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Que Razon Hay para Vivir

La historia narra la lucha interna de Lan Wangji, un emperador atrapado en una guerra, que anhela a su alma gemela mientras enfrenta la soledad y la presión de su deber. A través de visiones y recuerdos, busca a su otra mitad en un mundo donde la guerra y las expectativas familiares lo abruman. La narrativa se desarrolla en un universo de cultivación, explorando temas de amor, pérdida y la búsqueda de conexión en medio del caos.

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Que Razon Hay para Vivir

La historia narra la lucha interna de Lan Wangji, un emperador atrapado en una guerra, que anhela a su alma gemela mientras enfrenta la soledad y la presión de su deber. A través de visiones y recuerdos, busca a su otra mitad en un mundo donde la guerra y las expectativas familiares lo abruman. La narrativa se desarrolla en un universo de cultivación, explorando temas de amor, pérdida y la búsqueda de conexión en medio del caos.

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¿Qué razón hay para vivir?

Posted originally on the Archive of Our Own at http://archiveofourown.org/works/47222140.

Rating: Explicit
Archive Warning: Graphic Depictions Of Violence
Category: M/M
Fandom: 魔道祖师 - 墨香铜臭 | Módào Zǔshī - Mòxiāng Tóngxiù
Relationship: Lan Zhan | Lan Wangji/Wei Ying | Wei Wuxian
Characters: Lan Zhan | Lan Wangji, Wei Ying | Wei Wuxian, Lan Huan | Lan Xichen, Jin Zixuan,
Meng Yao | Jin Guangyao, Jiang Cheng | Jiang Wanyin, Lan Qiren, Nie Huaisang, Yu
Ziyuan, Jiang Yanli, Ancianos Lan, Jiang Fengmian
Additional Tags: Almas gemelas, imperios, Anhelo, Anhelo mutuo, Dark Lan Zhan | Lan Wangji/Wei
Ying | Wei Wuxian, Guerra, Mpreg, NSFC, Romance, separacion, Tristeza, muerte -
Freeform, WangXian, Yiling Laozu Wei Ying | Wei Wuxian, Alternate Universe -
Canon Divergence, Top Lan Zhan | Lan Wangji/Bottom Wei Ying | Wei Wuxian
Language: Español
Stats: Published: 2023-05-16 Completed: 2023-05-20 Words: 67,826 Chapters: 16/16
¿Qué razón hay para vivir?
by Acristina084

Summary

A veces tengo visiones de una persona alegre y cantarina, un espíritu libre que llena mi corazón de un
sentimiento demasiado hermoso, demasiado cálido; siento que mi alma se estremece al pensarla, como si
su alma llamara a la mía, como si el universo reclamara nuestra unión... Quizás en otra vida, tal vez en
otro universo mi alma no estaba sola, quizás no era solo yo. Hay algo que me falta... Dos mitades de un
mismo ser.

Luego todo se desvanece y me encuentro de nuevo en medio de esta guerra con mil personas que me
siguen, me apoyan pero, aun así me siento... Solo, vacío.

Hay algo que me falta... Alguien.


Capítulo 1
Chapter Notes

Hola! Esta fue la primera Historia que escribí, la publiqué primero en Wattpad y ya que casi termino
de publicar los capítulos, decidí montarla también aquí.

El universo narrativo estará orientado en la antigua china conservando el tema de la cultivación al


igual que en la novela original. Trataré de conservar lo más que pueda las personalidades originales
de los personajes y si encuentran inconsistencias me lo pueden decir en los comentarios para ir
corrigiendo y mejorando mi escritura.

Si hay errores ortográficos o de redacción me los pueden informar en los comentarios.


Probablemente la escritura de los primeros capítulos no sea la mejor, ya que como dije anteriormente,
es mi primera historia pero se que fui mejorando la redacción a medida que seguí escribiendo.

Ojalá le den una oportunidad a la historia.


Gracias por leer... Espero la disfruten.

La sangre gotea, el sonido de las espadas hace eco en los oídos, la visión es borrosa, se tambalea. Todo
pasa muy rápido frente a sus ojos y no está seguro de lo que ve ni de lo que escucha.

— ¡Su majestad! — Se escuchó un grito a lo lejos. Mira hacia el otro lado, se podía apreciar una figura
vestida con tonos grises y una cinta roja como la sangre atada en media cola a su larga cabellera.

— Heriste a su majestad — Dice el hombre en un tono muy frio mientras su espada atraviesa el corazón
del soldado Wen — Nadie que lo toque vive para contarlo. Ni siquiera eres digno de respirar su mismo
aire. — Giró su espada desgarrando la carne dentro del soldado mientras este daba su último grito en
agonía.

Parpadea, su rodilla presiona la tierra llena de sangre. Trata de mantenerse de pie, pero no es posible y cae
al suelo. Con su mano derecha presiona la herida en su abdomen. — ¿Qué caso tiene? — Piensa. Vuelve la
vista al hombre de gris. Ya no hay nadie en el lugar. Mira en todas las direcciones, pero solo ve al soldado
que gritó antes, ya está sobre el ayudándole. Su visión se torna borrosa de nuevo y luego, todo se oscurece.

Hay un columpio atado a un árbol frente al lago, hay flores de loto y algunos conejos saltando de un lado a
otro. El sol brilla intensamente, no, no es el sol... Es su sonrisa. Ahí está — Que hermosa vista— Piensa.
Túnicas largas y oscuras. Largos cabellos caen en su espalda como una cascada, oscuros como la tinta y
atados en una coleta alta por una cinta de color rojo. Su risa hace eco en el aire. No puede ver su rostro,
pero algo en su interior se siente como si lo conociera, como si supiera quien es. El corazón retumba como
si quisiera salirse, el aire es escaso en sus pulmones, no puede respirar —¿Dónde estás? — Dice.
—Su majestad, su majestad — Dice el médico. — Por fin despierta, Aquí estoy para lo que necesite.

Lan WangJi observa el techo de la carpa, son sus aposentos en el campamento militar Lan —Parece que
viviré un poco más— piensa. Tuvo otra de sus visiones, pero esta fue un poco más nítida, aunque sigue sin
poder ver el rostro de la persona que anhela. —Ni siquiera sé si podré encontrarla, ¿por qué la vida me
tortura de esta forma? — Piensa. Aunque algo se siente diferente. ¿Qué es? No lo sabe.

El medico se acerca y comienza a retirar el vendaje para limpiar la herida como lo hace todos los días —
Su majestad por favor... —Hace una pausa — Sabemos que quiere pelear por el imperio. No hay mayor
honor que querer defender con sus propias manos lo que con tanto trabajo se ha construido, pero no a
consta de su vida. Majestad... Asiste al campo de batalla cada día como si quisiera que ese fuese su ultimo
día, pelea sin importarle su seguridad, su pueblo está muy angustiado, su familia.

Lan WangJi aparta la vista del médico, piensa en sus palabras, luego en su visión. —Morir talvez es algo
que realmente deseo — Piensa. — La vida no es justa conmigo o quizás soy yo el injusto y malagradecido
con ella, pero qué sentido tiene vivir esta vida incompleta y vacía. Estoy aquí pero no lo estoy. Algo me
falta y vivo con la incertidumbre de si algún día lo podré tener.

Hace años el emperador tiene visiones de lo que podría ser un futuro, o un pasado, quizás otro mundo
también; no lo tiene claro. Solo sabe que, en algún punto de su existencia, su ser reconoce que existe una
persona que le pertenece a si mismo tanto como su persona le pertenece a él, ¿el problema es? No sabe
quién es, cómo es o donde está... Solo sabe que lo necesita, que su cuerpo y su espíritu lo llama a gritos y
desde entonces vive una lenta agonía y ya no sabe si puede seguir esperando, al cabo ¿Qué tan probable es
que en algún momento logren encontrarse?

—Esta es una guerra — Dice el emperador. — Luchar por el imperio es mi deber. No puedo exigirles a
mis soldados que luchen y mueran mientras yo me siento en la seguridad de mi palacio a verlos derramar
su sangre todos los días.

—Es curioso que diga eso majestad — Habla la mano derecha del emperador mientras entra a la carpa y se
acerca. — Luchar por el imperio es mi deber. — Repite — Pero si usted muere, ¿qué será de su pueblo,
qué será del imperio? — Hace un gesto con la cabeza para que el medico los deje solos.

— Con su permiso, me retiro majestades — Hace una reverencia y sale.

—Hermano — Dice el emperador.

—WangJi —Lan Xichen encontró la mirada de su hermano y con tono preocupado dice. —Sabes que
puedes conversar conmigo.

¿Qué se supone que diga? Sus pensamientos son un enredo últimamente, la guerra está en su punto más
crítico, los soldados Wen han ido ganando mucho territorio a medida que avanza la guerra, lo cual no es
para nada un buen indicio. Las batallas se hacen cada vez más pesadas, sus estrategas no dan respuestas
muy alentadoras. Adicional con las presiones de su tío y del consejo imperial para regresar al palacio a
conformar por fin su Harén, no le ayudan para nada a pensar con claridad.

¿Se supone que es más importante dar herederos que ganar la guerra? La respuesta es No. Además, no le
interesan ninguna de esas mujeres. ¿Que no lo entienden? Su corazón ya está ocupado, puede que no sepa
quién es, ni donde está, pero tiene que esta por ahí...

Tiene que existir...

Debe existir...

—Lo lamento hermano—hace una pausa. —Yo... No estaba concentrado.


—WangJi —Suspira— Puedo ver que algo te afecta, pero está bien si no quieres compartirlo. Solo espero
que entiendas que me preocupo por ti y... Estaré aquí siempre que lo necesites.

—Mn.

Lan Xichen asiente, se pone de pie y se encamina a la puerta. — Por cierto, los generales se reunirán
contigo el día de mañana, se tendrá una reunión para decidir el rumbo de la guerra Y... — hace una pausa
— También viene la señorita Jiang para que por fin la conozcas.

Lan WangJi suspira — Mn.

— No te esfuerces mucho, tómate unos días para descansar del campo de batalla y por ahora solo participa
en las discusiones, necesitas descansar... Estuviste inconsciente 13 días. — Y con eso salió de la carpa
dejando al emperador solo.

El emperador se queda observando el techo nuevamente. —Bueno, otro día más. — Cierra los ojos y
espera volver a soñar. Al menos en sueños se siente un poco mejor.

Al día siguiente

—Muévete inútil, — Escupe Madam Yu a su sirviente. —No sirves para nada, no entiendo la necesidad de
traer a este bueno para nada a estorbar aquí.

—Mi señora por favor, el emperador está por llegar. — Habla el general del norte.

Todos los presentes observan como la general del norte trata a su sirviente, pero nadie dice nada ya que
ninguno pretende ofender a una mujer con un carácter como el suyo. Adicional nadie pondría las manos
por un simple sirviente de sangre inferior que está por debajo de las grandes familias presentes en la sala.

Las diferencias de clase están muy marcadas en el imperio Lan, y aunque no todos los que no pertenecen a
las grandes familias tienen malas vidas, la mayoría se encuentran en situación de servidumbre o viven en
extrema pobreza.

La familia real Lan a tratado de minimizar esa brecha, pero pocas personas toman en consideración a las
personas que no poseen un estatus de nobleza y sangre pura y principalmente porque su cultivación suele
ser extremadamente baja.

El sirviente simplemente permanece de rodillas con la mirada baja esperando alguna orden de sus amos.

—¡El emperador está aquí! — Exclama un sirviente de la familia Lan mientras levanta la cortina de la
carpa para darle paso al emperador.

Lan WangJi ingresa a la reunión con porte recto y paso firme a pesar de haber sido herido en días
anteriores. Todos los presentes se inclinas en una reverencia profunda ante el emperador, excepto una
persona que sin que nadie lo note, levanta la vista, sus ojos grises brillan mientras sigue los pasos del
emperador.

—Pueden levantarse— Exclama el emperador.


—Muchas gracias su majestad, Larga vida al emperador Lan— Exclaman todos en coro mientras
continúan un momento más reverenciando.

La discusión empieza. Todos los generales se turnan para rendir cuentas de sus campos en batalla al
emperador, habla primero el general Nie, luego el General Jin, y por último el general Jiang junto a su
esposa, la única mujer liderando en el campo de batalla.

Unas noticias son mejores que otras, pero todas con una opinión en común. La guerra no va bien. El
imperio Wen sigue ganando ventaja en el campo de batalla, se tienen en cuenta diferentes consideraciones
y se plantean nuevas estrategias para tratar de dar un giro a la situación.

Después de que cada familia expone sus puntos y las discusiones concluyen, todos se retiran a excepción
de la familia Jiang.

Los sirvientes presentes se ponen de pie para servir té a las personas que se quedan presentes.

—Su majestad, como es de su conocimiento cada familia debía destinar como ofrenda para su harem a una
doncella que cumpla con todos los requisitos necesarios para ser su consorte y así... —Madam Yu se queda
en silencio cuando nota que la mirada del emperador se dirige a otro lado de la habitación específicamente
a otra persona.

Todos se detienen y miran en la misma dirección; el sirviente que anteriormente se encontraba siendo
maltratado por la Madam, ahora le está sirviendo Té a la Doncella Jiang. Jiang Fengmian y Madam Yu
sonríen en satisfacción al notar la mirada del emperador en su hija.

Grande sería su sorpresa y molestia si supieran que la mirada estaba siendo dirigida no a su hija, sino en
realidad al delicado sirviente que servía el té con una sutil pero hermosa sonrisa.

En el momento en que Wei Ying siente las miradas sobre su persona, levanta la vista y la dirige al frente.
Los ojos plata y dorado se encuentran y una corriente eléctrica les recorre a cada uno.

Inmediatamente Wei Ying aparta la vista y se arrodilla dejando ver a la doncella Jiang que levanta la
mirada en dirección al emperador. Jiang Yanli sonríe y se pone de pie. —Majestad, esta humilde doncella
se pone a su disposición.

Lan WangJi dirige su atención a la doncella, pero rápidamente la devuelve al sirviente, no entiende a que
se debe lo que siente, pero algo en esta persona le resulta familiar y al mismo tiempo lo impacta. No sabe
ponerlo en palabras, de hecho, nunca fue bueno con ellas, así que solo se queda ahí un momento más,
observando, hasta que Madam Yu se aclara la garganta trayéndolo de nuevo a la realidad.

—Majestad, como le decía, mi hija se encuentra el día de hoy para presentarse y ponerse a su disposición
como una candidata al harem imperial. — Dice mientras Jiang Yanli camina para situarse a su lado. —
Debido al trascurso de la guerra y que usted desea participar activamente de ella, mi hija quiso tener el
honor de presentarse hoy ante usted, con la debida autorización de la familia y el concejo real por
supuesto.

—Oh, ya los ancianos se están moviendo de nuevo. — Piensa Lan WangJi mientras observa a las dos
mujeres Jiang. —Bienvenida señorita Jiang... Si en algún momento lo considero adecuado, mandaré a
buscarla, pero por ahora solo considero tratar los asuntos relacionados a la guerra. — Hizo una pausa. —
Como pudo notar, nos encontramos en una situación precaria.

—Por supuesto su majestad, mi deseo no es importunar. —Se inclina — Me encuentro aquí con el único
deseo de que me conozca y si lo considera, poder apoyarlo en lo que se me permita.

Madam Yu sonríe ante las palabras de su hija, ya buscará la forma de hacer que el emperador tenga tiempo
de estar con ella.
Finalizando la presentación y palabras de la doncella Jiang, todos los presentes se inclinaron
respetuosamente ante el emperador y se retiraron de la sala, saliendo primero los amos seguidos por los
sirvientes.

Lan WangJi dio una última mirada al sirviente que se encontraba con la familia Jiang mientras salía,
preguntándose que era esa sensación que sentía desde que lo vio.

.
Capítulo 2

—Quédate —le susurró. Sonó casi como una súplica—. Quédate conmigo.

Wei Wuxian volvió la cabeza mientras parpadeaba, la tela se sentía áspera al costado de su rostro, sudor
frio recorría su frente. Podía escuchar los latidos de su corazón desbordarse. La imagen de Lan WangJi se
sentía pesada en su conciencia, su voz aturdía todos sus sentidos. Gotas comenzaron a acumularse,
lagrimas deslizándose por sus mejillas. —perdón — Susurra.

Vuelve a cerrar los ojos, espera que la oscuridad haga efecto, su respiración se estabiliza poco a poco y
ruega a Dianxia que la mañana llegue pronto, que el sol alumbre las ventanas, que pronto tenga que
levantarse a servir a sus amos.

La tortura vivida en el día es más llevadera. El dolor físico es tolerable, los moretones sanan, la sangre se
seca. Cualquier cosa es mejor que esto. No lo tolera, no más. Otra tormentosa noche. Ya no quiere ver a su
zhiji abatido, no quiere sentir más su dolor. Espera que algún día todo sea mejor, lo anhela, y con ese
pensamiento entra de nuevo al mundo de los sueños.

—¿Quién eres tú? — Lan WangJi gritó, sus ojos se enfocaron más allá y a través de Wei Wuxian como si
no fuera más que aire, como una sombra proyectada en un mar de penumbras. —¿Dónde estás? —

Wei Wuxian no respondió. ¿Para qué? No tenía sentido de todas formas; Lan WangJi no podía verlo ni
oírlo. No podía tocarlo, no podía alcanzarlo. Pero es mejor así, no puede ser de otra forma, no debe.
Resignado, todo lo que Wei Wuxian puede hacer es caminar junto a su Zhiji, su alma gemela, su amado, su
todo y observarlo, impotente mientras lo busca. —Mi amado emperador. — Susurra.

—¿Conoces a su majestad? —Pregunta Jiang Yanli

—¿Qué? —Wei Wuxian se pone rígido, su rostro no puede contener la sorpresa y el pánico al escuchar las
palabras de la doncella Jiang. Jiang Yanli voltea a verlo —Lo siento mi señora, fui irrespetuoso. —Wei
Wuxian aparta la vista rápidamente.

—A-Xian—Jiang Yanli regresa la vista al espejo. Observa como su sirviente continúa cepillando su
cabello de forma delicada y tranquila. —Su majestad ayer parecía observarte un poco. Todos parecían
creer que me observaba a mí, pero creo haber visto sus ojos inclinarse hacia abajo. —Sonríe un poco
pensativa. —¿Alguna vez lo viste en persona antes de ayer?

Wei Wuxian tarda un poco en contestar, trata de no levantar los ojos y ver directamente a la doncella. Sus
manos empiezan a sudar y ruega a los cielos que el temblor en ellas no sea tan evidente. Traga en seco. —
Mi señora, este humilde sirviente nunca podría haber tenido la fortuna de estar ante su majestad antes. —
Hace una pausa. — El solo hecho de estar en la misma habitación que su majestad es manchar y
contaminar el preciado aire que respira. Debería ser castigado por tan terrible ofensa. Nunca podría
pretender que su majestad siquiera note a tan humilde ser, mucho menos dirigirle una mirada.
La doncella mantiene la mirada fija en su sirviente pensando detenidamente en sus palabras. —Entiendo
— dice.

Más tarde ese día

A la orilla de un riachuelo, muy cerca del campamento Lan. Todo estaba muy tranquilo. Se escuchaban los
caballos en las caballerizas, sonidos de espadas en el campo de entrenamiento. La servidumbre pasaba
ocasionalmente dejando palabras y pequeñas risas. El sirviente de ojos plateados no prestaba atención a
nada, no podía. Se encuentra arrodillado tratando de lavar la montaña de ropa que se le fue asignada.
Mientras todavía se encontraba perdido en sus pensamientos.

Ahora que se encontraba solo analizaba todo lo dicho por la doncella Jiang esa mañana. —Esto es grave—
piensa. No puede permitirse volver a estar cerca de su majestad o las demás personas podrían notar la
verdad o incluso peor. Su majestad de verdad podría notarlo. No puede permitirse eso.

Su hilo de pensamientos fue cortado de repente —Es curioso cómo le mientes en la cara a esa señorita
amable. Creí que le tenías mucho cariño, siendo la única de esa escoria de amos tuyos que no te golpea—.
Una risa burlesca resuena. Wei Wuxian voltea a ver con una expresión en blanco a su pequeño invitado. —
Oye no seas tan frío jajajaja deberías ir y buscar a tu amorcito, seguro que eso te anima—Xue Yang ríe de
nuevo mientras ve como la expresión de Wei Wuxian se torna en un seño fruncido.

Wei Wuxian dirige de nuevo si vista a la ropa que debe lavar y luego al agua que fluye tranquila por el
pequeño riachuelo. —¿qué quieres A-Yang? Estoy bastante ocupado en estos momentos por si no lo haz
notado. —Termina.

—Jajajajaja eres un tonto ¿lo sabías? —Dice Xue Yang como si nada. Wei Wuxian rodó los ojos y
continua en su tarea sin prestarle atención a sus palabras. —Oye no me ignores, eso es grosero sabes.

—Déjame en paz. —El ojos plata suspira tratando de tenerle paciencia a su molesto amigo. Ya han tenido
esta conversación muchas veces. No necesita repetirla de nuevo. Ciertamente ya está cansado de lo
mismo.

—No lo haré— La risa de Xue Yang se torna seria de repente. Está molesto. Toda esta situación es ridícula
y no sabe cómo hacer entrar en razón a su amigo. Wei Wuxian suspira de nuevo y agrega un "A-Yang". —
No A-Ying, no seas tan testarudo. Lo amas y él te ama a ti... ¿Cuál es el maldito problema? ¿Por qué eres
tan jodidamente terco y tonto? — Espeta con irritación.

Wei Wuxian se queda en silencio un momento. Lo sabe, pero ¿Y eso qué? Esta situación no puede
remediarse, no debe. Si está en el evitar que todo se convierta en algo más, lo hará. Hará lo que sea
necesario para evitarlo. No le importa el costo, no importa el sacrificio, no importa él, no importa nada. Lo
único que verdaderamente importa es Lan WangJi. Su bienestar, su honor, su dignidad... Su felicidad.

Lo tiene claro, su alma le recuerda todos los días lo que necesita, su piel se retuerce ante la necesidad del
tacto de la otra parte. Suspira entre pensamientos, jadea en las noches anhelantes. Lo necesita, pero
también cada día que pasa es un nuevo recordatorio de su mundo, su estatus, su sangre.

Esta sucio. Solo es un sirviente que no vale nada. Como puede permitirse tener una esperanza cuando cada
centímetro de su ser es completa inmundicia. La belleza y grandeza de su majestad no puede reducirse a
escoria como el. Y no lo hará mientras él pueda impedirlo.

— No me importa lo que pienses. Yo nací para arrastrarme en la tierra y el para vivir la gloria en las
nubes. Solo soy basura de este reino, un desecho que no vale nada. No te atrevas a rebajar su divinidad a
este desperdicio de ser humano—.

— Sabes, una lagartija tiene más autoestima que tu—. Wei Wuxian se ríe, pero su sonrisa no llega a sus
ojos. Xue Yang está cansado de decirlo, pero no puede ir en contra de las decisiones de su amigo. No le
queda más que tratar de convencerlo si es que le es posible, espera algún día lograrlo. De verdad lo espera
—En fin, te tengo noticias del campo de batalla. —Dice y Wei Wuxian se pone serio de repente. Sus ojos
reflejan una enorme frialdad que le helaría la sangre a cualquiera que pase cerca de él.

—Enserio me da miedo cuando miras de esa forma, como que dan ganas de arrodillarse ante ti jajajaja—
Dice tranquilamente Xue Yang y el ojos plata roda los ojos.

—Habla, ¿qué noticias me tienes? —Dice con impaciencia y se pone de pie ante Xue Yang.

—Tenemos un espía en el campamento Lan. Tus sospechas eran ciertas. —Hace una pausa— Alguien está
pasando información al bando de los bastardos Wen y... Gracias a esa información es que el ataque contra
su majestad tuvo éxito hace unos días.

La mirada del ojos plata se volvió más aguda y siniestra, adoptando un ligero tono rojizo. La temperatura a
su alrededor descendió rápidamente. Xue Yang se llevó las palmas de sus manos a los brazos frotándolos
para tratar de calentarse.

—Oye oye, calma, no te alteres mucho. Su majestad se encuentra bien, tu personalmente mandaste del
otro lado a esa escoria que lo hirió— Wei Wuxian dirigió su mirada a una sirvienta que se acercaba a ellos
y rápidamente le hizo señas a Xue yang para que se retirara. —Te buscaré esta noche, necesito todos los
detalles. —Hace una pausa y sonríe —Esta pequeña rata debo ir a casarla personalmente.

Xue Yang también sonríe —Oh esto será muy divertido. Prepararé todos los juguetes. — Y con eso se
retira rápidamente.

Wei Wuxian respira profundo y vuelve a su tarea, la sirvienta lo alcanza después de unos minutos
deteniéndose justo al frente. Sonríe y le tira la canasta que lleva en las manos justo en la cabeza. El
sirviente no hace ningún movimiento.

—Oye inútil—Se ríe—te faltó esto. —Comienza a caminar de nuevo por donde vino, alejándose unos
pasos y luego se detiene volteando una vez más— Por cierto, Madam Yu solicita que vayas a limpiar sus
aposentos. Está muy disgustada el día de hoy así que yo de ti, me daría prisa.

Esto logra causarle un poco de escalofrío al sirviente, pero rápidamente recupera su compostura
continuando con su trabajo. —Esto es mejor—Piensa. No importa que pase con el, todo sigue siendo
mejor que la alternativa.

Jiang Wanyin entra a la carpa donde se encuentran sus padres y algunos sirvientes. El ojos plata lo observa
un momento antes de inclinarse profundamente en un saludo como es debido.

—Madre, Padre — Hace una reverencia y luego toma asiento cerca de ellos. Un sirviente se acerca y le
sirve un poco de té con bocadillos al igual que a sus padres.
—Que noticias nos tienes— Pronuncia su madre de forma dura. Todos saben lo exigente que es Madam
Yu con su hijo, lo mucho que lo presiona para que traiga honor a la familia Jiang y lo insistente que es en
el entrenamiento de su cultivación todos los días para que destaque en el reino.

Se espera que una vez acabada la guerra, los soldados y generales más destacados recibirán grandes
recompensas por los logros alcanzados en batalla. Sus familias se enaltecerán en el reino, obtendrán
mejores posiciones y en el mejor de los casos podrán estar más cerca de la familia real.

Por este motivo Madam Yu busca por todos los medios posibles que sus dos hijos destaquen, sea en la
guerra en el caso de su hijo barón, o en el caso de su hija, garantizar su lugar en el Harem imperial.

Esa misma mañana mandó a su hija para acompañar a su majestad en el desayuno, si tienen suerte, podrá
llamar la atención del emperador como lo hizo el día anterior. Siendo hasta el momento la única de las
Doncellas candidatas al Harem imperial, que ha llamado su atención, al menos un momento.

Jiang Wanyin se aclaró la voz y habló con completa confianza —Madre, logramos conseguir que el
enemigo retrocediera en la última batalla...—Hace una pausa. Un poco nervioso continua— pero lograron
infiltrarse en nuestro territorio, donde se guardan los suministros y destruirlo. Por este motivo tuvimos que
regresar para reabastecernos.

Se escuchó una tasa estrellarse contra el suelo, a unos metros de del joven heredero. Este por reflejo se
inclinó y el sirviente de ojos plata se acercó para recoger los vidrios de inmediato.

Un sonido de relámpago se escuchó, seguidamente el sirviente fue arrojado contra los estantes laterales
que se encontraban en la carpa y luego cayó al suelo en un ruido sordo. Varias cajas y objetos cayeron
encima de él, pero no movió un solo musculo.

—Mi señora—

—Silencio Fengmian—Rugió ella. —No vuelvas a cruzarte en mi camino escoria— Se dirigió al sirviente
en el suelo y luego volteó a ver a su hijo. —Y tú, me has decepcionado. —Dijo mientas azotaba a zidian
contra el suelo.

—Madre la información del campo de suministros es confidencial, creemos que hay un topo entre los
soldados...— Otro fuerte estruendo se escuchó, esta vez Jiang Wanying cayó de espaldas al suelo por el
fuerte latigazo en su pie izquierdo.

—Acaso no es eso obvio. No vengas a mi presencia con comentarios estúpidos y esperes salir ileso, no
voy a tolerar esta ridiculez—Espetó ella regresando a su asiento. —Esos bastardos nos han estado pisando
los talones por meses; si ganamos un movimiento, ellos nos adelantan dos más. ¿Crees acaso que eso es
posible sin que tengan un infiltrado en nuestras filas informando nuestros futuros movimientos?

—Lo siento madre, yo... Lo haré mejor, estarán orgullosos de mi— Trató de decir el heredero Jiang
nervioso desde el suelo, retomando su postura de rodillas.

—Por supuesto que lo harás —Rugió Madam. —¿Por qué sigues en el suelo? levántate inútil y ordena eso.
Bueno para nada, no sé porque sigues aquí. —

Wei Wuxian se encontraba poniéndose de pie lentamente mientras escuchaba a su ama, pero su mente no
se encontraba clara en ese momento. Seguía aturdido por la revelación del Joven heredero. Tenía que darse
prisa; Si el ejército ya sabía del espía, es probable que lo comiencen a cazar muy pronto y él no puede
permitir eso. No le pueden robar su presa— A sus órdenes Madam, ya mismo me encargo de todo esto.
Por favor perdone a este inútil sirviente— Expresa Wei Wuxian saliendo de su aturdimiento.
.

En el otro lado del Campamento Lan

Xue Yang observa desde las sombras. La barrera de protección que estableció su amigo en la carpa del
emperador. La berrera esta inestable. Algo o más bien alguien tiene intenciones no muy amistosas hacia el
emperador. —La vida no debe ser muy agradable para ti si vienes hasta aquí solo a buscar una muerte
horrible, más allá de tu imaginación— Dice sonriendo maliciosamente mientras juega con una daga en su
mano. —Porque eso es lo que le espera a todo aquel que busque dañar lo que le pertenece a Yiling Laozu.

.
Capítulo 3

El sudor frío corría por toda la frente. Gotas se deslizaban por su cara combinadas con la sangre fresca. Su
grito pudo haberse oído en todo el campamento, pero una barrera de protección impedía el paso del más
mínimo tono.

La espada vuelve a ingresar en su cuerpo, esta vez cerca del pulmón derecho perforando superficialmente.
Los gritos resuenan en el espacio cerrado, murmullos y súplicas. El puñal no se detiene mientras su
portador disfruta de la agonía y los gritos de su víctima.

—Esto es muy divertido, pero... — hace una pausa y retira el puñal. limpia la sangre en la túnica gris del
hombre antes de continuar. —Necesito que digas algo que no sean gritos e incoherencias. Mi paciencia es
limitada.

El hombre tenía la mirada perdida. No respondía más que para lamentarse y gemir por el dolor. Cada parte
de su cuerpo tenia cortes profundos, algunos de sus dedos ya no estaban fijos en sus manos. Los huesos
crujían con el más mínimo movimiento. Su ropa era ya más roja que gris, húmeda por el líquido ferroso
que no dejaba de brotar de cada herida.

—¿Podrías cortarle su dedo anular para mi? Estoy haciendo una colección de todas mis víctimas, quiero
hacerle un collar a Wen Ruohan para cuando lo mates, eso sería muy interesante, ¿no crees?

—Deja de ser asqueroso Xue Yang, no estoy para tus tonterías.

—Como digas, como digas. — Se ríe un poco y comienza a pasearse con las manos en la espalda mientras
gira alrededor de su amigo contemplando la escena tan encantadora que ha creado. —Sabes, no me puedes
decir que te da asco cuando mirando en retrospectiva las bellas cosas que haces todos los días jajaja son un
bello panorama, toda una obra de arte con tu extraordinario cultivo oscuro. — Wei Wuxian lo mira con el
ceño fruncido. — Si está bien, me callo. Solo creo que sería divertido y haría más interesante est...

Yiling Laozu de un rápido movimiento le corta el brazo completo a su víctima que llevaba un par de horas
torturando. Xue Yang se limpia la sangre que cayó en su rostro y observa con una sonrisa en su rostro
como el pobre infeliz se retuerce de dolor en el piso. La sangre brota sin parar y ellos solo pueden observar
hasta que el deceso llegue.

—Sí, esto servirá, gracias. — se inclina y toma el brazo para guardarlo en una bolsa qian kun— Creí que
querías sacarle algo de información. — Inquiere Xue Yang cuando los gritos del sujeto se detienen.

—Encontré algo en sus túnicas, con eso debe ser suficiente. No tengo tanta paciencia.

Wei Wuxian da la vuelta dispuesto a irse cuando un resplandor azul pasa frente a sus ojos y se posiciona
en su cuello. Tragó en seco, todo su cuerpo se tensó. Rogó a los cielos que no fuese quien creía que era y
cerró los ojos. Se dio cuenta que sus oraciones no fueron escuchadas cuando un olor a sándalo penetró en
su nariz. Giró ligeramente su rostro abriendo lentamente sus ojos. Por supuesto es el emperador, esa
esencia es inconfundible. Subestimar la cultivación de su zhiji le podría salir muy caro. Obviamente lo iba
a detectar y acercarse, su cultivación no podría nunca compararse a la propia. Maldijo internamente su
descuido por el afán de atrapar al espia.

—Yiling Laozu—. Pronuncia el emperador súbitamente. Su voz ligeramente ronca envía un escalofría a
todo el cuerpo de Wei Wuxia. Necesita salir de ahí ¡Ahora! Busca entre sus ropas un talismán o lo que sea
que le pueda permitir huir lo más pronto posible, pero antes de poder hacer algo, Lan WangJi agarra su
muñeca ejerciendo tanta fuerza que el hueso podría fracturarse.
Calor... El contacto de sus pieles quema como si estuviera sosteniendo un carbón encendido. Lan WangJi
inmediatamente lo suelta y Wei Wuxian salta unos metros poniendo un poco de distancia entre los dos.

La mirada del emperador es penetrante, analiza detenidamente cada centímetro de la persona que tiene en
frente. Es casi tan alto como el, túnicas oscuras. No es de alguna secta que pueda reconocer. Lleva una
máscara de un zorro negro con líneas rojas que cubre casi todo su rostro, solo puede observar unos ojos
rojos brillantes y unos labios delgados del mismo color.

Su boca se seca y de repente imágenes de su zhiji llegan a su mente. —No puede ser— debe estar
alucinando, piensa.

Mira su mano un momento, tratando de mantener la compostura —¿Quién eres realmente? —. pregunta de
forma contundente—Tu pusiste la barrera en mi carpa. —Es más una afirmación que una pregunta —
¿Crees que no iba a notarla? —

—Yo... —Esto es muy malo. Se supone que no debían encontrarse, no ahora, no nunca. No sabe que decir,
no debe decir nada siquiera. Cualquier acercamiento con él es una carta mal jugada por donde quiera que
se mire.

Bichen se alza imponente apuntándole, su frio resplandor azul vibra en el aire cortándole la respiración.

—Habla ahora.

De repente un talismán golpea la espada y genera una explosión de humo que los obliga a retroceder
drásticamente.

Lan WangJi está tan aturdido por la presencia de esta persona que no percibió a tiempo el segundo sujeto,
y mucho menos su ataque. Sus ojos se ensanchan y busca desesperado volver a atrapar a la persona. Una
barrera adicional fue levantada, y cuando se disponía a tratar de atravesarla escuchó su voz.

—¡¡ACASO ENLOQUECISTE!! — Wei Wuxian gritó alarmado. —Juro por Dianxia que si le hiciste un
solo rasguño te mataré.

—Ya cálmate y salgamos de aquí, es obvio que no le pasó nada, con su nivel de cultivo es imposible.

Lan WangJi escuchó a las dos personas alejarse, pero no movió ni un solo musculo. Su cuerpo hecho
piedra permaneció rígido en el sitio. —Esa voz— susurró bajito.

Su visión se dirigió al frente donde antes estaba aquel hombre. El espacio vacío le generaba muchas
sensaciones a su cuerpo. Muchos pensamientos cruzaron de forma desordenada por su cabeza, pero
ninguno mantenía una idea clara. Suspiró y se dio media vuelta para volver a su carpa. — Tal vez... Tal
vez si haya una razón para seguir aquí.

De vuelta en el campamento se dirigió a la carpa de su hermano, necesita hablar de su próxima batalla. Le


urge volver al campo de batalla. Sin pensarlo mucho entró a la carpa sin anunciarse por lo que encuentra a
su hermano con sus túnicas revueltas mientras está envuelto en un apasionado y muy acalorado beso con
el asistente del general Nie. Las manos de su hermano exploran de forma muy descarada las piernas del
asistente y los sonidos que salen de sus bocas son por mucho impropios para que alguien más los escuche.
Cuando Xichen nota su presencia inmediatamente rompe el beso alarmado y se gira rápidamente para
enfrentarlo. —WangJi!!

—No quiero saberlo. —El emperador dice bruscamente. Le da una última mirada al asistente y se gira
para irse. —Te veo en mi carpa en media hora. — Y con eso sale del lugar, con sus orejas teñidas de un
sutil tono rosa.

Lan Xichen se gira para ver de nuevo a Meng Yao y le da un último beso. —No te preocupes, el seguro
ignorará esto, ya sabes como es.

Ambos acomodan su ropa y salen de la carpa como si nada pasara.

—Te veo luego Xichen— Dice Meng Yao mientras se aleja.

Xichen lo observa irse y suspira. Su relación ya es bastante complicada. Espera que el emperador no haga
nada para complicarla más.

Camino a la carpa del emperador se encuentra con Lan Qiren a quien saluda respetuosamente y ambos se
encaminan hacia la carpa.

—Majestad, el príncipe Lan Xichen y el consejero real se encuentran aquí.

—Hazlos pasar.

Ambas personas entran una al lado de la otra y realizan una reverencia respetuosa ante el emperador como
es costumbre. —Saludos majestad.

—Mn

Ambos levantan la vista y ven al emperador algo perdido en sus pensamientos desde su lugar. —¿Pasa
algo WangJi?— pregunta Lan Xichen en tono preocupado.

Devuelta a la realidad, Lan WanJi niega con la cabeza. —La guerra. Quiero discutir los términos de la
próxima batalla. —Dice el emperador en su habitual tono plano.

Antes de que Xichen pueda decir algo, Lan Qiren da un paso al frente y comienza a hablar. —Su majestad,
antes de empezar con este asunto, aprovecho la ocasión para recordarle que no hace tanto fue herido en
batalla, por lo que es precipitado salir sin el debido descanso.

—Tio...— Comienza Xichen —No creo que WangJi tenga las intenciones de volver tan pronto.

—Te equivocas— habla de repente el emperador. —Es de hecho mi intención y si voy a retomar mi puesto
en la batalla. —Habla súbitamente —Esto no está a discusión.

—WangJi!! —Hablan Lan Qiren y Lan Xichen al mismo tiempo —Tus heridas fueron muy recientes, me
prometiste que te cuidarías. —Dice Xichen bastante alterado por las inesperadas palabras de su hermano.

—WangJi debes ser razonable —Hablan Lan Qiren con una expresión dura en el rostro. —Tu salud es más
importante, tienes muchos soldados a tu cargo y generales muy capacitados que pueden liderar mientras
terminas tu recuperación.

—No está a discusión. —Repite —mi decisión está tomada.

—WangJi hay otras cosas que se deben ir organizando además de todo lo relacionado con la guerra —
Dice Lan Qiren acariciando su barba pensando en alguna forma de persuadir a su sobrino. —En este
momento hay 2 de las candidatas a tu harem en el campamento que esperan conocerte en la mañana. Ya
conociste a la Doncella Jiang, las Doncellas Qin y Wang llegaron el día de hoy precisamente a ponerse a tu
disposición lo antes posible. Conformar la familia real es también un deber muy importante para el
imperio al cual debes responder.

Lan WangJi suspiró, esta conversación siempre termina por dañar su humor cada que se menciona, su tío
nunca lo deja en paz con este tema y ya no sabe cómo lidiar con esto—No voy a conformar un harem.

—WangJi por favor, no puedes decir eso. Tienes un deber como emperador, necesitas descendencia. Tus
deberes como emperador incluyen establecer la línea de sangre y asegurar la descendencia para la
prosperidad del reino. No todo son batallas. Esta lucha es importante pero también lo es la familia real.

—No me gustan las mujeres.

—...

—...

—...

Lan Qiren podría sufrir ahora una desviación de Qi pero el emperador solo suspira y se dirige a su
hermano. —solo hablaré de los planes de la batalla que se avecina, absténganse de comunicarme sus
comentarios porque desde ya les informo que no serán tomados en cuenta.

—ACASO TE HAS VUELTO LOCO!!! —Grita Lan Qiren de forma nada respetuosa para dirigirse a su
majestad —Nunca en la vida vuelvas a decir semejante cosa, eres el emperador, es impropio, inmoral,
imposible, que salgas con un disparate como ese. Eres el emperador, la persona más importante del
imperio, tener descendencia es tu obligación. Tu legado viene acompañado de las decisiones que tomes
para establecer tu posición en el reino junto a tu familia. Necesitas un harem y una emperatriz.

—Haré lo que considere mejor para mí vida—hace una pausa observando a la cara de su tío que pasa de
rojo a morado y luego a verde. —He cumplido con mis deberes para con el reino. He dado tanto de mi
como es humanamente posible. Pero no esperes que me entregue a alguien que no amo y mucho menos
para dirigir el reino conmigo. Mi decisión está tomada y no puedes hacer nada para cambiarlo. Xichen, por
favor acompaña al consejero real a su carpa. Esta discusión se terminó.

Con un Lan Qiren echando chispas al borde del colapso, ambos salen de la carpa del emperador dejándolo
solo nuevamente.

—Un hombre— Piensa mientras las imágenes de esa tarde inundan su cabeza. —No es lo que esperaba,
pero no soy nadie para juzgar al destino.

Con ese último pensamiento, el emperador se dirige a la mesa para revisar los documentos esparcidos en
ella. La planeación de la siguiente batalla no puede esperar. —Nos veremos pronto, mi zhiji.

Mascara que usa Yiling Laozu


Capítulo 4

Reino de Qishan wen

—Su Alteza, no hemos recibido más noticias del informante. Desapareció hace unos pocos días. —El
súbdito continua de rodillas al pie del trono, esperando alguna orden o indicación. Se puede notar su
nerviosismo en el tono de voz. Su alteza no está de buen humor, eso no es buen augurio para nadie.

—Llama a mi hijo Wen Xu, voy a cambiar el curso de la siguiente batalla. —Wen Ruohan se coloca de pie
y avanza hasta un ventanal cercano al trono. Sus manos reposan rígidamente a su espalda.

—¿Su majestad desea que convoque al consejo de guerra también?— Pregunta dudoso. No está seguro de
los planes del emperador y la forma en la que siempre está cambiando las estrategias quiere decir que no
confía en nadie de los presentes.

—Solo Wen Xu, retírate.— La fría mirada que el emperador le dirige es suficiente para helar su sangre.
Todos saben lo cruel que puede llegar a ser el emperador y no le importa asesinar a uno que otro súbdito si
siente que su lealtad flaquea ante él.

El sirviente se pone de pie rápidamente, haciendo una inclinación se retira lo más rápido posible para ir en
busca del heredero Wen. Una vez llegado a los aposentos del heredero, avisa a sus sirvientes para solicitar
el permiso de entrar.

—Joven maestro Wen— El sirviente se inclina respetuosamente ante el joven que se encuentra en una
mesa revisando unos papeles. —El discípulo Wen Shong solicita permiso para hablar con usted.

—Déjalo pasar.

—Como usted diga majestad.

El discípulo ingresa a la habitación y se inclina profundamente ante el joven heredero del imperio —
Saludos a su alteza primer maestro Wen Xu— El sirviente que se encontraba presente se retira. —El
emperador solicita su presencia en el salón imperial.

—¿Padre? ¿Mencionó algo importante?

—Su majestad solo hizo mención de que desea cambiar los planes de la siguiente batalla.

—Comprendo. Iré en un momento. —Se pone de pie y se dirige a la salida. Antes de salir se gira de nuevo
hacía el discípulo —¿Dónde se encuentra mi hermano ahora?

—Respondiendo a su majestad, el segundo joven maestro Wen Chao se encuentra en este momento dentro
del campamento, en el frente sur, la zona médica su alteza.

—¿Qué hace allá?

—El joven maestro Wen Chao tiene interés por una de las Jóvenes doncellas en la zona médica.

Wen Xu rueda los ojos, su hermano no tiene remedio. En vez de estar pendiente de los asuntos de la guerra
así como su puesto como segundo Joven maestro lo exige, se la pasa todo el día detrás de la falda de las
doncellas como un estúpido niño.

—Me dirijo a la sala real para hablar con mi padre. Encárgate de lo demás.
—Como ordene su alteza real.

Campamento de guerra Imperio Lan

Wei Ying caminaba sigiloso pasando por cada una las diferentes carpas de los soldados, tratando de no ser
notado y no llamar la atención de nadie. Ahora que el emperador era más consciente de su existencia
necesitaba ser el doble de cuidadoso para no encontrarlo en este lugar. —¿Qué estás haciendo?

—¡¡Maldición A-Yang!!— Wei Ying da un paso atrás de un salto y se pone la mano en el pecho de forma
dramática. —¿Acaso quieres matarme causándome un infarto?

—No seas exagerado, creí que ya habías percibido mi presencia. —Xue Yang se apoya en un tronco de
madera que está a su alcance mientras mira a su compañero hacer su drama.

—No estoy exagerando, que no sabes que mi corazón es débil. Ten más consideración quieres.

—Si si como digas, ahora habla, ¿por qué estás caminando así por todo el lugar? te vez raro y ya de por si
eres raro. Pareces un ratón escapando de su nido.

—Deja de molestarme quieres. —Wei Ying suspira y le da la espalda mientras levanta la vista para ver
hacía lo lejos. La carpa del emperador se encuentra al otro lado del campamento. —El emperador me vio,
no solo eso, tuvimos contacto por unos segundos ¿Tienes idea de lo peligroso que es eso? si permito que
se siga acercando las cosas no terminarán bien.

—Yo opino que deberías dejar de jugar a la damisela desaparecida. —Dice Xue Yang mientras mueve una
ramita en su mano juguetonamente y la otra mano la lleva a su barbilla, apoyando también el codo en la
rodilla.

Wei Ying lo voltea a ver con el ceño fruncido. Si vuelven a tener esta discusión, jura que invocará un
cadáver feroz para que le corte la lengua a su amigo para ver si de esa forma lo deja de molestar.

—No me veas así quieres, no he dicho nada malo. —Xue Yang se pone de pie y se aleja unos pasos. —En
el pasado...

—¡¡No lo digas!! —Lo corta Wei Ying inmediatamente. —No termines esa línea de palabras. Lo que pasó
hace años no significa nada. Todo... Todo está en el pasado... Por favor no lo traigas al presente nunca
más.

Wei Ying comienza a caminar alejándose de él, no tiene planes de continuar con esa conversación. Xue
Yang no lo siguió, solo se quedó ahí mirando como se iba. Por su mente solo pasaba la imagen de un niño
de ropas negras con una amplia sonrisa, corriendo y riendo mientras arrastra de la mano a otro niño de
ropa blanca y expresión seria.

"El destino puede ser cruel a veces" Piensa, y luego se aleja en la dirección contraria.

.
Wei Wuxian continua caminando, sumido en sus pensamientos mientras extendía las manos para secar las
pequeñas lágrimas que habían amenazado con salir. Su corazón dolía ante cada recuerdo. Las decisiones
tomadas no son las más fáciles, pero para él, son las correctas.

Cerca de donde se encontraba, logró escuchar algunas risas cantarinas de varias doncellas. Se giró en su
dirección y, con el rabillo del ojo, vio una figura que posaba con coquetería ante lo que parecían ser sus
¿amigas? ¿Sirvientas? No estaba muy seguro.

Planeaba alejarse del lugar cuando escuchó una voz chillona hablar —Señorita Wang, no tengo dudas. Su
majestad caerá rendido a sus pies cuando la vea, definitivamente eres la más hermosa de las doncellas. —
Ríe.

—Sin mencionar que esas otras estúpidas no tienen lo que se necesita para complacerlo, No tienen mi
encanto.

Wei WuXian había escuchado hablar de la solicitud de los ancianos del consejo real para que el emperador
se uniera rápido a una mujer en matrimonio. La necesidad de generar descendencia, sobre todo, en estos
tiempos de guerra, no era una novedad. Sabía que su majestad estaba indeciso respecto a contraer nupcias
y se molestaba bastante siempre que insinuaban este tema. No era ignorante, sabía que incluso la ama
Jiang había asistido al campamento de guerra precisamente por lo mismo. El consejo está tomando
medidas para crear un harem para el emperador.

Jamás pensó que conocería a las posibles candidatas a futura emperatriz mientras estaban en la guerra. La
doncella Jiang era completamente diferente, no la pondría en la misma casilla que estas lamentables
mujeres. Aunque... Debe admitir que el hecho le deja un sabor bastante agrio en la garganta.

Ver a esta mujer realizando poses sugerentes que posiblemente usará posteriormente con el emperador,
solo hace que su sangre hierva. Puede sentir a chengking inquieta debajo de sus ropas. La energía
resentida se arremolina rápidamente en su interior, llamándolo, invitándolo. Sería tan fácil solo hacerlas
desaparecer. Un montón de zorras no le hacen falta al emperador.

—Y bien ¿Cómo me veo? —Pregunta la doncella descarada mostrando su escote pronunciado, como si
con eso quisiera atraer la atención de todos los hombres del lugar, y no solo la del emperador.

"Zorra"

Wei Wuxian estaba por dar un paso al frente cuando son interrumpidos por el consejero real y sus
asistentes personales. —Bienvenida Doncella Wang, es un placer para mí tenerla aquí. El emperador se
reunirá con todas finalizando la tarde. Las demás doncellas esperan en el lugar designado, por favor tenga
la amabilidad de acompañarme.

Lan Qiren antes de girarse le da una rápida mirada a Wei Wuxian que los observaba a lo lejos. El ojos
plata al notar esto, se acomoda correctamente y hace una reverencia, luego de un momento, al levantar la
vista, Lan Qiren ya se ha retirado con las doncellas.

—Genial, lo último que me falta es llamar la atención de esos vejestorios del concejo. —Susurra para sí
mismo mientras continúa su camino. De verdad espera que el consejero real de su majestad no haya visto
su pequeño arrebato hace un momento. La energía resentida no era muy fuerte pero es posible que alguien
con un buen nivel de cultivo pueda detectarlo. Necesita ser más precavido.

En el otro lado del campamento, Lan Xichen estaba teniendo un incómodo almuerzo con su hermano. No
pudo evitar sentir una punzada de pánico por la situación en la que se encontraba en ese momento. Su tío
lo envió para tratar de convencer al emperador de reunirse con las doncellas que recién llegaron al lugar,
pero era totalmente imposible que lograra tal cosa. WangJi ni siquiera le dirigía palabra alguna. ¿Cómo se
supone que haga esto?

Lan Wangji notando el estado de ánimo de Xichen, suspira. Ya se imagina que podría estar pasando.
Xichen solo le sonrió y siguieron comiendo en ese incómodo silencio.

Al terminar, Lan WangJi se paró de su asiento, retomando su regia postura y se encaminó a la mesa donde
se encontraban todos los documentos que debía analizar antes de iniciar la siguiente batalla.

Lan Xichen suspiró, "Bueno, aquí vamos" —Hermano... Respecto a lo que dijiste esta mañana. Yo
imagino que lo hiciste en broma y... Como un regaño por como me viste con A-Yao. Se que quizás fue
impactante pero no tienes que usar eso para burlarte de tus deberes así. No es correcto WangJi.

—¿Te parece que yo hago bromas?— Lan Wangji mira fríamente a su hermano. Sus ojos dorados como el
sol parece que le clavaran espadas en el pecho. —Lo dije en serio.

Xichen se sorprende ante eso—Nunca mostraste un real interés por nadie en particular durante todos tus
33 años de vida ¿Cómo es que ahora estás tan seguro de que te gustan los hombres? ¿No has pensado que
ser un manga cortada trae bastantes más problemas de los que se pueden apreciar a simple vista? Hay
varias razones por las que nunca mencioné sobre mi relación y quizás debería hablarte de ellas.

—Yo soy el Emperador.— Lan Wangji dice imponente, apretando sus puños se acercó más al otro.
Chichen tragó grueso —Mi palabra es la ley, créeme cuando te digo, cualquiera que se atreva a ir en contra
de mis decisiones lo sufrirá no sólo en esta vida, sino también en la siguiente. Yo me encargaré de eso.

Lan Xichen contuvo la respiración, su hermano podría bien ser el menor de los dos, pero era bastante
intimidante cuando se lo propone. El silencio se posa entre ellos. Ambos dejan de hablar y no pasa mucho
tiempo hasta que Xichen sienta la necesidad de huir por su vida.

—Bueno hermanito, como sé que estás ocupado, me retiro. —Se dirigió a pasos apresurados hasta la
entrada de la carpa y sin detenerse por un momento continuó hablando. —Oh WangJi casi lo olvido, las
doncellas que debes conocer te estarán esperando al finalizar la tarde, tío enviará a alguien para indicarte
el camino. Adiós, suerte con la guerra. —Y salió huyendo del lugar a pasos agigantados sin mirar atrás por
última vez.

Lan Zhan se gira hacia él. Su mano se afloja, mientras niega con la cabeza levemente. Se había permitido
perderse a sí mismo en esta tormentosa agonía, resignado a una solitaria muerte en el campo de batalla.

Piensa en la noche oscura, cintas rojas, ojos plateados y una sonrisa encantadora. Es afortunado que no
haya muerto hasta ahora. Y ahora hará hasta lo imposible por obtener lo que desea. Nadie podrá detenerlo.

Está cerca, puede sentirlo. Agradece su presencia, no solo en su mente y corazón. Puede recordar el leve
toque en la palma de su mano. ¿No es suficiente con que lo haya encontrado por fin? No puede evitar la
voz dentro de su cabeza que grita No. "No, no es suficiente". Dada la oportunidad no piensa
desaprovecharla. El es suyo para poseerlo, tan suyo como su propio cuerpo, como una extensión de sí
mismo.

¿Qué hará entonces? Se permitirá ser egoísta. No descansará hasta que su amado tesoro, su precioso Zhiji,
esté sentado a su lado, gobierne junto a él y lo haga suyo hasta el cansancio, noche tras noche, día tras día.

.
.

.
Capítulo 5
Chapter Notes
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Wei Wuxian dio un paso y luego otro. Caminó justo en frente de los hombres y mujeres reunidos cerca de
la carpa que causaba tanta conmoción entre la multitud. Echó un vistazo rápido mientras se ocultaba con
una barrera de protección para que no notaran su presencia.

Varias personas no dejaban de murmurar sobre la belleza de las doncellas presentes dentro de la carpa.
Bellezas de alto linaje, cuerpos esculturales, belleza fina y delicada; enviadas desde las más prestigiosas y
altas familias con un solo propósito.

El cielo poco a poco se tornaba de un color naranja, la luz es suave y difusa, los colores se ven saturados.
A medida que el sol está más cerca del horizonte, la luz que queda penetra en las personas, dejando a la
vista unas relucientes y pulcras ropas blancas, decoradas con líneas en tonos dorados que acentúan la
imagen etérea de su portador. La vista es deslumbrante y en cuanto llega a sus ojos, todos se inclinan en
una profunda reverencia.

—Saludos a su Alteza real, el emperador Lan, mil años de vida a su alteza real HanGuang Jun. — Un
súbdito anuncia la entrada del emperador mientras continúa de rodillas al pie de la entrada. Todos se
encuentran esperando alguna orden o indicación. Se puede sentir la presión en el aire mientras el
emperador ingresa a la carpa. Su alteza no está de buen humor.

Wei Ying lo observó por un momento, notando lo cansado que se veía el emperador. Quizás el desgaste
por dirigir la guerra.

"¿Escuchaste? Dicen que el emperador no quiere mujeres para su harem."

"¿Qué dices, acaso enloqueciste? las mujeres en esa carpa son poseedoras de una gran belleza, no es
posible que no escoja a una o dos al menos"

Wei Wuxian continúa escuchando los murmullos mientras su mirada se vuelve cada vez más fría y oscura.

"Yo lo escuché por parte de un sirviente que siempre atiende personalmente a su majestad... El dice que el
emperador no desea escoger a ninguna doncella porque ya está enamorado de otra persona..." El hombre
se acerca un poco más al otro y extiende la mano cubriendo un poco su boca mientras susurra.

"Y esa persona no es nada más y nada menos que un hombre"

"¿Qué? debes estar bromeando"

"Solo digo lo que escuché"

"No puede ser que el emperador sea un asqueroso manga cortada, esta tiene que ser la peor broma de
todas"

"Puedes creer lo que quieras pero lo digo enserio"

"¿Y en manos de esos asquerosos es que ponemos esta guerra?" El hombre resopla

"Para eso mejor me voy del reino"

"Nada ha cambiado", pensó para sí mismo Wei Wuxian.


Los habitantes de GusuLan siempre serían así de "rectos", incapaces de aceptar que el mundo no es solo
blanco y negro, sino que está cubierto de un inmenso mar de colores.

Nunca habrían aceptado que una abominación como el estuviera con el emperador. Nunca los habrían
dejado ser. Wei Wuxian levantó una mano, apretándola contra su pecho temblorosamente, justo sobre su
corazón —Lan Zhan... Podrías encontrar a alguien mucho mejor que yo.— Las lágrimas descienden
nuevamente por sus mejillas. —¡Tonto! — Se dice a sí mismo.

Se va del lugar sintiéndose pesado. No quiere ver lo que pasa adentro de la carpa, ni escuchar los
murmullos de la gente que lo rodea. Recogerá los pedazos de su corazón y escapará como siempre lo ha
hecho, es bueno en eso, es quizás lo único que puede hacer ahora.

Tal vez, así fue como el destino dispuso que fuera. Quizás si el destino lo quiere, se encontrarían en su
segunda vida. Quizás en otro universo esto pueda ser posible, cuando tuviera una posición de mejor valor,
no afectado por los crímenes del mundo mortal, cuando sus manos no estuvieran manchadas de sangre,
cuando el emperador no estuviera marcado de por vida, con sus propios pecados.

Por ahora se conformará con ser su sombra, su escudo. Vivirá por el y para el, eliminando todos y cada
uno de los obstáculos de su camino. Una gran sonrisa que no llega a sus ojos se ensancha mientras observa
al sirviente que escuchó hablar hace poco.

"Con que asqueroso manga cortada ¡eh!" Pensó para si mismo mientras seguía con la vista al sirviente.

Entrada la noche todas las carpas en el campamento se disponían para dormir. Varios guardias rondaban el
lugar haciendo sus respectivos turnos de vigilancia. Algunos sirvientes finalizaban sus tareas para
disponerse a dormir mientras otros ya se encontraban descansando. Uno de ellos se disponía a preparar su
cama, había sido un día muy largo con todo el ajetreo que conllevó la llegada de esas doncellas al lugar.

—Oh, cuanto daría por tener una bella mujer aquí ahora. Esta soledad me está matando—.

—Uhm pero si pronto estarás por morir, no creo que una bella doncella quiera ver eso.—

El sirviente voltea abruptamente en el momento que escucha esas palabras. Observa al hombre que tiene
en frente; túnicas negras, su largo cabello atado en una medio cola, sus ojos brillan en un rojo tan profundo
como la sangre misma y en sus bellas facciones se acentúa una sonrisa tan fría que helaría el cuerpo de
cualquiera que la viera. —¿Qu-quién eres? ¿Qué es lo... lo que quieres?— Tartamudea tratando de
mantener la compostura.

La sonrisa de Wei Wuxian solo se hace más grande mientras se acerca al sirviente.

—¿Qué desea el joven maestro al acudir a este humilde sirviente?— Este se inclina sumisamente en medio
de su pánico sin saber qué más puede hacer. El hombre que tiene enfrente no parece una persona ordinaria.

Una suave risa se escucha venir del joven de negro mientras aún continua avanzando lentamente. El
sirviente no cree haber estado tan atemorizado en toda su vida. —AYUD...— El hombre se dispuso a
gritar para pedir ayuda solo para ver como su lengua caía al suelo en el siguiente segundo que observa una
espada pasar ante sus ojos.

Los gritos son desgarradores, pero nadie puede oírlos. Varios talismanes puestos alrededor de toda la
carpa, evitan la salida de cualquier tono de voz.

—Es curioso que una basura como tu se crea tanto como para tener la audacia de siquiera nombrar a su
majestad tan libremente.

La filosa espada se hunde en la carne desgarrándose mientras la espada gira poco a poco.
—¿Habías dicho que querías una bella doncella para que te acompañara?— En ese momento un pequeño
zarcillo de energía resentida se cuela en la mano de Wei Wuxian haciendo aparecer el fantasma de una
mujer vieja.

—Puedes darte una buena cena mí pequeña dama.— Wei Wuxian le indica al fantasma señalando al
hombre en el piso. El fantasma femenino se abalanza sobre el hombre, mientras este grita y suplica
incoherentemente por la falta de su lengua.

Los ojos rojos brillan con intensidad mientras se queda observando como el fantasma desgarra pedazo a
pedazo el cuerpo del sirviente. La sangre fluye por el suelo, empapando la tierra y llenando el aire del olor
a hierro.

La mirada de horror en el hombre mientras se ahoga con su propia sangre, mientras su cuerpo es
desmembrado poco a poco por los dientes filosos del fantasma, es un deleite para los ojos de Yiling Laozu
que sonríe contemplando la escena.

Una vez que todo ha finalizado, enciende un talismán para incinerar el cuerpo y toda evidencia de la
escena que dio lugar hace unos minutos. El fantasma desaparece y Wei Wuxian sale tranquilamente de la
carpa caminando en dirección a la suya propia.

Su camino se desvía hacia unas rocas altas en los limites del campamento mientras su cabeza da vueltas,
perdido en el caos de sus pensamientos.

Una muerte más se suma a la lista, sus manos están manchadas, no hay vuelta atrás. Hace algunos años
pudo creer que podría vivir en paz, se esforzó por seguir las reglas, por actuar como se debía, por
enorgullecer a sus seres queridos, por buscar la plenitud en su vida.

Quién diría que solo su existencia bastaría para arrebatarle todo lo que alguna vez amó, que tan miserable
tiene que ser el destino para ponerlo en esta tierra solo para que su corazón se desgarre día a día.

Wei Ying contempla la carpa del emperador desde lo alto de unas rocas donde se ha sentado a descansar.
"Que tan asquerosa quieren que sea la muerte que están buscando aquellos que se atreven a hablar mal del
segundo jade de Lan, emperador del imperio de GusuLan, HanGuang-Yun, mi amado Zhiji, mi Lan Zhan."
Piensa Wei Ying

"Lan Zhan... Eres lo único valioso que le queda a mi vida en este mundo".

No sabe exactamente qué le depara el futuro, pero en definitiva, no permitirá que nada le cause ningún
tipo de daño, nadie lo tocará, nadie atentará contra su nombre, nadie tiene permitido hacerlo. —Perdón
amor mío... Pagaré todo el daño que te he causado protegiéndote hasta el final de mi vida —. Susurra
mientras sus palabras se las lleva el viento en esta fría y oscura noche.

—¿Wei... Ying?

Wei Wuxian voltea "No, oh no, por favor no."

Imperio de GusuLan, 23 años atrás.

Una tarde cálida se acentúa en los pasillos del gran palacio de Gusu. En ellos, un pequeño niño de 8 años
corría mientras sostenía dos pequeñas bolitas de pelo con sus pequeños bracitos. Su ropa se encontraba
arrugada, desarreglada y ni que decir que su cabello largo que se apegaba a su cuerpo por las gotitas de
sudor que salían de su frente.

La risa alegré y traviesa del niño se escuchaba por todo el pasillo mientras él continuaba corriendo.

—Wei Ying no corras tan rápido, está prohibido correr dentro del palacio.

Wei Ying detiene sus pasos apresurados al escuchar a uno de los sirvientes regañarlo. Entra en el colorido
jardín que se encuentra a un costado del pasillo y se esconde en uno de los arbustos, sólo su cinta roja se
puede ver desde afuera.

—Wei Ying, puedo verte aunque trates de esconderte, ¿Qué llevas ahí ahora?

—Yo... Nada nada. —Wei Ying responde sin salir de su escondite.

El sirviente suspira, no es una novedad que el pequeño revoltoso esté rompiendo las reglas siempre, solo
espera que no se meta en muchos problemas.

—No vuelvas a correr y por favor no molestes mucho al príncipe, en este momento está practicando con el
guqin y necesita concentrarse.

Wei Ying asoma su cabeza desde los arbustos. —No voy a molestar a Lan Zhan, él es mi amigo.— Dice
mientras hace un puchero.

Cuando el sirviente desaparece de su vista, Wei Ying sale de su escondite volviendo a sujetar a las
pequeñas bolitas contra su pecho y continúa corriendo pese a la advertencia que le dieron.

Al llegar a la alcoba real, rodea el lugar para ingresar por la ventana en vez de por la puerta como de
costumbre. Se trepa encima de una gran piedra que hay cerca de la ventana para alcanzar el marco de la
misma y poder ver dentro de la habitación.

Otro pequeño niño un poco mayor que él, se encuentra dentro de la habitación sentado con la espalda
recta, y ojos cerrados. Su largo cabello negro viaja por su espalda, vuela junto con la suave brisa del
viento, y los suaves movimientos de sus manos contra el instrumento en su regazo decoran su inmaculada
presencia, resaltando los bellos rasgos que componen a su persona.

Pequeñas notas de una tranquila y dulce melodía, se filtran en los oídos de Wei Ying, y este no puede
apartar la vista de él, hipnotizado tanto por la vista como por la canción. No entiende por qué, pero desde
que conoció al pequeño segundo príncipe del palacio, nunca pudo volver a apartar la vista de él y no puede
hacer nada más que buscar llamar su atención en cada oportunidad.

—Wei Ying.

—Lan Zhan, Lan Zhan, ¿Cómo supiste que estoy aquí?, ni siquiera has abierto los ojos.

—Porque es Wei Ying.— Esos penetrantes ojos dorados se abren, devolviéndole la mirada. Ven a través de
él. Se deslizan sobre él, absorbiendo cada detalle de él, desde su cabello revuelto con pequeñas hojas en él,
hasta su linda nariz de botón. Hay una cinta roja ajustada y atada alrededor de su cola de caballo, una que
Wei Ying había usado desde que Lan Zhan se la obsequió meses atrás para que pudiera verse tan hermoso
como siempre lo era para él.

El pequeño príncipe se levanta, acomoda el instrumento suavemente en la cama y se acerca a Wei Ying,
levanta una mano con intención de retirar las pequeñas hojas de su cabello. Una vez termina, desliza la
mano hacia abajo, acariciando la mejilla sonrojada del más pequeño.
Lan Zhan no sonríe, nunca sonríe, pero la luz que baila en sus ojos le dice a Wei Ying que está complacido
y feliz. Sus ojos siempre cuentan una historia diferente, rebosantes de emociones que se guardan sin que
haya palabras para decir, que no pueden ni quieren decir... Aún.

Wei Ying lo mira sonriendo con afecto cálido, que se siente incluso más deslumbrante que el rayo más
brillante del sol en un día de verano. Lan Zhan no cree poder poner en palabras las mil emociones que
siente cuando está ante este pequeño ser a su lado. Aún no sabe lo que significa. A sus 10 años de edad lo
único que tiene claro es que se ha vuelto tan indispensable en su vida, que no puede imaginar estar sin él
nunca más.

Una de las pequeñas bolitas en los bracitos de Wei Ying se zafa de su agarre y salta dentro de la
habitación, rompiendo la pequeña atmósfera que se había creado momentos antes.

—Oye espera, vuelve.

—Wei Ying ¿Qué trajiste?

—Ten sostén este, se me escapó el otro.— El príncipe recibe la pequeña bola de pelos blanca que le
entregó Wei Ying, notando que son un par pequeño de esponjosos conejitos, uno blanco y otro negro,
aunque el negro se encuentra dando saltitos por toda la habitación mientras Wei Ying intenta atraparlo sin
éxito.

Un sentimiento cálido se instala en el pecho del príncipe mientras observa la divertida escena ante sus
ojos. Escena que es interrumpida por unos suaves golpes en la puerta.

—Adelante.

Un sirviente ingresa a la habitación y se inclina ante el joven príncipe. —Saludos alteza, la comida de la
tarde está lista. El príncipe mayor lo espera para comer.

—Mn

El sirviente observa el pequeño animal en el regazo del príncipe y el otro travieso aún corriendo en la
habitación.

—Su majestad, si me permite, las mascotas no están permitidas en el palacio... — La mirada fría que le
dirige el príncipe hace que se calle inmediatamente. Todos en el palacio saben que el segundo príncipe es
bastante calmado pero su presencia es tan imponente que llega a ser intimidante para la mayoría a pesar de
su corta edad.

—C-Con su permiso, me retiro alteza.

El sirviente sale de la habitación con una profunda inclinación y el príncipe dirige nuevamente su atención
a Wei Ying que se encuentra sosteniendo la bolita de pelos negra mientras está patea tratando de zafarse de
su agarre.

—Lan Zhan, Lan Zhan. —Canta Wei Ying mientras se acerca al príncipe.— Son para ti.

Lan Zhan recibe al segundo conejito con sumo cuidado y este se queda quieto en sus brazos. —Gracias
Wei Ying.

—Se que el palacio no permite mascotas pero se que te gustan mucho los conejos así que los traje igual.
—Sonríe radiante —Si no los quieres me los puedo llevar, A-niang sabe hacer un rico asado de conejo.

Lan Zhan frunce el ceño ante esto y Wei Ying solo puede tirarse al piso en medio de una carcajada. Las
expresiones del segundo príncipe suelen ser pocas pero siempre disfruta de ellas cada que tiene
oportunidad de apreciarlas o provocarlas.

El príncipe reprime el impulso de rodar los ojos ante el comportamiento desvergonzado de su amigo —
Wei Ying.

—Si si, lo siento, lo siento jajaja —Wei Ying se incorpora y calma su estruendosa risa mientras limpia
unas pocas lágrimas que se filtraron en sus ojos plateados. —¿Tienes que irte ahora?—Hace un puchero.

—Te buscaré más tarde y buscaremos juntos un lugar adecuado para los conejos...

Wei Ying se abalanza sobre el príncipe haciendo que los conejos se le caigan de las manos para poder
recibir el fuerte abrazo y corresponderle. El ojos plata hunde su cabeza en el cuello del mayor y
permanecen en esa posición un momento que para el príncipe se le antoja eterno. —Te esperaré. —Susurra
Wei Ying suavemente.

Ambos se separan después de otro momento y el príncipe deposita un suave beso en la frente del menor.
—Mn.

El príncipe sale de su alcoba con las orejas rojas y el corazón latiendo a mil, Wei Ying se queda adentro
furiosamente sonrojado y sus manos cubriendo su rostro. "El segundo príncipe es malo para su corazón"
piensa.

—Joven Wei, la señora Wei CangSe lo está buscando.

Wei Ying se sobresalta cuando escucha al sirviente que entró para darle aviso. Sale corriendo rápidamente
por la puerta para que no se note que ahora está tan rojo como un tomate. —Voy voy.

—Joven Wei, no corra por favor. —Wei Ying ya se ha ido.

Los rayos del sol se alzaban alto en el cielo alumbrando el día. Los sirvientes se mueven de un lado a otro
con prisa, realizando los preparativos para la ceremonia que daría inicio en poco tiempo, así como dicta la
tradición.

El imperio Lan es considerado uno de los reinos más fuertes debido a la sangre heredada desde hace más
de 10 mil años, que permite a 1 descendiente de la realeza poseer un gran poder que está por encima de las
personas comunes.

El dragón blanco es el espíritu que reside en todo emperador que asciende al trono dentro del imperio Lan.
Una vez que el emperador muere, un año después, en la doceava luna llena, se realiza la ceremonia en la
que el dragón blanco se manifiesta ante los descendientes de sangre del actual emperador, revelando ante
todos los presentes a su siguiente portador. Cuando esto ocurra, un nuevo emperador tomará su lugar en el
trono.

El joven príncipe camina tranquilamente por los amplios pasillos del palacio real. Cada sirviente que se
encuentra en el camino se inclina para saludarlo y extender sus respetos. Al llegar a los aposentos del
primer príncipe, es dirigido por un sirviente hacia uno de los jardines interiores donde actualmente se
encuentra su hermano.

—Xiongzhang.

—WangJi, te ves feliz. ¿Estás preparado para la ceremonia o tu alegría se debe al joven Wei?
El segundo príncipe toma asiento al frente de su hermano sintiendo sus oídos arder. Nada se le escapa a su
hermano.

Lan Zhan aparta la vista y decide no contestar esa pregunta.

—jaja tranquilo WangJi, se que tienes sentimientos especiales por el joven Wei, la verdad creo que son
bastante tiernos los dos.

—Xiongzhang. —Lan Zhan frunce el ceño ante las burlas de su hermano.

—Ya ya, no te molestaré más jaja, la verdad es que... Estoy un poco nervioso.

Lan WangJi contempla las palabras de su hermano. —Desde que padre murió, sabíamos que esto pasaría.

—Lo sé, pero no sé si estoy preparado.

—Mn.

—Si, lo entiendo, tenemos un deber para con el reino.

—Xiongzhang lo hará bien.

—Podrías ser tú el elegido. —Xichen sonríe a su hermano pequeño, sabe las dudas de su corazón, que
contrarias a las propias, residen más en la naturaleza de su personalidad. —El espíritu del dragón ve a
través de nuestros corazones, la gente puede que no te entienda en estos momentos, pero llegado el
momento lo harán, aún eres joven.

—Mn

Un momento después, los guardias abren la puerta principal, dejando pasar a Lan Qiren, Rey regente de
GusuLan. Este camina directo al jardín donde se encuentran los dos jóvenes.

—Shufu.— Ambos príncipes se levantan se inclinan saludando a su tío.

—WangJi, Xichen.— Los saluda. —Hoy es un día importante. Los preparativos están casi listos, ¿Ustedes
dos se encuentran preparados? deben comprender la importancia de este acontecimiento.

—Lo entendemos tío, estamos listos.

—Muy bien. WangJi, ¿Cómo van tus lecciones con el guqin y la espada? Espero que no hayas estado
perdiendo el tiempo con el hijo de esa sirvienta de nuevo. Ustedes no deben mezclarse con personas
inferiores a su rango. WangJi, eres uno de los hijos del Dragón blanco, debes actuar como tal.

—Tío...

—No quiero oír excusas, estoy cansado de decirlo.— Lan Qiren no lo deja terminar de hablar.

—Tío, Wangji entiende tus preocupaciones, te prometo que el joven Wei, no está interfiriendo con el
entrenamiento de mi hermano.

—Espero que sea cierto y no estés hablando solo por defenderlo Xichen, sabes que no tolero a esos sangre
sucia paseándose por todo el palacio como si fuera suyo. Ustedes son los actuales herederos del trono, esta
misma noche uno de ustedes se convertirá en el emperador, portador del dragón blanco, deben actuar
como se debe, que no se les olvide.

Sin esperar una respuesta, el rey regente sale de la habitación, dejando a Xichen altamente preocupado
mientras observa a su hermanito quien aprieta la tela de su túnica tan fuerte que los nudillos de sus manos
se tornan blancos.

—Wei Ying no es de sangre sucia y nadie puede alejarlo de mi... Ni siquiera el tío.

—Tranquilo hermanito, sabes como es el temperamento del tío, no debes prestar mucha atención a sus
palabras... en este caso.

Lan WangJi da largo suspiro resignado. No entiende por qué todo el mundo trata a los sirvientes como
menos, para él no tiene sentido ya que son solo personas al igual que él.

—Nos vemos en el ocaso Xiongzhang.

—¿Te vas tan pronto? apenas si pudimos conversar.

—Estoy ocupado.

—¿Tu ocupación tiene que ver con el joven Wei, WangJi?

Lan WangJi vacila un paso pero rápido continúa su camino sin voltear a ver a su hermano. Si le da la
oportunidad, sabe que su hermano lo leerá al instante y ya tuvo suficiente de sus burlas por ese día.

Xichen se queda contemplando el lugar por donde se fue su hermano pensando en su peculiar relación con
el pequeño Wei Wuxian. De verdad espera que lo que esté pasando entre ellos no se convierta en un
problema a futuro.

suspira y continúa con su té.

En la cocina imperial

Un pequeño Wei Ying se encuentra escabulléndose debajo de las mesas mientras el banquete ceremonial
es preparado.

Una mano sujeta de la túnica al pequeño, arrastrándolo fuera de la cocina hasta un lugar apartado. —¡A-
ying! ¿Dónde te habías metido?

—¡A-niang, duele! no me jales así.

—Por Dianxia, A-Ying, dime por favor que no estabas molestando al segundo príncipe de nuevo.

—A-niang que mala, ¿tu también? ¿Por qué dices que molestando? Lan Zhan y yo somos amigos.

—¡Wei Ying! No puedes llamar a su alteza real por su nombre de nacimiento, esa es una gran ofensa que
es severamente castigada.

—Pero A-Niang.

—Sin peros A-Ying, ¿por qué no sigues mis consejos? que no recuerdas todo lo que te he dicho, debemos
permanecer ocultos mi pequeño.

— A-Niang, no quiero ser diferente, quiero estar con Lan Zhan.—Wei Ying hace un puchero y su mirada
se torna triste.
CangSe siente que se le estruja el corazón por su pequeño niño mimado —Oh, ven aquí mi pequeño
zorrito. —CangSe levanta a su pequeño hijo en brazos para que lo pueda abrazar. —Sabes que daría lo que
sea por protegerte, eres la pequeña luz que ilumina mi vida. Cuando tu padre falleció, fuimos muy
afortunados por poder conservar un puesto bajo en el palacio. Tenemos dónde comer y donde dormir, y si
nos mantenemos alejados de la familia real, podremos estar seguros.

—A-niang, no quiero huir, quiero estar con Lan Zhan, entrenar con la espada, ser un cultivador.

—Zorrito mío, yo puedo seguir entrenándote en los 7 artes como lo he hecho hasta ahora, pero sabes que
debes tener mucho cuidado. Nadie en este palacio ni en este reino debe intentar sentir la corriente
espiritual que conecta tu núcleo, ¿Entiendes lo que digo? debes prometerme que no permitirás a nadie
sentir tu núcleo.

—Pero...

—Wei Ying, ¿sabes quién era tu abuela, lo recuerdas?

—La abuela Baoshan.

CangSe aparta un poco a su hijo para apuntar con un dedo a su pecho, justo en medio de su corazón. —
¿Qué sientes aquí, mi pequeño?

—Es mi núcleo dorado A-Niang.

—¿Qué más puedes sentir Wei Ying?

—Es... es uhm —Wei Ying se detiene un momento buscando la palabra para describirlo pero no encuentra
ninguna.

—Un cultivador normal entrena su mente y cuerpo para controlar la energía Yang que es la que conforma
el núcleo dorado Wei Ying, Nosotros somos un poco diferentes. La línea de sangre en la familia SanRen es
especial, ya que además de controlar la energía Yang, también dominamos la energía Yin. Está en nuestra
naturaleza hacerlo.

—Entonces la bolita negra junto a mi núcleo es... ¿Otro núcleo?

—Así es mi pequeño, nosotros tenemos 2 núcleos dorados. Pero eso es algo que no se lo puedes contar a
nadie. El reino de GusuLan encuentra el uso de la energía Yin como un camino torcido y del mal. Aquí
valoran en sobre manera la pureza, tanto del cuero como del espíritu. Nunca nos aceptarán y para
garantizar nuestra seguridad, lo único que podemos hacer es escondernos, esconder lo que somos.

—Oh!— Wei Ying asiente pensativo. Puede que sea muy pequeño para entender la mayoría de lo que se le
ha dicho, pero cree comprender generalmente lo que su madre quiere decirle.

—Seré bueno A-niang.

—Así se habla mi pequeño, necesito que comprendas la seriedad de esto. Debemos protegernos y esta es
la única forma mi amor.

—Lo haré, protegeré a A-Niang. —Wei Ying sonríe radiante. Su mamá era muy buena, y él quería estar
siempre con ella, así sea escondido.

CangSe se ríe un poco de la inocencia de su hijo. Sabe que es joven pero es bastante perceptivo y fue
talentoso desde muy temprana edad. Espera que logre entender que destacar es lo opuesto a lo que deben
hacer aquí y ciertamente le preocupa la relación que ha desarrollado con el segundo príncipe, eso le resulta
bastante extraño.
Desde que llegaron al palacio real, siempre escuchó de parte de todos los sirvientes, como el segundo
príncipe era alguien bastante retraído, que no le gusta el contacto, tampoco relacionarse con nadie y
mucho menos que lo toquen, pero solo bastó un encuentro entre su alteza real y su hijo para que se
volvieran inseparables en unos pocos días. Solo espera que esto no sea un problema, la familia real es
bastante complicada de manejar si no se tiene el debido cuidado.

—Wei CangSe, te necesitan en la cocina. —Otro sirviente se acerca para llamarle.

—Voy en un momento. A-Ying cariño, por favor quédate cerca, la gran ceremonia está próxima a
comenzar y aún hay mucho por hacer.

Wei Ying se ríe y sale medio corriendo por el pasillo. —Regreso pronto A-niang.

—¿A-Ying a donde vas?

—Con Lan Zhan. —Grita ya desde lo lejos y volea su pequeña manito despidiéndose.

CangSe palidece. ¿Acaso su hijo no entendió nada de lo que le dijo? Que Dianxia los ayude...

—¿Por qué es importante la celebración de ahorita? todo el mundo está corriendo en todo el palacio. A-
niang no ha podido salir de la cocina en todo el día...

Wei Yin se sonroja cuando Lan Zhan coloca suavemente una flor detrás de su oreja. —¿L-Lan Zhan?

—No es una celebración, es más bien una ceremonia. —Responde el joven príncipe calmadamente
mientras termina de acomodar la flor. Aprecia un momento la belleza de Wei Ying antes de continuar. —
El dragón blanco se manifestará esta noche, cuando eso suceda, mi hermano... o yo ascenderemos al
puesto de emperador.

—¡Oh! ¿Y podré ver al dragón?— pregunta Wei Ying animadamente.

—Mn, la ceremonia es pública, casi todo el reino acude para rendir homenaje al antiguo emperador y
presentar sus respetos al nuevo.

—¡Oh Lan Zhan! eso significa que podrías ser el nuevo emperador.

—...Mn— asiente.

—Y ¿Lo quieres?— Pregunta Wei Ying.

Lan Zhan lo observa, oro y plata se encuentran en una mirada. Hay tanto cariño transmitiendose. — No es
cuestión de desear o no, es nuestro deber responder ante el reino y aceptar el destino que el Dragón blanco
quiera para con nosotros.

"Destino" Que interesante palabra, piensa.

Lan Zhan continua contemplando esos hermosos ojos grises y esa brillante sonrisa. Es raro ver a Wei Ying
sin ella, es tan natural como adorna su bello rostro que se sentiría mal si no estuviera ahí todo el tiempo
para admirarla y Lan Zhan desea y quiere admirarla tanto como pueda.
A sus 10 años de vida, Lan Zhan no sabe realmente qué es el destino, y cree que este podría cambiar en
cualquier momento, después de todo, no es algo que pueda gobernar un simple mortal como lo es el. De lo
único que está seguro es que sea cual sea el destino que le depare el futuro, hará lo que sea necesario para
vivirlo al lado de la bella criatura que tiene ante él.

La pequeña charla se detiene y ambos niños se quedan acurrucados en un silencio cómodo mientras el
ocaso arriba en el jardín donde se encuentran recostados.

Las dos pequeñas bolitas de pelo, saltan de un lado a otro disfrutando felizmente de su nuevo hogar. Wei
Ying no para de sonreír mientras se encuentra muy cómodo en los brazos del segundo jade. Alrededor de
media hora después, llega un sirviente para solicitar la presencia del joven príncipe en la sala del trono.

El momento de la ceremonia ha llegado.

Nobles y gente de todas las clases son recibidos fuera del gran palacio, situados alrededor de una gran
plataforma en medio de la extensa naturaleza. Dirigidos por siervos y sus respectivos sirvientes, la gente
se aglomera buscando la mejor vista para la ceremonia que dará inicio en breve.

12 columnas de 5 metros, hechas en mármol blanco y talladas con el emblema de la nube, rodean la
plataforma en forma circular. 6 de ellas sostienen de forma vertical el estandarte con el emblema del
dragón blanco y en la base de las otras 6, un pequeño altar se levanta al cielo conteniendo el fuego azul
con la bendición de los dioses.

Un gran altar se alza en medio de la plataforma. Las llamas azules son sostenidas por una base de Jade
cristalino y un camino de oro con pequeñas gemas azules se extiende, conectándolo con Lan Qiren Rey
Regente por unos minutos más, el cual se establece en medio de la plataforma, anunciando el inicio de la
ceremonia.

—Su Alteza real, el Primer Príncipe de GusuLan, primer heredero del Gran Dragón blanco.— Lan Xichen
ingresa a la plataforma con paso firme.

—Su Alteza real, el Segundo príncipe de GusuLan, segundo heredero del Gran Dragón blanco.— Lan
WangJí camina junto a su hermano. Sus pulcras túnicas blancas se mecen en el viento mientras siguen sus
pasos hasta situarse al otro lado del altar, justo frente a Lan Qiren.

Wei Ying revolotea desde su lugar muy lejos de la plataforma cuando visualiza a Lan Zhan. Una
advertencia en los ojos de su madre hizo que el nombre del príncipe muera en su boca antes de ser
pronunciado.

La ceremonia da inicio, ambos príncipes extienden su energía espiritual y la concentran en el fuego que se
alza furioso en medio de la plataforma. Sacan sus espadas, la luz de la luna se refleja en ellas y comienzan
una suave danza.

Un paso al frente, extienden una mano y la otra retrocede cuando la espada hace un suave movimiento en
el aire a un costado en direcciones contrarias dibujando pequeñas ondas en el aire.

La energía fluye a través de sus cuerpos dejando un rastro de líneas azules en cada movimiento que
desaparecen segundos después. El inmenso público contiene la respiración mientras observan con
detenimiento cada salto, cada paso y cada uno de los movimientos de los jóvenes príncipes.

A medida que pasa el tiempo, el fuego en el altar crece y crece. La luna se alza imponente, brillando en su
máximo punto, iluminando el reino por completo.

Una hora después, se escucha un fuerte rugido que penetra en los oídos de todos los presentes del lugar.
Los príncipes realizan su último movimiento inclinándose ante el fuego para finalizar. Sus brillantes
espadas son extendidas en ambas manos y ofrecidas ante el dragón.
El cuerpo de Lan Zhan se sobresalta. Una fuerte corriente eléctrica recorre todo su cuerpo y no puede más
que volver la vista al frente aturdido. Cuando lo hace, nota la gigantesca energía azul que se impone ante
él, en forma de dragón. Sus ojos dorados hacen contacto con los gigantescos ojos azules que le devuelven
la mirada antes de que estos mismos se transformen en un dorado tan brillante como los del mismo
príncipe.

—El Gran Dragón Blanco ha elegido un portador. —La profunda voz de Lan Qiren se escucha a lo largo y
lleno de todo el lugar, penetrando en los oídos de hasta la última persona presente.

El dragón Blanco inicia su descenso y poco a poco desaparece, adentrándose en el pecho del joven
segundo príncipe, hasta que no se logra ver nada más de él. Lan WangJi se pone de pie y dirige una mirada
al público tras de él. Las más de 2000 personas presentes en el lugar están inclinadas con la frente pegada
al suelo.

—Larga Vida al emperador, mil años de vida a su alteza real. Que gobierne de forma justa y honorable,
que su vida sea bendecida por la gracia de los Dioses y que el gran Dragón Blanco lo acompaña hasta el
último aliento.

Larga Vida al emperador, mil años de vida a su alteza real HanGuang-Jun, el portador de luz.

Larga Vida al emperador.

Larga Vida al emperador.

Chapter End Notes

Este capítulo me quedó más largo de lo que creí jajaja y eso que lo dejé aquí para partirlo en una
segunda y probablemente tercera parte. Los siguientes capítulos son los recuerdos del pasado que
rodea a nuestra pareja, mostrando las razones que los llevan a la situación actual. Este capítulo
muestra los inicios del WangXian y lo profunda que es su conexión a pesar de que son chiquitos e
inocentes.

18 años y Wei Ying 16. Y ya se nos pone mas romántica y digamos 😏🔥🔥
En la próxima parte habrá un salto en el tiempo a la adolescencia de nuestra querida pareja, Lan Zhan
la cuestión.

Ahora si, que creen:

¿Por qué Wei Ying se quiere alejar de Lan Zhan a como dé lugar?

¿Por qué Lan Zhan no recuerda a Wei Ying?


¿Qué pudo pasar entre ellos para que las cosas terminaran de ese modo?

¿Quién es la persona que llama a Wei Ying por su nombre antes de empezar el recuerdo?

No siendo más, si te gustó el capítulo recuerda votar, gracias por leer, nos vemos en una próxima...
Chapter 6

Imperio de GusuLan, 10 años después.

Gusu es especialmente hermoso durante las tardes de invierno, cuando las montañas son desprovistas de
todo color y el blanco se esparce por los altos muros del castillo. El cielo azul es el único color adicional
que adorna el paisaje, y el sol apenas visible en las altas murallas blanquecinas, con un brillo de ensueño.

Después del atardecer, los pájaros vuelan a sus nidos, las ardillas corren a buscar refugio.

Acaba de empezar a nevar, la temperatura desciende varios grados por debajo de 0.

HanGuang-Jun está de mal humor.

Los ojos del emperador se estrechan y frunce el ceño profundamente mientras continúa caminando a paso
rápido por los amplios pasillos del palacio. Los sirvientes ubicados a los costados del pasillo, se inclinan
uno a uno, dándole paso, sintiendo la temperatura descender en picada.

Su estado de ánimo ha empeorado en los últimos meses, pero es difícil que no lo haga.

No cuando se la ha pasado entre banquetes, reuniones, ceremonias y toda clase de eventos formales que no
le dejan tiempo de...

Lan WangJi deja escapar un profundo suspiro. Lleva una semana sin verlo. Su madre y él fueron
designados para estar al servicio de la familia Jiang, lo que dio como resultado una disminución
considerable de la cantidad de veces que pueden verse.

Uno de los patéticos intentos de su tío por separarlos.

No, no iba a pensar en eso.

Cada vez que pensaba en ello, podía sentir la ira crecer dentro de él; más y más alto, hasta que un día, no
podrá ser contenida.

Su tío no entiende que no existe fuerza en este mundo que pueda separarlos verdaderamente. Él nunca lo
permitirá, no mientras viva.

—¿S-Su majestad?

—Mn

—L-La celebración de la siguiente cacería se acerca, su majestad. Está destinada a realizarse en los
terrenos de la Montaña Baifeng, patrocinada por la secta Jin.

Oh

—Las diferentes sectas están ansiosas y entusiastas por el evento, sin mencionar que su majestad será
partícipe, por lo que se espera sea un evento muy memorable.

—La participación debe ser voluntaria para cualquier cultivador, no solo se le permitirá a los nobles la
entrada.— Exige Lan WangJi de la nada.

—¿S-Su majestad?
—No está a discusión—. Ordena

—Pe-Pero...— El sirviente tiembla ante las palabras mencionadas por el emperador. —Majestad, esta
cacería es un evento muy importante para el reino y en especial para la nobleza; siendo usted participe, no
es correcto que los plebeyos se mezclen.

El emperador le dirige una mirada gélida. Su mente inundada con la imagen de una sonrisa radiante y ojos
grises, brillantes como la luna. —¿Te atreves a contradecirme?— Ruge.

Inmediatamente todos los sirvientes presentes caen de rodillas con la frente pegada al suelo. —Su-su
majestad, este humilde no podría, este sirviente se equivocó.

Lan WangJi no se molesta en contestar, simplemente continúa su camino sin mirar a los sirvientes que
dejó atrás.

Sumido en sus pensamientos, el emperador se dirige a la sala de reuniones para encontrarse con su
hermano y tío. Había cosas que discutir y necesitaba desocuparse rápidamente, necesitaba terminar todos
sus pendientes rápidamente, para salir y espera poder encontrarse con él.

Su puño se apretó con fuerza. —Wei Ying— comenzó. El nombre se sintió como una oración en su boca...

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Wei Wuxian miró por encima del borde de la muralla, la luna se alzaba grande y majestuosa, iluminando
las amplias paredes del castillo. Sacó a Chenqing, girándolo entre sus dedos antes de llevarlo a sus labios,
inspirado por el hermoso paisaje que se extendía debajo de él. La vista era impresionante, estaba solo en lo
alto de la columna, solo la luna como espectadora de la suave melodía que fluye en el aire.

Todo Cloud Recesses se podía apreciar desde su lugar, lo que significaba que en algún lugar de los
amplios muros, estaría Lan WangJi. Sería maravilloso ser capaz de ver su hermoso rostro. Wei Wuxian
sonrió, alejó a Chenqing de sus labios y volvió la vista a la luna. Era común para él, escalar el castillo y
contemplar el paisaje desde lo alto; lo había hecho tantas veces, pero hoy se sentía diferente. Su corazón
anhelante palpitaba con fuerza. Dejó que la brisa fluyera por su cuerpo, levantando sus cabellos y parte de
su ropa e imaginó lo maravilloso que sería volver a tocar con Lan WangJi.

Perdido en sus pensamientos, la voz detrás de él fue una completa sorpresa.

—Wei Ying.

Wei Wuxian se congeló. Seguramente lo había imaginado... Quizás estaba más desesperado de lo que creía
por verlo. Se dio la vuelta y no pudo evitar la sonrisa que se dibujó en su rostro cuando vio la etérea
figura, de pie allí, luciendo tan maravillosamente hermoso como recordaba.

—Su majestad— dijo finalmente y se inclinó levemente. —¿Es prudente que el soberano de este reino,
deambule por la cornisa de su palacio? —Se ríe suavemente mientras observa la expresión imperturbable
del hombre. —Espero que no hayas venido a deshacerte personalmente de éste intruso que de casualidad
pasaba por aquí.

—Lan Zhan—. Dice el emperador mientras camina por la cornisa, hasta quedar a poco menos de un metro
del otro hombre. La sonrisa de Wei Ying solo se hace más grande. —No hay necesidad de formalidades
entre nosotros.
Wei Ying se abalanza sobre el emperador y lo envuelve en sus brazos, mientras este mismo le devuelve el
abrazo con intensidad. —Lan Zhan, este pobre súbdito te ha extrañado mucho, así que debes perdonarlo
por invadir tu espacio personal.

Lan WangJi resopla con cariño mientras acaricia suavemente el cabello del menor. —Wei Ying es
bienvenido a invadirlo cuando lo desee.

Wei Ying estalla en una carcajada —¡¡Lan Zhan, desvergonzado!!, ¿no se supone que ese es mi trabajo?

El emperador observa embelesado esa radiante sonrisa que tanto extrañaba —Mn.

Wei Ying se calma y entierra su rostro en el cuello del emperador, inhalando la deliciosa fragancia del
sándalo que siempre lo acompaña. Este último nunca apartó las manos de la pequeña cintura del menor. —
Tanto me extrañaste, ¿eh, Lan Zhan? ¿Tanto que tuviste que venir a buscarme hasta aquí?— Wei Wuxian
bromeó, sintiéndose complacido y feliz.

—Mn— respondió el Emperador. Wei Wuxian pudo ver la leve y casi imperceptible sonrisa en el rostro de
Lan WangJi finalmente cuando se separaron un poco. —Te extrañé— estuvo de acuerdo Lan Wangji. Wei
Wuxian sintió que todo su cuerpo se sonrojaba con una vibración alegre.

Pasaron un largo y tendido rato, sentados en el borde de la cornisa, hablando de todo y de nada. Wei Ying
no dejaba de contarle sobre cada cosa que vivía, su entrenamiento, los avances de su cultivo, las
dificultades de ser un sirviente pero todo con una completa vibra de alegría sin dejar espacio a quejas.

Lan WangJi solo lo escucha atentamente, sus ojos son suaves mientras observa al más joven apegado a su
pecho, aún rodeando con su mano, la cintura de Wei Ying posesivamente. Es tan natural éste contacto
entre ellos, como si fuesen hechos para encajar. Lan WangJi lo contempla mientras estira el brazo hacia
adelante para acariciar suavemente su espalda. Wei Wuxian gravita hacia él, como siempre lo hace cuando
están juntos. Se siente un poco vulnerable, sabe que no existen barreras cuando se trata de Wei Ying,
siempre está ahí para completarlo, y Lan Wangji se siente tan lleno dentro de su corazón cuando sus dedos
se deslizan sobre la superficie del cuerpo del otro hombre para frotar suavemente.

Oh, él quería esto tanto.

El fuerte sonido de las campanas anunciando las 9 de la noche, los sobresaltó a ambos, rompiendo el bello
momento que compartían.

—Lan Zhan, tu shufu te va a asesinar. —Wei Ying comienza a reír, recordando lo estrictos que son con el
horario para dormir.

Wei Wuxian intenta respirar para aliviar el escozor en su piel por haberse separado del firme pecho y
brazos que momentos antes lo aprisionaba. Él mira a Lan Wangji, quien solo le da una mirada apacible a
cambio. Wei Wuxian maldice dentro de su cabeza y jadea ante la inevitable despedida que van a tener.

Wei Ying pensó que sería bastante agradable si solo se quedara dormido aquí, así Lan Zhan no tendría que
irse, más bien no podría, él nunca lo abandonaría, esta seguro de ello.

—Wei Ying...

—Aiyoo!! que rápido vuela el tiempo ¿eh?— Wei Ying se da la vuelta para volver a ver la luna.

—Montaña Baifeng

—¿Ah?

—La próxima cacería, Montaña Baifeng.


Oh, pero. —Umm Lan Zhan, no creo posible que un simple sirvient...— Se detuvo abruptamente por el
profundo ceño fruncido del emperador. Ya sabe lo mucho que el mayor odia que él mismo o los demás lo
menosprecien. Pero ciertamente es difícil ignorar su estatus cuando el resto del mundo no deja de
recordárselo todo los días. —Jeje, se que Lan Zhan no me ve como menos, pero estoy seguro que los
ancianos y por sobre todo tu tío, no me permitirán la entrada.

—Wei Ying es muy capaz.

—Eso no cambia quién soy.

—Eres mi Wei Ying.

Ambos pares de ojos se abren grandes ante las palabras pronunciadas. El emperador desvía rápidamente la
mirada, pero algo en él lo impulsa a mirar de nuevo hacia arriba y cuando lo hace, encuentra al hombre
más pequeño mirándolo. Su cabello oscuro traza el viento, Wei Ying está sonrojada desde las mejillas
hasta las orejas por la confesión.

Algo en esa vista, hace que el corazón de Lan Zhan tropiece, y cuando muestra una sonrisa, Lan Zhan se
ha ido; En algún lugar dentro de él, algo se enciende. Le gusta esa reacción, le gusta mucho. No sabía que
lo quería pero ahora que lo tiene, quiere más.

Mucho más...

—¡L-Lan Zhan, vas a hacer que mi corazón estalle! ¿De dónde viene todo esto?.

"Realmente te amo, más de lo que creía humanamente posible" Piensa el emperador, aún manteniendo su
mirada fija en esos preciosos ojos plateados.

—Tú...— Lan Wangji finalmente cree poder hablar de nuevo. Fuera lo que fuera que esperaba decir,
muere de nuevo en su garganta. Wei Ying vuelve a sonreír.

Es brillante y cálido, como los rayos del sol en un día de verano, sin embargo, en sus ojos, su resplandor
plateado refleja la luz de la luna.

Antes de que se den cuenta, ambos caminan hacia el otro. El emperador envuelve sus brazos en la cintura
del menor. Wei Ying podía sentir los días de deseo reprimido alcanzarlo rápidamente, su mirada desciende
a los labios del emperador.

"¿Esto está pasando en verdad?" se pregunta.

Lan WangJi se inclina peligrosamente, pueden sentir sus alientos mezclarse más y más.

Momentos después, Wei Wuxian escuchó pasos firmes por las escaleras, luego el crujido de una puerta en
la parte baja de donde ambos se encontraban, y luego estaban ya parados y separados uno frente al otro
nuevamente.

Wei Ying no puede negarlo, siente que quiere definitivamente morir en ese momento. Su corazón martilla
como loco por el designio de lo que pudo haber pasado.

Los dos caminan uno al lado del otro y Lan Zhan observa cómo los soldados se inclinan ante él. —Su
majestad.

—Mn. —Responde, dando un par de pasos al frente.

—El consejero real lo estuvo buscando, no se encontraba en las habitaciones reales.


—Volveré en un momento, pueden retirarse.

—Como ordene majestad.

Lan WangJi se gira para hablar pero se encuentra solo en la cornisa. Un suspiro de decepción lo atraviesa
inevitablemente.

Su pulcra figura comienza a descender a paso lento de la cornisa, para dirigirse a sus aposentos privados
cuando visualiza una grulla de papel que vuela suavemente hasta el.

"Nos veremos pronto Lan er-gege"

El bonito dibujo de 2 conejitos con una cinta blanca y otra roja, amarradas respectivamente lo recibió, y la
más pequeña de las sonrisas se dibuja en su rostro.

Volteó la vista a la luna una última vez, "Nos vemos pronto Wei Ying".

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
La primavera daba sus inicios en los terrenos de caza de la Montaña Baifeng.

A lo largo de extensos kilómetros, acechan diversos demonios y bestias. Éste lugar registra uno de los
terrenos de mayor demanda de criaturas, perfectos para la caza. A lo largo del tiempo ha acogido muchas
competencias de caza de gran importancia, donde las sectas grandes y pequeñas muestran sus habilidades,
talentos, y también para que algunos cultivadores errantes y nuevos discípulos se den a conocer.
En la vasta plaza y alrededor de ella, comenzaron a reunirse los diferentes cultivadores de las prominentes
sectas con sus respectivos sirvientes. Había 15 torres de vigilancia ubicadas alrededor de ella, alojando a
los nobles más destacados de todo el reino.

Murmullos entusiastas llenaban el aire, la gente comentaba animada sobre las expectativas del gran
evento. La cantidad de personas era considerablemente mayor, en comparación con otras ocasiones.

Más allá del tumulto, los líderes de secta, familias y discípulos, comenzaron la procesión para disponer el
inicio de todo; en la parte de atrás, filas y filas de sirvientas llevaban toldos, suministros o grandes
armamentos.

Sin embargo, cuando llegó la formación real de la Secta GusuLan, todo sonido del ambiente desapareció.

El emperador entró en posición erguida sobre su níveo corcel, seguido de su hermano Lan XiChen y
guiando a la formación de la Secta GusuLan lentamente hacia adelante.

Cada presente inclinaba profundamente su cuerpo en una respetuosa reverencia hacia el emperador
dragón. Lan WangJi continuó con su paso imperturbable, creando una atmósfera de grandeza y belleza
etérea; llevaba su espada en la cintura y flechas en la espalda. Con sus túnicas blancas y cinta de la frente
volando en el aire, lucía como un Dios inmortal, Casi como si hubiera sido esculpido de hielo.

Muchas mujeres en los alrededores y diversas cultivadoras, sentían sus piernas temblar, enamoradas de la
vista. Las más reservadas solo bajaron sus abanicos, luciendo tímidas sonrisas. algunas más atrevidas, sin
embargo, ya se habían movido hasta el borde de la procesión y arrojaron flores y capullos que habían
preparado de antemano.

Es una tradición arrojar flores a hombres y mujeres hermosos para expresar admiración, por lo que pronto
una lluvia de flores cayó inmediatamente desde cielo. Ya que los discípulos de de GusuLan provenían de
un distinguido clan noble, sus apariencias eran por mucho sobresalientes. Por lo tanto, ya se habían
acostumbrado a esto hace tiempo. Lan WangJi y Lan XiChen en especial por ser descendientes del dragón
blanco, tenían apariencias que no se podían comparar con nada de este mundo pero imperturbables, Los
dos asintiendo hacia las personas en señal de respeto, no se detuvieron y continuaron avanzando.

Sin embargo, Lan WangJi repentinamente levantó la mano, sosteniendo una flor que había sido lanzada
desde atrás de él.

Miró hacia atrás, la formación de la Secta Yunmeng Jiang, que aún no había partido; Jiang WanYin,
sentado al frente, seguido por su séquito de discípulos. Sin embargo justo al final de la procesión, en las
hileras de los sirvientes, una persona estaba sentada en un caballo de pelo negro y brillante. Su codo estaba
en la cabeza del caballo mientras lo miraba con su juguetona sonrisa.

Lan XiChen vio que Lan WangJi había tirado de las riendas y dejó de avanzar, —Majestad, ¿pasó algo?

—Wei Ying.— Lan WangJi consideró acercarse.

Al observar cómo su hermano estaba distraído, Xichen decidió persuadirlo. —La caza está por comenzar,
ya tendrás tiempo de saludarlo en otro momento, hermano.

Mientras hablaban, Jin ZiXuan se había acercado cabalgado hacia ellos. —Majestad—. Se inclina un
poco. —Algunas personas preguntan si, ¿estaría dispuesto a realizar una demostración de arquería, antes
de iniciar la caza?.

El campo de tiro ya se podía ver desde el lugar. Lan WangJi observó un momento antes de volver su
mirada a las finas de Yunmeng Jiang y de nuevo al frente —Mn.
La fila de objetivos era una serie de obstáculos antes de la entrada oficial hacia la montaña. Aquellos que
tenían el deseo de entrar, solo podían hacerlo si eran capaces de disparar a mínimo 3 obstáculos, desde
cierta distancia.

Había 10 anillos azules, situados respectivamente para las 10 vías de acceso. Cuanto más cerca estuviera
la flecha del centro de los objetivos, mayor sería el puntaje del participante.

A gran velocidad, Jin ZiXuan, como primer candidato y primer maestro de la secta organizadora, sacó una
flecha tras otra y disparó. Dio justo en el centro de 4. Los vítores vinieron de todas las torres de vigilancia.

Viendo lo mucho que Jin ZiXuan alardeaba de su excelencia, los diferentes cultivadores se animaron a
participar hasta que llegó el último espectáculo.

—Con ustedes, para la última presentación, su majestad, el Emperador dragón, HanGuang-Jun.

Dando unos pasos al frente, Lan WangJi disparó una secuencia de flechas sin vacilación alguna. Sus largos
cabellos, negro como la noche, fueron levantados con el viento y apenas si sus pulcras túnicas tuvieron
movimiento cuando 7 flechas dieron completamente en el blanco.

La multitud estalló en vítores y gritos extasiados. El gran emperador es por mucho el mejor de todos los
tiempos. Varias mujeres se desmayaron y todos en el lugar clamaban al emperador con emoción.

De repente, una secuencia de flechas se abrió pasó a través del campo, pasando cerca incluso del
emperador con una precisión perfecta.

8 flechas en el blanco

Lan WangJi no se movió ni un centímetro de su lugar, la suave fragancia a nísperos y manzana dulce llegó
a él, junto con las flechas, revelando a su tirador.

Todo el lugar se sumió en un súbito silencio.

—Su majestad no debería contenerse.— Una melodiosa y pícara risa, logró escucharse, antes de que su
dueño hiciera aparición. —Estoy seguro que su alteza real puede hacerlo mejor.

—¡¡WEI WUXIAN!!

Varias personas se adelantaron estallando en ira por el atrevimiento del sirviente, hasta que la mano del
emperador se levantó, indicándoles que retrocedieran.

—¿Wei Ying quedó decepcionado de mi pobre exhibición?

—¡¡Su majestad!!— Varios nobles trataron de interrumpir.

—Silencio—. Sentenció el emperador dirigiendo una fría mirada, a los nobles impertinentes.

Wei Ying sonríe un poco más y apoya su cabeza en el arco de forma juguetona. —Aiyoo!! majestad, este
humilde nunca se atrevería a ofenderlo. Solo considero que sus habilidades son dignas de admirar y...
Alguien que conoce de primera mano esa habilidad, podría saber cuando no lo ha dado todo.

Un fuerte sonido de desprecio vino de algún lugar cercano. —¡¡¿Cómo te atreves a hacer tales
insinuaciones, tu un mugroso sirviente?!! Tu...—

Antes de que pudiera terminar de hablar, el resplandor azul y helado de Bichen, se abrió paso a través de la
multitud. Su hoja resplandeciente con un brillo helado, se depositó a menos de un centímetro de la
garganta del noble. —Vuelve a pronunciar esas palabras y será lo último que digas en ésta vida.
Ante la mirada en shock de todos los presentes, el hombre cayó al suelo, helado hasta los huesos por el
miedo.

Lan WangJi sin volver a molestarse con el hombre, retrajo su espada y procedió a sacar una cinta de sus
túnicas y ató esta misma sobre sus ojos para cubrir su vista. Posicionó una flecha y tensó su arco —Si Wei
Ying no está conforme, tendré que mostrar un mejor espectáculo para complacerlo— soltó.

10 flechas, 10 anotaciones perfectas en el blanco.

La serie de acciones fue fluida y rápida, los presentes no se dieron cuenta de lo que pasó, ni siquiera
pudieron ver claramente sus movimientos antes de que el centro del objetivo fuera atravesado. Tras un
momento de silencio, en todo el lugar resonaron vítores abrumadores, con una intensidad aún mayor que
los recibidos anteriormente por el emperador.

Wei WuXian, con los ojos amplios por la sorpresa, caminó tranquilamente hacia el emperador. La vía de
acceso a la Montaña Baifeng estaba justo en frente. Como si fueran los únicos presentes en el lugar, Lan
WangJi giró su cabeza, aún con la cinta en sus ojos, podía sentir fuerte y claro la presencia del menor.
Ajenos a todo lo demás, en vez de un terreno de caza, parecían haber sido transportados hasta los
hermosos jardines del palacio, donde tantas veces habían paseado y compartido muchos momentos justos.

La multitud empezó a sentirse confundida, ¿por qué este simple sirviente es defendido por su alteza y se
comporta como su igual?

Una pequeña risa por parte de Wei Wuxian fue escuchada, era como una melodía mágica para los oídos
del emperador. —Su alteza es muy impresionante—. comenta Wei Ying.

—Me alegra haber cumplido con las expectativas de Wei Ying.

—Lan Zhan nunca podría decepcionarme—. comentó de nuevo el menor, casi en un susurro.

Una casi imperceptible sonrisa adornaba los labios del emperador, luego gira su cuerpo y empieza a
caminar hacia la entrada de la montaña.

Wei Wuxian río más alto esta vez y empezó a caminar también, pero tomó un acceso diferente al que el
emperador ingresó, momentos antes.

La gente aún en estado de shock solo pudo ver como las dos figuras desaparecen después de ese breve
intercambio. ¿Podría ser que él emperador no iba a quitarse la cinta de los ojos hasta que la cacería
terminara? ¿Cómo podría participar de la cacería así? ¿Quién es ese sirviente que al parecer tiene el favor
de su majestad?

Wei Ying caminó por un rato, hasta adentrarse lo suficiente en el amplio bosque. Finalmente encontró un
lugar en las profundidades de la Montaña Baifeng que le pareció bueno para empezar.

Wei Wuxian solo especulaba en su juventud sobre los usos de la energía resentida, nunca planeó usarla a
fondo, pero cuando su madre le enseñó los múltiples usos de su núcleo oscuro, tomó su turno para
acoplarlo a su cultivo.

En una rama extremadamente gruesa, que crecía de un tronco bastante grande, Wei WuXian dio palmadas
a la seca corteza un par de veces. Le pareció que era bastante robusta y se subió sin dificultad.

Llevando a Chenqing a sus labios, empezó a tocar suavemente; La melodía era tranquila pero potente. El
color rojo comenzó a fluir en el aire volviéndolo pesado y para finalizar, una parte de la energía lo
envolvió por completo ocultando la presencia de su cultivo.
Cuando la canción terminó, Wei WuXian cruzó los brazos y se apoyó en el árbol. La flauta estaba entre
sus brazos, y la balanceaba de un lado a otro.

Ya tiene identificada a cada persona y criatura en toda la montaña, aunque... Realmente solo le interesa
una.

Wei Ying a paso firme se encamina para acercarse sutilmente a su objetivo. Por medio de su cultivo, pudo
notar que el emperador ya había capturado un tercio de las criaturas de la montaña él solo. Y por ahora se
encontraba descansando cerca de un claro. ¡Impresionante!

—Deberías conocer tu lugar, sirviente.

Wei Wuxian se detiene cuando sus pensamientos son interrumpidos por lo que parecen ser cultivadores de
la secta Jin.

—Umm ¿Quién eres?

Rojo de la ira el hombre le grita —¡¿No sabes quién soy?!

—¿Por qué debería saber quién eres?

—JIN ZiXUN, mi nombre es Jin Zixun, eres un sinvergüenza, como no recuerdas los nombres de la
nobleza a la que sirves y no solo eso, ¿Cómo puede un simple sirviente ser tan pretencioso? Hoy, en una
cacería tan importante que involucra a todas las sectas y al mismo emperador; tu realmente fuiste tan
audaz de hacer alarde con trucos engañosos para ganar el favor de su majestad.

Wei WuXian hizo un gesto con la mano —Umm ¿Cómo puedo hacer trucos para ganar algo que ya poseo?

Lan Zhan ya me quiere, que imbécil.

—Solo eres un sirviente— escupe el Jin —tu lugar está en la basura con el resto de la plebe, será mejor
que recuerdes tu lugar. El emperador no necesita un bufón como tú a su lado.

El rostro de Wei Wuxian, que se había relajado un momento antes, se cubrió inmediatamente con una capa
de nieve y gelidez.

Los cultivadores Jin se retiraron dejándolo solo en su lugar.

Wei Ying apretó a Chenqing con fuerza en su mano —Lan Zhan...— Susurró.

Un manto de energía comenzó a ser visible alrededor de el... Su núcleo oscuro.

Lan WangJi se encontraba sentado a la sombra de un gran árbol en posición de loto, como si estuviera
meditando. No sabía cuánto tiempo había estado sentado. Cuando decidió que tenía suficiente de la
cacería, se sentó en el lugar a esperar. Seguramente Wei Ying vendría pronto hacia el, aunque, se estaba
tardando un poco.

Se dispuso a ponerse de pie cuando de la nada fue azotado contra el árbol. ¿Qué? ¿Cómo pudo una
persona ocultar su presencia lo suficiente como para no notar que se acercaba?

Justo cuando su mano derecha estaba a punto de arrancar la cinta, su muñeca fue torcida hacia atrás. La
fuerza ejercida era bastante intensa pero, no parecía fuerza física; ni siquiera podía resistirse, pero... a
pesar de eso, parecía que la persona no tenía intención de matar.

—¿Sabes que lo que estás haciendo es un crimen?— Trató de preguntar.


La persona no respondió.

Unos momentos más tarde, al no haber recibido respuesta, trató de liberar un poco de su energía espiritual.
Enderezó un poco su cuerpo e inclinó la cabeza, mirando en su dirección. Justo cuando estaba
contemplando su próximo movimiento, de la nada, fue empujado con fuerza nuevamente. Presionaron sus
dos manos contra el árbol, sus movimientos eran rígidos. Estaba a punto de lanzar su ataque, cuando sintió
una calidez en sus labios. Inmediatamente se congeló.

El contacto se sentía extraño y desconocido, húmedo y cálido. Al principio, no podía entender lo que
estaba pasando. Su mente se quedó totalmente en blanco. Cuando al fin lo entendió, quedó más que
impactado, pero sumamente molesto.

Esta persona, que sostenía sus muñecas hacia atrás mientras y lo presionaba contra el árbol, lo estaba
besando.

Trató nuevamente de realizar un ataque pero notó que su energía espiritual no le responde, ¿que? Quería
liberarse y quitarse la cinta, pero no lo logró. Quiso moverse de nuevo, pero de alguna forma se detuvo.

La persona que lo besaba parecía temblar suavemente y algo húmedo cayó por su mejilla. ¿Ésta persona...
está llorando?

Lan WangJi no pudo luchar más.

Los dos pares de finos labios iban de un lado a otro, cuidadosos, pero inseparables. Lan WangJi aún no
decidía qué hacer, está claro que esta persona no era un cultivador cualquiera. Esta completamente seguro
que es un hombre, su fuerza es algo a considerar aunque, sigue creyendo que no es fuerza física, esto es
algo más. Los suaves labios, de repente se volvieron un poco más agresivos y sin ser muy consciente,
permitió que la persona invadiera su interior. De repente, se quedó sin fuerzas. Pero por otra parte y por
alguna razón que desconoce, su cuerpo reaccionaba al de la otra persona, como si lo atrajera de alguna
forma.

Sintió que la otra persona afirmó su rostro y lo mantuvo en su lugar. Entre los remolinos que formaban los
labios y lenguas, él también se sintió mareado, hasta que la otra persona finalmente terminó mordiendo su
labio inferior. Después de permanecer así por un momento, los labios finalmente se alejaron.

La energía llegó a sus brazos sólo después de que se apoyó en el árbol un tiempo después. Levantando la
mano, se arrancó la cinta, solo para recibir la punzante y repentina luz del sol. Finalmente logró abrir los
ojos, pero no había nada a su alrededor. Arbustos, árboles, pastos; pero ninguna segunda persona.

Aún un poco confundido, se apoyó en el árbol un rato más. Cuando decidió por fin volver a moverse, notó
un rastro muy débil de energía.

"¿Es... Esto es energía resentida?"

Se apoyó de inmediato en el tronco del árbol, maldiciendo en silencio. Lo habían besado con tanta fuerza
que ni siquiera notó que lo estaban sujetando con energía resentida. Levantó la vista y miró a los
alrededores, pero no había rastro de la otra persona. La anterior escena parecía ser un sueño muy extraño;
absurdo, aunque erótico. Lan WangJi no pudo evitar recordar cómo su cuerpo reaccionó. Su energía ni
siquiera fluyó, como si no quisiera herir a la otra parte. No pudo evitar pensar en aquellas leyendas.

"El cuerpo reacciona al contacto con su Zhiji, dos partes de un mismo ser"

"¿Su alma gemela?" No, no era posible, si él tuviera un alma gemela, ese sería sin duda... Pero estaba
seguro de que el culpable no había sido él, de ser así, ¿por qué abordarlo de esa forma?
Recordando lo que había sentido, un cosquilleo trepó por todo su cuerpo, hasta llegar a su corazón. El
emperador tocó su pecho —Wei Ying...

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
La cacería llegó a su fin y HanGuang-Jun no se reunió con Wei Wuxian.

Lan WangJi se abrió paso en la línea de meta con dirección al séquito Lan, su semblante frío como el hielo
no hacía más que congelar a todo el que se cruzaba en su camino.

—¿Su majestad desea matar a alguien?

Lan WangJi se detiene y voltea a ver al hombre que se dirigió a él. —Zixuan.

—W-WangJi, ¿la cacería no fue de tu agrado? ¿por qué la actitud?

—Necesito que hagas algo por mi.

—Oh, sí por supuesto, ¿Qué deseas?— Jin Zixuan responde inmediatamente, esperando ayudar a su amigo
en lo que sea posible, antes de que alguien muera pronto. Ciertamente el emperador es aterrador cuando
está enojado.

—En la caravana Jiang, hay un sirviente, Wei Wuxian, tráelo ante mi.

—¿Wei Wuxian?

Lan WangJi no dijo nada más y continuó su camino.

—Mnmm okey...

Una Hora más tarde, Jin Zixuan se encuentra de nuevo en la torre principal donde el emperador y los
líderes de secta están reunidos hablando de los resultados de la cacería.

Jin Zixuan se acercó suavemente por un lado, con la autorización del emperador. —¿Dónde está?

—Su-Su alteza, este Wei Wuxian no se encontraba en el campamento Jiang, pregunté pero nadie sabe
dónde está.

La mirada del emperador eran como mil cuchillos dirigidos a él. "Quizás debí seguir buscando" Piensa
Zixuan con unas profundas ganas de salir corriendo en el acto.

—Majestad.

Nie MingJue era un hombre alto e imponente. Cuando estaba de pie, le daba a la gente una sensación de
extrema presión. Tenía una dignidad aún más apremiante, como si pudiera contemplar el alma de todos los
presentes. Cuando el hombre se paró frente a todos para llamar la atención del emperador, casi se podría
decir que su aura imponente, competía con la del mismo emperador, o al menos eso creyeron todos
durante dos segundos, antes de que el Emperador, al escuchar las palabras de Zixuan, les dirigió la mirada
más fría que hayan visto en su vida. La habitación fue sumida en una cámara de hielo. Lan WangJi apretó
los dientes. Una ola de ira, se precipitaba sobre él. Irradiaba una temperatura tan fría que los presentes casi
sintieron que el piso se llenaba de niebla.
—Uh-majestad— Nie MingJue trata de aclararse la garganta, tratando de ignorar el hecho de que el
emperador parece querer desmembrarlo en el acto. —Tengo el agrado de felicitarlo por la gran hazaña en
la cacería celebrada el día de hoy.

—La cantidad de presas que se llevó su majestad es una cantidad a tener en cuenta. —Comentó otro.

—Digno de la reputación de nuestro estimado HanGuang-Jun

El emperador ni siquiera los escuchaba, sus pensamientos estaban a años luz de distancia... Hasta que.

—Si, varios lo sintieron, había un cultivador demoníaco presente en la cacería.

El Emperador no pudo evitar entrecerrar los ojos ante el hombre que habló —¿Alguien lo vio?

El líder de la secta Yao se puso en pie con orgullo— Mis fuerzas Lograron visualizarlo en el costado sur
de la montaña, parecía algo descontrolado y no pudimos ver su rostro pero vestía túnicas negras con rojo,
y no se distinguía que perteneciera a alguna secta, parece ser un cultivador errant...

Todos en la habitación se sobresaltaron cuando el emperador se puso de pie abruptamente —su cabello,
¿traía una cinta roja?

El líder Yao se puso muy nervioso ante la intensa mirada del emperador, su actitud se salió bastante del
semblante tranquilo e imperturbable que suele tener siempre su majestad. Rápidamente dirigió su mirada,
a uno de los discípulos que le dieron caza al nombrado cultivador demoníaco. —Su alteza, yo estaba
presente en ese momento y efectivamente, el cultivador parecía tener una cinta atada al cabello. Mis
compañeros y yo logramos herirlo, así que considero que no pudo ir lejos.

Lan WangJi sintió que su alma se salía de su cuerpo.

"Wei Ying"

En estado de shock, todos los presentes solo pudieron observar cómo el Emperador, la personificación de
la perfección, el hombre más importante de este reino, salió corriendo por la entrada, sin importarle nada
más.

Jin Zixuan que todo el tiempo estuvo cerca del emperador, corrió rápidamente detrás de él, seguido por los
presentes de la sala.

—¡¡¿Majestad?!!

—¡¡¿Majestad?!!

—¡¡WangJi!!

—¡¡¿HanGuang-Jun?!!

Varias personas gritaron alarmadas, tratando de alcanzar al emperador, pero este último estableció una
barrera alrededor de la montaña y solo permitió la entrada de Jin Zixuan deteniéndose al borde de esta.

—Zixuan, me encargaré del cultivador demoníaco. Infórmale a todos los presentes que tomaré este asunto
en mis manos y nadie debe interferir.

—¿Majestad? Usted... ¿sabe quién es él?

Lan WangJi le dirigió una última mirada, antes de darse la vuelta para volver a la barrera —si alguien se
atreve a interferir, debe estar preparado para morir en mis manos, no toleraré la desobediencia.
Jin Zixuan solo lo vio irse... Parece que esto no será algo simple de resolver.

4 horas después

Lan WangJi continuó caminando. Llevaba varias horas siguiendo el rastro de energía sin detenerse. Desde
que se estableció la barrera, el rastro de energía resentida alcanzó un pico alto, antes de comenzar a
desaparecer poco a poco.

El sonido del agua caer en picada, le anuncia la presencia de una cascada cercana. Lan WangJi toma
rumbo al sonido, sintiendo que el último rastro de energía desaparecía en esa dirección.

Al llegar, lo primero que nota, es un árbol que sostiene en una de sus ramas, un par de túnicas negras
colgadas.

Oh!! él conoce muy bien esas túnicas.

El emperador trata de calmar su respiración cuando nota el rastro de sangre en la zona media de la túnica.
Con mayor desesperación, gira su cabeza en todas las direcciones, buscando señales del menor, hasta que
se congela.

A unos pocos metros de distancia, en un manantial, debajo de la cascada, se encuentra Wei Ying, parado
en medio del agua y... Está desnudo.

Lan WangJi observó con sumo detenimiento, su largo cabello, negro como la tinta, desciende como
cascada sobre su espalda. Un suave movimiento en el cabello, revela una piel pálida y delicada. Él lo
examinó despacio, mirando sin prisas su bella forma, cada rasgo de su piel, sus suaves gestos, el bello tono
de sus mejillas, la curva de su cintura.

El Emperador ya consideraba a su Wei Ying, una belleza sin igual pero, en el momento, con la vista frente
a él y su respiración atascada en la garganta, Lan WangJi, realmente cree que Wei WuXian se convirtió en
un hermoso pergamino sin abrir. Y el desea mucho leerlo.

Lan WangJi inhala con fuerza; todo su ser se estremeció, sus ojos aún detallando cada centímetro de la piel
expuesta en el menor. Los blancos y delgados brazos de Wei Ying, hacen un pequeño movimiento y
energía roja fluye de sus palmas, antes de bajar la vista al costado izquierdo, donde sus manos presionan
con fuerza la herida que parece estar terminado de cerrarse; Se dio cuenta, que al parecer, su Wei Ying le
ha ocultado un par de cosas.

Sin embargo, hace mucho que esa dejó de ser la cuestión más importante, y eso lo tiene muy claro, más
ahora, cuando hay una muy grande y dolorosa erección, palpitando, aún dentro de sus pantalones.

—¿A Lan Er-gege le gusta lo que ve?

El Emperador es sacado de su tren de pensamientos, cuando Wei Wuxian se gira para verlo. Su rostro
siempre enmarcado con una bella sonrisa, hoy, se encuentra desprovisto de ella. Lan WangJi
inmediatamente siente que le duele el corazón.

—Mn— Responde.

El menor ríe levemente pero su sonrisa no llega a sus ojos. El emperador siente que algo amargo se instala
en su estómago.

—¿Su majestad vino a castigarme? — ¿A acabar con mi vida? no dice.


—¿Wei Ying desea ser castigado por mi?— El emperador camina hasta el borde del manantial y al mismo
tiempo comienza a despojarse de sus prendas.

Wei Wuxian abrió grande sus ojos mientras observaba las acciones del emperador ¿Qué acaso esos
cultivadores no notificaron sobre su cultivo? No parece algo probable, o si no, ¿por qué estaría aquí el
emperador?...

Un furioso sonrojo se apodera de Wei Ying, justo cuando observa a Lan Zhan, despojarse de su última
pieza de ropa. Su mirada no puede evitar descender a la entrepierna del emperador donde el pequeño Lan
se alza glorioso, aunque de pequeño no tiene nada.

—Yo...

El emperador ingresa al manantial y avanza a paso lento, acercándose poco a poco al menor. Una parte de
Wei Ying considera muy tentativamente la opción de correr pero, por otra parte, muy en el fondo de su ser,
en verdad desea saber qué tiene planeado hacerle el emperador ahora.

Traga grueso; quizás ya empezó a alucinar debido al enorme esfuerzo que hizo al controlar tanto la energía
resentida, porque, no puede ser realmente posible que, este hermoso y glorioso hombre, con el que ha
soñado por largos años, este Dios bajado del cielo, se esté acercando a él, con lo que parece ser, la
erección más grande que Wei Ying haya visto nunca. Aunque, lo único que ha visto no es más que en los
libros de primavera que leyó por curiosidad.

—¿A Wei Ying le gusta lo que ve?

El menor redirige su mirada del palpitante miembro hasta ascender a los ojos dorados que ya se ubican a
pocos centímetros de él.

—¿La-Lan Zhan?

Una mano se extiende, justo hasta tocar la sonrojada mejilla del menor —Wei Ying es hermoso— Dice
Lan WangJi. Las vibraciones percibidas justo donde sus pieles se conectan, son suficientes para que ambos
entiendan lo mucho que necesitaban este contacto. Y antes de que siquiera entiendan lo que está pasando,
sus labios ya se han encontrado a medio camino.

Entonces ambos se besan y la mente de Lan Zhan explota con cada nueva sensación. Algo se encendió en
su interior y el instinto animal se apodera de él cuando agarra a Wei Ying por la cintura y lo aprisiona en
sus brazos. Wei Ying deja todo pensamiento racional y solo sabe que va a montar a este hombre aquí y
ahora, por lo que antes de que pueda considerarlo, sus piernas ya están envueltas en la cadera del
emperador mientras sus labios continúan lamiendo y chupando la boca contraría con desesperación.

Wei Ying dejó escapar un suave gemido, su pene atrapado dolorosamente entre su estómago y el duro
abdomen de Lan Zhan. Se estremeció violentamente cuando las manos del emperador lo recorrieron
descaradamente hasta descender a sus mejillas amasadolas suavemente.

Lan WangJi repartió una incontable cantidad de besos, lamidas y mordidas, mientras descendía del bello
rostro, pasando por el cuello y finalmente, posando su boca en las rosadas protuberancias que se erguían
animadas en el pecho del menor.

Lan Zhan se tragó el grito que asomaba del pecho de Wei Ying cuando la estimulación fue demasiada. Al
final sus manos continuaron el descenso, hasta comenzar a frotar suavemente la pequeña abertura del
menor. Después de lo que fueron, unos tortuosos minutos, un dígito fue hundido a través del pequeño
orificio.

Wei Ying gimió impotente entre el beso, su lengua buscando desesperadamente la de Lan Zhan, ignorando
el deje de dolor que le provocó la intrusión en su cuerpo. El rostro de Wei Ying estaba altamente
sonrojado, lo que resultaba en una vista extremadamente hermosa para el emperador.

Otro dígito fue ingresado y luego uno más. 3 largos dedos se encontraban haciendo un excelente trabajo
volviendo loco al menor. El dolor estuvo presente en todo momento, pero estaba seguro de que esto era
necesario como preparación, porque tenía la alta sospecha de que no importaba cuánto estuviera
preparado, el propio tamaño de Lan Zhan era algo a tener en cuenta.

—¡Lan Zhan, Lan Zhan!— Jadeó frenéticamente cuando sintió que el dolor era reemplazado por olas y
olas de placer. Pronto se volvió codicioso, más, quería más, sus dedos no eran suficiente, quería sentir a
Lan Zhan dentro de él.

—Mn— gruñó en respuesta el emperador y entendiendo las súplicas no verbales, pronunciadas por el
menor; retiró sus dedos rápidamente, Wei Ying hizo un sonido de protesta por la reciente pérdida pero,
luego sintió una humedad presionándose en su entrada. Si, definitivamente 3 dedos no eran suficientes
para prepararlo.

Empujando suavemente, su orificio fue abierto centímetro a centímetro. Su boca se abrió pero nada salió
de ella. Pronto enterró su rostro en el cuello del mayor mientras el miembro continuaba avanzando poco a
poco, más y más y más profundo.

Cuando por fin entró completamente, Wei Ying envolvió sus brazos en el mayor, aferrándose a alguna
parte de Lan Zhan en busca de apoyo.

—Yo... Deseaba esto, Lan Zhan —Habla Wei Ying con su rostro aún entierrado en el cuello del
emperador, incapaz de verlo a los ojos. —Quería ser tuyo, es lo que más deseaba—. El pensamiento era
tan peligroso, pero Wei Ying podía sentir su corazón latiendo con algún tipo de emoción. Su cuerpo
completamente unido al del emperador. No puede ni quiere contener las miles de emociones que lo
invaden. Y siente que si no lo dice ahora, es muy posible que se arrepienta el resto de su vida. Aunque
claramente contempla que no hay muchas posibilidades de un futuro al lado de su majestad.

—Volverás a Gusu conmigo— le aseguró Lan Zhan mientras inclinaba el rostro de Wei Ying para mirarlo
a los ojos, Ojos que le devolvieron la mirada con un deje de preocupación y lo que podría
ser ¿esperanza? —Yo me haré cargo de Wei Ying.

El brillo en los ojos del emperador solo se hizo más fuerte y presionó sus labios sobre los de Wei Ying. —
¿Me encerraras?— pregunta Wei Ying luego de separarse del beso.

—Wei Ying será ahora mi compañero, mi consorte... mi emperatriz—. Porque eso es lo que Wei Ying es.
Su compañero, su otra mitad. La que había estado esperando, lo que había anhelado toda su vida.

Los ojos plateados se abren ampliamente en estado de Shock ¿Emperatriz? pero, él es un hombre, el
concejo nunca lo permitirá y menos su tío.

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando Lan Zhan empezó el suave movimiento, muy lentamente
hacia arriba y hacia abajo por su gruesa longitud, extrayendo amplias descargas de placer que los invadía a
ambos.

—Ah!! ah, Lan... Zhan, espera— quería que le diera solo un momento para terminar su charla.

—Wei Ying no quiere que espere—. El menor sabía que debería odiar el hecho de que Lan Zhan conocía
todos sus pensamientos y entendiendo la respuesta corporal de Wei Ying, Lan Zhan aceleró y comenzó a
golpearlo cada vez más profundo. Su boca se pegó a cualquier parte de la piel disponible para él y Wei
Ying no pudo hacer nada más que agarrarse desesperadamente a la musculosa espalda mientras aún era
levantado por el otro hombre.
Los dedos de los pies de Wei Ying estaban comenzando a curvarse y el hormigueo en su estómago que
nunca desaparecía, comenzó a aumentar rápidamente. Las penetraciones comenzaron a volverse más
amplias y profundas, sacando toda la longitud hasta que solo la cabeza quedara dentro de la abertura, antes
de que lo empujara hacia abajo hasta la completa y total plenitud.

—Lan Zhan...— trató de recuperar el aliento y sujetó a al Emperador con las uñas, dejando marcas en su
espalda, inhalando el ya muy familiar aroma a sándalo. —Sí, oh, demonios, sí— gimió Wei Ying mientras
se aferraba con mayor fuerza. Lan Zhan nunca se había sentido tan vivo. Era como si Wei Ying hubiera
sido hecho para él, y pensándolo bien, así es. Atesoraba cada suspiro, cada gemido, cada pronunciación
suave de su nombre que escapaba de los labios de Wei Ying.

Necesitaba escucharlo más.

Mucho más...

—Respira— susurró mientras repartía besos por toda la longitud del cuello de Wei Ying, mordisqueando
su clavícula afilada y luego nuevamente descender con su lengua sobre un pezón erguido, girándolo y
jugueteando.

Wei Ying se apretó ante cada sensación. La parte interna de sus muslos estaba adolorida por estar tan
abierta, pero los fuertes brazos de Lan Zhan sobre él rodeándolo, era reconfortante y empujaba la tensión
hacia fuera de su conciencia.

De repente, el placer de Lan Wangji alcanzó su punto máximo, este último estrelló su boca contra la de
Wei Ying y aceleró el ritmo de sus embestidas, mientras al mismo tiempo, llevó su mano, curvándola
alrededor del pene del menor y acarició suavemente.

Wei Ying gritó cuando sintió que el pene dentro de él se hinchaba y una explosión de calor lo llenaba.

Esto fue demasiado.

Podía sentir el semen caliente de Lan Zhan llenar sus entrañas y no pudo evitar temblar ante la sensación
mientras su entrada se contrae ante el abrumador orgasmo que tuvo igualmente, momentos antes.

—Lan Zhan...

—Shhh...— Lan WangJi ajustó su agarre en el cuerpo de Wei Ying y los dirigió a ambos hacia la orilla del
manantial, al llegar allí, depositó suavemente al menor en la hierba y se posicionó a su lado para poder
descansar.

Lan WangJi envuelve sus manos alrededor del menor, atrayéndolo más a sí, y Wei Ying felizmente
recuesta su cabeza en el firme pecho, mientras monta su pierna derecha en las más grandes del emperador.
—Lan Zhan, ¿por qué no habíamos hecho esto antes?— exclamó Wei Wuxian con un fuerte suspiro,
complacido mientras se presionaba más contra el otro. —Nos conocimos desde niños, tuviste muchas
oportunidades de haberme follado en todos estos años; contra la pared de tu alcoba, en los muros del
castillo, en el manantial frío; te hubiera dejado—. agregó mientras sentía la alegría brotar en todo su
cuerpo.

—Desvergonzado— Regañó cariñosamente el emperador.

Sabe que perdieron mucho tiempo a lo largo de los años pero, su posición le dificultaba un poco establecer
libremente sus preferencias, además, ha tenido una lucha constante para construir un reinado justo y por
sobre todo, tratar de eliminar el estigma que se tiene con los sirvientes... Lo que le recuerda.

Con su mano presionada sobre la tersa espalda de Wei Ying, Lan WangJi dejó escapar un pulso de energía
espiritual, recorriendo, buscando. Y justo lo encuentra momentos después. Al lado del núcleo dorado de
Wei Ying había otra fuente de energía, algo opuesto al núcleo dorado, un susurro de algo oscuro, y aún
más fuerte.

El pecho de Wei Wuxian se elevó rápidamente, un ceño fruncido estropeando su hermoso rostro mientras
de un salto se alejó rápidamente de Lan Wangji.

Un solo pensamiento se fundió con fuerza cuando los 2 pares de ojos se encontraron y la claridad en la
cabeza de Lan Zhan solo fue más grande cuando agarró rápidamente del brazo a Wei Ying para impedirle
que huya.

—Wei Ying...

.
Capítulo 7
Chapter Notes

Nota: Seguimos en el pasado

Advertencia de contenido: por favor preparar pañuelos...

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—Wei Ying...

Wei Wuxian desvía la mirada rápidamente. Esta es una conversación, que definitivamente no quiere tener.

—Wei Ying, ¿Qué es?

—Nada.

—¿Wei Ying no confía en mí?

Wei Wuxian lo mira y siente que su corazón duele profundamente. Trata rápidamente de ponerse de pie,
pero sus piernas inmediatamente fallan y cae al suelo de nuevo —¡¡Joder!! ¿por qué eres tan grande? no
creo poder caminar ahora— Trata de bromear pero ciertamente su voz sale carente de toda calidez.

Los amplios brazos del emperador lo buscan de nuevo y lo aprisionan en un posesivo abrazo. —Debes
descansar.

—Yo...

—Entiendo que no desees hablar, pero no puedo proteger a Wei Ying si no entiendo lo que le pasa.

El menor no responde. Para alguien que habla de todo y todo el tiempo, es bastante desconsolable el
silencio.

Lan WangJi suspira, levanta el mentón del menor con su mano de forma suave, para que éste lo mire y
procede a besar suavemente sus labios. El contacto es electrizante y Wei Ying no puede más que fundirse
en el calor de las sensaciones que el otro le brinda.

Wei Wuxian permite que un suspiro se escape de sus labios mientras se aleja para ver mejor a la otra
persona. "Esta va a ser una larga charla" piensa para sí mismo.

Wei Ying desvía la mirada y lleva su mano derecha hasta posarla en el pecho, justo en medio de su
corazón. —Es mi núcleo oscuro— El menor aprieta con fuerza su pecho —Es... es uhm, desde que nací mi
cuerpo puede controlar la energía Yin, es algo hereditario, nosotros somos un poco diferentes. Aunque mi
mamá dice que yo soy... especial, ya que además de controlar la energía Yang, también domino muy bien
la energía Yin. Mi madre es como yo pero, su núcleo oscuro es débil, casi imperceptible. En nuestra
familia es normal que solo podamos nutrir uno de los dos núcleos pero yo... Está en mi naturaleza, siempre
pude usar ambos sin ningún inconveniente.
—¿Te lastima?

—¿Qué?

—Usar la energía Yin, el resentimiento, ¿te lastima?

—Umm no, no. Está arraigado en mí, es igual que usar mi núcleo dorado... So-solo es un poco más fuerte
e inestable dependiendo de mi estado de ánimo.

Silencio...

Wei Ying puede sentir la potente mirada del emperador, casi perforando su piel. Aún así, no se atreve a
mirarlo a los ojos.

Después de un breve momento en silencio, Lan WangJi finalmente habló —Cuando me besaste en el
bosque, estabas llorando.

El menor se sobresalta y vuelve su mirada para encontrar a la del emperador, pero horrorizado la apartó
inmediatamente. Su cara pasó rápidamente a un blanco enfermizo y luego a un rojo intenso.

—Y-yo...— Wei Ying solo pudo cubrir su rostro con ambas palmas, horrorizado de sus propias acciones.

—Wei Ying, mírame.

—Lan Zhan, Yo...

—Wei Ying, ¿por qué llorabas?

Tu lugar está en la basura con el resto de la plebe, será mejor que recuerdes tu lugar. El emperador no
necesita un bufón como tú a su lado.

Gusu solo se educa en la ortodoxia.

El reino de GusuLan encuentra el uso de la energía Yin, como un camino torcido y del mal. Nunca nos
aceptarán.

Aléjate de su majestad.

Solo eres un mugroso sirviente.

Nunca podrás permanecer al lado del emperador, sus mundos están separados por un abismo. No hay
forma de que puedas escalar hasta el.

—Yo... debo irme.

—No hemos terminado aquí— Lo detuvo. Wei Ying podía escuchar la autoridad en la voz de Lan Zhan.

—¿Me odias?— La voz de Wei Ying, es casi un susurró en el aire. El atronador latido de su corazón en el
pecho, amenaza con acabarlo.

—Lejos de eso, Wei Ying— le sonrió mientras le daba la vuelta de nuevo —Te amo.

Los ojos de Lan Zhan buscaron los de Wei Ying por un momento y su expresión se suavizó visiblemente.
—Te amo, Wei Ying— Repite.

—Lan Zhan...— El emperador no lo dejó hablar, presionando sus labios juntos. Lágrimas descendían por
las mejillas del menor.
—¿Wei Ying lo olvidó? Volverá a Gusu conmigo.

—Nadie aceptará que esté a tu lado... Yo solo soy.

—¡Mi palabra es la ley! La única persona de la cual me importa su opinión, eres tú, mi Zhiji.

—¿Zhiji? ¿Crees que soy tu alma gemela?

—¿Wei Ying cree que es insuficiente?

—¡¡Por supuesto que así es!! Lan Zhan, mereces a la mejor de las personas, no deberías conformarte con
alguien como yo.

—No me estoy conformando. Soy afortunado, Wei Ying es lo que siempre quise. Solo puede ser Wei Ying.

—Lan Zhan, tonto— El menor abraza con fuerza al Emperador, mientras sus ojos se desbordan en más y
más lagrimas. —Te amo... Te amo muchísimo. Haría lo que sea por ti.

—Solo quiero una cosa de Wei Ying.

—Lo que sea.

—Que siempre te quedes a mi lado.

Wei Ying comienza a reír, esta vez es una risa auténtica y brillante. En verdad estaba perdidamente
enamorado de este hombre.

—Te lo juro.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Cuando llegaron a Gusu, ya estaba oscuro afuera, pero parecía que nadie estaba dormido todavía. Lan
WangJi llevó a Wei Wuxian hasta la entrada del palacio. Descendiendo en sus espadas, un centenar de
guardias los recibieron.

¡HanGuang-jun! - ¡Majestad!

Wei Wuxian no sabía que al parecer todos en Gusu los estarían esperando, Bueno, no a él.

Una pequeña parte de los soldados, abrió paso, mostrando las regias figuras de Lan Xichen y Lan Qiren.
En su mente, Wei Ying esperaba que Lan Wangji lo llevará directo al Jingshi, y así, no tener que lidiar tan
pronto, con lo que posiblemente se avecina. Con gran decepción, maldijo su mala suerte, cuando el
profundo ceño fruncido de Lan Qiren se clavó directo en él.

Wei Wuxian, con la idea de poder casarse pronto con Lan Wangji, se convenció a sí mismo de que esta,
era al menos la oportunidad de tratar de agradar al hombre. Para permanecer en Gusu y una vez que estén
casados, es bueno mantener una buena relación con la familia de Lan WangJi.

Apropiadamente, Wei Wuxian realizó una profunda reverencia —Saludos, Zewu-jun, Maestro Lan Qiren
— El dice cuando los alcanza.

Lan Xichen niega con la cabeza. Lan Qiren está todavía más molesto —¡WangJi! ¿Qué significa esto?,
¿por qué llegas a esta hora?, ¿Acaso este es el cultivador demoníaco que divisaron en la cacería?— Grita
un muy alterado Lan Qiren al ver a Wei Wuxian muy tranquilamente mientras trae encima, parte de las
túnicas exteriores del Emperador.

—Shufu, Xiongzhang— El emperador dirige una leve inclinación de cabeza ante los presentes,
imperturbable por la ola de preguntas de su tío. —El problema con el cultivador demoníaco fue resuelto,
yo personalmente me encargué de él. Finalizada mi tarea, el perímetro que establecí en el bosque fue
liberado y no es necesario tomar medidas adicionales, todo se acabó.

Mientras Lan Xichen y Lan Qiren asimilan las palabras del emperador, este último comienza a caminar
para entrar al palacio sin molestarse en obtener una respuesta, por parte de los dos. Lan WangJi ubica su
mano en la espalda baja de Wei Wuxian, indicándole que camine a su lado. —Wei Ying vivirá aquí a partir
de ahora.

—¿WangJi? —Lan Xichen voltea a ver a su hermano, teniendo un mal presentimiento por las posibles
implicaciones en las palabras del emperador.

Lan WangJi detiene su paso y voltea a ver a los hombres nuevamente por un breve momento—A partir de
Hoy, Wei Ying, de cortesía Wei Wuxian, abandona el estatus de sirviente y debe ser tratado como lo que
es, mi futuro cónyuge.

—¡¡¿WANGJI?!!— ambos hombres gritaron al tiempo.

El Emperador no prestó más atención y dejó a su hermano pálido como un cadáver y a su tío al borde de
una desviación de Qi. Su marcha no disminuyó hasta llegar a sus aposentos.

Wei Ying fue y se tiró en la enorme cama sin ninguna vergüenza mientras reía. —Lan Zhan,
desvergonzado. ¿Cómo puedes decirle eso así a tu tío y hermano?— Wei Ying ríe feliz. —Nunca vi a tu tío
tener tantos colores en su cara al mismo tiempo, parecía que comenzaría a echar espuma por la boca en
cualquier momento.

—Solo les dije la verdad— Lan WangJi se acercó para sentarse en la cama junto al menor. Observando la
túnica blanca deslizarse por los hombros del menor.

—Tienes una mirada hambrienta. —Wei Ying sonríe con picardía.

El emperador se inclina en el suelo y levanta suavemente una de las piernas del menor y baja para dejar un
suave mordisco en la parte interna de ella, a través de las túnicas. —Tal vez estoy hambriento.

Wei Ying sonríe más intenso y levanta su mano para alcanzar el borde de la cinta de la frente que cuelga a
un costado del Emperador.

—Lan er-gege puede comer lo que desee.

La mirada del emperador se oscurece y Wei Ying no puede estar más que complacido por este hecho. —
Recuerda tus palabras.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
"¿Escuchaste? el emperador se volvió un manga cortada"

"¿Qué? debes estar bromeando"


"Si, yo también escuché y no solo eso. Su supuesta pareja es un sirviente"

"No puede ser posible, ¿o si?"

"Si, es cierto, lo he visto un par de veces cuando visité el palacio real, se viste de negro y no tiene
ningún principio de decoro en cuanto a la presencia del Emperador"

"Esta tiene que ser la peor broma de todas"

"Pero y si su pareja es un hombre, ¿Qué pasará con el linaje del dragón?"

"¿El emperador no planea tener descendencia?"

"Yo escuché que el consejero real, convocó a las doncellas más hermosas de todo el reino, con la
intención de conformar un harem para el Emperador"

"Si, y no duraron ni 5 minutos en presencia del emperador, antes de que este mismo las expulsara del
palacio"

"¿Qué pasará entonces con el reino, si no existe un heredero para cuando el emperador no esté?"

"¿Qué, ese maldito sirviente no entiende el gran daño que nos está haciendo?"

"Espero que el emperador se deje de juegos pronto o que ese sirviente desaparezca de alguna forma"

"Oh, el Emperador cuida mucho de él pero... Aquí entre nos, todos sabemos que los ancianos del concejo
no estarán quietos mucho tiempo"

"El reino es mucho más importante que un simple sirviente, y eso es algo que todos tenemos claro"

Wei CangSe caminaba inquieta por los pasillos del palacio. Escuchar toda clase de rumores acerca de su
hijo y el Emperador, no hacía más que ponerla nerviosa.

Desde que su hijo mandó a buscarla en la servidumbre de los Jiang y mudó su domicilio al palacio, no ha
hecho más que vivir angustiada. Recibir miradas hostiles, encontrarse siendo vigilada todo el tiempo, los
constantes murmullos sobre su hijo; sin mencionar la creciente tensión, que se instaló en el palacio, por la
futura boda que se realizará en pocas semanas.

La mujer suspiró, ¿Por qué su hijo tiene que ser tan testarudo? ¿El Emperador? ¿En serio? Está bien que
sea un manga cortada, eso lo puede aceptar, pero ¿por qué?, de todos los hombres en un reino tan grande,
tenía que meterse justo con el hombre más importante de la nación.

"Maldita sea su suerte"

CangSe continuó caminando en dirección a la alcoba real para ver si puede encontrar a su hijo. ¿Por qué
ese jovencito desvergonzado tiene que incluso dormir con su majestad? no le basta con pasarse el día
entero pavoneándose de aquí para allá en todo el castillo. Jura que un día de estos la hará infartar.

Un largo y sonoro gemido resonó en el pasillo, haciéndola detener a unos cuantos metros de la habitación
real.

—¡Ah! ah.. Joder! ¡Oh, sé amable, me vas a partir en dos, HanGuang-Jun! —se logró escuchar.

Wei CangSe sintió que su cara pasaba por todos los colores antes de decidir dar media vuelta y alejarse a
toda velocidad. ¡¡Muchachito desvergonzado!! Otra cosa en su lista de desgracias. ¿Su hijo en serio quiere
que todo el castillo escuche siempre sus actividades con el emperador? Por amor a Dianxia, ¿Qué no
puede ser un poco más silencioso?

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Wei Ying se apretó ante cada sensación, el enorme miembro del emperador entraba y salía de la parte
interna de sus muslos. Estaba adolorido. Era la tercera vez, solo ese día, pero joder, no quería parar.

Como si sintiera el pensamiento de querer más, Lan Zhan aumentó la velocidad lo que provocó que Wei
Ying inhalara bruscamente y levantara las caderas. Sus dedos se enterraron en el cabello negro como la
tinta del Emperador, tirando y presionando, mientras su estrecho agujero succionaba con fervor la dura
erección.

La piel que alguna vez fue blanca y tersa, ahora se encontraba llena de marcas de mordeduras, chupetones,
y toda clase de tonos, que, revelaban el posesivo reclamo sobre su cuerpo.

La cama estaba golpeando contra la pared, haciendo que los diferentes adornos que estaban en los estantes
cercanos a ella se tambalearan y comenzaran a caer.

—Mio— gruñe Lan WangJi contra su oído, sus caderas vacilan mientras se acerca al clímax. Ajusta un
poco la posición mientras acelera el ritmo. El nuevo ángulo se siente aún más satisfactorio. Estaba a punto
de correrse.

Wei Wuxian sintió que su clímax también se acercaba —Tuyo— Responde. Lan WangJi aceleró sus
movimientos y Wei Wuxian se convirtió en un lío de murmullos y gemidos incoherentes mientras su
interior era golpeado implacablemente.

No les tomó mucho correrse, una gran cantidad de semen fue depositada muy en lo profundo del más
joven, mientras este gritaba de placer y mordía su hombro.

Después de unos momentos, ambos permanecieron desplomados y enredados en las sabanas, nadando en
la burbuja de sus placeres saciados.

—¿Amor?— Lan WangJi siente que su corazón se calienta, cada vez que su Wei Ying le habla de forma
tan cariñosa.

Lan Zhan inclinó levemente su cuerpo y presiona un suave beso en la comisura de los labios de Wei Ying,
mientras acaricia suavemente su espalda con la mano —Mn.

Wei Ying sonríe y se abraza más al cuerpo del contrario. —Lan Zhan, Yo... Me iré a Yiling con mi madre
unos días.

El emperador detiene el movimiento de su mano y se queda mirándolo sin expresión alguna. La pregunta
implícita es su cara.

—Aiyoo!! amoor, no me mires así— se ríe —Solo es por unos días, iremos a presentar respetos a mi
padre, por el aniversario de su muerte.

—¿Puedo acompañar a Wei Ying entonces?

El menor se queda serio. —No lo dices enserio ¿o si?


—¿No puedo?

—¡Lan Zhan, amor! Por supuesto que me gustaría que vinieras, pero eres el Emperador. No puedes
simplemente dejar todo e irte.

—Wei Ying es mi prometido, no es seguro abandonar el palacio solo. —Para el emperador, no pasa
desapercibido, los múltiples rumores que circulan en todo el reino, al igual que la hostilidad que le es
dirigida.

—Sí, pero...¡ohh! —Wei Wuxian gimió cuando Lan WangJi se empujó de nuevo dentro de él.

—¿Pero?— Lan WangJi jadeó, todavía embistiendo el agotado cuerpo de Wei Wuxian.

—¡Ah, ah! ¡Oh, joder, eres insaciable HanGuang-Jun! —

—Acompañaré a Wei Ying. —Muerde suavemente su lóbulo derecho— No está a discusión.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
—¡NO!

—No estaba preguntando Shufu.

—¡Eres el Emperador!

—¿Y esa es la forma de hablarle a tu Soberano?

—¡Cuando el Emperador de este reino se comporta como un niño, si! No es así como te crie WangJi.

Lan Xichen solo giraba su cabeza de un lado a otro, mientras presenciaba el intercambio entre su hermano
y tío.

La verdad es que él tampoco está de acuerdo con las decisiones que ha tomado su hermano. Pareciera que
todo lo que hace ahora, gira en torno al menor.

—Son dos días.

—Dos días en los que puede pasar de todo.

—Mn— estuvo de acuerdo Lan WangJi —Xiongzhang estará a cargo.

Lan Xichen suspira y por fin interviene —WangJi, sé que estás pensando en la seguridad del joven Wei,
pero no puedes simplemente abandonar tus deberes en el reino.

—Confío en la capacidad de mi hermano para manejar todo en mi ausencia.

El emperador se retiró, dejándolos con la palabra en la boca.

Esa misma noche, en un lugar remoto del castillo, un pequeño mensaje en papel, fue entregado y
posteriormente quemado.

"Tenemos una oportunidad" Decía.


⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Las calles de Yiling eran bulliciosas y animadas. Los transeúntes paseaban por los diferentes
establecimientos, adquiriendo sus productos.

Un pequeño niño corría a toda velocidad mientras jugaba con una mariposa de papel. Estaba tan distraído
que no notó a la persona frente a él e inevitablemente chocó y cayó al piso. Con un rostro solemne, el
desconocido lo miró y extendió su mano para levantarle. —Ga-gracias— Dijo el niño, sacudió su ropa y
continuó corriendo.

—Lan Zhan, Lan Zhan, deberías sonreír más, el pobre niño casi llora cuando te vio.

—Ridículo.

Wei Ying estalla en una carcajada. Su madre a un lado, solo puede mirar nerviosa la escena. Nunca esperó
que el emperador realmente los acompañara.

—Su majestad... Sé que se encuentra disfrazado para que nadie lo reconozca pero, ¿es correcto que
caminemos entre el pueblo de forma tan tranquila?

—No te preocupes A-Niang, Lan Zhan lo tiene todo bajo control.

—¡¡Wei Ying!! deja de dirigirte a su majestad de forma tan casual.

Wei Wuxian hace un puchero. El emperador solo sonríe levemente.

Más tarde ese día...

Wei Wuxian y Wei CangSe, permanecen de rodillas mientras prenden un par de varillas de incienso en la
tablilla conmemorativa de su padre y marido respectivamente.

El Emperador permanece respetuosamente en silencio a unos cuantos pasos de ellos, justo en la entrada
del pequeño templo.

Wei Changze falleció hace 14 años, sirviendo como guardia en el castillo imperial. A su esposa e hijo, se
les permitió permanecer en el castillo, con igual condición de servidumbre. 2 años después, Lan Zhan y
Wei Ying se conocieron, mientras el segundo príncipe daba un tranquilo paseo por los jardines imperiales,
esté último, había sentido los fuertes ladridos de lo que parecían ser varios perros y antes de que se diera
cuenta, un pequeño niño de túnicas negras lo había derribado y posteriormente usado de escudo, cuando
los perros se disponían a atacarlo.

Los guardias personales del segundo príncipe, en ese momento, sacaron sus espadas, apuntando al niño,
debido al crimen que acababa de cometer. Alta fue su sorpresa cuando el pequeño segundo príncipe,
levantó su mano indicándoles que retrocedieran y solo se limitó a abrazar al menor que se aferraba a sus
túnicas mientras lloraba y temblaba de miedo.

En su momento, Wei CangSe, no daba crédito a lo comentado por los sirvientes. No era posible que el
segundo príncipe, una de las personas más importantes del reino y de quien se comentaba, era tan duro
como un adulto a pesar de su corta edad, hubiese ayudado a su hijo y protegido con sus propios brazos.
Pero la vida le siguió dando sorpresas pues en la actualidad, 11 años después de ese suceso, su hijo se
encontraba comprometido con ese mismo segundo príncipe que incluso ahora era el Emperador del reino y
quien se mostraba bastante protector, por no decir posesivo con el.
Unas horas más tarde, de vuelta en la elegante posada donde se alojaban, las 3 personas compartieron su
cena antes de, cada uno, retirarse a sus respectivas habitaciones.

Era una noche oscura, la luna no dio indicios de aparecer en ningún momento, pero un gran firmamento de
estrellas, decoraba bellamente el cielo. Wei CangSe se encontraba tranquila bebiendo un poco de vino en
el jardín lateral de la posada. Los huéspedes ya se habían dormido hace varias horas, por lo que la noche
era bastante silenciosa.

Lan WangJi se acercó a paso tranquilo, posicionándose a unos metros de la mujer. —Madam.

—Su alteza, no debe tratarme con tanto respeto. Tengo muy presente mi estatus— Dijo la mujer mientras
realizaba una inclinación.

—Su condición de servidumbre fue anulada cuando Wei Ying se comprometió conmigo.

—Entiendo las palabras del emperador, pero debo declinar en cuanto a las libertades que se me conceden.
No soy tan desvergonzada como mi hijo— Comenta Wei CangSe en un tono medio en serio medio en
broma.

El emperador tomó asiento junto a la mujer y permaneció en silencio por un momento antes de por fin
decidir hablar. —Hay algo que la perturba— No era una pregunta.

—Muchas cosas en realidad, pero no puedo molestar a su majestad con los problemas de esta simple
plebeya.

—Lo que es importante para Wei Ying, también lo es para mí y usted es su madre; no creo que haya algo
más importante.

La mujer observa de reojo la firme postura del emperador —¿En verdad lo amas?

—Con mi vida— Respondió de inmediato, sin vacilación alguna.

Wei CangSe suspira —Muchos están en contra de esta unión, estar juntos significa que son ustedes 2,
contra el resto del imperio.

—No hay nada que no esté dispuesto a hacer por él. Lo protegeré con mi vida si es necesario.

La mujer se sorprende de la severidad en las palabras del emperador pero algo en ellas, la tranquiliza al
menos un poco.

—¿Te contó sobre nosotros? ¿No?

—Mn

—¡¡Muchachito desobediente!!

—Fue un accidente. No planeo contárselo a nadie.

—Su majestad, se que no estoy en posición de pedir nada pero por favor, permítame pedirle algo.

Lan WangJi asiente.

—Wei Ying es un buen niño, es travieso y desvergonzado, pero no hay persona más noble en su corazón...
Por favor, se lo suplico alteza, protéjalo.

Por favor
Lan WangJi observa a la mujer un momento, y luego levanta la vista al cielo —Preferiría morir, antes que
permitir que alguien lo lastime.

A la mañana siguiente, las 3 personas pararon por algunos puestos del mercado local, antes de emprender
rumbo hacia la capital de Gusu. Pero varios murmullos de lo que parecían ser problemas en los túmulos
funerarios los hizo detener.

"¿Escuchaste? unos cultivadores errantes que respondieron a un pedido de auxilio, quedaron atrapados
en esa zona muerta"

"Si, ya lo había escuchado, son 5 personas y creo que había un niño con ellos"

"Que horrible, debe ser su primera cacería"

"¿Te imaginas morir en tu primera cacería? pobre, que desafortunado para el pequeño"

Wei Ying escuchó todo eso sintiendo el pánico recorrer su cuerpo —¡¡Tenemos que ayudarlos!! puede que
no hayan muerto todavía.

—¡¡Wei Ying!! Los túmulos funerarios son una zona de muerte, es muy peligroso tan solo estar cerca del
lugar.

—¡¡Pero A-Niang!! No podemos ignorar a alguien que necesita ayuda. Además Lan Zhan está aquí, no
hay nada que él no pueda vencer.

—Mn...

Con algunas dudas de por medio, las 3 personas se dirigen en dirección a los Túmulos.

Efectivamente, no es un lugar en el que cualquiera pueda estar. El ambiente es sumamente pesado, en la


tierra muerta descansan huesos de todo tipo, árboles marchitos y una espesa niebla esparcida por todo el
lugar.

Se encaminan más y más, tratando de explorar parte del territorio en busca de cualquier cosa que muestre
señales de vida. Wei Ying utiliza su cultivo para determinar dónde podrían estar las personas atrapadas,
después de unos breves minutos, frunce el ceño.

—En el pueblo dijeron que eran 5 personas. Puedo detectar al menos 15 personas en este lug...

Su frase no termina de ser pronunciada cuando el emperador ha desenvainado su espada mientras desvía 7
fechas que apuntaban directamente al menor. —¿Qué?

Diferentes cultivadores, todos con su rostro oculto hacen aparición y los rodean rápidamente. las 3
personas en medio se ponen en guardia, desenvainando sus espadas.

—¡Es una trampa!— Dice Wei CangSe.

—¡Hay que ser muy tonto para creer que tienen alguna oportunidad contra Lan Zhan! —Exclama Wei
Wuxian en tono divertido aunque su semblante es muy serio.

—Tal vez tienen un excelente plan— Contrarresta de nuevo su madre —O uno muy estúpido— Exclamó
con horror cuando escuchó la estridente canción que comenzaron a tocar sus atacantes. En menos de un
minuto la montaña parecía haber cobrado vida.
El sonido de algo que se movía a una velocidad antinatural, gritos inquietantes rasgaban el aire. La niebla
que antes estaba rodeando el lugar se disipó, para revelar cientos de horribles gargantas abiertas, el sonido
de cojeras agitadas se unió a la sinfonía.

Decenas de cientos de cadáveres saltaron a su encuentro. Como era de esperar, Lan WangJi no necesitó
ninguna consideración, el hombre era como lo describen las historias, atravesando la multitud de muerte
como un faro de luz, simplemente desgarrando varios cuerpos a la vez, justo donde intentaban arrastrarse.
La vista de las partes de los cuerpos siendo separadas y el fluido podrido volando por el aire, fue real y
asombrosamente brutal.

Lan WangJi estaba cerca, lanzándose en el aire y flotando para asestar golpes precisos a la masa chillona
de muerte, obligándolos a retroceder con su danza bellamente asesina.

Un par de cadáveres habían logrado atravesar su primera línea de ataque y estaban siendo detenidos por su
madre.

La preocupación se abrió camino hasta el pecho de Wei Wuxian, pero no podía hacer más nada para
ayudar aparte de luchar con todas sus fuerzas y confiar en que su amado y su madre no caerían tan fácil.

Se obligó a mirar hacia abajo de nuevo, justo a tiempo para ver que la situación tampoco iba bien para los
desgraciados que causaron este desastre.

Se maldijo así mismo y tomó rumbo para ayudar a uno de los implicados cuando un cadáver casi lo
destripa.

Wei Wuxian a menudo había pensado que el tiempo era algo extraño. Estaba bastante seguro de que
siempre pasaba exactamente a la misma velocidad, sin importar lo que estuvieras haciendo.

Pero a veces el tiempo parecía detenerse o pasar más rápido como si algo lo estuviera alterando y antes de
que te dieras cuenta, la situación para la que creías que aún tenías tiempo de reaccionar ya estaba allí,
tocando a tu puerta.

Técnicamente, siempre había estado bastante seguro de que siempre podría superar cualquier mala
situación si solo se esforzaba lo suficiente para enfrentarla.

Si alguien le preguntara, si estaba realmente preparado para lo que vino a continuación, realmente no
habría dicho que no.

En el momento que Wei Wuxian saltó y salvó al infeliz de su propia e injustificada trampa, uno de los
cadáveres, logró darle alcance y presionar sus garras sobre su pecho, pero contrario a sentir un golpe de
dolor físico su cuerpo estalló en una electrizante corriente de energía resentida.

Todo el torrente de energía que lo rodeaba se salió de control, su mente comenzó a perder claridad y solo
pudo distinguir los vestigios de una melodía estridente, cuando todo lo demás comenzó a ser difuso.

La energía se arremolinó en su interior para posteriormente comenzar a ser expulsada en grandes


cantidades. Los cadáveres pararon su ataque y permanecieron inmóviles, como si la voz que los guiaba
hubiese sido reemplazada con algo más, dejándolos confundidos en el lugar.

—¡¡Wei Ying!!— Lan WangJi gritó desesperado cuando observó la masa de energía que lo cubría.

—¡¡Es el cultivador demoníaco!!— Gritaron sus atacantes.

Sin prestar atención, Lan WangJi trató de acercarse pero la energía era tan densa que le impedía avanzar.
Su madre, al igual que el emperador, estaba haciendo lo posible por acercarse a su hijo pero todo intento
era frustrado.
Lan WangJi sacó su Guqin y comenzó a tocar la canción "claridad" para intentar dispersar la energía. Todo
el reino sabía que el cultivo musical del Emperador era el más fuerte registrado en la historia del reino.
Pero las notas estridentes del Guqin, parecían no ser suficientes para apaciguar la ira en las almas
torturadas que se arremolinaban cada vez más, alrededor de su amado.

En un intento desesperado de su parte, el Emperador soltó su Guqin y convocó toda la energía espiritual
que pudo reunir, directamente de donde estaba establecido su vínculo con el dragón blanco. Cuando sintió
que esté le respondía, volvió a tomar su Guqin pero esta vez la canción tocada no era para dispersar, era
para atraer.

En una situación tan desesperada, Lan WangJi, decidió absorber la energía resentida que rodeaba a Wei
Ying y ésta, atraída por la pureza que emanaba el dragón blanco, dejó de aferrarse al menor y tomó
dirección, ingresando en todas las partes del cuerpo del Emperador. Pronto su cabeza empezó a nublarse,
sangre brotó por la comisura de su boca. Levantó la vista, solo para ver cómo su amado se desplomaba en
el suelo, siendo liberado de la energía resentida. Es lo último que ve antes de perder el conocimiento.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
La siguiente vez que Wei Wuxian abre los ojos, se da cuenta que ya no está en los túmulos funerarios. Eso
es claro, ya que lo primero que logra ver son lo que parecen ser, los barrotes de una celda.

—Estás despierto— No era una pregunta.

Sus ojos se encuentran por un instante antes de que notara que era el tío del Emperador. —Maestro Lan
Qiren.

—No soy tu maestro, no vuelvas a dirigirte a mí así— Espetó con desagrado.

—Lan Zh... El emperador, ¿Dónde está él?

—¿WangJi?— El hombre se da la vuelta y camina hacia la salida con ambas manos en su espalda. —El
emperador se encuentra en cama en este momento, está en coma.

—¿Qué?

—Tal parece que mi sobrino consideró una gran idea, absorber la energía resentida que emanaba de ti, solo
para liberarte. Aunque eso desestabilizó la suya propia y ahora se encuentra en un sueño inducido mientras
su núcleo dorado busca estabilizarse.

"Lan Zhan hizo ¿qué? Absorbió... el resentimiento de su cuerpo."

—Yo... ¡Tengo que verlo!— Grita.

—¡Jamás volverás a acercarte al Emperador!

—¡¡NO!!

—Los dos serán sentenciados por practicar un camino hereje y atentar contra la vida del Emperador
dragón.

—¿¿L-Los dos??
—Wei CangSe fue sentenciada a la hoguera por dar vida a un ser maldito, abominación del mal. Su juicio
se está llevando a cabo en este momento.

¿Qué?

—¡¡¡MI MADRE NO TIENE QUE VER EN ESTO!!! Si deben castigar a alguien, es a mi.

—Cuando el juicio de esa mujer termine, tú serás el siguiente.

Con eso, Lan Qiren abandona la habitación.

¡Hoguera! ¡Hoguera! ¡Hoguera! ¡Hoguera!... ¡HOGUERA!

¡¿¿Quemarla viva??¡

¡Quemarla viva!

¡Quemarla viva!

¡Quemarla viva!

¡Quemarla viva!

La energía resentida vuelve a hacer presencia y antes de que pueda ser consciente, ya ha derribado la
puerta que lo mantenía prisionero.
¡Corre! Sus píes nunca se agitaron con tanta velocidad, como en ese momento. Su respiración errática
amenazaba su conciencia. El zumbido en sus oídos era una clara manifestación de que pronto se
desplomaría. Aún así, con el corazón en la garganta, No paró, siguió corriendo y corriendo hasta que por
fin vio la luz. Pero era una luz mortífera, tanto, que perforó su pecho, como una flecha en llamas.

¡¡¡¡A-NIAAAAANGG!!!!

Lan WangJi de se despierta. Lo primero que nota es que, definitivamente no está en los túmulos funerarios
pero... Aunque parece que se encuentra en su habitación del palacio. ¿Por qué se escucha tanto ruido en el
exterior? y esos son... ¿Gritos?

—¡Uhm!

El sonido lamentable de una mujer lo alerta de que no se encuentra solo en la habitación. Se levanta y
observa a una de sus sirvientas personales, agachada en el suelo tapando sus oídos con fuerza mientras
todo su cuerpo tiembla en sobre manera.

—¿Qué está pasando?

—Ma-Magestad...— La mujer al escuchar despierto al Emperador, corre y se postra a sus pies— E-el
cultivador de-demoníaco, está matando a todos.

El emperador sale corriendo justo al escuchar estas palabras. ¡No puede ser verdad!

La risa de Wei Wuxian retumba dentro del salón, cuando ve a los Ancianos del concejo luchar para
atravesar los hilos de energía resentida que los rodean con sus espadas. Su túnica está manchada de sangre,
su cabello suelto se balancea suavemente con cada paso que da, mientras camina rodeando los cuerpos
inertes en el suelo. Hace girar a Chenqing en sus manos. Su paso es relajado mientras escucha a los
Ancianos maldecirlo mientras agotan su energía espiritual en una pelea que ya está perdida.

—¡¡¡Wei Ying!!!

El emperador entra a la sala, horrorizándose inmediatamente de la vida. ¡Esto, esto no está pasando, este
no es su Wei Ying!

—¡Uh! Lan Zhan— Sonríe y se quita el cabello de la cara. —No te esperaba aún.

—Wei Ying, detente...

—A-Niang se ha ido

—¿Qué?

—¡Wei Wuxian, asqueroso malvado! ¡Siempre hemos sabido que tu existencia en el palacio no es más que
un maleficio para el reino! —Grita uno de los Ancianos en el suelo.

Su espada que había permanecido en la vaina, sale disparada y perfora el pecho del hombre sin vacilación
alguna.

—¡¡Wei Ying!!
—¡Ellos la mataron!— El emperador detiene sus movimientos al escuchar esto. —Su único crimen...—
Wei Ying voltea a ver al emperador con una sonrisa y los fragmentos del alma de Wei Ying, casi son
visibles ante los ojos del emperador. —Su, su único crimen fue tenerme.

El emperador se queda en silencio. No cree que algo de lo que diga, pueda apaciguar la ira de su amado. Y
también, está el hecho de que no sabe si lo correcto sea detenerlo. Está claro que el concejo tomó medidas
sin consultarlo con el, saltaron la línea de autoridad. Pero también, su deber como emperador es
protegerlos a todos...

Wei Wuxian lleva de nuevo la flauta a sus labios y establece un tono estridente en el aire. Él observa cómo
la niebla oscura arroja a los últimos ancianos a un lado, estrellándolos contra el muro y tosiendo una gran
porción de sangre. El impacto de la caída sería suficiente para que nunca más se recuperen.

Lan WangJi se adelanta y toma del brazo a Wei Wuxian, deteniendo la música —Detente Wei Ying.

—Ellos me la quitaron, Lan Zhan. Y ahora, nada puede impedir que yo les haga lo mismo. Ni siquiera mi
Zhiji.

De un rápido movimiento se separa del agarre del emperador. La energía emerge de su cuerpo, sintiendo el
resentimiento envolver el entorno, sofocando el aire con su energía oscura. Él observa cómo los Ancianos
gritan en agonía, sosteniendo sus cabezas entre sus manos.

La energía pura del emperador emerge, separando el resentimiento y dándole la oportunidad a los hombres
de poder escapar.

—Wei Ying, es suficiente sangre derramada.

—¡¡No te atrevas a cruzar en mi camino!!

—Wei Ying... Ven conmigo.

—¡No, su majestad! si cruzas esa línea, no tendré piedad.

El odio en los ojos de Wei Wuxian, es suficiente para fragmentar el corazón del Emperador. Está claro que
el resentimiento lo está controlando, pero no quiere enfrentarlo y terminar lastimándolo de algún modo.

—No deseo responder a esta batalla— Wei Wuxian planeaba continuar con los Ancianos pero el
emperador lo detuvo de nuevo —Pero tampoco puedo dejar que Wei Ying sucumba ante el resentimiento.

—Es muy tarde para eso Majestad... Ya no tengo salvación.

Wei Wuxian desfila alrededor del espacio cerrado, el choque de energía es fuerte y constante. Rojo y Azul
se arremolinan creando un torbellino caos en el aire. Los golpes del emperador son igual de certeros que
los de Wei Wuxian.

Lan WangJi recuerda un tiempo en el que practicó estos mismos movimientos, con esta misma persona.
Recuerda el arduo esfuerzo en su práctica con la espada, recuerda lo extenuante de los movimientos... Y
recuerda la completa felicidad en su pecho cuando Wei Ying en todo momento demostró ser su igual.

¡Oh! mi amada Zhiji, siempre supe que el universo me premió el día que te recibí en mis brazos. Pero,
¿por qué ahora, siento es el mismo universo el que me castiga por atesorar mi bendición?

Wei Wuxian arremetió contra el emperador, con cada gramo de su fuerza. Sabe que es inútil, sabe que está
en una batalla perdida. Nunca podría ganar luchando contra el Emperador, pero... ¿Está mal ser egoísta?
¿Está mal querer que sea él quien acabe con su vida?
Si hoy tiene que morir, espera que sea, desea que al menos sea por la mano de la única persona que amó y
amará verdaderamente por el resto de su existencia.

Con un último movimiento, Lan WangJi logra derribar todas las defensas del menor y su energía impacta
por completo en el cuerpo del pequeño, estrellándose en la pared y por último, cayendo en la
inconsciencia.

Lan WangJi lo atrapa en medio de su caída. Estando dormido, se ve tan serio y apacible...

Pequeñas gotas impactan en el rostro del menor; desde arriba de él, las lágrimas del emperador ya no se
pueden contener.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Wei Wuxian despierta en una celda oscura de nuevo. El dolor en su cuerpo es insoportable. Cada
respiración que exhala es como si le estuviera quebrando cada uno de sus huesos.

—¿Wei Ying?

Wei Wuxian dirige su mirada a la figura de blanco posicionada a su lado. Las blancas y prístinas túnicas
del Emperador, son manchadas por la suciedad del suelo en el que se encuentran apoyadas. "Oh, eso está
mal" Piensa.

Sus ojos desprovistos de todo calor, se posan en los orbes dorados que lo miran con completa
preocupación.

—Un sanador vendrá pronto para atender tus heridas.

Lan WangJi extiende su mano para tocar al menor pero este en un rápido movimiento la golpea, alejándolo
—Piérdete.

—Wei ying, yo...

—Piérdete— Escupe.

—Wei...

—¿No he sido claro? ¡Vete, Lan WangJi! Aléjate de mí y no vuelvas nunca más— Wei Wuxian rechinó
entre dientes, sintiendo el odio calando hasta sus huesos. No quiere pelearse más con Lan WangJi, él no
tiene la culpa pero...

Nunca fui digno de ti, Lan Zhan, está claro que este es el fin.

Wei Wuxian sabe que está hiriendo su corazón, desgarrándolo tanto, como el suyo propio. Pero él, pero su
cuestionable cultivo, podría dañarlo inconscientemente de nuevo y nadie nunca les dejará estar en paz
mientras sigan juntos. Algún día podrían levantarse en contra del emperador y no estaba dispuesto a correr
ese riesgo.

—Piérdete— Repite.

Ve el rostro del emperador contraerse de dolor. Algo dentro de él se quiebra y le grita que retracte sus
palabras y se lance en un abrazo hacia su amado. Pero sabe que no es digno de ello, no cuando sus túnicas
se encuentran aún manchadas de sangre; No cuando los barrotes de la celda en la que se encuentra, son un
claro recordatorio, de cuál es su lugar.

Antes de que Lan WangJi pudiera decir otra palabra, se dio la vuelta y se alejó. Desliza su espalda contra
la pared, doblando las rodillas contra el pecho, entierra su rostro.

Escucha los pasos del Emperador alejándose vacilante, un guardia cierra la puerta con llave y se aleja de
igual forma.

Las lágrimas se desbordan de sus ojos, como ríos agitados en un día lluvioso. Le duele el corazón y se
maldice a sí mismo una vez más. ¿Por qué no deja de doler?

Era mejor así.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
La mañana llegó pronto. Pequeñas líneas de luz, se filtran a través del concreto en la celda. Wei Wuxian se
encontraba solo en la misma posición del día anterior. No sabe cuánto durmió, o si lo hizo siquiera. El
sonido de una gotera golpeando el piso, hacía eco en la profundidad del espacio, distrayendo sus
pensamientos.

Quizás, pronto acabe todo. Se pregunta ¿Cuánto tiempo más, querrán dejarlo vivir?

El sonido de pasos lo alertaron de que alguien se aproximaba.

—¡Debo sentirme honrado! Que enviaran al primer príncipe a realizar la ejecución es toda una proeza.

Lan Xichen lo observó fríamente, como una rata en su jaula esperando el golpe final. Fuera lo que sea que
esperaba Wei Wuxian, nunca contempló que simplemente abriría la celda y se alejara unos pasos dándole
la espalda.

—WangJi siempre fue el epítome de la perfección, desde pequeño siempre fue fiel seguidor a las reglas.
Todo un modelo a seguir para los demás en el reino, y cuando el dragón blanco lo eligió, a pesar de las
dudas en su corazón, logró gobernar el reino, como ningún otro; un afamado y respetado cultivador... Mi
siempre tan perfecto y honesto hermanito, ¡El único error que ha cometido en toda su vida... has sido tú!

Wei Wuxian no se movió ni dijo nada.

—Desestabilizaste el palacio, derramaste sangre inocente y sumiste al reino en el caos.

Wei Wuxian solo lo escuchaba sintiendo su garganta seca, sus ojos enrojecidos y el corazón apretado. No
era capaz de decir ni una sola palabra. Lan XiChen continuó —Esta madrugada, cuando el consejo
sentenció tu muerte, WangJi caminó en medio de la plataforma, sacó a Bichen y la puso en su propia
garganta— Wei Wuxian lo miró con horror.

—Cuando Shufu fue hacia él y le ordenó que se explicara. Con la expresión más quebrada que nunca antes
contemplé en su rostro, él solo dijo: "si alguno de ustedes, se atreve a tocarlo, aquí y ahora, dejaré de
existir".

Esta vez, Lan Xichen se dio vuelta para mirarlo.


—Durante toda su vida, WangJi jamás había desafiado ni a mí, ni a Shufu. Pero, por ti, no solo se opuso a
nosotros, sino que incluso desenvainó su espada y estuvo dispuesto a romper el equilibrio del reino entero,
acabando con su vida. Debes saber lo que significaría en el mundo, que el portador del Dragón, muera, sin
que haya un sucesor para recibirlo.

—Yo...—Wei Wuxian no sabia que decir. Su cabeza era un completo caos.

—¡Treintaitrés latigazos!

—¿Qué?

—Ese fue el precio que al final, el consejo decidió como castigo por tus crímenes.

Wei Wuxian inclinó su cabeza nuevamente —Ya veo... Asumiré la responsabilidad.

Lan XiChen casi soltó una carcajada de la sola furia que lo embargaba —¿aún no lo entiendes Joven Wei?
WangJi jamás dejará que nadie te toque.

De repente, Wei WuXian sintió un enorme terror. —Qué...

—¡Treintaitrés latigazos con el látigo de la disciplina! ¡Cada uno, por cada persona que asesinaste!— Lan
Xichen hizo una pausa, su mirada fija en algún punto de la celda —Ahora mismo, en el gran salón
imperial, por sí mismo, Lan WangJi se arrodilló ante todos, para recibir el mismo, tu castigo.

Al terminar de pronunciar esas palabras, Lan Xichen se encontraba solo en el lugar.

⚜️🖤 👑 ❤️ 🖤 👑 ❤️⚜️

a partir de este punto, por favor ambientar con esta canción: Tommee profitt can't help falling in love
(dark)
Y como complemento, empatar con esta otra canción: https://youtu.be/tOjIa5PLqDo
wake me up tommee profitt

Las grandes puertas del salón imperial son azotadas, Hilos de energía resentida se cuelan en todas las
esquinas. Todo el cuerpo de WuXian tembló y su respiración se cortó al contemplar la escena frente a el.

Wei WuXian pudo divisar en cámara lenta como el látigo se levantaba alto, para luego bajar con fuerza y
golpear la espalda de Lan WangJi. Varios golpes ya habían sido depositados y Wei WuXian pudo ver la
túnica interior rasgarse y la sangre brotar, expandiéndose sobre el suelo.

Lan WangJi no se quejaba, sus manos cerradas con fuerza y apretadas en puños, era la única muestra que
delataba el dolor que está experimentando en esté momento.

—¡¡¿Cómo te atreves a interrumpir?!!— Grita Lan Qiren —¿Quién te dejó salir?

Wei Wuxian no lo escucha y sale corriendo en dirección al emperador. El sonido de sus rodillas,
impactando contra el suelo, es atronador. Sus brazos envuelven con fuerza al contrario —Lan Zhan, amor,
por favor perdóname... Yo.

Lan WangJi lo silencia con un beso, mientras le devuelve el abrazo. —¿Wei Ying sabe cuanto me importa?
si no he sido suficientemente claro, déjame repetirlo... Te amo.

Wei Ying siente que toda su vida se desmorona ante sus ojos. ¿Cómo puede su amado, pasar por todo esto,
debido a él?

La resolución invade su rostro cuando devuelve el beso de forma apasionada y desesperada. Gritos y gritos
furiosos de los espectadores enojados, logran escucharse, pero nada de eso importa. En medio del beso,
Wei Ying toma parte de la sangre que sale de la espalda del Emperador —Te amaré eternamente amor mío,
yo siempre seré tuyo— Wei Ying se pone de pie rápidamente y con una daga, hace un corte en su mano,
fusionando su sangre, con la del emperador.

Hilos de energía resentida comienzan a fluir en el aire, creando una atmósfera sofocante. Wei Ying siente
como su núcleo oscuro palpita en su pecho y por medio de éste, invoca una matriz que rodea todo la sala
imperial.

—¿¿Wei Ying, qué haces???— El Emperador grita desesperado.


Wei Ying le dirige la más pequeña de las sonrisas, mientras lagrimas caían por sus ojos —Gracias y... lo
siento— Fueron sus últimas palabras, antes de que la gran concentración de energía estalle y la matriz se
expanda, hasta envolver el reino por completo, en una potente luz roja.

Al día siguiente...

"¿Escuchaste?, el Emperador fue atacado y herido de gravedad"

"¿Qué? ¿Cómo es eso posible?

"Nadie sabe cómo sucedió, el palacio está sumido en el caos"

"Dicen que su espalda está irreconocible"

"Varios ancianos y funcionarios también desaparecieron, se especula que están muertos"

"Y el emperador se encuentra tendido en cama recuperándose".

"¿No falta algo? ¿Cómo pasan estas cosas así?"

"No lo se, realmente... no lo se"

Esa mañana, cuando los rayos del sol, se alzaron alto en el cielo, nadie en todo el reino, sabía que hubo en
algún momento, un joven maestro, un simple sirviente llamado Wei Ying, Wuxian de cortesía, alma
gemela del segundo príncipe y Emperador del reino de Gusu, su futuro cónyuge y emperatriz.

La paz y tranquilidad fue d evuelta al reino...

Por el momento.

Wei Ying al borde de la muerte, regresó a Yunmeng. Allí, una joven dama con túnicas de color lila, lo
encontró y curó sus heridas.

Wei Ying se mantuvo oculto, entre los sirvientes de la familia Jiang. El hechizo lanzado, casi destruyó su
cuerpo. Su núcleo oscuro se fundió y el núcleo dorado casi lo siguió también. Decidió que se quedaría en
ese lugar, ahí nadie le prestaría importancia a un simple sirviente sin habilidad. Los nobles no volteaban a
ver a los sirvientes, más que para mandarlos, golpearlos o humillarlos. La familia Jiang era una de las
principales ramas del reino de Gusu. Su cercanía le permitiría observar; Desde las sombras, podría vigilar
y cuidar a su amado Zhiji, así garantizaría que nada ni nadie pudiera herirlo de nuevo.

No le importa el precio que pagó por ello, su vida no es importante, lo único que verdaderamente importa
es que Lan Zhan, Lan WangJi, lo único que le queda en el mundo, permanezca bien y a salvo.

No importa lo que deba sacrificar para ello.

Adiós amor mío...

.
Chapter End Notes

Yo misma rompí mi corazón al escribir esto 😭


Hasta aquí llegan los recuerdos, en el siguiente capítulo, volvemos a la línea de tiempo presente.
Capítulo 8
Chapter Notes

Devuelta al presente donde nos quedamos antes del salto en el tiempo del capítulo 5

—¿Wei... Ying?

Wei Wuxian voltea "No, oh no, por favor no."

—¿Eres Wei Ying, Wei... Wuxian? Te conozco... ¿Cómo te conozco?

Wei Wuxian observa al hombre de vestimenta dorada parado frente a él sin saber que hacer o decir. Da un
paso atrás contemplando la posibilidad de huir aunque sabe que es un esfuerzo inútil de su parte. Sabe que
el hechizo se estaba debilitando pero no esperaba a la persona frente a él.

—¡¡Detente!!— El hombre de vestimentas doradas levanta su espada y dirige la punta hasta él —¡Eres el
cultivador demoníaco! el Emperador... WangJi te amaba, te ama... Estoy seguro de que aún te ama...
¿Cómo lo hiciste? ¿Por qué te olvidamos?

—Jin Zixuan...

—¡¡Ni se te ocurra huir!!— El Jin se interpone en su camino— ¡¡Habla ahora!!

—...

—Algo me dice que eres muy hablador así que te recomiendo que te reserves ese silencio para otro
momento y comiences a darme respuestas ¡¡Ahora!!— Espeta el Jin.

—Yo... Necesitaba que él me olvidara, que todos me olvidaran— Wei Wuxian baja la mirada hacia las
rocas— Solo fue para protegerlo. Pasaron muchas cosas de las cuales debía protegerlo... —Wei Ying
vuelve a levantar la vista para ver la expresión en el Jin— Supongo que recuerdas poco o nada por lo que
veo.

—Si, y te agradecería que lo que sea que hayas hecho para que olvidemos lo deshagas ahora mismo,
necesito saber qué está pasando. El Emperador... Estoy seguro que sabe que estás aquí, él debe saber algo,
debido a su inusual comportamiento estos días, estoy seguro.

Wei Wuxian lo sabe. Ha estado preocupado en las últimas semanas por lo mucho que no ha podido
mantenerse alejado del Emperador, esta guerra no deja de encontrar situaciones en las que de una forma u
otra, terminan por encontrarse y como cada momento en el que no logra mantener distancia, da como
resultado que el hechizo se debilite mucho más.

—Él lo sabe— reconoce Wei Ying —Aunque no sabe todo. Solo reconoce mi existencia pero aún no sabe
quién soy. El hechizo es más fuerte en él, me encargué personalmente de ello— Aunque no puede luchar
con la atracción de sus almas, no dice.

—¿Por qué insistes en estar alejado?— pregunta de nuevo él Jin.

—Le hice daño, por mi culpa él... Esto es necesario, es para protegerlo.
—Él sigue buscándote, todos estos años he estado a su lado y se que buscaba algo o alguien— Hay una
pausa. Desde donde ambos se encuentran parados, la noche es oscura y puede escuchar el viento aullar aún
silente —Es como una cáscara vacía... Como si no tuviera razones para vivir, y cuando empezó la guerra,
solo empeoró.

Wei Ying aparta la vista y la dirige al suelo nuevamente. Él lo sabe. Dentro de su ser, algo se retuerce en
agonía. Los sentimientos del Emperador son algo que no puede ignorar pero ¿qué otra alternativa hay?
todo lo que toca se destruye, todo lo que ama termina quemado y en cenizas. Él no puede privar a su
amado de una vida mejor, una vida que él no puede brindarle.

Los terribles recuerdos aún lo consumen. Recuerda cuando la desesperación se apoderaba de cada uno de
sus pensamientos, la idea de terminar con todo le parecía algo muy tentador a lo que recurrir. Tan sólo una
rápida puñalada en su corazón y todo este interminable vacío terminaría. Pero no puede, se lo prometió a
sí mismo. Cuidar y proteger al Emperador hasta el último aliento de su vida. Esa es una promesa a la que
no puede faltar. Nunca se lo perdonaría si algo malo le sucediera.

—Y ese alguien eres tú, eso lo sé ahora. El continuará persiguiéndote hasta que te tenga acorralado. Su
determinación no tiene igual.

—El Emperador merece algo mejor, yo no soy lo que él necesita en su vida.

—¿¡¡Y quién eres tú para decidir eso!!?

Wei Wuxian levanta la vista ante la exclamación furiosa de Zixuan. Está justo en frente de él con una
expresión tan iracunda y todo lo que Wei Ying puede hacer es quedarse parado ahí y mirarlo,
contemplando sus palabras.

Puede recordar todo lo que sintió y las decisiones que tomó en todo este tiempo. Desde la tristeza hasta la
angustia, desde la ira hasta la desesperación, son emociones que han vivido presentes en él, día a día.
Recuerda cada sentimiento porque nunca ha dejado de sentirlos, los años no son nada. Son meros números
que no contienen ningún sentido para él, en este abismo en el que él mismo se arrojó y ya no sabe si puede
o desea salir.

—El Emperador encontrará a una persona apropiada para él y para el reino que lo acompañar...

—¡¡13 AÑOS!! — Jin Zixuan grita sin poder contenerse.

—¿Qué?

—¡¡Han pasado 13 años, Wei Wuxian!! Crees enserio que si no ha encontrado a alguien en todos estos
años, ¿lo hará más adelante? El Emperador, Lan WangJi, ha estado estos 13 años esperando y buscando.
Podría hacerlo 20, 50 y hasta 100 años más, y si cultiva la inmortalidad, ten por seguro que lo hará
eternamente. Así de terco es— Jin Zixuan lo mira de nuevo aún más enojado que antes —Siempre me
pregunté ¿Qué es lo que realmente quiere el Emperador? ¿Qué es lo que tanto busca? Nunca estuve
realmente seguro hasta hoy. No te conozco, no recuerdo quien eres, pero estoy completamente seguro de
que eres a quien busca y por el bien de a quien considero mi soberano y amigo más cercano, no permitiré
que te marches de aquí hasta escuchar la historia completa o me borres el hechizo y así poder recordar por
mi cuenta— La espada se acerca más a su cuello como una amenaza clara —Tu escoges.

Wei Wuxian observa la filosa espada que amenaza con desollarlo y suspira para sus adentros. El hechizo
no puede ser restaurado. Ya lo ha intentado bastante en el pasado, sin éxito alguno. Vuelve a observar la
firme postura del Jin. Parece que no tiene más opción...

.
.

Un poco después...

—Eres un idiota.

Wei Ying respiró lentamente y miró al de ropajes dorados directamente a los ojos después de que habló —
Hice lo que consideré mejor para protegerlo, puse el legado del Emperador y el reino primero... Entiendo
por qué el sacrificio de Lan Zhan ese día, al igual que mi propio sacrificio todos estos años... ¡Pero por
amor a Dianxia, no me pidas que simplemente salte felizmente hasta su lado, cuando el reino entero me
considera un ser maldito y han demostrado estar dispuestos a todo con tal de sacarme del mapa. No me
pidas que arriesgue la seguridad de mi Zhiji cuando es lo único que me queda en el mundo, no me pidas
que ignore el mal que le puede ocasionar mi presencia a su lado ¡Nunca me pidas que haga tal elección!
No puedo y no lo haré, terminó en un susurro.

Jin Zixuan volvió la vista para mirar directamente al cielo —Gracias por borrar el hechizo y permitirme
recordar lo que había olvidado. Ahora varias cosas que no lograba comprender, por fin tienen un poco de
sentido— Volvió de nuevo la vista al de ropajes negros —Comprendo lo que dices pero sigues siendo un
idiota —Wei Ying lo mira con expresión neutra. No necesita que le digan algo que ya sabe. —Entiendo lo
que dices pero es la propia elección del Emperador lo que él decida hacer, siempre. No tienes permitido
decidir por él, no puedes decir que te alejas de él para protegerlo cuando él claramente ya declaró que son
almas gemelas y se ha demostrado que de una u otra forma, el destino los volverá a juntar.

Zixuan envaina su espada y se da vuelta dispuesto a marcharse —El consejo de ancianos en el reino tiene
sus fallas, por no decir que las fallas son del reino completo. La gente solo alienta los rumores y fue el
concejo quien se encargó de propagarlos... No me enorgullece decir que no he actuado con la suficiente
fuerza para detener las injusticias que se cometieron y que aún se comenten. Tampoco puedo justificar tus
acciones, pero... —El Jin lo vuelve a mirar una última vez— Realmente creo que merecían lo que les
hiciste y no deberías cargar con una cruz como la que sostienes, solo por nacer diferente.

Wei Yin lo mira atónito. Nunca se esperó que esas palabras vinieran del Jin. En el pasado tuvo poco de
tratar con él y siempre le pareció un pavo real desfilando al lado del Emperador, pero escuchar su
franqueza en este momento, ciertamente lo deja un poco desconcertado.

—No voy a guardar tu secreto porque estoy seguro que de igual forma, lo que sea que hayas hecho, se te
está saliendo de las manos y el emperador incluso ya empieza a recordar. Esperaré un momento
oportuno... Hasta entonces, te recomiendo que hagas las paces con tus demonios, porque te lo aseguro, de
una forma u otra, el emperador vendrá por ti. En el pasado ya te declaró como suyo una vez, aún por
encima del reino entero... Por lo que he podido observar, dudo que esta vez sea diferente.

Con esas últimas palabras, el Jin se fue, dejando a un muy angustiado Wei Wuxian solo en la penumbra de
la noche.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Todavía era temprano cuando llegó al campo de batalla. Zarcillos de sombra se deslizaban por el suelo,
dibujando una niebla fría y oscura que se extendía a través y delante del ejército real.
Lan WangJi no pudo evitar un escalofrío que le recorrió el cuerpo entero. Había varios Wen esparcidos en
el suelo mientras se acercaban, sus cuerpos difícilmente reconocibles. Parece que ni siquiera tuvieron
tiempo de hacer nada, antes de ya ser desmembrados y esparcidos por todo el lugar. Todo aquello le
parecía mal hasta cierto punto, pero lo único que podía hacer era mirar, atento y vigilante. Ya sabía de
quién era esta obra.

Una semana completa, su ejército logró abrirse paso hacia el enemigo sin mayores obstáculos. El Yiling
Laozu como todos le llaman, estaba bastante descontrolado en esta última semana, adelantándose en cada
batalla, tomando los campamentos de Wen con poco aviso, masacrando, y avanzando sin restricción
alguna, dejando apenas unas pocas tropas para que se encargara el ejército de Gusu.

Desde el frente, donde se encontraba dirigiendo sus fuerzas, llegaban ecos de gritos, el tintineo de las
armas y ese nauseabundo hedor de la carne podrida. Había caos, sangre y barro por todas partes, sus ojos
se movían de un lado a otro, tratando de ver más allá de unos pocos metros por delante para poder
visualizar la situación antes de que los alcanzara.

Era bien sabido que el Yiling Laozu utilizaba a su ejército de muertos para atacar al enemigo, aunque
nunca fue tan abiertamente sanguinario como en los últimos días. Casi como si tuviera prisa...

La niebla se levantó de nuevo a la orden de la flauta fantasmal, avanzando y ocultando a sus tropas. La
niebla, la mayoría del tiempo recorría el campo de batalla, dándole vida a los cadáveres que perecían a
cada minuto y brindándole al ejército de Gusu algo de cobertura al mismo tiempo, para avanzar sin
restricciones. Aun así, con la gran ventaja que les estaba brindando el ejército de muertos, Lan WangJi se
mantuvo preparado, dispuesto a enfrentarse a lo que sea que los Wen les arrojaran.

El problema de la niebla era que también le dificultaba la visión, por lo que muchas veces su adelanto en
la batalla era lento y cauteloso. Así que tardó un poco en darse cuenta de que ya no se oían los ruidos de la
batalla que tenían delante.

Sus fuerzas se encontraban dispuestas al otro lado del campo, a la derecha e izquierda de su posición,
manteniendo esa línea mientras los muertos vivientes barrían el lugar y, con suerte, el mismo, lograría
avanzar hasta el sonido de la flauta que se encontraba rompiendo las líneas enemigas.

Cuando 2 figuras altas se abrieron paso en medio de la neblina, ya estaba al borde de la línea de combate.
Eran 2, una vestida de blanco con rojo y otra persona muy familiar, vestida de negro.

En ese momento estaba frente a su Zhiji que tocaba el dizi, comandando las tropas que luchaban al otro
lado donde su ejército combatía al resto de los Wen y sobre su flanco derecho, se encontraba en posición
de ataque, lo que parecía ser el primer príncipe del reino Wen, Wen Xu.

Cuando terminó de tocar y las filas de los muertos se retiraron, todo lo que quedó fue el desorden
sangriento y varios miembros descuartizados esparcidos por ahí.

Su primera reacción fue lanzar un hechizo de ocultamiento. Intentar acercarse, sin ser detectado, podría ser
el mejor juego de acción por el momento. Las dos personas frente a él detuvieron su ataque, así que se
limitó a permanecer en silencio, mientras el ambiente entre ellos se volvía cada vez más tenso.

—Yiling Laozu, que honor por fin encontrarlo en batalla. Debo admitir que los rumores de su poder,
verdaderamente le hacen justicia.

Se logró escuchar al príncipe Wen, mientras el Emperador continuaba avanzando sin ser notado.

El de ropajes oscuros, solo le devolvió una mirada hostil sin contestar a las palabras dichas.

—Diría que vine en son de paz pero viendo como arrasaste tú solo con mi ejército, debería mejor
considerar mis palabras —El Wen sonríe tratando de ser amigable, sin éxito —Seré directo contigo, mi
padre, el Emperador Wen Ruohan me envió específicamente a esta batalla por ti.

El Emperador detuvo su avance en seco al escuchar estas palabras. Al mismo tiempo, Yiling Laozu tuvo el
más mínimo movimiento en sus ojos, como si también le sorprendieran las palabras dichas.

Tal como si leyera su expresión, el Wen continuó hablando mientras su sonrisa se ampliaba más —Es
curioso que te sorprenda ya que de hecho, pareces muy entretenido volteando la balanza en esta guerra en
favor del imperio de Gusu con una quizás extrema facilidad... Y a eso se debe mi participación el día de
hoy.

El cultivador demoníaco dirigió su mano a la espada con intención de no escuchar nada más del Wen, pero
fue detenido nuevamente por este mismo.

—¡¡Espera!! Tengo una propuesta, no es necesaria la hostilidad, si me permite hablar primero —el Wen se
defendió tratando de llevar una conversación, en lugar de otra batalla —Mi padre desea que te unas a
nuestro reino en Qishan.

Tanto Lan WangJi como Wei Wuxian se congelaron.

—Como parte de la oferta, mi padre está dispuesto a regalarte uno de sus más lujosos castillos y todo el
personal que desees tener a tu servicio. También, puedes solicitar la cantidad de oro que desees y pondrá a
tu disposición las más bellas doncellas de todo el reino para conformar tu propio Harem y le sirvan como
desee —Al ver que el hombre frente a él no dice nada, continúa con su discurso. —Es bien sabido que
solo la realeza posee su propio Harem, pero si decides aceptar, padre está dispuesto a otorgarte el más alto
puesto entre la nobleza del reino e incluso podrías pasar a ser su hijo adoptivo.

El mundo que los rodeaba se desvanecía en un silencio sepulcral. Ante lo dicho, Yiling Laozu no puede
evitar que una pequeña sonrisa comience a formarse en su rostro.

El Wen toma esto como una respuesta positiva a su propuesta —Puedes pedir lo que desees y te doy mi
palabra en nombre del emperador que todo te será concedido.

—Aiyaa!! que interesante todo lo que dices Maestro Xu —El cultivador demoníaco vuelve a dirigir su
mano hacia la espada en su costado. —Una risa estruendosa escapó de su boca —Como el infierno, esto es
tan divertido, porque de hecho, si hay algo que deseo —hizo una pausa, mirando atenta y afiladamente a
Wen Xu por un momento —Lo cual es... probablemente algo que obtendré en poco tiempo.

Wei Ying dió unos pocos pasos para acercarse más a él y sonrió —Verás Maestro Xu, mi único deseo para
tu Emperador es que mi espada... —El sonido metálico de su espada, siendo desenvainada, fue rápido y
estridente —Atraviese su corazón al igual que su núcleo dorado, y después proceder a desmembrar cada
una de las partes de su cuerpo.

Wen Xu dio un paso atrás, su rostro habiendo perdido todo el entusiasmo anterior —Piensalo bien, Yiling
Laozu, el reino de Gusu se caracteriza por su hipócrita seguimiento de las reglas. ¿Qué te hace pensar que
una vez que ganes la guerra por ellos, no te darán la espalda y te señalarán como enemigo del mundo del
cultivo, solo por tus prácticas poco ortodoxas?

La expresión del cultivador demoníaco volvió a ser sombría.

—Piensalo bien, el prístino Emperador Lan, tan justo y recto como es, no se detendría a defender a un
hereje del cultivo demoníaco, su gobernante es tan hipócrita como su pueblo. En cambio, en Qishan, tus
dones serían alabados y enaltecidos, el poder lo es todo, no importa como se obtenga. —Wen Xu volvió a
sonreír creyendo volver a tener la atención del cultivador demoníaco.

La espada firmemente clavada en su pecho, fue un claro indicio de su equivocación.


—El justo y prístino Emperador Lan, Lan WangJi, HanGuan-Jun, el Emperador dragón, es el único
hombre en el mundo, en esta vida y en todas las vidas, ante el cual me inclinaré. —La energía resentida los
envolvió mientras sangre escurría del pecho y la comisura de la boca de Wen Xu. Su espada fuertemente
clavada en el pecho, giraba desgarrando la carne. Wen Xu le devolvió la mirada con horror mientras la
vida se le escapaba del cuerpo.

Con filosos zarcillos de energía, el cuerpo del primer príncipe Wen, fue desgarrado al final, quedando en
pequeños pedazos de carne, esparcidos en el suelo.

Wei Wuxia solo se quedó observando el cadáver por un corto momento antes de que su brazo fuera
sujetado en un agarre firme.

—Lan Zhan— El nombre salió de sus labios suavemente, mientras volvía la vista, para conectarla con la
del Emperador que lo sujetaba fuertemente del brazo, casi como si este temiera que se le escapara en el
momento de parpadear.

Su rostro, desprovisto de la máscara que anteriormente usaba en cada batalla, contenía una expresión tan
suave, cuando oro y plata se encontraron, ambos orbes transmitiendo tantas emociones que no lograban ser
contenidas enteramente.

El emperador le devolvió la mirada con el doble de intensidad, tanto, que el cultivador demoníaco tuvo
que hacer un gran esfuerzo por no retorcerse en el agarre que aún sostenía su brazo.

—Wei Ying...

.
Capítulo 9

—Wei Ying...

Wei Wuxian sintió un escalofrío recorrer su columna vertebral ante la vibración de su nombre, saliendo de
los labios de Lan WangJi.

Antes de siquiera entender qué está pasando, Wei Wuxian se mueve rápidamente hacia atrás, justo a
tiempo para esquivar a Bichen ,lejos de su lado vulnerable. Lan WangJi continuó con su ofensiva, usando
el impulso para maniobrar hacia el frente y volver a atacar.

—¿¡Lan Zhan!?

Sin embargo el emperador no le contestó, solo prosiguió con el gran torrente de ataques. Wei Wuxian al
ver que no pensaba hablar, solo pudo sacar también su espada y defenderse de los ataques del Emperador.

No había posibilidad de explorar mejor la situación, Lan WangJi atacaba de forma cruda y sin piedad, con
una velocidad increíble. Deslizándose fuera de la línea directa del golpe, Wei Wuxian solo se concentraba
en esquivar cada ataque.

Bichen rozó a Suibian con el filo directo, creando un sonido agudo y estridente, perjudicando la
estabilidad del agarre de Wei Wuxian en la más mínima cantidad.

Wei Wuxian decidió usar una combinación rápida de estocadas para atacar a Lan WangJi en rápida
sucesión, dando por fin inicio a su ofensiva y usando su velocidad, pudo obligar a Lan WangJi a volverse a
la defensiva.

Lan WangJi ni siquiera vaciló.

Al darse cuenta de que Wei Wuxian lo supera en agilidad, el Emperador adaptó rápidamente una postura
diferente, convirtiendo su cuerpo en una fortaleza impenetrable, girando y maniobrando en su lugar,
bloqueando cada ataque con un tiempo de reacción sobrehumano.

Sabía que el Emperador tiene una fuerza sin igual y esperaba que no se cansara antes terminar con esto, así
que viéndose en desventaja, optó por apoyarse en la energía resentida para fortalecer sus ataques
ofensivos, ya que la velocidad y fuerza de su ataque actual, no podían mantenerse indefinidamente.

Lucharon como si fueran dos emisarios de los cielos. El campo de batalla estaba envuelto en silencio. Sólo
el crujido de las espadas chocando llenaba el aire. Ambos completamente sumidos en el calor de la pelea,
el sudor corriendo por sus frentes y cuellos, sus movimientos seguros y precisos, ojos penetrantes, y
brazos tan fuertes como el acero.

Fue increíblemente maravilloso.

Wei Wuxian estaba extasiado. Esto era... Esto era igual a los viejos tiempos, cuando El Emperador lo
incitaba a que practicarán justos con la espada. Su Zhiji todavía era mucho más rápido y fuerte que
cualquier otra persona con la que Wei Wuxian hubiera peleado y si no se estuviera ayudando con el cultivo
demoníaco, no cree posible hacerle frente a Lan WangJi y atacar de vuelta cada vez.

Wei Wuxian casi pensó que había vuelto al pasado, cuando todo era más simple, cuando era feliz...
Cuando era amado. Su corazón latía con fuerza y sentía que su núcleo dorado latía de satisfacción por la
tensión de recibir a al emperador en una ofensiva tan agresiva, prácticamente rememorando el pasado, con
una danza de marcial.
Sus espadas chocaban entre sí con fuerza una y otra y otra vez. Se sintió increíblemente en sintonía con la
energía espiritual de su núcleo dorado y la energía resentida de su núcleo oscuro. El impulso de sus
emociones lo hizo aún más rápido e incluso más preciso y casi logró maniobrar detrás de Lan WangJi, este
último volteándose hacia atrás en el último momento y empujándolo con fuerza en el hombro sin darle
oportunidades de acercamiento.

Wei Wuxian se vio obligado a rodar sobre su hombro para evitar un choque brusco en el suelo cubierto de
sangre. Tan pronto como logró enderezarse, Lan WangJi ya estaba avanzando de nuevo, usando sin
esfuerzo su cultivo, derramando más ataques y Wei Wuxian cambió rápidamente a su izquierda durante un
giro de evasión para detenerlo mejor, dejando escapar una risa encantada.

La pelea continuó así por un tiempo.

El sudor perló las sienes de Wei Wuxian en poco tiempo y vio que el emperador no estaba mucho mejor
que él. Los dos podían maniobrar una y otra vez, pero nunca era suficiente para terminar las cosas. Los
ojos del emperador parecían brillar, la furia en su aguda mirada y la adrenalina consumiendo el cuerpo
entero de Wei Wuxian, hacía que el lúgubre campo de batalla pasara de su oscuro estado tétrico a una
ráfaga de caliente de excitación que golpeaba el cuerpo de ambos luchadores.

Wei Wuxian voló hacia adelante y Lan WangJi se dio la vuelta al mismo tiempo, movimientos cada vez
más ásperos y animales.

De repente, ambas espadas se posaron en sus cuellos, deteniéndose a milímetros de cada uno.

Los ojos de Lan WangJi ardían, devorando el cuerpo de Wei Wuxian con sus abrasivas llamas doradas.
Wei Wuxian tragó en seco.

Bajando ambas espadas, Lan WangJi y Wei Wuxian se inclinaron, sus labios uniéndose en un abrasador
beso que casi les robaba el alma. Inundado de tantas emociones, la boca del emperador era fuego fundido
mientras se presionaba contra la de Wei Wuxian, fusionando sus cuerpos sin reservas.

Tantas emociones reprimidas, tanto que no podía ser contenido. Todo el amor, la desesperación y el miedo,
aplastándolo efectivamente sin forma de poder escapar... Wei Wuxian sabía que pronto tendría que
enfrentar las mismas cosas de las que había huido, pero por el momento, iba a dejar que Lan Zhan lo
besara hasta perder por completo el aliento y por ahora, podría fingir que el mañana no tenía que llegar.

Cuando se separaron, ambos jadeaban por aliento. Wei Wuxian cuenta los latidos de su corazón mientras
sus ojos encuentran los del emperador, sus ojos, oscuros y penetrantes a la luz del sol. Sus labios se abren
un poco y los ojos de Lan WangJi instantáneamente gravitan hacia ellos.

Y, silencio.

El único sonido en el lugar, es la suave brisa del viento y su propia respiración pesada. Los latidos de su
corazón se aceleran con cada segundo que transcurre y... Es demasiado. Demasiado abrumador. Todo
acerca del emperador, parado inamovible, justo enfrente de él, es de alguna manera peligroso. La tensión
en su mirada fluye de alguna forma, fuerte, pero contenida.

Wei Wuxian no está seguro de que decir cuando el emperador extiende su mano hacia adelante lentamente
y la posa en su mejilla.

—La-Lan Zhan... — trató de decir más, pero sus palabras no salieron al ver la mirada dolida en los ojos
del emperador.

—Trato de salvarte... De protegerte ¿Y lo primero que se te ocurre hacer es abandonarme?


Wei Wuxian sintió como si mil espadas atravesarán su corazón. Bajó la vista al suelo, sintiendo como todo
en su interior se derrumbaba —Yo... Yo soy el culpable de todos tus males. Lo hice para que pudieras
vivir.

—¿¡Y qué vida es esa!?

Wei Ying no pudo evitar volver la vista al emperador, sorprendido de que le haya levantado la voz. El
hermoso e imperturbable hombre que tenía delante, que nunca se veía afectado sin importar la situación,
ahora lo observaba con sus profundos orbes dorados, dirigiéndole la mirada más rota que jamás haya visto.

—¿Qué razón hay para vivir así, Wei Ying? Cuando mi alma entera te pertenece.

Sus palabras fueron suspendidas en el aire. Wei Wuxian podía mirar claramente el dolor en las emociones
de Lan WangJi, y eso llegó a él como un torrente de dolor agudo en su corazón.

Wei Wuxian se encontró a sí mismo llorando sin poder contenerse, las palabras del emperador lo
quemaban como hierro caliente en su garganta. "Yo no lo merezco". Trató de respirar profundo unas
cuantas veces. Todo dolía. Él cerró sus ojos y pensó en aquel día, en sus decisiones, en las consecuencias
de esas decisiones.

Hizo lo posible para menguar las voces coléricas dentro de su cabeza, voces que estaban llenas de odio
hacia él. Merezco sufrir por aquella luz brillante que apagué.

Lan Zhan siempre lo protegió, siempre lo puso primero en su vida. Nunca le pedí que lo hiciera, el... Él lo
hizo por amor. No, esto no fue solo amor. Esta fue una adoración completa y alucinante. Esta fue una
devoción y entrega absoluta. Todas las promesas, los años pasados juntos y amor compartido. Él no... Él
no quería que me fuera, me hubiera detenido cuando lo hice pero... Nunca le di una oportunidad para que
lo hiciera.

¿Qué he hecho?

¿Qué he hecho?

¿Qué he hecho?

¿QUÉ HE HECHO?

—Lan Zhan...—Wei Ying no dejaba de llorar.

El Emperador limpió suavemente las lágrimas derramadas en la mejilla de su Wei Ying y suspiró
pesadamente. De cualquier forma, odiaba ver la expresión que su Zhiji tenía en éste momento. Jin Zixuan
tenía razón, su amado es un idiota aunque sigue siendo sú idiota y eso no va a cambiar nunca.

Se inclinó suavemente, dejando un corto beso en los labios del menor que rápidamente fue correspondido
y luego se dió la vuelta para alejarse, dando dos pasos y luego se detuvo —Si 100 veces huyes de mi, Wei
Ying, 100 veces te perseguiré. Tu vida, tu cuerpo y tu alma, me pertenecen— El emperador volvió
ligeramente su torso para mirar brevemente a Wei Ying que seguía inmóvil en su lugar. Sus ojos lo
miraron fuertes y penetrantes —¡Que no se te olvide nunca!— Con eso regresó la vista al frente, envainó a
Bichen que aún descansaba sobre su mano y se alejó con pasos imperturbables.

Wei Wuxian solo se quedó estático en el lugar, mirando la alta figura del emperador alejándose. Su rostro
rojo como un tomate, sus piernas débiles a punto de colapsar, su corazón latiendo a mil por hora y su
cabeza vuelta un desastre de pensamientos y sentimientos.

Lan WangJi continuó su camino para encontrar a los soldados y volver al campamento. Sabía que Wei
Ying volvería también en algún momento, no tenía sentido arrastrarlo con el ahora. Había muchas cosas
que debían ser aclaradas pero con los sucesos de los últimos días, y el peso de la guerra encima de él, no
tenía caso presionar más la situación por ahora. Ya esperó 13 años, podría darle un breve momento más
mientras soluciona todo. Pero llegado el momento, no lo iba a dejar ir nunca, "Yo soy tuyo Wei Ying, y tu
eres mio, eso no va a cambiar nunca" pensó para sus adentros el emperador y continuó su camino.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
—¿Qué estás haciendo?— Pregunta mientras apunta con su espada en la garganta del sujeto.

—Heredero Jiang— Se inclina a modo de saludo —Por favor, no es necesaria la hostilidad, solo estaba
buscando unos documentos que el príncipe Lan Xichen me ha pedido.

—Meng Yao ¿Cierto?— Baja su espada un poco dudoso. Su ceño se frunce profundamente —¿Qué podría
necesitar el primer príncipe? para enviar a alguien a buscar información en los planes de batalla de mi
familia justo en nuestra oficina privada. —Pregunta en Jiang mientras observa los papeles en las manos
del Asistente Nie

—Lamento mucho la invasión pero no habiendo nadie, me tomé la libertad de buscar yo mismo lo que se
me encomendó, espero no se ofendan y entiendan la privacidad en las decisiones de la familia real—
Respondió tranquilamente el asistente Nie mientras se dirigía a la salida.

Jiang Wanyin solo lo observó en su salida y cuando estaba por atravesar la entrada de la carpa, volvió a
extender su espada para detenerlo —¡Aguarda!— El Nie le dirigió una mirada...

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Dos días después, campamento real - Reunión del consejo de guerra

Los principales generales del emperador, oficiales de alto rango, consejeros, asistentes y sirvientes, se
encuentran reunidos mientras se discuten los últimos acontecimientos de la guerra en proceso. La única
presencia que faltaba en la sala de guerra, es el Emperador HanGuang-Jun quien estaba próximo a llegar.

Mientras tanto los diferentes implicados realizan avances de los temas a discutir en lo que respecta a la
guerra, y como foco central de la discusión, estaba el renombrado Yiling Laozu y sus cuestionables
intenciones por ganar la guerra para el reino de Gusu.

Jin Zixuan que se encontraba presente, ha estado callado durante toda la discusión, nada más que
observando cada dos minutos al sirviente de la familia Jiang que también se encontraba presente, en su
puesto de servidumbre como se supone que es debido.

—¿Qué importan sus métodos?, está ganando la guerra, ¿no es eso lo que debería importarnos a todos?

—Sus métodos importan— Contesta el Consejero real Lan Qiren — Terminada la guerra, ¿hacía dónde
quedará dirigida esta maldad? Además...— Dirige su mano para acariciarse la barba de forma
contemplativa —sin saber sus verdaderas intenciones, cómo podemos estar tranquilos, sabiendo que allá
afuera hay una sola persona, capaz de arrasar con su propio poder sin problema alguno, con el ejército
Wen, cuando a nuestras fuerzas les ha tomado meses mantener la lucha.

—Si está volteando la balanza de la guerra a nuestro favor, significa que está de nuestro lado, eso ya habla
de sus intenciones. Podría ser un soldado de Gusu que honorablemente quiere ganar la guerra pero se
oculta por su... Cultivo.

—¿Qué tiene de honorable levantar a los muertos para que peleen por ti?

—El punto es que parece estar de nuestro lado.

—¿Por cuánto tiempo lo estará?— Lan Qiren da un paso al frente —Esa es la cuestión.

Los presentes guardaron silencio, sabían que esta era una cuestión importante pero no se podía evitar
pensar que los ánimos nuevamente se levantaban en esta maraña de muertes. Este Yiling Laozu, quien
quiera que sea, les está abriendo un gran camino a la victoria, y era una luz, que no habían saboreado,
prácticamente desde que comenzó la guerra.

Jin Zixuan, que aún se encontraba callado al fondo del lugar, solo suspiró. No cree saber realmente cómo
intervenir en esta discusión y mucho menos sin saber las acciones que tomará a partir de ahora el
emperador para con su... Realmente no sabe que son o serán ahora. Vuelve a suspirar y observa de nuevo
al de hecho mismísimo Yiling Laozu del que todos hablan sin saber que está presente en el lugar
escuchando todo lo que dicen.

Dos de los sirvientes personales de Lan, ingresan mientras levantan las cortinas para dar paso al
Emperador que por fin se une a la reunión prevista —¡El emperador está aquí!

—Saludos al Emperador, HanGuang-Jun— Saludan todos los presentes mientras se inclinan ante el
Emperador. Este solo continúa su camino está el trono dispuesto para él en el lugar.

—Pueden levantarse— Exclama el emperador.

Un sirviente da un paso al frente para poner un contexto general de la reunión y lo que se ha discutido
hasta el momento para que el emperador pueda tomar postura frente a la situación.

Varios minutos después, la temperatura de la sala descendió varios grados.

—S-su majestad, podría iluminarnos con su sabiduría para tomar acciones frente a este individuo—
Pregunta vacilante uno de los oficiales Jin presentes.

Lan WangJi podía ver desde su lugar, que Wei Ying de hecho se encontraba presente en la reunión. Este no
había levantado la vista para verlo en ningún momento desde que llegó a la sala, aunque esto no se podía
evitar ya que este parece querer pasar como un simple sirviente.

—Hace dos días tuve un breve encuentro con Yiling Laozu en el campo de batalla.

Todos dirigieron una mirada de temor ante las palabras dichas por el Emperador. —Majestad, ¿se
encuentra bien?— Habló primero el general de oriente, seguido de los demás generales.

—Esta persona no es un peligro para el reino— Declaró el Emperador en tono firme.

—Majestad...—Trató de hablar el Consejero real pero el emperador continuó hablando.

—Yiling Laozu ha declarado abiertamente sus intenciones de derrocar al imperio Wen. Estas mismas
intenciones, siendo sustentadas con la acción de asesinar al primer príncipe y heredero del imperio
enemigo, Wen Xu. Todo esto ocurrió sin que él, fuera consciente de mi presencia en el lugar y esta persona
es de hecho un ciudadano de Gusu—. Declaró finalmente el Emperador, dejándolos a todos aún más
conmocionados.

Todos los presentes permanecieron en estado de shock, no esperando que de hecho el Heredero del
Imperio Wen y Principal General de las tropas enemigas, haya caído de la nada, justo a los pies de este
misterioso individuo. El General de oriente que hace 2 meses fue derrotado en batalla y se vió en la penosa
necesidad de retirar sus tropas, estaba más que conmocionado y en cierta forma indignado. Parece que una
revancha ya no será posible.

—Majestad, esta persona le indicó ¿cuál será su siguiente movimiento? —preguntó un poco osadamente el
estratega militar del general Nie.

—¡HuaiSang!— Regañó su hermano aunque él también deseaba saber esto.

El Emperador dirigió su mirada de Nie HuaiSang hasta Wei Ying que disimuladamente estaba levantando
la vista, justo para encontrarse con los ojos dorados observándolo fijamente.

—Me reuniré de nuevo con él para planear un ataque conjunto en la próxima batalla. La guerra está
llegando a su fin.

—¡¡¡MAJESTAD!!!— Prácticamente todos en la sala exclamaron horrorizados.

—Majestad, debo pedirle que por favor reconsidere —Lan Xichen habló tan pronto como las
exclamaciones terminaron. Ha seguido de cerca a su hermano durante todo el transcurso de la guerra y
sabe que se ha vuelto cada vez más osado, sin importarle su seguridad.

—Su Majestad, es pertinente recordarle que es usted el soberano de este reino y no es debido que usted
arriesgue su vida de esa forma. Como Emperador, su deber es dirigir, y aquí los generales presentes, con
gusto estarían dispuestos a colaborar con este... Hombre, para el ataque previsto —El consejero real apoyó
rápidamente las palabras dichas por Xichen, con argumentos más sólidos. Estando de acuerdo con utilizar
al cultivador demoníaco pro sin comprometer la seguridad del Emperador.

Desafortunadamente el emperador pudo percibir la nota de desagrado que su tío usó al dirigirse al hombre
en cuestión. Ciertamente no confiaria en la mitad de los presentes para mandarlos en un ataque coordinado
con Wei Ying, teniendo presente que la mayoría podría intentar deshacerse de él en la menor oportunidad.

—¡Zixuan!— El emperador habló. Este último se inclinó rápidamente para recibir la orden —Estarás
conmigo en todo momento— Volvió a dirigir una mirada general al lugar —Sólo Jin Zixuan tiene
permitido participar de esta operación—. Declaró el Emperador sin dejar espacio para réplicas.

—WangJi...— Trató de hablar nuevamente su hermano.

—¡Yiling Laozu!— El emperador lo interrumpió y se puso de pie imponente. Wei Ying sintió que se le
erizaba la piel por la forma en que el emperador pronunciaba su título —Nadie, absolutamente NADIE,
tiene permitido atacarlo de ninguna forma— Cada palabra salía afilada de los labios del emperador, con
una nota de amenaza claramente implícita —desobedecer mi mandato, incurrirá en el peor de los castigos
y lo juro por mi mano que ¡Yo mismo lo haré cumplir!

Todos los presentes en la sala se inclinaron rápidamente mostrando aceptación a las palabras del
Emperador. Sabían que refutar ahora, sería condenar sus propias vidas.

Wei Ying se inclinó al igual que todos, su corazón latiendo con tanta furia que teme ser escuchado por los
demás presentes.

La reunión continuó con los presentes. Se discutieron los términos de las próximas batallas y algunas
estrategias a tener en cuenta. Nie HuaiSang, la mente maestra llevaba la dirección en toda la conversación,
haciendo los planes pertinentes que si todo sale bien, los llevaría a la victoria en poco tiempo.

Los sirvientes aún presentes en el lugar, se encontraban caminando por toda la sala, sirviendo té y
ayudando en todo lo que era debido, según las órdenes de sus amos. Wei Ying con gran dificultad, trataba
de controlar la sensación de picazón en su cuello. La profunda mirada del emperador lo seguía en cada uno
de sus movimientos y ciertamente podía sentir como le perforaba la piel. Realmente le parecería increíble
si al menos una persona de todos los presentes no lo hubiese notado ya.

Y así, los planes para la guerra finalizaron exitosamente. Los funcionarios de menor rango comenzaron
muy lentamente las despedidas y se dispusieron a salir para proceder a sus respectivos descansos después
de un día de estrategias y fuertes emociones, mientras que los generales y altos funcionarios continuaron
un momento más acompañando al Emperador, charlando de forma casual y naturalmente.

Con su último servicio listo esa noche, los sirvientes procedían a salir. Wei Wuxian, como sirviente de la
familia Jiang, estaba preparando su última taza de té para Madam Yu, mientras que la conversación de
fondo procedía de forma tranquila.

—Su Majestad, he dispuesto a una de las doncellas para que le sirva está noche. —Comenta de la nada
uno de los consejeros del emperador— Estamos es una fecha auspiciosa para un heredero.

Ante este comentario, Wei Wuxian tropieza con sus pasos sin poder evitarlo, perdiendo un poco del
líquido que se encontraba sirviendo, derramando sobre la vestimenta de la Madam.

Casi en el acto, Madam Yu le propició un fuerte latigazo que resonó en toda la sala, haciendo que
el sirviente cayera de bruces en el suelo —Sucia rata, no sirves para nada— Gritó enfurecida la mujer, al
mismo tiempo que levantaba su mano para dar otro golpe con el látigo.

El silencio se extendió como un eco en aquel lugar. Madam Yu al igual que todos los presentes, perdieron
todo color de sus rostros. En algún momento y a una velocidad completamente sobrehumana, el
Emperador se desplazó y atajó el látigo con su propia mano.

—Vuelve a hacer eso y juro por los Dioses que esto será lo último que hagas en esta vida y en las
siguientes.

.
Capítulo 10
Chapter Notes
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La tensión envuelve por completo la sala. Yu ZiYuan retrae prontamente su anillo pero este es rápidamente
arrebatado por las ágiles manos del emperador. Ella sin saber qué más hacer, se inclina en forma de
sumisión ante el emperador. Los demás siguen su ejemplo rápidamente.

—Ésta se disculpa con el Emperador. Nunca tuve la intención de perturbar su calma majestad...

El emperador no dignifica eso con una respuesta, en cambio aprieta más fuerte el anillo en sus manos,
mientras su atención se ha dirigido a donde Zixuan ayuda a su Wei Ying a ponerse de pie. Sus nudillos se
ponen de color blanco por la fuerza ejercida.

Wei Ying por otro lado, levanta la mirada y puede ver claramente la herida que logró dejar el látigo en la
mano del Emperador. Un fuerte sentimiento de molestia lo atraviesa y comienza a emanar un aura oscura
sin poder contenerla —Eso no era necesario...—Habla bajito con los dientes apretados y levanta un poco
más la mirada para conectarla con la del Emperador. Observa el profundo ceño fruncido de este y entiende
que lo mejor es callarse y controlar sus emociones.

—Zixuan— habla el Emperador. —Saca la mujer que han llevado a mis aposentos. Los demás...—El
Emperador le dirige una mirada oscura a la mujer frente a él— General del sur, campo oeste, al alba
mañana, ¡Todos pueden irse!

Todos se inclinan una vez más bastante incómodos. El campo oeste es la zona del campamento designada
para los castigos que se le realizan a los infractores dentro del ejército. Ninguno se esperaba que el
emperador estuviera dispuesto a castigar a una General solo por agredir a un sirviente. Y menos un castigo
público.

Terminada la reverencia, todos se disponen a salir sin hacer contacto directo con quienes permanecieron
dentro de la carpa. Wei Ying también hace ademán de querer salir pero una mano sobre su brazo lo
detiene. El menor solo levanta levemente la vista y puede interpretar fácilmente que el emperador no le
permitirá irse ahora y será mejor que no lo intente nuevamente tampoco.

Así llega la noche. Después de la celebración la mayoría han regresado a sus habitaciones para descansar.

Cuando llegaron a los aposentos del emperador, Lan WangJi esperó hasta que Wei Ying entró por delante
de él y lo siguió después, cerrando la cortina detrás para después mirarlo directamente. Inmediatamente
tomó su mejilla y se inclinó para darle un beso profundo, uno que le recordaría a Wei Ying todo lo que
siente por él, el ardiente deseo que Lan WangJi siente por él y apenas puede contener. Luego, se apartó
muy suavemente y dejó un beso prolongado en su frente, para recordarle al menor, el pozo sin fondo que
representa su afecto. Lan WangJi siempre fue malo para expresar cómo se siente, pero esperaba que sus
acciones lo mostraran alto y claro.

Cuando estaba preocupado por lo que sucedería cuando se rompiera el hechizo y tuviese que enfrentar al
Emperador de nuevo, este no era un escenario que tenía en mente. Pensó que habría una pelea,
ciertamente, creyó que lo odiaría y despreciaría por sus elecciones, pero no esperaba que fuera un
encuentro amistoso, por decir lo menos. No esperaba este amor, no esperaba tanta ternura y delicadeza, y
definitivamente no esperaba que Lan Zhan se sentara y lo observara con tanta adoración.

¿Era inevitable que Lan Zhan se volviera a enamorar de él, una vez que pasara el hechizo?
"Es mi alma gemela", respondió una pequeña voz en su cabeza. Enamorarse de Lan Zhan se sintió
ciertamente inevitable, porque sus almas estaban unidas. Eso Wei Ying si lo tenía claro. En cualquier vida,
Wei Wuxian siempre elegiría a Lan Zhan, estaba seguro de eso.

—Te extrañé cada segundo— dijo, porque no sabía qué más decir. El Emperador aún lo observaba
intensamente.

El Emperador vuelve a posar una mano sobre su mejilla.

—Vuelve a Gusu conmigo— dijo Lan Zhan.

Después de esconderse por tanto tiempo y solo controlar cadáveres desde las sombras, protegiendo a su
preciosa zhiji, casi había olvidado la gran habilidad que tenía Lan Zhan de voltear todo su ser, solo con
unas pocas palabras... Con unas pocas caricias.

El Emperador lo convierte fácilmente en el centro del mundo y Wei Ying lo retribuye con la misma
devoción.

Jin Zixuan que desde un comienzo se encontraba dentro de la carpa del Emperador esperándolos, los deja
hablar. No interrumpe, solo escucha, con la mirada fija intensamente en una pared lateral, y confía con
todo su ser, que si respira muy muy despacio, puede seguir permaneciendo invisible.

Wei Ying empuja la mano de Lan Zhan hacia abajo de él y observa la herida que dejó el látigo sobre la
palma mientras la acuna suavemente —No quiero lastimarte... mi presencia siempre causa algún mal en su
vida majestad.

—Wei Ying, el mal que gobierna en el mundo, ¡No es, ni será nunca, tu culpa!

Wei Wuxian suspira. Llevarle la contraria a su Lan Zhan, nunca fue su fuerte.

—¿Te revelarás nuevamente ante el consejo de ancianos?— Wei Ying no puede evitar sentir un nudo en el
pecho al ver la mirada anhelante en el rostro del Emperador. ¿Cómo pueden creer las personas que este
hermoso ser, podría ser frío y sin sentimientos? basta con observarlo bien para encontrarse con el océano
profundo que desbordan las emociones en sus ojos.

—Ven a casa conmigo— Repite el emperador a cambio.

Wei Ying asiente, no cree poder huir por más tiempo. Han sido muchos años escapando. Quizás... podría
dar un último salto de fé. El Emperador lo esperó muchos años, quizás lo esperaría eternamente si él
mismo lo permite y Wei Ying ciertamente no desea poner al Emperador en esa situación, no después de
que el pavo real le abrió los ojos. No desea más dolor para su amado, de ahora en adelante hará las cosas
como el emperador lo desee. Ya basta de ser egoísta, sus decisiones no fueron las correctas, se ha
equivocado inmensamente muchas veces. Es hora de tomar un nuevo camino, de escuchar a su zhiji, y
cumplir sus deseos. Él siempre lo haría.

El Emperador sonríe, muy levemente, pero Wei Ying puede ver la increíble alegría y el profundo alivio
apenas contenido que expresa su Zhiji. Wei Ying también sonríe, más grande, más radiante, más animado
y Lan Zhan está impregnado de un cariño abrumador mientras lo mira. Wei Ying es hermoso, y más aún
cuando sonríe.

—Lan Zhan Lan Zhan, deja que cure tu herida por favor.

El Emperador dirige una mirada rápida a Jin Zixuan que seguía parado inmóvil, contemplando las cortinas
en su lugar —Zixuan, trae ungüento y vendajes, por favor.
Jin Zixuan salta en su lugar, al ser llamado por el emperador de repente. Se encontraba rojo desde las
orejas hasta el cuello por haber tenido que presenciar un momento tan íntimo y sin poder escapar sin ser
notado. Rápidamente se dirige a sacar los elementos pedidos por el Emperador de uno de los estantes
laterales. Al encontrarlos, los lleva a gran velocidad a donde las otras dos personas se acababan de sentar.

Wei Ying toma el vendaje para comenzar la curación pero el emperador rápidamente lo detiene y extiende
sus manos para desabrochar el cinturón de la faja de Wei Ying y comenzar a quitarle sus túnicas.

—¿Vas a comerme ahora?— pregunta Wei Ying.

—¡Desvergonzado!— exclama Jin Zixuan, poniéndose aún más rojo de lo que estaba. —Aún sigo aquí,
por si no lo notaste.

El Emperador no responde a nada de lo dicho por ambas personas y solo continúa quitando las túnicas de
Wei Wuxian para examinar su pecho y hombro, en la zona donde el látigo impactó anteriormente.

Wei Ying hizo un puchero por un momento, pero luego se adelantó para darle un rápido beso a Lan Zhan,
deteniendo así sus movimientos. —No me importaría si así lo quisieras, Lan er-gege.

—¡Wei Ying!— Reprende el emperador.

—Bueno, yo los dejo ahora. Que tenga una agradable noche majestad, Wei Wuxian— El Jin huye a
máxima velocidad.

Wei Wuxian se cae hacia atrás en una carcajada bastante sonora. El Emperador solo suspira, toma el
ungüento y se posiciona encima del menor, mientras éste todavía continúa en el suelo riendo.

Con Lan Zhan completamente sobre él, Wei Ying ya no es capaz de reír más y se queda paralizado. El
emperador sin prestar atención a su reacción, procede a untar el ungüento en el pecho del menor, justo
donde se encontraba la marca del látigo.

—Uum... L-Lan Zhan, no es necesario— Wei Ying intenta correr sus ropas con las manos pero el
Emperador rápidamente lo inmoviliza, cogiendo ambas manos y sujetandolas arriba de su cabeza —La-
Lan Zhan...

Lan WangJi no responde y continúa aplicando el ungüento en la zona afectada. El látigo no perforó la piel,
por lo que la zona sólo estaba un poco quemada, sin mencionar que el núcleo de Wei Ying ya estaba
trabajando en ella de igual manera.

Unos minutos después, Lan WangJi ya había terminado de tratar y vendar la herida de su amado, pero su
mano derecha aún continuaba vagando en la piel del menor, y su izquierda, continuaba sujetándole ambas
manos. —¡Ah!— Wei Ying no pudo contener el gemido que se le escapó cuando el emperador descendió
por su cuello, dejando un camino de besos con la boca abierta.

Wei Ying estaba completamente colorado y se encontraba mirando a otro lado, negándose a verlo a los
ojos. "¡Por Dianxia!, ha pasado mucho tiempo" Pensó para sus adentros.

En algún momento, sintió la suave fragancia que siempre envolvía al emperador. El sándalo era un aroma
muy reconfortante, pensó Wei Ying en medio de ese acalorado momento. Toda la carpa del emperador olía
a él. Se alegró de que todavía fuera el olor que caracterizaba la ropa de Lan Zhan. Sándalo significaba el
Jingshi y significaba hogar. Su hogar siempre sería, donde sea que estuviera su Lan Zhan.

—Wei Ying...

—¿Hm?— Wei Ying Volteó para encontrarse con los ojos dorados que le devolvieron la mirada.
Lan WangJi extendió la mano y atrapó una pequeña lágrima que se había escapado de los ojos plata y
logró descender por su mejilla. Observó cómo el rostro de Wei Ying mostraba, ¿Tristeza, anhelo?

—Volverás a Gusu conmigo— dijo Lan Zhan.

Wei Ying se rió suavemente, asintiendo con la cabeza se sentó y lo atrajo para un profundo abrazo.

—Sí— suspiró y enterró su rostro en el hueco debajo del mentón de su Lan Zhan—Llévame a casa.

El Emperador cruza la pequeña distancia entre su ubicación y la cama. Las sábanas suspiran cuando
posiciona a Wei Ying suavemente en ellas. La almohada se hunde debajo, cuando su pareja apoya su rostro
contra ella. Se acuestan de lado, Los brazos de Lan WangJi envolviendo protectoramente a Wei Ying y
atrayéndolo contra su pecho.

Los latidos de su corazón se aceleran cuando Wei Ying se da la vuelta para quedar frente a frente,
entrelazando sus piernas. Apartando cada pensamiento, el menor levanta la mano y deja que sus dedos se
hundan en el espeso cabello de su Lan Zhan.

Lan WangJi lo mira inquisitivamente. Wei Ying le devuelve la mirada y sonríe suavemente —Cuando era
muy pequeño, mi madre solía frotarme el cabello y el cuello hasta que me dormía —Su suave toque fue
lento y relajante, y los movimientos repetitivos lo adormecieron. —Es lo que más recuerdo de ella, sus
manos en mi cabello, mi cabeza en su regazo, su gentileza y su voz tranquila cantando canciones de su
tierra natal.

"Desearía haber sabido de dónde venía ella". Pensó el menor.

El Emperador no dijo nada, solo se quedó ahí, disfrutando de los suaves y gentiles toques. Podía sentir
como el menor comenzaba a hacer un suave y ligero intercambio de su energía con la de él mismo y lo
dejó ser, hasta que ambos sucumbieron ante el cansancio del día y la noche los recibió con un tranquilo y
relajante sueño.

A la mañana siguiente el emperador despertó con la sensación de una cómoda presión sobre su pecho.
Abrió los ojos y no pudo evitar sonreír ante la hermosa vista de su pareja, cómodamente dormido sobre él.
Hace muchos años que no dormía tan pacíficamente. Lo cual es increíble en estos tiempos oscuros de
guerra y muerte, pero no se le puede culpar por la felicidad que lo inunda, al haber recuperado la luz que
ilumina su vida.

Extiende su mano y acaricia suavemente el cabello de su hermoso Wei Ying, continua un momento más
así, hasta que nota que es la mano que tenía herida por atrapar el látigo de esa mujer.

Levanta su mano y la acerca a sus ojos para observar que lo que ayer era una quemadura ligeramente
sangrante, ahora era piel tersa y completamente sana. Como antes de sostener el látigo.

Baja su mano y revisa su propio núcleo dorado. La energía fluye serenamente, fuerte y estable. Luego,
observa de nuevo a su pareja que dormía muy pacíficamente. El cultivo dual con Wei Ying siempre le ha
permitido fortalecerse a gran escala, en muy poco tiempo. Eso no ha cambiado al parecer.

Desde la primera vez que cultivaron dualmente juntos, supo que la energía de Wei Ying era
completamente compatible con la suya, incluso la que transmitía su núcleo oscuro. De hecho, a su dragón
interior parece gustarle mucho la energía de Wei Ying y definitivamente no es que le atraiga la energía
resentida como tal, porque puede recordar claramente que el dragón rechazó la energía resentida que se
vio obligado a absorber del cuerpo de su amado pero que fue inducida por esos cadáveres que los atacaron.
Pero antes de eso, sus energías se alineaban perfectamente, justo como ahora.
Observa el techo un momento y recuerda como Wey Ying se curó a sí mismo años atrás, usando su núcleo
oscuro. Definitivamente la energía del núcleo oscuro de Wei Ying no es absolutamente de ninguna manera,
la misma energía resentida que alberga el camino demoníaco al que tanto repudian en su reino.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
—Jiang WanYin está desaparecido.

—¿Qué?

Jin Zixuan se encontraba reunido con el emperador y Lan Xichen mientras se ponían al día con los
acontecimientos que se iban a llevar a cabo según los diálogos de la reunión anterior. Pero Jin Zixuan
aprovecha el momento para hablar.

—Leidy Jiang me comunicó su inquietud... Tuve la oportunidad de conocer a la Doncella esta mañana
cuando al parecer se encontraba recorriendo todo el campamento buscando a su hermano— Comenta Jin
Zixuan para dar a entender el porqué de sus palabras. —Me tomé el trabajo de ayudarla pero por más que
pregunté, nadie lo ha visto en lo que parecen ser tres días.

—¿Recorriste el campamento en compañía de la Doncella Jiang?— pregunta Lan Xichen.

—Yo... Um— Zixuan se sonroja sin saber qué decir.

—Tres días— Dice el Emperador, haciendo caso omiso a la actitud de Xichen y Zixuan. La última batalla
fue hace tres días pero no hubo bajas por parte de su bando. Recuerda que el ejército de muertos de Wei
Ying arrasó con cada Wen en el campo de batalla y cada uno de sus generales junto con sus comandantes
se reportaron sanos y salvos de este lado de la batalla. —El último día de combate, después de la
controversia del ejército de muertos y... el cultivador demoníaco, ¿Jiang WanYing no estuvo con los
generales del sur?

—Lo estuvo— Confirmaron Zixuan y Xichen al mismo tiempo.

—Zixuan, organiza un equipo para que lo busque, mantén un bajo perfil.

—¿Bajo perfil?— pregunta Lan Xichen.

—Entiendo— Dice Zixuan —si desapareció dentro del propio campamento, puede implicar muchas cosas.

—Mn.

—Como ordene majestad— El Jin se retiró rápidamente para cumplir sus órdenes.

Lan Xichen observa a su hermano después de que el Jin se fue. WangJi lleva un tiempo actuando extraño y
los últimos días se ha mostrado particularmente frío y distante con él y también con su tío. —WangJi, ¿en
qué piensas?

El Emperador no lo mira, y se queda en silencio.

—La guerra está a punto de terminar— Continúa Xichen.

Más silencio.

—WangJi...
—Pienso en lo que sigue.

Cuando WangJi voltea por fin la vista para ver a su hermano, este no muestra la misma expresión cálida
que siempre lo caracteriza. Ahora la mirada suave y tranquila que siempre le dirigía su hermano, ha
pasado a ser un frío y perpetuo hielo, como si se dirigiera a un insignificante desconocido.

—Lan Xichen, actualmente La general del sur cumple su castigo en el lado oeste del campamento, ve a
vigilar que mis órdenes se estén llevando al pie de la letra.

—¿No exageraste un poco con su castigo? Wangji, fue solo un sirviente.

Bueno, no esperaba que la mirada de su hermano pudiera volverse aún más fría, pero tal parece que se
equivocó.

—W-wangJi, ¿acaso hice algo que te molestara? ¿Qué hice mal?

El silencio continúa.

Finalmente, Lan Xichen suspira.

El Emperador voltea la vista y ve la luz del día, alta y clara, pronto será media mañana —Me retiro a mis
aposentos, debo atender algo más— Y con eso, Lan Xichen queda solo en la habitación... De nuevo.

Aposentos del Emperador - Campamen to real.

Wei WuXian extiende su mano para apartar un mechón de su cabello que le hace cosquillas en el rostro
mentiras lentamente abre sus ojos y aclara la vista. Ha tenido el descanso más reparador en lo que siente
que pudo haber sido toda una vida. El Emperador no está, obviamente, es tarde, y seguramente su
majestad tiene muchas cosas que atender. Suspira y observa un poco todas las cosas que adornan el
espacio personal del emperador. Se da cuenta ahora, que, se siente feliz, tan feliz como no lo ha sido en
bastantes años. Se siente correcto que esté allí.

Wei Ying se estira un poco aún estando acostado, dispuesto a relajarse mientras espera el regreso del
Emperador. Se siente raro haber dormido toda la noche con su majestad y limitarse literalmente solo a
dormir. No importa si verdaderamente estaban cansados y no pudieron evitar dormirse. Despertar sin que
su cuerpo esté dolorido en... ciertos lugares, ciertamente es algo que debe cambiar.

No pasó mucho tiempo y el emperador ingresa en su carpa. Wei Ying sonríe con picardía.

Sus manos sostienen el rostro de Wei Ying con una mezcla de adoración y posesividad mientras observa
desaparecer la extensión de su erección en esa boca húmeda y traviesa. Se interna dentro de esos labios
carnosos y sensuales; observa como esos traviesos ojos grises, lo miran oscurecidos en la lujuria y
completamente perdidos en la tarea de mantener el contacto visual.

La manera en que aguanta la respiración mientras empuja más profundamente su extensión hacia su boca,
hasta casi tocar la base, hace que él mismo pierda la capacidad de respirar. Todos los límites de su
decencia y de su control, siempre son destruidos y arrebatados por este bello ser.

"Mio... tan mio"

Todo su interior ruge tan desquiciado mientras se observa sumergirse una y otra vez en ese hondo calor.
Wei Ying mueve y pasa sus manos por los muslos descubiertos, acariciando el músculo mientras continúa
con su tarea. Y todo en lo que puede pensar el Emperador es... en esos ojos plata hipnotizándolo. Tan
sumergidos en el placer codicioso mientras traga y suelta vibraciones con su boca estremeciéndolo; tan
sumiso y tan desafiante al mismo tiempo. Tan determinado a sacudir por completo su ser, tan seguro de
derribarlo, aun cuando él es Emperador. A veces pareciera que es él, quien estuviera destinado a postrarse
ante Wei Ying.

Sus dedos pasan por el cabello despeinado y toma la cinta roja de su amarre. Parece la misma que le regaló
hace tantos años, solo un poco más desgastada. Adora como sus mechones rebeldes no pueden ser
contenidos por ésta y caen inevitablemente a los lados o frente de su rostro. Lan Zhan gime y Wei Ying
sale hasta dejar solo la punta atrapada entre sus labios antes de volver a descender completamente hasta la
base. El Emperador no puede más que observar embelesado, con una mezcla de puro delirio y
fascinación.

"Mío"

Lan WangJi se pierde en la sensación maravillosa, aferra sus dedos en el largo cabello y lo empuja contra
él, hasta que lo hunde en lo profundo de su boca. tiembla alrededor de su erección. Se corre. Profundo y
caótico. Ni siquiera pudo reconocer el momento de su llegada, solo supo qué pasó cuando ya no pudo
reaccionar. Echó su cabeza hacia atrás y cerró los ojos fuertemente. El éxtasis lo envolvió.

Sus manos suavizan el fuerte agarre que antes tenía y dirige estas mismas hasta posarlas con suavidad en
las mejillas del menor. Cuando este último sale, ve que no deja escapar ni una sola gota de su escancia,
Wei Ying le sonríe y saborea sus labios mientras se lo traga todo.

—Delicioso— dice con voz rasposa, casi afónica mientras le saca la lengua en señal de que lo tragó
completamente.

Lan WangJi solo se queda ahí, mirándole atónito. "Wei Ying, serás mi perdición". No pudo evitar pensar el
emperador.

Recuerda Lan WangJi en ese momento, cuando por fin Jin Zixuan le comentó todo lo que estaba pasando
con este personaje Yiling Laozu. Fue abrumador y caótico, fue doloroso en proporciones que no creía
posible. Escuchó unas cuantas palabras sobre esta persona y su propia historia apareció como un estallido
de imágenes, inundando su cabeza. Parece que solo se necesitaba un pequeño impulso más, para que el
hechizo desapareciera. Recuerda la cara de horror en el rostro de su amigo cuando comenzó a sangrar y
vomitar a borbotones por su boca, ojos y oídos. Y dos días después, habiendo superado lo que pudo haber
sido, una desviación de Qi. El hechizo o lo que sea que su pareja le hizo, había desaparecido por completo
de él, siento completamente consciente de las acciones que su amor realizó, lo que él mismo hizo y las
acciones de su propio reino. Recuerda haber llorado y gritado con todas sus fuerzas, recuerda la
frustración, el dolor, la impotencia... "Wei Ying, ¿Qué te ha hecho este mundo? ¿Qué hice yo para
evitarlo?"

Wei Ying ajeno a los pensamientos del emperador, sonríe aún más al ver su expresión aturdida. "Parece
que hice un buen trabajo", no puede evitar pensar.

El menor se levanta de su lugar y se sienta a horcajadas en el mayor. Sujeta suavemente el mentón de este
último, y luego se inclina hacia adelante para darle un besito en la comisura de la boca. —¿Fui bueno para
ti, majestad?—Este lo agarra por la cintura, y lo mira profundamente. "Más bueno de lo que siquiera
merezco" piensa internamente el emperador y mueve su cabeza para besar a Wei Wuxian cómo se
debe. "No estás solo Wei Ying. No eres solo tu y no soy solo yo, Somos un Nosotros... Te prometo que ésta
vez lo haré mejor".

El susurro del viento se lleva las palabras no dichas pero firmemente prometidas por el Emperador.
Sellado con un cálido beso, las dos personas continúan compartiendo su íntimo momento, ajenos a la
silueta de una persona, que se retira del lugar, después de haber visto suficiente.

.
.

Chapter End Notes

Me gustó mucho escribir este capítulo, siempre me siento bien escribiendo sobre la conexión que
tienen nuestro WangXian. Espero que el desarrollo de la historia pueda continuar fluido y les guste
todo lo que se viene.

Hago lo mejor que puedo para realizar una buena redacción y una trama coherente.

Oh, aprovecho para recordar y puntualizar un par de cosas:

- Este fic es Mpreg, no lo olviden.

- Se viene un Emperador mucho más sobreprotector.

- Los hermanos Wen entran a escena.

- Wei Ying desvergonzado en su máxima expresión con momentos todavía muy Dark 🖤
- Esta historia comenzó con XiYao pero decidí no escribir parejas secundarias más .

- Zixuan mejor amigo y partidario del WangXian (No es porque se vaya a robar una candidata del
harem) jajaja

- Los Jiang cayendo en desgracia (Menos Yanli y Jiang Cheng)

- Equipo Yiling Laozu y Emperador Dragón, Dioses apoteósicos finalizando la guerra

Eso es todo, gracias por leer y comentar, me motiva mucho.


Capítulo 11

La próxima vez que Wei Ying abrió los ojos, se hallaba envuelto en delicadas, suaves y preciosas sedas
que descansaban cubriendo cada extensión de su cuerpo desnudo. La vista de las bellas decoraciones que
adornan la carpa real, fue lo que lo recibió, junto con un pequeño ramo de flores azules que descansaba
justo a su lado.

Wei Wuxian giró su cabeza, pestañeando somnoliento, sus ojos lentamente parpadeando atónitos,
dirigiéndose hacia las flores y luego se detuvieron. "Lan Zhan, eres un romántico" pensó.

Levantó la cabeza estirándose un poco para ponerse de pie, pero inmediatamente se congeló. Inhalando y
exhalando profundamente, se vio obligado a retroceder y volver a reposar su cuerpo. Wei Wuxian se
descubrió y miró atentamente su cuerpo, captando una extraordinaria cantidad de detalles. Él estaba hecho
un absoluto desastre. Moretones y marcas de mordeduras cubrían su piel desnuda, su cabello estaba
desordenado y suelto. Adicional, una interesante cantidad de fluidos esparcidos por todas partes, fue una
vista francamente sorprendente... Incluyendo el agudo dolor que provenía de diferentes zonas de su
cuerpo, y en cierto lugar en particular, era definitivamente el retrato de una persona completamente
extasiada.

Wei Ying rió encantado. "Oh! cuánto extrañaba esta sensación" pensó para sí mismo.

—¡Veo que terminaste de juzgar a la doncella desaparecida!— Xue Yang se burla, observando a su amigo
—Y vaya desastre que eres en este momento... El emperador puede ser un completo animal cuando
quiere... Aunque parece que lo disfrutaste, llevan casi 2 días aquí encerrados, creí que nunca saldría.

Wei Ying se cubre nuevamente con las sábanas y dirige la mirada hacía la entrada de la carpa —A-Yang,
el emperador podría matarte por entrar a sus aposentos privados, Lan Zhan puede ser muy posesivo
cuando quiere, y en realidad no llevamos tanto tiempo aquí, solo desde ayer en la tarde, o en la mañana,
algo así... sabes que fue mucho tiempo sin estar juntos.

—¡Si como digas! Eso fue por tus propias decisiones. —Wei Ying lo miro con odio— Daré unos pasos
hacia afuera por seguridad, aunque esperaría que me cubrieras en caso de que el emperador de verdad
quiera matarme.

—Si Lan Zhan se da cuenta que me viste de esta forma, así sea por solo un segundo, creeme que ni yo
podría protegerte de su ira —Wei Ying sonríe un poco, disfrutando de la expresión que coloca su amigo en
el rostro.

—Por el bien de nuestra amistad, confío en que no se lo mencionaras. —Xue Yang se aclara la garganta —
Hablemos de cosas serías ahora por favor ¿Cuál será tu siguiente movimiento? Según veo te unirás al
emperador a partir de ahora, y la guerra está a un poco más de terminar, gracias a ti.

—Lan Zhan no me permitirá alejarme más de su lado, así que va siendo hora de que me presente ante los
generales y demás elementos importantes en esta guerra —Wei Wuxian sonríe de forma fría —Y deseo
ver que harán las cucarachas infiltradas cuando eso pase. Aunque no tuve oportunidad de hablar con lan
Zhan sobre eso.

—¡Claro! Tenías la boca un poco ocupada en otras cosas— Xue Yang se burla.

Wei Ying le manda una mirada inocente a su amigo —No sé de qué hablas —Le saca la lengua —A-Yang,
quiero que vayas en forma de mensajero y anuncies la visita de Yiling Laozu en el campamento. Que los
líderes sepan de antemano que me presentaré ante su majestad.
—¡Oh! Haremos un poco de teatro, me gusta como suena eso— Xue Yang se emociona ante lo que viene
—Ya quiero ver la cara de esos hipócritas, me gusta el plan, ¡Uh! por cierto, ¿que debo hacer con el saco
gruñón que me pasaste para cuidar? Está siendo todo un fastidio.

—¡Uh! Francamente, me había olvidado de él... Ummm, me vestiré por ahora e iré a visitarlo, tenemos
mucho por hacer y puede que me sirva para los propósitos de su majestad, si logro mantenerlo en las
sombras, junto con el resto del equipo— Wei Ying tomó una hoja de papel y garabateó algo rápido —
Entregárselo al emperador y solo al emperador.

Xue Yang entra y recibe la nota —¡Claro Jefe!— Wei Ying rueda los ojos —Me voy, nos reuniremos en la
tarde para planear el show, daré aviso a los demás para que también estén ahí.

Wei Ying sonríe ante eso, viendo a su amigo salir del lugar —Bueno, no podré relajarme como me gusta
después del sexo pero vale la pena por ahora, Ya habrá más tiempo después.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
"Los Wen están retrocediendo"

"Wen Ruohan los está situando en ciudad sin noche"

"El equipo táctico que enviamos a reconocimiento del perímetro, informó que el enemigo se está retirando
después de la última batalla"

"La guerra está próxima a ganarse"

"Los esfuerzos conjuntos del ejército han sido exitosos"

"No hay que olvidar que hemos recibido ayuda"

"No debemos asociarnos con el mal"

"Su fuerza era lo que necesitábamos para darle un giro necesario a esta guerra, cuanto la lucha termine
podemos decidir cómo disponer de él"

"No hay honor en tus palabras Guangshan"

"Solo digo lo obvio"

"Tus palabras no tienen sentido. ¿Que te hace pensar que podemos disponer de un hombre que es capaz
de diezmar al ejército Wen, él solo?"

"Su poder militar es muy fuerte pero el emperador sigue siendo superior en fuerza pura. Simplemente esta
persona tiene una ventaja de poder al convocar a los muertos que le sirven como mano de obra extra, eso
es todo"

"Una fuerza así no debería estar bajo el poder de un solo hombre"

"¿Desde cuándo la conversación se volvió hacia quien posee o no al cultivador demoníaco?"

...
El Emperador observa a través de la sala. La conversación continúa de fondo, junto con las personas
caminando dentro del lugar. Pero hace mucho tiempo que su mente está en otro lado. Vagando en
imágenes de una cinta roja, amarrada a una abundante cabellera negra que cae sobre una silueta delgada,
con su estrecha cintura. Dedos cálidos recorriendo suavemente la extensión de su piel y esos labios, suaves
y cálidos, adornados con esa sonrisa coqueta y los suaves gemidos que desprende...

Lan Xichen que se encuentra presente en la sala. Observa a su hermano, con la leve sospecha de que no
está prestando mucha atención —¿WangJi?

El emperador le dirige una rápida mirada tratando de enfocarse pero, No puede.

Un bello rostro teñido en un tono rosa bordeando sus mejillas vuelve a invadir su cabeza. Piensa en esos
ojos plata, brillando con travesura, ve como esas pupilas se dilatan, respirando con dificultad mientras lo
sostiene sobre sí mismo y puede ver el brillo de la transpiración mientras sus cuerpos se conectan. No
puede creer cuan enloquecedor es hundirse en el calor de su Wei Ying...

Mira hacia arriba y está agradecido por las luces tenues, que impiden que los presentes en el lugar vean lo
que su descontrolada imaginación le está haciendo en este momento. Verdaderamente necesita volver con
Wei Ying pronto, realmente no puede tener suficiente de él.

—Ma-magestad...— nuevamente sus pensamientos son interrumpidos, esta vez por un sirviente que
ingresa a la sala luciendo un poco nervioso.

—Habla— solicita Lan Qiren, que actualmente se encontraba dirigiendo la discusión en proceso.

—Ha-hay un enviado, co-con un mensaje...

—¿Mensaje? ¿De quién?

—Yiling Laozu...

Todos los presentes se quedaron en silencio al escuchar esto.

—Hazlo pasar— habló el emperador.

Todos en el lugar lo voltearon a mirar simultáneamente alarmados pero este los silencia rápidamente con
una fría mirada.

La persona que ingresó se veía joven a los ojos de los demás. Bastante joven como para estar participando
de una guerra. Aunque no se puede distinguir del todo sus rasgos ya que lleva cubierto el rostro con una
máscara.

El Emperador lo observó detenidamente sin mostrar ninguna expresión. El joven vestía de túnicas simples
en tonos de color azul. Su cabello medianamente corto, atado a una cola de caballo simple y un diente
canino sobresaliendo en su... inusual sonrisa que lograba verse un poco debajo de la máscara.

El joven se inclinó en su lugar, justo hasta donde le permitieron acercarse —Saludos majestad, mi nombre
es Xue Yang y soy un buen amigo y fiel sirviente del bien conocido Yiling Laozu.

—¿Buen amigo?— preguntó el emperador con un toque afilado en sus palabras.

Xue Yang inmediatamente se arrepintió de su elección de palabras. —estoy al servicio de Yiling Laozu, lo
he acompañado durante la guerra y...

—¿Lo acompañaste?
"Demonios"

Todos los presentes observaron el pequeño intercambio sin saber exactamente cómo deberían reaccionar.
El emperador parecía estar abiertamente hostil con el individuo que decía ser amigo del cultivador
demoníaco aunque francamente parecía que se estaban perdiendo de algo importante en este último
intercambio.

—Yi-yiling ammm— se aclara la garganta —Yiling Laozu me pidió que le entregara este mensaje —se
pone de pie dispuesto a entregar la nota. Extendió el mensaje en su mano pero rápidamente varias espadas
lo obligaron a retroceder

Lan Xichen, el primero en interponerse, extiende su mano —No te acerques, yo le daré el mensaje.

Xue Yang le dirige una mirada oscura —Yiling Laozu fue muy claro al decir que solo el emperador puede
ver el contenido de su mensaje.

—Majestad le recomiendo que tenga precaución. No sabemos sus verdaderas intenciones, además el
cultivador demoníaco puede ser peligroso.

El Emperador analiza a la persona frente a él un momento más antes de extender su mano para recibir el
mensaje —Lo leeré.

—¡¡Majestad!!— exclamaron todos los presentes.

Xue Yang simplemente se acercó y entregó la nota.

...

🥺
Eres cruel Er-gege, mi crisantemo casi no sobrevive a tu entusiasmo de anoche, me dejaste sin caderas...
No eres gentil con este pobre súbdito!!

Por favor no mates a Xue Yang, solo lo envié para avisarte que me reuniré con tu consejo de guerra, el
día de mañana, ya que hay varios puntos importantes a discutir y me presentaré como Yiling Laozu ante
todos. Lo menos que necesitamos es hacer un alboroto anunciándome como tu pareja en este momento, es
mejor dejar eso para cuando la guerra termine. ♥

😘
Te amo Er-gege, nos vemos mañana. Estaré ocupado hoy pero te prometo que me mantendré cerca y a
salvo.

...
La nota finaliza con una pequeño dibujo de Wei Ying dándole un beso.

Las orejas del emperador se ponen inmediatamente de un tono rojo debido a la primera parte del mensaje.
Pero rápidamente se recompone concentrándose en lo más importante del mensaje.

—¿Yiling Laozu se presentará?— hace una pausa —¿Aquí?— aclaró.

—Es correcto majestad— Contesta rápidamente Xue Yang —Su deseo es finalizar lo que falta de esta
guerra lo antes posible para poderse... retirar en paz con su compañero, de ser posible.

—¡Inaudito!— Lan Qiren exclama alterado.

—Majestad...

—Dile que lo estaremos esperando— interrumpe el emperador. —Nadie aquí tiene permitido atacarlos.

Todos los presentes fueron rápidamente silenciados por las palabras y la mirada amenazante del
emperador.

—¡A sus órdenes majestad!— Xue Yang hace una reverencia y se retira rápidamente dejando muy
alteradas a las personas de la sala, excluyendo al Emperador.

—Majestad si me lo permite...

—¡No lo permito!— interrumpe nuevamente el Emperador para asombro de todos los presentes —Lo
recibiremos— Finaliza.

Nie Minyue envía a uno de sus sirvientes para que les informe a los soldados de la frontera y den aviso
cuando el cultivador demoníaco haga presencia en el campamento, el joven sirviente aceptó la tarea con
rapidez y se marchó para cumplir la orden mientras al mismo tiempo esparcia la voz.

Yiling Laozu vendrá pronto.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
En el otro lado del campamento 2 personas se encuentran dialogando.

—¡¡No voy a usar esa cosa!!—gruñe la persona.

—¿Quieres que te reconozcan de inmediato?

—Esto es absurdo, mi madre va a matarme de cualquier forma.

—Bueno, si vas a morir de todas formas no hay razón para que no quieras usar la máscara.

—¿Quieres que te rompa las piernas, idiota? por cierto, ¿qué demonios tienes en el cuello?

—¿En el cuello?

—Parece como si te hubiera atacado un animal salvaje.

—¡Uhm! Bueno, un dragón quizás...—susurro.

—¿Qué?

—Nada...

El otro hombre solo lo mira con el ceño profundamente fruncido. No confía del todo en estas personas
pero parece que son su mejor opción en este momento para descubrir la verdad.

En determinado momento, un tercer participante se une a ellos.

—A-Yang, ¿Cómo te fue?

Xue Yang los mira a ambos y camina hasta donde está su amigo —El Emperador te va a recibir y
posiblemente me matará si me ve junto a ti.

—Obviamente me va a recibir, Lan Zhan no me negaría nada.

—¡No te dirijas al Emperador por su nombre de nacimiento. ¡Es irrespetuoso!— gruñó el otro sujeto.

Wei Ying solo rueda los ojos ante eso —a HanGuan-Jun le gusta como sale su nombre de mis labios— le
guiña un ojo juguetonamente —siempre será Lan Zhan~ para mí— extiende la última sílaba
sugestivamente.

—¡Eres un desvergonzado!

—Sip, ese soy yo— Ríe.

—Amo Wei— Wei Ying voltea a ver a las dos personas que recién llegan y se inclinan ante él.

—A-Ning, A-Qing, ya les he dicho que no me llamen Amo —Suspiró resignado.

—El Amo Wei nos salvó, es nuestro deber servir-le...— Wen Ning mira al tipo que se acercó a él y le
pincha el cachete con su dedo como si fuera un niño.

Tac tac —Eres lindo, como un rollito de canela.

—A-Yang, déjalo en paz. Ustedes, ¿cumplieron mi pedido?


—Los generales y el Emperador Lan ya están al tanto de los movimientos del clan Wen, y Wen Ruohan
continúa retrocediendo sus fuerzas— Habla Wen Qing —Creo que la siguiente batalla podría ser la última.
Mi tío parece estar un poco desesperado por los últimos resultados. Ciudad sin noche está siendo
fortificada mientras reciben a sus soldados.

—¡Por fin! Necesito unas vacaciones— Habla Xue Yang y Wei Ying reprime el impulso de rodar los ojos
otra vez.

—A-Qing, vuelve al cuerpo médico del campamento, ha sido suficiente espionaje por ahora y no quiero
que nadie de éste lado vaya a notar tu ausencia. A-Ning, vendrás conmigo a hacer un trabajo de
reconocimiento del perímetro. Mañana también me acompañaras junto con este tipo y A-Yang durante la
presentación con el Emperador. Quiero que él sepa que no son una amenaza.

—¿Como que este tipo? tengo nombre sabes.

—Si si, enojón, ahora eres parte del equipo así que acostumbrate.

"hug" El hombre solo se cruza de brazos malhumorado y les da la espalda.

—Bueno, ya cada uno conoce sus deberes. Nos vemos en el punto de encuentro más tarde, vamos A-Ning.

—Si Amo Wei.

El grupo se dividió siendo Wei Wuxian y Wen Ning quienes salieron de las protecciones del campamento
militar para revisar que efectivamente los soldados Wen se hubiesen retirado de la lucha.

A medida que avanzan, Wen Ning observa como Wei Wuxian levanta diferentes matrices que desaparecen
en el suelo. Parecen ser minas o quizás matrices de rastreo que le avisaban en caso de detectar enemigos o
posibles civiles, ajenos a la lucha que se vieron obligados a escapar.

Wen Ning y Wen Qing se unieron a la lucha de Yiling Laozu cuando esté último los encontró en medio del
campo de batalla huyendo de su propio clan. La familia de ambos, el clan médico Dafan Wen, fue
brutalmente masacrado después de haber sido acusados de traición hacía el Emperador Wen, por haberse
opuesto a la lucha. El Tio cuatro y la abuela Popo, fueron los últimos en morir, sirviendo de escudo para
que ambos jóvenes pudieran escapar y esa escena fue la que encontró Yiling Laozu cuando arribó con su
ejército de muertos.

Wen Qing y Wen Ning le agradecieron profundamente por salvarlos, aunque tristes por no poder ayudar al
resto de su familia y que estos decidieran sacrificarse por salvarlos a ellos. Wen Qing al ver el gran poder
que tenía Yiling Laozu, se ofreció a servirle a cambio de que matara a su tío.

Wei Wuxian al escuchar su súplica, los rechazó rotundamente ya que después de todo, matar a Wen
Ruohan era algo que tenía pensado hacer de todas formas. Ellos, independientemente de sus palabras,
pidieron mínimamente dejarlos ayudar, por lo que Wei Wuxian aceptó a regañadientes.

En su camino de reconocimiento, llegaron a un pequeño pueblito abandonado. Quizás estuvo habitado


hasta que comenzó la guerra. Wei Ying entró a una de las cabañas, viendo que era bastante hogareña a
pesar de estar deshabitada. Una pequeña cocina con sus utensilios intactos, una salita sencilla con algunos
muebles, la habitación o habitaciones probablemente estaban en el siguiente nivel.

Se entretuvo viendo los cuadros pintados en las paredes que retrataban una hermosa villa con niños y
animales en un bello y verde campo con flores y cultivos de comida.

"Una vida simple sin títulos, sin su poder, no suena mal". Wei Ying sonrió con nostalgia. Hacer una vida
por sí mismos en algún pequeño pueblo en algún lugar, fuera del reino, donde nadie los conociera, donde
no existieran los estatus.
"Siendo solo Lan Zhan y Wei Ying"

Podrían vivir juntos de la tierra, cultivar alimentos, criar algunos animales juntos, tal vez. Podrían dormir
en la misma cama todas las noches, abrazarse cuando hace frío y en medio del calor poder contemplar el
esbelto cuerpo del otro con una cantidad muy mínima de túnicas o sin ninguna de ellas. Tal vez de alguna
manera, lejos del Castillo, lejos de la relación de Noble y Sirviente...

Finalmente salió del lugar, sintiéndose un poco tonto. Estos pensamientos obviamente son imposibles
pero... entiende que Lan WangJi lo ama y no quería nada más que a Wei Wuxian. Vivir con Lan WangJi,
así sea en la montaña de reglas del castillo, es suficiente para él. Será difícil llegar ahí debido a todo lo que
ocurrió en el pasado, pero está seguro que el Emperador no permitirá que sus caminos vuelvan a
distanciarse y el mismo ya no cree poder hacerlo tampoco, además se prometió así mismo seguir los
deseos del Emperador al pie de la letra. Su único anhelo ahora es que puedan permanecer juntos.

Wei Wuxian se vuelve para observar el cielo azul con una mirada un poco melancólica. Mañana...
Nuevamente estaría frente a los clanes y las personas que le hicieron tanto daño.

—A-Niang...— Susurró. —No puedo perdonarlos pero... tampoco puedo huir de mi corazón y mi corazón
junto con mi alma entera le pertenecen a él.

Wen Ning se mantuvo distante, entendiendo que su Amo estaba teniendo un pequeño momento.

...

Al día siguiente

La gente de GusuLan, siempre se ha caracterizado por ser de un ambiente pacífico, como también contar
con súbitos con una excelente disciplina, quienes muestran con gran orgullo sus reglas, al menos así era
hasta ayer.

Soldados, sirvientes y personas de todas las clases corrían de un lado a otro mientras gritaban, rompiendo
sus preciadas reglas, entre otras cosas, por sus rápidos movimientos mientras se apartaban del camino.

Túnicas negras como la noche más oscura, bordeadas con patrones compuestos de flamas rojas. Una cinta
roja atando la mitad de su cabello, un dizi negro con una borla verde y una espada atada en su cinturón;
Una fuerza invisible azotó a todos los presentes en el lugar, dejando un camino de desastre por donde
caminaba a pasos lentos, junto a tres personas que lo seguían con la calma, como si fuesen los invitados
especiales, a una gran celebración.

Las 4 personas iban con una máscara de demonio zorro, que cubría completamente sus rostros. Cada una
de un color diferente, siento la de Yiling Laozu la única con fondo negro pero con los mismos patrones de
color, en conjunto con las demás.
La mañana los recibió fríamente, ya sea en temperatura o el miedo que se colaba en el cuerpo de los
presentes.

Los susurros no dejaron de escucharse a pesar de todo el alboroto. Algunos decían que pertenecía a una
antigua secta que fue aniquilada, otros mencionaban que en las noches se podía escuchar el sonido de su
dizi atrayendo el mal a este mundo, los civiles rumoreaban que se trataba de un demonio que ascendió
desde el infierno a este mundo para alimentarse del miedo y las almas de los inocentes.

Soltó una risa juguetona ante esto, mientras paseaba por el lugar, dirigiéndose a la sala de reuniones donde
lo esperaba el Emperador y sus generales. Desde su posición puedo ver como era rodeado por los líderes,
soldados y demás sirvientes. Algunos con sus manos fuertemente apretadas en la empuñadura de sus
espadas pero sin hacer ningún movimiento.

Avanzaron entre la multitud hasta llegar a su destino. Muchos parecen dudosos creyendo que en cualquier
momento los generales saldrían de su reunión y expulsarían el mal que los ha invadido. Wei Wuxian se
lamenta por tener que desilusionarlos y se sostiene con éxito aguantando las ganas de reírse a carcajadas
por las expresiones que tienen todos.

—Pueden por favor avisar al Emperador que he llegado, los demás por favor no se inmuten por mí, sé que
fue una magnífica entrada, no lo tienen que decir, pero agradecería que volvieran a sus deberes, no deseo
importunar a nadie con mi presencia. —Wei Wuxian habla, dirigiéndose a los guardias en la entrada de la
carpa de reunión y a los demás presentes.

Los guardias desechan su miedo y el escalofrío que los recorría, y abren la entrada para que puedan
ingresar —P-por favor pasen, el Emperador los espera.

Los demás rápidamente se comienzan a retirar, saliendo ya de su estupor.

—Entonces me presentaré con su excelencia— Su fría voz se escuchó por todo el lugar, a más de uno se le
congeló la sangre nuevamente.

Las cuatro personas avanzaron hasta quedar en el centro del lugar. Dentro de la sala se encontraban
reunidos los diferentes Generales que lideraban la guerra, junto con algunos de sus ayudantes y sirvientes.
En el fondo, con el consejero real, su mano derecha y algunos ancianos, se encontraba el Emperador.

Wei Ying sonrió suavemente mientras se inclinaba, seguido de las tres personas tras de sí —Este humilde
saluda a su majestad imperial, el Emperador Dragón. Este Humilde se alegra de poder estar ante el
emperador y brindar sus servicios en esta guerra, esperando que mis contribuciones sean del agrado de su
majestad.

Varios generales apretaron la mano en sus espaldas. La temperatura en el lugar descendió rápidamente.
Los ojos del cultivador demoníaco los miraron con evidente diversión.

—Desvergonzado, eres un insolente— Lan Qiren lo señaló con notorio desprecio. —Esta guerra se ha
llevado a cabo con el esfuerzo de muchos otros.

¡Oh! pero qué lengua tan venenosa tiene.

El Emperador da un paso adelante desviando la atención de todos los presentes. Wei Ying lo mira con
curiosidad, observándolo con cariño pintado en sus ojos.

Lan WangJi termina de acercarse, extiende su mano y sujeta suavemente la del menor, llevándola hasta sus
labios y depositando un suave beso en ésta —Bienvenido, te estaba esperando.

Sorprendido, y tomándolo con la guardia baja, el aliento de Wei Wuxian abandonó su cuerpo. "No eres
nada sutil Lan Zhan".

Wei Wuxian suspira dramáticamente —Por favor majestad, ten piedad del corazón este pobre sirviente, no
soy más que un hombre frágil y débil.

A Lan WangJi no le gusta que Wei Wuxian se degrade a sí mismo, pero como no pueden hablar muy
abiertamente en este espacio, lo deja pasar y ante la vista de todos, que actualmente se encuentran en
estado de shock, dirige a Wei Ying aún tomando su mano, para que se siente a la derecha de su trono en la
reunión.

Wei Wuxian los miró a todos con expresión de regocijo, como estaba disfrutando esto.

—Tus ayudantes pueden tomar asiento en la parte lateral y puedes llamarlos si lo necesitas.

—Estos agradecen a su alteza real por recibirnos, estaremos a su servicio —Las tres personas se ubicaron
rápidamente después de recibir la aprobación del Emperador y Yiling Laozu.
—Por favor, demos inicio a esta reunión, trataré de no perder mucho tiempo ya que sé que todos los
miembros de esta corte son personas muy ocupadas e importantes después de todo y yo solo soy un
sirviente humilde e indigno de su atención.

Wei Yin voltea a ver su mano que aún reposa sobre la del Emperador quien se encuentra sentado muy
tranquilo en su trono. "Mi amado Lan Zhan, si no deseas ser sutil, bien podría seguirte el juego" y así, sin
poder evitarlo, entrelaza sus dedos con los de el Emperador.

Esta acción parece ser suficiente para generar algunos desvíos de Qi dentro de la sala. La sonrisa de Wei
Wuxian se convierte en una sonrisa satisfecha y engreída. —Bueno, comencemos entonces.

.
Capítulo 12
Chapter Notes
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Wei Wuxian podía sentir la mirada de puro odio del consejero real, perforando su piel. Varios de los
líderes presentes en el lugar igualmente lo miraban entre aturdidos y con rabia mal disimulada.

Wei Wuxian vuelve la vista hacía la mano que aún sostiene la suya, dándole un ligero apretón,
recordándose a sí mismo que no está solo.

Observa lo fácil que ésta mano, se envuelve alrededor de la suya. Observa los patrones de sus venas, los
cuales Wei WuXian ha memorizado debido a las abundantes veces que se han encontrado presionadas en
su cuerpo "Como hace unas horas..."

—¡Ehem!— Uno de los Ancianos se aclara la garganta, rompiendo la tensión que se estaba acumulando
—Yiling Laozu ¿Debemos dirigirnos a usted por este título o puede compartirnos su nombre?

Wei Ying hace una mueca aún detrás de su máscara, y se acerca para susurrarle al Emperador —¿Alguna
vez te dije que amo tus manos?— Balbucea —Y las amo aún más cuando me las pones encima—
Terminando la frase, Wei Ying se pone de pie, soltando la mano del emperador pero sin moverse de su
lugar y realiza una reverencia con un arco perfectamente respetuoso —Este Humilde se presenta como Wu
Ming, pero pueden llamarme por mi título si así lo desean.

Lan WangJi tiene que contenerse para no sonreír, porque le gusta mucho cuando Wei Wuxian se comporta
tan juguetonamente y no se molesta en fingir lo que no es, aún cuando están teniendo esta conversación
frente a muchas personas importantes de la nobleza.

—¡Ridículo!— Regaña el consejero real —Muestra algo de respeto ante los presentes, y sobre todo en su
majestad, ¡Eres un sirviente!, compórtate como tal.

Lan WangJi sintió que sus labios se retraen con malestar ante la idea de dejar que traten así a su Wei Ying.
Wei Wuxian lo estaba mirando, siempre mirando. Podía sentir sus ojos de color mercurio aún ocultos por
esa máscara, muy fijos en él. Parecían no querer perderse nada. Respiró un poco más profundamente,
absorbiendo el olor que desprende su pareja. Un destello de diversión pasó por el rostro de Wei Ying, antes
de desaparecer en una disimulada inclinación de cabeza. El emperador habla en ese momento —Yiling
Laozu se ha presentado voluntariamente. No es su obligación rendirle cuentas a nadie más que a mi
persona.

Oh!

Wei Ying se deleita con las caras que ponen todos ante las palabras de su majestad. En vista de que el
emperador está cerrado en mantenerlo a su lado.

—Majestad...

—Estamos aquí reunidos para discutir el término de la guerra y reunir la información que se tiene sobre
ésta misma. No considero oportuno interrogar a un hombre que ha dejado muy en claro que es nuestro
aliado— Habló Jin Zixuan, cortando a los demás.

Wei Wuxian le dirigió una mirada al hombre y asintió en agradecimiento.

—Si les parece bien, comenzaré por compartir la información que tengo con mi equipo, A-Ning, puedes
proceder por favor.
La siguiente hora transcurrió rápidamente mientras el hombre compartió con todos, la sustancial
información que poseían sobre el enemigo. Esta información detalla la cantidad de hombres que queda en
el ejército enemigo, los diferentes campamentos instalados que rodean el perímetro de Ciudad sin noche,
algunos accesos seguros a la ciudad, entre otras cosas de vital valor.

—¿Cómo sabemos que esta información es real y no caminamos hacia una trampa?— interrumpe uno de
los ancianos.

—Esta información parece muy completa, como se puede determinar su veracidad— Habló otro.

—Por lo que sabemos, el general Wen Chao sigue por ahí, quizás es uno de sus espías —El hombre habló,
mirando fríamente a Wen Ning que se puso rígido bajo su mirada, aunque no por las razones que todos
creen.

—Wen Chao está muerto.

Todos se sorprendieron por las palabras pronunciadas por Yiling Laozu y lo observaron fijamente.

—Yo personalmente me encargué de él y agradezco que no lo mencionen en mi presencia— dijo en tono


frío.

—Tengo entendido que acabaste con el general Wen Xu— Habló esta vez Nie MingJue —¿La
información es correcta?

—Tanto Wen Xu como Wen Chao, murieron bajo mi espada. Aunque Wen Xu murió en mejores términos
que Wen Chao— un aura oscura rodeó al hombre.

—¿Estás diciendo que lo torturaste?

—Un poco si, entre otras cosas— miró a Wen Ning —llegué tarde y no pude salvar a la familia de mi
amigo aquí presente. Lo mínimo que pude hacer fue vengarlos.

—Que noble de tu parte— espetó con desgana Jin Guangshan.

—Jin Guangshan, le recuerdo que a pesar de ser su hijo, soy yo quien representa a la familia Jin en esta
reunión. Siendo el general de occidente, es mi voz la que cuenta aquí, por lo que usted no es más que un
observador, así que le pido por favor que guarde sus comentarios.

—¡Insolente! ¿Cómo te atreves?

Wei Ying no pudo evitar la carcajada que salió de sus labios al ver la pequeña riña familiar. Varias
personas lo miraron con molestia pero él los ignoró a todos —¡Oh! Zixuan, el pequeño pavito ya maduró,
me agradas mucho más ahora— comentó aún riéndose.

—¡Y tú sigues siendo un desvergonzado!— Contraatacó bufando.

—¡Suficiente! Continuemos con el tema— grito MingJue —Si Wen Chao también está muerto, la base de
poder en Qishan debe estar completamente colapsada. sin herederos y con lo poco del ejército que queda,
es el momento de dar el golpe final.

Xue Yang se puso de pie —Nuestro escuadrón tiene preparado un plan para infiltrarnos en la base de
ciudad sin noche, una vez adentro y asesinado a Wen Ruohan, las demás fuerzas caerán.

—¿Cómo vamos a deshacernos de Wen Ruohan?— preguntó Jin Zixuan.

—"Nosotros" no— dijo Yiling Laozu —Me voy a encargar de él yo mismo.


Lan Wangji no estuvo de acuerdo —Iré contigo, Zixuan y yo. Ya lo había decidido, un pequeño escuadrón
será más efectivo.

—¡Majestad!... No quiero que te pongas en peligro por mi culpa.

—Tu no tomas las decisiones ahora.

Wei Ying hace un puchero ante el regaño mal disimulado del Emperador.

—Majestad, se que ya lo había mencionado antes pero no es muy prudente que se encuentre de primera
mano ante un plan tan improvisado como este —Habló el consejero real —se que confía en este... hombre,
pero hay que analizar mejor las cosas. Lo que dijeron los ancianos podría ser cierto, por favor no
desestime su sabiduría, hoy planteábamos recibir a este Yiling Laozu pero incluso llegó con varias
personas de las que tampoco sabemos su procedencia.

El emperador observa a los acompañantes de Yiling Laozu. Es cierto que Wei Ying nunca los mencionó,
pero...

—Majestad— Wei Wuxian se puso de pie nuevamente para después inclinarse ante el emperador —Le
doy mi palabra de que las personas que me acompañan son de mi entera confianza y todo lo que hacemos
es para el beneficio del reino— en un movimiento muy audaz, extiende su mano para retirar la máscara
que cubre su rostro y así poder ver al emperador a los ojos —jamás obraría de forma que lo pudiera
perjudicar de alguna manera en esta guerra majestad, no como otros aquí presentes.

—¿Qué quieres decir?— preguntó un anciano, observando al joven sin su máscara, encontrándolo...
inquietantemente familiar.

—Alguien los ha estado espiando— Habló Wei Wuxian sin rodeos y procediendo a colocarse de nuevo su
máscara para volver la vista al resto de personas en la sala.

—¿De qué estás hablando?— gritó de nuevo el consejero real.

—Tengo razones para creer que se ha estado filtrando información desde nuestro lado de la guerra hacia el
enemigo —Wei Wuxian se pasea por la sala, observandolos a todos abiertamente —He cazado algunas
ratas en el camino pero aún no doy con su nido.

—¿Tienes pruebas de esto?— preguntó un líder menor.

—Si las tengo o no, es cosa mía. Y en este momento solo me dedico a observar, pero no puedo hacer
nada...No ahora, al menos— Sus ojos brillaron dirigidos a un punto en concreto de los presentes.

—¿Cómo puedes saber esto con tanta certeza?, incluyendo todo lo que nos has compartido de la guerra —
esta vez habló el general del norte.

—Soy así de increíble— dijo Wei Wuxian despreocupadamente, ya que no tenía ningún deseo de tener
esta conversación sobre sus métodos. Jin Zixuan puso los ojos en blanco. Wei Wuxian vio que Lan Wangji
lo miraba de reojo y dijo —¿Su majestad está de acuerdo conmigo?

—Mn— dijo el emperador, claramente sin sentirse obligado a refutar las palabras del contrario.

—Bueno, ya que se decidió el curso final de esta guerra, tengo curiosidad por saber que va a pasar a partir
de ahora, contigo— preguntó Jin Guangshan.

—¿Conmigo?
—Eres un cultivador demoníaco. según entiendo, perteneces al reino de gusu pero no está claro si eres
sirviente de alguna familia o de dónde provienes y tampoco sabemos el alcance de tus habilidades—
continuó el Jin.

—¡Eso no es algo que te importe!— espetó Xue Yang.

—Por supuesto que importa. Alguien con habilidades tan extraordinarias, no debe andar libre por ahí
como si no fuera nada. Lo correcto sería que se afilie a alguna de las familias nobles del reino para...

—Lo siento líder Jin— interrumpe Wei Wuxian —pero solo soy leal a su majestad, el Emperador. Podría
decirse que soy como su espada y me temo que no le serviría a nadie más que a él, sin mencionar que el
Emperador no me dejaría apartar de su lado— Lan WangJi miro a Jin Guangshan, en sus ojos fríos había
una amenaza implícita. "Aléjate ahora".

—Entonces, ¿Cuales son tus intereses? ¿cuál es tu propósito al ayudarnos en esta guerra? No creo que lo
hagas por la mera acción de hacer lo correcto. Un cultivador demoníaco como tú debe querer algo a
cambio— habló Lan Qiren, su voz en tono despectivo.

—¿Lo que quiero?— comentó Wei Ying pensativo y mirando de reojo al Emperador — Aunque ustedes
no lo crean, lo hago porque es lo correcto, pese a que no me agradan muchas cosas de este reino y sobre
todo muchas personas— lo dijo mirando directamente a Lan Qiren —ciertamente lo hago para poder estar
con la persona que amo, es lo único que me mantiene aquí y si por él tengo que diezmar el mundo —sus
ojos brillaron en rojo, aún ocultos detrás de su máscara —¡lo haré sin dudarlo!

Varios se sintieron inquietos ante el aura amenazante que desprendió el cultivador demoníaco al
pronunciar sus últimas palabras

—Debe ser una doncella muy especial— dice alguien en el lugar.

Lan Xichen da un paso al frente —perdón pero acaso dijiste "él", ¿te refieres a un "él" y no un "ella"?

—Oh! ummm. Sí, dije "él", ¿tienes algún problema con los manga cortada?

Lan Xichen se sorprendió y rápidamente contestó —No, por supuesto que no, solo me sorprendió, debido
a los... rumores.

—¿Rumores? ¿Qué rumores?

—Ummm bueno— Lan Xichen se veía bastante incómodo para responder —Desde que apareció la
leyenda de Yiling Laozu, se dice que atormenta día y noche tanto a vivos como a muertos y que le gusta
cazar a vírgenes en los pequeños pueblos para saciar sus deseos carnales más oscuros.

Wei Ying parpadea ante esto y luego estalla en una sonora carcajada sujetando incluso su estómago, sin
poder contenerse —Vi-virgen ¿Vírgenes? No puede ser jajajajaja.

—Amo We... digo, Amo Wu— Wen Ning lo ayudó a ponerse de pie cuando aún se seguía riendo.

—¡A-Ning! ¿Escuchaste eso? es hilarante, no puedo creer que dijeran eso.


Todos se quedaron mirando al temible Yiling Laozu, perder toda compostura para soltarse a reír como un
niño pequeño en medio de la sala.

—Lo absurdo es que en realidad, eres tú la doncella— habla Xue Yang de la nada.

—¡A-Yang! ¡Basta!, no puedo jajajaja.


Es solo cuando capta la suave mirada de Lan WangJi que Wei Wuxian se detiene por fin de su hilarante
risa. A menudo se le ve al Emperador con una expresión estoica en su rostro, pero Wei Ying ha tenido
bastante suerte de ver sonreír a Lan WangJi en las pocas veces que ha ocurrido.

No es el tipo de sonrisa que uno esperaría, ya que esta no es evidente, pero si se observa con atención, hay
una ligera curva hacia arriba en las puntas de sus labios. Wei Ying había soñado muchas veces con esa
sonrisa, sobre todo en los últimos años. Era a la vez una bendición y un tormento en sus días de soledad.

Esto fue algo que Wei Wuxian simplemente disfrutó. Hacía algo tonto, y Lan WangJi le resoplaba, pero la
curva en sus labios estaba ahí y se combina con una mirada tan suave que hace que el corazón de Wei
Wuxian tartamudee.

Hoy, esta vez, en medio de las personas más importantes que lideran esta guerra por el imperio, Wei
Wuxian vuelve a ver esa mirada.
Lan WangJi no está sonriendo por supuesto, pero Wei Wuxian puede reconocer la forma en que lo mira. Es
una mirada tan suave, con tintes de cariño, tal como lo hizo hace tantos años cuando eran más jóvenes y
sus corazones aún no habían sido manchados por la oscuridad del mundo. Quizás por eso puede notar que
hay algo diferente que Wei Ying no puede descifrar pero no cuestiona, ya que su corazón palpita
desbocado, bajo el abrumador cariño, que expresan esos orbes dorados.

—Hmm, ciertamente los rumores están fuera de lugar —Wei Ying se dirige al resto de los presentes
después de calmarse —Nunca he estado interesado en las doncellas y francamente nunca dormí con
ninguna —Se vuelve para mirar directamente al Emperador —Como dije antes, solo hay una persona a la
que amo, y es la única con la que he estado y estaré por el resto de mi vida. Mi corazón, mi cuerpo y mi
alma entera le pertenecen a él y únicamente a él.

Tanto Lan Xichen como Lan Qiren, examinan la mirada que el emperador y el cultivador demoníaco se
dirigen, sintiendo un creciente horror dentro de ellos.

—¡Bueno...! Creo que se tocaron todos los temas necesarios durante esta reunión —habló Jin Zixuan.

El Emperador se puso de pie con su habitual elegancia —Agradezco a todos su presencia y participación
en esta reunión. Ha sido difícil todo el proceso y la lucha que hemos tenido con esta guerra que nos ha
arrebatado tanto a todos. Pero gracias a los múltiples esfuerzos que hemos hecho, la paz y la luz volverán a
estás tierras.

Todos los presentes hicieron una reverencia y se sintieron felices por las palabras del Emperador. La
guerra estaba casi ganada, la paz estaba al alcance de sus manos.

—Pueden retirarse y descansar. Mañana procederemos según lo planeado —volvió la vista hacia donde
estaba Wei Wuxian —Yiling Laozu y su séquito, también Zixuan, se quedan —Sin nada más que decir,
despidió a todos para volver a su lugar.

Una pizca de desaprobación cruzó por el rostro de Lan Qiren quien rápidamente trató de refutar —Eso es
inapropiado majestad. Al menos como su consejero , debería quedarme para cumplir mi deber como su
guía en lo que necesite discutir con estas personas.

Lo miró a los ojos, su voz desprovista de cualquier emoción —su consejo no es necesario, retírese con el
resto de líderes.

Todos lo miraron como si hubiera dicho algo escandaloso, pero viendo que el Emperador estaba cerrado
en su decisión, decidieron salir para no desatar la ira de su majestad.

Wei Ying los siguió con la vista hasta que la última persona saliera del lugar.
Lan Xichen se detuvo en la entrada y miró a su hermano antes de volver la vista hacia el cultivador
demoníaco con una mirada fría, para luego salir de la sala de reunión.

Wei Ying no le prestó atención y cuando solo quedaron las 6 personas necesarias adentro, caminó
tranquilamente hasta la entrada y colocó un talismán silenciador para que nada de lo que se hablará a partir
de ese momento, fuera escuchado por las personas en el exterior.

En cuanto se dió vuelta, los ojos de Wei Ying buscaron a los del Emperador y luego habló muy
animadamente —¡¡Laaaaaaann Zhaaaaan!! Amor, te extrañé— se arrojó a los brazos del emperador, quien
lo recibió gustoso y lo ubicó en su regazo. Wei Ying enterró su rostro en el cuello del emperador —¿Me
extrañaste, Lan Zhan? Yo te extrañé mucho.

—¡¡TU!! Desvergonzado, ¿Qué crees que le haces al Emperador?— gritó el de morado.

—¡Déjame! El Emperador me quiere así, ¿Cierto Lan Zhan?

—Mn— contestó Lan WangJi y Wei Ying le mostró la lengua al de morado para después volver a enterrar
su rostro en el cuello del Emperador.

—Pero ¿Que?...

Todos los presentes procedieron a quitarse las máscaras, revelando los diferentes rostros.

El Emperador observó al hombre de morado un momento antes de hablar —Eres Jiang Wanyin.

—Majestad —se inclina ante el emperador.

—Lan Zhan, Lan Zhan, te los presentaré. Ellos son mis amigos Xue Yang y Wen Ning, aún Falta Wen
Qing que la dejé en el cuerpo médico. Todos ellos conforman mi equipo. Y el tipo de morado es de tu lado
pero lo rescaté hace unos días y lo uní al grupo temporalmente.

—¡No soy de tu equipo de fenómenos! —espetó el Jiang —solo estoy estratégicamente oculto mientras
cazo a esa rata escurridiza.

—¡No somos fenómenos!— Wei Ying se acurruca más en los brazos del Emperador —A A-Yang lo
rescaté de la familia Yueyang Chang, que quizás lo habría matado con tantos abusos si no intervenía. Wen
Ning y Wen Qing desertaron de Qishan y debido a eso mataron a su familia, no podía dejarlos a su suerte.

—¿La familia Yueyang Chang? ¿Los mataste?— preguntó Zixuan.

—¿Qué? Nooo, si me pusiera a matar a cada familia noble que hiriera a sus sirvientes, el reino se quedaría
sin súbitos. Incluso los Jiang que fue donde me estuve ocultando no son mejores.

—Wei Ying.

—¿Si, Lan Zhan?

—¿Te hicieron daño?— preguntó el Emperador, mirando sobriamente a Jiang Wanyin que se puso rígido
de inmediato.

—Estoy bien Er-gege, soy fuerte— y procedió a repartir besos en el rostro del Emperador, quien no lo
detuvo.

—Nunca dije que Wei Ying fuera débil, pero necesita obligatoriamente dejar de ponerse en peligro por el
bien de mi corazón— dijo Lan Wangji —No puedo soportarlo.
Wei Ying lo miró con los ojos llorosos —¡Lan Zhan! ¡Te prometí que me cuidaría!— hace pucheros.

—Mn. Lo creeré cuando lo vea.

El resto de las personas presentes ruedan los ojos, apartando la mirada por la desvergonzada interacción,
excepto Jiang Wanyin que está bastante sorprendido.

—Ustedes...

—¿Hmm? ¿Dijiste algo?— pregunta Wei Ying.

—¿Qué tipo de relación tienen?

—¿Que no es evidente?— Wei Wuxian descaradamente besa los labios del Emperador.

—¡Wei Ying!— regaña el emperador aunque su tono de voz es profundamente suave.

—Somos pareja— simplemente responde.

—Pe-pero eres un hombre, los dos son hombres.

—¿Jiang Wanying tiene algún problema con la pareja que escogí para compartir mi vida?— el Emperador
habla en un tono profundo y oscuro.

—Por supuesto que no majestad — el Jiang vuelve a inclinarse —solo... tenía entendido que varias
doncellas se reunieron para servirle a su majestad y estar en su harem imperial, mi hermana incluida.

—El consejo de ancianos reunió a las doncellas sin mi aprobación. Yo ya escogí a mi pareja, no requiero a
nadie más.

—Pero las leyes del reino exigen un heredero. Se requiere continuar con la línea de sangre. ¿El Emperador
tomará a las demás doncellas como concubinas?

El Emperador pudo sentir que Wei Wuxian se puso rígido bajo él. Lan Zhan repasó mentalmente lo que
había sucedido en el pasado. Estaba bastante seguro de que parte de la negativa de sus mayores para con
su pareja, era el tema de la sucesión y en ese entonces no pudo evitar que su propio reino lastimara a su
Zhiji. Se giró para mirar a Wei Ying de nuevo, empujándolo suavemente para presionarlo más contra sí
mismo. No cometerá los mismos errores está vez.

Había visto a muchas personas que tenían rasgos muy bien definidos y estéticamente agradables. En la
nobleza era algo muy normal y su familia particularmente estaba llena de ellos. Pero había algo en la
deslumbrante belleza que brillaba en los ojos plateados oscuros, la forma en que los bordes afilados de su
mandíbula y pómulo eran delicados pero decididamente masculinos que hizo que los procesos de
pensamiento de Lan Zhan se descarrilaran momentáneamente.

Wei Ying es hermoso, bastante atractivo en muchas formas, pero está completamente seguro que la fuerza
que tira desde lo más profundo de su ser, haciéndolo buscar desesperadamente al otro, no tiene nada que
ver con la belleza física.

Vuelve a mirar al Jiang —Wei Ying es mi alma gemela, Nos pertenecemos el uno al otro. Si el destino
decidió que mi Zhiji sería Wei Ying, un hombre al igual que yo. Aunque se nos sea imposible continuar
con mi descendencia, que así sea. Al único que quiero es a Wei Ying.

Los ojos de Wei Ying se abrieron y miró boquiabierto a su pareja, antes de esbozar una radiante sonrisa. El
emperador lo vio sonreír y sintió que inevitablemente podría imitar esta misma acción. Le gustaba mucho
cuando podía sentir los sentimientos de Wei Ying con tanta fuerza, a él realmente le gustó.
Jiang Wanyin se quedó con la boca abierta y un poco aturdido por estas respuestas, solo pudo quedarse a
un lado.

—Wei Ying, ¿Los Wen que trajiste?

—Lan Zhan, te prometo que son honestos, ellos no representan un peligro para esta guerra. Son ellos de
hecho quienes me han brindado información para las misiones que he realizado y me han apoyado en todo.
Ellos solo quieren liberarse de la opresión de Wen Ruohan.

—Mn. Confío en el juicio de Wei Ying.

Vuelve La vista al Jiang —Jiang Wanyin, ¿qué fue lo que te sucedió?

—Uh! Oh, por supuesto majestad, como dijo durante la reunión el... Wei Wuxian, hay un infiltrado en el
campamento. Lo sorprendí llevándose información de mis tropas, aunque dijo que era para su mano
derecha Zewu-jun. Este hombre trabaja en las filas de los Nie— hace una pausa — Y cuando trate de
detenerlo, logro incapacitarme. Lamento mí incompetencia majestad, Le prometo hacerlo mejor la
próxima vez.

—¿Lan Xichen está en esto?— preguntó el emperador.

—No estoy seguro majestad, Wei Wuxian sugirió que me quedara con su grupo después de ayudarme para
observar sus movimientos un poco, antes de tomar decisiones.

—Es una decisión acertada —Wei Ying se contenta con el pequeño cumplido —Jiang Wanyin, te
encargarás de vigilar a Lan Xichen desde este momento y ver si hay algún movimiento sospechoso con
respecto a Meng Yao.

—Lan Zhan, ¿ya sabías que era Meng Yao de quien hablábamos?— preguntó Wei Ying.

—Mn. Parece que tiene un interés particular en Xichen.

Wei Ying lo mira un momento contemplando sus palabras —¿Sucedió algo con tu hermano? No recordaba
que hayas sido tan frío con el antes.

La mirada y el ceño fruncido de Lan WangJi, fue lo suficientemente glacial como para arrojar escarcha
sobre quienes se encontraban en la sala.

—Lan Qiren y Lan Xichen tuvieron su parte en los acontecimientos que dieron lugar hace 13 años.
Cuando todo esto termine, ellos tendrán que rendir cuentas por todo lo que te hicieron pasar.

—¡Oh! Lan Zhan... Aunque ciertamente no puedo perdonar a algunos miembros de tu familia, no quisiera
que esto afectara su relación. Ellos son tu familia después de todo.

—Wei Ying es mí familia y lo más importante para mí —El Emperador lo miró serio —No te pongas por
debajo de ellos.

—Aiyoo!! Lan Zhan, ¡No puedes decir esas cosas! ¡Mi pobre corazón no puede soportarlo!

El Emperador levanta su mano para acunar el rostro de Wei Ying y lo mira suavemente —Wei Ying es mí
todo, siempre estará primero en mí vida.

—¡¡LAN ZHAAAAN!!— Wei Ying se sonroja furiosamente.

Los demás presentes trataron de ignorar el intercambio, ya un poco acostumbrados a la desvergüenza de la


pareja.
—¡Oye!— le susurra Wanyin a Xue Yang que está cerca de él —Tu eres el que ha estado vigilando más de
cerca el campamento, ¿Cierto? ¿Sabes por qué mi madre no estaba presente en la reunión?, solo vi a mi
padre en el lugar y ellos nunca se separan en estas reuniones.

—La general del norte Yu Ziyuan fue castigada, aún se está recuperando de sus lecciones —Xue Yang
sonríe ante el recuerdo.

—¿Qué? ¿Por qué fue castigada?

—Insubordinación.

—¡Eso es imposible! Mí madre nunca ha desobedecido en nada al Emperador.

—Pues es más posible de lo que crees. Escucha niño, dudo que alguien en este lugar pueda tocar las
pertenecías del Emperador y salir ileso de ello.

Jiang Wanyin miró a la pareja que seguía dándose cariño y las palabras de Xue Yang cobraron más
sentido. Tendría que tener cuidado de no ofender al Emperador en el futuro o su familia podría caer en
desgracia.

—Zixuan, el resto de los preparativos para mañana quedan en tus manos. Cada uno conoce sus deberes.
¡Adelante!

Terminada la conversación todos se dispersaron para cumplir con sus funciones mientras el Emperador
secuestra al patriarca de Yiling y lo arrastra hasta sus aposentos privados.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Lan Xichen va camino hasta la carpa de los Nie y encuentra en la salida a Nie Huaisang —Nie Huaisang,
me alegra encontrarte— se inclinó a modo de saludo —¿Has visto a Meng Yao? No lo encuentro después
de la reunión de esta tarde.

Nie Huaisang le hizo una mueca, pero negó con la cabeza —Me temo que no. Da-ge está furioso porque
desapareció de la nada y hay muchas cosas por resolver para mañana.

—Entiendo, cuando vuelva, ¿podrías decirle por favor que lo estoy buscando?

—Claro... si Da-ge no lo mata primero— ríe.


Xichen le sonríe amistosamente y luego se pone serio —Huaisang, tú estuviste en la reunión, que opinas
de esta persona, Yiling Laozu.

El Nie le dirige una mirada contemplativa, medio oculta por su abanico —El Emperador parece confiar en
él y hasta ahora no ha hecho más que ayudar con la guerra. El Emperador se muestra muy renuente a
apartarlo, los dos parecen ser... Cercanos.

Xichen se quedó inexpresivo un momento —Podría ser peligroso.

—El peligro está en la cama de alguien más, diría yo.

—¿Qué quieres decir con eso?

—¿Uh? ¿Dije algo?


—Huaisang...

—¡Eh!.....No lo sé, no sé. ¡¡Realmente, realmente no lo sé!!— Nie Huaisang exclamó, revoloteando con su
abanico antes de irse y dejar a Xichen con la palabra en la boca.

A unos cuántos metros de ahí... ocultos.

—¿El hermano del emperador también es manga cortada?

—E-eso parece...— responde Wen Ning.

—¿Es en eso en lo que te fijas? ¡Estás perdiendo el punto!

—¿Qué estás haciendo aquí? El emperador solo me pidió a mí seguirlo y Wei Wuxian solo mandó a este
Wen conmigo.

—Solo jugando, estoy aburrido— dijo Xue Yang, sonriendo.

—Juega en otro lugar— bufó el Jiang.

...

El amanecer estaba oscuro, solitario y tranquilo, con solo la luna para iluminar el lugar, mientras los rayos
del sol, estaban aún muy lejos de salir. A medida que la niebla se levantaba de la superficie del lugar, no se
oía más que los silenciosos pasos de los soldados, alistandose para marchar.

El paso del ejército era firme pero lento en una marcha perfecta. sus rostros estaban serenos excepto por el
surco de su frente, debido a la anticipación de lo que sería, su última batalla.
Al frente de ellos, alzándose imponentes, se encontraba una fila con los generales y líderes de guerra,
siendo dirigidos un poco más adelante, luciendo sus deslumbrantes tunicas blanca, una cinta en la frente
muy bien puesta y con el deslumbrante reflejo de su espada, se encontraba el Emperador Dragón,
HanGuang-Jun.

—¡Es una bonita mañana!— dijo Wei Ying, su cabeza cayó hacia un lado para descansar contra el hombro
de Lan WangJi.

El Emperador continuó mirando hacia el frente y rodeó con el brazo a su pareja, conduciéndolo para que
caminara a su lado.

—¡Si! ¡Es perfecta para derramar algo de sangre!— Exclamó Xue Yang que caminaba muy cerca de ellos.

—Dañaste el momento A-Yang— Wei Ying le saca la lengua y vuelve a poner su cabeza en el hombro del
Emperador.

—Tal vez deberían tener su "momento" fuera de la vista del público— exclamó Zixuan desde el otro
costado donde caminaba junto ellos, para luego mirar a las personas que los seguían.
Los líderes y diferentes generales se quedaron perplejos, con caras de asombro, mirando la pequeña
interacción del Emperador y el cultivador demoníaco, pero ciertamente, nadie se atrevía a decir nada al
respecto.

El día comenzó bastante bien, y el ejército continuó marchando en silencio. La guerra tardó más de lo que
cualquiera de los 2 bandos deseaba. 3 años de lucha, e incontable Sangre derramada fue suficiente para
todos. La anticipación hace cantar la furia en sus corazones.

Su victoria comienza a partir de ahora.


.

Chapter End Notes

La guerra llega a su fin. Nos espera algo de sangre en el próximo capítulo y veremos qué pasará en
esta nueva etapa en la vida de nuestro WangXian, con la calma después de la batalla.

Muchas gracias por leer y comentar


Nos vemos en una próxima...
🖤
Capítulo 13
Chapter Notes
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El sol ya ha comenzado a salir cuando se acercan al territorio de ciudad sin noche y todo se encontraba en
silencio.

—¿Las divisiones del ejército están listas?— El Emperador preguntó, y Jin Zixuan asintió.

—¡Bien! Cuanto más rápido hagamos esto, mejor— Dijo Wei Wuxian —A-Ning, ¿cómo están las cosas
actualmente? ¿Por qué no estás con el morado gruñón?— preguntó.

—Meng Yao no vino con el grupo Nie y tampoco lo encontré en el campamento antes de partir. Xue Yang
se fue a buscarlo después de notar su prolongada ausencia.

—¿Vino a Ciudad sin noche a darle aviso al enemigo? Eso explicaría el silencio en este lugar.

—N-no Parece que haya golpeado ninguna de las minas que esparció usted mismo en el camino.

—¿Minas?— preguntó el Emperador.

—Solo se activan con los enemigos, ninguna afectará a nuestros aliados— se vuelve para mirar de nuevo a
Wen Ning —A-Ning, vuelve con el morado gruñón y apoyalo. No pierdas de vista a Lan Xichen, aún no
sabemos si están relacionados— Wei Wuxian se lleva a Chenqing a los labios tocando una suave melodía
que resonó en todo el lugar.

Los soldados cerca de su posición tragaron audiblemente y lo miraron con diferentes expresiones en sus
rostros, reflejando desde nerviosismo hasta terror puro, al ya saber de antemano el significado de la
famosa flauta fantasma. Pero pasados varios minutos, la melodía se detuvo... y nada pasó.

—¿Qué hiciste?— preguntó Zixuan.

—Encargarme de los cabos sueltos— simplemente respondió. Zixuan lo miró un poco más pero decidió no
discutir.

Colarse en Qishan no fue tan difícil como la mayoría de escépticos en el lugar había anticipado. Se habían
sorprendido cuando él ejército se abrió paso por la ciudad, marchando sin contratiempos y con una mínima
resistencia por parte del enemigo. Llegaron tan lejos, sin derramar la sangre de sus aliados, que al
encontrarse cruzando la frontera de Qishan, comenzaron a sonreír con renovado entusiasmo.

Llegado el momento de dividir sus fuerzas, el Emperador dirigió un asentimiento de cabeza a los generales
y líderes, siendo ellos consciente de sus deberes, se repartieron para sitiar la ciudad y terminar de erradicar
al enemigo.

Lan Xichen, que se encontraba cerca, se separó de su grupo y se encaminó hacia dónde se alejaba el
emperador y sus dos acompañantes —¡Majestad!— se detuvieron al escucharlo —¡Por favor Déjame ir
contigo!

El Emperador reanudó su marcha sin voltear a verlo antes de hablar —Las 2 personas que me
acompañarán ya fueron designadas.

—¡WangJi!, ¡Soy tu hermano!


El Emperador se detuvo, volteando a verlo sin cambiar su expresión —Seguirás el mandato de tu
Emperador o serás castigado por insubordinación.

Lan Xichen esta vez lo miró enojado —¡Llevas días tratandome fríamente!— Miró al cultivador
demoníaco —No se que hizo este hombre para engañarte pero no puedes reemplazar a tu familia por un
simple acoston del momento.

La expresión del Emperador se volvió oscura y dio un paso para acercarse a su hermano —Cuando el
castigo se estaba llevando a cabo, cada anciano restante del reino así como Lan Qiren, se encontraban
presentes. Lan Qiren estaba ejecutando el castigo por lo que solo quedabas Tú, como la única otra persona
con acceso y autoridad para entrar a las celdas de los prisioneros —La ira reflejada en el rostro del
emperador obligó a Xichen a dar un paso atrás —¡Y no estabas presente ahí durante el castigo! por lo que
solo queda otro lugar donde pudiste estar.

Xichen lo mira confundido —Eso . . . Eso realmente no tiene ningún sentido para mí— murmuró.

El Emperador continuó —Y luego, Wei Ying aparece, en medio del ritual de castigo, claramente sabiendo
lo que estaba pasando cuando no tenía forma de saberlo de ninguna manera —Lan WangJi sujetó su
espada con tanta fuerza que sus nudillos se pusieron blancos —A menos que la persona que lo liberó, se lo
haya dicho.

—L-Lan Zhan...

—¡Silencio Wei Ying!— Lo cortó. Redirigió su atención de nuevo a la persona enfrente suyo. —Tú lo
mandaste a morir. Tu querías... Ignorante mis deseos y...

—¡WangJi!— Lan Xichen protestó interrumpiendolo —¿Cómo puedes decir cosas así? Yiling Laozu te
engaño, este hombre que apenas conoces está jugando con tu cabeza, estás diciendo incoherencias...

—Conozco a Wei Ying desde que tenía 9 años, crecí con Wei Ying y cada día que pasé a su lado, era un
día de enamorarme más intensamente de él —Lan WangJi suspiró, controlando sus emociones —
¿Conoces la leyenda de las almas gemelas? Wei Ying es la mía.

Lan WangJi volvió a mirar a Wei Ying que tenía los ojos vidriosos por contener las lágrimas. —No tienes
idea de lo que es tener a alguien, a quien tu propio ser reclama y se retuerce por mantener. Que cada gramo
de ti, lo llame a gritos, lo busque hasta en sueños y no sentirse completo, a menos que lo tengas cerca. Tan
necesario como el agua es esencial para la vida— extiende una mano y acaricia la mejilla del menor —
Con tanta hambre y sed de su presencia. Que clama por ti, como tú por el...

Vuelve la vista a Xichen —¿Alguna vez has deseado tanto algo? ¿Tanto que no puedes dormir, tanto que te
duele el alma? Pero ni siquiera sabes si eso que deseas está ahí afuera, en algún lugar. ¿Ni siquiera sabes si
está peor que tú? —las lágrimas de Wei Ying, ya no pudieron contenerse —Después de lo que hicieron,
me vi obligado a enfrentar un mundo sin él a mi lado. Una existencia vacía y todo esto por completo fuera
de mi control.

Lan WangJi miró hacia la ciudad —Estoy cansado de que las personas decidan por mi.

—Lan Zhan...— Dijo Wei Wuxian.

—Así que no importa lo que pase ahora. . . No permitiré que lo alejen de mí, otra vez. Y esto es
completamente mi voluntad. —El emperador reanuda su marcha, dejando congelados a los demás tras de
él —¡Wei Ying! revoca el hechizo en la mente de Xichen. Deja que recuerde el porqué ya no somos
hermanos.

Wei Wuxian dio una última mirada al Lan mayor antes de levantar a Chenqing y acercarla a sus labios —
No me culpes por esto. Tengo que obedecer las órdenes del Emperador.
La canción duró menos de un minuto. Al finalizar, Wei Ying no se quedó más que unos segundos para ver
la expresión horrorizada del Lan e inmediatamente se fue para alcanzar a Lan WangJi. Jin Zixuan se quedó
en su sitio.

—Tu... ¿Sabías de esto?— pregunto Xichen.

—Fui yo quien encontró a Wei Wuxian y lo obligué a enfrentar al Emperador. El resto ha sido solo la
voluntad de su majestad —respondió Zixuan.

—Ellos... él, los ancianos...

—Wei Wuxian está lejos de ser una persona inocente, pero en algo estoy de acuerdo con el Emperador. La
oscuridad que consumió y creó al Yiling Laozu fue obra de las propias acciones del reino y los ancianos—
suspiró —no lo conocí muy bien antes y puedo decir que definitivamente no lo conozco bien ahora, pero si
de algo estoy seguro es que todo lo que él ha hecho, es absolutamente por el bien del reino y del
Emperador. Te informo que como amigo más cercano de WangJi y su súbdito leal, honraré sus deseos,
protegiendolos a ambos, incluso si me tengo que enfrentar contra ti.

Dicho esto, Zixuan se marchó para alcanzar a los otros 2. Lan Xichen solo se quedó, de rodillas en el
suelo, contemplando el lugar donde antes estuvo parado el emperador.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Caminaron en silencio un rato. Wei Ying se removía incómodo pero no encontraba palabras que decir.

—Lan Zhan... lo siento.

—No es necesario. Lo que se tenía que decir, ya se dijo.

—Tu hermano...

—¿Fue errónea mi deducción?

—...No

—Entonces no hay nada más que decir.

Wei Ying asiente, aunque la incomodidad persiste. Decide extender tentativamente su mano para tomar la
del emperador mientras aún caminan, subiendo los escalones hacia la entrada del Palacio Wen. Lan
WangJi responde la acción, entrelazando sus dedos.

—Te amo, Lan Zhan...— comienza —Lamento todo el dolor que te cause. Te prometo compensarlo
amándote y dedicándome a ti el resto de nuestras vidas.

El Emperador detiene sus pasos para mirarlo.

—Dilo de nuevo.

Wei Ying parpadea —Lamento...

—Di que me amas— interrumpe y aclara su punto.


Wei Ying lo mira por un momento antes de hablar —Te amo, Lan Zhan. Con todo mi ser.

—Mn, También te amo Wei Ying. Lo único que te pido es que tengas presente, que tu vida ya no es solo
tuya. La próxima vez que estés pensando en morir solo, recuerda que hay personas que llorarían por ti y
estarían dispuestas a seguirte incluso en la muerte.

—¡¡LAN ZHAAAN!! No puedes decir eso, tienes prohibido morir. No morirás ¡Prométemelo!

—Solo si Wei Ying lo promete también.

—¡Lo prometo, lo prometo!

—Mn— la expresión del emperador se suaviza.

¡Crujido! Wei Wuxian empuja al emperador a toda velocidad y lo aparta del rango de impacto de una
espada que iba camino a su pecho. Con el desvío, la espada termina por impactar limpiamente en el
hombro de Wei Ying, esparciendo su sangre por el piso y manchando sus túnicas.

—¡Wei Ying!

—¡Wei Wuxian!

Gritan al mismo tiempo Lan WangJi y Jin Zixuan.

—¡Estoy bien, Lan Zhan! Puedo manejarlo.

Entonces, la espada salió volando de nuevo y regresó hacia la mano de su legítimo dueño. Wen Ruohan
había salido del palacio, caminando lentamente mientras descendía de las escaleras, observándolos por
turnos, antes de detenerse en Wei Wuxian.

—Te equivocaste de bando muchacho— Wen Ruohan habló —El imperio de Gusu nunca apreciará
verdaderamente tus habilidades.

Wei Wuxian recordó la propuesta casual de Wen Xu y sonrió —No me importa ser valorado de esa forma.
¡No soy una herramienta! y si lo fuera, solo hay una persona que tiene permitido empuñarme.

Los ojos de Wen Ruohan se entrecerraron —Cuando su gente te acribille y te sentencien a la hoguera,
¡Lamentarás tu decisión!

Wei Wuxian se pone ligeramente tenso ante lo dicho, lo suficiente para ser perceptible por los demás. El
Emperador camina con su espada ya fuera de su vaina y apuntando al enemigo. Se para justo delante de
Wei Wuxian.

—Quien se atreva a tocar un solo cabello de mi Emperatriz ¡Derramará su sangre por mi espada!— Siseó,
entrecerrando los ojos —No necesitamos tus advertencias vacías.

—¡Tú!— Wen Ruohan gruñó, alcanzando su espada.

Lan WangJi se abalanzó con Bichen en su mano, arqueando su cuerpo con fluidez y cortando el aire
mientras se aproximaba.

Las sombras cobraron vida instantáneamente, tropezando unas con otras para llegar al hombre de túnicas
rojas. Wei Wuxian se unió a la pelea mientras ordenaba a las sombras que se alzaran para atacar al hombre
que había causado tanto dolor y sufrimiento a la gente que le importaba al Emperador.
A su alrededor, los sonidos de muerte llenaban el aire. Espadas chocando con notas disonantes. Gritos
ahogados y espesos con sangre saliendo de sus bocas, agudos y agonizantes. Cuerpos apilados, golpeando
las piedras en su deceso. Un canto enfermo y retorcido sobre la lucha. Una canción de dolor, muerte,
sacrificio y... Esperanza.

Sombras negras se movían por el suelo, avanzando como si fuera neblina manchada sobre los cuerpos. Los
soldados que continuaban luchando, no se detuvieron ante esto. Ya sabían que solo había una persona que
podía controlar la energía resentida así.

—Soy el portavoz de los muertos— la voz de Yiling Laozu se alzó alto y claro en el campo de batalla —
Soy la espada del Emperador Dragón— Una enorme sonrisa se posó en los labios de Wei Wuxian. —Wen
Ruohan, ¿y sabes qué? Estaba muy ansioso por verte —Wei Wuxian detuvo sus movimientos y levantó su
flauta con una sonrisa sombría. Los dobladillos de su túnica oscurecidos por la nube de energía resentida
que se aferraba a sus pies —Majestad, me disculpo por lo que vas a ver, realmente no es algo lindo.

Todos pudieron ver a las 3 personas que se enfrentaban a Wen Ruohan y solo pudieron contener el aliento
mientras continuaban con su propia batalla. Los cultivadores Wen restantes comenzaron a entrar en
pánico, sabiendo que estaban condenados. El Emperador Wen no los protegería, su reinado había llegado a
su fin.

Lan WangJi aún en su lucha, logró divisar el campo de batalla, llegando a la conclusión de que Wei Ying
tenía razón. No era "bonito", era mucho más que eso y Lan WangJi no tenía palabras para describirlo. El
aire se volvió pesado mientras nubes brumosas de espíritus se formaban a su alrededor, los muertos se
levantan y cobran vida en la batalla. Wei Wuxian es un espadachín excepcional y logra esquivar con
precisión los certeros ataques de Wen Rouhan, mientras al mismo tiempo contraataca y comando los
muertos en el otro lado de la batalla. "Etéreo" pensó el emperador. "Magnífico" también, o incluso
"cautivador y hermoso". Qué impresionante espectáculo estaba protagonizando su pareja.

Wei Wuxian esquivó un primer golpe, bajando la flauta lo suficiente como para agarrar al hombre por el
brazo y girarlo, haciendo que su espada se abriera y casi lo atravesará. Luego, Wei Wuxian saltó al techo y
continuó jugando.

Los soldados Wen salieron tambaleándose en cuanto empezó a tocar. Algunos de ellos trataron de correr
hacia las puertas mientras que otros corrieron hacia el palacio. Algunos otros entendieron su posición y
apuntaron sus espadas contra sus propias garganta para evitar morir a manos del enemigo.

Lan WangJi aprovechaba cada ventaja que Wei Ying le concedió, decidido a mantener a su enemigo fuera
del alcance de este.

Jin Zixuan se deslizó por un costado con su espada y cortó una herida profunda en el brazo de este. Su
enemigo se estrelló contra uno de los postes de la entrada, y la ferocidad del contraataque de Lan WangJi
lo obligó a ponerse a la defensiva. Los ojos de Wen Ruohan se abrieron de indignación. —¡¿Cómo se
atreven?!— Gritó el Wen.

A medida que continuaba la batalla, la energía del enemigo comenzó a decaer bajo la presión del poder de
los tres combatientes. Wei Ying se lanzó hacia adelante y arrojó varias cuchillas de energía oscura hacia el
emperador enemigo. Atrapó a la mayoría con el arco de su espada, pero dos se incrustaron en su hombro,
impidiendo el movimiento de su brazo.

Wen Ruohan tomó represalias con una explosión de energía de su mano libre. Lan WangJi giró con su
espada, tomando la mayor parte de la fuerza para que nada dañara a Wei Ying mientras Zixuan le cuidaba
la espalda. Incapaz de evitar el ataque del cultivador demoníaco, liberó un estallido de qi, haciéndolos
retroceder. Siendo el Emperador Lan el más cercano, recibió un golpe directo en el pecho y la fuerza la
arrojó contra un muro, derrumbándose en el suelo.
Xichen que se encontraba cerca, se alarma cuando ve esto y corre directo hacia el emperador —
¡¡¡WANGJI!!!— Gritó, pero inmediatamente ve al cultivador demoníaco pararse frente al Emperador para
defenderlo.

Furioso, Wei Ying aprovechó todo el poder de su núcleo oscuro, tomando control de los espíritus
resentidos que rodeaban el lugar y con varias ráfagas rápidas de energía, les ordenó atacar a Wen Ruohan.
Los espíritus atentos a la orden invadieron al Emperador Wen, desgarrando cada parte que lograban
alcanzar de él, balanceándose de un lado a otro, para cada que derribara a uno, otro tomara su lugar.

Lan Xichen escucha el sonido del Clank, voltea para ver el ataque que iba directo hacia él, pero fue
desviado —Deberías preocuparte más por ti mismo en lugar del Emperador, el ya tiene quién lo proteja.

Xichen lo mira mal —¿Por qué tu amo te mandó a seguirme? crees que no te noté todo este tiempo.

—¡¡No es mi amo!! mejor cuida tu maldito trasero o yo mismo te romperé las piernas— gruñó, dándose la
vuelta para volver a la pelea.

Lan Xichen ve a su hermano ponerse de pie y nuevamente lanzarse a la batalla. Decide hacer lo mismo de
su lado.

Con Wei Ying utilizando toda su energía para sostener a los espíritus que tenían preso a Wen Ruohan, Lan
WangJi aprovechó la oportunidad para enviar a Bichen a la refriega con tanta fuerza que cortó el brazo de
Wen Ruohan en un solo corte, llevándose casi todo desde el hombro.

—Tú...— comenzó Wen Ruohan, pero antes de terminar sus palabras, al igual que la última vez, la espada
volvió hacia él y atravesó su espalda saliendo por su pecho. Wen Ruohan se atragantó con su sangre y
tropezó, dejando caer su cuerpo hacía adelante.

Wei Ying dispersó su energía y se derrumbó en el suelo esperando recuperar el aliento.

Los ojos de Wei Wuxian se encuentran con los de Lan WangJi a través del polvoriento suelo que los
separa. En ellos se puede leer la misma feroz emoción que corre por sus venas —Lan Zhan, ¿estás herido?
—Wei Wuxian instantáneamente recorre con sus ojos el cuerpo del emperador, buscando en él, cualquier
indicio de heridas.

Bajo la atenta mirada de escrutinio en su pareja, el Emperador siente que la sangre corre con euforia por
sus venas y siente que se enamora un poco más de Wei Ying allí mismo, en el campo de batalla, con el
sudor goteando en sus ojos la sangre manchando sus túnicas y los músculos magullados por el esfuerzo —
Estoy bien, amor —dice. Había sentido que el miedo penetraba a través de la rabia en esos hermosos ojos
plateados, luego hubo alivio. Había sido suficiente. El Emperador se puso de pie y caminó a donde está
arrodillado el menor, viendo el torrente de emociones más claramente que lo rodeaba. Era tan inmenso que
no pudo evitar presionar sus labios contra la sien de su pareja, antes de susurrar —Te amo.

Wei Ying se echó a reír —¡Lan Zhan!— Podía ver la pequeña y complacida sonrisa en el rostro de Wei
Ying —No se te permite ser romántico cuando estamos en una situación de vida o muerte.

Wei Ying esperaba que Lan Zhan murmurara "Mn", como es habitual pero en lugar de eso, se quitó un
poco de polvo imaginario de sus túnicas y dijo —Se acabó, hemos ganado.

Wei Ying ríe y le saca la lengua antes de atraerlo a un abrazo —¿Estás bien? ¿Todos están bien?—
murmuró, su cara presionada contra el hombro de Lan Zhan.

El Emperador levantó la vista para ver a Zixuan tendido en un costado de uno de los muros, luciendo
bastante lamentable pero en su mayoría ileso. Luego, vuelve la vista hacia donde los últimos soldados del
ejército enemigo, cayeron cuando su Emperador murió y ahora sus fuerzas ocupan el territorio, reuniendo
a los sobrevivientes y organizándose para desplazarse de vuelta a su hogar.
—Mn— Responde.

—Ya veo, eso me alegra...— Dice antes de que todo se ponga negro y pierda el conocimiento.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
En el otro lado del imperio, fuera del territorio de Gusu Lan.

Meng Yao se detuvo en una pequeña tienda de té, mientras descansaba de su largo viaje. "Logré salir con
éxito del reino de Gusu sin ser notado. En cuanto logre llegar a un reino vecino y cruzar las fronteras,
estaré a salvo..."

Graznido

El sonido de un cuervo graznando a su lado, interrumpe sus pensamientos —¿Por qué hay tantos cuervos?
— mira a su alrededor notando que ese pequeño pueblo apareciera estar infestado de cuervos que se
posaban en los techos, ventanas y hasta en los cables donde los habitantes cuelgan su ropa.

Meng Yao paga su bebida y continúa caminando hasta que los diferentes establecimientos quedan fuera de
su vista.

El día es bastante caluroso por lo que podrá continuar caminando y entrar a descansar en el siguiente
pueblo. No usará su espada hasta que no lo considere realmente seguro...

Graznido

Nuevamente ese sonido... La primera reacción de Meng Yao fue quedarse quieto, como un ratón asustado
que había sido atrapado. Meng Yao se paralizó hasta que sus pensamientos y el silencio le hicieron
levantar la mirada buscando el lugar de donde provenía aquel sonido y entonces, como para alimentar su
pánico, miles de brillantes ojos rojos le devolvieron la mirada.

Una bandada de cuervos, tan negros como la noche apareció en su punto de visión. Eran tantos que incluso
alcanzaban a ocultar el sol con su reluciente plumaje negro.

Su primer instinto fue correr, lo cual fue inútil debido a que ya no quedaban casas a la vista donde pudiera
ocultarse.

Graznido

Los cuervos comenzaron a agitar sus alas y volaron hacia él rodeando su cuerpo por completo. Sacó su
espada e hizo el intento de defenderse pero fue inútil. Los cuervos comenzaron a perforar su piel y de ella
empezó a brotar la sangre sin contención alguna.

Graznido

¡Corrió! tan rápido como sus pies se lo permitieron, pero el ataque nunca se detuvo, siendo más agresivo
entre más segundos pasaban. ¡Tropezó! sus pies fallaron y una piedra en el camino lo hizo rodar en el
suelo. ¡Ciego! Los cuervos picotearon sus ojos hasta que ya no pudo ver nada. Su garganta estaba ronca
debido a sus gritos desgarradores que llenaban el aire junto a los graznidos de los cuervos.
Sus heridas eran profundas, sentía que en cualquier momento perdería inevitablemente la conciencia
debido a su sangre que no dejaba de brotar de cada extremo de su cuerpo. Hasta que de pronto... Los
cuervos se detuvieron.

Meng Yao respiró, sintiendo que la sangre se filtraba en su garganta, haciéndole difícil la tarea. Trató de
mover una de sus manos pero una voz juguetona lo hizo parar cualquier movimiento.

—¡Hasta que por fin te encuentro!— Rió —Eres bastante escurridizo— procedió a sentarse en el el pecho
del cuerpo malherido de Meng Yao. Éste último trató de gritar pero ya bastante difícil era respirar sin la
presión aplastante en su pecho —¡Tranquilo! Esto no tomará mucho tiempo... Una vez que me des algunas
respuestas, los cuervos terminarán de completar la misión de su maestro y yo me podré ir a casa, por lo
que podrás descansar.

Meng Yao nuevamente intenta moverse pero es inútil, no lo lograría.

—¡¡Uff!!— Suspira Xue Yang —Me encomendaron un trabajo muy laborioso. Pero bueno, la guerra ya
terminó así que, hagamos esto rápido para poder irme a casa y disfrutar de la celebración con los demás —
Xue Yang saca un pequeño cuchillo y le sonríe a la persona en el suelo.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
El imperio celebró y vitoreo el final de la guerra. Dos grandes imperios lucharon una guerra iluminada
por la mezquindad y codicia de un hombre que no supo detenerse.

Todos los ciudadanos se unieron a la celebración enalteciendo el triunfo del Emperador Dragón contra el
ejército enemigo.

El Imperio Wen no volvería a ver el sol elevarse majestuoso en el alba.

Las diferentes familias nobles fueron reconocidas por sus diferentes triunfos y logros a lo largo de la
batalla que se llevó a cabo y se premiaron según ellos.

Varias familias lograron ascender en la línea de nobleza, aumentando su riqueza y poder dentro del reino
mientras que algunas otras se vieron caer inevitablemente de la gracia del Emperador.

El consejo de ancianos convoca a una celebración festiva para conmemorar el fin de la guerra y también
para presentar a las doncellas de la nobleza, que serán las primeras en hacer parte del harem imperial.

El día de la festividad llega tan rápido como es posible, siendo los preparativos pocos días después de
finalizada la guerra. La nobleza se reunió en el palacio real, en una noche fresca en medio del final del
invierno y comienzo de la primavera. La noche los recibe con un bello firmamento de estrellas y una
enorme luna llena que adornaba en alto de los cielos.

El Palacio Imperial Lan era una pieza de arquitectura única. Sus impecables muros, en mármol blanco, las
puertas de hierro forjado con el grabado de un enorme Dragón. Parecía el hogar de los Dioses.

En el largo camino a la entrada, vistiendo sus mejores atuendos, los miembros de la nobleza caminaban
orgullosos, siendo seguidos por su séquito y diferentes sirvientes.

Al ingresar al palacio, las diferentes familias nobles se situaron alrededor del escenario donde estaba
dispuesto el trono real, aún vacío, esperando a que todos ingresaran para la importante entrada de su
majestad real, el Emperador Dragón...

Cuando todo el mundo estuvo listo, los cuchicheos y risas de los nobles, fueron callados por el anuncio de
la entrada de las 3 principales Doncellas, candidatas al harem imperial.

Durante los días posteriores a la guerra, se habló mucho en el reino de como una de las 4 candidatas fue
excluida de las demás por la solicitud personal del propio mejor amigo del Emperador, Jin Zixuan, para
casarse con esta doncella. Dejando así a solo 3 candidatas para el puesto.

Las 3 Doncellas entraron a la sala una a una.

Qin Su, elegida por la familia Qin, bajo el mando de la Familia Jin. Era una mujer hermosa, con un rostro
inocente y un toque de infantil juventud, vistiendo túnicas amarillo claro y rosadas, de tono muy suave.

Wang LingJiao, elegida por la familia Wang, bajo el mando de la Familia Riu. Era una mujer de
voluptuosos atributos, con un toque descarado en su etiqueta, vistiendo túnicas moradas y lila, luciendo un
prominente escote.

Por último Luo Qingyang, elegida por la familia Luo, bajo el mando de la Familia Jin. Su rostro brillaba
con gracia al igual que sus ojos marrones, sus túnicas rosas brillaban, luciendo las flores primaverales de
la estación a la que estaban ingresando.

Las tres doncellas terminaron de ingresar en fila e hicieron una reverencia ante los nobles reunidos y
ancianos que se encontraban presentes, mientras Lan Qiren iniciaba su discurso en el Salon.

—Me alegro mucho de iniciar con todos ustedes esta noche a través de esta celebración, para conmemorar
con mucha emoción el fin de la guerra y el comienzo de una nueva etapa para el reino. Puedo
verdaderamente sentirme orgulloso por todo lo que conseguimos como Imperio.

Tengo que agradecer profundamente no sólo a las familias nobles y nuestra fuerza militar, por el apoyo en
este tiempo tan difícil que todos atravesamos, sino también agradecer a nuestros civiles que de una forma
u otra aportaron en esta guerra.

Hoy reconozco que una nueva etapa inicia en el reino y con ella, la nueva generación que debe empezar en
el Imperio.

Por favor, saluden todos a su Majestad Imperial, el Emperador Dragón, HanGuan-Jun, y que comience la
celebración.—

Las puertas fueron abiertas, las trompetas empezaron a sonar y los vítores no se hicieron esperar, pero
pasados unos minutos... Nadie entró.

—...

—...

—...

—¿Dónde está el Emperador?— Pregunta Wang Lingjiao

Luo Qingyang se pone de pie muy tranquilamente y se sienta en una silla en su costado sin prestar
atención a la situación.

—¿Por qué estás tan tranquila?— pregunta Qin Su.


En ese momento Lan Qiren estalla histéricamente señalando a sus sirvientes —¿Dónde está el Emperador?

—N-no lo sé— Responde uno.

—Y-ya lo estamos buscando, consejero real— Responde otro.

—¡Tu!— Lan Qiren señala a la Doncella Luo que está tranquila en su silla bebiendo un poco de Té —¿Por
que te ves tan tranquila con esto? eres conocida de Jin Zixuan y es muy notorio que el no se encuentra
presente ¿Dónde está el Emperador?

—Soy amiga de Zixuan por lo que antes de irse me dijo lo que pasaba para que no perdiera mucho mi
tiempo aquí— Simplemente responde.

—¿Qué estás diciendo?— Pregunta un anciano.

—¿Dónde está el emperador? ¡Más te vale responder ahora! —Presiona Lan Qiren.

Luo Qingyang bebe un poco más de su Té —Bueno, si insisten. El Emperador no vendrá hoy...
probablemente tampoco mañana.

—¡¡¡Mujer habla claro!!! ¡¡¿A dónde fue su Majestad?!!

Luo Qingyang sonríe —El Emperador... Está en su boda.

Chapter End Notes

Okey, me gustó mucho este capítulo. Creo que abarqué todo lo que realmente quería y fue un buen
resultado, me siento muy contenta con cómo ha ido resultando todo.

En el proximo cap se nos viene la BODA ♥ y otras cosas jajaja

Ahora, les informo que a la historia le faltan aproximadamente 3 ó 4 capítulos para terminar, ya
abarqué como la trama que tenía en mente y creo que no sabría que más meterle. También opté por
desistir de las parejas secundarias que tenía planteadas por que viendo cómo evolucionó la historia,
ya no lo veo viable. Aunque, es posible que más adelante saque al menos un extra con la pareja
Xicheng que era la que deseaba agregar.

💖
Realmente al resto de la historia le faltan solo los desenlaces y un poco de pelusa romántica de
nuestro WangXian
Capítulo 14
Chapter Notes

Créditos de la imagen al inicio:

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La luz de la mañana llega para iluminar el día con un brillo suave y acogedor en una pequeña villa, situada
en un extremo remoto del reino de Guau Lan.

A través de la ventana del dormitorio en una pequeña cabaña, Lan WangJi miró a su pareja mientras se
preparaba. El sol de la tarde se filtraba, los rayos acariciaban suavemente el cabello negro y la piel clara de
Wei WuXian, haciendo que los ojos plateados brillaran como la luna misma. Los ojos de Wei WuXian le
devolvieron la mirada, una sonrisa tierna e inocente tirando de sus labios —Te amo...
Sostuvo su mirada con emociones similares de ansias y afecto, arremolinándose mientras el sol se alzaba
para iluminar el día —Te amo— respondió.

Con toda la paciencia del mundo Wei Ying lavó su cabello, Luego se peinó con aceites y esencias
aromáticas antes de peinarse el cabello en una hermosa cola de caballo, envuelto con una cinta roja. Su
ropa era suave y de color rojo intenso, con hermosos y delicados patrones de flores, bordados con un
precioso hilo dorado.

Los últimos detalles fueron sus labios, pintados en un suave tono rojo y un poco de polvo oscuro en la
esquina de sus ojos. Y por último, el adorno de oro con un fenix en su cabeza, que mantendrá en su lugar
el largo y transparente velo rojo.

Fuera de la cabaña, algunos de los aldeanos del lugar junto con Jin Zixuan y los amigos personales de Wei
Wuxian, se encontraban corriendo de un lado a otro, terminando de realizar los diferentes preparativos
para la ceremonia que iniciaría en pocos minutos.

El Emperador observó la vista inmortal que tenía delante. Sus ojos brillando en anhelo, al observar a su
Wei Ying con las túnicas nupciales. El mismo ya había terminado de prepararse y solo se dedicó a
observar a su pareja mientras daba los últimos toques en su arreglo.

Cuando vio que éste había terminado, se inclinó y suavemente juntó sus labios y entrelazó sus manos. —
Wei Ying luce precioso.

—Aiyoo!! ¡Lan Zhan! —Wei Ying gimió —no puedes decir cosas así, ¡Piensa en mi pobre corazón!

—Mn.

Wei Ying agitó sus manos unidas cariñosamente —¡Lan Zhan, nos vamos a casar!— alzó sus manos hasta
su corazón — Quiero hacerte tan feliz como tú me haces a mí mí amor —sonríe —¡Y pensar Lan Zhan,
que enserio estuve dispuesto a dejarte y vivir en las sombras!— recordó.

Lan Zhan apretó la mano de Wei Ying con la suya y Wei Ying se acercó para darle un beso en la mejilla.
—¡Ahh Lan Zhan, no te preocupes tanto! Estoy aquí, ¿no?

—Tuve que perseguirte— reprocha Lan Wangji.

Wei Ying se echó a reír —¡Lan Zhan! No me regañes el día de nuestra boda— Lan WangJi le sonrió y lo
besó. Wei Ying sonrió en el beso. —Regresé amor.

Lan WangJi no pudo evitar mirar a Wei WuXian y tararear —Mn, Lo hiciste.

Wei Ying se ríe más animado —Lan Zhan, Lan WangJi, Lan Er-Gege, Mí amado HanGuang-Jun—
WuXian sollozó con una risa débil —Eres asombroso, maravilloso, perfecto, tan tan perfecto... ¿Cómo te
enamoraste de alguien como yo... uh? Yo no valgo todo esto... No lo valgo en absoluto.

Lan Zhan sonrió. Apretó su agarre en la mano y lo atrajo para un posesivo abrazo—Mi amor, vales
mucho. Wei Ying es perfecto, amable, divertido, hermoso. Amaré a Wei Ying por siempre y protegeré para
siempre.

Siempre lo haré

Wei WuXian sollozó, apretando su agarre —Te amo, te amo, te amo.

Lan Zhan le acarició la espalda y cuando Wei Ying inclinó la cabeza para poder mirar el rostro de Lan
Zhan este lo besó una vez más —y yo siempre te amaré a ti amor.
Al final, después de todos los acontecimientos que sucedieron, ambos decidieron que su boda sería un
evento pequeño. Los únicos asistentes por parte del Emperador, fueron Jin Zixuan, Jiang Yanli y Jiang
Cheng. Este último debido a que se involucró de último momento en la vida de Wei Wuxian y la otra
porque Jin Zixuan le propuso matrimonio. También, algunas de las pequeñas familias de la villa se
situaron alrededor para observar la ceremonia sin acercarse demasiado por temor a ofender al Emperador.

Caminaron aún tomados de las manos, hasta el pequeño templo de la villa, y lo encontraron bellamente
decorado con flores de ciruelo blancas y algunas orquídeas rojas, dando como resultado un hermoso
paisaje que conmovió el corazón de ambos.

El Emperador encontró la mirada de su pareja y este le sonrió radiante, a través de su velo. Juntos se
arrodillaron. Se inclinaron ante el cielo y la tierra para rendir homenaje a los dioses y a sus antepasados.
Luego una reverencia a las tablillas simbólicas en honor a sus padres ya fallecidos para que los bendigan.
Y finalmente, se inclinaron el uno al otro, como sello de su amor.

Todos en el lugar estallaron en aplausos y vítores, celebrando a la feliz pareja recién casada. Cuando se
pusieron de pie, el Emperador levantó su mano para pedir un poco de silencio y observó a su esposo antes
de hablar.

—Siempre me pregunté por qué me sentí tan apegado a ti cuando te vi por primera vez, aún en mí
temprana edad— dijo el Emperador en voz baja y levantó suavemente el velo de su esposo para verlo a los
ojos —Nunca me sentí particularmente apegado a nadie. Odié profundamente el contacto con cualquier
persona y aún con mí familia, fue difícil. Nunca abrí mi corazón a ninguna persona, pero tú... una mirada y
supe que estabas destinado a ser mío, Y ahora, con la bendición de los cielos, frente a las personas que
consideramos tan cercanos como una familia, yo HanGuang-jun, Emperador Dragón del reino GusuLan,
Lan Zhan, de cortesía WangJi, me entrego a ti Wei Ying, Wuxian de cortesía, reconociendote como mi
único consorte y amada Emperatriz. Te entrego mí corazón, y todo lo que soy. Hoy proclamo que eres mío
y que yo soy tuyo, en esta y en todas las vidas que sigan, mí Zhiji, mí amor, mí alma gemela. Porque no
soy nada sin ti, y lo soy todo contigo. Porque te necesito para poder respirar, y si el mundo decidiera que
yo no puedo estar contigo, lucharía con todo y contra todos, porque qué prefiero morir a tener que vivir
una vida vacía, sin mí precioso Wei Ying.

Todo se sumió en súbito silencio.

Wei Ying miró al Emperador con los ojos muy abiertos. Pequeñas gotas se escapaban de sus ojos. No
estaba preparado para esto. Tragó saliva, obligando a sus pies a no ceder ante la conmoción de la increíble
y hermosa confesión que hizo su amor. Wei Ying no estaba preparado para esto.

—L-Lan Zhan... Yo...— tartamudeó Wei Ying —Yo no te merezco— el Emperador lo miró mal. Wei Ying
levantó una mano para que lo dejara hablar —Yo no te merezco majestad pero soy egoísta... No puedo
vivir sin ti y más importante, no quiero. He tomado malas decisiones, terribles decisiones pero algo... algo
bueno tuve que haber hecho si alguien tan tan maravilloso como tú, puede amarme como lo haces. —Wei
Ying sonrie —Amor mío, puede que me considere inmerecedor de tu amor pero haré todo todo todo lo que
esté en mí, para hacerme merecedor de ti día a día. No importa que pase, nunca me volveré a alejar de ti,
de ninguna forma. Te amaré con cada parte de mí alma, me entregaré a ti con cada gramo de mí ser y seré
tuyo en esta vida y en todas las demás, mí Zhiji, mí vida, mí amor. Somos almas gemelas y nos
pertenecemos por siempre y para siempre— Wei Ying finaliza lanzándose a los brazos de su esposo y
besándolo con todo el amor del mundo.

Alguien en el público está llorando.

Un aldeano le extiende un pañuelo al otro.

Diferentes emociones atraviesan a los presentes. Primero, nadie cree haber escuchado decir tantas palabras
juntas al Emperador. Segundo, nadie esperaba un derramamiento de sentimientos de esta magnitud. Todos
aplauden a la feliz pareja, no cabe duda que el Emperador está realmente enamorado y es bueno que su
pareja lo corresponda con igual intensidad.

Los aplausos continuaron y luego el tierno beso, pasó a ser profundo y sucio. El Emperador empujó el
cuerpo de su esposo para que se levantara y lo presionó contra su propio cuerpo.

Los aplausos cesaron.

Todos presencian con horror al Emperador abriendo la boca de su esposo con su lengua.

Después de la ceremonia, Wei Ying bebió y bailó junto a su esposo y amigos. Los aldeanos del lugar les
ofrecieron un gran banquete, no muy elegante en cuanto a los estándares de la realeza pero fue muy
acogedor y familiar en los términos de Wei Ying.

Lan Zhan se contentó tranquilamente con observarlo disfrutar hasta que el sol empezó a ponerse y
entonces susurró al oído de su nuevo esposo que era hora de que se retiraran.

La pequeña cabaña que los aldeanos destinaron para la noche nupcial de su majestad, fue decorada con las
más finas telas que pudieron proveer en la villa. Todo el lugar resplandecía con los colores rojo y dorado.
Las ventanas, la puerta y varias de las paredes estaban bellamente decoradas con las mismas flores con las
que cubrieron el templo de la ceremonia y al entrar a la habitación principal, encontraron la enorme cama
decorada igualmente en rojo y con pequeñas flores blancas haciendo contrastes y esparcidas por toda la
superficie.

Wei Ying voltea a ver a su esposo. La intensidad con la que el Emperador le dirigía esa mirada dorada,
casi le perforaba la piel. Wei Ying lo sabía mejor que nadie. El Emperador era un hombre que no suele
mostrar sus emociones. Para todos los demás es un hombre centrado, tranquilo, estoico y frío, pero Wei
Ying conocía con absoluta certeza la desbordante pasión, que se oculta tras esa fachada de hombre serio.

Desde el exterior parecía ser agua tranquila que fluye con calma por el río, pero en el fondo corre profunda
y ferozmente, muy bien oculto bajo la superficie. Solo Wei Ying conoce al verdadero Lan Zhan, Solo Wei
Ying ha visto toda la pasión que se esconde detrás de la restricción, el fuego que ruge trás el hielo del
Emperador Dragón.

Wei Ying acorta la distancia entre los dos, y el Emperador rodea su cuerpo con sus manos. Todo el deseo,
toda la pasión estaba allí, oculta bajo la superficie, justo donde Wei Ying sabía que estaría, justo a su
alcance para ser desatada.

—Lan er-gege. Este humilde consorte se presenta ante su majestad. Por favor...— Wei Ying acerca su boca
al oído del Emperador y muerde suavemente su lóbulo antes de susurrar —haga con este consorte lo que
desee.

Las bellas y delicadas túnicas fueron casi desgarradas por el Emperador, en su afán por desprenderlas del
cuerpo de su esposo.

Wei Ying rió encantado, contribuyendo de igual manera con las túnicas del contrario y suspiró bastante
fuerte cuando los dientes del Emperador rozaron su cuello. Cierra los ojos, se encuentra con Lan Wangji a
mitad de camino y luego se besan, duro y desesperado, cargados de lujuria.

Abre la boca y Lan Wangji le responde dando besos húmedos de boca abierta, invadiendo en su interior
con la lengua. Wei Wuxian se acercó unos centímetros más, tirando de Lan Wangji hacia su cuerpo y
recorriendo su cuerpo con ambos brazos. Acaricia su espalda, y siente las cicatrices. Algo amargo se
instala en su estómago.
Las manos de Lan Zhan que estaban alrededor de la cintura de Wei Ying, suben y acunan su rostro —
Ahora estamos juntos, el pasado no importa.

—Lo estamos— lo volvió a besar .

Pronto se encuentran nuevamente mordiendo de un lado a otro, besando y tocando con el mismo
entusiasmo. Wei Ying se retira un momento, ganándose un sonido de molestia de la garganta de Lan
Wangji —Ven— Wei Ying le sonríe, guiándolo mientras se acercan para sentar al Emperador en la cama.
Los ojos de Lan Wangji están nublados por la excitación, y está respirando entrecortadamente mientras se
deja llevar hasta la cama.

Mantuvo el contacto visual, disfrutando de la mirada de abrumadora excitación en el rostro de Wei Ying
mientras se levantaba y se sentaba a horcajadas en el.

Las manos de Lan Zhan estaban alrededor de la cintura de Wei Ying, sosteniéndolo antes de que Lan Zhan
pudiera siquiera procesar lo que estaba haciendo.

—¡Oh, mierda!— Dijo Wei Ying, apoyando su cabeza contra los hombros de Lan Zhan mientras
descendía lentamente sobre la enorme erección, hasta que quedó enterrado hasta la empuñadura —Eres tan
grande, ¿Como puedes llegar tan profundo cuando te metes dentro de mí, Er-Gege?— Las palabras de Wei
Ying se arrastraban ligeramente mientras arqueaba la espalda con placer.

—Wei Ying— apenas logró decir, después del abrupto e increíblemente apretado deslizamiento. Parece
que no necesitó una preparación adicional después de la extenuante actividad del día anterior.

Es hermoso, la forma en que sus cuerpos se acoplan, como si él precioso cuerpo de Wei Ying estuviera
hecho para recibir a Lan Zhan. Caliente y húmedo, tan suyo...

—Fóllame, Lan Zhan. ¡Hasme tuyo!— jadeó Wei Ying.

—Ya eres mío— contestó el Emperador, flexionando sus caderas y pellizcando los pezones de Wei Ying al
mismo tiempo.

—Tuyo...— Wei Ying comenzó a mover sus caderas, apretando hacia abajo y Lan Zhan sintió que su
visión se nublaba por el placer enloquecedor que lo invadió —Somos esposos... me hiciste tu emperatriz—
jadeó Wei Ying mientras continuaba moviendo sus caderas de arriba hacia abajo —No puedes dejar a tu
pobre esposo. No te dejaré salir de aquí hasta que literalmente rompamos la cama y así va a ser, todos los
días por el resto de nuestras vidas.

Agarró las caderas de Wei Ying con más fuerza, sus dedos se clavaron mientras tomaba el control del
movimiento con aún más fuerza. Su miembro estaba increíblemente duro, mientras embestía a Wei Ying
una y otra vez desde abajo, deleitándose con las palabras sin sentido que brotaban de los labios de su
esposo —Marca tus palabras.

Lan Wangji podía sentir cómo las paredes internas de Wei Ying se apretaban a su alrededor, calientes,
tensas y húmedas. Estaba enterrado tan profundamente en Wei Ying, moviéndose implacable, creando una
fricción exquisita, que lo estaba volviendo loco.

—¡Si eso es! Por Dianxia. ¡Ah! E-eres maravilloso. Puedo sentirte en mí Vientre, ¡Ah!— las palabras de
Wei Ying fluyeron como agua mientras continuaba montando su dura erección. Lan Wangji miró hacia
abajo y efectivamente se podía ver la pequeña protuberancia que sobresalía en el tonificado vientre de su
esposo con cada embestida que daba.

Sintió que su miembro se contrae ante la necesidad de llenar a su esposo. "¡Ah, qué lástima que ambos
seamos hombres!", pensó, mientras sostenía más firme sus caderas. "Sería realmente maravilloso poder
llenar a su esposo hasta que le diera un hijo, y continuar y continuar después de eso hasta que el palacio
esté lleno de pequeños niños con ojos grises y dorados."

Sonríe un poco y continúa con su labor. La vida obra de formas misteriosas. Su esposo es un hombre y
esos pequeños anhelos nunca sucederán pero no importa. Tiene bastante claro que su mayor felicidad es
simplemente tener a su Wei Ying siempre a su lado.

Lan Wangji mantuvo un ritmo fuerte y uniforme, presionándose contra el trasero de Wei Ying. Sus
posiciones se habían invertido, y ahora Wei Ying estaba de espaldas contra la cama y sus bellos muslos
reposando contra el pecho del Emperador, mientras sus rodillas descansaban en sus hombros.

Mantuvo sus movimientos, deslizando las manos hacia arriba para sujetar los pezones de Wei Ying. Wei
Ying gimió, sus manos extendiéndose detrás de él para enterrarlas en el cabello de Lan Zhan.

Pronto el ritmo impuesto por el Emperador cambió, dando unas pocas embestidas superficiales antes de
hundirse con una profunda y dura para luego repetir el mismo patrón.

Pronto Wei Ying estuvo envuelto en un lío de gemidos e incoherencias debido al abrumador placer que lo
envolvía —¡Ngh! Ah, ah, Lan Zhan...

La tensión de advertencia del inminente orgasmo comenzó, Wei Ying lo atrajo para un demandante beso
mientras se apretaba en su entrada. Las respiraciones de ambos se volvieron más erráticas, los gemidos
fluyeron sin contención junto con el choque de ambos cuerpos. Sus miradas se conectan una vez más.

Le encanta esta parte, le fascina la mirada que aparece en el rostro de su esposo. Cómo esos ojos dorados
sostienen los suyos, sin apartar la mirada... como si Lan Zhan quisiera que él supiera que él es quien le da
este placer... como si a través de esos hermosos ojos le estuviera gritando cuánto lo ama.

El pico de excitación los golpea. Ambos sucumben ante el placentero éxtasis, llegando juntos al clímax.

Wei Ying se derrama largo y tendido sobre sus pechos, mientras Lan Wangji se derramó completamente
dentro de él. Ambos tendidos en la cama con sus cuerpos fuertemente presionados.

Los latidos de sus corazones se calmaron progresivamente pasados unos minutos.


Cuando Wei Ying vuelve en sí, el Emperador lo ha puesto sobre sí mismo, aún con su miembro todavía
dentro de él.

Se empieza a levantar —No, ven...— susurra el Emperador abrazando a su esposo —Estás cansado, no te
levantes.

En respuesta, Wei Ying se hunde contra él, su piel húmeda por el sudor y los fluidos —Eres cálido Er-
gege, Hmm...— se acomoda— Me hiciste perder el conocimiento.

—¿En un buen sentido?— Lan Wangji pregunta contra su cuello.

—Hmm...— murmura —su Majestad es implacable, este consorte no tiene quejas.

Lan WangJi le acarició la espalda y cuando Wei Ying levantó la cabeza para poder mirar el rostro de Lan
Zhan, vio una expresión complacida y engreída allí.

—Lan Zhan, no tienes vergüenza— Wei Ying estaba feliz, todo el cuerpo zumbaba de alegría hasta que
pudo sentir que el Emperador se endurecía nuevamente dentro de él —¡LAN ZHAN! Lo acabamos de
hacer, ¡Piensa en mí pobre cuerpo!— Wei Ying gimió.

—Mn. Siempre pienso en el cuerpo de Wei Ying— dijo el Emperador, invirtiendo nuevamente sus
posiciones.
—¡Lan Zhan, no puedes decir eso! No podré sobrevivir a tu vigor.

Ignorando las palabras de su esposo, Lan Wangji comenzó a moverse nuevamente —Todos los días, son
todos los días.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Tal como lo dijo Luo QingYang, el emperador no volvió al siguiente día, ni al siguiente ni al siguiente. De
hecho, pasó un mes completo, antes de recibir noticias de la feliz pareja, recién casada.

Jin Zixuan, a quien el Emperador dejó a cargo, se encontraba reunido con el consejo de ancianos,
discutiendo y realizando algunos cambios en el manejo interno del reino.

Había pasado aproximadamente una semana desde que el hechizo, lanzado por Wei Wuxian, perdió su
efecto y desapareció por completo de la mente de cada habitante del reino. Jin Zixuan no está seguro de si
el Emperador obligó a su Emperatriz a deshacerlo o simplemente se acabó el poder que mantenía el efecto
del hechizo y terminó por su cuenta.

Zixuan suspira pesadamente. Después de eso fue fácil para todos darse cuenta quién era realmente Yiling
Laozu y junto con el anuncio de Luo QingYang, los altos mandos en el concejo de ancianos, se volvieron
locos alegando y solicitando la ejecución del criminal. Jin Zixuan por haber quedado a cargo, ha estado
lidiando con todo el desastre mientras su Majestad disfruta de su luna de miel.

—Por enésima vez, el Emperador no permitirá que nadie toque a su Emperatriz.

—El consejo ha dictaminado que ese supuesto matrimonio no será válido. En cuanto el Emperador
aparezca, tendremos el juicio que correspon...

—Ya hubo un Juicio— Lan Xichen que hasta ahora había estado presente en silencio, interrumpió al
anciano que se encontraba hablando.

—¡¡XICHEN!!— Le grita su tío —¿Cómo te atreves a interrumpir a tus mayores?

—Estoy seguro que en cuanto Wang...— Se aclara la garganta —En cuanto el Emperador aparezca,
destituirá a cada anciano que hubo conservado su puesto desde la masacre de ese entonces— Xichen mira
a su tío, la tristeza en su rostro es perceptible a la vista —Eso te incluye a ti, Tio.

—¡¡XICHEN!!

—No importa que tanto discutas Tio, le fallamos a WangJi. —Xichen comenzó a caminar hacia la salida
mientras continuaba hablando —Hubo un juicio, sin el consentimiento del Emperador, se ejecutó a la
madre de Yiling Laozu. Murió mucha gente debido a eso, WangJi fue azotado como penitencia por
proteger a su pareja que francamente si no fuera por las decisiones de este estúpido consejo, nunca hubiese
hecho mal alguno— Todos se sorprendieron por el odio con el que fueron espetadas esas palabras. El
primer príncipe siempre fue alguien amable y sonriente, pero desde que terminó la guerra, su semblante
cambió por completo y nadie había vuelto a ver la carismática sonrisa que lo caracterizaba.

—Yiling Laozu, o mejor dicho, Wei Wuxian a servido a esta familia desde que era un niño, ¿Su cultivo
demoníaco? ¿qué hizo con él? proteger al emperador, ganar la guerra por nosotros. Por años se mantuvo
oculto y nunca hizo mal alguno— Complementó Jin Zixuan a las palabras de Lan Xichen.
Xichen se detuvo en la entrada de la sala del consejo y volteó a ver a Zixuan dando un asentimiento a este
último, luego dirigió una mirada de profundo resentimiento al consejo de ancianos— Me vi cegado por sus
prejuicios, causándole un profundo dolor a mi hermano, participando en la casi destrucción de la única
persona que él ha amado. Lan solo ama una vez, y ama con cada parte de su alma. Mi hermano ya eligió a
su Emperatriz, y tal vez ahora sea tarde, pero haré lo que sea necesario para apoyarlo, si él me lo permite.
así que, no veo razón de ser para continuar esta discusión; como ya dije, es muy probable que el
emperador disuelva este concejo, en el mejor de los casos.

Lan Xichen salió de la sala, dejando a todos con las palabras en la boca. Pocos minutos después, un
sirviente entró, acercándose a Jin Zixuan para darle un mensaje, en voz baja.

—Hemos recibido un mensaje del Emperador donde le expresa que su llegada al reino será el día de
mañana— Habla el sirviente.

—Gracias por avisarme, ¿Hay algo más?— pregunta Zixuan, al ver la expresión nerviosa del sirviente.

—S-si, llegó un mensajero. Dice que... Q-que viene de la montaña In-Inmortal — Habla de nuevo el
sirviente, tartamudeando un poco.

—¿¿¡La Montaña Inmortal!??— Habla un poco más fuerte de lo que debería y Lan Qiren se vuelve para
mirarlos.

—Zixuan ¿Qué sucede?

—Yo...— A Falta de palabras por parte de Jin Zixuan, el sirviente explica la llegada del visitante y Lan
Qiren entiende la reacción del Jin. La Montaña Inmortal o también conocida como la montaña de los
Dioses, es un territorio sagrado, oculto en algún lugar del mundo. Muy pocas veces se ha visto a los
discípulos o grandes inmortales que descienden de la montaña sagrada. Se dice que es un lugar puro,
únicamente para Inmortales destinados a gobernar el mundo.

De hecho, el primer Emperador que gobernó GusuLan, fue un Inmortal que ascendió a los cielos desde la
Montaña inmortal, pero siendo tan benevolente y amó tanto al mundo, que decidió renunciar a la divinidad
para quedarse en el mundo y ayudar a parar las guerras en las que este estaba sumido. Cuando la paz por
fin volvió, se quedó para gobernar como el primer Emperador del amado reino que ayudó a fundar y
cuando fue el momento de partir a la otra vida, dejó al inmortal Dragon Blanco, para que habitara en su
descendencia y continuará cuidando al reino.

—Hazlo pasar a la sala principal. Lo atenderemos inmediatamente— Dice Lan Qiren. El sirviente se dirige
a cumplir su orden rápidamente y el Consejero real dirige su mirada a Zixuan y los ancianos —La reunión
se pospone hasta la llegada del Emperador. Recibiremos al visitante de la montaña Inmortal.

Era cerca del mediodía cuando se reunieron en la sala principal. Jin Zixuan de alguna manera se las
arregló para que solo las figuras más importantes del consejo pudieran estar presentes en la audiencia, las
cuales se pararon ansiosamente observando al invitado con diferentes emociones en sus rostros.

Todos los ojos estaban puestos en él. Incluso Lan Xichen se presentó en cuanto fue informado de la visita
del hombre de la montaña inmortal.

La atención completamente fija en la etérea figura de túnicas blancas. La vista de una imagen de la
realeza. Solo con estar allí exudaba una cualidad intrínseca que lo hacía parecer intocable, sus túnicas casi
parecían resplandecer y de alguna manera, logró cortarle la respiración a cada persona en el lugar.

—Espero perdonen la abrupta llegada. No pretendo incomodar— el hombre se inclina muy


superficialmente a modo de saludo.

Lan Qiren inmediatamente agitó una mano —Oh! Por favor, no debe preocuparse.
—Es una falta de respeto, llegar sin avisar— dice el hombre.

—Por favor, por el contrario, perdona a nuestro Emperador por no estar aquí para darle la bienvenida. Está
inmerso en una tarea importante. Esperamos que su viaje haya ido bien— Lan Qiren se mostraba nervioso
pero no lo demostró en sus palabras.

—Agradezco su recibimiento, realmente no es necesario la presencia del Emperador, al menos eso espero
— el hombre observó la sala llena de hombres por alguna razón, su semblante lucía frío y en cierta medida
amenazante —Mi visita será breve, estoy buscando a mi sobrino, hijo de mi hermana marcial. Mi maestra
me encomendó la misión de encontrar a su nieto, el último descendiente puro del linaje inmortal SanRen,
hijos de los dioses de los 2 mundos. El príncipe Ying, Ying SanRen, heredero de la montaña inmortal,
Maestro del cultivo oscuro, Domador de la energía Yin y Yang.

La habitación se sumió en un súbito silencio. El hombre pudo ver cómo varias personas comenzaban a
palidecer visiblemente.

—Disculpe mi ignorancia —Dicen Lan Qiren, casi con el corazón en la garganta —pero ¿sería tan amable
de decirme su nombre para que pueda dirigirme a usted correctamente?

El hombre se inclina nuevamente —Este se llama Xiao XingChen, primer discípulo de la inmortal
Baoshan SanRen, Reina de la montaña inmortal.

Las palabras pronunciadas parecían casi suficientes para desplazar el alma de los presentes a un plano
superior... Hasta que continúo su discurso.

—Mí maestra sintió que su hija, mí hermana marcial Cangse SanRen, abandonó este mundo hace ya 13
años aproximadamente— el hombre los observó con algo parecido a la denuncia y habló con mordacidad
en su tono —Durante este tiempo estuvimos buscando a su único hijo y heredero de la montaña pero no
pudimos encontrarlo. Había algo, una especie de magia que lo oculta y solo pude percibir su presencia
hace pocos días y la rastreé hasta este reino.

Una nube de tormenta pasó sobre las finas facciones de cada Lan y noble presente. Jin Zixuan trató de que
su voz no temblara al hablar cuando preguntó —¿Ca-Cangse SanRen? ¿Te refieres a a... Wei Cangse, la
madre de Wei...Ying, Wei Wuxian?

La sala estalló en susurros

¿Cangse SanRen? Wei Cangse, ¿Son la misma persona?

¿Yiling Laozu es hijo de inmortales?

¿¿¿Yiling Laozu viene de la montaña sagrada???

¿Matamos a la hija de una reina inmortal?

¿El Emperador sabía esto? ¿Por eso eligió a Yiling Laozu como su Emperatriz?

—¿Yiling... Laozu?— preguntó Xiao XingChen, habiendo percibido algunos de los rumores.

Lan Qiren se aclara la garganta —Lamento la conmoción, no esperábamos que nuestra... Emperatriz
proviniera de la montaña inmortal. Wei Cangse sirvió durante varios años a la familia Lan y nunca se
dirigió a sí misma como una SanRen...

—Mi hermana abandonó la montaña en su deseo de conocer y explorar el mundo. Mí maestra, permitió
esto como una oportunidad para nutrir sus habilidades y expandir sus conocimientos pero mí hermana se
enamoró de un cultivador por lo que decidió no volver a la montaña y vivir una vida ordinaria con él
hombre. Al menos eso nos comunicó la última vez que visitó a mí maestra junto con Xiao Ying. Mí
maestra no estuvo de acuerdo con ella y le prohibió regresar a la montaña. Supongo que se quedó con el
hombre viviendo en este reino y de ahí el apellido Wei.

—Wei Changze fue un sirviente al servicio del antiguo Emperador. Pereció hace mucho...

—Comprendo— Miro detenidamente al hombre —¿dijo Emperatriz?

Lan Xichen se levantó superando un poco su aturdimiento— Wei Wuxian... o Ying SanRen como lo
llamaste, contrajo matrimonio con el Emperador de nuestro reino. Deberían estar aquí mañana. Ellos están
en su viaje postnupcial.

—¿El Emperador Dragón? Oh! Comprendo, eso tiene sentido.

Lan Xichen frunció el ceño —Disculpe pero, ¿Qué quiere decir con que tiene sentido?

—El Dragón blanco es un ancestro de la montaña celestial, estoy seguro de que ya saben eso —Todos
asienten —Xiao Ying desciende del linaje más antiguo de la montaña celestial por parte de mí maestra
Baoshan SanRen. Ella conoció a su primer Emperador y los dos fueron muy unidos en su juventud. Eran
almas gemelas, aunque su unión nunca evolucionó de forma romántica debido a diferentes factores.

Todos abrieron los ojos ante esto.

—Desafortunadamente, el destino separó sus caminos pero no tengo dudas que de una forma u otra, el
Dragón blanco encontraría su camino de vuelta a casa. Después de todo, las almas gemelas siempre se
buscarán entre sí, no importa el tiempo ni el espacio, están hechos para estar juntos. Creados en el mismo
molde, dos almas que se acoplan como una sola, destinados a ser uno solo.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
—Anunciando a su majestad imperial, HanGuang-jun el Emperador Dragón y a su majestad, el consorte
imperial Wei Ying, de cortesía Wuxian, Emperatriz Lan del reino de Gusu.

Las trompetas sonaron, y un pequeño desfile recibió a los gobernantes de GusuLan cuando comenzaron a
bajar del carruaje.

—Sean bienvenidos majestades, las principales familias de la nobleza se han reunido para ofrecer un
banquete en honor a la Nueva Emperatriz Lan y su feliz matrimonio, Majestad— habló un sirviente.

—También se han traído diferentes regalos que fueron dispuestos en sus aposentos majestad y algunos
fueron llevados a las bóvedas personales.

—Los regalos van desde joyas, diferentes adornos para el cabello, las telas más finas de todo el reino,
surtidas en diferentes colores. Varios conjuntos de túnicas y pantalones. Cofres con adornos, entre otras
cosas— dice otro sirviente.

Lan Zhan y Wei Ying —¿¿¿¿????

—Sean bienvenidos— Lan Qiren se acerca con pasos pausados y tranquilos. Hace una reverencia ante
ambos —¡WangJi, Wei Wuxian! Me alegra que hayan llegado.

Wei Wuxian observó al hombre con una expresión helada —Consejero real— se inclina superficialmente.
—Lan Qiren, ¿de qué se trata todo esto?

Jin Zixuan se acerca antes de que el consejero pueda responder —¡Majestad, Wuxian! Tenemos... Uh! Un
invitado inesperado.

La pareja comparte una mirada antes de seguir caminando en dirección al palacio, junto con Jin Zixuan y
Lan Qiren detrás, seguido de su séquito.

Adentro, varias familias nobles los recibieron con montones de saludos y felicitaciones. Wei Ying se
acurrucó un poco al costado del Emperador, luciendo bastante incómodo.

La expresión del Emperador se ensombreció —¡Suficiente!

Todos se congelaron ante la hostilidad de su majestad.

El Emperador continuó caminando con pasos lentos pero firmes y se situó en su trono frente a todos. Wei
Ying se sienta a su lado, mucho más calmado.

Jin GuangShan da un paso al frente queriendo ser el primero en hablar —Majestad, es un honor poder
estar aquí ante su magnífica presencia, y poder admirar la belleza de su hermosa esposa...

—¿Si sabes que No soy una mujer?— interrumpió Wei Ying, sonriendo con desgana —No necesito tus
falsas adulaciones, aún recuerdo tus palabras durante la guerra.

—¡Su alteza! Yo nunca...

—Jin GuangShan— La expresión del Emperador pasó de frío a helado —agradezco no ensombrezca mí
buen humor con su hipocresía— El Jin dio un paso atrás sintiéndose muy humillado. El Emperador dirigió
una fría mirada a los demás presentes —Ya que la nobleza se tomó el trabajo de recibirnos tan
efusivamente, aprovecharé para hacer algunos anuncios.

Todos tragaron grueso.

—Jin GuangShan, será arrestado por conspirar en contra del reino durante la guerra con el Imperio Wen.

—¡¡¿MAJESTAD??!!

—Guardias, escolten al ex líder Jin a los calabozos, a la espera de su sentencia— los guardias obedecieron
inmediatamente mientras los susurros inundan la habitación.

—Jin Zixuan.

—Majestad.

—A partir de hoy, serás nombrado líder de la familia Jin y pasarás a ser mí mano derecha en lo que
respecta a la política del reino. Siendo una de las pocas personas en las que verdaderamente confío, se que
harás un buen trabajo.

—Este súbdito agradece el favor de su majestad y prometo continuar sirviendo al Emperador con profunda
entrega.

—Mm.

—Wen Ning, Wen Qing y Xue Yang.

Las 3 personas dieron un paso al frente inclinándose ante el Emperador.


Los susurros no se hicieron esperar

¿Son Wen?

¿El Emperador los va a ejecutar?

¿Cómo se atreven a mostrar sus caras aquí?

—Wen Qing y Wen Ning, apoyaron la lucha interna de mi único Consorte y pareja real, La Emperatriz
Lan. El me ha expresado su cariño y agradecimiento por estar a su lado, considerándolos parte de su
familia, Por este motivo, hoy los declaro a los dos Wei Qing y Wei Ning, hermanos de mi Emperatriz, por
lo tanto quedan oficialmente bajo mi protección como Emperador.

—Estos agradecen profundamente a sus Majestades por esta oportunidad de vivir una nueva vida en su
reino, nosotros juramos absoluta y completa lealtad al Emperador y Emperatriz Lan.

—Mn— Lan WangJi vuelve la vista hacia Xue Yang. —Xue Yang, ya has manifestado tu deseo de vivir y
explorar libremente el mundo, siendo liberado de la condición de servidumbre. El imperio suplirá las
necesidades que puedas tener y las puertas del palacio siempre le estarán abiertas para cuando decida
volver. Gracias por sus servicios.

—Agradezco profundamente la generosidad del Emperador y Emperatriz Lan.

Wei Ying da un ligero apretón a la mano del Emperador que permanece entrelazada con la suya y le regala
una deslumbrante sonrisa como agradecimiento, por la amabilidad otorgada a sus amigos.

Lan WangJi asiente y vuelve a mirar al frente —Estimados ancianos del consejo...

—¡Majestad! Le ruego me disculpe por interrumpirlo. Es propicio discutir los asuntos del consejo a puerta
cerrada. Por lo que cualquier cosa que desee discutir, puede esperar un momento más oportuno.

El Emperador lo mira sin inmutarse —Lan Qiren, creo que estas olvidando tu posición. Tu deber es
aconsejarme, ¡No dictar mis acciones! Yo soy el Emperador.

La mirada en el rostro de Lan Qiren fue bastante cómica. Le tomó todo el esfuerzo a Wei Wuxian no
estallar en carcajadas.

—A partir de este momento el consejo de ancianos del imperio será disuelto y Los ancianos que lo
conforman serán juzgados por sus crímenes en contra de mí Emperatriz— Lentamente, se levantó de su
trono, ejerciendo toda la autoridad de su puesto como Emperador —Lan Qiren, tu puesto como consejero
real queda revocado permanentemente y serás juzgado como todos los demás habiendo perdido todos los
beneficios que podrías tener como miembro de la familia imperial. Adicional un nuevo consejo de
ancianos será conformado con nuevos miembros que yo personalmente dictare.

El anciano Yiayeng inmediatamente se pone de pie furioso —¡¡No pueden hacer eso!!

El anciano Yonli le sigue —¡Hemos servido a tres generaciones de Emperadores! No pueden simplemente
sacarnos.

Lan Qiren permanece en silencio. Aturdido por las palabras de su sobrino. Xichen ya le había advertido
pero no esperaba un desarrollo de esta magnitud.

Wei Wuxian no puede más que complacerse por este desarrollo. Personalmente le encantaría despedazar a
este nido de víboras con sus propias manos pero siendo la nueva Emperatriz del reino, debería actuar un
poco más... refinado.
—Líderes y nobles del reino, este cultivador demoníaco los ha manipulado. ¡¡Les ha lavado el cerebro con
su magia oscura!!— grita el anciano Yangmin.

Wei Wuxian se volvió hacia su esposo con sorpresa —¿Lo he hecho?... Amor ¿Por que no me dijiste que
tenía este poder? Pude haberme entretenido.

—¡¡Tu demonio!!— el hombre se acerca gritando —has mancillado este reino con tus trucos oscuros. El
reino se mantuvo puro hasta que llegaste con tu cultivo demoníaco y envenenaste a nuestro venerable
Emperador con tus trucos retorcidos.

—¿Demoníaco?— Una nueva persona se acerca hacia los hablantes con pasos suaves y tranquilos —
Ayudamos a las almas a curar su espíritu y poder avanzar a la siguiente vida. No permitimos que vaguen
en el mundo y por el contrario las ayudamos a ascender. ¿Por qué es visto como Demoniaco la única
esperanza que tienen estás almas de ser escuchadas para librarse del odio que las aprisiona?— hace una
pausa mientras observa las diferentes reacciones —a diferencia de ustedes, nosotros no destruimos,
nosotros damos vida.

Lan WangJi se dio cuenta que nunca antes había visto a este hombre. Es simple, pero al mismo tiempo
muy llamativo. Exuda un aura de completa calma y pureza, que contrasta con la atmósfera en la
habitación. Además, el hombre describe el cultivo de Wei Ying como si comprendiera su naturaleza de
alguna manera y habla como si el mismo poseyera este mismo cultivo... Lan WangJi se congeló
temporalmente, simplemente mirando.

—Este reino juzga a las personas por ser diferentes. ¿Se han puesto a pensar que estás diferencias se deben
a algo más grande que su egoísta doctrina?

—T-tu... ¿Quién eres?— Wei Ying pregunta un poco dudoso.

—Xiao Ying— lo mira con profundo cariño —has crecido mucho. Te has vuelto un hombre muy fuerte, tu
madre estaría muy orgullosa.

Wei Ying siente sus ojos arder —¿Tío Xing...Chen?

—Es bueno verte Xiao Ying— Wei Ying se levanta y corre en dirección al hombre y lo envuelve con sus
brazos fuertemente. Pequeños sollozos son escuchados en la sala que fue consumida por el silencio.

—Como... ¿Por qué estás aquí?— Wei Ying pregunta. Todos en la sala continúan en silencio, un poco
conmocionados por los últimos acontecimientos.

—Te estaba buscando. Mí maestra Baoshan SanRen mando por ti.

—¿Baoshan SanRen? ¿Ese era el nombre de mí abuela?

XingChen se ríe un poco —sigues siendo muy olvidadizo por lo que veo.

—Tenía como 5 años la última vez quea vi— hace un puchero.

—Si, han pasado muchos años y ahora que te vuelvo a ver resulta que te fugaste para casarte con un
Emperador.

—No nos fugamos— el Emperador se pone de pie y camina hasta donde está su esposo y él al parecer Tío
de su pareja —Solo ejercí mi poder como soberano de este reino para pausar momentáneamente mis
deberes reales y tener una pequeña boda privada con mi ahora Concerte real.

XingChen lo voltea a ver y se inclina significativamente más profundo de lo que había saludado a
cualquiera de los presentes el día anterior —Saludos, Emperador Dragón. Mí nombre es Xiao XingChen,
enviado de la montaña inmortal para localizar a mí sobrino Ying SanRen, al que ustedes llaman Wei Ying.

El Emperador le devuelve el saludo y toma suavemente de la cintura a su esposo para acercarlo a él. Wei
Ying se ríe de lo posesivo que es su pareja pero lo deja ser.

—Me honra recibir a un enviado de la montaña inmortal. Haré lo que esté en mis manos para brindarle lo
que necesite.

—Eso no será necesario, la razón por la que vine es para encontrar a mí sobrino— XingChen sonríe y
dirige su mano a la empuñadura de su espada —Y ya que lo he hallado, me marcharé inmediatamente con
él.

Wei Ying parpadea, genuinamente sorprendido por las palabras de su tío. El Emperador en un rápido
movimiento, desenvaina su espada y pone a Wei Ying detrás de él, mientras apunta al hombre con su
espada —Wei Ying no irá a ningún lado.

Los guardias que hasta el momento habían estado muy quietos observando el desarrollo. Desenvainan
igualmente sus espadas, dispuestos a apoyar a su Emperador.

XingChen no se inmuta y mira con semblante serio a su sobrino —No puedes quedarte aquí, Xiao Ying,
este mundo asesinó a tu madre, estás personas son la razón por la que mí maestra se aísla en una montaña
al otro lado del mundo. Este lugar que te ha despreciado y destruido, no es para nosotros.

Wei Wuxian se queda momentáneamente en silencio. No sabe qué decir porque sabe que parte de eso es
real. Que una parte de sí mismo la hicieron añicos en cientos y cientos de pedazos y luego los pegaron de
nuevo. Pero aún faltan piezas y algunas piezas se han vuelto a colocar mal.

Entonces, el Emperador se vuelve para mirarlo y es así como el hilo de sus pensamientos se rompe.

Yo HanGuang-jun, Emperador Dragón del reino GusuLan, Lan Zhan, de cortesía WangJi, me entrego a ti
Wei Ying, Wuxian de cortesía, reconociendote como mi único consorte y amada Emperatriz.

Te entrego mí corazón, y todo lo que soy.

Hoy proclamo que eres mío y que yo soy tuyo, en esta y en todas las vidas que sigan, mí Zhiji, mí amor, mí
alma gemela.

Porque no soy nada sin ti, y lo soy todo contigo.

Porque te necesito para poder respirar, y si el mundo decidiera que yo no puedo estar contigo, lucharía
con todo y contra todos.

Porque prefiero morir a tener que vivir una vida vacía, sin mí precioso Wei Ying.

Wei Wuxian recitó en su cabeza las palabras dichas por su esposo, el día de su boda. Palabras que
quedaron profundamente grabadas en su alma.

Haré todo todo todo lo que esté en mí, para hacerme merecedor de ti día a día.

No importa que pase, nunca me volveré a alejar de ti, de ninguna forma.

Te amaré con cada parte de mí alma, me entregaré a ti con cada gramo de mí ser y seré tuyo en esta vida
y en todas las demás, mí Zhiji, mí vida, mí amor.

Somos almas gemelas y nos pertenecemos por siempre y para siempre...


Wei Ying extiende su mano y entrelaza sus dedos con los del Emperador antes de mirar a su tío con
completa calma —No iré a ningún lado. Mí lugar está junto a mí esposo.

—Xiao Ying, este lugar ha demostrado no ser de confianza, sus leyes van en contra de nuestra naturaleza.

—Yo protegeré a Wei Ying— dice el Emperador —En el pasado fallé miserablemente, pero esta vez, no
será así.

—¿Cómo puedes asegurar eso?

—Porque ahora estamos juntos— responde Wei Ying por él, dando un paso al frente para posicionarse
junto al Emperador —Somos un equipo. Él me cuida y yo lo cuido.

—Xiao Ying...— comienza, pero luego se distrae observando directamente el vientre del menor —Oh!

—¿Qué?— pregunta Wei Ying al notar el cambio en el semblante de su tío.

XingChen se queda observándolo otro momento más, antes de responder —Estás portando vida.

—¿Ah?— fue casi una pregunta colectiva.

XingChen suspira resignado y aleja su mano de la espada —Nuestro cultivo no es destrucción, es vida
Xiao Ying. Nosotros podemos crear vida.

—¿Qué quieres decir con eso?— pregunta el Emperador bajando su espada.

—Que Xiao Ying lleva a tu primogénito en el vientre— vuelve a mirar a su sobrino —Estás embarazado.

—...

—...

¿Qué?

Chapter End Notes

El "Xiao" con el que Xiao XingChen se refiere a Wei Ying, significa "Pequeño" es decir, le esta
diciendo cariñosamente "Pequeño Ying"

palabras y aquí vamos con casi 7.500 😳


Este capítulo terminó siendo más largo de lo que pretendía jajaja se supone que serían unas 3.000
me dejé llevar.
Bueeeeeno, muchas gracias por leer, espero que lo disfruten. Nos vemos en una próxima.
Capítulo 15

—...Pero, soy un hombre.

—Nunca dije lo contrario, Xiao Ying.

—Tengo pene... Quiero decir, en la cama soy la doncella, pero en realidad soy un hombre, tengo pene...

—¡Wei Ying!— siseo el Emperador, aunque seguía bastante aturdido y rígido en su lugar.

Xiao XingChen parpadeó ante las desvergonzadas palabras de su sobrino, sin saber qué decir ante ello.
Wen Qing decidió pararse de su lugar y caminar hasta donde estaban de pie Wei Wuxian y el Emperador.

Extendiendo una de sus manos tomó la de Wei Ying, presionando con los dedos en su muñeca, para sentir
su corriente espiritual. Después de unos minutos —Es cierto...

—¿Es realmente posible?— Pregunta el Emperador bastante conmocionado.

—Un SanRen puede portar vida en su vientre, solo si encuentra una pareja con un cultivo
significativamente alto y al mismo tiempo, sus almas deben ser compatibles, acopladas entre sí, bajo el
más puro amor. Siendo almas gemelas, la probabilidad de la concepción, era muy alta. —Dice Xiao
XingCheng. Sus palabras quedan suspendidas en el aire unos momentos mientras todos los presentes lo
procesan. El Emperador dirige su mirada hacia Wen Qing.

—Tendría que hacer más estudios majestad, pero ciertamente su energía espiritual coincide con la de una
mujer que está en espera. La concepción podría tener cerca de 3 semanas, quizás un mes— Responde la
médico.

—Wei Ying...— Dijo la voz profunda y suave del Emperador, mientras se volvía para ver a su esposo.

—Lan Zhan...— dijo Wei Wuxian, aturdido y consternado en iguales proporciones. Agachó su rostro
después de unos momentos, llevando una mano hasta su vientre donde lo acaricia suavemente. Pudo sentir
la pequeña perturbación en su energía, algo cálido y muy pequeño, que se instalaba cerca de su dantian
inferior —Esposo...— dijo después de unos momentos, incorporándose para lanzarse a los brazos de su
amado —¡Esposo!— Repitió entusiasmado.

Entonces Lan WangJi emitió un sonido mientras lo atrapaba, una rápida y suave exhalación y luego otra la
siguió, entonces Wei Ying levantó su cabeza para poder observar el rostro de su amado esposo y verlo reír.

—Soy tan feliz— dijo Wei Ying, enterrando de nuevo su rostro en el cuello de Lan Zhan mientras reía
encantado —Soy muy feliz amor— Dijo.

Había una gran diferencia de anatomía en lo que es su cuerpo, comparándolo con el de una mujer, una
enorme diferencia; pero hay un bebé ahí dentro y no hace mucho tiempo, lo cual era bastante aterrador
cuando lo pensabas bien. Tener un bebé entero creciendo dentro de ti, y luego tener que salir... ¡Un
momento!

Su risa se detuvo abruptamente —Esperen, esperen, esperen... ¿Por donde va a salir?

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Después de que pasara toda la conmoción inicial, el Emperador se apresuró a despedir a todas las personas
en la reunión, queriendo llevar rápidamente a su esposo hacía un lugar más privado para que le hicieran
una revisión más exhaustiva, determinar mejor su condición y asegurar su salud física en todo sentido.

Wen Qing le indicó a Wei Ying que se recostara en la cama. Xiao XingChen y el Emperador serían las
únicas 2 personas adicionales presentes. Varias personas entre los nobles de la reunión, insistieron en que
querían observar la revisión y presenciar lo que parecía ser un acto divino de los cielos, dando su
bendición a la pareja Imperial.

El Emperador les dedicó una sola mirada, haciendo que la temperatura en la habitación bajara de golpe.
Todos dieron un paso atrás y se abstuvieron de insistir más.

Los amigos de Wei Ying tampoco pudieron entrar, pero esto fue a pedido de Wen Qing. No es agradable
trabajar con varias personas observando.

Wei Wuxian se recostó torpemente sobre la cama. Sus nervios eran visibles para cualquiera que lo
observara.

Lan WangJi se acercó a él y le besó suavemente la cabeza. Una simple presión de labios pero la castidad
del acto fue tan dulce, que le hizo olvidar momentáneamente sus nervios —Todo estará bien amor.

Wei Wuxian volvió a levantar la vista cuando el Emperador le habló y no pudo evitar sonreír.

—Wei Ying— volvió a hablar el Emperador —Estoy aquí— su mirada decía: derrumbaré el mundo entero
para mantenerte a salvo Wei Ying, no voy a dejarte.

Era una de las cosas que más le gustaban del Emperador, la absoluta seguridad con la que hacía todo. Wei
Wuxian a menudo pensaba en tonos grises, siempre indeciso de sus decisiones y acciones, mientras que
Lan WangJi pensaba en términos claros de blanco y negro. Entonces, con total confianza, con una mirada
tan sólida como las montañas hacía sentir a Wei Ying seguro.

Wen Qing comenzó a examinarlo, haciendo preguntas ocasionales a Xiao XingChen, para determinar
ciertos aspectos de la concepción, en términos de alguien que conoce el proceso.

La explicación que brinda Xiao XingChen es que su núcleo oscuro, es el que se encargará de portar al
pequeño por nacer. Su anatomía no cambiará a lo que es una mujer por dentro. En cambio, su núcleo
oscuro, creará una pequeña membrana de energía que se instalará en su vientre y almacenará por 9 meses
al pequeño bebe, hasta que esté completamente desarrollado y cuando llegue el momento de nacer, se
deberá extraer por medio de una incisión en el estómago.

Wei Ying Palidece ante esto último —¿V-Van a abrirme?

—Es recomendable que la Emperatriz permanezca en bastante reposo y que se asegure una condición de
salud óptima para realizar esta cirugía de forma segura tanto para él como para el bebe— dice Wen Qing.

Xiao XingChen sonríe con cariño a su sobrino —Xiao Ying estará bien. Eres el SanRen más fuerte que ha
nacido en muchas generaciones. Ni siquiera tu madre tuvo tu potencial. Tu cuerpo cambiará mucho
ciertamente. Todavía hay riesgos, incluso si Xiao Ying está saludable, pero confío en que el Emperador
Dragón hará lo imposible por mantenerte bien.

—Mn. Lo haré— dice el Emperador con completa seguridad.

—¿Me encontrarás sexy todavía, Lan Zhan?— Él hace un puchero —Cuando esté grande y redondo con tu
hijo.
Los labios del Emperador se curvan en una pequeña sonrisa. Sus ojos brillan intensos. —Creo que Wei
Ying se vería hermoso embarazado— Wei Ying jadea, sonrojándose en sus mejillas. Lan Zhan sonríe más.

—¡Lan Zhaaan!— protesta aunque no puede evitar sonreír de nuevo —Bien, supongo que si tú eres feliz...

Wei Ying tomó asiento nuevamente en la cama y acomodó sus ropas. Xiao XingChen decidió en ese
momento acercarse y verificar la energía de Wei Ying, pues desde que llegó, sintió algo inusual en ella.

—Xiao Ying ¿Por qué tu núcleo oscuro luce así?

—¿Qué quieres decir?

—Tu cuerpo parece haber albergado más poder. Tu núcleo oscuro tiene rastros de haber sido diferente...
más grande.

Oh

—Uhm! Tío XingChen, no le prestes atención, eso... no importa.

El emperador observó su nerviosismo y casi tristeza, llevándolo a una sola conclusión —¿Tiene algo que
ver con los eventos de hace 13 años?

Wei Ying se puso rígido en su lugar y eso fue suficiente para entender la verdad.

—¿Puedo saber que pasó?— preguntó suavemente Xiao XingChen.

Wei Wuxian suspiró resignado. —Yo... casi destruí mi núcleo oscuro hace años. Lancé un hechizo en todo
el reino para que me olvidarán y el poder que utilice casi fundió mi núcleo oscuro. Por años creí que así
había sido pero un día lo volví a sentir, una pequeña pero inconfundible chispa y he tratado de cultivarlo
desde entonces, para regresarlo a lo que era.

—¿Las personas de este reino te obligaron a ello?— preguntó Xiao XingChen con un tono afilado en su
voz.

—Yo...— Wei Ying no sabía cómo responder a esto. El emperador se sentó junto a él, sujetando
gentilmente su mano. Wei Ying cree que se le podría escapar el alma de tanto suspirar. —Mataron a mi
madre, nos culparon de ser demonios, solo Lan Zhan me defendió y trató de asumir la culpa por las cosas
que hice y... yo lo abandoné— comienza a llorar.

—Diría que este reino necesita una buena purga. Demasiada gente ignorante en el poder no puede ser
bueno. Podríamos hacer algo con eso, Xiao Ying.

Wei Ying mira consternado a su tío, él está hablando de... ¿Matarlos?

Ya había matado gente antes por supuesto, pero eso fue durante la guerra. Bueno, también a uno que otro
cretino que se atrevió a ofender al Emperador y esa vez hace 13 años que se había vuelto un poco loco.
¡Ah! y los Wen que había torturado hasta la muerte... Sí, de acuerdo, era bueno matando gente. Con
experiencia. Pero ahora era la Emperatriz de Gusu, es muy posible que su esposo no apruebe ese
comportamiento y quiera mediar las cosas de forma más pacífica. Ya hubo suficiente muerte durante la
guerra...

—Los implicados en el asesinato de Madam Wei serán juzgados y sentenciados el día de mañana— Habla
el Emperador —La mayoría de los líderes, nobles y en general las personas en el reino, tienen una idea
equivocada de lo que es el estatus, el poder y su supuesto derecho para con otras personas de un "estatus
inferior"— El Emperador pasa un dedo suavemente por el rostro de su esposo, admirando sus rasgos
mientras su mirada se agudiza —Juzgaremos lo que le hicieron a tu madre Wei Ying. Y los desgarraré
pieza por pieza yo mismo. El reino ha sufrido bastante en esta guerra pero considero que una limpieza, no
le vendría mal.

La sonrisa de Wei Ying se ensanchó en algo un poco más cercano a lo demoníaco —¿Oh?— Ronroneó —
Me estás mimando majestad. ¿Esa es la forma de actuar de un Emperador?

—El reino a abusado demasiado de mi nobleza, necesito crear un lugar seguro para mi Wei Ying y nuestro
hijo que viene en camino— Wei Wuxian se ríe de nuevo, encantado por las palabras de su esposo.

—¡Lan Zhan no puedes decir cosas así! ¡Piensa en mi corazón! ¿Qué pensarán los nobles si te escucharan
hablar de esa forma?

—Sus pensamientos no tienen ningún valor real para mi. Wei Ying es mi todo, es mi razón de vivir. Jamás
podría avergonzarte al darte algo menos que lo mejor de mí.

—¡LAN ZHAN!— Wei Ying jadea.

Ahora estaban demasiado cerca. Wei Ying tenía la cara roja como un tomate y sintió la temperatura de su
cuerpo subir en picada. Xiao XingChen se aclara la garganta indicando que sigue ahí presente. Wei
Wuxian parpadeó y apartó la mirada de Lan WangJi para ver a su tío que los observaba incómodo.

—Creo que puedo estar tranquilo sabiendo que el emperador se preocupa por mi sobrino. Y debido al
embarazo, supongo que llevarlo ante mi maestra ya no es una opción— habla Xiao XingChen.

—¿Qué vas a hacer entonces, tío XingChen?

—Enviaré un mensaje a mi maestra, y hasta no saber cómo desea ella que proceda, me quedaré aquí
contigo Xiao Ying.

—¡Genial! Me encantaría convivir contigo tio...— Wei Ying se levanta y empuja a su tío y a Wei Qing
hasta la puerta y prácticamente los saca de la habitación —pero esa maravillosa convivencia, puede
esperar hasta mañana. Nos vemos luego tío, Qing-Jie— les cierra la puerta en la cara.

—Lan Zhan— Wei Ying se voltea y camina hasta donde está su esposo aún sentado en la cama —Lan
Zhan~...— Wei Ying emitió un sonido desde el fondo de su garganta y empujó su cuerpo para derribar a su
esposo en las suaves sábanas, posicionándose sobre él, sabiendo que Lan Zhan sentiría que se estaba
poniendo duro y entendería el mensaje.

No esperaba que Lan WangJi invirtiera de un solo movimiento sus posiciones.

—Esposo...— Responde el Emperador. La excitación desbordándose de esos orbes dorados.

Wei Ying perdió cualquier pensamiento coherente cuando el Emperador descendió hasta su boca y dio
inicio a un beso abrasador, no pudiendo más que recibirlo, retorciéndose y suplicando debajo de su esposo.
Quería más, suplicó por más y se lo dieron.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
A la mañana siguiente, la mayoría de los líderes de las diferentes familias nobles, junto con su contingente
de familiares y sirvientes, fueron convocados al palacio.
Una nueva ley que condena severamente el maltrato hacia los sirvientes o familias humildes dentro o fuera
del reino, fue expuesta ante todos dentro del Imperio.

Los ancianos también fueron juzgados por sus crímenes en contra de la Emperatriz dónde fueron
condenados por 2 crímenes: Primero se expuso la trampa que le habían tendido a Wei Wuxian para
exponer su cultivo Demoníaco ante todos y dónde terminó herido el Emperador hace 13 años. Segundo,
los involucrados que condenaron a morir en la hoguera a Wei Cangse sin la autorización debida del
Emperador Dragón.

Ninguno de los ancianos habló en ese momento, esperando en silencio su condena, a medida que
continuaba la reunión.

¿La razón?

Normalmente, el estado tranquilo y pacifico del Emperador inundaba las audiencias, mostrando su justicia
y benevolencia ante sus súbditos. Esto no fue nada de eso. Los instintos de todos estaban en alerta y
gritaban, ¡Peligro! Mientras observaban por un lado al Emperador, mostrando la expresión más oscura
jamás vista. A su derecha, la nueva Emperatriz Lan, luciendo igualmente un aura de muerte y siendo el
poseedor del título Yiling Laozu, su semblante no presagiaba nada bueno. Por último, a su izquierda el
enviado de la montaña inmortal, Xiao XingChen, el cual parecía estar listo para saltar a mitad de la
plataforma y despedazar a cuánta persona se cruzara en su camino.

Todos supieron dos cosas con inmediata certeza. La primera, que el Emperador estaba furioso, por lo que
su benevolencia no sería vista en los próximos días y la segunda, que varias personas morirán hoy.

Los ancianos que atentaron contra la Emperatriz fueron sentenciados a cadena perpetua en las mazmorras
imperiales, con sus núcleos dorados destruidos.

Los implicados en el asesinado de Wei Cangse fueron condenados a 50 azotes cada uno con el látigo de la
disciplina y la destrucción de sus núcleos antes de iniciar los golpes. Si sobreviven al castigo, serán
exiliados del reino.

Lan Qiren, aunque no fue parte de las personas que deliberadamente ejecutaron a la mujer, fue acusado de
complicidad por no hacer valer la autoridad del Emperador. Por esta razón fue sentenciado a 30 azotes con
el látigo de la disciplina y rebajado a sirviente por el resto de su vida.

Jin GuanShan, fue ejecutado públicamente por el crimen de traición a la corona durante la guerra, al filtrar
información sobre las estrategias de batalla, ubicaciones, soldados, etc. todo en complicidad con el ya
fallecido Meng Yao.

Cuando Lan Xichen se enteró de la traición de Meng Yao. Trato de hablar con su hermano, pedirle perdón
por haberlo juzgado mal. Sobra decir que sus palabras entraron en oídos sordos. Su hermano, apenas si lo
miró.

Pese al gran dolor que le causó, aún conserva la esperanza de que en un futuro, su hermano lo perdone y
puedan reparar su relación, mientras tanto y a raíz de los eventos, Lan Xichen tomó la decisión de
recluirse en sus aposentos, al menos hasta que el Emperador o su Emperatriz decidieran que podían hablar
con él.

Después de las trágicas noticias, el reino se regocijó celebrando la concepción del primogénito del
Emperador y brindando los mejores deseos a la feliz pareja.

El Emperador se negó rotundamente a conformar un Harem imperial, decretanto oficialmente que Wei
Ying, sería su único consorte por el resto de su vida y vidas por existir. Las doncellas que fueron
previamente enviadas para servir al Emperador en su harem, fueron respetuosamente devueltas a sus
respectivas familias.

Mansión de la familia Jiang - Días después

—Mi señora— una sirvienta ingresa a las habitaciones donde Jiang Yanli se encontraba pasando el rato —
La Emperatriz se encuentra en la mansión, ha pedido verla a usted mí señora.

—¿A-Xian está aquí?— Jiang Yanli se pone de pie y se dirige rápidamente a la sala de recepción. Al
llegar, logra divisar la alta figura de la Emperatriz junto con 4 hombres, que puede asumirse que con sus
guardias personales.

—Majestad— Se inclina —Bienvenido a mí hogar.

—Doncella Jiang, por favor, no tiene que inclinarse. Sigo siendo solo yo, se supone que somos amigos, los
amigos no se inclinan así.

Jiang Yanli sonríe y tapa su sonrisa con la manga de su mano —Si somos amigos entonces A-Xian deberá
referirse a mí como su Shijie en vez de llamarme doncella Jiang.

Ambos se ríen juguetonamente. Pese a sus años de maltrato en la mansión Jiang, Wei Ying siempre
encontró reconfortante la presencia de la doncella Jiang y fue de las pocas personas que nunca lo trató mal
por su rango de servidumbre.

Pasaron un largo rato conversando y comiendo bocadillos mientras se ponían al día con sus vidas.

—No puedo creer que te quieras casar con ese pavo real— comenta Wei Ying.

—Es un buen hombre A-Xian, en verdad estoy feliz de haberlo conocido— Yanli sonríe —por otro lado,
me parece aún más impresionante que seas la Emperatriz Lan. ¿Quién lo diría?

Wei Ying se sonroja levemente —Perdón por haberte mentido... Pasaron muchas cosas.

—No es necesario disculparse, A-Xian. La verdad me pareció muy impresionante que lograrás poner un
hechizo en todos los habitantes del imperio. Tiene sentido que te encontrara casi al borde de la muerte en
ese entonces.

—Siempre estaré agradecido contigo Shijie, aunque no fue precisamente fácil vivir con Madam Yu y Jiang
Fengmian que no la detenía en nada. Me sirvió estar en una posición donde pudiera estar cerca del
Emperador de alguna forma y así poder protegerlo.

—Tuviste que pasar por mucho A-Xian, Ahora es el turno de su majestad para protegerte a ti y al bebé que
llevas aquí— Yanli sonríe y señala el vientre de Wei Ying.

Wei Ying sonríe con ternura y se acaricia suavemente su vientre que aún permanece completamente plano
—Es increíble que pueda darle hijos a Lan Zhan, me pregunto ¿cuándo comenzará a crecer?— se ríe —
aunque no me hace mucha gracia volverme redondo como un globo.

Jiang Yanli suelta una risita —en las mujeres el vientre se comienza a notar a partir de los 3 y 4 meses de
embarazo pero como eres una hombre no estoy segura si en tu caso sea igual, además tu complexión no es
para nada delicada como son las mujeres así que no estoy segura de cómo se vaya a manifestar. Eres
bastante alto y Tienes un físico muy varonil, incluso tienes más músculos que mí hermano A-Cheng.

—¡¡A-Jie!!— Jiang Cheng llega en ese justo momento interrumpiendo la charla.

—Oh! A-Cheng, no te esperabamos— habla Jiang Yanli.


—Hola Jiang Cheng— saluda Wei Ying.

—...Majestad— saluda.

—Sin formalidades por favor. Ya nos conocíamos A-Cheng.

Jiang Cheng siente que le palpita una vena en la frente. Hace ademán de querer acercarse al hombre pero
parece que sus hostiles pero inofensivas intenciones fueron mal recibidas por los 4 guardias cerca de la
Emperatriz, ya que inmediatamente se pusieron de pie en guardia. Era arrogante, por supuesto, pero estaba
lejos de ser estúpido. Todos en el reino pudieron apreciar de primera mano cómo el Emperador protege a
su Emperatriz y es un acto sumamente estupido querer si quiera ponerle un dedo encima. Así que
suspirando profundamente, se calmó y tomó asiento junto a su hermana.

—Lamento la interrupción alteza.

—A-Cheng! ¿Que no escuchaste lo que dije?

La vena vuelve a palpitar —preferiría que el Emperador no me rompa las piernas por pasarme de
confianza con su... Esposa.

—Es "Esposo" soy un hombre.

—Estas EmbarazadA— puntualiza la "A" solo para molestarlo.

—¡Shijie! Me está intimidando— Wei Ying hace un puchero.

—A-Cheng, no molestes a A-Xian.

—¿Que, eres un niño? ¿Por qué actúas tan infantil?

—XianXian solo tiene 3.

Yanli se ríe de la actitud de la Emperatriz, mientras que Jiang Cheng solo rueda los ojos. Justo en ese
momento entran Madam Yu y su esposo.

Jiang Cheng y Jiang Yanli se ponen rígidos, levantándose apresuradamente para saludarlos —Padre,
Madre...— dicen los dos al tiempo. Wei Wuxian no se mueve de su lugar y solo toma un bocadillo para
llevárselo a la boca.

—¿Qué hace esta rata callejera aquí?

—¡¡Madre!!— gritaron al tiempo los 2 Jiang —Es la Emperatriz Lan.

—¿Emperatriz? Yo solo veo el juguete desechable que utiliza el Emperador— Yu Ziyuan se acerca un
poco apuntando al menor que seguía sentado sin prestarle mayor atención —¿Te crees en posición de
presumir ante las verdaderas familias nobles? Cuando el Emperador se aburra de jugar contigo, se irá por
algo mejor.

—¡Oh! ¿eso crees?— Wei Wuxian contesta en completa calma —Es un pensamiento bastante ingenuo de
tu parte, Madam... ¡Oh! Perdón, ya no eres la Madam de la casa. Yu Ziyuan debería bastar para referirse a
ti o sería mejor... Sirvienta Yu.

—¡Tu! Sabandija despreciable. Por tu culpa el Emperador nos degradó a plebeyos.

—¿Por qué eso sería culpa mía?— pregunta Wei Wuxian. Los guardias detrás de él ya se preparaban para
atacar a la mujer pero Wey Ying los hizo detener. Él podía manejar esto.
—Envenenaste la cabeza de su majestad con tus retorcidos trucos. Esta familia te mantuvo todos estos
años y así es como lo pagas.

—Su desgracia la causaron ustedes mismos, no quieras culparme por lo que decida hacer el Emperador.
Yo puedo ser su esposo pero no dictó sus acciones.

—¡Si! Seguro. ¿Crees que por abrirle las piernas y arrodillarte como una zorra lograrás conservar ese
puesto?

Bueno, eso fue más de lo que Wei Ying podía y quería soportar.

Uno

Dos

Tres

¡Respira Wei Ying!

Uno

Dos

Tres

¡Exhala Wei Ying!

Uno

Dos

Tres

Repite...

No puedes matar a la madre de tus amigos... No frente a ellos al menos.

Wei Wuxian suspira profundamente un par de segundos más, y se giró para irse repitiéndose a sí mismo
que no iba a matar a nadie ese día, no lo haría, no lo haría.

—Eres igual a esa puta que te trajo al mundo— habló bajito, pero no lo suficiente.

Wei Wuxian se detuvo en seco.

—Repítelo— zarcillos de energía oscura comenzaron a salir de él —¡Repítelo!— volvió a decir.

—Majestad...— Jiang fengmian que hasta ese momento había estado en silencio, trató de intervenir.

El hombre fue arrojado hacia un costado de la habitación antes de que todos pudieran parpadear. Jiang
Cheng y Jiang Yanli se arrodillaron al igual que los guardias y sirvientes presentes.

Nadie quiere estar en la mira de la Emperatriz.

—¡Crees que estar embarazado me hace débil!— Wei Wuxian avanzó hasta donde la mujer permanecía
congelada —Yo te invito a replantearte con quién te estás metiendo porque te aseguro— sus ojos brillaron
en rojo —nada podría impedir que te corte pedazo a pedazo en este momento si así lo quiero.
—N-no p-puedes amenazarme...

—Oh! no te estoy amenazando, Yu Ziyuan. Estoy haciéndote una promesa— Acercó su boca hacia la
mujer, para casi silbar en su oído —No hay nada que me moleste más que escuchar a alguien faltarle al
respeto a mi familia, y tú...— un pequeño zarcillo de energía se adentró en la mujer —voy a saborear la
agonía de tus gritos mientras te enseño la locura de haber ofendido a mí madre. Disfruta lo poco que te
queda en la tierra de los vivos.

Wei Ying se levantó y se dirigió a la salida sin voltear a ver a nadie.

Los Jiang presentes contuvieron la respiración. Observar al normalmente expresivo y alegre Wei Ying,
transformarse en una masa furiosa de energía oscura, aún sin ser ellos su objetivo, les hizo sentir su alma
escapar del cuerpo.

Yu Ziyuan se desplomó en el suelo, palpando donde la energía la invadió momentos antes. "El... ¿Me
marco? ¿Qué fue eso?" Pensó la mujer.

—Jiang Cheng, A-Li...

—Madre, estar en contra de la Emperatriz es estar en contra del Emperador— habló Jiang Yanli.

—E-el Emperador no lo dejaría...

—Los ancianos del consejo fueron golpeados hasta la muerte con el látigo en manos del propio
Emperador. Su propio tío fue rebajado por este. ¿Qué te hace creer que el Emperador te miraría con
buenos ojos?— habla Jiang Cheng.

—A-Li, A-Cheng, ustedes son sus amigos. U-ustedes pueden hablar con él...

—Madre no lo entiendes— Jiang Cheng se dirigió a la salida junto con su hermana —Que no te haya
matado en ese instante, justo frente a nosotros, es probablemente el máximo acto de benevolencia que
podrás conseguir de él— ambos salieron y le dedicaron solo una mirada a la mujer antes de irse.

"Lástima que no fuiste una buena madre"... pensaron ambos al irse.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
Palacio real de Gusu - 7 meses después

—¡¡¡LAAAAAAAN ZHAAAAAAAAN!!!

Los gritos de la Emperatriz probablemente se escuchaban en todo el reino.

—Juro por Dianxia que jamás dejaré que me metas otro bebé, ¡¡Nunca, nunca, nunca más.!!

—Pensé que estabas feliz Xiao Ying— habla Xiao XingChen que se encontraba asistiendo a la pareja
durante su labor de parto.

—¡Por supuesto que estoy feliz! Quiero conocer a mí bebé pero esto es malditamente doloroso ¿Cómo
pueden las mujeres aguantar esto?

—Wei Ying— El Emperador acaricia suavemente la cabeza de su esposo y al mismo tiempo sujeta su
mano mientras le transfiere energía espiritual. Realmente no está muy seguro de cómo más apoyarlo,
además de estar ahí para él.

—¡Ah Dianxia! Apiádate de mí... ¿Que no se supone que el embarazo dura 9 meses? Solo tuve 8 meses,
todavía no debería de nacer.

—¿Hay algo mal?— preguntó el Emperador.

—¡Eres un hombre embarazado, Wei Ying!— espeta Wei Qing —Desde un principio tu condición no era
normal así que deja de quejarte y espera a que termine de examinarte.

—Qing-jie no seas mala, esto está matándome— lloriquea.

Wei Qing se queda callada al terminar el examen soltando una única exclamación —¡Oh!

—¿Qué? ¿El bebé está bien? Por favor Wei Qing, dime qué mí bebé está bien...— Wei Ying se asusta por
el cambio abrupto en el semblante de la médico. Intenta pararse pero su prominente vientre no se lo deja
fácil.

El Emperador igualmente dirigió su atención a la mujer, esperando una respuesta tranquilizadora mientras
él continuaba sosteniendo la mano de su esposo y la apretaba con un poco más de fuerza.

—Están bien... Ya van a nacer— dice Wei Qing.

—¿Están? ¿Por qué en plural? ¿qué quieres decir?

—¡Si, en plural, Wei Ying! —Wei Qing suspira —Tienes adentro 2 bebés, vas a tener gemelos Wei Ying.

Todos se congelan en sus respectivos lugares...

Después de un breve momento de aturdimiento, Wei Ying voltea para mirar a su esposo.

—¡¡¡LAAAAAAAN ZHAAAAAAAAN!!!

.
Epílogo
Chapter Notes
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La operación duró más de lo que Lan WangJi pensó que sería. Los mejores médicos disponibles en el
Imperio se encontraban trabajando activamente para llevar a cabo la cirugía, todo bajo la estricta dirección
de Wei Qing.

La anestesia suministrada, permitió que Wei Ying durmiera tranquilamente mientras todo el proceso se
llevaba a cabo y evitarle cualquier tipo de dolor.

Xiao XingChen y el Emperador permanecieron presentes en la sala, suministrando suficiente energía para
mantener estable a Wei Ying mientras su cuerpo era cuidadosamente abierto para sacar a los
pequeños. Xiao XingChen que solo posee un núcleo oscuro como el de Wei Ying, transfería su energía a al
núcleo oscuro, mientras que el Emperador transfiere energía espiritual.

El primer llanto inundó la sala. El Emperador observa con los ojos muy abiertos y con su respiración
atascada en la garganta, como sale el primero de sus hijos.

Tan solo una pequeña, rosadita y perfecta criaturita, gritando a todo pulmón mientras da su primer respiro,
fuera del vientre donde su madre lo albergó por 8 largos meses.

Del mismo modo en que no pudo precisar el momento exacto en que su corazón cayó por Wei Ying, Lan
WangJi se encuentra ahora mismo, con el corazón desbordado de emociones. Sus manos tiemblan con el
deseo de sostener a su pequeño hijo. Su mente se llenó de una inmensa necesidad de abrazar y de sostener,
cuidar y proteger, a su pequeño hijo.

El segundo llanto llegó poco después. Es tan hermoso . Su corazón se estrujó ante la ferviente necesidad
de protegerlos de todo y todos.

Sus hijos, su Wei Ying, una pequeña y hermosa familia. Quiere llevarlos a un lugar secreto, esconderlos y
cubrirlos con sedas preciosas y suaves para que nunca puedan sufrir ningún daño. Le asusta un poco la
intensidad de sus emociones. Siempre se enorgulleció de ser equilibrado, su firmeza y control en cualquier
circunstancia, pero ahora tiene la sensación de que solo le basta con ver la sonrisa reluciente de su esposo
y el solo hecho de poder sostener en sus brazos a sus hijos para desequilibrarlo y dejarlo delirante en una
nube de alegría durante horas y horas.

Después de limpiar cuidadosamente al primero de sus hijos, la médico lo acerca para que el Emperador lo
sostenga. Lan WangJi extiende sus manos y lo toma con sumo cuidado para acunarlo en su abrazo.

Nariz pequeña, labios definidos, piel clara y limpia, una pequeña carita con hermosos cachetitos rosados y
por último, unos hermosos ojos de color dorado, brillantes como el mismo sol. Luego, mira hacia donde le
muestran al segundo pequeñín. Tan bello y delicado como su hermanito pero sumamente inquieto en los
brazos de la médico. Parece haber nacido con suficiente energía como para querer salir volando de los
brazos que lo sostienen. Y esos preciosos ojos grises, tan hermosos como los de su madre, que miran y
exploran la habitación, llenos de vida y energía.

El Emperador se encuentra a sí mismo con el gran impulso de querer bañar con besos toda la carita de sus
pequeños hijos. No importa lo demás, no importa el mundo entero; Lan WangJi está demasiado lejos, ya se
ha enamorado de sus pequeños hijos y levantará su espada sin dudarlo para acabar con cualquiera que
quiera lastimarlos.

—Su energía está decayendo— Habla Wei Qing mientras intenta cerrar la herida rápidamente —Está
sangrando demasiado.

Lan WangJi se pone pálido y rápidamente su alegría es transformada por preocupación —Lleven a mis
hijos a su cuna— Extendió sus manos entregando a los pequeños —Transferiré energía contigo— habló
mirando a Xiao XingChen que continúa con la transferencia.

—No está recibiendo mi energía— habló muy preocupado XingChen —su núcleo oscuro no me responde.

El Emperador comienza la transferencia mientras siente crecer una gran opresión en su pecho —Wei Ying,
mi amor por favor, se fuerte —Las lágrimas comenzaron a caer —Nuestros hijos te necesitan… Yo te
necesito.

Los médicos trabajaron mucho más rápido. Pronto la habitación quedó fuertemente iluminada debido a la
gran concentración de energía roja y azul.

—Wei Ying…

Hay un columpio atado a un árbol frente al lago, hay flores azules y algunos conejos saltando de un lado
a otro. El sol brilla intensamente, no, no es el sol… Son sus ojos. Ahí está “Que hermosa vista” Piensa.
Túnicas largas y blancas, tan puras como la nieve en el invierno más crudo. Largos cabellos caen en su
espalda como una cascada, oscuros como la tinta y en su frente, una cinta blanca con nubes bordadas la
rodea. No puede evitar la risa que se le escapa, haciendo eco en el aire. Puede ver su rostro, lo conoce,
sabe quien es. El corazón retumba como si quisiera salirse, el aire es escaso en sus pulmones, no puede
respirar —Lan Zhan…— lo llama.

—Su majestad, su majestad— Dice la médico con alegría.

Lan WangJi observa con sus ojos aún llorosos, la mano que se acerca a su rostro —Estoy bien amor… por
favor no llores— Wei Ying dice, con voz tan suave y débil, que si el Emperador no estuviera a escasos
centímetros de él, no lo habría escuchado.

—Por favor… Wei Ying amor, no vuelvas a hacer algo así. No puedo…— Lan Zhan temblaba mientras
hablaba.

Wei Ying le sonríe —Te prometí nunca volver a irme de tu lado, no planeo romper mi promesa, amor.
Tendrás que aguantarme muchos muchos años más.

El alivio inunda por completo el semblante del Emperador. Los médicos lograron detener el sangrado a
tiempo y cerrar por completo la herida. Aunque Wei Ying haya quedado bastante débil, se recuperará con
unos pocos días de descanso y reposo. Sus núcleos comienzas a estabilizarse y Wei Ying sonríe feliz a su
esposo para tranquilizarlo.

—¿Entonces me besarás?

—Te besaré ahora y cien veces más antes de que finalice el día. Lo repetiré mañana y el resto de nuestras
vidas.

—¿Por qué eres tan romántico?— preguntó Wei Wuxian, cerrando sus ojos, mientras esperaba que el beso
llegara. Lan WangJi estaba feliz de complacerlo.
—Tuve mucho miedo—dijo el Emperador cuando separó sus labios— No quiero volver a pensar en vivir
sin ti a mí lado.

—No tendrás que hacerlo. Jamás te desharás de mí— Wei Ying bromea, antes de ver la diminuta figura
que se acercaba, reposada en los brazos de su tío. Estaba envuelto en una delicada manta azul celeste, y la
pequeña cara rosadita, mostraba unos hermosos ojitos Dorados que lo miraban.

Wei Ying se echó a llorar mientras extendía sus manos para recibir a su hijo en brazos —tuviste dos
pequeños muy hermosos, Xiao Ying— Xiao XingChen le entregó el bebé mientras el Emperador lo
ayudaba a levantarse levemente para acomodar al bebé en su pecho. Un segundo médico entregó al
segundo bebé, dejándolo en los brazos del Emperador.

Wei Ying lloró más fuerte —Son realmente feos— susurró, rozando con sus labios la frente del pequeño
en sus brazos —los amo.

Lan WangJi sonrió —Son perfectos.

—Perfectos— estuvo de acuerdo Wei Ying, contemplando su maravillosa creación.

—Mi pequeño A-Yuan tiene tus ojos— dijo con cariño, volviéndose para ver a su esposo.

—Este pequeño tiene los tuyos— dijo el Emperador, devolviendo el gesto a su esposo —debemos pensar
en un nombre.

Wei Ying se rió —no sabíamos que tendría 2 hijos de una vez— acarició con la mano a su esposo—escoge
tu su nombre de nacimiento y yo escogeré el de cortesía. Así como yo escogí el nombre de nacimiento de
Yuan y tú decidiste su nombre cortesía.

El emperador lo consideró un momento antes de hablar —Mis pequeños serán Lan Yuan y Lan Yu,
Príncipes del imperio GusuLan.

—A-Yu, me encanta— Wei Ying sonrió— entonces su nombre de cortesía será JingYi, mis hermosos
príncipes serán el pequeño revoltoso Lan JingYi y el lindo y educado Lan Sizhui.

⚜️🖤 👑 🤍 🖤 👑 🤍⚜️
El reino celebró durante una semana completa el nacimiento de los pequeños príncipes. Wei Ying duró un
poco más de 2 semanas en cama, curándose de la cirugía. Después de eso no hubo poder sobre el reino que
lograra mantenerlo en sus aposentos para completar un mayor tiempo de reposo. En su lugar, la
Emperatriz alegó estar completamente bien y se dedicó a dar vueltas por el palacio con sus hijos, también
recorrió más a fondo el reino, saltando entre puestos y puestos del mercado, comprando baratijas y toda
clase de juguetes tanto para él, como para sus hijos. Al principio, el Emperador se muestra reacio, pero
debido a la insistencia de Wei Ying, terminó cediendo solo con la condición de ser escoltado por un gran
número de guardias altamente capacitados o que el mismo Emperador lo acompañe.

Entonces, un muy animado Wei Ying que carga a sus 2 pequeños, el mismo Emperador y 2 sirvientas que
lo apoyan en el cuidado de los bebés, disfrutan de un agradable día mientras recorren la zona pintoresca
del reino, donde se ubican la mayoría de comercios. Wei Ying camina muy animadamente mientras Lan
WangJi le compra todo lo que le interesa. Bocadillos, dulces, juguetes, y algunos artículos espirituales
también. Todo bajo la nerviosa mirada de los habitantes del pueblo, que aún no logran acostumbrarse a la
presencia casual de los gobernantes del reino en sus humildes tiendas.
Lan WangJi no reaccionaba a sus miradas. Algunas veces incluso paraba para darle a su esposo pequeños
besos y caricias superficiales, sin inmutarse por mostrar su amor públicamente ante el reino. De hecho se
aseguraría de que todos supieran que Wei Ying era su esposo y que si alguien lo tocaba... Enfrentarían el
filo de su espada.

Llegada la noche, Wei Ying termina de alimentar a sus hijos antes de acostarlos en sus camas. Pasó un
dedo suavemente por la cabecita de Lan Yuan y luego miró a Lan Yu —Esto es bastante cansado— dijo —
¡No sabía que fuera tan difícil ser Padre! ¿Cómo viven las mujeres así?

—Podemos encargar una nodriza para que no tengas que cargar con tanto…

—¡No! Yo soy su Padre, yo puedo cuidar a mis bebes.

El emperador lo envuelve en un abrazo y le da un suave beso en la frente —Entonces los cuidaremos.

Wei Ying lo miró con ojos llenos de afecto antes de inclinarse y le besar su mejilla —Mi madre los habría
amado— Sonrió con nostalgia —Le habría gustado esto, nuestra familia. Le habría gustado muchísimo.

—Estoy seguro que Madam Wei te cuida desde el otro mundo.

Wei Ying le sonríe y se acercó, apoyó la mejilla contra el hombro de Lan WangJi —Gracias, Lan Zhan—
dijo en voz baja —Gracias por amarme.

—No hay necesidad de dar gracias, eres lo que me da fuerza para vivir.

—No amor, déjame decirlo— hizo una pausa mirando a su esposo fijamente a los ojos —Yo he cometido
muchos errores durante mi vida, errores que ya no puedo borrar. Lan Zhan, a pesar de que cargo conmigo
una montaña de arrepentimientos, tú me esperaste, me defendiste, me buscaste, luchaste por mi— Wei
Ying rodeó su cuello con sus brazos y lo besó suavemente en los labios —me amaste cuando ni yo mismo
lo hice y me cuidaste. Hiciste una elección y yo fui esa elección. Tu me elegiste y ahora estamos casados.

Lan WangJi le devolvió el abrazo con fuerza mientras Wei Ying continuó hablando —No puedo reescribir
la historia o cambiar el pasado y tengo que seguir enfrentando el futuro pero yo también hice mi elección
— Wei Wuxian volvió a reír y fue tan hermoso que Lan WangJi podría haber ascendido a los cielos en ese
momento —Si puedo hacerte feliz Lan Zhan, entonces quiero hacerte feliz. Quiero que criemos a nuestros
hijos, quiero pasear contigo por el reino, quiero ir de cacería nocturna contigo siempre, quiero gobernar a
tu lado, ayudarte en todo y despertar cada día contigo a mi lado. Estaré con Lan Zhan por el resto de mi
existencia y si vivo más de una vida, te buscaré en cada una de ellas y viviré de nuevo contigo.

Wei Ying finaliza juntando sus labios.

—Wei Ying no tiene que esforzarse porque solo con poder verte ya me hace muy feliz— comienza el
Emperador cuando finalizan el beso —Nada me honraría más que poder gobernar con Wei Ying a mi lado,
siendo mi mano derecha, mi amigo, mi amante, mi esposo— Vuelve a besarlo —Criar a nuestros hijos es
solo el comienzo de nuestra familia. Disfrutaré y amaré cada momento que viva con ustedes y si vivo más
de una vida, te buscaré a Wei Ying en cada una de ellas y viviré de nuevo contigo.

Se quedaron un rato disfrutando de la presencia del otro, entre besos y caricias, sintiéndose renovados y
llenos de amor por el otro.

—Eres un romántico Er-Gege.

—Wei Ying me hace muy feliz.

—Bueno Er-Gege, los bebés ya se durmieron. ¿Qué vas a hacer, esposo?— dijo Wei Ying llevando su
mano hacia abajo y acariciando por encima de la tela —Mi esposo ha sido bueno conmigo, ¿Er-gege me
quiere de rodillas?— Wei Wuxian preguntó tan desvergonzadamente como esperaba Lan WangJi.

—Quizás…— murmuró Lan WangJi —O podría arrodillarme por ti y adorarte como lo ordena el cielo.

Wei Ying se sonroja ante las palabras de su esposo pero no se deja superar. Pasa uno de sus dedos por
debajo de la barbilla de Lan Zhan, el rojo en sus mejillas es profundamente visible ante los ojos del
Emperador —¿No me digas que mi feroz dragón tiene algunas fantasías hirviendo allí que no me ha
contado? Aún estamos en la habitación de los bebés ¿Pretendes salirte con la tuya en frente de nuestros
hijos?

La respuesta del Emperador fue levantar a Wei Ying en sus brazos y llevarlo hasta su habitación. Wei Ying
se rió absurdamente por sus payasadas, con los brazos alrededor de su cuerpo y los ojos plateados
brillando con alegría desenfrenada.

Lan WangJi está encantado por poder escuchar la alegría que desborda su esposo, el quiere proteger esa
sonrisa. Quiere envolver a su esposo con sus brazos, cuidarlo, amarlo y mimarlo. “No es más de lo que te
mereces” Piensa Lan WangJi.

Y con eso, Lan Zhan vuelve a sonreír.

Tu eres mi razón para vivir… Wei Ying.

Fin

Chapter End Notes

1. El pequeño Sueño que tiene Wei Ying cuando estuvo inconsciente durante la operación fue el
mismo que tuve Lan Zhan en el primer capítulo, con la diferencia de que las flores que vio Wei Ying
son las que le gustan a Lan Zhan y las que vió Lan Zhan son las que le gustan a Wei Ying. Adicional
que cada uno hizo una descripción de cómo visualizaba al otro, Lan Zhan sin saber quien era Wei
Ying en ese momento y Wei Ying sabiéndolo muy bien.

2. Xiao XingChen en mi fic tiene núcleo oscuro pero no núcleo dorado. Por eso puede sentir más
fácil la anergia de Wei Ying. Baoshan Sanren le permitió quedarse en el reino de Gusu para cuidar de
Wei Ying y sus bisnietos. En un futuro quizás ella misma vaya hasta Gusu para visitarlos también.

3. Yu Ziyuan murió. ¿Siguiente pregunta?

4. La relación de Lan Xichen y el Emperador se queda inconclusa. En mi fic, Lan Zhan no es alguien
que perdone fácil.
5. Wei Ying y Lan Zhan serán unos buenos gobernantes, justos y buenos pero no muy benevolentes.
No perdonan las fallas que fueron hechas con intenciones. A pesar de esto, son muy queridos en el
reino y sobre todo respetados.

6. Habrá un Extra más adelante donde vincularé a la pareja Xicheng. Pero no será pronto.

7. Habrá también un extra de los bebés Lan creciendo. Tampoco será pronto jajaja

Eso es todo en esta historia.

Muchas muchas gracias a todos los que le dieron la oportunidad a la historia, me hizo muy feliz leer
sus comentarios y saber que les gustó.

Si tienen alguna idea de otro extra que deseen que agregue, me lo pueden dejar en los comentarios y
podría adicionarlo.

Nos vemos en una próxima.


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