "No las escuches, quédate conmigo".

Confundido, mirando al mayor sin entender por qué este no lucia enfadado, Lan Zhan le
pregunto: "¿Tú también lo escuchaste?"

"Si"
"¿Y no te molesta?"

Sonriendo divertido, Wei Ying beso cariñosamente una mejilla de su alfa antes de responder:
"Personas como ellas, incluso dentro de mi propia familia, han hablado así sobre mi toda mi
vida. Soy un omega que no se sometió y decidió entrar en mundo del cultivo, no solo eso, me
volví el segundo mejor cultivador de esta generación. He roto reglas, me han tratado de
perezoso, incluso de pervertido por querer entrenar con otros alfas para mejorar mi cultivo".

Desviando nuevamente la mirada a las viejas, Lan Zhan las miro con furia, escuchando como
a lo lejos sus parloteos se habían vuelto más avivados debido a que Wei Ying había vuelto a
abrazarlo.

Reclamando la atención de su alfa, Wei Ying lo tomo de la barbilla para girar su rostro de
nuevo, mirándolo a los ojos: "Y ahora estoy comprometido con el guapo Lan Wangji, un alfa
que ya ha sido catalogado como el más hermoso de Gusu... ¿Acaso no tienen razón de estar
celosas? Los hijos de esas mujeres, muchos que son alfas, ni siquiera pueden llegarme a los
talones. Todos siempre toman el hecho de que soy un omega para ponerme por debajo, pero
no me molesta, pueden llamarme ramera todas las veces que quieran, mientras tu sepas quien
soy a mí me basta".

Sintiéndose furioso, Lan Zhan lo miro a los ojos, para replicar: "Pero eso está mal. No por ser
un omega significa que eres menos que cualquier otro cultivador, Wei Ying no debe ser
menos por ser omega"

"Y con que tu entiendas que eso es lo que importa, nunca me dejes por debajo solo por ser
omega, para mi es suficiente" Susurro Wei Ying enamorado, besándole los labios a su alfa de
nuevo.

Tranquilizándose con el beso, Lan Wangji abrazo delicadamente al mayor por la cintura,
dejando de estar tan enfadado. Terminando el beso, Wei Ying se puso se reír, volviendo a
erguirse para dirigir a Lan Zhan un poco más lejos de esas mujeres en el muelle en el que
estaban, sin romper el abrazo de este sobre su cintura.

"Hanguang-Jun es realmente celoso y sobreprotector, pobre de mí, mis días de ser catalogado
como un descarado habrán terminado" Se lamentó Wei Wuxian con una sonrisa.

Confundido, Lan Zhan le pregunto: "¿Descarado?"

Intentando darle una muestra, Wei Ying observo a un grupo de señoritas cerca de ellos, y les
dijo: "Buenas noches bellezas de Yunmeng ¿No desean acompañar a este joven y pobre
omega en una noche tan hermosa?"

Las señoritas, las cuales ya conocían bien ese espíritu bromista de Wei Wuxian, solo se
rieron, hablando divertidas entre ellas, viendo igualmente a su joven prometido abrazado a
este. Por otro lado, Lan Zhan nada agradado por esto, presiono más fuerte sus brazos
alrededor de la cintura de su prometido, diciéndole furioso: "¡Wei Ying!"

"Estaba jugando, estaba jugando... Ay... Hanguang-Jun es tan fuerte" Se lamentó Wei Wuxian
entre risas sintiendo el fuerte agarre en su cintura.
Volviendo a ponerse celoso, Lan Wangji tiro de su prometido a otra parte más alejada del
muelle, replicándole: "¡No es gracioso!"

Riendo Wei Wuxian se dejó llevar, teniendo que besar y abrazar mucho al joven alfa para
tranquilizarlo de sus fuertes celos, pasando junto a este una mágica noche en el festival de la
cosecha en Yunmeng.
Capítulo 22.

Bostezando de forma despreocupada, Wei Wuxian salió de su habitación en Lotus Pier. Aquel
era un día maravilloso, con un sol radiante y un cielo despejado, como si el festival de la
cosecha que se realizó el día anterior hubiera servido para despejar el cielo de esa manera.
Caminando de forma tranquila hasta uno de los salones de Lotus Pier, Wei Ying miro
distraído el cielo sin ninguna nube, pensando que tal vez sería otra calurosa mañana en la cual
poder ir a jugar al lago con su alfa.

Así que cuando llego al salón que ese día se utilizaba como un comedor para el desayuno de
la familia Jiang, Wei Ying se sorprendió al ver a su hermano hablando de forma insistente
con su padre.

"Padre por favor" Pidió Jiang Wanyin con insistencia: "Solo será por esta vez, solo por esta
ocasión".

De una forma amable y tranquila, como lo caracterizaba, Jiang Fengmian tomo un sorbo de
su té antes de responder: "A-Cheng, las reglas del cortejo son las reglas del cortejo".

El líder de la secta Jiang Fengmian era conocido y respetado por todos los grandes
cultivadores de todas las demás sectas, no solo por ser un omega muy fuerte en el cultivo,
también por ser una persona determinada y que le hacía justicia al lema de los Jiang, con una
familia consolidada y un crecimiento económico estable cada año.

Y aunque podría dársele a este el logro de mantener la secta Yunmeng Jiang en solitario, la
verdad era que el éxito del liderazgo de Jiang Fengmian también se debía a su alfa, Yu
Ziyuan.

Mirando de forma severa a su hijo, Madam Yu sentencio: "Jiang Cheng, compórtate".

Sin embargo sin querer darse por vencido, Jiang Cheng siguió insistiendo: "Por favor mamá,
solo será esta excepción".

El matrimonio Jiang era uno de los más admirados y curiosos de todas las sectas, no solo por
el hecho de que el alfa de la relación era una mujer, también por todo el halo de rumores y
habladurías que hubo al respecto de esta pareja a lo largo de los años.

Desde el inicio Jiang Fengmian estuvo comprometido según la tradición con el hermano de
Madam Yu, sin embargo este murió a una edad temprana, así que el compromiso paso al
siguiente alfa en la línea sucesoria de la familia Yu, que en este caso fue la joven cultivadora
Yu Ziyuan. Sin embargo el compromiso nuevo no se aceptó de una forma tan fácil por la
familia Jiang, no solo porque esta alfa era una mujer, también porque era más joven e
inexperta que el líder Jiang, así que por un tiempo todo quedo en el aire, sin aceptar o negar
nada ante el ojo público.

Fue en este tiempo de incertidumbre acerca del compromiso y el futuro de la secta Jiang que
el padre de Wei Wuxian y Jiang Fengmian se conocieron.
Un cultivador desconocido, que afirmaba haber descendido de una montaña donde vivía un
cultivador inmortal, con un gran conocimiento del arte del cultivo, el cual fue expulsado de la
secta Lan donde fue temporalmente acogido por mal comportamiento, era el alfa que paso
por un par de meses en Yunmeng y fue alojado por los Jiang.

Según las palabras del propio Jiang Fengmian, el padre de Wei Wuxian llego en el momento
oportuno a la secta, pues durante un tiempo Lotus Pier estuvo asediado por fuertes fantasmas
de un origen desconocido. Y fue el padre de Wei Ying, quien ayudado por otros miembros de
la secta Jiang, logro liberar a Lotus Pier de estos males y fue condecorado como un gran
cultivador por los líderes dela secta de ese entonces.

Jiang Fengmian y el padre de Wei Ying se hicieron muy buenos amigos, pasando mucho
tiempo a solas y entrenando juntos. Y debido a que Jiang Fengmian estaba libre de
compromiso por la tradición y que el padre de Wei Wuxian era un alfa, se rumoreaba que era
casi seguro que ese gran cultivador de la montaña de los inmortales seria el nuevo señor de
Yunmeng, que se casaría con Jiang Fengmian y seria su alfa.

Sin embargo tras varios meses de estadía en la secta Yunmeng Jiang, el padre de Wei Wuxian
termino abandonando Lotus Pier con un sirviente personal del propio Jiang Fengmian, la
madre de Wei Wuxian, un omega cualquiera de Yunmeng. Y aunque en los siguientes meses
después de ese suceso los padres de Wei Ying visitaron múltiples veces la secta Jiang, no se
quedaban por mucho, y al final el padre de Wei Ying no se convirtió en el nuevo señor de
Yunmeng.

Poco después de que el cultivador de la montaña de los inmortales abandonara Yunmeng, de


manera oficial se aceptó el compromiso entre Jiang Fengmian y Yu Ziyuan, un alfa femenino
perteneciente a la familia Yu, una de las más poderosas e influyentes de la región.

Y aunque ambos cumplieron con su tiempo de cortejo de forma exitosa, siempre hubo
asperezas entre ambos respecto a los aspectos del control de la secta y el rol de cada uno en
Yunmeng. Siendo de esta manera que la secta Yunmeng Jiang era la única en ser liderada por
un omega, relegando a su alfa a un puesto del segundo al mando; una deshonra que Madam
Yu nunca le perdono a su esposo.

Entrando en aquel salón con una sonrisa, Wei Ying rápidamente se apresuró a ponerse de
parte de Jiang Cheng, suplicando también: "Por favor tío, se lo pido yo también".

Sonriendo de forma un poco más alegre con el comportamiento de Wei Ying, Jiang Fengmian
respondió: "A-Ying ni siquiera sabes por qué me estas suplicando..."

"No necesito saberlo" Dijo Wei Ying con confianza: "Si Jiang Cheng lo pide, entonces debe
ser algo tan bueno como para pedir por ello".

Riéndose de sus propias ocurrencias, Wei Ying rápidamente se fijó en el rostro serio de Yu
Ziyuan, la cual lo miro de una forma severa que lo asusto ligeramente y lo hizo temer por un
castigo, aun sin estar seguro de que había hecho mal.

Así que haciendo una reverencia para ambos líderes de Yunmeng, Wei Ying se apresuró a
sentarse al lado de su Shijie, la cual amablemente le sonrió intentando tranquilizarlo.
Como era usual, Wei Ying se despertó tarde, así que al llegar al salón no se sorprendió al
darse cuenta de que la familia Jiang casi había terminado su desayuno. Y siendo atendido por
uno de los sirvientes con rapidez, Wei Wuxian intento apresurarse a comer, ya que entendía
que nadie de la familia se retiraría del salón hasta que él hubiera terminado.

"Padre" Dijo Jiang Wanyin intentando jugar su última carta apelando a la bondad de Jiang
Fengmian: "Los Lan nunca han disparado cometas con flechas, así que sería una actividad
muy interesante de mostrarles a nuestros invitados, algo turístico incluso".

"Wanyin, el entrenamiento del cultivo está prohibido en el periodo del cortejo. Estamos en el
primer mes del periodo del cortejo de tu hermano ¿Acaso quieres deshonrar su compromiso?"
Pregunto Jiang Fengmian intentando hacer entrar en razón a su hijo.

Escuchando la conversación con atención mientras comía algunas pastas, Wei Ying entendió
a que se debían las suplicas de su hermano. Jiang Cheng estaba insistiendo para poder
realizar uno de sus entrenamientos favoritos: Disparar cometas con flechas. En Yunmeng los
jóvenes cultivadores realizaban esta actividad como una competencia y con el objetivo de
mejorar su puntería con las flechas. Era una competencia que a Wei Ying se le daba bastante
bien, ganando siempre a su hermano; sin embargo entendía que tal vez la intención de Jiang
Cheng al hacer esto era lucirse con Zewu-Jun, después de lo sucedido la noche anterior su
hermano probablemente querría demostrar su superioridad respecto a otros omegas, así que
probablemente planeaba intentar ganar en esa competencia, aunque Wei Ying no planeaba
dejárselo fácil, él también quería lucirse frente a Lan Zhan.

Sin embargo antes de que Jiang Cheng pudiera seguir suplicando, Yu Ziyuan prácticamente
arrojo su taza de te sobre la mesa baja en la que había estado comiendo, llamando la atención
de todos con su molestia, aun mirando fijamente a Wei Ying.

"¿Deshonrar su compromiso?" Pregunto ella de forma despectiva: "¿Qué acaso Wei Wuxian
no se está encargando de eso por sí mismo?"

Suspirando con cierta amargura, sabiendo lo que se le venía encima, Wei Ying ni siquiera
quiso levantar la mirada, solamente pudiendo comer más lento, preparándose mentalmente
para el regaño que iba a recibir.

Siguiendo con su discurso, Madam Yu continuó hablando: "Todos hablan de eso Wei
Wuxian, como el omega recién comprometido de la casa Jiang se comporta como una ramera
con su alfa, coqueteando y rompiendo las reglas del tiempo de cortejo. Nos dejaras en
vergüenza con los Lan, ocasionaras un desastre".

Con un tono suave y algo temeroso, Wei Ying respondió: "No me comporto como una ramera
madam, mi alfa y yo no nos hemos comportado de forma indebida".

Bufando molesta, Madam Yu replico: "¿Te parece correcto besar sus labios sin descanso?
¿Entrar en sus habitaciones personales sin vigilancia? ¿Pasar tanto tiempo a solas con él?"

"¿Acaso no es ese el objetivo del tiempo de cortejo?" Se defendió Wei Ying: "Poder conocer
de mejor manera a aquel que será tu compañero de vida, aprender sobre esa persona y pasar
tiempo a su lado ¿No es esa la razón por la que mi alfa vino a Yunmeng a conocerme?"
Sintiéndose mas enojada con aquellas respuestas aparentemente astutas dadas por Wei Ying,
Yu Ziyuan respondió: "Eres un omega de la calle, tu jamás comprenderías el peso que tienen
tus acciones para mi secta y para tu propia vida. Si continuas comportándote de esta manera
siempre serás un omega vulgar, nadie querrá tomarte..."

Al escuchar estas palabras Wei Ying se encogió de hombros de una forma algo desafiante,
pensando únicamente en Lan Wangji con cariño: "No necesito que alguien me tome, yo ya
tengo un alfa a quien amo".

Al escuchar estas provocadoras palabras todos guardaron silencio en el salón, mientras que
Wei Ying y Madam Yu se miraban fijamente de forma desafiante, la mujer bastante enfadada
y el omega algo temeroso de un posible castigo.

"Maldigo el día en que permití que un repulsivo omega callejero entrara a mi secta"
Sentencio Madam Yu furiosa: "Debimos dejar que murieras en las calles".

Al escuchar esas ofensivas palabras, Jiang Fengmian golpeo la mesa con una mano,
realmente enfadado: "¡Mi señora!"

"¿Qué? ¿Defiendes mas a este omega que a tu propio hijo?" Pregunto Madam Yu realmente
furiosa: "Dejas que este chico que ni siquiera tiene tu sangre corriendo por tus venas se
comporte como quiera, sin ningún tipo de castigo por sus acciones; mientras que tu propio
hijo, tu propia sangre, debe suplicarte para romper una sola regla que debe cumplirse por un
periodo de cortejo que ni siquiera es el suyo. Dejas que Wei Wuxian rompa las reglas, deja
que Jiang Cheng también lo haga".

Respirando profundo, intentando sonar tan tranquilo como siempre, Jiang Fengmian se
apresuró a responder: "Mi señora, hay una reputación que debemos mantener con la secta
Lan, debemos cuidar el compromiso de Wei Ying con Lan Wangji".

"¿Por qué debemos cuidarlo? ¿Acaso es el compromiso de uno de nuestros hijos?" Pregunto
Madam Yu levantándose de su sitio: "Es el compromiso de uno de tus sirvientes, nada más.
Dejas que coma con nosotros en los salones, que tenga una habitación privada e incluso que
tome un lugar con la familia Jiang en reuniones oficiales. Pero Wei Wuxian no es tu hijo, tu
único hijo es Jiang Cheng, permite que tenga su maldito juego con cometas y deja de
preocuparte por un sirviente inútil".

Bastante enfadada, sin decir más, Yu Ziyuan camino por el salón hasta la salida de este
mismo. Pero a la mitad del camino se detuvo, y girándose nuevamente en dirección a Wei
Wuxian lo señaló con el mismo dedo en el que tenía el anillo que contenía a Zidian, para
luego decirle: "Escúchame bien Wei Wuxian, no me importa qué clase de preferencia crees
que tienes por comer en mi mesa, pero si ocasionas un desastre y dejas a mi secta en
vergüenza con los Lan, serás castigado como el sirviente que eres. Ante el mas mínimo error,
romperé tu compromiso con ese alfa Lan de forma permanente, y en público te daré 10 azotes
con el látigo de disciplina de la secta y otros 10 más con Zidian ¿Entendiste?"

Ante esta amenaza sumamente aterradora, que hizo estremecer el cuerpo completo de Wei
Wuxian, el omega no dijo nada, solemnemente volviendo a bajar la mirada para comer su
desayuno en silencio, aun sintiendo la furiosa mirada de Madam Yu sobre su espalda.
Al ver que nadie respondía a sus palabras, sintiéndose ofendida, Madam Yu se apresuró a
salir del salón acompañada de sus sirvientes, mascullando furiosa: "Maldito omega
callejero..."

Poco después de que la mujer se retirara, Jiang Fengmian siguió sus pasos con rapidez, y sin
despedirse de ninguno de los tres jóvenes que estaban en el salón, camino fuera de este detrás
de su alfa, luciendo bastante molesto también.

"¿Estas contento?" Pregunto Jiang Cheng enfadado, observando como su padre se iba
también.

"¿Ahora que hice A-Cheng?" Se quejó Wei Wuxian, aun comiendo.

Bufando enfadado, Jiang Cheng señalo los lugares vacíos de sus padres, mirando a su
hermano de forma acusadora: "Hiciste que mis padres pelearan".

"¿Yo lo hice?" Se defendió Wei Wuxian: "Si tu no hubieras insistido con la tontería de las
cometas seguramente nada de esto hubiera pasado..."

"Paren" Ordeno Jiang Yanli dándose cuenta de que sus hermanos habían comenzado a pelear
también: "No peleen entre ustedes, nosotros debemos permanecer unidos".

"Shijie..." Se quejó Jiang Cheng molesto.

"A-Cheng" Siguió hablando Yanli: "Nuestros padres tienen sus problemas, no debe ser
nuestro asunto meternos en ellos. Deja que ellos se arreglen y disfruta del permiso
excepcional que obtuviste para poder entrenar tu cultivo".

Sonriendo de forma satisfecha, Wei Wuxian observo de reojo como su hermano solo pudo
mantenerse en silencio con aquellas palabras tranquilizadoras dichas por su hermana mayor.
Y sonriéndole con cierta malicia, Wei Ying miro también a Yanli, la cual le acaricio
suavemente una mejilla.

"A-Xian, tú también compórtate por favor. No les des una razón a mis padres para castigarte,
sigue las reglas del cortejo".

Sintiéndose nuevamente regañado de forma injusta, Wei Wuxian replicó: "Pero Shijie... Si
sigo las reglas".

"Mentiroso..." Susurro Jiang Cheng mirándolo también, ante lo que Wei Wuxian le saco la
lengua haciendo una expresión despectiva para su hermano.

"A-Xian" Continuo Jiang Yanli, aun acariciando suavemente la mejilla de su hermano: "Por
favor compórtate, solo quedan unos cuantos días más hasta que tu prometido regrese a Gusu,
dale una buena impresión a su secta y a la nuestra por su compromiso ¿No quieres eso?"

"Claro que lo quiero" Respondió Wei Ying con sinceridad: "¿Pero acaso para eso debo
cambiar mi forma de ser?"
"Claro que no, solo intenta comportarte mejor A-Xian, eso evitara que tengas más
problemas" Pidió Yanli.

Frunciendo el ceño, dándose cuenta de que él también había sido regañado, Wei Wuxian
volvió a comer asintiendo a las palabras de su hermana. Y aunque había aceptado al final ser
un poco más "educado", Wei Ying no sentía que estuviera haciendo algo incorrecto, así que
pensando en su alfa simplemente decidió no cambiar su modo de actuar en lo absoluto.

Wei Ying realmente pensaba que nada malo sucedería.


Capítulo 23.

Las aves recorrieron el nuboso cielo de Yunmeng, mientras que Jiang Cheng tomado de la
mano de Lan Xichen avanzaba a su lado y al frente de la gran comitiva de otros discípulos
que se dirigían al lugar de entrenamiento en Lotus Pier.

Detrás de ambos se encontraba la pareja por la cual se daba aquella celebración de


compromiso, Lan Wangji y Wei Wuxian, los cuales resaltaban del resto de discípulos por
causa del mayor.

"Lan Zhan, Lan Zhan" Dijo Wei Ying animado, tomado de la mano de su pequeño alfa,
preguntando divertido: "¿Soñaste conmigo anoche?"

Mirando al contrario de reojo, Lan Zhan inocentemente respondió: "Mmm".

"Ya veo... Que osado Lan Er Gege, no me imagino las formas impuras en las que usted debe
someterme en sus sueños, que vergüenza".

Sin entender bien las palabras del contrario, Lan Wangji se tomó su tiempo antes de
responder: "No fue nada impuro, no hay razón por la que deberías sentirte avergonzado".

Poniendo un puchero, Wei Ying replico: "Eso es más decepcionante aun ¿Eso significa que
no le gusto a mi gege? ¿Por eso no sueña con hacerme...?"

Escuchando esas palabras tan desvergonzadas, Jiang Cheng se giró de golpe completamente
sonrojado: "¡Wei Wuxian!"

Riéndose al verse descubierto, Wei Ying solo le saco la lengua a un furioso Jiang Cheng, el
cual prefiriendo no hacer una escena al regañar a su hermano frente a todos los discípulos de
la secta Lan, se mordió los labios y volvió a mirar al frente con cierto pesar.

Sin embargo Lan Wangji, el cual no entendió aquellas desvergonzadas palabras, no quiso
dejarlo de lado, preguntando: "¿Qué tenía que hacerte?"

Decidiendo no ser demasiado osado de nuevo, Wei Ying solo sonrió dulcemente,
agachándose para besar una de las mejillas del pequeño alfa a su lado, respondiéndole: "Feliz
Hanguang-Jun, tú debes hacerme feliz, como los alfas hacen felices a sus omegas".

Pensando en las palabras del mayor, Lan Wangji respondió entonces: "Estabas feliz".

"¿Muy feliz? ¿Feliz como cuando los alfas complacen a sus omegas en la noche?"

Confundiendo esas palabras con lo que había sucedido la noche anterior en el festival, cuando
Wei Ying había lucido realmente feliz al conseguir los juguetes y el alcohol, Lan Wangji
asintió a las preguntas del mayor sin tender su sentido real: "Si".
Al escuchar estas inocentes palabras que siempre caían en sus provocaciones de una forma u
otra, Wei Ying volvió a estallar en carcajadas, mientras que Jiang Cheng furioso al escuchar
esto se giró para volver a regañar a su hermano.

"¡Wei Wuxian! ¡Desvergonzado idiota!"

Después de aquella agitada mañana, en la que los líderes de la secta pelearon por horas, Jiang
Cheng con cierto pesar aprovecho el excepcional permiso otorgado por su padre para invitar
a los discípulos de la secta Lan a entrenar. Así que con una comitiva de varias personas de
ambas sectas, Jiang Cheng los guio a todos al amplio coliseo en el aire libre donde debían
realizar el juego de las cometas.

Siguiendo la tradición de Lotus Pier para este juego, volviéndolo una competencia, los alfas y
los omegas se separaron en grupos diferentes, siendo que aquel grupo que tirara más cometas
y a mayor distancia ganaría la competencia y podría escoger una penitencia para el contrario.

Debido a que la secta Jiang se caracterizaba por ser mayormente de omegas, los pocos alfas y
betas pasaron a formar parte del grupo de alfas, que estaba enteramente conformado por la
secta Lan, los cuales después de recibir instrucciones precisas de que debían hacer para ganar
aquella competencia, se pusieron manos a la obra para comenzar a realizar sus cometas,
aquellas que después de secar la pintura deberían disparar.

Al igual que con las linternas que hicieron para la noche del festival, los inexpertos miembros
de la secta Lan tuvieron que recibir instrucciones detalladas de los miembros de la secta Jiang
que se encontraban en su grupo para realizar sus cometas, comenzado con el armazón y
dejando el papel que debían pintar al final.

Con elegancia y cierta lentitud para evitar cometer errores, imitando a sus mayores, Lan
Wangji hábilmente se encontraba uniendo maderas livianas y delgadas para hacer la
estructura de su cometa, fijándose en todos los detalles que podía para hacer que esta se
encontrara lo suficientemente firme.

Mientras que por su lado, en medio de risas y charlas amenas con los demás omegas de su
grupo, Wei Ying no pudo evitar fijarse de reojo en su pequeño alfa, sintiéndose preocupado
por este. Viéndolo tan silencioso y concentrado, absorto en su labor. Así que en medio de las
conversaciones entre todos los omegas, que riéndose hablaban de la belleza de todos los alfas
Lan, siendo una joven omega la principal interesada en esta charla; Wei Ying dejo su cometa
la mitad y se levantó para ir cerca del grupo de los alfas.

"Mi gege es demasiado lento" Lo molesto Wei Ying, sentándose al lado del menor.

Desviando la mirada de sus actividades para ver a su prometido, Lan Wangji respondió:
"Mmm".

Sonriéndole dulcemente, Wei Ying le dijo entonces: "Mi gege debe apresurarse, o
comenzaremos a jugar sin él. Déjame ayudarte".

Tomando el papel en el que Lan Wangji debía pintar el arte para su cometa, Wei Ying
rápidamente se puso a dibujar en este un diseño especial intercambiando colores con unos
pinceles, comenzando a dar le forma a su dibujo con colores muy llamativos.

Sin decir nada al respecto, secretamente contento de volver a tener al mayor a su lado, Lan
Wangji pregunto entonces: "Últimamente me has estado llamando gege ¿Por qué?"

Levantando la mirada de su dibujo solo por un instante, el mayor respondió: "Por qué ahora
Lan Zhan es tan maduro, se porta como un alfa fuerte y grande, siempre celoso y
protegiéndome. Eres un gege para mí".

Muy serio, Lan Wangji respondió: "No lo soy".

"¿No? ¿Entonces prefieres que te llame didi?"

Reparando seriamente en las palabras dichas por Wei Ying, Lan Zhan respondió: "Patético".

"¿Patético?" Pregunto Wei Ying escuchando divertido las palabras de su pequeño alfa: "No
quieres ser un gege, tampoco un didi ¿Qué quiere ser entonces mi alfa?"

Volviendo a mirarlo a los ojos, Lan Wangji respondió sin dudar: "Tu marido".

Escuchando esas palabras inocentemente desvergonzadas, Wei Ying fue ahora el que
comenzó a reír realmente avergonzado, sin saber que responder a semejante provocación.
Mientras que los demás alfas que los rodeaban, habiendo escuchando esa conversación,
también soltaron un par de risas, siendo el más divertido Lan Xichen, el cual entendía mejor
los sentimientos de su hermano.

Volviendo a dibujar, en pocos minutos Wei Ying levanto el papel de forma triunfante,
enseñándole a su joven prometido: "Lan Zhan mira ¿Te gusta?"

A punto de terminar el armazón de su cometa, Lan Wangji levanto la mirada curioso,


observando frente a sus ojos el dibujo de un zorro dorado, un depredador que había en las
áreas del bosque de Yunmeng.

"Es un zorro" Explico Wei Ying: "Los zorros comen conejos, por eso debes dispararle
¿Entiendes Lan Zhan?"

Comprendiendo que era otro de los juegos del mayor, Lan Wangji asintió suavemente ante la
pregunta: "Mnn".

"Si dibujaba algo lindo seguramente tu no ibas a querer dispararle, pero si es algo feo como
un zorro que come conejos, será un incentivo doble para que ganes la competencia. Yo
dibujare un perro salvaje de las montañas, también comen conejos y son grandes como lobos,
que miedo. Ganemos los dos ¿Esta bien Lan Zhan? Defendamos a los conejitos de Yunmeng
antes que todos los demás".

Volviendo a asentir a las palabras dichas por el mayor, Lan Wangji respondió: "Mmm".

Riendo muy feliz, Wei Ying se acercó mucho más a su alfa, y deteniéndose unos pocos
centímetros del rostro del menor, recordó las palabras dichas ese mismo día en el desayuno,
algo que lo hizo suspirar. Recordando que había prometido portase bien, o hacer el esfuerzo
de portarse bien, dulcemente beso una de las suaves mejillas del contrario, realmente
contento.

Y volviendo a separarse del menor, Wei Wuxian se levantó del piso y sacudió sus ropas,
dejando el dibujo recién hecho al lado del menor, pidiéndole: "No olvides esperar a que seque
antes ponerlo en tu cometa, Hanguang-Jun".

"Mmm".

Sonriendo nuevamente divertido, Wei Ying comenzó a caminar de regreso con el grupo de
los omegas, diciendo: "Buenas suerte Lan Er Gege".

Finalmente terminando el armazón de su cometa, Lan Wangji tomo el dibujo aun con la tinta
fresca que Wei Ying había hecho para él. En silencio el menor admiro el lindo dibujo lleno de
colores que mostraba a un hermoso zorro sonriendo. Y aunque de cerita manera esto si servía
para incentivarlo a disparar, en realidad lo hacía dudar, pues quería preservar todos los
hermosos dibujos que el mayor hiciera para él, pensando tristemente en que al final de la
competencia el dibujo de su cometa estaría arruinado por las flechas.

De regreso con el grupo de los omegas, Wei Ying se apresuró a dibujar y realizar su cometa,
riendo y teniendo una amena conversación con todos ellos, que principalmente se concentró
en los alfas al otro lado del campo de entrenamiento, los alfas de la secta Lan.

"Son todos tan serios y elegantes" Comento un joven alfa que también realizaba su cometa:
"Pero son tan hermosos..."

Sonriendo al pensar en su alfa, Wei Ying miro de reojo a Jiang Cheng, el cual parecía
bastante desinteresado de la plática, solamente concentrado en su acometa, pensando también
en ganar y mirando con cierto recelo a Wei Wuxian, sabiendo que este era su principal
contrincante.

Afirmando ante las palabras recién dichas por aquel omega, una joven doncella de la secta
intervino diciendo: "Es tan difícil acercarse a ellos, aun cuando intentas hablarles ellos no
parecen querer ni mirarte ¿Eso será normal en todos los alfas?"

"No lo creo" Negó otro de los omegas, el cual ya tenía una pareja dentro de su propia secta:
"Probablemente sea cosa de los alfas Lan, que son un poco más fríos".

Suspirando realmente triste, la joven doncella miro al otro lado del campo de entrenamiento,
donde un alfa joven y tan reservado como el resto de los miembros de la secta Lan se
encargaba de preparar su cometa con mucha concentración, sin devolverle la mirada ni por un
solo segundo.

"De verdad quisiera decirle que me gusta, si solo hablara conmigo" Se lamentó la doncella en
un susurro.

Terminando su cometa y poniéndose de pie, Jiang Cheng intervino diciendo: "Entonces


deberías pedirle sabios consejos a Wei Wuxian, el conquisto a su alfa solamente diciendo
cosas vergonzosas".
"¡A-Cheng!" Reclamo Wei Wuxian riéndose: "Eso no es verdad, que malo".

Preparándose para hacer volar su cometa, Jiang Cheng respondió diciéndole: "¿Entonces
como conquistaste a tu prometido?"

Soltando una risita traviesa, Wei Ying respondió: "Besándolo".

Suspirando molesto y algo avergonzado, Jiang Cheng le grito: "¡Wei Wuxian! ¡Omega sin
vergüenza!"

Riéndose al igual que el resto del grupo de los omegas del a secta Jiang, Wei Ying en pocos
minutos termino de armar su cometa, poniéndole un diseño con un perro negó muy grande,
en la misma posición y muy parecido al zorro que había hecho para Lan Wangji. Con todos
ya listos, varios sirvientes de la secta y algunos discípulos que aún no podían participar en la
competencia por su bajo poder espiritual, sirvieron para sostener las flechas y ayudar a los
cultivadores que si participarían. Ese era el caso de la joven doncella Jiang, la cual intentando
seguir los consejos de Jiang Cheng, se encargó de sostener las flechas de Wei Ying y de los
otros cultivadores, intentando tomar valor para hablar con el desvergonzado omega.

Sin darse cuenta de nada, Wei Ying se preparó para disparar, poniendo la primera flecha en su
arco y apuntando a su cometa, la cual como era usual volaba mucho más lejos que el resto de
los demás, algo que convertía su tiro en uno sumamente difícil pero que Wei Ying siempre
lograba acertar, ganando la competencia. Tomándose las cosas a la ligera, a diferencia de
Jiang Cheng que estaba sumamente concentrado, Wei Ying dio un par de tiros de prueba
como juego, apuntando a los lados de su cometa con desinterés, observando de reojo a su alfa
a lo lejos, observándolo disparar de igual manera, cruzando miradas con los dorados ojos del
menor de vez en cuando, sonriéndole y suspirando realmente encantado con el menor.

Y después de un par de minutos, mientras la competencia iba calentándose por ambos grupos,
que cada vez daban tiros más certeros, la joven doncella de la secta Jiang se atrevió a
preguntar: "Joven maestro Wei, su alfa..."

"Es el gran alfa Lan Wangji" Respondió Wei Ying jugando, como siempre: "Ese pequeño alfa
de allá, puedes reconocerlo de inmediato porque siempre esta serio, parece que incluso está
enfadado ¿No da miedo?"

Riendo un poco más relajada con aquella broma, la doncella respondió: "Se quién es Wei
Gonzi, el alfa por quien se está haciendo el actual tiempo de cortejo, por su matrimonio,
todos lo saben. Yo solo quería preguntarle... ¿Cómo puedo hablar con un alfa Lan?"

"¿Hay un alfa que te gusta?"

Con las mejillas sonrosadas, la joven respondió: "Lo hay, un serio y hermoso alfa de la secta
Lan. Pero cuando intento hablarle él siempre responde con evasivas y escapa de mí, no me
deja cruzar más de un par de frases con él ¿Acaso hay algo en mí? No entiendo como
conquistar el corazón del alfa Lan Qiang" Se lamentó ella.

Sonriendo al escuchar las tímidas y frustradas palabras de la joven omega, Wei Ying bajo su
arco por un momento, girándose para verla: "Entiendo el motivo ahora, lo entiendo ¿No sabes
cómo conquistar a ese alfa Lan?"

La joven omega, bastante avergonzada por las palabras de Wei Ying rápidamente asintió con
la cabeza, aun sosteniendo las flechas de otros cultivadores.

"Por eso pensaba que el joven maestro Wei podría ayudarme" Explico la tímida joven: "El
joven maestro se ve tan unido a su alfa aun cuando solo pasaron un par de semanas de su
primer encuentro..."

Al escuchar estas palabras, Jiang Cheng no pudo evitar bufar con cierta molestia, evitando
mirar a su hermano el cual se reía alagado por las palabras de la hermosa joven omega. Así
que dejando su cometa y su arco en mano de uno de los sirvientes que los acompañaban, Wei
Ying se acercó a la joven, sin dejar de reír algo cohibido pero con mucha más diversión e
incluso sintiéndose algo desafiado.

"¿Entonces quieres que te enseñe como conquistar a uno de esos serios alfas Lan?"

Bajando su arco por un segundo, Jiang Cheng regaño a su hermano diciéndole: "Wei Wuxian,
deja de jugar".

Sin embargo la joven, muy cerca de Wei Ying asintió tímidamente, observando como Wei
Wuxian también ignoraba las palabras dichas por su hermano, siguiéndole el juego.

"Los alfas Lan... Oh los alfas Lan" Se burló Wei Ying en voz alta: "Dan miedo ¿No lo crees?
Tan elegantes y hermosos, te da pena incluso estar en su presencia, todos ellos son tan
hermosos..."

Con las ruidosas palabras de Wei Wuxian, los invitados Lan que se encontraban al otro lado
del campo de entrenamiento comenzaron a prestar atención a aquella conversación, siendo
uno de los principales interesados aquel alfa joven que era el objetivo de la omega de la secta
Jiang. Y mientras Lan Xichen sonreía escuchando las atrevidas palabras que decía Wei Ying,
entendiendo que solo era un juego; Lan Wangji lució mucho más serio de lo usual, girándose
discretamente en dirección a su prometido para verlo a la distancia y prestar atención a sus
palabras.

Haciendo un par de bromas más sobre como conquistar alfas, algunas que era bastante
populares y conocidas entre los omegas de Yunmeng, todos los discípulos de la secta Jiang
reían de forma armoniosa escuchando a Wei Ying, el cual intentando tomarse todo un poco
más en serio, siguió con su discurso: "Debes acercarte lentamente, con delicadeza, los alfas
Lan son tan serios que se asustan y se ponen tímidos incluso con una sonrisa".

Riendo ligeramente por las bromas y las desvergonzadas palabras de Wei Wuxian, la joven
omega dejo que Wei Ying se acercara a ella, extendiendo una de sus manos en dirección al
apuesto cultivador: "¿Qué tengo que hacer después de eso maestro?"

Sujetando la mano de la joven omega con mucha elegancia, imitando la elegante pose que
hacían los Lan, volviendo a causar risa, Wei Wuxian continuó: "Debes ser amable y decirle
cosas encantadoras, tales como: Oh mi alfa Lan, mi joven alfa ¿Hoy hace un buen clima para
usted? ¿No desea que le dé un abrazo para calentarlo?"
Con cada palabra que decía, sujetando la mano de esa joven doncella, Lan Wangji parecía
estar cada vez más furioso. Perdiendo por completo la concentración en sus tiros por el
enfado que sentía, el joven alfa Lan Zhan presionó los dientes con ira, girándose por
completo para ver aquella escena, cada vez más fuera de sí.

Riendo un poco más tímida, notando la cercanía de alguien del sexo opuesto por primera vez
en toda su vida, la joven omega pregunto: "¿Pero y si se niega a hablar conmigo? ¿Y si quiere
huir de mí?"

"Entonces debes besarlo" Dijo Wei Ying restándole mucha importancia al asunto.

Al escuchar estas nuevas palabras, Jiang Cheng soltó un nuevo bufido exasperado, regañando
a su hermano tildándolo de un desvergonzado; mientras que los demás omegas de su propia
secta que los rodeaban no dejaban de reír mientras disparaban.

Por otro lado, los alfas de la secta Lan también habían comenzado a reír ligeramente al
escuchar estas atrevidas palabras a distancia. Y aunque al inicio Lan Xichen se encontraba
completamente disperso escuchando aquella conversación, no pudo evitar fijarse en su
hermano menor, mirándolo preocupado.

"¿Wangji?" Pregunto Lan Huan preocupado, mirando al menor.

Y aunque había escuchado perfectamente a su hermano a su lado, Lan Wangji no respondió,


teniendo un extraño brillo dorado en sus ojos por la furia, presionando su arco tan fuerte entre
sus dedos que parecía que este se rompería bajo su fuerza, con una expresión de seriedad
absoluta en su rostro.

"¿Besarlo?" Pregunto la joven realmente avergonzada, mirando realmente sorprendida al


joven omega que aun sostenía su mano.

Pensando hacer una última broma antes de dejar aquel juego, Wei Ying asintió a las palabras
de la sonrojada joven, inclinándose para besar su mano de una forma sumamente elegante
impropia en los movimientos del joven maestro, para luego susurrar mirando a los ojos de la
joven: "Debes besarlo y decir: Gege te amo, de verdad me gustas..."

Y aunque en la cabeza de Wei Ying, el cual se había sonrojado un poco con aquella hazaña
increíblemente desvergonzada, dedicaba esas palabras a su joven alfa al otro lado del coliseo,
todos interpretaron que le decía aquello a la cada vez más avergonzada joven Jiang.

Aquello fue suficiente para Lan Wangji, el cual furioso reaccionando de la misma forma que
la noche anterior, tiro su arco al suelo con toda su ira, caminando rápidamente en dirección a
su omega. Dejándose llevar por los sentimientos de posesión de su alfa, que aullaba de ira por
los celos con el que consideraba su omega, Lan Zhan se acercó a Wei Ying tan rápido que
este ni siquiera había logrado soltar a la joven Jiang.

Dándose cuenta de que su joven prometido se encontraba tan cerca, Wei Wuxian se giró algo
sorprendido, preguntando: "¿Lan Zhan?"
Sin embargo el joven Lan, nada interesado en responder, en un rápido y brusco movimiento
tomó fuertemente el brazo de Wei Wuxian, tirando de él con fuerza obligándolo así a soltar la
joven y sorprendida cultivadora de la secta Jiang. Soltando un quejido de dolor por la fuerza
con la que había sido tomado, Wei Ying no pudo resistirse a ser arrastrado en dirección al
bosque con rapidez por su alfa.

"¡Wangji!" Dijo Lan Huan sorprendido y preocupado, tardando ligeramente en reaccionar al


ver las acciones de su hermano.

Al igual que el próximo líder de la secta Lan, el resto de los discípulos de ambas sectas
tardaron ligeramente en reaccionar a lo sucedido, comenzando a perseguir a la pareja
fugitiva, que a toda velocidad se había internado en el bosque.

"¡Lan Zhan detente!" Pidió Wei Ying adolorido, sintiendo la fuerza con la que su alfa tiraba
de su brazo: "Gege me duele, duele, duele..."

Y aunque Lan Wangji escuchaba perfectamente las adoloridas palabras de su omega detrás de
él, solo podía hacerle caso a su furioso alfa, el cual sintiendo a los propios miembros de su
secta como posibles amenazas detrás de ellos, aumento aún más el ritmo de su velocidad por
los frondosos árboles de Yunmeng, internándose cada vez más y más profundo.

Observando como de un segundo a otro la distancia entre todos los discípulos y ambos
prometidos había aumentado de manera preocupante, al punto de perderlos entre la naturaleza
que rodeaba el área de los entrenamientos, Lan Huan grito asustado: "¡Wangji! ¡Regresa!"

Mientras que Jiang Cheng siguiendo a Lan Huan detuvo a su prometido tomándolo de la
mano, mirando preocupado el bosque negro que comenzaba a rodearlos: "Lan Xichen, el
bosque es demasiado obscuro y traicionero en esta parte de Yunmeng, ustedes son forasteros,
no debemos internarnos más o podríamos perdernos".

Alarmado, solamente pudiendo pensar en su pequeño hermano, Lan Xichen replico: "Jiang
Wanyin mi hermano está perdido en el bosque, debo encontrarlo ahora".

"No está perdido" Le negó Jiang Cheng: "Esta con Wei Wuxian, él conoce este bosque mejor
que muchos cultivadores ancianos de mi propia secta. Deja que ambos se arreglen, están
enfadados, si los encontramos ahora podemos ocasionar una pelea incluso peor. Estarán bien,
Wei Wuxian sabrá como regresar; nosotros por otro lado, deberíamos volver a Lotus Pier y
pedir ayuda de mi padre, con cultivadores mejor preparados podemos buscarlos en una
comitiva".

"Pero... Wangji..." Susurró Lan Xichen realmente preocupado.

"A-Huan" Susurró Jiang Cheng, intentando hacer entrar en razón a su alfa: "Estarán bien,
Wei Wuxian sabe lo que hay unos pocos kilómetros más adelante, no podrán avanzar.
Hablarán entre ellos y regresarán cuando estén listos ¿Qué podemos hacer nosotros ahora? Ni
siquiera traes tu espada, debemos llevar a salvo a los discípulos más jóvenes a Lotus Pier y
conseguir ayuda".
Planeando las cosas mucho mejor que su alfa, como un líder completo, Jiang Cheng presionó
ligeramente la mano del próximo líder de la secta Lan intentando brindarle confianza, ante lo
que Lan Huan respondió con un: "Yin Yin, mi hermano... El realmente podría atacar al joven
maestro Wei ahora".

Suspirando exasperado, pensando furioso en su desvergonzado hermano, Jiang Cheng


respondió: "Lo sé. Pero también sé que ambos pueden manejarse, confiemos en ellos, te
prometo que ambos estarán bien. Regresemos pronto para conseguir ayuda y buscarlos antes
de que suceda una desgracia".

Refeccionando mejor gracias a las tranquilizadoras palabras de su omega, Lan Xichen no


tuvo más que aceptar, asintiendo suavemente a sus palabras, decidiendo hacerle caso a Jiang
Cheng. Así que llamando rápidamente a todos los discípulos de ambas sectas antes de que se
internaran aún más en el bosque y que pudieran perderse, toda aquella comitiva que antes
alegremente había ido al campo de entrenamiento para disparar cometas, regreso de forma
apresurada a Lotus Pier, donde después de poner en aviso al líder Jiang Fengmian y al alfa Yu
Ziyuan, inmediatamente iniciaron los planes de búsqueda de la pareja.

Y aunque varios minutos habían pasado desde los acontecimientos que precedieron esa
desgracia, ambos prometidos guiados por ese alfa fuera del control no habían dejado de
caminar rápidamente ni por un segundo, mientras que Wei Ying algo asustado intentaba
forcejear por el dolor con el fuerte alfa, dándose cuenta de a donde se dirigían.

"Lan Wangji, Lan Er Gonzi, Lan Er Gege..." Lo llamo desesperado, intentando detener sus
pasos: "Lan Zhan por favor, solo detengámonos por un segundo, un segundo, hay un
acantilado muy peligroso a solo unos metros de aquí, no podemos acercarnos más".

Pero Lan Wangji, aun absorto en sus pensamientos, se negó a escuchar las palabras del
omega, aun tirando de su brazo fuertemente sin importarle nada, cada vez más absorto en
alejarlo de cualquier alfa, deseándolo solo para él.

"Por favor duele... Es demasiado fuerte, siento que vas a arrancarme el brazo, detengámonos"
Siguió pidiendo Wei Ying desesperado.

El alfa siguió y siguió avanzando, arrastrando consigo al omega sin pensar en sus palabras.
Hasta que después de unos minutos finalmente llegaron a ese acantilado, el cual en medio del
frondoso y obscuro bosque de Yunmeng, tenía varios metros de profundidad antes de
terminar en un riachuelo que desembocaba en el lago a las afueras de Lotus Pier. Al
internarse demasiado en el bosque, Wei Ying sabía que debía seguir el cauce de ese riachuelo
para llegar a las afueras de Lotus Pier, donde solo debían rodear los muelles para llegar a la
residencia Jiang.

Y aunque aquello sonaba bastante fácil, la realidad era que por la dirección que ambos habían
tomado, Wei Wuxian calculaba la distancia hasta su hogar en horas, probablemente incluso
llegarían al anochecer si no se apresuraban, algo que lo alarmó, pues las criaturas peligrosas
del bosque surgían en medio de la obscuridad y ambos sin espadas no podían hacer
demasiado, podrían morir en el bosque si no volvían pronto.
Parándose muy cerca del borde del acantilado, jadeando ligeramente por el esfuerzo, Lan
Zhan logro razonar un poco, diciendo: "Lo prometiste, tú lo prometiste".

Recuperando el aliento de igual manera que su alfa, Wei Ying tímidamente intento soltarse
del agarre en su brazo que no había aminorado su fuerza, solamente había dejado de
arrastrarlo por todos lados como un muñeco de trapo: "Lan Zhan, debemos volver ahora,
debemos regresar" Susurro Wei Ying algo temeroso, intentando hacer entrar en razón a su
joven alfa.

Al escuchar estas palabras, los brillantes ojos dorados del menor se fijaron en el omega de
forma molesta, negando con la cabeza: "No".

Y sin querer detenerse a pensar más las cosas, completamente fuera de si por su alfa, Lan
Wangji volvió a caminar por el borde de aquel acantilado en dirección opuesta al cauce del
acantilado, alejándolos a ambos de Lotus Pier aún más. Y alarmado, dándose cuenta de que
no podía hacer entrar en razón a su joven alfa, Wei Ying forcejeo con más vehemencia,
lastimándose a si mismo en medio de sus suplicas para el menor.

"Lan Zhan es en serio..." Dijo Wei Ying intentando resistirse: "¡Me estas lastimando!"

Cada vez más fuera de control, Lan Wangji se negó a soltar el brazo de su omega, tirando de
el con fuerza intentando avanzar más lejos, solamente pudiendo pensar en alejarlo de
cualquiera, cada vez más y más enojado.

"¡Lan Zhan!"

"Tú de verdad...." Susurró Lan Zhan muy molesto, sin dejar de avanzar: "Lo prometiste Wei
Ying, prometiste que no volverías a hacerlo. Y aun así tú estabas comportándote como una..."

Pestañeando confundido, Lan Wangji fue detenido fuertemente por el mayor, el cual al
escuchar esas ofensivas palabras que su alfa le había dicho se negó rotundamente a avanzar,
deteniendo al contrario usando todas sus fuerzas. Mientras que el joven Lan, teniendo un
momento de lucidez en medio de todo ese enfado, se dio cuenta de lo que estaba a punto de
decir, solamente pudiendo mirar a Wei Ying de forma arrepentida, notando lo serio y
enfadado que este se notaba.

"¿Por qué no continuas?" Insistió el omega: "¿Cómo ibas a llamarme?"

Bajando la mirada y sin soltar el agarre en el brazo del contrario, Lan Wangji pensó en una
forma de disculparse, dándose cuenta de que aquella ocasión tal vez había ido demasiado
lejos.

"¿Ramera? ¿Así ibas a llamarme? ¿Eso es lo que soy para el alfa Lan Wangji?"

Respirando profundo antes de responder, intentando mantener la calma para no decir algo
equivocado, Lan Zhan dijo: "Wei Ying, eso no..."

Sin embargo, siendo ahora Wei Wuxian quien estaba furioso y ofendido, volvió a forcejear
con el fuerte agarre en su brazo con el menor, sin dejarlo continuar: "¡No puedo creerlo! ¿Eso
es lo que piensas de mí ahora? ¿Piensas que soy una ramera?"

"Wei Ying..."

"¡Suéltame!"

Cada vez más confuso, sintiendo a su alfa completamente fuera de control en su interior,
mientras que Wei Ying seguía reclamando casi en gritos mientras forcejeaba con furia, Lan
Wangji no supo bien que hacer, quedándose petrificado notando como su fuerza iba
disminuyendo con aquellos desesperados intentos de su omega por liberarse.

Tras un par de confusos segundos en medio de aquella discusión, Wei Ying uso todas sus
fuerzas e incluso parte de su energía espiritual para soltarse del agarre que Lan Wangji tenía
sobre él, sin prestarle ninguna atención al entorno que lo rodeaba, ni mucho menos lo que
tenía bajo sus pies.

"¡Wei Ying!" Grito Lan Zhan alarmado, intentando volver a sujetar a su omega.

Sin embargo ya era demasiado tarde, pues con los desesperados intentos por soltarse del
agarre que tenía impuesto, Wei Wuxian inconscientemente comenzó a acercarse al borde de
aquel acantilado. Y con esos últimos empujes para soltar el agarre del alfa sobre su cuerpo,
termino impulsándose hacia atrás, resbalando y cayendo hacia la nada.

"¡Wei Ying!"
Capítulo 24.

"Wangji" Dijo Lan Xichen, mirando muy serio a su hermano: "Tengo que hablar contigo".

Dejando de comer su desayuno por un segundo, Lan Zhan levanto la mirada observando a su
hermano mayor frente a él en esa mesa baja donde desayunaban los dos solos. En esa mañana
que había amanecido con una ligera lluvia de primavera, que luego aclaro el cielo por unos
minutos antes de volver a llenarse de negras nubes, cosas raras habían sucedido. A diferencia
del resto de los días, Lan Xichen pidió tener la comida a solas con el menor, invitándolo a su
habitación y comiendo únicamente los dos, a diferencia del resto de los días, que siempre
comían con los demás discípulos de la secta Lan.

Después de que los sirvientes de la secta llevaran el desayuno a las habitaciones privadas de
Lan Huan, ambos jóvenes jade comenzaron a comer el silencio, un silencio algo tenso que
ambos notaban se dio entre los dos hermanos. Y aunque Lan Xichen parecía completamente
normal con su sonrisa amable de siempre, Lan Zhan no podía evitar sentirse algo extraño y
preocupado por aquello tan inusual que sucedía.

Mirando a su hermano, Lan Wangji preguntó: "¿Estoy en problemas?"

Tomando un poco de fruta para comerla, Lan Xichen sonrió de forma tranquilizadora para su
hermano antes de responderle: "No, no lo estas".

Y aunque había escuchado claramente las palabras de su hermano, Lan Wangji no pudo creer
en su hermano, bajando la mirada en una expresión ligeramente triste, dejándole ver al
contrario su preocupación y su incredulidad por las palabras que acababan de decirle.

"Wangji, todo está bien" Dijo Lan Huan intentando tranquilizar a su hermano: "No hay nada
de lo que debes estar preocupado, yo no estoy enfadado. Hermano, solo quiero hablar contigo
sobre una conversación que tuve ayer con Madam Yu, es algo importante".

"¿Yu Ziyuan?" Pregunto Lan Zhan algo confuso: "¿Por qué debería ser algo importante para
mí una conversación con tu suegra?"

"Porque según la tradición, ella es la alfa que se responsabilizó ante nuestra secta por Wei
Wuxian".

Entendiendo mejor las palabras de su hermano, recordando todas las complejas reglas del
tiempo de cortejo, Lan Zhan pensó con mucha más preocupación en lo que se venía por
delante.

Ante las diferentes sectas eran los alfas quienes realizaban las uniones entre jóvenes de las
diferentes familias. Era de esa manera que cuando un omega o un alfa nacían en alguna de las
sectas más influyentes, eran solo los alfas quienes respondían por ellos y realizaban los
compromisos, y de esa manera ante cualquier problema con la realización del matrimonio
ellos se comprometían a intervenir. Después de todo, en una visión muy arcaica de las
tradiciones, los alfas eran tomados como los guardianes de los omegas, sean o no sus hijos,
eran ellos quienes debían encargarse de preservar su pureza y entregarlos vírgenes con su alfa
para ser "preñados".

Según las reglas los betas no podían disfrutar de este privilegio, no podían ser unidos según
la tradición a un omega o a un alfa, así que eran libres de realizar su unión con quien
quisieran. Pues aunque sonara cruel, en aquella sociedad se veía a los hijos de los betas como
seres comunes, aun si nacían como alfas u omegas, su peso en la sociedad disminuía al ser
hijos de betas.

En esa generación de jóvenes cultivadores todos los alfas y omegas habían sido emparejados
de acuerdo a la tradición y en busca del favorecimiento de sus sectas. Siendo así que los Jin
se unieron con los Jiang con el compromiso de Jiang Yanli y Jin Zixuan. Y en esa unión Yu
Ziyuan y Jin Guangshan respondían correspondientemente.

Mientras que los Nie se habían emparejado con los Wen, siendo Nie Mingjue comprometido
con el heredero de los Wen que era un omega, Wen Xu. Mientras que su hermano menor Nie
Huaisang había sido prometido con otro alfa de una manera excepcional, un niño mucho más
joven y de una rama no tan prominente en la secta Wen, el joven Wen Qionglin. Y aunque al
inicio este compromiso se había llevado de una forma convencional, después de que el líder
de la secta Nie se encaprichara con Jin Guangyao y forzara su compromiso, las alianzas entre
ambas sectas se cortaron de forma inmediata y de mala manera, dejando a Nie Huaisang y al
joven alfa Wen solteros y sin compromisos por la tradición. Una noticia que resonó entre
todas las sectas pues era la segunda vez que aquello le sucedía a los Wen, que la ruptura del
compromiso se diera por intervención de terceros; una historia en la que secta Lan se vio
tristemente involucrada en el pasado.

Mientras que en la secta Lan, ambos alfas herederos fueron prometidos con omegas de la
secta Jiang, siendo Lan Huan prometido con el heredero de Lotus Pier, el omega Jiang
Wanyin. Y el hermano menor y el menor de toda aquella generación, Lan Wangji, prometido
con el hijo de un sirviente pero criado como un miembro de la familia Jiang, el omega Wei
Wuxian. Un compromiso por el que respondió Yu Ziyuan y el padre de ambos hermanos Lan.

Fue de esta manera que Lan Zhan entendió que la conversación de su hermano con el alfa Yu
Ziyuan podría llegar a ser algo serio, pues una conversación de uno de los encargados del
compromiso con un miembro directo de la familia solo lo hacía pensar en un problema, algo
que secretamente lo asustaba.

"¿Qué sucedió ayer en el festival, Wangji?" Pregunto Lan Xichen con calma.

Aunque entendía perfectamente la pregunta de su hermano, sin querer responderle, Lan Zhan
respondió inteligentemente: "Tu prometido y tú pelearon".

Riendo al darse cuenta de las intenciones de su pequeño pero brillante hermano, Lan Xichen
siguió insistiendo con dulzura: "No hablo de Wanyin y de mí, hermano. Hablo de un suceso
que se dio entre el joven maestro Wei y tu".

"¿Qué escuchaste hermano?"


"¿Por qué se apartaron de todo el mundo en medio del festival?" Pregunto Lan Huan con un
poco más de seriedad: "Algo que es más importante aún ¿Por qué es que tu prometido tenía
una marca en la muñeca después de esto? ¿Y por qué impregnaste tus feromonas en él?"

Viéndose descubierto, sintiendo sus orejas sonrojarse al recordar las escenas de lo sucedido la
noche anterior, Lan Wangji no respondió por la vergüenza, atreviéndose a decir tras unos
segundos: "Fue un accidente".

"Hablamos de controlar tus feromonas la semana pasada ¿Lo recuerdas? Hablamos de lo


impropio que es marcar a tu pareja con estas, aun mas, esparcirlas en lugares públicos
¿Estuviste intentando contenerte como te dije Wangji?"

Asintiendo a las palabras de su hermano, completamente sincero, Lan Zhan respondió: "Si
hermano".

"¿Entonces qué sucedió Wangji?"

Levantando la mirada solo por unos segundos, sin saber bien que responder, Lan Zhan guardo
silencio culposo, sin atreverse a responderle a su hermano.

Sin embargo Lan Xichen, sin juzgar a su hermano, le dio su tiempo antes de continuar
hablando: "Debe ser difícil para ti, estar cerca de un omega que es tu destinado, debe ser
difícil para tu alfa el controlarse".

Algo confuso, sin haber entendido por completo la frase dicha pro el mayor, Lan Zhan
preguntó: "¿Destinado?"

Sonriendo nuevamente, Lan Xichen se reclamó a si mismo por haber hablado demasiado,
intentando explicarle a su hermano de la forma más dulce que podía: "Por la reglas de nuestra
secta, ningún alfa u omega pueden saber acerca de este tipo de cosas hasta tener su primer
celo, algo que a ti también te sucederá pero en un tiempo prudente. Sin embargo supongo que
debes haberte dado cuenta de lo diferente que es tu relación con el joven Wei, incluso entre
parejas como la mía, tu conexión con ese omega es mucho más especial. Ustedes tienen un
vínculo muy especial Wangji, es la primera vez que lo veo pero... Creo que Wei Wuxian es tu
omega destinado, ese que tu alfa reconoce como suyo por el destino, y al que tu estas
destinado a amar".

Entendiendo a medias las palabras de su hermano, Lan Zhan pregunto entonces: "¿Entonces
Wei Ying y yo estamos destinados a estar juntos? ¿Él también lo sabe?"

"No lo creo. Los omegas tardan un poco más en darse cuenta de estas cosas, los alfas son más
receptivos a todo esto, incluso a su aroma, que nosotros como alfas sentimos mejor" Explico
Lan Huan: "Eso dice papá. Lo dice cuando habla de mamá".

Suspirando algo triste al escuchar las palabras finales de su hermano, Lan Wangji decidió
tomar un poco más de su té, recordando por un segundo aquella sonrisa cálida y esas manos
suaves que acariciaban dulcemente su rostro en el Pabellón del silencio. Hace tiempo que no
había pensado en su madre.
Notando que su hermano se había deprimido con sus palabras, Lan Xichen decidió ir al punto
al que quería llegar con esa charla: "A lo que me refiero, Wangji, es que por este vínculo que
tienes con el joven maestro Wei su relación es mucho más complicada. Debes tener mucho
cuidado con tu alfa, no debes dejar que tome el control o cosas terribles podrían suceder
¿Puedo confiar en ti para contener a tu alfa y tus impulsos?"

Asintiendo seguro ante las palabras de su hermano, Lan Wangji respondió: "Lo prometo, soy
un Lan, tendré autocontrol".

"Es bueno escucharlo, porque si tu alfa toma el control aquel que salga lastimado será el
maestro Wei, no quiero que tu compromiso termine por que le hiciste daño".

"Yo jamás dañaría a Wei Ying" Prometió Lan Wangji, sintiéndose ligeramente horrorizado de
pensar en lastimarlo: "Yo no podría... No podría lastimarlo jamás".

Asintiendo a las dulces palabras de su hermano, Lan Xichen dijo: "Confió en ti hermano, en
que sabrás hacer lo correcto para tu relación con el omega Wei Wuxian".

Asintiendo a las palabras de su hermano, completamente seguro en que no iba a fallarle e iba
a cumplir su promesa, Lan Wangji respondió: "Te lo prometo hermano".

Y sin embargo, sintiendo su corazón palpitar desesperado, parado al borde de aquel alto
acantilado, aquellas palabras que le había dicho a su hermano mayor esa misma mañana
parecieron esfumarse en medio del aire, una conversación que el menor recordó rápidamente
y dio vueltas en su cabeza de forma culposa.

"¡Wei Ying!" Grito nuevamente desesperado, mirando hacia abajo desesperado.

Aquel risco no era tan alto como para matar a una persona si caía, pero tenía varias piedras
sobresalientes en las cuales el cuerpo del mayor se había golpeado al caer, hasta finalmente
resbalar en el riachuelo que quedaba abajo. Sin pensarlo más, decidiendo no esperar, Lan
Wangji rápidamente se apresuró a bajar a toda velocidad por aquel risco no muy pronunciado,
el cual pudo cruzar saltando entre las rocas lo más rápido que podía. De haber tenido a
Bichen a su lado todo hubiera sido tan fácil como subirse sobre su espada y llegar en un
segundo al lado de Wei Wuxian, sin embargo las cosas no eran tan sencillas y todo parecía
complicarse mucho más.

Después de caer brusca y dolorosamente por aquel risco, Wei Wuxian comenzó a volver en sí
mismo cuando su cuerpo cayó pesadamente sobre el agua. Soltando un fuerte quejido de
dolor mientras sus ojos se llenaban de lágrimas, a duras penas logro arrastrarse a la orla del
riachuelo antes de que la corriente lo arrastrara.

Temblando por el dolor, el joven omega bajo la mirada a observar gotas de sangre
manchando el agua del riachuelo a sus pies. Intentando concentrarse, sintiendo todo su
cuerpo adolorido y lleno de heridas, Wei Ying solo pudo mirar las palmas de sus manos
llenas de heridas profundas y sangrantes por haber intentado sujetarse de las rocas a su caída.

Llegando finalmente a la parte baja del risco, Lan Wangji observo a su omega al otro lado del
riachuelo consciente pero llorando, una imagen que le partió el corazón: "Wei Ying..."
Escuchando a su alfa a lo lejos, Wei Ying levanto la mirada sin dejar de llorar, diciendo
completamente desesperado: "Lan Zhan... Ayúdame".

Aquellas palabras fueron suficientes para Lan Wangji, el cual olvidando por completo que
usaba unas túnicas blancas puras, se metió de golpe en el riachuelo y cruzo a este a toda
velocidad, solamente pudiendo ver los llorosos ojos de su omega fijos en él.

Aun llorando y temblando por el dolor, al ver a su alfa finalmente a su lado, Wei Ying
rápidamente se apresuró a decir: "Lan Zhan me duele, me duele mucho".

Finalmente pudiendo encontrarse con su omega, Lan Wangji se agacho a su lado, observando
sus manos llenas de heridas y algunos fragmentos de roca incrustados en su piel. Teniendo un
impulso de lamer las heridas, intentando tranquilizar a su alfa, Lan Zhan se acercó a Wei
Ying para abrazarlo escuchando el quejido que este había soltado con sus acciones,
intentando apartarlo.

Todo el cuerpo del mayor había sufrido golpes sumamente fuertes en todos lados, además de
ciertos cortes que se podían ver sangrando atravesó de sus túnicas rasgadas, teniendo lesiones
que parecían sumamente dolorosas y profundas.

Logrando tranquilizarse un poco, Lan Wangji intento pensar en lo mejor para Wei Ying,
dándose cuenta de que los débiles pies del mayor aun tocaban el riachuelo a su lado, pensó
que lo mejor sería acercarse un poco más al bosque que continuaba aun al otro lado del
riachuelo, donde podrían intentar secar un poco más sus ropas y atender algunas de las
heridas del mayor antes de continuar.

Sin embargo Lan Wangji aunque era fuerte, aún era demasiado pequeño, así que era
impensable para él poder levantar a Wei Ying en sus brazos. Pensando en una mejor forma de
alejarlo de la orilla, Lan Wangji cuidadosamente acaricio una de sus mejillas llorosas para
llamar su atención.

"¿Puedes rodear mi cuello con uno de tus brazos?" Pregunto el menor dulcemente.

"¿Qué? ¿Para qué?" Pregunto el mayor aún muy confuso.

"Alejarnos de la orilla, debemos secarnos. Apóyate en mí, yo te llevaré".

Logrando recuperar un poco la razón a pesar del dolor, Wei Ying respondió asintiendo
ligeramente, haciendo el esfuerzo de rodear el cuello del contrario con uno de sus brazos de
forma temblorosa. Tomando al omega cuidadosamente de la cintura con sus dos brazos,
teniendo un agarre firme en su cuerpo, Lan Wangji comenzó a tirar de él para ayudarlo a
ponerse de pie.

Sin embargo un nuevo grito de dolor de corto el aire, llenando de pánico a Lan Wangji, el
cual sintió como el cuerpo del mayor se apoyaba por completo en el mientras gritaba y
lloraba con mucho más dolor aun. Entendiendo rápidamente que no podía hacer que Wei
Ying se pusiera de pie, Lan Zhan se apresuró a ayudarlo a sentarse de nuevo, realete confuso.
"Duele... Duele..." Gimoteo Wei Ying en medio de un fuerte llanto: "Lan Wangji duele
mucho...".

Sintiendo un fuerte estremecimiento recorriendo su cuerpo con el dulce grito del mayor, Lan
Wangji solo pudo escuchar extrañado como Wei Ying lo había llamado, era la primera vez
que este lo llamaba por su nombre de cortesía. Intentando concentrarse en lo importante, Lan
Zhan volvió a sentarse al lado del contrario, observando su cuerpo realmente preocupado.

"Wei Ying ¿Qué es lo que duele?" Pregunto el menor dulcemente.

"Mi pierna... Lan Wangji duele mucho..."

Bajando la mirada rápidamente, Lan Wangji no pudo evitar notar que el agua del riachuelo se
manchaba de sangre muy espesa que caía de la pierna del mayor, sangre que era muy
abundante y que no había notado al principio. De forma preocupada, Lan Zhan tomo al
contrario de la cintura y con todas sus fuerzas logro arrastrarlo unos cuantos centímetros lejos
del borde de aquel riachuelo, sacando un nuevo quejido de dolor de los labios de Wei Ying,
que no había parado de llorar.

Viéndose lejos del agua, Lan Zhan se apresuró a acercarse a la pierna herida del mayor, y con
sumo cuidado retiro la bota húmeda y rasgada de la pierna de Wei Wuxian. Abriendo mucho
los ojos al ver la pierna del mayor, Lan Zhan ahogo un jadeo de sorpresa, observando una
herida sumamente grande y llena de sangre subía desde el tobillo de Wei Ying hasta casi la
mitad de su pierna. Preocupado porque su pierna se hubiera roto, el menor antes que nada
procuro asegurarse de que la pierna de Wei Ying siguiera entera tocando su piel por los lados
que no estaban heridos, notando que por suerte su hueso no estaba quebrado, pero su tobillo
estaba ligeramente torcido.

Después de esto, alarmado, comenzó a destrozar tela de su propia túnica, comenzando a


limpiar la herida del mayor con sumo cuidado, temiendo que esta pudiera infectarse por toda
el agua y toda la tierra que la había tocado. Era una herida sumamente profunda, que incluso
había lacerado los músculos de su extremidad interior derecha, dejando un sangrado profuso
que Lan Zhan no sabía cómo controlar, poniendo toros de tela sobre la herida intentando
detener el sangrado, escuchando los fuertes quejidos de dolor que soltaba el mayor por sus
acciones.

"Duele... Duele tanto Hanguang-Jun" Se quejó Wei Ying entre sollozos.

"Solo un poco más" Pidió el menor, aun intentando detener el sangrado.

Con su propia túnica prácticamente deshecha, Lan Wangji intentaba cubrir fuertemente
aquella fuerte herida en la pierna del mayor. Mientras que Wei Ying, deshecho por el dolor,
termino tirándose sobre la tierra de la orilla, sintiéndose mareado por el dolor y por la pérdida
de sangre.

Tras un par de minutos, habiendo logrado un par de vendas apretadas que aseguraban bien la
herida del mayor, Lan Wangji finalmente dejo de tocar su cuerpo, mirando nuevamente el
risco del que habían caído: "Descuida Wei Ying, pronto nos encontraran y nos llevaran a
Lotus Pier".
Sonriendo con ironía ante las palabras del menor, Wei Wuxian dijo: "Nadie vendrá..."

"¿Qué?"

"Nadie vendrá" Repitió el mayor de forma pesimista: "No van a rescatarnos, porque nadie
sabe que estamos aquí".

Curioso por sus palabras, Lan Wangji observo como Wei Ying le señalaba el risco por el que
había resbalado, poniendo una expresión sumamente seria.

"El bosque de Yunmeng es conocido por ser sumamente peligroso, por eso nadie lo usa para
llegar a la tierra de los Wen aun cuando es un camino más rápido que ir por agua. Mi padre
decía que era por una bestia realmente poderosa que la secta Wen no admitía que se
encontraba en sus tierras, esta bestia es tan fuerte que toda su energía resentida atrae criaturas
de lo más aterradoras a la obscuridad de los árboles" Explico Wei Wuxian: "Hace años una de
estas criaturas, demasiado fuerte, comenzó a asediar Lotus Pier".

Recordando bien la historia en su cabeza, una historia que había escuchado infinidad de veces
por los labios de su tío Jiang Fengmian, Wei Wuxian guardo silencio, pensando en sus padres
con amargura, en los pocos recuerdos que tenia de ellos.

"Mi padre llego a esta tierra por esa bestia, y con ayuda de mi tío no solo la vencieron,
pusieron un sello sumamente fuerte en todo el acantilado y en el agua que fluye por este rio.
Es como una barrera para criaturas con energía resentida sumamente fuerte, que no pueden
atravesarla, por lo que nunca pueden llegar a Lotus Pier. Mi padre era un cultivador alfa
demasiado fuerte, usando técnicas de cultivadores inmortales trajo paz a Yunmeng, por eso la
gente de aquí me tiene respeto aun cuando no soy un Jiang, por las acciones de mi padre".

Escuchando atentamente las palabras de Wei Ying, Lan Zhan replicó: "¿Por qué no vendrán
entonces?"

Sonriendo de forma irónica, Wei Ying siguió explicando: "Nadie baja del acantilado jamás.
Aun de día el bosque fuera del rio es demasiado peligroso, así que solamente los cultivadores
de alto nivel cultivan por estas áreas cuando hay una bestia demasiado peligrosa, ni siquiera
yo había estado aquí alguna vez. Jiang Cheng y todos los discípulos de Yunmeng no vendrán
aquí porque saben que yo jamás bajaría, nadie bajaría, nos buscaran por el resto del bosque
pero ni siquiera se asomaran al acantilado".

Alarmado, mirando detrás de ellos, Lan Wangji observo la obscuridad del bosque detrás de
ellos, una que era incluso más profunda que la que había en una cueva, en la que pudo
asegurar que había escuchado un gruñido amenazador a la distancia.

Aun riendo con amargura, Wei Ying señalo el cielo: "Mira alfa idiota... El cielo se está
llenando de nubes negras, pronto lloverá y todo se volverá obscuro, cuando las criaturas del
bosque salen a cazar. Moriremos antes de media tarde".

Sintiendo su corazón palpitar desesperado por el miedo, Lan Wangji miro a los ojos de Wei
Ying, observando como en estos solo podía encontrar despacio y odio, una expresión que era
de lo más dolorosa para el menor.
"Muchas gracias Hanguang-Jun" Ironizo Wei Ying lleno de odio: "Moriremos por tu culpa,
supongo que ahora estarás contento, tu querida ramera morirá por ti".

Bajando la mirada realmente triste, Lan Wangji no supo que decir, tomando delicadamente la
mano del mayor, el cual con un brusco movimiento se apartó de él.

"Aléjate, no me toques".

Lloroso, lleno de arrepentimiento, Lan Zhan suplico: "Wei Ying..."

"Aléjate Lan Wangji, déjame solo. No quiero morir junto a ti, no quiero morir al lado de un
alfa que no me ama, y que yo tampoco quiero amar".
Capítulo 25.

Jadeando agotado, Wei Ying se apoyó débilmente contra uno de los árboles del bosque, y
cerrando los ojos pidió: "Detengámonos un segundo..."

Sosteniéndolo firmemente por la cintura, Lan Wangji rápidamente asintió a las palabras del
mayor, ayudándolo a descansar sobre aquel árbol, decidiendo soportar un poco del peso de
este para que pudiera descansar mejor.

Después de una conversación más seria y mucho más educada entre ambos, usando sus
nombres de cortesía y un lenguaje sumamente elegante, Wei Wuxian finalmente acepto
avanzar del sitio en el que se encontraban, apoyándose en Lan Wangji y en los arboles más
cercanos a la orilla mientras avanzaban. Sin embargo esto no era fácil para el mayor, pues
debía apoyar la mayoría de su peso en solo una de sus piernas la cual después de la caída
también tenía varios golpes y heridas, apoyando de vez en cuando su pierna derecha pues le
era demasiado complicado caminar así.

Y aunque Lan Wangji intentaba ayudar de la forma que podía, sosteniendo el cuerpo del
mayor por la cintura con toda su fuerza, ayudándolo a descansar, y guiando el camino de la
mejor forma que podía, no era de mucha ayuda viendo lo que sucedía. Wei Wuxian tenía que
hacer la mayoría del trabajo él solo, intentando avanzar lo más rápido que podía aun sabiendo
que ni siquiera estaban a la mitad del camino, enojado y resentido con el menor en secreto.

Ayudando a Wei Ying a apoyarse contra aquel árbol, Lan Wangji observo como este jadeaba
ligeramente por el esfuerzo, así que se apresuró a decir: "Iré a traerte un poco de agua".

Corriendo al riachuelo, Lan Zhan hizo un pequeño cuenco con sus manos, tomando en estos
un poco del agua clara que corría por ese sitio. Volviendo apresurado con el mayor,
poniéndose de puntitas le dio de beber el agua en los labios. Permitiéndole terminar, Lan
Wangji se dio cuenta entonces que la cinta roja que ataba el cabello largo y negro de su
omega se había soltado ligeramente.

"La arreglare por ti" Dijo el menor intentando acercarse al cabello de Wei Ying.

Sin embargo el mayor bruscamente le dio un empujón, mirándolo muy enfadado: "Aléjate, no
me toques".

Aun luciendo realmente enfadado, a pesar del triste rostro que había puesto su pequeño alfa,
Wei Ying arreglo por sí mismo y con mucha dificultad la cinta de su cabello, haciéndolo
lentamente por el dolor de las heridas en sus palmas que impedía que pudiera tocar cualquier
cosa.

Volviendo a recuperar el aliento, Wei Ying no dijo nada y de mala manera volvió a pasar uno
de sus brazos por los hombros del menor, aceptando volver a caminar con su ayuda. Y
sintiéndose profundamente herido con ese rechazo, con el rostro triste y lleno de
arrepentimiento, Lan Wangji acepto ser tratado de esa cruel manera que quería hacerlo llorar,
aferrándose a la cintura del mayor temeroso, sintiendo que lo perdía.
Así caminaron por mucho tiempo en la tarde, haciendo unas cuantas paradas más para
cambiar los vendajes la pierna de Wei Wuxian y para descansar, acercándose cada vez más al
lago de Yunmeng, el cual para ambos parecía estar a miles de kilómetros a esa velocidad.

Destrozando por completo sus túnicas exteriores para cambiar las vendas ensangrentadas del
mayor, Lan Wangji silenciosamente puso estas de una forma apretada alrededor de la herida,
intentando de forma inútil detener un sangrado tan profuso como ese. Y aunque antes
aquellos toques en sus heridas lo hacían chillar de dolor, ahora Wei Ying parecía bastante
tranquilo, sintiendo sus heridas algo adormecidas en vez de adoloridas, concentrado quitando
algunas piedras incrustadas en la piel de sus palmas mientras permitía al menor trabajar.

"Te quedaste sin tus hermosas túnicas blancas ¿Qué dirá tu secta ahora? Parecían realmente
costosas, no creo que les guste saber que malgastaste la tela en esta tontería".

Levantando la mirada para observar a Wei Ying, el cual sin mucha atención seguía limpiando
las heridas de sus palmas, Lan Wangji susurró: "No importa".

Riéndose de una forma cruel, dejando que ese ser mezquino que tenía dentro saliera a flote,
Wei Wuxian replico: "Claro que no importa, para niños como tú que lo tuvieron todo en la
vida, una túnica que podría costar la comida entera de una familia pobre da igual. No
importa, tu querido padre alfa rico comprara otras 10 iguales, no me preocupare entonces".

"No importa, si no lo hago te desangraras".

"Entonces déjame morir" Dijo Wei Ying cruelmente: "No te estoy pidiendo nada de esto, si
esperas que tenga algo de gratitud por salvarme la vida de un accidente que tu causaste,
entonces olvídalo. No te agradeceré por nada de esto, Lan Wangji".

Bajando la mirada de nuevo, sintiéndose regañado, Lan Zhan solo pudo decir: "Lo siento".

"Si, lo sientes" Ironizo Wei Wuxian de la mima forma cruel: "¿Eso hará que mis heridas se
curen? ¿Evitara que sigamos perdidos? ¿De qué me sirven ahora tus disculpas?"

Sin saber que decir Lan Wangji solo se quedó con la mirada baja, observando en sus manos la
sangre de Wei Wuxian, además de algunas heridas pequeñas en sus dedos por haber cortado
la tela y por haberla asegurado con tanta fuerza. Y aun sin poder notar el arrepentimiento del
menor, Wei Ying siguió insultándolo por lo bajo, tachándolo de inútil e inservible, unos
insultos que había recibido de otras personas toda su vida y que ahora descargaba sobre su
pequeño prometido solo por el enfado.

En medio de sus insultantes palabras las cuales no se detenían y no dejaban de herir al


pequeño alfa, Wei Ying fuel el primero en notarlo, dándose cuenta de que en una de las
heridas de sus palmas había caído una pesada gota de lluvia, algo que lo hizo elevar la mirada
a las negras nubes sobre su cabeza, susurrando: "Oh no..."

Elevando la mirada al cielo al igual que su prometido, Lan Wangji se dio cuenta de que la
lluvia había iniciado, y que pronto un millar de gotas pesadas los envolverían, al igual que la
inminente obscuridad que traería aquello que ambos tanto temían.
"Vamos, vámonos ya" Dijo Lan Zhan alarmado.

Aun pesimista, permitiéndole al menor que lo ayudara a levantarse, Wei Ying replicó: "Si,
esforcémonos en vano, igual moriremos".

Sin dejarse desalentar por aquellas palabras, Lan Wangji se apresuró a levantar a Wei Ying y
volver a sostenerlo, caminando a su lado un poco más rápido en medio de la lluvia. El
ambiente no tardo en llenarse de agua y obscuridad, volviendo el camino que ambos
transitaban sumamente resbaloso y lleno de barro, un camino en el que Wei Ying no podía
evitar tropezar de vez en cuando por su difícil forma de caminar, siendo sostenido con mucho
esfuerzo por su pequeño alfa, que se había dispuesto a protegerlo a cualquier costo.

Caminando en silencio y sin descansar, ambos se giraron rápidamente cuando escucharon un


fuerte grito monstruoso a sus espaldas. Sintiendo su corazón desbocado, Wei Wuxian observo
detrás de ambos a un cadáver feroz, el cual gruñendo y dejando escapar varios hilos de saliva
de su monstruosa boca, los miraba con los ojos blancos como la luna y las garras tan afiladas
como una espada, dispuesto a atacarlos.

Pensando que era el fin, Wei Wuxian se quedó petrificado, a penas reaccionando cuando Lan
Wangji lo apoyo contra un árbol con rapidez, dispuesto a enfrentarse con aquel cadáver.

"¡Lan Zhan espera!" Pidió Wei Ying realmente asustado, temiendo por la vida de su pequeño
alfa.

Sin embargo Lan Wangji hizo caso omiso, y tomando algunas rocas pesadas del piso, se las
lanzo la peligrosa criatura atontándola ligeramente, algo que Wei Wuxian aprovecho para
sellarlo. Escribiendo unos símbolos en su palma herida con la ayuda de su propia sangre, el
mayor se giró rápidamente en dirección a aquella criatura que seguía chillando de forma
monstruosa, y apuntando su palma en su dirección, dejo que aquel sello impregnado de su
energía espiritual fuera lanzada hasta este cadáver, y que finalmente lo sellara dejándolo
completamente inmóvil.

Cruzando miradas con su pequeño alfa, Wei Ying supo que ambos probablemente podrían
defenderse si trabajaban juntos, siendo él quien lanzara sellos simples para encerrar criaturas
obscuras, y Lan Wangji quien se encargara del trabajo físico.

Así que respirando un poco más tranquilo, Wei Ying ignoro el hecho de que se había
preocupado por su pequeño alfa, y desviando la mirada, volvió a aceptar caminar al lado del
menor apoyándose en su cuerpo.

Caminando en medio de una lluvia que aumentaba su intensidad, Lan Wangji y Wei Wuxian
se enfrentaron juntos a varias criaturas llenas de energía resentida. Sin eliminarlas o
purificarlas como estaban acostumbrados, ambos únicamente se aseguraban de dejarlos
inmóviles o inconscientes el suficiente tiempo como para permitirles continuar su camino,
usando rocas y algunas técnicas simples de cultivo.

Pero aun a pesar de todo su esfuerzo, mientras mas oscurecía en el cielo y más fuerte caía la
lluvia, mas criaturas peligrosas salían de los árboles para atacarlos, haciendo que incluso
aquellos simples métodos que les permitían huir se volvieran inútiles.
Observando como un gran monstruo con la forma de un oso había saltado de la nada frente a
ellos, Lan Zhan reacciono rápido y empujo a Wei Ying hacia atrás. Tomando una roca afilada
que había estado cargando consigo desde hace un rato para una emergencia, no dudo en
lanzarse sobre la peligrosa criatura para apuñalarla en el cuello con fuerza, tardando y
recibiendo algunos golpes, pero finalmente logrando matarla.

Mientras que Wei Ying, habiendo caído al piso por el empujón, volvió a llorar al sentir el
dolor regresando a su cuerpo por sentir sus heridas llenarse de barro con la caída. Sintiendo
aquello como un nuevo ataque por parte de Lan Wangji, Wei Wuxian volvió a ponerse
furioso, mirando al menor a la distancia completamente enfadado.

Dándose cuenta de lo que había hecho, aun si fue un error al intentar protegerlo, Lan Wangji
se apresuró a correr en dirección a Wei Ying para ayudarlo: "Wei Ying, lo siento, yo..."

Realmente enfadado, incluso más que cuando había caído por el acantilado, Wei Wuxian
empujo al menor con fuerza de su cuerpo: "Piérdete".

Dolido, Lan Zhan lo miro y solo pudo decir: "¿Qué?"

"¡Piérdete!" Le grito Wei Ying en medio de lágrimas: "¡Piérdete, piérdete, piérdete! ¡Déjame
en paz! ¡Aléjate!"

Sintiéndose nuevamente dolido por las fuertes palabras de su omega, Lan Wangji intento
replicar diciendo: "No fue mi intención Wei Ying, por favor... Déjame ayudarte".

Volviendo a empujarlo al ver sus intenciones de tocarlo, Wei Wuxian replico: "¿Por qué estas
esforzándote tanto por un omega que no amas?"

Confuso, Lan Wangji solo pudo observar al mayor con mucha preocupación, agachándose a
su lado pero sin poder tocarlo pues Wei Wuxian se resistía. Sin saber qué hacer, el menor
rápidamente desvió la mirada a los arboles al escuchar un nuevo rugido amenazante que salía
de las profundidades, algo que acelero mucho su corazón por el temor.

Absorto en su dolor y en su enfado, Wei Wuxian limpio algunas de las lágrimas de su rostro
con dificultad por sus manos heridas, para luego continuar hablando con odio: "Esforzarte así
por un omega que no amas, por un omega que no admites que amas ¿Cuál es el sentido?
¿Cuál es el punto de hacer algo así?"

"Wei Ying... Yo..."

"No hay nada que decir" Susurró Wei Wuxian de forma dura: "Durante todo este tiempo yo
siempre fui sincero con mis sentimientos, diciéndote lo mucho que te amaba y cuanto
significabas para mí. Pero aun cuando yo te pedí que fueras sincero conmigo en el festival,
cuando te pedí que me dijeras si tú también me querías... Tu nunca pudiste decirlo".

Olvidándose del monstruo en las profundidades al escuchar las dolorosas palabras de su


omega, Lan Wangji susurro: "No lo entiendes, eso solo..."
"¿No lo entiendo? ¿No entiendo qué?" Pregunto Wei Wuxian interrumpiendo al menor con
cada palabra que decía, cada vez más dolido y lleno de odio por toda la situación: "Tu eres el
que no entiende nada. Siendo cariñoso y celoso conmigo cuando ni siquiera puedes admitir
que me quieres, pidiéndome besos y abrazos cuando no puedes decirme que también me
amas. Tal vez después de todo solo soy una ramera para ti, dándote todas las atenciones
cariñosas que tú quieres y cuando quieres, para luego tratarme como una basura y lastimarme
dejándome ser el único que siente algo entre los dos ¿Esto será nuestro matrimonio
entonces?"

"No" Dijo Lan Wangji rápidamente, tomando una de las manos del mayor lleno de
desesperación: "No es eso, de verdad no..."

Levantando la mirada para verlo a los ojos, Wei Wuxian pidió: "Entonces dilo, dime lo que
significó para ti, dime que me amas tanto como te amo yo a ti. O si no yo seguiré siendo esa
ramera de la que tanto te quejas, esa persona con la que acudes cuando te aburres o quieres
que alguien te de un beso, ya me dijiste que lo era, solo debes decirme que me quieres para
que yo sepa que no soy solo eso para ti..."

Entrando ligeramente en pánico, como siempre que debía decirle al mayor que lo quería, Lan
Wangji entreabrió los labios para hablar, sin embargo no pudo pronunciar ninguna palabra.
Perdiéndose en los ojos grises ligeramente violáceos del mayor y su inconfundible belleza
bajo la lluvia, Lan Wangji se mantuvo en silencio, sin poder admitir una vez más que amaba a
su prometido, aun si quería gritarlo, queriendo decirlo una y otra vez.

Esperando de forma impaciente, los ojos de Wei Ying se llenaron de más lagrimas aun, cada
vez más desesperado: "¡Dilo! ¡Admite que me amas! ¡Dime que nuestro compromiso no es
solo un juego de niños para ti!"

Y aunque escuchaba esos desgarradores gritos de su omega, Lan Wangji no pudo decir nada,
aferrándose ligeramente tembloroso a una de las manos del mayor con fuerza, intentando
hablar pero sin poder hacerlo por su innegable timidez.

"¡Dilo!" Siguió exigiendo Wei Wuxian: "¡Dilo! ¡Eres solo un maldito niño! ¡Piérdete!"

Sintiendo como la mano del mayor se escapaba de sus dedos y luego como nuevamente lo
empujaban, Lan Wangji sintió ganas de llorar, sin saber qué hacer en medio de esa confusa y
dolorosa situación.

"Piérdete... Vete, piérdete..." Siguió pidiendo Wei Ying en medio de su llanto.

Sintiendo su corazón destrozado por no sentirse amado, Wei Wuxian siguió empujando y
dándole algunos golpes a Lan Wangji, el cual solo se mantuvo callado, reclamándose a sí
mismo por no haber podido ser sincero con el mayor. Escuchando su fuerte llanto sin saber
cómo tranquilizar a su pareja, Lan Wangji solo reaccionó cuando algo desconocido fue
lanzado en su dirección desde las sombras.

Apartándose de golpe, Lan Zhan no pudo identificar aquello que les habían arrojado desde las
sombras, y en medio de la obscuridad del bosque tampoco pudo identificar que ser los había
atacado, únicamente pudiendo escuchar cada vez más cerca aquellos fuertes gruñidos, que en
esta ocasión sonaban más como unos lamentos.

Asustado, Lan Wangji volvió a acercarse a Wei Ying, y ya sin importarle sus gritos o sus
intentos de empujarlo, obligo al mayor a ponerse de pie apoyado completamente en su
cuerpo.

"¿Qué haces? ¡Suéltame!" Reclamo Wei Ying entre sus fuertes lloros, tambaleándose
débilmente observando como comenzaban a avanzar nuevamente por la playa.

"Wei Ying" Dijo Lan Zhan intentando hacer entra en razón al mayor: "Debemos huir, ahora.
Vamos a morir, por favor camina".

"Púdrete" Respondido Wei Ying lleno de odio: "Déjame, no necesito que te preocupes por
mí, si no me amas..."

"No estoy jugando, camina".

Ofendido, mucho más débil por sus heridas, Wei Ying solo pudo obedecer de mala gana al
menor caminando débilmente arrastrado por los fuertes brazos de su alfa, el cual usando toda
su fuerza lo sostenía y lo obligaba a avanzar, únicamente fijo en llegar a su destino lo más
pronto posible.

Escuchando un fuerte ruido que cortaba el aire detrás de ambos, Wei Ying rápidamente
advirtió: "¡Agáchate!"

Dándose cuenta de que aquella misteriosa criatura les había lanzado un nuevo objeto a toda
velocidad, Lan Wangji se agachó sobre su mayor, buscando protegerlo, mientras que aquella
cosa que les habían arrojado pasaba sobre ellos.

"¿Nos está persiguiendo?" Preguntó Wei Ying incrédulo.

"Vamos, no te detengas" Pidió Lan Zhan volviendo a pararse erguido.

Decidiendo avanzar de buena gana, obedeciendo por miedo, Wei Wuxian se apresuró a
caminar apoyando su peso netamente en el pequeño alfa pues ya no podían acercarse a los
arboles fuera de la playa por miedo de ser atacados. Teniendo que esquivar nuevos ataques de
aquel ser que se escondía en las profundidades, ambos jóvenes se detuvieron en seco al ver
un gran número de cadáveres que se habían puesto en su camino a pocos metros, cortándoles
el paso.

Sabiendo que no podían retroceder por aquella misteriosa criatura, y mucho menos avanzar
por los cadáveres, Wei Ying miró rápidamente el riachuelo junto a ellos, y sin dudar comenzó
a arrastrar a Lan Wangji en esa dirección, solamente pensando en huir.

"Vamos al otro lado del rio" Pidió el mayor intentando caminar lo más rápido que podía: "No
podrán seguirnos a través del agua".

Siguiendo al mayor como podía, Lan Wangji pensó asustado en sus palabras, notando que por
la lluvia la corriente del rio había aumentado al igual que la profundidad de sus aguas:
"Tendremos que nadar Wei Ying".

"Lo sé".

Temeroso, Lan Zhan se aferró ligeramente a la ropa del mayor, sin saber cómo negarse:
"Pero..."

"Tranquilo" Susurro el mayor sonriéndole de forma nerviosa intentando darle confianza: "Te
voy a sostener".

Comprendiendo que no tenían otra opción y que debían actuar rápido o morirían, Lan Wangji
finalmente acepto aquella descabellada idea asintiendo, caminando más rápido junto al mayor
hasta el rio. Siendo seguidos a toda velocidad por todos esos horribles monstruos creados por
la energía resentida, Lan Wangji fue el primero en entrar en aquel riachuelo, notando sus
congeladas aguas que le calaban hasta los huesos, pero no se detuvo pues aunque estaba
demasiado fría, era una temperatura a la que estaba acostumbrado después de haber nacido en
el Receso De Las Nubes.

Pero Wei Ying, acostumbrado a una temperatura más cálida como las aguas de Yunmeng,
soltó un quejido al sentir como esa fría agua mojaba sus extremidades y sus heridas,
sollozando: "Frio, frio... Hace frio..."

Siendo el que iba adelante, aun preocupado por su seguridad, Lan Wangji no se detuvo
entrando cada vez más y más profundo dentro de aquel rio, observando como las criaturas
malditas se quedaban en la orilla, así como su prometido había previsto. Avanzando cada vez
más, el agua pronto llego a los hombros de aquel pequeño alfa, el cual asustado se tomó
fuertemente de su prometido, dándose cuenta de que no estaban ni a la mitad de aquel rio.

"N... No Pares..." Susurro Wei Ying temblando por el frio que llenaba todo su cuerpo: "No...
No Pares Hanguang-Jun... Te voy a sostener, te lo prometí... ¿No es verdad?"

Asintiendo a sus palabras, Lan Wangji siguió avanzando más asustado, teniendo que
comenzar a nadar pocos pasos después.

"Confía en mi" Pidió el mayor teniendo que hacer lo mismo poco después.

Y así como había prometido, nadando solo con un brazo, fue ahora Wei Ying quien sostuvo
fuertemente a Lan Wangji por la cintura pegándolo a su cuerpo, luchando contra la corriente
y manteniendo a flote al menor por las tormentosas aguas hasta llegar al otro lado del
riachuelo.

Desplomándose sobre la orilla, Lan Wangji tosió y escupió mucha del agua sucia del rio que
había tragado en su travesía, sintiendo como el agua aun tocaba su cuerpo en esa posición.
Notando que después de tanto esfuerzo Wei Wuxian casi se había consumido, además de su
cuerpo herido, Lan Wangji intento reponerse rápidamente, acercándose al mayor para
ayudarlo a salir del agua primero. Olvidando su cuerpo adormecido y completamente
mojado, Lan Zhan se forzó a sí mismo a ponerse de pie para ayudar a Wei Ying, el cual salió
casi arrastrándose, escupiendo agua y tosiendo también.
Siendo ayudado por la luz de los truenos que fuertemente sonaban sobre sus cabezas en una
tormenta que empeoraba cada vez más, Lan Wangji pudo ver alarmado la arena bajo sus pies
y el agua que los rodeaba, notando estaba llena de sangre. Bajando rápidamente la mirada a la
pierna herida del mayor, se dio cuenta de que la apretada venda que había puesto la última
vez antes de cruzar el rio se había soltado casi por completo, y gracias a la fuerza de la
corriente y el agua del rio, aquella profunda herida se había abierto aún más, dejando que la
sangre del mayor saliera a borbotones.

Jadeando agotado y sintiéndose mareado después de todo lo que habían pasado, Wei Wuxian
solo pudo acostarse sobre la húmeda arena bajo su cuerpo, sintiendo su cabello caer
libremente por todos lados con la cinta de su cabello nuevamente desatada. Observando al
otro lado del rio ese montón de cadáveres gruñendo y sin poder cruzar el rio con su fuerte
corriente, otra cosa llamo la atención del mayor, el cual con la vista borrosa observo aquella
figura sobre los árboles.

"¿Qué es eso?" Pregunto en un susurro inaudible.

Envuelto en espesa niebla negra proveniente de una gran energía resentida, Wei Ying pudo
ver apenas lo que parecía ser una imagen casi humana, la cual de una manera increíble
levitaba sobre los altos arboles del bosque. Forzándose a enfocar la mirada, Wei Wuxian
observo que aquello que parecía ser un humano llevaba una antigua armadura que
probablemente tendría cientos de años, al igual que una espada llena de sangre seca la cual
destilaba más energía resentida que el resto del cuerpo de aquel extraño ser. Y levantando la
mirada para ver el rostro de aquella criatura, Wei Ying solo pudo perderse en unos fieros ojos
rojos que también lo miraban de vuelta, una mirada que lo hizo sentir profundamente
perturbado y asustado, solamente pudiendo pensar en una cosa.

"Viene por mi..." Susurro Wei Ying, como si repitiera las palabras que aquel ser murmuraba
desde lo lejos.

Después de unos segundos, mirándose ambos fijamente, aquel extraño ser se giró de golpe y
volvió a la obscuridad de los bosques en menos de una fracción de segundo. Y aunque esto
había sucedido demasiado rápido, Wei Ying pudo ver una imagen algo descolorida en la capa
fantasmal que este ser traía en su espalda. De un color rojo y brillante, una marca redonda
rodeada por llamas que imitaban el sol se dibujaba como un estandarte en la armadura de
aquel extraño individuo, el símbolo de la secta Wen.

Únicamente atento a la herida sangrante de su omega, Lan Wangji se avoco a intentar parar el
sangrado. Y aunque durante unos segundos considero volver a cortar su ropa para hacer
nuevas vendas, pronto se dio cuenta de que esto probablemente sería más contraproducente
pues sus dos túnicas interiores estaban mucho más mojadas que aquellas vendas
improvisadas. Así que tomando estas del cuerpo del mayor, Lan Wangji se apresuró a
exprimir toda el agua que pudo de la tela para luego volver a envolver con esta la herida
sangrante del mayor, esperando que aunque sea con esto pudieran avanzar nuevamente hasta
su destino.

Sin haber escuchado aquellas débiles palabras dichas por Wei Ying, Lan Zhan termino de
vendar la pierna de este y se acercó al rostro del mayor, acariciando suavemente sus mejillas
y mirándolo a los ojos, para luego decirle: "Wei Ying, debemos continuar, no podemos
descansar aquí".

Pestañeando confuso volviendo en sí mismo, olvidando aquella criatura para concentrarse en


su prometido, Wei Ying rápidamente dijo: "No puedo, no puedo ponerme de pie".

"Puedes hacerlo, vamos".

Negando con la cabeza débilmente, Wei Ying volvió a negarse: "No, no puedo".

Haciendo caso omiso de las débiles palabras del mayor, Lan Wangji lo tomo de los brazos
para obligarlo a sentarse en la playa, para luego volver a acomodar la cinta roja en sus
hermosos cabellos negros. Logrando sentarse a duras penas, Wei Wuxian sintió su cabeza
darle vueltas sin poder resistirse más, pensando que incluso podría llegar a vomitar por la
pérdida de sangre.

"Vamos a ponerte de pie, sujétate de mí" Pidió Lan Zhan cuando el mayor ya estaba
completamente arreglado.

"Lan Zhan..." Susurró Wei Ying con una sonrisa amable, realmente débil: "Vete, déjame aquí,
yo solo te retrasaría".

Obligando al mayor a rodear su cuello con sus brazos, Lan Wangji de manera obstinada
siguió insistiendo: "Voy a sostenerte, solo necesito que hagas un poco de fuerza".

Suspirando resignado, sabiendo que Lan Zhan no lo obedecería aun si se lo pedía, Wei Ying
finalmente acepto que ponerse de pie, soltando un fuerte quejido de dolor, logro volver a
ponerse erguido, cayendo casi por completo sobre su pequeño alfa, el cual valientemente y
con fuerza lo sostuvo.

Mirando la orilla y el camino que se venía por delante de ambos, Wei Ying volvió a pedir:
"Déjame aquí, acostado. Estas tan cerca del lago... Solo debes ir a Yunmeng y traer personas
para ayudarme".

Usando toda la fuerza que le quedaba, Lan Zhan apoyo uno de los brazos del mayor sobre su
cuello, volviendo a negarse: "No te dejare aquí".

"Sabes que voy a morir aun así ¿Verdad? Lo sabes ¿No es así?"

Sintiendo un profundo dolor al escuchar esto, Lan Zhan volvió a negarse de forma obstinada:
"No morirás, tu nunca morirás. Camina".

Riendo por las inocentes palabras de su pequeño alfa, Wei Wuxian finalmente acepto seguir
con el camino, apoyando todo su peso sobre su valiente alfa mientras que cojeando
ligeramente comenzó a caminar. Dejando un rastro de sangre por la arena, la pareja camino
lentamente por la orilla de aquel riachuelo en silencio, observando cómo tras algunos pasos
pudieron ver finalmente el lago de Yunmeng.

Teniendo que caminar por varios minutos sin parar, Wei Ying estuvo a punto de desplomare
varias veces, siendo atrapado y sostenido por su joven prometido, el cual usando toda su
fuerza hasta lastimar sus brazos y su espalda, se esforzó por no dejarlo caer, obstinado en
salvarlo y llevarlo de regreso a Lotus Pier.

Llegando finalmente al borde del gran lago de Yunmeng, con lotos y hermosas flores blancas
bajo sus pies, ambos observaron los muelles y las luces de Lotus Pier a lo lejos, notando que
habían llegado finalmente a su tan deseado destino. Sin embargo soltando un fuerte quejido
de dolor, rindiéndose por fin, Wei Ying volvió a caer, algo que Lan Wangji no pudo detener,
solamente intentando amortiguar la caída del mayor sobre el piso sumamente mojado.

"Solo un poco más, un poco más" Suplicó Lan Wangji, observando a Wei Ying jadeando
cansado.

Sintiéndose completamente débil, Wei Ying negó con la cabeza, mirando a Lan Zhan a los
ojos le dijo: "No puedo más Hanguang-Jun... Duele mucho, estoy cansado".

Con el corazón latiendo desesperado, Lan Zhan únicamente pudo acomodar al omega en sus
brazos, acostándolo sobre su espalda y poniendo su cabeza sobre su regazo, intentando así
hacerlo sentir un poco más cómodo. Intentando evitar que más agua cayera sobre el rostro de
Wei Ying, Lan Zhan intento cubrirlo con su propio cuerpo, por más que se siguiera mojando,
observando como Wei Wuxian se reía con sus pobres intentos.

"Déjame" Pidió el mayor.

Sin hacerle mucho caso a las palabras del mayor, Lan Zhan siguió intentando evitar que el
cuerpo de su prometido se mojara, revisando a lo lejos su pierna herida aun envuelta con las
tiras de tela de lo que antes había sido una de sus túnicas exteriores más lujosas, la cual
estaba llena de sangre que se fundía con la tierra húmeda bajo sus pies y el diluvio que caía
sobre ellos.

Levantando una de sus manos, Wei Ying acaricio dulcemente una de las mejillas de su
pequeño alfa, sonriéndole dulcemente, para luego decirle: "Déjame, vete..."

Aun sosteniéndolo muy fuerte contra su cuerpo, Lan Zhan se negó: "No".

"Lotus Pier... Está a solo unos minutos de aquí" Explico Wei Ying señalando el camino del
rio que estaba a punto de terminar: "Solo debes bordear el lago, y este te llevara a la parte
civilizada de Yunmeng en menos de una hora, estarás en los muelles muy rápido..."

"No te voy a dejar" Sigue negándose Lan Zhan.

"Lo se... Es solo que... No quiero que mueras aquí Hanguang-Jun, no quiero que mueras".

Poniendo un rostro de dolor absoluto, Wei Wuxian volvió a llorar, abrazándose fuertemente
al cuerpo húmedo de su alfa, temblando por el dolor y el miedo que sentía.

Bajando la mirada muy triste, sin saber qué hacer, Lan Zhan susurro: "Wei Ying..."

"Perdóname" Suplico Wei Wuxian entre sollozos: "No quería decirte esas cosas tan horribles
Lan Zhan, no quería herirte. Es solo que... De todas las personas en el mundo, por un
momento creí que tu jamás me abandonarías, que no me llamarías o pensarías de mi
exactamente como todos los demás".

Escuchando esas palabras, Lan Wangji se presura a decir rápidamente: "No lo hago".

Sonriendo de nuevo, en medio de sus lágrimas, Wei Ying beso delicadamente una de las
mejillas del menor: "No puedes mentirme, Lan Zhan. Pero está bien, aun si tú piensas que
soy una golfa o un omega despreciable, eso no debería cambiar mis sentimientos hacia ti...
Yo no debería dejar de amarte por eso. Ya sea que tú me ames o no, yo estoy tan feliz con
nuestro compromiso. De verdad quiero casarme y ser feliz contigo Lan Wangji".

"No pienso eso, de verdad no lo pienso" Dijo Lan Zhan desesperado, sintiendo como la
fuerza de su omega se iba desvaneciendo.

Suspirando un poco más cómodo, disfrutando de apoyarse en los brazos de su alfa, Wei
Wuxian susurró: "Hace frio ¿No lo crees? Es egoísta, atarte a alguien a quien no conoces y no
sabes si amaras, para que por la decisión de alguien más tu tengas que casarte por una
tradición ridícula".

"Wei ying no cierres los ojos" Pidió Lan Zhan: "Mírame".

Comenzando a quedarse dormido, Wei Ying susurró: "Espero que puedas encontrar a alguien
a quien amar algún día... Aun si no es tu esposo. Tu mereces ser feliz aun si no es conmigo".

Respirando profundo, con su mente hecha un desastre y sus pensamientos revueltos, Lan
Zhan dijo: "Yo si te quiero, te quiero. Wei Ying te amo, por favor despierta, por favor..."

Sin embargo inconsciente, con el rostro completamente pálido y una respiración cada vez
más débil, Wei Wuxian no respondió, sin abrir los ojos. Al ver esto, los dorados ojos del
menor se llenaron de lágrimas de desesperación y miedo, moviendo el cuerpo del mayor
intentando desesperarlo a toda costa, cada vez más asustado.

"Wei Ying despierta... Wei Ying, Wei Ying por favor" Suplicó Lan Zhan llamándolo
innumerables veces, comenzando a temblar por el frio: "Por favor despierta, por favor Wei
Ying..."

Sin embargo sin importar cuanto lo intentara Lan Wangji, Wei Wuxian no abrió los ojos, con
la respiración más y más débil con cada minuto que pasaba, mientras que la herida de su
pierna no había dejado de sangrar, y la oscuridad comenzaba a engullirlos a ambos.

"No me dejes por favor, te amo, Wei Ying te amo. No me dejes... Por favor despierta" Suplico
Lan Wangji en medio de un fuerte llanto de pura tristeza, aferrándose fuertemente al cuerpo
de su inconsciente omega.
Capítulo 26.

"No me dejes por favor, te amo, Wei Ying te amo. No me dejes... Por favor despierta" Suplico
Lan Wangji en medio de un fuerte llanto de pura tristeza, aferrándose fuertemente al cuerpo
de su inconsciente omega.

En los minutos posteriores a eso, Lan Wangji volvió a maldecirse a sí mismo, intentando una
y otra vez levantar el cuerpo de Wei Ying entre sus brazos, pero sin lograrlo por ser aún
demasiado joven. Maldiciéndose por no ser mayor, por no ser más fuerte, por no ser un mejor
alfa; Lan Zhan pensó que estaba dispuesto a morir al lado de su omega, así que rindiéndose
también, simplemente cerro los ojos en medio de su llanto aferrándose fuertemente al cuerpo
del mayor, escuchando como a la distancia algo se acercaba por el bosque.

"¡Aquí están!"

Abriendo los ojos al escuchar esa voz desconocida en medio de la nada, Lan Wangji abrió los
ojos sorprendido, observando como varios cultivadores con túnicas de la secta Yunmeng
Jiang se acercaban rápidamente a ellos, iluminándolos con varias linternas con formas de
lotos.

"¡Joven Wei!" Dijo uno de los cultivadores alarmado, agachándose al lado del pequeño alfa y
Wei Wuxian: "¿Qué fue lo que paso? ¿Cómo terminó en este estado?"

Sin saber bien cómo responder aquella pregunta, viéndose rodeado por varios de esos
cultivadores betas que se notaban bastante alarmados, Lan Wangji se quedó en silencio, aun
sosteniendo fuertemente a Wei Wuxian entre sus brazos.

"Debemos irnos ahora" Dijo otro de los cultivadores alarmado, el cual se había acercado a la
pierna sangrante de Wei Wuxian, observándola cuidadosamente: "El joven maestro Wei
Necesita un curandero de inmediato, está perdiendo mucha sangre".

Al pronunciar estas palabras, otro de los discípulos rápidamente se apresuró a tomar de sus
túnicas un talismán que lanzo al cielo, marcando de esa manera el símbolo del clan en medio
de la obscuridad de esa gran tormenta, dando la señal de que finalmente habían encontrado a
la pareja desaparecida.

Aun algo aturdido por todo lo que estaba sucediendo, Lan Wangji no impide que uno de
aquellos betas tomara a Wei Ying en sus brazos, levantándolo de forma apresurada. Tardando
en reaccionar, Lan Zhan se pone de pie solo cuando ve a ese beta avanzando con Wei Ying,
apresurándose a sacudir la tierra húmeda de sus túnicas interiores y comenzando a seguirlos.

Observando al pequeño niño Lan detrás de ellos, uno de los betas amablemente le permitió
pasar antes entregándole una sombrilla, diciéndole: "Lan Er Gonzi, por favor resguárdese de
la lluvia y tome su lugar al lado de su prometido, los conduciremos muy pronto a Lotus Pier".

Temblando ligeramente por el frio, Lan Zhan vuelve a tardar un poco en procesar todo lo que
sucedía, haciendo una reverencia antes de tomar el paraguas, respondiéndole a ese joven
discípulo: "Muchas gracias".

Siendo correspondido por una sonrisa amigable por los demás miembros de la secta Jiang,
Lan Wangji avanzo entre ellos hasta el frente donde se encontraba Wei Wuxian siendo
llevado por ese beta. Cubriéndose lo mejor que podía de la lluvia con esa sombrilla, Lan
Wangji se apresuró a seguir el paso de las personas que los acompañaban, caminando
rápidamente por la orilla del rio hasta el lago de Yunmeng, acercándose cada vez más a los
muelles.

Y a pesar de lo rápido que debía moverse, Lan Zhan no dejo de ver a Wei Ying ni por un solo
minuto, cada vez más preocupado, tomando una de las manos del mayor con dulzura,
sosteniéndolo de esa manera mientras se acercaban cada vez más a Lotus Pier.

Como era de suponerse debido a la señal enviada por ese grupo de búsqueda, todos los
grupos que estaban en el bosque comenzaron a replegarse, mientras que en Lotus Pier una
gran comitiva se puso en la puerta principal de la residencia de los Jiang, sabiendo por esa
misma señal que se había lanzado que había algo mal con el rescate y que se necesitaba un
curandero.

Parada en la puerta frente a todos los demás miembros de su secta que esperaban la llegada
de la pareja perdida, Yu Ziyuan observo seriamente el horizonte, observando como la lluvia
golpeaba la superficie del gran lago afuera de los muelles, con una tormenta que por su
apariencia solo iba a peor.

Siendo la primera en darse cuenta de esa comitiva de discípulos de su propia secta y la joven
pareja llegando a los muelles, Madam Yu se puso realmente seria, mientras que Zidian
relució en uno de sus dedos de forma amenazante. A ella ya habían llegado los rumores de lo
sucedido después de aquel juego con cometas previamente a la desaparición de Lan Wangji y
Wei Wuxian, y nada contenta por lo que había escuchado, presumiendo lo sucedido como una
grave ofensa para su secta, frunció la nariz con desagrado viendo como Lan Wangji tomaba la
mano de aquel omega que ella protegía.

Sintiéndose aliviado al ver que se acercaban a la residencia de los Jiang finalmente, después
de tanto, Lan Wangji pudo suspirar tranquilo, acercándose a Wei Ying para susurrarle: "Solo
un poco más, aguanta".

Observando como aquel grupo de rescate se acercaba finalmente casi hasta la puerta de Lotus
Pier, a Yu Ziyuan dejo de importarle la lluvia o si arruinaba o no aquellas finas túnicas color
violeta que llevaba ese día. Dejando la zona de confort con el grupo de recibimiento en las
puertas de la residencia, la mujer alfa no dudo en acercarse a la comitiva, poniéndose frente a
Lan Wangji de forma amenazante.

"Suéltalo" Ordeno ella con un tono demandante.

Con mucho respeto viendo a uno de sus líderes, los discípulos de la secta se detuvieron frente
a Madam Yu, haciendo reverencias para ella, notando lo furiosa que se encontraba. Sin
embargo Lan Wangji, el cual no conocía para nada a la mujer frente a él, solo se quedó
callado, negándose a soltar a Wei Wuxian.
"¿Qué acaso no escuchaste?" Pregunto Madam Yu cada vez más seria: "Suéltalo, aléjate de
él".

Sin reaccionar de una forma demasiado brusca, Lan Wangji finalmente respondió: "No, él es
mi prometido".

Sonriendo de forma sarcástica ante ese joven tan atrevido, Madam Yu no dudo en comenzar a
soltar sus feromonas de una forma sumamente amenazante: "Aun no es tu pareja, Lan
Wangji. Este omega está bajo mi protección y yo seré quien decida su destino. Suéltalo,
ahora".

Sintiendo el olor más desagradable pero al mismo tiempo aterrador que alguna vez pudo oler,
Lan Wangji tembló ligeramente ante aquel alfa frente a sí mismo. Era la primera vez que otro
alfa lo amenazaba, después de todo aún era solo un niño, y en su secta nadie jamás se había
atrevido a molestar al joven hijo del líder de la secta Lan.

Sin embargo mirando a esa imponente mujer frente a sí mismo, Lan Wangji sintió miedo real
por primera vez, temiendo y sintiendo absoluto pavor por su propia vida. Sin embargo
mirando de reojo a Wei Ying aun inconsciente, solamente deseando protegerlo, rápidamente
se puso frente a su omega, impidiéndole el paso a Yu Ziyuan.

"No" Se negó Lan Wangji, comenzando a soltar sus feromonas de una forma tímida.

Riendo de una forma mucho más divertida aun, Yu Ziyuan sintió las suaves pero ligeramente
amenazantes feromonas que soltaba el joven alfa frente a ella, una reacción que causo ligera
ternura en ella, pues podía notar que aquella era posiblemente la primera vez que ese niño
usaba sus feromonas. Sin embargo aun viendo la risa de aquella mujer tan aterradora, Lan
Wangji no retrocedió, negándose a dejar a su omega.

Alarmados, todos los miembros de la secta que podían oler y sentir semejante espectáculo,
temieron por un segundo que realmente hubiera una pelea de alfas frente a ellos, y
conociendo a su señora no dudaban en que ella realmente no dudaría en atacar a Lan Wangji
para disciplinarlo. Así que susurrando entre ellos de forma nerviosa, se apresuraron a buscar
al líder Jiang Fengmian y al joven Zewu-Jun que habían llegado del bosque poco antes que
ellos, esperando que ambos pudieran apaciguar el ambiente aunque fuera un poco.

Avanzando aún más, Yu Ziyuan tomo al menor del cuello de una de sus túnicas y lo levanto
con ligera fuerza, observando solo por un segundo un atisbo de miedo en el rostro serio de
Hanguang-Jun, algo que la hizo sonreír: "Ultima oportunidad pequeño alfa, no te pongas en
mi camino o no dudare en disciplinarte. Tú necesitas la mano dura de un alfa que te enseñe tu
lugar frente a otros, ese querido tío tuyo, un omega, el que te crio; no te enseño la disciplina
que un alfa necesita, un omega no puede criar a un alfa, Lan Qiren fallo como tutor, y tu
padre... Tu padre es solo un asesino que mancha el nombre de cualquier alfa".

Negándose a responder a las ofensivas palabras de esa mujer, la cual insulto a dos de las
personas más importantes de su vida, Lan Wangji evito hacer contacto con esos ojos violetas
grandes y fieros que le trasmitían pavor, únicamente concentrándose en seguir firme frente a
Wei Ying, protegiéndolo.
"No dejare que tu familia manche las alianzas con mi secta así como lo hicieron con los Wen,
ya sea tu débil hermano o tú, niño mal educado, yo me encargare de darles la disciplina que
nadie les dio" Amenazo la mujer soltando finalmente a Zidian: "Apártate de mi hijo..."

Atreviéndose finalmente a hacer contacto visual con la mujer frente a él, Lan Wangji
respondió firmemente: "No".

Sin bajar la mirada ni retroceder, Lan Wangji se dispuso a aceptar cualquier castigo que
aquella aterradora alfa pusiera contra él, defendiendo a su omega a toda costa. Haciendo
contacto visual con los violetas ojos de Yu Ziyuan, en medio de las fuertes gotas de lluvia que
lo inundaban todo, Lan Wangji vio de reojo los destellos amenazadores que aquel látigo
soltaba, admirando por primera vez la belleza aterradora de esa poderosa arma espiritual
llamada Zidian.

Sin embargo, antes de que Madam Yu pudiera atacar al joven maestro Lan, su hermano
mayor Lan Huan interrumpió en la escena rápidamente. Siendo alertado por uno de los
sirvientes, salió del interior de Lotus Pier acompañado por Jiang Wanyin, y seriamente
intervino en medio de aquella pelea, poniéndose frente a su hermano de una forma protectora
pero nada amenazante.

"Madam Yu" Dijo Lan Xichen con el mismo tono amable que usaba con todos: "Por favor
guarde a Zidian, no hay necesidad de iniciar una pelea".

El mayor de los Lan, mas acostumbrado al aroma de otros alfas, no pareció tan afectado
como su pequeño hermano que temblaba de una forma casi imperceptible. Así que sin temer
para nada de aquella mujer tan enfadada, sonrió de una forma amble, tomando delicadamente
su pequeño hermano de la mano.

Sintiéndose ligeramente decepcionada de no haber podido disciplinar a ese joven alfa, Yu


Ziyuan aceptó la petición dicha por el próximo líder de los Lan, y luciendo extremadamente
altiva dijo: "Debes enseñarle modales a ese niño, debe aprender a respetar a sus mayores".

Entendiendo que no era momento para discutir con esa alfa, y mucho menos de ponerse en
contra, Lan Huan respetuosamente hizo una reverencia, disculpándose: "Lamento la rudeza
de mi hermano, señora. La secta Lan se disculpa por su comportamiento indebido,
prometiendo que esto no volverá a suceder y que será disciplinado".

"Eso espero, Lan Huan" Amenazo Madam Yu, mirando por última vez al pequeño maestro
Lan escondido detrás de su hermano mayor: "La próxima vez no tendré clemencia, aun si en
un futuro todos nosotros llegamos a ser una familia".

Dándoles un último vistazo a los jóvenes vestidos con túnicas blancas sumamente mojadas,
Madam Yu se giró con gracia y camino de regreso a la entrada de Lotus Pier, donde estaban
sus ayudantes.

Sintiendo las feromonas tan aterradoras que su propia madre había soltado, Jiang Cheng
acompañado por su hermana Jiang Yanli se quedaron con los sirvientes en la entrada de la
residencia de los Jiang, mirando todo muy asustados. Al ser omegas, eran mucho más
receptivos a feromonas de su sexo opuesto, así que sintiéndose sumamente perturbados, todos
los omegas de la secta Jiang miraron asustados a Yu Ziyuan, la cual hizo caso omiso, sin
dejar de soltar aquel aterrador aroma.

Viendo que la amenaza de aquella alfa finalmente se había alejado, Lan Wangji pudo
relajarse, aun temblando con cierto miedo y sosteniéndose fuertemente de la mano de su
hermano mayor. Así que limpiando unas cuantas gotas de lluvia de su rostro, Lan Wangji
observo alterado como los discípulos de la secta Jiang decidían seguir las órdenes de su
señora, y con la cabeza baja comenzar a avanzar en dirección a Lotus Pier.

"No, esperen" Pronuncio Lan Zhan sumamente perturbado: "¡Wei Ying!"

Observando como su inconsciente e indefenso omega era llevado por ese grupo de betas, Lan
Wangji estuvo a punto de perder la cordura de nuevo, intentando perseguirlos. Siendo
detenido esta vez por su propio hermano mayor, el cual poniéndose frente al menor le
impidió el paso.

"Wangji, contrólate" Pidió Lan Huan con seriedad.

Pero después de un día tan difícil, con tantas cosas difíciles que le habían pasado, Lan Wangji
no pudo mantener la calma, intentando rodear a su hermano y luchar con él para ir con su
omega: "No, no. Debo cuidar a Wei Ying, debo estar con Wei Ying..."

Siendo ayudado por el resto de miembros de su propia secta, Lan Huan tomo a su hermano
por los hombros para intentarlo hacer entrar en razón, notando lo fuera de sí mismo que se
encontraba: "Wangji, tu prometido se encuentra en buenas manos, nadie podrá dañarlo".

Negando a las palabras de su hermano, Lan Wangji intento luchar con más fuerza, siendo
detenido por los brazos e incluso sus extremidades inferiores: "¡Wei Ying! ¡Yo tengo que
estar con Wei Ying!"

Entendiendo que aquella reacción tan precipitada y fuera de control era dada por el alfa de su
pequeño hermano, Lan Huan solamente pudo mirarlo con lastima, pues entendía que era
imposible llevarlo con su prometido en ese estado: "Wangji, por favor".

"¡Wei Ying! ¡Wei Ying! ¡Quiero ir con Wei Ying!" Gritó Lan Zhan desesperado, pareciendo
que tendría un colapso de un segundo al otro.

Viendo aquella escena a lo lejos de la entrada de la residencia de los Jiang, observando a


todos los miembros de la secta Lan intentando tranquilizar y hacer entrar en razón a ese
pequeño alfa, que parecía cada vez más y más fuera de sí mismo, el curandero principal de la
familia se acercó a la señora Yu que estaba a cargo.

"Mi señora" Dijo el curandero haciendo una reverencia respetuosa: "Analizando esta precaria
situación, en una opinión netamente profesional, sugeriría tal vez permitir de forma
excepcional que el joven alfa Lan Wangji esté presente cuando trate a su prometido".

Parada en la puerta, esperando que el grupo de sus discípulos entrara en Lotus Pier con el
inconsciente Wei Wuxian, Yu Ziyuan respondió: "No".
Sintiéndose algo desesperado, observando como a lo lejos Lan Wangji comenzaba a rugir
intentando atacar a los miembros de su propia secta para que lo soltaran y le permitieran
seguir a su prometido, el curandero intento insistir: "Mi señora, aun si no he conocido a
ambos jóvenes prometidos personalmente, puedo ver que ambos tienen un vínculo mucho
más especial que un simple compromiso promedio, ellos realmente podrían llegar a ser una
pareja destinada".

Parados detrás de su madre, esperando igualmente a su hermano; Jiang Cheng y Jiang Yanli
se miraron el uno al otro de forma sorprendida al escuchar esas palabras, recordando todas las
escenas que habían visto de esa joven pareja desde el inicio de su compromiso, entendiendo
mejor la razón por la que ambos se complementaban y tenían un vínculo mucho mayor que
ellos con sus respectivas parejas, aun cuando solo se conocían hace un par de semanas.

Continuando con su discurso, el curandero dijo: "Entonces debe entender lo peligroso que es
separar a un omega y un alfa destinados cuando uno de ellos está herido, los instintos de
ambos pueden salirse de control y..."

"Lo sé" Le corto la mujer de forma mucho más tranquila: "Sé que ambos son destinados, lo
supe cuando estuvimos en el muelle y ese omega de una cara tan gruesa perdió el control. Yo
fui la primera en saber que ambos eran destinados, y por eso no he interferido con su relación
aun cuando rompe la tradición. Puedo reprender a Wei Wuxian por comportarse de una forma
indebida, pero sé que no puedo detenerlo, una pareja destinada no es una cosa fácil".

Haciéndose a un lado para dejar que los discípulos betas entraran junto a Wei Wuxian, Yu
Ziyuan miro de forma preocupada al joven omega que lucía realmente perturbado en medio
de su inconsciencia, poniendo un rostro de tristeza y comenzando a soltar sus feromonas
ligeramente.

"Creo que ni ellos saben lo peligrosa que es una pareja destinada" Dijo Madam Yu mirando al
joven omega inconsciente con preocupación: "Lo que un alfa puede hacerle a un omega por
amor, eso solo lo saben los alfas. Por eso estoy tan preocupada ahora".

Suspirando, recomponiendo su rostro serio y elegante, Madam Yu comenzó a caminar detrás


de aquellos betas que llevaban al inconsciente Wei Wuxian a sus propios aposentos para
tratar sus heridas, siendo seguida por sus hijos y el curandero.

"Es mejor que se mantengan apartados por un tiempo" Dijo Yu Ziyuan ya completamente
calmada: "Mire a ese niño Lan, tan fuera de control, comportándose como un animal; si lo
traemos a los aposentos de Wei Wuxian pradería aún más la cordura, no permitiría que otro
alfa o beta lo tocara, mucho menos que le quitaran las ropas para curar sus heridas. Gruñiría y
pelearía para proteger a su omega de lo que su alfa considera una amenaza. Dejemos que Wei
Ying se recupere de sus heridas, y que el joven Lan recomponga sus sentidos, entonces
cuando ambos estén estables dejaremos que vuelvan a hablarse"

Observando a su hermano, el cual mientras más se internaban en Lotus Pier lucia peor, Jiang
Cheng intento intervenir: "Pero mamá, Wei Ying está sufriendo también".

"No sabes si es por el dolor de sus heridas o su alfa" Intentó mentirle Madam Yu: "Estará
inconsciente por un tiempo más, seguro no se dará cuenta de nada".
Notando que realmente no podría hacer cambiar de opinión a su madre, Jiang Cheng solo
pudo mirar con preocupación a su hermano mayor, el cual lucia cada vez más y más infeliz
mientras se alejaban de los Lan. Y en medio de su inconsciencia, Wei Ying comenzó a llamar
a su alfa entre sueños, volviendo a llorar.

"Lan Zhan... Lo siento... Lan Zhan..."

***

Abriendo ligeramente los ojos, Wei Wuxian observo el techo de su habitación en silencio,
mirando como las hermosas formas del humo proveniente de numerosos inciensos se
mezclaba en medio del aire y de la nada.

Algo confuso, volviendo mejor en sí mismo, Wei Ying se sentó a duras penas en la cama,
observando a su alrededor encontrándose solo en sus habitaciones. La lluvia finalmente había
cesado dejando el cielo despejado y con una luna brillante, un paisaje que Wei Wuxian
admiro por una de sus ventanas, preguntándose cuanto tiempo había pasado desde que se
desmayó a las orillas del lago en Yunmeng.

Moviéndose lento y con precaución, el joven omega primero admiro sus manos, las cuales ya
curadas estaban rodeadas de apretadas vendas que protegían su piel herida, y aunque tenía
estos trozos de tela cubriéndolo, no evitaba que al intentar tocar cualquier cosa sus palmas
dolieran como el infierno por sus profundas heridas.

Lo siguiente en lo que se fijó fue en su cuerpo, con túnicas interiores nuevas y su cabello
lavado, supuso que le habían dado un baño antes de curar sus heridas. Y levantando
ligeramente las cobijas de su cama, admiro en silencio el experto trabajo de aquel curandero,
que había rodeado con más vendas otras de las heridas del mayor, y había puesto ungüentos
especiales en sus golpes.

Algo temeroso de ver su pierna derecha, Wei Ying espero un poco más antes de levantar las
frazadas y sus túnicas, observando una gran venda que cubría casi toda su pierna derecha,
llegando desde su tobillo hasta más arriba de su rodilla en sus muslos. Suspirando algo triste
al ver esto, se negó a tocar la herida por temor a lastimarse, así que volviendo a cubrirse con
sus túnicas y las cobijas, esperó a que alguien entrara su habitación.

Tras varios minutos, Jiang Cheng y Jiang Yanli entraron en la habitación de Wei Wuxian,
siendo ayudados por los empleados que resguardaban las puertas de la habitación, ambos
jóvenes Jiang entraron cargando cosas en sus manos, sorprendiéndose al ver a Wei Ying
despierto y esperándolos.

"A-Xian" Dijo Yanli aliviada, siendo la primera en acercarse a la cama: "¿Te encuentras bien?
¿Sigue doliendo?"

Sonriendo realmente contento con la preocupación de su hermana, Wei Ying negó con la
cabeza, respondiendo: "No Shijie, estoy mejor".

Llevando consigo una bandeja en la que cargaba un tazón de su sopa de raíz de loto con
costillas de cerdo, Jiang Yanli sonrió igualmente, sentándose al lado de su hermano dispuesta
a darle de comer. Mientras que Jiang Cheng, quedándose un poco atrás, miro de forma severa
a Wei Wuxian al acerarse a su cama, sin poder evitar lucir enfadado.

Suspirando exasperado, Wei Wuxian se quejó: "Shijie, mira la cara que me está poniendo".

"¿Cara?" Pregunto Jiang Cheng ofendido: "Esta es la única cara que tengo Wei Wuxian,
omega desvergonzado, no esperes que la cambie por ti".

"A-Cheng, solo por esa vez. Casi muero ¿No puedes ser amable conmigo solo por esta vez?"

Mirándolo con el mismo enfado de siempre, Jiang Cheng replicó: "Cuando te vuelvas una
persona de bien, entonces seré amable contigo, desvergonzado desobediente..."

Poniendo un puchero, Wei Ying volvió a quejarse: "Shijie, míralo..."

Riendo, Jiang Yanli interrumpió la pelea de ambos hermanos teniendo el cuenco de sopa listo
para dárselo a Wei Ying: "A-Cheng, A-Xian, no discutan ahora, no es bueno para la salud de
ninguno".

Tomando aquel recipiente de arcilla que tenía agua y un par de plantas medicinales en su
interior, Jiang Wanyin replico: "Pero yo estoy bien..."

"A-Cheng llegaste tosiendo y estornudando por la lluvia, estas a punto de enfermarte" Le


recordó Yanli.

Riéndose de su hermano de forma burlona, Wei Ying le dijo: "Delicadito..."

"Wei Wuxian" Dijo Jiang Cheng furioso, casi tirando aquel recipiente de arcilla: "Retráctate
ahora, si no fuera por tu culpa yo..."

"A-Cheng" Lo reprendió Yanli nuevamente: "A-Xian, dejen de comportarse como unos


niños".

Sonriendo de forma burlona y triunfante, Wei Ying vio a ese molesto Jiang Cheng, el cual de
mala gana siguió con lo suyo. Enviado por el curandero, Jiang Cheng descubrió la pierna
herida del mayor y de forma cuidadosa puso aquellas plantas medicinales remojadas sobre las
vendas del tobillo del herido, esperando así que la hinchazón de su tobillo que estuvo a punto
de romperse disminuyera. Dejándose hacer en silencio, aun a pesar de que Jiang Cheng
estaba siendo algo brusco con sus movimientos, Wei Ying le agradeció en un susurro,
sintiéndose un poco mejor con sus atenciones.

Sabiendo que Wei Ying no podría usar sus manos por un tiempo debido a sus profundas
heridas, Jiang Yanli de forma amable comenzó a darle de comer en la boca ella misma la
sopa, sonriendo y limpiando suavemente los labios de su hermano con un pañuelo tras cada
cucharada que le daba.

"Gracias Shijie" Dijo Wei Ying realmente contento.

"No hables con la boca llena A-Xian" Lo regaño Jiang Yanli: "¿Cuántos años tienes?"
Tragando aquel bocado de comida que tenía, Wei Ying respondió: "¡3 años!"

Riendo, Yanli beso una de las manos del menor antes de seguir alimentándolo, cuidándolo
cariñosamente de esa manera.

Terminando de poner aquella hierbas del curandero sobre las heridas de su hermano, Jiang
Cheng espero un poco antes de preguntar algo que realmente atormentaba su corazón,
mirando fijamente a Wei Ying sentado a los pies de su cama: "Wei Wuxian, oye... Tú... ¿Qué
te dijeron que paso cuando llegaste?"

"No me dijeron nada, ustedes son los primeros en llegar" Respondido Wei Ying con
sinceridad.

"No has preguntado nada sobre Lan Wangji desde que llegamos"

Poniéndose serio por un segundo al escuchar ese nombre, Wei Ying lucio realmente
perturbado antes de sonreír de una forma amable, respondiendo: "Seguramente está bien".

Frunciendo el ceño por la poca preocupación de su hermano mayor con su prometido, Jiang
Cheng se dio por vencido, dejando que su hermana preguntara y dijera aquello que a ambos
hermanos Jiang les daba curiosidad.

"A-Xian, los miembros de nuestra secta han estado hablando mucho hoy" Dijo Yanli aun
dándole de comer.

"Es entendible, me perdí en el bosque y casi muero, no veo por qué debería sorprenderme"
Respondido Wei Ying restándole mucha importancia al asunto.

Negando suavemente con la cabeza, Yanli le dio otra cucharada de sopa antes de continuar
hablando: "A-Xian no hablan sobre eso, hablan sobre... Hay un rumor que dice que tú y Lan
Er Gonzi tienen un vínculo".

"¿Vinculo?"

"Destinados" Respondido Jiang Cheng interviniendo: "Dicen que son destinados".

Poniendo una cara extraña, Wei Ying termino de comer lo que tenía en la boca para luego
responder: "¿Destinados? ¿Quién dice esa mentira?"

"Lo dijo el curandero que los atendió a ambos" Respondió Jiang Yanli.

Era normal que los jóvenes omegas fueran escépticos al respecto del amor de los alfas. Desde
que ellos son jóvenes se les enseña sobre el temor sano que se le debe tener a un alfa, temer
ser violado o preñado por accidente, además del peligro del celo y lo "sagrado" que debe ser
llegar vírgenes a sus matrimonios. Por lo que en una sociedad semejante, historias de amor
sobre destinados y alfas que aman a sus omegas más allá de los matrimonios arreglados era
solo eso para los omegas, historias; bonitas leyendas románticas en libros que se le daban a
las doncellas y que se contaban antes de dormir.
"Qué tontería" Dijo Wei Ying riendo: "¿Destinados? ¿Están jugando? ¿Ustedes también lo
creyeron? ¿Son tontos para creer esas estupideces de los destinados?"

Como cualquier omega, los hermanos Jiang también tuvieron sus dudas, pero después de
haber presenciado lo mismo que el resto de los miembros de su secta no pudieron evitar
sentirse curiosos y hasta esperanzados al respecto. Ambos tampoco creían en los destinados,
pero al ver el amor y desesperación que Lan Zhan, un alfa, había demostrado por su
prometido, ambos hermanos quisieron creer por un segundo en ese cuento de hadas que habla
sobre el amor de un omega planeado por el destino.

"¿Entonces tu no crees que lo sean? ¿No crees que haya algo especial?" Pregunto Jiang Yanli
curiosa.

Pensando en las palabras de su hermana, sintiéndose igualmente curioso, Wei Ying se


encogió de hombros respondiendo: "No lo creo. Es decir, yo quiero a Lan Zhan de la misma
forma que ustedes quieren a sus prometidos, yo no veo nada diferente. No veo por qué no
podríamos tener un vínculo, tal vez lo tenemos, pero nada especial porque... Bueno nos
apresuramos un poco pero eso probablemente sea por mí, pero Lan Zhan..."

Quedándose callado al pronunciar ese nombre, Wei Ying pensó en su alfa, su aroma y el tono
de voz que usaba cuando lo tenía a solas, lo demandante que era y como lo hacía sentir a
pesar de su edad. Recordando todo no pudo evitar sonrojarse.

"¿Entonces?" Insistió Jiang Cheng: "¿Tu prometido tampoco te da esa sensación de ser tu
destinado?"

Con su corazón latiendo fuertemente, sin poder apartar el hermoso sentimiento que tenía cada
vez que pensaba en Lan Wangji, Wei Wuxian no pudo responder aquella pregunta pues no
sabía su respuesta sincera, guardando silencio.

Sin poder conversar más, de pronto se escucharon pasos fuera de la habitación de Wei
Wuxian, mientras que los sirvientes que reguardaban la puerta del omega hicieron una
reverencia apresurados. Deteniendo su plática, los tres hermanos se giraron hacia la puerta,
observando al líder de la secta entrando en la habitación con su usual actitud amable, pero
notándose más serio de lo habitual.

Caminando a la cama de Wei Wuxian después de que los sirvientes cerraran la puerta a sus
espaldas, Jiang Fengmian preguntó: "¿Te sientes mejor, A-Xian?"

"Me siento mejor tío" Respondió Wei Ying de una forma contenta, pero algo temeroso,
sabiendo lo que iba a pasar.

"Eso es bueno A-Xian, nos diste un buen susto a todos" Dijo Jiang Fengmian con su usual
tono tranquilo, parándose al lado de la cama del menor sin dejar de sonreírle amablemente:
"¿Qué sucedió ahí fuera?"

Sintiendo la mirada de sus tres acompañantes sobre sí mismo, Wei Ying bajo la mirada algo
nervioso. Pensando en que decir, consideró seriamente en omitir ciertas verdades, endulzar
mejor las cosas. Pero aun alterado después de todo lo sucedido, con sus feromonas y su
omega lleno de dolor, de forma inevitable sus ojos se llenaron de lágrimas.

"Lan Zhan... Él..." Susurro Wei Ying aún muy triste: "Él me dijo... Dijo que yo era..."

Al escucharlo, Jiang Fengmian se puso completamente serio.

***

Y tomando aire para intentar hablar de una forma más tranquila, sin dejar que sus
sentimientos se interpusieran de por medio, Lan Wangji termino de relatar lo sucedido
diciendo: "... Entonces Wei Ying se desmayó en mis brazos, y esperamos en nuestra posición
la ayuda de los miembros de la secta Yunmeng Jiang".

Después de haber sido finalmente tratado por todas sus heridas después del accidente, Lan
Wangji tomó un baño rápido y se vistió con ropa apropiada, acudiendo después a la reunión
con los miembros de su secta.

Sintiéndose desprotegido y algo asustado, el joven alfa no levanto la mirada ni un solo


segundo, sentado en una mesa baja frente a su hermano mayor, rodeado por otros de los
discípulos de su propia secta que tenían rangos altos, y que en esa ocasión actuarían como el
consejo de su secta para semejante situación.

Por un par de horas y sin detenerse, Lan Wangji tuvo que contar todo lo que había sucedido
con su prometido cuando se perdieron, sin evitar detalles y contando secamente todos los
errores que había tenido. Al terminar, sintiéndose cohibido y arrepentido, solamente bajó la
mirada, sin atreverse a mirar a nadie de su secta por la vergüenza que tenía en ese instante.

Entendiendo que el menor había terminado, intentando aliviar un poco a su hermano que se
sentía en un interrogatorio, Lan Huan amablemente pidió: "Bien, gracias por decirnos todo
Wangji. Por favor déjenos solos por un momento, pronto saldré para deliberar".

El resto de los miembros de su secta, sin decir nada por respeto al joven Lan Wangji,
obedecieron a su líder e hicieron una reverencia antes de retirarse de aquel salón donde se
habían reunido, dejando solos a Lan Xichen y Lan Zhan.

"¿Te encuentras bien, hermano?" Preguntó Lan Huan preocupado, hablando cuando los
demás miembros de su secta se habían retirado.

Viéndose finalmente a solas con su hermano, Lan Zhan no respondió la pregunta y en su


lugar dijo: "¿Wei Ying? ¿Cómo esta Wei Ying?"

Sonriendo por la dulce preocupación de su hermano, Lan Xichen se tomó la libertad de darle
algunas palmaditas en el hombro para consolarlo antes de responder: "Esta bien, nos
informaron que fue inmediatamente tratado por los mejores curanderos de Lotus Pier, y que
está descansando siendo protegido con incienso medicinal en su habitación".

Pudiendo respirar finalmente tranquilo, Lan Zhan levanto la mirada para ver a su hermano,
observando su amable y siempre sonriente rostro: "¿Puedo verlo?"
"Sera mejor que evitemos el contacto entre ambos por ahora. Se rumora que ustedes tienen un
vínculo, algo que dijo uno de los curanderos en público y la señora de Yunmeng confirmó.
Deberé tener una reunión con el líder Jiang en unos instantes por el incidente, y tal vez
después de esto debamos volver a casa".

Volviendo a sentirse triste y arrepentido, Lan Zhan bajo nuevamente la mirada, presionando
sus manos en puños por el dolor y la pena. Sabía que si ellos eran mandados de regreso a
Gusu no le permitirían ver a Wei Ying para despedirse, y sintiendo una angustia cada vez más
fuerte mientras su alfa se volvía loco en su interior, se negó a llorar frente a su hermano,
solamente queriendo ver a su omega de forma desesperada.

"Es difícil" Dijo Xichen de forma sabia, mirando a su hermano preocupado: "Pero es lo
mejor. Ambos estaban muy alterados cuando llegaron, lo más prudente es calmar a su alfa y a
su omega separándolos por un tiempo. Intentare que solo sean un par de días y que puedas
verlo antes de que volvamos a casa, pero eso ya no depende de mí ni de nuestra secta, quien
lo decidirá es el líder Jiang Fengmian y sus consejeros"

Bajando la mirada cada vez más arrepentido, Lan Zhan de manera impotente solo pudo
aceptar aquello: "Entiendo".

"Además... Debes entender que debido al incidente tu periodo de prueba de cortejo está bajo
la mirada crítica de todos los alfas de las demás sectas" Explicó Lan Xichen con un tono un
poco más sombrío: "Lo más probable es que desde ahora tu relación con el joven Wei Ying
deba cambiar, en sus citas y encuentros ustedes deberán ser acompañados por un supervisor
todo el tiempo, además de que... Muestras de afecto como las que se daban antes estarán
prohibidas, me temo que el líder Jiang y su esposa pedirán que no haya contacto físico entre
ustedes por un tiempo largo".

"¿Eso significa que no podre besar más a Wei Ying?"

Bajando la mirada también, sin saber cómo ser claro con su pequeño hermano, Xichen solo
pudo decirle: "No podrás tocarlo, Wangji. Ustedes no tendrán permitido ni tomarse de las
manos".

Sintiendo un profundo dolor y los aullidos de su alfa que hacían doler su cabeza, Lan Wangji
una vez mas no pudo hacer más que aceptar, con la culpa de lo sucedido corrompiendo todo
su interior: "Esta bien, hermano".

Intentando consolar al pequeño frente a sí mismo, Lan Xichen solo pudo volver a palmear
ligeramente su espalda, diciéndole: "Sera mejor que me reitre ahora, el consejo de Yunmeng
y el de Gusu deberá reunirse pronto. Cuando todo termine iré inmediatamente a tu habitación
para contarte lo sucedido y la deliberación final".

Asintiendo a las palabras de su hermano, pero sin decir nada, Lan Zhan se puso de pie junto a
Lan Xichen, caminando a su ritmo fuera de aquel salón el té. Saliendo antes que su hermano
caminó con la cabeza baja detrás de los miembros de su secta, observando como a cierta
distancia dos discípulos de su propia secta lo seguían como escoltas, fijándose que fuera a su
habitación y que no hiciera nada indebido.
Sintiéndose atrapado, solo pudo ir a su habitación en silencio, siendo acompañado por su
hermano quien en la puerta de esta misma le dijo: "Sera una noche larga, así que para tu
distracción traje algunos libros médicos sobre relaciones entre omegas y alfas, además de...
Destinados".

"¿Destinados?" Pregunto Lan Zhan entrando en su habitación.

Sonriendo algo avergonzado al pensar en el tema, Lan Huan dijo: "Será mejor que los revises
por tu cuenta, Wangji. Cuando termines de leerlos podremos buscar más en la librería de
Yunmeng, e intentaré responder la mayoría de tus dudas. Yo tampoco se mucho al respecto,
las reglas de Gusu son más estrictas respecto a estos temas que las demás sectas, pero seguro
podremos aprender juntos".

Girándose para ver a su hermano, Lan Zhan asintió a sus palabras: "Mmm".

"Nos vemos más tarde Wangji, descansa y no salgas de aquí".

"No lo haré" Prometió Lan Zhan.

Recibiendo una última sonrisa amable por parte de Lan Xichen, Lan Zhan dejo que aquellos
escoltas Lan cerraran las puertas de su habitación, quedándose fuera y vigilando que el menor
no hiciera nada indebido. Estando solo, Lan Wangji volvió a sentirse destrozado. Sin saber
qué hacer, caminó a la mesa baja de su habitación, en la que junto a su Guqin tenía varios
libros con títulos extraños amontonados, esos que su hermano le había traído.

Leyendo sin mucho interés los títulos de estos, Lan Wangji no puedo evitar sentirse
nuevamente avergonzado por todo lo que había pasado, recordando una y otra vez lo
sucedido, culpándose por ello. Entrando en desesperación, comenzó a caminar de un lado al
otro en su habitación, sin dejar de pensar y reclamarse. Él realmente podría llegar a
comportarse como un niño, uno caprichoso y muy molesto. Y es que aunque su hermano le
había dicho que no debía preocuparse por Wei Wuxian, el menor no podía dejar de pensar en
el omega, recordando todas las cosas horribles que le había dicho y le había hecho esa misma
tarde.

Sin lograr despejarse, y entrando cada vez más en una profunda desesperación, sin poder más
con ese encierro, Lan Wangji tomo su Guqin y salió de sus aposentos escapando por una de
las ventanas. Tenía planeado ir a una parte un poco más alejada de la residencia Jiang para
practicar, intentando así calmar aunque sea un poco de su atormentado espíritu lleno de culpa.

Caminando por las sombras de Lotus Pier, el menor pronto se encontró con los miembros de
su secta, los cuales terminada la reunión volvían a sus aposentos en la residencia, pero sin la
presencia de Lan Xichen. Intentando evitar que descubrieran que había escapado, caminó
entre los jardines de Lotus Pier buscando un lugar vacío y alejado donde poder tocar algo de
música en paz.

Fue así como se alejó por el ala este a un pequeño parque que había en Lotus Pier, y mientras
caminaba metido en sus pensamientos, en medio de la obscuridad, detuvo sus movimientos al
escuchar la voz de su hermano en una de las habitaciones cercanas.
Y es que aunque Lan Zhan no quería entrometerse o espiar como un intruso, lo hizo al
escuchar el nombre "Wei Ying" de los propios labios de su hermano, algo que llamo su
atención y lo invito a quedarse cerca de una de las ventanas escondido, dispuesto a escuchar.

Lan Xichen y Jiang Fengmian se encontraban en la oficina personal del mayor, teniendo una
seria charla en medio de la noche, en la cual lo que pudo escuchar Wangji de los labios de su
hermano fue: "... Y como secta entendemos lo bochornoso que puede resultar este asunto,
principalmente para Wei Wuxian, que es un omega".

Guardando un respetuoso silencio después de las palabras del hermano mayor de los Lan, el
líder de la secta Jiang continuo hablando: "Debe entender, futuro líder de la secta Lan, que
esta situación es muy complicada. Hemos estado teniendo problemas con este compromiso
desde el inicio, y lo que sucedió hoy fue especialmente grave ¿Semejante escena de celos
frente a todos los discípulos de mi secta? ¿Llamar a Wei Ying una ramera? ¡Eso es una
ofensa!"

Bajando la cabeza de manera culpable, Wangji presiono su instrumento de madera con fuerza
entre sus manos, volviendo a tener ese desagradable sentimiento de saber que había hecho
algo realmente malo.

"Entiendo Líder de la secta Jiang, pero por parte de la secta Lan y mi propio hermano, nos
disculpamos oficialmente con usted por este desastre tan vergonzoso" Se disculpó Lan
Xichen con un tono muy arrepentido, continuando prontamente con su discurso: "Mi
hermano aun es joven, no entiende mucho de los omegas y las castas de género, y como secta
lo disciplinaremos por tal falta de educación, téngalo por seguro"

"Joven Xichen ¿Usted entiende que este matrimonio ha pasado a estar en una etapa de
cancelación?"

Con esta frase, el corazón de Wangji se aceleró de forma peligrosa, sintiendo un temor que no
entendía, pero que creaba un sentimiento muy desagradable de opresión en su pecho: La
angustia.

"Después del incidente de hoy, tanto mi esposa como yo mismo ya no estamos tan
convencidos de que el joven maestro Lan Wangji sea el marido correcto para nuestro Wei
Ying. Usted debe entender que Wei Ying también ha expresado sus inquietudes por privado
con nosotros. Si el omega y el alfa no son compatibles no podemos forzar el matrimonio.
Tanto Wei Ying como Lan Zhan podrán conseguir otras parejas para casarse de inmediato,
por lo que no habrá problema al respecto" Dijo Jiang Fengmian, aun molesto por lo que había
sucedido esa tarde.

Suspirando, Lan Xichen escucho todas aquellas palabras con cuidado, notando lo seria de la
situación, sintiéndose un poco curioso al respecto: "¿Otras parejas? ¿A qué se refiere?"

"Hace poco tiempo, un par de días, recibimos una propuesta de matrimonio por parte del
segundo hijo de los Nie. Su hermano mayor Nie Mingjue, el cual está a punto de contraer
nupcias con el joven cultivador Jin Guangyao, disolvió el compromiso de su hermano menor
con la secta Wen, y debido a la cercanía de Nie Huaisang con Wei Ying me pidió su mano por
privado, algo que fue aconsejado por la propia secta Jin y Meng Yao".
Al escuchar estas palabras, el rostro de Lan Zhan se ensombreció, mientras que otro
sentimiento comenzó a ganarle a la angustia que sentía en ese momento, eran sus celos de
solo pensar que Wei Wuxian podría ser tomado por otro.

"Como entenderá joven Lan, esta propuesta fue denegada por el previo compromiso que se
tenía entre nuestras sectas; pero las situaciones han cambiado, su tiempo en Yunmeng está a
punto de terminar y las cosas no han salido bien en lo absoluto. El joven la familia Nie
también es un alfa de buena cuna, el cual es bastante cercano a Wei Ying desde que ambos
eran jóvenes y nunca ha demostrado desagrado por este; además de que ambos son de la
misma edad y eso hace que su boda pueda ser más cercana".

Tomando aire e intentando ser lo más cortes que podía, Lan Xichen hablo con suavidad:
"Entiendo sus dudas respecto a esta unión, líder de la secta Jiang, principalmente respecto a
la actitud de mi hermano y su edad. Pero le pido que intentemos terminar el periodo de
prueba en Lotus Pier, si hasta la próxima semana, cuando tenemos previsto partir, las cosas
entre ambos no han mejorado, yo hablare con mi tío para romper el compromiso".

Quedándose helado, Lan Zhan escucho estas serias palabras que había dicho su hermano.
Conociendo bien a Lan Huan, Lan Wangji entendía que este iba en serio, que no solo eran
amables palabras que su hermano había dicho para tranquilizar a Jiang Fengmian.

Lan Xichen estaba dispuesto a terminar con el compromiso.

Perdiendo las ganas de ir a practicar su música, Lan Zhan volvió a su habitación


completamente abatido. Sintiendo unas grandes ganas de llorar, se derrumbó frente a una de
las mesas bajas de su habitación, abrazándose fuertemente a su Guqin con mucho dolor.

"Wei Ying..." Susurro Lan Zhan cada vez más preocupado por todo lo que sucedía.

Mirando hacia la nada lleno de tristeza, Lan Wangji pronto concentro su atención en aquellos
libros que su hermano había dejado para él a su regreso. Dejando por un segundo su
instrumento musical de lado, Lan Zhan tomo el primero de esos voluptuosos libros de la
superficie de madera, hojeándolo con curiosidad.

Aquel pequeño alfa nunca antes había tenido ninguna instrucción acerca de su propia
sexualidad o lo que significaba su género, así que observando todos esos libros en tonos
bastante médicos que hablaban sobre "Destinados", un extraño sentimiento de vergüenza y
fascinación se dio en el cuerpo de Lan Wangji.

Leyendo con más atención aquellos libros, de los cuales no entendía muchas cosas por su
nulo conocimiento en el tema, de forma deliberada observo fijamente una de las páginas
ilustradas de aquel libro, en el cual se hacía un esquema bastante rudimentario de los órganos
genitales e internos de un omega.

Sonrojándose ligeramente, Lan Wangji paso sus dedos de forma temblorosa por aquella
figura, preguntándose en silencio si su prometido seria exactamente igual a como estaba
dibujado.
Y si estaba bien el hecho de querer ver con sus propios ojos si el cuerpo de Wei Ying era
exactamente así como el libro lo describía.
Capítulo 27.

Era una hermosa mañana en Muelles de loto, con el sol reluciendo en su máximo esplendor,
muchos de los jóvenes del lugar se habían entregado a sembrar las semillas de loto, jugando y
riendo entre ellos.

Pero no todos los jóvenes de Yunmeng Jiang estaban tan contentos. Wei Wuxian, sentado en
uno de los muelles con vista al agua, solo pudo sonreír con cierta añoranza al ver a sus
compañeros distraídos en el agua jugando entre ellos. Había pasado un par de días en cama,
hasta que pudo finalmente levantarse. Después de ser revisado, se enteró de que su tobillo en
realidad no estaba roto, solo estaba lastimado por la dolorosa caída que había tenido al
resbalar; al igual que sus manos, las cuales a pesar de tener profundas cortadas y estar
vendadas, no tenían grandes heridas. Mientras que la gran cortada en su pierna estaba
sanando de forma rápida, una de las grandes ventajas que tenía por ser un cultivador.

Aun así, por orden del curandero que lo había atendido, a Wei Wuxian se le fue prohibido
jugar en el agua esa temporada, y mucho menos correr por ahí o andar escalando árboles,
como a él le gustaba hacer. Por lo que sin poder hacer mucho, esa mañana había ido a
observar a los demás jugar, y aunque muchos de sus amigos omegas se acercaron para hablar
con él e intentar hacerle pasar el mal rato, Wei Wuxian no mejoro su ánimo, mirándolos a
todos felices, pero sintiéndose muy deprimido.

Por otro lado, Lan Wangji no había abandonado la pequeña y simple biblioteca de Yunmeng
desde que había sucedido en incidente. Y mientras muchos seguían pensando que el joven
jade estudiaba de forma disciplinada para mejorar su cultivo, en realidad el joven Wangji se
encontraba en medio de una seria investigación en los libros de Yunmeng, intentando dar una
respuesta a todas las inquietudes que había sentido esos días, encontrando muchas respuestas
a sus preguntas, pero también sufriendo muchas desilusiones.

El joven alfa había pensado mucho en el accidente, y después de entender todo de mejor
manera, supo que la única forma de arreglar las cosas con su omega era siendo finalmente
sincero con sus sentimientos, debía decirle a Wei Wuxian que lo amaba. Sin embargo el
pequeño Lan era demasiado tímido aun para hacer algo semejante, así que planeando bien las
cosas, encontró una forma de confesar sus sentimientos sin tener que decir ni una sola palabra
para no arruinarlo todo, teniendo un plan muy certero para confesarse finalmente con su
amado Wei Ying.

Aquella mañana, al enterarse de que el joven Wei Ying finalmente podría salir de su
habitación y que ya se encontraba prácticamente sano, Lan Zhan tuvo una idea brillante,
sabiendo finalmente como poder responder a las inquietudes románticas de su prometido.
Después de ser aconsejado y prácticamente amenazado por Lan Xichen, a Lan Zhan
finalmente se le permitió ir a buscar a Wei Wuxian al lago, teniendo en cuenta que tanto Jiang
Cheng como su hermano estarían cerca de ambos para asegurarse de que ningún otro
incidente volviera a suceder.
A media mañana, ya listo para poner su plan en marcha, Lan Wangji abandono el pabellón de
la biblioteca junto a su hermano, caminando pasivamente fuera de la residencia de la familia
Jiang hasta los muelles en el exterior, donde todos estaban jugando en el agua. A pesar de la
pintoresca escena frente a sus ojos, con todos los discípulos de la secta jugando entre ellos y
riendo, los ojos de Lan Zhan solo se fijaron en aquel triste joven sentado en uno de los
muelles, con la cabeza baja.

Mientras Lan Xichen abandonaba a Lan Zhan para ir con Jiang Cheng, que jugaba en el agua
un poco más cerca a la orilla, Lan Zhan tomo el valor de acercarse a su prometido con un
paso ligeramente lento.

Wei Ying no tenía el mejor aspecto ese día, debido a las heridas de sus manos no había
podido peinar su cabello, así que solamente ato la cinta roja que usualmente solía adornar su
negra cabellera en su cuello como un collar, mientras que su cabello estaba libre sobre su
espalda. Usando túnicas interiores de color morado debajo de su túnica negra, para Lan Zhan
el aspecto del cuerpo del mayor era mucho mejor que cuando lo había visto por última vez
hace un par de días, teniendo un mejor color de piel y sin sangre o heridas visibles.

Finalmente llegando junto al mayor en el muelle, Lan Zhan se aclaró suavemente la garganta
antes de comenzar a hablar: "Buenos días Wei Wuxian ¿Te encuentras mejor?"

Siendo tomado por sorpresa, Wei Ying se volteó en dirección al joven maestro Lan,
haciéndole una suave reverencia desde su posición, para luego responderle: "Buenos días
joven maestro Lan, muchas gracias por su preocupación, me encuentro mucho mejor"

Lan Zhan no pudo evitar sentirse ligeramente perturbado con las palabras del mayor, ya que
había sido formal con él, algo que no había sucedido nunca, ni siquiera cuando se habían
conocido por primera vez. Pero Wei Ying no podía evitarlo, volviendo a mirar los juegos en
el agua bastante incomodo, ya que aún le era difícil y doloroso estar junto al menor después
de todo lo que había sucedido y lo que ambos se habían dicho.

"¿No deseas ir a dar un paseo por los muelles?" Preguntó Lan Zhan, intentando no sonar
dolido por lo que acababa de suceder.

"Mi pie aun duele un poco, así que tal vez podríamos quedarnos aquí a charlar..."

"Es importante" Insistió Lan Zhan, con la voz un poco más fuerte: "Por favor acompáñeme,
solo serán unos minutos".

Sintiéndose acorralado ante la insistencia del menor, Wei Ying no tuvo más que aceptar,
sintiéndose ligeramente forzado a hacerlo, poniéndose de pie con cuidado, con una cara de
ligero dolor cuando apoyó su pierna herida en la madera del muelle.

"Bien, vamos".

Al ver al mayor listo, Lan Zhan asintió: "Mmm".

Aparentando tranquilidad, Wei Wuxian camino detrás del joven maestro Lan, el cual tomo la
delantera, guiándolo lejos de los muelles atestados de personas a una parte un poco más
alejada, donde solían dejar los cargamentos traídos en barcos por comerciantes, pero que
ahora por tiempo de siembra se habían detenido, pues los barcos no podían ingresar a Lotus
Pier por la cantidad de gente que había en el agua jugando.

Al ver a ambos prometidos caminando, Jiang Cheng rápidamente salió del agua, señalándole
a Lan Xichen a la pareja que se alejaba. Por su parte, el próximo líder de la secta Lan no
había entrado al agua, pero había ayudado a Jiang Cheng sosteniendo una canasta con todas
las semillas que el menor iba sembrando en el agua, divirtiéndose así con su prometido. Y al
ver que su hermano y Wei Ying se alejaban, ayudo cuidadosamente a Jiang Cheng a salir del
agua, para igualmente fingir que habían decidido ir a de paseo para comenzar a seguirlos.

Por otro lado, en un silencio incomodo, Lan Zhan siguió guiando al joven Wei Wuxian por
los muelles vacíos, tomando el valor para hablar: "¿Sabes lo que es una pareja destinada?"

Siendo tomado por sorpresa ante esa pregunta, Wei Ying asintió suavemente: "Si, aquella
supuesta pareja de un alfa y un omega que son completamente compatibles, como por el
destino. Son puros cuentos de fantasía seguramente".

"¿Y si te dijera que creo que tú y yo somos destinados?"

"Entonces te diría que eres un niño con una imaginación realmente hiperactiva" Dijo Wei
Wuxian haciendo una broma.

Deteniendo su avance en uno de los muelles, Lan Zhan se giró para encarar al mayor, más
serio de lo usual: "No estoy bromeando".

Al ver el rostro inusualmente serio del menor, Wei Ying solo pudo sonreír de forma nerviosa,
parando de caminar igualmente, quedándose frente al menor.

"Tú me preguntaste que es lo que siento por ti" Dijo Lan Zhan, mirando al mayor fijamente a
los ojos: "Eso es lo que siento por ti, creo que tú y yo fuimos hechos para estar juntos, que
nuestro matrimonio no es una mala idea o un accidente, es el destino".

Siendo tomado por sorpresa por aquellas románticas palabras, Wei Wuxian se sonrojo mucho,
sintiendo que pronto tendría un ataque de ansiedad por tales palabras: "P... Pero... Hanguang-
Jun, tú y yo somos muy diferentes, las cosas... Las cosas que nos gustan, como nos
comportamos..."

"Eso no importa, yo me volveré la persona que tú necesitas para que te entienda y te ayude,
aun si me pides romper las reglas de mi clan, lo hare por ti".

"Hanguang-Jun..." Susurro Wei Ying comenzando a sentir su cuerpo caliente, ya no solo por
la vergüenza.

Cerrando los ojos por tan solo un segundo, Lan Zhan inspiro profundamente, sintiendo ese
aroma tan dulce de nuevo, un aroma que sabía que provenía del mayor y que reconocía como
el aroma más delicioso del mundo: "Tú también lo sientes ¿No es verdad? Como eso que
llamamos feromonas es más fuerte en ti y en mi cuando estamos juntos. Es como si nuestros
aromas se juntaran a la perfección, como si hubieran sido hechos para juntarse".
"¡Eso es bastante relativo! ¡Las feromonas no indican nada!"

Ante esa respuesta, Lan Zhan solo pudo entrecerrar un poco los ojos, observando al mayor
completamente nervioso y comenzando a perder el control frente a sí mismo.

"No entiendo cómo vas por ahí pensando que somos destinados solo porque olemos bien
juntos, o porque aparentemente tenemos algún tipo de conexión espiritual" Se quejó Wei
Wuxian, bajando la mirada completamente nervioso, evitando por completo el ver esos
hermosos ojos dorados frente a él: "Es un error, hasta tú lo sabes, si seguimos con este
compromiso, tu y yo seremos profundamente infelices..."

"Estoy seguro de lo que digo".

"¿Y cómo puedo confiar en tus palabras?" Replicó Wei Ying.

Respirando profundo, y tomando el valor necesario, Lan Wangji finalmente arrancó su cinta
de frente con un rápido movimiento, tomando una de las manos del mayor para entregarle
esta preciada tira de tela blanca y pura.

Detrás de ellos, a pocos metros de distancia, Jiang Cheng y Lan Xichen se quedaron con la
boca abierta, mirando como Wei Wuxian sostenida la cinta de frente de Lan Zhan, un tipo de
intimidad que ellos ni siquiera habían alcanzado a un 1 año de iniciado su cortejo.

Sin embargo, Wei Wuxian, sin entender nada en absoluto, miro la cinta blanca en su mano de
forma confusa ¿Qué significaba aquello? Intentando entender "La metáfora" observo aquella
cinta con más atención, notando el resistente material del que estaba hecha, con bordados de
nubes azules, y aun ligeramente tibia por haber estado en la frente del menor. Mientras que
Lan Zhan, completamente sonrojado, aun sin creer lo que se había atrevido a hacer, se había
quedado en silencio, esperando ver la respuesta del omega frente a sí mismo.

Y es que aun cuando Wei Wuxian intentaba entender y comprender por qué Lan Zhan había
dejado aquella cinta en sus manos, comenzando a enfurecerse por no saber que estaba
sucediendo, pensó que el menor lo estaba molestando y burlándose de él: "¿Y qué significa
esto?"

Quedándose callado, incrédulo ante que el mayor no lo entendiera, Lan Zhan trago un poco
de su saliva, sin poder explicarle lo que acababa de hacer por su propia vergüenza, dejando
que Wei Ying se enfureciera aún más.

"De verdad no te entiendo, no te entiendo" Se quejó Wei Wuxian a punto de llorar por la
frustración: "En un segundo te conviertes en un alfa adorable que me persigue y me pide
besos en las mejillas, y al otro eres alguien que se burla de mí y me da un accesorio de
belleza como si fuera algo tan importante".

Ofendido con sus palabras, Lan Zhan abrió mucho los ojos ¿Acababa de llamar accesorio de
belleza a su cinta de frente?

"Si esta es tu "prueba de amor", una burla, entonces puedes hacer lo que quieras con ella"
Dijo Wei Wuxian, soltando la cinta para que esta cayera al piso: "Rompe el compromiso,
regresa a Gusu y busca un marido más digno, a mí me da igual" Pronuncio furioso, pisando
aquella cinta de frente con furia.

Al ver aquella acción, fue Lan Zhan el que comenzó a llorar, empujando fuertemente al
mayor para agacharse y tomar la cinta blanca del piso, para luego correr lejos del sitio, sin
dejar de sollozar, siendo perseguido de inmediato por Lan Xichen que había visto toda la
escena. Furioso y aun sin entender que había sucedido, Wei Wuxian solo aumento su enfado
con el empujón a punto de perseguir a Lan Zhan para dejarlo en su sito. Pero fue detenido por
un furioso Jiang Cheng que lo tomo de un brazo.

"¿¡Pero qué crees que hiciste!?" Le reclamó el menor casi en un grito.

Sorprendido ante esta acción Wei Ying no supo que responder, pestañeando confuso: "¿Qué
te pasa? ¿Por qué estás aquí?"

"¿Entiendes lo que hiciste? ¿¡Entiendes que acabas de hacer!?"

Ante los gritos de Jiang Cheng, varias personas del lago se giraron en su dirección,
observando el espectáculo con atención. Y solo fueron los discípulos de la secta Lan los que
salieron del agua para seguir los pasos del joven Lan Zhan, todos completamente
horrorizados.

"¿Puedes dejar de gritar?"

Presionando fuertemente el brazo de su hermano, Jiang Cheng se contuvo para no golpearlo


ahí mismo, cada vez más enfadado: "De verdad eres imposible, eres realmente lo peor".

Soltando a su hermano finalmente, Wei Wuxian no supo que decir al respecto, observando
como Jiang Cheng igualmente corría detrás de Lan Zhan. Ante este comportamiento, Wei
Ying solo pudo suspirar, decidiendo volver a su antiguo lugar en los muelles para seguir
observando a la gente de su secta jugar, aunque el ambiente siguiera algo tenso.

Fue así como la mañana continuó, y aunque el ambiente termino relajándose de nuevo tras
algunos minutos, ningún otro discípulo de la secta Lan regreso a jugar, y un mal
presentimiento comenzó a recorrer el cuerpo de Wei Wuxian, algo que nunca había sentido
antes.

Cuando finalmente sonaron las campanas que indicaban el medio día, Wei Wuxian suspiró
exasperado, sabiendo que debía ir a almorzar al lado de ese insoportable niño Lan, nada
animado por tener que hacer eso.

Levantándose del muelle con pereza, caminó dentro de la residencia de los Jiang arrastrando
los pies, y es que no noto nada extraño hasta llegar a la sala principal de la secta, donde la
comida no había sido servida, y en cambio todos los discípulos de las sectas Jiang y Lan se
encontraban ahí esperando de pie. Al ver a su tío sentado en la silla del líder, Wei Ying supo
que era algo serio, así que apresuro su paso para tomar su lugar al lado de Jiang Cheng
rodeando la silla del líder, esperando que comenzara la reunión o el anuncio por el que todos
se habían reunido.
"Jiang Cheng ¿Qué es esto? ¿Qué está pasando?"

Ignorando por completo su pregunta, Jiang Cheng ni siquiera se volteó a mirarlo, cruzado de
brazos y visiblemente molesto. Resoplando exasperado, Wei Ying miró a su hermana y su tía
al otro lado de la silla de su tío, considerando seriamente romper el protocolo para acercarse a
ellas y aclarar sus dudas.

Pero no pudo hacerlo, pues antes de que pudiera moverse, como si hubieran estado esperando
a que llegara, los dos jades de Gusu entraron en la sala, dejando a todos en silencio. Mas
confundido aun, Wei Wuxian observo como Lan Xichen con una expresión ensombrecida se
quedaba a pocos pasos de su hermano, y como el joven Lan Wangji avanzaba muy cerca de la
familia Jiang, haciendo una respetuosa reverencia.

El menor se veía con los ojos enrojecidos por llorar, con una actitud realmente deprimida,
una que Wei Wuxian nunca había visto en este. Mientras que su cinta de frente, ligeramente
húmeda y ya limpia, seguía en su frente de forma orgullosa, mostrando sus lindos bordados
como nubes en su larga longitud.

"Líder de la secta Jiang, familia y discípulos de la secta Yunmeng Jiang, he venido para
disculparme" Dijo Lan Wangji con la voz solemne.

Pronto, Wei Ying comenzó a sentir un profundo dolor en su corazón, como si lo estrujaran
desde el interior de su pecho, mirando desesperado al joven de ojos dorados que ni siquiera
se había girado a mirarlo una sola vez desde que había entrado.

"Lamento venir a importunarlos para suplicar que mi compromiso con el omega Wei Wuxian
sea irrevocablemente anulado".

Con esas palabras, Wei Ying sintió su cuerpo estremecerse por completo, teniendo un gran
impulso de moverse y hablar, siendo inmediatamente detenido por Jiang Cheng, que volvió a
tomarlo de un brazo de manera firme, lanzándole una severa y amenazante mirada para que
no se atreviera a hablar.

Jiang Fengimian, tomando una actitud serena, miro al joven alfa frente a él con calma: "Lan
Wangji ¿Estás seguro de tus palabras? ¿Por qué has tomado esta decisión? Si la secta
Yunmeng Jiang acepta romper el compromiso no habrá vuelta atrás, no podrás volver a pedir
a Wei Wuxian en matrimonio".

Guardando silencio por un par de segundos, Lan Zhan cruzo miradas con Wei Wuxian, antes
de seguir hablando: "Estoy completamente seguro. No quiero casarme con Wei Wuxian".
Capítulo 28.

El dolor era inimaginable.

Solo pudiendo recordar una y otra vez las crueles palabras de su pequeño alfa pidiendo la
anulación de su matrimonio, Wei Ying se quedó en blanco, llorando y sintiéndose destrozado.

Obviamente gritó y suplicó cuando Lan Zhan anuló la alianza, intentó correr a sus brazos
para pedirle que se detuviera, para pedirle que reconsiderara las cosas. Pero su joven alfa no
lo miró de nuevo, sin ninguna expresión en su rostro no retrocedió, y con el apoyo de su
hermano finalmente logró la aceptación de toda su secta para anular el matrimonio.

Oficialmente Wei Wuxian y Lan Wangji ya no eran prometidos.

Lo que pasó después de eso es bastante confuso para Wei Ying, recordando haber sido
detenido por otros de sus compañeros de secta y Jiang Cheng, se le fue impedido buscar a
Lan Zhan para suplicar, y en medio de sus gritos y sus luchas desesperadas, el joven omega
de Yunmeng fue llevado a la fuerza a sus habitaciones.

Todos entendían el dolor por el que ambos prometidos estaban pasando, y la única que se
opuso en esta decisión fue Madam Yu, la cual sabiendo que ambos se harían más daño
separados, intentó hacer que el consejo de ambas sectas reconsiderara su decisión.

Pero nadie la escuchó.

Teniendo un colapso por el dolor que sentía su omega, Wei Ying terminó acostado en su
cama, con su rostro apoyado en el regazo de su hermana, llorando y temblando sin parar.

"A-Xian" Susurró la joven realmente angustiada: "A-Xian respira..."

Sin embargo el joven omega solo podía escuchar a su hermana a medias, sollozando sin parar
y aferrándose a ella como si fuera su última salvación, llamando a su alfa entre susurros.

Era bien conocido el dolor que le causaba a un omega perder a su alfa, ya fuera destinado o
no, causaba una gran depresión e incluso problemas físicos. Así que preocupados, los dos
hermanos Jiang se quedaron con Wei Ying, mientras que cultivadores de su secta
resguardaban las puertas de su habitación para impedir que el joven maestro Wei buscara a
Lan Wangji una vez más.

"Tranquilo, tranquilo" Susurró Jiang Wanyin muy preocupado, limpiando el rostro de su


hermano con un pañuelo de forma temblorosa: "De verdad quiero partirte las piernas ahora".

Con un dolor profundo recorriendo todo su cuerpo, Wei Ying cerró los ojos, abrazándose a su
hermana con más fuerza aun. Con cada segundo que pasaba, su omega se volvía más y más
inestable, a tal punto que ni siquiera podía pensar con claridad, sintiendo sus pensamientos
enteros invadidos por ese sentimiento de desesperación.
Sollozando y con una voz sumamente lastimera, Wei Wuxian preguntó: "Lan Zhan... ¿Por
qué me dejaste? ¿Por qué no me dijiste que me amabas?"

Resoplando furioso, Jiang Cheng finalmente respondió: "Si te lo dijo, pero tú eres demasiado
idiota como para entenderlo, maldito Wei Wuxian..."

Abriendo los ojos, pensando con una ligera claridad por primera vez en varios minutos, Wei
Ying preguntó: "¿Qué?"

Recibiendo una mirada enfada por parte de Jiang Yanli, Jiang Cheng frunció ligeramente el
entrecejo. Pero sabiendo que su hermano merecía una explicación, decidió decirle la verdad:
"La cinta de los Lan no es un accesorio de belleza imbécil, tiene un gran significado en su
secta. Significa autocontrol, es algo tan privado que solo las personas significativas para ellos
pueden tocarlas, sus padres o... Amantes".

"¿Entonces debí sentirme alagado porque me permitiera tocarla? ¿Cuántas veces has tocado
tú la cinta de Lan Huan?"

"Jamás, yo nunca he rozado si quiera la cinta de Lan Xichen" Respondió Jiang Cheng con
seriedad: "Es algo sumamente privado, no entenderías lo importante que es para ellos. El
fundador de su secta, que era un alfa, estipuló que la única ocasión en la que ellos tienen
permitido quitarse la cinta de frente es frente a su ser amado o un destinado. Al quitársela
ellos simbolizan que están listos para perder todo el control bajo el que han vivido, solo por
su persona amada, eso fue lo que hizo Lan Wangji contigo".

Sintiendo sus mejillas sonrojarse, entendiendo a medias aquel gran significado, Wei Ying
pregunto: "¿Entonces? ¿Él me dijo que estaba dispuesto a perder todo su autocontrol por
mí?"

"No solo eso idiota" Siguió regañándolo Jiang Cheng: "Te dijo más que eso. Es una forma
significativa de los Lan para admitir que aman a alguien, para muchos entregar su cinta
incluso es más que un simple "te amo". Lan Zhan te entrego su vida al darte esa cinta, todos
sus sentimientos ¿Lo entiendes ahora?"

Pensando mejor en lo sucedido, recordando rápidamente las palabras de aquel dulce niño y la
expresión sumamente asustada de este cuando le entregó la cinta; Wei Ying finalmente pudo
darse cuenta de lo que había pasado, algo que rompió aún más su corazón.

"Él te dijo que te amaba, imbécil" Lo regañó Jiang Cheng.

Soltando a su hermana para sentarse en la cama, Wei Ying lució razonable por primera vez
desde que su compromiso se había roto hace un par de horas, mirando hacia la nada pero muy
serio, pesando.

"¿A-Xian?" Preguntó Yanli preocupada, tomando a su hermano de la mano.

"Yo lastime el corazón de Lan Zhan, lastime el corazón de mi alfa" Susurró Wei Ying,
mirando en dirección a la puerta de su habitación: "Debo disculparme, debo pedirle que me
perdone..."
Sin decir más, Wei Ying se puso de pie de su cama y camino apresurado a la puerta de su
habitación. Dándose cuenta de lo que estaba pasando, Jiang Cheng rápidamente se puso de
pie y se puso frente a Wei Ying para impedir que avanzara.

"Muévete" Ordenó Wei Ying mirando a Jiang Cheng frente a él.

"Basta, sabes que no puedes ir" Respondió Jiang Cheng intentando hacer entrar en razón a su
hermano: "Sabes que no lo tienes permitido".

"Muévete" Siguió diciendo Wei Ying, completamente enceguecido por los sentimientos de su
omega.

"Escucha, cuando vayas a buscar a los Lan no los encontraras, a estas horas ya estarán".

Pestañeando confuso, Wei Ying pregunto: "¿Qué?"

Dándose cuenta de que había cometido un error muy grave al decir todas esas cosas, Jiang
Cheng insistió de nuevo, tomando a su hermano de un brazo intentando hacerlo retroceder:
"Venga, acuéstate en la cama, te sentirás mejor después de dormir".

Mirando a su hermano fuera de control por completo, Wei Ying no dudo y atacó a Jiang
Cheng. Tomando al menor por sorpresa, Wei Ying le dio un puñetazo con su mano libre, y
rápidamente logro soltarse de su agarre en uno de sus brazos. Cayendo al suelo por el golpe,
sintiendo su nariz sangrar, Jiang Wanyin no pudo detener a Wei Wuxian, observando como
este seguía su camino a la puerta.

Alarmada, Jiang Yanli corrió a atender a Jiang Cheng, observando horrorizada el gran golpe
que Wei Ying le había dado: "¡A-Xian! ¡Regresa!"

Completamente inundado por su omega y sus sentimientos de absoluta desesperación por su


alfa, Wei Wuxian abrió la puerta de la habitación a la fuerza. Observando a esos cultivadores
que intentaban resguardar la puerta, el joven omega no dudo en luchar también con ellos,
venciéndolos con facilidad, pues por primera vez en mucho tiempo estaba luchando de
verdad.

Dejando a todos esos cultivadores en el piso, después de haberles dado una buena golpiza,
Wei Ying se puso a correr rápidamente, solamente pensando en encontrar a su amado Lan
Wangji.

Alterada, sin poder creer lo que había pasado, Jiang Yanli de forma temblorosa intentó
detener el sangrado de Jiang Cheng con su pañuelo, mirando a su hermano realmente
preocupada. Sin embargo Jiang Wanyin, volviendo en sí mismo al ver a Wei Ying corriendo
de nuevo, detuvo a su hermana tomándolo de la muñeca y mirándola a los ojos.

"Detenlo" Pidió Jiang Cheng.

"A-Cheng..." Susurro Yanli, sin querer dejarlo.

"Va a hacer una estupidez, va a lograr que los Lan lo maten" Susurró Jiang Cheng
preocupado: "Él ya no es nada para esa secta, pero Lan Wangji es el hijo del líder. Si ese
idiota va a buscarlo ellos pueden interpretar que está intentando molestarlo de nuevo, después
de todo lo que ha hecho, no tendrán clemencia".

Mirando la dirección en la que su hermano había corrido, Jiang Yanli lucio dubitativa, aun sin
querer dejar a su pequeño hermano en el suelo. Sin embargo Jiang Cheng siguió insistiendo,
apartándose ligeramente de ella para intentar darle confianza.

Sin dejar de correr, sintiéndose perdido en Lotus Pier por primera vez en toda su vida, Wei
Ying no dudó en pelear con cualquiera que se pusiera frente a él y quisiera detenerlo.
Volviendo a lastimarse con sus acciones, abriendo las heridas de sus palmas y el resto de su
cuerpo, al igual que su pierna la cual volvió a sangrar de forma abundante mientras sus
huesos amenazaban con romperse, Wei Wuxian no dejo de correr ni un solo instante,
llegando finalmente al pabellón que le habían dado a la secta Lan a su llegada.

Con habitaciones vacías y rastros de movimiento en estas mismas, Wei Ying entró en pánico
al darse cuenta de que su alfa no estaba ahí, que había desaparecido.

"Tengo que encontrarlo, tengo que encontrarlo..." Se repitió llorando ligeramente, dando
vueltas de un lado al otro sin saber qué hacer.

Fue en medio de esta desesperación que su omega se dio cuenta, aullando en su cabeza, Wei
Ying finalmente pudo sentirlo: El olor de unas fuertes feromonas casi disipadas por el viento,
un olor tan delicioso que casi lo hace desmayarse, el olor de su alfa.

Dejándose guiar por este aroma, Wei Ying supo en qué dirección avanzar, dándose cuenta de
que aun tal vez no era demasiado tarde, que aun podía encontrarlo. Sintiendo su cuerpo
adolorido, con muchas de sus heridas abiertas después de haber luchado tanto, Wei Ying
corrió lo más rápido que pudo en dirección a los muelles, intentando convencerse de que aún
estaba a tiempo.

De que aún tenía tiempo para arreglarlo todo.

Sintiendo el sol del atardecer sobre su piel, con unas hermosas nubes color rosa en un cielo
ligeramente anaranjado sobre el lago, Wei Ying observo hacia la nada, completamente
devastado.

Un olor fuerte era el único que podía distinguir en todo el muelle vacío, en el cual solo se
podían ver los rastros de un movimiento apresurado, alguien había partido hace poco.

"Lan Zhan..." Sollozó Wei Ying, forzándose a seguir.

Avanzando a tropezones, con el dolor recorriendo cada espacio de su cuerpo, Wei Ying
caminó por uno de los muelles acercándose cada vez más al lago, donde en el horizonte
finalmente pudo verlo.

Varios hermosos barcos de una de las mejores maderas, con banderas blancas que tenían la
imagen de nubes azules alejándose con la brisa, se podían ver a lo lejos, alejándose cada vez
mas de Yunmeng.
"¡Lan Zhan!" Gritó Wei Ying, volviendo a correr.

El omega estaba dispuesto a saltar al agua y nadar si era necesario, aun si moría en el intento,
solamente siguiendo a su alfa, ese dulce niño de ojos dorados que Wei Ying sabía que no
volvería a ver. Y aunque realmente quería hacerlo, dispuesto a hacerlo de verdad, su pierna
herida finalmente no resistió y lo hizo caer al suelo, en medio de su fuerte llanto acompañado
de lastimeros sollozos.

Sin querer darse por vencido, Wei Ying comenzó a arrastrarse por aquel muelle, observando
de manera borrosa como los botes de los Lan se alejaban casi por completo. Sin estar
dispuesto a dejarlos ir, Wei Ying avanzó lentamente por aquel muelle casi hasta el final,
solamente intentando hacer un pequeño esfuerzo más para caer al agua e intentar nadar en su
dirección.

Sin embargo no tuvo las fuerzas, y de pronto sintió unas amables manos que lo sostuvieron,
evitando que siquiera avanzando.

"A-Xian, A-Xian" Susurró Yanli realmente enternecida, abrazando y sosteniendo a su


hermano herido con suavidad.

"Por favor, por favor solo... Quiero disculparme, por favor..." Suplicó Wei Ying en un fuerte
llanto, intentando luchar débilmente con su hermana.

Sin embargo Yanli no respondió, abrazando tiernamente a su hermano intentando aliviar


aunque fuera un poco de su gran dolor, observando también como aquellos barcos Lan se
perdían cada vez más en el horizonte, hasta casi perderse por completo. Llorando nuevamente
desconsolado en los brazos de su hermana, dándose cuenta de que había fallado otra vez en
su triste intento por recuperar a su alfa, Wei Ying siguió gritando el nombre de Lan Wangji
por varios minutos, hasta que finalmente los barcos habían desaparecido.

"Lan Zhan perdón... Por favor perdóname... Regresa"

Y mirando nuevamente hacia la nada, mientras la noche comenzaba a hacerse, lo último que
vio Wei Ying fueron las hermosas banderas blancas perdiéndose en la obscuridad.

4 AÑOS DESPUÉS.

Respirando profundo, Wei Wuxian estiró con fuerza su arco, apuntando con mucha maestría
en dirección a ese cadáver ambulante.

Esperando a tener un excelente tiro, Wei Ying disparo con seguridad y lo derribo de una sola
vez, observando complacido como este caía al suelo con un grito ahogado y dejaba de
moverse.

Bajando de aquel árbol de un salto, Wei Ying se acercó al cadáver y lo observó fijamente
antes de lanzar una señal al cielo, marcando el lugar donde estaba el último cadáver de
aquella cacería. Respirando finalmente tranquilo, Wei Ying colgó su arco en su espalda y
tomo a Suibian con fuerza, caminando a un lugar un poco más despejado de aquella frondosa
vegetación para poder subirse a Suibian y volver a Lotus Pier.
En aquella cacería que había durado toda la noche, varios cultivadores tuvieron que ingresar
en los bosques a las afueras de Lotus Pier por denuncias de varios cadáveres que habían
logrado subir el acantilado a la zona protegida. Después de varias horas de intenso trabajo
hasta el amanecer, Wei Ying finalmente pudo terminar con el último de ellos, sintiéndose
satisfecho con lo mucho que había avanzado su cultivo esos últimos años.

Caminando hasta un lugar más despejado, Wei Wuxian desenfundo a Suibian y se subió sobre
su espada de un salto, comenzando a ascender a los cielos, se giró por un segundo y vio aquel
acantilado pocos metros detrás, con el agua del rio sonando de forma pacífica. Persiguiendo
aquel cadáver se había internado en el bosque mucho más de lo que había esperado, llegando
a ese punto el cual no había pisado en años.

Mirando aquel lugar en silencio por un par de segundos, pensativo, Wei Ying solamente soltó
un suspiro antes de forzarse a sí mismo a continuar, intentando dejar todo atrás.

Después de que su compromiso con los Lan se había roto, Wei Ying entro en una depresión
profunda. Se encerró en Lotus Pier llorando a todas horas, llamando a su alfa en gritos y
perdiendo la razón por su omega inestable. Después de casi un año y medio en reclusión, Wei
Wuxian finalmente salió de nuevo al mundo, un lugar que no había cambiado pero que aun
así lucia diferente para el omega.

En Yunmeng Jiang no se volvió a mencionar el nombre de Lan Wangji, aunque los Lan
seguían visitando Yunmeng de forma recurrente por el compromiso de Lan Xichen y Jiang
Cheng, por lo general Wei Ying los evitaba a toda costa, y el segundo maestro de Lan no
había acompañado a su hermano en sus visitas nunca más.

De una forma increíble para Wei Wuxian, nadie lo obligó a seguir la tradición por órdenes de
Madam Yu. Aquella mujer alfa que resulto ser mucho más comprensiva que el resto de
personas en Yunmeng por el estado de Wei Wuxian, no solo denegó todas las peticiones de
matrimonio que se hicieron inmediatamente se supo que Wei Ying había quedado soltero,
también lo protegió de cualquier alfa que si quiera pensara en acercársele. Y en momentos de
profunda tristeza del menor, fue Madam Yu la que acudió a sus aposentos a tranquilizarlo con
sus feromonas y permitirle a Wei Ying abrazarla en esas noches interminables llamando a
Lan Wangji.

Y aunque su relación técnicamente seguía siendo igual, ahora Madam Yu no solo hablaba con
Wei Ying para regañarlo o para llamarlo "inútil", también lo hacía para preguntarle cómo se
encontraba y para de vez en cuando darle un poco de afecto, como abrazos o algunas caricias
en las mejillas.

Aquella mujer alfa, que entendía mucho mejor que el resto como se sentía perder a una pareja
destinada, no presionó a Wei Ying a encontrar otro alfa, pues entendía que sin importar el
tiempo o la persona que se fijara en él, Wei Wuxian solo podría amar a un alfa el resto de sus
días.

El resto de la familia Jiang había sido igualmente comprensiva, Jiang Fengmian se encargó
de las relaciones diplomáticas con las demás sectas que intentaron tomar la mano de Wei
Ying y fueron rechazadas, intentando explicar que Wei Ying aunque siendo omega, era solo
un sirviente y que pertenecía a Yunmeng, donde debía servir a los señores de la secta Jiang.
Por otro lado, Jiang Yanli contrajo finalmente nupcias dos años antes con su adorado
prometido Jin Zixuan, un hermoso alfa que lucía fiero con todos los demás excepto con su
hermosa mujer omega, con la cual bajaba la cabeza y lucia como un cachorrito. Con una boda
increíble celebrada en Lanling, en la torre de los Jin, la joven Jiang Yanli se convirtió en parte
de la familia Jin rodeada de oro y la boda más cara que se había visto. Desde entonces la
joven vivía en Lanling visitando Yunmeng de forma constante, y ya comportándose como
toda una mujer, con ayuda de su padre comenzaba a planear cuando tener su primer hijo.

Mientras que Jiang Cheng, con su usual carácter y arrogancia, fue el único que intentó
persuadir a su hermano de buscar a su alfa. Mientras que el resto de la secta Jiang impedían
que Wei Ying hiciera una locura como ir a Gusu para intentar encontrar a Hanguang-Jun,
Jiang Wanyin más de una vez le propuso a su hermano alocadas ideas para intentar buscar al
menor y arreglar las cosas. Planes a los que Wei Ying siempre se negó, pues más allá de la
pena y el arrepentimiento por todos sus errores, el omega sabía que no había forma de
arreglar lo sucedido.

Sin importar que hiciera, él jamás podría volver a ser comprometido con Lan Wangji.

Así que aunque lo intentó por mucho tiempo, Jiang Cheng terminó aceptando que su
hermano no iría tras el amor de su vida y se quedaría encerrado en Yunmeng para toda su
vida, sirviendo a su secta hasta su muerte. Aceptándolo de mala gana, cada cierto tiempo
Jiang Cheng intentaba seguir persuadiendo a Wei Ying, el cual negándose peleaba con su
hermano, algo que cada vez era más frecuente.

Y Wei Wuxian, el primer sirviente de la casa Jiang, se quedó como aquello, solo un sirviente.
Un título que el acepto con agrado, aunque terminaba siendo un castigo peor que la muerte
para un cultivador.

Según la tradición, ningún omega maduro podía salir de su secta a practicar el cultivo o
socializar con otros alfas. Aun cuando no estaban comprometidos, sin importar su edad, a los
omegas se los veía como criaturas inferiores que solo servían para procrear. Sin un alfa, estos
como criaturas "débiles" se exponían a los peligros del mundo y a poder ser preñados por
"accidente", pues en las leyes se estipulaba que en caso de una violación, el omega abusado
era el culpable por no ser cuidadoso y se exoneraba de todo al alfa. Y en caso de un embarazo
por causa de ese abuso, el omega era condenado a morir por ser "impuro", teniendo una
muerte dolorosa y humillante frente a todos.

Era de esa forma que para evitar la muerte o ser "deshonrados", todos los omegas adultos que
no tenían pareja, por la ley debían mantenerse encerrados en su tierra natal bajo la protección
de la secta más prominente, donde no deberían volver a tener contacto con ningún otro alfa o
beta y servirían como simples sirvientes por el resto de sus vidas.

Las leyes en Yunmeng, aunque eran mucho más laxas por el líder, aun se cumplían. Y aunque
a estos omegas sin alfa por lo general se les impedía hasta salir de la residencia de la secta
principal y ser cultivadores, Wei Wuxian momentáneamente tenia permitido seguir
practicando el cultivo y aunque sea salir por todo Yunmeng con confianza. Todos los alfas de
la secta, excepto Madam Yu, tenían prohibido acercarse a él; y aunque aún podía tener
contacto con cultivadores betas, Wei Ying suponía que pronto todos estos privilegios
terminarían y no podría volver a hablar con nadie que no fuera de su género nunca más.
Por esta ley Wei Ying no pudo salir de Yunmeng desde que fue abandonado por Lan Wangji,
con todo el dolor de su corazón dejo de ir a conferencias de cultivadores o clases para estos
en otras sectas, donde Jiang Cheng podía ir con libertad; y con más dolor aun no pudo ir a
Lanling para presenciar la boda de su hermana. Con el corazón dolido y lleno de pena, aun
cuando esto era sumamente injusto, Wei Ying se resignó a su destino, sabiendo que algún día
le quitarían a Suibian para siempre, y que lo encadenarían a Lotus Pier donde cumpliría
labores de omega cuidando niños y de la residencia familiar, sirviendo a la familia Jiang hasta
que su corazón dejara de palpitar.

Y aunque un espíritu libre como el suyo, el cual más de una vez se prometió a si mismo ser el
mejor cultivador omega de toda la historia, ahora se resignaba a ser solamente un omega
cualquiera, el cual debía estar agradecido por la bondad de sus señores por permitirle el gran
honor de cultivar, viviendo el resto de sus días con el temor de ser deshonrado y preñado por
un aterrador alfa.

Sin embargo el joven omega prefería no pensar en esas cosas, disfrutando de volar sobre
Suibian con el viento golpeando sus mejillas y dándole una falsa libertad de poder ir a donde
quisiera con quien quisiera, terminaba volviendo a Yunmeng donde era vigilado a cada
segundo, esperando que se comportara como el omega respetable que ahora estaba obligado a
ser.

Llegando a Lotus Pier, Wei Ying bajo de su espada en la parte posterior de la residencia,
donde bostezando caminó a las cocinas donde planeaba tomar algún aperitivo y un poco de
licor antes de volver a su habitación, donde dormiría después de una noche tan ajetreada.

Bajo la mirada de todos los sirvientes de Yunmeng, que se encargaban de obligarlo a hacer lo
correcto todos los días, Wei Wuxian entró en las cocinas de Lotus Pier con una sonrisa,
acercándose a los pasteles de arroz para tomar algunos. Entrando y haciendo algunas
reverencias de forma agradecida con las jóvenes que ahí trabajaban, Wei Ying las saludó
diciendo: "Buenos días hermanas, tomare algo y me iré, lamento molestarlas".

Siendo observando por una de las sirvientas de la secta, esta joven beta rápidamente se acercó
a Wei Ying para decirle: "Wei Gonzi, el joven Jiang Wanyin lo espera en los salones
principales de la secta".

"Gracias" Dijo Wei Ying haciendo una reverencia para la joven: "¿A-Cheng me espera en el
salón principal? ¿Te dijo la razón?"

Encogiéndose de hombros, la joven sirvienta respondió: "No maestro, solo sé que hoy habrá
un gran festejo en la secta".

Haciendo una reverencia, la joven sirvienta regresó rápidamente a sus labores, dejando a un
sorprendido Wei Wuxian que no supo que responder a esas palabras. Sabiendo que aquel día
era una fecha común, en la que no se festejaba nada especial o algo parecido, se apresuró a
tomar un par de pasteles de arroz para dirigirse al salón principal de la residencia mientras los
comía, sintiéndose cada vez más intrigado.

Caminando por los pasillos con gente feliz y emocionada por todos lados, Wei Ying
finalmente llego al salón principal de su secta, donde encontró a su hermano. Rodeando de
otros de sus amigos cultivadores, Jiang Cheng se notaba con una gran sonrisa y muy
emocionado, llamando inmediatamente la atención de Wei Ying.

Acercándose a Jiang Cheng, Wei Ying le pregunto: "¿Qué te paso? ¿Otra vez viste un perrito
lindo que no puedes comprar por mí?"

Perdiendo su sonrisa para ver a Wei Ying con un rostro molesto, Jiang Cheng soltó un bufido
mientras que las personas que lo acompañaban en ese instante no podían evitar reír.
Apartándose un poco e la multitud para hablar con su hermano, Jiang Cheng dijo: "Eres una
molestia".

"Una molestia con la que quieres hablar" Le recordó Wei Ying, riéndose del enfado de su
hermano: "¿Qué quieres?"

Mientras que el resto de amigos y acompañantes se reían emocionados, Jiang Cheng volvió a
soltar una sonrisa nerviosa, y tomando a Wei Ying de un brazo lo llevo a una parte un poco
más apartada del salón. Acercándose a una de las ventanas, donde tenían una gran vista de
todo Lotus Pier, Wei Ying soltó un bostezo bastante cansado, siguiendo a su hermano
expectante por saber que rayos estaba pasando.

"¿Entonces?" Insistió Wei Ying.

Tomando aire sin poder evitar volver a sonreír, Jiang Cheng se tomó de la mano de Wei Ying
de forma temblorosa antes de comenzar a hablar: "Llegó un comunicado oficial de Gusu.
Xichen tomara el lugar de su padre como líder en 6 meses".

"¿El líder de la secta Lan se retirara? No me sorprende, todos dicen que Jin Guangshan
también se retirara pronto, supongo que el tío Fengmian también lo hará..."

"No divagues" Lo regañó Jiang Cheng impaciente.

"Está bien, lo siento. Continua A-Cheng".

Mirando a Wei Ying a los ojos, Jiang Cheng sonrió mucho más, para luego decirle: "Es mal
visto por las sectas que un nuevo líder ascienda soltero, así que Lan Huan finalmente me
propuso matrimonio de forma oficial, vamos a concretar el compromiso".

Quedándose sin habla por semejantes palabras, Wei Ying pestañeo confuso, razonando en lo
que acaba de escuchar, cada vez más contento por su hermano menor.

"Finalmente se dio una fecha para la boda" Dijo Jiang Cheng sin poder dejar de sonreír:
"Wuxian, finalmente voy a casarme".

Sin poder aguantar más, Wei Ying olvidó todo su cansancio y le dio un fuerte abrazo a Jiang
Cheng, el cual le correspondió llorando ligeramente por la felicidad. Entendiendo lo mucho
que significaba para su hermano el poder cumplir con la tradición y finalmente casarse, aun
mas con un alfa que realmente amaba como Lan Xichen, para Wei Ying fue la mejor noticia
de todas, emocionándose mucho al igual que el menor.
"Lo harás excelente" Dijo Wei Ying sonriendo igualmente, soltando finalmente aquel abrazo:
"Tu boda será preciosa, y seguro tendrás un matrimonio prospero A-Cheng. Estoy muy
feliz..."

"Gracias" Respondió Jiang Wanyin algo cohibido, y volviendo a tomar una de las manos de
Wei Ying lució algo abatido por un segundo: "Wei Ying... Antes que nada deberemos hacer
una fiesta de compromiso en Yunmeng".

"Si, como lo dicta la tradición".

Como dictaba la tradición, la boda debería realizarse en la secta de alfa, mientras que la fiesta
de compromiso debía llevarse a cabo en la secta del omega. Ambas eran ceremonias
sumamente importantes, ya que la boda significaba la alianza de ambos para toda la vida,
mientras que la fiesta de compromiso era el momento oficial en el que se terminaba el
periodo de cortejo y podían hablar legalmente de un compromiso real.

En esta fiesta Lan Xichen no solo tendría que pedir la mano de Jiang Wanyin frente a todos
los líderes de sectas que sean invitados, Jiang Cheng debía renunciar de forma oficial a su
título como heredero de Yunmeng para pasar a formar parte de la familia Lan desde ese
mismo instante. Además de que por la misma tradición, en la fiesta de compromiso para
cerrar un trato semejante ambos prometidos debían darse un beso frente a todos los líderes
simbolizando el cambio en su relación desde ese instante. Lo que significaba que Jiang
Cheng perdería su primer beso muy pronto.

Intentando ser suave con su hermano, Jiang Cheng lo miró a los ojos diciéndole: "Wei Ying,
para la fiesta de compromiso toda la familia Lan deberá venir a Yunmeng a quedarse un
tiempo ¿Lo entiendes?"

Sin captar aun la idea al respecto, luciendo tan desinteresado como siempre, pero igualmente
embriagado con la felicidad de su hermano, Wei Ying dijo: "Si, sería raro si no lo hicieran..."

Sintiéndose frustrado por la estupidez de su mayor, con la poca paciencia que lo caracterizaba
y perdiendo por completo su tacto, Jiang Cheng rápidamente dijo: "Idiota escucha...
Hanguang-Jun está invitado a mi fiesta de compromiso".

Quedándose en blanco al escuchar aquello, Wei Ying miro a Jiang Cheng dejando de sonreír,
observando el rostro preocupado del menor.

"¿Estas bien con eso?" Insistió Jiang Cheng preocupado.

Forzando una sonrisa para no ponerse a llorar, sintiendo su corazón latiendo desesperado y su
omega hecho un desastre nuevamente, Wei Ying solo pudo decir: "Una boda... Hurra..."

Bajando la mirada realmente triste, Jiang Cheng presiono fuertemente las manos del contrario
entre sus dedos, perdiendo aún más la paciencia.

Mientras que Wei Ying, cada vez más abatido por todo lo que estaba pasando, desvió la
mirada nuevamente al salón, sintiendo su corazón estrujándose por la pena.
En ese mismo salón su compromiso había sido roto por el alfa Lan Wangji.

Y ahí otro alfa Lan le prometería su amor y devoción eterna a su querido hermano Jiang
Cheng.
Capítulo 29.

El paisaje en Yunmeng era acogedor.

En medio del atardecer, la luz violeta y amarilla del cielo despejado se reflejaba en el agua de
ese lago de lotos, haciendo lucir el lugar aún mucho más hermoso ante los dorados ojos de
Lan Wangji.

Lan Zhan no creyó que volvería a ese sitio de nuevo, mirando todo con atención como si
fuera la primera vez, se dio cuenta de que en realidad nada había cambiado. Con las aguas
cristalinas y tranquilas, los lotos hermosos bajo su barco, y el olor más suave y puro que
alguna vez pudo sentir.

El joven alfa de ahora 16 años lucia mucho más serio de lo usual, apartado de las propias
personas de su secta, estaba parado en la proa de aquel barco, mirando hacia la nada con un
rostro de reflexión.

En todo el tiempo que había pasado desde la ruptura de su primer compromiso, Lan Wangji
se había concentrado puramente en mejorar su cultivo. Teniendo un cuerpo musculoso típico
de un alfa, con una altura mucho mayor para su edad, el joven Lan ahora era reconocido en
todas las sectas por ser un excelente cultivador, ascendiendo al segundo lugar de los mejores
solamente siento superado por su propio hermano mayor.

Convirtiéndose en el mejor discípulo de la secta Lan, el joven alfa finalmente hizo honor a su
título como Hanguang-Jun, y ahora no solo era el alfa soltero más codiciado por todas las
sectas, también era el menos interesado en un compromiso y el más frio de todos.

Y aunque el joven Lan fuera tan distante, esto no evitó que lo obligaran a seguir la tradición y
que ahora tuviera un nuevo compromiso con un hermoso omega de una secta pudiente.

Sonriendo a las alabanzas de todos los miembros de su consejo, Lan Xichen pronto observó a
su hermano a lo lejos parado solo en la proa mirando hacia la nada. Recibiendo un par de
halagos más por su compromiso, Lan Huan logró apartarse de todos sus aduladores y
acercarse a su hermano, observando su seriedad.

"Hermano" Le dijo Lan Zhan observando como su mayor se acercaba.

"Wangji" Dijo Lan Xichen, acercándose aún más: "Luces perturbado ¿Esta todo en orden?"

Girándose para ver a Lan Huan a los ojos, Lan Zhan asintió: "Mmm".

Sonriendo de forma amable, Lan Xichen respondió: "Ya veo..."

Quedándose al lado del menor admirando el paisaje en silencio, Lan Huan sintió un aroma
ligeramente fuerte que su hermano desprendía. Lan Zhan ya no era un niño, había aprendido
a controlar sus feromonas y entender a su alfa, teniendo un autocontrol absoluto de sí mismo.
Sin embargo en ese momento, un ligero aroma lograba desprenderse del menor, el cual lucia
abatido y algo extraño ante los ojos de su hermano mayor, el único que pudo darse cuenta de
esto.

"Wangji" Insistió Lan Xichen de forma preocupada, sin dejar de mirarlo: "Si hay algo que te
preocupa, hermano, puedes decirme".

La preocupación de Lan Huan tenía su razón de ser, pues además de saber que su joven
hermano vería a Wei Wuxian después de tanto tiempo, la noticia de su nuevo compromiso se
le había dado al menor antes de partir, así que esto también podría estar haciendo mella en la
salud mental del menor.

El joven Lan Wangji se había ganado el corazón de un apuesto omega de una secta
prominente. Como un cultivado de elite, uno de los mejores, Lan Wangji acompañó a su
hermano Lan Huan a una misión a Qishan. Acudiendo como ayuda para los cultivadores de la
secta Wen, los jóvenes Lan se encargaron de ayudar a eliminar a unos extraños fantasmas de
agua bastante agresivos que habían aparecido en las costas, que la propia secta Qishan Wen
había sido incapaz de eliminar.

Fue en esta misión que Wen Xu se enamoró perdidamente de aquel joven cultivador que
había salvado su vida. A punto de hundirse en su barco por aquellas entidades de agua, Wen
Xu fue salvado por Lan Wangji que lo tomó del cuello de su túnica y lo levantó con maestría
parado sobre su fiel espada Bichen, salvándolo de ser asesinado por aquellos fantasmas.

Y aunque Lan Wangji y la secta Lan no prestaron mucha atención al omega Wen Xu, el líder
de la secta Wen Ruohan y se su segundo hijo Wen Chao miraron con buenos ojos a Lan
Wangji, fijándose en este de inmediato al saber que había roto su compromiso con los Jiang
de forma definitiva.

La secta Wen siempre era mirada con malos ojos por las demás sectas por ser betas, siendo
una familia de betas en la que rara vez nacían alfas u omegas, al hacer los tratos para la
tradición del compromiso, a los miembros de la secta Wen siempre se los miraba como
inferiores solo por ser de una familia de betas, algo que ocasionara que muchos tuvieran sus
reservas al hacer tratos con ellos o proponer compromisos con sus hijos.

Esto que creo un gran resentimiento en la secta Wen, además de muchas rupturas de alianzas
en su larga lista de compromisos, especialmente con la secta Lan, llevo a Lan Qiren a querer
denegar dicho compromiso. El omega de la secta Lan, aquel que había criado a los dos jades
Lan Wangji y Lan Huan, una vez estuvo comprometido con el beta Wen Ruohan. Después de
una serie de desafortunados eventos ocasionados por su hermano mayor y el padre de los dos
jades, ese compromiso fue disuelto de mala manera y Lan Qiren no tuvo contacto de nuevo
con Wen Ruohan... Hasta ahora.

Cuando la solicitud para el compromiso fue hecha por parte de la secta Wen hace un par de
meses, Lan Qiren tuvo sus reservas. Wen Xu no solo era un omega hijo de betas, lo que se
consideraba de un estatus menor; también había estado en un compromiso previo con Nie
Mingjue el cual fue disuelto, y era mayor que Wei Ying por dos años, lo cual lo hacía
bastante mayor para Lan Wangji.
Sin embargo, cuando finalmente se decidió hacer la fiesta de compromiso entre Lan Xichen y
Jiang Cheng, eso suponía una alianza entre los Lan y los Jiang. Su preciado sobrino seria
pariente político de aquel omega que hace varios años lo había lastimado tanto.

Así que en un intento por proteger a Lan Wangji, Lan Qiren de forma arbitraria se tomó la
libertad de aceptar el mejor compromiso para su sobrino en pos de mandarlo con una nueva
pareja ya dispuesta a Yunmeng, así mediante la tradición Lan Wangji no podría fijarse en Wei
Ying aun si estos eran "destinados", y su amado sobrino estaría a salvo. Fue de esta manera
que pocos días antes de la partida de la comitiva que se quedaría en Yunmeng un par de días
por el compromiso, Lan Qiren volvió oficial el compromiso entre la secta Wen y la secta Lan,
estipulando que el periodo de cortejo entre Wen Xu y Lan Wangji iniciaría inmediatamente
terminada la fiesta de compromiso de Yunmeng.

Después de que Lan Xichen y Jiang Cheng se unieran oficialmente en una ceremonia, Lan
Wangji debería partir a Qishan a conocer a su nuevo prometido. La partida del menor estaba
programada para el día siguiente después de aquella celebración, con el objetivo de que Wei
Wuxian no tuviera oportunidad de ver a Lan Wangji ni un solo minuto. Esto ya que Lan
Qiren no veía con buenos ojos a ese omega Jiang, después de la gran ofensa cometida
pisando la cinta de frente de su sobrino, el omega Lan no quería pensar si quiera en que Wei
Wuxian estuviera cerca de su querido Wangji.

Esto a Lan Wangji le daba igual. Pues aunque era algo sumamente importante para el resto de
su vida, una decisión trascendental, había pasado mucho tiempo desde que dejo de pensar en
el amor o en casarse con un omega.

Después de su regreso a Gusu, al igual que Wei Wuxian, el joven alfa se puso a sí mismo en
reclusión para sanar. Sin embargo a diferencia de Wei Ying, él no tenía una persona como
Madam Yu que lo cuidara y lo calmara con sus feromonas, así que se internó por varios
meses en soledad, sufriendo y sanándose a sí mismo completamente solo. Y al salir, siendo
un año más maduro, Lan Wangji lucio mucho más frio y distante para cualquiera, incluso
para su propia familia.

Buscando olvidar a su destinado y que alguna vez lo había conocido, aun si su alfa lo buscaba
con desesperación y lo atormentaba a cada minuto por no tenerlo a su lado, Lan Wangji se
comprometió a entrenar sin descanso. Aprendió nuevas técnicas de cultivo, entreno con
Bichen sin descanso, y se volvió un maestro en las técnicas espirituales con su Guqin.

Y en medio de la soledad, cuando pensaba demasiado, tocaba aquella hermosa melodía que
una vez había compuesto pensando en el ser que más amaba. Aunque ahora se notaba triste y
depresiva, como una melodía de un lamento.

Así que decidiendo obedecer las leyes de su secta, cumplir aquello que todos querían de él, y
hacer lo que fuera correcto según las tradiciones; Lan Wangji no se opuso a su nuevo
compromiso. Prometiendo comportarse bien y no buscar a Wei Ying, el joven Lan decidió
cerrar aún más su corazón en ese viaje, mirando en silencio aquellos lotos que comenzaban a
ponerse ligeramente rosados por la temporada.

"Los lotos" Dijo Lan Wangji, sin dejar de mirarlos mientras seguían avanzando en el barco:
"Sus flores, huelen bien".
Sonriendo por aquel comentario que sonaba desinteresado por parte de su pequeño hermano,
Lan Xichen solo le dio un par de palmadas en el hombro antes de responder: "Lo hacen,
iniciado el verano las flores blancas se vuelven ligeramente rosadas y huelen mejor, su
fragancia es mucho más fuerte. Eso me dijo A-Cheng el verano pasado, cuando recorríamos
el lago y pude oler su aroma".

Lan Wangji no respondió a estas palabas, volviendo a quedarse tan callado como era usual.
Este comportamiento no resulto extraño para su hermano, pues desde que su joven hermano
había salido de reclusión hacerlo hablar era mucho más difícil que antes, había días en los
que el joven maestro Lan no pronunciaba palabra y nadie decía algo al respecto.

Sin embargo aquel silencio no era normal para el joven Lan Wangji, pues aunque entendía
que aquel dulce y fragante aroma que lo inundaba todo venia de las flores, había algo más, un
aroma más dulce y puro que el de las flores, el cual mientras más avanzaban en dirección a
Yunmeng mas podía sentir. Proviniendo del interior de Lotus Pier, Lan Wangji supuso que
había una hermosa flor fragante en el interior, pensando que probablemente serian
decoraciones especiales por la celebración de su hermano, intentó no prestarle atención.

Sin embargo aunque intentaba distraerse y no pensar en eso, Lan Wangji no pudo evitar sentir
su cuerpo extraño, mucho más caliente de lo usual. Usando todo su autocontrol logro retener
sus feromonas, o lo más que pudo de ellas, que escapaban de su cuerpo sin su
consentimiento. Y sin entender que le pasaba, teniendo cientos de pensamientos al respecto,
considerando que tal vez estaba enfermo, intentaba dejarlo pasar aunque realmente estaba
preocupado.

No entendía que estaba reaccionando a las feromonas de Wei Wuxian, las cuales podía sentir
aun a pesar de la distancia.

***

Sonriendo encantado, Wei Ying ato el cinturón de Jiang Cheng alrededor de su cintura,
haciendo un hermoso listón al final.

"Esto es ridículo" Se quejó Jiang Cheng mirándose al espejo: "Tengo muchos atuendos de
gala, cientos de ellos ¿Por qué mi padre insistió en confeccionar uno especial?"

"A-Cheng, es tu fiesta de compromiso" Le recordó Wei Ying agachándose para arreglar los
bodes inferiores de la túnica: "Todos quieren que te luzcas representando a nuestra secta, y
eso estás haciendo".

Bufando molesto, dejándose hacer, Jiang Wanyin respondió: "Supongo".

Jiang Wanyin se había puesto una túnica nueva mandada a confeccionar únicamente para
aquel día. Con tonos violetas y bordados delicados de lotos, esta túnica tenía adornos de oro
real, además de un cinturón negro y una cinta roja alrededor de esta. Ese conjunto bastante
lujoso era también muy llamativo, resaltando la hermosura de Jiang Wanyin, un omega que
con su porte lo hacía lucir perfecto.
Siendo ayudado por Wei Ying a vestirse, Jiang Cheng arrugo ligeramente la nariz, girándose
en dirección a su hermano: "¿Por qué hueles así?"

"¿Así cómo?" Preguntó Wei Ying aun concentrado en arreglar bien ese traje.

"Tú sabes cómo imbécil ¿Estas soltando tus feromonas para molestarme? Te partiré las
piernas"

"A-Cheng" Se quejó Wei Ying, levantándose del piso para mirarlo con un puchero: "Te estoy
ayudando de buena gana ¿No puedes ser más amable? Te juro que no estoy soltando mis
feromonas, debes estarlo imaginando por los nervios".

Bufando molesto, Jiang Cheng le giro el rostro de mala manera, respondiendo: "No te
comportes de una forma indecente en mi celebración imbécil, no te lo perdonare si arruinas
mi boda".

Sonriendo ante las advertencias de su hermano, Wei Ying respondió: "Esta bien, está bien,
está bien... Prometo no arruinar tu boda".

Poniéndose detrás de Jiang Cheng, Wei Ying delicadamente comenzó a arreglar su larga
cabellera negra, haciéndole un peinado mucho más elegante del que el menor solía usar,
trenzando y haciendo un moño alto en su cabecera, dejando parte de su largo cabello negro
sobre su espalda, adornado el conjunto con un hermoso pasador. Terminando su trabajo, el
mayor rodeo el cuerpo del contrario para verlo al rostro, observando su expresión nerviosa y
sus mejillas sonrojadas al verse al espejo. Así que tomando la campana ceremonial de la secta
Jiang, agachándose para engancharla a su cinturón, Wei Ying pensó en seguirlo molestando.

"Bueno, técnicamente esta no es tu boda, así que..."

"¡Wei Wuxian!" Le gritó Jiang Cheng muy molesto: "Tú, omega indecente, te juro que si
haces una tontería..."

Riendo, Wei Ying dejo que Jiang Cheng lo insultara para aliviar su tensión, esperando así que
dejara de estar tan nervioso.

Cuando el menor finalmente estuvo listo, Wei Ying lo dejo solo en su habitación, mientras
que Jiang Cheng seguía preparando un regalo de compromiso para Lan Xichen, uno que
había hecho con sus propias manos y que le entregaría cuando ambos estuvieran a solas.

Aparentando normalidad, Wei Ying salió de la habitación de Jiang Cheng y camino


rápidamente a su habitación, donde se encerró a sí mismo y prácticamente cayó al piso,
jadeando y gimoteando con dolor.

"Maldición, maldición, maldición..." Se reclamó Wei Ying realmente agitado.

Aquella situación era preocupante, sintiendo el mismo sus propias fuertes feromonas las
cuales se esforzaba por contener, con su cuerpo sumamente caliente, y una humedad
incomoda que comenzaba a darse entre sus nalgas, Wei Wuxian se maldijo a si mismo por ser
un omega, pensando en que hacer.
Su celo se había adelantado. Se dio cuenta esa misma tarde cuando comenzó a tener los
primeros síntomas. Sintiendo su cuerpo adormecido y a su omega suplicando por tener un
alfa entre las piernas. Wei Wuxian se esforzó mucho por aparentar normalidad aquel día,
cambiando de atuendo varias veces para que no se notaran sus feromonas, sonriendo a pesar
de la fiebre, y ayudando en todo aun cuando se sentía sumamente enfermo.

Sin embargo no podía más, sintiéndose complemente derrotado, se arrastró hasta su cama,
donde se tiró y se quitó los pantalones. Poniéndose sobre su estómago en la cama, mordió
fuertemente las frazadas y las almohadas, guiando sus dedos a sus nalgas de forma
temblorosa. Buscando darse un ligero alivio, Wei Wuxian comenzó a estimular esa sensible
parte de su cuerpo por sí mismo, algo que había comenzado a hacer prácticamente desde que
tuvo su primer celo. Buscando aliviarse un poco, metiendo dos de sus dedos en su interior,
presiono todos sus lugares sensibles de una forma lenta, jadeando y gimiendo en susurros.

"Lan Zhan..." Susurró cerrando los ojos, tensando su cuerpo por el placer: "Más profundo...
Er Gege... Por favor más profundo..."

Moviendo suavemente las caderas, dejando que su instinto de omega saliera a flote, Wei Ying
se quedó estimulándose a sí mismo por varios minutos, llamando a su alfa entre gemidos,
intentando convencerse a sí mismo de que el menor estaba ahí con él.

Presionando un profundo punto en su interior al meter un tercer dedo casi a la fuerza, Wei
Ying ahogo un grito de placer contra su cama, finalmente teniendo su orgasmo y viniéndose
sobre sus frazadas. Con su cuerpo temblando y resintiéndose por el placer, Wei Wuxian
finalmente termino desplomándose sobre la cama, con sus piernas completamente húmedas
de sus propios fluidos y su entrada completamente preparada para tener un alfa.

"No más... Lan Er Gege por favor... Piedad..." Susurró Wei Ying, aun moviendo sus dedos de
forma tímida en su interior.

Aun deseoso se darse más placer a sí mismo, Wei Ying movió tres dedos en su interior de una
forma algo fuerte y profunda, llegando a estimular su punto sensible varias veces, sin
importar que se estuviera lastimando ligeramente al hacerlo.

"Lan Zhan... Lan Zhan me vengo... Detente... Er Gege para..." Gimotea suavemente,
intentando no hacer mucho ruido.

Introduciendo sus tres dedos de una forma obscena en su interior, estimulando sus puntos
sensibles con embestidas cada vez más fuertes, Wei Wuxian alcanzo nuevamente el orgasmo,
y suspirando completamente satisfecho, cayó exhausto sobre la cama, teniendo leves fuerzas
para sacar sus dedos de su interior con suavidad.

Los celos de Wei Ying solían ser largos, de más de un día a veces, algo que llegaba a ser
infernal para el omega. Aquello que curanderos especializados auguraban como una
representación de su fertilidad, que era mucho mayor por esos celos tan prolongados, para
Wei Wuxian solo significaban una molestia. Y aunque estos celos eran regulares, sucediendo
una vez cada 33 días, en aquella ocasión especial se había adelantado mucho, teniendo un
nuevo celo tan solo 10 días después del anterior.
Jadeando con la mente en blanco, sintiéndose mas satisfecho, Wei Ying escuchó el
movimiento fuera de su habitación algo sonrojado, oyendo como todos se movían de un lado
al otro por semejante festejo, realmente emocionados.

"Dicen que los jóvenes Lan llegaron hace unos pocos minutos a Yunmeng" Comentó un
joven fuera: "Están en su pabellón preparándose para el festejo".

"¿Eso significa que pronto comenzara la fiesta?" Pregunto su acompañante.

"¡Eso espero!" Dijo el primero, riendo con alegría: "El heredero de Yunmeng finalmente se
casara".

Wei Wuxian había aumentado sus ganas de satisfacerse a sí mismo cuando los jóvenes Lan
llegaron a Yunmeng, y pensando en eso, Wei Ying no pudo evitar pensar que se había venido
cuando estos cultivadores de Gusu habían estado cerca, algo que lo hacía sonrojarse mucho.

Recordando a Jiang Cheng y su compromiso, Wei Ying se forzó a sentarse en la cama, aun a
pesar de todo su malestar y debilidad.

Aquel era un día especial para su pequeño hermano, un día que Wei Ying no quería perderse
puesto que no iría a su boda. Y aunque durante un segundo, sentado en su cama mirando todo
el desastre que había hecho en sus frazadas, considero quedarse encerrado para pasar su celo
solo, su corazón dolió más que nada.

"Me perdí la boda de Shijie" Se lamentó Wei Ying en un susurro: "Igual me perderé la boda
de A-Cheng, pero..."

Mirando hacia la puerta, donde podía escuchar risas de personas emocionadas en el exterior,
recordando lo mucho que le había costado preparar todo con los demás sirvientes para el
banquete, y aquella hermosa túnica que tenía su hermano antes de que él se fuera. Solo
pensar en eso logro un nudo en la garganta de Wei Ying, que bajo la mirada tristemente.

"De verdad quiero verte en tu compromiso".

Respirando profundo para tranquilizarse, Wei Wuxian tomó una decisión, forzándose a
ponerse de pie a pesar de su gran debilidad en las piernas y el resto de su cuerpo.

"Correcto" Se dijo Wei Ying caminando a su armario: "Lo prometí, iré por A-Cheng".

Después de haberse masturbado, Wei Wuxian se sentía mejor, el calor había disminuido y su
omega estaba un poco más tranquilo. Sin embargo conociendo bien su cuerpo, sabía que no
tardaría en volver a perderse en el celo, así que apresurándose tomo una decisión.

Abriendo su armario, Wei Wuxian primero se limpió las piernas de todos los fluidos que tenía
encima con un paño. Observando esta fina tela entre sus dedos, pronto se dio cuenta de que
debido a los fuertes movimientos de sus dedos había lastimado ligeramente su interior y
había sangrado, después de todo era virgen, y aunque su interior palpitaba pidiendo algo más
grande y más duro que sus dedos, nunca había tenido algo en esa parte de su cuerpo. Y
aunque quitarse a sí mismo la virginidad por sus bruscos movimientos a la hora de
satisfacerse antes significaba mucho, ahora al saber que no tendría una pareja jamás eso ya no
le importaba al joven omega, el cual pensó que ya fuera con sus dedos o con un pene real,
daba completamente lo mismo.

Así que limpiando bien sus piernas y sus nalgas, Wei Wuxian rebusco entre todas sus túnicas
para encontrar algo de su agrado. Al provenir de una familia rica como la secta Jiang, Wei
Ying también tenía varias túnicas costosas para ocasiones especiales, sin embargo ese día
había arruinado varios conjuntos con sus feromonas, así que sus opciones favoritas no podía
usarlas.

Finalmente decidiéndose por unas túnicas negras con bordados dorados, que no era su
favorita pero aun así era elegante, Wei Wuxian se cambió otra vez esa noche, teniendo unas
nuevas túnicas limpias que no olían para nada a sus feromonas. Logrando recuperar el control
de sí mismo por esos instantes, camino al espejo de su habitación para arreglar su cabello,
dejándolo suelto sobre su espalda y solo unos cuantos cabellos recogidos en una coleta
simple, arreglando su flequillo con sus dedos y limpiándose el sudor de la frente.

Ahora lucia mucho mejor, sin estar muy sonrojado o agitado, incluso sus feromonas estaban
un poco más suaves, así que pensando bien, Wei Ying miro la mesa baja de su habitación,
donde por sí mismo se sirvió una taza de té de forma temblorosa. Al darse cuenta de que su
celo estaba en camino, Wei Ying inteligentemente fue a la cocina por hierbas medicinales,
esas que una vez e había dado Madam Yu para controlar su celo. Y aunque habían funcionado
casi siempre, en esa ocasión no eran de mucha ayuda.

Tomando teteras enteras de ese te medicinal desde la tarde, lo único que había conseguido
Wei Ying era controlar a su omega, no dejar que llenara sus pensamientos y lo nublara todo
como usualmente solía pasar sin aquel té. Pero el resto de los síntomas persistía, con sus
feromonas descontroladas y una temperatura que iba aumentando, además de esa incomoda
humedad en sus partes privadas y la sensibilidad en todo su cuerpo.

"Solo iré, me quedare para ver la ceremonia principal y regresare a encerrarme aquí" Se dijo
Wei Ying, tomando una quinta taza de este té: "Solo me quedare a ver a Jiang Cheng con Lan
Huan, solo a eso".

Tomando fuerza y valor para volver a levantarse, Wei Ying respiro profundamente para
tranquilizarse antes de salir de su habitación. Controlando bien sus feromonas, salió a los
pasillos de Lotus Pier, escuchando a lo lejos las campanas ceremoniales de la secta.

La celebración estaba por comenzar.


Capítulo 30.

Como en un sueño, Lan Wangji miró fijamente aquellas lámparas con forma de loto, que para
aquella especial ocasión adornaban todo el salón principal de la secta Jiang.

Con recuerdos vagos de algo que en su mente podía ser o no un sueño, Lan Wangji recordó
que una vez hace mucho tiempo, ese mismo salón también lo habían adornado con hermosos
faroles con forma de lotos y un gran banquete.

"Lan Zhan, abre la boca, déjame alimentarte..."

Cerrando los ojos con dolor, intentando concentrarse, Lan Wangji escuchó esas palabras en
sus oídos claramente. Con un tono de voz dulce pero nada afeminado, una vez su destinado
había estado sentado a su lado en ese mismo salón, celebrando a su lado que algún día se
casarían. Ni siquiera recordaba bien las palabras dichas por el mayor en ese entonces,
teniendo recuerdos borrosos que había querido olvidar sin lograrlo, solo podía repetir en su
mente una y otra vez aquello que no regresaría.

"Hanguang-Jun, te amo..."

Sentándose al lado de su hermano con preocupación, Lan Huan toco suavemente su hombro,
mirándolo a los ojos: "Wangji".

Forzándose a sí mismo a recomponerse, Lan Zhan abrió los ojos y miro a su hermano,
susurrando: "Mmm".

Después de desembarcar en los muelles de Yunmeng, toda la comitiva de la secta Lan fue
llevada a los aposentos que ocuparían por esas fechas tan importantes. Después de vestirse
con túnicas apropiadas, llevando los regalos que habían traído para el festejo, la pequeña
comitiva de los Lan se dirigió al salón principal de Lotus Pier.

"¿Te encuentras bien?" Preguntó Lan Xichen, mirando al menor tan serio.

"Si hermano".

Por el festejo, Lotus Pier tenía invitados muy importantes.

Desde la secta Jin el próximo líder había asistido junto a su adorada esposa, mientras que
acompañando a la pareja, Jin Guangshan y su mujer madam Jin visitaban Lotus Pier después
de mucho tiempo.

Por otro lado, recién casados y después de su luna de miel, el líder de la secta Nie había
asistido con su esposo, Meng Yao; siendo acompañados en esa ocasión especial por su
hermano menor y el siguiente en la línea de sucesión de la secta Nie, el joven cultivador Nie
Huaisang.
Y como invitados de honor estaba la secta Lan, representada por los jades de Gusu, Lan
Xichen y Lan Wangji, además de una pequeña comitiva de algunos ancianos de su consejo y
otros jóvenes alfa como acompañantes.

Todos los poderosos invitados al festejo estaban sentados en la parte frontal del salón, en
diferentes mesas para cada familia, conversaban amenamente entre ellos. Todos ellos excepto
Lan Wangji, el cual sentado en el centro de la mesa reservada para la familia Lan, al lado de
su deslumbrante hermano mayor, no había pronunciado palabra, luciendo frio y serio para
todos los demás.

"¿Estás seguro?" Insistió Lan Huan, dándose cuenta de que en realidad algo muy malo
sucedía con su hermano menor.

Sin necesidad de palabras, Lan Wangji asintió y volvió a mirar al frente, distrayéndose con
los adornos de aquel lujoso salón, perdiéndose en la pena y la infinidad de sus recuerdos.

El resto del gran salón estaba dividido en otras mesas un poco más pequeñas para el resto de
asistentes, ya fueran familias de Yunmeng menos pudientes que la secta Jiang, y miembros de
la propia secta que asistirían a la ceremonia. Teniendo entre esta una mesa que resaltaba para
todos los alfas, ubicada en un lugar central y muy cerca de las mesas principales, tenían un
lugar dispuesto únicamente para omegas los cuales reían y charlaban entre ellos.

Decidiendo rendirse con su didi, intentando ser comprensivo, Lan Xichen decidió no insistir
y volvió a su lugar en la mesa de los Lan, charlando amenamente con los padres de su
prometido y su propio prometido en la mesa contraria, amenizando el ambiente hasta que la
ceremonia empezara.

Pero de pronto todo el ambiente se puso tenso.

Abriendo las puertas de salón para el ultimo invitado importante, Wei Wuxian entró en el
lujoso salón de Gusu con una sonrisa amable, siendo iluminado por los faroles de lotos que
estaban sobre sus cabezas y resaltando entre todos los demás.

Y por un segundo, como si el tiempo se hubiera detenido, Lan Wangji miró de frente aquellos
ojos grises y brillantes, perdiéndose en el hermoso rostro de aquel que alguna vez había sido
suyo. Con las mismas hermosas facciones de siempre, el joven omega de Yunmeng había
cambiado su peinado a una media cola que dejaba parte de su hermoso cabello negro cayendo
por toda su espalda, con una figura mucho más formada por el paso del tiempo, que debajo
de sus túnicas negras y bien ceñidas a su cuerpo, le dejaron notar a Lan Wangji sus curvas y
sus músculos.

Desviando rápidamente la mirada, dándose cuenta de que Lan Wangji lo estaba mirando
fijamente, Wei Ying se apresuró a hacer reverencias de saludo a todos los miembros
importantes de su secta, para luego caminar rápidamente a esa mesa que estaba únicamente
destinada a omegas, sentándose justo al medio, uniéndose a la charla e intentando ocultar su
nerviosismo.

Al verlo entrar, Yu Ziyuan que conversaba amenamente con Madam Jin y Jiang Yanli, arrugó
la nariz, observando muy tensa a Wei Wuxian. Esta alfa, que estaba mucho más
acostumbrada que el resto a las feromonas de Wei Ying, fue la primera en darse cuenta.
Después de ella, Jin Zixuan y Jin Guangshan notaron las fuertes feromonas de un omega,
pero sin saber exactamente a quien pertenecían, hicieron algunas bromas al respecto, pues
aunque su alfa reaccionaba a ellas, ambos estaban vinculados a sus respectivos omegas así
que no tuvieron muchas complicaciones.

Por otro lado, los hermanos Nie que tenían alfas conocidos por ser menos perceptivos, no se
dieron cuenta en lo absoluto. Y Nie Huaisang, el cual vio a su gran amigo entrando,
solamente pudo saludarlo a la distancia batiendo ligeramente uno de sus abanicos, sabiendo
que por la ley no podía acercarse a saludarlo, por más que quisiera hablar con su querido
amigo omega, alguien a quien Nie Huaisang apreciaba mucho.

Y finalmente los Lan, una secta conocida por ser de alfas, también notaron cierto olor
distante a feromonas, que se perdían en el ambiente gracias al olor del incienso y las
distracciones por el banquete. Sin embargo respondieron de una forma más tranquila,
comentando el asunto entre ellos por unos segundos para luego pasar a otra cosa, después de
todo hablar de una persona a sus espaldas estaba prohibido en su secta, así que siguiendo sus
preceptos se comportaron de una forma honorable.

Todos ellos excepto Lan Wangji.

El joven maestro Lan por un segundo sintió que se ahogaba, presionando fuertemente la
mandíbula, no pudo apartar los ojos de Wei Wuxian. Sintiendo ese dulce aroma embriagante,
como si fuera un dulce exótico desprendiéndose del mayor, poco a poco le costaba más
controlarse. Con su alfa hecho un desastre y su mente comenzando a nublarse, Lan Wangji
tuvo que usar el mayor autocontrol que tenía para no soltar sus feromonas en ese instante y
saltar sobre Wei Wuxian, sintiendo aquella dolorosa situación como algo infernal, que no
sabía cuánto tiempo más podría aguantar.

Sabiendo que pronto iniciaría la ceremonia de su hijo, preocupada por Wei Wuxian que cada
vez se veía más sonrojado, Yu Ziyuan se alejó de sus compañeras omega para acercarse a Wei
Wuxian con disimulo. Fingiendo hablar con él, que se observó mucho más nervioso aun, la
señora de Yunmeng se sentó a su lado en la mesa, tomándolo suavemente de un brazo.

"A tu habitación, ahora" Le ordenó ella en un susurro.

"Por favor no" Pidió Wei Ying en otro susurro, sumamente suplicante: "Por favor, mi señora,
permítame ver la ceremonia, solo eso y me iré".

Mirándolo de forma severa, queriendo regañarlo y sin poder por el festejo a su alrededor, Yu
Ziyuan solo pudo reclamarle: "Maldito omega insensato, venir en medio de tu celo... Debería
castigarte, sirviente mal educado".

Bajando la mirada arrepentido, Wei Ying no supo que responder al respecto, sintiéndose
mucho más sensible que el resto de los días debido a su celo. Suspirando resignada, cediendo
a las suplicas del menor, Madam Yu fingió acercarse al oído del contrario para susurrarle
algo, y en un rápido movimiento mordió y lamio ligeramente el cuello del menor.
Soltando un suave jadeo, sintiendo sus piernas humedecerse de nuevo al tener un alfa cerca,
Wei Ying intento no reaccionar, con un leve temor y excitación al mismo tiempo.
Separándose casi al instante, Madam Yu oculto su suave mordida con el cabello suelto del
menor, y de esa forma lo marco con sus feromonas, intentando protegerlo con su aroma y
disipar un poco el olor de sus feromonas de celo. Tomando a Wei Ying de la barbilla, la mujer
lo obligo a mirarla a los ojos.

"Después de la celebración regresaras a tu habitación y te encerraras ahí" Le ordeno ella con


un tono de voz mucho más fuerte, usando su voz de alfa: "Me esperaras hasta mañana
¿Entiendes Wei Ying?"

Pestañeando algo confuso, solamente pudiendo asentir, el menor sonrió y respondió: "Si mi
señora".

"Cuídate mucho, pequeño inútil".

Sin decir nada más, una preocupada Madam Yu se levantó de la mesa de los omegas y volvió
a su lugar en las mesas centrales, dejando a un aturdido Wei Wuxian, el cual tardo un poco
más en reaccionar con ayuda de sus compañeros omegas, quienes se habían dado cuenta de
todo pero prefirieron no decir nada.

Aquella ligera acción que había pasado desapercibida por todos los dela fiesta, fue notada por
el joven Lan Er Gonzi, el cual furioso presionó fuertemente la mandíbula sintiendo su alfa
chillando en su cabeza por los celos. Sin apartar la mirada de Wei Ying ni por un solo
segundo, Lan Wangji observo como aquella mujer alfa había marcado a Wei Ying, ese omega
que sin importar el tiempo ni las circunstancias, Lan Zhan seguía reclamando como suyo.

En medio del desconcierto de su primer celo, con toda la confusión de la fiesta y todos los
alfas que lo rodeaban los cuales Lan Wangji no podía dejar de considerar una amenaza, el
menor tuvo que hacer un esfuerzo máximo para no reaccionar y no atacar a esa mujer alfa.
Soltando un suave gruñido al verla acercarse a su mesa, Yu Ziyuan solo lo miro de reojo,
ignorándolo elegantemente.

Luciendo tan serio como siempre ante la vista de todos los demás, Lan Wangji siguió
mirando a Yu Ziyuan, la cual de regreso con su omega intentaba lucir normal, mirando de
reojo también a Lan Wangji, intentando infundirle miedo a ese joven alfa para que no se
acercara a Wei Wuxian.

Volviendo a gruñirle al otro alfa de forma amenazante, Lan Wangji fue reprendido por su
hermano mayor, el cual lo tomó de un brazo y lo miró de forma severa pero silenciosa.
Volviendo ligeramente en sí mismo gracias a las acciones de Lan Huan, Lan Zhan respiró
profundo controlando a su alfa, para luego volver a mirar a Wei Ying de forma fija,
tranquilizándose ligeramente al hacer esto, pues aunque ese omega ya no era su pareja y en
ese mismo instante olía a otro alfa, solo ver su rostro le daba un paz increíble al menor.

Viendo que finalmente todos los invitados importantes están en sus asientos y que todos
estaban listos, las puertas principales del salón se cerraron y dejando de sonar las campanas
ceremoniales, se dio inicio al acto por la fiesta de compromiso.
Esperando a que todos los invitados guardaran silencio, Lan Huan fue el primero en
levantarse, usando unas túnicas de gala color jade que lucían extremadamente lujosas,
resaltaba entre el resto de los alfas Lan por su belleza, siendo mucho más guapo que su joven
hermano menor por su radiante sonrisa. Caminando hacia la mesa de los Jiang, tomo
delicadamente de la mano a Jiang Wanyin ayudándolo a levantarse, para luego caminar al
centro del salón junto a él, frente a las mesas de las sectas visitantes y los demás invitados.

Luciendo realmente avergonzado con las mejillas sonrojadas, Jiang Cheng le extendió sus
manos a Lan Huan, el cual con una sonrisa las sujeto entre las suyas, admirando lo hermoso
que se veía su prometido, se tomó su tiempo antes de comenzar a hablar.

La ceremonia de compromiso no era complicada, pero sí bastante significativa, así que


recordando las palabras que tanto había practicado para la ocasión en su secta, Lan Huan
comenzó a hablar: "Lideres de las sectas, cultivadores y demás invitados, mi querido A-
Cheng".

Sonrojándose más al escuchar a su alfa pronunciar su nombre con un tono mucho más dulce
frente a todas las personas de su secta, Jiang Wanyin miró de reojo a Wei Ying, que le sonrió
intentando darle confianza.

"He venido hasta Yunmeng con el objetivo de pedir tu mano, frente a tus padres y
representantes de mi secta, quiero pedir que el periodo de cortejo entre nosotros sea
terminado y que te permitan volverte mi esposo" Pidió Lan Huan con un sonrisa emocionada,
sin dejar de mirar los ojos violetas de Jiang Cheng: "En todo este tiempo que he pasado a tu
lado, conociéndote, aprendiendo de ti y amándote; me he dado cuenta de que deseo más que
nada volverme tu alfa, casarme contigo, tener una vida prospera a tu lado, y ser un gran líder
de mi secta junto a ti".

Haciendo una suave reverencia para besar las manos de Jiang Cheng, esa fue la señal que los
ayudantes de la secta Lan tuvieron para tomar los pesados cofres que habían traído consigo
para presentarlos a los líderes de la secta Jiang. Abriendo estos pesados contenedores de
madera, dejaron a la vista de los asombrados invitados varias riquezas entre cerámicas y
piedras preciosas en su interior, al igual que un cofre únicamente dedicado a preciosas vasijas
negras y rojas que contenían el mejor licor de Gusu: La sonrisa del emperador.

Este acto que se daba para demostrar el poder económico y la capacidad de poder mantener al
omega por parte de la familia del alfa, se presentaba a la familia del omega y principalmente
al alfa representante de este, buscando su aprobación para continuar con la ceremonia. Siendo
Madam Yu la encargada del omega Jiang Cheng, fue la que se tomó su tiempo para observar
aquellos hermosos cofres recién tallados con motivos de ambas sectas, tanto Lan como Jiang,
observando sus tesoros y ofrendas para su secta.

Bufando ligeramente al ver los regalos de la secta Lan, Jin Guangshan susurró: "No se
compara con lo obsequiado por la secta Lanling Jin, cofres llenos de oro y jade que
regalamos para tu compromiso..."

"Padre..." Lo regaño Jin Zixuan en un susurro, sabiendo lo ofensivas que eran aquellas
palabras para la secta de alfas Lan.
La secta Jin, a pesar de ser la segunda secta más pudiente de la región, era una familia
conocida por dar omegas. Jin Guangshan y Jin Zixuan eran los primeros alfas en
generaciones, así que con sus dotes a sus respectivos prometidos habían sido más que
generosos, gastando una fortuna que muchas otras sectas no podían soñar en poseer.

Sin embargo los Lan no se quedaban atrás, dando obsequios costosos pero que tenían detalles
finos, que hacían dudar ligeramente de su valor real, eran los elegantes presentes que
cuidadosamente habían elegido para la secta Jiang, algo que no fue pasado por alto por la
detallada vista de Madam Yu. La mujer alfa sonrió complacida y satisfecha, sin decir nada,
solamente dio un par de aplausos para demostrar lo contenta que se encontraba, permitiendo
que la ceremonia continuara.

Soltando las manos de Jiang Cheng con cuidado, Lan Huan se giró a la respectiva mesa de
sus suegros e hizo una elegante reverencia, para luego pedir: "Líder de la secta Jiang
Fengmian, señora protectora de Yunmeng, por favor permítanme tomar la mano de su hijo
Jiang Wanyin para hacerlo mi esposo".

Dando por terminado su discurso, Lan Xichen se puso nuevamente erguido para dar paso a su
prometido omega, el cual también debía decir unas cortas palabras. Luciendo nuevamente
nervioso, pero sin vacilar, Jiang Cheng también se giró en dirección a la mesa perteneciente a
la secta Lan, y mirando a los ojos a los líderes comenzó a hablar.

"El deber de un omega es encontrar un alfa y formar una familia, sin embargo junto a Lan
Xichen yo aprendí que puedo ser más que solo un padre progenitor, quiero cuidar de la secta
Lan como si fuera mi familia, y quiero ser un buen líder al lado de Lan Huan" Respirando
profundo, Jiang Cheng hizo una reverencia también, para luego pedir: "Es de esta manera que
siguiendo las tradiciones, renuncio formalmente y frente a todos ustedes a mi familia y a mi
secta, a mi derecho como heredero de Yunmeng y Lotus Pier; solo por el amor que profeso a
Lan Huan y mi deseo de casarme con él. Líderes representantes de la secta Lan, Hanguang-
Jun, por favor suplico que me dejen pertenecer a su familia desde ahora, tomando mi lugar
como el esposo de Lan Huan, el próximo líder de la secta Gusu Lan".

Sin necesidad de deliberaciones o más palabras, fue Lan Wangji quien solo dio un par de
movimientos afirmativos con la cabeza en representación de su secta, aceptando así que Jiang
Cheng se uniera a los Lan y legalmente dejara de ser un Jiang.

Sonriendo realmente contento, cruzando un par de miradas con Lan Huan, Jiang Cheng
volvió a hacer una reverencia agradecida a todos los líderes de las sectas, sabiendo que
finalmente estaba comprometido con Lan Xichen. Pronto los aplausos de alegría llenaron el
salón principal de la secta Jiang, y dando por terminada la ceremonia, Lan Huan se acercó a
su joven prometido, tomándolo delicadamente de la cintura para pegarlo a su cuerpo.

Con el corazón desbocado por la emoción, sintiéndose realmente nervioso aun después de
haberse preparado mentalmente para ese importante suceso, Jiang Cheng cuidadosamente
abrazo a su alfa por el cuello. Mirándose ambos a los ojos por unos segundos, finalmente
unieron sus rostros en su primer beso frente a todas las sectas.

Al ver esto, el primer beso de su avergonzado hermano con el radiante y feliz Lan Xichen,
Wei Wuxian aplaudió mas fuerte lleno de alegría, viendo realmente contento como su
pequeño hermano finalmente había cumplido el sueño que tanto había deseado.

Y aunque de igual forma aplaudía con alegría al ver el dulce beso de amor que Jiang Cheng y
Lan Xichen se habían dado, Lan Wangji no había dejado de mirar a Wei Ying ni por un solo
segundo, pensando amargamente en que ambos jamás podrían tener un momento semejante.

Aunque se amaban más que cualquier otra pareja presente en esa fiesta, Lan Wangji sabía que
él nunca tendría una fiesta de compromiso con hermosos faroles de loto y cientos de aplausos
emocionados con su "primer beso", nunca tendrá una boda con un traje rojo y dorado con su
dulce omega, y su futuro en la secta Lan al lado de Wei Ying se había desvanecido para
siempre.

Y mirando a Wei Ying aplaudiendo con una gran sonrisa, Lan Wangji se lamentó observando
a su destinado.

Ya no quedaba nada para ellos.


Capítulo 31.

Cuando los aplausos cesaron y la pareja de ahora prometidos oficiales terminó su beso, se dio
por concluida la ceremonia y se pasó al banquete. Dejando que Lan Huan regresara a su
asiento en la mesa Lan ahora acompañado por Jiang Cheng, el cual desde instante en todos
los eventos importantes entre sectas debía tomar su lugar al lado de su esposo con los Lan, al
igual que su hermana con los Jin, fue la señal que los sirvientes esperaron para comenzar a
servir la comida a todos los invitados.

Intentando no ser muy obvio al huir a su habitación, Wei Ying decidió esperar a que sirvieran
el banquete para retirarse de inmediato, poniendo de excusa que se encontraba indispuesto e
intentando pasar desapercibido con el resto de los sirvientes de la secta.

De manera muy inteligente, dejando que los sirvientes se encargaran de servir sus platos, Jin
Guangyao miró a Wei Ying al otro lado del salón, notando por sus movimientos corporales
que estaba preparándose para irse, algo que lo hizo sonreír.

"Muchas felicidades Hanguang-Jun" Dijo Meng Yao, con un tono dulce y suave: "He
escuchado sobre tu nuevo compromiso con la secta Wen, nuevamente felicidades, que tengan
un matrimonio prospero".

Aun sentado en la mesa de los omegas, Wei Ying no pudo evitar perder su sonrisa al escuchar
esas palabras, girando rápidamente para ver la mesa Lan. Sentado prácticamente al lado de
Jin Guangyao, por la cercanía de la mesa de la secta Nie con la mesa de los Lan, Lan Wangji
no pudo ignorar esas palabras, haciendo una reverencia y agradeciendo así las palabras del
esposo del líder de la secta Nie.

"Gracias" Respondió Lan Wangji con sequedad, sabiendo que su destinado también lo había
escuchado por el dolor que tenía su alfa en ese instante.

"Es bueno saber que sectas prominentes que antes estaban enemistadas ahora se encuentran
más unidas que nunca" Comentó Meng Yao, atrayendo de mala manera la atención de todos
los miembros de la secta Lan: "Con este compromiso ustedes traerán una unión muy
necesaria, desde la tragedia ocurrida hace casi 20 años la secta Lan y la secta Wen no han
tenido reuniones diplomáticas ¿Me equivoco?"

Decidiendo salvar a su pequeño hermano, sabiendo que este se encontraba fuera de control
por un motivo que desconocía, Lan Xichen dejó de hablar con Jiang Cheng para responder
aquella pregunta de su preciado amigo: "Estas en lo correcto A-Yao, la secta Lan se encuentra
muy agradecida por la posibilidad de resolver malentendidos del pasado con este
matrimonio".

"Eso es genial A-Huan" Respondió Meng Yao riendo con dulzura: "Espero que este
matrimonio sea de provecho para ambas sectas, y que Lan Er Gonzi finalmente pueda
encontrar un esposo adecuado y educado para procrear a sus hijos, alguien de un buen estatus
y un buen apellido, no solo un sirviente".
Todas las sectas se habían enterado de los pormenores de la ruptura de Lan Wangji y Wei
Wuxian, y aunque no muchos habían entendido la importancia de la cinta manchada, todos
supieron que Wei Wuxian había insultado a la secta Lan de forma imperdonable, hasta tal
punto que Lan Qiren lo había declarado una persona no grata en el Receso De Las Nubes.

Notando aquella ofensa dicha por Meng Yao, Jiang Wanyin soltó un improperio en un susurro
antes de comenzar a hablar: "Jin Guangyao, me parece de muy mala educación que insulte de
esa manera a mi secta y a mi hermano, si quiere que hablemos de buen estatus puedo
recordarle quien es usted y donde estaba hace un par de años, podrá compararse con Wei
Ying entonces. Por favor discúlpese".

Sin ofenderse en lo absoluto, sonriendo con cierta malicia, Jin Guangyao respondió: "A-
Cheng, solo quiero recordarte que esta ya no es tu secta, y técnicamente no es tu hermano.
Me disculparé con los líderes de la secta Jiang o con alguien perteneciente a la secta Jiang
después; te recomiendo que comiences a adaptarte a los Lan lo más pronto posible, aunque tú
no eres muy elegante o brillante ¿Me equivoco?"

Furioso, Jiang Cheng presiono sus manos en puños, mirando al contrario fijamente: "Tu..."

Temiendo lo que su prometido podría decir, Lan Xichen intervino con rapidez, tomando a
Jiang Wanyin de la mano, sonriéndole e intentando hacer que pasara el mal rato: "A-Cheng
¿Quieres que bebamos un poco de licor?"

Dándose cuenta de sus intenciones, sabiendo que estaba protegiendo a Meng Yao, Jiang
Cheng apartó su mano de la de su prometido de mala manera, mirándolo realmente furioso:
"Bebe tu solo".

Sin decir nada más, se levantó de su asiento y fue a la mesa de sus padres, fingiendo ir a
hablar con ellos alegremente por su compromiso, intentando así ocultar su dolor y su enfado
con su alfa.

Sonriendo de nuevo al ver esto, Jin Guangyao se dio por satisfecho y decidió centrarse en su
esposo. Nie Mingjue, el líder de la secta Nie, había rechazado el licor para la mesa entera de
los Nie y extrañamente no había corregido a Jin Guangyao. Notándose extrañamente dulce
con este, el líder de los Nie únicamente le pidió al menor en un susurro que fuera más
educado, para luego besar sus labios con cariño y darle un suave abrazo.

Aun con las palabras crueles de Jin Guangyao en su cabeza, sin importarle si lo había
insultado o no, pensando únicamente en el compromiso de su alfa, a Wei Ying no le importó
nada y rompió a llorar. Intentando que nadie notara su dolor, sin poder esperar más, se retiró
rápidamente de la mesa de aquellos extrañados omegas Jiang, llamando la atención de todos
al pasar en medio de los demás sirvientes, Wei Wuxian salió a toda prisa del salón para ir a
sus aposentos, tal y como el alfa de Yu Ziyuan le había ordenado.

Sintiendo un profundo dolor al ver a su destinado irse, Lan Zhan quiso levantarse para
seguirlo, siendo detenido nuevamente por su hermano, el cual lo tomo de un brazo e impidió
que se pusiera de pie, negando suavemente con la cabeza a sus intenciones. Pudiendo
únicamente mirar con desesperación la puerta entreabierta por donde su omega había salido,
Lan Zhan también quiso llorar, controlándose a duras penas debido a que se encontraban en
tan importante acontecimiento.

Varios minutos después, cuando el banquete ya había sido servido, Jiang Cheng tuvo que
regresar de mala gana a la mesa de los Lan, donde discutiendo un par de minutos con su
prometido, fue finalmente tranquilizado por Lan Xichen, quien logró calmar a su omega y
volver a tener una festividad tranquila.

En medio de amenas conversaciones entre las 4 sectas presentes y los invitados, en las cuales
Lan Zhan no participaba y Jiang Cheng se negaba a hablar con Meng Yao, se escucharon
gritos en el exterior. Siendo el primero en darse cuenta, escuchando como todo Lotus Pier fue
invadido por gritos de personas asustadas, Lan Xichen tomó a Jiang Cheng de a cintura
pegándolo fuertemente a su cuerpo, preparado para defenderlo. Mientras que Lan Zhan,
recordando a Wei Ying y que este se había retirado solo a sus aposentos, se puso de pie
asustado, dispuesto a ir con el omega para defenderlo.

Sin embargo así como los gritos habían irrumpido en el salón, pronto cesaron y un sirviente
de la secta entro apresurado para informarle a los líderes Jiang lo que había sucedido.

Acercándose a la mesa de la secta Jiang apresurado, un cultivador alfa bastante mayor,


comenzó a informarle a los líderes lo sucedido: "Líder Jiang, mi señora; varios aterrados
pobladores de Yunmeng solicitan la ayuda de la secta, aseguran que varios fantasmas de
viento han irrumpido en las costas en medio de la festividad y los han atacado".

"¿Hay heridos?" Preguntó Madam Yu, siendo la primera en reaccionar.

"No lo sabemos mi señora, solo hemos permitido entrar a los pobladores asustados que llegan
del exterior a Lotus Pier, no hemos avanzado más allá del muelle" Respondió el asustado
cultivador.

Sin perder más tiempo, poniéndose de pie rápidamente, Yu Ziyuan salió de aquel salón
especial acompañada de sus ayudantes de elite, dos jóvenes alfa que eran de la propia secta
de Madam Yu y que habían entrenado con esta en la niñez. Viendo el proceder de su esposa,
Jiang Fengmian dio un par de órdenes a sus consejeros antes de salir igualmente, dispuesto a
ver los daños ocasionados.

Parando por completo la festividad, los líderes de las diferentes sectas presentes no dudaron
en hacer lo mismo, saliendo acompañados de sus demás cultivadores y preparados para
luchar. Dejando en el salón a omegas y a otros invitados que no sabían pelear, por varios
minutos se sintieron en una gran zozobra, hasta que finalmente los líderes de las sectas
regresaron y se reunieron en las puertas del salón principal de Yunmeng a discutir.

Debido a que era una reunión únicamente de líderes y consejeros, cultivadores de las sectas y
jóvenes alfas como Nie Huaisang y Lan Wangji fueron enviados nuevamente dentro del salón
a esperar nuevas indicaciones. Mientras todos hablaban asustados en susurros, observando a
lo lejos a los líderes deliberando, Jiang Cheng se quedó en el centro del salón, observando
como Lan Wangji pasaba de largo y volvía a la mesa de los Lan, mientras su Shijie hablaba
con su suegra aun en la mesa de los Jin entre susurros, y uno de sus más grandes amigos se
acercaba a él para hablarle.
"¿Sigues refunfuñando A-Cheng?" Preguntó Nie Huaisang, acercándose a su enfadado
amigo.

"¿Refunfuñando? ¿A qué te refieres?"

"Meng Yao..."

Sin poder ocultar su descontento al escuchar ese nombre, Jiang Cheng rodó los ojos con
molestia, observando a Nie Huaisang reírse de él, tomando un abanico de sus túnicas para
abrirlo y comenzar a jugar con él.

"Es tu compromiso, venga, puedes insultarlo frente a mi si quieres".

Mirándolo con desconfianza, Jiang Cheng respondió: "Es de tu secta ahora".

Asintiendo a sus palabras, Huaisang respondió: "Lo es, pero no es mi esposa, es la esposa de
mi hermano. Tu si eres mi amigo".

Ya sin poder aguantar más, Jiang Wanyin finalmente dijo: "Es un inconsciente, maldito,
desgraciado, omega asqueroso..." Siguió insultando Jiang Cheng furioso, mirando enfadado a
su amigo Nie Huaisang.

Nie Huaisang, el segundo alfa de la secta Nie, era un conocido amigo de los hermanos de
Yunmeng. Debido a la cercanía entre Yunmeng y Qinghe, el joven Huaisang había pasado
gran parte de su infancia en Yunmeng, pues gracias a la pronta muerte de sus padres su
hermano se convirtió en líder a una corta edad, y pidiendo ayuda a otras sectas como los Wen
con quienes antes tenían un compromiso y los Jiang que eran sus vecinos más cercanos, Nie
Huaisang era dejado en estas sectas por un tiempo corto mientras Nie Mingjue se encargaba
solo de ciertos asuntos de su secta. Desde ese entonces el joven alfa se había vuelto muy
amigo de todos en Lotus Pier, pero mucho más de Jiang Cheng y Wei Wuxian, quienes lo
vieron con buenos ojos por ser un alfa diferente el cual no los traba de forma descortés.

"Tranquilo A-Cheng" Pidió Nie Huaisang batiendo ligeramente su abanico contra su rostro:
"Debes ser paciente con él".

"¿Paciente?" Respondió Jiang Cheng con un bufido de indignación: "¿Por qué debería ser
paciente con la perra de Meng Yao?"

El joven Huaisang, el siguiente heredero al liderazgo en Qinghe, era conocido por ser un alfa
bastante débil. Sin tener un buen nivel de cultivo y con un carácter bastante manso, era
completamente opuesto su hermano mayor, que se caracterizaba por su brutalidad y por su
fuerza, siendo uno de los mejores cultivadores y líderes más respetados. Pero todo aquello
que a Huaisang le faltaba respecto a fuerza en el cultivo, el joven lo compensaba con una
inteligencia privilegiada, algo de lo que solo los hermanos de Yunmeng se habían dado
cuenta.

Respirando profundo, dudando ligeramente antes de decir la verdad, Nie Huaisang finalmente
respondió: "A-Yao esta embarazado".
Olvidando su enojo por un instante, mirando a Nie Huaisang incrédulo, Jiang Cheng
respondió: "¿Embarazado? Pero si solo han pasado 7 meses desde su boda..."

"Mi hermano no pierde el tiempo".

Riendo por aquella broma estúpida dicha por su amigo, Jiang Cheng respondió: "O los Jin
son sumamente fértiles, como todos dicen".

Era bien conocido el rumor de la fertilidad de la familia Jin, con omegas con largos celos y
alfas con una capacidad de embarazo muy alta. Razón por la cual Jin Guanghsan tenía varios
hijos ilegítimos, siendo Meng Yao uno de ellos y del que más se hablaba.

"Si es por eso, todos lo saben" Dijo Nie Huaisang bastante desinteresado: "Pero mi hermano
tampoco pierde el tiempo, deberías escuchar lo ruidosos que son. Meng Yao tiene celos
largos y seguidos, dos al mes a veces; mi hermano me dijo que en su luna de miel paso una
semana entera en celo gracias a sus feromonas, increíble".

"Increíble que en ese pequeño cuerpo quepa tanto" Bromeó Jiang Cheng, permitiéndose ser
tan sucio como quisiera: "¿Realmente tu hermano puede entrar en él?"

"Supongo que sí, debe ser más placentero, ya sabes... Más estrecho porque es pequeño".

"¿Estás diciendo que yo no seré bueno solo porque soy alto?" Cuestionó Jiang Cheng.

"Supongo que podremos preguntarle a Lan Xichen de aquí a un año" Respondió Huaisang
con una sonrisa: "Según tu paranoia tu querido prometido los tuvo a ambos, así que sería un
buen juez para decir cual fue mejor".

Sintiéndose ofendido con aquellas palabras, aun sabiendo que era un juego, Jiang Cheng le
dio un fuerte golpe en el brazo al alfa, para luego regañarlo: "Idiota, eso no fue gracioso".

Quejándose entre risas, masajeándose el brazo adolorido, Nie Huaisang respondió: "Si lo fue,
muy gracioso..."

"Cierra la boca, te voy a matar..."

Temiendo ligeramente por su vida, Nie Huaisang retrocedió del enfadado pero divertido Jiang
Cheng, el cual después de un rato igualmente se puso a reír, admitiendo que si había sido
gracioso, aunque molesto al mismo tiempo.

Con el ambiente nuevamente relajado, Nie Huaisang se atrevió a preguntar: "¿Cómo esta
Xian Xian?"

Desde la ruptura del compromiso entre Wei Ying y Lan Wangji, la entrada a Yunmeng se le
había prohibido a Nie Huaisang. Debido a la estancia de un omega soltero impedido por la
tradición en Lotus Pier, la entrada de muchos alfas se había restringido para protegerlo, y
aunque Huaisang seguía teniendo contacto con Jiang Cheng debido a las diferentes
conferencias y reuniones en las que habían coincidido, ese alfa tampoco había visto a Wei
Wuxian en más de 4 años.
"Está bien, supongo" Dijo Jiang Cheng encogiéndose de hombros: "Fue difícil para él hoy,
espero que este mejor mañana".

"Es raro porque... Pude verlo y lo saludé, pero es la primera vez en mi vida en la que no pude
acercarme a hablarle y bromear con él. Es ridículo, esta tradición estúpida toma a todos los
alfas como posibles violadores ¿Realmente crees que yo podría abusar de Wei Ying? Antes
de intentarlo él podría matarme".

"A ti podría, pero a otro alfa..." Respondió Jiang Cheng encogiéndose de hombros: "Le daré
tus saludos, y si quieres decirle algo mas también. No por que tengas prohibido verlo para
siempre solo por ser un alfa significa que dejaremos de ser amigos, los tres siempre nos
llevaremos bien".

"¿Puedes decirle que me regrese mis libros 'Especiales'?" Preguntó Nie Huaisang.

Riendo de forma culpable, Jiang Cheng se sonrojó mucho y tuvo que desviar la mirada,
sintiéndose sumamente avergonzado. Siendo sus únicos amigos, Nie Huaisang había
compartido sus libros pornográficos destinados a alfas con los jóvenes Jiang, esos libros que
su hermano le había comprado para calmar sus celos habían fascinado a ambos jóvenes
omegas, tanto así que Wei Ying pedía constantemente que Huaisang le trajera algunos
prestados en su recurrentes visitas a Lotus Pier. Y sin saberlo, la última vez que lo vio, Nie
Huaisang le entregó un par de libros que Wei Wuxian nunca pudo devolverle.

Aquellos libros no solo les habían enseñado a los jóvenes omegas como seria su primera vez
con sus alfas, también había logrado su cometido creando cierta excitación en ellos, que
usaban muchos de ellos en sus celos para tranquilizarse. Así que sintiéndose culpable por
haberlos leído varias veces también, Jiang Cheng solamente pudo reír, mirando a su amigo de
forma acusadora.

"Pervertido".

Encogiéndose de hombros aceptando la acusación del contrario, Huaisang respondió: "No


tanto como Xian Xian, él es insuperable".

Volviendo a reír algo avergonzado, Jiang Cheng le dio otro golpe a Nie Huaisang. Y de forma
curiosa se giró a ver la puerta del salón abierto, donde los alfas seguían reunidos hablando
entre ellos de lo sucedido. Fijando su mirada en Lan Xichen se sintió enfadado por un
momento, pues después de enterarse de que Meng Yao estaba embarazado, estaba
completamente seguro de que Lan Huan lo sabía y por eso lo había defendido tan rápido en
su pelea. Lan Huan lo sabía y no le había dicho a Jiang Cheng.

"A propósito" Dijo Nie Huaisang con curiosidad: "¿Por qué Xian Xian estaba soltando sus
feromonas de esa manera?"

"¿Feromonas?"

Asintiendo, el alfa respondió: "Si, pude sentirlas toda la ceremonia e incluso después de que
se fue, muy fuerte ¿Algo le pasó?"
Recordando todos los acontecimientos que se habían dado esa misma tarde, en los que él
mismo había notado esas cosas "raras", Jiang Cheng se sintió preocupado, desviando su
mirada ahora a la mesa de los Lan, donde de la misma forma silenciosa de siempre, Lan
Wangji estaba en silencio.

A punto de responder, Jiang Cheng guardó silencio, observando como los alfas volvían a la
sala en silencio y se acercaban a sus respectivas sectas para hablar con ellos. Acercándose a
Jiang Cheng, Lan Xichen lo tomo suavemente de la mano decidiendo explicarle la situación.

"Los fantasmas de aire regresaron al bosque, a esa parte peligrosa fuera del acantilado"
Explicó Lan Xichen intentando relajar a su prometido: "Los rastreamos hasta ahí, pero
hubieron varios heridos en Yunmeng, debemos hacer algo".

Volviendo a su mesa con su hermano, Nie Huaisang también escuchó lo que este tenía que
decirle, hablando con mucha seriedad. Mientras que Lan Wangji, junto con otros miembros
de su secta caminaron hacia Lan Xichen y Jiang Cheng, esperando así obtener algunas
respuestas.

"Lo entiendo" Dijo Jiang Cheng con cierto desagrado: "Fue lindo mientas duro, una linda
fiesta".

Bastante sorprendido de que su fiesta finalmente se hubiera arruinado, y sin ser culpa de Wei
Wuxian de una forma increíble, Jiang Cheng supo que no tendría con quien enfadarse o
reclamar, así que solo hizo un puchero, sabiendo que todo había terminado mucho antes de lo
debido y en tan tristes circunstancias.

"Dije que algo debía hacerse, no que debía hacerlo" Dijo Lan Xichen intentando consolar a
su omega: "Podría quedarme contigo, después de todo es nuestra fiesta de compromiso, nadie
me culparía por ello".

Sonriendo de forma amable, notando lo dulce de su prometido, Jiang Cheng terminó


negándose: "Seria egoísta de mi parte pedirlo. Todos los líderes irán, la secta Lan también
debe tener a su líder peleando. Tenemos mucho tiempo hasta que regreses a Gusu para pasar
juntos, no te angusties".

"Te lo compensare" Prometió Lan Huan, acariciando suavemente una de las mejillas del
menor.

"Lo sé".

Desviando la mirada con desagrado ante tal muestra de cariño, Lan Wangji se quedó algo
apartado de la pareja, observando de reojo como Lan Xichen besaba cariñosamente a un
avergonzado Jiang Cheng, despidiéndose así de este. Girándose finalmente a su secta para
delegar deberes en esa misión tan repentina, Lan Xichen se detuvo al llegar frente a su
pequeño hermano, y apartándolo ligeramente lo miró con mucha preocupación.

Lan Huan aún no estaba seguro de lo que le sucedía a Lan Wangji, sabía que su hermano
estaba sumamente extraño, y más que eso, lucia enfermo. Pero además de lo mencionado, ni
siquiera pasaba por su cabeza que el pequeño Lan Er Gonzi podía estar pasando por su
primer celo, así que pensando que sería algo ocurrido por el viaje o por ver a Wei Wuxian
después de tanto tiempo, Lan Xichen decidió proteger a Lan Zhan.

"Wangji" Dijo Lan Huan mirando a su hermano: "Será mejor que te quedes esta noche en el
pabellón destinado a los Lan en Lotus Pier, descansa".

Sin entender el razonamiento de su hermano, intentando convencerse a sí mismo de que


estaba bien, Lan Zhan replicó: "Hermano, no hay razón para esto, yo puedo acompañarlos".

Prefiriendo poner una excusa antes de decirle sus verdaderas razones al menor, sin querer
mencionarle lo mal que se veía, Lan Huan respondió: "Wangji, mañana partirás a la
residencia Qishan Wen a primera hora para conocer a tu prometido. Sera un viaje tan largo
como el que recorrimos desde Gusu hasta Yunmeng, es bueno que descanses".

Recordando que debía ver a Wen Xu y que partiría al día siguiente, Lan Zhan suspiro
resignado, decidiendo aceptar las palabras de su hermano: "Entiendo hermano, descansaré".

"Cuídate mucho, Wangji".

Haciendo una reverencia de agradecimiento al mayor, Lan Zhan se despidió de los miembros
de su secta y decidió salir de aquel salón para ir al pabellón donde dormiría. Viendo al menor
irse, Lan Xichen habló con un par de sirvientes que se quedarían esa noche en Lotus Pier,
pidiendo que vigilaran bien la habitación de Lan Wangji y que no lo dejaran salir o hacer algo
indebido.

Escuchando a medias la conversación que su prometido había tenido con Lan Wangji, Jiang
Cheng regreso con los miembros de su antigua secta, observando como sus padres eran los
más atareados designando funciones, hablando apresuradamente entre ellos.

"... Necesitare un par de vigilantes en la habitación de Wei Ying" Pidió Madam Yu: "Y otros
cerca del pabellón de los Lan".

"¿Alguna razón en específico para esto, mi señora?" Preguntó Jiang Fengmian curioso: "Esta
noche nos faltara personal en la cacería nocturna, no quisiera que cultivadores capaces se
quedaran como simples guardias".

Sin querer explicar nada en medio de tantos invitados, Yu Ziyuan respondió: "No pido
cultivadores, solo algunos sirvientes. Wei Wuxian se ha sentido indispuesto esta noche, no
quiero que salga de sus habitaciones intentando hacerse el héroe y cause una desgracia en el
bosque, mantengámoslo encerrado esta noche".

Mirando con desconfianza a su alfa, Jiang Fengmian dijo: "Esta bien, mi señora".

Sintiéndose curioso con el proceder de su madre, Jiang Wanyin también guardó respetuoso
silencio, esperando algo alejado de la multitud a que ellos dejaran de discutir. Finalmente,
cuando todas las ordenes estuvieron dadas, Madam Yu dio su última petición: "Pido que
cuiden muy bien a mi omega en esta cacería, yo no asistiré, me quedare cuidando Lotus
Pier".
Bastante extrañados por esta actitud, dejando que un omega representara a la secta en medio
de una peligrosa situación, todos los cultivadores alfas se miraron entre ellos, mientras que
Jiang Fengmian solo pudo mirar a su esposa fijamente.

"Es mi última palabra" Dijo Madam Yu, terminando con aquella reunión: "Sean precavidos, y
regresen pronto".

Haciendo reverencias para la señora de Yunmeng, todos los cultivadores de la secta siguieron
a Jiang Fengmian al exterior, mientras que Madam Yu se acercaba su hija y a Madam Jin,
decidiendo cruzar algunas palabras con ellas antes de ir con Jiang Cheng. El joven Wanyin,
bastante aburrido observando como todo había terminado, miró a su amigo Huaisang con su
hermano discutiendo en voz baja.

"Tu irás" Ordenó Nie Mingjue, mirando de forma severa a su hermano menor.

Nervioso, sin querer ir a esa peligrosa cacería nocturna en un lugar tan aterrador como el
bosque de Yunmeng, Nie Huaisang intentó negarse: "Pero hermano, no me he sentido bien
después del viaje, estoy mareado, enfermo..."

Sin prestarle atención a las palabras engañosas del menor, Nie Mingjue se negó: "¿Acaso
estás jugando? Los fantasmas de aire son sumamente difíciles de encontrar y luchar con ellos,
debes entrenarte y conocerlos, podría ser tu única oportunidad en la vida para aprender".

"Pero hermano...".

Sin escuchar más, Nie Mingjue ordenó: "Ve por tu sable".

Cada vez más desesperado, sin querer ir, Nie Huaisang suplicó: "Hermano, por favor..."

"Ve por tu sable, ahora".

Refunfuñando de manera molesta, decidiendo obedecer de mala gana y con cierto miedo, Nie
Huaisang salió de aquel salón en dirección a sus aposentos en Yunmeng para tomar su sable,
dispuesto a tomar su lugar con el resto de cultivadores de Qinghe Nie. Viéndose finalmente
libre de su débil hermano, Nie Mingjue dirigió toda su atención a Meng Yao. Sonriéndole con
dulzura y acariciando sus mejillas con cuidado, le dijo algo en un susurro que Jiang Cheng no
pudo escuchar, solamente viendo a Jin Guangyao sonriendo.

"Si vuelves pronto, entonces te dejare hacer eso y más mi señor" Prometió Meng Yao con una
sonrisa.

"Enmarca tus palabras, A-Yao".

Sonriendo de forma divertida, el omega Jin respondió: "Estaré esperando ansioso, mi alfa".

Sonriendo con cierta excitación, Nie Mingjue se agachó ligeramente para besar al omega en
sus brazos, pasando una de sus manos de forma casi imperceptible por el abdomen del
contrario, dándole un cariñoso y largo beso en los labios. Mirando enfadado a Jin Guangyao,
Jiang Cheng observo como este era delicadamente tomado de la mano por su prometido, que
lo trataba como si fuera de cristal, acompañándolo a la habitación que ambos compartirían en
Yunmeng.

"A-Cheng"

Girándose de pronto, escuchando a su madre detrás de él, Jiang Cheng se sorprendió de ver a
su Shijie acompañando a Madam Yu, habiendo dejado sola a su suegra Madam Jin.

"Madre" Dijo Jiang Cheng haciendo una reverencia.

Sonando mucho más fría y distante de lo habitual, Yu Ziyuan respondió: "Tengo que hablar
contigo".
Capítulo 32.

"Lo quiero, lo quiero, lo quiero..."

Poniendo una expresión de absoluta incomodidad, Wei Ying intentó callar esa voz en su
cabeza, su omega fuera de control que suplicaba por un alfa que lo tomara, suplicando por el
alfa de Lan Wangji.

"Lan Zhan, quiero a Lan Zhan, quiero que Lan Zhan me tome..."

Muy asustado, dándose cuenta de que su omega estaba mucho más fuera de control de lo que
había estado alguna vez, incluso en su primer celo que fue una de las peores experiencias de
su vida, Wei Ying realmente temió no poder controlarlo. Luchando consigo mismo, siguiendo
las indicaciones de Yu Ziyuan, el joven omega fue a su habitación y se encerró en esta, donde
perdió el poco control que le quedaba.

Con su corazón y su mente sufriendo al saber que su alfa estaba comprometido con otro, y su
omega hecho un desastre en su cabeza suplicando por ser violado por el alfa de Lan Wangji y
todo su cuerpo ardiendo hasta producirle dolor, Wei Wuxian solo pudo tenderse en su cama
mientras sollozaba por el dolor y la pena, abrazándose a una almohada con todas sus fuerzas
intentando controlar el dolor.

Supuso entonces que se desmayó, abrazándose fuertemente a esa almohada, de un segundo al


otro perdió la consciencia, quedándose dormido y a merced de su omega. Teniendo sueños
intranquilos como unas visiones, en las que veía una cueva oscura rodeada de agua con algo
obscuro en el fondo, Wei Ying se retorció entre sueños, despertando solo cuando sintió las
feromonas de Madam Yu.

Agachado al lado de su cama, Jiang Wanyin miró a Wei Ying lleno de preocupación,
aliviándose cuando este abrió los ojos y se notó un poco más razonable, diciéndole: "Que
bueno que estas despierto..."

Pestañeando ligeramente, dándose cuenta de donde estaba y con quien, Wei Wuxian
preguntó: "¿A-Cheng?"

Después de pronunciar esas palabras con una voz un poco ronca, Wei Ying rápidamente se
dio cuenta de que estaba en una posición diferente a la que recordaba cuando perdió la
consciencia la primera vez. Con el rostro apoyado en el regazo de Madam Yu, Wei Ying tenía
también sus brazos alrededor de las caderas de la mujer alfa, habiéndola abrazado
fuertemente. Muriendo internamente por la vergüenza, Wei Ying se apresuró a soltar a la
mujer alfa y se sentó en su propia cama en silencio, sintiendo la juzgadora mirada de Madam
Yu sobre él.

"¿Qué pasó?" Preguntó Wei Ying finalmente.

Acercándose a la cama de su hermano con calma, sentándose a su lado y dándole un cariñoso


abrazo por los hombros, Jiang Yanli respondió: "No te preocupes por eso A-Xian".
Y aunque sus hermanos no querían decirle, y Madam Yu tampoco parecía dispuesta a
pronunciar palabra, era claro para Wei Ying que había hecho algo vergonzoso. Sin embargo
eso no era su culpa, pues sabía que estando en celo muchas veces su omega tomaba el control
y lo hacía actuar como un idiota que solo buscaba a un alfa.

"¿Te sientes mejor?" Preguntó Jiang Cheng.

Respirando profundo, sintiéndose mucho mejor gracias a las feromonas de Madam Yu, Wei
Ying asintió con una sonrisa, sintiéndose menos adolorido y menos caliente. Reconociendo
bien las feromonas tranquilizadoras de Madam Yu por toda la habitación, unas feromonas que
para Wei Ying olían a canela dulce cuando eran tranquilizadoras y canela picante cuando eran
amenazadoras, un olor al que el joven omega se había habituado bien.

Tomando una nueva tetera con aquel té de hierbas especial, Jiang Yanli de forma amable
sirvió una nueva tasa para su hermano menor: "Toma A-Xian".

Sonriendo agradecido, con el cuerpo ligeramente entumecido, Wei Ying aceptó la tasa y
bebió su contenido con calma: "Gracias Shijie".

"No es nada A-Xian, bebe más" Respondió la joven, volviendo a llenar la tasa de té.

Aquella habitación olía fuertemente a las feromonas de celo de Wei Ying, un aroma al que
sus hermanos omegas no reaccionaban pero podían sentir, mientras que Yu Ziyuan que era un
alfa vinculada, aunque podía sentirlas no reaccionaba a ellas, pues ahora solo podía
reaccionar a las feromonas de su omega Jiang Fengmian.

"Escucha Wei Wuxian" Dijo Madam Yu con suma seriedad: "Debes permanecer en esta
habitación acompañado por un par de días, estas fuera de control y temo que hagas alguna
tontería".

"Por favor Madam Yu" Susurró Wei Ying, restándole importancia al asunto: "No soy un
idiota".

"No lo digo por que seas un idiota, aun cuando realmente lo eres. Tu omega esta fuera de
control, podría ser un desastre si sales en estas condiciones, cualquier alfa o beta podría
tomarte sin problema; es más, yo supongo que en tu estado tu incluso suplicarías por ello".

Sonriendo con cierta diversión al escuchar esto, Jiang Cheng miro a Wei Wuxian con una
sonrisita, recibiendo una mirada enfada por el mayor, quien siguió tomando el té que su
Shijie servía amablemente para él.

"Perdóneme Madam Yu" Susurró Wei Ying arrepentido, acabando una nueva tetera de aquel
té.

Dándole una caricia en la mejilla, entendiendo lo difícil que era para Wei Ying, Yu Ziyuan le
respondió: "Descuida, solo concéntrate en descansar ahora".

Sonriendo al ver el cariñoso acto de su madre, Yanli también acaricio el rostro sonrojado y
caliente de Wei Ying con dulzura, esperando reconfortarlo aunque sea un poco con sus actos.
Después de una ligera charla entre los cuatro por algunos minutos, Madam Yu y Jiang Yanli
finalmente tuvieron que retirarse.

Madam Yu debía cuidar el perímetro de Lotus Pier, asegurándose de que ninguna criatura
peligrosa avanzara hasta la residencia principal donde descansaban sus invitados. Mientras
que Jiang Yanli, aunque no tenía ningún deber, prefería retirarse al pabellón de los Jin para
cuidar las apariencias; no sería bien visto que una mujer casada pasara la noche con dos
hombres estando uno en celo, aun si eran sus hermanos y otros omegas.

Así que dándole unas ultimas indicaciones a Jiang Cheng para que cuidara bien a Wei Ying,
Madam Yu y Jiang Yanli finalmente abandonaron la habitación, dejando en la puerta dos
sirvientes para vigilar que nadie saliera hasta el día siguiente, y dando la orden de que otros
sirvientes disponibles patrullaran los pasillos fuera de la habitación de Wei Ying para
asegurarse de que nada malo pasara.

Finalmente estando solos, Wei Ying suspiró de forma resignada, observando como Jiang
Cheng tomaba la misma tetera vacía y volvía a rellenarla con agua, preparando más de ese te.

"A-Cheng..." Se quejó Wei Ying observando más de ese empalagoso té: "De verdad, he
estado bebiendo eso todo el día, no puedo más, voy a estallar".

Mirándolo con seriedad, Jiang Cheng sirvió una nueva taza para el mayor, obligándolo a
tomarla: "Tu lo beberás, por que debes mantener a tu omega tranquilo y tu consciencia hasta
bien avanzada la noche, no quiero lidiar contigo excitado y suplicando por un alfa".

"Sabes que aun bebiendo esto mi omega tomara el control y suplicara por un alfa".

Asintiendo a sus palabras con resignación, Jiang Cheng respondió: "Lo sé, pero espero poder
dormir un par de horas tranquilo hasta entonces".

Decidiendo obedecer con resignación, Wei Ying tomo aquella taza de té y bebió nuevamente
su contenido. Desviando su mirada para observar a Jiang Cheng, observando su rostro
cansado y su mirada triste, Wei Ying se sintió culpable.

"Lo siento".

Mirándolo confundido, Jiang Wanyin preguntó: "¿Por qué estas disculpándote?"

Bebiendo una nueva taza, Wei Ying respondió: "Estas triste, lo que significa que algo salió
mal en tu fiesta ¿Fue mi culpa? Seguro que lo fue, perdóname".

"Te estas victimizando demasiado. Si se arruino, pero no fue tu culpa".

Bastante sorprendido, Wei Ying miró a su hermano y preguntó: "¿No lo fue? ¿Entonces que
paso?"

"Fantasmas de aire. Atacaron Yunmeng y los cultivadores alfa salieron a pelear con ellos,
dejaron a los omegas en Lotus Pier y terminaron la fiesta antes de lo previsto" Explicó Jiang
Cheng con infelicidad: "Ni siquiera pude darle a Lan Huan el regalo que preparamos".
Acercándose a Jiang Cheng para darle un par de palmadas en el hombro, Wei Ying
respondió: "Lo siento A-Cheng, realmente fue una fiesta hermosa".

"Gracias..."

Sonriéndole a Wei Ying un poco más tranquilo, Jiang Cheng terminó aquella tetera y bostezo
cansado. Mirando la luna brillando en el cielo con fuerza, el joven Wanyin decidió que lo
mejor sería descansar; después de un día tan pesado para él por su compromiso, y un día
cansador para Wei Wuxian por su celo, ambos merecían un buen descanso.

Sin necesitar de palabras, Wei Ying se apresuró a arreglar su cama para ambos, observando
como su menor apagaba las velas de la habitación y dejaba la tetera preparada en el centro de
una de las mesas.

"Si te despiertas en la noche como un loco, te ahogare con ese té hasta que te tranquilices" Lo
amenazó Jiang Cheng.

Riéndose de su hermano, Wei Ying asintió aceptando: "Esta bien A-Cheng, puedes hacerlo".

"Lo hare de verdad, no voy a lidiar con tu omega".

"Lo sé, lo se..."

Aun riéndose, Wei Ying volvió a acostarse en su cama cerca de la ventana, haciendo un
espacio a su lado para su hermano, el cual quitándose algunos ornamentos del pelo y el
cinturón de su túnica, se acostó al lado de Wei Wuxian con comodidad, dispuesto a dormir.
Ambos hermanos estaban acostumbrados a dormir juntos, cuando uno de ellos tenía un celo
usualmente era cuidado por el contrario, así que acostumbrados a dormir en una cama
pequeña con sus túnicas puestas, no se hicieron ningún problema por esa noche.

"Hablé con A-Sang en la fiesta" Dijo Jiang Cheng pocos minutos después de haberse
acostado.

"A-Sang..." Susurró Wei Ying con una suave sonrisa: "¿Cómo está? ¿Está más alto?"

"No tanto, aún sigo siendo más grande que él" Bromeó Jiang Cheng con cierta satisfacción:
"Aunque sé que no será por mucho, es un alfa, será más grande dentro de poco. Me mando
saludos para ti"

Sonriendo al recordar a su gran amigo, Wei Ying respondió: "Dile gracias a Huaisang, seria
lindo volver a hablar con él".

"No creo que quieras hablar con él, me pidió que le devolvieras sus libros".

Teniendo un ataque de risa, Wei Ying respondió: "¡Puede olvidarse de eso!"

Riendo también, Jiang Cheng dijo: "Sabia que dirías eso..."

Aun riendo, Jiang Cheng volvió a ponerse serio pocos minutos después, y girándose en la
cama, miro a Wei Ying a los ojos, observando a su alegre hermano.
"Sabes que tu no morirás sin Lan Zhan ¿Verdad?"

Sonriendo con cierta amargura al escuchar ese nombre, Wei Ying respondió: "Lo sé".

Aun mirándolo preocupado, después de haber visto lo fuera de control que estaba el mayor,
Jiang Cheng continuo hablando: "Hay más en la vida que las tradiciones y los alfas. Tu
puedes tener una vida feliz aquí, así como la tiene Lan Qiren en Gusu, no debes buscar un
esposo solo por obtener tu libertad, hay muchas más libertades que poder salir de Yunmeng".

"No es como que me queje por estar encerrado" Explicó Wei Ying con una sonrisa:
"Tampoco por perder a Lan Zhan o por no poder seguir las tradiciones. Es el remordimiento
lo que me mata por dentro, la culpa... Yo solo quisiera hablar con Lan Wangji un segundo y
decirle lo mucho que lo siento, disculparme; nunca pude disculparme con ese niño por
romper su corazón".

"Deja a Lan Wangji en paz" Advirtió Jiang Cheng con seriedad.

Jiang Wanyin, que había estado mucho tiempo en contacto con ambos hermanos Lan, se daba
cuenta también de lo mucho que sufría Lan Zhan por Wei Ying. Así que temiendo una
desgracia, ahora que el joven Lan parecía estar volviendo a poner en rumbo su vida, Jiang
Cheng temía que Wei Ying pudiera arruinarlo todo.

"De verdad, él lo sabe, créeme, yo se lo dije" Mintió Jiang Cheng con seguridad, intentando
darle confianza al contrario: "Pero lo mejor es que ambos estén separados, no les hace bien
estar juntos sabiendo que no son amantes".

Sonriendo con amargura, sabiendo que el menor tenía razón, Wei Ying se giró a ver la luna
en silencio, mirando su pureza, pensando en ese joven alfa que ahora ya no era un niño.

"No necesitas salir de Yunmeng y conseguir un esposo para convertirte en el mejor


cultivador. Demuéstrales a todos que aun estando aquí tu puedes ser un cultivador y un
omega excelente, que no necesitas de un marido o hijos, que estando solo puedes ser el
orgullo de Yunmeng".

"¿El orgullo de Yunmeng?" Preguntó Wei Ying con curiosidad: "¿Eso qué es?"

"Será el título que obtendrás al ser el cultivador más fuerte y el primer omega en lograrlo"
Explicó Jiang Cheng con seguridad: "Venimos de una secta de omegas, tu eres un omega. Si
eres excelente nos representaras a todos, demuestra a esos pedantes líderes alfa que puedes
ser mejor que ellos sin la tradición. Así tal vez en un futuro otro omega no tendrá que
quedarse encerrado solo por no querer un marido".

Sonriendo con aquellas enternecedoras palabras, Wei Ying volvió a girarse para ver a su
hermano, respondiéndole: "Gracias A-Cheng".

"Sé que tú puedes lograrlo, lo sé".

Y dando un último bostezo, terminando aquella charla, Jiang Wanyin cerró los ojos y
comenzó a quedarse dormido, dejando a un Wei Ying aun despierto que lo miraba.
Admirando a su hermano dormido por algunos minutos más, Wei Wuxian finalmente volvió a
girarse en dirección a la ventana, observando la luna en silencio.

Con su blanca pureza le recordaba a su hermoso prometido, un alfa puro y completamente


blanco, con una hermosa cinta en la frente y los ojos dorados y brillantes. Esa era la imagen
que Wei Ying aun guardaba en su memoria, aun cuando el joven Lan ya no la tenía. Cuando
entro en el salón principal esa misma noche, Wei Wuxian no pudo reconocer a Lan Zhan de
inmediato. Topándose de frente con la mesa de los alfas Lan, distinguidos y elegantes, sus
ojos vagaron por los rostros conocidos de aquellos cultivadores hasta toparse con el hermoso
rostro de un joven serio que también le devolvía la mirada.

Con las facciones un poco más finas y detalladas, unos ojos claros y fríos, una belleza que
deslumbraba a todos; fue difícil para Wei Ying apreciar que ese joven era su querido Lan
Wangji. Con un cuerpo mucho más grande y una altura mayor, el joven Lan ahora lucia como
todo un alfa, con sus músculos desarrollados y un aroma mucho más penetrante, con solo una
mirada de esos brillantes ojos dorados Wei Ying se sintió petrificado, temiendo ante la
presencia de ese gran y aterrador alfa.

Sin embargo mirando nuevamente esos ojos, aquellos de un color tan puro y brillante, por un
instante Wei ying vio a ese pequeño niño que se tomaba de sus túnicas y le decía
"desvergonzado", suplicando por sus besos y desbordando inocencia. Ese alfa que amaba aún
estaba ahí, con un rostro y una apariencia diferente, pero sin lugar a dudas era la misma
persona, y sin importar las apariencias, ese era el Lan Wangji a quien Wei Wuxian amaba con
locura.

Con ese simple pensamiento los ojos de Wii Ying se llenaron de lágrimas. Habían pasado
meses desde la última vez que lloró por Lan Zhan, desde que lo había dejado el joven omega
evitó visitar aquellos lugares que habían sido importantes para ambos; la biblioteca, el claro
en el bosque, el lago, los salones... Prefería no tener su recuerdo. Sin embargo con el más
mínimo detalle, viendo las raíces de loto o algún juguete de cerámica, Wei Ying entraba en
depresión y rompía a llorar, suplicando en silencio por el perdón de Lan Zhan y deseando
volver a su lado.

Pero sabiendo que no podía retroceder el tiempo, que sus errores cometidos estaban escritos y
que nadie podría borrarlos, a lo único que podía aspirar Wei Ying era al perdón. Sabiendo que
su querido hermano mentía, con la seguridad de que no había hablado con Lan Wangji para
nada, Wei Wuxian se sentó en la cama con cuidado, sin querer hacer ruido. Arreglando bien
su cabello y sus túnicas, con el sigilo de un gato, Wei Wuxian abrió la ventana que estaba al
lado de su cama y salió por esta al exterior, dejando a un Jiang Cheng profundamente
dormido sobre su cama.

"Perdóname A-Cheng" Susurró Wei Ying saltando fuera por la ventana: "Debo disculparme".
Capítulo 33.

ADVERTENCIA.

ESTE CAPÍTULO CONTIENE ESCENAS DE SEXO Y VIOLENCIA EXPLICITA, SE


RECOMIENDA A LAS PERSONAS SENSIBLES NO LEERLO Y PASAR
DIRECTAMENTE AL FINAL DEL CAPITULO 35.

SE PIDE DISCRECIÓN.

"Debo tenerlo, quiero tenerlo".

Mordiéndose los labios con furia, intentando controlarse, Lan Wangji trató inútilmente de
controlar a su alfa.

"Busca a Wei Ying, búscalo y llévatelo lejos, átalo y oblígalo a ser tuyo".

Negando con la cabeza, comenzando a quedarse dormido, o inconsciente por su alfa, Lan
Zhan susurró: "Basta".

"Muérdelo, hazlo tuyo a la fuerza, solo tuyo..."

Lan Zhan no tenía idea de que estaba pasando con su cuerpo. Temblando y sintiéndose
caliente, con su alfa susurrando cosas obscenas y fuera de lugar a cada segundo en su cabeza,
queriendo dormir pero sabiendo que estaría despierto al mismo tiempo; con todos esos
sentimientos mezclados en su cuerpo, Lan Wangji se perdía cada vez más, temiendo perder el
control y hacer eso que su alfa tanto le ordenaba.

Sentado en una de las esquinas de su habitación, en medio de la obscuridad y varias horas


después de su hora indicada para dormir, Lan Zhan no se sentía cansado en lo absoluto. Con
la adrenalina recorriendo sus venas gracias a su alfa, y completamente confuso, el joven
maestro Lan comenzaba a sucumbir a su celo, dejando paso a su alfa en su consciencia.

"¿No lo quieres de regreso? ¿No quieres que sea tuyo?"

Cerrando los ojos, cada vez más cansado, Lan Wangji no pudo responder, soltando
fuertemente sus feromonas y dejando a su alfa finalmente a cargo.

"Volver a ser mío, volver a ser nuestro".

Quedando finalmente inconsciente, los ojos del joven maestro Lan se abrieron en medio de la
obscuridad, dejando ver sus hermosos ojos dorados reluciendo en medio de la negrura. Era el
mismo Lan Wangji, pero al mismo tiempo no, su alfa había tomado el control y ahora sus
más bajos instintos se daban en él. Y solamente un único pensamiento se daba en su cabeza
con fuerza: Tomar a Wei Wuxian para hacerlo suyo, morderlo y obligarlo a estar con él.
El alfa de Lan Wangji había perdido a su destinado una vez, ahora que tenía una segunda
oportunidad, se aseguraría de no volver a perderlo.

Poniéndose de pie tambaleándose ligeramente, Lan Wangji se apresuró a acercarse a la puerta


de sus habitaciones privadas, dispuesto a salir a buscar a su omega.

Debido a la expedición por la cacería nocturna, casi todos los miembros de la secta Lan
habían acompañado a Zewu-Jun al bosque. Eso dejo el pabellón indicado para los Lan casi
vacío, sin otras habitaciones ocupadas cercanas a las de Lan Wangji, así que Lan Zhan sabía
que podría salir de este con libertad y caminar a la habitación de Wei Ying para tomarlo.

Cada vez más perdido, sintiéndose mareado, Lan Wangji se acercó a la puerta para abrirla.
Sin embargo, parándose frente a esta, pronto se dio cuenta.

Un dulce aroma comenzaba a inundarlo todo.

Soltando un gruñido de satisfacción, Lan Wangji cerró los ojos, sintiendo como el aroma
dulce de las flores de loto no tardaba de inundarlo todo. Con su hermosa fragancia entrando
por una de las ventanas, el alfa de la secta Lan se giró en esta dirección, esperando
expectante. Pronto esa ventana semiabierta se abrió mucho más, y del exterior de la
habitación, el joven omega Wei Wuxian entro con mucho sigilo, aun con las mejillas
sonrojadas y el cuerpo desprendiendo el fuerte olor de sus feromonas.

Wei Wuxian había logrado evadir con éxito a los sirvientes de su secta que hacían guardia en
el exterior, pasando por los lugares oscuros y en medio de la vegetaciones Yunmeng, el
omega se dirigió al pabellón de los Lan donde por el olor le fue fácil encontrar a Lan Wangji.
Aturdido por su celo, Wei Wuxian no se dio cuenta de que Lan Zhan también estaba en su
celo, y de forma imprudente, sin querer llamar la atención, entro en las habitaciones privadas
de su alfa por una de las ventanas traseras, en completo silencio.

Observando toda la habitación en penumbras, Wei Ying cerró cuidadosamente la ventana


detrás de él y comenzó a caminar en silencio por esta, buscando la cama de Lan Zhan para
despertarlo y únicamente disculparse, deseando salir de ahí y volver con Jiang Cheng lo más
pronto posible, antes de que este se diera cuenta de que había escapado.

Sin embargo sufriendo un ligero ataque, Wei Ying se topó de frente con Lan Wangji tan solo
habiendo dado unos pasos por aquella habitación. Observándolo despierto y con el rostro
sumamente serio, Wei Wuxian se mantuvo en silencio sin saber que decir por la sorpresa,
admirando a su alfa que ahora casi era de su misma altura.

"¿Qué estás haciendo aquí?" Preguntó Lan Wangji con un leve atisbo de racionalidad, la poca
consciencia que le quedaba sin su alfa: "No deberías estar aquí".

Sonriendo de una forma nerviosa, intentando apartar el miedo de su mente, Wei Ying
respondió: "Me asustaste Lan Zhan... Que malo".

Sin responder aquellas palabras que querían sonar graciosas, Lan Wangji miró al joven
omega frente a si mismo lleno de seriedad. Sin sonreír ni una sola vez, Lan Zhan se acercó
mucho al cuerpo de Wei Ying, algo que el omega no impidió aun cuando le daba miedo,
perdiéndose en los ojos dorados sumamente brillantes que tenía el menor en ese mismo
instante.

"Vine aquí porque quería hablar contigo" Explicó Wei Ying finalmente, sintiendo su corazón
latiendo desbocado: "Lan Zhan yo... Quiero disculparme".

Sin prestar atención a sus palabras en absoluto, Lan Wangji se quedó absorto mirando el
dulce rostro de su omega, intoxicándose a gusto con sus feromonas, apenas pudiendo
susurrar: "Mmm".

Sonriendo al escuchar ese susurro que por tanto tiempo quiso escuchar, Wei Wuxian siguió
hablando, comenzando a explicarse frente a su alfa: "La última vez que nos vimos, en los
muelles, yo... Yo de verdad no sabía el significado de la cinta de frente de tu secta, no sabía
su importancia y mucho menos su significado. Ahora entiendo que con tus acciones tu solo
querías declarar tu amor hacia mí, un amor que yo te obligué admitir y que no fue justo en lo
absoluto. Por eso quiero disculparme, porque sé que en todo este tiempo no fui justo
contigo".

"Mmm".

"Lo que paso, todo lo que paso, fue culpa mía" Admitió Wei Ying, sintiéndose muy triste y
arrepentido: "Por favor perdóname..."

Mirando al omega frente a sí mismo, dejando a su alfa tomar el poco control que le quedaba,
Lan Wangji respondió: "No".

Sorprendido, levantando la mirada para ver a Lan Wangji, Wei Ying sintió miedo. Aquella
habitación estaba inundada de las fuertes feromonas de Lan Wangji, unas que no había
notado antes por su nerviosismo al estar frente al menor, lo único en lo que se había
concentrado entonces. Ahora, finalmente relajado después de haber dicho lo que tenía que
decir, Wei Wuxian finalmente pudo notar ese aroma, dándose cuenta de que no era normal,
retrocediendo intentando alejarse de Lan Zhan con miedo.

"No voy a perdonarte Wei Ying, no te perdonaré jamás" Dijo Lan Zhan con un tono de voz
grueso, propio de un alfa casi adulto: "No te perdonaré porque tú me orillaste a perderte, a
dejarte. Gracias a lo que hiciste no puedes ser mío, ya no eres mío..."

Comenzando a sentirse ahogado con tantas feromonas, Wei Ying comenzó a temblar,
sintiendo a su omega haciendo un desastre en su interior: "Lan Zhan... Por favor... Yo solo..."

"No" Rugió Lan Wangji en un tono amenazante: "No te creo, tu no viniste para buscar mi
perdón. Tu viniste por mi ¿No es verdad? Se sinceró entonces ¿Qué es lo que buscas de mí?"

Dándose cuenta de que era verdad, fue su omega desesperado buscando a su alfa por su celo,
Wei Wuxian finalmente se dio cuenta de grave error que cometió. Intentando alejarse de Lan
Wangji por el miedo, sintiendo una humedad mayor entre sus piernas y sus feromonas
saliendo sin control de su cuerpo en un intento de atraer a su destinado, Wei Ying intentó
escapar en un rápido movimiento, corriendo hasta la puerta de la habitación intentando irse.
Dándose cuenta de las intenciones de su omega, sin querer dejarlo escapar, Lan Wangji
también se giró y rápidamente siguió Wei Wuxian, llegando a su lado justo a tiempo,
impidiendo que pudiera abrir la puerta con una de sus manos, encerrando a Wei Wuxian en su
habitación.

"Tu viniste a buscarme" Reclamó Lan Zhan "Aun cuando ya no somos nada, viniste a mi
habitación en medio de la noche..."

Jadeando y comenzando a temblar, Wei Ying intentó volver a avanzar hasta la puerta,
tratando de escapar de esa manera de su joven alfa "Por Favor Lan Zhan... Quiero salir, por
favor..."

"¿Qué es lo que estabas buscando de mí?"

"¡Solo quería hablar contigo!"

Sin creer las palabras del mayor, Lan Zhan solo lo miró de forma severa, sujetando la puerta
con solo una de sus manos, impidiendo así que Wei Ying pudiera abrirla para escapar de él:
"¿Estás seguro de tus palabras?"

Cada vez más desesperado, solo intentando abrir la puerta de la habitación de forma
desesperada, Wei Ying sintió su cuerpo cada vez más caliente: "Por favor... Por favor Lan
Zhan..."

Ya completamente fuera de sí mismo, sintiendo sus feromonas escapar sin control, con su
cuerpo completamente caliente y lleno de temblores desesperados, además de la mente
nublada, algo que nunca antes había tenido ocurrió: comenzó a tener una erección y una
extraña humedad entre sus nalgas que bajaba por sus piernas.

"No... No, no, no, esto no está bien" Susurró Wei Ying cada vez más desesperado: "No está
bien... Tengo miedo... Lan Zhan déjame ir, tengo miedo..."

Sin previo aviso, Wei Ying fue fuertemente tomado de la cintura, para ser arrastrado lejos de
la puerta hasta la cama del menor, en la cual fue tumbado de manera violenta, logrando sacar
un dulce quejido de sus labios. Atontado y apenas pudiendo razonar lo que estaba
sucediendo, Wei Wuxian intento ponerse nuevamente de pie para correr a la puerta ahora que
Lan Zhan no se encontraba en medio de su camino; pero ni bien se sentó en la cama con la
intención de ponerse de pie, fue nuevamente tomado de la cintura para ser bruscamente
acostado en la cama.

"¡No estoy jugando! ¡Déjame ir!" Gritó Wei Ying desesperado, intentando escapar con más
vehemencia de los fuertes brazos de ese alfa.

Sin embargo, a pesar de sus luchas, no pudo deshacerse del joven alfa, el cual había
comenzado a respirar de forma más pesada a cada segundo que pasaba junto al omega en su
cama, al cual sin ningún problema había logrado inmovilizar, sosteniéndolo fuertemente
contra sí mismo, impidiendo que pudiera ponerse de pie.
Cada vez más asustado, solo queriendo escapar, Wei Ying se volteó disimuladamente para ver
al joven maestro Lan detrás de sí mismo, intentando razonar con él. Pero al verlo se quedó
mudo, pues podía asegurar que los ojos de este habían comenzado a brillar en medio de la
obscuridad como dos grandes estrellas doradas. Pronto, Wei Wuxian entendió que se había
producido en el menor, el cual no decía ni una sola palabra.

"L... Lan Zhan... ¿Acaso tu estas... Reaccionando a mis feromonas?"

¿Aquello era posible? Su alfa ya no era un niño pequeño, no tenía 12 años, y ahora había
entrado en esa etapa en la cual tanto alfas como omegas podían llegar a tener su primer celo.
Incluso el mismo Wei Wuxian había tenido su primer celo a los 13 o 14 años, una experiencia
que él denominaba algo peor que la muerte, realmente horrible. Por lo que llego a la rápida
conclusión de que Lan Wangji podía estar reaccionando a sus feromonas, pero eso no lo
llevaría a tener su primer celo como alfa ¿Verdad?

"Es en serio, en serio Lan Zhan" Dijo Wei Ying luchando con todas sus fuerzas, ante lo que
Lan Wangji lo presiono con más fuerza aun contra su cuerpo, manteniéndolo preso en su
sitio: "¡Suéltame ya! ¡Me estas lastimando!"

Sin embargo para su pesar, el joven alfa no parecía estar respondiendo a sus palabras,
haciendo lo que quería con el cuerpo de Wei Ying en sus brazos, atreviéndose acercar su
rostro al cuello del mayor para olerlo, quedándose tan maravillado como era usual con su
magnífico aroma; el cual debido a su celo, se había intensificado. Pero el omega, cada vez
más asustado, comenzó a notar que ya no era un juego entre Lan Zhan y el mismo como en el
pasado, sino que ahora realmente era un alfa quien estaba reclamando su cuerpo de una
manera seria.

Temblando, comenzando a sentirse realmente desesperado, Wei Ying suplicó de nuevo: "Por
favor para... No quiero..."

Como si no lo escuchara, Lan Zhan comenzó a deshacerse de las túnicas de Wei Wuxian con
una sola mano, manteniéndolo preso en su cama con el otro brazo. Pero a diferencia de cómo
era usual, el pequeño jade no era amable o elegante, era tosco, jalando de mala manera las
ropas del mayor, incluso amenazando con romperlas. Era como si Lan Zhan estuviera
completamente absorto en el mayor y lo que debía hacer, completamente fuera de sí mismo,
solo queriendo poseer al omega en sus brazos.

Mientras que Wei Ying, notando como sus energías se iban, y como poco a poco su cuerpo
comenzaba a ceder debido al celo, entendió que debía actuar de inmediato, debía escapar
como sea, ya que si no lo hacía de inmediato podía sucumbir al deseo y a la excitación.

Respirando profundo, Wei Ying tomó firmemente a Lan Zhan de las muñecas, deteniendo así
los movimientos que este hacia luchando con su cinturón para quitárselo, sonriendo muy
nervioso para decirle: "Esta bien, está bien, Lan Er Gonzi, está bien... Voy a hacer lo que
quieras, lo hare, pero se más cuidadoso, me duele..."

Despertando ligeramente de su ensueño debido al celo, Lan Zhan pestañeó un par de veces
confuso, dejando de moverse, pero aun sosteniendo a Wei Wuxian contra su cuerpo
impidiéndole escapar: "Mmm..."
Sintiéndose un poco más aliviado de que este dejara de intentar desnudarlo, jalando su ropa
con fuerza y casi destrozando su cinturón en sus manos, Wei Ying soltó las manos del menor
para llevarlas a su cinturón, comenzando a quitárselo con los dedos temblorosos por el
miedo: "Me lo quité ¿Lo viste? No debes romper mi ropa, yo me la quitare, en serio. Solo
debes soltarme un poco, así podre quitarme la túnica".

Lan Zhan, muy inteligente aun en ese estado, miró de manera desconfiada a Wei Wuxian
desde la espalda de este, susurrando: "Mmm".

Sabiendo que esa era su única oportunidad para escapar, Wei Ying se giró suavemente para
mirar al menor al rostro, acercándose lentamente a este para darle un suave beso en la mejilla,
intentando darle algo de confianza: "Por favor Lan Zhan, no quiero hacerlo con mi ropa
puesta, por favor..."

Dejándose llevar, Lan Wangji soltó cuidadosamente su agarre del cuerpo de Wei Wuxian,
dejándolo finalmente suelto en la cama. Ya libre, Wei Ying no desaprovecho la oportunidad,
y en el primer segundo se puso de pie de la cama de un salto, corriendo a la puerta de la
habitación lo más rápido que podía, sosteniendo sus túnicas en su lugar con una mano, lleno
de terror.

Mientras que Lan Zhan, dándose cuenta de que había sido engañado, sintió su alfa rugir en su
interior.

Wei Wuxian ya no era solo un omega en celo que quería reclamar como suyo, ahora al verlo
correr desesperado se había convertido en una presa.
Capítulo 34.

ADVERTENCIA.

ESTE CAPÍTULO CONTIENE ESCENAS DE SEXO Y VIOLENCIA EXPLICITA, SE


RECOMIENDA A LAS PERSONAS SENSIBLES NO LEERLO Y PASAR
DIRECTAMENTE AL FINAL DEL CAPITULO 35.

SE PIDE DISCRECIÓN.

Mientras que Lan Zhan, dándose cuenta de que había sido engañado, sintió su alfa rugir en su
interior.

Wei Wuxian ya no era solo un omega en celo que quería reclamar como suyo, ahora al verlo
correr desesperado, también se había convertido en una presa.

Saltando de la cama igual que el mayor, Lan Wangji corrió lo más rápido que pudo en
dirección a este. Sin embargo, Wei Ying el cual había sido más rápido, logró abrir la puerta
sin impedimentos, saliendo al exterior de la habitación con piernas temblorosas. Y
suponiendo que todo terminaría ahí, que Lan Zhan no se atrevería a ir detrás de el en
exteriores, que el elegante joven maestro Lan tendría un poco de compostura... Wei Ying fue
nuevamente atrapado, siendo sorprendido por una fuerza aun mayor, que lo había tomado del
cabello para impedir su escape, haciéndolo soltar un fuerte quejido.

Llevando una de sus manos a su cabeza, aun sosteniendo sus túnicas con su otra mano, Wei
Ying dijo casi en un grito: "¡Lan Zhan! ¡Déjame!"

Sin embargo, el joven jade, fuera de sí mismo, no se detuvo, nada interesado por los gritos
del joven omega en medio de la obscuridad, arrastrándolo lo más rápido que pudo de vuelta a
su habitación, ya sin preocuparse por el bienestar de este, dejando que su salvaje alfa tomara
el control. Wei Ying, por su parte, solo pudo agacharse debido a la altura del menor,
tomándolo del brazo mientras era arrastrado a la fuerza, aun quejándose y suplicando,
mientras se ponía cada vez más débil por su celo.

Lloriqueando por el dolor en su cabeza, y tambaleándose por sus piernas débiles, Wei Ying
fue llevado nuevamente a la cama por su captor, el cual sin cuidado lo arrojo contra la
mullida superficie, haciendo que el joven omega volviera a suplicar: "Por favor Lan Zhan,
despierta..."

Debido a su agarre en el cabello de este, la fluida cola de cabello de Wei Wuxian se había
soltado, dejando la cinta en el piso en algún lugar de su habitación, dejando su cabello suelto
en su espalda, dándole un aspecto más delicado e indefenso ante los ojos del alfa.

Gruñendo ligeramente por el deseo, Lan Zhan retrocedió a la puerta de la habitación para
cerrarla, sin apartar sus feroces ojos de la cama, mirando a Wei Wuxian como si se tratara de
una presa salvaje. Al volver a acercarse a la cama, Wei Ying soltó un suave gemido de
pánico, haciendo un esfuerzo para arrastrarse por la cama para alejarse de este, pero su
cuerpo había sucumbido al celo, poniéndolo débil y muy caliente, tanto que casi ni le
respondía, pronto perdería el sentido y su omega tomaría el control; Wei Wuxian estaba
aterrado de solo pensar en lo que sucedería si eso ocurría.

Viendo a su presa intentando escapar nuevamente, Lan Zhan lo tomo fuertemente de uno de
sus tobillos en la cama, tirando de su pierna sin ningún cuidado para que volviera a su antigua
posición, haciendo que Wei Wuxian gritara de nuevo, intentando resistirse: "¡No! ¡Lan Zhan
no quiero!"

Sin hacer caso a los gritos y suplicas del contrario, Lan Wangji tomo las túnicas de este para
quitárselas de golpe, escuchando un nuevo quejido de dolor por parte del mayor, el cual
completamente indefenso solo pudo cubrirse el cuerpo con las manos en la cama, ya llorando.
Wei Ying aun llevaba unos pantalones que usaba debajo de su ropa, los cuales a diferencia de
sus túnicas que solo le fueron arrebatadas y arrojadas al piso al lado de la cama, si fueron
destrozados por las hábiles manos de Lan Wangji, el cual rugía por ver a su presa desnuda.

Cerrando inmediatamente las piernas como acto reflejo al ver que sus pantalones fueron rotos
de tal brusca manera, Wei Wuxian volvió a suplicar: "Por favor Lan Zhan... Tengo miedo, no
quiero que mi primera vez sea así, por favor..."

Sin embargo el alfa ya no lo escuchaba, mirándolo con completa fascinación, se atrevió a


pasar una de sus manos por las caderas de este, notando la suave y tibia piel de su omega.
Pero Wei Ying, debido al celo, sintió el tacto del alfa como si fuera fuego en su piel, y como
reflejo intento patear al joven Lan con fuerza, aun resistiéndose.

"¡No quiero! ¡No quiero!" Repitió Wei Wuxian, intentando patear a Lan Zhan para que se
alejara de él y lo dejara tranquilo.

Pero a Lan Wangji, aprovechando la debilidad del mayor, no le fue difícil volver a sujetar al
joven omega, tomándolo de ambos tobillos para mantenerlo quieto, para luego subirse sobre
este en la cama y sujetarlo del cuello. Y aun a pesar de esa incómoda posición, Wei Wuxian
no dejo de retorcerse ni por un solo segundo, tomando a Lan Zhan de los hombros para
intentar empujarlo de sí mismo, realmente aterrado.

El menor, dándose cuenta de cuán difícil seria continuar con las luchas de Wei Ying,
comenzó a pensar en alguna manera de facilitarle las cosas, y mirando las manos de este en
sus hombros empujándolo, supo que debía hacer. En un rápido movimiento tomo ambas
muñecas del mayor, arrastrándolo en la cama como a un muñeco de trapo, lo giró para dejarlo
sobre su abdomen y lo acercó a la cabecera de la cama.

Sin poder defenderse por la debilidad de su cuerpo, Wei Ying no pudo evitar quejarse y
sollozar, intentando luchar con el brusco alfa que lo estaba lastimando en exceso: "¡Lan Zhan
detente!"

Aun sin escucharlo, Lan Wangji intentó buscar alguna cosa con la que sujetar las manos del
mayor a la cabecera de la cama, pero sabiendo que con el mas mínimo movimiento podría
conseguir que Wei Ying escapara, solo pudo pensar en aquello que más se asemejaba a una
cuerda y que tenía lo más cerca de su cuerpo: Su cinta de frente. Y con solo una mano, quito
la blanca y resistente tela de su frente, para luego llevar está a las muñecas del mayor,
anudándola alrededor de sus extremidades hábilmente, dejando ambos brazos inmovilizados,
para luego anudar lo restante de la blanca cinta a la cabecera de la cama, dejando al mayor
sobre su estómago y con la cabeza hundida en las almohadas de la cama.

Sollozando, notando que ya no podía luchar por más que forcejeara, Wei Ying supo que no
tenía escapatoria. Pero sin rendirse, siguió intentando soltar sus manos de aquella cinta
blanca que estaba fuertemente anudada contra sus muñecas, sin poder creer lo resistente que
era. Mientras que Lan Zhan, después de haberse apartado de su presa ya completamente
segura, solo se quitó los pantalones debajo de sus túnicas, pero aun con la ropa de la parte
superior puesta, para luego volver a la cama, poniéndose entre las piernas abiertas del omega,
dejándose llevar por el instinto.

Aterrorizado por sentir a un alfa de esa manera por primera vez, todo el cuerpo de Wei Ying
se tensó, y como un acto reflejo intento patearlo de nuevo, gritándole: "¡No! ¡Para!"

Volviendo a detener el ataque del joven omega con facilidad, Lan Wangji suspiro exasperado,
y ya cansado de seguir luchando, llevo sus dos manos a la espalda baja del mayor, y con un
toque certero, presionó los puntos de acupuntura de la espalda baja de este, logrando que Wei
Wuxian gritara por el dolor. Llorando más, Wei Ying solo pudo sentir como sus piernas
habían dejado de responderle por completo, y mientras su cuerpo se entumecía, se quedó
todavía más indefenso ante el exigente alfa que comenzó a tocar su cuerpo con descaro.

Sollozando y temblando por el pánico, Wei Ying intentó razonar con Lan Zhan por última
vez, sintiendo las manos de este por sus nalgas y sus caderas, tocándolo de una forma
morbosa: "Por favor Lan Zhan, detente... No quiero que mi primera vez sea de esta manera,
me da tanto miedo. Si quiero hacerlo contigo, pero no así, por favor no lo quiero así..."

Sin responder a sus suplicantes palabras, Lan Wangji se concentró en masajear con sus dedos
aquellas hermosas y grandes masas de carne, las perfectas y redondas nalgas de Wei Ying
entre sus dedos, disfrutando de poder tocarlo con facilidad ahora que el mayor ya estaba
completamente inmovilizado, tocándolo como si estuviera hipnotizado. Ya sin poder más, y
sin siquiera tener un poco de cuidado en algún juego previo o para preparar al mayor, con sus
manos abrió las nalgas de este de forma brusca, pudiendo finalmente ver esa pequeña y
rosada entrada, la cual jamás había sido tocada por nadie, y que estaba completamente
húmeda debido al celo del omega.

Relamiéndose los labios, Lan Zhan se atrevió a pasar sus dedos entre las nalgas del omega,
tocando suavemente y con una caricia aquella suave vertiente que había entre sus piernas,
empapando sus dígitos de esa liquida sustancia que olía a las feromonas del mayor, y le
daban a entender al alfa que el omega en celo estaba listo para aceptarlo.

Decidiendo acomodarlo mejor en la cama, forzando el cuerpo de Wei Ying, Lan Zhan lo
tomo de las cederás y luego de los muslos para posicionarlo, dejando sus caderas levantadas
y aquella entrada a su disposición. Acomodándose mejor entre sus piernas, Lan Zhan no dudó
en pasar su miembro erecto entre las húmedas nalgas de Wei Ying, comenzando a presionar
este contra su entrada pero sin penetrarlo, como si lo estuviera "probando".

Mientras que Wei Ying, deshecho en lágrimas de impotencia y pánico, luchaba con su omega
para mantenerse consciente en medio de todo aquel doloroso proceso. Sin embargo al sentir
aquella cosa grande y dura entre sus nalgas no pudo evitar soltar un gritito de terror,
intentando luchar de nuevo, aunque sabía que era imposible, suplicando entre sollozos: "No
quiero, no quiero... Por favor... Alguien ayúdeme... No quiero... Lan Zhan no..."

Wei Ying no pudo terminar de suplicar, pues un gemido de puro dolor escapo de sus labios.
Sin cuidado, el miembro de Lan Wangji había comenzado a entrar en su interior. El miembro
del joven jade era bastante grande, más grande que el promedio de un alfa de su edad, el cual
ya estaba comenzando a entrar en su etapa adulta y la indicada para comenzar a reproducirse,
así que con su gran tamaño lastimaba la entrada de Wei Wuxian.

"¡Para, para, para, para! ¡Me duele! ¡Lan Zhan duele mucho!" Suplicó Wei Ying desesperado,
comenzando a temblar por el dolor, sintiendo como su propia sangre mezclada con sus
fluidos había comenzado a resbalar por sus nalgas y sus piernas.

Pero tal y como había sucedido toda la noche, Lan Wangji hizo oídos sordos ante las suplicas
del omega bajo su cuerpo, entrando profundamente en su interior y soltando un jadeo de
placer, pues el interior de este se encontraba húmedo y muy estrecho, lo cual le daba una
sensación increíble. Tomándolo fuertemente de las caderas, antes de comenzar a embestirlo,
Lan Zhan susurró: "Wei Ying..."

Sin darle ni un solo segundo para acostumbrarse a aquella invasión en su interior, Lan Zhan
se movió de golpe, separando ligeramente sus caderas del cuerpo del mayor para luego volver
a empujar con fuerza en su dirección, sacando ligeramente su miembro para meterlo una y
otra vez en el interior de Wei Ying, el cual solo pudo gritar por la invasión. El mayor no
sentía aquello placentero en lo absoluto, era más, lo sentía como si algo lo estuviera picando
con una vara en su interior, ya que Lan Wangji no era delicado en lo absoluto, presionando
sus caderas con tanta fuerza como si quisiera quebrar sus huesos, y dando embestidas tan
fuertes que lo hacían rebotar en la cama.

Y aunque Wei Wuxian seguía lloriqueando y gritando por el dolor, su cuerpo se sentía cada
vez más caliente con aquellas profundas y fuertes embestidas, que de vez en cuando en medio
de sus movimientos, provocaba un sentimiento desconocido de placer en el cuerpo del
omega, que dejaba de gritar para gemir, sintiendo una corriente eléctrica por todo su cuerpo,
sintiendo como ese miembro tocaba partes sensibles en su interior que nunca pensó tener.

"No... No, no, no... Mhg... No..." Repetía Wei Ying una y otra vez, intentando hacer
reaccionar a su cuerpo, aun asustado por todo lo que sucedía.

Y es que gracias a esos sentimientos cada vez más mínimos de dolor, su cuerpo comenzó a
reaccionar, pudiendo mover débilmente las caderas y los brazos de nuevo, comenzando a
forcejar con las cintas y contra Lan Zhan otra vez, en medio de aquellos gemidos de placer y
dolor que soltaba a la par, comenzando a acostumbrarse realmente bien al miembro de Lan
Zhan penetrando una y otra vez de su interior.

Pero el alfa, nada contento por ver que su omega había logrado resistirse de nuevo, lo tomaba
furiosamente de los muslos y las caderas cada vez que este intentaba alejarlo o bajar las
caderas, poniéndolo en la misma posición de siempre aun si tenía que usar la fuerza,
tomándose la libertad de presionar fuertemente la espalda de Wei Ying cada vez que este
intentaba ponerse erguido o alejarse de él, incluso tomándolo y jalándolo del pelo cada vez
que este intentaba girarse para verlo o para gritar, empujando el rostro del mayor contra las
almohadas de la cama para callarlo.

Y es que en ese preciso instante, haciéndolo de esa manera tan fuerte y brusca, no era Lan
Wangji quien estaba a cargo de su propio cuerpo, si no que era su alfa, el cual brutalmente
había reaccionado de esa manera ante su celo, solo buscando su propio placer, aun si sabía
que debía dañar y forzar a Wei Ying de esa manera para conseguirlo.

Mientras que el joven omega, aun intentando resistirse, llorando más cuando sus cabellos
eran tomados de esa misma manera brusca, y gritando cuando su espalda era cruelmente
empujada, no pudo evitar excitarse. Era su omega en celo, el cual aceptaba a Lan Zhan en su
interior con alegría, haciéndolo sentirse bien y excitado con cada embestida, aun cuando la
propia razón de Wei Wuxian le decía que no debía disfrutarlo. Era su propio instinto que
aceptaba a Lan Zhan como su primer alfa, y que había comenzado a disfrutar de aquellas
bruscas atenciones.

"P... Para... Lan Zhan... Ten piedad... Solo un segundo... Para..." Gimoteó Wei Wuxian
desesperado, dejando de luchar, ya que su cuerpo entero se había perdido en el placer.

Pero el cruel alfa que lo dominaba no parecía querer dejar las cosas tan tranquilas, aun
tirando de su cabello y presionando sus caderas con todas sus fuerzas hasta hacer chillar al
mayor, buscando únicamente su placer a través de las dolorosas acciones. Y es que el cuerpo
del omega había sido consumido por completo por este, envuelto en esas feromonas de un
olor delicioso que Wei Wuxian nunca había percibido, sintiendo sus puntos sensibles ser
presionados por ese miembro al mismo tiempo que sentía dolor, notando su propio miembro
completamente endurecido en su abdomen bajo, meciéndose ante las fuertes embestidas del
alfa, el cual no había bajado su ritmo ni su fuerza en todos aquellos minutos, haciendo la
estimulación repetida y con la misma intensidad para el omega.

Comenzando a sentir mucho placer y un extraño cosquilleo en la parte baja de su abdomen,


Wei Ying intentó detener a Lan Zhan una última vez, volviendo a suplicar: "Er... Er Gege...
Lan Er Gege... Por favor, solo... solo un segundo por favor. Lan Zhan me duele mucho...
Dame un descanso..."

Pero aun sin reaccionar, con los ojos dorados por su excitación ante el celo, Lan Wangji
siguió dando esas mismas embestidas fuertes y profundas en el interior del mayor, sin ningún
cuidado, disfrutando de sentir como el cuerpo de este había comenzado a absorberlo de una
forma más fuerte aun. Era el cuerpo de Wei Ying, el cual sintiendo aquel cosquilleo en su
abdomen cada vez más fuerte, supo que pronto tendría su orgasmo, su tan esperada primera
vez, la cual lograría solo con las bruscas atenciones de Lan Wangji, sin poder dejar de soltar
gemidos fuertes y dulces.

Presionando sus manos en puños y escondiendo su rostro entre las almohadas de la cama por
la vergüenza, solo faltaron unas cuantas embestidas más para que el mayor se viniera,
estremeciendo por completo su cuerpo y soltando gemidos más fuertes. Su cuerpo temblaba
por el placer de su primera vez, mientras que su mente ahora se había convertido en un caos,
comenzando a ceder por completo ante su propio celo. Respirando profundo para intentar
tranquilizarse, el joven omega no tuvo ni un segundo de descanso por parte de Lan Wangji, el
cual sin dejar de sostenerlo por las caderas, no había dejado de moverse ni por un segundo.
Gimiendo fuertemente por el placer, Wei Wuxian intentó apartarse de Lan Zhan de nuevo, ya
que todo aquello era demasiado para su cuerpo, el cual no había tenido ni un segundo de
descanso después de su primer orgasmo, que lo había hecho temblar y estremecerse con
placer: "Piedad... Lan Er Gonzi... Piedad, no puedo más, por favor déjame descansar un
momento... Por favor".

Como si aquellas palabras por parte del mayor fueran un incentivo en vez de una súplica, Lan
Wangji afianzó su agarre en el cuerpo de este, decidiendo sostenerlo de la cintura para
obligarlo a bajar la espalda pero sin dejar que se alejara. Y sujetándolo de esa manera con sus
dedos, volvió sus movimientos más fuertes y rápidos aun, cada vez más excitado por sentir
aquella estrechez sobre su miembro.

Ya sin poder resistirse más, dejando a su omega el control de su cuerpo, Wei Wuxian poco a
poco comenzó a ceder ante las embestidas, bajando la espalda para hacer más fácil su
penetración, mientras que comenzaba a mover las caderas por su cuenta, siguiente el violento
ritmo de Lan Zhan con sus embestidas. Jadeando y gimiendo tímidamente, Wei Ying oculto
su propio rostro entre las almohadas de la cama con mucha pena, muy avergonzado del
increíble placer que sentía con cada embestida, soltando aún más feromonas, que parecían
enloquecer a Lan Zhan.

Lan Zhan, dándose cuenta de que ya no debía sujetar fuertemente al mayor para seguirlo
penetrando, se atrevió a tocar el pecho de este con torpeza, al igual que darle duras caricias en
las piernas y las caderas. Era como si su alfa no quisiera ser amable con el omega al que
estaba abrazando, lo trataba con rudeza, haciéndolo duro y fuerte. Al sentir aquellas dulces
feromonas que inundaron la habitación y que provenían de Wei Ying, su mandíbula se tensó,
comenzando a sentir un deseo incontrolable de morder al indefenso omega debajo de su
cuerpo, mirando blanca y suave piel, queriendo marcarlo una y otra vez como suyo.

Poco a poco, Wei Ying se dejó inundar por el embriagante placer, cooperando ciegamente
con Lan Zhan para ser penetrado y abusado de esa forma, cediendo por completo ante sus
instintos como omega. Pero cuando sintió unos fuertes dientes presionando la piel de uno de
sus hombros no pudo evitar soltar un fuerte quejido, mientras su cuerpo se tensaba: "¡Lan
Zhan! ¡Duele! ¡No lo hagas de nuevo!"

Sin embargo, el joven alfa volvió a ignorar sus suplicas, y enredando el largo y sedoso
cabello negro del omega entre sus dedos, lo obligó a girar la cabeza con el agarre tirando de
sus cabellos, para así poder tener acceso a su cuello, mordiéndolo con la misma fuerza que
antes, dejando marcas rojas en su piel, escuchando los gemidos y quejidos que soltaba Wei
Ying por sus acciones.

"Por favor no me muerdas... No lo hagas... Las marcas se verán y..." Suplicó Wei Ying,
intentando mantenerse consiente en medio de su celo.

Sin embargo, Wei Wuxian no pudo seguir hablando, pues sus palabras rápidamente se
cortaron cuando las embestidas de Lan Wangji se volvieron más bestiales aun, comenzando a
hacerlo rebotar en la cama. Tal era la fuerza con la que lo embestía que Wei Ying volvió a
estar a punto de venirse otra vez, disfrutando en secreto de ese rudo trato que lo hacía llorar
por el placer, contrayendo su interior y estremeciendo su cuerpo.
Solo bastaron unas cuantas embestidas más para que Wei Ying volviera a tener un orgasmo,
contrayendo su interior y levantando las caderas por instinto, aun sintiendo a Lan Zhan
mordiendo su piel. Soltando un gruñido de placer, Lan Wangji finalmente dejo de morder al
mayor para tomarlo firmemente de las caderas, sujetándolo con todas sus fuerzas a punto de
venirse igualmente, embistiéndolo cada vez más fuerte hasta finalmente terminar en el
interior del omega, dando una fuerte y profunda embestida, jadeando por el placer.

Sintiendo como algo muy caliente comenzaba a llenarlo, Wei Ying se tensó gritando: "¡No!
¿¡Que haces!? ¡No adentro!".

Sin embargo, aunque el mayor suplicara, ya era demasiado tarde, pues toda la esencia del
menor se había derramado dentro de él, mientras que soltando un quejido de dolor, Wei Ying
sintió como en su interior el miembro de Lan Zhan se volvía más grande por unos segundos,
expandiéndolo hasta el límite.

"¡Basta! ¡Me duele! ¡No te vuelvas más grande!" Suplicó Wei Ying, temblando.

Y es que no lograba entenderlo ¿Por qué se había vuelto más grande de un segundo a otro?
No dejaba de darle vueltas a aquello, sintiendo su interior arder y como si sus fuerzas se
acabaran, comenzando a derrumbarse en las almohadas. Comenzaba a perder la consciencia
después de tanto, dejándole finalmente paso a su omega.

Lan Zhan por su parte, regularizando su respiración, aún seguía aferrado a las caderas del
mayor mientras comenzaba a volver en sí mismo poco a poco. Lo primero que el joven Lan
notó al despertar fue ese aroma, el aroma de sus feromonas juntadas con las de Wei Ying, uno
que nunca antes había sentido, y que le parecía el más delicioso del mundo. Relajando
finalmente sus manos en las caderas del mayor y al bajar la mirada, aun mareado, no pudo
evitar sentirse horrorizado.

Todo su cuerpo tembló, mirando a Wei Ying debajo de sí mismo, atado a la cabecera de la
cama con su cinta de frente, con el cabello suelto y revuelto, y lo más importante: con todo el
cuerpo hecho un desastre. Nadie en Gusu le había explicado jamás como era tener sexo con
un omega, en realidad nadie nunca jamás si quiera le había mencionado eso al joven Lan
Zhan, así que cuando este se vio en el interior del omega, en aquella escena que le costaba
entender, sin comprender que estaba haciendo o que había hecho, teniendo pequeños
destellos de lo que acababa de suceder, algo que comenzaba a recordar, pero no entendía para
nada.

Y aunque todavía se encontraba duro en el interior del omega, de manera temblorosa lo


sostuvo de las caderas para salir de su interior con cuidado, notando que este había sangrado
bastante. Sin embargo, Wei Ying se quejó debajo de él, empujando sus caderas en su
dirección: "No... Te lo suplico... Lan Er Gege... No salgas, no salgas..."
Capítulo 35.

ADVERTENCIA.

ESTE CAPÍTULO CONTIENE ESCENAS DE SEXO EXPLICITP, SE RECOMIENDA A


LAS PERSONAS SENSIBLES NO LEERLO Y PASAR DIRECTAMENTE AL FINAL DE
ESTE MISMO CAPÍTULO.

SE PIDE DISCRECIÓN.

Quedándose helado al escuchar al mayor, Lan Zhan lo miró incrédulo. Wei Ying le había
hablado con un tono de voz muy dulce en medio de pesados jadeos por su excitación,
temblando y removiéndose contra su cuerpo. Todo aquello era demasiado confuso para el
menor, el cual le había hecho aquello al joven omega solo por instinto en medio de su primer
celo, y es que cuando su alfa tomo el control de su cuerpo, aunque Lan Wangji no tenía idea
de lo que estaba haciendo, actuó por puro instinto para tomar al omega que tenía en sus
brazos.

Pero eso poco le importaba a Wei Ying, el cual ya completamente perdido, lleno de deseo por
el celo, comenzó a mover las caderas por sí mismo sobre el erecto miembro de Lan Zhan,
soltando feromonas para intentar tentar al alfa aun en su interior: "Te lo suplico... Lan Er
Gege... Por favor hazme sentir bien... Ayúdame Lan Zhan..."

Ahogando un gemido de placer, Lan Zhan cerró los ojos intentando concentrarse, sintiendo
una extraña pero placentera sensación recorrer su cuerpo entero solo con sentir como era
succionado por el omega debajo de sí mismo. Aun sosteniéndolo de las caderas, cada vez
más excitado por esas feromonas que lo envolvían por completo, Lan Wangji se dejó llevar e
introdujo su miembro de nuevo en el caliente y estrecho interior de Wei Wuxian, escuchando
como este gemía con placer.

"Si... Así, hazlo así... Mas fuerte..." Suplicó el mayor perdido en el placer.

Aun sin entender nada de lo que estaba sucediendo, Lan Wangji comenzó a mover las
caderas, entreabriendo los ojos para ver a su compañero debajo de su cuerpo, observando su
rostro de placer y sus mejillas completamente rojas por la excitación. Lan Zhan no entendía
nada, solo pudiendo razonar que a Wei Ying parecía estarle gustando por los dulces sonidos
que soltaba de forma tímida y los movimientos temblorosos del cuerpo de este. Y aunque el
joven jade ni siquiera sabía si podía tocarlo en otras partes de su cuerpo, solamente se
concentraba en embestirlo de una forma inexperta, dando suaves y lentos movimientos de
cadera, soltando jadeos al sentir el estrecho y húmedo interior del omega.

"Lan Er Gonzi... Mas fuerte... Se siente tan bien... Tan bien" Suplicó Wei Ying.

Sonrojándose un poco por las palabras de su compañero, el inocente jade comenzó a hacer lo
que el contrario le pedía, bombeando sus caderas de una forma un poco más fuerte,
escuchando sorprendido como los dulces sonidos que soltaba Wei Wuxian se habían vuelto
más fuertes aun. Y sin esperarlo para nada, Lan Zhan sintió como el interior de este se
estrechaba mucho sobre su miembro, escuchando como Wei Ying soltaba gemidos tan fuertes
que parecían gritos, sintiendo de pronto una humedad mayor pero de origen desconocido
saliendo del mayor.

Dejándose llevar por el fuerte y placentero aroma de las fuertes feromonas de Wei Ying, Lan
Zhan siguió dando esas fuertes embestidas un poco más confiado, pues entendía que eso no le
disgustaba al omega, en cambio le gustaba mucho. Observando hipnotizado como el mayor
se removía debajo de su cuerpo, susurrando cosas incomprensibles en medio de sus fuertes
gemidos, tensando su cuerpo y soltando cada vez más feromonas, algo que lo tentaba cada
vez más.

"Mi cuello... Lan Er Gege... Por favor mi cuello"

Algo confuso, Lan Wangji logró escuchar unas cuantas palabras de las que decía el mayor en
medio de sus fuertes gemidos, pero no lograba comprender su significado, así que bajo un
poco el ritmo de sus embestidas, intentando conversar un poco con Wei Ying para poder
entender lo que decía, preguntándole: "¿Tu cuello?"

Respirando profundo, aún muy agitado después de ser embestido con tal energía, Wei Ying
logró hablar con un poco más de coherencia: "Muérdelo... Muerde mi cuello... Arde tanto..."

Los dorados ojos de Lan Zhan se fijaron entonces en el resto del cuerpo del mayor, notando
que tenía varias fuertes mordidas en la espalda y en casi todo su cuello. Avergonzándose por
darse cuenta de que había sido él mismo quien lo había marcado de esa manera, volvió a
acostarse sobre el cuerpo de Wei Wuxian y alargando ligeramente su cuello por la diferencia
de altura que existía entre el mismo y el omega, se atrevió a dar suaves mordidas en su blanca
piel, dejando marcas más pequeñas y menos rojas.

"¡Ahí no! ¡Ahí no!" Suplicó Wei Ying en un grito, completamente dominado por su omega en
celo: "En mi nuca... El vínculo... Lan Zhan quiero el vínculo..."

Al escuchar estas palabras, Lan Wangji abrió mucho los ojos, sorprendido. Era verdad que no
entendía nada en absoluto de como tener sexo con su omega, pero algo que si entendía era el
significado del vínculo y como se realizaba. Sin entender por qué Wei Ying le estaba
suplicando aquello, solo pudo mirar al mayor, el cual deshecho en lágrimas por el dolor y el
placer, igual le devolvía la mirada de reojo, aun suplicando.

"El vínculo... Quiero el vínculo... Quiero ser de didi... Lan Zhan... Quiero ser de Lan Zhan".

Sonrojándose de nuevo al escuchar esas suplicas, Lan Zhan se puso tímido, desviando la
mirada: "Wei Ying, no puedo".

Quejándose en modo de respuesta, volviendo a tensar su cuerpo por el placer, Wei Wuxian
replicó: "Duele... Me duele... Ayúdame Lan Zhan, muérdeme... El vínculo, quiero el vínculo,
por favor hazme tuyo, dame el vínculo..."

Jadeando por el placer, sintiendo como era nuevamente succionado con fuerza, Lan Wangji se
contuvo para no ceder ante las suplicas. Sin embargo, envuelto en medio de todas esas
feromonas, escuchando a su alfa rugir por el deseo, Lan Zhan acercó sus labios
peligrosamente a la nuca del mayor.

"Si... Muérdeme... El vínculo, dame el vínculo..." Siguió suplicando Wei Ying, a punto de
venirse otra vez.

Sin embargo, logrando contenerse, sabiendo que si hacia lo que el mayor le pedía no sería
justo para nadie, Lan Wangji beso tiernamente la piel de la nuca de este, intentando así
relajarlo y controlar sus ansias, comenzando a sentirse en su límite también debido a la fuerza
con la que era succionado.

Pronto, con un grito, Wei Ying se vino por última vez, derrumbándose en la cama
completamente agotado. Sintiendo como su miembro era succionado con más fuerza aun,
Lan Zhan sostuvo el débil cuerpo de Wei Ying en sus brazos, moviéndose más rápido aun
hasta venirse nuevamente en el interior de este. Quedándose quieto por un par de segundos,
recuperando el aliento, lentamente soltó el cuerpo del omega notando como Wei Ying
finalmente se derrumbaba en la cama agotado.

"¿Wei Ying?" Preguntó Lan Zhan preocupado, saliendo del interior de este.

Sin obtener respuesta, ya completamente fuera del interior de Wei Ying, Lan Zhan
cuidadosamente se arrastró en la cama para poder ver al mayor. Aparentemente Wei Wuxian
había acabado inconsciente por el cansancio, así que de manera cuidadosa procurando no
despertarlo, Lan Zhan decidió desatar las manos de este de la cabecera de la cama,
recuperando por fin su cinta de frente.

Todavía confundido, Lan Wangji solo atinó a vestir al mayor con la poca ropa que le
quedaba, para luego acomodarlo en la cama de una mejor manera, cubriéndolo con las
frazadas lo mejor que pudo, intentando así recuperar aunque sea un poco del pudor que
ambos habían tenido en el pasado. Y aunque Lan Zhan intentaba disimularlo un poco, en
realidad él también estaba agotado, así que débilmente logró desabrochar su cinturón para
poder estar un poco más cómodo, desajustando sus túnicas ya que había sudado mucho y aún
estaba un poco acalorado. Ya más tranquilo, Lan Wangji también se acostó en su cama, y algo
aturdido por el aroma de las feromonas en su habitación, terminó durmiéndose también.

Sujetando una de las manos del mayor con delicadeza en medio de sus sueños.

***

Abriendo los ojos con cierta furia, Jiang Cheng sintió la luz de la venta abierta por la que
había escapado Wei Wuxian dándole directamente en los ojos.

"Maldito Wei Wuxian" Susurró Jiang Cheng enfadado: "Oye tarado ¿No podrías cerrar las
cortinas por lo menos?"

Sin recibir respuesta, Jiang Cheng soltó un bufido con molestia, tomando una de las
almohadas de la cama de Wei Ying para cubrirse con esta el rostro, aun molesto de haberse
despertado por la incómoda luz del exterior dándole directamente en los ojos.
"¡Wei Wuxian!" Gritó Jiang Cheng furioso: "¡Cierra la puta ventana! ¡No es gracioso!"

Sin embargo, nuevamente puro silencio.

Comenzando a asustarse, dándose cuenta de que su hermano no respondía, Jiang Cheng se


sentó en la cama de golpe, mirando a todos lados confusos. La habitación estaba
completamente vacía, y a su lado en la cama no había rastro de que Wei Ying hubiera
dormido.

"Mierda..."

Poniéndose de pie lo más rápido que podía, tomando sus túnicas para vestirse apresurado
mientras se dirigía a la salida, miles de horribles opciones de lo que pudo sucederle a Wei
Ying se hicieron en su cabeza. Desesperado, sin saber qué hacer, finalmente decidió salir a
buscarlo. Caminando rápidamente a la salida, abrió la puerta de la habitación y se topó de
frente con Jiang Yanli, la cual despierta y con una sonrisa había traído el desayuno para sus
dos hermanos en una bandeja.

Luciendo aterrado, quedándose en blanco por algunos segundos al ver a su hermana en la


puerta, Jiang Cheng no supo que hacer, solamente pudiendo susurrar: "Shijie..."

"A-Cheng, buenos días" Saludó la joven de forma alegre: "¿A-Xian aún sigue dormido?"

Razonando rápidamente y decidiendo mentir, Jiang Cheng dijo: "Si, lo está".

Viendo a esos dos sirvientes cansados, aun vigilando la puerta, Jiang Cheng supo que no
podía decir la verdad en ese mismo instante. Así que haciéndose a un lado en la puerta, dejo
que su hermana pasara a las habitaciones privadas de Wei Ying.

"Entonces despertémoslo juntos, les traje algo delicioso de lo que sobro del banquete de ayer"
Dijo Yanli con alegría, entrando en la habitación.

Cerrando las puertas corredizas de la habitación por sí mismo detrás de su hermana, Jiang
Cheng se apresuró a seguirla, dándose cuenta de que ella había ido directamente a la cama de
Wei Ying, encontrándola vacía y con la ventana que quedaba al lado abierta.

"¿A-Xian?" Preguntó la confusa joven.

Tomando valor para decir la verdad, Jiang Cheng se acercó a su hermana y la miró a los ojos
asustado antes de confesar: "Ayer escapó mientras yo dormía".

Abriendo mucho los ojos por al sorpresa, sin saber que decir, Jiang Yanli se quedó
completamente aterrada, pensando al igual que su hermano en todas las horribles
posibilidades de lo que pudo sucederle a Wei Ying solo en medio de su celo.

"¿Qué hacemos?" Preguntó Jiang Cheng aterrado.

"Tenemos que buscarlo nosotros, nadie puede enterarse, ni madre, ni padre".


Asintiendo a las palabras de su hermana, Jiang Cheng la ayudó con la bandeja, poniéndola
sobre la cama.

Mirando a su hermana nuevamente asustado, Jiang Cheng preguntó: "¿Y si le pasó algo
horrible? ¿Y si no podemos encontrarlo?"

Guardando un poco más de calma, Jiang Yanli respondió: "Lo haremos, estará todo bien".

"Esto es mi culpa..." Se lamentó Jiang Wanyin realmente angustiado.

Intentando consolar a su hermano, Yanli le dio un par de palmadas en la espalda, mirándolo


con compasión: "No fue tu culpa A-Cheng, no lo fue".

"¿Entonces?"

"No pensemos en culpas ahora, busquemos a A-Xian y regresémoslo pronto antes de que
alguien se dé cuenta".

Aun lleno de pánico por lo sucedido, Jiang Cheng se negó a llorar, saliendo junto a su
hermana con dirección a diferentes lugares en su propia secta, buscando a Wei Wuxian
desesperados. Recorriendo lugares como el claro en los bosques donde antes solían jugar o
los muelles, no encontraron rastro del joven omega, comenzando a desesperarse aún más,
pues sabían lo delicado que estaba en su estado.

Sin embargo, acercándose cada vez más al pabellón de los Lan, el único lugar donde ambos
hermanos no habían entrado, Jiang Cheng sintió su corazón latiendo desesperado, pues temía
lo que pudo haber pasado ahí.

"¿Crees que...?" Preguntó Jiang Cheng, parándose en la entrada de aquel pabellón con
habitaciones de lujo.

Mirando el lugar vacío con mucha preocupación, Jiang Yanli finalmente se resignó y dijo:
"Debemos avisar al consejo y a nuestra madre".

Asustado, Jiang Cheng se giró en dirección a su hermana, mirándola aterrado: "Pero..."

"Debemos hacerlo A-Cheng, esto ya es muy grave".

Bajando la cabeza realmente triste, comenzando a temblar por el miedo y la pena, Jiang
Cheng susurró: "Pueden condenarlo a muerte por esto..."

***

Lan Zhan abrió los ojos bastante cansado. Su horario habitual en la secta Lan hacia que su
reloj biológico lo despertara cada mañana al amanecer sin fallas, una rutina que había seguido
desde que tenía memoria. Sin embargo ese día, después de haber tenido su primer celo y su
primera vez hasta tan tarde por la noche, fue la primera vez en muchos años que Lan Wangji
terminó despertando mucho después de lo usual.
Recordando bien lo que había hecho, con la culpa y el dolor carcomiendo su ser, se giró en la
cama y observo a su anterior prometido a su lado. Wei Ying, el cual seguía profundamente
dormido al estar exhausto y débil, había pasado la noche sobre su estómago por el dolor en
sus caderas, y entre sueños había buscado la mano del joven maestro Lan, tomándola y
durmiendo aferrado a su alfa. Aun sujetando tiernamente su tibia mano, Lan Wangji lo miró
fijamente, notando lo apacible que se veía durmiendo de esa manera.

Llevando su otra mano al rostro del contrario, Lan Zhan acarició delicadamente sus mejillas,
apartando un poco de su cabello suelto que se había puesto sobre su rostro entre sueños.
Admirando la belleza de aquel omega, Lan Zhan notó que un aroma especialmente delicioso
inundaba toda la habitación: la mezcla del olor de sus feromonas con las feromonas de Wei
Ying. Un aroma sumamente relajante y que para el menor era sumamente delicioso, una
combinación perfecta.

Aun distraído pensando en esas cosas sin sentido, sintiendo finalmente en paz al poder estar
al lado de su omega, Lan Wangji no se dio cuenta cuando voces alarmadas y pasos
apresurados invadieron el pabellón designado para la secta Lan en Yunmeng. Saliendo de ese
estado de paz únicamente cuando escuchó fuertes golpes en la puerta, Lan Wangji se sentó en
la cama de golpe asustado, sintiendo las feromonas de otras alfas y betas en el exterior,
notando que estaban furiosos, algo de lo que pudo darse cuenta debido a lo sensible que se
encontraba.

Despertando a duras penas con esos fuertes golpes y palabras que no entendía, Wei Ying
pestañeó un par de veces sintiendo como Lan Zhan soltaba su mano y se levantaba de la cama
apresurado. Sintiéndose aturdido, apenas pudiendo recordar lo sucedido la noche anterior,
solamente pudiendo concentrarse en el fuerte dolor de su cuerpo, Wei Wuxian preguntó:
"¿Lan Zhan? ¿Qué está pasando?"

Poniéndose de pie de la cama rápidamente, el joven maestro Lan se arregló las túnicas y el
cinturón que llevaba lo más rápido que pudo, intentando lucir aunque fuera un poco
presentable. Escuchando a la pregunta de Wei Ying, solo pudo mirarlo en la cama, y sin decir
nada se acercó a la puerta donde los gritos y los golpes se hacían cada vez más fuertes, hasta
el punto que amenazaban con romper las puertas de la habitación para entrar.

Tomando valor, Lan Wangji finalmente se acercó a la entrada de su habitación privada, y con
un rostro muy serio deslizo aquella puerta de madera para permitir que aquellos que estaban
fuera entraran. Sorprendido, Lan Zhan se topó de frente con aquellos ancianos del consejo de
su propia secta que no habían asistido a la cacería nocturna, al igual que otros alfas enfadados
pertenecientes a la secta Yunmeng Jiang. Sin siquiera tener tiempo de preguntar, Lan Zhan
fue apartado de golpe por aquellos alfas de la secta Jiang, los cuales con confianza entraron
en las habitaciones de Hanguang-Jun con un objetivo específico.

Aun aturdido, quejándose por el fuerte dolor en su cuerpo, Wei Ying se sentó a duras penas
en la cama manchada del menor, aferrándose a las frazadas del contrario intentando mantener
aunque fuera un poco de su pudor. Sin embargo al ver como las alfas de su secta entraban a la
habitación, un estremecimiento de pánico recorrió todo el cuerpo del joven omega, el cual
con los ojos llorosos solo pudo ver a los miembros de su secta acercarse cada vez más a él
completamente furiosos.
"¡Wei Ying!" Gritó Lan Zhan alarmado.

Sin ningún cuidado, aquellos alfas de la secta Jiang tomaron a Wei Ying de los brazos y lo
obligaron a levantarse de la cama. El omega, que se encontraba sumamente débil, no pudo
resistirse, y poniéndose de pie a duras penas comenzó a avanzar con la cabeza baja por la
vergüenza, sintiendo sus piernas doblarse por la debilidad que tenía pero sin poder detenerse
pues aquellos alfas lo arrastraban sin ningún tipo de consideración.

Observando a su destinado ser maltratado de esa manera, Lan Wangji quiso intervenir
inmediatamente, sin embargo fue detenido por los alfas consejeros de su secta, los cuales
observando al joven Lan llenos de desilusión y enfado, lo tomaron de los brazos para impedir
que fuera detrás de Wei Wuxian.

Pasando junto a su alfa por la puerta, sintiendo un inmenso dolor en su cuerpo, Wei Ying solo
pudo verlo de reojo y susurrar: "Lan Zhan..."

Con su alfa aullando de dolor al ver como su omega era herido de esa forma, Lan Wangji
estuvo a punto de perder el control, comenzando a luchar con esos consejeros Lan, gritando:
"¡Wei Ying! ¡Wei Ying!"

Pudiendo darle un último vistazo a su alfa antes de seguir siendo brutalmente arrastrado, Wei
Wuxian volvió a bajar la cabeza con vergüenza, dejando que lo condujeran por el largo
camino de regreso al centro de Lotus Pier. Sin pronunciar palabra, solamente pudiendo
quejarse en susurros por el dolor de su cuerpo herido, Wei Ying fue llevado al salón principal
de Lotus Pier, ese que la noche anterior había sido testigo de la fiesta de compromiso de Jiang
Wanyin y Lan Xichen.

Entrando por la puerta principal, Wei Ying observó como el salón tenia a todo el consejo de
Yunmeng Jiang reunido, los cuales al verlo entrar pusieron rostros de asco y odio, unas
expresiones que el joven omega nunca podría olvidar. Sintiendo las lágrimas de vergüenza y
dolor bajando rápidamente por sus mejillas, Wei Ying fue arrojado por esos alfas al suelo de
aquel salón, justo al frente de donde se encontraban las sillas de los líderes, donde Madam Yu
lo esperaba sentada.

Sin dejar de llorar, aún muy débil, Wei Ying logró sentarse a duras penas en el piso. Debido a
la noche anterior, su túnica se encontraba rasgada y no tenía pantalones ni botas. Así que
intentando mantener aunque fuera un poco del pudor que le quedaba, arregló sus túnicas y las
sujeto con sus manos para evitar que se viera su piel expuesta, con sus muslos manchados de
sangre por haber perdido su virginidad y el resto de su cuerpo lleno de las marcas de Lan
Zhan sobre su piel.

Esperando a que Wei Ying estuviera listo, llena de decepción por el joven omega, Madam Yu
comenzó a hablar: "Wei Wuxian, debes aceptar tu castigo".
Capítulo 36.

El rumor de que el joven omega Wei y Hanguang-Jun habían pasado la noche juntos corrió
como la pólvora. Después de ver como aquel omega era arrastrado como un perro fuera de las
habitaciones de Lan Wangji, cientos de rumores comenzaron a correr por todo Yunmeng,
hablando de como aquel omega indecente el cual había terminado su propio compromiso
insultando a los Lan, había corrido a buscar al joven alfa Lan Wangji y lo había seducido con
sus encantos para tener sexo con él. En pocos minutos la historia se deformó pasando de boca
en boca, llegando a tal punto que los aldeanos de Yunmeng aseguraban que por testimonio de
un amigo inexistente que trabajaba para los Jiang, se contaba que Wei Ying había tenido
relaciones sexuales con el joven maestro Lan desde que se conocieron en ese compromiso
que fue roto hace tantos años, donde Hanguang-Jun tenía 12 años; y que esa fue la razón por
la que el compromiso fue roto hace tanto tiempo, por la perversión de aquel omega Jiang.

Y desde ese entonces, aun sin ser cierto, en todas las sectas y todos los cultivadores supieron
la historia, que comenzó a contarse como un hecho en vez de una realidad.

Estos rumores que llegaron incluso dentro de Lotus Pier alarmaron a los invitados de la secta,
los cuales habían asistido a esta por el compromiso de los Jiang con los Lan. Y aquello que
debería haber sido resuelto únicamente por miembros de los propia secta Jiang fue
presenciado por todos los invitados importantes que habían asistido a la fiesta de
compromiso, miembros de la secta Jin tales como Madam Jin y Jin Guangyao, o los
consejeros alfa de la secta Nie. Algo que puso mucha más presión sobre la líder momentánea
de la secta Yunmeng Jiang, Madam Yu, la cual ante la mirada atenta de todas esas personas
poderosas opinando, debía tomar una decisión sobre aquel omega que llegaba a considerar
como un hijo.

Mientras que los Lan, otros invitados de la secta, no hicieron acto de presencia en el salón
principal de Yunmeng aun cuando sabían lo que ahí estaba pasando. El consejo de la secta
Gusu Lan, sin la presencia de su líder Lan Xichen o miembros importantes de su propio
consejo, tenían que encargarse de sus propios asuntos y de su propio castigo, deliberando a
solas sobre Lan Wangji, el cual estaba cada vez más fuera de control al estar apartado de su
omega.

Era todavía temprano en la mañana, y aquella gran comitiva que había salido de Yunmeng
para buscar los fantasmas de aire no había regresado aun, dejando a los líderes de las
importantes sectas fuera de aquella deliberación. Y aunque se habían enviado señales para
explicar la necesidad de su regreso, ninguno la había visto pues se habían internado
demasiado profundo en aquel bosque fuera del risco que rodeaba Yunmeng Jiang.

Así que tomando el lugar de su esposo, Yu Ziyuan miró a Wei Wuxian en el piso frente a ella,
con sus dos aterrados hijos a un lado, y el resto de las sectas importantes al otro, cada uno
pidiendo una cosa diferente.

"Madre por favor" Pidió Jiang Cheng desesperado: "Por favor no le hagas nada..."
"Madre..." Suplicó Jiang Yanli, poniéndose de lado de su hermano.

"Es indignante" Dijo Madam Jin, hablando con aquel que había aceptado en su secta como
hijo: "Que se admita este tipo de comportamiento en la secta Jiang, omegas indecentes, es
una vergüenza".

Asintiendo ante las palabras de Madam Jin, Meng Yao respondió: "Es verdad, ese omega
siempre causa desgracias, no debería ser considerado parte de una secta importante, se
necesita un castigo ejemplar u otros omegas de su clase pensarán que pueden romper la
tradición y hacer lo mismo".

Bajando la cabeza cada vez más avergonzado al escuchar todas esas habladurías, palabras
que en su mayoría eran en su contra y pedían un castigo, Wei Wuxian solo pudo quedarse
callado, llorando y sin poder pronunciar palabra.

"¿Qué debería hacer contigo?" Preguntó Madam Yu, sentada en la silla del líder: "Es evidente
lo que has hecho, puedo oler las feromonas de Lan Wangji en tu cuerpo y puedo ver las
marcas que ha dejado sobre tu piel ¿Qué debo hacer ahora Wei Wuxian?"

Ante esas palabras vergonzosas, Wei Ying presionó las manos en puños sobre su propia ropa,
con un dolor más fuerte que las heridas en su cuerpo, el dolor de saber que había fallado a su
secta y a Madam Yu, ya que aun sabiendo que no era enteramente la culpa el omega, Wei
Wuxian se castigaba a si mismo siguiendo la tradición.

"Una vez te dije que si ponías a mi secta en vergüenza te daría 10 azotes con el látigo de
disciplina de los Jiang y otros 10 con Zidian".

Alarmado al escuchar estas palabras de su madre, Jiang Cheng intervino: "¡Madre! ¡Míralo!
Esta herido, no podrá soportar ni cinco azotes".

Sin prestarle atención a su hijo en lo absoluto, intentando ser fuerte y directa, Yu Ziyuan
sentenció: "Entonces es lo que haré, tu castigo ha sido decidido Wei Wuxian, serás azotado
20 veces por hacer quedar en vergüenza a tu propia secta".

Haciendo una señal, Madam Yu ordenó a sus ayudantes de confianza que trajeran el látigo de
disciplina, mientras que otros sirvientes se acercaban a Jiang Cheng y Jiang Yanli,
apartándolos de Wei Wuxian para que no intervinieran en el castigo.

"¡Madre por favor!" Suplicó Jiang Cheng entre gritos de desesperación: "¡Lo mataras!
¡Madre Wei Ying no lo soportara!"

Prestando atención a estas palabras dichas por Jiang Wanyin, una de las damas del consejo de
Qinghe Nie dijo: "El omega Wei Wuxian está recibiendo un castigo inapropiado, en casos
semejantes debería ser condenado a muerte".

Asintiendo ante las duras palabras de aquella dama Nie, Madam Jin respondió: "Él debería
ser degollado y enterrado sin ningún rito funerario, fragmentar su alma para impedir su
resurrección, y escupir en su tumba por ser un omega tan desvergonzado".
Quedándose sin aliento al escuchar estas palabras, Jiang Wanyin se giró a ver a su hermano,
el cual sin reaccionar se había quedado en la misma posición sentado en el piso, decidiendo
aceptar su destino cualquiera que fuera.

Prestando atención a estas palabras de igual manera, con opiniones que habían comenzado a
llenar la sala de todos los presentes que pedían la muerte del joven omega, Madam Yu
respondió con frialdad: "Las tradiciones dictan que un omega deshonrado y preñado debe ser
condenado a muerte. Wei Wuxian fue ultrajado en su celo, pero no tenemos evidencias de que
este preñado. Si descubrimos en un futuro que lo está, entonces lo condenare a muerte; ahora
recibirá el castigo que como líder de secta he dictado, que como dice la tradición, solo debe
ser tomada por el líder de la secta deshonrada sin intervenciones ni cambios. Es mi decisión".

Sintiendo un ligero alivio al escuchar estas palabras, Jiang Cheng observó a su seria madre
con cierto cariño, sintiéndose aliviado de escuchar que solo sería castigado aun con ese brutal
procedimiento, el joven Wanyin no se preparó para lo que sucedería a continuación.

Aun esperando a que los sirvientes de la secta Yunmeng Jiang trajeran el látigo de disciplina
de la secta, Jin Guangyao intervino pocos segundos después, mirando a Wei Wuxian con
cierta indiferencia: "Sabemos que como sectas externas no podemos intervenir en el castigo
de Wei Wuxian por haberse deshonrado, pero si podemos intervenir pidiendo su destitución
como cultivador y de su posición en la secta Yunmeng Jiang".

Escuchando estas crueles palabras, Wei Ying levantó la mirada aterrado, observando a su
madre sentada de forma imparcial en la silla del líder, escuchando atenta las palabras de
Meng Yao.

Continuando con su discurso, el cual era dado en una voz tranquila y amable, Jin Guangyao
dijo: "La secta Yunmeng Jiang ha estado incumpliendo lo dictado por la tradición, dejando
que el sirviente Wei Ying continúe con sus actividades como cultivador y que salga de Lotus
Pier cuando lo desee. Como omega sin compromiso el debería quedarse sirviendo a sus
señores sin poner un pie fuera de la residencia Jiang, quitándosele su espada y su posición
privilegiada como miembro de la familia del líder de la secta. Wei Wuxian ni siquiera debería
haber presenciado la festividad de ayer como un cultivador importante, debió quedarse fuera
del salón sirviendo a sus amos como el resto de los sirvientes".

Presionando fuertemente los dientes, decidiendo interrumpir a Jin Guangyao, Jiang Cheng
gritó: "¡Cierra la boca maldito omega prostituto! ¡Cállate! ¡No opines sobre mi hermano!"

"A-Cheng, A-Cheng calma..." Pidió Yanli, con los ojos llenos de lágrimas por todo lo que
estaba sucediendo.

"¡Cierra tu maldita boca de omega barato! ¡Tú maldito Meng Yao!" Sentenció Jiang Cheng,
ardiendo en furia.

Mirando al contrario de reojo con cierta satisfacción, Meng Yao habló como líder suplente de
la secta Nie en representación de su esposo pidiendo: "Es petición de la secta Qinghe Nie que
se le quiten todos los privilegios dados de forma ilegal al omega Wei Wuxian. Tal vez si esto
se hubiera hecho desde un inicio, él no hubiera deshonrado a su secta y a la secta Lan como
lo hizo".
Poniéndose de lado de Meng Yao, Madam Jin también se pronunció: "Es petición de la secta
Jin que se le quiten los mismos privilegios a Wei Wuxian. Un omega de su clase no merece
ser tratado como un miembro importante de la secta Yunmeng Jiang".

Siguiendo el ejemplo de las dos sectas más importantes, otros líderes de sectas más pequeñas
se pronunciaron pidiendo lo mismo, presionando a Yu Ziyuan la cual no dejaba de mirar a
Wei Wuxian a los ojos. Mientras que el joven omega, cada vez más desesperado, no había
dejado de llorar ni por un segundo, suplicando en susurros que no hicieran aquello, cada vez
más asustado.

Tomando una decisión, suspirando resignada, Madam Yu habló con uno de sus sirvientes:
"Vayan a las habitaciones de Wei Wuxian y tomen a Suibian, llévenla a salón de las armas de
los Jiang, se le dará a otro cultivador cuando termine su entrenamiento".

"Por favor no... Por favor..." Suplicó Wei Ying ya sin poder aguantar más, sintiendo como
todo lo que le quedaba era arrebatado de sus manos.

Sin tener compasión, intentando hacer un buen papel para todos los presentes, Yu Ziyuan
siguió dando órdenes: "Tomen también toda la ropa de Wei Wuxian y llévenla a las
habitaciones compartidas de los sirvientes de Yunmeng, ahora él ya no tendrá una habitación
privada junto a mi familia, dormirá con el resto de los sirvientes omegas" Y tomando valor,
sintiendo un nudo en la garganta por la pena, Madam Yu se giró a ver a Wei Ying para darle
su última sentencia: "Wei Wuxian, desde este momento te expulso del núcleo de la familia
Jiang, permanecerás en esta secta, pero solo como un sirviente común sin más beneficios. Te
prohíbo tener un lugar en mi mesa y llamar hermanos a mis hijos. Tomarás tu lugar como un
sirviente común en las cocinas de Lotus Pier, y no podrás poner un pie fuera de los muelles
de Yunmeng, vas a obedecer, aun si tengo que encadenar sus manos y pies para hacerlo, no
volverás a salir de aquí nunca más".

Volviendo a bajar la cabeza con un llanto de desesperación y lamento mucho más fuerte, Wei
Wuxian gimió con dolor, sintiendo su corazón hecho pedazos. Nunca más podría ser un
cultivador, con esa falsa libertad que sentía cuando volaba sobre Suibian y ayudaba a
eliminar monstruos para su secta, no podría acercarse a los bosques donde amaba jugar, y
quedaría encadenado sirviendo en las cocinas todos los días y a todas las horas.

"Prefiero estar muerto..." Susurró Wei Ying, ya sin poder aguantar mucho más.

Haciendo reverencias para Madam Yu, aquellos sirvientes que ella había designado se
apresuraron a salir de la sala, yendo a las antiguas habitaciones de Wei Wuxian para hacer lo
que se les había ordenado, comenzando a empacar sus ropas y llevándose a la preciada
Suibian.

Tras unos cuantos minutos más aquellos sirvientes que habían sido enviados para traer el
látigo de disciplina de los Jiang regresaron a la sala principal de Lotus Pier, trayendo consigo
una caja de madera pesada llena de adornos, de la cual tomaron un pesado látigo el cual tenía
manchas de sangre en sus puntas, dejando ver a cuantas personas había lastimado antes que a
Wei Wuxian. Poniéndose detrás del omega, uno de los cultivadores alfa más fuerte de la
secta, se preparó para golpear a Wei Ying, levantando la mirada para ver a su líder esperando
la señal para poder empezar.
Con la mirada baja y habiendo dejado de llorar, Wei Ying se quedó en silencio, resignándose
a su suerte después de haberlo perdido todo, maldiciéndose a sí mismo por haber nacido
como un omega, esperando realmente morir después de aquellos azotes.

Asintiendo con la cabeza, Madam Yu dio la señal para que aquel alfa comenzara, y
levantando su brazo aquel cultivador de la secta Jiang dejo caer el primer y pesado azote
sobre la espalda de Wei Wuxian, escuchándolo gritar.

Doblándose por el dolor al sentir aquel fuerte golpe sobre su espalda, Wei Ying casi cae al
piso, teniendo que poner sus manos frente a si mismo de inmediato para no derrumbarse,
mientras que su cabeza comenzaba a dar vueltas y volvía a llorar por el dolor. Aquel primer
azote que ni siquiera había sido dado con toda la fuerza de aquel alfa, rasgó la delgada tela de
las túnicas interiores de Wei Wuxian, dejando la primera marca sangrante y roja sobre su
espalda.

"Aún si se cae, no te detengas" Sentenció Madam Yu con frialdad: "Dale los 10 azotes aún si
se desmaya en el piso".

Asintiendo ante las palabras de su líder, el cultivador alfa volvió a levantar el látigo para
luego dejarlo caer sobre la espalda de Wei Ying, el cual temblando por el dolor gritó y
escupió un poco de sangre, con una nueva y profunda cortada sobre su espalda. La cabeza
comenzó a dolerle, y entendiendo lo difícil que sería su muerte, Wei Wuxian cerró los ojos
resignado a morir, pidiendo morir para escapar de aquel castigo, gritando con la voz ronca
cuando un tercer azote cayo sobre su lastimada piel, sintiendo sus brazos temblar por el dolor
y su cuerpo a punto de caer.

Lamentándose de una sola cosa, pensando en su joven alfa con quien había despertado esa
mañana, Wei Ying únicamente pensó que no pudo disculparse con él, que aquella cosa que
tanto había deseado por años no pudo suceder, y lamentándose por eso, rogó internamente
que su joven Lan fuera feliz. Pues aún si no moría después de su sentencia, Wei Wuxian no
volvería a ver a ningún otro cultivador jamás; y eso incluía al maestro Lan Wangji.

"Perdón Lan Zhan..." Susurró Wei Ying, para luego volver a gritar cuando un cuarto azote
golpeó su espalda.

A punto de caer al piso, con sus brazos sin poder sostenerlo más y con sangre saliendo
abundantemente por sus labios, Wei Wuxian se giró rápidamente. Antes que cualquiera sintió
la presencia de su alfa, el cual se acercaba cada vez más a ese salón.

Deteniendo el castigo al escuchar ruidos extraños en el exterior, pronto todos los presentes se
sorprendieron al ver como las puertas del salón se abrían y Lan Wangji entraba con su típica
elegancia y seriedad. Llevando a Bichen ligeramente manchada de sangre consigo, los
dorados ojos del menor rápidamente se fijaron en el omega arrodillado en el piso, el cual
sumamente débil le devolvió igualmente la mirada.

Controlando a su alfa a duras penas, sintiéndolo arder en furia por ver como habían herido a
su destinado, Lan Wangji rápidamente avanzo hasta el centro del salón en medio de los
sorprendidos susurros de todos los presentes. Arrodillándose al lado de Wei Wuxian con
suma elegancia, Lan Er Gonzi levanto a Bichen en sus manos en la posición de penitencia de
los Lan, mirando a una sorprendida Madam Yu.

"Líder de la secta Jiang" Dijo Lan Wangji con un tono frio pero bastante fuerte: "Demás
líderes y miembros de los diferentes consejos, yo Lan Wangji de la secta Gusu Lan, pido el
honor de tomar la mano de Wei Wuxian para hacerlo mi prometido".

Aun mareado por todos los golpes, Wei Ying abrió mucho los ojos observando a su
destinado, pues no había creído posible escucharlo decir algo como eso alguna vez. Con
suma seriedad, mirando al alfa Yu Ziyuan frente a sí mismo, Lan Wangji no dudó, y se quedó
en esa posición de súplica frente a la mujer que respondía por el omega Wei Wuxian.

Mirando a ambos menores con un rostro de circunstancia, Madam Yu no tardó en responder:


"No".

Sin estar dispuesto a darse por vencido, Lan Wangji suplicó: "Por favor, líder de la secta,
permita que Wei Ying se convierta en mi esposo".

Sintiéndose enfadada y ofendida por el proceder del menor, quien no aceptaba la negativa, Yu
Ziyuan volvió a negar: "No, no lo permito. Regresa con tu secta y abandona Lotus Pier de
inmediato".

Con la misma determinación, mirando fijamente los ojos violetas de aquella mujer alfa, Lan
Wangji respondió: "No me iré".

Al escuchar esas palabras desafiantes entre ambos alfas, quienes enfadados y bastante fuera
de control por todo lo que había sucedido, comenzaron a soltar sus feromonas, intimidando el
uno al otro, intentando hacer prevalecer su voluntad.

"¿No te iras?" Cuestionó Madam Yu con un tono desafiante: "No es una petición, todo esto es
tu culpa, te estoy echando de mi secta. Sepárenlos" Ordenó a sus sirvientes.

Observando de reojo como los cultivadores alfa que servían a Madam Yu volvían a acercarse,
Lan Wangji se puso de pie en menos de un segundo, y desenvainando a Bichen se preparó
para pelear, poniéndose detrás de Wei Ying para defenderlo.

"Lan Zhan..." Susurró el omega débilmente, observando a su alfa protegerlo.

Mirando fijamente a esos sirvientes alfas que temerosos querían acercarse a ellos, Lan
Wangji no dudó en amenazarlos: "No se atrevan a tocarlo, nunca".

Soltando fuertes feromonas que incluso asustaron a Wei Ying, aquellos alfas retrocedieron
mirando asustados a su líder, dejando a ambos jóvenes nuevamente en paz. Viendo que
aquellos alfas se habían alejado, Lan Zhan relajo su posición y volvió a enfundar a Bichen, y
dándole un nuevo vistazo a Wei Ying para asegurarse de que estuviera bien, regresó a su
antigua posición arrodillado y sosteniendo su espada con los brazos rectos frente a Yu
Ziyuan.
"Líder de la secta Jiang, permítame tomar la mano de Wei Ying para hacerlo mi esposo"
Volvió a pedir Lan Zhan.

Dándose cuenta de que aquel joven alfa no iba a rendirse y mucho menos dejar que lo sacaran
de ahí sin pelear incluso llegando a matar, Yu Ziyuan suspiró con resignación y enfado,
observando a Wei Ying y Lan Zhan en el piso frente a ella, ambos suplicando que los dejaran
volver a unirse. Sin embargo sintiendo la presión de todas las sectas a su alrededor, que
cuestionaban su fuerza como líder al no poder controlar esa situación y aún mas cuestionando
su debilidad si volvía a dejar que se unieran, la mujer se sintió completamente impedida.

E intentando pensar, miró por una de las ventanas del gran y lujoso salón, dándose cuenta de
que ni siquiera era media mañana.

Aquel día amenazaba con ser arduo y muy largo para todos los presentes.
Capítulo 37.

Su sangre goteaba sin cesar. Sintiendo las tibias gotas caer de sus labios al piso, manchando
las maderas debajo de sus pies, Wei Ying volvió a sentir que desfallecería. No había comido
nada desde el día anterior, pues se había saltado el banquete dado por el festejo. Y no solo
eso, había tenido un celo muy duro y muy reciente, además de la pérdida de su virginidad de
una forma tan violenta; teniendo que aguantar esas heridas junto a los fuertes azotes del látigo
de disciplina en su espalda. Aun sentado en el piso, temblando por el esfuerzo, Wei Wuxian
se obligaba a sí mismo a no desmayarse, aun teniendo a Lan Zhan a su lado.

El joven alfa, sin perder su determinación ni por un segundo, no había relajado si posición
para nada. Arrodillado y con los brazos frente a su cuerpo, con la espalda recta y el rostro
serio, sosteniendo a Bichen y con mucha elegancia; en la posición de penitencia de los Lan,
seguía pidiendo de forma incansable que le permitieran casarse con Wei Ying, estando
también muy atento a cualquier signo de ataque de quien sea, preparado para defender a Wei
Wuxian de cualquiera que quisiera ponerle un dedo encima.

Dándose cuenta de que estaban en una situación imposible de solucionar, Madam Yu se


quedó sentada en el asiento del líder completamente resignada. Habían intentado separar a
Lan Wangji de Wei Wuxian un par de ocasiones, y sin importar que hicieran, el resultado
siempre era el mismo; al darse cuenta de sus intenciones el joven Lan se ponía de pie de
inmediato, y desenvainando a su conocida espada Bichen, luchaba y defendía a su omega,
gruñendo y soltando sus feromonas. Siendo presionada por las sectas para hacer algo al
respecto, y presionada por Lan Wangji para darle lo que quería, esa mujer alfa se sentía
superada, y solamente pudiendo mirar intentaba pensar en una solución rápida para ese gran
problema.

De una forma increíble, aun sin entender como lo habían logrado, ambos jóvenes se quedaron
en sus posiciones por un par de horas, habiendo pasado el mediodía y con miembros de todas
las sectas cansados de la situación y retirándose a sus aposentos, pocos miembros importantes
quedaban en la sala, muchos de los cuales por curiosidad o por falsa moral intentaban
asegurarse de que las tradiciones fueran seguidas y el compromiso entre ambos no fuera
restaurado.

Debido al paso del tiempo, pronto aquellos líderes que fueron de cacería regresaron.
Llegando a Yunmeng, Jiang Fengmian y Lan Xichen se enteraron de lo sucedido, y fueron los
primeros en correr al salón principal de Yunmeng, encontrando aquel espectáculo.

"Wangji..." Se lamentó Xichen, observando a su hermano.

Sintiendo un profundo dolor al ver a su querido Wei Ying en ese estado, Jiang Fengmian se
apresuró a dirigirse a su esposa, comenzando a hablar con su alfa en susurros, cada vez más
alterado al ver lo que pasaba.

Aun siendo sujetado por sirvientes al igual que su hermana, Jiang Cheng se negaba a
abandonar el salón, y al ver a su prometido entrando, sus ojos se llenaron de lágrimas
mientras Lan Huan iba en su rescate, apartándolo de aquellos sirvientes para abrazarlo.

"Fue tan horrible..." Susurró Jiang Cheng aferrándose a su alfa: "Por favor ayúdalos, por
favor haz algo..."

"Tranquilo Yin Yin" Susurró Lan Huan apartándolo un poco de aquella multitud: "Por favor
no llores, yo me encargare, quédate tranquilo". Aseguró el mayor.

Convocando una nueva reunión de líderes, ahora sin suplentes por ausencia, Jiang Fengmian
condujo aquella reunión en medio de la sala y frente a los jóvenes, llamando consigo a los
tres líderes que estaban presentes como invitados en su secta.

"Esto es imperdonable" Se negó Nie Mingjue con seriedad, con la usual rigidez de los
miembros de su secta: "El omega fue deshonrado, merece el castigo y no una recompensa
como un matrimonio arreglado con un miembro de una secta como Gusu Lan".

Tomando una posición tranquila, aunque no lo estaba en absoluto, Lan Xichen intervino
rápidamente: "El compromiso no está visto de mala manera a mis ojos, es una forma de
intentar retribuir a la secta Yunmeng Jiang por este desastre. Wei Wuxian no es el único
culpable, mi hermano también lo es, la única forma que nosotros tenemos para pedir
disculpas es intentando solucionar el problemas ofreciéndole un nuevo futuro al omega
deshonrado".

Escuchando con atención, sintiéndose más divertido que preocupado por la decisión, Jin
Guangshan dijo: "Si ese es el caso, líder de la secta Lan, usted debería proponer un
matrimonio entre sirvientes, no con la línea sucesoria principal de su clan. Un omega
deshonrado no es un buen partido para alguien como su hermano".

"Deshonrado pero por él mismo, Wangji deshonro a Wei Wuxian" Se defendió Lan Xichen.

"Líder Lan, usted no puede pedir un matrimonio" Sentenció Jiang Fengmian con un tono
obscuro: "Le recuerdo que su hermano ya está comprometido con un omega de la secta Wen.
La secta Jiang podría aceptar otro compromiso con su secta en un caso excepcional, pero con
otro alfa que este sin compromiso; el joven Wen Xu ya ha sufrido una ruptura de
compromiso, la secta Yunmeng Jiang no quiere hacerse responsable por el dolor de una
segunda ruptura. Esto es devastador para un omega, la secta Wen puede sentirse ofendida, y
nosotros no queremos eso para nada".

Escuchando todo aunque a ligera distancia, Jiang Cheng se tomó fuertemente de la mano de
su hermana, suplicando internamente que todo se resolviera y que Lan Xichen pudiera hacer
algo.

Poniéndose tenso, escuchando todo también, Lan Zhan se dio cuenta de que en esa reunión
era la opinión de su hermano en contra de todos los líderes. Y aunque el joven alfa confiaba
ciegamente en la capacidad de Lan Huan, sin importar la decisión de aquella reunión de
líderes, ya había tomado una decisión: No permitiría que lo separaran de Wei Ying de nuevo,
y aun si tenía que escapar con el omega y romper las reglas de todas las sectas, Lan Wangji se
había prometido no volver a abandonar a Wei Ying.
"Si lo que le preocupa es la responsabilidad de la ruptura del compromiso, entonces será la
secta Lan la que se hará responsable ante la secta Wen y todos los demás" Prometió Lan
Huan.

Bufando con ironía, Nie Mingjue miró con cierta incredulidad a Zewu-Jun: "Lan Huan, con
todo respeto, usted no entiende a la secta Wen en lo absoluto. Con su actitud, aun si lo
intenta, será una desgracia".

Nie Mingjue, el anterior prometido de Wen Xu y quien había roto el compromiso la primera
vez, era un gran conocedor de los miembros y el proceder de la secta Qishan Wen. Así que
sabiendo los problemas que podría tener la secta Lan con la secta Wen por su propia
experiencia, supo que aquello era una mala idea.

"No queremos una nueva desgracia como en el pasado ¿No cree Zewu-Jun?" Preguntó Jin
Guangshan, sonriendo con diversión: "No es la primera vez que la secta Lan rompe un
compromiso con la secta Wen, hace 20 años cuando su padre estaba comprometido con la
hermana de Wen Ruohan, rompió el compromiso por casarse con su madre, una mujer omega
cualquiera que ni siquiera venia de una buena familia y era un sirviente, así como Wei
Wuxian. Sintiéndose deshonrada y rechazada, la señorita Wen acabo con su vida de una
manera trágica y eso causo una desgracia. Aún recuerdo que en ese entonces su propio padre
prometió que la secta Lan se haría responsable por la ruptura ¿Lo harán de la misma forma de
nuevo?"

Poniéndose serio ante las palabras maliciosas de aquel hombre, Lan Xichen respondió: "Si, la
secta Lan se hizo y se hará responsable de todas sus promesas".

"Y vaya que se hizo responsable entonces" Se siguió burlando Nie Mingjue: "Gracias a la
muerte de la hermana de Wen Ruohan, hubo una guerra entre la secta Lan y la secta Wen,
varios muertos de ambos por un sirviente; y no solo eso, su propio tío Lan Qiren, perdió el
compromiso que tenía con Wen Ruohan y ahora debe pasar sus días en Gusu encerrado como
un sirviente. Ese fue el precio a pagar por su padre ¿Está usted dispuesto a pagar el precio del
error de su hermano?"

Dándose cuenta de que tenían al pobre joven Lan contra la pared con sus palabras mal
intencionado, Madam Yu rápidamente intervino en la reunión, parándose al lado de su omega
para decir: "Ustedes entienden que esta decisión solo le compete al clan Jiang ¿Verdad?"

Riéndose nuevamente, solamente disfrutando de aquella diversión, Jin Guangshan respondió:


"Claramente, solo el clan Jiang y el clan Lan pueden encargarse. Pero como líderes de sectas,
nosotros igualmente podemos opinar y aconsejar. Después de todo son nuestras tradiciones
ancestrales de bodas las que se quieren pisotear con esta unión".

Mirando al alfa frente a ella de forma desafiante, Madam Yu respondió: "¿Pisotear las
tradiciones? Le recuerdo señor que usted tiene tantos hijos ilegítimos como nosotros flores de
loto en nuestro lago, hijos a los cuales ahora reúne y obliga a su señora a aceptar como hijos
ilegítimos" Acusó Madam Yu con seriedad, para luego ver a Nie Mingjue: "Y le recuerdo
señor, que si usted no se hubiera encaprichado del hijo de una prostituta, algo peor que un
sirviente, el joven Wen Xu seria ahora su esposo, miembro de la secta Nie y no sufriría por
una ruptura ¿Quiere hablar de desgracias ajenas? Hablemos entonces de la soltería de su
hermano Nie Huaisang, el cual a pesar del tiempo aún no ha encontrado un omega y no ha
seguido la tradición, solo porque con su ruptura de compromiso también se rompió la de su
hermano".

Ambos alfas, escuchando aquellas provocadoras pero ciertas palabras, solo pudieron
mantenerse en silencio, sabiendo que habían sido descubiertos frente a todos los miembros
del consejo de una forma tan vergonzosa, negándose opinar de más en ese asunto. Riendo
ligeramente por la osadía de su madre en esa conversación, Jiang Cheng volvió a sentirse
confiado, observando como la sonrisa tranquila de su prometido también había regresado.

"Nosotros no estamos aquí para deliberar errores pasados entre sectas, estamos aquí para
hablar sobre el compromiso de dos jóvenes que son destinados y cometieron un error. Ya sea
con deshonra o sin ella, el joven Lan Wangji pide nuestro permiso para volver a realizar un
compromiso" Explicó Madam Yu con cierta impaciencia, sin querer más charlas: "La secta
Jiang está dispuesta a aceptar esta proposición, solo por lo excepcional y vergonzosa de esta
situación por alguien perteneciente la línea sucesoria de los líderes. Pero queremos ciertas
garantías antes de volver esto formal otra vez".

Un poco más tranquilo, sin tener las intervenciones de esos dos maliciosos líderes, Lan
Xichen respondió: "¿Qué clase de garantías, mi señora?"

Interviniendo en la conversación, Jiang Fengmian respondió: "Queremos que se haga


público, principalmente para la secta Wen, que la unión de nuestras sectas por este caso
excepcional es única y exclusivamente responsabilidad de la secta Gusu Lan. Debido a este
excepcional caso, pedimos que el periodo de cortejo, el cual se establece por la secta del alfa,
sea mucho más corto para poder contraer las nupcias entre ambos lo más pronto posible. Y
finalmente, gracias a este excepcional matrimonio, pedimos un ajuste a las leyes de la
tradición".

Bastante sorprendido, decidiendo escuchar aquella última petición antes de aceptar, Lan
Huan preguntó: "¿Cuáles ajustes?"

"Las leyes de la tradición estipulan que el omega debe renunciar a su familia y a su secta para
casarse, volviéndose parte de la familia del alfa desde el momento de su compromiso legal"
Explicó Yu Ziyuan: "Como usted tiene entendido, nosotros solo tenemos dos hijos omegas
los cuales ya han sido comprometidos y han abandonado nuestra secta. Nosotros pedimos que
Lan Wangji renuncie a su secta y sea él quien acepte formar parte de la secta Yunmeng Jiang,
de esta forma nosotros le daremos nuestro apellido a Wei Wuxian y ambos se convertirán en
los nuevos líderes de la secta Yunmeng Jiang, teniendo Lotus Pier y todo Yunmeng bajo su
cuidado, y teniendo hijos que tengan el apellido Jiang para esta secta".

"Pedimos que Lan Wangji acepte convertirse en el segundo al mando de Wei Wuxian, quien
se convertiría en el líder oficial de la secta" Dijo Jiang Fengmian con seriedad: "No solo
pedimos que Lan Wangji pierda muchos de sus derechos como alfa, pedimos que desde ahora
entienda que deberá aceptar a su omega como líder, siendo uno más de sus subordinados
como cultivador".

Dándose cuenta de lo delicada de la situación y lo mucho que significaba esto para su


hermano, Lan Xichen desvió rápidamente la mirada, y observando a Wangji, este
simplemente asintió con la cabeza, aceptando de esa manera el trato. Respirando profundo,
volviendo a enfrentar a los líderes, Lan Huan respondió: "La secta Lan acepta estas
condiciones, pidiendo de una manera formal que el compromiso entre Lan Wangji de la secta
Gusu Lan y Wei Wuxian de la secta Yunmeng Jiang vuelva a darse entre ambos".

Haciendo una reverencia de forma agradecida junto a su alfa, Jiang Fengmian respondió: "La
secta Yunmeng Jiang acepta la petición de matrimonio de la secta Gusu Lan con mucho
agrado".

Con una sonrisa de alivio, dándose cuenta de que aquel asunto finalmente había sido zanjado,
Lan Xichen también respondió haciendo una elegante reverencia. Mientras que Nie Mingjue
y Jin Guanghsan intercambiaron miradas de desaprobación, y sin decir nada más se retiraron
con sus propias sectas. Encarando a los nuevos jóvenes prometidos que se encontraban en el
centro de aquel salón, Lan Xichen le sonrió a su hermano, mientras que Jiang Fengmian se
encargó de dar la noticia.

"Después de deliberar respecto a esta delicada situación, es un placer informar que se ha


aceptado la petición de Lan Wangji para poder volver a unirse en un compromiso con Wei
Wuxian" Explicó el líder Jiang, causando susurros de todo tipo entre los presentes.

Sonriendo emocionado, aun tomado de la mano de su hermana, Jiang Cheng miró con una
sonrisa a Lan Xichen, estando completamente seguro de que su prometido había intervenido
en esa decisión por el bien de sus hermanos. Mientras que las demás sectas presentes tuvieron
reacciones diferentes, algunos lucieron enfadados e indignados por la ruptura de las
tradiciones de esa manera, mientras que otras reaccionaron mucha indiferencia, y por parte de
la secta Jiang y algunos miembros de la secta Jin hubo alegría con grandes rostros sonrientes.

"Wei Wuxian, Lan Wangji, me complace que su unión vuelva a estar hecha" Dijo Lan Xichen
mirando a su hermano con orgullo: "Legalmente ante todas las sectas ustedes son
nuevamente prometidos".

Con los brazos temblorosos por el esfuerzo y una ligera sonrisa casi imperceptible en su
rostro, Lan Wangji finalmente dejó de adoptar la posición de penitencia de los Lan, bajando a
Bichen y relajando la postura de su cuerpo. Alegremente, mirando a su hermano a los ojos, el
joven Lan agradeció en silencio, finalmente sintiendo a su alfa en paz por saber que le
permitirán estar nuevamente al lado de su omega.

Sin embargo, aunque había escuchado todo con cierta dificultad y realmente quería festejar
lleno de emoción, Wei Ying no pudo hacer nada. Y en medio de todos los aplausos de las
sectas, que aun de forma enfadada celebraban su compromiso de nuevo, Wei Ying sintió un
fuerte dolor de cabeza mientras sus ojos comenzaban a nublarse. Completamente agotado, sin
poder más, el joven omega termino desplomándose al piso, inconsciente.

"¡Wei Ying!" Gritó Lan Zhan, siendo el primero en darse cuenta de esto.

Sin importarle nada, el joven alfa se abalanzo sobre su omega en el piso, sosteniéndolo en sus
brazos. Alarmado noto la sangre que manchaba toda su espalda, y el pálido rostro de aquel
hermoso omega. Temblando por el temor, abrazándolo contra su pecho, Lan Zhan beso la
frente de Wei Wuxian de manera delicada, mientras que los alarmados miembros de la secta
Jiang se aproximaban y llamaban a los curanderos.

"Te amo Wei Ying, no dejare que nadie vuelva a lastimarte, nunca" Prometió Lan Zhan en un
susurro, uniendo su frente con la del contrario lleno de amor por este.
Capítulo 38.

Gimiendo con dolor, Wei Ying volvió a removerse en la cama, luciendo realmente adolorido
a pesar de su inconsciencia. Realmente preocupado, Lan Wangji solo pudo sostener la mano
de su omega con cuidado intentando tranquilizarlo, aun cuando sabía que no podía.

Después de la reunión de los clanes, Lan Wangji tomó a Wei Ying en sus brazos y lo llevo a
la habitación privada del omega en Lotus Pier, de donde se negó a ser expulsado. Aun cuando
su actitud era reprochable, ya que no era bien visto que un alfa estuviera en una habitación
con un omega, nadie en la secta Jiang hizo algo para impedirlo, pues sabían que Lan Wangji
volvería a pelear si lo intentaban.

Encerrándose en la habitación con su omega, Lan Zhan logro tranquilizar a su alfa para
permitir que un solo curandero entrara a tratar las heridas del mayor. Aun sitiándose bastante
descontrolado después de su celo, Lan Wangji se quedó al lado de su omega sosteniéndolo,
mientras permitía que aquel curandero tratara sus heridas. Ardiendo en furia al ver como
aquel hombre quitaba la poca ropa de Wei Wuxian y no solo trataba su espalda herida por los
azotes, también trataba su maltrata entrada; Lan Zhan tuvo que hacer un enorme esfuerzo por
no atacar al curandero beta, presionando fuertemente la mandíbula y sosteniendo a Wei Ying
con delicadeza.

Mientras que el omega, el cual estaba demasiado débil después de tanto, no había despertado
desde que fue azotado y simplemente se dejó hacer, soltando algunos quejidos cuando sentía
sus heridas ser tratadas, y sosteniéndose fuertemente de Lan Zhan por el dolor.

En lentos minutos, en lo que avanzaba la tarde, aquel curandero beta se tomó su tiempo
tratando los finos pero profundos cortes que tenía Wei Wuxian en la espalda. Poniendo
hierbas y pomadas naturales para favorecer la pérdida de la hinchazón. Terminando de
atender su espalda, el curandero tomo algunos paños tibios y comenzó a pasarlos
delicadamente por las piernas de Wei Ying, logrando obtener un gruñido por parte de Lan
Zhan, el cual inevitablemente se había puesto celoso.

"No debe hacer eso" Pidió Lan Zhan con seriedad: "Yo me encargare de limpiar el cuerpo de
mi omega".

Sonriendo y haciendo una reverencia, el comprensivo curandero respondió: "Disculpe mi


atrevimiento, Hanguang-Jun".

Sin decir más, intentando no enfurecer al alfa, el curandero comenzó a tratar la entrada herida
del joven omega. Poniendo ungüentos y asegurándose de que la herida no fuera demasiad
profunda, supuso que sanaría bien con un poco de cuidado. Terminando de curar las heridas
graves de Wei Ying, el curandero cubrió el cuerpo desnudo del omega con una sábana,
tomando algunos inciensos medicinales para encenderlos en la habitación y girándose de
regreso a la cama, el curandero beta le entrego una pomada medicinal a Lan Zhan.

"Hanguang-Jun, por favor intente que el joven maestro Wei no se esfuerce ni se levante de la
cama. Las heridas del látigo de disciplina de los Jiang son bastante severas y necesitara
reposo por un par de días. Yo volveré mañana para ver sus heridas y volver a tratarlas,
mientras que usted después de limpiar su cuerpo, deberá poner esa pomada calmante sobre
los golpes y las heridas que encuentre en su piel" Explicó aquel curandero.

Tomando aquella pomada de las manos del curandero, Lan Zhan rápidamente hizo una
reverencia: "Muchas gracias por sanarlo".

Asintiendo con calma, el curandero se puso de pie y tomo sus cosas para también
corresponder con otra reverencia: "Sean cuidadosos, jóvenes maestros".

Sin decir nada más, aquel curandero se retiró de las habitaciones personales de Wei Wuxian,
para luego dirigirse de inmediato a las oficinas de los líderes de la secta, donde debía
informar sobre el estado y la condición de su hijo.

Viéndose solo de nuevo con su omega, Lan Zhan finalmente pudo relajar su posición.
Sabiendo que no podía descansar mucho ya que aún tenía que tratar el cuerpo herido de Wei
Ying, Lan Wangji únicamente se quedó en su sitio por algunos minutos más, admirando el
rostro tranquilo y dormido de su dulce omega, admirando su belleza. Dándole un suave beso
en la frente, Lan Zhan finalmente se bajó de la cama, y arreglando sus túnicas se dispuso a
seguir las órdenes de aquel curandero.

Tomando un par de recipientes de cerámica que contenían agua tibia, Lan Zhan se acercó con
estos a la cama, y tomando un paño, delicadamente comenzó a limpiar el cuerpo de su
omega. Con toques suaves y finos, Lan Wangji delineo la piel de Wei Ying quitando los
restos de sangre y fluidos, dejando a la vista las marcas que tenia en su piel blanca.
Suspirando con culpa, dándose cuenta de que aquellas marcas rojizas que dentro de poco se
volverían violetas, eran debido a sus propias manos, el joven alfa no pudo aguantar la
tentación y paso sus labios delicadamente por aquellas marcas que lucían tan dolorosas,
besándolas con cariño.

Despertando con aquellos besos, Wei Ying sintió sus mejillas volverse rojas, preguntando de
inmediato: "¿L... Lan... Zhan?"

Realmente avergonzado, dándose cuenta de lo que acaba de hacer, Lan Wangji se separó de
golpe del cuerpo del contrario, observando sus ojos abiertos y sus mejillas sumamente rojas.

"¿Qué haces?" Preguntó Wei Ying confuso, con la voz algo ronca.

Tardando un poco en responder, sin saber bien que decir, Lan Zhan finalmente pudo admitir:
"Estaba tratando tu cuerpo".

Al escuchar ese tono de voz mucho más grueso del que recordaba, Wei Wuxian solo pudo
sonreír con cierta nostalgia. Aquel era su alfa, pero aún así era tan distinto físicamente que lo
asustaba un poco: "No tienes que hacerlo".

Bajonado la mirada con culpa, volviendo a ver el cuerpo de Wei Wuxian maltratado, Lan
Wangji replicó: "Es mi deber".

"No lo es, esto lo hacen los curanderos y los sirvientes, no deberías hacerlo tú".
"Es mi culpa, yo tengo que hacerlo" Insistió Lan Zhan, con un toque de culpa en su voz.

Bajando la mirada, sintiéndose ligeramente incomodo, Wei Wuxian simplemente se dejó


hacer por las dulces manos de Lan Wangji, que con esos paños húmedos siguió limpiando
amablemente su cuerpo, siendo sumamente cuidadoso. Sin dejar de sentirse avergonzado,
guardando silencio por que no sabía que decir, Wei Wuxian solo soltó un jadeo cuando las
suaves manos del menor tocaron la parte interna de sus muslos y luego sus genitales.

"Lan Zhan... Tú de verdad..." Se quejó Wei Ying, lleno de vergüenza.

Concentrando únicamente en limpiar al mayor, Lan Wangji dijo: "Disculpa, terminaré


pronto".

Aquello que Wei Ying decía fue mal interpretado por Lan Wangji, el cual bajando la mirada
tristemente, pensó que el mayor no quería que lo tocara. Mas arrepentido aun por lo que
había pasado la noche anterior, Lan Wangji simplemente intento apresurarse para no molestar
al contrario. Terminando de limpiar su cuerpo puso aquella crema en todos los golpes del
mayor, poniéndolo también sobre las mordidas que le había dado en el cuello y en los
hombros. Terminando, Lan Wangji se apresuró a tomar una de las túnicas intimas del mayor,
regresando con esta a la cama lo ayudó a vestirse.

Aun sintiéndose sumamente incomodo por todo lo que había pasado, Wei Wuxian de una
forma algo tímida dejo que Lan Wangji le pusiera aquella fina túnica interior roja y que
después de ello lo acostara dulcemente en la cama cubriéndolo con las sabanas.

Mirando al menor, Wei Ying dijo: "Gracias..."

Asintiendo a sus palabras, Lan Wangji no dijo nada. Pensando que sería mejor no incomodar
al mayor, Lan Zhan no se acostó a su lado en la cama, fue al otro lado de la habitación,
sentándose cerca de la puerta. Al ver esta acción Wei Ying no supo bien que hacer, no le
gustaba que el joven Lan se fuera tan lejos, sin embargo no tenía idea de cómo detenerlo, así
que simplemente se quedó acostado mirándolo, sintiendo esa frialdad e incomodidad que
había entre los dos.

Ambos habían madurado y habían superado el dolor de perderse mutuamente de formas


distintas. Wei Ying ya se había hecho a la idea de que no volvería a ver a su alfa jamás, que
no se casaría y que se quedaría en Lotus Pier encerrado por el resto de su vida; pero las cosas
cambiaron y ahora él estaba nuevamente comprometido con el alfa que amaba. Por otro lado
Lan Zhan se había hecho a la idea que tendría que casarse con otro omega que no era su
destinado, que perdería a Wei Ying por siempre y que este lo odiaba; y aunque su opinión
respecto al odio de su omega no había cambiado mucho, ahora ambos estaban juntos de
nuevo, y aunque eso tranquilizaba a su alfa no calmaba su consciencia.

Sentado en el piso al lado de la puerta, Lan Zhan no levanto la mirada para nada, únicamente
mirando el piso bajo sus pies, pensando una y otra vez en el gran error que había cometido y
que Wei Ying no lo perdonaría jamás. Mientras que Wei Wuxian, mirándolo desde la cama,
cada vez se sentía peor de verlo tan lejos y con ese rostro de tristeza que podía notar a pesar
de su usual seriedad.
"Lan Zhan..." Susurró Wei Ying sin saber qué hacer, solamente queriendo volver a hablar con
su alfa.

"No te lo preguntamos" Susurró Lan Wangji aun sin levantar la mirada: "Nunca se le
pregunta a un omega si desea casarse o no, no se le pregunta si ama o no a su prometido, ni si
quiere ser o no una madre; solo se lo obliga a casarse con un alfa para tener hijos, sin
importar si ellos se llevan bien como pareja si quiera".

Pestañeando confuso, sintiéndose extraño al haber escuchado a su joven alfa decir más de una
frase, Wei Ying solo pudo responder: "Por eso está el tiempo de cortejo ¿Verdad?"

"Si se rompe la relación en ese tiempo el omega deberá volver a formar una relación con un
alfa, porque esa es su única opción antes del encierro. Nunca se les pregunta si ellos quieren
casarse o ser cultivadores, sus padres o señores alfa arreglan los compromisos y ellos están
obligados a pasar años de tiempo de cortejo con alguien que solo significa su libertad, un alfa
al que puede odiar pero que aun así es su única forma de seguir con su estilo de vida".

"¿Por qué estás diciéndome todo esto?" Preguntó Wei Ying.

Levantando la mirada para ver al mayor a los ojos, Lan Zhan preguntó tristemente : "¿Tu
realmente quieres casarte conmigo?"

Escuchando esa pregunta, Wei Ying no supo que responder, perdiéndose en el dolor que
mostraban los dorados ojos de su prometido. Debajo de ese gran cuerpo y ese rostro tan serio,
aún estaba ese niño asustado que había huido por los muelles cuando fue terriblemente
rechazado por la persona que amaba. Y ese niño estaba quebrándose frente a Wei Wuxian.

"Lo que hice... Lo que yo hice, lo que te hice ayer, no..." Susurró Lan Zhan quebrándose: "No
merezco tu perdón, no merezco ser tu esposo, no merezco estar a tu lado".

"Lan Zhan..."

Perdiéndose ligeramente en sus recuerdos, el joven maestro Lan volvió a bajar la mirada, sin
tener el valor de seguir viendo el rostro de aquel omega que amaba tanto: "No quería ser
como mi padre".

Sin poder soportar más esa situación, Wei Ying hizo un gran esfuerzo y se levantó de la
cama. Con sus piernas temblando y todo su cuerpo adolorido, sin importarle nada, comenzó a
caminar rápidamente hasta llegar al lado de Lan Wangji. Tomando por sorpresa a Hanguang-
Jun, Wei Ying volvió a derrumbarse frente a él, quien rápidamente lo tomo e impidió que
cayera al piso, sujetándolo rápidamente en sus brazos y pegándolo a su cuerpo.

"No te odio" Dijo Wei Ying rápidamente.

"No puedes estar de pie, te harás daño" Dijo Lan Zhan asustado, sosteniendo a Wei Ying
contra su cuerpo con cuidado.

"Escúchame, solo escúchame" Pidió Wei Ying intentando ocultar el dolor, sosteniendo el
rostro de Lan Wangji entre sus manos: "No te odio, jamás te odié. Aún cuando rompiste el
compromiso y me dejaste, yo nunca te odié ni podría odiarte".

Cerrando los ojos con culpa, dejándose endulzar por las palabras de su omega, Lan Zhan
recordó: "El bosque..."

"No, jamás" Dijo Wei Ying, besando una de sus mejillas: "No te odio, ni siquiera entonces te
odié. Yo solo... Fue un error. Por qué ahora entiendo que tu no necesitas hablar o decir algo
para demostrarme tu amor, no necesito tenerte a mi lado repitiendo una y otra vez que me
amas, yo sé que lo haces, no confiar en ti fue mi error entonces".

Estrechando a Wei Ying en sus brazos, aun sentados en el piso como lo estaban, Lan Wangji
susurro: "Tu deberías odiarme, por mi culpa tu cuerpo... Tu podrías estar embarazado ahora".

"¿Y eso que? Fue mi decisión, consciente o inconsciente, yo fui quien te busco aun sabiendo
que estaba en celo. Y si estoy embarazado... Pensaba en nombres lindos para niños, tal vez
Yuan, uno de los viajeros del muelle se llama así ¿Quieres saber qué significa?"

"Deja de jugar" Lo regañó Lan Wangji.

Riéndose por la inocencia que aun demostraba su dulce alfa, Wei Ying besó delicadamente
sus labios, intentando tranquilizarlo: "Te amo, Lan Zhan. Y estoy feliz de volver a casarme
contigo, quiero hacerlo, por favor acepta ser mi marido".

Sin poder aguantar más, Lan Wangji se quebró por completo, comenzando a llorar. Ocultando
su rostro lleno de lágrimas en el cuello de Wei Ying, estrechó al omega en sus brazos con
mucha fuerza, teniendo sentimientos ambiguos de felicidad y tristeza por el arrepentimiento
al mismo tiempo. Correspondiendo el abrazo con mucho cuidado, Wei Ying dejó que su
joven alfa llorara y se lamentara cuanto quisiera, soltando algunas de sus feromonas para
intentar tranquilizarlo y calmar su llanto.

"Lo siento" Se disculpó el joven Lan tras algunos minutos.

"No debes disculparte, en realidad debo ser yo".

"¿Disculparte?"

Confundido, el joven Lan levanto la mirada para observar a Wei Ying, sin entender bien sus
palabras. Sonriendo con ligera pena, Wei Wuxian respondió: "Disculpa por haberte herido esa
vez, cuando yo... Pisoteé tu cosa blanca esa" Explicó Wei Ying tocando con uno de sus dedos
la frente del menor: "De verdad no sabía que significaba tanto para tu secta, fue un error, y
me disculpo por ello. Además de pedirte perdón por haber hecho algo tan horrible, quería
decirte que yo también te amo, y que está bien que te quites la cinta conmigo, si eso significa
regulación o eso..."

Sonriendo ligeramente al escuchar esas palabras, Lan Zhan tomo una de las manos de Wei
Ying y la beso con cariño, pegándola nuevamente a su rostro. Y mirándolo a los ojos, dijo:
"Te amo Wei Ying".
Observando esos ojos dorados aun ligeramente brillantes después de su celo, Wei Ying se
quedó deslumbrado con la belleza del joven Lan, su prometido. Sonriendo con suavidad al
escuchar sus hermosas palabras, se acercó a sus labios y le dio un beso lleno de cariño,
abrazándolo por el cuello y pegándose mucho a su cuerpo.

"Yo también te amo, Lan Zhan" Admitió Wei Ying después de terminar con aquel beso.

Sintiéndose tranquilo después de haber obtenido el perdón por el que tanto había rogado, Wei
Ying se acostó por completo sobre su alfa, descansando su cuerpo entero sobre el del menor
en el piso. Sintiendo las delicadas manos de Lan Wangji recorriendo su espalda y sus
cabellos, el joven omega sintió que podía estar en paz, bostezando y cerrando los ojos.

Pensando que Wei Ying tenia sueño, Lan Zhan alarmado dijo rápidamente: "Volvamos a la
cama".

Riendo ligeramente al escucharlo, Wei Ying respondió: "Esta bien gege, volvamos".

Pensando que debía volver a ponerse de pie, Wei Ying fue sorprendido cuando Lan Zhan de
pronto lo tomo en sus brazos. Soltando un jadeo de sorpresa, Wei Wuxian rápidamente se
abrazó del cuello de su fuerte alfa, mirándolo al rostro fijamente. Nunca nadie lo había
tomado como a una doncella en sus brazos, y sintiéndose desprotegido por estar tantos
centímetros por arriba del suelo, Wei Ying se pegó mucho al cuerpo de Lan Zhan, temiendo
que lo dejara caer.

Pero Lan Wangji, un alfa adolescente casi rozando su joven adultez, tenía casi la misma
altura que Wei Ying, con un cuerpo mucho más musculoso y grande que el de su omega,
pudiendo sostenerlo en sus brazos con facilidad, cargándolo con cuidado hasta la cama.
Siendo sumamente cuidadoso, Lan Wangji ayudó al contrario a acostarse nuevamente sobre
su abdomen en la cama, asegurándose de que ninguna de las heridas de su espalda estuviera
sangrando.

"Gracias Hanguang-Jun" Susurró Wei Ying con una pequeña sonrisa.

Sonriéndole también, Lan Zhan se aseguró de acomodar bien las sabanas y la almohada de
Wei Ying, y pensando en volver a su lugar en la puerta, fue detenido por el mayor que lo
tomo de la mano y lo miró algo preocupado y triste.

"Acuéstate conmigo gege..." Pidió Wei Ying haciendo un puchero.

"No me llames gege" Le reclamó Lan Zhan.

"Ahora gege es tan grande y tan fuerte que me da miedo..."

"No soy tu gege".

Suspirando ligeramente, observando como Wei Wuxian se reía, disfrutando molestarlo; Lan
Wangji finalmente aceptó sus peticiones y rodeo la cama del contrario, acostándose a su lado
sobre aquella pequeña y suave superficie. Girándose ligeramente en la cama para verlo, Wei
Ying volvió a abrazarse al menor, atrayéndolo mucho a su cuerpo.
Al menor le parecía bastante curioso como ambos habían logrado arreglar sus problemas tan
fácilmente, y aunque Lan Zhan aun sufría y se sentía culpable por todo lo que había pasado,
Wei Ying parecía muy cómodo y tranquilo, tomando confianza con él de inmediato,
subiéndose sobre su cuerpo y abrazándolo como si nada. Disfrutando de esa actitud
descarada, que en esos momentos volvía todo más fácil para ambos, Lan Wangji tomó al
mayor de la cintura y lo abrazó también, disfrutando de tenerlo nuevamente a su lado.

"Oh Hanguang-Jun, Hanguang-Jun" Dijo Wei Ying distraído, tomando los extremos de la
cintra de frente del contrario para jugar con ellos: "¿Sabes hacer bálsamos labiales?"

"¿Bálsamos labiales?" Preguntó Lan Wangji con curiosidad.

"Si, esas cosas que las mujeres se ponen en los labios, algunos tienen colores brillantes y muy
rojos" Explicó Wei Ying animado: "Yo aprendí la semana pasada, pasé mucho tiempo con los
demás omegas de la secta planeando la fiesta de A-Cheng, y ahí me enseñaron".

Escuchándolo con atención, Lan Zhan susurró: "Mmm".

"Escucha, te enseñare, así podremos hacerlo juntos y jugar..."

Mirando a Wei Ying, el cual hablaba sin parar, no solo sobre los bálsamos, también sobre
todas las cosas curiosas que recordaba, Lan Zhan se sintió en paz, pensando que realmente
podría escucharlo hablar toda su vida, seguro de que jamás se cansaría.

"... Entonces tome ese gran huevo de caimán y se lo tire a Jiang Cheng desde un árbol" Contó
Wei Ying riendo: "Fue tan gracioso... Se había puesto ropa especial para recibir a tu hermano
en una de sus visitas a la secta, terminó todo manchado de esa cosa asquerosa. Me persiguió
por horas intentando pegarme, Zewu-Jun llego en ese tiempo y tuvo que intervenir. Lo hice
llorar... O eso creo, A-Cheng se abrazó muy fuerte a tu hermano y no me permitió ver sus
lágrimas".

"No debes acercarte a caimanes" Le reclamó Lan Zhan, nada interesado en el sufrimiento de
Jiang Cheng.

"Son graciosos, saltan muy alto en el agua Lan Zhan, son grandes y fuertes".

"Por eso mismo no debes acercarte" Pidió Lan Wangji con seriedad: "No te acerques".

"Está bien Hanguang-Jun".

Sonriendo realmente contento, Wei Ying volvió a buscar los labios de Lan Wangji para
besarlos con cariño, haciendo sus besos largos y llenos de cariño.

"Lan Zhan... ¿Hay caimanes en Gusu?"

Pensando antes de responder, Lan Wangji negó suavemente con la cabeza: "No. Gusu está en
las montañas, casi no hay lagos o pantanos. Los que están en las montañas son pequeñas
fuentes heladas, ahí solo hay peces".

"Oh... Gusu parece un lugar muy frio ¿Es frio?"


"Mmm".

Sonriendo con diversión, sin dejar de jugar con la cinta de frente de Lan Zhan, Wei Ying
preguntó: "No sé mucho sobre tu secta y tu familia Lan Zhan ¿Hay algo importante que deba
saber?"

Recordando de inmediato en las 3000 reglas de su clan, Lan Zhan se puso serio, pensando en
cómo decirle al mayor: "Tal vez un par de cosas".

"¿Cómo cuáles?" Pregunto Wei Ying emocionado: "Estoy feliz de volver a casarme contigo,
Hanguang-Jun, no puedo esperar para conocer a tu familia. Tu tío, Lan Qiren, es un omega
admirado por todos, tan fuerte que incluso enseña a otros alfas a cultivar... Quiero aprender
con él, quiero ser fuerte".

"Ya eres fuerte Wei Ying".

"¿Lo crees? No tanto, quiero ser más y más fuerte. Seré el mejor cultivador y el mayor héroe
de la historia, ya lo veras" Prometió Wei Ying.

Sonriendo dulcemente para su omega, dándole un par de caricias en las mejillas, Lan Zhan
respondió: "Lo serás".

Sonriendo nuevamente contento, dejándose hacer por Lan Wangji, Wei Ying pronto recordó
un poco de aquella platica que había tenido recientemente con el menor, perdiendo
ligeramente su sonrisa.

"Hace poco tú... Mencionaste a tu padre" Dijo Wei Ying: "¿Por qué no quieres ser como tu
padre?"

Bajando la mirada, dejando de estar tan animado como hace un momento, Lan Wangji
respondió: "Mi padre fue un gran cultivador pero... El violó a mi madre y la obligó a vivir en
el clan Gusu Lan, uso su voz de alfa para obligarla a casarse con él. Aun cuando él decía que
mi madre era su destinada, ella solo se quedó con él y se casó con él porque estaba
embarazada de mi hermano. Mi madre pasó su vida encerrada por mi padre, aun si lo amaba,
su amor ocasiono una tragedia y mucha gente murió por su culpa".

Sorprendido por eso, algo de lo que no tenía ni idea, Wei Ying no supo que decir, solamente
pudiendo acariciar suavemente el rostro de su alfa con cuidado, intentando calmarlo.

"Y yo hice lo mismo. Te viole y ahora te estas casando conmigo".

"Pero no me estas obligando, mucho menos usaste tu voz de alfa conmigo, y tampoco fuiste
violento" Le recordó Wei Ying.

Sin poder creer en las palabras del mayor, Lan Zhan paso una de sus manos por el cuello
lleno de heridas y mordidas del mayor, tocando su piel lacerada por sus propios dientes con
violencia.

"¿Recuerdas lo que paso ayer?" Preguntó Wei Ying.


Bajando nuevamente la mirada con culpa, Lan Zhan negó con la cabeza, dejando de acariciar
el cuello de Wei Ying para abrazarlo, sin dejar de sentirse mal.

"¿Entonces por qué estas preocupado?"

"Por eso mismo, no recuerdo. Sé que fui violento, horrible. Pero no sabré lo que te hice
mientras mi alfa estaba en control, ni siquiera entiendo lo que hice, no se... Yo... Yo solo ni
siquiera sé cómo puedo amarte".

Sonriendo enternecido con las palabras nerviosas de su pequeño alfa, Wei ying volvió a
besarlo, diciéndole: "No debes preocuparte por eso, fuiste violento, pero sé que no tenías idea
de cómo hacerme el amor. Aprenderemos juntos, y la próxima vez será mucho mejor".

Con la culpa remordiendo su corazón, sin poder apartar de su mente los pocos recuerdos que
tenia de la noche anterior, Lan Zhan se atrevió a pasar una de sus manos por el abdomen del
mayor, acariciando suavemente y con cuidado.

"¿Cómo quieres que llamemos a nuestro hijo?"

"Deja de jugar" Lo regañó Lan Wangji de nuevo.

"No sabemos si será una niña o un niño, tampoco si será alfa u omega" Susurró Wei Ying con
curiosidad: "¿Tu qué crees que sea?"

"Nada" Respondió Lan Zhan con seriedad.

Sintiendo un dolor mucho más profundo al pensar en ello, solo con la idea de que había
embarazado a Wei Ying violándolo de esa manera, Lan Wangji quiso morir por la culpa, sin
dejar de pensar en el horrible alfa que era. Sin embargo Wei Ying no se dio cuenta de eso, sin
dejar de bromear acerca de su embarazo.

"Por eso creo que Yuan es un buen nombre" Explicó Wei Ying: "Puede servir tanto para un
niño como una niña, es bonito. Pero supongo que eso deberemos decidirlo después, las
personas son muy quisquillosas con los nombres que le pondrán a sus hijos, ya que será el
primero deberemos ser quisquillosos también. Pero no quiero hablar de él solo como un él,
debemos ponerle un apodo..."

Sin dejar de sentirse mal, Lan Zhan desvió rápidamente la mirada, susurrando: "Mmm".

Sin dejar de pensar, llevando una de sus manos a su propio abdomen, Wei Ying finalmente
dijo: "¿Rabanito? Es un nombre dulce, podemos llamarlo así incluso cuando nazca ¿Qué te
parece Lan Zhan? ¿Te gusta?"

"Mmm..."

"Entonces es rabanito" Dijo Wei Ying contento: "¿Escuchaste rabanito? Ya tienes un nombre.
Papá y mamá te aman, ojala seas un pequeño niño, así podrás tener una hermosa cinta blanca
y ojos dorados como papá".
Sin decir nada, solo mirando la alegría con la que Wei Wuxian hablaba una y otra vez sobre
su hijo, Lan Wangji volvió a sentir la culpa y el arrepentimiento por sus acciones, pensando
tristemente en cómo había dañado a su omega, y como no se perdonaría jamás por haberle
hecho lo que le hizo. Sin embargo Wei Ying, tomándose todo aquello muy a la ligera, siguió
desvariando al respecto.

"¿Crees que tenga tu color de ojos o el mío? Seguramente será el tuyo si es un alfa, Madam
Yu me dijo una vez que el color de ojos entre alfas se hereda. Pero eso no tiene sentido
porque tú eres alfa y tus ojos son dorados, pero tu hermano también es alfa y sus ojos son
azules..."

"Mmm".

"¿Y su nombre de cortesía? ¿Qué nombre le pondremos? Aun si es un omega quiero un


nombre poderoso, que de suerte..."

"Mmm..."

"¿Y tendrá tu cinta? ¿Aun si es una niña? No sé si las niñas las llevan..."
Capítulo 39.

Wei Ying abrió los ojos de forma pesada, sintiéndose cansado aun después de haber dormido
por tantas horas. Mirando a su lado en la cama, observo a Lan Zhan, el cual aún vestido con
las mismas túnicas del día anterior, estaba sentado a su lado en la cama meditando.

"Hanguang-Jun..." Susurro Wei Ying bostezando ligeramente: "¿Te quedaste a dormir?"

Saliendo de su trance para mirar a Wei Ying a su lado, Lan Zhan rápidamente respondió:
"Mmm".

"Que osado..."

Sonriendo con cansancio, Wei Ying volvió a bostezar pocos segundos después, aun sintiendo
la mirada de Lan Zhan sobre sí mismo. Había pasado mucho tiempo desde que ambos
pasaron tanto tiempo solos, así que sin estar bien familiarizado al silencio del alfa, Wei Ying
solo sonrió nervioso.

"Lan Zhan que miedo, no me mires así en silencio".

"Lo siento" Se disculpó el menor, desviando la mirada para ver una de las paredes.

Sonriendo con diversión, Wei Ying extendió una de sus manos y pico suavemente una de las
blancas mejillas del contrario: "Solo te estoy molestando... Claro que puedes mirarme,
mírame tanto como quieras..."

Permitiéndole al contrario tocarlo, Lan Wangji sintió sus orejas sonrojarse ligeramente,
atreviéndose a preguntar: "¿Cómo te sientes?"

"Normal, supongo que algo cansado pero... Debe ser normal en un embarazo".

Escuchando estas palabras, Lan Wangji desvió la mirada de forma algo incomoda, negándose
a decir algo.

"¿Qué pasa?" Cuestiono Wei Ying sin entender bien lo que sucedía.

Con mucha seriedad, Lan Wangji respondió: "Nada".

Queriendo seguir cuestionando, Wei Ying fue prontamente interrumpido por uno de los
sirvientes de su secta, el cual siendo enviado por Madam Yu había llevado la comida del
desayuno a su habitación. De una forma posesiva, sin querer que otra persona sin importar su
género viera a su omega, Lan Zhan recibió la comida el mismo desde la puerta de la
habitación, pidiéndole al resto de los sirvientes que no entraran, pues él se encargaría de todo.

Aun con un semblante serio e incluso algo molesto, Lan Wangji regreso a la cama con el
mayor, trayendo consigo una bandeja llena de diferentes platos principalmente hechos a partir
de frutas y otras tantas cosas. Mirando la comida animado, Wei Ying observo como Lan Zhan
podía la bandeja de la comida entre ambos en la cama y con mucha delicadeza ofrecía un
poco de comida a Wei Ying en los labios.

"¿Qué haces Lan Zhan?" Cuestionó Wei Ying dándose cuenta que este quería alimentarlo.

Sin cambiar de opinión, ofreciendo aquella fruta a su omega de forma insistente, Lan Zhan
respondió: "Estas enfermo, yo te cuidare, abre la boca".

"Lan Zhan, Lan Zhan..." Dijo Wei Ying divertido, sin poder evitar reír un poco por la dulzura
de su alfa: "Estoy herido en la espalda y en mi trasero, no estoy enfermo. Además aunque
estoy en cama no significa que estoy invalido, puedo comer por mí mismo".

Mirándolo con seriedad, sin cambiar de opinión, Lan Zhan volvió a insistir: "Estas enfermo,
yo te cuidare, abre la boca".

Suspirando con resignación, dándose cuenta de que su prometido planeaba hacer las cosas a
su manera sin importar su opinión, Wei Ying sonrió divertido antes de hacer lo que se le
pedía, abriendo los labios para recibir aquel trozo de fruta. Con calma y con mucha
dedicación, Lan Wangji alimento tiernamente a su omega, limpiando sus labios con un
pañuelo después de cada bocado, y asegurándose de que Wei Ying comiera todo. Sin sentirse
molesto o algo similar, Wei Ying acepto con alegría las atenciones de su alfa, sonriendo
suavemente después de cada bocado, disfrutando de observar su preocupación y dedicación
por él.

Cuando Lan Wangji termino de darle su ración de comida a Wei Ying, comenzó a comer su
desayuno, tomando pequeñas porciones y comiendo con mucha elegancia. Esto que no fue
pasado de largo por Wei Wuxian, hizo sonrojar al joven maestro Lan, el cual sentía la mirada
atenta de Wei Ying sobre sí mismo mientras seguía comiendo.

"¿Lan Wangji durmió bien?" Pregunto Wei Ying con curiosidad.

"Mmm" Respondió Lan Zhan, cubriéndose los labios con una de sus manos con elegancia.

"Yo recuerdo que me abrace a ti toda la noche ¿Tú también lo recuerdas así?"

"Mmm".

Sonriendo con mucha diversión, Wei Ying pico suavemente una de las mejillas del menor a
su lado: "¿Y te gusto nuestra primera noche juntos?"

Luciendo triste e incómodo por un segundo, Lan Zhan finalmente respondió: "No fue la
primera".

"¿Eh?" Pregunto Wei Wuxian confuso.

"No fue nuestra primera noche juntos" Aclaro Lan Wangji con un tono sombrío.

Reparando en las palabras del menor, el cual lucia sumamente triste e incómodo de un
segundo al otro, Wei Ying se dio cuenta de que este hablaba sobre la noche en que ambos
habían entrado en celo juntos, así que sintiéndose algo avergonzado, Wei Ying solo pudo
asentir a sus palabras.

Terminando de comer, Lan Wangji tomo todos los platos y utensilios con los que habían
comido para volver a acomodarlos en la bandeja, la cual tomo en sus manos para llevar fuera
de la habitación de Wei Wuxian, dejando esta fuera de la puerta corrediza donde un sirviente
la recogería. Cerrando bien las puertas de la habitación para asegurarse de que no entrara
nadie, Lan Wangji finalmente fue a ver las pocas cosas que su hermano le había llevado el día
anterior de su equipaje, tomando de entre estas un libro bastante delgado, con el cual regreso
a la cama con Wei Ying.

Intentando volver a tener una conversación alegre con el contrario, Wei Wuxian pregunto:
"Aun así no me respondiste si te gustó ¿Disfrutaste dormir conmigo?"

Acostándose nuevamente en la cama, abriendo su libro para seguir leyendo en la parte donde
lo había dejado, Lan Wangji respondió secamente: "Mmm".

"Que malo Lan Zhan... No respondes mis preguntas, no quieres hablar conmigo".

Apartando la mirada de su libro para observar a Wei Ying por un segundo, Lan Wangji
respondió: "No tengo nada que decirte".

Sintiendo esas palabras como un puñal doloroso, Wei Ying entendió que Lan Zhan quería que
lo dejara tranquilo. Aun con esa gran incomodidad entre ambos, un sentimiento que se podía
palpar en toda la habitación, Wei Ying decidió dejar tranquilo a su prometido, aunque fuera
unos minutos. Mirando con aburrimiento a todos lados de su habitación, comenzando a
desesperarse por no poder arreglar las cosas con su alfa, Wei Wuxian finalmente decidió
seguir insistiendo, sin querer darse por vencido con Lan Wangji.

"¿Qué lee mi alfa?" Pregunto Wei Ying curioso.

Girándose en la cama para verlo, Lan Wangji respondió: "Algunas leyendas e historias de la
secta Qishan Wen".

Recordando que Lan Wangji en ese instante debería estar en la secta Wen, y no con Wei
Wuxian, el joven omega se sintió ligeramente mal.

"Lo siento mucho por Wen Xu" Dijo Wei Ying con sinceridad: "Dos compromisos rotos en
periodos muy cercanos... Debe ser doloroso para él, lo seria para cualquier omega, espero
poder disculparme con él en persona".

Según Wei Ying sabia, Jin Guangyao nunca se había disculpado con Wen Xu por haber
interferido en su compromiso. Nie Mingjue si presento sus disculpas oficiales frente a todos
los líderes de sectas, sin embargo la familia Jin se mantuvo en silencio, y Meng Yao por lo
usual fingía ni siquiera saber quién era el anterior prometido de su esposo, tratándolo con
mucha indiferencia. Después de ese acontecimiento tan humillante, la secta Qishan Wen se
volvió mucho más aislada del resto de sectas de lo que solía ser.
Desde la fundación de la secta Qishan Wen esta se había notado mucho más apartada del
resto de sectas. Era una secta prácticamente entera de betas, había pocos alfas y omegas en la
línea sucesoria principal, y los pocos miembros que había eran rechazados y disminuidos por
provenir de una familia de betas, que en sus tradiciones eran débiles e incluso "sucios" para
realizar un compromiso. Esto creo mucho resentimiento en la secta con el símbolo del sol,
que poco a poco comenzó a ser muy poderosa, pues muchos betas que también se sentían
rechazados comenzaban a pedir ser miembros de esa secta, debido a eso a diferencia de las
demás sectas los Wen permitían que otros betas usaran su apellido si hacían algún tipo de
favor al líder, siendo así que miembros betas cultivadores de sectas prominentes preferían
darle la espalda a su familia y partir a la Ciudad Sin Noche para intentar ser parte de la rama
principal de la gran familia Wen, ya que sabían que como betas o hijos de betas ellos nunca
tendrían un lugar importante en la sociedad.

Esto no impedía que la secta Wen hiciera compromisos arreglados, incluso había un par de
alfas Wen que hicieron compromisos arreglados en Yunmeng en el pasado. Pero desde hace
un par de generaciones que la secta Wen comenzó a aislarse mucho más. Prácticamente desde
la época del padre de Wen Ruohan que los miembros de esta secta no iban a reuniones de
jóvenes cultivadores que se daban en Lanling o Gusu, igualmente el líder Ruohan era visto
poco fuera de Qishan; y aunque eran invitados a ceremonias importantes como el
compromiso de Jiang Cheng, habían pasado casi 30 años desde que asistieron a su ultima
fiesta en sociedad.

La situación comenzaba a empeorar con los años, pues la secta Wen comenzaba a faltar a
ciertos acuerdos que se tenían entre las sectas, respecto a derecho de ciertos terrenos y la
instrucción de sus cultivadores. Y aunque muchas sectas se quejaron sobre esto, Wen Ruohan
muchas veces los desafío a ir a la ciudad amurallada de Sin Noche para dar a lugar sus
quejas. Y desde hace un par de años que Wen Ruohan se negaba a participar en los consejos
anuales que se daban entre líderes de sectas, pues estos se oficiaban en Lanling y los Wen
querían que se celebrara en sus tierras.

Siembre había existido cierto roce entre las demás sectas y los Wen. La familia Jin era muy
elitista, una familia de omegas que por su poderío miles de veces se habían dado el lujo de
rechazar pretendientes y otras familias de betas como aliados o posibles compromisos para
sus hijos, razón por la que la secta Wen no los veía con buenos ojos, siempre alardeando de
su poder económico y bélico, que en la actualidad se presumía que era duplicada por los betas
Wen. Sin embargo los Lan tenían un problema mucho más antiguo, debido a la tragedia entre
ambos clanes había mucho resentimiento, pues los Wen culpaban a los Lan de la muerte de
uno de sus seres más queridos, mientras que los Lan culpaban a los Wen de la soltería y la
"deshonra" del omega Lan Qiren; esta relación tormentosa había apaciguado con los años,
pues Wen Ruohan y Lan Qiren parecían entenderse muy bien a pesar de ser antiguos
prometidos, y habían limado estas asperezas con mucha dificultad con sus miembros.

Sin embargo con este nuevo suceso, a Wei Ying le preocupaba que esto cambiara y que los
Wen pudieran sentirse ofendidos.

Los Jiang no eran amigos ni enemigos de los Wen. Qishan quedaba cerca de Yunmeng,
siendo separados únicamente por ese frondoso bosque fuera del acantilado que estaba lleno
de monstruos. En el pasado ambas sectas habían colaborado para ciertos eventos, pero por lo
general no se prestaban más atención a ser simples vecinos, ya que los Wen tenían bien
delimitado su terreno por el bosque en su frontera con Yunmeng, y por eso no se habían
tenido los mismos problemas territoriales que con las demás sectas.

Wei Ying había ido a varios eventos para cultivadores omegas en Qishan, ya que siempre se
separaban las competencias de omegas de las de alfas para evitar accidentes, pero los betas
podían asistir a ambas, así que la mayoría de competencias para omegas solían hacerse en
Qishan. Wei Ying había visto un par de veces a Wen Xu, un omega bastante delicado, con el
cabello negro y muy largo, facciones delicadas y un cuerpo incluso más pequeño y curvilíneo
que el que tenía Meng Yao; este omega no solía apartarse mucho de su padre Wen Ruohan, y
era tratado como una joya para la secta, siendo protegido por todos que ni siquiera le
permitían desempeñar sus labores como cultivador. Pero como otro omega, Wei Wuxian
entendía que el joven Wen sufriría mucho por el rechazo de Lan Zhan, y sin querer ser tan
insensible como Meng Yao, solo quería una oportunidad para poder disculparse por haberle
robado un nuevo compromiso, aun cuando no era su culpa y tampoco había hecho nada malo
en sí.

Sin embargo Lan Zhan, el cual apenas había visto al joven Wen una vez en su vida, parecía
bastante indiferente al respecto. Y aunque durante un par de días en su viaje a Yunmeng
desde Gusu tomo en serio su compromiso, razón por la cual pidió un par de libros sobre la
secta Wen para aprender sobre ellos, al estar nuevamente al lado de Wei Ying la secta Wen
volvía a darle igual, decidiendo leer sobre ellos únicamente por aburrimiento.

Al ver el silencio indiferente de Lan Zhan con sus palabras, Wei Ying volvió a hablar: "¿Qué
lees entonces? Cuéntame la historia Lan Zhan, también estoy aburrido".

Tomando un poco de aire, cerrando el libro por algunos instantes, Lan Wangji comenzó a
contarle: "Estoy leyendo la historia del 'Guerrero maldito de las profundidades del bosque
obscuro', una leyenda muy común entre omegas de la secta Wen".

"¿El bosque obscuro? Esa es la forma en la que los Wen llaman al bosque en la frontera de
nuestras sectas..."

"La leyenda habla de un omega de la línea sucesoria principal de la familia Wen, este fue
prometido por la tradición con un alfa de su propia secta que era un gran guerrero. Ellos iban
a casarse pero justo antes de su boda una gran guerra ocurrió, así que su alfa fue enviada lejos
a luchar por su secta. Pasaron los días y dejaron de oírse noticias sobre el guerrero prometido
del joven omega Wen, este entro en una profunda desesperación y haciéndose pasar por un
cultivador ocultando su naturaleza como un omega fue a la batalla para buscarlo".

Suspirando con cierta pena, recordando que hace no mucho se le impedía a los omegas ser
cultivadores, Wei Ying no pudo evitar sentirse algo empatizado con el omega de esa historia,
aun cuando era puramente ficción.

"En la leyenda cuentan como ese omega paso muchas dificultades, incluso como fue
deshonrado por alfas de su propia secta en medio de la guerra, todo para encontrar a su
amado" Siguió relatando Lan Zhan: "Después de tantas calamidades, el joven omega
encontró información de su alfa, el cual supuestamente abandono a sus tropas en un pequeño
pueblo del reino enemigo. Pensando que lo habían capturado, el omega Wen se infiltro en el
pueblo y busco a su amado..."

Expectante, Wei Ying siguió mirando a Lan Zhan, riéndose un poco, pues su voz se había
apagado de repente. Así que curioso pregunto: "¿Qué sucede? ¿Por qué te callas? Quiero
saber el final ¿Encuentra a su prometido?".

Respirando profundo, Lan Zhan tomo valor para seguir contando la historia: "El omega entra
en el pueblo y siguiendo risas de felicidad y armonía, llega a una pequeña casa pobre en el
centro, donde encuentra a su alfa. Este había encontrado a su omega destinado, una mujer
omega pobre, con la cual se había casado abandonando la guerra y a su secta, esperando un
hijo con ella".

Al escuchar ese gran giro en la trama, Wei Ying abrió mucho los ojos, sintiéndose
nuevamente apenado: "Vamos, continua, no pudo terminar ahí..."

"No" Negó Lan Zhan, mirando a Wei Ying de reojo: "No termino ahí".

"¿Entonces por qué no continuas?"

Sin decir nada, Lan Zhan dejo el libro en la cama y se puso de pie, fingiendo ir por agua a
una de las mesas de la habitación. Frunciendo el entrecejo, dándose cuenta de que había sido
ignorado, Wei Ying se giró ligeramente en la cama, para ver al menor.

"¿Qué pasa?" Le reclamó a Lan Zhan.

Parándose cerca de una de las ventanas de la habitación, mirando hacia la nada, Lan Wangji
respondió: "Los alfas somos monstruos".

"No lo son" Negó Wei Ying sin entender bien a que se refería el menor: "¿Por qué estás
diciendo estas cosas ahora mismo? Antes estábamos muy animados, incluso me estabas
leyendo una historia..."

"Las leyendas, sin importar de donde vengan, ya sea tu secta o la mía, siempre tienen
moralejas con consecuencias terribles para los omegas" Razono Lan Zhan: "Siempre
terminan siendo deshonrados o asesinados, dejando entrever en la historia que fue por su
propia culpa, que se lo merecían".

"Claro, esas leyendas las cuentan a los niños omegas, ya sabes, para evitar el peligro".

"No deberían vivir con miedo" Dijo Lan Zhan con seriedad: "A mí como alfa nunca me
contaron esas historias o algunas similares, no tengo historias con moralejas que hablan sobre
el cuidado que debo tener al ir a una guerra o salir de mi secta, no viví con miedo".

Aun sin entender el punto, sin comprender que Lan Zhan estaba yendo en serio, Wei Ying
solo pudo suspirar, decidiendo darle un poco de tiempo ya que no comprendía nada. Pasando
el rato, el joven omega extendió la mano y tomo aquel libro de leyendas de la secta Wen,
observando sus hojas finas y con el símbolo del sol rojo en su portada. Viendo que Wei Ying
tomo aquel libro, asustado, Lan Wangji corrió de regreso a la cama y se lo quito de las
manos, evitando que pudiera hojearlo. Mirándolo confuso, Wei Wuxian solo pudo suspirar,
entendiendo cada vez menos al menor.

"¿Quieres que termine de leer para ti?" Pregunto Lan Zhan.

"No estoy seguro" Respondió Wei Ying con mucha confusión: "Ni siquiera sé si tú quieres
leer para mí".

"La historia tiene un final feliz" Mintió Lan Zhan.

Creyendo ingenuamente en las palabras de su alfa, Wei Ying asintió con una sonrisa:
"Entonces quiero escucharla, amo los finales felices".

Sintiendo un ligero nudo en la garganta, Lan Wangji respiro profundo por última vez, para
luego seguir relatando: "El omega encontró a su alfa en aquella casa pobre, hablo con él y
con su nuevo omega, así que entendiendo que ambos eran destinados les deseo buena suerte
con su hijo, y regreso a casa con la noticia de que ese alfa había muerto para evitar que
tuviera problemas por lo que había hecho. De regreso en su secta este omega se volvió fuerte,
debido a su experiencia en la guerra sabía pelear, así que logro ser aceptado como un
cultivador más por su secta. Debido a su habilidad pronto los demás líderes se dieron cuenta
de que los omegas podían luchar, así que gracias a este guerrero Wen las demás sectas
permitieron que los omegas pudieran pelear como otros cultivadores".

Escuchando atento hasta el final, Wei Ying se sintió curioso: "Vaya, ya veo... ¿Entonces fue
todo por ese omega? No es un final feliz, es gris en realidad. El joven Wen fue deshonrado,
seguro no consiguió un marido ni encontró a su destinado al final, paso el resto de sus días
solo".

"En porcentaje es difícil encontrar a tu pareja destinada" Explico Lan Zhan con cierto
pesimismo: "Encontrar a una persona que tenga este vínculo contigo, esperar que tenga tu
misma edad o una similar, que este cerca de ti en un mundo tan amplio, suponiendo que ha
nacido en esta misma época o que no está muerto por que nació antes que tu... Esa es la razón
por la que hay tan pocas parejas destinadas, no todos pueden encontrar a su destinado".

Asintiendo a sus palabras, Wei Ying lo tomo delicadamente de la mano: "Por eso tu y yo
somos afortunados".

Riendo con felicidad, Lan Wangji dejo que Wei Ying lo abrazara nuevamente en la cama,
dejando aquel libro de la secta Wen lejos del alcance del omega. Lan Zhan se negaba a
permitir que su destinado leyera el final real de aquella historia tan terrible.

"Yo a veces pienso que todo el camino que recorrimos, incluso antes de existir, nos llevó a
este momento para estar juntos, para que podamos ser felices y podamos formar una familia.
Ese es el futuro que deseo a tu lado Lan Wangji, ya hemos pasado por mucho dolor tu y yo,
hemos sido bendecidos al habernos tomado el uno al otro en nuestros celos, eso finalmente
nos volvió a unir. No quiero separarme de mi alfa nunca más".

Escuchando esas palabras tan románticas, pero que a su vez rompían su corazón, Lan Zhan
solo pudo bajar la mirada con cierta pena: "Wei Ying, tu... ¿Recuerdas lo que paso esa
noche?"

Pestañeando confuso, creyendo entender mejor a su alfa y su reciente tristeza, fue ahora Wei
Ying quien mintió, sonriendo y asintiendo ante la pregunta: "Por supuesto Lan Zhan, perder
mi virginidad al lado del alfa a quien amo es algo que nunca podré olvidar. Fue hermoso, algo
tan placentero y..."

"¿Estas bien con eso?" Insistió Lan Zhan, cada vez más roto por la culpa: "Lo que yo te hice,
como lo hice yo..."

"Tranquilo" Susurro Wei Ying tomando el rostro de su alfa entre sus manos con cariño,
intentando calmarlo: "Si te digo que está bien es porque lo está, y si te digo que me gusto
también es verdad. No te sientas mal por eso, yo lo deseaba tanto como tú, estoy seguro".

Sin querer responder a sus palabras, bajando la mirada, Lan Wangji sintió que quería llorar.
Dejando que su omega lo abrazara y acariciara sus mejillas con cuidado, el joven Lan cerró
los ojos, sintiendo los labios tibios de su omega en sus labios poco después, dando un toque
suave pero lleno de cariño.

"¿Hanguang-Jun confía en mí?" Pregunto Wei Ying dulcemente.

"Lo hago".

"Te amo Lan Zhan, estoy feliz de poder ser nuevamente tu prometido, gracias por estar a mi
lado".

Aun con los ojos, intentando dejarse llevar y olvidar el dolor, Lan Wangji respondió: "Yo
también te amo, Wei Ying".

***

"Duele... Duele tanto, por favor detente Lan Zhan..."

Removiéndose en la cama, luciendo sumamente infeliz, Lan Wangji no podía evitar


recordarlo.

"Detente, por favor para... Me lastimas... Me duele..."

Sintiendo repulsión, ganas de vomitar por sus acciones, frente a los ojos del joven Lan volvía
a tener el cuerpo desnudo de Wei Wuxian. Con esas caderas y esas nalgas de un buen tamaño,
su cintura delgada y su cuerpo fino, esa piel adornada por los cabellos negros sueltos de su
espalda; ese hermoso cuerpo estaba debajo de sí mismo nuevamente. En medio de sus sueños
incluso podía oler esa deliciosa fragancia que envolvía a su destinado por completo, el aroma
de las flores de loto que tanto lo caracterizaba.

"Por favor detente... Por favor para... Alguien ayúdeme..."

Sin embargo su omega no lucia feliz, envuelto en lágrimas y temblando sin control, lucia de
una forma tan triste que Lan Zhan quiso llorar, quiso ser otra persona para intervenir en esa
misma habitación y salvarlo. Pero aun así no podía detenerse, tomándolo firmemente de la
cintura con tanta fuerza que sentía los huesos de sus costillas bajo sus dedos, empujando su
espalda con toda su fuerza y obligándolo de esa forma a subir las caderas. Furioso de
escuchar sus suplicas, tomo al omega de los cabellos y estrello su rostro contra las almohadas
de la cama, escuchando el grito de dolor que este había soltado con sus acciones.

"No... No, no, no... Por favor no... Lan Zhan... No..." Siguió suplicando Wei Ying entre
sollozos.

Pero el mismo se negaba a detenerse, tocando ese suave cuerpo debajo de sí mismo con
morbo, presionando esas nalgas tan firmes y mordiendo toda su espalda con deseo, Lan Zhan
embistió ese cuerpo sin descanso, sintiéndolo sangrar debajo de sí mismo. Pero aun así, sin
detenerse, el alfa enajenado acerco sus dientes y mordió la nuca del omega bajo su cuerpo,
estableciendo finalmente el vínculo, escuchándolo gritar de una forma mucho más lastimera
que antes.

"No quiero un bebe... No quiero un bebe de Lan Zhan... Por favor no..." Gimoteo Wei Ying
destrozado.

Entrando en razón en medio de sus sueños, Lan Zhan se separó ligeramente del cuerpo del
omega, dándose cuenta que finalmente se había corrido en el interior de este, llenándolo por
completo. Y algo que para su alfa significaba satisfacción, para Lan Wangji significaba la
peor de las pesadillas: Había preñado a su omega en medio de esa horrible violación.

Aun llorando, Wei Ying finalmente pudo girar su rostro en la cama, observando a Lan Wangji
con lágrimas bañando sus mejillas y los ojos rojos por el dolor, tenía una expresión horrible
en su rostro, una expresión de asco profundo por el alfa detrás de su cuerpo.

"Te odio..."

Abriendo los ojos entre jadeos de miedo, Lan Zhan finalmente pudo despertar.

Mirando el techo de la habitación de Wei Ying frente a sus ojos, la mirada del joven alfa
rápidamente bajo a sus propios brazos, donde observo a un tranquilo joven de cabellos negros
durmiendo a su lado, apoyando su rostro contra su pecho y roncando ligeramente.
Mordiéndose los labios para no gemir con dolor, Lan Wangji rápidamente desvió la mirada
sintiendo las lágrimas de arrepentimiento bajar por sus mejillas.

De forma inconsciente, el joven Lan se aferró a la ropa de su omega que aun dormía en sus
brazos, llorando en silencio mientras miraba la luna por una de las ventanas. Aún era de
noche, probablemente bien entrada la madrugada; Lan Wangji estaba fuera de su horario de
sueño por la culpa.

Sintiendo que era indigno del dulce omega en sus brazos, ese al cual había vejado cruelmente
hace tan poco tiempo, al cual había hecho chillar de dolor y suplicar por que se detuviera, él
cual no lo odiaba aun cuando Lan Zhan sentía que merecía su odio; ese omega seguía
durmiendo felizmente en sus brazos.

Sin poder evitarlo, Lan Wangji bajo una de sus manos de forma temblorosa al abdomen del
mayor, tocándolo con suavidad. No entendía bien que había sucedido, después de todo ni
siquiera estaba seguro de cómo podía embarazarse una mujer o un omega, pero si sabía que
todos suponían que lo había hecho, que en medio de ese horrible espectáculo cuando violo a
su destinado lo había preñado, y eso le dolía más que cualquier cosa.

Lan Zhan no quería tener un hijo de esa forma con su omega, el solo pensar en el dolor de
que su dulce destinado tuviera un hijo suyo gracias a sus terribles actos lo espantaba, se
negaba a creer que había sido tan horrible como para darle un hijo en semejantes
circunstancias.

Sin poder dejar de llorar, Lan Wangji volvió a girarse en dirección a Wei Ying, besando su
frente de forma protectora. Odiándose a si mismo de nuevo por saber que habían castigado a
Wei Ying por su culpa, mientras que él había salido libre aun cuando todo había sido su
culpa, pensando sin parar en aquel posible embarazo, Lan Wangji se hizo una promesa en
medio de la obscuridad.

El alfa se prometió que su castigo por esa ofensa seria su muerte. Nadie más iba a darle un
castigo, aun si Lan Wangji lo suplicaba, después de todo solo castigarían a Wei Ying por un
crimen que no cometió. Así que negándose a salir libre por todo lo que había hecho, Lan
Wangji decidió que propiciaría su propia muerte de haber hecho algo tan horrible como
embarazar a su destinado.

"¿Lan Zhan?" Pregunto Wei Ying adormilado.

Apartando rápidamente su mano del abdomen del mayor, intentando controlar sus lágrimas,
Lan Wangji respondió con la voz temblorosa: "Mmm".

"¿Por qué estas despierto?" Reclamo Wei Ying ahogando un bostezo, sin abrir los ojos y muy
adormilado: "¿Estabas acariciando mi abdomen? Rabanito agradece a papá por sus
atenciones..."

Sintiendo un dolor profundo por aquello que consideraba tan horrible, Lan Zhan dejo que
más lágrimas de pena y culpa cayeran por sus mejillas, únicamente susurrando: "Mmm".

"Debes dormir Lan Zhan, mañana vendrá el doctor para ver el sexo de Bao Bao, es un día
importante..." Susurro Wei Ying comenzando a quedarse dormido: "Debes dormir..."

Mirándolo fijamente, observando como pocos segundos después Wei Wuxian se quedaba
nuevamente dormido de forma profunda, Lan Zhan sintió su corazón destrozándose por el
dolor y la culpa que sentía. Disfrutando de aquellos momentos con su omega como lo más
preciado, Lan Wangji se dejó llevar por la poca felicidad que sentía de estar con su destinado,
pensando que tal vez esa sería la última noche que pasaría a su lado.

"Perdóname Wei Ying..."


Capítulo 40.

Los días en Lotus Pier eran sumamente tranquilos. Pasando las horas al lado de su omega,
Lan Zhan se sentía en paz.

"¿Entonces tampoco se permite cazar?" Preguntó Wei Ying sorprendido.

Escuchando su pregunta, Lan Zhan negó con la cabeza, acariciando suavemente la espalda de
su dulce omega, intentando relajarlo.

"Tu hogar tiene muchas, muchas cosas que aprender..." Susurró Wei Ying haciendo un
puchero: "Que aburrido, ni siquiera puedes salir por la noche ya que hay un toque de queda".

Había pasado una semana desde que el compromiso de ambos se volvió a unir, y desde
entonces Lan Zhan decidió pasar toda su estadía en Yunmeng junto a Wei Ying. Sin tener
ningún tipo de reclamo por parte de su secta o de la secta Jiang, Lan Wangji llevó su equipaje
a la habitación de Wei Ying, quedándose ahí a dormir con él, cuidándolo. Madam Yu, un alfa
que también era territorial, entendía que esto era lo mejor para ambos, pues sabía que Lan
Wangji enloquecería si lo apartaban de su omega en ese estado, y que para Wei Ying era
terapéutico estar junto a su alfa. Así que no intervino al respecto.

Aun con mucha culpa, un sentimiento horrible que no lo abandonaba, Lan Wangji pasaba sus
días únicamente atento a Wei Ying, impidiendo que este hiciera cualquier cosa por sí mismo.

"¿Duele mucho?" Preguntó Lan Zhan preocupado.

"Un poco..." Susurró Wei Ying con una sonrisa, observando a su atento alfa.

"Entonces lo mejoraré".

Bajando sus manos cuidadosamente a las caderas del mayor, Lan Zhan presiono
delicadamente su piel, haciéndole un ligero masaje. Siendo sumamente atento con el mayor,
Lan Wangji besaba tiernamente sus heridas y masajeaba sus caderas y sus piernas esperando
hacerlo sentir bien después de todo lo que había pasado, esperando que su cuerpo pudiera
sanar más rápido con sus atenciones.

"¿Esta mejor?"

Asintiendo contento, dejándose hacer muy feliz, Wei Ying respondió: "Si Lan Zhan, se siente
bien..."

Suspirando con tranquilidad, Wei Ying dejó que Lan Zhan siguiera masajeando y besando sus
heridas. Siempre que el joven omega se quejaba de dolor, su alfa acudía apresurado a su lado,
masajeando su piel y sus músculos, besando sus heridas con cuidado, asegurándose de hacer
pasar el dolor con sus atenciones. Aquella forma atenta que Lan Zhan tenía de tratar a Wei
Ying era la única forma en la que podía intentar calmar sus arrepentimientos, sanando su
cuerpo y ayudando a Wei Ying con todo lo que este quería hacer.
Dándole de comer en los labios, limpiando su cuerpo y sanando sus heridas, cepillando su
cabello y abrazándolo a todas horas; esas eran unas de las tantas atenciones que Lan Wangji
había dado a su omega en todo ese tiempo.

Aquel día era uno especial. A diferencia del resto de los días comunes, en los cuales
curanderos normales acudían a la habitación de Wei Wuxian para curar sus heridas, aquel día
en específico un curandero especial iría a visitarlo, un curandero que se especializaba en
embarazos de omegas.

Lan Wangji se había vuelto sumamente posesivo con su omega, no por su propia culpa, si no
por su alfa, el cual descontrolado por ver a su omega herido no quería que nadie se acercara.
El joven Lan más de una vez había tenido el instinto de querer lamer las heridas de su
prometido para tranquilizarlo, uno de sus tantos instintos que tuvo que controlar. Sin permitir
el paso de nadie para ver a su Wei Ying, ni siquiera otros omegas o sirvientes, Lan Zhan a
duras penas permitía que algún curandero de la secta fuera a visitarlos, y cuando lo hacía
tenía que hacer su mayor esfuerzo para impedir que su alfa atacara al ver como alguien mas
tocaba a su destinado.

Mientras que Wei Wuxian, bastante contento por ser mimado por su alfa de esa manera tan
dulce, no se quejaba en lo absoluto, notando que este era bastante posesivo, prefería no
pensar mucho al respecto, únicamente dejándose consentir y cuidar por su alfa. El joven
omega tampoco sentía mucho dolor respecto a sus heridas, hace un par de días que
finalmente pudo acostarse sobre su espalda, y los profundos cortes de los látigos comenzaban
a curarse mucho más rápido de lo previsto, incluso sin dejar marcas sobre su piel
aparentemente.

Intentando calmar el dolor de Wei Ying de forma nerviosa, Lan Wangji miraba ansiosamente
en dirección a la puerta de la habitación una y otra vez, tocando delicadamente las caderas de
su omega debajo de su cuerpo. Mientras que Wei Wuxian, muy relajado, sonreía contento
dejándose hacer mientras soltaba algunos suspiros de satisfacción.

Finalmente tras un par de minutos más, la puerta de la habitación fue tocada por el curandero
especial, quien entendiendo bastante del tema se quedó fuera para no molestar al alfa dentro.
Reaccionando al saber que el curandero finalmente había llegado, Lan Wangji apartó sus
manos de la espalda de su omega, y acomodándolo mejor en la cama, se puso rápidamente de
pie, caminando apresurado a la puerta para recibir a ese hombre que trataría a su omega.

Abriendo la puerta corrediza, Lan Wangji se topó de frente con un hombre algo mayor, un
beta que llevaba consigo varias medicinas en una cesta, portando el uniforme típico de la
Secta Yunmeng Jiang y que se notaba bastante amable. Sonriendo con calma al ver al alfa
frente a sí mismo, el curandero hizo una reverencia, portándose de forma educada.

"Lan Gonzi" Saludó el curandero con mucha calma: "Muchas gracias por el honor de
permitirme tratar a su omega".

Conteniendo a su alfa que había comenzado a gruñir en su cabeza, Lan Zhan también
correspondió la reverencia con elegancia, respondiendo: "El honor es mío, por favor pase".
Haciéndose a un lado en la puerta, Lan Zhan permitió que el curandero ingresara a las
habitaciones privadas de Wei Wuxian. El hombre agradecido respondió con otra sonrisa para
Lan Wangji, acercándose a la cama de Wei Ying de inmediato. Wei Wuxian por su parte se
había acostado de mejor manera en la cama, esperando de forma ansiosa a ese curandero.
Cubriéndose con una sábana delgada, Wei Ying lo esperaba solo con una de sus túnicas
interiores, luciendo realmente nervioso por saber la verdad.

"Wei Gonzi" Saludó el curandero con el mismo respeto y elegancia que demostró a Lan
Wangji: "Es un honor que me permita tratarlo ¿Puedo sanar su cuerpo?"

Sonriendo con alegría ante ese amable hombre, el cual lo había tratado más de una vez, Wei
Ying respondió: "Es un gusto verlo de nuevo, y por favor adelante, puede comenzar".

Acercándose a la cama después de cerrar la puerta corrediza de la habitación, Lan Wangji no


molestó al curandero que se sentó al lado de Wei Ying en la cama, únicamente parándose al
lado de su omega y sosteniéndolo de la mano, teniendo su mirada fija en todas las acciones
de aquel hombre, dispuesto a atacarlo si lastimaba o se sobrepasaba con Wei Ying.

El curandero, dispuesto a hacer aquello que Madam Yu le había ordenado primero,


cuidadosamente destapo a Wei Ying de aquella fina sabana, y tomando sus túnicas interiores
las abrió para tener acceso a su abdomen. Sin dejar de sonreír nervioso, sosteniéndose de la
mano de Lan Wangji con cierta fuerza, Wei Ying se dejó desnudar sintiendo las hábiles
manos del hombre comenzar a tocar su abdomen.

"Lan Zhan... Hace cosquillas" Susurró Wei Ying riendo ligeramente.

Atento a los movimientos del beta, Lan Zhan solo pudo susurrar: "Mmm".

"Debemos jugar a las cosquillas después, algo así como una guerra..."

"Mmm".

El hábil curandero, el cual casi no prestaba atención a esa animada conversación, solamente
se limitaba a tocar el abdomen de Wei Ying, presionando suavemente su piel. Acercando
ligeramente su nariz al estómago del contrario, aquel curandero olió su aroma y sin notar
nada extraño preguntó: "Wei Gonzi ¿Ha sufrido mareos o vómitos recientemente?"

"No, nada aun" Dijo Wei Ying con sinceridad: "Pero si tengo antojos ¿Algo está mal con mi
rabanito?"

"¿Tendrá un rabanito?" Preguntó Lan Zhan con angustia.

Sonriendo con dulzura, dejando de tocar el vientre de Wei Ying, el curandero finalmente dijo:
"Lo lamento mucho joven Wei, pero no está embarazado".

Sintiéndose aliviado, Lan Zhan suspiro con cierta felicidad, presionando la mano de Wei
Ying con cierta fuerza. Pero el joven omega no parecía nada contento, perdiendo su sonrisa y
luciendo sumamente desconcertado, miró a ese hombre incrédulo.
"¿Qué? ¿Cómo es eso posible? Lan Zhan eyaculó en mi interior en medio de mi celo" Dijo
Wei Ying apenado: "¿Cómo no pude quedar embarazado? ¿Hay algo mal en mí?"

Sonriendo ante las dudas de aquel joven omega, mientras comenzaba tomar todas las
medicinas que había traído consigo para tratar al menor, el curandero preguntó: "Lan Gonzi
¿Este fue su primer celo?"

Algo avergonzado, sintiendo sus orejas arder por la vergüenza, Lan Zhan respondió: "Lo
fue".

"No hay nada malo con usted, Wei Gonzi" Respondió el curandero con seguridad: "Hay
probabilidades altas de quedar embarazado en el celo de un omega, pero hay otros factores
que impiden que esto sea así en todos los casos, y entre esos está el primer celo o uno de los
primeros celos de un alfa".

"¿Entonces hay algo malo con Lan Zhan?" Preguntó Wei Ying asustado.

"No, en lo absoluto. Ambos son un omega y un alfa completamente funcionales. Pero debe
entender que esta fue la primera vez que el joven Lan tenía un celo, probablemente la primera
vez que expulsaba semen tal vez; esto afecta los índices de fertilidad de los alfas, cuando son
muy jóvenes su conteo de esperma no es tan alto, así que el joven maestro Lan pronto tendrá
las mismas capacidades sexuales que los otros alfas, pero por ahora aún se está
desarrollando" Explicó el curandero con mucha calma.

Sintiendo sus mejillas arder por la vergüenza, Lan Zhan pensó que quería morir por la pena
de haber escuchado todo eso. Y aunque no lograba entender todo lo dicho por el curandero,
ya que aún nadie se había tomado la molestia de explicarle algo sobre sexo en su propia
secta, Lan Zhan sabía que era algo sumamente privado, así que simplemente se quedó
callado, intentando apartar esas palabras de su mente.

Pero Wei Ying no lucia nada contento, bastante triste y perturbado, el joven omega llevó una
de sus manos a su propio vientre, acariciándolo con cariño. Aun si era un juego, Wei Ying
secretamente si se había emocionado al respecto de tener un bebe, dándole un nombre de
apodo y pensando en su sexo, aquellos deseos de un pequeño alfa con una cinta blanca como
la de Lan Zhan desaparecieron en el aire, haciéndolo sentir vacío.

"Lan Zhan... No hay un rabanito" Susurró Wei Ying muy triste, mirando a su alfa.

Saliendo de su silencio de vergüenza al escuchar esas tristes palabras, Lan Wangji quiso
consolar a su omega, acariciando una de sus mejillas.

"Lan Zhan... No tendremos un bebé" Susurró Wei Ying muy triste.

Interviniendo en esa conversación, el curandero rápidamente dijo: "Tal vez sea para mejor,
jóvenes maestros".

"¿Para mejor?" Preguntó Wei Ying sin entenderlo bien, respondiendo: "Esto es tan triste, no
es para mejor..."
"Recuerde las reglas de la tradición joven Wei, sin importar si un omega está comprometido o
no, un omega deshonrado y preñado puede ser condenado a muerte. Si usted hubiera quedado
embarazado muchas cosas podrían haberse vuelto más difíciles" Le recordó el curandero.

Bajando la mirada con resignación, comenzando a hacerse la idea de que no tendría un bebé,
Wei Ying respondió: "Si, tal vez sea para mejor".

Notando la increíble tristeza de su omega, Lan Zhan pensó que lo mejor sería reconfortarlo,
pero esperaría a que ese curandero se retirara para hacerlo. Volviendo a suspirar, Wei Ying se
soltó de la mano de Lanz Zhan, y sabiendo lo que sucedería a continuación, se giró en la
cama para quedar sobre su estómago, dejando su espalda cubierta de vendas disponible para
ser tratada. Sin necesidad de palabras, intentando darle al menor su espacio después de
semejante noticia, el curandero se apresuró y comenzó a retirar las vendas para observar y
seguir tratando los golpes, mientras que Wei Ying volvió a tomar la mano de Lan Zhan pero
ahora desde su nueva posición.

Un silencio triste se hizo en la habitación después de eso, por un par de minutos Wei Ying
siguió enfrascado en sus pensamientos de tristeza, pensando únicamente en su hijo.
Razonando en todo lo sucedido en ese corto lapso de tiempo, Wei Ying pronto se atrevió a
preguntar para resolver sus dudas.

"Pero aun así no lo entiendo..."

Ante esas palabras, el curandero se giró en dirección a Wei Ying, mirándolo algo intrigado:
"¿Qué es lo que no entiende joven maestro Wei?"

"¿Por qué Lan Zhan tuvo su celo tan de pronto?"

Desviando la mirada algo incómodo, Lan Zhan siguió parado al lado de la cama. Y es que
aunque el mismo tenía curiosidad al respecto, nunca creyó que su prometido se atreviera a
hacer una pregunta tan vergonzosa así de frente. Wei Ying realmente tenía la piel de la cara
muy gruesa.

Sonriendo por la pregunta, el doctor dejo de tratar las heridas de Wei Ying para encarar a
ambos jóvenes, dispuesto a explicarles todo lo que había sucedido esa noche: "Es normal que
los jóvenes alfa entren en celo de forma repentina cuando perciben las feromonas de un
omega que han marcado como suyo".

Ante esta explicación, tanto Wei Ying como Lan Zhan se sonrojaron ligeramente,
intercambiando miradas de reojo. Y algo preocupado por esas palabras, Lan Zhan se atrevió a
preguntar: "¿Entonces eso me pasara siempre que este con Wei Wuxian en su celo?"

"El ciclo de celo de los alfas es más espaciado que el de los omegas, probablemente aunque
aún vaya a ser irregular debido a tu edad, tu próximo celo sucederá en un par de meses, y
dependiendo de tu organismo, cuando seas mayor llegará a regularizarse y solo sucederá unas
dos o tres veces por año"

"Eso no responde mi pregunta ¿Por qué sucedió justo ayer entonces?" Insistió Wei Ying.
"Puede deberse a muchos factores, pero yo pienso en la explicación más simple" Dijo el
curandero algo dubitativo, mirando a ambos jóvenes por igual: "A pesar de que el joven
maestro Lan nunca tuvo su celo en el pasado es un alfa, y su alfa marco a la maestro Wei
como su omega probablemente desde que se conocieron; es lo que nosotros llamamos la
marca del destinado. Como pude escuchar por los rumores, yo realmente creo que ustedes
son destinados, ambos ya han desarrollado un lazo que muchas parejas casadas no logran
crear ni con varios años juntos. Ambos deben sentirlo, porque cuando uno se enfada el otro lo
siente, y cuando el otro esta triste ambos también lo sienten".

Pensando en las palabras del doctor, Wei Ying recordó aquella inexplicable angustia que
había sentido todo ese día cuando Lan Zhan había roto su compromiso, lloro toda la tarde, y
siempre supo que había algo más ahí además de su propia tristeza. Y teniendo un recuerdo un
poco más feliz, Wei Ying recordó el sentimiento que tuvo en el festival de los faroles por la
cosecha, donde una emoción nunca antes conocida lo había invadido por completo ¿Todas
aquellas emociones habían sido de Lan Zhan?

"Aquella vez... Cuando sucedió" Susurro Lan Zhan, muy pensativo: "Yo estaba
extremadamente asustado, como nunca, mi cuerpo comenzó a temblar. Y hoy... Siento dolor,
aunque sé que no estoy lastimado, y sé que está solo en mi cabeza".

Sonrojándose, Wei Ying extendió una de sus manos fuera de la cama, tomando a Lan Zhan
suavemente de la mano, mirándolo algo apenado: "Entonces tú también lo sientes..."

"Mmm".

Por su parte el curandero, realmente interesado, miraba a ambos jóvenes con atención,
sonriendo ligeramente ante su charla: "El joven Lan, además de estar siendo estimulado por
su alfa debido a su lazo, estuvo fuertemente expuesto a tus feromonas desde que llego. Y
como tú mismo explicaste que entraste en celo en su habitación debido a que oliste sus
feromonas demasiado cercanas, además de todos los sentimientos de arrepentimiento y
vergüenza que tenían, los dos se provocaron el celo mutuamente, cada uno gracias a las
feromonas del otro y los sentimientos que tenían en conjunto".

Haciendo entender a ambos de una mejor manera que había sucedido, Lan Zhan y Wei Ying
volvieron a guardar silencio, perdiéndose en sus pensamientos y sus recuerdos de aquella
noche. Decidiendo continuar con su trabajo, siendo sumamente delicado, el curandero siguió
tratando las heridas de la espalda de Wei Ying, dándose cuenta de que estas habían sanado
bastante bien, volviendo a ponerles vendas encima para protegerlas.

"No deben temer por su próxima vez. Sin un celo presente las cosas para ambos serán mucho
mejores, estando conscientes ambos podrán controlar mejor sus instintos y esto no sucederá"
Explico el curandero, intentando tranquilizar a ambos jóvenes.

"¿Próxima vez?" Preguntó Lan Zhan confundido.

Sonriendo con cierta dulzura por el inocente alfa, el curandero respondió: "Debe hablar con
su secta Lan Gonzi".
Sonriendo igualmente, Wei Ying no dijo nada al respecto, aun sosteniéndose de la mano de su
alfa con cariño, sintiéndose en paz teniéndolo a su lado. Sin decir más, el curandero siguió
enfocando su atención en curar al joven Wei, bajando sus manos a las nalgas de este,
comenzando a tratar su maltratada entrada.

Suspirando con incomodidad, como siempre sucedía cuando aquellos curanderos lo tocaban
en esa parte de su cuerpo, Wei Ying no pudo evitar ponerse tenso mientras se sostenía
fuertemente de la mano de Lan Wangji, con las mejillas completamente sonrojadas por la
vergüenza. Cambiando su actitud al igual que su omega al ver al curandero haciendo aquello,
con su alfa rugiendo en su cabeza por los celos, Lan Zhan miró en silencio el trabajo de ese
hombre, que con calma abría las nalgas de Wei Ying con sus manos y miraba con atención
sus genitales.

"En hora buena Wei Gonzi, ya casi ha sanado por completo" Dijo el curandero dejando de
tocarlo y aparándose de él.

Suspirando finalmente tranquilo y cerrando las piernas rápidamente, Wei Ying susurró:
"Yay..."

"Eso no significa que este sano" Explico el curandero, comenzando a guardar todas las cosas
que había llevado para tratar al menor: "Las heridas de su espalda aún no han sanado y
tardaran una semana más aproximadamente, pero asumo que no quedaran cicatrices por el
trabajo realizado, solo tardaran un poco más en desaparecer".

Observando como el doctor había terminado, Lan Zhan se apresuró a ponerle las túnicas
interiores a su omega de nuevo, volviendo a cubrir su cuerpo. Mientras que el doctor
terminando de guardar todos sus implementos, encendió incienso medicinal el cual dejo en
una de las mesas bajas de la habitación, para luego volver a encarar a ambos jóvenes.

"El joven maestro Wei parece estar sanando bien, sin embargo no es recomendable que
abandone la cama ni que haga esfuerzo físico aún, por lo menos por un par de días"
Recomendó el curandero.

Suspirando exasperado, haciéndose ligeramente a un lado en la cama, Wei Ying permitió que
Lan Zhan cerrara sus túnicas antes de preguntar: "¿Pero por cuánto más?"

Sonriendo de forma comprensiva, el curandero respondió: "Una semana máximo, maestro".

Observando a su omega bufar, Lan Wangji se apresuró a acariciar una de sus mejillas con
cariño, mirándolo a los ojos: "No te preocupes, yo me encargare de cuidarte".

Sonriendo, Wei Ying respondió: "Gracias Lan Zhan".

Dando su labor por terminada, el curandero hizo una reverencia para ambos jóvenes antes de
retirarse de la habitación, cerrando la puerta corrediza detrás de sí mismo. Cuando el doctor
se fue Wei Ying no pudo evitar lucir nuevamente triste, poniéndose de lado en la cama y
acariciando su abdomen.

"¿Estas bien?" Pregunto Lan Wangji dándose cuenta del humor de su prometido.
Asintiendo con una sonrisa triste, Wei Ying siguió tocando su abdomen con tristeza: "No hay
Bao Bao".

Aunque sentía un gran alivio y hasta felicidad al saber que Wei Ying no estaba embarazado,
Lan Wangji no podía ignorar el hecho de que aquella noticia parecía entristecer a su omega.
Así que sentándose en el piso al lado de la cama también puso una de sus manos en el
abdomen del contrario, intentando reconfortarlo aunque fuera un poco.

"No tendré un rabanito..." Se lamentó Wei Ying.

"Lo tendrás" Prometió Lan Zhan: "Pero no ahora".

"Es que... Estaba tan contento Hanguang-Jun, creí que tendría un bebe para ti, incluso
pensaba en nombres y en como encargárselo a Jiang Cheng para molestarlo. Pero no tendré
uno".

"Lo tendremos, tendrás un rabanito y será mío. Pero podemos esperar ¿No es verdad? Aún
hay tantas cosas que podemos hacer los dos, un bebe es demasiada responsabilidad, ni
siquiera tenemos un hogar" Le recordó Lan Zhan intentando hacerlo razonar.

Poniendo un puchero, Wei Ying respondió: "Lo se Lan Zhan... Pero..."

"Yo te juro que muy pronto pondré un rabanito en tu vientre, no solo uno, varios. Que estarán
corriendo por Muelle De Loto y jugarán contigo sin parar" Prometió Lan Zhan, mirando a
Wei Ying a los ojos: "Pero para eso primero debes casarte conmigo, y tener una juventud
plena a mi lado".

Haciendo un ligero puchero, Wei Ying respondió: "¿Varios rabanitos?"

"Mmm... Muchos".

Sonriendo nuevamente, Wei Ying dijo: "Mi alfa puede poner todos los que quiera en mi
vientre entonces, puede darme muchos hijos".

Asintiendo a sus palabras, Lan Zhan respondió: "Todos los que quieras".

Olvidando su anterior pena por las dulces e inocentes palabras de su Hanguang-Jun, Wei
Ying no pudo evitar reír a carcajadas, haciendo sonreír ligeramente a su prometido. En medio
de esas risas, antes de poder decir algo, el estómago de Wei Wuxian sonó de una forma ronca,
haciendo reír aún más al mayor.

"Tienes hambre" Dijo Lan Zhan.

"Descuida, los sirvientes traerán pronto algo de comer".

Poniéndose de pie de inmediato, Lan Zhan dijo: "No hay necesidad, iré yo mismo a las
cocinas".

"Pero los sirvientes lo harán... Tu no debes..." Susurró Wei Ying, intentando detener a su alfa.
Con confianza, el contrario respondió: "Déjame cuidarte".

Sintiéndose muy bien por ser tratado de una forma tan especial, Wei Ying no pudo negarse y
únicamente sonrió, dejando que su joven alfa le diera una caricia en la mejilla antes de
caminar fuera de la habitación, dándole una última mirada desde la puerta antes de dejarlo
solo. Acostándose nuevamente sobre su estómago, Wei Ying suspiro con cierta pena y
desilusión, sin dejar de pensar en su Bao Bao. Recomponiéndose lentamente mientras
esperaba al menor, Wei Ying finalmente recordó algo que quería hacer hace mucho tiempo,
pero para lo cual nunca tuvo oportunidad por tener a Lan Zhan todo el tiempo a su lado.

Haciendo un ligero esfuerzo con su cuerpo, Wei Ying extendió una de sus manos hasta el piso
al lado de su cama, de la cual con mucha maestría retiro uno de los tablones de madera del
suelo, dejando a la vista un agujero en el suelo con diversas cosas escondidas. Apartando
algunos juguetes y botellas de licor llenas, Wei Ying finalmente tomó su tesoro más preciado
de la parte inferior, muy bien cuidados y escondidos: Los libros pornográficos de Nie
Huaisang.

Los omegas tenían prohibido masturbarse, obviamente sabían sobre sexualidad, mucho más
que algunos alfas debido a que ellos tenían que cuidarse, pero para los omegas no se veía
como algo satisfactorio, solo como un método para tener hijos. Sin embargo para los alfas
esto era diferente, ellos poseían gran cantidad de literatura erótica para calmar sus
necesidades, unos libros que estaban fuera del alcance de cualquier omega. Sin embargo Wei
Ying y Jiang Cheng conocieron esos libros gracias a su amigo alfa Nie Huaisang, y gracias a
estos no solo aprendieron que el sexo podía ser sumamente satisfactorio para los omegas,
también comenzaron a "satisfacerse" a sí mismos usándolos.

Tomando uno de sus libros favoritos, en los que relataba la primera vez de un omega esclavo
tomado por un emperador, una fantasía recurrente para alfas, Wei Ying comenzó a leer y ver
las ilustraciones con las mejillas sonrojadas. Admirando las posiciones dibujadas y pensando
en el placer que describía ese libro, el joven omega se perdió en sus pensamientos sin dejar
de leer, únicamente pensando en cómo debió ser su primera vez con Lan Wangji y en el
placer que este debió darle.

Saliendo de las cocinas pocos minutos después, Lan Wangji se apresuró a volver a la
habitación de su omega. A su alfa no le gustaba dejar solo a su omega, que consideraba
indefenso por estar herido, así que con un sentimiento sumamente desagradable en todo su
cuerpo, Lan Wangji apresuró sus pasos hasta la habitación de Wei Ying, suspirando tranquilo
únicamente cuando pudo abrir la puerta para entrar. Cerrando la puerta corrediza de la
habitación de Wei Ying solo con una de sus manos detrás de sí mismo, Lan Wangji entró en
la sala con mucha elegancia, llevando consigo una bandeja con los alimentos que los
sirvientes habían preparado para ambos esa noche. Y acercándose a la cama de su omega,
gran fue su sorpresa cuando vio a Wei Ying con un libro en las manos leyendo con una
sonrisa y las mejillas sonrojadas.

"¿Wei Ying?" Preguntó Lan Zhan confuso, para luego decir sumamente preocupado: "¿Te
pusiste de pie para tomar un libro?"

Sin poder evitar lucir muy preocupado, Lan Wangji se acercó más al omega, ya que por las
indicaciones del doctor hasta que las heridas del cuerpo de Wei Wuxian sanaran este no debía
hacer ningún esfuerzo, ni siquiera el más mínimo. Girando ligeramente el rostro para verlo,
Wei Ying también sonrió y negó con la cabeza ante su pregunta.

"No me puse de pie Hanguang-Jun" Se explicó Wei Ying: "Tome el libro de este tablón de
madera al lado de mi cama, ahí tengo un escondite para licor y otras cosas..."

Curioso fijándose que verdaderamente había un tablón desplazado del piso, Lan Wangji
preguntó: "¿Por qué escondías un libro?"

Con una sonrisa pícara Wei Ying respondió: "¿Por qué? ¿Quieres ver?"

Parándose a los pies de aquella cama, Lan Wangji se sintió un poco dudoso, sabiendo que
probablemente era otra de las bromas que le hacia el mayor todos los días desde que habían
comenzado a dormir juntos. Pero decidiendo seguirle el juego para hacerlo feliz Lan Wangji
respondió: "Mmm".

"¡Estoy estudiando!"

Levantando el libro para mostrárselo a su alfa, Wei Wuxian estalló en carcajadas al ver lo
rojo que se había puesto su rostro y como este casi había soltado la bandeja con comida por la
impresión.

"¡Desvergonzado!" Exclamó Lan Zhan desviando la mirada rápidamente.

Aquel era un libro pornográfico en el que se mostraban representaciones artísticas de


relaciones entre alfas y omegas machos, libros que Wei Ying había leído y disfrutado más de
una vez.

Riéndose de la cara avergonzada de su inocente alfa, Wei Wuxian siguió molestándolo: "¿Por
qué estás tan avergonzado Lan Zhan? ¿Acaso no recuerdas aquello que me hiciste tan solo
hace unos días? Hanguang-Jun que malo... Me quitaste mi virginidad y por poco pones un
bebé en mi vientre..."

Poniéndose más rojo aun, Lan Wangji pensó en huir, exclamando fuertemente:
"¡Desvergonzado!"

Temblando ligeramente por la vergüenza y nuevamente por el remordimiento de haber


abusado a Wei Ying, algo de lo que el mayor no se daba cuenta, Lan Wangji quiso huir de ese
sitio, sin poder aguantar más toda aquella incomoda sensación.

"Eres realmente inocente, Hanguang-Jun" Dijo Wei Ying cuando finalmente pudo terminar de
reír: "Dudo que puedas hacerme el amor algún día..."

Poniendo un rostro algo triste y desilusionado, pensando en sus pesadillas y sus tristes
recuerdos, Lan Zhan preguntó en un susurro: "¿De verdad crees eso?"

"Tal vez..." Canturreo Wei Ying aun hojeando ese libro con atención: "Solo espero que mi
alfa sepa cómo hacerme el amor, y que cumpla su promesa de hacerme sentir bien y llenar mi
estómago de cientos de rabanitos. Si no Lan Wangji realmente me habrá desilusionado".
Volviendo a reír de una forma cantarina, Wei Ying no noto como Lan Zhan puso un rostro
muy triste y arrepentido, manteniéndose en su sitio en silencio.

En ese mismo instante el joven Lan deseó ser un mejor alfa para su amado.
Capítulo 41.

"No quiero que te vayas..."

Sonriendo con cierta melancolía, acariciando suavemente una de las mejillas del mayor, Lan
Wangji se sintió enternecido, observando a su omega en la cama rodeado de sus túnicas,
mirándolo con mucha tristeza.

"Quédate" Volvió a pedir Wei Ying con dulzura, tomándose fuertemente del menor.

Una semana pasó desde que Wei Ying se enteró que no estaba embarazado después de todo.
Con sus heridas prácticamente curadas y habiendo sido dado de alta por los curanderos de
Yunmeng, Wei Ying supo que su tiempo con su alfa había terminado.

Lan Wangji usó toda su voluntad frente a su secta antes de rescatarlo y pedir nuevamente su
mano aquel día después de dormir juntos por primera vez. Luchando con miembros ancianos
de su consejo acompañado de su fiel espada Bichen, Lan Wangji no solo exigió que su secta
le permitiera defender a su omega, también exigió quedarse en Yunmeng hasta que Wei
Wuxian sanara, pues su alfa se negaba a dejar a su omega indefenso en ese sitio. Fue de esa
manera que los lideres finalmente accedieron a quedarse más tiempo del que habían
planeado, una visita que antes solo constaría de un par de días por el compromiso, termino
volviéndose de casi tres semanas en la que todos los miembros de la secta Lan se quedaron
en Lotus Pier.

Lan Xichen se encargó de todo de una forma comprensiva, usando su poder como líder
transitorio de esa comitiva, no solo informo a su familia en Gusu de lo sucedido, también dio
su consentimiento para que Lan Zhan durmiera en la misma habitación de Wei Ying
rompiendo las reglas de la tradición. Esto que no fue visto para nada bien por la familia Lan
en Gusu, tanto que el propio padre de los Jades se sintió disgustado, se decidió que sería
solucionado cuando la comitiva volviera a Gusu.

Lan Wangji seria disciplinado en el Receso De Las Nubes por sus errores.

Sin embargo aquello al joven Lan le traía sin cuidado, ya fuera copiar las 3000 reglas de su
clan un millón de veces, o soportar 100 azotes con el látigo de disciplina de los Lan, Lan
Wangji no se arrepentía. Esto debido a que no sería juzgado por violar a Wei Ying, seria
castigado por haber atacado a miembros mayores de su propio consejo. Mientras que el
asunto de la pérdida de su virginidad pasaría como algo sin importancia para muchos,
mientras que algunos otros alfas incluso podrían felicitarlo por haberlo hecho.

Fue de esta manera que ese mismo día se les informo a todos que Wei Wuxian ya estaba
completamente recuperado, lo que significaba que la secta Lan debía regresar a casa. Esto no
fue tomado de buena manera por parte del joven Wei, el cual dejándose dominar por su
omega, tomó todas las prendas del baúl de cosas personales del menor e hizo un cómodo nido
en su cama, negándose a dejar que el joven Lan volviera a empacar.
Regresando de una reunión con su secta para planear el viaje de regreso gran fue la sorpresa
del joven Lan al encontrar semejante espectáculo. Quedándose sin habla al observar a Wei
Ying en medio de sus cosas revueltas en su cama soltando fuertes feromonas, Lan Wangji
únicamente pudo acostarse al lado de su omega dejando que este lo abrazara, intentando
tranquilizarlo y tranquilizarse a sí mismo.

"No te vayas..." Volvió a suplicar el mayor, abrazándose fuertemente a Lan Wangji y


sosteniendo sus túnicas con fuerza.

Sonriendo de forma comprensiva, mientras daba suaves caricias en la espalda del contrario,
Lan Zhan respondió: "Volveremos a vernos pronto..."

"¡No es pronto!" Reclamo Wei Ying haciendo un berrinche por su omega: "¡No te vayas!"

Siendo sumamente paciente, Lan Wangji permitió que Wei Ying hiciera su berrinche
controlado por su omega, únicamente intentando consolarlo.

"Solo serán un par de semanas ¿Sabes que pasara en un par de semanas verdad, Wei Ying?"

Asintiendo de forma lastimera, soltando sus feromonas intentando tentar a su alfa, Wei
Wuxian respondió: "Lo se Er Gege, pero... No creo poder esperar..."

Pegándose mucho al cuerpo del menor y sin previo aviso, Wei Ying lo tomo de la mano y
metió dos de los dedos del contrario en su boca, lamiéndolos para tentarlo. Suspirando
ligeramente con esa visión tan excitante, y el olor de esas fuertes y dulces feromonas, Lan
Wangji simplemente se dejó hacer, intentando controlarse. Besando la frente de Wei Ying de
forma dulce, Lan Zhan saco sus dedos de la húmeda y caliente boca del contrario, volviendo
a abrazarlo contra su pecho, Lan Zhan comenzó a soltar sus feromonas de forma tímida
intentando controlarlo.

"Por favor..." Suplico Wei Ying de una forma vergonzosa, presionando con uno de sus muslos
la entrepierna de Lan Wangji: "Quiero ser tuyo... Quiero ser de Lan Zhan otra vez... Por favor
hazme un hijo pronto".

Quedándose en silencio únicamente reparando en las palabras de Wei Ying, Lan Zhan volvió
a sentirse inseguro y muy preocupado, solamente dejándose hacer. Después de todo lo que
había pasado, no estaba seguro de que algún día podría hacer sentir bien a su omega.

Abrazándose fuertemente al menor, Wei Ying tardo un poco pero finalmente pudo controlar a
su omega y despertar de ese ensueño. Notándose sumamente avergonzado después de lo que
hizo, se separó de Lan Zhan a duras penas, con las mejillas completamente sonrojadas.

"Esto fue estúpido" Se quejó Wei Ying muy avergonzado por sus acciones: "Maldita sea, lo
siento Lan Zhan, soy..."

Sonriendo enamorado por la dulzura de su omega, Lan Wangji acaricio una de sus mejillas
suavemente: "Descuida".

"Quiero morir de la vergüenza, perdóname Hanguang-Jun..."


Dejando que el mayor volviera a ocultar su rostro en su pecho por la pena, Lan Zhan solo
acaricio su espalda y sus cabellos con cuidado: "Todos hacemos tonterías por nuestros alfas o
nuestros omegas, no es algo tan malo. No debes avergonzarte".

Suspirando sumamente incomodo, Wei Ying levantó la mirada para observar a Lan Wangji a
los ojos: "Tome toda tu ropa y me hice un nido... Que estupidez".

"No lo es".

"No digas que es dulce Lan Wangji, te lo advierto, no lo digas" Pidió Wei Ying muriendo de
la vergüenza.

"Es dulce" Susurro Lan Zhan acercando sus labios a la frente del menor para besarla con
cariño.

Volviendo a morir de la vergüenza, ambos fueron interrumpidos por unos toques en la puerta
de su habitación. Suspirando con cierta resignación, fue Wei Ying el que se levantó de la
cama en esta ocasión para atender, aun con las mejillas sumamente sonrojadas por la
vergüenza. Abriendo la puerta corrediza de su habitación, Wei Wuxian se topó de frente con
Jiang Wanyin, el cual lo esperaba fuera con los brazos cruzados.

"¿Qué pasa?" Pregunto Wei Ying confundido.

"Shijie mando un mensaje desde Lanling, mi padre quiere que lo recibamos todos juntos"
Explico Jiang Cheng mirando a su hermano curioso.

Observando su rostro sonrojado y esa expresión que este hacia cuando se avergonzaba, una
expresión que había visto contadas y reducidas veces a lo largo de toda su vida, Jiang Cheng
quiso ver dentro de la habitación curioso, únicamente pudiendo ver la cama llena de ropa
antes de ser empujado por Wei Wuxian.

"Bien, bien, vamos a recibir el mensaje, vamos" Dijo Wei Ying sumamente avergonzado,
sacando a su hermano a empujones de su habitación: "Lan Zhan, volveré rápido y te ayudare
a ordenar todo" Dijo Wei Ying desde la puerta, apresurándose a cerrarla para evitar que Jiang
Cheng pudiera ver algo.

Sentándose en la cama estando solo sin su omega, Lan Wangji pudo escuchar con claridad la
conversación que tuvieron Wei Ying y Jiang Cheng antes de irse: "¿Qué? ¿Hiciste un nido?"
Le pregunto Jiang Cheng divertido.

"Cállate" Dijo Wei Ying sumamente avergonzado.

"Que tierno..." Se burló Jiang Cheng: "¿Extrañaras a tu pequeño alfa? ¿No podrás esperar sus
'Atenciones'?"

"Te golpeare Wanyin, no me retes..."

"Inténtalo..."
Sonriendo para sus adentros, mientras las voces de ambos omegas se alejaban comenzando a
ser inaudibles, Lan Zhan se puso de pie y comenzó a arreglar sus túnicas. Rodeando la cama,
Lan Wangji comenzó a doblar con maestría todas sus prendas de ropa para devolverlas al
baúl de donde Wei Ying los había tomado. Y distraído en sus labores, los ojos de Lan Wangji
pronto viajaron a ese tablón suelto de madera que había al lado de la cama del mayor.

Quedándose en silencio, Lan Wangji no aparto la mirada de esa tabla de madera ligeramente
descolocada.

***

El agua del lago de Yunmeng lucia apacible. Sin olas o turbulencias, solo una suave brisa que
movía los lotos sobre el agua de lago, dando un paisaje tranquilo y calmo, en el cual lejos en
el horizonte varios barcos con banderas blancas y con nubes azules se perdían cada vez más.

Wei Wuxian, parado en el final de uno de los muelles, observaba junto a su hermano Jiang
Cheng como los barcos de la secta Gusu Lan abandonaban finalmente Yunmeng, llevando de
regreso a casa a todos sus visitantes. Lan Wangji y Lan Xichen se habían quedado en Lotus
Pier mucho más de lo esperado, en aquello que solo debía ser una corta visita por la fiesta de
compromiso del joven Jiang, se prolongó a una visita de varias semanas, en las que Lan
Wangji insistió en quedarse. Con Wei Ying en buen estado de salud y recuperado, y los
negocios por parte de la secta Lan y la secta Jiang por el compromiso fueron concluidos,
ambos hermanos jades tuvieron que regresar a casa con toda la comitiva que los acompañaba,
dejando a sus omegas en Muelle De Loto añorando por volver a verlos.

Después de haberlos despedido junto a una comitiva de Yunmeng, Wei Ying y Jiang Cheng
se quedaron en el muelle hasta que los barcos de la secta Lan hubieran desaparecido, aun con
mucha pena por haber dejado marchar a sus alfas. Dándose cuenta de que la comitiva de los
Jiang se había dispersado, y que los líderes Jiang Fengmian y Yu Ziyuan habían comenzado a
pasear por los muelles sin rumbo, Jiang Wanyin tomó a su hermano de un brazo.

"Regresemos" Dijo Jiang Cheng.

Dándole un último vistazo al lago, donde los barcos casi se habían perdido en el horizonte,
Wei Ying asintió a las palabras de su hermano, girándose y caminando de regreso a la
residencia de los Jiang. Caminando juntos ambos hermano se notaron un poco más decaídos
de lo usual, sintiendo a sus omegas pidiendo a sus alfas con dolor, algo que los hizo
mantenerse en silencio por un par de minutos en su camino, hasta que lograron tranquilizarse.

"Tu cabello" Observo Jiang Cheng mientras seguían caminando juntos por Lotus Pier: "Te
peinas como antes otra vez".

Luciendo una cola de caballo alta sujetada por una cinta roja, Wei Ying sonrió animado,
respondiendo: "¿Te fijas en esas cosas ahora? ¿Soy hermoso?"

"Cállate..."

Riendo, Wei Ying abrazó a Jiang Cheng por los hombros, mientras ambos hermanos
caminaban sin rumbo por la residencia de los Jiang, sin tener nada más que hacer con la
ausencia de Lan Wangji y Lan Xichen.

"A-Cheng también sé muy bien, cuidaste mucho tu aspecto por la visita de tu alfa".

"Fue por el compromiso" Mintió Jiang Cheng con seriedad: "Quería verme bien para mi
nueva secta. No tengo por qué cuidar mi aspecto con Lan Huan".

"Ya veo, ya veo..." Dijo Wei Ying divertido, prefiriendo no insistir al respecto: "¿Al final le
diste el regalo que preparaste para su compromiso?"

"Lo hice, le gustó mucho".

"¿Qué te dio él a ti?"

Según la tradición cuando se tenía una fiesta de compromiso, era el alfa quien debía llevar
varios regalos a la secta del omega para mostrar cuan pudiente era su familia, una forma de
demostrar a los padres del omega que cuidaría bien de su hijo y que le daría una buena vida.
Sin embargo de forma reciente la pareja de prometidos también se daba un regalo en privado,
un regalo que debía ser significativo para ambos, no necesariamente algo caro, solo algo
especial como una forma de festejar su compromiso pero solo entre ellos.

Esa nueva costumbre que había hecho eco en las diferentes sectas y que cada vez se hacía
más popular, fue una nueva costumbre que Jiang Cheng imito con Lan Huan. Ambos al saber
sobre su compromiso se pusieron de acuerdo para entregarse regalos en privado, así que Jiang
Cheng preparo una hermosa pintura de su prometido con la ayuda de Wei Ying, una pintura
que les tomo varios días en terminar y que quedo muy bien decorada y pintada.

"Un libro con partituras de canciones" Explico Jiang Cheng sonrojándose ligeramente.

Frunciendo ligeramente la nariz, Wei Ying observo a su hermano con lastima, suspirando
ligeramente: "Que mal regalo, tú no sabes tocar ningún instrumento, el regalo de Lan Huan
fue una pérdida de tiempo, debió haberte dado algo más simple, algo que tu pudieras entender
con tu reducido intelecto".

Furioso por sus palabras, Jiang Cheng se giró y dio un fuerte golpe en el costado de Wei
Ying, el cual riéndose de sus propias palabras soltó el abrazo que tenía en los hombros de
Jiang Cheng para apartarse de golpe, riéndose y quejándose a la vez.

Muy molesto por su insulto, Jiang Wanyin le reclamo: "Eres un imbécil, no me las regalo
para que las tocara yo mismo, es un libro con varias partituras que Lan Huan compuso para
mí".

"Que malo A-Cheng, que malo..." Se quejó Wei Ying aun sujetando el lateral de su cuerpo
adolorido, sin poder dejar de reírse: "Solo fue una broma..."

"El regalo de Zewu-Jun fue maravilloso" Se lamentó Jiang Cheng en un suspiro: "Él no solo
escribió cada una de las canciones a mano, incluso creó el libro empastándolo y dibujando la
portada con varios lotos y un cachorro para mí, dibujando en cuero de muy buena calidad mi
nombre sobre la portada".
"Rayos... Eso realmente deja mal parado nuestro regalo. Definitivamente tu alfa supero
nuestra pintura con ese presente".

"Lo sé".

Parando en uno de los salones de Yunmeng, ambos hermanos entraron en esta tranquila
habitación sentándose en la puerta, mirando hacia la nada, esperando de esa forma a que
finalmente anocheciera y pudieran ir al salón principal de la secta para cenar con sus padres.

"¿Cómo se siente?" Preguntó Jiang Cheng tras un par de minutos en silencio, sintiendo sus
mejillas sonrojarse ligeramente.

"¿Cómo se siente qué?" Preguntó Wei Ying distraído, mirando el cielo naranja sobre sus
cabezas: "¿Cómo se siente ser maltratado por tus golpes?"

Con cierta exasperación, Jiang Cheng respondió: "No idiota, como se siente... Como se siente
hacer..."

Muy avergonzado, notando la mirada de Wei Ying sobre su rostro cada vez más apenado,
Jiang Cheng no supo cómo continuar, tragando un poco de saliva.

"¿Cómo se siente qué?" Siguió preguntando Wei Ying.

Una duda había crecido en la mente de Jiang Cheng desde que supo que Wei Ying perdió su
virginidad con su alfa, pensando en aquellas escenas que había visto tantas veces en los libros
de su amigo Nie Huaisang, Jiang Cheng quiso preguntarle al mayor por mucho tiempo como
se sentía perder su virginidad con un alfa, sin tener oportunidad hasta ese instante pues Lan
Wangji siempre se la había pasado pegado a su omega.

Logrando controlar su timidez, Jiang Cheng finalmente preguntó: "¿Cómo se siente tener
sexo?"

"Ah... Eso" Dijo Wei Ying con calma: "Bien, se siente bien supongo".

Girándose para ver a su hermano con confusión, observando su desinterés e incluso calma al
respecto, Jiang Cheng comenzó a sospechar al respecto: "¿Solo bien? Tú siempre hablas de
estas cosas como un pervertido, contándome las mil cosas que aprendiste de los libros de A-
Sang. Pero ahora eres increíblemente desinteresado, sin dar detalles, no seas así, quiero
saber..."

"Bien, bien, bien..." Dijo Wei Ying sonriendo con cierta malicia: "Te contare los sucios
detalles cuando lo haga por segunda vez".

"¿Segunda vez?"

Riéndose de sus propias palabras, tomando valor de igual manera, Wei Ying miró a su
hermano a los ojos para preguntarle: "¿A-Cheng, cuantos de tus celos recuerdas?"

Pensativo, sin entender bien a lo que su hermano se refería, Jiang Wanyin respondió:
"¿Celos? Vaya..."
"Yo no recuerdo ninguno" Lo interrumpió Wei Ying sin perder su sonrisa: "No recuerdo nada
en lo absoluto".

Reparando en las palabras de su hermano, luciendo tan tranquilo y desinteresado aun después
de todo lo que había pasado, Jiang Cheng finalmente pudo entenderlo. Aquello que en caso
de cualquier omega hubiera sido sumamente traumático, para Wei Ying paso como si nada,
no cambio su actitud y no dejo de confiar en su alfa, aún después de ser violado Wei Wuxian
lucia sumamente normal ante todos.

"Espera un segundo ¿Me estás diciendo que no recuerdas nada de tu primera vez con Lan
Wangji?" Preguntó Jiang Cheng incrédulo.

Siendo sincero al respecto por primera vez, Wei Ying asintió a la pregunta, respondiendo:
"No recuerdo nada".

Entendiendo todo a la perfección, Jiang Cheng lució sumamente sorprendido, mirando a su


mayor el cual reía y jugaba al respecto, como si nada malo hubiera pasado.

"Todo ese día esta borroso en mi cabeza" Respondió Wei Ying con sinceridad: "Ni siquiera
recuerdo bien la fiesta de compromiso que tuviste. Hay un hueco en mi memoria, tengo
algunos destellos, pero ni siquiera se bien cuando fui a buscar a Lan Zhan o porque, ni
siquiera recuerdo si te quedaste a dormir conmigo. Sé que Madam Yu estuvo cerca por que
recuerdo sus feromonas, pero después de eso... A veces creo que sentía un poco de dolor y
me gustaba hundir mi rostro en las almohadas de la cama de Lan Zhan, pero más allá de eso...
Todo se pone obscuro nada más".

"Eres un idiota" Le reclamó Jiang Cheng molesto: "¿Esa es la razón por la que perdonaste a
Lan Wangji tan rápido? ¿Por qué no recuerdas nada de lo que hizo?"

"Basta A-Cheng, estoy seguro que lo disfrute mucho, incluso casi quedo embarazado ¿No es
eso suficiente? Lan Zhan también parece tranquilo, así que no creo que haya sido la gran
cosa. Yo ya sabía que tendría que sangrar cuando él entrara en mí, así que no hay muchas
sorpresas al respecto, tener mi cuerpo marcado de sus manos y sus dientes me hace parecido
a las ilustraciones de A-Sang ¿No es bonito?"

Negando con la cabeza, visiblemente decepcionado, Jiang Cheng respondió: "Maldito idiota,
perder tu virginidad de esa manera... Yo jamás lo hare así, no perderé mi virginidad en medio
de un celo, me aseguraré de recordar todo".

"A veces tal vez no sea bueno recordar..." Dijo Wei Ying con una sonrisa.

"En mi caso lo será, yo quiero recordar todo por siempre" Respondió Jiang Cheng con
seguridad.

El menor suponía que su primera vez seria con Lan Xichen, y quería asegurarse de no olvidar
ningún detalle, aún cuando ese alfa tal vez nunca podría tocar su cuerpo.

***
Furioso, Wei Ying salió de su habitación apresurado, caminando rápidamente por los pasillos
del pabellón de las habitaciones privadas de la familia Jiang, acercándose a las habitaciones
de Jiang Cheng.

El joven Wanyin, el cual estaba acostado en su cama muy relajado, tenía en sus manos el
libro que Lan Xichen había hecho con tanto amor para él. Teniendo el libro abierto en una
página especial, en la cual tenía la canción que más le había gustado, siendo marcada por una
hermosa flor que había guardado con mucho cariño entre sus páginas, Jiang Cheng miraba
aquella flor y el libro con añoranza, sin poder evitar pensar una y otra vez en su querido alfa.

Siendo sorprendido por Wei Ying el cual golpeo fuertemente la puerta de su habitación, Jiang
Cheng se sentó rápidamente sobre su cama, cerrando el libro con vergüenza y escondiendo
aquella flor delicada entre sus hojas con vergüenza. Sin tener tiempo ni de ponerse de pie o
preguntar, Jiang Cheng fue sorprendido por Wei Wuxian, quien abrió la puerta de la
habitación y entro en esta sin ser invitado.

"¿Dónde están?" Pregunto Wei Ying furioso, caminando rápidamente en dirección a Jiang
Cheng.

"¿Qué te pasa? ¿Estás loco?" Reclamó Jiang Cheng, sin entender nada.

"No estoy jugando Jiang Cheng" Amenazo Wei Ying: "Devuélvemelos, no es gracioso".

Muy molesto, Wei Ying arrebato el libro que Jiang Cheng tenía en las manos, y dándose
cuenta de que era el regalo de Lan Huan, lo tiro en la cama con indiferencia, poniéndose a
buscar por el resto de la habitación privada con mucha atención. Comenzando a molestarse
de igual forma, Jiang Cheng tomo cuidadosamente el libro de Lan Huan en sus manos
nuevamente, observando extrañado como Wei Ying caminaba de un lado al otro en su
habitación.

"¿Qué te pasa? ¿Qué crees que haces?" Reclamo Jiang Cheng enfadado.

"No es broma Jiang Cheng, sé que los tomaste, regrésamelos...."

"¿Qué fue lo que supuestamente tome de ti?" Se defendió Jiang Cheng molesto, observando
al mayor ir de un lado al otro.

Encarando finalmente a su hermano, Wei Ying lo acusó diciéndole: "¡Los libros de Huaisang!
¡Sé que tú los tomaste! ¡No es broma A-Cheng, regrésamelos!"

Luciendo increíblemente exasperado, Jiang Cheng respondió: "Maldito pervertido, tu solo


piensas en esas mierdas, no me sorprende que hayas disfrutado ser violado por tu alfa".

"Cállate A-Cheng, es en serio, regrésalos..." Pidió Wei Ying, intentando apelar al lado bueno
de su hermano.

"No los tome Wei Wuxian ¿Por qué tomaría algo como eso?"

"Deja de jugar" Volvió a reclamar Wei Ying de forma acusadora: "El lugar donde los
escondía esta vacío, solo quedaron mis botellas de licor. Tu no bebes licor y eres el único que
sabía que yo tenía los libros, así que es obvio que tú los tomaste ¡Regrésalos!"

"Deja de ser tan infantil, no tome tus dichosos libros porno, no tengo por qué hacerlo, lárgate
me das dolor de cabeza".

Sintiéndose muy enojado, Wei Ying regreso a la cama de Jiang Cheng, parándose frente a él
de forma amenazante: "Regrésalos Wanyin, te golpeare si no me los devuelves".

Completamente seguro de que su hermano los había tomado, Wei Wuxian estaba dispuesto a
obligarlo a admitirlo para exigir su regreso. Sin embargo Jiang Cheng, sin estar dispuesto a
dejarse intimidar, dejo el libro de Lan Huan de lado y se puso de pie frente a su hermano,
mirándolo a los ojos.

"Inténtalo" Lo reto Jiang Cheng con seriedad.

"Regresa lo que no es tuyo, Jiang Wanyin" Dijo Wei Ying furioso.

Presionando sus manos en puños, realmente dispuesto a golpear a su hermano, Wei Ying fue
interrumpido por Jiang Fengmian, el cual había estado en la puerta de la habitación desde
hace un par de minutos observando todo en silencio, bastante curioso por la situación después
de haber sido alertado por los gritos de Wei Ying que se habían escuchado en todo aquel
lugar.

"A-Xian" Dijo Jiang Fengmian interviniendo de inmediato, intentando evitar la pelea: "¿No
tienes que ayudar a entrenar a unos jóvenes cultivadores?"

Sorprendiéndose con la intromisión de su tío, Wei Ying relajo su semblante y rápidamente se


giró a verlo, forzando una sonrisa: "Iré de inmediato tío, solo tengo que arreglar un asunto
con Jiang Cheng".

"¿Qué asunto?" Cuestionó Jiang Fengmian.

Mordiéndose los labios para no responder, Wei Ying guardo silencio, mientras que Jiang
Cheng no pudo evitar sonreír con satisfacción, observando el rostro muy molesto de su
hermano. Según la tradición los omegas no tenían permitido darse satisfacción a sí mismos
durante sus celos, eso era trabajo de los alfas; así que nadie más que ellos mismos sabían que
tenían los libros pornográficos de Nie Huaisang, los cuales estaban únicamente dirigidos a
otros alfas, pero que aun así había logrado causar satisfacción y curiosidad en los jóvenes
omegas. Sabiendo que no podía decir la verdad porque sería castigado por su perversión, Wei
Ying miro de reojo a su hermano con real molestia, dándose cuenta de que aquella
interrupción tan oportuna había impedido que pudiera reclamar lo que era suyo; mientras que
Jiang Wanyin, divertido por la situación, tampoco dijo nada, únicamente observando todo con
satisfacción.

"Si no es nada tan importante, entonces dirígete al lugar de entrenamiento de inmediato A-


Xian, ya deben de estarte esperando" Pidió Jiang Fengmian con calma: "Vamos juntos, yo te
llevare".
Sin saber cómo negarse, mirando aquella sonrisa satisfecha en el rostro de Jiang Cheng con
odio, Wei Ying solo pudo suspirar con resignación, decidiendo seguir a su tío: "Esta bien tío,
vamos juntos".

Observando a Wei Ying irse con la cabeza baja, luciendo realmente desanimado, Jiang
Wanyin se burló diciendo: "Nos vemos después Wuxian".

Saliendo de la habitación, Wei Ying se giró de reojo para ver a su hermano realmente
enfadado, mordiéndose la lengua para no decir algo indebido, apresurándose a caminar lejos
de ese lugar sin poder aguantar más al "ladrón y mentiroso" de Jiang Cheng. Bastante
confuso observando aquella pelea, asumiendo que sería una tontería entre ambos jóvenes,
Jiang Fengmian observo también a su hijo, el cual sonriendo se sentó nuevamente en la cama
para seguir leyendo su libro.

"A-Cheng, la belleza de una persona consiste en no hacer sentir mal aquellos quienes te
aman. No debiste burlarte de A-Xian" Reprendió Jiang Fengmian con seriedad.

"Padre, Wei Ying es un inconsciente, el comenzó, se lo merecía".

Mirando al menor con severidad, enfadado por ver su proceder, Jiang Fengmian respondió:
"Un buen hermano hubiera ayudado a su ser querido con sus problemas, no se hubiera
burlado".

Sintiéndose regañado y molesto por que su padre se parcializara en favor de Wei Ying como
siempre, Jiang Cheng no respondió a sus palabras luciendo realmente molesto, prefiriendo
callarse para no discutir con el mayor. Mientras que Jiang Fengmian, sumamente
decepcionado de su hijo, salió de la habitación para comenzar a cerrar la puerta.

"Hoy vi tu entrenamiento con el resto de cultivadores, aún falta mucha destreza con tu espada
y con tu arco, debes entrenar más" Dijo Jiang Fengmian con severidad, cerrando la puerta y
dejando a su hijo finalmente solo.

Sintiéndose deprimido, Jiang Cheng tomo el libro de Lan Huan nuevamente entre sus dedos.
Tocando suavemente la portada de cuero, esa que su hermoso novio había hecho con sus
propias manos, Jiang Cheng se lamentó en silencio, dándose cuenta de que no era suficiente
para su padre ni su secta.

"A-Cheng es sumamente fuerte, muy fuerte, me siento tan orgulloso de su progreso..."

Esas fueron las palabras con las que Lan Xichen había descrito a Jiang Wanyin con su tío Lan
Qiren durante una visita del joven Jiang a Gusu. Mientras Jiang Wanyin observaba el dojo de
los Lan con otros omegas, pudo escuchar esas halagadoras palabras que fueron dichas con
suavidad a lo lejos.

Aquella fue la primera vez que alguien alagaba sus dotes como cultivador sin poner a Wei
Ying delante de él, ya que en todas las competencias o reuniones de cultivadores siempre
hablaban bien de las dotes y habilidades de los famosos omegas Jiang, pero nunca solo del
hijo del líder.
"¿Observaste la destreza de esos omegas? Son de la secta Jiang, Wei Wuxian es
impresionante, un excelente cultivador".

"¡Qué gran talento! Ese omega Wei Wuxian sabe muy bien el arte del cultivo ¡Tal y como se
espera de un miembro de la secta Jiang!"

"¿Viste a ese joven Jiang? Ambos hermanos son excelentes, pero ese de cabellos negros y un
rostro hermoso es mejor ¿Cómo se llama? ¿Wei Wuxian? Es muy virtuoso..."

Resignado a recibir los mismos comentarios agrios toda su vida, Jiang Cheng se sonrojo
mucho cuando su prometido alago su cultivo por primera vez. Él no era un prodigio como
Wei Wuxian, no había nacido siendo hijo de un cultivador ancestral, no era un cultivador que
aun pasando las tardes vagueando y cazando faisanes era sumamente poderoso. Todo lo que
Jiang Cheng era se debía a su esfuerzo, horas entrenado con alfas y omegas de su secta,
intentando poner en alto el nombre de los omegas Jiang y de sus padres donde fuera que
vaya. Y una broma cruel del destino fue darle a Wei Ying como hermano, un joven omega el
cual sin siquiera ser un hijo biológico de los Jiang, era un genio en el arte del cultivo y
representaba a su secta, nunca fue el heredero quien se llevó los halagos por la fuerza de los
omegas Jiang, siempre fue Wei Wuxian, aun con todo sus errores, todos siempre se fijaban en
Wei Wuxian.

Así que cuando tuvo a Lan Huan, ese alfa tan amable que lo desesperaba a veces, Jiang
Wanyin fue feliz. Por primera vez en toda su vida tuvo a una persona que creía en él, que
tenía su vista únicamente para él, y que lo llamaba de cientos de halagos y felicitaciones por
todos sus logros. Lan Xichen fue la primera persona que felicito a Jiang Wanyin por ser quien
era, que lo ayudo a mejorar y que presumía la habilidad de su prometido con todos. Después
de conocer a Lan Huan la confianza de Jiang Cheng aumento hasta los cielos, disfrutando de
entrenar con miembros de la secta Lan que era su nueva familia y disfrutando de las
atenciones de su alfa.

Así que olvidando el dolor y sonriendo con cierta felicidad al recordar a Lan Huan, Jiang
Cheng beso delicadamente la portada de aquel libro entre sus dedos, añorando a su dulce alfa
quien solo tenía ojos para él y lo llenaba de atenciones. Abriendo nuevamente el libro en
aquella partitura que había estado leyendo, Jiang Wanyin tomo aquella flor blanca con
pétalos delicados y un delicioso aroma, una flor que Lan Xichen había traído para él como un
regalo junto al libro, una flor que a Jiang Wanyin le había gustado tanto que guardo como
algo preciado, aplanándola con sus hojas y dejándola como un marcador en su presente.

Añorando ver nuevamente a su alfa, y pensando únicamente en una nueva forma de


sorprenderlo para que no dejara de mirarlo solo a él, Jiang Cheng sostuvo aquella flor con
suma delicadeza entre sus dedos, pensando también que cuando Wei Ying regresara lo
ayudaría a buscar los dichosos libros por toda la secta, intentando hacer el bien así como su
alfa le había pedido. Besando suavemente las flores aplanadas de aquella peonia blanca, Jiang
Cheng recordó claramente en su cabeza las palabras que Lan Huan le había dicho cuando le
entrego aquella flor.

"Mi dulce Yin Yin, toma esta flor, es una peonia blanca. Al verla solo pude pensar en tu
belleza... Te quiero mucho mi dulce Yin Yin, te amo".
Sonrojándose al besar nuevamente esa flor, Jiang Cheng se perdió en los dulces recuerdos al
lado de quien amaba.

Sin saber que aquella flor en realidad había sido un regalo de Meng Yao para Lan Xichen, un
regalo que Lan Huan no quiso y entrego a alguien más.
Capítulo 42.

5 SEMANAS DESPUÉS.

Jadeando algo cansado, Wei Ying suspiró, subiendo lentamente aquellas escaleras de piedra
que supuestamente lo conducían a Gusu, o eso creía.

Había sido un viaje realmente largo desde Yunmeng a ese sitio, sin embargo valdría la pena,
pues pasaría 4 semanas en Gusu con su prometido, acompañado por una pequeña comitiva de
otros omegas de su secta que lo escoltarían, pero que al final de cuentas seguía siendo una
visita por la temporada de cortejo, lo que le aseguraba mucho tiempo a solas con su Lan
Zhan.

Lo primero que vio al terminar de subir esos escalones lo dejo helado. Casi al lado de la
puerta de entrada a la residencia de los Lan, donde los esperaba una comitiva de personas
para recibir al prometido, se encontraba una gran piedra tallada que explicaba los preceptos y
las reglas de la secta Gusu Lan.

"¡3000 reglas! ¿Estas bromeando?" Se preguntó Wei Ying en un susurro: "¿Qué pueden
prohibirte en 3000 reglas? ¿Hasta respirar?"

Volviendo en sí mismo cuando los omegas de Yunmeng le dieron algunas palmaditas en la


espalda para que siguiera avanzando, Wei Ying siguió su camino hasta la entrada, viendo a
todas las hermosas personas que habían ido a recibirlo, gente mucho más sobria que aquella
de Lotus Pier que fueron a recibir a Lan Zhan la primera vez, lo cual Wei Ying agradeció en
secreto pues su presentación ante la secta sería más fácil.

Avanzando él solo hasta la entrada de Gusu, dejando a los discípulos de la secta Jiang atrás,
lo primero que hizo Wei Ying al entrar fue acercarse al líder suplente de la secta para
presentarse: "Wei Wuxian, de la seta Yunmeng Jiang, presentándose ante usted como
prometido oficial. Maestro Lan Qiren, es un gusto para mi conocerlo"

Terminando la reverencia, Wei Ying observo como aquel hombre alto y serio, con el cabello
negro y largo, el cual tenía en su frente una cinta de manera tan orgullosa como Lan Zhan, y
vestido con los típicos atuendos Lan; correspondió su reverencia con un elegante movimiento
de cabeza, antes de hablarle al joven omega que tenía en frente: "Joven maestro Wei, sea
bienvenido a Gusu"

Aunque a Wei Ying no le gustara admitirlo, creyó que las palabras del tío de Lan Zhan habían
resultado algo frías y distantes, hasta enfadadas ¿Lo odiaba por algo? Wei Ying no tenía idea.
Intentando apartar esos extraños pensamientos de su mente, Wei Wuxian sonrió sincero,
volviendo a hacer una reverencia muy rápida como agradecimiento.

"Muchas gracias maestro" Dijo Wei Ying sin dejar de sonreír, y tras ser finalmente aceptado,
Wei Wuxian se giró para observar al joven jade con un rostro algo triste que se paraba al lado
del líder suplente de la secta Lan: "Zewu-Jun, es un gusto verte de nuevo".
Correspondiendo el saludo con una sonrisa, Lan Xichen miró a Wei Ying con alegría,
intentando ocultar así su dolor por no tener a Jiang Cheng acompañando a su hermano a esa
visita a Gusu: "El gusto es mío, Wei Wuxian. Por favor disfruta tu estancia en Gusu".

Y es que aunque Jiang Wanyin realmente había querido ir a acompañar a Wei Ying a la visita
a Gusu, no pudo hacerlo debido a la propia agenda de Lan Xichen y Jiang Cheng. Debido que
aunque a la llegada de Wei Wuxian, Lan Xichen se encontraba en la secta Lan, en menos de
una semana debía partir a Laling Jin junto a otros jóvenes próximos líderes de las sectas. Ya
que organizado por el propio Jin Guangshan, se estaba realizando una conferencia para
jóvenes líderes, la cual duraría unos días. Y debido a que Jiang Cheng y Lan Xichen se
encontraban invitados, decidieron encontrarse ahí, para luego ir a Yunmeng y pasar un mes
entero juntos.

Y aunque la promesa de estar junto a su prometido por un mes entero logro tranquilizar
ligeramente a Jiang Cheng, este aun así se había puesto muy triste por no poder acompañar a
Wei Wuxian, y había terminado insistiendo en darle una carta para su Zewu-Jun, la cual Wei
Ying le entregaría en un día o dos cuando estuvieran un poco más a solas. Sabía que las
cartas de los enamorados debían ser entregadas con cuidado, ya que si alguien robaba la carta
o intentaba averiguar su contenido podría ser un grave problema, por lo que Wei Ying debía
ser discreto.

Haciendo una última reverencia agradecido para Zewu-Jun, Wei Ying se giró alegremente en
dirección a la persona más importante para él en todo ese sitio.

Usando unas hermosas túnicas de gala color marfil con adornos plateados, con su usual cinta
blanca en la frente, Lan Zhan esperaba a Wei Ying de manera ansiosa al otro lado de su tío.
Sin importarle si rompía el compromiso o no, Wei Wuxian corrió a los brazos de su alfa y lo
abrazo de golpe, siendo correspondido por un avergonzado Lan Wangji.

"¡Lan Zhan!" Dijo Wei Ying muy contento: "Te extrañe Hanguang-Jun, te extrañe..."

Mirando aquel espectáculo con ojos críticos, Lan Qiren solo pudo negar suavemente con la
cabeza, sintiéndose muy avergonzado por ver a ambos jóvenes haciendo eso frente a todo el
consejo de Gusu que estaba presente mirando desde atrás. Mientras que Lan Huan, sonriendo
al ver esa dulzura entre ambos destinados, únicamente pudo pensar en Jiang Wanyin,
añorando tristemente a su omega.

"Vi muchas cosas en el camino Hanguang-Jun, debo contarte todo".

Asintiendo a sus palabras, acariciando una de las mejillas de su omega con cariño, Lan Zhan
respondió: "Mmm".

"Muchas, muchas cosas..." Siguió diciendo Wei Ying emocionado, sin dejar de abrazar al
menor: "Pero ahora estoy cansado... Vamos a jugar Hanguang-Jun".

"Mnn" Accedió Lan Zhan con una suave sonrisa, disfrutando del fuerte abrazo que le daba
Wei Ying.
Tomando al mayor en sus brazos haciéndolo reír, Lan Wangji se dispuso a entrar en la
residencia de los Lan para llevar al omega a un lugar donde jugar. Sin embargo subiendo los
últimos escalones que los llevarían dentro del Receso Entre Las Nubes, ambos fueron
detenidos por la sobria y fría voz de Lan Qiren.

"Wangji" Dijo el omega líder mirándolos a ambos: "No olvides que ambos tienen una cita
ahora".

Recordando la petición que le habían hecho antes de la llegada de su prometido, Lan Wangji
solo pudo suspirar antes de responder: "Si Shifu".

Dejando de reír para mirar todo curioso, Wei Ying se animó a preguntar: "¿Cita?"

"No lleguen tarde" Fue lo único que dijo Lan Qiren, mientras recibía al resto de la comitiva
de los Jiang y comenzaba a hablar con ellos.

Girándose para ver a su alfa, Wei Ying volvió a preguntar: "¿Cita? ¿Cuál cita?"

***

Con una gran sonrisa, Wei Ying removió el agua de ese tranquilo y frio lago con una rama
seca de un sauce cercano, observando como los pequeños peces de colores que habitaban en
esas frías aguas nadaban lejos espantados, huyendo de su tacto.

Era otoño en Gusu, así que sin nieve aun, todos los hermosos arboles de la sobria naturaleza
de aquellas montañas comenzaban a dejar caer sus hojas marchitas por toda la blanca y pura
arena, dejando un espectáculo maravilloso. Había pasado casi una hora desde la llegada de la
comitiva de la secta Yunmeng Jiang a Gusu, y aunque a un inicio la idea había sido jugar y
permitir que los jóvenes prometidos pasaran su tiempo como quisieran, ambos finalmente
tuvieron que desistir y aplazar sus planes para después, debido a esa "cita" que nadie se había
tomado la decencia de explicar a Wei Wuxian.

Siendo ayudados por los sirvientes de la secta Jiang, el equipaje de Wei Ying fue llevado al
pabellón privado de Lan Wangji. Al principio el joven omega pensó que tendría su propia
habitación en el Receso De Las Nubes, aunque la idea no le hacía mucha gracia. Sin embargo
después se enteró de que ambos prometidos tenían el permiso de dormir juntos, así que todo
el equipaje del mayor termino en la habitación de Lan Zhan.

"Jingshi..." Susurro Wei Ying mirando de reojo: "¿La habitación silenciosa?"

Quedándose sumamente maravillado y prendado de la belleza del paisaje de Gusu, con esas
grandes montañas silenciosas y con un viento afable, lleno de pequeños pabellones con
arquitectura tradicional separados los unos de los otros por hermosas plantas y pequeños
parques con fuentes naturales, que contenían varios pequeños peces en su interior; Wei Ying
se sorprendió con el regreso de Lan Zhan, el cual camino a su lado con pasmosa tranquilidad.

"¿Terminaste de ordenar mi equipaje Hanguang-Jun?" Preguntó Wei Ying con una sonrisa.

Asintiendo a su pregunta, Lan Zhan respondió: "Mmm".


Sonriendo contento, Wei Ying agradeció: "Muchas gracias Lan Zhan, fue un viaje muy largo
y solo quería relajarme, gracias por ayudarme con ello".

"No es problema".

Ayudando a su omega a ponerse de pie sosteniéndolo de un brazo, Lan Wangji ofreció una
capa de gruesa tela blanca con símbolos de los Lan a Wei Ying.

"¿Qué es esto?" Preguntó Wei Ying recibiendo la capa con curiosidad.

"Es mío" Respondió Lan Zhan sincero: "El clima en Gusu es muy frio ahora, no quiero que
Wei Ying se enferme".

Riendo con alegría ante las hermosas palabras de su alfa, Wei Ying no dudo en besar una de
sus mejillas con cariño, antes de separarse de este para ponerse aquella gruesa capa blanca
para el frio, respondiendo: "Muchas gracias Lan Zhan, eres muy dulce".

"Mmm" Respondió Lan Wangji, mirando fijamente al mayor poniéndose aquella capa que era
suya.

Esperando a que su omega estuviera listo, Lan Wangji lo tomo de la mano y comenzó a
guiarlo por los pabellones de El Receso Entre Las Nubes, teniendo una caminata lenta y
relajada en dirección a su destino.

Mirando todo tan maravillado como siempre, caminando al lado de su alfa, Wei Ying se
admiró de la belleza de aquel que era el hogar de su prometido, tan blanco y puro como este.

"Hanguang-Jun, Hanguang-Jun" Dijo Wei Ying poco tiempo después de comenzar su


caminata: "¿A dónde vamos? ¿Hay algo importante que tenemos que hacer?"

"Lo hay" Respondió Lan Wangji: "Estamos yendo a visitar a una persona importante en mi
secta".

Sonriendo y tomándose del brazo de Lan Wangji, Wei Wuxian respondió contento: "Ya veo,
ya veo..."

Riendo y hablando de tonterías con su alfa, el cual dulcemente correspondía todos sus
desvaríos y sonreía ligeramente ante todas sus formas, Wei Wuxian permitió que lo
condujeran por aquel gran sitio hasta un pabellón privado un poco alejado del resto. Algo que
a Wei Ying le parecía curioso de aquel sitio era la privacidad que cada uno de sus miembros
poseía, pues a diferencia de Lotus Pier donde las habitaciones privadas de todos los
miembros estaban una al lado de la otra, casi sin mucha privacidad; las habitaciones y
pabellones privados en Gusu tenían mucha privacidad, estando bastantes separadas las dunas
de las otras, con hermosos espectáculos de naturaleza como árboles y esos lindos lagos
artificiales entre ellos.

Así que sin dejar de maravillarse por el hermoso paisaje ante sus ojos, pensando que ese tal
vez podría llegar a ser el paraíso, Wei Wuxian se dejó llevar a ese pabellón tan alejado.
Cuando finalmente volvió a concentrarse y se dio cuenta donde estaban, Wei Ying miro
confuso a su Lan Zhan, mientras avanzaban por ese camino de piedra simple y hermoso, casi
hasta las puertas de aquel pabellón privado.

"¿Qué estamos haciendo aquí Lan Zhan?" Preguntó Wei Ying curioso.

Sin embargo su joven jade no le respondió, aun cuando había escuchado bien aquella
pregunta, pues sabía que sería irrespetuoso. Parándose a los pies del pabellón junto a Lan
Zhan, grade fue la sorpresa en Wei Ying cuando se dió cuenta de que alguien había abierto
las puertas corredizas de aquella habitación para recibirlos. Sin poder apartar la mirada de
aquella puerta abierta que dejaba ver el obscuro interior que reinaba dentro de esa habitación,
Wei Ying pronto pudo distinguir una figura que se acercaba a ellos en medio de la
obscuridad.

De esa obscuridad pronto salió un hombre, el cual vestido de blanco con las usuales túnicas
de la secta Gusu Lan, no usaba su cinta de frente aun cuando parecía ser de la secta de Lan
Zhan. Al verlo frente a ambos, Wei Ying no pudo evitar asociar su parecido con Lan Xichen,
recordándole mucho al hermano mayor de Lan Zhan por su amable sonrisa y esos hermosos
ojos azules, con un rostro bien parecido y una presencia algo fuerte usual en un alfa.

Viendo a la persona frente a ellos, Lan Wangji hizo una reverencia elegante, para luego decir:
"Padre".

Girándose en dirección a su prometido incrédulo, Wei Ying se sintió enfadado ¿Aquel era el
padre de su alfa? ¿Por qué Lan Zhan no se lo había dicho cuando era algo tan importante?
Sintiéndose avergonzado por su falta de educación ante su suegro, él rápidamente hizo
también una reverencia también, esperando no haber ofendido a ese alfa frente a sí mismo.

Sonriendo de forma amable, mirando a su hijo y a su prometió, Qing Heng-Jun dijo


amablemente: "A-Zhan, bienvenido. Wei Wuxian, es un gusto conocerte".

Volviendo a pararse erguido junto al menor, Wei Ying miro con cierto temor al líder de la
secta Lan, el cual haciéndose a un lado en la puerta, elegantemente los invito a entrar en sus
habitaciones privadas.

"¿Por qué quiere hablar conmigo?" Se preguntó Wei Ying en un susurro inaudible, muy
asustado por lo que pasaría a continuación.
Capítulo 43.

"Wuxian, espero que te guste él té de menta".

Sonriendo con dulzura, Wei Ying asintió con la cabeza, mirando a su suegro frente a él en esa
mesa baja: "Esta bien por mí, líder de la secta Lan".

Wei Wuxian nunca se había caracterizado por su elegancia frente a personas importantes o en
acontecimientos importantes, la mayor parte del tiempo, él evitaba las clases de etiqueta en
Yunmeng para ir a jugar al lago, y solía comportarse como un "salvaje" en reuniones
importantes incluso en su propia secta. Sin embargo aquello era una situación diferente, pues
aunque no era un evento importante en sí, Wei Ying quería comportarse con elegancia frente
al padre de su alfa, se estaba esforzando por ser bien visto ante sus ojos; aunque no estaba
muy seguro de poder lograr algo semejante.

La habitación privada de Qing Heng-Jun era muy obscura, con gruesas persianas que cubrían
todas las ventas de la habitación e impedían el paso de la luz del exterior en el interior del
pabellón, siendo únicamente alumbrado por velas, que aunque daban cierta luz no podían
competir contra aquella penumbra. La habitación privada de Qing Heng-Jun era bastante
tradicional, sin muchas cosas o lujos, no parecía la habitación de un líder, parecía la
habitación de un miembro normal de la secta. Únicamente con una cama, un par de mesas
bajas, un lugar específico para cocinar algunos alimentos con una pequeña estufa, y los
libreros que tenían todas las habitaciones de Gusu; a Wei Ying ese sitio en realidad le pareció
bastante modesto.

Después de entrar en los aposentos privados del líder, Wei Ying fue invitado por este mismo a
sentarse en una de las mesas bajas de la habitación, donde había una flauta en una de las
esquinas y un par de pergaminos apoyados en el suelo. Aparentemente el líder de la secta no
estaba interesado en ayudar con el trabajo de su propia secta, dejando de lado todos aquellos
pergaminos y asuntos importantes que debería revisar. Por su parte Lan Zhan, de una forma
muy diligente, había entrado en aquella habitación dirigiéndose rápidamente a la cocina de
esta, donde rápidamente se puso a hacer té para aquella visita.

Sonriendo de una manera amable, el líder respondió: "Eres amable y educado, es bueno
saberlo".

Haciendo una reverencia algo nerviosa, Wei Wuxian no pudo evitar pensar que estaba siendo
evaluado de alguna forma por su suegro, algo que lo ponía extremadamente nervioso hasta el
punto que podía comenzar a sudar.

Wei Ying no se sentía preparado para aquello en lo absoluto.

Apresurándose para no dejar solo a su omega, Lan Wangji rápidamente llevo la tetera caliente
con aquel té de menta a la mesa, junto a un par de pastas y dulces que habían llevado los
sirvientes previamente, sirviendo estos en hermosos recipientes de arcilla blanca en una
bandeja de plata. Sin embargo al llegar a la mesa donde su omega y su padre se sentaban, Lan
Wangji no pudo evitar soltar un suave jadeo de dolor cuando agacho la espalda y puso la
bandeja sobre la mesa, llamando la atención de Wei Ying.

"¿Lan Zhan?" Pregunto el joven Wei preocupado, observando a su alfa.

Sin embargo Lan Wangji, controlando su expresión rápidamente, lucio nuevamente serio y
tranquilo para ambos mayores, sentándose al lado de Wei Ying con mucha calma y elegancia,
y disponiéndose a servir el té Lan Zhan susurró: "¿Mmm?"

Sabiendo que no podía insistir por el momento para pedir una explicación, Wei Ying solo
pudo mantenerse en silencio, mirando a su alfa de reojo. Mientras que el líder de la secta Lan,
sin abandonar su carácter tranquilo, comentó: "Espero que tu viaje a Gusu haya sido
placentero. Yunmeng está a una distancia considerable, y el viaje a veces no suele ser muy
cómodo".

Recordando los días cansados en un barco y luego su caminata en las montañas, Wei Ying
solamente pudo sonreír con cierta resignación, respondiendo: "Fue un viaje interesante líder
de la secta, vi muchas cosas nuevas, y también pude comprar algunos obsequios para mis
hermanos de camino".

"A-Zhan me comento que tu hermana contrajo nupcias recientemente con el próximo líder de
la secta Lanling Jin, es una mujer afortunada" Comentó Qing Heng-Jun con alegría: "En hora
buena, que tengan muchos hijos y que su matrimonio sea prospero".

Sonriendo con mucha resignación, Wei Wuxian no pudo evitar pensar en Jin Zixuan con
cierto enfado, pero sin querer demostrarlo, también dijo: "En hora buena..."

Terminando de servir el té, Lan Wangji entregó los recipientes a sus dos acompañantes,
tomando un sorbo corto de aquel té bastante refrescante. Sin saber que más decir, sin poder
evitar sentirse incomodo, Wei Ying bebió un sorbo de ese té también, bajando la mirada e
intentando suplicar que aquella incómoda situación terminara pronto.

"A-Zhan me comento que tú has estado interesado en el cultivo, a pesar de ser omega".

"Lo estoy" Respondió Wei Ying con sinceridad: "Quiero ser un gran cultivador y un gran
héroe, por eso me esfuerzo mucho en mi cultivo".

"¿Y tus hijos?" Preguntó el líder con cierta calma, intentando no molestar mucho a Wei Ying:
"¿Qué sucederá cuando tengas hijos?"

Esperando un poco antes de responder, pensando bien en su respuesta, Wei Ying finalmente
dijo: "Mi secta es de omegas, mi tío que es líder y padre es omega; yo nunca vi limitaciones
en mi género y en mi capacidad para ser madre con ser un cultivador, puedo ser ambas cosas
a la perfección, yo tengo muchas convicciones líder de la secta, no quiero dejar nada de lado
y tener una vida plena".

"Yo lo ayudare" Respondió Lan Zhan rápidamente: "Haré que Wei Ying cumpla todos sus
sueños y deseos".
Sonriendo con la dulzura de las palabras de su propio hijo, Qing Heng-Jun bebió un poco
más de su té, tomando una pequeña pasta para comerla mientras todos guardaban silencio.
Debajo de la mesa, con sus manos apoyadas en su regazo, Wei Ying no podía evitar mover
sus dedos de forma nerviosa sobre la tela de su túnica, únicamente esperando ser "aprobado"
en aquella reunión.

"Es lo que esperaba de un omega de Yunmeng" Respondió el líder tras un rato: "Tu secta
siempre ha sido muy fuerte e independiente, a pesar de ser casi completamente de omegas,
toda tu familia siempre se ha caracterizado por su determinación. Espero que tú y tu hermano
tengan las mismas convicciones, y apoyen a sus alfas más allá de solo tener un hogar, ser un
líder omega al lado de su alfa es lo mejor para una secta".

Asintiendo ante palabras tan sabias, Wei Ying se atrevió a preguntar: "¿Usted ya conoció a mi
hermano líder de la secta?"

"He escuchado cosas maravillosas de Wanyin, pero lamentablemente aún no he tenido el


placer de hablar con él" Respondió Qing Heng-Jun con sinceridad: "Parece ser un joven
excelente, es bueno saber que es parte de mi secta ahora".

Al escuchar esas palabras Wei Ying no pudo evitar sentir que su rostro palidecía. Jiang Cheng
había estado visitando Gusu de forma constante desde que su tiempo de cortejo con Lan
Huan comenzó, hace ya casi 5 años. Sin embargo en todo ese tiempo el líder nunca lo había
llamado para conocerlo como a él, que lo había invitado el primer día de su llegada. Aquello
era demasiada presión para el joven omega.

Notando el nuevo nerviosismo por parte de Wei Ying, el líder de la secta Gusu Lan intentó
tranquilizarlo diciéndole: "No te pongas tan nervioso Wuxian, te llamé a ti primero porque las
condiciones del compromiso tuyo con A-Zhan es diferente al compromiso de Xichen. Yo aún
me opongo a que la boda de tu hermano y mi hijo sea tan pronto, su tiempo de cortejo debería
ser mucho más largo, pero por las tradiciones retrogradas de las sectas ambos deberán casarse
pronto".

"¿Se opone?" Preguntó Wei Ying confuso.

Sonriendo amablemente de nuevo, el líder de la secta quiso evadir la pregunta únicamente


respondiendo: "Yo conozco bien a mi hijo, y entiendo que hay cosas que un alfa está
preparado para hacer y cosas que no. Xichen aún no está preparado para hacer ciertas cosas
como alfa, aun cuando el mismo cree que esta listo. No me opongo por tu hermano, es un
partido excelente, cualquier alfa estaría feliz de tenerlo como su pareja; pero no estoy
convencido de que Xichen esté a la altura de lo que tu hermano necesita o está dispuesto a
entregar. Su matrimonio será un fracaso si la entrega de uno es mayor que la del otro".

Entendiendo a medias las palabras del líder, Wei Ying preguntó: "¿Y por qué mi compromiso
es diferente al de mi hermano? Si se preocupa por la relaciones sexuales entre Lan Zhan y yo,
de verdad le prometo que no volveremos a hacerlo hasta nuestro compromiso si así lo
desea..."

Escuchando aquellas palabras, el rostro de Lan Wangji se ensombreció, y volviendo a tomar


su taza de té, bebió todo el contenido de golpe, haciendo reír discretamente a su padre el cual
se había dado cuenta de la molestia de su hijo.

Sin darse cuenta para nada, Wei Ying continuo hablando: "... No planeo ofender a su secta o
pasar por un omega descarado, yo amo a su hijo y estoy feliz de casarme de nuevo con él. Así
que respetare la tradición para poder quedarme a su lado".

"No lo decía por sus relaciones como alfa y omega, algo que aunque es sumamente
importante entre ambos, es algo que ustedes deberán resolver a solas; hablando mediante
cartas con el alfa Yu Ziyuan, ambos acordamos que ninguna de nuestras sectas planea
entrometerse en sus relaciones privadas, si ambos quieren tener una vida sexual activa y
dormir juntos en todas sus visitas nosotros lo permitiremos, pidiendo prudencia por los
embarazos y el vínculo que no puede ser establecido antes del matrimonio, pero al final de
cuentas es algo muy suyo y no nos compete ni a la tradición. Yo hablo de que ambos son
destinados, eso es lo que diferencia su compromiso del resto".

Entendiendo mejor aquellas palabras, Wei Ying se mantuvo en silencio, pues no sabía mucho
del tema de los destinados, pero por la seriedad que mostraba el mayor, creía que era algo
sumamente importante, por lo que decidió prestar atención muy concentrado.

"Tener una pareja destinada conlleva un compromiso más allá de un matrimonio. Su alfa y su
omega no podrán vivir separados, podrían morir si lo intentan" Explicó el mayor con mucha
sabiduría, la sabiduría de una persona que ya había pasado por algo similar: "Lo que más me
preocupa de ustedes es saber el compromiso que tienen el uno con el otro. Yo ya se lo mucho
que A-Zhan te ama, pero es normal para mi preocuparme del bienestar de mi hijo y de su
futuro".

"Líder de la secta Lan, si lo que a usted le preocupa es cuanto amo a Lan Zhan... Yo... Yo de
verdad amo mucho a su hijo" Confesó Wei Ying avergonzado.

"A veces el amor no es suficiente" Dijo Qing Heng-Jun: "¿Qué está dispuesto a hacer tu
omega por mi hijo?"

Perdiéndose por un segundo en esa pregunta, Wei Ying sintió como Lan Zhan tomaba su
mano debajo de la mesa, sosteniéndolo con delicadeza. Mirando a su alfa de reojo,
sintiéndose avergonzado por un segundo, perdiéndose en esos ojos dorados preocupados que
este tenía, Wei Ying supo que debía esforzarse por hacer las cosas bien con Qing Heng-Jun;
no por sí mismo, si no por Lan Wangji.

"Hubo un tiempo en el que yo me forcé a perderlo" Dijo Wei Ying con sinceridad: "Yo no
podría morir por su hijo, porque aunque estaría dispuesto, yo sé que si muero Lan Zhan no se
lo perdonaría. Pero si estoy dispuesto a vivir por él, y... De dejarlo si eso es lo que él me pide.
Yo estoy a los pies de Lan Zhan y toda la secta Lan, solo por Lan Wangji, estoy dispuesto a
dejar que mi espíritu sea roto y fragmentado. Yo estoy dispuesto a romper todos mis huesos
por su felicidad, y a perder hasta mi núcleo dorado por verlo sonreír. Tal vez no es suficiente,
pero si tengo que inventar un nuevo mundo o un nuevo Gusu para hacerlo feliz, yo construiré
una montaña para su hijo líder de la secta Lan".

Sintiéndose avergonzado por decir algo como eso, que solo había pensado pero que jamás
creyó tener que decir en voz alta, Wei Ying bajó la mirada avergonzado, sintiendo su rostro
arder por la vergüenza que sentía muy rara vez. Mientras que Qing Heng-Jun solo pudo
sonreír, mirando a ese joven omega al otro lado de la mesa, recordando por un segundo a esa
mujer que tanto amo en el pasado.

Una joven omega la cual sabiendo que era su destinada, una vez se tiro a sus pies y le ofreció
únicamente su vida a cambio de su amor. Una propuesta que Qing Heng-Jun acepto
rompiendo el corazón de una princesa, ocasionando una guerra que termino separándolo por
siempre de aquella persona a la cual amaría por toda su vida, y arruino la vida de su hermano
menor por ello.

Y aunque las personalidades de Wei Wuxian y su esposa muerta no se parecían para nada, por
un segundo viendo aquel rostro avergonzado y a su hijo tan preocupado a su lado, se recordó
a si mismo hace ya casi 20 años, frente a su propio padre suplicando por poder casarse con su
destinada.

"Es más que suficiente" Dijo Qing Heng-Jun con una sonrisa.

Levantando la mirada sorprendido para observar al mayor, Wei Ying solo pudo sonreír
sintiéndose contento, dándose cuenta de que tal vez había pasado aquella prueba que el líder
de la secta Lan puso sobre sus hombros.

"Estoy más que contento de poder llamarte hijo, Wuxian" Dijo el mayor con una sonrisa
tranquila.

Riendo alegremente, mirando a Lan Zhan animado, Wei Ying se sintió sumamente feliz.

***

"Que malo Hanguang-Jun" Se quejó Wei Ying, saltando por las piedras del camino: "Debiste
decirme a dónde íbamos".

Después de pasar un par de horas en las habitaciones de Qing Heng-Jun, hablando e incluso
llegando a jugar, Lan Wangji y Wei Wuxian finalmente salieron nuevamente al exterior,
donde ya en la semi obscuridad de la noche, regresaban al pabellón privado de Lan Wangji.

Caminando al lado de su animado omega, Lan Zhan respondió: "Si te lo hubiera dicho, te
hubieras negado a ir".

Haciendo un puchero, para luego ponerse a reír, Wei Ying pronto dijo: "Me conoces bien Lan
Zhan, te hubiera persuadido para no ir. Que miedo, es realmente aterrador conocer a tus
suegros".

Asintiendo con la cabeza de forma comprensiva, pues Lan Zhan también estuvo asustado al
conocer a la familia de Wei Ying, respondió: "Mmm".

Volviendo a su habitación ya de noche, nuevamente en medio de conversaciones banales y


algunos desvaríos por parte de Wei Ying, pronto el mayor recordó algo, tomando a Lan Zhan
de un brazo para detenerlo y que dejara de caminar, ignorando que por un segundo el menor
había puesto una expresión de absoluto dolor.
"Espera Hanguang-Jun, es hora de la cena ¿No deberíamos ir a comer con los demás
miembros de tu secta y tu familia?"

Negando con la cabeza, Lan Wangji respondió: "No, las personas de mi secta por lo general
cenan en solitario. Tendremos una comida de presentación mañana por la mañana con todos
los miembros importantes de mi secta".

Asintiendo con la cabeza, volviendo a sentirse nervioso, Wei Ying respondió: "Que miedo".

"Todo estará bien".

Soltándose del agarre de Wei Ying, Lan Wangji volvió a caminar en dirección a sus
habitaciones, volviendo a ser detenido por su omega pocos minutos después.

"¿Pero no deberíamos ir a recoger la cena a la cocina Hanguang-Jun?" Pregunto Wei Ying


haciendo un pequeño puchero: "Tu prometido tiene hambre... Aliméntame".

Mirándolo de reojo, sintiendo sus orejas sonrojándose ligeramente, Lan Zhan le dijo:
"Descuida, tengo algo en mente".

"¿Algo en mente?" Preguntó Wei Ying curioso.


Capítulo 44.

Apoyándose en la mesa baja con una sonrisa, Wei Ying observó fijamente como su alfa
preparaba aquel pollo marinado con mucha maestría, poniéndolo sobre aquella parrilla
portátil en su habitación.

Sorprendiendo a Wei Ying, de regreso al Jingshi Lan Wangji tomó varios utensilios de cocina
de una de las gavetas de su habitación. Tomando platos, alimentos en contenedores frescos de
cerámica, tenazas y pinzas, y una elegante parrilla portátil que puso cerca a esa mesa baja; el
menor se dispuso a cocinar.

Lan Wangji le explicó a Wei Ying que por lo general la comida en Gusu era bastante
insabora, teniendo tofu y arroz blanco sin nada de picante como platillo principal, con
ensaladas de algunas raíces de acompañante, esa era la cena que todos los miembros de Gusu
comían generalmente. Al escuchar aquello, Wei Ying no pudo evitar poner un rostro de cierto
asco, pues nunca había sido demasiado aficionado a comer tofu y las raíces no parecían nada
apetitosas. Así que con el correspondiente permiso de su familia, al joven Lan se le permitió
cocinar para su omega la mayoría del tiempo en su habitación, usando ingredientes que por lo
general no se conseguían en las montañas, pero si en pequeños pueblos alrededor de Gusu.

"¿Cómo dijiste que se llama este plato Lan Zhan?" Preguntó Wei Ying curioso, jugando con
algunos chiles rojos que había en uno de los platos.

"Pollo picante de Chongqing" Explicó Lan Zhan, muy concentrado en lo que tenía que hacer.

El joven Lan había pasado ese mes entero estudiando platos de comida de todos lados para
hacer a su omega, aprendiendo a cocinar con cierta facilidad con los sirvientes de Gusu y
buscando los ingredientes con sumo cuidado, Lan Wangji se había vuelto bastante bueno al
respecto. Tomando todo el pollo marinado de uno de los frascos y poniéndolo en esa parrilla,
comenzó a freírlo con ayuda de unas tenazas, mientras que con su otra mano comenzó a picar
el pimiento y los chiles juntos.

Ante la atenta y hambrienta mirada de Wei Ying, Lan Zhan introdujo aquella mezcla de
pimientos y chiles en la parrilla, para luego picar un poco de ajo, y sazonar todo con una salsa
picante y otros condimentos. Moviéndose en toda su habitación ante la atenta mirada de su
omega, Lan Zhan comenzó a preparar el arroz en una estufa aparte, mientras que tomando un
plato que habían traído los sirvientes recientemente, puso la misma salsa picante a camarones
frescos y ya cocidos.

Acercándose a la parrilla con unos palillos para intentar picar algo, notando su fragante
aroma, Wei Ying sintió su estómago gruñir por el hambre, comentando: "Esto huele
demasiado bien Lan Zhan..."

Regresando a la mesa baja, Lan Wangji le quito los palillos a Wei Ying, mirándolo severo:
"Esta caliente".
"Tengo hambre Hanguang-Jun" Se quejó Wei Ying, intentando tomar un chile de la parrilla
ardiendo.

"No, está caliente".

Interponiéndose entre Wei Ying y la comida friéndose, Lan Wangji siguió removiendo el
contenido de esta con ayuda de las tenazas, notando que pronto todo estaría listo. Quejándose
y poniendo un puchero, Wei Ying únicamente pudo mirar, teniendo que esperar de forma
hambrienta que su alfa sirviera todo para permitirle comer.

Cuando Lan Wangji se dio cuenta de que todo ya estaba bien cocido, puso el contenido de
todo el pollo picante en un plato grande, el cual dejo en el centro de la mesa. Tomando el
resto de la comida que había preparado, Lan Zhan sirvió el arroz en dos cuencos pequeños, y
puso los camarones adornados de aquella salsa picante y chiles frescos en platos aparte.
Acomodando todo en la mesa ante la atenta mirada de su hambriento omega, Lan Zhan
termino su preparación sirviendo vino en un vaso para su omega y encendiendo incienso
suave para intentar mejorar el aroma de la cocción de los alimentos que estaba en toda la
habitación.

"¿Ahora si puedo comer?" Preguntó Wei Ying realmente hambriento.

Asintiendo con suavidad, Lan Wangji se sentó elegantemente frente a su omega. Wei Wuxian
no esperó más y tomando sus palillos comenzó a devorar la comida frente a sí mismo,
escogiendo buenas presas de aquel pollo junto con esos chiles que quemaban sus labios y su
lengua, el joven omega no pudo evitar lucir realmente contento, deseando incluso lamer los
platos para limpiarlos de aquel delicioso picante. Sonriendo de una forma disimulada, Lan
Wangji únicamente estuvo atento a las necesidades de su omega, dejándole las mejores presas
de aquel pollo picante, añadiendo chiles y camarones al plato del mayor cada vez que este los
acababa, y llenando su vaso del mejor vino que pudo encontrar cada vez que Wei Ying lo
terminaba.

Limpiando sus labios con un pañuelo, habiendo comido casi todo, Wei Ying preguntó:
"¿Acaso no está prohibido el alcohol en Gusu, Lan Zhan?"

"Una vez te dije que rompería las reglas de mi clan si para eso conseguía hacerte feliz" Dijo
Lan Wangji comiendo lentamente la comida picante que había preparado: "Haré lo que sea
para hacerte feliz".

Sonriendo dulcemente para su alfa, Wei Ying se estiró sobre aquella mesa baja para besar sus
labios, realmente enamorado. Sintiendo como los picantes labios del mayor se posaban sobre
los suyos, Lan Wangji quiso sudar, pues lo sentía incluso doloroso. Lan Zhan había aprendido
a preparar comida picante, pero no era su favorita especialmente, así que simplemente la
comía muy lento intentando no demostrar su incomodidad para no poner triste al mayor.

Volviendo a comer en silencio, concentrado únicamente en masticar por lo sabroso de todo lo


que probaba su paladar, Wei Ying pronto termino de comer todo, habiendo disfrutado mucho
de ese picante y luciendo realmente contento.

"¡Eso estuvo delicioso Lan Zhan!" Dijo Wei Ying contento.


"Mmm".

"Estoy tan lleno que creo que podría reventar... Vamos a dormir Hanguang-Jun, estoy
cansado" Pidió Wei Ying: "Y lee uno de esos cuentos que tienes antes de dormir para mí".

Asintiendo suavemente para luego ponerse de pie, Lan Zhan respondió: "Si, pero antes debo
llevar los trastes fuera de la habitación".

Acercándose nuevamente a aquella gaveta que destinó únicamente para los alimentos, Lan
Wangji tomó de esta una bandeja muy cara, junto a una bonita caja de regalo. Entregándole la
caja a Wei Ying, Lan Zhan comenzó a poner los platos en la bandeja con cuidado.

"¡Gracias Hanguang-Jun!" Dijo Wei Ying contento, tomando aquella cajita muy feliz.

Abriendo el presente, Wei Ying volvió a sonreír, mirando dentro deliciosos dulces de azúcar
rojo, los cuales no dudo en comer de inmediato acompañado con vino, que volvía su sabor
incluso mejor para el mayor. Sin embargo en medio de esos tranquilos segundos en los cuales
cada uno de ambos prometidos se encontraba distraído en sus asuntos, Lan Wangji soltó un
fuerte ruido de dolor cuando levanto uno de los platos pesados de arcilla donde había servido
la comida. Escuchando el claro quejido que había soltado el menor, Wei Ying se giró a verlo
algo alarmado. Se había dado cuenta desde hace un tiempo que Lan Zhan se quejaba y ponía
una expresión de dolor cada vez que debía hacer fuerza con sus brazos, tomando cosas
incluso nada pesadas para cargar.

"¿Estas bien Lan Zhan?" Preguntó Wei Ying alarmado.

Asintiendo suavemente con la cabeza y esbozando una ligera sonrisa, Lan Wangji respondió:
"Lo estoy".

Mirándolo desconfiado, Wei Ying siguió comiendo aquellos dulces de azúcar rojo, mirando
como Lan Zhan seguía recogiendo las cosas de la mesa en una bandeja. Sin tardar mucho, el
joven alfa caminó a la salida de la habitación, dejando la charola llena de los trastes que
habían usado fuera para que los sirvientes la recogieran.

Con todas las cosas prácticamente listas, Lan Wangji volvió nuevamente a la mesa baja y con
cuidado levantó aquella parrilla pequeña en la que habían cocinado. Este artefacto el cual
tenía mucho más peso que cualquiera de las anteriores cosas que se había llevado, hizo que
Lan Zhan no pudiera ocultar más su dolor y casi soltara el artefacto exclamando un fuerte
quejido por el dolor.

Mirando todo alarmado, Wei Ying rápidamente se puso de pie para ayudarlo e impedir que la
parrilla cayera, exclamando: "¡Lan Zhan!"

Bajando la mirada con vergüenza, nada contento por haber hecho que su omega trabajara,
Lan Zhan solo pudo aceptar que Wei Ying lo ayudara con la parrilla para llevarla fuera con el
resto de los trastes que debían ser recogidos por los sirvientes. Muy preocupado, dándose
cuenta del estado de su alfa, Wei Wuxian se contuvo para no hacer comentarios hasta llevarse
aquella parrilla por completo, sacándola fuera y dejándola en la puerta. Con toda la
habitación limpia, ambos jóvenes entraron en silencio, y después de que Lan Wangji cerrara
la puerta de su habitación, fue inmediatamente sujetado de la mano y detenido por el mayor,
que lo miro sumamente preocupado.

"¿Qué está pasando Lan Zhan?"

Todavía con la mirada baja, sin querer observar el rostro de su omega por la vergüenza, Lan
Wangji respondió: "Nada..."

Frunciendo el ceño nada feliz por aquella respuesta, que sabía era mentira, Wei Ying le
recordó: "Estamos en Gusu, tienes prohibido mentirme Hanguang-Jun".

Suspirando con cierta resignación, sabiendo que ya no podría mentirle a su omega, Lan
Wangji se soltó delicadamente de la mano de su omega para levantar la tela de las mangas de
sus túnicas para mostrar su piel. Soltando un jadeo de sorpresa al ver los brazos del menor,
Wei Ying rápidamente volvió a sujetar sus manos, sin poder apartar la mirada de semejante
horrible espectáculo.

Envueltos en vendas, los brazos de Lan Wangji tenían heridas que rodeaban su piel, la cuales
por su reciente esfuerzo habían vuelto a sangrar. Aquel que era un castigo para los niños de
alta cuna de una secta, consistía en rodear sus brazos desde la muñeca hasta el codo con
afiladas cuerdas de acero o de otro material filoso que cumplía la función de incrustarse en su
piel, dejando estos cordeles atados por el tiempo que se determinara en el castigo, se obligaba
a aquellos jóvenes castigados a hacer su vida normal e incluso un poco de esfuerzo físico con
los brazos. Esto lograba que con cada esfuerzo que ellos hicieran con los brazos, que
distendida los músculos, el cordel afilado se incrustaba más y más en su piel, cortando e
incluso llegando al musculo.

Aquel castigo que no era para nada normal por lo que implicaba, pero si sumamente doloroso
y lento de curar, hizo que Wei Ying quisiera llorar, mirando los profundos cortes que en la
piel de su prometido, que no sanaban aun por completo.

"Estoy bien" Dijo Lan Zhan rápidamente: "Están sanando bien".

Muy enfadado, recordando que Lan Wangji había hecho esfuerzos con sus heridas toda la
tarde, incluyendo haberlo cargado desde la entrada de El Receso Entre Las Nubes, hizo que
Wei Ying se sintiera sumamente culpable, levantando la mirada para ver los dorados ojos del
menor y preguntar: "¿Por qué?"

Intentando ser lo más sincero que podía, Lan Wangji respondió: "En Yunmeng ataqué a
personas de mi propia secta con Bichen, casi no los toqué pero..."

"Tonto..." Reclamó Wei Ying sintiendo como sus ojos se llenaban de lágrimas: "¡Eres un
tonto!"

Sin poder evitarlo, Wei Wuxian pronto abrazó a Lan Wangji con fuerza contra su propio
cuerpo, sorprendiendo al joven jade que sin esperar aquello sucediera, únicamente pudo
sostener a Wei Wuxian contra su cuerpo dulcemente, intentando tranquilizarlo.
"No puedo creer que te hayan hecho esto por mi culpa, si tú tan solo no hubieras venido a
rescatarme..."

"Si no lo hubiera hecho no seriamos una pareja de nuevo" Le recordó Lan Wangji.

Teniendo que morder sus labios por el enfado, sabiendo que no podía replicar nada a eso, Wei
Ying únicamente dijo: "Estoy muy enfadado, no puedo creer lo que hicieron... Estoy muy
enfadado..."

Sonriendo ligeramente al sentir como su omega lo cuidaba y besaba cuidadosamente sus


mejillas, Lan Wangji respondió: "Estoy bien".

"No lo estas..." Susurro Wei Ying arrepentido sin poder apartar la mirada de los brazos del
contrario: "Ven..."

Tomando a Lan Wangji de la mano con cuidado, Wei Ying lo arrastró en dirección a la cama
de la habitación, sin importarle las cosas que aún no habían sacado fuera por la cena, Wei
Ying sentó en la cama a su joven jade, y sentándose en su regazo comenzó a besar
delicadamente las heridas del menor sobre las vendas, algo que recordaba que Lan Zhan
había hecho en el pasado. Sintiendo sus orejas sonrojarse al ver a su omega haciendo algo tan
dulce, Lan Wangji no se negó en lo absoluto y simplemente permito que Wei Ying lo curara
con sus besos, atreviéndose a besar una de sus mejillas con cariño.

"¿Duele mucho?" Preguntó Wei Ying angustiado.

Negando con la cabeza dulcemente, Lan Zhan respondió: "No".

Bajando la mirada arrepentido, sostenido una de las manos de Lan Zhan entre las suyas,
jugando delicadamente con esos dedos largos y delicados, Wei Ying únicamente pudo
disculparse de nuevo: "Perdóname Lan Zhan".

Sin entender la razón por la cual su omega se disculpaba, Lan Wangji giró suavemente la
cabeza en forma de intriga, respondiendo: "¿Mmm?"

"Fue un error" Susurró Wei Ying arrepentido: "Yo estoy realmente feliz de que ambos
podamos casarnos de nuevo, pero... Hubiera preferido que fuera en otras condiciones, así
ninguno de nosotros hubiera sido castigado".

"No importa la manera, solo que estamos juntos de nuevo".

Sorprendiendo a Wei Ying, Lan Zhan lo tomo delicadamente la barbilla para besar sus labios
con dulzura. Siendo ahora el menor quien sostenía al omega, entre esos delicados pero
apasionados besos, Lan Wangji comenzó a acostar al contrario en la cama, dejándolo
acostado y subiéndose sobre el cuerpo del contrario con cuidado.

"Y yo no te dejaré ir nunca más" Prometió Lan Zhan con la voz algo ronca por su alfa.

Sonrojándose aún más, Wei Ying sonrió suavemente entre los besos, mirando al contrario a
los ojos: "Yo nunca me iré de tu lado, Lan Zhan".
Volviendo a unir sus labios en un beso, Lan Wangji logro invertir las posiciones y poder
subirse sobre su omega en la cama, metiéndose entre sus piernas abiertas apresándolo contra
la suave superficie, las manos del alfa pronto se escabulleron hasta la cintura del joven
omega, tocándolo con cuidado y comenzando a deshacerse de sus túnicas.
Capítulo 45.

Tocando suavemente la piel desnuda del pecho de Wei Ying, lo único en lo que pudo pensar
Lan Zhan fue en el deseo. La piel limpia y suave de su omega, con esos pezones tan
pequeños, y su miembro ligeramente erecto en su perineo; al verlo lo único en lo que pudo
pensar el menor era en cuanto lo amaba. Sintiéndose algo avergonzado hasta el punto que
tuvo que desviar la mirada, Wei Ying dejo que su alfa se deshiciera de su ropa con
delicadeza, abriendo su cinturón y retirando sus túnicas.

Mirándolo a los ojos, Lan Wangji susurró: "Eres hermoso".

"No digas cosas vergonzosas Hanguang-Jun" Reclamó Wei Ying.

Sonriendo con dulzura ante las palabras de su omega, Lan Wangji volvió a besar sus labios, y
llevando una de sus manos a la nuca del contrario, deshizo aquella coleta alta que siempre
adornaba los bellos cabellos de su omega. Profundizando aquel beso, las manos hábiles de
Lan Wangji se encargaron de deshacerse de las túnicas del contrario, quitándole la parte
superior de sus ropas y dejando su torso finalmente desnudo, mientras que con un poco más
de dificultad por su posición, también se deshizo de los pantalones que Wei Ying traía
puestos ese instante.

Sonrojándose por estar desnudo frente a su alfa por primera vez consciente, Wei Ying no
pudo evitar dejar el beso para sonreírle al contrario: "Que injusto Hanguang-Jun... Tú
también deberías quitarte la ropa".

Asintiendo ante las palabras exigentes de su omega, Lan Zhan se separó de este ligeramente,
y abriendo su cinturón se quitó únicamente las túnicas exteriores, dejando su torso desnudo.
Tomando su cinta de frente, Lan Zhan la retiro de su cuerpo y sin fijarse mucho en ella, la tiro
por cualquier lado de la habitación sin mucho cuidado.

Las velas comenzaban a apagarse, siendo la estancia únicamente iluminada por las luces de la
luna del exterior, Lan Wangji no pudo evitar admirarse al ver a su lindo omega en la cama,
con su cuerpo tan suave y puro. Aquellos recuerdos que tenía el menor sobre Wei Wuxian en
medio de la confusión de su celo no le hacían justicia en lo absoluto, con esa piel tan suave y
esa cintura tan delgada, Lan Wangji no puedo evitar bajar sus manos hasta las caderas del
mayor presionándolas ligeramente entre sus dedos, soltando un suspiro de absoluto deseo al
sentir la suave carne del contrario contra sus falanges.

"¿Wei Ying, puedo tocarte?" Preguntó Lan Zhan en un susurro.

Sonriendo dulcemente por la inocencia que su alfa aun demostraba, Wei Ying lo tomó
delicadamente de las mejillas para besar cariñosamente sus labios, respondiendo: "Puedes
hacerlo Lan Zhan..."

Dándole otro beso al contrario en los labios, Lan Wangji se apoyó por completo contra el
mayor. Yendo lento para no lastimarlo y para intentar tranquilizar a su alfa, Lan Zhan
únicamente comenzó con toques lentos. Llevando sus manos a las piernas semiflexionadas de
Wei Ying, tocando su firmeza y su suavidad sus muslos, mientras que unía sus perineos
haciendo suspirar al mayor. Sonriendo con cierta timidez al sentir las manos de su alfa en
esas partes tan privadas de su cuerpo, que aun cuando por acto reflejo quería apartarlo, Wei
Ying no pudo evitar sentirse algo excitado al sentirlo tocándolo, así que enredando sus brazos
en el cuello del contrario, se dejó hacer con calma, intentando habituarse y habituar al menor
a hacer algo como aquello.

Atreviéndose a profundizar sus toques, Lan Wangji subió una de sus manos hasta la
entrepierna del contrario, tomando su virilidad entre sus dedos. Sintiendo como el cuerpo
entero de Wei Ying vibraba por el placer y como un dulce sonido se había ahogado en su
beso, Lan Zhan se sintió alentado a continuar, comenzando a masajear aquel miembro semi
erecto entre sus dedos, sin dejar aquel beso profundo. Siendo tocado de aquella manera por
primera vez en toda su vida, Wei Ying solo pudo gemir algo tímido, sintiéndose mareado por
todas las sensaciones que tenía, atreviéndose arañar ligeramente la piel de la espalda de Lan
Wangji con suavidad.

Enredando su lengua con la del mayor en una danza dentro de sus bocas, Lan Wangji hizo sus
movimientos sobre el miembro del mayor lentos y algo suaves, pues no sabía cómo podría
gustarle a Wei Ying. Y sintiéndose sin mucho aire por todo aquel esfuerzo, Wei Ying
finalmente termino rompiendo el beso ladeando suavemente el rostro, poniendo sus manos en
el pecho ligeramente musculoso de su joven alfa, intentando separarse un poco de él.

"Calor... Lan Zhan hace calor" Susurró Wei Ying con vergüenza, jadeando pesadamente por
el placer que sentía por los toques en su sensible miembro.

"¿Calor?" Preguntó Lan Zhan con su usual voz ronca.

"Calor... Tú haces que sienta calor..."

"Entonces déjame ayudarte".

Soltando sus feromonas de forma deliberada, con el objetivo de excitar aún más a su omega,
Lan Zhan presionó el miembro del mayor entre sus dedos con ligera fuerza, escuchando el
gemido de placer que soltó Wei Ying con sus acciones. Bajando sus labios al cuello del
mayor, Lan Zhan comenzó a besar y succionar su piel con sumo cuidado, dejando pequeñas
marcas rojas por toda la extensión de su cuello, bajando por esta suave piel hasta los pezones
de Wei Ying, tomando uno para succionarlo entre sus labios con gusto.

"Lan Zhan..." Gimió Wei Ying en un suspiro, cerrando los ojos por el placer: "Se siente bien
Hanguang-Jun".

Sintiéndose alentado por esas palabras y por las suaves feromonas que su omega había
comenzado a soltar en medio de toda su excitación, Lan Zhan dejó de tocar el miembro de
Wei Ying para llevar sus dedos entre las nalgas del contrario. Saltando ligeramente al sentir
aquellos dedos en su zona más privada, Wei Ying presiono el cuerpo del mayor entre sus
piernas con cierta fuerza, sintiéndose avergonzado de sentir a su alfa tocándolo de esa forma.

Siendo muy lento al entender que Wei Ying estaba asustado, Lan Zhan solo se dedicó a tocar
aquella entrada por fuera con sus dedos, masajeando delicadamente la parte entre las nalgas
del contrario. Comenzando a relajar su cuerpo nuevamente jadeando por todas las
estimulaciones, Wei Ying comenzó a soltar un poco de líquido por su entrada aun contraída
por el miedo, y sintiendo uno de los dedos de Lan Zhan presionando en dirección a su
delicado interior, introduciendo únicamente la punta de su dedo, Wei Wuxian bajo sus manos
a las frazadas de aquella cama, presionándolas fuertemente entre sus dedos.

"¿Puedo introducir uno de mis dedos?" Preguntó Lan Wangji volviendo a acercar su rostro al
de Wei Ying.

Sin creer que podría hablar por la vergüenza y el placer, Wei Wuxian respondió asintiendo
suavemente con la cabeza, aceptando dejarse hacer por el menor. Separándose nuevamente
del mayor, Lan Wangji lo tomo delicadamente de los tobillos para subirlos sobre sus
hombros, levantando así las caderas de Wei Wuxian y permitiendo que tuviera un mejor
acceso a sus dedos. Quedándose nuevamente en blanco por algunos segundos, admirando el
espectáculo de su hermoso omega en su cama, Lan Wangji finalmente volvió en sí mismo,
observando lo agitado y deseoso que se encontraba Wei Wuxian.

Siendo muy cuidadoso, Lan Zhan volvió a llevar una de sus manos a las nalgas del contrario,
y mojando sus dedos en los fluidos lubricantes del mayor, comenzó a introducir uno de sus
dedos en el interior de este. Wei Wuxian, el cual se había comenzado a masturbar desde hace
un tiempo introduciendo sus dedos en aquel sitio en medio de sus celos, creía que estaba listo
para aceptar a su alfa sin problemas; sin embargo no pudo evitar poner un rostro de absoluta
incomodad, pues aquel único dedo que había introducido Lan Zhan en su interior era mucho
más grueso y más largo que sus propios dedos, haciéndolo sentir incómodo y algo adolorido.
Intentando controlarse, Wei Ying presiono las frazadas de la cama hasta que sus nudillos se
pusieron blancos por la fuerza, sin entender como aquel dedo entraba tan profundo en su
interior, soltando un fuerte quejido de dolor cuando este entro por completo, moviendo las
caderas de forma incomoda por acto reflejo.

"¿Duele?" Preguntó Lan Wangji preocupado, mirando fijamente el rostro de su omega.

Forzándose a sonreír, mientras algunas lágrimas de dolor comenzaban a asomarse en las


comisuras de sus ojos, Wei Ying respondió: "No..."

Decidiendo esperar un poco, mientras besaba delicadamente las piernas de su omega, Lan
Zhan finalmente se atrevió a dar una suave embestida cuando sintió que el interior del mayor
se relajaba lo suficiente. Siendo sorprendido con aquel movimiento en su interior, Wei Ying
ya no pudo ocultar su dolor y soltó un quejido audible para el contrario, removiendo las
caderas sumamente incomodo e intentando sacarlo de su interior por un segundo.

Dándose cuenta de lo que había hecho, sintiéndose sumamente arrepentido, Wei Ying
rápidamente dijo: "Disculpa, Lan Zhan disculpa... Yo..."

Sonriendo dulcemente, Lan Wangji acerco una de sus manos al rostro del contrario,
acariciando sus mejillas con dulzura: "Esta bien Wei Ying".

Sin necesidad de más palabras, Lan Wangji rápidamente se agachó entre las piernas abiertas
de Wei Ying, y con cuidado introdujo el miembro erecto de este en sus labios sin sacar sus
dedos del interior del mayor. Soltando un jadeo por la sorpresa, Wei Wuxian solamente pudo
llevar una de sus manos de forma temblorosa a los cabellos del menor acariciándolos
suavemente entre sus dedos. Estremeciéndose con placer, al sentir aquella estimulación, Wei
Ying gimió sumamente excitado, estremeciéndose y forzándose a tener las caderas y las
piernas levantadas para su alfa.

Lamiéndolo con cierta inexperiencia, Lan Wangji cerró los ojos visiblemente avergonzado,
mientras sentía como el interior de su omega se distendida y se relajaba por la excitación y el
placer, finalmente pudiendo embestirlo, dándole mucho placer a su pareja. Perdiéndose en
aquel placer que le era brindado por primera vez, Wei Ying comenzó a gemir sin parar, sin
poder creer todo aquel placer que estaba teniendo en su cuerpo por primera vez.

"Lan Zhan..." Suspiró con las mejillas sumamente sonrojadas, removiéndose en aquella
cama.

Sintiéndose alentado por los dulces sonidos de placer que soltaba su omega, Lan Wangji se
atrevió a introducir un segundo dedo en el interior del contrario, comenzando a expandir su
interior con sus falanges. Abriendo y cerrando sus dedos lentamente, mientras lo embestía
con gentileza, Wei Ying comenzó a mover las caderas de forma temblorosa, buscando
introducir aquellos dedos más profundo en su interior, pues se sentía demasiado bien.

"Más profundo, por favor Lan Zhan... Más profundo..." Suplicó Wei Ying, perdido por
completo en el placer que le brindaba el menor.

Sacando el miembro del contrario de sus labios, Lan Zhan le dijo: "Podría lastimarte..."

Negando con la cabeza, Wei Ying sonrió: "Lo necesito ahora Hanguang-Jun... Necesito algo
más grande y grueso ahora..."

Tragando un poco de su saliva realmente excitado, sintiendo su miembro doler aun


enclaustrado en sus pantalones, Lan Wangji supo que Wei Ying aún no estaba completamente
preparado pero que deseaba continuar. El joven Lan había estudiado mucho, libros y libros no
solo de biología, también algunos libros pornográficos para hacer sentir bien a su omega. Y
tras memorizar bien los pasos para hacerlo todo bien, entendiendo como preparar su interior
para recibirlo y la importancia del juego previo, creyó estar listo.

"Esta parte tuya es tan linda" Susurró Lan Zhan agachándose para besar una de las nalgas del
contrario con cariño: "No quiero lastimarla".

Riendo suavemente con aquel descarado beso, Wei Ying abrazó al joven maestro Lan con sus
muslos cuidadosamente, susurrando: "Lan Zhan... Que descarado te has vuelto... Se bueno y
complace a tu omega, quiero sentirte en mi interior, y quiero recordar lo bien que se siente
por siempre".

Sonriendo con cierta dulzura, besando los muslos internos y las nalgas de Wei Ying con
suaves toques, mientras aún seguía moviendo sus dos dedos en aquella estrecha entrada, Lan
Wangji tomó la decisión de complacer a su omega. Separándose finalmente de este, Lan Zhan
sacó sus dedos del interior del contrario y se quitó los pantalones, quedando completamente
desudo ante la vista del mayor.
Sonrojándose al observar la virilidad de Lan Wangji por primera vez en toda su vida, Wei
Wuxian tímidamente bajo una de sus manos entre sus piernas hasta el pene de Lan Zhan,
tocando su dureza y su forma entre sus dedos, sorprendiéndose de esta. Dejándose hacer con
un suspiro, sintiéndose estimulado por primera vez en esa noche, Lan Wangji volvió a
ponerse sobre Wei Ying, dejando sus entrepiernas casi completamente unidas.

Sonriendo mientras ponía el pene del menor junto al suyo, Wei Ying comentó: "Lan Zhan es
tan grande... Es casi del doble de tamaño que el mío ¿Acaso se volverá más grande con la
edad?"

"Mmm... Probablemente" Confirmó Lan Zhan, recordando todo lo que había estudiado sobre
alfas y omegas.

Abrazando al contrario nuevamente por el cuello, Wei Ying lo miró a los ojos perdiéndose en
el brillante color dorado de estos, suplicando: "Hazme sentir bien Lan Zhan... Por favor
quiero sentirme bien".

Besando suavemente los labios del mayor con dulzura, Lan Zhan respondió: "Lo haré".

Acomodándose de una mejor manera sobre el cuerpo de Wei Wuxian, Lan Wangji tomó su
propio miembro con una de sus manos, y acomodando este sobre la entrada de Wei Ying,
comenzó a entrar cuidadosamente en su interior. Cerrando los ojos y gimiendo con culposo
placer, Wei Ying arqueó ligeramente la espalda, sintiendo como aquel gran miembro
comenzaba a entrar y abrir mucho su interior.

"Lan Zhan..." Se quejó Wei Wuxian en un suspiro, arañando ligeramente la espalda del
contrario.

Besando su frente y todo el rostro del mayor, Lan Wangji intento tranquilizarlo diciéndole:
"Tranquilo, solo relájate y respira".

Tomando las caderas de Wei Ying con su otra mano, Lan Zhan introdujo solamente una parte
de su miembro en el interior del omega, decidiendo esperar a que se acostumbrara un poco a
su tamaño antes de continuar. Evitando que moviera sus caderas y se lastimara, Lan Wangji
volvió a bajar sus labios al cuello y los pezones de Wei Ying, estimulándolos esperando así
distraerlo del dolor para poder continuar. Tras un par de segundos, jadeando y gimiendo con
mucho placer por todas las acciones de su prometido, Wei Ying finalmente pudo relajar su
interior casi por completo, sintiéndose bien al comenzar a tener algo tan grande dentro de él.

"Voy a continuar" Dijo Lan Zhan sintiendo aquello también: "¿Eso está bien para ti?"

Mirando a los ojos a su preocupado alfa, Wei Ying sonrió mientras asentía: "Te amo Lan
Wangji..."

Buscando los labios de su amado para tranquilizarse, Wei Wuxian permitió que Lan Zhan
introdujera más su miembro, hasta más allá de la mitad, donde volvió a quejarse y comenzar
a gemir por el dolor. Sin embargo comenzando a derramar algunas lágrimas por sus mejillas,
algo más se denotaba en el rostro sonrojado de Wei Ying: placer. El joven omega estaba
comenzando a perderse en ese desconocido sentimiento que recientemente había descubierto,
gimiendo con placer y removiendo su cuerpo en busca de mayores toques de su alfa.

"¿Wei Ying?" Preguntó Lan Zhan preocupado, escuchando la forma en la que el joven omega
gimoteaba.

Atrayendo a Lan Wangji en su dirección, volviendo a buscar sus labios para besarlos con
deseo, Wei Wuxian suplicó: "Mas... Se siente bien... Por favor más..."

Suspirando con excitación, Lan Wangji terminó de introducir su miembro profundamente en


el interior de Wei Ying, escuchando el fuerte grito de placer que este había soltado, moviendo
las caderas y arqueando la espalda. Cerrando los ojos y soltando un nuevo gemido de
satisfacción, Lan Wangji se quedó quieto en el interior de su omega, controlándose para no
embestirlo de inmediato, pues no quería lastimarlo.

Controlándose un poco, jadeando y removiéndose con placer, sintiendo aquel miembro


llegando profundamente en su interior y estimulando todos sus lugares sensibles, Wei Ying
pronto busco los ojos e Lan Wangji para verlos, sonriéndole dulcemente: "Te amo Lan
Zhan..."

Devolviéndole la mirada con cierta preocupación, acariciando una de las mejillas del omega,
el menor preguntó: "¿Lo estoy haciendo bien?"

"Mi alfa lo hace tan bien... Se siente increíble Lan Zhan... Por favor, finjamos que esta es
nuestra primera vez".

Bajando la mirada de forma culpable, Lan Wangji volvió a recordar aquellas duras escenas de
cuando había abusado a Wei Ying hace ya casi dos meses, unas escenas que no dejaban de
atormentarlo y lastimaban su corazón cada vez que debía recordarlas. Y notando el rostro de
tristeza que había puesto su alfa, Wei Ying rápidamente se apresuró a besar cariñosamente las
mejillas y los labios de este, en un intento de tranquilizarlo.

"Lan Zhan... Está bien Lan Zhan" Susurró Wei Ying mirándolo a los ojos: "No duele, nada
duele. Solo siento placer, mi alfa lo está haciendo tan bien..."

Sintiéndose alentado por aquellas desvergonzadas palabras, Lan Wangji sonrió con cierto
dolor, tomando una de las manos de su omega para besarla con sumo cariño, mirándolo a los
ojos enamorado.

"Nuestra primera vez, Wei Ying".

Devolviéndole la sonrisa con felicidad, Wei Wuxian respondió: "Mi primera vez con Lan
Zhan".

Volviendo a unir sus labios con los de su alfa, Wei Ying comenzó a gemir lleno de placer,
sintiendo como aquel gran miembro que tenía introducido tan profundo en su interior
comenzaba a moverse. Dando cuidadosas embestidas y muy lentas, Lan Wangji aprendía
como moverse en el interior de su omega, controlando bien sus deseos para no lastimarlo y
no hacerle daño, que era lo que menos deseaba. Escuchando como los gemidos de Wei Ying
se apagaban en sus besos tan apasionados, Lan Zhan terminó por separarse de este, quedando
a tan solo algunos centímetros de su rostro, deseoso de escuchar aquellos lindos sonidos que
su omega soltaba cuando estaba excitado.

"Lan Zhan..." Gimoteó Wei Ying desesperado, removiéndose con placer debajo del cuerpo de
su alfa, perdido en el placer que este le brindaba.

Con tantas estimulaciones, a pesar de que aún no estaban ni siquiera empezando, Wei Ying
no pudo esperar más y termino viniéndose en su propio abdomen, gimiendo fuertemente y
presionando fuertemente su interior. Sorprendiendo a Lan Wangji, el cual no estaba nada
preparado para semejante estimulación, sintiendo como si su miembro fuera succionado por
el mayor, Wei Ying solamente pudo mirar al menor avergonzado, notando como los
movientes de este habían disminuido de intensidad.

"Lan Zhan... No quería venirme aun..." Susurró Wei Wuxian avergonzado: "Pero se sentía tan
bien..."

Sonriendo suavemente enternecido por semejantes palabras, Lan Wangji respondió


acercándose nuevamente al rostro de su omega, besando sus labios con cariño y dando
gentiles embestidas en su interior.

"Perdóname..." Volvió a pedir Wei Ying en un susurro.

"No debes disculparte, puedes venirte tanto como quieras. Te hace sentir mejor" Prometió
Lan Zhan.

Tomando al omega de improvisto, Lan Wangji volvió a levantar sus caderas para seguirlo
embistiendo con fuerza y mucha profundidad, volviendo a hacerlo gemir. Arqueando la
espalda con placer, Wei Wuxian no pudo reprimir sus gemidos, pues después de venirse y sin
tener descanso, volvió a sentir a Lan Zhan moviéndose y martilleando su interior, estando
mucho más sensible y sintiéndose cada vez mejor envuelto en todo ese placer.

Acercándose al oído del mayor, Lan Wangji susurró: "Wei Ying..."

Sonrojándose mucho al escuchar su nombre ser dicho de esa manera, Wei Wuxian
únicamente pudo suspirar con mucho placer, levantando las caderas al ritmo de su alfa y
dejándose hacer. Las manos de Lan Wangji eran hábiles, tocando el cuerpo de su omega con
mucha delicadeza, como si temiera que este fuera a romperse, presionando esos lugares
sensibles que tenía el mayor. Pasando sus dedos por sus sensibles pezones, jugando con ellos,
besando y mordiendo su cuello de igual manera, y dando embestidas con mucha puntería para
rozar aquellos puntos sensibles en el interior del contrario, haciendo que este muriera de
placer.

"Lan Zhan..." Suspiró Wei Ying, removiéndose y aferrándose a su alfa completamente


perdido.

Sintiendo como el interior de Wei Ying comenzaba a contraerse nuevamente, avecinando un


nuevo orgasmo por parte del mayor, Lan Zhan le pidió: "Solo aguanta un poco más, intenta
aguantarlo un poco..."
Jadeando con placer, removiéndose en la cama incomodo, Wei Wuxian solo pudo responder:
"Me gusta mucho..."

"Lo se... Pero se sentirá aún mejor si lo aguantas un poco más".

Decidiendo aguantar con mucha dificultad, así como Lan Zhan se lo había pedido, Wei Ying
finalmente se dejó absorber por todo ese placer que no podía controlar. Disfrutando de hacer
el amor con su alfa por primera vez, el joven omega llevó una de sus propias manos a su
miembro, y buscando su satisfacción, se acarició suavemente hasta venirse por segunda vez
en su abdomen. Soltando un nuevo gruñido de placer al sentir como el interior de este se
contraía, Lan Wangji hizo sus embestidas realmente violentas y fuertes en dirección al
contrario, haciéndolo rebotar ligeramente en la cama.

"¡Lan Zhan!" Gimoteó Wei Ying, sintiendo esas embestidas mucho más por la sensibilidad en
todo su cuerpo.

Sin dejar de moverse de la misma forma violenta, entrando cada vez más profundo y con más
fuerza en el interior del mayor, Lan Zhan finalmente se dejó llevar y tuvo su primer orgasmo,
viniéndose dentro de su omega profundamente en su interior.

"Wei Ying..." Susurró Lan Zhan, jadeando por el placer y el esfuerzo que sentía recorriendo
todo su cuerpo.

Jadeando suavemente en la cama, sintiendo como su alfa finalmente terminaba en su interior


y derramaba todo su caliente líquido, Wei Ying respiró profundamente intentando
tranquilizarse, cerrando los ojos y relajando su cuerpo.

"Lo siento".

Abriendo los ojos de golpe para observar a su alfa, Wei Ying preguntó confuso: "¿Lan Zhan?
¿Por qué estas disculpándote?"

Bajando la mirada, aun en el interior estrecho y caliente de Wei Ying, Lan Zhan no pudo
evitar pasar sus dedos por las caderas del contrario ahora marcadas por sus dedos, dejando a
la vista las marcas de amor que había plasmado en la piel blanca de Wei Wuxian.

"Aquella vez yo..." Susurró Lan Wangji realmente deprimido: "Lo siento".

Mirándolo preocupado, Wei Ying lo tomo de las mejillas para atraer su rostro hacia él,
mirándolo a los ojos: "No debes disculparte Lan Zhan".

"Quiero disculparme, una y otra vez, todas las veces que sea necesario" Dijo Lan Zhan
sintiendo un profundo dolor en su corazón: "Yo quiero apreciar a Wei Ying, quiero protegerlo
y ser su más grande apoyo. Pero soy un alfa y yo... Yo no pude apreciarte. Te rompí y te hice
llorar, eso no está bien, por más que me digan que no fue mi culpa, de verdad lo siento. Por
favor perdóname, perdóname".

Observando las lágrimas de dolor derramarse por las mejillas de Lan Wangji, Wei Ying no
supo que decir, acariciando sus mejillas dulcemente, sintiendo un profundo dolor en su
interior también, un dolor que sabía que provenía de su alfa.

"Lan Zhan..." Susurró Wei Wuxian muy apenado.

Tomando una de las manos de Wei Ying que descansaban sobre sus mejillas, Lan Zhan no
dudo en besarlas, pasando sus labios de forma cariñosa por toda aquella suave piel: "Yo...
Desde que lo hice la primera vez, yo ya consideraba que los dos estábamos casados. Aun
ahora lo considero, que sin importar una ceremonia o una gran fiesta, yo ya soy tuyo, y tú
eres mío. Eres con quien quiero pasar toda mi vida, por favor conviértete en mi esposa".

Siendo ahora él quien quería llorar por la emoción, Wei Ying solo pudo sonreír, susurrando:
"Lan Zhan, Lan Zhan... No debes pedirle a tu esposa que sea tu esposa. Yo acepto casarme
contigo, sin importar si tenemos una ceremonia o no, desde ahora y para siempre, tu y yo
estamos casados".

Mirando al contrario a los ojos, Lan Zhan repitió: "Estamos casados".

"Estamos casados Hanguang-Jun..."

Volviendo a unir sus labios en un apasionado beso, Lan Zhan sujetó a Wei Ying de la nuca
con delicadeza, sintiéndose aun insatisfecho. Esperando un poco pero sin salir del interior del
mayor, Lan Wangji pronto invirtió las posiciones sorprendiendo a Wei Wuxian, dejando al
omega ahora arriba de su cuerpo.

"¡Lan Zhan!" Lo regañó Wei Ying rompiendo el beso: "¡Me asustaste!".

Mirándolo a los ojos fijamente, en aquella posición tan excitante que le dejaba ver el cuerpo
entero de su omega, Lan Zhan suplico: "De nuevo Wei Ying, de nuevo".

Sin tener oportunidad para responder, un nuevo gemido de placer y sorpresa fue soltado por
los labios de Wei Wuxian. Apoyándose de inmediato sobre el pecho de su alfa con sus
manos, Wei Ying levanto ligeramente las caderas y se puso en posición, permitiendo que Lan
Wangji se moviera. Suspirando con satisfacción, sintiendo su miembro nuevamente erecto
por lo bien que se sentía en ese instante, Lan Zhan comenzó a mover las caderas, haciendo
rebotar a Wei Ying por sus embestidas que comenzaron a ser profundas y fuertes desde el
inicio.

Soltando gemidos de placer, Wei Ying solo pudo dejarse hacer, cerrando los ojos muy
excitado y entreabriendo los labios para soltar sus sonidos. En aquella posición que era tan
dolorosa pero placentera a la vez, Wei Ying sentía claramente como el gran miembro de su
alfa entraba por completo en su interior, estimulando todos sus puntos sensibles y llegando a
crear una ligera elevación en la parte baja de su abdomen la cual podía ver de reojo.

"Profundo... Tan profundo..." Gimoteó Wei Ying, comenzando a perderse de nuevo.

Sintiéndose sobre estimulado, lleno de placer al estarlo haciendo por primera vez consciente,
Wei Wuxian quiso venirse de nuevo. Sin embargo ya había tenido varios orgasmos en el
pasado, así que para su sorpresa, su miembro y cuerpo temblaron sin parar mientras el placer
lo recorría por completo, teniendo su tan deseado orgasmo pero sin soltar una gota de semen.
"¿Lan Zhan?" Preguntó Wei Ying asustado, sin entender que sucedía: "Lan Zhan..."

Mirando a su omega fascinado, Lan Wangji llevó una de sus manos que descansaban en las
caderas de este a su miembro aun erecto, tocándolo delicadamente. El interior de su omega se
había contraído y se había humedecido, lo que indicaba que Wei Ying definitivamente tuvo
su orgasmo; así que sonriendo con dulzura, intentando consolar a su pequeño y dulce omega,
Lan Zhan bajó ligeramente el ritmo de sus embestidas, intentando darle tiempo a controlarse
un poco.

"Tranquilo, está bien" Susurró Lan Wangji mirando los asustados y confusos ojos del mayor:
"Tuviste un orgasmo seco, es normal. Te estas viniendo demasiado rápido, debes intentar
controlarlo un poco".

Jadeando y sintiéndose perdido por tanto placer, Wei Ying únicamente pudo ver a Lan Wangji
con lágrimas de placer asomándose en las comisuras de sus ojos, susurrando: "Lan Zhan...
Me siento bien..."

Sintiéndose alentado por aquellas palabras tan desvergonzadas, Lan Wangji volvió a besar los
labios de su dulce omega con un suave toque, atreviéndose a moverse con más energía.
Subiendo las caderas con cierta rapidez y fuerza, sumamente excitado, Lan Zhan bajó sus
manos a las nalgas y las caderas del mayor, comenzando a masajear aquellas perfectas masas
de carne entre sus dedos. Sin apartar la mirada del rostro excitado de Wei Ying, el cual lo
abrazaba por el cuello en un intento de sujetarse de algo en medio de aquellas violentas
embestidas, gimiendo sin control y dejándose hacer por el menor.

"Wei Ying..." Susurró Lan Wangji, acercando sus labios a cuello del mayor para besarlo con
delicadeza.

Dejando un recorrido de sus labios por aquella piel marcada por sus besos, Lan Zhan volvió a
bajar a esos pequeños pezones tan sensibles que este tenía, deseando estimularlos. Llevando
estos a sus labios mordiéndolos y chupándolos con gusto, sintiendo como el interior de su
omega se contraía cada vez que estimulaba esa sensible parte de su cuerpo.

Sin poder pensar con claridad, únicamente centrado en su propia satisfacción, Wei Ying
comenzó a mover las caderas por sí mismo, pegándose aún más al cuerpo del menor
intentando buscar su propio placer frotando su erección contra el abdomen bien formado de
Lan Wangji. El joven jade, entendiendo los deseos de su omega, llevó una de sus manos al
miembro de este, comenzando a estimularlo.

"Espera... Hanguang-Jun... Piedad..." Gimoteó Wei Ying sintiendo un nuevo cosquilleo en su


abdomen: "Me voy a venir..."

Sonriendo dulcemente, sintiendo que él también terminaría pronto, Lan Wangji apoyó su
frente con la del mayor mirándolo a los ojos: "Esta bien Wei Ying, te amo".

Sin poder aguantar más estimulación, después de haberse venido ya varias veces, Wei Ying
volvió a derrumbarse sobre el cuerpo de Lan Wangji, soltando fuertes gemidos de placer
mientras terminaba viniéndose en las hábiles manos de su alfa, el cual no había dejado de
estimularlo ni un solo segundo, embistiéndolo y masturbándolo al mismo ritmo.
"Lan Zhan..." Gimió Wei Ying desesperado, buscando nuevamente los labios del menor para
besarlos.

Cerrando los ojos y comenzando a soltar suaves suspiros de satisfacción, Lan Wangji dejó de
presionar aquellas firmes nalgas que tenía su prometido, para llevar sus dos manos a esas
caderas tan hermosas que tenía Wei Ying. Comenzando a hacer el vaivén de sus caderas
mucho más rápido y fuerte, Lan Wangji se sintió en su límite también, pues cuando Wei Ying
tenía un orgasmo, todo su interior se contraía de una forma mucho más estrecha. Así que
sintiéndose lleno de placer, Lan Wangji no midió la fuerza de sus embestidas en el cuerpo del
mayor, terminando pronto en su interior por última vez, escuchando los gemidos casi roncos
de su omega por todos los casi gritos que Wei Ying había soltado.

"Te amo..." Susurró Lan Zhan, buscando los ojos de su omega en medio de esa obscuridad.

Sonriendo de forma cansada, apoyado en el pecho de su alfa, Wei Ying respondió: "Yo
también te amo Lan Zhan..."
Capítulo 46.

Los pájaros cantaron al amanecer en Gusu, y abriendo los ojos de forma perezosa, Wei
Wuxian se dio cuenta de que era bien entrada la mañana. Aun con el sentimiento de dolor y
relajación de la noche anterior, Wei Ying se giró en la cama, observando a su alfa junto a sí
mismo. Lan Wangji, el cual había terminado rendido la noche anterior después de tantas
estimulaciones, no había despertado a su hora usual, todavía inconsciente a pesar de la hora.

Sonriendo al ver a su hermoso jade durmiendo, un paisaje que le resultaba increíblemente


bello, Wei Ying se giró aún más en los brazos del menor para besar sus labios con un suave
toque.

"Te amo, Lan Zhan..." Susurró Wei Ying, mirando a su jade profundamente dormido.

Sintiéndose en paz al estar rodeado por los brazos del menor, en un cariñoso abrazo que no se
había aflojado en toda la noche, Wei Ying pensó que podría volver a dormir. Sin embargo
debido a la luz que entraba en todo el pabellón, junto con el canto intermitente de las aves y
el estar en un lugar que aún le resultaba extraño; Wei Ying no pudo volver a conciliar el
sueño. Decidiendo pasar el rato jugando con su inconsciente alfa, Wei Wuxian se distrajo
enredando la blanca cinta de Lan Wangji en sus dedos, o besando los labios y el rostro del
menor, intentando secretamente despertarlo.

Sin embargo estas distracciones solo duraron algunos minutos antes de aburrir de una manera
insoportable al mayor, el cual admirando fijamente el hermoso rostro dormido de su jade,
comenzó a desesperarse en la cama. Wei Ying el cual era un joven inquieto, no podía pasar
mucho tiempo sin estar haciendo algo, ya fuera caminando por ahí o jugando, así que
intentando despertar a Lan Zhan para poder salir de ese increíble aburrimiento y poder hacer
finalmente algo, comenzó a picar una de sus mejillas y su nariz.

Pero joven Lan sin querer despertarse, frunció la nariz e hizo una expresión de desagrado,
soltando el abrazo que tenía impuesto en el cuerpo de Wei Ying para luego girarse en la cama
y darle la espalda. Refunfuñando al ver cómo había sido ignorado por su alfa, Wei Wuxian
pataleó suavemente debajo de las frazadas, quejándose en susurros sin saber que más hacer.

"Lan Zhan despierta..." Se quejó Wei Ying en un susurro, mirando al contrario sin hacerle
caso aun.

Refunfuñando en susurros, Wei Ying finalmente decidió sentarse en la cama, cansado de estar
acostado. Mirando toda la habitación del menor con aburrimiento, pensando en que podría
hacer para divertirse, pronto se le ocurrió una gran idea. Levantándose de la mullida cama del
menor con cuidado, Wei Ying se apresuró a dirigirse a una estantería cercana a la cama del
menor, donde amontonados en las repisas habían varios libros de diferentes temáticas.

Recordando que después de la primera noche que ambos pasaron juntos y en condiciones,
Lan Wangji le había leído al despertar, Wei Ying pensó que sería un buen detalle leerle al
menor también cuando este despertara. Así que acercándose a la gran estantería de madera,
Wei Wuxian comenzó a investigar los libros de su alfa con curiosidad.
Encontrando libros de temas diversos, que iban entre historia a cuentos cortos, Wei Wuxian
se sorprendió al darse cuenta de que una de las repisas de la estantería estaba llena de un solo
tipo de libros: De poesía. Tomando uno de esos delgados volúmenes, con tapas de
estampados elegantes y preciosos, Wei Wuxian comenzó a hojearlos dándose cuenta de que
eran poemas de amor. Girándose para ver curioso a su alfa en la cama, Wei Ying se sonrojó
pensando en el menor con esos libros recordándolo.

Sin tener más que hacer, Wei Ying se quedó frente a esa repisa, tomando libros al azar para
hojearlos y leer unas líneas sueltas, esperando encontrar alguno que llame su atención para
llevarlo a la cama del menor a leérselo. Fue de esta manera que Wei Ying notó algo extraño
en el fondo de la estantería, moviendo los libros de un lugar a otro pronto se dio cuenta de
que al final de la sección, escondidos detrás de otros tantos volúmenes de esos inocentes
tomos, habían libros escondidos.

Curioso, pensando en la razón por la cual su dulce alfa podría haber escondido esos libros de
tal manera, Wei Ying con mucho esfuerzo tomó uno de los libros escondidos al final. Cuando
finalmente tuvo aquel libro en las manos, las mejillas del omega se pusieron rojas, mirando
de forma incrédula la cubierta de un libro que ya conocía, un libro que había estado en sus
manos más de una vez.

Pestañeando incrédulo ante lo que veían sus ojos, Wei Ying pronto susurró: "Debe ser un
error..."

Sin poder creer que su dulce alfa hubiera hecho algo tan incorrecto como robar y leer
pornografía, Wei Ying se negó por algunos segundos a abrir ese libro con una portada algo
maltratada, un libro que le recordaba a aquellos que el mismo había robado a Mie Huaisang.

Pero finalmente tomando valor, Wei Wuxian abrió las hojas tan conocidas por sus dedos,
ardiendo en furia al ver la ilustración de aquel rey teniendo sexo con un esclavo. Girándose
de golpe y furioso, Wei Ying no dudo en tirarle aquel libro a Lan Wangji. El joven jade
despertó entonces, abriendo los ojos sorprendido por el golpe que había dado en su espalda,
miró enfadado y confuso a su omega, hasta darse cuenta de lo que estaba sucediendo.

"¡Tú los tomaste!" Le reclamo Wei Ying, tomando otro de los libros escondidos para tirárselo
a Lan Zhan: "¡Tú los tomaste e hiciste que golpeara a Jiang Cheng por eso!"

Mirando aquellos libros junto a él en la cama, Lan Wangji no pudo evitar bajar la mirada con
vergüenza, sintiendo como las puntas de sus orejas se enrojecían y no tenía cara para mirar al
mayor. Nada contento con el proceder del alfa, Wei Ying tomó otro libro de la sección
escondida con la intención de tirárselo, pero viendo la portada se quedó más sorprendido aun.

"Espera, este no es uno de los libros de A-Sang" Dijo Wei Ying comenzando a hojearlo:
"¿Compraste más libros pornográficos para alfas Lan Wangji?"

Negándose a responder aquellas preguntas, sumamente avergonzado por su proceder, Lan


Wangji se quedó con la mirada baja, pensando en cómo disculparse. Sin embargo Wei Ying
pronto estallo en carcajadas descontroladas, ojeando aquel libro bañado en las feromonas de
su alfa. Y reconociendo una de las escenas plasmadas en sus páginas, el omega volvió
rápidamente con el menor: "¡Mira Hanguang-Jun! ¡Me hiciste esto a noche!"
Mirando de reojo la página con la ilustración que Wei Ying le señalaba, Lan Wangji
únicamente pudo susurrar: "Mnn..."

"De verdad eres increíble..." Susurró Wei Wuxian, sin poder parar de reír.

Cada vez más avergonzado, observando de reojo como su omega leía ese libro en medio de
su incontrolable risa, Lan Wangji por un momento pensó que moriría de la vergüenza,
sintiéndose muy arrepentido por haber sido descubierto.

Sin embargo Wei Ying, habiendo olvidado su anterior enfado, pronto se concentró en
aquellas excitantes imágenes que miraban sus ojos, sonriendo con cierta diversión
encontrando una ilustración especialmente descarada: "Mira Lan Zhan, mira... Hagamos esto
en la noche ¿De acuerdo?"

Mirando de reojo aquella página nuevamente, Lan Wangji sintió una ligera excitación
pensando en que podría hacerle eso al mayor, pero conteniéndose solamente pudo susurrar:
"Desvergonzado..."

"Necesitaríamos un par de cuerdas, pero supongo que podríamos usar tu cinta de frente si no
podemos encontrar algunas en Gusu"

Alarmado girándose en dirección a Wei Ying, Lan Zhan replicó: "¿Mi cinta de frente? ¿¡Mi
cinta de frente!?"

"Claramente Hanguang-Jun" Respondió Wei Ying con obviedad: "¿De dónde planeas sacar
una cuerda en Gusu de lo contrario?"

Quedándose sin palabras al escuchar aquellas palaras, sintiendo sus orejas sonrojarse mucho
más por la vergüenza, Lan Wangji no pudo evitar desviar la mirada para observar la
ilustración excitante que se veía en aquel libro que el mismo había comprado hace un par de
días. Observando a su alfa tan avergonzado, Wei Wuxian no pudo evitar volver a reír con
mucha alegría, divirtiéndose por la graciosa expresión que Lan Wangji tenía ese instante.

"Desvergonzado" Lo regañó Lan Zhan, desviando la mirada.

Sonriendo con diversión, queriendo molestar al contrario un poco más, Wei Wuxian
preguntó: "¿Acaso mi alfa no desea hacérmelo?"

Mirándolo de nuevo de reojo, Lan Wangji tomó el libro de las manos del omega para tirarlo
al piso. Y sin previo aviso, Lan Zhan se subió nuevamente sobre Wei Ying en la cama,
escuchando las risas fuertes que soltaba el mayor. Acercando sus labios al cuello del omega,
el cual estaba lleno de sus marcas de amor, Lan Zhan no dudo en volver a besarlo,
comenzando a excitarse.

"Si Hanguang-Jun no usa su cinta de frente no quiero" Lo molestó Wei Ying.

"¡Desvergonzado!"

"¿Eh? ¿Ah? Espera... ¡Hanguang-Jun piedad! ¡Era una broma, una broma! ¡No tomes tu
cinta! ¡Se gentil!"
1 AÑO DESPUES

Escuchando el canto de los pájaros con el amanecer, Wei Wuxian abrió los ojos de manera
perezosa.

Lo primero que observó frente a sus ojos fue una ventana abierta que daba al exterior de un
paraje desconocido, mientras que el olor de un suave incienso de lavanda inundaba la
habitación, intentando así dispersar el olor de sus propias feromonas juntadas con el olor de
las feromonas de su joven amante Lan Wangji.

Sentándose en la cama a duras penas, Wei Ying enfocó la vista tras un par de segundos,
observándose solo en la habitación privada de su Hanguang Jun: "¿Lan Zhan?"

Bajando la mirada a su propio cuerpo, observó sus manos aun atadas por las muñecas con la
cinta de frente de Hanguang Jun, algo que lo hizo sonrojarse mucho. Ya se había vuelto una
especie de tradición que ambos lo hicieran de esa manera o maneras similares cuando hacían
el amor, de cierta manera, su joven prometido era muy posesivo y dominante, algo que
propiciaba ese tipo de tratos con el joven omega, el cual nunca se había negado a ser tratado
de una forma tan brusca, aun si resultaba algo lastimado.

Al ver el sol fuera de la ventana abierta cerca de la cama distendida de Lan Wangji, Wei
Wuxian calculo que aún era muy temprano, algo que lo hizo preguntarse donde estaba su
joven alfa: "¿Fuiste a traerme el desayuno?"

Mirando sus manos atadas y con su túnica más íntima aun puesta y desarreglada, Wei Ying
suspiró. Llevando aquella larga cadena de ajustados nudos hechos con la cinta de frente a sus
labios, cuidadosamente intentó desatar estos para liberarse, pues se sentía muy incómodo al
estar atado de esa manera. Sin embargo, no pudo hacerlo, ya que los nudos estaban
fuertemente atados uno sobre el otro, impidiendo esta acción por parte del omega, el cual
finalmente terminó rindiéndose y tirándose nuevamente en la cama. Cuando Hanguang-Jun
regresara, se encargaría de desatarlo.

Sin embargo los minutos pasaron, y aunque Wei Wuxian intentaba distraerse mirando por la
ventana y escuchando los cantos de las aves, la espera se le hizo demasiado insoportable. Al
darse cuenta de que casi todo el incienso se había consumido, Wei Ying supo que ya había
esperado demasiado, así que decidió ir el mismo en busca de su joven Lan Zhan.

Pronto sería un acontecimiento importante en Gusu, muchos discípulos de todas las sectas
vendrían para estudiar con el gran maestro Lan Qiren. Incluso el mismo Wei Wuxian y su
hermano Jiang Cheng habían llegado para ser instruidos por el líder de la secta Lan.

Muchas cosas pasaron ese año, y muchas otras se avecinaban en los próximos meses, tantas
que eran difíciles de recordarlas todas.

A pesar de la boda de su Shijie con el pavo real, ella no había logrado tener un hijo aún, así
que con ayuda de otros omegas de sectas prominentes, buscaban la forma de ayudarla a tener
un joven heredero para el más joven líder de la secta Jin. Habiendo tomado su lugar como
líder de Lanling Jin hace poco, la misión de Jin Zixuan junto a su hermano Meng Yao fue
buscar a sus hermanos perdidos, todos aquellos niños que habían sido abandonados por su
padre, para llevarlos de regreso a Lanling y hacer de ellos unos buenos cultivadores.

Mientras que del otro lado de la moneda, en la secta Nie todo era alegría desde hace un par de
meses. El pequeño Nie Song nació como un alfa saludable y lleno de vida, el cual era la
adoración de todos los miembros de la secta Qinghe Nie. Meng Yao era sumamente fértil, así
que todos aproximaban que no tardaría en darle un nuevo hijo a Nie Mingjue, esperando que
fuera otro fuerte alfa para la secta.

Por otro lado, aunque Jiang Cheng ya había cumplido 18 años, sus nupcias se habían
retrasado hasta finales de ese mismo año, en 6 meses aproximadamente. Esto debido a que
Lan Xichen asumió el papel de líder ante la secta Lan de improviso, pues su padre finalmente
se retiraba del puesto por motivos de salud y dejaba al mayor de los dos jadeas a cargo. Por
eso, mientras este se establecía bien con su título y sus obligaciones, la boda tuvo que ser
suspendida. Aun así pronto Jiang Cheng abandonaría Yummeng para siempre y los planes de
la boda flotaban por el aire como burbujas de felicidad, pues dos de los clanes más ricos y
poderosos estaban a punto de unirse, y la boda debía ser tan grande y vistosa como la que
había tenido Yanli en el pasado.

Y aunque su adorado Lan Zhan apenas había cumplido 17 años hace un par de semanas, la
boda entre Wei Ying y joven jade ya había sido programada para abril del próximo año, tan
solo tres meses después de que el alfa cumpliera 18 años. Esto era lo usual en la tradición, ya
que por lo general se esperaba a que ambos novios tuvieran 18 años para casarse. Así que por
más que ambos quisieran casarse lo más pronto posible, debían esperar un tiempo prudente.
Aunque esto tenía a las demás sectas en el filo de la preocupación, pues todos tenían sus
motivos para desear que aquella boda se consumara lo más pronto posible.

El primero y el más obvio de aquellos motivos fue la incertidumbre en la que quedaba la


secta Yunmeng Jiang, ya que el heredero varón directo, es decir Jiang Cheng, pronto iría a
vivir a Gusu; mientras que la otra hija heredera, Jiang Yanli, ya había abandonado Lotus Pier
hace dos años y había abandonado su cargo mucho antes que eso. Fue por eso que muy
pronto Wei Wuxian dejaría de ser un Wei, y se convertiría en un Jiang; contrayendo nupcias
con uno de los mejores cultivadores de la generación.

Y el segundo motivo era algo más privado, algo que solo sabían los miembros mayores de
ambas sectas. Y es que en medio de todo ese periodo de cortejo, Lan Wangji y Wei Wuxian
no habían detenido sus prácticas sexuales. Obviamente ambos "se cuidaban", o eso le decían
a sus familiares, y es que bebiendo bien sus inhibidores y cuidado de no tener relaciones en
sus días fértiles, Wei Ying evitaba quedar embarazado por accidente. Pero eso no evitaba que
otros muchos accidentes pudieran ocurrir en medio de su desenfreno, y el mayor temor de
todos en la secta Jiang era el establecimiento del vínculo entre ambos antes del matrimonio.

Era muy mal visto que un omega se casara ya vinculado con su alfa, ya que esto significaba
que no había llegado puro al matrimonio. Y aunque era obvio para todos en sus familias que
Wei Wuxian había dejado de ser un omega puro hace mucho tiempo, estaban hablando del
que comenzaba a considerarse como el próximo líder de la secta Yunmeng Jiang, no era un
omega cualquiera, y si por accidente ambos terminaban vinculándose en medio de su
desenfreno el tener sexo, sería un escándalo de proporciones inimaginables.
Aun así todo esto le importaba poco a Wei Wuxian, después de todo Lan Wangji era su
destinado, no le importaba ser marcado por él, así que en silencio agradeció que adelantaran
la boda. Le había costado horrores esperar 12 meses hasta ese punto, estaba seguro de que no
podría haber aguantado ni un años más.

Y es que a diferencia de lo que pensaban todos en la secta Lan y en la secta Jiang, no era Lan
Wangji el que perdía el control cuando ambos estaban haciendo el amor, lo cual era usual
entre alfas. Era el propio Wei Wuxian el cual en medio de su intenso amor, rogaba a gritos ser
marcado por Lan Wangji. E incluso en uno de sus celos, había perdido la razón y había
intentado ir a Gusu por su propia cuenta para buscar a su prometido, actuando como un
demente. Pero Lan Wangji era paciente y atento, no trataba a Wei Wuxian de manera
indecente, siempre manteniéndose en sus 5 sentidos cuando se encontraba con el mayor,
besando su cuello con cariño cuando este le pedía en medio de lágrimas el ser marcado para
establecer el vínculo, y escapando a Yunmeng para verlo cada vez que tenía tan solo un poco
de tiempo.

Era así como ambos jóvenes terminaban encontrándose aunque sea una vez cada mes,
durmiendo juntos aunque ambos tenían habitaciones separadas en sus propias sectas, pasando
el tiempo sin separarse como si fueran del mismo cuerpo, y tratándose con más cariño que
muchas de las parejas que llevaban años en el periodo del cortejo. Y fue por esta misma
razón que ambas familias no se opusieron a que ambos tuvieran una relación tan poco
tradicional, permitiéndoles visitarse por la noche y tener sexo tantas veces como quisieran.

Fue de esta manera que para la reunión de cultivadores, tanto Wei Wuxian como Jiang Cheng
decidieron arribar una semana antes que el resto a Gusu, visitando a sus novios antes de
tomar las clases. Los discípulos de la secta Jiang no habían ido con ellos, y llegarían a Gusu
en un par de días más como usuales invitados, por lo que tanto Jiang Cheng y Wei Wuxian
tuvieron tiempo y privacidad para estar junto a sus prometidos.

Esos días, Wei Wuxian y Lan Zhan habían pasado mucho tiempo haciendo tonterías,
recorrían las montañas, nadaban en los fríos lagos de Gusu, trepaban árboles, perseguían
conejos, y jugaban por todas las habitaciones y recovecos de El Receso Entre Las Nubes.
Para luego, en la noche, entregarse a sus instintos y comportarse como si ya estuvieran
casados desde hace años, amándose por horas en la habitación privada de Lan Zhan.

La noche anterior fue especialmente dura para Wei Wuxian, el cual al ponerse de pie sintió un
profundo dolor en las caderas que lo hizo jadear, mientras que ya libre de las sabanas de la
cama pudo ver mejor su cuerpo. Toda su piel se encontraba llena de macas rojizas y
ligeramente violetas, no solo por mordidas de Lan Wangji, sino también por las marcas de los
fuertes dedos de este sobre su sensible piel, que se notaban principalmente en las delegadas
caderas y las redondas nalgas del omega, dando a entender lo mucho que ambos lo hacían
cada noche.

Avergonzándose por ver su propio cuerpo en ese estado, y pensando en reclamarle seriamente
a Lan Zhan después ese día, Wei Ying arregló su túnica interior lo mejor que pudo con sus
manos atadas. No podía ponerse nada más encima pues sus manos estaban sujetas, y aunque
se sentía avergonzado por salir prácticamente en paños menores a buscar a su prometido, no
pudo hacer nada más, resignándose a salir de ese modo a buscar a Lan Zhan.
Abriendo la puerta corrediza de la habitación, salió descalzo y con cuidado fuera de esta
misma, caminando con los cabellos ligeramente erizados por el frio por los largos y limpios
pasillos de la residencia de la secta Gusu Lan, buscando a su joven alfa: "¿Lan Zhan?... ¿Lan
Zhan?... ¿Lan Zhan, estas aquí?"

Buscando y mirando por las ventanas de diferentes habitaciones en búsqueda de su amado,


Wei Ying agradeció en silencio que no se cruzó con nadie de la secta Lan que pudiera verlo
en ese estado, llegando prontamente a lo que parecía ser la residencia privada de Lan Qiren,
donde pudo escuchar la voz de Lan Xichen desde el interior.

"... Es una amenaza entonces" Dijo Lan Xichen con severidad: "En esta ocasión, Wen Chao
se ha sobrepasado, jugar con la energía resentida se castiga con la muerte".

Bastante curioso, Wei Ying se acercó a una de las ventanas de manera disimulada,
observando el interior del sitio. En esa habitación privada, que lucía como un pequeño salón
para tomar el té o tener reuniones, se encontraban tres personas. Un hombre mayor con un
rostro rígido y facciones serias, que Wei Ying reconoció como el antiguo líder suplente de la
secta Lan, el tío de su prometido y el hombre que lo había criado, el famoso cultivador omega
Lan Qiren.

Por otro lado, sentado de una forma elegante, se encontraba el hermano mayor de su alfa, Lan
Xichen, el nuevo líder de la secta Lan, el cual había cumplido 21 años recientemente y
prácticamente no había cambiado en lo absoluto desde la última vez que Wei Wuxian lo había
visto.

Y al lado de su hermano, se encontraba Lan Wangji.

Al verlo, Wei Wuxian suspiró suavemente, como si fuera una doncella enamorada, sintiendo
como a sus espaldas, una suave brisa de la mañana soplaba levemente.

Su dulce alfa había cumplido 17 años, y él si había tenido un cambio significativo. El


pequeño y adorable maestro Lan ya no tenía nada de pequeño, sus días de ver desde abajo a
Wei Ying habían quedado en el olvido, ya que era de la altura del mayor, siendo incluso un
poco más alto que este tan solo por unos centímetros. De igual manera, el cuerpo de su
amado había cambiado, ya no era tan suave y pequeño como la primera vez que había tomado
a Wei Wuxian, debido a sus arduos entrenamientos, Lan Wangji pronto pudo lucir una
espalda ancha, con músculos fuertes en todo su cuerpo, teniendo un abdomen bien marcado y
unos brazos fuertes que ahora podían levantar a Wei Ying con facilidad.

El mayor había visto estos cambios en su prometido de primera mano, ya que cada vez que se
reencontraban, veía como su amado era diferente en algo. Notando como de una semana para
otra, su altura había aumentado, o que tenía una musculatura un poco más marcada, o incluso
que su voz se había vuelto más gruesa.

Pero eso era algo que a Wei Ying no le causó tanto impacto como se habría imaginado, pues a
solas, mirándose a los ojos, el joven maestro Wei aun podía perderse por horas en esos
tranquilos y apacibles ojos dorados, que lo miraban con dulzura en el día y se volvían
brillantes por la lujuria de sus feromonas por la noche.
El rostro de Wangji, siempre serio, era diferente solo con Wei Ying. No solo porque
probablemente el omega había sido el único en ver al joven jade sonreír en mucho tiempo,
hasta el tono de voz y las expresiones faciales de su prometido llegaban a volver ser más
suaves a su lado, volviendo a lucir como ese niñito infantil de 12 años, celoso y posesivo con
su omega, sin pensar en las consecuencias de sus actos, solo queriendo reclamar una y otra
vez la atención de Wei Wuxian para sí mismo. Era así como Wei Ying sabía que estaba con
su Lan Zhan, solo debía mirarlo a los ojos para darse cuenta de que era él, aun a pesar de los
cambios físicos y mentales que este tuvo con los años, solo con una mirada Wei Wuxian
podría reconocer a su destinado en medio de una multitud.

Continuando con su charla, Lan Xichen miró con profunda seriedad a su tío, una seriedad que
era bastante impropia del líder de la secta Lan, que reflejaba lo complicada de la situación de
la que platicaban: "Si las sospechas son ciertas tío, ninguna secta estará a salvo de los Wen,
una guerra será inminente y miles morirán".

"La guerra ya ha dado inicio Xichen, y a menos que no tomemos nuestro papel hablando con
las demás sectas de cultivadores, nadie estará a salvo hasta que la amenaza que ahora
representan los Wen sea eliminada por completo" Sentenció Lan Qiren con cierto deje de
dolor en su voz: "Si seguimos así, todas las bodas y planes deberán ser suspendidos, todos los
jóvenes discípulos deberán ser instruidos para matar a sus hermanos, y una nueva era llena de
obscuridad dominara el mundo de la cultivación".

Tal vez por oler las suaves feromonas de Wei Ying en el exterior, que habían entrado en la
habitación por la brisa que recorría Gusu, o simplemente porque Lan Zhan no había dejado
de pensar en este desde que había despertado, no pudo evitar preguntarle a su tío algo
realmente preocupado: "¿Y Wei Ying? ¿Él estará a salvo?"

Desde el exterior al escuchar su nombre y la angustiada pregunta de su prometido, el cual


solo se preocupaba por su seguridad, Wei Wuxian no pudo evitar sonreír. Y aunque no
entendía ni una sola palabra de lo que estaban hablando los maestros Lan en aquella reunión
privada, el saber que su Hanguang-Jun se preocupaba por él con tanta intensidad, lograba
calentar su corazón y hacerlo sentir amado.

"Si una guerra ocurre Wangji, tu prometido deberá ser devuelto a Lotus Pier, de donde
pertenece. El deberá luchar con los Jiang, como tú por los Lan" Le aclaró Lan Qiren al
menor.

Nada satisfecho con esa respuesta, Lan Wangji decidió replicar: "Pero él es mi prometido,
nos casaremos muy pronto. Él debe permanecer aquí en Gusu, conmigo".

Sonriendo para sí mismo y sin poder aguantar las ganas de abrazar a su pequeño alfa, Wei
Ying comenzó a alejarse de la ventana, decidido a entrar en la habitación privada.

"Él es mío, yo debo protegerlo" Dijo Lan Zhan, realmente serio al pronunciar sus palabras.

Sonriendo algo enternecido, Xichen miró a su hermano menor con cariño: "Wangji, debes
entender que el joven maestro Wei no es un Lan aun, y aunque hasta a mí mismo me gustaría
mantener a Jiang Cheng aquí en Gusu bajo mi cuidado, eso podría ser tomado como un
secuestro por parte de la familia Jiang. Si las cosas empeoran, ambos deberán regresar a su
hogar y defender sus sectas, ya que además de ser nuestros prometidos y unos omegas, son
cultivadores"

Frunciendo el ceño, encarando a su hermano, Lan Zhan dijo: "Wei Ying se quedara aquí en
Gusu, conmigo" Sentencio realmente molesto, presionando sus manos en puños.

Interrumpiendo su charla, Wei Wuxian pronto abrió la puerta de la habitación privada,


entrando con una sonrisa en esta: "¡Lan Zhan! Te busqué por todos lados..."

Los tres hombres Lan dentro de la habitación pronto giraron en dirección a la entrada,
quedando deslumbrados con el espectáculo que tenían en frente. Un despeinado omega, solo
usando su túnica interior, atado con la cinta de frente de Wangji, se aproximó a la mesa con
una sonrisa, saludándolos a los tres: "Líder de la secta Lan, Lan Qiren, Lan Zhan; buenos
días" Saludo Wei Wuxian, de una forma muy formal, haciendo una reverencia, para luego
sentarse al lado de Lan Zhan con muy poco cuidado: "¡No es divertido! Vamos, desátame por
favor, es muy incómodo..."

Sin poder evitar sonreír ligeramente por el atrevimiento de su prometido, Lan Zhan
rápidamente lo tomo de las muñecas, acercando sus dedos a su propia cinta de la frente,
comenzando a desatar los nudos con cuidado, dándose cuenta por sí mismo de lo apretado
que había hecho estos y de lo difícil que sería soltarlos todos. Por otro lado, Lan Qiren, el que
menos estaba ha acostumbrado a este proceder por parte del atrevido omega, se aclaró la
garganta, muy molesto por lo que veían sus ojos.

Al darse cuenta de esto, Lan Zhan rápidamente hizo una reverencia arrepentido, volviendo a
ponerse serio: "Discúlpanos, tío".

Aun curioso por la conversación que había escuchado, Wei Ying también se giró ante sus
mayores, ladeando suavemente la cabeza: "¿De que estaban hablando hace unos minutos?"

Los tres maestros Lan guardaron silencio, mientras Lan Qiren y Lan Xichen cruzaron
miradas silenciosas por algunos segundos, manteniéndose callados. Pero Wei Wuxian no
planeaba dejar las cosas así, realmente curioso por lo que escucho: "¿Guerra? ¿Los Wen?
¿Acaso están teniendo algún tipo de problema entre sectas?"

Ambos mayores, sin saber que responder, fueron adelantados por Lan Wangji, el cual aun
desatando los nudos de su cinta de frente con mucha dificultad, decidió mentirle a su omega:
"No es nada, solo algunos reportes sospechosos de la secta Wen".

"¿Debería preocuparme?" Preguntó Wei Ying, aun insistiendo.

Llevando una de sus manos a una de las mejillas del mayor, Lan Wangji volvió a sonreír
intentando darle confianza: "No, no debes preocuparte por nada".

Creyendo ciegamente en el menor, Wei Wuxian sonrió alegremente, disfrutando del cariño
que le era brindado. Pero de cierta manera, un extraño sentimiento de preocupación cruzo su
mente por algunos segundos, el cual se disipó tan rápido como había llegado a si mismo
cuando vio los dorados ojo de Lan Zhan, volviendo a estar feliz y en calma.
Muy poco sabrían todos que en realidad no habría ninguna boda ese año, ni en otros años
más.

Que pronto, aquella guerra que Lan Qiren tanto temía se haría realidad.

Que muchas personas morirían y muchas sectas terminarían hechas cenizas.

Y que aquel risueño joven, un omega alabado por sus altos niveles en la cultivación, pronto
dejaría de ser reconocido como el discípulo más fuerte de la secta Jiang, el famoso Wei
Wuxian; para convertirse en un ser temido y respetado, el cual tocando una flauta maldita,
podría controlar la energía resentida que destruiría su espíritu.

Pero en ese instante, en medio de esa fría sala en recesos de las nubes, Wei Wuxian fue feliz,
comenzando una alegre charla con el nuevo líder de la secta Lan sobre la próxima reunión de
jóvenes cultivadores que se daría en Gusu, mientras que su Lan Zhan seguía liberando sus
manos de la cinta en sus muñecas con mucha dificultad, y el único que pensaba en el horrible
destino que venía sobre ellos era Lan Qiren.

"Oye Lan Zhan... Ya estoy deseando casarme contigo" Susurró Wei Ying mirándolo de reojo
aun desatar los nudos en sus muñecas.

Ante estas palabras, Lan Wangji asintió otra vez, acariciando suavemente la piel de los brazos
de su prometido con cariño, mirándolo realmente enamorado.

En ese instante, para ambos jóvenes, la vida era perfecta.

Aunque no se quedaría así por mucho más tiempo.

FINAL DE LA PRIMERA PARTE


Epílogo y palabras de la autora.

"¡Hoy hagamos muchas cosas!"

Sonriendo de forma amable, Lan Wangji siguió desatando aquellos nudos de las muñecas de
su joven prometido: "Mmm..."

Muy contento, Wei Ying siguió sonriendo, moviendo los pies jugando con las sabanas que
estaban debajo de sus pies: "Ayer solo hicimos cosas que me gustan a mí, jugamos todo el día
en la montaña y perseguimos a los conejos..."

"Mmm".

"¡Hoy tengo muchos planes! En la mañana podemos ir a la biblioteca a jugar, en la tarde


podemos ir a buscar a los conejos de nuevo, y en la noche debemos ir al pueblo para la feria
del comercio que habrá hoy" Dijo Wei Ying animado, permitiéndole al menor desatar sus
muñecas.

"Wei Ying, hoy llegan los discípulos de las demás sectas a Gusu, debemos quedarnos" Le
recordó Lan Zhan, levantando la mirada para observar a su mayor.

Escuchando estas palabras, Wei Ying frunció el ceño, levantando sus manos para pasarlas por
el cuello de su joven amante aun sin desatar la cinta de sus muñecas, quedando colgado de su
cuello: "¿Estas preocupado por lo que te dijeron tu hermano y tu tío ayer?"

Ante su pregunta, Lan Zhan solo asintió, correspondiendo el abrazo sosteniendo al mayor por
la cintura. Al ver el rostro ligeramente preocupado de su didi, Wei Wuxian sonrió, dándole un
beso en la mejilla: "No te preocupes por eso, si hay algún problema, donde sea, lo
solucionaremos juntos. A demás, el próximo año ya estaremos casados, no debes temer por
mí, todo estará bien".

Lan Zhan sonrió un poco más al tener este pensamiento, llevando una de sus manos a la parte
baja del abdomen del mayor, acariciando esta parte de su cuerpo con sumo cuidado.

"En menos de lo que mi Hanguang-Jun se dé cuenta, tendremos 10 pequeños de cabellos


negros y cintas blancas en la frente correteando por todos lados".

"¿Planeas que tengamos tantos?"

"Hanguang-Jun, Hanguang-Jun... ¿No te has dado cuenta de la energía que pones cuando me
haces el amor? Si ya lo estamos haciendo así ahora que no estamos casados y vivimos en
lugares diferentes, temo por mi pobre cuerpo cuando vivamos y durmamos juntos todos los
días..."

Sintiéndose avergonzado por las palabras de su prometido, las puntas de las orejas de Lan
Zhan se pusieron de un color rojizo, mirando el travieso rostro de Wei Ying junto a él:
"¡Desvergonzado!"
Riendo satisfecho, Wei Ying se dejó tirar en la cama del menor, abriendo las piernas para
este, dejándolo acostarse por completo sobre su cuerpo. Sin dejar de abrazar al mayor por el
cuello, aun atado por la cinta blanca de los Lan, Wei Wuxian atrajo cuidadosamente al menor
para besar sus labios, cerrando los ojos y dejándose hacer. Mientras que Lan Zhan,
deshaciéndose de su propia ropa en medio del beso, pronto bajó sus labios al cuello del
mayor para besarlo, sabiendo que aquella era una parte realmente sensible de su cuerpo.

Jadeando al sentir aquellos húmedos besos y suaves mordidas en la piel de su cuello, Wei
Ying se removió incomodo, sintiendo también como una de las manos de Lan Wangji había
comenzado a pasarse sobre su pecho, jalando y estimulando sus pezones entre sus dedos con
suavidad, escuchando los gemidos de Wei Ying, el cual ya había comenzado a mover las
caderas, buscando ser penetrado.

"Ahora... Hanguang-Jun ahora, no puedo más".

Notando el desespero del mayor, Lan Zhan sonrió, volviendo a acercarse a sus labios para
besarlos intentando calmarlo un poco: "¿Estás seguro? Ni siquiera te he preparado..."

Negando rotundamente a sus palabras, solo deseando sentirse bien, Wei Ying siguió
suplicando desesperado: "Por favor, por favor... No lo necesito... Solo entra ya"

Besando nuevamente y de forma cariñosa los labios del mayor, Lan Wangji cuidadosamente
mete su miembro en la entrada de Wei Ying, escuchando como este gime con fuerza y como
su cuerpo se estremece por completo. Temeroso por no haberlo preparado, y notando que el
interior de este estaba más estrecho de lo habitual, Lan Zhan para a la mitad, mirando
preocupado al mayor bajo su cuerpo.

"¿Estás bien?"

Controlando un poco sus gemidos y su placer, Wei Wuxian sonríe enternecido ante la
preocupación de su pequeño jade, acercándose a sus labios para besarlos con cariño antes de
responderle: "Si... Tan bien que ahora estoy considerando seriamente el hacerlo como ahora
todos los días..."

Sin entender las palabras del mayor, Lan Zhan ladeó la cabeza intrigado, haciendo reír a Wei
Ying, que continuó hablando: "¡Quiero hacerlo cuando nos despertemos también!"

"¿Pero tu cuerpo estará bien con eso?" Preguntó Lan Zhan preocupado.

"Si eres tú... Estaré bien" Respondió Wei Ying con confianza, mirando a su prometido a los
ojos: "Lan Zhan, quiero que me prometas algo"

"Mmm..."

"Sin importar lo que pase, quiero que tú y yo siempre confiemos en el otro, que confiemos en
nuestras decisiones, y que las apoyemos ciegamente".

Reparando en las palabras del mayor, Lan Zhan replicó: "¿Y si yo considero que tus
decisiones son equivocadas? ¿También tendré que aceptarlas?"
"Hanguang-Jun... ¿Acaso no confías en mí? ¿En mi sentido de justicia? ¿En mi
razonamiento? Yo si confió completamente en mi marido. Aun si tú me dices que quieres
destruir Gusu yo lo haría contigo..."

"No bromees con eso" Lo regañó Lan Zhan.

Riendo con la expresión enfadada de su novio, Wei Wuxian volvió a acercarse a sus labios
para besarlos, lleno de amor por este: "Te amo Lan Zhan"

Sonrojándose por las palabras de su omega, Lan Zhan bajó suavemente la mirada, pensando
bien las cosas. Y aunque temía por esa promesa, estaba seguro de que no iba a abandonar a su
amado, y aun si este cometía un error, él lo acompañaría hasta el final para protegerlo.

"Yo también te amo" Respondió Lan Zhan, volviendo a levantar la mirada para fijarla sobre
los grises ojos de Wei Ying.

Volviendo a besar sus labios, Lan Zhan llevo sus manos a las piernas del mayor para
levantarlas un poco más, para así poder entrar profundamente en su interior, escuchando
como Wei Wuxian comenzaba a gemir su nombre sobre sus labios.

En esta vida, ambos querían vivir felices y sin remordimientos, compartiendo una jarra de la
sonrisa del emperador y su amor por toda la eternidad.

Sin saber que el destino ya les tenía otros planes, en esta vida dolorosa y llena de tristeza.

La cual destruye hasta las uniones más fuertes.

Continúa en la segunda parte.

***

Palabras del autor.

¡Hola bebés!

Muchas gracias por continuar conmigo hasta el final de esta primera parte, que como
prometí, es cerrado. Así que si quieren dejar de leer el fanfic aquí, muchas gracias por
haberme leído y fue un placer escribir para ustedes; mis más sinceras gracias, espero que
hayan disfrutado de mi trabajo.

Y para los que se quedan... Muchas gracias por esperar y apoyar más de mi trabajo son
personitas muy especiales, y nunca me cansare de agradecer por lo increíbles que son
conmigo. Me esforzare porque esta segunda parte sea mucho más interesante y mucho mejor
que la primera, así que esperen sorpresitas.

Y antes de terminar, quiero hablar de dos cosas importantes.

Primero: Es muy importante que lean las advertencias del fanfic (ahora sí, de verdad es
importante), porque esta segunda parte tiene escenas y advertencias que muchos odiaran.
Obviamente todos los capítulos censurables tendrán su respectivo aviso en la parte superior, y
se podrán evitar entendiendo perfectamente la trama para aquellos que no quieran leerlos.
Solo no quiero que muchos y muchas se lleven sorpresas desagradables leyendo la segunda
parte si se quedan, quiero que todos disfrutemos de leer lo que voy a escribir.

Segundo: Quiero aclarar también que el fanfic no solo adaptará cosas de la novela original,
también meteré cositas del live action y de la nueva serie MDZS-Q, porque... Pues porque
puedo, ósea si yo quiero que Wifi y Lanchitas vayan en busca de Xue Yang en esta parte
(aunque no sucede en la novela), pues sucederá... Creo. Solo es un aviso, para que si ven
cosas como un Yi de acero volando por ahí o un perro gigante en Sin Noche volando por allá,
sepan que estoy tomando partes de todas las adaptaciones para hacerlo.

Y finalmente, quiero hablar de los tiempos. Han sido meses muy complicados subiendo el
fanfic, y me tomare un descanso algo largo, pero bien merecido. Serán 9 semanas y un par de
días desde el final de esta primera parte; pero para que no me extrañen mucho, en medio de
estas se subirán los dos extras especiales de esta primera parte y el One Shot prohibido de la
Madam y el Wifi, cada uno con una diferencia de 3 semanas.

1. Cuando te conocí; el primer extra, el cual saldrá dentro de 3 semanas un viernes.

2. Noche de bodas; segundo extra que será publicado en 6 semanas un viernes.

3. Dulce desesperación; One Shot prohibido (Señor, protege mi alma de una funa), el cual
será publicado unos días antes del inicio de la segunda parte en 9 semanas.

Sin más, de nuevo muchas gracias a todos y a todas por haber leído mi trabajo, es un placer
escribir para ustedes, y espero contar con su apoyo para este proyecto el cual quiero
diversificar y hacer muy grande <3

Muchas gracias por leerme y por esperar! Un beso!


Especial #1. Cuando te conocí.

Al conocerlo, Lan Xichen estaba seguro de que podía llamarse a sí mismo “tonto”.
Tenía el mundo y la vida por delante, habiendo sido criado como el próximo y excelente líder
de la secta Lan, el joven Xichen estaba dispuesto a “comerse el mundo” y hacer grande a su
secta, así como su padre soñaba desde el encierro y su tío deseaba.
Creciendo con expectativas modestas pero alcanzables, con sueños que creía poder rozar con
sus dedos a cada día que pasaba, y un futuro grandioso. El alfa Lan Xichen fue visto como
una luz, en medio de toda aquella multitud de personas de diferentes sectas, que se veían
atraídos a su luz como pequeños insectos, los cuales atrapados por la amabilidad del inocente
jade, deseaban ser parte de ese brillante futuro de forma desesperada.
“Te amo Lan Huan”.
Quedándose serio por un segundo, mirando a aquel joven de fina figura que estaba frente a sí
mismo, Lan Xichen no supo que decir.
Mientras que Meng Yao, con cierta satisfacción en sus palabras venenosas, acerco sus labios
a los del joven jade, besándolo de improvisto: “Rompe tu compromiso Er-Ge, rómpelo y
cásate conmigo, yo te esperare para estar a tu lado”.
Lan Huan perdió su primer beso tres meses antes de conocerlo.
Meng Yao había sido el primer omega al que pudo conocer de frente. Un joven de sonrisa
radiante y palabras dulces, el cual portando las doradas túnicas del clan Jin de forma tímida,
usualmente se la pasaba molestando a los demás. Lan Huan lo conoció en la primera reunión
de jóvenes cultivadores a la que fue, siendo custodiado por su secta y su hermano mayor,
Meng Yao entro de improvisto en sus habitaciones privadas y pidió su protección.
“¿Qué es esto Lan Huan?” Pregunto Meng Yao de forma curiosa, observando el Guqin de
Lan Xichen: “Se ve tan hermoso y suena tan bien…”
A pesar de la hora, Lan Huan afortunadamente se encontraba despierto cuando Meng Yao
irrumpió en sus habitaciones sin previo aviso, tocando y practicando con su instrumento
musical.
“Es un Guqin joven Jin” Explico Xichen de forma amable.
Alargando una de sus manos en dirección a las cuerdas de su Guqin, y tocándolas
suavemente, rozo los dedos de Xichen a propósito.
Esa noche ambos hablaron sin parar. Para Lan Huan, aquella fue la primera vez en la que
pudo hablar a solas con un omega. En su secta, donde omegas y alfas estaban tan separados
que apenas se veían a lo lejos, el joven Lan nunca había tenido la oportunidad de estar cerca
de un omega alguna vez, así que mirando a Meng Yao se sintió intrigado ¿Todos los omegas
serian como él? Con esas sonrisa juguetonas y hasta coquetas, con platicas inteligentes e
historias que nunca acababan, con esa apariencia tan frágil y esos rostros hermosos. Lan
Huan no pudo evitar quedar cautivado, pero no solo de Meng Yao, el realmente quería
conocer más omegas para hablar con ellos.
Después de aquella noche, ambos no pudieron evitar convertirse en amigos. No era lo usual,
un alfa siendo amigo de un omega era mal visto, pero Meng Yao solía romper y volver a la
tradición cuando le daba la gana; mientras que Lan Huan aún no había podido conocer a su
prometido, así que técnicamente seguía soltero. Acudiendo a Gusu de forma recurrente con la
excusa de aprender a tocar el Guqin, Meng Yao visito desde Lanling al joven Lan para hablar
con él e intentar encantarlo con sus palabras. Lan Xichen era un joven tan dulce que a Meng
Yao no le costó enredarlo con sus palabras.
“¿Yo te gusto Er-Ge?” Pregunto Meng Yao mirándolo a los ojos: “¿Me amas?”
Algo avergonzado, sintiendo nuevamente los tibios labios de Meng Yao sobre los suyos, Lan
Xichen solo pudo responder: “Te quiero A-Yao”.
Lan Huan fue besado por primera vez en uno de los salones más hermosos del Receso De Las
Nubes.
Por un tiempo, Lan Huan realmente creyó que amaba a Meng Yao. Visitando y besando sus
tibios labios una y otra vez escondidos en las sombras de pabellones obscuros, sintiendo el
delicado cuerpo de él joven Guangyao presionándose contra el suyo, amándolo con cada beso
que le robaba. Lan Huan realmente considero hacer lo que este le pedía, anular su
compromiso con los Jiang y casarse con él, seguir su corazón como había hecho su padre una
vez, dispuesto a perderlo todo por ese omega que era el hijo de una prostituta.
Sin embargo Lan Huan no era tan tonto como aparentaba. Encontrándolo en reuniones con
varios cultivadores, notando como lo trataba diferente en público, y como prácticamente lo
ignoraba o trataba mal; especialmente en frente de Nie Mingjue, parte de la familia que antes
lo había acogido.
“Te lo juro Gege” Susurro Meng Yao mirando al mayor a los ojos: “Él me beso, no fui yo…”
Mirándolo de forma juzgadora, sin creer por completo en sus palabras, Nie Mingjue
arrincono al joven omega Jin contra una de las paredes exteriores de aquel pabellón en medio
de la obscuridad, susurrándole: “¿Realmente?”
Tomando una de las manos de Nie Mingjue para llevarla a su rostro y besarla suavemente,
Meng Yao respondió: “Es verdad, completamente verdad gege. Yo solo quiero a Er-Ge, solo
a mi Er-GE, te amo… Por favor sigue luchando por casarte conmigo”.
Saliendo de aquella habitación para tomar un poco de aire, Lan Huan había escuchado
aquella conversación por accidente, sin saber que Meng Yao y Nie Mingjue habían estado
fuera platicando, muy cerca el uno del otro.
“¿Mi gege se siente furioso?” Pregunto Meng Yao interesado: “¿Acaso quieres castigarme?”
Tragando un poco de saliva, Nie Mingjue sintió como el propio Jin Guangyao bajaba su
mano y lo obligaba a presionar suavemente su cuello, sonriéndole.
“Invente algo divertido para usar entre los dos Er-Ge, por favor lléname Er-Ge” Suplico
Meng Yao dulcemente.
Antes de conocerlo, el corazón de Lan Huan fue destruido.
Por su amabilidad, Lan Xichen no dejo de ser amigo de Meng Yao, pero no permitió que
ambos volvieran a tener aquel acercamiento que tuvieron los primeros meses que se
conocieron.
“¿Por qué no quiere besarme? ¿Acaso no me amas más Lan Huan?” Pregunto Meng Yao
ofendido.
Sonriendo amablemente, Lan Xichen respondió: “Pronto conoceré a mi prometido Meng
Yao, fue un error, le debo respeto a Jiang Wanyin”.
Divertido, mirando al joven Lan con interés, Meng Yao respondió: “¿Tu prometido? Lan
Huan nunca ha lidiado con un perro rabioso, se llevara una gran sorpresa cuando llegue a
Yunmeng y conozca al fiero heredero de la secta Jiang”.
Poniéndose de pie y acercándose al joven Lan, Meng Yao beso delicadamente una de sus
mejillas, para luego recoger su Guqin y prepararse para irse.
“Entonces Lan Huan regresara a mis brazos, y yo podre hacerlo olvidar los malos tratos de
aquel omega rabioso” Dijo el joven Jin retirándose de aquel pabellón: “Nos vemos, Xichen-
Ge”.
Quedándose solo en aquel pabellón, sin música ni un solo ruido, Lan Huan perdió a su primer
amor.
¿Qué más podía esperar de su prometido?
Ya no quería pensar que todos los omegas eran como Meng Yao, no quería pensar en sus
manipuladoras palabras y en sus tibios besos, quería pensar que su prometido seria alguien
diferente. Así que en medio de un calmo lago rodeado de lotos, en medio de una multitud y
una comitiva, vio a Jiang Cheng por primera vez.
Se sentía tan nervioso de hacer aquello, caminando directamente frente a la familia Jiang,
hizo una reverencia de forma elegante, sin poder distinguir bien aún cuál de todos aquellos
omegas frente a si mismo era su prometido ¿Acaso era aquella fina joven con una sonrisa
amable y un hermoso vestido violeta? ¿O era aquel joven con una sonrisa muy divertida en el
rostro y una coleta alta?
“Jiang Wanyin, es un placer conocerte por fin. Soy Lan Xichen, heredero de la secta Gusu
Lan y tu prometido” Saludo Lan Huan de forma elegante, unas palaras que había ensayado
para sí mismo infinidad de veces en su propia secta.
Esperando a que su prometido se pusiera nuevamente erguido, Jiang Cheng avanzo con
mucha confianza en medio de la multitud. Ante la atenta mirada de su alfa, el joven omega
hizo una reverencia igual de elegante pero con un toque algo delicado, saludándolo: “Es un
gusto conocerte por fin Lan Huan. Soy Jiang Wanyin, el heredero de Yunmeng Jiang y tu
prometido”.
Quedándose sin habla por un segundo, sintiendo un aroma dulce pero fuerte al mismo
tiempo, Lan Huan vio por primera vez a su prometido.
Al tenerlo frente a si mismo por primera vez, lo primero que el joven Lan pudo notar en su
omega fue su rostro dulce, de mejillas algo sonrojadas y unos ojos brillantes de color violeta;
aquella dulzura enmascarada de seriedad, con esos labios tensos y su rostro que intentaba
demostrar desinterés, se le hizo más tierno que cualquier cosa. Perdiéndose ligeramente en su
cabello negro bien arreglado, y aquellas túnicas típicas de Yunmeng con varios lotos dorados
bordados en telas violetas, Lan Huan creyó que tenía una criatura maravillosa frente a sí
mismo.
“No esperes que me arrodille ante ti solo por ser un alfa” Le dijo Jiang Cheng mirándolo a los
ojos: “Seré tu esposa, pero merezco el mismo respeto que cualquier otro, ya sea beta o un
alfa. Tampoco esperes que me someta a tus decisiones, o a tus deseos, te pateare el trasero si
te sobrepasas conmigo Lan Xichen”.
Pestañeando confundido, Lan Huan observo sorprendido al joven Jiang frente a sí mismo.
Ese era el primer día que pasaban juntos, después de haber tenido un corto recorrido en
Yunmeng acompañados de sus sectas, ahora ambos tenían la oportunidad de poder estar
juntos a solas. Pero para la gran sorpresa de Lan Huan, Jiang Cheng no se parecía en lo
absoluto a Jin Guangyao, el único omega que había conocido antes que él.
Jiang Wanyin no era coqueto, no forzaba algún tipo de toque entre ellos o forzaba su
cercanía, sus conversaciones eran mucho más frías, y aunque tenía las mejillas algo
sonrojadas, era muy serio con su prometido. El joven omega no era nada amable con su alfa,
teniendo un aspecto incluso enojado, despertó la curiosidad de Lan Xichen.
“Entiendo joven Jiang, no me sobrepasare con usted de ninguna manera, jamás” Dijo Lan
Huan con una sonrisa cálida: “Espero ser un buen esposo para usted”.
Mirándolo con cierto desagrado, Jiang Cheng respondió: “Un buen esposo no se preocupa
por ser un buen esposo, simplemente lo es. Si está esperando encontrar mi simpatía con
palabras falsas de amabilidad, entonces tal vez debería romper este compromiso de
inmediato. No me agradas Lan Huan, y mientras sigo escuchando tu voz, me agradas menos”.
Dándole la espalda, Jiang Cheng siguió caminando en dirección a los parajes solitarios de
Yunmeng, siendo rápidamente perseguido por Lan Huan, el cual no sabía bien que decir.
“¿Y cómo podría agradarle más al joven maestro Jiang?” Pregunto Lan Huan.
Mirándolo de reojo otra vez, Jiang Cheng respondió: “Tendrías que volver a hacer”.
Jiang Wanyin no era una persona fácil con la que tratar, un omega orgulloso el cual siempre
tenía una opinión para discutir con Lan Huan, dispuesto a prevalecer su voluntad, impuso una
distancia entre ambos desde el inicio. Y aunque cualquier alfa en su etapa de compromiso
habría terminado la alianza con un omega tan difícil de tratar, aquello solo logro despertar
aún más el interés en Lan Huan, el cual no planeaba rendirse tan fácil. Estando en la secta
Yunmeng Jiang pronto comenzó a entender un poco más de Jiang Wanyin, averiguando sus
intereses y la forma en la cual había sido criado por su madre, una fuerte mujer alfa.
“¿Por qué no hacemos algo que le guste a A-Cheng hoy?” Pregunto Lan Huan, una de las
tardes de la segunda semana del inicio del cortejo.
Mirándolo de la misma forma desagradada de siempre, Jiang Cheng respondió: “¿Algo que
me guste a mí? ¿Qué es lo que crees que sabes de mi Lan Huan? No me gusta tu cara ¿Por
qué debería gustarme algo que me propongas?”
Sonriendo amablemente, acercándose a su omega hasta quedar a su lado, Lan Xichen
respondió: “Por qué me quiero esforzarme por ti, A-Cheng”.
Sonriendo con cierta diversión y hasta burla, Jiang Cheng simplemente asintió, permitiendo
que Lan Huan lo dirigiera por Yunmeng. Teniendo un lugar reservado especialmente para
aquella ocasión, Lan Huan lo llevo a un lugar algo apartado de Lotus Pier, donde había un
hermoso paraje cerca al lago, donde nadie transitaba usualmente. Sintiendo la mirada
juzgadora de Jiang Cheng sobre sí mismo, Lan Huan rápidamente se apresuró y tomo a
Shuoyue, desenvainándola.
“¿Qué haces?” Cuestión Jiang Cheng mirándolo.
Tomando su espada gentilmente, Lan Huan la extendió a Jiang Cheng, sonriéndole:
“Podemos entrenar un poco nuestro cultivo”.
Suspirando exasperado, Jiang Cheng se cruzó de brazos, negándose: “¿Eres idiota? Las
prácticas de cultivo están prohibidas durante el tiempo de cortejo en Yunmeng”.
“Según la tradición las prácticas de cultivo no pueden darse en los sitios donde se está dando
el tiempo de cortejo” Explico Lan Huan: “Pero eso no contempla legítima defensa”.
Sin poder preguntar si quiera, Jiang Cheng se sorprendió y se sonrojo mucho cuando su alfa
se acercó a él y acaricio su rostro con suavidad, tocándolo por primera vez en toda su vida.
Ardiendo en furia y de vergüenza, lo primero que pensó hacer Jiang Cheng fue golpear a ese
osado alfa, siendo esquivado fácilmente por Lan Huan, el cual agachándose esquivando el
golpe, volvió a ofreceré a Shuoyue al menor.
“Hace frio joven Jiang, puedo abrazarlo por la cintura si me lo permite”.
Presionando fuertemente los labios, Jiang Cheng finalmente acepto tomar aquella espada y
señalar a Lan Huan con esta: “Tu…”
Sonriendo, Lan Huan y su espada aceptaron los fuertes ataques de Jiang Cheng, el cual
ardiendo en furia y en vergüenza, comenzó a intentar cortar a Lan Huan con aquella hermosa
espada que le recordaba a la luna, fría y hermosa como el alfa que tenía en frente. Logrando
esquivar los ataques moviéndose rápido y con gracia, bloqueando muchos de estos con la
vaina de su espada, Lan Huan vio sonreír a Jiang Cheng por primera vez, observando sus
labios curvándose por la felicidad que sentía al poder entrenar.
Al anochecer, sin decir palabra, ambos regresaron a Lotus Pier. Jiang Cheng entendió que
ambos estaban jugando, así que no ataco con toda su fuerza, y simplemente se divirtió
demostrando sus habilidades con la esgrima junto a su alfa. Así que al día siguiente, fue Jiang
Cheng quien espero al joven alfa Lan en aquel lugar apartado. Cuando Lan Huan llego al
lugar en busca de Jiang Cheng, se sorprendió cuando Jiang Cheng le arrojo a Sandu, una
delicada espada que permitió que Lan Huan la desenvainara.
“Es en serio ahora Lan Xichen” Dijo Jiang Cheng acercándose a su prometido para tomar a
Shuoyue: “Les diré a todos como me atacaste”.
Sonriendo con gracia, preparándose para pelear, Lan Huan respondió: “Me disculpare
entonces, Wanyin”.
Fue entonces que ambos comenzaron a moverse por aquel prado peleando de forma tranquila
pero fuerte, intercambiando las espadas varias veces, dejando destellos azules y violetas en
medio de la obscuridad. Ambos no necesitaron hablarse, pero en silencio, a lo largo de los
días, ambos comenzaron a llevarse mejor.
“Debes subir más el brazo” Comento Lan Huan, guardando a Sandu volviendo a envainarla.
Mirando a su alfa algo confuso, Jiang Cheng preguntó: “¿Cómo?”
Tomándose la libertad de acercarse a su omega, Lan Huan lo tomo delicadamente del brazo
que aun sostenía a Shuoyue, subiéndolo en un ángulo mucho mayor al que solía entrenar
Jiang Cheng, Lan Huan le explico cómo debía hacer aquel movimiento de la esgrima.
“Eres un poco más bajo que un alfa o un beta” Explico Lan Huan: “Si quieres cortar sus
cuellos, el ángulo debe ser mayor”.
Poniéndose frente a su omega, Lan Huan acerco su cuello al filo de su propia espada,
mostrándole a este como debía apuntar. Observando como Jiang Cheng observaba y aprendía,
Lan Huan volvió a sentirse sumamente contento y feliz, dejando que su omega practicara
cuanto quisiera en su cuerpo.
“¿Nunca has practicado con otro alfa?”
Negando con la cabeza, mientras envainaba a la espalda de su prometido de nuevo, Jiang
Cheng respondió: “No, aun no. Los alfas no quieren practicar conmigo, solo practican con
Wei Wuxian porque es más fuerte que yo, cualquier alfa me tiraría al piso con facilidad”.
“¿Tirarte al piso?”
Resoplando con cierta molestia, Jiang Cheng se explicó: “Yunmeng es una secta de omega,
hay pocos alfas, pero los alfas de aquí no son respetuosos con los omegas, son bruscos, no
entienden que nosotros por nuestra propia complexión somos un poco más débiles. Wei
Wuxian puede lidiar con esa brusquedad, ser tirado al piso y golpeado, pero eso es porque él
también tira a otros alfas al piso. Yo no puedo con Wei Wuxian aun ¿Podre tirar a un alfa al
piso entonces? Si no puedo vencer al omega más fuerte de mi secta ¿Cómo podría
enfrentarme con un alfa?”
Notando la tristeza en los ojos de su omega, Lan Huan no dudo y se arrodillo al piso frente a
Jiang Wanyin, mirándolo desde el piso con una sonrisa.
“¿Qué estás haciendo?” Cuestiono Jiang Wanyin sorprendido: “Ponte de pie”.
“Un alfa se ha puesto a tus pies, lograste vencerme. Ahora no debes temer por enfrentar a
otros alfas, puedes vencerlos a ellos si me venciste a mí”.
“¿Estás jugando, idiota? No te burles, no te vencí, solo estas arrodillándote para reírte de mí,
como Wei Wuxian cuando deja que lo venza para que no quede mal frente a los demás
miembros de mi secta”.
Tomando delicadamente la mano de Jiang Cheng, Lan Xichen beso delicadamente el dorso
de la mano de esta, haciendo soltar un jadeo de sorpresa al omega, el cual no podía creer lo
que estaba haciendo el mayor.
“Desde el primer momento he sido vencido por ti, Wanyin. Perdiendo ante ti por no poder
ganarme tu corazón, por ver como todos mis intentos de conquistarte son en vano, por tus
habilidades, tu siempre me vences Jiang Cheng” Confeso Lan Huan, mirando a su omega
desde el piso.
Balbuceando ligeramente, Jiang Cheng replico: “P… Pero esto es una tontería… De
verdad…”
Negando con la cabeza, Lan Xichen respondió: “No lo es. Si es algo importante para Wanyin,
entonces es importante para mí. Por favor entrena junto a mí, y deja que te ayude a derribar a
Wei Wuxian. Eres demasiado fuerte como para creer que no podrías vencer a quien te
propones, déjame ayudarte”.
Poco después de eso, cuando el periodo de cortejo en Yunmeng termino, corrió un gran
rumor en todos Lotus Pier.
“¿Lo escuchaste? El heredero de Yunmeng logro vencer al hijo del gran cultivador inmortal,
Wei Wuxian”.
“¿Logro vencer al cultivador omega más fuerte de Yunmeng? ¿Cómo es eso posible? Wei
Wuxian no había sido vencido por un omega antes, solo algún alfa logro alguna vez tirarlo al
piso”.
“Jiang Wanyin tiro al piso a Wei Wuxian tres veces, en tres diferentes rounds. En la tercera
por poco y lo deja noqueado”
Después de entrenar “en soledad” por varios días, Jiang Wanyin logro vencer a su hermano
mayor usando técnicas características de su secta y algunas otras que nadie había visto ahí
jamás, movimientos únicos de Gusu que le había enseñado su prometido, las cuales Jiang
Cheng había logrado entremezclar fácilmente con sus propios movimientos.
“Gracias”.
Girándose confuso en dirección a su omega, Lan Huan pregunto: “¿Por qué?”
“¿No deberías decir ‘De nada’? Que grosero eres Lan Huan, voy a patearte” Dijo Jiang
Cheng.
Sonriendo por aquellas palabras de su omega, Lan Huan respondió finalmente: “De nada A-
Cheng”.
Sonrojándose un poco, asintiendo ante las palabras de su alfa, Jiang Cheng volvió a comer a
gusto su cena. Y aunque Lan Huan nunca supo exactamente por qué le habían agradecido, en
aquella visita a Gusu por parte de su prometido, Jiang Cheng siguió insistiendo en practicar a
solas con él, usando a Shuoyue y aprendiendo más técnicas de la secta Gusu Lan. Llegando al
punto que el maestro Lan Qiren, viendo sus prácticas en los dojos del Receso Entre Las
Nubes, intervino y le enseño un par de cosas al joven omega, permitiendo que de forma
excepcional, Jiang Cheng pudiera entrenar con os discípulos de su secta en pequeñas
reuniones por las mañanas.
En uno de los primeros entrenamientos de Jiang Cheng con su secta, Lan Huan le presento a
Jiang Cheng a su hermano: “Wanyin, este es mi hermano Wangji, el prometido de tu hermano
Wuxian”.
Acercándose a ese pequeño alfa de solo 11 años, el cual lucia muy serio con los típicos
atuendos de la secta Lan, Jiang Cheng rápidamente hizo una reverencia: “Es un gusto
saludarlo de nuevo joven maestro Lan”.
Respondiendo la reverencia con elegancia, Lan Zhan respondió: “El gusto es mío”.
Jiang Cheng ya había visto antes al segundo maestro Lan, el cual lo había recibido con la
comitiva de Gusu a su llegada. Pero aquella era la primera vez que tenía la oportunidad de
saludarlo de forma privada. Sin tener tiempo de hablar mucho, Lan Zhan pronto fue rodeado
de otros pequeños jóvenes Lan, del cual resalto un pequeño niño con los ojos brillantes y el
rostro sonriente.
“A-Zhan, A-Zhan, préstanos a Bichen, vamos préstamela…” Pidió Su She, un joven beta que
era el mejor amigo de Lan Wangji.
Aquellos jóvenes Lan aún no habían obtenido sus espadas espirituales, a diferencia de Lan
Wangji, el cual aun a pesar de su corta edad, recibió su espada poco tiempo antes de la visita
de Jiang Cheng. Así que creando cierta fascinación en los demás jóvenes de la secta, Bichen
pasaba mucho tiempo fuera de las manos de Lan Wangji con los demás niños. Asintiendo
ante las peticiones, Lan Zhan pronto se retiró con los demás jóvenes de su edad,
entregándoles a Bichen, la cual era mayormente usada por Su She, aun cuando la espalda
solía sellarse por si misma cuando este intentaba desenvainarla.
Mirando al joven jade, el cual ayudaba a su amigo a desenvainar su espada, Jiang Cheng se
lamentó: “Wei Wuxian acabara con ese niño…”
Escuchándolo con curiosidad, Lan Xichen pregunto: “¿Disculpa?”
Recordando que estaba con su prometido, Jiang Cheng únicamente pudo ponerse a reír,
intentando hacerle olvidar al mayor lo que había dicho.
El tiempo de compromiso de ambos continuo, y avanzando lentamente, Lan Huan y Jiang
Wanyin se llevaban cada vez mejor con cada visita por el tiempo de cortejo que realizaban
juntos. Pocos meses antes del encuentro de Wei Wuxian y Lan Wangji por primera vez, se dio
una gran conferencia de cultivo en Lanling, donde por primera vez en mucho tiempo, tanto
omegas como alfas fueron invitados a demostrar sus habilidades. Yendo por separado, Lan
Huan y Jiang Cheng se encontraron en aquella conferencia, de la cual relataba sobre todo la
competencia de lucha, en la que sin distinción de géneros pelearían entre todos.
Teniendo varias luchas separadas, en las cuales tanto alfas como omegas pelearon unos con
otros. Lan Xichen fue increíblemente vencido por Nie Mingjue, mientras que Wei Ying
venció tanto a Nie Mingjue como Nie Huaisang, y en medio de las eliminatorias, una gran
sorpresa se dio. Por más que todos apostaban por ese cultivador omega, tan salvaje y con
túnicas poco convencionales usando sellos en medio de las peleas, el heredero de Lanling, el
alfa Jin Zixuan lo venció de una manera increíble.
“¡Ese maldito pavo real!” Grito Wei Ying furioso, entrando en el área de descanso junto a los
demás miembros de su secta: “Su espada es malditamente rápida”.
Con tierra por todo el cuerpo tras haber caído al piso de una forma espectacular, Wei Ying
lucia furioso, refunfuñando y limpiando su ropa a golpes con sus palmas. Los demás
miembros de la secta comentaban unos a otros realmente preocupados, mirando a Jiang
Wanyin, el cual ayudaba a Wei Wuxian a limpiarse.
“Todos comentan que esa estúpida espada de oro que tiene, tan costosa, fue hecha por una
dama en una villa, la familia Mo o algo así, una supuesta familia que se encarga de hacer
armas espirituales maravillosas” Se quejó Wei Ying suspirando: “Ya vera mañana, voy a
ganarle en el concurso de arquería, maldito, seguro me mirara sobre su hombro todo el día de
hoy… No lo soportare”.
Poniendo un paño de agua sobre el rostro de su hermano con cuidado, Jiang Cheng lo regaño:
“Wei Wuxian, deja de decir tus estupideces, ese de quien hablas es el prometido de nuestra
Shijie”.
“Ella merece algo mejor…”
“Cállate…”
Mirando a ambos hermanos pelear, uno de los jóvenes cultivadores omegas intervino
rápidamente, mirando a Jiang Cheng con cierto temor, interviniendo para decir: “Joven
maestro, la próxima pelea… Sera su pelea contra Jin Zixuan, son los últimos que quedan en
el torneo”.
Después de haber tenido peleas maravillosas con alfas y omegas de diferentes sectas, Jiang
Cheng había logrado tener un puesto incluso mejor que su prometido alfa en aquella
competencia. Jiang Wanyin sabía que quedaría en los puestos más altos, pues era un omega
muy fuerte, había entrenado duro, y hasta los mismos miembros de su secta habían
comenzado a alabar sus nuevas cualidades. Sin embargo algo que no podía negar, era que
tuvo bastante suerte en sus peleas, ni por asomo tuvo peleas tan complicadas como las de Wei
Wuxian, y aunque gano todas, fueron peleas muy reñidas con cultivadores que no eran ni
siquiera la mitad de hábiles que Jin Zixuan.
Poco antes de iniciar la pelea Jiang Cheng busco a Lan Xichen, mientras todos los presentes
comenzaban a alabar a Jin Zixuan y nadie creía en Jiang Wanyin, a quien habían descrito
como un omega mucho más inferior que Wei Wuxian. Todos comparaban que si el hermano
virtuoso había mordido el polvo con el alfa Jin, el hermano más débil ni siquiera podría dar
una pelea interesante.
“No tengas miedo” Le pidió Lan Huan, observando a su prometido realmente nervioso.
Sujetándose fuertemente de Sandu, mientras miraba de manera nerviosa el coliseo de peleas,
Jiang Cheng replico: “Hare el ridículo ahí afuera, no podre vencerlo. El estúpido de Wei
Wuxian no pudo hacerlo…”
Notando el nerviosismo en el menor, intentando tranquilizarlo, Lan Xichen se acercó mucho
más al contrario y delicadamente acaricio una de sus mejillas: “¿Eso qué significa? Tú ya has
vencido a tu hermano”.
“Y después de eso el volvió a vencerme, y luego lo vencí de nuevo, y luego me volvió a
vencer… Pelear con Wei Wuxian no es un estándar para mi ahora” Explico Jiang Cheng
mirando a su alfa con miedo: “No podre vencer a Jin Zixuan, no lo conseguiré”.
Tomando a Shuoyue, Lan Xichen se acercó a Jiang Cheng y con mucha confianza dejo su
querida espada en las manos de este, mirándolo a los ojos: “Yo creo que tu podrás hacerlo.
Shuoyue te protegerá, y yo estaré en la tribuna muy cerca. Si veo que ese alfa se sobrepasa
contigo o quiere lastimarte, voy a intervenir de inmediato y le daré una paliza”.
“Eso está en contra de las normas Xichen”.
“No me interesa”.
Sonriendo con suavidad, Lan Xichen tomo la mano de Jiang Cheng entre las suyas por
primera vez, intentando darle la confianza que a este le faltaba. Y tomando a Sandu, el alfa
Lan condujo a su prometido al área de peleas, donde mirándolo caminar algo tembloroso en
dirección al coliseo, supo que realmente estaba enamorado de ese asustado joven que se había
aferrado fuertemente a él antes de la pelea.
Como había prometido, Lan Xichen abandono rápidamente el área de descanso para ir a las
tribunas, donde yendo con los propios miembros de su secta y demás cultivadores, observo
ansioso la pelea.
“¿Pero qué espada está trayendo?” Observo Wei Ying en voz alta: “¿Dónde dejo a Sandu?”
Ocultando la espada de Jiang Cheng entre sus túnicas, Lan Huan sonrió con cierta diversión,
observando como Jiang Cheng y Jin Zixuan hacían cortas reverencias en el área del coliseo
para saludarse. A diferencia de Wei Wuxian, el cual insulto a Jin Zixuan desde un inicio y se
burló de el en su propio hogar, haciendo enfurecer al alfa Jin; Jiang Cheng fue cortes desde el
inicio, mirando a cada instante a su alfa en las tribunas, cada vez más nervioso. Gran parte de
la victoria de Jin Zixuan se debió al enfado que llego a sentir por Wei Wuxian cuando este se
mató de risa en su cara por su espada nueva, brillante y llena de oro, peleando con ese
desvergonzado omega con todas sus fuerzas, hasta el propio Jin Zixuan se sorprendió de
haberlo vencido. Pero al ver a Jiang Cheng frente a él, el hermano de su prometida a la cual
amaba con todo el corazón, y con el cual aunque no simpatizaba por completo, nunca había
sido irrespetuoso; Jin Zixuan sintió como se le ablandaba el corazón por un instante.
Preparándose para la pelea, fue Jiang Cheng quien dio el primer ataque, sorprendiendo a
todos. Ante la vista de todas las sectas, Jiang Wanyin no desenvaino a su espada y por
algunos golpes ataco a Jin Zixuan con la funda, un movimiento muy típico de los alfas de la
secta Lan, ya que se necesitaba mucha fuerza para hacerlo y no era muy típico de ver en
omegas. Sonriendo satisfecho al ver como su omega usaba ese tipo de técnica que tanto le
había costado aprender, haciendo retroceder a Jin Zixuan, Lan Huan presiono a Sandu
ligeramente fuerte entre sus manos, sintiéndose nervioso.
Las peleas de cultivadores tenían reglas muy estrictas, aun cuando permitían el uso de
espadas y otras armas espirituales, no podían herirse de gravedad o a puntos vitales del
cuerpo. Aquello que era respetado por ambos competidores resaltaba a la vista, sin embargo
no dejaba de ser una preocupación para Lan Huan, quien temía por un posible accidente en la
arena. Cuando Jin Zixuan finalmente pudo reaccionar y levanto a su espada para comenzar a
atacar, Jiang Wanyin se vio obligado a desenvainar la espada Shuoyue, comenzando a
blandirla de igual manera.
En una pelea muy rápida entre ambas espadas, en las cuales ambos jóvenes retrocedían y
avanzaban por igual, Jiang Cheng buscaba constantemente a su alfa en la tribuna, y viéndolo
sonreír a la distancia, seguía adelante. Pronto Jin Zixuan decidió usar su última técnica, y
levantando su espada para ir directamente por Jiang Cheng con un fuerte golpe, se sorprendió
cuando el omega salto en el aire usando una de las típicas acrobacias Lan, y de improvisto
dio un fuerte golpe con uno de sus brazos en toda la espalda de Jin Zixuan con todas sus
fuerzas, un movimiento típico de su secta. Logrando quitarle el balance al alfa Jin, Wanyin
remato el ataque dando una patada en una de sus piernas y golpeando la espalda de este con
Shuoyue para derribarlo por completo.
Tirándolo en el piso y ganando, todos los omegas Jiang estallaron en gritos de victoria,
siendo principalmente ruidosos por parte de Wei Wuxian, quien celebro como su propia
victoria el ver a Jin Zixuan en el piso. Mientras que el resto de la tribuna, incluyendo a
miembros de la secta Lanling Jin, aplaudieron complacidos el combate, felicitando de esa
manera al joven cultivador omega, el cual no pudo evitar sonreír algo cohibido por todas las
felicitaciones que recibía.
Observando como todos los miembros de la secta Yunmeng Jiang invadían la arena para
felicitarlo, Lan Xichen, el cual se sentía sumamente orgulloso, quiso bajar también. Sin
embargo fue detenido por alguien, quien se puso en su camino en medio de aquella tribuna.
“Fue una excelente pelea ¿No lo crees A-Chen?” Pregunto Jin Guangyao mirando a Lan
Xichen con una sonrisa: “Fue una gran sorpresa, no tenía idea de que Jiang Cheng fuera tan
fuerte, especialmente porque uso a Shuoyue, una espada que es bastante pesada y muy difícil
de maniobrar”.
Meng Yao, el cual no parecía muy interesado en ese tipo de convenciones, no participo como
peleador para aquella ocasión. Quedándose únicamente con las personas de su secta, al lado
de su padre y su nueva madre, observo todo desde la distancia, aplaudiendo y celebrando con
la secta Nie en ciertas ocasiones. Al ver al omega Jin, con el cual no se había encontrado
desde hace un tiempo, Lan Xichen solamente pudo sonreír con cierta amargura, recordando
todo lo que había sucedido entre ellos antes de su separación.
Volviendo a mirar la arena, donde Jiang Cheng era ovacionado por sus compañeros de secta y
otros omegas, Jin Guangyao comento: “Yo tome a Shuoyue un par de veces antes, me dejo
desenvainarla entonces, aun cuando sigo practicando mi cultivo y no pude usarla entonces.
Deberías dejarme probar ahora Xichen-Ge, seguro puedo hacer algo interesante…”
“No creo que sea buena idea A-Yao” Dijo Xichen sin perder su suave sonrisa: “No creo que
sea buena idea que sigamos encontrándonos a escondidas”.
Mirándolo con cierta lastima, con un ligero puchero, Jin Guangyao pregunto: “¿Sigues
enojado conmigo A-Chen?”
“No lo estoy A-Yao”.
“¿Entonces por qué ya no quieres verme?”
Recordando su comportamiento en toda aquella reunión, en la que literalmente había evitado
a Meng Yao desde su llegada, Lan Huan únicamente pudo sonreír con cierta incomodidad,
aun sin sentirse bien al estar hablando con ese omega.
Respondiendo con sinceridad, Lan Huan dijo: “No creo que deberíamos seguir hablando,
Meng Yao”.
Mirando al alfa frente a si mismo con mucha falsa inocencia, Meng Yao respondió: “¿No
deberíamos? ¿Por qué?”
“Yo ya tengo un omega al que amo”.
Al escuchar esas simples palabras, Meng Yao perdió su sonrisa y por un instante frente a Lan
Xichen se notó muy serio y hasta enfadado. Pero controlándose rápidamente, recuperando ese
semblante feliz y usualmente tranquilo que siempre tenía, Jin Guangyao respondió: “¿Y eso
que tendría que ver con ser amigos?”
Pestañeando confuso, nada preparado para aquellas palabras que le dijo el descarado omega,
Lan Xichen no supo bien que podría responder al respecto, pues tenía sentimientos
encontrados al respecto. Después de tener tantos cambios en sus pensamientos por las
opiniones y palabras que Jiang Cheng le había dicho más de una vez, Lan Huan ahora
definitivamente creía en la fuerza de los omegas, y en su capacidad para ser iguales e incluso
mejores a los alfas. Algo que significaba que los omegas definitivamente podían ser amigos
de los alfas.
“¿Zewu-Jun no quiere ser mi amigo entonces?”
Volviendo en su raciocinio por un minuto, teniendo fuerza solo pensando en Jiang Cheng,
Lan Xichen respondió: “Los omegas y los alfas pueden ser amigos definitivamente, pero no
creo que sea apropiado en nuestro caso Meng Yao. Yo amo Jiang Wanyin, es mi prometido, y
es el omega con el que quiero pasar mi vida. No hay espacio para nadie más en mi corazón”.
Poniendo un rostro de absoluto dolor, sin poder aceptar la pérdida de su amigo, Jin Guangyao
se acercó más a Lan Xichen, al cual tomo delicadamente de la mano aun en medio de la
inconformidad del alfa, diciéndole: “Por favor gege… No me dejes solo… Voy a perder
demasiado si no te tengo a mi lado”.
Apartando su mano de aquel omega, Lan Xichen rápidamente se apresuró a decir: “No me
pierde Jin Guangyao, yo siempre podre ayudarlo en lo que me pida. Pero lamento no poder
corresponder más su cariño, por favor, no quiero seguir intimando con usted”.
Mirando a ese alfa de forma desesperada, Jin Guangyao quiso decir más, pero simplemente
guardo silencio, pues vio quien se acercaba.
Saliendo de la arena, Jin Zixuan se acercó a su hermano y a Lan Xichen acompaña dado de su
primo, observando algo confuso ese espectáculo. Para Jin Zixuan no era una gran sorpresa
saber que su padre había tenido más hijos, creció con la certeza de tener más hermanos por el
mundo. Así que cuando Meng Yao entro en su familia por intervención de diferentes
personas que presionaron la situación, Jin Zixuan lo trato con respeto y hasta con cariño.
Después de intimidar con aquel joven omega, al cual su alfa ya reconocía como su familia,
Jin Zixuan no pudo evitar volverse algo sobreprotector con Meng Yao; algo que era usual
entre familiares alfa y omega, pues los alfas que son sumamente territoriales suelen volverse
paternales y sobreprotectores con omegas que consideran suyos por ser familia.
Sin dirigirse a Lan Xichen, únicamente hablando con su hermano, Jin Zixuan pregunto: “¿Por
qué te apartaste de los omegas de la secta? Hay muchos alfas en la reunión, no es bueno que
un omega este solo”.
“Solo vine a saludar a un amigo” Respondió Meng Yao con un tono dócil, manteniendo su
distancia con Lan Huan.
Decidiendo intervenir para no agrandar la situación, Lan Xichen saludo: “Joven líder Jin, es
un gusto verlo, fue una excelente pelea”.
Observando a ese alfa al lado de su hermano sin poder ser objetivo por causa de su alfa, Jin
Zixuan respondió de forma seca: “Gracias”.
Tomando a su primo del brazo de una forma suave, Jin Zixun únicamente dijo: “Tranquilo A-
Xuan, no pasa anda”.
Jin Zixun, el primo mayor de Jin Zixuan, era un joven beta siempre descrito por un carácter
benevolente. Era respetado en las demás sectas por su alto nivel de cultivo, que le permitía
usar técnicas que requerían mucha energía espiritual pero sin cansarse. Paso un tiempo con
algunos monjes que trabajaban para la secta Lanling Jin, y al regresar, se convirtió en un
cultivador que respetuoso de las leyes budistas, daba consejos a todos los líderes.
“Regresemos con nuestra secta primos, pronto iniciara el banquete de la tarde y Madam Jin
querrá vernos a todos juntos” Recordó Jin Zixun de forma tranquila: “Lan Xichen,
lamentamos haberlo importunado”.
Sintiéndose bastante cómodo con aquel joven que usaba un tono tranquilo y sereno al hablar,
Lan Huan hizo una ligera reverencia amablemente, respondiendo: “Descuide joven Jin, fue
un placer hablar con ustedes”.
Suspirando con cierta resignación, aun dejándose llevar por los sentimientos de su alfa, Jin
Zixuan hizo una reverencia para Lan Xichen y se marchó aun sujetando a Meng Yao del
brazo. Mientras que Jin Guangyao, mirando a Lan Xichen de reojo por última vez, también
suspiro con cierta resignación, caminando detrás de su hermano dócilmente, pero alejándose
discretamente de Jin Zixun. Por lo general, el beta Jin Zixun no era evitado por los demás
cultivadores, era consultado y respetado por su sabiduría; sin embargo Meng Yao siempre
solía mirarlo con cierta desconfianza y hasta rabia, evitándolo de una forma algo inútil pues
ambos pertenecían a la misma secta.
Esto siempre resulto curioso para Lan Huan, pues en el pasado, fue Jin Zixun quien intervino
personalmente con Madam Jin para que aceptara a Meng Yao como parte de su secta. Cuando
Jin Guangyao aún era propiedad de la secta Qinghe Nie, y apoyado por Ni Mingjue logro una
audiencia con todos los líderes de las sectas para intentar persuadir a la secta Lanling Jin de
poder admitirlo, fue fundamental la participación de Jin Zixun para la decisión, un beta que
siempre trato con respeto y apoyo a Meng Yao ante los ojos de Lan Xichen.
Aun sintiéndose curioso por lo que había visto, Lan Huan espero a que los jóvenes Jin se
alejaran un poco antes de abandonar su lugar en la tribuna y bajar a las arenas de pelea, donde
casi todos ya se habían dispersado y solo quedan algunos omegas Jiang riendo. Ubicando a
Wei Wuxian entre la multitud con facilidad, resaltando por ser un omega un poco más alto y
apuesto que el resto, con una risa algo escandalosa y una actitud singular; Lan Xichen se
acercó a este, esperando encontrar a Meng Yao.
Observando al alfa primero, Wei Wuxian lo saludo haciendo una reverencia: “Lan Xichen, es
un gusto verte de nuevo”.
Correspondiendo la reverencia al llegar junto a ese omega, saludando también a sus
acompañantes, Lan Huan pregunto: “¿Has visto a Jiang Wanyin?”
“¿A-Cheng? ¿Acaso no está contigo?” Pregunto Wei Ying tan distraído como siempre.
“El joven Jiang estaba llorando” Intervino rápidamente una de las cultivadoras omega que
acompañaba a Wei Ying: “Creímos que se había lastimado y acudió a usted para hablarle”.
Quedándose pasmado, pues no había visto a Jiang Cheng para nada, Lan Huan pronto pudo
ubicar algo en el piso cerca de una de las salidas de la arena, decidiendo acercarse a esta
abandonando al grupo de omegas. Caminando rápidamente a una de estas salidas, Lan Huan
tomo del piso su espada, la cual algo empolvada, había sido arrojada ahí por Jiang Cheng.
Confuso, sin entender este comportamiento en lo absoluto, Lan Xichen se apresuró a salir del
coliseo siguiendo ese camino, esperando encontrar a Jiang Cheng para pedir explicaciones.
Caminando por los lujosos jardines exteriores de la torre Koi, donde estaba el coliseo y el
área de entrenamiento, Lan Huan no tardó en encontrar a Jiang Cheng. Sentado al borde de
un pequeño estanque repleto de lotos artificiales, escondía su rostro entre sus manos, llorando
desconsolado. Acercándose a este preocupado, pensando que realmente estaba herido, Lan
Huan pregunto: “¿A-Cheng?”
Sin mirarlo si quiera, Jiang Cheng respondió: “Aléjate”.
Sin entender esta brusquedad por parte de su amado prometido, Lan Huan rápidamente
pregunto insistiendo: “¿Qué sucede A-Cheng? ¿Por qué te fuiste tan de prisa?”.
“¿Por qué estás aquí?”
Sin entender la pregunta, agachándose al lado del menor en silencio, sosteniendo tanto a
Shuoyue como a Sandu, Lan Huan respondió: “Vine por ti”.
Apartando sus manos de su rostro para presionarlas en puños, Jiang Cheng respiro profundo
y miro aquel estanque lleno de lotos intentando tranquilizarse, sin querer llorar para el alfa
Lan Xichen.
“No lo entiendo” Negó Jiang Wanyin recomponiéndose y recuperando su fuerza habitual:
“No entiendo tu esfuerzo por mantener este compromiso, por quedarte a mi lado”.
Intentando comprender a su omega, aunque temía hacerlo enfadar más, Lan Huan pregunto:
“¿Por qué no lo entiendes?”
“Por qué Lan Xichen ama a otro”.
Quedándose en blanco, observando el sufrido rostro del omega, el cual había estado llorando
en soledad desde hace un par de minutos, Lan Xichen quiso tocarlo para abrazarlo y
consolarlo, aunque sabía que se ganaría una buena golpiza solo de intentarlo.
“¿Crees que soy idiota?” Pregunto Jiang Cheng comenzando a enfurecerse.
“Claro que no ¿Por qué creería algo semejante?”
Mirándolo a los ojos lleno de rabia, Jiang Cheng respondió: “Te vi con Meng Yao”.
Jiang Cheng no había apartado su mirada de su prometido todo el tiempo, ni siquiera cuando
fue encontrado por los demás miembros de su secta y se lo declaró ganador, siempre mantuvo
su mirada sobre su alfa y su amable sonrisa. Así que cuando vio a Jin Guangyao acercarse y
tomarlo de la mano, rompió a llorar y escapo corriendo, arrojando a Shuoyue furioso en
medio de su huida.
Continuando, Jiang Cheng dijo: “¿Sabes lo que dicen los demás de ustedes? ¿Las cosas que
cuentan? Como Meng Yao acudió a tus aposentos de noche, como pasa tiempo a solas
contigo en tu secta, como te persigue a todos lados en las reuniones de cultivadores ¿Cree que
soy idiota para no darme cuenta de lo que pasa?”
Sin saber que decir, entendiendo aquello como medias verdades, Lan Huan solo pudo
responder: “A-Cheng…”
“No vas a engañarme” Dijo Jiang Cheng con furia: “No soy un omega con el que puedas
jugar, te lo dije desde un principio. No entiendo cuál es el punto de mantener este
compromiso si no me amas, si yo ni siquiera te atraigo. Jin Guangyao es un mejor partido que
yo, la secta Lanling Jin es mucho más rica que la secta Yunmeng Jiang, él está soltero y es
mucho más hermoso. Yo siempre lo supe… Y por eso no quería enamorarme de ti”.
Entendiendo mejor el proceder de su omega, entendiendo por fin la razón por la cual el joven
Jiang había sido tosco al inicio con Lan Xichen, evitando su cariño a toda costa; el alfa se
sintió sumamente apenado. Sabía que sus decisiones afectarían a su prometido, a ese que
tanto amaba, pero aun cuando en un tiempo considero exactamente eso que Jiang Cheng le
sugería, ahora el solo considerar perder a Wanyin le daba un dolor terrible. En su corazón,
ahora el joven Jiang tenía más peso.
“No sucedió nada entre nosotros” Explico Lan Huan, mintiendo a medias.
“¿No lo hizo?”
“Puedo contarte todo si así lo deseas, toda la plática que tuve con Meng Yao esa noche”
Propuso Lan Xichen con seriedad: “Puedo decirte todo lo que me dijo hoy. Él y yo somos
solamente amigos A-Cheng, no hay nada entre nosotros…”
“¡No me interesa saberlo! ¡Eres una mierda!” Le grito Jiang Cheng dolido, intentando
alejarse de él.
Dándose cuenta de lo que estaba intentando hacer su omega, Lan Xichen actuó con rapidez,
poniéndose de pie a su lado para abrazarlo por la cintura e impedir que se fuera.
Furioso por ser detenido, Jiang Cheng exigió: “Suéltame”.
Sin querer darse por vencido, Lan Xichen respondió: “No”.
Volviendo a romper en lágrimas, sintiéndose absorbido por aquel aroma tan característico de
su alfa, Jiang Cheng pregunto: “¿Por qué? ¿Por qué me haces esto si no me amas?”
Sintiendo mucho dolor por ver a su omega sufrir, Lan Huan solo lo abrazo más fuerte,
respondiendo: “Porque yo amo a Jiang Wanyin. Te amo, de verdad te amo”.
Negándose a esa confesión, Jiang Cheng dijo: “Mentiroso…”
“No hay ningún otro omega para mí que no seas tú, Yin Yin” Dijo Lan Huan llamándolo de
forma cariñosa por primera vez en su vida: “Ningún omega es como tú porque… Ningún
omega es tan fuerte, tan decidido, ningún omega lucha tanto por sus convicciones y por
demostrar su punto de vista. Si Yin Yin no se rinde, yo tampoco lo haré”.
“No puedo luchar más” Respondió Jiang Cheng envuelto en lágrimas: “No puedo luchar
contra él, no soy tan fuerte como crees, no soy tan bueno… No soy el mejor omega así como
crees…”
“Lo eres para mí”.
Rompiendo en un fuerte llanto lleno de dolor, Jiang Cheng finalmente termino aferrándose
fuertemente a Lan Xichen. Una parte de sí mismo le decía que debía dejarlo ir, que sufriría
mucho más si se mantenía a su lado, pues nunca podría competir contra el primer amor de su
alfa, al cual este aún se aferraba. Pero otra parte quería creerle ciegamente, aceptar su cariño
y dejarse amar, quería quitar esa coraza que se había impuesto para no salir herido, quería
amar a Lan Xichen.
“Por favor déjame ir” Suplico Jiang Cheng aferrándose a Lan Huan con más fuerza.
Sonriendo por aquellas acciones contradictorias, Lan Xichen únicamente se limitó a acariciar
dulcemente la espalda de su omega con su mano libre, sosteniéndolo fuertemente contra su
cuerpo de igual manera.
“Sé que no quieres irte Yin Yin…”
“No quiero escuchar la verdad… No quiero que duela” Suplico Jiang Cheng destrozado.
“Entonces no te la diré, no hasta que tú me pidas escuchar todo” Prometió Lan Xichen: “Pero
si puedo decirte cosas que no duelen, cosas que también son verdad. Te amo Jiang Wanyin, y
quiero casarme solo contigo”.
Guardando silencio para escuchar a su alfa con atención, dejándose llevar por esas dulces
palabras, Jiang Cheng oculto su rostro en el cuello de Lan Xichen sin dejar de llorar,
aferrándose a este con todas sus fuerzas.
“Sé que no será un camino fácil, he estado luchando por mucho tiempo hasta llegar a este
punto. Sin embargo no planeo rendirme, luchare por ti y por tu amor hasta el final de mis días
de ser necesario” Dijo Lan Xichen sonrojándose ligeramente por la vergüenza: “Así que aun
si quieres dejarme ahora, iré detrás de ti hasta que me golpees, y aun si lo haces, seguiré
detrás de ti pidiendo tu cariño”.
Riendo ligeramente por aquellas palabras, aflojando su agarre con el alfa, Jiang Cheng
susurro: “Eso es tan patético…”
“No me importa ser patético si es por ti”.
Dejándose querer por primera vez en su vida, confiando completamente en su alfa, Jiang
Cheng levanto su rostro del cuello del mayor y lo observo a los ojos, perdiéndose en ese azul
tan calmo que este tenía.
“No te lo perdonare” Sentencio Jiang Cheng con seriedad: “Ante la mínima sospecha de que
tú me engañas, con cualquier omega no solo Meng Yao, yo te dejare por siempre ¿Lo
entiendes?”
Sonriendo con confianza, seguro no lastimar a su omega jamás, Lan Huan respondió: “Yo lo
aceptare entonces, y te dejare ir para hacerte feliz. Sin embargo estoy seguro de que puedo
hacerte feliz ahora, solo necesito que te quedes conmigo y confíes en mi”.
“Confió en ti”.
“Entonces no dejare de luchar por tu amor, Yin Yin”.
Con sus rostros tan cerca por aquel abrazo, ambos por un segundo pensaron que se besarían
por primera vez. Pero recuperando la compostura, se separaron nuevamente, y ya tranquilos,
regresaron a la torre Koi donde estaba el banquete, en el cual Jiang Cheng recibir iría una
gran fiesta por haber sido el ganador de la prueba de las peleas.
Toda esa noche Lan Huan celebro con su amado, y sostuvo ambas espadas tan juntas en sus
manos que parecieron una sola.
Después de aquel acontecimiento la relación de Jiang Cheng y Lan Xichen solo fue a mejor,
mientras los meses pasaban, ambos llegaron a un punto de intimidad y cariño que ambos
podían tolerar. Cuidándose y amándose muy en privado, manteniendo su compostura en
público, todo volvió a cambiar cuando sus hermanos se conocieron para su tiempo de cortejo.
Después de aquel desastre, el cual no solo resalto por la ruptura del compromiso de ambos
destinados, también por aquel espectáculo que dieron Lan Xichen y Nie Mingjue en el
festival de los faroles, todos por un tiempo pensaron que la pareja de ambos herederos
realmente estaba en problemas. Sin embargo ambos lograron superar el acontecimiento, y
apoyando a sus hermanos, se mantuvieron juntos a pesar de las habladurías.
De regreso en Gusu, cuando Lan Zhan ya se encontraba en reclusión y todos temían por su
vida, Lan Xichen acudió con su padre en busca de ayuda para intentar sacar a su hermano de
esa tristeza. Contándole de primera mano todo lo sucedido en su corto viaje a Yunmeng por
aquel compromiso, Lan Huan no pudo evitar hacer énfasis en el momento en el cual decidió
proteger a Meng Yao.
El alfa ya había decidido cortar relaciones con ese omega por siempre, sin embargo no podía
evitar seguir siendo amable cuando este se acercaba a solas para saludarlo, así como había
sucedido en el festival, cuando tuvieron una conversación banal a solas. Sin embargo cuando
todo aquel problema comenzó, en vez de apartarse y dejar que Nie Mingjue y Meng Yao
arreglaran sus asuntos como prometidos, Lan Huan no pudo evitar entrometerse dejando que
el cariño que aun sentía por ese omega saliera a la luz, protegiéndolo y convenciendo a Jiang
Cheng de protegerlo también.
Y después de semejante victoria, en la que Lan Huan finalmente pudo ayudar a su amado A-
Yao, por un segundo considero que podría ser amigo de este y tener a Jiang Cheng a su lado,
una idea que le agradaba mucho y comenzaba a florecer en su cabeza después de que Jiang
Cheng prometiera ser de mente abierta. Deseando con todo su corazón ver a sus dos amores
siendo amigos, así como él quería tenerlos a ambos por siempre.
A pesar de que la plática con su padre se había centrado en Lan Wangji y en cómo ayudarlo
en un inicio, pronto el líder de la secta Lan olvido ese detalle, decidiendo centrar su reunión
con su hijo mayor en su relación con Meng Yao para criticarla, intentando hacer entrar Lan
Xichen en razón.
“Solo puedes tener a uno a tu lado”.
Mirando confuso a su padre, Lan Huan no supo que responder, preguntando después de
algunos segundos: “¿Acaso no puedo tener a ambos a mi lado?”
Mirándolo a través de esa mesa baja, donde ambos habían servido un poco de té para
conversar de una forma amena, el líder de la secta Lan negó respondiendo: “No puedes
tenerlo como amigo cuando tus sentimientos están comprometidos de semejante manera. Un
alfa puede ser fácilmente amigo de un omega, si tiene la educación y el control necesario,
nada impide que alfas y omegas puedan tener amistades maravillosas. Pero cuando el corazón
de una persona ama a otra, por más que ahora haya alguien más que también ame, es muy
difícil mantener una amistad”.
“Yo no hace nada con Meng Yao”.
“¿Y si él lo hace contigo? ¿Te negaras?” Cuestión el mayor con seriedad: “Te conozco, eres
mi hijo A-Huan. Por tu propia naturaleza, entiendo que serás amable con ese omega aun
cuando él pueda intentar algo contigo, no vas a detenerlo por que no quieres herirlo, así como
tu corazón aun siente algo por él. El hecho de que estés considerando seguir manteniendo tus
lazos con ese omega a pesar de tener un prometido a tu pudo ahora, solo significa el poco
compromiso que tienes con tu actual omega”.
Quedándose callado, sin entender como aquella charla había degenerado de aquella manera y
en aquel rumbo, Lan Huan únicamente pudo beber un poco de té de forma nerviosa,
intentando callar todas aquellas voces en su cabeza que dejaban entender que su padre tenía
toda la razón del mundo al decirle esas cosas.
“Jiang Cheng no se merece algo como esto, si eres esta clase de alfa, entonces no deberías
casarte” Sentencio el padre de los jóvenes Lan, con un tono serio que hizo estremecer al
mayor de los jades.
Lan Huan no quería renunciar a ninguno de los dos.
Era egoísta, y aunque se prometió en ese entonces que no sería amigo de Meng Yao nunca
más, se negaba a sacarlo de su vida; así como amaba a Jiang Cheng y solo tenía su corazón
para este.
Su relación con Jiang Cheng siguió adelante aun a pesar de todos los problemas que acarreó
la separación de Lan Wangji con Wei Wuxian, ambos se mantuvieron juntos y pudieron
mantener su compromiso a flote. Tras varios años en los cuales se entendieron mejor aún,
enamorándose más y más de Jiang Cheng,
Pronto tras varias reuniones entre las personas de su secta, viendo la salud deteriorada de su
padre, Lan Xichen fue promovido a líder de la secta. Era una noticia grande, un joven de su
edad tomaba una gran responsabilidad, y todos esperaban que estuviera a la altura de sus
nuevos deberes. Lo que implicaba tener un omega a su lado como esposo.
Más pronto de lo que esperaba Lan Huan, los preparativos para su boa y su fiesta de
compromiso se hicieron. Entre deseos buenos y regalos hermosos, partió a Yunmeng con su
hermano menor, dispuesto a tener una gran fiesta de compromiso. En esos afanes, llegando a
su pabellón privado, Lan Huan se puso aquellas túnicas sumamente elegantes y caras que
habían preparado para él, revisando que su regalo estuviera en orden, y de que todo estuviera
listo; Lan Xichen lo vio.
No era usual que un omega entrara en un pabellón para alfas, es más, estaba prohibido. Pero
aprovechando la cercanía de los pabellones de la secta Nie con la secta Lan, que se
encontraban en el mismo lugar designado para las visitas, Jin Guangyao había logrado entrar
en el pabellón de los Lan.
Viendo a su amigo solo, vestido con túnicas elegantes para la ceremonia próxima, Lan Huan
decidió salir a recibirlo, encontrándose de frente con él fuera de sus habitaciones privadas.
“Buenas noches A-Chen” Saludo Meng Yao de forma animada.
Viendo a ese omega, el cual estaba vestido con sus trajes de gala dorados ahora adornados
con símbolos de la secta Nie, Lan Xichen por un momento sintió que su corazón se detenía.
Apresurándose a hacer una reverencia, Jin Guangyao solo pudo reír algo animado, parándose
al frente de aquel alfa.
“Buenas noches A-Yao”.
Sonando sumamente tranquilo, Jin Guangyao respondió: “Es un tiempo desde que no nos
vemos Lan Huan, desde mi boda. Te ves realmente apuesto para tu cierta de compromiso,
Jiang Wanyin es muy afortunado”.
Sonriendo algo cohibido, Lan Xichen respondió: “Muchas gracias Meng Yao. Felicidades
igualmente por tu embarazo”.
Riendo de una forma algo coqueta, Jin Guangyao puso una de sus manos en su abdomen
todavía plano, jugando con una hermosa flor blanca que traía en la otra.
“¿Ya te enteraste? Los rumores corren rápido…”
Sintiendo a sus palabras, Lan Xichen respondió: “Lo hacen”.
Acercándose mas a Lan Xichen, notando su tranquilidad, Meng Yao dijo animado: “Ya
escogimos su nombre, será Nie Song. Mingjue está realmente contento, los curanderos dicen
que es un pequeño alfa, mi A-Song será el orgullo de su padre”.
Asintiendo ante las alegres palabras de Jin Guangyao, Lan Xichen por un segundo se notó
algo incómodo. Su corazón aun latía fuertemente por el joven omega Jin, aquel que hace
tantos años había roto su corazón y del cual había decidido separarse por siempre. Sin
embargo Lan Xichen siempre había creído en todas sus mentiras, y aunque dejaron de ser
amigos desde hace varios años, el alfa siempre se preocupó y cuido de su gran primer amor a
distancia.
“Solo vine a decirte que… Entiendo todo lo que sucedió con nosotros Lan Huan” Dijo Meng
Yao mirándolo a los ojos: “Ahora he cambiado mucho, y entiendo tus sentimientos y lo que
es mejor para los dos. Pero aun así extraño tu amistad Xichen-Ge, extraño nuestras charlas
interminables y aprender a tocar el Guqin contigo”.
Bajando la mirada con cierta añoranza, recordando algo que el alfa también extrañaba, Lan
Xichen respondió: “Yo también lo extraño A-Yao, pero no creo que a tu alfa o a mi omega les
agrade la idea de vernos juntos”.
“¿Por qué no?” Replico Meng Yao mirando a Lan Huan a los ojos: “Nadie ni nada impide
que un alfa y un omega sean amigos, tu y yo podemos serlo ¿Acaso no quieres mi amistad A-
Chen? ¿Acaso no me echas de menos?”
“Lo hago A-Yao, pero me preocupa lo que puedan decir los demás”.
“Entonces mostremos que podemos hacer la diferencia, y enseñemos a las demás sectas que
podemos ser amigos sin importar nuestro género”.
Sintiendo aquellas palabras como si fueran dichas por su A-Cheng, ese omega que luchaba
incansablemente por demostrar la igualdad de los omegas, Lan Huan no pudo negarse. Por un
segundo, considerando toda su felicidad y todo el futuro que tenía por delante, quiso ser
egoísta, amando a su Jiang Wanyin y teniendo a su Meng Yao como amigo, no perdería a
ninguno, y todo podría ser perfecto.
“Si Meng Yao cree que podemos hacerlo… Entonces yo aceptare ser tu amigo de nuevo, A-
Yao” Respondió Lan Xichen.
Sonriendo realmente alegre, Meng Yao se acercó a su amigo para darle un corto e inocente
abrazo, sonriendo realmente feliz: “Estoy contento entonces Lan Huan, podemos volver a ser
amigos”.
Separándose del alfa sin dejar de sonreír, viéndose sumamente satisfecho, Jin Guangyao
pronto recordó la flor que tenía en las manos, y extendiéndosela al joven Lan, le dijo:
“Acepta este regalo de mi parte entonces, un regalo por volver a unir nuestra amistad y
nuestras vidas”.
Mirando aquella hermosa flor, la cual relucía en las manos de aquel omega, Lan Huan lo
sintió impropio, así que quiso rechazarlo: “Es muy dulce de tu parte A-Yao, pero no creo que
debería…”
“Es solo una flor Lan Huan” Dijo Meng Yao sin poder evitar reír ligeramente por las palabras
del alfa: “No es una gran riqueza o un importante objeto lleno de valor sentimental, solo es…
Una flor”.
Admirando aquella planta cerca de su rostro, permitiéndole admirar sus detalles, Lan Xichen
por un segundo se dio cuenta de que en realidad aquella flor no le gustaba tanto como él
creía. Por el paso del tiempo desde que fue tomada en Lanling hasta Yunmeng, la flor había
perdido cierto color y sus pétalos estaban algo marchitos y arrugados, teniendo un aspecto
algo desagradable cuando se lo miraba de cerca. Y aun a pesar de su maravilloso aroma y su
hermosa presentación a ojos menos detallistas, a Lan Xichen se le hicieron horrible cada vez
que la miraba más de cerca.
Dándose cuenta de que ese alfa rechazaría su oferta, y sin planear dejarse vencer, Jin
Guangyao insistió de una manera sutil: “Es más, podría ser un regalo perfecto para ese omega
tuyo que tanto amas”.
Pensando en Jiang Cheng nuevamente, Lan Xichen pregunto: “¿Realmente lo crees?”
“Es una flor hermosa, digna de un omega hermoso. Estoy seguro de que le encantara. Tómalo
como mi símbolo de paz hacia él, ahora no debe ponerse celoso de mi o cosas semejantes,
solo somos amigos ¿No es verdad?”
Dejándose convencer por aquellas palabas, comenzando a ver a esa flor tan horrible con otros
ojos, como el posible acompañante perfecto de su libro de canciones, Lan Huan finalmente
acepto tomarla de las manos del joven omega Jin, admirando su belleza.
“Espero que le guste la flor Lan Huan, y ya estoy deseando ver su ceremonia de
compromiso” Dijo Meng Yao acercándose al alfa para besar suavemente una de sus mejillas.
Volviendo al mundo real, sintiéndose sumamente incomodo con aquel cariñoso beso, Lan
Xichen se apartó de inmediato, perdiendo su sonrisa y susurrando: “Gracias…”
Grandote para regresar a los salones de Yunmeng y salir del pabellón privado de los Lan,
Meng Yao se despidió: “Nos vemos en tu ceremonia, A-Chen”.
Quedándose ciertamente incómodo y extrañado por toda aquella escena, con sentimientos
encontrados en medio de la felicidad de haber recuperado a su amigo al cual tanto quería y
esa extraña incomodidad que tenía cuando Meng Yao hacia cosas semejantes; pronto todos
sus pensamientos se perdieron, pues las campanas ceremoniales de Yunmeng sonaron
fuertemente, indicando que pronto comenzaría la fiesta.
Regresando a sus aposentos de forma rápida, Lan Xichen dejo la flor junto a ese bonito libro
de canciones que planeaba darle a su omega al día siguiente. La flor seguía sin gustarle
demasiado, una flor que realmente hubiera tirado de tener oportunidad; pero recordando las
animadas palabras de Meng Yao, tomando aquella flor como un símbolo real, Lan Xichen
supo que no podía hacer algo como eso. Su más grande sueño era ver como Jiang Cheng y
Jin Guangyao se llevaban bien, sus dos más grandes amores juntos, un inocente deseo que
podía traer una desgracia.
Recobrando su buen humor olvidando todo, Lan Xichen pronto se reunió con la comitiva de
su secta, encaminándose con ellos al salón principal de Yunmeng. Y en ese sitio, envuelto en
el aroma de miles de inciensos por todos lados, personas animadas y de rostros sonrientes, y
la más grande felicidad que alguna vez pudo sentir; Lan Huan pudo concretar su compromiso
tan deseado con aquel omega.
Acercándose a él y besando tiernamente sus labios, tomando su delicada cintura entre sus
manos, y dejándose llevar por Jiang Wanyin.
Lo amo con todo su corazón desde entonces.
Así que después de sostenerlo y negarse a soltarlo, en aquel primer beso que le dio en medio
de todas las sectas que los rodeaban.
Se dio cuenta de que los besos de Jiang Cheng eran como el fuego.
Y a Lan Xichen le encantaría quemarse.
Especial #2. Noche de bodas.

Fuertes aplausos llenaron todo el salón principal de Qinghe, mientras que los novios retiraban
sus rostros y terminaban aquel beso.
Girándose hacia la multitud, Nie Mingjue con su usual seriedad pudo observar en las
primeras filas de invitados a su pequeño hermano Nie Huaisang, el cual aplaudía y celebraba
con cierto recato, ligeramente incómodo. Además de ver también a la familia Jin, los padres
de su esposo Jin Guangshan y Madam Jin, y sus hermanos Jin Zixuan y Qin Su; la familia de
Jin Guangyao que habían asistido a la boda.
Mirando con cierto recelo a Jin Guangshan, aquel viejo tan desagradable, tan cerca de su
pequeño hermano haciendo ligera conversación en medio de la ceremonia, Nie Mingjue se
notó mucho más serio aun. Pero pronto fue distraído por Jin Guangyao, su amado esposo.
¿Cómo había comenzado su romance?
No fue para nada algo convencional, fue un error, algo que jamás debió suceder.
Nie Mingjue aun recordaba la primera vez que vio a Jin Guangyao, que en ese entonces se
hacía llamar Meng Yao. Siempre tan reluciente, con una belleza descomunal para su baja y
delicada estatura, un omega hermoso que siempre transmitía paz con sus palabras y acciones;
por más malintencionadas que fueran.
El joven Meng Yao llego a sus 10 años a la secta Qinghe Nie. Como un omega huérfano que
sufrió una gran humillación, fue recogido por su bondadoso padre, el cual presencio como
este pequeño joven fue arrojado por las escaleras de la torre Koi por aquel que llamaba padre
en medio de una reunión entre sectas. Aquel amable pero serio hombre, el padre de Nie
Mingjue, se apiadó de aquel joven desamparado y lo recogió como un sirviente para su secta.
Nadie sabía el origen de Meng Yao en ese entonces, ni siquiera el propio Nie Mingjue, y esa
fue la razón por la cual todos cayeron en sus engaños.
Poco tiempo después de que el joven llegara, el padre de los hermanos Nie enfermo de una
forma grave. En el poco tiempo que Jin Guangyao paso en la secta Nie, fue tan elocuente que
ascendió rápidamente a ser el sirviente personal del líder, algo que no fue bien visto por
nadie. La madre de Nie Mingjue y Nie Huaisang había muerto hace años, y un joven omega
entrando y saliendo de las habitaciones del líder no le agradaba a nadie.
Así que cuando el líder murió en circunstancias muy tristes por una enfermedad desconocida,
y el joven Nie Mingjue de solo 13 años ascendió al liderazgo, todos pensaron que el asunto
estaba terminado. Pero poco conocían al omega que habían metido en su secta como un
“sirviente”.
“Mi gege se nota distraído”.
Volviendo a la fiesta con aquellas dulces palabras, Nie Mingjue sintió los pequeños y cálidos
dedos de su prometido cerca de su rostro, el cual con una sonrisa amable le ofrecía un poco
de fruta de aquel gran banquete para dárselo en los labios.
Suspirando ligeramente antes de aceptar la fruta, Nie Mingjue se disculpó: “Perdóname,
estaba algo distraído”.
Tomando más fruta para dársela de comer al que ahora era su esposo, Meng Yao
amablemente respondió: “Lo note mi señor, pero no se preocupe, yo prestare atención por
usted de ser necesario”.
Siendo tan encantador como siempre, Meng Yao le sonrió a Nie Mingjue, dejándolo
deslumbrado por su belleza.
Desde el primer minuto, el líder de la secta Nie se había sentido completamente prendado del
joven Jin Guangyao. Tal vez por la forma hermosa que ese omega tenia, o como se presentó
con él la primera vez que se vieron.
En medio de la noche, pocas semanas después de haber obtenido su título, Meng Yao entro en
sus habitaciones privadas, buscando sus “atenciones”. El joven omega se presentó a sí mismo
como un sirviente especial para el líder, proveniente de un prostíbulo, le prometió al joven
Nie que podría complacerlo de todas las formas posibles. El joven alfa, bastante vulnerable
después de haber perdido a su padre y con todos los cambios que se daban a su alrededor
recientemente, aceptó estar esa noche con el omega; perdiendo así su virginidad con Meng
Yao.
Pronto el joven Meng Yao tomó el puesto de sirviente principal con el nuevo líder de la secta,
así como lo fue una vez con el padre de Nie Mingjue. Teniendo intimidad y confianza con
este, el joven omega le confeso su triste historia a ese alfa; como era hijo de una prostituta y
del desvergonzado Jin Guangshan, como su madre murió y quedándose solo en el mundo
buscó a su padre, el cual le dio una patada y lo desconoció, por más de que tenía una hermosa
joya que este le dio a su madre en el pasado y lo autentificaba como su hijo. Después de eso
Meng Yao le contó que el padre el propio Nie Mingjue lo compró como un omega de
“compañía”, usándolo para complacerse antes que él. Aunque Nie Mingjue se negó al inicio,
sin saber bien que hacer, pensando únicamente en su compromiso con Wen Xu y en los
valores que le habían enseñado como alfa; Meng Yao fue mucho más convincente, y al final
termino entrando en su cama.
Esto fue una completa confusión para el joven líder de la secta Nie. Su padre había muerto
cuando este era demasiado joven, y sin tener la suficiente confianza con otro alfa de un rango
superior de su secta, Nie Mingjue no sabía que hacer o como asegurarse de que sus actos eran
incorrectos. Así que al no tener una respuesta clara, sin saber si era bueno o malo disfrutar del
cuerpo de aquel omega casi cada noche, el joven líder de la secta Nie comenzó a enamorarse
de una forma inminente.
Meng Yao era el omega más especial que alguna vez pudo conocer, no solo era una adorno
que se llamaba a sí mismo “omega de compañía”, el joven Yao era bastante inteligente y
locuaz con sus palabras, haciendo disfrutar a Nie Mingjue con su conversación tanto como
con sus visitas nocturnas. El omega era atrayente y lo sabía, y usaba eso para enamorar al frio
pero confundido líder de la secta Nie, ganando su confianza poco a poco, confiándole sus
más íntimos secretos y deseos; deseos que de una forma indirecta le pedía a Mingjue cumplir.
Nie Mingjue regreso a si mismo saliendo de sus recuerdos cuando vio a su suegro acercarse a
la mesa de los novios. Manteniéndose tan serio como siempre, el líder de la secta Qinghe Nie
observo como Jin Guangshan se acercaba su hijo con una sonrisa tan hipócrita y falsa como
solo él podía poner, acercándose a este para besar una de sus manos y felicitarlo por su boda.
“Hijo mío, mi dulce A-Yao” Dijo Jin Guangshan realmente encantado: “Mi bello hijo ahora
está casado, serás muy feliz con tu esposo, un gran líder de secta y una buena madre. Por
favor dame nietos lo más pronto posible”.
Riendo algo avergonzado con las palabras de su padre, Jin Guangyao solo pudo susurrar:
“Padre muchas gracias, prometo que te enorgulleceré a ti y a nuestra secta”.
Dándole un último beso en el dorso de la mano, Jin Guangshan se separó de la mesa, dándole
paso a su mujer. La pobre Madam Jin, una mujer tan humillada, la cual en los años recientes
tuvo que aceptar que su esposo trajera a la torre Koi a sus bastardos para cuidarlos como sus
hijos, siendo la burla de todas las señoras omegas de las demás sectas, y causa de lastima por
los alfas que sabían de su situación. Aquella pobre mujer humillada, tuvo que sonreírle al hijo
de otra mujer la cual llevaba el oro de su secta, y dedicándole las mismas hipócritas palabas
de amor, Madam Jin le dio un hermoso regalo a Jin Guangyao, una de sus propias joyas, una
hermosa pulsera de oro muy ostentosa así como todas las joyas de los Jin. Viendo su rostro
contraerse de odio cuando puso la pulsera en la delgada muñeca de Meng Yao, Nie Mingjue
no tuvo duda de que aquella mujer había sido obligada por su alfa a fingir que amaba a ese
hijo que no era suyo y a darle una de sus queridas joyas como manera de respeto; pero
seguramente si tuviera oportunidad, ella lo estrangularía.
“Muchas gracias madre, apreciare este regalo de tu parte como un tesoro preciado” Dijo
Meng Yao sin perder su sonrisa.
Aun bastante frustrada, la mujer solo pudo sonreír a la fuerza, mirando al omega llena de
odio. Terminando de felicitar a su hijo, los líderes de la secta se dirigieron entonces a Nie
Mingjue, haciendo una reverencia y deseándole un matrimonio prospero; felicitaciones que el
líder Nie acepto con etiqueta, haciendo otra reverencia. Su relación con los líderes de la secta
Jin no era buena ni mala, solo eran familia política, y habían tenido roces en el pasado gracias
a Jin Guangyao.
Terminando de darle sus felicitaciones, los líderes de la secta Jin se retiraron nuevamente a
sus lugares, hablando el uno con el otro en susurros. Era tradición que en medio de la
ceremonia los invitados se acercaran a la pareja de recién casados a felicitarlos, dejándoles
hermosos regalos y sus buenos deseos. Así que esperando a los nuevos invitados que no
tardarían en llegar, Nie Mingjue volvió a concentrarse en su cena, volviendo a pensar.
En una de esas interminables noches al lado de Jin Guangyao en la residencia de los Nie,
Mingjue supo la verdad de ese omega. Jin Guangyao le mostro entre lágrimas un collar de
oro con una peonia en ella, el ultimo recuerdo de su madre, la cual fue una prostituta. Esta
desdichada mujer que murió enferma y en la pobreza, una vez fue una mujer de una secta
pudiente, la cual creyó en un joven Jin Guangshan que la embarazó y le prometió casarse con
ella cuando volviera a esa región, dejándole un collar de una peonia de oro como prueba de
su amor. Poco sabia la inocente mujer que Jin Guangshan era un hombre infiel, el cual
contrajo nupcias poco después de que ella dio a luz a Meng Yao, y nunca regreso por ella o
por su hijo.
Siendo desterrada por su secta como algo sucio, la joven no pudo hacer más que dedicarse a
ser una prostituta para mantener a su hijo y a los que tuvo después. Varios años después,
cuando Meng Yao fue casi un adolescente, supo la verdad en el lecho de muerte de la mujer,
y tomando el último recuerdo de su padre, fue a Lanling con la esperanza de que este lo
ayudara a él y a sus hermanos. Sin embargo no recibió ni una sola muestra de amabilidad de
su padre, que se deshizo de él como una alimaña, arrojándolo por unas escaleras con asco.
En medio de lágrimas entonces, Meng Yao le suplicó de una forma indirecta que interviniera,
le pidió a Mingjue que lo ayudar a ser reconocido como un Jin, que lo ayudar a recuperar su
lugar. Y aunque Nie Mingjue dudó al inicio, amaba tanto a ese pequeño omega que
finalmente decidió ayudarlo, volviendo aquel asunto un tema de todas las sectas, usando a la
secta Nie para presionar a la secta Lanling Jin a que reconociera a Meng Yao como un Jin, así
como a todos los bastardos de Jin Guangshan. Siendo apoyado por Jin Zixun y otros alfas
líderes de las sectas más pudientes, la secta Jin al final no pudo hacer más que aceptar,
teniendo que reconocer a Meng Yao como un Jin por la presión, dándole el nombre de
“Guangyao” y acogiéndolo bajo su techo.
Nie Mingjue levantó la mirada de su plato cuando sintió una nueva presencia, viendo como
ahora los siguientes que se acercaban a la mesa de los novios eran más familia Jin. Era el
próximo líder de Lanling, el joven alfa Jin Zixuan, y su esposa Jiang Yanli, la próxima
amante de la torre Koi. La pareja hizo una reverencia para ambos al llegar frente a la mesa,
Jiang Yanli con una gran sonrisa de felicidad, mientras que Jin Zixuan mantenía su distancia,
luciendo incluso algo enfadado. Correspondiendo las reverencias con su esposo, Nie Mingjue
acepto los mejores deseos de aquella pareja, recibiendo como regalo un hermoso quemador
de incienso de oro, tan ostentoso como era usual de los Jin.
Sin embargo antes de que estos se retiraran, Nie Mingjue recibió una mirada de enfado y
resignación de Jin Zixuan, el cual no se notaba contento con la boda. Pero siendo controlado
por su esposa, tuvo que sonreír y no pelear con el nuevo esposo de su hermano, teniendo que
regresar a su mesa con Jiang Yanli fingiendo que todo estaba bien. Al ver que no había
ocurrido una pelea en su boda, Jin Guangyao por un segundo pareció bastante decepcionado,
volviendo a comer de mala gana.
La secta Lanling Jin se caracterizaba por ser de omegas. Había una gran tradición de omegas
en puestos de poder de Lanling, una de las sectas más ricas de todas. Sin embargo desde
generaciones recientes, algunas alfas comenzaron a nacer en la rama principal. Tal vez por la
mezcla entre genes con alfas de otras sectas, o simplemente por un poco más de suerte, pero
así como Jin Guangshan, Jin Zixuan era un alfa. Esto enorgullecía a Madam Jin, ya que
aunque no era tan fértil y no tuvo más hijos que Zixuan, este era el único alfa de toda la
descendencia de Jin Guangshan que se conociera hasta ahora, un mérito que Madam Jin
siempre resaltaba como si fuera algo muy importante.
Así que como cualquier alfa, Jin Zixuan era bastante territorial. Meng Yao era el hermano
mayor de Zixuan, ambos se llevaban por un par de años, y aunque Jin Zixuan era muy joven
cuando Meng Yao fue arrojado por las escaleras de la torre Koi y no tenía idea del incidente,
no se tomó a mal saber que tenía un hermano nuevo. Sin embargo al tener a Jin Guangyao
cerca, siendo un omega y uno especialmente pequeño, Jin Zixuan no pudo evitar dejar aflorar
a su alfa, comenzando a sobreproteger a su hermano como el omega que era. Así que por lo
tanto, no le agradaba en absoluto Nie Mingjue.
Meng Yao tenía una personalidad y un carácter único, Nie Mingjue lo supo desde la primera
vez que lo conoció, y aún más cuando sus consejeros le dijeron que era un problema. Jin
Guangyao adoraba causar conflictos a los demás, intrigas, calumnias, entre muchas otras
cosas; el omega adoraba ver el sufrimiento y el dolor en personas que consideraba más
afortunadas que él. Así que además de sus ambiciones, lo demás que Meng Yao adoraba era
lastimar a otros.
“¿Gege, no sería genial romper tu compromiso? Ese omega Wen no merece un alfa tan fuerte
como tú, deberías romper tu compromiso ahora…”
“¿Gege, no sería genial romper el corazón del próximo líder de la secta Lan? Tan puro, tan
odioso. Todos los alfas de la secta Lan son repulsivos para mí”.
“¿Gege, no sería genial apoyar el castigo con la muerte de Wei Wuxian? Ese omega sucio, en
una secta tan poderosa. Ahora puedes pedir que se lo condene a muerte, hazlo por mi Da-
Ge”.
“¿Gege, no sería genial romper el compromiso entre la secta Lan y la secta Jiang? Eso sería
tan gracioso, podríamos reírnos por años”.
Nie Mingjue sabía que Meng Yao lo manipulaba, así como manipulaba a casi todos a su
alrededor, adorando ver las peleas y el dolor que podía llegar a causar con solo pocas
palabras que salieran de su boca, y muchas veces lo había utilizado con ese propósito tan
maligno. Pero era hasta vergonzoso admitirlo, pero esto a Nie Mingjue le traía sin cuidado,
estaba tan completamente enamorado de Meng Yao, que gustoso aceptaba participar en todas
sus intrigas, aun cuando no terminaba bien parado en muchas de ellas.
Sintiéndose provocado por este, Nie Mingjue muchas veces había caído en el juego de
ponerse celoso y reaccionar de mala manera cuando Meng Yao hacia una acción mala de
forma premeditada, coquetear con otro alfa o molestar a Lan Xichen. Esto que para todas las
sectas fue tomado como que Nie Mingjue se había obsesionado con Jin Guangyao, que no
aceptaba un “no” por respuesta a sus constantes propuestas de matrimonio, que era un loco
violento con aquel omega; solo eran cosas alejadas de la verdad. Disfrutando obtener esas
reacciones de su alfa, Jin Guangyao se hacia la victima frente a cualquiera que los miraba,
ocultándose detrás de Lan Xichen o su hermano cuando obtenía los gritos de Nie Mingjue
que tanto buscaba, para luego acudir en la noche a sus habitaciones privadas y pedirle que se
casara con él, felicitándolo por haberle gritado de esa manera.
Así que manejándose en medio de esas extrañas señales que el omega le daba, teniendo que
ser malo con este a vista de los demás, un alfa posesivo el cual no le daba un respiro a su
propio omega. Pero en realidad siendo provocado a propósito, cumpliendo todos los deseos
que Meng Yao tenía, luchando hasta el cansancio para casarse con él así como se lo pedía, y
dándole todo su cariño el cual este no apreciaba de la forma correcta.
Fue gracias a esto que Nie Mingjue perdió toda la simpatía frente al protector Jin Zixuan, el
cual viendo a su hermano “desprotegido” en esa mesa, solo pudo lamentarse en silencio que
ahora perteneciera a ese “violento” alfa, que seguro lo lastimaría y no podría protegerlo.
Sin embargo esto no podía estar más alejado de la verdad, siendo en realidad Meng Yao quien
provocaba y disfrutaba de esa dureza, amando ver sufrir a las personas a su alrededor.
“Mis felicitaciones por su encantadora boda” Dijo Lan Xichen, acercándose a la mesa de los
novios con su prometido.
Haciendo una reverencia así como su alfa, Jiang Cheng también saludo a los recién casados,
sin querer ocultar su rostro de indiferencia por la boda: “Si, muchas felicidades”.
Nie Mingjue acepto estas felicitaciones con el rostro serio y haciendo una reverencia,
mientras que Jin Guangyao, disfrazando su diversión con amabilidad, saludo a la pareja con
una sonrisa cálida y una reverencia contenta, mirándolos complacido. Cuando Lan Xichen
volvió a pararse erguido, por un segundo miro a Jin Guangyao con mucho cariño, casi con
amor; disfrazando este sentimiento con una gran amabilidad y calma.
“Muchas gracias por sus buenos deseos, Líder de la secta Lan y próximo señor de la secta
Lan” Agradeció Meng Yao.
“Unos buenos deseos merecidos para dos grandes amigos” Dijo Lan Huan sin perder su
sonrisa: “Que ambos tengan una buena vida juntos”.
Nie Mingjue se mantuvo en silencio viendo fijamente a Lan Xichen, así como Jiang Cheng se
mantuvo mirando a Jin Guangyao. El líder de la secta Nie no sentía mucho agrado por Lan
Xichen, pero lo respetaba, pues entendía que aunque a Jin Guangyao le gustaba coquetearle y
molestarlo, no era debido a él, sino a su querido esposo.
Tomando una hermosa caja adornada con brillantes, Lan Xichen la puso sobre la mesa de los
esposos, dejando su regalo: “Espero que ambos disfruten sus regalos”.
Bastante curioso, fue Jin Guangyao el que abrió aquella caja, encontrando bellos colgantes de
jade, ambos iguales y característicos de Gusu: “Muchas gracias A-Chen, es un regalo
hermoso. Ten por seguro que ambos lo apreciaremos” Agradeció Jin Guangyao.
“Es bueno saber que te gusto” Dijo Lan Xichen en un susurro, volviendo a hacer una
reverencia.
Sin decir nada, Jiang Cheng hizo lo mismo que su prometido, despidiéndose así de los
nuevos esposos para regresar a su mesa, la cual compartía con los miembros de la secta Lan.
Girándose de reojo, mientras Meng Yao aun miraba los colgantes de jade, Nie Mingjue pudo
ver una expresión de cierto disgusto en su rostro. Jiang Wanyin y Lan Huan se casarían
pronto, en un par de meses se rumoreaba que tendrían su fiesta de compromiso, así que en
menos de un año ambos tendrían que contraer nupcias; claro, de no haber alguna desgracia
que interfiriera. Así que mirando la expresión de su omega, a Nie Mingjue no le pareció rara
la idea de que este intentara interferir de alguna manera en aquel compromiso solo por el
placer de verlos triste a ambos.
Cuando la mayoría de los invitados importantes dieron sus obsequios y presentaron sus
respetos a ambos jóvenes esposos, Nie Mingjue y Jin Guangyao dieron por terminada la
fiesta. Antes de poder seguir a su omega a sus aposentos, donde ambos estarían finalmente
solos, Nie Mingjue fue abordado y retenido por su hermano menor, el cual quería pedirle
algunos minutos para poder saludar a unos miembros del consejo que requerían su presencia.
Dudando por algunos segundos, queriendo ir a su alcoba con Meng Yao de inmediato, Nie
Mingjue fue detenido por su propio omega, el cual le acaricio el rostro y le dijo: “No se
angustie mi señor, yo iré primero, y usted puede alcanzarme en unos segundos”.
Desviando la mirada con cierta incomodidad, Nie Mingjue vio a Huaisang sosteniendo su
brazo, pidiéndole también que lo siguiera. Así que para darle confianza, Jin Guangyao le dijo:
“Yo lo esperare listo, mi señor”.
Sintiendo aquellas palabras especialmente provocativas, algo que sabía que su marido no
había dicho por accidente, Nie Mingjue solo pudo suspirar con resignación, observando como
su omega hacia una reverencia antes de retirarse entre los invitados a una de las puertas
principales.
Aun viendo aquello de una forma extraña, Nie Mingjue solo pudo aceptar la petición de su
hermano, diciendo: “Bien, vamos”.
Siguiendo a Nie Huaisang a otro lado del salón, el nuevo y flamante esposo alfa tuvo una
ligera conversación con algunos de los miembros del consejo de su secta, los cuales le dieron
felicitaciones más privadas, y le instruyeron que estuviera tranquilo al día siguiente cuando
debía partir a su luna de miel. Agradeciendo a cada uno de ellos y brindado por su boda, Nie
Mingjue finalmente se retiró, dejándole deberes a Nie Huaisang, como aprender más sobre la
secta mientras era líder suplente cuando él estuviera fuera con Meng Yao.
Con todos los invitados habiéndose retirado casi por completo, Nie Mingjue solo tuvo que
saludar a un par de personas mientras salía del salón principal de su secta. Dejando todo listo
y todos los deberes delegados, el líder de la secta Nie pudo irse con mucha más tranquilidad a
sus habitaciones, con una ligera emoción inundando su pecho al pensar en su omega.
Acercándose a su pabellón privado, lo primero que Nie Mingjue pudo notar fueron las luces
tenues del interior, Meng Yao seguramente había puesto solamente un par de velas de
ambiente; además de un aroma dulzón saliendo del interior, proveniente de unos inciensos
especiales.
Respirando profundo antes de entrar, Nie Mingjue finalmente abrió la puerta corrediza de su
habitación, entrando dentro de esta con seguridad, caminando directamente hacia la cama.
Avanzando en medio de los lujosos muebles que adornaban su lugar privado, el alfa Nie
pronto se topó con su esposo.
Más relajado, Jin Guangyao se había quitado su hermoso atuendo de bodas rojo y dorado, el
cual tenía bordados en oro las peonias de la secta Jin. Quedándose en sus túnicas interiores, el
omega había soltado también su cabello, y únicamente manteniendo el velo rojo, esperaba a
su alfa sentado en la cama, habiendo perorado todo para su tan ansiada noche de bodas.
“Mi señor” Saludó Jin Guangyao cuando vio a su alfa entrar en la habitación.
Admirando a la bella criatura que tenía frente a sí mismo, su amado omega, Nie Mingjue solo
pudo mantenerse en silencio. Sonriendo muy contento cuando vio a su alfa, Meng Yao no
dudó en ponerse de pie elegantemente al verlo frente a sí mismo, avanzando en su dirección
para luego arrodillarse frente a él, manteniéndose en sumisión frente a su alfa.
En el exterior, Meng Yao era un omega que se había ganado el respeto a pulso, a pesar de su
origen y los rumores que pesaban en su espalda, se había vuelto un cultivador bastante fuerte
y con una reputación digna entre las sectas. Algo que como omega perdía por completo ante
Nie Mingjue. Jin Guangyao sabía que fue la primera vez del alfa líder de la secta Qinghe Nie,
así que aun manteniendo esa ligera separación de jerarquías, como si él aun fuera un sirviente
en vez de un igual, todavía mantenía la típica sumisión de un sirviente frente a su amo,
arrodillándose ante él y llenándolo de halagos. Algo que el omega hacía porque sabía que le
encantaba a su alfa.
“¿Me extrañaste?” Preguntó Nie Mingjue mirándolo desde arriba.
Sonriendo dulcemente, Jin Guangyao asintió, respondiendo: “Yo siempre extraño a mi alfa, a
mi esposo”.
Aun desde su posición de rodillas, Meng Yao se tomó la libertad de tomar una de las grandes
manos de Nie Mingjue, acercando está a su rostro para ponerla contra su mejilla, para luego
besarla con cariño, tentando a su alfa. Pronto Nie Mingjue no tuvo más paciencia, y bajando
su mano al cuello de su esposo, lo presiono ligeramente obligándolo a ponerse de pie; algo a
lo que Jin Guangyao no se negó en lo absoluto, siendo obediente.
“Tengo un regalo para usted mi señor” Dijo Meng Yao en un susurro, permitiendo que Nie
Mingjue lo sostuviera como quisiera.
Aflojando su agarre en el cuello del menor ligeramente, Nie Mingjue preguntó: “¿Un
regalo?”
“Esta sobre la cama”.
Dirigiendo a su alfa al lecho nupcial, Meng Yao le mostró unas fuertes correas de cuero bien
puestas sobre las sabanas rojas que tenía la cama en ese instante, unas las cuales se sujetaban
de la parte inferior de la cama en cada esquina, y otras que estaban libres y parecían ser
esposas. Al ver aquel inusual regalo de su omega, Nie Mingjue guardó silencio, escuchando a
Jin Guangyao reír de una forma algo disimulada.
“¿Te gusta mi señor?” Preguntó Meng Yao de una forma algo impaciente: “Yo las diseñé, e
hice que un costurero especial las preparara para mí en Lanling. Estoy seguro de que no se
romperán, aun si uso mi energía espiritual, me quedare inmovilizado para usted amo, podrá
hacer lo que desee con mi cuerpo”.
Meng Yao era una persona sumamente brillante, no por nada se había ganado el corazón de
más de un líder de importantes sectas. Pero muchas veces usaba ese intelecto privilegiado
para más que arruinar la vida de otras personas, también solía inventar algunos artefactos de
tortura, muchos de los cuales realmente fabricaba con ayuda de otros artesanos, y los cuales
amaba usar consigo mismo y con su esposo.
Sintiéndose un poco confuso pero excitado con la idea, Nie Mingjue preguntó para
confirmar: “¿Estas pidiéndome que te ate con esto?”
“Por favor mi señor, te lo suplico”.
Volviendo a subir su mano del cuello del omega a una de sus mejillas, Nie Mingjue le dio una
caricia suave, para luego agacharse un poco a besar sus labios, diciéndole: “Eres bueno, te
recompensare haciendo lo que me pides”.
“Gracias amo…” Susurró Jin Guangyao fingiendo vergüenza y sumisión.
Admirando a su hermoso omega por unos segundos mas, Nie Mingjue terminó arrancando el
velo rojo de su cabeza, el cual se había mantenido sujetado en un broche en la parte trasera de
su cabeza. Sin querer ser demasiado cuidadoso, el alfa bajo sus manos por el cuerpo de su
esposo, acariciando suavemente sus hombros y parte de su pecho, hasta llegar a las
sujeciones que la túnica interna del menor tenia, abriendo estas para quitarlas y finalmente
poder desnudarlo. Sin perder su sonrisa algo tímida, Jin Guangyao se dejó hacer en silencio,
uniendo sus labios con los de su esposo una vez más cuando finalmente estuvo desnudo.
Completamente perdido en la excitación por el estímulo visual que tenía frente a sus ojos y el
embriagante aroma de peonias que se desprendía de su omega, Nie Mingjue mordió
ligeramente el labio del menor antes de ordenarle: “Acuéstate en la cama”.
Dándole un besito rápido antes de obedecer, Meng Yao susurró: “Si amo”.
Separándose de su alfa con cuidado, Meng Yao se subió a la cama con elegancia, gateando
sobre esta hasta el centro, alargo una de sus manos en dirección a una de las almohadas de la
cama, la cual puso debajo de su abdomen antes de tumbarse boca abajo en la suave
superficie. La fuerza de Nie Mingjue era casi del doble que la suya, y el cuerpo de su alfa era
demasiado pesado, así que sin querer bajar las caderas en medio de su penetración, Jin
Guangyao inteligentemente uso una de las almohadas de la cama para obligarse a sí mismo a
mantener una posición con la cual ayudar a su penetración.
Ante la fija mirada de su alfa, el cual sin perder detalle de esa posición tan expuesta, Jin
Guangyao abrió ligeramente las piernas y puso sus manos entrelazadas detrás de su espalda
por sí mismo, en la posición perfecta para ser atado con esas correas de cuero. Tragando un
poco de su saliva por el deseo, Nie Mingjue fue a la cama cuando vio a su omega preparado,
y acariciando suavemente sus brazos y su espalda, finalmente tomo las correas de cuero,
comenzando a entrelazarlas en las extremidades superiores de su esposo, escuchándolo
suspirar.
Estimulado por la idea de tener a su adorado A-Yao completamente inmovilizado bajo su
cuerpo, sin tener más opción que aceptar sus órdenes y sus deseos, Nie Mingjue uso mucha
fuerza al entrelazar esas correas en las muñecas de su amado, solamente queriendo asegurarse
de que no podía soltarse de ellas y por consiguiente que no pudiera luchar contra él sin
importar lo que hiciera.
“Amo…” Susurró Meng Yao sumamente excitado: “Esta muy apretado… Duele…”
Terminando de atar aquellas correas en las muñecas de su esposo, Nie Mingjue levantó la
mirada y complacido observó su rostro sonrojado y perdido, esa expresión que siempre adoró
observar en el rostro del contrario.
“Pero eso te gusta ¿No es verdad? Te gusta cuando duele…” Dijo Nie Mingjue con la voz
ronca por la excitación, acercándose al contrario para apresarlo bajo su cuerpo.
Sonriendo suavemente, Jin Guangyao respondió: “Si… Me gusta, amo”.
Tomando al omega del cabello con ligera fuerza, Nie Mingjue le dio un ligero tirón para
obligarlo a subir el rostro. Poniendo una expresión de dolor, Jin Guangyao forzó su cuerpo
para adoptar la posición que su alfa le exigía, aceptando sus besos y mordidas suaves en los
labios.
Soltando al menor de nuevo, Nie Mingjue se relamió los labios bajando de la cama y del
cuerpo del omega. Aflojando su cinturón y sus túnicas, el alfa termino de asegurar el cuerpo
de Meng Yao sobre la suave superficie de la cama, tomando otras nuevas correas de cuero
que el omega había sujetado en la parte inferior del lecho nupcial, las cuales ato hábilmente
en sus delgados tobillos, dejando sus piernas abiertas e inmovilizadas.
“Da-Ge… Da-Ge” Gimoteó Meng Yao de una forma atrayente: “Por favor amo… Se gentil
conmigo, se gentil con tu esposa…”
Quitándose por completo aquellas hermosas pero incomodas túnicas de boda, quedando
solamente con sus pantalones, Nie Mingjue regresó a la cama con su querido omega.
Desnudo y en aquella posición tan expuesta, con las caderas levantadas y las piernas abiertas,
el joven y sonrojado omega se veía muy avergonzado, pero igualmente deseoso de tener
nuevamente a su alfa sobre su cuerpo.
“¿Gentil?” Pregunto Nie Mingjue con cierto desinterés: “¿Por qué debería?”
Cerrando los ojos y tomando una actitud completamente sumisa, algo que a Meng Yao le
gustaba hacer, el omega respondió: “Por favor Da-Ge… Se suave conmigo… Estoy
asustado”.
“¿Por qué estas asustado?”
Entreabriendo los ojos y mirando a su marido de reojo, Jin Guangyao respondió: “El pene de
mi Da-Ge es tan grande… Tengo tanto miedo de que entre en mi…”
Sintiendo aquellas palabras sumamente estimulantes y provocativas, Nie Mingjue trago un
poco de su propia saliva, bajando una de sus manos a las nalgas de Meng Yao. Aquel omega
con un cuerpo pequeño pero bien formado, tenía una figura excepcional, invitándolo a
presionar sus perfectas nalgas con sus dedos o su delgada cintura con sus manos. Meng Yao
lo tentaba de una forma increíble.
“Tan suave…” Susurró Mingjue, presionando una de las nalgas de su esposo entre sus dedos.
Jadeando suavemente, Meng Yao se dejó hacer sin oponer resistencia, solamente cerrando los
ojos lleno de vergüenza, sintiendo las manos de su alfa tocándolo con descaro. Absorto en el
deseo que sentía por su esposo, Nie Mingjue pasó sus manos varias veces por las redondas
nalgas de su omega, presionando sus dedos contra estas, dejando marcas en su piel. Sin poder
aguantar más la tentación, Nie Mingjue en un rápido movimiento dejo que su mano cayera
fuertemente contra las nalgas del menor, dándole una fuerte y sonora nalgada.
Sorprendido por tal acción, Meng Yao susurró: “Amo…”
Pero sin hacerle caso al omega, en medio de sus agarres, Nie Mingjue fue repartiendo algunas
nalgadas a Jin Guangyao, dejando su piel de un tono algo sonrosado en pocos segundos.
Estremeciéndose y saltando un poco con cada nalgas que recibía, Meng Yao no podía evitar
lucir sumamente avergonzado, soltando jadeos y gemidos de sorpresa con cada movimiento
que su alfa hacía, notándose algo incómodo incluso.
Cuando el mayor finalmente se cansó de golpear las nalgas de su esposo con sus manos, se
separó de Meng Yao por última vez, quitándose los pantalones para regresar a la cama, pero
esta vez a la cabecera del lecho. Entendiendo las intenciones de su alfa, Jin Guangyao levantó
ligeramente el rostro y entreabrió los labios, observando el miembro de su alfa muy cerca.
Sonriendo complacido por la obediencia de su esposo, Nie Mingjue lo tomo suavemente de la
nuca enredado sus dedos en esos largos cabellos negros, posicionando bien su cabeza antes
de introducir su pene en la boca del contrario.
Jadeando con satisfacción cuando sintió aquella húmeda y estrecha cavidad envolviéndolo,
Nie Mingjue no dudo ni un segundo en comenzar a moverse de inmediato, entrando lo más
profundo que podía en la boca del omega. Siendo tomado por sorpresa, Jin Guangyao no
pudo evitar toser un poco y cerrar los ojos de golpe, sintiendo como aquel gran miembro
entrando profundamente en su interior. Pero manteniendo la concentración, solamente
deseoso de complacer a su alfa, Meng Yao presiono los labios alrededor de esa dura erección
en su boca, esforzándose por introducirlo lo más profundo que podía dentro de su boca.
“A-Yao… Qué bueno” Susurró Nie Mingjue excitado, tirando ligeramente de los cabellos
para obligarlo a introducir aún más su miembro dentro de su boca: “Eres realmente bueno…”
En medio de sus suspiros de satisfacción, Nie Mingjue siguió embistiendo los labios de su
omega a un ritmo constante, parando cada cierto tiempo para permitirle respirar, pero sin
darle mucho tiempo a recomponerse. Sin cambiar de posición, el mayor pronto extendió su
otra mano en dirección a las nalgas de Meng Yao, volviendo a darle una sonora nalgada. El
cuerpo de su esposo era bastante pequeño, así que sin muchos problemas, mientras seguía
penetrando sus labios podía darse el lujo de tocar las nalgas de este dejando más marcas en su
cuerpo.
Siendo tomado por sorpresa, Meng Yao soltó un gemido de dolor, mientras su cuerpo se
estremecía y forcejeaba un poco. Sin embargo así como había previsto, sin importar la fuerza
que hiciera, ni las correas de sus muñecas ni las de sus tobillos cedieron, dejándolo en la
misma incómoda posición completamente indefenso. Comenzando a ahogarse y a sentir un
dolor que ya no era placentero, el omega levanto la mirada suplicante ante su alfa, intentando
pedir que parara en medio de sus quejidos y tosidos ahogados.
Mirando los ojos de Meng Yao desde arriba, Nie Mingjue pasó sus dedos entre las nalgas de
su omega tocando su entrada algo húmeda, sonriendo suavemente: “¿Quieres que entre aquí
ahora?”
Sintiéndose agobiado por la falta de aire, Meng Yao asintió como pudo, suplicando que ahora
destruyera su entrada con aquel gran miembro que tenía en la boca.
“Está bien…” Accedió Nie Mingjue divertido.
Dando una última embestida profunda en la boca de Jin Guangyao, Nie Mingjue finalmente
soltó sus cabellos y saco su miembro de sus labios, observando como el omega se
derrumbaba en la cama tosiendo y quejándose un poco. Sintiéndose un poco arrepentido por
cómo había tratado al menor, el cual se veía realmente adolorido, el mayor se agacho y beso
delicadamente sus labios, mientras que Meng Yao se controlaba a sí mismo como podía.
“Te amo…” Susurró el alfa contra los labios del menor, terminando el beso y volviendo a
separarse de este.
Aun escuchando a Meng Yao jadear de una forma muy cansada, Nie Mingjue bajó a las
piernas y las nalgas del omega. Viendo sus nalgas perfectas con algunas marcas rojas por sus
propias manos, Nie Mingjue pronto paso sus dos dedos sobre aquella estrecha entrada,
logrando un jadeo de excitación por parte de Jin Guangyao, el cual tímidamente lo miró de
reojo.
“Suave… Por favor amo, hágalo suave” Suplicó el omega en un susurro.
Sonriendo a medias al escuchar el tono con el cual Meng Yao estaba hablándole, el alfa
entendió que su esposo le estaba dando una orden diferente, queriendo que fuera duro con su
cuerpo. Así que sin dudar en complacerlo, le dio una nueva fuerte nalgada, para luego llegar
sus dos dedos nuevamente a la entrada del omega, comenzando a penetrarlo con estos de
golpe. Al sentir aquella intromisión de los gruesos dedos de su alfa, los cuales conocía bien,
Meng Yao soltó un gemido de placer y dolor al mismo tiempo, levantando las caderas y
temblando.
“Amo… Amo lento…” Suplicó Guangyao en un susurro, estremeciéndose.
Introduciendo completamente sus dos dedos en aquella estrecha entrada, ayudado por lo
húmedo que estaba el interior de su esposo, Nie Mingjue preguntó: “¿Eso es lo que realmente
deseas?”
Sintiendo aquella estrecha y suave entrada en sus dedos, la cual se abría dócilmente para él,
el líder de la secta Nie pronto comenzó a embestirlo, sacando gemidos sorprendidos de los
labios de su esposo. Ya varias veces había podido tomar ese cuerpo, así que conociendo bien
sus límites, Nie Mingjue no dudo en ser un poco brusco con Meng Yao, penetrándolo lo más
profundo que podía con sus dedos.
Completamente inmovilizado y con aquella almohada en el abdomen, Meng Yao no pudo
bajar las caderas o moverse demasiado, y teniendo que soportar aquellos dedos en su interior
de una forma tan brusca, solo pudo respirar profundo una y otra vez, intentando realojarse
para soportar el ligero dolor que sentía. Tras unas cuantas embestidas, Nie Mingjue introdujo
un tercer dedo en el interior de su esposo, haciendo que Meng Yao se retorciera ligeramente
con placer.
“Gege… Gege por favor…” Gimoteó el omega resistiéndose un poco: “¿Por qué me estas
estirando tanto?”
Sonriendo Nie Mingjue le recordó: “Llevas repitiendo toda la noche lo grande que soy, voy a
prepararte muy bien entonces…”
Volviendo a soltar un gemido de dolor y placer, Jin Guangyao cerró fuertemente los ojos,
sintiendo como aquellos tres dedos comenzaban a embestirlo. Notando como su omega se
había puesto algo tenso por el dolor, Nie Mingjue rápidamente comenzó a besar
delicadamente la espalda del menor, llevando su otra mano a la entrepierna del contrario,
tocándolo suavemente y con cuidado, intentando hacer que olvidara el dolor.
“Da-Ge… Da-Ge…” Gimoteo Meng Yao, comenzando a removerse con más placer que
dolor.
Sintiéndose alentado por esos gemidos desesperados, Nie Mingjue introdujo un cuarto dedo
en el interior de su esposo, escuchando el grito que había soltado este, embistiéndolo de
inmediato. Jin Guangyao era indudablemente pequeño y muy estrecho, sin embargo logrando
absorber cuatro de los dedos de su esposo, Nie Mingjue no dudo que con más calma y con un
poco más de preparación, incluso podía intentar meter sus cinco dedos en el interior de esa
estrecha entrada; un pensamiento que le causaba mucha excitación.
“No… Da-Ge no más…” Suplicó Jin Guangyao comenzando a derramar algunas lágrimas
por sus mejillas.
Apiadándose de su esposo, el cual se veía realmente adolorido, Nie Mingjue finalmente sacó
sus dedos, observando por un segundo su entrada completamente preparada. Suspirando y
jadeando aliviado, Jin Guangyao bajó suavemente las caderas, sintiendo las manos de su alfa
aun masajeando suavemente sus nalgas. Dejándose hacer en silencio, Meng Yao pronto sintió
el miembro de Nie Mingjue entre sus nalgas, frotándose contra su húmeda y preparada
entrada.
“Da-Ge… Se gentil”.
Sonriendo con cierta diversión, Nie Mingjue respondió: “Lo intentare”.
Apoyándose en la cama y en las caderas de Meng Yao, Nie Mingjue espero un poco antes de
comenzar a introducir su pene en el interior del menor. Intentando no lastimarlo, introdujo
lentamente la mitad de su miembro en el estrecho interior de su omega, escuchando sus
gemidos algo adoloridos y sintiendo su cuerpo tensarse con cierto dolor.
Quedándose quieto, Nie Mingjue llevó una de sus manos a la barbilla del contrario, sujetando
su rostro para darle un beso en la mejilla: “¿Duele mucho?”
Jadeando y respirando profundo para intentar controlarse, Jin Guangyao respondió: “Solo un
poco…”
Dándole una nueva nalgada con su otra mano, Nie Mingjue dio una suave embestida
introduciendo su miembro un poco más en el interior del contrario: “Entonces sopórtalo”.
Sin poder replicar o decir algo, Jin Guangyao volvió a gemir, levantando débilmente las
caderas para permitir que el gran miembro de su alfa entrara completamente en su interior,
mordiéndose un labio cuando este rozó uno de sus puntos sensibles.
“Amo… Amo esta tan profundo…” Susurró Meng Yao ya casi completamente perdido en el
placer.
Volviendo a tomar sus cabellos para girar su rostro, Nie Mingjue preguntó: “¿Te gusta?”
“Si… Me gusta…”
“Entonces suplica que continúe” Le ordeno el mayor en un susurro muy cerca de uno de sus
oídos, pasando sus labios y sus dientes por uno de sus lóbulos con deseo.
Concentrándose para hablar a duras penas, Jin Guangyao suplicó: “P… Por favor… Mi
amo… Por favor destrózame…”
Sonriendo complacido, Nie Mingjue no esperó ni un solo segundo más, comenzando a
moverse en el interior de su esposo. Levantando aún más las caderas con mucho esfuerzo,
Meng Yao soltó un fuerte gemido de placer que tenía atorado en la garganta, aceptando
contento aquellas profundas y placenteras embestidas, las cuales con cada movimiento
rozaban su punto más sensible, haciéndolo perderse en todas aquellas sensaciones.
“Mas… Mas gege…” Suplicó el omega: “Mingjue me gusta…”
Sonriendo realmente complacido por su atrevido omega, Nie Mingjue le dio una nueva
nalgada, sintiéndose alentado a ser más fuerte con sus movimientos. Por lo general él no era
delicado con Meng Yao, este nunca lo había alentado a ser especialmente cuidadoso, así que
acostumbrado a embestirlo con fuerza y con profundidad, no dudo ni un segundo en destrozar
a ese omega completamente inmovilizado bajo su cuerpo.
Cerrando los ojos y comenzando a derramar lágrimas de placer por sus mejillas, Meng Yao
comenzó a soltar nuevos gritos de placer, temblando y estremeciéndose sin parar. Soltando
algunos jadeos y suspiros de excitación sintiendo como el interior de su omega se estrechaba
cada vez que estimulaba lo más profundo de su interior, Nie Mingjue llevó una de sus manos
debajo del cuerpo del omega, y cuidadosamente comenzó a estimular sus pezones,
presionándolos y tirando de ellos con cuidado.
“Da-Ge…” Suspiró Jin Guangyao completamente perdido, removiéndose bajo el cuerpo del
contrario.
Bajando sus labios al cuello del menor, Nie Mingjue beso su piel desnuda con cuidado, sin
dejar de estimular su sensible cuerpo. Buscando darle más placer a su esposo, como pudo
bajo su mano del pecho y los pezones de su omega a su entrepierna, moviendo un poco la
almohada y obligándolo a subir las caderas. Escuchando los gemidos y los jadeos de Meng
Yao volverse más pesados, Nie Mingjue se sintió alentado a estimular el miembro de su
amado, estrechándolo entre sus dedos y haciendo sus toques amables.
Sin poder dejar de llorar por el placer, Meng Yao gimoteó: “No más… Da-Ge no… Me voy a
venir…”
Ambos habían estado estimulándose el uno al otro desde hace un buen tiempo, así que
Mingjue se sentía también en su límite. Buscando los labios de su omega para besarlos, el
alfa le susurro: “Esta bien… Puedes hacerlo”.
Absorto en el placer, sintiendo como el interior de Meng Yao se contraía un más, anunciando
su próximo orgasmo, Nie Mingjue hizo sus embestidas de una forma mucho más certera en
dirección al punto sensible del contrario, haciendo sus movimientos sobre el miembro del
contrario al rimo de sus embestidas. Sintiéndose también en su límite, los ojos del alfa pronto
miraron la nuca de su esposo. En el pasado siempre había evitado morder esa parte del cuerpo
de su amado, después de todo ambos no tenían la certeza de que terminarían casándose; pero
ahora ya eran esposos y estarían juntos por siempre, así que su alfa le exigió a Mingjue el
vínculo.
Así que obedeciendo a su alfa, dejando de tocar el miembro de su omega, Nie Mingjue llevó
su mano a los cabellos negros del menor, tomándolos para apartarlos de su camino y empujar
el rostro de Meng Yao contra la cama, dándole acceso así ante la nuca desnuda del menor.
Jadeando asustado, volviendo en sí mismo con semejante acto, Jin Guangyao no pudo evitar
tensarse y forcejear aún más contra las ataduras de las correas, asustado al sentir el aliento y
los labios de su alfa contra su cuello.
“Da-Ge… Da-Ge…” Susurró muy asustado, temblando por el miedo de ser vinculado:
“Mingjue… El vínculo…”
Absorto en su alfa y en toda la placentera sensación que ambos tenían, Nie Mingjue no prestó
atención a su omega y no le permitió terminar de hablar, mordiendo fuertemente la piel de la
nuca del contrario, estableciendo el vínculo con esa mordida. Cerrando los ojos adolorido,
Meng Yao abrió los labios para soltar un fuerte grito de dolor, mientras que sin poder
evitarlo, era finalmente marcado y vinculado por su esposo, algo que lo hizo llorar aún más.
Sin embargo a los pocos segundos Jin Guangyao volvió a gemir con placer, pues su alfa
había comenzado a embestirlo con mucha fuerza, y sin soltar aun la mordida que tenía en su
nuca, el omega comenzó a sentir mucho placer con todo aquello. Sin poder aguantar más
estimulaciones, el cuerpo entero de Meng Yao tembló por completo, viniéndose de golpe,
estrechando mucho más aun su interior.
Teniendo que soltar la nuca de su omega con un gruñido de satisfacción, Nie Mingjue bajo
sus dos manos de forma inmediata a las caderas del contrario, presionándolas fuertemente
entre sus dedos. Él también estaba en su límite, así que cerrando los ojos y concentrándose en
aquella maravillosa sensación, termino viniéndose en el interior de su omega, dando una
última profunda embestida y permitiendo que su alfa tomara el control de su cuerpo por un
segundo.
Jadeando y gimiendo aún muy confuso por todo lo que había pasado, Meng Yao solo volvió
en sí mismo al sentir como su interior era expandido de golpe por el miembro de Nie
Mingjue, el cual seguía profundamente introducido en su interior. Así que algo asustado,
girándose un poco, el omega pregunto: “¿Amo? ¿Qué estás haciendo? ¿Qué está pasando?”
Aun respirando profundo y sosteniéndose de las caderas de su omega, Nie Mingjue intentaba
calmarse respirando profundo. Así que al escuchar aquella pregunta, el alfa regreso con el
menor bastante enternecido, besando la piel de su cuello y su nuca, esperando a que su nudo
se relajara antes de poder salir.
“Da-Ge… Duele…” Se quejó Meng Yao removiéndose incómodo.
“Tranquilo…” Pidió Nie Mingjue en un susurro, buscando los labios de su omega para
besarlos: “Es el nudo… Ya pasara”.
En el pasado Nie Mingjue también había evitado anudar en su omega, no hubiera sido bueno
que Meng Yao se embarazara por accidente. Pero ahora que ambos estaban casados, eso dejo
de importar. Así que bastante relajado, mientras su nudo comenzaba a aflojarse y le dejaba la
oportunidad de salir un poco del interior del menor, Mingjue busco los labios de Jin
Guangyao, besándolos una y otra vez realmente enamorado de este.
“Te amo A-Yao” Susurro Nie Mingjue con suavidad contra los labios de su omega,
sintiéndose algo tímido por decir algo así.
Recuperándose poco a poco de igual manera, Jin Guangyao tardo algunos segundos en
responder: “Yo también te amo Mingjue”.
Dejándose llevar por aquel maravilloso sentimiento, el alfa volvió a besar los labios de su
omega una infinidad de veces, hasta relajarse por completo. Jadeando con placer, Nie
Mingjue finalmente salió del interior de Meng Yao, dejándolo nuevamente tendido en la
cama. El omega se veía bastante cansado y confuso, removiéndose con placer y con cierto
dolor después de semejante ronda de hacer el amor.
Mirando la nuca del menor, donde se podía ver la marca de su mordida con algunas gotas de
sangre, Nie Mingjue no pudo evitar sonreír. Agachándose ligeramente, el alfa besó
delicadamente la piel de la nuca de Meng Yao, sintiéndose realmente bien al poder vincularse
finalmente con este. Al sentir los besos, Jin Guangyao sonrió de una forma cansada,
dejándose hacer en silencio, sintiéndose muy bien de igual forma por tener finalmente su tan
deseada marca.
“Te amo A-Yao” Susurro Nie Mingjue con cierta timidez, siempre algo nervioso por
demostrar sus sentimientos.
“Yo también te amo Da-Ge” Correspondió Meng Yao con dulzura, sin dejar de sonreírle.
Dándole un último beso en los labios al que ahora era su esposo, Nie Mingjue finalmente se
levantó de la cama, y con cuidado comenzó a desatar las correas con las cuales había
asegurado del cuerpo del omega. Dejándose hacer en silencio, Jin Guangyao solamente pudo
suspirar con satisfacción cuando sus extremidades fueron liberadas y pudo volver a moverse.
Mirándolo en la cama sentándose con cierto dolor, Nie Mingjue pregunto: “¿A-Yao estas
bien?”
Sonriendo, Meng Yao asintió a la pregunta, y tomando a su gege de una mano, lo jalo en
dirección a la cama, haciendo que este se acostara a su lado.
“Se sintió bien Da-Ge” Susurro Meng Yao muy satisfecho: “Me gustó mucho”.
Algo cohibido, Nie Mingjue respondió: “Bueno, podremos hacerlo mucho más seguido ahora
que somos esposos”.
“¿Realmente?”
Siendo tomado por sorpresa, Nie Mingjue observo como Meng Yao rápidamente se subía
sobre él y se sentaba en su regazo, mirándolo desde arriba con una sonrisa.
“Quiero ser una buena esposa para mi señor, que tengamos muchos hijos y… Ser unos
buenos líderes de secta”.
“Lo seremos” Dijo Nie Mingjue con seguridad, pasando sus manos por el abdomen de Meng
Yao con suavidad.
Riendo un poco, con dulzura y tranquilidad, Jin Guangyao paso sus manos delicadamente por
el cuello y los hombros de Mingjue. Y aunque esto al alfa se le hizo algo extraño, un poco
amenazante incluso, se dejó hacer pues era Meng Yao quien lo tocaba.
“Te hare feliz Nie Mingjue” Prometió Meng Yao, presionando ligeramente el cuello del
mayor con sus dedos: “Ya lo veras, te sentirás loco de la felicidad a mi lado, incluso podrías
perder la cabeza…”
Sonriendo con aquel comentario que se le hizo bastante gracioso, Nie Mingjue bajo sus
manos a las caderas del menor, acariciándolas con cariño, para luego decirle: “Claro que lo
hare…”
Volviendo a buscar los labios de su alfa, Meng Yao levanto un poco las caderas, y bajando
una de sus manos al pene de su esposo, comenzó a estimularlo entre sus dedos muy cerca de
sus nalgas. Suspirando, Nie Mingjue se dejó hacer, dándole una suave nalgada volviendo a
excitarse.
“De nuevo… Hazme el amor de nuevo Da-Ge…” Pidió Jin Guangyao contra los labios del
contrario: “Yo nunca me cansare de amarte…”
Prologo parte 2.

“… Es de esta manera que la secta Gusu Lan, en representación de la secta Yunmeng Jiang y
la unión de alfas de las sectas más prominentes, se disculpa de manera formal con la secta
Qishan Wen por la ruptura de este compromiso”.
Sentado en la silla del líder, en el salón principal de Ciudad Sin Noche, Wen Ruohan escuchó
aquellas palabras dichas por uno de sus sirvientes con mucha atención, con la mirada perdida
en cualquier lugar de aquel gran sitio atestado de gente. No era la primera vez que escuchaba
una carta parecida, en aquel salón, miles de cartas de disculpa por rupturas de alianzas o
compromisos con miembros de la secta Wen se habían escuchado a lo largo de los siglos.
Mismas cartas, mismas sectas, mismos alfas, mismos resultados.
“… Y de forma personal, se da una sincera disculpa por parte del alfa Lan Wangji y el omega
Jiang Wuxian, los cuales piden el perdón del omega Wen Xu por los inconvenientes,
esperando poder ayudarlo a encontrar una nueva pareja y concretar un nuevo compromiso”.
Parado al lado de su padre, Wen Xu no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas,
sintiendo la vergüenza y la humillación de haber sido desechado por un alfa por segunda vez.
No hace mucho había llorado por días al enterarse de la boda de Nie Mingjue y Jin
Guangyao, una fiesta que debió ser suya, una boda que debió ser suya. Y poco después
volvió a llorar cuando se enteró del embarazo de Meng Yao, el cual según los curanderos
especiales gestaba un pequeño alfa en su vientre, un hijo que debió ser suyo, un alfa que
debió ser suyo. Y finalmente, después de tener esperanzas por primera vez en casi 5 años
después de la ruptura de su primer compromiso, se enteró por rumores de celebración que el
nuevo heredero de Yunmeng se había vuelto a comprometer con su alfa Lan, un alfa que
había prometido ser suyo, un alfa que creyó que tal vez podría amarlo.
“… Esperando que la secta Wen acepte la cordial invitación de la secta Lan a Gusu, para la
instrucción de jóvenes cultivadores en el Receso De Las Nubes que se dará el próximo año de
manos del maestro Lan Qiren, unas clases especialmente orientadas para jóvenes omegas”.
Sonriendo de cierta forma melancólica, escuchando aquellas últimas palabras claramente
como las de Lan Qiren, pues ese omega tan practico seguramente habría dicho algo similar,
intentando mantener la amistar entre todos de la mejor manera posible.
Sin embargo Wen Xu no sonrió en lo absoluto, presionando sus manos en puños fuertemente
dijo: “Es una linda invitación. Pero yo no podré volver a salir de Qishan nunca más, sin un
alfa un omega pierde todo”.
Ya sin poder evitar llorar rompiéndose ante todos los presentes, múltiples invitados de la
secta y de la región, Wen Xu rápidamente se giró y camino fuera del gran salón de vuelta a
sus habitaciones privadas, rompiendo en un fuerte llanto de puro dolor. Al ver esto todos los
miembros de la secta sintieron lastima y algunos otros diversión, pero la mayoría estuvo en
completo favor de que Wen Xu realmente era un omega desafortunado.
En medio de los cuchicheos de diferentes índoles por parte de los presentes, Wen Ruohan dio
por terminada la reunión y se levantó de su lugar de líder junto a su hijo menor, Wen Chao.
Abandonando la sala de reuniones principal de la secta Wen por la misma puerta por la cual
había salido el omega hace pocos segundos, padre e hijo no dijeron palabra hasta asegurarse
de estar completamente solos, cuando Wen Chao estallo.
“¡Esto es una ofensa!” Dijo Wen Chao sumamente enfadado: “La secta Lan ha sobrepasado
los límites, es inadmisible lo que ellos nos han hecho, lo que le han hecho a mi hermano”.
Wen Chao era un beta y el hijo heredero de Qishan Wen. Todos suponían que Wen Xu se
casaría algún día con un alfa de alguna secta importante, así que Wen Chao era quien se
quedaría a cargo de la secta. Ahora todo cambio de una forma drástica, Wen Xu rozaba los 21
años, una edad indeseable para un omega, ya que no se los consideraba tan fértiles y era
sumamente difícil conseguirles un buen marido. Aun cuando Wen Ruohan podía pagar una
fortuna para que un alfa tomara a su hijo como esposa, debía ser realista, y saber que cuando
dijera la edad de su querido hijo omega, cualquier alfa arrugaría la nariz y lo vería con
desprecio.
Ya era muy tarde para el joven omega Wen.
Esto de cierta manera había arruinado todos los planes de Wen Chao. El joven Beta, que
había sido criado desde su nacimiento como el próximo líder de la secta, teniendo la cabeza
en alto pues mandaría tanto a omegas como alfas con su posición, teniendo incluso la
oportunidad de casarse con un omega de alta cuna como un Jiang o un Jin solo por su
posición; todo eso había terminado, pues la posición de líder ahora descansaba en los
hombros de Wen Xu. Y esto enfurecía a Wen Chao, más que pensar en el dolor de su
hermano o su secta, él se sentía ofendido por perder la única oportunidad de su vida.
Wen Chao había crecido acomplejado toda su vida por ser un beta. Después de varias
generaciones de tanto omegas como alfas en la línea principal, Wen Chao era el primer beta
que nacía como un hijo de un líder en ya casi 100 años. Este joven Wen, el cual daría lo que
fuera por ser un alfa así como su padre, fingía ser de este género a toda costa, infundiendo
respeto en los demás gracias a sus guardias personales que eran todos alfas y rodeándose de
omegas hermosos con los cuales acostarse. Wen Chao realmente odiaba no poder ser un alfa.
Mirando a su hijo de reojo con cierta dureza, sintiéndose decepcionado de su infantil actitud
así como siempre sucedía cuando este decía aunque fuera una sola palabra, Wen Ruohan le
dijo: “¿Lo es? Todas las sectas ven normal ofender a los betas, las personas que fundaron
nuestra familia. No importa cuántos alfas u omegas sean los miembros de la línea sucesoria
principal, todos ellos siempre nos miraran con asco solo porque nuestros antepasados fueron
betas. Mandaran cartas ridículas sobre prostitutas que ahora se hacen llamar Jiang, y alfas sin
palabra que se hacen llamar Hanguang-Jun. No es una ofensa, es una declaratoria de una
guerra”.
Girándose de forma sorprendida ante su padre, Wen Chao solo pudo guardar silencio, sin
creer por completo en su palabra. Desde hace varios años que como betas se habían
encargado de crear una milicia de proporciones gigantescas dentro de Sin Noche, teniendo
más soldado que sectas prominentes como los Jin o los Nie, que eran las sectas que en el
pasado osaron afirmar que eran las más fuertes. Todos estos ejércitos, conformados en su
mayoría por betas, sentían el odio de los alfas del consejo en su sangre, odiando ser
considerados menos solo por su género. Infundir ese odio había sido la principal razón de
vida de Wen Ruohan, crear una fuerza armada de su secta que odiara a las demás sectas con
un motivo compartido: La discriminación.
Hubo un tiempo en el que Wen Ruohan inicio una guerra solo por un omega, y la termino por
las lágrimas y las suplicas de aquel que una vez creyó el amor de su vida, Lan Qiren. Pero
ahora ese omega estaba encerrado en Gusu, y el corazón de ese alfa se había llenado de
resentimiento, tanto que incluso quería cobrar aquella venganza del pasado, la promesa que le
hizo al cadáver de su hermana que nunca pudo cumplir: Cortar la cabeza de Qing Heng-Jun
en una lanza y darle de comer su cadáver a los cerdos, fragmentando su espíritu para que un
alfa tan despreciable ante sus ojos nunca pudiera reencarnar.
Tal vez el líder de la secta Wen esperaba esto en secreto, la más mínima provocación, el más
mínimo fallo; todo con el único objetivo de iniciar aquella guerra y aquel mar de sangre que
su corazón había anhelado desde que tuvo 17 años. Por eso acepto gustoso que los jóvenes
Lan, cultivadores de una secta que fue declarada no grata en Qishan, entraran y ayudaran en
su territorio, con el consiguiente desarrollo de los eventos que llevo al nuevo compromiso de
su hijo. Recibiendo aquellas cartas de Lan Qiren después de tantos años, el cual tal vez por
más culpa que real preocupación por su sobrino, intento reparar errores del pasado con un
nuevo matrimonio. Tal vez Wen Ruohan acepto esta unión que él consideraba desagradable
solo para ver como terminaba en una desgracia y tener aquel motivo tan deseado para atacar.
Así que acercándose junto a Wen Chao a las habitaciones privadas de Wen Xu, donde el
omega se había encerrado con uno de sus sirvientes a llorar, Wen Ruohan entro sin tocar la
puerta, observando a su deprimido hijo.
“Soy un omega repugnante… Soy tan horrible” Se lamentó Wen Xu en medio de un mar de
lágrimas, sin poder dejar de llorar: “¿Por eso ningún alfa puede amarme? ¿Qué es lo que
estoy haciendo mal?”
Aquel sirviente que acudió con Wen Xu era el omega Wang Jiao, mejor conocido como Jiao
Jiao. Un omega masculino que era un sirviente ambicioso, usando su género como omega y
su bello rostro logro conquistar a varios miembros poderosos de la secta Qishan Wen
ascendiendo con su ayuda hasta ser uno de los sirvientes privados de los hijos del líder. Lo
cual ocasiono que Wen Chao comenzara a fijarse en él, y ante la sorpresa de todos, un omega
tan mundano y hasta despreciable, comenzó a ser el favorito del que se suponía debía ser el
próximo líder de la secta Wen.
Arrodillado frente a Wen Xu, limpiando sus lágrimas con un pañuelo, Wang Jiao sonrió de
una manera hipócrita fingiendo empatía, intentando consolar al omega Wen Xu: “No diga eso
joven maestro, usted es el omega más hermoso, incluso más hermoso que la ramera de Wei
Wuxian ¿Acaso no sabe cómo consiguió a su alfa? Todos comentan como se acuesta con el
joven Lan desde que este tiene 12 años. Jiang Ying no tiene a su alfa por ser hermoso o un
buen omega, solo porque sabe abrir las piernas, no hay nada más que indecencia en el nuevo
heredero de Yunmeng”.
Aun con la mirada baja, con una inocencia típica de ese omega Wen, el joven A-Xu
respondió: “No creo que sea así. Yo conozco bien a Lan Wangji, el jamás hubiera hecho algo
semejante. Fue amor, él se enamoró de Jiang Wuxian, y no de mí, porque soy asqueroso…”
“Joven maestro no llore por favor…”
Wen Xu era un omega de un buen corazón. Siendo criado por el lado más dulce que tenía
Wen Ruohan, el cual veía a su dulce hermana reflejada en el rostro de su hijo, Wen Xu era el
omega más noble de todo Qishan Wen. Al ser de una familia de betas era un poco más frágil
que los demás omegas, con un cuerpo pequeño y delgado, pero de un rostro hermoso y unos
largos cabellos negros que caían por su espalda. Wen Xu estaba realmente enamorado de Lan
Wangji, así que no lo juzgaba por haberse enamorado, solo se juzgaba a si mismo por que no
pudo lograr que su amor fuera correspondido.
Acercándose a su hijo con preocupación, Wen Ruohan acaricio suavemente una de las
mejillas de este con sumo cuidado, mirándolo a los ojos: “No llores mi dulce A-Xu, papá se
encargara de que tengas una vida maravillosa aquí en Qishan, y serás muy feliz tu solo como
un gran líder”.
“No poder salir de aquí jamás” Se lamentó Wen Xu mirando a los ojos a su padre: “Estaré
encerrado toda mi vida en Sin Noche, no poder ver el mar nunca más, ni siquiera las
montañas. Mi vida está acabada”.
“¿Y quién dice semejante cosa?”
Sonriendo con cierta resignación, Wen Xu respondió: “Las tradiciones de las sectas padre,
esa es la sentencia de todos los omegas que fuimos despreciados por los alfas, no podremos
ser felices jamás”.
Tomando delicadamente la mano de su hijo, Wen Ruohan sentencio: “Entonces yo quemare
cada secta para que nadie pueda encarcelarte”.
Abriendo mucho los ojos, observando a su sorprendido hermano y al sorprendido omega Jiao
Jiao, Wen Xu no supo que decir, comenzando a sentirse asustado por las tétricas palabras de
su padre.
“Yo haré una promesa ante ti ahora” Dijo Wen Ruohan mirando a los ojos a su dulce hijo:
“Yo te juro que lastimaré profundamente a todas las personas que se rieron de nuestra secta,
que osaron lastimarte. Y a ese alfa por el cual derramas tus lágrimas, lo traeré ante ti para
obligarlo a casarse contigo, y esa ramera la cual ama… La arrojare ante los perros”.
Sintiendo lágrimas de horror recorriendo su rostro, cada vez más asustado por las palabras de
su padre, Wen Xu no pudo evitar que aquel alfa besara su frente con cariño, demostrando el
poco amor que le quedaba por su dulce hijo.
“Quemaré todas las sectas por ti, a todos aquellos que recuerden que existió una tradición
alguna vez, y así te hare libre. Ningún omega será atado por la tradición entonces, y la secta
Wen podrá hacer justicia por todos los betas que han sido despreciados” Dejando que el odio
inundara su voz, Wen Ruohan miro a su hijo a los ojos y le pregunto: “¿Alguna vez he roto
una promesa para ti, mi dulce hijo?”
Capítulo 1.

El sol baño por completo el Receso De Las Nubes.


Esa mañana era una bastante agitada en la residencia de los Lan, en aquellas silenciosas y
tranquilas montañas, las cuales se bañaron de luz en medio de su usual calma. Con sus
riachuelos naturales tan fríos y tranquilos como siempre, con la suave brisa que recorría la
montaña en silencio, y con una ligera niebla por el frio de aquella mañana; nada lucia fuera
de lugar más allá de los nuevos invitados.
“¡Atrápame Lan Zhan! ¡Atrápame!”
“¡Wei Ying!”
Pronto aquella quietud fue interrumpida por risas escandalosas y fuertes gritos, que no
alarmaron a los acostumbrados miembros de la secta Gusu Lan, pero si a sus nuevos
invitados.
Corriendo entre risas por los lisos pasillos de la residencia de la secta Lan, Wei Wuxian
escapaba rápidamente de su alfa, un juego que recientemente se le había hecho usual realizar,
pues el astuto omega Wei sabía que existía una parte de su alfa que quería cazarlo como una
presa cuando corría y escapaba, algo que usaba para jugar con su frio y serio destinado. Tras
las risas y pequeños saltos de aquel fino omega, pronto se escucharon pasos más fuertes y
rápidos, un alfa el cual furiosamente caminaba rápidamente detrás de su omega. Vestido
completamente de blanco, con un rostro serio y hasta enfadado, Lan Wangji estaba
caminando tan rápido que parecía que trotaba detrás de Wei Ying, trayendo en sus manos una
gruesa capa de piel para abrigar a su omega.
Wei Wuxian, vestido con las túnicas blancas usuales de la secta Lan, como todos los
invitados que estaban ahí presentes, se aprovechaba de que su alfa no podía correr en la secta
para tomar ventaja y seguir jugando. El joven Wei, buen conocedor de las reglas de Gusu,
solía molestar a su alfa intentando hacer que este rompiera las normas; sin embargo Lan
Wangji siempre encontraba maneras de hacer lo que su omega le pedía pero manteniéndose
tan recto y serio como siempre.
Pronto la ruidosa pareja salió de los pasillos de la residencia principal, y acercándose a los
puentes fuera del recinto donde había pequeños lagos helados, Lan Wangji aprovecho que
ambos estaban entrando en un lugar estrecho para hacer su jugada definitiva. Dando un salto
en el aire apoyándose en una de las barandas de aquel puente, Lan Zhan termino frente a su
omega de un solo salto, tomándolo de los hombros para impedir que escapara. Wei Wuxian,
dándose cuenta de las intenciones de su alfa, no pudo hacer nada para resistirse, pues no
podía ir a los lados por el estrecho puente, y no tenía suficiente tiempo para retroceder y
escapar.
Así que cuando sintió las fuertes manos de su alfa tomándolo de los hombros, Wei Ying no
pudo evitar soltar un bufido, y mirando a su destinado a los ojos se quejó en un susurro: “Lan
Zhan… Vamos suéltame, no es justo, hiciste trampa”.
Con su usual rostro serio e imperturbable, Lan Wangji solamente respondió: “Mmm”.
“¡Que malo!” Se quejó nuevamente Wei Wuxian.
Resoplando ligeramente, Lan Wangji recobro la compostura. Con las orejas ligeramente rojas
por haber hecho semejante espectáculo en medio de tantas personas y los ojos dorados algo
brillantes por la diversión, el alfa no reacciono ante las quejas de su destinado, y sin soltarlo
en un rápido movimiento puso aquella abrigada capa blanca sobre los hombros de Wei Ying,
a pesar de las protestas de este.
“¡Lan Zhan!” Protestó Wei Ying.
Asegurando la capa con cuidado para que no se le cayera al mayor, Lan Wangji respondió:
“Hace frio Wei Ying”.
Frunciendo la nariz enfadado, Wei Wuxian se cruzó de brazos replicando: “No hace frio
¿Estás loco? Solo es una pequeña brisa, vamos no necesito esto, quítamelo…”
Haciendo caso omiso a las palabras de su omega, Lan Wangji por su parte arreglo
cuidadosamente su cabello, sacándolo de la capa para dejarlo caer libremente por su espalda.
Recientemente Wei Wuxian había dejado de recoger su cabello en una alta coleta, intentando
lucir un poco más serio, el joven omega dejaba su cabello suelto y a penas lo recogía con una
media cola que aun ataba con aquella cinta roja tan característica, dejando su gracioso y
desordenado flequillo en su frente. Aquel aspecto que le daba un aire un poco más
atemorizante, a Lan Wangji se le hacía hermoso; así que peinándolo delicadamente con sus
dedos, beso finalmente su frente con cariño, sintiéndose en paz por estarlo protegiendo.
“Mira al resto Lan Zhan, míralos” Pidió Wei Ying enfadado: “¿Acaso alguno está usando
ropa para el frio? ¿No? ¿Entonces por qué debo usarlas yo?”
“Por qué hace frio”.
“¡No hace frio!”
Negando con la cabeza, tan obstinado como siempre, Lan Wangji susurró: “Frio”.
Refunfuñando realmente enfadado, cruzándose de brazos muy molesto, Wei Wuxian
únicamente debió aceptar que su paranoico alfa acariciara sus brazos y su espalda
dulcemente, haciéndolo entrar “en calor”.
Aquel espectáculo tan adorable no fue pasado por alto por todos los presentes. Los cuales con
sonrisas a medias y rostros de confusión, observaron cómo ambos destinados seguían
discutiendo en el puente.
Los días de instrucción en Gusu habían comenzado, y jóvenes representantes de todas las
sectas habían asistido a las exclusivas clases del maestro Lan Qiren, un omega cultivador
sumamente respetado por su gran sabiduría. Todas las sectas habían mandado un
representante, excepto la secta Wen, la cual se había vuelto increíblemente hostil e impedía
que cualquiera entrara o saliera de Qishan.
Pero aquello traía sin mucho cuidado a todos los grandes líderes de las demás sectas, pues
creían que Wen Ruohan solo estaba haciendo una rabieta por su hijo, pero así como había
sucedido en el pasado, no haría nada y al final los dejaría a todos tranquilos. Todos suponían
eso, menos Lan Qiren.
Los discípulos de las grandes sectas habían llegado el día anterior a ese, donde se instalaron
en sus respectivos pabellones y asistieron a la ceremonia de inauguración, donde el líder Lan
Xichen les dio la bienvenida a Gusu y les deseo una agradable estadía en la secta Lan.
Aquel día por la mañana comenzaría la instrucción, así que separados con sus respectivas
sectas y géneros, todos esperaban que se abrieran las puertas del gran salón principal de El
Receso Entre Las Nubes para que pudieran ingresar a las primeras clases del día. Parado en el
sector de los omegas de la secta Gusu Lan, Jiang Cheng solo pudo observar a su hermano en
silencio, desaprobando seriamente sus actitudes al ser tan ruidoso en la que ahora consideraba
su secta.
Pronto los sirvientes de la secta Lan abrieron las puertas del gran salón e invitaron a todos a
entrar. Al ver esto, Lan Wangji se separó finalmente de su omega dándole una suave caricia
en la mejilla, para ir con los alfas de su secta. Mientras que Wei Wuxian, bastante fastidiado,
le saco la lengua antes de ir con la secta Yunmeng Jiang, parándose al frente como el
heredero. Así que en formación, dejando que los miembros de la secta Lan entraran primero,
Wei Wuxian aprovechó que su alfa no lo veía para quitarse la capa de los hombros.
Pasando al lado de la secta Yunmeng Jiang y observando a su gran amigo desobedeciendo a
su alfa, Nie Huaisang solamente pudo reír, cubriendo su rostro de una forma elegante con uno
de sus hermosos abanicos. Todos manteniendo sus formaciones, siendo dirigidos por los
herederos de las sectas o sus representantes, pronto terminaron de entrar en el gran salón,
ocupando sus sitios y esperando al maestro.
Pronto el gran maestro Lan Qiren entro en la habitación acompañado de su sobrino, el nuevo
líder de la secta Lan, Zewu-Jun. Caminando en medio de sus nuevos alumnos, el respetado
omega recibió varias reverencias mientras se acercaba a su sitio, sentándose en este con
mucha elegancia. Así que al verlo tomar su lugar, comenzó la ceremonia del primer día de
aquella reunión. Como era una tradición, todas las sectas invitadas a la instrucción en Gusu
llevaban regalos, agradeciendo la amabilidad de aquel maestro por acogerlos en la secta e
instruirlos.
Y siguiendo el usual orden de presentación, la secta Lanling Jin se puso de pie primero, y
encabezados por la joven omega Qin Su, se acercaron al líder con sus sirvientas haciendo una
graciosa reverencia. Qin Su era una de las tantas hijas bastardas del patriarca Jin Guanghsan,
un alfa desagradable el cual probablemente tenía hijos en cada una de las sectas más
prominentes. Aquella joven era originaria de Qishan de la secta Qin, una famosa secta de
betas, hija de la segunda dama de la familia, la cual al igual que Jin Guangyao fue encontrada
y adoptada como una Jin más por su padre. Así que siendo la siguiente en la línea sucesoria
sin Meng Yao y Jin Zixuan, fue a Gusu en representación de su secta.
“Gran cultivador Lan Qiren” Dijo la joven en un tono sumamente respetuoso: “En nombre de
la secta Lanling Jin y el nuevo líder Jin Zixuan, agradecemos su amabilidad por su
instrucción. Y agradecemos al líder Lan Xichen por alojarnos amablemente en Gusu. Por
favor acepten este presente de la secta Jin”.
Haciendo una reverencia al igual que sus demás damas, la joven Qin Su pronto hizo una
señal a su dama de compañía más cercana para que esta se adelantara y dejara una lujosa caja
en manos de Lan Xichen, el cual agradecido respondió la reverencia.
Abriendo la caja frente a todos los presentes, Lan Huan descubrió un hermoso libro decorado
con oro y piedras doradas, tan ostentosa como solía ser la secta Jin. Dejando que se viera el
libro, Qin Su pronto explico: “Espero que disfrute las mil y un poesías del más grande
escritor de Lanling, un regalo para personas tan cultas como usted”.
Mirando aquel ostentoso regalo, que incluso llegaba a ser vulgar por la cantidad de adornos y
oro, Wei Wuxian frunció ligeramente la nariz, desagradado por ver algo tan ridículamente
ostentoso. Correspondiendo las reverencias de forma agradecida, Lan Xichen entregó el libro
a su tío y le permitió ver el regalo de igual manera; reaccionando de una manera sobria, Lan
Qiren hizo una reverencia agradecida y dejo el elegante libro en su caja de regalo.
Sintiéndose satisfechos, lis miembros de la secta Lanling Jin regresaron a sus lugares, con su
usual arrogancia y mirando a los demás que los acompañaban en el salón con cierta
superioridad.
Poco después, la secta Qinghe Nie se levantó para presentar sus respetos de igual manera.
Dirigidos por el segundo hijo de la secta, el alfa Nie Huaisang, aquella secta se dirigió frente
al escritorio de Lan Qiren, haciendo su respectiva reverencia de saludo y entregando su
obsequio, el cual era un modesto juego de té, el cual a pesar de verse bastante simple era muy
costoso por los materiales con los que estaba hecho.
Siendo la última secta, Yunmeng Jiang siendo dirigidos por el próximo líder, se puso de pie
de sus lugares. Sonriendo con cierta diversión, siendo aquel su primer acto oficial como el
nuevo sucesor, Wei Wuxian se puso al frente de su secta, dirigiéndolos frente a la mesa de
Lan Qiren, aquel que se convertiría en su familia muy pronto.
Recordando bien lo que debía decir en aquella presentación, Wei Ying hizo una elegante
reverencia para el omega, siendo seguido por los demás miembros de su secta; para luego
decir: “Gran maestro Lan Qiren, la secta Yunmeng Jiang en representación de su líder Jiang
Fengmian y su nuevo sucesor Jiang Wuxian, presenta sus respetos entregando este presente
para usted”.
Mordiendo ligeramente su lengua cuando tuvo que usar su nuevo “nombre”, Wei Wuxian dio
paso a otro de los cultivadores de su propia secta, el cual con mucho respeto entrego una
hermosa caja adornada con lotos violetas a Lan Xichen, el cual acepto el regalo con una
reverencia. La ceremonia de su cambio de nombre aún no se había realizado, pues debía ser
una fiesta grande y con la próxima boda de Jiang Cheng en pocos meses era casi imposible
de realizar ese año. Pero debido a que su fiesta de compromiso estaba programada para
inicios del siguiente año, la familia Jiang había decidido que la ceremonia de cambio de
nombre fuera solo un par de semanas antes de esta misma, para que cuando se comprometiera
con Lan Zhan tuviera el apellido Jiang.
Así que con su nombre ya prácticamente cambiado, solo con algunos meses por delante, a
Wei Ying ya se le había pedido dejar de usar el apellido “Wei” en ceremonias o frente a
personas importantes, que comenzara a representar a la secta Yunmeng Jiang desde ese
instante. Y aunque Wei Wuxian sabia cuáles eran sus deberes y estaba feliz con poder heredar
la secta de quienes consideraba sus padres, aun le resultaba ligeramente malsonante usar el
nombre “Jiang”, no estaba acostumbrado, y a pesar de que había repetido su nuevo nombre
un millar de veces frente a sí mismo en el espejo, no creía que algún día podría
acostumbrarse a usarlo.
Volviendo a la realidad cuando sintió la enfadada mirada de Lan Zhan sobre sí mismo, Wei
Ying se giró ligeramente para sonreírle y saludarlo, recibiendo también una mirada molesta
de Jiang Cheng, el cual sentado con los omegas Lan lo juzgaba por su forma poco seria de
comportarse como el heredero. Lan Wangji por otro lado solo pudo suspirar suavemente, algo
resignado a que Wei Wuxian se hubiera quitado aquella gruesa capa de invierno de los
hombros, quedando “desprotegido”.
Abriendo el regalo de la secta Jiang, Lan Huan mostro a todos los presentes un hermoso
quemador de incienso con la forma de un loto dorado, el cual prácticamente fue ignorado por
Lan Qiren, el cual tenía su vista fija en Wei Wuxian y en su mal comportamiento. Haciendo
una última reverencia de agradecimiento, la secta Yunmeng Jiang regreso a sus lugares
guiados por Wei Wuxian, el cual no dejo de sonreír ni un solo instante, lleno de alegría.
Cuando todos los presentes de las sectas invitadas fueron entregados, la clase real inició.
Poniéndose de pie, fue Lan Qiren el que hizo una elegante reverencia para todos,
agradeciendo sus respetos y sus obsequios, luciendo tan deslumbrante como siempre. Lan
Xichen por su parte también agradeció de una forma tranquila, dando algunas palabras y una
amable sonrisa. Como estaba estipulado en la tradición, Lan Qiren no podía estar solo frente
a tantos alfas como un omega soltero, así que teniendo que “proteger” a su tío, Lan Huan
también se quedaría en la instrucción, aun cuando él ya no necesitaba ninguna clase al ser un
gran cultivador y un buen líder. Así que volviendo a sonreír, el líder de la secta Gusu Lan
cruzo miradas con Jiang Cheng, el cual soltó un bufido y algo sonrojado le desvió el rostro,
luciendo tan desinteresado como siempre en su alfa, algo que en secreto le encantaba a Lan
Xichen.
Volviendo a tomar asiento y alisando su barba con los dedos, Lan Qiren tomo un gran
pergamino de su mesa y lo desenvolvió con elegancia, dejando que el papel cayera al piso y
parte del pasillo de aquella estancia, sorprendiendo a todos los estudiantes: “La enseñanza
deriva en reglas, normas prescritas que nos ayudan a regularnos y ser mejores cultivadores.
Así que el inicio de su enseñanza en la secta Lan será aprender las 3000 reglas de El Receso
Entre Las Nubes”.
“3001 reglas” Dijo Lan Wangji en un susurro casi inaudible, ya que había insistido con su
padre para añadir una norma que impidiera la entrada de cualquier perro en El Receso Entre
Las Nubes. Y después de tanta silenciosa insistencia por parte de su obstinado hijo menor,
QingHeng-Jun finalmente acepto poner aquella regla modificando el muro en las puertas de
la secta.
“Por si alguno de ustedes no se ha tomado la molestia de leer el gran muro de piedra en las
puertas de El Receso Entre Las Nubes, preste mucha atención, pues cualquier regla rota será
penalizada con un gran castigo” Amenazó Lan Qiren, aclarándose ligeramente la garganta
para comenzar a leer con una voz muy clara y serena.
Sin poder creer lo que sucedía, ya que las reglas de la secta Gusu Lan literalmente eran 3000,
Wei Ying supo que aquello era para largo. Y apoyando su mejilla contra una de sus manos,
miró curioso al resto de sus compañeros. A diferencia de los Lan, que eran los únicos que se
veían bastante atentos e incluso concentrados al escuchar al omega Lan Qiren leyendo las
reglas; los demás presentes lucían igual de aburridos y distraídos, cada uno en su propio
infierno, odiando aquellas clases desde el inicio.
Así que perdido entre las palabras incesantes de Lan Qiren, al borde del colapso por el
aburrimiento, Wei Ying pensó en una idea maravillosa. Mirando de reojo a Lan Zhan, el cual
sentado correctamente atendía muy concentrado, Wei Wuxian sonrió ligeramente. Todos
parecían realmente aburridos, así que como un nuevo proyecto, Wei Ying tenía planeado
crear un libro o algo similar que enseñara a los demás a burlar las reglas de Gusu Lan.
Estaba planeando estrategias para portarse mal en la secta de su prometido.
Así que sentándose de forma recta también, Wei Wuxian prestó atención a las palabras de
Lan Qiren con una media sonrisa en sus labios, memorizando bien cada regla para intentar
razonar en como podía evadirla.
Capítulo 2.

Cerrando los ojos, Jiang Cheng sintió sus mejillas ardiendo por la vergüenza, mientras que
dócilmente y aun con mucha pena, dejo que Lan Xichen besara sus labios de una forma algo
pasional. Todavía era complicado para el joven omega aceptar ese tipo de afecto, toques
personales y besos apasionados; no se debía a que le desagradara su alfa, en realidad Lan
Xichen hacia más que gustarle. Pero aún seguía sin sentirse suficiente.
Después de todo no iba a casarse con cualquier alfa, Lan Huan era el alfa que encabezaba la
lista de los “Jóvenes más apuestos”, seguido por su hermano Lan Wangji en segundo lugar,
mientras que Jin Zixuan tenía el tercer lugar, Nie Huaisang el cuarto y Nie Mingjue el quinto.
Mientras que en la lista de los omegas más hermosos, su odioso hermano mayor obviamente
encabezaba la lista, seguido por Jin Guangyao en segundo lugar, y Jiang Cheng apenas
llegaba al quinto de aquella reñida lista.
Algo que el joven omega Jiang nunca pensó que en esas listas no solo calificaban la belleza
de los rostros de los omegas y sus cuerpos, también su carácter por decirlo de una manera.
Razón por la que aunque Lan Wangji ocupaba el segundo lugar de la lista de alfas, solo por
su eterna frialdad y seriedad que solía asustar a los demás; mientras que Jiang Cheng con su
usual ceño fruncido y su brusquedad también había sido rebajado de puesto.
Así que sin saberlo bien, en la cabeza del joven omega, seguía sin sentirse suficiente para su
prometido. No le parecía justo que Lan Huan tuviera que conformarse con un quinto lugar
nada más por un compromiso, sin sentirse lo suficientemente guapo, Jiang Cheng tenía miedo
de que Lan Huan se arrepintiera de aceptar el casamiento en su noche de bodas cuando le
quitara la ropa y se diera cuenta de que en realidad le disgustaba.
Así que sosteniéndose nerviosamente de los hombros de su alfa, Jiang Cheng suspiro
sintiendo como la lengua de Lan Huan lamia sus labios, atreviéndose a darle una traviesa
mordida incluso; algo que aumento el nerviosismo en el inseguro omega.
Ambos se encontraban en las habitaciones privadas de Lan Xichen, el Hanshi, la habitación
del líder. Lan Xichen había dejado de ser un alfa cualquiera, ahora ostentaba el poderoso
título del líder de la secta Lan, así que ya no tenía que pasar clases de instrucción y mucho
menos seguir estudiando. Ahora tenía ocupaciones más importantes dentro de su propia secta.
Aun así la pareja de próximos esposos no planeaba perder el tiempo mientras estuvieran en
esa visita. Así que después de las clases de Jiang Cheng con Lan Qiren, y de terminadas las
funciones más importantes de Lan Xichen en la secta Lan, ambos se reunían en privado para
almorzar juntos, pasando casi toda la tarde a solas en las habitaciones de Lan Xichen.
Aferrándose fuertemente a la ropa de Lan Huan, Jiang Cheng soltó un suave suspiro,
buscando los labios de su alfa por puro instinto, deseoso de sus besos cálidos. Aunque seguía
muriendo de la vergüenza por semejante acercamiento, su omega no podía rechazar a su alfa,
así que deseando alejarlo pero también retenerlo a su lado, Jiang Wanyin buscaba a su alfa
como si sus besos fueran agua en el desierto.
Lan Huan bastante paciente, entendiendo o intentando entender a su omega, iba tan lento
como podía, solamente reaccionando a su omega cuando este deseaba algo con locura o
realmente quería continuar haciendo algo un poco más profundo. Así que controlando a su
alfa lo mejor que podía, Lan Xichen acostó a su omega en su propia cama subiéndose sobre
este, y cerrando los ojos al igual que el menor, buscaba sus labios de una forma incansable;
mientras disfrutaba estar entre sus piernas tímidamente abiertas y lo sostenía dulcemente de
la cintura con una de sus manos.
Sin cambiar de posición, dejándose llevar un poco por su deseoso alfa, el cual le ordenaba a
Xichen someter a ese dulce omega bajo su cuerpo para hacerlo finalmente suyo, algo que
deseaba con desesperación; sin embargo la voluntad del mayor era más fuerte, así que nunca
hacia nada inapropiado. Pero esa tarde, desconcentrado por el bienestar que sentía besando
los adictivos labios de Jiang Wanyin, Lan Huan se atrevió a ir un poco más lejos, bajando la
mano que tenía en la cintura de este como una caricia hasta sus caderas y la parte baja de su
espalda, presionando ligeramente la parte suave de su piel.
Saltando por la sorpresa al ser tocado así por primera vez en toda su vida, Jiang Wanyin
reacciono con mucho miedo, abriendo los ojos de golpe y poniendo sus manos en el fuerte
pecho de su alfa para empujarlo con todas sus fuerzas, lastimando ligeramente a Lan Xichen
el cual se apartó de inmediato, sentándose entre las piernas abiertas y temblorosas de Jiang
Cheng con una expresión suave de dolor.
Luciendo más asustado aun al darse cuenta de lo que había hecho, Jiang Wanyin se apresuró
a sentarse también, disculpándose de inmediato: “A-Huan, lo siento, perdona… Yo no…”
Sujetándose el pecho algo adolorido por el golpe, pues Jiang Cheng había usado su energía
espiritual con él, Lan Xichen tuvo que respirar profundo un par de veces más antes de sonreír,
intentando tranquilizar a su cada vez más asustado y arrepentido omega: “Tranquilo A-
Cheng, estoy bien”.
Acercándose más a Lan Huan en la cama, Jiang Cheng bajo la mirada arrepentido,
presionando las frazadas de la cama del contrario con fuerza entre sus dedos. No podía creer
en las palabras del mayor, pues veía su expresión de dolor y creía notar el enfado en su voz,
disculpándose una y otra vez: “Por favor perdóname, no fue mi intensión, yo solo…
Perdón…”
“Oye… Yin Yin” Dijo Lan Xichen acercándose a su omega rápidamente, intentando
calmarlo: “Esta bien, no tienes que disculparte, fue mi error”.
Sorprendido por lo que su alfa le dijo, Jiang Wanyin levanto la mirada para ver fijamente
aquellos tranquilos y compasivos ojos azules, sin saber que responderle. Mientras que Lan
Xichen, rodeando nuevamente la cintura de Jiang Wanyin con uno de sus brazos, continuo
hablando: “Entiendo que debemos ir lento, y lamento haberte forzado demasiado hoy, no debí
tocar más debajo de tus caderas sin tu consentimiento, fue un error. Pero no volverá a pasar,
iremos lento, es una promesa”.
Sintiendo sus ojos cristalizarse por el dolor, queriendo gritar pero sin poder decir nada, Jiang
Cheng solo pudo bajar la mirada de forma frustrada. Él se sentía tan poco deseado por Lan
Huan en ese instante que le dolía, creía haberle fallado, y temía que este no volviera a tocarlo
en mucho tiempo. Pero sin saber cómo pedirle que no se detuviera, que podría soportar
aquellos toques vergonzosos solo por su amor y por el temor de que lo abandonara; Jiang
Wanyin comenzó a derramar lágrimas por sus mejillas, sabiendo que jamás podría decirle eso
de frente a Lan Xichen, temiendo que por sus tonterías su alfa se cansara y lo abandonara por
un omega más hermoso y mucho menos problemático.
Aun sin entender nada, mirando el dolor de su omega pero sin poder hacer algo, Lan Xichen
llevo una de sus manos a las mejillas del menor para limpiar sus lágrimas: “Yin Yin… Por
favor no llores, te prometí que no volvería a hacerlo, y de verdad lo cumpliré. Por favor no te
sientas culpable o desagradado, nunca hare nada para lastimarte y prometo esperar de forma
paciente”.
Sin poder aguantar más, Jiang Cheng finalmente levanto la mirada y estallo diciéndole: “¡No
es eso! ¡Yo no quiero eso!”
Pestañeando confuso, sin entender las confusas señales que su omega le daba, Lan Xichen
solo pudo preguntar: “¿A qué te refieres entonces?”
“Yo… Yo solo quiero…”
Sin embargo ambos no pudieron seguir discutiendo, pues pronto unos suaves y tímidos
golpes se escucharon en la puerta de la habitación. Suspirando con cierta pesadez, luciendo
ligeramente enfadado, Lan Huan miro por última vez a Jiang Cheng y se levantó de la cama
arreglando sus túnicas, caminando por el elegante pabellón hasta la puerta corrediza.
“Líder de la secta” Dijo rápidamente una dulce voz de una joven omega, haciendo una
nerviosa reverencia desde la puerta.
Respondiendo la reverencia con elegancia, Lan Xichen se apresuró a decir: “Pedí no ser
molestado a esta hora, por favor, atenderé cualquier asunto después”.
Sintiéndose algo mal por aquel reaccionar un poco brusco de su alfa, Jiang Cheng se atrevió a
asomarse desde la cama y detrás de unos paneles hasta la puerta. Ahí vio a una pequeña joven
omega, una sirvienta, la cual usando las típicas túnicas Lan, tenía unas cuantas manchas de
sangre en su perfecta figura blanca. Por un segundo los ojos de la omega también se fijaron
en él, y sonrojándose por su aspecto, Jiang Cheng se sentó de mejor manera en la cama
arreglando sus túnicas y luego su cabello.
“Iré al sector de los omegas después” Sentencio Lan Huan con la intención de cerrar
nuevamente aquella puerta corrediza.
La joven sirvienta, la cual no pudo evitar ponerse algo sonrojada al darse cuenta de lo que
había interrumpido al ver las lágrimas en el rostro de Jiang Wanyin, rápidamente se puso en
medio de la puerta con determinación, suplicando: “Por favor líder de la secta, es algo
sumamente urgente”.
Sorprendiéndose por la osadía de aquella pequeña, la cual aprovechando su cercanía de tan
solo unos cuantos centímetros con aquel gran alfa, comenzó a explicar en susurros lo que
sucedía. Tras un par de segundos escuchando en silencio, Lan Xichen solo pudo sonreír con
cierta tristeza, observando como la joven volvía a apartarse y terminaba de explicar.
“Entiendo” Dijo Lan Huan: “Iré de inmediato”.
Haciendo una reverencia agradecida, aquella joven hizo una agradecida reverencia, y
mirando por última vez a Jiang Cheng, se retiró, permitiendo que Lan Huan cerrara la puerta.
Nuevamente solos, Lan Xichen regreso con Jiang Wanyin en la cama, notándose un poco más
serio e intranquilo.
“¿Qué sucede?” Pregunto Jiang Cheng algo confuso.
Sonriendo de una forma algo triste, Lan Huan tomo delicadamente la mano de Jiang Cheng,
susurrando: “Una desgracia…”
***
La secta Gusu Lan era una de las más estrictas con sus miembros, separando bien a los alfas
de los omegas, y a las mujeres de los hombres. El Receso De Las Nubes era un territorio
amplio, así que a pesar de que la parte central de todo el territorio de la secta se compartía
con todos los cultivadores que ahí Vivian, los alfas y los omegas tenían pabellones separados,
mientras que los betas estaban destinados al área de los alfas. Así que había una clara
separación entre ambos géneros dentro de Gusu, tanto así que era bastante difícil ver un
omega cerca de un alfa pasando el rato dentro de El Receso Entre Las Nubes.
Había pasado un tiempo desde que un omega aparte de Lan Qiren vivía en los dormitorios de
la rama principal de la secta. Al ser parte de la familia Lan desde su fiesta de compromiso,
Jiang Cheng tuvo su propia habitación lejos de la secta Jiang, y ahora era tomado como
alguien importante dentro de la secta de su prometido. Así que enterándose de muchas más
cosas sobre el próximo lugar que habitaría por el resto de sus días, Jiang Cheng supo del área
destinada para los omegas.
En un lugar un poco más apartado que la parte central de la secta y el área de los alfas, en un
sitio mucho más bajo en la misma cumbre donde estaba El Receso Entre Las Nubes, habían
cómodos y hermosos pabellones escondidos entre arboles de cerezo y flores de invierno. Los
omegas sabían bien las reglas de su secta, así que siempre andaban en grupo, solo en su
propio espacio personal podían ir solos entre ellos, y era un lugar el cual preservaban con
mucho cuidado. Esto era fácil pues no había muchos omegas en la secta Gusu Lan, esta era
una secta predominante de alfas, así que a la población total de omegas era menor de la
cuarta parte; así que no existía inconveniente por mantenerlos en un lugar hermoso pero algo
pequeño.
Por lo general aun casados los omegas eran un problema, así que cuando estos se enamoraban
de un alfa y se casaban con este, se mudaban a pabellones privados cerca de la residencia
privada de los omegas, ya que se temía que si un omega vivía cerca de la residencia de los
alfas, cualquier accidente podría sucederles en sus celos. Por lo que después de sus
matrimonios, los omegas todavía vivían cerca de ese lugar que se les había destinado, junto a
los demás de su mismo género cuando no podía estar cerca de su esposo.
Esa regla no aplicaba para Jiang Cheng de cierta forma, pues él no viviría en ese lugar jamás,
si pasaría más tiempo con las personas de su mismo género, pero al igual que Lan Qiren que
pertenecía a la rama principal de la familia Lan, Jiang Wanyin viviría en los pabellones de la
familia principal con Lan con su esposo liderando la secta. Aun así Jiang Cheng no podía
evitar sentiré algo curioso al respecto, queriendo conocer aquel lugar donde vivían las
personas como él en su nueva secta.
Así que distrayéndose un poco con el paisaje del lugar, Jiang Cheng supo que realmente no
podría conocer bien ese sitio en ese instante, pues ahora una cosa distinta llamaba su
atención; o mejor dicho, alguien distinto reclamaba toda su atención.
Sentado en un elegante pero estrecho salón dentro del pabellón de los omegas, Jiang Wanyin
no podía evitar mirar fijamente aquella pequeña cuna improvisada que se había hecho a su
lado con diferentes mantas blancas con símbolos de la secta Lan. Fuera de aquel salón tan
silencioso había un escándalo, mientras se comenzaba a preparar un funeral, Lan Huan
conversaba seriamente con una mujer fuera de otro salón cercano.
“No se pudo hacer nada” Dijo la mujer con mucha serenidad: “Los partos de los omegas
masculinos siempre traen muchas complicaciones, no fue culpa de ninguna de las parteras
líder de la secta, solo fue algo que tuvo que suceder”.
Sin poder evitarlo, Lan Huan desvió la mirada en dirección al salón donde se encontraba
Jiang Cheng, observándolo por un segundo: “Lo entiendo perfectamente”.
En medio de lamentos y lloros de otros omegas en el salón que tenía en sus espaldas, una
habitación especializada dentro de su propia secta donde venían omegas a dar a luz, Lan
Huan no podía evitar apartar la mirada con cierta pena. Lo único que podía observar dentro
era la sangre y la desolación, sintiendo la pena y la frustración de todos los presentes, una
pena que el mismo sentía por la triste y trágica muerte de una persona de su propia secta.
“Se le darán los entierros apropiados Zewu-Jun” Informo la partera con solemnidad: “Pero
sobre el bebé…”
“¿Qué sucede respecto a ese asunto?” Pregunto Lan Xichen algo intrigado por la pausa
repentina que había hecho la mujer.
“El padre es un alfa bastante joven que acaba de perder a su destinada, cuando hablamos con
él nos pidió expresamente que nos lleváramos al niño” Siguió explicando la mujer: “Según
mi recomendación personal sería lo mejor, como omegas nosotros podemos encargarnos del
niño hasta que tenga suficiente edad para ir por si solo al área de los alfas”.
Pensando bien en la situación y las complicaciones, Lan Xichen dijo: “Permíteme hablar con
el padre”.
Haciendo una reverencia, la partera se apartó de la puerta principal del salón, permitiendo
que Lan Xichen pudiera entrar, encontrando al padre de la criatura aun al lado del cadáver de
su destinado.
Mientras toda aquella delicada situación tenía lugar, en la que se decidiría la vida de aquel
pequeño que dormía profundamente al lado de Jiang Cheng, este omega seguía fascinado con
el pequeño. Nunca antes pudo ver un niño recién nacido, pero al observarlo dormido entre sus
pañales, tan sereno y calmo, sin absorber nada de la tristeza a su alrededor, Jiang Cheng
pensó que ese pequeño era absolutamente adorable.
Observando como en medio de su sueño el pequeño niño se estiraba y sacaba uno de sus
brazos de las mantas, Jung Wanyin se preocupó bastante. La temperatura en ese sitio no era
nada cálida, así que temiendo que el pequeño pudiera enfermarse, rápidamente lo tomo de la
pequeña mano con cuidado, volviendo a meter su brazo dentro de las abrigadas mantas que lo
envolvían.
Al tocarlo Jiang Cheng no pudo hacer más que sorprenderse, con su piel tan blanca y suave,
sin una gota de sangre después de haber sido limpiado, y una docilidad increíble; Jiang
Cheng quedo más fascinado aun, sin poder apartar la mirada de aquel dulce pequeño,
atreviéndose incluso a acariciar dulcemente una de sus mejillas con sus dedos algo
temblorosos.
Esta fascinación no pasó desapercibida por todos los ajetreados presentes, que corrían de un
lado al otro preparando los ritos mortuorios. Una de las parteras que había participado en el
nacimiento del niño pronto se dio cuenta de lo que Jiang Cheng estaba haciendo, y dejando
sus labores se acercó lentamente al joven omega, sonriendo al ver como tocaba al
somnoliento niño: “¿Le gustan los bebes líder de la secta?”
Sorprendiéndose por la pregunta tan repentina, Jiang Cheng aparto sus manos del bebe de
una forma rápida, como si estuviera haciendo algo malo, respondiendo rápidamente: “N…No
realmente…”
Jiang Cheng no estaba seguro de lo que decía, pues en medio de toda esa fascinación creía
que su omega comenzaba a comportarse extraño, queriendo tomar a ese bebe y comenzando
desear marcarlo con sus propias feromonas. Y sonrojándose por sus propios pensamientos, el
joven Jiang susurro: “Bueno, en realidad no estoy seguro”.
Sonriendo con calma y comprensión, sin querer asustar o presionar al omega frente a ella, la
partera se acercó más a Jiang Cheng, diciéndole: “Es un pequeño alfa”.
“¿Un alfa? ¿Cómo lo sabe?”
Tomándose su tiempo, la mujer se acercó al bebe y destapo su torso de las mantas por unos
segundos, enseñándole a Jiang Cheng los genitales del bebe: “Los niños alfa tienen una
expansión en la base de sus genitales donde se hace el nudo, así sabemos su género
rápidamente. Los betas y los omegas son bastante similares, pero desde su nacimiento los
omegas sueltan fuertes feromonas que nos dicen su sexo. Los niños alfa son más tranquilos,
no sueltan feromonas hasta una edad mayor, casi el inicio de la niñez; así que por sus
primeros días huelen a las feromonas de sus madres”.
Bastante fascinado por lo explicado, Jiang Cheng no pudo evitar acercar su rostro en
dirección al bebe, olfateando con curiosidad, comprobando que aquello que le dijo la mujer
era cierto, el pequeño niño no tenía ningún olor. Aquello era extraño para Jiang Cheng, pues
aun los betas que conoció en el pasado tenían un aroma el cual podía reconocer; pero aquel
niño no tenía un aroma específico en lo absoluto, solo olía a agua y a los aceites con los que
habían limpiado su cuerpo, no tenía un aroma propio.
“¿Desea cargarlo?” Pregunto la partera.
Pestañeando confuso y volviendo a sentirse tímido, Jiang Cheng pregunto: “¿Yo?”
“Claramente Jiang Gonzi”.
Tardando un poco en procesar aquellas palabras, Jiang Cheng finalmente asintió suavemente,
queriendo realmente tomar a ese niño en brazos. Siendo cuidadosa, la mujer omega tomo al
pequeño en brazos, para luego entregárselo cuidadosamente a Jiang Cheng, pidiéndole: “Sea
cuidadoso con la cabeza y la espalda líder de la secta, los niños tan jóvenes no pueden
sostenerse tan fácilmente”.
Algo asustado temiendo hacerlo mal, Jiang Cheng tembló un poco al tomar el pequeño en sus
brazos, sujetando rápidamente la cabeza del bebé y apoyando su espalda firmemente en su
antebrazo. Al tenerlo en sus manos, Jiang Wanyin se quedó en silencio admirando al pequeño
más de cerca aun, dándose cuenta de lo delicado que era y lo frágil de su cuerpo.
Admirándolo por un segundo dudo que pudiera crecer hasta ser del tamaño de su prometido,
lucia tan frágil y pequeño que Jiang Cheng incluso dudo que fuera real, mirándolo lleno de
adoración.
“Se nota que ambos tienen una conexión” Dijo la partera con una sonrisa, observando al
pequeño alfa acurrucarse contra el pecho de Jiang Cheng.
“¿En serio?” Pregunto Jiang Cheng con una sonrisa algo avergonzada, olvidando su carácter
duro solo por aquel dulce pequeño en sus brazos: “Es tan pequeño… Tengo miedo de hacer
algo mal y lastimarlo”.
“Lo hace excelente Jiang Gonzi”.
Sin quererlo, aquel pequeño había comenzado a reconocer a Jiang Cheng como su madre.
Dándose cuenta de que era un omega, el pequeño alfa se sujetó de las túnicas de Jiang Cheng
con una de sus pequeñas manitas, pegando su rostro a su pecho para sentir el aroma de sus
feromonas gustoso, habituándose a ese dulce olor. Observándolo Jiang Cheng volvió a reír,
permitiéndole hacer lo que quisiera, sintiendo a su omega increíblemente más alegre de lo
usual con el pequeño.
Sin embargo cuando termino de reír y volvió a mirar el exterior, pronto se dio cuenta de que
Lan Huan había vuelto a salir de aquella habitación tan obscura donde estaba el cadáver del
padre de aquel pequeño, teniendo un semblante mucho más triste y hablando nuevamente con
la partera a cargo.
“Su madre murió ¿No es verdad?” Pregunto Jiang Cheng mirando fijamente a Lan Huan a la
distancia.
Tomándose un rato para responder, sintiéndose muy triste por la perdida, la joven partera
finalmente respondió: “Si, la madre del pequeño falleció en el parto”.
Bajando la mirada para ver al menor con pena, Jiang Cheng se dio cuenta de que este jamás
podría ver o sentir a su madre, que esta lo había abandonado incluso antes de que pudieran
ponerle un nombre, algo que lo entristeció de sobre manera: “¿Qué sucederá con él ahora?”
“Bueno…” Dijo la mujer con algo de tristeza: “En casos de niños abandonados de esa forma,
los omegas nos encargamos de él hasta que crezca un poco y pueda ir a vivir al área de los
alfas por su cuenta”.
“¿Y cuándo será eso?”
“5 o tal vez 4 años a lo mucho”.
Sintiéndose horrorizado por aquella respuesta, Jiang Cheng levanto la mirada del niño para
observar a la partera sin saber que decir. Creer que un niño estaba listo para abandonar el
cariño de una madre a una edad tan corta era imposible de él para creer, temiendo por el
destino de aquel pequeño en sus brazos, temiendo el dolor que podría sufrir al no tener una
madre y ser separado de una forma tan cruel de los omegas que podría considerar su familia
¿No era acaso demasiado cruel?
Dándose cuenta del horror que Jiang Cheng demostraba, la partera intento mejorar la
situación: “Los niños en Gusu son bien cuidados líder de la secta, este niño será criado por
nosotras las parteras, y aun en el ala de los alfas, todos se aseguraran de que crezca como un
buen alfa”.
“Pero es no…” Susurro Jiang Cheng realmente triste: “¿Y si tiene una pesadilla? ¿Y si se
pone a llorar en medio de la noche? ¿También lo cuidaran si se va al ala de los alfas?”
Bajando la mirada con tristeza, la partera no respondió las preguntas, dándole a entender a
Jiang Cheng que en realidad eso era un “no”.
Cuando Lan Huan termino de arreglar los últimos detalles del rito funerario, intentando
controlar sus emociones, regreso con Jiang Cheng a esa habitación pequeña, con la intención
de recoger al niño para entregárselo a las parteras que se harían cargo de todo desde ese
instante. Sin embargo no pudo evitar sorprenderse al ver a un triste Jiang Cheng con el
pequeño niño huérfano en brazos, notando como este parecía querer llorar, sosteniendo al
niño muy cerca de su pecho.
“¿A-Cheng?” Pregunto Lan Xichen sin saber que decir a su omega.
Jiang Cheng no respondió, bajando la mirada para que no se viera su dolor, apegándose aún
más a ese pequeño omega. Dándose cuenta de lo que sucedía y que Jiang Wanyin parecía
estarse encariñando realmente con el niño, la jefa de las parteras se acercó rápidamente,
pidiendo al pequeño de regreso: “Jiang Gonzi, por favor entrégueme al bebe”.
Sin embargo Jiang Wanyin se negaba dejar ir a ese pequeño.
Aun mirándolo acurrucado en sus mantas, completamente dormido e indefenso en este
mundo, una leve congoja recorrió todo su cuerpo, atreviéndose a pasar uno de sus dedos
delicadamente por una de las mejillas de aquel pequeño.
Jiang Cheng no podía dejar a ese niño, pues desde que fue muy joven se prometió a si mismo
nunca abandonar y siempre proteger a los más débiles. Una promesa que se hizo por Wei
Wuxian.
Capítulo 3.

Muy pocos sabían el verdadero origen del joven cultivador Wei Wuxian, una promesa entre
todos los de su edad.
Entre aquellos más conocedores se sabía que el padre de Wei Wuxian, el gran cultivador alfa
Cangse Sanren, provenía de una montaña de los inmortales. Un cultivador increíble, el cual
con sus dotes incluso impresiono a la secta Gusu Lan en su breve estadía en El Receso Entre
Las Nubes. Mientras que la madre de Wei Ying era una joven omega que servía al clan Jiang,
perteneciente a la secta Wei, una familia desaparecida la cual en sus tiempos fue una secta
prospera, la cual tampoco se quedaba atrás con su cultivo y fue una de las oficiales
principales del líder Jiang Fengmian en su juventud.
Cuando ambos jóvenes enamorados contrajeron nupcias decidieron ir a recorrer el mundo. El
joven de la montaña de los inmortales nunca había visto más allá de las 5 sectas conocidas,
mientras que la joven Wei nunca había salido de Yunmeng al ser una omega. Sin embargo
ambos prometieron volver a Yunmeng para servir a la familia Jiang, después de todo eran
personas preciadas para ambos, y querían vivir en Yunmeng por el resto de sus días.
Así que con la promesa de un dulce reencuentro algún día, los padres de Wei Wuxian
partieron de Yunmeng en una barca modesta, con los ahorros de toda la vida de ambos,
dispuestos a vivir una gran aventura. Por varios años los mensajes fueron constantes entre la
pareja y Yunmeng Jiang, hablando de sus aventuras y del pequeño niño el cual había tenido el
joven matrimonio en una región algo apartada denominada Yiling.
Sin embargo un día como cualquiera los mensajes dejaron de llegar.
Lleno de preocupación por sus grandes amigos, Jiang Fengmian intento inútilmente mandar
cientos de mensajes, sin embargo las mariposas mensajeras nunca volaban de sus dedos,
como si la persona a la cual estuvieran destinadas a llegar ya no estuvieran.
Pasando dos años en medio de la angustia, sin saber que había pasado con sus grandes
amigos, con la incertidumbre del destino, Jiang Fengmian encontró algo. Viajando por los
parajes remotos del gran territorio de Qishan con el permiso de Wen Ruohan, Jiang Fengmian
encontró un pequeño niño de ojos grisáceos violetas, un pequeño omega el cual decía
llamarse Wei Ying y que estaba vagando solo por las calles desde la muerte de sus padres.
Completamente consternado, sin entender cómo fue que sus grandes amigos habían muerto
en aquel lugar tan alejado, y sin poder obtener una explicación del confundido y famélico
niño, Jiang Fengmian no quiso hacer más que llevar a ese indefenso y asustado omega a
Yunmeng, a Lotus Pier.
Jiang Cheng recordaba como si hubiera sido ayer el primer día que observo a Wei Wuxian. Se
encontraba en los jardines de la residencia principal de la secta, junto a sus tres queridas
mascotas: Princesa, Jazmín, y Amor. Tres hermosas perritas hushky que le habían enviado
como un regalo de Gusu, gracias a su reciente formalización de un compromiso con el hijo
mayor y heredero del lugar, un regalo de su próximo prometido, un joven alfa el cual
conocería cuando tuviera su primer celo.
Jugando con aquellos cachorros de un buen tamaño, con un pelaje tan blanco como la nieve,
las cuales aullaban y median delicadamente los dedos del joven Jiang Cheng; pronto se
escuchó un pequeño grito de miedo. Era Wei Wuxian, el cual descuidadamente había entrado
en la residencia de los Jiang adelantándose unos pasos de Jiang Fengmian y lo primero que
había visto fue a Jiang Cheng jugando con aquellos perros.
El pequeño omega Wei lloro y grito con terror al verlos, tan asustado que no se bajó de los
brazos de Jiang Fengmian todo el día. Así que esa noche su madre Yu Ziyuan se presentó
ante Jiang Cheng, pidiéndole los cachorros para enviarlos de vuelta a Gusu. Su padre Jiang
Fengmian había sugerido tal vez crear un recinto especial para los perros en Lotus Pier, un
lugar alejado de los pabellones principales donde Wei Ying no pudiera verlos; pero la mujer
alfa, mucho más fría y dura que su marido, decidió terminar con el problemas de raíz.
Así que prácticamente arrancando a los perros de los brazos testarudos de su hijo, el cual no
quería entender ninguna razón por la cual esos perros debían irse. Así que el joven Jiang
Cheng, únicamente entendiendo que había sido por Wei Ying, se enfadó tanto que comenzó a
odiar a ese niño de la calle.
Sin más perros en la residencia Jiang, Wei Ying seguía sintiéndose sumamente inseguro y
asustado a todas horas, únicamente tomándose de las túnicas de Madam Yu y de Jiang
Fengmian, siguiéndolos a todos lados como un conejo perdido. Para la sorpresa de Jiang
Cheng el joven Wei pronto recibió las túnicas de su propia secta, al igual que un nombre de
cortesía por parte de su madre, y un compromiso arreglado con alguien de la misma secta del
prometido de Jiang Cheng. Esto lleno de ira y resentimiento a Jiang Wanyin ¿Por qué ese
extraño estaba recibiendo los mismos privilegios que él? ¿Acaso no era una persona extraña?
Todo colapso aún más para Jiang Cheng cuando una tarde el niño Wei fue mimado por Yu
Ziyuan. La mujer alfa, cansada de tenerlo siempre detrás incluso en sitios peligrosos como el
campo de entrenamientos, a la hora de la comida de media mañana le entrego al pequeño un
dulce para distraerlo y lo dejo con una de las sirvientas. Esto que funciono de maravilla,
dejando a Wei Ying distraído en su dulce de azúcar rojo, no fue pasado por alto por Jiang
Cheng, que sintió a su omega ardiendo de celos y sin soportar más aquella situación.
Los jóvenes omegas suelen ser muy territoriales con sus padres alfas, sumamente celosos y
posesivos. Así que al ver a su madre alfa dándole un caramelo a otro omega y no a él, Jiang
Cheng se sintió al borde del colapso por la ira. Esto no fue pasado por alto por Yu Ziyuan, la
cual ya muy cansada del mal comportamiento de su hijo, se dio cuenta de lo molesto que este
se sentía por una pequeñez. Así que ignorando los consejos su marido y decidiendo cortar el
problema de raíz, mando a Wei Ying a mudarse a la habitación de Jiang Cheng, donde
esperaba que los dos se volvieran más cercanos al tener que pasar tiempo a solas de forma
obligatoria.
Pero esa fue la gota que termino con todo para Jiang Cheng, el cual esperando a que todos se
fueran a dormir, saco al omega Wei Ying a patadas de su habitación y tiro sus cobijas fuera,
echándolo como un perro callejero.
“¡No quiero volver a verte aquí!” Le grito Jiang Cheng furioso: “¡Vete de Yunmeng! ¡Regresa
con tus padres! ¡Nadie te quiere aquí!”
Parado al otro lado de la puerta, en medio de la obscura noche, Wei Ying se lamentó: “Pero…
Yo no tengo a donde regresar…”
Sin ningún tipo de empatía por su omega alterado, Jiang Cheng le grito: “¿Y eso debería
importarme? ¡Lárgate! ¡Fuera de Yunmeng o traeré a mis perros para que te muerdan!”
“¿Perros?” Pregunto Wei Ying sumamente asustado: “¡No! ¡Me iré! ¡Me iré!”
Entonces los siguiente que escucho Jiang Cheng fueron pasos apresurados que se alejaron
hacia la nada, y luego silencio.
Sintiéndose satisfecho sin otro omega en su habitación, Jiang Cheng regreso a su cama con
una sonrisa en los labios, pensando que todo había salido de maravilla. Pero
independientemente de su omega, Jiang Cheng siempre fue un niño maravilloso y bien
criado, con buenos valores dados por sus padres, sensible y empático. Así que cuando su
omega se calmó, el joven omega miro al otro extremo de su habitación, un lugar el cual había
sido destinado a Wei Ying y que ahora estaba vacío, algo que causo una fuerte impresión en
el pequeño.
Recordando todas las historias que su padre le había dicho miles de veces, sobre los peligros
del bosque con fantasmas y Ghouls, comenzó a sentirse realmente asustado por el pequeño
omega Wei ¿Estaría bien? ¿Se encontraba a salvo?
Comenzando a sentir mucha culpa, Jiang Cheng también salió de sus habitaciones, y en
completo silencio fue a la habitación de su hermana, a la cual en medio de un fuerte llanto le
conto todo lo sucedido, como había echado a Wei Ying y lo preocupado que se encontraba de
que este pudiera morir. Jiang Yanli tranquilizo a su hermano antes de ponerse manos a la
obra, ya que también le preocupaba que un pequeño niño estuviera solo en el bosque a esas
horas.
Intentando evitar un castigo por parte de sus padres a Jiang Cheng, la joven Yanli solamente
abrigo a su hermano y a ella misma con abrigadas capas de su secta, tomando faroles y
saliendo en silencio de la residencia principal. Sin saber muy bien en que dirección caminar,
ambos hermanos se guiaron por las frazadas de la cama de Wei Wuxian, las cuales
encontraron tiradas en la parte norte de la residencia, decidieron seguir ese camino y se
separaron para cubrir más terreno.
Solo en el bosque y con la culpa hundiendo su corazón, pronto Jiang Cheng estallo en un
fuerte llanto, llamando a Wei Wuxian entre sollozos y pidiéndole disculpas, cada vez más
asustado pensando que algo terrible pudo sucederle. Debido a toda su desconcentración, a
pesar de que el mismo conocía ese sitio como la palma de su mano y podía recorrerlo a
obscuras, Jiang Cheng piso un pozo cerrado y cayó en su interior con un grito. El lugar no era
tan profundo, pero con la caída uno de sus tobillos se había lastimado, y ahora comenzó a
gritar por el dolor además de la pena por sus acciones.
Tras algunos minutos él fue encontrado por Jiang Yanli, la cual cargando a Wei Wuxian en su
espalda, había rescatado al pequeño que se escondía en un árbol. Teniendo que sacar a Jiang
Cheng del pozo, la joven omega hizo que los dos menores se disculparan; así que entre
llantos, Jiang Cheng le suplico a Wei Ying su perdón, mientras que Wei Ying se disculpó
también por haberlos angustiado con su huida. Con todo ya arreglado, Jiang Yanli tuvo que
cargar con ambos menores hasta sus habitaciones, llamando a un curandero a escondidas, y
preparando sopa de raíz de loto para compartir entre todos.
A pesar de dolor, Jiang Cheng recordaba aquella noche como una de las más felices de toda
su vida. Entre la deliciosa comida de su hermana, y las risas alocadas de un joven Wei
Wuxian, Jiang Wanyin se sintió sumamente feliz de ya no estar solo.
Y es que conocer a Wei Wuxian cambio mucho la percepción de la vida de Jiang Wanyin, un
joven mimado que había crecido sobreprotegido por su madre alfa en una secta pudiente.
Hablando con un niño solo un año mayor el cual sufrió más que cualquier niño que Jiang
Cheng conociera, se dio cuenta de la diferencia que había en el exterior de las paredes de
Lotus Pier; perros aterradores que luchaban por comida, hombres desagradables que querían
tocar a niños omegas sin su permiso, el frio y el dolor de dormir en las calles, el sufrimiento
de la absoluta soledad.
Sin embargo a pesar de todo aquello, todas las penurias y el dolor por el que su nuevo
hermano haba pasado, este aun podía sonreír felizmente y jugar como si no hubiera vivido un
infierno por varios años. Pero Jiang Cheng sabía que Wei Wuxian necesitaba mucha ayuda
aun, no sabía ni escribir ni leer cuando ambos se conocieron, tampoco estaba bien nutrido, y
era muy temeroso con todas las personas a su alrededor. Así que tomándose en serio el papel
de cuidar de su hermano, Jiang Cheng se prometió que siempre ayudaría a las personas
menos afortunadas que él, ya fuera como líder o como un cultivador, nunca dejaría que a un
ser indefenso le hicieran daño.
Seguiría el lema de su clan, y haría lo imposible para proteger a los que necesitan su ayuda.
Así que sosteniendo a ese pequeño niño en sus brazos, aunque Lan Huan y las demás parteras
de la secta intentaban disuadirlo, Jiang Wanyin estaba decidido: Protegería a ese pequeño
para que nada malo le pasara.
La discusión pasó a una liga mayor cuando los omegas de la secta Gusu Lan, sin querer
entregar al niño a Jiang Cheng, pidieron que Lan Qiren estuviera presente para intentar
solucionar el asunto, pues nadie creía que Jiang Cheng estuviera listo para la responsabilidad
de cuidar a un niño pequeño. Sin tener más opción, Lan Qiren abandono sus labores
entrenando a algunas alfas que fueron a la conferencia, dejándolos en las manos de su sobrino
Lan Wangji, para dirigirse al pabellón de los omegas para intentar resolver el asunto de una
vez por todas.
Pero al llegar, el omega Lan Qiren tuvo un extraño sentimiento de añoranza, teniendo algunos
breves recuerdos de su pasado, mientras se acercaba a Jiang Cheng y su sobrino Lan Xichen,
los cuales parecían estar discutiendo.
“…No puedo dejarlo” Siguió insistiendo Jiang Wanyin muy decidido: “No puedo hacerle eso
a este pequeño. El no recibirá el amor de una madre ni un padre jamás, vivirá solo sin ayuda,
estará completamente abandonado”.
“A-Cheng” Dijo Lan Huan intentando hacerlo entrar en razón: “Los niños en la secta Lan son
bien cuidados, no debes preocuparte por ello, no le faltara absolutamente nada, tienes mi
palabra de ello”.
Mirando a Lan Xichen con mucha ira, Jiang Cheng replico: “¿Entonces puedes prometerme
que le darán el cariño que merece este pequeño bebe? ¿Puedes darme tu palabra como alfa?”
Lan Xichen sabía que no podía mentir en su hogar, y aun cuando realmente hubiera querido,
su alfa estaba conectado ya al omega de Jiang Cheng, y este no podía engañarlo. Así que
prefiriendo no decir nada, el joven líder Lan bajo la cabeza, sintiéndose también muy triste
por toda la situación y sin poder ayudar a su omega.
Observando el silencio de su alfa, Jiang Cheng continuo hablando: “Todos los niños en este
mundo merecen el amor de un padre y una madre, mercan recibir abrazos y besos en las
noches. Si un niño así es abandonado tan tristemente por su propia secta teniendo una
oportunidad… ¿Qué clase de secta comandaras entonces?”
“Lo siento A-Cheng, no puedo hacer nada”.
“¿No eres el líder? ¡Entonces cambia las reglas!” Exigió Jiang Wanyin realmente molesto por
la suavidad de su alfa con aquella situación: “Yo puedo cuidar a este bebe, puedo mantenerlo
sano y con mucho cariño ¿Acaso no confías en mí? Me dijeron que el será cuidado por unos
años por los omegas de la secta Lan, yo también soy un omega y soy de esta secta ahora,
entonces pido que me lo entreguen para cuidarlo”.
Escuchando aquellas palabras, las omegas de la secta Lan intercambiaron miradas, pues
técnicamente estaba entre las reglas de su secta que Jiang Wanyin pidiera aquello y que se le
concediera. Sin embargo Lan Huan aún no estaba del todo convencido, así que no acepto de
inmediato e intento seguir persuadiendo a Jiang Wanyin; siendo interrumpido por Lan Qiren,
el cual intervino en la discusión de sorpresa.
“El deber de muchos omegas en nuestra secta es criar a los niños Lan ¿Por qué habríamos de
darte al bebe si ya hay personas disponibles para ello?”
Dirigiendo su atención ahora al omega Lan Qiren, Jiang Cheng rápidamente dijo: “Porque yo
sé que puedo hacerlo, y por qué yo me siento confiado en que puedo ser una buena madre
para este bebé”.
“¿Estás seguro? Tu nunca has criado a un niño, no tienes experiencia”.
“Y aun así me casare en menos de un año y todos esperan que tenga un hijo de inmediato
¿Tendré experiencia entonces?”
Sonriendo por la osadía de aquel omega, Lan Qiren desvió la mirada a Lan Huan, diciéndole:
“Es tu decisión como líder Xichen, sabes lo que significa que tu esposa se quede con ese
niño”.
Dando por entendido que él aceptaba que Jiang Wanyin se quedara con el niño, Lan Qiren se
retiró de nuevo, sonriendo por un segundo nuevamente recordando. Hace 20 años el mismo
fue persuadido por sus padres para no cuidar a un niño desamparado por su madre, y
reaccionando de una manera fuerte y similar a la de Jiang Wanyin, Lan Qiren termino
cumpliendo su voluntad y cuidando de Lan Xichen ya que su madre no quería hacerlo.
Observando como el tío de su prometido se retiraba y dándose por aprobado con sus palabras,
Jiang Cheng se giró en dirección a Lan Xichen expectante, aun llevando a ese pequeño niño
en los brazos: “¿Entonces aceptas que lo cuide?” Presiono Jiang Cheng.
Suspirando suavemente y sonriendo con amabilidad, Lan Xichen solo guardo silencio,
considerando seriamente la petición de su omega.
***
Lan Wangji sujeto fuertemente aquella linterna de papel entre sus dedos. Sintiendo su cuerpo
algo adormecido por el entrenamiento, caminaba tranquilamente por el frio paraje de El
Receso Entre Las Nubes, pasando entre su frondosa vegetación para regresar al Jingshi,
donde su prometido lo esperaba. Aquellas clases dadas por su tío Lan Qiren, eran
especialmente duras, así que después de un duro entrenamiento con otros alfas toda la tarde,
Lan Wangji no podía negar que se había agotado bastante.
Él estaba acostumbrado a tener entrenamientos de alta exigencia, no por nada era uno de los
mejores discípulos de su secta. Pero de alguna manera su tío se las había arreglado aquella
tarde para hacer algunos ejercicios mucho más difíciles de lo que alguna vez hizo en el
pasado, haciéndoles pasar un muy mal rato a todos los alfas que estuvieron presentes en
aquella clase; hasta el punto que muchos como Nie Huaisang terminaron desmayándose por
la fatiga. Sin entender bien por qué Lan Qiren estaba preparándolos de esa manera, lo único
que Lan Wangji podía considerar era que tal vez su tío estaba preparándolos
inconscientemente para una posible batalla, aunque Lan Zhan no le veía ningún sentido aun.
Acercándose a su pabellón privado en pocos segundos, no pudo evitar sonreír al ver el
interior iluminado, sintiendo también aquel dulce aroma de las flores de loto muy cerca de su
nariz. Acercándose a la puerta, abrió esta y entro en el interior del tibio pabellón, dejando la
linterna aun encendida en la entrada. Dejando sus zapatos, Lan Wangji se dirigió al centro de
la habitación, donde Wei Ying se encontraba dándole la espalda.
Dándose cuenta de que su alfa estaba cerca, Wei Ying rápidamente cerro los pergaminos en
los que estaba trabajando y volteo las hojas en las que escribía, esperando con una gran
sonrisa a su alfa: “Lan Er Gege…”
Sin sospechar nada en lo absoluto, Lan Zhan sonrió suavemente al verlo, sentándose a su
lado en aquella mesa baja. Sonriendo realmente contento, Wei Ying no dudo ni un segundo
en pegarse mucho al contrario, apoyándose delicadamente contra su cuerpo, abrazándolo con
mucha fuerza, para luego preguntarle: “¿El entrenamiento fue duro Er Gege? Luces
cansado…”
Asintiendo suavemente y correspondiendo el abrazo, Lan Wangji respondió: “Mmm”.
“Luces realmente cansado Lan Zhan…” Susurro Wei Ying llevando una de sus manos de
forma delicada a las mejillas del menor: “No te preocupes, hoy cocine yo, así que podre
mimarte”.
Sin dejar aquella suave sonrisa que tenía plasmada en sus labios, Lan Zhan dijo: “Gracias
Wei Ying”.
Acercándose a este para dejar un rápido beso en sus labios, Wei Wuxian se apresuró a
ponerse de pie, tomando sus pergaminos y hojas escritas consigo: “Debes estar hambriento,
así que voy a servirte ahora, si comes temprano podrás descansar pronto”.
Sin embargo ya que nada escapaba de Lan Wangji, este pronto noto que el mayor tenía unos
pergaminos y papeles en las manos, así que curioso lo tomo del brazo mientras Wei Ying se
ponía de pie. Riendo un poco de una forma algo culpable al ser atrapado por su alfa, Wei
Ying se apresuró a soltarse de Lan Zhan, huyendo de sus manos para guardar sus escritos
entre sus cosas.
Pero sin querer dejar el asunto, viéndolo guardar los pergaminos, Lan Zhan quiso insistir:
“¿En qué trabajabas?”
“¿Trabajar?” Pregunto Wei Ying fingiendo demencia: “Oh no estaba trabajando, eran solo
algunos apuntes que estaba realizando…”
Sin creerle mucho en el mayor, Lan Zhan susurro: “Mnn”.
“Venga Lan Zhan… Te estoy diciendo la verdad. Quiero esforzarme en la clase de tu tío, así
que estaba estudiando un poco, quiero caerle bien así que planeo esforzarme”.
Sabiendo cómo llegar a su alfa, Wei Ying sonrió un poco sin que el contrario lo viera,
guardando bien sus cosas para que Lan Zhan no pudiera tocarlas y caminando a otra parte de
la habitación donde estaba la comida que había preparado. Lan Wangji creía bastante en las
palabras de su omega, y le gustaba pensar que este realmente estudiaba y quería esforzarse en
aquel tiempo de estudio en su secta, sin embargo conocía demasiado bien al mayor, y sabía
que había algo además de eso que este no estaba contándole.
Poniéndose de pie con elegancia, Lan Zhan camino hasta el lugar en el que se encontraba Wei
Ying, sorprendiendo al omega el cual ya se encontraba sirviendo arroz picante en elegantes
platos de porcelana. Sin decir ni una sola palabra, Lan Wangji le quito los utensilios de
comida al mayor y los puso de nuevo en su sitio, para luego tomarlo en brazos y llevarlo a la
cama, logrando una risa incontrolable por parte de Wei Wuxian, el cual se abrazó del cuello
del menor y no se negó a ser llevado.
Cargándolo hasta la cama, Lan Zhan acostó delicadamente al mayor en la suave superficie,
subiéndose sobre su cuerpo y mirándolo a los ojos: “Dime la verdad” Exigió el alfa.
“¿La verdad? ¿La verdad sobre qué?” Preguntó Wei Wuxian riendo.
Presionando la mandíbula, Lan Wangji volvió a decir: “Dime la verdad”.
Decidiendo jugar con su alfa para hacer que olvidara el asunto de las hojas, Wei Ying abrió
suavemente las piernas permitiéndole al contrario acostarse sobre su cuerpo: “¿Y si me
niego?”
Sintiéndose enfadado pero igualmente estimulado por aquellas preguntas, Lan Wangji
únicamente suspiro, sintiendo como una de las traviesas manos de Wei Wuxian bajaba de sus
hombros a su miembro, estimulándolo y presionándolo sobre las túnicas.
“¿Lan Er Gege me castigara entonces?” Pregunto Wei Ying de forma provocativa.
Cayendo balo las intenciones de su omega, Lan Zhan en un rápido movimiento tomo ambas
muñecas del omega y las puso sobre su cabeza, observando como Wei Ying sonreía
realmente complacido al ser tomado de esa forma.
“No me digas gege” Ordenó Lan Zhan con seriedad.
“No lo hare, no lo hare Hanguang-Jun; pero déjame ir…” Susurro Wei Wuxian forcejeando
ligeramente.
Este también había llegado a conocer bien al menor, y también a su alfa; así que sabía bien
como provocar ese sentimiento de deseo en su cuerpo. Fingiendo querer escapar y poniendo
un rostro inocente, a pesar de su sonrisa divertida, Wei Ying finalmente consiguió que Lan
Zhan se quitara la cinta de frente y atara sus muñecas con esta, dejándolo completamente
inmóvil, aun cuando sabía que el omega no escaparía de él.
“Oh… ¿Qué harás ahora?” Pregunto Wei Ying sin poder dejar de sonreír.
Ya completamente absorto en el cuerpo de su omega, Lan Wangji bajo sus manos al pecho de
este, acariciando su esbelta figura por encima de las túnicas blancas de su propia secta. Como
los demás visitantes de Gusu, los cuales habían ido a estudiar a la secta Gusu Lan, Wei Ying
usaba las típicas túnicas blancas con las nubes azules; a diferencia de su usual atuendo, las
túnicas violetas con los lotos, la vestimenta usual de Lotus Pier.
Admirando el cuerpo de su prometido con esas hermosas y lujosas ropas, Lan Zhan se tomó
su tiempo antes de abrir el banco cinturón de sus ropas, pudiendo acceder finalmente a tocar
su piel sin tener la tela de por medio, sintiendo como el mayor se estremecía. Suspirando y
removiéndose con suavidad, Wei Ying sitio como las tibias manos de Lan Zhan tocaban su
caliente piel, bajando por toda su cintura con una caricia hasta sus caderas, las cuales sostuvo
con un poco de fuerza.
Acercándose a besar el cuello del mayor, Lan Zhan susurro: “Wei Ying…”
Cerrando los ojos y dejándose hacer entre jadeos y suspiros, Wei Ying sintió como sus
pezones eran succionados, mientras que hábiles manos de Lan Zhan se deshacían de sus
pantalones y abrían sus túnicas, dejándolo completamente expuesto para su alfa. Lan Wangji,
el cual no parecía muy paciente para seguir partiendo el tiempo, rápidamente llevo uno de sus
dedos entre las nalgas de este, comenzando a introducirlo en su interior.
Saltando ligeramente por la sorpresa, Wei Wuxian volvió a abrir los ojos, sonriendo
ligeramente por lo travieso de su alfa, subiendo ligeramente las piernas y las caderas para
facilitar el trabajo del menor. Ambos habían estado haciendo el amor por más de un año, así
que se habituaron bastante bien a las posiciones y los gustos del contrario, posicionando sus
cuerpos y tocándose mutuamente sin necesidad de palabras.
“Lan Zhan… Entra ya…” Suplico Wei Ying, sintiendo como su interior se humedecía mucho
más y como un segundo dedo entraba en su interior.
Dando una mordida ligeramente fuerte en uno de los pezones del mayor, Lan Zhan se separó
de este para preguntar: “¿Ahora?”
“Por favor…”
Esbozando una sonrisa casi imperceptible, Lan Wangji acepto continuar, separándose por
completo del menor para abrir sus túnicas y quedar igual de expuesto que Wei Wuxian.
Regresando sobre su cuerpo, el menor miro fijamente los ojos de su omega mientras entraba
en su interior. Arqueando la espalda y esforzándose para no cerrar los ojos, Wei Ying acepto
el gran miembro de su alfa en su interior, sintiendo como este lo abría y lo expandía por
completo, dándole un gran sentimiento de placer.
“¡Lan Zhan!” Gimió fuertemente, cerrado los ojos finalmente al sentirse penetrado por
completo.
Suspirando suavemente, Lan Wangji bajo sus dos manos a las caderas de su omega, bajando
la mirada para observar por un segundo sus cuerpos unidos, encontrando muy excitante la
imagen de su propio miembro forzando a Wei Wuxian, comenzando a embestirlo de
inmediato. Dejándose hacer con un nuevo grito, Wei Ying estremecía su cuerpo mientras
aceptaba obedientemente el miembro de su alfa en su interior, sintiendo como con su gran
tamaño presionaba todos sus lugares sensibles.
Con movimientos bastante controlados pero profundos, Lan Zhan volvió a pegarse al cuerpo
del mayor, besando sus labios para luego susurrarle: “No vuelvas a ocultarme cosas…”
En medio de su placer, Wei Wuxian apenas si podía concentrarse en no gritar demasiado, así
que sin haber entendido bien las palabras de su alfa, solamente pudo responder: “Mas
fuerte… Lan Zhan se siente bien…”
Sonriendo sabiendo que el contrario no le había hecho caso en lo absoluto, Lan Wangji tomo
las piernas del mayor para subirlas un poco más, comenzando a moverse más fuerte y más
rápido, siendo consumido por el placer pocas embestidas después, olvidando absolutamente
todo lo que no fuera su adorado Wei Ying.
Capítulo 4.

“¿Realmente te encuentras bien?” Pregunto Lan Zhan preocupado, mirando a su omega.


Sonriendo dulcemente, mientras seguía arreglando su ropa y su cinturón, Wei Ying
respondió: “Lo estoy Lan Er Gege, no soy tan frágil…”
Aquella noche habían tenido varias rondas de hacer el amor sin descanso, tanto que Wei Ying
termino gritando sin parar hasta casi perder el conocimiento. Por lo que aquella mañana,
preocupado por el bienestar de su prometido, Lan Zhan intento cuidar a su omega hasta el
inicio de las lecciones de su tio a media mañana. Pero Wei Ying tenía otros planes, queriendo
ir a pasar un rato con Jiang Cheng y tomar el desayuno con él.
“Mmm” Susurro Lan Zhan, sentado frente a una mesa baja preparando su propio desayuno.
Notando que su alfa se encontraba algo receloso de dejarlo ir, Wei Ying sonrió aún más, y
acercándose a este, le dio un cariñoso beso en la frente, intentando tranquilizarlo: “Er gege
por favor, estoy realmente bien. Es solo que quiero pasar un tiempo con A-Cheng, es mi
hermano y pronto se casara, tengo cierta añoranza a su lado”.
“Lo entiendo” Dijo Lan Zhan de forma comprensiva, pasando sus brazos por la cintura de
Wei Ying con cuidado: “Pero aun así quiero cuidarte, y pasar tiempo a tu lado”.
Volviendo a sonreír, por un instante Wei Wuxian recordó a ese pequeño niño de ojos dorados
que había conocido en Yunmeng, ese que se tomaba de sus túnicas con desespero e intentaba
llamar su atención a cualquier costo. Ese niño aún era su Lan Zhan, así que estando a su lado
no podía evitar morir de la ternura, amándolo como había hecho desde ese entonces.
“Perdóname Lan Zhan… Deberás comer solo hoy… Pero prometo que mañana me quedare a
tu lado todo el día, y lograre que dejes de extrañarme tanto, ya lo veras…” Le prometió Wei
Ying, volviendo a besar sus labios.
“No te preocupes por eso, diviértete mucho con tu hermano, y nos encontraremos en un rato
en las clases” Dijo Lan Zhan correspondiendo el beso.
Riendo un poco por la felicidad, Wei Ying le dio otro par de besos cortos a su prometido
antes de separarse de este finalmente. Dejando a Lan Zhan en su habitación, Wei Ying salió
tranquilamente a los pasillos del área privada del Receso Entre Las Nubes, admirando aquel
hermoso día de primavera, despejado y brillante.
Saludando con reverencias y sonrisa a las diferentes personas de la secta de su prometido con
las que se encontraba en el camino, Wei Wuxian se acercaba cada vez más a la habitación
privada de Jiang Cheng; la cual quedaba muy cerca del Jingshi, pues ahora su hermano
formaba parte de la rama principal de la secta Lan y debía dormir con los demás miembros
importantes.
Llegando a la habitación de Jiang Wanyin pocos segundos después, como era usual, Wei
Wuxian entro en esta sin tocar la puerta, casi sufriendo un colapso al ingresar en esta: “¿A-
Cheng? ¿Qué es eso?” Preguntó parado en la puerta de la habitación.
Siendo sorprendido por su hermano, habiendo olvidado por completo que ambos habían
decidido verse ese día para desayunar, Jiang Cheng que se encontraba aun en sus túnicas
interiores después de haber dormido, se giró rápidamente en dirección a la puerta. Se
encontraba sentado en el centro de su habitación, junto a una estufa portátil, con su pequeño
cachorro en brazos.
“¿Qué acaso no es obvio?” Cuestiono Jiang Cheng “Es un bebé”.
“Lo veo A-Cheng, no soy tonto ¿Pero de donde lo sacaste?”
Olvidando la verdadera razón por la cual había ido ese día a ver a su hermano, Wei Ying
entro en la habitación de Jiang Cheng, cerrando la puerta corrediza detrás de sí mismo. Así
como Jiang Cheng, Wei Ying nunca había visto a un niño tan pequeño en el pasado, así que
curioso se acercó hasta Jiang Wanyin, sentándose a su lado en el piso.
El pequeño niño, ahora vestido con ropa blanca típica de su secta y despierto bebiendo un
poco de leche, había pasado su primera noche junto a Jiang Cheng. Era un recién nacido, así
que no fue demasiado problema para Jiang Wanyin, el cual paso casi la noche entera atento a
su suave llanto, para cambiar sus pañales o calentarle un poco de leche.
“No es una historia demasiado agradable. Su madre murió ayer en el parto, así que no tenía a
nadie, y decidí cuidarlo” Explicó Jiang Cheng con calma.
Mirando al pequeño bebe en los brazos de su hermano, Wei Ying no pudo evitar sonreír
encantado, mirando al pequeño muy feliz: “Muy amable de tu parte, pero él no es un perrito
callejero como los que solías llevar a Lotus Pier” Le recordó Wei Ying.
Mirándolo exasperado, Jiang Cheng respondió: “Claro que no es un perrito, lo se idiota. Pero
no tenía a nadie más, así que quise simplemente cuidarlo”.
Sonriendo realmente enternecido por el niño, Wei Ying acerco una de sus manos al pequeño
rostro de este. El menor aun no tenía sus rasgos bien distinguidos, ya que aún era pequeño;
pero lo que Wei Ying podía notar era que tenía el usual cabello negro de los Lan, y unos
grandes ojos castaños que lo miraban fijamente, con unos pómulos bien marcados y una nariz
muy linda.
“¿Entonces vas a quedártelo?” Cuestiono Wei Wuxian.
“¿Acaso estas sordo? Te dije que solo lo estoy cuidando”.
Bastante curioso por esas palabras, Wei Ying levanto la mirada del bebe para ver a Jiang
Cheng, dándose cuenta de su expresión de dolor y tristeza, atreviéndose a preguntar: “¿Pero
por qué solo vas a cuidarlo?”
Suspirando ligeramente, devolviéndole la mirada a Wei Ying, Jiang Cheng respondió: “Por
qué no es mi hijo de sangre, ahora no soy cualquier omega, soy el prometido del líder. Si
adopto a este pequeño se volverá el primogénito de Xichen… Y supongo que nadie del
consejo de Gusu Lan quiere a un niño cualquiera heredando la secta”.
“¿Pero qué quiere Lan Xichen?” Pregunto Wei Ying curioso.
“No lo sé” Respondió Jiang Cheng con sinceridad.
Notándose triste y preocupado por un momento, Jiang Cheng volvió a suspirar con tristeza,
volviendo a mirar al bebe en sus brazos, lamentándose: “Ni siquiera puedo ponerle un
nombre porque no soy su madre… Me dijeron que la secta Lan le pondrá uno cuando cumpla
un año de edad y le den su cinta blanca en una ceremonia, pero aun así me parece
incorrecto”.
“Es como se hacer aquí ¿No es verdad?” Pregunto Wei Ying intentando consolar a su
hermano: “Pero tu vivirás aquí desde el próximo año, así que podrás cuidarlo aun cuando no
sea tu hijo. Si no tiene un nombre ¿Cómo lo llamas?”
“Cachorrito” Respondió Jiang Cheng con cierta vergüenza.
Sonriendo más contento aun, Wei Wuxian acaricio sumamente las mejillas redondas y algo
regordetas del menor, susurrándole: “Hola cachorrito, soy Wei Wuxian, tu tio…”
Mirando a Wei Ying tan contento con el menor, hablándole en un tono dulce y tranquilo,
Jiang Cheng recordó lo que le dijeron la noche anterior. Los omegas de la secta aceptaron que
el menor se quedara con el bebé, y con el permiso de Lan Xichen tampoco tenían muchas
maneras de protestar.
“¿Y cómo vas a cuidarlo ahora?” Pregunto Wei Ying curioso: “¿Dejaras de ir a las clases de
Lan Qiren?”
“Claro que no… Tampoco puedo dejarlo, así que en las mañanas lo cuidaran los omegas de la
secta Lan, donde también tiene una madre sustituta que le da el pecho. En la noche o en la
tarde cuando yo esté libre de mis actividades, lo recogeré y lo traeré aquí”.
Asintiendo bastante sorprendido ante la planificación de Jiang Cheng, Wei Ying comento:
“Lo tienes todo planeado”.
“Así es”.
Mirando al menor con una sonrisa, Wei Ying rápidamente se dio cuenta de que aquel
pequeño Lan tenía la gran fascinación de meter los dedos de los demás a su boca, así que
gustoso dejo que chupara uno de sus dedos, ante la mirada atenta de Jiang Cheng.
“Espero que hayas lavado tus manos”.
“¡Claro que lo hice A-Cheng! ¡Que malo!” Dijo Wei Ying, aun jugando con el menor:
“¿Puedo sostenerlo?”
Dudando ligeramente, Jiang Cheng soltó un suspiro y accedió, notando la amabilidad de su
hermano: “Debes poner los brazos así, y cuida su cabeza”.
Dejando que Jiang Cheng lo acomodara, con mucho cuidado Wei Ying tomo al bebe en sus
brazos, sonriendo nuevamente: “Es más pesado de lo que esperaba… También mas grande”
Comento curioso.
“Lo es por ser un alfa”.
“¿Es un alfa? ¿Cómo sabes?” Pregunto Wei Ying curioso.
“No huele a nada, me dijeron que los alfas no tienen feromonas hasta cierta edad, así que solo
huelen a sus madres”.
Sintiéndose curioso, Wei Ying bajo su nariz ligeramente hasta el bebé, notando que este olía
únicamente a su hermano, pudiendo distinguir aquel dulce pero fuerte olor a lavanda de las
feromonas de Jiang Cheng.
“Además de que… En sus genitales tiene un… Ensanchamiento” Explico Jiang Cheng con
vergüenza.
“Oh… Donde hacen el nudo” Comento Wei Ying, llevando una de sus manos a las mejillas
del bebé de nuevo, permitiéndole lamer sus dedos, mientras lo sostenía con uno de sus brazos
únicamente”.
Volviéndose a notarse muy avergonzado, Jiang Cheng susurro: “Si, exactamente”.
Jiang Wanyin aún se notaba bastante tímido y reacio a decir muchas cosas referentes al sexo,
después de todo aún era virgen. Y aunque había leído y sabía prácticamente lo mismo que
Wei Ying, el joven Jiang no era tan descarado, así que sus mejillas aún se teñían de rojo
cuando debía hablar de su sexualidad y cuando pensaba en su alfa de una manera pasional.
“¿Y duele?” Pregunto Jiang Cheng de pronto, con mucha timidez.
“¿Qué cosa?” Pregunto Wei Ying curioso, bastante atento al pequeño en sus brazos.
Tragando un poco de saliva para tomar valor, Jiang Wanyin finalmente pudo preguntar: “El
nudo…”
“Oh… Lan Zhan solo lo hizo una vez conmigo consciente, y si, duele mucho; pero se quedan
quietos adentro, así que solo es como cuando mete más de tres dedos en mi interior”.
Luciendo sorprendido, Jiang Cheng pregunto: “¿Mete más de tres dedos?”
Asintiendo con calma, sin avergonzarse para nada, Wei Wuxian respondió: “A Lan Zhan le
gusta mucho jugar con mi trasero, meter sus dedos, más de 4 a veces; meter su miembro y sus
dedos al mismo tiempo. Le gusta abrirme mucho, y aunque duele un poco, no es
desagradable, se te olvida de inmediato”.
“Yo no podría hacer eso jamás”.
Notándose realmente preocupado, pensando con temor en que Lan Huan hiciera algo
semejante con su cuerpo, Jiang Cheng se notó incluso triste, bajando la mirada a sus dedos.
Notando aquello, Wei Wuxian se dispuso a intervenir de inmediato: “Pero eso solo le gusta a
Lan Zhan, no creo que Zewu-Jun sea brusco contigo”.
“¿Y cómo lo sabes?”
“No creo que te trate mal en tu primera vez, será cuidadoso, se asegurara de que te sientas
bien” Le prometió Wei Wuxian.
Suspirando realmente triste, Jiang Cheng susurro: “Tengo tanto miedo que duela y que no me
guste… Y también que vaya a sangrar…”
“Vas a sangrar obviamente, es tu primera vez. Pero te gustara, a todos los seres humanos les
gusta, no veo por qué a ti no”.
Prefiriendo guardarse sus comentarios, Jiang Cheng siguió mirando sus manos en silencio,
preocupándose nuevamente por lo que más temía de su boda: La luna de miel. Así que
volviendo a mirar a Wei Wuxian, el cual se distrajo de nuevo con el bebé, Jiang Cheng hizo
una nueva pregunta: “Si el hizo el nudo… ¿Cómo no te embarazas?”
“Cuento los días” Explico Wei Wuxian.
“¿Qué días cuentas?” Pregunto Jiang Cheng de forma curiosa.
“El tio Fengmian y Shijie estaban haciendo una planificación para su embarazo ¿Lo
recuerdas? Porque tiene algunas dificultades con el pavo real. Ellos cuentan los días para
saber cuándo esta Shijie más fértil sin contar su celo, así que yo hago lo mismo pero con otro
objetivo, cuanto los días hasta la semana donde será mi celo, y solo en esa semana tengo sexo
oral con Lan Zhan…”
“Qué asco…” Comento Jiang Cheng exasperado.
Pero sin hacerle caso, Wei Ying siguió hablando: “Y en el resto del tiempo Lan Zhan puede
venirse adentro cuantas veces quiera, porque sé que no me embarazare. Yo puedo hacerlo
porque mi ciclo es regular, pero sé que Shijie tiene sus complicaciones por que el de ella es
variante ¿El tuyo es variante?”
“¡Cállate! ¡Claro que no voy a decirte algo así!” Se negó Jiang Cheng muy sonrojado.
Haciendo un puchero, Wei Ying se quejó: “¡Que malo A-Cheng! Yo te conté absolutamente
todo, y tú no puede contarme algo así…”
“Tú lo haces porque eres un desvergonzado, yo no lo soy, así que puedes olvidarlo”.
Dándose por vencido, entendiendo que no sacaría nada de Jiang Cheng por su usual timidez,
Wei Ying volvió a concentrarse en el pequeño en sus brazos. El niño estaba sumamente
tranquilo, tan relajado que incluso comenzó a dormirse en los brazos de Wei Ying, soltando
finalmente sus dedos y dejando de lamerlos. Pudiendo tener su otra mano libre finalmente,
Wei Wuxian rápidamente recordó la razón verdadera por la cual había ido a visitar a Jiang
Cheng esa mañana.
Con mucho cuidado de no despertar al bebé, Wei Ying metió su mano dentro de sus túnicas y
tomo los pergaminos y papeles que había estado escribiendo la noche anterior, poniéndolos
en el centro de la mesa muy cerca de Jiang Cheng, esbozando una sonrisa de orgullo.
Mirando los papeles por un segundo, saliendo de sus pensamientos, Jiang Cheng pregunto:
“¿Qué es eso?”
“Tú solo léelos” Pidió Wei Ying.
Suspirando con cierta resignación, Jiang Wanyin decidió acceder a lo que le pedía su
hermano, ya que este seguramente no lo dejaría tranquilo hasta que lo hiciera. Tomando uno
de los pergaminos lo desenrollo comenzando a leerlo, tomando uno de los papeles con su otra
mano para compararlo, luciendo mucho más serio de lo usual tras unos segundos de lectura.
Volviendo a mirar a Wei Ying con un rostro de molestia, Jiang Cheng aparto aquellos
pergaminos y hojas sueltas de su rostro, preguntándole: “Tú quieres que Lan Qiren te odie
¿No es cierto?”
Aun distraído con aquel pequeño niño en sus brazos, el cual seguía con uno de sus dedos en
su boca, Wei Ying rápidamente levanto la mirada para ver a su hermano, respondiendo: “Que
malo A-Cheng, soy adorable ¿Cómo podría odiarme?”
“¿Formas de evadir las reglas de Gusu Lan?” Pregunto Jiang Cheng leyendo el título de
aquellos atrevidos documentos.
“Es una guía práctica” Explico Wei Ying con orgullo: “Encontré muchos vacíos legales en las
3000 reglas del clan, es pueden aprovechar para romper reglas pero técnicamente no hacerlo
al mismo tiempo”.
Volviendo a bajar la mirada a esos documentos, Jiang Cheng por un momento sonrió, para
luego negar con la cabeza: “¿Y por qué hay tantos? ¿Por qué hiciste tantas copias?”
“Para los invitados, por supuesto. Debemos procurar que tengan una agradable estadía en la
secta de nuestros prometidos, así que como un gesto de amabilidad, cree pequeños folletos
para cualquiera, y grandes pergaminos con dibujos para los representantes. Así todos tendrán
una copia y podrán hacerlo”.
Volviendo a negar con la cabeza, Jiang Cheng tiro los documentos en la mesa donde
desayunarían, guardando una de las hojas discretamente para él. Para luego pasar a regañar a
su hermano: “Estas incitando al desorden en El Receso Entre Las Nubes, tu desvergonzado
idiota”.
Wei Ying, el cual se había dado cuenta de que Jiang Cheng guardo una de las hojas para sí
mismo, solamente pudo sonreír diciendo: “Solo quiero que todos tengamos diversión en este
tiempo de estudio, además tu ni siquiera tienes el derecho de quejarte, te casaras en 6 meses y
luego pasaras tu luna de miel fuera de aquí, no terminaras el año de instrucción como todos
los demás”.
“Por suerte, así no tendré que ver tu tonta cara cuando seas castigado por el señor Lan”.
“Los Lan me aman, hasta QingHeng-Jun me ama, solo estas celoso”.
Sonriendo con malicia, Jiang Cheng respondió: “Cuando seas castigado, yo seré el que le
cuente a mi madre en una carta, y me encargare de decirle todos los detalles…”
“¡Que malo A-Cheng!”
***
Apartando su libro por un segundo, Lan Huan observo la estufa portátil que había llevado a la
habitación con interés, observando como la sopa que había preparado ya estaba lista.
Recogiendo sus mangas con una de sus manos, al alfa de forma elegante apago la hornilla y
el fuego, terminando de cocinar la cena.
Aquella tarde fue un poco movida para Lan Xichen, pero creía que tendría sus frutos después
de todo, pues sabía que estaba haciendo lo correcto. Mirando de reojo sus maletas y sus
objetos personales más importantes, los cuales había movido a la habitación de Jiang Cheng
esa tarde para mudarse con él, por un instante sintió unos cuantos escalofríos de temor,
volviendo a leer su libro para intentar calmarse. Jiang Wanyin no había estado en sus
habitaciones esa tarde, acudiendo a los entrenamientos físicos de Lan Qiren, al atardecer tuvo
que ir al pabellón de los omegas por su cachorro antes de regresar a sus aposentos; así que sin
que el omega se diera cuenta de alguna cosa, Lan Xichen tuvo el tiempo para mudarse con
este como una “sorpresa”. Una noticia que podría tomarse para bien o para mal, algo
impredecible por el carácter de Jiang Cheng.
Sin embargo Lan Huan creía estar haciendo lo correcto, imitando a su hermano y sin tener
que pedirle permiso a nadie, pues era el líder de la secta, simplemente tomo la decisión de
mudarse con su prometido. Después de todo el sabía que no le haría nada malo a Jiang
Wanyin, e incluso había traído su propia cama para no incomodarlo; todo con un propósito.
Después de todo, Lan Xichen tomo aquella audaz idea después de lo que sucedió la noche
anterior.
Unos tímidos golpes en su puerta lo despertaron en medio de la madrugada. Sentándose en su
cama y encendiendo una lámpara cercana al lugar en el que dormía, Lan Xichen se puso de
pie y con pasos rápidos se acercó a la puerta preocupado, abriendo esta para sorprenderse
encontrando a Jiang Cheng fuera. Era una hora avanzada de la noche, y siendo el único
despierto en El Receso Entre Las Nubes, Jiang Wanyin había salido de sus habitaciones
privadas con el pequeño niño que cuidaba, solamente vestido con sus túnicas interiores y
descalzo, buscando su alfa.
“Debemos encontrar un curandero, ahora” Exigió Jiang Cheng, sin darle tiempo a Lan Huan
de preguntar cualquier cosa si quiera.
“¿A-Cheng? ¿Qué está pasando?” Pregunto Lan Xichen cuando tuvo la oportunidad: “Por
favor pasa, está haciendo mucho frio fuera y tu…”
Muy acelerado y asustado, Jiang Cheng intento apresurar a su alfa: “¡Deja de decir tonterías!
¡No tenemos tiempo! Necesito un curandero para nuestro cachorro, algo está mal con él”.
Finalmente mirando al pequeño bebé que Jiang Wanyin tenía en sus brazos, Lan Huan
rápidamente intento notar que sucedía con este, sin embargo el menor dormía plácidamente
en los brazos de su omega, sin ningún síntoma aparente.
“¿Qué le sucede?”
Tomando una de las manos de Lan Xichen, Jiang Cheng rápidamente la puso sobre la frente
del bebe, temblando un poco: “¿No lo sientes? Tiene fiebre, está muy caliente… Hice todo lo
que las señoras omegas de la secta Lan me dijeron, use paños fríos y le di un baño antes de
que se durmiera, pero la fiebre no disminuye ni desaparece…”
Tocando su piel realmente caliente, Lan Xichen bajo sus dedos preocupado las mejillas
regordetas del niño, acariciándolas para notar su temperatura, comenzando a preocuparse así
como Jiang Cheng. Sin embargo el omega, el cual no había dormido en toda la noche,
bastante alterado, pronto rompió en lágrimas temblando aún más, aferrándose fuertemente al
pequeño niño muy desesperado.
“A-Huan no sé qué hacer… Por favor ayúdalo, tengo miedo” Suplico Jiang Cheng, mirando a
su pequeño cachorro desesperado.
Notando el estado sumamente alterado de Jiang Wanyin, Lan Xichen acepto de inmediato,
sumamente preocupado por el niño y por su omega. Entrando en su habitación para tomar su
cinta de frente y unas túnicas exteriores, volvió a salir y cubrió a Jiang Cheng con las túnicas
para intentar hacerlo entrar en calor, rodeando su cintura con uno de sus brazos para
conducirlo por su hogar con la leve luz de la luna, buscando al curandero más cercano.
Pronto llegaron a una de los pabellones cercanos al área de los omegas, y despertando a un
curandero, ambos jóvenes le entregaron al niño. Mientras él bebe era examinado por el doctor
de turno, Jiang Cheng no se apartó ni un solo segundo de Lan Huan, tomándolo de la mano
fuertemente, mientras aun temblaba de miedo por el cachorro. Tras algunos minutos de
deliberación, el medico solamente sonrió y le dijo a Jiang Cheng que no temiera, pues la
temperatura de los bebés solía ser mucho más elevada que los de una persona adulta, razón
por la cual creía que este tenía fiebre cuando en realidad no era nada.
Sintiéndose estúpido, pero mucho más aliviado de que su pequeño no estuviera enfermo,
Jiang Cheng volvió a tomar al niño en sus brazos y se disculpó en un susurro, aún muy
asustado por lo que paso. Disculpándose también pero igualmente aliviado, Lan Huan
termino por regresar con Jiang Cheng hasta sus habitaciones privadas. En medio del
silencioso camino, Jiang Wanyin se aferraba fuertemente al pequeño, realmente asustado,
solamente mirando su rostro dormido.
“Está bien A-Cheng” Dijo Lan Huan intentando calmar a su prometido: “No debes sentirte
mal por ello”.
Suspirando suavemente, sin dejar de mirar al pequeño, Jiang Cheng susurro: “Siento que
tampoco puedo con esto, soy un fracaso…”
“Jamás lo serias…”
“¿No? Me ofrecí para cuidarlo, pero ni siquiera puedo distinguir que tenga fiebre o que no la
tenga. Es duro darse cuenta de que a pesar de que mi intención era darle una mejor vida, tal
vez estaría mejor con otra persona”.
Guardando silencio por algunos segundos, Lan Xichen pudo notar como verdaderamente
Jiang Wanyin amaba a ese pequeño niño. Más allá de esa conexión que tuvieron con su
omega y su alfa, aquel pequeño se había ganado un lugar especial en el corazón del joven
Jiang; así que pensar que estaba dañándolo por no saber hacer las cosas, era lo más doloroso
para el omega. Había pasado un par de semanas desde que el pequeño niño fue entregado a
Jiang Cheng, y aunque este aparentaba bastante bien la normalidad en su día a día, era más
que obvio que el pequeño le quitaba horas de sueño y bastante energía con sus cuidados, así
que el estar asistiendo a las duras clases de Lan Qiren al mismo tiempo seguramente era muy
duro para el menor.
“Tal vez me precipite, tal vez no puedo cuidarlo…” Se lamentó Jiang Cheng a punto de
romper a llorar: “Es solo que… No puedo dejarlo, y me duele tanto pensar que estoy
dañándolo…”
“A-Cheng…” Susurro Lan Huan realmente preocupado, abrazándolo un poco más cerca de
su cuerpo: “Por favor no digas eso…”
Lan Huan sentía realmente el dolor de su omega como si fuera el suyo propio, así que
queriendo besarlo y abrazarlo para intentar consolarlo, solamente pudo pensar en alguna
manera de reconfortarlo.
“Tal vez yo podría…” Susurro Lan Xichen intentando proponerle ayudarlo a cuidarlo.
Sin embargo como si fuera una especie de maldición, ambos tuvieron que guardar silencio
cuando pasaron cerca de uno de los pabellones privados de Gusu, el Jingshi. Sonriendo de
una forma incomoda mientras sus orejas se enrojecían, Lan Xichen dejo de hablar,
sintiéndose sumamente tímido; mientras que Jiang Cheng puso una expresión de
exasperación, y miro con odio en dirección a la habitación de su hermano.
“Er Gege por favor… Eres tan grande y yo tan estrecho…” Dijo Wei Ying fuertemente, en
medio de ruidosos gemidos y sonidos de placer: “Se gentil… Es la tercera ronda…”
“Wei Ying… ¿Mas fuerte?” Pregunto Lan Zhan, entendiendo las indirectas de su omega.
“Rompe mis caderas gege…”
“No me digas gege”.
Poniendo los ojos en blanco y dejando de caminar, Jiang Cheng escucho como su hermano
dejaba de hablar para comenzar a gritar con todas sus fuerzas, dejando que todos en el área
cercana escucharan su placer.
“¿No puedes ser más ruidoso? Vamos, te estoy retando” Dijo Jiang Cheng de mal humor,
mirando realmente enfadado en dirección a ese pabellón.
Sin poder evitar reír con aquel comentario, aunque obviamente fue sin ninguna intención de
resultar gracioso por parte del omega, Lan Xichen tomo a Jiang Wanyin de la cintura con más
firmeza para hacer que siguiera caminando, intentando alejarlo de aquella desvergonzada
escena. Olvidando su anterior tristeza y su anterior conversación, la pareja tuvo un silencioso
trayecto de regreso a las habitaciones privadas de Jiang Cheng. Mientras el joven omega
refunfuñaba en susurros por la cara tan dura de su hermano, y Lan Xichen no había dejado de
sonreír contento por la felicidad de su hermano menor.
“Gracias por ayudarme Xichen” Agradeció Jiang Wanyin cuando finalmente estuvieron en la
puerta de su habitación.
“No debes agradecerlo”.
Mirándolo fríamente, como si quisiera decirle algo aunque lo callaba, Jiang Cheng finalmente
dijo: “Pero lo haré”.
Haciendo una leve reverencia educada, Jiang Wanyin entro dentro de sus habitaciones,
dejando a un triste y preocupado Lan Huan fuera. El joven alfa no podía dejar de pensar en el
dolor de Jiang Cheng y como no podía ayudarlo, así que tras dar un corto paseo por el área
buscando despejarse, regreso de nuevo a las habitaciones del omega solamente queriendo
asegurarse de que estaba bien. Al regresar viendo todo en obscuridad, con mucho cuidado y
silencio, Lan Xichen se asomó dentro de la habitación por una de las ventanas, observando
una imagen que le rompió el corazón.
Jiang Wanyin estaba acostado en su cama con su cachorro durmiendo sobre su pecho, no le
había regresado sus túnicas a Lan Huan, así que se había envuelto bien con ellas para sentirse
protegido con su olor, y abrazándose fuertemente a su bebe, se había dormido completamente
solo aun temblando en medio de sus sueños. Quedándose observándolo por un par de
minutos que se le hicieron eternos, Lan Xichen se sintió realmente apenado y enojado
consigo mismo. Jiang Cheng podía aparentar ser tan fuerte como quisiera, pero como su alfa
Lan Huan se reclamaba por no haber podido entender lo solo y desprotegido que se sentía;
pensando que incluso esa noche antes de despedirse el omega había querido pedirle que se
quedara por lo asustado que se sentía.
Y aun así ahora Jiang Wanyin dormía desprotegido, aferrándose a las túnicas de su alfa,
mientras que su cachorro se hundía en su pecho y dormía tranquilo, dándole una escena
realmente triste a su alfa. Lan Xichen sentía que su deber era estar ahí con él, ayudándolo a
proteger a su bebé y dándole esa seguridad que el omega no sentía.
Fue así que después de una noche de reflexión tomo la decisión de no dejar a Jiang Cheng
solo con aquel niño. Sabía que no era su hijo, y aunque su alfa se resentía un poco por ello, el
cariño y amor que Lan Huan sentía por Jiang Wanyin era aún mayor, así que simplemente
decidió hacer lo que su corazón le dictaba. Y mientras Jiang Cheng se encontraba en las
clases con su tio, ayudado por sirvientes de su secta, Lan Xichen llevo su ropa y artículos
personales de su pabellón personal al de Jiang Cheng esperando sorprenderlo.
Así que de forma ansiosa, después de haber preparado la cena, Lan Huan sintió su corazón
acelerarse cuando los pasos de su prometido se notaron cerca de aquella habitación. Jiang
Cheng y su cachorro finalmente volvían después de un largo día.
Llegando a sus aposentos perdido en sus pensamientos, Jiang Cheng no pudo evitar
sorprenderse mucho viendo a Lan Huan dentro de su habitación, y levantando una ceja
bastante confuso, preguntó: “¿Qué haces aquí?”
Sonriendo amablemente viendo a su omega en la puerta, trayendo a su pequeño niño en
brazos, Lan Xichen bajo el libro que tenía en las manos para mirarlo al rostro, explicando:
“Hice la cena para ti, entiendo que fue un duro entrenamiento, así que deberías descansar”.
Observando aquello, Jiang Cheng no supo que responder, sin entender por qué Lan Huan se
encontraba en su habitación, o porque también estaba un baúl con su ropa y una cama nueva.
“Espero que no hayas hecho una tontería para enfadarme, Xichen” Dijo Jiang Cheng con
frialdad, entrando en su pabellón junto a su cachorro.
Capítulo 5.

Jiang Wanyin nunca se había considerado a sí mismo un omega muy “dulce”. Había pasado
su vida entera viendo a otras personas enamoradas, pero él nunca se había imaginado a si
mismo de esa misma vergonzosa manera. No le gustaba tomar a su novio y preparar comida
llena de amor como su hermana, y tampoco tener besos y toques apasionados como su
hermano; el simplemente era un poco más seco.
Hasta ese instante.
Se había notado cambiar con Lan Xichen, desde el primer instante que lo conoció y su omega
lo hizo comportarse de forma extraña con él. Y aunque seguía reaccionando de una forma
indudablemente tímida y hasta violenta con las representaciones de amor a las cuales no
estaba acostumbrado, Jiang Cheng aun podía llamarse a sí mismo un omega frio.
Pero tal vez aquello que lo cambio por completo fue su pequeño cachorro, ese bebe lleno de
sonrisas y dulces sueños en sus brazos; aquel pequeño alfa sacaba lo más dulce y protector de
su corazón. Desde que su omega se había vinculado con el pequeño reconociéndolo como su
propio hijo, Jiang Cheng no podía evitar quererlo incluso más que a sí mismo, preocupándose
por él a todas horas.
Así que estando a solas con el menor, después de alimentarlo y tocar sus pequeñas manos con
cariño, Jiang Cheng se sentía un omega completo. Se sentía vulnerable y preocupado, como
si alguien pudiera dañarlos y el no hacer nada, se preocupaba mucho por su pequeño
cachorro, y también solo podía pensar en lo mucho que lo quería.
Y aun cuando quiso evitarlo, en medio de una noche lluviosa que lo puso nervioso, Jiang
Cheng dejo a su cachorro en la cama y corrió al baúl con las cosas de Lan Xichen. Sin
dudarlo, comenzó a sacar todas las túnicas y ropa de su prometido, para llevarlas a su cama,
comenzando construir un nido.
Su convivencia con Lan Huan había sido bastante buena, pasaron solo un par de días desde
que comenzaron a vivir en la misma habitación, y así como el alfa le había prometido, ningún
tipo de insinuación o acción incorrecta fue hecha por alguno. Lan Xichen solo disfrutaba
pasar más tiempo con Jiang Cheng conversando o únicamente viéndolo, mientras que
también se concentraba en ayudarlo con la crianza de su cachorrito y con algunos de los
deberes de Jiang Wanyin; especialmente en la noche cuando el pequeño bebé requería más
atención.
Sin embargo las fuertes feromonas con el olor de la brisa del mar comenzaron a llenar la
habitación de Jiang Cheng, y acostumbrándose a ese olor al igual que su cachorro, no pudo
evitar asociarlo a seguridad. Creando un buen nido rodeado de las cosas de su prometido,
Jiang Wanyin termino poniéndose una de las túnicas de gala del mayor, regresando con su
cachorro a la cama. Aun temeroso por todos los ruidos extraños que escuchaba en el exterior
causados por la tormenta, Jiang Cheng se refugió debajo de las sabanas con su pequeño bebe
en brazos, concentrándose en el olor de su prometido intentando sentirse seguro, esperando a
Lan Huan con ansias.
Lan Xichen regreso a su habitación un par de horas después de que Jiang Cheng construyera
su nido. Se había distraído en la cena con otros alfas que visitaron su secta, y cuando la
tormenta menguo un poco, regreso con Jiang Cheng sonriente. Sin embargo en el exterior de
la habitación noto que algo estaba mal, pues las feromonas del omega se desprendían
fuertemente desde el interior, alarmado a Lan Huan. Abriendo la puerta preocupado, el alfa se
quedó sin palabras, observando las camas que ambos tenían unidas para hacer una sola, con
toda su ropa arremolinada y un Jiang Cheng bien envuelto en el interior.
“¿A-Cheng?” Pregunto Lan Huan realmente preocupado.
Entrando en la habitación y dejando la comida que había traído para su prometido en una esa
baja, Lan Xichen se acercó cauteloso a la cama que había hecho Jiang Cheng. Podía entender
que era un nido de omega, y entendiendo que era algo sumamente privado, no quería ofender
o asustar al menor, así que trato de ser muy cuidadoso.
“A-Cheng” Volvió a llamarlo, viendo las frazadas de la cama que cubrían al menor.
Reaccionando al sentir a su alfa cerca, Jiang Cheng finalmente accedió a descubrirse de las
frazadas, mirando a Lan Huan cerca de la cama, reclamándole: “¿Por qué tardaste tanto?”
Sintiéndose culpable de inmediato por haber tardado tanto esa noche, Lan Huan se disculpó:
“Perdóname A-Cheng, fue una distracción”.
“Tenía miedo… Igual nuestro cachorro” Le reclamo Jiang Wanyin mirándolo a los ojos
fijamente: “Creí que alguien podría entrar y hacernos daño”.
“¿Lo dices por la tormenta? No debes preocuparte por eso, jamás permitiría que alguien se
atreviera a poner un solo dedo sobre ti, estas a salvo en Gusu”.
Sin creerle y siendo muy dulce, Jiang Cheng rápidamente extendió uno de sus brazos en
dirección a Lan Huan, tomándolo de las túnicas con fuerza y tirando de el en su dirección.
Captando la indirecta, Lan Xichen no tuvo problemas en obedecer a su omega y subirse a la
cama a su lado. Habiendo creado el nido lo suficientemente grande para ambos, Jiang Cheng
solamente se recorrió un poco en la cama, permitiendo que Lan Xichen se acostara debajo de
las frazadas a su lado.
Por un instante Lan Xichen sintió como sus orejas se enrojecían, bastante avergonzado.
Nunca antes había estado de esa manera junto a Jiang Cheng, ya que los días anteriores
ambos durmieron en camas separadas, y en su día a día a penas si se abrazaban y besaban
para mostrar su cariño; aquella era la primera vez que podía acurrucarse con su omega en la
cama. Bastante inexperto y avergonzado, Lan Huan pasó uno de sus brazos debajo del cuello
del contrario para permitirle apoyarse en él, jalando ligeramente el cabello suelto de su
omega, aunque Jiang Wanyin no se quejó en lo absoluto.
Suspirando cómodo, Jiang Cheng no dudo en pegarse mucho a su alfa, apoyándose en su
pecho y poniendo al pequeño cachorro acostado sobre ambos. Desde el inicio Jiang Cheng
había evitado usar cunas para él bebe, pues este lo desperraba mucho en la noche, así que
dormía con él en la cama; ya sea a su lado en la almohada o sobre su pecho con confianza.
Así que para ambos no era una sorpresa que el pequeño niño se sintiera cómodo así, sin
despertarse.
Sonriendo al ver como Jiang Cheng acomodaba las frazadas para su bebé, Lan Huan no pudo
evitar admirarse de lo bello que se veía Jiang Cheng en ese instante, tan calmo y cuidadoso,
buscando su cariño y contacto, algo para nada usual en él. Sin embargo Jiang Wanyin en su
interior tenía un debate intenso, pues a pesar de que estaba obedeciendo a su omega para
hacer semejantes cosas vergonzosas, él en realidad se sentía bastante apenado de estarse
comportando de una manera tan ridícula. Él sabía que era un cultivador fuerte, que podía
defender a su cachorro si algo sucedía, sin embargo aun así buscaba a Lan Huan como si
fuera su único salvador, sintiéndose finalmente tranquilo después de aquella ardua noche solo
cuando estuvo en sus brazos y sintiendo el potente olor de sus feromonas.
“¿Crees que todas nuestras noches sean así al casarnos?” Pregunto Lan Huan tras algunos
minutos de silencio.
Abriendo los ojos para ver a su alfa, Jiang Cheng respondió: “¿Así abrazados en la cama? Yo
realmente espero que sí, se siente bastante bien. Aunque supongo que tú debes mejorarlo, aun
eres muy malo en esto”.
Sonriendo con el suave regaño de su alfa, Lan Xichen dijo: “He estado pensando mucho en
eso ¿Sabes? Como será nuestra vida de casados, con un pabellón grande donde todos
nuestros hijos jugaran sin cesar, y encontrarme contigo cada noche para abrazarte sin soltarte
por horas, hasta que caigamos dormidos”.
“No soy un juguete de felpa para que hagas eso, idiota” Reclamo Jiang Cheng, sin darse
cuenta de que él mismo estaba abrazando a Lan Huan fuertemente entre sus brazos.
“No, eres mejor que eso” Respondido Lan Huan, acercando sus labios a la frente del menor
para besarla.
Sonrojándose aún más, Jiang Cheng no pudo evitar sentirse completamente cautivado y
enamorado de su alfa con esas palabras, dejándose besar y acariciar cuanto quisiera Lan
Huan. Entendía que a diferencia de las otras veces, Lan Xichen no hacia aquellos actos de
manera pasional, no con su cachorro entre ambos; era puro amor, solamente su deseo de
querer demostrarle cuanto lo quería a Jiang Cheng con cada uno de sus besos y sus caricias.
“¿Entonces esto que significa?” Pregunto Jiang Cheng rompiendo el último beso.
“Que me he dado cuenta finalmente que solo quiero estar contigo para siempre… Que no
necesito a nadie más a mi lado” Explico Lan Huan, aunque Jiang Cheng no podía entenderlo:
“Que moriré si no estoy a tu lado…”
Unos sentimientos que eran verdaderos para el alfa, pues desde que ambos adoptaron a ese
pequeño y se sintieron vinculados con este, Lan Xichen por varios días dejo de pensar en
Meng Yao, ese al cual extrañaba como amigo algunas veces cuando pensaba demasiado.
Finalmente con el cariño de Jiang Cheng lo había olvidado, había pasado de este para
siempre.
Ahora Lan Huan sabía lo que quería, y estaba seguro de que ese era solo Jiang Cheng, para él
solo era su Jiang Cheng.
Así que pasando sus dedos por la nuca del menor por un segundo, Lan Huan realmente quiso
marcarlo en ese mismo instante. No le importaba si no estaban haciendo el amor o no, el solo
quería vincularse con su omega, para asegurarse de que nunca más tendría ojos para otro que
no fuera Jiang Cheng toda su vida, para estar a su lado por completo por siempre.
Creyendo aquellas palabras, las cuales su omega le indico que eran sinceras, Jiang Cheng se
aventuró a decir: “Te amo A-Huan…”
Sufriendo un sobresalto, Lan Xichen se quedó sumamente sorprendido al escuchar tales
palabras. No era la primera vez que se decían aquello, con su usual timidez y en susurros;
pero siempre había sido el mismo quien pronunciaba tales palabras primero. Aquella era la
primera vez que Jiang Cheng le decía que lo amaba antes que él.
“Yo también te amo Yin Yin…” Susurro Lan Huan realmente conmovido, volviendo a buscar
los labios de su omega para besarlos.
Cerrando los ojos y dejándose llevar, Jiang Cheng se pegó aún más al cuerpo de Lan Huan,
quedando completamente pegado a él, aceptando el beso, el cual se hizo más pasional poco a
poco, entreabriendo sus labios permitiendo que Lan Xichen le diera un profundo beso, por
primer vez sin dificultades o resistencia. Sin embargo ambos tuvieron que detenerse al
escuchar a su bebé hipar, ya que el pequeño cachorro se había despertado con el movimiento
de sus padres, y aunque no estaba llorando, si los miraba a ambos fijamente, como si
estuviera celoso de que su padre estuviera besando a su madre frente a él.
Separándose de Lan Xichen riendo un poco, Jiang Cheng se agacho un poco y beso la frente
de su pequeño alfa, intentando calmarlo: “También hay un beso para ti, no debes ponerte
celoso de papá…”
Dándose cuenta de lo que había dicho, Jiang Cheng miro a Lan Huan rápidamente, queriendo
disculparse. Sin embargo Lan Xichen solamente sonrió de forma tranquila, acariciando las
mejillas de su prometido y besando su frente de igual manera. Lan Xichen podía sentirlo,
después de todo su alfa ya se entendía bien con el omega de Jiang Cheng, y este no le mentía;
a Jiang Wanyin le dolía bastante no poder tener a ese cachorro como su hijo legítimo, sin
poder llamarse su “padre” y viviendo con el miedo de que se lo quitaran porque había
terminado el tiempo para cuidarlo. Sin embargo Lan Huan ya tenía una decisión, y quería
quedarse con Jiang Cheng toda su vida, algo que había decidido sin dudar, así que también
sabía que quería una familia a su lado, una que iba a iniciar junto a ese pequeño a su lado.
“Estaba pensando que debíamos ponerle un nombre” Sugirió Lan Xichen: “Me gusta llamarlo
cachorrito, pero pronto cumplirá 4 semanas de nacido ¿No crees que es algo injusto?”
“Un nombre… Pero nosotros no podemos…”
“Pensaba que podríamos ponerle un nombre bonito y corto como nombre, y algo elegante
como nombre de cortesía” Sugirió Lan Xichen.
Olvidándose de todo por un instante, Jiang Cheng sonrió y sugirió: “Yi, significa regalo. Es
un buen nombre para él, porque es un regalo para mí”.
“Lan Yi…” Susurro Lan Huan mirando al pequeño en silencio: “Y su nombre de cortesía
podría ser Jingyi; Lan Jingyi, Lan Yi. Tiene dos nombres muy lindos”.
“¿Lo crees de verdad? Yo creo que a él le encantara…”
Sonriéndole, Lan Xichen se acercó a Lan Jingyi y le dio un cariñoso beso en la frente
también, susurrándole: “A-Yi… Mi hijo”.
Escuchando aquello, el corazón de Jiang Wanyin se aceleró y sus ojos se humedecieron.
Observando a su omega, Lan Xichen volvió a sonreír, besando sus labios también: “Nuestro
hijo, mi heredero…”
“Pero… Pero… El consejo, los omegas dijeron…” Le recordó Jiang Cheng realmente
confuso.
“Si, ellos pueden decir muchas cosas, pero yo soy el líder” Le recordó Lan Xichen, siendo
prepotente posiblemente por primera vez en toda su vida: “Una vez tú me dijiste que
inventara mis propias reglas, así que si necesito destruir el muro de reglas para ello, A-Yi será
nuestro hijo, y ya nadie podrá arrebatártelo. Con él iniciamos nuestra familia”.
Ya sin poder aguantar las lágrimas de felicidad, Jiang Cheng se aferró fuertemente a su
pequeño, perdiendo finalmente aquel terror que sentía de que alguien se lo arrebatara.
Sabiendo que podría adoptarlo y que este finalmente seria su hijo, no pudo hacer más que
llorar feliz, sintiéndose realmente completo después de mucho tiempo, muy feliz y
agradecido con su alfa.
“Gracias… A-Huan gracias, gracias por darme un hijo, gracias, gracias…” Susurro Jiang
Cheng entre sus sollozos, buscando a su alfa para besar sus labios nuevamente.
Sosteniéndolo entre sus brazos de igual manera, Lan Xichen se sintió realmente agradecido
de poder tener a su omega y a su familia a su lado, abrazando y limpiando las lágrimas de
felicidad de Jiang Cheng con sus besos. Observando lo contento y agradecido que se veía el
menor, Lan Xichen finalmente entendió que aquello probablemente era lo que este necesitaba
para estar bien, aceptar que aquel pequeño era completamente su hijo.
“No debes agradecerme por algo como esto A-Cheng, nos casaremos dentro de unos meses
¿No es verdad? Comenzar nuestra familia ahora o entonces ¿Realmente hará alguna
diferencia?”
Aún muy contento y conmovido, Jiang Cheng negó suavemente con la cabeza, buscando
nuevamente los labios de Lan Huan para besarlos: “Aunque no es tu hijo de sangre…
Aceptarlo como tu primogénito y el próximo heredero de la secta… Solo para que podamos
formar una familia… Tu mereces todos los gracias que yo pueda darte, muchas gracias A-
Huan”.
Suspirando muy tranquilo, Lan Huan permitió que Jiang Cheng le agradeciera cuanto
quisiera. Y cuando ambos estuvieron un poco más tranquilos, habiendo pasado aquella
emoción, Lan Huan recordó la comida que había traído para Jiang Cheng: “¿Yin Yin tienes
hambre?”
Bastante cómodo abrazado a Lan Xichen, Jiang Cheng solamente pudo asentir un poco:
“Si… Tengo hambre”.
“Te traje la cena, puedes comerla ahora”.
“No quiero” Se negó Jiang Cheng de forma caprichosa: “Me siento muy bien ahora, no
quiero ni pensar en moverme un poco; quiero quedarme en la cama por una semana contigo y
A-Yi”.
Sin poder dejar de sonreír por la dulzura de su omega, Lan Xichen trato de encontrar alguna
solución para aquello: “No tienes que moverte. Yo traeré la comida y te ayudare a sentarte, y
luego me encargare de darte de comer en la boca”.
“No soy un bebe idiota” Reclamo Jiang Cheng.
“No, eres mi dulce Yin Yin; por eso quiero mimarte esta noche”.
Mirándolo algo enfadado sin ninguna razón, Jiang Cheng le dio un golpe suave en el pecho al
contrario para luego acceder: “Esta bien, puedes hacerlo… Supongo”.
“No te preocupes, seguirás tan cómo y abrazado a mi como hasta ahora” Prometió Lan Huan.
Moviéndose solo un poco, Lan Xichen arrastro la mesa baja donde había puesto la comida en
dirección a la cama, donde podía tener acceso a esta. Con cuidado entonces se sentó en la
cama y ayudo a Jiang Cheng a hacer lo mismo, tomándolo delicadamente de la cintura y
subiéndolo sobre su regazo, abrazándolo mientras ambos estaban en la cama. Dejándose
hacer dócilmente por su alfa, Jiang Wanyin únicamente sostuvo firmemente a su cachorro,
sosteniéndolo contra su pecho y dejando que meta sus dedos en su boca mientras Lan Huan
lo movía de lugar.
Estando ya posicionado para poder darle de comer al menor, Lan Huan con solo una de sus
manos de una manera muy hábil, logro tomar los platos que había traído consigo para
posicionarlos de mejor manera en la mesa, y tomando unos palillos, recogió un poco de arroz
para dárselo a Jiang Wanyin de forma delicada en los labios.
Comiendo con cierta vergüenza, así como siempre se sentía cuando hacia cosas demasiado
intimas con Lan Xichen, Jiang Cheng susurro: “Perdona por tu ropa…”
Recordando el nido que había hecho, y la costosa túnica que traía en los hombros, el omega
no pudo hacer más que sentirse sumamente apenado: “Ahora toda tu ropa lucirá arrugada, lo
siento…”
“Oye…” Dijo Lan Huan mirándolo a los ojos: “Esto es muy dulce, muy lindo; no debes
disculparte, somos una familia ahora, puedes usar todo lo mío como te plazca”.
Prefiriendo no decir nada más al respecto por la vergüenza, Jiang Cheng aceptó comer un
poco más de arroz dado por Lan Huan, poniendo un ligero puchero. Mirando al menor con
una sonrisa, Lan Xichen se sintió sumamente conmovido por lo adorable que era, sin poder
evitar besar su frente con cariño, solo pudo pensar en lo feliz que era en ese instante.
Sintiéndose completo por primera vez en su vida.
***
Lan Wangji se sentó de forma elegante frente a su tio, guardando respetuoso silencio. Había
sido una sorpresa que Lan Qiren lo llamara a su hermano y a él a una reunión privada antes
de iniciar las clases, sin embargo Lan Zhan nunca se negaba ante la peticiones de su secta, así
que después de haber sido contactado por uno de los sirvientes de Gusu Lan para que fuera a
una de la oficinas privadas de la secta, dejo a su prometido con los demás alfas de la secta
Jiang y acudió con Lan Qiren sin hacer preguntas.
Ya había pasado 2 tranquilos meses desde el inicio de las clases en Gusu. Y aunque al inicio
fueron tiempos tranquilos, desde hace un par de semanas que ciertas personas que acudieron
a estudiar comenzaban a portarse de una manera cuestionable, rompiendo las reglas. Y
aunque hubo varios infractores que el propio Lan Wangji denuncio, increíblemente los
castigos eran bajos o nulos contra los infractores, algo que dejaba muy sorprendidos a todos
los presentes.
Cuando Lan Huan llego a la oficina pocos segundos después de Lan Wangji y se sentó a su
lado, Lan Qiren aparto los documentos que había estado preparando para esa clase y miro a
sus sobrinos: “Hay una complicación en la visita” Dijo Lan Qiren sin irse por rodeos.
“¿Una complicación?” Pregunto Lan Xichen con su usual calma.
Alisando su bigote y su barba con sus dedos, Lan Qiren reformulo sus ideas antes de
comenzar a hablar: “Recientemente muchos de los estudiantes y visitantes consiguieron
romper las reglas de la secta, encontrando puntos que no se han considerado jamás en el muro
de reglas y que les permite cometer acciones cuestionables.
Bastante sorprendido por aquella revelación, así como su hermano, Lan Xichen pronto
comento: “Me había percatado de ello antes, pero pensé que fueron simples coincidencias
con algunos estudiantes”.
“Podría ser” Acepto Lan Qiren con seriedad: “Pero también hay una ligera posibilidad de que
no lo sea. Alguna persona inteligente probablemente ha ideado un plan para burlar las reglas
de la secta, y ha esparcido los rumores entre todos”.
“¿Podría ser eso posible?” Pregunto Lan Zhan curioso.
“No lo sabremos a menos que preguntemos. Así que les pido que intenten averiguar estos
rumores con los estudiantes y visitantes; Wangji, pregunta a tus compañeros de clase si saben
algo; Xichen, mantente alerta en caso de que escuches algo al respecto”.
Aceptando las peticiones de Lan Qiren, ambos hermanos Lan hicieron una reverencia para
luego retirarse, volviendo a los pasillos exteriores de su secta, donde varios de los invitados
se preparaban para asistir a la usual clase con Lan Qiren en el salón principal. Despidiéndose
de su hermano con breves palabras, Lan Xichen también se fue por su lado a resolver algunos
asuntos de la secta antes de las clases, dejando a Lan Wangji con las personas de su secta.
Su Minshan, el llamado “Mejor amigo” de Lan Wangji, no pudo evitar notar que el contrario
había ido a la oficina privada de Lan Qiren, donde tuvieron una charla aparentemente intensa.
Así que con curiosidad, separándose de los miembros de su secta, acudió con el silencioso y
pensativo Lan Wangji, preguntándole: “Wangji ¿Qué paso?”
Lan Wangji y Su Minshan habían empezado su amistad por decisión de sus padres. Su
Minshan era el único heredero de la secta Moling Su, la segunda secta más fuerte de la región
de Gusu. La secta Moling era una extensión de la secta Lan, pues sus fundadores fueron
personas de la propia secta Lan los cuales abandonaron su casa madre para fundar su propio
lugar, el cual compartía muchas de las características de El Receso Entre Las Nubes, pero
teniendo algunas reglas más laxas y siendo mayormente de betas; a diferencia de los Lan, que
en su mayoría eran alfas.
Lan Wangji y Su Minshan nacieron el mismo año solo con algunos meses de diferencia,
siendo Su She el menor. Tras su nacimiento, el padre de Su Minshan quiso que Lan Wangji y
su hijo se casaran, pues Su She era beta y en su generación no habían más omegas
disponibles; sin embargo poco tiempo después desde el nacimiento de Lan Wangji, el joven
Wei Wuxian fue rescatado y enviado a Lotus Pier, donde debido a su conexión previa con el
compromiso de Lan Xichen y Jiang Wanyin, no fue difícil para Yu Ziyuan pedir el
compromiso entre el nuevo alfa de la secta Lan y el joven Wei.
Después de todo, Su She era solo un beta. Mientras que Wei Wuxian era un omega, el cual
tenía el precedente de tener un padre alfa proveniente de una montaña de inmortales, y una
madre la cual fue catalogada como una leyenda en Yunmeng por su habilidad de pelea. Por lo
que a pesar de que QingHeng-Jun estaba considerando seriamente la propuesta de la secta
Moling Su, con la llegada de Wei Wuxian todo cambio y acepto el compromiso sin ninguna
duda. Siendo el primer regalo enviado al omega una hermosa cinta blanca la cual Lan Wangji
escogió a pesar de ser bastante pequeño, y la cual Madam Yu utilizo para peinar a Wei Ying
desde entonces sin decirle nada.
Sin embargo la secta Lan, temerosa de un nuevo conflicto por la ruptura de un compromiso,
se apresuró a proponerle una nueva alianza a la secta Su. Su She y Lan Zhan serían criados
como hermanos, los dos juntos ya fuera en Gusu o en Moling, con la promesa de que cuando
ambos crecieran, Lan Wangji se convertiría en el hermano jurado de Su Minshan, algo que no
podía compararse a un matrimonio, pero que aun así crearía una alianza entre ambas sectas.
Y se hizo como se prometió, pues aunque Lan Wangji no pasaba tanto tiempo en Moling, Su
She había pasado casi todas su vida en la secta Lan, considerando a la familia de Lan Zhan
como su propia familia, solamente creando un vínculo fraternal y nada romántico como se
había planeado alguna vez.
“Problemas” Respondido Lan Wangji con seriedad.
Su Minshan llegaba a conocer bien a Lan Zhan, aunque su vínculo no era tan fuerte como el
de Lan Xichen o el de Wei Wuxian. Así que a pesar de que podía adivinar muchos de sus
sentimientos a pesar de su eterna frialdad, Su She no podía entender las cosas que este
pensaba sin necesidad de palabras; por lo que había aprendido a sacarle información a Lan
Wangji a base de preguntas: “¿Qué clase de problemas?” Cuestiono Su She.
Tomando un tiempo para responder, Lan Wangji finalmente dijo: “Los invitados han
comenzado a portarse mal”.
“Si, me entere de que han roto varias reglas, y en muchas ocasiones ¿Eso está causando
problemas?”
Asintiendo, Lan Zhan dijo: “Mmm”.
Cruzando los brazos, Su She también comenzó a pensar, sugiriendo de pronto: “Creo que hay
alguien a quien podríamos preguntarle”.
Luciendo interesado, Lan Wangji pregunto: “¿Mmm?”
“No me mires así…” Dijo Su She poniéndose algo nervioso: “Solo es que conozco a una
persona que recientemente ha roto las reglas, porque yo la reporte en mi periodo de vigilancia
hace algunas noches. No es gran problema, podríamos intentar preguntarle”.
Siendo ahora él quien se sentía curioso, Lan Wangji no pudo evitar preguntar: “¿Quién es?”
Al escuchar esa interrogante, Su She volvió a reír, notándose bastante avergonzado e incluso
tímido. Algo que sorprendió a Lan Wangji, pues su amigo no solía ser así con nadie jamás.
Capítulo 6.

Lan Wangji y Su She debían hacer ciertas preguntas a los estudiantes para cumplir con la
tarea que Lan Qiren les había dado, sin embargo aquello era un poco más complicado para
los jóvenes Lan, pues al tener esa reservada actitud y ser un poco más distantes, no habían
podido intimar de forma correcta con las demás sectas, sin tener la confianza necesaria como
para hacer ese tipo de preguntas a otros.
Aun así Su She parecía confiado y directo a cierta persona. Así que al día siguiente después
de que Lan Wangji recibiera aquellas instrucciones de investigar, Su She y este fueron por su
cuenta a un pabellón de invitados cercano al área de los omegas, en lugar hermoso y bien
acomodado.
“¿Wei Gonzi te pregunto acerca de la investigación?” Preguntó Su She curioso.
Asintiendo con la cabeza, Lan Zhan respondió: “Mmm”.
“Wei Gonzi es muy popular entre las personas de todas las sectas, siempre está conversando
y bromeando con todo el mundo” Observo Su She curioso: “¿No pensaste en preguntarle a
él?”
“No sabe”.
“¿Realmente?” Pregunto Su She curioso.
“Me lo dijo hoy” explico Lan Wangji con confianza.
Wei Ying había sido la primera persona con la que Lan Zhan acudió para hablar del dichoso
asunto de las sospechas de su tío acerca de que alguien está intentando enseñar a otros como
burlar las reglas del clan. Al escucharlo Wei Ying estallo en carcajadas por varios minutos,
tanto que termino llorando de la risa en los brazos de un confuso Lan Wangji, riéndose sin
parar de lo que este le contaba. Para que al final el joven omega se negara a decir algo al
respecto, asegurando no saber nada y distrayendo a Lan Wangji haciendo el amor como era
su usual costumbre.
Prefiriendo no comentar nada, Su She prefirió mantenerse en silencio, pues no creía por
completo que el omega desconociera el asunto tras su vista confianza con los invitados en la
secta. Pero temiendo ofender a su amigo, simplemente guardo silencio; aunque ya tenía sus
sospechas.
Caminando una ruta que Su She conocía bastante bien y había recorrido de forma constante
esos días, ambos jóvenes se adentraron en un pabellón de un aspecto bastante caro y
ordenado, con banderas de peonias doradas y discípulos con ropas doradas en sus patios. El
ala privada designada a la secta Lanling Jin.
Sabiendo la importancia de la secta y su usual costumbre a la riqueza, el propio Lan Qiren
acomodo el pabellón más caro en todo El Receso Entre Las Nubes para esta secta, recibiendo
de muy buena manera a la hija omega de su amigo Jin Guangshan. La comitiva de los Jin,
que por tratarse de una joven omega y escoltándola como su representante, en aquella visita
se conformaba en su mayoría de otros cultivadores omegas o betas mujeres; las cuales viendo
a los apuestos jóvenes Lan entrando por su área privada, hicieron reverencias saludándolos.
Teniendo más curiosidad por el bello alfa Lan Wangji, pero saludando con más naturalidad a
Su She, al cual conocían como alguien familiar de visita por ese sitio.
Su She no había querido comentarlo por la vergüenza, pero desde hace un tiempo había
comenzado a cortejar a la doncella Jin. La joven no tenía un compromiso con la tradición, y
provenía de una buena familia con una buena posición, algo que se veía con muy buenos ojos
para el próximo líder de la secta Moling Su. Así que a espaldas de todos, ambos comenzaron
a intimar y a llevarse bien en secreto.
Así que siguiendo su familiar recorrido por aquel pabellón, Su She llevo a Lan Zhan a uno de
los salones de té de ese sitio, donde solía reunirse con Su She usualmente para charlar,
teniendo una reunión planeada justamente para esa mañana. Encontrándose con la joven
omega que los esperaba en el salón acompañada de algunas de sus escoltas, otras jóvenes
omega dela misma secta Jin que resguardaban a la representante de la secta.
Viendo como su gran amigo entraba en la sala, el rostro dulce de Qin Su se ilumino,
saludando animada: “¡SheShe! ¡Bienvenido!”
“Buenos días A-Su” Respondió Su She con mucha educación, entrando antes que Lan Zhan
en la sala.
A punto de decir algo más, la joven Qin Su se puso ligeramente seria e intrigada al ver como
otra persona acompañaba a Su She, entrando en silencio y con elegancia a ese salón,
deslumbrado a todos los presentes.
“Hanguang-Jun, es un gusto que nos acompañe esta mañana” Saludo Qin Su de una forma un
poco más educada al joven alfa, haciendo una reverencia educada para este.
Respondiendo la reverencia con elegancia, Lan Wangji respondió: “El gusto es mío”.
Siguiendo las indicaciones de los sirvientes de la secta, Lan Wangji y Su She avanzaron hasta
la mesa baja donde estaba sentada Qin Su, sentándose también alrededor de esta, esperando
que el té fuera servido por los sirvientes. A pesar que le resultaba curioso ver a Lan Wangji
en una visita de índole social, sabiendo por rumores su reservado carácter únicamente
dedicado a su omega, Qin Su no hizo ninguna conjetura apresurada, conociendo su relación
con Su She e interpretando que ambos jóvenes habían decidido ir a verla juntos solo como
amigos, algo que tampoco era algo tan extraño.
“Es bueno contar con su presencia para la merienda de esta mañana Hanguang-Jun, es
agradable poder conversar con usted” Dijo Qin Su alegremente, mirando a su nuevo invitado
con una sonrisa.
Tan reservado como siempre, Lan Wangji solamente asintió a esas palabras, quedándose en
silencio y luciendo extremadamente frio. Aquello que era normal para Su She pero
aparentemente extraño para las doncellas Jin, intento ser pasado de largo por Qin Su, quien
con su agradable carácter intento alivianar la reunión.
“Ojala podamos tener una mañana semejante con la presencia del joven Wei Wuxian
acompañándonos, hace tiempo que he querido invitarlo a pasar un tiempo con mi secta, pero
él siempre alega estar ocupado” Dijo Qin Su con cierta lastima: “Seria interesante poder
formar lazos amistosos entre todos nosotros”.
El hecho de que Qin Su fuera enviada por Jin Guangshan a Gusu no fue un accidente. En los
recientes años varios hijos bastardos del líder de la secta Jin habían sido descubiertos,
algunos mucho más fuertes o buenos cultivadores que sacarían un mejor provecho de las
clases del ilustre maestro Lan Qiren. Sin embargo Qin Su no había ido a ese sitio para
aprender, pues teniendo el carácter más ligero y simple de toda la torre Koi, se había
convertido en la mejor embajadora para su padre, el cual sabía que podía enviarla a cualquier
sitio sin reparo, pues ella se adaptaría con facilidad a su entorno y sacaría provecho de su
situación.
Después del nuevo nombramiento del compromiso entre Lan Wangji y Wei Wuxian, viejas
asperezas resurgieron entre la secta Lanling Jin y Yunmeng Jiang, ya que en el pasado Jin
Guangshan había tenido ciertos problemas con Yu Ziyuan debido a su cercanía con Jiang
Fengmian; un asunto de niños que había sido olvidado. Sin embargo con la reciente lucha de
poder que se tuvo entre ambos alfas, este asunto volvió a salir a flote, volviendo el clima muy
tenso entre ambas sectas que ahora eran prácticamente hermanas, pues Jiang Yanli ahora
pertenecía la secta Jin, dificultando mucho su estadía estando su madre en una constante
pelea con el patriarca de la familia.
Así que intentando resolver las cosas con los hijos omega de la secta Jiang, Qin Su fue
enviada como una embajadora pacificadora, con el único objetivo de intentar volver a
arreglar la relación entre los Jiang y los Jin, volviendo a ganar el aprecio de ambos hermanos
de Yunmeng, los cuales también se habían notado reticentes ante la secta Jin desde aquel
incidente.
Sonriendo despreocupado, Su She comento: “Sería una buena idea. Tal vez incluso se podría
aspirar a algo más formal, como una cena o algo semejante, donde podríamos invitar a Zewu-
Jun y su prometido de igual manera”.
“Sería una reunión maravillosa, ojala podamos realizarla” Comento Qin Su con su usual
carácter dulce, riendo ligeramente.
A pesar de todos los problemas que se habían suscitado entre ambas sectas, nadie podía
enfadarse con Qin Su, ni siquiera el propio Jiang Cheng, quien era el más ofendido por todos
los comentarios sacados de tono que se tuvieron por parte de aquella familia. Así que la joven
Jin simplemente intento dejar caer esa idea como algo desinteresado, cuando para ella era un
objetivo fundamental al intentar volver a unir a ambas sectas como se le había pedido en su
hogar.
Dejando que los sirvientes sirvieran el té y prepararan unas pastas de arroz en la mesa, Qin
Su comento alegremente: “Espero que ambos les guste el té de hojas verdes, es un poco
acido, pero es bastante bueno para el organismo y para mejorar el cultivo”.
“¿Realmente?” Pregunto Su She interesado, probando un sorbo de aquel té: “A-Su eres muy
inteligente, siempre aprendo cosas de ti”.
“¿En verdad?” Pregunto la joven con otra dulce risa.
“Claramente, porque eres una persona muy interesante y con la que da gusto charlar”.
Aquellas halagadoras palabras que resultaron algo incomodas para Lan Wangji, el cual no
sabía cómo reaccionar ante el coqueteo evidente de su amigo, simplemente se quedó en
silencio, bebiendo su té con calma. Mientras que Su She se quedó charlando un poco más con
Qin Su.
“SheShe también es impresionante” Dijo la doncella con una sonrisa: “Me has enseñado
bastante…”
“¿Realmente? No sé si lo hecho en realidad”.
“Claro que lo has hecho, los brotes de flores de algodón están creciendo bien cerca de los
pabellones donde los plantamos. Estoy esperando poder llevarme unos brotes a la torre Koi
para plantarlos allí” Comentó Qin Su.
“Seguro crecerán bien en ese ambiente, las flores de algodón de Moling se ambientan bien en
cualquier sitio, no son como las flores de invierno de Gusu que solo sobreviven en este tipo
de clima” Comento Su She con una sonrisa muy feliz: “Seguro te gustaría ver las diferentes
variedades de las flores de algodón en Moling, de diferentes colores y textura”.
Sonriendo dulcemente, Qin Su respondió: “Realmente sería algo maravilloso, he escuchado
que Moling es un lugar maravilloso, con todas su diversidad y sus grandes criaderos de
perros espirituales, suena como algo simplemente maravilloso. Además que escuche que el
joven próximo esposo del líder Lan Xichen se sintió encantado con el sitio, me contaron
Jiang Wanyin no quería dejar Moling”.
La secta Moling Su, con unas reglas mucho más laxas pero aun dependiente de los Lan,
quedaba en un área cercana a El Receso Entre Las Nubes. En este sitio mayormente habitado
por betas, se tenían los mayores criaderos de perros espirituales, animales alegres y
juguetones, que eran muy hábiles y buenos para las cacerías nocturnas. Debido a que quedaba
en Gusu y estaban bajo la dependencia de la secta Gusu Lan, en los meses pasados Lan
Xichen fue en una visita diplomática para revisar algunos asuntos de estado, llevando consigo
a Jiang Wanyin; el cual exigió ir pues conocía las leyendas del sitio.
Y aunque Lan Wangji había ido varias veces a lo largo de su vida a esa secta a pasar tiempo
con su próximo hermano jurado, y le gustaba mucho la ciudad; sabía que sería imposible para
él llevar a Wei Ying a un sitio semejante. Pues los perros espirituales llenaban toda la secta,
correteando entre las personas y teniendo un trato amable con todas. Y aunque eran criaturas
fantásticas, Wei Ying probablemente moriría del miedo por el temor que sentía por los
peludos animales de cuatro patas, un temor que Lan Wangji conocía bien y siempre cuidaba.
Pero esto era una gran diferencia con el próximo esposo del líder de la secta Gusu Lan, el
cual enamorado de las pequeñas criaturas, paso toda su estancia en Moling en las calles y en
los criaderos de perros. Prometiendo que en un futuro crearía un recinto especial para perros
espirituales en El Receso Entre Las Nubes y que le regalaría un cachorro a cada uno de sus
hijos.
“Lo hizo, realmente mucho” Dijo Su She riéndose un poco, dándole un codazo disimulado a
Lan Zhan: “El joven prometido de Lan Xichen es una persona bastante agradable cuando está
rodeado de seres pequeños como perros, una persona muy divertida con la que tratar. Aunque
bueno realmente también tiene un carácter algo difícil y duro para ser un omega, suele asustar
un poco a los demás. Tal vez por eso fue castigado recientemente”.
Luciendo sorprendida por esas declaraciones, Qin Su dijo: “¿Castigado? No me había
enterado de esa noticia”.
“Bueno en realidad no fue castigado, fue casi castigado. El astuto omega de Lan Xichen
cambio sus tazones para que fueran más grandes y pudiera recibir más cantidad de comida en
ellos, así que intento ser castigado por comer más de 3 tazones de arroz como lo estipulan las
reglas; pero el señor Lan no pudo cumplir la sentencia por que técnicamente no había roto las
reglas. Si comió los tres tazones, es solo que no hay una regla en Gusu que explique el
tamaño de estos o el arroz que puede caber en ellos”.
Notándose algo extraña por un instante, Qin Su intento evitar el tema, bebiendo té de su taza
de una forma nerviosa: “Bueno, es normal querer un poco más, especialmente cuando se está
cuidando de un niño como lo hace él, muy admirable por cierto. El pequeño ya tiene un
nombre ¿No es verdad?” Comentó ella intentando evadir el asunto.
“Escuche que algunos miembros de la secta Jin también fueron castigados, o casi castigados”
Comento Lan Wangji, sin querer dejar pasar el asunto.
“Oh… Fue algo menor, entiende usted Hanguang-Jun, cosas de jóvenes cultivadores” Intento
excusar Qin Su riendo, volviendo a tratar de evadir el asunto: “Mian Mian por favor ve a
traer más té, se nos está acabando ¿Puedo preguntar si les gusto el té jóvenes maestros?”
Aquella jovencita llamada Mian Mian, una de las acompañantes de Qin Su, se notó bastante
torpe, poniéndose de pie y tomando la tetera casi resbalando, notándose muy nerviosa por el
rumbo que tomaba aquella conversación, como si escondiera algo.
Pero sin querer dejar ir el asunto, Lan Wangji siguió presionando: “Tres miembros de la secta
Jin se quedaron a des horas fuera de El Receso Entre Las Nubes, cuando comenzaba el toque
de queda pero aún no había sido levantada la barrera de protección. Saltaron el muro para
entrar incumpliendo las reglas, pero cuando se quiso castigarlos por su osadía, no pudimos
hacerlo pues saltaron la puerta de la entrada a la secta, y eso no está prohibido”.
Riendo un poco, Qin Su respondió: “Claramente una actitud osada, pero también bastante
brillante. Entiendo que no se haya podido castigar a mis muchachos, pero tenga por seguro
Hanguang-Jun que yo los he disciplinado por mi cuenta. Ese comportamiento no volverá a
verse de parte de mis acompañantes”.
“Aun así debo insistir, pues no son los primeros que saltaron las puertas para cruzar el muro
que protege la secta, o que encontraron el perímetro para cazar fuera de Gusu sin que pudiera
castigárseles. Es un patrón muy recurrente últimamente”.
“¿Qué está queriendo sugerir Hanguang-Jun?” Pregunto Qin Su a la defensiva, un poco
cansada de aquella obvia interrogación.
“¿Acaso de alguna manera se han puesto en contacto con otros para esparcir estas ideas?
¿Estas formas osadas de romper las reglas?” Cuestiono Lan Wangji.
“Si lo que usted está sugiriendo que los invitados a su secta conspiramos para romper sus
reglas, debo decir que está equivocado joven maestro Lan” Dijo Qin Su dejando de sonreír:
“Yo no diré nada de este asunto pues no quero más enemistades con la secta causante de este
dilema, pero si esta preocupado por que la secta Jin iniciara rumores, le aconsejo que vigile
de mejor manera a aquellos que son más cercanos a la línea sucesoria principal de su familia
y también son invitados; especialmente esos que duermen a su lado pacíficamente
aparentando no haber cometido errores”.
Llegando justo a tiempo para interrumpir la intensa platica, la joven Mian Mian entro
apresurada con los sirvientes de su señora, los cuales se acercaron de nuevo a la mesa central
para servir más té y poner nuevos pasteles de arroz en la mesa; mientras la joven volvía a su
sitio y conversaba un poco con las demás doncellas Jin, las cuales lucían tan preocupadas e
incomodas como su señora con la anterior platica.
Volviendo a su anterior semblante sonriente, Qin Su comento: “SheShe ¿Te comente que los
omegas de la secta Lan me enseñaron a preparar ‘pastel de luna’?”
“¿Pastel de luna?” Preguntó Su She con una sonrisa algo nerviosa: “Debes prepararlo para mi
uno de estos días”.
“¿Pero que acaso no se preparan solo en ocasiones festivas?” Pregunto Qin Su riendo
dulcemente.
Dejando de prestar atención a las conversaciones ligeras entre Qin su y su amigo, Lan Wangji
se quedó en silencio con la mirada baja, pensando en aquel especie de “acertijo” que le había
dejado Qin Su. Quedándole una sola cosa en claro: Las sospechas de su tío eran verdad, y
alguien había comenzado a envenenar la mente de los invitados y a corromper las reglas de
su secta.
La visita de esa mañana continúo de una forma normal, y aunque Qin Su no volvió a iniciar
una conversación con Lan Wangji por el temor de volver al mismo asunto, todo fue bastante
ameno, hasta que todos tuvieron que retirarse para prepararse para las clases de Lan Qiren
que pronto comenzarían.
“Gracias por acompañarme esta mañana jóvenes maestros, fue un honor que nos visitaran”
Dijo Qin Su con alegría, despidiéndose de ambos cuando estos se ponían de pie.
“Muchas gracias por la invitación” Respondió Lan Zhan con cierta frialdad pero educación.
“Fue increíble estar una mañana más a tu lado A-Su, espero que podamos vernos esta tarde
para ir a pasear por los jardines de las flores de invierno” Comento Su She.
“Estaré encantada de esperarte” Dijo Qin Su.
Haciendo las reverencias de cortesía, Lan Wangji y Su She finalmente abandonaron el
pabellón de los Jin, cada uno con sus propios pensamientos e inquietudes. Sin haber
conseguido lo que necesitaban de la reunión, ambos jóvenes salieron de vuelta a los pasillos
principales de El Receso Entre Las Nubes, ambos pensativos. Pero sin hablar, ambos
pensando en lo suyo, pronto escucharon unos pasos rápidos detrás de ellos, llamando su
atención.
“¡Hanguang-Jun! ¡Su Gonzi!” Dijo una voz suave, aun corriendo detrás de ellos.
Girándose al escuchar esa voz, ambos jóvenes miraron a una de las doncellas de Qin Su, la
llamada “Mian Mian”, Luo Qingyang, una omega de la secta Jin vestida con las usuales
túnicas doradas. La cual corría algo agitada detrás de ambos.
Notándose dudosa mientras se acercaba a ambos jóvenes maestros, Luo Qingyang se nota
bastante seria, haciendo una reverencia para ambos: “Discúlpenme por perturbarlos jóvenes
maestros”
“Descuida ¿Necesitas decirnos algo?” Pregunto Su She con calma, intentando darle confianza
a la joven.
Volviendo a dudar, la joven apodada Mian Mian, finalmente les mostro a ambos jóvenes
maestros algo que había estado escondiendo en sus manos desde que fue detrás de ambos:
“Tal vez esto es lo que están buscando, jóvenes maestros” Sugirió la joven, entregándole a
Lan Wangji y Su She una hoja de papel escrita con tinta.
Tomando la hoja de papel con curiosidad, Lan Zhan lo primero que hizo fue mirar el título y
luego leer el contenido. Quedándose en silencio analizo las palabras escritas en ese corto
manual, el cual señalando ciertas reglas específicas de su secta, enseñaba con cortas
indicaciones maneras de poder romper y evitar sus consecuencias, encontrando ciertos
“vacíos” en aquellas normas para poder romperlas de forma efectiva.
“¿De dónde sacaste esto?” Pregunto Su She realmente sorprendido, leyendo el papel detrás
de uno de los hombros de Lan Wangji.
“Los miembros de todas las sectas los tienen Su Gonzi” Explico Mian Mian aun con cierto
recelo y precaución de hablar del tema: “Los miembros de mis secta entregaron algunas
copias a sus compañeros, así casi todos recibimos o leímos esto. Pero la señora A-Su tiene un
gran pergamino con más cosas escritas, no se lo ha enseñado a nadie, pero todos su ponemos
que tiene algo similar escrito”.
Cruzando miradas con Lan Wangji por un instante, Su She volvió a interrogar diciendo: “¿Y
no tienes idea de quien se lo dio a tu secta?”
Con sinceridad, la joven Jin negó con la cabeza: “Nadie lo sabe, yo lo recibí de otra de las
doncellas de la señora A-Su. Y comentando el asunto con otras compañeras de la secta
Qinghe Nie, ellas nos dijeron que también habían recibido los mismos papeles con las
instrucciones de personas de alto nivel en su secta, aunque nadie dice o quiere decir quien fue
el que los escribió”.
Aun mirando el papel entregado con consternación, Lan Wangji dijo rápidamente:
“¿Podemos quedarnos con el documento?”
“Pueden hacerlo Hanguang-Jun, de cualquier manera hay muchas copias que están rondando
de un lado para el otro, incluso a manos de miembros de la secta Lan” Respondió Mian Mian.
“Muchas gracias doncella Jin, apreciamos su ayuda” Corto Lan Zhan la conversación,
impidiendo que Su She hiciera más preguntas; haciendo una reverencia y tomando a su
amigo del brazo para incitarlo a seguir su camino.
“De nada” Respondió la joven con calma, haciendo una reverencia con gracia para sus dos
acompañantes antes de volver por donde vino.
Lleno de confusión por todo lo raro que estaba pasando, Su She siguió a Lan Wangji, aunque
no entendía por qué el contrario no había querido comentar el asunto y mucho menos seguir
interrogando a Mian Mian, que podría haber tenido más información acerca de la persona
detrás de los documentos.
“¿Qué sucede A-Zhan? ¿Por qué no vamos tan apresurados? Podemos intentar reunir más
información con los miembros de la secta Jin, hay algunas personas que yo también…”
Comenzó a sugerir Su She, pensando únicamente en la tarea asignada por Lan Qiren.
Sin detener su paso, aun tomado del brazo de Su She impidiendo que regresara, Lan Wangji
pidió: “Olvida todo este asunto y nunca se lo comentes a nadie”.
“¿Qué? ¿Por qué razón?”
“Es un favor que te pido” Dijo Lan Wangji con seriedad: “No le digas esto a nadie, ni a mi
hermano ni a mi tío, o a cualquier persona importante de mi secta. Por favor olvida todo lo
que sabemos”.
Sin entender nada en lo absoluto, pero pudiendo identificar la angustia y la preocupación en
la voz de su amigo, Su She finalmente accedió: “Esta bien A-Zhan, lo haré”.
Arrugando la hoja con las instrucciones, Lan Wangji tiro el documento entre la maleza que
los rodeaba, volviendo con Su She hasta los pabellones principales de la secta en silencio,
perdido en sus pensamientos.
Lan Wangji había reconocido la letra de la persona autora de esos documentos, y temía por el
castigo que le darían por su travesura.
***
Un nuevo día se dio en El Receso Entre Las Nubes. Bostezando un poco, Wei Wuxian en su
lugar en el gran salón, escribía de forma cautelosa y escondida en un documento con las
formas de romper las reglas del clan Lan, haciendo rápidas anotaciones mientras tenía tiempo
libre. En los últimos días más y más personas pedían sus aclamados documentos de
instrucciones, incluso personas que los habían tenido en el pasado; esto porque
supuestamente esos documentos habían comenzado a desaparecer, alguien aparentemente
estaba robándoselos. Así que teniendo que reponer estos para sus “clientes”, Wei Ying
intentaba aprovechar todo el tiempo que tenía libre para trabajar en ellos, escribiéndolos a
mano y con mucho cuidado, ya que su caligrafía no era tan buena, así que debía asegurarse de
que esta era entendible para ser leída.
Aquella mañana el maestro Lan Qiren se había retrasado un poco para su ingreso a clases, así
que entrando en el salón más grande de la secta a esperarlo, todos los estudiantes de las
diferentes sectas se divertían conversando entre ellos en sus lugares; todos menos Lan Wangji
y Wei Wuxian, uno por escribir sin parar a escondidas, y el otro por estar vigilando de cerca
todos los movimientos de su prometido.
Pronto los pasos fuertes y rápidos del maestro Lan Qiren se escucharon en el salón, seguidos
por los pasos elegantes de Lan Xichen, y los agraciados pasos de Qin Su. Ambos Lan se
mostraron sumamente serios ante todos los presentes, tanto que Lan Xichen no estaba
sonriendo; mientras que Qin Su con su usual actitud relajada y dulce, le susurro algo a Su She
antes de tomar su lugar en la cabeza de su secta.
Tomando su sitio en la mesa al centro de la clase, Lan Qiren sorprendió a todos los jóvenes
cultivadores dando una fuerte palmada en el centro de la madera, ocasionando un fuerte ruido
que los sorprendió a todos, y llamo su atención para verlos.
“La sociedad humana basa su integridad y su desarrollo en reglas, normas que deben regir
nuestro comportamiento y llevarnos por el sendero del bien. Como cultivadores de sectas
importantes, cada uno de ustedes debe formar su carácter y su camino en el ancho sendero de
la luz, alejados de la maldad y la energía corrompida” Dijo Lan Qiren con un tono lleno de
decepción y enojo en su voz: “Es por eso que como su maestro, me siento tan decepcionado
de su actuar”.
Con aquellas palabras, todos los presentes sintieron un sudor frio en la espalda, mientras se
miraban los unos a los otros con miedo. Y el más asustado de todos ellos era Wei Wuxian, el
cual casi partiendo el pincel que tenía en los dedos por la sorpresa, miro a Lan Qiren con un
rostro de circunstancia; sintiendo como muchas miradas de todos los estudiantes se dirigían a
él.
Cruzando miradas con Wei Wuxian, Lan Qiren se notó mucho más serio, pronunciando en
voz alta: “Joven maestro Wei Wuxian, póngase de pie de inmediato”.
Ocultando los documentos que escribía debajo de otros papeles en su mesa, y dejando su
pincel de lado; Wei Ying se puso de pie en su lugar con una sonrisa en los labios, haciendo
una reverencia para el maestro e intentando aparentar normalidad, a pesar de que estaba
temblando por el miedo: “¿Si maestro Lan?”
Tomándose su tiempo, observando a ese joven omega desobediente, el cual incitaba al mal
comportamiento, Lan Qiren dijo: “¿Podría explicarme por qué ha estado analizando las reglas
del clan Gusu Lan de una forma incorrecta y con indicios de maldad?”
“¿Incorrecta maestro?” Preguntó Wei Ying aun intentando fingir inocencia: “No lo entiendo”.
Sin poder tolerar las mentiras del contrario, Lan Qiren tomo un pergamino de una de sus
mangas y ante la mirada de todos los presentes, desenrolló este en su mesa, preguntando:
“¿Entonces niega que usted escribió esto?”
Viéndose descubierto y sin saber que decir, Wei Ying se mantuvo en silencio, dejando que
sirvientes de la secta Lan se acercaran a él y revisaran entre sus cosas, encontrando
finalmente los documentos que había estado escribiendo hace algunos minutos, con la tinta
fresca como una nueva evidencia, que le entregaron de inmediato a Lan Qiren.
“En posición de penitencia, ahora” Le ordeno Lan Qiren, furioso.
Resoplando con furia al verse descubierto, Wei Ying dejo su lugar para avanzar hasta el
centro del salón frente a la mesa de Lan Qiren, arrodillándose ante este. Poniéndose en la
posición usual de penitencia de los Lan, el joven omega no hizo contacto con Lan Qiren,
comenzando a sentirse avergonzado.
Mientras que Jiang Cheng presiono fuertemente las manos en puños, enfadado porque Wei
Ying como el representante de la secta Yunmeng Jiang, volviera a dejar a todos en vergüenza.
Mientras que Lan Xichen cruzo miradas con Lan Wangji, el cual se notaba aterrado viendo a
su omega.
“Actos de tan baja calidad moral se castigan fuertemente en esta secta” Dijo Lan Qiren,
mirando a Wei Ying con mucha seriedad: “Así que espero que estés preparado para afrontar
las consecuencias de tus perversos actos”.
Sin responder, Wei Ying se quedó en blanco, dispuesto a aceptar lo que fuera. Solamente
pudiendo pensar en la persona que lo había entregado ¿Quién pudo ser capaz de traicionarlo?
Sintiéndose realmente molesto con esos a quienes quería haber ayudado haciendo su estadía
en Gusu más tolerable.
Sintiéndose desesperado por su omega, temiendo cualquier castigo que pudieran darle, Lan
Wangji tomo una decisión apresurada y se puso de pie también, sorprendiendo a todos en la
sala. Sin dubitación, el alfa Lan avanzo hasta el centro del salón arrodillándose al lado de Wei
Wuxian y poniéndose en la misma posición que este, ante su sorprendido tío y hermano.
“Shufu, debo admitir y confesar mi culpa” Dijo Lan Wangji fuertemente, consiguiendo que
todos los presentes lo escucharan.
“Lan Zhan…” Susurro Wei Ying intentando detenerlo, sin entender que estaba haciendo su
prometido.
“Yo también ayude a mi prometido a realizar esos documentos, todas las reglas rotas e
indicaciones, fueron mi idea y son mi culpa también” Admitió Lan Zhan, el cual le dio una
mirada a Wei Ying antes de seguir hablando: “Ambos somos responsables, así que el castigo
debería ser dividido a partes iguales entre los dos”.
Escuchando aquellas palabras, Lan Qiren se notó dudoso, notando que su sobrino
probablemente estaba mintiendo solo para proteger a Wei Wuxian; algo que creía firmemente
pues en la acusación hecha solo se mencionó al omega Jiang. Sin embargo Lan Wangji
también tenía esto cubierto, girándose un instante para ver a Su She, el cual también el
devolvió la mirada confusión y choqueado, hasta entender lo que su amigo decía.
“Es verdad Lan Gonzi” Admitió Su She poniéndose de pie en un movimiento algo torpe por
lo consternado que se sentía con todo el asunto: “Yo también vi que Lan Wangji realizaba
estos actos inmorales, y puedo dar certeza de que es culpable”.
Mirando al líder de la secta Moling Su, Lan Qiren cuestiono: “¿Entonces por qué no lo
confeso antes joven Su? ¿Por qué no hizo una acusación entonces?”
“Por qué Lan Wangji es mi amigo, y me pidió no hacerlo” Mintió Su She con mucha
habilidad: “Pero yo también me siento indignado con este terrible comportamiento, así que
quiero hacer una acusación formal contra Lan Wangji por haber roto las reglas del clan Gusu
Lan, señalándolo como un culpable y poniéndome como testigo por sus actos inmorales”.
Todos los presentes sabían que esto era una mentira, pues Wei Wuxian era el único culpable,
sin entender por qué estaba Lan Zhan recibiendo un castigo que no le correspondía y que lo
humillaba. Pero al tener un testigo y una acusación, ahora Lan Qiren no podía eximir a su
sobrino, teniendo que castigarlo de igual forma aunque sabía perfectamente que este no era
culpable de nada en lo absoluto.
“Bien, entonces los dos serán castigados” Acepto Lan Qiren.
Sintiéndose muy mal porque Lan Wangji estuviera siendo castigado, ya que este en realidad
no había hecho nada en lo absoluto, Wei Wuxian intento negarse a esta idea, susurrando:
“Lan Zhan pero…”
Sin embargo el menor le dio una mirada severa a su omega, ordenándole que se callara de
esta forma. Aunque se seguía sintiendo frustrado y molesto por todo, Wei Ying tuvo que
conformarse con quedarse callado, mirando nuevamente al frente y presionando la mandíbula
con todas sus fuerzas, esperando a que Lan Qiren les diera sus sentencias finalmente.
“Ya que a ambos parece gustarles tanto escribir, les daré un castigo acorde a sus intereses”
Dijo el maestro Lan, acariciando su bigote y su barba en silencio, mirando a ambos jóvenes
frente a él con mucha decepción: “Wei Wuxian, por tus indecentes actos, mi idea inicial fue
darte la tarea de copiar 100 veces las 3001 reglas del clan Gusu Lan…”
Al escuchar estas palabras Wei Ying dejo de estar indignado para sorprenderse y asustarse,
mirando al contrario con temor. Pensando seriamente en todos los años que tardaría en
cumplir semejante castigo, sin poder creer que pudiera copiar las 3000 reglas en una tarde si
quiera.
“… Pero ya que ahora su castigo es compartido, solo copiaras las reglas 50 veces” Sentenció
Lan Qiren.
Esto no mejoro en lo absoluto para Wei Wuxian, el cual incrédulo no podía pensar si quiera
en terminar de copiar las 3000 reglas 10 veces, arrepintiéndose de inmediato por querer hacer
tantas tonterías.
“Mientras que para ti Wangji, ya que cumpliste una traición a tu secta y a tu familia, tu deber
será enmendar los errores hechos” Dijo Lan Qiren con mucha seriedad: “Así que tu arreglaras
todas las reglas familiares, realizando nuevas reglas para el muro de la entrada, que
complementen y pongan más severidad en las normas de Gusu. Te aseguraras de que ninguna
otra persona indecente pueda intentar burlar nuestra secta de nuevo”.
“Si Shufu” Acepto Lan Zhan de forma seria, aceptando su castigo con agrado a pesar de ser
sumamente complicado.
Levantándose nuevamente, Lan Qiren miro a todos los presentes en la clase, los cuales
sintieron un profundo temor recorrerlos, pues sabían que tampoco saldrían limpios de aquel
problema: “Todos tenemos opciones, opiniones, y oportunidades. Al aceptar incumplir las
normas de mi secta y romperlas usando trucos baratos, ustedes también fueron indecentes, y
merecen un castigo. En lo que respecta a la clase de esta mañana, todos copiaran sin descanso
las 3000 reglas del clan una y otra vez hasta que el tiempo de la clase haya culminado; y yo
me asegurare personalmente de que ninguno de ustedes descanse de escribir las normas ni
por un solo instante. Y mañana, se tomara un examen oral de cada una de las reglas a todos
ustedes, para asegurarme de que no han olvidado ni una sola”.
Con aquella sentencia que resultaba infernal para todos, los repentes se miraron asustados,
sin poder creer que tenían semejante castigo. Y con un último movimiento de cabeza, Lan
Qiren les ordeno a Lan Wangji y Wei Wuxian que regresaran a sus lugares, preparándose para
comenzar el castigo de toda la clase.
Levantándose al mismo tiempo que Lan Wangji, Wei Ying quiso decir algo, pero el joven alfa
no le dio ni una sola mirada, regresando a su lugar en completo y frio silencio, visiblemente
molesto con Wei Ying.
“Lan Zhan…” Susurro el omega apenado, queriendo disculparse con Lan Zhan, el cual no lo
miro de nuevo.
Capítulo 7.

“Lan Zhan… Lan Zhan…” Dijo Wei Ying haciendo un puchero: “¿Realmente estas enfadado
conmigo? ¿Realmente Hanguang-Jun?”
Sin responderle, concentrado en escribir aquello que su tío le había pedido, Lan Wangji ni
siquiera levanto la mirada para ver a su omega. Notándose frustrado y arrepentido, Wei
Wuxian siguió mirando fijamente a Lan Wangji, esperando aunque fuera una pequeña
reacción por su parte a sus palabras.
“¡Lan Zhan!” Dijo Wei Ying fuertemente.
Cumpliendo el castigo que Lan Qiren les había dado a ambos, después de las clases en el
salón principal con el resto de los invitados de las demás sectas, Wei Wuxian y Lan Wangji
tuvieron que ir a la biblioteca de Gusu, donde comenzaron a cumplir sus castigos copiando y
transcribiendo las 3000 reglas de la secta Gusu Lan. Y aunque estaban sentados en dos meas
bajas prácticamente juntas, desde que habían llegado a ese sitio Lan Wangji no le había dicho
ni una sola palabra a su prometido, ignorándolo por completo.
Sin querer darse por vencido, entendiendo que su alfa estaba molesto, Wei Ying tomo sus
pergaminos y en un rápido movimiento se trasladó a la misma mesa baja de Lan Wangji,
sentándose frente a este, con el objetivo de llamar su atención y evitar que este siguiera
ignorándolo. Pero sin surtir ningún resultado, Lan Wangji siguió con lo suyo sin levantar la
mirada ni por un segundo, logrando una mayor desesperación en su mayor.
Bufando con cierta resignación y abandonando su orgullo, Wei Wuxian decidió volver a
disculparse, diciendo: “Ya te lo había dicho Hanguang-Jun, fue un error, un tonto error por mi
parte. Soy malo, lo admito, y lamento haber roto las reglas de tu clan… Y que los demás
también las rompieran por mi culpa”.
A pesar de haber escuchado aquellas palabras, Lan Zhan siguió sin reaccionar ante el mayor,
concentrado en su escritura y en terminar sus deberes lo más pronto que pudiera. Logrando
un nuevo pico de desesperación por parte de Wei Ying: “¡Lan Zhan!” Volvió a insistir el
omega con mucha frustración.
Entendiendo que su alfa no le haría ningún caso a pesar de todas sus palabras y casi gritos,
Wei Wuxian finalmente termino tomando el pergamino en el cual Lan Zhan escribía tan
concentrado, arrebatándoselo intentando llamar su atención.
Consiguiendo finalmente que Lan Wangji levantara la mirada, el menor solamente dijo: “No
es necesario”.
Quedándose en blanco por un instante, evitando que Lan Wangji recuperara su pergamino,
Wei Ying pregunto: “¿Qué es innecesario?”
“Tus disculpas por ese asunto”.
Sonriendo aliviado, Wei Wuxian le devolvió el pergamino y le pregunto: “¿Entonces me
perdonaste por haber roto las reglas Lan Zhan?”
“Si, te perdono por haber roto las reglas. Pero aun no te perdono por lo demás” Respondió el
alfa con frialdad.
Perdiendo su sonrisa de inmediato, Wei Ying no supo que decir, observando como su alfa con
su usual semblante de seriedad, se ponía nuevamente las manos a la obra escribiendo de
forma elegante en su pergamino, ignorándolo por completo. Intentando razonar bien antes de
decir cualquier cosa, Wei Wuxian se preguntó a si mismo que otras cosas podrían haber
molestado a su destinado, pero sin lograr entenderlo, finalmente no tuvo más opción que
volver a preguntar.
“¿Por qué cosas no me has perdonado? ¿Qué otra cosa he hecho para enfadarte?”
Suspirando con cierta resignación, Lan Zhan respondió: “Piensa en tus acciones”.
“¡Ya lo hice! Verdaderamente Hanguang-Jun, he pensado en todo, pero no sé qué pude hacer
para enfadarte…”
Sin querer responderle, visiblemente enfadado por primera vez en todo el tiempo que ambos
pasaban juntos, Wei Wuxian realmente quiso llorar de la frustración. Nunca había discutido
de esa forma con su alfa, y sin saber bien que hacer ante su intermitente silencio, solo pudo
bajar la mirada tristemente, sintiéndose muy mal consigo mismo.
“Perdóname Lan Zhan…” Susurro Wei Ying muy deprimido.
Dejando de escribir y levantando su mirada, Lan Wangji cuestiono: “¿Por qué estas
disculpándote ahora?”
Siendo sincero, Wei Wuxian respondió: “No lo sé… No sé por qué estás tan enfadado
conmigo, y yo solo… Lo siento”.
Dejando su pincel en la mesa, Lan Wangji extendió su mano hasta el rostro de Wei Wuxian,
tomándolo de la barbilla para verlo a los ojos, con mucha frialdad: “No debes disculparte por
cosas que desconoces, Wei Ying”.
“¿Qué debería hacer entonces?”
“Reflexionar”.
Poniendo una expresión de aburrimiento, Wei Wuxian no respondió a esas palabras. Él no era
demasiado apegado a las enseñanzas de la meditación o la oración, prefería ser más activo en
su tiempo libre. Así que sin poder responderle a su alfa, prefirió mantener un silencio
rotundo, mirando esos ojos dorados y fríos fijamente. Soltando un nuevo suspiro, Lan Wangji
supo que su omega no entendería por sí mismo la razón de su molesta, así que intentando
terminar con aquel asunto de una vez por todas, decidió decirle la verdad de una vez por
todas.
“¿Qué fue lo que nos prometimos desde que volvimos a comprometernos?” Pregunto Lan
Wangji con seriedad.
“¿Tener cuidado de no embarazarnos?” Pregunto Wei Ying sin entender aun.
“Nos prometimos completa sinceridad, con nuestros deseos y actividades” Le recordó Lan
Zhan, sin perder la compostura por las usuales irracionalidades de su destinado: “Me
prometiste siempre decirme la verdad, de todo lo que hicieras, porque somos un equipo, y yo
siempre apoyare todas tus decisiones; aun si estoy en contra de ellas”.
Escuchando aquellas palabras con un rostro de confusión absoluta, sin recordar bien haber
dicho o hecho algo semejante, Wei Wuxian reflexiono seriamente al respecto. Intentando
pensar bien porque una promesa semejante había molestado a su alfa de tal manera, tras unos
silenciosos segundos, Wei Wuxian solo pudo llegar a una conclusión.
“¿Estas enfadado porque no te dije lo del manual antes?” Pregunto Wei Ying con suavidad.
Soltando la barbilla del mayor, Lan Wangji asintió con suavidad, mirando con mucha
decepción a su omega.
Entendiendo finalmente la razón, Wei Ying pregunto: “¿Entonces querías que te lo dijera? No
podía hacerlo Lan Zhan, te hubieras opuesto rotundamente y no me lo habrías permitido bajo
ninguna razón”.
“Tal vez, pero si tu realmente querías hacerlo, yo te habría ayudado sin problemas. Te amo, y
haría cualquier cosa por ti” Dijo Lan Wangji con sinceridad, volviendo a tomar su pincel para
seguir trabajando.
Sintiendo aquellas palabras con un golpe realmente duro a su corazón, Wei Wuxian se quedó
callado por un instante. Había olvidado por completo que su jade era tan puro como la nieve,
tan inocente, y que lo amaba con locura; así como él también lo amaba. Y dándose cuenta de
que había lastimado el corazón del menor y herido sus sentimientos al mentirle y no contarle
la verdad de lo que hizo, Wei Ying solamente pudo tomar la mano de Lan Wangji con un
suave movimiento, impidiendo que pudiera seguir escribiendo.
“Lan Zhan… Perdóname” Pidió el omega con mucha sinceridad, mirando los ojos de su alfa
nuevamente: “Nunca quise herir tus sentimientos o hacerte pensar que no confió en ti, tu eres
el amor de mi vida, y confió en ti más que en nadie… Eso fue un error, lo que hice, más allá
de que no estuvo bien para tu secta… Cuando comenzaste a investigarlo y yo lo supe, debí
decirte la verdad sobre lo que hice. Lo siento, estuvo realmente mal mentirte de esa forma, no
fue mi intención Lan Zhan…”
Dándose cuenta de todo el dolor y el sincero arrepentimiento de su omega, Lan Wangji
suspiro suavemente, acariciando sus mejillas con cariño: “Esta bien Wei Ying, te perdono”.
Sonriendo finalmente tranquilo, Wei Ying se relajó por completo, preguntando: “¿Ahora todo
volverá a la normalidad entre nosotros entonces?”
“No” Negó Lan Wangji, volviendo a ignorar al mayor para seguir con sus deberes.
Frustrándose de nuevo, Wei Ying ahora arrebato el pincel de los dedos del menor, exigiendo
una explicación: “¿Por qué no? ¡Ya me perdonaste! ¡No tienes razones para volver a estar
enojado!”
Mirando al mayor con una expresión seria, Lan Wangji explico: “Aun no has recibido un
castigo por tu mal comportamiento”.
“¿Castigo?” Pregunto Wei Ying de forma traviesa, pensando en las clases de castigos que le
gustaban a Lan Wangji: “¿Qué harás conmigo Hanguang-Jun? ¿Azotes? ¿O tal vez algo más
divertido?”
Desviando la mirada con vergüenza al ser descubierto, Lan Wangji sintió como sus orejas se
enrojecían, mientras Wei Wuxian se reía de forma escandalosa al haber descubierto las
malvadas intenciones del menor.
“Bien Hanguang-Jun, bien, lo entiendo” Dijo el omega rindiéndose: “Si para estar bien
quieres hacer alguna cosa con mi cuerpo, entonces te lo permitiré, puedes hacerme cualquier
cosa ahora”.
“¿Ahora?” Pregunto Lan Zhan sorprendido, recordando donde se encontraban ese instante.
“Claramente Lan Zhan” Respondió Wei Ying con seriedad: “No soporto estar peleado con mi
gege…”
Mirándolo nuevamente serio, Lan Zhan dijo: “No soy tu gege”.
“… Así que quiero volver a la normalidad contigo lo más rápido posible, y si para eso debo
entregarte mi trasero en la biblioteca… No dudes que lo haré”.
“Recuerda tus palabras” Advirtió Lan Wangji, poniéndose mucho más serio aun.
Pensando en decir alguna otra tontería, en medio de sus alocadas risas, Wei Wuxian fue
tomado por sorpresa, cuando Lan Wangji lo tumbó sobre su estómago en esa mesa baja
donde antes habían estado trabajando, sin importarle si derramaba la tinta o dañaba los
pergaminos escritos. Dejándose hacer con más risas, Wei Ying no le impidió a Lan Zhan el
ponerlo en la posición que el alfa quisiera, mientras sus muñecas eran atadas por la cinta
blanca de Lan Wangji y esta misma cinta era asegurada a la mesa atándola a una de las patas
de esta, dejando a Wei Wuxian inmovilizado con su estómago y todo su torso en la mesa,
mientras su piernas y sus caderas aún estaban libres en el otro borde de la mesa, pudiendo
estar arrodillado en el piso.
“Esto es nuevo Hanguang-Jun ¿Algo aprendido en una revista?” Pregunto Wei Ying con
interés, girándose por un instante a ver al menor.
Asintiendo mientras se ponía detrás de Wei Ying, Lan Zhan susurro: “Mmm”.
“Muy interesante…”
Dejando de reír para jadear, Wei Ying levanto las caderas por instinto, sintiendo como la
pelvis de Lan Wangji se había pegado a su trasero en esa expuesta posición, dejándole sentir
al omega su miembro contra sus nalgas. Sonrojándose y dejándose hacer, Wei Wuxian siguió
jadeando sintiendo aquel miembro rozarse contra él, mientras las manos de Lan Wangji
tocaban sus caderas y sus piernas con deseo.
“Lan Zhan… Vamos a continuar…” Pidió Wei Ying, perdiendo un poco la paciencia.
Disfrutando del desespero de su omega, Lan Wangji negó suavemente con la cabeza, sin
cambiar de posición. Apoyándose por completo en el cuerpo del mayor, el alfa paso sus
labios por el cuello y la nuca de su omega, dejando suaves besos en su sensible piel
comenzando a fingir embestidas contra el trasero del contrario. El cual comenzó a soltar
algunos gemidos en medio de sus pesados jadeos, comenzando excitarse y a desear el
miembro de Lan Wangji con más desesperación aun, soltando sus feromonas para intentar
tentarlo.
Aun yendo lento, pero decidiendo continuar con sus estimulaciones, Lan Wangji llevo sus
manos al cinturón de las túnicas de Wei Ying, soltándolo para poder abrir sus ropas y dejar su
torso expuesto ante la mesa, bajando sus manos a los pantalones del mayor para bajárselos
finalmente. Suspirando con un poco más de calma, Wei Ying se dejó hacer dócilmente,
sintiendo una humedad bajando entre sus nalgas por el deseo, queriendo a Lan Wangji con
ansias. Sin embargo el alfa aun no tenía apuro, y sentándose detrás de Wei Wuxian, abrió sus
nalgas mirando con atención su entrada húmeda por el deseo, pasando sus dedos entre las
nalgas de este jugando un poco con el mayor.
“Lan Zhan… Por favor…” Suplico Wei Ying sin poder aguantar más, ardiendo en deseo por
tener algo en su interior.
Dejándose llevar por el olor de las feromonas de su alfa, Wei Ying se sentía tan excitado que
hubiera aceptado que el menor introdujera su miembro en su interior sin prepararlo,
solamente queriendo sentirse bien y sin poder soportar mucho más. Sin embargo Lan Wangji
siguió pasando sus dedos por la húmeda entrada de Wei Ying, introduciendo solamente las
puntas de sus dedos y luego sacándolas, sabiendo que eso a Wei Wuxian lo desesperaba más
que nada.
“¡Lan Zhan!” Exigió el omega perdiendo la paciencia por completo, reclamando que su alfa
le diera placer.
Besando una de las nalgas del mayor, Lan Wangji le recordó: “Esto es un castigo, Wei Ying”.
“Lo se… Lo sé pero…” Gimoteo Wei Ying suplicante, girándose ligeramente para ver al
menor.
“Entonces discúlpate de nuevo y pensare en hacer algo más”.
Tragando su orgullo, dejándose llevar solo por el deseo, Wei Ying susurro: “Lo siento…”.
“¿Qué es lo que sientes?” Pregunto Lan Wangji, volviendo a introducir solamente las puntas
de sus dedos en el interior del contrario.
“Lamento haber roto tu confianza, lamento haber roto las reglas de tu secta… Por favor Lan
Zhan…”
“Continua” Exigió el menor, sin estar satisfecho.
“Perdóname por favor, perdona a este omega tan desobediente. Seré bueno, desde ahora en
adelante voy a obedecer a Lan Zhan, voy a ser bueno, me portare bien…” Continúo Wei
Ying, forcejeando ligeramente con la cinta blanca del menor que lo ataba.
“¿Lo harás de verdad?”
“Lo hare, hare todo por mi alfa, seré bueno, seré obediente. Por favor perdóname, te lo
suplico Lan Zhan, perdón…” Dijo Wei Ying completamente perdido, moviendo sus caderas
en dirección a los dedos del menor.
Sabiendo que ya había sido suficiente de verdad, y que Wei Ying estaba en su límite de
paciencia también, Lan Wangji decidió continuar. Y mientras el mayor aún seguía
disculpándose, introdujo uno de sus dedos en el interior de este de golpe, sorprendiendo al
contrario y sacando un dulce y fuerte grito de sus labios.
Jadeando y gimiendo por la sorpresa, Wei Ying se obligó a relajar su interior, abriendo un
poco más las piernas y subiendo las caderas, aceptando gustoso a su alfa. Metiendo solo uno
de sus dedos profundamente en el mayor, Lan Wangji volvió a apoyar su cuerpo entero en
Wei Ying, alcanzando su cuello para seguirlo besando, mientras su otra mano se colaba
debajo del cuerpo del omega para estimular sus pezones, tirando de ellos con un poco de
fuerza.
“Lan Zhan…” Suspiro Wei Ying excitado, jadeando y gimiendo ante las embestidas de aquel
único digito en su interior.
Obviamente un solo dedo no era lo suficientemente bueno para Wei Ying, pero el joven
omega no planeaba quejarse, esperando a que su alfa pronto metiera más de sus dedos y su
miembro en su interior, intentando mantenerse calmado en ese castigo.
Embistiéndolo con profundidad pero sin nada de fuerza, Lan Wangji se concentró en ir
sumamente lento, perdido en los dulces sonidos de su omega, mientras seguía pasando sus
labios y sus dientes por la piel del cuello de este, principalmente por su nuca; sintiendo
también como todo el cuerpo de Wei Ying temblaba cuando el menor pasaba sus dientes por
aquella sensible zona.
Ambos se mantuvieron así por varios minutos, hasta que se sorprendieron cuando escucharon
voces y risas en dirección a la biblioteca. Actuando rápidamente, Lan Wangji llevo su mano
libre a los labios de Wei Ying, callando sus gemidos y sonidos de placer; mientras que con su
otra mano, sin haber olvidado su castigo, introdujo un segundo dedo en el interior del mayor
de sorpresa, causando un grito ahogado por la parte de este.
Ambos se encontraban en un pabellón privado en la biblioteca, el cual se separaba del resto
de estanterías por unos delgados separadores con el escudo de la familia Lan, los cuales
apenas cubrían un poco la escena que ahí se daba y que les daba su privacidad. Así que
cuando jóvenes beta de la secta Lan entraron en la biblioteca riendo y charlando animados,
tanto Lan Wangji como Wei Wuxian miraron aterrados en dirección a los separadores,
temiendo ser descubiertos en semejante situación.
Sin embargo los jóvenes al ser betas no pudieron sentir las feromonas que invadían toda la
biblioteca, y sin notar nada extraño, charlando entre ellos, se acercaron a las estanterías
principales para tomar algunos libros, pasando incluso frente a los separadores que cubrían a
la pareja en la biblioteca, pero sin notar nada.
A pesar de saber todo el peligro que estaban viviendo, Wei Wuxian no pudo contenerse, y
sumamente excitado por sentir los dedos de su alfa tan profundamente en su interior,
tembloroso comenzó a mover las caderas por sí mismo embistiéndose con los dedos de su
alfa. Dándose cuenta de lo que hacía, sintiendo también como sus dedos eran estrechos por el
interior de su omega, Lan Wangji solamente pudo mirarlo, haciendo su agarre en los labios de
este más firme para evitar que cualquier sonido escapara de sus labios escandalosos.
Tras algunos minutos escogiendo libros, los jóvenes beta finalmente se retiraron a otro
pabellón privado en la misma biblioteca, muy cercano al que ocupaban Wei Ying y Lan Zhan,
pero solamente concentrados en hacer sus deberes. Mientras hablaban y reían entre ellos con
fuerza, aprovechando que creían que no había nadie para hacer un escándalo.
Dándose cuenta de que el peligro técnicamente había pasado, Lan Wangji soltó los labios de
Wei Ying y dejo de apoyarse en su cuerpo, volviendo sentarse detrás de él.
“Bien, paremos” Dijo Wei Ying con la voz muy baja, sintiéndose asustado.
Mirándolo con seriedad, Lan Wangji respondió: “¿Parar?”
Dándose cuenta de las intenciones de su alfa, Wei Wuxian volvió a forcejear, negándose de
inmediato: “No podemos Lan Zhan, no podemos. Vayamos a nuestra habitación ¿De
acuerdo? Sigamos ahí”.
Sonriendo divertido, Lan Wangji dijo: “No”.
Volviendo a callarse para soltar un gemido, Wei Ying sintió como la otra mano de su alfa
rodeaba su erección y comenzaba a atender su pene. Mientras que los dos dedos de Lan Zhan
volvieron a entrar profundamente en su interior, obligándolo a levantar las caderas, mientras
temblaba por el placer que no podía seguir conteniendo.
“Para, de verdad para” Pidió Wei Ying sin mucha convicción, deseando continuar en secreto:
“No poder contener mi voz si sigues haciendo eso, voy a gritar…”
Dándose cuenta de que aquello podía ser un problema de verdad, pensando en una solución,
Lan Wangji pronto miro la cinta roja del cabello de Wei Ying. Soltando su cuerpo y dándole
un alivio al omega, el alfa pronto tomo la cinta roja del cabello de este, desatándola y dejando
todo su cabello negro libre en su espalda. Sin entender nada, Wei Ying intento preguntar, pero
nada más al abrir la boca, sintió como aquel pedazo de tela roja se metió entre sus labios,
mientras Lan Wangji ataba esta cinta firmemente detrás de su cabeza, amordazándolo.
“No tienes que contener tus gemidos de esta forma” Explico el menor tomando a Wei Ying
de la barbilla para girarle el rostro, mirándolo a los ojos: “Ellos hacen mucho ruido, y tus
gemidos se confundirán con su bullicio”.
Mirando a su alfa asustado, Wei Ying intento negarse soltando algunos ruidos
incomprensibles de sus labios. Sin embargo Lan Wangji siguió sin detenerse, y beso los
labios de su omega aun sobre esa cinta, callando todos sus reclamos.
“Continuemos con el castigo, Wei Ying…” Susurro Lan Zhan contra sus labios, llevando
ambas de sus manos a las nalgas del contrario, presionándolas fuertemente y separándolas
ligeramente.
Dejándose hacer nuevamente invadido por el placer, Wei Ying obediente abrió las piernas y
volvió a relajarse. Regresando a su interior posición, Lan Wangji introdujo dos de sus dedos
profundamente en el omega, y tomándolo de las caderas, lo miro con una sonrisa.
“Mueve las caderas así como lo hiciste antes, muévete por tu cuenta” Ordeno Lan Wangji.
Recordando lo que había hecho en medio de su desesperación por el placer, Wei Wuxian se
sintió sumamente avergonzado, pero hizo lo que su alfa le pedía. Con tímidos y suaves
movimientos, comenzó a mover las caderas de adelante hacia atrás en un suave balance,
penetrándose por sí mismo con los dedos largos de su alfa, los cuales a mucha profundidad lo
hacían suspirar y gemir con fuerza, temblando y removiéndose con placer.
“Más rápido” Exigió Lan Zhan en un susurro, aun tomándolo de las caderas con su mano
libre, marcando un ritmo un poco más rápido en sus movimientos, comenzando a mover sus
dedos en forma de círculos dentro del omega para darle más placer a este.
Con la respiración sumamente agitada, Wei Ying mordió con fuerza la propia cinta de su
cabello en su boca, temblando y cooperando lo mejor que podía con Lan Wangji. Mientras
que el menor, aparentemente bastante concentrado, seguía moviendo sus dedos en círculos en
el interior del mayor, presionando sus lugares sensibles y dando ligeras embestidas. Nunca
antes había hecho ese tipo de cosas con Wei Ying, ese tipo de estimulación, solamente usando
sus dedos, así que parecía estar bastante interesado al respecto.
“Sigue moviendo las caderas” Ordeno Lan Zhan en un susurro, presionando con ligera fuerza
una de las nalgas del mayor entre su mano libre, dejando marcados sus dedos en aquella
blanca piel.
Creyendo que enloquecería por aquel extraño sentimiento en su interior, Wei Wuxian bajo la
cabeza con vergüenza, forzándose a seguir las órdenes de su alfa por más vergüenza que
sintiera al respecto. Empujando sus caderas en dirección al menor, Wei Ying podía controlar
mejor sus gemidos, pues era él quien controlaba las embestidas en su propio cuerpo. Pero
aquello no lo hacía menos placentero, sintiendo que debía complacer a su alfa, se esforzaba
en mantener un ritmo constante, presionando los largos dedos de Lan Zhan en su interior.
Sintiéndose curioso, rozando la próstata del mayor con la punta de sus dedos, Lan Wangji
introdujo un tercer dedo en el interior de su estrecho omega, y con curiosidad arqueo sus
dígitos en el interior de este, presionando aún más aquella zona específica. Sintiendo una
corriente eléctrica recorriendo su cuerpo entero, Wei Ying ahogo un grito de placer con
mucha dificultad, sintiendo como su punto más sensible era fuerte y placenteramente
presionado, un sentimiento que nunca antes había tenido. Entre espasmos de placer, el omega
intento alejarse de aquellos dedos moviendo las caderas, intentando seguir con las constantes
embestidas, siendo detenido por Lan Wangji.
Lan Zhan, bastante curioso respecto al cuerpo de su omega, lo tomo de las caderas con su
otra mano y lo empotro contra la mesa con su propio cuerpo para evitar que se moviera e
intentara huir de él. Mientras que muy concentrado, presionaba una y otra vez sus dedos
contra aquel punto sensible, frotándolos contra aquella zona específica, sin darle un descanso
a Wei Ying. El omega que ya no pudo aguantar más, comenzó a gimotear en voz baja contra
la cinta roja de sus labios, temblando e intentando removerse con el cuerpo de su alfa encima
de sí mismo, sucumbiendo por completo ante aquella estimulación.
Intentando complacer más a su omega, Lan Wangji volvió a llevar su mano libre debajo del
torso apoyado y casi desnudo de Wei Ying en la mesa, alcanzando sus pezones para seguirlos
presionando entre sus dedos, mientras no paraba ni un solo segundo de estimular y presionar
su punto sensible en su interior. Jadeando y gimiendo en voz baja por la mordaza, Wei Ying
sacudió su cuerpo entero, e intentando apartar a Lan Zhan con más ahínco, tuvo la sensación
más extraña de toda su vida, comenzando a gemir más fuerte mientras sentía como una
sustancia liquida se escurría de su miembro.
Escuchando el sonido de las gotas liquidas cayendo en el suelo de la biblioteca, Lan Wangji
se apartó de su omega ligeramente para ver que estaba sucediendo, pensando que Wei Ying
se había venido finalmente. Sin embargo grande fue su sorpresa cuando vio que en realidad
gotas transparentes de un aroma cargado a las feromonas de Wei Ying habían caído el pene
del omega en el piso debajo de la mesa de la biblioteca, algo que confundió mucho al alfa,
pues ni él mismo ni Wei Ying habían solado algo así jamás.
Sonrojándose mucho pensando que se había orinado, Wei Wuxian negó fuertemente con la
cabeza intentando seguir apartando a Lan Zhan, forcejeando con mucha fuerza contra la cinta
blanca del menor que lo seguía manteniendo atado a esa mesa. Sin embargo Lan Wangji no
planeaba dejarlo ir todavía y terminar con el castigo, y aun empotrándolo contra la mesa,
volvió a hacer sus movimientos contra el punto sensible del mayor con sus dedos. Y con
mucho cuidado, bajo su mano libre al miembro de Wei Ying, comenzando a masajear
solamente la punta de su pene entre sus dedos, estimulando fuertemente esa parte.
Notando como más liquido salía de su interior mientras el placer lo recorría por completo,
Wei Ying no pudo aguantar más y soltó un grito el cual fue ahogado por la cinta en sus
labios, mientras Lan Zhan besaba su cuello intentando tranquilizarlo. Sin embargo las
estimulaciones eran demasiadas, y mientras completamente confuso seguía soltando chorros
de aquel liquido cristalino sucumbiendo por completo ante las atenciones de Lan Wangji, el
omega no tardo mucho más en venirse finalmente.
Estrechando su interior con fuerza alrededor de los dedos de su alfa y haciendo un desastre en
el piso de la biblioteca, Wei Ying solamente pudo jadear agotado, derrumbándose contra la
mesa, mientras los movimientos de su alfa se habían detenido y comenzaba a soltar su
cuerpo. Sin embargo Lan Wangji aún no había sido satisfecho, y quitándose los pantalones de
su túnica y dejando su miembro al aire, el alfa regreso con el omega, frotando su dura
erección entre las nalgas de Wei Ying.
“El castigo aún no ha terminado” Dijo Lan Wangji en un susurro demandante, obligando a
Wei Ying a mantenerse despierto.
El agitado omega solo pudo ver fijamente aquel separador en la biblioteca, escuchando a lo
lejos risas y las conversaciones de los demás discípulos que estaban en la misma sala, los
cuales a pesar del ruido y metidos en sus propios asuntos, parecían no haber notado nada.
Besando la espalda de su omega y acariciándole las caderas sin importarle nada, Lan Wangji
solamente introdujo la mitad de su miembro con facilidad en el interior de Wei Ying, el cual
ya había sido preparado por sus tres dedos en la anterior ronda. Volviendo en sí mismo
soltando nuevos gemidos de placer al sentir aquella intromisión, Wei Ying reacciono como de
costumbre, levantando las caderas y relajándose para su alfa, el cual lo llenaba por completo
con el tamaño de su miembro.
Volviendo a entretenerse algunos segundos masajeando las redondas nalgas de su omega, Lan
Wangji pronto le ordeno a su pareja: “Mueve las caderas, así como hiciste con mis dedos,
toma todo en tu interior y comienza a moverte”.
Jadeando por el placer de sentir a su alfa, Wei Ying hizo un esfuerzo a pesar de su
agotamiento, levantando aún más las caderas y comenzando a introducir el gran miembro de
Lan Wangji por completo en su interior. El tamaño de su alfa siempre le parecía excesivo, así
que volviendo a soltar un grito ahogado, el omega finalmente pudo introducir a Lan Wangji
por completo en su interior, sintiendo como su propio miembro comenzaba a reaccionar.
Suspirando con placer y sujetándose de las caderas de su omega, Lan Wangji volvió a
ordenar: “Muévete”.
Temblando por el placer, Wei Ying comenzó a mover sus caderas, siendo ayudado por Lan
Wangji, el cual siguiendo el ritmo de los movimientos del mayor, solo se encargaba de hacer
las embestidas realmente fuertes tirando de las caderas de Wei Ying en su dirección,
ocasionando un agradable ruido cuando sus dos cuerpos chocaban.
Volviendo a negar con la cabeza, Wei Ying intento pedir que fuera más despacio, que sería
demasiado ruidoso si lo hacía tan fuerte. Sin embargo la cinta en su boca impedía que
cualquier sonido saliera de sus labios, obligándolo a aceptar cualquier cosa que Lan Wangji
quisiera, teniendo que mover sus caderas fuertemente contra el miembro de este, sintiendo
como todo su interior era fuertemente estimulado por ese gran miembro.
Tensando su cuerpo, el omega jadeando y gimiendo de forma ahogada acepto que Lan
Wangji hiciera lo que quisiera con su sensible cuerpo, mientras las manos del menor volvían
a recorrer su cuerpo, estimulando sus pezones y su miembro con suaves toques, iniciando
nuevamente una larga ronda de placer para ambos amantes.
Capítulo 8.

6 MESES DESPUES
Jadeando, Jiang Cheng desvió ligeramente el rostro, cerrando los ojos y estremeciéndose con
placer. Todavía sentía a Lan Xichen sobre su cuerpo, gimiendo con cierta timidez cuando lo
sentía rozarse contra su cuerpo, algo que había comenzado a gustarle mucho. Con mucha
vergüenza, Jiang Wanyin comenzaba a dejarse hacer, tomando su papel como omega con Lan
Huan en la cama.
Ambos aun respetaban las leyes de la tradición, sin ir demasiado lejos. Pero habían pasado
meses enteros durmiendo abrazados en la cama, viviendo sus días al lado del otro, y de forma
paulatina, ambos terminaron volviéndose muy cercanos, aceptando y disfrutando nuevas
formas de afecto. Así que suspirando y buscando los labios de Lan Huan por su cuenta, Jiang
Cheng dejo dócilmente que su alfa sujetara sus dos muñecas sobre su cabeza
inmovilizándolo, mientras la otra mano de Lan Xichen se coló por las caderas de su omega
hasta sus nalgas, presionando una de estas sobre sus túnicas interiores.
“A-Huan…” Susurro Jiang Cheng sorprendido, rompiendo el beso.
Aparentemente absorto en sus manos, Lan Xichen volvió a callar al menor uniendo sus labios
con este en otro apasionado beso, el cual mareo a Jiang Cheng, perdiéndose en el grandioso
sentimiento que tenía y en el delicioso olor de las feromonas de su alfa.
Lan Xichen siguió besando profundamente a Jiang Cheng, pasando su lengua por los labios
de este con deseo. Mientras seguía masajeando las suaves nalgas del menor entre sus manos,
obligando a Jiang Wanyin a tener las caderas levantadas y las piernas abiertas para él,
quedando completamente pegados.
Pensando que realmente llegarían más lejos esa vez, algo que no le molestaría en lo absoluto
por lo excitado que comenzaba a sentirse, Jiang Cheng abandono su concentración en el
momento cuando escucho a su pequeño hijo, separándose ligeramente de Lan Xichen. Su
pequeño bebé, un alfa muy celoso, estaba sentado en la pequeña cuna que Lan Xichen había
insistido en comprarle, mirando a sus dos padres con el ceño fruncido, nada contento por
verlos en un momento romántico.
Rompiendo el beso y mirando los azules ojos de su alfa, Jiang Cheng susurro: “A-Yi tiene
hambre…”
Sabiendo que debían parar aunque Lan Xichen realmente no quería hacerlo, a pesar de estar
escuchando a su cachorro, el alfa presiono fuertemente la mandíbula y las muñecas del menor
entre sus dedos, luciendo realmente inconforme e incluso adolorido.
“¿A-Huan?” Pregunto Jiang Cheng preocupado, sin quejarse por el trato que recibía.
Controlando a su alfa a duras penas, Lan Huan tuvo que respirar profundo un par de veces
escondiendo su rostro en el cuello del menor, antes de soltarlo y apartarse de él, sonriendo
suavemente y mirando a Jiang Cheng aun en la cama.
“¿Estas bien?” Pregunto Jiang Cheng realmente preocupado.
Sin abandonar su sonrisa tranquila, consiguiendo controlarse mejor, Lan Xichen respondió:
“Está todo bien, no debes preocuparte”.
Aun sin estar muy seguro, entendiendo lo difícil que era para su alfa toda esa situación, Jiang
Cheng se sentó en la cama y le dio un tierno beso a su alfa en una mejilla, para luego ponerse
de pie de la cama, caminando apresurado hacia la cuna de su cachorro. Lan Jingyi, el cual se
calmó al estar en los brazos de Jiang Cheng, miro a Lan Xichen desde su posición
aparentando mucha felicidad, burlándose ligeramente de su padre. Pero esto a Lan Huan le
causo gracia, y riéndose de la situación, también se puso de pie de la cama, decidiendo
ayudar a Jiang Wanyin encendiendo la estufa de su habitación para calentar la leche del bebé.
“Ya que tenemos el día libre… ¿Has pensado en que harás?” Pregunto Lan Xichen,
encargándose de todo mientras Jiang Cheng solo sostenía y calmaba a Lan Jingyi.
Por una reunión de emergencia, Lan Qiren había abandonado Gusu desde el inicio de esa
semana hasta el inicio de la próxima, así que por esos días fuera las clases se habían
suspendido y todos los invitados a El Receso Entre Las Nubes disponían de su tiempo como
querían.
Suspirando un poco, volviendo a sentirse estresado, Jiang Wanyin respondió: “En la mañana
pensaba ir con Wei Wuxian y A-Yi a visitar la sala de los ancestros de la secta, ya sabes, para
ver a la madre de A-Yi”.
Sin querer desmerecer a la madre del pequeño, Jiang Wanyin llevaba constantemente a su
hijo a verla al salón ancestral de la secta Lan, donde prendía un par de inciensos para ella y
para todos los de la familia Lan, mostrándole a su hijo y contándole a ella como lo había
estado cuidando. Jiang Cheng no planeaba esconderle la verdad Jingyi jamás, diciéndole la
verdad acerca de sus padres biológicos, e intentando mantenerlo lo más cerca que podía de su
verdadera madre.
“… Y luego de eso… Supongo que debo volver a planear cosas de la boda” Respondió Jiang
Cheng sin estar muy feliz.
Mirando a su omega con cierta lastima, Lan Huan quiso ayudar, pero sabía que no podía
hacerlo; pues a pesar de que Jiang Cheng estaba cargando con un peso enorme al tener que
planear la boda solo, solo las mujeres y omegas podían encargarse de planear las bodas, así
que por más que quería, Lan Xichen no tenía un lugar ayudándolo por las tradiciones.
Aun así muchos en la propia secta Lan le habían sugerido a Jiang Cheng que llamara a su
padre Jiang Fengmian o a su hermana Jiang Yanli para que lo ayudaran con los preparativos,
algo que era bastante común al tratarse de la familia de la novia. Pero Jiang Wanyin siempre
negaba estas sugerencias, poniendo de excusa que estaba apañándoselas bien con Wei
Wuxian y que no necesitaba a nadie más de la familia Jiang; aunque esto no era tan cierto.
Y a pesar de que esto era indudablemente extraño para todos los miembros de la secta Lan,
Jiang Wanyin tenía sus razones para querer a los miembros de su familia lejos.
Y aun así Madam Yu y Jiang Fengmian no sospechaban nada extraño al respecto, sabiendo lo
independiente que era Jiang Cheng, pensando que este realmente quería encargarse de todo
solo. Únicamente tomándose como encargo preparar los trajes ceremoniales rojos que Jiang
Cheng usaría en la boda, los cuales llevarían consigo cuando viajaran de Yunmeng a Gusu.
“Entiendo… ¿Realmente falta demasiado?”
Intentando restarle importancia al asunto, Jiang Cheng respondió: “Un poco aquí, un poco
allá. No demasiado en realidad”.
Asintiendo con un poco de desconfianza, Lan Xichen le dijo: “Quedan 4 semanas para la
boda ¿Realmente debes hacerlo hoy?”
“No tengo idea” Respondió Jiang Cheng con sinceridad: “Todas las personas de la secta Lan
que están ayudándome ahora están muy aceleradas, pidiéndome opiniones y que me encargue
de muchas cosas, pero en realidad no sé si estamos demasiado pronto o tarde para las
planeaciones”.
Pensando un poco, notando nuevamente el gran estrés del menor, Lan Xichen pregunto: “¿Y
no hay algún tipo de planeamiento que debas hacer fuera de El Receso Entre Las Nubes?”
“¿Eh? ¿Por qué preguntas eso?”
“Escuche que algunas de las personas de la secta Jin y de la secta Nie irán a un paseo por
Caiyi Town aprovechando la época de verano y que hoy es un día de feria” Explico Lan
Xichen con una sonrisa: “Pensaba que nosotros también podríamos salir un rato, no hemos
visitado Caiyi Town desde hace más de un año cuando fuimos en tu vista de invierno”.
Pensando en ello, ligeramente contrariado, Jiang Cheng respondió: “No lo sé… Me gusta
Caiyi Town ¿Pero y A-Yi? ¿Vamos a ir con él?”
“Podemos dejarlo con las omegas de la secta, no lo dejaste con ellas desde el inicio de la
semana cuando comenzó el receso, deben extrañarlo” Sugirió Lan Huan.
Pensando en ello con más seriedad, sonriendo ligeramente, Jiang Cheng finalmente acepto y
respondió contento: “Todavía me falta decidir que licor servir en la fiesta, podemos ir a
buscar eso a Caiyi y tener una linda mañana todos juntos. Además Wuxian aún no ha ido, y
seguro le gustara ir por ahí a dormir en las balsas y comer dulces de azúcar rojo o algunos
nísperos. Sera divertido”.
Sonriendo contento de igual manera, Lan Xichen termino de calentar la leche de su hijo y se
la entregó a su omega, sonriéndole: “Sera divertido”.
“Lo será…” Dijo Jiang Cheng relajándose, besando cariñosamente los labios de Lan Xichen
con un toque cariñoso.
***
“¿Sabes que rumor escuche sobre esta ciudad?”
Tomando a Wei Ying firmemente de las caderas, Lan Wangji continuo caminando a su lado,
observando a su omega manteniendo el equilibrio y caminando firmemente por una de las
barandas de uno de los puentes de Caiyi Town.
“¿Un rumor?” Pregunto Lan Wangji curioso.
Asintiendo contento, aun comiendo esos azucarados dulces rojos, Wei Wuxian respondió:
“¿Sabías que Wen Ruohan una vez estuvo enamorado de tu tío? Eran prometidos, y todos
hablaban de lo mucho que se querían, que eran algo así como una pareja perfecta”.
“Mmm” Respondió Lan Zhan con sinceridad.
“El tío Fengmian nos contó esto a Jiang Cheng y a mi antes de venir a Gusu, cuando
hablábamos de las bodas, los compromisos y eso” Dijo Wei Ying riendo un poco: “Mi tío y
Wen Ruohan eran amigos en la adolescencia ¿Lo sabias? Parece que también se llevaba bien
con mi padre, e increíblemente también se llevaba bien con Madam Yu”.
“Mmm”.
Ya era casi media mañana en Caiyi Town. Así como lo habían planeado hace un par de horas,
muchas personas descendieron desde El Receso Entre Las Nubes hasta ese puerto llamado
Caiyi Town, donde navegando en las barcas o comiendo la buena comida, se distraían. Nie
Huaisang había ido con miembros de su secta para hacer algunas compras regulares, como
tinta o papel. Mientras que Su She había invitado a Qin Su a ir con él, y ahora ambos
paseaban a solas en una de las barcas que rentaron en el lugar. Mientras que Jiang Cheng y
Lan Xichen paseaban juntos por diferentes locales de bebida y comida en el sitio, buscando
cosas específicas para su boda. Y al no tener ninguna responsabilidad o algo semejante, Wei
Wuxian y Lan Wangji fueron a pasear y jugar por ahí; decidiendo darles su espacio a la
próxima pareja de esposos en la búsqueda de las cosas para su boda, con la promesa de
reencontrarse para almorzar los 4 juntos en un buen local de pescado que Lan Xichen
recomendó.
“Algunos omegas en tu secta nos contaron que la primera cita oficial entre tu tío y Wen
Ruohan fue en este sitio, en Caiyi Town. Aparentemente vinieron por la noche, en un festival
de cometas que se hace aquí. Todos hablan de Wen Ruohan como si fuera un romántico
demente, siempre dicen que amaba a tu tío con locura, haciendo hasta las cosas más ridículas
por conseguir su felicidad”.
Asintiendo a sus palabras, conociendo mejor que Wei Ying esa descripción, Lan Wangji
respondió: “Mmm”.
Continuando, saltando un poco en la baranda, Wei Wuxian dijo: “En ese festival las personas
debían subirse a balsas para volar cometas en el lago, pero Wen Ruohan solo pudo conseguir
un lugar, que le dio al tío Qiren. El tío Qiren no quería ir solo, así que Wen Ruohan se tiró al
mar para nadar a su lado en las frías aguas haciéndole compañía mientras tu tío volaba las dos
cometas en el barco” Siguió contando Wei Ying riéndose un poco: “Cuando la celebración
termino, tu tío se quitó las túnicas exteriores blancas de los Lan y la uso para secar a Wen
Ruohan, algo que todos en tu secta tomaron como un acto sumamente romántico… ¿Es
romántico Lan Zhan?”
“Mmm” Respondió Lan Zhan asintiendo.
“¿Por qué lo es? No lo entiendo…”
“Mi tío perdió parte de su elegancia al quitarse sus túnicas para él” Explico Lan Wangji:
“Como esa historia, hay cientos mas de ambos, durante su tiempo fueron la pareja preferida
de todas las sectas”.
“Oh… ¿En su época lo fueron? ¿Quién es la pareja preferida ahora? ¿Somos nosotros?”
Pregunto Wei Ying emocionado.
Pensando en la mala fama que tenía su relación por los tropiezos pasados, Lan Wangji
respondió: “Probablemente son mi hermano y Jiang Wanyin”.
“Oh…” Se quejó Wei Ying algo deprimido: “Nosotros deberíamos ser los favoritos”.
Terminando el camino del puente, Wei Wuxian se giró y con un salto bajo a los brazos de Lan
Wangji, el cual con suavidad lo sostuvo firmemente sobre su pecho, caminando con su omega
en brazos a pesar de las miradas y los comentarios de los demás; los cuales ya sabían quiénes
eran, y los tomaban como una desvergonzada pareja de novios.
“Tú eres mi favorito” Dijo Lan Wangji intentando animarlo.
“¿Lo soy?” Pregunto Wei Ying riendo: “Me molestaría de no serlo… Soy tu esposo, claro
que debo ser tu favorito”.
“Wei Ying siempre será mi favorito” Respondió Lan Zhan convencido: “Te amo”.
Sonriendo y riendo más, Wei Wuxian abrazo a su alfa y le dio un cariñoso beso en los labios,
disfrutando de todo su cariño. Besándose de esa forma por algunos segundos más, Wei
Wuxian finalmente bajó de los brazos de su alfa, caminando a su lado muy feliz. Ya era
medio día, así que caminando entre las tiendas, ambos jóvenes comenzaron a buscar a sus
hermanos para ir a comer así como habían prometido.
“Oye Lan Zhan… ¿Y tú alguna vez viste alguna de esas tantas escenas de amor entre tu tío y
Wen Ruohan vivieron?” Pregunto Wei Ying curioso.
Con sinceridad, Lan Wangji negó con la cabeza: “No. Ellos se separaron varios años antes de
que yo naciera”.
“¿Entonces nunca viste como trata Wen Ruohan a tu tío?”
Pensando un segundo en aquellas palabras, Lan Wangji finalmente respondió: “Si lo vi”.
“¿Y cómo se llevan?” Pregunto Wei Ying curioso.
“Cuando Wen Ruohan decidió casarse con su esposa, con la que ya había tenido varios hijos,
yo tenía 5 años. No invito a nadie de Gusu u otras sectas, pero… Le envió una carta a mi tío”
Dijo Lan Wangji con seriedad: “Lo recuerdo bien porque ese día fue el primero que pude
pasar entero con mi madre en el Jingshi, miembros de la secta Lan nos dejaron a su cuidado,
porque mi tío no podía dejar de llorar. Yo estaba preocupado, y le pregunte a mi madre
porque mi tío no podía cuidarnos ese día a mi hermano y a mí, y ella me respondió que era
porque mi Shufu estaba enamorado, y que le dolía mucho”.
Quedándose en silencio con aquellas palabras, Wei Wuxian se dio cuenta de que
probablemente Lan Wangji no se daba la suficiente cuenta acera de la importancia de todo lo
que estaba contándole. Lan Qiren fue un omega dejado por su alfa, con Wen Ruohan soltero,
tal vez siempre hubo una esperanza de que fuera a buscarlo a Gusu para quedarse con él. Pero
con esa carta de despedida, Lan Qiren debió darse cuenta de la realidad, y probablemente
dejo de soñar desde entonces.
Wei Wuxian conocía ese sentimiento, fue el mismo que sintió cuando se enteró que Lan
Wangji iba a casarse con otro omega… El sentimiento de desolación y completo dolor, de
haber perdido el amor de tu vida.
“… Luego de eso se vieron un par de veces también” Siguió explicando Lan Wangji: “En
conferencias, reuniones importantes en Gusu”.
“¿Y cómo se trataban?” Pregunto Wei Wuxian curioso.
“Con cariño” Respondió Lan Zhan.
Perdiéndose un segundo en sus recuerdos, Lan Wangji pensó en las muchas veces en las
cuales su tío se había visto con ese hombre Wen, pocas pero todas significativas. Wen
Ruohan no era un hombre amable, no tenía halagos y buenas palabras para decirte, era directo
y siempre parecía furioso. Pero cuando veía a su tío, dulcemente le decía cosas en susurros, le
manda libros cada cumpleaños, y cuando se veían ambos siempre iban a tener una charla a
solas en un estanque apartado de Gusu. Lan Wangji nunca vio a Wen Ruohan tratar a una
persona con respeto, a nadie más que no fuera su tío, al cual le acariciaba las mejillas y le
besaba el dorso de la mano.
Y aunque ese sentimiento parecía mantener tranquilo a su tío, el cual no le negaba nada a ese
hombre. Cuando él abandonaba Gusu, Lan Qiren volvía a encerrarse en sus aposentos a llorar
desconsolado por varias horas. Y sin su madre a su lado, Lan Wangji solo podía quedarse
fuera, escuchando a su tío llorar, sin poder hacer nada para ayudarlo.
“Wen Ruohan parece un tipo gracioso… Cuando escuchas tantas cosas de él, piensas que
puedes llevarte bien a su lado. Tal vez podría volverme su amigo” Sugirió Wei Ying, riendo
un poco: “¿Te imaginas como seria si realmente fuera tu tío? ¿Cómo lo llamarías?”
“Shufu” Respondió Lan Zhan sin vacilar.
“¿Nada más cariñoso? Que malo Hanguang-Jun. Escuché que los alfas son bastante celosos
con los omegas que los crían, como su madre o sus tías ¿Tú también eres celoso de Lan
Qiren? ¿Por eso serias malo con Wen Ruohan?”
Luciendo escéptico, Lan Wangji respondió: “No soy celoso”.
Al escucharlo, Wei Wuxian no pudo evitar en estallar a carcajadas, sorprendiendo a Lan
Wangji y a todos los que pasaban a su lado, los cuales no podían evitar fijarse en el extraño
omega de la risa escandalosa.
Pero Wei Wuxian aun así no podía parar de reír, recordando bastante bien en su cabeza
cuando su pequeño alfa se enfadaba lo tomaba de brazo, marcándolo con sus feromonas, y
hasta incluso llegando al punto de casi morderlo y vincularse con él solo por los celos.
Recordando aquello, por un solo instante, Wei Wuxian extraño seriamente a su pequeño alfa,
ese que no llegaba más arriba de sus hombros, y al cual tenía que besar agachándose un poco.
Así que mirando a Lan Wangji a su lado, jugando un poco, Wei Wuxian se puso de puntitas,
intentando pasarlo en altura.
Dándose cuenta de lo que su omega hacía, pero sin entenderlo, Lan Wangji pregunto: “¿Qué
haces?”
“¿Lo recuerdas Lan Zhan? ¿Lo recuerdas?” Pregunto Wei Ying divertido: “¿Cómo era verme
desde arriba?”
“Desvergonzado” Le reclamo Lan Zhan, volviendo a mirar al frente.
Frunciendo el ceño al darse cuenta de que ahora Lan Wangji era realmente alto, como
cualquier alfa, y que no podía pasarlo en altura ni siquiera al ponerse completamente de
puntas, Wei Wuxian se quejó diciendo: “¡No es justo! ¡No es justo ser omega! Yo soy mayor
que tú, pero ahora debo ser el que mira desde abajo ¡No es justo! ¡Niño malcriado! ¡Deja de
crecer!”.
“Yo no lo decido” Respondió Lan Wangji.
Frunciendo el ceño y cruzándose de brazos, Wei Wuxian se quejó: “¡Es injusto! ¡Quiero
seguir siendo más alto que tú!”
Pensando en las palabras y peticiones de su omega con mucha seriedad, Lan Wangji
finalmente termino girándose un poco para tomar a Wei Wuxian de las caderas y levantarlo
nuevamente en sus brazos sorprendiendo al mayor. Levantándolo un poco más de lo usual en
sus brazos, Lan Wangji se encargó que Wei Ying fuera más alto, observando como su omega
reía feliz, mirando a su alfa nuevamente desde abajo.
“Esto es increíble… Yo de nuevo… Vuelvo a verte como cuando nos conocimos” Susurro
Wei Ying entre risas, feliz de volver a ver a Lan Zhan desde arriba.
“Te amo Wei Ying” Susurro Lan Zhan igualmente contento.
Riendo feliz, Wei Wuxian tuvo que agacharse de nuevo para besar los labios de su alfa
realmente contento, disfrutando de todo su cariño, y realmente feliz de poder besarlo y
abrazarlo de esa forma.
“¿Qué están haciendo?” Pregunto Jiang Cheng, sorprendiendo a la pareja.
Girándose sorprendidos en dirección a uno de los locales cercanos, Wei Wuxian y Lan
Wangji observaron a Jiang Wanyin, el cual bebiendo un poco de licor, estaba mirándolos
desde la puerta del local con una expresión extrañada.
“¿Qué estás haciendo tú?” Pregunto Wei Ying confuso, bajando de los brazos de Lan Zhan
para ir en dirección a su hermano.
Aun bebiendo ese licor en un vaso de cerámica, Jiang Cheng respondió: “Encontramos el
licor para nuestra boda, y Lan Huan está haciendo el contrato para pedir varios jarros”.
Sintiendo el fuerte y delicioso aroma de un licor en el vaso de Jiang Cheng, Wei Wuxian no
pudo evitar acercarse a su hermano con mucho apetito, queriendo beber lo mismo que él.
Pero Jiang Cheng divertido le dio la espalda, bebiéndoselo todo de un solo golpe.
“¡Que malo eres A-Cheng! ¡Eso olía delicioso!” Se quejó Wei Ying molesto, siguiendo a su
hermano de cerca: “¿Qué clase de licor era?”
“Sonrisa del emperador…” Respondió Jiang Cheng pasando el vaso cerca de Wei Ying con
burla: “El licor más delicioso de todo Gusu”.
Capítulo 9.

Aplaudiendo con ganas, Wei Wuxian sonrió al ver como los artistas hacían reverencias al
público, preparándose para su siguiente acto. A su lado, Jiang Wanyin sonrió con un poco
más de recato, mirando de reojo a unos pasos de distancia, donde su alfa y el alfa de su
hermano hablaban entre ellos mientras los dejaban ver a esos acróbatas tan comunes en Gusu.
Mirando todo sorprendido, al ser la primera vez que presenciaba aquel espectáculo, Wei
Wuxian se notaba felizmente emocionado, comentando: “Son grandiosos… Los acróbatas de
Gusu son tan divertidos, mucho mejores que aquellos que vienen a Yunmeng”.
“En algunos aspectos lo son” Afirmo Jiang Cheng, el cual ya había visto aquel acto con
anterioridad de artistas similares, así que no se notaba tan emocionado como su hermano al
verlos: “Pero los de Yunmeng son mucho más carismáticos y graciosos”.
La gran diferencia que había entre los espectáculos callejeros existentes en su hogar y en el
hogar de su prometido, era que los artistas callejeros no eran tan carismáticos, no hacían
bromas o hablaban de una forma tan divertida con el público; como sucedía en Yunmeng. En
Gusu los artistas callejeros eran más sobrios y serenos, encargándose de hacer su acto y luego
agradeciendo al público, balanceándose en altos cables o haciendo teatro cantado como una
ópera.
Se podía ver el atardecer en el cielo de Caiyi town, el día terminaba, y después de haber
conseguido lo necesario para la boda y haber paseado la tarde de forma agradable todos
juntos, pronto deberían regresar a El Receso Entre Las Nubes para evitar problemas.
“Aun así es muy bonito, muy interesante” Dijo Wei Ying relajado, viendo aquel espectáculo
realmente contento.
Asintiendo con calma, Jiang Cheng respondió: “Lo es, además de que tú debes estarlo
disfrutando casi el doble de como yo lo hago. A penas acabas de terminar tu castigo”.
Suspirando con cierta satisfacción, Wei Wuxian le dio toda la razón que pudo a su hermano,
después de todo finalmente terminó de hacer las 50 copias de todas las reglas de clan Gusu
Lan.
“¿Fue tan malo después de todo?” Pregunto Jiang Cheng curioso: “Escuche que tú y Lan
Wangji estuvieron mucho tiempo en las bibliotecas de la secta”.
Sonriendo con cierta diversión, pensando en lo que habían hecho durante todo ese tiempo,
Wei Wuxian solo pudo razonar que fue un omega bastante bueno, pues pudo cumplir
exitosamente todos los castigos que le habían dado en esos meses; a pesar de que algunos de
ellos no se sintieron tan desagradables como debería sentirse un castigo.
“Tardamos un poco más de lo esperado, pero no fue realmente desagradable” Explico Wei
Ying encogiéndose de hombros: “Aunque es realmente molesto que no haya podido
entregarle toda las hojas de las transcripciones del castigo al maestro Lan Qiren, se fue de
viaje antes de que pudiera hacerlo”.
Suspirando con cierta resignación, mientras observaba como los artistas se preparaban para
hacer su último acto, Jiang Cheng comento: “El dichoso viaje a Qishan”.
“¿Qishan?” Pregunto Wei Ying sorprendido: “Creí que el maestro Lan Qiren fue a una visita
diplomática a Lanling, por una reunión”.
Wei Wuxian sabía lo complicada que era la situación de un omega sin estar casado y sin un
alfa por la tradición, ya que esto impedía a cualquier omega de abandonar su hogar o su secta
sin importar el motivo, teniendo pequeños y reducidos permisos cuando es algo de extrema
urgencia, algo que debe ser aprobado por todos los líderes de las sectas en un consenso antes
de permitírsele la salida. En el pasado, antes de que volviera a tener un compromiso con su
alfa, Wei Wuxian intento de forma incansable obtener uno de esos permisos para ir a Lanling
cuando tuvo lugar la boda de su hermana; pero sin importar cuando tratara o todas las veces
que intento obtener dicho permiso, no todos los líderes de las sectas estuvieron de acuerdo,
catalogándolo algo sin el suficiente peso como para dejarlo salir de Lotus Pier. Así que Wei
Ying tuvo que quedarse en casa sin poder ver a su adorada Shijie contraer nupcias.
Lan Qiren por su parte salía de su secta mucho más que otros omegas, pero por la razón
pertinente de ser el líder suplente de la secta Gusu Lan. A los ojos de los demás cultivadores,
era Lan Qiren quien se encargaba de liderar la secta Lan y no su hermano, pues QingHeng-
Jun había pasado tanto tiempo en reclusión y fuera de los asuntos de las demás sectas que ya
nadie lo veía como una autoridad, todos lo llamaban un mal líder. Así que siendo Lan Qiren
el líder de la secta Lan a los ojos de todos los demás, tenía los exclusivos permisos de poder
salir de la secta Lan para asuntos diplomáticos como reuniones de cultivadores o tareas de
mandatarios.
Así que con tal precedente Wei Wuxian supuso que el maestro Lan Qiren había ido a Lanling
para tener algunas reuniones con otros líderes, algo que no era demasiado inusual en las cosas
que el omega hacía de forma frecuente. Por lo que enterarse de que en realidad había ido a
Qishan fue una sorpresa.
“Oh… Si” Dijo Jiang Cheng intentando evitar el asunto, recordando que cuando Lan Xichen
le confió ese secreto le pidió que no se lo dijera a nadie: “Fue a Qishan”.
“¿Para que fue ahí? Queda tan lejos… Mucho más lejos que Gusu incluso” Le recordó Wei
Ying.
Encogiéndose de hombros con cierto desinterés, sin tener mucha más información para su
hermano pues lo demás si era un absoluto secreto incluso para él, Jiang Cheng respondió:
“Fue a darle una corta visita a Wen Ruohan a un lugar llamado Yiling. Supuestamente es
cercano a Yunmeng, pero dudo que sea una reunión formal o algo así, porque papá no ira
según Xichen”.
“¿Y para que fue ahí? Y aún más ¿Por qué fue a una visita a solas con el líder de la secta
Wen? ¿También le dieron permiso para actividades sociales? ¿Por qué a mí no?” Pregunto
Wei Ying frunciendo el ceño con cierto enfado.
“Creo que salió sin permiso, por eso es un secreto”.
Ladeando la cabeza curioso, Wei Wuxian pregunto: “¿Entonces no puedo decírselo a nadie,
A-Cheng?”
“No puedes, te partiré las piernas si lo haces” Lo amenazó Jiang Wanyin.
“Entiendo, entiendo. No se lo diré a nadie” Dijo Wei Ying riendo un poco, intentando pasar el
asunto.
Aunque realmente se sentía curioso al respecto de saber por qué Lan Qiren había ido a
Qishan o al territorio de los Wen, supuso que no sería algo importante, así que prefirió pensar
que era algo romántico en vez de algo peligroso. Volviendo a apoyarse en el barandal de
aquel muelle, observo con una sonrisa como el espectáculo continuaba, y como los acróbatas
terminaban toda la presentación en unos pocos minutos más.
Cuando los aplausos sonaron por última vez y las personas comenzaron a darles algunas
propinas a los artistas, dando por terminado el espectáculo, ambos hermanos jades dejaron de
charlar para ir por sus omegas, entrando entre la multitud para encontrarlos. De regreso a casa
ambos omegas vieron el espectáculo y pidieron quedarse algunos minutos más para verlos,
así que como ambos hermanos Lan no les interesaba mucho, debido a que habían visto
muchas veces esos espectáculos de acróbatas y actores en barcos por los muelles, decidieron
dejar a sus prometidos divertirse apartándose un poco para conversar entre ellos, mientras
Jiang Cheng y Wei Ying se maravillaban de todo lo que veían.
Entregando láminas de jade a los artistas de su propio dinero, Jiang Cheng y Wei Ying
volvieron con sus alfas de forma contenta. Tomándose de la mano de Lan Wangji, Wei
Wuxian comenzó a hablar muy contento: “¿Lo viste Lan Zhan? Saltaban muy alto, tanto
como cultivadores. Pero son humanos corrientes ¿No es verdad?”
Asintiendo, Lan Wangji respondió: “Mmm”.
“¿Y cómo hacen eso? Si fueran cultivadores lo entendería, nosotros incluso hacemos cosas
más arriesgadas. Pero son simples humanos, sin ningún tipo de energía espiritual, ni siquiera
tienen un núcleo dorado”.
“Imitan algunos trucos de la secta Lan, no todos necesitan energía espiritual para realizarse
de forma correcta. Así que los hombres corrientes solo están en buena condición física e
imitan movimientos de mi secta”.
“Muy impresionante, muy impresionante” Comento Wei Ying contento, sin poder dejar de
sonreír.
Caminando detrás de Lan Xichen y Jiang Wanyin, los cuales eran los que los dirigían para
salir de Caiyi Town, Wei Ying se detuvo y miro suplicante a Lan Zhan.
“Dulces rojos Hanguang-Jun, compremos algunos” Pidió el mayor con una sonrisa.
“Mmm” Acepto Lan Zhan, dispuesto a complacer a su omega.
Dándose cuenta de que su hermano ya no caminaba detrás de él, Lan Xichen se giró y vio a
ambos prometidos, regresando sobre sus pasos acompañado de Jiang Wanyin “¿Qué sucede?”
Pregunto el mayor de forma amable.
Mirando a su hermano, Lan Wangji pidió: “Adelántense, compraremos algunos dulces rojos”.
Asintiendo conforme, Lan Xichen nuevamente se giró con su prometido para regresar a su
secta; mientras Jiang Cheng bostezaba algo cansado, pensando únicamente en su hijo. Así
que volviendo a caminar, Jiang Cheng y Lan Xichen siguieron con sus tranquilas
conversaciones y paso tranquilo para regresar a Gusu entre las montañas.
Mientras que Lan Wangji y Wei Wuxian desviaron su camino en otro de aquellos muelles,
dirigiéndose a los comercios donde vendían comida y los tan ansiados dulces rojos que pedía
él mayor. Paseando por estos lugares donde existía tanto comercio, Wei Wuxian detuvo sus
pasos cuando pasaron cerca de esa tienda que su hermano había visitado esa misma mañana,
esa que venía licores caros y finos de la región de Gusu.
Dándose cuenta del interés de su omega en ese sitio, Lan Wangji pregunto: “¿Quieres algo de
este sitio?”
“Compremos ‘Sonrisa del emperador’, Jiang Cheng no me dejo probar ni una gota hoy, por
favor llevemos un poco” Pidió Wei Ying con una gran sonrisa.
Dudando ligeramente, Lan Wangji respondió: “Wei Ying, recuerda las reglas”.
Ambos acababan de pasar por un penoso castigo que duro meses, y aunque Lan Wangji
siempre estaba dispuesto a complacer a su omega, aún estaba algo receloso de volver a
incumplir las normas de su secta.
“No es la primera vez que metemos licor a Gusu ¿No es verdad Lan Zhan?” Pregunto Wei
Ying con una sonrisa, recordándole aquello a su prometido intentando convencerlo: “No
compraremos demasiado, solo un tarro o dos, lo suficiente como para que pueda beberlo y
deje de sentirme curioso por ello”.
Pensando que aquella propuesta era razonable, Lan Wangji suspiro suavemente antes de
aceptar la propuesta: “Esta bien Wei Ying”.
“Y compremos maíz como acompañamiento también, beber y comer maíz es delicioso”.
“Mmm”.
Tomando a su omega nuevamente de la mano, Lan Wangji desvió su rumbo por última vez
esa tarde, entrando al comercio de licores.
***
“¡Que día!”
Sentándose de golpe en el piso frente a esa mesa baja, Wei Ying finalmente pudo suspirar con
calma, sintiéndose realmente relajado. Entrando detrás de él con elegancia, Lan Wangji
ingresó a Jingshi cargando las botellas de licor y cerrando la puerta detrás de ambos. Mirando
las armas espirituales de ambos en la mesa, Wei Wuxian solo pudo sonreír, viendo como
Suibian estaba sobre Bichen.
“¿Acaso hay un fantasma en este pabellón Hanguang-Jun?” Pregunto Wei Ying divertido,
tomando su espada con cuidado: “¿Tu dejaste a Suibian en esa posición? Que descarado Lan
Zhan, parecía que estaba haciéndole algo malo a Bichen”.
Caminando a unos armarios en su propia habitación, Lan Wangji tomo unos vasos y unos
platos de cerámica, volviendo con su omega: “No lo creo, no suelo tocar a Suibian”.
Respondió Lan Zhan con sinceridad.
“No me asustes” Pidió Wei Ying con un puchero: “Las espadas no pudieron moverse solas,
obviamente, si no fuiste tú, fueron fantasmas…”
“Las espadas de los cultivadores son armas espirituales, tienen un alma. Tal vez el alma de
Bichen y el alma de Suibian son buenos amigos” Dijo Lan Wangji, intentando calmar a su
omega.
“Oh ya veo… ¿Entonces son mejores amigos? Ten cuidado Suibian, Bichen es muy fría y
cortante, trátala con delicadeza” Pidió Wei Ying mirando a su espada, volviendo a dejarla al
centro de esa mesa baja, al lado de la blanca y pura Bichen.
Prefiriendo no hacer ningún comentario, Lan Zhan solo pudo mirar a Bichen con seriedad,
razonando que debido a que él era un alfa, seguramente su espada lo sería también.
Únicamente pensando en cual de ambas armas espirituales era o no el alfa en la relación. En
medio de esos pensamientos, el joven alfa le entrego al mayor las dos vasijas de la tan
aclamada “Sonrisa del emperador”, mientras serbia los manís salados en ambos platos.
Destapando la primera vasija con una sonrisa, Wei Ying cerro los ojos complacido al sentir el
dulce pero fuerte sabor de aquel licor llamado “Sonrisa del emperador”, maravillándose con
su aroma. No olía muy diferente a otros licores caros que alguna vez tuvo el placer de probar,
pero aun así se seguía sintiendo emocionado por las descripciones que Jiang Cheng le había
dado de la bebida. Así que sin querer esperar, le dio un trago directamente del envase,
bebiéndolo con gusto y luciendo mucho más complacido aun.
“¡Es delicioso!” Dijo Wei Ying animado, dando un nuevo trago más largo del envase: “Dulce,
fragante, fuerte y muy sabroso… ¡Es el mejor licor del mundo!”
Dándose cuenta de que su omega no usaría los vasos, Lan Wangji solamente tomo uno de
ellos para servirse a sí mismo un poco de agua, bebiendo esta mientras comía maníes y
disfrutaba de estar al lado de Wei Ying. Mientras que Wei Wuxian, absorto en el delicioso
licor que probaba por primera vez, el cual con cada trago que tomaba le sabia más sabroso, se
notaba animado, diciéndole muchas cosas a Lan Wangji respecto a la bebida realmente
contento.
Al terminar el primer jarro, comenzando a sentirse algo mareado, pero no borracho debido a
su resistencia al alcohol, Wei Wuxian se sorprendió cuando se dio cuenta de que Lan Zhan no
estaba bebiendo aquel delicioso licor, bebiendo agua y comiendo el maní con calma.
“¿Por qué estas bebiendo agua? No es de buena educación que dejes beber a otros solos
Hanguang-Jun” Lo regaño Wei Ying, tomando un aire más maduro: “Además, eres un alfa,
debes beber licor”.
Mirando el siguiente jarro de aquel licor, el cual era abierto por Wei Wuxian, Lan Wangji no
supo cómo negarse. En toda su vida nunca antes había bebido alcohol, antes por ser
demasiado joven, y luego simplemente por falta de costumbre.
“No estoy seguro” Dijo Lan Zhan con sinceridad.
“Este es especialmente dulce, muy delicioso. Te gustara Lan Zhan, además será lindo que
tomes tu primer trago de alcohol a mi lado, bastante romántico” Dijo Wei Ying intentando
convencerlo.
Aun dudando con ligero respeto por el licor, Lan Wangji permitió que Wei Wuxian tomara el
vaso en el que bebía agua y sirviera en este el dichoso licor “La sonrisa del emperador”. Los
vasos que había traído tampoco eran la gran cosa, así que el licor que entro en este no era
demasiado, tan solo unos cuantos sorbos. Terminando de servir en ambos vasos, Wei Wuxian
le entrego el suyo a Lan Wangji, realmente animado por ver a su alfa bebiendo por primera
vez.
“Wei Ying, no lo sé” Dijo Lan Zhan, tomando su vaso con licor dubitativo, oliendo el fuerte
aroma del alcohol, que se le hizo desagradable.
“Tómalo como un entrenamiento” Dijo Wei Ying, intentando convencerlo: “Deberemos
brindar en nuestra boda que será en menos de un año ¿Qué pasara entonces? Deberías estar
preparado para cuando eso pase, será bueno que aprendas ahora”.
Dejándose llevar por esas palabras, pero sin dejar de sentirse dudoso, Lan Wangji finalmente
accedió, llevando el vaso de cerámica a sus labios.
Sonriendo alegre y bebiendo el licor de su vaso de un solo trago, Wei Ying miro al otro lado
de la mesa, atento a cuando su alfa bebiera su primer trago. Imitando a Wei Wuxian, Lan
Zhan también bebió el licor de un solo trago, bajando el vaso y dejándolo en la mesa,
luciendo tan frio como siempre.
“¿Lo viste? Todo está bien…” Dijo Wei Ying con una sonrisa, mirando a su alfa contento.
Sin embargo Lan Wangji no respondió a sus palabras, y sin decir nada en lo absoluto, se
desmayó frente a los ojos de su omega, cayendo sobre la mesa y golpeando su frente
duramente contra esta superficie. Ahogando un grito por la sorpresa, Wei Ying soltó el vaso
de cerámica el cual rodó por el suelo, levantándose para correr en dirección a Lan Wangji
aterrorizado.
“¡Lan Zhan!” Dijo Wei Ying temblando, tomando al alfa de los hombros.
Su prometido se notaba completamente inconsciente, sin responder a ninguno de los
estímulos que hacia Wei Ying intentando despertarlo, palmeando sus mejillas y llamando su
nombre. Entrando ligeramente en pánico, Wei Wuxian pronto razono que su alfa en realidad
solo estaba dormido, con una respiración profunda y el rostro calmado.
“¿Solo con un trago de licor?” Pregunto Wei Ying crédulo, sosteniendo al menor contra su
pecho a intentando despertarlo dando palmadas en sus mejillas.
Entrando en un ligero pánico sin saber qué hacer, Wei Ying se quedó largos minutos
sosteniendo a Lan Zhan en esa misma posición, sin poder moverlo pues el alfa era demasiado
pesado para él en su estado físico actual. Y lleno de pensamientos sombríos, temiendo que
algo realmente malo le hubiera pasado a su amado, Wei Ying pensó y quiso ir a buscar a su
hermano y a Zewu-Jun en busca de ayuda, pero volvió a soltar un gritito cuando Lan Wangji
se sentó de golpe soltándose de sus brazos.
“Aiya... Lan Zhan… No hagas eso de nuevo, casi muero del susto” Se quejó Wei Ying,
mirando a su alfa sentado con su usual actitud fría, como si nada realmente hubiera pasado.
Sin embargo tan cerca como estaba, oliendo un ligero cambio en sus feromonas, Wei Wuxian
se dio cuenta de que en realidad Lan Wangji si estaba algo diferente. Con los ojos entre
cerrados y las mejillas ligeramente sonrojadas, dándole una mirada extraña con sus ojos
dorados extremadamente brillantes, Lan Zhan estaba definitivamente diferente; algo que no
pasó desapercibido para Wei Wuxian.
“¿Lan Zhan?” Pregunto Wei Ying algo confuso: “¿Estas bien?”
Mirando al frente directamente a la puerta, Lan Wangji susurro: “Hambre…”
Entendiéndolo a penas por lo bajo de su voz, Wei Wuxian pregunto: “¿Hambre? Hay maní
Lan Zhan, mucho maní…”
Negando con la cabeza con vehemencia, Lan Wangji dijo: “Sopa…”
“¿Sopa? ¿Cómo un caldo? ¿Dónde conseguiremos algo así a esta hora en El Receso Entre
Las Nubes?” Preguntó Wei Ying confuso.
Volviendo a mirarlo, Lan Wangji se notó mucho más raro aun.
Capítulo 10.

“¡Se razonable! ¡Hanguang-Jun, se razonable!”


Tomándose fuertemente de uno de los brazos de su alfa, Wei Ying usaba toda la fuerza de su
cuerpo para intentar detenerlo, sin embargo Lan Wangji no correspondía como se esperaría,
avanzando sin detenerse y sin mirar atrás, caminaba con determinación por todo El Receso
Entre Las Nubes. Era de noche, bastante avanzado en la hora de la secta, así que la mayoría
de los maestros debían estar dormidos ya y no había nadie por los pasillos armoniosos del
hogar de la secta Lan. Así que aprovechando esa soledad, Lan Wangji caminaba rápidamente
sin detenerse en dirección a las cocinas de la secta, que quedaba en el área de los omegas y
mujeres en la secta.
Dándose cuenta de donde estaban, Wei Wuxian se notó extremadamente alarmado: “Lan
Zhan, no deberíamos estar aquí, no deberías estar aquí”.
“¿Mmm?” Pregunto el alfa confuso, sin dejar de caminar.
“Recuerda las reglas Hanguang-Jun, eres un alfa, no se permiten alfas o betas pasada la hora
del toque de queda”.
“Mmm…” Susurro Lan Wangji, prefiriendo ignorar las palabras de su omega a pesar de que
las había escuchado claramente.
“¡Lan Zhan!” Reclamó Wei Ying, aun intentando pararlo.
El joven omega tenía la ligera esperanza de que su alfa volviera a la razón cuando llegaran a
las cocinas, pero no estaba seguro, pues nunca antes había presenciado semejante locura en el
joven maestro Wangji.
Atravesando algunas plantas de la gran y frondosa naturaleza que rodeaba toda la secta,
ambos jóvenes finalmente llegaron a las cocinas, y en medio de los reclamos de Wei Wuxian,
Lan Wangji se acercó a la puerta e intento abrirla, encontrándola cerrada.
Aliviado al darse cuenta de que no podrían hacer nada, Wei Ying pregunto: “¿Lo ves? ¿Lo
ves Hanguang-Jun? No se puede hacer nada, está cerrado. Volvamos a la habitación ¿De
acuerdo? Se bueno ¿De acuerdo?”.
Frunciendo el ceño en un adorable puchero, el joven maestro Lan siguió insistiendo con la
delgada puerta corrediza de madera, intentando recorrerla una y otra vez, hasta que la madera
sonó, alarmado a Wei Wuxian.
“Bien, para, romperás la puerta” Dijo Wei Wuxian alarmado, tomando a su alfa de la muñeca
con fuerza intentando alejarlo de la madera: “Lan Zhan es tan fuerte… La puerta no es buen
rival para demostrarlo ¿De acuerdo?”
Girándose para ver al mayor, Lan Wangji se notó extremadamente triste, poniendo una
expresión dulce que a su omega le recordó a ese pequeño niño que le hacía pucheros cuando
jugaban juntos en Lotus Pier. Suspirando con cariño, Wei Ying acaricio el rostro del
contrario, depositando un beso en una de sus mejillas, mirándolo con pena.
“Vamos, mañana te llevare a comer algo delicioso” Dijo Wei Ying, tomando suavemente la
mano del menor.
Sin embargo Lan Wangji no estaba dispuesto a acompañarlo, y mirando únicamente el
candado que cerraba la puerta de las cocinas, estaba pensando en la llave y en quien podía
tenerla, empecinado en su idea.
Tirando un poco más fuerte de su mano para hacerlo avanzar, Wei Ying susurro: “Vamos Lan
Zhan… En serio, vamos…”
“La llave…” Susurro Lan Wangji, pensativo.
“¿La llave?” Repitió Wei Wuxian nuevamente confuso.
“Mi hermano…”
“Ni lo pienses Hanguang-Jun, Zewu-Jun está dormido ahora, no querrás…” Negó Wei Ying
asustado.
Sin embargo Lan Wangji le hizo poco caso al contrario, y volviendo a caminar, arrastró
nuevamente a su omega en una dirección desconocida dentro de la secta, logrando que Wei
Ying se quejara: “¡Lan Zhan!”
Regresando a la región donde estaban los pabellones y habitaciones privadas de los
miembros importantes de la secta, Lan Wangji se dirigió a la que pertenecía a Jiang Wanyin,
esa donde ahora dormía su hermano a su lado. Y a pesar de las protestas de Wei Wuxian, el
cual siguió intentando hacerlo entrar en razón, Lan Wangji se acercó por la parte posterior de
la habitación, mirando en el interior de la habitación por una ventana.
“¿Estás loco? ¡Para! ¡Ni lo intentes!” Reclamó Wei Ying en un susurro, dándose cuenta de las
intenciones de su alfa.
“Shh… Llaves…” Susurro Lan Wangji atento a lo que veía por la ventana.
“Estas loco, de verdad… ¿Quién eres? ¿Dónde está mi recatado marido?” Dijo Wei Ying
sorprendido.
Sin embargo sin prestarle atención todavía, Lan Wangji volvió a callarlo: “Shh”.
En medio de la obscuridad de la habitación vio ambas camas de su hermano y Jiang Wanyin
unidas, dejándolos a ambos dormidos en medio de la blanda superficie. Mientras que una
pequeña y elegante cuna estaba casi al lado de la cama, pegada al sitio donde dormía Jiang
Cheng, donde suponía que estaba Lan Jingyi, aunque no podía verlo. Y repartido en la
habitación había baúles y otras pertenencias de ambos, en las que Lan Wangji finalmente
pudo ubicar las cosas que le pertenecían a su hermano mayor.
Siendo un buen conocedor de su secta, Lan Wangji hábilmente abrió la ventana trasera del
pabellón desde fuera, a pesar de todas las réplicas de su omega, el cual estaba aterrorizado de
lo que veía de su prometido, comportándose de una manera tan irracional.
Tan silencioso y elegante como era usual, Lan Wangji logro entrar en la habitación por la
ventana de un solo salto, en completo silencio. Analizando bien toda la situación y a las
personas que veía en la cama, Lan Wangji camino silenciosamente hasta las cosas de su
hermano, dispuesto a registrar sus cosas; sin embargo al no tener a Wei Wuxian a su lado, el
cual lo sostenía al caminar, ya era más evidente su tambaleo por el alcohol en su sistema.
Alcanzando las cosas de su hermano, Lan Wangji comenzó a registrarlas en busca de las
llaves, siendo poco delicado y dejando caer algunas de las cosas de este sin cuidado. Desde la
ventana, completamente aterrado, Wei Wuxian solo podía morderse los labios lleno de
nerviosismo, mirando una y otra vez a su tambaleante e irracional prometido, al igual que la
cama en la que dormían Jiang Cheng y Lan Xichen abrazados.
Y aunque la presencia del joven Lan Zhan fue pasada por alto por ambos mayores, el
pequeño alfa Lan Jingyi el cual no estaba acostumbrado al olor de las feromonas de Lan
Zhan, siendo muy receptivo a ese tipo de olores debido a su corta edad, se despertó con su
presencia sentándose en su cuna mirando al extraño en la obscuridad con mucha curiosidad.
Viendo a su pequeño sobrino despierto, Wei Wuxian ahogo un gemido de angustia y sorpresa,
temiendo que el bebé pudiera llorar. Debido a la silenciosa noche y temiendo que
descubrieran a su amado, Wei Ying no pudo decirle nada para advertirle, y sin tener otra
opción, entro también en la habitación de forma silenciosa. Sin embargo acercándose
directamente a la cuna de Jingyi, el cual ya lo reconocía, se concentró en acariciar su cabeza
y haciendo gestos graciosos para el niño, distraerlo de su alfa, y hacer que se acostara de
nuevo, evitando que llorara o despertara a sus padres.
Revolviendo todas las cosas de su hermano, Lan Wangji frunció el ceño al darse cuenta de
que la llave maestra de la secta, esa que abría todas las cerraduras, no estaba con él. Y
dándose por vencido, caminó de vuelta a la ventana, cruzando miradas por un segundo con el
pequeño Jingyi, el cual al reconocerlo como otro alfa, se había despertado temeroso de que
alguien viniera por su madre omega.
“Eres un desastre, un verdadero desastre Hanguang-Jun” Reclamo Wei Ying, saliendo
igualmente del pabellón y cerrando la ventana: “¿Ahora qué? ¿Nos damos por vencidos?”
Suspirando tristemente, sin querer rendirse, siendo extremadamente perseverante; Lan
Wangji negó con la cabeza.
“Ah… ¿Entonces?”
Mirando a su omega de reojo, Lan Wangji respondió: “Mi tío”.
Poniéndose pálido, Wei Wuxian negó con la cabeza desesperado: “Ni lo pienses, ni lo
sueñes”.
Sin embargo así como había pasado toda la noche, Lan Wangji hizo lo que quiso in escuchar
a Wei Ying, desviando su dirección del Hanshi al pabellón privado de su tío, que quedaba
muy cerca de ahí. Y así como había hecho con la habitación de su hermano, entró por la
ventana trasera directamente a sus cosas personales, donde comenzó a revolver todo hasta
finalmente encontrar la llave.
Y aunque Wei Wuxian se encontraba desesperado y aterrorizado por la situación, quedándose
fuera temblando, en realidad también le resulto curioso. Nunca antes había visto las
habitaciones privadas de Lan Qiren, las cuales tenían muchos libros en diferentes estantes, y
era muy blanca y pura, como si fuera un santuario, el cual solo tenía el olor de las feromonas
de este en su interior, lo que significaba que nadie había entrado ahí en mucho tiempo.
Después de finalmente haber encontrado las llaves, Lan Wangji salió más tranquilo, incluso
notándose contento. Sin embargo Wei Ying seguía notándose frustrado, así que pregunto: “¿Y
bien? ¿Ahora?”
“Sopa” Dijo Lan Zhan convencido.
Suspirando con cansancio, Wei Ying se encargó de cerrar la ventana del pabellón de Lan
Qiren, y tomándose nuevamente del brazo de su alfa, fue arrastrado en dirección a las cocinas
de la secta.
Sin embargo lo impensable ocurrió, y a pesar de que ambos jóvenes se desplazaban
silenciosamente entre la maleza de la secta, se toparon de frente con unos guardias, los cuales
distraídos charlaban en susurros entre ellos, obviamente notando la presencia de dos extraños
rompiendo el toque de queda en la secta.
Dándose cuenta de esto también, Wei Wuxian pensó en una solución rápida, y usando toda su
fuerza detuvo a Lan Zhan y se apoyó contra un árbol, obligando a su alfa a ponerse contra él.
“¿Jóvenes maestros?” Preguntó uno de los guardias, dándose cuenta de su presencia.
Suspirando y cerrando los ojos con vergüenza, sin ver otra solución, Wei Ying abrazo a Lan
Wangji por el cuello, comenzando a gritar: “¡Lan Zhan! ¡Me gusta mucho! ¡Más fuerte!”
No estaban muy lejos del Jingshi, y aunque técnicamente estaba prohibido, Wei Wuxian sabía
que Lan Zhan y él tenían algún tipo de permiso excepcional por parte de la secta para hacer
cosas sexuales, como hacer el amor gritando hasta altas horas de la noche. Así que intentando
aprovecharse de estos permisos, así como lo había hecho al crear su manual, trató de desviar
la idea de que estaban ebrios y rompiendo las reglas de la secta para aparentar que habían
querido salir a hacer cosas vergonzosas al aire libre.
“Oh… Me gusta tanto Hanguang-Jun… Me gusta…” Dijo Wei Wuxian en voz alta, sin poder
abrir los ojos por la vergüenza que sentía, fingiendo soltar gemidos y los usuales sonidos de
placer que salían de sus labios al hacer el acto.
Mientras que Lan Wangji, completamente confuso, solo podía ver a su omega en silencio, sin
entender nada, pues al estar tan ebrio ni se había dado cuenta de los inesperados visitantes
que tenían cerca, permitiendo que Wei Wuxian lo abrazara fuertemente por el cuello y
escondiera su rostro en su pecho por la vergüenza.
“Me voy a venir Lan Zhan… Por favor no tan profundo…” Grito Wei Wuxian con todas sus
fuerzas, intentando alejar a los guardias.
Los miembros de la secta Lan, completamente avergonzados por lo que estaban presenciado,
llenándose de los gemidos desvergonzados del omega, apresuraron sus pasos intentando
aparentar que no habían visto nada, ya que por la obscuridad solo pudieron ver las siluetas de
ambos pero no si realmente estaban desnudos o haciendo algo en sí, solo guiándose por los
gemidos tan fuertes como gritos de Wei Wuxian.
Dejando de hacer ruidos de placer cuando se dio cuenta de que estaban nuevamente solos,
Wei Wuxian aún se quedó en esa posición por unos minutos más, abrazándose fuertemente
del cuello de su alfa y ocultando su rostro en su pecho. Con las mejillas completamente
sonrojadas, Wei Wuxian creyó que realmente moriría de la vergüenza, siendo aquella una de
las únicas veces en las que realmente creyó que podría morir por haber perdido la cara de
semejante manera. Sin embargo Lan Wangji no se había dado cuenta de nada aun, y
disfrutando aquel estrecho abrazo, rodeo a su omega por la cintura, esbozando una pequeña
sonrisa en su rostro.
“De verdad… De verdad Hanguang-Jun, no puedo más, voy a morir” Reclamo Wei Ying,
recobrando la compostura y levantando la mirada: “¿Te das cuenta de lo que acaba de pasar?
¿Lo que acabamos de hacer?”
Mostrando su usual rostro serio, tan solo con las orejas sonrojadas y la mirada perdida, Lan
Wangji pregunto: “¿Sopa?”
Poniendo los ojos en blanco, Wei Wuxian susurró: “Que frustrante eres”.
Dándose cuenta de que no terminarían esa noche hasta cumplir las tonterías de su alfa, fue
ahora Wei Wuxian quien guio al menor hasta las cocinas de la secta, permitiendo que abriera
el candado de la puerta e ingresaran a las cocinas. En medio de la obscuridad, guiándose a
duras penas, ambos recorrieron la habitación mirando todo en silencio, dándose cuenta de que
todo estaba vacío, ni siquiera había reservas preparadas como para realizar una comida
rápida.
“¿Lo ves?” Pregunto Wei Ying, parándose al lado de su alfa: “No hay ingredientes para hacer
sopa, ni siquiera hay ingredientes para hacer arroz glutinoso que es lo más simple”.
Mirando todo lleno de decepción, Lan Wangji solo pudo susurrar: “Mnn…”
“¿Entonces? ¿Vamos de vuelta Lan Zhan?”
Mirando a su omega con una expresión triste, Lan Wangji dijo: “¿Debería matar una gallina
para comerla?”
Las cocinas de la secta quedaban prácticamente al lado de los criaderos de aves y otros
animales, ya que había una regla que impedía matar cualquier ser vivo en la secta, sin
embargo los cocineros tenían un permiso expreso para matar algunos de estos seres vivos con
el objetivo de alimentarse.
“No” Negó Wei Wuxian rápidamente, mirando a su alfa a los ojos: “Ni lo pienses”.
Luciendo un poco más razonable, tal vez por el cansancio a pesar de la tristeza, Lan Wangji
respondió: “Esta bien”.
Suspirando tranquilo al darse cuenta de que su alfa finalmente estaba siendo razonable, Wei
Wuxian lo tomo de la mano y apresurado lo sacó de la cocina, temiendo que este pudiera
cambiar de opinión y volver a hacer una locura. Cerrando el candado de la puerta intentando
pretender que nada sucedió, Wei Wuxian se apresuró a dirigir a su alfa de vuelta a su
habitación, riéndose un poco más relajado.
“¿Te gustan las gallinas entonces, Hanguang-Jun?”
Asintiendo con la cabeza, Lan Zhan respondió: “Mmm”.
Riéndose mientras hacía más comentarios, Wei Ying se distrajo, ignorando el hecho de que
algunas de las personas mayores de la secta los estaban mirando a la distancia. Siendo
advertidos por los jóvenes guardias de esa noche, personas de la secta más experimentadas
quisieron comprobarlo, dándose cuenta de que en realidad había más que un simple incidente
con la vida sexual de la pareja, pero manteniendo su distancia por el momento.
Ignorando todo esto Wei Wuxian siguió con su travesía por la secta hasta llegar al Jingshi, al
cual entró un poco más calmado, pero igualmente temeroso de un nuevo arranque de
impredecible locura de su alfa, apresurándose a entrar en el pabellón, diciendo: “Se bueno
¿Esta bien Lan Zhan? Compórtate un poco, se bueno…”
El joven alfa, aun realmente confuso con todos sus sentidos, no respondió de forma
afirmativa ni negativa ante esas palabras, entrando en el pabellón de manera tambaleante, sin
razonar bien. Dejando que su omega lo condujera, Lan Wangji se acostó en la cama que
ambos compartían, sin siquiera quitarse las botas o cambiarse las túnicas.
“Bien… De acuerdo…” Susurro Wei Ying recuperando la calma, dándose cuenta de que
nuevamente estaban en su habitación y todo estaba bien: “Duerme, Lan Zhan debes dormir”.
Recordando la usual forma en la que su prometido solía dormir, cuidadosamente cruzo sus
manos sobre su pecho y luego lo cubrió con las frazadas.
“Son las 9… Buenas noches Wei Ying” Susurro Lan Wangji cuando se dio cuenta de que
estaba en una buena posición para dormir, cerrando finalmente sus ojos dorados con largas
pestañas negras.
Negando con la cabeza de manera divertida, Wei Wuxian se agachó y cuidadosamente beso
una de las mejillas de su alfa, sintiéndose finalmente tranquilo de que todo hubiera
“terminado”.
Estirando su cuerpo con cansancio, decidió aprovechar la última luz de las velas de la
habitación que estaban a punto de consumirse, y caminando a la mesa baja donde habían
estado antes de que toda la locura empezara, terminó de consumir todo el licor que quedaba y
comer un poco más de maní. Cuando estuvo satisfecho regreso a la cama, sin embargo al ver
a Lan Wangji acostado tan cómodamente en el centro, el joven omega no quiso importunarlo,
y solamente quitándose el cinturón de las túnicas para estar más cómodo, se acostó en el piso
al lado de la cama, dispuesto a dormir.
***
“Vamos Jingyi… Cómelo” Pidió Jiang Cheng en un susurro, acercando nuevamente la
cuchara con puré a los labios del pequeño bebé.
Aun así el joven alfa puso una mala cara haciendo un puchero y desvió el rostro con
desagrado, impidiendo que su padre le diera aquel puré de zanahorias. Los tiempos como un
pequeño niño que solo tomaba leche comenzaron a terminar para el menor, y cumplidos sus 6
meses de vida, el joven niño alfa comenzaba a comer otras cosas hechas puré, como
calabazas o zanahorias; notándose resistente a querer comerlas, frustrando a Jiang Cheng.
Intentando hacer lo que le habían enseñado las parteras, con una sonrisa Jiang Cheng comió
un poco del puré frente a su hijo, intentando darle la confianza de que era algo delicioso:
“Muy rico A-Yi ¿Lo viste? Delicioso…” Dijo Jiang Cheng, volviendo a comer el puré.
Sin embargo el pequeño alfa solo lo miró en silencio, volviendo a negarse a que le dieran ese
alimento girando el rostro con desagrado cada vez que Jiang Cheng trataba.
Terminando de prepararse para aquel nuevo día, Lan Xichen ajusto la cinta de su túnica y se
giró para ver a su prometido y a su hijo en el centro de aquel pabellón. Con una suave sonrisa
al ver la dulce escena, se acercó a ambos viendo como Jiang Cheng susurraba algunas
groserías aun intentando darle de comer al bebé.
“¿Aun no?” Pregunto Lan Huan sentándose al lado de su omega.
Suspirando con agotamiento y frustración, Jiang Cheng negó con la cabeza: “Aun no…”
Tomando el recipiente de cerámica con comida de las manos delicadas de su omega, Lan
Xichen pidió: “Déjame intentar”.
Encogiéndose de hombros ya completamente rendido, Jiang Cheng respondió: “Esta bien, yo
iré a alistarme”.
Dejando que su alfa se encargara de la situación, Jiang Cheng se levantó de aquella mesa baja
y fue a cambiarse la ropa. Abriendo su baúl de pertenencias, comenzó a quitarse las túnicas
íntimas para ponerse su ropa normal de Gusu, la cual era una túnica blanca que le daban a
todo los visitantes por las clases. Terminando de vestirse y camino a peinarse con su usual
moño alto, se sorprendió cuando vio que su bebé estaba comiendo lo que su padre le ofrecía,
aun haciendo algunos gestos, pero aceptando comer de Lan Xichen.
“¿Qué rayos? ¿Cómo lo hiciste?” Pregunto Jiang Cheng enfadado, acercándose a su hijo y a
su prometido.
Sonriendo dulcemente para intentar calmarlo, Lan Huan respondió: “Solo comencé a comerlo
y él también quiso”.
“¿O sea que te lo estabas comiendo?”
“Si, y me pidió un poco”.
La estrategia de Lan Huan fue simplemente comer el puré sin insistir el menor, y cuando el
bebé se dio cuenta de que su padre estaba comiéndolo, pidió un poco, comiendo por simple
imitación.
“Aun así creo que no le gustan las zanahorias” Dijo Lan Xichen, volviendo a darle de comer
al menor.
“Traidor…” Susurro Jiang Cheng molesto, mirando a su hijo comer lo que Lan Huan le
ofrecía, comentando: “Hay muchas cosas que A-Yi no puede comer todavía, así que debe
acostumbrarse a comer zanahorias”.
“Podríamos darle calabaza…”
“No puede comer calabaza todos los días” Se negó Jiang Cheng.
Y aunque Lan Huan quiso replicar, ambos jóvenes fueron interrumpidos cuando unos golpes
sonaron en la puerta del pabellón: “Yo iré, descuida” Dijo Jiang Cheng, prefiriendo que Lan
Huan se quedara a terminar de darle de comer a Jingyi ya que él no podía hacerlo.
Con el cabello suelto, el omega se acercó a la puerta del pabellón y la abrió con cierta
rapidez, topándose de frente con uno de los miembros del consejo de la secta, el cual le hizo
una reverencia educada: “Buenos días líder de la secta”.
“Buenos días” Respondió Jiang Cheng haciendo otra reverencia como saludo de igual forma:
“¿Está buscando a Lan Huan? Él saldrá en un momento a cumplir con sus deberes como
líder”.
“Estoy buscándolos a ambos, lamentablemente” Respondió el consejero con un tono
sombrío.
“¿Ambos?” Pregunto Jiang Cheng confuso.
“Lamento molestarlo con algo que a usted ya no le compete legalmente, pero por esta única
ocasión en la secta, necesitamos que cumpla el papel del líder de la secta Yunmeng Jiang
como lo hacía anteriormente”.
Pensando únicamente en Wei Wuxian y poniéndose serio, Jiang Cheng pregunto: “¿Y mi
hermano?”
“Ha sido arrestado junto al joven maestro Wangji esta mañana” Respondió el consejero.
Escuchando aquellas noticias desde el interior del pabellón, Lan Xichen no pudo evitar
sorprenderse, pensando aterrado en su pequeño hermano Wangji. Mientras Jiang Cheng ponía
un rostro mucho más serio aun, comenzando a pensar enfadado en como golpearía a Wei
Wuxian por aquello.
***
Se despertó fuera de su horario usual de sueño. Abriendo los ojos de forma confusa y
sentándose en la cama algo perdido, Lan Wangji se dio cuenta rápidamente de que algo raro
había pasado la noche anterior, después de todo no recordaba bien nada de lo que pasó, y
tenía un gran malestar desconocido. Pasando por la primera resaca de su vida, se levantó
débilmente de la cama, apenas mirando a Wei Wuxian dormido en el suelo, aun roncando y
durmiendo plácidamente. Y como un hombre en el desierto, Lan Wangji tambaleándose
camino a una jarra de agua que había cera, y olvidando las reglas de etiqueta por las que se
había regido toda su vida, bebió directamente de la jarra sediento.
Calmando su sed pero no su dolor de cabeza y no sus nauseas, el alfa se giró de forma
discreta, mirando todo el desastre en su pabellón privado, con los manís desparramados en la
mesa y el alcohol completamente terminado. Entonces tuvo ligeros destellos de lo ocurrido,
mirando su vaso de licor vacío y sintiendo el fuerte olor del licor “La sonrisa del emperador”
que le dio mucha nauseas, llegando una conclusión: La noche anterior se había emborrachado
accidentalmente.
Sin embargo no tuvo mucho más tiempo para pensar o intentar razonar al respecto, pues
pronto escucho como pasos pesados y rápidos se acercaban al Jinsghi, y teniendo alguna
especie de recuerdo vivido de algo que paso hace mucho tiempo, golpes se escucharon en la
puerta. Despertando de golpe con los sonidos en la puerta, tan confundido como su alfa, Wei
Wuxian pregunto: “¿Lan Zhan?”
Sin embargo el menor no pudo responder, pues a la falta de alguien que abriera la puerta para
atenderlos, aquellos sirvientes de la secta Gusu Lan abrieron las puertas por sí mismos,
encontrando a ambos jóvenes despiertos. Los sirvientes de la secta Lan eran diferentes a los
de Yumeng, y siendo elegantes pero implacables, no cruzaron ni una sola palabra con ambos
jóvenes maestros, tomándolos a ambos de los brazos para arrastrarlos y obligarlos a salir de
sus aposentos.
“¡Hey! ¡Detente!” Pidió Wei Ying asustado, sin entender ese brusco comportamiento: “¡Ni
siquiera me he vestido apropiadamente!”.
Sin embargo los sirvientes eran implacables, y sin escuchar o hacer caso de las palabras de
Wei Ying, llevaron a ambos jóvenes a un salón algo apartado en la secta, un salón destinado a
castigos o reforzamiento de la conducta de los estudiantes de El Receso Entre Las Nubes. Un
lugar donde ya los esperaba una comitiva los maestros más importantes de la secta, además
de Jiang Wanyin representando a la secta Yunmeng Jiang, y Lan Xichen como el líder de la
secta Lan.
Entendiendo rápidamente la razón por la que se encontraban ahí, Wei Ying cayo con un golpe
seco de rodillas frente a Lan Qiren, quien encabezaba aquella corte: “Lan Gonzi, por favor
escúcheme. Entiendo perfectamente la razón de su molestia, porque estamos aquí, pero si tan
solo pudiera entender que yo fui quien…”
“Wangji es culpable” Interrumpió Lan Zhan, arrodillado al lado de Wei Wuxian.
Sorprendido por semejante declaración, Wei Ying se giró en dirección a su alfa incrédulo, sin
poder creer lo que había dicho: “Pero Lan Zhan…” Susurro Wei Ying angustiado.
“Wangji es culpable” Repitió el menor, sin atreverse a mirar el rostro enfadado de su tío.
“Lan Zhan…” Susurro Wei Ying arrepentido, intentando arreglar la situación.
Sin embargo Lan Qiren, prado frente a ambos, no estaba dispuesto a seguir con aquella
tontería, diciendo fuertemente: “Silencio”.
Escuchando el tono furioso del hombre frente a sí mismo, Wei Ying no tuvo más opción que
bajar la cabeza de igual manera, sintiéndose nuevamente regañado y con un gran peso por
delante en un castigo. Mientras que Lan Wangji se mantenía en silencio, reflexionando acerca
de sus errores que lo llevaron a estar en semejante situación, realmente arrepentido.
“Wei Wuxian, tu comportamiento es… Inaceptable. Como un omega, y aun mas, como un
invitado ¿Acaso no te has cansado de insultar la secta Gusu Lan?” Pregunto Lan Qiren
furioso.
Presionando las manos en puños, Wei Ying prefirió no responder a esas palabras, con la
mirada baja y negándose a decir algo más. Asique Lan Qiren continuo hablando: “Eres un
desastre, una mala influencia, y tengo mucho arrepentimiento de que tu vayas a ser el esposo
de uno de los herederos de mi secta; eres una decepción así como tu padre”.
“¿Mi padre?” Pregunto Wei Wuxian, levantando la mirada.
Dándose cuenta de que había hablado de más, Lan Qiren rápidamente remedio todo diciendo:
“¡Silencio! ¡Baja la cabeza!”.
Refunfuñando, Wei Ying hizo lo demandado, aunque su mente ya no estaba más con el
castigo o la situación que tenía en frente; ahora solo podía pensar en las palabras dichas por
Lan Qiren.
“Wangji, una falta es una falta, y la juventud no es una excusa. Me has decepcionado a mí y a
tu secta una vez más. Temo por tu futuro, y lamento el destino que se te ha previsto al lado de
un ser inmoral al cual dices amar” Continuo diciendo Lan Qiren.
Haciendo una reverencia de arrepentimiento, Lan Wangji dijo: “Perdóneme Shufu”.
Suspirando con tristeza, negándose a ver a su sobrino por la decepción, Lan Qiren hizo una
señal a otros cultivadores, los cuales tomando tablas de disciplina de la secta, se pusieron a
los lados de ambos jóvenes arrodillados. Antes de comenzar, girándose por un momento, Lan
Qiren vio a Jiang Wanyin parado detrás de él, pidiendo su consentimiento como líder de la
secta Jiang.
Mirando igualmente enfadado y decepcionado a su hermano, Jiang Cheng no dudo en decir:
“Pueden comenzar”.
Con esas palabras, ambos cultivadores levantaron las tablas de disciplina y comenzaron a dar
fuertes golpes en las espaldas de Lan Wangji y Wei Wuxian, comenzando con el castigo
reglamentario para una situación así. Siendo tomado por sorpresa por la fuerza de los golpes
en su espalda, Wei Wuxian soltó un fuerte quejido y casi cayó al piso, teniendo que apoyar
sus manos frente a si mismo por el dolor. Sin embargo mirando a su lado, se encontró con la
mirada preocupada de su alfa, el cual sin haber cambiado su posición erguida, solo podía
preocuparse por el contrario y su dolor. Así que decidiendo ser fuerte para no preocupar a su
amado, Wei Wuxian recobro la compostura y mordiéndose los labios intentando aparentar
fuerza, aguanto los golpes en su espalda completamente erguido.
Golpe tras golpe cayó sobre la espalda de ambos, hasta llegar al avanzado numero de 20
azotes en cada uno de ellos, complaciendo así a todos los presentes que habían acordado ese
castigo para la ofensa que ellos habían cometido. Sin embargo Lan Qiren aún no estaba
satisfecho, y como un maestro sentencio: “Este solo ha sido el inicio de los castigos por su
ofensa, sin haber terminado el anterior, ambos serán sentenciados a tener otro largo tiempo
entre libros cumpliendo uno de mis deberes”.
Cuando los azotes finalmente terminaron y el castigo también, Lan Wangji solo pudo fijarse
en su omega. Apoyándose en el piso completamente destrozado, sintiendo toda su espalda
arder y doler por los recientes golpes que había recibido, Wei Wuxian solo pudo sorprenderse
cuando su alfa lo tomó en sus brazos, sacándolo de ese salón ante la vista de todos los
presentes, sin tener ningún impedimento pues todo había terminado.
“Lan Zhan… No…” Susurro Wei Ying muy asustado.
Lan Wangji también había recibido un bruta castigo hace pocos segundos, y sin embargo
estaba completamente normal, pudiendo ponerse de pie e incluso tomarlo en sus brazos.
Aunque esto no impedía que Wei Wuxian se preocupara mucho por su alfa, el cual pensaba
que su alfa estaba tan herido y dolido como él.
“Lan Zhan detente…” Pidió Wei Wuxian realmente preocupado.
Mirando todo el escenario, aun ardiendo de furia al pensar que ese descarado omega era una
terrible influencia para su sobrino, lamentando que fueran destinados, Lan Qiren dijo en voz
alta: “¡No esperen que sea clemente con su nuevo castigo! ¡Pasaran más de un año en la
biblioteca!”
Escuchando aquellas palabras mientras salían de aquel salón, Lan Wangji no pudo evitar
notarse excepcionalmente alegre por ello, mientras que Wei Ying se ponía mucho más pálido
y asustado aun, temiendo por el bienestar de su pobre cuerpo.
Dejando todo atrás nuevamente, Lan Zhan llevó a su omega entre la vegetación por un
camino que Wei Ying no recorrió antes, dirigiéndose hasta un hermoso estanque natural frio,
al cual solo tenían acceso personas importantes de la secta. Maravillándose por el hermoso
lugar que tenía frente a sus ojos, Wei Ying permitió que su alfa lo bajara y lo acostara
ligeramente en la orilla, finalmente dejando de preocupar al mayor.
“Perdóname” Se disculpó Lan Zhan, mirando a su omega y sentándose a su lado: “Esto fue
mi culpa”.
Negando con la cabeza con suavidad, Wei Ying respondió: “Fue culpa de los dos, no bebiste
solo, fui yo quien metió el alcohol en Gusu y que te hizo beber”.
Sin embargo con elegancia, Lan Wangji volvió a negar estas palabras: “Fue mi culpa, por ser
irracional”.
Riéndose un poco al escuchar esas palabras, volviendo a recordar la locura de la noche
anterior, Wei Wuxian lo tomó suavemente de la mano, apoyándose en su hombro: “Nunca
creí que el elegante maestro Lan Wangji perdiera la cordura al beber pocos sorbos de licor,
perdiste toda tu racionalidad Lan Zhan, incluso pensaste en matar gallinas”.
“Mmm…” Susurro Lan Zhan apenado, sintiendo como sus orejas se enrojecían suavemente.
“Pero… Estoy feliz” Confeso Wei Ying, cerrando los ojos y sonriendo con calma: “Si, estoy
adolorido por los azotes; pero estoy feliz de haber compartido esto contigo. Ser el primero en
verte beber y ser el primero al estar a tu lado cuando te emborrachaste, eso es un gran honor
para mí”.
“Yo solo quiero que Wei Ying sea el que me vea de esa manera. Solo tú por siempre”.
Sintiéndose nuevamente conmovido por esas palabras, Wei Wuxian se levantó de su hombro
y busco los labios de su pareja, dándole un cariñoso y suave beso en los labios a su
prometido, un beso que Lan Zhan disfruto en silencio.
“Te amo Hanguang-Jun…” Susurro Wei Wuxian.
“Te amo Wei Ying” Respondido Lan Zhan con seguridad.
Volviendo a sonreír y mirando directamente los ojos dorados ligeramente enrojecidos del
menor, Wei Wuxian dijo: “No debes preocuparte más por ello Lan Zhan, ahora que ya
conozco tu situación con el alcohol, no dejare que nadie más vuelva a darte ni un solo trago,
yo voy a protegerte”.
“Mmm…” Respondió Lan Wangji, sintiéndose seguro.
Volviendo a besar sus labios, Wei Ying notó entonces el lugar en el que se encontraban, en
ese hermoso y pacifico estanque frio, el cual rozaban con la punta de sus botas estando
sentados en la orilla.
“Lan Zhan… ¿Por qué estamos aquí?” Pregunto Wei Ying curioso.
Respondiendo a su pregunta, Lan Wangji dijo: “Es un estanque frio natural, muy saludable,
nos ayudara con las heridas y el dolor de los azotes del castigo”.
Asintiendo sorprendido, Wei Ying dijo: “Oh… Ya veo…”
Volviendo a desviar la mirada al estanque natura, Wei Wuxian se distrajo viendo todo el
espectáculo natural frente a sus ojos, rodeados de hermosa vegetación en todos los tonos de
puro verde y flores de invierno a punto de florecer. Mientras que Lan Wangji volvió a
ponerse manos a la obra, y encargándose de todo, se quitó la ropa y luego le quito la ropa a
Wei Wuxian, dejando estas prendas dobladas y bien ordenadas en la orilla, permitiendo que
ambos pudieran entrar juntos en el agua.
“Aiya… Lan Zhan… Esta helada” Se quejó Wei Wuxian, saltando a los brazos de su alfa
cuando sus piernas entraron en el estanque casi congelado.
“Mmm… Es un estanque frio”.
Rodeando la cintura de su alfa con sus piernas mientras lo abrazaba por el cuello, Wei Ying
siguió quejándose en susurros, mientras la fría agua comenzaba a subir por todo su cuerpo:
“Aiya… Está muy frio”.
Tomando a su omega delicadamente de la cintura y los muslos, Lan Wangji sin estar
perjudicado por el frio estanque al estar acostumbrado a dicha temperatura, entro lentamente
en el estanque intentando dejar que su omega se acostumbrara al ambiente despacio: “Respira
Wei Ying, te abrazare para que no sientas frio”.
“Aun siento frio…”
“Entonces te abrazare más fuerte”.
Sin poder evitarlo, Wei Wuxian estallo en carcajadas con esas palabras, sintiendo como el
agua helada subía más y más mientras su prometido entraba más profundo en el estanque,
llenándolo de temblores y escalofríos por el ambiente, pero también calmado y cubriendo las
recientes heridas de su dolida espalda. Llegando a la parte más profunda del estanque, la cual
cubría casi todo su cuerpo hasta un poco más debajo de sus hombros, Lan Wangji detuvo su
avance, dejando que Wei Ying se acostumbrara y se relajara dentro del agua.
Sin embargo aprovechando que sus cuerpos estaban cubiertos por el agua y que nadie podía
verlos en esa posición, pronto las manos de Lan Wangji fueron a las nalgas del mayor,
sosteniéndolo de esa parte de su cuerpo, sorprendiendo gratamente a Wei Wuxian.
“Vaya… Lan Zhan… ¿Acaso estas ansioso?” Pregunto el mayor con una sonrisa divertida:
“Ahora que lo recuerdo, ayer no tuvimos una noche de amor ¿Verdad?”
Intentando sonar no tan ansioso al respecto, Lan Wangji respondió: “Mmm”.
“Ya veo… Entonces puedes seguir, úsame tanto como quieras, después de todo soy tu
esposa…”
“Wei Ying…” Susurro Lan Zhan avergonzado, dejando que el mayor le diera un beso.
“Estamos en agua Lan Zhan, nunca antes lo hicimos en el agua ¿Crees que entre agua
adentro?”
“¡Wei Ying!”
“Ya veo… ¿Quieres meter agua adentro entonces? Espera Hanguang-Jun, no tan rápido,
realmente el agua está entrando… ¡Es en serio Lan Zhan! El agua está entando de verdad, de
verdad… Se siente raro… Ten piedad de tu pobre esposa…”
***
“Wei Ying… ¿Escuchaste A-Yi? Wei Ying…” Siguió repitiendo Wei Wuxian, sonriéndole a
su pequeño sobrino.
Sentado frente a una mesa baja, mientras revisaba algunos documentos importantes sobre su
matrimonio que le habían enviado desde su hogar, Jiang Cheng sonrió ligeramente y en
secreto, distrayéndose por un segundo de sus deberes.
Los días siguieron pasando, y lo que antes se contaba cómo semanas, ahora solo como días.
Faltaban doce días para su boda.
Muchas de las invitaciones al gran evento ya habían sido mandadas, y con varios días de
antelación uno de los salones más lujosos de Gusu de había adecuado para semejante
acontecimiento, mientras se realizaban algunos de los últimos preparativos para la ceremonia.
Y Jiang Cheng solo podía estar ansioso y estresado por todo, mirando los arreglos, invitados,
y lo más importante: sus padres.
Había retrasado la llegada de Jiang Fengmian y Yu Ziyuan casi hasta el final de los
preparativos, lo más que podía, pero sabía que aquello no duraría para siempre. Esa misma
mañana ellos habían partido desde Yunmeng y llegarían en menos de una semana. Y
levantando la mirada de los documentos para ver a su hermano y a su hijo, solo pudo volver a
sentirse angustiado, con ese terrible sentimiento de opresión en el pecho, ese que tenía
siempre que pensaba con pavor en lo que le dirían sus padres cuando vieran a Jingyi.
“Wei Ying… Recuérdalo, Wei Ying” Siguió repitiendo Wei Wuxian con una sonrisa, mientras
seguía jugando con el cachorro de Jiang Wanyin.
Poniendo un rostro de extrañeza, Jiang Cheng pregunto: “¿Qué rayos estás haciendo?”
Girándose para ver a su hermano con una sonrisa divertida, Wei Wuxian dijo: “Las señoras
que cuidan a A-Yi dijeron que pronto comenzara a hablar, así que quiero que su primera
palabra sea el nombre de su querido tío favorito”.
Poniendo una mala cara, Jiang Cheng pregunto: “¿Quieres que diga ‘Lan Wangji’ o ‘Jiang
Yanli’ entonces?”
“Gracioso…”
El crecimiento del pequeño Lan Jingyi ahora era innegable. Sus días como un pequeño bebé
de un tamaño menor a los de un beta habían terminado, ahora a casi sus 7 meses de vida no
solo se sentaba solo y había comenzado a abandonar la leche materna como único alimento,
también había casi duplicado su tamaño y peso inicial, viéndose como todo un pequeño niño
alfa, siendo uno de los más grandes de todos los que algunas omegas en Gusu cuidaban.
Pronto comenzaría a soltar sus feromonas, y se comportaría mucho más posesivo con Jiang
Cheng como su propio instinto; empezando sus días como un pequeño alfa en desarrollo.
“No seas tonto” Lo regaño Jiang Cheng, volviendo a sus documentos: “Tu nombre es
demasiado complicado para ser una primera palabra, seguro dirá mamá o papá como todos
los demás”.
Frunciendo el ceño, mientras tomaba las manos de su pequeño sobrino, Wei Wuxian reclamo:
“Podría pasar…”
“No sucederá” Negó Jiang Cheng convencido.
Sabiendo todo el estrés que pasaba su hermano, Wei Ying solo podía intentar ayudarlo con lo
que estaba en sus manos, cuidando del pequeño Jingyi lo mejor que podía, e intentando
ayudarlo con algunos mandados cuando no estaba en sus castigos o con Lan Zhan. Sabia la
razón por la que su hermano no quería a su familia cerca para ayudarlo, pero también lo
lamentaba por lo difícil que le resultaba hacerlo todo solo, sintiéndose triste también por que
no podía ayudarlo.
“Aiya… Jingyi… Trata, trata…” Pidió Wei Yin haciendo un puchero, intentando que el
menor gateara.
“¿Aun no?” Pregunto Jiang Cheng.
“¿Por qué no le gusta gatear? No lo entiendo…” Reclamó Wei Ying.
“Elegante como todo un Lan, ellos no gatean, seguro comenzara a caminar directamente”.
Riendo de las palabras de su hermano, Wei Ying se agacho y le dio un suave beso en la frente
al menor, mientras seguía sosteniendo sus pequeñas manos: “Camina pronto entonces… ¿De
acuerdo?”
Mirando a ambos sentados en el piso, Jiang Cheng volvió a sonreír, pensando en decir algo
más al respecto.
Sin embargo una gran explosión sonó en todo El Receso Entre Las Nubes, asustando a Jiang
Cheng y Wei Ying, los cuales se miraron el uno al otro aterrados.
“¿¡Que fue eso!?” Pregunto Jiang Cheng aterrado, poniéndose de pie.
Tomando a Lan Jingyi de inmediato, Wei Ying solo pudo susurrar: “Lan Zhan…”
Preocupado, Wei Wuxian solo pudo pensar en que su alfa estaba entrenando con otros
estudiantes de la secta antes de las clases del maestro Lan Qiren, temiendo que algo pudo
pasarle. Mientras que Jiang Cheng pensó igualmente en Lan Huan, el cual había salido a una
reunión muy temprano.
Sin decir ninguna palabra, ambos hermanos rápidamente salieron del pabellón privado de
Jiang Cheng, mientras Wei Ying llevaba al pequeño Jingyi en sus brazos, corriendo
rápidamente al centro de la secta. Topándose con otras personas confusas en su camino,
cuando llegaron al salón principal de la secta, ambos omegas se toparon con una
aglomeración de personas asustadas, entre las cuales resaltaban sus dos alfas junto a su padre
frente a todos.
Mientras banderas rojas con el sol pleno comenzaban a notarse en el horizonte.
Capítulo 11.

El silencio reinó en la sala.


Sentado solo en una mesa de forma nerviosa, Wei Wuxian se lamentaba de que su primera
labor como “líder” de la secta Yunmeng Jang fuera en tales condiciones, mirando todo muy
ansioso. De una forma lenta pero sumamente elegante, los sirvientes de la secta Gusu Lan
pasaban frente a todas las mesas bajas de los importantes presentes, sirviendo té de la mejor
categoría e intentando tener contento a su inusual e indeseado invitado.
Wen Chao, el segundo hijo de Wen Ruohan.
Aquella se había designado como una reunión únicamente de líderes, o de los representantes
de las sectas presentes de Gusu, así que solamente niños que ni siquiera habían sido
preparados para el cargo como Nie Huaisang y Qin Su fueron obligados a asistir, teniendo
sobre sus espaldas no enfurecer a Wen Chao y mantener a sus sectas con vida.
Las fuerzas enteras de la secta Qishan Wen tomaron Gusu, sobrepasando de manera
exponencial a todos los cultivadores presentes, demostrando su clara supremacía.
Recibiendo el té, Wei Wuxian sonrió de forma amble, haciendo una ligera reverencia antes de
beber un trago de la fragante sustancia, mirando de reojo como Lan Xichen en la mesa de al
lado no sonreía ni un poco, sin apartar la mirada de Wen Chao, luciendo enfadado por
primera vez ante los ojos de muchos de los presentes. Como se había designado, ni Lan
Wangji ni Jiang Wanyin pudieron entrar a la reunión, pues solo eran las parejas de los lideres,
así que tras recibir ciertas instrucciones de Jiang Cheng que había servido como líder
suplente de su secta por muchos años antes de él, Wei Wuxian supo que debía apoyar a Lan
Xichen al ser su secta hermana y principal aliada por sus matrimonios, y que no debía pelear
con Wen Chao por más irritante que fuera.
Wei Wuxian no pudo prometérselo a su hermano y a su prometido, pero juró que lo
intentaría.
Cuatro mesas principales estaban al frente de Wen Chao, las pertenecientes a las sectas más
poderosas y conocidas de las regiones más grandes, siendo: la secta Qinghe Nie con Nie
Huaisang como el líder suplente, la secta Lanling Jin con Qin Su como líder suplente, la secta
Gusu Lan con su líder Lan Xichen, y la secta Yunmeng Jiang con su líder Jiang Wuxian.
Mientras que las demás sectas presentes no tan importantes pero aun así fuertes tomaron sus
lugares detrás de todos ellos, tales como la secta Moling Su con su líder Su She, y la secta
Cheng Yu con su líder Yu Cayase; el sobrino de Yu Ziyuan y el primo de Jiang Cheng.
Mientras que de forma arrogante, tomando la parte superior del salón donde debería haber
estado situado Lan Xichen como el líder de la secta donde se estaba tomando la reunión,
estaba Wen Chao, sentado de forma descuidada en el lugar ancestral de todos los lideres Lan,
siendo escoltado por todos sus guardias personales; los cuales curiosamente eran solo alfas.
Llevando el suave pero sabroso te de jazmín a sus labios, Wen Chao olio el fragante aroma
antes de dar un sorbo de cuantioso liquido: “Delicioso… Tan suave, tan puro, tan… Difícil y
salvaje” Susurro con una sonrisa, mirando en dirección a Lan Xichen.
Presionando la mandíbula con fuerza, Lan Xichen miro aún más furioso a Wen Chao,
reprimiendo por poco sus feromonas para no ser descortés, realmente fuera de sí mismo por
el enfado. Mientras que ajeno a todo esto, Wen Chao miro como la servidumbre de Gusu
terminaba de servir el té y estaba punto de retirarse, chasqueando los dedos de forma
descortés y señalando su taza, sorprendiendo a la servidumbre de Gusu, que nunca había sido
tratada de esa forma tan poco propia. Así que mirándose de forma confusa, finalmente
decidieron volver con el líder Wen y rellenar su taza, dejando una tetera del fragante té para
este, haciendo reverencias antes de irse; reverencias que Wen Chao no correspondió y miro
con repudio.
“Joven maestro Wen ¿Podemos saber a qué se debe su inesperada visita?” Pregunto Lan
Xichen, harto de la situación y queriendo acabar con todo.
Tomándoselo con calma, como si no tuviera ningún tipo de presión, Wen Chao respondió:
“Escuchamos que habría una boda, es una lástima que la secta Wen no fuera invitada”.
“Las invitaciones a la boda aún no se han enviado líder de la secta, y por supuesto que usted
y su padre estaban contemplados como invitados a la celebración” Aclaro Lan Xichen, sin
usar su usual tono amable ante ese hombre.
Mirándose divertido con los hombres que lo acompañaban, Wen Chao pregunto: “¿Qué hay
de mi hermano entonces? ¿Él está invitado también?”
Ladeando la cabeza un poco confuso, Lan Xichen pregunto: “¿Disculpe?”
Haciendo un comentario inocente en salvación de Lan Xichen, temiendo que hubiera una
pelea por lo que diría, Nie Huaisang rápidamente dijo: “Eso sería imposible aun si todos
nosotros quisiéramos ver al joven Wen Xu aquí, la tradición prohíbe que salga de los
territorios de Qishan. No sería propio verlo paseando fuera de Sin Noche solo por una boda”.
Sonriendo por la obviedad de las palabras de aquel a quien consideraba un tonto alfa, Wen
Chao dijo: “Brillante, realmente brillante, debería aplaudirte de pie ¿No lo crees? Si mi
hermano intenta salir de Sin Noche aun si es para comer un níspero ¿Quién va a detenerlo?
¿Tu secta? ¿Tú lo harás? ¿Si quiera eres un alfa?”
Bajando la mirada algo triste por aquellas palabras de las cuales no sabía cómo responder,
Nie Huaisang únicamente cubrió su rostro con el abanico que portaba ese día, intentando no
ocasionar más problemas. Algo que causo más risas en los invitados de la secta Wen,
principalmente en Wen Chao.
Era conocida la obsesión del segundo hijo de la secta Wen por ser un alfa. Su hermano mayor
era un omega y su padre un alfa, así que cuando nació como un beta, ocasiono un gran
problema a su autoestima como dicen los rumores. Así que desde el inicio de su juventud,
cuando fue anunciado como el líder de Qishan Wen tras el compromiso de Wen Xu con Nie
Mingjue, Wen Chao se obsesiono con aparentar que era un alfa intentando ocultar su
naturaleza beta, a pesar de que todos en las sectas más importantes sabían su género.
Acostándose con los omegas más hermosos de todo Qishan, rodeado de alfas a los que
ordenaba llenarlo de sus feromonas, portándose orgulloso y superior solo como se le permitía
a un alfa; ese era el tipo de comportamiento que aquel tenia.
Sin embargo las diferencias no se podían evitar, y aunque Wen Chao había hecho hasta lo
imposible para imitar a su padre con su apariencia en general y todos sus rasgos más
característicos, se veía minúsculo entre alfas altos y fornidos, además de patético intentando
pretender tener feromonas que eran obviamente falsas para todos los alfas y omegas que lo
conocían. Pasando como un joven ridículo y resentido ante todo aquel que lo conocía.
Decidiendo responder la pregunta que le había hecho Lan Xichen con anterioridad, Wen
Chao finalmente dijo: “Tu tío sabe la respuesta ¿Acaso no te dijo sobre la advertencia de la
secta Qishan Wen?”
Sintiéndose confuso pero sin demostrarlo, Lan Xichen respondió: “No lo hizo ¿Es algo
importante de lo que deba enterarme?”
Negando con la cabeza con burla y aparentando pena, Wen Chao se lamentó: “Es una pena la
situación de la secta Gusu Lan, un omega no puede ser un buen líder sin un alfa, son criaturas
tontas y banales, ni siquiera pueden valerse por sí mismo en una pelea… Supongo que como
líder lo compruebas una vez más, ese tibio omega que ridículamente mantienes a tu lado te ha
humillado, así como siempre humillo a tu padre. No puedo hacer más que compadecerme de
ti, de líder de una secta a otra”.
Sonriendo de una forma algo divertida, tomando aquel ataque como algo personal, Wei
Wuxian rápidamente dijo: “Disculpe mi atrevimiento Wen Gonzi, no quiero sonar como una
criatura tonta, pero temiendo equivocarme puedo afirmar que usted… Ya no es el próximo
líder de la secta Qishan Wen ¿Me equivoco?”
Perdiendo su sonrisa para poner una mueca de enfado, Wen Chao no respondió esas palabras,
solamente mirando a Wei Wuxian, el cual continuo hablando: “Entonces siguiendo la línea de
sus palabras, es una pena que el próximo líder de la secta Wen sea un omega, que según lo
que usted mismo dice seguramente caerá en desgracia por este hecho. Se lo digo con respeto,
de líder a líder”.
Escuchando aquellas palabras tan provocativas provenientes de un omega, Wen Chao solo
pudo sonreír con fiereza, amenazando: “Disfruta de tus palabras sin sentido aquí en Gusu, en
Qishan a los omegas sucios e indecentes no se les permite insultar alfas”.
Sonriendo aún más al escucharlo, Wei Ying calló, pero todos los presentes sabían lo que le
hacía tanta gracia a Wei Wuxian, pues Wen Chao no era un alfa, así que ni siquiera en Sin
Noche podrían castigarlo por decirle algo así. Sonriendo por un segundo por aquellas
palabras, Lan Xichen observo como uno de los miembros de la guardia de Wen Chao se
acercaba a él, y con mucha rudeza por muy poco le arrojó un pergamino enrollado y bien
decorado con el escudo de la secta Wen.
Sintiéndose curioso por aquello que había recibido en las manos, Lan Xichen respiro
profundo para no enfadarse y no reaccionar ante aquellas provocaciones, decidiendo abrir el
pergamino con cuidado. Observando como con letra muy pulcra en ese pergamino había un
mandato del mismo Wen Ruohan se sintió muy perturbado, pues no solo era algo muy
delicado lo que había ahí escrito, también estaba el hecho de que Lan Qiren se lo había
ocultado, algo que lo preocupaba más aún.
“¿Qué significa todo esto?” Pregunto Xichen tras leer el pergamino.
Aclarándose la garganta después de haber bebido más del delicioso té que le habían
entregado, Wen Chao respondió: “Bajo mandato y orden de la secta Qishan Wen, declaramos
las instrucciones en la secta Gusu Lan como algo ilegal y que atenta ante nuestra supremacía
como una secta, pidiendo su disolución inmediata y la prohibición permanente de estos actos
ilícitos”.
“¿Actos ilícitos?” Pregunto Lan Xichen sintiéndose sumamente confuso: “Las instrucciones
en la secta Gusu Lan son como cualquier otra reunión de jóvenes cultivadores, se hacen cosas
similares en Lanling o en Qinghe. Además las instrucciones dadas por mi tío son repetidas
cada 5 años para los cultivadores más prometedores de cada secta, se ha hecho así por
décadas”.
“Si, lo sabemos, tenemos mucha constancia de eso” Dijo Wen Chao sin interés en lo que le
decían: “Pero la secta Qishan Wen no planea admitir que jóvenes cultivadores sean
manipulados en nuestra contra con ideologías en contra de la nuestra, somos la secta más
poderosa, así que nosotros decidiremos que clase de cosas puede aprender o no un cultivador.
Ya no será más una decisión del consejo de sectas o de la secta Gusu Lan, ahora todos
ustedes deberán aprender y regirse bajo las leyes de Qishan”.
Al escuchar esas altaneras palabras, todos los presentes se miraron entre ellos, muy confusos.
Era verdad que muchos de los presentes no eran los líderes de sus sectas o tan solo herederos
por el momento, pero Wen Chao se refería a ellos como escoria, así como si les hablara a
unos sirvientes. Y sin entender menos a que se refería esa nueva autoridad auto asignada,
ninguno podía creer lo que escuchaban, sintiéndose ofendidos al asumir que Wen Chao les
pedía que bajaran la cabeza ante él.
Siendo la más ofendida ante ello, al ser criada como una diplomática la cual respetaba a todos
y representaba a su secta en situaciones difíciles, Qin Su pregunto ofendida: “Disculpe joven
maestro Wen ¿A qué se refiere cuando habla de que nosotros deberemos regirnos bajo las
leyes de la secta Qishan Wen? Cada secta tiene su propia autonomía desde hace siglos,
teniendo algunas leyes en común, pero que se acuerdan por el consejo de los líderes de las
sectas, un consejo que se realiza cada año y al cual su secta se negó a asistir por más de una
década. Si está un poco confundido respecto a las leyes y acuerdos que tenemos entre todos
en estas reuniones, fácilmente podemos resolver sus dudas. No hubieron imposiciones de una
secta a otra desde hace siglos, cuando ocurrieron las guerras que dividieron el territorio”.
“Bueno, supongo que eso se acabó” Respondió Wen Chao, mirando a Qin Su de forma
altanera, así como miraba a todos los omegas: “La secta Wen exige que todas las sectas desde
ahora aprendan sus leyes y las sigan desde ahora”.
Creyendo entender a lo que se refería Wen Chao, Lan Xichen lo miro confuso preguntando:
“¿Eso qué significa? ¿Qué la secta Wen quiere enseñarnos sus preceptos?”
“Claramente líder de la secta Lan, pero seguiremos las normas que usualmente se rigen en las
demás conferencias de cultivadores” Explico Wen Chao sin perder su sonrisa burlona: “Por lo
que, según mandato de la secta Wen, todos los jóvenes cultivadores que vinieron a estudiar a
Gusu deben ser conducidos de inmediato a Ciudad Sin Noche para un adiestramiento de un
año”.
Al escuchar esas alarmantes palabras, todos los presentes se horrorizaron, pues de lo que
hablaba Wen Chao era de algo similar a un secuestro. Los planes originales de todos ellos era
estar un año en Gusu, con un receso de un mes después de la boda de Lan Xichen y Jiang
Cheng; ninguno de ellos tenía planeado ir a Qishan, mucho menos tenían el permiso de sus
sectas. Sin embargo por las palabras de Wen Chao no parecía que este se interesara
demasiado por los permisos o porque estos pudieran pedir permisos a sus sectas; no parecía
tener la intención de esperar.
Ofendiéndose aún más por lo que acababa de escuchar, Lan Xichen se negó de inmediato:
“Wen Gonzi, todas las sectas presentes son invitadas y protegidas por la secta Gusu Lan,
como anfitriones no podemos permitir una decisión tan arbitraria para dejar que todos ellos se
vayan a una nueva conferencia de cultivación de una manera tan repentina…”
Sin dejar que Xichen terminara de hablar, Wen Chao puso un rostro sorprendido,
preguntando: “¿Entonces estas negándote?”
Al escuchar esas palabras que sonaron mucho más amenazantes aun, todos los presentes
guardaron silencio, observando como los guardias que resguardaban a Wen Chao daban un
paso adelante, sujetando sus espadas en sus manos, con una clara pero silenciosa advertencia
para los presentes.
“Temo que no está en el poder de negarse, líder de la secta Lan” Dijo Wen Chao con
seriedad, mirando a Lan Xichen fijamente: “Aun si lo intenta con todos los cultivadores
jóvenes y experimentados que hay en su secta, contando todas las fuerzas que tenemos en El
Receso Entre Las Nubes y los pequeños pueblos aledaños, acabaremos con todos sin mucho
esfuerzo”.
Así como Wei Wuxian había pensado y se había dado cuenta, las fuerzas de todos unidos eran
poca cosa para todos los Wen, así que no tenían oportunidad, por más que lucharan e
intentaran mantener su firmeza, Wen Chao los mataría a todos de negarse a sus arbitrarias y
caprichosas decisiones.
Volviendo a sonreír al ver el rostro de temor y circunstancia de todos los presentes, Wen
Chao dijo: “Bueno, más vale que todos empiecen a empacar. Solo los cultivadores sin
experiencia según el consejo de líderes serán admitidos en esta nueva reunión de
cultivadores”.
Y volviendo a mirar a Lan Xichen a los ojos, como en un tono de burla pero con mucha
seriedad, Wen Chao repitió: “Solo los cultivadores sin experiencia serán admitidos”
***
“No iras”.
Girándose sorprendido al escuchar a su alfa con ese tono tan fuerte, Jiang Cheng se giró
sorprendido, dejando de caminar.
“¿Por qué no lo haría?” Pregunto el omega Jiang mirando a su prometido.
Lan Huan entonces avanzo en dirección a Jiang Cheng, tomándolo del brazo: “No iras”.
Después de las órdenes dadas por Wen Chao, el caos absoluto reinó en El Receso Entre Las
Nubes. Muchos de los jóvenes presentes intentaron mandar mensajes a sus padres, pero todas
las mariposas mensajeras eran interceptadas y destruidas por los guardias Wen; que parecían
querer mantener a todos incomunicados. Según las ordenes de Wen Chao, quien seguía en la
secta Lan dando órdenes como si fuera el líder, todos tenían menos de una hora para arreglar
sus cosas antes de abandonar Gusu en dirección a Caiyi Town, donde en los puertos casi toda
la flota de barcos Wen había anclado, con la única indicación de llevar a los jóvenes y a la
armada Wen de regreso a Sin Noche.
Después de que la reunión de líderes se disolviera, Jiang Cheng se enteró de que las ordenes
eran moverse a Sin Noche en corto tiempo, así que actuando de prisa ayudando a Wei
Wuxian a ordenar a la secta Yunmeng Jiang, también corrió a sus habitaciones a arreglar sus
pertenencias y hablar con personas de la secta para decidir quién cuidaría a su hijo mientras
él faltara. Lan Xichen por su parte se quedó junto a Wen Chao y los demás consejeros de la
secta Lan, la situación era tan grave que incluso QingHeng-Jun dejo su reclusión para hablar
con el arbitrario y tonto chico, intentando hacerlo entrar en razón. Pero todo intento fue vano,
Wen Chao no parecía querer recapacitar de las órdenes dadas.
Así que sin poder esperar más, absorto en el caos del consejo y el caos que se vivía en los
pasillos de su secta, Lan Huan solo pensó en volver a su habitación a ver a su omega,
encontrándose con Jiang Wanyin preparándose para irse.
Poniéndose serio pero también intentando ser razonable, Jiang Cheng pregunto: “Dame una
buena razón para no hacerlo”.
Sin soltar a Jiang Wanyin, Lan Xichen dijo: “Tú también lo notaste, la forma en la que Wen
Chao te miraba…”
“Para, no seas ridículo” Se quejó Jiang Cheng, soltándose del agarre de su prometido para
seguir recogiendo sus cosas, minimizando sus palabras como simples celos de alfa.
“Estoy hablando en serio Yin Yin, no quiero que tu vayas… Solo a Sin Noche ¿Quién te
protegerá entonces?”
“Yo voy a protegerme solo” Sentencio Jiang Cheng, caminando al baúl donde tenía sus cosas
para comenzar a guardar sus pertenencias.
Bufando con molestia, Lan Xichen se sintió más desesperado aun, intentando hacer
recapacitar al menor, pero sin saber realmente como hacerlo. Pero Jiang Cheng estaba
decidido, así que recorriendo el pabellón, siguió tomando sus pertenencias para llevarlas de
un lado al otro, apresurado por el tiempo.
Angustiado, Lan Huan volvió a suplicar: “A-Cheng…”
Hartándose de la situación, Jiang Wanyin se giró y encaro nuevamente a su alfa, mirándolo a
los ojos: “Escúchame, cállate y escucha. Soy un cultivador, uno sin experiencia, entro en el
perfil exacto de las peticiones ridículas de Wen Chao, no veo por qué debería tener algún tipo
de preferencia…”
“Eres mi prometido, mi esposa” Le recordó Lan Huan, intentando hacerlo razonar: “Si esto
hubiera pasado en dos semanas ya serias tomado como un cultivador con ‘Experiencia’ y no
tendrías que hacer esto”.
Lan Huan ya era tomado como un cultivador con experiencia ante los líderes de las demás
sectas. Para los alfas y betas, convertirse en un cultivador con experiencia significaba cumplir
con ciertos requisitos referentes a una buena cultivación, tales como tener una edad propia y
haber conseguido cierto tipo de logros; tales como vencer monstruos poderosos en cacerías
nocturnas, o tener buenos rangos en las posiciones de las listas de los cultivadores más
fuertes.
Mientras que un omega se volvía un cultivador con experiencia al casarse con un alfa o con
un beta que le permitiera ser su pareja de cultivo.
“Si, pero no pasó” Le recordó Jiang Wanyin, negando suavemente con la cabeza.
Suspirando con enfado, Lan Xichen solo pudo sostener al menor por la cintura, sin saber
cómo decir toda la frustración y temor que sentía en ese instante.
“A-Yi…” Susurro el alfa, intentando jugar su última carta.
Enfadándose, Jiang Cheng reclamó: “No, no hagas eso, no te atrevas a hacerlo”.
Dándose por vencido ante la voluntad del contrario, Lan Huan solamente pudo volver a
suspirar con resignación, bajando la mirada tristemente. Observando la tristeza en el rostro de
su alfa, Jiang Wanyin sonrió dulcemente para este, acariciando una de sus mejillas,
intentando decirle algo para hacerlo comprender: “Luche toda mi vida para que me vieran de
una forma distinta la esposa de alguien más, yo también soy fuerte, soy un buen cultivador, y
me esforzare siempre para demostrarlo. Sé que estas preocupado, pero es algo que debo hacer
como todos los demás; hasta Wuxian asistirá a pesar de ser el heredero de mi secta”.
“Wei Gonzi ira con Wangji”.
“Entonces yo iré con ambos, si eso te hace sentir más tranquilo” Dijo Jiang Cheng
rápidamente.
Lan Xichen no se notó muy convencido, pero sin querer discutir más, solo pudo sostener a
Jiang Cheng de forma cariñosa contra su cuerpo, creyendo que ambos tenían todo el tiempo
del mundo para amarse. Sin embargo Jiang Wanyin sabía la verdad, y recordando que solo
tenía una hora para arreglar todo, beso una de las mejillas de su alfa para separarse de él,
intentando volver a preparar su equipaje.
“Confía en mí, te lo pido, confía en mi” Suplico Jiang Cheng: “Estaré bien, volveré bien a
ti…”
Sin responder por no estar convencido en lo absoluto, Lan Xichen solamente se concentró en
ayudar a su omega a empacar tristemente, doblando sus túnicas y poniendo sus objetos
personales en su baúl. Cuando las cosas de Jiang Wanyin finalmente estuvieron listas tras
algunos minutos, Lan Huan se encargó de llevar las cosas de este fuera de su pabellón
privado, mientras que saliendo detrás de su alfa, Jiang Cheng desvió su camino a un pabellón
cercano.
“Hola mi amor…” Dijo con una sonrisa, acercándose a su hijo.
Lan Jingyi, el cual estaba en los brazos de dos omegas que cuidaban niños, jugando
despreocupado en ese pabellón privado, se dio cuenta de la presencia de a quien reconocía
como su madre y comenzó a reír, extendiendo su manos en su dirección. Sonriendo
tristemente, Jiang Cheng lo tomo en sus brazos, mirando que había estado jugando con
algunos pinceles para distraerse.
“¿Tu lo hiciste? Es tan bonito ¿Estás seguro de que serás un cultivador? A-Yi es tan bueno en
todo, podría ser un gran artista” Lo alagó.
Quedándose algunos pasos lejos de su omega, Lan Xichen observo como este se despedía de
su hijo, sintiéndose mucho más triste aun, pero sabiendo que no podía hacer nada al respecto.
Besando delicadamente una de las mejillas de su bebé, el cual seguía riendo ajeno a todo lo
que sucedía, Jiang Cheng pidió: “Por favor se bueno, obedece a papá que te cuidara solo, y a
todas las lindas señoritas que te cuidaran en el ala de los omegas. Se amable con tus amigos,
y comete las zanahorias en el desayuno ¿De acuerdo?” Pidió Jiang Cheng, negándose a llorar.
Acercándose nuevamente al rostro de su bebe, dándole un último beso en la frente, le pidió
en un susurro: “Que tu primera palabra sea mamá o mi nombre ¿De acuerdo?”
Volviendo a reír sin entender nada, Lan Jingyi disfruto del cariño de Jiang Cheng, y
extendiendo sus brazos en su dirección, también correspondió su abrazo de cierta forma.
Tomándose su tiempo para separarse de su cachorro, Jiang Cheng finalmente le devolvió su
bebé a las mujeres que lo cuidaban, agradeciéndoles por su ayuda y dándoles unas últimas
indicaciones.
“Se bueno A-Yi, mamá volverá pronto” Prometió Jiang Cheng, regresándole al menor el
pincel con el que dibujaba: “Te amo…”
Dándole una última mirada, Jiang Cheng regreso con Lan Xichen cabizbajo, completamente
dolido pero negándose a llorar, tomándose de la mano de su alfa para no voltear y no
romperse en ese mismo instante. Mientras que Lan Jingyi siguió ajeno a todo lo que sucedía,
pensando que sería como un día cualquiera, en el que pasaría el día siendo cuidado por otros,
para regresar con su madre por la noche para recibir su cariño y dormir abrazado a él
teniendo dulces sueños. Sin saber que en realidad no regresaría a verlo ese día, ni tampoco el
siguiente.
Caminando de forma sombría al lado de su prometido en completo silencio por el dolor de la
despedida, Lan Huan ayudo a Jiang Cheng a llevar sus cosas fuera de Gusu, y siguiendo a
todos los demás, ambos caminaron por el largo camino desde El Receso Entre Las Nubes
hasta Caiyi Town, donde estaban las barcas que los llevarían.
Por su parte Lan Wangji y Wei Wuxian también se encargaron de preparar sus cosas y a sus
sectas, ya que ambos serían los líderes en ese viaje, Wei Wuxian como un Jiang, y Lan Zhan
en reemplazo de su hermano.
Aunque Lan Wangji estaba preocupado y tenía muchas cosas en la cabeza por las
instrucciones que le dieron en su hogar, Wei Wuxian se lo tomaba con mucha calma, y
pensando únicamente en mejorar su cultivo, ansiosamente esperaba los torneos donde
planeaba aplastar a Wen Chao como su nuevo objetivo.
Al llegar a Caiyi Town los jóvenes presentes se dieron cuenta de que las cosas en Sin Noche
no serían nada simples al parecer. Eran demasiadas personas las cuales deberían viajar, no
solo por parte de los Lan y sus invitados, los Wen y sus fuerzas también ocupaban un sitio en
los barcos, así que el espacio era limitado. A pesar de su posición privilegiada como
sucesores de sectas o líderes de estas, tales como el caso de Wei Wuxian y Su She, fueron los
soldados y los miembros de la secta Wen quienes obtuvieron lugares amplios y viajes
cómodos; siendo Wen Chao quien ocupo solo un barco entero donde podían entrar más de 15
personas. Mientras que en los barcos restantes amontonaron a los invitados, obligándolos a
sentarse en el piso o en sus baúles con pertenencia a falta de espacio.
“Sera un viaje interesante ¿No lo crees Lan Zhan?” Pregunto Wei Ying riendo, dejando
pesadamente su baúl en una de las barcas.
Haciendo lo mismo que su prometido pero de una forma un poco más delicada, Lan Wangji
respondió: “Mmm”.
Sonriendo aún más, mientras ayudaba a algunas de las personas de su secta que irían con
ellos, Wei Wuxian comento: “Solo debes poner una buena cara Lan Zhan, mientras estemos
los tres juntos, nada pasara; o esa es la lógica de mi Shijie, y eso nunca nos falló a Jiang
Cheng o a mí”.
“¿Tu Shijie?” Pregunto Lan Wangji confuso.
“Tu confía en mi” Pidió Wei Ying sin querer dar más explicaciones, acercándose al menor
para besar una de sus mejillas.
Mientras que en el puerto, a pesar de estar a punto de partir, Jiang Cheng seguía aun al lado
de Lan Xichen, tomándolo de la mano e intentando tranquilizarlo.
“… Entonces volveré a salvo, y me casare contigo de inmediato” Prometió el menor,
sonriéndole y mirándole a los ojos.
Aquella situación que era infernalmente difícil para Lan Huan, el cual aún se negaba a dejar
ir a su prometido solo pues no podría protegerlo, le hizo responder: “Lo sé, o lo espero”.
“¿Acaso estas dudando? Que idiota, claro que me casare contigo…”
Sin poder continuar de hablar, pronto sonaron los avisos de que los últimos barcos estaban a
punto de zarpar, así que sin tener otra opción, Lan Huan acompaño a Jiang Cheng a su bote,
donde todos estaban acomodados y a punto de zarpar.
“Cuídese mucho Zewu-Jun, no olvide practicar su flauta todos los días” Le recordó Wei
Ying, cuando el mayor fue a despedirse de ellos.
“Lo hare joven Wei” Prometió Lan Huan sonriendo, recordando que ambos habían tocado los
instrumentos de viento juntos un par de veces los anteriores días.
“Cuídate, hermano” Pidió Lan Wangji, mirando a su hermano fijamente.
Lan Xichen forzó una sonrisa y asintió suavemente con la cabeza, únicamente mirando a su
pequeño hermano menor con una única cosa en su mente: Que cuidara a Jiang Cheng. Una
petición que Lan Wangji entendió sin necesidad de que el contrario pronunciara una palabra.
Aun en el muelle, a punto de subir a su barco, Jiang Cheng se despidió de su prometido
abrazándolo por el cuello, recibiendo un estrecho y cariñoso abrazo en respuesta de Lan
Huan, quien no quería que este se fuera: “Por favor, espera a que regrese para casarnos,
mantén los planes para la boda…” Pidió Jiang Cheng muy preocupado.
“Lo hare, mantendré todo lo como lo dejaste” Prometió Lan Xichen de forma decidida.
“También… A-Yi…” Susurro Jiang Wanyin, negándose a quebrarse: “Su primera palabra, no
olvides decírmela, no olvide cuidarlo y… Por favor abrázalo todas las noches”.
Entendiendo lo difícil que era para el menor dejar a su bebé, Lan Xichen rápidamente
respondió: “Lo cuidare bien, me asegurare de que este a salvo”.
“Por favor calma sus pesadillas” Suplico Jiang Cheng, aferrándose fuertemente a su alfa: “Y
tú también… No tengas pesadillas”.
Entendiendo de que aquella era la forma en la que Jiang Wanyin estaba pidiéndole cuidarse,
Lan Xichen sonrió, acercándose a este para besar sus labios: “Te amo A-Cheng, me cuidare.
Tú también debes mantenerte a salvo”.
“Por favor espérame, por favor…” Suplico Jiang Cheng, realmente triste.
“Siempre voy a esperarte”.
“Te amo” Dijo el omega tímidamente, mirando a su alfa a los ojos antes de darle un último
beso.
Forzándose a separarse, Lan Xichen se quedó en el muelle, y sosteniendo delicadamente la
mano de su prometido lo ayudó a subir al bote donde estaban sus cosas, dejando que se
sentara al lado de Wei Wuxian.
Siendo el ultimo barco en zarpar, Lan Xichen se quedó en los muelles de Caiyi, mirando
como su omega, su hermano y su cuñado se alejaban en el horizonte; únicamente rogando
porque todos volvieran a salvo de Ciudad Sin Noche. Suplicando porque su omega regresara
a sus brazos una vez más.
“¿Crees que debamos compartir habitaciones en Sin Noche, A-Cheng?” Pregunto Wei
Wuxian distraído, jugando con unos nísperos que habían comprado antes de partir.
Cruzado de brazos apoyado sobre su baúl con su equipaje, Jiang Cheng respondió de forma
malhumorada: “Si, probablemente”.
“Entonces deberás taparte los oídos, soy muy ruidoso” Le advirtió Wei Wuxian, tomando
suavemente la mano de Lan Wangji quien estaba sentado a su lado; el cual solo pudo desviar
la mirada mientras sus orejas se enrojecían.
Furioso, Jiang Cheng reclamo en un grito: “¡Maldito omega desvergonzado! ¿¡Cómo puedes
pedirme algo así!? ¡Tienes la cara realmente dura!”
Y en medio de los gritos de Jiang Wanyin, se escucharon las risas estridentes de Wei Wuxian,
quien había cumplido su cometido de distraer a su hermano de la tristeza.
Capítulo 12.

Jadeando, Wei Wuxian dio un último golpe, observando como su contrincante Wen, otro
omega, caía al piso derrotado.
Limpiando sus manos en esas baratas túnicas con los símbolos rojos del sol que les habían
dado en la secta Wen, Wei Wuxian ni siquiera se molestó en hacer una reverencia de
agradecimiento por ser el ganador de ese enfrentamiento, sabiendo que aunque lo hiciera
nadie en el coliseo le daría aplausos por su hazaña. Así que esperando las felicitaciones en
susurros de su propia secta, el omega Wen regreso con una sonrisa a las graderías del coliseo,
donde se sentó al lado de su hermano y en medio de sus subordinados de la secta Yunmeng
Jiang.
Mirando al frente por un segundo, sin dejar de sonreír, se topó con la mirada fija de Wen
Chao sobre él; aunque no podía estar seguro de si lo miraba a él o a Jiang Cheng.
A Wei Wuxian le costaba admitirlo, pero la instrucción en la secta Qishan Wen fue mucho
peor de lo que esperaba, antes tomándolo con buen humor; para llegar a detestarlo por
completo.
Llegando a Sin Noche, a todos los invitados se les confiscaron sus espadas y otros objetos
personales “peligrosos”, tales como talismanes y objetos de protección; incluso se le quitaron
los pinceles a Nie Huaisang. Aquello que la secta Wen defendía como un medio de
resguardar el orden y el buen comportamiento de los invitados en su secta, para Wei Wuxian
no fue más que un intento burdo de humillación y control sobre ellos. No había una mayor
ofensa para un cultivador que ser apartado de su espada, y de forma arbitraria y con
amenazas, la secta Wen los obligo a todos a dejar sus armas, con un claro tono de
supremacía.
Desde el primer instante les demostraron quien mandaba en ese sitio y sobre ellos.
“Cuida bien a Bichen ¿De acuerdo?” Le pidió Wei Ying a Suibian, mientras avanzaba en la
fila para dejar a su espada con los miembros encargados: “No sé quién de ustedes es el alfa,
pero como sea Bichen nunca ha estado lejos de Lan Zhan así como lo estuviste tú de mí una
temporada” Recordó Wei Ying, como su tiempo en la secta Jiang cuando estaba soltero y se
le impidieron muchas formas de cultivo, en las que dejaba de lado por largo tiempo a Suibian
en sus habitaciones: “Ambos tienen un vínculo especial, temo que Bichen se asuste sin Lan
Zhan…”
En el área de alfas, a pocos pasos de Wei Yin, Lan Zhan estaba sosteniendo a Bichen con
cuidado en sus manos, pasando sus dedos por los adornos tan característicos de esta hechos
en plata blanca, en completo silencio. Lan Wangji era joven, y nunca antes se había separado
de su espalda, y aunque quería mantenerse sereno para su secta, actuando como el líder por
primera vez sin su hermano, no podía evitar sentirse algo desprotegido sin su fiel espada a su
lado; algo que Wei Wuxian notó sin necesidad de palabras, conociendo bien a su pareja.
“Volveré por ti, yo siempre volveré por ti” Le susurro Wei Ying a Suibian, pasando sus dedos
por su nombre tallado en su funda antes de entregarla, mirando con dolor como los miembros
de la secta Wen tomaban a su fiel espada para tirarla como un objeto más con los otros
cientos de armas que habían confiscado.
Quitándoles también parte de su equipaje, con prendas como las túnicas más costosas que
habían llevado para ocasiones especiales, e incluso algunas joyas; la secta Wen volvió a
imponerse dándole prendas de vestir a los asistentes para que las usaran durante los días de la
instrucción.
Esto no era tan extraño, pues así como lo habían hecho en la secta Gusu Lan, los cultivadores
invitados debían llevar como túnicas exteriores los colores de la secta donde estaban
entrenando. Sin embargo había una gran diferencia con cualquier otra ropa que alguna vez
habían llevado en otra secta donde fueron aprendices, pues la calidad de las túnicas que la
secta Wen les había cedido era tan mala, que Wei Wuxian no pudo evitar equipararla con la
ropa vieja de los sirvientes que Madam Yu usaba para las antorchas que se daban al salir a las
cacerías nocturnas, siendo ropa tan inservible y vieja, que su única utilidad era ser rota para
envolverlas en un palo y prenderles fuego.
Wen Chao sin embargo no les había mentido. Llevando una sociedad mucho más
“tradicional” de lo que Wei Ying hubiera esperado, siendo un lugar lleno de betas donde casi
no habían omegas o alfas, todos los cultivadores fueron separados de acuerdo a su género.
Los betas dormían en un lugar, siendo separados también dependiendo si eran varones y
mujeres, los alfas de igual manera, y los omegas que eran aquellos con menor cantidad de
asistentes, solo fueron separados de los demás, sin distinguir si eran varones y mujeres.
Intentando respetar aunque fuera un poco la tradición de dar ciertos privilegios a los
herederos de las sectas o personas importantes de estas mismas, Wen Chao dio habitaciones
privadas en dúos a los herederos de las sectas. Siendo Lan Wangji quien dormiría con Nie
Huaisang, Su She con el heredero de la secta Yu, Qin Su quien dormiría con el representante
de la secta Ouyang, y Wei Wuxian quien dormiría con Jiang Wanyin.
“Esto es una ruina” Se quejó Jiang Cheng, cuando finalmente encontraron su pabellón
destinado y entraron en él.
Sin saber que responder al respecto, parándose en la puerta con cierto asco, Wei Wuxian
sintió el aroma pesado de una habitación que probablemente no había sido abierta en años,
con camas sucias y paredes de madera mohosas, con polvo en el piso y telarañas en las
esquinas.
“¿Nos están mandando a dormir a un almacén?” Se preguntó Jiang Cheng, sorprendido.
Encogiéndose de hombros, aun negándose a entrar por lo desagradable que le resultaba, Wei
Wuxian respondió: “No creo que este lugar sea considerado un almacén si quiera… Es tan
viejo y tan sucio que debe ser una parte abandonada de la ciudad, como esos lugares que
deberían ser demolidos por estar fuera de cualquier tipo de norma”.
Negando con la cabeza, atreviéndose a poner un pie en las escaleras que lo llevaban al
interior del sitio, Jiang Cheng escucho el horrible sonido de la madera vieja al crujir, un
sonido tan desagradable que hizo que ambos omegas hieran una mueca: “¿Qué es esto?”
Volvió a quejarse Jiang Cheng muy molesto.
“Supongo que no podremos movernos de las camas en la noche A-Cheng, ese crujido es tan
fuerte que nos despertara sin dudas” Se quejó Wei Ying, suspirando y negándose a entrar en
su pabellón.
La situación de los demás cultivadores invitados era muy similar a la de ellos, pues la secta
Wen había dado pabellones similares o peores a todos los líderes. Y aunque algunos como
Wei Wuxian y Jiang Cheng que limpiaron todo juntos, o Lan Wangji quien limpio todo él
solo porque Huaisang estaba asustado; otros como Qin Su y el líder de la pequeña secta
Ouyang tuvieron que pedir ayuda, demasiado asustados como para hacerlo ellos mismos.
“¿Quién es él? No lo había visto jamás…” Comentó Wei Wuxian, mientras limpiaban su
habitación y por la puerta abierta observo como Qin Su y su acompañante eran escoltados a
su pabellón por los acompañantes de sus respectivas sectas, llorando muy asustados y siendo
reconfortados por sus acompañantes.
Acercándose a la puerta para ver a lo que Wei Wuxian se refería, Jiang Cheng respondió: “Es
el hijo único del líder de la secta Ouyang, en Lanling”.
“¿Secta Ouyang?” Pregunto Wei Wuxian mucho más confuso aun: “Nunca escuche hablar de
ellos…”
Jiang Cheng, quien sabia más respecto a sectas y políticas al haber recorrido la región en
viajes políticos junto a su prometido Lan Xichen cuando este ascendió al líder de su secta,
respondió: “Son una secta pequeña derivada de los Jin, algo así como la secta Moling Su y la
secta Gusu Lan. Aun son muy jóvenes por que fueron fundados como hace una década, pero
ya son bastante característicos y son muy… Llamativos para otras sectas”.
“¿Llamativos?”
“Sabes que hay muchos omegas en Lanling, son como su población principal… Así que ellos
conformaron solo una secta de omegas y para omegas, no se permite que betas o alfas entren
en ella o algo así” Explico Jiang Wanyin: “Su líder que es un omega se casó con otro omega,
y todos esperan que tenga un hijo omega”.
Sintiéndose sumamente extrañado, Wei Wuxian preguntó: “¿Entre omegas? ¿Y eso es
posible?”
Encogiéndose de hombros sin saber bien la respuesta, Jiang Cheng dijo: “Supuestamente si,
por que los omegas masculinos también tienen la forma de ‘embarazar’ a alguien, así como
las alfas mujeres de embarazarse. Pero no tengo idea de si lo conseguirán”.
Sintiéndose sumamente curioso por aquella extraña secta, de la cual no había escuchado
antes; pronto otra idea se formó en la mente de Wei Wuxian, girándose para ver a su
hermano: “Tu mamá es un alfa, y tu papá es un omega, si tu mamá puede embarazarse a pesar
de ser un alfa y tu padre puede embarazarla a pesar de ser omega ¿Quién te dio a luz, A-
Cheng?”
“¡Que estúpido eres! ¡Omega desvergonzado!” Reclamo Jiang Cheng, mirando a su hermano
molesto: “¿Por qué mierda estas interesado en cosas así? ¡Eres un desvergonzado!”
“Aiya…” Se quejó Wei Ying, sintiendo un fuerte golpe de su hermano en la espalda,
mirándolo y haciendo un puchero: “No creí que no supieras…”
“¡Claro que fue mi padre!” dijo Jiang Cheng más molesto aun.
Levantando los brazos en señal de rendición, sin querer molestar más a su hermano, Wei
Wuxian nuevamente entro en su pabellón a limpiar, pasando un trapo viejo u húmedo por los
pisos corroídos de madera, mientras Jiang Cheng con el ceño fruncido seguía encargándose
de limpiar las paredes.
“Creo que fue él…” Masculló Jiang Cheng en un susurro, aun dándole vueltas al asunto del
embarazo de sus padres.
El entrenamiento en Ciudad Sin Noche era arduo y pesado para todos, incluso para aquellos
alfas que estaban acostumbrado al fuerte trabajo físico; como Lan Wangji o Su She. En las
mañanas desde antes que saliera el sol, todos los invitados asistían a una clase magna sobre
los principios y los fundamentos de la secta Wen, que en pocas palabras se resumía en su
basta historia al ser la primera secta en fundarse tras la gran guerra, y como ellos debían bajar
la cabeza por ser los Wen una secta superior; además de bonitos poemas e historias, como
tenían los Wen con una cultura tan basta.
Luego en la tarde, sin almorzar, todos ellos eran conducidos a arduos entrenamientos físicos
de más de 6 horas en los coliseos de la secta o al aire libre. Se encargaban de entrenarlos en
todas las áreas y sin distinciones, como por ejemplo el hecho de que algunos tuvieran más
experiencia en algunas cosas, o que otros tuvieran nula experiencia en otras cosas. Siendo los
más desfavorecidos omegas con experiencia casi nula en el área del combate, así como Qin
Su, quien había recibido su espada pocos meses antes de ir a la secta Gusu Lan, y sus
entrenamientos en esgrima en su secta habían sido más de “apariencia” que un entrenamiento
real.
“No puedo más… De verdad no puedo más…” Gimoteo Qin Su, sentada en una esquina de
aquel gran dojo donde los habían puesto a entrenar esa tarde, en una de las pequeñas pausas
que les daban para respirar: “Me duele mucho…”
Siendo atendida por sus acompañantes de la secta Jin, aquellas que la cuidaban aun en su
posición al ser omegas. Mirando sus palmas llenas de ampollas y con sangre, Qin Su
realmente parecía no poder ponerse en pie, gimoteando por el dolor. La joven representante
de la secta Jin era conocida como una joven virtuosa, pero nada fuerte en el área del combate,
y al ser tan delicada y refinada, tenía muchos problemas con el fuerte entrenamiento al que
era sometida. Mientras su piel sucumbía ante los raspones de la espada sin filo que se le había
entregado para los entrenamientos, con golpes fuertes por su incapacidad de defenderse en las
peleas cuerpo a cuerpo que les obligaban a tener, con las uñas rotas por los tiros con arco que
entrenaban, y con las plantas de los pies magullados por las grandes caminatas y carreras que
les hacían tener con aquellos zapatos baratos que les obligaban a llevar.
Aquellas dolencias que eran mucho mejor sobrellevadas por aquellos que ya tenían
experiencia en el área, para Qin Su eran un infierno, y solamente pudiendo llorar y bajar la
cabeza, estaba a punto de darse por vencida apenas dos meses de iniciada su “conferencia” en
Sin Noche.
“Por favor señorita Qin” Suplico Mian Mian, su sirvienta más leal y que le había ayudado en
todo desde el inicio: “Póngase de pie antes de que lleguen los instructores”.
Negando con la cabeza, Qin Su suplico: “Quiero volver a Gusu…”
En la secta Gusu Lan, a pesar de haberlos instruidos de forma física así como en la secta
Wen, la enseñanza era mucho más balanceada dependiendo en el tipo de aprendiz y
cultivador que se estaba tratando. Así que aunque Qin Su también tuvo instrucciones como
cultivadora en luchas, fue mucho más acorde a su nivel, sin sobre exigirle tanto como se
hacía en Qishan.
“Por favor señorita Qin, debe ponerse de pie” Pidió nuevamente Mian Mian, tomando de sus
túnicas una pequeña bolsita perfumada con hierbas medicinales: “Pondré esto en sus heridas
para calmar el dolor ¿De acuerdo?”
Gimoteando aún más, Qin Su dejo que sus sirvientas pusieran aquellas hierbas medicinales y
calmantes en sus heridas, llorando aún más por el dolor que esas acciones le producían. Los
demás omegas que entrenaban junto a ella en ese mismo lugar no pudieron evitar mirarla a la
distancia con cierta lastima. Muchos omegas querían ayudarla, pero todos tenían sus propios
problemas, así que preferían ver por si mismos o por sus sectas en esa situación tan extrema.
Incluso los propios Wei Wuxian y Jiang Wanyin, que tenían problemas mucho más graves
que no poder soportar el entrenamiento físico.
En pocos minutos el entrenador de esgrima que los estaba entrenando desde el inicio de la
tarde llegó, y mirando a Qin Su lloriqueando en una esquina, comenzó a reírse de ella: “¿No
son acaso los miembros de la secta Jin los omegas más respetables? Eres una vergüenza para
tu secta, sumamente débil…” La acuso.
Escuchando aquellas palabras tan frías por parte de aquel hombre, Qin Su solo pudo bajar la
cabeza y lloriquear aún más, mientras sus sirvientas hacían todo lo posible por ayudarla y
tranquilizarla. Pero el profesor de ese día no parecía querer dejarla en paz, y comenzó a
amenazarla para hacer que se pusiera en pie: “¡De pie! ¡De prisa! ¡Hare que te den una
paliza!”
Y aunque Qin Su realmente quiso moverse, no pudo hacerlo, y termino llorando aún más
frente al instructor, realmente débil. En medio de los gritos y las amenazas de aquel hombre
frente a esa débil omega, Wei Wuxian simplemente no pudo fingir más que no le importaba,
y alzando la voz reclamó: “¡Oye! ¡Qué clase de maestro le dice esas cosas a un estudiante!
¡Ya déjala en paz!”
Aquel instructor se giró entonces muy molesto en dirección a Wei Wuxian. Aquel joven
omega se había ganado la antipatía entera de toda la secta Wen, no solo por el pasado
incidente con Wen Xu, también por demostrar ser sumamente brillante y mucho mejor que
sus discípulos. Así que durante todo el tiempo que llevaban las clases de la instrucción todos
los maestros siempre estaban atentos a alguna forma de castigar o darle un mal rato al joven
heredero de la secta Jiang; pero Wei Wuxian simplemente no les permitía hacerlo, y siempre
salía limpio de todo sin problemas aparentes.
“Sigue hablando Wei Wuxian, desafía a tus maestros. Sigue siendo tan irrespetuoso y a quien
azotare será a ti y a toda la secta a la que representas” Amenazo el maestro.
Sonriendo de forma burlona, Wei Wuxian respondió: “¿Qué acaso no le basta conmigo? Yo
no le temo a sus látigos y castigos ridículos, yo solo puedo soportar el castigo entero que le
daría a mi secta. Y aun después de eso no espere que baje la cabeza ante usted”.
“Wei Wuxian…” Dijo el maestro, realmente furioso, preparándose para decir algo más.
Sin embargo calló, y desviando la mirada, el maestro prefirió no decir nada más al respecto.
Volviendo a sonreír, Wei Wuxian pensó que había triunfado en aquella tonta pelea, pero
pronto sintió como Jiang Cheng lo tomaba de un brazo, tirando de él ligeramente, llamando
su atención.
“Basta, no digas nada más” Pidió Jiang Wanyin acercándose mucho a Wei Wuxian,
notándose incomodo, y hasta asustado.
Girándose para ver qué era lo que ponía tan nervioso a su hermano, no le fue ninguna
sorpresa ver en la puerta la “atemorizante” figura de Wen Chao protegido por sus guardias
personales, observándolos fijamente.
El segundo hijo de los Wen encontró cierto gusto en el prometido del líder de la secta Gusu
Lan, el omega Jiang Wanyin.
Mirándolo al lado de su hermano, Wen Chao rápidamente pudo distinguir que era aquello tan
atrayente en Jiang Cheng, y no pudo evitar sonreír divertido, como cada vez que lo miraba.
Jiang Wanyin no era el típico omega hermoso del que hablaban, no era fino y con una
apariencia curvilínea como su hermano Wei Ying, que representaba el típico omega hermoso
para los estándares de cualquier secta; Jiang Cheng parecía un beta de cierto ángulo. Con el
cuerpo un poco más musculoso, siendo un poco más alto del estándar para un omega, con un
rostro bello pero algo masculino por ser tan fiero. Incluso su forma de peinar resaltaba de
todos los omegas que había visto antes, pues la mayoría de ellos prefería dejarlo suelto o libre
en su espalda, así como Wei Wuxian con su conocida coleta alta que dejaba su hermosa
cabellera negra libre en su espalda, o los nuevos peinados sueltos que tenía recientemente;
Jiang Cheng siempre mantenía su cabello recogido en un moño alto en su cabeza.
Aquel gusto por el joven omega Jiang que Wen Chao había estado cultivando por todos esos
días que había durado la visita, derivo en un tipo de acoso hacia este, el cual no podía evitar
sentirse inseguro en Ciudad Sin Noche por estos actos que cada vez eran más peligrosos.
“¿Qué es eso?”
Abriendo los ojos en la obscuridad, así como su hermano, Wei Wuxian se sentó
silenciosamente en su cama en aquel viejo pabellón donde se les había asignado dormir. Era
la primera noche que pasaban en Ciudad Sin Noche, y tras ser despertado por su hermano y
un ruido desconocido, Wei Ying miro fijamente en dirección a la puerta del pabellón,
entendiendo que era lo que lo había despertado.
Por la delgada puerta de madera y ayudado por la luminosidad de la luna, Wei Ying pudo
observar claramente una silueta fuera de su pabellón, parado justamente en la puerta, quieto
en medio de la obscuridad de la noche. Tanto Jiang Cheng como Wei Wuxian se habían
despertado por el sonido del crujir de la madera de los escalones exteriores del lugar,
alertándose por el desconocido. Pero el desconocido también se había alertado del ruido que
hizo, así que tras el fuerte crujido de la madera ante sus pies, se quedó quieto en el exterior,
justo frente a la puerta, como si estuviera atento a saber si había despertado a los dos omegas
que dormían en el interior.
Miles de ideas pasaron por la mente de Wei Wuxian, el cual desesperado con la mirada
intento buscar alguna forma de defenderse, pues no tenía su espada ni sus talismanes cerca, y
sin saber bien que hacer, volvió a cruzar miradas con Jiang Cheng a pocos metros de
distancia, ambos luciendo sumamente confundidos y asustados.
Eran dos omegas en un sitio desconocido y completamente indefensos sin sus armas
espirituales, si dos o más alfas entraban a reducirlos, ni Wei Ying ni Jiang Cheng podrían
resistirse a sus feromonas o a sus voces de alfa. Así que realmente temiendo por sus vidas en
aquel instante, Wei Wuxian hizo un movimiento rápido para ponerse de pie de su cama para
luchar, sin embargo la madera vieja del suelo volvió a traicionarlos y soltó un fuerte crujido.
El desconocido entonces se dio cuenta de que las personas en el interior del pabellón estaban
despiertas, así que saltando de los escalones, corrió lejos lo más rápido que pudo.
Al escucharlo tanto Jiang Cheng como Wei Ying corrieron a la ventana más cercana del
pabellón para abrirla de golpe y observar fuera, queriendo ver quien había sido aquel extraño
que intento hacerles una visita nocturna. Sin embargo el tipo desconocido corrió demasiado
rápido y se perdió en la obscuridad, impidiendo ver quien era. Pero cerca del pabellón que
tenían ambos omegas, apoyado contra uno de los edificios cercanos, ambos jóvenes sí
pudieron ver a alguien, uno de los guardias alfas de Wen Chao, quien les devolvió la mirada
de igual forma.
Aquel incidente de la puerta él primer día de su llegada dio el inicio a muchos sucesos de
acoso que ambos vivieron en la secta Wen, siempre teniendo cerca a uno de los molestos
guaridas de Wen Chao que los seguía a todos lados, teniendo a esos vigías fuera de su
habitación cada noche, y con el sentimiento de ser siempre perseguidos a donde fuera que
vayan. Aquello no eran paranoias, pues aquellos que los acosaban y vigilaban no tenían ni el
más mínimo descaro de ocultarse o aparentar que no los seguían, mostrándose detrás de ellos
o vigilándolos a pleno día y frente a muchos otros de los invitados a la secta Wen.
Demostrando solo una cosa, que no importaba para ellos que Wei Ying y Jiang Cheng
supieran que eran vigilados, ellos sabían que los jóvenes omegas no podían presentar una
queja contra alguna persona o defenderse, así que continuaban con aquellos actos sin
importarles nada.
Comentando esto con Lan Wangji casi el mismo día que sucedió, los tres hicieron un acuerdo
de que Jiang Cheng y Wei Wuxian no podían separarse el uno del otro sin importar nada,
pues aparentemente incluso los guardias de Wen Chao parecían tenerle respeto al joven
omega Wei, e intentando mantenerse a salvo juntos, ambos intentaban cuidarse el uno al otro
y no ponerse en riesgo. Siendo Wei Ying el más preocupado, pues sabía que era Jiang Cheng
quien más peligro corría, y quería proteger a su hermano sin importar que pasara.
Y aunque a la mirada de todos Wei Wuxian era el pilar fuerte de la secta Jiang, no solo como
el cultivador más fuerte y aparentemente decidido de todos ellos, también demostrando
fiereza ante todos los maltratos de los Wen y una actitud sumamente decidida; la verdad es
que Wei Wuxian también estaba pasándolo mal en ese sitio. No solo por el temor constante
de tener que cuidar a Jiang Cheng, algo que no le desagradaba, pero si causaba una gran
tensión en él todo el tiempo. También por que no podía acercarse a Lan Wangji tanto como
quería.
Desafortunadamente Wen Chao si había dicho la verdad acerca de cierto suceso especifico,
pues en la secta Wen los omegas y los alfas casi no tenían contacto, los alfas pasaban clases
teóricas y prácticas solos con su género, así como los omegas, por lo que Wei Ying y Lan
Wangji tenían pocas oportunidades de encontrarse en medio de sus extenuantes clases en la
conferencia de cultivación. Y debido a los largos horarios que cumplían y lo cansados que
terminaban después de sus largas jornadas, apenas si podían si podían verse algunos minutos
después de las clases, a escondidas y siempre con el temor de causar una desgracia para sus
sectas por si los encontraban juntos a solas.
Y no solo era la presión de tener tan cerca a su alfa y no poder acercarse a él, en silencio Wei
Wuxian debía aceptar ver como por petición de Wen Chao y Wen Ruohan, su amado Lan
Wangji era obligado a estar cerca o en contacto con Wen Xu siempre que estos estaban en un
mismo espacio. Ya fuera en los comedores públicos donde todos a veces cenaban juntos, o en
reuniones de todos los cultivadores, Wen Chao y Wen Ruohan se las arreglaban para hacer
que la secta Gusu Lan estuviera al frente o al lado de la posición de la secta Wen, y ya que
Wen Xu era el nuevo heredero al frente de la familia, siempre tenía que estar cerca de Lan
Wangji. A pesar que ninguno de los principales involucrados se sintiera a gusto con esto.
Controlándose para no explotar y seguir tan tranquilo como hasta ahora, aguantando y
protegiendo a los suyos, Wei Wuxian se obligó a mantener oídos sordos y fingir que no veía
nada de esto. Pasando así lo mejor que podía el tiempo, a pesar de que cada vez se iba
sintiendo peor y debilitando cada vez más.
De esta forma los dos primeros meses pasaron, y luego se convirtieron en cuatro, y después
en seis.
“Seis meses más, son seis meses menos” Solía repetirse Wei Wuxian cada vez que se sentía
desanimado o falto de energía para seguir adelante.
Y como era costumbre en todas las conferencias de cultivación, a la mitad del periodo
planeado para la conferencia, se iniciaban algunos torneos entre los cultivadores presentes
como un tipo de evaluación. Lo que en otras sectas servía para identificar las falencias en sus
enseñanzas y apoyar a esos jóvenes cultivadores que tenían algunos problemas con los
métodos enseñados, en la secta Wen era una nueva forma de humillación para los invitados.
Los torneos eran injustos balanceados a favor de los Wen, con sus competidores con mucha
más experiencia y edad que los cultivadores invitados, así que por lo general las pruebas en
las que se los confrontaba ya habían sido entrenadas arduamente por los miembros de dicha
secta, y lo demás invitados perdían inminentemente de una forma vergonzosa frente a todos.
Siendo aquel el principal motivo de la secta Wen, quienes querían tener registrado las
humillantes derrotas de las demás sectas intentando demostrar que los Wen eran superiores y
dejar constancia de esto.
Sin embargo algo con lo que los Wen no contaban era con la fuerza y la superioridad de
algunos de los presentes, como Wei Wuxian y Lan Wangji, los cuales a pesar de los intentos
de los Wen, terminaban ganando los torneos y humillando a sus contrincantes. Así que al
final de cuentas, esa división ridícula que hicieron respecto a los géneros resulto una mala
jugada de los Wen, ya que Wei Ying era el omega más fuerte de todos los discípulos, y Lan
Wangji el más fuerte de los alfas.
Por lo que en un intento desesperado de balancear nuevamente las cosas a su favor,
comenzaron a hacer competencias conjuntas, intentando aunque sea que sus alfas vencieran a
Wei Wuxian en competencias como tiro con arco, la cual sería la competencia del día
siguiente.
Sacudiendo sus manos, Wei Ying venció en pelea cuerpo a cuerpo a ese desafortunado omega
Wen con quien le había tocado pelear, y sin recibir ninguna ovación o aplauso, regreso en
silencio con su secta, dando por terminada la competencia de omegas. Al llegar al lado de su
hermano, todos los miembros de la secta Wen lo felicitaron en susurros, realmente divertidos
porque su líder fuera tan fuerte.
Sin embargo Jiang Cheng no se notaba tan contento, y mirando al otro lado del estadio donde
habían estado tomando las practicas, un ligero estremecimiento lo recorrió al cruzar miradas
con Wen Chao: “La competencia ya termino ¿Eso significa que podemos irnos?”
Dando inicio a la competencia de los alfas de inmediato, intentando pasar de largo aquella
vergüenza por parte de los Wen, Wei Wuxian se notaba muy atento: “Si, supongo” Respondió
este, algo desconcertado por la pregunta de su hermano.
“Entonces vámonos, quiero irme” Pidió Jiang Cheng.
Wei Ying quiso negarse, mirando en dirección a la secta Lan, donde Lan Wangji también le
devolvió la mirada. Sabía que por las competencias ellos no podrían verse ese día a solas, así
que queriendo ver a su amado aunque fuera por un tiempo más, Wei Ying realmente quiso
quedarse. Sin embargo no supo cómo negarse ante Jiang Cheng, observando su desesperación
y tristeza, suspirando y solamente pudiendo aceptar para calmarlo.
“Está bien, regresemos a nuestro pabellón” Acepto Wei Ying, fingiendo no estar triste por
ello.
Dando algunas indicaciones a los miembros de su secta y disculpándose con los alfas Jiang
por no poder mirar su competencia, Jiang Cheng y Wei Wuxian se fueron del lugar, siendo
comprendidos por todos sus discípulos, pues sabían la delicada situación por la que ellos
pasaban.
Fue de esa manera que caminando junto a Jiang Cheng fuera del salón de entrenamiento de
los Wen que Wei Wuxian se dio cuenta.
Sin Noche no era una ciudad muy conocida por tener una frondosa vegetación, en realidad
era bastante escueta en cuanto a decoraciones naturales, teniendo más estructuras amplias y
elegantes hechas en arcilla ardiente. Wen Xu no podía ser más un cultivador, su padre se
había negado a que fuera un sirviente, su bello hijo omega jamás podría ser o hacer algo
semejante; pero aún estaba bajo las reglas de la tradición. Sufriendo ese destino que alguna
vez fue de Wei Ying, al joven omega Wen se le fue arrebatada su espada, se le impidió su
salida de Qishan para siempre, y no podía acercarse a ningún otro alfa de nuevo. Así que
quedándose fuera del lugar donde su hermano arbitrariamente instruía a los demás alfas, Wen
Xu solo podía mirar de forma melancólica, siendo reguardado por sus guardianes beta y
asistido por sus sirvientes omegas.
Pero por otro lado, sin darse cuenta de nada, un joven alfa observaba al heredero omega de la
secta escondido detrás de un pilar, observando a la distancia. Pasando silenciosamente detrás
de ese alfa, ambos omegas de Yunmeng se dieron cuenta de aquello, observando también a
Wen Xu a la distancia. Sintiéndose intrigado por ese joven alfa, Wei Wuxian se aclaró la
garganta, sorprendiendo al joven el cual se dio la vuelta realmente aterrado pensando que lo
habían descubierto acosando al hijo del líder.
“¿Se encuentra bien?” Pregunto Jiang Cheng con un tono sombrío y juzgador. Después de
todo lo que había estado pasando en su estadía en la secta Wen, el joven Wanyin comenzaba a
repudiar mucho a los acosadores.
Mirando a su hermano de reojo, suspirando ante su mal humor, Wei Ying sonrió contento y
rápidamente saludo a ese joven alfa haciendo una reverencia: “Mi nombre es Wei Wuxian, es
un gusto conocerte joven alfa. No le hagas caso a mi hermano, es Jiang Cheng, y está
enfadado por qué extraña a su alfa”.
“¡Claro que no idiota!” Reclamo Jiang Cheng casi en un grito, golpeando al mayor
fuertemente en un brazo.
Mirando aquella escena de una forma tímida, sin saber bien que hacer, el joven Wen también
hizo una reverencia para ambos omegas, saludándolos: “Es un gusto conocerlos jóvenes
maestros, soy Qionglin, de la secta Qishan Wen”.
Al escuchar aquel nombre, Wei Ying tuvo un recuerdo de repente, pues conocía ese nombre.
Aquel joven alfa, casi de la misma edad que Lan Wangji, era el anterior prometido de su
amigo Nie Huaisang. Cuando Wen Xu y Nie Mingjue rompieron su compromiso, también se
rompió el compromiso del joven alfa Wen y el mejor amigo de Wei Ying. Al contrario de
otros compromisos, con este en específico, no hubo un dilema demasiado grande. Cuando el
compromiso de ambos se rompió Wen Ning apenas tenía 9 años, ni siquiera se había
conocido con Nie Huaisang su prometido, así que para ambos alfas no hubo un gran
problema.
Aquel niño Wen no era un familiar demasiado cercano a los líderes de la secta Wen, siendo
un familiar de tercera o incluso cuarta generación de Wen Ruohan. Pero aparentemente este
clan asociado a los Wen se había ganado el visto bueno del líder Ruohan por sus vastos
conocimientos en ciencias, así que mientras los familiares cercanos a Wen Qionglin tales
como su hermana y madre, trabajaban para Wen Ruohan, este alfa creció como un joven
favorecido en su secta. Tan favorecido como para obtener un buen compromiso a pesar de no
ser nadie técnicamente.
“¿Qué estás haciendo aquí?” Pregunto Wei Ying amablemente: “¿Estabas observando a tu
primo?”
Llamar a Wen Xu ‘primo’ de aquel alfa era demasiado amable por parte de Wei Wuxian,
puesto que Wen Ning en realidad era un miembro lejano de la familia de Wen Xu, tanto que
probablemente no tenían casi sangre en común. Pero por su posición nueva y favorecida, era
un título correcto.
Sorprendiéndose al verse descubierto, aquel tímido y amable alfa dudo un poco antes de
responder, diciendo en voz baja: “N-No… Yo solo… Yo solo…”
Bajando la mirada de forma culpable, sosteniendo fuertemente aquel arco que tenía entre sus
manos, Wen Ning comenzó a soltar algunas de sus feromonas de una manera dulce. Aún era
bastante joven y aprendía a controlarse como alfa, notándose extremadamente asustado, pues
Wei Wuxian y Jiang Cheng eran los primeros omegas con los que hablaba a solas, algo que
incrementaba su malestar en semejante situación.
Entendiendo a la perfección, Wei Wuxian solo pudo reír amablemente, acercándose al joven
para darle un par de palmadas en el hombro: “Entiendo, practicabas tu arquería. Excelente,
debes prepararte para el evento de arquería de mañana, Wen Xu estará presente y vera a los
ganadores, es una buena forma de impresionarlo”.
Levantando la mirada de forma emocionada, Wen Ning pregunto: “¿En serio?”
Asintiendo con obviedad, Wei Wuxian respondió: “Claramente. Todos los miembros
importantes de la secta verán el espectáculo de mañana, se dará un premio al ganador de la
ronda, así que Wen Xu podría ser aquel que entrega la recompensa al ganador, no sería algo
demasiado inusual. Los omegas solemos encargarnos de entregar esas cosas a los alfas ¿No
es verdad A-Cheng?”
No muy interesado en esa platica, solamente intentando distraerse de toda la rabia que sentía,
Jiang Cheng respondió: “Es verdad…”
Agachándose hasta quedar al frente del rostro de aquel alfa, sonriendo con mucha
amabilidad, Wei Ying dijo: “Es una buena oportunidad de hablarle, no te des por vencido,
seguro puedes lograr más que verlo a la distancia como un demente”.
Volviendo a avergonzarse por las palabras de aquel omega de Yunmeng, Wen Ning bajo la
cabeza con mucha pena, aferrándose con todas sus fuerzas a ese arco de madera, mientras
escuchaba a Wei Wuxian estallar en carcajadas y seguir su camino, volviendo a dejarlo solo.
Esperando a que ambos omegas desaparecieran, Wen Qionglin volvió a girarse en dirección a
Wen Xu, mirándolo con las mejillas completamente sonrojadas.
¿Cómo podía sufrir tanto una persona tan hermosa? Wen Ning siempre se había preguntado
aquello, desde la primera vez que lo vio, cuando en el salón principal de Qishan les dijeron
mediante una carta que sus compromisos fueron anulados. En ese instante Wen Xu se rompió
en llanto al enterarse que su prometido Nie Mingjue lo había dejado por otro omega, parado
al lado de un joven Wen Ning el cual ni siquiera entendía bien las tradiciones a las cuales
estaba sometido, solamente pudiendo ver asustado como ese hermoso omega se rompía y
lloraba con mucho dolor.
Wen Xu era un omega increíblemente hermoso, aquello que incluso era alabado por otros
alfas en las diferentes sectas, se podía ver en su largo cabello negro, el cual caía suelto y liso
casi hasta sus rodillas. Con un cuerpo pequeño y delgado, el cual le daba un aspecto mucho
más joven y frágil que el de otros omegas, con ojos rojizos grandes y brillantes, los cuales
relucían en un rostro que por lo usual siempre estaba con una expresión triste.
Wen Ning se enamoró de él de inmediato. Cuando lo conoció, con las típicas ilusiones de un
niño pequeño, pensó por un instante que podría cortejar a ese omega, ambos ya no estaban
atados por la tradición y podrían comprometerlos; no eran familiares tan cercanos, y Wen
Ning era un alfa así como Wen Xu un omega ¿No era aquello algo posible?
Pero mientras crecía, observando a ese omega que poco a poco se perdía en su tristeza, sin
poder hacer nada por él, Wen Qionglin entendió mejor cómo funcionaba el mundo. Los
matrimonios en la tradición siempre se daban por algún tipo de beneficio, ya fuera monetario
o una alianza, los matrimonios arreglados eran su moneda de cambio. Wen Ning amaba al
joven Wen Xu, pero no importaba su amor, no podía ofrecer nada al heredero de Qishan, así
que ni siquiera estaba en la lista de los posibles prometidos de ese omega de alta cuna.
Wen Ning estuvo ahí cuando Wen Xu se enamoró de Lan Wangji. Parado algo lejos dejando
que los cultivadores más experimentados pelaran con aquel fantasma de agua, vio como Wen
Xu fue salvado de las aguas por los fuertes brazos de ese alfa completamente vestido de
blanco, viendo como las mejillas de aquel omega se sonrojaban y por primera vez en mucho
tiempo el rostro de este se alegró viendo a ese hermoso alfa. Entonces Wen Ning odió a Lan
Wangji ¿Acaso ambos no eran de la misma edad prácticamente? ¿Acaso no eran ambos alfas
solteros? ¿Entonces por qué todos se sintieron encantados con ese acercamiento y no querían
que él se acercara a Wen Xu?
Simplemente porque Wen Ning no era el segundo hijo del líder de Gusu, no era un alfa con
una fortuna inmensa detrás de sí mismo, y no tenía en sus manos una jugosa alianza para la
secta Wen. Wen Qionglin era un alfa que solo tenía su más sincero y profundo amor para
ofrecerle a Wen Xu, la promesa de amarlo y nunca dejarlo así como habían hecho otros alfas,
y el deseo de ser un mejor cultivador con cada día que pasara para protegerlo en sus brazos.
Pero eso no era suficiente.
Y ahora por más que lo deseara, sus oportunidades habían terminado. Wen Xu se había
sometido al juicio de la tradición, manteniéndose preso en su propio hogar lejos de cualquiera
que pudiera hacerle daño, y viviendo una triste y solitaria existencia, sin conocer el amor de
un alfa jamás. Por más que quisiera, por más que deseara acercarse a Wen Xu, el omega tenía
prohibido volver a estar en contacto con un alfa para toda su vida. Era mayor, tenía 21 años,
tenía prohibido casarse debido a su edad demasiado avanzada, y se lo consideraba imposible
para embarazarlo.
Suspirando con pena, resignándose a que debía ver al gran amor de su vida a la distancia por
siempre, observándolo a lo lejos aún escondido detrás de ese pilar, Wen Ning soñó por un
segundo que podía ir en su búsqueda para hacerlo sonreír, y sentir nuevamente ese olor a
rosas que tenía el contrario como feromonas. Pero sabía que era imposible.
Así que volvió a levantar su arco en dirección a los árboles y apuntando, Wen Ning volvió a
practicar su puntería.
Tal vez si ganaba, podría intentar rozar la mano de su gran amor cuando este le entregara su
premio.
Volviendo a pasear de forma desinteresada por los exteriores de aquel sitio, Jiang Cheng
espero a estar lejos de aquel alfa para reclamarle a Wei Wuxian: “¿Qué te pasa? No te metas
en asuntos ajenos, si está enamorado del hermano de ese psicópata entonces que sea su
problema, el mocoso alfa es un idiota”.
“No le digas así A-Cheng” Reclamo Wei Wuxian con un bufido: “¿Acaso no puedo
divertirme? Estamos aquí, secuestrados en Qishan, por lo menos intentemos pasarlo de una
forma buena”.
“Eres idiota”.
“¡Que malo A-Cheng!”
Riendo, Wei Wuxian siguió molestando a su hermano, tomándolo de los hombros mientras
ambos regresaban caminando en dirección a su habitación designada en Ciudad Sin Noche.
Girándose en medio del camino, Wei Ying miró a lo lejos al joven Wen Ning, el cual seguía
atento practicando y mirando a Wen Xu a la distancia. Solamente pudiendo pensar con
emoción en la competencia de tiro que tendría lugar al día siguiente.
Capítulo 13.

Finamente el día había llegado, en uno de los coliseos más grandes e importantes de Qishan,
todos los discípulos de las sectas se preparaban para la competencia de tiro, siendo vistos por
la tribuna de los pobladores de Ciudad Sin Noche y los cultivadores más fuertes de la secta
Wen, se dio inicio a la única competencia mixta donde competirían tanto omegas como alfas.
Sonriendo felizmente, Wei Ying entro a la cabeza de su secta, recibiendo aplausos
respetuosos de los presentes, quienes sentían curiosidad por aquel joven omega de la secta
Jiang de quien se había estado hablando tanto por su habilidad. Mientras que la secta Gusu
Lan, con Lan Wangji a la cabeza, fue admirada por su belleza y su gran elegancia, causando
muchos murmullos de curiosidad por los miembros de la secta Wen.
Formándose en el coliseo para comenzar a designar los puestos de quienes participarían
primero en la competencia. Estando separado de la secta Lan y su prometido por la secta Jin,
Wei Ying sonrió divertido, y mirando a su alfa le dijo: “Hanguang-Jun, Hanguang-Jun, tu
cinta de frente esta torcida”.
Sorprendido por estas palabras, Lan Wangji rápidamente llevo sus dedos a su cinta de frente,
tocándola para asegurarse de que no estuviera fuera de su lugar. Sonriendo divertido al verlo,
Wei Wuxian no pudo evitar notarse alegre cuando su alfa suspiro con cierta resignación,
dándose cuenta de que su cinta no estaba torcida para nada. Aun así esto no molesto a Lan
Zhan, quien dejando a Wei Ying jugar como quisiera, se sintió contento de que este riera
aunque fuera un poco.
Regresando a sus formaciones, los organizadores pronto dieron las posiciones en las que los
jóvenes cultivadores empezarían la competencia, apartando a ciertas personas como Qin Su y
Su She de la competencia por no ser tan hábiles, solamente dejándolos como representantes
de sus propias sectas pero a la distancia. Fue por esto que al joven Wen Qionglin se lo intento
apartar de la competencia por parte de su propia secta debido a su edad e inexperiencia,
pensando que este podría avergonzarlos en su principal objetivo de ese día: Vencer a todos
los presentes sin lugar a duda.
Pero el joven Wen Ning se aferró fuertemente a su arco y se negó a que lo apartaran, pidiendo
y hasta suplicando por que le permitieran continuar en la competencia, asegurando triunfar
para la secta Wen. Y aunque no lograba convencer a todos los concursantes de la secta
Qishan Wen, estos aceptaron por cierta presión de las ramas superiores, pues Wen Qing, la
hermana del joven, era una de las protegidas del líder Wen Ruohan y estaba presente en
aquella competencia. Así que como un acto de compasión con el niño e intentando ganar un
visto bueno por parte del líder, los cultivadores Wen le permitieron al niño participar.
Separando a los alfas, betas y omegas solo para la parte preliminar de la selección, se dio por
iniciada la competencia. Usando dianas a diferentes distancias y de diferentes tamaños, se
calificaba a los concursantes bajo dos criterios, cuan cerca quedaban sus flechas del centro de
la diana y cuan complicado era el tiro dependiendo de la distancia y tamaño del blanco. Así
que dividiéndolos en parejas, se sumaba los puntos que cada uno obtenía, aquel que obtenía
más puntos pasaba a la siguiente ronda clasificatoria, mientras que el perdedor pasaba con los
demás perdedores para una nueva clasificación entre ellos.
La mañana siguió pasando entre cortos enfrentamientos de parejas entre sectas, llegando a la
siguiente fase y avanzando de igual manera. Hasta que casi llegado el medio día, solamente
quedaron los 10 mejores cultivadores. 5 de la secta Qishan Wen entre los que estaba el joven
Wen Ning, Lan Wangji en representación de la secta Gusu Lan, Wei Wuxian y Jiang Wanyin
de la secta Yunmeng Jiang, el líder de la secta Yu de Yunmeng, y finalmente un cultivador
alfa de la secta Lanling Jin.
Dividiéndolos nuevamente en parejas, se continúo con las partidas clasificatorias, y no fue
sorpresa para nadie que los miembros de la secta Wen fueran eliminados en esta ronda casi
por completo, quedando solo el joven Wen Ning de todos ellos para sorpresa de los presentes.
Jiang Wanyin perdió contra el líder de la secta Yu, mientras que Wen Qionglin venció al
joven representante de la secta Jin, mientras que en la siguiente partida clasificatoria fue Wei
Wuxian quien venció al líder de la secta Yu, dejando solamente a tres últimos concursantes
para disputarse el primer lugar. Fue de esta forma que en un último intento de favorecer a su
secta, se decidió que Wen Qionglin pasaría directamente a la última ronda, mientras que Lan
Wangji y Wei Wuxian deberían disputarse su lugar para poder llegar a la final.
Parándose al lado de su prometido, Wei Wuxian no pudo hacer más que sonreír, esperando
que los miembros de la secta Wen les dieran las órdenes para empezar. Así que mirando a su
alfa de reojo, se dio cuenta de que ahora realmente su cinta de frente estaba torcida, algo que
lo preocupo pues estaban en la ronda final y no quería que miraran a su prometido
desarreglado: “Lan Zhan, tu cinta de frente esta torcida” Susurro Wei Ying.
Lan Wangji quien lo había escuchado, pensó que este quería jugar con él, pero no le hizo caso
pues estaban en una situación seria, así que simplemente bufo. Dándose cuenta de que su alfa
no le hacía caso, Wei Ying replico: “Es en serio, Hanguang-Jun es en serio. Tu cinta de frente
esta torcida”.
Sin ningún cambio, Lan Wangji siguió ignorando a su omega, mirando al frente como las
dianas eran cambiadas de lugar preparándolos para la competencia. Poniéndose ansioso por
ser ignorado por algo semejante, Wei Ying deicidio arreglar la cinta por sí mismo, y en un
rápido movimiento tomo uno de los extremos inferiores de la cinta que descansaban
orgullosamente en la espalda de su novio, tirando de esta con fuerza tratando de enrectarla.
Pero para sorpresa de ambos jóvenes, la cinta no se enderezo en lo absoluto, y cediendo ante
el tirón, terminó soltándose de la frente del orgulloso joven Lan descansando entre los dedos
de Wei Wuxian.
Muchos de los presentes en la tribuna soltaron un jadeo de la sorpresa al observar semejante
acontecimiento, pues algunos de los presentes conocían el significado de la cinta de los Lan;
siendo uno de ellos Wen Xu. Y no pudieron evitar sorprenderse al presenciar una actitud que
todos consideraban sumamente mal educada y hasta ofensiva.
Mirando la cinta de frente de Lan Wangji entre sus dedos, Wei Wuxian no pudo evitar
sonrojarse. Había tenido ese firme trozo de tela en diferentes partes de su cuerpo a lo largo de
esos años, en sus muñecas, en sus tobillos, en sus labios, y hasta alrededor de su propio
miembro. Así que tocándola de esa forma, no pudo evitar recordar todas esas vergonzosas
escenas, sonrojándose mucho.
Lan Wangji quien también se dio cuenta de esto obviamente, solo esbozo una ligera sonrisa,
tomando la cinta de frente de los dedos del mayor, para atarla cuidadosamente alrededor de
una de las muñecas de este, sorprendiendo a Wei Ying.
“Lan Zhan…” Susurro Wei Wuxian sumamente avergonzado.
“Pensabas en eso ¿No es verdad?” Cuestiono Lan Wangji, haciendo un par de nudos en la
cinta: “Debes extrañarlo tanto como yo…”
Observando el rostro sonrojado y lleno de pánico de su omega, Lan Wangji siguió sonriendo
divertido, agachándose por un momento para besar cariñosamente el dorso de la mano de su
prometido. Al ver semejante acto romántico y dulce de aquel alfa con su omega, muchas de
las presentes no pudieron evitar suspirar enamoradas, pensando en aquel acto como algo
mucho más romántico de lo que verdaderamente era; pues su significado real solo podían
saberlo Wei Ying y Lan Zhan.
Sin embargo no todas las expresiones de los presentes eran de emoción por semejante
romance, pues Wen Xu, sentado al lado de su padre, no pudo evitar poner una expresión de
dolor, desviando la mirada de inmediato; deseando por un instante ser aquel que tenía la cinta
enredada en su muñeca. Y desde la arena, Wen Qionglin fijo con la vista en el joven omega
Wen, también noto aquella expresión de dolor, sintiéndose sumamente triste y preocupado
por el mayor.
Terminando a de atar su cinta de frente alrededor de una de las muñecas del mayor, Lan
Wangji volvió a girarse en dirección a la audiencia con una ligera sonrisa en su rostro,
volviendo a causar una reacción de suspiros y admiración por su belleza de los presentes, que
nunca antes habían visto al joven Lan sonreír.
Cuando las dianas estuvieron finalmente preparadas, Lan Wangji levanto su arco y disparo
con confianza, dando justamente en el centro consiguiendo la puntuación máxima,
continuando con la siguiente y después las demás. Wei Wuxian era el segundo en disparar, y
quedándose detrás de Lan Wangji esperando a que terminara de disparar, por un segundo
escucho a la audiencia.
“Es obvio que ganará Lan Gonzi” Dijo uno de los representantes más altos de la secta Wen.
“Es un omega, seguramente llego ahí por suerte” Respondido otro de los oficiales.
“Claro que esta ahí por suerte, debe estar esperando que su alfa le dé la victoria, pero Lan
Wangji tiene una reputación que cuidar”.
“Hasta aquí llego la participación del heredero de la secta Jiang”.
Bufando divertido por esas palabras, deseando hacer tragar sus declaraciones a esos irritantes
alfas Wen, Wei Ying pronto miró la cinta blanca enrollada en su muñeca, y sonriendo tuvo
una idea interesante; comenzando a desatar los nudos de esta para sostenerla en sus dedos.
Disparando a la última diana con elegancia y maestría, Lan Wangji termino su recorrido con
un puntaje perfecto, que se ganó las ovaciones y aplausos de todos los presentes; mientras
que Lan Wangji hacia una pequeña reverencia de agradecimiento, apartándose para dejar que
su omega participar.
Avanzando hasta el centro de la arena con una sonrisa, Wei Wuxian levantó la cinta de frente
de su amado frente a sus ojos, para luego atarla detrás de su nuca con maestría, quitándose la
vista. Viendo semejante espectáculo, todos los presentes comenzaron a cuchichear
asombrados de la audacia de aquel omega al cual a pesar de todo seguían considerando
inferior, pensando que en aquellas circunstancias le seria aún más complicado ganarle a su
prometido.
Sin embargo en medio de la obscuridad, con aquella cinta tan conocía cegándolo, Wei
Wuxian aprecia desenvolverse con soltura, así que avanzando con seguridad en dirección a la
primera diana, levanto su arco y disparo con un tiro certero. Dejando boquiabiertos a todos
los presentes, Wei Wuxian no solo consiguió dar en el centro de todas las dianas, también
consiguió desplazar algunas de las anteriores flechas de Lan Wangji de su posición perfecta.
Y en la última diana, aquella con la posición más lejana y difícil de todas, Wei Wuxian no
solo consiguió dar en el centro, atravesó directamente la flecha que anteriormente había
puesto Lan Wangji en ese sitio sorprendiendo a todos.
Quitándose la venda con una sonrisa, Wei Wuxian puso la delgada y fina cinta de los Lan
sobre su propia frente, sonriéndole a todo con satisfacción, incluido a Lan Wangji; quien fue
el primero en aplaudirle por su gran hazaña.
“Grandioso” Lo halago Lan Zhan, mirándolo realmente enamorado.
“Gracias Hanguang-Jun” Respondido Wei Ying con orgullo, sonriendo realmente contento
para su alfa.
Sin estar contentos por el resultado de aquella competencia pero dándolo todo por perdido,
sin confiar en las habilidades de su representante Wen Qionglin, ya que consideraban
demasiado habilidosos a Wei Wuxian y Lan Wangji, sabiendo que perdería inminentemente
sin importar a quien eligieran como su rival. Así que decidiendo hacer lo correcto tras haber
ganado tanta admiración por parte de la audiencia, después de una larga deliberación por
parte de los organizadores del evento por parte de la secta Wen, se decidió que Wei Wuxian
sería el ganador de esa competencia y pasaría a la ronda final contra Wen Qionglin.
Tras una ronda de aplausos mientras Lan Wangji se retiraba con su secta bajo el tercer lugar,
Wei Wuxian y Wen Ning se prepararon para la ronda final, mientras las dianas eran limpiadas
y nuevamente posicionadas.
El joven cultivador Wen, dos años menos que Lan Wangji, se aferró fuertemente a su arco
mientras miraba de reojo al omega junto a él. No podía negar que Wei Wuxian, con su cuerpo
fino y una estatura menor a la suya, le parecía muy atemorizante, considerándolo realmente
fuerte después de lo que todos acababan de presenciar. Así que no podía evitar temblar por
los nervios y sudar por las ansias, solamente queriendo ganarle para enorgullecer a su secta e
impresionar a Wen Xu, que era lo que más le importaba en ese instante.
Sin embargo a su lado, Wei Ying se notaba relajado y contento, mirando a su alfa a la
distancia con una sonrisa. Sabía que el joven junto a él era ese mismo niño Wen que había
visto el día anterior, así que notando su nerviosismo, le hizo una reverencia antes de iniciar la
competencia, deseándole buena suerte: “Que la fortuna lo acompañe en esa competencia,
Wen Gonzi”.
Sorprendido de que aquel omega Jiang volviera a hablarle, Wen Ning se aferró más fuerte a
su arco y solamente pudo corresponder la reverencia, demasiado tímido para decir algo.
Cuando todo estuvo listo, como un acto de cortesía al omega, Wen Ning fue el encargado de
empezar la ronda. Avanzando cabizbajo y sin ánimos suponiendo su inminente derrota, el
joven Wen levanto su arco, preparándose para disparar su primera flecha. Sin embargo detrás
de la primera diana entre el público, pudo visualizar a Wen Xu, el cual sentado al lado de su
padre, se mostraba emocionado e ilusionado, juntando sus manos en su pecho mirándolo
también atentamente. A diferencia de los demás miembros de su secta, que ya daban por
perdido el encuentro y aburridos charlaban entre ellos, Wen Xu seguía atento a la
competencia, deseando con todas sus fuerzas la victoria para su pequeño primo, dándole
fuerzas a la distancia; siendo el único al que le importaba de verdad.
Sintiéndose fuerte por ver el rostro de ilusión y expectativa del omega que amaba, Wen
Qionglin recupero su esperanza y deseo de ganar, así que apuntando con más seguridad,
comenzó la competencia con todas las ganas que tenía. Terminando su recorrido por las 10
dianas su puntaje no era perfecto, pero Wen Ning había dado lo mejor de sí mismo para
conseguir ese resultado, y aunque sabía que Wei Wuxian con los ojos vendados podría ganar
un puntaje perfecto, esperaba poder enorgullecer a su hermana y a Wen Xu, que eran los
únicos de toda su secta que le importaban.
Terminando la ronda con escuetos aplausos, Wei Wuxian acomodo la cinta de Lan Wangji en
su frente con un bostezo, solamente pudiendo pensar en lo incomodo que le sentaba tener
algo en su frente, preguntándose como su alfa podía soportar algo semejante todos los días.
Preparándose con su arco en la primera diana, notándose tan interesado y serio como en todas
sus anteriores rondas, todos los presentes ahogaron un jadeo de sorpresa cuando la flecha de
Wei Wuxian golpeo el borde externo de la diana.
El joven Wei consiguió el peor puntaje con esa flecha.
Wei Ying avanzo a la siguiente diana y el resultado fue el mismo, sacando los peores puntajes
de la competencia justamente en la ronda final; como si estuviera apuntando a los puntajes
malos en vez del centro. Anonadados y sin saber que decir, todos los presentes observaron
como Wei Ying fallaba de una forma increíble, a tal punto que parecía un aprendiz, algo
incomprensible después de haber demostrado toda su maestría en las rondas anteriores.
Llegando a la diana final, la más difícil y en la cual Wen Ning había sacado el peor puntaje,
Wei Wuxian no apunto a la diana para nada, y con tiro certero apunto su flecha a la audiencia,
logrando gritos de la secta Wen a los que había disparado, dando justamente entre Wang Jiao
y Wen Chao, los cuales estaban abrazados anteriormente.
“Aiya… Que omega más tonto y descuidado soy… Por favor perdonen a este inferior omega,
una disculpa” Dijo Wei Wuxian sin poder aguantar las risas.
Para los evaluadores fue fácil decidir al ganador, pues Wei Wuxian había sacado el peor
puntaje de la competencia en la ronda final, declarando ganador al joven Wen Qionglin. Entre
aplausos y vítores de toda la secta, los cuales incrédulos se dieron cuenta de que aquel niño
había ganado a grandes maestros, Wen Ning no pudo evitar hacer reverencia agradecido,
realmente contento por el resultado.
Dejando su arco y sus flechas, Wei Wuxian paso junto al ganador Wen mientras se retiraba
con su secta, diciéndole en un susurro: “La próxima vez debes relajar tu muñeca, si lo haces
así con los músculos relajados, la flecha llegara más lejos”.
Sonriendo, Wei Wuxian le señalo a Wen Chao y Wang Jiao que seguían furiosos en la
tribuna, dándole a entender al menor que se había sido su ejemplo para demostrarle cuán
lejos podía llegar una flecha, que había sido el problema de Wen Ning en la última diana.
Sonriendo contento, Wen Qionglin fue coronado como el ganador y el primer lugar de
aquella competencia, una de las más importantes de toda aquella ronda. Así que caminando a
la tribuna principal, con una reverencia estrecho las manos de los principales líderes Wen, y
pasando junto al líder Wen Ruohan, estrecho la mano de Wen Xu, el cual fue el único en
ponerse de pie para saludar al ganador.
Con una gran sonrisa de felicidad, Wen Xu lo alago diciéndole: “Fue maravilloso A-Ning, tus
tiros fueron perfectos, eres un gran cultivador. Gracias por enorgullecer a nuestra secta”.
Parpadeando incrédulo por aquellas dulces palabras que le había dedicado el mayor, Wen
Ning solo pudo pensar sorprendido en que su amado supiera su nombre, algo que acelero su
corazón, sin querer soltar su mano: “Gracias A-Xu”.
Viendo como aquel joven Wen tocaba a su hijo, Wen Ruohan no pudo hacer más que rugir
ligeramente, haciendo reír ligeramente a Wen Xu, el cual con un elegante y ligero
movimiento soltó su mano de la de Wen Ning, quien bajo la cabeza algo triste, pasando a
saludar a Wen Chao y su omega; para posteriormente buscar a su hermana para abrazarla y
decirle lo feliz que se sentía. Pero aun a la distancia, Wen Ning no pudo apartar la mirada de
Wen Xu, quien hablaba animado con su padre. Solamente pudiendo pensar en lo mucho que
quería volver a sostener su mano.
Regresando con su secta con una sonrisa, Wei Wuxian también fue recibido por aplausos
discretos, ya que un segundo lugar no era nada bajo en una competencia semejante, con tato
favorecimiento con la secta contrincante. Aun así Jiang Cheng no se notó contento, y regaño
a su mayor: “¿Qué crees que hacías, Wei Wuxian? Perder de una forma tan baja… ¿Eres
idiota?”
“Aiya… A-Cheng no me molestes, mira mis manos, están tan adoloridas, solo quería salir de
ahí” respondió Wei Ying intentando poner excusas.
“¿Qué estabas planeando, idiota? Dejaste a nuestra secta en ridículo”.
Mirando al frente a la tribuna Wen, Wei Wuxian sonrió con dulzura observando como Wen
Qionglin tomaba la mano de Wen Xu. Y notándose sumamente contento y satisfecho, Wei
Ying respondió: “Nada, no planeaba nada en lo absoluto…”
***
“¡Descansemos aquí!” Grito Wen Chao, deteniendo la procesión de discípulos que los seguía:
“No quiero que alguno de ustedes, débiles, se desmaye y alguien tenga que cargarlo”.
Bufando con enfado, Wei Wuxian se contuvo para no decirle nada a ese pedante hombre, y
desviando ligeramente la mirada, detuvo a los discípulos de su secta, diciéndoles que podían
descansar.
Sus días normales en la secta Qishan Wen regresaron a la normalidad tras los torneos de
mitad de año, con los maltratos y los entrenamientos que los llevaban al extremo. Así que con
toda la autoridad ridícula que tenía Wen Chao, es mañana al amanecer había interrumpido
todas sus actividades para obligarlos a salir de cacería, pues se suponía que algunos
exploradores Wen encontraron una gran cantidad de energía resentida en un lugar cercano.
Por lo que con su usual prepotencia y su mal habida tendencia a sentirse superior a cualquiera
de los presentes, Wen Chao ignoro las quejas de muchos de los cultivadores con más
experiencia, y llevándose a toda su guardia como respaldo y obligando a todos los
cultivadores invitados, comenzaron su procesión a buscar dicho lugar con tal energía
resentida para eliminarla y erradicarla.
Por su parte Wei Wuxian se sentía sumamente intranquilo, mirando el bosque obscuro que los
rodeaba, solo podía pensar en lo mucho que quería salir de ahí corriendo, sumamente
alterado; así como todos los demás miembros de Yunmeng.
Pocos lo sabían, pero Yunmeng y Qishan eran naciones vecinas, a penas separadas por un
frondoso bosque negro donde había varios puntos de energía resentida sumamente alta que no
podía ser erradicada. Era por eso que a pesar de que se tenía un camino mucho más corto y
directo de Yunmeng a Qishan por la corriente del lago que bordeaba aquel bosque lleno de
energía resentida, nadie lo usaba desde hace décadas para transitar, prefiriendo ir de una
región a otra por el camino más largo bordeando los pueblos y pequeñas ciudades que
estaban en la arte segura del bosque.
“Creo que estamos cerca de Yiling” Susurro Jiang Cheng, sentándose cerca de un árbol,
prefiriendo hablar en susurros con su hermano para no asustar a los demás miembros de su
secta.
“¿No estamos cerca de Yunping?” Pregunto Wei Ying en un susurro.
“Caminamos por 5 horas, debimos pasar Yunping hace un rato ya”.
Fijándose en el terreno inclinado que transitaban, que comenzaba a parecerse a las faldas de
una montaña, Wei Ying sonrió y bromeo: “¿Nos estará llevando a Los Túmulos Funerarios?”
“Deja de jugar, eso no es divertido”.
Todos conocían la leyenda de aquella montaña maldita, la cual al centro de un cinturón de
montañas y pequeños montículos, era el lugar con mayor cantidad de energía resentida; un
lugar maldito. Siendo también el lugar de origen de la secta Qishan Wen según muchos, pues
aunque fue hace mucho tiempo y no habían registros al respecto, se cuenta que el primer líder
de la secta Wen el ilustre Wen Mao llevo a todo un ejército para la última batalla que
marcaría el fin de la era violenta que orillo a la región a dividirse y formar sectas.
Una batalla para matar a su madre.
Se cuenta que la pelea fue tan brutal y destructiva que solo 10 hombres salieron con vida, que
juraron nunca contar lo que ahí había sucedido. Pues la madre del líder fue una mujer que tras
mucho sufrimiento decidió recluirse en esa montaña, la cual en ese entonces no estaba
maldita, para entregar su vida al estudio y la creación de nuevas formas de cultivo para su
secta. Pero su hijo el cual se volvió loco no dudo en perseguirla hasta ese sitio para iniciar
una batalla y matarla, muriendo igualmente en ese sitio maldito, que no había sido visitado
desde entonces, apenas logrando ser contenido por todas las sectas que construyeron una
barrera espiritual que impedía que cualquier tipo de energía resentida saliera de ahí; tratando
de evitar que el mal lastimara a los inocentes.
Y aunque todos conocían esa historia, con ligeras variaciones por los rumores, como hablar
de que la madre de Wen Mao en realidad era un hombre omega; Wei Wuxian siempre tuvo un
problema con aquella leyenda. Todos contaban que hubo una batalla en ese sitio, que Wen
Mao llevo un ejército, pero… ¿Para un solo hombre o mujer? Eso siempre perturbo a Wei
Wuxian, pues nunca pudo sacar de su cabeza la duda de porque hubo tal esfuerzo para
detener a una sola persona, y es mas ¿Contra quienes lucharon? ¿Quién mato a todo ese
batallón de cientos de hombres Wen? Se suponía que había solo una persona ahí ¿Cómo pudo
matar una sola persona a tal cantidad de cultivadores?
Con el paso del tiempo Wei Wuxian supuso que la leyenda era mentira o que simplemente no
se había registrado con claridad, pues un solo hombre o mujer no podía matar en solitario a
un batallón entero, por más que tuviera una calidad increíble de cultivo, era imposible para un
solo hombre. Así que supuso que tal vez la madre de Wen Mao tenía un ejército con ella, o
que simplemente nunca hubo tal mujer y simplemente fue un sitio de batalla común, una
batalla contra alguna secta que trato de tomar esa montaña en la tierra de la secta Qishan
Wen.
Sin embargo a pesar de todas las dudas y las suposiciones, Wei Wuxian sabía que nunca
podría saber la verdad, la realidad acerca de ese suceso quedaría para siempre como un
misterio, que los únicos 10 supervivientes nunca dirían; y que quería como prueba con los
cientos de cadáveres que ahí permanecían debajo de la tierra. A tal punto que la leyenda decía
que no podías cavar ni un solo centímetro de tierra en Los Túmulos Funerarios sin toparte
con un cadáver, cientos de cuerpos, enterrados uno sobre el otro, en un lugar que ya era
maldito antes de que sucediera la masacre; era obvia la razón por la que todos querían evitar
ese lugar a cualquier manera.
Intentando sacar aquello de su mente, pronto Wei Wuxian miró a Lan Wangji, el cual estaba
junto a la secta Gusu Lan y Qinghe Nie cerca de ahí, y sonriendo decidió ir a saludar a su
alfa. Estaban descansando, así que a pesar de que Wen Chao quisiera, no podía separarlos.
Así que susurrándole un par de cosas a Jiang Cheng, Wei Wuxian se puso de pie con una
sonrisa, caminando felizmente en dirección a su alfa. Llegando a su lado, con una sonrisa
feliz plasmada en su rostro, Wei Ying dijo casi en un grito: “¡Lan Zhan!”
Girando el rostro en dirección al omega, Lan Wangji apenas tuvo las fuerzas para sostener a
su prometido, notándose algo débil e incluso enfermo, algo que todos en su secta notaron
pero prefieren no decir nada.
“¿Estás cansado Hanguang-Jun? La caminata es extensa y cansada, debes estar agotado…”
Dijo Wei Ying preocupado, sin enterarse de nada, solamente pudiendo notar que el rostro de
su alfa estaba algo sonrojado como si tuviera fiebre y que no estaba tan fuerte como era
usual.
Sonriendo ligeramente y besando una de las mejillas del mayor, Lan Wangji negó: “Estoy
bien Wei Ying…”
“¿Realmente? Hanguang-Jun es pálido y frio como el hielo, está haciendo mucho calor, temo
que te sientas indispuesto por esto”
“Estoy bien…” Repitió Lan Wangji, con un tono de voz un poco más ronco del que solía
tener.
Sorprendiendo a Wei Wuxian, Lan Wangji acerco su rostro al cuello de Wei Wuxian,
besándolo y aspirando el aroma de sus feromonas como si fuera algún tipo de droga,
haciendo reír al mayor. Sin embargo esto no le hizo ni un poco de gracia a todos los alfas
presentes, que rápidamente intervinieron.
“Wei Gonzi, no es bueno que demuestren este tipo de acciones de cariño por ahora” Pidió
uno de los miembros de la secta Gusu Lan.
Sonriendo de forma algo incomoda, Nie Huaisang por su parte tomo a Wei Ying de la cintura
y lo separo de Lan Wangji: “A-Xian, no es bueno que dejes solo a A-Cheng por ahora…”
Conteniéndose y solamente pudiendo gruñir, Lan Wangji bajó la mirada y no dijo nada al
respecto. Aquellas actitudes tan sospechosas y extrañas de aquellos alfas asustaron un poco a
Wei Wuxian, el cual mirando a su alfa callado, solamente pudo suspirar: “Esta bien, nos
veremos entonces, Lan Zhan…”
Prefiriendo ni siquiera mirar a su omega por lo enfadado que se encontraba, Lan Wangji
desvió la mirada realmente molesto, y cuando Wei Ying comenzó a alejarse, los alfas que lo
rodeaban rápidamente se pusieron a hablar con él joven Lan en susurros.
Mientras que la joven Mian Mian, descansando junto a la líder de su secta bastante cerca de
la secta Lan, pronto ubico al joven Wei Wuxian y con el permiso de su señora, se puso de pie
para hablarle: “¡Joven maestro!”
Girándose sorprendido por aquellas palabras dichas con tanta fuerza, Wei Wuxian vio a la
agraciada cultivadora correr detrás de él con una dulce sonrisa en su rostro: “Señorita Mian
Mian” Saludó Wei Ying con una sonrisa, haciendo una reverencia.
Correspondiendo la reverencia, Mian Mian rápidamente extendió sus manos en dirección al
joven omega, extendiendo una bolsita pequeña y fragante con hermosos diseños, diciéndole:
“Wei Gonzi, por favor tome esto como un obsequio de mi parte. Son algunas hierbas
medicinales que recogimos hace algunos días, y he preparado esta selección para usted y su
secta”.
Sintiéndose sorprendido por aquel regalo, Wei Wuxian dudó un poco en tomarlo, diciendo:
“No es necesario, verdaderamente no lo es. Seguramente los miembros de tu secta lo echaran
más en falta que yo”.
“Es un regalo de nuestra secta Joven Jiang, por toda su ayuda con nuestra líder Qin Su, es una
forma de retribuirle. Por favor acepte el regalo”.
Desde que Wei Wuxian había defendido a la joven doncella Jin aquella ocasión en las clases,
los maestros comenzaron a tratarla con más respeto y consideración, algo que atribuían a que
de cierta forma le temían a Wei Ying y pensaban que la joven estaba bajo su protección. Así
que desde entonces toda la secta Jin se notaba sumamente agradecida con el joven de la secta
Jiang.
Sonriendo alagado por aquellas palabras, Wei Wuxian hizo una reverencia de agradecimiento
y tomo la bolsita perfumada: “Muchas gracias, es un honor”.
La joven Mian Mian correspondió la reverencia, y sin decir nada más regreso de vuelta con
su secta, bajo la fija mirada de Qin Su, quien en ese instante estaba acompañada de Su She.
Sin embargo aquel acto que podía haber pasado como algo honorifico y alegre para Wei
Ying, paso a ser algo sumamente extraño y algo molesto. Pues quedándose en su sitio
mientras la joven Mian Mian se retiraba, Wei Wuxian no pudo evitar notar las feromonas de
su alfa, las cuales eran tan fuertes que llegaban a su posición a pesar de la distancia. Girando
su mirada a Lan Wangji de inmediato, Wei Ying se dio cuenta de que el joven Lan no lo
miraba para nada, teniendo sus ojos fijos en la agraciada figura de Luo Qingyang mientras
esta regresaba con los miembros de su secta, soltando feromonas que su omega interpreto
como deseo.
Esto dejo pasmado a Wei Wuxian, mientras escuchaba a su omega chillar por los celos de que
su alfa se fijara obviamente en otro omega, el joven Wei no podía creer lo que veían sus ojos
¿Su alfa interesado en otra persona? Era doloroso y molesto, y sin saber qué hacer, solo pudo
presionar fuertemente aquella bolsita perfumada entre sus dedos, deseando que Lan Wangji lo
mirara para sentirse mejor. Pero eso no sucedió, y los ojos de Lan Wangji siguieron fijos en la
joven Mian Mian, sin mirar a su omega ni por un solo instante.
Aquello enfureció mucho a Wei Wuxian, quien presionando aquella bolsita perfumada hasta
casi romperla, decidió confrontar a Lan Zhan, realmente molesto y celoso porque este
estuviera mirando a otro omega que no fuera él.
Sin embargo no pudo continuar con sus intenciones, pues así como Wen Chao había
prometido, tras solo un par de minutos volvió a exigir que los cultivadores se pusieran de pie
y continuaran con su camino. Siendo sorprendido por Jiang Cheng que había ido en su
encuentro, Wei Wuxian no pudo evitar notar como Lan Wangji volvía a evitar mirarlo y
seguía su camino con su secta, enfureciéndolo y poniéndolo muy celoso.
“¿Pasa algo?” Pregunto Jiang Cheng sorprendido, notando que el aroma de su hermano había
cambiado ligeramente.
Bajando la mirada tristemente, Wei Ying solo pudo mascullar: “¿Entonces estas interesado en
otros omegas…?”
“¿Qué?” Pregunto Jiang Cheng, que no había podido escucharlo claramente por lo bajo del
volumen de su voz.
“No pasa nada”.
Tragando todo su dolor y enfado, Wei Wuxian volvió a caminar guiando a los miembros de
su secta, sorprendiéndolos a todos, pues notaban que estaba de mal carácter; algo inusual en
aquel omega comúnmente alegre y despreocupado.
Siguiendo su camino, Wei Ying evito mirar a Lan Zhan o a cualquier miembro de la secta
Lan, interpretando aquellas acciones tan extrañas como algo relacionado con el deseo de su
alfa por otros omegas, algo tan doloroso y molesto. Así que caminando cabizbajo, no pudo
evitar mirar como a pocos pasos del lugar en el que habían descansado, en un claro en medio
de aquel bosque espeso, Wen Chao seguía descansando.
Siendo custodiado por sus guardias alfas, sentado sobre el césped y rodeado de un banquete,
el segundo hijo de los Wen no parecía estar en una cacería para nada, aparentaba estarse
divirtiendo en un día de campo. Sin haberse cansado en lo absoluto por estar en un corcel
todo ese tiempo, e incluso llevando a su omega con él, el joven Wen Chao parecía estarse
riendo de todos a esa distancia, mientras su pareja le daba uvas en los labios y besos en el
cuello.
“Abra la boca mi señor” Pidió el omega Wang Jiao, sentado en el regazo de su señor mientras
lo alimentaba delicadamente con sus dedos.
Wei ying había escuchado muchas veces aquel dicho de que si uno se juntaba con alguien
poderoso se volvía poderoso también, y el omega Wang Jiao era la prueba viviente de aquel
dicho.
De una belleza descomunal, aquel omega de la secta Wen no era más que un simple sirviente.
Provenía de una familia de betas en Sin Noche, pero gracias a su delgado y curvilíneo cuerpo,
con un cabello negro y sedoso, y aquellos ojos violetas adornados con un delicado lunar en
una de sus comisuras; se había ganado la oportunidad de ser un sirviente para la secta más
importante de la región. Todos conocían la reputación del nuevo acompañante del segundo
hijo de la secta Wen, un omega hermoso, pero muy desvergonzado; nadie se explicaba cómo
pasó de limpiar pisos en los salones de la secta Wen, a ser uno de los custodios de Wen Xu el
heredero de la secta. Muchas personas poderosas de la secta Wen hablaban bien de él, pero no
por nada, lo hacían seguramente por que obtuvieron algún tipo de favor de este omega para
ayudarlo a subir en su posición como un sirviente.
Siendo uno de los sirvientes y custodios principales de Wen Xu, para Wang Jiao no fue difícil
seducir al segundo hijo del líder Wen Ruohan, aquel joven obsesionado con ser un alfa y con
tener bellezas siempre a su disposición. Wang Jiao pasó mucho tiempo con alfas a lo largo de
su vida, así que no le fue difícil seducir a Wen Chao, fingiendo que este era un alfa y que lo
sometía como uno de estos. Y a pesar de que le resultaba ridículo tener que fingir reaccionar
a sus feromonas inexistentes o seguir sus órdenes cuando usaba su “voz”, el joven Wang
aguantaba todo esto con una sonrisa por las recompensas.
“Jiao Jiao se está portando demasiado lascivo el día de hoy… ¿Acaso tu celo está cerca?”
Cuestiono Wen Chao con una sonrisa, llevando una de sus manos a la barbilla del menor para
presionarla con algo de fuerza.
Sonriendo dulcemente y tomando una actitud sumisa, Wang Jiao respondió: “Mi alfa siempre
hace que me sienta en mi celo estando cerca, mi señor no puedo esperar a regresar a casa
después de esta peligrosa misión a su lado, me siento siempre tan húmedo estando junto a
usted…”
Escuchando aquellas palabras Wei Wuxian no pudo evitar poner cierto rostro de asco, pues a
pesar de que él también era considerado un omega “desvergonzado”, realmente aquel joven
Wang lo superaba con creces, algo que le disgustaba de sobre manera.
Al escuchar aquellas provocativas palabras, Wen Chao no pudo evitar reír, introduciendo uno
de sus dedos entre los labios de Wang Jiao, jugando con el cuerpo del omega como se le
apetecía. Sin embargo al ver desfilar a la secta Yunmeng Jiang desde su posición, Wen Chao
no pudo evitar fijar sus ojos en Jiang Wanyin, quien pasaba cerca de ambos, ignorando por un
instante a Wang Jiao.
Jiao Jiao entonces se fijó fieramente en Jiang Cheng, como siempre que este pasaba cerca de
ambos, odiándolo en secreto. Era obvio para el omega Wang la obsesión de Wen Chao por
aquel insoportable y frio omega Jiang, y aunque no podía entender esa fijación y trato por
todos los medios de revertirla, Wen Chao no parecía cambiar de opinión, algo que hacia arder
la sangre de Wang Jiao y lograba su odio por Jiang Cheng. Y mirándolo a la distancia, Jiao
Jiao solo pudo añorar el instante cuando pudiera hacerse con aquel idiota omega Jiang en sus
manos, pues si este moría, no tendría que preocuparse por que su señor se fijara en alguien
más y le cediera los favores que le cedía a él a otro.
Sin embargo Jiang Cheng seguía ajeno a todo esto, y evitando mirar a Wen Chao por lo
incomodo que lo hacía sentir, siguió su camino con pasos rápidos. Wen Chao pensaba que
Jiang Cheng se hacia el difícil con sus encantos, incrédulo a que este prefiriera a Lan Xichen;
pero en realidad Jiang Wanyin solo podía sentir repulsión profunda contra aquel hombre,
deseando terminar su estadía en Qishan para ya no tener que verlo de nuevo ni tener que bajar
la cabeza frente a él.
Tras un par de minutos caminando por aquella montaña, los cultivadores Wen que dirigían la
comisión se detuvieron de golpe, identificando el lugar donde supuestamente había una gran
cantidad de energía resentida: “¡Mi señor! ¡Lo encontramos!”
Poniéndose a la cabeza de la comitiva de nuevo rápidamente gracias al estar en un caballo,
Wen Chao observo emocionado el lugar la cual se dirigían, sonriendo felizmente: “Bueno,
entonces vamos ¿Qué estamos esperando? Debo cazar un gran monstruo para el orgullo de
mi padre”.
Wen Chao siempre tomaba decisiones precipitadas, y solamente queriendo demostrar su
habilidad y su fuerza frente a Wen Ruohan con la esperanza de recuperar su título como
heredero de la secta, decidió ir a ese sitio a pesar de los consejos de cultivadores más
experimentados, arrastrando consigo a todos los cultivadores invitados; a pesar de que no
había tenido el permiso expreso de su padre o su hermano para esto. Todavía comportándose
como si fuera el heredero de su secta.
Volviendo a avanzar por la montaña, pronto todos se internaron en una caverna húmeda y
bastante obscura, la cual de inmediato erizo sus pieles y los puso alerta, pues realmente la
energía resentida en ese sitio era muy fuerte, más fuerte de lo que muchos en esa comisión
habían sentido alguna vez.
Caminando lentamente alumbrándose débilmente por la luz del exterior que penetraba en esa
caverna, Lan Wangji no pudo evitar notar que en el piso habían algunas marcas extrañas
talladas en la roca, pareciendo algo similar a un conjunto de sellos que habían sido rotos
recientemente, algo que no pudo evitar alarmarlo. No conocía los símbolos tallados en
aquellas rocas, pero sintiendo su fuerte energía espiritual, supuso que fuera lo que fuera que
indicaran, estaban sellando algo que se consideraba de algo riesgo y muy peligroso.
Pasando al lado de la secta Lan con despreocupación siendo la última secta en la procesión, la
secta Yunmeng Jiang dirigidos por Wei Ying penetraron en la obscuridad en silencio,
susurrando cosas entre ellos asustados. Viendo a su omega de cerca y olvidando sus antiguas
dolencias, Lan Wangji rápidamente dijo: “Wei Ying, debes ser cuidadoso”.
Mirando a su alfa por un instante al escucharlo, Wei Ying simplemente decidió ignorarlo y se
negó a responder sus palabras, caminando más rápido aun demostrando su molestia. Esto que
desconcertó a Lan Wangji, el cual ya estaba muy confundido desde el inicio, lo llevo a seguir
a la secta Jiang a toda velocidad, temiendo por su prometido y queriendo protegerlo.
Pues Lan Wangji tenía un muy mal presentimiento de lo que permanecía en aquella caverna.
Capítulo 14.

“Esto es una locura…” Se quejó Wei Ying en un susurro.


Avanzando a duras penas por aquel sendero destruido y lleno de rocas, en medio de una
aplastante obscuridad en la que los miembros de la secta Wen ni siquiera les daban antorchas,
Wei Ying debía sujetarse de los demás miembros de su secta y pegarse a las derruidas
paredes de la caverna para seguir avanzando.
Viendo la arquitectura de aquel sitio tan peligroso, fue fácil dilucidar que en algún tiempo,
posiblemente hace siglos, aquel lugar tuvo construcciones humanas, de las que todavía
quedaban ruinas. Pero por alguna razón, así como todos notaban que aquel sendero que
transitaba fue construido por seres humanos, también notaban que había sido destruido por
otros humanos. Así que sin entender la razón por la cual aquel sitio había tenido una
construcción en una caverna, y mucho menos porque alguien se había tomado la molestia de
destruirlo o intentar destruirlo, Wei Wuxian siguió caminando.
Y aunque de cierta forma le preocupaba caer al vacío de aquel sendero, ya que la caverna
parecía ser muy profunda y el camino estaba en muy mal estado, a Wei Ying también le
preocupaba otra cosa. A cada paso que daba en dirección a la profundidad de aquella caverna,
todos los presentes podían notar como la energía resentida se volvía más y más fuerte, algo
que les hacía preguntarse ¿Qué descansa en el fondo de este sitio para emitir semejante
energía?
De un instante al otro la procesión que seguía a Wen Chao se detuvo, y avanzando en medio
de los presentes, Wei Ying y Jiang Cheng se acercaron al frente de las personas para ver que
sucedía, mirando la horrible obscuridad que había al fono del final del camino cortado.
“Bien, es todo” Susurro Wei Ying aliviado, pensando que regresarían debido a que ya no
podían continuar.
Sin embargo Wen Chao no se veía muy convencido o contento con esa idea, así que
ignorando a todos los cultivadores expertos de su propia secta que lo acompañaban y las
sugerencias de los demás, exigió: “¡Una soga!”
Mirándose entre ellos confusos, sin querer bajar a ese sitio, los cultivadores invitados se
hicieron a un lado cuando los miembros de la secta Wen pasaban entre ellos para traer
cuerdas y más antorchas. Atando el extremo de una cuerda a una estaca, la dejaron caer
libremente al vacío, notando como esta tocaba fondo mucho más pronto de lo esperado,
indicando que habían llegado cerca del fondo de la caverna.
“Bien, entonces deberíamos dejar que alguien baje primero, como una prueba” Sugirió uno
de los cultivadores de la secta Wen.
“Una prueba…” Susurro Wen Chao interesado, girándose a ver a los cultivadores invitados,
pues o invitaría a nadie de su propia secta primero.
Wang Jiao, quien había sido apartado del borde protegido por Wen Zhuliu, salió de las
sombras con una sonrisa buscando a Wen Chao para pedirle: “Mi señor, mi señor… Yo tengo
una sugerencia” Caminando con una sonrisa hasta tomar al segundo hijo Wen de brazo, Wang
Jiao miro en dirección a la secta Yunmeng Jiang y señaló a Jiang Cheng directamente: “Él
sería una buena elección, mi señor”.
Alarmándose por esas palabras, Wei Wuxian rápidamente se puso frente a su hermano menor
para defenderlo, mientras su secta también los rodeaba. Mientras que por un segundo Wen
Chao puso un rostro de real disgusto, sin notarse feliz por aquella petición: “¿Él realmente
Jiao Jiao? ¿Por qué seria él?”
“¿Qué sucede? ¿Por qué no sería él?” Reclamo Wang Jiao, girándose de golpe disgustado
para encarar a su señor: “¿No dijiste acaso que todos eran ratas inservibles?”
Notando que su omega estaba disgustado, Wen Chao tomo una actitud más pasiva,
susurrando: “Si, lo hice pero…”
Bufando molesto y soltándose de mala gana de Wen Chao, Wang Jiao comenzó a replicar:
“¿Entonces por qué tienes preferencias por él? Una rata es una rata, lánzala al abismo ¿O
acaso no quieres hacerlo por alguna razón? ¿Qué clase de trato tienes con esa rata sucia?”
Respirando profundo para responder, intentando hacer razonar a su omega, Wen Chao le dijo:
“No hay ninguna razón para ello, ni para lanzarlo ni para no hacerlo. Yo solo quiero
reconsiderar la opinión porque es un omega, no quiero que me vean como un monstruo por
lanzar a un omega…”
“Tú ya eres un monstruo, no debes hacer nada para que te veamos diferente” Negó Wei
Wuxian en voz alta, furioso por saber que pensaban dañar a Jiang Wanyin.
Ignorando por completo al omega Wei, Wang Jiao sonrió con aquellas palabras, tomando
nuevamente un aspecto dulce para intentar explicar sus propósitos: “Y por eso al ser un
omega sería una mejor opción, mi señor. Todos saben que los omegas tienen una mayor
afinidad con la energía resentida, todos saben su conexión; bajar a un omega es una buena
forma de hacer salir a la bestia más rápido. Si usted lleva la cabeza de un monstruo ¿Cree que
alguien pensara en la rata que murió?”
Era bien conocido que en el folclore de Qishan, se relacionaba mucho a los omegas con la
energía resentida, bajo la idea de que eran mucho más receptivos a esta y que podían incluso
soportarla mejor. Pero aquello eran leyendas claramente, una leyenda que nunca se
comprobó, pues aunque la secta Wen jamás aclaro porque siempre pensaron esto, ningún
omega voluntariamente se sometería a energía resentida para comprobarlo.
“¿Quieres lanzar a un omega para hacer salir al monstruo? ¡Entonces baja tú mismo!”
Reclamo Wei Wuxian, interviniendo en la conversación: “¡Las serpientes pueden entenderse
con monstruos de su misma especie a diferencia de las ratas!”
Poniendo una expresión de ira al escuchar ese comentario, Wang Jiao giro el rostro para ver a
Wei Ying, preguntando furiosamente: “¿Acaso estas sugiriendo que soy una serpiente?”
Mirando a ese vulgar omega a los ojos, Wei Wuxian respondió: “Jamás lo haría mi señor,
sería un insulto para las serpientes insinuar algo semejante”.
“¡Maldito sirviente! ¿¡Cómo te atreves!?” Grito Wang Jiao, con el rostro desencajado por la
ira.
Tomando a su amado de los brazos para impedir que atacara a Wei Wuxian por la ira, Wen
Chao rápidamente tuvo una idea, mirando rápidamente a Wen Zhuliu, el segundo hijo Wen
dijo: “Una rata es una rata”.
Devolviéndole la mirada de forma confusa, Wen Zhuliu espero a que su señor le diera la
orden. Y con una sonrisa, Wen Chao exigió: “Arroja al joven heredero Jiang”.
Escuchando esas palabras, Lan Wangji grito: “¡Wei Ying!”
Y aunque Lan Wangji quiso proteger a su omega, la secta Lan fue la última en entrar en la
procesión, así que durante todo ese tiempo se mantuvieron en la retaguardia. Por lo que al
escuchar que dañarían a su omega, aunque quiso pasar a empujones por los cultivadores
frente a sí mismo, Lan Zhan no pudo lograrlo a tiempo, pues había una gran barrera de
personas en el estrecho sendero frente a él.
Siendo aquel que estaba al frente de su secta, queriendo proteger a Jiang Cheng, Wei Wuxian
fue rápidamente alcanzando por las manos de los miembros de la secta Qishan Wen, quienes
impidieron que miembros de la secta Yunmeng Jiang intervinieran, mientras Wen Zhuliu
tomaba a Wei Wuxian del cabello y lo obligaba a caminar.
“¡Wuxian!” Grito Jiang Cheng, sintiendo como el cuerpo de su hermano era despegado de
sus manos a la fuerza, mientras él mismo era detenido por los miembros de la secta Wen lo
detenían de querer correr detrás de él.
Sosteniendo a Wei Ying de la coleta alta que siempre traía, Wen Zhuliu lo arrastró a la fuerza
hasta el borde de aquel sendero cortado, obligando a Wei Wuxian a presenciar el vacío
obscuro, jadeando con pánico.
Deteniendo a Wen Zhuliu de que arrojara a Wei Ying de inmediato, Wang Jiao se acercó al
omega con una sonrisa, susurrándole: “Dicen que las ratas corren rápido, veamos cuán rápido
puedes correr tú”.
Presionando los dientes con ira, mirando a Wang Jiao de reojo sumamente furioso, lo último
que vio Wei Wuxian fue el rostro desencajado por la risa de aquel despreciable omega, antes
de ser lanzado a la nada por aquel brazo tan fuerte que antes lo había sostenido por los
cabellos.
Cerrando los ojos y absteniéndose de gritar para no darle placer a sus torturadores, Wei
Wuxian sintió como su cuerpo golpeaba duramente la roca debajo de él, y logrando cubrirse a
penas durante la caída, sintió como su cuerpo rodaba en medio de rocas y mugre hasta tocar
fondo, donde finalmente soltó un fuerte quejido, tosiendo y tocándose la espalda adolorido.
Sorprendiéndose cuando vio una antorcha ardiendo caer cerca de su rostro, Wei Wuxian
escucho como le gritaban: “¡Empieza a caminar! ¡Solo grita si mueres!”
Temiendo que le hicieran algo a su alfa o a su hermano si no obedecía, Wei Wuxian hizo un
esfuerzo para ponerse de pie, comprobando que no se había roto nada y que sus magulladuras
apenas eran algunos rasguños. Ya había caído de una altura semejante años atrás, así que en
silencio agradecido no haber quedado tan mal herido como en ese entonces.
Sacudiendo su ropa y arreglando su cabello, Wei Ying se volteó por un segundo para ver de
forma desafiante a sus secuestradores, para luego tomar la antorcha del piso y comenzar a
caminar como le habían exigido. Temiendo mirar detrás de él o a los lados, pensando que
algo lo atacaría de pronto, Wei Ying se sorprendió al darse cuenta de que aquel lugar estaba
completamente vacío. Sin importar a donde mirara, el resultado era igual: no había nada más
que escombros.
Caminando lentamente por aquella parte baja de la caverna, atento a que algo saliera de la
nada, pronto Wei Ying se dio cuenta de que aquello no era el simple fondo de una caverna,
era un enredado de túneles subterráneos, cada uno más obscuro que el anterior, y muchos de
los cuales parecían conducir a lugares mucho más profundos que aquel en una bajada.
Caminando por fuera de todas esas entradas en silencio, pronto Wei Wuxian se sintió
sorprendido por un sonido familiar.
“¿Agua?” Se preguntó en un susurro.
Asomándose dentro de la entrada de ese túnel, Wei Ying no escucho nada más, pero seguro
de haber oído el sonido característico del agua al chapotear, tomo la decisión de entrar y
seguir por aquel túnel. Alumbrando su camino con aquella antorcha, caminando de forma
recta por algunos segundos más, Wei Ying pronto llego a un lugar mucho más amplio del que
había estado antes, observando un reservorio de agua en el fondo de aquel lugar. Ese sitio el
cual parecía no haber sido visitado en siglos, tenía las aguas calmas y tranquilas, sin una sola
onda, con un color algo turbio y sin poder ver el fondo de aquella pequeña laguna o
reservorio por la obscuridad.
Sin embargo Wei Ying estaba seguro, había escuchado aquel ruido muchas veces antes en
casa, el sonido de cuando un objeto rompía la superficie del agua, creando un sonido
característico de chapoteo; estaba seguro de haber escuchado ese sonido proviniendo de ese
sitio. Pero parado en la orilla, viendo el agua tan calma sin ni una sola onda, se preguntó
cómo pudo haber escuchado ese sonido ¿Acaso algo realmente se había sumergido dentro del
agua?
Pensando que tal vez había peces o algo semejante, con mucho cuidado y precaución, Wei
Ying caminó lentamente hasta la orilla, lo más cerca que pudo del agua, hasta que sus botas
se mojaron ligeramente por ella. Entonces un estremecimiento le recorrió el cuerpo, mientras
inútilmente intentaba alumbrar el fondo de aquel sitio con su antorcha.
Toda el agua de aquel lugar estaba llena de energía resentida, tanta que parecía ser el origen
de esta…
“¡Wei Ying!”
Siendo sorprendido y saliendo de sus pensamientos, Wei Wuxian sintió como las manos de su
alfa lo tomaban de los hombros y rápidamente lo alejaban de la orilla de aquel lago. Mientras
Lan Wangji de inmediato sostuvo el rostro de su mayor entre sus dedos, tocando su cuerpo y
mirándolo sumamente preocupado.
“¿Te encuentras bien? ¿Estas herido?” Pregunto Lan Zhan sumamente preocupado.
Sonriendo al ver ese ligero tono dulce e inocente en su menor, que tanto le recordaban a un
niño asustado, Wei Ying negó diciendo: “Esto bien Lan Zhan, no estoy lastimado”.
Cerrando los ojos y tomando un gran suspiro, Lan Wangji se notó más tranquilo, abrazando a
su omega de inmediato, intentando tranquilizarse. Ver a Wei Wuxian caer por aquel lugar fue
como revivir una pesadilla, una pesadilla que algunas noches lo atormentaba, de ver como su
amado caía y de no poder hacer nada por él. Así que recuperando la calma, Lan Wangji no
quiso soltar a su omega, muy sensible por todo lo ocurrido.
Tras algunos segundos no tardaron en aparecer antorchas por el mismo túnel por el cual
habían llegado, ya que los miembros de la secta Wen y los cultivadores invitados, siguieron a
Lan Wangji cuando este apresurado bajó por una de las cuerdas y se guio por su olfato para
buscar a Wei Ying, sin tardar en encontrar aquel extraño reservorio de agua subterráneo.
Tomando a Wei Wuxian con firmeza y mirando furioso a los miembros de la secta Wen, Lan
Wangji se dirigió con la secta Lan y la secta Jiang, quienes ahora estaban juntos. Cuando la
mayoría de aquellos que habían ido en la procesión bajaron hasta ese punto, se dividieron en
dos grupos, siendo los invitados quienes estaban al frente, y los Wen ahora se quedaban en la
parte trasera resguardándose.
“¿Dónde está?” Preguntó Wen Chao, mirando el lugar vacío.
Interviniendo rápidamente, temiendo una rabieta del joven Wen, uno de los cultivadores Wen
con más experiencia dijo rápidamente: “Debe estar debajo del agua mi señor, la energía
resentida es poderosa en este sitio, así que el monstruo que busca debe estar dormido en las
profundidades”.
Mirando el lago que parecía tan inofensivo a sus ojos, Wen Chao dijo: “¿Y cómo lo
despierto?”
Wei Wuxian puso los ojos en blanco, aun en los protectores brazos de su alfa rodeándolo. Le
era incomprensible el pensar que Wen Chao, el cual era considerado un cultivador dentro y
fuera de su secta, fuera tan ignorante.
“Podríamos intentar lanzar algunos talismanes purificadores al lago, mi señor” Sugirió aquel
cultivador anciano.
Sintiéndose algo preocupado por permanecer ahí dentro demasiado tiempo, Wang Jiao se
negó: “Eso tomaría demasiado tiempo, además si está demasiado profundo no saldrá”.
Escuchando a ese omega tan sucio, el cual ni siquiera tenía un núcleo dorado por no haber
entrenado jamás, Wei Wuxian pensó que todo aquello era muy gracioso, pues hasta Wang
Jiao parecía saber más que Wen Chao; quien poniendo un rostro extraño solo podía escuchar
en silencio, pretendiendo entender la conversación.
“Bueno… No sé si hay otra forma…” Dijo aquel cultivador, sintiéndose algo extraño, pues
no sabía si debía respetar o no a ese omega tan sucio.
Cortando las palabras de aquel hombre, Wang Jiao dijo: “Una vez escuche que si se hace un
sacrificio de sangre se pueden despertar algunas bestias ¿Eso es correcto?”
“Si pero…” Dijo el cultivador, intentando hacer entrar en razón al contrario.
“¿Y es más rápido?” Cuestiono Wang Jiao.
Prefiriendo guardar silencio, aquel cultivador bajo la cabeza, mientras Wang Jiao esperaba
expectante, cruzándose de brazos.
“Claro que es más rápido, pero es más peligroso también” Dijo Wei Ying sin poder
contenerse, mirando detrás del hombro de Lan Wangji a ese omega tan despreciable: “¿Sabes
acaso como se lleva a cabo uno de esos sacrificios?”
Suspirando con indignación, harto de tener que hablar con Wei Wuxian, Wang Jiao mintió:
“Claro que lo se…”
Pero aquello obviamente no era verdad, pues Wang Jiao una vez había escuchado hablar de
aquel sacrificio en una de las pláticas de un superior Wen, y aunque en ese entonces Wang
Jiao era un joven que apenas limpiaba pisos como un sirviente, siempre prestaba atención a
todas las pláticas que escuchaba en caso de que pudiera usar algún dato a su favor. Así que
aunque no le importaba en lo absoluto el mundo del cultivo, recordaba claramente aquella
palabra dicha en aquella platica tan lejana.
“Mi señor, para un sacrificio semejante, uno de nosotros deberá cortarse las palmas de las
manos y con su sangre atraer a la criatura” Explico otro de los cultivadores Wen, temeroso de
que uno de sus señores quedara en ridículo por su desconocimiento: “Alguno de nosotros
deberá entrar al agua sangrando”.
Levantando una ceja, realmente divertido por aquellas palabras, Wang Jiao preguntó:
“¿Nosotros?”
Con una sonrisa, Wang Jiao se volteo en dirección a los cultivadores invitados, mirando
directamente en dirección a la secta Yunmeng Jiang. Anteriormente no tuvo el gusto de
sacrificar a Jiang Cheng por culpa de Wei Ying, sin embargo Wang Jiao era un joven
caprichoso y perseverante, el cual no dejaba ir sus objetivos y siempre tenía claro lo que
quería hacer, sin cambiar de parecer para nada.
Pero la situación era diferente ahora, Wei Wuxian y Jiang Wanyin no estaban solos frente a
un montón de personas Wen en un lugar estrecho, bajo la protección de la secta Lan y los
cultivadores de su propia secta, Wei Wuxian y Jiang Wanyin eran prácticamente intocables.
“Lo quiero a él” Pidió Wang Jiao de forma caprichosa, tomando una actitud dulce solo para
convencer a Wen Chao: “Por favor, deja que sea Jiang Wanyin quien lo haga”.
Un poco harto de la actitud tan caprichosa del omega, Wen Chao replicó: “Jiao Jiao por favor,
escuchaste que es peligroso”.
Poniéndose furioso de nuevo, Wang Jiao exigió gritando: “¡Quiero que lo haga él! ¡Te dije
que lo quiero! ¡Que lo haga ahora!”
Nuevamente intimidado por aquellos gritos chillantes y dolorosamente dulces de Wang Jiao,
Wen Chao no tuvo más opción que mirar a Wen Zhuliu, decidiendo darle la orden de que
fuera por el joven Jiang, solo para que Wang Jiao finalmente se callara.
Notando las intenciones de la secta Wen, quienes se acercaban a ellos de forma peligrosa,
todos los cultivadores invitados se pusieron alertas, y mucho más todavía los cultivadores
Lan y Jiang, pues sabían lo que buscaban los Wen. Sin embargo aquellos sirvientes que
acompañaban a Wen Chao, a pesar de ser cultivadores, veían como muy poca cosa a los
cultivadores que tenían en frente, pues estaban desarmados y no los creían una amenaza.
Y a pesar de ello, cuando los Wen se pudieron frente a los Lan con la clara intención de
pasarlos para tener acceso a Jiang Wanyin, para la sorpresa de todos, los Lan contratacaron,
asustándolos. Los Wen entonces tomaron sus espadas y las desenvainando, empezando una
batalla real entre ellos y las demás sectas. Pero esto no fue una buena opción, pues los otros
cultivadores eran mucho más capaces que ellos, así que sin dudarlo se lanzaron en su
dirección, arrebatándoles sus espadas o intentando quitárselas.
Viendo que comenzaban a ser sobrepasados por los cultivadores invitados, Wen Zhuliu
retrocedió para proteger a su señor, dándoles la señal a los arqueros de la secta Wen para que
se preparan y comenzaran a disparar flechas desde la retaguardia, intentando imposibilitar
completamente a los cultivadores invitados que los estaban sobrepasando.
Sin embargo Wang Jiao no parecía querer darse por vencido, y aprovechando que Wen Zhuliu
y Wen Chao estaban distraídos en la pelea, tomo una espada y de forma silenciosa paso entre
todos los combatientes para acercarse a la secta Lan y a la secta Jiang.
Dejando que los demás pelearan, Lan Wangji se había quedado junto a Wei Wuxian y Jiang
Wanyin, y a pesar de que ambos omegas querían pelear y participar en la batalla, tanto
miembros de la secta Yunmeng Jiang como miembros de la secta Gusu Lan se los impidieron,
pues Wei Ying ya había sido herido y Jiang Cheng era un objetivo. Así que bajo la protección
de Lan Wangji, ellos se quedaron apartados de la pelea, solamente respondiendo si alguien se
acercaba a atacarlos, pero manteniendo una posición defensiva.
Esperando a un momento oportuno, escondido en las sombras cerca de los Jiang y los Lan,
Wang Jiao espero hasta que Lan Wangji tuvo que separarse de ambos omegas para salir
corriendo en su dirección, sosteniendo firmemente aquella espada en la mano.
Viendo como algunos cultivadores Wen se acercaban a ellos, Lan Wangji tuvo que avanzar
con algunos de los miembros de su secta para detenerlos, separándose de Wei Ying y Jiang
Cheng quienes obedientemente se quedaron apartados y distraídos. Así que cuando Wang
Jiao se acercó silenciosamente desde las sombras con la clara intención de apuñalar a Jiang
Cheng, Wei Wuxian fue el primero en darse cuenta, alarmado. Y con un rápido movimiento
aparto a su hermano con un fuerte golpe, casi tirándolo al piso, para luego interponerse y
recibir con su cuerpo el ataque de Wang Jiao.
“Tu…” Susurro Wang Jiao furioso, viendo como se había interpuesto en su ataque.
Soltando un jadeo de dolor, Wei Ying tardo un momento en darse cuenta del dolor punzante
de la espada en su hombro, la cual había atravesado su piel y por muy poco había tocado su
hueso. Pero recomponiéndose de inmediato, Wei Wuxian mostro una sonrisa burlona y
desafiante para aquel omega, tomando la hoja de la espada don sus dos manos sin importarle
si se cortaba la piel, comenzando a tirar de ella para quitársela a Wang Jiao. Y aunque el
omega Wen quiso resistirse, era demasiado débil para Wei Wuxian, así que termino perdiendo
su espada y retrocediendo de inmediato.
Sin perder más tiempo, Wei Ying saco la espada de su piel y la giro en sus manos para
sostenerla del mango, apuntando la espada en dirección a Wang Jiao y atacándolo. Sintiendo
un corte de la hoja en su mejilla, Wang Jiao grito haciendo un escándalo y se tiró al piso
como si lo hubieran herido de gravedad, haciendo que Wei Wuxian pusiera un rostro de
extrañeza por su reacción. Él había recibido una herida profunda en el hombro sin haber
hecho ni un solo sonido, pero aquel omega tan solo había recibido un corte en el rostro y ya
estaba en el suelo retorciéndose como si alguien lo hubiera matado.
“¡Jiao Jiao!” Dijo Wen Chao alarmado, escuchando los estridentes gritos de su omega, quien
chillaba como si lo hubieran asesinado.
Reaccionando de igual forma ante los gritos de aquel otro a quien debía proteger, Wen Zhuliu
avanzo en medio de toda la batalla junto a Wen Chao para ir en busca a Wang Jiao, quien
seguía en el piso gritando, como si Wei Wuxian lo estuviera matando. Sin embargo Wei Ying
se hizo a un lado expectante, aún tenía la espada en las manos, y solamente con la vista fija
en Wen Chao dejo que Wen Zhuliu llegara a Wang Jiao. Sabía que por más habilidoso que
fuera aquel fundidor de núcleos, no podía estar en dos lugares al mismo tiempo, así que
esperando a que este se distrajera con el escandaloso omega Wen, Wei Wuxian corrió en
dirección a Wen Chao, el cual estaba completamente desprotegido sin su guarda espaldas más
fuerte.
Siendo tomado por sorpresa, Wen Chao no pudo evitar el ataque de Wei Wuxian, quien lo
tomo fuertemente de un brazo y le puso la espada en el cuello, y tirando de él para alejarlo de
todos los demás.
“Bajen sus espadas, ahora” Amenazo Wei Wuxian, retrocediendo cada vez más en dirección
al agua.
Mirando como su líder estaba en tal peligro, pero aun dudando de lo que debían hacer, los
cultivadores de la secta Wen se miraron entre ellos confusos, sin obedecer. Por lo que
haciendo más presión, Wei Wuxian puso su espada más cerca aun del cuello de Wen Chao,
lacerando ligeramente su piel de forma amenazante, dejando que algunas gotas de sangre
mancharan aquella espada, exigiendo nuevamente: “Bajen sus espadas y ríndanse, ahora…”
Aterrorizado por sentir una espada en su cuello por primera vez en su vida, Wen Chao exigió
también: “¡Bájenlas, bájenlas ahora!”
Suspirando con resignación, los miembros de la secta Wen obedecieron, bajando sus espadas
y sus arcos, deteniendo la batalla que se había gestado. Sin embargo Wei Wuxian aún no se
sentía seguro, y viendo a Wen Zhuliu a pocos metros de distancia, sabiendo lo que este podía
hacer, decidió retroceder más, sintiendo como el agua comenzaba a llegarle a los tobillos.
“¡Sálvalo! ¡Salva a tu señor!” Exigió Wang Jiao aun sujetando su mejilla herida, nada
contento porque los miembros de su secta hubieran bajado sus espadas rindiéndose: “¿Qué
hacen bajando sus espadas? ¡Peleen!”
Sin embargo a pesar de que todos al inicio estaban atento únicamente a Wen Chao y a Wei
Wuxian, pronto su atención se concentró en otra parte de la caverna, poniendo un rostro de
susto y desencajo.
Wei Wuxian quien estaba dándole la espalda al lago no se dio cuenta al inicio, pero algo
asombrado de pronto sintió como si el agua alrededor de sus tobillos se endureciera, y como
si algo lo sujetara por debajo del agua turbia y obscura.
Por más extraño que sonara, sentía como si unas manos fantasmales lo estuvieran sujetando
bajo el agua.
Y aunque esto lo hizo temblar, Wei Ying perdió por completo el valor cuando sintió como el
agua a su alrededor se movía violentamente, y como a sus espaldas algo salía de las
profundidades elevándose varios metros en el aire, como si volara.
Jadeando por el pánico, sin querer voltear, Wei Wuxian rápidamente miro su espada antes
manchada de sangre, dándose cuenta de que la sangre del desagraciado de Wen Chao
accidentalmente había caído al agua del lago.
Por accidente Wei Ying hizo un sacrificio de sangre con él mismo y Wen Chao.
Había despertado algo de las profundidades.
Capítulo 15.

Guardando silencio por el pánico, Lan Wangji solamente podía ver aquella cosa, con una
visión fantasmal, se elevaba varios metros en el aire, y parecía mirar a todos los presentes
fijamente. Tenía una forma humanoide, con algo que parecía ser una cabeza y unos hombros,
pero tenía una larga túnica corroída y sucia que cubría el resto de su cuerpo, impidiendo ver
si tenía unos pies o no debajo de la tela. Ante sus ojos el agua anteriormente clara del lago se
volvió turbia y obscura, aparentando ser agua sucia, en la cual “cosas” se movían de forma
acelerada.
Aquella cosa que causaba tanto pavor y dejaba en los demás presentes, no parecía haberse
dado cuenta de que Wen Chao y Wei Wuxian estaban en el borde del lago, debajo de él. Y
mirando a todos aquellos que estaba en la playa, levantando el rostro pero sin mostrarlo
debajo de la capucha de su túnica, solo se mantenía a esperar, viéndolos como si fueran
amenazas. Wei Wuxian también parecía haberse dado cuenta de que aquella cosa no se había
percatado de su presencia, manteniendo silencio y casi sin respirar, intentando no avisarle al
ser obscuro de que estaban ahí. Pero Wen Chao no podía controlarse, temblando con pánico
en las manos de Wei Wuxian, solo podía pensar en salir corriendo por el miedo que tenía.
Y sin poder aguantar más, sintiendo como algo comenzaba a tomarlo de los tobillos, Wen
Chao grito: “¡Sálvenme! ¡Sáquenme de aquí!”
Escuchando ese fuerte grito, aquella entidad rugió y bajo la mirada, percatándose de la
presencia de Wen Chao y Wei Wuxian; quienes por su parte levantaron la mirada al escuchar
ese rugido, mirando el rostro de aquella criatura.
Soltando un suave gemido de pánico, Wei Wuxian miro aterrorizado el rostro de aquella cosa,
y reaccionando de la forma más rápida que podía, soltó a Wen Chao y lo empujo a la orilla
fuera del agua, queriendo correr sin pensar en más. Pero Wei Ying olvido que tenía algo
enredado en los tobillos, y aunque intento correr despavorido sin poder pensar en nada más
por el miedo, aquello que parecían ser manos sujetándolo, lo hicieron caer y comenzaron a
arrastrarlo, metiéndolo cada vez más en el agua.
Mirando como su omega era arrastrado, Lan Wangji rápidamente corrió a la orilla, ignorando
a Wen Chao y todo lo demás, solamente pudiendo pensar en su amado: “¡Wei Ying!”
Escuchando la voz de su alfa a lo lejos, aunque quiso luchar y sujetarse de algo, cada vez más
lejos de la orilla y la luz, Wei Wuxian siguió siendo arrastrado a la fuerza por el agua,
sintiendo como más “manos” o lo que aparentaban serlas se aferraban a sus túnicas y a sus
piernas, con sus huesos fríos y puntiagudos. Casi al punto en el cual no podía mantener el
rostro fuera del agua, Wei Wuxian tomo una gran bocanada de aire, siendo inminentemente
arrastrado al fondo del lago.
Siendo ayudado a salir del agua por Wen Zhuliu, Wen Chao comenzó a correr aterrado,
solamente queriendo salir de ahí corriendo, gritando: “¡Tenía la cara podrida! ¡Esa cosa no
era humana!”
“Mi señor, tranquilo” Pidió Wen Zhuliu, ayudando a Wen Chao a caminar.
“¡Tenemos que irnos! ¡Tenemos que irnos!” Exigió Wen Chao.
Mirando detrás de ellos mientras regresaban con los demás miembros de la secta Wen,
quienes se habían arrinconado en la parte trasera de la cueva tras haber terminado la batalla,
Wen Zhuliu replico: “Mi señor ¿Y los demás?”
“¡Deja de pensar en esas raras! ¡Sácame de aquí!” Exigió Wen Chao en otro grito, tomando a
Wen Zhuliu del cuello de su túnica de forma exigente.
Soltando un suspiro de resignación, mirando como todos los demás cultivadores invitados se
habían abocado a la orilla del lago por donde Wei Wuxian había sido arrastrado, Wen Zhuliu
tuvo que seguir las ordenes de su señor a pesar de su valor moral que le pedía ayudar al joven
omega Jiang con aquella cosa tan aterradora. Y tomando a Wen Chao y dirigiendo al resto de
su secta, Wen Zhuliu los dirigió por aquel mismo túnel por el cual habían ingresado a esa
cueva, dirigiéndose a esa parte por donde habían bajado con cuerdas, ayudando a subir a Wen
Chao y a Wang Jiao para salir de ahí.
Gracias a ser alguien de Yunmeng y haber vivido toda su vida en el agua, Wei Wuxian pudo
aguantar la respiración de mejor manera, logrando forzar sus ojos en medio de la obscuridad
del agua, pudo ver como la energía resentida que seguramente controlaba ese ser, realmente
tomaba la forma de unas manos, las cuales se extendían en todas direcciones para alcanzarlo,
arrastrándolo cada vez más al fondo.
“¿Qué es eso?” Se preguntó Wei Wuxian, intentando luchar contra todas a aquellas cosas.
Mientras más se acercaba al fondo del lago, más débil se sentía y más energía resentida podía
percibir. Pero mirando entre todas esas manos y la negrura, pudo observar algo enclavado en
el fondo, y por un instante cuando una luz apareció desde su espalda, pudo ver como el
destello de un metal brillante se mostraba desde el fondo.
Sin previo aviso y siendo sacado de sus pensamientos, Wei Wuxian sintió como un fuerte
brazo se enredaba en su cintura y con un fuerte tirón lo jalaba fuera del agua, soltándolo de
aquellas manos fantasmales y sacándolo del fondo. Saliendo nuevamente a la superficie, Wei
Wuxian tosió y tomo aire de forma desesperada, escupiendo asqueado toda aquella agua
turbia, y pudiendo respirar por fin. Girándose de forma débil, Wei Wuxian pudo ver a su alfa
Lan Wangji, quien de forma seria pero demostrando temor en sus ojos, siguió sosteniéndolo
por la cintura para comenzar a nadar, intentando salir del agua lo más pronto posible.
Usando su propia sangre, Lan Wangji escribió algunos símbolos de protección en su propia
ropa, y tomando una antorcha para alejar aquellos seres obscuros, se metió al agua nadando
superficialmente hasta lo más profundo que podía. Al ser seres de obscuridad y formados por
energía resentida, aparentemente esas manos fantasmales le temían a la obscuridad, así que se
apartaron de Lan Wangji mientras este avanzaba por el agua. Mirando en medio del agua con
dificultad, cuando Lan Wangji pudo identificar a Wei Wuxian en el fondo, se zambullo en el
agua apagando la antorcha, yendo directamente por su omega. Y aunque aquellas manos
querían tomarlo así como a Wei Wuxian, los símbolos de su ropa impidieron que pudieran
rozarlo si quiera. Así que encontrando a su omega en las profundidades, Lan Wangji lo tomo
de la cintura y usando toda su fuerza lo jalo lejos de esas manos y lo saco fuera del agua; y a
pesar de que aquellas extrañas manos de energía obscura seguían luchando por tomar a
alguno de los dos para llevarlos a las profundidades, seguían sin poder tocar a Lan Wangji, y
Wei Wuxian era arrastrado a mucha velocidad por su alfa como para que pudieran sujetarlo.
Aun algo mareado por haber estado tanto tiempo sin oxígeno bajo el agua, Wei Ying se apoyó
débilmente en Lan Wangji, tosiendo e intentando recuperar el aliento, mirando todo de una
forma algo borrosa. Pero en medio de su rápido camino, mientras su alfa nadaba a toda
velocidad para poder sacar a ambos de las peligrosas aguas, Wei Wuxian sintió como la hoja
de alguna planta golpeaba su mejilla, y mirando a un lado del lago, se fijó que había una
grieta que daba al exterior, por donde se filtraban las hojas de los árboles y se filtraban unas
casi imperceptibles haces de luz solar, que se perdían por toda la obscuridad del interior.
Llegando finalmente a la orilla, pudiendo salir de aquella agua tan turbia y desagradable, Lan
Wangji de forma preocupada puso a Wei Wuxian acostado en la orilla, mirándolo a los ojos le
preguntó: “¿Wei Ying?”
Sonriendo algo cansado, sintiéndose mejor al estar fuera del agua y lejos del peligro, Wei
Wuxian respondió: “Estoy bien Lan Zhan, estoy bien…”
Muchos de los cultivadores invitados que habían peleado en aquella pequeña batalla que
todos tuvieron en conjunto con los miembros de la secta Wen, se arremolinaron alrededor de
Wei Wuxian y Lan Wangji, haciendo algunas preguntas. Mientras otros tantos seguían atento
a las aguas de aquel lago, que seguían arremolinadas y con aquel extraño ser varios metros en
el aire atento para atacar. Mientras que otros tantos, los más asustadizos, retrocedieron hasta
lo más profundo de la caverna sin tener la intención de querer luchar más, dándose cuenta de
que los miembros de la secta Wen ya no se encontraban presentes.
“¿Y los Wen?” Pregunto Su She, uno de aquellos que se apartaron por temor, notando que los
miembros de la secta del sol rojo ya no estaban por ningún lado.
Dejando de mantener su atención fija en Wei Wuxian y Lan Wangji, los presentes se giraron
sorprendidos, intentando buscar con la mirada a los miembros de la secta Wen, dándose
cuenta de que habían desaparecido. Dejando de lado su anterior atención por Lan Wangji y
Wei Wuxian, todos los demás comenzaron a buscar a los Wen de forma desesperada,
alejándose de aquel lago con aquel ser maldito, metiéndose entre los túneles para encontrar
una salida. Hasta que finalmente llegaron al mismo lugar por el cual habían entrado,
observando como las cuerdas por las cuales habían bajado hasta ese sitio estaban cortadas,
dejándolos sin salida.
“¡Nos encerraron! ¡Nos dejaron aquí para morir!” Dijo Qin Su aterrada.
Comenzando a llenarse de pánico, todos se dieron cuenta de que no podían salir pues no
podían escalas las paredes tan húmedas de las cavernas, quedándose encerrados en ese sitio al
no tener las cuerdas para subir. Y aunque algunos gritaron y suplicaron a gritos para que los
miembros de la secta Wen regresaran por ellos, ya era demasiado tarde, y los cultivadores
Wen habían huido hace tiempo de la caverna e incluso de la montaña.
Y aquellos gritos desesperados habían resultado mucho menos productivos de lo que todos
esperaban, pues presos de la desesperación, hicieron demasiado ruido, molestando a lo que
fuera que estaba en el lago, el cual rugió con ira. Encogiéndose de miedo, los cultivadores de
las diferentes sectas que seguían encerrados al fondo de aquella caverna, se dieron cuenta de
que aquel ser obscuro estaba furioso porque todos perturbaron su descanso.
Mirando en dirección a la laguna, Jiang Cheng susurro: “Tenemos que encontrar alguna
forma de salir…”
Wei Wuxian, quien estaba parado detrás de su hermano, pensó entonces en aquella grieta que
claramente había visto en una de las paredes de la caverna, sonriendo mientras sus ojos se
iluminaban.
“Creo que es por donde podemos irnos” Dijo Wei Ying animado, tomando a Jiang Cheng del
brazo y a Lan Wangji de la mano.
Sin dar más explicaciones, Wei Ying arrastro a ambos jóvenes de vuelta a la cueva donde
estaba la laguna, pero intentando evitar al monstruo que seguía rugiendo enfurecido, con
todas las aguas turbias, Wei Ying se detuvo en la entrada, donde estaba todo obscuro y podían
camuflarse.
“Ahí” Señalo Wei Ying, intentando mostrar por donde había visto aquella grieta en la roca:
“Ahí hay una salida”.
Forzando la mirada e intentando ver en la dirección en la que Wei Ying señalaba, Jiang
Cheng y Lan Zhan miraron en silencio, pero sin poder identificar nada. La obscuridad era
demasiado profunda por la energía resentida impidiendo que entrara cualquier rayo de luz, y
la grieta era demasiado pequeña como para poder verla a esa distancia.
Extrañado, Jiang Cheng negó: “Yo no veo nada”.
“Está ahí” Insistió Wei Wuxian: “Hay una salida, una grieta en la roca por ahí”
Mirando atentamente en la misma dirección, Lan Wangji prefirió no hacer ningún comentario
al respecto, pues definitivamente no podía identificar nada en medio de las sombras. Así que
viendo el rostro de incredulidad de sus dos acompañantes, Wei Wuxian insistió: “Hay una
grieta estrecha en la roca, estoy seguro, vi los rayos de luz del exterior a través de ellas y el
viento arrastrando hojas dentro de la laguna”.
Prestando atención a ese detalle, Jiang Cheng bajó la mirada al agua del lago, fijándose que
realmente había hojas de árboles marchitos flotando en la superficie ¿Cómo habría hojas ahí
si no provinieran del exterior? Así que suspirando, decidiéndose a confiar en su hermano,
Jiang Wanyin preguntó: “¿Dónde está esa grieta?”
Mirando todo el terreno alrededor de la laguna, intentando buscar la mejor ruta para llegar al
lugar donde creía que estaba la grieta al exterior, Wei Wuxian comenzó a hablar: “Debes
subir ese montículo y caminar pegado a la pared de la cueva por las salientes sin tocar el agua
para no advertir a esa cosa, debe encontrarse por algún lugar de esa pared. Pero el montículo
es bastante alto, así que alguien deberá ayudarte a subir elevándote un poco”.
“El problema ahora es esa cosa” Dijo Jiang Cheng frustrado, mirando a la criatura sobre el
agua, que seguía gruñendo y mostrándose amenazante: “No podre acercarme ni un centímetro
al montículo para subirlo si se da cuenta, mandara las cosas en el agua por mi si se da cuenta
de que estoy tan cerca…”
Mordiéndose el labio pensativo, Wei Ying miro de pronto una antorcha cerca de sus pies,
susurrando: “No le gusta el fuego…”
Entendiendo sus intenciones, Lan Wangji tomo a su omega de un brazo, oponiéndose de
inmediato a lo que este estaba pensando en hacer: “No”.
“Lan Zhan…” Dijo Wei Wuxian, intentando convencer a su alfa.
“No Wei Ying, te dije que no” Negó Lan Wangji, poniéndose sumamente serio.
Sonriendo dulcemente, Wei Wuxian se acercó a su alfa y acaricio sus mejillas, para luego
besar sus labios, notando como el menor se encontraba un poco más sensible y receptivo a
sus toques: “Solo será un instante, mientras tu ayudas a Jiang Cheng a subir al montículo y
mientras él llega a la grieta, yo solo lo voy a entretener para que no los ataque a ustedes”.
“No vas a arriesgarte como una distracción” Se negó Lan Wangji realmente molesto.
“No seré una distracción, solo voy a mantenerlo ocupado… Confía en mi ¿De acuerdo?”
Desviando la mirada, Lan Wangji siguió negándose a aceptar, después de todo no quería
poner en peligro al mayor. Pero Wei Wuxian siguió insistiendo: “¿De acuerdo?”
Suspirando con resignación, aun cuando no quería aceptar, Lan Wangji finalmente dijo:
“Mmm…”
Sonriendo intentando darle confianza a su alfa, Wei Wuxian pidió en un susurro: “Entonces
deja que vaya primero, y cuando esa cosa este conmigo, ustedes avancen por las sombras”.
Tardando un poco en soltar a su omega, Lan Wangji finalmente dejo el brazo de Wei Wuxian,
permitiendo que este tomara la entorcha en sus pies, y valientemente saliera de las sombras a
enfrentar directamente a esa cosa en el agua.
“¡Oye tú! ¡Cosa horrible!” Grito Wei Wuxian, tomando una roca del piso para intentar
arrojársela a esa cosa sobre el agua: “¡Mírame!”
Realmente furioso por el ruido, aquel ser lleno de energía resentida concentro toda su
atención en Wei Wuxian, el cual se paró muy cerca de la orilla del lago. Pero antes de que esa
cosa pudiera atacarlo, Wei Ying hábilmente escribió un sello en su palma con su propia
sangre, creando una llamarada de fuego, que encendió la antorcha que tenía en la mano y
otras cercanas, espantando al monstruo, quien realmente le temía al fuego. Pero Wei Wuxian
no planeaba que este se alejara demasiado, así que tomando más rocas y sin dejar de gritar
para seguirlo molestando, siguió llamando su atención y sirviendo de distracción.
Sin perder a Wei Wuxian de la vista, Lan Wangji y Jiang Cheng avanzaron silenciosamente
en medio de las sombras hasta ese montículo el cual los llevaba a uno de los laterales de la
caverna. Esta formación natural era demasiado alta como para que una sola persona pudiera
escalarla por sí misma, así que siendo ayudado por Lan Wangji, quien empujo sus pies, Jiang
Cheng pudo trepar esta hasta algunos salientes de roca en las paredes, comenzando a caminar
cuidadosamente por estos, intentando buscar aquella grieta en las paredes.
Y a una ligera distancia de la orilla, así como Wei Wuxian había prometido, Jiang Cheng
finalmente encontró la grieta, sonriendo de inmediato. La luz del atardecer se filtraba en el
interior con el frio viento de las montañas, mostrando una salida al otro lado de la montaña a
la cual habían ingresado por la boca de la caverna principal. Pero la grieta era demasiado
estrecha, así que tomando una rama cercana, Jiang Cheng tuvo que usar toda su fuerza para
abrirla un poco más hasta que permitiera el paso del cuerpo de una persona, dándose cuenta
de que las paredes de la caverna estaban demasiado corroídas y la roca se rajaba con
facilidad; lo que traía una nueva complicación, pues no sabía cuánto podría resistir aquella
grieta abierta a la fuerza por él mismo antes de derrumbarse, lo que significaba solo una cosa:
Que debían apresurarse a salir por ese sitio.
Con la salida abierta, Jiang Cheng regreso al montículo lo más rápido y silencioso que podía,
encontrándose con Lan Wangji para decirle lo que había encontrado, pidiéndole que les dijera
a los demás que se acercaran de uno en uno para pasar a la grieta, ya que solo podía pasar una
persona a la vez y debía ser ayudada a subir al montículo.
Haciendo lo que le pedían lo más rápido posible, Lan Wangji regreso con los demás
cultivadores para explicarles que había una salida, pidiéndoles que fueran de uno en uno a
través de la obscuridad, para que él los ayudara a subir al montículo y Jiang Cheng los guiara
hasta la grieta con cuidado. Ayudando a subir a los demás lo más rápido que podía, Lan
Wangji no podía evitar apartar la mirada de Wei Ying, mirando asustado como este seguía
batiéndose contra el monstruo usando sellos y tirándole rocas, esquivando ataques
hábilmente. Pero el segundo maestro Lan no olvidaba que su omega estaba herido, así que a
pesar de que Wei Ying se movía con soltura intentando aparentar que todo estaba bien, él
sabía que Wei Wuxian se movía más lento por su herida y tarde o temprano terminaría
cansándose.
Y tras varios angustiantes minutos, en los que Lan Wangji subió gente al montículo sin parar,
pronto se alegró al ver que tan solo quedaba una persona, su gran amigo Su She; quien
aparentando valentía se había quedado hasta el final para pretender que ayudaba. Sin cruzar
palabras con Lan Zhan, harto de fingir que quería estar ahí para ayudar, Su She subió al
montículo ayudado por su amigo de una forma apresurada, solamente pensando en salir de
ahí. Siendo recibido en la cima por Jiang Cheng, Su She ignoro todas las indicaciones que el
contrario le dio, advirtiéndole que no tocara la roca por el temor de que las paredes se
derrumbaran y tuviera cuidado con el camino hasta la grieta pues era resbaloso por la
humedad del lugar.
Pero Su She no hizo ningún caso, y haciendo eso que le habían pedido no realizara, se tomó
de las paredes mientras corría a la grieta, siendo perseguido por Jiang Cheng, quien en
susurros le pedía que fuera más cuidadoso pues ocasionaría un desastre. Todo parecía ir bien
hasta que Su She llego a la entrada de la grieta, donde tropezó por lo resbaloso del piso y se
agarró de las paredes para evitar caer de forma estruendosa, esto ocasiono que la roca se
rajara y la grieta se abriera aún más, filtrando más luz y haciendo un gran ruido.
Girándose en dirección la grieta, el monstruo de las aguas soltó un horrible grito de disgusto,
pues así como no le gustaba el fuego tampoco le gustaba el sol. Y comenzando a agitarse,
Wei Ying presencio como de las aguas manos comenzaban a lanzarse en dirección a la grieta,
donde aún estaba Jiang Cheng.
Casi empujando a Su She para que saliera de ahí, Jiang Cheng se quedó en la grieta, mirando
a su hermano y a Lan Wangji desesperado, sin querer dejarlos atrás: “¡Wei Ying!” Grito Jiang
Cheng, intentando que su hermano viniera.
“¡Vete!” Grito Wei Wuxian asustado, temiendo que aquella cosa dañara Jiang Cheng: “¡Vete!
¡Vete ahora!”
Tomando más rocas del piso, Wei Wuxian siguió lanzándoselas al monstruo intentando que
volvía a mirarlo para distraerlo y alejarlo de Jiang Cheng, pero era en vano pues el malvado
ser estaba demasiado molesto por la luz del exterior y solo podía concentrarse en Jiang
Wanyin, el joven que había tomado una antorcha y resistía todavía en la entrada, negándose a
dejar a su hermano.
Viendo como las manos monstruosas que salían del agua ya no iban por Jiang Cheng, si no a
la parte superior de la caverna, con la intención de derrumbar parte del muro para cubrir la
grieta, Wei Wuxian miro a su hermano a los ojos con una sonrisa, susurrando: “Esta bien,
vete…”
Devolviéndole la mirada con angustia, Jiang Cheng se negó a irse, pero el también sintió las
paredes temblar, dándose cuenta de que pronto aquella pared se derrumbaría, y si se quedaba
ahí saldría lastimado. Así que insistiendo, Wei Wuxian repitió: “Esta bien, vete, debes irte.
Estaremos bien…”
Leyendo los labios de su hermano y dándose cuenta de lo que le quería decir, a pesar de que
aún se resistía, Jiang Cheng termino saliendo al exterior y dejando la grieta, dándole una
última mirada de preocupación a Wei Wuxian. Definitivamente no quería dejar a su hermano
ahí adentro con ese monstruo, pero no tenía otra opción.
Viendo como el monstruo finalmente lograba derrumbar la pared poco después de que Jiang
Cheng se alejara, la luz abandono finalmente aquel lugar, y la única salida de aquel sitio fue
sellada de nuevo, dejando a Wei Wuxian y Lan Wangji encerrados ahí, con ese ser. Volviendo
a enfocarse en Wei Wuxian, pero ahora con mucha más ira, el monstruo comenzó rebasar sus
límites para atacar. Y aunque antes no pasaba de la orilla, ahora las manos obscuras que
salían del agua llegaban a todos los lugares, cada vez más cerca de Wei Wuxian.
“¡Wei Ying!”
Volviendo a ser tomado por sorpresa mientras esquivaba los ataques del monstruo, Wei
Wuxian fue tomado de la mano por su alfa rápidamente, siendo tirado en dirección a uno de
los tantos túneles que habían en el fondo de aquel lugar, un sitio que ya estaba demasiado
alejado del agua y en donde el monstruo ya no podía alcanzarlos.
Jadeando sumamente cansado, mirando como Lan Wangji encendía una de las antorchas para
iluminar su camino, Wei Wuxian siguió escuchando los gritos aterradores de aquella cosa
horrible fuera de aquel túnel, que lo llevaban a preguntarse: “¿Pero qué rayos es esa cosa?”
Mirando en la misma dirección que su amado, Lan Zhan respondió: “Creo que tengo una idea
de lo que puede ser”.
Capítulo 16.

“Hay una vieja historia de la secta Wen, que en Qishan tiene muchas variantes dependiendo
de la secta que lo cuente, pero todas hablan de lo mismo”
Bajando la mirada y calentando sus manos en la leve llama de aquella fogata que de manera
rudimentaria consiguieron encender con ramas viejas, Wei Wuxian guardo silencio, dejando
que su alfa siguiera hablando.
Sentado frente a la fogata al lado contrario que Wei Ying, Lan Wangji siguió hablando:
“Antes de que las sectas se crearan, cuando habían muchas peleas por los territorios y no
existía ningún tipo de líder en las familias, todos hablan de un omega que provenía de aquella
primera línea familiar que dio origen a la secta Wen. Este omega nació en una familia
acomodada, así que no aprendió a ser un cultivador, fue criado para ser una buena esposa y
fiel sirviente a su marido. Cuando tuvo su primer celo, fue entregado como prometido al jefe
más hábil de su padre, el más fuerte de todo su ejército. Las fuentes difieren aquí, muchos
dicen que se casaron, otros dicen que simplemente tuvieron su tiempo de cortejo; como fuera
el resultado es el mismo, ambos se enamoraron perdidamente. Sin embargo este romance se
desarrolló tan solo unos días antes de que la gran guerra de Qishan sucediera…”
“¿La gran guerra de Qishan?” Pregunto Wei Ying algo confuso.
“La primera región en dividirse y tener una secta representante fue Lanling, ellos se basaron
en el poder económico y decidieron a los Jin como la secta predominante de una forma
pacífica, en una reunión donde se establecieron alianzas y se firmaron acuerdos. Es por eso
que la familia Jin tiene una relación mucho más estrecha con sus sectas vecinas que el resto
de grandes sectas en las demás regiones. Después de ellos, casi al mismo tiempo que estalló
la guerra en Qishan, la región de Yunmeng estaba decidiendo a los Jiang como sus
representantes de una forma pacífica también. Y aunque supongo que se trató de hacer algo
similar en Qishan, en ese entonces existían muchas familias de alfas y betas que se
disputaban el poder, ya que a diferencia de otras regiones, no había tanta diferencia de poder
entre las más grandes familias, todas estaban bastante iguales en cuanto a poder, entonces
esto disputo grandes peleas entre los representantes de estas, hasta el punto de llegar a una
guerra. Una guerra para decidir quién sería la secta más fuerte de toda la región”.
Asintiendo con la cabeza, Wei Ying bostezo ligeramente, fingiendo saber a lo que su alfa se
refería, cuando en verdad no tenía ni idea, y tampoco tenía mucha intención de querer
aprender sobre ello. Cuando era pequeño solía dormir en las clases teóricas de Yunmeng, esas
que hablaban sobre las historias de cada secta y su origen. Y aunque sabía de memoria los
nombres de los fundadores de cada secta y otras de sus características, siempre hubo cosas
que nunca se molestó en aprender. A él le gustaba más aprender cosas teóricas respecto al
cultivo, no tanto sobre guerras y matrimonios importantes; solo sobre grandes cultivadores
fuertes que hicieron grandes hazañas.
“La secta Wen estaba entre esas familias que se disputaban la supremacía de la región, pero
ellos no estaban ni siquiera entre las 5 familias más poderosas de Qishan, eran una simple
secta de Betas, viviendo en una región no muy favorecida y cercana a Yunmeng, que apenas
tenía algunos alfas y mayormente omegas en su línea principal. Pero para no desaparecer, a
pesar de que ninguno de ellos quería luchar, debieron pelear en la guerra, temerosos de que si
no actuaban otra familia iba a destruirlos. Y fue en esta secta donde estaba ese omega del
cual te hablo, el omega de la leyenda es el origen real de la secta Wen, nunca fue Wen
Mao…”
“¿Y por qué no está en los libros de historia como tal? ¿Solo por ser omega?” Pregunto Wei
Ying, comenzando a molestarse.
“Los Wen lo borraron”.
“¿Pero por qué?”
“En mi secta hay una gran aversión a aquellos que se juntan con el mal, en las demás sectas
también, y todo eso es gracias a la secta Wen. La familia Wen tiene un respetuoso miedo a la
energía resentida y el mal, todos ellos. Sin libros y de padre a cada hijo, hay leyendas sobre
ello, leyendas de terror sobre los peligros de que un omega maneje energía resentida… Wen
Ruohan le conto esas leyendas a mi tío, y ahora yo voy a contártelas a ti” Explico Lan Wangji
con seriedad.
Aun sin entender lo que su alfa quería contarle y como se relacionaba con el monstruo, Wei
Wuxian decidió guardar respetuoso silencio, dejando que Lan Wangji siguiera con el relato:
“Debido a la guerra, el esposo o prometido del omega de la familia Wen fue llevado a la
guerra, siendo puesto al frente, tuvo grandes batallas y victorias; las cuales le eran contadas
constantemente a su amado en su hogar. Pero de un día al otro, las noticias dejaron de llegar,
las mariposas mensajeras del esposo del omega no aparecieron más, y todo se quedó en
silencio. Las demás fuerzas de la secta Wen siguieron adelante, pero ya nadie hablo del
pelotón que lideraba el esposo del omega, ni nadie explico su paradero. El omega entro en
desesperación, y sin obtener noticias, tomo una decisión desesperada, ocultando su naturaleza
escapó como un soldado cualquiera de su familia a la guerra, solo para buscarlo”.
“Ahí paso muchas penurias, hasta encontrarlo en un pueblo donde se había enamorado de
otro omega” Dijo Wei Wuxian volviendo a bostezar: “Que cansino Lan Zhan, ya me habías
contado esa historia, la recuerdo bien porque fue del tiempo cuando pensaba que estaba
esperando un hijo tuyo…”
Bajando la mirada algo arrepentido, Lan Zhan pregunto: “¿La recuerdas? ¿En qué te dije que
terminaba?”
“Algo más aburrido aun, que él perdonaba a su esposo o prometido infiel y regresaba a casa,
donde entrenaba a sus cultivadores y algo así” Explico Wei Ying.
“Bueno… Fue algo así en verdad, pero no del todo. Después de pasar muchas penurias, al
punto de casi ser torturado y asesinado por una familia rival, el omega Wen encontró una
respuesta de un disidente de su propia secta, quien le dio el nombre de un poblado a las
afueras de la región, un pueblo que estaba fuera de la guerra, y donde podría estar su amado.
Sin embargo al llegar el omega se dio cuenta de que aquel alfa al que amaba en realidad
estaba con otra mujer, otra omega quien aparentemente era su destinada. En todos esos años
en los cuales él había estado fuera de la batalla, ambos construyeron un hogar, próspero y
lleno de hijos. Su amado había preferido traicionar a su familia y a su secta solo por amor”.
“Entonces lo perdona por compasión” Dijo Wei Wuxian.
“Los asesino a todos” Dijo Lan Wangji en un susurro, mirando a Wei Ying al otro lado de la
fogata.
Quedándose en silencio por el giro de la historia, Wei Wuxian no pudo evitar sentirse
ofendido, pues había descubierto una de las mentiras de su alfa, algo que lo hizo entrecerrar
los ojos con enfado.
“Tras cometer una masacre, el omega Wen se quedó al lado del cadáver de aquel a quien
había amado tanto y por quien había sacrificado tanto. En los libros usuales de historia o de
cuentos de Qishan, luego de reflexionar sobre sus actos el omega acaba con su vida
suicidándose en Los Túmulos Funerarios, un lugar cercano a su hogar. Pero según la versión
de Wen Ruohan, esa que su padre el conto, y esa que todos los miembros de la rama principal
de la secta Wen cuentan como el origen verdadero de su secta; es algo diferente. El omega
creía que su alfa había tenido un fin demasiado pacifico después de lo que le había hecho
pasar, todo el dolor y la desilusión que causo, así que a pesar de que parecía imposible,
decidió que lo atormentaría aun en la muerte”.
Estremeciéndose ligeramente, Wei Wuxian pregunto: “¿Acaso esto se ha transformado en una
historia de terror Lan Zhan? Que miedo…”
“Cuando la guerra ya casi estaba a su final y solo quedaban tres familias fuertes de alfas que
seguían en pie, luchando, la secta Wen renació. Siendo guiados por el hijo menor del antiguo
jefe de la familia, un omega el cual había desaparecido hace años, ellos regresaron al campo
de batalla. Su padre había muerto, también sus hermanos, y ahora solo quedaba él con unos
cuantos súbditos, pero valiéndose de la espada de aquel quien había sido su amado y una
extraña flauta de roble obscuro, el omega Wen podía vencer ejércitos”.
“¿Él solo?” Pregunto Wei Ying sorprendido.
“Él y aquel alfa quien había sido su prometido” Explico Lan Zhan.
“¿No estaba muerto?”
Respirando profundo, Lan Zhan se encogió de hombros, respondiendo: “Según mi tío, Wen
Ruohan le contó que cuando regreso a su secta, el omega trajo consigo a ese que alguna vez
había sido su esposo o su prometido, pero ya no era más un ser vivo, era otra cosa…”
“¿Cómo un cadáver viviente?” Pregunto Wei Wuxian sonriendo muy emocionado,
divirtiéndose con el repentino giro que había tomado todo.
“No tengo idea, no sé si un cadáver viviente pueda controlarse, tal vez era otra cosa, tal vez
no lo mato o era alguien más. Una historia contada de persona a persona por tantos años suele
deformarse” Explico Lan Zhan, intentando darle un sentido a todo: “Sin embargo todos
hablaban de ese omega como un oponente imbatible, no importaba a cuantos ejércitos se
enfrentara, él solo o acompañado con los pocos súbditos que le quedaban, aplastaba a todos
frente a él. E invadiendo casas ancestrales de familias de la región, masacrando a quien se
pusiera en frente, amenazaba a todos con unirse a su familia o morir. Así fue como al final de
la guerra solo quedo la familia Wen en la región de Qishan, sin ninguna otra secta
sobreviviente, y siendo la más numerosa de todas la sectas pues no daba opción a negarse a
formar parte de ellos”.
Sonriendo emocionado, así como cuando escuchaba la historia de otros grandes cultivadores,
Wei Wuxian comento: “Un gran cultivador, sumamente fuerte”.
“El omega nunca fue un cultivador, no fue instruido como tal, seguramente no tenía ni un
núcleo dorado para pelear” Lo corrigió Lan Wangji.
“¿Y cómo peleaba entonces?”
Sin saber que responder, pues a pesar de saber la historia no sabía todos los detalles, Lan
Wangji siguió contando la historia: “Después de ser nombrado el líder de la región, el omega
Wen tomó el hogar ancestral de una de esas familias a las cuales había asesinado, y fundo su
secta como tal. Adelantándose a posibles problemas internos de aquellos miembros de otras
sectas a los cuales había obligado a unírseles, decidió tener un hijo con el descendiente de la
familia más poderosa, y ahí nació Wen Mao, el líder y supuesto creador de la secta Qishan
Wen; el único hijo del omega”.
“Una pregunta, solo una pregunta ¿Cómo sabes que esta historia es real? Suena real, pero
puede no serla, si la contó Wen Ruohan… Yo dudaría” Dijo Wei Ying.
“Los Wen pudieron borrar de la historia la mayoría de las hazañas de su verdadero creador,
pero no pudieron borrarlo de toda la historia. Para empezar, Wen Mao era casi unos 14 o 15
años menos de los demás líderes de las demás sectas al tomar el poder ¿Quién estaba a cargo
de la secta Wen en todo ese tiempo? No se la historia de todas las sectas, pero sé que en la
secta Jin hay un rumor: El fundador de la secta Jin compro los planos de un objeto diseñado
por el líder de la secta Jin para su hijo primogénito, que era omega; nunca escuche que Wen
Mao fuera un diseñador de armas espirituales, además de que si esto es verdad,
probablemente Wen Mao tenía la edad del hijo del líder de los Jin entonces ¿Por qué
comprarle algo a otro niño? Y además hay muchos puntos que concuerdan con la historia, el
hecho de que la secta Wen sea la única secta en todo Qishan, no es como tu secta o la mía,
que tienen sectas alternas como la familia Su en Gusu o la familia Yu en Yunmeng; en Qishan
solo ha existido una secta desde el inicio, solo la secta Wen. Si mencionamos a Wen Mao,
donde sea, en cualquier libro, nunca veras información de sus padres, solo que fue el
fundador de la secta Wen sin hablar de su origen, es el único del cual no se menciona de
donde viene. Y hablando de la secta Lan… Están las notas del líder Lan An”.
“¿Lan An? ¿No es el fundador de tu secta?”
“Lo es, un alfa brillante y recto, un ejemplo para todos los miembros de mi familia quienes
descendemos directamente de él. Como un hombre recto y disciplinado, Lan An tenía un gran
número de anotaciones, diarios y registros de lo que él creía importante. Esos registros
existen todavía en mi secta, en la biblioteca privada a donde solo tiene acceso el líder, están
todos los diarios y registros del líder, una reliquia de décadas, que solo tenemos acceso los
descendientes directos, pues en esos diarios no solo hay registros de reuniones entre líderes o
cosas relacionadas a mi secta en sus inicios, están los sentimientos y las vivencias de mi
primer antepasado”.
“¿Y tú lo leíste? ¿Cotilleaste entre los diarios privados de tu antepasado?” Pregunto Wei Ying
divertido.
Desviando la mirada, Lan Wangji respondió algo avergonzado: “Mmm…”
“¿Y qué dice? ¿Hay algún dato vergonzoso? ¿Algo gracioso del perfecto líder Lan An?”
Dudando un poco en responder, Lan Wangji susurro: “Estaba enamorado del padre de Wen
Mao”.
“¿Qué?”
Asintiendo, Lan Wangji siguió contando: “Siempre ha existido una relación entre la secta Lan
y Wen, desde el inicio siempre se espera que nuestras sectas estén juntas, que se casen, que
tengan relaciones amorosas. Y a lo largo de la historia esto siempre ha fallado, todos los
compromisos y matrimonios que forzosamente se trataron de hacer para complacer deseos
pasados, siempre terminaron en desastre. Y eso le paso al líder Lan An. Él era un monje que
había abandonado su divinidad para ayudar a los pobladores de Gusu y formo su propia secta
para protegerlos de la maldad, creo una secta recta y personas de bien para ella. Pero él líder
era un alfa, no era inmune a los placeres carnales y el amor, y creía ser el destinado del
omega Wen… Su amado Shima”.
Pestañeando confundido, Wei Wuxian no supo que decir. Pues había comenzado escuchando
una historia para niños de la secta Wen, que terminó convirtiéndose en algo similar a una
conspiración contra un héroe olvidado de la historia, para transformarse en una historia de
terror, y terminando siendo una historia de amor escondida con aquel que para todos era
tomado como el hombre más ilustre y recto de la historia.
“Wen Shima, el nombre del que según mi ancestro, era el primer líder de la secta Wen. Él lo
describe como un omega tímido, de cabello negro y sumamente largo que solía recoger en
una coleta baja, siempre adornado con joyas rojas y una armadura o túnicas negras, resultaba
entre todos por ser el más temido de todos los líderes, pero aquel que tenía la apariencia más
fina y delicada de todos. Esto fue un escándalo en su época, pues cuando Lan An fue
nombrado líder de la secta Lan en Gusu y se presentó ante los demás líderes como tal, Wen
Shima ya se había embarazado y tuvo a Wen Mao, quien era un niño de un par de años, un
chiquillo que corría en Sin Noche siendo mimado por su madre. Shima sin embargo nunca se
casó, tuvo muchas aventuras románticas y fue tildado como un omega indecente por ello,
pero nunca tuvo un amorío serio con nadie; hasta Lan An. En su notas privadas, su diario
privado, donde ponía sus pensamientos más privados, él aseguraba y prometía estar seguro de
que era el alfa desinado de Wen Shima, y estaba locamente enamorado de él, tanto que en
cierto punto para mi… Parecía un acosador para el líder de la secta Wen”.
“¿Locamente enamorado? ¿Cómo?”
“Hacia cosas vergonzosas”.
“¡No lo calles!” Exigió Wei Ying haciendo un puchero, mirando a su alfa con el ceño
fruncido: “Quiero saber que son esas cosas vergonzosas…”
Sintiendo sus orejas sonrojarse ligeramente, Lan Wangji respondió: “Le mandaba cartas
diarias, intentaba comunicarse con él cada vez que lo veía en cualquier lugar, y… Le escribía
poesía… Poesía muy explícita y… Erótica”.
Soltando unas risas divertidas, Wei Wuxian comento: “Todos los alfas de tu secta parecen
perder la cabeza cuando se enamoran…”
“Mnn…” Dijo Lan Wangji avergonzado, desviando la mirada sonrojándose más.
Decidiendo no avergonzar más a su alfa, Wei Wuxian decidió pedir: “Esta bien, está bien
Hanguang-Jun… Lo siento, perdona, no diré nada. Pero continua por favor, quiero saber que
paso con Wen Shima”.
“No es una historia de entretenimiento, Wei Ying” Lo regaño Lan Wangji.
“Lo sé, pero aún no hemos llegado al punto en el que todo esto se relaciona con el monstruo”.
“Lan An relata muchas cosas en sus diarios sobre Shima, su enamoramiento inicial cuando lo
conoció, lo seguro que estaba de ser su destinado y de cómo rompería todas las reglas de su
secta por él. Pero con el paso del tiempo… Comenzó a registrar otras cosas. Wen Shima
había conseguido su objetivo, tenía una secta libre y había reivindicado a su familia, tenía un
hijo y sucesor, y había cumplido su venganza con todos a quienes había dañado; pero eso no
lo detuvo de seguir adelante. Además de cuidar de su secta, mientras criaba a su hijo y se
encargaba de todo, comenzó a realizar algunos experimentos con la energía resentida, crear
objetos espirituales… Hacer cosas inmorales con los cadáveres… Lan An refleja su temor
por esto en sus diarios, y habla de cómo intenta casarse con Wen Shima, la presión que hace
la secta Lan para obtener su mano y casarse con él; pero Wen Shima siempre lo rechazo”.
“¿Pero por qué? Si eran destinados… ¿Acaso Shima pudo no darse cuenta?”
“Lan An escribió que su omega estaba muriendo”.
“¿Cómo?” Pregunto Wei Ying sumamente curioso.
“Lan An describe cortamente en una de las entradas de sus diarios como la salud de Wen
Shima comenzó a deteriorarse por la energía resentida, los efectos que tenía en su carácter y
en su cuerpo, como lo mataba lentamente convirtiéndolo en un monstruo. Y lo primero que le
paso, incluso antes de conocer a mi antepasado, fue matar a su omega lentamente; hasta el
punto en el cual cuando mi antepasado lo conoció, ya no tenía feromonas, y era
prácticamente un beta. Wen Shima solo tuvo un hijo por que no pudo concebir más, con otras
alfas de su propia secta o incluso el propio Lan An, muchas veces trato de quedar en cinta,
pero nunca pudo hacerlo. Sus celos desaparecieron, así como sus feromonas, y… Dejo de
sentir a su omega. Como un efecto irreversible comenzó a perder su identidad. Sin un omega
al cual responderle, Wen Shima no podía entender o no quería entender que Lan An era su
destinado”.
“Eso es tan trágico…” Susurro Wei Ying apenado.
Asintiendo, Lan Wangji comento: “Lan una vez escribió que todos los omegas y alfas Wen
tienen una maldición, algo que les impide ser felices, y sin importar sus intentos, todos ellos
vivirán vidas miserables y sin poder encontrar la felicidad. Eso le paso a Wen Shima. Él y
Lan An tuvieron una relación más que algo ‘amistoso’, a pesar de ser inmoral estoy seguro de
que Lan An y Wen Shima tuvieron relaciones sexuales sin estar casados, y tuvieron la que fue
la última relación romántica seria de Shima; a pesar de que al final nunca quiso casarse con
mi antepasado. Y eso es una pena, porque Lan An no podía saberlo, cuando todas las
tragedias que sacudieron a Wen Shima ocurrieron, mi antepasado estaba sirviendo como un
monje en la divinidad, sin saber que su alma gemela sufría en el mundo terrenal. Esas son las
cosas de las que Lan An mas se lamenta en sus diarios”.
Sin poder evitar pensar en Wen Xu, Wei Wuxian prefirió no responder aquello, mirando de
reojo a Lan Wangji ¿Había sido el causante de la maldición en esta ocasión? No podía estar
seguro y eso lo entristecía.
Continuando, Lan Zhan dijo: “Tras varios años, cuando Wen Mao cumplió 13 años, por un
problema interno en la secta Wen que nunca se revelo ni a mi antepasado, Wen Shima fue
expulsado de su secta y de ser el líder de los Wen. Así que a pesar de las insistencias de mi
antepasado, quien incluso trato de obligarlo a ir a el Receso Entre Las Nubes para estar
juntos, Wen Shima se exilió en solitario al antiguo hogar de su familia, ese que habito antes
de ir a Ciudad Sin Noche, un templo en el lugar que ahora se conoce como Los Túmulos
Funerarios”.
“Y ahí… Wen Mao fue a matarlo” Dijo Wei Wuxian, conociendo la historia.
“Todos hablan de ello, tras varios años, cuando Wen Mao ya tenía una esposa e hijos, pero sin
ser tan mayor, reunió un pelotón de mil hombres para detener a su propia madre e hizo un
asedio en Los Túmulos Funerarios. Tras una batalla de tres días y tres noches, solo diez
miembros de la secta Wen salieron de la montaña, los cuales decidieron hacer un voto de
silencio ante lo que había pasado en ese sitio, donde murió Wen Shima y también Wen Mao.
Lan An en ese tiempo fue obligado a casarse, tomo como esposa una mujer originaria de
Gusu, la cual de forma comprensiva nunca forzó sus sentimientos y le dio hijos, siempre
entendiendo que su corazón no estaba con ella, seguía con Wen Shima. Así que cuando los
rumores llegaron a Gusu en forma de celebración, de que Wen Shima había muerto asesinado
por su propio hijo, Lan An corrió a los Túmulos Funerarios para verlo con sus propios ojos, y
tras perderse por varias semanas, él dijo que no consiguió encontrar su cadáver, pero que
sabía que había muerto”.
“Eso es… Desolador. Tan doloroso perder a tu destinado” Dijo Wei Ying en un susurro,
conociendo ese sentimiento y teniendo empatía con Lan An.
Asintiendo, Lan Wangji suspiro, susurrando: “Lan An lo amo incluso cuando este dejo de ser
un omega, no le importo no poder tener hijos con él o lo que dirían las demás sectas, dedico
gran parte de su vida en componer canciones y poesía para un hombre que nunca
correspondió sus sentimientos, decidido a limpiar su cuerpo y su alma de la energía
resentida… Y cuando murió, Lan An creo una técnica para hablar con fantasmas, y con su
Guqin por años hasta su muerte trato de contactarlo, llamándolo mediante la única forma
conocida de poder hablar con los muertos, y no lo olvido. No sé si consiguió hablar con él
mediante ese método alguna vez, pero Lan An aun así no pudo olvidarlo, cada día seguía
escribiéndole una carta que nunca pudo enviar y guardo en cientos de tomos dedicándole su
amor a un muerto, y cada vez en su cumpleaños creo una festividad en Gusu, lanzando
cientos de linternas al cielo y quemando papel en su honor. Y yo estoy completamente seguro
de algo, Lan An creía que él regresaría, por algún motivo hablaba de que había un método de
traerlo de vuelta, y que lo esperaría sin importar el tiempo, estando seguro de que volvería a
la vida aunque él jamás regreso. Así que con esa esperanza, Lan An murió amando a ese
omega, siendo el único que seguía llamándolo por su nombre a pesar de que todos se habían
encargado de borrar su nombre de los libros de historia, extrañándolo y añorándolo… Lan An
fue el último en escribir el nombre de Wen Shima en su última carta antes de morir”.
Bajando la mirada, Wei Wuxian guardo silencio por algunos segundos, pensando en lo que
acababan de decirle, sin saber bien que responder, realmente conmovido. Pero cuando toda
esa triste historia dejo de lastimar su corazón, extrañado pregunto: “No entiendo ¿Y esto que
tiene que ver con el monstruo en la caverna?”
“Tú también lo viste ¿Verdad?” Pregunto Lan Wangji en un susurro.
“¿Ver qué?”
“Al fondo del lago, en medio de la obscuridad, hay una espada clavada al fondo, en las
profundidades” Dijo Lan Wangji pensativo: “La vi por un segundo mientras estábamos en el
agua, resguardada en medio de la obscuridad…”
Encogiéndose hombros, pensativo, recordando lo que había visto, Wei Wuxian susurro:
“Podría ser… Estaba todo tan obscuro… Vi algo pero no sé lo que es”.
“Buscando el cadáver de Wen Shima, Lan An fue hasta la secta Wen a exigir explicaciones, y
finalmente consiguió algunas respuestas de uno de los diez soldados que sobrevivieron al
asedio en Los Túmulos Funerarios. Ese soldado le dijo que el cuerpo de Wen Shima fue
tragado pro las profundidades de la montaña en un pozo lleno de sangre, sin volver a salir.
Mientras que toda la investigación que Shima hizo en esos años, pergaminos y libros, fueron
quemados para que nadie pudiera tener ese poder de nuevo. Mientras que la flauta de madera
negra que Wen Shima siempre traía consigo, fue tomada como una reliquia para los Wen, y
permanece guardada en una bóveda en Sin Noche, donde no ha sido tocada por décadas, pero
siendo un recuerdo latente de que la historia es real. Y el objeto maldito más poderoso de
Wen Shima, su espada, esa alguna vez perteneció a su prometido y este le arrebato al
asesinarlo con ella, era un objeto tan poderoso y lleno de energía resentida que no pudieron
purificarlo o destruirlo. Así que por instrucción de cultivadores expertos, la espada fue
llevada a un lugar sagrado, un templo subterráneo donde había una fuente de agua que todos
llamaban milagrosa. Con la esperanza que aquella agua sagrada purificara el mal del acero, la
espada fue arrojada al fondo de aquella fuente natural, y aquel lugar sagrado fue cerrado y
ocultado del resto del mundo, intentando evitar que alguien pudiera encontrar esos objetos
que tanto daño hicieron en el pasado. Esa fue la razón por la cual esos diez soldados hicieron
un voto de silencio, después de todo el horror que presenciaron, decidieron evitar para
siempre que alguien alguna vez tratara de volver a controlar energía resentida, llevándose
consigo a la tumba lo que ocurrió con el cadáver de Wen Mao y lo que paso en Los Túmulos
Funerarios”.
Quedándose en silencio, Wei Wuxian razono en todo aquello que había pensado desde que
llego a ese sitio, recordando lo que pensó de aquel camino semi destruido por el cual habían
caminado, un sitio construido por el hombre que no parecía haber sido pisado hace años. Así
que mirando en dirección a donde debía estar ese reservorio de agua, no pudo evitar
estremecerse con temor.
“Entonces esa cosa… ¿Es Wen Shima?” Pregunto Wei Ying temeroso.
Negando con la cabeza, Lan Wangji respondió: “No lo creo, creo que es el espíritu de su
espada”
“Espíritu…” Susurro Wei Wuxian, intentando fingir que lo entendía.
“Una vez te dije sobre ello cuando hablábamos de Bichen y Suibian. Todas las armas
espirituales tienen un espíritu, lo obtienen cuando son nombrados y protegidos con sellos que
los vuelven mágicos, no cualquier espada o arma espiritual tiene un espíritu habituando en
ellas. Sé que esos espíritus se quedan ligados a las armas espirituales, y así como Bichen y
Suibian, en ciertos casos pueden llegar a ser visibles y hacer cosas sin su dueño. Creo que esa
cosa sobre el agua, que flota y parece un fantasma, es el espíritu de la espada… Es un arma
maldita y en eso se convirtió por la anergia resentida”.
“¿Qué haremos entonces?” Pregunto Wei Ying sin saber que hacer: “¿Debemos purificarla?
Dijiste que ellos no tenían una forma de hacerlo entonces, que no pudieron”.
“Han pasado décadas desde entonces, más de un siglo, ahora tenemos formas más efectivas
de lidiar con energías semejantes. Si no podemos purificar el arma espiritual, podremos
destruirla” Dijo Lan Wangji seguro de sí mismo.
Asintiendo de forma energética, Wei Wuxian se puso de pie de un salto, deseoso de empezar:
“¿Y cómo comenzamos? ¿Entro al agua o…?”
“Siéntate Wei Ying” Pidió Lan Wangji, sin moverse aun.
“¿Por qué? ¿Aún hay algo que no me dices?”
Levantando la mirada, dudando en hablar con no, Lan Zhan finalmente dijo: “Estoy entrando
en mi celo”.
Capítulo 17.

Era un sentimiento horrible.


Mirando la sangre y sintiendo la culpa, Wei Wuxian solo quiso gritar, pero no pudo hacerlo.
No tenía idea de donde se encontraba, era un lugar obscuro, con un olor horrible, en medio de
la nada. Por las ventanas de aquel lugar podía ver el cielo, nublado y obscuro. De alguna
forma Wei Ying no se sentía ni siquiera en su propio cuerpo, no sentía que fuera el mismo. Y
bajando la mirada de forma borrosa, pudo ver que sus propios dedos ensangrentados habían
dibujado algunos símbolos extraños en el piso.
“¿Qué es esto?” Se preguntó en voz alta.
Él conocía mucho de símbolos y sellos de cultivación, esos que se usaban para purificar o
contener espíritus. Pero a lo largo de toda su vida, viendo libros o a otros cultivadores en
acción, nunca antes vio un sello como ese ¿Para qué podría servir?
Sin embargo Wei Ying no pudo pensar mucho en ello, perdiéndose nuevamente en ese
sentimiento desagradable, se dio cuenta de que la sangre con la que escribía en el suelo no era
suya…
… Era la sangre de otra persona…
“¡Wei Ying!”
Abriendo los ojos y sentándose de golpe, Wei Wuxian jadeo aterrado, bajando su mirada a
sus manos de inmediato. Estaban limpias, con un poco de tierra, pero no había ni una sola
gota de sangre sobre su piel.
Aun temblando, Wei Ying miro al frente, encontrándose con Lan Wangji, quien estaba al otro
lado de la fogata, mirándolo preocupado. Suspirando intentando calmarse, Wei Wuxian se
repitió de nuevo que aquello solo era un sueño, un mal y terrible sueño, pero nada más que
eso.
“¿Te encuentras bien?” Pregunto Lan Wangji preocupado.
“Estoy bien Lan Zhan” Respondió Wei Wuxian bostezando, intentando aparentar normalidad:
“¿Llevas mucho tiempo despierto?”
“Un par de horas tal vez”.
“Entonces debe ser media mañana” Dijo Wei Wuxian haciendo cálculos apresurados.
Era el quinto día que pasaba encerrado en ese sitio con Lan Wangji.
Las cuevas de aquel sitio eran obscuras y sumamente frías, y a pesar de que ambos estaban
juntos, las cosas no habían ido tan bien como Wei Ying esperaba. Lograban mantener el calor
con rama secas y hojas viejas que encontraban en los túneles, no podían comer nada, pero
con recipientes hechos de hojas Wei Ying lograba tomar agua fresca de otros pequeños
reservorios de agua que habían en cuevas vecinas, agua donde no estaba el monstruo y donde
no había energía resentida. Durante esos días, usando las antorchas que se dejaron atrás, Wei
Wuxian paso su tiempo recorriendo los serpenteantes caminos de las diferentes grutas que
existían al fondo de aquellas cuevas, evitando llegar hasta el monstruo y con la esperanza de
encontrar una salida, Wei Ying recorrió toda su extensión de forma inútil. Todas las cuevas y
grutas estaban vacías.
“Iré por un poco de agua para el té” Dijo Wei Wuxian, bostezando y desperezándose.
“Puedes esperar un poco antes de ir, acabas de despertarte” Le recordó Lan Wangji.
Negando con la cabeza, Wei Ying respondió: “Descuida, quiero moverme rápido”.
Poniéndose de pie del lugar en el cual dormía en aquella estrecha cueva, Wei Wuxian tomo
un recipiente y salió con una antorcha del sitio. Cuando estuvo lejos de Lan Zhan, no pudo
evitar suspirar, sintiéndose algo enfadado e incluso hasta desilusionado. Pero prefiriendo
ocultar su enfado y dolor por todo lo que sucedía entre su alfa y él, Wei Ying se forzó a
caminar por esa ruta que ya conocía, a ese lugar donde tomaba agua. Así Wei Ying
cuidadosamente recogió agua fresca en aquel recipiente improvisado que consiguió hacer con
algunas hojas, y alumbrando su camino, regreso silenciosamente a la cueva donde se
escondía con Lan Wangji.
“Preparare tu té ¿De acuerdo?” Pregunto Wei Ying, dejando el recipiente con agua de forma
delicada en el piso.
Meditando y sin siquiera ver al mayor, Lan Zhan respondió: “Mmm…”
Desviando la mirada a su pareja por un segundo, Wei Ying reprimió un suspiro; no quería que
Lan Wangji notara que estaba triste.
Comprendiendo que su alfa estaba en un momento complicado, su celo, Wei Ying no trato de
forzar las cosas y acepto las condiciones que Lan Wangji impuso para su seguridad. A
diferencia de los celos de los omegas, los celos de los alfas solían durar varios días, una
semana incluso. Y según los cálculos de Lan Wangji, cuando ellos quedaron encerrados en la
cueva fue el primer día de su celo, por lo que tenían un largo camino por recorrer todavía;
siendo lo más peligroso del celo los últimos días.
“… No quiero que vuelva a suceder” Se negó Lan Wangji cuando hablaron sobre eso:
“Cuando pase mi primer celo contigo… No quiero que vuelva a suceder algo como eso”.
“No sucederá, no debes temer; además no debió ser tan malo” Se negó Wei Wuxian, quien
aún no recordaba nada de lo que paso en aquella ocasión.
Negando con la cabeza, Lan Zhan dijo: “No es no Wei Ying. Voy a protegerte… Así que
tienes prohibido acercarte a mi hasta que mi celo termine”.
Aquellas palabras que fueron tan duras dichas por su alfa, Wei Wuxian sinceramente
considero que no serían cumplidas por el menor; pero la voluntad de Lan Zhan fue fuerte.
Para controlar los impulsos de su alfa, mientras este tomaba el control de forma progresiva
con el paso de los días, Lan Zhan meditaba muy seguido, intentando mantener la razón.
Mientras que Wei Ying por su parte, así como le había prometido a Lan Zhan, no se acercaba
a este a menos que fuera absolutamente necesario. Su alfa estaba débil por su celo, así que
Wei Wuxian debía encargarse de todo de una forma diligente, yendo por el agua que ambos
bebían y preparando el té que este bebía.
No había comida de ningún tipo en esas cavernas, un sitio tan obscuro y frio donde ni
siquiera entraba la luz del sol. Sin embargo afortunadamente, Wei Ying no perdió aquel saco
perfumado con hierbas que le había dado la joven Mian Mian poco antes de entrar en la
caverna. Y con ayuda de Lan Zhan, Wei Ying consiguió separar todo su contenido respecto a
su tipo.
“Estas son para curaciones… Estas otras como calmantes… Y estas otras…” Susurro Wei
Ying, ordenándolas con cuidado en tres montones diferentes.
“Para calmar el celo” Respondió Lan Wangji con un tono serio, mirando al mayor a la
distancia.
Ambos jóvenes estaban débiles, Lan Zhan estaba conteniendo su celo y parecía estarlo
pasando bastante mal, mientras que Wei Ying estaba herido en el hombro y perdió una
cantidad considerable de sangre. Sin embargo Wei Wuxian era quien menos débil se
encontraba, así que él fue quien se encargó de las cosas más importantes para hacer.
No solo recogió las pocas provisiones como ramas y hojas que encontró en las demás cuevas
del lugar, también se encargó de crear recipientes y contenedores para el agua y las hierbas
medicinales, y dos veces al día buscaba el agua que tanto Lan Zhan como él consumían.
Su herida dejo de sangrar el primer día después de llegar a ese sitio, pero desafortunadamente
estaba bastante lejos de sanarse, Wei Ying tenía una herida tan profunda que probablemente
necesitaría puntos y atención médica inmediata cuando salieran de ese sitio. Sin embargo el
omega parecía estarlo llevando bastante bien, quitándose las túnicas que cubrían su torso
antes de dormir, para lavar la herida con agua tibia y poner las hierbas cicatrizantes sobre
ella. Este proceso lo hacía gimotear y llorar de dolor, sus manos temblaban cuando debía
curarse por sí mismo, pero Lan Wangji se negó a estar cerca de él a unos centímetros si
quiera, mucho menos iba a tocarlo, así que Wei Wuxian no tenía otra opción más que hacerlo
por sí mismo.
Tras un par de días en ese sitio, mientras el celo de Lan Zhan seguía progresando y Wei Ying
esperaba pacientemente, una noche Wei Wuxian tuvo que tratar sus heridas. Así que
siguiendo su rutina, se quitó las túnicas que cubrían la parte superior de su torso, dejándolas
dobladas a un lado de la fogata, suspirando para tomar valor, finalmente mojo sus manos en
la poca agua que recogió para lavar su herida. Como siempre que hacia eso, un dolor
profundo recorría todo su ser y lo hacía gimotear desesperado lleno de dolor, mientras su
herida ardía y quemaba.
En medio de todo el dolor que sentía, Wei Ying por un instante miro a Lan Wangji. Por lo
general no hacia eso cuando se curaba a sí mismo, estaba tan absorto con lo que debía hacer
que ni siquiera podía pensar en algo más allá del dolor. Sin embargo ese día, tal vez buscando
apoyo o tal vez porque Lan Zhan había soltado ligeras feromonas que Wei Ying pudo
percibir, giro su rostro para verlo. Sin embargo no se encontró con los ojos dorados de su
prometido devolviéndole la mirada, Lan Wangji estaba mirando a otro lado, sin siquiera
parecer conmovido o preocupado por el dolor de su omega.
Viendo semejante desinterés en el menor, muchas teorías vinieron a la mente de Wei Wuxian,
ideas que había estado teniendo y que no podía apartar de sí mismo. Que Lan Wangji
estuviera tan frio con él, que lo evitara y que ni siquiera quisiera mirarlo, que hubiera soltado
sus feromonas de forma completamente intencional junto a otro omega… Aun cuando Wei
Ying no lo deseaba, todas aquellas acciones lastimaban su corazón.
“¿Entonces te gusta Mian Mian?” Se preguntó dolido, mirando a su alfa de reojo.
Escuchando aquella pregunta a la distancia, Lan Wangji desvió su mirada para ver a Wei
Ying, notándose sumamente confuso, preguntando: “¿Mmm?”
Sin embargo Wei Ying se mordió los labios, y siendo ahora él quien evitaba a Lan Wangji,
siguió con lo suyo, terminando de lavar la herida y poniéndose las hierbas curativas. Estando
listo, luciendo sumamente furioso, Wei Ying se puso las túnicas nuevamente en su sitio y se
acostó en su lugar usual para dormir. Lan Zhan todavía estaba despierto, lo que significaba
que ni siquiera eran las 9 PM, pero Wei Ying estaba demasiado furioso y solo quería dormir
para apartarse de su alfa.
Así que girándose para darle la espalda a Lan Zhan, a pesar de que estaba sobre su hombro
herido, Wei Ying se despidió en voz alta de este: “Buenas noches Lan Zhan”.
Notando la voz de su omega tan fría y enfadada, Lan Wangji tuvo el impulso de hacer algo.
Sin embargo recordó que no podía hacer algo semejante, así que presiono sus manos en
puños, y bajando la mirada respondió: “Buenas noches, Wei Ying”.
Forzándose a cerrar los ojos y a no llorar por el dolor tanto físico como emocional, Wei Ying
comenzó a dormirse a la fuerza, solamente pudiendo pensar en que su alfa no quería pasar su
celo a su lado porque ya no lo amaba tanto como antes.
Y de esa forma, el día más temido llego para ambos.
“Ya sabes lo que tienes que hacer” Le dijo Lan Wangji esa mañana, forzándose a no acercarse
al mayor.
La voz de Lan Zhan se hacía vuelto indudablemente más ronca, así como sus feromonas
mucho más potentes, asustando ligeramente a Wei Ying.
Wei Wuxian no quería dejar a su alfa, preocupado por su estado y viéndolo tan desmejorado,
pensó en pedirle quedarse, pero sabía la respuesta que Lan Zhan le daría, después de todo él
lo hacía para protegerlo. Y bajando la mirada, sin querer decir nada, Wei Ying se puso de pie
del lugar en el que dormía, arreglando sus túnicas y llevándose las pocas hierbas curativas
que quedaban, se acercó a la entrada de la cueva en la que estaban y miro los símbolos de la
barrera debajo de sus pies.
Volteándose a ver a Lan Wangji, Wei Ying pregunto: “¿De verdad quieres hacer esto?”
“Mmm” Respondió Lan Zhan, sin atreverse a mirar a su omega: “Y ya lo sabes, no puedes
venir hasta dentro de dos días”.
Suspirando algo enfadado, Wei Ying susurro: “Dentro de dos días…”
Dejándose llevar por el enfado que sentía hacia el menor, Wei Ying salió de la cueva y sin
miramientos, escribió el último símbolo faltante de esa barrera, dejando a Lan Wangji
encerrado en el interior sin posibilidades de salida.
Mirando a su omega irse, Lan Wangji volvió a pedir: “Dos días…”
Girándose un instante para ver al menor, sin muchas ganas, Wei Ying respondió: “Dos días”.
Sin tener ganas de despedirse, sintiéndose realmente mal por todo lo que estaba pasando,
queriendo quedarse con Lan Zhan con todas sus ganas; Wei Ying no tuvo más opción que
alejarse.
Dejando atrás la luz de aquella cueva y la presencia de Lan Zhan en pocos segundos, Wei
Ying se internó en medio de aquellas serpenteantes cavernas, hasta encontrar el mejor lugar
en el cual podría quedarse y podría pasar esos dos días en solitario.
Entendía perfectamente las intenciones de su alfa, Lan Wangji había tomado demasiadas
precisiones. No solo había creado esa barrera casi impenetrable, la cual solamente podría ser
rota por Wei Ying, quien la había sellado. La idea de mandar lejos a Wei Ying en ese sitio
había sido otra medida de precaución, Lan Wangji era un cultivador fuerte, no podía estar
seguro que en medio de su celo no podría romper esa barrera espiritual. Así que mandando a
Wei Wuxian lejos, en ese serpenteante conjunto de túneles de las cavernas, el cual solo Wei
Ying conocía pues fue él quien las exploró en solitario sin Lan Zhan, era otro seguro más
para el alfa de que no podría encontrarlo en medio de ese obscuro lugar.
Así que entendiendo las intenciones de Lan Zhan, Wei Ying se fue a un lugar apartado, un
lugar bastante escondido en medio de los pasadizos, donde tenía agua y era muy poco
probable que Lan Wangji pudiera encontrarlo. E instalándose en ese sitio, hizo una fogata
rudimentaria con lo que tenía a mano, y simplemente se sentó al borde de esta dispuesto a
esperar.
Muchas dudas recorrían la mente de Wei Wuxian, no solo pensando en su alfa con cierto
enfado por que lo hubiera mandado lejos de esa forma, impidiéndole acompañarlo en su celo.
También se preguntaba cuándo podría volver a su lado, y como sabría cuando los dos días
hubieran pasado. Anteriormente se fijaba en ese tipo de cosas con el sueño de Lan Wangji, ya
que con el ciclo de los Lan era fácil adivinar cuando era de día y cuando era de noche.
Cuando se sintió cansado después de varias horas sin hacer nada, a penas perdido en sus
pensamientos, Wei Ying se curó la herida en su hombro como usualmente hacia terminando
de usar las hierbas curativas que tenía, y dejando una leve llama encendida en la fogata que
preparó para dormir.
Acostándose en la tierra y mirando el fuego consumirse, Wei Ying se quedó finalmente
dormido.
Como todas las noches que paso en ese sitio, las pesadillas no tardaron en llegar a su mente.
Frente a sus ojos, podía ver sangre y fuego, personas gritando y el más absoluto dolor de
todos. Wei Ying no creía que aquellas escenas de muerte fueran recuerdos o sucesos que
tuvieron lugar en verdad, no creía que fuera algo que ocurrió en algún momento en la
historia. Ante sus ojos, creía estar presenciando los sueños de sangre y muerte de otra
persona, alguien más. Incluso pudiendo escuchar la voz de esa persona en su oído a lo lejos.
“Me vengare… Me vengare de todos…”
Resentimiento.
Ahora no tenía a Lan Wangji para despertarlo, así que jadeando y sollozando con terror, Wei
Wuxian vio la pesadilla entera.
Removiéndose y gimoteando con pánico, tras varios minutos dormido, Wei Ying despertó
gritando, mirando a todos lados aterrorizado, mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.
“Lan Zhan…” Gimoteo Wei Ying lleno de pánico, solamente pudiendo sentir el miedo.
Llevando una de sus manos a su pecho, intento controlar los latidos de su asustado corazón,
comenzando a volver en sí mismo.
Reaccionando lentamente después del sueño más vivido y aterrorizante que alguna vez tuvo
en su vida, Wei Ying pronto se dio cuenta del aroma. Cerrando los ojos, se dejó envolver por
el dulce aroma de sus feromonas, tan fuertes y envolventes que aun a lo lejos, conseguían
erizar su piel y estremecer su cuerpo. Era su alfa, y aun sin verlo, Wei Ying sabía que lo
llamaba, que su omega estaba gritando por querer ir con él.
El plan de Lan Wangji era infalible para impedir que escapara, pero no evitaba que Wei
Wuxian fuera a él.
Jadeando y sintiéndose con mucha sed, Wei Ying entendió lo que le sucedía, eran los
primeros síntomas de su celo. No tenía ni idea de cuantos días u horas habían pasado, solo
entendía que paso mucho tiempo inconsciente bajo el flujo de las feromonas de su alfa, así
que de manera inminente, también causo un efecto fisiológico en él.
Intentando pensar en los días del mes que eran para no quedar embarazado, o en no romper la
promesa que le hizo de forma consciente a su alfa, todo se nubló para Wei Wuxian cuando
sintió una humedad recorrer sus piernas, algo que lo hizo gimotear y buscar a Lan Wangji con
la mirada de forma desesperada.
Era inevitable, estaba asustado y confuso, a punto de entrar en celo. Aun si hubiera querido
resistirse, Wei Ying solo podía pensar en buscar a su amado.
Así que mientras su corazón palpitaba fuertemente, Wei Wuxian se puso de pie de aquel
rincón obscuro; y guiándose por sus instintos, su olfato y su omega, comenzó a recorrer aquel
sendero serpenteante e irregular de aquel enmarañado de cavernas en su búsqueda.
No sabía cuánto tiempo había pasado desde que dejo a Lan Wangji en ese estado, pero
actuando solamente por su impulso, logro llegar a la cueva principal donde había dejado a su
alfa, asomándose tímidamente por la entrada sin saber que decir. Lan Wangji tenía los ojos
abiertos mirando en su dirección fijamente, aparentando que sabía que Wei Wuxian iría en su
búsqueda incluso antes de que el propio omega lo supiera.
“¿Qué haces aquí? Te dije que te alejaras” Le reclamo Lan Zhan con la poca razón que le
quedaba, con aquella voz sumamente gruesa que Wei Ying solo escucho una vez en su vida
hace varios años.
Sintiéndose algo atemorizado, Wei Wuxian no entro en la caverna, quedándose en la entrada
en el límite de la barrera con la mirada baja. Nunca antes había sentido aquel nivel de
feromonas, tan fuertes y embriagantes por estar concentradas en aquella cueva, tan potentes
que comenzaban a marearlo.
“No importa, eso ya no importa” Dijo Lan Zhan poniéndose de pie del lugar en el que estaba,
caminando en dirección del mayor: “No tengo planes de mandarte lejos”.
Siendo tomado por sorpresa, Wei Wuxian sintió las manos firmes y fuertes de su alfa
enredarse en su cintura, tirando de él para llevarlo al interior de la caverna, justamente al
centro, cerca de la fogata que ambos encendieron al llegar.
“Lan Zhan…” Susurro Wei Ying, caminando a tropezones y siguiendo a su alfa.
“No luches” Le ordeno Lan Wangji.
Un estremecimiento recorrió la espalda de Wei Ying, que dócilmente camino e hizo lo que su
alfa le ordenaba, obedeciendo ciegamente. Era la primera vez que Lan Wangji usaba su voz
de alfa con el mayor.
Siendo cuidadoso, Lan Wangji soltó a su omega solo por un segundo, quitándose las túnicas
que traía solamente quedándose en los pantalones debajo de sus ropas, para extender aquellas
blancas telas en el duro suelo de la caverna, acostando a Wei Ying sobre estas con cuidado.
Wei Wuxian solamente pudo dejarse hacer, sujetándose del cuello de su alfa tímidamente,
mirándolo a los ojos fijamente.
“Tus ojos…” Susurro Wei Wuxian con una pequeña sonrisa, extendiendo una de sus manos
hasta el rostro del menor, delineando sus perfectos pómulos y acariciando sus mejillas:
“Dorados, brillantes… Es tan hermoso”.
Dejándose hacer en silencio, Lan Wangji beso delicadamente la mano de su omega que loa
acariciaba, susurrando: “Wei Ying…”
Y sin decir nada más, se acercó a este uniendo sus labios con los del contrario, dándole un
apasionado y profundo beso. Wei Wuxian no se resistió en lo absoluto, siguiendo las
indicaciones de su alfa, solamente pudo aferrarse fuertemente a su espalda y a su cuerpo,
mientras suspiraba con deseo dejándose hacer. Mientras que Lan Wangji, sin dejar de besar a
su omega, comenzó a pasar sus manos por el cuerpo firme de Wei Ying, comenzando a
deshacerse de sus ropas con cuidado de no romper las telas, intentando ser cuidadoso a pesar
de lo desesperado que se encontraba.
Quedándose completamente desnudo y aun siendo besado por su alfa, Wei Wuxian de forma
temblorosa comenzó a rodear los cuerpos de ambos con su propia ropa, creando un pequeño
nido de forma rudimentaria, pues su omega de lo ordenaba y sabía lo que pasaría pronto.
Él también entraría en celo de forma inminente.
Capítulo 18.

Él también entraría en celo de forma inminente.


Girando el rostro mientras jadeaba en busca de aire, Wei Wuxian sintió como los labios de su
alfa bajaban por la piel de su cuello dejando besos y suaves mordidas, algo que lo excito más.
Y cerrando los ojos dejándose hacer con completa docilidad, Wei Wuxian comenzó a soltar
sus feromonas de forma deliberada, sintiendo extasiado el aroma delicioso que se formaba
cuando sus feromonas se mezclaban con las de su destinado.
Yendo lento pero con mucha seguridad, Lan Wangji se entretuvo por un par de minutos
dando besos en el cuello de Wei Ying y jugando con sus pezones, hasta que la espera se hizo
insoportable para ambos, y dejándose estimular por el olor de las feromonas de su omegas
decidió proseguir. Así que levantándose de su cuerpo por un instante, hizo que Wei Ying se
pusiera sobre su estómago en el suelo levantando las caderas ligeramente.
Mirando el cuerpo hermoso y expuesto de su omega en esa posición, Lan Zhan toco
delicadamente la piel suave y firme de sus nalgas, pasando sus dedos entre estas tocando
ligeramente su entrada, la cual ya se encontraba húmeda por la excitación que Wei Ying
sentía. Dejándose hacer y posicionándose de la forma en la que su alfa quería, Wei Ying
solamente pudo aferrarse a las túnicas fragantes de su alfa que ahora tenía tan cerca de su
rostro, sintiéndose protegido en medio de su nido, mientras temblaba por el deseo tras haber
tenido al menor jugando con su cuerpo y sus demás lugares sensibles hace tan poco.
Sin embargo nada preparado para lo que sucedería, Wei Wuxian abrió mucho los ojos y soltó
un jadeo cuando sintió como Lan Wangji comenzaba a lamerlo, abriendo bien sus nalgas y
pasando su lengua sobre su entrada: “¡Lan Zhan!”
Sintiendo sus mejillas sonrojarse y sus labios abrirse jadeando por el placer, Wei Ying
presiono sus puños sobre las túnicas de su amado, sintiéndose al borde del colapso por la
vergüenza de ese momento. Nunca había pensado que su alfa le haría algo semejante.
Sus gemidos se hicieron más dulces cuando tras un par de segundos, las lamidas de su alfa
bajaron a sus testículos y luego a su miembro, estimulándolo. Mientras que los traviesos de
dos de su menor se pasearon por su entrada húmeda, comenzando a penetrarlo, sacando más
gemidos de Wei Ying, quien comenzó a temblar por el placer.
Jadeando y comenzando a sentirse mareado, Wei Wuxian comenzó a sentir que su omega
tomaba el control, mientras sus feromonas también salían de su cuerpo con mucha potencia,
algo que lo asusto ligeramente. Y al punto de la inconsciencia, solo pudo susurrar: “Lan
Zhan…”
Sabía que su alfa no podía escucharlo, que estaba en su propio celo, y que estaba concentrado
lamiéndolo y estimulándolo con sus dedos. Pero Wei Wuxian estaba asustado, presionando
sus manos en puños intentando mantenerse consciente, solamente pudo repetir en su mente
las miles de palabras con las que lo habían criado desde un niño, todas las amenazas y el
miedo…
“Aun si me embarazo… Aun si yo… Si yo no llego virgen a nuestro matrimonio… Tú me
seguirás amando igual ¿No es verdad?” Pregunto Wei Ying asustado.
Escuchando aquellas palabras, fue como si por un instante, Lan Wangji volvieran sí mismo,
levantándose del cuerpo de su omega para mirarlo.
Sintiendo como su alfa lo abrazaba por la espalda con sus brazos y recargaba su cuerpo
contra él por completo, Wei Wuxian continuo hablando: “Tengo miedo Lan Zhan… Tengo
miedo de que las personas, mis padres y mi secta… Digan cosas malas si pasa algo aquí,
ahora… Ya no somos unos niños… ¿Y si algo pasa?”
Respirando profundo, Lan Wangji bajo sus labios a los hombros de Wei Ying, besando su
espalda y su cuello relajándolo: “Mío… Siempre mío… Te amare por siempre…”
“¿No van a separarnos? ¿Lo prometes?” Pregunto Wei Wuxian sin poder dejar de estar
asustado por lo que sucedería.
“Te amo… Por siempre… Me quedare contigo por siempre… Solo mío…”
Cerrando los ojos y dejándose llevar, queriendo creer ciegamente en las palabras de su alfa,
Wei Ying comenzó a dormirse dejándose llevar por su celo, sintiendo como los besos de su
alfa ahora rozaban sus mejillas y sus labios, dándole dulce cariño. Y antes de perder la
consciencia, solo pudo escuchar: “Te amo Wei Ying…”
Dejándose llevar por el sentimiento embriagante de las feromonas y el placer que le daba su
alfa, Wei Wuxian se dejó controlar enteramente por su omega, el cual de forma sumisa
permitió que sus feromonas salieran tímidamente de su interior, temiendo molestar a su alfa,
y abriendo más las piernas y subiendo las caderas, intento suplicar que lo penetraran
rozándose contra el duro miembro de Lan Wangji.
Sintiendo aquel toque travieso de su omega, Lan Zhan bajo una de sus manos a las redondas
y suaves nalgas del mayor, presionándola con algo de fuerza entre sus dedos, logrando un
jadeo de parte de Wei Ying. Pasando su miembro sobre la entrada de Wei Ying, Lan Wangji
comenzó a penetrarlo poco después, sin tener mucha intención de seguir con el juego previo,
bastante desesperado por poder poseer a su omega.
Soltando un fuerte gemido de placer y dolor, Wei Wuxian presiono fuertemente las túnicas
del menor entre sus dedos, mientras su espalda se curveaba y él se forzaba a tomar el gran
miembro de su alfa en su interior. Jadeando fuertemente al sentir como el miembro del menor
entraba profundamente en su interior, Wei Ying intento relajarse temblando, tratando de
aceptar a su prometido de mejor manera. Sin embargo Lan Zhan no le dejaba fácil aquella
tarea, e inmerso en los sentimientos de su celo, aferro sus dos manos en las caderas débiles
del mayor, comenzando a moverse de inmediato.
“Lan Zhan… No…” Gimoteo Wei Wuxian sorprendido por aquel movimiento tan repentino,
mientras una oleada de placer lo golpeaba entero.
Siendo obediente ante su alfa, aun con las claras palabras que este le había ordenado, Wei
Ying volvió a relajarse y bajar su cuerpo en una forma sumisa, mirando de reojo al menor
detrás de él, mientras poco a poco comenzaba a aceptar gustosamente esas embestidas tan
profundas.
Lan Wangji por su parte seguía inmerso en lo que su alfa le obligaba a hacer en medio del
celo, sosteniendo las caderas del mayor y presionando sus nalgas con deseo, mientras con la
mirada fija en el cuerpo de este, se sentía hipnotizado al ver su cuerpo entero rebotando por
cada embestida que daba.
Temblando y estremeciéndose con cada embestida, Wei Wuxian comenzó a suplicar: “Más
despacio… Por favor Hanguang-Jun… Si lo haces tan rápido… Yo… Yo me voy a…”
Sonriendo de una forma divertida al escucharlo, usando una voz mucho más gruesa debido a
su celo, Lan Wangji respondió: “No…”
Estremeciéndose lleno de excitación al escuchar la voz de su alfa, Wei Wuxian solamente
pudo cerrar nuevamente los ojos, relajando su cuerpo para permitir que Lan Zhan se moviera
con más velocidad y con la fuerza que quisiera, teniendo una actitud sumisa que su omega le
obligaba a tomar. Sin embargo Wei Ying se daba cuenta de que su alfa estaba demasiado
concentrado en su propio placer, penetrándolo de forma constante y dura, llevando sus manos
únicamente para presionar sus nalgas o sostenerlo de las caderas, sin tocar el resto del cuerpo
de Wei Ying para darle placer. Así que suponiendo que Lan Wangji no estimularía su cuerpo,
y sin sentirse capaz de venirse solamente con esas duras embestidas que lo hacían temblar y
gemir con toda la fuerza de su garganta como si fueran dulces gritos de placer, Wei Ying
decidió satisfacerse a sí mismo.
Apoyando su cuerpo entero en las túnicas de Lan Wangji, de una forma temblorosa Wei Ying
llevó una de sus manos a su miembro, comenzando a darse toques inexpertos pero que le
brindaban mucho placer, y su otra mano a uno de sus pezones, para presionarlo y tirar de este
suavemente por sí mismo. Wei Wuxian se tocaba con mucho cuidado, pues desde hace
mucho tiempo que era Lan Wangji quien se encargaba de hacer eso con su cuerpo, estimular
todos sus puntos sensibles, así que se sentía bastante inexperto al darse placer.
Saliendo de su concentración tras algunos minutos de solo penetrarlo, Lan Zhan se dio cuenta
de que Wei Wuxian comenzaba a estrecharlo demasiado, así que levantando la mirada hacia
el rostro del mayor, se dio cuenta que este tenía los ojos cerrados y una expresión perdida de
placer, así que se puso sumamente furioso.
Siendo tomado por sorpresa, Wei Wuxian soltó un fuerte grito cuando sintió como Lan
Wangji le había dado una embestida con todas sus fuerzas, lastimándolo. Mientras que a la
fuerza, Lan Zhan tomo las muñecas del mayor y bruscamente las aparto de su propio cuerpo,
poniéndolas sobre su cabeza e inmovilizándolo, usando mucha más fuerza de la necesaria.
“No…” Rugió Lan Wangji enojado, mordiendo uno de los hombros de Wei Wuxian como
castigo.
Gimoteando adolorido mientras sentía aquella violenta mordida y sus manos ser sujetadas de
esa forma, con sus muñecas siendo presionadas de una manera tan fuerte por los dedos de
Lan Wangji, Wei Ying gimoteo: “Perdón… Perdón… No lo hare… No lo haré”.
Lamiendo ligeramente la mordida que acababa de darle al mayor, Lan Wangji susurro:
“Mío… Solo mío…”
Cerrando los ojos nuevamente de forma débil, Wei Wuxian tembló ligeramente. A pesar de
que su alfa solo había dicho dos palabras, entendía lo que este se refería, queriendo decirle
que solo él podía tocarlo, enojándose con Wei Ying por que este se había dado placer sin su
permiso. Así que arrepentido, Wei Ying dijo: “Perdón… Perdóname Hanguang-Jun. Yo soy
tuyo, solo de Lan Zhan, nadie me tocara, lo prometo…”
Tranquilizándose ligeramente por aquellas palabras, Lan Zhan acerco su rostro al de Wei
Ying, rozando sus labios con los del mayor, preguntándole: “¿Lo prometes?”
“Lo prometo, nadie, solo tú, solo Lan Zhan. Solo Lan Zhan puede tocarme, es una promesa”
Repitió Wei Ying desesperado intentando conseguir el perdón del menor, buscando sus labios
para tranquilizarse, todavía sintiendo dolor en su cuerpo.
Dejándose convencer por aquellas palabras tan desesperadas, Lan Zhan aflojo la fuerza en
sus dedos sobre la piel de las muñecas del mayor, y de forma cuidadosa acerco sus labios a
los del contrario, dándole un beso cariñoso. Suavizando sus feromonas con aquel acto tan
cariñoso, Wei Wuxian suspiro, sintiendo como también las embestidas que le daban bajaban
su intensidad, siendo una placentera caricia que le daba placer. Así que sin querer separarse
de sus besos, poco a poco Wei Ying fue entreabriendo los labios, permitiendo que el contacto
se volviera mucho más pasional, sintiendo la lengua de Lan Zhan recorrer toda su boca en
medio de sus suaves gemidos y jadeos de placer, relajándose por completo.
Besándolo por algún par de minutos, solo hasta que su omega se tranquilizara, Lan Wangji
volvió a separarse de su rostro, a pesar de que Wei Ying seguía suplicando por sus besos,
mirándolo tristemente por que este se alejara. Sin embargo Lan Wangji no podía seguirse
conteniendo y teniendo ese toque tan suave con el mayor, su alfa le exigía destrozar a ese
omega bajo sus dedos, así que sin soltar las muñecas de Wei Ying, arranco la cinta de su
frente con un poco más de fuerza de la usual, llevándola a las muñecas del contrario para
atarla alrededor de estas, inmovilizándolo por completo.
Dejándose hacer, Wei Ying volvió a levantar débilmente las caderas, con un poco más de
fuerzas para seguir aguantando las fuertes embestidas que su alfa iba a darle, sonriendo
ligeramente: “Por favor Gege… Se siente bien… Por favor más…”
Sonrojándose ligeramente por aquellas desvergonzadas palabras que solo conseguían alentar
a su alfa, Lan Wangji volvió a tomar a Wei Wuxian de las caderas para sostenerlo con
firmeza, y sacando su miembro por un instante del interior del mayor, Lan Wangji volvió a
penetrarlo con más profundidad aun, embistiéndolo con rapidez y fuerza de inmediato.
Presionando las manos en puños sobre su cabeza, Wei Wuxian abrió mucho los labios para
soltar fuertes gemidos desesperados de placer, los cuales se empujaban unos contra otros en
su garganta, cada uno respondiendo a una embestida fuerte que su alfa daba en su interior, en
su punto más sensible.
Sin embargo en esta ocasión Lan Wangji era mucho más consciente de las necesidades de la
persona que tenía debajo de su cuerpo, así que deseando darle placer, llevo una de sus manos
a los pezones de este, comenzando a tirar de ellos. Pero su toque no era como el usual que
solía tener con el cuerpo del omega al hacerle el amor cada noche, gracias a su celo Lan Zhan
era mucho más brusco y torpe, presionando aquellos pequeños botones rosa sin
contemplaciones entre sus dedos, y tirando de ellos con un poco más de fuerza de lo usual.
Algo ante lo que Wei Wuxian respondía gimiendo más dulce y estrechando su interior entre
ligeras contracciones, pues el omega también estaba en celo, así que sentía aquellos bruscos
toques que hasta llegaban a ser dolorosos, como algo placentero; solo porque era su alfa
quien lo tocaba.
“Lan Zhan… No más… Lan Zhan no…” Suplico Wei Ying tras algunas pocas embestidas
más: “No puedo… No lo hagas…”
Sin entender a lo que el mayor se refería, Lan Wangji susurro: “¿Mmm?”
“Me voy a venir pero… Pero no puedo… No quiero venirme así… No solo con toques en
mis pezones… Por favor no…”
Avergonzado, Wei Wuxian se removió algo incómodo, intentando contenerse para no venirse
de inmediato. Su miembro casi no había sido atendido desde que iniciaron a hacer el amor,
así que a pesar de que ya estaba en el punto para venirse gracias a todas esas fuertes
estimulaciones y los toques de su alfa, Wei Wuxian se negaba a hacerlo, pues quería que Lan
Wangji atendiera algo más que sus sensibles pezones.
Razonando las peticiones de su omega a duras penas por el celo, Lan Wangji resolvió que
para hacerlo de una mejor manera, debía salir del interior de este para luego girar su cuerpo,
dejándolo sobre su espalda en las túnicas. Dejándose mover por su alfa de una forma muy
débil, Wei Wuxian solo se forzó a mantener las manos sobre su cabeza para no hacerlo
enfadar, y dejando que este abriera y subiera sus piernas, volvió a aceptar gustoso su
miembro en su interior.
“Lan Zhan…” Suspiro Wei Ying, arqueando la espalda y cerrando los ojos al sentirse
nuevamente penetrado.
Decidiendo cumplir con las peticiones de su omega, estando en una mejor posición para
tocarlo, Lan Wangji llevo una de sus manos al miembro del mayor, comenzando a estimularlo
al mismo tiempo que sus embestidas. Cerrando los ojos con placer y presionando las manos
en puños, Wei Wuxian no aguanto mucho más, y estrechando su interior con fuerza, termino
viniéndose en los dedos de Lan Zhan y en su propio abdomen, soltando muchas más
feromonas.
Jadeando roncamente por el placer al ser estimulado de esa forma, Lan Wangji volvió a tomar
a Wei Wuxian de las caderas con ambas manos, decidiendo hacer sus embestidas más
rápidas, pues el interior estrecho de su omega lo invitaba a ello. Y queriendo hacer sus
penetraciones mucho más profundas de lo que ya eran, levanto las caderas del mayor
obligándolo a curvear la espalda, permitiéndole así entrar mucho más profundo en su interior.
Aun aturdido por el placer de haber tenido su orgasmo, Wei Wuxian soltó un grito cuando
sintió la primera rápida y profunda embestida que le daba su alfa, sintiendo como las
lágrimas de placer comenzaban a recorrer sus mejillas, mientras su ojos se abrían de
inmediato y miraban desconcertados lo que sucedía. Sus mejillas se volvieron rojas de
vergüenza de inmediato, pues desde esa posición, con las caderas tan levantadas y con la
espalda curveada, era posible para él ver como su alfa lo embestía. Así que estando
sumamente sensible después de venirse, Wei Wuxian no pudo hacer más gemir y suplicar que
pararan un rato, queriendo recuperarse después de tanto.
“Por favor… Solo un instante, Lan Zhan… Por favor…” Suplico Wei Ying ahogado por sus
propios gemidos de placer: “Eres tan grande… No puedo… Por favor…”
Dándose cuenta de que su omega se resistía, Lan Wangji volvió a gruñirle, nada contento
porque Wei Ying intentara apartarlo. Sin querer descansar, Lan Wangji no dejo de embestir al
mayor de una forma constante y profunda por la posición que ambos tomaban en ese sitio, y
sujetando sus piernas y caderas con algo de fuerza, Lan Wangji se concentró en rozar los
puntos sensibles del mayor para hacerlo sentir bien de nuevo.
Presionando fuertemente los dientes y gimiendo algo incómodo, Wei Wuxian poco a poco
volvió a sentir placer con las bruscas embestidas que le daban, las cuales presionaban su
sensible interior, pulsando todos esos lugares placenteros dentro de él. Y con sus manos aun
atadas, intento abrazar a Lan Zhan en medio de sus desesperados gemidos de placer,
deseando abrazarlo aunque fuera por un instante, mirándolo suplicante.
Siendo compasivo con su omega, el cual se veía bastante asustado y confuso por su propio
celo, Lan Wangji volvió a salir de su interior y cuidadosamente bajo sus caderas, cambiando
a una posición más relajada antes de volver a embestir su interior. Acercándose al omega,
Lan Zhan beso sus labios y lo abrazo con cariño, sintiendo como las manos todavía atadas de
Wei Ying rodeaban su cuello, dándole un estrecho y cariñoso abrazo. Deseando darle más
placer, Lan Zhan bajo por su cuello hasta su pecho dando besos y ligeras mordidas en su piel,
lamiendo y chupando sus pezones, mientras una de sus manos viajaba al miembro del
contrario para estimularlo, frotándolo ligeramente entre sus dedos.
Jadeando cada vez más pesado, mientras se estremecía con cada toque y cada embestida, Wei
Ying suplico: “No más… Por favor no más… Me voy a venir de nuevo… Hazlo más
despacio, Lan Zhan”.
Volviendo a subir hasta su rostro, Lan Wangji deposito algunos cariñosos besos en las
mejillas de Wei Ying, antes de besar sus labios tratando de tranquilizarlo, susurrándole: “Aun
no…”
“¿Aun no?”
“Solo espera un poco… Deja que ponga un bebé en tu vientre”.
Poniendo un rostro de ligera extrañeza, Wei Wuxian no tuvo tiempo de preguntar, ya que Lan
Zhan había besado sus labios sin previo aviso, dándole un pasional y profundo beso,
recorriendo la boca del mayor con su lengua. Ya completamente perdido por el placer y a
punto de venirse nuevamente, Wei Wuxian fue tomado por sorpresa cuando su alfa volvió a
salir de su interior, y sin darle ninguna razón, volvió a girar su cuerpo dejándolo sobre su
abdomen sobre aquellas túnicas en el piso, regresando a la primera posición que tuvieron
aquella noche.
Soltando un fuerte grito de placer, Wei Wuxian tembló cuando sintió el miembro entero de su
alfa entrar profundamente en su interior de una sola estocada, logrando un estremecimiento
en todo su cuerpo y que su miembro goteara un poco de semen. Gruñendo con placer y
sintiéndose a punto de venirse, Lan Zhan rápidamente apreso el cuerpo de su omega con todo
su peso, y llevó una de sus manos al cabello de este sujetándolo y empujando su rostro contra
las túnicas para bajar su espalda, mientras que su otra mano se afianzaba en las caderas del
mayor para evitar que las bajara, poniendo el cuerpo de Wei Wuxian en una posición perfecta
para ser penetrado profundamente.
Sintiendo aquella posición incómoda y algo dolorosa, Wei Wuxian no se negó en lo absoluto,
poniendo sus manos atadas sobre su cabeza, e intentando relajar su interior para hacer su
penetración más fácil. Después de todo estaba en pleno celo, y solamente deseando satisfacer
a su alfa como instinto de su omega, Wei Wuxian se mantuvo gimiendo dulcemente, mientras
sus mejillas se mojaban con lágrimas de placer y una delgada línea de saliva se escurría por
su barbilla.
Presionando fuertemente las caderas de su omega, Lan Wangji no pudo aguantar más, y
dando embestidas tan fuertes que hacían rebotar el cuerpo entero de Wei Wuxian, finalmente
termino corriéndose en el interior de este, dando una última y profunda embestida en su
interior. Abriendo mucho los ojos y soltando un nuevo grito, Wei Ying contrajo y tensó todo
su cuerpo entero, comenzado a quejarse y a soltar lágrimas de un ligero dolor.
“No… No… Para…” Suplico Wei Ying, sintiendo como todo su interior era expandido hasta
el límite: “Duele…”
Sin embargo Lan Wangji no parecía estarlo escuchando, y volviendo a gruñir con placer,
anudo completamente en el interior de su omega, escuchándolo lloriquear por el dolor
suplicando que parara.
Y aunque Lan Zhan quiso detenerse al sentirse más consciente después de haberse venido,
pronto sus ojos se posaron fijamente en la nuca desnuda de Wei Wuxian, el cual seguía preso
debajo de su cuerpo.
“El vínculo…” Susurro Lan Wangji, solamente pudiendo escuchar a su alfa.
Un nuevo grito se escuchó de los labios de Wei Wuxian, el cual cerrando los ojos de golpe,
sintió como los fuertes dientes de su alfa pronto comenzaron a morder su piel,
sorprendiéndolo y haciéndolo temblar desesperado.
“Lan Zhan…” Susurro débilmente y en un hilo de voz.
Pero su alfa no lo escucho de nuevo, y afianzando el agarre con sus dientes hasta hacer la
herida sangrar, Lan Wangji cerró los ojos, suspirando. Wei Wuxian por su parte estremeció su
cuerpo entero, y balbuceando cosas sin sentido, se terminó viniendo por tantas
estimulaciones, mientras sentía el dolor más fuerte y el placer más profundo con aquella
mordida en su nuca.
Siendo vinculado con su destinado finalmente.
“Lan Zhan… Te amo…” Susurro Wei Ying, completamente débil y a punto de caer
inconsciente.
Capítulo 19.

Wei Ying abrió los ojos con suavidad, sintiéndose débil y mareado. Frente a sus ojos noto la
semi obscuridad de aquella caverna, suspirando algo deprimido de seguir metido ahí adentro.
“Wei Ying” Dijo Lan Zhan alarmado, escuchando el suspiro que había soltado su omega.
Desviando la mirada para observar al menor, Wei Wuxian no pudo evitar sonreír al verlo
acudir a su lado tan rápido, prácticamente corriendo en su dirección. Así que muy contento,
Wei Ying susurró: “Lan Zhan…”
“¿Estas bien?” Pregunto Lan Wangji muy preocupado, pasando una de sus manos debajo de
la espalda de su prometido, ayudándolo a sentarse con cuidado: “¿Te duele algo?”
Poniendo una ligera expresión de molestia y dolor, Wei Ying consiguió sentarse en aquel
duro piso de arena y roca, sosteniéndose firmemente de los brazos de Lan Wangji. De esta
manera Wei Ying se dio cuenta de que no se encontraba sobre el duro piso de tierra nada más,
se encontraba sobre las túnicas exteriores de su alfa, quien las había tendido sobre el suelo
para proteger su cuerpo de la tierra y el frio, quedándose únicamente con sus dos túnicas
interiores.
Llevando una de sus manos a su frente lentamente, Wei Ying intento despejarse sintiéndose
algo mareado, preguntando de inmediato: “¿Cuánto tiempo ha pasado?”
“Dormiste por un día entero” Respondió Lan Wangji, para luego seguir insistiendo: “¿Te
encuentras bien?”
Sonriendo dulcemente y mirando a su alfa a los ojos, Wei Ying respondió: “Estoy bien Lan
Zhan…”
Bajando la mirada, Wei Ying se sorprendió al darse cuenta de que su prometido había vuelto
a tocarlo, sosteniéndolo por la cintura y tomándolo delicadamente, manteniéndose cerca de él
después de tanto tiempo.
“¿Recuerdas algo?” Pregunto Lan Wangji algo temeroso.
Volviendo a levantar la mirada para ver a su alfa, Wei Ying negó con la cabeza,
respondiendo: “No, solo… Creo que… Tal vez hay algo” Susurro el omega de forma
confusa.
“¿Qué cosa?”
“¿Hay alguna forma de comunicarse con fantasmas o energía resentida?” Pregunto Wei Ying
de pronto.
Poniéndose serio, Lan Wangji pregunto: “¿Estas intentando comunicarte con la criatura del
lago?”
“Claro que no…” Dijo Wei Wuxian con seriedad, apoyándose contra el pecho del menor de
forma despreocupada: “Pero creo que hay algo que quiere comunicarse conmigo”.
“¿Algo?”
Quedándose callado un instante, Wei Ying susurro: “No sé cómo explicarlo”
Poniéndose serio, Wei Ying pareció perderse por un instante en sus recuerdos, analizando
bien los breves destellos de su memoria, solo pudiendo pensar en una cosa: no tuvo malos
sueños ese día, siendo la primera vez desde que llego a la caverna que no se despertó gritando
aterrorizado por una pesadilla.
Pensando en las palabras de su omega, Lan Wangji respondió: “El Inquiry es una técnica con
el Guqin de mi clan, pero tiene sus limitaciones, si un fantasma no quiere comunicarse con
este método o no sabe cómo hacerlo, no hay manera de obligarlo y no se puede hablar con
él”.
“¿Y no hay alguna otra forma? ¿Ni siquiera en los otros clanes?”
“No que yo conozca. El creador de Gusu Lan creo Inquiry tras pasar mucho tiempo en
compañía de los muertos, no es tan grato, pero él insistió porque tenía una buena razón para
ello. No creo que los demás clanes hicieran alguna técnica semejante, no tenían una
motivación para ello”.
Sintiéndose extraño, Wei Wuxian pregunto: “¿Entonces a nadie le intereso alguna vez?
¿Saber lo que piensa un ente resentido o un fantasma?”
Mirándolo con seriedad, Lan Wangji respondió: “Los entes resentidos solo están fijos en
venganza, y dudo que los fantasmas o cadáveres vivientes sigan teniendo pensamientos como
tal, son solo reflejos de la vida en este mundo. No te juntes con el mal Wei Ying, pensar que
seres malvados aún tienen rastros de su humanidad es un pecado”.
Frunciendo el ceño, Wei Wuxian renegó diciendo: “¿Vas a regañarme por ello?”
“Puedes decirlo conmigo, puedes decirme lo que sea. Pero decir estas cosas con otras
personas, principalmente en frente de otros cultivadores, no puedes hacerlo” Le negó Lan
Wangji con seriedad: “No está bien sentir curiosidad por la energía resentida o por los
muertos, es un pecado”.
“No es como que vaya a volverme como Wen Shima o algo así…” Susurro Wei Ying riendo,
alcanzando los extremos de la cinta de Lan Wangji para jugar con ellos: “Es solo que…
Alguien menciono una cosa en uno de mis sueños”.
“¿Tus sueños?”
“Dijo muchas cosas en realidad, pero recuerdo unas palabras claramente en mi memoria
porque lo dijo muchas veces, lo repitió hasta el cansancio… Empathy, háblame usando
Empathy ¿Alguna vez escuchaste sobre esa técnica, Lan Zhan? ¿Escuchaste sobre algo
semejante?”
Negando con la cabeza, Lan Wangji respondió: “Mnn”.
“¿Entonces estoy imaginando cosas? ¿Por qué tuve un sueño semejante?” Pregunto Wei Ying
preocupado: “De verdad Lan Zhan, creo que hay algo buscándome, se mete en mis sueños y
me muestra cosas ¿Me estoy volviendo loco?”
Notando el temor en la voz de su mayor, Lan Wangji no tardo en actuar, respondiendo: “Wei
Ying, no debes temer. No he escuchado jamás de un ser resentido que se comunique con un
humano, mucho menos que se meta en sus sueños, no hay nadie asechándote”.
“¿Cómo puedes estar seguro?” Insistió Wei Wuxian, notándose realmente preocupado.
“Porque yo voy a protegerte de lo que sea si intenta tomarte”.
Cerrando los ojos y sintiéndose realmente bien, oliendo las feromonas tranquilizadoras de
Lan Wangji, Wei Wuxian consiguió tranquilizarse un poco más, cerrando los ojos y
dejándose llevar por su alfa.
“No importa lo que pase o a donde vayas, incluso si es al infierno, yo voy a seguirte y a
protegerte, no dejare que nadie te haga daño… Tu eres mío, y te amo más que a mi vida”
Susurro Lan Wangji, pegando el cuerpo del mayor hacia sí mismo en un suave abrazo.
Sintiendo un cosquilleo en la nuca con esas palabras, Wei Wuxian rápidamente abrió los ojos,
teniendo un nuevo recuerdo distorsionado. Mirando a su alfa a los ojos de manera incrédula,
llevo sus dedos a la parte posterior de su cuello, tocando su piel con cuidado. Sintiendo una
ligera punzada de dolor, Wei Wuxian claramente pudo tocar las marcas cicatrizadas de la
mordida de Lan Wangji sobre su piel, la marca de su vínculo.
Jadeando, Wei Ying lo recordó claramente, como Lan Wangji se apoyó por completo en su
espalda, y tomándolo de los cabellos acerco sus labios a su cuello. Pudo recordar entonces el
dolor de sentir los dientes de este lacerando su piel, junto con el increíble placer que le dio
aquel acto, junto con un sentimiento increíble, que no podía ser descrito, el ser vinculado con
su destinado.
Entendiendo que su omega estaba recordando todo lo sucedido o la mayor parte de ello, Lan
Wangji únicamente pudo bajar su rostro y besar el cuello de este con cuidado, estrechándolo
con un poco más de firmeza entre sus brazos.
“No puede ser…” Susurro Wei Ying mirando a su alfa muy consternado: “Tu… Tu…”
“Te amo…” Susurro Lan Wangji, uniendo su frente con la del mayor.
Sintiendo ganas de llorar por la felicidad, Wei Wuxian rápidamente rodeo el cuello de su alfa
con los brazos, susurrando: “No puedo creerlo… No puedo creer que tú y yo… Tu y yo…”
Sonriendo suavemente por la felicidad que sentía, Lan Wangji dijo: “Yo no necesito una
marca o una vinculación, ya te lo dije hace mucho, desde la primera vez que tome tu cuerpo
ya me sentía tu esposo. Sin embargo esa marca significa que no habrá nadie más, ni para ti ni
para mí, tu eres mío y yo soy tuyo para siempre”.
“Soy tuyo, siempre, solo tuyo” Susurro Wei Ying entre sollozos de felicidad, acercándose al
rostro de su alfa para besarlo solo pudiendo repetir una y otra vez lo mucho que lo amaba.
Sosteniendo el tembloroso cuerpo de su amado hasta que este se tranquilizara, Lan Wangji
acepto todos los besos y caricias que Wei Ying le daba, disfrutando de ese dulce amor que los
dos se brindaban a la luz y el calor de esa fogata pequeña, olvidándose juntos por un instante
de todo lo que sucedía, pensando que solo eran los dos y que nadie ni nada más existía.
Terminando de darle el último beso al menor, mucho más tranquilo, Wei Wuxian sonrió y
rápidamente dijo: “Ahora tu eres mío, solo mío por siempre… Supongo que es una lástima
para ti ¿No es verdad Lan Zhan? Ahora solo podrás mirarme a mí y solo a mí en toda la
eternidad”.
Confuso y sin entender a lo que su omega se refería, Lan Zhan pregunto: “¿Mmm?”
“¿Crees que soy un tonto? ¿Con quién crees que estás hablando?” Reclamo Wei Wuxian,
quien había estado guardando todo ese enfado desde hace días: “¿Crees que no lo es?”
“¿Qué sabes?”
“Te gusta Mian Mian” Lo acuso Wei Wuxian, haciendo un puchero.
Quedándose en blanco, Lan Wangji no supo que responder ante esa acusación; mientras que
Wei Ying continuo hablando: “Es una lástima por ti, porque ya no podrás ver a otros omegas
de forma lasciva soltando tus feromonas para otros, incluso si es alguien tan bonita como
Mian Mian o de un rostro hermoso como Jin Guangyao, solo podrás amar a tu esposa, es
decir a mí. Así que deja de ocultarlo y responde, estamos vinculados y no puedes mentirme
porque lo sabré, responde… ¿Te gusta Mian Mian?”
Poniéndose serio, Lan Wangji pregunto con toda su sinceridad: “¿Quién es Mian Mian?”
Sorprendido y guardando silencio por un segundo, Wei Ying miró a Lan Wangji confuso.
Continuando empecinado con su idea, entonces decidió preguntar: “¿Luo Qingyang? Tal vez
la conoces por ese nombre…”
Reconociéndola por fin, Lan Wangji cuestiono: “¿Y que hay con ella?”
Ofendido, creyendo que su alfa se burlaba de él, Wei Wuxian reclamó: “No soy tonto Lan
Zhan, sé que la estabas mirando antes, incluso soltaste tus feromonas por ella…”
“Solté mis feromonas por ti”.
Quedándose en silencio de inmediato por esa revelación, Wei Ying no supo que decir ante
esto, sintiéndose estúpido y mirando a su alfa muy callado, recordando una y otra vez lo que
había pasado en el prado fuera de la cueva antes de que ellos llegaran, pensando en esas
escenas que tanto lo habían enfadado desde que llegaron a ese sitio.
Decidiendo aclarar de una vez las cosas, Lan Wangji continuó hablando: “Soy muy posesivo
contigo cuando estoy en celo, vi que alguien se te acercaba y solté mis feromonas. Estaba
enfadado porque alguien se acercó a ti, no estaba sintiéndome feliz o contento”.
Recordando que la joven Mian Mian se había acercado a él entonces para entregarle esa
bolsita con hierbas perfumadas, Wei Wuxian solamente pudo suspirar, mirando a su alfa a los
ojos sintiéndose muy avergonzado. Mirando la expresión seria y hasta confusa de Lan Zhan,
Wei Ying pronto estallo en carcajadas por la vergüenza, ocultando su rostro en el cuello del
contrario de inmediato, sin poder continuar mirándolo a los ojos por lo apenado que estaba.
“¡Lan Zhan! ¡Tú de verdad…!” Se quejó Wei Wuxian entre fuertes risas.
“¿Mmm?” Pregunto Lan Wangji, realmente confuso sin entender nada de lo que sucedía.
“¡Olvídalo! ¡No vuelvas a mencionarlo!”
Sonriendo también, Lan Wangji no hizo ningún otro comentario al respecto, abrazando a Wei
Ying muy contento contra su pecho, dejando que este siguiera diciendo incoherencias en
susurros y ocultando su rostro contra él.
Cuando finalmente todas las confusiones fueron solucionadas y ambos estuvieron tranquilos,
Lan Wangji decidió hablar con Wei Ying respecto a lo que había estado pensando todos esos
días, una manera de escapar de ese sitio.
“Tenemos que exorcizar el arma espiritual” Dijo Lan Wangji con seriedad.
Asintiendo con una sonrisa, Wei Wuxian respondió: “Lo suponía”.
Wei Ying también era un cultivador excelente, así que también pensó en lo mismo estando en
soledad. Ambos sabían que los rescatarían, ya fueran los Lan o los Jiang, sus familias
definitivamente no los olvidarían ahí abajo, especialmente con Jiang Cheng y otros miembros
de la secta Lan fuera de la cueva. Sin embargo por la seguridad de quienes fueran a
rescatarlos y por la suya propia, Lan Wangji y Wei Wuxian debían matar o exorcizar ese ser
maligno sobre el lago, para asegurarse de que este no dañaría a sus seres queridos y confirmar
un rescate seguro.
Así que planeando la forma de atacar a ese ser, Lan Wangji y Wei Wuxian decidieron que uno
de ellos debía quedarse en la orilla distrayendo al monstruo, mientras que otro debía entrar en
el agua para tomar la espada que este poseía. Habían comprobado que el monstruo solo podía
enfocar su atención para atacar en un solo objetivo, como al atacar a Jiang Cheng quien
escapó olvidando a Lan Wangji y Wei Wuxian quienes seguían en la orilla.
Razonando este plan, Wei Ying pidió: “Yo debería ser quien entre en el agua”.
Negándose de forma rotunda, Lan Zhan dijo: “No, estas herido y débil, yo debería entrar”.
Wei Ying era quien estaba en peor estado físico de ambos, y eso era algo evidente. No solo
tenía una herida grave en uno de sus hombros, también acababa de recibir el nudo de Lan
Wangji y una larga sesión de sexo, así que podía verse bastante delicado. Mientras que Lan
Zhan, tras haber pasado el delicado momento de su celo, se encontraba en una condición
excelente.
“Lo comprendo, pero será peor si me quedo fuera por mi cuenta. No creo poder enfrentarme
con esa cosa estando en mi estado actual, hacer saltos y moverme tan rápido, no creo que
pueda hacerlo así como estoy. Sin embargo nadar es simple para mí, he vivido en el agua toda
mi vida, podre bucear y moverme bajo el agua mejor que tú incluso. No tendré que pelear,
podre moverme en medio de esa cosa hasta el fondo y tomar la espada”.
Desviando la mirada, nada convencido, Lan Wangji susurró: “Mmm…”
Sonriendo y acercándose nuevamente a su alfa para abrazarlo por el cuello con suavidad, Wei
Ying susurro: “Oye… Necesitamos la espada para poder purificarla ¿No es verdad? Debemos
hacer esto como un equipo, confía en mí y no me mires solo como tu esposa, yo también soy
un cultivador y puedo pelear. Hagámoslo juntos y todo saldrá bien”.
Sintiéndose sumamente preocupado por aquello, Lan Wangji solo pudo corresponder el
abrazo, sosteniéndose de la ropa de Wei Ying con mucha angustia. Pensando en su omega y
en protegerlo, Lan Zhan considero seriamente pelear solo contra esa cosa, pero incluso para
un cultivador experimentado, un ser con tanta energía resentida era demasiado fuerte, así que
Lan Zhan no podría vencerlo y mucho menos purificar la espada por sí mismo. Era un trabajo
que debía hacerse en equipo, por más que al menor esto le disgustara por el peligro que veía
para su amado.
Así que con la planeación hecha y sin poder replicar más, Lan Wangji decidió ponerse las
manos a la obra. Encaminándose a recoger las antorchas tiradas por los miembros de la secta
Wen y los arcos abandonados de estos, Lan Zhan unió los extremos de las sogas creando una
sola línea de cordeles unidos, lo más largo que podía. Y tomando la tela empapada en cera de
las antorchas, envolvió lo más que pudo de estas alrededor del cordel. Creando así una larga
línea de sogas envueltas con material inflamable, la cual preparo para una de las técnicas más
reconocidas de su clan, la cuerda asesina del clan Gusu Lan.
Mientras que Wei Ying, preocupado por las diversas heridas en su cuerpo, decidió tomar
largos retazos de tela de sus túnicas y las de Lan Wangji, las cuales cuidadosamente lavo con
agua limpia y seco con el calor de la hoguera, creando vendas. Teniendo dos heridas de
importancia, una en la parte posterior de su cuello por su reciente vinculación y otra en su
hombro por la puñalada que recibió en la batalla, la principal preocupación de Wei Wuxian
era infectar sus heridas. Entraría en un lago sucio y con mucha energía resentida, temía que
sus laceraciones en carne viva pudieran infectarse, esa era su mayor preocupación. Así que
tomando las vendas que cuidadosamente había preparado, envolvió muy bien su cuello y su
hombro entero, intentando así proteger su cuerpo de lo que se avecinaba.
Teniendo todo listo en menos de un día, Lan Wangji y Wei Wuxian se acercaron nuevamente
al fondo de esa caverna dispuestos a pelear, al amanecer de ese día. Con una planeación ya
prevista, fue Lan Zhan quien entro primero en la caverna, con las cuerdas que había
preparado envueltas en una de sus manos y talismanes escritos en hojas secas con su propia
sangre, lo primero que este hizo fue lanzar los talismanes purificadores al agua, enfureciendo
a la criatura.
Las aguas estaban calmas cuando ambos llegaron, aquella cosa se había escondido de nuevo
tras la batalla, pero Lan Zhan sabía que debía despertarla para poder pelear con ella y que
Wei Ying entrara en el agua. Así que lanzando talismanes de purificación al agua, como lo
había previsto, no paso ni un segundo hasta que la criatura volviera a alzarse en medio de la
obscuridad lanzando gritos enfurecidos. Aquella cosa era demasiado fuerte como para ser
dañada por los talismanes de purificación lanzados al agua, sin embargo si se sentiría
amenazada y le molestaría tener esos objetos espirituales cerca, consiguiendo ser provocada
como Lan Wangji quería.
Atacando de inmediato al joven de blancas vestiduras quien lo esperaba en la orilla, la bestia
solo soltó algunas de sus extremidades del agua. Aquellas negras extensiones que parecían
raíces de árboles con terminaciones de garras en forma de manos, atacaron a Lan Wangji de
frente; pero este de una forma hábil las esquivo todas dando saltos por el aire y moviéndose
con mucha rapidez. Pasando a la segunda parte del plan, Lan Wangji comenzó a pelear
usando talismanes y sus propias manos, cortando algunas de las extremidades negras del
extraño ser e interponiendo una barrera de fuego cuando este se volvía demasiado
incontrolable.
El desempeño del joven alfa Lan era excelente, y bajo la mirada de su omega quien seguía
escondido esperando su oportunidad, Lan Wangji se dio cuenta de que ya era demasiado.
Yendo despacio, Lan Zhan solo trataba de provocar a la bestia, lanzando talismanes
purificadores en su dirección y usando sellos de fuego. Pero provocándola más y más, pronto
esta se volvió incontrolable, sacando más y más extremidades negras del agua para atacar,
hasta el punto que era prácticamente imposible para Lan Wangji poder esquivarlas y
defenderse de todas ellas.
Así que viéndose acorralado tras algunos minutos, decidió tomar un poco de espacio, y con
un movimiento controlado, lanzo la cuerda que tenía envuelta en su mano directamente al
monstruo, empezando así con la rutina de la cuerda asesina de su clan. Aquello no pareció
molestar mucho al maligno ser, quien al ser únicamente energía resentida no se sintió dañado
al ser tocado por esa cuerda. Sin embargo Lan Zhan encendió pronto las telas inflamables que
rodeaban aquel cordel, lastimando realmente al monstruo envuelto por esta con las llamas.
Viendo como los rugidos fantasmales sonaban en todo su esplendor tras ser dañado por las
llamas, mientras Lan Wangji continuaba con su ataque tirando de la cuerda y volviéndola a
lanzar llena de fuego, el monstruo se distrajo por completo atacando al joven Lan con todo su
poder. Entonces Wei Ying entendió que era su momento de actuar.
Mirando a su alfa preocupado por última vez, Wei Ying se escabullo en medio de las sombras
para llegar al agua, lanzándose al lago sin pensarlo, tomando una gran bocanada de agua al
sumergirse en esta.
La obscuridad era aplastante, en medio de rápidos movimientos esquivando a las
extremidades negras del monstruo y tratando de pasar desapercibido, Wei Ying fue
internándose en medio de aquel peligroso lugar llegando hasta el fondo.
Pasando en medio de todas esas negras extremidades hasta lo más profundo que podía llegar,
sintiéndose agobiado por toda la energía resentida que existía ahí abajo, pronto Wei Ying
observo algo brillante en el fondo, en medio de la obscuridad. Tal y como aquella vez en la
que bajo hasta lo más profundo y vio algo al fondo, pudo observar brillando en medio de la
nada una hermosa espada de acero blanco, el mismo acero del cual estaba hecha Bichen,
encallada en el fondo en medio de unas rocas.
A pesar de que era demasiado difícil pasar en medio de todas esas extremidades negras, que
se movían a toda velocidad debajo del agua y se arremolinaban alrededor de la espada, que
parecía ser su lugar de origen, Wei Ying se las ingenio a acercarse lo más posible a la espada,
y extendiendo un brazo con dificultad en medio de las raíces, consiguió tomar el mango de la
espada, comenzando a tirar de él.
Usando toda su fuerza con su brazo izquierdo Wei Ying se dio cuenta de que le sería
imposible tomar el objeto de esa forma. Y aunque no quería hacerlo, pues su herida estaba en
su hombro derecho, se vio obligado a meter su mano derecha en las raíces y tomar también el
mango de la espada, tirando de esta con más fuerzas.
Y a pesar de que estaba debajo del agua, se sorprendió cuando escucho un rugido fuerte sobre
su cabeza, el rugido del monstruo el cual había traspasado hasta la barrera del agua que los
cubría. Pronto el ser dejo de atacar a Lan Wangji en la superficie, y fue directamente por Wei
Ying, intentado evitar que quitara la espada de su sitio. Sin embargo Wei Ying fue más
rápido, y antes de que las extremidades pudieran tocarlo, consiguió sacar la espada de las
rocas.
Una gran energía resentida se liberó por el agua entonces, rodeándolo por completo. Sentía
como si el acero blanco que tenía en la mano derecha quemara su piel, mientras que la
energía a su alrededor se hacía tan pesada que no podía pensar. Sin embargo se quedaba sin
oxígeno, así que por simple supervivencia, intento nadar hacia arriba, en medio de todas
aquellas extremidades que habían dejado de atacarlo y ahora se retorcían en la nada.
Y de nuevo tuvo ese sentimiento, el mismo que siempre tenía después de despertar de una
pesadilla, ese que nublaba todos sus sentidos y lo confundía. Ese sentimiento comenzó a
rodear a Wei Ying, mientras que la energía resentida se acoplaba a su cuerpo.
De forma inminente, mientras un suspiro escapaba de sus labios, los ojos de Wei Wuxian se
acerraron pesadamente, mientras una nueva imagen comenzaba a formarse ante sus ojos, una
visión que él sabía que tenía gracias a estar sosteniendo aquella espada que quemaba su piel
como fuego ardiente.
.Entonces pudo escucharlo y verlo claramente, más claro que cualquier cosa que alguna vez
sintió en su vida.
El dolor, el sufrimiento, el odio… Todos esos sentimientos lo recorrían, mientras frente a sus
ojos pudo ver una escena tan obscura como la de esa cueva, la obscuridad misma quien lo
tragaba por completo. Luego de unos instantes, como si caminara por un charco de sangre,
Wei Ying salió de una casa en un paraje desconocido, era una casa modesta, hecha a penas de
unas maderas y paja vieja. Desde lejos esa casa parecía un hogar de una humilde familia
amorosa.
Caminando en medio de la hierba, que se mecía con la brisa de la noche despejada, Wei Ying
avanzo por el medio del patio delantero de aquella humilde vivienda en medio del campo,
siguiendo las huellas de sangre. No tardo en toparse con un hombre moribundo, un alfa bien
parecido, quien vestido con ropas baratas y manchadas de su propia sangre, se apoyaba
débilmente contra un pozo de piedra, sosteniendo su estómago donde tenía una gran herida
hecha con una espada.
“¿Aun no planeas rendirte?” Pregunto Wei Wuxian en voz alta, aunque aquella no era su voz,
no se parecía a esta en lo absoluto.
El alfa frente a sí mismo no respondió, en más desvió la mirada, mientras sus mejillas lucían
manchadas de lágrimas que limpiaban la sangre su rostro. Entonces Wei Ying pudo notarlo,
detrás del hombre había el cadáver de un niño o una niña pequeña, quien ya no se movía,
parecía estar muerto. Sin clemencia, Wei Ying levanto esa espada de acero blanco en el aire,
señalando en dirección al hombre herido, quien seguía llorando.
“¿No esperabas que supiera luchar? ¿No esperabas que pudiera matarlos a todos?” Pregunto
Wei Ying, como si se mofara del hombre frente a él.
En verdad Wei Wuxian sabía que el alfa no se defendió para nada, cuando su amado Shima
irrumpió en su casa en medio de la noche, ni siquiera cuando apuñalo sin descanso a su
esposa o corto el cuello de sus hijos, ni por un solo instante pensó en herirlo; aquel alfa solo
pudo sorprenderse de ver aquellos ojos rojos antes compasivos ahora llenos de odio.
“Shima…” Susurro el hombre moribundo, mirando de frente a Wei Ying: “¿Por qué?”
Sin responder, por un instante Wei Wuxian pudo ver su reflejo en la espada manchada de
sangre que sostenía en su mano derecha, mirando su rostro despiadado y sus ojos llenos de
resentimiento. El rostro de Wen Shima.
“Arrodíllate una última vez ante mí, hazlo rápido, antes de que corte tu despreciable cuello”
Exigió Shima con la voz quebrada, negándose a llorar.
El alfa solo sonrió aceptando la muerte, bajando la cabeza en silencio, negándose ante lo que
su príncipe Wen le exigía, en su primer y último acto de rebeldía ante quien amo una vez con
todo su corazón. Sin esperar más, tomando lo último que le quedaba de valor, Wen Shima se
acercó corriendo en dirección a su amado y clavo su espada en su cuello, asesinándolo
finalmente.
Mirando el cadáver frente a sí mismo, Shima y Wei Ying soltaron un alarido de dolor al
mismo tiempo, arrodillándose en la hierba horrorizados, aferrándose fuertemente a la espada
que tenían en su mano derecha. Ambos sostenían el mango de esta con tanta fuerza que el
acero había comenzado a lastimar y marcar su piel, hiriéndolos. Pero esto no parecía estarlos
molestando, solo podían fijarse en una cosa.
Un homicidio lleno de odio y venganza solo podía despertar una cosa: cadáveres vivientes y
seres resentidos.
Pronto el aroma del lugar comenzó a oler a podrido y a sangre seca, mientras que una niebla
obscura se levantó del suelo. Alarmado Wei Ying solo pensó que un ser muy poderoso lleno
de energía resentida estaba despertando y que Wen Shima estaba en peligro, preguntándose si
este joven sabía que debía huir, que estaba en peligro. Pero Wen Shima parecía ser ajeno a
toda esta situación, y con cuidado avanzo en dirección al cadáver que tenía en frente,
agachándose hasta la altura de aquel alfa muerto. Sacando su espada del cuello de este, el
joven omega se agacho muy cerca del rostro ensangrentado de su última víctima, como si
quisiera memorizar los detalles de su rostro.
Sin embargo Wei Ying aterrorizado lo supo de inmediato, energía resentida comenzó a rodear
a Wen Shima de una manera peligrosa, tanto que según su experiencia, la propia energía y
otros seres malignos no tardarían en atacarlo. Sin embargo para la sorpresa de Wei Ying, la
energía resentida no hizo aquello que preveía, se comportó de una forma calma, rodeando a
Wen Shima como un pequeño remolino, comenzando a envolverlo.
“Está bien… Todo estará bien…” Susurro Wei Ying, hablando y sintiendo lo mismo que el
joven Wen, quien estaba cada vez más cerca del cadáver: “Aun no estoy satisfecho, no de ti…
Quiero matarte una y otra vez, hasta que mi odio se acabe… Entonces hazlo rápido,
conviértete en un cadáver, permíteme hacerlo de nuevo…”
Pronto un sentimiento extraño recorrió a Wei Ying, un sentimiento desagradable y molesto,
comenzando en las puntas de sus dedos y las plantas de sus manos y sus pies, extendiéndose
como una plaga a lo largo de sus extremidades hasta su corazón, infectándolo todo. Era la
energía resentida que comenzaba a penetrar en Wen Shima.
“Está bien… No importa, ya no estoy enojado…” Susurro Shima, acariciando las mejillas del
cadáver: “Los matare a todos, a cada uno, los matare una y otra vez, las veces que sea
necesario. Nadie escapara de mi”.
Y sin decir nada más, cerrando los ojos, Wen Shima unió sus labios con los del cadáver,
soltando finalmente aquella espada de acero blanco, dejándola caer al suelo con un ruido
sordo. Y así como la energía resentida que acudía en una cantidad cada vez mayor en
dirección a Shima invadiéndolo, también penetro en aquella espada, siendo esto lo último que
pudo ver Wei Wuxian.
Con una bocanada de aire, Wei Ying despertó cuando su cabeza fue sacada del agua,
sintiendo como un brazo de su alfa lo rodeaba y lo sacaba del agua a toda velocidad. No sabía
cuánto tiempo había pasado, en su mente pudo pasar un segundo o un año entero, notándose
sumamente desconcertado mientras tosía a bocanadas el agua negra que había tragado en el
fondo del lago.
Sin embargo Lan Wangji no tenía tiempo para fijarse en esto, esquivando los ataques de aquel
ser maligno mientras intentaba salir rápidamente del agua, ya que parecía ser el terreno en el
que aquel monstruo se movía con mayor facilidad.
Logrando llegar a la orilla con bastante dificultad, Lan Wangji puso a salvo primero a Wei
Ying, sacándolo del agua. Viendo como la espada que contenía el alma de ese ser seguía
siendo sostenida por el mango firmemente por su amado, Lan Wangji no perdió el tiempo, y
pateándola de las manos de Wei Ying para que este no pudiera tocarla más, rápidamente se
puso a escribir un poderoso sello sobre la afilada hoja de acero con su propia sangre.
Viendo lo que su amado estaba haciendo, Wei Ying alarmado intento detenerlo, acostado
débilmente en la arena de la orilla: “¡Espera!”
Sin embargo aunque Lan Wangji escucho claramente la petición del mayor, no podía
detenerse, teniendo al monstruo detrás de ambos a punto de atacar. Así que escribiendo un
poderoso sello de purificación directamente en la hoja, Lan Wangji escucho al monstruo
gritar tan fuerte que sus oídos comenzaron a doler, mientras toda la energía resentida
comenzaba a ser purificada de aquella espada. Y sin querer correr más riesgos, temiendo que
el daño hecho por la energía corrupta fuera irreparable sobre el alma de aquella espada, Lan
Wangji lanzo un fuerte golpe sobre la hoja de acero con su puño cerrado, partiendo la espada
en dos y cesando los gritos de golpe.
Wei Ying quien se había cubierto los oídos con las manos adolorido cuando aquel fuerte grito
comenzó a sonar por todos lados, abrió los ojos sorprendido cuando todo se detuvo, mirando
en dirección a su alfa aun confuso y mareado. La hermosa espada de acero blanco, con un
acabado simple pero indudablemente hermosa, ahora estaba partida en dos por el centro de su
hoja, gracias a un fuerte y contundente golpe que Lan Wangji había dado en el centro de esta
misma con todas sus fuerzas.
“¿Qué fue lo que hiciste?” Pregunto Wei Ying sorprendido, mirando la espada sin entender.
Tomando el mango de la espada para poder verla mejor, Lan Wangji respondió: “Una espada
espiritual es el cuerpo de un alma, cuando esta se rompe de manera irreparable, el alma
dentro de la espada se fragmenta y desaparece”.
“¿Entonces mataste al alma de la espada?” Pregunto Wei Ying asustado.
Asintiendo con la cabeza, mientras miraba los detalles en el mango de la espada en silencio,
Lan Wangji respondió: “Mmm…”
Muy cansado después de todo lo que había pasado, Wei Ying se apoyó contra la arena de
espaldas, cerrando los ojos: “Entonces si Bichen o Suibian…”
“Las espadas espirituales se dañan, son objetos después de todo. Pero cuando estas son rotas
de forma irreparable, cuando la hoja es destruida o el mango se separa, el alma dentro de la
espada es destruido. Así que si, si Bichen o Suibian rompen sus hojas, morirán. Aun si
intentas repararlas, solo serán armas normales, una espada común y corriente”.
Sonriendo con cansancio, Wei Ying comento: “Es increíble… ¿No lo crees Lan Zhan? Las
armas espirituales son como un humano, tienen un cuerpo y un alma, y si alguien las parte a
la mitad o corta su mango mueren… Debe ser difícil crear un arma espiritual”.
Asintiendo ante esto, tomando los dos fragmentos de la espada rota para deshacerse de ellos,
Lan Zhan respondió: “Mmm… Hay lugares específicos para hacer armas espirituales, no
todos los herreros pueden hacerlo, solo cierto tipo de cultivadores especiales pueden asignarle
un alma al acero. Esta espada, por su acabado, parece de Mo Village, ahí hay una pequeña
secta que se dedica solo a la fabricación de este tipo de armas, Bichen también fue hecha
ahí”.
Escuchándolo a penas, Wei Ying pregunto: “¿De dónde vendrá Suibian? No es una espada
tan costosa como la de Wanyin o mi Shijie, soy un hijo ilegitimo después de todo, me dieron
un arma común como a los demás cultivadores de la secta… Pero no importa ¿No es verdad
Lan Zhan? Yo amo a Suibian, realmente adoro a mi espada…”
Poniéndose de pie, Lan Wangji volvió a acercarse al lago, y dándole un último vistazo a la
espada en sus manos, con un rápido movimiento arrojo ambos trozos al fondo del lago, que
comenzaba a ponerse claro y apacible sin energía resentida contaminándolo. Lan Wangji no
podía prometer que el peligro había pasado al romper dicha arma, así que para no correr
riesgos decidió deshacerse rápidamente de ella, temiendo que alguna cosa pudiera despertar
de ella de improvisto.
Mientras que débilmente, Wei Ying abrió los ojos y levanto su mano derecha para verla. Esa
había sido la mano con la que anteriormente tomó la espada debajo del agua, así que en su
palma una marca rojiza se hacía ver justamente donde había sujetado el mango, algo que se le
hizo sumamente curioso: “¿Crees que Suibian me extrañe también? ¿Crees que está
asustado? Le pedí que protegiera a Bichen pero… A veces no me hace caso, espero que me
haga caso esta vez… No puedo imaginarlo, pensar que puede morir… Si alguien rompe a
Suibian yo moriría”.
Notando aquellas palabras muy extrañas, como si Wei Ying estuviera divagando demasiado.
Lan Wangji se giró de inmediato a ver a su omega: “¡Wei Ying!”
A penas pudiendo escuchar, Wei Wuxian sintió como su alfa corría a su lado aterrado,
comenzando a tocarlo tembloroso, mientras lo abrazaba contra él con cuidado; Lan Wangji se
notaba realmente asustado. Y es que Wei Ying estaba rodeado de su propia sangre en la
arena, saliendo a chorros de su hombro, aparentemente la herida que tanto había tardado en
dejar de sangrar se había vuelto más grande y se abrió debajo del agua, creando una lesión
mucho más profunda.
Entendiendo que su omega comenzaba a desangrarse y por eso hablaba tantas tonterías,
comenzando a agonizar, Lan Wangji quito las túnicas superiores del cuerpo de este,
deshaciendo las vendas improvisadas en su hombro, las cuales estaban empapadas de agua y
sangre.
“No… No puede ser… No…” Susurro Lan Wangji aterrorizado, notando lo grave de la
situación.
Sin embargo Wei Ying no parecía darse cuenta de nada, y sonriendo, comenzó a ver todo
borroso, comenzando a dormirse: “Lan Zhan… ¿Cómo se llamaba esa canción que tocaste
una vez para mi hace tanto?”
Desesperado pensando en que hacer, Lan Wangji intento crear nuevas vendas para la herida
del mayor con sus propias ropas, intentando así detener el sangrado. Pero tanto el mismo
como Wei Ying estaban empapados, así que su ropa mojada no funcionaría: “¿Qué?”
Pregunto Lan Zhan confuso, escuchando a su débil amado mientras desesperado pensaba en
que podía hacer.
“Ya sabes… Esa hermosa canción, tan linda…” Susurro Wei Ying, tosiendo un poco de
sangre, pero sin dejar de sonreír: “Una vez tu… La tocaste para mí en tu Guqin…”
Acercándose de nuevo a Wei Ying, Lan Zhan toco sus mejillas, notando su rostro pálido y sus
ojos a punto de ceder: “Wei Ying…”
“La compusiste para mi ¿No es verdad? Nunca me lo dijiste, pero lo sé, siempre lo supe… Y
cuando tu hermano le dio a A-Cheng un libro entero de canciones, me sentí tan celoso…
Quería que alguien hiciera algo tan bonito por mí así como lo hacían para A-Cheng, pero en
ese entonces no tenía esperanzas, estaba soltero, habías roto el compromiso… Pero entonces
recordé que mucho antes, cuando tú a penas me llamabas por mi nombre y me tomabas de la
mano como un dulce pequeño, ya habías compuesto una hermosa canción para mi… ¿Le
pusiste un nombre? Te pedí que lo hicieras…”
Con un nudo en la garganta, Lan Wangji no quiso separarse de Wei Wuxian, abrazándolo
contra sí mismo mientras este comenzaba a perder el conocimiento; así que respondió: “Lo
hice”.
“¿Cuál es su nombre? ¿Puedes cantarla para mí?”
Tomando una de las manos de su omega para entrelazar sus dedos con este, Lan Wangji
comenzó a susurrar la melodía de aquella canción muy suave, mientras miraba como Wei
Ying comenzaba a quedarse inminente dormido, mientras la sangre caía a chorros por la
arena, manchándolo todo de carmesí.
Y mientras sus ojos comenzaban a cerrarse, teniendo como última mirada los ojos dorados y
llenos de preocupación de su amado, Wei Ying solo pudo preguntarse una cosa… El nombre
de aquella magnifica canción.
La cual escucho de forma incansable en sus sueños.
***
Abrió los ojos con los canticos de los pájaros en sus oídos.
Confuso, miro sobre su cabeza un techo de madera café, en la cual el humo de un incienso
medicinal se mezclaba creando hermosos bailes en el aire.
Por un instante, Wei Ying creyó que estaba muerto. Sin embargo aclarando sus ojos y
mirando por una ventana cercana, reconoció rápidamente el paisaje fuera de aquel lugar,
mirando sus hermosos arboles blancos por la nieve y las flores de invierno que comenzaban a
florecer.
“¿Estoy en Gusu?” Se preguntó en un susurro ronco.
Sin entender nada, por un segundo pensó que todo fue un sueño. Que en verdad nunca había
ido a la secta Wen, que nunca peleo contra un ser maligno en una cueva, y que Lan Zhan
nunca había mordido su nuca. Pero al levantar su mano derecha con debilidad, Wei Ying
observo sorprendido una marca roja como de una quemadura en esta.
La marca que había dejado la espada de Wen Shima en su piel.
“¡Wei Ying!”
Siendo tomado por sorpresa, Wei Wuxian recibió un abrazo de su preocupado alfa, quien
arrodillado al lado de la cama, parecía haber estado esperando por mucho que despertara.
Vestido con ropa diferente y luciendo mucho más limpio que en la cueva, Lan Wangji no
pudo ocultar su felicidad, solando sus feromonas de alegría ante su amado, mientras lo
estrechaba con fuerza entre sus brazos, realmente aliviado de tenerlo de vuelta.
Y aunque Wei Ying quiso corresponder este abrazo con alegría, igualmente feliz de tener a su
amor de vuelta, no pudo evitar empujar a Lan Wangji para separarlo de su cuerpo, sentándose
de golpe sobre la cama cubriendo sus labios con una de sus manos.
“¿Wei Ying?” Pregunto Lan Zhan confuso.
Aguantando las náuseas, Wei Ying se volteó para mirar a su alfa, susurrando: “Lan Zhan…
Quiero vomitar…”
Capítulo 20.

“¡Bien hecho!” Celebro Jiang Cheng muy contento, recibiendo a su hijo en sus brazos con
una sonrisa.
Sentado frente a su omega en un salón vacío en Gusu Lan, Lan Huan solo pudo sonreír,
observando como los dos más grandes amores de su vida sonreían y se abrazaban. El tiempo
era apacible en Gusu, el invierno había llegado a la región, y una ligera capa de nieve había
caído, dejando un paisaje hermoso ante los ojos de todos.
Bajando a Lan Jingyi con cuidado, Jiang Cheng lo ayudo a ponerse de pie erguido, mientras
el pequeño bebé reía contento, extendiendo sus brazos y haciendo pucheros: “Ahora ve hacia
papá” Pidió Jiang Cheng.
Así como le había pedido Jiang Cheng, el joven alfa Jingyi extendió sus brazos y dando
pasos cortos camino torpemente en dirección a su padre. Sine margo perdió el equilibrio de
un segundo al otro, y antes de que pudiera caer al suelo, Lan Xichen lo tomo en sus brazos
con cuidado, evitando que se lastimara.
“Bien hecho A-Yi” Lo felicito Lan Huan, sosteniéndolo en sus brazos haciendo reír al
pequeño de nuevo.
Haciendo un puchero viendo a su prometido con su hijo, Jiang Cheng reclamo: “Deberías
dejar que se raspe las rodillas…”
Sonriendo y desviando la mirada para ver a Jiang Cheng, Lan Huan pregunto: “¿Entonces
soy demasiado sobreprotector?”
“Tal vez solo un poco. A-Yi también debe aprender a caerse, no podremos estar detrás de él
todo el tiempo”.
Acariciando suavemente una de las mejillas de su hijo, quien reía y había metido uno de sus
dedos en su boca, Lan Huan susurro: “Aún es demasiado pequeño para caer”.
Sonriendo con esas palabras, Jiang Cheng extendió una de sus manos en dirección a su
prometido, tomándolo de la mano contenta, suspirando: “Eres demasiado terco pero lindo
como para que pueda regañarte, te has vuelto un gran padre…”
Sonriendo algo cohibido por sus palabras, Lan Huan quiso decir algo más, sin embargo
Jingyi apunto con sus manos en dirección a Jiang Cheng y susurro: “Mamá…”
El joven alfa había cumplido ya un año y dos meses de vida, así que como todos los bebés de
su edad, comenzaba a caminar y a decir sus primeras palabras. Lan Jingyi solo sabía decir
una palabra por el momento, repitiendo “mamá” una y otra vez cuando veía a Jiang Cheng,
además de leves balbuceos con su suave y tierna voz. Aquello que enternecía de sobre
manera a Jiang Cheng, lo hizo reír y acercarse más a ambos, besando dulcemente la frente de
Jingyi, contento de escucharlo llamándolo.
Observando esa dulce escena, Lan Xichen quiso decir algo más, sin embargo ambos
observaron como un exaltado miembro de la secta Lan se acercaba a ellos corriendo.
Llegando frente a los dos líderes de su secta, el joven hombre hizo una reverencia apresurada,
saludando a ambos.
Correspondiendo la reverencia con elegancia, Jiang Cheng pronto pregunto: “¿Sucede algo?”
Asintiendo con la cabeza, el hombre rápidamente respondió: “Líder Jiang, su hermano ha
despertado. El joven maestro Hanguang-Jun me pidió llamarlos a su aposento”.
Luciendo sumamente emocionado, Jiang Wanyin cruzo miradas con Lan Xichen antes de
ponerse de pie de inmediato, comenzando a caminar en dirección al Jingshi; mientras que
Lan Huan sonriendo se puso de pie detrás de él, siguiéndolo llevando consigo a su pequeño
hijo.
Avanzando por toda la secta Lan hasta los pabellones privados de los miembros importantes
de esta, Jiang Cheng y Lan Xichen pronto se acercaron a Jingshi, un lugar que solo Jiang
Cheng había visitado de forma seguida esos días para ver a Wei Ying inconsciente, mientras
que Lan Xichen solo había pasado de vez en cuando para hablar con su hermano. Así que
cuando estuvieron cerca de las puertas del pabellón, Lan Xichen se paró en seco, quedándose
en blanco.
Girándose sorprendido, Jiang Cheng pregunto: “¿Lan Huan?”
“Ese aroma…” Susurro Xichen, arrugando la nariz por un segundo: “Las feromonas de tu
hermano huelen diferente”.
Por lo general, los alfas eran mucho más sensibles a los aromas de las feromonas, ya sea de
otros alfas o de omegas. Lan Xichen por su parte, conocía bastante bien el aroma de Wei
Wuxian, pues lo había sentido muchas veces en el pasado, reconociéndolo bien a pesar de
que el contrario no era su omega. Sin embargo, a pesar de que por el aroma que podía sentir
saliendo de los pabellones, estaba seguro de que Wei Wuxian estaba adentro; sus feromonas
ahora tenían un toque ligeramente diferente, como si hubieran cambiado en su tiempo en la
cueva.
Como omega, siendo menos receptivo a esos aromas, Jiang Cheng solo pudo poner una
expresión de extrañeza, diciendo: “Yo no siento nada diferente, tu hermano sigue oliendo
igual así como el mío…”
“Definitivamente hay algo diferente… Pero no puedo saber que es” Dijo Xichen convencido.
Encogiéndose de hombros, Jiang Cheng sugirió: “Tal vez es el incienso medicinal”.
Negando con la cabeza, pero intentando dejar pasar el asunto para poder entrar, Lan Huan
dijo: “No lo creo. Pero seguramente no es nada, solo son imaginaciones mías”.
Notando aquello como algo muy extraño, pero prefiriendo no hacer comentarios, Jiang
Cheng solo le dio una última mirada extrañada a su alfa antes de abrir la puerta del pabellón,
entrando sin tocar, esperando ver a Wei Ying.
Mirando la puerta abrirse y personas entrar, Wei Ying ilumino su rostro con una sonrisa,
mirando a su hermano: “¡A-Cheng!”
Wei Ying se encontraba sentado en la cama que compartía junto a Lan Wangji, con su alfa
arrodillado y cuidándolo a su lado. Solo traía sus túnicas interiores y su largo cabello negro
suelto sobre su espalda, luciendo aun algo pálido pero mucho mejor a como se encontraba
cuando estaba inconsciente.
“Tu idiota” Le reclamo Jiang Cheng, contento de verlo pero también molesto: “No vuelvas a
hacer eso nunca, no me asustes así”.
Sonriendo por la preocupación de su hermano, quien fue directamente a sentarse a su lado en
la cama, Wei Ying se disculpó: “Perdóname A-Cheng, no quería asustar a nadie”.
Aun molesto pero preocupado, Jiang Cheng pregunto: “¿Cómo estás?”
“Me siento bien, estoy descansado. Aunque vomite al despertar, probablemente porque bebí
mucha agua de ese lago, seguramente no debe ser bueno para el organismo” Sugirió Wei
Ying.
Atento a las palabras de su omega, Lan Wangji asintió con la cabeza, susurrando: “Mmm”.
Arrugando ligeramente la nariz, Jiang Cheng susurro: “Que asco…”
Escuchando la risa de Wei Ying con esas palabras, Lan Xichen tomo ese su momento para
acercarse a la cama del omega, haciendo una ligera reverencia para saludarlo: “Joven maestro
Wei, espero que se encuentre mejor”.
Aun con una ligera risa, Wei Ying correspondió la reverencia, diciendo: “Me encuentro
mucho mejor Zewu-Jun, muchas gracias por su preocupación”.
Llevando su mirada al pequeño niño alfa que cargaba Xichen, Wei Wuxian sonrió aún más,
mirándolo lleno de adoración: “¡A-Yi! ¡Qué grande estas!”
Acercándose mas a la cama, Lan Xichen permitió de forma cuidadosa que Wei Ying pudiera
tomar al bebe, dejándolo en su regazo en la cama. Lan Jingyi, olisqueando por un instante a
Wei Wuxian, comenzó a reír y dejo que este lo abraza y lo tocara con tranquilidad,
reconociéndolo como su tío, ese que hace ya varios meses lo cuidaba junto a su madre.
Sonriendo realmente contento, Wei Ying no pudo evitar abrazar y besar cariñosamente la
frente de aquel dulce bebé, sintiéndose realmente feliz de poder volver a verlo, diciéndole:
“A-Yi te extrañe tanto, estoy muy feliz de verte”.
Notando que Wei Ying estaba en buenas manos, siendo cuidado por Jiang Cheng y
sosteniendo al pequeño Jingyi, Lan Zhan se puso de pie de forma elegante, alisando sus
túnicas dispuesto a salir.
Mirando a su alfa, Wei Ying pregunto: “¿A dónde vas?”
“Ellos van a quedarse, iré por un poco de té a las cocinas” Aclaro Lan Zhan, pensando en sus
invitados y en ser Cortez.
“Oh… Trae pasteles dulces de arroz y algunas otras pastas” Pidió Wei Ying.
Asintiendo, Lan Wangji respondió: “Mmm”.
“Y esos dulces rojos, si hay algunos, puedes traerlos”.
Volviendo a asentir, Lan Zhan respondió: “Mmm”.
Frunciendo el ceño, Jiang Cheng reclamo: “¿No estas comiendo demasiado?”
“No comí nada por días en una cueva húmeda, deja que me de algunos gustos” Pidió Wei
Ying, para luego volver a enfocarse en Jingyi, tomándolo de las manos y jugando con él: “Tu
tío debe comer ¿No es así A-Yi? Debo comer mucho para recuperarme pronto”.
“Es una sorpresa que no estas pidiendo licor” Lo acuso Jiang Cheng.
“No beber licor por un tiempo” Le aclaro Wei Ying.
Dejando un poco de lado a ambos omegas Jiang, Lan Xichen se acercó a su hermano,
preguntándole: “¿Deseas que vaya contigo? Son muchas cosas para que solo uno pueda
traerlas”.
Asintiendo, Lan Wangji respondió: “Mmm”.
Sonriendo tranquilamente, Lan Huan puso una de sus manos de forma cariñosa sobre uno de
los hombros de su hermano menor, comenzando a charlar con él mientras salían del pabellón,
recibiendo varios “Mmm” como respuesta.
Estando finalmente solos, Wei Ying se giró en dirección a su hermano y pregunto: “¿Cuánto
tiempo estuve dormido?”
Sorprendido por esa pregunta, Jiang Cheng cuestiono: “¿Tu alfa no te lo dijo?”
“Lan Zhan no quiere preocuparme con esas cosas, tiene miedo de que me estrese o algo
semejante, así que se negó a decirme”.
“Casi 7 días desde que los rescatamos, debieron ser 10 días en total contando el tiempo que
pasaste en la cueva” Le explico Jiang Cheng.
Muy sorprendido, Wei Ying susurro: “¿Fue tanto?”
“Nos diste un buen susto a todos. Perdiste mucha sangre y Lan Wangji tuvo que hacer
milagros para mantenerte vivo ahí abajo, te trajeron a toda velocidad a Gusu y usaron la
medicina más moderna aquí para salvarte. Cuando yo te vi llegar… Nunca antes te había
visto así, estaba realmente preocupado porque creí que morirás, de verdad creí que ibas a
morir”.
Rememorando esos días, Jiang Cheng recordó las noches que paso en vela junto a Lan
Wangji al borde de la cama de Wei Wuxian, todas las operaciones y procedimientos a los que
este fue sometido; y toda la zozobra que causaba el hecho de que este no se despertara a pesar
de todos los esfuerzos hechos. De alguna manera, parecía que Wei Wuxian estaba
extremadamente cansado, tan cansado que permanecía en un sueño profundo de donde nadie
podía despertarlo.
“Bueno, de cierta manera es entendible…” Susurro Wei Ying, con un poco de vergüenza.
Mirando a su mayor extrañado, Jiang Cheng pregunto: “¿Qué quieres decir?”
“Hay algo que tengo que mostrarte”.
Sosteniendo bien a Jingyi, Wei Ying se posiciono mejor en la cama dándole la espalda a Jiang
Cheng, y con un movimiento rápido, recogió su largo cabello apartándolo para dejar a la vista
su cuello desnudo. Ahogando un jadeo de sorpresa, Jiang Cheng observo la marca del vínculo
en la nuca de Wei Wuxian, que mostraba todos los dientes de Lan Zhan marcados en su piel,
y las heridas ya casi completamente curadas.
Alargando su mano para tocar las marcas con cuidado, Jiang Cheng susurro: “De verdad estás
loco…”
“¿Se ve muy mal? No quise preguntarle a Lan Zhan, y nadie más aparte de ti o él vieron la
marca” Pregunto Wei Ying, permitiendo que su hermano viera tanto como quisiera de su
espalda.
Atento a todos los detalles de aquella gran mordida marcada en la piel del mayor, pensando
en que aquello debía ser muy doloroso, Jiang Cheng respondió: “No se ve mal, es decir… No
se ve diferente a las marcas que he visto en otros omegas antes”.
Sintiendo a Jiang Cheng alejarse, Wei Ying soltó su cabello dejándolo nuevamente libre
sobre su espalda, volviendo a su anterior posición en la cama: “Eso no significa que se vea
bien o que no se vea bien, solo que es una marca…”
“¿Qué estabas esperando? ¿Qué tenga la forma de un corazón en tu nuca? Una marca es una
marca. Además yo estaría preocupado de más cosas además de la forma que puede tener”.
Luciendo sorprendido, Wei Ying pregunto: “¿Y de qué cosas debería preocuparme
entonces?”
“¿Qué harás ahora? Si es por la marca… Lan Huan se dio cuenta de inmediato de que tu
aroma era diferente al llegar, otros alfas podrán notarlo. Si saben que te vinculaste, el consejo
de Yunmeng te va a castigar fuertemente, así como nuestros padres”.
Sonriendo despreocupado, Wei Ying le dijo: “Relájate A-Cheng, lo tengo todo bajo control.
Nadie hará preguntas si me apresuro en casarme y evito a todos en casa, además mi aroma es
casi imperceptible para betas y omegas cuando no estoy en celo o cerca de este, así que
tendré que evitar estar cerca de alfas por algún tiempo”.
“Si, suena bien ¿Pero cómo vas a casarte tan rápido?” Cuestiono Jiang Cheng.
“Cuando ustedes se vayan le escribiré una carta al tío Fengmian. Inventare una excusa, algo
estúpido o lo que sea, pero voy a pedir que la celebración de la ceremonia de mi cambio de
apellido a Jiang de forma oficial sea de inmediato al llegar a casa, y luego una boda simple al
mes siguiente. No necesito algo pomposo o lujoso como tu boda, solo pon los documentos
frente a mí y los firmare”.
“¿Y qué opina Lan Zhan?”
“Él ni siquiera quiere casarse, esta tan preocupado por la marca que me propuso escapar antes
de que alguien se dé cuenta, irnos por nuestra cuenta. No le importara tener la boda más
común para poder estar conmigo”.
“Todo suena realmente fácil…” Bromeo Jiang Cheng, mirando a su hermano incrédulo:
“Espero de verdad que no te condenen a muerte por esto”.
“Todo saldrá bien, ya lo veras. En tres meses tú y yo estaremos casados y todo esto solo serán
risas, estoy seguro. Además, no importa que haya sido ahora o después, Lan Zhan se
vincularía conmigo tarde o temprano ¿No es cierto? Solo aceleramos un poco las cosas”.
Mirándolo con seriedad, Jiang Cheng replico: “Estas tomando demasiado a la ligera todo este
asunto, de verdad, si alguien se entera… Van a matarte. Me gustaría decir que de forma
figurativa, pero no, van a colgarte o a cortarte el cuello por ser inmoral. Lo entiendes ¿No es
así?”
Encogiéndose de hombros, Wei Ying respondió: “Para eso tenemos un plan de apoyo”.
“¿Plan de apoyo?”
“¿Te gusta más Qishan o Qinghe para escapar?” Pregunto Wei Ying.
Las regiones de Qishan y Qinghe eran las más alejadas de Lotus Pier en la región. Qishan por
su amplio territorio, tenía varios poblados y ciudades que muchos desconocían, incluso la
propia secta Wen, que no puede hacerse cargo de todo el territorio que dispone. Y la secta
Qinghe, de un territorio hostil y de montañas, tiene poblados poco visitados, no es un lugar
turístico, así que suele ser un lugar algo desolado en sus poblados más lejanos; los turistas
son vistos como algo extraño.
Riéndose de su hermano, Jiang Cheng respondió: “Qinghe sería una buena opción, escuche
que hay mucho trabajo para cultivadores errantes por ahí, además de que podrías vista a
Huaisang de vez en cuando, él no te delatara ante nuestros padres”.
“Entonces será Qinghe. De igual manera Qishan no me gusta mucho, si los Wen se enteran de
que estoy ahí intentaran matarme, así que ya sea en casa o en mi nuevo hogar, técnicamente
voy a morir, así que no me conviene”.
Sin poder evitar reír por las ocurrencias de su hermano, Jiang Cheng no pudo evitar sentirse
preocupado, intentando ocultarlo, pero temiendo seriamente por su destino. Y mientras
divagaba en estos pensamientos, una nueva idea se hizo en el joven Jiang, quien se sonrojo
ligeramente.
“¿Y duele mucho?” Pregunto Jiang Cheng curioso.
“No tengo idea” Respondió Wei Ying con sinceridad: “A penas recuerdo como paso, por que
entre en celo junto a Lan Zhan. Pero ahora mismo, después de que haya sanado y todo… Si,
duele mucho. No puedo echarme bien de espaldas y eso que casi ha sanado por completo, no
quiero imaginar cuanto debió dolerme los primeros días, es una suerte que haya estado
inconsciente”.
Estremeciéndose ligeramente, temiendo el dolor, Jiang Cheng siguió preguntando: “¿Y te
notas diferente?”
Pensativo, Wei Ying negó con la cabeza: “No lo creo. Dices que Zewu-Jun noto que olía
diferente, pero aparte de eso no he notado nada. Antes pensaba que cuando Lan Zhan se
vinculara conmigo perdería parte de mi personalidad, que dejaría de bromear y sería más
serio. Pero en verdad sigo siendo yo, sigo riendo y bromeando, hablo mucho, y no me siento
serio o frio para nada”.
Mirando a su hermano con una mala cara, Jiang Cheng le dijo: “No es como que la
personalidad de Lan Zhan vaya a transformar la tuya con el vínculo, idiota. El vínculo
significa que ambos se pertenecen el uno al otro para siempre, ningún otro alfa podrá tocarte,
y tú solo podrás reaccionar ante Lan Wangji. Mientras que sus sentimientos ahora van a estar
conectados, étnicamente el otro debe sentir con su omega y su alfa si el contrario esta triste o
enojado, incluso en peligro”.
“Lo sé, A-Cheng, lo sé, cremé que lo sé” Dijo Wei Ying de forma cansina: “Pero no hay
ningún cambio, ninguno en lo absoluto, ni siquiera con Lan Zhan. No creo percibir sus
sentimientos o algo, mi omega no me dice nada tampoco…”
“¿Los sentimientos tendrán que ser fuertes tal vez?” Sugirió Jiang Cheng.
“No lo sé, tal vez no funcione con Lan Zhan porque es demasiado serio, no creo que tenga
sentimientos extremos para que pueda sentirlos, tal vez por eso no puedo sentir nada. Me
pregunto si él sentirá algo mío…”
“Se volverá loco si percibe tus sentimientos asquerosos, se volverá descarado y un payaso”.
“Aiya… A-Cheng no me maltrates ¿No ves que acabo de despertar? ME estoy portando bien
contigo, no empieces con tu mal humor” Se quejó Wei Ying.
Mirando a Lan Jingyi quien seguía distraído jugando con las manos de su tío, aparentemente
contento de volver a verlo, Jiang Cheng le dijo: “Y despertaste en el momento correcto”.
Curioso, Wei Ying pregunto: “¿Momento correcto?”
“En dos días se hará la ceremonia de la entrega de la cinta de frente a Jingyi”.
“Oh… ¿Eso es importante?”
Poniendo los ojos en blanco, Jiang Cheng respondió: “Claro que sí, idiota. Entregarle su cinta
de frente a un Lan es algo importante, tiene una ceremonia y todo, podría decirse que lo inicia
en su secta. Además de que firmare con Lan Huan en unos documentos de registro para
anotar su partida de nacimiento, de forma legal me volveré su madre en esta secta”.
Asintiendo sumamente curioso, recordando que había algo similar en Yunmeng con niños
recién nacidos, Wei Ying dijo: “¿No es un poco mayor para esto? ¿No lo habían registrado
antes?”
Negando con la cabeza, Jiang Cheng respondió: “Ese registro se hace cuando los niños
reciben su cinta de frente aquí en la secta Lan, una ceremonia cuando ellos cumplen un año
de vida. No es su culpa que hayamos sido secuestrados por los Wen por más de 7 meses y
medio, ahora A-Yi tiene más de un año y dos meses, estoy apenado por él, hubiera querido
hacerlo antes”.
“No es tu culpa, si los Wen no hubieran interferido, tú ya serias el señor de Gusu y estarías
casado con Zewu-Jun, además de que A-Yi ya estaría registrado bajo tu nombre como su
padre”.
“Y tendríamos más tiempo para planear tu boda” Le recordó Jiang Cheng con un suspiro de
resignación, agachándose para tomar una de las manos de su bebé con cuidado: “Pero eso no
importa, yo siempre estaré con A-Yi desde ahora, y aunque no lo haya hecho en su debido
momento, seré su orgulloso padre y lo criare felizmente en Gusu. Y respecto a tu boda… Ya
se nos ocurrirá algo para hacerla una ceremonia memorable”.
Negando con la cabeza de forma perezosa, Wei Ying susurro: “Solo póngame algo rojo y
mándenme a un templo, no necesito el banquete o las bendiciones de los demás, acaben con
todo y déjenme ir a la luna de miel”.
“¡Wei Wuxian! ¡Tú, idiota desvergonzado! ¿Cómo se te ocurre decir algo semejante?”
***
Sonriendo, Jiang Cheng abrazo a Lan Jingyi delicadamente contra su pecho, mientras
observaba atentamente a gran maestro frente a ambos. En uno de los templos de Gusu Lan,
frente a los ancestros de los Lan, Jiang Cheng escuchaba atentamente las palabras de
celebración y de buenos deseos para su hijo. Él nunca antes había estado en una ceremonia de
la entrega de una cinta de frente, así que todo era nuevo y emocionante por conocer.
Lan Xichen a su lado, escuchando todo con solemnidad, solo podía fijarse en la cinta de su
hijo. Sobre una tabla de madera ceremonial, justo al frente de la bendición del gran maestro,
la larga cinta blanca tenía diferentes motivos de nubes sobre toda su blanca extensión,
diferenciándola de una cinta común y corriente como la que tenían los demás discípulos.
Después de todo, Jingyi era tomado como su hijo, el hijo del líder, por lo que debía tener una
cinta que lo diferenciara como alguien de la rama principal de los Lan. Solo los miembros
sucesores del líder principal de la secta podían tener una de esas cintas, y ahora Jingyi
legalmente no sería cualquier niño alfa dentro de Gusu, se convertiría en el sucesor y
próximo líder de toda la secta.
A unos metros de distancia del centro, observando todo con mucha curiosidad al lado de su
alfa, Wei Wuxian no pudo evitar mirar todo con una sonrisa. Él nunca antes había visto una
ceremonia de entrega de cinta de frente en el pasado, así que también le resultaba sumamente
interesante, tomándose de la mano de su alfa mientras intentaba analizar todo con calma.
“Lan Zhan… Oye Lan Zhan…” Susurro Wei Ying en un tono muy bajo acercándose un poco
al oído del menor: “¿Nuestros hijos también tendrán esta ceremonia?”.
Escuchando al mayor pero sin girarse a verlo, atento únicamente a la ceremonia, Lan Wangji
negó con la cabeza. Notándose muy decepcionado con aquella respuesta, Wei Ying pregunto:
“¿Por qué?”
“Esta ceremonia es únicamente para los niños que nacen y viven en Gusu. Aunque nuestros
hijos también serán de la rama sucesoria principal, nosotros viviremos en Yunmeng, lejos de
las tradiciones de mi familia. Si viviéramos aquí en Gusu, nuestros hijos recibirían esta
ceremonia y su cinta, pero ellos vivirán y crecerán bajo las leyes de la secta Jiang en Lotus
Pier” Le aclaro Lan Zhan.
Poniendo un rostro más tranquilo, Wei Ying se sintió un poco sorprendido, pues había
olvidado por completo el mínimo hecho de que ellos no vivirían en Gusu Lan. O eso creía él.
Terminando las palabras de celebración para el pequeño bebé, le indicaron a Jiang Cheng
entregarle al niño al maestro. Así que con sumo cuidado, el joven Jiang avanzo hasta el
frente, entregándole a su hijo a ese anciano maestro, quien lo tomo con delicadeza y lo hizo
sentarse sobre aquella tabla de madera frente a su nueva cinta de frente.
Jingyi se notaba sumamente confuso, mirando a sus padres y a todas las personas que lo
rodeaban, solo pudo meter su pulgar en su boca, visiblemente asustado y nervioso. Sin
embargo evitando llorar, el pequeño bebé permitió que aquel maestro tomara la cinta y la
pusiera en su frente, haciendo un nudo detrás de su cabeza, finalmente volviéndolo un Lan
completo.
Sonriendo aún más, de manera muy emocionada, Jiang Cheng observo encantado a su
pequeño cachorro con aquella cinta blanca, pensando que esta era muy parecida a la de Lan
Xichen, realmente contento por ese simple hecho.
Y en medio de su emoción, Jiang Cheng observo como otro de los miembros de la secta se
acercaba a ambos, y con cuidado les entregaba un gran libro de registros. Aquel era el
documento que registraba el número de natalidades y decesos en la secta, donde se anotaban
todos los niños que nacían y sus padres, y aquellos hombres o mujeres que morían.
Entregándole primero el libro a Lan Xichen con una pluma, el líder de la secta Lan registro
su nombre pulcramente sobre el de Lan Jingyi, registrándolo como su hijo legal finalmente.
Entregándole el libro a Jiang Wanyin, el joven omega tomo la pluma y se notó algo
tembloroso.
Por un instante, antes de escribir su nombre al lado de su prometido y sobre el de su hijo, se
tomó la molestia de mirar los nombres escritos antes de su cachorro, volviendo a sonreír. Con
aquella simple anotación, algo tan básico, Jiang Wanyin finalmente se volvería el padre de
Jingyi, un deseo intermitente que no había abandonado desde que conoció al pequeño.
Así que sosteniendo la pluma con firmeza, Wanyin escribo su nombre de la forma más
elegante que pudo al lado de Lan Xichen, sintiéndose finalmente en paz al hacerlo.
Con aquella firma, registrando al pequeño niño como suyo, ya nadie más podría quitárselo, se
había vuelto su hijo legítimo ante todas las sectas
***
“¿Esta demasiado apretado? ¿Te molesta mucho?” Pregunto Jiang Cheng preocupado,
mirando a su bebé en su regazo.
Junto al pequeño Jingyi, Jiang Wanyin esperaba sentado a que terminaran de arreglar el salón
principal para tener una comida especial celebrando al nuevo hijo oficial del líder Lan
Xichen, un banquete que se había previsto para después de la ceremonia cuando Lan Yi
recibiera su cinta. Así que sentado debajo de un árbol en medio de la nieve, Jiang Cheng
esperaba junto a su bebé.
Sin embargo preocupado, mientras descansaba con el pequeño, no pudo evitar notar como el
joven Lan fruncía el ceño y tocaba la cinta de su frente descontento, notándose algo
incómodo con ella. Así que intentando calmarlo, Jiang Cheng intento acomodarla una y otra
vez para tratar que su hijo no se sintiera incomodo con ella. Después de todo, su cinta de
frente era algo sumamente importante que debía llevar en su frente como un Lan.
“¿El joven heredero Lan no se acostumbra a su cinta de frente?”
Volteándose con aquella voz desconocida, Jiang Cheng se sorprendió al encontrarse con un
hombre que portaba las vestimentas de la secta Lan y su cinta de frente, con una sonrisa
amable y unos ojos azules profundos. Pero para sorpresa del omega Jiang, aquel hombre
maduro que le sonreía de forma amable, era un desconocido para él. No podía asegurar que
conocía a todos los miembros de la secta Lan, pero si a la mayoría y los más importantes, y
aquel hombre alfa con un porte tan imponente nunca antes había sido visto por Jiang Cheng.
Asintiendo algo tímido, Jiang Cheng respondió: “Solo un poco, es nuevo para él”.
Agachándose frente a Jiang Cheng y Lan Jingyi para estar a su altura, el hombre desconocido
acerco una mano en dirección al pequeño niño, tomando una de sus manos con delicadeza:
“Todos los pequeños tienen problemas con las cintas de frente, son un objeto de elegancia
que todos deben aprender a portar con orgullo, los niños y niñas siempre tienen problemas
con ellas. A-Huan solía tropezarse con su propia cinta en los entrenamientos, se avergonzaba
tanto que solía venir conmigo llorando, pidiéndome permiso para cortar su cinta para hacerla
más corta”.
Sonriendo con aquella anécdota tan dulce, Jiang Cheng pregunto: “¿Lan Huan hizo algo
semejante de verdad? Nunca me lo había comentado”.
“Les contamos a nuestros amantes aquellas anécdotas en las que podemos ser admirados o
alabados, no las cosas vergonzosas; eso es muy característico de los alfas”.
Sin perder su sonrisa, observando como Jingyi parecía encantado con el hombre frente a sí
mismo, Jiang Cheng dijo: “Seguramente todos ocultamos cosas vergonzosas que hicimos en
el pasado, no me sorprendería enterarme de cosas muy vergonzosas de Lan Huan en un
futuro; pero eso no hará que lo ame menos o algo semejante”.
Levantando su mirada para ver a Jiang Cheng, el amable hombre le dijo: “La forma en la que
habías de A-Huan es muy dulce ¿Tu eres su prometido?”
Dándose cuenta de que no se había presentado, Jiang Cheng rápidamente dijo: “Si, mi
nombre es Jiang Wanyin y soy el prometido del líder Lan Xichen”.
“Ya veo… Lo imaginaba, tus ojos son violetas, te pareces bastante a tu madre”.
Notándose un poco extrañado y confuso, Jiang Cheng pregunto: “¿Usted conoce a mi
madre?”
Asintiendo con la cabeza, el hombre respondió: “Mucho más de lo que me gustaría. Cuando
era joven prefería la compañía de tu padre o del padre del joven Wei Ying, éramos más afines
en nuestras personalidades. Tu madre solía ser más cercana a mi hermano menor, ella y Qiren
eran cercanos en su juventud”.
“Mi madre no me lo había comentado” Dijo Jiang Cheng sorprendido.
“Son cosas que olvidamos con el paso de los años. Cuando tú seas mayor y tengas que hablar
con este pequeño sobre tu vida, raramente recordaras quien fue tu amigo en tu infancia o
juventud”.
Asintiendo con suavidad, Jiang Wanyin se quedó en silencio muy pensativo, intentando
imaginar a su madre siendo amiga de Lan Qiren, teniendo un ligero estremecimiento en la
espalda, pues pensaba que ese dúo de ser cercano podría ser lo más peligroso de todas las
sectas por sus personalidades.
“¿Usted conoce bien a mi prometido?” Pregunto Jiang Cheng de forma curiosa, dándose
cuenta de que aquel hombre hablaba de manera muy cercana respecto a todos sus conocidos.
“No tanto como me gustaría, me arrepiento de no ser más cercano a él” Respondió el hombre.
Bajando la mirada pensativo, Jiang Cheng se preguntó quién podría ser ese hombre que
nunca había visto antes ¿Algún tío de los Lan? ¿Algún primo?
“Y como lo conozco a él y finalmente he notado su determinación, estoy muy feliz de poder
conocerte a ti”.
Saliendo de sus pensamientos, Jiang Cheng pregunto: “¿A mí?”
Asintiendo con la cabeza, el hombre respondió: “Hace un tiempo me hubiera gustado
presentarme contigo, más de una vez, pero quise mantenerme apartado de algo que aún no
veía correcto. Sin embargo en este último tiempo, finalmente puedo ver en mi hijo la
determinación de tener una familia y una vida a tu lado, él realmente te ama a ti y a este niño,
estoy orgulloso de que él finalmente se haya convertido en ese alfa que siempre soñé que
fuera”.
“¿Me ama?” Pregunto Jiang Cheng sumamente avergonzado, comenzando a sonrojarse.
“Más que a su propia vida” Respondió el hombre con seguridad.
Sintiéndose a punto de morir de la vergüenza al escuchar algo semejante de un extraño, Jiang
Cheng se sonrojo a mas no poder, teniendo muchos pensamientos dispares en su mente al
mismo tiempo. Pensando en que podría responder, el joven Jiang observo como a lo lejos,
saliendo del salón donde darían el banquete, Lan Xichen había salido para buscar a Jiang
Cheng.
“Padre, bienvenido” Saludo Lan Huan cuando se acercó al árbol donde estaba apoyado Jiang
Cheng.
Sufriendo un nuevo colapso, Jiang Cheng pregunto asustado: “¿Padre?”
Sin perder su sonrisa, el hombre desconocido frente a Jiang Cheng se puso de pie para
saludar a su hijo mayor, dándole unas cariñosas palmadas en un hombro: “Gracias A-Huan”.
Quedándose en blanco con semejante revelación, dándose cuenta de la persona con la que
había estado hablando todo ese tiempo, Jiang Cheng no pudo evitar mantener un silencio
incomodo, mirando al hombre frente a sí mismo. Mientras que el anterior líder de los Lan,
dándose cuenta de la sorpresa de Jiang Wanyin, rápidamente hizo una elegante reverencia
como saludo para este.
“Lamento no haberme presentado antes joven Jiang, soy QingHeng-Jun, es un gusto
finalmente conocerte” Se presentó el hombre con elegancia.
Correspondiendo la reverencia como podía con Jingyi aun en sus brazos, Jiang Cheng
rápidamente dijo: “El gusto es mío padre, por favor perdona mi falta de educación contigo”.
Agachándose para ser él quien ayudara a Jiang Cheng a ponerse de pie, QingHeng-Jun
amablemente extendió una de sus manos en la dirección de este para ayudarlo a pararse;
diciéndole: “No hubo ninguna falta de educación por tu parte, A-Cheng”.
Poniéndose de pie algo tembloroso, aun sorprendiendo por lo que acababa de suceder, Jiang
Cheng sujeto firmemente a Jingyi y se acercó a Lan Xichen para pararse a su lado, sintiendo
la mirada del padre de su prometido sobre él en todo momento.
“Es más, yo debería disculparme” Dijo QingHeng-Jun con amabilidad: “Me invitaron a la
ceremonia pero no pude llegar a tiempo, por un descuido perdí algo muy importante”.
Notando la tristeza en los ojos de aquel hombre, Jiang Cheng se apresuró intentando mejorar
las cosas: “No fue algo tan impresionante de cualquier manera…”
“Cualquier cosa que tenga que ver con mi nieto es importante” Aclaro QingHeng-Jun.
Al escuchar a su padre, Lan Xichen no pudo evitar sonreír con suavidad, rodeando la cintura
de un nervioso Jiang Cheng con uno de sus brazos. El día anterior a la ceremonia, Lan Huan
invito a su padre tras una plática algo emotiva que tuvieron, y aunque no estaba seguro de
que este fuera a asistir, finalmente se sintió muy contento de que hubiera decidido abandonar
su reclusión solo para conocer a Lan Jingyi y ver a Jiang Cheng.
Volviendo a mirar al pequeño bebé, QingHeng-Jun pregunto: “¿Puedo cargarlo un
momento?”
“Por supuesto” Dijo Jiang Cheng reaccionando rápidamente, acercándose al contrario para
entregarle a su hijo.
Siendo sumamente delicado, el anterior líder de los Lan tomo al pequeño bebé en sus brazos
y lo acuno con suavidad, permitiendo que este se apoyara en su pecho y en sus brazos
cómodamente.
Más personas comenzaron a llegar al banquete, y sabiendo que debían entrar, Lan Xichen y
Jiang Wanyin siguieron a QingHeng-Jun al salón, que aún seguía sosteniendo alegremente al
pequeño Jingyi en sus brazos.
Había sido sumamente inesperada la visita del anterior líder de los Lan a ese evento, tanto
que los demás invitados de su secta y las demás sectas, no pudieron evitar notarse
extremadamente sorprendidos de verlo ahí, haciendo reverencias apresuradas para este y
saludándolo; QingHeng-Jun no había roto su periodo de reclusión ni siquiera cuando la secta
Wen invadió El Receso Entre Las Nubes pocos meses atrás. Pasando en medio de los
presentes, QingHeng-Jun fue a tomar su lugar en la mesa central dela secta, donde Wei Ying
lo saludo animado, recibiéndolo muy contento por verlo después de mucho tiempo.
Sentándose en medio de la familia más importante de los Lan, con su pequeño cachorro
riendo y jugando con su abuelo, mirando a Wei Ying y Lan Wangji sumamente enamorados,
recibiendo el cariño y las atenciones de Lan Xichen en todo momento.
Rodeado de toda esa felicidad, Jiang Cheng deseo que aquel momento fuera eterno.
Capítulo 21.

Barcos con hermosas banderas con lotos morados pudieron verse en el horizonte de un
instante al otro. Esperando en el muelle en silencio al lado de Lan Xichen, Jiang Cheng solo
pudo pensar en que los momentos felices habían terminado.
Su familia finalmente iba a Gusu.
Después de ser liberados de la secta Qishan Wen, la mayoría de los miembros de las sectas
fueron por sus hijos llevándolos de regreso a casa, y obviamente esa no sería la excepción de
la secta Yunmeng Jiang. Yendo en una gran comitiva, incluso Jiang Fengmian y Yu Ziyuan se
tomaron la molestia de abandonar Lotus Pier para ir a Gusu, decidiendo recuperar a sus hijos.
Y aunque esto era verdad, era parcialmente cierto. Sus padres, los líderes de Yunmeng,
obviamente no se tomarían semejantes molestias solo para ir por ellos. La verdadera razón de
su visita tan precipitada, era la boda de Jiang Wanyin y Lan Xichen. Después del secuestro de
los Wen, los preparativos que Jiang Cheng realizo con tanto esfuerzo permanecieron intactos,
y aunque por la situación era poco probable contar con tantos invitados con los que se había
planeado al inicio, la boda podía ser hecha en cualquier momento sin problemas.
Así que tras mandarles una carta indicando esto a sus padres, Jiang Cheng suplico su
presencia para poder confirmar la fecha de boda con su prometido y poder casarse lo más
pronto posible, algo de lo que hablarían cuando ellos llegaran a Gusu, sin embargo era lo más
probable, pues no se tomarían semejante molestia de acudir juntos si no fuera para aceptar
esa petición. Y aunque esto parecía perfecto, había una pequeña razón por la cual Jiang
Cheng no quería que sus padres acudieran a Gusu, causándole mucho temor.
Esperándolo en los puertos de Caiyi Town, Jiang Cheng solo pudo sentir amargura en su
corazón, mirando a su alfa muy triste.
Pronto los barcos de la secta Yunmeng Jiang arribaron a los puertos de aquella pequeña
ciudad en el borde de la montaña cuya cumbre tenía a El Receso Entre Las Nubes, el hogar
ancestral de los Lan. Acompañando a sus padres había acudido una gran comitiva de otros
cultivadores Jiang, quienes llegaron a tierra antes que los líderes de dicha secta, que iban en
el barco más costos y aquel que navegaba por detrás de los demás. Así que cuando al final
sus padres finalmente desembarcaron en el puerto, el corazón de Jiang Cheng palpito con
fuerza.
Siendo el primero en bajar, Jiang Fengmian fue directamente a darle un cariñoso abrazo a
Jiang Cheng, notándose muy contento de verlo. Sonrojándose y correspondiendo el abrazo de
su padre algo tembloroso, Jiang Cheng susurro: “Padre…”
“¿Te encuentras bien A-Cheng?” Pregunto Jiang Fengmian, sumamente preocupado tras todo
lo que había sucedido con los Wen.
Forzando una sonrisa algo temblorosa, Jiang Wanyin respondió: “Si, estoy bien”.
“Me alegro mucho” Dijo el líder de los Jiang con una sonrisa.
Dejando a Jiang Cheng para buscar a Wei Ying, que estaba algunos pasos detrás de Jiang
Cheng junto a Lan Zhan, Jiang Fengmian también fue a darle un fuerte abrazo y a preguntarle
si estaba bien. Por su parte, Madam Yu tomo un poco más de tiempo en bajar, y tomando un
poco más de reserva con sus sentimientos como era usual, solo saludo cariñosamente a Jiang
Cheng preguntándole como se encontraba, saludando calmadamente a Lan Xichen en su
camino.
Sin embargo cuando la mujer alfa se acercó a Wei Ying, no pudo evitar arrugar la nariz. Aun
a varios pasos de este, la mujer se notó sumamente extraña, tanto que por un segundo soltó
fuertes feromonas de enfado, mirando fijamente a Wei Wuxian. Sintiendo la mirada de
Madam Yu sobre sí mismo mientras aun abrazaba a Jiang Fengmian, Wei Wuxian no pudo
evitar temblar y sentir un sudor frio en su espalda, temiendo lo peor. Sin embargo la mujer
recobro la compostura, y como si nada hubiera sucedido, se acercó a Wei Ying para saludarlo
con normalidad, saludando a otros miembros de la secta Lan de igual forma; pero sin saludar
ni mirar a Lan Zhan por un solo instante.
El camino desde Caiyi Town a El Receso Entre Las Nubes no era demasiado largo, pero si
algo cansador, pues era de entera subida por la montaña, pasando por hostiles ero hermosos
paisajes y varias escaleras empinadas en el camino. Así que bastante cansados después de un
viaje tan largo, los Jiang decidieron llevar su equipaje a la residencia de los Lan de
inmediato, con el propósito de descansar un poco.
Manteniéndose un poco apartado de sus padres, Jiang Cheng se mantuvo todo momento al
lado de Lan Huan, mientras que Jiang Fengmian y Wei Wuxian hablaron todo el camino,
mientras el omega emocionado le contaba al líder de la secta Jiang toda su aventura con aquel
monstruo en la caverna; una historia heroica que comenzaba a hacerse popular en las masas,
viendo a Wei Ying y a Lan Zhan como cultivadores héroes.
Tras algunos minutos de caminata, todos los Jiang y la comitiva Lan finalmente llegaron a El
Receso Entre Las Nubes, donde los esperaban más miembros de la secta Lan como Lan Qiren
para recibirlos; y un pequeño invitado especial.
Poniéndose más nervioso aun, teniendo a sus padres detrás de él todo el tiempo, Jiang Cheng
casi se desmaya cuando aquella mujer omega que se encargaba de cuidar a Lan Jingyi se
acercó a él para entregarle a su hijo frente a todos los presentes; algo que Jiang Cheng le
había pedido hacer antes de irse.
Viendo como a su hijo le entregaban aquel bebe vestido de blanco, Jiang Fengmian se quedó
en seco, dejando de hablar con Wei Ying para preguntar: “Que niño tan lindo… ¿Por qué te
lo dieron, A-Cheng?”
Conociendo bien lo que sucedería, Wei Wuxian se apartó discretamente junto a Lan Zhan,
intentando alejarse de todo el problema. Tragando un poco de su saliva, sin querer apartarse
de Lan Xichen aun al encarar a su padre, Jiang Cheng respondió: “Papá, te presento a Lan
Jingyi, él… Él es mi hijo”.
Al escuchar esas palabras todos los miembros de la secta Jiang dejaron de lucir contentos,
mirando a Jiang Cheng con seriedad. Y siendo el menos contento de todos, Jiang Fengmian
pregunto sumamente serio: “¿A qué te refieres con tu hijo?”
Perdiendo el habla por un instante, muy temeroso de su padre, Jiang Cheng respondió: “Es
mi hijo papá, yo… Yo lo estoy cuidando con Lan Huan, ambos lo cuidamos como sus
padres”.
“¿Entonces solo lo cuidas?” Pregunto Jiang Fengmian intentando tranquilizarse un poco.
“No, es mi hijo, mi hijo legítimo. Legalmente, Jingyi es mi hijo” Respondió Jiang Cheng.
Presionando las manos en puños, realmente furioso, Jiang Fengmian pregunto: “¿Qué fue lo
que hiciste?”
Notando todo el mal humor de su padre, lo mal que lo estaba tratando y las feromonas que
este soltaba, Jiang Cheng se encogió ligeramente, pegándose aún más a Lan Huan de ser
posible. Y aunque Lan Xichen quiso decir algo, recordando lo que le había pedido Jiang
Cheng antes de la llegada de sus padres, se quedó callado, haciendo un esfuerzo por no
responder.
“¡Eres una deshonra!” Dijo Jiang Fengmian abruptamente, subiendo mucho su tono de voz.
Dándose cuenta del visible mal humor de Jiang Fengmian y que estaban dando un
espectáculo, los miembros de alta posición en la secta Yunmeng Jiang le pidieron al líder ir a
un lugar más privado en la secta Gusu Lan, donde podrían hablar más cómodos. Dándole una
última mirada de decepción a Jiang Wanyin, Jiang Fengmian se giró con elegancia y siguió a
sus consejeros a un salón más privado en la secta donde estaban invitados, donde todos los
omegas podrían hablar.
Entendiendo que era algo solamente de omegas en su secta, Yu Ziyuan y los demás betas y
alfas de la familia Jiang se quedaron en la puerta de la secta, y fingiendo estar llevando el
equipaje, intentaron pasar por alto lo que sucedía.
Suspirando con pena, temblando un poco por el miedo, Jiang Cheng se aferró fuertemente a
Lan Jingyi antes de tomar el mismo camino que su padre. Mirando a su omega y sintiendo
una gran angustia, Lan Xichen quiso seguirlo, pero fue detenido por Wei Wuxian, el cual se
puso en su camino de forma nerviosa.
“Regresaremos pronto Zewu-Jun, no debe preocuparse” dijo Wei Ying con una sonrisa suave.
Sin hacer caso e intentando esquivar a Wei Ying, Lan Xichen siguió insistiendo para seguir a
su omega; siendo ahora detenido por Lan Wangji, el cual se apresuró a tomar a su hermano
de un brazo para impedir que fuera: “Hermano, por favor” Pidió Lan Zhan con seriedad.
“No puedo, A-Cheng… El me necesita” Dijo Xichen realmente angustiado, sintiendo el dolor
de su alfa el cual podía sentir al asustado omega de Jiang Wanyin.
Cruzando miradas con Lan Wangji por un instante, Wei Wuxian continuo hablando y
finalmente dijo: “Por favor Zewu-Jun, no debe preocuparse, yo siempre cuidare a A-Cheng;
es mi hermano. Por favor, entienda que esto solo le compete a omegas de mi secta”.
Presionando los puños con ira, Lan Xichen solo pudo aceptar que Wei Ying hiciera una
reverencia y corriera detrás de su hermano y los demás miembros de su secta, dejando que su
asustado omega se fuera solo con su hijo. Lan Xichen era un alfa, pero en ese instante no
podía entender como su prometido debería lidiar solo con situaciones semejantes, sin
comprender como en una sociedad como la suya aún se tenía roles de género tan definidos,
en los que alfas no podían interferir en asuntos clasificados para “omegas”, aunque ellos
también tenían mucho que ver al respecto.
“Está bien” Dijo Lan Wangji, intentando calmar a su hermano, el cual comenzaba a soltar
feromonas, saliéndose de control.
“A-Cheng… El me necesita ahora, yo debería estar ahí, a su lado y al de nuestro hijo”
Reclamo Lan Xichen, intentando hacerle entender a su menor toda la desesperación que lo
carcomía.
“Lo entiendo, pero no es tu lugar” Le recordó Lan Zhan con seriedad: “No hagas algo
imprudente que pueda arruinar aún más las cosas”.
Volviendo en sí mismo con dificultad, Lan Xichen no se dio cuenta que era observado
fijamente por Yu Ziyuan, la cual había escuchado toda esa conversación. Sin temer en lo
absoluto, la fuerte mujer alfa intervino entre ambos hermanos, decidiendo preguntar: “¿Tu
hijo?”
Siendo sorprendido por esa pregunta, aunque quería responderla, Lan Xichen solo guardo
silencio aun siendo sujetado por Lan Wangji, sin poder admitir cuanto amaba a su cachorro,
así como amaba a su omega.
“¿A-Cheng también lo ama?” Pregunto Yu Ziyuan con calma, sorprendiendo a ambos jades.
Dentro de un lujoso salón de té dentro de Gusu, omegas de la secta Jiang así como de la secta
Lan se habían dispuesto en una reunión alrededor de la situación de Jiang Wanyin, el cual era
apoyado por Wei Wuxian, que estaba detrás de él.
Mirando a su hijo lleno de decepción, Jiang Fengmian le dijo: “¿Tienes idea de lo que hiciste
con ese niño?”
Bajando la cabeza para no responder de una forma agresiva, aunque sentía a su omega
ardiendo de furia en su interior por aquellas palabras despectivas, Jiang Cheng guardo
silencio, sintiendo como Lan Jingyi ajeno a todo, jugaba con sus túnicas, las cuales llenas de
adornos y colores vibrantes distraían la atención del niño.
“Eres una vergüenza para esta secta, para todos los omegas que la conforman. Acabas de
sentenciar tu matrimonio a un fracaso” Lo regaño Jiang Fengmian, realmente duro con su
hijo.
“¿Un fracaso? Solo hice lo correcto, ayude a un inocente” Se defendió Jiang Cheng dolido.
Mirándolo de una forma sumamente severa, Jiang Fengmian dijo: “Hiciste que tu alfa
reconociera legalmente a un niño desconocido como su heredero, por tus caprichos con tu
alfa manchaste tu reputación como omega, manchaste a toda tu secta. El próximo heredero de
la secta Lan no proviene de la rama principal de la familia, todo por tu causa; has destinado a
la vergüenza todo el linaje de tu familia”.
“A-Yi es un Lan, es un Lan como mi prometido, como muchos de esta sala ¿Por qué no
puede ser un líder? ¿Por qué no puede si Lan Huan lo desea tanto como yo?” Pregunto Jiang
Cheng realmente dolido.
“Porque es una vergüenza que tu no hayas podido darle un heredero” Explico Jiang
Fengmian con más enfado en su voz: “Por esa criatura que tienes en los brazos, no habrá una
alianza verdadera entre tu esposo y tú, no hasta que te embaraces de un Lan que tenga la
sangre Jiang y la suya en su venas”.
“¡Entonces me embarazare ahora! ¡Hoy mismo, de inmediato! Si es lo que exiges, lo hare
ahora mismo, si es tan importante…”
“Eres un omega masculino, Wanyin. Puedes intentarlo por años y aun así no quedar
embarazado. Cuando todas las sectas sepan que tu heredero no es tu hijo de sangre, te
tomaran como un omega infértil, un desecho. Y esa es la peor ofensa que cualquier omega y
familia de omegas puede recibir, el aviso de que no son buenos para la tarea principal de una
esposa: Tener una familia”.
Volviendo a bajar la cabeza con rabia, Jiang Wanyin no quiso responder esas palabras,
solamente aferrándose fuertemente a su cachorro, el cual seguía riendo y jugando con sus
túnicas, como si realmente nada hubiera pasado.
Viendo el tenso ambiente en la que todas las personas de su secta se encontraban algo
relegadas, Lan Qiren intento aliviar un poco lo tenso del asunto, acercándose a Jiang
Fengmian e intentando hacerlo entrar en razón: “Fengmian por favor, tu hijo cometió un acto
de compasión con un niño sin madre ¿Acaso no hiciste lo mismo con un joven desamparado
que ahora también es el heredero de tu secta?”
Sintiendo como todas las miradas ahora se centraban en él, Wei Wuxian solo pudo sonreír
con cierta amargura, pensando que tal vez ahora las criticas caerían sobre él y sus padres. Sin
embargo guardando silencio y mostrándose molesto, Jiang Fengmian negó suavemente con la
cabeza, riéndose un poco de las palabras de Lan Qiren.
“Qiren ¿Acaso estas comparando una situación tan diferente con algo como esto? Yo tengo
dos hijos biológicos, que llevan la sangre Jiang y Yu en sus venas, cumplí mi labor como
omega con ambos. Wuxian es mi sobrino y su condición es muy diferente a la de ese niño
tuyo en esta secta, su madre era una prima segunda de la rama principal, así que aunque no se
lo considere, también tiene sangre de la rampa principal de mi secta ¿Puedes decirme lo
mismo de ese niño que tiene Wanyin en sus brazos? ¿Su origen es tan importante e ilustre
como para heredar tu milenaria secta sin ningún tipo de complicación?” Pregunto Jiang
Fengmian con ira.
Sin poder responder esas preguntas con respuestas satisfactorias, Lan Qiren solo pudo decir:
“Te aseguro Fengmian, que ese niño es un alfa tan capaz como lo son y serán mis propios
sobrinos; un Lan completo el cual satisface todas las expectativas de esta secta”.
“Pero no es un Jiang” Negó Jiang Fengmian, volviendo a resaltar la importancia de la sangre
en ese asunto: “Esta situación no es tan simple como para hablar de apellidos o familias, es
una cuestión de herencia, de sangre. Pero es algo que tú no puedes entender Qiren, porque
nunca tuviste hijos”.
Enfureciéndose realmente por esas palabras, Lan Qiren replico: “Cuida tus palabras conmigo
Fengmian, no hagas comentarios desafortunados aquí, insultándome en mi propio hogar”.
Mirándolo con recelo, como si quisiera decirle mucho desde hace tiempo, Jiang Fengmian
solo dijo: “Culpable y siempre culpable, no tuviste la fuerza para hacer lo correcto entonces,
tampoco ahora. Esto es culpa tuya tanto como la de mi hijo, por que como omega tú tenías la
posibilidad de detener esta aberración al permitir que se adoptara a ese niño; pero no hiciste
nada, como siempre. Mi secta ha sido manchada por tu ineptitud al mandar en Gusu, has
arruinado la reputación de mi hijo y mi familia…”
Dándose cuenta de la forma terrible en la que su padre insultaba a Lan Qiren, Jiang Wanyin
intervino de inmediato: “¡Padre basta! ¡Te lo suplico! ¡Para ya!”
Volviendo a enfocar su atención en Jiang Cheng, Jiang Fengmian guardo silencio, mirando a
su hijo tan alterado, tanto que temblaba y había roto a llorar, mirándolo desesperado. Wei
Wuxian por su parte, viendo el estado de su hermano, rápidamente se acercó a este para
tomar a Jingyi de sus brazos, intentando que se calmara un poco.
“Por favor te lo suplico, esto no tiene nada que ver con la secta Lan o cualquier presente en
esta sala, fue mi decisión, mi deseo; ni siquiera Xichen tiene que ver con esto. Si quieres
culpar a alguien y descargar tu ira con una persona, que sea conmigo” Pidió Jiang Cheng
realmente alterado: “Por favor no insultes a mi nueva secta, por favor padre”.
Volviendo a reírse de su hijo con mucha crueldad, Jiang Fengmian pregunto: “¿Tu nueva
secta? Tú aun no te has casado con nadie Wanyin, y aunque renunciaste a la secta Jiang,
como omega tus padres aún siguen decidiendo tu destino. Si así lo quiero, puedo llevarte
conmigo a la fuerza de vuelta a Yunmeng y romper tu compromiso, donde no volverás a ver a
ese niño ni a esta familia que tanta vergüenza nos ha traído a todos…”
Alterándose mucho con esas palabras, que casi lo hacen desmayarse por el pánico, Jiang
Cheng replico: “¿Qué?”
Interviniendo finalmente, Wei Wuxian se puso frente a su hermano, mirando a su tío a los
ojos intentando calmarlo: “Por favor tío, no lo digas, por favor. Lo que le dices a Jiang Cheng
es peor que la muerte, el ama a su alfa, ama a su hijo, no puedes separarlos”.
Mirando a Wei Wuxian con más calma, pero de igual manera enfado, Jiang Fengmian solo
suspiro, dejando que el omega Wei terminara de hablar: “Todo esto se ve muy mal, yo lo sé.
Pero Jiang Cheng se casara en un par de días, será tomado por su alfa, y nos aseguraremos de
que tenga un hijo de inmediato, tendrá un niño con sangre Lan y Jiang en sus venas. Además
si es tan importante, yo puedo permitir que el segundo hijo de mi hermano sea el heredero de
Yunmeng, a Lan Zhan tampoco le importara. Así se solucionara todo esto ¿No es verdad?
Habrá un líder que sea su hijo de sangre también, no habrá nada de qué preocuparse
entonces” Sugirió Wei Ying, intentando arreglar todo el asunto.
Mirando a sus consejeros a su lado, los cuales lucían tan decepcionados y enfadados con la
situación como su líder, Jiang Fengmian solo suspiro con resignación, mirando su hijo detrás
de Wei Wuxian, viéndolo a los ojos: “Esto ya está hecho, fue tu error y fue tu decisión. No
consultaste con tus padres, tampoco con tus superiores, e hiciste lo que se te dio en gana
como un inmaduro niño caprichoso”.
“Padre…” Susurro Jiang Cheng envuelto en lágrimas, sin poder soportar más toda la
situación.
“Eres una decepción para tus padres, tu familia y tu secta; condenaste tu reputación a ser un
omega infértil e inservible” Sentencio Jiang Fengmian con mucha decepción su voz: “Ya que
eres un mal hijo y un mal sucesor, no veo por qué debería preocuparme por ti o por tu futuro
de nuevo, pareces ser capaz de tomar decisiones por ti solo, por más erróneas que sean. Así
que puedes casarte ahora, o nunca; puedes tener hijos o no tenerlos; puedes hacer lo que se te
plazca en tu vida. Pero no esperes el apoyo de tus padres y tu secta desde ahora, estas solo.
Yo no iré a tu boda, no podré presenciar toda la vergüenza que me has causado al ser mi hijo,
regresare a Yunmeng de inmediato”.
Cubriendo su rostro con sus manos y llorando con más fuerza, Jiang Cheng no quiso ver
como su padre y el resto de líderes de su secta abandonaban la sala, repudiándolo.
Sintiéndose solo y abandonado, sabiendo que ni siquiera la secta Lan podía hacer algo por él,
Jiang Cheng termino cayendo de rodillas al piso, sollozando y suplicando el perdón de su
padre, sin entender por qué hacer lo correcto le causaba tal dolor.
Esperando a que todos los omegas de la secta Jiang salieran, Yu Ziyuan no espero más y
entro en el salón, acercándose directamente a su hijo. Al verla un gran temor recorrió el
cuerpo entero de Wei Wuxian, quien temeroso preveía que la mujer le gritara a su hermano y
empeorara todo, terminando de romper a su hermano menor. Pero haciendo lo inesperado, Yu
Ziyuan se agacho al lado de Jiang Cheng, esperando a que se tranquilizara un poco antes de
limpiar sus mejillas llenas de lágrimas con las mangas de su propia túnica.
“Usare mi voz de alfa si es necesario” Sugirió la mujer sorprendiendo a todos: “No permitiré
que tu padre o todos esos refinados idiotas te den la espalda el día de tu boda”.
Sonriendo ligeramente al escuchar esas palabras, Wei Wuxian no pudo evitar imaginar la
escena, creyendo muy capaz a Madam Yu, pues esta sin dudarlo usaría su voz para obligar a
cada uno de los omegas de su secta a apoyar a Jiang Cheng.
Mirando como su hijo no podía calmarse, Yu Ziyuan pidió: “No llores, por favor”.
Logrando calmarse un poco al escuchar a su madre, Jiang Cheng replico entre sollozos: “Él
me odia… Todos me odian…”
“Tu padre no te odia, es duro contigo por que debe serlo; si fueras un alfa yo hubiera sido
dura contigo. Él te crio de esta manera por que debes traerle honor a los Jiang, enorgullecer a
tus padres y a toda tu secta; eres el heredero después de todo, llevas la sangre de todo
Yunmeng en tus venas” Le recordó Madam Yu.
“Eso no parece importar tanto ahora…” Susurro Jiang Cheng, enjuagando las lágrimas de sus
mejillas tembloroso: “Si hacer lo correcto me trae este sufrimiento, no me arrepiento de nada,
aun si el me repudia, yo aun estaré orgulloso”.
“¿Cuál es el lema de la secta Yunmeng Jiang?” Pregunto Madam Yu.
Interviniendo en la conversación, Wei Ying susurro: “Intenta lo imposible”.
Asintiendo a las palabras de su otro hijo, Yu Ziyuan le dijo a Jiang Cheng: “Y siguiendo ese
lema, tu eres el Jiang más respetable que he conocido, el único que está haciendo lo
imposible. Así que eso no importa, lo que digan los demás, en tu corazón tú debes mantener
lo que es correcto, y si lo crees de verdad, cualquier otra cosa que suceda dará igual”.
Escuchando atentos, todos los presentes no pudieron evitar enternecerse con ese momento,
viendo por primera vez en toda su vida a Yu Ziyuan comportarse de una manera amable y
dulce con alguien, comprobando que su carácter definitivamente cambiaba frente a sus hijos.
Notando que Jiang Cheng estaba un poco más tranquilo, Yu Ziyuan delicadamente recogió
uno de los mechones del flequillo de este detrás de su oreja, mirándolo lleno de cariño:
“Además sin importar lo que decidas, incluso si rompes tu compromiso y te casas con otro
omega, yo siempre estaré orgullosa de ti”.
Volviendo a romper a llorar, Jiang Cheng susurro: “Mamá…”
Recibiendo un cariñoso abrazo de la mujer, Jiang Cheng lloro sobre su hombro, dejando que
las dulces y picantes feromonas de alfa de su madre lo reconfortaran, abrazándola con fuerza.
Y a pesar de que todos los presentes guardaron respetuoso silencio con tan enternecedor
momento, había alguien quien no parecía estar muy contento de la situación, y aun en los
brazos de Wei Wuxian, Lan Jingyi comenzó a llorar fuertemente. Dándose cuenta de que Yu
Ziyuan era un alfa, el joven Lan se sintió sumamente disgustado de que tocara a su madre
omega, llamando a Jiang Cheng entre sollozos.
“¡Mamá!” Grito Jingyi, extendiendo sus brazos en dirección de Jiang Cheng.
Siendo tomado por sorpresa pro su cachorro, Jiang Cheng se separó de inmediato de su
madre, rompiendo el abrazo que tan solo había durado unos segundos, dispuesto a
tranquilizar al menor.
“¿Puedo cargarlo?” Pregunto Yu Ziyuan de improvisto.
Dudando por un segundo mientras se ponía de pie, limpiando torpemente las lágrimas de sus
mejillas, Jiang Cheng respondió: “Claro…”
Más preocupado por la reacción de Jingyi que la de su madre, Jiang Cheng cruzo miradas con
un confuso con Wei Wuxian, quien algo dudoso le extendió el bebé a la mujer alfa. Esto
obviamente desagrado fuertemente a Lan Jingyi, quien lloró más fuerte aun, nada contento de
estar siendo sostenido por ese alfa extraño.
Tomando al menor de una forma delicada, cansada del fuerte llanto de este, Yu Ziyuan miro
al menor a los ojos y fuertemente dijo: “Silencio”.
Estremeciendo a todos los presentes, que eran solo omegas y muchos nunca habían
escuchado la voz de un alfa antes, Yu Ziyuan consiguió calmar al pequeño. Lan Jingyi
también se notó sumamente sorprendido, y cerrando la boca, siguió llorando pero dejo de
gritar.
Quedándose boquiabierto, Wei Wuxian comento: “Una palabra, solo una palabra, dijo solo
una”.
Tan sorprendido como su hermano, Jiang Cheng respondió: “Lo sé”.
“Yo también quiero hacer eso, quiero callar bebés con una palabra”.
Mirándolo molesto, Jiang Wanyin replico: “Idiota, solo los alfas pueden hacerlo…”
Pensativo, Wei Ying se preguntó: “¿Lan Zhan podrá hacerlo…?”
Ajena a la tonta conversación de sus hijos, Yu Ziyuan se mantuvo en silencio, mirando al
bebé en sus brazos, tomando con delicadeza sus manos e incluso mirando su cinta; notando
como primera cosa que aquel pequeño olía únicamente como Jiang Wanyin.
“Pareces un gran nadador” Comento la mujer, hablándole a Jingyi: “¿Estás seguro de que no
eres de Yunmeng?”
Riendo al escuchar ese comentario, pues su madre solía decírselo mucho cuando era niño,
Jiang Cheng respondió: “Aun no sabe nadar…”
“Eso es un pecado para alguien con herencia de Yunmeng” Reclamo la mujer alfa, mirando
fijamente los ojos azules puros del menor: “Los niños en Lotus Pier nacen sabiendo nadar.
No debes preocuparte de nada A-Yi, aprenderás a nadar, yo me encargare de eso”.
Haciendo reír a ambos hermanos, por un instante Wei Wuxian y Jiang Wanyin rememoraron
sus infancias, recordando como la mujer solía empujarlos al agua para obligarlos a nadar
incluso cuando eran pequeños, enseñándoles a jugar y recoger lotos desde que tenían
memoria; razonando que la mujer quería hacerle lo mismo a ese pequeño.
Sonriendo al ver como el menor la olisqueaba y la miraba fijamente, Yu Ziyuan por un
instante se giró en dirección a Lan Qiren, mirándolo de reojo, diciéndole: “Debes estar muy
orgulloso ahora, somos abuelos”.
Sorprendido por ese comentario, Lan Qiren susurro: “Pero yo no soy…”
“Oh por favor” Se quejó Yu Ziyuan, aparentemente muy cómoda de hablar con Lan Qiren:
“Ya hemos pasado por esto, te lo dije mil veces antes. Tu eres el padre de esos dos jóvenes
Lan más que el idiota de tu hermano o su esposa, solo tú”.
Sonriendo por esas palabras, perdiéndose por un instante en sus recuerdos, Lan Qiren hizo
una reverencia de forma agradecida, susurrando: “Muchas gracias, mi señora”.
Correspondiendo la reverencia de forma suave, Yu Ziyuan respondió: “Muchas felicidades, y
muchas gracias por hacerme feliz como abuela”.
Dándose cuenta de todos los cumplidos que había hecho la mujer hacia una figura de
autoridad semejante como Lan Qiren, los demás miembros de la secta Lan correspondieron
con reverencias de igual manera.
“Voy a presentarte a los demás miembros de tu secta ¿De acuerdo? Hay muchas personas que
quieren conocerte y están felices por ti” Dijo Madam Yu, acercándose con el pequeño a la
puerta del salón.
Las personas en Yunmeng solían ser muy amigables con los demás, así que como parte de sus
tradiciones, por lo general hacían grandes recibimientos a nuevos integrantes como hijos o
esposos de miembros de la secta Jiang, y era una tradición dejar que los miembros de dicha
secta jugaran con los bebés y los conocieran, pasándoselos de brazos en brazos y pasando
largo rato con ellos a pesar de no ser sus hijos.
Parada en el marco de la puerta, la mujer se giró por un instante en dirección a Wei Wuxian y
le dijo: “Tu, idiota Wei Wuxian, acompáñame. Tengo algo muy serio que hablar contigo,
ahora”.
Sintiendo un estremecimiento en la espalda al escuchar el tono enfadado de la mujer
llamándolo, Wei Ying solo pudo cruzar miradas con Jiang Cheng por un instante de forma
asustada, antes de seguir a su madre fuera.
Aprovechando que Yu Ziyuan finalmente se iba, los demás miembros de la secta Lan
abandonaron lentamente la sala también, dejando finalmente solo a Jiang Cheng. Sin
embargo viendo que todos finalmente se iban y que la reunión finalmente había terminado al
parecer, Lan Xichen se apresuró a dirigirse a la sala de reuniones para buscar a Jiang Cheng.
“A-Cheng” Dijo Lan Huan preocupado, acercándose al menor.
Volviendo a llorar al ver a su alfa, Jiang Cheng rápidamente se abrazó a este, sollozando: “A-
Huan… Ellos quieren quitármelo…”
Viendo de reojo como en el exterior, Madam Yu hablaba con Wei Wuxian apartados de los
demás miembros de su secta, mientras que los demás Jiang se encontraban con Lan Jingyi,
jugando con él y conociendo al bebé; Jiang Cheng se aferró más fuerte aun a Lan Xichen.
“Ellos me amenazaron con romper nuestro compromiso…” Susurro Jiang Cheng asustado,
mirando a su alfa a los ojos.
Quedándose en silencio, Lan Huan solo pudo sostener a Jiang Cheng de forma delicada
contra sí mismo, sintiendo miedo también.
Capítulo 22.

Temblando y sollozando suavemente, Jiang Cheng siguió sosteniéndose fuertemente de su


alfa, mientras sentía como este le acariciaba la espalda con cariño, y dulcemente trataba de
calmarlo.
“Ellos quieren separarnos… Ellos quieren alejarme de ti…” Sollozo Jiang Cheng, lleno de
dolor.
“No voy a permitirlo” Prometió Lan Xichen.
“¿Y cómo lo impedirás? Si ellos quieren obligarme…”
“Entonces iré a Yunmeng y te tomare por la fuerza, te traeré aquí a Gusu, y te secuestrare”.
Guardando silencio con aquellas palabras, mirando a su alfa a los ojos con cierto temor, Jiang
Cheng susurro: “¿Tu harías eso de verdad?”
Sonriendo dulcemente, intentando calmar al menor, Lan Xichen respondió: “Si me veo
obligado, podría hacer eso o más”.
Tomando la mano del contrario con delicadeza, Lan Huan la llevo a sus labios para dejar un
suave beso sobre el dorso de esta, mirándolo a los ojos fijamente: “No soy una persona
violenta, mucho menos malévola; yo repudio el mal. Pero si es por ti, haría lo que sea.
Definitivamente, yo por ti me volvería un villano o algo peor, porque te amo”.
“No digas esas tonterías…” Lo regañó Jiang Cheng, apartando su mano de la de Lan Xichen
con cierto temblor: “No lo harías, yo sé que no”.
Mirando al contrario a los ojos con seriedad, Lan Xichen dijo: “Escúchame bien A-Cheng,
solo escúchame… Yo no voy a dejarte ir”.
Sintiendo su corazón acelerarse por un segundo, mientras se perdía en los ojos azules de su
alfa, Jiang Cheng solo pudo guardar silencio, manteniéndose expectante.
“Después de todo lo que ha pasado, después de todo este tiempo, yo solo puedo estar seguro
de una cosa en mi vida, lo mucho que te amo. No me importa la secta Lan, no me importa mi
título o si sigo siendo un cultivador; lo único que me importa eres tú. No veo una vida sin ti a
mi lado”.
“¿Lo dices en serio?” Pregunto Jiang Cheng dudoso.
“Más en serio de lo que he hablado en toda mi vida” Dijo Lan Xichen con seriedad:
“Entonces quiero permitirme ser egoísta por primera vez en toda mi vida, aun si rompo un
par de reglas de mi secta por ello. Quiero tenerte, quiero amarte, y quiero vivir mi vida a tu
lado; solo quiero amarte por siempre. Y no importa lo que pase, lo que diga tu padre, lo que
diga tu secta, ni lo que diga mi propia secta; a menos que tú me lo pidas, yo no me rendiré
contigo jamás, voy a luchar por ti hasta el final. Y aun si me lo pides, no dejare de amarte, mi
corazón solo es tuyo A-Cheng, yo solo soy tuyo por completo”.
Cerrando los ojos y dejándose llevar, Jiang Cheng se abrazó fuertemente a Lan Xichen,
rodeando su cuello con sus brazos. Mientras que Lan Xichen continuo hablando: “No
necesito una marca de alfa, yo ya soy tuyo, no importa a que omega vea o que omega mienta
diciendo que me ama, yo solo voy a pertenecerte a ti por siempre. Así que no dudes de mí, no
dudes de mi amor y lo que estaría dispuesto a hacer por ti… Yo te amo, y no veo mi vida al
lado de alguien más que no seas tú, solo tu… Quiero amar a A-Cheng por toda la eternidad”.
“Entonces promételo… Promete que no vas a abandonarme” Suplico A-Cheng.
“No voy a abandonarte…” Susurro Lan Huan, correspondiendo el estrecho abrazo que le
daba el menor: “No importa lo que pase, yo siempre voy a pertenecerte, solo a ti por siempre.
Y aun bajo cualquier circunstancia, te juro A-Cheng, volveré a traerte a Gusu Lan para
hacerte mi esposo. Formare mi familia a tu lado, y planeo ser feliz solo contigo”.
“Solo contigo…” Susurro Jiang Cheng, dejando de llorar para buscar los labios del contrario.
“Solo contigo… Solo voy a amarte a ti, por siempre” Prometió Lan Xichen.
Y en medio de todo el dolor que comenzaba disiparse, y la alegría por la más dulce confesión
de amor, Jiang Cheng unió su rostro con el de Lan Huan en un profundo y apasionado beso,
intentando transmitirle sin necesidad de palabras cuanto lo amaba también… Diciéndole con
aquel simple acto que él también deseaba amarlo por siempre.
Abrazándose fuertemente de Lan Huan mientras continuaban con aquel beso tan profundo,
Jiang Cheng comenzó a acostarse en la cama, jalando a Lan Xichen contra su cuerpo,
haciendo que el alfa terminara acostado sobre él. Sonrojándose mucho Jiang Cheng continuo
con los ojos cerrados, sintiendo como el gran cuerpo de su alfa lo apresaba por completo,
solamente pudiendo abrir las piernas para dejarlo acostarse mejor, y rodear el cuello del
mayor con sus brazos.
Ambos estaban completamente solos en el pabellón privado de Lan Huan, con solo algunas
velas encendidas, y nadie más a su alrededor. Así que pudiendo tener privacidad por primera
vez en mucho tiempo, Lan Huan reacciono como Jiang Cheng esperaba, llevando una de sus
manos al cabello de este para deshacer su peinado dejando sus negros cabellos libres por toda
la cama, y llevando su otra mano hasta la parte baja de sus caderas, muy cerca de sus nalgas.
Rompiendo el beso, Jiang Cheng susurro: “A-Huan…”
Notándose sumamente avergonzado por lo que sucedía, Jiang Cheng solo pudo mirar a su
alfa a los ojos, observando ese calmo color azul y su tranquila sonrisa, sintiendo como su alfa
había comenzado a soltar sus feromonas, tranquilizándolo aún más. Sin saber bien si eran los
deseos de Jiang Cheng o estaba mal interpretando sus señales, Lan Xichen quiso ir despacio,
así que aun manteniendo ese abrazo, cuidadosamente llevo sus manos a las túnicas del menor,
quitándole su cinturón para comenzar a quitarle las ropas.
Y para sorpresa de Lan Huan, Jiang Cheng no se opuso en lo absoluto, permitiendo que su
alfa lo desnudara, incluso ayudándolo moviendo su cuerpo en silencio. Tragando un poco de
su saliva con nerviosismo, entendiendo lo que eso significaba, Lan Xichen no perdió el
tiempo, y llevando una de sus manos a su cinta de frente, la arranco de su cuerpo para tirarla
lejos, acercándose a su amado para volver a devorar sus labios.
Estando desnudo frente a su alfa por primera vez en toda su vida, Jiang Wanyin no pudo
evitar ponerse al tímido, y tembloroso puso sus manos sobre el pecho musculado y bien
formado del mayor, mientras cerraba los ojos y se estremecía. El aroma de su alfa inundo
fuertemente la habitación, así que intentando hacer lo mismo, Jiang Wanyin soltó sus
feromonas ligeramente, sin saber bien que hacer.
Dando una suave mordida en uno de los labios del omega para terminar el beso, Lan Xichen
pronto bajó con sus labios al cuello de este, dando ligeras caricias al hacerlo, tomándose su
tiempo para besar el cuello de su amado, intentando relajarlo aún más. Jadeando, Jiang Cheng
no se atrevió a abrir los ojos ni por un solo segundo, abrazando al mayor por las caderas con
sus propias piernas de manera delicada, mientras se estremecía sintiendo gustoso todos los
toques en su cuerpo.
Lan Xichen pronto bajo sus dos manos a las nalgas de Jiang Cheng, sacando un suave
gemido de los labios de este, quien no pudo evitar asustarse al ser tocado de esa forma por
primera vez en toda su vida. Sin embargo acostumbrándose a ese toque tan vergonzoso, Jiang
Cheng no replico para nada, solo cerrando fuertemente los ojos y jadeando, permitiendo que
su alfa lo tocara de esa forma. Sonriendo ligeramente al ver esa reacción tan dulce de su
omega, Lan Huan no pudo evitar besar una última vez sus labios, mientras acariciaba con sus
dedos las nalgas de Jiang Cheng con mucho deseo.
Era la primera vez que el alfa podía tocarlo de esa forma, así que siendo algo inexperto y
estando ansioso de igual forma, paso mucho más tiempo del necesario tocando las bien
formadas nalgas de su amado mientras seguía besándolo. Pero al darse cuenta de cuanto lo
molestaban sus túnicas, Lan Xichen tuvo que separarse a regañadientes del menor, tomando
su cinturón para quitárselo a la fuerza, casi rompiendo la tela, para luego quitarse las túnicas
quedándose únicamente en sus pantalones con rapidez.
Entreabriendo los ojos para ver a su alfa por un instante, Jiang Cheng se sonrojó mucho más
aun, viendo el cuerpo de Lan Xichen con mucho deseo, alargando una de sus manos por un
segundo, tocando los abdominales bien formados de este con una suave caricia; volviendo a
retraerse de inmediato por la vergüenza. Sin perder su sonrisa algo nerviosa pero llena de
felicidad, Lan Xichen se contuvo para no hacer algún comentario para no avergonzar al
menor, regresando sobre su cuerpo para besarlo nuevamente, introduciendo su lengua entre
los labios de este.
Dando tan solo un par de besos de esta forma, Lan Huan pronto volvió a bajar con sus besos
por el cuello del menor hasta su pecho, y luego hasta sus pezones. Observando esos pequeños
botones rosa, a penas erectos por la excitación que sentía Jiang Wanyin, Lan Huan no pudo
aguantar la tentación y llevo uno de estos a sus labios, mientras sostenía la cintura del
contrario con firmeza. Siendo tomado por sorpresa con aquella placentera acción, Jiang
Cheng abrió los ojos de golpe, y dejándose llevar soltó un fuerte y dulce gemido de placer.
Avergonzados de inmediato por lo que hizo, el joven omega rápidamente cubrió sus labios
con una de sus manos para no soltar más sonidos de dulce placer, mientras llevaba su otra
mano a uno de los hombros de su alfa, sosteniéndose de este tembloroso. Y cerrando los ojos
mientras seguía sintiendo aquellas lamidas sobre sus sensibles pezones, Jiang Cheng se quejó
susurrando: “A-Huan… No…”
Deteniéndose por un segundo, volviendo a subir hasta la altura del rostro del menor, Lan
Xichen pregunto: “¿No te gusta A-Cheng?”
Negando con la cabeza apresurado, Jiang Cheng se negó a la pregunta. Sintiéndose un poco
desilusionado por aquella respuesta, Lan Xichen subió una de sus manos a los pezones de
este, estimulándolo suavemente entre sus dedos: “¿Ni cuando lo hago así de suave?”
“Por favor… No…” Suplico Jiang Cheng en un susurro, conteniendo sus gemidos con suaves
suspiros.
Entendiendo que su omega no estaba nada conforme con esos toques, Lan Xichen se detuvo
de inmediato, besando las mejillas del contrario suavemente: “Lo siento A-Cheng, no quería
hacerte sentir mal”.
Entreabriendo los ojos para mirar a su alfa de reojo, Jiang Cheng no respondió a sus palabras.
La verdad era que los toques sobre sus pezones no le disgustaban realmente, solo le daban un
sentimiento sumamente extraño, que hacia estremecer su cuerpo y soltar gemidos de forma
incontenible; sin poder aguantar la vergüenza. Así que a pesar de no estar seguro de si le
gustaba o no, Jiang Cheng prefirió conservar su pudor, pidiéndole al mayor que se detuviera.
Pero sin darse por vencido, Lan Xichen bajo cuidadosamente sus manos a las caderas del
menor, y suavemente las levanto, uniendo sus pelvis y sus miembros. Con esa nueva
estimulación, sintiendo el gran miembro de su alfa aun apresado en sus pantalones tan cerca,
Jiang Cheng volvió a gemir sin poder contenerse, mirando a Lan Huan a los ojos confundido,
disfrutando de esa cercanía.
“¿Quieres que te toque ahí, A-Cheng?” Pregunto Lan Xichen.
Desviando la mirada de inmediato, Jiang Cheng susurró: “Idiota…”
Sonriendo con felicidad al escuchar las palabras de su omega, Lan Xichen no dudó en bajar
una de sus manos al miembro de este, comenzando a tocarlo suavemente entre sus dedos. Sin
poder negar más el embriagante placer que sentía con las acciones de su alfa, Jiang Cheng
solo pudo contener sus gemidos, soltando a penas algunos jadeos y gemidos tan suaves como
suspiros, mientras seguía cubriendo sus labios con una de sus manos. Sintiéndose alentado a
continuar con esos dulces sonidos de placer, Lan Xichen pegó su entrepierna a las nalgas de
Jiang Cheng, mientras seguía rozando el miembro del menor con suaves toques, estimulando
de esa forma todos los lugares sensibles de su amado.
Aferrándose a las túnicas de su alfa mientras lo abrazaba fuertemente, Jiang Cheng gimoteó:
“A-Huan… Se siente… Raro…”
“¿No te gusta?” Pregunto Lan Xichen, muy preocupado por darle placer al menor.
Sin poder contener mas gemidos, comenzando a soltarlos de forma tímida, Jiang Cheng
susurro: “No lo sé…”
“Solo debes decirme, si no te gusta, yo me detendré de inmediato” Prometió Lan Huan en un
susurro, acercándose al menor para besar su frente por un segundo: “Te amo A-Cheng, no
quiero hacerte daño”.
Sintiéndose sumamente protegido por su alfa con esas palabras, Jiang Cheng prefirió no
responder, abrazándose fuertemente a este, ocultando su rostro en el cuello de su amado,
mientras gemía sin poder parar. En cierto punto, tras ser estimulado por Lan Xichen por
varios minutos, fue Jiang Cheng quien de manera desesperada buscó los labios de su amado,
deseando besarlo con mucha desesperación por lo excitado que se sentía.
“A-Huan… No más…” Suplico Jiang Cheng de un momento al otro: “Si lo sigues haciendo,
si sigues haciendo eso… Me voy a venir”.
Concentrándose en frotar la punta de su pene con cuidado, Jiang Cheng no pudo evitar
sonriera suavemente, acercándose a darle un cariñoso beso en una mejilla; preguntándole:
“¿No quieres venirte?”
Negando con la cabeza de forma desesperada, Jiang Cheng respondió: “Aun no… Por favor
aun no…”
Decidiendo obedecer al menor, Lan Xichen le dio unas últimas caricias a su miembro antes
de finalmente alejar su mano de este, llevándola a sus nalgas. Consiguiendo controlarse
mediante respiraciones profundas, temblando sin parar, mientras sentía como los dedos de
Lan Xichen ahora solo presionaban sus nalgas y pasaba sus dedos entre estas, rozando su
sensible entrada, la cual estaba húmeda por la excitación.
“No puedo más… Por favor mételo… Por favor…” Suplico Jiang Cheng desesperado,
dejando de pensar, pudiendo escuchar solamente a su omega en su cabeza, quien suplicaba
ser tomado por Lan Huan.
Bajando la mirada con cierta incomodidad, de forma pensativa, Lan Xichen dejo de tocar las
nalgas del menor. Mientras que Jiang Cheng, cada vez más desesperado al sentir como su alfa
dejaba de tocar su cuerpo, volvió a suplicar: “Por favor, por favor… Quiero que lo metas, por
favor…”
Notando su tono de voz más dulce y desesperado, Lan Xichen sonrió con dulzura, acercando
sus labios a la frente de Jiang Cheng para volver a besarlo; susurrándole: “No A-Cheng, no lo
haré”.
Quedándose en silencio, sumamente sorprendido por estas palabras, Jiang Cheng pronto
estallo: “¿Por qué? ¿Por qué no?”
“Tranquilo, por favor cálmate” Pidió Lan Xichen, tan sereno como era usual en él: “Estas
dejando que tu omega tome el control, y no estás pensando con claridad, estas dejando que
piense por ti. Yo de verdad quiero hacerlo ahora, quiero hacerte mío e incluso vincularme
contigo; pero sé que cuando todo esto termine, tu no podrás perdonarme…”
Quedándose en silencio, mientras su corazón palpitaba descontrolado con semejantes
palabras, Jiang Cheng solo pudo mirar a su alfa a los ojos, sintiendo todo su amor. Así que
siendo sumamente cariñoso con el menor, besando sus mejillas y su frente para calmarlo, Lan
Huan siguió hablando: “No olvides tus deseos, los que compartiste conmigo. Sé que quieres
respetar las tradiciones, hacer todo bien para nuestra boda, así que solo debemos esperar un
poco más. Ya sea hoy, o dentro de unos días, yo definitivamente te hare mío y me vinculare
contigo, la primera noche que pasemos como esposos si así lo deseas. Yo siempre protegeré
todos tus deseos, y por eso no puedo hacerlo ahora, porque quiero hacerte feliz”.
“A-Huan…” Susurro Jiang Cheng, realmente enamorado del contrario.
“Te amo A-Cheng, mi adorado Yin Yin. Yo nunca podría hacerte daño, así que no puedo
hacer eso, lo siento mucho…”
Sonriendo suavemente, entendiendo lo difícil que era para su alfa y lo triste que este se
notaba, Jiang Cheng acarició suavemente las mejillas de su mayor, mirándolo a los ojos:
“Gracias Xichen… Gracias por pensar en mí y solo en mí. Yo también te amo”.
Suspirando lleno de amor, Lan Xichen volvió a buscar los labios de Jiang Cheng, besándolo
de forma apasionada, mientras lo estrechaba en sus brazos con fuerza. Dejándose hacer en
silencio, correspondiendo el abrazo como podía, Jiang Wanyin no replico para nada,
sintiéndose muy bien del cariño que le daba su alfa; sintiéndose satisfecho solo con eso.
“Tal vez no pueda penetrarte ahora… Pero puedo hacer algo más…” Susurró Lan Xichen,
rompiendo finalmente el beso.
“¿Algo más?” Pregunto Jiang Cheng confundido, mirando a su alfa a los ojos.
Dándole un último cortó beso en los labios, Lan Xichen finalmente se separó del menor, y
sentándose entre las piernas abiertas de este mismo, el alfa se bajó los pantalones que había
traído puestos todo ese tiempo. Sonrojándose mucho al ver el miembro erecto de su alfa por
primea vez, Jiang Cheng ni siquiera tuvo tiempo de razonar lo que sucedía antes de Lan
Xichen regresara a su antigua posición, subiéndose sobre su cuerpo y apresándolo contra la
cama. Cerrando los ojos y soltando un fuerte suspiro, Jiang Cheng sintió como el gran
miembro de Lan Xichen se juntaba con el suyo, rozándolo.
“¿Se siente bien A-Cheng?”
Jadeando y sin poder concentrarse, Jiang Wanyin suspiró: “Esta húmedo… Tan húmedo… Se
siente raro…”
Sonriendo suavemente por estas palabras, Lan Xichen no perdió más tiempo, y bajando una
de sus manos basta las entrepiernas de ambos, unió sus dos miembros, y cuidadosamente
comenzó a estimularlos a ambos. Gimiendo nuevamente con placer, sosteniéndose
firmemente de los hombros de su amado, Jiang Cheng solo pudo estremecerse y temblar,
sintiendo aquella placentera sensación que su alfa le brindaba.
“Se siente bien… Se siente bien” Gimoteo Jiang Cheng, buscando los labios de su amado
para intentar ahogar sus gemidos: “Si sigues así voy a venirme…”
Permitiendo que se acercara a él para besarlo, Lan Xichen le dijo: “Esta bien A-Cheng… Yo
también estoy a punto”.
Uniéndose en un profundo y apasionado beso, Lan Xichen movió su mano con una velocidad
frenética, dándoles a ambos un placer indescriptible, hasta que sin poder aguantar más
terminaron corriéndose al mismo tiempo. Soltando un grito ahogado en los labios de su alfa,
Jiang Cheng tembló de forma descontrolada, mientras sentía el placer recorriendo cada parte
de su cuerpo. Mientras que Lan Huan soltó un par de jadeos de placer suavemente,
controlándose muy bien para no hacer algo para lastimar a su omega.
“Te amo, A-Cheng” Susurro Lan Xichen, repartiendo besos cariñosos por todo el rostro del
menor.
Jedando sumamente desconcertado después del primer orgasmo de toda su vida, Jiang Cheng
solamente pudo aceptar los besos cariñosos de su alfa, mientras relajaba todo su cuerpo,
sintiéndose mareado incluso. Algo aturdido de igual manera, Lan Xichen consiguió mantener
su compostura, y besando a Jiang Cheng un par de veces para calmarse, finalmente consiguió
ponerse de pie. Decidiendo ser el fuerte en ese instante, Lan Xichen solamente se subió los
pantalones, y buscando un paño, cuidadosamente limpio el cuerpo de su omega, limpiándolo
de todos los fluidos. Dejando su ropa en el piso como estaba, sin querer arreglar nada más,
Lan Xichen regreso a la cama junto a su amado, y cubriéndolo con las sabanas de estas, se
acostó detrás de él, abrazándolo por la espalda, besando su cuello y sus hombros con
delicadeza.
Logrando salir de su ligero trance poco a poco, tranquilizándose después de tantas
emociones, Jiang Cheng se giró un momento en dirección a su alfa y le susurro: “Eso se
sintió bien…”
Sonriendo felizmente, Lan Huan le respondió: “Yo también me sentí bien”.
Acostándose de forma relajada en los brazos de su alfa, entrelazando sus dedos con los de
este, Jiang Cheng dijo: “Ya quiero casarme contigo”.
“Yo también” Confeso Lan Xichen, buscando los labios de su omega para volver a besarlos.
Quedándose de esa forma, queriendo despreocuparse del tiempo y de todo lo demás, ambos
simplemente siguieron abrazados en la cama, besándose y dándose cariño en susurros.
“Te amo A-Cheng, te amo con todo mi corazón…”
***
El viento sopló fuertemente sobre El Receso Entre Las Nubes. Tomando a Lan Jingyi
firmemente en sus brazos, Jiang Cheng salió del Hanshi de Lan Huan con cuidado, dejando
pasar después a los sirvientes de su propia secta, quienes llevaban consigo todo el equipaje
del joven Jiang, sacándolo de las habitaciones privadas de Lan Xichen. Saliendo detrás de
dichos sirvientes, Lan Huan pronto acudió a encontrarse con Jiang Cheng, forzando una
sonrisa y envolviendo uno de sus brazos alrededor de la cintura de su omega, pego su cuerpo
al de este.
Mirando el atardecer con cierta nostalgia, Jiang Cheng dijo: “A-Yi y yo estábamos jugando
en la nieve”.
Evitando ordenar su propio equipaje, sintiéndose demasiado triste para hacerlo, Jiang Cheng
pasó su último día en Gusu solo con su hijo o su prometido, permitiendo que Lan Huan se
encargara de todo lo demás en el poco tiempo que pasaban separados. Así que sonriendo, tras
haberse encargado de ordenar las pertenencias de su prometido, Lan Xichen tomo una de las
manos de Jiang Cheng con delicadeza, observando sus dedos ligeramente enrojecidos y fríos
por la nieve.
“Ya veo… ¿Se divirtieron?” Pregunto Lan Xichen con una sonrisa.
Asintiendo miran tras miraba a su cachorro, quien se apoyaba enteramente en su pecho, Jiang
Cheng respondió: “Muy divertido, le estaba enseñando a hacer formas con la nieve”.
“Eso es muy importante, él vivirá en Gusu, donde siempre hay nieve. Se juega mucho de esa
forma” Dijo Lan Xichen convencido.
Asintiendo con la cabeza, Jiang Cheng afirmo: “Lo sé, le dije eso a nuestro cachorro”.
Sin poder evitar reír con las palabras del contrario, Lan Xichen le dio un corto beso en los
labios, para luego acariciar la pequeña cabeza de su hijo con cariño. Suspirando con pesar,
recordando la hora, Lan Xichen dijo: “Vamos”.
Sonriendo con pena de igual forma, Jiang Cheng solo pudo mirar a Lan Jingyi, susurrándole:
“Vamos a dar un paseo… ¿Quieres dar un paseo con mamá?”
Riendo felizmente, Lan Jingyi dijo: “¡Mamá!”
“Creo que si está animado” Dijo Jiang Cheng, mirando a su alfa.
Dejando que el mayor lo sostuviera de la cintura de esa forma, Jiang Cheng caminó a su lado
por en medio de los pabellones de la secta Lan, charlando con este como si no sucediera
nada, como si fuera uno de los usuales paseos que tenían los tres juntos. Tan solo hasta que
llegaron a las puertas principales de Gusu, donde una gran multitud los esperaba.
Después del gran disgusto que se llevó la secta Jiang en su totalidad el día anterior, los
consejeros y el actual líder decidieron abandonar la secta Lan de inmediato, pasando solo una
noche en dicho sitio para descansar y luego tener un día entero para volver a organizarse para
retirarse. Así que al atardecer del día siguiente, la misma hora a la que llegaron el día
anterior, ellos estaban volviendo a casa.
En tales circunstancias, a pesar de tener todo preparado y esperándolo, Jiang Cheng se negó a
tener su boda. Era importante para él contar con el apoyo de su secta y de su padre el día de
su boda, así que al no poder contar con ellos, Jiang Cheng suspendió sus planes de inmediato.
Así que sin tener su futuro claro, sin saber que sucedería con él o si su padre cumpliría su
amenaza de romper su compromiso solo por la rabia, el joven omega debía regresar a casa.
Confiando ciegamente en la promesa que Lan Xichen le hizo la noche anterior.
Llegando con su secta pero quedándose apartado de estos ligeramente, Jiang Cheng le
entrego a Lan Jingyi a Lan Xichen con todo el pesar de su corazón, sintiendo un gran nudo en
su garganta por la tristeza, pero sin poder llorar. Así que acariciando suavemente la cabeza de
su bebé con una caricia, Jiang Cheng solo pudo mirar los ojos del pequeño, deseando con
todo su corazón poder quedarse con su hijo.
“Debes ser un buen niño ¿De acuerdo? Lo hablamos hace un rato…” Le recordó Jiang Cheng
a su pequeño, tomando una de sus pequeñas manitas entre sus dedos: “Obedecer todas las
lecciones que te den en la secta, comer toda tu cena sin rechistar, y lo más importante es
obedecer a tu padre. No seas caprichoso, se inteligente, y fórmate como un buen líder ¿Está
bien? Cuando yo regrese, me asegurare de saber si cumpliste con mis instrucciones”.
Bajando la mirada con tristeza, negándose a decir algo a mostrar su tristeza por lo que
escuchaba, Lan Xichen solo guardo silencio con una suave sonrisa en su rostro. Mientras que
Lan Xichen siguió hablando: “Cuando regrese, espero que también hayas aprendido a decir
‘papá’ ¿De acuerdo? Por favor, no olvides lo que te digo… No lo olvides jamás A-Yi”.
Cerrando los ojos, Jiang Cheng tomo el rostro de su pequeño bebé entre sus manos, tocando
sus suaves mejillas; para luego dejar un suave beso sobre su frente, justamente sobre su cinta.
Sin entender nada en lo absoluto, disfrutando del cariño de Jiang Cheng, Lan Jingyi solo
pudo reír dulcemente, extendiendo sus manos para tocar el rostro de su madre con cuidado.
Terminando de despedirse de su hijo, Jiang Cheng se puso nuevamente erguido, mirando a su
alfa a los ojos.
“No es necesario que digas algo” Dijo Lan Huan, intentando facilitar las cosas para el
contrario.
Poniendo una cara de molestia, Jiang Cheng replico: “¿Entonces vas a prohibírmelo?”
Sonriendo y sin atreverse a decir algo más, temeroso de molestar a su omega Lan Xichen no
respondió. Permitiendo así que Jiang Cheng pudiera hablar: “Ni se te ocurra hacer cosas
imprudentes, aprende a ser un buen líder, y espérame”.
Aquello había sido corto y conciso, sin embargo para Lan Xichen fue suficiente, así que
susurro: “Esta bien A-Cheng, no voy a decepcionarte”.
“Estoy confiando en ti, toda mi vida, mi corazón” Dijo Jiang Cheng en un susurro,
acercándose más a su alfa: “Cumple tu promesa, pase lo que pase… No me abandones”.
“Antes muerto que dejarte. Yo te amare por siempre, A-Cheng” Prometió Lan Xichen con
seriedad, mirando a su omega a los ojos.
Acercándose más a su alfa, Jiang Cheng lo abrazo con fuerza, dejando a su bebé entre ambos,
sintiéndose en paz al estar tan cerca de ambos Lan.
Mirando la escena desde la puerta de la secta, bastante irritado por lo sucedido, Jiang
Fengmian se negó a esperar más, así que despidiéndose escuetamente de todos los Lan que
estaban ahí, dio la orden de abandonar a Gusu, sin importarle si dejaban atrás a Jiang Wanyin.
“Te amo A-Huan, yo también te amare siempre… Los amo a los dos” Susurro Jiang Cheng
con todo el dolor de su corazón, dándole un último beso a Lan Xichen.
Y tomando toda la fuerza y la determinación que le quedaba, el joven Jiang soltó el abrazo
que tenía en lo único que conocía como una familia, y dándoles una última mirada, se
apresuró a salir de Gusu, intentando no mirar atrás ni una sola vez. Sin embargo al ver que su
madre se iba, comenzando a alterarse, Lan Jingyi comenzó a llorar.
Escuchando el llanto del pequeño, Jiang Cheng no pudo evitar volver sobre sus pasos,
corriendo al bebé para darle un último abrazo, besando nuevamente su frente.
“Está bien A-Yi, está bien… Esto solo es por un tiempo. Yo voy a regresar a Gusu
definitivamente, y cuando vuelva, no me iré de nuevo, me quedare contigo para siempre”
Susurro Jiang Cheng: “Es una promesa… No lo olvides, yo te amo A-Yi, te amo mucho”.
Dándole una última mirada a su hijo, Jiang Cheng finalmente tuvo que alejarse de los Lan y
El Receso Entre Las Nubes, obligándose esta vez a no voltear atrás, escuchando como su
pequeño lo llamaba entre gritos, hasta que tras algunos pasos, finalmente todas las voces
cesaron. Finalmente había abandonado a su familia.
Bajando los escalones que lo llevaban fuera de la secta, Jiang Cheng se encontró en medio
camino con Wei Wuxian, quien sin decir ni una sola palabra, fue el único Jiang que lo espero.
Por el enfado que tenía su tío, ningún Lan fue invitado a escoltarlos de regreso a Caiyi, así
que él también tuvo que separarse de Lan Zhan en Gusu con pesar. Y luciendo tan deprimido
como su hermano, Wei Ying solo paso uno de sus brazos por los hombros del menor en un
amistoso abrazo, bajando a su lado por aquellas escaleras, alejándose cada vez más del hogar
de los Lan.
Encontrándose pronto con su secta, Wei Ying comenzó a comportarse normal con todos, un
poco más apagado que de costumbre, pero bromeando y sonriendo como era usual. Sin
embargo Jiang Cheng se mantuvo apartado, sin hablar con nadie y sin acercarse a sus padres;
aun podía sentir el sentimiento de Jiang Fengmian, queriendo mantenerse alejado de este.
Cuando llegaron a los puertos de aquella ciudad, Jiang Cheng se subió en silencio en el bote
de las personas importantes de su secta, donde estaban sus padres y algunos consejeros. Y
aunque Wei Wuxian alegremente se sentó cerca de los lideres sin ninguna preocupación,
Jiang Cheng se sentó al final del barco, lo más lejos que pudo de Jiang Fengmian. Así que
sentándose en el piso, dejando que uno de sus brazos colgara libremente hacia el agua del
mar, Jiang Cheng solo pudo cerrar los ojos con tristeza.
Pues el aroma de Lan Xichen era el mismo que el olor de la brisa del mar.
Así que mientras los barcos partían, Jiang Cheng se permitió a si mismo finalmente llorar,
mientras sus dedos acariciaban suavemente la superficie del agua.
Solamente pudiendo añorar a su familia.
***
Suspirando con resignación, Wei Wuxian se sentó con descuido, prácticamente dejando caer
su cuerpo al sentarse. Siguiéndolo a pocos pasos, Jiang Cheng se sentó frente a su mayor en
aquel salón, mirándolo en silencio.
Habían regresado a Yunmeng hace tan solo un par de semanas, y en todo ese tiempo Jiang
Fengmian no le había dirigido la palabra a Jiang Cheng, ignorándolo e incluso llegando a
evitar mirarlo por lo enfadado que todavía se encontraba con este. Sin embargo Jiang Cheng
no presionaba o apresuraba las cosas, entendía que era complicado para su padre aceptar lo
que había hecho, aun cuando no era un error. Por lo que simplemente bajaba la cabeza y
dejaba que todo sucediera.
Y aunque ambos jóvenes habían pensado que al regresar a casa tendrían un tiempo de
descanso, sobre todo después de todo lo que habían pasado con los Wen, en verdad ninguno
de los dos llegó a descansar en lo absoluto. Debido a la situación actual, se tomaron ciertas
decisiones en la propia secta Jiang, que presionaba a los actuales líderes para dejar la
sucesión al nuevo heredero como las demás sectas, quienes ya habían dejado a cargo a sus
hijos como nuevos y jóvenes líderes, siendo la secta Jiang la única que seguía teniendo a su
mismo líder por tanto tiempo. Algo que se intensifico aún más con la nueva y creciente fama
de Wei Wuxian, quien ahora se conocía como el héroe que derroto a un monstruo peligroso
en una cueva obscura con su alfa, una historia heroica que encantaba a todos. Era obvio que
la gente de Yunmeng quisiera a ese héroe con su alfa como los nuevos líderes cuanto antes.
Así que buscando una solución rápida a este dilema, pronto la secta Jiang decidió que
seguirían las peticiones de Wei Ying, planeando la ceremonia de su cambio de nombre al
apellido Jiang a finales de ese mismo mes, una ceremonia que iban a hacer al mismo tiempo
que la fiesta de compromiso entre Wei Ying y Lan Wangji; mientras que la boda seria
planeada al mes siguiente de ese en Gusu. Debido a que Jiang Cheng tenía toda su boda
planeada en dicho lugar desde hace tanto, se sugirió que ambos compartieran la misma
ceremonia, dejando que Jiang Cheng compartiera todos los arreglos que había hecho para sí
mismo con su hermano mayor; algo a lo que Jiang Cheng aceptó gustoso. Si compartía su
boda con Wei Ying esta se llevaría a cabo definitivamente, y así su padre no podría cumplir
su amenaza de cancelarla.
Sin embargo apresurar estas festividades fue bastante contraproducente para su planeación
por parte del joven Wei Ying, quien al haber adelantado todo de tal manera, consiguió que
todo el peso de la organización de dichas festividades cayera sobre él sin un instante de
descanso, agotándolo por completo. Con la ayuda de Jiang Cheng, quien tenía un poco más
de experiencia por la planeación de su boda, Wei Ying se las arreglaba como podía para
organizar todo de una manera debida, ordenando todos los adornos, contratando a ciertos
sirvientes, eligiendo el banquete, mandando invitaciones, entre muchas otras cosas.
Así que después de un trabajo extenuante ese día, tras haber organizado el orden de las mesas
para los invitados, Jiang Cheng y Wei Ying fueron a sentarse a un salón vacío, notándose
muy agotados y frustrados.
“¿Cómo se hizo de noche tan de pronto? Empezamos con esto al medio día” Se quejó Jiang
Cheng, observando como el atardecer mostraba su plenitud en el cielo.
Mandando algunos de los mechones libres de su cabello detrás de su espalda, Wei Ying
respondió: “Tardamos más de lo esperado, por lo visto…”
Desde su llegada a Yunmeng, además de evitar otros alfas, Wei Wuxian mantenía su cabello
suelto o solo con una media cola sobre su espalda, ocultando así la marca de su vínculo de
todos los demás.
Refunfuñando, Jiang Cheng susurro: “Yo quería ir a jugar con las cometas…
Teniendo unas ligeras vacaciones hasta que se realizara la fiesta de cambio de nombre y
compromiso de Wei Ying, los demás cultivadores de la secta Jiang pasaban sus tardes sin
hacer mucho más que jugar o cazar por diversión; siendo aquella tarde en la cual habían
decidido ir a volar cometas y a practicar su puntería con arco, un juego que Jiang Cheng
disfrutaba mucho.
Molesto, girándose en dirección a su hermano, Wei Ying reclamo: “¿Entonces planeabas
abandonarme para jugar?”
Por una extraña orden de Madam Yu, Wei Wuxian tenía prohibido por todos los medios hacer
esfuerzo físico, cualquiera que fuera. No podía practicar cultivo, no podía hacer ejercicio, no
podía alzar pesos, entre otros. Aquella decisión que fue notada como algo extraño por todos
los demás, era seguida en silencio por Wei Wuxian, quien sin replicar se quedaba sentado o
acostado la mayor parte del tiempo; algo más extraño aun, pues por lo general Wei Ying solía
replicar ese tipo de órdenes. Pero la mayoría no dio muchas vueltas al respecto, pensaron que
Wei Wuxian tal vez se portó mal y cumplía un castigo cualquiera de la señora de Yunmeng,
algo que por el contrario, si era bastante común.
“Claro que lo haría” Respondió Jiang Cheng burlándose del mayor: “Te dejaría tirado donde
sea si lo necesito…”
Furioso, Wei Ying reclamo: “Jiang Cheng, tu…”
Pero ambos hermanos no tuvieron más tiempo de reclamar, pues curiosos observaron cómo
varios cultivadores jóvenes entraban corriendo en la secta Jiang, notándose realmente
asustados.
“¿Qué fue lo que paso?” Pregunto Jiang Cheng en voz alta, viéndolos.
Notando que ambos herederos se encontraban ahí, los jóvenes cultivadores de Yunmeng
desviaron su rumbo y fueron directamente hacia ellos, haciendo reverencias algo tímidas.
Todos ellos llevaban consigo sus arcos y sus cometas, así que parecían haber huido del lugar
donde se estaban jugando en el bosque.
Siendo el mayor de todos los cultivadores jóvenes en ese grupo, un joven beta hablo
diciendo: “Wei Gonzi, Jiang Gonzi, nuestro didi Ming ha sido secuestrado por unos
extraños”.
Poniendo un rostro de asombro, Wei Ying pregunto: “¿Secuestrado?”
No era normal que en Yunmeng sucedieran cosas semejantes, las personas eran muy
amigables, y en Lotus Pier y sus alrededores, bajo la protección de los Jiang y respetando sus
perímetros, todos se sentían seguros. No había secuestradores de niños por esas áreas.
Asintiendo rápidamente, el joven beta siguió explicando: “Nuestro didi consiguió derribar su
cometa en el bosque, y cuando fue por ella, todos vimos como unos soltados lo tomaron y lo
hicieron gritar”.
Alarmándose por esa situación, Jiang Cheng rápidamente dijo: “Hicieron bien en venir
pronto, por favor informen de esto a mi madre que se encuentra en los muelles, nosotros nos
encargaremos de ver lo que sucedió”.
Recibiendo otras reverencias de aquellos jóvenes, Wei Wuxian y Jiang Cheng se pusieron en
marcha sin necesidad de otra palabra. Caminando en medio de los demás pabellones y
salones, ambos jóvenes Jiang pronto llegaron a la parte trasera de la secta, que colindaba con
los bosques y al área de entrenamiento, la forma más rápida de llegar a los bosques.
Y aunque al inicio pensaron que debían buscar en medio del bosque para saber que le había
pasado al niño, ambos jóvenes se sorprendieron cuando en la puerta encontraron altas
banderas con el signo del sol, las banderas de la secta Wen.
Siendo retenidos por sorprendidos y asustados cultivadores de la secta Jiang, que eran vigías
y guardias en esas puertas, los Wen no podían avanzar, mostrándose en una gran comitiva, la
cual era encabezada por Wang Jiao y Wen Zhuliu; quienes habían sido los que tomaron de
rehén a ese pequeño niño Jiang, que lloraba aterrado sosteniéndose de su cometa.
Sintiendo como su respiración se cortaba por un instante, Jiang Cheng solo puso tomarse del
brazo de Wei Wuxian, sin saber que sucedería a continuación.
Capítulo 23.

Todos guardaron un sepulcral silencio, mientas los miembros de la secta Wen entraron
confiadamente en la sala principal de la secta Yunmeng Jiang, protegiendo a Wang Jiao, su
“líder” de ese día.
“¿Acaso no hay un buen servicio en este lugar? ¿Por qué no están sirviendo el té los
sirvientes?” Reclamó Wang Jiao, mientras se sentaba confiadamente en la silla principal del
líder.
Mirándolo a la distancia, Wei Wuxian solo pudo cruzarse de brazos enfadado, pensando que
el tomar lugares que no les pertenecían, aparentemente era algo de “secta” por parte de los
Wen, ya que en Gusu Wen Chao hizo algo similar, sentándose de una forma sumamente
irrespetuosa en los asientos de los líderes de dichas sectas.
Avanzando hasta el centro de salón, muy confiada, Yu Ziyuan respondió: “Se sirve el té
cuando el visitante a nuestra secta es invitado, si el visitante llega sin una invitación, no se
puede hacer nada al respecto”.
Aquel probablemente había sido el peor día para que la secta Qishan Wen fuera a Yunmeng,
pues ese día en específico Jiang Fengmian salió con los consejeros y cultivadores de su secta
para purificar un monstruo en una región algo alejada a Lotus Pier donde se reportaron
problemas, y no había regresado aun. Así que Yu Ziyuan, cumpliendo su deber como
protectora de la secta al ser el alfa del líder, cumplía su rol. Y aunque seguramente Jiang
Fengmian hubiera sido más amable y paciente con las visitas “indeseadas”, al mando estaba
Madam Yu, y Wang Jiao podía soñar con cualquier tipo de clemencia por su parte.
Después de la llegada de los sorpresivos invitados, los miembros más importantes de la secta
Jiang acudieron al salón principal de la secta, permitiendo que solo Wang Jiao y algunos de
sus guardias pasaran al interior de este sitio, siendo uno de estos el famoso Wen Zhuliu; un
alfa que tenía problemas muy graves con Yu Ziyuan, lo que complicaba mucho la situación.
Antes de cambiar de secta, el verdadero nombre del llamado “fundidor de núcleos” era Yu
Zhuliu, de la familia y la secta Yu, pariente lejano de Yu Ziyuan. Sin embargo por ambición,
teniendo una habilidad tan única y destructiva en el cultivo, Yu Zhuliu se negó a permanecer
como un cultivador cualquiera en su secta de nacimiento, sabiendo que a pesar de ser pariente
lejano de la secta principal no podría tener más que un título como cultivador, acepto una
oferta deshonrosa renunciando a su secta por las vacías promesas de gloria que le hizo Wen
Ruohan; quien se fijó en el joven Yu cuando este acudió a una conferencia de cultivación
acompañando a su secta y demostró sus habilidades únicas.
Y debido a toda la deshonra que este alfa le había causado a su secta de origen, Yu Ziyuan
tenía un gran odio y resentimiento contra este, repudiándolo aun en ese instante. Después de
todo, cuando Yu Ziyuan aún vivía en la residencia Yu y no era la esposa del líder Jiang,
entrenó personalmente a Yu Zhuliu, ayudándolo a controlar su gran don. Un don que luego el
llamado Wen Zhuliu uso para deshonrar a su propia secta de nacimiento y favorecer al mal.
“Una disculpa mi señora, tuvimos un viaje tan apresurado que no pudimos mandar un
mensaje avisando de nuestra pronta visita… Terribles inconvenientes” Se disculpó Wang
Jiao, pero sin demostrar ningún tipo de arrepentimiento en su voz.
Sin irse por rodeos, deseosa de sacar a esa escoria de su secta, Yu Ziyuan preguntó: “¿Cuáles
son esas terribles circunstancias entonces? ¿Son merecedoras de secuestrar niños pequeños
por ellas?”
Riendo de forma soberbia, Wang Jiao respondió: “Supongo que en este punto las razones
verdaderas de la visita no importan ¿No es verdad? He encontrado dos graves faltas hacia la
secta Wen en mi visita, una gran ofensa”.
“¿Y qué ofensas son esas?”
Mirando a sus guardias con una ligera sonrisa, Wang Jiao respondió: “Su secta trató de
matarnos, obviamente”.
Luciendo incrédulo, sin entender ni una sola de las palabras de ese omega, Wei Wuxian cruzó
miradas con Jiang Cheng, sin saber que decirle. Mientras que Jiang Cheng se notaba mucho
más confundido e incluso asustado, pues después de su incomoda visita a Qishan, los
miembros de la secta Wen causaban temor en Jiang Wanyin.
Poniéndose seria al notar las tonterías que salían de la boca de aquel sucio omega, Yu Ziyuan
preguntó: “¿Puedo saber cómo sucedió algo semejante?”
“Como emisarios de la secta Wen nosotros entramos por la parte trasera de su secta, cuando
miles de flechas amenazantes cayeron sobre nosotros, a tal punto que varios de mis hombres
salieron heridos y yo mismo casi muero…”
“Una gran pena” Dijo Yu Ziyuan con seriedad.
Sin entender el sarcasmo o fingiendo no entenderlo, Wang Jiao respondió: “De esta forma
encontramos al culpable, al cual atrapamos en los bosques, seguramente yendo a comprobar
con sus propios ojos que los miembros de mi secta hubiéramos muerto después de su
ataque…”
Bufando furioso, Wei Wuxian no pudo creer el cinismo de aquel idiota, pretendiendo hacerles
creer a todos que fueron “atacados”, cuando no había nada de eso en verdad. Ellos
simplemente aparecieron en un momento inconveniente, cuando los muchachos de su secta
practicaban a disparar cometas, un juego muy típico para cultivadores de la región. Algo que
Wang Jiao seguramente sabia porque Wen Zhuliu era de Yunmeng, y de joven seguramente
jugó de la misma forma también. Así que no había ninguna excusa para explicar la razón por
la cual los miembros de la secta Wen no supieran que solo era un inocente juego.
Sin querer discutir con ese indecente omega, Yu Ziyuan prefirió disculparse, haciendo una
reverencia elegante para luego decir: “Lamento los inconvenientes de parte de mi secta, será
un comportamiento que no volverá a suceder”.
“Lo entiendo mi señora, pero los asesinos no pueden ser perdonados… Así que pediré la
sentencia de muerte para el niño, deben cumplirse las leyes y ordenes de la secta Wen
obviamente” Pidió Wang Jiao con seriedad.
“Haremos lo posible para realizar un juicio de responsabilidades aquí en Lotus Pier, así que
no debe preocuparse por ello, si hubo un crimen nosotros nos encargaremos de ello”
Prometió Yu Ziyuan.
Luciendo contento y relajado nuevamente, Wang Jiao celebro: “Es un alfa realmente
excelente mi señora, confiare en su palabra de que los criminales serán castigados, muchas
gracias…”
Insistiendo por acabar con ese asunto de una vez, Yu Ziyuan pregunto: “¿Y el segundo delito
al cual se refiere?”
Mirando a su alrededor, Wang Jiao guardó silencio por un segundo: “El salón parece estar
bien adornado, y en el exterior de este mismo sitio he visto más vistosos objetos, como para
una ceremonia”.
“Tiene un buen ojo joven Wen, si es una celebración que se dará en un par de días en esta
secta”.
“No puede suceder” Negó Wang Jiao: “Según las nuevas leyes estipuladas por la secta Wen,
cualquier celebración o compromiso entre las sectas debe ser previamente aprobada por el
gran líder Wen Ruohan, las sectas ya no tienen la libertad de unirse y hacer las cosas que
deseen, esos tiempos ya han terminado”.
Poniéndose sumamente furioso, Wei Wuxian debió ser tomado de un brazo por parte de Jiang
Cheng, quien mirándolo fieramente a los ojos, le ordeno quedarse quieto para no hacer una
locura. Aunque esto seguía enfureciendo a Wei Ying ¿Quién se creía Wen Ruohan para dar
leyes semejantes?
“¿Gran líder?” Pregunto Yu Ziyuan, arrastrando la voz con desagrado: “¿Y qué sucede si no
queremos cumplir con esas tontas imposiciones?”
Sonriendo divertido, Wang Jiao dijo: “Oh ya me habían hablado de usted… No le gusta
seguir las reglas, ni siquiera de su propia secta. He escuchado muchas historias interesantes al
respecto sobre su juventud”.
Notando la actitud desafiante de aquel descarado omega, Yu Ziyuan se obligó a si misma a
mantener la calma, aunque se le hacía demasiado complicado, observando la sonrisa
desagradable en el rostro de Wang Jiao.
Viendo que la mujer alfa frente a sí mismo no respondía a sus palabras, Wang Jiao decidió
seguir con sus palabras sin sentido, con la clara intención de provocar a la secta Jiang.
“Escuché que en la secta Yu, la heredera de la secta que era una alfa, aseguró que había
encontrado a su destinada en su propia secta, que era una sirvienta omega un par de años
mayor que ella. Y aunque la heredera Yu quiso convertir en su esposa a esa sirvienta, había
una diferencia de edad muy considerable entre ambas, y la heredera tenía un matrimonio
arreglado de por medio que le impedía seguir a su corazón. Así que los crueles líderes de la
secta, para terminar con el problema, obligaron a la sirvienta que era la destinada de su propia
hija a casarse de forma apresurada, solo para alejarla de su secta” Comentó Wang Jiao en voz
alta, sin abandonar su sonrisa malvada.
Poniendo un rostro mucho más serio que antes, Yu Ziyuan solo presionó las manos en puños,
escondiendo su rabia entre las telas de sus costosas túnicas, mirando cada vez más enfadada a
ese sucio omega que tenía el valor de regodearse de esa manera frente a ella.
Y sin darse cuenta de nada, continuando hablando, Wang Jiao dijo: “Cuando la heredera de la
secta cumplió una edad considerable, antes de casarse, buscó nuevamente a su destinada.
Pero su omega ya estaba felizmente casada, y al estar vinculada con otro alfa ya no sentía
absolutamente nada por quien era su verdadero amor. Así que tal vez por decepción o por no
tener otra opción, la heredera de la secta cumplió su matrimonio arreglado, a pesar de que no
amaba ni amara a su esposo… O bueno, eso es lo que todos cuentan ¿Acaso es verdad?”
“¿Eso es lo último que tenías que decir? ¿O hay otra razón por la que sigas aquí?” Pregunto
Madam Yu, harta del parloteo incesante de ese sucio omega.
“Oh es verdad, discúlpeme líder de la secta Jiang, perdí mi tiempo divagando en las historias
de amor fallidas de otros. Viendo las faltas cometidas por parte de esta secta y con mi
autoridad como líder de la secta Wang Wen, exijo un castigo contra Wei Wuxian, el infractor
de las leyes del gran líder Wen Ruohan y la secta Qishan Wen”.
Quedándose en blanco, incrédulo por lo que estaba escuchando, Wei Wuxian se preguntó qué
clase de delito había cometido, sin entender nada; tomando aquello como algo gracioso
incluso. Pero las demás personas a su alrededor, incluidos Jiang Wanyin y Yu Ziyuan se
dieron cuenta de lo peligroso que era todo aquello, poniéndose alertas de inmediato.
“¿Puedo preguntar qué clase de faltas son las que señala para pedir el castigo?” Preguntó Yu
Ziyuan.
“¿Debo repetirlo? Las personas de Yunmeng son realmente tontas…” Dijo Wang Jiao con
desagrado, soltando un fuerte suspiro antes de seguir hablando: “Según las leyes de la secta
Qishan Wen, ningún celebración en las sectas controladas por el líder Wen Ruohan pueden
realizarse sin su presencia y aprobación. Ahora mismo se está preparando una fiesta ¿Me
equivoco?”
Guardando silencio, Wei Wuxian no pudo evitar sentirse furioso ¿Por qué la secta Wen quería
meter sus narices en todo? Su fiesta de cambio de nombre no les incumbía, mucho menos su
matrimonio. Y aunque por un instante pensó que los Wen querían hacer todo esto para
asegurarse de que sus enemigos no se aliaran, Wei Ying solo pudo pensar en lo molestos que
eran, queriendo acaparar todo donde ellos no eran llamados ni bienvenidos.
Poniendo un semblante serio, Yu Ziyuan dijo: “Lamento el inconveniente, emisario de la
secta Wen, pero actualmente Wei Wuxian se encuentra demasiado enfermo como para recibir
un castigo, de cualquier tipo”.
Poniendo un rostro de extrañeza, Jiang Cheng se giró discretamente hacia su hermano y
preguntó: “¿Estas enfermo?”
“Son excusas para que no me castiguen, A-Cheng” Explico Wei Ying en otro susurro.
“Lo único que podemos hacer como secta para redimir nuestro error es pedir disculpas al
líder de la secta Wen, e invitarlo cordialmente al cambio de nombre del nuevo sucesor de la
secta Jiang; aunque no será una gran y vistosa celebración, solo algo modesto y bastante
privado” Dijo Madam Yu.
La señora de Yunmeng obviamente no estaba de acuerdo con todo lo que sucedía a su
alrededor, pedir disculpas se le hacía ridículo. Pero priorizando a sus hijos y su secta, sin
querer tener problemas con los Wen, trató de resolver el asunto por la manera diplomática,
aunque no estaba de acuerdo en ello.
Asintiendo con la cabeza, Wang Jiao preguntó: “¿El joven maestro Wei se encuentra
enfermo?”
“Si, lo está lamentablemente” Respondió Yu Ziyuan con seriedad.
“¿Tan enfermo que no puede recibir ni un par de golpes por parte del látigo de disciplina de
su secta?”
Con seriedad, casi enfado, Madam Yu respondió: “Tan enfermo que no puede recibir ni un
solo golpe”.
Y aunque no era su intención, Yu Ziyuan sonó de una forma amenazante por un segundo,
sorprendiendo a todos los presentes.
Sonriendo ligeramente, sin atemorizarse, Wang Jiao dijo: “Comprendo perfectamente la
situación, líder de la secta Jiang; sin embargo, temo que una disculpa no es suficiente”.
Suspirando lleno de enfado, Wei Wuxian pensó en decir algo al respecto, harto de toda esa
situación. Sin embargo fue detenido por Jiang Cheng, quien lo tomó del brazo y lo miró
seriamente, indicándole que mantuviera la boca cerrada y que no hiciera ninguna tontería.
“¿Qué debemos hacer entonces?” Preguntó Madam Yu.
“Deberá arrodillarse ante mi” Exigió Wang Jiao.
Al escuchar esa petición, muchas voces alarmadas se escucharon en toda la sala, provenientes
de miembros de la secta Jiang. Aquella era una petición deshonrosa, no solo porque Wang
Jiao estaba exigiéndole eso a un alfa de alta cuna como Yu Ziyuan, también porque
arrodillarse para un líder significaba sumisión.
Mirando a los ojos a Yu Ziyuan, Wang Jiao rápidamente acotó: “Es arrodillarse o castigar a
Wei Gonzi, es su elección, líder de la secta Jiang”.
Presionando las manos en puños, Wei Wuxian se preparó para ir al frente del salón, pues
estaba seguro de que recibiría su castigo; le resultaba imposible creer que su madre se
arrodillara ante aquel omega tan sucio.
Sin embargo con elegancia, Madam Yu no dudó, y terminó arrodillándose frente a Wang Jiao,
frente a la silla del líder que aquel omega ocupaba y en su propia secta.
Al ver aquel acto, todas las voces se callaron de inmediato, incrédulos ante lo que estaban
viendo, pues Yu Ziyuan no se había arrodillado ante nadie nunca antes, y era bastante
conocida por ello.
Confuso y sintiéndose furioso, viendo aquella humillante escena, Wei Ying solo pudo
susurrar: “Tu, maldito Wang Jiao ¿Cómo te atreves a hacerle eso a Madam Yu?”
Sin embargo ajeno a todo lo demás que lo rodeaba, Wang Jiao celebró alegremente lo que sus
ojos veían, aplaudiendo muy contento al ver a esa mujer alfa tan imponente arrodillarse frente
a él.
“Eso me agrada, es usted realmente buena mediando asuntos políticos ¿Me equivoco?”
Pregunto Wang Jiao, poniéndose de pie de la silla del líder: “Seguro nos volveremos grandes
amigos ahora que me quedare aquí, en Lotus Pier”.
Desconcertada, Madam Yu preguntó: “¿Se quedaran en Lotus Pier?”
Asintiendo con la cabeza, Wang Jiao explicó: “Por mandato de líder Wen Ruohan, se ha
decidido que Lotus Pier será la oficina de revisión de la secta Qishan Wen en Yunmeng. Así
que como emisario, con mi principal misión al venir aquí, voy a asentarme con toda mi secta
para quedarme por siempre aquí, en Lotus Pier”.
Poniéndose muy seria, Madam Yu no respondió a esas descaradas palabras. Pero presionando
las manos en puños, por debajo de las mangas de sus túnicas, se pudieron ver algunos
destellos violetas provenientes de Zidian; los cuales Wang Jiao ignoró. Con alegría, pensando
que todo sería fácil y que ya estaba solucionado, Wang Jiao caminó hasta Madam Yu,
poniéndose frente a ella mirándola desde arriba.
“No se preocupe, mi señora, yo estoy dispuesto a ser más que su amigo si así lo desea.
Ambos estaremos muy solos aquí ¿Me equivoco? Si usted no ama a su esposo, yo no diré
nada de lo que hagamos en nuestro tiempo de soledad, podemos volvernos muy cercanos…”
Susurro Wang Jiao, relamiéndose los labios con una ligera sonrisa: “Claro, solo para afianzar
la cercanía entre nuestras sectas…”
Aquello fue suficiente para Yu Ziyuan, recibiendo aquellos desagradables intentos de
coqueteo por un omega tan sucio. Así que poniéndose de pie de inmediato, la mujer alfa
levanto su mano y golpeo fuertemente el rostro de Wang Jiao, dándole una bofetada que
lanzo al joven omega al piso.
“Yo jamás engañaría a mi esposo contigo, basura” Dijo Yu Ziyuan con asco, mirando a ese
sucio omega en el piso.
Sujetando su mejilla adolorido, aun en el piso, Wang Jiao se giró para ver a la mujer alfa,
mirándola lleno de furia; para luego gritar: “¡Wen Zhuliu!”
Escuchando el grito de su “amo”, aquel denominado fundidor de núcleos no tardo en atacar,
con la intención de proteger a Wang Jiao. Siendo repelido de inmediato por Zidian, quien se
había soltado del anillo que residía en la mano izquierda de Yu Ziyuan.
Capítulo 24.

Con el repentino ataque de Madam Yu, todos los miembros de la secta Wen se volcaron a
atacar, mientras la líder de la secta se ocupaba personalmente de Wen Zhuliu, el mejor
cultivador de los miembros de la secta Wen. Respondiendo de inmediato al ver el ataque de
los Wen, los demás miembros de la secta Jiang también avanzaron a pasos rápidos al centro
del salón, desenvainando sus espadas para pelear.
Dispuestos a hacer lo mismo que sus compañeros de secta, Wei Wuxian y Jiang Wanyin
avanzaron también al centro del salón, pero sus miradas pronto se desviaron a una de las
puertas laterales de la secta, que se había abierto discretamente en medio de la pelea. Era
Wang Jiao, que de una forma cobarde se había escabullido de la pelea, saliendo al exterior.
Cambiando de objetivo de inmediato, escapando de la pelea de igual forma, Wei Wuxian y
Jiang Cheng fueron detrás de Wang Jiao, dispuestos a matarlo si hacia lo que ambos
esperaban.
Sin embargo tardando demasiado en salir del salón principal de la secta, cuando Wei Ying y
Jiang Cheng finalmente consiguieron salir al exterior, se quedaron sin aliento al ver a Wang
Jiao, quien habiendo tomado una señal de sus ropas, lanzo la marca roja de la secta Qishan
Wen al cielo.
“¡No!” Gritó Wei Ying con furia, corriendo detrás de aquel omega tan sucio.
Completamente lleno de furia, Wei Ying se lanzó a golpear a Wang Jiao con todas sus
fuerzas, lleno de ira contra aquel omega tan despreciable. Y al sentir los primeros golpes que
fueron dados contra su cuerpo, Wang Jiao soltó fuertes gritos de dolor, los cuales terminaron
alertando a Wen Zhuliu, quien tenía la misión principal de mantenerlo a salvo.
Así que dejando la pelea, el fundidor de núcleos corrió para defender a Wang Jiao de Wei
Wuxian, siendo seguido por Madam Yu de forma obvia. Así que a pesar de que Wen Zhuliu
quiso apartar de forma brusca a Wei Wuxian, fue detenido por Zidian quien lo había atacado
por orden de Madam Yu. Viéndose imposibilitado, Wen Zhuliu solo pudo apartar a Wang Jiao
de Wei Wuxian para que dejara de golpearlo, mientras que Madam Yu sujetaba a Wei Ying y
lo apartaba de igual forma.
Y girándose por un instante, ambos alfas de la familia Yu se miraron seriamente a los ojos,
ambos muy furiosos también. Y aunque Wen Zhuliu quería seguir peleando, debía recordar
su misión principal, teniendo a Wang Jiao muy herido en sus brazos. Mientras que Madam Yu
de igual forma, solo podía pensar en sus dos hijos y sus deseos de mantenerlos a salvo. Así
que dándose una tregua, ambos alfas permitieron que el otro se fuera; sabiendo que tendrían
una nueva oportunidad de pelear el uno contra el otro en algún momento.
“¡Mamá están escapando!” Gritó Jiang Cheng alterado, observando como Wen Zhuliu se
llevaba a Wang Jiao.
“¡Debemos perseguirlos!” Exigió Wei Ying, queriendo escapar del agarre de su madre par air
detrás de Wen Zhuliu y Wang Jiao.
Pero Madam Yu se puso muy firme al respecto, y negándose a soltar a Wei Wuxian, también
atrapo a Jiang Cheng, sujetando a sus dos hijos a pesar de sus quejas, comenzando a tirar de
ambos para alejarlos de la pelea y cualquier otro conflicto.
Sacando a ambos menores a rastras del lugar, permitiendo que sus demás guardias se
encargaran de todo, Yu Ziyuan solo se encargó de proteger a Jiang Cheng y Wei Wuxian.
Escuchando como por la parte frontal de la secta comenzaban a escucharse gritos y las
trompetas de guerra de los Wen, que anunciaba su llegada a Lotus Pier para el ataque, Yu
Ziyuan acelero su paso, casi hasta correr por los pasillos caóticos de su secta.
Casi tropezando por la velocidad de la mujer, que no les permitía ni poder ponerse de pie de
forma correcta, Wei Wuxian y Jiang Cheng solo podían aceptar ser arrastrados de esa forma,
asustados por todo el caos a su alrededor y sin saber que preguntar o pedirle a esa mujer alfa.
Siendo llevados fuera de la secta por una de las puertas laterales, que daba a un puerto un
poco más privado, que se usaba para algunas emergencias, ambos jóvenes omegas fueron
sorprendidos cuando su madre los tiró bruscamente al interior de un pequeño bote, un navío
discreto que había ahí anclado.
“Escuchen bien los dos, vayan a Lanling y busquen a su hermana, no importa lo que pase en
el camino o lo que escuchen de aquí en adelante, oculten sus feromonas de omegas, oculten
sus túnicas Jiang, y vayan a Lanling, solo a Lanling; los Jin en la torre Koi los cuidaran”
Pidió Yu Ziyuan.
Sin entender nada, Jiang Cheng pregunto: “¿Qué? ¿Por qué?”
Sonriendo ligeramente, Yu Ziyuan miró a su hijo y le dijo: “Ahora todo dependerá de ti, solo
de ti y de la sangre que corre en tus venas, todo el futuro de tu secta empieza y termina en ti
desde ahora. Vive una vida feliz, ama a tu alfa con todo tu corazón, y aprende a ser amable y
a dar tu perdón A-Cheng. No importa lo que digan a partir de ahora, tu madre siempre te
amara y para mí siempre serás el orgullo de mi secta”.
Sintiéndose mareado por el miedo, Wei Ying preguntó: “¿Por qué está diciendo eso Madam?
¡Nosotros podemos pelear! ¡Podemos ayudar aquí!”
Mirando a Wei Ying ahora, Yu Ziyuan tampoco perdió su sonrisa y le dijo: “Tu no, tú no
puedes pelear más. Lo siento A-Ying, no poder sostener tu mano cuando tengas a tus hijos, ni
al primero ni a los demás. Confió en ti y en tus habilidades, confió en tu alfa y en el destino
que te has propuesto, pero por favor… Cuida a A-Cheng, cuida a tu hermano menor”.
Sin entender absolutamente nada, llenos de pánico, Wei Wuxian y Jiang Cheng siguieron
gritando y pidiendo bajar para poder pelear en Lotus Pier. Pero con una sonrisa, Madam Yu
miro a Zidian en su dedo, y admirando su bello anillo por un segundo, lo saco de su dedo con
sumo cuidado.
“Protégelos a ambos” Le ordeno a su arma espiritual, activándola con su energía espiritual
por última vez.
Obedeciendo a su dueña, Zidian se desenrollo en toda su extensión, y acercándose a ambos
jóvenes en la balsa los ato a ambos el uno al otro, enrollando la última parte de su cuerpo al
dedo de Jiang Wanyin, a quien había escogido como su amo por la sangre que tenía en
parentesco con Yu Ziyuan. Observando como Zidian escogió a Jiang Cheng, Yu Ziyuan no
puedo evitar sonreír.
“Zidian es el arma espiritual ancestral de mi secta, la secta Yu, y en milenios el único omega
que ha escogido como dueño eres tu A-Cheng” Comento la mujer, sin dejar de sonreír:
“Vivan una vida feliz, larga y tranquila. Yo siempre los amare a ambos, y por favor díganle a
Yanli… Que también la amo”.
Mirando a los ojos a sus dos hijos, Yu Ziyuan mordió su pulgar y rápidamente escribió un
sello en el barco de madera, haciendo que este se moviera solo por el lago con una dirección
predeterminada.
Forcejeando aterrorizado, mirando como comenzaban a alejarse del lugar dejando atrás a Yu
Ziyuan, Jiang Cheng no pudo evitar gritar lleno de terror: “¡No! ¡Mamá! ¡Mamá!”
Sin poder evitar llorar, forcejeando también, Wei Wuxian gritó: “¡No haga esto! ¡Por favor
venga con nosotros!”
Dándole una última mirada a sus dos hijos mientras el barco se alejaba más y más en el agua
llena de lotos a su alrededor, Yu Ziyuan perdió su sonrisa, y con el corazón destrozado, se
giró para regresar a Lotus Pier.
Sin volver a voltear ni una última vez.
Llenos de pánico, alejándose cada vez más y más de Lotus Pier, Wei Wuxian y Jiang Wanyin
desgastaron sus gargantas con gritos agónicos, pidiendo regresar y por la mujer alfa,
aterrorizados al saber que estaban dejándola sola en medio de la batalla.
Y como en un milagro, mientras el sol se ponía por completo en el horizonte, pronto ambos
hermanos se encontraron con otro barco en medio del agua, el cual pertenecía a Jiang
Fengmian, quien regresaba con los miembros de la secta Jiang de su cacería, ajeno a todo lo
que sucedía en su hogar.
“¡Papá! ¡Papá por favor ayúdanos!” Gritó Jiang Cheng con todas sus fuerzas, viendo como el
barco de su padre se acercaba al de ellos.
Notándose esperanzado por primera vez, Wei Wuxian también grito: “¡Tío Fengmian!
¡Estamos aquí!”
Alertado por los gritos desesperados que podía escuchar de esa pequeña balsa a la deriva,
Jiang Fengmian ordeno desviar el curso para acercarse a esta, donde encontró a Wei Wuxian
y Jiang Cheng atados y envueltos en lágrimas.
“¿Zidian?” Pregunto Jiang Fengmian, mirando el arma espiritual de su esposa.
Sin tiempo para nada, sintiéndose presa del pánico, Jiang Cheng explicó: “¡Papá! ¡Mamá está
haciendo una locura! Los Wen llegaron e invadieron nuestro hogar, hay cientos de barcos
fuera, esperando para atacar ¡Y ella se quedó ahí sola!”
“¡Debe dejarnos volver! ¡Tenemos que luchar todos juntos!” Pidió Wei Wuxian, lleno de
pánico.
Mirando a sus dos hijos en la balsa, Jiang Fengmian no respondió a sus palabras, y mientras
una lágrima se deslizaba por su mejilla, rápidamente llevó una de sus manos a la parte
posterior de su cuello, donde estaba la marca que hace tanto le había hecho su esposa.
“Mi señora…” Susurro Fengmian, sintiendo mucho dolor por su omega.
Mirando a sus dos hijos y entendiendo de inmediato las intenciones de su mujer, Jiang
Fengmian ordeno dejar ir al barco y seguir su curso a Lotus Pier, pidiendo acelerar su avance
para llegar lo más pronto posible.
Incrédulo ante lo que sucedía, Jiang Cheng siguió gritando: “¡Papá! ¡No hagas esto! ¡Papá
por favor!”.
Y aunque Wei Wuxian también quiso gritar, presa del terror, pronto su atención se desvió a
otra cosa. En la dirección donde quedaba Lotus Pier una gran barrera en la forma de un domo
violeta se había activado, mientras pocos segundos después, catapultas con grandes bolas de
fuego comenzaron a impactar en esa superficie, que era la barrera de protección de la secta;
su última línea de defensa cuando todo lo demás había fallado.
Guardando silencio al ver esto, Jiang Cheng sintió como más lagrimas se derramaban de sus
ojos, pues recordó todas las cosas que alguna vez supo de esa barrera, la cual nunca creyó
poder ver activada algún día, ya que todo el mundo decía que esta solo podría cernirse en el
cielo de Lotus Pier cuando todos sus muros protectores fueran destruidos y ya no hubieran
más defensas.
Regresando a Lotus Pier, viendo el caos mientras más se acercaba, Jiang Fengmian comenzó
a alterarse, y sin esperar a llegar al muelle salto el agua para llegar por sí mismo junto con
varios de sus soldados, quienes no podían seguir esperando al barco. Llegando a Lotus Pier,
Jiang Fengmian corrió dentro de la residencia desesperado. Así como era previsible, de
camino a la entrada de la secta, se encontraron con varios cadáveres y personas heridas; sin
embargo la mayoría de ellos eran solo cultivadores y guardias de la secta, pues al ver todo el
peligro, Madam Yu había desalojado de emergencia al resto de miembros de la secta.
Así que escuchando el sonido del fuego y los gritos, Jiang Fengmian pudo llegar a la entrada
de su secta, donde se estaba dando la mayor parte de la batalla. Logrando pasar la barrera,
varios soldados de la secta Wen luchaban con los pocos cultivadores que ahí permanecían.
Mientras que al frente de todos, con sus guardias personales, Yu Ziyuan luchaba hábilmente.
La mujer alfa estaba empuñando su espada con una sola mano, pues su otro brazo había sido
herido en pelea, teniendo sus túnicas llenas de sangre y el aspecto algo desarreglado.
Viendo todo el caos en su secta, tomando su papel de líder, sin estar dispuesto a permitir que
toda aquella locura continuara, Jiang Fengmian también tomó su espada y sin dudar se lanzó
a la batalla, avanzando hasta llegar al frente a luchar con su esposa.
Y aunque Yu Ziyuan se había dispuesto a pelear hasta la muerte por su secta, cuando de un
instante al otro sintió a su omega detrás de ella, perdió su concentración. Por muy poco Jiang
Fengmian casi fue herido por uno de los Wen, y reaccionando rápidamente la mujer alfa lo
salvo de aquel ataque, asesinado a ese soldado antes de que pudiera tocar a su esposo,
protegiéndole.
“Fengmian…” Susurró ella, mirándolo en la pelea.
Aun agitado, mirando todo mientras sujetaba firmemente su espada, Jiang Fengmian
respondió: “Debemos seguir, sin parar, debemos continuar…”
Mirando la determinación de su omega, quien estaba dispuesto a pelear a cualquier costo, Yu
Ziyuan se dispuso a ser egoísta.
Solo pudiendo hacer caso a su alfa, la mujer tomó a Jiang Fengmian de un brazo, impidiendo
que avanzara más allá, hasta el frente donde todos los demás luchaban.
“¿Qué crees que haces? ¡Debemos defender nuestra secta!” Exigió Jiang Fengmian,
determinado en salvar su hogar.
Pero sin decir una palabra, Yu Ziyuan tomo a Jiang Fengmian de la cintura, pegándolo más
hacia ella, sin querer dejarlo ir. Yu Ziyuan nunca le había prohibido nada a su esposo, a pesar
de que en su momento muchos se lo aconsejaron por los problemas matrimoniales que a
veces tenían, ella siempre respeto el libre albedrio de su omega; aun cuando este cometía
errores. Pero en ese instante, escuchando a su alfa lleno de pánico, pidiéndole salvar a su
omega, la mujer alfa solo podía quedarse ahí, abrazando a su amado y sin querer dejarlo
avanzar.
“¿Qué haces? ¿Por qué haces esto?” Se quejó Jiang Fengmian, queriendo seguir avanzando.
“Si tu peleas y nos quedamos aquí, vamos a morir” Dijo Yu Ziyuan, muy dolida.
“¡Es mi secta! ¡Debo protegerla! ¡Por los Jiang debo salvar Lotus Pier!”
Siendo más racional que el contrario, Yu Ziyuan pidió: “Fengmian, mírame, míranos. No hay
nada que salvar aquí, es una pelea perdida…”
“¿Entonces que sugieres? ¡Esta es mi secta! ¡Debo salvarla!” Siguió empecinado Jiang
Fengmian.
“La secta Jiang somos nosotros”.
Sorprendiéndose por las palabras de su alfa, Jiang Fengmian dejo de luchar por un instante,
mirando a la mujer a los ojos, sin saber que decirle.
“Tus hijos están fuera, más de la mitad de tu secta también fue evacuada ¿Planeas salvar
cenizas? Ordena a todos retirarse y dejar solo la barrera para distraer a los Wen mientras
escapamos” Pidió la mujer, mirándolo a los ojos: “Tu secta no es Lotus Pier, son todas estas
personas, y si te quedas aquí por tu honor, moriremos… Toda tu secta morirá”.
“No… Tú no sabes lo que dices, suéltame. Moriré por salvar Lotus Pier de ser necesario” Se
negó Jiang Fengmian.
Con un gran suspiro, aflojando su agarre en la cintura del contrario, lo dejo alejarse. Pero
siendo egoísta, y sin querer perder lo que más amaba, Yu Ziyuan supo que su voluntad era
más grande que la de su omega.
“Fengmian, regresa” Ordeno la mujer firmemente.
Al escuchar esas palabras, Jiang Fengmian se detuvo en seco, sin avanzar más allá y
regresando sobre sus pasos pocos segundos después.
“Por favor no lo hagas… Te lo suplico…” Pidió Jiang Fengmian, luchando todavía contra su
alfa.
“No pelearas, vas a seguirme, y tienes que obedecer” Dijo la mujer alfa, con toda la firmeza
de su voz.
Y a pesar de todo el dolor que le causaba, sin importar de la forma en la que luchaba, Jiang
Fengmian no pudo negarse ante las palabras de su alfa.
Yu Ziyuan había usado su voz de alfa para obligarlo.
Mirando al resto de los pocos soldados que ahí quedaban, Yu Ziyuan dijo: “Pongan la barrera
en toda su intensidad, y aquellos que quieran irse con nosotros, no serán juzgados, así como
los que quieran quedarse. Pero el líder y su alfa están evacuando Lotus Pier”.
Dejando sorprendidos a todos los soldados que ahí estaban, quienes no sabían si seguir
luchando o retirarse, Yu Ziyuan volvió a volver su brazo sano alrededor de la cintura de Jiang
Fengmian, caminando a su lado hacia la parte posterior de su secta; a pesar de que su omega
lucia realmente adolorido e incluso había comenzado a llorar por el enojo.
Ordenando a los guardias y sirvientes que veía a su paso evacuar a los heridos y escapar, Yu
Ziyuan se sorprendió de que la mayoría de los cultivadores a su mando decidió acatar sus
órdenes, siguiéndolos y evacuando Lotus Pier como les habían ordenado. Mientras que los
más orgullosos y tradicionales discípulos eran los que se quedaban atrás, decididos a
defender esa secta con su vida.
Llegando al puerto privado por el cual Wei Wuxian y Jiang Cheng habían huido, Yu Ziyuan y
Jiang Fengmian tomaron uno de los barcos que ahí estaban, mientras que los demás
discípulos de su secta hacían lo mismo.
“Debemos apresurarnos, la barrera no resistirá mucho más” Ordeno la mujer, mirando aquel
gran domo que cubría todo y estaba siendo brutalmente atacado.
Mientras los barcos comenzaban a moverse, evacuando a los últimos discípulos y los líderes
de la secta Jiang que ahí quedaban, Jiang Fengmian se paró en la parte posterior del barco,
mirando su secta con los ojos llenos de lágrimas, pero sin poder decir nada todavía. Mirando
y sintiendo el dolor de su omega, pero sabiendo que había hecho lo correcto, Yu Ziyuan se
acercó a este de forma cautelosa, abrazándolo por la espalda y besando su nuca con cariño.
“Te amo Fengmian, voy a protegerte por siempre” Le prometió la mujer, pegando al contrario
mucho contra su cuerpo.
Yu Ziyuan entendería si su omega no la perdonaba por lo que había hecho, pues como alfa
ella sabía lo doloroso que era para un omega ser sometido bajo la voz de un alfa, perdiendo
su voluntad y solo pudiendo obedecer; sintiendo dolor si intentaban resistirse de forma inútil.
Sin embargo Jiang Fengmian no se resistió en lo absoluto, y mientras ellos también se
alejaban en el lago, el omega puso su mano con la de su alfa enredando sus dedos con los de
ella cuidadosamente.
“Yo también te amo…” Susurro Jiang Fengmian, sintiéndose consolado por el abrazo de su
amada.
Dirigiéndose a Lanling, los líderes de la secta Yunmeng Jiang habían sobrevivido a la
invasión de la secta Qishan Wen a Yunmeng.
***
Saliendo del barco a tropezones, Jiang Wanyin cayó al piso de hierba, mientras respiraba
rápidamente, lleno de miedo. Observando a su hermano, Wei Wuxian se puso de pie
rápidamente, saliendo del barco de igual forma, siguiendo al menor con mucha preocupación.
“A-Cheng, A-Cheng levántate” Pidió Wei Ying, tomando a su hermano de un brazo.
Sin embargo Jiang Wanyin no respondió, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas,
temblando de forma descontrolada: “Mis padres… Mis padres…”
“A-Cheng…”
“Están muertos… Ellos deben estar muertos…” Gimoteó Jiang Wanyin lleno de dolor.
Desde aquel barco en el cual Yu Ziyuan los había sacado de Lotus Pier, Wei Wuxian y Jiang
Wanyin pudieron ver claramente como el escudo de protección era roto, y luego mucho fuego
por doquier donde antes solía estar la residencia de los Jiang. Aquello a ambos solo les hizo
entender una cosa: Lotus Pier había sido destruido.
“Ellos están muertos…” Gimoteo Jiang Cheng completamente destrozado.
Sintiendo mucho dolor, creyendo lo mismo que su hermano, Wei Ying intento hacer razonar
al menor: “A-Cheng, no podemos quedarnos aquí, no podemos meternos, pueden estarnos
siguiendo, si no te mueves tú serás el que muera”.
Poniéndose de pie, Wei Wuxian intento tirar de Jiang Wanyin para hacer que se pusiera de
pie, in embargo el menor de ambos hermano seguía sollozando, llorando por sus padres a
quien creía muertos.
“A-Cheng, te lo suplico. Recuerda lo último que nos dijo tu madre, tenemos que ir a Lanling,
debemos buscar a nuestra hermana” Le recordó Wei Ying.
“Él murió odiándome…” Susurro Jiang Cheng, sin poder dejar de llorar: “Mi padre murió
pensando que soy una ramera…”
Dejando de tirar de él, Wei Ying solo pudo quedarse sosteniendo las manos de su hermano,
tomándolo con sumo cuidado, intentando apaciguar aunque sea un poco de su dolor y su pena
al estar a su lado.
“No pude disculparme con mi padre, no pude disculparme” Sollozo Jiang Wanyin, llorando
cada vez más fuerte.
Tragando un poco de saliva, aguantando el dolor con todas sus fuerzas, Wei Ying se negó a
llorar. Uno de ambos debía ser el fuerte, así que sacrificando su pena por la perdida por su
hermano menor, volvió a tirar de él.
“Ninguno de ellos hubiera deseado que mueras…” Le recordó Wei Ying, poniéndose muy
serio: “Ahora la secta Jiang depende de ti y solo de ti, el apellido Jiang es tuyo todavía, y eres
el último en la línea sucesoria. Shijie ahora es una Jin, y yo no pude obtener el apellido de
forma legal así que sigo sin ser más que el hijo de un sirviente. Ahora todo depende de ti y de
los hijos que tengas con Lan Xichen”.
“¿A quién le importa el deber ahora? ¿De verdad estas diciéndome eso?” Preguntó Jiang
Cheng furioso, creyendo que Wei Ying estaba siendo insensible.
“Esa era la última voluntad de tus padres, de ambos. Así que no puedes quedarte aquí
arriesgándote, cumple la última voluntad de ambos, por favor… Levántate, debemos seguir
adelante”.
A pesar del dolor, Jiang Cheng decidió levantarse y seguir a Wei Ying. Así que tomándose de
su brazo, mientras ambos caminaban fuera de esa playa y se internaban en la maleza, Wei
Wuxian lucho por seguir algunas luces lejanas que podía ver, pensando que estaban cerca de
una ciudad. Y tras una caminata algo corta, finalmente llegaron a un poblado, el cual ajeno a
todo el escándalo en Lotus Pier se notaba lleno de vida en la noche.
Mirando todo con precaución, pues no podía saber si los miembros de la secta Wen estaban
ahí o no, Wei Ying propuso: “A-Cheng quédate aquí, pero no te muevas ¿De acuerdo? Iré a
preguntar dónde estamos y a pedir instrucciones”.
Mirando todo el lugar, Jiang Cheng quien supo donde se encontraban de inmediato guardo
silencio, pudiendo solo decir: “Wuxian, por favor cuida a Zidian por un rato”.
Notando como Jiang Cheng le entregaba el anillo morado de su madre, Wei Wuxian solo
pudo quedarse extrañado, preguntando: “¿Por qué?”
Bajando la mirada y mintiendo, Jiang Cheng dijo: “No quiero tener nada de mi madre
ahora…”
Decidiendo respetar el momento de duelo de su hermano, Wei Ying tomo el anillo de sus
manos para ponerlo en uno de sus dedos, pidiéndole de inmediato: “No te muevas aquí,
volveré de inmediato”.
Asintiendo, Jiang Cheng acepto en silencio. Mientras que dándole un último vistazo al
menor, Wei Wuxian se internó más profundo en aquella pequeña ciudad, con casas de
vistosos colores y comercios abiertos por todos lados. Aquella ciudad tenía un curioso piso
de piedra blanca, la cual recorría toda la parte central del lugar hasta la entrada de este
mismo, donde Wei Wuxian había dejado a Jiang Cheng.
Acercándose amablemente a uno de los comercios, comprando algunos bollos fingiendo ser
un turista, Wei Wuxian consiguió información; la cual no fue favorable. Aquella era la ciudad
Kwizow, que era un lugar no tan lejano a Lotus Pier, apenas un par de horas a caballo. Y a
pesar de que Madam Yu había puesto en la balsa un sello de papel que debía llevar a ambos
menores a otra ciudad, la más cercana al camino que se debía tomar para llegar a la Torre
Koi, por algún motivo este sello se había roto y ambos terminaron en la deriva hasta que por
la corriente llegaron a ese sitio.
Esto no era favorable pues esta ciudad quedaba a varias horas a caballo0 de la ciudad donde
debieron ir correctamente, esa que los dejaba más cerca del camino a Lanling. Algo que
preocupaba mucho a Wei Ying era el camino que debían recorrer, pues de cierta forma
Lanling estaba más cerca que Gusu respecto a Yunmeng, porque a Gusu se debía llegar en
balsa por el mar en más de 7 días, dependiendo de la fuerza del mar. Sin embargo Lanling
tenía un camino más rápido por camino, y en un caballo podías llegar en máximo tres días.
Sin embargo Wei Wuxian y Jiang Cheng no tenían un caballo y tampoco el dinero para
comprar uno, así que calculando el tiempo con aquel retraso por estar en la ciudad
equivocada, Wei Ying calculó que serían más de diez días de camino a pie hasta la Torre Koi;
siendo positivos y si se apresuraba en el camino con Jiang Wanyin.
Con ese peso en sus hombros, Wei Wuxian camino de forma desanimada hasta la entrada de
la aldea, el final del camino de piedras que recorría toda la ciudad, el mismo punto donde
hace tan solo unos minutos dejó a Jiang Wanyin.
Sin embargo en ese lugar no había nada.
Soltando la bolsa con bollos y mirando todo alrededor aterrorizado, Wei Wuxian solo pudo
preguntar: “¿A-Cheng?”
Sin embargo ahí no había nadie más.
Capítulo 25.

“¿Pero qué están haciendo? Deben ser más eficientes, están tratando mal al líder de la secta
Jiang en su propio hogar” Dijo Wen Chao como burla, regañando a los soldados que lo
acompañaban.
Soltando varias risas, los soldados Wen que estaban presentes en el salón principal de la secta
Wen miraron a Jiang Cheng agachado en el centro de aquel gran salón, sentado frente a una
pequeña mesa baja; pudiendo relajarse al ver que Wen Chao finalmente había cambiado su
humor.
Hubo una gran conmoción después de la invasión de los cultivadores de la secta Wen en
Yunmeng, no solo porque casi no pudieron pelear, también por que en su momento se tomó
como un gran terrible fracaso. Cuando los Wen finalmente pudieron derribar la barrera
protectora de la dicha secta Jiang, se sorprendieron cuando al entrar no encontraron a nadie
importante, tan solo un par de soldados que se habían quedado para pelear. Pero el resto de la
secta estaba desierta, ni siquiera había sirvientes presentes, a pesar de que Wang Jiao había
asegurado que cuando estuvo ahí con Wen Zhuliu había una gran cantidad de personas.
La teoría fue que por algún motivo, los Jiang abandonaron la secta en masa, dirigiéndose a
sus sectas vecinas o sin un lugar determinado, solo corriendo despavoridos de la invasión
Wen, que se dio por los muelles y por la puerta principal.
Esto fue tomado como un gran fracaso por todos, pues no solo no pudieron pelear a pesar de
tener una de las fuerzas mayores, también porque nadie de la secta principal de la secta Jiang
fue dañado, ni los lideres ni los hijos de los lideres, o aunque fuera algún miembro del
consejo; consiguiendo de esta forma que Wen Chao fracasara en cumplir las órdenes que
tenia de su padre. Esto conllevo a la furia del líder del pelotón, Wen Chao, quien de forma
descontrolada se encargó personalmente de destruir gran parte de Lotus Pier, invadiendo
lugares sagrados como el templo de la familia de dicha secta o habitaciones privadas de los
lideres, rompiendo todo a su paso.
Esta situación no parecía querer mejorar, pues mientras Wen Chao enloquecía, los miembros
de su ejército se vieron en la obligación de enviar mensajes a su hermano y padre para
informar del fracaso, teniendo como respuesta que Wen Xu llegaría prontamente a Yunmeng
después de su victoria en Qinghe, para encargarse de todo el desastre que Wen Chao no pudo
controlar.
Esto enfureció aún más a Wen Chao, el cual se sentía frustrado de no poder haber vencido a
su hermano omega, el cual ante todo pronóstico había vencido a la secta Nie y cumplió a
cabalidad con todas las órdenes del líder de la secta Wen Ruohan. Wen Chao estaba tan
furioso que por poco y no comienza a ejecutar a sus generales de estrategia, a quienes
culpaba por aquel desastre.
Hasta que un milagro ocurrió.
Cuando la noche ya había cubierto el cielo, dos cultivadores de la secta Wen irrumpieron en
el salón principal de la destruida secta Wen, trayendo consigo a un débil joven de túnicas
violetas y cabello negro.
Era el heredero de la secta Jiang, el joven omega Jiang Wanyin.
Los cultivadores de la secta Wen lo habían capturado en el lago que rodeaba la secta Jiang,
cuando vieron un pequeño barco cercarse a Lotus Pier sigilosamente bordeando la orilla,
tratando de no ser visto. Después de una corta batalla que los dos miembros de la secta Wen
ganaron, Jiang Cheng fue llevado a la fuerza de vuelta a Lotus Pier, en medio de los pocos
cadáveres de los guardias que se quedaron y la mayoría de los edificios en ruinas.
“Sírvanle el té de inmediato, debemos ser corteses con el líder de la secta, así como él lo fue
contigo ¿No es así Jiao Jiao?” Preguntó Wen Chao, mirando a su omega detrás de él.
El hermoso joven omega quien estaba sentado en la silla del líder se encogió de hombros con
indiferencia, mientras seguía mirando las joyas de Madam Yu y Jiang Yanli que pudo robar
de los aposentos privados de ambas, probándolas en su propio cuerpo.
“No lo sé, ellos no me sirvieron te” Negó Wang Jiao, sonando ofendido.
“Eso es una verdadera pena porque… Si ellos hubieran sido más amable con mi adorado Jiao
Jiao, el destino del joven líder hubiera sido diferente” Dijo Wen Chao, mientras se paseaba de
manera lenta frente a la mesa baja de Jiang Cheng.
Jiang Wanyin mantuvo la mirada baja en todo momento, no solo porque estaba furioso y
sabía que si miraba a Wang Jiao o Wen Chao terminaría atacándolos, también por todo el
desastre y el dolor que lo rodeaba. Al entrar a su propia secta, mirando los cadáveres tirados
en el piso, los pabellones destrozados, y todo el dolor… Jiang Cheng quiso gritar. En medio
de rostros conocidos y el fantasma de lo que era su hogar, Jiang Cheng solo quería ver a sus
padres, la única razón por la cual regresó a Yunmeng y permitió que lo capturaran, para
asegurarse de que Jiang Fengmian y Yu Ziyuan estuvieran a salvo; sin saber que ellos habían
abandonado Lotus Pier hace horas y se encontraban a salvo.
Poniendo un rostro de extrañeza, Wang Jiao preguntó: “¿Por qué estas llamando ‘Líder’ a esa
escoria? Él no es un líder, ni siquiera es el heredero de su propia secta…”
“Ahora mismo es el líder Jiao Jiao, es el último con el apellido Jiang…” Mintió Wen Chao.
Cayendo fácilmente en las mentiras de Wen Chao por el temor y desconcierto que sentía,
Jiang Cheng preguntó: “¿El ultimo con el apellido Jiang? ¿Y dónde están mis padres?”
Poniendo una sonrisa maliciosa, dejando de caminar para pararse frente a la mesa baja donde
estaba Jiang Cheng, Wen Chao respondió: “¿Dónde crees que están? Claro que están
muertos, nosotros los matamos”.
Escuchando esas palabras todos los miembros de la secta Wen presentes guardaron silencio,
pues sabían que aquello era una mentira. Y aunque Wen Chao lo sabía también, estaba
mintiendo a propósito y de una forma convincente a Jiang Cheng, pues él no tenía la
intención de asesinar al joven omega, tenía mejores planes para Jiang Wanyin.
Sintiendo como su corazón se paraba por un instante, Jiang Cheng no pudo evitar que un par
de lágrimas se derramaran por sus mejillas, diciendo de inmediato: “Mentira, es mentira…”
“No lo es, si lo fuera ¿Cómo estamos aquí? Si tus padres hubieran sobrevivido, mi secta no
hubiera invadido Lotus Pier, nosotros hubiéramos sido los muertos. Pero aquí estamos,
sentados en la silla del líder y destrozando tu hogar”.
Incrédulo y llorando más, Jiang Cheng exigió: “Sus cuerpos ¡Muéstrame sus cuerpos! ¡Tú
maldito cerdo! ¿Qué les hiciste?”
Sonriendo con diversión, disfrutando de los últimos gritos sin sentido que Jiang Cheng diría
esa noche, Wen Chao le respondió: “Dialoguemos, nuevo líder de la secta Jiang, no hay
ninguna necesidad de gritarme o insultarme. Cumpliré tus peticiones si eres bueno y
obedeces mis órdenes”.
Creyendo que Wen Chao estaba yendo en serio, soltando un gemido de pánico, Jiang Cheng
rompió a llorar, cubriendo su rostro con sus manos lleno de pánico, mientras la tristeza y la
desesperación lo recorrían por completo. Aguantando la risa, Wang Jiao bajo la mirada,
mientras mentalmente se enorgullecía de las aptitudes de actuación de Wen Chao. Mientras
que el propio Wen Chao sonreía también, disfrutando de ver a ese omega en una posición tan
desprotegida y llena de dolor.
Interrumpiendo la escena, uno de los guardias más débiles entró en la sala principal trayendo
consigo una bandeja con una taza de té. Mientras que detrás de él, Wen Ning entró en la sala
trayendo consigo las tazas de té, las pocas que habían sobrevivido después de todos los
destrozos que arbitrariamente cometieron los miembros de su propia secta.
Sintiendo mucha pena, el joven Wen Ning miró a Jiang Cheng sentado frente a esa mesa baja,
sintiendo mucha lastima por él sabiendo lo que estaban haciéndole, pero sin poder decirle
nada porque sabía lo que harían con él si desobedecía a su líder. Mas temeroso de hacer
enojar a Wen Chao que de herir a un inocente.
“Sírvele” Exigió Wen Chao, mirando como finalmente traían el té.
En silencio, ambos cultivadores jóvenes pusieron la taza de té frente a Jiang Cheng, sirviendo
el contenido de aquel té dulce en una de las tazas. Y dudando por un segundo, sabiendo bien
lo que contenía aquel líquido, Wen Ning tardó en poner la taza frente de a Jiang Cheng. Pero
finalmente temiendo por Wen Chao, le entregó aquella taza a Jiang Wanyin para que la
bebiera.
Sonriendo, mientras los cultivadores que usaba como sirvientes hacían una reverencia para ir
a la puerta, Wen Chao le exigió a Jiang Cheng: “Bebe el té”.
Apartando las manos de su rostro mientras miraba furioso a ese horrible beta Wen frente a sí
mismo, Jiang Cheng pensó en negarse; pero Wen Chao rápidamente le dijo: “Debes ser
obediente, o cortare en trozos los cuerpos de tus padres, para asegurarme de que nunca más
puedan reencarnar…”
Presionando los dientes con ira, controlando su enfado para hacer las cosas bien, Jiang Cheng
llevó la taza de té a sus labios, bebiendo un sorbo con rapidez, intentando apresurar el
proceso para la única cosa que le interesaba: Ver a sus padres y asegurarse de que tuvieran un
entierro digno.
Caminando a la puerta, a Wen Ning y su compañero se les fue indicado no retirarse de la sala,
pues Wen Chao podría requerir más de sus servicios pronto. Así que quedándose en la sala,
muy nervioso Wen Ning observó cómo Jiang Cheng bebía aquel té, abandonando sus últimas
esperanzas de que el omega se diera cuenta de que había algo extraño en el líquido y no lo
consumiera. Después de todo había sido el propio Wen Ning quien había preparado ese té,
siguiendo lo enseñado por su hermana y las ordenes de Wen Chao, el joven Wen Ning
preparó un té dulce con un conjunto de hierbas que le habían proporcionado otros
cultivadores de mayor rango, el cual si es preparado de la forma correcta, tenía un solo
objetivo…
Inducir el celo en los omegas.
Para un alfa esta bebida no tiene ningún efecto, pues los celos de alfas y omegas son
fisiológicamente diferentes. Pero en un omega tenía un efecto potenciador y acelerador, así
como las hierbas que inhibían los efectos, ese fluido tenía un tiempo de vida determinado
pero sumamente fuerte. Mientras preparaba el té, apresurado por los guardias que le dieron la
orden por parte de Wen Chao, Wen Ning pensó que el joven Wen tal vez quería beberlo
porque el sabor le gustaba, o que planeaba forzar un celo en su pareja Wang Jiao; después de
todo ambos tenían una relación muy extraña. Sin embargo de haber sabido para lo que se
usaría, Wen Ning se hubiera negado en rotundo a prepararlo.
Aun así Wen Ning tenía las esperanzas de no haberlo preparado bien pues no era tan hábil, de
que los efectos no sucedieran en el cuerpo de aquel omega tan indefenso, y de que nada malo
ocurriera. Aunque en el fondo, Wen Ning sabía que eso era imposible, pues al saber que era
para Wen Chao, se había esforzado mucho en preparar la bebida a la perfección.
Observando como Jiang Cheng tomaba aquel líquido, Wen Chao sonrió, diciéndole: “Muy
bien, muy buen niño ¿Sabe bien?”
Sin querer distraerse, Jiang Cheng volvió a preguntar: “¿Dónde están los cadáveres de mis
padres?”
“¿Por qué tanto apuro? Están muertos, no irán a ningún lado, podemos tomarlo con calma”.
Derramando más lagrimas con esas palabras, Jiang Cheng dijo: “¿Qué más tengo que hacer?
Solo apresúralo, cualquier tontería que quieras, cualquier juego, hare lo que sea, solo déjame
enterrarlos de forma apropiada, te lo pido…”
Ya sin poder aguantar la risa, Wang Jiao estalló en carcajadas, cubriendo sus labios con una
de sus manos, sintiéndose muy divertido por aquella conversación.
Mirando a Jiang Cheng a los ojos, Wen Chao preguntó: “¿Harás lo que sea?”
“Si, lo que sea” Prometió Jiang Cheng, fijándose únicamente en Wen Chao.
“Entonces desnúdate”.
Pestañeando confuso, mientras escuchaba más risas de todos los presentes, que eran alfas de
la guardia personal de Wen Chao; Jiang Cheng solo pudo preguntar: “¿Qué? No, claro que
no”.
“¿No dijiste que harías lo que sea?”
“Lo que sea menos eso” Aclaro Jiang Cheng con determinación.
Sin embargo en la última palabra que pronunció, la voz de Jiang Cheng se quebró
ligeramente. De un instante al otro su omega comenzó a comportarse de una forma extraña en
su cabeza, y sin quererlo, una gran cantidad de sus feromonas escaparon de su cuerpo.
Alarmándose mucho, Wen Ning sintió como el olor de la lavanda comenzaba a invadir toda
la habitación, mientras que los alfas que los rodeaban sonreían más, mirando con atención la
escena. Esto asustó mucho a Wen Ning, quien pensó en como detener toda la situación.
Pero ya era demasiado tarde.
“¿En serio? Lo siento mucho líder de la secta Jiang, pero usted ya no puede decidir” Dijo
Wen Chao muy divertido: “Sujétenlo y quítenle la ropa”.
“¡No! ¡Basta!” Gritó Jiang Cheng aterrorizado, sintiendo como varios alfas rápidamente se
volcaban sobre él para sujetarlo.
En medio de sus fuetes gritos de pánico, Jiang Cheng fue desnudado a la fuerza, siendo que
sus hermosas túnicas violetas fueron hechas pedazos, y su cabello negro soltado sobre su
espalda libremente, con marcas de dedos sobre su piel por la brusquedad con la que le habían
arrancado la ropa. Llorando por el temor y todo el miedo que había comenzado a sentir, Jiang
Cheng trató de cerrar las piernas y de cubrirse con los brazos, pero a la fuerza sus
extremidades fueron sujetadas por los alfas que lo rodeaban.
“Por favor no, por favor…” Gimoteo Jiang Cheng, intentando forcejear débilmente con sus
captores.
Pero esto ya era imposible, pues el celo había corrompido todo su cuerpo, dejándolo débil e
indefenso ante todos los miembros de la secta Wen.
Agachándose a la altura de Jiang Cheng, finalmente pudiendo tocar su hermoso rostro y parte
de su cuerpo, Wen Chao dijo: “¿Qué sucede? ¿No dijiste que harías cualquier cosa?”
Negando con la cabeza desesperado, Jiang Cheng trató de suplicar por última vez: “No
esto… Por favor todo menos esto, por favor…”
“Lo siento mucho, joven líder de la secta Jiang, ninguno de nosotros ha pedido su opinión”
Dijo Wen Chao, con mucha crueldad en su voz.
Gimoteando lleno de pánico, Jiang Cheng solo pudo removerse en la cama con mucho temor,
mientras sentía como Wen Chao se agachaba en medio de sus piernas abiertas a la fuerza,
comenzando a pasar sus dedos por sus muslos con cuidado. Llenándose de más pánico, solo
pudiendo pensar con temor en ser tomado de esa forma, Jiang Cheng consiguió fuerzas de lo
más profundo de sí mismo, y venciendo los efectos del celo, luchó con tanta fuerza contra sus
captores que finalmente consiguió liberar una de sus piernas de las manos que lo sujetaban,
consiguiendo patear a Wen Chao con todas sus fuerzas.
“¡No me toques! ¡Aléjate!” Gritó Jiang Cheng con todas sus fuerzas, sintiendo su voz
quebrarse al pronunciar esas palabras en un grito.
Sujetando su pecho, donde había impactado la fuerte patada de Jiang Cheng, Wen Chao gritó:
“¿¡Cómo te atreves a golpearme!? ¡Maldita ramera!”
Poniéndose de pie de inmediato, aprovechando que Jiang Wanyin estaba tan indefenso, Wen
Chao no dudó y comenzó a patearlo en el piso con toda su fuerza, escuchando como Jiang
Cheng gritaba. Hasta que tras algunas patadas, un fuerte sonido de un crujido de escucho por
toda la sala, y escupiendo sangre Jiang Wanyin soltó un grito mucho más fuerte.
Deteniéndose al ver esto, sintiéndose finalmente satisfecho por haber herido al contrario de
esa forma, Wen Chao dijo: “¿No quieres tenerme a mí? ¿No quieres que sea el primero?
Entonces habrá que buscar a alguien más de tu talla…”
Sin poder responder o pedir clemencia, sintiendo que le faltaban las fueras para respirar,
seguro de que Wen Chao le había partido alguna costilla o algo semejante, Jiang Cheng solo
pudo guardar silencio.
Pero Wen Chao pronto empezó a maquinar una idea aterradora, sabiendo muchas cosas sobre
omegas y alfas, así que sin dudarlo llamó a Wang Jiao a su lado: “Jiao Jiao, mi dulce amor
¿Puedes acercarte un segundo?”
Dejando de mirar las joyas que había robado, sorprendiéndose por el llamado de su amante,
Wang Jiao se puso de pie de la silla del líder de inmediato, caminando en dirección a Wen
Chao con confusión.
“¿Sucede algo mi amor?” Pregunto Wang Jiao, sin entender.
“Yo me pregunto… ¿Nunca has sentido curiosidad de cómo se siente un alfa al entrar en un
omega?”
Poniendo un rostro de extrañeza, Wang Jiao respondió con sinceridad: “No, no lo creo”.
“Bueno, no es necesario que la sientas, pues yo voy a entregarte la virginidad de joven amo
Jiang Cheng” Dijo Wen Chao, con una gran sonrisa plasmada en su rostro.
Escuchando aquella idea tan asquerosa, a pesar del dolor, Jiang Cheng volvió a luchar y grito:
“¡No! ¡No puedes hacerlo!”
Para un omega o para un alfa, ser tomado por alguien de su mismo sexo era algo sucio, de lo
más repulsivo, que se consideraba un pecado incluso. Y siendo Jiang Cheng un respetuoso de
las reglas, se negó en rotundo a continuar con esa locura, sin querer para nada que otro omega
tuviera sexo con él.
Y aunque aquella propuesta se les hizo graciosa a la mayoría de los alfas Wen presentes, a
Wang Jiao no se le hizo nada divertida. Wang Jiao era un omega que haría cualquier cosa por
dinero y poder, pero incluso el tenía sus propios límites, y sintiendo aquella idea de tener
sexo con otro omega como algo absolutamente repulsivo, quiso negarse.
“Mi señor, no creo que…” Dijo Wang Jiao, queriendo decir que no.
Harto de todas las negativas y queriendo proceder de una vez por todas, Wen Chao amenazo
diciendo: “¿No quieres hacerlo? Es una pena Jiao Jiao, supongo que pasamos unos buenos
momentos juntos, pero estoy seguro de que incluso aquí en Yunmeng puedo encontrar un
omega tan hermoso como tú el cual haría lo que yo le pidiera por los actuales privilegios que
ahora mismo tienes… Los cuales puedes perder si no haces lo que yo quiero”.
Soltando un suspiro de resignación, entendiendo que era obedecer o perder todo por lo que
había trabajado tanto, Wang Jiao llevo sus manos al cinturón de sus túnicas, comenzando a
soltarlas para desnudarse.
Observando como el omega Wang estaba finalmente aceptando, todos los alfas presentes
comenzaron a reír, ansiosos por ver aquel espectáculo tan depravado que Wen Chao había
comenzado a preparar.
Manteniendo sus túnicas interiores sobre sus hombros, pero ya sin nada de ropa debajo de
estas, Wang Jiao preguntó con cierta molestia: “¿Qué debo hacer?”
Sonriendo satisfecho, Wen Chao tomo a Wang Jiao delicadamente de la mano, conduciéndolo
hacia las piernas del joven Jiang: “Por aquí, mi dulce amor, agáchate por aquí…”
Poniendo los ojos en blanco, dándose cuenta de que nuevamente regresó a ser “mi dulce
amor”, Wang Jiao solo pudo obedecer en silencio, caminando hasta la retaguardia de Jiang
Wanyin, agachándose entre sus piernas abiertas así como Wen Chao se lo indicaba.
Al sentir la cercanía de ese omega, y las manos de Wen Chao que se posicionaron sobre su
piel, Jiang Wanyin rápidamente se negó gritando: “¡No! ¡No te atrevas!”
Volviendo a luchar a pesar del dolor, Jiang Cheng movió sus caderas y sus piernas con
desespero, consiguiendo apartar a la fuerza a Wang Jiao y a Wen Chao, impidiendo que estos
pudieran hacer cualquier cosa con su cuerpo.
Furioso, dándose cuenta de que no conseguiría nada de Jiang Wanyin mientras este
continuara removiéndose con tal fuerza, Wen Chao tomó su última opción. Wen Zhuliu,
quien había estado apartado del asunto en todo momento, pronto fue llamado por su líder.
“Wen Zhuliu, acércate” Pidió Wen Chao, sin apartar la mirada de Jiang Cheng todavía
tendido en el piso de esa manera.
Obedeciendo a Wen Chao, Wen Zhuliu se acercó al centro del salón con paso rápido.
Pensando que tal vez le pediría sujetar a ese pobre omega en el piso, o incluso tal vez
noquearlo, Wen Zhuliu solo pudo sentir ligera pena por parte de aquel joven, siendo sometido
en esa terrible situación. Aunque para nada tenía la intención de ayudarlo, a pesar de que de
forma lejana, ambos eran familia por parte de la secta Yu.
Cuando vio al fundidor de núcleos a su lado, Wen Chao exigió: “Muérdelo, vincúlate con él”.
Confundido, Wen Zhuliu pregunto de inmediato: “¿Disculpe mi señor?”
“¿Acaso estas sordo? Te digo que lo muerdas, muerde su nuca y has esa mierda que hacen los
alfas y los omegas, vamos, hazlo rápido…” Volvió a exigir Wen Chao.
Escuchando esas palabras, Jiang Cheng soltó un fuerte grito de pánico, volviendo a lugar
contra aquellos que lo sujetaban, a pesar de dolor removiéndose con todas sus fuerzas;
aunque no podía lograr nada.
“Mi señor, yo no puedo…” Dijo Wen Zhuliu tratando de negarse, entendiendo lo serio que
era ese asunto, a pesar de que Wen Chao no parecía estarlo entendiendo.
Poniendo los ojos en blanco, harto de toda esa ridícula situación, Wen Chao miró a los ojos a
su guardia más fuerte y le dijo: “Te estoy entregando la secta Jiang, todo Yunmeng ¿No es
eso lo que deseas?”
Guardando silencio, Wen Zhuliu solo pudo bajar la mirada a ese omega en el suelo, desnudo
y siendo retenido contra su voluntad. Y viendo la dubitación en sus ojos, Wen Chao continuó
hablando: “Él es un omega, uno que aún no ha sido mordido por nadie y está soltero; míralo,
puedo asegurar que incluso es virgen. Si tú lo muerdes y te vinculas con él, se volverá tu
esposa de inmediato, no hay ninguna forma de romper el vínculo ¿No es verdad? ¿Y sabes
quién es él? Es el único heredero de la secta Yunmeng Jiang, su hermana la puta está casada
con los imbéciles Jin, y su otro hermano esa maldita ramera no tiene el apellido ¿Quién se
convertirá en el líder legítimo de todo Yunmeng cuando matemos a los padres de esta
escoria?”
Pestañeando algo confuso, mientras seguía mirando a Jiang Cheng en el suelo, Wen Zhuliu
trató de negarse de nuevo: “Pero mi señor, yo no puedo hacerlo, no conozco ni siquiera a este
omega…”
“¿Y eso que? Solo tómalo como un matrimonio rápido, además míralo, está desnudo frente a
ti ¿No es hermoso? Es un omega de alta cuna, mejor partido que cualquier otro que podrías
conseguir por ahí, mejor que cualquiera en Qishang incluso”.
Escuchando las palabras de su señor, Wang Jiao bufo con molestia, mientras cerraba sus
túnicas y desviaba la mirada, dándose cuenta de que para Wen Chao no era tan hermoso
como Jiang Cheng.
“Te lo estoy ofreciendo, solo a ti, para convertirlo en tu esposa” Siguió hablando Wen Chao,
intentando convencer a Wen Zhuliu con todas las ganas que podía: “Lo hago porque para mí
tu eres el más leal, el guardia en el que más confío, y yo sé que si te convierto en el líder de la
rebelde secta Jiang, tu no vas a abandonar jamás a la secta Wen, siempre serás leal… Y lo
más importante, convertirás a tu linda esposa en alguien leal a mí también”.
Notando como Wen Zhuliu seguía dudando, varios de los alfas que estaban ahí presentes
sosteniendo a Jiang Cheng quisieron proponerse para ello, todos ellos queriendo una
oportunidad semejante, en la cual ninguno dudaría y mordería a Jiang Cheng sin rechistar.
“Ya no tendrías que pensar en convertirte en el líder de la secta Yu, mi querido amigo, debes
pensar en grande. Si lo conviertes en tu esposa, ahora serás el líder indiscutible de todas las
sectas en Yunmeng, incluso de la secta Yu… Yo te doy esa oportunidad” Siguió diciendo
Wen Chao, pasando uno de sus brazos por los hombros de Wen Zhuliu.
Suspirando con cierta resignación, tomando una decisión finalmente, Wen Zhuliu dijo:
“Entiendo mi señor, lo haré”.
Pensando únicamente en su secta de origen, esa la cual le obsesionaba poseer, Wen Zhuliu
acepto aquella descabellada propuesta. Y aunque sabía que su matrimonio seria agrio con
aquel omega, sabiendo que este lo odiaría, y aun más… Que debería entregárselo a Wen
Chao cuando este deseara; prefirió dejarse enceguecer por el poder y las promesas de ser el
gran líder de Yunmeng Jiang en un futuro.
Escuchando la decisión de Wen Zhuliu, Jiang Cheng se removió con más fuerza, gritando:
“¡No! ¡Por favor no! ¡Por favor!”
Jiang Cheng no podía evitar sentirse sumamente fuera de control, pues si era mordido por
Wen Zhuliu sabía que su vida entera terminaría. Todos los sueños que alguna vez tuvo, de
una vida feliz en un matrimonio perfecto, una vida en Gusu siendo el líder en ese hermoso y
pacifico lugar, en tener una vida al lado de Lan Xichen.
Todo eso terminaría con la mordida de Wen Zhuliu en su nuca, pues solo podría pertenecerle
a él, por toda la eternidad…
“Por favor… Por favor te lo suplico, no lo hagas…” Gimoteo Jiang Cheng lleno de pánico.
Pero sin escucharlo, agachándose al lado del omega, Wen Zhuliu comenzó a acercar su rostro
a la nuca del contrario, apartando con sus propios dedos los cabellos sueltos que Jiang Cheng
tenía en su espalda, preparándose para vincularse con él.
Lleno de desesperación, dándose cuenta de que Wen Zhuliu no iba a escucharlo, Jiang Cheng
entonces solo pudo sollozar el nombre del alfa al cual amaba con todo su corazón: “A-
Huan… Lan Huan… Por favor sálvame… Por favor…”
Deteniéndose al escuchar los lamentos de Jiang Cheng, Wen Zhuliu volvió a reconsiderar su
decisión, mirando el rostro lleno de temor y dolor de aquel que se convertiría en su omega; el
cual incluso en sus últimos momentos de libertad estaba llamando el nombre de otro alfa.
Mirando la puerta abierta del salón, Jiang Cheng siguió sollozando: “Te amo Lan Huan… Por
favor no me dejes, por favor sálvame… Ven por mí… Por favor… Quiero regresar a Gusu
contigo y A-Yi…”
Bufando molesto, sintiendo que Wen Zhuliu se arrepentiría si seguía escuchando los gritos
desgarradores de Jiang Cheng, Wen Chao exigió: “¡Muérdelo ya! ¡Ahora!”
Bajando la mirada con arrepentimiento, Wen Zhuliu susurró: “Perdóname…”
Intentando pensar en su hijo y en su alfa, Jiang Cheng solo pudo sollozar: “Te amo Lan
Huan… Te amo tanto…”
Sin poder terminar de hablar, Jiang Cheng pronto irrumpió sus palabras cuando sintió un
dolor desgarrador en la parte posterior de su nuca, mientras los dientes de Wen Zhuliu se
incrustaban en su piel, formando finalmente el vínculo. Cuando el vínculo estuvo completo,
la voz de Jiang Cheng se quebró completamente, mientras dejaba de luchar y se quedaba
tendido en el piso, dejando de pensar por todo el dolor que estaba sintiendo.
Sintiéndose extraño de igual forma, Wen Zhuliu soltó el agarre que tenía en el cuello de Jiang
Wanyin, separándose de este con lentitud, mirando fijamente el rostro lleno de lágrimas de
Jiang Cheng; comenzando a sentir todo el dolor de quien ahora era su omega.
Mirando como todo el proceso había terminado, Wen Chao solo pudo reír, preguntando: “¿Ya
está? ¿Entonces podemos continuar por fin?”
Con la mirada baja, Wen Zhuliu respondió: “Si, mi señor”.
“Perfecto, entonces Jiao Jiao, ven aquí por favor” Pidió Wen Chao, continuando con su idea
principal.
Wang Jiao, quien no había dejado de reír en todo el tiempo que pudo ver lo que sucedía,
decidió obedecer a su líder, y volviendo a abrir sus túnicas, se posiciono en medio de las
piernas de Jiang Cheng con mucha inexperiencia al ser otro omega.
Pero Jiang Wanyin, quien seguía siendo el mismo a pesar de la mordida, volvió a soltar un
gemido de dolor al darse cuenta de esto, tratando de resistirse de nuevo.
“Quieto” Ordeno Wen Zhuliu, usando su voz de alfa.
Siendo ahora su alfa vinculado, a pesar de todo el dolor que le causaba, Jiang Cheng tuvo que
detener sus movimientos, volviendo a quedarse quieto en el piso. Él ya no podría
desobedecer a Wen Zhuliu nunca más.
“Bien Jiao Jiao yo voy a prepararlo para ti, luego tu solo tendrás que entrar en él, explicó
Wen Chao, agachándose detrás de Wang Jiao en medio de las piernas abiertas de Jiang
Cheng.
Sintiendo los asquerosos dedos de Wen Chao en su piel, pero ya sin poder resistirse, Jiang
Cheng solo pudo cerrar los ojos débilmente, perdiéndolo absolutamente todo…
Capítulo 26.

Con la mirada baja, Wen Ning recogía todas sus cosas, intentando apresurarse para irse de
ahí. Después de negarse a participar en el horrible acto que hicieron sus compañeros de secta
con Jiang Cheng, se le fue exigido por el propio Wen Chao regresar a Yiling con su hermana,
pues aparentemente la mayor de los miembros de su propia secta habían comenzado a
sentirse incomodos con su presencia.
Y siendo sinceros, Wen Ning había terminado en el pelotón de Wen Chao como un favor a su
hermana, no porque fuera un cultivador fuerte o por que tuviera alguna habilidad especial.
Nadie de los demás Wen lo querían ahí, y Wen Ning tampoco quería, pero su hermana si para
intentar ganar mayor favor ante los ojos de Wen Ruohan, y para que Wen Ning intentara
sobresalir entre los demás alfas de su propia secta.
Aun así Wen Ning estaba agradecido que al final de todo no hubo una pelea como tal, y
aunque aún le dolía saber todo lo malo que le ocurrió al joven omega Jiang, solo quería salir
de ahí para regresar con su verdadera familia en Yiling.
“Puedes tomar una de las balsas, no es necesario que te quedes más” Le dijo uno de los
cultivadores de su secta, cuando vio a Wen Ning preparado para irse.
Después de la captura de Jiang Cheng, los ánimos entre los demás cultivadores y miembros
de la secta Wen habían mejorado. No solo porque ahora podían cumplir con las órdenes del
líder Wen Ruohan, también porque después de lo sucedido, todos suponían que tenían a la
secta Jiang a sus servicios para siempre.
Tomando su sable y sus cosas, sin decir nada más, Wen Ning dejó las carpas de los soldados
que ahora se habían dispuesto en Lotus Pier, caminando a través de la destruida residencia
Jiang hasta la parte anterior de los muelles, donde tomaría un barco cualquiera para remar
hasta llegar a casa; después de todo Yiling no estaba tan lejos de Yunmeng Jiang.
Pasando cerca del salón principal de la secta, en la cual ahora había una gran fiesta, Wen
Ning sintió un ligero escalofrió. Hace menos de una hora, aquellos mismos alfas que ahora
celebraban bebiendo alcohol y comiendo la comida de la secta invadida, habían tomado
turnos para poseer el cuerpo de Jiang Cheng en ese mimo salón. Y no contentos con ello,
vincularon al omega a la fuerza con Wen Zhuliu, quien ahora se había convertido en su alfa
de por vida. Sin tener otra opción, Jiang Cheng ahora solo podría mirar a Wen Zhuliu como
su único amado.
Esto obviamente convenía a Wen Chao, no solo porque al tener a Jiang Cheng vinculado con
Wen Zhuliu finalmente tendrían a la secta Jiang subyugada a sus deseos, también por que
podría tener el cuerpo de Jiang Cheng cuando lo deseara, ya que Wen Zhuliu le entregaría a
su omega sin rechistar. Pero nadie había pensado en el joven omega Jiang, quien después de
ser tomado de una forma tan brutal y por tantas personas en su primera vez, estaba
profundamente herido, teniendo además de varios golpes propinados cuando se resistía, una
costilla rota por Wen Chao y el cabello cortado de forma arbitraria por parte de Wang Jiao.
Pensando en eso con un escalofrió, pudiendo escuchar aun los gritos desesperados de aquel
joven omega en el piso, Wen Ning apresuro su paso, queriendo salir de ahí cuanto antes.
Después de saber el terrible estado en el que había terminado Jiang Wanyin, Wen Ning se
preguntó a donde lo habrán llevado los demás miembros de su secta, ya que sabía que varios
curanderos de los Wen debieron atenderlo de inmediato, y que se lo llevaron a otro sitio de
inmediato para curarlo.
Y aunque esto le daba mucha curiosidad a Wen Ning, más extraño le parecía el
comportamiento de Wen Zhuliu, el cual a pesar de haberse vinculado con él y ser su alfa, no
impidió que Wen chao y los demás miembros de su secta hicieran lo que quisieran con Jiang
Cheng. Como si Wen Zhuliu realmente fuera un simple perro entrenado que seguía las
ordenes de Wen Chao sin rechistar.
Con esos pensamientos rodeando su cabeza, Wen Ning finalmente llegó a la entrada de la
secta Jiang. Y aunque si intención era irse, se sorprendió cuando vio a los guardias de Wen
Xu descargando cosas del barco en el cual habían llegado, lo cual solo podía significar una
cosa: Que Wen Xu finalmente llegó a Yunmeng después de ser llamado por los cultivadores
del pelotón de Wen Chao. Queriendo verlo por una sola vez, aunque fuera solo un instante a
lo lejos, Wen Ning desvió su camino por la secta destruida, buscándolo; después de todo no
tenía ningún apuro, podía llegar a Yiling hasta el amanecer sin problemas.
“¡Eres una maldita bestia!”
Escuchando aquel grito con sorpresa, Wen Ning se acercó sigilosamente a uno de los salones
algo apartados de Lotus Pier, donde podía oler las feromonas de Wen Xu, sabiendo que este
se encontraba en el interior.
Bufando, Wen Chao respondió: “¿Por qué estás tan sensible? No es tu asunto, no lo
entenderías, es una cosa de alfas…”
“Pero tú no eres un alfa, pequeña mierda” Le dijo Wen Xu, sin abandonar su tono de furia.
Quedándose cerca del salón, pudiendo ver el interior escondido en la obscuridad de la noche,
Wen Ning observo a Wen Xu, el cual estaba resguardado por dos de sus guardias betas
personales, teniendo al frente a Wen Chao quien también estaba con dos de sus guardias
alfas; sin la presencia de Wen Zhuliu, quien no estaba en la escena extrañamente.
“Cuida tus palabras” Dijo Wen Chao, poniéndose serio de inmediato.
“¿Por qué? ¿Por decir la verdad? ¿Quién te crees que eres?” Le pregunto Wen Xu a su
hermano menor: “Ni siquiera eres el heredero ahora, no eres nada ni nadie, incluso fallaste en
la orden de matar a los líderes de la secta Jiang”.
“Pero conseguí un prisionero…”
“La orden de nuestro padre era conseguir un prisionero de la rama principal de cada secta, no
violarlo y casi matarlo, maldito cerdo” Lo acuso Wen Xu en otro grito.
Volviendo a bufar, como si no quisiera entender las palabras y el enfado de Wen Xu, Wen
Chao respondió: “Que sensible eres, seguro es por ser un omega. Debiste quedarte en casa, el
campo de batalla no es para seres inferiores como tú”.
“Pues este ser inferior consiguió vencer a la secta Qinghe Nie y tomar a Jin Guangyao como
rehén” Le recordó Wen Xu: “¿Puedes ser un poco más sensible tú? Yo soy tu hermano mayor,
también soy un omega ¿Qué hubieras hecho si esto me sucediera a mí? ¿Qué hubieras hecho
si un maldito monstruo permitía que un pelotón entero me violara en mi primera vez?”
Encogiéndose de hombros, Wen Chao respondió: “¿Felicitarte tal vez? Ahora estarás
atrapado en Qinghe sin que ningún alfa pueda tomarte, si alguien te toma a la fuerza, será
motivo de celebración para ti ¿No es verdad?”
Soltando un jadeo de sorpresa y sintiéndose muy enfadado, Wen Ning presionó las manos
fuertemente en puños, sin poder creer que Wen Chao hubiera dicho algo como eso, que fue
tan ofensivo. Pero el más furioso de todos los presentes era el propio Wen Xu, el cual sin
esperar más avanzó en dirección a su hermano menor y le dio una fuerte bofetada en el
rostro, alarmando a los guardias alfas que protegían a Wen Chao.
“Háganlo, golpéenme. Él no es nada, yo soy el heredero de su secta ahora” Dijo Wen Xu sin
ningún temor, mirando a los guardias alfas confundidos, sin saber qué hacer.
Muy humillado, Wen Chao sujetó su mejilla con dolor, mirando furioso a su hermano; el cual
con asco limpió con un paño húmedo la palma de su mano con la cual había abofeteado a su
hermano menor, como si tuviera mucha repulsión por este.
“Tal vez no pueda hacerte nada ahora, pero en un futuro yo seré el líder de la secta Qishan
Wen, y todos los asquerosos cerdos que se atrevan a tocar a un omega sin su permiso, serán
desollados vivos” Amenazó Wen Xu, mirando a su hermano a los ojos con ira: “Ahora yo
tomare en mando el asedio en Lotus Pier, tú ya no tienes ningún poder aquí, así que regresa a
casa con esa ramera que trajiste y las cosas que robaste”.
Sin decir nada más, dándole una última mirada a su hermano, Wen Xu abandonó aquel salón
acompañado de sus guardias betas, alejándose de Wen Chao con paso rápido. Mientras que el
menor de los Wen, con furia tras ver a su hermano irse, comenzó a golpear las paredes del
salón y a romper algunas cosas de este mismo.
“¡Maldita puta! ¡Algún día te matare y volveré a ser el heredero de la secta! ¡Lo juro!” Grito
Wen Chao, dejándose llevar por la furia y la ira que lo consumían.
Sintiéndose asqueado por aquel horrible beta, Wen Ning también le dio una última mirada
antes de seguir a Wen Xu, manteniéndose en las sombras para no ser visto. Tomando su
distancia de Wen Xu y sus guardias, Wen Ning observó sorprendido como Wen Xu iba al
templo familiar de los Jiang. Ese lugar había sido uno de los más maltratados por los
miembros de la secta Wen, quienes no solo tiraron y rompieron muchas de las lapidas
familiares de la secta, también orinaron en algunas partes y quemaron otras tantas.
“Mi señor, no es necesario que haga esto” Dijo uno de los guardias betas de Wen Xu,
observando como el omega comenzaba a recoger todo el desastre.
“Está bien, yo quiero hacerlo” Respondió Wen Xu con la voz quebrada.
Quedándose en la puerta del santuario, los guardias betas solo pudieron quedarse en silencio,
observando a su líder limpiar todos los fragmentos rotos de las esculturas, mientras que de la
mejor forma que podía intentaba acomodar nuevamente las lapidas de la familia Jiang,
tomando algunos paños para limpiar el piso incluso.
Acercándose al santuario con paso lento, Wen Ning solo pudo observar en silencio a su
amado hacer aquello, en medio de lágrimas de arrepentimiento y disculpas a los miembros de
la secta Jiang.
“Lo siento mucho… Lo siento, no lo sabía, de verdad no lo sabía” Gimoteo Wen Xu en
medio de un fuerte llanto, mientras presionaba una de las lapidas de los familiares de los
Jiang contra su pecho: “Lo hubiera protegido, hubiera hecho cualquier cosa, hubiera tomado
su lugar, todo menos eso… No quería que fuera herido, que nadie de su secta lo fuera. Por
favor perdónenme… Perdónennos…”
Quedándose fuera del santuario, viendo todo el dolor y la impotencia de Wen Xu, Wen Ning
se sintió enfadado consigo mismo. Él también era culpable de lo sucedido con Jiang Cheng,
más culpable que el propio Wen Xu incluso, ya que él estuvo ahí cuando todo sucedió, pudo
haber evitado que el omega fuera maltratado de esa forma, hacer cualquier cosa para
impedirlo. Pero tuvo miedo… Y ahora Wen Xu estaba cortando sus lindos dedos con
fragmentos de vidrio y cerámica rotos, mientras suplicaba el perdón de la secta Yunmeng
Jiang en un fuerte llanto.
“Perdóname A-Xu…” Susurro Wen Ning, sintiéndose furiosos consigo mismo.
Sin poder aguantar más estar ahí, por lo avergonzado que se sentía de sí mismo y el asco que
tenía en su interior, Wen Ning giró sobre sus pasos y decidió salir de ahí cuanto antes, sin
poder más con todo el dolor que le causaba estar en ese sitio. Regresando a los muelles de
Lotus Pier, los cuales estaban prácticamente vacíos en ese instante, en medio de sus
pensamientos de enfado y vergüenza por sus acciones y por ser tan cobarde, Wen Ning
escogió un bote cualquiera para regresar a casa.
“¿Dónde está Jiang Cheng?”
Sorprendiéndose, Wen Ning sintió como alguien lo tomaba de espaldas y ponía un cuchillo
sobre su cuello, algo que lo hizo temblar y ponerse muy nervioso.
“Responde, donde esta Jiang Wanyin…”
Reconociendo el tono de aquella voz, Wen Ning preguntó: “¿Wei Gonzi?”
Guardando silencio al verse descubierto, temiendo que fueran a capturarlo por saber quién
era, Wei Wuxian considero seriamente cortar el cuello de aquel alfa para mantenerse oculto.
Pero Wen Ning rápidamente dijo: “Wei Gonzi ¿Sabe quién soy? ¿Me recuerda? Soy Wen
Qionglin, nos conocimos en Ciudad Sin Noche… Usted me dio mi primer triunfo como
cultivador”.
Haciendo memoria en medio de su desconcierto por toda la situación, Wei Ying dijo: “El
acosador…”
Sonrojándose ligeramente, Wen Ning respondió: “Exactamente”.
Sin bajar la guardia, pero sintiéndose un poco más seguro frente a ese joven alfa, Wei Ying
volvió a insistir: “¿Sabes dónde está Jiang Cheng? ¿Lo recuerdas? Es mi didi, siempre tiene
un rostro serio y parece que quiere matarte…”
Poniendo un rostro sombrío, Wen Ning respondió: “Si, lo recuerdo Wei Gonzi”.
“¿Ha venido aquí? ¿Lo has visto merodeando por Lotus Pier?”
“Lamentablemente lo he hecho joven maestro, fue capturado por Wen Chao y…”
“¿Y…?” Insistió Wei Ying.
“Fue gravemente lastimado joven maestro, fue golpeado por el látigo de disciplina de su secta
ya que no quería obedecer al líder Wen, también fue torturado por los demás alfas de mi secta
y… Fue vinculado a Wen Zhuliu a la fuerza”.
Soltando el cuchillo con el cual sujetaba a Wen Ning, Wei Wuxian cubrió sus labios con una
de sus manos lleno de sorpresa, sin poder creer lo que escuchaba.
“No puede ser… ¿Vinculado? ¿Pero cómo?”
Bajando la mirada, Wen Ning dijo rápidamente: “Lo siento mucho joven maestro Wei, yo…
No pude hacer nada”.
Sintiendo ganas de llorar, Wei Ying tuvo que sostenerse de Wen Ning mientras gritaba
ahogadamente por la rabia y la furia que sentía, mientras se sentía incrédulo ante la idea de
que su hermano hubiera sufrido un destino tan horrible.
“¿Dónde está?” Pregunto Wei Ying lleno de ira.
“En la secta Jiang, pero no sé exactamente el lugar, varios curanderos de mi secta se lo
llevaron y no pude ver dónde”.
Conociendo bien su hogar, Wei Ying se puso serio y dijo: “No importa, préstame tu espada,
yo iré a buscarlo, y voy a cortar el cuello de ese cerdo de Wen Zhuliu por haberse atrevido a
violar a mi hermano…”
Negándose de inmediato, Wen Ning respondió: “Eso sería un suicidio, joven maestro. Hay
muchos cultivadores fuertes de mi secta ahí adentro, no podrá pelear con ellos usted solo…”
“¡Eso no me importa! ¡Tengo que sacar a mi hermano de ahí!”.
Observando como Wei Wuxian no pudo más y termino quebrándose, comenzando a llorar por
al rabia y la pena que sentía; Wen Ning se quedó callado un momento, pensando.
“Yo tal vez podría ayudarlo a entrar” Sugirió Wen Qionglin.
Negándose a seguir siendo un cobarde.
Capítulo 27.

Con paso firme, mientras las maderas algo dañadas de los pisos de los pasillos de Yunmeng
bajo sus pies crujían, Wen Zhuliu se dirigió a una de las habitaciones más apartadas de toda
la secta, la cual debido a su lejanía con el área principal, no fue destruida o saqueada por los
miembros de su propia secta. Acercándose a ese sitio, el fundidor de núcleos encaró una ceja,
observando como los guardias de su misma secta dormitaban en sus puestos de trabajo, sin
cumplir su único deber: Cuidar de esa habitación.
Tosiendo ligeramente, Wen Zhuliu despertó a esos tontos discípulos de la secta Wen, quienes
alarmados al ver de quien se trataba, rápidamente se pusieron de pie e hicieron una
reverencia, saludando de esa forma a su superior; temiendo ser reprendidos por haberse
dormido en el trabajo.
“¿Alguna novedad?” Pregunto Wen Zhuliu con seriedad, mirando a ambos guardias.
“No mi señor, su omega sigue durmiendo pacíficamente, y nadie se ha acercado aquí”
Respondió uno de los guardias.
“¿Están seguros?” Cuestionó Wen Zhuliu, recordándoles a ambos muchachos que los
descubrió durmiendo.
Sin decir nada más, ambos jóvenes solo bajaron la cabeza con cierto arrepentimiento,
temerosos de lo que podía suceder a continuación. Sin embargo manteniendo la calma, Wen
Zhuliu solo agregó: “No quiero volver a encontrarlos dormidos, no mientras cuidan a mi
omega. Si vuelvo a verlos descansando, arrancare sus núcleo dorados de sus cuerpos de la
forma más lenta que pueda”
Tragando saliva, entendiendo que aquella amenaza era real, ambos guardias rápidamente
aseguraron: “No volver a suceder, señor”.
Entendiendo que su mensaje fue bien recibido, Wen Zhuliu siguió su camino pasando de
largo a esos tontos guardias, entrando en dicha habitación, pasando al interior y cerrando la
puerta detrás de sí mismo.
Ya dentro de ese lugar, su expresión de ablando de inmediato, mientras sentía las suaves
feromonas de Jiang Cheng, las cuales todavía se desprendían de su cuerpo tras el celo forzado
al que fue sometido, y al cual su alfa había comenzado a reaccionar tras Jiang Wanyin
volverse su omega. Dejando su espada en la puerta, con un paso lento ingreso en la
habitación, hasta la cama que había ahí, manteniendo la mirada baja en todo instante.
Lo que le hicieron a Jiang Wanyin en el centro de su propia secta fue un acto brutal, ya que
en medio de todo el proceso, Wen Chao tomó el látigo de disciplina de los Jiang y azotó a
Jiang Cheng cada vez que este se resistía a algo, llegando a romperle una costilla y a dejar
varias heridas profundas en todo su cuerpo; como si el segundo hijo de la secta Wen
disfrutara ver sufrir a ese pobre omega. Quedándose a su lado, Wen Zhuliu solo podía usar su
voz de alfa para mantener quieto a Jiang Cheng cada ver que su amo se lo ordenaba, pero aun
usando su voz de alfa, Jiang Cheng tenía una voluntad tan fuerte que terminaba moviéndose y
gritando aterrado, ganándose golpes y azotes.
Jiang Cheng y Wen Zhuliu se vincularon desde el primer momento que empezó aquella
tortura, así que durante todo el proceso, Wen Zhuliu pudo sentir en carne viva todo el dolor y
miedo de Jiang Cheng. Y aunque su alfa rugía de furia, queriendo proteger a su omega, Wen
Zhuliu mantuvo la cabeza baja, presionando los dientes adolorido, mientras se encargaba de
seguir las ordenes de sus superiores.
Así que cuando todo finalmente terminó, Jiang Cheng fue llevado de inmediato a esa
habitación alejada, donde fue tratado de emergencia por los curanderos de la secta Wen,
quienes incluso temieron que pudiera morir por sus heridas. Sin embargo como si fuera un
milagro, aquellos curanderos consiguieron estabilizar al omega y mantenerlo con vida,
aunque pidieron su traslado de inmediato a Qishan Wen, pues Jiang Wanyin aún no había
sido curado por completo, y necesitaban mejores implementos médicos que los que pudieron
encontrar en Lotus Pier para tratarlo. Así que se destinó su viaje a Qishan para la mañana
siguiente, en compañía de Wen Chao y Wang Jiao, además de su alfa Wen Zhuliu.
Y temerosos de que el joven omega pudiera hacer algo para intentar huir, sabiendo que
incluso podía desobedecer las órdenes de su alfa, los curanderos no tuvieron más opción que
atarlo a la cama. Atando sus brazos y sus piernas, además de poniendo una mordaza en su
boca, Jiang Cheng permanecía en silencio en la cama, con la vista perdida en el techo de la
habitación, sin haber dormido ni por un solo instante a pesar de las drogas que le habían dado
para sedarlo, todo por el dolor que sentía en sus profundas heridas.
Con la mirada baja, sin saber que decir, Wen Zhuliu finalmente se agacho al lado de la cama,
y cuidadosamente quito la mordaza de los labios de Jiang Cheng, intentando conversar con
él.
“¿Cómo te encuentras?” Preguntó Wen Zhuliu, notándose sumamente preocupado.
Sin decir nada, aun con la vista perdida en el techo, Jiang Cheng no le respondió a su alfa.
Wen Zhuliu no culpaba al joven omega por ello, entendía lo traumático y doloroso que fue
todo lo que le pasó, incluso sintiendo toda su pena en ese instante. Eso causaba que Wen
Zhuliu se sintiera miserable, pues frente a si mismo tenia al hijo de su maestra, un miembro
de su propia secta por parte de su madre, su omega al cual no pudo proteger. Y sintiéndose
avergonzado con Yu Ziyuan por permitir lo que le sucedió a su hijo, Wen Zhuliu solo pudo
pensar en una forma de reparar todos sus errores, planeando proteger a Jiang Cheng desde ese
instante.
“No te preocupes, las medicinas calmantes harán efecto pronto y podrás dormir, debes
descansar pues nos espera un viaje muy largo mañana, ya que iremos a Qishan para tu
recuperación” Le informó Wen Zhuliu, usando un tono de voz suave para hablarle a Jiang
Cheng: “No debes temer, ahora yo me quedare a tu lado, y ya nadie más podrá hacerte daño”.
Intentando ser cariñoso, Wen Zhuliu llevo una de sus manos de forma cuidadosa a una de las
mejillas de Jiang Cheng, dándole una cariñosa caricia. Sin embargo Jiang Cheng apartó el
rostro de inmediato, rechazando el toque de su alfa, notándose sumamente disgustado.
“No me toques…” Dijo Jiang Cheng mirando a Wen Zhuliu a los ojos, con la voz ronca por
todos los gritos que anteriormente soltó.
Siendo aquellas las primeras palabras que pudo escuchar por parte de su omega, Wen Zhuliu
solo pudo bajar la mirada, alejando sus manos de Jiang Cheng, entendiendo que tal vez
aquello sería mucho más difícil de lo que esperaba.
Sin embargo de pronto ambos fueron interrumpidos cuando una persona abrió la puerta, era
uno de los sirvientes de la secta Wen, quien de forma apresurada acudió con Wen Zhuliu.
“Wen Gonzi, el joven heredero Wen Chao exige su presencia en los salones principales de
Lotus Pier, ya que pronto iniciara la celebración por haber ganado la batalla” Explicó aquel
sirviente.
Con un largo suspiro, recordando esa tonta fiesta, Wen Zhuliu rápidamente dijo: “Iré de
inmediato”
Esperando a que el sirviente se fuera, Wen Zhuliu tuvo que volver a llevar sus manos al
rostro de Jiang Cheng, poniendo la mordaza una vez más en sus labios. No le gustaba la idea
de tener que hacerle eso a su omega, pero Wen Chao había sido claro dando la orden de que
no quería escucharlo gritar más, pues supuestamente Jiang Cheng le daba dolor de cabeza con
sus gritos; así que como Wen Zhuliu no podría estar cerca por un tiempo, no tenía más opción
que callarlo de esa forma.
“Volveré pronto y te quitaré eso, sé que es incómodo…” Aseguró Wen Zhuliu.
Sin embargo Jiang Cheng no hizo ningún movimiento, dejándose hacer en silencio,
completamente indiferente a lo que sucedía a su alrededor.
Con un suspiro, asegurando nuevamente a Jiang Cheng, Wen Zhuliu se puso de pie de nuevo,
y mirando a su omega le dijo: “Volveré de inmediato, no debes temer, y no me apartare de ti
de nuevo…”
Wen Zhuliu le decía esas cosas a Jiang Cheng tratando de tranquilizarlo, pero el joven Jiang
parecía indiferente por completo, como si no pudiera sentir más miedo, mirando hacia la nada
sin mostrar ninguna otra emoción. Con un suspiro de resignación, Wen Zhuliu le dio una
última mirada a su omega antes de caminar nuevamente fuera de la habitación, tomando su
espada antes de irse.
***
“¡Brindemos! ¡Por una exitosa batalla en Yunmeng Jiang!”
Levantando sus copas, todos los miembros importantes de la secta Qishan Wen en Yunmeng,
se dispusieron a beber ese delicioso licor de raíces de loto, una cara bebida que tomaron sin
permiso de las despensas de Yunmeng para sí mismos.
“¡Y también por haber capturado al heredero de la secta Jiang!” Celebró otro de ellos,
disponiéndose a brindar por su gran ‘Victoria’
En medio de vítores y palabras de alegría, las únicas personas que se veían infelices estaban
en la parte anterior del salón, justamente en las sillas del líder. Uno de ellos era Wen Chao,
quien tras la discusión con su hermano tenía un humor terrible. Luego estaba Wang Jiao,
quien frustrado con la actitud de Wen Chao, tampoco podía estar feliz. Y finalmente estaba
Wen Zhuliu, quien con un rostro serio, se notaba pensativo, seguramente pensando en Jiang
Cheng.
Manteniendo la cabeza baja a toda costa, temiendo que alguien pudiera verlo, Wen Ning
terminó de servir todas sus copas a los presentes, quienes lo ignoraron por completo, como si
él fuera cualquier otro sirviente. Terminando de servir a esos hombres, los más poderosos de
su propia secta, los sirvientes se retiraron del lugar rápidamente. Ellos tenían la orden de
servir aunque sea una copa de licor a todos los soldados del lugar, así que aun tenían un largo
camino por delante, regresando a las cocinas para abrir más botellas de licor y servirás en
vasos, para luego repartirlas a todos los Wen en Lotus Pier.
“No te preocupes, yo me encargare de abrir todas las botellas” Dijo Wen Ning de inmediato,
cuando regresó a la cocina con los demás sirvientes.
Mirando al joven con desconfianza, viendo como aún era un pequeño alfa débil, ese sirviente
preguntó: “¿Estás seguro?”
“Si, no soy tan bueno sirviendo las copas” Dijo Wen Ning riendo ligeramente.
Dejando que aquel tonto alfa riera, el sirviente le permitió abrir las botellas, haciéndose a un
lado para servir en más copas las botellas abiertas que quedaban. En verdad, Wen Ning no
quería hacer ese trabajo en específico, abrir una botella con corchos tan apretados como los
que tenían esos licores de la secta Jiang se le dificultaba mucho, sin embargo debía hacerlo.
Después de encontrarse con Wei Wuxian, Wen Ning hábilmente preparó unas hierbas
medicinales somníferas, las cuales su hermana en secretó le enseño a preparar, pues eran
drogas demasiado fuertes. Así que tomando las botellas de licor, Wen Ning solo podía poner
en las bebidas la droga, esperando así dormir a todo el mundo el tiempo suficiente para poder
encontrar a Jiang Cheng y sacarlo de ahí junto a Wei Ying.
Abriendo las botellas con cierto esfuerzo y poniendo ahí las hierbas de forma disimulada,
Wen Ning se aseguró que todos bebieran ese líquido, y tomando una charola con bebidas ya
servidas, dejó a los sirvientes en la cocina para seguir revisando Lotus Pier. Ser un sirviente
era útil para tratar de encontrar a Jiang Cheng, ya que él podía moverse por todos los sitios
sin resultar sospechoso, entregando las bebidas a los presentes como una excusa para estar
por ahí. Así que cuando estaba a punto de terminar de entregar las copas que tenía, Wen Ning
observó algo extraño en una de las habitaciones más alejadas de la secta.
Había dos guardias parados en uno de los pasillos, como si resguardaran una de las
habitaciones. Esto era extraño pues ninguna otra habitación tenía algo similar, y a menos que
fuera la habitación de Wen Xu, la habitación resguardada por esos guardias tenía algo muy
importante en su interior, posiblemente Jiang Cheng.
Usando la excusa de las bebidas, Wen Ning se acercó a esos guardias con una sonrisa en sus
rostros, ofreciéndoles una copa: “Jóvenes maestros, por favor tomen una bebida en cortesía
del líder Wen Chao”.
Notándose dubitativos, los guardias rechazaron la oferta, diciendo: “No, estamos en nuestra
guardia”.
Tras la amenaza que Wen Zhuliu les había dado, ambos discípulos de la secta Wen se negaron
en rotundo a hacer cualquier cosa errónea, temiendo morir y perder sus núcleos por eso.
Pero Wen Ning no quería darse por vencido, así que insistió diciendo: “Es una orden de líder
que todos los presentes celebren la victoria en Yunmeng con un trago. No es la gran cosa
además, solo es un poco de vino”.
Sintiendo el aroma de aquel dulce vino de lotos, los guardias finalmente terminaron
cediendo, tomando dos copas de la charola de Wen Ning, dándole un trago frente al joven
Wen. Sonriendo de forma disimulada, contento porque su plan hubiera funcionado, Wen Ning
regresó rápidamente a las cocinas de la secta, donde se dio cuenta de que su labor ya había
terminado. Junto a los demás sirvientes Wen, las botellas de vino fueron vaciadas por
completo, y todos los miembros de la secta bebieron una copa; hasta el punto que incluso los
sirvientes de la secta habían comenzado a beber. Fingiendo terminar sus tareas y tomar una
copa, Wen Ning dejo la charola y volvió a salir de las cocinas, caminando de forma
disimulada a los muelles.
Fingiendo beber aquel vino tan peligroso, Wen Ning fue al lugar en el cual dejó su bote, en el
cual Wei Wuxian lo había estado esperando todo ese largo tiempo.
“¿Entonces? ¿Pudiste encontrarlo?” Preguntó Wei Wuxian ansioso, viendo a Wen Ning de
regreso.
“Pude encontrarlo, Wei Gonzi, peor debemos esperar algunos minutos antes de poder entrar
en la secta” Explicó Wen Ning.
“No puedo esperar tanto… Debo ir por él ahora…”
“Lo comprendo Wei Gonzi, pero si lo ven ahora, será imposible acercarse a él” Lo hizo
razonar Wen Ning.
Con un largo suspiro, Wei Wuxian no pudo hacer más que volver a sentarse en el bote,
mientras que de forma ansiosa, esperaba que los minutos pasaran para que él finalmente
pudiera ir por su hermano. Contando los minutos desde que le dio las bebidas a los guardias
que resguardaban la habitación de Jiang Cheng, Wen Ning esperó el largo tiempo de veinte
minutos antes de aceptar llevar a Wei Wuxian al interior de la secta, esperando así el tiempo
máximo para que la droga hiciera su efecto.
Tras pasado el tiempo, Wen Ning junto a Wei Wuxian finalmente entraron en Lotus Pier,
encontrándose con un paisaje increíble. Todos los miembros de la secta Wen ya hacían en el
piso, con las botellas o las copas de licor al lado, aparentando estar ebrios por la posición que
tenían, a pesar de que tanto Wen Ning como Wei Wuxian sabían que esto no era verdad.
“Por favor Wei Gonzi, sígame” Pidió Wen Ning, intentando apresurarse, pues temía que
alguno de los miembros de su secta despertara por no haber tomado demasiado del licor con
el sedante.
Manteniendo la mirada en una de las botellas de licor, Wei Ying susurró: “De acuerdo”.
Mirar aquella bonita botella de cerámica, con una flor de loto pintada, a Wei Wuxian le trajo
varios recuerdos. Pues aquel licor era preparado a mano en su secta, y era guardado como un
preciado tesoro por su difícil elaboración, y debido a su gran sabor, el propio Wei Wuxian
incluso había suplicado de rodillas para poder beber él solo una de las botellas enteras, una
petición que siempre fue negada por Yu Ziyuan, no solo porque Wei Wuxian tenía prohibido
beber debido a su condición de omega, también porque aquel licor era un preciado tesoro
para la secta Jiang, que incluso sus propios miembros tenían prohibido tomar.
Y mirando esa botella en silencio, Wei Wuxian solo pudo ver como un soldado beta
cualquiera la sostenía dormido, derramando gran parte de su preciado contenido en el piso.
Desperdiciando así un gran tesoro al cual Wei Wuxian sabía que no podía acceder más.
Siguiendo a Wen Ning con paso rápido, a Wei Wuxian no le sorprendió ver como gran parte
de los salones de su hogar fueron destruidos, los muebles rotos y las paredes de papel
quemadas, pasando por la biblioteca y los salones de té, Wei Ying también pudo rememorar
gran parte de su infancia en ese lugar hecho pedazos. Y cuando pasaron cerca del salón
principal de la secta, por una de las ventanas Wei Ying pudo ver a Wen Chao y Wang Jiao
dormidos en el piso, completamente inconscientes. Presionando los puños con ira, Wei Ying
pensó en entrar y cortarles el cuello a ambos por lo que habían hecho, pero se contuvo, pues
no quería cometer ningún cato imprudente que pudiera despertar a los demás miembros de la
secta Wen presentes; su prioridad debía ser sacar a Jiang Cheng de ahí cuanto antes.
Wei Ying estaba seguro de que algún día podría vengarse de ambos por todo el sufrimiento
que causaron.
Caminando a los pabellones de los invitados, esos que se les daban a los visitantes que iban a
la secta Yunmeng Jiang, Wen Ning finalmente pudo ubicar ese extraño salón donde había
guardias resguardando la puerta, los cuales ya hacían dormidos en el piso, como todos los
demás. Entrando delante de Wei Ying, Wen Ning abrió las puertas del pabellón para el
omega, el cual al entrar, soltó un fuerte jadeo de sorpresa.
“A-Cheng…” Dijo Wei Ying aterrado, entrando corriendo a la habitación.
Acercándose a la cama en el centro del lugar, Wei Ying rápidamente tocó las mejillas frías de
su hermano, el cual estaba acostado en la cama con la mirada perdida, sin ninguna expresión
en su rostro a pesar de que Wei Ying estaba ahí.
“¿Puedes escucharme? ¿Sabes quién soy?” Preguntó Wei Wuxian temblando, mientras seguía
sosteniendo el rostro de su hermano con cuidado: “Por favor A-Cheng… Respóndeme”.
Pero tras esas últimas palabras de Wei Ying, Jiang Cheng finalmente cerró los ojos,
quedándose inconsciente. Alterado al ver esto, Wei Wuxian no pudo evitar gritar: “¡A-
Cheng!”
Decidiendo intervenir en la escena, Wen Ning rápidamente dijo: “Wei Gonzi, a su hermano le
dieron fuertes sedantes para que pudiera dormir. Él se encuentra bien ahora, solo está
dormido”.
“¿Cómo puedes estar seguro? ¡Mira su estado! ¡Podría estar muerto!”
“Mire su pecho, Wei Gonzi, sigue respirando, solo está dormido” Señaló Wen Ning,
tranquilizando a Wei Wuxian.
Viendo el pecho de Jiang Wanyin, comprobando que este aun respiraba, Wei Wuxian solo
pudo bajar la mirada, conteniendo las lágrimas de indignación que estaban a punto de escapar
de sus ojos por todo lo que estaba presenciando. Parecía como si Jiang Cheng hubiera estado
esperando a la llegada de Wei Wuxian para por fin poder dormirse…
“Debemos sacarlo de aquí” Dijo Wei Wuxian con la voz quebrada por el dolor.
Sin decir nada más, Wen Ning tomó su espada, y cuidadosamente cortó las cuerdas que
ataban el cuerpo del omega a la cama, finalmente liberando sus extremidades. Mientras que
Wei Wuxian se encargó de quitarle la mordaza de los labios y de acomodar sus túnicas, ya
que los miembros de la secta Wen habían vestido a Jiang Cheng con nueva ropa después de lo
sucedido, pero no arreglaron bien sus túnicas antes de acostarlo.
“Déjeme llevar a su hermano en mi espalda, Wei Gonzi” Pidió Wen Ning.
“¿Estás seguro? Yo puedo intentarlo…” Dijo Wei Ying.
Jiang Wanyin era un omega ligeramente más alto y más grueso que Wei Wuxian, así que
aunque Wei Ying era bastante fuerte, Wen Ning estaba seguro de que le costaría bastante
cargar a Jiang Cheng para sacarlo de ahí. Y no tenían tiempo para retrasos y mucho menos
oportunidades de fallar con trasladar a Jiang Wanyin fuera de ahí, ya que este tenía heridas
muy profundas, y debía ser llevado con mucho cuidado; algo que Wen Ning procuraría.
“Descuide joven maestro, yo puedo hacerlo” Insistió Wen Ning.
Con ayuda de Wei Ying, Wen Ning cargó a Jiang Wanyin en su espalda, asegurándose de no
lastimar sus heridas visibles, y de cargarlo con cuidado para poder sacarlo de ahí. Yendo
ahora por delante, decidiendo ubicar la forma de salir de la secta lo más rápido posible, Wei
Ying tomó un camino diferente del que habían usado para llegar hasta ahí, dirigiendo a Wen
Ning hábilmente por todo el lugar para llegar fuera de la secta Jiang.
Sin embargo para su sorpresa, cuando estaban cerca de la salida de Lotus Pier, Wen Ning y
Wei Ying sufrieron una gran sorpresa cuando vieron a alguien despierto, un miembro de la
secta Wen que caminaba sin rumbo por el lugar.
Capítulo 28.

Sin embargo para su sorpresa, cuando estaban cerca de la salida de Lotus Pier, Wen Ning y
Wei Ying sufrieron una gran sorpresa cuando vieron a alguien despierto, un miembro de la
secta Wen que caminaba sin rumbo por el lugar.
Esa persona era Wen Xu, quien dándose cuenta del extraño espectáculo que estaba teniendo
lugar, decidió salir de la habitación en la que estaba resguardándose para comprobar lo
sucedido, sorprendiéndose al encontrar a todos dormidos. Él por obvias razones no celebró
con su secta por la gran “hazaña” de tomar Lotus Pier, y encerrándose en una habitación, solo
se dio cuenta de que algo extraño estaba sucediendo cuando uno de sus guardias betas cayó al
piso inconsciente fuera de su habitación, lo que lo llevo a buscar ayuda, encontrándose con
que todos los miembros de su secta estaban en las mismas condiciones, o incluso peores;
dependiendo de la cantidad del licor con sedante que habían tomado.
Encontrándose de frente, Wei Wuxian no supo que hacer, temiendo que Wen Xu hiciera algo
para detenerlos. Mientras que Wen Ning se quedó helado, comenzando a sentirse temeroso,
pues no quería que Wen Xu pensara que era un traidor, aunque no podría negarlo en ese
instante, caminando detrás de Wei Wuxian por la secta, llevando al prisionero de los Jiang en
su espalda.
Y manteniendo un incómodo silencio tenso entre todos, Wen Xu de pronto hizo algo
inesperado, arrodillándose frente a Wei Ying y haciendo una reverencia, algo que sorprendió
mucho al joven Wei.
Con una voz muy suave, Wen Xu se disculpó diciendo: “Joven maestro Wei Wuxian, por
favor perdone a mi secta por la barbarie que han cometido en su hogar, por todo el dolor y la
destrucción, y por… Haber dañado a su hermano…”
Sintiéndose muy incómodo, Wei Ying solo pudo quedarse en silencio, escuchando as tristes y
arrepentidas palabras de Wen Xu; quien continuó con su discurso: “… Nunca habrá una
forma en la que mi secta o mi persona puedan pagar a su familia por todo el daño que hemos
hecho, pero desde el fondo de mi corazón, suplico su perdón. Por favor maestro Wei, por
favor perdóneme, a mí y a toda mi secta, se lo suplico…”
Wei Wuxian se sentía incómodo con toda esa situación pues Wen Xu estaba tomando una
posición de penitencia que solo los sirvientes tomaban cuando se disculpaban con sus amos,
arrodillados y con una reverencia que casi ponía todo su cuerpo en el piso. En toda su vida,
nadie había hecho una reverencia semejante en frente de Wei Wuxian, y pensar que aquel
joven omega tan refinado y bien educado, alguien de una alcurnia mucho mayor que Wei
Ying, se le hacía sumamente incómodo.
“P… Por favor Wen Gonzi, no es necesario disculparse de esa forma…” Pidió Wei Ying,
notándose realmente incómodo.
Wei Ying descendía de una familia de sirvientes, su madre lo fue, y su padre incluso era peor
que un sirviente ya que no había nacido en ninguna secta importante. Aun así en ese instante
tenia al heredero de la secta Wen a sus pies, suplicando de forma vergonzosa, mientras
lloraba y llamaba su nombre.
Levantándose y quedándose solamente arrodillado, sin atreverse a mirar a Wei Ying por lo
arrepentido que se sentía, Wen Xu susurró: “Es más que necesario, Wei Gonzi. Toda mi secta
debería pedir perdón a usted y a su familia, millones y millones de veces. Por lo que hemos
hecho, no tenemos perdón…”
Sonriendo amablemente, a pesar de la situación, Wei Ying también se agachó, quedando a la
altura de Wen Xu, para decirle: “Joven maestro Wen, le aseguro que no hay ninguna
necesidad. Así como hay personas malas en su secta, hay personas buenas también, y yo solo
estoy furioso con aquellos que causaron dolor; como su hermano. Personas como usted o
como Wen Ning, son personas con las cuales no puedo tener ningún resentimiento, sin
importar su apellido o su secta, yo sé quién tiene un buen corazón”.
“Muchas gracias, Wei Gonzi…” Susurro Wen Xu, limpiando delicadamente las lágrimas de
arrepentimiento de su rostro.
Decidiendo acabar con todo eso, Wei Ying volvió a ponerse de pie, y amablemente le ofreció
una de sus manos a Wen Xu para ayudarlo a ponerse de pie también. El joven omega Wen se
notaba bastante demacrado, con los ojos rojos por haber llorado desde hace mucho tiempo, y
un aspecto pálido por no haber comido en mucho tiempo, algo que preocupó mucho a Wen
Ning, pero que le hizo notar a Wei Wuxian que las disculpas de este eran sinceras.
Decidiendo ayudarlos, Wen Xu también los acompañó a salir de la secta, caminando delante
de Wen Ning, alumbrando al alfa con una linterna para que este no tropezara en los
resbalosos muelles de Lotus Pier. Sabiendo que esa sería su única oportunidad, estando tan
cerca de Wen Xu, Wei Ying finalmente se atrevió a disculparse con este.
“Hablando de disculpas…” Dijo Wei Ying con cierta vergüenza: “Wen Gonzi, hace mucho
tiempo he querido disculparme con usted por haber roto su compromiso con Lan Er Gonzi.
No fue nuestra intención inmiscuirlo en un asunto semejante, y estoy seguro de Lan Wangji
nunca quiso lastimarlo, pero nosotros somos destinados y… Lamentamos no haber podido
arreglar esto de una mejor manera con usted”.
Sonriendo amablemente, Wen Xu rápidamente dijo: “No hay necesidad de disculparse por
amar y por ser amado”.
“¿Entonces usted no está enfadado?”
Negando con la cabeza, Wen Xu aclaró: “No podría estarlo, porque yo también aprecio
mucho a Lan Er Gonzi, y saber que ha encontrado a su destinado y que es feliz con él me
llena de regocijo. Ustedes dos hacen una pareja maravillosa, y les deseo mucha prosperidad
en su próximo matrimonio, espero que puedan tener una vida feliz juntos”.
Entendiendo que Wen Xu en verdad tenía un gran corazón, Wei Ying esbozo una gran sonrisa
en su rostro, diciendo: “Muchas gracias Wen Gonzi, esperamos verlo en nuestra boda”.
“Estaré muy feliz de poder asistir” Dijo Wen Xu, realmente contento; aunque sabía que era
imposible para él hacer algo semejante.
Esto hizo a Wei Ying sentirse algo extraño, pues teniendo tan buena relación con Wen Xu tras
tan poco tiempo de conocerse, el omega Wei supo que en diferentes circunstancias, ambos
pudieron ser grandes amigos.
Finalmente llegando al bote de Wen Ning, ese pequeño navío que le cedieron al alfa para
poder ir a casa, Wei Ying subió primero al bote, mientras que con cuidado recibía el cuerpo
inconsciente de su hermano para acomodarlo bien en el barco, asegurándose de que este no
sufriera más golpes o heridas. Mientras que Wen Xu se encargó de ayudar a Wen Ning a bajar
a Jiang Wanyin de su espalda, siendo muy delicado y cuidadoso al tocarlo.
“Perdóname…” Susurró Wen Xu cuando finalmente pudieron acomodar a Jiang Cheng en la
barca.
Con un suspiro de cansancio, tras haber hecho una tarea tan extenuante, Wen Ning se dispuso
a entrar en el barco también, pero fue detenido por Wen Xu, quien tímidamente lo tomó de un
brazo.
“A-Ning, muchas gracias” Susurró Wen Xu, mirando al alfa a los ojos.
Sin poder evitar sonrojarse, teniendo la belleza de Wen Xu tan de cerca, Wen Ning solo pudo
responder: “¿Por qué?”
Sonriendo con cierta pena, Wen Xu le dijo: “Gracias por ayudarlo, tu enorgulleces a nuestra
secta, eres un héroe”.
Bajando la mirada apenado, recordando nuevamente como no pudo proteger a Jiang Cheng a
pesar de tener la oportunidad, Wen Ning replicó: “No creo ser un héroe, A-Xu”.
“Para mí lo eres…”
Siendo tomado por sorpresa, Wen Ning sintió como Wen Xu besó una de sus mejillas con
dulzura, mientras seguía sosteniéndolo de un brazo para que no se alejara de él. Viendo todo
desde el barco, Wei Ying se giró rápidamente, con una ligera sonrisa en sus labios,
prefiriendo fingir que no había visto nada.
“Gracias…” Volvió a repetir Wen Xu, finalmente soltando a Wen Ning para permitirle irse.
Quedando anonadado, Wen Ning tuvo que recobrarse algunos segundos, para luego subir al
barco torpemente, haciendo reír a Wen Xu, quien se quedó en el muelle mirando todo.
“Cuídense mucho en su viaje, yo tratare de retrasar a los discípulos de nuestra secta que
quieran ir detrás de ustedes para atraparlos” Prometió Wen Xu.
Tomando los remos, Wen Ning agradeció al mayor: “Gracias A-Xu, tú también eres un
héroe”.
“Yo aún no he hecho nada…” Dijo Wen Xu riendo ligeramente.
“Muchas gracias maestro Wen, usted también cuídese mucho” Pidió Wei Ying desde el barco.
Con una persona tan agradable y dulce en medio de todas las bestias Wen, Wei Ying no podía
evitar estar temeroso por él. Wei Ying no dudaba en las capacidades del heredero de la secta
Wen, pero también sabía que Wen Chao era un demente, que iba a enloquecer cuando se
enterara que Jiang Cheng había escapado. Así que temiendo que Wen Chao pudiera dañar a
Wen Xu, Wei Ying solo pudo suspirar algo triste, mientras comenzaban a alejarse del puerto.
“Lo hare…” Prometió Wen Xu, mientras el barco se alejaba.
Tomando gran distancia, siendo llevados por Wen Ning, lo último que pudo ver Wei Wuxian
fue a Wen Xu alejándose por el puerto, tomando una de las copas de licor del piso, y
bebiendo un trago de esta a pesar de que sabía lo que contenía, regresando él solo dentro de
Lotus Pier.
Avanzando por la nebulosa noche en el barco, Wei Ying ayudaba a Wen Ning a remar de vez
en cuando, mientras que su ocupación principal era Jiang Cheng, acercándose a su
inconsciente hermano constantemente pare asegurarse de que siguiera respirando, y sujetando
su cuerpo herido cuando el barco se movía mucho por las olas del lago o los lotos que
pasaban por encima. Tras varios minutos en silencio, pronto Wei Wuxian se dio cuenta de
que estaban tomando un camino contrario a la secta Jin, algo que lo alarmó ligeramente.
“¿A dónde nos estas llevando?” Le preguntó Wei Ying a Wen Ning, muy preocupado.
***
La secta Qishan Wen no era originaria de Qishang. Mucho antes que los territorios se
dividieran en las sectas más poderosas, antes de las grandes guerras, la secta Wen era una
secta algo pequeña, que se encargaba principalmente del arte de la curación, y que no tenía
grandes aspiraciones más allá de poder seguir existiendo sin ser molestados por las otras
familias grandes de Qishan; esas que ansiaban el poder. Esto cambió cuando Wen Shima
surgió de la nada como un gran luchador, venciendo a todas las sectas él solo, decidiendo
llevar a su familia a Sin Noche y volver a fundar a su secta en ese lugar.
Sin embargo, a pesar de ello, una parte de la secta Wen aún permanecía en su hogar ancestral,
esa primera secta de la cual provenían, manteniéndose en un lugar llamado Yiling, una ciudad
entre Qishan y Yunmeng. Esta secta seguía manteniendo su tradición ancestral, centrándose
en la medicina y la curación de las personas, manteniéndose firmes a sus raíces sin importar
nada.
Y fue en esa secta donde Wen Ning nació, siendo parte de la secta de origen real de la secta
Qishan Wen. Esta secta vivía en el hogar ancestral de los Wen, cerca de la montaña
denominada “túmulos funerarios”, ayudando de forma desinteresada a todos los pobladores
de Yiling. Sin embargo desde el inicio del liderazgo de Wen Ruohan, aquella secta tan
pacifica, siendo una de las ramas alejadas de la secta, se había convertido en un lugar más
hostil, siendo uno de los puntos fronterizos de la secta principal en Qishang.
De esta manera, haciendo un plan rápido, Wen Ning supo que solo podía llevar a Wei Ying y
a Jiang Cheng a su hogar. Pero temiendo cualquier problema en su casa, en silencio y sin que
nadie los notara, aprovechando que todavía estaban escondidos por la obscuridad de la
madrugada, Wen Ning introdujo a sus dos invitados al interior de su hogar a escondidas. El
joven alfa Wen tenía el plan de llevar a Jiang Cheng a su habitación, donde ya en su cama,
por sí mismo podría intentar curar a Jiang Cheng. Wen Ning aún no era un experimentado
curandero como su hermana, pero había recibido el suficiente entrenamiento, así que
esperaba poder encargarse de Jiang Wanyin sin ayuda.
“¿Estamos en Yiling?” Preguntó Wei Ying sorprendido, cuando finalmente estuvieron dentro
de la habitación de Wen Ning.
Dejando a Jiang Wanyin cuidadosamente en la cama, tras un largo suspiro de cansancio por
haber cargado al joven Jiang en su espalda tanto tiempo, Wen Ning respondió: “Así es, Wei
Gonzi ¿Usted ya había venido aquí?”
Negando con la cabeza, Wei Ying respondió: “No, pero la he visto a lo lejos cuando iba de
camino a Gusu”.
Yiling era el territorio de los Wen más cercano a Lotus Pier, siendo el territorio que estaba
justamente detrás del bosque lleno de criaturas malignas que separaba el territorio de los Wen
del de los Jiang. Wei Ying sabia de la existencia de esa ciudad fronteriza, pero debido a que
nunca iba a Qishang o pisaba el territorio de los Wen, solo había podido ver dicha ciudad a lo
lejos, cuando viajaba por bote en dirección a Gusu.
“Es un lugar muy lindo maestro, seguro le gustara”
“Espero que si…” Dijo Wei Ying algo nervioso, sin querer admitir que planeaba irse de ahí
cuando pudiera.
Y aunque Wen Ning planeaba decirle algo más, pronto ambos presentes se sorprendieron
cuando escucharon pasos en dirección al pasillo, y luego muy cerca de la habitación de Wen
Qionglin. Tanto Wen Ning como Wei Ying pensaron que habían entrado en la secta Wen a
escondidas de forma exitosa, que nadie los vio al entrar; pero aparentemente estaba
equivocado.
“A-Ning, ¿Qué te dije sobre traer invitados a casa sin pedir permiso?” Pregunto una voz
femenina, abriendo la puerta de la habitación.
Poniéndose muy tenso, Wei Wuxian no supo que decir, temeroso de lo que podía suceder.
Mientras que Wen Ning solo pudo bajar la mirada tristemente, muy arrepentido.
“Hermana, perdóname” Pidió Wen Ning.
Pronto entrando en la habitación y siendo alumbrada por la luz de la luna que se filtraba entre
las ventanas, una joven delgada y de tez blanca se mostró frente a Wei Ying, con el
característico cabello negro y los ojos ligeramente rojizos característicos de la secta Wen.
Era obvio que aquella mujer vestida con túnicas simples pertenecía a dicha secta.
Mirando fijamente a Wei Ying, la joven soltó un largo suspiro, para luego decir: “A-Ning,
¿Pero que acabas de hacer?”
Era obvio que la joven había reconocido a Wei Ying, ya que él se había vuelto muy popular
recientemente entre todas las sectas, siendo reconocido por su hazaña con el fantasma del
arma maldita de la cueva de la montaña de Yiling junto a su alfa, además de sus ojos violetas
y su alta cola de caballo.
Intentando excusarse, Wen Ning rápidamente se apartó de su cama, mostrándole a su
hermana el cuerpo inconsciente de Jiang Wanyin: “Hermana, no podía dejarlos allí, no
solos… Además uno de ellos está herido”.
Poniéndose muy seria, reconociendo también al heredero de la secta Jiang en la cama, la
joven Wen dijo: “A-Ning, esto es un tema muy serio, no debiste traerlos aquí, no debéis
inmiscuirte en lo que no te compete. Ahora has puesto en graves aprietos a nuestra secta y
nuestra familia”.
Entendiendo que ahí no eran bienvenidos, Wei Ying solo pudo bajar la cabeza, sintiéndose
muy avergonzado. En una situación diferente, le hubiera gustado mantener su orgullo y salir
de ahí con Jiang Cheng, sabiendo que no lo querían en ese lugar. Pero no tenía opciones, con
Jiang Cheng inconsciente y en mal estado, Wei Ying solo podía suplicar que no los echaran a
la calle como dos perros, por lo menos hasta que Jiang Wanyin recuperara la consciencia y
pudiera caminar por sí mismo.
“Tengo una gran deuda con el joven maestro Wei, además… A-Xu me pidió que los
protegiera” Explicó Wen Ning.
Ignorando por completo la deuda a la que su hermano se refería, la joven Wen solo se notó
interesada en la segunda cosa que escuchó: “¿Wen Xu te lo pidió?”
Notándose más arrepentido aun, Wen Ning susurró: “Wen Chao fue quien le hizo daño…”
Explicó refiriéndose a Jiang Cheng.
Con un largo suspiro, pudiendo entender finalmente todo lo que estaba sucediendo, la joven
Wen se acercó rápidamente a la cama, comenzando a tocar a Jiang Cheng. Observando esto,
alarmado, Wei Wuxian se acercó rápidamente a la cama. Wei Ying entendía la posición
complicada en la que se encontraba, sin embargo no por eso permitiría que otro Wen le
hiciera daño.
“Tranquilo, Wei Gonzi, estamos ayudándolo” Dijo Wen Ning de inmediato, observando
como Wei Wuxian se acercaba apresurado a la cama.
“¿Qué va a hacerle?” Preguntó Wei Ying a la joven, ignorando a Wen Ning frente a él.
Manteniendo la calma, la joven Wen respondió: “Tiene una costilla rota, y varias contusiones.
Sera complicado arreglar el hueso roto por que está cerca de sus pulmones, tendré que abrir
su piel para volver a ponerlo en su lugar”.
“¿Acaso es una especie de curandera?” Preguntó Wei Ying confuso.
“Mi nombre es Wen Qing, y soy la líder de la secta Yiling Wen” Explicó Wen Qing, mirando
de reojo a ese atrevido omega.
Wen Qing era una mujer beta, pero debido a su jerarquía y haber nacido en la secta Wen, ella
entendía que su género estaba por encima de aquel de un omega, así que se sentía ofendida
porque Wei Wuxian le estuviera levantando la voz de esa forma, tratándose de un simple
omega.
“¿Entonces si es una curandera?” Preguntó Wei Ying, sin interesarle los títulos de la mujer.
Prefiriendo ignorar las tontas preguntas de Wei Ying, Wen Qing volvió a concentrarse en su
hermano, diciéndole: “A- Ning, ve a buscar a mis dos ayudantes, despiértalas y pídeles traer
mis instrumentos esterilizados, además de todos los implementos para practicar una cirugía”.
Haciendo una reverencia, Wen Ning respondió: “De inmediato, hermana”.
Observando como Wen Ning se iba, Wei Ying solo pudo preguntar: “¿Qué cirugía?”
Todo lo que estaba sucediendo era demasiado confuso para Wei Wuxian, el cual apenas
pudiendo entender un par de palabras de lo que estaban diciendo, se quedó en la habitación
en silencio, cada vez más preocupado. Wen Qing por su parte, se mantuvo tocando el cuerpo
de Jiang Wanyin con cuidado, palpando delicadamente sus músculos y su piel.
“Deberías irte” Sugirió Wen Qing de pronto, dirigiéndose a Wei Ying: “Le pediré a uno de
mis sirvientes que te de una habitación por esta noche, donde podrás tomar un baño y ponerte
otra ropa; tener túnicas de Yunmeng puede traerte problemas ahora”.
Bufando mientras se cruzaba de brazos, Wei Ying dijo: “No veo por qué debería irme…”
“Abriremos la piel de tu hermano aquí, y acomodare sus huesos con mis dedos”.
“Soy un exterminador, no creo que eso pueda asustarme”.
Bajando la mirada, mientras posicionaba sus manos en las caderas de Jiang Cheng, Wen Qing
preguntó: “¿Puedes sentirlo? Ese aroma, incluso yo puedo sentirlo, son feromonas de alfa,
muchas de ellas. Tú sabes lo que le hicieron a tu hermano, y yo también lo sé. Pero no será
agradable para ti verlo cuando le quite la ropa, por eso deberías irte, porque también eres un
omega, y no deberías ver algo así”.
Bajando la mirada, Wei Ying sintió una gran pena en su corazón, susurrando: “No puedo
dejarlo de nuevo…”
Intentando tomar un tono comprensivo, Wen Qing dijo: “Te doy mi palabra de que nadie aquí
les hará daño, ni a ti o a él, si fue el heredero Wen Xu quien pidió mis cuidados, seré lo más
profesional para asegurarme de salvar la vida de tu hermano. Pero en verdad, deberías irte,
porque no quieres ver a tu hermano o a otro omega en este estado, es horrible, ni siquiera yo
quisiera ver algo así”.
“¿Acaso esta tan mal?”
Prefiriendo no responder esa pregunta, Wen Qing dijo: “Intente descansar Wei Gonzi, yo lo
llamare cuando su hermano se encuentre fuera de la cirugía, y pueda estar más… Presentable
para usted”.
Bajando la mirada, sintiendo una nueva opresión en el pecho, sin querer dejar a Jiang Cheng,
Wei Ying se acercó al menor y delicadamente lo tomó de la mano, sintiéndose muy culpable.
Wei Wuxian quería negarse, bajo todas las condiciones quería quedarse ahí, sin embargo no
quería molestar a la líder de ese sitio, y solo queriendo procurar mantenerse a salvo con Jiang
Cheng, finalmente aceptó irse, dejando a Jiang Cheng ha cuidado de esos extraños.
“Por favor, cuídelo mucho” Pidió Wei Wuxian, notándose muy triste.
“Él estará bien, Wei Gonzi, sanaré todas sus heridas” Prometió Wen Qing.
Prefiriendo no decir más, Wei Ying solo pudo bajar la cabeza con cierta tristeza, mirando las
manos de su hermano. Y observando sus dedos heridos y sus muñecas llenas de marcas, Wei
Wuxian solo pudo preguntarse… ¿Qué clase de monstruos lo habían herido de tal forma que
incluso sus dedos estaban lastimados?
Tras un par de minutos, apresurados sirvientes y otros miembros de la secta Wen fueron a la
habitación, de Wen Ning, trayendo consigo varios objetos que Wei Ying no pudo reconocer,
quedándose anonadado por todas las cosas que traían consigo. Pero cuando vio que todos
estaban listos, sin querer importunar más, Wei Ying solo le dio un suave apretón a la mano de
Jiang Cheng antes de finalmente soltarlo, decidiendo seguir fuera a uno de los sirvientes de la
secta; y de camino a la salida recibió una suave sonrisa de Wen Ning, quien quería
tranquilizarlo.
Dejando la habitación de Wen Ning, con la mirada muy baja, Wei Ying siguió a ese sirviente
a una de las habitaciones en la secta. Y así como Wen Qing le había ordenado a su sirviente,
este de forma obediente comenzó a preparar la bañera de Wei Wuxian, calentando agua para
esta.
“Descuide Wei Gonzi, el agua calentara en un instante” Prometió dicho sirviente, sonriéndole
al joven omega.
Mirando como el sirviente apenas estaba tomando los baldes con agua fría para calentarlos,
Wei Ying dudó mucho de lo que acababan de decirle, así que preguntó: “Disculpa ¿Puedo
salir un momento a caminar un momento? Me siento demasiado intranquilo, y eso me
ayudaría”.
“Claro joven maestro, en ese tiempo el agua ya estará caliente y usted podrá tomar su baño”
Aseguró el sirviente, sin dejar de ser amable.
Sonriendo algo triste, Wei Ying hizo una reverencia de agradecimiento para ese hombre, para
luego caminar fuera de la habitación que le designaron, dirigiéndose al patio fuera de la
residencia. Mirando la luna de la madrugada, la cual estaba a punto de esconderse para dejar
paso al amanecer, Wei Ying solo pudo pensar con tristeza en una persona.
Así que algo nervioso, pensando por unos minutos si hacer eso era lo correcto, Wei Ying
finalmente terminó mordiendo su pulgar, para hacer un sello con su sangre en su palma.
Pocos segundos después, una hermosa mariposa se materializó en su palma, la cual era una
mariposa mensajera, la cual le llevaría en el menor tiempo posible un mensaje a la persona
que Wei Ying deseara.
Bajando la mirada, permitiéndose ser débil, Wei Ying susurro: “Lan Zhan…”
Solo pronunciar el nombre de su amado a Wei Ying se le hacía difícil, pero sintiendo un
suave sentimiento de calidez en su nuca, se dispuso a seguir hablando.
“Lan Zhan… Me encuentro bien, estamos en Yiling con Jiang Cheng, y fuimos afortunados
de encontrar personas amables que nos ayudaron. Seguro escuchaste lo que paso en
Yunmeng, pero no debes preocuparte por mí, tu omega está a salvo, pero Jiang Cheng… A-
Cheng está muy lastimado” Susurro Wei Ying, limpiando algunas lágrimas de su rostro con
su otra mano: “Ahora están haciéndole una cirugía, y también están tratando todo su cuerpo.
Y quiero ser fuerte, yo sé que debo hacerlo pero… Ni siquiera sé si mis padres están vivos,
Madam Yu y el tío Fengmian, no sé si ellos sobrevivieron. Sé que debo buscar a mi Shijie,
debo ir a Lanling, pero yo quiero verte… Lan Zhan te necesito”.
Sintiendo como su voz se quebraba con cada palabra que decía, Wei Ying solo pudo pensar
con terror en todas las cosas que le habían pasado, permitiéndose a sí mismo llorar, pues
sabía que estaba en presencia de su alfa, y sabía que Lan Wangji no lo defraudaría.
“Solo dime que hacer, Lan Zhan, si debería volver a Gusu o… Ir a otro sitio. Yo haré lo que
tú me digas, me quedare aquí incluso si me lo pides. Solo… Por favor, ven por mí, tú y
Zewu-Jun, vengan por nosotros. No sé qué hacer ahora Lan Zhan, por favor ven, te lo
suplico… Voy a ser fuerte, lo estoy intentando, pero no soy tan fuerte, no sé cuánto más
poder aguantar, solo quiero verte de nuevo… Te amo demasiado, por favor ven por mi”
Diciendo sus últimas palabras, Wei Ying observó como la pequeña mariposa hecha de su
energía espiritual volaba de su mano, y yendo al este, pronto desaparecía entre las nubes.
Y sentado en un rincón obscuro de ese jardín, Wei Wuxian se quedó llorando.
Capítulo 29.

“Joven maestro Wei, despierte por favor”.


Abriendo los ojos con esas suaves palabras, Wei Ying se sentó de golpe en la cama que
estaba usando, mirando a una de las sirvientas de la casa Wen a su lado.
“El joven maestro Jiang ya ha despertado, y la señorita Wen Qing me ha pedido llamarlo”
Informó la sirvienta.
Sintiéndose aliviado y muy animado, Wei Ying respondió de inmediato: “Muchas gracias, iré
ahora mismo”.
Bostezando un poco, Wei Ying se puso de pie de aquella cama, sintiéndose un poco mareado
y algo cansado todavía. Después de tomar un corto baño y recibir algunas túnicas de la secta
Qishan Wen para cambiarse, Wei Ying se acostó en la cama de la habitación que le habían
cedido en la secta Yiling Wen, y aunque su primera intención fue solo recostarse por algunos
minutos para descansar, al final terminó quedándose dormido.
Ya había amanecido, y por el sol que se filtraba en las ventanas dentro de la secta, Wei Ying
podía calcular que era casi la media mañana. Antes de dormir, la última noticia que tuvo fue
que Jiang Cheng había salido de la operación de forma exitosa, pero que continuaba dormido,
así que lo llamarían para poder verlo después de que Wen Qing curara las demás heridas del
cuerpo del contrario y que este hubiera despertado.
Levantándose de la cama de un salto, Wei Ying camino rápidamente fuera de la habitación en
la que se encontraba, y sin necesidad de ser llevado por alguien más, consiguió encontrar el
camino hacia la habitación de Wen Ning, donde habían operado de emergencia a Jiang
Wanyin, y donde se encontraba en ese instante. Sintiéndose animado, solamente queriendo
ver a su hermano menor de una buena vez, Wei Wuxian se sintió sorprendido cuando vio a
Wen Qing parada en la puerta de la habitación, impidiendo el paso de Wei Wuxian al interior.
Acercándose a la joven con una sonrisa, Wei Ying preguntó: “¿Esta despierto?”
“Lo está, le di una última revisión hace pocos minutos y ya se encuentra estable” Informó
Wen Qing.
“Perfecto, entonces entrare a verlo ahora” Dijo Wei Wuxian algo exaltado, solamente
deseando ver a su hermano para poder saber si estaba a salvo.
Todavía interponiéndose en el camino de Wei Wuxian, Wen Qing dijo: “Debo informarte de
algunas cosas antes de eso”.
“¿No se puede hacer después? Tengo que ver a Jiang Cheng ahora…”
“Debes escucharlo antes de entrar” Dijo Wen Qing con seriedad.
Tras un largo suspiro de resignación, poniéndose frente a la joven del clan Wen, Wei Ying
finalmente dijo: “De acuerdo, ¿De qué se trata?”
Quedándose en silencio por algunos segundos, Wen Qing finalmente dijo: “Conseguimos
sanar la costilla rota de tu hermano, además de que él salió muy tranquilo de la intervención
quirúrgica que le hicimos, también sanamos los golpes y demás heridas de su cuerpo. No creo
que quieras detalles al respecto”.
“No, lo importante es saber que está bien” Dijo Wei Ying: “¿Ahora puedo pasar a verlo?”
Continuando con su explicación, Wen Qing dijo: “Además de las profundas heridas en el
cuerpo de tu hermano, hay una cosa que me preocupa de su estado de salud”.
“¿Qué cosa?”
“Tu hermano fue vinculado con un alfa a la fuerza, ¿No es así?”
Bajando la mirada al recordar eso, un detalle en el cual Wei Ying no había pensado en un
tiempo, el joven omega no pudo evitar presionar sus manos en puños, sintiéndose muy
furioso al recordar aquello que le habían hecho a su hermano.
“Eso es lo que más me preocupa, pues tu hermano ha cambiado parte de su carácter y se nota
muy afectado por la mordida, probablemente por su propio alfa. Cuando existe un vínculo,
los alfas suelen tener más posición sobre sus omegas, sea quien sea que lo haya mordido,
debe estar ejerciendo cierta presión a la distancia sobre él, reclamando a su omega” Explicó
Wen Qing.
“¿Eso qué significa?” Pregunto Wei Ying confundido.
Wen Qing, quien no sabía que Wei Ying estaba vinculado con su alfa, le explicó: “El vínculo
entre un omega y un alfa es muy especial, significa pertenencia. Cuando ambos están
separados, pueden sentir los sentimientos más extremos del otro, si está muy feliz o por el
contrario muy asustado, incluso si siente dolor. Este vínculo también afecta a sus emociones,
lo que significa que tu hermano no podrá volver a amar a nadie más que no sea ese alfa, y si
el alfa lo desea, puede modificar incluso el comportamiento del omega en contra de su
voluntad, que creo que es lo que está haciendo ahora”.
“¿Jiang Cheng ha cambiado su actitud?”
“Me temo que lo ha hecho, y que de alguna forma a la distancia, su alfa ha encontrado una
forma de atormentarlo, probablemente porque ustedes escaparon y él lo necesita de vuelta”
Explicó Wen Qing.
Bufando con molestia, Wei Ying prefirió no decir nada. A pesar de que no podía decirlo,
mientras cubría su espalda con su cabello para cubrir su propio cuello, Wei Wuxian también
estaba marcado, y hace mucho más tiempo que Jiang Waniyin. Sin embargo en todo ese
tiempo, él no había sentido ningún tipo de cambio a pesar de ser un omega, ni se había
sentido influido por Lan Wangji. Así que tomaba como algún tipo de mito las palabras dichas
por Wen Qing, quien era una beta y jamás podría vincularse con nadie.
Encogiéndose hombros, Wei Ying dijo: “No creo que valga la pena hacer tanto alboroto, es
decir… Esto será pasajero, solo debemos encontrar al alfa que se vinculó con Jiang Cheng y
asesinarlo, así mi hermano estará libre de su influencia”.
“Pero no volver a ser un omega libre” Negó Wen Qing.
“¿Cómo que un omega libre?”
“La marca del vínculo funciona diferente para un omega que para un alfa, mientras que el
alfa puede vincularse con una nueva pareja si su omega muere, el omega siempre estará
vinculado a su alfa sin importar lo que le pase al contrario. Eso significa que no importa lo
que hagas, Jiang Cheng está marcado, y le pertenecerá por siempre a quien sea que lo haya
mordido” Dijo Wen Qing con seriedad.
Para todos ellos, la identidad del alfa que había mordido a Jiang Cheng era un misterio. Wen
Ning había abandonado el salón antes de que Jiang Cheng fuera mordido, pues el espectáculo
grotesco le resulto insoportable, así que no pudo darle mucha información a Wei Ying. Así
que según lo que le competía a Wei Wuxian, todas las alfas que estuvieron en ese salón
podían ser los que mordieron a su hermano, sin tener clara la identidad del alfa que mordió a
Jiang Cheng.
Pero sin creer aun en las palabras de Wen Qing, manteniéndose tranquilo Wei Ying aseguró:
“Entiendo, pero aunque es preocupante, supongo que su estado de salud general es lo más
importante ahora, porque debemos irnos de aquí lo más pronto posible para mantenernos a
salvo”.
“¿A dónde planean ir?” Preguntó Wen Qing.
“Debemos ir a Lanling con mi hermana, que hasta donde tengo conocimiento, es mi único
familiar vivo. En Lanling podemos escondernos en la torre Koi, y Jiang Cheng estará a
salvo”.
Suspirando y siendo pesimista, Wen Qing le dijo: “Me temo que tendrás que olvidar tus
planes del viaje por el momento”.
“¿Qué? ¿Por qué?”
“Tu hermano está demasiado débil para viajar, ni siquiera puede ponerse en pie. El viaje a
Lanling desde Yunmeng toma varios días de camino en caballo, a pie puede extenderse a
semanas incluso, caminando y durmiendo a la intemperie; tu hermano no podrá hacer eso en
su condición actual” Negó Wen Qing.
Poniéndose muy serio al enterarse de esa noticia, Wei Ying dijo: “Si, no hay un camino a
Lanling en barco lamentablemente, así que necesito que Jiang Cheng pueda caminar para
llegar hasta ahí ¿Cuánto tiempo debo esperar a que se recupere?”
“Debes esperar a que su costilla rota sane para que pueda viajar sin peligro, así que tal vez
sea un mes o un poco más” Le informó Wen Qing.
Enterándose de esa noticia, Wei Wuxian casi se desmaya por la impresión. Ellos ya no tenían
un hogar, y si ya era dramático tener que esperar los dos solos una semana en un lugar
desconocido, tener que esperar un mes le parecía irreal, un infierno.
Dándose cuenta del susto que había causado en Wei Ying, Wen Qing rápidamente le dijo:
“Descuida, ustedes pueden quedarse escondidos en mi secta el tiempo que necesiten.
Entiendo ahora por qué el heredero Wen Xu los mando con nosotros, así que no planeo
decepcionarlo, y voy a tratarlos a ambos muy bien”.
Negando con la cabeza, Wei Ying dijo: “Eso no es bueno, no está nada bien… Si nos
quedamos aquí hay muchos peligros, incluso de que nos reconozcan o algo así ¿Qué
haremos? No sé cómo podremos quedarnos aquí por tanto tiempo los dos solos…” Susurró
comenzando a angustiarse.
Interviniendo de inmediato, Wen Qing dijo: “Descuida, por favor cálmate. Cuando veas a tu
hermano veremos que hacer, pero no te sientas abandonado, la secta Yiling Wen los apoyara a
los dos”.
Dejándose tranquilizar por las palabras de Wen Qing, esa mujer beta que lo había tratado con
tanto cariño desde que lo conoció, Wei Ying finalmente recupero la calma, y acompañado por
la joven entro en la habitación de Wen Ning, donde Jiang Cheng estaba momentáneamente y
había sido operado.
Entrando en esa habitación, Wei Ying solo se encontró con algunas de las ayudantes de Wen
Qing, quienes estaban limpiando y arreglando algunas de las cosas dentro de la habitación; a
las cuales Wei Ying saludo con una reverencia. Ahora de día Wei Ying podía observar mejor
aquella habitación, la cual se notaba como un pabellón de alguien de alcurnia como el
hermano menor de la líder de la secta, con varios libros de peleas y pergaminos por todos
lados; aparentemente Wen Ning estaba estudiando para ser un guerrero además de un gran
curandero.
Pero dejando de distraerse con cosas sin sentido, pronto Wei Ying enfocó su atención en la
cama de Wen Ning, donde cubierto por unas frazadas, descansaba Jiang Cheng con los ojos
cerrados. Así como le habían prometido, su hermano había recibido un cuidadoso baño
después de su intervención, y él también estaba usando túnicas de la secta Wen, con un
semblante un poco mejor y algunas vendas en su cuerpo, se notaba estable mientras tenía los
ojos cerrados en la cama.
“A-Cheng…” Dijo Wei Ying, abandonando a Wen Qing de inmediato para ir con su hermano.
Decidiendo darles su privacidad, Wen Qing se quedó con sus aprendices cerca de la puerta,
permitiendo que Wei Ying se acercara a su hermano menor, pero quedándose ahí pues debía
asegurarse de que Jiang Cheng no se exaltara para mantener su estado de salud estable.
Llegando a la cama, Wei Ying se sentó al lado de su hermano en esta, tomando una de las
manos de Jiang Cheng con cuidado. Dándose cuenta de que alguien estaba junto a él, de una
forma débil, Jiang Wanyin abrió los ojos, mirando a Wei Ying a su lado.
“A-Cheng, hola, A-Cheng soy yo ¿Puedes reconocerme? ¿Puedes verme bien?” Pregunto
Wei Ying, sin poder evitar exaltarse un poco.
“Wuxian…” Susurro Jiang Cheng, dejando que su hermano se acercara a él.
“Si A-Cheng, soy yo ¿Cómo te sientes?”
Volviendo a cerrar los ojos, Jiang Cheng respondió: “Me duele…”
“Lo sé, te acaban de operar ¿Dónde te duele?” Preguntó Wei Ying preocupado.
“En todos lados… Duele mucho…” Susurro Jiang Cheng.
Jiang Wanyin se notaba muy débil, después de todo lo que había pasado, no tenía fuerzas ni
para sostener las manos de Wei Wuxian, solamente dejando que su hermano lo tocara y lo
cuidara.
Sintiéndose muy triste, Wei Ying dijo: “Descuida, estamos a salvo ahora ¿De acuerdo? No te
preocupes por nada, yo no me separare de tu lado, voy a protegerte, te lo prometo…”
“Lo se…” Susurro Jiang Cheng.
Sin embargo dejando de hablar de un instante al otro, Jiang Cheng prestó atención de
inmediato a la puerta de la habitación, por la cual habían entrado más sirvientes de la secta
Qishan Wen trayendo algunos implementos médicos que Wen Qing les había ordenado,
además del joven Wen Ning, quien también quería entrar para ver cómo se encontraba el
joven maestro Jiang a quien habían rescatado.
Y aunque todos los presentes se notaron muy tranquilos con la situación, cuando Jiang Cheng
vio a Wen Ning poner un solo pie dentro de su propia habitación, esa en la que se
encontraban en ese mismo instante, comenzó gritar aterrado, mirando lleno de pánico al alfa
que había entrado en la habitación.
“¡A-Cheng!” Dijo Wei Ying alarmado, intentando controlar a su hermano.
“¡No! ¡Por favor no!” Grito Jiang Cheng lleno de terror, mirando fijamente a Wen Ning:
“¡Aléjate de mí!”
Sintiéndose muy asustado, siendo la primera vez que un omega demostraba tanto terror hacia
él, Wen Ning miró a su hermana desconcertado, peor tras varios gritos más de Jiang Cheng,
el joven alfa Wen terminó abandonando el lugar rápidamente; asustándose también de Jiang
Cheng y de la forma en la que lo habita tratado.
Tomando a Jiang Cheng de las manos con cuidado, Wei Ying le dijo: “Ya está, se fue, ya
está…”
Sin embargo Jiang Cheng no parecía estar calmado, y a pesar del dolor y de haber salido de
un procedimiento tan complicado, el joven omega siguió gritando con pánico, mientras se
sentaba de golpe en la cama y llevaba sus dos manos a su nuca, alarmando a Wen Qing y a
sus sirvientas.
“A-Cheng, acetate, A-Cheng por favor…” Pidió Wei Ying, dándose cuenta del temor que
demostraban las curanderas de la secta Wen.
Sin embargo Jiang Cheng no parecía estarlo escuchando, y solamente sujetando su nuca con
sus dos manos, en el mismo lugar en el cual Wen Zhuliu lo había mordido, Jiang Cheng
decía: “Por favor sácalo de mi cabeza… Por favor… Por favor sácalo…”
Entendiendo la desesperación de su hermano, Wei Ying se acercó a este y trato de hacerlo
razonar, para tranquilizarlo y tratar de que se acostara de nuevo, preocupado de su estado de
salud. Mientras que Wen Qing, apresurándose, fue con sus ayudantes para pedir que
prepararan algunos sedantes, dispuesta a sedar nuevamente a Jiang Cheng para calmarlo.
“Nos vio a todas desde que se despertó, con nuestras túnicas de la secta Wen a su alrededor,
tocándolo y ayudándolo ¿Tiene que ver con nuestra secta acaso?” Preguntó Wen Qing,
intentando entender por qué Jiang Cheng había reaccionado de esa forma.
“Tal vez no tiene que ver con nuestra secta mi señora, tal vez tiene que ver con que el joven
A-Ning era un alfa…” Sugirió una de las ayudantes de Wen Qing, preparando los sedantes lo
más rápido que podían.
Escuchando esa plática a lo lejos, mientras seguía intentando calmar a Jiang Cheng, Wei Ying
finalmente pudo entender a lo que se estaba enfrentando. Observando a su hermano chillar
del pánico, gritando y llorando desesperado, Wei Wuxian supo que todo lo que Wen Qing le
había dicho antes de entrar a la habitación era cierto, que el omega que tenía frente a sí
mismo no era más el hermano que Wei Ying conoció antes…
“Por favor sácalo de mi cabeza, por favor…” Suplico Jiang Cheng desesperado, mirando a
Wei Ying a los ojos.
“A-Cheng…” Susurro Wei Ying, sin saber cómo tranquilizarlo.
“Tú lo olvidaste, tu siempre me dijiste que no podías recordar nada de lo que te paso esa
noche ¿Por qué yo puedo recordarlo? ¿Por qué? Por favor… Por favor sácalo de mi cabeza…
Por favor…”
Guardando silencio, mientras seguía sosteniendo a Jiang Cheng con suavidad, Wei Ying
sintió una gran furia y dolor extendiéndose en su interior. Y mirando los ojos llorosos y
desesperados de su hermano menor, Wei Wuxian se prometió castigar de la peor manera a
aquellos que se atrevieron a lastimar de esa forma a Jiang Wanyin.
***
“…Así que, solo espero que podamos volver a vernos pronto” Dijo Wei Ying, hablándole
dulcemente a esa pequeña mariposa posada en su mano: “Como sea, debo regresar con Jiang
Cheng para cocinarle la cena, hoy compre buena carne en el mercado, barata pero buena. Te
sorprenderás cuando vuelvas a verme, me he vuelto muy bueno en la cocina, he aprendido
muchas variantes de carne con picante que podemos comer. Así que no lo olvides Lan Zhan,
estoy esperándote aquí, siempre voy a esperarte, por favor… Ven por mí”.
Cerrando los ojos, Wei Ying dejo que la mariposa se elevara de sus manos, y como era usual,
que volara en medio de las nubes hacia el cielo, perdiéndose en dirección al este. Quedándose
en silencio por algunos segundos más, Wei Ying simplemente suspiro, admirando la luna, la
cual por su blanca pureza le recordaba a su alfa.
Tras resignarse a que no tenía más opción que regresar con Jiang Cheng, Wei Ying se sacudió
las manos y comenzó a caminar, decidiendo alejarse finalmente de ese sitio, mientras que
alumbrándose con una linterna de papel conseguía salir de aquel frondoso bosque.
Ya habían pasado un par de días desde que Jiang Cheng y él llegaron a Yiling, y desde
entonces varios cambios tuvieron lugar. Wei Ying entendía que no podía llevar a su hermano
de viaje todavía, el camino a Lanling era a pie, y tardarían más de 10 en llegar desde ese
punto. Jiang Cheng aún estaba recuperándose, no podía ponerse en pie, así que Wei Ying
debía esperar a que su hermano se repusiera para intentar viajar a su lado. Wei Ying sabía que
su única opción era llegar con la única familia viva que él sabía que le quedaba, su adorada
Shijie, pero para llegar hasta ella tendría que esperar más de un mes.
Después de que Jiang Cheng fuera estabilizado por Wen Qing, el propio Wei Wuxian tomó la
decisión de abandonar la casa principal de la secta Yiling Wen. Al inicio Wen Qing quiso
negarse, por el delicado estado de Jiang Cheng, pero Wei Ying no quería arriesgarse. La secta
que Wen Qing dirigía era visitada constantemente por otros miembros de la secta Wen, los
cuales se quedaban de visita en dicho sitio en sus viajes comunes entre Qishan y Yunmeng,
debido a que ese era un puesto fronterizo de la secta Wen. Si alguien reconocía a Wei Ying o
Jiang Cheng, por cualquier accidente o motivo, sería un completo desastre.
Así que aceptando una modesta casa en Yiling, un poco apartada de la ciudad y de la secta
Wen como tal, siendo una residencia escondida en el bosque, Wei Ying aceptó mudarse ahí
de buen agrado. Jiang Cheng ya había sido curado, solo quedaba esperar que sus heridas
sanaran, además de tener ciertas revisiones no tan constantes con los curanderos que lo
trataron; así que Wen Qing los visitaba constantemente para ver a Jiang Cheng. Y en ese
tiempo, además de cuidar de su hermano, Wei Ying hacia pequeños trabajos en la ciudad para
ganarse comida y algunas monedas que estaban ahorrando. No escogía trabajos difíciles,
ayudaba en algunas granjas o vendía pescado en el mercado de la ciudad, pero con ello
esperaba ahorrar suficiente dinero para comprar un caballo para su viaje a Lanling.
Así que dividiendo sus días en medio de esas actividades, trabajando y cuidando a Jiang
Cheng, Wei Ying se preparaba ansiosamente para viajar cuanto antes, desesperado de poder ir
a Lanling para dejar a Jiang Cheng en un lugar donde nadie le hiciera daño.
Regresando a esa pequeña casa en la que ahora se encontraba con su hermano, Wei Ying no
pudo evitar sonreír, viendo como los miembros de la secta Wen se encontraban ahí, curando a
su hermano y haciendo otras labores.
“Perfecto, ahora no tendré que cocinar” Se dijo Wei Ying con felicidad.
Acercándose a la casa, Wei Ying fue recibido por Wen Qing, quien fue a hablarle
directamente: “¿Dónde estabas? Llegamos aquí hace un buen rato…”
“Estaba viendo el lugar en el que pescare mañana, debo vender un buen número de pescados
en el mercado antes del mediodía por un encargo” Aclaró Wei Ying con una sonrisa.
Poniendo los ojos en blanco, Wen Qing replicó: “Ya te dije que no debes trabajar, solo
pídeme el dinero y la comida que necesites, yo puedo dártelo”.
Negando con la cabeza, Wei Ying replicó: “No puedo hacer eso. Estoy en una situación
complicada y lo entiendo, pero aun mantengo mi honor, así que yo quiero encargarme de
algunas cosas mientras estoy aquí, no puedo depender de ti o de tu secta”.
Bufando, Wen Qing volvió a refunfuñar, enfadada por el comportamiento del omega.
Sonriendo felizmente, Wei Ying solo pudo observar a los miembros de la secta Wen, quienes
se movían por toda la pequeña casa, seguramente tratando las heridas de Jiang Cheng. Y
aunque Wei Wuxian no estaba seguro, él podía apostar que Wen Qing les trajo algo para
cenar a ambos desde su secta.
Suspirando con cierta resignación, ablandando su expresión, Wen Qing volvió a insistir: “Wei
Wuxian, no estoy bromeando contigo, tu no deberías trabajar y lo sabes”.
“No son trabajos tan pesados, soy un cultivador después de todo…”
“En tu estado, sin importar si eres un cultivador o no, es muy peligroso” Dijo Wen Qing con
mucha seriedad.
Sin poder evitar reír, entendiendo que Wen Qing sabia su secreto, Wei Ying trató de pasar el
tema preguntando: “¿Has visto a Jiang Cheng? ¿Cómo se encuentra?”
Suspirando, entendiendo que Wei Ying no quería hablar más al respecto, Wen Qing
respondió: “Se encuentra estable, le quitare los puntos al final de la semana”.
“Eso suena doloroso…”
“Usare anestesia local por si acaso, pero él estará bien, eso significa que su herida de la
cirugía esta mejor” Aclaró Wen Qing.
Volviendo a ponerse algo nervioso, Wei Ying preguntó: “Y respecto al tiempo de
recuperación…”
“Sigue siendo el mismo, un mes y medio, tal vez dos”.
Suspirando frustrado, Wei Ying se quejó diciendo: “Es demasiado tiempo, está tomando
demasiado…”
“Debes ser paciente, las heridas y las contusiones tu hermano son severas, y por las
condiciones que tenemos no podemos darle el tratamiento adecuado todo el tiempo. Se
recuperara, pero tardara un tiempo” Aclaró Wen Qing.
Bajando la mirada, Wei Ying susurró: “A veces llora en la noche, deberías darle más
sedantes”.
Notándose incomoda, Wen Qing dijo: “No creo que le duela, no físicamente; debe estar
llorando por su alfa”.
“Voy a matar a ese bastardo…”
Wen Qing entendía la molestia de Wei Wuxian, quien viendo a su hermano sufrir de esa
forma por el alfa que lo mordió sin su permio, quien seguramente lo llamaba usando su voz
de alfa para lastimar a Jiang Cheng usando el vínculo, era comprensible que quisiera
venganza por ello.
“Te daré algo para que Jiang Cheng pueda dormir, no será tan fuerte como un sedante, pero si
será algo que lo ayude a conciliar más rápido el sueño” Le ofreció Wen Qing: “Tal vez si
duerme pronto, no tendrá que escuchar a su alfa llamándolo por las noches”.
Sonriendo ligeramente, tranquilizándose, Wei Ying dijo: “Gracias señorita Wen”.
Sonriéndole también, Wen Qing guardó silencio, mientras escuchaba los apresurados pasos
de una de sus ayudantes acercarse a ellos por la espalda.
Interrumpiendo la charla, una de las aprendices de la secta Wen le dijo a Wen Qing: “Líder de
la secta, necesitamos su ayuda para el vendaje del paciente”.
“¿Ya terminaron de limpiar y sanar sus heridas? Revisare su trabajo y lo vendare entonces”
Aceptó Wen Qing, girándose para entrar en la pequeña casa.
Sin perder su sonrisa, observando como Wen Qing entraba en su nuevo “hogar”, Wei Ying se
dispuso a seguirla. Sin embargo, deteniéndose aun debajo de la luz de la luna, Wei Ying pasó
una de sus manos por su nuca con suavidad, tocando la marca que Lan Zhan había hecho
sobre su piel, volviendo a pensar en él.
Ambos tenían ese vínculo que los unía, Lan Wangji era su alfa, y aunque Wei Ying ya estaba
haciendo planes para ir a Lanling con Jiang Cheng, aún tenía la pequeña esperanza de que
otra cosa sucediera: Que Lan Wangji apareciera en Yiling para salvarlo y llevarlo de vuelta a
Gusu.
Wei Ying no dudaba de su alfa, jamás podría dudar del amor que ambos se tenían. Sin
embargo, durante todos esos días, Wei Wuxian había estado enviando incesantes mariposas
mensajeras, más de una al día incluso. Pero sin importar el paso del tiempo, Lan Wangji no
había respondido ninguno de sus mensajes.
Su alfa no se había comunicado con él desde hace mucho.
Capítulo 30.

Con un suspiro, Wei Ying salió del agua, poniendo en una tela los dos últimos peces que
consiguió sacar del lago. Para Wei Ying, ese trabajo no era la gran cosa, ya que él había
pasado toda su vida en Yunmeng, donde los niños aprendían a nadar incluso antes de
caminar, aprendiendo a bucear y cazar peces desde una edad corta. Sin embargo en Yiling, a
pesar de estar al borde del lago, no era actividad tan habitual como en Lotus Pier, así que los
habitantes de esa pequeña ciudad solían tener algunas dificultades para pescar, razón por la
que ese trabajo era tan requerido en el mercado del lugar.
Sacudiéndose las manos con un suspiro, Wei Ying se giró un instante, mirando a lo lejos por
el recorrido del propio lago. Desde ese lugar Wei Ying no podía ver Lotus Pier, sabía dónde
estaba, pero por la ubicación de la playa, su hogar se ocultaba a lo lejos. Wei Ying prefería no
pensar mucho en Lotus Pier, ya que eso le daba un extraño sentimiento de agobio y tristeza,
pensando en el triste destino que sus padres debieron haber sufrido.
Decidiendo dejar de pensar, Wei Ying acomodo los pantalones debajo de sus túnicas, y
secando un poco el agua de sus ropas, se puso las botas viejas que compró. Esa era la ropa
más barata que Wei Wuxian alguna vez pudo usar, en su hogar el usaba túnicas de buena
calidad, no tan caras como las túnicas de la secta Jin o la secta Lan, pero si lo suficientemente
buenas como las que provenían de una familia adinerada.
Wen Qing quiso darle túnicas de su propia secta, que Wei Ying usara túnicas de la secta Wen,
pero Wei Wuxian se negó en rotundo. No quería llamar la atención en Yiling, ya era bastante
raro mirar a un omega solo en las calles, el cual pedía trabajos y buscaba dinero, en la
mentalidad de esas personas Wei Ying no debería estar en las calles trabajando por más pobre
que fuera, debía buscar un esposo para tener hijos y que este alfa lo apoyara
económicamente. Por esa misma razón a Wei Ying se le negaban muchos trabajos, lo creían
muy débil por ser un omega, sin embargo él se las arreglaba para encontrar buenas formas de
ganar dinero en la ciudad, con la ayuda de las amables personas en la ciudad.
Wei Ying quería usar túnicas baratas para no llamar la atención, si los ciudadanos de Yiling
ya hablaban de él solo por ser un omega solo en las calles, no quería armar más revuelo
siendo un omega solo con las túnicas de la secta Wen, lo que despertaría más habladurías y
posibles problemas. Wei Ying permitía que Wen Qing vistiera con túnicas caras a Jiang
Cheng, porque este no salía jamás de aquella cabaña a las afueras, pero Wei Ying gastaba
parte del dinero que ganaba trabajando para comprarse ropa barata en la ciudad, solo para ir a
trabajar.
Ajustando la cinta en su cabello, la cual solo recogía parte de su flequillo dejando el resto de
su cabello libre en su espalda, debido a que él debía ocultar la mordida de su vínculo a toda
costa en su espalda, Wei Ying contó y reviso los 20 peces que pudo sacar del lago, dándose
cuenta que eran de muy buena calidad, conseguiría un buen dinero por ellos. Cerrando la tela
donde los llevaba, Wei Ying los colgó en su espalda, y poniéndose un sobrero de paja,
comenzó a caminar en dirección al mercado. Ya era media tarde, había pasado casi todo el día
pescando, pero Wei Ying sabía que valdría la pena por el dinero que recibiría.
Se sentía algo cansado y mareado, pero por la hora él calculaba que podría regresar a su
“hogar” a descansar antes de preparar algo de comer para sí mismo y Jiang Cheng, planeando
comprar algunas otras cosas en el mercado antes de irse, como algunos chiles verdes con los
que planeaba hacer una sopa o unas raíces picantes que quería probar; cosas deliciosas que no
había en Yunmeng. Y aunque incluso Jiang Cheng había comenzado a quejarse del sabor de
las comidas de Wei Ying, a este no le importaba demasiado, pues a él le gustaba lo que
cocinaba.
Tras una caminata algo larga, Wei Ying finalmente llegó a la ciudad de Yiling, y cargando los
pesados peces en dirección al mercado, por un instante el joven omega se cruzó con un grupo
de señoritas omegas, que pasaron junto a él riendo. Al verlas, Wei Ying solo pudo pensar en
su hermana, su quería Shijie.
Todo ese tiempo Wei Ying solo había estado mandando mensajes a Lan Wangji, pues no
podía decirle nada a su Shijie. Si le hablaba a su adorada hermana, tendría que decirle sobre
el estado de Jiang Cheng, contarle sobre lo que le había pasado, y Wei Ying… No se sentía
capaz. Jiang Cheng juraba que sus padres estaban muertos, así que si su hermano menor tenía
razón, Wei Ying había fallado a la última petición de Madam Yu. Y eso lo hacía sentirse
avergonzado hasta casi querer morir, pues no pudo proteger a Jiang Cheng como le habían
pedido.
Prefería no preocupar a su Shijie, por lo menos hasta que fuera el momento de volver a
encontrarse con ella en Lanling.
Entrando en el mercado, con una gran sonrisa, Wei Ying se acercó al área donde vendían
pescados, entregando su gran cacería a una amable vendedora, quien le encargaba los peces
de vez en cuando.
“El joven maestro es muy buen pescador, todos sus productos son excelentes” Lo halagó la
mujer.
Riendo con modestia, Wei Ying respondió: “Los peces son más fáciles de atrapar en el fondo
del lago, solo se debe nadar bien…”
Mientras recogía los peces en una cesta, la vendedora le dijo a Wei Ying: “Agradezco los
servicios del joven maestro, pero debería mantenerse cerca de Yiling por un par de días, ir al
lago no es tan bueno por ahora para los omegas”.
“¿Por qué?”
“Los miembros de la secta Qishan Wen llegaran a Yiling pronto, seguro pasaran por el puesto
fronterizo de la secta Yiling Wen en sus botes. Después de la cosa despreciable que todos
dicen que el hicieron al heredero de la secta Jiang antes de matarlo, cualquier omega está en
peligro a su lado” Dijo la mujer, demostrando preocupación por Wei Ying.
“Matarlo…” Susurro Wei Ying.
¿Ahora las demás personas pensaban que Wei Ying y Jiang Cheng estaban muertos? Era
Obvio que las demás personas y demás sectas se habían enterado de lo ocurrido en Lotus
Pier, no solo de su destrucción, también de lo que Wen Chao le hizo a Jiang Cheng. Wen
Chao hizo algo tan horrible en frente de muchas personas, muchos soldados de su propia
secta, así que aunque él hubiera querido mantenerlo como algo privado para intentar
mantener la poca decencia que le sobraba, muchas personas lo sabían, y los rumores corrían
rápido.
Sin embargo el rumor de su “muerte”, a Wei Ying no le parecía algo inventado por los
soldados de la secta Wen, en verdad le parecía algo inventado por Wen Chao o Wen Ruohan.
Después de lo que paso y de todo lo que hicieron, inventar que Jiang Cheng y él estaban
muertos era mucho mejor que admitir que escaparon, porque además de ser juzgados por
inmorales, también lo serian por incompetentes al permitir que sus dos rehenes y única forma
de control sobre la secta Yunmeng Jiang escaparan.
Lo cual a Wei Ying se le hacía sumamente gracioso.
Sonriendo amablemente a la señora del mercado, Wei Ying dijo: “Descuide señora, los Wen
no podrán hacerme nada”.
Manteniendo cierto silencio, escuchando desconfiada las palabras de Wei Ying, la mujer dijo:
“Aun así ten cuidado, ya nos dijeron que los barcos y miembros de la secta Wen estaban
cerca de la ciudad, seguro pasaran por aquí en un par de días a lo mucho”.
Recibiendo finalmente los peces, la mujer saco de su dinero una cuantiosa suma de dinero
para Wei Ying, entregándole incluso una propina, pues el pequeño omega se le hacía adorable
a la mujer. Recibiendo el dinero con sorpresa, Wei Ying rápidamente hizo una reverencia, con
esa suma podría comprar comida para una semana y ahorrar el resto, por lo cual estaba
sumamente agradecido.
“Muchas gracias señora” Dijo Wei ying sinceramente contento.
“Cuídate mucho, pequeño” Pidió la mujer del mercado.
Sonriendo, Wei Ying guardó con seguridad el dinero en sus túnicas, comenzando a pensar en
que compraría en el mercado. Y pensando que incluso podría comprar un poco de pescado, se
quedó en la tienda mirando los productos, analizando si tal vez sería mejor ir a pescar algo
para sí mismo o comprarlo, mientras que sin quererlo, escuchó la plática de otros
compradores en una tienda cercana.
“Terribles circunstancias” Escuchó que decía aquel anciano.
Fingiendo ver algunos peces en la tienda, atento a esa conversación en la tienda a su lado,
Wei Wuxian presto mucha atención.
“Yo también lo escuche señor Mado” Dijo la vendedora de especias, preparando la compra de
su cliente: “Los dos herederos de la secta Jiang muertos, todo Yunmeng se ha puesto de luto.
Y sus padres escondidos en Lanling deben estar desconsolados”.
Asintiendo con la cabeza, el anciano respondió: “Todos rumorean cosas asquerosas que le
hizo la secta Wen, pero al ser omegas, supongo que su destino fue muy obscuro. Debemos
encender velas y orar por esos pobres niños”.
Suspirando con cierta calma, Wei Ying se tranquilizó al saber que todos pensaban que Jiang
Cheng y el mismo estaban muertos, pues así podrían pasar desapercibidos por más tiempo,
por lo menos hasta que Jiang Cheng se recuperara lo suficiente y pueda viajar a Lanling a pie.
Sonriendo con cierta pena, la joven vendedora respondió: “Una tragedia, pero Jiang
Fengmian y Yu Ziyuan aún son bastante jóvenes, pueden tener un nuevo heredero y
reconstruir su secta, además de que Jiang Yanli también sigue con vida y uno de sus hijos
puede ser el heredero de su anterior secta. Circunstancias más favorables que las de la secta
Lan, por ejemplo”.
“Una absoluta tragedia” Afirmo el anciano, diciendo: “La secta Lan ahora no tiene más
herederos vivos”.
Sintiendo su corazón detenerse por un instante al escuchar esas palabras, Wei Wuxian se giró
de inmediato en dirección al anciano y la vendedora, incrédulo.
“¿La secta Lan? ¿Qué paso con la secta Lan?” Pregunto Wei Ying con seriedad.
Sorprendido por aquella intervención, el anciano se giró a ver a ese joven omega, y pensando
que sería solo un pescador por sus ropas ligeramente andrajosas, le dijo: “El Receso Entre las
Nubes fue completamente quemado”.
“¿Y los miembros de la línea sucesoria?” Pregunto Wei Wuxian, comenzando a temblar, sin
poder creer lo que oía.
“Fue Wen Ruohan quien invadió Gusu con su ejército, así que siendo más cruel y efectivo
que sus dos hijos quienes invadieron Yunmeng y Qinghe, finalmente cumplió su promesa;
decapito y descuartizo a QingHeng-Jun, fragmentando su espíritu e impidiendo que vuelva a
reencarnar”.
Recordando a ese amable hombre, quien de forma dulce le había hablado sobre el amor y su
secta, invitándole un té refrescante, Wei Wuxian sintió su corazón romperse, sin poder creer
que estuviera muerto.
“Tratando de defender a su padre, Lan Xichen fue herido de muerte por Wen Ruohan y su
ejército, recibiendo una gran herida cerca de su corazón, para luego ser capturado por los
Wen y llevado a Qishang como un prisionero”
Sonrisas amables y el olor de la brisa del mar, recordando lo dulce que podía ser Lan Xichen
con su hermano, y lo mucho que este parecía querer a su alfa; Wei Wuxian sintió como una
lagrima se deslizaba por su mejilla.
“Y Lan Qiren… Supongo que ahora tiene el peor destino de todos, pues fue tomado como
prisionero por Wen Ruohan, y también fue llevado a Qishang a la fuerza, para convertirse en
la nueva esposa del líder de la secta Wen; lo obligaran a casarse con el asesino de su hermano
y su sobrino”.
Ya sin poder evitar llorar, entrando en el más profundo pánico, Wei Ying recordó a ese
enfadoso maestro omega, que tantas veces lo había castigado, pero que aun así apreciaba;
pensando en el triste destino que tenía por delante.
“¿Y Hanguang-Jun? ¿Qué paso con Lan Wangji?” Pregunto Wei Wuxian, llorando
desconsolado.
Muy confundido, viendo a ese andrajoso omega llorando por una secta tan poderosa, el
anciano respondió: “Según los rumores, intentó proteger la biblioteca de su secta, así que
murió quemado. Supongo que es cierto porque nadie lo ha visto desde entonces, así que si no
murió quemado en la biblioteca, seguramente murió con todo el resto del consejo de Gusu
Lan, quienes fueron ahorcados y ahora tienen sus cuerpos exhibidos en las puertas de su
clan”.
Sin decir una palabra, Wei Wuxian solo pudo llevar una de sus manos a la marca de su nuca,
sintiendo el dolor más profundo que alguna vez tuvo en su vida.
***
Quedándose en silencio al lado de su madre, o aquella que consideraba su madre, Wei
Wuxian solo podía sentirse nervioso.
“Estas embarazado” Le dijo Madam Yu, mirándolo de reojo.
Siendo tomado por sorpresa con esas palabras, las cuales Wei Ying no sabía cómo negar, se
giró en dirección a la mujer, sumamente sorprendido. Sin embargo Madam Yu no parecía
nada sorprendía o molesta, sin mirarlo tampoco, con la mirada fija en la hermosa vegetación
de Gusu, mientras que los demás miembros de la secta Jiang a su espalda estaban jugando
con el pequeño Jingyi, en medio de risas y dulces palabras.
“¿No lo sabias?” Pregunto Madam Yu tras algunos segundos.
Notándose desconcertado, Wei Ying susurró: “No… Es decir, lo suponía, pero no estaba
seguro porque… No me había embarazado antes”.
“Tu olor está cambiando al de una madre Wei Wuxian, por las feromonas que siento en ti
ahora mismo, creo que vas a tener un pequeño omega; algo bastante inusual, ya que será el
hijo de un Lan”.
Sintiéndose mareado con todas esas palabras, Wei Wuxian bajo sus manos a su abdomen,
tocándolo con sus dedos de forma temblorosa, pensando en todo lo que había sucedido, y
contando los días desde su estancia en la cueva, se dio cuenta de que pronto cumpliría casi un
mes de embarazo.
“El hijo de Lan Zhan…” Susurro Wei Ying, presionando la tela de sus túnicas con suavidad
entre sus dedos.
Mirando al menor de reojo, Yu Ziyuan no hizo ningún comentario brusco, y fingiendo
acariciar a ese omega, levanto ligeramente su cabello, mirando la marca en su nuca por un
segundo: “No puedes decirle a tu prometido”.
“¿Qué? ¿Por qué no?” Pregunto Wei Ying, sumamente confundido.
“Están vinculados, tu alfa ahora será mucho más protector y posesivo contigo si se entera de
que estas embarazado, no te dejara salir de Yunmeng o de su protección, tu alfa no podrá
contener sus instintos protectores contigo; eso complicara las cosas”
“¿Entonces qué debo hacer?”
“Tú no debes hacer nada, déjamelo todo a mi” Pidió Yu Ziyuan, girándose para ver a Wei
Wuxian a los ojos: “Yo me encargare de que tu boda sea programada para no más de dos
meses, cuando tus feromonas no cambiaran tanto por el embarazo y aun podremos engañar a
todos. Después de eso voy a mandarte lejos, lo más lejos que pueda, y tendrás que encargarte
de parir muy lejos de cualquier lugar y quedarte ahí con el niño por un par de meses antes de
volver, para intentar despistar a los demás líderes de la fecha exacta de tu embarazo. Si
alguien se entera…”
“Seré condenado a muerte” Dijo Wei Ying con seriedad.
“Oculta tus feromonas todo el tiempo, y quedare junto a Jiang Cheng, no importa lo que pase;
si están juntos tu aroma será menos fácil de identificar. Nadie puede saberlo, nadie más que
nosotros, ni tu tío ni tus hermanos, no puedes correr riesgos” Le indico Yu Ziyuan.
“Pero yo sé que A-Cheng no dirá nada…” Se negó Wei Ying, queriendo decirle a su hermano
menor.
“A-Cheng tiene un alfa el cual te condenara a muerte si lo sabe, y Yanli también. No puedes
pedirle a tus hermanos que guarden secretos a sus alfas, porque estarías interfiriendo en sus
matrimonios ¿Entiendes lo importante que esto, Wei Ying? Estoy hablando muy en serio,
porque si alguien se entera de que estas embarazado… Seré yo quien deba cortar tu cuello
para ejecutarte por ello”.
Según las tradiciones, era el alfa líder de la secta de proveniencia del omega el encargado de
ejecutarlo como su castigo; siendo ese alfa Yu Ziyuan por parte de la secta Yunmeng Jiang.
Así que notando el dolor y la preocupación de Madam Yu por solo pensar en hacer aquello,
Wei Ying comprendió que no podía decírselo a nadie, que solo podía ser un secreto entre
ambos; solo para no lastimar a esa mujer alfa.
“¿Está enfadada por esto?” Pregunto Wei Wuxian.
“No” Dijo Yu Ziyuan, siendo muy sincera: “Con tu destinado, me sorprende que no haya
sucedido antes en realidad. Pocos encuentran a su pareja destinada en esta vida, así que no
entienden los profundos sentimientos que te carcomen al estar cerca de ellos, tanto de amor
como de dolor al no tocarlos, así que no te culpo por ello. Y aunque no debería decírtelo,
muchas felicidades A-Xian, tienes al heredero de nuestra secta en tu vientre, que tengas un
embarazo prospero”.
Sonriendo muy feliz, Wei Wuxian pregunto: “¿Por qué no debería decírmelo?”
“Porque es un secreto, imbécil”.
Riendo aún más, Wei Wuxian olvidó por completo aquella situación, pudiendo únicamente
sonrojarse por esto. Mientras que Madam Yu suspiro con preocupación, dudando seriamente
respecto a que Wei Wuxian pudiera mantener la boca cerrada respecto a su embarazo.
“No podre estar presente en el parto, y no poder sostener tu mano mientras lloras” Se lamentó
Yu Ziyuan en un suspiro, mirando al contrario de reojo de nuevo: “Así que pídele a ese
estúpido alfa tuyo que lo haga bien, que te consuele y te cuide bien; si le pasa algo a mi nieto
o a mi hijo, al que ejecutare será al tan famoso Hanguang-Jun”.
“No debe preocuparse por eso mi señora, le prometo que mi alfa me cuidara, aunque no debo
prometérselo, Lan Zhan lo hará aun si no se lo pido”.
Sonriendo ligeramente por un segundo, Yu Ziyuan le pidió a Wei Ying: “Ten una vida feliz al
lado de tu destinado mi querido, disfruta de tener hijos a su lado, y conviértete en el mejor
cultivador que la historia de Yunmeng ha conocido”.
Arañando la marca en su nuca con todas sus fuerzas, hasta el punto que sentía su piel sangrar
y arder, Wei Wuxian solo podía repetir esas palabras una y otra vez en su cabeza.
“Ten una vida feliz al lado de tu destinado, mi querido…”
Mientras aquel recuerdo se desvanecía de su cabeza, con la amable Madam Yu a su lado en
Gusu, escuchando las risas de su pequeño sobrino detrás de su espalda, y sabiendo que su alfa
y su hermano estaban a salvo; Wei Wuxian se sentía en una pesadilla.
“Por favor funciona, por favor” Suplico Wei Ying entre sollozos, arañando una y otra vez la
marca en su nuca, esa que Lan Wangji había hecho hace tanto: “¡Por favor!”
No podía sentirlo, no podía sentir nada. Y aunque esto había sido normal para él desde hace
muchos días, sabiendo que su alfa podía estar muerto y que por eso no lo sentía, no pudo
evitar desesperarse, intentando obligar a su omega a sentir a Lan Wangji.
“¡Lan Zhan! ¡Por favor, por favor, por favor! ¡Solo dime algo! ¡Por favor haz algo!” Grito
Wei Wuxian sumamente aterrado, cansado de sentir su propio dolor.
Quería sentir a su alfa, aun si dolía, quería sentir a Lan Wangji.
Con sus dedos manchados de su propia sangre, de forma temblorosa, Wei Wuxian bajo sus
manos a su propio abdomen, tocándolo con cuidado ¿Cuántos días llevaba ya de embarazo?
No podía estar seguro, sin embargo dándose cuenta de que ya no podía controlar sus
feromonas e incluso betas como Wen Qing se daban cuenta de su estado, supuso que rozaba
los cuatro meses. Cayendo de rodillas sobre la tierra de aquel campo desierto, Wei Wuxian
solo pudo gritar lleno de pánico, pensando en su alfa y en su propio hijo. Ya no tenía una
salvación, pues si su alfa estaba muerto en verdad, cuando el embarazo fuera ya imposible de
ocultar, él sería asesinado con su hijo.
Así que entando en desesperación, temblando de solo pensar que podrían matar a su hijo, lo
único que le quedaba de Lan Zhan, quiso correr lejos, huir y esconderse, vivir una vida de
vergüenza como un omega soltero solo por mantener a su hijo con vida.
Pero girando el rostro, mirando la casa de madera donde se quedaba con Jiang Cheng, supo
que no podía hacerlo.
Su hermano, en ese estado… Estaba indefenso ante todos y todo. Así que Wei Ying
definitivamente debía protegerlo y cuidarlo.
Así que recobrando la compostura, decidiendo seguir solo por su hijo, limpio las lágrimas de
sus mejillas, poniéndose de pie para regresar a la casa donde estaba Jiang Wanyin.
Debía cocinar la cena para su hermano.
Capítulo 31.

Sollozando, Wei Ying observó la bonita mariposa de color dorado que descansaba en su
mano, la cual estaba hecha de su energía espiritual. En silencio, se quedó mirando la
mariposa mensajera por varios minutos en silencio, sin saber bien que podía o debía decir.
“¿Estas aun ahí?” Preguntó Wei Ying, mirando fijamente la mariposa.
Sabía que era una mala idea, lo supo desde el minuto que dejo la cabaña en la que Jiang
Cheng y el mismo vivían, pero ya no podía aguantar más. Jiang Cheng aún se encontraba
muy débil, y necesitaba calma para recuperarse, así que a pesar de que Wei Ying sabía lo que
había pasado con todos los Lan, no podía llorar frente a su hermano, no podía hacer algo
como eso para preocuparlo. Así que a pesar de todo el dolor que sentía en su corazón, Wei
Ying debía sonreír todo el día frente a Jiang Cheng, muriendo del dolor de pensar que su alfa
estaba muerto pero sin demostrarlo.
“¿Qué debería decirte ahora? Lan Zhan… Estoy perdiendo la esperanza” Susurro Wei Ying,
mirando la mariposa fijamente: “¿Hay una vida después de la muerte? Hay tantas cosas que
aún no he hecho contigo, tantas cosas que no te he dicho, que yo solo… Quisiera más tiempo,
quisiera tener más tiempo a tu lado, te necesito tanto… Por favor… Es solo que todo esta tan
mal ahora, yo solo… Tal vez si te doy un abrazo entonces todo estará bien…”
En ese punto, Wei Ying no estaba seguro de si estaba hablando con Lan Zhan o si estaba
rogando a algún tipo de poder superior, en medio de sus sollozos para intentar suplicar por la
vida del hombre que amaba tanto, suplicando por más tiempo.
“Ven por mi Lan Zhan, no importa cuando, no me importa si tardas mucho, solo… Ven por
mí, por favor no me abandones, yo voy a esperarte siempre… Vamos a esperarte por
siempre” Susurró Wei Ying, tocando su abdomen suavemente: “Aun después de la muerte, yo
solo voy a amarte a ti por siempre. Te amo, Lan Zhan”.
Y sintiendo como una gota de agua caía sobre la palma de su mano desde el cielo, Wei Ying
cerró los ojos y dejo que la mariposa se elevara de su mano. Aquel era un día muy malo,
desde la noche anterior que el cielo se había cubierto de nubes negras, que amenazaban con
una gran tormenta. Wei Ying sabía que no debía salir ese día, mirando el mal clima y las
pequeñas tormentas aisladas que se dieron durante todo el día, se repitió mil veces que debía
quedarse en casa con Jiang Cheng; pero no pudo hacerlo.
Viendo como la gotas de agua comenzaban a caer con más fuerza, a pesar de que él hubiera
querido quedarse ahí por más tiempo para poder llorar solo, Wei Ying finalmente soltó un
suspiro de fuerte resignación, y sacudiendo su sombrero de paja, volvió a ponerlo sobre su
cabeza para comenzar su regreso a la pequeña cabaña que estaba en el bosque. Para ello
tendría que cruzar toda la ciudad de Yiling en medio de la lluvia, con lo cual seguramente se
mojaría, pero eso poco le importaba en ese instante, dejándose llevar por la desesperanza y el
dolor que estaba sintiendo.
Wei Ying sabía que no podía salir esos días, porque por sí mismo había podido comprobar
que los miembros de la secta Wen habían llegado a Yiling. Por un mensajero de Wen Qing, la
propia líder de la secta Yiling Wen le informó que varios miembros de la secta estarían en la
ciudad, así que por su propia seguridad y la de Jiang Cheng no le recomendaba salir a ningún
lugar. Y aunque por un par de días Wei Ying siguió aquellas instrucciones a la perfección,
tras aguantar tanto el dolor, simplemente no pudo más y tuvo que buscar a su alfa, ya que
necesitaba hablar con él y mandarle un mensaje.
Con la mirada baja, Wei Ying caminó lentamente por la ciudad de Yiling, mientras la
tormenta aumentaba y caían gotas al piso de forma abundante, lo que hizo que todos los
comercios cerraran y todas las personas regresaran a sus casas; dejando a Wei Ying solo por
las calles.
Perdido en sus pensamientos, Wei Ying levanto la mirada al cielo por un instante, cuando por
si propio instinto se dio cuenta de que había un aleteo muy extraño sobre su cabeza. Así que
levantando la mirada, a pesar de la lluvia, Wei Ying observó la mariposa mensajera que él
había mandado hace pocos minutos. Eso se le hizo muy extraño, ya que por lo general la
mariposa se metía entre las nubes para ir en dirección al este, sin embargo en esta ocasión
estaba volando bajo, y aparentemente seguía la misma dirección que Wei Ying.
Preguntándose si tal vez era por la lluvia o por otro factor, Wei Ying siguió caminando
mientras miraba la mariposa fijamente, prácticamente cruzando la ciudad entera de esta
forma. Sin embargo cuando casi llegó al final, se detuvo de golpe y cerró los ojos.
Como si fuera una ilusión, por un instante Wei Ying sintió un aroma muy dulce y
característico, el olor del sándalo. Abriendo los ojos de golpe y mirando al frente, Wei Ying
sintió como nuevas lágrimas se derramaban por sus mejillas, pero en esta ocasión eran
lágrimas de felicidad.
“Lan Zhan…” Susurró Wei Ying incrédulo.
Frente a sus ojos, cubiertos con sombrillas blancas, miembros de la secta Gusu Lan
avanzaban entre los arboles a las afueras de Yiling con rapidez, siendo guiados por el apuesto
Hanguang-Jun, quien con una ligera cojera parecía estar muy apurado mientras caminaba.
“¡Lan Zhan!” Grito Wei Ying con todas sus fuerzas.
Pero nadie pudo escucharlo, pues el ruido de la fuerza era demasiado fuerte. Wei Ying no
tenía idea de lo que estaba pasando, ni siquiera sabía si aquella imagen era una especie de
ilusión, pero sin importarle si se trataba de un fantasma incluso, Wei Wuxian estaba decidió a
encontrar a su alfa, para mirarlo y decirle cuanto lo amaba una vez más.
Así que quitándose el sombrero de paja para poder ver mejor, Wei Ying comenzó a correr por
la ciudad de Yiling, buscando a su alfa al cual había podido ver a lo lejos.
***
Parándose frente a esa pequeña cabaña entre los árboles, Lan Wangji dijo con seguridad: “Es
aquí”.
Mirando ese lugar tan sucio y rustico, Su She preguntó: “¿Estás seguro?”
“Mmm… Puedo oler las feromonas de Wei Ying en todo este sitio” Dijo Lan Wangji con
seguridad.
Deteniéndose fuera de esa vieja casa, todos los miembros de la secta Gusu Lan y Moling Su
se aseguraron de que fuera un lugar sin la intervención de la secta Wen, por lo menos en
apariencia. Así que mirando a Lan Wangji y Su She, los líderes de esa expedición, esperaron
a que ellos dijeran algo antes de entrar.
“Debes entrar tu” Dijo Lan Zhan, mirando a Su She: “Wei Ying me dijo que Jiang Wanyin
teme de los alfas”.
Notándose algo incómodo por esa petición, Su She dijo: “¿Pero qué le diré al joven heredero
de la secta Jiang? Ni siquiera tuve una plática en privado con él en toda mi vida, no sé cómo
podría convencerlo de que venga conmigo…”
“Solo dile que la ayuda ya vino, y que estamos aquí para rescatarlo y llevarlo a Lanling.
Además de que… Debes buscar a Wei Ying y decirle que estoy aquí” Pidió Lan Wangji,
demostrando lo difícil que era aquella situación para él.
De haber sido una decisión de Lan Zhan, este mismo habría ido por su cuenta a esa cabaña,
entrando en esta para buscar a su omega. Sin embargo quería hacer las cosas de forma
correcta, después de escuchar por los mensajes de Wei Ying toda la complicada situación,
entendía que si entraba en ese sitio podría asustar a Jiang Cheng, y eso complicaría mucho las
cosas. Así que controlando a su alfa, quien le exigía que entrara en esa cabaña para poder
tener a su omega de nuevo en sus brazos, prefirió mandar a Su She, su mejor amigo y la
persona en la que más confiaba. Después de todo, Lan Wangji solo debía esperar unos
segundos más, seguro de que Su She sacaría de inmediato a Wei Ying para poder abrazarlo
por fin.
Entendiendo la situación, Su She escogió a dos de sus guardias de confianza, y con una
simple orden, les pidió entrar primero, con cierta cobardía. No estaban seguros de lo que iban
a encontrar en ese sito, pero prefería mandar a sus empleados antes de arriesgarse a sí mismo,
así que detrás de sus dos guardias, Su She entró en esa cabaña que se encontraba obscura en
ese instante, comenzando a recorrerla en búsqueda de los dos omegas que supuestamente
habitaban en ese sitio.
Mientras que Lan Wangji, de forma muy ansiosa, se quedó parado en la puerta de la cabaña,
mirando el interior esperando ver a su omega llegar a sus brazos en cualquier instante. Así
que cuando Su She abrió la puerta, Lan Zhan no pudo evitar cerrar los ojos, oliendo a la
perfección las feromonas con olor de loto que salieron disparadas del interior, dándole a
entender que no estaba equivocado, su omega había estado ahí definitivamente.
Lan Zhan lamentaba mucho la espera y no haber podido responder a su omega, pero la
situación fuera de las demás sectas era muy complicada. Los Wen se habían hecho con todos
los caminos y todas las sectas más importantes de todas las regiones, exceptuando Lanling
Jin, y tenían ordenado asesinar a cualquiera que sea de la rama principal delas familias más
importantes. Después de haber sido rescatado por Su She, quien lo llevo a la secta Moling Su,
Lan Wangji tuvo que sanar sus heridas por algunos días antes de empezar su viaje.
En todos esos días él no había dejado de pensar en Wei Ying ni por un solo instante. Cuando
la secta Lan fue quemada y él estaba huyendo a Moling, en medio del camino recibió el
primer mensaje de Wei Ying, algo que tranquilizo su corazón, pues incluso antes de saber lo
que había ocurrido en las demás sectas, él ya sabía que Wei Ying estaba a salvo.
Sin embargo Lan Wangji no pudo responderle a su omega, aun cuando quiso hacerlo, pues
los Wen sabían que él estaba en Moling, siempre podía verlos rondado, como si lo estuvieran
vigilando. Y mientras recibía los mensajes de su Wei Ying, Lan Wangji pudo entender la
razón, Wei Ying y Jiang Cheng habían escapado de los Wen, así que estos los estaban
buscando de una forma desesperada. Y para todos, era obvio que Wei Ying acudiría a su alfa,
así que viendo que Lan Wangji recibía muchos mensajes a diario, los Wen solo estaban
esperando pacientemente a que Lan Zhan respondiera uno de esos mensajes, para poder
seguir a la mariposa mensajera y hallar a los herederos Jiang.
Lan Wangji no les importaba en lo absoluto a los Wen, ya que en su poder ya tenían a Lan
Xichen, así que a quienes ellos querían con desesperación eran a Wei Wuxian y Jiang
Wanyin.
Así que a pesar de lo mucho que le dolía, lo difícil que le resultaba escuchar a su omega
llorar y suplicar por él, Lan Wangji no respondió ni uno de sus mensajes, solo queriendo
protegerlo.
Pero él ya había decidido ir a buscar a Wei Ying, así que esperando el momento oportuno,
cuando los Wen se distrajeron por un instante, Lan Wangji acompañado por algunos de los
miembros sobrevivientes de su propia secta, y Su She y los miembros de su propia secta,
iniciaron un viaje largo desde Moling hasta Yiling. Ellos debían ser sigilosos, ya que no
podían llevar su rastro hasta el lugar donde Wei Ying se encontraba, Lan Wangji no estaba
seguro de si los Wen habían dejado de seguirlos, pero por lo menos tenía un plan.
Solo necesitaba un minuto, al encontrar a Wei Ying solo debía tenerlo en sus brazos,
asegurarse de que estaba bien, y los Wen ya no importarían. Lan Wangji solo necesitaba
sujetar a Wei Ying, tenerlo a su lado, y aun si tenía a un ejército Wen frente a él, los vencería
a todos para poder salvar a su omega, sin importar que su pierna estuviera rota o todas las
heridas que tenía en su cuerpo. Pero lo más importante era encontrar a Wei Ying pronto, pues
estaba en una carrera en contra de los miembros de la secta Qishan Wen, ya que quien
encontrara primero a los herederos de la secta Jiang, se los llevaría y el contrario no tendría
oportunidad de recuperarlo, sin importar cuanto lo intentara.
Así que de forma ansiosa, cubriéndose con una sombrilla, Lan Wangji esperó fuera de la
puerta de aquella pequeña cabaña, esperando ver a su omega salir en cualquier instante, ya
deseando poder tenerlo en sus brazos y decirle cuanto lo amaba, además de disculparse con él
por haberlo dejado llorar solo tanto tiempo.
Sin embargo de forma sorpresiva, una cosa completamente diferente sucedió.
Desde el cielo, una pequeña mariposa dorada se posó sobre la mano de Lan Wangji. De
inmediato, Lan Zhan entendió que se trataba de uno de los múltiples mensajes que Wei Ying
le mandaba todos los días, así que cerrando los ojos, Lan Zhan escucho en silencio y por
varios minutos el mensaje que su omega le había enviado. Sufriendo internamente,
escuchando las desgarradoras palabras de su omega quien lloraba desesperado, Lan Wangji
no pudo esperar más, e incluso sin terminar de escuchar el mensaje, soltó su sombrilla y entro
en la casa.
Se había prometido a si mismo que haría las cosas de forma correcta, que no espantaría a
Jiang Cheng pues entendía lo importante que él era para su omega. Pero después de escuchar
a Wei Ying llorando, estando tan cerca de él, Lan Zhan no pudo soportarlo más, y tuvo que ir
a buscarlo.
“¡Wei Ying!” Dijo en voz alta, entrando en la pequeña cabaña.
Sintiendo su corazón palpitar fuertemente en su pecho por la emoción, Lan Zhan observo
aquella pequeña cabaña, tan vieja y sin mucha luz, siendo un lugar antiguo y que antes debió
estar abandonado. El lugar apenas tenía una habitación y una sala aparte, donde Wei Ying
había dispuesto en el suelo y en algunos muebles todas las cosas que pudo comprar, entre
ropa y utensilios de cocina, además de un poco de comida e incluso algunos pergaminos para
anotar algunas cosas. Sin tomarle mucho tiempo, Lan Wangji recorrió aquel estrecho lugar, y
dándose cuenta de que su omega no estaba en ese sitio, fue al último lugar que le quedaba por
revisar, la habitación principal.
“¿Wei Ying?” Preguntó Lan Zhan cada vez más exaltado, entrando en la habitación.
En ese lugar, tan estrecho como la otra sala de la cabaña, solo había una pequeña cama y
algunas mantas en el piso, aparentemente Wei Ying había dejado la cama para su débil
hermano, prefiriendo dormir en el piso con cobijas viejas y en el frio.
Jiang Cheng, quien estaba en la cama hablando débilmente con Su She y sus guardias betas,
palideció al ver al alfa que había en puerta, susurrando: “¿Xichen?”
Quedándose en blanco al ver el lugar vacío, sin que Wei Ying estuviera por el lugar
aparentemente, Lan Wangji no dijo nada, sin responder las palabras de Jiang Cheng.
Sin embargo no faltó mucho para que Jiang Wanyin entrara en pánico, y soltando un fuerte
grito mirara aterrorizado al alfa en la puerta de su habitación.
“¡Vete! ¡No me mires! ¡Aléjate de mí!” Le grito Jiang Wanyin a Lan Zhan, confundiéndolo
con Lan Xichen.
Asustado, viendo como el omega con ese delicado estado de salud se exaltaba, Su She intentó
calmarlo diciéndole: “Jiang Gonzi, Jiang Gonzi por favor, mantenga la calma…”
Pero Jiang Cheng no parecía hacerle caso, y enloqueciendo cada vez más con la presencia de
Lan Zhan, siguió gritando: “¡Aléjate de mí! ¡Te odio! ¡Te odio!”
Ante la situación cada vez más difícil, Su She no tuvo más opción que ponerse de pie de la
cama e ir en dirección a Lan Zhan, decidiendo sacarlo de ahí para tranquilizar a Jiang
Wanyin, temiendo que este se hiriera o empeorara su estado por lo exaltado que estaba.
Sin embargo Lan Wangji, empecinado en buscar a su omega, no quería moverse a pesar de
los intentos de su amigo, buscando una y otra vez a Wei Ying en la habitación con la mirada,
determinado a encontrar a su amado.
“No hay nadie aquí, Lan Zhan” Le dijo Su She, intentando hacer entrar a su amigo en razón.
Sin importarle el temor de Jiang Cheng, o la propia herida de su pierna, Lan Wangji salió
apresurado de aquella cabaña. La lluvia había empeorado hasta volverse una tormenta
incontrolable, y aun así a Lan Wangji no le importó, y sin siquiera tomar una sombrilla
consigo, él volvió sobre sus pasos, llegando a la ciudad de Yiling.
Todo aquel lugar olía a su omega, cada calle, cada casa; con el aroma de la lluvia y de la
tierra todo aquello se complicaba aún más. Lan Wangji estaba seguro de que su omega estaba
en ese sitio, pero sin poder confiar en sus instintos, comenzando a sentir pánico y terror por
no encontrarlo, Lan Zhan comenzó a recorrer ese lugar sin rumbo, donde las calles estaban
vacías y todos los negocios cerrados.
“¡Wei Ying!” Grito Lan Zhan, desesperado al no poder encontrarlo: “¡Wei Ying!”
Sin importarle cuan ruidoso debía ser, o cuanto tenía que lastimar su garganta, Lan Wangji
estaba decidido a encontrar a su omega en ese lugar. Pero sin resultado, con su voz ahogada
por la lluvia, Lan Zhan dejo de gritar en seco, mirando al piso en silencio.
Agachándose por un segundo, Lan Wangji tomó del suelo una cinta roja manchada de tierra y
completamente húmeda. Él no necesitaba olerla para darse cuenta a quien pertenecía, así que
sosteniendo aquella cinta entre sus dedos, Lan Zhan comenzó a girar para mirar en todas
direcciones, buscando desesperado.
“Wei Ying por favor… Estoy aquí, vine por ti…” Dijo Lan Zhan desesperado.
Su omega indudablemente había estado en ese sitio, toda la ciudad olía a él. Sin embargo en
un segundo parecía como si Wei Wuxian se hubiera desvanecido, como si algo muy malo le
hubiera ocurrido y ya no estuviera más.
“Wei Ying… ¿Dónde estás?” Se preguntó Lan Zhan lleno de angustia, llevando una de sus
manos a su nuca.
Pronto pasos rápidos se escucharon en el piso húmedo detrás de Lan Wangji, era Su She, el
cual protegiéndose con una sombrilla había ido en búsqueda de su amigo: “¡A-Zhan!
¡Debemos irnos de inmediato!”
“¿Qué?” Preguntó Lan Wangji muy confundido.
“Mis informantes acaban de decirnos que varios barcos de la secta Wen están anclados en
esta misma ciudad, y muchos cultivadores están desembarcando; es obvio que vienen por
nosotros. Lo que dijiste es cierto, ellos nos siguieron todo el camino hasta aquí, y están
buscando al heredero de la secta Jiang”.
Mirando nuevamente la cinta roja en sus manos, Lan Wangji no podía pensar con claridad, y
solo pudo decir: “No… Yo debo encontrar a Wei Ying, debo hallarlo”.
“Lan Zhan, mírame” Pidió Su She desesperado, intentando hacer reaccionar a su amigo:
“Solo hay dos caminos ahora, irnos o quedarnos, yo no voy a abandonarte, nadie aquí te
abandonara. Así que si quieres quedarte aquí a buscar a tu omega, todos nos quedaremos;
incluyendo a Jiang Wanyin”.
“No lo hagas, él debe estar a salvo” Dijo Lan Wangji, recordando que Jiang Cheng era una
prioridad para su omega.
“No voy a abandonarte. Así que esto solo depende de ti, si tú quieres quedarte a buscar a tu
omega, todos nos quedaremos contigo, aun si a todos nos capturan los Wen. Pero si decides
irte, continuaremos con el plan inicial e iremos directo a Lanling”.
Mirando fijamente la cinta en su mano, presionándola entre sus dedos, Lan Wangji intento ser
racional. Y solamente pensando en su omega, sabiendo lo que Wei Ying hubiera decidido en
una situación así, finalmente dijo: “Vámonos, debemos poner a salvo al heredero de la secta
Jiang”.
Suspirando aliviado, cubriendo a su amigo con parte de su sombrilla, Su She dijo: “De
acuerdo, pero vámonos rápido, no pueden ni saber que estamos aquí…”
Sin decir nada más, Lan Wangji se giró por última vez en esa calle desierta, mientras
presionaba la cinta de Wei Wuxian entre sus dedos. No sabía si estaba haciendo lo correcto,
pero si estaba seguro de que aquello seria lo que Wei Ying haría en su lugar. Así que en
silencio, Lan Wangji solo podía suplicar un milagro para que su omega se mantuviera a salvo.
Prometiéndole a Wei Ying a la distancia que no se rendiría y que definitivamente lo
encontraría.
Capítulo 32.

Pasos fuertes se escucharon por el pasillo de la torre Koi, dirigiéndose con firmeza en
dirección a una de las habitaciones en específico, la cual estaba resguardada por guardias
beta. Parados fuera de la habitación, Lan Wangji, Jin Zixuan y Su She, guardaron silencio,
observando a la mujer que se aproximaba por el pasillo.
“Señora Yu, disculpe mi atrevimiento, pero el paso se ha restringido a esta área de la torre”
Dijo uno de los guardias beta, viendo la intención de la mujer por entrar al lugar.
Parándose frente a la puerta de forma amenazante, Yu Ziyuan preguntó: “¿Y quién va a
impedirme pasar? ¿Tú lo harás? Mi hijo está ahí, así que muévete”.
Quedándose al otro lado del pasillo, ninguno de los alfas o el beta que se encontraban ahí
quisieron intervenir. Jin Zixuan consideraba a su suegra como alguien verdaderamente
aterradora, y no quería molestarla por nada en el mundo. Mientras que Lan Wangji se sentía
algo temeroso de igual forma, ya que muchos rumores decían que Yu Ziyuan ya sabía que
Lan Wangji había mordido a Wei Wuxian vinculándose con él, así que en secreto, Lan Wangji
no podía evitar temer en su propia seguridad física.
“P… Pero mi señora…” Dijo el valiente guardia beta, intentando discutir.
“No me hagas pedirte que te muevas una vez más” Exigió la mujer alfa con seriedad.
Pronto unas aterradoras feromonas invadieron todo el pasillo, haciendo que Jin Zixuan y Lan
Wangji se apartaran aún más de ser posible, ya que podían sentir la ira de ese alfa que
consideraban más aterrador que ellos. Mientras que Su She, sin poder sentir las feromonas
del alfa al ser solo un beta, no pudo dejar de mirar una de las manos de Yu Ziyuan, donde
unos ligeros destellos violetas comenzaban a verse, provenientes de Zidian, quien había sido
devuelta a su dueña después de que Jiang Cheng había sido rescatado.
Después de llegar a Yiling, Lan Wangji y Su She se las ingeniaron para sacar a Jiang Wanyin
de la ciudad sin ser vistos, llevándolo al único lugar donde creían que el joven Jiang podía
estar seguro, de regreso con sus padres y su familia en Lanling Jin. Sin embargo el joven
omega Jiang seguía sintiendo pavor hacia los alfas, principalmente hacia Lan Wangji o
cualquiera de la secta Lan, así que para no alterarlo, se tomaron medidas en toda la torre Koi,
entre las cuales se incluían impedir que cualquier alfa se acercara al joven omega; incluyendo
a Yu Ziyuan en ese grupo.
Pero sin pasar ni 12 horas desde la llegada de su hijo a la torre Koi, la mujer alfa no esperó
más, y decidida a verlo, fue a buscarlo a pesar de los pedidos incansables de todos los
presentes que no lo hiciera. Yu Ziyuan no quería esperar más para ver a su adorado hijo
menor.
Mientras que desde su llegada, Lan Wangji y Su She no se apartaron de la puerta del omega,
ya que ambos confiaban en que pronto el joven Jiang se recuperaría con ayuda de sus
familiares, y así ambos podrían entrar a hablar con él. Lan Wangji estaba decidido a encontrar
a Wei Wuxian a cualquier costo, completamente convencido de que el omega estaba vivo en
algún lugar, pero la única pista que podía guiarlos en dirección a su destinado, era Jiang
Wanyin, así que debían esperar a que él estuviera bien para intentar comprender que había
sucedido con el omega. Mientras que Jin Zixuan solamente se encontraba ahí por su esposa,
ya que desde la llegada del joven heredero Jiang a su secta, Jiang Yanli no se había separado
de él, y Jin Zixuan quería esperarla para cuando ella se sintiera preparada para descansar un
poco de cuidar a su hermano.
Pero Yu Ziyuan había llegado a interrumpir aquella calma, y viéndose amenazados sin poder
hacer nada al respecto, los alfas presentes superaron con cierta resignación, decidiendo
apartarse de la puerta, dándole paso a esa mujer alfa, la cual entró al lugar con paso decidido.
Y los dos alfas y el beta que se encontraban fuera, con mucha curiosidad queriendo ver el
estado de Jiang Wanyin, se acercaron a la puerta con paso cuidadoso, asomándose para ver el
escenario dentro de la habitación, pero sin acercarse demasiado para no molestar a Yu
Ziyuan.
Entrando en la habitación con paso decidido, Yu Ziyuan relajo su actitud y su semblante al
ver la escena que tenía en la habitación frente a ella. Acostado en la cama, Jiang Wanyin lucia
muy cansado, pudiendo dormir bien finalmente después de aquella pesadilla. Mientras que a
los pies de la cama, Jiang Fengmian vigilaba el sueño de su hijo, y sentada al lado de Jiang
Cheng en la cama, Jiang Yanli sostenía cuidadosamente una de las manos de su hermano,
tocándolo con suavidad.
“Mi señora…” Dijo Jiang Fengmian sorprendido al verla ahí.
“Mamá, no creo que deberías…” Dijo Yanli asustada, viendo a su madre acercarse.
Sin embargo Yu Ziyuan no le hizo caso a ninguno de los dos, y a arrodillándose al lado de la
cama, la mujer alfa llevo una de sus manos a las mejillas de Jiang Cheng, acariciándolo con
suavidad. La mujer alfa sentía un dolor indescriptible al ver a su pequeño hijo en ese estado,
solamente queriendo abrazarlo y apartarlo de todos por su instinto. Ella sabía lo que le habían
hecho a su cachorro, y ardía de furia e impotencia por no poder defenderlo.
Sintiendo esos dulces toques en su rostro, Jiang Wanyin abrió los ojos confundido, mirando a
su madre: “¿Mamá?”
“A-Cheng…” Susurro la mujer con dulzura, sin dejar de tocar sus mejillas: “¿Estas bien?”
Mirando el primer encuentro entre la mujer alfa y Jiang Wanyin, todos los presentes se
quedaron en silencio, expectantes. Lan Wangji aun recordaba el ataque de pánico de Jiang
Wanyin cuando lo vio, como le gritó y reacciono de una forma tan desesperada, así que
temeroso, pensaba que Jiang Cheng rechazaría a su madre alfa.
Pero Jiang Cheng reacciono de una forma completamente diferente, acercándose más a su
madre, sollozando: “Me duele mucho mamá…”
Suspirando con suavidad, Yu Ziyuan se acercó más a su hijo, y cuidadosamente lo abrazo
contra su pecho, sintiendo como Jiang Cheng se aferraba fuertemente a ella, sollozando y
gimoteando con dolor. Intentado tranquilizar a su alfa, sintiendo a su pequeño hijo llorando
de esa forma descontrolada, Yu Ziyuan pasó sus dedos de forma cuidadosa por la nuca del
menor, tocando esa marca que le habían hecho a la fuerza.
“Estoy aquí contigo, A-Cheng, yo te cuidare…” Susurró Yu Ziyuan, intentando calmarlo.
“Me dijo que estaban muertos, tenía tanto miedo de que murieras odiándome… Intenté ser
fuerte, quise hacer las cosas bien, lo siento mucho” Se disculpó Jiang Cheng.
Quedándose en la puerta, Lan Wangji se preguntó en cuanto tiempo podría hablar con Jiang
Wanyin, ya que solo podía pensar en Wei Wuxian, sintiéndose secretamente desesperado por
poder encontrarlo. Y pensando en su omega, mientras miraba esa enternecedora escena, Lan
Zhan ahogó un gemido de dolor, luciendo muy mal de repente.
“¿A-Zhan?” Preguntó Su She, dándose cuenta del estado de su amigo: “¿Qué sucede?”
Sin embargo Lan Wangji no pudo responderle, y retrocediendo fuera de la habitación de
vuelta al pasillo, Lan Wangji rápidamente avanzó hacia una de las esquinas del lugar, donde
tuvo que apoyarse en una de las paredes, sintiendo mucho dolor en todo su cuerpo. Era la
primera vez que sentía algo como eso, un dolor tan fuerte que lo hacía querer llorar y gritar,
era sumamente insoportable.
“A-Zhan…” Dijo Su She preocupado, siguiendo a su amigo por el pasillo.
Sin embargo Lan Wangji estaba intentando controlarse ¿Cómo podía estar sintiendo tanto
dolor? Ni siquiera había sufrido una herida reciente, no había nada en su cuerpo que pudiera
herirlo tanto, sin embargo aun así lo sentía, destrozando su piel y su carne, Lan Wangji creía
que iba a morir del dolor, casi derrumbándose en el piso por este.
“Es Wei Ying, ¿No es verdad?” Preguntó Yu Ziyuan, saliendo de la habitación de Jiang
Cheng y yendo en búsqueda de Lan Wangji.
Levantando la mirada sorprendido, Lan Wangji observó a la mujer ir en su dirección,
sorprendiéndose al verla, ya que ella había abandonado a Jiang Wanyin para ir por él. Y
sintiéndose algo nervioso, todavía con el dolor recorriendo todo su cuerpo, Lan Zhan
respondió: “Mmm…”
“No balbucees conmigo, si vas a hablar o a responderme, hazlo de forma correcta” Exigió la
mujer con firmeza.
“Si, creo que es Wei Ying” Dijo Lan Wangji aguantando el dolor.
No sabía por qué, pero sintiendo ese dolor tan profundo herirlo de esa manera no podía evitar
pensar en Wei Wuxian, sabiendo que alguien en algún lugar, estaba haciéndole mucho daño
en ese mismo momento. Su omega estaba sufriendo, estaba siendo torturado por alguien en
algún lugar.
“De acuerdo, ponte de pie” Exigió Yu Ziyuan.
“P… Pero…” Susurró Lan Wangji, todavía sintiendo el dolor insoportable en su cuerpo.
“¿Eres un alfa? Entonces ponte de pie, estamos yendo a buscar a tu omega, compórtate como
su esposo y deja de llorar como un idiota”.
Sin poder negarse, solamente pudiendo pensar en Wei Ying, Lan Wangji finalmente
consiguió ponerse de pie, caminando por el pasillo detrás de esa fuerte y aterradora mujer
alfa, la cual regresó a la habitación de su hijo. Sentándose al lado de Jiang Cheng en la cama,
Yu Ziyuan volvió a acariciar sus mejillas, mirándolo a los ojos.
“A-Cheng, ¿Puedes responderme algunas cosas?” Preguntó Yu Ziyuan siendo cuidadosa al
hablar.
“¿Qué cosas?” Preguntó Jiang Cheng, luciendo un poco más tranquilo.
“¿Recuerdas a donde fue Wei Wuxian antes de que despertaras?”
4 MESES DESPUES.
Con un largo suspiro, Wen Xu bajó de su caballo con ayuda de uno de sus sirvientes, ya que
él era bastante bajo de estatura, y no pudo desmontar por sí mismo. Sintiéndose agotado,
mientras dejaba que sus sirvientes se llevaran su caballo, Wen Xu comenzó a planear lo que
haría cuando entrara dentro de su secta, planeando tomar un baño y ordenar sus ideas antes de
presentarse con su padre para presentar su reporte.
Sin embargo mientras caminaba cansadamente en dirección a la residencia principal en Sin
Noche, Wen Xu se sorprendió mucho cuando una de sus sirvientas corrió en su dirección,
notándose muy asustada y llorosa: “¡Joven maestro! ¡Joven maestro! ¡Sucedió algo horrible!”
Tratando de mantener la calma, Wen Xu preguntó: “¿Qué fue lo que sucedió? Tranquila
Ming, seguro podemos solucionarlo…”
“¡Ejecutaran al joven maestro Wei!”
Al escuchar esas palabras, el corazón de Wen Xu casi se detiene, y sin hacer más preguntas,
comenzó a correr en dirección a su secta, olvidando por completo el cansancio que había
sentido por su viaje.
Le había parecido muy extraño, especialmente extraño de su padre, conociéndolo tan bien
como lo conocía, pero en ese momento hizo muchas excusas en su mente para explicar lo que
había estado pasando. De una forma extraña, hace cuatro meses, su padre lo envió en una
misión muy larga, en la que Wen Xu debía controlar los nuevos puntos recién conquistados
por la secta Wen, establecer ahí puestos de control, y mantener tranquilos a la población. Esa
era una tarea muy importante, pero bastante peligrosa, no apta para el hijo más amado del
gran líder Wen Ruohan.
Así que Wen Xu pensó que lo había mandado lejos por tanto tiempo porque quería prepararlo
para ser el nuevo líder de su secta, o porque simplemente ya no confiaba más en Wen Chao
después del desastre de Yiling. Pero después de saber que Wei Ying había estado ahí…
Entendió la razón.
Después de los recientes ataques a las diferentes sectas, su padre se había vuelto mucho más
irracional y cruel de lo que era antes, masacrando y asesinando por placer, torturando e
hiriendo a personas inocentes solo por sus obscuros deseos. Y e único rastro de humanidad y
cordura que quedaba en la mente de Wen Ruohan, ahora solo aparecía bajo las peticiones de
Wen Xu, su hijo omega, ese al cual amaba con todo su corazón, probablemente el único ser al
cual Wen Ruohan amaba.
Así que si su padre deseaba hacer algo horrible, tan horrible como torturar o herir a un omega
indefenso, lo mejor era enviar a Wen Xu lejos, pues seguramente su hijo lo detendría si era
cruel.
Lamentándose por haberse ido, por haber sido tan ingenuo con la personalidad tan mala de su
padre, Wen Xu corrió lo más rápido que pudo por toda su secta, deseando no llegar
demasiado tarde, deseando poder hacer las cosas correctas. Sin embargo fue demasiado tarde,
y llegando al salón principal de su secta, Wen Xu se encontró con un espectáculo horrible.
Abriendo la puerta de golpe, el joven omega ahogó un jadeo de sorpresa, ya que en la entrada
había una gran mancha de sangre, todavía fresca. Temiendo lo peor, Wen Xu giró el rostro y
se topó con un cadáver en una de las esquinas de la habitación, el cual era solo uno de los
tantos cultivadores de su secta, quien aparentemente había sido atacado con una espada, y a
quien pertenecía toda esa sangre fresca. En medio de toda esa confusión, Otra cosa que llamó
la atención de Wen Xu fue una hoja de acero rota, la cual parecía la hoja rota de una espada,
la cual estaba empapada de sangre.
“¿A-Xu? Regresaste de tu viaje” Lo saludó Wen Ruohan con calma, como si nada hubiera
pasado.
Mirando al frente con desagrado, Wen Xu pregunto: “Oh padre… ¿Qué fue lo que hiciste?”
Aparentemente todo el consejo de Qishan Wen se encontraban en medio de una reunión
tranquila, con varias personas sentadas en futones y luciendo relajadas. Y aquello hubiera
pasado por una reunión cualquiera, de no ser por una figura encogida en el suelo, un omega
vestido con túnicas blancas, quien estaba arrodillado en el suelo, mientras lloraba de forma
descontrolada.
Fingiendo demencia, como si nada de lo que ocurría importara, Wen Ruohan respondió:
“Estamos planeando mi boda, ya que la guerra va de una manera fenomenal para nosotros,
podemos tomarnos un descanso de planeaciones de batallas y peleas…”
Sintiéndose ofendido por que su padre pensara que era una idiota, Wen Xu respondió: “Padre,
hay un cadáver en la puerta… ¿Qué paso aquí?”
“Hubo una pelea simple, pero me encargue de solucionarla de inmediato”.
“¿Y la espada en el suelo?”
Luciendo pensativo, Wen Ruohan respondió: “¿Cuál era su nombre? ¿Suibian? Tenía un
nombre estúpido, estaba en nuestro almacén por que se selló a sí misma, pero finalmente
encontramos a alguien que pudiera usarla. Aunque al final se rompió… Es una pena, porque
una espada de buen espíritu hubiera sido un buen regalo, es una pena que haya muerto”.
Todo aquello parecía tan calmado, pero a la vez tan ruidoso, que a Wen Xu estaba doliéndole
la cabeza solo de pensar en ello. Así que solo pudo mirar en todas direcciones en silencio,
encontrándose con otra cosa extraña, ya que había dos lugares en el salón que estaban vacíos.
“¿Y Wen Chao y su tonto omega?” Pregunto Wen Xu dándose cuenta de que su hermano
menor no estaba ahí por ningún lugar.
“Llegaste unos minutos tarde hijo, ellos salieron hace poco a hacerme un favor” Respondió
Wen Ruohan.
“¿Qué clase de favor?” Preguntó Wen Xu, comenzando a impacientarse.
“¿Acaso importa ya?” Pregunto Wen Ruohan como si nada: “Un cadáver mas es un cadáver
más, muchas personas mueren en la guerra, ¿Acaso alguien se fijara en un omega que
cometió un crimen? Si no lo asesinaba yo, igual iban a ejecutarlo por su gran pecado”.
“Padre…” Susurro Wen Xu, al borde del colapso, creyendo lo peor.
“¿Por qué te preocupas tanto? Deberías estar feliz, tu padre va a casarse de nuevo, estamos
celebrando…”
Wen Xu quiso preguntar más, para intentar entender que cosa tan horrible había pasado en
ese mismo lugar pocos minutos antes de su llegada. Pero no pudo hacerlo, pues pronto fue
interrumpido, por sirvientes de su propia secta, quienes habían acudido con artefactos de
limpieza para atender ese desorden. Y quedándose en blanco, Wen Xu observo como uno de
los sirvientes rodeaba los futones para acercarse a la parte trasera del salón, donde justamente
detrás de Wen Ruohan, había un pequeño bulto envuelto en mantas, el cual al ser levantado
comenzó a llorar.
“Mi señor, ¿Qué debemos hacer ahora con este niño?” Pregunto el sirviente, quien sostenía
sin mucho cuidado a ese bebé.
Mirando al niño con indiferencia, Wen Ruohan respondió: “No lo sé, lánzalo a los perros, a
su madre parecían gustarle mucho...”
Escuchando esas crueles e indiferentes palabras, alguien mas no pudo aguantar todo ese
dolor, y el omega que estaba arrodillado en el piso, se giró y suplico: “Por favor, por favor A-
Han, te lo suplico, por favor no lo hagas…”
Mirando al omega arrodillado en el piso, su próximo prometido, Wen Ruohan pregunto: “¿Y
qué es lo que no debo hacer exactamente? Deja de ser ridículo, Qiren”.
El omega vestido con las túnicas de su propia secta, la secta Lan, con todo el dolor de su
corazón volvió a suplicar: “Por favor, déjame quedarme con ese niño, es de mi secta, por
favor…”
“Él no es de tu secta, ese niño no es de ninguna secta” Dijo Wen Ruohan cruelmente: “¿Para
qué quieres un niño omega cualquiera? Sé paciente, ya voy a embarazarte…”
Sin embargo Lan Qiren no quiso darse por rendido, y siguió suplicando: “Por favor A-Han,
ten piedad, es solo un niño pequeño, por favor…”
“¿Sabes quién era un niño también? Mi hermana lo era, y no te vi suplicando por ella en
ningún momento Qiren”.
“A-Han por favor, por favor no le hagas daño…”
Harto de toda la situación y de las suplicas desesperadas, Wen Ruohan dijo fuertemente:
“Deja de llorar de una vez, sabes que odio a los omegas que lloran como unas putas, cierra la
boca y siéntate”.
“Ruohan por favor…” Siguió suplicando Lan Qiren, sin poder dejar de llorar.
“¿Quieres hacerme enfadar?” Preguntó Wen Ruohan con frialdad: “Tengo a tu maldito
sobrino en mis manos, siendo atendido por los mejores doctores de mi secta para que no
muera, ¿Quieres más piedad de mi parte? Soy un hombre piadoso Qiren, pero no acabes con
mi paciencia. Puedo pedir en este momento que corten el cuello de tu querido Xichen, así que
te doy a elegir, la vida del hijo de una ramera de Yunmeng o el futuro de tu secta”.
Entendiendo la situación en la que se encontraba, dándole una última mirada a ese bebé, Lan
Qiren solo pudo bajar la mirada con culpabilidad, y de forma temblorosa y algo incomoda
por las cadenas que tenía en sus tobillos, sacudió su túnica blanca y se sentó nuevamente al
lado de Wen Ruohan.
“Bien, ahora cierra la boca, o voy a golpearte de nuevo” Amenazó Wen Ruohan, mirando a
Lan Qiren de reojo.
Entendiendo que el asunto finalmente había terminado, la sirvienta que había tomado al bebé
en sus brazos, hizo una reverencia y se acercó a la puerta para irse, llevándose consigo al
pequeño, quien no había dejado de llorar. Mientras que Wen Xu, quedándose en silencio, se
giró en dirección al sirviente, quien pasó a su lado, caminando rápidamente lejos del salón
principal de la secta.
Y cerrando los ojos por un momento, Wen Xu estuvo seguro, aquel pequeño desprendía un
dulce aroma a sus propias feromonas, y también a las feromonas de su madre.
El dulce aroma de las flores de loto.
Capítulo 33.

“Solo un poco más… Solo un poco…” Se dijo Wen Ning a sí mismo, mientras sostenía el
remo de ese bote con firmeza.
En medio de la obscuridad, cubierto con una capa, Wen Ning se encontraba navegando por la
orilla en dirección a Sin Noche, intentando hacerlo rápido pero con cuidado, ya que se había
vestido bien y peinado su cabello con cuidado, sin querer desarreglarse en su viaje por el
lago. Después de todo, tenía que ver a Wen Xu.
En medio de la cena, cuando nadie lo estaba mirando, Wen Ning recibió una mariposa
mensajera de Wen Xu. Sonando muy serio, el omega Wen le suplicaba a Wen Ning ir a verlo,
encontrándose después de la media noche en los puertos fuera de Qishang, ya que tenía algo
muy importante que entregarle, pidiéndole que fuera un secreto de cualquiera en su secta,
incluso de la propia Wen Qing. Ya que citando las propias palabras de Wen Xu: “…Wen Ning
es la única persona en la que puedo confiar ahora”.
Así que siguiendo las peticiones del omega, sin dudar o hacer preguntas al respecto, Wen
Ning se preparó de forma cuidadosa, y subiéndose en un pequeño bote de su propia secta, se
dispuso a seguir el largo viaje desde Yiling a Qishang, remando por un par de horas, solo
queriendo ver a Wen Xu. Y después de varias horas en el mar, saliendo de entre los árboles,
Wen Ning sonrió al ver los puertos de Sin Noche, donde a lo lejos pudo identificar una
pequeña y delgada figura en los puertos.
Desembarcando y acercándose a la pequeña figura en medio de la noche, Wen Ning dijo: “A-
Xu, ya estoy aquí…”
El joven omega, el cual también se había protegido de la noche con una capa, se giró al
escuchar la voz de Wen Ning, avanzando en su dirección hacia el menor: “Oh… A-Ning, que
bueno que estas aquí…”
Wen Ning quiso responder a esas palabras, que sonaban tan tristes de los labios del omega.
Sin embargo no pudo evitar bajar su mirada a los brazos del menor, el cual debajo de su capa,
cargaba un pequeño bulto envuelto en toallas blancas, las cuales desprendían fuertes
feromonas. Wen Ning ni siquiera tenía que preguntar que era ese pequeño bulto, ya que había
visto muchos nacimientos de omegas y había leído mucho al respecto. Lo que Wen Xu
sostenía era un pequeño bebé omega.
“¿Qué fue lo que pasó, A-Xu?” Preguntó Wen Ning, comenzando a preocuparse por ver al
omega tan asustado.
Ya sin poder contener el llanto, Wen Xu se acercó a Wen Ning y se apoyó en el temblando,
buscando un abrazo reconfortante del joven alfa. Sonrojándose mucho al sentir a Wen Xu tan
cerca de sí mismo, por primera vez en toda su vida, Wen Ning no supo bien cómo reaccionar,
tardando un poco en rodear el delgado cuerpo de Wen Xu entre sus brazos, sintiendo su dulce
aroma y su tibio cuerpo contra sí mismo.
“Fue tan horrible…” Dijo Wen Xu sin poder controlarse más: “No puedo reconocerlo…
Cuando lo veo a los ojos, ya no puedo encontrar a esa persona, Wen Ruohan ya no es mi
padre”.
“¿Te hizo daño?”
“¿Qué importa si me hace daño a mí? Eso ya no importa, aun si él no me lastima, todas las
personas a mi alrededor están sufriendo. Todos los soldados, todos los sirvientes, incluso su
próximo prometido Lan Qiren, todos están sufriendo. Yo solo quisiera… Yo solo quisiera…
No ganar la guerra, que alguien viniera a Sin Noche, y acabaran con él, porque ese hombre ya
no es mi padre, es un monstruo”.
Sintiendo toda la angustia y tristeza de Wen Xu, preguntándose qué había sucedido pero sin
querer profundizar en el asunto para que el omega no siguiera llorando, Wen Ning dijo:
“Entonces vámonos, ven conmigo a Yiling, mi hermana y yo te esconderemos ahí, y podrás
estar lejos de tu padre si es tan peligroso…”
Separándose de Wen Ning, levantando la mirada y observándolo a los ojos, le dijo: “No, no
puedo irme solo”.
“¿A qué te refieres con eso?”
“Lan Qiren, Jin Guangyao y su hijo Nie Song, Lan Xichen, y todos los demás prisioneros de
las sectas; no puedo dejar a ninguno de ellos atrás”.
Suspirando con suavidad, Wen Ning intentó hacer entrar en razón al mayor: “A-Xu, viendo
cómo se están desarrollando los acontecimientos, la secta Wen ganara la guerra, cuando eso
suceda no habrá ningún otro lugar a donde ir, solo un milagro podría salvar a la secta Jin que
sigue siendo la única en pie contra tu padre. Deja a esas personas atrás, no les debes nada…”
Bajando la mirada, Wen Xu observó al bebé en sus brazos, susurrando: “Él no lo hubiera
hecho, él era valiente y también un omega, yo no puedo rendirme si él tampoco lo hacía. Lo
siento A-Ning, no dejaré Sin Noche dejando a todas esas personas inocentes atrás, a manos
de mi padre”.
Sintiéndose muy preocupado, Wen Ning solo pudo mirar al mayor sin saber que decir, sin
saber cómo intentar obligarlo a ir con él. Estaban los dos solos en ese muelle, en medio de la
noche, para Wen Ning sería muy fácil tomar al omega y forzarlo a subir a su bote, aun si Wen
Xu gritaba, nadie podría alcanzarlo a tiempo. Para él como alfa, sería muy fácil obligarlo a ir
a Yunmeng para salvarlo. Pero Wen Ning amaba demasiado a Wen Xu para hacerle algo
como eso, así que bajando la mirada, observando también a ese pequeño bebé omega que él
tenía en sus brazos, Wen Ning entendió que no podía hacer nada por Wen Xu.
Logrando tranquilizarse un poco, Wen Xu cuidadosamente le entregó al bebé a Wen Ning,
diciéndole: “Toma, debes llevarlo a Yiling con tu hermana”.
“¿Al bebé? ¿Por qué?” Preguntó Wen Ning.
Tomando cuidadosamente al bebé que Wen Xu le extendía, Wen Ning rápidamente se dio
cuenta de que aquel pequeño niño omega no tenía más de 1 día de nacido, tan frágil y
pequeño, luciendo muy débil y cansado.
“¿De quién es este niño, A-Xu?”
Guardando silencio, Wen Xu respondió: “Es el ultimo heredero que queda de la secta Lan y
la secta Jiang, es el hijo de Lan Wangji y Wei Wuxian”.
Levantando la mirada atónito, Wen Ning preguntó: “¿Pero cómo…?”
“No tenemos mucho tiempo, te prometo que cuando nos volvamos a ver te lo explicare todo.
Pero ahora, por favor, debes llevártelo a Yiling y dárselo a tu hermana, dile que es el hijo de
una mis sirvientas o algo así, ni siquiera ella puede saber de quién es este niño, ¿Esta bien?”
“Mi hermana no le hará nada a ese bebe…”
“Tu hermana es la líder de una secta, A-Ning, ella tiene el deber de ejecutarlo, sin importar si
es de un Wen o no” Respondió Wen Qing: “Wei Wuxian nunca se casó con Lan Wangji, ya
sea en la secta Wen o en la secta Jiang, este bebé junto a Wei Ying están condenados a muerte
por eso, y si tu hermana lo sabe… Tendrá que matarlo”.
“¿Pero qué hare con él entonces? ¿Fingir que es de la secta Wen y hacerlo pasar por uno de
nosotros? Eso será más problemático, es un omega, las cosas se complican cuando un niño es
omega”.
“No te lo quedes, Lan Wangji está vivo, está en algún lugar de estas tierras todavía. Solo
cuídalo lo suficiente hasta que puedas encontrarlo, y luego entrégaselo, dile la verdad sobre
que este niño es su hijo, y pídele que escape con él a algún lugar donde ninguna secta pueda
perseguirlo”.
“¿Pero y el joven maestro Wei? ¿Qué le diré sobre él?”
Volviendo a guardar silencio, Wen Xu le dijo: “Solo dile… Que murió como un héroe”.
Entendiendo esas palabras, Wen Xu guardo silencio, sosteniendo a ese bebé contra su pecho
con algo de fuerza. Ya que finalmente podía comprender que Wei Wuxian, ese omega tan
amable que siempre sonreía, tuvo una muerte horrible, dolorosa y atroz. Así que defendiendo
a su secta y su honor, Wei Wuxian había muerto como un héroe.
“De acuerdo, me iré entonces” Dijo Wen Ning poniéndose muy serio: “Pero quiero que me
prometas una cosa”.
“¿Qué cosa?”
“Cuando acabe la guerra, y puedas liberar a todos los prisioneros de tu padre, encuéntrame
aquí de nuevo y huye conmigo”.
“Pero… Yo no puedo, por la ley de la tradición”.
“Yo me casare contigo, A-Xu, te hare mi esposa, y te llevare lejos de tu padre. Cuando la
guerra termine, el horror se esparcirá por estas tierras, y no habrá ningún futuro para ti aquí,
al lado de esas bestias. Ven conmigo, esa es la única condición que te pido”.
Sonrojándose mucho y bajando la mirada, Wen Xu se sintió dudoso. En el pasado, su corazón
había latido con fuerza del deseo que sentía por los alfas que alguna vez había amado. Pero
ahora estaba demasiado herido para creer en el amor, y aunque sentía a ese alfa tan sincero y
tan puro, queriendo salvarlo y amarlo, Wen Xu no creía poder amar a otra persona de nuevo.
Pero solo pensando en ese bebé, queriendo salvarlo a como dé lugar, Wen Xu mintió y dijo:
“De acuerdo, te esperare para que te cases conmigo, A-Ning”.
Luciendo sumamente emocionado, Wen Ning dijo: “¿En verdad? Yo te amo mucho, desde el
primer momento en el que te conocí, quiero hacerte feliz A-Xu, yo quiero…”
“Lo entiendo, de verdad gracias. Pero no tenemos mucho tiempo, pronto amanecerá, y tú
tienes que estar en Yiling muy lejos de aquí para entonces” Le recordó Wen Xu, un poco
desesperado porque Wen Ning se fuera pronto: “Así que por favor… Solo dime cuánto me
amas cuando volvamos a vernos, para casarme contigo”.
Sonriendo emocionado, Wen Ning dijo: “Lo hare A-Xu, volveré por ti definitivamente, y te
hare mi esposa”.
“Lo sé A-Ning, muchas gracias por amarme”.
Dándole una última sonrisa a ese alfa, Wen Xu observo como Wen Ning se llevaba al
pequeño omega por el muelle de regreso al barco, subiéndose en este para alejarse de
Qishang, volviendo a Yiling. Temeroso, Wen Xu solo pudo rezarle en silencio a todos los
dioses que conocía, pidiéndoles cuidar a ese alfa y al pequeño bebé omega que llevaba
consigo, ya que ese bebé era la última esperanza de supervivencia de la secta Lan y la secta
Jiang.
Y quedándose parado en el muelle, Wen Xu solo pudo mirar a lo lejos como Wen Ning se
perdía entre la obscuridad.
***
Suspirando con suavidad, Wen Ruohan enredó aquella blanca cinta entre sus dedos, tirando
de ella hasta desprenderla de la frente de Lan Qiren.
“Basta, no puedes hacer esto” Dijo Lan Qiren asustado, observando como Wen Ruohan le
quitaba su cinta.
Sosteniendo la delga cinta de blanca con pequeñas imágenes de nubes en su extensión, Wen
Ruohan preguntó: “¿Por qué me dejaste tocar esta cinta cuando nos conocimos? No entiendo
mucho de tu secta… Pero poco tiempo después de conocerme, me dejaste tocarla, como si
fuera algo tan importante. ¿Es importante para ti, Qiren?”
Desviando la mirada con vergüenza, Lan Qiren no quiso responder esas palabras, sintiéndose
inmovilizado, ya que sus manos estaban atadas sobre su cabeza y sus piernas también,
dejándolo completamente quieto en esa cama.
“Vamos Qiren, mírame al rostro, no quiero tocarte” Dijo Wen Ruohan con diversión: “Por
qué sabes que si pongo un dedo sobre tu piel, no podré detenerme…”
“¿Por qué estás haciendo esto? Tú lo dijiste, debemos respetar las reglas de la tradición, tu y
yo no estamos casados todavía, tú no puedes estar aquí conmigo, en mi habitación privada”.
“Lo sé, pero ahora la tradición la pongo yo a mi antojo, ya que soy el líder supremo de todas
las sectas. Y yo decreto, que si el líder desea, puede tomar a su omega cuando quiera”.
Sintiendo su corazón palpitar con fuerza, Lan Qiren no pudo resistirse, sintiendo como Wen
Ruohan lo tomaba de la barbilla y lo obligaba a girar el rostro, para poder besar sus labios, en
un toque suave y dulce, pero el cual comenzaba volverse pasional.
“Basta, no” Dijo Qiren con firmeza, usando toda su fuerza para liberarse de su alfa.
Riendo con fuerza, observando la determinación de Lan Qiren por mantener su pureza, Wen
Ruohan preguntó: “¿No? Ayer no estabas resistiéndote tanto, incluso te hice venirte varias
veces con mis dedos ¿Estás enojado conmigo ahora? Ya te dije que dejaría a ese bebé vivo…
No te enfades con tu esposo…”
Cerrando los ojos con vergüenza, Lan Qiren sintió como Wen Ruohan abría sus túnicas
internas, comenzando a pasar sus dedos por todo su pecho, tocando sus pezones y su piel
expuesta, gritando: “¡No! ¡Detente ahora!”
Lan Qiren no lo entendía, usando toda su energía espiritual, forcejeaba con esas correas de
cuero que lo mantenían preso a esa cama. Pero sin importar toda la fuerza que usara, o cuanto
intentara soltarse, las correas no cedían ¿Cómo era posible? Solo era cuero, ante la energía
espiritual de cualquier cultivador, el cuero debería ceder y romperse como el papel.
Sonriendo con diversión, mirando a Lan Qiren resistirse, el líder de la secta Wen se acercó
nuevamente a su rostro, presionando con más fuerza los pezones del omega entre sus dedos,
susurrándole: “No hagas esto más difícil para los dos, Qiren. Mírame a los ojos mientras te
hago mío, o usare mi voz de alfa y te obligare a hacerlo, y sabes lo mucho que te duele
cuando uso mi voz de alfa al follarte…”
Sin embargo, para la suerte del omega Lan, el cual ya estaba a punto de llorar por el pánico,
entendiendo que su prometido ahora iba en serio con él, la puerta de la habitación se abrió de
pronto, interrumpiendo la escena de ambos en la cama.
Gruñendo con molestia, Wen Ruohan preguntó: “¿Qué quieres?”
Entrando por la puerta con paso lento, Jin Guangyao entro en la habitación, haciendo una
corta reverencia: “Mi señor, el joven maestro Wen Xu ha salido de sus aposentos en medio de
la noche, y se ha llevado consigo al hijo de Wei Wuxian a un rumbo desconocido”.
Soltando a Lan Qiren y girándose en dirección a la puerta, Wen Ruohan preguntó: “¿Qué
hizo que?”
“Lo estaba vigilando como me pidió, mi señor, pero su hijo se fue demasiado rápido, y se
llevó al bebé antes de pudiera hacer algo”.
Quedándose sin habla ante esa noticia, escuchando que Wen Xu se las había arreglado para
salvar a su pequeño sobrino de aquel destino tan horrible, Lan Qiren quiso llorar de la
felicidad. Pero Wen Ruohan bajo la cabeza y soltó un par de risas aterradoras, presionando
entre una de sus manos la tela de las túnicas del omega con fuerza, luciendo sumamente
furioso.
“Oh… Voy a matar a ese hijo de puta” Dijo Wen Ruohan lleno de ira.
Temblando con temor, sabiendo que Wen Ruohan era capaz de cumplir sus amenazas, Lan
Qiren dijo rápidamente: “Espera, quédate, yo… Yo te dejare seguir hasta el final, no voy a
resistirme, de verdad quiero que sigas adelante, quiero que me hagas el amor. Solo
quédate…”
Lan Qiren se sentía en paz al saber que su querido sobrino había sido salvado, y ya sin temer
sufrir el dolor a las manos de Wen Ruohan, decidió entregarle su cuerpo a cambio de que
dejara huir a Wen Xu con el bebé. Después de todo, su boda seria en menos de una semana, y
su vida estaría condenada al lado de ese hombre para entonces, ¿Qué sentido tendría resistirse
ante él? Mientras pudiera proteger al hijo de Lan Wangji, Lan Qiren estaba dispuesto a lo que
fuera.
“¿De verdad? ¿Me lo dices en serio? ¿Quieres que te folle ahora?” Preguntó Wen Ruohan con
burla.
“Si, lo que tú quieras, pero hazlo ahora, por favor…”
Volviendo a reírse, sin ser un tonto, Wen Ruohan llevo una de sus manos al cabello de Lan
Qiren, tomándolo con furia y tirando de él: “Claro, está bien, pero primero iré a disciplinar a
mi hijo, que es otra perra omega como tú. Y si tanto lo deseas, te lo hare, está bien por mí,
pero tendrás que quedarte aquí a esperarme. Aunque eso no es un gran problema ¿No es
verdad? ¿A donde más irías? Solo estás aquí para mí, Qiren”.
Soltando el cabello del omega, Wen Ruohan en un fuerte y rápido movimiento, le dio una
bofetada a Lan Qiren, usando su energía espiritual. Soltando un grito de dolor, Lan Qiren
escupió un poco de sangre en las sabanas de la cama, sintiéndose atontado por el fuerte golpe
que acababa de recibir.
“No me tomes como un idiota Qiren, se lo que estas intentando hacer…” Dijo Wen Ruohan,
poniéndose de pie de la cama.
Pero sin rendirse, todavía queriendo ganar tiempo para que Wen Xu escapara con su sobrino,
Lan Qiren dijo: “Por favor hazlo ahora… Por favor no te vayas, aun si me golpeas, solo
quédate… ¡Quédate A-Han!”
Pero sin escuchar más los lamentos desesperados de ese omega, Wen Ruohan caminó a la
puerta de la habitación, donde Jin Guangyao se había quedado mirando esa escena, con una
sonrisa divertida asomándose en sus labios; Meng Yao no podía negar el hecho de que le
gustaba oír a Lan Qiren gritando de esa forma.
“¿Las correas que diseñé para usted funcionan bien, amo?” Preguntó Jin Guangyao,
siguiendo a Wen Ruohan por el pasillo fuera de la habitación.
“Funcionan de maravilla, Qiren no puede romperlas. Pero aún tengo un pequeño problema,
ya que el sigue retorciéndose demasiado, y no mantiene su cuerpo entero a mi disposición,
sigue alejando su rostro de mi” Dijo Wen Ruohan con disgusto.
“¿Su rostro? Podría diseñar algo para usted… Para hacer que el maestro Lan mantenga su
cabeza quieta en la cama, si es lo que desea”.
“Sería muy útil para mi noche de bodas”.
“Entonces lo hare de inmediato, amo”.
Sonriendo satisfecho, Jin Guangyao no dijo más, siguiendo en silencio al infame líder de la
secta Wen por la residencia principal de Sin Noche, caminando hasta el centro de la secta a su
lado. Wen Ruohan ya había planeado cuales serían sus siguientes movimientos para esa
noche, llamando a varios de sus soldados más fuertes, para darles las ordenes de cazar a su
hijo y traerlo de vuelta a la secta.
Pero llegando a la entrada del edificio, no fue necesario buscar a Wen Xu, ya que este había
entrado por la puerta principal, llegando solo y con el rostro abatido. Mirando a su hijo entrar
en su hogar, Wen Ruohan sonrió, acercándose a él en silencio.
“¿Dónde estabas?” Preguntó Wen Ruohan sin irse por rodeos, parándose frente a Wen Xu.
Bajando la mirada con temor, ante la imponente presencia de su padre, Wen Xu respondió:
“Estaba dando un paseo”.
“¿Y el bebé?”
Guardando silencio por un instante, Wen Xu respondió: “Lo ahogue en el lago”.
Escuchando esa respuesta, todos los presentes guardaron silencio. Wen Xu era un omega
amable, ni siquiera sabía cultivar pues era demasiado amable como para pensar en pelear, así
que nadie podía creer que alguien como él tuviera el valor de matar a una persona, mucho
menos a un bebé inocente. Y conociendo también la bondad en el corazón de su hijo, Wen
Ruohan no pudo evitar reírse.
“Vamos, no juegues, ¿Dónde está ese niño?” Preguntó Wen Ruohan.
“Lo mate”.
“No eres idiota, ¿Por qué harías algo así con un bebé?”
Tomando valor, sintiendo odio profundo por su padre, Wen Xu levantó la mirada y dijo: “Fue
un acto de compasión”.
“¿Un acto de compasión?”
“¡Tu querías lanzarlo a los perros!” Gritó Wen Xu furioso: “Si ese bebé iba a morir, por lo
menos quería darle una muerte piadosa y rápida, ahogarlo en un rio es mejor que ser comido
vivo por perros”.
“Tú no eres idiota, A-Xu, y yo se eso” Dijo Wen Ruohan sonriendo: “¿Crees que de verdad
iba a matar a ese niño? Gracias al idiota de tu hermano, perdimos al heredero de los Jiang, y
el idiota de Wei Wuxian me hacía enfadar demasiado con su presencia, aun en los calabozos
de mi secta. El único prisionero que tenía para someter a Yunmeng y a la secta Jiang era el
hijo de la perra de Wei Wuxian, matar a ese bebé sería igual a matar a Lan Xichen. Así que
deja de jugar, y dime donde está el pequeño omega”.
“Lo mate, está muerto” Dijo Wen Xu, sin perder su firmeza.
“Oh… A-Xu… No sé por qué no puedo creerte, mi dulce flor”.
Wen Ruohan conocía bien a su hijo, desde una sola mirada o un movimiento de sus dedos,
conocía bien a ese pequeño omega al cual había criado con tanto cariño. Así que acercándose
más a él, le dio una suave caricia en una de las mejillas, mirándolo a los ojos.
“Dime donde está el bebé, y hare esto mucho más fácil para ti” Pidió Wen Ruohan, mirando
su hijo a los ojos.
“¿Mas fácil? ¿Crees que tengo miedo?” Preguntó Wen Xu de forma desafiante: “Así como tú
crees conocerme, padre, yo también te conozco. Tu jamás me golpearías o me dañarías”.
Asintiendo con la cabeza, Wen Ruohan respondió: “Estas en lo correcto, yo nunca tocaría
uno solo de tus cabellos para dañarte, hijo mío. Pero… Hay otras opciones”.
Separándose de Wen Xu, Wen Ruohan le dio la espalda a su hijo, y acercándose a sus
guardias alfas, les ordenó: “Golpéenlo en el estómago”.
Soltando un grito de pánico, Wen Xu fue rápidamente sujetado por esos guardias, quienes
sosteniendo sus brazos, rápidamente le dieron un fuerte golpe en el estómago, haciéndolo
gritar del dolor. Negando con la cabeza al ver a su hijo todavía en pie, Wen Ruohan dijo:
“Háganlo con más fuerza, no veo que le haya dolido”.
Soltando un fuerte grito, Wen Xu sintió como un nuevo golpe aterrizaba en todo su abdomen,
gritando: “¡Padre por favor!”
“¿Dónde está el bebé?” Volvió a preguntar Wen Ruohan con calma.
“¡Esta muerto! ¡Yo lo mate!”
Negando con la cabeza, Wen Ruohan dijo: “De nuevo, en el estómago”.
A pesar de que a ninguno de los alfas que estaban ahí les gustaba eso, viendo a ese pequeño e
indefenso omega temblando y sufriendo, tuvieron que obedecer, sujetándolo y golpeándolo
múltiples veces, escuchando sus gritos desesperados. Wen Xu nunca había recibido dolor
físico, ni siquiera en su entrenamiento, así que a pesar de que seguía firme a sus ideales de no
decir la verdad, estaba retorciéndose de dolor, creyendo que moriría por esos fuertes golpes
en todo su cuerpo.
Parado detrás de Wen Ruohan en la entrada, Meng Yao no podía evitar sonreír ya a sus
anchas, mirando complacido como Wen Xu era torturado de esa forma, susurrando: “Debes
disfrutarlo, querido A-Xu…”
Y tras varios minutos de esa golpiza, siendo Wen Xu prácticamente tirado en el piso, Wen
Ruohan dijo: “Cuando tu regresaste de Yunmeng, me dijiste que el peor horror que podrían
hacerle a un omega, es quitarle su virtud entre varios alfas, ¿No es verdad? Veamos si
haciéndote lo peor que podrían hacerle a cualquier omega me dirás que le paso al bebé”.
“¿Qué?” Preguntó Wen Xu aterrado, reaccionando a pesar de estar en el piso por la debilidad
que sentía.
“Quítenle la ropa” Exigió Wen Ruohan con frialdad.
Escuchando más gritos desesperados del omega, los guardias alfas se vieron obligados a
sujetarlo en el piso, quitándole la ropa. Y a pesar de que Wen Ruohan se sentía firme con la
idea de obligarlo a decir la verdad sobre lo que había sucedido con el niño, escuchando los
gritos desesperados de Wen Xu, su corazón comenzaba a ablandarse.
“¡Papá por favor!” Gritaba Wen Xu envuelto en lágrimas: “¡Papá sálvame!”
Y dándose cuenta de esto al instante, Meng Yao avanzó rápidamente hacia Wen Ruohan,
susurrándole: “Mi señor, lo veo algo perturbado, ¿Es esto demasiado para usted?”
Todavía manteniendo la calma, a pesar de ver a su hijo siendo abusado en el piso, Wen
Ruohan respondió: “Tal vez yo… Estoy yendo demasiado lejos esta vez”.
“Traje mi guqin conmigo esta noche, mi señor, deje que interprete algunas de las canciones
de la secta Lan para aclarar su mente, gran líder”.
“Si, eso tal vez podría ayudar”.
Wen Ruohan había tenido a Jin Guangyao como un sirviente privilegiado desde que llego
solo por esa magnífica habilidad, esas maravillosas canciones en su guqin. Meng Yao era un
omega bien preparado, el cual conociendo bastante de la secta Lan, podía interpretar a la
perfección sus canciones de la calma y la limpieza de espíritu, algo que lo ayudaban a aclarar
sus ideas, y dirigir a su secta de mejor manera.
Así que sonriendo aún más, Jin Guangyao tomó su guqin dado por una de las sirvientas del
lugar, poniendo sus dedos sobre las cuerdas y comenzando a tocar una melodía tranquila y
serena, que tranquilizo a todos los presentes por un instante. Pero de una forma repentina, sus
dedos se movieron rápidamente por las cuerdas, y sonido chirriante y desagradable cortó el
ambiente. Parecía que Meng Yao había errado en la canción, pero continuó tocando.
Y escuchando ese sonido tan desagradable, Wen Ruohan volvió a sonreír, sintiendo su mente
clara después de mucho tiempo, mirando la escena en la entrada fijamente: “No veo que lo
estén haciendo de una forma adecuada todavía, deben hacerlo más fuerte, para que confiese
donde esta ese bebé”.
Gritando aterrorizado por el dolor, intentando huir de esos alfas, Wen Xu gritó con todas sus
fuerzas: “¡Papá no! ¡Papá por favor ayuda! ¡Sálvame!”
Y por un momento, mirando la luz de la luna por una de las ventanas, Wen Xu solo pudo
pensar en Wen Ning, lamentando no haberse ido con él a tiempo, de no haber huido de ese
terrible destino cuando tuvo oportunidad.
Ahora solo pudiendo atenerse a las terribles consecuencias de haberse quedado junto a su
padre en aquel infierno.
***
Bufando con molestia, Wang Jiao se puso de pie de aquella cama, y cerrando sus túnicas
interiores, caminó fuera de la habitación, buscando a Wen Chao.
“Maldita mierda, ¿Quién te crees?” Se preguntó Wang Jiao con furia, caminando rápidamente
por el pasillo de la residencia: “Tengo que fingir que eres un maldito alfa ¿Crees que es fácil
para mí? Vamos, si vas a hacerlo no me tengas esperando, maldito Wen Chao, solo quiero
vomitar de pensar en tu olor”.
Caminando por aquel edificio a obscuras, Wang Jiao caminó hasta una de las oficinas
alejadas de la secta, donde suponía que Wen Chao se encontraba.
“¿Mi amor?” Preguntó abriendo la puerta de la habitación con delicadeza, suavizando el tono
de su voz al hablar: “¿Te encuentras ahí? No pudo aguantar más… Te extraño demasiado
¿Por qué no vienes a la cama ahora?”
Pero la habitación se encontraba vacía, solo con las velas encendidas, y con la apariencia de
que alguien había abandonado el lugar a toda prisa. Bufando con molestia, sintiéndose
sumamente disgustado, Wang Jiao maldijo entre dientes. Ni siquiera sabía por qué seguía
aguantando a Wen Chao, en su habitación, en una caja secreta, tenía una pequeña fortuna que
había robado de todas las sectas que invadieron, lo suficientemente amplia como para escapar
y fundar su propia secta muy lejos de todos esos idiotas Wen.
Pero la codicia tal vez era demasiado fuerte en él, intentando encontrar más joyas o dinero de
las sectas que Wen Chao destruía, para tener una fortuna incluso mejor.
“Con todo ese dinero, me comprare un alfa de verdad, que no la tenga tan pequeña como tú,
maldito Wen Chao” Susurro Wang Jiao con molestia.
Y dándose por vencido, entendiendo que tendría que seguir esperando a Wen Chao como le
habían ordenado, Wang Jiao se giró para regresar a su habitación. Pero no pudo hacerlo.
A lo lejos, desde el jardín, comenzó a escucharse una dulce melodía en una flauta.
Sintiéndose extrañado, Wang Jiao cruzó nuevamente el pasillo, y se acercó a la ventana
observando el jardín principal.
“¿Quién se atreve a tocar la flauta a esta hora? Es de madrugada… Que molesto” Se quejó
Wang Jiao en un susurro.
Y dispuesto a regañar al idiota que se había atrevido a perturbar su calma, creyéndose el
dueño de aquel lugar, Wang Jiao se quedó sin habla, observando el exterior.
Ya que en medio de la niebla nocturna, con su cabello volando ligeramente en el aire, Wang
Jiao reconoció la delgada y fantasmal figura que estaba tocando la flauta en medio del jardín,
algo que lo aterrorizo.
“No puede ser… ¿Es un fantasma? ¿Pero cómo…?” Se preguntó Wang Jiao retrocediendo.
Y por un instante, en uno de sus oídos, pudo escuchar claramente esa voz que hace tanto
tiempo había olvidado: “…No importa a donde huyan, me volveré un fantasma lleno de
resentimiento por lo que me hicieron, y los matare…”
Con el corazón acelerado y el rostro lleno de pánico, Wang Jiao siguió mirando por esa
ventana la figura fantasmal que ahí estaba, cruzando miradas por un instante con aquel ser
maligno, observando sus ojos rojos y llenos de odio.
Entonces Wang Jiao gritó con todas sus fuerzas.
Capítulo 34.

“¡Yo sé lo que vi! ¡Yo lo sé!”


Manteniendo la calma, a pesar de que escuchaba los desesperados gritos de su omega, Wen
Chao respondió: “Lo se Jiao Jiao, pero por favor, cálmate”.
“¡Yo sé lo que vi! ¿Y si lo sabes? ¿Por qué no me crees?” Siguió gritando el omega.
Parados detrás de su líder, los alfas que solían cuidar a Wen Chao, intercambiaron miradas
entre ellos, burlándose en silencio del ataque de histeria que Wang Jiao parecía estar
teniendo. Pero manteniendo la calma, a pesar de los gritos desesperados de su omega, Wen
Chao intentaba calmar al contrario, viendo que de verdad estaba asustado.
“Si te creo, es solo que… Probablemente te hayas confundido”.
“No me confundí, lo vi con mis propios ojos, y él me vio a mí. Tenía las mismas túnicas
negras con las que lo asesinamos, una flauta negra en sus labios, y la espada Suibian
colgando de su cintura, ¿Quién más podría ser que el fantasma resentido de Wei Wuxian?”
Preguntó Wang Jiao muy alterado.
Regresando del centro de la secta de los Wen, Wen Chao se había encontrado con un aterrado
Wang Jiao, quien había salido corriendo de la gran casa que les había cedido su padre a las
afueras de la ciudad, corriendo en sus túnicas interiores y gritando horrorizado. Logrando
calmarlo, Wen Chao consiguió traerlo de regreso a su secta, donde lo llevó a su oficina para
intentar razonar con él.
“¿Cómo podría ser el perro de Wei Wuxian? ¿Hace cuánto tiempo lo matamos? ¿6 meses?”
Preguntó Wen Chao”.
“3, fueron solo 3 meses” Dijo Wang Jiao alterado: “El 3 es un numero de mala suerte,
justamente 3 días y 3 meses desde su muerte, y vino aquí por mí”.
“Jiao Jiao, eso es imposible”.
“¿Cómo lo sabes? El no tuvo un ritual para mantener su alma en paz después de su muerte,
como el resto de niños de sectas pudientes, pudo venir por nosotros al morir”.
“Wei Wuxian murió en los túmulos funerarios, es imposible que saga de ahí, vivo o muerto.
Hay una gran barrera impenetrable puesta por mis antepasados en ese lugar, ningún ser
resentido o vivo ha salido vivo de ese lugar ¿Cómo podría salir de ahí su fantasma?”
“Tal vez la barrera está rota, o tal vez hay otra forma…”
“Jiao Jiao, por favor, deja de molestarme” Dijo Wen Chao, comenzando a perder la paciencia:
“Tengo cosas más importantes que atender ahora, como intrusos en mi secta que se colaron a
los almacenes de Sin Noche”.
Recibiendo un alarmante aviso a media noche, Wen Chao y todos sus guardias tuvieron que ir
apresurados al centro de la ciudad, donde en los almacenes principales de la secta, alguien
había entrado a la fuerte y había robado varias cosas. Eso fue un escándalo, ya que en los
almacenes es donde los Wen guardaban todos sus tesoros y objetos imprescindibles. Pero
para sorpresa de Wen Chao, solo se habían llevado viejos pergaminos que tenían siglos de
antigüedad, y una vieja flauta que supuestamente le pertenecía al líder de la secta Wen, sin
tocar objetos preciados o tesoros. ¿Quién podría desear pergaminos antes que el oro? Sea
quien fuera el saqueador, era muy idiota por llevarse papel antes que tesoros.
“No me importa, solo quiero que nos vayamos, por favor, vámonos de esta ciudad, de este
país” Pidió Wang Jiao.
“Tienes que calmarte, ve a dormir un poco, creo que el estrés te está haciendo daño” Dijo
Wen Chao, todavía negando las palabras del omega.
“¡Cree en mí! ¡Maldita sea! ¡Sé que está en esta secta! ¡Y sé que viene por nosotros!” Grito
Wang Jiao, muy alterado: “¿Eres un cultivador o no? ¡Entonces exorciza a esa cosa!”
“Bien, te prometo poner talismanes en toda la secta, ¿Eso te calma?”
“¡No! ¡Quiero que lo mates!”
“¿Cómo puedo matar algo que ya está muerto? Wei Wuxian está retorciéndose en los túmulos
funerarios y no hay nada más que mencionar sobre él al respecto, ve a dormir y deja de
molestarme, Wang Jiao” Dijo Wen Chao, harto de toda la situación.
Y aunque Wang Jiao quiso seguir discutiendo, completamente seguro de que tenía razón
sobre haber visto lo que vio, varios apresurados sirvientes se acercaron al omega, sacándolo
del lugar para que ya no molestara a Wen Chao, quien tenía que seguir trabajando. Sacando al
omega de la habitación, dejando a Wen Chao solo con sus guardias alfas, Wen Zhuliu no
pudo evitar sentirse curioso por la situación.
“Mi señor, ¿No le dirá a su padre sobre este suceso?” Preguntó Wen Zhuliu, acercándose a
Wen Chao.
“Por favor, no empieces” Dijo Wen Chao fastidiado: “¿Sobre qué tendría que decirle a mi
padre? No hay ningún maldito fantasma aquí, Wei Wuxian está muerto y su alma perdida en
el abismo, eso es todo. Y si te refieres al mínimo saqueo de los almacenes, ¿Qué sentido
tendría? No robaron nada de interés para mi secta, solo interrumpiría la luna de miel de mi
padre con su nueva esposa por una tontería”.
“Mi señor… Los pergaminos que se llevaron, son reliquias antiquísimas, pertenecientes al
creador de la secta, a Wen Shima”.
“¿Y que hay con eso? Por favor, no me digas que crees en esa tontería de que es posible
controlar la energía resentida, son cuentos para asustar a los niños. Además, sea quien sea
que se haya llevado los diarios de mi antepasado, si de verdad está intentando seguir los
pasos del infame Wen Shima como su estúpido discípulo o lo que sea, está abriendo una
puerta al más allá que no podrá cerrar. Wen Shima no quiere un discípulo a quien enseñar sus
grandes invenciones, quiere un nuevo cuerpo al cual poseer y regresar a esta vida” Respondió
Wen Chao de forma cortante.
Nadie más que un propio descendiente de Wen Shima podía leer sus diarios, sabiendo lo que
había pasado esa noche en los túmulos funerarios cuando fue asesinado por Wen Mao,
entendiendo cuales eran los verdaderos deseos de Wen Shima. Y conociendo bien esa
historia, Wen Chao estaba seguro de que si Wen Shima había contactado a alguien, por el
método que fuera, no eran buenas intenciones.
Tal vez pronto Wen Shima encontraría un nuevo cuerpo el cual podría poseer para regresar a
ese mundo.
***
Tres días pasaron en la pequeña casa a las afueras de Ciudad Sin Noche, la casa que Wen
Chao habitaba, y la cual ahora estaba maldita.
“Por favor te lo pido, por favor no me dejes” Suplicó Wang Jiao arrodillado frente a Wen
Chao.
“Jiao Jiao, ya te lo dije, no hay nadie aquí” Dijo Wen Chao, repitiendo su discurso de los
últimos días: “Tengo que ir a una importante reunión con mi padre, ya que ha regresado
abruptamente de su viaje de luna de miel con su esposo”.
En la habitación que compartía con el omega, Wen Chao se preparaba vistiéndose con sus
mejores galas, ya que aquella noche tendría una cena formal muy importante con su padre y
personas importantes de su secta, a la cual se le había pedido ir solo. No era un evento social
como para llevar a Wang Jiao con él, así que tenía que dejarlo esa noche solo en su casa, a
pesar de los llantos desesperados del omega.
Todavía arrodillado frente a Wen Chao, el omega suplico: “No quiero quedarme solo aquí, no
quiero quedarme con el bebé”.
“Jiao Jiao, no hay ningún bebé aquí”.
“Todas las noches puedo escucharlo, por los pasillos, me está persiguiendo” Dijo el omega
llorando más: “Pero no es un bebé, escucho sus garras en la madera, arañándola, no sé qué es
esa cosa horrible… Creo que es el hijo de Wei Wuxian que mató tu hermano”.
“Todos sabemos que A-Xu no mató a nadie, deja de hacerte ideas tontas sobre esto. Pediré
que te traigan algo para dormir, y regresare antes de la media noche para estar contigo, ¿Estas
bien con eso?” Preguntó Wen Chao, intentando ser paciente, tomando al omega de un brazo
para hacerlo ponerse de pie: “Además, hoy hablare con mi padre sobre nuestra boda, para
casarnos después de invadir la torre Koi la próxima semana como está previsto ¿No te llena
eso de emoción?”
Guardando silencio, Wang Jiao prefirió guardar sus comentarios al respecto, ya que él no
tenía ningún deseo de casarse con Wen Chao, pero tenía que fingir que si, por lo menos hasta
poder escapar con una buena fortuna de la secta Wen y tener una vida feliz lejos de ellos.
“Así que acuéstate aquí, mi dulce omega, te traerán algo para dormir pronto, y yo regresare a
cuidarte cuanto antes” Prometió Wen Chao, llevando al omega a la cama de ambos
cuidadosamente.
Teniendo que resignarse, a pesar del miedo que lo consumía entero, Wang Jiao susurró: “De
acuerdo”.
“Pondré uno de mis guardias alfas en tu puerta, para que ningún bebé o cosa extraña venga
por ti, y puedas dormir más tranquilo” Dijo Wen Chao acostando a Wang Jiao y arropándolo
con las frazadas de la cama: “Te amo Jiao Jiao, volveré cuanto antes”.
Acercándose al omega por última vez, Wen Chao le dio un beso en la frente, separándose de
él para finalmente salir de la habitación que ambos compartían, dispuesto a partir a Sin
Noche cuanto antes.
Poco después de que Wen Chao se fuera, Wang Jiao recibió en sus aposentos a una de las
sirvientas de la casa, la cual le dio una taza de té con hierbas relajantes para ayudarlo a
dormir. Wang Jiao no quería tomar esa cosa, sintiéndose alerta pensando que alguien lo
atacaría, prefería quedarse despierto, por si tenía que huir. Pero sabiendo que sería regañado
si Wen Chao descubría que no había bebido el té, Wang Jiao se lo bebió de un trago,
sintiéndose más tranquilo al ver la figura de un alfa parándose en su puerta, para cuidar su
sueño.
Wang Jiao esperaba poder dormir esa noche.
***
Wen Chao guardó silencio, a pesar de que esperaba una reunión jovial y llena de alegría tras
el regreso de su padre, al llegar al edificio principal de Sin Noche se dio cuenta de que el
asunto era mucho más complicado de lo que parecía, con todos los presentes con el rostro
serio y un aspecto sombrío. ¿Por qué todos se encontraban de esa forma? Wen Chao no lo
comprendía, ya que estaban a punto de ganar la guerra, solo debían invadir la torre Koi y todo
terminaría.
Sentado al lado de su padre en ese gran salón, todos esperaban solo a una última persona
más, el joven heredero de la secta, Wen Xu. Después de haber sido torturado por su padre
después de “asesinar” al heredero de Yunmeng, el joven omega no había sido el mismo
jamás, luciendo mucho más demacrado y triste que antes. Wen Chao había escuchado
historias de lo que sucedió esa noche, historias vomitivas que lo hacían odiar a su padre en
secreto, pero obviamente no podía decirlo, ya que con la salud mental de Wen Ruohan
empeorando cada día, era imposible pensar en decir algo en esa secta sin temer a la muerte.
Después de un par de minutos esperando, las puertas del salón se abrieron y darán paso a
Wen Xu, quien acompañado de un guardia alfa que lo seguía a todos lados, ya que temían que
el pequeño omega escapara o se suicidara, llego al salón. Ignorando el temor y el asco que su
hijo mayor parecía sentir por él, Wen Ruohan sonrió complacido al verlo, observando su
semblante callado y ahora tan triste.
“A-Xu… Ven con papá, siéntate a mi lado” Pidió Wen Ruohan con una sonrisa, señalando el
asiento a su lado, el cual estaba apartado para su hijo.
Con el mismo semblante en blanco, Wen Xu no hizo ningún comentario, obedeciendo a su
padre en silencio. Mientras que sentado al otro lado del que ahora era su esposo, Lan Qiren
no pudo evitar presionar los puños con ira, odiando lo que Wen Ruohan le había hecho a su
propio hijo, y la forma en la que el joven Wen Xu ahora parecía… Estar muerto en vida.
Cuando todos los invitados a la reunión finalmente arribaron, Wen Ruohan se aclaró la
garganta y dijo: “Buenas noches a todos, lamento haber convocado una reunión a estas horas
y de una forma tan abrupta, pero… Hay algo importante que tenemos que discutir”.
Dándole paso a uno de los consejeros de Wen Ruohan, este se puso de pie y camino hasta
unos pergaminos, los cuales tenían dibujados extraños símbolos: “Estamos en el punto final
de esta guerra, ahora solo la secta Lanling Jin se mantiene firme ante nosotros, así que todos
nuestros esfuerzos se han centrado en el asedio en la torre Koi y en afianzar nuestros puntos
de control en el mismo Lanling. Pero tal vez nos hemos confiado demasiado en las áreas que
ya hemos tomado como nuestras y que hemos dejado sin mucha vigilancia”.
Sintiéndose algo extrañado, Wen Chao desvió la mirada, observando como su padre lo
miraba de forma juzgadora, como si Wen Ruohan estuviera esperando que Wen Chao se
disculpara por algo, aunque Wen Chao no entendía que era aquel error que había cometido.
“En los últimos días, tres de nuestros asentamientos en la frontera de Yunmeng fueron
vencidos, todos los soldados asesinados, y solo estos símbolos fueron encontrados en las
paredes y diversos amuletos” Dijo el consejero, señalando los pergaminos.
“¿Entonces los asentamientos fueron tomados?” Pregunto uno de los presentes en la reunión:
“Es decir, ¿Acaso los Jin o los Jiang tomaron esos asentamientos?”
“No, no se encontró a nadie. Solo a los cadáveres de los soldados, que murieron de una forma
terrible” Explicó el consejero de una forma sombría.
“Esto solo puede estar relacionado con una cosa, un arte obscura dominada por la secta Jin o
Lan, alguno de ellos debió tomar conocimientos del pasado de sus sectas y está intentando
vencernos desde el interior con ellos” Dijo otro de los Wen.
Y sin apartar la mirada de su hijo menor, Wen Ruohan dijo: “O incluso son las técnicas
prohibidas de nuestra propia secta, que han comenzado a ser usadas en nuestra contra. Eso
me hace preguntarme… En los almacenes de Sin Noche, ¿Alguien ha visto la flauta maldita?
¿O los pergaminos malditos de Wen Shima?”
Al escuchar esas preguntas, un estremecimiento recorrió la espalda de Wen Chao, quien
entendió por qué su padre estaba mirándolo con tanto enfado. Hace varios días él había
obviado un reporte de un saqueo tomándolo como algo menor, pero entonces Wen Chao no
supo que se habían llevado de las bóvedas de la ciudad, sin saber que eran cosas tan
preciadas…
“¿Acaso alguien olvido dar un reporte de un saqueo?” Preguntó Wen Ruohan, como si
estuviera leyendo la mente de Wen Chao: “¿Acaso alguien esta ocultando la verdad sobre
algo tan importante?”
Con esas preguntas tan obvias, dirigidas a Wen Chao quien tomo el lugar del líder de la secta
ante la ausencia de su padre, todas las miradas de los presentes de enfocaron en él, esperando
pacientemente que dijera la verdad.
Pero antes de que Wen Chao pudiera abrir la boca, uno de los sirvientes de la secta Wen entró
rápidamente en el salón, interrumpiendo la reunión: “Lideres de la secta, lamento la
intromisión, pero desde la residencia exterior del maestro Wen Chao han comenzado a
lanzarse señales de peligro…”
Desviando la mirada hacia una de las ventanas, todos los presentes observaron cómo varias
señales rojas se veían en el cielo, desde la dirección de la residencia privada de Wen Chao,
algo que hizo suspirar con frustración al joven beta, quien suponía lo que había sucedido.
“Maldita sea, Jiao Jiao…” Dijo Wen Chao con furia, poniéndose de pie de inmediato.
Observando a su hijo, Wen Ruohan dijo: “¿Acaso necesitas ayuda con esto?”
“No, es solo Jiao Jiao, está nervioso por su celo o cualquier otra mierda, nadie entiende a los
malditos omegas” Se quejó Wen Chao: “Solo está haciendo un berrinche por que no pudo
venir a la reunión. Me encargaré de él y volveré de inmediato”.
“¿Estás seguro de que no quieres una escolta?”
“Padre, puedo manejar mi omega” Dijo Wen Chao con confianza, minimizando el asunto:
“¿Cómo podría ser algo grave? Estamos en la frontera de Sin Noche, solo un demente se
atrevería a atacarnos estando tan cerca de la ciudad principal, seguro solo es una tontería de
mi omega”.
“De acuerdo, regresa rápido, mi querido hijo” Dijo Wen Ruohan, con un tono sombrío.
Haciendo una reverencia de disculpa ante todos los presentes, Wen Chao se apresuró a salir
de la sala de reuniones con Wen Zhuliu detrás, ambos prácticamente corriendo as sus caballos
para regresar a la residencia privada de Wen Chao.
“Maldito Wang Jiao, voy a darte una golpiza por interrumpirme” Susurró Wen Chao furioso.
***
Abrió los ojos cuando escuchó un ruido extraño.
Se sentó en la cama de inmediato, mirando en dirección al pasillo principal fuera de su
habitación, donde alumbrado por la luz de la luna podía ver la sombra del guardia que había
dejado Wen Chao para él antes de irse, algo que tranquilizó a Wang Jiao, ver que todo estaba
normal.
Sin embargo estaba seguro de que un sonido extraño lo había despertado, sintiéndose algo
atontado debido al somnífero que había tomado antes de dormir, Wang Jiao pensó que solo lo
había soñado. Que había escuchado entre sus sueños lo que parecía ser… El llanto de un
bebé.
Con un bostezo, Wang Jiao se tumbó en la cama, dispuesto a dormirse. Pero entonces lo
escuchó claramente, el sonido del llanto de un bebé desde el pasillo y el sonido de unas
pequeñas manos en el piso.
Abriendo los ojos y soltando un grito, Wang Jiao se bajó de la cama de inmediato, sin poder
ver nada en medio de la obscuridad, pero seguro de lo que había escuchado.
“¿Qué es eso? ¿Qué mierda es eso?” Se preguntó Wang Jiao aterrorizado, sintiendo más
ruidos debajo de su cama.
Sin poder soportar más, a pesar de que el ruido de los llantos desde el pasillo se hacían más
fuertes, Wang Jiao se acercó a la puerta y la abrió de golpe, dispuesto a llamar al guardia que
lo protegía para que pudiera salvarlo.
Pero al abrir la puerta corrediza, Wang Jiao volvió a girar, ya que el cadáver del guardia que
debía protegerlo cayó al suelo ante sus pies, con sangre saliendo de sus ojos y su boca,
teniendo un rostro contorsionado por la angustia.
“¡No! ¡Sálvenme!” Grito Wang Jiao aterrado, saliendo corriendo de su habitación.
El ruido de los llantos del bebé se escuchaban por toda la residencia de Wen Chao, y en
medio de su camino, Wang Jiao pudo ver la desolación, cadáveres de todos sus sirvientes y
guardias por doquier, todos muertos de formas horribles y sangrientas.
Parecía que Wang Jiao era el último superviviente de toda la casa.
Enfocándose solo en su supervivencia, Wang Jiao corrió por el pasillo principal hasta la
oficina privada de Wen Chao, donde sabía que había señales de auxilio. Entrando en la
habitación y dirigiéndose a una de las ventanas, Wen Chao tomó varias señales y las lanzó
una tras otra hacia el cielo, desesperado por conseguir ayuda.
Entonces en medio de su desesperación, el ruido del llanto del bebé se detuvo de forma
súbita, y antes de que Wang Jiao pudiera lanzar la última señal, se giró al sentir una
respiración en su espalda.
Entonces soltó un nuevo grito.
“¡Wei Wuxian!” Gritó Wang Jiao aterrorizado, casi al punto de desmayarse en el piso.
Lo tenía frente a sí mismo, con su característica túnica negra y su hermoso cabello negro
suelto sobre su espalda. Pero no sabía si era un espectro o no lo era, solo podía mirarlo
aterrado, sin poder creer que lo tuviera en frente… Wang Jiao estaba seguro, lo había
asesinado, él mismo lo vio caer al abismo en medio de la obscuridad.
Tomando un aire calmado, Wei Ying susurro: “¿Dónde está?”
“¿Qué?” Preguntó Wang Jiao temblando, al borde de la ventana abierta: “¿Quién?”
Respondiendo sus dudas, los llantos de ese bebé fantasmal volvieron a escucharse por todo el
lugar, pero con tanta fuerza que taladraron los oídos de Wang Jiao, quien volvió a gritar el por
el dolor.
“¿Dónde está?” Preguntó Wei Wuxian una vez más.
Entendiendo finalmente lo que ese fantasma resentido quería, Wang Jiao respondió:
“¡Muerto! ¡Pero yo no lo hice! ¡Yo no asesiné a tu hijo! ¡No fue mi culpa!”
“Si no fuiste tú, ¿Quién fue entonces?”
“¡Wen Xu!” Gritó Wang Jiao: “¡Él mató a tu hijo! ¡Él lo mató!”
Guardando silencio, Wei Wuxian lucio muy tranquilo con esa noticia, como si estuviera
reflexionando al respecto. Mientras que Wang Jiao se cubrió los oídos con las manos, ya sin
poder soportar los fuertes llantos de ese niño, que estaban enloqueciéndolos.
“El omega más hermoso de Qishan Wen” Dijo Wei Ying, mirando a Wang Jiao a los ojos:
“Incluso más hermoso que el propio Wen Xu, la flor de Wen Ruohan. Pero me pregunto…
¿Eres tan hermoso por fuera como por dentro?”
Confundido por esa pregunta, Wen Jiao observó como Wei Ying desenvainaba su espada, y se
la ofrecía a Wang Jiao. Pero antes de que el joven omega pudiera preguntar que estaba
sucediendo, una hermosa tonada en una flauta comenzó a sonar fuertemente junto con el
llanto de aquel bebé, mientras que pequeñas manos de niños comenzaron a aferrarse a sus
piernas desde el suelo, impidiéndole moverse.
Y tras pocos segundos más, mientras Wang Jiao se perdía en los rojizos ojos de Wei Ying,
dejó de luchar. Extendiendo uno de sus brazos en dirección a la espada, Wang Jiao tomó a la
espada Suibian por el mango, sintiendo como la energía resentida que esta desprendía
quemaba su piel, pero sin poder quejarse al respecto, no podía luchar.
“Sí, soy hermoso” Respondió Wang Jiao con una sonrisa, llevando la hoja de la espada a su
rostro.
Entonces una serie de gritos desgarradores se escucharon por todo el lugar, mientras Wei
Wuxian se quedaba en silencio, muy cerca de aquel joven, dejando que algunas gotas de
sangre llegaran a su piel, pero sin apartar la mirada de Wang Jiao.
“Eres hermoso por fuera… Pero estas podrido por dentro” Dijo Wei Ying sin apartar la
mirada: “Gracias, ahora tengo que añadir a Wen Xu a mi lista. Voy a matarlos a todos”.
Mientras que desde las afueras de la residencia, Wen Chao y Wen Zhuliu llegaban en sus
caballos. Pero desde ese el exterior pudieron notar que había algo extraño, ya que la puerta
principal estaba entreabierta, algo que no era usual, ya que los guardias siempre estaban
protegiendo la entrada.
Pero antes de que pudieran preguntar cualquier cosa, ambos se vieron interrumpidos cuando
un agónico grito cortó el aire una vez más, haciendo estremecer a Wen Chao y Wen Zhuliu
por su fuerza, parecía que estaban asesinando a alguien.
“Ese era…” Susurró Wen Zhuliu.
“Jiao Jiao” Respondió Wen Chao, reconociendo el tono de la voz de inmediato.
Entonces el sonido de una flauta comenzó a escucharse desde su espalda, en medio del
obscuro camino que los llevaba de regreso a Ciudad Sin Niche, y extraños seres comenzaban
a moverse agitadamente desde ambos lados del camino entre los matorrales.
La puerta de la residencia de Wen Chao se abrió de par en par, mostrando la desolación que
había en el interior. Y sosteniendo la espada Suibian ensangrentada, Wang Jiao apareció
frente a Wen Chao en medio de todos los demás cadáveres.
“Mi señor… Ha vuelto a casa” Dijo Wang Jiao con la voz áspera: “Dígame… ¿Soy hermoso
ahora?”
Un nuevo grito se escuchó en todo el lugar, el grito de terror de Wen Chao.
Capítulo 35.

En silencio, Lan Wangji subió de un salto sobre el tejado de esa vieja casa. Girándose,
extendió una de sus manos en dirección a su compañera, dispuesto a ayudarla a subir en una
acción caballerosa. Sin embargo subiendo por sí misma, Yu Ziyuan terminó mirando a Lan
Wangji como si este fuera un idiota.
Manteniendo el mismo silencio habitual que había entre ambos, Yu Ziyuan y Lan Wangji
caminaron hasta un punto más visible del tejado, desde donde podían observar la ventana de
una de las casas cercanas, la cual era una posada.
Era bastante tarde en la noche, y desde hace un par de días que Lan Wangji y la madre de su
omega se encontraban siguiendo una pista, una bastante peculiar.
Desde que Wei Wuxian desapareció, Yu Ziyuan y él habían hecho esfuerzos para obtener
pruebas del lugar donde se encontraba. Y es que todo el mundo les daba pistas diferentes,
algunos aseguraban que estaba muerto, otros que había sido exiliado, otros que estaba
encerrado en los calabozos de Sin Noche todavía. Sin importar quien les dijera, no había una
versión segura, y por lo tanto no había una forma exacta de saber dónde estaba el joven
omega.
Sin embargo había algo claro para Lan Wangji, Wei Ying no estaba muerto, el lazo que
ambos tenían se lo decía. Así que solo necesitaba encontrarlo, en donde sea que fuera, tenía
que hallarlo para salvarlo.
Los pensamientos del joven Lan se distrajeron cuando escucho el sonido de la puerta de esa
habitación a lo lejos, mirando por una de las ventanas, observó cómo un hombre había
regresado a la habitación.
“Wen Gonzi, traje la medicina, debe reponer fuerzas antes de volver a viajar” Dijo Wen
Zhuliu, caminando por la habitación hacia la cama.
La habitación se quedó en silencio, y a lo lejos, a penas alumbrados por las velas de la
habitación, Yu Ziyuan y Lan Wangji observaron como el alfa Wen se acercaba a la cama,
sentándose en ella a hacer algo que ellos no pudieron observar más.
Cuando estaban por la región de Yiling, Yu Ziyuan recibió rumores de uno de sus espías, que
le dijo que Wen Zhuliu había huido de Sin Noche en medio de la madrugada hace un par de
días. Al inicio, ambos pensaron que había traicionado a los Wen así como a los Yu y estaba
escapando, pero los rumores decían que Wen Zhuliu llevaba consigo a un invalido, algo que
los desconcertaba, ¿Un invalido?
De todas las personas de alto rango de la secta Qishan Wen a los cuales podían tener acceso,
Wen Zhuliu era la fuente más confiable, seguramente él sabría con certeza lo que había
sucedido con Wei Wuxian, o por lo menos sabría algún rumor un poco más verdadero que
simples aseveraciones. Así que tenían que atraparlo, pero también moverse con cuidado, ya
que Wen Zhuliu era muy poderoso, y sin importar si estaba solo, era un riesgo. Si iban a
atraparlo para sacarle información, debía ser con mucho cuidado.
Además de que estaba “ese otro asunto”.
“¿Por qué esta huyendo?” Preguntó Lan Wangji el primer día que ambos comenzaron a
seguir a Wen Zhuliu: “¿Sabe que estamos aquí?”
“No creo que este huyendo de nosotros” Respondió Yu Ziyuan.
Los informes de la secta Wen se volvían cada vez más extraños, en medio de extrañas
muertes de sus asentamientos, y la supuesta desaparición de Wen Chao, al inicio Lan Wangji
pensó que los Wen solo querían distraerlos del asunto de la guerra. Pero eso no tendría
ningún sentido, la última resistencia que ellos tenían era la torre Koi, y tarde o temprano los
Jin caerían también, ¿Por qué los Wen tomarían tantas molestias de intentar confundir a sus
rivales en un momento como este?
Entonces Lan Wangji pensó que tal vez no era una mentira, que alguna persona o algún
ejército estaban comenzando a luchar contra los Wen desde otro punto que no fuera la torre
Koi. ¿Pero quién podría ser? Lan Wangji conocía a todas las sectas, y ninguna de las que
todavía existía era lo suficientemente fuerte para hacer algo así. Los Jin podrían ser una
opción, pero estaban tan ocupados defendiendo Lanling que apenas si podían respirar, era
imposible que hubieran ideado una forma de atacar a los Wen desde otro punto.
¿Acaso serían los dioses, o los cultivadores inmortales quienes habían ido a ayudarlos? Lan
Wangji no tenía idea, tampoco le interesaba, solo quería recuperar a Wei Wuxian, y desde ahí
enfocarse en la supervivencia de las demás sectas y de la guerra.
Quedándose en ese sitio, a una distancia considerable de aquella posada, Lan Wangji observó
como Wen Zhuliu se quedaba al lado de esa cama por varios minutos, sosteniendo en sus
brazos un cuerpo pequeño envuelto en varias sabanas. Era un cuerpo tan delgado que por un
momento pensó que era una mujer, pero cuando vio las túnicas rojas típicas de la alta alcurnia
de la secta Wen entre las sabanas, Lan Wangji entendió quién era.
“Wen Chao” Dijo Lan Wangji sorprendido.
“Parece que encontramos al hijo desaparecido del imbécil de Wen Ruohan” Comentó Yu
Ziyuan con seriedad.
Ambos no entendían nada en lo absoluto, solo podían mirar sorprendidos, como Wen Chao
parecía estar tan débil que ni siquiera podía ponerse en pie por sí mismo. ¿Qué le había
pasado?
Después de varios minutos, en los cuales Wen Zhuliu y Wen Chao comieron las provisiones
traídas por el alfa, ambos recorrieron la habitación, y luego finalmente salieron de la posada,
en medio de las calles obscuras de aquella ciudad pobre. Poniéndose de pie, Lan Wangji y Yu
Ziyuan comenzaron a saltar en los tejados, comenzando a seguirlos a la distancia.
Wen Zhuliu llevaba a Wen Chao cargado en su espalda, avanzando con rapidez en medio de
la calle, escapando hacia el bosque.
“Mira… Los pétalos ya han florecido…”
Sorprendido, Lan Wangji desvió la mirada en dirección a la calle, donde suaves voces y risas
de mujeres se escuchaban por todo el lugar. Confundido, Lan Zhan cruzó miradas con Yu
Ziyuan, sin entender como un grupo de mujeres podían estar a esas horas en medio de la
calle.
Tensando su cuerpo, Wen Zhuliu se giró de inmediato, mirando aterrorizado a la obscuridad.
Pero de esta solo emergieron un grupo de mujeres, de cuerpos delgados y hermosos, cubiertas
por túnicas de seda color roja, las cuales cubiertas por velos dorados, jugaban entre ellas y
reían, acercándose a Wen Zhuliu cada vez más. Mirando a esas mujeres, el alfa dejó caer a
Wen Chao de su espalda, y sin pensarlo desenvainó su espalda, amenazando a las mujeres.
“Tú me dijiste… Que cuando las flores de los cerezos florecieran regresarías conmigo y te
casarías” Canturreó una de las mujeres dulcemente: “Ahora estoy vestida de rojo y los
cerezos han florecido… ¿Te casaras conmigo ahora?”
Mirando la escena con más detenimiento, Lan Wangji tomó a Yu Ziyuan de un brazo y
rápidamente la alejó de la escena, ya que se había dado cuenta de algo… Ellas no eran
mujeres.
“No importa el tiempo, no importa mi aspecto, cásate conmigo” Dijo otra de las mujeres, en
una voz rasposa.
“Aléjense, es mi última advertencia” Dijo Wen Zhuliu, mirando enfadado a las mujeres.
Pero aparentemente ellas no le tenían miedo, y acercándose aún más, casi hasta quedar al filo
de su espada, una de ellas dijo: “Mírame a los ojos… Y pídeme que me case contigo”.
Ahogando un gemido de terror, Wen Zhuliu observó debajo del velo dorado de una de esas
jóvenes, casi soltando su espalda y retrocediendo de inmediato. Mientras las dulces risas de
todas las mujeres llenaban el lugar, rodeando por completo a Wen Zhuliu y Wen Chao.
Pero antes de que Lan Wangji pudiera procesar lo que estaba pasando, siendo esa la primera
vez que escuchaba claramente la voz de un fantasma resentido, el sonido de una flauta
comenzó a llenar el ambiente. Con el ruido de la flauta, las mujeres dejaron de reír, y
soltando un aterrador grito, se abalanzaron sobre Wen Zhuliu, comenzando a atacarlo.
“Esto es… Energía resentida” Dijo Yu Ziyuan alejándose también: “Tenemos que irnos, mas
seres resentidos llegaran atraídos por esta energía, y no será agradable”.
Lan Wangji asintió rápidamente, y se dispuso a huir del sitio, ya que no podía negar que
estaba asustado. Sin embargo, cuando estaba a punto de saltar al siguiente tejado, se detuvo,
así como el ruido de la música.
“Te gustaba estar rodeado de hermosas mujeres, creí que sería digno morir de esta forma”.
Dándose cuenta de que Lan Wangji no estaba a su lado, Yu Ziyuan se giró enfadada y le dijo:
“Tu, imbécil, vas a matarnos, ¡Muévete!”
Sin embargo Lan Wangji no podía escucharla, y solo susurró: “Wei Ying…”
“¡Tu! Maldita bestia… ¡Aléjate de mí!” Gritó Wen Zhuliu, decapitando a una de esas mujeres
para alejarla.
Apareciendo desde las sombras, Wei Ying miró al frente y dijo: “Ya te lo dije la noche
anterior, y la noche anterior a esa. No tengo ningún deseo en asesinar al alfa de mi hermano,
traicionaste a tu secta entonces, puedes volver a traicionarla ahora… Arrodíllate ante mí y
perdonare tu vida”.
Alejando a otra de esas mujeres con su espada, Wen Zhuliu se giró y miró por un instante a
Wen Chao, tirado en el piso, tan indefenso. Sabía que ya no podían seguir huyendo, Wen
Zhuliu incluso comenzaba a sentirse sin fuerzas, así que solamente pensando en su propia
vida y su propia supervenía, dejó caer su espada, corriendo en dirección a Wei Wuxian para
arrodillarse a sus pies.
Mirando a Wen Zhuliu desde arriba, Wei Wuxian preguntó: “¿Se sintió bien? Ver como
abusaban de tu omega una y otra vez, como otros alfas lo tomaban sin descanso, ¿Eso le
gustó a tu alfa?”
Confundido, Wen Zhuliu levantó la mirada para observar a Wei Ying, pero no encontró
ninguna compasión en su mirada, solo odio.
“Una persona tan sucia como tú, que no tiene principios y que siempre traiciona a sus dueños
para salvar su asquerosa vida, no merece ser un cultivador” Dijo Wei Ying mirándolo
fijamente: “Tu no mereces ser nada… ¿Cómo podría confiar en ti para estar a mi lado? Solo
me traicionarías, como traicionaste a todos los demás…”
Pero antes de que Wen Zhuliu pudiera rogar por su vida, entendiendo que había sido
engañado, las mujeres volvieron a abalanzarse sobre él, tomándolo de los brazos y las
piernas, inmovilizándolo en el piso.
“¡No! ¡Lo prometiste!” Gritó Wen Zhuliu aterrado.
“Tú le prometiste a mi hermano que estaría bien, ¿Él lo está?” Preguntó Wei Wuxian:
“Quiero… Que encuentren su núcleo dorado”.
Desenvainando su espada, Wei Wuxian se la entregó a una de las fantasmales mujeres, las
cuales esbozaban sonrisas de felicidad debajo de sus velos dorados. Y en medio de los gritos
desgarradores de Wen Zhuliu, ellas comenzaron a clavar la espada en su piel y sus entrañas,
en búsqueda de aquello que Wei Wuxian les había pedido.
Pasando de largo de Wen Zhuliu, Wei Wuxian se acercó a esa persona cubierta por sabanas,
la cual inultamente intentaba arrastrarse lejos del lugar, intentando escapar de Wei Wuxian.
“¿A dónde crees que vas? Aún no hemos terminado contigo…” Dijo Wei Ying con una
sonrisa.
Poniéndose frente a Wen Chao, Wei Ying le quitó aquellas sabanas que lo envolvían,
escuchando como el maltrecho hombre gritaba lleno de dolor.
Ahogando un jadeo, Lan Wangji pudo entonces ver a Wen Chao. Envuelto en túnicas rojas
llenas de sangre, el hombre tenía varias cortadas en todo su cuerpo, pero no eran simples
cortadas, estaban infectadas, con una sustancia negruzca rodeando todas las heridas. Y la
segunda cosa que llamaba la atención de Lan Wangji, fue que Wen Chao había perdido sus
piernas, las cuales ya no estaban en la parte inferior de su túnica.
“¡Piedad!” Gritó Wen Chao llenó de pánico.
Dejando las sabanas de lado, Wei Ying se agachó cuidadosamente al lado de Wen Chao,
mirándolo a los ojos: “¿Cómo pudo una perra como tu quedar embarazada? ¿Qué alfa se
habría atrevido a tomarte?”
“¡Por favor!”
“¿Tu hijo será un omega? ¿Qué crees que le haré cuando nazca? Si es tan lindo como su
madre, entonces tal vez lo vuelva mi esclavo, al cual tomaré cuando me canse de mi
esposa…”.
“¡Lo siento! ¡Todas las cosas que te dije entonces! ¡Lo siento! ¡Por favor perdóname!” Gritó
Wen Chao.
“Tu embarazo está muy avanzado, ¿No lo crees? Tal vez haré que tengas a tu hijo en la jaula
de mis perros, entonces ellos podrán comerte a ti y a tu bebé…”
“¿Qué más quieres de mí?” Gritó Wen Chao desesperado: “¡Corte mi cuerpo por ti! ¡Corte
mis piernas por ti! ¡Ya he pagado mis pecados!”
“Te gustaba intimidarme diciendo esas cosas, ¿No es verdad?” Preguntó Wei Ying sonriendo
suavemente: “Debí saber que eran mentira, tu padre no te lo hubiera permitido jamás. Pero
estaba asustado, así que lloraba toda la noche temiendo el amanecer, temiendo que tu
cumplieras tus asquerosas promesas…”
“Por favor… Déjame vivir” Suplicó Wen Chao desesperado.
“¿Tú crees que eso pensó mi hijo antes de que tu hermano mayor lo asesinara?” Preguntó
Wei Ying en un susurro: “Eso no importa, ya nada de eso importa… Este es el último acto
misericordioso que tendrás por mi parte…”
Volviendo a llevar su flauta a sus labios, Wei Wuxian comenzó a tocar una suave y hermosa
melodía. Entonces las mujeres volvieron a reír, y abandonando el despojo sanguinolento que
se había convertido Wen Zhuliu, se arrastraron por el piso en dirección a Wen Chao.
“¡No!” Gritó Wen Chao, intentando escapar: “¡Por favor no! ¡Lo siento! ¡Perdóname! ¡Wei
Wuxian!”
Pero pronto los gritos cesaron, y mientras las mujeres rodeaban el cuerpo entero de Wen
Chao, solo pudo escucharse el desagradable sonido de la carne siendo desgarrada y la sangre
cayendo al suelo.
Observando aquella aterradora escena, Yu Ziyuan solo pudo pensar en huir, ya que sabía lo
peligroso que era estar en ese lugar con esos seres resentidos tan poderosos. Pero aunque su
sentido común le ordenaba escapar, Lan Wangji simplemente no podía hacerlo, y girándose,
volvió a correr por todo aquel tejado, acercándose hasta Wei Wuxian.
“¡No! ¡Estúpido!” Dijo Yu Ziyuan, sin ser capaz de detener al joven Lan.
Bajando la flauta de sus labios, Wei Wuxian cerró los ojos y respiró profundamente, sintiendo
el agradable aroma de la sangre y muerte a su alrededor. Mientras las apariciones a su
alrededor comenzaban a irse, y la energía resentida a disiparse, el joven omega se sintió
sorprendido cuando los brazos de una persona lo rodearon sorpresivamente.
“Wei Ying…”
Abriendo los ojos de inmediato al escuchar esa voz, Wei Wuxian preguntó: “¿Lan… Zhan?”
Al ver a su alfa abrazándolo, un estremecimiento recorrió la espalda del omega, ¿Cuánto
había visto su prometido? ¿Pensaría que era un monstruo después de lo que observó?
Pero eso no parecía molestar en absoluto a Lan Wangji, quien estrechó el delgado cuerpo de
su omega contra su pecho, con una suave sonrisa asomándose entre sus labios.
“Finalmente… Pude encontrarte…” Dijo Lan Wangji aliviado: “Te amo, Wei Ying…”
Sonriendo también, algo avergonzado, Wei Wuxian susurró: “Si… Me encontraste… Ahora
te debo un beso, ¿De acuerdo?”
Entonces las risas de las mujeres desaparecieron, mientras la luz de la luna lo iluminaba todo
a su alrededor.
Capítulo 36.

Cuidadosamente, Lan Wangji dejó a Wei Ying en la cama, ayudándolo a sentarse.


“¿Estas bien?” Preguntó Lan Wangji con suavidad.
Sonriendo, con el rostro apoyado en uno de los hombros de Lan Wangji, Wei Ying sonrió y
respondió: “Si, estoy bien”.
Después de ese extraño reencuentro en medio de la calle, Lan Wangji y Yu Ziyuan se
apresuraron a sacar a Wei Ying de ese sitio. Ninguno de ellos hizo preguntas, ya que estaban
demasiado preocupados pensando que los miembros de la familia Wen los perseguirían y los
matarían después de lo que pasó. Así que volando en sus espadas, fueron a la ciudad más
grande que había cerca, en la cual alquilaron dos habitaciones en una posada cualquiera.
Sabían que tenían que llevar a Wei Ying a un lugar seguro, pero no podían hacerlo en medio
de la noche y después de haber asesinado a Wen Chao…
Arrodillándose al lado de Wei Ying, Lan Zhan cuidadosamente tomó al omega de las manos,
mirándolo a los ojos: “Estas lleno de sangre”.
“Si… Lo siento”.
“Preparare un baño para ti”.
A Wei Ying le sorprendía lo tranquilo que Lan Zhan parecía con todo ese asunto, Madam Yu
lo había mirado aterrada, pero Lan Zhan… Él solo lucia especialmente feliz de que tenerlo en
sus brazos nuevamente.
Caminando hasta una de las esquinas de la habitación, Lan Wangji tomó la bañera de madera
que había en el lugar, y tomando el agua que los sirvientes previamente habían dejado en ese
sitio, llenó la bañera preparándola para Wei Wuxian.
“¿Tienes hambre?” Preguntó Lan Wangji.
“No, estoy bien”.
“Luces muy delgado, debes comer”.
“Descuida, es más de la media noche, ¿Dónde podrías comprar comida a esta hora?”
Preguntó Wei Ying con una sonrisa: “Además, puedo aguantar hasta mañana, comeremos
algo delicioso en el desayuno, ¿De acuerdo?”
Girándose por un instante para ver a su omega, Lan Wangji le dijo: “No creo que tengamos
tiempo de desayunar mañana, despertaremos directo para viajar a Lanling”.
“Entonces comeré con los Jin” respondió Wei Ying con simpleza.
Terminando de llenar la bañera, Lan Wangji se puso de pie y quiso acercarse a Wei Ying para
seguir insistiendo. Pero acercándose nuevamente a su omega, otra cosa llamó su atención.
Guardando silencio, Lan Wangji observó la espada de Wei Wuxian colgando de su cintura.
Sin decir nada, agachándose nuevamente al lado del mayor, Lan Wangji tomó el mango de la
espalda para intentar desenvainarla. Pero la espada no solo no se desenvainó, cuando la piel
de Lan Zhan tocó el mango, quemó su piel, haciendo que el alfa se alejara de inmediato.
“¡Lan Zhan!” Dijo Wei Ying asustado, acercándose a su alfa y tomándolo de la mano
suavemente.
“¿Qué es eso?” Pregunto Lan Wangji asustado.
“Lan Zhan, Lan Zhan…” Dijo Wei Ying con un suspiro, sonriendo suavemente: “No hagas
eso, ¿De acuerdo? Suibian está demasiado lleno de energía resentida ahora, te quemara la piel
si la tocas”.
“Entonces tu tampoco debes tocarla…”
“No, yo estoy bien. Yo volví a Suibian de esa forma”.
Confundido, Lan Wangji solo pudo mirar a su omega, quien usando su energía espiritual,
estaba tratando la quemadura en la palma de Lan Wangji, la cual no se podía curar de la
manera tradicional, ya que era una herida hecha por energía resentida.
“¿Qué fue lo que pasó?” Preguntó Lan Wangji, sin más rodeos.
“¿Qué fue lo que pasó?”
“No repitas las cosas que digo” Exigió el alfa con cierta molestia: “¿Dónde estabas? ¿Qué
sucedió?”
Cerrando los ojos por un segundo, Wei Wuxian pareció estar perdido en sus recuerdos,
finalmente diciendo: “Te vi ese día… En la lluvia, en el bosque. Pude reconocerte incluso
antes de que tú me reconocieras a mí. Te vi”.
“¿Estabas ahí?”
“Estaba ahí. Grite tu nombre, una, mil veces, por horas” Susurró Wei Ying: “Pero no me
escuchaste, ellos me escucharon primero. Los Wen estaban ahí, te estaban siguiendo, porque
sabían que estabas yendo por mí. Entonces ellos me encontraron primero, me tomaron y…
Me llevaron a Quishan, a los calabozos de Sin Noche”.
Cerrando los ojos, Lan Wangji presionó su otra mano en un puño, intentando controlar la
furia que sentía. Ya que todo eso que había imaginado, ahora se daba cuenta de que era una
realidad.
“Supongo que fue una decepción para ellos, ya que querían a Jiang Cheng, pero me
obtuvieron a mí, yo no era importante, no les agradaba, así que se encargaron de hacerme
saber que no era bienvenido en ese sitio” Continuó Wei Ying: “Wen Ruohan… Me hizo cosas
horribles”.
Temiendo lo peor, Lan Wangji preguntó: “¿Qué cosas horribles? ¿Te tocó?”
“Oh Lan Zhan… Él no me tocó” Dijo Wei Wuxian sonriendo suavemente: “No de esa forma,
de la forma que temes. No sé si es porque no le agrado, personalmente creo ser más lindo que
tu tío. Pero ya sabes… Yo estaba…”
Por un instante, Lan Wangji se dio cuenta de que fue difícil para Wei Ying continuar,
cruzando miradas con el mayor por un instante.
“¿Tú estabas que?” Preguntó Lan Wangji.
“¿No lo sabes?” Preguntó Wei Ying en un susurro: “¿Madam Yu no te lo dijo?”
“¿Decirme que?”
Tragando un poco de saliva, Wei Wuxian se negó a llorar, sonriendo y diciendo: “Ya está, la
quemadura seguirá doliendo pero ya está curada. Ahora podemos tomar un baño”.
Viendo como su omega lo soltaba y se ponía de pie de la cama, Lan Wangji hizo lo mismo,
caminando detrás de él, mientras la confusión seguía llenándolo: “¿Decirme que?”
Pero Wei Wuxian no respondió. Acercándose al centro de la habitación, Wei Ying
cuidadosamente dejó su espada, junto a esa extraña flauta que traía siempre, y también una
pequeña bolsa de tela, todos esos objetos juntos. Para luego soltar el cinturón de sus túnicas,
comenzando a desnudarse.
“¿Decirme que?” Preguntó Lan Wangji cada vez más confundido: “Wei Ying, por favor…”
Dejando caer su túnica al piso, quedando desnudo, Wei Wuxian encaró a Lan Wangji y le
preguntó: “¿Qué ves de diferente en mí?”
“¿Qué?”
“Todos me decían que cuando un omega masculino tiene un hijo, su cuerpo se ve diferente,
más feo” Dijo Wei Ying ligeramente avergonzado: “¿Me veo más feo ahora? ¿Me veo
horrible?”
Sin entender nada, Lan Wangji bajó la mirada al cuerpo de su omega, sin saber que
responder. Así que Wei Wuxian siguió hablando, perdiéndose en sus pensamientos: “Tal vez
solo es una excusa, ya sabes, llamarnos feos… Es una excusa para que un alfa pueda engañar
a su esposo sin tener culpa, porque un omega es feo después de tener un bebé…”
“Wei Ying…”
“Dolió muchísimo, yo… yo estaba solo” Dijo Wei Ying en un susurro, sin poder mirar a Lan
Wangji a los ojos: “Estaba ahí abajo, en los calabozos, junto a los demás miembros de las
demás sectas que estaban presos. No llamaron a una partera, mucho menos alguna ayuda
médica, estaba yo solo, en una celda, gritando”.
“No entiendo…”
“pero fueron lo suficientemente amables para traer un par de toallas y agua tibia, Meng Yao
lo hizo, me cuido mucho durante mi embarazo, por eso estoy agradecido con él, es un buen
amigo”.
“¿Embarazo? ¿Qué?”
“Cuando nació, pude bañarlo, uno de los guardas cortó el cordón umbilical, y me dejaron
quedarme con él toda la noche. Madam Yu no se equivocó, era un omega, un pequeño omega,
tan pequeño que parecía un muñeco. ¿Recuerdas a A-Yi? Yo también lo conocí cuando nació,
nuestro bebé era mucho más pequeño, tan pequeño…”
Sintiendo un nudo en la garganta, Lan Wangji se acercó a su omega lo abrazo, sintiéndose
desesperado y muy impotente.
“Me quede con él toda la noche, lo llame Yuan, como dijimos la primera vez que pensé que
estaba embarazado, ¿Lo recuerdas? Era nuestro pequeño regalo, mi regalo” Dijo Wei
Wuxian, apoyando su rostro suavemente en el pecho de Lan Wangji: “Lo sostuve contra mi
pecho, conté sus dedos y toque su piel, sentí su dulce aroma e incluso lo escuché reír… Lo
ame tanto, lo amo tanto…”
“¿Qué paso con Yuan? ¿Qué pasó con nuestro bebé? ¿Dónde está?” Preguntó Lan Wangji
confundido.
“A la mañana siguiente, cuando amaneció, unos guardias me llevaron a la parte superior de la
residencia Wen. Wen Ruohan se enteró de que nuestro bebé había nacido, así que me llevo al
salón principal de su consejo para burlarse de mí, como siempre lo hacía. Me quitó a nuestro
bebé, me golpeo, y me dijo que tenía que pelear por él para recuperarlo”.
“Wei Ying…”
“Pero no pude hacerlo… Me sentía demasiado adolorido, demasiado débil. Tome a Suibian y
asesiné a uno de sus guardias, pero eso es lo que Wen Ruohan quería, y me condenó a muerte
por eso, me llamó asesino y dejó que Wen Chao intentara asesinarme. Me llamó asesino por
querer salvar a nuestro bebé”.
“Está bien, no hiciste nada malo” Dijo Lan Wangji intentando consolarlo: “Lo
recuperaremos, iremos a Quishan y lo salvaremos, traeremos a Yuan a casa”.
Escuchar esas palabras fue suficiente para Wei Wuxian, quien rompió a llorar desesperado,
sin poder aguantar más el dolor: “Esta muerto… Nuestro bebé… Wen Xu lo ahogó en un
lago, nuestro bebé está muerto… Él lo mató”.
Abriendo mucho los ojos al escuchar esa noticia, Lan Wangji sintió como todo en su interior
se derrumbaba, cayendo de rodillas frente a Wei Wuxian, quien también estaba destrozándose
en llanto, ya que esa era la primera vez que podía llorar por la pérdida de su hijo, se estaba
permitiendo a si mismo ser débil estando junto a su alfa.
“¡No pude hacerlo! ¡No pude salvarlo!” Grito Wei Wuxian desesperado: “¡Él lo mató! Quiero
matarlo… A todos esos bastardos… ¡Voy a matarlos a todos!”
Escuchando los gritos de dolor de Wei Wuxian, Lan Wangji también comenzó a derramar
lágrimas por sus mejillas, acercando su rostro al vientre desnudo a Wei Ying, besando
suavemente su piel. Mientras que por el dolor, ignoró por completo como la habitación
comenzaba a llenarse de energía resentida.
Aun gritando por el dolor mientras lloraba, Wei Wuxian sollozo: “Me odio… Me odio
tanto… Lo quiero de vuelta, quiero a nuestro bebé de vuelta… Lan Zhan lo quiero de
vuelta…”
“A-Ying, lo siento…”
“Lo quiero de vuelta… Por favor dámelo… Por favor lo quiero de vuelta…”
***
Cerrando los ojos, Wei Wuxian apoyó su rostro en la amplia espalda de su alfa, mientras
sentía al refrescante aire rozar sus cabellos y todo a su alrededor, hasta que finalmente todo se
detuvo.
“Está bien, ya llegamos” Susurró Lan Wangji, bajando de un salto de Bichen.
Abriendo los ojos y mirando a su alfa, Wei Wuxian sonrió. Desde la noche anterior Lan
Wangji no había dejado de cuidarlo, tomándolo en sus brazos y abrazándolo a todas horas,
incluso llegando al punto de querer darle de comer en los labios. Pero él iba a permitírselo, ya
que también estaba lleno de alegría por volver a verlo, Wei Wuxian había recuperado su
felicidad al volver a encontrar a su alfa.
Aceptando ser tomado por su alfa, Wei Ying bajó igualmente de Bichen, apoyándose una vez
más en pecho de su alfa, dejando que él lo llevara por todo el lugar, finalmente llegando a
Lanling, su lugar seguro.
“¡A-Xian!”
Un grito lo hizo abrir los ojos, observando como en la entrada de la torre, Jiang Yanli bajaba
corriendo, siendo perseguida por Jin Zixuan, quien intentaba estar atento a su esposa bajo
cualquier circunstancia.
“¡A-Xian! ¡A-Xian!” Grito Yanli con lágrimas en los ojos, acercándose a su hermano para
abrazarlo.
Siendo dejado en el suelo por su alfa, Wei Wuxian también correspondió el estrecho abrazo
que le daba su hermana, susurrando: “Hola Shijie…”
“A-Xian… Yo estaba tan asustada… ¿Estas bien? ¿Estás bien?”
“Estoy bien Shijie…”
“No hagas eso de nuevo A-Xian, no te vayas” Suplico la joven sin poder dejar de llorar: “Te
amo tanto que no podría soportar perderte, no de nuevo…”
A punto de responder a las palabras de su hermana, ambos fueron interrumpidos, cuando
escucharon como el sonido de una catapulta impactó en una de las barreas de la torre Koi,
alarmando a todos los soldados de la secta Jin, quienes se prepararon para el ataque de los
invasores. Eran los soldados de la secta Wen, quienes le estaban dando la bienvenida a Wei
Wuxian.
“A-Li, regresemos adentro, no es seguro estar aquí durante un ataque” Dijo Jin Zixuan
tomando a su esposa de un brazos de inmediato: “Mucho menos en tu… En tu estado…”
Guardando un incómodo silencio, los tres alfas presentes se miraron entre ellos. Yu Ziyuan
mirando a Jin Zixuan llena de furia asesina, Jin Zixuan mirando a su suegra con evidente
temor, y Lan Wangji con una mirada fría que demostraba profundo dolor.
Reaccionando escuchando más ruidos alarmantes en el exterior, Jiang Yanli soltó a su
hermano y le dijo: “A-Xian entremos, no es seguro estar aquí ahora. Adentro todos están
esperándote, hicimos una fiesta de bienvenida para ti, papá y A-Cheng están ansiosos de
verte de nuevo…”
“Gracias” Susurró Wei Wuxian con una sonrisa.
“Ese ruido… Ese ruido insoportable” Se quejó Jiang Yanli, soltando a Wei Wuxian para
tomarse del brazo de su esposo: “No deja dormir a A-Cheng… ¿Cuándo terminara todo
esto?”
“¿No lo deja dormir?”
“No deja dormir a nadie… Es una molestia…”
Ante el aumento de los ruidos de los ataques y los gritos de los soldados que comenzaban a
pelear fuera de las murallas, todos los miembros de la secta Jin y sus demás invitados se
apresuraron a subir las escaleras para entrar en la torre Koi, donde podrían resguardarse.
Todos menos Wei Wuxian, quien se había quedado parado al final de las escaleras, teniendo a
su alfa detrás.
“Wei Ying…” Dijo Lan Wangji confundido, sin entender por qué su omega no subía.
“No dejan dormir a mi hermano…” Susurró Wei Wuxian, sonando extremadamente molesto:
“¿No te parece desconsiderado de su parte? Fueron esos ismos bastardos quienes lo hirieron,
pero ahora no lo dejan descansar…”
Dándose cuenta de que su hermano no estaba junto a ellos, Jiang Yanli se giró confundida,
observando a Wei Wuxian y Lan Wangji al borde de la escalera, siendo los últimos que
todavía no entraban a la torre.
“¿Qué quieres hacer entonces?” Preguntó Lan Wangji confundido.
Cruzando miradas con su alfa por un instante, Wei Wuxian no respondió, girándose y
caminando en dirección opuesta a las escaleras de la torre, a la entrada por donde corrían los
soldados y cultivadores de la secta Jin en dirección a la batalla.
“¡A-Xian!” Gritó Jiang Yanli, queriendo ir detrás de su hermano menor.
“A-Li, no” Dijo Jin Zixuan, tomando a su esposa para evitar que se fuera.
“¡Está yendo a morir!”
“Esta con su alfa, confía en Lan Wangji…”
“¡A-Xian! ¡Regresa!”
Sin saber qué hacer, viendo a su omega alejarse, Lan Wangji rápidamente tomó una decisión,
y caminó detrás de él, tomándolo de un brazo para no perderlo en medio de los demás
soldados. Pero Wei Wuxian parecía estarlo tomando con mucha calma, caminando fuera en
medio de las trincheras, ante los ojos sorprendidos de todos los soldados de la secta Jin.
“Wei Ying, basta” Dijo Lan Zhan asustado: “Vas a matarnos a los dos, detente”.
“La muerte no es el final, Lan Zhan… ¿Por qué tienes miedo de morir?”
Sin escuchar las palabras de su alfa, Wei Wuxian caminó hasta el centro del campo de batalla,
ante los confundidos ojos de los miembros de la secta Wen, quienes no sabían si atacar, sin
entender si aquello era una trampa o un ataque. Ya que solo había un pequeño omega junto a
su alfa frente a un ejército.
Cerrando los ojos, Wei Wuxian pudo sentir toda la muerte y el dolor que había en ese mismo
sitio, durante por varios días y semanas, ambas sectas se habían enfrentado sin cesar, dejando
un rastro de varios cadáveres en el centro, que estaban justamente bajo sus pies.
Tomando su flauta cuidadosamente, aun con la mano de Lan Wangji en su muñeca, Wei
Wuxian llevó la flauta a sus labios, comenzando a tocarla.
Entonces un gran estruendo se hizo en la tierra, mientras los cadáveres alrededor de todos los
presentes se ponían de pie, convertidos en cadáveres resentidos.
Mirando la escena aterrorizado, Lan Wangji rápidamente desenvainó a Bichen, dispuesto a
defender a Wei Wuxian de esos monstruos. Pero confundido, en medio de toda esa energía
resentida, Lan Wangji observó cómo esas cosas no parecían interesados en ellos, los únicos
humanos parados en medio de ellos. En vez eso abría sus fauces de forma amenazante, para
luego abalanzarse sobre los miembros de la secta Wen. Soldados Jin y soldados Wen, todos
muertos, atacando al gran ejército que tenían en frente, convirtiendo a más soldados de los
Wen en cadáveres resentidos, que atacaban a los suyos.
“¡Dispárenle! ¡Él es quien está causando todo!” Grito uno de los generales de la secta Wen,
que sabía bien lo que estaba sucediendo: “¡Maten a ese omega!”
Actuando mucho más rápido que los cadáveres resentidos, Lan Wangji se puso frente a su
omega, peleando contra los soldados de la secta Wen que intentaban atacar a Wei Wuxian,
defendiéndolo de todos, siendo la primera vez que no atacaba a los cadáveres resentidos a su
alrededor, solo a los humanos.
Al finalizar la tarde, cuando el sol comenzó a ocultarse entre las montañas, solo dos personas
quedaron paradas en medio de aquel campo de batalla. Envainando nuevamente a Bichen, la
cual estaba llena de sangre, Lan Wangji se giró en dirección a su omega.
Sintiendo el sol del atardecer contra su piel, completamente exhausto, Wei Wuxian bajó su
flauta de sus labios, a punto de caer al piso de rodillas.
“Wei Ying” Dijo Lan Wangji, atrapando a su omega para evitar que cayera.
Sonriendo suavemente, Wei Wuxian respondió: “Estoy cansado… Lan Zhan…”
“Lo sé, yo también”.
Ambos estaban llenos de sangre y todos fluidos, además del aroma de la muerte y la energía
obscura, que se había adherido a ambos como una enfermedad.
Pero a pesar de eso, Lan Wangji no podía evitar fijarse en una cosa, observando como las
pupilas de su omega se habían vuelto de un color rojo sangre, que por un momento le
parecieron hermosas.
“Eres mi luz, Hanguang-Jun… Tu título te precede…” Susurró Wei Ying.
Sin decir nada en lo absoluto, Lan Wangji besó la frente de su omega con cariño, tomándolo
en sus brazos y comenzando a caminar nuevamente al interior de la residencia Jin.
Cuando vieron el horror que comenzó a darse en todo el campo de batalla, todos los
miembros de la secta Jin huyeron aterrorizados, explicando como Wei Wuxian había
resucitado a los muertos y los estaba usando para acabar con la secta Wen. Así que cuando
Wei Ying y Lan Zhan entraron en la torre Koi, ya no había una fiesta de bienvenida para el
joven omega, solo había temor.
Mientras los cadáveres del campo de batalla caían al piso, ya que la música se había detenido.
***
Con un grito, Wen Ruohan estrelló una botella contra la pared.
“¡Maldito bastardo!” Gritó lleno de ira: “¡Maldito!”
Escuchando los gritos de su líder, el mensajero que estaba fuera de la oficina temió tocar la
puerta. Después de enterarse de la muerta de Wen Chao, Wei Ruohan se había comenzado a
comportar como un demente, estrellando cosas contra las paredes y gritando con furia.
Observando a ese tímido joven, Jin Guangyao se acercó a él, y amablemente tomó el
pergamino que este tenía en las manos: “Descuida, yo se lo entregare”.
Dudando un poco, ya que sabía el estatus de Jin Guangyao como un prisionero, ese joven no
pudo evitar dudar. Pero sonriendo suavemente, Meng Yao dijo: “Descuida, yo soy su
ayudante ahora, su único ayudante… Déjame hacerlo”.
Finalmente entregando la carta, por el temor que sentía por parte de su jefe, el joven
mensajero observó como Meng Yao entraba en la oficina sin miedo, cerrando la puerta con
llave detrás de sí mismo.
“¿Qué quieres?” Preguntó Wen Ruohan, sentado en medio de su oficina destruida, bebiendo
licor.
“Vaya…” Dijo Meng Yao, leyendo el mensaje en el pergamino: “Hay malas noticias”.
“Lárgate…”
“Han destruido todo el asentamiento fuera de la torre Koi, mi señor. Es la primera batalla que
la secta Jin gana en semanas” Dijo Jin Guangyao haciendo un breve resumen: “¿Debería
sentirme feliz?”
Sin prestar atención a las palaras del omega, Wen Ruohan bebió un trago nuevo de licor. En
una situación normal hubiera tenido un nuevo colapso nervioso por saber esa noticia, pero
después de enterarse de la terrible muerte que su hijo había tenido en manos de Wei Wuxian,
todo había dejado de importarle. Por esa noche, Wen Ruohan quería concentrarse en el dolor
de su hijo.
Sin perder su sonrisa amable, Meng Yao se acercó cuidadosamente al líder de la secta Wen,
susurrando: “¿Me escuchó, gran líder? ¿Escucho lo que le dije?”
“Lárgate…”
“El dolor por la pérdida es duro, ¿No es verdad? Yo me sentí igual cuando murió mi madre”
Dijo Meng Yao, usando un tono dulce y suave: “¿Cómo podría consolarlo?”
Parándose frente a Wen Ruohan, Meng Yao dejó caer el pergamino, y luego de eso el
cinturón que ataba sus túnicas.
“Debe ser tan difícil, tener que soportarlo todos los días. Ser rechazado por Lan Qiren cada
noche, a pesar de que ambos son esposos, tener que atarlo a una cama y tener que forzarlo…
¿Hace cuánto que un omega no se entrega a usted por amor, mi señor?”
Confundido, Wen Ruohan observó como Meng Yao se acercaba a él y cuidadosamente se
sentaba en su regazo.
“Déjeme consolarlo, mi señor…” Suplicó Meng Yao.
***
Sonriendo con suavidad, Lan Xichen acunó a Nie Song en sus brazos. Aquel pequeño bebé
de poco más de un año de nacido era la única cosa que lo mantenía cuerdo. Estando aun
recuperándose de una fuerte herida que tuvo cerca de su corazón, que casi lo mata, Lan
Xichen solo era un prisionero más, el cual afortunadamente y gracias a su tío, tenía una de las
mejores celdas en todo Quishan.
Pero era solo eso, un prisionero. Pasando todos sus días en esas cuatro paredes, sin poder ver
el sol o la luna, pensando todas las noches en las únicas personas que amaba, su hijo y Jiang
Wanyin, añorando el día que pudiera salir de ese sitio para poder reencontrarlos.
Como cada noche antes de dormir, Meng Yao iba por su hijo, cruzando algunas palabras
amables con Lan Xichen y revisando sus heridas antes de ir a su propia celda. Pero esa noche
fue diferente, ya que fuera de su celda, Lan Xichen se alarmó al escuchar gritos y pasos
rápidos.
Entonces antes de que pudiera razonar lo que había pasado, Lan Xichen fue sorprendido
cuando la puerta de su celda fue abierta, y Jin Guangyao fue arrojado al interior por dos
guardias, quienes nuevamente cerraron la puerta.
“¡A-Yao!” Dijo Lan Xichen alarmado.
Dejando al bebé de Meng Yao en su cama, Lan Xichen rápidamente se puso de pie y corrió
en dirección a su amigo, viéndolo llorar en el piso de forma desconsolada. Pero cuando se
acercó al omega, pronto Lan Xichen entendió lo que había pasado, ya que la piel y el cuerpo
entero de Meng Yao olían a un alfa, olían a Wen Ruohan, y viendo las túnicas desarregladas y
el aspecto de su amigo, Lan Xichen sintió ganas de llorar por la impotencia y el asco.
“A-Yao…” Susurró Lan Xichen, agachándose al lado de su amigo.
“No puedo hacerlo más… No puedo soportarlo…” Gimoteó Meng Yao envuelto en lágrimas:
“Él me tomó por la fuerza, A-Chen… Me tomó por la fuerza en su oficina, en el suelo… Yo
tenía tanto miedo, no podía resistirme, porque temía que le hiciera daño a mi bebé o a ti, no
pude resistirme…”
Cerrando los ojos abatido, Lan Xichen se acercó al contrario y le dio un abrazo,
presionándolo fuertemente contra su pecho, sin saber que decir.
“No puedo hacerlo más…” Siguió repitiendo Meng Yao: “Tener que soportar sus abusos
todos los días, los golpes de Wen Xu a diario, sus humillaciones, ver como Wen Ruohan
golpea a tu tío sin que yo pueda defenderlo… No puedo más… Quiero morir…”
“No A-Yao, está bien, no lo hagas, vamos a salir de aquí, te lo prometo…”
“¿Cuándo? ¿Cuándo vamos a salir de aquí? No puedo hacerlo más… Wen Xu me lastima
tanto que yo no…”
“Mírame, vamos a salir de aquí, ¿De acuerdo? Te lo prometo…”
“No me dejes solo… No me dejes…” Suplicó Jin Guangyao desesperado.
Cerrando los ojos, Lan Xichen estrechó fuertemente al omega contra su pecho,
prometiéndose a sí mismo que nunca dejaría de protegerlo.
Capítulo 37.

“¿Lo sabias entonces?”


“No es algo nuevo, si lees la historia lo suficiente… Supongo que es fácil darse cuenta”.
“Buah… Es difícil sorprenderte” Dijo Wen Xu, sonriendo muy contento: “Eres demasiado
inteligente…”
Desviando la mirada de su libro, Nie Mingjue miró a su prometido, aquel hermoso joven
Wen, quien estaba sentado en su regazo con una sonrisa.
Nie Mingjue no podía negar que Wen Xu era hermoso, con aquel largo cabello negro y sus
ojos rojizos, probablemente era uno de los omegas más hermosos de todas las sectas. Aunque
sus ojos siempre estaban puestos en otra persona…
“Jóvenes maestros, vine a dejar para ustedes el té” Dijo Meng Yao, entrando en la habitación
sin previo aviso.
Frunciendo el ceño con molestia, Wen Xu dijo: “¿Qué acaso no te enseñaron a tocar las
puertas?”
Quedándose parado en el umbral de aquel salón, Meng Yao cruzó miradas con Nie Mingjue,
respondiendo: “Disculpe joven maestro Wen, yo… El líder de la secta me pidió que viniera
sin tocar”.
“¿Acaso estas espiándonos o algo así?” Preguntó Wen Xu con desagrado: “Además, yo no
soy tu joven maestro, soy la próxima esposa del líder, dirígete a mí de forma correcta”.
Haciendo una reverencia, Meng Yao respondió: “Disculpe, Esposa del líder”.
Sin decir nada, Nie Mingjue solo observó a Meng Yao, el cual de forma silencio se acercó a
la mesa baja que tenía en frente, dejando cuidadosamente las tazas de té y un par de postres.
Wen Xu era hermoso, pero sin lugar a dudas el más hermoso de todos era Meng Yao.
Nie Mingjue conocía a todos los omegas de sectas importantes, desde los Lan hasta los Jiang,
y sin lugar a dudas, Meng Yao era el heredero digno de su secta, ya que como siempre, los
omegas Jin eran alabados por su belleza y su fertilidad. Aquel pequeño omega de cabellos
negros, los cuales solía recoger en un moño bajo, con un cuerpo delgado pero curvilíneo, y
esos ojos castaños claros… Nie Mingjue no podía negar que sentía un gran deseo por él.
Pero Meng Yao era intocable, era el acogido de su padre, su sirviente personal. Aunque por
su posición Nie Mingjue podía pedirle tener sexo en cualquier momento, jamás se atrevería,
su padre también era un alfa, y no planeaba meterse con un omega que había reclamado como
suyo.
Aunque le gustaba Meng Yao, Nie Mingjue sabía que no podía poseerlo. No mientras su
padre siguiera vivo.
“¿Y?” Preguntó Wen Xu de forma brusca: “¿Qué haces?”
Después de haber dejado las tazas de té y los postres, Meng Yao se quedó parado frente a la
mesa baja, cruzando miradas con Nie Mingjue de forma silenciosa, de la misma forma que
hacia siempre que ambos estaban cerca.
“Si hubiera querido público, lo hubiera pedido” Dijo Wen Xu muy molesto: “Por favor,
retírate”.
“Una disculpa, joven maestro” Dijo Meng Yao, haciendo una reverencia.
Sonriendo suavemente, Wen Xu susurró: “Otra equivocación… Muy extraño…”
“Una disculpa, esposa del líder…”
“Basta A-Xu, déjalo tranquilo” Pidió Nie Mingjue, defendiendo a Meng Yao: “Por favor
retírate, Meng Yao”.
Sonriendo con suavidad al ser defendido por el alfa, Meng Yao hizo una última reverencia, y
salió del salón. Pero esa actitud fue fácilmente notada por Wen Xu, quien espero a que se
fuera para darle un golpe en el pecho a su alfa, riéndose.
“¡No lo defiendas!” Reclamó Wen Xu.
“¿Qué? ¿Por qué?” Preguntó Nie Mingjue, sonriendo también.
“No me agrada, no me gusta la forma en la que mira a todos, la forma en la que… te mira”.
“¿Y de qué forma me mira?”
“No lo sé… Es decir, no quiero ser malvado, no quiero ser como él” Se quejó Wen Xu: “Es
tan raro… Creo que ese omega saca lo peor de mí, me vuelve malvado y cruel, como si me
provocara para que lo maltratara y quedara como el malo de la historia”.
“No creo que haga eso”.
“Es que… No lo entenderías. La forma en la que mira a otros alfas, como se mueve e incluso
cómo se comporta… No está bien, es extraño”.
“Sé que A-Yao no es un omega bien educado todavía, vivió toda su vida en un prostíbulo
preparándose para atender a otros alfas como una vez lo hizo su madre. Pero lo estamos
educando…”
Sonriendo con molestia, Wen Xu nuevamente volvió a golpear el pecho su alfa, volviendo a
reír, al igual que Nie Mingjue.
“¡Ni siquiera estas negando que te mira de forma lujuriosa!” Se quejó Wen Xu.
Riendo mientras tomaba a su omega de la cintura y lo abrazaba, Nie Mingjue respondió:
“¿Qué sucede? ¿Estas celoso?”
“¡Claro que lo estoy! No me gusta que una prostituta mire a mi esposo de forma lujuriosa…”
Sin poder dejar de sonreír, Nie Mingjue unió sus labios a los del joven omega, dándole un
cariñoso beso antes de responder: “No debes preocuparte por nada, yo soy tuyo, y tú eres
mío. Eres mi esposa, nadie va a alejarme de ti…”
“Confió en ti… Mi alfa…”
Mirándose a los ojos, Wen Xu quiso volver a besarlo, disfrutando de aquel momento cariñoso
que ambos tenían. Pero ambos se detuvieron cuando escucharon pasos rápidos en el pasillo,
acercándose al salón donde ambos se encontraban.
“¡A-Xu! ¡A-Xu!” Dijo Nie Huaisang, entrando al salón corriendo: “¡Mira lo que dibujé!”
Separándose de su alfa para mirar al pequeño niño, Wen Xu gustosamente recibió un dibujo
en un pergamino, mirando la escena antes de preguntar: “Vaya… ¿Qué es esto?”
“Somos A-Xian y A-Cheng y yo en el muelle de loto” Dijo Nie Mingjue, señalando el
pergamino muy contento: “Aquí hay flores, y aquí hay barcos…”
“Ya lo veo… Es un dibujo muy bonito, Pero deberías darle color, ¿No lo crees?”
Mirando el dibujo de su hermano en silencio, Nie Mingjue prefirió no hacer ningún
comentario, ya que no le hacía nada feliz que su hermano menor dibujara y no entrenara su
cultivo. Pero a diferencia de los demás días, cuando le prohibida dibujar, solo porque Wen Xu
se encontraba ahí prefirió callarse.
“Ven conmigo, te enseñaré a hacerlo” Dijo Wen Xu, levantándose del regazo de su alfa.
“¿Lo harás?”
“Préstame tus pinturas, te enseñare formas bonitas de pintar estas flores de loto” Pidió Wen
Xu: “Volveré en un momento”.
“Creo que mi hermano está pasando mucho tiempo con omegas…” Se quejó Nie Mingjue.
“Yo soy su hermano jurado, mi amor. Además, a mí también me gusta dibujar. Volveremos de
inmediato, ¿De acuerdo?”
Dándole un beso en la mejilla a Nie Mingjue, Wen Xu se apartó de su lado y camino junto a
Nie Huaisang, quien animadamente hablaba con el omega obre pintura.
Wen Xu era un omega muy frágil, el cual casi no había sido entrenado en el cultivo por su
condición. Pero por el contrario había sido entrenado en las artes desde muy joven, siendo un
gran pintor y músico, aunque personalmente él prefería hacer esculturas. Así que obviamente
seria admirado e incluso amado por Nie Huaisang, quien a pesar de ser un alfa, también tenía
el espíritu de un artista, considerando a Wen Xu su primer maestro, y un gran amigo.
Poniéndose de pie de la mesa de igual forma, sin poder evitar suspirar, Nie Mingjue caminó
hasta la puerta de la habitación, dispuesto a seguir a su hermano y prometido a cierta
distancia, solo para asegurarse de que Nie Huaisang se estuviera comportando de forma
decente con su prometido.
Pero cuando llego a la puerta del salón, Nie Mingjue se sobresaltó cuando casi chocó con
alguien, encontrándose nuevamente con Meng Yao, quien convenientemente había estado
esperando en una esquina del pasillo para entrar.
“Disculpe, líder de la secta” dijo el omega haciendo una rápida reverencia: “Vi que el joven
maestro Wen abandonó la habitación y supuse que ambos habían terminado de comer”.
Aquel era un día caluroso en Qinghe, así que por el arduo trabajo de la mañana, Meng Yo
lucia ligeramente sudoroso, dejando el aroma de sus feromonas salir suavemente, algo que
una vez más tentó a Nie Mingjue, quien lo miro fijamente.
Tras guardar unos segundos de silencio, mirando al joven alfa a los ojos, Meng Yao preguntó:
“Disculpe líder de la secta, ¿Le molesta si hago una pregunta?”
“¿Qué sucede?”
“¿De que estaban hablando usted y su omega hace un momento?”
“Wen Shima, su… Antepasado. Es una leyenda tonta sobre la energía resentida”.
“Ya veo… Hay muchas cosas que aun no entiendo, y tampoco comprendo… Leyendas
tontas, ¿Debería saberlas?”
“No, eres un sirviente, no veo la necesidad de volverte una persona culta, tu trabajo es limpiar
pisos”.
“¿Desea que limpie pisos ahora, mi señor?” Preguntó el omega con un tono inocente: “Solo
debe pedirlo, y yo haré lo que sea”.
De una forma usual, Meng Yao tenía ese pequeño coqueteo con Nie Mingjue, tentándolo
siempre que ambos se encontraban a solas.
“No puedes, no debemos” Se negó Nie Mingjue de inmediato.
“¿Por qué?”
“Mi padre… Tu eres suyo, no puedo tocar lo que otro alfa posee” Se negó Nie Mingjue.
“¿Su padre es el problema?” Preguntó Meng Yao sonriendo: “Es gracioso que a pesar de que
su prometido se encuentra aquí en su época de cortejo… Usted no lo haya mencionado”.
Tres noches después, el padre de Nie Mingjue cayó terriblemente enfermo. Y en solo tres
meses más, Nie Mingjue ascendió al puesto de líder de su secta después de la ceremonia
funeraria de su padre. Finalmente pudiendo poseer todo lo perteneciente al líder de la secta
Nie.
Incluido al sirviente Meng Yao.
***
No había ni un solo ruido en el paraje, a pesar que desde su caballo a varios kilómetros de
distancia, pudo escuchar los gritos de las personas y también de las armas de guerra, cuando
llegó al lugar de la batalla, ya no había nada.
Junto a sus desconcertados soldados, quienes avanzaban a su lado, Nie Mingjue caminó por
aquel paraje desolado, donde solo quedaban los cadáveres y las armas de la guerra. Pero solo
había soldados Wen, ningún otro cadáver, como si solo ellos hubieran luchado.
“Mi señor, hay una gran energía resentida llenando todo este sitio” Dijo uno de sus
consejeros: “Debemos tomar otro camino o podríamos…”
“No hay que temer, esa energía no está en nuestra contra, solo le obedece a él” Dijo Nie
Mingjue con seriedad.
Junto al resto de los demás miembros de su armada, Nie Mingjue avanzó hasta el otro lado
del campo de batalla, donde había un campamento de la secta Jin y Jiang; los cuales solo
estaban ahí como un adorno, y Nie Mingjue lo sabía.
Cada batalla era peleada solo por dos personas, y toda esa multitud de soldados estaban ahí
para aparentar, para no sentirse inútiles, para alimentar el ego de sus respectivos líderes, los
cuales veían como la guerra de varios meses estaba siendo ganada por un pequeño omega de
sonrisa encantadora.
Viendo a los miembros de la secta Qinghe Nie llegar al lugar, todos los soldados presentes
susurraron varias cosas entre ellos, admirando la llegada de esos soldados, sin saber sus
intenciones.
Aunque por cortesía Nie Mingjue sabía que debía ir a saludar a los dos grandes alfas al
mando, Yu Ziyuan y Jin Zixuan, él no estaba interesado en ser cortes o hablar con esas
personas. Así que pasando de largo sus cabañas, Nie Mingjue se acercó a la residencia más
alejada de todo el campamento, la cual por sus informantes, pertenecía a la persona que él
estaba buscando.
Dejando a su ejército atrás y avanzando él solo en dirección a dicha cabaña, antes de que si
quiera pudiera tocar la puerta, Lan Wangji la abrió, mirando con seriedad e incluso enfado al
alfa que estaba fuera.
Haciendo una reverencia corta, Nie Mingjue saludo a su joven amigo, diciéndole: “Buenas
noches Hanguang-Jun, s un gusto volver a verlo”.
“Líder de la secta Nie” Dijo Lan Zhan, respondiendo la reverencia de forma elegante.
Nie Mingjue no tenía una buena relación con ese joven Lan, ambos se llevaban por varios
años, y él solo había tenido contacto con Lan Xichen en el pasado, convirtiendo a Lan Wangji
en prácticamente un extraño. Así que no sabía cómo podía reaccionar ese joven alfa ente sus
intenciones, temiendo su rechazo si hacia algo incorrecto.
“¿Puedo importunarlo un poco?” Preguntó Nie Mingjue.
“No” Respondió Lan Wangji, retrocediendo con la intención de cerrar nuevamente la puerta.
Sin darse por vencido, Nie Mingjue detuvo la puerta de la cabaña con una de sus manos,
diciendo: “Por favor, es sumamente importante”.
Mirando a Nie Mingjue con su usual frialdad y actitud seria, notándose nada contento por la
idea de dejarlo pasar o entrar, Lan Wangji estuvo a punto de negarse de nuevo.
Sin embargo una voz se escuchó desde el interior deteniendo al alfa: “A-Zhan, está bien…”
Suspirando al escuchar la voz de su omega, sin notarse nada contento o tranquilo por esa
petición, Lan Wangji de mala gana se hizo a un lado de la puerta, dejando a Nie Mingjue
entrar.
Era obvio que el líder de la secta Nie había interrumpido un momento importante al llegar a
la cabaña de descanso de Lan Wangji y Wei Wuxian. Cuando salió, Lan Wangji solo estaba
usando sus túnicas interiores, y tenía su cabello húmedo, con su cinta de frente también
mojada. Y cuando entró en la cabaña, haciendo una nueva reverencia, Nie Mingjue observó a
Wei Wuxian, el cual estaba sentado en la única cama en el lugar, también vestido con sus
túnicas interiores, jugaba con su flauta entre sus dedos mientras sonreía amablemente.
“Wei Gonzi…” Dijo Nie Mingjue, haciendo una reverencia.
“Líder de la secta Nie, es un gusto” Respondió Wei Wuxian con calma.
Cerrando la puerta, Lan Wangji se adelantó a Nie Mingjue, acercándose a la cama en la que
se encontraba su omega, sentándose frente a él, en medio del otro alfa y su omega, con la
obvia intención de protegerlo.
Aquellas improvisadas cabañas de guerra eran de un tamaño bastante reducido, así que sin
tener más espacio, Nie Mingjue se sentó cerca de la puerta de la cabaña, dispuesto a charlar
con sus acompañantes.
“¿Acaba de llegar al campamento? ¿A que debemos su agradable visita?” Preguntó Wei
Wuxian.
Sin irse por rodeos, siendo un hombre bastante directo como siempre, Nie Mingjue dijo:
“Quiero que me ayuden a acabar con esta guerra, asesinar a Wen Ruohan y liberar a los
prisioneros”.
Ladeando la cabeza, Wei Wuxian sonrió y preguntó: “¿No es eso lo que hemos estado
haciendo hasta ahora? Creo que estoy confundido…”
“Me temo que se están tomando las cosas con demasiada calma, tenemos que liberar a los
prisioneros en la secta Wen, cuanto antes”.
“Es gracioso que usted pida eso, ya que debe estar más informado que yo sobre el actual
estado de la guerra, y también sobre el gran poder que tiene la secta Wen en el territorio ahora
mismo, debemos proceder con cautela o podría suceder un desastre”.
“Al diablo la cautela” Dijo Nie Mingjue con obvia molestia en su voz: “Tengo que salvar a
mi hijo y a mi omega, usted no lo entiende”.
“Lo entiendo mejor de lo que usted cree, líder de la secta Nie, yo estuve ahí, en ese
calabozo”.
Presionando las manos en puños, Nie Mingjue tuvo que aguantar las ganas de gritarle a Wei
Wuxian y ordenarle que lo obedeciera. Después de todo, Nie Mingjue consideraba a Wei
Wuxian como cualquier otro omega que hubiera conocido, y él como alfa, siempre había
tenido una gran autoridad sobre todo tipo de omegas.
“Escuche, líder de la secta Nie” Dijo Wei Ying, tomando el asunto a la ligera: “La secta Wen
tiene 18 poderosos asentamientos en toda la región, esta ha sido la décima victoria que hemos
tenido sobre una de sus bases, lo cual nos deja con menos de la mitad de lugares que tomar.
Cuando ellos se vean debilitados y sin aliados a las afueras de Qishang, entonces
procederemos al ataque sobre Sin Noche, donde están los prisioneros. De otro modo, será
muy peligroso, ya que Wen Ruohan puede convocar a sus aliados y nos queríamos encerrados
en Ciudad Sin Noche, que es una fortaleza”.
“Debe ser paciente” Dijo Lan Wangji.
“Si seguimos de esta forma, en menos de 2 meses podremos atacar Ciudad Sin Noche con un
gran número de soldados de todas las sectas, para asesinar a Wen Ruohan y salvar a todos.
Lamento no poder apresurar las cosas”.
Suspirando con suavidad, intentando tranquilizarse para hablar de forma correcta con las dos
personas que tenía en frente, Nie Mingjue dijo: “Recibí un mensaje alarmante de Lan Xichen,
su hermano, hace un par de días. ME informó que Wen Ruohan abusó de mi omega, de mi
esposo. No puedo esperar más, ni un solo día, necesito ir por él y por mi hijo cuanto antes. Y
más que cualquier ejército, he acudido con usted, Wei Gonzi, porque se lo que hace y se cuál
es su fuerza, solo usted puede ayudarme”.
Escuchar esas noticias sorprendió mucho a Wei Wuxian, quien en toda su estadía en los
calabozos de Ciudad Sin Noche, nunca escuchó sobre que Wen Ruohan fuera un abusador de
otro omega que no fuera Lan Qiren. Parecía que Wen Ruohan estaba empecinado en
mantener una relación amorosa con ese omega quien ya no correspondía sus sentimientos,
luciendo obsesionado con Lan Qiren, sin tener ojos para otro que no fuera él.
Pero después de todo, Wei Wuxian sabía lo demente que estaba Wen Ruohan, quien incluso
llegaba a desvariar muchas veces. Así que no le sorprendía saber que probablemente
comenzaba hacer esas otras cosas horribles por su demencia, perdiéndose cada vez más en los
recónditos y obscuros lugares de su mente. Y lo único que podía pensar al respecto era la
lástima que sentía por Meng Yao, ya que durante su estancia en los calabozos, Wei Wuxian
había recordado a ese pequeño omega como un apoyo, quien lo había ayudado en múltiples
ocasiones durante sus noches más oscuras en ese horrible sitio.
“¿Y cuál es la fuerza de mi omega?” Preguntó Lan Wangji de forma amenazante.
“Yo también he escuchado las leyendas de la secta Wen, Hanguang-Jun” Dijo Nie Mingjue
con seriedad: “Las leyendas sobre Wen Shima…”
“Fuera” Exigió Lan Wangji, poniéndose más serio aun: “Si vuelve a mencionar algo como
eso frente a cualquier persona, yo lo asesinare”.
Sonriendo suavemente, Wei Wuxian susurró: “Aquellos que tengan vínculos con el mal…
Deberán ser condenados a muerte”.
“No me iré, Hanguang-Jun, ya que desesperadamente necesito la ayuda de su omega” Dijo
Nie Mingjue, oponiéndose frente al alfa que tenía en frente: “Ya no me queda nada, mi
familia, mi secta, todo se lo ha llevado Wen Ruohan. Ahora necesito recuperarlo, y lo
necesito cuanto antes. Por eso he hecho un plan que podría hacer todo esto posible”.
“No volveré a repetirlo, salga de la cabaña, ahora” Pidió Lan Wangji, dejando salir sus
feromonas de una forma amenazante.
“Espera Lan Zhan, quiero escuchar lo que tiene que decir” Pidió Wei Ying.
Entonces tomando un mapa de sus túnicas, Nie Mingjue se tomó el tiempo de explicar un
elaborado plan para entrar a la secta Wen desde Yiling, explicando paso por paso como creía
que podían llegar a Sin Noche en un solo día y asesinar a Wen Ruohan cuanto antes.
Y aunque ese plan no convencía para nada a Lan Wangji, quien veía todo ese asunto como
algo muy riesgoso, fue Wei Wuxian quien decidió tomar el riesgo.
“De acuerdo, voy a aceptar su propuesta” Dijo Wei Wuxian, sonriendo suavemente.
“¡Wei Ying!” dijo Lan Zhan alarmado.
Sin prestarle atención a su alfa, Wei Wuxian dejó de girar su flauta entre sus dedos y la
apuntó en dirección a Nie Mingjue, diciendo: “Lo haré, pero con una condición”.
“¿Qué condición?” Preguntó Nie Mingjue de inmediato.
“La persona que asesinara a Wen Xu, seré yo” Dijo Wei Wuxian con seriedad.
***
“¿Estás seguro de lo que estamos haciendo?” Preguntó Lan Wangji, luciendo muy
preocupado.
“No, pero tengo confianza en ti, Lan Zhan” Dijo Wei Ying con una sonrisa: “Sé que vas a
mantenerme seguro”.
De una forma cuidadosa, frente a un pequeño espejo que tenían en su cabaña, Lan Wangji se
encargaba de peinar el cabello de su omega, con su conocida y usual coleta alta, atada con esa
cinta roja que el mismo había encontrado hace tiempo cuando lo buscaba.
Hace un par de días que había dejado de interesarle que todos supieran que Wei Wuxian y él
estaban vinculados, tenía cosas más importantes de las que preocuparse. Como los rumores
de los obscuros poderes de su amado, que podrían llegar a ponerlo en peligro de muerte. O la
salud de Wei Ying, que parecía enfermar más con cada batalla que tenían. O incluso la salud
mental de su amado omega… Quien tampoco parecía estar en todos sus sentidos cuando
ambos estaba juntos.
“¿Estas preocupado?” Preguntó Wei Wuxian.
“No” Respondió Lan Wangji.
“No me mientas” Pidió Wei Ying con una sonrisa: “La marca me lo dice, puedo sentirlo,
¿Sabes?”
“Mmm…”
“Escucha, confió en el plan de Nie Mingjue, si asesinamos a Wen Ruohan, todo esto habrá
terminado, y no tendré que hacerlo nunca más. ¿No es eso lo que tú quieres?”
Ignorando su pregunta, Lan Wangji le dijo: “Recuerda tu promesa”.
“Lo hare, Lan Zhan”.
“No, repítela”.
“Si es demasiado para mí, si me veo superado en esta situación, te diré, y nos iremos en
bichen a un lugar seguro para descansar” Dijo Wei Wuxian de forma obediente: “Lo juro”.
Con un suave nudo, Lan Wangji terminó de atar la cinta roja en el cabello del mayor,
suspirando suavemente: “Confió en ti”.
“Y yo en ti, por siempre”.
Girándose en los brazos de su amado, Wei Wuxian le dio un abrazo por el cuello, besando sus
labios suavemente antes de separarse de él nuevamente. Ambos querían quedarse en esa
pequeña cabaña por más tiempo aun, pero sabían que no tenían tiempo, así que solamente
decidieron darse un par de besos más antes de separarse.
“¿Qué llevas en esa bolsa todo el tiempo?” Preguntó Lan Wangji, cuando Wei Wuxian se
separó de él para ir a tomar sus cosas.
Colgando su espada en su cinturón, Wei Wuxian tomó una pequeña bolsita de cuero del
suelo, sonriendo y mostrándosela a su alfa: “¿Aquí adentro?”
“Mmm…”
“Es una baratija que forje en la montaña… El sello de tigre de estigio”.
“¿Y qué es lo que hace?”
“Ya te lo dije, es una baratija. No debes preocuparte por eso”.
Nada convencido por esa respuesta, ya que podía sentir una energía muy obscura proveniente
de aquel pequeño objeto, Lan Wangji quiso tomar la pequeña bolsa para abrirla. Pero con una
suave risa, Wei Wuxian la apartó de inmediato de su alfa nuevamente: “¿Qué quieres? ¿Una
quemadura por energía resentida otra vez? No la toques, te harás daño”.
“¿Por qué tu puedes tocarla y yo no?”
“No hay un porque, Lan Zhan” Dijo Wei Ying con una sonrisa: “Tu lo escuchaste, Wen
Shima y yo somos lo mismo, no hay un porque…”
***
Los gritos del pánico se escucharon por toda Ciudad Sin Noche, a las afueras de la residencia
principal de la secta Wen, donde los soldados de las demás sectas sometían y asesinaban a
todas las personas de la secta Wen que en su momento no consiguieron ponerse a salvo.
Aquella emboscada los había tomado completamente por sorpresa. Usando barcos, en una
maniobra que en cualquier otra circunstancia hubiera sido un suicidio, las sectas Jin, Jiang y
Nie entraron a Qishan por Yiling. Viéndose sobrepasados en el primer minuto, la secta Yiling
Wen alejada de su líder Wen Qing, la cual en ese mismo instante se encontraba en Sin Noche
como muchos de los demás líderes, se rindieron de inmediato ante la presión y la invasión de
las demás sectas.
Con uno de sus puestos fronterizos tomados en Qishan, lo demás fue inevitable, ya que el
avance de las fuerzas enemigas al interior del territorio fue imparable, e incluso antes de que
las noticia de la toma de Yiling llegara a oídos de Wen Ruohan, los invasores ya habían
llegado a la ciudad, y los miembros de la familia Wen apenas tuvieron tiempo de racionar.
Evacuando la ciudad de la mejor forma que pudo, Wen Ruohan mandó a los ciudadanos que
pudieron al interior de la residencia principal, mientras ponía a todos sus soldados
disponibles alrededor de la muralla de esta, confiando en que ellos podrían resistir hasta que
la ayuda de los demás refuerzos que tenían fuera de Qishan llegara.
Después de todo, Wen Ruohan aún no sabía contra lo que se estaba enfrentando.
Escuchando los gritos fuera y dentro de su hogar, con los refugiados y todo el sonido de la
invasión en el exterior de su residencia, Wen Ruohan no podía evitar sentirse nervioso. Ante
la inminente invasión, había enviado a Lan Qiren junto a su sobrino Lan Xichen a los
calabozos de la secta, y solamente se había quedado con los prisioneros y sirvientes
imprescindibles. Ni siquiera había guardias en toda la secta, todos habían ido a las murallas
para detener el avance de la invasión.
Mirando como su ciudad se incendiaba desde una de las ventanas, Wen Ruohan solo pudo
pensar en una persona, caminando lejos de la silla del líder y por uno de los pasillos más
largos, llegando finalmente a una puerta cerrada con llave. Debido a la invasión la mayoría de
las sirvientas también habían dejado el lugar, por lo que inevitablemente, el tesoro más
preciado de Wen Ruohan se había quedado solo.
Tomando las llaves de sus túnicas, Wen Ruohan finalmente abrió la puerta, dejándole ver una
habitación bien decorada y con luz entrando por todas sus ventanas, la habitación más
hermosa en todo el lugar sin lugar a dudas.
Pero a pesar de toda la belleza, un joven con la mirada baja se encontraba sentado en una
esquina, en silencio, mirando hacia la nada. Sonriendo suavemente al ver a su hijo, Wen
Ruohan se acercó a él cuidadosamente, agachándose a su lado en el piso, mirándolo con
cariño.
“A-Xu, ¿Estas asustado? No debes temer, papá está contigo, nadie te hará daño” Aseguró
Wen Ruohan, acariciando una de las mejillas de su hijo con suavidad.
Sin decir nada en absoluto, Wen Xu se negó a mirar a su padre a los ojos, aun mirando hacia
la nada, dejándose hacer en silencio.
Desde hace mucho tiempo que Wen Xu ya no sonreía. Se había vuelto un prisionero de su
propia secta, de su propio padre, el cual sin entender el sufrimiento que le causaba a su
adorado hijo, lo forzaba a mantenerse a su lado, sin permitirle descansar, sin permitirle
intentar morir… Wen Xu no sentía ningún tipo de consuelo, ni más alegría, solo quería
terminar con todo.
“No escuches los gritos, ¿De acuerdo? Yo me quedare contigo, para que no estés asustado”.
“¿Qué te hace pensar que no estaré asustado si estás conmigo?” Preguntó Wen Xu con mucha
seriedad.
“¿Qué estas queriendo insinuar con eso, A-Xu?” Preguntó Wen Ruohan intentando sonar
suave con su hijo: “claro que estarás a salvo conmigo, soy tu padre, yo te amo…”
Wen Xu miró a los ojos a Wen Ruohan y sin dudarlo le dijo: “No, tu no me amas”.
Pero antes de que Wen Ruohan pueda seguir discutiendo con su hijo menor, se sorprendió al
escuchar gritos nuevamente, pero ahora no tan lejos como antes, si no bastante cerca, en los
pasillos de su propia secta. Muy alarmado, se puso de pie y corrió a la entrada de su
residencia, observando como todos los refugiados que había ahí estaban corriendo por todos
lados, y como los pocos soldados que quedaban estaban intentando defender la entrada del
lugar.
Pero ya no era necesario, pues frente a sus ojos, Wen Ruohan pudo observar como Nie
Mingjue y Lan Wangji estaban acabando con todos los soldados, y como detrás de ellos, Wei
Wuxian entraba en el salón con paso calmado.
“Wei Wuxian…” Dijo Wen Ruohan, muy furioso.
Jugando con Bichen entre sus dedos, la cual también estaba manchada de sangre tras la ardua
pelea que tuvieron en Yiling y en Ciudad Sin Noche, Wei Wuxian dijo: “Cuando usted
rompió mi espada, me dijo que me había quitado las dos únicas cosas que amaba que me
quedaban, mi bebé y el arma espiritual que me había acompañado toda mi vida. Pero nada
permanece muerto por siempre, y así como pude devolverle la vida a Suibian… ¿Usted cree
que podré devolverlo a la vida cuando lo asesine?”
“Criatura vil y asquerosa, te has medito con el más obscuro de los poderes en este mundo, no
hay lugar para ti ni en este mundo ni en el de los muertos” Dijo Wen Ruohan, mostrándose
muy asqueado por Wei Wuxian.
“Y aun así, este ser tan repugnante ha venido a asesinarte”.
“Yo acabare contigo, Wei Wuxian, y le hare un bien a todo el mundo, que no sabe con qué
clase escoria se han metido”.
“¿Entonces serás el héroe de esta historia de horror?” Preguntó Wei Ying con una sonrisa:
“No hay un buen final para ti, líder de la secta Wen. Este será el último acto de misericordia
que tendrás por mi parte…”
Parándose al final de la escalera, Wei Wuxian desenvainó a Suibian y apuntó la hoja
directamente hacia Wen Ruohan, esperando a que él bajara para poder empezar su pelea. Lan
Wangji y Nie Mingjue se encontraban demasiado ocupado con los soldados dentro de la
residencia que todavía intentaban oponer resistencia. Y mirando fijamente los ojos color
carmesí del omega que tenía a sus pies, Wen Ruohan intentó tomar la espada que tenía en su
cintura, encontrando la funda vacía.
Pero antes de que pudiera razonar si quiera lo que estaba pasando, Wen Ruohan soltó un
fuerte grito de dolor, sintiendo como su pecho era atravesado por su propia espada, en el
lugar en el cual se encontraba su corazón, finalmente acabando con él de esa forma.
Al ver a su líder caer, todos los soldados presentes soltaron sus armas y salieron corriendo
como los demás refugiados en la sala. Mientras que sorprendido, Wei Wuxian observo el
cuerpo de Wen Ruohan caer por las escaleras que tenía en frente, dejando ver a la persona
que lo había asesinado y había terminado con esa guerra.
Jin Guangyao, quien temblando de forma descontrolada, también miraba el cuerpo de Wen
Ruohan caer por las escaleras.
“¡A-Yao!” Gritó Nie Mingjue, corriendo por el lugar para abrazar a su omega.
Durante la incómoda charla que habían tenido Wei Wuxian y el líder de la secta Wen, Jin
Guangyao esperó su momento y tomó la espada que el líder siempre llevaba consigo,
apuñalándolo en el pecho, y siendo conocido desde entonces como el asesino de Wen
Ruohan.
Mirando el suelo manchado de sangre, pero todavía sin volver a guardar su espada, Wei
Wuxian se giró en dirección a la entrada de la residencia Wen. Lan Wangji estaba en la
entrada, mirándolo fijamente, sin decir nada en absoluto.
Durante la noche anterior, ambos no habían hablado al respecto, pero Wei Wuxian estaba
seguro de que su alfa quería detenerlo, quería impedir que hiciera lo que tenía planeado. Pero
ya era muy tarde, y Wei Wuxian había tomado una decisión irrevocable.
Así que dándole la espalda a Lan Wangji una vez más, dejando que Nie Mingjue y Jin
Guangyao disfrutaran de su reencuentro, Wei Wuxian caminó por los pasillos de esa secta
siguiendo un aroma en específico, el dulce aroma de las rosas rojas, que lo llevaron a una
habitación con una puerta cerrada.
Parándose en medio de la obscuridad, en frente de esa puerta cerrada, Wei Wuxian sostuvo
fuertemente la espada entre sus dedos, queriendo encontrar el valor que le faltaba para hacer
lo que tanto había planeado. Pero no pudo, y a pesar de que sabía quién estaba ahí adentro,
Wei Wuxian no se sentía capaz de seguir adelante.
“¿No vas a hacerlo?”
Girándose sorprendido, Wei Wuxian observó a Nie Mingjue, quien estaba detrás de él. No
sabía cuánto tiempo había pasado, pero suponía que el suficiente como para que hubieran ido
a buscarlo.
“Te lo pregunto una vez más, ¿No vas a hacerlo?” Preguntó el alfa con seriedad.
Sintiéndose arrepentido, Wei Wuxian bajó la mirada, negando con la cabeza. Entonces sin
hacer más preguntas, Nie Mingjue lo tomo de un brazo y lo apartó de su camino, entrando en
la habitación y cerrando la puerta detrás de sí mismo.
“¿Mingjue?” Preguntó Wen Xu al otro lado de la puerta: “¿Qué haces aquí? Lo siento… ¡Por
favor detente! ¡Detente!”
Girándose una vez más en dirección a la puerta, Wei Wuxian escucho horrorizado los gritos
que venían de esa habitación, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.
“Lan Zhan…” Dijo Wei Ying en un susurro, queriendo huir de ahí aterrorizado.
Pero aun así no lo hizo, quedándose fuera de esa habitación hasta que los gritos cesaron,
junto con todos los demás ruidos en la secta Qishan Wen.
Capítulo 38.

Soltó un fuerte grito de dolor, mientras sujetaba su pecho con sus manos adoloridas. A lo
lejos, en medio de la niebla infernal, pudo escuchar sus risas y luego pudo ver como las
espadas volaban sobre su cabeza, finalmente dejándolo solo.
Lo habían condenado a morir.
Pero eso a él no le importaba, el dolor en su cuerpo no era tan fuerte como el dolor que sentía
en su corazón, se sentía vacío… Le habían arrebatado lo que más le importaba en el mundo.
“A-Yuan…” Gimoteó Wei Ying, sollozando desesperado, mientras llevaba sus manos a su
abdomen, presionándolo con fuerza.
No tuvo tiempo ni de despedirse, solo le puso el nombre que tanto había soñado, y
torpemente lo alimentó una vez. A penas su obtuvo ayuda de Meng Yao, el cual desde la
puerta de su celda, lo ayudó de la forma en la que podía, pasando todo el tiempo a su lado
aun cuando Wen Ruohan le dio una golpiza por ayudarlo; algo que Wei Ying siempre le
agradecería.
Pero se lo habían arrebatado, le habían quitado a su bebé de la forma más horrible y más
traicionera del mundo, cuando él estaba tan débil, y asustado. Lo condenaron a muerte, y
también a su hijo. Ni en sus peores pesadillas, Wei Wuxian creyó que la secta Wen podría ser
tan cruel.
No supo cuánto tiempo se quedó llorando en el suelo, sintiendo sus huesos rotos arder y
doler, y la fría niebla envolverlo todo. Pero en cierto punto, su instinto de supervivencia lo
hizo levantarse, pues aunque sabía que moriría, no quería hacerlo en la tierra, como un simple
perro. Wei Ying aún tenía algo de decencia.
Tomando el único objeto que tenía cerca, su espada rota, Wei Wuxian la apoyo en el piso,
usándola para poder ponerse de pie y para no caerse. Aun estando rota y muerta, Wei Wuxian
aún seguía usando a Suibian, aunque se sentía patético, pues ni siquiera había podido
proteger a su propia espada.
“Lo siento tanto… No quería que murieras…” Sollozó Wei Ying.
Limpiando las lágrimas de su rostro, Wei Wuxian comenzó a caminar de una forma muy
lenta, observando ese inhóspito lugar, un lugar lleno de muerte, los túmulos funerarios.
Pero siendo atraído por algún tipo de energía, aun sin darse cuenta, Wei Ying llegó a lo que
parecían ser las ruinas de un templo, abandonado hace años, pero que aún estaba en pie para
poder refugiarse en su interior.
Con las últimas fuerzas que le quedaban, Wei Ying empujó la puerta de madera que cerraba
aquel templo, cayendo al piso en el interior de aquel lugar.
Tosiendo un poco de sangre, sabiendo que su muerte estaba cerca, Wei Ying se arrastró al
interior de ese lugar, pensando en encontrar un lugar fresco para descansar.
“¿Por qué tengo que ser yo el que muera? Todos ellos deberían morir… No debería ser yo él
que terminara llorando y sangrando…”
Pronto el dolor y la pena se convirtieron en rabia. Y mientras se arrastraba por el suelo,
sintiendo las lágrimas bajar por sus mejillas, Wei Ying tuvo un último deseo: Acabar con toda
la secta Wen y todos los que lo habían dañado.
“Un deseo interesante…”
Asustado, Wei Ying se giró y miro a todos lados, ya que había escuchado claramente una voz
detrás de él.
“Yo tuve un deseo así hace mucho tiempo”.
“¿Hola?” Preguntó Wei Ying asustado: “¿Hay alguien ahí?”
“Puedo ver tu corazón… Lo que esconde. Siempre pude verlo. Una pequeña parte, tan
obscura y resentida, por eso que te sucedió cuando eras pequeño, cuando viste morir a tus
padres” Dijo la voz: “Lo entiendo, yo también vi morir a mis padres, yo los mate…”
Asustado, Wei Ying intentaba girarse en todas direcciones, y es que aquella voz no provenía
de un sitio en específico, provenía de todos lados, como si todo el templo hablara con él.
“Tristeza, dolor, furia… Eso sientes ahora, y por eso eres más fuerte, lo que yo necesito” Dijo
aquella voz de forma misteriosa: “Y si tú me das lo que quiero, yo puedo cumplir tus deseos,
todos ellos.”
“¿Quién eres?” Preguntó Wei Ying asustado.
Entonces frente a él, un cumulo de energía resentida formó la imagen de una persona, un
joven de cabellos negros y los ojos rojos como la sangre, el cual físicamente le recordaba
mucho a Wen Xu, y traía puesta una extraña armadura con el símbolo del sol al frente.
“No es la primera vez que nos vemos” Dijo Wei Ying.
“No…”
“Esa vez… Cuando Lan Zhan y yo…”
“Tu rabia me trae a ti, la furia ciega que veo en tu interior, eso me atrae, me hace más fuerte.”
“Y yo estaba muy enojado en ese momento…” Susurró Wei Ying.
“Y estas muy enojado ahora…”
Presionando el mango de su espada con fuerza, mirando ese extraño espectro frente a sí
mismo, Wei Ying vaciló y pregunto: “¿De verdad puedes ayudarme?”
“Te volveré el ser más fuerte en el mundo, imparable, y con mi fuerza tu podrás vencer
ejércitos y vengarte de todos los que te dañaron”.
“Pero tú mismo lo dijiste… Hay un costo, ¿Qué quieres?”
“Cuando tu venganza se haya cumplido, dame tu cuerpo, y déjame renacer en él” Pidió el
espectro: “Tu vida a cambio de tu venganza… Puedes morir aquí, lleno de furia y en mi
compañía, o puedes sobrevivir un día más para vengarte de todos aquellos que te dañaron…”
En silencio, Wei Wuxian pensó seriamente en la propuesta de aquel extraño ser. Su vida había
perdido su propósito, su alfa había sido asesinado, y su hijo probablemente también lo había
sido. ¿Qué más le quedaba? No se sentía tan fuerte como para regresar después de todo aquel
sufrimiento a buscar a sus padres y a sus hermanos, y que sabía que ellos probablemente
también morirían.
Pero su cuerpo frágil y casi muerto, tan solo por un día más para poder vengarse, a Wei
Wuxian le parecía un trato justo.
“Acepto” Dijo Wei Ying mirando los ojos rojos de esa criatura: “Te daré mi cuerpo cuando
mi venganza haya terminado…”
La criatura sonrió, y le dijo: “Cuando todos hayan muerto, tu encontraras la felicidad, es una
promesa…”
“¿Pero cómo vas a darme ese poder? ¿Acaso poseerás mi cuerpo ahora o algo así?” Pregunto
Wei Ying confundido.
“Solo acércate a mí, Wei Wuxian, y te daré tu primera lección… Empatía…”
Entonces Wei Ying vio frente a sus ojos la vida entera de Wen Shima, su vida llena de tristeza
y muerte, pero también aprendió. Todas las cosas que aquel malvado líder consiguió, tan
sorprendentes como aterradoras, Wei Ying también aprendió a hacerlas…
“Dame tu cuerpo ahora, Wei Wuxian…”
***
“¡Wei Ying!”
Abrió los ojos asustado, sintiendo los brazos de su alfa alrededor de su cintura, quien lo
sostenía con firmeza contra su cuerpo.
“¿Lan Zhan?” Pregunto Wei Ying confundido: “¿Qué sucede?”
“Por favor cálmate… La energía resentida, está llenando toda nuestra habitación…”
Mirando todo con más detenimiento, Wei Ying observo como la habitación entera estaba
llena de energía resentida, que seguramente había salido de su propio cuerpo. Así que
respirando profundo, Wei Ying hizo un esfuerzo por controlar todo aquel desastre, ya que no
quería lastimar a su alfa si seguía de esa forma.
“Lo siento Lan Zhan, fue una pesadilla…”
“Mmm…” Dijo el alfa, no muy convencido.
“Oh vamos… Estoy hablando en serio, tuve un sueño de… Algo extraño que me pasó hace
tiempo, no hay nada de qué preocuparse”.
“Últimamente has estado teniendo muchas pesadillas”.
“Lo se…”
“Tenemos que limpiar tu cuerpo con las partituras de mi secta, tenemos que controlar tu
poder”.
“Lo se…” Repitió Wei Ying, apoyándose en el pecho de su alfa.
Pero sin saber cómo decirle a Lan Wangji… Que él no quería que limpiara su cuerpo de la
energía resentida que ahora lo llenaba.
Guardando silencio por un par de segundos, Wei Ying preguntó: “¿Volviste después de ver a
tu hermano?”
“Mmm…”
“¿Y qué te dijo?”
“Que no saldrá de su reclusión hasta que vea a tu hermano”.
Bajando la mirada con tristeza, Wei Ying dijo: “Hablare con A-Cheng, pero… No puedo
prometerte nada. Él necesita más tiempo”.
“¿Cuánto más? Ya han pasado 4 meses desde que terminó la guerra…”
“Tiempo es tiempo Lan Zhan, puede ser un mes más así como un año, no lo entenderías…”
“¿Es por qué no soy un omega?”
“Es por que no pasaste por lo mismo que A-Cheng, así que no puedes opinar al respecto,
tonto”.
Dándole un suave golpe en la cabeza a su alfa, Wei Ying se puso de pie de la cama,
caminando a la mesa del centro de su habitación, donde tomó una botella de vino para
beberlo.
“Preparé un desayuno para ti” Se quejó Lan Wangji.
“Lo sé, pero prefiero el vino” Respondo Wei Ying.
“Mmm…”
“Cállate…” Se quejó Wei Ying, volviendo a reírse.
A Lan Wangji no le gustaba como Wei Ying había transformado su carácter, pero él sabía que
solo podían dar un paso a la vez, ya que primero se encargaría de limpiar toda la energía
resentida de su cuerpo, y luego se encargaría de lo demás.
“Tienes que tomar un baño, y luego venir al salón principal de la torre Koi, solo tenemos 15
minutos” Dijo Lan Wangji.
“¿Solo 15? Buah… Que flojera…” Se quejó Wei Ying.
“Sabes que es un anuncio importante, Wei Ying”.
“¿Anuncio importante? Tú y yo ya sabemos lo que pasa, mi hermana está embarazada, no es
un anuncio importante… Es solo el idiota de Jin Guangshan y el estúpido de mi cuñado que
están intentando hacer un espectáculo de todo esto, como si fuera la gran cosa…”
“Wei Ying…”
“Es solo un bebé, Lan Zhan, ¿Acaso es tan importante?” Preguntó Wei Ying con molestia:
“Cuando yo estaba embarazado tuve que ocultarme de todos, como un maldito idiota, pero
ahora tengo que soportar ver como todos festejan que mi hermana tenga un bebé, como hacen
una fiesta por algo tan simple… Es problema del idiota de Jin Zixuan no haber podido hacer
bien su único trabajo, que era engendrar un heredero, el resto es solo una mala broma por
parte de todos, incluso de mis padres”.
Bajando la mirada, Lan Wangji prefirió no hacer más comentarios. Desde hace varios días
Lan Zhan había notado que el comportamiento de Wei Wuxian se había vuelto muy extraño,
ya no era un joven amable y dulce, se había vuelto bastante agresivo e irónico con los demás,
con todos los que no fueran Lan Wangji, ya que Wei Wuxian se controlaba bastante bien con
su alfa; pero mientras los días pasaban, Wei Ying incluso comenzaba a comportarse así con
Wangji.
Lan Zhan estuvo a punto de decir algo más, pero se detuvo cuando escuchó unos golpes
tímidos en la puerta de su habitación. Elegantemente, Lan Zhan se puso de pie y caminó a la
puerta, encontrándose con un asustado sirviente que hizo una reverencia para él.
“Maestro Lan Wangji, los alfas de la secta requieren su presencia en el salón principal de la
secta…” Dijo el tímido sirviente.
“Iré de inmediato” Respondió Lan Zhan, correspondiendo la reverencia.
Entrando en la tina con cuidado, Wei Wuxian masculló: “Reunión de alfas… Que
interesante…”
Sin escuchar las palabras de su omega, Lan Wangji se giró en su dirección en la puerta, y le
dijo: “Debo ir a esa reunión, Wei Ying, aunque sea para hacer presencia por mi secta pues
Xichen está en reclusión. Volveré por ti en 5 minutos para ir juntos a la reunión principal,
espérame aquí, y no salgas tu solo”.
“Está bien, Lan Zhan…” Respondió Wei Ying con tranquilidad.
Sin estar muy convencido por la actitud tranquila y liviana de Wei Ying, pero sin poder
perder más tiempo, Lan Wangji salió de su habitación y los dejó solo, caminando
rápidamente en dirección al salón principal de la secta Lanling Jin, dejando solo a su omega.
Suspirando con suavidad, Wei Wuxian abrazó sus piernas contra su propio cuerpo,
sintiéndose tranquilo al estar sin Lan Wangji. Wei Wuxian amaba a su alfa con locura, pero
recientemente su amado Wangji había comenzado a presionarlo bastante, principalmente para
intentar limpiar su cuerpo de las energías resentidas, algo con lo que lo que Wei Wuxian no
sabía cómo explicarse para resistirse a ello.
Wei Wuxian amaba a su alfa, pero a veces se arrepentía de haberse vinculado con él tan
pronto.
De reojo, Wei Ying observó a lo lejos en una mesa de la habitación, a Suibian y a Bichen. En
el pasado, Wei Ying recordaba como su espada y la espada de su alfa era inseparables,
siempre juntas. Pero desde su regreso, aparentemente Bichen evitaba a Suibian a toda costa,
siempre lejos de su espada, algo que le parecía bastante curioso…
Pero era entendible, pues Suibian ya no era la misma espada, así como Wei Wuxian ya no era
la misma persona…
***
Con calma, sintiendo la luz el sol iluminando su rostro, Wei Wuxian caminó lentamente por
los pasillos de la torre Koi. Como era usual, no había querido obedecer a Lan Zhan, y
después de haberse bañado, Wei Ying se dirigió a la sala de reuniones de la secta, donde
supuestamente estaban todos los alfas.
Al ver a Wei Wuxian, todos los discípulos de las diferentes sectas presentes se hacían a un
lado, pues todos ya habían escuchado las aterradoras leyendas sobre el joven omega… Que
podía traer de vuelta a los muertos y volverlos sus esclavos.
Pero ignorándolos a todos, ya que estaba acostumbrado a ese comportamiento desde que
había regresado a ese sitio, Wei Ying solo fue al salón principal de la secta, en búsqueda de
su alfa.
En medio de risas hipócritas y un gran derroche de dinero en alcohol, todos los alfas de la
secta estaban reunidos, dando un espectáculo lamentable ante la mirada de Wei Ying, quien
les tenía mucha repulsión. Y entre todos ellos esta su alfa, quien resultaba como alguien
ajeno a ese espectáculo tan ridículo, sentado elegantemente frente a su secta, sin beber ni una
gota de alcohol como los demás alfas Lan que lo acompañaban, haciendo acto de presencia y
esperando a que la reunión principal iniciara.
“¿No te parecen extraños?” Pregunto uno de los alfas Jin, que estaba conversando con un alfa
de la secta Su: “Los niños Lan, no beben ni una gota de alcohol, tan raros…”
“Solo es el idiota de Lan Wangji, su hermano bebía alcohol, no demasiado, pero por lo menos
bebía por cortesía. Su hermano menor se comporta como un omega, sin beber alcohol, tan
callado y sereno. Lo casaría con mi hijo alfa si pudiera…” Se burló el otro miembro de la
secta Su.
Escuchando esa conversación desde el exterior, Wei Wuxian no pudo evitar sonreír,
escondiendo su flauta detrás de su espalda, mientras entraba en la sala con paso calmado.
“¿Un omega? Es un comentario gracioso, supongo” Dijo Wei Ying con tranquilidad: “Pero
yo no le veo nada divertido, ¿Podría decirme donde está la gracia de su comentario?”
Todavía en medio de su charla, sin girarse a ver a Wei Ying, el alfa de la secta Jin dijo:
“Omega, este no es sitio para ti, es solo una reunión de alfas. Ve con los otros de su sexo, a
bordar manteles y arreglar flores, esta es una celebración para los verdaderos héroes de la
guerra…”
“Verdaderos héroes de la guerra…” Dijo Wei Ying con suavidad: “¿Quiere ver quién es el
verdadero héroe de la guerra ahora mismo? Puedo mostrárselo si quiere…”
Pronto las risas y las palabras animadas dejaron de escucharse en todo el salón, mientras los
rostros de horror y silencio sepulcral se hizo presente en el lugar.
“¿Puede verlo ahora?” Pregunto Wei Ying en un susurro: “Puede mandarme a hacer arreglos
con flores o bordar manteles de nuevo, puede hacerlo, ¿Verdad? Hágalo, eso es gracioso…”
“J… Joven heredero de la secta Jiang…” Dijo el alfa de la secta Jin en voz temblorosa: “Por
favor…”
“Hágalo, dígalo de nuevo, atrévase a decirme quien es el verdadero héroe de la guerra y
llamar a mi alfa un omega, se lo suplico” Dijo Wei Ying con una gran sonrisa.
“No puedo…”
“Yo insisto, vamos…” Dijo Wei Ying acercando el filo de su espada aún más al cuello del
alfa: “¡Dígalo ahora!”
El grito de Wei Ying se escuchó por toda la sala, haciendo retumbar los cristales de toda la
habitación, asustando aún más a todos los presentes, alfas que estaban encogiéndose de
miedo ante un omega.
Ya que de inmediato todos se dieron cuenta de que la persona presente era Wei Wuxian, quien
en medio de su enfado había desenvainado su espada maldita Suibian, llenando la sala entera
de energía resentida, lo cual no podía resultar en nada bueno.
“Hágalo ahora, o voy a matarlo, y cuando muera no morirá realmente, tal vez entonces su
cadáver podrá decirme lo que usted no tuvo el valor de volver a pronunciar” Amenazo Wei
Ying con una gran sonrisa en su rostro.
Al ver ese espectáculo, Lan Wangji se puso de pie de inmediato, prácticamente corriendo en
dirección a su omega. Y antes de que Wei Ying pudiera hacer o decir algo más, Lan Zhan lo
tomo de la mano, y cuidadosamente alejo a Suibian del cuello de ese aterrorizado alfa, quien
cayó de rodillas sujetando su cuello adolorido, ya que la energía resentida había herido su
piel.
“Lan Zhan…” Se quejó Wei Ying, intentando luchar con su alfa para que lo soltara.
“Basta” Dijo Lan Wangji con fuerza: “Ven conmigo”.
Refunfuñando, Wei Ying no tuvo más opción que obedecer a su ala, volviendo a envainar a
Suibian, y caminando detrás de él, a las escaleras fuera del salón, donde ambos podrían estar
solos. Mientras que todos los alfas dentro de la habitación evocaban toda su atención en alfa
herido de la secta Jin, intentando aliviar su dolor.
“¿Por qué hiciste eso?” Pregunto Lan Wangji con seriedad.
“¿Escuchaste lo que te dijo? ¿Escuchaste lo que me dijo?” Pregunto Wei Ying furioso,
soltándose del agarre de Lan Wangji con fuerza: “No, claro que no lo hiciste, solo te importan
las apariencias, que no digan cosas malas de tu secta, como si eso importara, como si algo de
esto importara…”
“Wei Ying, sabes cómo funciona esto, lo que ellos dicen, los rumores sobre sectas, es algo
normal…”
“Pero yo no quiero soportarlo, no quiere aguantar más rumores, no quiero aguantar más de
este ridículo espectáculo depravado” Dijo Wei Ying, sintiendo como la energía resentida
volvía a llenarlo todo: “¿Cuál es la diferencia entre ellos y Wen Ruohan? Él también me
decía esas cosas, se burlaba de mí diciéndome todo eso. No aguante que él me lo dijera,
¿Debo aguantar a estos idiotas? ¿Por qué?”
“A-Ying” Dijo Lan Zhan preocupado, acercándose a su omega para intentar tranquilizarlo:
“Hay mucha cosas que tenemos por delante, por favor… Esto es una locura, tu secta y la
mía…”
“A-Ying…” Se burló Wei Ying, soltando una risotada: “A mí no me queda nada, ni aquí, ni
en Yunmeng… Debería quemarlo todo, porque si yo no tengo nada, ¿Por qué los demás
deben ser felices? ¿Por qué yo debo ser el único que sufre después de haber traído paz a estas
tierras? ¿Por qué no puedo castigarlos?”
“A-Ying, por favor”.
Enfureciéndose ante las negativas de su alfa, Wei Ying uso toda su fuerza y empujó a Lan
Wangji, lastimando a su alfa con la energía resentida de su cuerpo.
“No me llames así, no vuelvas a llamarme así jamás” Dijo Wei Ying furioso: “No pudiste
salvarme, ni a mí ni a nuestro hijo, tú no tienes el derecho de llamarme así…”
Sujetando su pecho adolorido, Lan Wangji solo pudo mirar a su omega con el corazón
destrozado, ya que no podía negar las palabras que él le había dicho, y solamente pudo
apartarse, sin saber cómo controlar al omega que amaba.
“¡Wei Wuxian!” Dijo de pronto una voz femenina, la cual subía las escaleras en dirección al
salón principal de la torre Koi.
Con una sonrisa de satisfacción en su rostro, después de darse cuenta que había alejado
finalmente a Lan Wangji, Wei Wuxian se giró en dirección a la voz que le había hablado,
mirando a Yu Ziyuan, que se acercaba a él rápidamente.
“¿Qué crees que haces?” Pregunto la mujer furiosa: “¡Estas dejando en ridículo a tu secta y a
tu hermana!”
“¿Mi secta? ¿Qué secta?” Pregunto Wei Ying encarando a su madre: “No tenemos una secta,
tu cobardemente dejaste que la destruyeran, ¿Te llamas un cultivador? No pudiste defender
Muelle De Loto, huiste cobardemente dejando todo atrás, ¿Qué estas reclamando
exactamente, cobarde?”
Teniendo un temperamento mucho menos paciente que Lan Wangji, sin dejar que Wei
Wuxian dejara de pronunciar sus insultos, Yu Ziyuan levanto una de sus manos y le dio una
bofetada, que hizo reír nuevamente a Wei Wuxian, quien la miro de forma más desafiante
aun.
“Cierra la boca ahora mismo, mocoso impertinente” Exigió Madam Yu furiosa.
“¿Por qué debería? No eres mi madre” Dijo Wei Wuxian con suavidad: “¿Qué harás si no me
callo? ¿Volverás a darme 20 azotes en la secta que no pudiste proteger? ¿O me ocultaras
como un criminal por estar embarazado?”
“Wei Wuxian…” Dijo Madam furiosa, mientras que en su mano derecha comenzaban a verse
destellos de color violeta.
“Sigue odiándome, pero eso no cambiara que tu querido esposo amaba a mi padre mucho
más de lo que alguna vez te amo a ti, eso dicen en tu secta, ¿No es verdad? Felicidades,
dejaste que destruyeran Muelle De Loto por un omega que no te ama…” Se burló Wei
Wuxian: “Pero no lo olvides, la felicidad es transitoria, y así como gracias que tu no pudiste
encontrarme a tiempo, espero que a tu querida hija también le hagan lo mismo que me
hicieron a mi…”
Eso fue suficiente para que Yu Ziyuan perdiera el control, y quisiera golpear nuevamente a
Wei Wuxian, pero en esta ocasión usando a Zidian. Sin embargo reaccionando rápidamente,
Lan Wangji se interpuso entre ambos, usando su espada Bichen y parte de su cuerpo para
detener el ataque, impidiendo que hieran a su omega.
Bostezando con aburrimiento, Wei Wuxian no quiso decir nada más, y sin si quiera girarse
para asegurarse que su alfa estuviera bien, se alejó del lugar bajando las escaleras de la torre
principal de la torre Koi. Cruzándose en su camino con Jin Zixuan y su Shijie, quienes lo
habían escuchado todo, y se apartaron de él de inmediato.
Pero Wei Wuxian no presto atención a nada en lo absoluto, dejándose llevar únicamente por
la furia que lo consumía todo en su interior.
***
La media mañana había llegado, y abriendo los ojos, Wei Wuxian volvió a bostezar, sintiendo
como su estómago gruñía con hambre. Después de todo no había comido el desayuno que
Lan Wangji había preparado para él, suponiendo que comería el banquete de celebración por
el anuncio del embarazo de su hermana. Sin embargo no había podido probar ni un solo
bocado de ese banquete, y como no planeaba regresar a la torre Koi de nuevo, Wei Ying
supuso que tendría que comprar algo de comer por sí mismo.
Caminando por las calles de Lanling con calma, en medio de una mañana tranquila, Wei Ying
compró unos panecillos calientes de un puesto callejero, y junto a una botella de vino, se
dispuso a comer mientras caminaba para distraerse.
Sin embargo en medio de su paseo, viendo a varios mendigos fuera de un templo, quienes
esperaban monedas o donaciones de comida de los transeúntes, Wei Ying se quedó estático,
mirando una túnica roja muy sucia que reconoció de inmediato, ya que la había visto en el
pasado.
Parándose frente a una mujer andrajosa y prácticamente dormida, Wei Ying dudo un poco,
pero finalmente pregunto en voz alta: “¿Wen Qing?”
Capítulo 39.

En silencio, Wei Wuxian evitaba mirar a su lado en medio de la calle, comiendo lentamente
el pastel que había comprado, intentando evitar la incómoda situación en la que estaba ese
mismo instante.
“¿Terminaste la comida que te di?” Le preguntó Wei Ying a Wen Qing, girándose hacia ella.
“Lo hice, Wei Gonzi, en verdad muchas gracias” Respondió la joven, también visiblemente
incomoda.
“¿Quieres comer mi último pastel?” Preguntó Wei Ying.
“No es necesario, joven maestro…”
“Yo insisto, yo no… Tengo tanta hambre” Mintió Wei Ying.
A pesar de que Wen Qing estaba realmente hambrienta, quería mantener la compostura, pero
finamente viendo el último pastel caliente que Wei Wuxian le ofrecía, el hambre le gano a la
decencia, y la joven finalmente aceptó, tomando el pastel de las manos de Wei Wuxian con
ligera rapidez.
“Muchas gracias, joven maestro” Dijo la joven, haciendo una corta reverencia.
Y aunque la joven Wen había intentado hacer la situación menos incómoda para ambos, en
ese intento había hecho completamente lo contrario, consiguiendo que Wei Ying volviera a
sentirse mal por la situación.
Pero manteniendo la compostura, y sonriendo con suavidad, Wei Ying le dijo: “Ni lo
mencione… Señorita Wen…”
Volviendo a concentrarse en el pastel que tenía en las manos, el único que había podido
comer, Wei Ying miró de reojo a la joven Wen, la cual sentada en el piso, no tenía ni una
pizca de la apariencia y la gloria que Wei Ying conoció cuando ella era la líder de una secta.
Ahora Wen Qing parecía un mendigo cualquiera, como muchos de los otros que ahora
rondaban toda Lanling y la torre Koi. Y al verla, Wei Ying no podía evitar sentir cierto
predicamento, en su tiempo Wen Qing fue una poderosa líder de una secta, Wei Ying no tenía
idea del poder total de la joven en la secta Wen, pero si sabía que era lo suficientemente
poderosa como para comandar en una ciudad entera y haber protegido a dos fugitivos incluso
de su propia secta.
Y había un problema en eso… Ya que todos los líderes de la secta Wen debían ser
encarcelados y enjuiciados por sus crímenes, la cual era la última orden dada por las sectas
que ganaron la guerra contra el sol.
A Wei Ying no le interesaban esas tonterías políticas, las nuevas normas y castigos que
habían impuesto a la secta Wen. Sabía que su familia estaba en contra, pero aun así él se
había mantenido apartado, sabía que a nadie le gustaría tener su opinión al respecto, y
mientras no lo molestaran a él o a Lan Zhan, Wei Ying pretendía ser completamente
imparcial ante lo sucedido.
Después de todo él ya había obtenido su venganza, lo que sucediera después… Era algo que
solo el destino decidiría.
Pero Wei Ying sabía y tenía muy claro que a nadie le haría gracia saber que él se había
encontrado con un líder prófugo de la secta Wen, aún más, que había ayudado a ese líder. Así
que Wei Ying estaba dudando, ¿Qué era lo correcto que debía hacer? ¿Debía entregar a Wen
Qing? ¿O simplemente marcharse intentando fingir que no había vuelto a encontrarla?
“¿Qué haces por Lanling?” Preguntó Wei Ying, aun perdido en sus pensamientos: “No quiero
sonar grosero, pero no es el mejor lugar para una persona de tu secta…”
“Lo sé, joven maestro. Pero estoy buscando a mi hermano menor, Wen Ning, ¿Lo recuerda?
Es un joven alfa, lo conoció en mi secta cuando vino a refugiarse aquella noche” Respondió
la joven.
Sonriendo con suavidad, Wei Ying respondió: “Wen Ning… Claro que no recuerdo, ¿Cómo
podría olvidarlo?”
Wei Ying aun recordaba a ese pintoresco alfa, el cual conoció una tarde mientras espiaba a
Wen Xu. Un recuerdo acido de lo que para Wei Ying en algún momento significo una vida
mejor, cuando la guerra aún no había iniciado, y él era otra persona.
“¿Lo perdiste durante la guerra?” Preguntó Wei Ying curioso.
“Algo así…” Respondió Wen Qing: “En verdad perdí a toda mi secta…”
“Eso es bastante obvio, apresaron a todos los miembro de la secta Qishan Wen”.
“Pero mi secta pertenece a la secta Yiling Wen” Dijo Wen Qing, sonando molesta por un
instante: “Ellos eran ajenos a esta situación, ni siquiera somos una secta guerrera o
involucrada en la guerra, somos médicos. Según los decretos del nuevo líder de la secta Jin,
las sectas Wen no relacionadas con la guerra se respetarían y no serían juzgadas… Pero eso
no paso en mi hogar”.
“¿Eso no paso?”
“Durante la época más crítica de la guerra, cuando comenzamos a perder el terreno
conquistado, todos los líderes de la sectas Wen fuimos llamados a Sin Noche, para un par de
reuniones de emergencia. En medio de eso nos atacaron, y asesinaron a Wen Ruohan, todo
fue un caos, pero evacuaron a mujeres y niños de la ciudad, así pude escapar. Me escondí por
un tiempo, pero cuando finalmente regrese a Yiling, mi secta estaba vuelta cenizas, y mi
hermano estaba perdido… Los Jin mintieron, no están respetando sus propios acuerdos,
llevaron a mi secta a un campo de castigo, y ahora no puedo encontrarlos”.
Wei Ying no pudo evitar lucir sorprendido ante las palabras de la joven, ya que él tampoco
podía creer que los Jin hubieran mentido de esa forma.
Jin Zixuan estaba intentando pretender ser mejor que Wen Ruohan, el cual ahora era visto
como un depravado dictador. Por eso el tonto esposo de su hermana había dictado como
orden que solo se enjuiciaría y se castigaría a los líderes importantes de la secta Wen y
personas relacionadas con la guerra. La secta Wen era demasiado amplia, con muchas
familias dependientes y ciudades dependientes, que habían sido arrastradas a la guerra y eran
inocentes. Así que según las palabras de Jin Zixuan, esas sectas serian dejadas en reclusión
pero sin un juicio, se añadirían a la secta Lanling Jin, y solo sus líderes serian juzgados.
Pero aparentemente… Eso no había ocurrido en el caso de la secta de Wen Qing.
“¿Por qué se llevaron a mi hermano?” Preguntó la joven en un susurro: “A-Ning solo es un
niño, cumplió la mayoría de edad durante la guerra, ni siquiera fue entrenado como un
cultivador como tal. No lo entiendo… Todo el mundo me dice que los Jin están siendo justos
con nosotros, pero luego hay campos de castigo y yo…”
“Un momento, ¿Campos de castigo? ¿Qué rayos es eso?” Preguntó Wei Wuxian confundido:
“Nunca he escuchado de algo así. Los líderes Wen están encarcelados en los calabozos de la
torre Koi, y personas de la secta Wen que han sido juzgadas y perdonadas se han vuelto
sirvientes o han regresado a sus sectas. Nunca he escuchado de un campo de castigo en este
tiempo”.
“Son lugares establecidos por la secta Jin en secreto, donde llevan a los prisioneros de mi
secta, y los obligan a hacer el trabajo sucio que ningún otro trabajador haría en Lanling. Crear
carreteras, buscar agua en pozos, incluso construir casas. Los tratan como esclavos, incluso
peor que animales”.
“Debes estar bromeando… Eso es esclavitud, y según Jin Zixuan eso sigue siendo ilegal,
¿Cómo es posible que esto ocurra a espaldas de las demás sectas?”
“Antes la secta Wen fue la más grande e importante, ahora es la secta Jin. Todo es posible,
solo debe pensar en el ejemplo de Wen Ruohan, que por un tiempo tuvo a todo el continente
en sus manos” Se lamentó Wen Qing.
Wei Ying no podía negar que la deprimida joven tenía razón, ya que tanto la secta Jiang como
la secta Lan habían sido destruidas por los Wen, mientras que la secta Nie aún estaba
recuperándose después del secuestro de Jin Guangyao. La única secta que quedo en pie y
ahora es estable después de la guerra, es la secta Jin, la cual por lo tanto se había vuelto la
más poderosa.
“He recorrido todos los campos de castigo, desde la frontera con la secta Jiang, hasta la
frontera con la secta Nie, pero no hay rastro de mi familia o de mi hermano. Ahora solo me
queda acercarme a Lanling, que es un lugar muy peligroso para mí, pero aquí también hay
campos de castigo así que… Esta es mi última esperanza…” Se lamentó Wen Qing.
Pensativo, Wei Ying se sentó en el piso al lado de la joven, y le preguntó: “¿Puedo ir
contigo?”
“¿Por qué querrías hacer algo como eso?”
“Quiero verlo”.
Para Wei Ying, había una pequeña línea entre ser Wen Ruohan y un simple mandatario con
poder. Wen Ruohan lo había torturado, le había quitado lo más importante, y lo había
convertido en un esclavo hasta casi asesinarlo. Si Wei Ying descubría que Jin Zixuan les
había hecho lo mismo a otras personas, entonces eso significaría que el tonto esposo de su
hermana no era mejor que el dictador que todos odiaban.
Y Wei Ying no planeaba perdonar a nadie que fuera igual o similar a Wen Ruohan.
***
En medio de aplausos, Lan Wangji observó como en un acto de puro derroche, Jin
Guangshan entregaba a Jin Guangyao una espada, tallada en oro puro, la cual el joven omega
sonriente recibía de las manos de su padre.
“Esta es una espada tallada por la mejor artesana de la villa Mo, para mi adorado y fuerte
hijo, aquel que acabo con el despreciable Wen Ruohan, el héroe de todas las sectas” Dijo Jin
Guangshan, con falsa felicidad en su rostro: “Mi adorado hijo, mi adorado A-Yao…”
Nuevamente una explosión de aplausos se hizo escuchar en toda la sala, mientras Jin
Guangyao recibía la espada de las manos de su padre, y así obtenía un nuevo reconocimiento
por su gran hazaña: Haber apuñalado desde la espalda a un indefenso Wen Ruohan.
Lan Wangji no había dejado de pensar en Wei Ying todo el día, desde que en medio de una
fuerte pelea, el joven omega había abandonado la torre Koi, pero al no estar presente su
hermano, Lan Wangji no pudo dejar su secta para ir detrás de su amado. Así que Lan Wangji
se lamentó, viendo como incluso personas de su propia secta se regocijaban de ese
espectáculo tan lamentable, celebrando y aplaudiendo las tonterías de la secta Jin.
Entonces Lan Zhan deseo haberse ido con Wei Ying cuando tuvo la oportunidad.
Jin Guangshan entonces continuó con su discurso, en medio de palabras repetitivas, en las
cuales alababa su propia secta y a su hijo Jin Guangyao, unas palabras que él siempre adoraba
repetir, y que en secreto Lan Wangji detestaba.
Sin embargo en medio del discurso, algo extraño sucedió. Ya que en medio de todos los
presentes, un apresurado cultivador de la secta Jin se acercó a Jin Guangyao, y susurrándole
algo al joven omega, ambos salieron de forma apresurada del lugar.
Esto llamo mucho la atención de Lan Wangji, ya que no era usual que Jin Guangyao
abandonara un discurso de su padre, especialmente cuando todas las palabras del anterior
líder Jin siempre se centraban en llamarlo un “héroe de todas las sectas”. Algo realmente
extraño estaba ocurriendo.
Esperando unos segundos a que Jin Guangyao se haya retirado, de una forma muy elegante
Lan Wangji también se puso de pie, y excusándose con su propia secta, salió del lugar de
forma silenciosa, yendo detrás de los dos miembros de la secta Jin que faltaban.
“¿Estás seguro de lo que dices?” Preguntó Jin Guangyao, con un tono de voz muy enfadado.
“Lo siento mucho, Lianfang-zun, los reportes son claros, los soldados del asentamiento este
están pidiendo ayuda mediante señales, y todos suponemos que fue un ataque de…”
Bufando con molestia y sonriendo con burla, Meng Yao dijo: “Wei Wuxian”.
Quedándose escondido detrás de uno de los pilares del pasillo, Lan Wangji escuchó
atentamente las palabras de aquellos hombres, especialmente cuando mencionaron el nombre
de su amado omega.
“¿Cómo se enteró?” Preguntó Jin Guangyao en voz alta: “Siempre husmeando en donde
nadie lo llama, es una molestia en verdad… Ese tonto niño Wei” Se lamentó Meng Yao:
“Supongo que será demasiado tarde ahora”.
“¿Qué vamos a hacer?”
“Toma a un puñado de soldados de confianza y llévalos al lugar lo más pronto posible,
supongo que cuando lleguen ese tonto omega entrometido ya habrá asesinado a los guardias
que había en el asentamiento así como a los perros Wen que tenemos ahí, y estará de camino
aquí para hacer un escándalo, como le gusta, salir gritando por ahí”.
“¿Entonces no seremos refuerzos?” Pregunto el guardia confundido.
“No, quiero que ocultes todo. Llevare a los cadáveres y quémalos, mata a los heridos, y
pretende que nada de esto paso. Seguramente van a ir cultivadores de todas las sectas cuando
Wei Ying venga aquí ladrando, para comprobar que lo que él dice es verdad. Pero si no
encuentran los cadáveres, ¿Quién va a creerle? Es solo un desagradable nigromante que todos
detestan, nadie dará veracidad a sus tonterías” Dijo Jin Guangyao con calma: “Solo límpialo
todo, yo me encargare de lo demás”.
Sin dudarlo, el guardia Jin hizo una reverencia, y de forma apresurada se alejó por el pasillo.
Mientras que Jin Guangyao, recuperando su actitud serena y rostro sonriente, regreso a la sala
de la fiesta, donde su padre seguía dando su discurso.
Mientras que Lan Wangji, presionando el mango de Bichen para tranquilizarse, espero a que
Jin Guangyao se hubiera marchado para ir detrás del guardia Jin.
***
Jadeando con suavidad, Wei Ying se paró en medio de la lluvia, mirando al frente de forma
incrédula.
“Esto… No puede ser posible…” Susurró él de forma suave.
Frente a sus ojos tenía un espectáculo horroroso, varios soldados Jin subidos sobre caballos,
los cuales gritando y con látigos de cuero, comandaban a varias personas las cuales a pesar
del frio y de la lluvia, estaban trabajando en la tierra.
No había distinción, niños, mujeres, hombres, ancianos… Todos ellos estaban siendo
obligados a trabajar en medio de esa fuerte lluvia y frio insoportable, todos comandados por
la secta Jin, con soldados que se reían y se mofaban de su sufrimiento.
“¿Lo ves por algún lado? ¿Está aquí?” Preguntó Wen Qing desesperada, tomándose del brazo
de Wei Wuxian: “¡Debemos encontrarlo!”
“¡Wen Qing espera!”
En medio de toda esa confusión, Wei Ying observo como la joven Wen entraba en el campo
de castigo sin siquiera pensarlo, a pesar de los soldados que estaban por todo el lugar,
comenzando a buscar entre los esclavos Wen que ahí trabajaban.
“Bien… Demonios” Dijo Wei Ying, entrando detrás de Wen Qing al lugar.
El espectáculo era insoportable, todas las personas exhaustas apenas podían cavar en la tierra
húmeda por la fuerte lluvia, mientras a lo lejos se escuchaba el llanto de un bebé, y los gritos
de los soldados Jin dirigiendo a la secta Wen.
“¿A-Ning?” Preguntaba Wen Qing desesperada, deteniendo a todos los hombres de la secta
Wen que tenía en frente: “¿Conoces a mi hermano? ¿Has visto a un joven llamado Wen
Ning?”
Manteniéndose a pocos pasos de la joven Wen, Wei Wuxian apenas podía creer lo que sus
ojos estaban viendo. En su tiempo, Wen Ruohan también había condenado a trabajos
forzados a sus prisioneros, pero jamás en esas condiciones, en medio de la lluvia y el frio.
Wei Ying no podía creer que era testigo de toda la crueldad de Jin Zixuan.
Pasando en medio de todos los esclavos, mientras se acercaban cada vez más al lugar donde
sonaba el llanto de ese bebe, pronto Wen Qing soltó una expresión de sorpresa, y corrió en
medio de la lluvia hasta un grupo de personas, que también lucieron sorprendidos de verla.
Manteniéndose un poco al margen de todo, sintiendo como la lluvia estaba empeorando, Wei
Ying observó cómo varias personas se fundían en un fuerte abrazo, mientras los llantos del
bebé finalmente se detenían.
Wen Qing había encontrado a las personas de su secta.
“¿Están bien? ¿Están bien?” Preguntaba Wen Qing mirándolos a todos, con lágrimas en los
ojos: “¿Dónde está Wen Ning? ¿Y mi hermano?”
Pronto la felicidad del reencuentro se detuvo, y en medio de rostros tristes, una mujer anciana
habló: “Hace dos días… El joven maestro Wen intentó luchar con uno de los soldados, que
iba a… Iba a dañar a un omega… Pero cuando lo intentó, los demás soldados reaccionaron
y…”
Llenando su rostro de horror, Wen Qing susurró: “No…”
“Lo siento mucho, señorita Wen” Se disculpó la anciana.
“No es posible, no lo creo” Se negó Wen Qing: “¿Dónde está? ¿Dónde dejaron su cuerpo?”
Wen Qing se negaba a creer que había perdido a la última familia que le quedaba, su adorado
hermano. Así que no entraría en razón hasta encontrarlo, hasta ver con sus propios ojos a su
querido hermano fallecido.
“Los soldados tiran los cadáveres en el rio de la parte de atrás, pero…” Dijo la mujer anciana.
Escuchando esas palabras, Wen Qing volvió a correr en la dirección que le indicaban, siendo
nuevamente seguida por Wei Ying, quien no planeaba dejarla sola.
“¡Señorita Wen! ¡Es un lugar peligroso!” Grito la anciana, intentando detenerla en vano.
Con el corazón acelerado por el miedo, Wei Ying corrió detrás de Wen Qing hasta la parte
posterior del lugar, donde había un pequeño rio… El cual estaba lleno de piedras y lo que
parecían ser cuerpos humanos.
“No puedo creerlo… Malditos desgraciados Jin, maldito asesino, Jin Zixuan” Dijo Wei Ying
furioso, observando la gran cantidad de cadáveres que había ahí.
Sin embargo Wen Qing no presto atención a nada más, y entrando en el rio, a pesar de la
fuerte corriente y las afiladas piedras en el fondo, comenzó a revisar los cadáveres,
tropezando y cayendo, lastimando sus manos en el proceso.
Entrando en el agua al igual que Wen Qing, pero con un poco más de cuidado, Wei Ying
también comenzó a revisar los cadáveres, observando las horribles formas en las que habían
sido asesinados, y odiando a Jin Zixuan por ello.
Hasta que escuchó un fuerte grito de dolor.
Asustado, Wei Ying levantó la mirada, observando a Wen Qing, la cual arrodillada en medio
del agua, abrazaba en sus brazos uno de los cadáveres, mientras gritaba y lloraba
desesperada.
“¡No! ¡A-Ning!” Grito ella sin dejar de llorar: “¡A-Ning!”
Con paso lento, Wei Ying se acercó a la joven Wen, mirando finalmente el rostro pálido y sin
vida de aquel joven alfa, el cual Wei Ying recordaba como un niño lleno de vida y con un
arco de madera. Ahora esos recuerdos también habían pasado a ser de una vida mejor.
Los gritos de Wen Qing fueron tan fuertes, que pronto varios guardias Jin muy alarmados
dejaron de atormentar a los esclavos para acercarse al lago con los cadáveres, poniéndose
nerviosos al darse cuenta finalmente que habían dos personas extrañas en el lugar, que lo
habían visto todo.
“¿Cuál es la diferencia entre Wen Ruohan y Jin Zixuan ahora?” Preguntó Wei Ying en un
susurro, tomando a Chenqing del cinturón de sus túnicas con suavidad: “Ambos están
castigando inocentes por su deseo incontrolable de poder, ambos han cometido grandes
crímenes y han causado sufrimiento… Castigue a los Wen por los pecados de Wen Ruohan,
supongo que sería justo que ahora los castigue a ustedes… Por los pecados de mi adorado
cuñado…”
Pronto una suave melodía en flauta llenó todo el lugar, y en ese rio que antes estaba tan
silencioso, todos los cadáveres se pusieron de pie, de esa forma junto a la suave melodía de la
flauta, pronto muchos gritos se escucharon, y finalmente silencio de nuevo.
Sin embargo Wen Qing no le prestó atención a esto en absoluto, aferrándose fuertemente al
cuerpo de su hermano menor, hasta que nuevamente fue interrumpida por Wei Wuxian, quien
sujetando su abdomen con una mano y caminando lentamente, se acercó a ella.
“Vamos, esos idiotas lanzaron señales de auxilio a su secta, pronto vendrán refuerzos y no
será lindo” Dijo Wei Ying, mirando a la joven Wen.
“No puedo dejarlo…” Se lamentó Wen Qing: “Es mi hermano, mi pequeño A-Ning, tengo
que llevarlo conmigo, tengo que darle un buen entierro…”
“¿Entierro?” Preguntó Wei Ying en un susurro.
Muchas dudas llenaron su mente en ese instante… Entonces él recordó como en las viejas
leyendas, se decía que Wen Shima siempre estaba acompañado de un cadáver viviente.
Lamentablemente Wei Ying no había accedido a esos recuerdos cuando tuvo contacto con ese
aterrador espectro, pero si Wen Shima lo había conseguido, Wei Ying pensaba que él también
podría hacerlo.
“No vas a enterrarlo” Negó Wei Ying: “Yo voy a devolverle la vida”.
“No quiero que mi hermano sea uno de los cadáveres que manejas, que usas como un arma”
Negó Wen Qing, limpiando lágrimas de su rostro.
“¿Confías en mí?”
“¿Debería?”
“Te prometo que eso no sucederá, Wen Ning volverá a tus brazos, pero no como uno de mis
cadáveres vivientes, te lo aseguro” Dijo Wei Ying con confianza.
Levantando la mirada, Wen Qing quiso confiar las palabras del joven omega Wei, y aunque
ella tenía sus reservas, finalmente quiso apoyarse en esa pequeña luz de esperanza, ya que de
lo contrario ella sabía que enloquecería.
Con la ayuda de las personas de su propia secta, Wen Qing consiguió sacar el cuerpo de Wen
Ning del agua, y subirlo a uno de los caballos que anteriormente le habían pertenecido a los
soldados de la secta Jin.
“Estas herido” Dijo Wen Qing, mirando con más atención a Wei Wuxian.
“Estoy bien” Negó el joven omega, aun presionando su abdomen con una de sus manos.
“¿Qué te paso? Déjame verlo” Exigió Wen Qing.
“No me paso nada, eres demasiado exagerada…”
“¡Wei Wuxian!” Dijo Wen Qing con molestia: “Eres un omega desobediente, no tengo el
tiempo para lidiar con tus tonterías ahora, solo haz lo que te digo, y déjame ver tu maldita
herida”
“Estoy bien” Repitió Wei Wuxian con cierto cansancio: “Uno de los soldados me lanzo una
flecha, y como no estoy con Lan… Estoy solo, no pude detenerlo, y me dio en el abdomen.
Estoy bien”.
“Eso no está bien, déjame ver”.
Sin aceptar un no por respuesta, Wen Qing tomo a Wei Wuxian de un brazo y lo llevo a la
sombra de un árbol, donde la lluvia no perjudicaría demasiado, mirando la herida sangrante
en su abdomen, comenzó a limpiarla con el agua limpia que tenía disponible, y haciendo un
vendaje temporal con retazos de su propia ropa.
Apoyándose contra el tronco del árbol, mirando cómo había varias personas de la secta Yiling
Wen rodeándolo, Wei Ying no pudo evitar mirar nuevamente a la mujer anciana que
anteriormente habló con Wen Qing, la cual tenía un pequeño bulto contra su pecho.
“¿Qué es eso?” Preguntó Wei Ying con curiosidad, sintiendo todavía a Wen Qing limpiando
su herida.
Sonriendo con suavidad, la anciana se acercó más al joven omega y le respondió: “Es un
bebé.”
Sorprendido, Wei Ying observo como la mujer anciana le mostraba el rostro de un pequeño
niño de cabellos negros, el cual profundamente dormido, tenía las mejillas sonrojadas y el
rostro tranquilo.
“¿Un bebé sobrevivió a esta tortura? Es increíble…” Admiró Wei Wuxian.
“Nuestro pequeño Sizhui es fuerte” Dijo la anciana: “Es un pequeño omega que le entregaron
a la señorita Wen desde Ciudad Sin Noche, su madre era una simple sirvienta del joven
maestro Wen Xu, y lo saco de la ciudad antes del desastre de la guerra. Supongo que ya no
importa, porque ella debe estar muerta, así que ahora lo cuidamos, como algo muy preciado
para toda la secta”.
Sonriendo con suavidad, recordando la carta que Wen Xu le había enviado junto a ese
pequeño bebé, Wen Qing dijo: “Es un niño especial, parecer ser el hijo de una sirvienta muy
querida por A-Xu, me alegra que haya sobrevivido”.
En silencio, Wei Ying observó a ese pequeño niño, un pequeño omega. Verlo lastimaba su
corazón, pues él pensaba que probablemente su hijo tendría ese tamaño si hubiera
sobrevivido, añorando a su bebé, aquel que hace tanto tiempo había perdido.
Oliendo las feromonas de Wei Wuxian, y despertando de su profundo sueño, el pequeño bebé
estallo en un fuerte llanto, el cual sonaba muy desesperado.
“Oh… Debe tener hambre, cuando salgamos de aquí le buscare algo de comer, prepararle
alguna papilla o darle leche de vaca” Dijo la mujer anciana, volviendo a poner al bebé contra
su pecho.
Dudando un poco, pero sintiendo lastima por ese niño que lloraba desesperado por hambre,
Wei Ying dijo: “Dámelo, yo puedo alimentarlo… Creo”.
“¿Esta seguro, joven maestro Wei?” Preguntó Wen Qing.
“Si, no ha pasado tanto desde que… Bueno, no importa. Tal vez aún tengo un poco de leche
que pueda darle” Dijo Wei Ying, intentando no romper a llorar.
Wen Qing sabia del estado de Wei Wuxian. Cuando había atendido las heridas de Jiang
Wanyin hace casi un año, ella se había dado cuenta de inmediato del embarazo del joven
omega. Pero nadie hablaba del hijo de Wei Wuxian y de Lan Wangji, así que ella se temía lo
peor, pensando que durante el encierro de Wei Ying, algo malo le había pasado a él y a su
bebé.
Así que a pesar del intento de negarse de la mujer anciana, Wen Qing asintió con la cabeza,
indicándole a ella que le entregara el bebé a Wei Ying.
Ante la seriedad y curiosidad de todos los presentes, Wei Ying tomó al pequeño bebé con
delicadeza, y abriendo ligeramente sus túnicas, lo puso contra su pecho, sintiendo como el
pequeño comenzaba a alimentarse.
Entonces todos los presentes supusieron lo que había ocurrido, y prefiriendo no decir nada, se
concentraron en seguir preparando el poco equipaje que tenían para salir de aquel campo de
castigo.
Al darse cuenta de que no había más guardias Jin, muchos de los miembros de la secta Wen
salieron corriendo, escapando de ese lugar infernal. Pero todos los miembros de la secta
Yiling Wen, bajo las órdenes de Wen Qing, tomaron los caballos disponibles y prepararon sus
cosas para marcharse. Siendo seguidos por algunos de los otros esclavos Wen, que no tenían
otro lugar a donde ir, y decidieron unirse a la secta Yiling Wen para abandonar ese sitio.
Cuando todo estuvo preparado, Wei Ying se subió a uno de los caballos ante la insistencia de
Wen Qing, y todavía cargando al pequeño bebé, encabezó el grupo de la secta Yiling Wen,
quienes se dispusieron a salir de ese campamento infernal.
Sin embargo en medio del camino, se detuvieron en seco, al ver a un único alfa parado en
medio de la lluvia, cubierto por una sombrilla y esperándolos a todos.
Poniéndose serio y mirando al frente, Wei Ying dijo: “Lan Zhan… ¿Qué haces aquí?”
Capítulo 40.

Llegando a un paraje alejado, Lan Wangji escuchó gritos a lo lejos, y pudo ver por el mismo
camino de tierra, como varios guardias de la secta Jin salían corriendo.
Poniéndose frente a uno de los guardias, Lan Wangji preguntó: “¿Que está sucediendo?”
“¡Hizo que todos los muertos se levantaran!” Dijo el alarmado soldado Jin: “¡Ahora todos
ellos están viniendo por nosotros! ¡Están malditos!”
Sin necesidad de escuchar más, Lan Wangji supo de quien estaban hablando, así que dejó ir a
ese aterrado soldado, y apresuró su paso en dirección al lugar donde se escuchaban los gritos.
Pronto los sonidos de terror cesaron, y en medio de la lluvia, fueron suplantados por sonidos
del galope de varios caballos.
Llegando a un lugar que parecía una construcción en proceso, Lan Wangji se paró en medio
del camino, observando como varios caballos y personas a pie salían apresuradas de ese sitio,
siendo guiados por Wei Wuxian, su joven omega que al verlo, se detuvo en seco.
Ambos sorprendidos, cruzaron miradas, sin saber que decir. Mientras que las asustadas
personas de la secta Wen, tomaron su distancia, ya que sabían quien era ese alfa que estaba
frente a ellos en el camino… Era el alfa de Wei Wuxian.
“Lan Zhan… Acaso tu… ¿Viniste a detenerme?” Preguntó Wei Wuxian, rompiendo el
silencio.
“Wei Ying… ¿A dónde vas?” Preguntó Lan Wangji con dolor en su voz.
Todavía sintiéndose alterado por todo lo que había ocurrido, Wei Ying respondió de
inmediato: “¡No lo sé! Pero el mundo no tiene límites… Habrá un lugar a donde todos
nosotros podamos ir, sin que nadie pueda molestarnos”.
“Piénsalo con cuidado, si tú te vas, te rebelaras con todas las sectas y abandonaras las
enseñanzas ortodoxas… Tendrías que dejarme a mí… Sin vuelta atrás” Le recordó Lan
Wangji, mirando fijamente a su omega.
Tal y como esperaba, escuchar esas palabras rompió el corazón de Wei Wuxian, quien dudo
de su siguiente respuesta, ya que su corazón dolía de pensar que tendría que abandonar a su
amado alfa. Pero pensar en hacer lo correcto era aún más fuerte que él… Más fuerte incluso
que el amor que sentía por Lan Wangji.
“¿Abandonar la enseñanzas ortodoxas?” Preguntó Wei Wuxian con dolor y burla en su voz:
“¿Cuáles son esas enseñanzas exactamente? Herir y ser déspotas con otros, ser tan malo o
incluso peor que Wen Ruohan, ¿Esas son las enseñanzas a las cuales debería ser fiel?”
Bajando la mirada, Lan Wangji supo que su omega tenia razón, ya que él había comenzado a
sentirse realmente inconforme con como las cosas sucedían desde que eran regidas por la
secta Jin, pero no se había atrevido a decir nada al respecto, aun…
Notando la actitud dubitativa en el rostro de su alfa, Wei Wuxian continuo hablando: “Lan
Zhan, ¿Aun recuerdas la promesa que hicimos juntos?”
“Si” Respondió Lan Wangji sin dudarlo.
“¿Qué fue lo que ambos prometimos?”
“Que sin importar las decisiones que tomemos, ambos confiemos en el juicio del otro, y
apoyemos sus decisiones” Dijo Lan Wangji.
“Sé que tu no confías en mi ahora mismo, tú crees que estoy loco por hacer esto, ¿Pero quién
es el fuerte y quien es el débil ahora? ¿Quién es la verdadera amenaza para la vida de los más
débiles?” Preguntó Wei Wuxian: “Esas reglas que todos tanto defienden, solo han conseguido
darle el poder a un cerdo como Jin Guangshan y mi estúpido cuñado Jin Zixuan, que son
incluso peores que Wen Ruohan. Y ni tu familia ni la mía fueron capaces de oponerse a este
horror, fueron tan cobardes como todos los demás…”
“¡Wei Wuxian!” Dijo Lan Wangji alarmado, escuchando como su omega insultaba a sus
padres.
“No me interesa a quien tengo que darle la espalda, o con quien tengo que pelear, ya sea con
tu hermano o con Madam Yu, si para eso tengo que defender a los débiles que sufren ahora,
no dudes que voy a hacerlo… Y eso también te incluye a ti”.
Sorprendido, Lan Wangji observo como Wei Wuxian tomaba el mango de su espada,
luciendo amenazante, como si fuera a atacarlo.
“Esto es justicia para mí, Lan Zhan, no me importa de qué secta vienen, ni que apellido
tienen. Solo me importa que Jin Zixuan y su estúpida secta estaban torturándolos, de la
misma forma en que Wen Ruohan me hizo daño a mí, así que voy a salvarlos de la persona
que los está hiriendo… Que son los Jin, apoyados por las demás sectas, nuestras sectas” Dijo
Wei Wuxian con seriedad: “Y de lo único que me arrepiento, es de no haber acabado con toda
la malvada secta Jin hoy, cuando tuve oportunidad…”
Guardando silencio, Lan Wangji pensó en las palabras de su omega, mirando como detrás de
él, varios de los miembros de la secta Wen lucían heridos y asustados, apenas pudiendo estar
en pie por lo cansados que se encontraban, dándole a entender que su omega tenía razón, y
que esas indefensas personas habían sido heridas por los Jin.
“Así que responde de una vez, Lan Zhan, ¿Vas a apartarte de mi camino? ¿O acaso tendré que
luchar contigo para poder avanzar?” Preguntó Wei Wuxian.
Poniéndose frente a su omega, Lan Wangji respondió: “No, yo no me apartare”.
Cerrando los ojos, Wei Wuxian sintió un gran dolor en su corazón, pues pensaba que tendría
que forzarse a pelear con el alfa al que amaba… Algo que haría sin dudar por defender lo que
pensaba que era lo correcto.
“No me apartare, porque voy a ir contigo” Dijo Lan Wangji.
Abriendo los ojos de golpe, Wei Wuxian preguntó: “¿Qué?”
“Cumpliré mi promesa, Wei Ying, no me importa si esto es correcto o no, lo que piensen las
demás sectas. Si tú crees que es correcto, entonces yo también lo creeré…”
“Lan Zhan… ¿Estás seguro de lo que dices? Tú mismo lo dijiste, si sigues este camino a mi
lado, no hay vuelta atrás…”
“Aun si es hasta el fin del mundo, yo iré contigo. Porque creo en ti, y en las cosas que tú
dices, te amo y confió en ti. Así que no importa lo que me digas, no me apartare del camino,
y voy a continuar a tu lado” Respondió Lan Wangji lleno de seguridad en sus palabras.
“Lan Zhan…” Susurró Wei Ying, sintiéndose muy conmovido.
Dándose cuenta de lo mucho que amaba a su alfa, Wei Ying salto de su caballo y corrió a sus
brazos, donde Lan Wangji dejó caer el paraguas para poder abrazar a su omega, y darle un
cariñoso beso, abrazándolo contra su cuerpo.
“Cuidado… Se cuidadoso…” Pidió Wei Ying entre risas: “No me estreches tan fuerte…”
“¿Mmm?” Preguntó Lan Wangji confundido.
Apartándose ligeramente de su alfa, Wei Ying le mostro el pequeño bebé que tenía en sus
brazos, cubierto con esas mantas rojas de la secta Wen, quien había vuelto a quedarse
dormido.
Temiendo la reacción de su alfa, que podría llegar a rechazarlo por ese pequeño, Wei Ying
dijo: “No te preocupes Lan Zhan, solo lo estoy cuidando, cuando lleguemos a nuestro destino
lo regresare con las personas que me lo dieron, tú no tienes…”
“Está bien” Susurró Lan Wangji, acariciando suavemente la cabeza del bebé: “Te amo Wei
Ying, todo está bien”.
Volviendo a sonreír, dándose cuenta de que su alfa no lo había rechazado, Wei Wuxian volvió
a unir sus labios con él menor, repitiendo lo mucho que lo amaba entre sus besos. Tras varios
minutos, en los cuales Wei Wuxian consiguió tranquilizarse con los cálidos labios de su alfa,
finalmente accedió a subirse de nuevo a su caballo, siendo ayudado por Lan Wangji, ante la
atenta mirada de todos los Wen, que se sentían conmovidos por la situación que acababan de
atestiguar.
“¿A dónde iremos ahora?” Preguntó Lan Wangji, tomando su sombrilla para entregársela a
Wei Ying.
Tomando la sombrilla y luciendo pensativo, Wei Wuxian dijo: “Creo que… Tengo una
idea…”
“De acuerdo, tu solo guíame”.
Quedándose de pie al lado del caballo, Lan Wangji tomó las riendas de este mismo, dispuesto
a guiar a su omega en la dirección que este le dijera.
Volviendo a sonreír al ver a su alfa a su lado, Wei Wuxian respondió: “Solo confiaría en ti
para llevarme, Lan Zhan…”
***
“¿Escuchaste ese rumor, mi querido A-Yao?”
Levantando la mirada de su taza de té, Meng Yao preguntó: “¿Qué rumor? Han pasado
muchas cosas hoy, me temo que no preste demasiada atención a rumores innecesarios”.
“No es un rumor, mi querido hermano” Respondió Qin Su, riendo de forma cantarina: “Es
una situación que te concierne de sobremanera, hermanito”.
“Entonces no alargues más la situación y dímelo, ¿Qué es eso a lo que te refieres?”
“Parece que nosotros ya no seremos 3 hermanos por mucho más tiempo, nuestro padre ha
tenido un nuevo hijo en la secta Mo”.
De pronto en la habitación, todos los omegas presentes se exaltaron, comenzando a soltar
expresiones de sorpresa. Sin embargo Jin Guangyao permaneció serio, solamente sosteniendo
su tasa de té.
Sentada en el centro de la mesa, siendo la anfitriona, Jiang Yanli preguntó: “¿La familia Mo?
¿La familia que forja armas espirituales a las afueras de Qinghe?”
“Exactamente ellos” Respondió Qin Su, bebiendo un poco de su te: “Cuando mi querido
padre se embarcó en su peligroso viaje para conseguir la espada de mi hermano, parece que
tuvo un encuentro amoroso con la segunda dama de la familia Mo. Ahora que la guerra ha
terminado y él volvió a la secta Mo para recoger el arma de Zixuan, le fue informado que
tenía un hijo de 2 años de vida, un nuevo Jin”.
Nuevas habladurías se hicieron por toda la mesa, en aquella reunión de omegas. Pero Jiang
Yanli se quedó en silencio, ya que ese mismo día, a pesar de ser la fiesta de presentación de
su hijo, suegra no había estado presente, y ahora ella podía entender por qué Madam Jin no
había salido de sus aposentos desde el regreso de Jin Guangshan a Lanling.
“¿No es una noticia estupenda? Me hace feliz saber que nuestra familia va extendiéndose…”
Comentó Qin Su con calma.
Aun luciendo serio, Jin Guangyao preguntó: “¿Cuál es el sexo del nuevo hijo de nuestro
padre?”
“Es un varón…”
Ante aquellas palabras, Jin Guangyao lució un poco más nervioso, presionando fuertemente
la taza de cerámica que tenía entre sus dedos.
“Oh vamos, relájate” Dijo Qin Su de inmediato: “¿En verdad crees en esas tonterías de las
profecías? Es solo una tonterías, no deberías sentirte alterado…”
Notando el evidente nerviosismo en Meng Yao, Jiang Yanli se acercó a una de sus sirvientas
y en susurros le preguntó: “¿Qué profecía?”
En otro susurro, la sirvienta dijo: “Cuando un niño nace en la secta Jin, una de las
sacerdotisas del norte de Lanling lee su futuro, para saber quién será su destinado y si tendrá
éxito en la vida. Al leer el futuro de Jin Guangyao, la sacerdotisa profetizó que el heredero de
la secta Nie tendrá como destinado al hijo menor de Jin Guangshan, por eso en esta secta
apoyaron el casamiento de Nie Mingjue con el joven maestro Meng Yao. Pero ellos no son
destinados, y como ahora Meng Yao no es el hijo menor del líder Jin Guangshan…”
“¿Eso significa que el nuevo hijo de mi suegro puede ser destinado de Nie Mingjue?”
Preguntó Jiang Yanli sorprendida.
“Podría serlo…”
Entendiendo la molestia de Jin Guangyao, Jiang Yanli prefirió mantener su silencio, ya que
aun cuando él y Nie Mingjue estaban vinculados, si su alfa encontraba a su destinado, podría
abandonarlo por él. Y eso sería problemático, ya que Jin Guangyao estaría vinculado a Nie
Mingjue toda su vida, pero Mingjue podría vincularse con su nuevo omega y dejar de lado a
Meng Yao, lo que resultaría en un triste acontecimiento para joven omega Jin.
Sin embargo recobrando la compostura, volviendo a sonreír con tranquilidad, Jin Guangyao
dijo: “Lo se hermana, es una tontería, las profecías en verdad… No tienen ningún tipo de
sentido, no es algo de lo que debamos preocuparnos”.
“Tienes razón hermano, es bueno saber que habrá un nuevo hijo de nuestro padre, es lo único
que importa.”
“Un nuevo hijo con la sangre de la secta Jin, es lo único que importa” Repitió Meng Yao,
bebiendo un nuevo sorbo de su té.
En medio de esa incómoda situación, Jiang Yanli como unos cuantos pasteles de arroz,
mirando por la ventana, como la lluvia iba cesando en su intensidad.
La fiesta de la celebración por su embarazo había resultado en un… Desastre. Después de la
gran pelea que tuvo su querido hermano Wei Ying en la mañana, al anochecer recibieron
alertas de peligro en un lugar alejado de la secta, así que su esposo y demás miembros de las
diferentes sectas tuvieron que abandonar el lugar de forma apresurada, terminando la fiesta
antes de tempo. Y para animarla, Qin Su organizo una tranquila fiesta de té con los omegas
presentes, intentando darle un buen final a la celebración de Jiang Yanli.
Sin embargo una nueva tormenta se acercaba, ya que todavía húmedo por la lluvia, Jin
Zixuan se acercaba a la habitación en la que todos los omegas se encontraban, luciendo
furioso. Abriendo la puerta de golpe, y sin siguiera mirar a su esposa, el líder de la secta Jin
fijó su mirada en su hermano menor.
“Guangyao, ven conmigo ahora” Ordeno Jin Zixuan.
Pronto las risas y las palabras animadas de todos los presentes se callaron, observando el mal
temperamento de Jin Zixuan, quien lucía tan serio con su hermano. Pero Jin Guangyao, como
si hubiera estado esperando ese momento, se puso de pie con calma, sin perder la sonrisa en
su rostro, y dócilmente acompaño a su hermano.
“Claro hermano, iré contigo de inmediato” Respondió Meng Yao como si nada.
Siguiendo a su furioso hermano, ambos salieron de la habitación al pasillo, en lo que parecía
una discusión en susurros. Tras varios segundos, escuchando como la discusión se volvía mas
acalorada, Qin Su sonrió con cierta incomodidad, dejando su taza de té y poniéndose de pie.
“Oh mis hermanos… Siempre tan caóticos. Iré a hablar con ellos para que dejen de ponernos
en vergüenza, más de lo que ya estamos” Dijo Qin Su, apresurándose a ir a la puerta de la
habitación.
Acercándose a la puerta sin perder su sonrisa, pronto Qin Su pudo escuchar la conversación
que Jin Zixuan y Meng Yao tenían, notando lo sería que era.
“¿Cómo te atreviste? ¿Por qué lo hiciste?” Preguntó Jin Zixuan muy molesto: “Abrir campos
de castigo, incumplir las reglas de nuestro padre, torturar a miembros inocentes de la secta
Wen, y lo más importante, hacer todo bajo mi nombre como líder, ¿Cómo te atreves?”
Sin poder ninguna excusa, Jin Guangyao respondió: “Lo siento, hermano.”
“¿Sabes lo que pensaran las demás sectas de nosotros? Todos vinieron conmigo, lo vieron
con sus propios ojos, los cadáveres, las torturas, todo. Y todos ya han comenzado a hacerse
preguntas. Sabemos que un grupo de tus esclavos escapó con Wei Wuxian, y que Lan Wangji
está desaparecido, la secta Lan esta en caos, y Madam Yu quiere mi cabeza después de lo que
vio, ¿Tienes idea de las consecuencias de tus actos?”
Manteniendo la compostura, como si las palabras de su hermano no le importaran en
absoluto, Meng Yao repitió: “Lo siento, hermano”.
“Yo tendré que hacerme cargo de esto, de todo esto, ya que tu metiste mi nombre y el nombre
de nuestro padre en estos crímenes. ¿Quieres que nos vean como los nuevos dictadores de la
secta Wen? ¿Qué estabas queriendo al hacer todo eso?” Reclamó Jin Zixuan furioso: “Espero
que tengas una buena excusa para mí, para nuestro padre, y tu alfa, porque todos ellos están
esperando muy ansiosos saber lo que tienes que decir. Pero ahora tengo que encargarme de
cosas más importantes, como intentar detener a Wei Wuxian sin lastimarlo para evitar que la
secta Jiang me corte la cabeza, y encontrar a Lan Wangji antes de que los Lan me quemen
vivo. Tu sigue disfrutando tu estúpida fiesta de té…”
Dándole una última mirada de furia a su hermano, Jin Zixuan volvió a caminar por el pasillo,
para salir del lugar con paso rápido, luciendo cada vez más enfadado y furioso. Dejando solo
a Meng Yao, que seguía con el rostro tranquilo, como si aquello no le importara. Esperando a
que Zixuan se alejara, Qin Su finalmente se acercó a Meng Yao, quien seguía luciendo tan
distraído como antes.
“Así que ya lo sabe… Vaya, supongo que eso es un gran problema” Dijo Qin Su, bastante
tranquila.
“Tal vez, tal vez no. En estas circunstancias a todos les importa más que unos perros Wen
hayan escapado con Wei Wuxian que los campos de castigo en sí. Pero esto yo ya lo tenía
previsto, así que no te preocupes, lo voy a solucionar” Respondió Meng Yao.
“¿Entonces por qué estás tan serio? No me digas que de verdad te preocupó esa tontería de la
profecía del verdadero destinado de tu esposo…”
“¿Crees que algo así me preocuparía ahora que Lan Xichen está soltero?” Preguntó Jin
Guangyao con una sonrisa: “Probablemente estás hablando con el nuevo consorte de la secta
Lan, mi querida A-Su”.
“¿Entonces por qué estás tan preocupado?”
“Solo un varón puede acceder al liderazgo de la secta Jin, sin importar si es omega o alfa,
solo un varón será aceptado por el consejo. Cuando Jin Zixuan muera, solo quedaré yo en la
línea sucesoria, hasta que mi hijo crezca o el débil niño de Yanli sea mayor, pero ahora…”
“Ahora…” Susurró Qin Su asustada.
“Sabes tan bien como yo que no hay nada de Jin en mi sangre, así como que Jin Guangshan
no es mi verdadero padre. El verdadero heredero es ese estúpido niño de la secta Mo, y
cuando Zixuan muera, cuando tengan que elegir entre él y yo mediante los rituales de
selección por sangre, ¿Quién crees que será el elegido?”
“Oh no…”
“Tanto esfuerzo, tantos años, para nada en absoluto” Se quejó Jin Guangyao furioso:
“¿Quieres saber por qué estoy tan nervioso? Porque estamos a un paso de perder todo esto
por un simple error de nuestro estúpido padre. Y eso es algo que no puede ocurrir”.
“¿Qué haremos entonces? ¿Lo mataremos como a Zixuan?”
“Uno de nosotros va a morir, será demasiado sospechoso si matamos a nuestro nuevo
hermano, que será un niño nada más” Dijo Meng Yao furioso.
“¿Entonces qué haremos?” Preguntó Qin Su aterrorizada.
Quedándose en silencio, Meng Yao siguió viendo hacia la nada, pensando en cómo podría
arreglar todo aquel peligro que se cernía sobre él… Y que amenazaba con arruinar los planes
que tanto tiempo había tardado en realizar.
***
Wei Ying abrió los ojos al sentir como unos dedos cálidos acariciaban su frente, aun
sintiéndose cansado, desvió la mirada en dirección a la mano de la persona que tan
suavemente lo acariciaba.
“Lan Zhan…” Susurró Wei Ying, levantando la mirada hacia su alfa.
“Te quedaste dormido” Dijo Lan Wangji con calma.
Bostezando suavemente, Wei Ying se dio cuenta de que traía puesta sobre sus hombros las
túnicas externas de su alfa, que lo había cubierto en medio de la noche cuando se había
quedado dormido.
“¿Ya llegamos?” Preguntó Wei Ying adormilado, observando el paisaje árido y algo obscuro
a su alrededor.
“Mmm” Respondió Lan Wangji.
En medio de su apresurada huida, Wei Ying solo pudo pensar en un único lugar donde podían
estar a salvo, los túmulos funerarios.
Wei Ying sabía que se había llevado de forma ilegal a varios miembros de la secta Wen,
quienes bajo las leyes de la secta Jin, debían ser encerrados y castigados. Pero Wei Wuxian
no planeaba permitir que eso ocurriera, no para arriesgarse a que volvieran a llevarse a esas
personas inocentes a campos de castigo, Wei Ying no planeaba arriesgarse a algo como eso
de nuevo.
Así que decidió llevar a todos al único lugar donde él sabía que ni los Jin ni cualquier otra
secta se atreviera a acercarse a atacarlos, el lugar más temido de toda a la región, “Los
Túmulos Funerarios”, un lugar maldito.
Los miembros de la secta Wen no se hicieron un gran problema al saber a dónde se dirigían,
después de todo, esta misma montaña fue el origen de la secta Yiling Wen, la secta de Wen
Qing y Wen Ning, así que para ellos sería como regresar a casa. Además de que un lugar con
malos rumores de estar maldito era mejor que regresar a uno de los campos de castigo Jin…
“Déjame ayudarte a bajar del caballo” Pidió Lan Wangji.
“Vas a ayudarnos… En plural, querrás decir” Dijo Wei Ying con una sonrisa.
“Los ayudaré” Se corrigió Lan Wangji.
Tomando la contra de su omega, y siendo muy cuidadoso al saber que él estaba herido, Lan
Wangji bajó a Wei Wuxian del caballo, escuchando las risas de felicidad del joven omega.
“¿Estas bien? ¿Puedes caminar?” Preguntó Lan Wangji preocupado.
“Estoy bien, Lan Zhan” Respondió Wei Ying con una sonrisa: “Vamos adentro, aún no ha
amanecido, quiero dormir y… Seguramente nuestro pequeño bebé querrá comer algo”.
Bajando la mirada, Lan Wangji observó a ese pequeño bulto envuelto en telas rojas, el cual
estaba pegado al pecho de Wei Wuxian, que los sostenía con firmeza.
Sintiendo como su alfa lo abrazaba por la cintura, Wei Ying comenzó a caminar en dirección
al templo que había frente a ellos, ese lugar que se había convertido en su hogar hace tantos
meses más, y al que ahora estaba regresando después de tantos meses.
A su alrededor, también había varios miembros de la secta Wen, quienes después de tanto
tiempo estaban pudiendo descansar tranquilos, esperando en el campo a que amaneciera para
poder registrar su nuevo hogar.
Adelantándose a ellos y siendo ayudada por algunas personas de su secta, Wen Qing se había
llevado el cuerpo de su hermano hasta el interior de dicho templo, a una de las habitaciones
más profundas, donde ella planeaba limpiar el cuerpo de su hermano y llorar por su perdida.
Así que prefiriendo no interrumpir, Lan Wangji y Wei Wuxian se quedaron en el salón
principal del tiempo, ese en el que Wei Ying se había encontrado con Wen Shima en el
pasado, pero que ahora estaba vacío.
Mirando a su alfa, quien había encontrado un par de ramas secas y ahora hacia una fogata
improvisada, Wei Ying no pudo evitar sonreír, sintiendo el calor alcanzándolo.
“Gracias, Lan Zhan” Dijo Wei Ying con una sonrisa.
Sacudiéndose las manos, Lan Wangji se sentó al lado de Wei Wuxian, volviendo a abrazarlo
por la cintura, preguntándole: “¿Cómo está el bebé?”
Sintiendo el ambiente ponerse más cálido, Wei Wuxian descubrió cuidadosamente al niño
que tenía en sus brazos, observando su rostro sonrosado y sus ojos cerrados.
“Está bien, no tiene fiebre, creo… Debe estar hambriento, pero no tengo el corazón para
despertarlo” Respondió Wei Wuxian.
“Aún es pequeño” Susurró Lan Wangji mirando el rostro del bebé dormido: “Debe tener
menos de 3 meses…”
“No es tan pequeño, se ve más pequeño que un bebé normal porque es un omega”.
Pestañeando varias veces, Lan Wangji sintió como un dulce aroma llegaba sus fosas nasales,
confirmando que aquel pequeño bebé era un omega, el cual aún desde muy joven ya soltaba
sus dulces feromonas.
“Debe tener 5 meses, tal vez 6” Dijo Wei Ying pensativo: “Si fuera un alfa lo sabría mejor,
cuide por mucho tiempo a Jingyi con mi hermano, así que se bastante sobre alfas… Creo. No
sé si podre ser tan bueno como A-Cheng cuidado a este bebé”.
“Lo harás bien” Respondió Lan Wangji de inmediato, muy convencido de sus palabras.
Sin poder evitarlo, Wei Wuxian sonrió con suavidad, acariciando las mejillas del pequeño
bebé en sus manos, en un vago intento de despertarlo. El bebé parecía exhausto, así como los
demás miembros de la secta Wen, en ese campo de castigo ni siquiera un bebé tan pequeño
podría estar a salvo, y seguramente no había dormido mucho.
Mirando de reojo a su alfa, sintiendo culpa en su corazón, Wei Ying miró a Lan Wangji y le
dijo: “No tienes que hacer esto si no lo deseas…”
“Ya te dije que iré contigo, a donde sea que vayas…”
“No me refiero a eso” Negó Wei Ying: “Este bebé… Si no quieres, no tienes que cuidarlo. No
soy A-Cheng, si no quieres, no lo volveremos nuestro hijo, solo vamos a…”
“El bebé necesita unos padres, y nosotros necesitamos un bebé” Dijo Lan Wangji.
Muy sorprendido, Wei Wuxian no supo que responder, sintiendo como su alfa le acariciaba
suavemente el abdomen sobre el improvisado vendaje que tenía sobre su piel, y como
cariñosamente le besaba el cuello.
“Lo se Wei Ying, sé que duele” Susurró Lan Zhan: “Yo no pude cuidarlo, no pude cuidarte.
Él no va a regresar, nuestro A-Yuan…”
“No, él no va a regresar” Negó Wei Ying, sintiendo como una lagrima resbalaba por su
mejilla.
“Pero si nosotros tenemos la oportunidad de darle todo el cariño y cuidado que era para A-
Yuan a otro bebé, uno tan necesitado como este niño, entonces tal vez nosotros también
vamos a poder sanar”.
Sintiendo más lagrimas resbalando por sus mejillas, Wei Ying apoyó su rostro en el pecho de
su alfa, sintiendo como él continuaba acariciándolo con cariño y sumo cuidado.
“Lo extraño tanto… Él no lo merecía, morir siendo tan pequeño, ni siquiera tuvo una
oportunidad…”
“No, A-Yuan merecía una vida con nosotros, una vida de felicidad a nuestro lado” Respondió
Lan Wangji.
“No quiero que él me odie, que piense que no quise protegerlo, que deje que muriera…” Se
lamentó Wei Wuxian: “Yo lo amaba tanto… Solo quisiera una nueva oportunidad, para darle
un abrazo y decirle que lo amo, que lamento no haber podido protegerlo”.
Con culpabilidad, Lan Wangji bajó la mirada, ya que todavía sentía la impotencia de no haber
podido proteger a su familia, dejar que a su amado omega le sucedieran cosas tan horribles,
Lan Wangji siempre se castigaba a si mismo por lo sucedido.
“Pero si puedo sanar y darle todo mi cariño a este bebé, que esta tan solo en el mundo,
entonces tal vez A-Yuan estará orgulloso de mi, de nosotros, y podrá perdonarnos” Susurró
Wei Ying.
“Wei Ying, A-Yuan no está enfadado, no te odia” Aseguró Lan Wangji: “Pero él si estaría
agradecido de que ayudemos a este bebé, de que seamos nosotros los que le demos una nueva
oportunidad.”
“¿Cómo lo sabes?”
“Es nuestro hijo, sé que él pensaría eso… A-Yuan sería tan dulce como tú, Wei Ying, nuestro
hijo seguramente querría que cuidáramos a este niño y que se vuelva parte de nuestra
familia”.
“Lo sé, nuestro A-Yuan hubiera sido un niño muy bueno, el mejor…” Respondió Wei Ying,
sonriendo con suavidad.
Después de tantos días, Wei Wuxian sintió que podía dejarlo ir, después de haberse aferrado
por tanto tiempo a su adorado A-Yuan, no haber podido superar su partida, Wei Ying
finalmente podía llorar al lado de su alfa y aceptar que él verdaderamente no regresaría.
Ahora Wei Ying también se sentía en paz, dejando de pensar que su adorado bebé lo odiaba
por lo que había pasado, y que ahora su adorado A-Yuan estaba descansando tranquilo. Así
que pensando en no decepcionarlo, todavía queriendo reponer sus errores con su hijo, Wei
Ying estaba dispuesto a cuidar de ese bebé que tenía en los brazos, ese niño tan pequeño a
quien planeaba darle todo su cariño, y cuidarlo como si verdaderamente fuera su hijo.
“¿Cuál es su nombre?” Preguntó Lan Wangji, mirando al bebé todavía dormido.
Sonriendo nuevamente, Wei Wuxian respondió: “Sizhui…”
Como si aquel pequeño niño hubiera reconocido su propio nombre, abrió los ojos y comenzó
a llorar, sorprendiendo a sus nuevos padres.
Teniendo mucha fuerza con sus dulces llantos, el pequeño bebé mostro sus ojos, de un color
dorado muy puro, con pequeños destellos violetas, unos ojos verdaderamente especiales. Al
observar a su hijo, Wei Ying no pudo evitar pensar que aquel niño tenía los mismos ojos de
Lan Zhan, unos ojos hermosamente dorados, con unos pequeños destellos violetas parecidos
a los ojos de su propia madre.
¿Acaso eso era posible? ¿Cómo pudo ocurrir semejante coincidencia?
“Tranquilo Sizhui” Susurró Lan Zhan, acariciando las mejillas del bebé con suavidad: “Wei
Ying, debe estar hambriento”.
Saliendo de su estupor, causado por los ojos de aquel pequeño niño, Wei Ying respondió:
“S… Si… Voy a darle de comer”.
Muy tembloroso, Wei Ying abrió sus túnicas, y cuidadosamente puso al pequeño contra su
pecho, quien de inmediato calló sus llantos desesperados, comenzando a comer.
“Este es el primero de muchos, ¿Verdad Lan Zhan?” Preguntó Wei Ying, apoyándose en su
alfa.
“Mmm…” Respondió Lan Wangji con calma.
“Madam Yu me dijo que es muy importante para los alfas y las familias de los alfas tener
hijos biológicos, por eso se enojaron con A-Cheng cuando tuvo a A-Yi, ¿Es importante en
verdad?”
“Mmm…”
“Entonces deberemos tener muchos hijos para que tu familia y la mía no se enojen con
nosotros”.
“Mmm…”
“¿Entonces tendremos muchos? ¿Cuantos?”
“Muchos, los que quieras” Respondió Lan Wangji.
“Quiero 5… No, quiero 10” Respondió Wei Ying riendo: “Que jueguen todo el día conmigo
en Muelle De Loto… ¿Serán muchos entonces?”
“Mmm… Y jugaran contigo todo el día”.
“¿Lo prometes?”
“Lo prometo…”
Volviendo a reír emocionado, Wei Ying no dejo de hablar sobre los hijos que quería tener,
recibiendo tranquilas respuestas por parte de su alfa, quien lo sostenía con cuidado, dándose
cuenta de que Wei Ying estaba cansado y pronto se quedaría dormido también.
“...Cuando estábamos en la secta Lan, tu secta, las jóvenes doncellas que nos ayudaban a
cuidar de Jingyi, me dijeron que los niños son lindos y quieres tener muchos, hasta que
quedas en cinta. Luego de tenerlos, odiaras a tu alfa y ya no querrás volver a quedarte
embarazado, me dijeron eso, ¿Sabias?” Preguntó Wei Ying.
“Mmm”.
“Pero yo no te odio, y en vez de eso quiero tener más, quiero 5 o 6, incluso 7 u 8, tal vez
9…”
“10” Dijo Lan Zhan.
“Quiero 10 más” Aseguró Wei Ying con confianza: “Además quiero disfrutar de hacer eso 10
niños…”
Sintiendo sus orejas sonrojarse, Lan Wangji respondió: “Mmm…”
“¡Quiero 10! ¡Quiero 10 bebés más!” Suplicó Wei Ying, teniendo su antiguo y dulce
comportamiento con su alfa.
Al verlo, Lan Wangji no pudo evitar sonreír. Ya que desde hace mucho tiempo, desde antes
de que ambos se separaran a causa de la secta Wen, Lan Wangji no había visto a su omega tan
tranquilo y feliz, así que verlo en ese estado le transmitía una gran felicidad. Lan Wangji
sentía que finalmente había recuperado a su adorado Wei Wuxian.
“Te daré los hijos que quieras… Siempre te daré lo que tú quieras…” Aseguró Lan Wangji,
besando delicadamente los labios de Wei Wuxian.
Capítulo 41.

Soltó un fuerte gemido de placer.


“Lan Zhan…” Gimoteó Wei Ying, sintiendo sus piernas temblando: “No hagas eso… Es
sucio…”
Sin escuchar a su omega, Lan Wangji siguió sosteniéndolo por las caderas y abriendo sus
nalgas con las manos, mientras cuidadosamente lamia la entrada de su omega.
“Lan Zhan…” Volvió a gemir Wei Ying, sintiéndose a punto de venirse: “Te quiero adentro…
Por favor… Entra ya…”
Dándose cuenta de que Wei Ying verdaderamente estaba en su límite, Lan Wangji dejó de
lamer la entrada de su omega, y se puso de pie detrás de él, tomándolo del cuello con una de
sus manos, mientras que con la otra presiono con un poco de fuerza una de las nalgas de su
omega.
“Pídelo” Exigió Lan Wangji con la voz ronca por la excitación.
Sintiendo la mano de su alfa en su cuello presionar ligeramente, Wei Wuxian soltó un jadeo,
antes de suplicar con la voz temblorosa: “Por favor mételo ya… Quiero venirme Lan
Zhan…”
Acercando sus labios a la nuca del mayor, besando con delicadeza la marca de su propia
mordida en la piel del contrario, para luego comenzar a introducir su erección en la entrada
de Wei Ying.
Cerrando los ojos y soltando un fuerte gemido de placer, Wei Wuxian presionó en puños sus
manos atadas sobre su cabeza, sintiendo como su alfa comenzaba a entrar en él, de una forma
lenta, mientras rozaba y presionaba todos sus puntos sensibles. Sintiendo la pelvis de su alfa
chocar contra su cuerpo, Wei Ying movió suavemente las caderas volviendo a soltar un
gemido, sintiendo lo profundo que su alfa había llegado en su interior.
“Lan Zhan…” Volvió a gemir Wei Ying, temblando por el placer.
Esperando unos segundos a que su omega se acostumbrara a su tamaño. Lan Wangji llevo sus
manos al pecho de Wei Wuxian, comenzando a presionar y tirar suavemente de sus pezones,
haciendo gemir dulcemente al mayor.
Respirando profundamente en medio del placer que llenaba su mente, intentando
tranquilizarse, Wei Ying soltó un fuerte gemido de placer, ya que su alfa había comenzado a
moverse imprevisto, haciéndolo temblar y removerse lleno de placer.
“Esta tan profundo… Lan Zhan…” Gimoteó Wei Ying.
“¿Acaso no te gusta cuando lo hago profundo?”
“Me gusta… Me gusta mucho… No te detengas…”
Girando su rostro, Wei Wuxian alcanzó los labios de su alfa, besándolo lleno de deseo y
pasión. Mientras que Lan Wangji, tomando a su omega de las caderas con firmeza, aumentó
el ritmo de sus embestidas de forma paulatina, hasta comenzar a penetrarlo con fuerza y
rapidez, presionando todos los puntos sensibles en su interior, asegurándose de hacerlo sentir
bien.
Soltando un fuerte grito, Wei Wuxian rompió el beso que Lan Wangji le estaba dando,
suplicando: “No me toques así… Me voy a venir…”
Soltando as caderas del mayor con una de sus manos, Lan Wangji había llevado sus dedos al
miembro de su omega, comenzando a acariciar lentamente su erección, desesperando aún
más a Wei Wuxian, quien estaba muy sensible.
“No lo hagas… No me toques así…” Gimoteó Wei Ying desesperado, sintiéndose al punto
del orgasmo.
Wei Wuxian había estado conteniendo su orgasmo prácticamente desde que ambos habían
iniciado a hacer el amor, con la intención de prolongar el placer. Pero ahora que estaba siendo
estimulado de esa forma por su alfa, Wei Wuxian no pudo contenerse por mucho más tiempo,
y termino viniéndose en los dedos de Lan Zhan, soltando fuertes gritos de placer, y tensando
su cuerpo entero.
Soltando un gruñido, Lan Wangji sintió como el interior de Wei Wuxian se contraía alrededor
de su miembro. Así que volviendo a tomarlo fuertemente de las caderas, Lan Zhan aumentó
el ritmo de sus embestidas, hasta terminar viniéndose en el interior del mayor, dando una
profunda embestida en su interior.
Cerrando los ojos, Wei Wuxian sintió temblar su cuerpo entero, mientras su entrada era
extendida al máximo, dándole a entender que su alfa había anudado en su interior.
Con la respiración agitada, Lan Wangji besó suavemente los hombros y la espalda de su
omega, susurrando: “Te amo…”
Sonriendo con cansancio, mientras aun salían suaves gemidos de placer de sus labios, Wei
Ying respondió: “Yo también te amo…”
Sintiéndose agotados al igual que satisfechos, ambos volvieron a unir sus labios en un beso
lleno de cariño, mientras se relajaban y esperaban que el nudo dentro de Wei Wuxian se
relajara.
Sin embargo rápidos pasos se escucharon cerca de la habitación en la que ambos estaban
encerrados, haciendo que ellos rompieran su beso y miraran consternados en dirección a la
puerta.
“¡A-Die! ¡A-Die!” Dijo una dulce voz, sonando muy animada: “¡Te hice un dibujo! ¡Mamá
míralo!”
Frunciendo la nariz con molestia, Wei Wuxian susurró: “Mamá…”
“¡A-Die…!” Volvió a decir Sizhui desde el exterior de la habitación, golpeando la puerta con
sus pequeñas manos.
Siendo muy cuidadoso, Lan Wangji cubrió con una de sus manos los labios de Wei Wuxian,
pidiéndole que hiciera silencio, para que su hijo no pudiera descubrirlos. Algo que era inútil,
ya que por el olor de sus feromonas, Lan Sizhui sabía que sus padres estaban ahí encerrados.
“¡A-Die!” Siguió llamando el pequeño cachorro desde el exterior.
Pronto otros pasos apresurados se escucharon por el pasillo, y la voz cariñosa de la anciana
que cuidaba a Sizhui se escuchó: “Pequeño Sizhui, ¿Por qué te fuiste corriendo? Te dije que
tus padres estaban ocupados…”
“Mira mi dibujo, míralo… Es Suibian, quiero mostrárselo a mi mamá” Dijo Sizhui con
alegría.
“Tu A-Die” Corrigió amablemente la anciana: “Ven conmigo, pequeño, tus padres vendrán
por ti en un instante, y podrás enseñarles tu hermoso dibujo.”
“¡Quiero mostrarlo ahora!”
“Tengo dulces de azúcar rojo para ti, pero solo si eres bueno y me obedeces, mi pequeña
mariposa”.
Quedándose en silencio por un segundo, pensando en los dulces, Sizhui finalmente respondió
de forma animada: “¡De acuerdo!”
En medio de sus dulces e infantiles risas, Lan Sizhui tomo la mano de la anciana, y
caminando a su lado, se alejó de la habitación, dejando nuevamente solos a Lan Wangji y Wei
Wuxian.
“Mamá, mamá, mamá…” Se quejó Wei Ying cuando Lan Wangji soltó sus labios: “¡Él lo
hizo de nuevo! ¡Volvió a llamarme mamá!”
Prefiriendo no iniciar esa discusión con su omega, Lan Wangji le respondió: “Pero también te
llamó A-Die”.
“Pero también me llamó mamá. ¿Por cuánto tiempo tendré que corregirlo? Es tan vergonzoso
que me llame de esa forma…”
“A penas tiene 3 años Wei Ying, ya aprenderá…”
Todavía refunfuñando, Wei Wuxian sintió como Lan Wangji finalmente salía de aún interior,
y como después de unos segundos liberaba sus brazos de sus ataduras, permitiéndole
finalmente caminar. Con las piernas temblorosas, Wei Ying caminó hasta el otro lado de la
habitación, donde estaba su ropa.
Con cuidado y tomando un pañuelo de papel, limpio sus piernas y sus nalgas, mirando de
reojo a su alfa. Después de liberar las manos de Wei Ying, Lan Wangji de inmediato se puso
nuevamente su cinta de frente, para luego volver a vestirse.
Al ir a los Túmulos Funerarios, ambos habían tenido que hacer grandes sacrificios, como
dejar de usar ropa cara o beber licor caro. Y algo muy difícil para Wei Ying, fue ver como su
amado alfa tenía que comenzar a usar ropas baratas, que eran de diversas tonalidades neutras,
que iban del café al azul, pero ya no esas hermosas túnicas blancas típicas de Gusu Lan.
Y aunque Lan Wangji lo había tranquilizado diciéndole que a él no le importaba su ropa, Wei
Ying aun sentía cierto dejo de culpabilidad al ver a su adorado alfa vistiendo esas ropas
baratas, algo que hería su corazón, pues Wei Ying era mayor que Lan Wangji, y quería darle
un futuro mejor a su amado.
Intentando evitar esos pensamientos tristes y no tardar más en esa habitación, sabiendo que
su cachorro ya estaba esperándolos, Wei Ying se vistió con rapidez con túnicas baratas y de
color negro, acercándose a su alfa, quien también había terminado de vestirse.
“Lan Zhan… Llévame en tus brazos” Le pidió Wei Ying, acercándose más a su alfa: “Lo
hiciste demasiado duro, mis piernas están temblando”.
Terminando de arreglar su ropa, Lan Wangji se giró en dirección a su omega y le dijo:
“Mmm…”
Sin necesidad de más palabras, Lan Zhan tomó a Wei Wuxian en sus brazos, saliendo a su
lado de aquella habitación privada, en dirección a las cabañas fuera del templo, donde
seguramente estarían los demás.
Tres años habían sido el tiempo suficiente para que las personas de la secta Wen se instalaran
en los Túmulos Funerarios. No era un lugar vistoso, pero para la secta Yiling Wen manejada
por la líder Wen Qing, era su hogar ancestral, así que para ellos tenía más valor histórico que
un rumor como un lugar maldito.
Así que todos trabajaron duro para convertir esa desolada montaña en un lugar habitable,
creando varias cabañas de madera fuera del templo donde podían dormir, además de ciertos
edificios comunes, como un comedor y un templo para venerar a sus ancestros, además de
varios lugares de cultivo y establos, donde podían tener algunos animales y cosecha.
Comenzaban a ser una secta nuevamente, y una que estaba volviéndose prospera a pesar del
lugar en el que se encontraban.
Saliendo del templo y mirando en todas direcciones, Wei Wuxian preguntó: “¿Dónde crees
que este A-Yuan? ¿Habrá comido algo?”
“Seguro debe estar en el templo rezando” Respondió Lan Wangji.
“Es probable, vamos a buscarlo…”
Sin mucho problema, Wei Wuxian permitió que las personas de la secta Wen crearan un
templo para sus ancestros, donde pusieron los nombres de todas sus personas queridas y
líderes respetados, aquellos que habían muerto durante la guerra. Sin embargo la única cosa
que Wei Ying no había permitido, era que pusieran los nombres de Wen Ruohan o Wen Xu en
ese altar, demostrando el odio que les tenía a ellos. Algo que resultaba incomprensible para
algunos de los Wen, ya que no entendían como Wen Xu podía ser odiado por alguna persona.
Acercándose al templo, Wei Wuxian sonrió, observando a su pequeño cachorro, el cual
estaba arrodillado al lado de una de las jóvenes de Yiling que lo cuidaba, frente a inciensos
encendidos y rezando en silencio. Wei Wuxian nunca le había mentido a su pequeño
cachorro, dejándole en claro que no era su verdadero padre, pero que junto a Lan Zhan lo
amaban e iban a cuidarlo. E imitando el ejemplo de su hermano mayor, quien había hecho lo
mismo con Lan Jingyi, Wei Wuxian se encargó de llevar a su cachorro al templo para rezar
por su madre que había fallecido, aunque nadie sabía quién era.
Girándose al sentir el aroma de sus padres, Sizhui esbozó una gran sonrisa, y se puso de pie
para correr hacia ellos: “¡Papá! ¡A-Die!”
Bajando de los brazos de su alfa, Wei Wuxian se apresuró a acercarse a su cachorro y
sostenerlo con cuidado, diciéndole: “Oye, no corras tan rápido, te caerás”.
“Te hice un dibujo… ¡Te hice un dibujo!” Dijo Sizhui emocionado, ignorando el regaño de
Wei Ying.
“¿En verdad? ¿Qué dibujaste?” Preguntó Wei Wuxian, sonriendo suavemente.
“¡Suibian!”
“Oh… Muy bueno, ¿Quieres mostrarme?”
“Si… Mañana voy a dibujar a Bichen” Prometió Sizhui.
Tomándose de las manos de sus padres y caminando muy lento, los tres avanzaron por el
lugar en dirección a la cabaña de madera que les pertenecía, donde Sizhui había dejado su
dibujo.
Sin embargo fueron detenidos por una voz autoritaria: “Wei Wuxian.”
Suspirando con suavidad, sabiendo lo que estaba pasando, Wei Ying se giró y miró a la
molesta joven que llamaba su nombre: “Hola Wen Qing, como siempre, es un placer verte”.
“Me dijiste que irías a comprar semillas ayer, pero no fuiste, y me mentiste diciéndome que
lo habías hecho” Reclamó la joven molesta.
“Aiya… Te dije que iba a hacerlo, no que lo había hecho, prometerlo es lo mismo que
hacerlo, ¿No es verdad?” Cuestionó Wei Wuxian, intentando quitarle peso a las palabras de la
joven.
“¡No es lo mismo! ¡Eres un mentiroso irresponsable!”
A pesar de que Wei Wuxian había sido el que llevo a los Wen a ese lugar, Wen Qing se había
convertido en la líder de la nueva secta Yiling Wen, ya que la joven Wen ya tenía cierta
experiencia en el liderazgo por su papel antes de la guerra, y Wei Wuxian por su lado no
demostraba demasiado interés en volverse un líder.
De esa forma ambos habían pactado sus partes, Wei Ying era el protector de la secta,
mientras que Wen Qing se encargaba de ser la dirigente del lugar. Y como el protector, era
Wei Ying el encargado de ir a la ciudad de Yiling a las afueras de los túmulos funerarios, para
ir de compras o vender sus productos. Ya que los Wen no podían salir del área protegida de
esa montaña, pues tenían varias órdenes de arresto y podían incluso llegar a ser asesinados.
“De acuerdo, de acuerdo, no me grites” Pidió Wei Ying intentando calmar las cosas: “Iremos
ahora mismo, Lan Zhan y yo iremos a comprar las cosas, es una promesa”.
“Tienes hasta la media tarde, o te daré una paliza cuando regreses” Reclamó la joven,
volviendo a alejarse de la familia, luciendo muy enfadada.
Sintiéndose muy perezoso, Wei Ying apoyó su cabeza en el hombro de su alfa y susurró: “No
quiero ir…”
“Tenemos que hacerlo” Dijo Lan Wangji con firmeza.
“Lan Zhan…” Gimoteó Wei Ying, intentando sonar suplicante.
“Creo que tengo un poco de dinero guardado, podemos comprar más vino” Sugirió el alfa de
forma inteligente.
Poniéndose recto de nuevo, y mostrando una gran sonrisa en su rostro, Wei Ying dijo:
“Siempre es bueno salir a la ciudad y cumplir tus promesas, ¿No lo crees, Lan Zhan?”
***
En los brazos de su padre, Sizhui miraba todo a su alrededor con curiosidad, observando la
gran ciudad de Yiling en la que se encontraban.
Para el pequeño niño omega, su mundo se resumía a los Túmulos Funerarios y todas las
personas Wen que ahí vivían, así que ir a lugares tan grandes como Yiling solían
desorientarlo, sintiéndose algo temeroso viendo a su alrededor.
“Papá… ¿Que es esa?” Preguntó Sizhui señalando en dirección a un puesto callejero.
“Sizhui, no debes señalar de esa forma, no es educado” Dijo Lan Zhan con tranquilidad: “Son
mariposas de papel…”
Quedándose nuevamente en silencio, Sizhui siguió mirando las mariposas de forma fija,
observando su hermoso color y llamativas formas. Notando el interés de su cachorro, Lan
Wangji decidió apartarse por un momento del caballo que habían traído, para acercarse al
puesto callejero.
“¿Quieres verlas?” Preguntó Lan Zhan.
“¡Shi!” Respondió Sizhui emocionado.
“De acuerdo.”
Siendo muy cuidadoso, Lan Zhan bajó a Sizhui de sus brazos, permitiéndole acercarse al
puesto de las mariposas de juguete, donde miraba todos los juguetes muy emocionado.
Saliendo de la tienda de licor en la que había estado, Wei Wuxian trajo consigo una caja
entera de vino, notándose muy contento y sonriente.
La declaración oficial de la secta Lan fue que Lan Wangji fue secuestrado por Wei Wuxian,
que había sido llevado a la fuerza a los túmulos funerarios, y fue embrujado por ese omega de
tan mala fama. Sin embargo Lan Xichen sabia la verdad sobe su hermano, así que cada mes
se las arreglaba para mandarle una buena suma de dinero a Wangji, con la que el alfa Lan
apoyaba para comprar cosas para la secta Wen y para tener dinero disponible para su familia.
Mirando a su alfa junto a su cachorro frente al puesto de mariposas, mirando como Sizhui se
notaba tan interesado y quería comprar una, pero Lan Wangji se notaba reacio a hacerlo,
solamente permitiéndole al niño ver todo. Así que dejando la caja de vino en la carreta que
había traído con el caballo para las compras, Wei Wuxian se acercó a su familia, abrazando a
su alfa por la espalda con cariño.
“Mira es papá… Es pequeña…” Insistió Lan Sizhui.
“No es no, Sizhui, no puedes comprarlas”.
“Papá…” Suplicó Sizhui mirando a su padre, luciendo muy adorable.
Mirando a su hijo en silencio, en medio de toda su seriedad, Lan Wangji estaba a punto de
ceder, pero entonces fue abrazado por Wei Wuxian, quien miraba toda la escena divertido.
“Sizhui, no podemos comprarlo” Se negó Wei Ying: “Sabes la regla…”
“A-Die, no es justo, es muy bonito” Se quejó Sizhui.
“Sabes la regla Sizhui, no más de dos juguetes al mes” Se negó Wei Ying con severidad.
Sabiendo que no conseguiría nada de su A-Die, quien era mucho más severo que su padre,
Sizhui decidió enfocar sus esfuerzos en Lan Wangji, quien antes de la llegada de Wei Ying,
había estado a punto de ceder ante sus peticiones.
“Papá…” Suplicó el pequeño omega, tomándose de las túnicas de su padre con fuerza:
“Quiero una mariposa, por favor…”
Viendo el rostro suplicante de su cachorro, pensando que el pequeño niño terminaría
llorando, algo que Lan Wangji no podía soportar, el alfa finalmente termino cediendo, y antes
de que Wei Ying pudiera decir algo, tomó un par de monedas a su hijo para que pudiera
comprar su juguete.
Mirando esa escena boquiabierto, viendo como su hijo terminaba su manipulación, y
sonriendo felizmente regresaba con el vendedor para comprar una hermosa mariposa de papel
naranja.
“¡Lan Zhan!” Se quejó Wei Ying, golpeando suavemente el brazo de su alfa.
“Mmm…” Susurró Lan Wangji algo avergonzado, viendo a su hijo sonriendo feliz al tener su
mariposa.
“¡No puedes romper tus reglas así nada más!” Se quejó Wei Ying: “Dijimos que no podíamos
comprarle más de dos juguetes al mes para evitar que se volviera un niño mimado…”
Cuando Lan Sizhui era un pequeño bebé, Lan Wangji y Wei Wuxian cedían ante los
caprichos del pequeño, gastando prácticamente todo su dinero en juguetes y ropa para el
bebé. Sin embargo mientras el pequeño omega crecía, ambos se dieron cuenta de que estaban
malcriando a su hijo, quien se había acostumbrado a obtener lo que quisiera de sus padres,
por lo que decidieron poner un par de reglas con los juguetes y los dulces que le daban a su
pequeño desde hace un par de meses. Reglas que tristemente ninguno de los dos cumplía, ya
que Wei Ying era débil ante su bebé y no podía evitar darle caramelos cuando él lo pedía, y
Lan Wangji o podía evitar comprarle lo que él le pidiera.
Ambos eran padres muy condescendientes con Lan Sizhui.
Apoyándose en el hombro de su alfa, Wei Wuxian susurró: “Sera un omega mimado, que será
esa clase de personas insoportables que creen que el mundo les debe un favor, como Qin
Su…”
“Sizhui no será así” Se negó Lan Wangji en rotundo.
“¿En verdad? Este mes no le compramos dos juguetes, este es el quinto. Se está volviendo
materialista, va a regresar a la secta y jugara con la mariposa por un par de días, y luego va a
acumular polvo…”
“Probablemente” Aceptó Lan Wangji.
“Temo por su futuro, tendrá que conseguir un marido rico, o tendrá una vida muy
desafortunada por lo caprichoso que es…”
En silencio, ambos padres observaron cómo pronto Lan Sizhui se veía rodeado de otros niños
cerca de la tienda del vendedor, quienes lo invitaron a jugar con ellos.
Al ver eso, Lan Wangji frunció el ceño con desagrado, y quiso soltarse de su esposo para ir
detrás de su hijo, pero fue prontamente detenido por Wei Wuxian.
“Déjalo, solo está jugando, sabes que no hay otros niños de su edad en los Túmulos
Funerarios” Dijo Wei Ying.
Olfateando el ambiente con enfado, Lan Wangji dijo: “Son alfas.”
“¿Que hay con eso?”
“No quiero que otros alfas se acerquen a nuestro hijo”.
Sin poder evitarlo, Wei Wuxian estallo en carcajadas, diciendo: “¿Otros alfas? ¡Son niños de
5 años! Solo lo están llevando a jugar con cometas y otras mariposas de papel… Lan Zhan,
Lan Zhan… Eres un padre muy celoso…”
“Mmm…” Susurró Lan Wangji, sin perder de vista a su hijo, quien estaba cerca con los otros
niños.
“Tranquilo, ven conmigo, vamos a ordenar las compras que hice…”
Aceptando ir con su esposo de mala gana, Lan Wangji siguió vigilando a su pequeño
cachorro de reojo, viendo como Sizhui estaba tomado de la mano con uno de esos niños
omegas, que estaba jugando con él y su mariposa de papel, mientras otros niños alfas y betas
de edades similares los rodeaban y también jugaban con ellos.
Lan Wangji no podía evitarlo, al ser un alfa y tener un pequeño niño omega, sus instintos le
rugían que no podía permitir que otro alfa tocara a su bebé, pensando que cualquier alfa que
quisiera ir con Sizhui era indigno de su pequeño hijo. Sin embargo Wei Wuxian estaba
despreocupado, arreglando los sacos de semillas en la carreta y los jarrones de vino, siendo
ayudado por Lan Wangji, quien seguía muy alerta.
A Wei Ying en verdad no le importaba que su hijo se juntara con otros alfas o betas. Durante
su infancia en Muelle de Loto, Wei Ying también había sido muy popular con otros alfas, a
quienes veía como iguales y jugaba junto a ellos sin problema; algo que no sucedía en otras
sectas, como la secta Lan, donde omegas y alfas crecen separados hasta que deben casarse.
Así que Wei Ying deseaba lo mismo para su pequeño hijo, que Lan Sizhui creciera sin ningún
tipo de sumisión hacia otros alfas, y que fuera su igual. Aun si iba en contra de la secta Lan,
Wei Ying quería criar a su hijo como si fuera un niño de Yunmeng.
Cuando ambos terminaron de arreglar las compras de la carreta, ambos padres se giraron en
dirección a donde jugaban los niños, los cuales habían desaparecido.
“¿Sizhui?” Preguntó Wei Ying asustado.
En menos de un segundo, Lan Wangji comenzó a caminar por las calles, en búsqueda de su
pequeño, como si fuera una bestia muy enfadada. Mientras que Wei Wuxian iba detrás de él,
sintiéndose muy confundido, sin entender como era que su pequeño cachorro hubiera
desaparecido en solo un segundo.
Pronto ellos volvieron a encontrar al grupo de niños con quienes había estado Sizhui, quienes
habían corrido por una calle persiguiendo una de las cometas con las que jugaban, chocando
por accidente con una persona inesperada.
“Mierda…” Susurró Wei Ying, sintiéndose palidecer al ver al final de la calle.
Sin prestarle atención a nada en absoluto, escuchando a su pequeño hijo llorar desconsolado,
Lan Wangji solo pudo enfocarse en Sizhui, quien estaba en el piso abrazando a una persona
desconocida llorando.
“Sizhui, tranquilo” Susurró Lan Wangji, acercándose a su hijo para separarlo de la persona
desconocida.
“¡Papá!” Gimoteó Lan Sizhui muy triste: “¡Se rompió!”
Tomando a su pequeño en sus brazos, Lan Wangji observó cómo Lan Sizhui tenía su
mariposa de papel destruida en sus manos, la cual se había roto cuando él accidentalmente
había chocado con Jiang Wanyin cuando corría detrás de la cometa.
Mirando a su alrededor, Lan Wangji pronto notó las banderas violetas con lotos, al igual que
personas muy sorprendidas vestidas de los colores de la secta Jiang, los cuales protegían a
Jiang Cheng, el nuevo líder de la secta Yunmeng Jiang.
Pero Jiang Cheng estaba estático, prácticamente en shock, sin poder apartar su mirada de
aquel pequeño niño que lloraba desconsolado en los brazos de su padre, y a lo lejos a Wei
Wuxian, que estaba tan desconcertado como Jiang Cheng.
En medio de un reencuentro inesperado.
Capítulo 42.

Sonriendo con felicidad, Lan Sizhui jugaba con varias mariposas de papel, todas de la mejor
calidad que había en la ciudad, todas de color violeta, muy similar a los colores de Yunmeng.
Mientras que al otro lado de la mesa, con mucha seriedad, Jiang Cheng lo tenía muy claro,
estaba en frente al hijo de su hermano y Lan Wangji.
Jiang Cheng había conocido a Wei Ying cuando él era muy joven, y estaba muy seguro que
Lan Sizhui era idéntico a Wei Ying cuando ambos eran pequeños. Con esas mejillas
sonrojadas y una sonrisa llena de brillo, un cuerpo más delgado y pequeño típico de un
omega, y una coleta de cabello negro cortó en la parte alta de su cabeza.
Pero lo que más identificaba a ese niño como el hijo de su hermano y Lan Wangji, eran sus
extraños ojos dorados, nada peculiares, un color de ojos único en la secta Lan, que solo
podías encontrar en Gusu. Aquel pequeño con ojos dorados y algunos destellos violetas, era
la mezcla perfecta entre la secta Lan y Jiang, no había duda.
Dándose cuenta de la forma en la que su hermano miraba a su hijo, Wei Wuxian se apresuró a
decir: “No te hagas ideas tontas, A-Cheng”.
“¿Ideas tontas? ¿Cuál sería una idea tonta?” Preguntó Jiang Wanyin, muy molesto.
“No es mi hijo” Aclaró Wei Wuxian con seguridad: “Es decir, lo es, pero… No es mi hijo
biológico, nosotros lo adoptamos”.
Intentando distraer a su pequeño hijo, sabiendo que la charla entre su esposo y su hermano
iba a ser muy tensa, Lan Wangji jugaba con su pequeño cachorro, mirando las bonitas
mariposas que Jiang Cheng le había reglado para que dejara de llorar.
Volviendo a mirar a su hermano, Jiang Cheng le dijo: “Wei Wuxian, idiota, no me mientas”.
Era obvio que Jiang Wanyin no creía en las palabras de su hermano menor, no necesitaba una
prueba de ADN, solo con ver a ese niño una vez era obvio que era hijo biológico de Lan
Wangji y Wei Wuxian.
“Aiya… A-Cheng…” Se quejó Wei Ying: “Estoy diciendo la verdad”.
“¿Fue por esto que escapaste? ¿Por qué estabas embarazado antes de casarte? ¿Por eso sigues
mintiéndome ahora?” Cuestionó Jiang Cheng.
“¿Por qué habría de huir por eso?”
“Por qué no eres idiota, sabes que te ejecutarían si alguien se enteraba que estabas
embarazado antes de casarte”.
Sin poder evitarlo, Wei Wuxian esbozó una sonrisa burlona en su rostro, y dijo: “Los Wen no
pudieron acabar conmigo lanzándome a un lugar maldito, ¿Crees que debo temer que alguien
de tu secta venga a intentar asesinarme?”
Cubriendo suavemente los oídos de su hijo, Lan Wangji reclamo: “Wei Ying, no frente a él”.
Había muchas cosas que Lan Sizhui no entendía, y al escuchar palabras extrañas como
“asesinato” y “ejecución”, el pequeño omega comenzó a prestar atención a la discusión de su
tío y su madre, preguntándose en silencio de lo que ambos estaban hablando.
Respirando profundo para controlarse, Wei Wuxian susurró: “Lo siento Lan Zhan” Y
volviendo a girarse en dirección a su hermano, Wei Wuxian le dijo: “Si has venido aquí solo
para cuestionarme e inventar tontas ideas en tu cabeza, puedes irte ahora, no planeo pelear
contigo, y mucho menos en frente de mi hijo”.
Entendiendo la situación, y consiguiendo tranquilizarse de igual forma, Jiang Cheng dijo:
“No he venido por eso.”
“¿Entonces? ¿A que debo tu agradable visita en Yiling? ¿Acaso debo pensar que es una
casualidad?”
“Debo hablar contigo, pero no ahora, a solas”.
Entrecerrando los ojos, haciendo muchas teorías en su cabeza, Wei Wuxian dijo: “De
acuerdo”.
Riendo suavemente, notando que su madre estaba enfadado, Lan Sizhui tomó una de las
mariposas y se acercó a Wei Ying, poniéndolo la mariposa sobre su cabeza.
“Ahora mamá se ve bonito” Dijo Sizhui contento.
“Gracias” Dijo Wei Ying con una sonrisa en su rostro: “Pero soy tu A-Die, no tu mamá”.
“¡A-Die es bonito!” Se corrigió Sizhui, abrazando a Wei Ying por el cuello.
Sin poder evitarlo, Wei Ying se relajó por completo, devolviéndole el abrazo a su cachorro,
olvidando por un momento que estaba frente a Jiang Cheng.
“¿Que estas queriendo decir con eso, malcriado? ¿Acaso solo soy bonito con la mariposa
encima? ¿No soy bonito siempre?” Reclamó Wei Ying haciéndole cosquillas a su pequeño
hijo: “Que atrevido eres…”
Abrazándose con fuerza a su A-Die, Sizhui no pudo evitar reír con fuerza, mientras Wei Ying
también sonreía, distrayéndose con su pequeño hijo. Mientras que Lan Wangji
cuidadosamente acariciaba la espalda de Wei Wuxian con una de sus manos, mientras
también miraba fijamente a Sizhui, sintiéndose contento al verlo reír de esa forma.
Mientras que al otro lado de la mesa, Jiang Cheng guardaba un silencio sepulcral, mirando
también a Sizhui, el hijo de Wei Ying.
Después de su encuentro imprevisto en las calles, superando la impresión inicial, Jiang
Cheng observó como Sizhui no dejaba de llorar, así que ordeno ir a comprar todas las
mariposas moradas que hubiera, para dárselas al pequeño. Sizhui también tenía una parte de
Yunmeng, así que Jiang Cheng pensó que ya era hora que también tuviera algo de su secta,
no solo de la secta Lan.
Después de eso, sin necesidad de muchas palabras, Jiang Cheng invitó a almorzar a su
hermano y su familia, llevándolos al que supuestamente era el mejor restaurante de la ciudad
de Yiling. Ahí los cuatro tomaron una mesa, en la que Wei Ying y Lan Wangji se sentaron en
uno de los lados, poniendo a su pequeño hijo en medio, y dejando a Jiang Cheng al otro lado.
Sin dejar de mirar al pequeño niño sonriente, miles de preguntas se hicieron en su mente.
¿Cuantos años tenía? ¿Cómo fue posible que Wei Wuxian escondiera su embarazo? ¿En
verdad había escapado por eso? ¿Si alguien se enteraba… en verdad los ejecutarían?
Jiang Cheng estaba dudando, ya que sabía que su deber como líder de secta era informar a las
personas de Yunmeng, sobre el crimen de Wei Wuxian, quien había tenido un hijo fuera del
matrimonio, ya que era la secta Jiang la que debía responsabilizarse por lo sucedido, y ellos
debían encargarse de ejecutar a Wei Wuxian y a su hijo de ser necesario.
Tras un par de minutos, ellos fueron interrumpidos por los meseros del restaurante, quienes
trajeron los primeros platillos que habían ordenado, una sopa de fideos y verduras muy ligera.
“¿Puedes comer tu solo? ¿Recuerdas como papá te enseñó a tomar los palillos?” Preguntó
Wei Ying preocupado, acercando el plato a su hijo y entregándole sus palillos.
“Shi” Respondió Sizhui confiado.
“Está caliente, se cuidadoso, ¿De acuerdo?”
Tomando sus palillos, todos empezaron a comer. Mientras que Lan Sizhui, con la típica
torpeza de un niño de su edad, comía con cierta dificultad con los palillos, de una forma muy
lenta, pero pudiendo hacerlo.
“Sizhui, come con la boca cerrada, se educado” Le indicó Lan Wangji, atento a los modales
de su hijo.
Mientras que Wei Ying, en silencio, limpiaba los labios de su hijo cada cierto tiempo con un
pañuelo, también muy atento a verlo comer.
Mirando todo ese espectáculo al otro lado de la mesa, Jiang Cheng pudo ver los buenos
padres que eran Wei Ying y Lan Wangji, sorprendiéndose mucho al respecto, ya que en el
pasado había dudado seriamente de las capacidades de su hermano menor para tener una
familia.
En medio de sus pensamientos, la mirada de Jiang Cheng se encontró con la de Lan Sizhui,
quien alegremente le sonrió al mayor, luciendo muy adorable.
Entonces Jiang Cheng se quedó callado mirándolo, una vez más recordando a Wei Wuxian en
la mirada del pequeño niño.
***
“Ustedes no van a entrar aquí” Dijo Wei Wuxian con seriedad, mirando a los guardias Jiang
que los habían acompañado: “Solo Jiang Cheng puede pasar”.
Después del incomodo almuerzo que habían tenido, finalmente se encaminaron de regreso a
los Túmulos Funerarios.
“Tranquilos, está bien” Dijo Jiang Cheng con calma, mirando a sus escoltas: “Quédense aquí,
yo voy a entrar con mi hermano.”
A pesar de todo lo que había sucedido entre ambos, Jiang Wanyin confiaba ciegamente en
Wei Wuxian, a quien todavía consideraba su preciado hermano menor. Y a regañadientes, los
guardias de la secta Jiang tuvieron que quedarse afuera de la barrera de los Túmulos
funerarios, observando como Jiang Cheng entraba solo.
Detrás de la familia Lan, Jiang Cheng observo de reojo como un gran muro de piedras había
sido destruido, para crear la entrada a la montaña, pero aun había una barrera protectores
creada por Wei Ying, que le impedía el paso a cualquier persona que quisiera entrar a
importunarlos.
Subiendo la montaña por un par de minutos, casi llegando al lugar donde se encontraba el
templo y las cabañas de la secta Wen, Wei Ying se despidió de Sizhui con un beso en la
frente, y luego se despidió de Lan Wangji dándole otro beso en los labios de forma cariñosa,
indicándole en un susurro que se fuera sin él. A Lan Wangji no le gustaba dejar solo a su
omega, pero entendiendo que ese era solo un asunto de Jiang Wanyin y su esposo, decidió no
intervenir, llevando la carreta con las provisiones y a su hijo con la secta Wen.
“Sígueme” Pidió Wei Ying, acercándose nuevamente a su hermano.
Alejándose de las cabañas de madera, y rodeando la montaña por un rustico camino de tierra,
Wei Ying llevó a Jiang Cheng a un lugar privado donde sabía que nadie los molestaría, una
pequeña cabaña de madera a las afueras de la secta, que siempre estaba vacía.
Acercándose a ese lugar, Jiang Cheng arrugó la nariz con desagrado, preguntando: “¿Que hay
ahí? Siento mucha energía resentida a nuestro alrededor”.
“Es Wen Ning” Respondió Wei Ying con tranquilidad.
“¿Wen Ning?” Preguntó Jiang Cheng confundido.
“Si, ese niño Wen que conocimos en Ciudad Sin Noche hace un par de años, lo llamaste
acosador.”
Acercándose a la cabaña y para tranquilizar a su hermano, Wei Ying abrió la puerta, de ese
lugar a penas iluminado por velas, dejándole ver su interior.
Asomándose dentro de la cabaña con cautela, Jiang Cheng observó a ese joven pálido, el cual
estaba acostado sobre una cama de tela improvisada, lleno de sellos de papel y en medio de
varios símbolos escritos con sangre que Jiang Cheng desconocía.
“¿Que rayos estás haciéndole?” Preguntó Jiang Cheng confundido.
“Es complicado” Dijo Wei Ying entrando en la cabaña y acercándose a Wen Ning con calma.
“Puedes explicarme…”
“Quiero devolverlo a la vida como un cadáver con consciencia y recuerdos” Dijo Wei Ying
con calma.
“¿Crees que eso es posible? Los únicos cadáveres vivientes que conocemos son solo zombis
malditos, no creo que…”
“Sé que es posible, lo he visto” Dijo Wei Ying confiado.
“¿Entonces por qué no lo haces de una vez?”
“Porque aún no sé cómo hacerlo, él no me mostro todo…”
En los recuerdos que Wei Ying pudo ver de Wen Shima, conoció al ex prometido del omega,
ese que Wen Shima convirtió en su esclavo y en un cadáver viviente con consciencia, sin
embargo ese cadáver aún era esclavo, dependiendo totalmente de las decisiones de Wen
Shima, aunque había regresado a la vida.
Wei Ying no quería eso para Wen Ning, quería que el joven regresara, aun como un cadáver
viviente, pero que pudiera hacer su propio camino en el mundo, que tuviera libertad. Y
aunque aún no había conseguido despertarlo con consciencia y libertad, Wei Ying no
planeaba rendirse, muy seguro de que algún día podría conseguir lo que tanto deseaba.
Bufando con cierta molestia, Jiang Cheng dijo: “Eres demasiado fantasioso…”
“Es algo que voy a conseguir, ya lo veras, y tendrás que tragarte tus palabras” Dijo Wei Ying
con seguridad.
“No eres un dios, Wei Wuxian, no puedes traer de vuelta a la vida a las personas muertas,
deja de soñar” Reclamó A-Cheng, saliendo finalmente de la cabaña.
Sonriendo suavemente mientras miraba a Wen Ning, Wei Ying susurró: “Tal vez no soy un
dios… Aun”.
Dándole un último vistazo a todo en la cabaña, asegurándose de que estuviera en orden, Wei
Wuxian se dispuso a seguir a su hermano.
Saliendo nuevamente de la cabaña y encarando a su hermano, Wei Ying le preguntó: “¿Que
estás haciendo aquí?”
Estando a solas, sin Lan Zhan o el pequeño Sizhui, ambos hermanos podían hablar entre ellos
sin mucho problema, sonando muy cercanos y sin más educación que la necesaria.
Tras un largo suspiro, Jiang Cheng dijo: “Vine por nuestra hermana, Yanli esta embaraza de
su segundo hijo, y quiere que tu vengas para su nacimiento y su fiesta de iniciación en la
secta Jin”.
“Vaya, no sé por qué, pero cada palabra de esa proposición sonó terriblemente mal.”
“Wei Ying, entiendo que aun estés enfadado, pero no tienes que insultar a mi hermana por
eso…”
Sonriendo con suavidad, Wei Wuxian dijo: “No estoy insultando a Shijie, no lo decía por su
nuevo hijo, estoy muy feliz por ella. Hablaba sobre ir de regreso a la secta Jin, eso suena…
Terriblemente mal, lo peor que me han pedido en mucho tiempo, y ahora tengo un hijo
travieso que me pide mucho tipo de cosas vergonzosas y extrañas…”
“¿En verdad odias tanto a los Jin?”
“¿No debería odiarlos? Son los sucesores de la secta Wen, y la parte mala de la secta Wen, es
decir Wen Ruohan y sus estúpidos hijos. Cuando veo a Jin Guangshan solo veo a Wen
Ruohan, y cuando veo al estúpido del pavo real solo veo a Wen Chao, solo que él si es un
alfa” Se burló Wei Ying.
Intentando controlarse para no decir algo erróneo, sabiendo que las cosas con su hermano
menor no estaban tan tranquilas, Jiang Cheng dijo: “Escucha y no me interrumpas, ¿De
acuerdo? Sé que los Jin no son perfectos, pero ahora que nuestro cuñado se ha vuelto el líder
suplantando a su padre, las cosas han mejorado mucho. Zixuan es un muy buen líder de todas
las sectas, te lo juro, deberías ver todas las cosas buenas que ha hecho recientemente…”
Poniendo los ojos en blanco, Wei Ying prefirió no decir nada en absoluto, ya que en su mente
solo podía pensar en ese estúpido alfa como una persona muy egoísta y malvada, que había
sido su rival toda su vida ya que Jin Zixuan era de esos alfas estúpidos que pensaban que los
omegas no debían ser cultivadores.
“Tu partida ha causado mucha tristeza, en nuestra secta y en nuestra hermana, toda la secta
Jiang te extraña, y ahora que tienes un hijo, ¿No crees apropiado presentarlo a todos? No te
pido que perdones a los Jin por lo que pasó ante tu partida, solo te pido que hagas esto por mí
y por Yanli, visítanos un momento con tu alfa y tu hijo, arregla las cosas…”
“¿Cuál es la razón publica que explica por qué me fui de la secta?” Preguntó Wei Ying,
agachándose para recoger un poco de hierba del piso.
“¿Que?”
“Eres muy tonto si no crees que ya lo sabía, A-Cheng” Dijo Wei Ying con un tono sombrío:
“Los rumores viajan rápido, ya sabía desde hace meses que nuestra Shijie estaba embarazada,
y también sé que tuvo un primer hijo alfa que será heredero de la secta Jin, también se las
cosas “maravillosas” que ha hecho Jin Zixuan, y también se lo que las personas han dicho
sobre mí, cosas que tú y yo sabemos que son mentira”.
Poniendo un rostro de enfado, Jiang Cheng susurró: “¿Lo sabias y aun así no se te ocurrió ir a
verla un solo instante?”
“Las personas dicen que yo ayude a escapar a los Wen de una prisión porque soy un traidor y
me gusta juntarme con el mal, que llevé a Wangji conmigo a la fuerza y que lo secuestré, que
estoy loco y soy un omega maldito, ¿Eso es verdad?” Preguntó Wei Ying con furia: “Si
quieres engañarte a ti mismo diciendo que el idiota de Zixuan es el líder perfecto, hazlo. Pero
los Wen empezaron mintiendo y ocultando sus actos crueles inventando rumores estúpidos
como estos, en vez de admitir que crearon campos de castigo para personas inocentes,
rompiendo las leyes que ellos mismos crearon. Tú le das suficiente poder al tirano porque
esta con nuestra hermana, no quiero que regreses aquí llorando cuando ahora sean los Jin
quienes lleguen a Muelle de Loto para atacar a tu secta”.
Desahogando todo lo que tenía guardado en su corazón, Wei Ying volvió a ponerse de pie,
guardando esos trozos de hierba obscura en una pequeña bolsa que tenía colgando de su
cinturón. Las plantas alrededor de la cabaña estaban llenas de energía resentida, así que Wei
Ying las recolectaba para usarlas en sus experimentos.
“Hablas de todo eso como si en verdad quisiera que ocurriera de nuevo, que una nueva secta
Wen atacara” Dijo Jiang Cheng con molestia.
“¿Crees que quiero que vuelva a suceder? Tal vez, porque quiero enfrentarme a Jin Zixuan,
para hacerlo pagar por lo que hizo. Cuando vuelva a verlo, lo voy a matar, y voy a hacerlo
sufrir mucho antes de eso” Amenazó Wei Wuxian.
“¿Lo que hizo? ¿Qué te pasa? No eres un maldito justiciero, él no hizo algo que mereciera la
muerte…”
“Los Wen me lo dijeron, la persona que dio la orden para su encierro y la creación de ese
campo de concentración, fue Jin Zixuan, los malditos documentos de la orden tenían su puto
nombre escrito en tinta dorada. Su vida no vale nada, hizo cosas tan crueles como los Wen, e
incluso maté a Wen Xu por hacer algo mucho menor que eso. ¿Crees que el merece piedad
porque se está cogiendo a nuestra hermana? Yo prometí acabar con el mal de este mundo, y
por eso voy a matarlo la próxima vez que lo vea” Aseguró Wei Wuxian.
Hablar sobre ese asunto que lo enfadaba tanto, había hecho que Wei Ying dejara salir energía
resentida de su propio cuerpo, asustando ligeramente a Jiang Cheng que retrocedió de
inmediato. Pero al darse cuenta de lo que estaba haciendo, Wei Ying también se apartó,
intentando controlarse.
“Gracias por la invitación, Wanyin, pero tendré que rechazarla, estoy muy ocupado en este
sitio ahora. Por favor, dale mis felicitaciones Jiang Yanli. Fue un placer verte” Dijo Wei Ying
sin emoción, intentando echar a su hermano cuanto antes.
“¿Cómo sabes que la amenaza son los Jin y no tú?” Preguntó Jiang Cheng, sintiéndose
furioso: “Eres tú el que se ha estado juntando con el mal, rescatando a personas de la secta
Wen que tanto daño te hizo, volviéndote un monstruo, quien se atreve a amenazar a una
persona inocente como Jin Zixuan con matarlo”.
“¿Un monstruo? ¿Yo lo soy?” Preguntó Wei Ying con burla: “Si no fuera por mí, Lanling Jin
hubiera caído en uno o dos días más bajo el ejercito de Wen Ruohan, carajo, yo salve los
malditos traseros de tu estúpida secta y de todos los demás, ¿Aun así se atreven a llamarme
monstruo? Eres una basura, Jiang Wanyin”.
“Solo te gusta escucharte hablar sobre ti mismo, sobre lo que perdiste, y hacerte la gran
victima que se volvió un gran héroe. ¿Y los demás? No ganaste esta guerra tu solo, es más, ni
siquiera asesinaste a Wen Ruohan, fue Jin Guangyao. Te gusta estar enfrascado en algo que
paso hace 3 años, los demás avanzamos, los demás estamos intentando perdonar y recuperar
nuestras vidas…”
“¿Los demás? ¿Estás hablando de ti?” Preguntó Wei Ying con burla: “¿Crees que no lo es?
Abandonaste a Lan Xichen, un alfa que te estuvo rogando regresar con él por más de un año,
lo dejaste a él y al hijo que adoptaron, ocasionando que Xichen entrara en reclusión por la
depresión que sentía. ¿Estas avanzando? ¿De qué puta forma? Vienes aquí a juzgarme por no
poder perdonar a tu amado Jin Zixuan, pero tú no puedes olvidar a un alfa que te violó y te
marco a la fuerza, mientras yo tengo un hijo y un esposo, ¿Quién está avanzando, idiota?”
Sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas, con un profundo dolor en su corazón, con esas
palabras tan duras que Wei Ying le había dicho, Jiang Cheng sintió como Zidian en uno de
sus dedos comenzaba a despertar por su furia.
Cuando la energía maligna dejó de controlar sus pensamientos, Wei Ying se dio cuenta de lo
que había hecho, y de lo que le había dicho a Jiang Cheng, arrepintiéndose de inmediato.
“A-Cheng…” Susurró Wei Ying, intentando disculparse con su hermano.
Sin embargo Jiang Wanyin no esperó más, y de improvisto atacó a Wei Ying con Zidian.
Viendo al látigo acercarse a él, Wei Wuxian reaccionó rápidamente, y esquivó el golpe de un
salto, mirando sorprendido a su hermano.
“¿Qué demonios estás haciendo?” Preguntó Wei Ying asustado.
“Saca tu flauta” Exigió Jiang Cheng con la voz ronca de la furia.
“¡Claro que no! ¡No voy a pelear contigo!”
“¡Hazlo ahora!”
De pronto nuevos ataques con el látigo se lanzaron contra Wei Ying, quien pudo esquivarlos
a duras penas, pues Zidian era difícil de contener, y Wei Ying no se sentía preparado para
pelear con su hermano.
“¡Tu no entiendes! ¡No entiendes nada!” Le gritó Jiang Cheng furioso: “¡Eres un maldito
idiota!”
Muy arrepentido por sus palabras, dándose cuenta de que realmente había lastimado a su
hermano, Wei Ying susurró: “Esta bien A-Cheng, tienes razón, lo siento mucho… Si quieres
golpearme por lo que te dije… Puedes hacerlo, no voy a detenerte, solo quiero que te sientas
mejor, lo siento mucho”.
Entendiendo que tal vez tendría que recibir algunos golpes de Zidian para tranquilizar a su
hermano, sintiéndose muy culpable por haberlo hecho salir de control, Wei Ying dejó de
moverse y cerró los ojos, preparándose para recibir el dolor del primer golpe.
Pero en menos de un segundo, Wei Ying escuchó un fuerte crujido, y antes de que pudiera
darse cuenta de lo que estaba pasando, Wen Ning se puso frente a él, protegiéndolo.
Abriendo los ojos de golpe, muy confundido, Wei Ying observó la espalda ancha de aquel
alfa, que aun con varios sellos colgando de sus ropas, había detenido el fuerte golpe de Zidian
con una sola de sus manos.
“¡Wen Ning!” Dijo Wei Ying sorprendido: “¿Pero cómo…?”
Sin embargo aquel alfa parecía no estarlo escuchando, y ante un sorprendido Jiang Cheng,
Wen Ning soltó a Zidian, y corrió en su dirección para empezar a atacarlo.
“¡No! ¡Espera!” Gritó Wei Ying aterrado.
Wei Wuxian no entendía que demonios estaba sucediendo, pues todos los cadáveres o
fantasmas resentidos que él había tenido a su servicio alguna vez, siempre eran controlados
por las melodías de su flauta, y cuando la música se detenía, ellos caían al piso y se
desvanecían. Pero ahora Wei Ying no había tocado su flauta si quiera, así que Wen Ning
estaba despierto y siendo controlado, pero no bajo alguna cosa que Wei Ying pudiera
controlar.
Siendo sumamente fuerte y rápido, como cualquier otro cadáver resentido, Wen Ning
comenzó a lanzar golpes fuertes en dirección a Jiang Cheng, quien apenas podía esquivarlo o
a intentar defenderse con Zidian. Pero era demasiado obvio que Jiang Cheng no era rival para
la fuerza de Wen Ning, y tras recibir un fuerte golpe en el estómago por la criatura, Jiang
Wanyin fue tomado del cuello con fuerza y levantado del piso por las manos de aquel alfa
fuera de control.
“¡Detenlo! ¡Ahora!” exigió Jiang Cheng, intentando luchar con Wen Ning.
“¡No estoy controlándolo!” Gritó Wei Ying, sin saber qué hacer.
“¡Haz algo! ¡Va a matarme!”
Mirando a todos lados aterrorizado, sabiendo que Wen Ning le rompería el cuello a su
hermano si no se apresuraba, Wei Ying pensó en su última alternativa, algo que no había
querido hacer jamás ya que temía que saliera mal.
Tomando su flauta, Wei Ying rápidamente comenzó a tocar una tranquila melodía, que era su
propia versión de algunas de las canciones de la secta Lan, pero con algunas notas diferentes
que él había puesto por las propias canciones que Wen Shima le había enseñado.
Wei Ying tenía la teoría de que podía tranquilizar a los seres resentidos usando las canciones
de la secta Lan, pero con los mismos hechizos con los que los había despertado. Pero nunca
lo había hecho, ya que en el pasado nunca tuvo necesidad de tranquilizar a un cadáver o
fantasma resentido bajo su control, y con Wen Ning temía despertarlo como un cadáver
cualquiera usando esas canciones.
Pero tras solo un par de segundos interpretando esa melodía con su flauta, Wei Ying
consiguió que Wen Ning soltara a Jiang Cheng, quien cayó al piso tosiendo y sujetando su
abdomen adolorido, mientras le ordenaba a Wen Ning retroceder en su dirección.
Cuando estuvieron lo suficientemente lejos de Jiang Cheng, Wei Ying dejó de tocar la
canción, y se acercó a Wen Ning de forma cautelosa, sin saber qué hacer.
“¿A-Ning?” Preguntó en un susurro.
Durante la pelea, los ojos del alfa estaban completamente en blanco, pero tras la canción,
Wen Ning pestañeó varias veces y mostró nuevamente sus ojos negros, los cuales se
mostraban confundidos.
“¡A-Ning!” Dijo Wei Ying contento, acercándose a él para abrazarlo.
“¿J… Joven maestro Wei?” Preguntó Wen Ning confundido: “¿Dónde estamos? Yo estaba…
Yo fui…”
“Lo sé, es una larga historia” Dijo Wei Wuxian, dándole un fuerte abrazo al confundido alfa:
“Pero está bien, ahora todo está bien…”
Mirando esa extraña escena, pero temeroso de volver a ser atacado, Jiang Cheng se puso de
pie a duras penas, mirando nuevamente a su hermano.
“Si encuentras en tu corazón un poco del cariño que le tenías a nuestra Shijie, ve con ella a
Lanling, te estará esperando, ella probablemente es la persona que más te quiere y te extraña
en este mundo, aun si no lo crees” Dijo Jiang Cheng en voz alta, dándole a Wei Ying una
última mirada antes de irse.
Mirando a su hermano, dejando de abrazar a Wen Ning, Wei Ying pensó en ir detrás de él,
pero pensó que tal vez no sería lo mejor, pues ahora tenía que enfocarse en Wen Ning que
acababa de despertar después de tanto tiempo.
“Oh A-Ning, tengo tantas cosas que contarte, de verdad no vas a creer lo que sucedido en
todo este tiempo” Dijo Wei Ying de forma animada.
“Yo también tengo algo importante que decirle, joven maestro” Dijo Wen Ning con seriedad.
“¿Algo importante? ¿A mí?”
“Es algo que Wen Xu me pidió decirle cuando volviera a verte, joven maestro Wei” Dijo Wen
Ning con mucha seguridad en su voz.
Capítulo 43.

“Va a matarlo” Dijo Wen Xu con suavidad.


Quedándose en la puerta de la habitación, Meng Yao mostró una expresión de tristeza, pero
en el fondo sentía una gran indiferencia por el asunto.
“¿Cómo pudo hacerlo?” Se lamentó Wen Xu entre lágrimas: “¿Qué demonios le pasó a mi
padre? Sé que no hizo cosas buenas en el pasado, pero lanzar a Wei Gonzi a los túmulos
funerarios con vida, y preparar una ejecución para un recién nacido, ¿Por qué? ¿Por qué está
haciendo todo esto?”
“Su padre hace lo que cree mejor para su secta, Wen Gonzi” Respondió Meng Yao,
intentando sonar triste, a pesar de que la situación le resultaba muy graciosa dentro de sí
mismo.
“Mi padre está enloqueciendo…”
Sentándose en su cama con la mirada baja, Wen Xu se lamentó en silencio, sintiendo como
las lágrimas bajaban por sus mejillas, sintiéndose triste y muy impotente por lo ocurrido.
Soltando un suave suspiro, Meng Yao cerró la puerta de la habitación de Wen Xu,
acercándose a él para intentar consolarlo. Por el aspecto del joven omega, Jin Guangyao
podía notar que Wen Xu también estaba enloqueciendo un poco, y Meng Yao temía que ese
chico hiciera alguna estupidez, algo que Meng Yao no quería, ya que el joven Wen Xu era
una de la pocas personas en todo el mundo que podía controlar a Wen Ruohan, y Meng Yao
lo necesitaba por si alguno de sus planes salía mal.
“Wen Gonzi, hay cosas que suceden, que nadie puede cambiar. Esta es una guerra, siempre
habrá tristeza y dolor” Dijo Jin Guangyao, intentando consolar al joven Wen.
“Lo entiendo, en los campos de batalla, las cosas son crueles y horribles. Y aunque no estoy
de acuerdo con ello, lo entiendo” Respondió Wen Xu: “Pero esto… Es diferente, no es la
crueldad de la guerra, es la crueldad de mi padre, que voluntariamente decidió torturar a una
persona inocente como Wei Ying y su hijo, eso no lo hubiera hecho ganar una guerra o una
batalla, eso fue simple crueldad…”
“Cosas horribles pasan en la guerra, cosas que no siempre tienen que estar relacionadas con
la batalla, ¿Cómo sabes que esta acción no tuvo un propósito para la guerra? Además, aun si
quisiéramos, ¿Que podemos hacer? Tu hermano ya ha regresado, lo que significa que Wei
Wuxian está muerto, no hay forma de salvarlo”.
Sintiéndose miserable, Wen Xu bajó la mirada, presionando sus puños con furia y con fuerza.
Si hubiera llegado a tiempo, Wen Xu estaba muy seguro de que podría haber detenido a su
padre, si tan solo hubiera llegado un par de minutos antes, podría haber evitado todo. Pero
debía admitir que Meng Yao tenía razón, no hay una forma de regresar al pasado, Wen Xu
había fallado al proteger a Wei Wuxian, pero…
“No todo está perdido, aun puedo salvarlo” Dijo Wen Xu en un susurro.
“¿A Wei Wuxian?” Preguntó Meng Yao confundido.
“No, a su bebé” Dijo Wen Xu, luciendo nuevamente animado.
“¿A-Yuan? Oh no, eso es una terrible idea”.
“¿Yuan? ¿Ese es su nombre? Es muy dulce” Dijo Wen Xu sonriendo suavemente: “No
esperaba menos de Wei Gonzi, darle un nombre tan lindo a su hijo…”
Volviendo a sentirse triste, pero ahora ya dejando de llorar, Wen Xu miró a Meng Yao a los
ojos, luciendo muy decidido.
“Necesito que me ayudes a salvarlo” Pidió Wen Xu.
Sin poder fingir más, Meng Yao puso un rostro muy serio, denotando su disconformidad con
ese asunto.
“Joven maestro, eso es una terrible idea” Dijo Meng Yao.
“Ni siquiera te dije lo que planeo…”
“No necesita decirme, intentar algo con ese niño va a causar mi muerte, y un gran castigo
para usted. En verdad es una mala idea”.
A pesar de estar haciendo un teatro, intentando llevarse bien con Wen Xu, Meng Yao no
planeaba ser tan idiota de provocar su muerte solo por fingir ser amigable, y sabía que hacer
esa tontería podría conseguir que fuera descubierto y que lo asesinaran.
Sin dejar de sonreír, Wen Xu le dijo: “Solo necesito que me digas donde está el bebé, mi
padre no me lo dirá, y necesito sacarlo de aquí antes de que lo ejecute. Se lo debo a Wei Ying,
aun no es tarde para ayudar a su bebé y llevarlo a un lugar seguro.”
“¿Lugar seguro? ¿Que estas planeando hacer? Hay guardias custodiando todos los pasillos,
incluso hay guardias custodiando fuera de su puerta. Aun si consigue librarse de ellos, y si
consigue tomar al bebé de Wei Wuxian, ¿Que hará después? ¿Traerlo a su habitación? No hay
un lugar seguro para ese niño en esta secta, y dudo que en cualquier otra secta, no hay forma
de que esto salga bien”.
“Si hay una forma, yo sé cómo ponerlo a salvo” Dijo Wen Xu seguro.
Desde el primer momento, Wen Xu había pensado en Wen Ning, aquel joven alfa de un
corazón tan puro y dulce. Wen Xu no lo amaba, ya que después de tanto dolor no creía que
podría volver a amar a otra persona, pero estaba seguro del amor de Wen Ning por él, y
planeaba usar eso para pedirle un favor; y aunque se sentía culpable por ello, creía que hacer
algo semejante por un buen motivo era justificable. Iba a hacerlo solo por el bebé de Wei
Ying.
“No creo que esto sea una buena idea” Se negó Meng Yao.
“Solo ayúdame con lo que te pedí, ¿De acuerdo?” Pidió Wen Xu: “Sé que tienes miedo, y que
por eso no te estás dando cuenta, pero hacer esto es lo correcto. Meng Yao yo sé que tú tienes
un corazón puro y bueno, y que cuando te des cuenta de que esto es lo correcto, vas a
ayudarme…”
Al escuchar esas palabras, Meng Yao no puedo evitar poner una expresión de incredulidad,
dándose cuenta de que había mentido tan bien que Wen Xu creía en sus mentiras, tal vez
demasiado.
“Déjeme ver lo que puedo hacer” Dijo Meng Yao aguantando la risa, girándose para salir de
la habitación.
Suspirando con suavidad, viendo a su amigo irse, Wen Xu se acercó a la ventana de su
habitación, donde con ayuda de su energía espiritual, creó una mariposa mensajera, con la
cual en un breve mensaje le pedía a Wen Ning que fuera al muelle a las afueras de Sin Noche,
pidiéndole su ayuda urgente, aunque sin especificarle para que.
Wen Xu confiaba en que ese bebé estaría a salvo en la secta Yiling Wen, ya que ese bebé
necesitaba estar en un lugar seguro lo más lejano posible de su padre, y los únicos lugares así
eran sectas Wen apartadas de Sin Noche, que no participaban de la guerra como tal, y eran
lugares muy seguros. Y de entre todos esos lugares posibles, la secta Yiling Wen resaltaba
como el lugar más seguro, no solo por la confianza que tenía en Wen Ning, también por su
líder, ya que Wen Xu sabía que Wen Qing era la líder más amable, así que Yuan seria bien
recibido y sin hacer muchas preguntas sobre él.
Suspirando con suavidad, mirando la mariposa elevarse en el cielo y finalmente desaparecer
entre las nubes, Wen Xu se apoyó en el marco de la ventana, mirando el horizonte con
tristeza.
Wen Xu en verdad llegó a lamentar la muerte de Wei Wuxian.
Esperando al anochecer de esa misma noche, incluso después de la cena y cuando todos ya
estaban preparándose para quedarse dormidos, Wen Xu supuso que Wen Ning estaría
llegando al puerto, así que se dispuso a actuar.
“El bebé está en una de las habitaciones cerca al área de la servidumbre, está solo, pero hay
guardias custodiando la puerta para impedir que cualquier persona entrara” Explicó Jin
Guangyao con frialdad: “Y debo volver a repetirle, Wen Gonzi, que esto suena como una
terrible idea, y que estoy en contra por completo de que lo haga”.
“Gracias A-Yao, yo me encargaré de ahora en adelante, no debes preocuparte” Dijo Wen Xu
con confianza.
Dándole una última mirada, Jin Guangyao prefirió no decir nada al respecto, volviendo a
retirarse de la habitación del omega, pero sin alejarse demasiado.
Suspirando con suavidad, Wen Xu se acercó a la ventana de su habitación, saliendo por esta y
parándose en las cornisas, comenzando a moverse por ahí.
Aun recordaba como en su infancia, cuando era retado por sus hermanos, Wen Xu se movía
de una habitación a otra pasando por las cornisas de las altas ventanas, causándole mucho
terror a su padre, quien temía que se cayera. Obviamente había dejado de hacerlo con el
tiempo, no era algo delicado como lo que los omegas siempre debían hacer, pero aun podía
recordar como lo hacía entonces.
Siendo muy silencioso y evitando mirar hacia abajo, ayudándose por la obscuridad, Wen Xu
comenzó a moverse por las ventanas hasta prácticamente cruzar toda su secta, hasta la parte
de la servidumbre. Mirando por las ventanas con precaución, intentando que nadie lo
descubriera, no tardó en encontrar al bebé de Wei Wuxian.
Así como Meng Yao le había dicho, el pequeño niño se encontraba solo en una habitación
obscura, prácticamente sin moverse, luciendo minúsculo en una sucia cama destinada a un
sirviente.
Abriendo la ventana con un poco de dificultad, Wen Xu entró en la habitación y se acercó
rápidamente al bebé, tocándolo con cuidado para asegurarse de que aun siguiera con vida. Y
aunque el pequeño Lan Yuan estaba extremadamente frio y lucia muy débil, reacciono ante
las suaves caricias de Wen Xu en su rostro, removiéndose cuidadosamente en sus mantas,
pero sin llorar.
Wen Xu entonces sonrió con suavidad, ya que aquel pequeño cachorro aún era un recién
nacido, y a pesar de las circunstancias en las que se encontraba, el pequeño cachorro aun
luchaba por mantenerse con vida.
“Tranquilo, pronto nos iremos de aquí, y te llevaré a un lugar donde vas a poder estar seguro”
Aseguró Wen Xu con suavidad.
Al ver el estado del bebé, quien era un recién nacido y había sido abandonado en una fría
habitación y sin ningún tipo de cuidado, tuvo certeza de que la intención de su padre en
verdad era asesinar al pequeño niño, lo cual le resultaba increíblemente cruel, pues Lan Yuan
era un bebé verdaderamente adorable que no merecía ningún tipo de mal o podía ser
considerado un medio de venganza, Wen Ruohan estaba dañándolo solo por placer.
Wen Xu ya había llegado junto al niño, pero aún quedaba la parte más difícil, que era sacarlo
de ahí y llegar a los muelles de Ciudad Sin Noche. Como era obvio, Wen Xu no iba a poder
salir de la habitación de la misma forma en la que había llegado, es decir caminando por las
ventanas a las afueras de la secta, ya que no podía hacer algo tan riesgoso con un bebé en sus
brazos.
Tenía que encontrar una mejor forma de sacarlo de la habitación burlando a los guardias que
estaban en los pasillos.
Pronto una gran conmoción se hizo en el área de los sirvientes, ya que en una de las
habitaciones, algunas ropas que habían sido dejadas en el suelo estaban en llamas.
Escuchando los gritos, todos los guaridas de los pasillos se acercaron a lugar, donde
intentaron apagar el fuego y controlar la situación lo más pronto posible, evitando así que el
fuego se extendiera a las cocinas o al resto de la secta causando un mayor daño.
Con toda la conmoción, la mayoría de las personas en el área de los sirvientes acudieron al
lugar donde estaba el fuego, y trataron de ayudar o solo estaban mirando la situación.
Entonces la puerta de la habitación de Lan Yuan se abrió con suavidad, y lo más rápido que
pudo, Wen Xu salió corriendo con él bebé en sus brazos, aprovechando que los pasillos
estaban vacíos. Y su plan había sido tan bueno que no solo logró engañar a los guardias para
salir del lugar sin ser detenido, también logró evitar que cualquier otro sirviente pudiera verlo
y dar la alarma, pensando que así conseguiría llevar su plan sin que nadie se diera cuenta de
lo que había sucedido.
Sin embargo había una persona que si lo había visto.
Escuchando los rápidos pasos de Wen Xu en el pasillo, Meng Yao se asomó por la puerta de
la habitación contigua, sonriendo con suavidad. Desde el primer momento había estado
siguiendo el camino de Wen Xu, viendo su delgada silueta caminar detrás de las cortinas de
las ventanas, sin hacer nada, solo admirando el espectáculo.
Era verdad, de una forma algo extraña, Wen Xu había conseguido sacar de ahí ese niño sin
que nadie se diera cuenta, lo cual podía significar que nadie de la secta se diera cuenta y no
hubieran represarías para él. Y a pesar de que nadie se lo había ordenado, Meng Yao tomó
una decisión, hablar con Wen Ruohan para decirle lo ocurrido.
Con una suave sonrisa asomándose en su rostro, Jin Guangyao caminó en dirección a los
aposentos privados del líder de la secta, dispuesto a cometer un acto tan terrible en contra de
Wen Xu.
“Espero que vayas a disfrutar las consecuencias de tus decisiones, mi querido A-Xu” Susurró
Meng Yao con suavidad.
Mientras que Wen Xu, jadeando con suavidad, salió corriendo por la puerta principal de la
secta, sosteniendo contra su pecho de forma firme el pequeño cuerpo de Lan Yuan,
dirigiéndose al puerto donde iba a encontrarse con Wen Ning.
***
Sentado en el regazo de su padre, Sizhui miraba el pergamino frente a él, escuchando la
tranquilizadora y suave voz de su padre detrás de él, leyendo aquel texto con calma.
Sizhui aún era muy pequeño para saber leer, pero aun así disfrutaba de esas cortas sesiones
con su padre, en la que ambos se sentaban dentro del templo de Los Túmulos Funerarios, y
Lan Wangji leía historias fantásticas para él. El joven omega lo disfrutaba por su padre, no
tanto porque le gustaran las historias que le leía, era tan joven que muchas ni siquiera podía
entenderlas bien, pero escuchar la suave voz de Lan Wangji en su espalda, oliendo su suave
aroma a sándalo, en un ambiente tan suave, era algo que Lan Sizhui disfrutaba mucho cada
día.
Sin embargo su momento de relajación fue interrumpido cuando unos rápidos pasos se
acercaron a ellos desde el exterior del templo, al igual que una gran conmoción se hacía
desde el exterior.
Levantando la mirada del pergamino con preocupación, ya que había estado intranquilo desde
que Jiang Cheng había llegado a la montaña, Lan Wangji quiso ver que estaba sucediendo.
Pero antes de que pudiera hacer algo como eso, Wei Wuxian entró corriendo al templo,
acercándose a Lan Sizhui y a su esposo con lágrimas en los ojos.
“¡A-Yuan!” Gritó Wei Wuxian, acercándose a su pequeño cachorro para abrazarlo con fuerza.
Sorprendido y teniendo que apartar el pergamino de sus manos, Lan Wangji observó como
Wei Wuxian tomaba al pequeño niño de su regazo y lo abrazaba con fuerza contra su pecho,
sorprendiéndolo muchos a ambos.
“¿Mami?” Preguntó Lan Sizhui confundido, sintiendo el estrecho abrazo que estaba dándole
Wei Ying.
Abrazándolo con fuerza, mientras lloraba de forma desconsolada, Wei Wuxian susurró: “Mi
A-Yuan, mi adorado A-Yuan…”
“¿A-Yuan?” Preguntó Lan Wangji confundido.
Si bien era cierto que Wei Ying había llamado “A-Yuan” a Sizhui en el pasado, siempre había
sido por accidente. Pero ahora, Wei Ying estaba llamando a su hijo por ese nombre de forma
premeditada, algo que sorprendía a Lan Wangji.
“Mami… ¿Porque estas llamándome de esa forma?” Preguntó el pequeño cachorro
confundido.
Separándose ligeramente de su hijo, Wei Wuxian lo tomó con suavidad del rostro,
acariciando sus mejillas con delicadeza: “Porque ese es tu nombre, mi pequeño A-Yuan”.
“Pero… Mi nombre es Sizhui”.
“No, tu nombre es Yuan, tu nombre de cortesía es Sizhui”.
“Pero… Sizhui es el nombre que me puso mi verdadera madre…”
Mirando al pequeño niño a los ojos, Wei Ying dijo: “Yo soy tu verdadera y única madre, A-
Yuan”.
Abriendo mucho los ojos al escuchar esas palabras, Lan Zhan preguntó: “¿Qué?”
“Hay tantas cosas que tengo que contarte…” Dijo Wei Ying mirando a su alfa: “Fue Wen Xu,
él salvó a nuestro pequeño, lo sacó de Ciudad Sin Noche y se lo entregó a Wen Ning, quien lo
llamó Sizhui y lo trajo a su secta.”
Quedándose en silencio, Lan Wangji pensó en esa situación desconcertado. Habría sufrido
mucho por pensar que su hijo, que su pequeño niño, había sido asesinado en la secta Wen,
que no había podido salvarlo, y que lo había perdido para siempre. Nunca odió a Wen Xu, a
diferencia de Wei Wuxian que odiaba al joven omega con todo su ser, Lan Wangji nunca lo
culpó por la muerte de su cachorro, solo creía que tanto su bebé como Wen Xu habían sido
víctimas de la guerra y sus horrores.
Pero ahora saber que su hijo estaba vivo, y que siempre había sido el pequeño omega que
había criado con su esposo, a Lan Wangji lo tenía desconcertado e incrédulo.
“No… No lo entiendo…” Susurró Lan Wangji.
Sonriendo con suavidad, Wei Ying dijo: “Tenias razón, siempre tuviste razón. No debí juzgar
u odiar a Wen Xu, todo lo que él sufrió, como se sacrificó por nuestro hijo hasta el final…
Siempre fui yo Lan Zhan, yo soy el culpable de lo que sucedió, incluso de su muerte, es mi
culpa”.
“Lo recuperamos Wei Ying” Dijo Lan Wangji incrédulo: “Nuestro hijo…”
“Si, nuestro A-Yuan está vivo, y siempre estuvo a nuestro lado. Nuestro cachorro está vivo,
Lan Zhan…”
Como si se hubiera quitado una venda de los ojos, Lan Wangji tomó a Sizhui delicadamente
de los hombros, girándolo para verlo mejor. Era indudable el parecido físico con Wei Ying,
con un rostro con rasgos muy parecidos a los del omega que Lan Zhan amaba. Pero la prueba
más contundente para él, eran los ojos de aquel pequeño niño, de un color dorado más
brillante que el de Lan Wangji, que al alfa le recordaban a los ojos de su madre, con suaves
destellos violetas de Yunmeng.
Sin lugar a dudas, ese era su bebé.
Con el corazón desbocado, sin poder expresar con palabras la emoción que sentía, Lan
Wangji abrazó al pequeño omega contra su cuerpo, besando suavemente su frente.
“A-Yuan…” Susurró Lan Zhan, aferrándose fuertemente a su cachorro.
Mirando aquel dulce abrazo, Wei Ying tampoco quiso esperar, y se unió al dulce abrazo que
ambos estaban dándose, abrazando a Lan Yuan y Lan Wangji con fuerza, disfrutando de su
primer abrazo como una familia completa.
Mientras que en el exterior del templo, toda la secta Wen celebraba, ya que se habían
encontrado nuevamente con Wen Ning, que ahora como un cadáver viviente podía unirse
nuevamente a su hermana y a su familia.
***
“Mami, ¿Esta bien escrito?” Preguntó Lan Sizhui, mostrando una linda tabla de madera, con
el nombre de Wen Xu en el centro.
Sonriendo con suavidad, acariciando el cabello negro de su hijo con delicadeza, Wei Ying
respondió: “Lo está, muy bien escrito”.
“¿Que dice ahí, papi?” Preguntó Lan Yuan, acercando la tabla de madera a su padre.
“Wen Xu” Dijo Lan Wangji con voz clara.
Bajando la mirada con tristeza, Wei Ying se sintió arrepentido. Por años había maldecido a
Wen Xu, lo había culpado por haberle quitado la vida a su adorado hijo. Incluso en su
momento, cuando se recuperaron los cadáveres de la secta Wen, Wei Ying pidió
personalmente que quemaran y despedazaran el cuerpo de Wen Xu, para evitar que volviera a
reencarnar.
Ahora que sabía la verdad, el corazón de Wei Ying dolía de recordarlo.
Ni siquiera Wen Ning sabía lo que había hecho Wen Xu para rescatar al pequeño Yuan, lo que
había tenido que pasar. Pero Wei Ying solo podía pensar en ese delgado omega, teniendo que
enfrentarse con las bestias de los guardias Wen, solo para salvar a su hijo. Y aunque no sabía
cómo lo había hecho, si sabía su destino.
Lo que Wen Ruohan le había hecho como castigo por haber “asesinado” a Lan Yuan.
Y un nuevo dolor de impotencia se hizo en el fondo de su corazón. Ahora había sanado, al
saber que su hijo estaba vivo, que alguien pudo salvarlo y mantenerlo a salvo hasta que pudo
encontrarlo de nuevo. Pero Wen Xu… Wei Ying aun recordaba la puerta cerrada, y los gritos.
Él había estado ahí cuando lo asesinaron, cuando Nie Mingjue acabó con él, y Wei Ying no
hizo nada, se quedó fuera escuchando hasta que los gritos cesaron para siempre.
Ahora Wei Ying sentía el dolor de la impotencia de no haber podido salvar a ese omega.
“Mami, la ceremonia esta por empezar, ¿Debería entregarle la tabla de madera a la tía Qing?”
Preguntó Lan Yuan con una sonrisa.
“Si, ve a dársela” Pidió Wei Ying, dejando de abrazar a su cachorro.
Con los pasos temblorosos y lentos de siempre, Lan Yuan entró en el templo de los ancestros
de los Wen, entregándole a Wen Qing la tabla de madera con el nombre de Wen Xu en ella.
Cuando la joven recibió la tabla de madera, Wen Qing levantó los ojos y cruzó miradas con
Wei Ying, unas miradas frías y dolidas.
Ahora todos en la secta Yiling Wen sabían lo que Wen Xu había hecho, Wen Ning les había
contado a todos como el joven omega dio su vida por salvar a Lan Yuan, el hijo de Wei Ying
y Lan Zhan. Así que obviamente, el joven omega incluso después de muerto y después de
tantos años, se ganó el cariño de toda su secta, siendo admirado y adorado por todos los
presentes.
Y por obvias razones, todos también sabían lo que Wei Ying había hecho, que él había estado
fuera de la habitación cuando Wen Xu fue asesinado, así que de forma silenciosa se
demostraba cierto desprecio hacia él, como si lo culparan por su muerte.
Algo que Wei Ying no planeaba refutar, ya que él también se culpaba a si mismo por su
muerte.
“Está bien” Dijo Lan Zhan, notando la tristeza de su omega.
“¿En verdad?” Preguntó Wei Ying con cierta burla: “Esta bien que me odien, yo también me
odio”.
“Ellos no te odian”.
“No sabes leer los sentimientos en las personas. Te lo aseguro, me odian. Y es correcto, lo
maté.”
“Wei Ying, no fuiste tú…”
“Aun si yo no sostuve el cuchillo contra su cuello, ¿Cuál es la diferencia? Yo estuve ahí y no
hice nada para detenerlo, no hay ninguna diferencia entre la indiferencia y el homicidio en
este caso” Se lamentó Wei Ying en un susurro: “Deje que asesinaran al hombre que dio su
vida por nuestro hijo, merezco su odio…”
“Wei Ying…” Susurró Lan Wangji, sin saber cómo confortar a su omega.
Cuando Lan Yuan regresó a su lado, Lan Zhan y Wei Ying volvieron a guardar silencio,
pretendiendo que nada malo sucedía, sonriendo para su pequeño y dulce hijo, quien era un
manojo de sonrisas y felicidad desde que había enterado de que era el hijo biológico de sus
padres.
En el momento que todas las varillas de incienso estuvieron encendidas, Wen Qing se
arrodillo frente al altar junto a su hermano Wen Ning, y ambos se dispusieron a empezar el
ritual para poner la placa con el nombre de Wen Xu y quitar el nombre de Wen Ning. Al ser
este un ritual muy importante para todas las sectas, ninguna placa podía ser quitada o añadida
sin su previa preparación, un ritual adecuado para tal hecho. Así que ahora todos estaban
reunidos, no solo para celebrar la vida de Wen Ning y quitar su nombre del altar, también
para dar los respetos adecuados a Wen Xu, el nuevo héroe de la secta.
Mirando al cielo y viendo como el incienso subía hasta las nubes, Wei Ying cerró los ojos,
rezando en silencio. Sabía que había pasado mucho tiempo, y a pesar de sus errores,
silenciosamente estaba rogando por que el espíritu de Wen Xu estuviera en algún lugar.
Y que pudiera perdonarlo.
Capítulo 44.

Jadeando, vio la puerta frente a sus ojos, completamente cerrada. Y aun a pesar de estar
cerrada, Wei Ying sabia quien estaba ahí adentro, podía oler el suave aroma de las rosas…
“¿No vas a hacerlo?”
Asustado, Wei Ying se giró en dirección a la obscuridad, pero solo vio una sombra negra, un
recuerdo borroso.
“Te lo pregunto una vez más, ¿No vas a hacerlo?”
Wei Ying quiso negarse, quiso detener a esa sombra, pero la voz no salía de sus labios, como
si estuviera mudo. Entonces la sombra lo tomó de un brazo, y con una fuerza abrumadora,
apartó a Wei Ying del camino, para acercarse a la puerta.
Cuando la puerta se abrió, la luz entró desde el otro lado, y por un solo instante, Wei Ying
pudo ver a Wen Xu. El joven omega se encontraba sentado en el piso, apoyado contra una de
las paredes de su habitación, debajo de una ventana abierta. Cuando ambos se vieron,
cruzaron miradas, hasta que la puerta se cerró completamente.
Y Wei Ying no se movió.
Pero el ruido y la calma no duraron demasiado, ya que pronto comenzaron a escucharse los
gritos.
“¿Mingjue? ¿Qué haces aquí?”
“No, espera, por favor detente” Suplicó Wei Ying, sabiendo a la perfección lo que sucedería a
continuación.
“Lo siento… ¡Por favor detente!” Escuchó como Wen Xu gritaba desesperado.
Entonces sintió como si todo su cuerpo despertara, y moviéndose con rapidez, Wei Ying
corrió a la puerta, intentando abrirla.
“¡Para! ¡Abre la puerta!” Suplicó Wei Wuxian, golpeando la puerta cerrada con sus manos de
forma desesperado: “¡Abre la puerta!”
Pero nadie parecía escucharlo, y la puerta no se movía, mientras los gritos de Wen Xu en el
interior de la habitación se volvían ensordecedores.
Entonces Wei Ying escuchó un susurro detrás de él: “El tiempo no puede regresar… Wei
Wuxian…”
Apoyando su frente en la puerta llorando desesperado, Wei Ying suplicó: “No lo hagas, por
favor, déjame salvarlo…”
“El ultimo recuerdo que tuvo, además del rostro de su asesino, fue el tuyo…”
“Basta” Suplicó Wei Ying, cubriendo sus oídos con sus manos.
Sentía que estaba enloqueciendo, con los gritos tan fuertes que estaban taladrando su cabeza,
hasta el punto de lastimarlo. Y junto esa voz tan suave, que podía escuchar en su cabeza a
pesar de los gritos, Wei Ying creía que iba a enloquecer.
“Cumple tu promesa, Wei Wuxian…”
Los gritos se cortaron de golpe, y todo volvió a quedare en silencio. Así que muy temeroso,
Wei Ying se destapó los oídos y se alejó un par de pasos de la puerta, esperando expectante.
Hasta que unos brazos lo alcanzaron desde la espalda, una persona había intentado abrazarlo
o sujetarlo desde la parte de atrás de su cuerpo.
Y Wei Ying no tenía ni siquiera que girarse para ver de quien se trataba.
Sabía que era Wen Shima.
***
Abrió los ojos y se sentó en la cama de golpe, jadeando aterrorizado. Mirando a todos lados,
solo pudo observar tenue obscuridad iluminada por la luz de la luna, en lo que era la pequeña
cabaña que compartía con su familia.
A su lado tenia a Lan Wangji, quien lo abrazaba por la cintura estando profundamente
dormido. Y a su otro lado estaba su bebé, su pequeño A-Yuan, dormido en su propia cama de
forma tranquila. Al verlos a ambos, Wei Wuxian no pudo evitar sonreír, y siendo muy
cuidadoso, apartó el brazo de Lan Wangji de su cuerpo, poniéndose de pie con cuidado.
“¿Acaso estas intentando matarme de un susto?” Reclamó Wei Ying con molestia, saliendo
de su cabaña: “No es gracioso, no te metas en mis sueños para molestarme…”
Desde que había llegado a ese sitio, Wei Ying no volvió a ver a Wen Shima. Cuando llegó la
primera vez, pasaba mucho tiempo al lado de ese misterioso fantasma resentido, quien
incluso había llegado a materializarse a su lado y conversaban mucho tiempo. Wen Shima
había sido su mentor, y le había enseñado todo lo que sabía de la energía resentida.
Lan Zhan le había dicho que probablemente él ya no estaba ahí, como Wei Ying rompió la
barrera de contención alrededor de la montaña, mucha de la energía resentida escapó de ahí,
así que probablemente el alma de Wen Shima también lo había hecho. Pero Wei Ying no
estaba seguro…
Durante el último mes, en su momento de mayor felicidad, pero también de mayor debilidad,
las pesadillas habían sido constantes. Al inició él pensó que solo era por la culpa que sentía
por lo que le había hecho a Wen Xu, pero ahora… No podía evitar dudar al respecto,
pensando que las pesadillas y su malestar corporal tal vez no solo eran por la culpa, también
eran por él…
Wen Shima estaba reclamando lo que era suyo, lo que le partencia.
Por eso en sus sueños, cada vez estaba más cerca, hasta el punto que ya podía tocarlo…
Pensando hablar con el fantasma, para intentar arreglar el asunto, Wei Ying entró al templo
de la montaña dispuesto a encontrarse con él. Pero se sorprendió, al encontrarse con Wen
Ning, quien se encontraba sentado al lado del pozo de sangre fresca, aparentemente
pensativo.
“A-Ning” Dijo Wei Ying sorprendido: “Me asustaste…”
“Lo siento joven maestro Wei” Se disculpó Wen Ning poniéndose de pie: “No era mi
intención hacerlo…”
“Descuida, supongo que solo estoy algo cansado, perdona por no notarte” Dijo Wei Ying con
una suave sonrisa, acercándose a su amigo con paso tranquilo.
Wen Ning era un cadáver viviente. Su cuerpo no se descomponía por los conjuros que Wei
Ying había hecho, como si estuviera congelado en el tiempo, pero eso también había
ocasionado que el joven alfa dejara de tener deseos o necesidades humanas, sin tener que
comer o dormir, ni siquiera respirar… Wen Ning era un ser que ni siquiera Wei Wuxian podía
comprender por completo.
“¿No puede dormir, Wei Gonzi?” Preguntó Wen Ning.
Acercándose al pozo de sangre y sentándose al borde, Wei Ying respondió: “No
exactamente…”
“A penas son las 3 Am, debería estar dormido”.
“Tuve una pesadilla horrible” Explicó Wei Ying, para soltar un suspiro: “¿Puedo hacerte una
pregunta?”
“Claro”.
“¿Me odias por lo que pasó con Wen Xu?”
Aquella pregunta tomó a Wen Ning por sorpresa, quien tras pensarlo por un par de segundos
respondió: “No lo estoy. Usted no fue su asesino, y aunque la gente dice que usted estuvo ahí,
nadie sabe las circunstancias. La persona que lo mató injustamente fue Nie Mingjue, no
usted, las cosas que él le hizo a mi A-Xu… Eso es algo que yo no voy a perdonar. Pero usted
es inocente, hubo muchas personas en la residencia Wen ese día, tendría que odiarlos a todos
si lo odiara a usted, pero no lo hago, sé que usted no podría haberlo lastimado jamás”.
“Eres muy amable, A-Ning” Digo Wei Ying con una sonrisa: “Creo que me lamento mucho
por su muerte, no puedo dejar de pensar en eso, en él antes de morir. ¿Te parece algo
normal?”
“Debería dejar el pasado, Wei Gonzi. Aun si lo piensa todo el día, el pasado no cambiara, él
no va a regresar.”
Sonriendo con suavidad, mirando hacia la nada fijamente, Wei Ying respondió: “Tal vez…
Lo único que quiero, es no volver a cometer un error como ese de nuevo, volver a tener este
arrepentimiento por mi odio injustificado. No quiero volver a cometer el error que cometí con
A-Xu con otra persona”.
***
Pocas semanas después, todas las calles se adornaron de color dorado y peonias blancas,
todas las ciudades estaban de celebración.
Como había sucedido en el pasado con la secta Wen, que era la más fuerte, ahora todas las
ciudades y sectas celebraban los logros de la secta Jin, temiendo por su supervivencia si no lo
hacían. Así que aunque no les interesara en verdad, todas las calles se habían teñido de
dorado, en una celebración por el nuevo heredero de la secta Jin, el segundo hijo de Jin
Zixuan y Jiang Yanli, un pequeño niño omega.
Caminando por las calles de Yiling, mirando sobre su cabeza las cintas doradas volando con
el viento, Wei Ying pensó en su hermana, y en su segundo hermoso sobrino, un niño que era
muy afortunado al tener a Yanli de madre.
“¿Crees que sea un niño o una niña?” Preguntó Wei Ying mirando a su alfa.
Como cada semana, ambos habían acudido a la ciudad de Yiling a hacer un par de compras,
yendo los dos solos en esta ocasión, ya que su pequeño A-Yuan había querido quedarse para
ver la siembra de rábanos, que la secta Wen estaba recogiendo del campo esa mañana.
“Según escuche, es un niño omega” Dijo Lan Wangji con calma.
Lan Zhan podía notar el cambio en su omega, aunque Wei Ying se negaba a decirle a su alfa
lo que estaba lastimando su corazón, Lan Zhan sabía que algo estaba perturbándolo. Así que
se dispuso a apoyarlo, aun cuando no tenía idea de que era lo que lo aquejaba, Lan Wangji
quería estar para su esposo.
“Jin Ling, es el nombre del hijo primogénito de mi Shijie” Dijo Wei Ying, sonriendo con
felicidad: “Es un pequeño alfa, seguro Zixuan debió hacer una fiesta porque su primogénito
sea un alfa, ¿No lo crees?”
“Mmm…”
“Es un año y medio menor que nuestro A-Yuan, tal vez si nosotros todavía estuviéramos en
Gusu o Yiling, recibiríamos una propuesta de matrimonio de Jin Ling cuando A-Yuan
cumpliera cuatro años. Mi hermana y yo solíamos hablar de que si teníamos un hijo alfa y
omega, los casaríamos, decíamos eso cuando fuéramos niños. Ya sabes que mi Shijie no es
mi hermana sanguínea”.
“Mmm…” Respondió Lan Zhan, aunque no le agradaba para nada la idea.
“¿No te gustaría? Mi hermana sería una gran suegra, A-Yuan seria afortunado. Pero Jin Ling,
pobrecito, te tendría a ti como suegro, tal vez terminarías asesinándolo cuando nadie te vea”
Dijo Wei Ying sujetándose del brazo de su alfa mientras reía: “¿Que tendría que ofrecerte Jin
Ling para que aceptes su propuesta de compromiso con Sizhui?”
“El sol, la luna, todo el jade del mundo” Respondió Lan Zhan malhumorado: “Eso no va a
pasar”.
“¡Lan Zhan! Deja de jugar, faltan 9 meses para el cumpleaños de nuestro Sizhui, y cuando los
omegas tienen 4 años, sus padres comienzan a buscar compromisos para ellos, tenemos que
pensar en eso…”
“A-Yuan es un bebé, mi bebé” Dijo Lan Wangji con molestia: “No se va a casar”.
“¿Que pasara entonces cuando cumpla 15 años y sea el único sin un novio? Vera como todos
los omegas a su alrededor se casaran y tendrán un alfa, ¿Que hará él entonces? ¿Llorar a tu
lado?”
“A-Yuan siempre será mi bebé, aun si tiene 35 años, no se va a casar con un sucio alfa jamás,
sobre mi cadáver” Dijo Lan Wangji con un tono aterrador de voz, que hizo reír de nuevo a
Wei Ying.
Después de saber que Sizhui era su hijo biológico, Lan Wangji se había vuelto mucho más
sobreprotector con él, hasta el punto de pensar que ningún alfa era lo suficientemente bueno
para su pequeño. Algo que por el momento no molestaba a A-Yuan, quien siempre se sentía
encantado de pasar tiempo con su padre aun cuando él lo apartaba de otros alfas. Y aunque
eso pasaba ahora que A-Yuan era un bebé, Wei Ying no estaba seguro de que sucedería en el
futuro cuando Lan Sizhui fuera un hermoso omega de 15 o 16 años, la edad en la que tendría
que casarse.
“Nunca digas nunca, A-Zhan” Dijo Wei Ying de forma juguetona: “Yo siempre pensé que
Madam Yu no te aceptaría, porque ella es igual o incluso más celosa que tú con sus hijos
omegas, pero ambos hicieron buenas migas cuando yo desaparecí. Tal vez eso ocurra con el
pretendiente de nuestro A-Yuan”.
“Un milagro” Respondió Lan Wangji, muy malhumorado.
Una vez más, Wei Ying no pudo evitar estallar en carcajadas ante el evidente mal humor de
su alfa, sujetándose fuertemente de su brazo.
Ambos apenas habían llegado a la ciudad, empezando las compras. Así que sintiéndose muy
relajado, Wei Ying levantó la mirada, observando las peonias blancas y las cintas doradas
brillantes sobre su cabeza. Entonces Wei Ying sintió un gran vacío y dolor en su corazón.
“Lan Zhan… Creo que quiero aceptar la petición de A-Cheng, quiero ir a Lanling a ver a mi
hermana y a mi nuevo sobrino” Dijo Wei Ying de pronto.
Al escuchar esas palabras, Lan Wangji dejó de caminar y miró a su omega, preguntando:
“¿Estás hablando en serio?”
“Lo sé, ya te había dicho que me negaba a ir, que sería muy hipócrita de mi padre ir a brindar
al lado de los Jin después de saber lo que ellos han hecho. Pero… Después de lo que pasó con
A-Yuan, después de saber lo que pasó con A-Xu, creo que he dejado de confiar en mi sentido
de la justicia” Dijo Wei Ying con suavidad: “¿Que sucede si los Jin son inocentes como Jiang
Cheng asegura? ¿Qué pasa si estoy cometiendo un error con ellos así como los cometí con
Wen Xu?”
“Mmm…” Susurró Lan Wangji, sin verse nada convencido con esas palabras.
“¿Crees que es demasiado estúpido?” Preguntó Wei Ying dudoso: “Ahora ya no se en lo que
debería querer. Siento un gran odio en mi interior, que solo tú puedes controlar con las
bonitas melodías de tu Guqin, y temo que si me alejo de ti, ese odio me controla y me hace
hacer cosas horribles. No quiero volver a cometer el mismo error que cometí con Wen Xu,
aun si Jin Zixuan es culpable, ¿En verdad tengo que alejarme de mi hermana solo por él? No
quiero hacerlo, yo también quiero conocer a mis sobrinos…”
Entendiendo el gran conflicto interno que tenía Wei Ying en su interior, Lan Wangji lo tomó
delicadamente de la mano, y lo apartó del camino para hablar con él.
“Wei Ying, esto no tiene que ver con los inocentes o los culpables, no podemos regresar con
las demás sectas, no aun” Dijo Lan Wangji con seriedad.
“¿No? ¿Por qué?”
“Hay muchas razones. Si nos alejamos hasta Lanling y alguien se entera, no dudaran en
entrar a los Túmulos funerarios y van a capturar a la secta Yiling Wen que protegemos. Si
regresas junto a nuestro hijo, nos arriesgamos a que te condenen a muerte a ti y a Sizhui. Si
yo regreso y me encuentro con alguna persona de la secta Lan, ellos tienen la orden de
llevarme a Gusu de vuelta, aunque sea a la fuerza, me obligarían a abandonarte. Si los Jin te
encuentran…”
“Entiendo” Lo interrumpió Wei Ying, suspirando con suavidad: “De verdad, lo entiendo.”
“No me interesa el odio que le tengas a la familia Jin o si quieres estar con tu hermana. La
situación aún es muy complicada entre todas las sectas, y la furia contra los Wen o las
secuelas de la guerra aún son algo reciente. Yo sé que algún día podremos salir de los
Túmulos Funerarios y regresar a casa, nosotros y nuestros hijos, pero ahora no es el
momento, hay muchas cosas que podrían salir terriblemente mal de solo intentarlo…”
Bajando la mirada, tomándose de la mano de Lan Wangji con fuerza, Wei Ying guardo
silencio. En el fondo de su corazón y a pesar de las advertencias de su alfa, él ya había
tomado una decisión al respecto.
“Lo entiendo, Lan Zhan. Fue una idea tonta, creo que estoy dejándome llevar por el ambiente
festivo lleno de dorado y peonias, además de la visita de Jiang Cheng hace un par de meses.
Por un momento… Quise recuperar nuestra vida y volver a casa. Pero lo sé, ahora que tú me
lo recordaste, si sé que las advertencias que me haces son reales, así que no iré a la secta Jin,
entiendo que es una estupidez” Mintió Wei Ying, evitando mirar los ojos de su alfa.
Creyendo entender los sentimientos de su omega, dejándose engañar por las mentiras del
mayor, Lan Zhan llevó una de sus manos al rostro de Wei Ying, acariciando suavemente una
de sus mejillas, siendo extremadamente delicado con sus toques.
“Te amo Wei Ying, te prometo que algún día te llevare de regreso a Yunmeng, para que
puedas ver los lotos florecer” Aseguró Lan Wangji.
“Yo también te amo, Lan Zhan…”
***
Siendo sumamente cuidadoso, viendo como los primeros rayos de la luz del sol iban a salir
del horizonte, Wei Wuxian cerró cuidadosamente la puerta de su pequeña cabaña de madera,
y lo más silencioso que pudo, caminó en dirección a la salida de la montaña.
A pesar de la promesa que le había hecho a su adorado alfa, sin dudarlo por un solo instante,
Wei Ying estaba dirigiéndose a Lanling. Wei Wuxian estaba demasiado confiado en su
fuerza, y pensaba que si iba él solo, sin acudir con su esposo o su hijo que eran sus más
grandes debilidades, dejando los Túmulos Funerarios y la secta Wen en buen cuidado a
manos de Lan Wangji, y bajo la promesa de Jiang Cheng de tener un buen recibimiento por
parte de la familia Jin; Wei Ying confiaba en que nada podría salir mal.
Consigo llevaba un pequeño medallón con hermosas peonias blancas, que él mismo había
hecho tallándolo en madera. Y aunque pensaba que no era un regalo muy valioso para el hijo
de su hermana, quien había nacido bañado en oro y jade, confiaba en que su belleza seria lo
suficiente para deslumbrar a su sobrino, ya que su propio hijo A-Yuan decía que la flor en
madera era bastante linda.
Así que pensando en que iba a decirle a su familia después de tanto tiempo, Wei Ying caminó
fuera de la montaña, dispuesto a desenvainar a su espada para subirse sobre ella y dirigirse a
Lanling.
“¿Joven maestro Wei?”
Sorprendido, Wei Wuxian se giró, encontrándose con Wen Ning, quien lo había estado
siguiendo desde el asentamiento Wen.
“¿A dónde se dirige a esta hora? Ni siquiera ha amanecido” Dijo Wen Ning muy preocupado.
Sonriendo con suavidad, sin querer mentirle a ese joven, Wei Ying respondió: “Estoy yendo a
visitar a mi sobrino, el hijo de mi hermana, ¿Te enteraste que nació en la Torre Koi hace un
par de días?”
“¿Su alfa lo sabe? ¿Está de acuerdo?”
Sonriendo aún más, Wei Wuxian volvió a negar con la cabeza, haciendo suspirar a Wen Ning.
“Wei Gonzi…” Se lamentó Wen Ning en un susurro.
“Lo sé, parece una mala idea. Pero es algo que tengo que hacer, no me importan las mierdas
que pasan entre las sectas, o los Jin, o cualquier otra estupidez. Mi Shijie, ella esta
esperándome ahí, eso es lo único que me importa” Dijo Wei Ying determinado: “Ir con ella es
lo correcto.”
Suspirando de nuevo, sin poder negarse ante esas palabras, y sabiendo que aunque opusiera
resistencia Wei Wuxian se iría de cualquier forma, Wen Ning pensó en una forma de
mantenerlo seguro.
“De acuerdo joven maestro, yo iré con usted” Dijo Wen Ning decidido.
“¿Vendrás? Creo que eso si es una mala idea” Dijo Wei Ying sorprendido.
“IR solo a un lugar como la Torre Koi, donde su cabeza tiene precio, es un problema. No
planeo atacar a nadie, ni siquiera era bueno en el cultivo cuando estaba vivo. Pero como un
cadáver viviente puedo moverme más rápido que cualquiera, así que si la situación se vuelve
complicada, yo lo sacaré de ahí de inmediato”.
Wei Ying no supo que responder al respecto. Ellos todavía no habían probado los límites de
Wen Ning como un cadáver resentido, y aunque si sabían que el joven Wen tenía mucha
fuerza y era muy rápido, a Wei Ying le preocupaba el control de Wen Ning, temiendo que se
volviera un demente como cuando Jiang Cheng vino a visitarlo.
Pero temiendo que el joven e inocente alfa acudiera con Lan Wangji si no iba con él, Wei
Wuxian decidió aceptar, pues sabía que si su alfa se interponía en su viaje, él no tendría más
decisión que aceptar detenerse.
“De acuerdo A-Ning, vayamos a hacer turismo a Lanling” Dijo Wei Ying, desenvainando a
Suibian.
***
A penas con sus túnicas de dormir, siendo muy cuidadoso, Jin Guangyao se desplazó hasta
una de las habitaciones de los aspirantes a cultivadores en la secta Jin.
Entrando por una puerta sin siquiera tocar, Meng Yao se sorprendió, encontrando a ese joven
de cabellos negros despierto y en medio de varios símbolos extraños pintados con su propia
sangre en el suelo.
“¿Acaso no duermes, Xue Yang?” Preguntó Meng Yao con seriedad.
Aquel joven de solo 13 años, abrió los ojos y esbozó una sonrisa divertida en su rostro,
levantando la mirada para observar a su mayor.
“Yao-Ge” Dijo Xue Yang, sacudiéndose las manos y poniéndose de pie: “La energía resentida
se maneja de mejor manera en la noche, tengo que cargar el acero con esta energía si
queremos crear nuestro propio Sello del Tigre… O como sea que se llame esa mierda…”
Meng Yao puso los ojos en blanco, ya que de una forma evidente, no podía negar que Xue
Yang le desagradaba en extremo. Aquel joven de una secta y una procedencia desconocida,
era un prodigio. Sin ningún tipo de inducción previa, ya era un prodigio en el cultivo, uno de
los mejores cultivadores que Meng-Yao había visto jamás, incluso superando a Alfas
realmente fuertes, como su hermano mayor o el propio Lan Xichen.
Así que con tal intelecto, y siendo una persona joven sin ningún tipo de valor moral, era
obvio que ellos acudirían a él para pedirle sus servicios. Vistiéndolo con las sectas doradas de
Lanling, lo metieron a la Torre Koi a escondidas, “entrenándolo” como un cultivador, aunque
él tenía otro deber en realidad.
Como era de esperarse, tras mostrarle por un par de días los pergaminos prohibidos de Wen
Shima que habían podido recuperar de Sin Noche, Xue Yang se había convertido en un
maestro de las técnicas obscuras, prácticamente al nivel de Wei Wuxian, pero siendo una
persona mucho más joven.
Tomando su guante y poniéndoselo con cuidado, Xue Yang preguntó: “¿A que debo su visita,
Yao-Ge?”
“Los vigilantes me lo informaron, Wei Wuxian abandonó los Túmulos Funerarios en
dirección a Lanling” Explicó Meng Yao con calma.
“¿Cayo en la trampa? Entonces si es un verdadero imbécil” Respondió Xue Yang riendo de
forma burlona: “¿En verdad piensa que podrá acercarse a Lanling con vida?”
Bajo la influencia de Meng Yao y sus sabios consejos, Jiang Cheng había ido a Yiling a
invitar a Wei Ying a conocer a su sobrino. Algo que todos ellos estaban buscando, una forma
de alejar a Wei Ying para poder atacarlo y sacarlo de control, una excusa que tendrían para
asesinarlo, y quitarse así un gran peso del camino.
“¿Entonces funcionara tu plan?” Preguntó Meng Yao.
“Aun puedo escucharlo… Hablando todas las noches” Dijo Xue Yang de forma criptica: “En
mi cabeza, cada noche, Wen Shima está reclamando su cuerpo desde hace tiempo. Solo
necesito una grieta, un poco de descontrol, y así poder dejarlo entrar, entonces cualquiera
podrá matarlo, hasta usted, Yao-Ge…”
Meng Yao no confiaba en las palabras de Xue Yang, ese omega tan sombrío y malvado, pero
no tenía más opción, pues él también seguía órdenes, y la orden que tenía era ayudarlo y
protegerlo.
Así que tomando una delgada flauta de madera obscura, Meng Yao se la ofreció a Xue Yang,
pero dudando un poco, ya que tenía algo que lastimaba su corazón.
Acercándose a su mayor, Xue Yang tomó es réplica de la flauta Chenqing, mirando fijamente
los ojos de Meng Yao.
“Escuché que su esposo le dio un golpe en el rostro después de la cena, Yao-Ge, ahora que
veo la marca en su mejilla puedo comprobar que es cierto. Es muy extraño, ¿No lo cree?
Parece que su esposo está perdiendo la cabeza, sería muy desafortunado que alguien estuviera
usando en él las canciones prohibidas de los Lan, ¿No lo cree?” Preguntó Xue Yang con
malicia.
“No tientes a tu suerte” Amenazó Meng Yao con furia, dejando ver su real personalidad,
mirando fijamente a Xue Yang: “Si me entero que eres tu quien esta envenenando los oídos
de mi alfa con tus mierdas, obligándolo a volverse violento conmigo, te voy a matar…”
“¿Lo hará en verdad? Jin Guangyao, se quién eres, y yo tengo más de Jin en mi sangre que tú
y toda tu descendencia. Eres un perro que sigue ordenes, así como yo, y tú no puedes
mandarme… ¿Porque estas tan sensible? Aun si me ordenaron asesinar a Nie Mingjue, ¿Por
qué importaría?”
“No te atrevas…”
“¿Acaso en verdad estás enamorado de Nie Mingjue?” Preguntó Xue Yang con una sonrisa:
“Que patético, esa marca en tu cuello te hizo débil, solo la puta de otro alfa. Aun si un alfa
me muerde, yo jamás dejare de ser yo mismo, y eso es lo que nos diferencia, por eso tú nunca
jamás podrás matarme. Lárgate de mi habitación y ve a meterte en los cariñosos brazos de tu
alfa… Claro, mientras todavía puedas hacerlo”.
Presionando los puños con ira, Meng Yao controlo su furia, observando como Xue Yang reía
y metía la flauta en su cinturón, para luego abrir una ventana y saltar al exterior sin pensarlo,
desapareciendo de inmediato.
Meng Yao no tenía idea de la verdadera razón por la cual Xue Yang estaba en la secta Jin,
pero si tenía claro algo, iba a proteger lo único que amaba en verdad en toda su vida: A su
amado alfa Nie Mingjue y a sus hijos.
***
“¿Qué demonios?”
Desde el aire, Wei Ying observó a lo lejos varios sellos de protección, que intuban detener a
cualquier persona que viajara por los territorios de Lanling. Así que a pesar de que Wei
Wuxian podía eliminar esos sellos con facilidad, no entendía por que estaban en ese sitio,
¿Acaso los Jin no estaban esperando su visita? Jiang Cheng eso le había dicho…
Siendo muy cuidadoso, Wei Ying descendió con su espada hasta el suelo, permitiendo que
Wen Ning y él mismo bajaran al suelo firme, mirando ese lugar lleno de sellos de protección.
“Esto no es una buena señal Wei Gonzi, deberíamos regresar” Dijo Wen Ning, dándose
cuenta de lo mismo que el mayor.
Pero antes de que Wei Ying pudiera reaccionar, se vieron rodeados por varios cultivadores de
la secta Jin, quienes parecían haberlos estado esperando desde hace mucho.
“Wei Wuxian” Habló el líder de los cultivadores de la secta Jin: “Por órdenes del gran líder
Jin Zixuan y la soberana secta Lanling Jin, queda apresado por los cargos de necromancia y
haber desobedecido los preceptos de la secta Jin”.
Poniendo los ojos en blanco, sintiéndose traicionado y comenzando a enfadarse, Wei Wuxian
susurró: “Oh… Creo los Wen me arrestaron con los mismos cargos en el pasado… Deberían
ser más originales”.
Sin poder tomar la situación con el mismo humor que Wei Ying, Wen Ning se acercó a Wei
Ying muy asustado, susurrando: “Wei Gonzi, si ellos me arrestan, van a ejecutarme…”
“No lo harán, no lo permitiré”.
“¿Entonces vamos a pelear?”
“No, eso sería lo peor que podríamos hacer en esta situación, le daríamos armas reales al
imbécil de Jin Zixuan para acusarnos de asesinos; Wen Ruohan me engañó de la misma
forma en el pasado. Solo relájate, deja que nos arresten sin pelear, seguro nos llevaran a la
torre Koi, ahí mi hermana se encargara” Dijo Wei Ying con confianza.
Las cosas definitivamente no habían salido nada bien para ellos, pero Wei Ying planeaba
evitar que terminaran de forma desastrosa, así que planeaba actuar de forma dócil hasta el
final, sin tener deseos de atacar a nadie.
Sin embargo cuando los cultivadores Jin se acercaron a ellos, con la intención de atarlos para
apresarlos, una suave tonada de flauta se escuchó en el viento, tan suave que Wei Ying pudo
escucharla a penas. Y antes de que pudiera razonar o pudiera intentar ver el origen del
sonido, varios gritos se escucharon desde el bosque, junto con gruñidos de varios cadáveres
resentidos.
“¡Wei Wuxian!” Grito el líder de los Jin aterrorizado: “¡Detenlos! ¡Para ahora!”
Mirando a todos lados desconcertado, sin entender nada en medio de los gritos, Wei Ying
dijo: “¡Yo no estoy controlándolos!”
Había tantas cosas que Wei Ying no podía entender en ese instante… ¿Porque había
cadáveres frescos en medio del bosque y escondidos debajo de la tierra? ¿Cómo era posible
que hubiera otra persona controlándolos con una flauta? ¿Acaso aquello era una trampa?
Sintiéndose desesperado, mirando a todos lados, encontrándose con la sangre y la muerte,
Wei Wuxian solo pudo pensar en lo tonto que era, al haber caído en una trampa tan obvia…
“Wei Gonzi…” Susurró Wen Ning a su lado.
“¿A-Ning?” Preguntó Wei Ying confundido, sintiendo como una gran energía resentida
llenaba todo el lugar.
“Mi cabeza… No puedo controlarlo… Él… Está llamándome”.
Antes de que Wei Wuxian pudiera pensar en alguna forma de controlar la situación, observó
cómo los ojos de Wen Ning se ponían blancos, y como él comenzaba a atacar a todos los Jin
que estaban a su alrededor.
“¡No! ¡A-Ning!” Gritó Wei Ying desesperado.
Todo el lugar se convirtió en la peor pesadilla de Wei Wuxian, quien observó como Wen
Ning comenzaba a atacar a todos los cultivadores Jin, sin obedecer sus palabras o sus vanos
intentos de defensa. Wen Ning no era como cualquier cadáver resentido, en su intento por
devolverlo a la vida, Wei Ying lo había hecho un cadáver resentido sumamente fuerte, más
fuerte que cualquier otro. Así que sin importar los intentos de los pobres cultivadores Jin, no
había forma en la que un humano común pudiera detener a Wen Ning.
Entonces recordando lo que había ocurrido con Jiang Cheng, intentando frenar aquel
desastre, Wei Ying llevó a Chenqing a sus labios, intentando controlar y calmar a Wen Ning
de forma descontrolada, mientras las lágrimas de desesperación recorrían sus mejillas. Pero
no importaba cuanto intentara luchar, Wen Ning no se detenía, era como si él solo pudiera
escuchar la otra suave melodía, que provenía de la obscuridad.
Entonces aquel campo de batalla se convirtió en una pelea entre dos cultivadores de energía
resentida, quienes con sus propias melodías, luchaban por Wen Ning. Todos los demás
cadáveres a su alrededor se desplomaron, y el misterioso cultivador enfocó todos sus
esfuerzos en Wen Ning, volviéndolo más violento aun. Mientras que Wei Ying, incrédulo
ante lo que estaba sucediendo, intentaba usar toda su fuerza interior para controlar a Wen
Ning y calmarlo.
Pero no era suficiente, quien fuera que estaba tocando la otra melodía era mucho más fuerte
que Wei Wuxian, ganando esa batalla, y convirtiendo todo el bosque en una carnicería de
cultivadores Jin, mientras las manos de Wen Ning chorreaban de sangre.
“¡Detente! ¡Todos deténganse! ¡No lo ataquen!” Grito Jin Zixuan desesperado, llegando en su
caballo a toda velocidad: “¡Dije que dejaran de atacarlo!”
Al ver a su cuñado llegar de forma repentina, Wei Wuxian quiso gritarle, suplicarle que se
alejara ya que era peligroso. Pero no podía alejar la flauta de sus labios, intentando de forma
desesperada vencer al otro cultivador escondido, ya que sabía que Jin Zixuan se volvería el
blanco perfecto de Wen Ning cuando él se acercara.
A pesar de los intentos de los pocos cultivadores Jin que seguían con vida, que aun
intentaban luchar con Wen Ning, Jin Zixuan bajó de su cabello y comenzó a acercarse a Wei
Ying, en un claro intento por detenerlo, pensando que él era el causante de aquella masacre.
“Wei Ying, por favor detente, lo siento” Dijo Jin Zixuan mirando al joven omega
desesperado: “Me odias, merezco tu odio, toda mi secta lo merece. Pero por favor, por tu
hermana, tus sobrinos que son mis hijos, detente ahora, por favor…”
“Aléjate… ¡Aléjate ahora!” Gritó Wei Wuxian desesperado, quitando la flauta de sus labios.
“¿Que?” Preguntó Jin Zixuan confuso, ya que Wei Ying había dejado de tocar la flauta, pero
Wen Ning seguía moviéndose.
“¡Vete ahora!”
Bajo las órdenes del otro misterioso cultivador, Wen Ning salto en un árbol y regreso al
centro del bosque, dispuesto a atacar de forma mortal a Jin Zixuan, que estaba distraído y
completamente expuesto.
Dándose cuenta de esto de inmediato, Wei Ying intentó correr en dirección a Jin Zixuan, que
estaba solo a un par de pasos de distancia, dispuesto a protegerlo con su vida y salvarlo del
terrible destino que le quedaba.
Pero no fue Wei Ying quien se interpuso en el terrible ataque, ya que bajando del cielo a toda
velocidad, otra persona se puso frente a Jin Zixuan, recibiendo el impacto del fuerte puño de
Wen Ning en uno de los lados de su torso, haciéndolo escupir sangre.
Mientras la espada Bichen se clavaba en el suelo.
Sorprendido, Xue Yang detuvo la música de golpe, quitando la flauta de sus labios y mirando
la escena aterrado. Las órdenes que le habían dado fueron asesinar a Jin Zixuan o Wei Ying,
cualquiera de los dos servía para sus planes.
¿Pero Lan Wangji? Según los planes que habían previsto, él tenía que mantenerse con vida. Y
aunque Xue Yang era inocente, pues aquel alfa había salido de la nada para interponerse,
sabía que estaba en problemas. Jin Guangyao no iba a estar nada feliz al saber que había
asesinado a Lan Wangji, y aun mas, que no había conseguido acabar con Jin Zixuan y Wei
Wuxian, quienes eran sus objetivos principales.
“Mierda…” Susurró el joven omega, guardando la flauta en su cinturón y comiendo un dulce,
pensando en regresar a Lanling antes de que las cosas se salieran aún más de control.
Prácticamente cayendo al piso, Wei Ying observó como la sangre de su alfa se derramaba en
el piso, y como de inmediato, Lan Wangji se quedaba inconsciente, cayendo sobre Jin
Zixuan.
“¡Lan Zhan!” Gritó Wei Ying desesperado, viendo a su amado en ese estado.
Tan desconcertado como Wei Ying, Jin Zixuan a duras penas pudo atrapar el cuerpo
inconsciente de Lan Wangji, acostándolo en el piso con cuidado. Jin Zixuan había podido
sobrevivir un día más…
Arrastrándose en el piso, Wei Wuxian se acercó a su alfa, sin poder dejar de llorar tocó su
rostro pálido, acariciando sus mejillas y llamando su nombre: “Lan Zhan… A-Zhan… Por
favor…”
Saliendo del trance que le había ocasionado la otra tonada del cultivador desconocido, Wen
Ning pestañeo varias veces, dándose cuenta con horror de lo que había ocasionado, mirando
sus manos llenas de sangre, llenándolo de arrepentimiento.
Los pocos cultivadores Jin que quedaban vivos después de esa masacre, mirando la escena a
lo lejos, comenzaron a susurrar entre ellos, creyendo firmemente que Wei Wuxian era el
causante de esa desgracia.
“Mató a su alfa…” Susurró uno de los soldados Jin: “¡Asesino!”
“¡Asesino!” Grito otro de los cultivadores Jin.
Pronto todo el bosque se llenó de gritos, que acusaban a Wei Ying de ser el causante de ese
terrible incidente, y principalmente de la supuesta muerte de Lan Wangji.
Algo que Wei Ying no podía negar… Pues él también creía que era el causante de la muerte
de su alfa, la persona que amas amaba en el mundo.
Capítulo 45.

Aquella avecinaba ser una hermosa y feliz mañana en la torre Koi, ya que el cuarto hijo de
Jin Guangshan finalmente llegaría a Lanling. De esta forma, al amanecer y muy temprano en
la mañana, un pequeño niño bajó de una carreta dorada en la puerta principal de la secta
Lanling Jin, siendo recibido únicamente por Jin Zixuan y algunos miembros de la corte Jin.
“Xuanyu” Dijo Zixuan con una sonrisa, acercándose al pequeño niño que miraba todo
ligeramente asustado: “Bienvenido a Lanling, tu hogar”.
Aquel pequeño niño, de solo 7 años de edad, había sido enviado a la secta Jin para iniciar su
educación como un cultivador Jin, a órdenes y servicio de su familia biológica. Sin embargo
aquel pequeño niño, un dulce omega de ojos castaños claros como los de su hermano, se
sostenía fuertemente de una muñeca de trapo, mirando todo muy asustado.
En verdad Mo Xuanyu no tenía ningún deseo de convertirse en un cultivador, quería
continuar con la tradición familia Mo, crear hermosas armas espirituales. Pero su madre y su
tía habían insistido en enviarlo a la Torre Koi, ya que sabían que un cultivador siempre
significaría prestigio a la familia, además de que esperaban que cuando aquel pequeño niño
omega alcanzara un mayor nivel en la secta Jin como el hijo biológico de Jin Guangshan,
pudiera llevar a su pequeño primo Mo Yuan a Lanling, que era el principal interés de su tía.
La noche anterior Mo Xuanyu había llorado desconsolado en los brazos de su madre, hasta
que fue prácticamente llevado a la fuerza por su tío a esa carreta de la secta Jin, que sin
esperar lo llevaron a la torre Koi. Y por varias horas, hasta que se quedó dormido en la
madrugada, el pequeño omega se quedó llorando, sin querer ir a ese lugar extraño con
personas extrañas.
Viendo el semblante asustado de aquel pequeño niño, que por su aroma dulce a peonias y
otras flores silvestres, Jin Zixauan reconoció de inmediato como su hermano y su alfa se puso
de forma protectora con él, así que sin dejar de sonreírle se agacho para mirarlo a los ojos,
observando cómo eran idénticos a los suyos.
“Vaya, nos parecemos, ¿No lo crees?” Preguntó Zixuan acercando una de sus manos a las
mejillas del niño para acariciarlas: “Tienes sangre Jin en tus venas, eso es claro.”
Jin Zixuan nunca había tenido ese tipo de conexión con alguno de sus hermanos omega. Qin
Su era más parecía a su madre que a la familia Jin, y era un joven hermosa, pero siempre
distante y astuta. Mientras que Guangyao… al verlo, Jin Zixuan no podía creer que ambos
fueran hermanos biológicos, ya que no veía nada de Lanling en él.
Pero Mo Xuanyu era diferente, Jin Zixuan sentía una gran afinidad hacia él de inmediato,
queriendo abrazarlo y protegerlo, pues su alfa sentía lo asustado que estaba ese omega.
“Mi nombre es Jin Zixuan, y soy tu hermano mayor” Dijo el alfa sin dejar de acariciar las
mejillas de Mo Xuanyu.
“Xuan-Ge…” Susurró Mo XuanYu.
“Sí, soy tu gege” Dijo Zixuan riendo un poco: “Debes estar hambriento, ven conmigo, te
llevaré a comer algo delicioso a las cocinas reales. Luego te llevaré a conocer al resto de
nuestra familia, nuestro padre está algo enfermo y mi esposa está en cama después de tener a
nuestros hijos, pero seguro A-Su y A-Yao estarán encantados de conocerte…”
Sintiéndose un poco más cómodo con ese alfa, Mo Xuanyu lo tomó de la mano, y accedió a
caminar a su lado en dirección a la entrada de la torre.
“Pero no le digas a Yanli que te lleve a comer antes, ¿De acuerdo? Ella planeó un gran
recibimiento para ti a media mañana, y se enfadara si se da cuenta de que te di algo de comer
antes de tiempo…” Dijo Jin Zixuan, riendo un poco.
Aun tomando a su pequeño hermano de la mano, y sin dejar de hablarle con cariño, el nuevo
líder de la secta Jin le mostró las habitaciones más interesantes de la torre Koi, en camino a la
cocina, donde se encontraron con Meng Yao, quien pasaba el tiempo comiendo algo ligero.
Al ver a su hermano mayor y al pequeño niño que traía consigo, Meng Yao sonrió y se acercó
a ambos, diciendo: “¿A quién tenemos aquí?”
“Es nuestro pequeño A-Yu” Dijo Zixuan sin dejar de sonreír: “Xuanyu, este es tu hermano
mayor, Meng Yao”.
Escondido detrás de Zixuan, Mo Xuayu se asomó a ver a Meng Yao. Frente a sus ojos, tenía
al omega más hermoso que había visto, su rostro era tan agradable que ni siquiera parecía
humano, y con un cuerpo delgado y pequeño parecía una muñeca. Al verlo, Mo Xuanyu solo
pudo admirarse en silencio, rogando secretamente que cuando creciera pudiera ser aunque sea
un 10% tan hermoso como su hermano mayor.
“Hola A-Yu, mi pequeño didi” Dijo Meng Yao con dulzura: “¿Quieres sostener mi mano? Tu
y yo seguramente vamos a ser grandes amigos…”
Dejando de sonreír al ver a su hermano más de cerca, Jin Zixuan soltó la mano de Mo
Xuanyu, y se acercó a Jin Guangyao para tomarlo por la barbilla, obligándolo a mirarlo a los
ojos.
“¿Volvió a golpearte?” Preguntó Zixuan con frialdad.
“No, me caí” Mintió Jin Guangyao, soltándose del agarre de su hermano para volver a ocultar
su mejilla herida con su largo cabello negro.
“No estoy bromeando, Meng Yao, te prometí que lo mataría si volvía a tocar uno de tus
cabellos, y voy a hacerlo. Así que más te vale decirme si ese golpe que tienes en la mejilla la
hizo Nie Mingjue” Ordenó Jin Zixuan furioso.
“Detente” Ordenó Meng Yao con seriedad: “No ahora, lo estas asustando. Hablaremos de
esto después”.
“Nadie puede golpearte, hermano. Eres mi hermanito, A-Yao, no dejare que nadie toque uno
solo de tus cabellos” Dijo Zixuan con seriedad, acercándose a él para acariciarle suavemente
la cabeza.
Quedándose en silencio, Jin Guangyao mantuvo la mirada en los ojos de su hermano mayor,
queriendo decir muchas cosas, pero teniendo que callarse, sabiendo que no podía decirle
nada.
“Gracias…” Susurró Meng Yao, sintiéndose culpable.
Mirando aquella escena ligeramente alejado, Mo Xuanyu solo pudo pensar en lo buen
hermano que era Jin Zixuan, deseando que algún día él también pudiera obtener el mismo
cariño que su hermano mayor, y que Jin Zixuan también pudiera quererlo como quería a
Meng Yao.
Los tres hermanos fueron sorprendidos por un apresurado soldado Jin, que corría buscando a
Jin Zixuan, quien se notaba bastante extrañado.
“Líder de la secta” Dijo el soldado casi sin aliento: “Tenemos una emergencia… En la
frontera norte, recibimos noticias de que Wei Wuxian se encontró con un grupo de cacería de
la secta, y que está siendo arrestado por ellos.”
“¿Qué?” Pregunto Jin Zixuan incrédulo: “¿Quién pudo dar una orden como esa? Yo pedí
específicamente que ante la llegada de Wei Ying o Lan Wangji, los dejaran pasar sin
problemas, incluso que los escoltaran hasta aquí, ¿Cómo pudo pasar algo como eso?”
“No lo sé, líder de la secta, pero temo que las cosas se salgan de control. ¿Debería mandar a
un mensajero para arreglar el asunto?”
Quedándose en silencio por un par de segundos, luciendo muy pensativo, Jin Zixuan dijo:
“No, prepara mi caballo, iré yo mismo.”
“¿Esta seguro señor?” Preguntó el soldado sorprendido.
“Solo hazlo, no hay tiempo que perder”.
Haciendo una rápida reverencia, el soldado se retiró corriendo, haciendo lo que el líder le
había ordenado.
“A-Yao, cuida a Xuanyu, yo volveré de inmediato” Dijo Jin Zixuan luciendo muy serio por la
situación.
“¿En verdad vas a ir?” Preguntó Jin Guangyao sorprendido: “Suena muy peligroso…”
“Volveré pronto, descuida” Dijo Zixuan, dándole una última mirada a sus hermanos antes de
caminar rápidamente por el pasillo, en dirección a la puerta de salida de la secta.
Mirando a Jin Zixuan irse, dándose cuenta de que su plan había funcionado, Meng Yao
esbozó una sonrisa disimulada en el rostro, esperando que aquel que terminará muerto al final
de esa mañana fuera Jin Zixuan y no Wei Ying.
Enfocando su mirada en el pequeño niño omega frente a él, un pequeño niño Jin muy
hermoso, Meng Yao se quedó en silencio. ¿En verdad estaba frente al mate de Nie Mingjue?
De solo pensarlo su corazón dolía y el resto de su cuerpo ardía en furia.
Ese niño era peligroso para él.
“Hola A-Yu, ¿Quieres comer algo?” Preguntó con amabilidad acercándose al niño: “No te
preocupes, ven conmigo, estoy seguro de que tú y yo seremos grandes amigos en el futuro,
mi pequeño didi…”
***
Un gran caos se hizo en Los Túmulos Funerarios, en todo el asentamiento de los Wen.
“¿¡Hanguang-Jun!? ¿Qué fue lo que paso?” Preguntó Wen Qing muy alterada, saliendo fuera
del templo para ver el espectáculo: “¡Tráiganlo aquí ahora! ¡Debemos operarlo de
inmediato!”
Tomando a Lan Wangji de uno de sus brazos, Jin Zixuan desvió la mirada a su compañero, el
joven Wen Ning, quien estaba sujetando el otro brazo del alfa inconsciente. Lan Zhan era
bastante pesado, así que ambos habían tenido que arreglárselas para lograr llevarlo a un lugar
seguro.
Asintiendo con la cabeza, Wen Ning volvió a moverse al lado de Jin Zixuan al interior del
templo, donde su hermana tenía un improvisado hospital con varios ayudantes. Después de
salir del shock inicial, en medio del bosque, Wen Ning había sido el primero en atender a Lan
Wangji, gracias a los conocimientos de su secta y su hermana, logró detener el sangrado y
mantener al alfa con vida.
Pero Wen Ning no podía negarlo, había hecho mucho daño, y aunque no había alcanzado
ningún órgano de Lan Wangji ya que se había detenido a tiempo y el cuerpo del joven alfa era
bastante musculoso, si había dañado el lado lateral de su abdomen, donde había varios vasos
importantes, que debían ser sanados de inmediato o él terminaría muriendo desangrado.
“Déjenlo aquí, con cuidado” Ordeno Wen Qing, quien ya había preparado una cama en su
improvisado hospital: “¿Pusiste las hojas que te dije? Muy bueno A-Ning, lo hiciste bien…”
“Gracias hermana…” Susurró Wen Ning, sin poder evitar sentirse culpable, pues gracias él
era que Lan Wangji se encontraba herido.
Temblando con suavidad, temiendo que en cualquier momento vería morir a Lan Wangji, Jin
Zixuan dejó al joven alfa en la camilla, tomándose el trabajo de acomodar la almohada bajo
su cabeza, intentando que estuviera cómodo…
“Llama a mis asistentes, no hay tiempo que perder” Dijo Wen Qing mirando a su hermano:
“Tenemos que operarlo ahora, y asegurarnos de que no pierda más sangre”.
“Entendido, iré por ellas ahora” Dijo Wen Ning, saliendo del templo corriendo.
Comenzando a retirar las túnicas ensangrentadas del cuerpo del alfa, para poder acceder a su
herida, Wen Qing observó al joven alfa de túnicas doradas, que lucía aterrado.
“Tu… Jin Zixuan, supongo” Dijo Wen Qing con calma: “Llama a Wei Wuxian, lo necesito
aquí”.
“Yo… No creo que él este en estado de ver a su alfa o estar aquí” Dijo Jin Zixuan,
recordando lo mal que se encontraba Wei Wuxian: “¿Para qué lo necesitas?”
“Para mantenerlo con vida, necesito que me ayude dándole parte de su energía espiritual, es
muy importante para que no muera durante la cirugía.”
“Si no te molesta, yo puedo hacerlo…”
“No te ofendas, pero parece que vas a vomitar, y ni siquiera hemos empezado. ¿En verdad
crees que vas a poder soportar ver como abro su piel y cierro sus heridas?” Cuestiono Wen
Qing.
Poniéndose firme, Jin Zixuan respondió: “Él salvó mi vida, tengo una deuda con él, y si lo
que puedo hacer es darle un poco de mi energía espiritual para sanarlo, lo hare sin duda…”
“Sin vomitar” Le advirtió Wen Qing, muy seria.
“Sin vomitar” Aseguró Jin Zixuan.
“De acuerdo, entonces empieza ahora, no hay tiempo que perder…”
Observando como Jin Zixuan cerraba los ojos para concentrarse, poniendo una de sus manos
cerca del lugar donde se suponía que estaba el núcleo dorado de Lan Wangji para pasarle su
propia energía, Wen Qing se preguntó dónde estaría Wei Wuxian y por qué no podía ir a
ayudar a su alfa.
En una situación normal, Wen Qing conociendo a Wei Wuxian, iría a buscarlo personalmente
para ayudarlo. Pero en ese instante, sus prioridades se encontraban en salvar la vida de Lan
Wangji, ya buscaría a Wei Ying para ayudarlo…
Suponiendo que nada malo sucedería.
***
“¿Por qué? ¿Por qué pasó esto?”
Podía sentirlo, como la energía resentida se acumulaba a su alrededor, de una forma muy
peligrosa, hasta el punto de volverla incontrolable.
“Lan Zhan… ¿Por qué?”
Arrodillado en el piso, apenas pudiendo sollozar con suavidad, Wei Wuxian intentó
tranquilizarse, pero le resultaba imposible, todavía sintiendo la sangre de su alfa en sus
manos, y la marca en su cuello arder de forma insoportable.
“Ya te lo había dicho… No hay un final feliz para las personas como nosotros, los que
escogemos este camino” Dijo una voz cantarina detrás de él: “Solo hay muerte, y
destrucción…”
“Basta…” Gimoteó Wei Wuxian.
La persona o cosa que menos quería ver estaba presente, en medio de toda esa energía, podía
sentirlo, la presencia de Wen Shima, como si se riera de él… Como si se estuviera
burlando…
“Cuando él muera, ¿Qué harás?”
“No va a morir, él no morirá” Dijo Wei Ying con seguridad.
“¿Cómo lo sabes?” Pregunta Wen Shima con una sonrisa: “¿Acaso puedes sentirlo?”
Cuando llegaron a los Túmulos Funerarios, Wei Ying pudo darse cuenta de que la respiración
de su alfa estaba disminuyendo, Lan Wangji estaba muriendo frente a sus ojos. Por eso se
sintió incapaz de seguir adelante, sin querer ver cuando él muriera, sabiendo que enloquecería
y no podría soportarlo.
Así que fue al bosque, lo más alejado que pudo del templo, intentando llorar y tranquilizarse
antes de enfrentar la realidad… Al darse cuenta de que su amado estaba muerto.
“Ahora mismo, en este instante…” Dijo Wen Shima, arrodillándose frente a Wei Wuxian:
“Puedo sentir como su corazón se ha detenido, y como su alma abandona su cuerpo…”
“¡No! ¡Basta! ¡No quiero escucharlo!”
“Una vida sin él, ¿Acaso tiene sentido? Cumple tu promesa Wei Ying, y yo te haré un último
favor…”
“¿Ultimo favor?”
“Voy a vengarme de la persona que ocasionó la muerte de tu alfa, el misterioso cultivador en
las sombras, yo sé quién es… Y voy a vengarlo por ti”.
Levantando la mirada incrédulo, Wei Ying llevó sus manos a su nuca, tocando tembloroso la
marca en su piel, dándose cuenta de que el ardor había desaparecido. Era verdad, Wei Ying
ya no podía sentir nada, su alfa ya no estaba…
“Solo cumple tu promesa Wei Ying… Y dame lo que me pertenece” Exigió Wen Shima.
Pensando que había perdido todo lo que amaba, lo que más le importaba en todo el mundo,
Wei Ying observó el fantasma de Wen Shima frente a él, extendiendo una mano en su
dirección.
Cerrando los ojos y dejándose ir, Wei Ying también extendió su mano en su dirección,
aceptando su destino.
***
Cuando el atardecer terminó, Lan Yuan se sentó en su cama y miró a todos lados confundido.
Sus padres tendrían que haber regresado ya, así que tembloroso, queriendo reunirse con ellos,
el pequeño omega se puso de pie y camino fuera de su pequeña cabaña en silencio.
Toda la secta Wen se encontraba consternada, después de tantas cosas que habían sucedido,
enterándose de que la secta Jin había ordenado cazarlos, culpándolos de varios crímenes, la
secta entera estaba en caos. Así que sin ser visto por nadie, mirando a casi toda la secta a las
puertas del templo, esperando a Wen Qing para tomar una decisión, Lan Sizhui empezó a
buscar a sus padres en la multitud, sintiéndose muy asustado.
“... Una bendición, saber que Lan Wangji está estable y sigue vivo, la líder Wen en verdad es
una genio de la medicina” Dijo uno de los ancianos entre la multitud.
“Un milagro, pero hubiera preferido que Jin Zixuan no estuviera metido en esto” Respondió
otra anciana: “Ahora están diciendo que Wei Gonzi lo secuestró, ¿Puedes pensar en esa
tontería?”
“Las personas de la secta Jin son unos idiotas…”
“Solo espero que el líder Jin descanse y recupere su fuerza para regresar a Lanling, solo él es
capaz de detener esta demencia…”
Mirando en dirección del templo, Lan Yuan pudo oler las feromonas de su padre, pero de una
forma muy suave, así que supuso que ya no estaba ahí. Pero por otro lado, sintiendo el aroma
de los lotos entre los árboles, comenzó a meterse en el bosque, buscando a su madre.
“¿Mamá?” Preguntaba el pequeño omega, sosteniéndose de los árboles para caminar de
forma correcta.
Finalmente tras varios minutos caminando, sintiéndose exhausto, el pequeño niño llego
prácticamente al final de la montaña, viendo la delgada figura del que solía ser Wei Ying,
dándole la espalda y mirando a la luna.
“¡Mamá!” Dijo Lan Sizhui sonriendo, reconociendo a Wei Ying: “¡Tengo hambre! ¡Ven
conmigo!”
Escuchando la suave voz en su espalda, Wei Ying no pudo evitar esbozar una suave sonrisa
en su rostro, girándose para ver al tambaleante cachorro detrás de él.
“¿Mamá?” Preguntó Wei Ying con bura: “¿Quién mierda es tu madre? ¿Crees que soy yo?”
Sintiendo feromonas amenazantes provenientes de Wei Ying, Lan Sizhui se quedó quieto,
comenzando a asustarse: “Pero tu dijiste…”
“Yo te dije que no eras mi hijo, que fui bueno, y te recogí de la basura Wen, que es lo que tú
eres” Dijo Wei Ying, acercándose al pequeño cachorro con paso rápido: “Tú no eres mi hijo,
tú no eres nada…”
Temblando con mucho temor, Lan Sizhui sintió como Wei Wuxian lo tomaba fuertemente del
cabello, haciéndolo gritar con dolor.
“Vuelve a llamarme mamá y te cortare la lengua, pequeño bastardo”.
Furioso, sintiendo nuevamente la energía resentida llenarlo de nuevo, Wei Ying arrojó al niño
al piso, dándose cuenta de que lo lastimaría si seguían juntos.
“Mamá, mamá, mamá… Tu maldita madre real no te quiso, ¿Porque yo debería quererte?
Cierra la boca, y no vuelvas a mirarme a la cara, pequeña basura…”
Dándole una última mirada llena de odio, observando como el pequeño niño estaba en la
tierra, llorando adolorido, Wei Ying continuó con su camino, en dirección a la salida de la
montaña.
***
Al igual que en la secta Yiling Wen, en la torre Koi todo había sido un caos desde la mañana,
desde el primer momento en el que las noticias de lo que había sucedido con Wei Wuxian y
los cultivadores Jin, junto con la desaparición repentina de Jin Zixuan, todo se había salido de
control.
“¡Claro que lo secuestro! ¡Mi pobre y querido hermano!” Gritó Jin Guangyao, llorando frente
al consejo de líderes de su secta: “¡Wei Wuxian se lo llevo a la fuerza! ¡Por qué está loco!”
Sentada al lado de Meng Yao, Jiang Yanli quiso intervenir de inmediato: “Mi hermano nunca
haría eso, estoy segura de que hay una buena explicación para todo esto, solo debemos
esperar a que A-Xuan regrese para que…”
“Si es que Zixuan regresa” La interrumpió Meng Yao: “Todos sabemos lo que Wei Wuxian
hace con los alfas que se lleva, como lo que hizo con Lan Wangji, ¡Va a matarlo!”
“Mi hermano menor no le hizo eso a su alfa”.
“Líder de la secta, ¿Acaso está yendo en contra de las palabras de la secta Lan? ¡Eso es un
insulto! Todos sabemos por las palabras de Lan Qiren que Lan Wangji fue secuestrado por
ese omega indecente, y que lo ha estado torturando hasta ahora, hasta llegar a ejecutarlo en
público como una señal de rebeldía, como lo que hizo hoy” Dijo Jin Guangyao, limpiando
varias lágrimas de su rostro: “¡No podemos permitir que le haga algo como eso a mi
hermano!”
Quedándose sin palabras, ya que no entendía como era que Meng Yao pudiera soltar tantas
tonterías en un solo instante, Jiang Yanli intercambió miradas con Jiang Cheng, quien estaba
cerca. Ambos tenían en gran estima a Jin Guangyao, pero ahora ellos no entendían como él
estaba comportándose de una forma tan demente, gritando y llorando incoherencias, algo ante
lo que ambos no sabían como actuar o que responder.
“Padre” Dijo Meng Yao, dirigiéndose al presidente del consejo: “Debemos actuar ahora. Sé
que en el pasado dijimos que no podíamos intervenir en Los Túmulos Funerarios ya que ellos
no nos habían hecho nada directamente. ¡Pero eso ya ha cambiado! ¡Ellos han secuestrado a
mi hermano! ¡No podemos permitirlo! ¡Debemos llevar a ejercito Jin a esa montaña para
salvar a Zixuan!”.
“No, basta” Dijo Yanli con fuerza, cansada de todos los gritos y el ridículo espectáculo que
estaba dando Meng Yao en ese instante: “Esto es demasiado precipitado. No sabemos nada,
ni siquiera sabemos que pasó en el bosque. No podemos causar una nueva masacre y tomar
una decisión tan precipitada…”
“Si perdemos más tiempo, ellos asesinaran a Zixuan, estoy seguro…”
“A-Yao, se más respetuoso, estás hablando de mi esposo y mi hermano menor” Dijo Yanli
con fuerza: “Hace 3 años prometimos que no tomaríamos nuevas represarías contra la secta
Wen por nuestro honor y nuestros principios, como con los horrorosos campos de castigo. Sé
que Zixuan hubiera querido eso, estoy segura…”
“Líder de la secta, lamento que su opinión en este momento no es válida para este consejo”
Dijo Meng Yao con furia: “Ya ha dejado en claro lo personal que es este asunto ya que el
criminal es su hermano. Lo entendemos, acaba de tener un hijo y perdió a su esposo, no está
en posición para tomar decisiones en este momento, debería cederle su lugar a una persona
competente como es mi padre, y retirarse para conservar su compostura…”
“¿Que estas queriendo insinuar?” Preguntó Jiang Yanli molesta: “¿Acaso estas diciendo que
no puedo tomar una decisión porque esto es personal para mí? ¡Claro que es personal! ¡Es mi
esposo de quien estás hablando! ¡Y es mi hermano menor a quien estas acusando! Tener en
claro la lealtad a mi familia y a los que amo no me hace incapaz de tomar mi posición como
líder de la secta Jin ahora, y todos tengan claro que voy a tomar mi puesto sin problemas”.
Como las leyes lo estipulaban, ante la falta del líder de la secta Jin, era la esposa del líder
quien debía tomar su lugar al frente de la secta. Siendo en este caso Jiang Yanli, que ahora era
la cabeza de ese consejo y frente a todos los presentes.
Conteniendo sus ganas de reír de forma burlona, Jin Guangyao dijo: “Veo que no se puede
razonar con usted ahora, Madam Jin. Pero yo no estoy dispuesto a permitir que mi hermano
sea asesinado por una persona como Wei Wuxian. Así que como líder de la secta Nie, yo voy
a mandar al ejército de mi secta por él y para salvarlo. Mientras que usted puede quedarse
aquí para organizar un funeral, ya sea el de mi hermano o el suyo.”
“Si tu alfa no te golpea y lo permite” Susurró Jiang Cheng, mirando la escena algo alejado.
Todo el consejo se encontraba algo contrariado, ya que en frente tenían la pelea de dos fuertes
omegas, sin saber en qué lado ponerse, pues cada uno de ellos tenía su propio punto y una
opinión valida. Sin embargo todos sabían que sin importar sus opiniones, era Jiang Yanli
quien tenía la última palabra al respecto, sin importar la decisión final de aquella reunión.
Todos pensaban eso, excepto Jin Guangshan, quien apoyaba completamente a su hijo, y tenía
una forma de burlar las órdenes de Yanli y hacer lo que Meng Yao deseaba.
Así que interviniendo en la discusión, aclarándose la garganta, el anterior líder de la secta Jin
dijo: “Debido a que no podemos llegar a un consenso en el consejo, y que ambas partes en
discusión tienen una opinión muy importante, creo que se debe llamar a la consciencia de
cada uno de nuestros soldados, y que cada uno decida si se quedara en la secta o si
acompañaran a los soldados Nie en su misión de rescate.”
“¡No se puede hacer algo como eso!” Negó Jiang Yanli furiosa poniéndose de pie, mirando a
todos muy enfadada: “Desobedecer mis órdenes, significaría traición, para cualquier
soldado… O miembro de la secta Jin”.
“Lo comprendo, señorita Jiang. Pero como lo decretan las leyes, en una situación como esta,
se puede declarar ley marcial por parte del consejo, y eso es lo que voy a decretar como
presidente” Declaro Jin Guangshan.
“No se atreva…” Dijo Yanli furiosa: “Sé que ninguno de ustedes me respeta aquí como su
líder, pero mañana cuando mi esposo regrese sano y salvo, y se entere de lo que han hecho,
los va a ejecutar a todos…”
“Mañana será un día nuevo, A-Li” Dijo Meng Yao, sin poder ocultar la satisfacción de su
voz: “Y cuando mi hermano regrese, tras ser rescatado por su fiel ejército y mi ejército, la
cabeza que será cortada tal vez sea la tuya…”
Incrédula ante lo que acababa de escuchar, dándose cuenta de que estaba luchando sola
contra la corriente, solo pudo ver como Jin Guanghsan se apresuraba en firmar un documento
oficial, que confirmaba la ley marcial, y como todo el consejo se retiraba, dejándola sola.
“A-Li, no puedo creer que esto haya ocurrido…” Dijo Jiang Cheng, acercándose a su
hermana rápidamente.
“No hay tiempo para lamentos, A-Cheng, tenemos que ir a la sala de mensajes” Dijo Yanli,
poniéndose de pie con algo de debilidad.
“¿Sala de mensajes?”
Sin entender a su hermana, Jiang Cheng la tomó de la mano, y ambos salieron rápidamente
por los pasillos de la torre Koi.
Jiang Cheng se encontraba en la secta Jin para apoyar a Yanli. La joven omega Jiang era
bastante frágil, así que le costaba mucho poder recuperarse tras un parto. Y así como había
ocurrido con su primer hijo, ella debía permanecer en reposo después de su segundo parto,
para lo que necesitaba a su querido hermano, quien gracias a sus conocimientos tras haber
cuidado a Lan Jingyi, era bastante bueno con los niños y era capaz de cuidar de sus sobrinos
con Yanli en cama.
“Sigue, detente” Suplicó Jiang Cheng, mirando a su hermana corriendo: “No deberías estar
haciendo esto, ha sido un día verdaderamente extenuante, especialmente para ti,
deberíamos…”
“A-Cheng, disculpa la expresión, pero el bastardo de Meng Yao no va a salirse con la suya”
Dijo Yanli realmente furiosa: “Quiere matar a nuestro didi con la excusa tonta de salvar a
Zixuan de un peligro inexistente, y yo no voy a permitirlo.”
“¿Que planeas hacer?”
“Él cree que es el único con un ejército a sus espaldas, pero yo no estoy sola, y tú tampoco”
Dijo Yanli mirando a su hermano a los ojos: “Debes mandar cartas a todo el consejo de
Yunmeng, informándoles de la situación, y pidiendo su ayuda. Necesitamos al ejercito de
Lotus Pier aquí, para apoyarme y detener al idiota de Meng Yao.”
“Yanli, si traes a nuestro ejército aquí, podrías iniciar una guerra, entre los que te apoyan a ti
y a él…”
“Lo escuchaste, mañana será un nuevo día, y si una guerra debe iniciar esta noche, yo estoy
dispuesta para salvar a nuestro querido A-Xian”.
Mirando los ojos decididos de su hermana, suspirando con suavidad, Jiang Cheng ni siquiera
tuvo que fingir que pensaba en la propuesta, como el nuevo líder de la secta Jiang tenía más
poder que Meng Yao o Yanli en sus propias sectas, así que sin consultar al consejo de su secta
podía ordenar a todo su ejército a venir a la Torre Koi de inmediato.
“Yo también estoy dispuesto, para salvar a nuestro didi, vamos a iniciar una guerra” Dijo
Jiang Cheng decidido.
***
Caminando por las calles de Lanling, Wei Ying solo pudo pensar en lo refrescante que se
sentía la fría brisa sobre su rostro, se acercaba el invierno, y muy pronto empezaría la época
fría en todas las sectas. El sentimiento de ese suave aire contra su piel lo hizo sentir vivo,
como no se había sentido desde hace más de 100 años.
“Es terrible” Dijo una de las vendedoras de uno de los comercios cercanos, hablando para
muchas personas frente a ella: “Ese omega, Wei Wuxian, no tiene ningún tipo de decencia,
¿Llevarse al joven líder Jin Zixuan? ¡Eso es un terrible insulto para todos nosotros!”
Negando con la cabeza de igual forma, una de las mujeres dijo: “¿Creen que desee hacerle lo
mismo que a Hanguang-Jun?”
“Es un omega indecente, que juega con la muerte y la obscuridad, atrapando alfas en sus
manos con embrujos y cosas terriblemente prohibidas para cualquier persona de bien. A mí
no me sorprendería en absoluto que lo haya llevado consigo para hacerle algo tan terrible…”
Escuchando esa conversación a lo lejos, Wen Shima ahora convertido en Wei Wuxian, no
pudo evitar sonreír de forma burlona, pero prefiriendo ignorarlos. Hubiera sido tan fácil como
levantar su flauta e invocar un par de los fantasmas que estaban bajo su orden, y esas tontas
personas morirían. Pero él no tenía ningún interés en asesinar personas normales de la ciudad,
había vivido con rumores semejantes toda su vida, y nunca había tenido el deseo de tomar
venganza por ello.
Además, él sabía que esas personas terminarían arrodilladas a sus pies muy pronto.
Wen Shima había pensado por mucho tiempo en la razón de su fracaso. Durante un tiempo, él
fue el gobernante superno de todo Qishan, el lugar más grande y próspero de la región. Él
había conseguido ese gran logro convirtiendo a su familia en los únicos gobernantes vivos de
la región, después de la guerra, solo quedaron ellos.
Y una de las razones de su derrota fue su incapacidad de ver a sus vecinos. Lanling que era
un lugar lleno de personas ricas y orgullosas que jamás llegaban a un acuerdo jamás, las frías
tierras de Gusu que apenas tenían un par de monjes y cultivadores dedicados a la divinidad,
Yunmeng que era más agua que tierra para gobernar, y Qinghe que solo eran frías montañas
de piedra.
Cuando los Jiang, Nie, Lan y Jin aparecieron como los respectivos líderes de sus regiones,
fue demasiado tarde para él. Todos se pusieron en su contra, incluso su propio hijo, y
viéndose sobrepasado por todos ellos, además de traicionado por su propia secta, fue
obligado a exiliarse a Yiling, y posteriormente asesinado y traicionado como una rata.
Eso no podía volver a ocurrirle.
Por eso Wen Shima pensó que lo mejor era asesinar a todos los líderes, a cualquiera que
quisiera ponerse al frente de una secta y plantarle cara, él iba a matarlo. Si no había más
líderes en esas tierras, nadie más podría ponerse en su contra, y él podría vivir una vida feliz
como el único gobernante de ese sitio por el resto de los años que le quedaban a Wei Wuxian.
Niños, mujeres, ancianos… Wen Shima había perdido su humanidad hace mucho, y solo le
quedaba el resentimiento. Sin piedad, estaba dispuesto a eliminar a todos, solo para
convertirse en el líder supremo.
Mirando la Torre Koi, reconociéndola como el lugar principal de esa ciudad, Wei Ying se
acercó a sus pierdas, encontrando a varios cultivadores armados, como si estuvieran
esperando a alguien.
Pero era obvio que no lo esperaban a él… Había alguna otra situación que los había puesto
alertas, y eso a Wei Ying le parecía interesante.
Sin ningún temor, el joven omega se acercó lo más cerca que pudo a esos cultivadores,
quienes lo miraron como a un idiota.
“Tú, basura omega, no se tiene permitido pasar cerca de la residencia Jin ahora, regresa a tu
casa antes de que te arrestemos” Amenazo uno de los cultivadores del lugar.
“¿En verdad? ¿Puedo preguntar por qué está prohibido?” Preguntó Wei Ying con una sonrisa.
“No te metas en los asuntos de la secta, regresa a casa ahora, es la última advertencia…”
“Yo te hare una última advertencia” Dijo Wei Ying tomando la flauta de su cinturón:
“Muévete de mi camino, o te matare”.
Pronto todos los cultivadores presentes dejaron de reír, reconociendo de inmediato la flauta y
al omega que tenían en frente, que no era una persona común.
Mientras el suave sonido de una tonada se escuchaba en toda Lanling.
Capítulo 46.

“De acuerdo, está todo bien…” Susurró Jiang Cheng, acercando al pequeño niño a su cuerpo
para tranquilizarlo.
Mucho más pronto de lo previsto, fuertes sonidos se escucharon las afueras de la torre Koi,
seguidos de varios gritos desesperados. Sin saber que estaba ocurriendo, ya que ambos
hermanos Jiang no podían confiar en nadie, y ninguno de ellos tenía el valor de ir a averiguar
lo que sucedía.
Así que ante la amenaza creciente, sintiéndose completamente solos, ni siquiera podían
confiar en los sirvientes de la secta, así que ambos hermanos se encerraron en las
habitaciones de los hijos de Yanli, quienes se notaban muy asustados y alterados con los
gritos.
“Eres un alfa fuerte, ¿Verdad A-Ling?” Preguntó Jiang Cheng con suavidad: “Demuéstralo
entonces…”
Luciendo muy somnoliento y a la vez muy asustado, el pequeño niño heredero de la secta Jin,
se aferraba fuertemente a su tío omega, mientras lloriqueaba fuertemente.
“Soy fuerte…” Susurró el pequeño alfa, quien apenas estaba aprendiendo a hablar con
propiedad.
“Entonces demuéstralo y tranquilízate, estas asustando a tu pequeño hermano” Susurró Jiang
Cheng, acariciando suavemente los cabellos de su sobrino.
“No…” Se negó Jin Ling, aferrándose con más fuerza aun a las túnicas de Jiang Cheng.
Suspirando con suavidad, mientras sostenía en sus brazos a su pequeño bebé recién nacido,
Jiang Yanli no pudo evitar sonreír y negar suavemente con la cabeza, mientras seguía
tratando de calmar a su bebé y hacerlo dormir de nuevo.
Pero sus esfuerzos fueron en vano, pues los gritos volvieron a escucharse, seguidos de varios
sonidos muy fuertes.
“Demonios…” Dijo Jiang Cheng asustándose un poco también, ya que los ruidos eran cada
vez más fuertes: “¿Que está pasando? ¿Acaso nuestra secta llegó tan pronto?”
“No lo sé, probablemente lo hicieron… O tal vez son la secta Lan…” Sugirió Yanli.
En medio de su desesperación, temiendo por la vida de su hermano, Jiang Cheng no solo
mandó cartas de auxilio a su propia secta, también mandó una carta pidiendo ayuda a Lan
Xichen. Después de todo, Lan Wangji también estaba involucrado en el asunto, y Jiang
Cheng lo usó de excusa para poder hablar con el alfa.
Sintiéndose algo avergonzado, dándose cuenta de que sus intenciones habían sido
descubiertas por su hermana, Jiang Cheng abrió los labios, queriendo responder. Sin embargo
se quedó en blanco, mirando por una de las ventanas, observando como por dos direcciones
diferentes, miembros de la secta Lan y Jiang llegaban volando en sus espadas.
“No puede ser…” Dijo Jiang Cheng en un susurro.
“¿Qué pasa?” Preguntó Yanli confundida, girándose en dirección a la ventana de igual forma.
“La secta Lan y nuestra secta acaban de llegar. Si ellos recién están llegando ahora, ¿Con
quién estaban peleando los miembros de la secta Jin todo este tiempo?”
Notándose muy confundidos, ambos hermanos intercambiaron miradas, hasta finalmente
decidir salir a ver qué demonios estaba ocurriendo.
Metiendo a Jin Ling y al nuevo hijo de Yanli en sus camas, Yanli y Jiang Cheng salieron
corriendo de la habitación de los niños hasta las escaleras exteriores de la torre Koi, por
donde podían ver la entrada de la secta.
“A-Xian…” Gimoteó Yanli aterrorizada, reconociendo a su pequeño hermano en medio del
campo de batalla, siendo rodeado por varios miembros de la secta Jin.
“¿Wei Wuxian? ¿Qué demonios está haciendo aquí?” Preguntó Jiang Cheng.
Ambos hermanos se asomaron al exterior, con el frio de la noche golpeando sus rostros,
siendo la energía resentida extendiéndose como raíces por todo el lugar, llenándolo todo con
su obscuridad.
Y al centro de todo, se encontraba Wei Ying.
Sonriendo con suavidad, mientras hacía girar su flauta en sus dedos, Wei Ying peguntó:
“¿Acaso están cansados?”
“¡Ríndete ahora! ¡Es nuestra última advertencia! ¡No queremos hacerte daño!” Gritó uno de
los cultivadores Jin que amenazaba a Wei Ying.
“Es una pena, porque yo si quiero dañarlos… A todos…”
Llegando a los jardines de la secta, los miembros Jiang se exaltaron, viendo las intenciones
de los cultivadores Jin de atacar a Wei Ying, quien aún consideraba parte de su secta.
Mientras que los Lan, siendo dirigidos por Lan Xichen que había abandonado su reclusión
por la carta de Jiang Wanyin, también decidieron intervenir, siendo aliados de la secta Jiang.
Pero los Nie, dirigidos por Nie Mingjue y rodeando a Wei Wuxian, querían seguir adelante y
asesinar a ese omega, como lo había ordenado Meng Yao. Y los Jin se encontraban al medio
de todo ese desastre, sin tener a nadie que los dirigiera, teniendo que enfrentarse entre ellos y
Wei Ying, aunque no entendían el por qué.
Pero aquella batalla fue detenida cuando una fuerte tonada en flauta se escuchaba por todo el
lugar, haciendo que la tierra temblara, y que los cadáveres se levantaran. Mientras que un
extraño amuleto de hierro comenzaba a volar por los aires.
“Wei Ying… No lo hagas…” Suplicó Jiang Cheng, temiendo lo que ocurriría.
Y así como él temía, aquellas criaturas convocadas por su hermano, pronto comenzaron a
atacar a todos en la entrada de la secta, sin importar si eran Jiang o Jin, Wei Wuxian estaba
atacando a todos.
“Tengo que bajar, Xichen esta ahí abajo, tengo que ir…” Dijo Wanyin aterrorizado,
queriendo salvar a ese alfa.
“A-Cheng, no lo hagas, por favor te lo suplico” Pidió Yanli, tomando a su hermano de un
brazo: “Ven conmigo, hay algo mejor que podemos hacer…”
“¿Algo mejor? ¿Qué cosa podría ser mejor?”
Mordiendo uno de sus labios con nerviosismo, Yanli respondió: “Sé que no queríamos
hacerlo, pero… Tendremos que hablar con Zixuan y… Lan Wangji.”
***
Lloriqueando con suavidad, aun temblando lleno de miedo, el pequeño Lan Yuan salió del
bosque en dirección a la secta Yiling Wen, buscando a su padre. Al llegar, se encontró con
todos los miembros de la secta reunidos a las afueras del templo de la montaña, todos ellos
hablando con Jin Zixuan.
Después de salvar la vida de Lan Wangji, Jin Zixuan se tomó su tiempo para hablar con los
Wen, y disculparse con ellos por todas las atrocidades que les hicieron en su nombre. Así
supo lo difícil que se había vuelto la vida para ellos, las demandas que tenían para regresar a
sus sectas, y como querían ser perdonados por los pecados de Wen Ruohan. Mientras que el
líder Jin hacia todo tipo de promesas, asegurando que cuando regresara a casa, iba a
ayudarlos a todos ellos a regresar a sus hogares y a conseguir el perdón de las demás sectas.
Quedándose al lado de Jin Zixuan, Wen Qing se sorprendió cuando a lo lejos, pudo ver a A-
Yuan llorando, mientras se acercaba a ellos buscando a su padre.
“¿A-Yuan? ¿Qué pasó?” Preguntó Wen Qing acercándose al pequeño omega muy asustada:
“¿Estas herido? ¿Qué te pasó?”
“Quiero a mi papá…” Sollozó el pequeño omega desconsolado, permitiendo que Yanli lo
cargara.
Viendo ese escenario a lo lejos, Jin Zixuan se notó muy sorprendido, ya que aun a esa
distancia pudo reconocer a ese niño como el hijo de Lan Zhan y Wei Ying, por las obvias
similitudes físicas. Dudando un poco, Jin Zixuan se acercó a Wen Qing, queriendo ver mejor
a ese niño que no dejaba de llorar.
Al acercarse, Jin Zixuan confirmo sus sospechas, asegurándose de que Lan Sizhui era el hijo
de Wei Wuxian y Lan Wangji. Pero eso lo confundía, ya que nadie afuera de Yiling sabía que
ellos habían tenido un hijo, y como líder de una secta, Jin Zixuan tuvo una duda con su deber,
ya que no sabía si tenía que ejecutar a Wei Ying y ese bebé por aquel crimen.
Tranquilizándose un poco al estar en los brazos de Wen Qing, Lan Yuan levantó la mirada
con curiosidad, viendo a ese alfa desconocido frente a él. Y suavizando su expresión,
intentando apartar los malos pensamientos de su mente, Jin Zixuan sonrió, acariciando
suavemente los cabellos de Lan Yuan.
“Hola pequeño, mi nombre es Zixuan, y soy tu tío” Se presentó el líder de la secta Jin con la
voz suave: “¿Cuál es tu nombre?”
Mirando a ese hombre con cautela, el pequeño susurro: “Mi nombre es Yuan…”
“Ya veo, es un gusto conocerte, pequeño Yuan…” Dijo Zixuan, tomando suavemente la mano
del pequeño omega, notando que estaba herido: “¿Que te pasó en la mano? Parece una
raspadura muy fuerte, ¿Acaso te caíste en el bosque?”
A-Yuan negó con la cabeza, respondiendo: “Mi mamá me lo hizo cuando me arrojó al
suelo…”
Sorprendidos, Jin Zixuan y Wen Qing intercambiaron miradas, sin entender lo que estaba
ocurriendo. Pero viéndose en el exterior, rodeados de todos los miembros de la secta Yiling
Wen que escuchaban todo con curiosidad, Wen Qing y Jin Zixuan se apresuraron a ir al
interior del templo para tener un poco más de privacidad.
“Ya veo… De acuerdo, vamos a curar esa herida, ¿está bien A-Yuan? Si tienes otra herida,
puedes mostrarme, también la curare” Dijo Wen Qing con una sonrisa.
Más tranquilo, luciendo muy distraído, Lan Yuan preguntó: “¿El señor que huele bien vendrá
con nosotros?”
“¿Huele bien?”
“Mi tío…”
“Si, él también vendrá” Dijo Wen Qing, dándole una mirada de reojo a Jin Zixuan detrás de
ella.
Sin poder evitarlo, a pesar de la tensa situación, Jin Zixuan sonrió suavemente, caminando
detrás de Wen Qing al interior del templo donde estaba su hospital improvisado.
Dejando al pequeño omega en una camilla, Wen Qing comenzó a limpiar la herida de su
mano para curarla. Mientras que Lan Yuan seguía aparentemente encantado con Jin Zixuan,
mirándolo fijamente.
“¿Entonces te gusta cómo huelo?” Preguntó Zixuan volviendo a reír.
A-Yuan negó con la cabeza, diciendo: “No… Aquí huele bien…”
Con su otra mano, Lan Sizhui señaló el pecho de Jin Zixuan, en medio de sus túnicas.
Pensativo por un segundo, Jin Zixuan busco entre su ropa, encontrando un pequeño caballito
hecho de papel, el cual le entregó a Lan Sizhui.
“¿Esto huele bien?” Preguntó Zixuan.
“¡Si!” Respondió el pequeño omega animado, tomando el caballito de papel con su mano
sana.
“Lo hizo mi hijo mayor, Jin Ling” Dijo Zixuan, viendo como A-Yuan sonreía mirando
fijamente ese caballito de papel: “¿A que huele?”
“Huele como la flores rojas que hay en el rio…” Dijo Lan Yuan: “Huele a flores y dulces
rojos… Yo amo la flores y los dulces rojos, huele bien”.
Mirando esa escena de reojo, Wen Qing no pudo evitar preguntar: “Líder la secta Jin, ¿Su
hijo es un alfa?”
“Si, lo es, mi hijo mayor es un alfa” Respondió Jin Zixuan.
“Los destinados pueden olerse desde muy jóvenes, incluso antes de que puedan percibir las
feromonas de cualquier otra persona. Debería considerar presentar a su hijo con A-Yuan,
especialmente ahora, que ambos son pequeños y aun no tienen un compromiso arreglado…”
Sugirió la joven Wen, intentando ser sutil en su sugerencia.
Sintiéndose muy confundido, aun sin poder entender completamente lo que había querido
decirle aquella mujer, Jin Zixuan solo pudo ver como A-Yuan tocaba aquel pedazo de papel
con cuidado, como si lo estuviera apreciando, como si realmente fuera algo valioso para él.
Pero antes de que Jin Zixuan pudiera continuar con sus preguntas, intentando entender lo que
Wen Qing había querido decirle, todos escucharon fuertes ruidos desde la camilla de al lado,
la camilla que le pertenecía a Lan Wangji.
“Lan Gonzi” Dijo Wen Qing alarmada, dejando a Lan Yuan para acercarse a la otra camilla:
“Por favor, no haga eso, acaba de ser operado…”
Sin embargo Lan Wangji no la escuchó, y forzando su cuerpo, se puso de pie de la camilla,
acomodando sus túnicas y disponiéndose a salir de la habitación.
Al ver a su padre de pie, Lan Yuan grito: “¡Papá!”
Sin importarle sus heridas, y sosteniendo el pequeño caballito de papel contra su pecho, Lan
Yuan salto de la camilla y corrió hacia su padre, abrazándolo por la pierna.
“A-Yuan…” Susurró Lan Wangji, acariciando la cabeza de su pequeño con dulzura,
olvidando su dolor por un momento al verlo.
El aspecto de Lan Wangji no era nada favorable, a pesar de que pudo mantenerse con vida a
pesar de la terrible herida en su abdomen, había perdido mucha sangre, así que se notaba
bastante cansado y muy pálido, demostrando que necesitaba mucho descanso para poder
recuperarse.
“Hanguang-Jun” Dijo Jin Zixuan, intentando intervenir en la conversación: “Por favor
regrese a la camilla, aún no está en condiciones de…”
“Recibir un mensaje, de su esposa…” Dijo Lan Wangji, mirando a ese alfa de reojo: “Hay
una emergencia en la Torre Koi, debo acudir de inmediato.”
“¿Una emergencia en mi secta? ¿A qué se refiere?”
Escuchando el nuevo ajetreo dentro del templo, Wen Ning se apresuró a entrar al templo,
encontrando a Lan Wangji despierto, y sin poder evitar sentirse culpable, pensó en
disculparse…
Pero cuando Wen Ning abrió la puerta, una nueva mariposa mensajera entro en el templo,
acercándose a Jin Zixuan. Recibiendo el mensaje y guardando silencio por algunos segundos,
Jin Zixuan se notó tan tenso y preocupado como Lan Wangji, cruzando miradas con el otro
alfa en silencio.
“Entiendo, debemos ir ahora” Dijo Jin Zixuan, muy serio.
“¿Que? Esto es una locura, Hanguang-Jun está demasiado herido, no podrá subirse a su
espada…” Dijo Wen Qing, intentando negarse.
“Tendrá que hacerlo” Respondió Jin Zixuan.
Aun sin entender, pero sabiendo que no podría negarse, Wen Qing volvió a suspirar,
agachándose para tomar a Lan Yuan y separarlo de su padre, prefiriendo mantenerse al
margen a pesar de lo mucho que le molestaba lo sucedido.
Pero Wen Ning no planeaba mantenerse apartado, y acercándose a ambos alfas dijo: “Yo
también iré con ustedes…”
“No se ofenda, Wen Gonzi, pero este es un asunto que tiene que ver solo con Lan Wangji y
conmigo” Dijo Jin Zixuan, ya que no quería arriesgar de nuevo a Wen Ning.
“Tiene que ver con Wei Gonzi, ¿Me equivoco? Pude sentirlo, energía resentida en el bosque
de la montaña, algo terrible ocurrió, y ustedes quieren detenerlo. Esto también tiene que ver
conmigo, yo también soy responsable por este desastre, así que déjeme repararlo, se lo
suplico” Pidió Wen Ning decidido: “Además, mi hermana tiene razón, Lan Gonzi está
demasiado débil, usted no podrá llevarlo a Lanling sin ayuda, si vamos los dos juntos, Lan
Gonzi podrá viajar de una forma más cómoda”.
Dudando un poco, Jin Zixuan se quedó en silencio, hasta finalmente responder: “De acuerdo,
puede venir con nosotros, Wen Gonzi.”
Mientras que Lan Wangji se mantenía al margen de esa conversación, sin importarle quien
iba a ir con ellos a Lanling, únicamente queriendo ir ahí cuanto antes.
Así que con ayuda de Jin Zixuan y Wen Ning, Lan Wangji se subió sobre Bichen, y los tres
juntos partieron sobre sus espadas en dirección a la torre Koi.
Mientras que Wen Qing se quedó junto a Lan Yuan y su secta, temiendo lo peor… Viendo
como el pequeño niño omega lloraba desconsolado, llamando a su padre en gritos.
***
En una emergencia de tal calibre, todos los cultivadores de la secta Jin fueron llamados a la
entrada de la torre Koi, incluida aquellos cultivadores que apenas iniciaban con su
entrenamiento. Fue por eso que Xue Yang se sorprendió tanto al ser llamado a la batalla, pues
él estaba fingiendo ser un aprendiz a penas.
Escuchando los gritos cada vez más cerca, Xue Yang tuvo un muy mal presentimiento, ya
que por sus propias capacidades, podía sentir la energía resentida en todo el lugar y escuchar
la tonada de la flauta maldita a lo lejos.
Y al llegar al campo de batalla, viendo los cadáveres pelear contra los vivos, Xue Yang supo
que algo muy malo estaba ocurriendo.
Decidiendo dejar de fingir, tomando su espada, Xue Yang corrió en medio de la multitud,
peleando contra varios cadáveres vivientes con mucha habilidad, queriendo ver lo que
ocurría. Y al llegar al centro del lugar, escuchando cada vez más cerca la tonada de esa flauta,
Xue Yang se quedó helado.
Frente a sí mismo, a solo un par de pasos de distancia, Xue Yang pudo ver a Wei Wuxian,
quien usando el sello del tigre de estigio, estaba controlando a todos esos cadáveres. Sin
embargo, aquel hombre frente a él no era Wei Ying, podía lucir como él e incluso imitarlo,
pero Xue Yang se dio cuenta de inmediato que no era él.
Y cuando su mirada se encontró con la de aquel hombre, Xue Yang comprobó su teoría, ya
que Wei Ying bajó la flauta de sus labios, y le dedico una sonrisa burlona a Xue Yang.
Eso fue suficiente para él, Xue Yang supo que a pesar de toda su habilidad y conocimiento,
aquel hombre era mucho más fuerte, y que no había oportunidad de vencerlo.
Mandando al demonio su misión y a toda la secta Jin, Xue Yang soltó la espada que le habían
dado, y corrió fuera del campo de batalla, decidido a escapar de ahí cuanto antes. Y para su
sorpresa, los cadáveres vivientes dejaron de atacarlo en su escape, Wei Wuxian estaba
dejándolo ir.
Desde una de las ventanas de la torre Koi, Jin Guangyao presionó una de sus manos en
puños, mirando como Xue Yang escapaba con vida. En un intento de deshacerse de él, Meng
Yao dio la orden de llevar a todos los cultivadores a la batalla, incluso los aprendices. Pero
una vez más, Xue Yang había arruinado sus planes, y había escapado con vida.
Dejando a sus tres hijos a cargo de sus asustadas niñeras, Meng Yao salió de su habitación,
decidido a encontrar a Xue Yang para obligarlo a regresar a la batalla, y que así pudiera
matarlo.
“¿Qué crees que haces?” Pregunto Meng Yao furioso, entrando en la habitación de Xue Yang
sin tocar.
Después de haberse quitado las incomodas túnicas de la secta Jin, Xue Yang se apresuraba a
preparar su equipaje, sonriendo con burla al ver a Meng Yao entrando a su habitación.
“¿Qué crees que hago? Me voy de aquí, antes de que esto termine mal” Respondió Xue Yang.
“No puedes” Se negó Jin Guangyao con enfado: “Regresa a la batalla, es una orden.”
“¿Una orden? ¿Quién demonios te crees tú para ordenarme?”
“¡Hiciste un trato con ellos! Tú debes obedecerme a mí, hacer lo que te ordene…”
Terminando de arreglar su equipaje, Xue Yang se giró en dirección a Meng Yao y le dijo: “A
diferencia tuya, Meng Yao, yo puedo renunciar a este trabajo de mierda, no soy un esclavo
como tú. Y eso hago, estoy renunciando, me voy… Y te aconsejo que hagas lo mismo.”
“¿A qué te refieres?” Preguntó Jin Guangyao, notando lo asustado que estaba Xue Yang.
“Pude verlo, esa persona… No era Wei Ying, o por lo menos no él que conocíamos.
Demonios, incluso su olor, todas sus feromonas han desaparecido, ¿Sabes lo que significa?
Que su núcleo dorado se infectado por completo con energía resentida” Explicó Xue Yang:
“No sé quién o que está dentro de él ahora mismo, pero no me sorprendería que desde ahora
quiera que lo llamen líder Wen”.
“¿Estas sugiriendo que Wen Shima poseyó su cuerpo? Eso es ridículo… Wei Wuxian sabe
que si lo deja entrar, perderá todo, a su familia y toda su vida. Yo lo conozco, él jamás lo
habría hecho, no con su esposo y un hijo en Yiling”.
“Tal vez Lan Wangji está muerto, tal vez lo mate de verdad, ¿Eso te parece un motivo bueno
para darle tu cuerpo a un fantasma resentido?” Preguntó Xue Yang sonriendo suavemente:
“Es solo un consejo, antes de que esa cosa gane más poder y destruya toda esta ciudad, toma
a tus tres pequeños bastardos, y escapa de aquí a un lugar muy lejano, a cualquier ciudad que
Wen Shima no considere importante. Si te quedas, vas a morir como todos los demás de tu
secta…”
Dejándose llevar por las palabras cripticas de aquel joven, Jin Guangyao susurró: “No puedo
hacerlo, Mingjue… Mi alfa… Él aún está ahí, no puedo dejarlo.”
“Entonces si está ahí, va a morir, si es el Wen Shima del que todos leímos en los libros de
historia, sabes bien que él no deja que ningún soldado escape de él, no deja a nadie vivo”
Dijo Xue Yang, abriendo la ventana de su habitación: “Además, ¿En verdad me estás
diciendo que te enamoraste de ese alfa? No creo que seas tan idiota, ¿Verdad? Tú y yo no
podemos enamorarnos, estamos malditos, lo condenaras a una vida de tristeza a tu lado…
Que egoísta, Meng Yao.”
Dejándose llevar por la rabia, viendo como aquel desagradable chico se preparaba para saltar
por la ventana, Meng Yao dijo: “Aun si renuncias, a ellos no les agradará lo que hiciste, que
me abandonaras. Si te encuentran, te mataran, y no creo que lo que te hagan será mejor a lo
que Wei Ying o Wen Shima puedan hacerte”.
“¿Crees que estoy asustado de morir?” Preguntó Xue Yang con burla: “No tengo un alfa, no
tengo una familia, no tengo nada. Aun si muero, no tengo nada por lo que luchar que valga lo
suficiente la pena. Además, gracias a los pergaminos que me enseñaste, mi cultivo se ha
fortalecido, así que si ellos vienen por mí… Tal vez serán los que deberán temerme.”
Dándole una última sonrisa a Meng Yao, Xue Yang se burló una última vez de él antes de
irse: “Adiós, Meng Yao.”
Viendo como aquel chico saltaba por la ventana y escapaba, Jin Guangyao dijo: “Hasta
nunca, maldita peste…”
Aun dudando un poco de las palabras de aquel joven, ya que Meng Yao jamás creería en las
palabras de Xue Yang, el omega Jin se asomó por una de la ventanas del pasillo, viendo
nuevamente la entrada de su secta, observando fijamente a Wei Wuxian, que peleaba sin
descanso contra todos los cultivadores de sectas presentes, ganando a la mayoría…
“Wen Shima… ¿En verdad eres tú?” Preguntó Jin Guangyao en un susurro.
Pensando solo en su alfa, sabiendo que si no hacía algo Mingjue moriría, Meng Yao pensó
rápidamente en una forma de encargarse de ese fantasma y Wei Ying de una vez por todas,
acudiendo a su último recurso.
Subiendo las escaleras hasta uno de los últimos pisos de la torre, Meng Yao pudo ver en uno
de los balcones de la secta como ambos hermanos Jiang se asomaban a ver la pelea, tan
asustados como todos los demás. Preparándose para una actuación, Meng Yao dejo que varias
lágrimas se derramaran por sus mejillas, corriendo en dirección de los Jiang.
“¡A-Li!” Dijo Meng Yao, acercándose a la joven omega para abrazarla, mientras lloraba
desconsolado.
“A-Yao… ¿Que sucede?” Pregunto Yanli sorprendida, sin rechazar el abrazo de su cuñado.
“Necesito tu ayuda, tienes que ayudarme. Tenemos que ordenar que la pelea se detenga,
tienes que hablar con los soldados, debemos evacuar la Torre Koi de inmediato, debemos
abandonar Lanling cuanto antes…”
“¿Por qué dices eso? ¿Qué sucedió?” Preguntó Yanli cada vez más confundida.
“Tenemos que tomar a los niños, a tus hijos y a los míos, debemos escapar ahora” Dijo Jin
Guangyao alarmado: “Esta pelea no va a terminar bien, debemos irnos ahora…”
“¿Por qué dices eso A-Yao?” Pregunto Yanli confundida: “Mi hermano está ahí abajo, y es
solo él en contra de todas las sectas. Pronto A-Xian entrara en razón y va a detenerse…”
“Lo sé, porque yo también confió en la bondad de tu hermano… Pero ese no es A-Xian…”
Ante la evidente preocupación de su hermana por Jin Guangyao, Jiang Cheng no pudo evitar
poner los ojos en blanco, ya que él nunca había perdonado a Meng Yao por las cosas que
hizo, por las muchas cosas que él había hecho. Y a diferencia de él, Yanli que era una persona
tan dulce, jamás podía guardar rencor contra otra persona, y de inmediato terminó
perdonando a su cuñado.
Pero algo que este había dicho llamó la atención de Jiang Cheng, quien pregunto: “¿A qué te
refieres con que ese no es mi hermano?”
Levantando la mirada y observando a Jiang Cheng, Meng Yao dijo: “Porque creo, según mi
experiencia en la cultivación, que tu hermano ha sido poseído por un espíritu maligno”.
“¿Cómo pudo ocurrir algo como eso?” Pregunto Jiang Cheng confundido.
“No lo sé, tu hermano suele unirse con cosas obscuras, como las que está usando ahora
mismo para pelear. ¿Acaso no hay una posibilidad de que algo así suceda?”
Suspirando con calma, Jiang Cheng respondió: “Entonces no hay que preocuparse por eso…
Si él de verdad esta poseído, yo bajaré y arreglare todo en un solo segundo, Zidian puede
expulsar espíritus resentidos”.
Sonriendo para sus adentros, aun al lado de Yanli, Jin Guangyao observo como detrás de
Jiang Cheng, varios rayos de color violeta se hacían visibles.
***
Escuchando los gritos a lo lejos, Lan Wangji se forzó a sí mismo a mantenerse erguido sobre
su propia espada. Estaba tan débil después de su operación que estaba a punto de caer al piso,
sin embargo seguía firme, dispuesto a salvar a su omega.
“No puede ser…” Susurró Jin Zixuan mirando la torre Koi.
Debajo de ellos, una gran masacre estaba teniendo lugar, con los desconcertados cultivadores
de todas las sectas, peleando con varios fantasmas y cadáveres resentidos, mientras a la vez
intentaban detener a Wei Ying, quien estaba al centro de toda esa multitud, controlando todo
con su flauta.
“Debes detenerlos” Exigió Lan Wangji mirando la escena: “Wei Ying los está atacando como
defensiva”.
“Aun si pudiera hacerlo… ¿Crees que ellos van a escucharme en este caso?” Preguntó Jin
Zixuan.
“De todo este sitio, eres el único al que todos respetan, aun si no lo consigues, debes
intentarlo.”
Bajando de sus espadas en el tejado de la torre, Jin Zixuan le dio una última mirada a sus
compañeros, para luego bajar de un salto, y disponerse a detener a su secta. Mientras que
esperando a recuperar el aliento, luciendo muy débil, Lan Wangji también bajó a la batalla,
siendo ayudado por Wen Ning.
Abriéndose paso en medio de la multitud, Jin Zixuan intento alcanzar a todos los miembros
de su secta, sean grandes cultivadores o algún aprendiz, ordenándoles a todos que dejaran de
atacar y se alejaran. Sorprendiendo a todos los presentes, quienes no esperaban ver ahí a Jin
Zixuan, pensando que había muerto por los rumores que salieron de la Torre Koi. De esta
forma la mayoría de los cultivadores de la secta Jin se replegaron, y los demás cultivadores
de otras sectas los siguieron, concentrando sus esfuerzos en repeler a los seres malignos,
negándoles la entrada a la torre Koi o la salida a la ciudad de Lanling a las afueras de la secta.
Mientras que cada vez más cerca, Lan Wangji y Wen Ning estaban luchando por alcanzar a
Wei Wuxian, habiendo pasado a los soldados, pero ahora estaban luchando contra la energía
resentida acumulada alrededor de Wei Ying, que casi no podía permitirles acercarse.
Dándose cuenta de que era un esfuerzo inútil, Wen Ning dijo: “Hanguang-Jun, deberíamos
pensar en retroceder y encontrar una mejor forma de detener esto”.
“Solo un poco, tengo que acércame a él para hablarle, solo así se detendrá” Dijo Lan Wangji
decidido.
Notando la determinación en el otro alfa, tras un largo suspiro, Wen Ning decidió tomar la
delantera, y poniéndose frente a Lan Wangji, le abrió el camino para permitirle avanzar en
medio de toda esa energía, estando cada vez más cerca de Wei Wuxian.
Todavía siguiendo adelante por su propia determinación, Lan Wangji no dejó de caminar sin
importar el dolor de su herida o la impenetrable barrera de la energía resentida a su alrededor.
Decidido a alcanzar a su omega y detenerlo.
Completamente concentrado en seguir tocando su flauta, Wei Ying fue tomado por sorpresa
cuando sintió los fuertes brazos de un alfa rodeándolo, que lo hizo detenerse de golpe y mirar
hacia atrás confundido.
“Wei Ying…” Susurrus Lan Wangji.
Dándose cuenta de lo que estaba pasando, una suave sonrisa se esbozó en los labios del
omega, que dijo: “Por un momento, pensé que eras… No importa, siempre de blanco, como
si fueran a un funeral. Eso no ha cambiado, en más de 100 años…”
Jadeando por el esfuerzo, Lan Wangji apoyó su rostro en el hombro de su omega, mientras lo
abrazaba por la cintura. Pero pronto noto algo extraño, pues su alfa estaba aullando en su
interior, al no poder encontrar al omega de Wei Ying. Y ese dulce aroma a flores de loto,
había desaparecido también. La persona que Lan Wangji tenía en sus brazos se parecía a Wei
Wuxian, pero no era él.
“Wei Ying…” Susurró Lan Wangji confundido.
“¿Acaso has venido a detenerme? Que romántico…” Dijo Wei Ying sin dejar de sonreír: “Es
inútil, ríndete.”
“¿Quién eres?” Pregunto Lan Wangji furioso.
“¿Acaso no me reconoces, mi querido esposo?” Pregunto el omega con cierta burla: “Mi
nombre es Wei Wuxian, el líder de la secta Yunmeng Jiang, y que pronto será el líder de todas
las demás sectas”.
“Si vas a imitarlo tendrás que hacerlo mejor, Wei Ying jamás se llamaría a si mismo líder de
todas las sectas. Deja de ensuciar su dulce nombre con tus palabras…”
“Creo que ya es demasiado tarde para eso, mi querido esposo Lan Wangji…”
Mirando fijamente los furiosos ojos dorados de su alfa, Wei Ying intentó desenvainar a
Suibian para quitarse a Lan Wangji de encima. Sin embargo no pudo hacerlo, ya que un grito
escapó de sus labios, y su espada cayó al piso.
“No me interesa quien seas, pero no eres el líder de la secta Yunmeng Jiang, esa persona soy
yo…” Dijo Jiang Cheng.
Al principio, Jiang Wanyin dudó seriamente de que Jin Guangyao dijera la verdad, y aun así
decidió bajar a la batalla para detener a su hermano. Sin embargo tras escuchar la pelea entre
Lan Wangji y Wei Wuxian, a Jiang Cheng no le quedó duda, él estaba poseído. Y
aprovechando la distracción de Wei Ying, en un rápido movimiento, Jiang Cheng lo ataco
con Zidian, quien se había enredado en su muñeca dándole una fuerte descarga.
Jadeando adolorido y mirando su muñeca, Wei Wuxian gritó: “¿Cómo te atreves? ¿Sabes
quién soy?”
“No, pero tampoco me interesa, solo despídete” Dijo Jiang Cheng con frialdad: “Voy a
purificarte.”
Un nuevo grito se escuchó en todo el campo de batalla, mientras los cadáveres caían al piso,
y la energía resentida también disminuía. Usando toda su energía espiritual, Jiang Cheng
había atacado a Wei Ying con Zidian, dispuesto a sacar aquel ser obscuro de su cuerpo.
Mientras que Lan Wangji lo sostenía fuertemente para evitar que él escapara.
Aun sintiendo los fuertes choques eléctricos en todo su cuerpo, Wei Wuxian se las arregló
para levantar la mirada y sujetar a Zidian con su otra mano. Incrédulo ante lo que estaba
ocurriendo, Jiang Cheng sintió como Wei Ying comenzaba tirar fuertemente del arma
espiritual, como si quisiera arrastrarlo.
“¿Qué? ¿Por qué no funciona?” Pregunto Jiang Cheng intentando resistirse: “¿¡Por qué no
funciona!?”
Usando todas sus fuerzas, Wei Wuxian tiró de Zidian en su dirección, para atraer también a
Jiang Cheng. Y con un fuerte grito suyo, una nueva explosión de energía resentida hizo
retumbar el suelo, mientras todos los cadáveres resentidos volvían a levantarse.
Cayendo al piso por aquella nueva explosión de energía resentida, Lan Wangji ya no pudo
sujetar más a Wei Ying, quien con toda libertad, acercó a Jiang Cheng hacia sí mismo, y en
un rápido movimiento lo tomó del cuello.
Mirando esa escena a lo lejos, resguardado por su propia secta, Lan Xichen susurró: “A-
Cheng…”
Sintiéndose aterrorizado, aun sin saber que estaba ocurriendo, Jiang Cheng solo pudo toser,
sintiendo como aquella cosa que tenía la apariencia de su hermano comenzaba a
estrangularlo.
“¿Sabes por qué no funciono?” Preguntó Wei Ying en un susurro: “Porque esto no es una
posesión, él me ofreció su cuerpo de forma voluntaria, eso es algo que ni tu ni nadie pueden
deshacer.”
“¿Qué le hiciste a mi hermano?” Preguntó Jiang Cheng con dificultad.
“Su alma está fragmentada, ha desaparecido de esta tierra para siempre, y solo un milagro de
XueYu TanHua podría traerlo de vuelta” Dijo Wei Ying con burla: “¿Tan desesperado estas
por hallar a tu hermano? Entonces te ayudare, ve a la ciudad de los muertos con el gran rey
de los fantasmas San Lang y suplica por él… Para que te devuelvan su alma... Pero no será
un viaje agradable, porque vas a tener que morir.”
Sin poder responder a esas palabras, Jiang Cheng soltó un fuerte quejido de dolor, mientras
sentía como la mano de Wei Ying se estrechaba aún más contra su cuello, amenazando con
romperlo.
Mirando aquella escena desde uno de los balcones de la torre Koi, Yanli grito: “¡A-Cheng!”
Dándose cuenta de que su plan había fallado, y que ni siquiera Zidian fue capaz de detener a
Wei Ying, Jin Guangyao dijo: “Tendremos que huir…”
Sin embargo Yanli no le hizo caso, y lo más rápido que pudo, comenzó a correr para ir a la
parte baja de la torre, donde estaba dándose la batalla.
“¡A-Li!” Gritó Meng Yao viéndola irse: “¡No puedes bajar ahí! Es una batalla enorme, por
favor regresa… ¡Terminaras muerta si intervienes!”
Pero eso no le importó a la joven, solamente pensando en sus queridos hermanos, que ahora
la necesitaban.
Capítulo 47.

Furioso, golpeó con su puño la madera de la mesa de aquella reunión, mirando a todos los
asustados líderes de las diferentes sectas frente a él.
Si pudiera, él los hubiera matado a todos, pero sabía que no podía hacerlo, no con miembros
de la secta Lan ahí presentes. Así que dándoles una última mirada de desprecio, Wen Shima
se giró y salió del salón principal de la secta Wen, su propia secta, dejando a todos los líderes
anonadados, mientras que su propio hijo Wen Mao hablaba con ellos disculpándose por el
mal temperamento de su padre.
Suspirando con enfado, Wen Shima se sintió enfadado consigo mismo, ya que pensaba que
perdió una gran oportunidad, pues al terminar la guerra de Qishang antes de que todos esos
tontos líderes de secta existieran, para él hubiera sido muy fácil simplemente haberlo
conquistado todo, haber tomado todo que quisiera y cuando lo quisiera.
Pero ahora ya era imposible.
“¡Líder de la secta Wen!”
Mientras caminaba rápidamente por los parajes desiertos a las afueras de su propia secta,
pudo escuchar como lo llamaba, pero no se giró ni un solo momento, avanzando incluso más
rápido.
“¡Líder Wen!”
Llegando a un lato risco, desde el cual se podía observar el mar a lo lejos, Wen Shima soltó
un suave jadeo de sorpresa, sintiendo como unos fuertes brazos lo abrazaron desde la espalda,
asustándolo ligeramente, algo que lo hizo sonreír.
“Shima…” Escuchó como él decía en su cuello.
“¿Por qué haces eso?” Reclamó Wen Shima en un susurro: “Siempre me asustas cuando lo
haces, cuando me abrazas de esa forma…”
“Me gusta asustarte…”
Wen Shima sonrió, llevando sus propias manos a las muñecas de su alfa, tocando suavemente
sus muñecas, y presionando sus túnicas blanquecinas entre sus dedos.
Wen Shima sabía que era amor verdadero.
A diferencia de otros destinados, Wen Shima jamás pudo oler las feromonas o sentir al alfa
de su amado, pero aun así se había enamorado perdidamente de él. Sin necesidad de alfas u
omegas, Wen Shima estaba perdidamente enamorado del líder de la secta Lan.
“Túnicas blancas… ¿Acaso hay un funeral por aquí?” Preguntó Wen Shima con un tono de
burla: “Las odio, siempre que las veo pienso que estas preparándote para mi muerte.”
“Si no te gustan puedes quitármelas…”
“¡Cállate!” Gritó Wen Shima avergonzado: “No es gracioso…”
Aun entre risas avergonzadas, Wen Shima cerró los ojos y soltó un suspiro, sintiendo como
su alfa apartaba su cabello y daba un cariñoso beso en su nuca, donde habían un centenar de
marcas de mordidas que el propio líder de la secta Lan había dejado en su piel en sus
momentos de romance en la noche, en un vano intento de vincularse con él. Algo imposible,
pues el omega de Wen Shima había muerto un par de años antes de conocer a su alfa.
“A mí me parece gracioso…” Dijo el alfa aun besando suavemente su piel: “Escribí algo para
ti durante el viaje hasta tu secta, pensaba decírtelo en la noche cuando nos viéramos, pero
podría decírtelo ahora…”
Arañando suavemente la piel de los brazos de su alfa, Wen Shima susurró: “Debería matarlos
a todos, esos malditos bastardos, siempre juzgando mis decisiones y mirándome como un
monstruo, debería matarlos a todos…”
Durante un largo tiempo, Wen Shima había considerado esa posibilidad, solo necesitaría 5
minutos y dejar salir toda su energía resentida, y todos ellos estarían muertos, incluso su
insoportable hijo…
“No puedes” Negó su alfa de inmediato.
“Pero…”
“Yo confió en ti, Shima. Conozco la pureza de tu corazón…”
“No creo que haya nada puro en mi…” Replicó Wen Shima con burla.
“Lo prometiste. Nunca lastimarías a nadie de la secta Lan.” Le recordó su alfa.
“Tu estarías a salvo…”
“Pero no podría vivir con la idea de que tu lastimaste a alguien de mi secta o de nuestras
sectas vecinas. La guerra fue larga, no hay necesidad de más sangre o sufrimiento, y eso
también te incluye a ti, ya no tienes que estar tan enfadado.”
Refunfuñando, Wen Shima bajó la mirada con enfado. De alguna forma, su alfa siempre se
las arreglaba para calmar su enfadado corazón, y lo volvía una persona buena. Lo hacía
sentirse como cuando solo era solo un niño, antes de la guerra, cuando Wen Shima aun creía
en la felicidad y la paz.
“Shima, yo te conozco, mejor de lo que piensas. Aun en esta vida o en otra, tu corazón es
bueno, y siempre buscaras la justicia y la felicidad de las personas infelices, tu eres bueno.”
“¿En esta vida o en otra? ¿Y qué pasaría si en otra vida yo fuera un omega destinado a otro
alfa?” Preguntó Wen Shima.
“Entonces yo estaría feliz por ti, y lo celebraría, sin importar el lugar donde este. Tu felicidad
es lo único que deseo, ni tu amor o el placer de tu cuerpo, verte sonreír… Es lo que me hace
más feliz…”
Cerrando los ojos, Wen Shima se dejó envolver por el cariño de su alfa, sintiendo como si
todo su interior cambiara solo al escuchar sus palabras, y la obscuridad abandonara su
corazón.
“Solo aguanta un poco más, tu hijo pronto cumplirá 13 años, y podrás dejarle tu puesto como
líder. Entonces iremos junto a Gusu y nos casaremos, y te prometo una vida llena de felicidad
a mi lado, donde ya no tendrás que preocuparte por la guerra o una vida de tristeza, la gente
de Gusu te amara tanto como yo te amo” Aseguró su alfa intentando ser tranquilizador.
“13 años…” Susurró Wen Shima: “¿No es un castigo demasiado cruel tener que esperar ese
tiempo para poder estar al lado de una persona que amas?”
“Por ti voy a esperar el tiempo que sea necesario.”
Wen Shima y su alfa se habían conocido poco tiempo después de que el omega tuviera a su
único hijo, y desde entonces ese insufrible alfa Lan se había enamorado de Wen Shima, sin
dejarlo solo jamás. Pero su perseverancia tuvo un buen resultado, ya que Wen Shima terminó
perdidamente enamorado de él, pero sin poder estar juntos, ya que Wen Shima aún tenía un
deber grande con la secta Wen, que él mismo formo, y con la región que Qishang que aún
estaba recuperándose después de los estragos de la guerra.
Sin embargo pronto su deber terminaría, ya que su hijo podría tomar su lugar, y Wen Shima
podría ir con su alfa. Y a pesar de lo que cualquier persona podría pensar, Wen Shima en
verdad añoraba poder ir a Gusu, imaginándose a sí mismo en la nieve junto a su alfa,
escuchando sus poesías de amor todo el día, y calmando el fuego en su interior con la paz de
las frías montañas.
Ese era el más grande sueño que Wen Shima había tenido, sin saber que jamás se cumpliría.
Así que sonriendo con suavidad, enredando sus dedos con los de su amado, Wen Shima
susurró: “De acuerdo, quiero escuchar tu poesía. Pero sabes que soy un crítico duro, te diré si
es basura si lo considero, aun si son versos de tu amor extraño y erótico para mí.”
“No esperaría menos de ti… Mi hermosa luna, tan pura como la nieve” Respondió el alfa,
dándole un nuevo beso en el cuello.
“Te amo… Lan An…” Susurró Wen Shima, cerrando los ojos con fuerza.
***
Un jadeo escapó de los labios de Wen Shima, mirando cómo frente a él, una joven vestida de
blanco se había lanzado a sus brazos, sosteniéndolo con fuerza.
¿Cómo era posible? Nadie, ni siquiera Lan Wangji podían traspasar su barrera de energía
resentida, pero aquella joven había pasado sin problemas, alcanzándolo para abrazarlo.
Entonces Wen Shima supuso que era el cuerpo de Wei Wuxian, que se negaba a hacerle daño
a esa joven, probablemente la mujer más preciada para Wei Ying.
“A-Xian… Mi querido A-Xian…” Sollozo la mujer, acariciando su rostro y mirándolo a los
ojos: “¿Qué haces?”
Wen Shima no supo que responder, ya que él no era Wei Ying, y aun así su cuerpo
comenzaba a reaccionar de una forma extraña frente a esa mujer. Ella lo estaba volviendo
débil.
“A-Cheng es tu hermano, no puedes dañarlo, por favor A-Xian, detente…” Suplicó ella,
tomando uno de los brazos de Wen Shima.
Aun mirando los ojos llorosos de aquella extraña, Wen Shima sintió como el agarre en el
cuello de Jiang Wanyin se debilitaba. Hace un par de segundos había estado a punto de
romperle el cuello, pero por la influencia de aquella joven en su nuevo cuerpo, estaba
rindiéndose.
“Shijie…” Susurró Wen Shima, dejando salir aquel nombre como si fuera un quejido de sus
labios.
“Estoy aquí A-Xian, ¿Puedes reconocerme? A-Xian…” Susurró la joven, volviendo a abrazar
a Wen Shima y besando una de sus mejillas con delicadeza.
Y aunque el cuerpo de Wei Wuxian comenzaba a rendirse y a confundir a Wen Shima, el
verdadero líder Wen seguía ahí adentro, muy despierto y aun determinado a cumplir su deseo,
así que los diversos cadáveres resentidos alrededor suyo se dirigieron hacia Yanli, dispuestos
a atacarla para recuperar la conciencia de Wen Shima.
Dándose cuenta de lo que estaba pasando, temiendo por la vida de su esposa, Jin Zixuan
intentó correr para protegerla, llamándola a gritos por su nombre.
Mientras que al otro lado del lugar, Lan Xichen también estaba luchando con la energía
resentida a su alrededor, intentando alcanzar a Jiang Cheng para defenderlo.
En medio de aquel caos, levantándose del piso con ayuda de Wen Ning, Lan Wangji tuvo una
idea. Sabía que era algo demasiado arriesgado, ya que ni siquiera sabía quién había tomado
posesión del cuerpo de su amado. Pero gracias a Yanli supo que esa cosa aun tenia
sentimientos, y que el cuerpo de su amado Wei Ying también podía reaccionar a estímulos
externos, así que lanzando una moneda al aire suplicando por suerte, Lan Wangji hizo algo
muy osado.
“Sobre el mar crece una luna de satín. Los dos la contemplamos desde extremos diversos.
Triste, lamento la noche tan larga… y me acuerdo de ti.” Dijo Lan Wangji en voz alta, casi en
un grito, para que su voz pudiera escucharse en todo el lugar.
Al escuchar esas palabras, Wen Shima ahogó un jadeo, ya que de inmediato pudo reconocer
las palabras de la persona que alguna vez amo en esas frases, aunque nunca había escuchado
ese poema.
Aunque no podía ver la reacción del omega frente a él, Lan Wangji continuó adelante:
“Siento el rocío que nos moja. Me duele no poder atrapar un rayo de luz y ofrecértelo.
Regreso y me tiendo en el lecho. Quizás pueda verte en un sueño.”
“Lan An…” Gimió Wen Shima, mientras las lágrimas comenzaban a derramarse de sus ojos.
Toda su mente era un caos, mientras que los recuerdos de la persona que alguna vez amo
atormentaban sus pensamientos, haciéndolo debilitarse, mientras la energía resentida
comenzaba a debilitarse, y el sello del tigre de estigio cayó al piso.
Corriendo en su dirección, uno de los últimos cadáveres resentidos que quedaban en pie
corrió en dirección a Yanli, levantando su espada para atacarla. Sin embargo saliendo de la
multitud, Jin Zixuan levantó su espada y detuvo a ese ser obscuro, recibiendo un profundo
corte en un brazo, pero impidiendo que Yanli muriera.
Escuchando el grito de dolor de su alfa, Yanli soltó a su hermano, girándose para ver a su
alfa, acudiendo en su auxilio de inmediato.
Y sintiéndose mas alentado por lo que veía, Lan Wangji continuó: “Me preguntas cuándo
volverás. No lo sé. Los estanques y las colinas están inundadas en otoño. Quién sabe cuándo
podremos despabilar las velas, sentados, al pie de la ventana y hablar de esta lúgubre e
interminable noche de lluvia, llamada vida sin ti mi amada luna…”
Perdiendo por completo la fuerza, rompiendo a llorar desconsolado, Wen Shima finalmente
soltó a Jiang Cheng, cubriendo su rostro con sus manos, soltando un lastimero grito de dolor,
llamando a su alfa en susurros.
Viendo caer a su amado, Lan Xichen también corrió en medio de la multitud, y logró atrapar
a Jiang Wanyin antes de que su cuerpo cayera al piso. Tosiendo descontrolado y al borde de
la inconsciencia por la asfixia, Jiang Cheng miró los preocupados ojos azules del alfa que
alguna vez amo, quien llamaba su nombre de forma desesperada pero sin poder responderle.
“Es la primera hora de la noche y mis lágrimas brotan; destrozado tengo el corazón. Mi
amado Shima aún no ha venido. Debe estar perdido en la Calle de las Flores. A la tercera
hora duermo; entonces mi amor viene en el sueño; compartimos nuestra almohada, y riendo,
felices, saboreamos los placeres del lecho.”
“Basta…” Suplicó Wen Shima destrozado, girándose para ver a Lan Wangji, todavía parado
detrás de él a un par de pasos de distancia.
Sin embargo Lan Wangji no se detuvo: “El viento sopla mientras rompe el alba, las campanas
suenan bajo los tejados, me despierto asustado de mi sueño inconcluso. El lecho permanece
vacío, aún estoy solo…”
Sin poder aguantarlo más, Wen Shima caminó rápidamente en dirección a Lan Wangji,
dispuesto a hacerlo callar. Pero una vez más, viendo las túnicas blancas de aquel alfa, al igual
que la cinta blanca en su fuente, Wen Shima no pudo hacer nada, quedándose en blanco
mientras lo miraba fijamente.
“¿Me parezco a él?” Preguntó Lan Wangji en un susurro.
Sonriendo con suavidad, Wen Shima respondió: “¿Tu? Jamás… Lan An era el hombre más
hermoso que piso la tierra… Tú no eres ni una sombra de lo hermoso que era…”
“¿Debería continuar?”
Dudando por un segundo, ya que esa era una pregunta que había evitado todo el tiempo, Wen
Shima finalmente preguntó: “Era suya, ¿No es verdad? Nunca la había escuchado, en verdad
mejoró sus dotes de escritor con el paso del tiempo…”
“Fue la última que escribió para ti, pocas horas antes de morir” Explicó Lan Wangji con
calma: “Creí que merecías escucharla. Se todas las poesías que él escribió para ti, si quieres
puedo decírtelas todas…”
“¿Por qué las leíste?” Preguntó Wen Shima en un susurro.
“Ver tantos libros amontonados, con cientos de páginas, miles de poemas y cartas dedicadas a
una sola persona. Quería saber por qué mi ancestro pasó toda su vida enamorado de ti,
amándote tanto como para hacer eso todos los días, una carta y un poema nuevo, canciones
de amor, y el más grande honor, crear una técnica de cultivo solo para poder hablar contigo.
¿Por qué?”
Sintiendo la culpa volver a recorrer todo su cuerpo, mientras volvía a soltar un grito de
agonía, Wen Shima sujeto su rostro con las manos, mientras los recuerdos volvían a
atormentarlo. Todas las malas decisiones, todos los terribles finales, y el dolor…
“¿Dónde está?” Preguntó Wen Shima desesperado: “Su espíritu, no pude hallarlo en el
mundo de los fantasmas, ¿Dónde está?”
Dudando un poco, Lan Wangji respondió: “Como última voluntad, el primer líder Lan pidió
fragmentar su espíritu. Pensaba que tú no reencarnarías, y él no quería regresar a un mundo
sin ti. No está en ningún lugar.”
Cerrando los ojos con culpa, sabiendo que el alma de su amado alfa estaba perdida para
siempre, Wen Shima dejó de llorar, sintiendo un gran dolor en su corazón. Entonces lo
descubrió, gracias al cuerpo de Wei Wuxian, él supo que aun podía amar, tanto como Wei
Ying amaba a ese alfa que tenía en frente.
“Gracias… Por leerme su ultimo poema” Dijo Wen Shima, sintiéndose derrotado.
Sin perder más tiempo, Lan Wangji pidió: “Regrésamelo.”
“¿Qué?”
“Hare lo que quieras” Dijo Lan Wangji con una clara desesperación en su voz: “Te recitare
todos sus poemas, los mil que escribió para ti, leeré todas sus cartas, tocare Inquiry hasta que
mis dedos sangren para buscarlo. Hare lo que sea, solo deja que Wei Ying regrese a su
cuerpo.”
Sonriendo con lastima, Wen Shima susurró: “No creo que eso sea posible…”
“Tu inventaste esta técnica, y si eres tan brillante como mi ancestro aseguraba, eres la única
persona que sabe cómo traerlo de vuelta… Por favor, te lo suplico. Si tanto lo deseas, incluso
te daré mi cuerpo para que puedas regresar a la vida… Solo… Regrésame a mi omega.”
Bajando la mirada, Wen Shima pensó en su alfa, seguro de que su amado Lan An hubiera
hecho lo mismo, algo que lo hizo sonreír.
“Definitivamente, los miembros de la secta Lan cambian sus rostros, pero jamás sus ideales,
y mucho menos su tonta y alocada forma de amar una sola vez” dijo Wen Shima con una
sonrisa: “¿Tú también le escribes poemas extraños a Wei Ying?”
“No” Respondió Lan Wangji: “Wei Ying no es una persona que acepte ese tipo de cariño, se
avergonzaría y terminaría riendo.”
“No imaginaba menos de una persona como Wei Wuxian, un idiota. Pero es tu idiota.”
Mirando a Lan Wangji a los ojos, Wen Shima pidió: “Me preguntaste que quería para hacer el
esfuerzo de traerlo de vuelta, cuando despierte, llévalo a Gusu para que sea feliz en la nieve,
y escríbele un poema, aun si se ríe y muere de la vergüenza, quiero que lo hagas, será un
castigo apropiado para ese imbécil.”
Antes de que Lan Wangji pudiera responder, Wei Ying cerró los ojos, y cayó inconsciente en
los brazos de su alfa.
“¡Wei Ying!” Gritó Lan Wangji asustado.
Tomando a su omega en sus brazos, cuidadosamente lo bajó al suelo, notando como su
respiración se había detenido. Temiendo lo peor, Lan Wangji posó una de sus manos en el
pecho de su omega, dejando de sentir los latidos de su corazón.
Wei Ying estaba muerto.
***
Abrió los ojos mirando el cielo estrellado. Sintiéndose extrañado, Wei Ying se sentó en el
suelo, y miró a uno de sus lados, donde había una fogata, y una persona sentada al otro lado.
“Eres realmente escurridizo” Dijo Wen Shima con molestia: “Reunir los fragmentos de tu
alma me llevó varias horas, y ya andabas haciendo desastres por la ciudad fantasma.
Seguramente Sang Lan querrá matarme por haberte traído aquí…”
Aun confundido, Wei Wuxian llevó una mano a su frente, intentando recordar. Lo último que
había sentido era un profundo dolor, cuando su alma se desprendió de su cuerpo, y después
de eso en un solo segundo, vio como todo su cuerpo se rompía y su alma finalmente se
fragmentaba. Pero eso no dolía, ya nada dolía cuando morías.
“¿Dónde estamos?” Preguntó Wei Ying, notando que no estaban vivos, pero tampoco en el
reino de los muertos.
“¿Eso importa?” Preguntó Wen Shima: “Volví a unir tu alma, y ahora te permito volver a tu
cuerpo, eso es lo único que importa.”
Sentándose frente al fuego, Wei Ying cerró los ojos y soltó un suspiro, preguntando: “¿Acaso
te aburriste de estar vivo? Lo entiendo, todo ahí es una basura…”
“¿Acaso no quieres regresar?” Preguntó Wen Shima, sin muchas ganas de conversar.
“¿Cuál sería el caso? Lan Zhan…”
“Está vivo idiota, deja tu ridículo drama” Ordenó Wen Shima con molestia.
Sufriendo un ligero shock, Wei Ying no supo que más decir, mirando a Wen Shima
desconcertado.
“Vete ahora” Ordenó de nuevo el omega.
“¿Debería agradecerte?” Preguntó Wei Ying dudoso: “Gracias por esta experiencia extraña,
dolorosa y horrible…”
“Eres un idiota” Se quejó Wen Shima furioso.
“Si, como sea” Dijo Wei Ying poniéndose de pie, ahora siendo el que quería apresurarse a
irse: “¿Cómo puedo regresar?”
Tardando un poco en responder, Wen Shima le pregunto: “¿Sabes quién es Lan An?”
“¿Esto es una clase de historia?” Se quejó Wei Ying molesto: “Eh… Era un fundador de
algo… Algo importante. ¿La secta Nie? No, era… ¿La secta Jin?”
“Lan, maldito idiota, ¿A qué demonios te suena eso?” Preguntó Wen Shima cada vez más
furioso.
“¿Siempre estás tan enfadado?” Preguntó Wei Ying riendo un poco. “Como sea, no lo
olvidare, creo que este es el adiós…”
“No es el adiós.”
“¿Qué? ¿Volverás a intentar tomar mi cuerpo? Lo siento, pero dolió mucho, no voy a dártelo
de nuevo…” Se negó Wei Ying en rotundo.
Levantando la mirada para ver los ojos de Wei Wuxian, Wen Shima respondió: “Nos vemos
en diez años, Wei Wuxian, mi mejor aprendiz del cultivo demoniaco.”
Quedándose muy extrañado, Wei Wuxian sintió como su cuerpo era absorbido por una
extraña luz blanquecina, y como nuevamente todo volvía a doler…
***
Abrió los ojos soltando un fuerte grito de dolor, todo su cuerpo dolía, Wei Wuxian estaba tan
adolorido que incluso creía que volvería a desmayarse por ese horrible sentimiento.
“¡Wei Ying!”
Jadeando confundido, aun con el dolor insoportable quemando su cuerpo, Wei Wuxian miró a
su alfa, admirando su belleza.
“Lan Zhan…” Susurró Wei Ying, a punto de llorar por el dolor.
“Mi amado omega, mi esposo…” Susurró Lan Wangji besándole la frente: “Creí que te había
perdido…”
Por varios segundos, hubo una gran conmoción en toda la secta Jin, quienes de inmediato
rodearon a la pareja, algunos con verdadero desconcierto al saber que Wei Wuxian estaba
muerto, y otros con el deseo de verlo muerto.
Sin embargo Wei Wuxian había abierto los ojos, y un nuevo desconcierto recorrió a todos los
presentes, quienes no creían que ambos estaban casados.
Sin embargo Wei Wuxian sonrió, y mirando los ojos de Lan Wangji dijo: “Jamás de
abandonaría, Lan Zhan, mi esposo…”
Confirmando así ante todos, que ellos supuestamente habían contraído un matrimonio.
***
“De verdad, eres un demente” Dijo Jiang Yanli, mirando la herida vendada de su alfa en uno
de sus brazos.
“Loco de amor por ti, mi querida A-Li” Respondió Zixuan con cierta vergüenza.
Después de la batalla, Jin Zixuan fue inmediatamente llevado a la sala de curaciones de la
secta, donde su herida fue tratada, y Yanli le reclamó en lágrimas por haberse sacrificado por
ella. Jin Zixuan sin embargo estaba tranquilo, al saber que podía ver un nuevo día al lado de
su amada.
Caminando al lado de Yanli, ambos fueron a la habitación de sus hijos, donde Jin Ling los
esperaba despierto, saltando a los brazos de su padre cuando lo vio. Tomando al bebé de su
cuna, Yanli lo llevó con su esposo y su hijo mayor, mientras los cuatro se acostaban en la
cama de Jin Ling como una familia, tranquilos después de la batalla.
“¿Qué fue lo que comiste?” Reclamó Jin Ling mirando a su padre molesto: “Puedo olerlo en
tu ropa…”
“¿Comer?” Preguntó Jin Zixuan sorprendido.
“¡Huele muy bien! ¡Yo también quiero comerlo! ¡Te exijo que me lo des!” Ordenó el pequeño
con un claro tono autoritario.
Al verlo, Yanli no pudo evitar reír, pero Zixuan se quedó pensativo, recordando lo que Wen
Qing le había dicho en ese templo hace unas horas.
“A-Li, ¿Recuerdas lo que me dijiste del compromiso de nuestros hijos?” Preguntó Zixuan
con calma: “Creo que deberíamos hacerlo, ahora que tu hermano ha tenido un hijo omega con
Wei Wuxian y ambos vivirán en Gusu, deberíamos… Hacer un compromiso entre Jin Ling y
Lan Yuan, puede que ambos se lleven mejor de lo esperado.”
“¿En verdad? Eso me encantaría, pero necesitaríamos la aprobación del consejo para eso…”
“Déjamelo a mi…”
Sonriendo con felicidad, Jiang Yanli besó delicadamente la mejilla de su esposo, pero pronto
su sonrisa se desvaneció, susurrando: “¿Mi hermano y su alfa irán a Gusu?”
“Ambos están casados, tu hermano como omega debe ir al lugar que su alfa le ordene. Y Lan
Wangji debe regresar a Gusu de inmediato, por una orden de El Receso Entre Las Nubes,
ellos deben ir ahí ahora” Explicó Jin Zixuan con un tono sombrío.
Esto de inmediato alertó a Yanli, quien dijo: “Pero ellos quieren castigarlos, no podemos…”
“No hay nada que pueda hacer, A-Li. Ellos dicen que están casados, y si lo están, pertenecen
a Gusu. Esa es la ley…”
Yanli se quedó callada, mirando el techo de la habitación de sus hijos, pensando con temor en
el futuro que les deparaba a su querido hermano y su familia.
***
Tras dejar su espada y su armadura, Nie Mingjue regresó a la torre Koi, yendo a la habitación
donde Meng Yao y sus hijos lo esperaban. Al verlo llegar, los ojos de Jin Guangyao se
iluminaron, y corrió a sus brazos a recibirlo.
“¡Mingjue!” Dijo Meng Yao emocionado.
“A-Yao…” Dijo Mingjue con calma, abrazándolo también: “Lo siento, lo que tú me pediste,
acabar con Wei Wuxian, yo no pude…”
“No importa, nada de eso me importa…”
Después de la partida de Xue Yang, Meng Yao estaba seguro de que nadie más envenenaría el
corazón de su amado alfa, y que ahora ellos podrían vivir una vida de felicidad y tranquilidad
juntos. Así que solo quiso abrazar fuertemente a su alfa, feliz de haberlo recuperado después
de esa horrible batalla.
“Solo quiero que me prometas que todo estará bien ahora, que volveremos a ser una familia,
y que seremos felices…” Pidió Jin Guangyao.
“Te lo prometo” Aseguró Mingjue sin dudarlo.
Y Meng Yao quiso confiar en su palabra, sin saber que en pocas semanas, tendría que
preparar un funeral.
***
Parado junto a una ventana en el salón principal de la secta Jin, Jiang Cheng tocaba su cuello
suavemente. Había sido atendido por los curanderos de la secta Lan, y ahora se encontraba
esperando su terrible destino, que sabía que se acercaba de forma inminente.
“A-Cheng…” Susurró Lan Xichen desde su espalda.
Tomando un poco de aire, viendo el amanecer fuera de la ventana, Jiang Cheng pregunto:
“¿De verdad quieres hacer esto?”
Lan Xichen guardo silencio, ya que él no estaba seguro de que en verdad quería hacerlo.
Después de la guerra, Jiang Cheng se negó a hablar con él, su compromiso y próxima boda
quedaron en algo nulo, y eso deprimió profundamente a Lan Xichen. Eso lo llevo a recluirse,
así como su padre al perder a su madre, Lan Xichen se había perdido a sí mismo al no tener a
Jiang Cheng.
Pero por todos esos años, no obtuvo una respuesta, y Lan Xichen creía que la verdad de lo
ocurrido era más fuerte que su dolor.
“Lo siento” Susurró Jiang Cheng: “Pero no voy a poder casarme contigo”.
“¿Por qué?”
Con un suave movimiento, Jiang Wanyin levantó su cabello, dejando ver la mordida en su
piel, una vieja cicatriz que aún se veía con dolor.
“Mi madre me dijo una vez que la marca de un omega era una maldición, principalmente
cuando… No es deseada” Dijo Jiang Cheng: “Esa noche, cuando él me marco y se vinculó
conmigo, una parte mía murió. Y esa parte era la que te amaba, o la que podría amar a
cualquier otro alfa. Yo seré suyo para siempre, aun si él está muerto, no poder tener otro alfa
al que amar en toda mi vida.”
Sabía que lo lastimaría, sin embargo esas palabras fueron indescriptiblemente dolorosas,
tanto que Lan Xichen no pudo soportarlas, y avanzo en dirección al omega, poniéndose frente
a la ventana para verlo al rostro, mirándolo a los ojos.
“No necesito una marca, no necesito vincularme contigo, yo te amo A-Cheng, aun sin
importar lo que pasó, de verdad te amo” Aseguró Lan Xichen.
“Sé que me amas, y por eso me alejare de ti” Dijo Jiang Cheng en un susurro: “Tu mereces
más que esto. Aun si me caso, esto será una sombra que jamás podremos eliminar, que nunca
seré… Tuyo.”
“Puedo soportarlo…”
“Pero yo no podré hacerlo, no sabiendo que tu tenías otra opción, que podrías haberte casado
con otro omega, que de verdad podría ser tuyo y vincularse contigo” Aseguró Jiang Cheng:
“Eres un alfa maravilloso Xichen, mereces toda la felicidad en esta vida, pero es una felicidad
que nunca podre darte.”
“A-Cheng…” Dijo Xichen, intentando volver a acercarse a él.
Sin embargo Jiang Wanyin cerró los ojos y dijo: “Esta es mi última decisión. No me casare
contigo, no me casare con nadie, así que te pido que lo respetes, por favor…”
Mirando el rostro decidido y dolido de su omega, Lan Xichen solo le acaricio el rostro,
aceptando la dolorosa decisión que él estaba pidiéndole. Después de todo, Lan Xichen lo
amaba demasiado, y por eso planeaba dejarlo ir.
Pensando que su charla había terminado, Lan Xichen bajó la mirada, dispuesto a irse. Sin
embargo Jiang Cheng aún no había terminado.
“A-Yi…” Susurró Jiang Cheng, limpiando la lágrimas de sus mejillas: “Nuestro… Bebé.
Dale una buena vida, que crezca bien y sano, que sea un cultivador fuerte y un buen alfa. Que
sea feliz… Por favor Xichen, haz eso por mí.”
Sonriendo con suavidad, reconociendo a su amado detrás de esa mascara de dureza, Lan
Xichen dijo: “Lo hare, te lo prometo.”
“Gracias…”
“A-Cheng” Dijo Xichen desde la puerta: “Siempre voy a esperarte. Y esa también es mi
decisión.”
Muy confundido, Jiang Cheng se giró en dirección a la puerta del salón, encontrándola
entreabierta, y el lugar completamente vacío.
Lan Xichen finalmente se había ido.
***
A-Yuan abrió los ojos con cansancio, viendo como había un gran revuelo en toda la secta.
Eran sus padres, que finalmente habían regresado.
Poniéndose de pie de la cama de la enfermería en la que se había quedado dormido, aun
sosteniendo con fuerza aquel caballito de papel contra su pecho, salió del templo dispuesto a
buscar a sus padres.
Lan Wangji y Wei Wuxian, que habían abandonado Lanling en caballos, siendo custodiados
por la secta Lan, llegaron a la secta Yiling Wen. Recibiendo palabras de aliento de todos a su
alrededor, Wei Wuxian solo busco a la persona que más le importaba en medio de esa
multitud.
“¡A-Yuan!” Dijo Wei Ying contento, mirando a su pequeño cachorro saliendo del templo para
buscarlo.
Bajando de su caballo, Wei Ying corrió en dirección a su cachorro, pero gran fue su sorpresa
cuando solo recibió rechazo, ya que A-Yuan se hizo para atrás atemorizado, mirando a su
padre con temor.
“Mi bebé, ¿Que te pasó en el brazo?” Preguntó Wei Ying confundido, notando a su pequeño
herido.
Sin embargo A-Yuan no respondió, y evitando a Wei Wuxian, el pequeño corrió en dirección
a su padre alfa, quien se acercaba a ambos con un paso más calmado por la herida que
todavía tenía.
“¡Papá!” Gritó A-Yuan emocionado, acercándose a su padre para abrazarlo.
Un abrazo que Lan Wangji correspondió, contento de ver a su pequeño nuevamente. Mientras
que Wei Wuxian se quedaba al margen, sin comprender el rechazo de su pequeño bebé.
“A-Yuan, mira, ahí está Wei Ying” Señaló Lan Wangji, notando la tristeza en el rostro de su
omega: “¿Acaso no tienes algo que decirle?”
Mirando en dirección a su padre omega, A-Yuan dudó un poco, pero por la petición de su
padre, finalmente dijo: “Hola A-Die…”
Wei Wuxian solo pudo sonreír con suavidad, pensando por primera vez en lo mucho que
deseaba que su pequeño lo llamara “mamá” una vez más.
***
“¡Hey!” Gritó Wei Wuxian furioso, mientras era empujado al interior de una sala vacía:
“¡Regresen! ¡Lan Zhan!”
Wei Wuxian sabía que su regreso a Gusu no sería agradable, estaba feliz de volver a un lugar
tan apacible, donde había tenido momentos realmente felices junto a su alfa. Sin embargo la
secta Lan ya no era lo mismo que antes, y al regresar, de inmediato separaron a Lan Wangji y
Wei Wuxian, llevando a Lan Wangji a la sala de castigo, mientras que Wei Wuxian y su
cachorro fueron llevados al pabellón del silencio, donde vivirían de ahora en adelante.
Los Lan no eran idiotas, a pesar de que Wei Wuxian ahora perteneciera a su secta tras su
supuesto matrimonio con Lan Wangji, él seguía siendo un Jiang, y si lo castigaban, causarían
una nueva guerra. Pero Lan Wangji era diferente, ya que él seguía y segura rigiéndose bajo
las leyes de Gusu.
“¡Oigan!” Gritó Wei Ying, golpeando la puerta con ira, dándose cuenta de que lo habían
encerrado ahí adentro: “¡Lan Zhan!”
Sin estar muy contento de haber sido dejado a solas con su padre omega, Lan Yuan se alejó lo
más que pudo de su padre, yendo a una de la ventanas del salón, mirando el exterior en
silencio, mirando como la nieve caía suavemente dejando un manto blanco en el lugar.
Después de gritar por varios minutos, sintiéndose agotado, Wei Wuxian se detuvo, sentándose
en el piso y mirando a la puerta, solamente queriendo a su alfa de regreso.
Sin embargo sus deseos fueron escuchados, y eso no le agrado.
Pocos minutos después, los guardias de la secta Lan abrieron nuevamente las puertas, y
dejaron caer a Lan Wangji al interior, quien estaba prácticamente inconsciente.
“¡Lan Zhan!” Gritó Wei Ying aterrado, mientras sostenía a su alfa con fuerza.
Sin saber qué hacer, sabiendo que no podía traumatizar a su cachorro de esa forma, Wei Ying
se la arregló para llevar a Lan Wangji a la habitación principal del pabellón, cerrando la
puerta y acostándolo sobre una cama.
“Lan Zhan…” Susurró Wei Ying entre un suave llanto: “¿Que paso? ¿Puedes escucharme?”
Acostado sobre su abdomen en aquella cama, Lan Wangji apenas pudo mirarlo, extendiendo
una de sus manos en dirección a Wei Ying, acariciándole una mejilla con suavidad.
“Estoy bien…” Susurró el alfa.
“¿Que te pasó?” Preguntó Wei Ying desconcertado.
En la espalda de su amado, Wei Wuxian podía ver marcas delgadas y sangrantes de un látigo
de disciplina. Pero Wei Ying no podía entender la crueldad de la secta Lan, quienes sabiendo
que Lan Wangji estaba gravemente herido aun así lo habían castigado con el látigo de
disciplina de los Lan.
“Lan Zhan…” Susurró Wei Ying en un fuerte quejido.
“Está bien, por ti, aguantare todo Wei Ying…”
Sabiendo que ese castigo era su culpa, besando suavemente la mano de su alfa, Wei Wuxian
susurró: “Lo siento, lo siento tanto Lan Zhan…”
Mirando a su omega a los ojos, Lan Wangji respondió: “Te amo, Wei Ying.”
“Yo también te amo, A-Zhan…”
Cuando el invierno comenzó, fue el primer día de la reclusión forzada de Wei Wuxian y Lan
Wangji. Y mientras Lan Yuan se quedaba mirando la ventana, aquel pequeño cachorro
añoraba la nieve, sin saber que no podría tocar su suavidad en muchos años más.
Epílogo.

Las campanas ceremoniales sonaron con suavidad.


“Entonces el nombre de arriba…” Susurró Sizhui, mirando.
“Es Lan An” Confirmó Lan Wangji.
Parado frente al salón ceremonial de la secta Lan, Sizhui miraba todo con mucha curiosidad,
observando todas las tablas de madera con los nombres de los miembros pertenecientes a
dicha secta.
“Es tu secta, todos ellos lo son” Dijo Lan Zhan con seriedad.
“¿Lo son en verdad? Yo no sé si soy… Bien recibido aquí…” Susurró Sizhui con suavidad.
“Eres de la secta Lan, no importa lo que te digan, siempre serás bien recibido” Dijo Lan
Wangji con seriedad.
Sizhui prefirió no decir nada, mientras volvía a mirar a la sala de ceremonias, prefiriendo
quedarse en silencio.
Era el inicio del verano, tras un largo invierno, el buen clima había regresado a Gusu.
Además de que aquel día era uno muy especial, y en la secta sucedería una ceremonia.
7 años habían pasado desde el inicio de la reclusión de Lan Wangji, Wei Wuxian y Lan Yuan
en la secta Lan. Cuando las heridas cerraron y las demás sectas lo permitieron, ellos
finalmente pudieron salir de su encierro, para volver a vivir sus vidas.
Eso ponía especialmente tristes a Lan Wangji y Wei Wuxian, quienes por sus errores, habían
condenado a su pequeño cachorro a una vida de encierros, pues A-Yuan había vivido gran
parte de su infancia viendo el mundo a través de una ventana, saliendo fuera del pabellón del
silencio pocas ocasiones.
Pero ahora Lan Yuan se unía a la secta Lan oficialmente, como uno de los herederos de la
secta principal, y el hijo de los cultivadores más famosos: Hanguang-Jun y el aterrador
Patriarca Yiling. Todos en el mundo de la cultivación tenían sus ojos puestos en él, esperando
que fuera aún más fuerte que Lan Wangji y Wei Wuxian.
Acercándose a Lan Wangji y su hijo corriendo, uno de los sirvientes de la secta dijo:
“Hanguang-Jun, ya es hora, la ceremonia esta lista…”
“Iremos de inmediato…” Respondió Lan Wangji haciendo una reverencia.
Con cierta tristeza, Lan Yuan también hizo una reverencia, volviendo a sentir un terrible
nerviosismo en su interior.
Cuando el sirviente se retiró, Lan Yuan preguntó: “¿No podemos quedarnos un poco más?”
“¿Por qué querrías quedarte?” Preguntó Lan Wangji con obvia curiosidad.
“Quisiera rezar un poco para mi verdadera madre…” Susurró Lan Yuan de una forma
inaudible.
“¿Tu verdadera madre?” Preguntó Lan Wangji sin entender lo que ocurrida: “Wei Ying esta
esperándonos en el lugar de la ceremonia…”
Mirando a su padre en silencio, Lan Yuan finalmente dijo: “De acuerdo, vamos.”
A veces, la mente de su cachorro era un misterio para Lan Wangji, quien añoraba los viejos
tiempos, cuando A-Yuan era un niño pequeño y ambos eran muy cercanos.
Como cualquier otro niño omega, Lan Yuan en su infancia era muy unido a Lan Wangji, su
padre alfa. Sin embargo con el paso de los años, ambos habían comenzado a separarse, y
Sizhui comenzaba a ser un misterio, incluso para Lan Wangji. Así que viendo el semblante
serio e incluso algo triste de su pequeño, Lan Zhan pensó en una forma de tranquilizarlo.
“Sé lo que te dijeron los ancianos de la secta” Susurró Lan Wangji, mirando a su hijo de
reojo: “Pero si quieres un poco más de tiempo para poder pensarlo…”
“Tengo un deber que cumplir, tú mismo lo dijiste, ahora pertenezco a la familia Lan. Ya he
tomado una decisión…” Susurró Lan Yuan, tomando a su padre de la mano y sonriéndole con
suavidad le dijo: “No te preocupes por mi papá, se lo que hago, te lo prometo…”
Lan Wangji prefirió no decir nada en absoluto, caminando al lado de su cachorro hasta el
centro de ceremonias de la secta, el cual ya estaba preparado para iniciar la ceremonia.
Parado en la puerta, Wei Ying no pudo evitar sonreír, viendo a su esposo junto a su hijo,
ambos acercándose al lugar. Wei Ying haba querido darle un poco de espacio a su hijo en ese
día, ya que A-Yuan y él eran muy distantes, y Wei Ying creyó que eso sería lo apropiado. Wei
Wuxian no podía negar que eso hería su corazón, sentir el rechazo de su pequeño bebé, el
cual ni siquiera quería jugar con él o hablarle a solas. Sin embargo Wei Ying amaba a su
cachorro demasiado, así que nunca quiso forzar a Sizhui a nada.
“¿Cómo les fue? ¿Presentaron sus respetos a los ancestros Lan?” Preguntó Wei Ying con una
sonrisa, acercándose a su esposo y a su hijo.
Sonriendo con suavidad, sin mirar a Wei Wuxian a los ojos, Sizhui respondió: “Si A-Die, lo
hicimos.”
“Bueno, creo que cumplimos todo el procedimiento, ¿No es así?” Preguntó Wei Ying
mirando a su alfa: “Creo que entonces podemos comenzar.”
“Mmm…” Respondió Lan Wangji con un rostro muy serio.
“Entonces entremos, ¿A-Yuan estás listo?” Preguntó Wei Ying con una feliz sonrisa.
Aun sin mirar a su padre omega, A-Yuan respondió: “Si A-Die.”
A diferencia de las demás celebraciones de ese tipo en la secta Lan, la ceremonia de Lan
Yuan era bastante sencilla, contando solo con los altos miembros de la secta Lan, sus padres y
algunos invitados. Era algo demasiado obvio mencionar que aquella ceremonia era inusual,
pues los niños de la secta Lan recibían su cinta de frente antes de cumplir un año de vida
normalmente, así que tener una celebración de ese tipo para un niño de 10 años era una de las
cosas más raras que habían sucedido en la secta.
Pero mientras las campanas ceremoniales seguían sonando, Wei Ying no pudo evitar sonreír
con orgullo, observando como su cuñado, Lan Xichen, finalmente le entregaba a Lan Yuan su
cinta de frente. Dudando un poco, el joven omega finalmente tomó aquella tela de color
blanquecino con algunas nubes bordadas, y finalmente se la puso, anudándola en su nuca con
bastante habilidad.
Cuando la ceremonia había terminado, los pocos presentes aplaudieron, mientras Sizhui
finalmente se convertía en un miembro de la secta Lan de forma oficial. Y de todos los
presentes, el más emocionado era Lan Jingyi, el joven alfa heredero de la secta de solo 12
años de edad, quien observaba a Lan Yuan con una gran sonrisa mientras aplaudía. Ambos
eran muy cercanos, ya que durante su reclusión en el pabellón del silencio, Lan Jingyi acudía
constantemente a jugar con Lan Yuan durante su encierro, teniendo el permiso de entrar al ser
un familiar directo de Lan Wangji y Wei Wuxian, siendo el único amigo que tuvo Lan Yuan
durante toda su niñez.
Sonriendo también, mientras sentía la ligera molestia en su frente por la cinta blanca que
ahora lo adornaba, Lan Yuan se giró para hablar con sus invitados, muchos de los cuales eran
allegados cercanos a Lan Wangji, pero no eran más de 20 personas. Con un suspiro, Wei
Wuxian arregló el cinturón blanco de las túnicas ceremoniales de la secta Lan que traía
puesto, mientras que al lado de su esposo caminaba detrás de su hijo.
Con cierta tristeza, Wei Ying recordó la ceremonia de iniciación de su propio sobrino, Lan
Jingyi, como aquella fue una gran ceremonia, con invitados de otras sectas, que vinieron a
felicitar al joven heredero Lan. Muy en el fondo, Wei Wuxian también hubiera deseado algo
así para su cachorro, tener una gran fiesta donde todos lo celebraran por volverse un Lan, con
muchos aplausos y sonrisas de felicidad. Pero Wei Ying sabía que eso era imposible, después
de los crímenes que él había cometido y que había forzado a su esposo a cometer, la vida de
su pequeño estaría condenada al rechazo y la soledad.
En silencio, Wei Ying se echaba la culpa por que su pequeño hijo no tuviera la misma
felicidad o trato que otros niños en la secta Lan.
Cuando estaban acercándose al final de salón, Lan Yuan no pudo evitar sonreír con felicidad,
y acercarse corriendo a Wen Qing y Wen Ning, quienes también habían acudido a ese día tan
especial, y querían felicitarlo. Gracias a la intervención de Jin Zixuan, los Wen recuperaron
su hogar ancestral en Yiling, reconstruyendo su secta y abandonando aquella montaña
maldita. Ahora Wen Qing volvía a ser la líder de la secta Yiling Wen, la más grande de todas
las sectas Wen restantes, y la cual era completamente leal a los Jin y sus leyes.
“¡Muchas gracias por venir!” Dijo Lan Yuan, abrazando fuertemente a Wen Ning: “Tengo
que mostrarte los conejos de papá como te dije…”
“Espero poder verlos pronto, A-Yuan…” Dijo Wen Ning con una sonrisa: “Muchas
felicidades por haber obtenido tu cinta.”
“Gracias tío Wen Ning” Respondió Lan Yuan con felicidad.
Sin embargo pronto las sonrisas desaparecieron del rostro de Lan Yuan, mirando como fuera
del salón, dos emisarios con túnicas doradas lo esperaban. Eran los mensajeros de la secta
Jin.
Sin necesidad de palabras, sabiendo bien lo que tenía que hacer, Lan Yuan se deshizo del
abrazo de su tío, y con paso calmado salió del salón, acercándose a esos mensajeros, quienes
de inmediato le ofrecieron una hermosa caja tallada en madera y con adornos de oro.
Aquello tampoco era usual, ya que los compromisos entre sectas solían acordarse antes de
que los jóvenes prometidos cumplieran 5 años, sin embargo Lan Wangji y Jin Zixuan
decidieron esperar a que Lan Yuan recibiera su título como Lan antes de hacer público su
compromiso, y para ello debían esperar a que no solo la reclusión forzada terminara, también
a que esa ceremonia tuviera lugar.
En más de una ocasión, Wei Ying le había dicho a su hijo que no tenía que aceptar la
propuesta de los Jin. Ya sea por buena o mala suerte, a pesar del título de Sizhui, él estaba
fuera de la mayoría de las normas de todas las sectas. Pero Lan Yuan, gracias a la
intervención de los consejeros de la secta Lan, entendía que su vida y la vida de sus padres se
facilitarían mucho si él se volvía el líder consorte de Jin Rulan.
Sus padres y él mismo aún seguían siendo vistos como criminales, sin ser bienvenidos en la
mayoría de las sectas. Pero si Lan Yuan se volvía el prometido del próximo líder Lan,
cubierto de túnicas doradas y siendo parte de la secta más poderosa de la región, todo se
solucionaría tarde o temprano.
Sin embargo miles de dudas asaltaron la mente de Lan Yuan, mientras sujetaba aquella caja
llena de oro y peonias blancas. Solo podía pensar en los demás omegas de la secta Jin, su tía,
Qin Su y Jin Guangyao… Ninguno de ellos con la opción de ser cultivadores. Lan Yuan lo
sabía, si él se volvía el esposo de Jin Rulan, todos iban a esperar que él fuera como su tía, y le
prohibirían volverse un cultivador.
Entonces sus sueños, de ser un gran héroe como sus padres, de los cuales incluso se contaban
historias en las escuelas, ese gran sueño habría terminado antes de haber podido empezar.
Con mucho cuidado, Lan Yuan abrió la caja de madera, observando como en el interior sobre
terciopelo rojo, había un hermoso collar de oro, con un dije con la forma de una pequeña
mariposa. Lan Yuan solo debía aceptar el regalo y hacer una reverencia, y finalmente se
habría convertido en el nuevo prometido del heredero Jin.
Pero Lan Yuan sabía que no podía dudar, que no tenía otra opción, ya no gracias a las
acciones de Wei Ying. Si rechazaba a Jin Rulan, no obtendría otro compromiso tan
importante, ya que todos los jóvenes de su edad en las demás sectas ya contaban con un
compromiso arreglado. Y si Lan Yuan quería asegurar el futuro de sus padres o incluso de sus
futuros hermanos, debía aceptar esa propuesta.
Así que tomando la mariposa cuidadosamente, Sizhui se puso el hermoso collar dorado, para
luego hacer una reverencia, aceptando así la propuesta de los Jin.
Sizhui había aceptado su destino.
***
Mirando aquel hermoso jardín, Wei Ying observaba a su pequeño cachorro, quien jugando
con Jingyi, ahora podía correr lo lejos que quisiera, habiendo terminado su reclusión
finalmente.
“Maestro Wei” Dijo uno de los sirvientes Lan de pronto: “Han llegado nuevos obsequios para
el joven Sizhui, unos cuadros pintados por el líder de la secta Nie, el maestro Nie Huaisang”.
“Oh Huaisang, sabía que no lo olvidarías” Dijo Wei Ying con una sonrisa: “¿Por qué llegaron
tan tarde?”
“No lo sé mi señor, ¿Debería preguntar al respecto?”
“No te preocupes, seguro debe ser algún tipo de descuido de mi querido amigo, yo le
mandare un mensaje pronto, para reclamarle y agradecerle a la vez. Deja las pinturas en la
habitación de Sizhui, seguro le gustaran.” Dijo Wei Ying con una sonrisa.
Haciendo una nueva reverencia, el sirviente finalmente se retiró, dejando a Wei Ying
nuevamente solo, admirando a su hijo a lo lejos.
Durante sus años de reclusión, muchas cosas habían cambiado en las sectas, como la
ascensión al puesto de líder de su gran amigo Nie Huaisang. Después de la misteriosa muerte
de su hermano mayor, Nie Mingjue, el consejo de la secta Qinghe Nie desterró a Jin
Guangyao y a sus hijos a Lanling, ya que nadie quería al hijo de una prostituta como el
próximo líder. Y aunque todos tuvieron sus reservas al respecto, Nie Huaisang demostró ser
un mejor líder de su hermano en esos pocos años, trayendo gran fortuna a la secta Nie, y
volviéndose el alfa más cotizado. Pasando de ser el alfa menos apreciado y débil, a uno de los
líderes más fuertes de todos.
Mientras que Lanling, tras la muerte de su padre, Jin Zixuan se había vuelto un líder
completo. Y teniendo varios hijos más con su hermana, todos pequeños niños omega, se
encargaba de cuidar a su propia secta y a todas las demás sectas a su alrededor. Y aunque a
Wei Ying le molestara aceptarlo, el tonto pavo tenía el talento de un líder nato, volviéndose el
opuesto a lo que alguna vez fue Wen Ruohan, uno de los mejores líderes que tuvo la secta
Jin.
Mientras que Muelle de loto, su adorado hogar… Ahora tenía un solo líder. Cuando las
tierras se volvieron un lugar tranquilo y ya no hubo más guerras, Yu Ziyuan creyó que era
hora de retirarse. Dejando a su hijo al mando, tomo a Jiang Fengmian, y los dos se perdieron
en el campo, decididos a vivir una vida solos y lejos del mundo de la cultivación. De esa
forma Jiang Cheng se había vuelto el líder de Lotus Pier, dejando todo en su sitio.
Wei Ying no sabía si ese era un final bueno para todos los que alguna vez había conocido, sus
seres queridos o incluso sus enemigos. Pero Wei Ying sabía que era un final correcto, ya que
de una u otra forma, todos habían obtenido lo que merecían tras sus decisiones del pasado.
Incluso él mismo, Wei Ying había obtenido su gran merecido después de sus errores, y
también el perdón tras hacer el bien a los Wen, todo había quedado en su lugar al final.
Escuchando pasos que se acercaban en su dirección, Wei Ying se giró y observó a su esposo,
quien estaba saliendo por una de las puertas laterales del pabellón, trayendo consigo una
botella de “La sonrisa del emperador”.
“¿Aun está jugando?” Preguntó Lan Wangji, sentándose al lado de su omega.
Asintiendo con la cabeza, Wei Ying respondió: “Si, aún siguen corriendo por ahí como locos.
Seguro jugaran hasta el anochecer. Pero… Supongo que está bien, A-Yuan lo merece.”
En el pasado, durante su tiempo de reclusión, Lan Yuan tenía el tiempo exacto para jugar con
Jingyi, así que ese era su primer día para pasarlo como un niño normal, un día de libertad.
Entregándole la botella de licor a su esposo, Lan Wangji lo rodeó suavemente por la cintura y
le dio un beso en el cuello, cerrando los ojos y quedándose en silencio.
“¿Por qué estás en mi cuello?” Preguntó Wei Ying riendo un poco, mientras le daba aun largo
trago a su botella de licor: “En el pasado, cuando aún tenía feromonas, podía entenderlo, pero
ahora… Es raro.”
“¿Es raro que te amé?” Pregunto Lan Wangji en un susurro.
“Es raro que lo hagas cuando ahora yo soy algo similar a un beta…”
Cuando Wei Ying regresó del reino de los muertos, algo de Wen Shima se quedó con él, y fue
la muerte de su omega. Wei Ying ya no pudo emitir sus feromonas o sentir las feromonas de
otra persona de nuevo, su cuerpo ya no se comportaba como el de un omega, y lo más
importante: Había perdido la oportunidad de tener nuevos cachorros.
Esto había destruido emocionalmente a Wei Ying, quien una vez tuvo el gran deseo de tener
una gran familia. Sin embargo supo que era su castigo, ya que gracias a él muchas vidas
inocentes se perdieron, y Wei Ying pensaba que era su karma por haber lastimado a tantas
personas. Sin embargo Lan Wangji no se rendía, ya que en secreto pensaba que el omega de
Wei Ying solo se encontraba dormido, y que si ellos purificaban su núcleo dorado de la
energía resentida que lo invadía, Wei Ying volvería a la normalidad. Pero eso no había
ocurrido en 7 años, y ambos ya se habían resignado a la idea de que no tendrían más hijos.
Aun así Lan Wangji no se separaba de Wei Wuxian, sin dejar de amarlo aun cuando él ya no
era compatible con su alfa.
Sabiendo que Lan Wangji no respondería a sus palabras, Wei Ying preguntó: “¿Viste los
regalos de Huaisang? Me dijeron que eran cuadros…”
“Mmm… Envió cinco pinturas con paisaje de Yunmeng” Respondió Lan Wangji.
“¿Paisajes de Yunmeng?”
“Tus cinco lugares favoritos de Lotus Pier…”
Al escuchar esas palabras, Wei Ying comenzó a reír de forma descontrolada, pensando con
mucho cariño en su gran amigo Huaisang. A pesar del tiempo separados y del encierro, Wei
Ying y el nuevo líder de la secta Nie habían continuado comunicándose por mariposas
mensajeras, así que Huaisang sabía perfectamente que Sizhui aún no había tenido la
oportunidad de ir a Yunmeng.
“Lo creo apropiado… Se habla mucho de la importancia de los Lan y esas cosas” Dijo Wei
Ying con un suspiro: “Pero yo también soy su padre, y Sizhui también tiene sangre de
Yunmeng en sus venas, él también debería estar orgulloso de sus raíces como un Jiang.”
“Mmm…” Susurró Lan Wangji asintiendo suavemente con la cabeza.
“Ahora que ya hemos salido de la reclusión, llevaré a Sizhui a nadar a Muelle de Loto a nadar
uno de estos días.”
“Wei Ying, A-Yuan no sabe nadar.”
“Entonces le enseñaremos” Dijo Wei Ying convencido: “Ahora que estamos libres, el cielo es
el límite para nuestra familia, quiero que los tres seamos sumamente felices, como siempre
soñé.
Guardando silencio por un segundo, Lan Wangji besó suavemente los labios de su esposo, ya
que él sabía perfectamente que ese no era el mayor sueño de Wei Ying, lamentando mucho
que su amado tuviera que conformarse con esa realidad, sin que él pudiera hacer nada para
mejorar su situación.
“Tengo un regalo para ti” Dijo Lan Wangji al terminar el beso: “fue una promesa que hice
hace tiempo.”
“¿Una promesa?” Pregunto Wei Ying confundido: “¿A mí?”
“Algo así.”
“¿Y qué es?”
“Un poema” Dijo Lan Wangji con seriedad.
Sintiéndose impactado, Wei Ying guardo silencio por un par de segundos, para luego estallar
en carcajadas, y decir: “¡No puedes! Moriré de la vergüenza si sé que escribiste algo para mí,
de verdad Lan Zhan, voy a morir.”
“No morirás.”
“En serio, muy serio Lan Zhan, soy muy débil ante la vergüenza ajena, tendré una taque al
corazón y moriré en tus brazos si lo haces.”
Mirando a Wei Ying a los ojos, Lan Wangji dijo: “Me arriesgare.”
“¡No Lan Zhan! ¡De verdad no quiero escucharlo!” Dijo Wei Ying, intentando escapar de los
brazos de su alfa.
Sin embargo usando toda su fuerza, Lan Wangji ajustó el abrazo en la cintura de su omega,
impidiéndole escapar, y aclarándose la garganta dijo: “Mi amado Wei Ying…”
Wei Wuxian soltó un grito muy agudo y cubrió su rostro con una de sus manos, mientras sus
mejillas se ponían sumamente rojas: “¡Detente! ¡Me da mucha vergüenza! ¡Para ahora!”
Sin detenerse, con una sonrisa en su rostro por la actitud tan dulce y a la vez vergonzosa de
su amado, Lan Wangji continuó hablando: “Eres muy hermoso como una semilla de loto…”
“¡Te dije que pararas!”
Y en medio de gritos y risas, Wei Wuxian se dejó seducir por las cariñosas palabras de Lan
Wangji, en el primer día del verano en El receso entre las nubes.
FIN DE LA SEGUNDA PARTE
Extra de cumpleaños: Deseos y anhelos - Chernobyl.
Chapter Notes

Hola dulce Laozu.

¡Feliz cumpleaños! No estoy muy segura de que hora exactamente es el lugar en el que
vives, pero me hace feliz pensar que soy la primera en desearte un feliz cumpleaños.
Espero que este sea un día maravilloso al lado de tu Lan Zhan y que seas muy feliz toda
tu vida, 26 años son realmente la cuarta parte de tu vida, y aun te faltan muchos años
más por seguir alegrando la vida de todos los que te conocemos. Muchas gracias por ser
el primer autor que puede ser mi amigo después de mucho tiempo y muchas
desilusiones, igualmente gracias por ser tan amable y por leer mi libro, tus opiniones y
peticiones son muy importantes para mí.

¡Feliz cumpleaños dulce Laozu! ¡Este Mo Xuanyu te adora! <3

Sin más, espero que puedas cuidar mucho de tu salud y que sigas dibujando tan bonito
como lo haces todo el tiempo, eres increíble y maravilloso, por favor nunca dejes de ser
la persona increíble que eres y no dejes que nadie vuelva a lastimarte. Tienes un futuro
maravilloso por delante, no dejes de luchar por tu felicidad.

Antes de continuar, una pequeña advertencia:

ADVETENCIA: ESTE CAPÍTULO CONTIENE SPOILERS DE LA TERCERA


PARTE DE "MI JOVEN AMANTE", UN LENGUAJE VULGAR Y ESCENAS DE
SEXO FUERTE. SE PIDE DISCRECION.

Yo les recomiendo, y a ti también dulce Laozu, que lean este capítulo con mucha
precaución, pues tiene muchas revelaciones sobre el futuro de los personajes principales
del fanfic, además de ser parte de algo que probablemente no sea escrito (no olvidemos
que no se si voy a publicar la tercera parte aun). Sin embargo espero que lo disfrutes y
que tengas un muy lindo cumpleaños, ten tu todos los días son todo los días después de
leer esto. Y Lan Zhan, si lo lees, se paciente porque es su cumpleaños y cocina algo rico
para él en la mañana, asegúrate de que lo coma todo <3

Los amo mucho a los dos Shipp suprema <3

Espero que te guste tu regalo bebé <3

Se sentía entusiasmado.

Caminando en medio de las sombras de regreso a la casa funeraria, llevando una botella de
licor en una mano y un farol para alumbrarse entre las penumbras en la otra, Xue Yang seguía
su camino de regreso a casa.

Su brazo derecho aún seguía algo lastimado. Aquella mañana después de asesinar a Song Lan
y convertirlo en un cadáver a sus órdenes, regreso a la funeraria de Ciudad Yi, donde su alfa
preocupado vendó sus heridas y le pidió que se mantuviera a salvo. Aun así Xiao Xingchen
no podía hacer mucho por él ese día, su celo de alfa estaba cerca, probablemente llegaría en
la madrugada; así que se mantuvo en casa esperándolo, mientras Xue Yang se encargaba de
llevar a la pequeña ciega a una posada en la ciudad más cercana, donde la recogería al día
siguiente cuando todo hubiera pasado.

Mientras caminaba de regreso a la casa funeraria, Xue Yang pronto se encontró de frente con
su nueva "mascota". Con los ojos blancos y la piel pálida, aún tenía la herida sangrando en el
pecho donde Xue Yang lo había penetrado con su espada. El alfa Song Lan ahora estaba bajo
sus órdenes, y completamente sometido por aquellos finos clavos de acero que había
introducido en su nuca, se veía completamente sumiso; una expresión muy diferente a la que
había mostrado en la mañana cuando irrumpió en Ciudad Yi para intentar atacarlo y rescatar a
su Daozhang.

Sonriendo de forma macabra, Xue Yang se paró frente a Song Lan, tan cerca que incluso le
dio miedo. Nunca en su vida pensó estar tan cerca de un alfa que lo odiaba tanto en vida,
tanto que se ofreció a matarlo cuando fue encerrado por los Jin. Sin embargo ahí estaba, con
una expresión mansa, observando a su dueño sin pestañear.

"Que miedo A-Lan" Dijo Xue Yang rendo ligeramente, extendiendo su mano para entregarle
al alfa la linterna que sostenía: "Esta obscuro, tu iluminaras mi camino. Lastimaste mi brazo
hoy, debes hacerte responsable".

Con una sonrisa plasmada en su rostro, Xue Yang observo como Song Lan tomaba
dócilmente la linterna y lo seguía por medio de la maleza, mientras ambos se internaban cada
vez más en medio de la espesa niebla que siempre rodeaba Yi City.

Xue Yang aún no se explicaba cómo fue que Song Lan dio con ellos, había cubierto bien su
rastro en aquella ciudad y en la matanza que hizo hace años con Xiao Xingchen, así que
ambos habían desaparecido de la faz de la tierra por varios años haciendo su vida en familia
tranquilos. Xue Yang incluso se sorprendía de pensar que ahora podía ser llamado un
miembro respetable de la sociedad, con un trabajo en una granja cercana y escondiendo ser
un cultivador ante todos; incluso manteniendo a la pequeña plaga de aquella ciega como si
fuera su hija, algo que nunca pensó hacer.

Después de todo incluso estaba planeando su embarazo con Xiao Xingchen, ahorrando dinero
para tener un cachorro, y pensando en mejorar aquel lugar donde Vivian. Daozhang era un
alfa generoso, y no quería tener un hijo en la miseria; ahora que la pequeña ciega iba a
cumplir 15 años también querían darle una habitación y que saliera de los ataúdes, pero para
eso deberían esforzarse mucho, y tal vez perder su sagrado tiempo en pareja.

Algunas veces Xue Yang consideraba volver a contactar con esos miembros de la secta Jin,
aquellos que lo habían contratado para asediar a Meng Yao y asesinar a Nie Mingjue; sabía
que ahora ellos y sus amigos, empecinados en tomar a la secta Lanling Jin para sí mismos, no
solo estaban amenazando a Meng Yao para que hiciera lo que querían, estaban buscando algo
más que usar para destruir a todas las sectas. Xue Yang tal vez podría ayudar con eso, usar el
cultivo demoniaco incluso mejor que el patriarca Yiling se había vuelto su especialidad.
Después de todo, Wei Wuxian ya no era un maligno cultivador, vivía con su esposo en Gusu
Lan con su hijo, y ambos solo se dedicaban a cuidar de su familia y de sus sectas. Eso lo
convertía a él, Xue Yang, en el cultivador demoniaco más fuerte de la actualidad.

Sin embargo no quería tener que darle explicaciones a Xiao Xingchen, se manejaba con
mucho cuidado con su Daozhang, pues aunque podía engañarlo con cierta facilidad, no era un
imbécil. Podría hacer muchas preguntas si veía que Xue Yang desaparecía mucho o no estaba
en el trabajo. Además sus días de libre albedrio alejándose mucho de ese alfa habían
terminado, pasando su mano libre por su nuca y su marca de vinculo, donde Xiao Xingchen
lo había mordido en su noche de bodas; ahora le respondía a ese alfa, y no podía alejarse
mucho de él aunque quisiera.

Pensativo, aun considerando sus opciones para encontrar más dinero para su familia, Xue
Yang llego a la pequeña casa funeraria de Ciudad Yi, donde todas las luces estaban
encendidas y su alfa lo esperaba. Antes de entregar suspiro ligeramente, sintiendo sus
mejillas sonrojarse; el olor de las feromonas de Xiao Xingchen se habían vuelto muy fuertes,
tanto que comenzaban a hacerlo sentirse mareado. Su alfa tendría su celo muy pronto sin
dudas.

Parando frente a la puerta, Xue Yang se giró en dirección a Song Lan, tomando la linterna de
sus manos y ordenándole: "Quédate aquí".

Sin responder, el alfa obedeció, quedándose en las sombras en medio de la niebla escondido,
así como le había ordenado su nuevo dueño. Esto a Xue Yang se le hizo aterradoramente
divertido, nunca antes había tenido un cadáver a sus servicios, sabía cómo hacerlos y como
dominarlos pues en el pasado aquel hombre le había pedido varios de ellos, incluyendo a Nie
Mingjue en su ejército. Pero nunca había tenido uno suyo a su servicio.

Y lo que le emocionaba era que usaría sus servicios esa misma noche.

Con una sonrisa, fingiendo que todo estaba bien, Xue Yang entro en la casa funeraria por la
puerta principal, encontrando a su alfa sentado frente a una chimenea, pensativo. Xiao
Xingchen, la nieve pura y amable, completamente vestido de blanco y con los ojos vendados,
era un alfa simplemente admirable por su belleza. Con las mejillas algo sonrojadas por su
próximo celo, y limpiando su espada con calma, se giró en dirección a Xue Yang cuando lo
escucho entrar.

"¿Dejaste a A-Qing en la posada?" Pregunto Daozhang con preocupación.

Asintiendo ante la pregunta, aun cuando sabía que su alfa no podía verlo, Xue Yang apago la
linterna y respondió: "Lo hice Daozhang".

Ambos llevaban una pacífica vida de casados, obviamente Xue Yang debía fingir su tono de
voz con su alfa, usando uno más dulce que el usual, y en todo ese tiempo jamás había
permitido que este tocara su mano para darse cuenta de su dedo faltante, encubriendo bien su
identidad. Para Xiao Xingchen, Xue Yang era un pobre omega desvalido, el cual encontró en
medio del camino después de haber recibido una golpiza por no querer acostarse con su
señor. Xue Yang le mintió contándole que era un sirviente omega de una casa rica cercana a
Ciudad Yi, este no quiso acostarse con su señor Beta y fue golpeado brutalmente, temiendo
más castigos y ser abusado escapo de aquel sitio, donde se encontró con Xiao Xingchen y su
pequeña ciega que en ese entonces solo era una niña y tenía casi 5 años.

Sonriendo tranquilamente, de una forma dulce, Xiao Xingchen respondió: "Eso es muy bueno
A-Yang, muchas gracias".

Acercándose a su alfa frente a la chimenea, Xue Yang se sentó en su regazo con mucha
calma, siendo sostenido por Xiao Xingchen de inmediato, comentando: "También compre un
par de cosas de la ciudad Daozhang. Una botella de dulce vino y algunos dulces de azúcar
rojo, para hacer nuestra noche más divertida".

Sintiéndose algo preocupado por el dinero, Xiao Xingchen pregunto: "¿No es acaso algo muy
costoso? Sería un desperdicio si lo acabamos todo hoy".

"No seas aguafiestas... Debo festejar mi última noche sin alcohol, hoy probablemente termine
preñado por ti".

Sonriendo con cierta culpa, recordando el destrozo que había hecho con su omega en su
último celo, Xiao Xingchen respondió: "Tenemos precauciones para eso en esta ocasión ¿No
es cierto?"

"Las tenemos" Afirmo Xue Yang, abriendo la botella de vino con las manos: "Pero eso no
evita que vayas a derramar mucho semen en mi interior, vas a llenarme por completo. Si no
termino preñado hoy me sentiré muy decepcionado".

La pareja de esposos había comenzado a tomarse en serio el tema de tener un bebe hace tan
solo unos días, cuando A-Qing hablo de que quería tener su propia habitación y tal vez su
propia cama. Eso los llevo a querer tener una familia más grande, ya habían esperado mucho
tiempo, así que era un momento propicio para tener más cachorros en casa. Dejándose llevar
sin preocupaciones, Xue Yang tomo uno de sus dulces de azúcar de uno de sus bolsillos y
bebió un gran trago de vino de la botella, sonriendo muy contento por aquel dulce sabor
como el almíbar recorriendo sus papilas gustativas.

"¿Escuchaste las nuevas noticias en el reino?" Pregunto Xiao Xingchen, abrazando


cariñosamente a su omega por la cintura.

"¿Nuevas noticias?"

Asintiendo a su pregunta, Daozhang respondió: "Todos hablan de ello. Noticias alentadoras


de Gusu, el líder Lan Xichen se comprometió de nuevo, se casara con el viudo de Nie
Mingjue, Jin Guangyao".

Bufando con cierto descontento, ofreciendo vino a su alfa que bebió gustoso, Xue Yang
respondió: "¿Una nueva alianza entre los Jin y los Lan? ¿No les bastaba con haber
comprometido al hijo de Hanguang-Jun con el hijo mayor del líder de los Jin?"
Tomando un trago generoso de aquel vino, Xiao Xingchen respondió: "Las sectas prominente
siempre buscan crear nuevos lazos con otras sectas igual de poderosas".

"Pudo haber regresado con el omega de la secta Yunmeng Jiang, el nuevo líder, Jiang
Wanyin. Ambos están en las mismas condiciones, omegas marcados y con alfas muertos, de
sectas poderosas. Incluso en un balanza Jiang Wanyin es más conveniente, es el líder del
nuevo Lotus Pier ¿Por qué no habrán reanudado su compromiso?".

"Lo que le paso al líder de la secta Yunmeng Jiang fue horrible" Comento Xiao Xingchen con
un tono sombrío: "Dudo que el líder de la secta Lan haya negado querer regresar con su
anterior prometido, probablemente sea el propio Jiang Wanyin quien lo haya denegado.
Todos comentan que después de lo que le paso, comenzó a tener mucho miedo de todos los
alfas, incluso de Hanguang-Jun quien fue el alfa que lo salvo y es el esposo de su hermano,
ese omega debe tener mucho miedo y dolor todos los días. Lo que le paso... fue horrible".

Sin empatizar tanto con su alfa, a pesar de ser un omega, Xue Yang respondió: "Supongo que
lo ha superado bastante bien a pesar de eso, tiene a su madre alfa protegiendo todos sus
pasos, y aunque su padre murió hace unos tres años de forma natural, se nota que la secta
Yunmeng Jiang se ha vuelto muy prospera. Reconstruir y liderar una secta se le da bastante
bien, es un omega indudablemente fuerte".

Asintiendo a sus palabras, Xiao Xingchen dejo que Xue Yang le diera más de ese fuerte vino,
bebiendo generosas cantidades de este. Aunque el omega no lo demostraba, estaba bebiendo
poca cantidad de aquel licor en comparación a su alfa, con la clara intención de querer
emborracharlo para aquello que tenía planeado para la noche.

"Aun así es muy triste" Comento Xue Yang con una sonrisa divertida: "No me imagino como
debe sentirse ahora Jiang Wanyin, saber que aquel que una vez dijo que te amaba ahora se
casa con otro... Supongo que al final era verdad y Lan Xichen nunca amo a Jiang Wanyin
tanto como afirmaba".

Acercándose a besar los labios de su alfa, Xue Yang le permitió a este comenzar a quitarle
sus túnicas, desatando su cinturón y abriendo sus ropas. Xiao Xingchen se encontraba más
sensible y estimulado que la mayoría de los días por su celo y el alcohol, así que Xue Yang
no planeaba detenerlo.

"¿Tú me amas Daozhang?" Pregunto Xue Yang en un susurro sobre los labios de su alfa.

Dejándose llevar por su omega y sus instintos, completamente seguro de lo que decía, Xiao
Xingchen respondió: "Si, te amo".

"Yo también te amo Xingchen" Susurro Xue Yang, buscando nuevamente los labios de su
alfa.

Pudiendo quitar aquel cinturón de las ropas de su omega, comenzando a tocar gentilmente su
pecho con sus dedos tibios, Xiao Xingchen susurro: "Te amo A-Mei".

Mei, el nombre que Xue Yang había inventado para sí mismo cuando conoció a su alfa, era la
manera en la que era llamado todos los días; ya fuera A-Mei o Mei Mei, era Xiao Xingchen
quien lo llamaba así cariñosamente cada vez que se dirigía a él.

Sin dejar de abrazarse mutuamente frente a esa fogata, pronto intensificaron la pasión de sus
besos y los toques en sus cuerpos. Xue Yang jadeo sintiendo como los traviesos dedos del
contrario viajaban a su pecho para estimular sus pezones, sintiendo también como el
miembro de su alfa se endurecía bajo su trasero, sintiéndolo bien al estar sobre su regazo.

"Vamos a la cama... Daozhang..." Susurro Xue Yang mordiendo ligeramente uno de los labios
del contrario.

Podía sentirlo, por su omega y por el fragante aroma que comenzaba a soltar su alfa, Xiao
Xingchen estaba a punto de dejarse llevar por su alfa y entrar en celo, así que Xue Yang supo
que debía apresurarse, pues si no actuaba rápido todo su plan no podría realizarse y sería un
desperdicio. Xiao Xingchen por su parte no necesito más palabras, y apresurándose tomo a
Xue Yang en sus brazos, caminando hábilmente a ciegas por su hogar para llevarlo a su
habitación. Riendo dulcemente dejando que su alfa lo llevara, Xue Yang abrazo a Xiao
Xingchen por el cuello, entrando junto a este en la habitación.

A pesar de ser ciego, Xiao Xingchen se manejaba perfectamente en su casa y en su


habitación, así que sin necesidad de indicaciones, llego rápidamente a la cama que ambos
compartían para dejar delicadamente a Xue Yang sobre aquella blanda superficie, subiéndose
de inmediato sobre el para besarlo.

"A-Mei..." Susurro Xiao Xingchen con una voz mucho más gruesa de lo usual, comenzando a
dejarse llevar por su alfa.

Reaccionando rápidamente, Xue Yang tomo el rostro de su alfa entre sus manos, acariciando
suavemente sus mejillas, preguntó: "Daozhang ¿Puedes escucharme? ¿Aun puedes
entenderme?"

Respirando profundamente, controlando un poco mejor a su alfa, Xiao Xingchen respondió


asintiendo suavemente, forzando una sonrisa para su omega: "Lo hago Mei Mei... ¿Fui
demasiado brusco? ¿Te lastime?"

Cuando un alfa tenía su celo, todos sus instintos salían a flote y su control era inhibido, eran
crueles y fuertes con sus omegas, únicamente buscando su propia satisfacción. Y a pesar de
que conscientemente Xiao Xingchen era un alfa excelente y sumamente decente, al entrar en
celo no era muy diferente de una bestia con su omega. Xue Yang y Xiao Xingchen ya habían
sido una pareja hace varios años, así que no era el primer celo que el omega pasaba con su
alfa; sin embargo en los recientes celos, Xiao Xingchen aparentemente estaba más fuera de
control de lo usual así que comenzaba a lastimar a Xue Yang en exceso.

En su último celo el alfa arrojo al omega contra una pared en medio de su pasión, algo que
lastimo seriamente a Xue Yang, aunque no había sido intención de Xiao Xingchen y este se
disculpó con su omega sumamente arrepentido cuando todo termino. Después de aquella
ocasión, ambo habían llegado a un acuerdo; Xue Yang no quería dejar a su alfa solo en su
celo, y Xiao Xingchen no quería lastimar a su omega, así que ambos encontraron una
solución.
Sonriendo con diversión y dulzura por la inocente preocupación de su esposo, Xue Yang
respondió: "No, estoy bien Daozhang, me siento bien ¿Recuerdas lo que hablamos antes del
celo? ¿Lo que acordamos?"

Logrando mantenerse consciente, Xiao Xingchen asintió sumamente, besando la frente de su


omega con sumo cariño y cuidado: "Si..."

"Entonces déjame hacerlo antes de continuar..."

Asintiendo de forma dócil, Xiao Xingchen se separó de su omega a duras penas, logrando
contener a su alfa con mucha fuerza de voluntad. Separándose de Xiao Xingchen de la misma
forma, Xue Yang se acercó al rostro de este, besando cariñosamente su frente sus mejillas
antes de levantarse de la cama. Así como ambos habían acordado, Xue Yang camino a una de
las esquinas de la habitación, de donde tomo una cuerda antes de regresar con el mayor.

"Voy a quitarte las túnicas para estar más cómodos ¿De acuerdo?"

Asintiendo dócilmente, Xiao Xingchen respondió: "Si".

Sonriendo con cierta emoción, Xue Yang desato rápidamente el cinturón de las ropas de Xiao
Xingchen, quitándoselo para poder abrir sus túnicas, y dejar su torso desnudo. Tomándose un
tiempo que no tenía, arriesgándose a que el alfa de su esposo tomara el control, Xue Yang
acaricio dulcemente el pecho de este con sus dedos, pasándolos por sus músculos y perfectos
abdominales.

"Te amo Daozhang" Susurro Xue Yang, volviendo a rodear el cuerpo de su esposo para
quedar detrás de él.

Tomando suavemente sus manos, el omega unió sus muñecas detrás de su espalda,
comenzando a atarlas con una cuerda en esa misma posición. Inmovilizando a su alfa de
aquella manera, Xue Yang beso delicadamente su espalda con cariño, asegurándose bien de
que las cuerdas no se soltarían y de que su pareja estaría bien seguro.

Jadeando con cierto dolor por estarse conteniendo de esa manera, forzándose a sí mismo a
estar lucido por su omega, Xiao Xingchen susurro algo dolido: "A-Mei..."

Entiendo que ya era demasiado para su alfa, y que este probablemente entraría en celo de un
segundo a otro muy pronto, Xue Yang rápidamente lo ayudo a acostarse en la cama y girarse,
quedando sobre su espalda: "Entiendo, estoy entendiendo Daozhang. Descuida, yo me
encargare".

Sonriendo con diversión a pesar de que sabía que el contrario no lo veía, Xue Yang se subió
sobre su alfa en la cama, y cuidadosamente tomo el borde de sus pantalones para comenzar a
bajarlos lentamente. Sonriendo de forma lasciva, Xue Yang observo maravillado el duro
miembro de su alfa, aquella maravilla la cual había podido disfrutas varias veces en el
pasado. Acercando su rostro a la erección de su esposo, el omega paseo traviesamente la
lengua por toda su longitud, sin apartar su mirada del rostro del contrario observando como
esta se había contraído con placer al ser estimulado.
Tomándose su tiempo, Xue Yang lamio aquella sensible parte de su alfa, hasta terminar
metiéndolo en su boca, tomándolo suavemente las caderas antes de comenzar a moverse
sobre este. Al sentir la húmeda cavidad de su omega envolviendo su virilidad, Xiao Xingchen
jadeo y se removió con placer, moviendo ligeramente las caderas en busca de más
satisfacción. Deteniendo a su alfa para no ahogarse con su gran miembro, Xue Yang lo tomo
delicadamente de las caderas, comenzando a moverse sobre el duro miembro de su pareja con
cierta rapidez.

Escuchando sus gemidos y jadeos de placer, el omega se sintió alentado y termino de bajar y
quitar los pantalones de su alfa sin dejar de lamer su miembro. Abriendo las piernas de Xiao
Xingchen y flexionando estas ligeramente, Xue Yang rápidamente llevo dos de sus dedos a su
propia boca, los cuales lamio con maestría sin sacar el pene de su alfa de sus labios.

Xiao Xingchen era un alfa diferente, muy diferente a cualquiera que haya conocido. Tal vez
por haber crecido y nacido en una montaña donde se le enseñaron valores muy diferentes a
alfas convencionales, o simplemente porque era una persona más tolerante; pero Xiao
Xingchen era un alfa muy diferente a cualquiera con quien Xue Yang hubiera estado en el
pasado.

Acercando sus dedos húmedos por su propia saliva a la entrada de su Daozhang, Xue Yang
humedeció y lubrico lentamente aquella zona, para luego comenzar a introducir uno de sus
dedos con cuidado. Los alfas no se lubricaban a sí mismo como los omegas, así que para
poder penetrar a su alfa, Xue Yang siempre tenía que recurrir a usar su saliva, una técnica que
el propio Xiao Xingchen le enseño. Su alfa disfrutaba de ser penetrado, así como un omega,
teniendo cierta versatilidad con Xue Yang desde que ambos comenzaron su relación.

Esto fue sumamente inusual para Xue Yang, el cual jamás pensó estar sobre un alfa
penetrándolo. Sin embargo aprendiendo al lado de su esposo, entendió lo placentero que eso
podía ser, comprendiendo un poco mejor a los alfas y su necesidad de penetrar
profundamente a los omegas.

"¿Puedes sentirlo Daozhang?" Pregunto Xue Yang con diversión, sacando el miembro de su
alfa de su boca solo por unos instantes: "Son dos dedos Daozhang..."

Xiao Xingchen presiono sus manos en puños en su espalda, aquellas cuerdas firmemente
atadas eran ligeramente dolorosas, sin embargo se sentía más excitado, así que asintió: "Si...
Puedo sentirlo".

Ladeando suavemente la cabeza de forma intrigada, Xue Yang dio una lamida más al
miembro de su alfa, como si fuera un dulce el cual saborear, introduciendo un segundo dedo
en el interior de este con cuidado: "Siempre me he preguntado... ¿Se siente tan bien como el
miembro de otro alfa? ¿Mi esposo acaso no quisiera algo más grande en su interior?"

Aunque estaba prácticamente fuera de sí mismo por el celo, Xiao Xingchen seguía siendo el
mismo, así que con aquella pregunta se sintió disgustado, negando rápidamente: "Claro que
no, solo deseo a Mei Mei, mi esposo, no quiero a nadie más".

"¿Y en el pasado?"
"¿El pasado?"

"Antes de conocerme" Aclaro Xue Yang con una suave sonrisa: "¿Acaso Daozhang no
disfruto de otros alfas antes de casarse conmigo?"

Ante aquella pregunta desvergonzada, la cual también traía tristeza en su corazón, Xiao
Xingchen desvió el rostro de forma incomoda, negándose a responder aquella pregunta.

Sonriendo con más diversión aun, Xue Yang se sentó entre las piernas abiertas de su alfa,
tomando un poco de distancia entre ambos: "Revivamos recuerdos pasados entonces,
Daozhang".

Soltando un silbido sumamente fuerte, controlando la energía resentida así como hacia Wei
Wuxian con su flauta, Xue Yang llamo a Song Lan. Sintiendo un estremecimiento
recorriendo su espalda, Xiao Xingchen se quedó sin habla, pues aquel sonido soltado por su
omega había sido sumamente incomodo de escuchar, hasta doloroso para sus oídos. El
cadáver feroz de ese alfa que ahora obedecía a Xue Yang pronto respondió al silbido, y sin
necesitar órdenes entro por la puerta principal de la casa funeraria, acercándose a la
habitación de ambos esposos con paso lento y calmado.

De pronto, a pesar de su inconsciencia por el celo, el corazón de Xiao Xingchen comenzó a


latir de manera desbocada, pues sin haber entrado en la habitación, el alfa de ese Daozhang
pudo sentir un olor muy característico en medio de las sombras y la niebla de aquella ciudad
maldita.

"¿Zichen?" Pregunto Xiao Xingchen con un nudo en la garganta, hablando a la obscuridad


fuera del pasillo de su habitación.

Al escuchar la tímida voz del que alguna vez fue el amor de su vida, Song Lan dudo un poco
en entrar; sin embargo su voluntad ya no tenía ningún peso, solo los deseos de Xue Yang, así
que sin importar sus deseos, el cadáver feroz siguió caminando hasta llegar frente al lecho
matrimonial. Entrando en aquella habitación estrecha finalmente, el olor de sus feromonas
fue completamente claro paro Xiao Xingchen, el cual se quedó sin habla por la sorpresa, sin
poder creer aun lo que sus sentidos le decían.

Con el esquicito aroma de la lluvia y tierra mojada, aquel aroma que Xiao Xingchen tanto
recordaba de su hogar en las montañas cuando habían tormentas, y después proveniente de
ese alfa que tanto había amado; ahora podía sentir ese aroma de nuevo, invadiéndolo todo,
marcando toda su habitación.

Aunque no podía verlo, Xiao Xingchen estaba seguro de que Song Lan estaba en aquella
habitación.

"Zichen..." Susurro Xiao Xingchen a punto de ponerse a llorar: "Lo siento, lo siento tanto. No
fue mi intención, todo lo que paso fue mi culpa, por favor perdóname..."

Bajando la cabeza con tristeza, Song Lan no respondió aquellas palabras, aunque las escucho
de forma clara y pudo sentir como quemaban su corazón con cada frase dicha.
Ansioso ante el silencio, sin entender que sucedía, el Daozhang suplico: "Por favor dime
algo, por favor... Solo... Habla conmigo... Zichen háblame".

Y aunque Song Lan realmente quiso hablarle, a pesar de las órdenes silenciosas de Xue Yang,
ese alfa ya no podía pronunciar palabra, únicamente mirando a su gran amor debajo de su
mayor enemigo, completamente indefenso.

Mirando aquel espectáculo con una gran sonrisa, deleitándose de semejante escena, Xue
Yang no hizo ningún comentario hasta que vio a su alfa comenzando a llorar, notando como
la venda debajo de sus ojos se humedecía ligeramente por su sangre: "Por favor no llores
Daozhang" Susurro Xue Yang dulcemente: "Te he traído una sorpresa, un amigo a casa..."

"¿Tu lo trajiste?" Pregunto Xiao Xingchen confuso, sin entender nada.

"Claro..." Respondió Xue Yang con mucha sinceridad: "¿No extrañaste a tu gran amigo Song
Lan? ¿No quieres ser tocado de nuevo por sus manos? Ahora él puede hacer y ser lo que tu
desees Daozhang, solo con una orden mía, el volvería a amarte así como lo hizo antes de que
yo arrancara sus ojos de su cráneo".

Tomándose la libertad de usar su tono de voz normal, abandonando el dulce tono de voz que
siempre usaba con su marido al ser 'A-Mei', Xue Yang pudo observar el horror en el rostro de
Xiao Xingchen por un segundo, un horror que era una droga y le encantaba.

"¿Xue Yang?" Pregunto Xiao Xingchen completamente confuso.

Negando con la cabeza, Xue Yang saco sus dedos del interior de su alfa, y sonriendo le dijo:
"Aquí no hay ningún Xue Yang, solo tu dulce marido, A-Mei. Tu amas a Mei Mei ¿No es
verdad? Ámame entonces, dulce Xingchen..."

Volviendo a besar los labios de su alfa, Xue Yang impidió que este pudiera hacer preguntas,
comenzando a soltar sus feromonas de forma pesada. Al sentir las feromonas de Xue Yang,
las cuales tenían un fuerte aroma a vainilla, Xiao Xingchen no pudo hacer más que rendirse
ante su celo, aunque sin perder la consciencia por completo, no pudo hacer más que volverse
completamente dócil.

"Mis dedos no son tan largos Daozhang" Susurro Xue Yang divertido, ando una pequeña
mordida en uno de los labios del contrario: "¿Qué te parece intentar con algo un poco más
largo? Como los dedos de otro alfa por ejemplo..."

Jadeando por la excitación y la confusión que sentía, perdiéndose en las feromonas de las
personas que más amaba, Xue Yang y Song Lan, Xiao Xingchen no tuvo las fuerzas para
responder esa pregunta, únicamente sintiendo como su omega se separaba de su cuerpo y
dejaba todo completamente preparado para que Song Zichen tomara su lugar.

Sin necesidad de palabras, obedeciendo en silencio, Song Lan rápidamente ocupo el lugar de
Xue Yang entre las piernas de su Daozhang. Estando en esa posición en la cual no creía que
volvería estar en la vida, sobre el cuerpo de su tan amado Xingchen, Son Lan sintió como su
miembro se endurecía en sus pantalones y comenzaba a excitarse. Obedeciendo a Xue Yang,
el alfa recién convertido en un cadáver feroz, acerco sus fríos dedos a las nalgas de Xiao
Xingchen y las abrió con delicadeza, observando su entrada a penas ligeramente dilatada y
deseosa, escupiendo ligeramente sobre ella para comenzar a penetrarlo con sus dedos.

Absorto por la imagen que tenia de su alfa, siendo sometido por ese a quien se lo arrebato,
Xue Yang se sentó en la cabecera de la cama al lado de Xiao Xingchen, sosteniéndolo
firmemente de los hombros para impedir que se moviera, sin dejar de admirar el rostro
confuso y perdido de su esposo lleno de deseo por este.

"Zichen... Zichen..." Susurro ese Daozhang en un susurro, subiendo ligeramente las caderas
con gusto, llenándose de ese placer.

Sintiendo los dedos largos y gruesos de ese alfa, mucho más grandes que los que tenía su
pequeño esposo omega, Xiao Xingchen se derritió en el placer. Tan solo con un dos de dos de
Song Lan en su interior, moviéndose y presionando todos sus puntos sensibles con mucha
facilidad por su previo conocimiento del cuerpo de ese alfa, Daozhang quiso venirse,
haciendo sus gemidos más pesados y comenzando a mover las caderas por sí mismo, en
busca de un mayor contacto con aquellos dedos de su ex pareja.

Dándose cuenta de inmediato de que su alfa estaba a punto, Xue Yang cruelmente bajo una
de sus manos a la entrepierna de aquel que estaba siendo sometido, presionando su pene
fuertemente entre sus dedos impidiendo su orgasmo: "Aun no Daozhang... Aún falta
mucho..."

Soltando un audible quejido como reproche, muy adolorido por ser tocado de esa forma, Xiao
Xingchen reclamo: "Mei Mei... ¿Por qué?... Por favor deja que me venga... Por favor..."

"He dicho que aún no, Xiao Xingchen, ahora yo decido. Así que mejor distrae tu boca con
algo más interesante en vez de aburrirme con tus suplicas".

Abriendo su cinturón con una mano, Xue Yang logro deshacerse de sus ropas con algo de
dificultad. Regresando a la cama con su esposo, de una forma brusca introdujo su pene erecto
en los labios entreabiertos de su esposo, reclamando ser atendido por este de inmediato, sin
soltar aun su pene para impedir que se viniera.

Introduciendo un tercer dedo en la estrecha entrada de ese alfa, el cual lo recibía de una
manera algo dolorosa por no haber tenido una cosa tan grande después de varios años, Song
Lan no pudo evitar levantar la mirada, observando aquella felación que su amado realizaba
envuelto en lágrimas de confusión y placer. Absorto con esa imagen tan excitante, el propio
Song Zichen tuvo que aflojar sus túnicas y bajar sus pantalones dejando a la vista su dolorosa
y dura erección, muy excitado solo por su Xiao Xingchen.

Observando de igual forma a Song Lan con una sonrisa traviesa, Xue Yang comento: "Ojala
pudieras ver a tu gran amigo ahora Daozhang ¿Realmente es tan grande? ¿Cómo un alfa
puede soportar algo así en su interior? Eres sorprendente esposo, me siento curioso de saber
si realmente un alfa puede tomar a otro..."

Sacando su miembro de los labios de Xiao Xingchen, el cual tosió ligeramente, Xue Yang
volvió a silbar fuertemente, dándole una nueva orden a Song Lan. Obediente, el alfa Song
Lan se deshizo de sus ropas antes de tomar a un débil Xiao Xingchen, acomodando su cuerpo
de rodillas en la cama y con la espalda recta, casi sentado. Tomando ahora el lugar que ante
tenia Xiao Xingchen, Xue Yang abrió las piernas y puso el cuerpo de Xiao Xingchen entre
ellas, dejando a Song Lan detrás de él, poniendo a su querido esposo entre sus cuerpos.

"Que buena vista..." Susurro Xue Yang encantado, bajando sus manos para unir su miembro
con el de su alfa, comenzando a masturbar ambos unidos: "Puedes comenzar A-Lan".

De forma obediente, Song Lan sujeto a Xiao Xingchen firmemente de las caderas con una
mano y rodeo su cintura con su otro brazo, impidiendo que cambiara de posición o que
cayera. Respirando profundo, Song Zichen paseo su dolorosa y dura erección entre las nalgas
de un confuso Daozhang, el cual mareado por todos los sentimientos, solo pudo relajar su
interior, gimiendo fuertemente y con cierto dolor al sentir una gran intromisión en su interior.

Suspirando sumamente excitado, sin apartar su mirada de su alfa y su rostro contraído por el
placer, Xue Yang hizo sus movimientos de su mano sobre sus miembros de una manera más
rápida, mientras que bajando su otra mano entre sus piernas abiertas, el omega comenzó a
introducir sus dedos en su interior preparándose a sí mismo, sumamente excitado y húmedo
por la escena que presenciaba frente a sí mismo.

Dejándose llevar por el placer, Xiao Xingchen cerró los ojos y levanto las caderas,
permitiendo a Song Lan entrar tan profundo como pudiera en su interior, disfrutando con
ligero dolor de tener a ese alfa en su interior. Mientras que Song Lan, disfrutando de tener a
su amado nuevamente en sus brazos después de tanto tiempo, pasaba sus manos por el pecho
y por los sensibles pezones de este estimulándolos suavemente, dando fuertes embestidas
pero intentando ser delicado para no lastimar a su amado.

"Zichen..." Susurro Xiao Xingchen con la voz muy dulce por el placer.

Girando el rostro sin cambiar de posición, Daozhang reclamo los labios de aquel alfa que
poseía su cuerpo, besándolos con timidez al inicio, para luego profundizar aquel beso.
Introduciendo su lengua entre los labios de Song Lan, Xiao Xingchen se apartó de inmediato
sumamente asustado, temblando y sin saber que decir.

No había sentido la lengua de Song Lan dentro de su boca.

Riendo fuertemente al ver aquella reacción tan inocente por parte de su alfa, Xue Yang dijo:
"El no podrá llamarme 'Perra' de nuevo..."

Girándose en dirección a Xue Yang, Xiao Xingchen pregunto: "¿Qué hiciste Mei Mei?"

"Me defendí... Y disfrute mucho arrancando su lengua".

Girándose nuevamente en dirección a Song Lan, Xiao Xingchen susurro sumamente


arrepentido: "Por favor perdóname..."

Sintiéndose sumamente triste por su amado, el cual volvía a sufrir por todo lo que estaba
pasando, Song Lan volvió a unir sus labios con los de Xiao Xingchen con un suave beso,
intentando consolarlo. Frunciendo la nariz con cierto desagrado al ver esa reacción de amor
entre ambos alfas, sin poder evitar sentir una punzada de celos al ver a su esposo ser tomado
de esa manera, Xue Yang rápidamente subió las caderas y tomando el miembro de Xiao
Xingchen comenzó a penetrarse a sí mismo con este cuidadosamente.

Soltando el beso de golpe para gemir lleno de placer, Xiao Xingchen gimoteo: "Mei Mei..."

Suspirando lleno de placer, Xue Yang introdujo lentamente el duro y gran miembro de su alfa
en su interior, sintiendo como este lo llenaba por completo. Había estado teniendo sexo con
Xiao Xingchen desde hace tiempo, sin embargo no importaba por cuanto tiempo lo hicieran,
Xue Yang siempre se sentía sobrepasado por su alfa cuando era penetrado de esa forma.

"Daozhang..." Susurro Xue Yang lleno de satisfacción, dejándose llevar por el placer.

Dejando que su alfa entrara por completo en su interior, Xue Yang dio un nuevo silbido,
ordenándole a Song Lan que comenzara a moverse. Obediente, ese alfa el cual veía toda la
excitante escena, comenzó a moverse dando nuevas embestidas a Xiao Xingchen, fuertes y
profundas, haciendo que este también se moviera dándole placer a Xue Yang.

Poniendo su cuerpo débil por el placer, permitiendo que Song Lan lo sostuviera, Daozhang se
quejó diciendo: "¡Estas entrando demasiado fuerte!"

Sin embargo Xue Yang, debajo de ambos alfas, disfrutaba de aquellos buscos movimientos
con el miembro de su esposo aun en su interior, gimiendo fuertemente y suplicando: "Se
siente bien... Mas Daozhang... Por favor más...".

Xiao Xingchen estaba atado, así que sin tener más opción, el propio omega comenzó a
estimular sus pezones y el resto de su cuerpo en busca de su placer, estimulando su duro
miembro con una de sus manos y moviendo suavemente las caderas al ritmo de ambos alfas,
el omega supo que no tardaría mucho en venirse. Aquella visión frente a sus ojos era
suficientemente estimulante, con su esposo siendo penetrado por su mejor amigo y también
penetrándolo a él, con su dulce Daozhang suplicando por mas, perdido en su celo y en lo
satisfecho que se sentía.

Cerrando los ojos y comenzando a contraer su interior, Xue Yang susurro: "No puedo más...
Daozhang... Me vengo...".

Haciendo sus gemidos y jadeos más pesados, Xiao Xingchen se sintió mucho más excitado
cuando el interior de su omega comenzó a contraerse alrededor de su miembro, alentándolo a
mover las caderas más rápido, logrando ser penetrado más rápido por Song Lan y penetrar
más fuerte a su omega. Xue Yang, sintiendo esa nueva estimulación, no tardó mucho en
venirse, gimiendo el nombre de su esposo y manchando su propio abdomen, estrechando
fuertemente el miembro de Xiao Xingchen en su interior y finalmente haciendo que ambos
alfas también dejaran de moverse, quedándose todos unidos en esa misma posición.

"Se sintió bien... Me gustó mucho Daozhang" Susurro Xue Yang aun envuelto en placer, con
estremecimientos recorriendo su cuerpo entero.

Jadeando y gimiendo sin parar, dejándose envolver por todo el placer que sentía, Xue Yang
sonrió de forma libidinosa, bajando una de sus manos hasta sus nalgas. Con morbo, toco
suavemente el miembro de Xiao Xingchen aun afuera de su interior, masajeando su húmeda
dureza.

"Mi Daozhang aún no se ha venido" Susurro Xue Yang con una pequeña sonrisa: "Tal vez
necesitas algo más estimulante... Más 'Intimo' ¿Acaso no extrañaste a tu mejor amigo Xiao
Xingchen? Debemos darle una buena bienvenida a nuestro hogar".

A Xue Yang siempre le había parecido curiosa la relación que tenían Song Zichen y Xiao
Xingchen. Siendo alfas pasaban todo el tiempo juntos, durmiendo en los mismos hoteles y
viajando uno al lado del otro sin separarse por mucho. Ellos nunca habían confirmado ser
compañeros de cultivo, sin embargo nadie lo suponía ¿Alfas enamorados? Aquello era
sumamente inusual, pues en su sociedad, era casi impensable el que un alfa tomara el lugar
de un omega y aceptara ser penetrado. Sin embargo ahora todo era claro ante los ojos audaces
de Xue Yang, el cual acariciando suavemente las mejillas de su confuso alfa, supo que Song
Lan había sido más que un buen amigo para este, también había sido un gran amor.

"Cambiemos de posición" Le ordeno a Song Lan.

Con ayuda de su nuevo 'Esclavo', Xue Yang levanto a Xiao Xingchen de su cuerpo y lo saco
de su interior. Acostando a su esposo en la cama, el omega invirtió posiciones, subiendo
sobre su regazo y quedando arriba. Con un suspiro de satisfacción, el omega volvió a
introducir el miembro de Xiao Xingchen en su interior, jadeando dulcemente pues aún se
sentía demasiado sensible después de haberse venido.

"Tan profundo..." Susurro Xue Yang con una sonrisa: "¿Te parezco estrecho Daozhang? ¿Qué
te parece si invitamos a tu amigo a unirse?".

Subiendo ligeramente las caderas, Xue Yang abrió sus nalgas con sus manos y observo de
reojo a Song Lan todavía en su espalda. Mostrándole al alfa su entrada aun invadida por el
duro miembro de Xiao Xingchen, Xue Yang dio otro silbido, ordenando así a Song Lan
comenzar a prepararlo. Soltando un gemido tanto de dolor como de placer, el omega relajo su
interior para permitir la intromisión de dos largos y gruesos dedos al lado del gran pene de su
alfa, sintiendo como Song Lan delicadamente lo preparaba para recibirlo.

"No..." Susurro Xiao Xingchen volviendo en sí mismo por algunos segundos: "Te haremos
daño... No..."

Bajando su rostro hasta quedar nuevamente frente a su alfa, Xue Yang lamio sus labios antes
de besarlos con sumo cariño, sin dejar de observar fijamente su sonrojado y avergonzado
rostro.

"Aprende a compartir, Daozhang..." Susurro Xue Yang divertido.

Ambos esposos gimieron al sentir como un tercer dedo de Song Zichen entraba en el interior
del cuerpo de Xue Yang, haciendo una presión contra el pene de Xiao Xingchen. Sintiéndose
sobreestimulado por todo lo que sucedía, Xiao Xingchen se removió de forma incomoda
debajo del cuerpo de su omega. Notando que ya estaban listos, Song Lan se puso detrás de
Xue Yang, y con mucho cuidado tomándolo de las caderas, comenzó a entrar en su interior.
La sonrisa de Xue Yang desapareció de sus labios entonces. Nada preparado para todo el
dolor y el placer que sentía, el omega soltó un fuerte grito de dolor y placer, sintiendo como
era abierto hasta su límite e incluso más, logrando acoger ambos penes de ambos alfas en su
interior. Comenzando a soltar lágrimas de dolor y teniendo que apoyarse sobre el pecho bien
formado de su alfa con sus dos manos, Xue Yang se notó sumamente incómodo y hasta algo
destrozado.

Preocupado, sintiendo el dolor de su omega, Xiao Xingchen dijo: "Mei Mei... Por favor
para... Te estás haciendo daño".

Sintiendo el miembro de Song Lan completamente en su interior, Xue Yang suspiro con
cierto dolor placer, removiéndose algo incómodo sobre el miembro de ambos alfas en su
interior. Sintiendo su miembro nuevamente duro, sonrió con cierta dulzura para su Daozhang,
susurrando: "Estaré bien..."

Mirando de reojo a Song Lan detrás de él, Xue Yang asintió delicadamente con la cabeza,
dándole la señal para continuar. Obedeciendo silenciosamente, Song Zichen siguió
tomándose de las caderas de Xue Yang y comenzó a embestirlo; al sentir aquel primer
movimiento, Xiao Xingchen no pudo más y soltó un fuerte gemido de placer, pues aquella
posición era extremadamente placentera y estimulatoria, disfrutando al máximo el estar así
con su omega. Mientras que Xue Yang cerró fuertemente los ojos y gimió con mucho dolor,
sintiendo como ambos miembros comenzaban a martillear su interior.

Dejándose llevar, pronto Xiao Xingchen comenzó a mover las caderas tímidamente también,
siguiendo el mismo ritmo que tenía su amigo Song Lan en el interior del omega. Sintiendo
esto, Xue Yang casi se derrumbara sobre el cuerpo de su esposo, gimoteando: "¡Daozhang!
Se siente... Bien..."

Suspirando lleno de satisfacción, disfrutando aquello de igual manera al máximo, Xiao


Xingchen respondió: "Yo también me siento bien Mei Mei..."

Agachándose nuevamente, Xue Yang beso delicadamente los labios de su alfa entre lágrimas
de puro placer, dándole un tierno beso sin dejar de ser estimulado. Viendo esto, Song Lan se
quedó helado por un segundo, y aunque estaba siendo controlado por Xue Yang como su
esclavo, sus sentimientos salieron a flote y no pudo evitar comenzar a llorar, observando al
hombre que más amaba declarando su amor a la persona que ambos debían odiar más.

"Te amo Daozhang..." Susurro Xue Yang mirando a su alfa.

"Yo también te amo..." Respondió Xiao Xingchen en un susurro.

Separándose nuevamente de su alfa para estar en una buena posición, Xue Yang no pudo
evitar girarse por un segundo, observando a Song Lan el cual lloraba mirándolos a ambos.
Eso que le hizo mucha gracia fue causante de una ligera risa por su parte, y silbando de
nuevo, le ordeno a Song Lan ir más rápido y más fuete con sus embestidas. Sin poder
resistirse, el cadáver feroz a órdenes de Xue Yang hizo lo que se le ordenaba, comenzando a
mover las caderas con más energía y más fuerza.
Gritando por el placer al igual que su alfa, Xue Yang rápidamente tuvo que bajar una de sus
manos a su propio miembro, comenzando a estimularlo con mucha rapidez, pues aquello
estaba siendo demasiado para él. Ya que Xiao Xingchen tenía las manos atadas y Song
Zichen solo obedecía penetrándolo, fue el propio Xue Yang quien tuvo que encargarse de
estimular su cuerpo. Tocando su pene para darse satisfacción, y pellizcando y presionando
sus pezones de vez en cuando, volvió a sentirse en su límite poco después.

"Daozhang... Me vengo..." Gimoteo el omega mirando fijamente el rostro de su esposo: "Me


vengo... Se siente tan bien..."

Sintiendo aquellas palabras lo suficientemente estimulantes, Xiao Xingchen no dudo en hacer


sus embestidas mucho más fuertes y rápidas aun, igualando el ritmo de su amigo Song Lan,
dándole mucho placer al omega. Gimiendo y gritando fuertemente por el placer, Xue Yang
hizo los movimientos en su mano de una forma sumamente frenética, hasta que termino
finalmente viniéndose en el abdomen de Xiao Xingchen, presionando fuertemente su interior,
estrechando a ambos alfas con fuerza. Jadeando y gimiendo igualmente excitado, Xiao
Xingchen se sintió a punto, penetrándolo y entrando cada vez más profundo en su interior.
Song Lan, igualmente a punto de tener un orgasmo, pronto se dio cuenta de que el grosor del
miembro de Xiao Xingchen comenzaba a aumentar, así que temiendo lastimar en demasía a
Xue Yang, salió rápidamente de su interior, eyaculando en sus nalgas y en parte de su
espalda. Teniendo finalmente todo el espacio que quería en el interior de su omega, Xiao
Xingchen se movió con mucha fuerza y brusquedad en su interior, hasta terminar viniéndose
profundamente dentro de él e inundándolo.

Jadeando fuertemente por todo el placer que recorría su cuerpo, Xue Yang no pudo negar que
su alfa se viniera abundantemente y profundamente en su interior, sintiendo un ligero
abultamiento en su abdomen por lo profundo que llegaba el pene de Xiao Xingchen dentro de
él, y como el resto de su entrada era expandida dolorosamente, mientras su alfa lo anudaba y
lo marcaba por completo. Totalmente agotado, Xue Yang termino derrumbándose sobre el
cuerpo de Xiao Xingchen, sin moverse mientras el alfa jadeando intentaba controlarse para
soltar el nudo y salir del interior de su omega.

Esperando un poco más, tomando fuerzas de donde ni siquiera el mismo comprendía, Xue
Yang pronto se levantó del cuerpo de su alfa y saco su miembro de su interior. Suavemente
adolorido, con un hilo delgado de sangre corriendo entre sus piernas, Xue Yang se tumbó
bastante cansado al lado de su alfa, quejándose en susurros por su cuerpo adolorido. Mientras
que Xiao Xingchen, agotado después de un sexo tan placentero y su propio celo, se quedó
prácticamente dormido al instante, sin moverse mucho del sitio donde estaba.

Con ayuda del alfa Song Lan, Xue Yang débilmente logro desatar las ataduras de las manos
de Xiao Xingchen, acostándolo mejor en la cama y tapándolo con las frazadas. Observando
de manera disgustada a ese alfa aun desnudo en su cama, Xue Yang le ordeno a Song Lan:
"Sal de la cama y ve a esa esquina, quédate ahí de pie toda la noche".

Obedeciendo en silencio, Song Lan se puso de pie de aquella cama y camino a una de las
esquinas más alejadas de la habitación, donde se paró y se quedó viendo en dirección a la
cama. Con las lágrimas rojas por la sangre cayendo en sus mejillas, llenas de dolor y pena,
Son Zichen observo en silencio como el amor de su vida abrazaba y dormía gustoso al lado
de su mayor enemigo.

***

Xiao Xingchen despertó de forma perezosa cuando los cantos de las aves sonaron
fuertemente fuera de su ventana. Desde hace varios años que todas sus mañanas eran iguales,
sin ver la luz del sol, únicamente escuchando las aves y los ruidos del exterior de su
habitación.

Volviendo en sí mismo lentamente, después de haber tenido una noche tan agitada, Xiao
Xingchen estiro una de sus manos hacia el lado de su cama, tocando a su omega aun acostado
a su lado. De cierta manera, el alfa no entendía por qué sus brazos dolían, o porque su cuerpo
estaba tan adolorido. Sin embargo recordando de pronto, teniendo la impresión de haber
sentido un olor a feromonas especial, se sentó en la cama agitado.

"¿Zichen?" Pregunto Xiao Xingchen en voz alta, con el corazón latiendo en su pecho
desesperado.

Al sentir a su alfa hablar y sentarse tan de golpe, Xue Yang se quejó en un susurro a su lado,
entreabriendo los ojos para mirarlo y decirle: "¿Daozhang? ¿Qué pasa?"

Recordando que estaba con su omega, un extraño sentimiento de desesperanza y tristeza


envolvió el corazón de Xiao Xingchen, el cual respondió: "Nada... Es solo que... Creí que
alguien estaba aquí".

"¿Alguien? ¿Quién?" Pregunto Xue Yang fingiendo demencia: "No hubo nadie anoche
además de mí y de ti Daozhang..."

Ahogando la esperanza en su corazón, Xiao Xingchen bajo la cabeza con cierta pena. En sus
sueños y deseos más profundos podía verlo, aquel hombre que no solo había sido su primer
amor, también su mejor amigo. Quería verlo de nuevo, de solo pensar en ese rostro frio y
serio, con un temperamento justo y recto, el cual solo sonreía y era amable para él; ese era
Song Lan para Xiao Xingchen. El inocente alfa tenia tantas cosas que contarle a su mejor
amigo, tantas disculpas y sinceros perdones que decirle; quería contarle que tenía una familia
ahora, una hija adoptiva, un marido maravilloso, y que quería un hijo.

Pero solo había sido un sueño para él, para Xiao Xingchen su querido amigo jamás lo había
visitado.

Observando y sintiendo el pesar de su alfa, Xue Yang intento distraerlo, temeroso de que
pudiera recordar algo de la noche anterior: "Daozhang eres demasiado malo... Anoche lo
hiciste tan fuerte... No sirvió de nada atarte, al final terminaste siendo brusco y haciendo lo
que querías con mi cuerpo. Toca..."

Tomando una de las manos de su alfa, Xue Yang la llevo debajo de las sabanas y entre sus
piernas, permitiéndole al contrario tocar su entrada maltratada. Después de todo Xue Yang
había recibido dos miembros de dos alfas en su interior e incluso el nudo de su esposo, así
que su interior estaba bastante maltratado.
Notando lo hinchado y adolorido que estaba ese sitio, Xiao Xingchen no pudo evitar sentirse
horrorizado y enfadado consigo mismo, pues pensaba que había sido el único culpable de
haber lastimado a su omega en medio de su celo la noche anterior.

Decidiendo manipular más a su alfa, sabiendo que este olvidaría por completo el asunto de
Song Lan si pensaba en su dolor, Xue Yang comento: "Duele tanto... Ni siquiera sé si podre
ponerme de pie Daozhang, me duele..."

"Perdona, por favor perdóname" Dijo Xiao Xingchen olvidando su anterior dolor de
inmediato, únicamente fijándose en su omega, abrazándolo rápidamente en la cama: "¿Duele
demasiado? ¿Qué puedo hacer? Por favor perdóname... Lo siento tanto Mei Mei".

Ocultando una sonrisa, Xue Yang correspondió el abrazo de su alfa en la cama, y apoyándose
en su pecho, le dijo: "Solo abrázame y reconfórtame con tus feromonas un rato más
Daozhang... Me voy a sentir mejor entonces".

Asintiendo ante las palabras de su omega, únicamente deseando hacerlo sentir mejor, Xiao
Xingchen lo estrecho delicadamente entre sus brazos, acunándolo delicadamente, soltando
sus feromonas lentamente. Respirando profundo y sintiéndose muy cómodo, Xue Yang sintió
ese aroma tan dulce que provenía de su esposo, un aroma tan dulce que siempre le recordaba
al algodón de azúcar, un aroma que adoraba.

Mirando de rojo a una esquina de la habitación, Xue Yang pudo observar a Song Lan aun
desnudo y parado en ese sitio, llorando en silencio y mirándolos sin pestañear. Xue Yang no
lo sabía, pero observando aquel dolor en ese cadáver feroz que ahora le pertenecía, por un
segundo pensó que Song Lan realmente estaba sintiendo dolor de ver a su gran amado con su
mayor enemigo en brazos.

Pero a Xue Yang ya no le importaba si el contrario sentía o no dolor. No importaba si su


cadáver feroz podía sentir algo o no, ahora lo único que importaba era que Song Lan lo
obedecía ciegamente.

Así que dejándose mimar por su alfa, aun riendo suavemente al ver el dolor de Song Lan el
otro lado de su cuarto, Xue Yang se sintió completo, comenzando a quedarse nuevamente
dormido en los amorosos brazos de Xiao Xingchen.
Prologo parte 3.

Sintió un nuevo golpe en el rostro, y sintiéndose muy débil, cayó al suelo, sintiéndose
completamente indefenso.
“¡Maldito omega repugnante!” Escuchó el grito de su primo a lo lejos.
Tendido en el suelo, sintiendo la sangre brotar de su nariz hasta el piso, Mo Xuanyu no dijo
nada en absoluto, solo se quedó en blanco, aceptando ese terrible dolor.
“¿A quién le importa si toco tus cosas?” Pregunto Mo Yuan en un grito más fuerte aun: “Solo
te gusta crear baratijas sin ningún valor, como ese estúpido intento de Sello de Tigre de
Estigio, o una brújula que no apunta al norte, ¡Tocare tu basura cuanto quiera!”
Interviniendo en la situación, temiendo que el heredero de la secta Mo terminara asesinando a
su primo, uno de los sirvientes presentes intervino y dijo: “Joven maestro Mo, ya ha sido
suficiente, por favor no debe manchar sus manos con ese sucio omega.”
Aún muy furioso, Mo Yuan dijo: “Algún día, tendrás tu primer celo, y cuando eso suceda, mi
padre podrá divertirse contigo, y después de él cualquier alfa de mi secta lo hará también.
Entonces tu cuerpo sucio será vendido a cualquier alfa que quiera tomarte como esposa, y yo
me encargare de que seas el omega con la vida más miserable en esta tierra, ¡Eso es un
juramento!”
Dándole una última mirada de odio a su indefenso primo, Mo Yuan y su sequito de amigos
alfas además de sirvientes, salieron finalmente de esa sucia y pequeña habitación que antes
solía ser un almacén, pero que ahora era el hogar de Mo Xuanyu. Y a salir, cerraron la puerta
con cadenas, dejando al omega herido y sin oportunidad de poder escapar.
Cuando puro recobrar un poco de su energía, Mo Xuanyu se sentó en el piso, mientras las
gotas de sangre seguían cayendo desde su rostro.
Mo Yuan no debía prometer que Mo Xuanyu tendría la más miserable vida que cualquier
omega podría tener, Mo Xuanyu ya tenía esa vida tan miserable que su primo le prometía.
Un omega sin ningún tipo de instrucción en la cultivación era débil, pero un omega sin
ningún tipo de conocimiento de cultivación y sin protección de sus padres tenía una sentencia
de muerte. Y ese era el caso de Mo Xuanyu. Él no tenía nada, lo único que poseía estaba al
fondo de esa habitación escondido en una esquina detrás de unos tableros de madera, y las
voces en su cabeza.
Toda su vida le habían dicho que estaba demente, sin embargo ahora que él tenía la
oportunidad de terminar con todo, después de sufrir tanto… Él dejó de dudar, y usando la
sangre que todavía chorreaba por sus mejillas, comenzó a escribir unos símbolos en el suelo
con sus dedos temblorosos.
“Wei Wuxian… Wei Wuxian… ¿Por qué quieres volver a verlo?” Preguntó Mo Xuanyu en
un susurro, escuchando las fuertes voces en su cabeza, que llamaban una y otra vez su
nombre.
Mo Xuanyu, Mo Xuanyu…
“¿Por qué estas llamándome?”
Terminando de escribir los símbolos en el suelo, Mo Xuanyu susurró: “Pongo todo mi
corazón para salvarte… No tuve más elección… Nunca tuve una elección… cumple tu
promesa y cumple mi venganza… ¡Mátalos a todos!”
Entonces un grito se escuchó en medio de la noche, y el primer fantasma resentido llegó a la
secta Mo.
Capítulo 1.

Caminando al frente de sus compañeros, Lan Sizhui hizo una corta reverencia, saludando a
todas las personas que tenía frente a él.
“Muchas gracias por su recibimiento, somos los cultivadores de la secta Lan, y hemos
acudido a su llamado” Dijo el joven omega, con un tono de voz muy relajante.
Como parte de su entrenamiento, Lan Sizhui y los demás cultivadores de su secta debían
acudir a cualquier lugar donde los llamaran, para resolver problemas con cadáveres o
espíritus resentidos.
En aquella ocasión específica, habían sido llamados a la villa Mo, un lugar muy celebre por
ser el hogar de la mayoría de las armas espirituales de los cultivadores. La villa Mo no
pertenecía a ninguna secta, estaban fuera del territorio y eran una villa libre, pero aun así
tenían una buena relación con todas las sectas, y al no tener cultivadores en sus tierras,
siempre debían acudir con otras sectas para obtener ayuda.
“Bienvenidos, grandes cultivadores de la secta Lan” Dijo uno de los sirvientes que habían
acudido al lugar, sonriendo muy feliz: “Por favor, vengan conmigo, la señora de la Villa Mo
los está esperando…”
Volviendo a ponerse erguido, Lan Sizhui camino detrás de ese sirviente, siendo seguido por
los demás cultivadores de su secta, que eran de edades similares a la suya.
“A-Yuan, ¿Viste eso? Es genial, deberíamos comprarlo ¿Tu papá te dio jade?”
Escuchando esa voz detrás de su espalda, Lan Sizhui sonrió con suavidad, respondiendo:
“Cállate, no vas a comprar libros pornográficos para alfas, tu padre te regañará”.
Soltando un claro suspiro de decepción, mientras le daba unos cuantos golpes en la espalda a
su primo, Lan Jingyi reclamó diciendo: “Que aburrido te has vuelto…”
“Basta, compórtate bien” Pidió Lan Sizhui, recordando su papel de líder: “Además, ¿Acaso
mi tío Xichen no te dio dinero?”
“No…”
“¿Por qué?”
“Tenía miedo de que comprara estupideces si estaba solo…” Bromeó Lan Jingyi.
Sin poder evitarlo, Lan Yuan se puso a reír, teniendo que cubrir sus labios con una de sus
manos suavemente, ya que quería mantener la compostura.
No era normal que un omega de su edad guiara una misión como aquella, pero Lan Sizhui era
uno de los mejores cultivadores de su secta, muy respetado, así que para esa situación en
específico le habían asignado ese puesto.
Detrás de él y como el segundo al mando, estaba su primo y el heredero de la secta Lan, el
joven alfa Jingyi. Ambos estaban igualados respecto a sus técnicas de cultivo, pero por lo
general era Sizhui quien ganaba en sus peleas, ya que Jingyi era muy precipitado, y Sizhui
era una persona más lógica.
Sin embargo con su posición de alfa y heredero, el joven Lan Yi era quien solía ser el líder de
la mayoría de las misiones a las que acudían, siendo esa la primera vez que A-Yuan tenía la
oportunidad de ser el líder.
“No estés nervioso… Todo estará bien” Dijo Jingyi, notando lo serio que estaba su primo:
“Además, aun si arruinas las cosas, tienes la señales para llamar a tus padres…”
“No los llamare, vamos a resolver esto nosotros solos” Aseguró Lan Yuan.
Siempre era mucho más difícil para un omega poder sobresalir en el mundo del cultivo, y
Lan Sizhui tenía pensado esforzarse y hacer todo perfectamente, para poder tener una buena
reputación como líder en su primera vez.
“De acuerdo, como diga mi gran líder, tan serio” Se burló Jingyi.
Lan Yi no era el mejor líder o heredero ante la vista de la secta Lan, era un alfa demasiado
relajado, y no parecía tener la misma fuerza que su padre adoptivo Lan Xichen. Pero Lan
Yuan sabía que eso era mentira, ya que cuando su primo se ponía serio, podía llegar a ser más
fuerte y decidido que la mayoría de los alfas Lan, incluidos su propio padre y su tío.
Llegando a uno de los salones de la residencia principal de la villa Mo, todos los cultivadores
hicieron una reverencia, mirando a la familia regente de aquella villa, la señora de la secta, su
esposo y su hijo, quienes les dieron una cálida bienvenida… Tal vez demasiado cálida.
“¡Bienvenidos cultivadores! ¡Es maravilloso que se encuentren aquí!” Dijo la mujer con una
fuerte voz: “¿Acaso eres un omega? ¿Eres su líder?”
“Muchas gracias…” Dijo Lan Yuan algo incómodo, respondiendo por su secta: “Si, mi
nombre es Lan Sizhui, y soy el líder de mi grupo.”
“¡Es maravilloso!” Dijo la mujer volviendo a decir esas palabras de forma muy fuerte: “Verte
al frente de todos esos alfas, solo me hace pensar en lo mucho que ha avanzado la sociedad,
un omega como tú de líder… Es maravilloso.”
Volviendo a sonreír, sin saber si sentirse ofendido o incomodo por las palabras de esa mujer,
Sizhui dijo: “Muchas gracias…”
Siguiendo las indicaciones de los sirvientes, los cultivadores Lan se sentaron en unas mesas
bajas al lado de la familia Mo, donde iban a invitarles algo de comer después de un viaje tan
largo desde Gusu hasta la villa Mo esa mañana.
“Si me permites ser indiscreta, puedo preguntar… ¿Estas comprometido?” Preguntó la mujer,
de una forma muy mal educada: “Como veras, yo también tengo un hijo, que es tan fuerte y
grande como un alfa, sería una gran pareja para ti…”
Todos miraron al hijo de la familia, un joven de un aspecto robusto, que intento sonreírle de
forma coqueta a Lan Sizhui. Ocasionando que Lan Jingyi casi se echara a reír, teniendo que
cubrir sus labios con sus manos rápidamente. Mientras que Sizhui se sentía más incómodo
aun.
Haciendo una corta reverencia, Lan Yuan respondió: “Una disculpa, señora Mo, pero yo ya
estoy comprometido con un alfa, desde que tenía 5 años. Su hijo es un gran partido, pero ya
tengo un compromiso con otra familia y otra persona”.
“Pero aún no lo has conocido, ¿Verdad?” Interrogo la mujer, sin darse por vencida: “Pareces
joven, no creo que hayas tenido tu primer celo aun, seguramente no has iniciado el periodo de
cortejo con ese alfa…”
Sintiéndose más incomodo aun, después de una pregunta tan personal, Sizhui respondió:
“No, aún no he conocido personalmente a mi prometido.”
Al escuchar esa respuesta, la señora Mo pareció extrañamente satisfecha, susurrando varias
cosas a su esposo, ambos bastante interesados en Sizhui.
Ya que si aún no se ha iniciado el periodo de cortejo, aun se puede rechazar el compromiso
sin mucho problema, y el alfa y el omega estarían solteros de nuevo. Así que la familia Mo
planeaba esforzarse en agradarle a Sizhui, esperando que él rompiera su compromiso, y se
quedara con el heredero de la Villa Mo.
Pronto sirvieron la comida, una suave comida típica de la región, con buen vino, y una charla
nuevamente incomoda. En la cual la familia Mo habló en exceso sobre sus conexiones y su
dinero, intentando impresionar al pequeño Sizhui. Sin embargo Lan Yuan no les prestaba
demasiada atención, ya que sin importar los esfuerzos de esa familia, él planeaba continuar
con su decisión de casarse con el heredero de la secta Jin. No importaba lo que sucediera,
Sizhui en verdad quería casarse con Jin Rulan, sabiendo bien cuál era su deber.
Sin embargo interrumpiendo la amena comida, pronto se escucharon varios gritos fuera del
salón en la cual comían, y de pronto una persona abrió las puertas principales y entró
corriendo. En el exterior del salón casi todas las personas de la villa estaban reunidas,
escuchando afuera de la puerta con gran curiosidad.
“¡Regrésalo!”
Muy confundido, Sizhui se giró en dirección a la puerta, mirando como una persona entraba
corriendo el salón.
Todos estaban muy interesados en los jóvenes cultivadores Lan, sin embargo aquel joven los
había ignorado por completo, y dirigiéndose a la mesa central del salón, directamente a Mo
Yuan, comenzó a gritarle.
“¡Sé que los tomaste!” Gritó aquel joven: “¡Regrésalo! ¡Eso no es tuyo!”
“¿Qué… Demonios?” Preguntó Lan Yi en un susurro: “Esa persona…”
“Es un omega…” Susurró Sizhui, quien se dio cuenta de inmediato de la persona que tenía en
frente.
Era un joven omega de un aspecto muy desarreglado, con la cara pintada de blanco y los
labios muy rojos, con las túnicas viejas y sucias, y su cabello recogido en una desarreglada
coleta en lo alto de su cabeza.
Al verlo, toda la familia Mo aparentemente entró en pánico, y llamaron a los sirvientes de la
secta, para pedirles ayuda. Mientras que aquel joven continuó con sus acusaciones.
“Cuando entraste hoy en la mañana, sé que lo tomaste de mis cosas, ¡Ladrón! ¡No sabes lo
que te llevaste!” Siguió gritando aquel joven omega.
Viéndose muy culpable, el único hijo de la familia Mo respondió: “Estas demente, ¡Yo nunca
tocaría nada de tus cosas!”
“¡Eres un sucio ladrón! ¡Regrésalo ahora!”
Muy confundidos e incomodos por la situación, los cultivadores Lan se miraron entre ellos,
sin saber si deberían o no intervenir en una pelea como aquella. Pero las cosas empeoraron
cuando los sirvientes finalmente entraron al salón, y sujetaron al joven omega de una forma
brusca y dolorosa, arrastrándolo fuera del lugar.
Sintiéndose muy molesto al ver eso, Jingyi se puso de pie y dijo: “¡Deténganse ahora! ¡Eso
no es correcto, lo están lastimando!”
Sin embargo las palabras del heredero Lan parecieron desaparecer en el viento, ya que nadie
le hizo caso. Y mientras todas las miradas se fijaron en aquel omega misterioso, el ambiente
se llenó repentinamente de energía resentida.
“Si vuelves a poner un solo dedo en mis cosas… Definitivamente voy a matarte…” Dijo el
joven omega mirando a Mo Yuan, antes de ser finalmente sacado de aquel salón.
Todos se quedaron en silencio, estupefactos por el espectáculo que acababan de presenciar,
así que la líder de la villa Mo se aclaró la garganta e intentó dar una explicación: “Jóvenes
maestros, me disculpo por la intervención de mi tonto sobrino. Deberán disculparlo, el hijo
de mi hermana, Mo Xuanyu, tiene graves problemas mentales, no sabe lo que dice…”
“Mo Xuanyu…” Susurró Lan Yuan, mientras sentía como la energía resentida en el lugar se
disipaba.
Y aunque la líder Mo seguía hablando, dando cientos de excusas para lo sucedido, Sizhui no
podía escucharla. Él solo mantenía la mirada fija en Mo Yuan, quien seguía viéndose muy
nervioso después de aquel encuentro, tocando su cuello con suavidad.
Desde su posición, Lan Yuan no podía verlo claramente, sin embargo pudo ver perfectamente
una línea negra en el lateral del cuello de aquel chico. ¿Acaso era la marca de una maldición?
Sizhui no estaba seguro, y prefería pensar que solo era una marca de tinta o algún mechón de
cabello. A Sizhui no se le ocurría como había alguna persona en esa secta que pudiera dejar
tal maldición.
***
Mirando hacia la nada, Sizhui abrió los ojos, escuchando una melodía a lo lejos.
Varios reportes de cadáveres resentidos se hicieron en esa área, lo que no sería un gran
problema para otras sectas, sin embargo en la Villa Mo si lo era, ya que no había cultivadores
en esas tierras que pudieran encargarse del problema. Era relativamente usual ver algunos
cadáveres resentidos a las afueras de las demás sectas, ya que ellos almacenaban algunos
objetos antiguos malditos o creaban talismanes para atraerlos y practicar eliminándolos.
¿Pero cadáveres resentidos en un lugar así? Eso sí era problemático, ya que la Villa Mo no
tenía ninguna forma de atraer ese tipo de seres, lo que significaba que algo más estaba
llevándolos hasta ahí.
Parados en el centro de la Villa, todos los cultivadores Lan sostenían talismanes para atraer
energía resentida. Ellos creían que solo era una coincidencia, que los cadáveres habían
llegado ahí por casualidad. Sin embargo algo hacía sospechar a Lan Yuan de que algo muy
malo estaba ocurriendo en ese sitio… Pero no sabía el que.
“¿Estas escuchando eso?” Preguntó Lan Yuan, mirando a su primo de reojo.
“¿Qué cosa?” Preguntó Jingyi en otro susurro, manteniendo los ojos cerrados y muy
concentrado.
“Esa canción…”
“Deja de distraerte, a alguien aquí le gusta tocar la flauta, no importa…”
“No es eso… La canción, creo que la escuche antes. Creo que mi A-Die…”
Pero antes de que pudieran terminar de hablar, todos los Lan abrieron los ojos de golpe,
cuando escucharon gritos a lo lejos. Dejando los talismanes, todos se aferraron a sus espadas
y corrieron en dirección a los gritos, encontrando una masacre.
***
El dolor, el sufrimiento, la ira… Mo Xuanyu sabía de lo que se alimentaba, lo entendía a la
perfección.
Con su flauta de bambú, recién creada, él caminaba por los pasillos de su secta controlando la
energía resentida a su alrededor, hasta llegar al pabellón principal de esta casa. Así como lo
esperaba, tres cadáveres llenos de sangre estaban ahí, en lo que solía ser la recamara de los
líderes de la villa. La familia principal de la Villa Mo había muerto.
Dejando de tocar la flauta finalmente, Mo Xuanyu se acercó al cuerpo de su primo, quien era
el que sostenía el cuchillo con el cual había asesinado a sus padres. Agachándose al lado del
cadáver, Mo Xuanyu buscó entre las túnicas de Mo Yuan, encontrando finalmente un
pequeño artefacto de acero, el cual rápidamente envolvió en un trozo de tela y guardó en sus
túnicas.
“Lo sabía… Sabía que tú lo tomaste. Lamento esto, A-Yuan, pero no puedo dejar que te lo
llevaras. Puedes hacer lo que quieras conmigo, pero tocar esto… Está prohibido. Este objeto
es para A-Yao.” Susurró Mo Xuanyu, evitando mirar el rostro de sus familiares muertos.
Mo Xuanyu no podía negarlo, si sentía dolor por sus tíos y sus primos muertos, hubiera
deseado que las cosas fueran diferente, pero el “Sello de tigre de estigio” era algo que él
debía proteger.
Mo Yuan se lo había llevado ya que quería impresionar a los cultivadores Lan cuando
llegaran, sin embargo no conocía el efecto negativo de aquella pieza de acero, su cuerpo
comenzó a infectarse con la energía resentida. Cuando Mo Xuanyu finalmente pudo crear su
flauta, en medio de la madrugada, él le ordeno a su primo que se suicidara, Mo Xuanyu sabía
que no había remedio para Mo Yuan, que ya estaba infectado con aquella energía obscura.
Sin embargo lo que él nunca pensó, era que Yuan estaría con sus padres, quienes al intentar
detenerlo, resultaron heridos y finalmente muertos. En una sola noche, Mo Xuanyu había
acabado con la vida de toda su familia, así como había prometido, venganza…
Al escuchar todo el alboroto en la habitación de los líderes de la villa, varios sirvientes se
acercaron, y al ver semejante espectáculo, comenzaron a gritar aterrorizados. Al verse
descubierto, Mo Xuanyu supo que ya no podía quedarse ahí, y poniéndose de pie salió
corriendo. Ya no había nadie que lo detuviera, y Mo Xuanyu tenía pensado correr hasta
quedar exhausto.
Su vida como un miembro de la familia Mo había terminado.
Al llegar al salón, todos los miembros de la secta Lan se quedaron estupefactos, viendo los
cadáveres de aquellas tres personas, y la energía resentida que los rodeaba. Y aunque Lan
Yuan estaba igualmente sorprendido por el hallazgo, no les prestó demasiada atención, ya que
a lo lejos pudo ver a Mo Xuanyu, corriendo fuera de la secta.
Antes de que cualquier persona pudiera decir alguna palabra, los tres cadáveres volvieron a
ponerse de pie, y siguiendo las ultimas ordenes que Mo Xuanyu les había dado, continuaron
peleando entre ellos, llamando más cadáveres resentidos con su energía, y sin importarles a
quien o a que se llevaban entre sus poderosos ataques durante la pelea.
“¡Retrocedan!” Gritó Lan Yuan, escuchando más gritos.
Sizhui se quedó estupefacto, nunca antes había visto algo como eso, y de inmediato supo que
no eran cadáveres resentidos normales, había algo terriblemente malo en aquel asunto. Y
viendo como nuevos cadáveres resentidos comenzaban a llegar desde todos lados, sintiéndose
en un grave peligro, Sizhui no tuvo más opción.
Tomo una señal de sus túnicas, y la señal blanca de los Lan se vio en el cielo.
***
Jadeando suavemente, Wei Wuxian se aferró con fuerza a sus propias túnicas en el suelo,
mientras su cuerpo temblaba descontrolado.
“Lan… Zhan…” Susurró Wei Ying, sin poder dejar de gemir y temblar.
En medio de la sombra de la naturaleza, detrás de unos matorrales, Wei Wuxian y su esposo
Lan Wangji, se encontraban “patrullando” a las afueras de la villa Mo, quedándose cerca de
los jóvenes cultivadores Lan… Pero no demasiado cerca.
“Detente… si continuas…” Susurró Wei Wuxian, temblando: “Me voy a venir…”
Con suavidad, Lan Wangji presionó una de las nalgas de su omega, y pasando sus dedos por
la entrada del mayor, preguntó: “¿Acaso no quieres venirte? ¿No lo estoy haciendo bien?”
Muy avergonzado, Wei Ying respondió: “No con tu lengua ahí… Pon tú… Miembro…”
Sonriendo con suavidad, Lan Wangji susurró: “Me gusta cuando eres sincero contigo
mismo…”
Prefiriendo no responder, ya que se sentía sumamente incomodo con esas palabras, Wei Ying
bajó la espalda y levantó las caderas para su alfa. Ambos estaban en su segunda ronda de
hacer el amor, y tras un descanso, estaban dispuestos a continuar hasta el amanecer. Sin
embargo cuando el mimbro de Lan Wangji estaba a punto de entrar dentro de Wei Wuxian,
ambos se sorprendieron cuando sobre sus cabezas y entre las hojas de los árboles, pudieron
ver los destellos blancos de la señal de auxilio de la secta Lan.
“Sizhui…” Susurró Wei Ying, sintiéndose inmediatamente asustado por su cachorro.
Sin necesidad de más palabras, ambos se separaron y se vistieron con rapidez, para luego
tomar sus espadas y salir volando en dirección a la villa Mo. Wei Ying se sentía ligeramente
frustrado por no haber podido alcanzar su tan deseado orgasmo, pero ante el temor de que su
hijo estuviera en peligro, todo lo demás parecía minúsculo.
***
Los jóvenes cultivadores de la secta Lan se encontraban en el centro de la Villa Mo,
protegiendo a todos los habitantes de este sitio. Gracias a la gran energía resentida que
provenía de los cadáveres de los que alguna vez fueron los líderes de la secta, otros muchos
cadáveres resentidos los habían rodeado, y ahora amenazaban con atacarlos.
“¡Son demasiados!” Dijo Lan Jingyi peleando con su espada.
“¡Resistan y no los dejen avanzar!” Ordenó Sizhui en un grito.
Pronto sus plegarias fueron escuchadas, y con la luz de amanecer, Lan Wangji y Wei Wuxian
llegaron a la villa, parándose sobre uno de los techos. Usando su Guqin, Lan Wangji
comenzó a tocar una melodía suave, logrando controlar a los cadáveres resentidos y logrando
detenerlos.
Mientras que Wei Ying bajó de inmediato al lado de su cachorro, y poniéndose frente a todos
los cultivadores Lan, comenzó a exterminar a todos los cadáveres resentidos, que se quedaron
aturdidos con la suave música que Lan Wangji logró interpretar.
Tras varios minutos de silenciosa tensión, la música finalmente se detuvo, y el último cadáver
resentido cayó al suelo. Todos los miembros de la villa Mo parecieron aliviados, habiendo
sobrevivido a aquella noche tormentosa. Mientras que los cultivadores Lan jadeaban
exhaustos después de esa gran pelea.
Siguiendo el rastro de la energía resentida que quedaba en el lugar, Wei Ying se asomó en el
pabellón principal de aquella casa, y dijo: “Lan Zhan, debes ver esto…”
Los cadáveres, finalmente inertes, de la familia Mo se encontraban en el piso. La energía
resentida había abandonado sus cuerpos, y solamente había dejado la maldición, con aquel
cumulo de líneas negras que se había impregnado en sus pieles como una infección.
Acercándose a su esposo con rapidez, Lan Wangji también entró en el pabellón, mirando
aquel espectáculo sorprendido. Ambos se dieron cuenta de que algo terrible había ocurrido
ahí.
“Wei Ying, ¿Qué es esto?” Preguntó Lan Wangji.
“¿Acaso no lo reconoces?” Preguntó Wei Wuxian con seriedad: “Es una maldición causada
por poseer un objeto maldito, y la única cosa lo suficientemente fuerte como para provocar
algo así… Es mi “Sello del tigre de estigio”, no hay nada más en este mundo que pueda
causar algo así.”
“Es imposible, los Jin lo destruyeron.”
“Pues alguien debió crear uno nuevo” Dijo Wei Wuxian con seriedad: “Nos veremos en 10
años, eso fue lo que dijo… ¿Cuántos años han pasado?”
“¿Acaso crees que Wen Shima está detrás de todo esto?”
“Tal vez lo está, y si estoy en lo correcto, el cuerpo de un nuevo omega con habilidad para la
energía resentida está en problemas” Dijo Wei Ying con seriedad: “Lan Zhan, Wen Shima
causara una nueva guerra si no lo detenemos, tenemos que parar esto ahora…”
Capítulo 2.

Cuando el sol de la mañana iluminó la secta por completo, Wei Wuxian y Lan Wangji se
reunieron con todos los junior de la secta Lan, quienes aún estaban asustados, pero podían
tener información importante para ellos.
Y no se equivocaban, ya que de inmediato, Lan Sizhui les hizo saber a sus padres sus
preocupaciones: “Desde el primer momento note algo extraño en él, como si su cuerpo
desbordara energía resentida. Además, estaba aquí cuando todo ocurrió, y salió corriendo
antes de que todo se saliera de control…”
“¿Quién es?” Preguntó Wei Ying mirando a su hijo.
“Es otro miembro de la familia Mo, Mo Xuanyu si no me equivoco.”
“Mo Xuanyu…” Susurró Wei Ying pensativo.
Girándose en dirección a su alfa, Lan Wangji preguntó: “¿Crees que este poseído?”
“Esperemos que no, pero para saberlo tenemos que encontrarlo primero, si salió corriendo
probablemente esté en algún lugar seguro en la Villa o por los alrededores, busquemos sus
lugares preferidos por aquí, y tratemos de encontrar pistas.”
Buscando a los sirvientes de la secta, quienes tenían la mayor información sobre los
miembros de la familia Mo, Wei Ying y Lan Zhan decidieron dividirse para hallar al joven
Mo. Wei Ying iría a los aposentos de Mo Xuanyu, mientras que Lan Wangji iría a buscar a la
mascota de aquel joven Mo.
***
Caminando a los reducidos establos de la secta, Lan Wangji, Lan Sizhui y Lan Jingyi; pronto
se encontraron con un animal atado a un poste, un burro muy malhumorado, quien solo
comía heno y los miraba con desprecio.
“Así que tú eres manzanita” Dijo Lan Yuan con una sonrisa: “¿Has visto a tu amo?”
Caminando en medio de la suciedad, Lan Wangji ignoro al burro, y solo se concentró en
recorrer el establo. Había pensado que ante el peligro, Mo Xuanyu había corrido en búsqueda
de su cosa favorita en la secta, su mascota. La mayoría de las personas prefería un cachorro o
un gatito, pero aparentemente Mo Xuanyu había preferido tomar como mascota a un burro,
algo que le hizo notar a Lan Wangji lo peculiar que era el joven con quien estaban tratando.
“¿Ahora le hablas a los animales?” Preguntó Jingyi acercándose a su primo con una sonrisa
burlona.
“Basta, él también debe estar asustado, por eso le hablo… No espero que me responda si es
lo que crees.” Dijo Sizhui, poniendo los ojos en blanco.
“Eres como una pequeña princesa, hablando con los animales, que tonto…”
“No me molestes…”
Enfadado por las palabras de su primo, Lan Yuan le dio un golpe en el brazo a Jingyi, quien
respondió intentando pellizcar el brazo de Lan Yuan. Ambos de esta forma iniciaron una
pelea suave, como las que solían tener cuando eran pequeños. Pero sin ver el reducido
tamaño de aquel establo, cuando Jingyi trató de esquivar uno de los golpes de su primo,
golpeo la puerta del establo donde se encontraba manzanita, abriendo esta.
Antes de que pudieran darse cuenta, el burro salió corriendo en dirección al bosque. Y ante la
mirada furiosa de Lan Wangji, los dos jóvenes Lan entendieron que debían ir a buscar al
animal.
De esa forma los tres cultivadores Lan se metieron en medio de los arboles siguiendo al
testarudo burro manzanita.
***
Abrió la puerta de aquel almacén con cuidado, mirando el descuidado interior con curiosidad.
“¿En verdad dormía aquí?” Preguntó Wei Ying girándose para ver al sirviente que estaba
detrás de él: “¿Puedo saber por qué?”
El nervioso sirviente respondió: “El joven maestro Mo… Siempre tuvo graves problemas
mentales, su familia pensó que este sería un lugar adecuado para poder contenerlo y…”
“Es un almacén” Dijo Wei Ying disgustado.
Desde que había llegado a la villa Mo, Wei Ying no pudo evitar tener el terrible
presentimiento de que algo muy raro o muy malo estaba ocurriendo en ese lugar, y no solo
pensaba eso por los fantasmas resentidos, había algo muy obscuro alrededor de esa familia y
Mo Xuanyu.
Con un suspiro, Wei Ying entro en la habitación, al cual era bastante pequeña, con cosas
tiradas por todos lados, y una pequeña cama en una esquina.
“¿Cuantos años me dijiste que tenía?” Preguntó Wei Ying con algo de frialdad.
“18 años” Respondió el sirviente.
“Era un omega, ¿Verdad? ¿Por qué no obtuvo un compromiso?”
“Como le había comentado, mi señor, el joven maestro Mo tenia graves problemas…” Volvió
a repetir el sirviente.
“No creo que eso sea relevante. Era un chico de buena familia, con una buena herencia por
parte de su madre si no me equivoco, he visto matrimonios peores bajo circunstancias
similares” Dijo Wei Ying con frialdad: “Deja de mentirme, dime porque no tuvo un
compromiso si ya es tan mayor.”
Después de la guerra con los Wen, los omegas masculinos se habían vuelto muy populares
entre los alfas, quienes incluso compraban omegas masculinos de casa pobres para volverlos
señores de poderosas villas. Eso había resultado en un grave problema, volviendo las cosas
aún más peligrosas para omegas indefensos. Pero bajo esa premisa, a Wei Ying le sorprendía
que un joven como Mo Xuanyu siguiera soltero, a pesar de su condición económica y social,
sin entender porque seguía en esa casa o incluso por que no estaba casado.
Bajando el tono de su voz, Wei Ying dijo: “Ya no debes temer a tus antiguos señores, ellos ya
no están más, tu nuevo señor es Mo Xuanyu, el ultimo heredero de esta villa. Así que por
favor, dime la verdad para que podamos encontrarlo antes de que sea demasiado tarde…”
“El esposo de la líder de la secta no quería que Mo Xuanyu se casara” Dijo el sirviente con
un tono de tristeza: “Como usted dijo, varias cartas propuestas llegaron, pero todas fueron
rechazadas.”
“¿Por qué?”
“Mo Xuanyu era el interés ‘amoroso’ de nuestro antiguo señor” Dijo el sirviente.
Muy sorprendido, Wei Ying abrió mucho los ojos, sin saber que decir, muy confundido por la
respuesta.
“El antiguo señor Mo dijo que sería el primero en tomar a Mo Xuanyu después de que él
tuviera su celo, y luego de eso permitiría que se casara con otro alfa.” Siguió explicando el
sirviente: “Sin embargo el joven maestro Mo nunca tuvo su celo, y por eso lo encerraron en
este lugar, para evitar que escapara.”
“Y aun así se preguntan por qué se volvió loco…” Susurró Wei Ying, mirando todo el lugar
lleno de lastima.
No pudo evitarlo, al conocer la historia de Mo Xuanyu, Wei Wuxian sintió una gran tristeza
por él. Entendiendo a la perfección la razón por la cual había escapado, cuando tuvo la
primera oportunidad, él no dudo en dejarlo todo, ya que incluso la calle o vivir como un
mendigo era mejor que aquella habitación.
Sin embargo Wei Ying no podía arriesgarse, tenía que encontrarlo, ya que temía que Mo
Xuanyu también hubiera sido afectado por el nuevo “Sello del tigre de estigio”, y que ahora
tuviera energía resentida en su interior. Tenía que encontrarlo antes de que algo terrible
ocurriera.
Caminando por aquel almacén, observo como había un horno de fundición en otra de la
esquinas de la habitación, donde había rastros recientes de carbón y acero. La secta Mo era
conocida por hacer armas espirituales, así que a Wei Ying no le llamó la atención ver aquel
objeto en esa habitación.
Conociendo mejor el contexto de Mo Xuanyu, Wei Wuxian preguntó: “¿Sabes si hay algún
agujero en la pared o una tabla suelta en esta habitación?”
“No mi señor, ¿Por qué busca algo como eso?”
“Es obvio que él no se sentía seguro en este sitio, todo este desastre, dudo que lo haya
causado él” Dijo Wei Ying, mirando al sirviente de reojo: “Seguro tenía algún lugar donde
escondía sus objetos más preciados… Claro, si no se los llevó antes de escapar.”
Caminando por la habitación, Wei Ying dio suaves patadas en las paredes, hasta que
finalmente, una de las tablas cercanas al piso al lado de la cama, se desprendió y cayó. Wei
Ying no pudo evitar sonreír, ya que en su juventud, él también solía esconder cosas en su
habitación de esa forma.
Agachándose, con cuidado Wei Ying metió una de sus manos dentro de aquel agujero,
encontrando solo una pequeña caja de cerámica, debajo de un libro malgastado, que se notaba
que Mo Xuanyu había hecho él mismo.
Mirando la caja con atención, Wei Ying se dio cuenta de que era costosa, la cerámica era
buena, y los dibujos sobre ella eran delicados, seguro costaría una fortuna. Pero con
curiosidad, Wei Ying abrió la caja, esperando encontrar algún tesoro, pero solo encontró…
Hojas secas.
“Oh no…” Susurró Wei Ying, reconociendo esas hojas de inmediato.
“¿Sucede algo maestro?” Preguntó el sirviente confundido.
“Tengo que hallar a mi alfa, ahora” Dijo Wei Ying, poniéndose de pie de inmediato.
***
Corriendo en medio del bosque, detrás de aquel apresurado burro, Lan Sizhui seguía
intentando atrapar al animal y hacer que se detenga.
“¡Manzanita!” Gritó Sizhui, intentando correr más rápido: “¡Manzanita detente!”
Detrás de él y a cierta distancia, su padre y su primo también corrían detrás de él, ya que no
querían dejar a Sizhui solo en medio de una situación tan peligrosa.
Sin embargo al llegar a un prado algo solitario, de golpe una red cayó de uno de los árboles,
enredando al burro y deteniéndolo finalmente.
“¿Una trampa?” Preguntó Sizhui confundido: “Son… Redes espirituales…”
Alcanzando a Sizhui poco después, Lan Wangji y Lan Jingyi también observaron el
espectáculo, con el pobre burro relinchando desesperado, enredándose cada vez más en
aquella red que había caído del cielo.
“Rayos…” Dijo Jingyi, acercándose a A-Yuan para ayudarlo a quitarle la red al animal.
“¿Porque hay una red espiritual aquí?” Preguntó Lan Yuan confundido.
“No solo hay una, mira los árboles, debe haber cientos en este lugar, es una cantidad
realmente obscena, ¿Quién puede necesitar tantas redes espirituales para cazar?”
“La pregunta no es quien, es porque necesita tantas” Dijo Lan Wangji, mirando el
espectáculo a cierta distancia.
Sin embargo la respuesta fue bastante obvia sin necesidad de palabras, pues pocos segundos
después, varios cultivadores con túnicas doradas aparecieron al otro aldo del prado,
alarmados por la acción de una de sus redes.
Muy confundido, sintiendo su corazón latir desesperado en su pecho, Lan Sizhui levantó la
mirada al sentir un dulce aroma, tan agradable como los dulces rojos de cereza que él adoraba
comer. Y confundido, observó a los alfas en túnicas doradas que se acercaban a ellos.
“¿Quién accionó las trampas?” Preguntó el que parecía ser el líder de aquellos cultivadores.
“Lo hizo un burro, ¿Acaso no puedes verlo?” Preguntó Jingyi, sin dejar su labor de intentar
quitar la red del animal.
Guardando un segundo de silencio, el líder de los cultivadores dijo: “Lan Jingyi, que
desagradable sorpresa.”
“Descuide joven maestro Jin, no es un placer para mi verlo aquí” Dijo Jingyi con una sonrisa
burlona: “¿Que hace aquí? Tan lejos de casa… Y de su madre…”
Al escuchar esas palabras, todos los cultivadores Jin mordieron sus labios, para no reírse.
Pero al cultivador Jin no le hizo ni un poco de gracia, presionando sus puños con furia.
“Cuida tus palabras, Lan Jingyi” Amenazó el cultivador Jin.
“¿Por qué debería?” Preguntó Jingyi con calma: “No es como que te tema, en todas las
conferencias para cultivadores sales llorando y pidiendo a tu mami, pequeño alfa mimado…”
“¿Por qué te interesas tanto en mis relaciones familiares? Oh lo entiendo, debe ser duro para
ti, no tener una madre…”
Muy enfadado, Lan Yuan se puso erguido para mirar a ese otro alfa al otro lado del prado, sin
poder creer lo que había dicho. Sin embargo Jingyi no prestó demasiada atención, aun
concentrado en quitar la red espiritual del asustado animal.
“Yo cuidaría mi lengua si fuera usted, maestro Jin” Dijo Jingyi con calma: “Después de todo,
esta frente a su omega…”
Muy confundido, Jin Ling preguntó: “¿Qué?”
“Es un placer para mi presentarle a mi pequeño primo, Lan Sizhui, su próximo esposo.” Dijo
Lan Jingyi con un tono triunfal.
Por un momento, Jin Rulan palideció, mirando como al lado de Lan Jingyi, estaba un joven
delicado, también usando túnicas blancas, pero que lo miraba horrorizado.
Lan Sizhui simplemente no podía creerlo…
A-Yuan aún no había conocido a su prometido alfa, ya que el joven omega aún no había
tenido su primer celo, y aun no podían empezar el periodo de cortejo hasta que Sizhui tuviera
su primer celo. Así que esa era la primera vez que él podía ver a Jin Ling, llevándose aquella
sorpresa, y aún más, teniendo aquel desagradable primer encuentro en medio de esa pelea.
Sin embargo nadie pudo decir nada más, ya que de inmediato, Lan Wangji decidió intervenir:
“Jingyi, detente, no es la forma correcta de comportarse frente a un líder de otra secta.”
“Si se comporta como un animal, yo también me comportare como uno” Respondió Lan
Jingyi con una sonrisa burlona de nuevo.
“Tú no eres un animal, eres el próximo líder de la secta Lan, así que compórtate” Dijo Lan
Zhan con frialdad: “Y respecto a usted, joven Jin Rulan, debería ser más cuidadoso al hablar
de mi secta o de la secta de su próximo esposo, no le gustara tener problemas incluso antes de
haber conocido a su prometido.”
Bajando la mirada, Lan Sizhui se concentró en seguir quitando la red de aquel pequeño burro.
Sin embargo no podía evitar tener sentimientos contradictorios, ya que por un lado estaba
furioso, muy molesto con aquel tonto alfa por lo que le había dicho a su primo. Sin embargo
su omega estaba comportándose… Muy extraño, como si quisiera acercarse a ese alfa Jin y
no soltarlo jamás.
“Felicidades A-Ling, diste la mejor primera impresión ante tu suegro y tu prometido. Moriría
por ver la cara de tu querida mami cuando sepa que tu…” Dijo Jingyi con una gran sonrisa en
su rostro, hasta que sus palabras se cortaron de golpe, y él llevó una de sus manos a su cuello,
notándose muy confundido.
“Jingyi, compórtate.” Volvió a ordenar Lan Wangji, con un tono muy serio.
Intentando disimular su disconformidad al haber sido víctima del hechizo de silencio de los
Lan, Jingyi solamente sonrió, mientras continuaba liberando al burro de la red.
Sin embargo un ambiente muy tenso se había hecho en todo el lugar, ya que todos los
cultivadores Jin estaban hablando en murmullos, y de inmediato Jin Ling se mostró
avergonzado.
Y aunque lo adecuado hubiera sido que él se presentara de formalmente ante su prometido y
Lan Wangji, Jin Ling solamente le dio una última mirada a Lan Sizhui, antes de que se girara
y se fuera, sin decir nada más. Lan Yuan solo guardo silencio, obligándose a sí mismo a no
mirar al alfa que rápidamente escapaba de ese prado.
Aquel había sido un primer encuentro muy desastroso.
***
En el camino a ciudad Yi, A-Qing comenzó a correr con rapidez, dejando que el aire golpeara
su rostro.
“A-Qing, no corras tan rápido” La regañó Xue Yang, mirando a la joven delante de ellos: “Te
caerás…”
“¡Eres demasiado exagerado!” Reclamó la joven girándose y mirándolo muy molesta: “No
me caeré…”
“A-Qing, estas olvidando un pequeño problema, que tú no puedes ver” Reclamó Xue Yang
con molestia: “¡Deja de correr!”
Sonriendo con burla, la joven de ojos blanquecinos prefirió no decir nada, y continuó con su
camino corriendo hasta su hogar. No podía evitar sentirse orgullosa, ya que aun a pesar del
tiempo, A-Qing pudo engañar a Xue Yang haciéndole creer que era ciega.
“Esa niña…” Se quejó Xue Yang, luciendo muy enfadado.
“Tranquilo” Dijo Xiao Xingchen, acercándose a él para abrazarlo por la cintura: “Ella aun es
joven, déjala que se divierta.”
“A-Chen, no es justo, se caerá y vendrá llorando, para que le vende las rodillas y le cepille el
cabello, es una inconsciente” Volvió a quejarse Xue Yang.
“Tranquilo, todo estará bien…”
Con cuidado, Xiao Xingchen besó suavemente el cuello de su omega, justamente en el lugar
en el que lo había mordido para vincularse con él hace un par de meses.
Ambos habían iniciado una nueva familia hace solo un año atrás, cuando Xue Yang y él se
casaron. Junto a A-Qing, la pequeña niña beta que habían adoptado, ellos comenzaron a
remodelar la abandonada Ciudad Yi, una de las tantas ciudades desoladas por la guerra que
habían quedado después de lo que ocurrió con los Wen.
Ellos estaban comenzando a reconstruir las casas, limpiar el lugar, e iniciar cultivos cercanos.
En un sueño demasiado ambicioso, Xiao Xingchen deseaba iniciar su propia secta, y por eso
estaba creando aquella villa.
Mirando a su alfa con una sonrisa, antes de que pudiera responder o decir algo más, Xue
Yang y Xiao Xingchen escucharon un grito a lo lejos, el cual pertenecía a la joven A-Qing.
Sin decir nada más, ambos tomaron todas sus compras en el pueblo más cercano, y
comenzaron a correr en dirección al sonido. A un lado del camino, ambos encontraron a A-
Qing, quien lucía horrorizada.
“¡Esta muerto!” Gritó la joven, luciendo muy asustada.
“¿Quien?” Preguntó Xue Yang confundido.
Pero al estar al lado de la joven, ambos vieron a un muchacho, el cual estaba tirado en el piso,
inconsciente.
“No está muerto, aun respira” Dijo Xue Yang, suspirando con suavidad: “¿Cómo lo
descubriste?”
A pesar del temor, ante la amenaza de que descubrieran su mentira, A-Qing respondió: “Casi
tropiezo con él…”
Olfateando el aire muy concentrado, Xiao Xingchen dijo de pronto: “A-Yang, ese aroma…”
“Si, este chico es un omega, y parece que va a entrar en celo” Dijo Xue Yang, luciendo muy
serio de pronto.
A-Qing no dijo nada, mirando al joven de cabellos negros y túnicas viejas tirado en el piso,
mostrándose realmente curiosa, ya que ella al ser un beta, no podía oler nada.
“Crees que…” Susurró Xiao Xingchen, temiendo lo peor al igual que su esposo.
“No huelo a otro alfa, pero pudieron ser betas, si lo abusaron…” Susurró Xue Yang muy
serio: “Ahora no hablemos de eso, no frente a A-Qing.”
Xiao Xingchen asintió con la cabeza, y respondió: “Llevémoslo a casa, ahí podremos
ayudarlo.”
“De acuerdo.”
Dejando todas las compras en el piso, Xue Yang subió al joven inconsciente en la espalda de
Xiao Xingchen, quien se encargaría de llevarlo hasta la ciudad Yi.
Mientras que A-Qing, todavía muy confundida, se quedó un poco atrás de sus padres
adoptivos. Pero con curiosidad, volvió a mirar el lado de camino donde aquel joven había
sido encontrado, hallando un pequeño cuaderno y una brújula muy extraña, las cuales tras
considerarlo por un momento, decidió llevarse.
A-Qing sospechaba que algo muy extraño estaba ocurriendo alrededor de ese joven.
***
Tras varios minutos, todos los cultivadores Lan salieron del bosque a las afueras de la villa
Mo, trayendo consigo al rebelde burro manzanita, quien todavía estaba relinchando con
molestia.
Cruzado de brazos y protegiéndose con una sombrilla, Wei Wuxian observaba a su esposo y a
su hijo, quienes salían del bosque en completo silencio. Esto extrañó mucho a Wei Wuxian,
quien pudo notar de inmediato que algo malo le había ocurrido a su cachorro.
“¿A-Yuan?” Preguntó Wei Ying confundido, acercándose a su hijo: “¿Qué pasó?”
Sin embargo, evitándolo como siempre, Sizhui respondió: “Nada, iré a darle de comer.”
Sin siquiera ver a Wei Wuxian, Sizhui tiro con fuerza de la cuerda que tenía el burro
alrededor del cuello, para obligarlo a caminar en dirección a los establos en la villa. Mientras
que aun en silencio y con una sonrisa en su rostro, Jingyi se acercó a Wei Wuxian, y tras
hacer una reverencia corta, fue detrás de Sizhui.
“¿Qué pasó?” Preguntó Wei Ying confundido, acercándose a su alfa.
“Te contare después, aunque no te gustara” Dijo Lan Zhan con seriedad: “¿Averiguaste
algo?”
“Tal vez demasiado” Dijo Wei Ying, recordando la razón por la cual estaban en ese sitio:
“Mira esto.”
Con cuidado, Wei Ying tomo la caja de cerámica de sus túnicas, y la abrió frente a su alfa,
mostrándole aquellas hojas ligeramente secas.
“¿Qué es eso?” Preguntó Lan Wangji.
“¿No lo reconoces?” Preguntó Wei Ying con una sonrisa: “Las bebía mucho cuando era
joven, cuando mis celos eran… Irregulares. Son hierbas que suprimen el celo, son efectivas
pero, algo perjudiciales a largo plazo.”
“¿Era de Mo Xuanyu?”
“Eso es correcto. Me dijeron que nunca tuvo un celo, probablemente sea por esto, las recogía
en el bosque, y las bebía para intentar evitar que su tío lo lastimara. Eso es horrible.” Dijo
Wei Ying con tristeza: “Tenía muchas razones para escapar, para querer huir muy lejos de
aquí…”
“¿Tienes alguna idea de donde pudo ir?”
“No, él no tenía amigos, y esta era su única familia. No creo que tuviera a donde ir.”
“Eso será problemático, si de verdad está infectado con energía resentida o esta poseído,
tendremos que hacer un gran trabajo para hallarlo.” Dijo Lan Wangji con seriedad:
“Tendremos que hablar con mi hermano.”
“Lo sé, creo que esto es más grave de lo que suponemos, la reaparición del sello y la energía
resentida que llena todo este lugar y otras ciudades aledañas, no me gusta nada de eso.” Dijo
Wei Ying con seriedad.
Tomando la mano de su alfa, ambos comenzaron a caminar de regreso a la villa Mo,
dispuestos a reunir a todos y marcharse. Sin embargo pensando aun en el joven maestro Mo,
una nueva duda comenzó a crecer en la mente de Wei Wuxian.
“Los sirvientes mencionaron a su madre, ¿Y su padre?” Preguntó Wei Ying: “No estaba aquí,
si aún está vivo, Mo Xuanyu pudo ir a buscarlo…”
Con esa idea en mente, Lan Wangji y Wei Wuxian se dirigieron nuevamente con los
sirvientes de la villa, quienes seguían limpiando el desastre por lo ocurrido la noche anterior.
Acercándose al que parecía ser el jefe de todos ellos, se dispusieron a buscar nueva
información.
“¿El padre del segundo maestro Mo?” Preguntó el sirviente algo nervioso: “Lamento no
poder darle una respuesta, Wei Gonzi, había un gran secretismo en la secta al respecto,
incluso para nosotros los sirvientes de alto rango.”
“Pero debes tener alguna idea, si su padre alguna vez vino a buscarlo…” Sugirió Wei Ying.
Tras un par de segundos, el sirviente dijo: “Tengo dos ideas, pero… No son respuestas
concretas.”
“De acuerdo, voy a escucharte.”
“La primera tiene que ver con el pasado de él joven maestro Mo, cuando tenía menos de 10
años, fue llevado a la secta Lanling Jin para ser entrenado como un cultivador de alta
categoría. Pero tres años después, fue expulsado y regresado aquí, cuando comenzó con sus
delirios.”
“Secta Jin…” Susurró Wei Wuxian girándose para ver a su alfa.
“¿Alguien de la secta Jin?” Preguntó Lan Wangji: “Solo se me ocurre un nombre de un alfa
que tenía hijos dispersos por todo el mundo…”
“Imposible, mi hermana me hubiera dicho si un nuevo hijo Jin Guangshan hubiera aparecido,
aunque sea para compartir el rumor conmigo.”
“Posiblemente no. Si hago bien mis cálculos, Mo Xuanyu fue a la secta Jin y posteriormente
fue expulsado en los primeros años de nuestra reclusión, y entonces…”
“Nosotros teníamos nuestros propios problemas, lo entiendo” Dijo Wei Ying pensativo: “Un
nuevo hijo de Jin Guangshan hubiera resultado en una poca cosa comparado con nuestra
situación de entonces.”
En silencio, y aun sintiendo mucha culpabilidad, Wei Ying recordó sus primeros años de
reclusión en la secta Lan, cuando su alfa estaba recuperándose de sus heridas, su hijo no
quería hablarle, y nadie sabía sobre su futuro. Definitivamente, la última prioridad de su
hermana hubiera sido contarle sobre un nuevo miembro Jin en esas condiciones.
Volviendo a girarse en dirección al sirviente, Wei Ying preguntó: “¿Cuál es la segunda idea
que tiene en mente?”
“Desde hace un par de meses, un alfa de alto rango de una secta importante venia
constantemente a la secta Mo, a intentar discutir un compromiso para el joven Mo Xuanyu y
él mismo” Dijo el sirviente pensativo: “El alfa líder de la secta Nie, si no mal recuerdo, Nie
Huaisang.”
Con aquella noticia, Wei Ying y Lan Wangji fueron los que se quedaron estupefactos. En el
pasado, Nie Huaisang nunca mostró interés por otro omega o beta, y había pasado todo ese
tiempo sin tener una pareja seria o una intención de compromiso. Paso tanto tiempo que Wei
Ying incluso llegó a pensar que Huaisang no disfrutaba de la compañía de otra persona…
Sin embargo su gran amigo había pasado meses en aquella pequeña villa, intentando
convencer a los tíos de Mo Xuanyu de un matrimonio para ese omega, que no tenía celo y era
catalogado como un demente. Wei Ying simplemente no podía comprenderlo.
“Eso es todo lo que se, maestros, ahora si me disculpan deberé retirarme.” Dijo el sirviente,
haciendo una reverencia para luego alejarse de ellos.
Esperando a que el sirviente se fuera, Wei Ying se giró en dirección a su alfa y dijo:
“¿Huaisang? ¿De verdad?”
“Es extraño…” Dijo Lan Wangji.
“No, no es raro, es inusual. ¿A Huaisang le gustan los omegas? ¿Le gusta otro ser vivo? No
puedo creerlo, esto es una locura…” Dijo Wei Ying realmente confundido, pero tras unos
segundos de silencio, finalmente dijo: “¿O no? Tal vez no es una locura…”
“¿Mmm?”
“Recuerdo que… Había una profecía, mi hermana me lo dijo para reírnos de Jin Guangyao
hace tiempo” Susurró Wei Wuxian pensativo, pero al ver el rostro molesto de su alfa acotó:
“No me molestes, sabes que eran tiempos diferentes, antes de la guerra. Una profecía sobre…
Que el heredero Nie iba a ser el destinado del hijo menor de Jin Guangshan.”
“Si, la conozco. Por eso admitieron el matrimonio de Nie Mingjue y Jin Guangyao, a pesar
de ser una unión tan inusual.”
“Pero ahora… Huaisang es el heredero de los Nie, su líder. Y si nuestras sospechas son
correctas, Mo Xuanyu…”
“Es el hijo menor de Jin Guangshan” Terminó Lan Wangji.
Wei Ying nunca creyó en las profecías, cuando llegó a Muelle de Loto, las curanderas le
dijeron a Yu Ziyuan que Wei Ying sería un gran líder de todo el territorio de los Jiang, el más
próspero de todos, y que tendrían varios hijos que terminarían siendo grandes guerreros. Pero
ahora Wei Ying era un adulto, y no podía tener hijos, y tampoco era el líder de los Jiang. Por
esa y otras tantas razones, Wei Wuxian no confiaba en las profecías.
Sin embargo, aún había una posibilidad de que las curanderas de la secta Nie fueran más
hábiles que las curanderas de la secta Jiang, y que ellos en verdad no se hubieran equivocado
respecto a la pareja destinada de Huaisang, quien resulto el mejor líder de su secta en
décadas, dirigiendo a todos con inteligencia y mucha tranquilidad, algo muy necesitado
después de la guerra.
“¿Crees que en verdad sean mates?” Preguntó Wei Ying mirando a su alfa.
“No lo sé, ¿No te comentó al respecto?”
Como era usual, Wei Ying tenia correspondencia por mariposas mensajeras con Nie
Huaisang, algo que habían hecho desde que eran muy jóvenes. Pero en todas sus cartas, su
gran amigo nunca le había comentado algo sobre un omega, Mo Xuanyu no estaba en las
palabras de su amigo.
“No lo dijo… ¿Por qué lo ocultaría? No lo entiendo…” Susurró Wei Ying con suavidad.
“Mo Xuanyu no tenía la mejor reputación, si fue expulsado por los Jin, debe haber algo
oscuro detrás de todo ello. Además de que es un omega sin celo, y con rumores de ser un
demente. Seguramente Huaisang no quería un escándalo asociado a él por su omega…”
Sugirió Lan Wangji.
Wei Ying no dijo nada al respecto, ya que le dolía que su gran amigo no le hubiera dicho
nada al respecto, que no le hubiera dicho de su supuesto destinado.
“¿Que haremos ahora?” Preguntó Wei Ying, aun luciendo triste.
“Tendremos que cubrir ambos campos. Tenemos que registrar el área alrededor de la villa Mo
para encontrar a Mo Xuanyu, así que mandaremos a los Juniors a revisar todo el lugar, para
rastrearlo. Nosotros nos encargaremos de los difícil, hablar con el líder Nie y el líder Jin”
Dijo Lan Wangji.
“¿Crees que Mo Xuanyu pueda estar con alguno de ellos?”
“Tal vez. Pero estamos acudiendo a ellos para obtener respuestas, hay demasiados secretos
alrededor de ese chico, que Huaisang no haya hablado sobre él como su destinado, y los Jin
sin haberlo declarado parte de su secta.”
“Lo sé, todo esto huele muy mal” Dijo Wei Ying con calma: “¿Crees que encontremos algo
demasiado malo si seguimos buscando en esta historia?”
“Espero que no, porque estaría involucrada la secta de mayor poder en la región ahora. La
guerra no paso hace mucho, los Wen aún son recordados, no queremos que los Jin sean
reconocidos como los nuevos Wen si seguimos buscando en esta historia”.
Wei Ying asintió con la cabeza, volviendo a tomar a su alfa de la mano, mientras se dirigían
al interior de la casa principal de la villa.
Debían encontrar a Lan Yuan para informarle que su deber como líder de los Junior aún no
había terminado en esa misión.
***
Abrió los ojos asustado, mirando en todas direcciones aterrado. Había corrido toda la noche,
lo más rápido que pudo, metiéndose entre los arboles obscuros hasta encontrar luz. Pero al
amanecer, sintiendo su cuerpo descontrolado por sus feromonas, Mo Xuanyu no pudo
evitarlo, y terminó desmayándose, aún muy asustado por lo que había ocurrido.
“Tranquilo” Dijo de pronto una voz suave detrás de él: “Estas a salvo.”
Mirando a uno de sus lados, Mo Xuanyu encontró a Xue Yang, quien con mucha delicadeza
estaba lavando sus túnicas sucias en un bañador.
“¿Quién eres?” Preguntó Mo Xuanyu confundido.
De inmediato, por el aroma de Xue Yang, Mo Xuanyu pudo notar que ese hombre a su lado
era un omega, así que no tuvo tanto miedo. Sin embargo eso no resolvía sus dudas, para
entender la razón por la cual se encontraba desnudo y en una bañera de madera.
“¿No debería ser yo quien haga las preguntas?” Preguntó Xue Yang con suavidad: “Mi
nombre es Xue Yang…”
“Disculpe, joven maestro” Dijo Mo Xuanyu, luciendo muy débil: “Mi nombre es Xuanyu, y
soy uno de los sirvientes de la secta Mo.” Mintió Mo Xuanyu con rapidez.
“¿Secta Mo? Estas muy al este, ¿No lo crees? Estas en la ciudad Yi, cerca al mar del este y a
la secta Lan” Le explicó Xue Yang: “¿Cómo llegaste aquí?”
“Escape durante la noche…” Respondió Mo Xuanyu con suavidad.
Xue Yang lo miró de reojo, tan astuto como siempre, pero dejándose convencer por las
palabras del chico y las marcas de su cuerpo. Cuando lo encontró en medio del campo,
inconsciente, Xue Yang temió lo peor. Era un comportamiento habitual en alfas delincuentes,
secuestrar a un omega, abusarlo, y dejarlo en medio de la nada para que muriera. Sin
embargo ese no parecía ser el caso de Xuanyu, o por lo menos no por completo.
“Las marcas en tu cuerpo, tienes muchos golpes, pero también varias marcas de dedos en tus
piernas, ¿Debería preguntar…?” Susurró Xue Yang.
“Mi señor era abusivo” Dijo Xuanyu con suavidad: “El señor de la villa Mo… No era un
hombre agradable.”
“Entiendo, no debes darme los detalles” Dijo Xue Yang, exprimiendo las túnicas del joven
para luego ponerlas a secar: “Lo entiendo, la razón por la que escapaste, puedo comprenderla.
La situación para omegas de clase baja no es buena, debe ser peor para un sirviente de una
casa importante. Pero eso no es una buena excusa para reprimir tus celos.”
Al verse descubierto, Mo Xuanyu susurró: “¿Como…?”
“Lo supe cuando te vi, estabas soltando muchas feromonas, pero no estabas en celo. Lo he
visto antes, en otros omegas que hacen lo mismo que tú, cuando reprimen tanto su celo hasta
el punto de enfermar” Dijo Xue Yang con un tono sombrío: “No es bueno para ti, supongo
que lo hacías para evitar a tu señor, pero no debes reprimirlo, te enfermaras…”
Mirando a Xue Yang con vergüenza, Mo Xuanyu asintió nuevamente con la cabeza, sin saber
que más decir.
“Estas en un lugar seguro, debes olfatear a mi esposo afuera, pero es un alfa vinculado
conmigo, no te hará daño. Sera muy difícil si quieres dejar de depender de esas hierbas para
controlar tu celo, pero si quieres hacerlo, puedes empezar aquí, yo te cuidare…”
“Es muy amable, Xue Gonzi” Dijo Mo Xuanyu bajando la cabeza: “Pero no quiero ser una
molestia para ustedes…”
“No serias una molestia, estamos reconstruyendo este lugar y necesitamos manos, si puedes
trabajar a pesar de tus golpes, puedes quedarte aquí con nosotros. A-Qing necesita con quien
jugar, y yo necesito ayuda para clavar maderas en el techo de las casas, todos saldremos
beneficiados. Tu ropa está secando, así que deje unas túnicas mías para ti al lado de la bañera,
cuando estés listo puedes salir a buscarnos, y me dirás tu decisión.”
Dándole una última sonrisa tranquila a Xuanyu, Xue Yang se secó las manos con una toalla, y
finalmente dejó el baño, dejando a Mo Xuanyu solo.
Recuperando la fuerza lentamente, Mo Xuanyu se apoyó en la bañera hasta poder ponerse de
pie, siendo del agua. Usando otra toalla, comenzó a secar su cuerpo con suavidad, aun
sintiendo sus extremidades rígidas, y viendo como en una esquina había más de ese te que
usualmente solía beber, que Xue Yang había preparado para él.
“Xue Yang eres muy amable… Que sorpresa…” Susurró Mo Xuanyu, hablando solo.
Sin tener nada más que usar, Mo Xuanyu terminó poniéndose la ropa que habían dejado para
él, y antes de irse tomó aquel té, que lo hizo sentirse mejor.
Saliendo del baño con paso lento, Xue Yang observó aquella vieja casa, hasta encontrar la
salida con las puertas abiertas. Mirando al exterior, de aquella casa, con el sol del mediodía
dándole de frente, pudo observar a solo tres personas trabajando con madera, con una joven y
un alfa que parecían estar ciegos, y Xue Yang, quien una vez más, volvió a sonreírle a Mo
Xuanyu.
Capítulo 3.

La relación entre Jin Guangyao y Nie Mingjue siempre fue motivo de rumores entre todas las
sectas, por lo que implicaba que un omega como Meng Yao se casara con el heredero de una
secta tan importante, y lo que tuvo que hacer Nie Mingjue para consumar ese matrimonio; un
esfuerzo en vano después de que Guangyao fuera expulsado de la secta Nie y fuera devuelto
a Laling como un juguete usado.
Jin Guangyao siempre fue una figura de interés, desde su primera aparición en la torre Koi.
En ese entonces solo había rumores sobre el gran líder Jin Guangshan, que le gustaba
frecuentar burdeles en todos los territorios de todas las sectas, teniendo varias mujeres con las
cuales sostenía largas relaciones fuera del matrimonio. Pero hasta la llegada de Meng Yao,
fueron solo eso, rumores.
Todo cambió en una de las tantas festividades de la secta varios años en el pasado, un joven
omega de cabello obscuro y una belleza desorbitante había conseguido entrar en la torre Koi
en medio de la distracción de la fiesta, y encontrando a Jin Guangshan, se presentó ante él
como su hijo menor, tras esa revelación las risas terminaron y la fiesta acabó de forma
abrupta.
Meng Yao era el hijo de una prostituta proveniente de un burdel a las afueras de Laling, casi
en la frontera de Gusu, el lugar preferido de Jin Guangyao para tener mujeres. La madre de
Meng Yao había muerto hace varios años, dejando que el pequeño omega fuera entrenado
como una prostituta en el burdel donde habían vivido con sus hermanos, y al cumplir cierta
edad después de su primer celo, Meng Yao abandonó todo para ir a buscar la única familia
que le quedaba: su padre.
Como era obvio, hubo muchas dudas respecto al origen de Jin Guangyao, ya que su
apariencia no era demasiado similar a la Jin Guangshan, Meng Yao si tenía una belleza típica
de Laling, ¿Pero acaso se parecía en verdad a algún miembro de la familia Jin? Aunque hubo
dudas al inicio, Meng Yao no iba con las manos vacías para demostrar su verdadero origen,
una caja de músicas y el peculiar aroma de sus feromonas.
Tal vez como algún tipo de burla, o solo para intentar encontrar algún otro niño alfa, Jin
Guangshan solía acudir con las mujeres a las que embarazaba después de que ellas tuvieran a
sus hijos, las visitaba un par de veces antes de irse para siempre, ya que el líder de la secta Jin
solo había tenido un hijo alfa, su primogénito, y los demás eran niños omegas. Y antes de
irse, tal vez como una forma de pago a las mujeres o solo para burlarse, el líder de la secta Jin
dejaba una costosa caja de música con adornos de oro para cada uno de sus hijos, una última
despedida antes de desaparecer para siempre.
Meng Yao había crecido en el burdel con las historias de que provenía de una poderosa
familia de cultivadores, creyendo que si se presentaba frente a su padre con la caja de música,
podría ser recibido en la familia que siempre había deseado. Ya que a pesar de que su
apariencia no era del todo de un Jin, Meng Yao tenía una característica única de esta familia,
el aroma de peonias en sus feromonas, una curiosidad que solo ocurría en algunos omegas de
la familia Jin desde hace generaciones.
Sin embargo los deseos de Meng Yao no pudieron ser cumplidos, ya que ante la duda de que
aquel pequeño omega era en verdad su hijo o no, con tantas pruebas así como dudas, Jin
Guangshan rompió la caja de música y arrojo a su hijo fuera de la torre Koi, lanzándolo por
ese centenar de escaleras, ordenando no regresar jamás a Laling.
Y a pesar de un final tan triste para ese omega, el cual se había quedado sin nada por el deseo
de buscar a su padre, la suerte de Meng Yao le sonrió de una forma completamente distinta.
El joven omega fue tomado como un sirviente por un acaudalado oficial de la secta Qinghe
Nie, quien tomo a la hermosa peonia blanca y la llevo a su obscura secta. Meng Yao pronto se
volvió un objeto codiciado por todos los alfas en dicha secta, quienes estando casados o
solteros, pasaban al omega como un sirviente de mano en mano, aunque era claro por qué lo
deseaban. Meng Yao era la bella flor de Laling, el hermoso hijo de Jin Guangshan, todos lo
deseaban por su belleza y su origen, ya que la mayoría de esos alfas jamás podrían soñar si
quiera con tener un omega de tan alta categoría como él en sus camas.
Pasando de mano en mano como un objeto, tras un par de meses en la secta Nie, Meng Yao
misteriosamente terminó siendo el sirviente personal del líder de la secta Nie, el padre de Nie
Mingjue. El alfa líder de la secta había enfermado misteriosamente poco tiempo antes de que
Meng Yao llegara, y pidiendo omegas hermosos a su lado para asistirlo, era obvio que la
deseada flor de Laling terminaría sirviéndole personalmente.
Nunca se supo cómo inició el romance entre Nie Mingjue y Jin Guangyao, la secta Jin dio la
versión de que fue el nuevo líder de la secta Nie quien se obsesionó con el hermoso omega
Jin, teniendo un turbulento compromiso, hasta que prácticamente obligó a Meng Yao a
casarse con él. Pero la versión de la secta Nie es diferente, acusando a Meng Yao de haber
embrujado a su líder, y obligándolo a hacer todo tipo de cosas detestables hasta conseguir su
objetivo: Obtener el apellido Jin y casarse con un alfa de alta cuna.
El inicio de estos perturbadores acontecimientos ocurrió tras la muerte misteriosa del líder de
la secta Nie, dejando así que Mingjue ascendiera a tomar su lugar a una corta edad, y se
volviera el dueño de la hermosa flor de Laling. Desde el primer momento la intención de
Mingjue fue casarse con Meng Yao, rompiendo su compromiso con la secta Wen cuando se
volvió líder, pero su consejo se lo prohibió rotundamente. Meng Yao era el hijo de Jin
Guangshan, pero no tenía el apellido Jin, y un omega sin un buen apellido y con los
antecedentes de Meng Yao no era una pareja digna para el líder de una secta.
“¿Quieren que él tenga el apellido Jin para poder hacerlo mío?” Le preguntó Mingjue a sus
consejeros en ese entonces: “De acuerdo, voy a obligar a Jin Guangshan a que lo reconozca
como su hijo si es lo que necesitan para dejar que se case conmigo.”
Entonces ocurrió un extraño complot en la secta Jin, varios omegas y betas provenientes de
Qinghe fueron a la torre Koi clamando ser hijos de Jin Guangshan, pidiendo un resarcimiento
de su padre por haberlos abandonado. En medio de todo ese problema, más y más omegas de
todas las sectas clamaban que Jin Guangshan era su padre, y entre ellos incluso hubo niños
provenientes de familias poderosas, como la familia Qin en el propio Laling.
En medio de tanta presión y sin poder negar más sus pecados, Jin Guangshan finalmente
aceptó las acusaciones, reconociendo a algunos de esos niños como sus hijos, y a otros
simplemente negándolos para siempre. Y entre los afortunados que obtuvieron el apellido de
los Jin, se encontraba Meng Yao, quien siendo recibido finalmente en Laling como el hijo
menor de Jin Guangshan, obtuvo un nuevo nombre y finalmente el tan ansiado apellido de su
padre.
Nie Mingjue por su parte no fue nada disimulado en sus intenciones de poseer al recién
reconocido hijo menor del líder de la secta Jin, ya que el mismo día que el nombre de Meng
Yao cambió, Nie Mingjue se presentó frente a Jin Guangshan exigiendo casarse con el
omega. Sin embargo algo que Mingjue nunca tomó en cuenta era que la secta Jin no tomaba
muy bien las exigencias de otras personas, y a pesar de que se había visto que el “futuro” de
Guangyao era casarse y ser el destinado del líder de los Nie, la respuesta para Mingjue fue
negativa entonces. Jin Guangyao ya no era propiedad de Nie Mingjue, y eso comenzó a
obsesionar al alfa, quien veía como sus intentos de casarse con el omega poco a poco
fracasaban.
Por su parte Jin Guangyao nunca mostró demasiado interés en Nie Mingjue, incluso
reaccionando con “miedo” cuando él estaba cerca, dando la apariencia a todos de que
rechazaba a ese alfa y que este le había hecho daño cuando fue de su “propiedad”; algo que
causó enemistad entre Jin Zixuan y Mingjue, ya que Zixuan se tomaba muy en serio su papel
como hermano mayor con Meng Yao.
La turbulenta relación entre la secta Nie y la secta Jin se volvió comidilla de todas las demás
sectas, quienes con sorpresa veían como Jin Guangyao se había vuelto muy cercano a Lan
Xichen, haciendo enloquecer aún más a Nie Mingjue, quien incluso llego a sugerir iniciar una
guerra contra los Jin solo por Meng Yao. Sin embargo con la llegada del verano de ese mismo
año, después de que Lan Xichen visitara por primera vez Yunmeng para conocer a su
prometido, extrañamente las hostilidades terminaron, y Jin Guangyao de buena gana aceptó
la propuesta de matrimonio de Mingjue, siendo la primera pareja de esa generación en
casarse.
Nadie iba a mentir, ambas sectas estaban disconformes con aquel matrimonio, a pesar de las
apariencias que daban a los demás. Los Nie además de considerar a Meng Yao una mala
influencia para su líder por sus obvias manipulaciones, lo consideraban nada digno por su
virtud, ya que nadie ponía en tela de juicio la pureza de un omega como Meng Yao. Mientras
que los Jin habían creído demasiado bien el teatro de Meng Yao, quienes no podían ver a
Mingjue como otra cosa que un maltratador y un alfa obsesivo, temiendo por el futuro del
delicado omega a su lado.
Desde el primer inicio quedo claro que aquel matrimonio estaba destinado al desastre.
Después de la guerra y varios años de paz, una vez más ocurrió una muerte extraña en la
secta Nie la cual no le fue explicada a ninguna otra secta, el líder Nie Mingjue murió de
forma misteriosa a manos de su propio hermano en Qinghe.
Como lo dictaba la tradición, tras la muerte del líder si este no tenía un heredero o su hijo era
demasiado pequeño para tomar el mando de la secta, era su pareja quien debía encargarse de
tomar el liderazgo hasta que el legítimo heredero estuviera en condiciones de hacerlo por sí
mismo. Aunque era claro que nadie en la secta Nie deseaba a Meng Yao como su líder, así
que tras realizar una votación en la que Huaisang estuvo en contra, se decidió destituir a
Meng Yao para darle el liderazgo al siguiente alfa en la línea sucesoria, regresando a Jin
Guangyao y a sus hijos a Laling, dejando todo en manos de Nie Huaisang.
Y aunque técnicamente los hijos de Jin Guangyao no habían dejado de ser los herederos de la
secta Nie, nadie dudaba que cuando Huaisang tuviera sus propios hijos con un omega de
buena reputación y alta cuna, los hijos de una prostituta de Laling serían desplazados por el
propio consejo y seria la línea sucesoria de Nie Huaisang quienes tomarían su lugar como los
nuevos líderes de la secta Qinghe Nie.
“Ah… Que viaje, el clima de Qinghe siempre es una locura” Dijo Wei Ying, bajando de un
salto de la espada Bichen, mirando frente a si mismo las puertas de roca de la secta Qinghe
Nie.
“Mmm…” Respondió Lan Wangji, bajando de su espada de igual forma, para luego
envainarla con cuidado y continuar con su camino.
Así como habían planeado, todos se separaron en dos grupos, mientras los juniors rastraban
la energía de Mo Xuanyu, Lan Wangji y Wei Wuxian se encargarían de hacer las preguntas
pertinentes a las sectas Nie y Jin, quienes una vez más parecían estar relacionadas de mala
manera en un escándalo sobre un hijo del fallecido Jin Guangshan.
Caminando frente a su alfa, Wei Wuxian ni siquiera tuvo que presentarse ante los guardias de
la puerta de la secta, quienes al reconocerlo como Wei Ying, el gran amigo de su líder,
abrieron las puertas para él y su alfa, ya que Huaisang había dado la orden de dar paso libre a
Wei Ying sin importar la circunstancia.
Las tierras de Qinghe eran llenas de roca obscura y frialdad, Wei Ying solía pensar que ese
lugar estaba embrujado cuando era pequeño, ya que a diferencia de Qishang que era un lugar
árido y simple desierto, Quinghe era solo frialdad, un lugar áspero donde no había espacio
para la belleza o los colores…
Caminando dentro de la secta saludando a todos y haciendo reverencias educadas, Wei Ying
guio a su alfa a la residencia principal de la familia Nie, la cual desde la salida de Jin
Guangyao estaba mucho más silenciosa y fría que de costumbre.
Huaisang había demostrado con su propia sangre su habilidad como líder, ya que a pesar de
no tener una gran habilidad en el ámbito bélico, era un gran administrador, así que después de
los estragos de la guerra y tener su secta casi en ruinas, fue Huaisang quien logró
reconstruirlo todo y recuperar todo su poder en el Qinghe, volviéndose así una secta mucho
más poderosa y rica que en los mandatos de su padre o su abuelo.
Y a pesar de todas estas cosas buenas que habían ocurrido en la secta Nie, Wei Ying todavía
se sentía apenado por lo ocurrido con Jin Guangyao, quien había sido desplazado de tal forma
y sus hijos habían sido expulsados de forma vergonzosa. De haber podido, Wei Ying hubiera
intervenido con su secta para intentar impedir ese atropello a Meng Yao, ya que Wei Ying
todavía consideraba a Jin Guangyao como un aliado y un omega de buen corazón por lo
vivido en la secta Wen durante la guerra. Pero Wei Ying no pudo hacer nada entonces, ya que
cuando Huaisang fue nombrado el nuevo líder, Wei Ying y Lan Zhan se encontraban en su
primer año encerrados en Gusu, y solo pudieron enterarse mediante cartas de la catástrofe.
Wei Ying desde entonces lamento el terrible destino de Meng Yao… pero sintiéndose
secretamente feliz por su mejor amigo, ya que Huaisang en verdad había nacido para ser un
gran líder.
“¡A-Xian!”
Girándose al escuchar esa animada voz, Wei Ying esbozo una sonrisa, viendo como Nie
Huaisang se acercaba a él a toda velocidad, acercándose también a su encuentro para darle un
abrazo. Wei Ying y Huaisang casi no se frecuentaban estos días, sin embargo todavía
mantenían su buena relación tras haber sido mejores amigos en la infancia, así que
secretamente Wei Ying esperaba que todo fuera un error y que Huaisang en realidad no
estuviera involucrado en ese terrible incidente.
“Hola A-Sang…” respondió Wei Ying, dándole un estrecho abrazo: “¿Por qué hueles así?
¿Qué es eso?”
Separándose de su amigo de golpe, Wei Ying arrugó la nariz algo disgustado.
“Lo siento A-Xian, es pintura especial que traje de las tierras al sur de Laling, su olor no es
tan agradable, pero no pude prepararme para recibirlos” Se excusó Huaisang, con una suave
sonrisa.
“Disculpe nuestra intromisión al llegar sin previo aviso” Se disculpó Lan Wangji, haciendo
una reverencia como saludo para el líder.
“No es molestia Hanguang-Jun, es un placer tener a mi amigo y a su alfa de visita…”
Sin dejar de sonreír, sin notar nada extraño, Huaisang condujo a sus invitados por la secta
hasta un salón de té, donde ordeno servir comida y bebidas para sus amigos.
“Oh… ¿Debería felicitarlo por las próximas nupcias de su hermano?” Preguntó Nie Huaisang
mirando a Lan Wangji: “Sé que no es el tipo de matrimonio que su hermano hubiera deseado,
pero es el deber que un alfa debe cumplir, y Meng Yao es un omega excelente, eso lo puedo
asegurar.”
Lan Xichen estaba siendo obligado a casarse, esas fueron las noticias más recientes para
todas las sectas.
Al inicio no hubo tantos inconvenientes con la soltería del líder de la secta Lan, ya que Lan
Wangji y su omega estaban casados, siendo ellos los encargados de continuar con la línea
sucesoria de los Lan y tener al próximo líder de la secta, un niño Lan que sería el próximo
líder tras la muerte de Lan Jingyi. Pero Wei Ying no podía embarazarse, y a punto de perder
la línea sucesoria del clan principal, se tuvo que buscar un matrimonio lo más pronto posible
para el líder.
Lan Xichen quiso negarse a un inicio, él ya tenía un hijo que podía ser su sucesor. Pero las
reglas que le había dado el consejo fueron claras desde un inicio, para poder adoptar a Jingyi,
Lan Xichen se comprometió a tener un hijo biológico alfa o beta para la línea sucesoria
principal, un deber que recaía ahora solo en Xichen ya que Lan Wangji había condenado su
vida a estar con un omega infértil como Wei Ying.
Fue por eso que se pidió la mano de Jin Guangyao en matrimonio para Lan Xichen, Meng
Yao no aspiraba a ser el nuevo líder de Gusu, ya que en pocos años Xichen iba a retirarse
dejando su lugar a su hijo adoptivo, pero Meng Yao podía darles un nuevo futuro a sus hijos
como líderes de una secta tan poderosa como los Lan. Se había considerado a ese omega
desde el primer momento ya que tuvo un buen entendimiento con Lan Xichen desde que
ambos eran jóvenes, y demostró ser muy fértil para niños alfas al embarazarse antes de
cumplir un año de matrimonio con su alfa.
Entre la espada y la pared, con la amenaza de exterminar a toda su familia, Lan Xichen no
tuvo más opción que aceptar se matrimonio arreglado, en el cual no era obligatorio el amor,
solo tener uno o dos niños alfas para poder continuar con el legado de la familia. No era una
boda feliz, era una boda por obligación.
“Gracias” Respondió Lan Wangji de forma seca, casi sin demostrar sus sentimientos de
rechazo, ya que entendía el dolor que le causaba a su hermano esa boda.
Huaisang prefirió no decir nada más al respecto, abanicando su rostro mientras desviaba la
mirada. Había intentado ser cotes con el alfa Lan, pero probablemente había traído a colación
algo no tan agradable para él con sus palabras.
Jugando con su tasa de té, Wei Ying decidió usar esa oportunidad, preguntando: “Hablando
de matrimonios… ¿Qué pasa contigo y tu omega?”
“¿Tendría que pasar algo conmigo y un omega?” Preguntó Huaisang con una sonrisa,
luciendo muy relajado: “Mi secta ya tiene un sucesor en Laling, el hijo mayor de mi
hermano, ni sobrino Nie Song que es un alfa. Yo estoy tranquilo viviendo mi vida, cuidando
de esta secta para cuando mi sobrino regrese a tomar mi lugar, no tengo tiempo para
amoríos…”
“¿Pero sigues teniendo tiempo para pintar en horas de trabajo?” Ironizó Wei Ying con una
sonrisa: “Escuché un rumor…”
“¿Qué rumor?”
“Escuche que un alfa de una poderosa familia visitaba una villa a las afueras de Gusu, donde
visitaba a un pequeño omega que todos decían que estaba loco… Su nombre… ¿Cuál era?”
“Mo Xuanyu” Dijo Huaisang, dejando de sonreír de golpe.
De una forma extraña, al pronunciar ese nombre el ambiente en la habitación se volvió frio,
alarmando a Lan Wangji y Wei Wuxian, quienes pudieron oler unas feromonas algo
amenazantes provenientes de Huaisang.
“A-Sang…” Susurró Wei Ying algo intimidado, temiendo haber herido o molestado a su
amigo.
“¿Por eso viniste? ¿Para preguntarme sobre él?” Preguntó Huaisang luciendo realmente
aterrador al estar tan serio.
“Yo no…”
“No me mientas A-Xian, ya me has herido suficiente al venir aquí para preguntar por él como
su yo fuera un criminal, ¿Quieres preguntar sobre Xuanyu? Sígueme…”
Poniéndose de pie, Huaisang comenzó a caminar con pasos rápidos fuera de la habitación,
siendo seguidos a cierta distancia por Lan Wangji y Wei Wuxian. Lan Zhan estaba
sorprendido de ver al amable líder Nie enfadado, ya que durante toda su vida pocas veces
había podido presenciar más que amabilidad de aquel joven sonriente. Mientras que Wei
Ying solo podía pensar en una forma de disculparse, ya que notoriamente había herido los
sentimientos de su amigo.
Caminando entre los pasillos de la fría secta Qinghe Nie, los cuatro llegaron a una habitación
algo apartada y con un fuerte olor a pintura, el estudio de Nie Huaisang. Abriendo la puerta
para ambos, Huaisang dejo que Lan Zhan y Wei Ying entraran a su estudio, donde había
varias pinturas terminadas y en proceso, que mostraban una sola persona en diferentes
escenas.
“Les presento a Mo Xuanyu” Dijo Nie Huaisang de una forma algo aterradora, mostrándoles
todos los cuadros que había pintado: “Mi destinado”.
Al escuchar esas palabras, Lan Wangji y Wei Wuxian se quedaron estupefactos, mirando a
Nie Huaisang muy sorprendidos, ya que no esperaban tal revelación.
“¿Qué quieren saber sobre mi omega?” Preguntó Huaisang, mucho más serió aun.
Capítulo 4.

“Lo conocí hace cinco años, cuando A-Song cumplió 10 años” Explicó Huaisang, tomando el
primer cuadro que había pintado de su destinado: “Soy el alfa responsable de mi sobrino, aun
si él vive lejos de Qinghe, él debía iniciar con su entrenamiento como cultivador, así que fui a
forjar una espada espiritual para él en el mejor lugar que hay…”
“La villa Mo” Susurró Wangji, mostrándose muy serio.
Había ciertos lugares a las afueras de todas las sectas que se regían a sí mismos. Ya que
durante las grandes guerras que dividieron el territorio en sectas y entre familias, hubo
algunos territorios que por su poco valor o por estar demasiado alejados, no fueron incluidos
en ninguna secta, viviendo en paz con todas las personas en el territorio, pero teniendo sus
propias formas de gobernarse.
En el caso de la villa Mo, ellos no fueron conquistados ya que tenían una relación neutral con
todas las demás sectas, y no era un sitio donde había cultivadores, solo herreros, los
denominados “mejores creadores de armas espirituales”. Entonces siendo un territorio a las
afueras de Gusu, ellos mantuvieron su propio gobierno dependiendo de la familia más
importante, la familia Mo, en una imitación algo extraña de como son los gobiernos de las
diferentes sectas.
“Lo conocí ahí, en realidad… Lo vi a lo lejos” Dijo Huaisang, sonriendo suavemente: “No
sabía quién era entonces, lo vi en el prado rodeado de otros sirvientes, alimentando animales
como si fuera otra de las tantas personas que servían a la familia Mo…”
“Si, ellos no lo trataban como una persona…” Dijo Wei Ying, observando el cuadro de su
amigo, en el cual se veía la delgada figura de ese omega mientras alimentaba a lo que parecía
ser un burro.
“No, en realidad no lo hacían. Hable de inmediato con el encargado de la secta, que era su tía,
ella me ofreció el compromiso de uno de sus hijos o de las sobrinas de su esposo, pero me
negó la de Xuanyu. No entendía la razón por la que un omega soltero de su edad, proviniendo
de una familia tan respetada, se le negaba un matrimonio de una forma tan deliberada… Me
enloquecía…”
Por el aroma de su amigo, Wei Ying notó lo mucho que estaba sufriendo el alfa de Nie
Huaisang, quien se notaba muy perturbado por toda la situación.
“Nunca pude hablar con él, solo podía mirarlo a la distancia, como un demente…” Confesó
Huaisang, soltando un suspiro de tristeza: “Acudí varias veces más a la villa Mo con todas las
excusas posibles, solo para verlo e insistir ante su tía para poder obtener su mano, siempre
obteniendo negativas, por más de 5 largos años. Yo incluso hice cosas deshonrosas… Sé que
no me perdonaras por eso, pero incluso ofrecí comprarlo como si él fuera un objeto, eso que
te prometí no hacer jamás, lo hice por la desesperación que me causaba no poder tenerlo
conmigo. Y cuando eso también se me fue negado, incluso pensé en llevarlo conmigo a la
fuerza… Lo siento tanto A-Xian…”
“Está bien A-Sang, no te juzgo por ello…” Intervino Wei Ying, acercándose a su amigo para
tomarlo por un brazo suavemente.
Wei Ying podía notar la tristeza en Huaisang, quien a sus ojos era un alfa correcto, el cual
jamás trataría a un omega como un objeto o pensaría en dañarlo. Así que al saber los planes
de su amigo, quien había llegado a ese límite de querer hacerle algo tan horrible a Mo
Xuanyu, Wei Ying entendió lo desesperado que estaba su amigo por su destinado, sintiendo
pena por él, ya que Wei Ying llego a sentir esa misma desesperación cuando estuvo separado
de Lan Wangji en su juventud.
“¿Por qué no me dijiste?” Preguntó Wei Ying suavemente.
“Se sobre su mala reputación… ¿Viniste por eso, no es así? Cuando lo veía ya no estaba
seguro de cuál era la cosa correcta o cual no, lo veía sufrir siendo maltratado por su propia
familia, que se negaban a dármelo a pesar de que sabían que yo era su única opción para
casarse. Y aunque a veces me decía a mí mismo que lo correcto sería secuestrarlo para
salvarlo, sabía que si me atrevía podría iniciar una nueva guerra con tu cuñado…”
“¿Mi cuñado? ¿Por qué iniciarías una nueva guerra con ese estúpido pavo real?”
A pesar de que Wei Ying y Lan Wangji lo habían sospechado desde un inicio, obtener la
confirmación de que Mo Xuanyu estaba relacionado con los Jin era sorprendente, así que Wei
ying no pudo evitar expresar su evidente confusión.
“Todos sabemos las cosas de las que fue acusado, pero solo fueron acusaciones, no significa
que él…” Dijo Huaisang a la defensiva, pero al observar el rostro de genuina confusión de
Wei Ying, Huaisang susurró: "Espera… ¿Acaso no lo sabes?”
“¿Saber qué?” Insistió Wei Ying.
Huaisang dudó un poco, pero al cruzar miradas con Lan Wangji, quien se notaba tan frio pero
a la vez tan determinado en saber la verdad, Huaisang pensó que tal vez había hablado
demasiado, y ahora no tenía más opción que continuar…
“Mo Xuanyu es el hijo menor de Jin Guangshan. Fue llevado a la torre Koi cuando su madre
enfermó, aunque se sabía desde su nacimiento que era hijo de Jin Guangshan. Pasó varios
años en la torre Koi, hasta que cuando cumplió 12 años, él…” Huaisang miró nerviosamente
a Wei Ying, sin saber que decir: “Xuanyu fue acusado de acosar a Jin Zixuan”.
Al escuchar esas palabras, Wei Ying se quedó en blanco, mirando muy curioso a su alfa,
quien por un solo segundo demostró sorpresa, antes de volver a su fría y seria actitud.
“¿Acoso? ¿Podrías explicarnos mejor?” Preguntó Lan Wangji con calma.
“No conozco los detalles, supongo que deberías preguntarle a tu hermana, porque fue ella
quien lo descubrió” Susurró Huaisang, dirigiéndose nuevamente a Wei Ying: “Lo único que
supe fue que encontraron a Xuanyu en la habitación que Zixuan comparte con tu hermana en
la torre Koi, y el asunto fue tan escandaloso que el consejo votó por expulsarlo de la secta, ya
que según ellos era demasiado ofensivo que un hermano sintiera atracción por otro, lo
consideraban indigno.”
“Entonces lo regresaron a la villa Mo…” Dijo Wei Ying con tristeza.
“Lo hicieron, y poco tiempo después de que regresara, su madre murió y la familia Mo alegó
que su sobrino tenia graves problemas mentales, como si fuera una excusa para su
comportamiento, y lo encerraron” Dijo Huaisang verdaderamente ofendido: “Aun si quería
hacerlo, sabía que no podía llevármelo a la fuerza porque aun siendo expulsado, es un Jin, y
si lo hago…”
“Todo esto podría terminar en desastre” Dijo Wei Ying, comprendiendo de mejor manera lo
ocurrido.
Ahora muchas de las incógnitas que tenía respecto a la vida de Mo Xuanyu quedaron claras
para Wei Ying y Lan Wangji, quienes a pesar de querer saber la razón exacta por la cual el
joven Mo había sido expulsado de la secta Jin, finalmente podían tener un mejor contexto de
su pasado y su importancia para las demás sectas.
“Un nuevo hijo de Jin Guangshan…” Susurró Wei Ying sorprendido.
Era entendible que Wei Ying y Lan Wangji no se hubieran enterado sobre todo el drama sobre
Mo Xuanyu, ya que el periodo en el cual habían ocurrido todos estos acontecimientos, ellos
se encontraban en reclusión dentro de la secta Lan y tenían sus propios problemas. Sin
embargo Wei Ying no entendía por qué su hermana no le había hablado al respecto ahora que
ya todo había pasado y estaba nuevamente libre, ya que durante todo ese tiempo en la secta
Jin todos habían pretendido que Mo Xuanyu no existía… Y eso le extrañaba de su adorada
Shijie.
Razonando ligeramente, mirando a Wei Ying fijamente, Huaisang preguntó: “Si ustedes no
vinieron por el escándalo de Xuanyu para reclamarme por ello, ¿Cuál es la razón de su visita?
¿Por qué me preguntaron por él?”
“Bueno…” Dijo Wei Ying en un susurro, sin saber cómo explicarle la verdad a su amigo.
Sin embargo el joven omega no tuvo que hacerlo, ya que por una de las ventanas de la
habitación pudieron ver a lo lejos una de las claras señales de auxilio de la secta Lan, la cual
solo podía ser lanzada por el líder del grupo.
“Sizhui…” Susurro Wei Ying alarmado, temiendo que su cachorro estuviera herido.
“Debemos ir a buscarlo” Dijo Lan Wangji seriamente.
“Volveré después de visitar a los Jin y te traeré respuestas, por favor solo espérame” Pidió
Wei Ying a su amigo, corriendo con su alfa fuera de la habitación.
“De acuerdo…” Dijo Huaisang luciendo muy confundido, pero sin detener a su amigo, ya
que comprendía que algunos miembros de la secta Lan estaban en problemas.
Volviendo a cubrir su rostro con uno de sus típicos abanicos, Nie Huaisang observó cómo
Lan Wangji y Wei Ying se subían nuevamente en la espada bichen, viajando rápidamente en
direcciona donde había sido lanzada la señal de ayuda, que era en un lugar muy profundo en
las montañas en dirección a la secta Wen.
***
“Entonces ustedes… Están casados” Dijo Mo Xuanyu suavemente.
“Lo estamos” Respondió Xiao Xingchen con la voz tranquila: “Tuvimos una modesta
ceremonia de celebración en el poblado más cercano hace casi medio año, aunque conocí a
A-Yang hace más de dos años.”
“¿Cómo se conocieron?”
Con ayuda del alfa, Mo Xuanyu tomó un pesado balde de agua, mientras que Xiao Xingchen
se sujetaba de uno de los hombros del omega con una de sus manos, cargando otro balde de
agua con su mano libre, dejando que Mo Xuanyu lo guiara de regreso a la ciudad Yi.
“Bueno… Fue algo similar a lo que te ocurrió a ti. A-Yang fue atacado por fantasmas
resentidos, en ese entonces yo vagaba como un cultivador errante con A-Qing a la cual
prácticamente adoptamos como nuestra hija. Yo recogí a A-Yang y lo traje a la ciudad Yi para
sanar sus heridas, pronto los dos descubrimos que éramos destinados y nos casamos… Desde
entonces vivimos aquí con A-Qing.”
Mo Xuanyu aun encontraba curioso que dos personas ciegas junto a un omega vivieran en
uno de los pueblos desolados en la frontera entre Qishang y Qinghe. Sin embargo encontraba
adorable esa idea de fundar su propia secta o tener un nuevo pueblo en ese sitio desolado por
la guerra, ya que después de toda la destrucción causada por Wen Ruohan, el área de Qishang
que en algún momento había sido el área más prospera y con la mayor cantidad de
ciudadanos, había terminado con varios pueblos fantasmas, siendo a penas la sombra de lo
que alguna vez fue en el momento de apogeo de la secta Wen hace un par de décadas.
Sin embargo Mo Xuanyu creía que sería una buena idea tener este espacio tan pacifico para
cualquier persona que quisiera alejarse de las demás sectas en el área, ya que incluso tantos
años después de la guerra, había muchas personas que habían quedado como vagabundos sin
un hogar, y en un lugar como la ciudad Yi podrían llegar a tener una nueva oportunidad.
Mo Xuanyu no sabía si se quedaría con ellos, quería huir lo más lejos posibles de todas las
sectas y de cualquier persona que quisiera encerrarlo de nuevo. Pero en su estado actual, con
su celo descontrolado y con su cuerpo herido por todo lo que le había ocurrido al salir de su
propia villa, Mo Xuanyu creía que lo mejor sería quedarse con ellos hasta poder recuperarse
por completo, y solo entonces seguir con su camino lo más lejos posible.
Así que caminando fuera del bosque, guiando al cultivador alfa entre los árboles, Mo Xuanyu
lo llevó de regreso a la ciudad Yi, donde lo esperaban Xue Yang y A-Qing seleccionando
unas cuantas semillas para poder comerciar con ellas en el pueblo.
“A-Yu, muchas gracias por llevar a A-Chen al pozo en el bosque, yo lo haría, pero prefiero
cuidar un poco mi salud hasta visitar a la curandera” Se excusó Xue Yang, viendo a Mo
Xuanyu y a su alfa regresar a la ciudad.
“No es problema, me siento mejor al ayudar” Confeso Xuanyu, dejando el balde con agua
cerca de Xue Yang.
“Eres muy amable…” Respondió el otro omega, con una sonrisa suave en su rostro.
Decidiendo ayudar con las semillas, Mo Xuanyu se sentó frente a A-Qing, cruzando miradas
con la joven por un momento. Podía sonar como algo extraño, pero Mo Xuanyu a veces creía
que la joven ciega lo observaba, lo cual era ilógico, ya que por su apariencia era obvio que A-
Qing era ciega y no podía verlo, sintiéndose algo estúpido por sentirse observado por los ojos
grisáceos de la joven.
Xue Yang iría al pueblo él solo esa mañana, desde hace un par de días se había estado
sintiendo enfermo, vomitando y teniendo muchos mareos. Eso para Mo Xuanyu se traducía
en un obvio embarazo, pero aparentemente Xue Yang y Xiao Xingchen ignoraban ese hecho
y fingían que no sabían la razón por la cual el omega se sentía de esa forma.
Xiao Xingchen había querido ir con su omega al doctor, pero por el inestable celo de Mo
Xuanyu, el matrimonio había decidido que lo mejor sería que el alfa se quedara a cuidar a su
invitado omega. Después de todo un alfa siempre sería más útil para un omega en celo,
especialmente uno como Xiao Xingchen el cual ya se había vinculado a otro omega y no
podía reaccionar ante las feromonas de celo de otro que no fuera Xue Yang. Por lo que en
caso de que Mo Xuanyu volviera a ceder ante su celo, Xiao Xingchen podría tranquilizarlo
usando a su propio alfa y dejando salir sus feromonas, siendo de mucha ayuda para
tranquilizar el dolor de un omega en tales condiciones.
“De acuerdo, cuídense mucho, espero volver pronto con medicina para mi estómago y un
buen dinero por las semillas” Dijo Xue Yang animado, tomando el saco de semillas que había
reunido con A-Qing.
“Cuídate mucho, regresa antes del atardecer” Pidió Xiao Xingchen con preocupación.
“Lo hare, todo estará bien.”
Besando los labios de su alfa, Xue Yang se despidió de A-Qing y Xuanyu con una sonrisa,
tomando el saco de semillas y caminando fuera de la ciudad con confianza. Mo Xuanyu lo
observó alejarse entre la niebla, y pronto observó un pequeño saco de dinero en la mesa
donde antes habían estado ordenando las semillas, dándose cuenta que Xue Yang lo había
olvidado.
“Oh… No podrá ir al doctor si no tiene dinero… ¡Voy a ir a entregárselo!” Dijo Xuanyu
tomando el pequeño saco de monedas y poniéndose de pie con rapidez.
Era claro que dos personas ciegas no eran la mejor opción para ir detrás de un omega en
medio del bosque por un camino tan desolado, así que después de explicarle la situación a
Xiao Xingchen y asegurarle que volvería pronto, Mo Xuanyu corrió entre la niebla, yendo en
la misma dirección en la cual había desaparecido Xue Yang hace poco.
Caminando entre los árboles, para Mo Xuanyu no fue difícil encontrar a ese omega,
guiándose por su olfato y su oído… Pero no lo encontró caminando en dirección al pueblo, lo
encontró hablando con otra persona en medio de la nada.
“… Muy interesante, un muy buen pago por algo tan simple como deshacerte de un cadáver,
¿No lo cree, maestro Song?” Preguntó Xue Yang con un tono de burla: “Jin Guangyao debe
estar realmente desesperado para pagar esta cantidad de dinero solo por mantener oculto a un
cadáver.”
Escuchando el nombre de su hermano, Mo Xuanyu se mantuvo escondido detrás de un árbol,
apenas asomándose para ver lo que ocurría.
Xue Yang se encontraba en un claro en medio del bosque, cerca del único camino que te
llevaba a la ciudad Yi. Tenía el saco de semillas tirado descuidadamente cerca de sus pies, y
hablaba con un misterioso hombre, el cual con un semblante pálido y la mirada perdida,
desprendía un aroma a muerte y mucha energía resentida de su cuerpo estático.
Al verlo, Mo Xuanyu se sintió muy aterrado, ya que con facilidad pudo identificar que la
misteriosa persona al lado de Xue Yang era un cadáver resentido, pero no era cualquier tipo
de cadáver, parecía de ese tipo especial que solo seguía las ordenes de su maestro, como si
fuera un esclavo sin voluntad.
“¿Por qué Xue Yang estaría con alguien así?” Se preguntó Xuanyu en un susurro.
“Te dejo una carta… Mierda” Dijo Xue Yang con desagrado, observando un pergamino en el
cinturón de Song Lan: “¿Acaso no entiende que no voy a trabajar con él? Es jodidamente
insistente…”
Xue Yang parcia estar hablando para sí mismo, tomando aquel pergamino y leyéndolo por un
par de segundos, antes que una seriedad extraña se pusiera en su rostro.
“Maldito manipulador… ¿Acaso cree que le temo? Puede olvidarlo, no voy a hacer algo
como eso, ya he pagado mis deudas al ayudarlo con el cadáver de su esposo, buscar a una
persona desaparecida con una descripción tan vaga parece algo demasiado complicado, y
ahora no tengo tiempo para hacer cosas complicadas” Dijo Xue Yang molesto, cerrando el
pergamino y devolviéndoselo a Song Lan.
El omega entonces concentró su atención nuevamente en la bolsa de dinero que el cadáver
resentido le había entregado, mirando varias monedas de oro que separo en dos montones,
llevando solo la mitad consigo y devolviéndole la otra mitad al cadáver resentido, quien
continuó con la mirada perdida mirando hacia la nada.
“Esconde el dinero en la cueva, y escóndete por un tiempo, no quiero que Guangyao te use
para llegar a mi… También tira esas estúpidas semillas, maldita pérdida de tiempo” Ordenó
Xue Yang sin más, caminando fuera del claro con rapidez.
Sin responder, aquel cadáver resentido hizo lo que su amo le había ordenado, guardando
nuevamente las monedas entre su ropa, y agachándose para tomar aquel saco con semillas,
saltando y desapareciendo en lo alto de los árboles.
Aquella actitud parecía demasiado contrastante con el Xue Yang que Mo Xuanyu conocía,
ese amable alfa que siempre tenía sonrisas y era adorable frente a su alfa. Pero de cierta
forma Mo Xuanyu esperaba que él fuera de esa forma… Una persona tan buena y misteriosa
como Xue Yang parecía un perfecto mentiroso.
¿Un omega atacado por un fantasma resentido? Era obvio que Mo Xuanyu no creía esa
mentira, había algo mucho peor en todo ese asunto que Xuanyu percibía, aunque no estaba
tan seguro.
Esperando un par de minutos escondido para no resultar sospechoso, Mo Xuanyu finalmente
fue detrás del omega, regresándole el saco con monedas, a pesar de que sabía perfectamente
que Xue Yang ya tenía mucho dinero consigo.
Mo Xuanyu ya no pensaba en irse de la ciudad Yi, después de saber que existía una conexión
entre su querido hermano y Xue Yang, el joven omega solo deseaba saber toda la verdad
antes de que fuera tarde.
Ya que la persona que Jin Guangyao estaba buscando… Era Mo Xuanyu, y el omega lo sabía.
Su hermano ya había envidado personas para cazarlo y eliminarlo.
Capítulo 5.

“¿Un cementerio?” Preguntó Lan Sizhui en un susurro.


“Parece muy antiguo…” Comentó Lan Jingyi, caminando al lado de su primo de forma
despreocupada.
Los aprendices de la secta Lan habían seguido las órdenes de Lan Wangji, dividiéndose en
dos grupos fueron al norte y al sur, saliendo del territorio de Gusu el primer grupo, mientras
que el segundo se dirigió al sur entrando en Qishang.
Ellos estaban suponiendo los probables caminos que Mo Xuanyu tomó al escapar de la villa
Mo, usando los dos caminos menos usuales para viajeros, que serían los más recomendados
para alguien que estaba escapando.
“¿Estás seguro de que la brújula nos trae a este sitio?” Preguntó Lan Jingyi, curioso mirando
a su primo.
“No… pero los aldeanos nos dirigieron hasta aquí, así que probablemente estemos en la
dirección correcta.”
Las cosas habían estado extrañas en las laderas del territorio de la secta Lan y Qishang, cada
vez se escuchaban más reportes de cadáveres resentidos y todo tipo de monstruos en los
alrededores, como si algún tipo de energía resentida hubiera despertado de pronto. Así que en
su arduo camino tratando de ubicar a Mo Xuanyu, los miembros de la secta Lan se toparon
con algunos aldeanos que estaban viajando por las montañas, que les contaron sobre un
extraño templo en la montaña que estaba cumpliendo milagros… A un costo muy grande.
Siguiendo las indicaciones que los aldeanos les habían dado, todos los jóvenes miembros de
la secta Lan siguieron el camino entre la montaña, llegando finalmente al templo en medio de
la montaña, dándose cuenta de que no estaban solos.
“Ah… Maldita sea” Se quejó Jingyi, mirando el interior de dicho templo.
Usando sus típicas ropas doradas, los aprendices jóvenes de la secta Jin ya se encontraban en
dicho lugar, poniendo símbolos de atracción de espíritus en el suelo, al igual que varios
símbolos de contención.
“¿Por qué demonios están aquí?” Preguntó Jingyi con molestia.
“Tampoco es un placer verte de nuevo, heredero de la secta Lan” Dijo Jin Rulan de pronto,
notando la presencia de los aprendices de la secta Lan.
“Eso no responde mi pregunta…”
“Así como ustedes, nosotros también acudimos al llamado de auxilio de los aldeanos, no te
creas tan importante Lan Yi” Dijo Jin Ling, mirándolo con enfado.
“¿Yo soy la persona que se cree importante aquí?” Ironizó Lan Jingyi, mirando con burla al
menor: “Yo no estoy dibujando símbolos inútiles en el piso de un templo vacío…”
En medio de esa disputa de alfas, Lan Sizhui se apartó de ambos de forma disimulada. Sabía
que era el líder de esa misión, sin embargo en presencia de ese alfa Jin, Sizhui prefería tomar
su distancia, después de todo lo que había pasado… El joven omega Lan no sabía si quería
estar cerca de él.
Pasando de largo a los cultivadores Jin, Lan Sizhui se acercó al fondo de la cueva que era
aquel templo, encontrando a una bonita espada de piedra, con una pierna levantada y que
parecía estar bailando.
Sizhui se sentía confundido en aquel sitio, ya que no podía sentir ningún tipo de energía
resentida, y al usar su brújula que detectaba energía espiritual, esta no apuntaba a ningún
sitio. Aun así el joven Lan no se rindió, y decidió buscar por todos los rincones, dejando que
fueran los Jin quienes hicieran el trabajo pesado, que era usar los sellos espirituales para
intentar despertar a cualquier energía resentida que estuviera dormida.
Y mientras miraba en las ofrendas de la estatua, Lan Sizhui casi suelta un grito, retrocediendo
del golpe mientras miraba las tablas de madera que estaban apiladas a los pies de dicha
imagen de piedra.
“¡A-Yuan!” Dijo Jingyi dejando de pelear para concentrarse en su primo menor.
Corriendo entre los miembros de la secta Lan, Jingyi se acercó a Lan Yuan, preocupado por
su bienestar.
El joven omega lucia desconcertado, observando una tabla de madera relativamente nueva, la
cual parecía haber estado en ese sitio por un tiempo muy corto, tal vez un par de semanas.
“¿Qué es eso?” Preguntó Lan Jingyi confundido, mirando la tabla de madera.
“Wen Xu…” Señaló Lan Yuan sumamente confundido: “¿Por qué esta eso escrito en la tabla?
¿Por qué esta aquí su nombre?”
Entonces la estatua se movió.
Los dos jóvenes Lan se miraron desconcertados, ya que en las manos de Sizhui la brújula
espiritual se volvió loca apuntando en dirección a la espada, mientras que el lugar se llenó por
completo de energía resentida, como si algo hubiera despertado de las profundidades.
“¡Cuidado!”
Siendo tomado por sorpresa, Sizhui sintió como unos fuertes brazos lo tomaban de la cintura,
apartándolo de forma brusca de la estatua, la cual se había movido de golpe para intentar
atrapar al joven omega Lan.
Tomando fuertemente a Sizhui de la cintura, Jin Ling lo sacó de la cueva a la fuerza,
intentando que los sellos de las barreras que habían preparado previamente detuvieran a la
estatua.
“¿Qué…?” Preguntó Sizhui confundido.
“¡Corre!” Gritó Jin Ling: “¡Vete ahora!”
Dejando a un confundido Lan Yuan en la entrada de la cueva, Jin Ling regreso al interior del
templo, donde todos los miembros de la secta Lan y Jin habían empezado a pelear contra la
estatua. Sin embargo aquella gran masa de piedra no parecía fijarse en ellos, peleando solo
porque se ponían en su camino, con un claro objetivo.
Atrapar a Lan Sizhui…
Temblando con temor, Sizhui tomó una de las señales de auxilio de la secta Lan,
comprendiendo que aquella situación era demasiado para los inexpertos jóvenes, lanzándola
al cielo para llamar a sus padres buscando ayuda.
Entendiendo que estaba en un grave peligro, Sizhui comenzó a correr como Jin Ling le había
ordenado, y mientras bajaba por la montaña, el joven Lan tropezó con otro gran grupo de
cultivadores, los cuales vestidos con túnicas verdes, por su aroma eran evidentemente todos
omegas.
“¿Te encuentras bien?” Preguntó el líder de todos los omegas, ayudando a Sizhui a ponerse
de pie.
“¡Deben correr! ¡Rápido!” Gritó Sizhui, tomando al líder de todos ellos de un brazo.
No hubo tiempo de preguntas, ya que con un fuerte estruendo, la gran estatua de piedra
atravesó una de las paredes de la cueva, apareciendo detrás de Lan Yuan. Y a pesar de que su
atención había estado fija en Lan Sizhui al inicio, pronto se fijó en todos aquellos omegas
reunidos al borde de la montaña, tomándolos como objetivos a ellos también.
Entonces todos comenzaron a correr despavoridos, intentando alejarse de esa gran cosa, que
parecía fijar su atención solo en omegas, tratando de atrapar a alguno de ellos con
desesperación.
Llegando a un gran claro en medio del bosque, Sizhui soltó un fuerte grito de terror, ya que la
estatua había dado un gran salto, cortando su vía de escape y apareciendo frente a él.
Intentando retroceder, Lan Yuan sintió claramente como aquella cosa había intentado
sujetarlo, sin embargo nuevamente fue salvado por Jin Ling, quien usando su arco había
disparado varias flechas hacia la estatua distrayendo su atención.
“¡Maldito idiota!” Dijo Lan Jingyi viendo como Jin Rulan había enfurecido más a la estatua:
“¡Solo la hiciste enfadar más!”
“No importa… Le di más tiempo” Susurró Jin Ling, preparando más de sus flechas.
Gracias a la distracción del alfa, Lan Yuan pudo alejarse nuevamente de la estatua, buscando
un nuevo lugar al que huir, siguiendo al otro grupo de omegas. Y aunque intentaron
internarse en el bosque para esconderse, un nuevo grito hizo que todos se detuvieran.
“¡El general fantasma!” Gritó uno de los omegas aterrorizado, volviendo a retroceder.
Sin entender nada de lo que ocurría, Lan Yuan pudo observar como su tío favorito, Wen
Ning, llegaba al claro del bosque, comenzando a pelear con la estatua.
Y aunque esto debió ser un alivio para Jin Ling, este comprendió de inmediato que había algo
terriblemente mal en todo lo que estaba pasando, pues su tío parecía perdido, como si no
estuviera pensando, mientras que una fuerte aura de energía resentida rodeaba su cuerpo.
Había algo muy malo que estaba ocurriendo en ese momento.
Ante la fuerza de Wen Ning, quien comenzó a pelear con la estatua alejando a todos los
jóvenes cultivadores, esta gran masa de piedra terminó cediendo, rompiéndose en varios
pedazos ante la fuerza de los puños de aquel alfa, quien no dejó de golpearlo hasta destruir
completamente la espalda.
Todos excepto Lan Yuan se relajaron al ver que la estatua había sido neutralizada, sin
embargo pronto se dieron cuenta de que la batalla no había terminado, ya que ahora era Wen
Ning su enemigo, quien encargándose de eliminar a su mayor rival, se giró para intentar
atrapar a uno de esos omegas.
“¡Todos corran!” Ordenó Lan Sizhui, entendiendo primero el riesgo que corrían: “¡Corran al
bosque!”
Un nuevo caos se hizo presente en aquel claro, mientras todos los jóvenes intentaron correr
despavoridos. Sin embargo el general fantasma siempre tuvo un objetivo claro, lanzándose en
medio de todos los cultivadores, intentando atrapar a uno de los jóvenes omegas de túnicas
verdes.
Sin embargo alguien se interpuso en su camino, y protegiendo al omega líder de aquella
secta, Lan Jingyi dejó que Wen Ning lo tomara del cuello, negándose a permitir que alguien
le hiciera daño a un omega.
“¡No! ¡A-Yi!” Gritó Lan Yuan aterrado, intentando correr a salvar a su primo.
Era claro que nadie podía salvar a Lan Jingyi, quien fue levantado del suelo por la fuerte
mano de Wen Ning, quien pronto amenazó con romperle el cuello, en una desgracia que
parecía inevitable.
Entonces desde lo alto, una dulce tonada comenzó a sonar por todo el lugar, deteniendo a
Wen Ning, que por un momento pareció reamente confundido por todo lo que estaba
pasando.
Saliendo desde las nubes subidos sobre la espada Bichen, Lan Wangji y Wei Wuxian llegaron
a ese claro en medio del bosque. Mientras Wei Wuxian se encargaba de tocar una hermosa
melodía en su flauta, Lan Zhan saltó desde las alturas con mucha gracia, y poniéndose en la
espalda de Wen Ning, le dio un golpe con la palma abierta, sellando al espíritu resentido en el
interior de aquel cuerpo.
Cerrando los ojos con aquel golpe, Wen Ning se desplomó en el suelo inconsciente, dejando
finalmente a Jingyi, quien también cayó al piso tosiendo desesperado.
La música se detuvo cuando Wei Ying bajo de la espada, concentrando su atención en todo lo
que ocurría. Caminando al montón de polvo en el que se había convertido la estatua de
piedra, Wei Ying pudo sentir algo muy maligno en medio de los escombros, y siendo muy
cuidadoso levantó una pesada espada de hierro, la cual despedía energía resentida la cual era
demasiado fuerte.
Dudando por un segundo, mientras Lan Wangji seguía reforzando el sello de contención en la
espalda de Wen Ning, Wei Wuxian se acercó a su alfa, mostrándole la espada muy alarmado.
“¿Qué es eso?” Preguntó Lan Wangji confundido.
“Mira la hoja, mira el sello impreso, la marca…” Señaló Wei Ying en un susurro.
Enfocando la mirada en el sitio que su omega le señalaba, Lan Wangji no supo que decir.
“Es la marca del sello del tigre de estigio” Dijo Wei Wuxian con seriedad.
Lan Wangji y Wei Wuxian se miraron realmente serios, mientras intentaban asimilar lo que
acababa de ocurrir, sin poder comprender como era que aquella marca hubiera vuelto a
aparecer después de tanto tiempo.
Acercándose al cuerpo inconsciente de Wen Ning, Wei Wuxian comenzó a revisarlo con
mucha atención, finalmente encontrando un pesado medallón de acero colgando de su cuello,
el cual despedía mucha energía resentida. Tomando aquel objeto con mucho cuidado, Wei
Ying lo inspeccionó con atención, encontrando de igual forma aquella marca tan peligrosa.
El sello del tigre de estigio había vuelto a aparecer en este mundo de una forma inexplicable.
“Debemos convocar una reunión con los líderes de las sectas más importantes, ahora” Dijo
Wei Ying, sin dejar de mirar fijamente aquel acero maldito.
***
Jadeando lleno de cansancio, Mo Xuanyu levantó su palma llena de sangre del suelo. Había
varios símbolos antiguos escritos a su alrededor, los cuales finalmente fueron activados con la
sangre del omega, terminando con aquel ritual.
Mo Xuanyu no tenía pensado hacer eso tan pronto, después de todo podía activar el sello
cuando fuera. Pero ahora que conocía la inevitable relación entre Xue Yang y Jin Guangyao,
el omega pensó que necesitaba protección, toda la protección de la que dispusiera.
Y esa fue la razón por la cual activó el sello de tigre de estigio.
Limpiándose las manos de la tierra y borrando todos los símbolos con sus pies, Mo Xuanyu
se dispuso a recorrer el bosque, ya que guiándose por la energía resentida iba a hallar sus
cosas. Que había perdido mientras escapaba cuando llego a la ciudad Yi.
Caminando entre los arboles mirando con atención, pronto Mo Xuanyu llegó al lugar exacto
en el cual sentía la mayor cantidad de energía resentida. Sin embargo no había nada en ese
lugar, y Mo Xuanyu comenzó a girar confundido, sin saber dónde estaban sus cosas.
“¿Estás buscando esto?”
Escuchando esa voz femenina tan conocida, Mo Xuanyu observó a la pequeña niña ciega
saltando de uno de los árboles, mostrándole una pequeña bolsa de cuero que ella sostenía
usando una rama, evitando tocar aquel objeto repleto de energía resentida.
“A-Qing… ¿Cómo encontraste esto?” Preguntó Mo Xuanyu.
“No soy tonta, recordé el lugar en el que te encontré, y vine de inmediato cuando no
regresaste a casa después de ir detrás de A-Yang” Dijo A-Qing con seriedad: “¿Estas
intentando escapar?”
“Entonces como lo sospechaba… No eres ciega” Dijo Xuanyu con una suave sonrisa en su
rostro.
“La persona que hará las preguntas aquí soy yo” Respondió la joven de forma amenazante:
“Dime lo que quiero, o iré a entregarle esto a Daozhang.”
A-Qing no era tonta, había pasado un tiempo a solas con Xiao Xingchen cuando este era
cultivador errante antes de conocer a Xue Yang, y una de las cosas que había aprendido con
aquel amable alfa, fue a identificar la energía resentida y saber que no debía tocarla bajo
ninguna circunstancia.
“Eso es… El sello del tigre de estigio” Respondió Mo Xuanyu con calma.
“¿Y para qué sirve?” Preguntó la joven curiosa.
“Sirve para controlar energía resentida.”
“¿Y por qué querrías controlar energía resentida?”
“Mi hermano quiere matarme…” Respondió Mo Xuanyu con la voz suave.
El omega no era tonto, y aunque estaba siendo sincero con todas sus respuestas, había varias
cosas que en realidad no estaba diciéndole a la joven, resumiendo demasiado su historia.
Viendo la sinceridad en los ojos del omega, A-Qing finalmente bajo la guardia, entregándole
aquella pequeña bolsa al omega, quien con facilidad la tomó a pesar de toda la energía
resentida que la rodeaba.
“¿Entonces la usaras para defenderte?” Preguntó A-Qing con suavidad.
“Tal vez… Pero por ahora debo mantenerla segura, y para eso necesito tu ayuda” Dijo Mo
Xuanyu con la voz suave: “¿Conoces algún lugar en la ciudad Yi donde pueda poner esto sin
que nadie note la energía resentida?”
Dudando un poco, A-Qing respondió: “Tal vez…”
“¿Podrías ayudarme?”
“Ven conmigo.”
A-Qing no estaba realmente segura de ayudar a ese omega, siendo una persona tan cuidadosa
como siempre. Sin embargo podía ver la verdadera sinceridad en los ojos de Mo Xuanyu,
dejando de dudar para finalmente aceptar, guiándolo de regreso a la ciudad Yi pero usando
otro camino.
“¿Quién es tu hermano?” Preguntó A-Qing confundida: “¿Y por qué quiere matarte?”
“Bueno… Su nombre es Meng Yao” Dijo Mo Xuanyu con suavidad: “Y quiere matarme
porque… Se su secreto.”
“¿Qué secreto?”
“Que no es hijo de Jin Guangshan… Estuvo mintiendo todo este tiempo.”
Capítulo 6.

“¿Te encuentras bien?”


Limpiando suavemente sus manos con un poco de agua, Lan Sizhui se giró en dirección a esa
voz, encontrándose con unas bonitas túnicas doradas, y un avergonzado alfa quien le extendía
una cantimplora con agua.
“Si…” Respondió Sizhui con la voz muy suave: “Gracias por su ayuda, joven maestro
Lan…”
En un mundo ideal, su primer encuentro con Jin Ling hubiera sido diferente. Ambos se
hubieran visto por primera vez en Gusu Lan, probablemente en uno o dos años, al inicio de
su periodo de cortejo. Lan Yuan entonces se hubiera vestido con hermosas túnicas blancas y
celestes representando orgullosamente a su secta, y Jin Rulan hubiera ido a su hogar con sus
túnicas doradas para pasar un mes a su lado.
Incluso ahora, Lan Yuan no estaba seguro de que podía hablar con Jin Rulan tan fácilmente,
ya que las reglas del cortejo eran muy estrictas, y tal vez había sido un accidente que ambos
coincidieran de una forma tan… Accidentada. Así que dulcemente, Sizhui hizo una
reverencia, tomando la cantimplora de las manos del alfa, bebiendo un sorbo antes de
regresársela.
Aunque no quería admitirlo, Lan Yuan tenía mucho miedo de que por el más mínimo error
las demás sectas decidieran romper su compromiso. Todo respecto a el compromiso entre la
secta Lan y Jin fue anormal desde el inicio, iniciando después de varios años, con varios
contras de personas de ambas sectas, Lan Yuan temía que con tantas personas en su contra
utilizaran cualquier error de ambos para terminar con su compromiso.
Manteniéndose en un silencio incomodo por algunos segundos, Jin Ling finalmente dijo:
“Debo disculparme contigo…”
“No es necesario” Dijo Lan Yuan rápidamente.
No entendía por qué estaba actuando de una forma tan tímida frente a ese alfa, pero Lan
Sizhui sentía que su omega se comportaba de una forma muy extraña frente a Jin Ling, sin
poder calmarse o comportarse normalmente. Esa era la primera vez que A-Yuan se sentía de
esa forma junto a un alfa…
“Claro que es necesario” Dijo Jin Ling, acercándose al mayor para tomarlo suavemente de la
mano: “Lo que yo dije sobre tu primo y tu familia, no es algo que yo crea de verdad, me deje
llevar por el enfado y dije algo verdaderamente lamentable. Lo siento.”
Lan Sizhui casi no pudo escuchar las amables palabras que Jin Ling le dijo, solamente
pudiendo mantener su mirada fija en las manos de ambos, que estaban unidas en ese preciso
momento, provocando un ligero calor desconocido en su interior.
“Yo…” Susurró Sizhui, comenzando a sentirse mareado.
“¿Qué crees que haces?”
Muy molesto, Lan Jingyi intervino en aquella escena, tomando a Jin Ling de la muñeca para
obligarlo a soltar a Sizhui, interponiéndose entre ambos y encarando al alfa menor.
“¿Estar a solas con mi primo y tocarlo? ¿Quién te crees que eres?” Preguntó Jingyi molesto,
comportándose como un alfa territorial con su primo.
“Por si no lo sabias soy su prometido” Se defendió Jin Ling molesto, ya sin poder soportar la
actitud altanera del alfa Lan mucho más.
“Aún no lo eres, ni siquiera ha empezado el periodo de cortejo entre ustedes dos” Dijo Lan
Jingyi con un obvio tono provocativo: “Y si tú sigues comportándote de una forma tan
impropia, acercándote a él a solas y rompiendo las reglas, no esperes que ese compromiso
llegue más lejos…”
“¿Yo estoy comportándome de una forma impropia?” Preguntó Jin Ling sin dejarse intimidar
por el contrario: “¿Dónde estabas tú hasta hace unos minutos? ¿Acaso no estabas mirando de
forma obsesiva a los omegas de la secta Baling Ouyang? Tú ya estás en periodo de cortejo,
¿Por qué estas mirando a otros omegas faltándole el respeto a tu prometida?”
“Cierra la boca…”
“Basta, dejen de discutir” Dijo Sizhui, interviniendo entre ambos.
Dándole una mirada de advertencia a su primo, Sizhui obligo a Lan Jingyi a retroceder, aun
mirando molesto a Jin Ling, pero sin decir nada más. Girándose para encarar a su prometido,
Sizhui hizo una suave reverencia, pero sin atreverse a mirar al alfa menor por la vergüenza
que sentía.
“Sus disculpas son aceptadas Jin Gonzi, lamento el terrible comportamiento de mi primo,
espero que podamos dejar todo esto atrás y continuar con nuestro acuerdo con normalidad”
Dijo Sizhui, intentando ser cortés pero rápido con sus palabras.
Sin esperar la respuesta de un confundido Jin Ling, Sizhui tomó a Lan Jingyi de la mano, y lo
arrastró de regreso con los demás cultivadores de la secta Lan, quienes miraban sorprendidos
ese espectáculo.
Lan Sizhui prácticamente estaba escapando de Jin Ling, ya que no quería dejar en evidencia
lo extraño que se había estado comportando su cuerpo, queriendo alejarse al sentirse
asustado, sin saber la razón por la cual su omega estaba comportándose de una forma tan
extraña.
Mirando a ambos primos alejarse, mientras Lan Jingyi regañaba a A-Yuan en susurros por
haberse encontrado a solas con el otro alfa, Jin Rulan solamente pudo suspirar con tristeza,
viéndose obligado a regresar con los miembros de su secta, nuevamente pensando que había
arruinado las cosas con Lan Sizhui.
***
La noche finalmente había llegado, y asentándose en el pueblo más cercano, los líderes de las
sectas más importantes habían llegado, confundidos por la misteriosa urgencia de Wei
Wuxian por verlos.
Sentado en una de las esquinas de la habitación, Jiang Cheng mantenía la mirada baja.
Siempre se comportaba de esa manera cuando debía estar cerca de otro alfa, especialmente
uno como Lan Xichen, quien despertaba reacciones tan extrañas en su cuerpo. Pero eso era
algo que no podía evitarse, ya que Jiang Cheng ahora era el líder de su secta, así como Lan
Xichen era el líder de los Lan.
En un pequeño salón del se te encontraban los líderes de las sectas Gusu Lan, Qishang Wen y
Yunmeng Jiang, pero faltando los líderes de las sectas Jin y Nie respectivamente. Viendo que
todos los líderes de dichas sectas estaban preparados, Wei Ying y Lan Zhan entraron en el
salón, trayendo consigo el medallón y la espada malditas que habían encontrado.
“Bueno, creo que podemos empezar” Dijo Wei Ying, aclarándose la garganta.
“¿Y Huaisang? ¿No debería estar aquí también?” Preguntó Jiang Cheng algo confundido.
“El líder de la secta Nie no respondió al llamado de esta reunión” Dijo Lan Zhan con un
rostro serio.
Wei Ying suponía que su amigo ya se había enterado del desastre ocurrido en la Villa Mo,
con la muerte de toda la familia principal y la desaparición de Mo Xuanyu, así que suponía
que su amigo estaba encargándose de eso que sería su prioridad. Y aunque Wei Ying había
enviado un mensaje a Nie Huaisang para pedirle su presencia en esa reunión, él comprendía
que su amigo no asistiera, aun sintiéndose culpable por no haber podido ser sincero con él
cuando tuvo la oportunidad.
“También debo presentar unas disculpas por A-Yao ahora que tengo la oportunidad” Dijo Lan
Xichen con su usual tranquilidad: “Él no podrá presentarse ya que se encuentra con su
hermano atendiendo un asunto importante a las afueras de Lanling, así que yo voy a
representarlo a él y a su secta.”
Jiang Yanli había quedado embarazada por quinta vez, y como en todos sus anteriores
embarazos, este era muy complicado. Así que Jin Zixuan tomó la decisión de dejar a su
hermano como líder de la secta y retirarse a una casa un poco más alejada con Yanli, tratando
de darle la tranquilidad necesaria para llevar su embarazo en paz. Aun así Meng Yao acudía a
su hermano mayor cuando se trataba de una decisión importante para su secta, así que era
comprensible que el omega no hubiera podido llegar a la reunión por la distancia en la que se
encontraba.
“Bueno, es muy amable de su parte Zewu-Jun, este es un asunto muy importante que debe ser
tratado con cuidado” Dijo Wei Ying con seriedad.
Por su parte, Jiang Cheng solo pudo poner los ojos en blanco, pensando en lo molesto que era
Jin Guangyao, una opinión que Jiang Cheng seguía teniendo a pesar de los años.
Tomando la espada y el medallón, Wei Ying cuidadosamente se los mostro a los líderes de las
sectas, usando su energía espiritual para mostrar los sellos que cubrían el acero.
“Esta marca es…” Dijo Wen Qing sorprendida.
“Es la marca del sello del tigre de estigio, es correcto” Aseguró Wei Ying con seriedad.
“¿Pero cómo es posible? El sello original fue destruido después de que Wen Shima fuera
exorcizado, no comprendo cómo pudo reaparecer su marca en este mundo otra vez.” Dijo
Jiang Cheng sintiéndose contrariado.
Después de estudiar el sello por varios días, todos los líderes de las sectas acordaron
destruirlo. Así que mientras Wei Ying y Lan Wangji se encontraban en reclusión, todos los
líderes de las sectas se reunieron en la secta Jin, y presenciaron como dicho sello fue
destruido, purificando su maldad para siempre.
“¿No hay una posibilidad de que el sello no fuera destruido, Zewu-Jun?” Cuestionó Wei
Ying.
“No, es imposible. Todos vimos con nuestros propios ojos como el sello se volvía polvo, y
como este polvo era lanzado en los volcanes de fuego de Qishang después de la destrucción.
No existe una forma en la que el sello original haya sobrevivido” Dijo Xichen convencido.
“Bueno, si el sello original que yo cree realmente desapareció, solo queda otra alternativa”
Dijo Wei Ying con seriedad: “Otra persona creo un sello del tigre de estigio…”
Aquello sorprendió más aun a los líderes presentes, ya que eso solo significaba que había otra
persona desconocida que comenzaba a controlar la energía resentida.
“¿Pero cómo pudo crearse otro sello? Creí que necesitabas acero maldito para hacer algo así”
Dijo Wen Qing aun incrédula.
“Si, necesitas acero maldito, pero puedes maldecir acero con un evento que solo traiga
desgracias. En mi caso use la espada maldita de la cueva Xuan Wu, una espada que
perteneció a Wen Shima y estaba cargada con la muerte de su prometido, un evento lleno de
desgracias que le dio la fuerza suficiente al acero para maldecirse y crear sello. Y si una
persona conoce suficiente sobre un evento maldito y lo usa para maldecir el acero, entonces
supongo que podría conseguir crear el sello…” Explicó Wei Ying.
“¿Y cómo llegamos a esa persona entonces? Imagino que no tienes el sello todavía, solo las
cosas que maldijo” Observó Jiang Cheng, mirando fijamente la espada y aquel misterioso
medallón.
“Bueno, podríamos comenzar rastreando estos dos objetos, eso tal vez nos va a conducir a la
persona causante de este desastre…”
“Eso no es necesario” Dijo Lan Xicheng interviniendo en la conversación de pronto:
“Reconozco esa espada y ese medallón, la espada pertenece a Nie Mingjue, y el medallón le
pertenece a Jin Guangyao.”
Al escuchar esas palabras, el lugar se volvió más silencioso aun.
Mientras que en la mente de Wei Ying, todo comenzaba cobrar sentido… Ya que la historia
que rodeaba a Nie Mingjue estaba llena de tragedias...
***
“¿Entonces solo fue una falsa alarma?” Preguntó Xiao Xingchen, acariciando suavemente el
abdomen de Xue Yang.
“Lo fue… La curandera me dio solo un par de hierbas y me dijo que debía volver en un par
de días, para que me de los resultados del embarazo” Mintió Xue Yang, sonriendo
suavemente.
“Ya veo… ¿Pero puedes imaginarlo? Tener un cachorro, eso sería fantástico.”
“Lo seria…” Dijo Xue Yang, agradeciendo que Xiao Xingchen no pudiera ver, para que así
no notara su rostro serio y hasta disgustado por la idea.
Era obvio que Xue Yang ya sabía que estaba embarazado.
Desde hace un par de semanas que tenía mareos y estaba vomitando, pudo ocultarlo al inicio
cuando los síntomas no eran demasiado graves, pero con el paso de los días eso se volvió en
algo imposible, así que tuvo que inventar toda esa tonta historia de ir a la curandera y tratar
de ocultar todo un poco más.
Xue Yang no quería aceptar lo obvio, se mentía a si mismo pensando que era por la actual
situación, con Jin Guangyao tan cerca y las cosas tan extrañas que comenzaban a ocurrir con
la energía resentida. Sin embargo Xue Yang sabía que no era nada de eso, él no creía ser un
buen padre, y odiaba la idea de tener un cachorro para fallarle a su bebé y a su alfa,
sintiéndose muy presionado por la situación…
Mientras reían, A-Qing y Mo Xuanyu entraron corriendo la ciudad Yi, viendo como Xue
Yang ya había regresado y se encontraba hablando de forma animada con Xiao Xingchen.
“Eh, niños, ¿Dónde estaban?” Se quejó Xue Yang, ya que ambos habían desaparecido casi
toda la tarde.
“Le estaba enseñando a Xuan-Ge todos los lugares bonitos del bosque, solo estábamos
jugando, no debes exagerar” Dijo la joven, acercándose a sus padres adoptivos haciendo una
mala cara.
“A-Qing, te dije que no vagues por los bosques hasta que A-Chen los purifique por completo,
no es seguro…”
“Eres un exagerado” Volvió a quejarse la joven.
“A-Qing…” Dijo Xue Yang comenzando a molestarse, pensando en regañar a la joven.
“Está bien, no les paso nada, no deben pelear” Intervino Xiao Xingchen, mientras Xue Yang
volvía a quejarse sobre la actitud rebelde de A-Qing, sonando como un omega preocupado y
adorable.
Y viendo esa escena, Mo Xuanyu se puso serio, ya que no podía confiar o creer más en la
amabilidad de Xue Yang después de todas las cosas que había escuchado esa tarde, mirándolo
como un enemigo.
Sin embargo Xuanyu sabía que tenía que fingir, sonriendo y tratando de convencer a todos de
que todo estaba en orden, ya que tenía que averiguar más sobre Xue Yang y lo que quería Jin
Guangyao de él.
“De acuerdo, vayan a limpiarse, traje comida del pueblo y vamos a cenar” Ordenó Xue Yang.
“¿Tan temprano?” Preguntó A-Qing como una queja.
“A-Qing voy a prepararte un baño después de comer, sé que no te has bañado hace más de
dos días, debes hacerlo ahora” Ordenó Xue Yang.
Suspirando, A-Qing solo pudo sacarle la lengua a su padre adoptivo, mientras tomaba a Mo
Xuanyu de la mano, llevándolo consigo hasta uno de los pozos de la ciudad, donde podrían
asearse.
Mientras los ojos astutos de Xue Yang los miraban fijamente… Con una actitud sospechosa.
Era obvio que A-Qing y Mo Xuanyu no habían estado en el bosque, pasaron casi toda la tarde
buscando un buen lugar en esa misma ciudad abandonada donde dejar el sello del tigre de
estigio, un lugar escondido de todos, pero a la vez no tan lejano para que Mo Xuanyu pudiera
ir por el sello en caso de problemas.
Hasta el anochecer los cuatro tuvieron una velada agradable, comiendo una sabrosa comida
picante que Xue Yang compro, haciendo que solo por un momento Mo Xuanyu olvidara que
todo aquello era una farsa.
Después de comer, Xiao Xingchen llevó a A-Qing a tomar un baño, dejando a un asustado
Xuanyu solo con Xue Yang.
Ambos se quedaron en un incómodo silencio, hasta que después de terminar de limpiar todo,
Xue Yang se acercó a Mo Xuanyu, acariciando suavemente su cabello.
“¿Puedes sentir eso?” Preguntó Xue Yang, siendo muy suave al hablar con Mo Xuanyu.
El joven omega se quedó en silencio, temblando con temor, sin saber que responder a las
palabras del contrario.
“Ven conmigo, tenemos que arreglar esto” Pidió Xue Yang de forma misteriosa.
Por un instante, Mo Xuanyu pensó en huir, creyendo que Xue Yang no tenía nada bueno entre
manos, temiendo que el mayor planeara hacerla daño o entregarlo con Jin Guangyao.
Sin embargo pensando únicamente en dejar de ser sospechoso, Mo Xuanyu sonrió
ligeramente incomodo, aceptando finalmente acompañar al contrario. Sintiendo su corazón
palpitando fuertemente por el nerviosismo, Mo Xuanyu caminó por Yi City hasta una casa un
poco apartada, sintiéndose verdaderamente asustado por la situación.
“Sé que es difícil…” Dijo Xue Yang, girándose para encarar al menor: “Especialmente para
ti, que iniciaste con esto tan mayor…”
Quedándose sin palabras, muy asustado, Mo Xuanyu solo pudo preguntar: “¿De que estas
hablando?”
Las palabras de Xue Yang podían interpretarse de muchas maneras, y Mo Xuanyu ya no
podía negar que se sentía muy asustado para pensar con claridad, temiendo que Xue Yang ya
supiera sobre su relación con la energía resentida o que planeara deshacerse de él… Sin
embargo Xue Yang lucia completamente diferente.
“De tu celo… Por su puesto” Dijo Xue Yang con calma: “¿Acaso hay alguna otra cosa?”
Al escuchar esas palabras, Mo Xuanyu sintió un nerviosismo de otro tipo, oliendo
discretamente su propio cabello.
De cierta forma, su cuerpo se había vuelto adicto a las hierbas que controlaban su celo, sin
poder pasar mucho tiempo sin beberlo o terminaría dejando salir sus feromonas sin control,
aparentando estar en celo. Y después de todas las cosas que habían ocurrido esa tarde, Mo
Xuanyu había olvidado beber aquel brebaje tan peligroso, y ahora estaba dejando salir sus
feromonas sin control.
“Lo siento… Iré a tomar un poco de té para no molestar a nadie con mis feromonas…” Dijo
Mo Xuanyu avergonzado.
“No hagas eso, ven conmigo, te ayudare” Aseguró Xue Yang con amabilidad.
El mayor estaba genuinamente preocupado por Mo Xuanyu. Al ser un omega, Xue Yang
sabía lo difícil que era controlar un celo, especialmente para omegas jóvenes al inicio de sus
celos. Mo Xuanyu no era un omega joven, sin embargo estos eran sus primeros celos como
tal, así que Xue Yang planeaba tratarlo como un joven inexperto para intentar conseguir que
Xuanyu controlara su celo sin la necesidad de las hierbas.
“Pero no creo que pueda controlarlo sin beber él te, además si un alfa como mi tío se da
cuenta de que yo…” Dijo Xuanyu nervioso.
“Estas a salvo con nosotros” Respondió Xue Yang con suavidad: “No puedes depender de ese
te para siempre, ahora eres un adulto y debes aprender a controlarlo por ti mismo como los
demás omegas, si sigues bebiendo esa cosa sin control llegara a afectar tu salud, y podrías
terminar sin tener cachorros jamás…”
“Pero…” Susurro Mo Xuanyu asustado: “Va a doler…”
“Tienes que hacerlo, eres fuerte, yo confió en ti.”
Mo Xuanyu no estaba acostumbrado a tener a su omega tan consciente, era muy sensible a
cualquier feromona, y no podía controlar bien sus instintos. Sabía que con práctica podría
llegar a ser como cualquier otro omega, pero Xuanyu no podía evitar sentirse asustado, sin
tener la suficiente confianza en sí mismo para conseguirlo.
Siguiendo a Xue Yang a una de las casas que ya habían sido restauradas, Xuanyu
cuidadosamente se acostó en una cama, hasta que pocos minutos después Xiao Xingchen
llegó a cuidarlo.
Era muy común que un alfa vinculado cuidara de omegas en celo, ya que con su propio
aroma un alfa podía calmar un poco del dolor que un omega sentía. Y aunque Xiao Xingchen
y Mo Xuanyu no eran tan cercanos, el alfa quien ahora solo podía reaccionar a las feromonas
de Xue Yang, se ofreció a cuidar de Xuanyu sin mucha resistencia.
Al inicio, Mo Xuanyu y Xiao Xingchen solamente hablaron de temas ligeros. Mo Xuanyu le
hablo de su familia y como extrañaba a su madre, y Xiao Xingchen le contó sobre su infancia
en una montaña de inmortales. Pero en cierto momento en medio de la noche, cuando el calor
de Mo Xuanyu fue demasiado insoportable, el omega entro en un corto periodo de celo,
llorando de dolor y teniendo que ser reconfortado por Xiao Xingchen, quien cuidadosamente
lo abrazo en la cama, dejando que Mo Xuanyu se aferrara a él con fuerza y solo oliera sus
feromonas.
Pasando fuera de la cabaña tras un par de minutos, Xue Yang miró aquella escena en silencio,
todavía admirando a Mo Xuanyu con una expresión sospechosa, pero sin decir nada en
absoluto.
Cuando llegó la madrugada, Xiao Xingchen cuidadosamente llevó el cuerpo inconsciente del
omega a los ataúdes donde dormía A-Qing, dejando al agotado omega en uno de estos para
dejarlo descansar cómodamente, ya que solo había una cama en la ciudad la cual le
pertenecía a Xiao Xingchen y Xue Yang.
“¿Qué tal le fue?” Preguntó Xue Yang en un susurro, viendo a Xiao Xingchen dejando a Mo
Xuanyu en uno de los ataúdes.
“Sus feromonas son una locura, me imagino que se debe al tiempo que él las mantuvo
retenidas en su cuerpo. De cualquier manera, debemos cuidarlo bien hasta que pueda
controlarlo, o cualquier alfa puede reaccionar y hacerle mucho daño” Dijo Xiao Xingchen en
un susurro.
“¿Ya habías hecho esto antes?” Preguntó Xue Yang curioso.
“No, pero se cómo se hace. Los alfas nos sentimos responsables de cuidar de un omega en
celo, es como un instinto natural. Debe ser difícil para él, cuando los omegas son jóvenes, son
alfas de su familia quienes se encargan de esto, personas con las que ellos tienen vínculos…
Debe dolerle demasiado.”
“Eres muy dulce por hacer esto, gracias por ayudarlo…” Susurró Xue Yang, acercándose a
Xiao Xingchen para abrazarlo y darle un beso.
“No debes agradecerme por ello… Además solo es un poco de práctica, supongo que deberé
hacerlo si algún día tenemos un hijo que sea omega.”
Una risa nerviosa e involuntaria escapó de los labios de Xue Yang, quien besó nuevamente a
su alfa: “Si, tal vez… Ahora deberíamos ir a tomar un baño, todavía queda agua caliente, y
ahora… Hueles demasiado a las feromonas A-Xuan, mi omega se puso un poco celoso.”
“Entonces déjame solucionarlo…”
Entre risas, Xiao Xingchen y Xue Yang salieron de la habitación, dejando solos a los dos
menores.
Viéndose finalmente a solas, A-Qing abrió los ojos, observando con cierto temor y
preocupación a Mo Xuanyu. Ella no había dormido ni un solo minuto, preocupada porque
Xue Yang pudiera hacerle daño, así que verlo de regreso y a salvo la hacía sentir muy
aliviada.
A-Qing era una niña beta, así que no entendía nada sobre feromonas o celos, pero después de
escuchar hablar a sus padres adoptivos fingiendo estar dormida, lo único que ella había
entendido era que Xuanyu estaba sufriendo, y que su Daozhang era tan amable que lo estaba
ayudando.
“A-Xuan, ¿Te sientes bien?” Preguntó la joven acariciando suavemente una de las mejillas
del contrario.
Mo Xuanyu abrió suavemente los ojos, sonriendo para tranquilizar a la niña: “Lo estoy…”
“¿Te duele mucho?”
“No… Ya no tanto, solo tengo un poco de frio.”
A pesar de que el ambiente era cálido, después de tener su cuerpo tan caliente gracias al celo,
Mo Xuanyu no podía evitar sentir un poco de frio ahora que todo había terminado.
Tomando la cobija de su ataúd, A-Qing cubrió a Mo Xuanyu con ella, decidiendo dormir
junto al mayor, intentando darle un poco de calor de esa forma.
“Gracias A-Qing…” Susurró Xuanyu, volviendo a cerrar los ojos y bostezando con
cansancio: “Y había olvidado decirte… Hoy en la tarde, Yang-Ge no estaba solo, estaba con
un extraño alfa de túnicas negras y cabello negro… ¿Sera su amigo? No tengo idea, pero le
dio un mensaje de mi hermano…”
“¿Un alfa de túnicas negras y cabello negro?” Preguntó A-Qing sorprendida: “¿Sabes si era
un cultivador?”
“No lo sé… Tenía una espada espiritual… ¿Eso lo hace un cultivador?”
A-Qing guardo silencio, observando como Mo Xuanyu caía nuevamente dormido por el
cansancio, mientras la joven recordaba algo que había ocurrido hace varios meses.
Poco después de la boda de Xue Yang y su Daozhang, A-Qing se encontró con un extraño
cultivador de túnicas negras, quien buscaba a Xiao Xingchen. Pensando que sería un viejo
compañero de su Daozhang, la joven le dijo que fuera a la ciudad Yi, donde solo estaba Xue
Yang, pero al anochecer de ese mismo día regresaría Xiao Xingchen.
Gran fue su sorpresa cuando al regresar a casa esa noche, Xue Yang aseguró no haber
recibido a ninguna persona en la ciudad y mucho menos a una persona que buscara a Xiao
Xingchen. A-Qing hubiera insistido al respecto, pero justamente esa noche era el celo de Xue
Yang, así que fue llevada a la ciudad por su Daozhang, a un hotel donde pudo divertirse con
otros niños de su edad jugando hasta el amanecer, olvidando completamente el asunto.
En su mente, A-Qing pensaba que aquel misterioso cultivador pudo haberse perdido por el
bosque, o simplemente se arrepintió y no buscó a Daozhang. Pero de cualquier manera ella
nunca había sospechado que aquel misterioso desconocido hubiera llegado a la ciudad Yi,
encontrándose a solas con el misterioso Xue Yang.
No lo había sospechado, hasta ahora.
Capítulo 7.

“¿Estás enojado conmigo?” Preguntó Jingyi, abrazando suavemente a Sizhui por los
hombros.
“Basta, no seas tan pegajoso…” Se quejó Sizhui, visiblemente molesto y sacando el brazo de
su primo de sus hombros.
Los dos primos eran bastante unidos, desde su tierna infancia ambos habían crecido como si
fueran hermanos, viviendo casi todo el día juntos en Gusu Lan. Así que los dos a pesar de no
tener ningún parentesco sanguíneo, se comportaban como si en verdad fueran un alfa y un
omega enlazados por sangre, con Jingyi siendo un alfa protector con su pequeño primo
omega, y Sizhui uno bastante obediente con su mayor.
Esta relación entre ambos a veces conllevaba a confusiones, ya que los dos no tenían ningún
tipo de familiaridad sanguínea, muchos llegaban a confundirlos a ambos con una pareja de
alfa y omega. Sin embargo entre ambos solo había una relación fraternal, y nunca se habían
visto como algo más que hermanos.
“Oh… Vamos A-Yuan” Dijo Jingyi volviendo a abrazar al menor: “No te enfades.”
Una vez más, Sizhui empujó a su primo, cruzándose de brazos muy molesto. Consiguiendo
hacer reír a Jingyi, quien insistió nuevamente en abrazarlo por los hombros.
Los dos primos Lan estaban guiando a los demás cultivadores jóvenes de la secta Gusu Lan,
quienes al amanecer y después de haber descansado un poco, comenzaron su camino de
regreso a Gusu, teniendo varios días de caminata por delante antes de volver a casa.
La reunión final entre los líderes de las diferentes sectas había concluido en dejar todo en
manos de cultivadores experimentados, el incidente con la estatua de la montaña había
asustado a todos, y en un momento tan crítico con tanta incertidumbre, decidieron llevar a los
cultivadores más jóvenes de regreso a sus sectas para mantenerlos a salvo.
“Oh vamos… Habla conmigo” Insistió Jingyi.
“¡No debes interferir cuando hablo con otros alfas! ¡No soy un niño!” Se quejó Sizhui
molesto.
“No me digas que estas molesto por lo que pasó con ese tonto alfa Jin…”
“Si estoy molesto por lo que pasó con Rulan, y deberías empezar a llamarlo por su nombre,
se va a casar conmigo.”
“Él te gusta” Dijo Jingyi, visiblemente disgustado.
“¡Él no me gusta!” Dijo Sizhui levantando un poco la voz, muy avergonzado: “Y aun si me
gustara, algo que obviamente no es verdad, ¿Tendría algo de malo? Ese alfa va a casarse
conmigo, no entiendo por qué no te agrada.”
Tras un largo suspiro, Jingyi susurro: “Él no te merece, A-Yuan.”
“Eres como mi papá, crees que ningún alfa es lo suficientemente bueno para mí, que
ridículo.”
“No lo digo por eso, en serio, me preocupa mucho que vayas a terminar con un alfa como
él…”
Sizhui miró a su primo con curiosidad, ya que más allá de la típica protección de los alfas
hacia omegas de su familia, el joven Lan pudo notar que había algo realmente raro en su
primo.
“¿Por qué?” Insistió A-Yuan.
“En pocas palabras… Es un niño mimado” Se quejó Jingyi, luciendo nuevamente molesto:
“No estoy bromeando contigo, es el alfa más delicado e inútil que he conocido, no es bueno
en nada, no puede manejar su espada, no puede manejar un arco, ni siquiera puede hacer
buenos sellos espirituales. Hasta ahora no ha cazado ni un solo monstruo por sí mismo, y solo
por su título es el jefe de los cultivadores de su secta. Le he pateado el trasero tantas veces en
las competencias para cultivadores…”
“Eres terrible, es tres años menor que tú, ¿Cómo puedes juzgarlo por no ganarte si no tiene la
misma experiencia?” Se quejó Sizhui, defendiendo a Jin Ling.
“Tú eres dos años menor que yo, y me pateas el trasero. No me malinterpretes, no me molesta
que sea débil o no tenga talento, me molesta su poca humildad y poca percepción de la
realidad, ah… Odio tanto que vaya por ahí, orgulloso con su espada dorada, como si fuera el
alfa más dotado y más fuerte de esta generación, viviendo de la fama de su padre y de su tío
para sustentar que es un buen cultivador. Luego cuando las cosas no salen como él quiere por
ser tan débil, termina llorando con su madre, lo he visto llorar tantas veces que es
gracioso…”
“¿Lo hiciste llorar? Oye, eso es cruel” Se quejó Lan Yuan, golpeando el brazo de su primo:
“Es solo un niño…”
“No me interesa que sea un niño, me interesa que en un año o poco más de eso él y tu
empezaran su etapa de cortejo, eso me asquea.”
“Es débil, pero yo soy fuerte, no pasa nada si no es humilde, mientras él me quiera…”
“Temo que no sea buen alfa para ti, sé que seré cruel y probablemente gane algún castigo del
tío Qiren si se entera que te dije esto, pero Jin Ling es la única persona en la faz de esta tierra
que no tiene ninguna habilidad o algo bueno que ofrecer. No es fuerte, no es humilde, es
arrogante… ¿Alguien como él puede amar? No me importan sus bonitos sentimientos, si no
puede protegerte de ninguna manera, ¿Cómo puede ser un buen alfa para ti?”
Algo confundido por las palabras de su primo, Sizhui dejó de caminar, sintiendo como Jingyi
lo abrazaba cariñosamente, acariciándole la cabeza con suavidad.
“No será un buen esposo, si este matrimonio se lleva a cabo, temo que vayas a sufrir toda tu
vida… Cualquier alfa sería mejor que él, en verdad, cualquiera sería mejor que Jin Rulan para
ser tu esposo.”
“No digas eso…” Susurró Sizhui con algo de tristeza, sin poder evitar sentirse preocupado
por las palabras de su primo.
Sizhui podía entender la angustia de Jingyi, quien solo quería lo mejor para él, sin ver la
suficiente fuerza en su próximo prometido para darle lo que él deseaba. Aun así Sizhui no
temía a la debilidad de su próximo esposo, él ya se consideraba a si mismo fuerte, y pensando
solamente en el cariño de Jin Rulan, A-Yuan esperaba encontrar a un alfa que lo amara tanto
como su padre amaba a su A-Die.
Ambos primos fueron interrumpidos, cuando uno de los miembros de su secta se acercó a
ambos corriendo, visiblemente alarmado.
“¡Líder, la brújula espiritual está volviéndose loca!” Dijo al alarmado cultivador.
Aun siendo el líder de la misión, Sizhui tomó un paso al frente, tomando la brújula
sorprendido, observando como esta giraba sin parar, algo que nunca antes había visto.
“¿Pero qué demonios le ocurre?” Preguntó Jingyi sorprendido: “¿Esta dañado?”
“No… Algo con mucha energía se está manifestando” Respondió Sizhui sorprendido: “Mi A-
Die me dijo que esto podía llegar a ocurrir, pero nunca creí que… Fuera real.”
Wei Wuxian fue el inventor de aquella misteriosa brújula, así que le había enseñado muchos
de sus secretos, cosas que nadie más que el propio inventor podía saber.
Antes de que Jingyi pudiera responder, la brújula se detuvo, apuntando en una dirección en
específico.
“¿Qué pudo ser tan fuerte como para volver tan loca a la brújula?” Cuestionó Jingyi
sorprendido.
“Tal vez… El sello de tigre de estigio” Sugirió Lan Sizhui: “Tal vez… si seguimos el
rastro…”
“Mi padre dijo que debíamos regresar a casa, A-Yuan.”
“Si nosotros encontramos a Mo Xuanyu, ¿No acabaría todo esto?”
Jingyi pensó en eso por un minuto. Sizhui era el líder de la misión, pero Lan Jingyi seguía
siendo el heredero y próximo líder de la secta Gusu Lan, así que en esas decisiones tan
importantes, siempre se tomaban en cuenta sus opiniones más que las de cualquier otro.
“A-Yuan, no sé si sería prudente” Dijo Jingyi al final: “Sin embargo, no sé si ser prudentes no
hará mejores cultivadores.”
“¿Significa que aceptaste?” Preguntó Sizhui muy emocionado.
“Con prudencia, al primer herido o riesgo demasiado grave, todos regresaremos a casa,
¿Están todos de acuerdo?”
Todos los cultivadores Lan aceptaron emocionados, ya que todos ellos querían continuar con
aquel viaje y terminar la misión.
“Papá va a matarme…” Susurró Jingyi muy preocupado.
“¿El tío Xichen? Yo estaría más preocupado por el tío Qiren, ¿Pero no vale la pena? ¡Es una
gran aventura! Estoy emocionado…” Respondió Sizhui.
“Qué bueno que tu estas feliz, A-Yuan.”
Entre risas, los dos primos Lan guiaron a todos los cultivadores de su secta por otro camino
en medio de los árboles, dirigiéndose al lugar donde apuntaba la brújula, que los llevó en
dirección al territorio de Qishang.
***
Arrugando el entrecejo, Jin Ling observó a lo lejos como Lan Yuan y Lan Jingyi se abrazaban
fuertemente, algo que aun sin desearlo causó una punzada de celos por su parte.
Jin Rulan también había recibido por parte de su tío Jiang Cheng la orden de regresar a
Laling con todos los demás cultivadores de su secta a su lado. Sin embargo Jin Ling por su
propio instinto había ido detrás de los cultivadores Lan, siguiendo a no mucha distancia a
todos aquellos muchachos de túnicas y cinta blancas, pero con su mirada únicamente fija en
una persona en específico.
“Líder de la secta Jin, ¿No nos estamos desviando demasiado del rumbo de regreso?
Deberíamos empezar a dirigirnos al este antes de llegar al territorio de…” Dijo tímidamente
Ouyang Zizhen, caminando detrás de Jin Ling.
“Vamos a avanzar un poco más” Respondió Jin Rulan de forma arrogante.
La secta Baling Ouyang estaba en la región de Lanling, siendo dirigidos y debiéndoles
obediencia a la secta Lanling Jin. Así que de cierta forma, Ouyang Zizhen quien era el
heredero de su secta, le debía respeto a Jin Ling aceptando sus decisiones, ya que ambas
sectas habían acordado regresar juntas a su región de origen.
En más de una ocasión Zizhen se había dicho a si mismo que debía ser mas asertivo, su secta
era únicamente de omegas, y había sido criado en mucha paz y tranquilidad, teniendo una
actitud suave y bastante tranquila. Pero ahora que su secta se estaba abriendo al mundo y él
tenía la oportunidad de buscar una pareja, Zizhen se había propuesto a trabajar en sus
relaciones con los alfas, quienes le parecían seres muy curiosos así como aterradores.
“Si me permite el atrevimiento…” Dijo Zizhen con suavidad: “¿Por qué estamos siguiendo a
los miembros de la secta Lan? Es la secta de su prometido…”
“Es correcto, pero no hay una razón en específico, solo creo que ellos se traen algo entre
manos” Dijo Jin Ling con suavidad: “Mi tío Jin Guangyao me dijo que nunca debía confiar
en las palabras de Wei Wuxian, así que creo que él está ocultando algo a las demás sectas, no
planeo dejarlo pasar tan a la ligera.”
Jin Ling en realidad estaba poniendo excusas, ya que solo quería buscar una razón para no
dejar solo a Lan Sizhui, sintiéndose secretamente avergonzado por sus celos.
“Ya veo…” Susurró Zizhen, sin confiar realmente en las palabras del contrario: “¿Entonces
quiere que los sigamos hasta ver a donde se dirigen? Probablemente terminaremos llegando a
Gusu…”
“Sé que eres nuevo saliendo de tu secta, pero mira el sol y ubica las coordenadas, ellos están
yendo en dirección a Qishang, no a su secta, ¿No te parece eso sospechoso? Traen algo entre
manos, y quiero saber lo que es.”
En realidad Jin Ling no confiaba en dejar a su omega a solas con Lan Jingyi, así que solo los
estaba siguiendo hasta sentirse seguro de que Sizhui estuviera a salvo, luciendo muy frio y
arrogante por fuera, pero interiormente queriendo la suficiente aprobación de otra persona
para sus ideas irracionales.
Aun así Zizhen no dijo nada al respecto, ordenándoles a los miembros de su secta ir detrás de
los miembros de la secta Jin, siendo obediente y leal a Jin Ling como le habían dicho sus
padres.
***
“¿Puedes acompañarme a poner estas tejas en el techo?” Preguntó Xiao Xingchen
amablemente, acercándose a Mo Xuanyu.
“Claro, iré con gusto” Dijo el joven omega, poniéndose de pie y caminando junto al alfa.
“Gracias, es un alivio tener a otra persona que pueda ver aquí con nosotros, especialmente
ahora que A-Yang está enfermo.”
Como cada mañana, los cuatro habitantes de la ciudad Yi se encontraban reparando las casas
de dicha ciudad. Poco a poco ese sitio comenzaba a tomar vida de nuevo, y ya varias casas
del centro de la ciudad estaban completamente remodeladas, sin embargo todavía quedaba un
gran trabajo por delante con las casas de las laderas y aquellas que estaban casi en la entrada
de la ciudad, así que los cuatro no dejaban de trabajar en la remodelación de ese espacio.
En ciertas tareas que necesitaban la ayuda obligatoria de una persona que pudiera ver, tales
como arreglar los techos o pintar las paredes, Xiao Xingchen solía acudir por la ayuda de su
esposo. Pero sospechando cada vez más que Xue Yang estaba embarazado, y temiendo que
terminara herido por hacer cosas peligrosas, Xiao Xingchen había decidido acudir con Mo
Xuanyu, quien recuperándose cada vez más de sus heridas ya podía trabajar a su lado con
normalidad.
Quedándose al lado de A-Qing, mientras limpiaban algunos platos de cerámica que habían
encontrado en una de las casas, Xue Yang se quedó de pronto estático, asustando a la joven.
“¿Qué te ocurre? ¿Vas a vomitar otra vez?” Preguntó A-Qing confundida: “¿Debería ir por
Daozhang?”
“¿Sentiste eso?” Preguntó Xue Yang muy perdido en sus pensamientos, mirando hacia la
nada: “El suelo tembló por un momento, como si hubiera…”
A-Qing rápidamente negó con la cabeza, ya que ella en realidad no había sentido nada,
esperando la continuación de las palabras de Xue Yang, quien se notaba cada vez más
extraño.
“Iré a cortar más madera al bosque” Dijo de pronto el omega.
“No puedes hacer eso, sabes que Daozhang te prohibió hacer actividades físicas, ir a cortar
madera…” Intentó negarse A-Qing.
“Se una niña buena y quédate aquí, ¿De acuerdo? Yo arreglare las cosas con A-Chen cuando
regrese” Dijo Xue Yang ignorando a la joven, para luego volverse extrañamente aterrador:
“No esto jugando A-Qing, quédate aquí.”
Dándole una última mirada de advertencia a la joven, a pesar de pensar que ella no podía
verlo, Xue Yang limpió sus manos en su túnica negra, caminando rápidamente entre las casas
abandonadas en dirección al bosque.
“De acuerdo…” Susurró la joven, mirando disimuladamente la dirección en la cual Xue Yang
desaparecía.
Sin embargo A-Qing no pensaba cumplir sus palabras.
A-Qing estaba acostumbrada a que Xue Yang fuera extraño, su Daozhang le había dicho que
esa actitud misteriosa era común entre los omegas, quienes se cuidaban mucho de los
extraños por propia naturaleza. Aun así A-Qing tenía un instinto agudo para las mentiras, y
detectando algo extraño en toda la situación, la joven se puso de pie y no tardo en ir
sigilosamente detrás de Xue Yang.
La joven A-Qing no tenía ningún tipo de entrenamiento en cultivo, así que mientras se metía
al bosque sigilosamente detrás de Xue Yang, ella no podía detectar toda la energía resentida
que había en el lugar, sin darse cuenta del peligro que la rodeaba.
“¿Qué mierda haces aquí?”
Quedándose detrás de unos arbustos, muy cerca de una misteriosa cueva que ella no conocía
pero estaba bastante cerca de la ciudad, A-Qing pudo ver a Xue Yang junto a dos personas,
una de ellas la cual pudo reconocer como ese misterioso alfa que una vez vino a buscar a su
Daozhang hace varios meses, aunque ahora se veía distinto. Y la otra persona… por un
momento A-Qing pensó que se trataba de una mujer, por su cuerpo pequeño y curvilíneo,
pero cuando este se quitó la túnica que lo cubría, pudo ver el refinado rostro de un omega
vestido de dorado, el cual por su aspecto eral omega más hermoso que A-Qing había visto en
su vida, haciéndola sonrojarse mucho.
“Jin Guangyao…” Dijo Xue Yang, con evidente desagrado en su voz.
Al escuchar ese nombre la joven se quedó aterrada, ¿A caso ese no era el nombre del
hermano malvado que quería hacerle daño a Mo Xuanyu?
“¿Esa es una buena forma de recibirme?” Preguntó Meng Yao con suavidad: “No es la forma
en la que una persona recibiría a un amigo, especialmente después de no vernos hace tantos
años…”
“No somos amigos. Creí que había dejado mis intenciones claras contigo, yo ya no tengo
nada que ver con tu causa o tus problemas, lo deje después de que me hicieras herir a mi alfa
destinado” Dijo Xue Yang muy molesto: “El trato era que yo te prestaría a Song Lan cuando
quisieras para que él haga lo que le ordenes, mientras tú me dejaras fuera de tus estupideces y
te mantuvieras alejado de mi familia.”
“Yo nunca acepte ese trato, A-Yang” Dijo Jin Guangyao con calma, acercándose al contrario
para acariciar suavemente su abdomen: “¿Ya sabes cuál será su sexo?”
“Aléjate de mí, no me toques.”
“Has estado ocultando tus feromonas, pero ya se puede sentir que estas embarazado, y por el
aroma puedo saber que ser aun alfa, pobre de ti, no será un embarazo fácil, lo sé porque mis
hijos son alfas los dos…”
Bajando la cabeza con temor, Xue Yang retrocedió varios pasos alejándose de Meng Yao,
mientras tocaba su vientre con suavidad. Él mismo no podía sentir sus propias feromonas, así
que saber el sexo de su bebé le dio una ligera alegría, que rápidamente se disipó cuando Jin
Guangyao habló.
“Seria gracioso quitártelo, ¿No lo crees?” Preguntó Jin Guangyao con suavidad.
“Basta. No me harás lo que le hiciste a Wei Wuxian hace años, no dejare que lo hagas,
mantente alejado de mi o de mi familia, no lo voy a repetir” Amenazó Xue Yang con furia.
“Ah… Agradables recuerdos, ¿No lo crees? Convencer a Wen Ruohan de quitarle a su hijo a
Wei Wuxian fue una de las mejores y más divertidas ideas que tuve, fueron buenos tiempos
entonces. Wei Ying era muy fuerte entonces, porque tuvo un omega, ese no es tu caso. Es el
primer mes de tu embarazo, pero cuando las hormonas de alfa empiecen a llenar tu cuerpo, te
sentirás débil e indefenso, habrán días en los que ni siquiera vas a poder caminar, ¿Qué harás
entonces? ¿Cómo vas a defender a tu alfa o a ti mismo?”
“Aun si no puedo moverme te voy a destruir, basura, tú no sabes cultivar, no sabes lo fuerte
que puedo ser.”
“Entonces hazlo ahora, atácame.”
A pesar de aquella provocación, Xue Yang siguió retrocediendo asustado de Jin Guangyao,
sin atreverse a atacarlo.
“No lo harás, porque ya te sientes débil. Debe ser tan duro, pobre A-Yang” Se burló Meng
Yao, tomando uno de los mechones del cabello de Xue Yang, enrollándolo entre sus dedos:
“Vomitando a todas horas, sin poder dormir por el dolor, cada día con menos energía y su
núcleo dorado más débil. El embarazo de un omega con un bebé alfa no puede ser tomado a
la ligera A-Yang, un pequeño golpe en tu lindo abdomen y todo terminara…”
Ya sin poder evitarlo, notándose muy débil y asustado, Xue Yang susurró: “¿Qué es lo que
quieres de mí?”
“Encuentra el sello de tigre de estigio para mí, es lo único que te pido.”
“No sé dónde está, ya lo busque, te lo juro…”
“Tú lo conoces mejor que yo, debes tener alguna pista.”
“No la tengo, por favor suéltame…”
Viendo aquel espectáculo tan deprimente, viendo a Xue Yang asustado y débil por primera
vez, A-Qing quiso saltar para defenderlo. Pero la joven era realista, ella no tenía ningún tipo
de fuerza física, y si salía de su escondite probablemente sería peor, pensando en alguna
forma de intervenir y salvar a Xue Yang de esa situación.
“Entonces lo hare más fácil para ti” Dijo Meng Yao con una sonrisa cruel: “Tengo la leve
sospecha de la persona que puede tener ese sello, búscalo y entrégamelo, no necesito nada
mas de ti.”
“¿Quién es?” Preguntó Xue Yang finalmente rendido.
“Es mi pequeño hermano menor, su nombre es Xuanyu…”
Al escuchar ese nombre, Xue Yang se quedó estático, pero pronto recobró la compostura,
tratando de no lucir nada sospechoso frente al omega Jin.
“Es un omega como nosotros, seguro te darás cuenta, es muy similar a mi hermano…
Búscalo por el bosque, la ciudad más cercana a tu sucio hogar, no lo sé… Esos sitios” Ordenó
Jin Guangyao: “Lo haría yo mismo, pero si A-Xu me ve terminara huyendo. Necesito que lo
atrapes, y cuando lo hagas solo trae a Song Lan, y él se encargara del resto.”
“¿Crees que él tiene tu sello?” Preguntó Xue Yang desconcertado.
“Eso no te incumbe, no fuiste lo suficientemente útil para encontrar el sello, entonces trata de
hallar a la persona que lo tiene… Seré compasivo, porque estas en cinta y tienes un alfa en tu
vientre, ya sabes apoyo entre omegas y esas cosas. Un día, si mañana a esta hora Song Lan
no me lo trae, te aseguro que el final que tengan tú y tu hijo será mucho más triste que el final
que pudo tener Wei Wuxian, y debes recordar donde terminó cuando Wen Ruohan mandó a
que lo mataran.”
Xue Yang se mantuvo en silencio, sintiendo como la mano de Jin Guangyao ahora tomaba un
gran mechón de su cabello, comenzando a tirar de él con fuerza, lastimándolo.
“Creí que nunca diría esto, pero tenías razón A-Yang, un alfa y los hijos te han débil.
¿Recuerdas esa noche en Lanling, cuando huiste como un perro? Me juraste que nunca
tendrías un alfa o una familia para no ser débil… Debiste seguir tu propio consejo, tal vez si
lo hubieras hecho, yo no hubiera tenido una forma de lastimarte” Se burló Meng Yao.
Viendo el rostro adolorido de Xue Yang, sabiendo lo peligroso que era ese tipo, A-Qing supo
que tenía que hacer algo. Así que de forma temblorosa por el miedo, se puso de pie, tratando
de regresar a casa para traer a su Daozhang y que salvara a Xue Yang.
Sin embargo al ponerse de pie, la joven tropezó, alertando a todos de que había estado ahí
todo el tiempo.
“¡No! ¡Song Lan para!” Ordenó Xue Yang con firmeza, soltándose del agarre de Jin
Guangyao de un empujón.
Al descubrir a la joven como un intruso, el cadáver resentido se había abalanzado sobre ella,
haciendo gritar a una asustada A-Qing, quien supo que había arruinado todo.
“¡Mantente alejado de ella!” Ordenó Xue Yang, separando al cadáver resentido de la joven.
Llorando asustada, ya que nunca había sido atacada de esa forma antes, A-Qing se abrazó de
Xue Yang, quien cuidadosamente la sostenía en sus brazos, tratando de mantenerla segura de
Jin Guangyao y Song Lan.
“Mamá…” Sollozó A-Qing, abrazándose fuertemente a Xue Yang.
“Estoy aquí A-Qing, no va a pasarte nada, te voy a proteger…” Susurró el omega, tratando de
calmar a la joven.
A pesar de su extraña rivalidad y que siempre se la pasaban peleando, A-Qing y Xue Yang
siempre habían tenido una relación paternal, así como A-Qing la tenía con Xiao Xingchen.
La joven era huérfana, así que cuando conoció a Xiao Xingchen y después a Xue Yang,
aceptó felizmente ser adoptada por la pareja, considerándose a sí misma su hija verdadera, a
pesar de que contadas veces los llamaba “papá” o “mamá” en voz alta.
“¿Mamá?” Preguntó Jin Guangyao con una sonrisa: “Vaya… Eso es una sorpresa…”
“Es solo una niña… Tiene 13 años, por favor…” Suplicó Xue Yang abrazando fuertemente a
A-Qing contra su cuerpo.
“¿Por qué estás tan asustado? Yo jamás le hice daño a ningún niño, ¿Acaso me crees un
monstro?” Preguntó Jin Guangyao con burla.
Sin poder detenerlo, Xue Yang dejó que el omega se acercara a ambos, mirando fijamente a
A-Qing, quien asustada se aferraba con todas sus fuerzas de Xue Yang.
“Dime pequeña… ¿Qué fue lo que escuchaste?” Preguntó Meng Yao de forma amenazante.
***
Limpiándose las manos con suavidad, Mo Xuanyu suspiró con cansancio, sintiéndose
satisfecho de que el trabajo de esa mañana hubiera terminado y que finalmente pudieran ir a
comer.
“Xiao Gonzi…” Susurró Mo Xuanyu con suavidad, mientras caminaba al lado del alfa
lentamente por la ciudad: “¿Puedo hacerle una pregunta personal?”
“Claro A-Xu, puedes preguntarme lo que desees” Respondió el alfa, tan amable como
siempre.
“¿Qué ocurrió con sus ojos?”
Era obvio que Xiao Xingchen no había nacido ciego, siempre traía una venda blanca sobre
los ojos, y a diferencia de A-Qing quien mostraba sus ojos casi blancos, Mo Xuanyu en
realidad nunca había visto los ojos de Xiao Xingchen.
“No es una historia agradable. Cuando estaba en una misión junto a mi viejo compañero de
cultivo, fuimos atacados por una misteriosa persona, traía una máscara y usaba la energía
resentida para cultivar. Subestimamos sus poderes, y usando una sustancia extraña hirió los
ojos de mi mejor amigo, él quiso matarlo pero yo lo detuve, porque esa persona era un omega
y yo nunca le hago daño a los omegas… Entonces dejé que él escapara. Mi compañero de
cultivo me culpó por haberlo dejado huir, me maldijo e incluso… Él verdaderamente estaba
enfadado.”
Por el tono de la voz del alfa, Mo Xuanyu pudo notar que él estaba sufriendo, arrepintiéndose
ligeramente de haber preguntado por esa historia.
“Aun así lo lleve a mi hogar, donde estaba mi madre adoptiva. Prometí nunca regresar, pero a
cambio le pedí que le diera mis ojos, y ella lo hizo. En la montaña de los inmortales todo es
posible, así que le devolví la vista a mi compañero de cultivo y decidí dejarlo. No me
arrepiento de haber salvado a ese omega, pero eso arruinó mi relación con él para siempre,
desde entonces uso esta venda en los ojos por que no puedo ver” Explicó Xiao Xingchen.
“Ya veo… ¿Y dónde está su compañero ahora?” Preguntó Mo Xuanyu.
“Yo espero que este bien, le tengo un gran cariño, pero no hemos hablado en un par de años
desde que el incidente ocurrió. Imagino que sigue odiándome, así que probablemente no lo
vuelva a ver, pero en verdad espero que este a salvo y feliz…”
Interrumpiendo su conversación, Xiao Xingchen y Mo Xuanyu llegaron a la casa que
habitaban, encontrando solo a Xue Yang, quien silenciosamente limpiaba los platos de
cerámica, aunque no parecía haber avanzado demasiado a pesar del tiempo que pasó.
“¿A-Yang?” Preguntó Xiao Xingchen, notando la misma atmosfera extraña que Mo Xuanyu:
“¿Y A-Qing?”
“Oh… Ella…” Dijo Xue Yang dudando un poco: “Dijo que iría al bosque por un poco de
madera, me prohibiste hacerlo y ella quiso ir por mi…”
Muy preocupado, ya que a pesar de que Xue Yang estaba dando su mayor esfuerzo por lucir
normal, Xingchen podía notar que algo terriblemente malo había ocurrido con su omega, así
que se acercó a él, acariciando suavemente sus mejillas.
“A-Yang, ¿estabas llorando?” Preguntó Xiao Xingchen preocupado.
“Solo abrázame un minuto, ¿De acuerdo?” Preguntó el omega con debilidad: “Abrázame
fuerte…”
Viendo como Xiao Xingchen y Xue Yang se daban un abrazo tan cariñoso, Mo Xuanyu se
quedó algo apartado, ya que aquella historia le parecía realmente rara. Y al cruzar miradas
con Xue Yang, un escalofrió le recorrió el cuerpo, ya que Xue Yang lo miraba de una forma
extraña, que asustó a Mo Xuanyu… Quien por un momento creyó que Xue Yang lo miraba
lleno de odio.
Capítulo 8.

Saltando de su espada, Lan Xichen se giró para mirar a Jiang Cheng detrás de él, ofreciéndole
su mano para ayudarlo a bajar de su espada. Sin embargo Jiang Cheng no aceptó su ayuda,
mirando a Lan Huan como si fuera un idiota, bajando por sí mismo de su espada. Sin
ofenderse por esa acción, Lan Xichen solo pudo sonreír con suavidad, apartándose un poco
de Jiang Cheng, mientras ambos volvían a envainar sus espadas.
“¿Entonces esta es la residencia de verano de la familia Jin?” Preguntó Lan Huan con
curiosidad, mirando una casa bastante modesta pero con los típicos adornos dorados típicos
de dicha familia.
“Si” Respondió Jiang Cheng, tan distante y malhumorado como siempre: “Vamos a buscar a
mi Shijie.”
Jiang Yanli siempre había sido conocida por tener una salud bastante delicada cuando se
trataba de un embarazo, así que para cuidarla y hacerla sentir en casa, Jin Zixuan había
construido esa pequeña residencia de verano cerca a uno de los ríos más hermosos de
Lanling, en un lugar tranquilo y apartado que simulaba la belleza de Yunmeng, aunque estaba
muy alejado de la atmosfera del hogar ancestral de los Jiang, apenas pudiendo simular un
poco de la belleza de Lotus Pier.
Estando bastante avanzada en su último embarazo, Yanli se había retirado de la secta Lanling
Jin con su esposo hace un par de semanas, dejando a Jin Guangyao a cargo, y llevando solo a
un par de sirvientes con ellos. La pareja planeaba quedarse ahí por casi un año, hasta que su
recién nacido tuviera mínimo 6 meses de vida y la joven omega se hubiera recuperado,
cuando ambos planeaban regresar a casa. Pero esto no era un abandono absoluto de su secta,
ya que Yanli había llevado a sus hijos más jóvenes a ese viaje, dejando solo a Jin Rulan a
cargo de Jin Guangyao, pero el joven heredero de la secta Jin podía ir a visitarlos cuando
quisiera y no tuviera deberes que hacer.
Caminando por delante, Jiang Cheng llamó a la puerta de la residencia, donde una de las
sirvientas ya lo estaba esperando. El anuncio de su visita había sido demasiado pronta, así
que Jin Zixuan le había pedido esperarlo a él y a su esposa unos minutos más antes de
reunirse, conduciendo al alfa Lan y al omega Jiang a una sala de té donde podrían descansar.
Mirando aquel lugar con curiosidad, Lan Huan se sentó al lado opuesto de la habitación de
Jiang Cheng, observando con curiosidad los cuadros en las paredes, en las cuales se tenían
retratos pintados de todos los hijos de Jin Zixuan y Jiang Yanli.
“Jin Ling ha mejorado mucho en su cultivo” Dijo de pronto Lan Xichen, sin dejar de mirar
los retratos familiares de la secta Jin: “Eres un maestro muy bueno, Wanyin.”
“Aun no tan fuerte…” Dijo Jiang Cheng en un susurro: “Es un poco frágil, tal vez por la
salud de mi hermana.”
“Tiene 12, ¿No es así? No deberías ser muy duro con él, mejorara con el tiempo, ni siquiera
ha empezado a asistir a los torneos y solo ha tenido entrenamientos conjuntos con otros
cultivadores, solo necesita un poco más de practica…”
“Estas siendo amable, tu heredero es el cultivador más fuerte de esta generación, aunque no
es nada sorprendente viniendo de un alfa de la secta Lan. A-Yi es muy fuerte…”
Lan Xichen pudo escuchar como la voz de Jiang Cheng se apagaba poco a poco, antes de
volver a permanecer en silencio. La mayoría de las personas no hubiera notado aquella
pequeña punzada de dolor en sus palabras, pero Xichen conocía bastante bien a Jiang Cheng,
así que pudo entender con facilidad que aquel no era un tema muy feliz de hablar para él,
decidiendo cambiar el asunto para hablar de algo que no trajera recuerdos tan deprimentes.
“¿Recuerdas tus primeros torneos con los demás cultivadores? En ese entonces todos
pensaban que tú también eras uno de los más débiles solo por ser el menor de nuestra
generación, aunque pronto te volviste un contrincante feroz. Incluso lograste vencer a tu
cuñado, si no mal recuerdo…” Dijo Xichen intentando continuar con su charla amable: “Tal
vez eso ocurra con Jin Ling, solo un poco más de entrenamiento duro y él podría ser tan
fuerte como tú.”
“Esas fueron buenas épocas, ¿No lo crees?” Respondió Jiang Cheng, tan serio como siempre:
“Confió en Jin Ling, pero temo que no llegue a ser tan fuerte como todos esperan, es el único
hijo alfa de Jin Zixuan, todas las expectativas están puestas sobre él, me preocupa que
termine rompiéndose si no es tan poderoso como todos aseguran.”
Después de su primogénito, todos los demás hijos de Yanli habían sido betas y omegas, algo
bastante común para la secta Jin que en sus orígenes había sido únicamente de omegas como
las demás sectas poderosas de la región de Lanling. Así que siendo el tercer alfa heredero en
la línea de sucesión desde el nacimiento de Jin Guangshan, todos esperaban que Jin Ling
fuera perfecto, algo que Jiang Cheng temía que él no pudiera cumplir.
“Eres muy amable, Wanyin. Tu hermana debe estar muy agradecida contigo por ayudarla
tanto con su hijo” Dijo Xichen, sirviendo un poco de té para ambos.
“Ella no debe agradecerme nada… Jin Ling es como mi hijo…” Susurró Jiang Cheng.
Una historia curiosa comenzó a circular en Lanling poco después del final de la guerra. Yanli
definitivamente era débil ya había quedado herida después de tener un hijo alfa, algo nada
fácil para cualquier omega. Pero después de casi un año, la joven permanecía todavía
convaleciente en cama, dejando a su hijo en las confiables manos de su hermano menor,
quien ya tenía experiencia cuidando un niño alfa. Todos decían que Yanli estaba fingiendo, ya
que a pesar de necesitar la ayuda de su hermano para criar a su hijo en los primeros meses
después del parto, Yanli había insistido en continuar con ese teatro para mantener a Jiang
Cheng cuerdo… Ya que después de perderlo todo, Jiang Cheng se había sumido en una
terrible depresión.
Jiang Wanyin había perdido a su alfa, a pesar de haberse vinculado a la fuerza, su omega lo
hizo sufrir sin descanso. Además de eso tuvo que aceptar perder su vida anterior a la guerra,
su compromiso con Lan Xichen ahora era un sueño, y con ese sueño también se había
desvanecido el hijo que ambos habían adoptado, quien le pertenecía a la secta Lan. Así que
por los pasillos de Lanling, durante la noche, podían escucharse los gritos y sollozos de Jiang
Cheng, quien llamaba a gritos a Jingyi y a Lan Huan, aunque ambos se habían ido.
Por su parte Lan Xichen se encontraba confinado en su propia secta. Su alfa se encontraba
enlazado al de Jiang Cheng, aun si ambos no se habían vinculado como tal, Lan Xichen pudo
sentir como su alfa moría de dolor por lo que Jiang Cheng sentía a la distancia. Así que
mientras ese vínculo de disolvía, ambos debían permanecer separados, teniendo al pequeño
Jingyi al cuidado de Lan Qiren, quien pronto comenzó a olvidar a su verdadera madre,
teniendo su tiempo con Jiang Cheng como si en verdad hubiera sido solo un sueño. Nadie le
dijo a Lan Jingyi que fue Jiang Cheng quien lo adoptó y lo tomo como su hijo durante sus
primeros meses de vida.
Fue en esas penurias cuando Jin Ling nació. Jiang Cheng se encontraba completamente
quebrado, pero la noche después del nacimiento de su sobrino, cuando todos se encontraban
ayudando a Yanli quien se encontraba bastante afectada después del parto, Jiang Cheng se
fijó en otra cosa. Su vínculo con el pequeño Jin Rulan fue inmediato, Jiang Cheng no lo
miraba como un remplazo para su hijo, lo miraba como un bebé alfa que necesitaba su ayuda,
y Jin Rulan en cierto punto llegó a verlo como su verdadera madre.
Nadie los separó incluso después de que Yanli se había recuperado, la joven vio cómo su hijo
ayudaba a su hermano a superar el dolor de todo lo ocurrido durante la guerra, así que los Jin
dejaron que Jiang Cheng criara a Jin Ling al lado de Yanli, siendo hasta ahora tan unidos
como si fueran verdaderos padre e hijo, y teniendo una conexión muy cercana. Aunque Jiang
Cheng en realidad nunca había olvidado a Lan Jingyi, siempre mirándolo a la distancia,
sabiendo que no podía acercarse a él ya que el joven omega lo había olvidado…
“¿Cómo esta A-Yi?” Preguntó A-Cheng, mirando a Xichen servir el té.
Antes de responder, una sonrisa suave se dibujó en los labios de Xichen, quien siempre se
sentía alegre y orgulloso cuando pensaba o hablaba sobre su hijo: “Esta muy bien en
realidad… Su relación con la heredera del clan Yu está floreciendo, y va mejorando sus
técnicas de cultivo enseñándole algunos movimientos de pelea de la secta Jiang como me
pediste.”
“¿Y su salud? Me dijiste que estaba enfermo el otro día, ¿Esta mejor? ¿Le diste la medicina
que le envié?”
“Lo hice, pero no es nada grave. Los niños alfas se enferman con facilidad en esta época,
suelen retarse los unos a los otros a saltar a los lagos helados en Gusu. Yo espero que se
enferme de algún resfriado unas dos o tres veces antes de que llegue la primavera.”
“A-Yi es muy valiente…” Dijo Jiang Cheng con una suave sonrisa: “Asegúrate de que lleve
un regalo agradable a su prometida la próxima vez que la visite, y dime si se enferma de
nuevo, le enviare más medicina.”
“Lo hare…”
Había pasado mucho tiempo desde que Lan Xichen y Jiang Cheng habían dejado de sentirse
incomodos o tristes hablando a solas. Era obvio que sus vidas estarían unidas para siempre,
sus hermanos estaban casados, y ambos eran líderes de sectas que se encontraban en
constantes reuniones. Aun así ambos siempre trataban de evitar encontrase a solas, Lan
Xichen temía decir algo que pudiera herir a Jiang Cheng, y Jiang Wanyin temía aceptar por
accidente y frente a ese alfa que todavía lo amaba. Así que esa era una de las pocas ocasiones
en las que ambos podían hablar a solas, teniendo ese extraño pero a la vez invisible ambiente
de tristeza entre los dos, los cuales se seguían mirando con cariño, pero ya completamente
resignados a no poder estar juntos.
“La invitación a tu boda llegó a Lotus Pier, Jin Guangyao fue muy amable por enviarla para
mi” Dijo Jiang Cheng de pronto.
“Sabes que no tienes que ir” Dijo Lan Huan rápidamente, ya que en un inicio había
considerado no invitar a Jiang Cheng, pero Meng Yao había insistido.
“No… En realidad no tengo que hacerlo… ¿Tú quieres que yo esté ahí para apoyarte?”
Lan Huan no supo que responder a esa pregunta, guardando un incómodo silencio mientras
miraba fijamente a un serio Jiang Wanyin.
La conversación de ambos se vio interrumpida cuando los sirvientes abrieron la puerta,
dejando así que Jin Zixuan y Yanli entraran en la sala de té, finalmente interrumpiendo a la
pareja, que recobró la compostura.
“¡A-Cheng!” Dijo Yanli emocionada, separándose de su esposo para acercarse a su hermano.
“Shijie…”
Poniéndose de pie, Jiang Cheng acudió hacia su hermana mayor, abrazándola lleno de
emoción, mientras Zixuan hizo una reverencia como saludo, siempre yendo detrás de su
esposa, cuidándola. Yanli tenía un gran vientre de embarazo, y aun a pesar de eso no dejaba
de lucir radiante, usando sus típicas túnicas violetas ahora mezcladas con adornos dorados.
Después de abrazarse, Yanli fue ayudada a sentarse, y luego Jiang Cheng y Jin Zixuan se
sentaron para comenzar a charlar sobre el asunto importante que los había traído hasta ese
sitio. Después de las típicas trivialidades de saludarse después de verse tras varias semanas
separados, Jiang Cheng fue el que hizo las preguntas, decidiendo empezar con la parte
importante que los había traído hasta ese sitio.
“Shijie, líder de la secta Jin, ¿Podría hacerles una pregunta sobre un asunto importante pero
algo incómodo?” Preguntó Jiang Cheng.
“Claro A-Cheng, ¿Qué es lo que ocurre?” Preguntó Yanli con una sonrisa.
“Quisiera saber sobe un joven omega que perteneció a su secta, su nombre es Mo Xuanyu…”
Al escuchar ese nombre, Yanli perdió su sonrisa y Zixuan por un momento tuvo una
expresión triste, lo cual sorprendió bastante a Lan Xichen, quien esperaba que el matrimonio
Jin expresara su desagrado al escuchar el nombre de ese omega que supuestamente había
“acosado” a Jin Zixuan.
“A-Xu es… El ultimo hijo del líder Jin Guangshan” Dijo Yanli, finalmente confirmando las
sospechas que Wei Ying había tenido todo ese tiempo: “Fue enviado a la secta Lanling Jin
por su madre cuando tenía poco más de 7 años, y fue recibido para convertirse en uno de los
cultivadores de nuestra familia.”
“Pero fue expulsado de la torre Koi, ¿Es correcto?” Preguntó Jiang Cheng con seriedad.
“No fue algo placentero, A-Cheng, pero es algo que debía hacerse.”
“¿Y que fue eso tan grave que un niño pudo hacer para ser expulsado de su secta?”
“Mi hermano menor tenia pensamientos muy retorcidos… Respecto a sus sentimientos sobre
mi” Intervino Jin Zixuan, nuevamente luciendo algo deprimido: “Tal vez porque no estuve
presente en su vida desde su nacimiento, o solo porque se sintió confundido, Mo Xuanyu
comenzó a enamorarse de mí, y fue por eso que debimos apartarlo de nuestra secta.”
Jiang Cheng cruzó miradas con Lan Huan, quien lucía igual de sorprendido que Jiang Wanyin
al escuchar la noticia, pues aquellas palabras eran una situación sumamente grave.
“Poco después de cumplir 11 años, A-Yu comenzó a rondar demasiado a A-Xuan, le enviaba
cartas extrañas, solía aparecer en medio de la noche en nuestra habitación, lucia muy
intranquilo e incluso afectado en sus entrenamientos, nadie sabía lo que le ocurría” Explicó
Yanli: “Sin embargo las cosas se volvieron insostenibles cuando invadió nuestra habitación y
fue a buscar ropa de Zixuan para hacer un nido o algo así… Entonces supimos que la
situación era grave, y lo llevamos con curanderos para saber lo que le ocurría.”
“¿Qué fue lo que ellos te dijeron?” Preguntó Jiang Cheng.
“Nos dijeron que Xuanyu estaba mentalmente afectado, gravemente inestable. No quería
decir lo que había visto, pero los curanderos aseguraron que él presenció o vio algo tan grave
que rompió su mente, volviéndolo un demente, y que eso solo iba a empeorar si lo
manteníamos en la torre Koi donde ocurrió su trauma.”
“Pero no lo abandonamos, en absoluto” Dijo Zixuan rápidamente: “Yo ya tenía conocimiento
sobre la situación de la familia Mo, especialmente después de la muerte de su madre, que lo
convirtió en una persona más inestable. Cada mes me encargaba de enviarle dinero para
mantenerlo económicamente, trataba de hallar tratamientos o curanderos para eliminar su
mal, hice todo lo que pude… Pero pasaron los años y las cosas siguieron iguales, incluso
empeoraron según los informes de la secta Mo y A-Yao.”
“¿A-Yao?” Preguntó Jiang Cheng, sin poder ocultar el desagrado en su voz.
Sabía que estaba siendo algo injusto, pero de alguna manera, aquel omega Jin siempre se las
arreglaba para estar en el centro de todos los problemas de todas las sectas, causando
desastres en todos los lugares a los que iba, desde vencer heroicamente a Wen Ruohan por la
espalda, hasta la misteriosa muerte de su esposo en Qinghe, un agudo instinto en Jiang Cheng
le decía que cuando Jin Guangyao estaba involucrado la situación no era algo limpio.
“Yo no podía acercarme a A-Yu, podía llegar a empeorar su estado, estando tan mentalmente
inestable no quería hacerle daño. A-Yao fue el encargado de llevar el dinero y contratar a los
curanderos en la villa Mo, era el nexo entre mi secta y ellos, siempre estuvo atento a A-Yu
incluso desde antes que este desastre ocurriera…” Explicó Jin Zixuan.
“Oh… Es verdaderamente un ángel” Ironizó Jiang Cheng: “Solo déjame adivinar… ¿Fue él
quien descubrió a Mo Xuanyu robando tu ropa?”
“Bueno… Ciertamente él estuvo involucrado en ese asunto, pero… ¿Por qué es algo
importante?” Preguntó Yanli.
“No es nada, solo me gusta adivinar…” Respondió Jiang Cheng, sorbiendo un poco más de
su té.
Después de eso, Jiang Cheng permitió que Lan Huan se encargara de explicar la delicada
situación con la reparación del sello del tigre de estigio y su posible relación con Mo Xuanyu,
así como todos los maltratos y las acusaciones de violencia de la familia Mo hacia el
hermano menor de Jin Zixuan, quien se quedó estupefacto.
Zixuan no podía abandonar a Yanli, pero aun a la distancia prometió comandar a la secta Jin
para ayudarlos, aunque en realidad él no estaba interesado en buscar el dichoso sello, Zixuan
en verdad se notaba preocupado y dolido pensando en el destino de su hermano, siendo el
primero en preocuparse únicamente por encontrar a Mo Xuanyu y su bienestar.
“Hablando de Meng Yao, ¿Dónde está?” Preguntó Jiang Cheng curioso: “Creí que él estaba a
cargo de la secta Jin mientras ustedes permanecían en este sitio…”
“Me informaron que estaba encargándose de asuntos de la boda, así que no está en Lanling
desde hace unos días” Explicó Zixuan: “Imagino que está en Gusu.”
“¿La boda? Todos los detalles ya fueron cuidadosamente planeados, no hay nada más que
hacer” Dijo Lan Xichen tan sorprendido como Zixuan: “A-Yao no está en Gusu, no ha
visitado el Receso entre las nubes desde hace más de un mes…”
“Mis sirvientes me dijeron que no estaba en la torre Koi desde el inicio de esta semana,
¿Acaso no le dijo a donde iría, Zewu-Jun?”
“Me dijo que estaría aquí con usted de visita por unos días…” Dijo Lan Huan muy
confundido.
“No, él no ha pasado por aquí desde hace varias semanas…”
Con aquella revelación, dejando en claro que nadie sabía dónde estaba Meng Yao, Yanli y su
hermano cruzaron miradas, ambos comprendiendo que aquel omega tenía algo entre manos, y
que probablemente estaba inmiscuido en ese asunto mucho más de lo que ellos podían creer.
***
“Ah… No sé cómo voy a mirar a Huaisang a la cara después de todo este desastre” Se quejó
Wei Ying, apoyando su barbilla en el hombro de su alfa.
“No hiciste nada malo Wei Ying.”
“¿No lo hice? No le avise que su omega destinado había desaparecido, tampoco me disculpe
por haber pensado mal de él, soy un terrible amigo…”
“El líder de la secta Nie tampoco te dijo sobre su relación con Mo Xuanyu previamente, están
a mano.”
Riendo, Wei Ying no pudo evitar abrazar con un poco más de fuerza a Lan Zhan por la
cintura, sujetándose de él con fuerza mientras ambos viajaban sobre la espada Bichen en
dirección al norte de Qinghe, al lugar donde estaban las montañas.
“Eres muy gracioso cuando realmente lo intentas, ¿Lo sabias, Lan Zhan?” Preguntó Wei Ying
riendo.
“Mmm…”
“Claro que lo sabes, no finjas demencia… Acabemos con esto lo más rápido que podamos,
¿De acuerdo? No quiero que A-Cheng pierda el control estando con tu hermano, eso podría
ser desastroso estando tan cerca de la boda con A-Yao…”
Aquella mañana se habían despertado con un mensaje de Nie Huaisang, quien contactó
alarmado a Wei Ying, pidiéndole encontrarlo en los mausoleos de la familia Nie, asegurando
que había algo que él y Lan Wangji debían ver cuanto antes. Así que a regañadientes, Wei
Ying tuvo que permitir que Jiang Cheng y Lan Xichen se fueran solos a interrogar a Jin
Zixuan sobre el asunto, mientras él debía ir a apoyar a su amigo con ese asunto tan
importante en las montañas de su secta.
“Solo espero que Huaisang en verdad este hablando de algo importante…” Se quejó Wei
Ying en un susurro, apoyando su barbilla en el hombro de su alfa, mientras viajaba
cómodamente a su lado.
Después de un largo viaje sobre sus espadas, Lan Wangji y Wei Wuxian llegaron a Qinghe, a
un lugar desolado y lleno de niebla, donde estaba el lugar de descanso de la mayoría de los
miembros de alto rango de la familia Nie, en mausoleos y amplias tumbas llenas de lujos.
“Eh… ¿Eso fue un perro?” Preguntó Wei Ying aterrado, abrazándose fuertemente a su alfa.
Mirando a ambos lados en medio de la niebla, Lan Wangji no pudo identificar nada al
respecto, solamente pudiendo negar con la cabeza, dando así a entender que no había nada
ahí.
“Escuche un perro, lo juro” Insistió Wei Ying: “Tengo miedo… Protégeme Lan Zhan…”
“Te protegeré” Aseguró el alfa, abrazando suavemente a su omega.
“Abrázame más fuerte, tengo miedo…”
Wei Ying no se encontraba asustado por el ambiente desolado y aterrador del lugar de
descanso funerario de la secta Nie. Pudo escuchar como un perro había ladrado desde lo
lejos, así que como era usual cuando alguno de esos animales se acercaba, Wei Ying se ponía
sumamente nervioso y buscaba a su alfa para abrazarlo.
“Está bien A-Ying, te voy a cuidar, ven conmigo” Siendo muy suave, Lan Wangji tomó a su
esposo en sus brazos, manteniéndolo seguro contra su cuerpo mientras caminaban entre las
tumbas.
Parado fuera del mausoleo más grande de todo el lugar, Nie Huaisang esperaba ansiosamente
la llegada de sus amigos, y al verlos se sintió intrigado, viendo a Lan Wangji cargar de una
forma tan cariñosa a su omega entre las tumbas.
“Oh… A-Xian, ¿Te asustaste en el cementerio?” Preguntó Huaisang con suavidad, viendo a
su amigo omega tan tembloroso en los brazos de su alfa.
“No seas tonto… Hay perros rondado” Aclaró Wei Ying, luciendo sumamente molesto.
Bufando con molestia, Wei Ying bajó de los brazos de su alfa, acercándose al líder de la secta
Nie para hacer una reverencia para saludarlo. Todos los presentes hicieron las reverencias
correspondientes, con la usual cortesía entre cultivadores, para luego ponerse manos a la obra
con el trabajo que quedaba pendiente.
Nie Huaisang se encontraba fuera de uno de los mausoleos de aquel cementerio con varios de
sus hombres, aquel lugar aparentemente había sido abierto a la fuerza, y una gran energía
resentida emanaba por todo el lugar.
“¿Qué pasó aquí?” Preguntó Wei Ying confundido viendo la escena.
“No lo sé…” Dijo Nie Huaisang de inmediato: “Los guardias que patrullan la parte baja de
esta montaña me informaron que ayer a altas horas de la noche sonó una fuerte explosión.
Creí que hubo un derrumbe, muchas de las tumbas en este lugar tienen siglos de antigüedad,
pero al llegar vimos que alguien había derrumbado esta pared y que había entrado a la fuerza
al mausoleo de la secta de la familia Nie.”
“¿Este es el mausoleo de tu familia?” Preguntó Wei Ying sorprendido.
Cada una de las sectas tenía su forma propia de hacer los funerales, en Yunmeng se dejaban
los cadáveres en botes que se hacían flotar por el lago, y en Gusu se quemaba los cadáveres.
Así que era bastante curioso para Wei Ying está presente en ese sitio, considerando aquel
lugar como un sitio único, pues él nunca había visto alguna secta que enterrara a sus muertos.
“Si, es el lugar de descanso ancestral de mi secta, fue construida cuando murió el creador de
la secta Nie, y se fue ampliando con los años. Ahora es un lugar bastante laberintico, porque
no se tienen planos de las ampliaciones, solo de la estructura original…”
“Ya veo…” Dijo Wei Ying inspeccionando las ruinas destruidas en el suelo: “¿Crees que
pudo ser algún tipo de asalto? ¿Tenían reliquias valiosas dentro de las tumbas?”
“No somos como la secta Wen” Negó Huaisang, cubriendo su rostro con un abanico: “Las
reliquias de mi secta están en las bóvedas de la residencia principal de en Qinghe, ahí abajo
solo hay cadáveres y tal vez alguna armadura, pero nada realmente valioso…”
Los miembros de la secta Wen también enterraban a sus cadáveres, pero con ellos guardaban
grandes tesoros, espadas o joyas que ellos habían usado en vida, para horrar a los muertos
con las riquezas que acumularon en vida. Comprendiendo la diferencia entre ambas sectas,
Wei Ying asintió con la cabeza, mirando a su alfa confundido.
“Talismán explosivo” Señaló Lan Zhan, entendiendo de inmediato como habían abierto esa
cripta.
“Lo sé, ¿Pero por qué? Sin tesoros o algo valioso, ¿Por qué invadir una tumba?” Preguntó
Wei Ying.
“Mmm…”
“Si, no vamos a saberlo a menos que bajemos ahí… Supongo que no hay otra forma…”
Interviniendo en la conversación, Huaisang dijo: “Yo mismo hubiera bajado, pero… Creímos
que sería conveniente llamar a alguien como ustedes, que pueden hablar con los muertos
usando Interrogación o Empatía…”
“¿Estas sugiriendo hablar con los muertos de la cripta de tu secta? ¿Por qué?” Preguntó Wei
Ying confundido.
“No lo sé… Realmente no lo sé…”
“Bueno, no creo que ellos tengan algo demasiado importante que decir. Como sea, vamos a
revisar todo, te diremos si se robaron algo de tu secta o si solo fue algún ladrón que se
equivocó al intentar robar este sitio.”
Era obvio que aquel incidente no había sido un accidente, alguien había usado un talismán
explosivo para abrir el mausoleo, así que no fue un derrumbe o una falsa alarma. Decidido a
encontrar la verdad, Wei Ying aceptó una antorcha de las temblorosas manos de uno de los
cultivadores Nie que acompañaban a su amigo, y sin temor entro primero a la cripta, siendo
seguido por Lan Zhan.
Bajando unas escaleras de roca sucias y viejas, Wei Ying llegó a una extraña sala circular, la
cual tenía varios pasillos serpenteantes saliendo de ella, los cuales guiaban a lugares más
profundos donde había más tumbas.
“Tal vez Huaisang no se equivocaba por completo… ¿Deberíamos usar interrogación para
saber por dónde ir?” Preguntó Wei Ying mirando a su alfa.
“Mmm…”
En un rápido movimiento, Lan Wangji tomó su guqin, apoyándolo contra una de las escaleras
de piedra, y después de concentrarse un poco, Lan Wangji comenzó a tocar.
“Quieren saber lo que estamos buscando para decirnos donde ir” Dijo Lan Wangji después de
unos segundos.
“Bueno, en realidad nosotros tampoco sabemos lo que estamos buscando” Respondió Wei
Ying pensativo: “¿Puedes preguntarles si otra persona entro aquí anoche?”
Volviendo a tocar unas notas y recibiendo otras como respuesta, Lan Wangji dijo: “Si.”
“Pregúntales a donde fue…”
“No lo saben” Dijo Lan Wangji: “Fue a un lugar nuevo.”
“¿Un lugar nuevo? ¿Qué se supone que significa eso? Como sea, pregúntales si saben lo que
esa persona se llevó.”
Volviendo a preguntar y recibiendo una respuesta, Lan Wangji susurró: “¿Cómo es eso
posible?”
“¿Qué dijeron?”
“Nie Mingjue.”
Aquella respuesta también dejo desconcertado a Wei Ying, quien se quedó callado por un
minuto, pensando en esa curiosa respuesta.
“¿Cómo pudieron llevarse a Nie Mingjue si él esta…? Oh…”
“¿Mnn…?” Preguntó Lan Zhan confundido.
“Ven conmigo” Pidió Wei Ying.
Caminando rápidamente por el lugar, Wei Ying se dirigió a las entradas de esos caminos
serpenteantes, y buscando el que parecía más nuevo, entró en este con confianza. Escuchando
los pasos rápidos de su alfa detrás de él, Wei Ying caminó por ese estrecho y obscuro pasillo
hasta llegar a una amplia sala de nuevo, la cual solo tenía un ataúd en el centro, el cual estaba
adornado con oro y algunas peonias.
“Ni siquiera tengo que preguntar de quien es el ataúd, ¿No crees?” Preguntó Wei Ying,
bufando con molestia.
Acercándose al ataúd, Wei Ying pudo observar como este había sido abierto recientemente
por el polvo a su alrededor, y sin dudarlo también lo empujo con cuidado, revelando su
interior completamente vacío.
“Por eso ellos te dijeron que era un lugar nuevo, este nuevo espacio en el mausoleo fue
creado para Nie Mingjue, este era su ataúd” Dijo Wei Ying.
Leyendo el nombre en la tapa del ataúd, Lan Zhan asintió con la cabeza: “Mmm…”
“¿Pero por qué alguien tendría interés en llevarse su cuerpo? ¿Cuál es la relación que todo
esto tiene con él y la secta Nie? No puedo comprender nada de lo que está ocurriendo…
Primero fue la espada de Nie Mingjue en la espada, luego el medallón de Meng Yao
controlando a Wen Ning, ahora la desaparición del cadáver, ¿No está todo esto relacionado de
alguna forma, Lan Zhan?”
“Probablemente lo está, pero no encuentro la manera.”
“Me temo que no podremos responder esto haciendo las preguntas precisas, aun si tratamos
con los vivos. Tenemos que encontrar a la persona que recreo mi sello, probablemente fue él
quien ocasionó todo este desastre, tenemos que detenerlo antes de que alguien termine
herido…”
Acercándose a su omega, Lan Wangji se tomó la molestia de empujar la tapa del ataúd,
haciéndola caer al piso y girándola con la caída. Al ver la parte inferior de la tapa, Lan
Wangji y Wei Ying nuevamente se quedaron sin habla, pues había varios rasguños en la
madera, pero por la forma de la madera, estos parecían ser muy recientes.
“Esto… Esto no tiene sentido” Dijo Wei Ying más alarmado: “Nie Mingjue murió hace
varios años, ¿Cómo es posible que su cadáver se haya levantado para intentar salir de la
tumba? Es aterrador…”
“Si una persona usa tu sello, ¿Podría levantar cadáveres resentidos como Wen Ning?”
Preguntó Lan Zhan.
“No como Wen Ning, para crear a alguien como él la muerte debe ser reciente o el cadáver
debe ser preservado con talismanes, si alguien usara el sello para levantar a un cadáver como
el de Nie Mingjue, lo único que conseguirá sería un cadáver resentido por que el alma de la
persona se habría ido hace mucho tiempo ya, solo quedaría una carcasa vacía” Explicó Wei
Ying.
“¿Pero es posible?”
“Técnicamente… ¿Crees que la persona que creo el sello levantó a Nie Mingjue de su
tumba?”
“Mmm… Tal vez fue un accidente, tal vez no… Pero por las marcas en el ataúd, parece que
su cadáver se estuvo removiendo por un largo tiempo tratando de salir. Sea quien sea que
entro aquí sabía que él estaba despierto y vino a buscarlo…”
“¿Pero por qué? ¿Qué planea conseguir con todo esto? Es una locura…”
“Tú lo dijiste, solo encontraremos las respuestas que queremos con el sello.”
“Tienes razón, solo con el sello…”
Tomándose de la mano de su alfa, Wei Ying salió junto a él de aquel lugar tan aterrador,
teniendo que darle las malas noticias de Huaisang sobre la desaparición del cadáver de su
hermano. Esto obviamente causó una gran conmoción en la secta Nie, los cuales de
inmediato se pusieron a rastrear al posible ladrón, al cual desde el inicio condenaron a muerte
por el atrevimiento de robar el cuerpo de su anterior líder.
A pesar de contarle al respecto a Huaisang, Wei Ying se había reservado los detalles sobre el
nuevo sello del tigre de estigio y pensar que el cadáver de Nie Mingjue había despertado, ya
que todavía no sabía a lo que se enfrentaba, y no quería dar demasiada información de
simples suposiciones; hasta que Wei Ying no viera el sello del tigre de estigio no confiaría en
que ese objeto hubiera reaparecido.
Después de tomar un pequeño descanso con su alfa y recibir la noticia de Jiang Cheng de que
estaba yendo a Lanling para hacer más preguntas, Wei Ying decidió concentrar sus esfuerzos
en buscar rastros de energía resentida proveniente del supuesto sello, y tomando una de sus
brújulas, pronto encontró un camino, el cual lo dirigía a una ciudad fantasma en las tierras de
Qishang.
Epílogo.

6 años después.
Con la llegada del atardecer, todos los barcos comenzaron a abandonar los puertos, así que
entre risas, todos los jóvenes herederos Jiang corrieron fuera de su secta, queriendo nadar en
el mar calmo y tibio de primavera.
“Niños, no corran tan rápido” Dijo Wei Ying molesto, corriendo detrás de sus pequeños,
queriendo cuidarlos de cerca.
Wei Ying tenía 4 hermosos hijos, su primogénito Lan Sizhui, el cual ya había cumplido su
periodo de cortejo, y solo estaba esperando al final de la primavera para casarse con su alfa
destinado. Su segundo hijo, un alfa con el apellido Jiang, tan enérgico y travieso como lo
había sido Wei Ying toda su vida, el tan esperado heredero de la secta Jiang. Su tercera y
única hija, una pequeña alfa tan amable y fría como su padre alfa, la cual robaba suspiros
incluso a su corta edad. Y finalmente su cuarto hijo, un pequeño omega con ojos violeta, el
cual apenas tenía unos meses de nacido, y era la adoración de Wei Ying, quien con tristeza
debía dejar ir a su hijo mayor, y se aferraba al menor para calmar su tristeza.
Siguiendo la risa de sus otros dos hijos, llego a uno de los muelles de Lotus Pier, donde
ambos niños con los apellidos Jiang, no tardaron en lanzarse al agua, nadando como todos los
niños de Yunmeng lo hacían, sabiendo nadar incluso antes que caminar.
Tomándose las cosas con más calma, ya que tenía a su hijo menor en brazos, Wei Ying solo
se sentó en la orilla de muelle, introduciendo sus piernas en las aguas tibias del lago, viendo a
su bebé dormido en su regazo, muy apacible.
Wei Ying no creía tener más hijos después de ese bebé, no porque no lo deseara, él quería
tener más de 10 hijos si pudiera. Pero ya no estaba en la edad de seguir teniendo cachorros,
con sus celos cada vez más pausados, Wei Ying sabía que estaba entrando en esa época que
nunca creyó vivir: La verdadera adultez. Nunca iba a envejecer, era un cultivador inmortal,
pero como cualquier humano, a pesar de seguir siendo un omega, tenía un ciclo de vida y de
reproducción, y el momento de tener cachorros aparentemente ya había terminado para él.
Mirando aquel lugar hermoso, en el que las flores de loto florecían y las risas se escuchaban
por todos lados, Wei Ying añoró sus días de juventud, donde no pensaba en nada, y solo
disfrutaba de nadar al lado de sus hermanos y luego al lado de su alfa. Recordaba todo el
dolor y las heridas, pero no se arrepentía de ninguna de las decisiones que había tomado en su
vida, que de forma indudable lo habían llevado a ese, que era su final feliz.
Cuando la brisa sopló, cerrando los ojos, Wei Ying pudo oler a lo lejos aquel aroma dulce que
lo enloquecía.
“¿Puedes oler eso? Es papá… Está regresando por fin de Lanling, ¿Deberíamos recibirlo?”
Le preguntó Wei Ying a su bebé.
Poniéndose de pie, Wei Ying caminó al muelle principal de Lotus Pier, donde a lo lejos se
veía un bote con la insignia de los Jiang, que regresaba de un corto viaje pero lleno de
sentimientos.
Lan Sizhui había abandonado la secta Jiang por última vez, con su fiesta de compromiso
hecha y a punto de casarse, iba a pasar sus últimos días de soltería en la torre Koi, a la cual
Wei Ying y Lan Zhan debían viajar en pocas semanas para su boda, haciendo ese último viaje
como un omega soltero al lado de su padre, quien había insistido en escoltarlo hasta Lanling
para mantenerlo protegido.
“Tu papá está muy triste por haber dejado ir a A-Yuan, debemos animarlo un poco, ¿De
acuerdo?” Le preguntó Wei Ying a su cachorro, viendo el bote cada vez más cerca del puerto.
Cuando el aroma de las feromonas se hizo más fuerte, Wei Ying cerro los ojos, escuchando
como el barco se detenía en el muelle, y como los fuertes pasos de su alfa se acercaban.
“Wei Ying…” Dijo la voz de su alfa, la cual a pesar de ser fría como el hielo, a Wei Ying le
parecían lo más cálido.
“Me gustas” Dijo Wei Ying re pronto.
“¿Mmm…?”
“¡Te lo dije! ¡Me gustas! Ahora es un buen novio y preséntate ante tu prometido.”
Sonriendo al ver las intenciones de su omega, Lan Wangji se acercó al mayor, abrazándolo
por la cintura para acercar sus cuerpos.
“No me gustas Wei Ying, yo te amo” Respondió Lan Wangji con firmeza.
“Yo también te amo… Lan Zhan…”
Abriendo los ojos, Wei Ying se encontró con los ojos dorados de aquel hombre al cual amaba
con locura, acercándose a él para besar sus labios suavemente, mientras se sentía como ese
joven otra vez, conociendo por primera vez lo que era el amor.
Pero pronto su breve momento romántico fue interrumpido por sus otros cachorros, los cuales
se acercaron para pedir la atención de su padre. Soltando a Wei Ying, Lan Wangji ayudo a
ambos niños a salir del agua, caminando todos juntos de regreso al interior de Lotus Pier,
donde iban a cenar como una familia.
“Lan Zhan, Lan Zhan… Yo estaba pensando… Ya ha pasado casi un año desde que tuve a
nuestro último cachorro…”
“Mmm…”
“¿Deberíamos intentar hacer otro hoy?”
“¡Desvergonzado!”
“Entiendo, entiendo… Disculpa Hanguang-Jun, no lo pediré…”
“No tienes que pedirlo, porque todos los días son todos los días.”
“Que pervertido eres, Lan Wangji…”
Palabras finales de la autora.

Creo que ahora si es… La despedida final. Y perdonen si divago demasiado, pero de verdad
quiero expresar mis sentimientos ahora, en lo que está significando este final para mí.
Ya no quiero hablar de lo mucho que me gusto esta historia y de los inconvenientes, porque
quiero que esta despedida sea más real, más personal.
Este fanfic fue lo que me devolvió las ganas de escribir, y también me dio la fe en mi misma
de que tengo algo que decir y soy una buena escritora o una escritora interesante. Antes de
empezar este fanfic, en su primera versión y todo lo demás, no había escrito por más de tres
años, gracias a un incidente difícil con libros que tenía en la plataforma, y que tal vez haga
que vuelvan alguna vez… Quién sabe.
El punto es que este libro para mí fue un nuevo comienzo, de todo. No solo me devolvió mi
pasatiempo favorito, también me trajo muchas oportunidades, ya que de no ser por este libro
jamás habría intentado trabajar para escribir, y ahora es a lo que me dedico para vivir, y es lo
que más adoro de esta experiencia, como me ha ayudado a evolucionar como persona, y lo
que ha significado para mi vida.
Durante el último año he estado en una gran depresión por diversos asuntos sin finalizar de
mi vida, cosas que son… Realmente duras, y no creo que tengan que ver con este libro. Pero
reo que finalizarlo de una forma tan esperanzadora, con un final tan feliz y lleno de amor, me
ha devuelto nuevamente las ganas de continuar adelante, por más duro que sea, esperando
también tener un final feliz algún día de estos.
Si bien me arrepiento de lagunas de las decisiones que tome al escribir este fanfic, no de las
cosas que aprendí, las personas que conocí, y todas las cosas bonitas que me dejo. Desde el
inicio de este libro hasta ahora soy una persona completamente diferente, y por eso le tengo
un gran cariño a este libro, y a todos ustedes.
Gracias por haberme aguantado hasta ahora, aun si no fue una tercera parte tan larga como
quería, si nos permitió darle un final a esta historia, y aunque no somos tantos como al
principio, me gusta pensar en todos ustedes como amigos, a los cuales espero seguir viendo y
seguir compartiendo a su lado. Muchas gracias por todo estos años, y por acompañarme en
este largo camino de vida que significo todo esto para mí. En verdad, muchas gracias por
leerme.
Un beso y un gran abrazo para todos y todas.
PD: No hay extras, este es el final por completo, así que ya podemos dejar de tener TOC por
esta historia que finalmente terminó.
Please drop by the Archive and comment to let the creator know if you enjoyed their work!

También podría gustarte