CENTRO EDUCATIVO JOSÉ VASCONCELOS
NIVEL SECUNDARIA CLAVE: 27PES0016C
CENTRO EDUCATIVO DE ALTO RENDIMIENTO JOSÉ VASCONCELOS
NIVEL BACHILLERATO CLAVE: 27PCB0061R
Materia: Lengua y comunicación 3
Nombre de proyecto: El racismo
Nombre de los alumnos: Luis David Sánchez S.
Nombre del docente: Sayda Yahaida Alamilla Rodríguez
Grado: 3er semestre Grupo: A
Paraíso, Tab; (18) de (noviembre) de 2024.
Introducción
El racismo y la discriminación racial se erigen como problemas sociales y culturales
profundamente incursionados en todas las sociedades. Estos problemas violan derechos
humanos, pero también perpetúan desigualdades y exclusiones que afectan a aquellos
sectores más desfavorecidos de la población, particularmente la infancia, los pueblos
indígenas, las comunidades afrodescendientes, y los migrantes.
Este texto da cuenta de la extensión y las diferentes formas de racismo que presenta en
contextos determinados, así como las implicaciones que puede acarrear en ámbitos como
la educación, la salud, el acceso a la justicia y las condiciones de vida. También se hace
eco de cómo estas prácticas, discriminatorias contribuyen a la perpetuación de la pobreza
intergeneracional y a la vida cotidiana de las personas que son afectadas.
A lo largo de la historia, hay iniciativas internacionales y nacionales que han pretendido
dar respuesta a este problema. Desde la adopción de instrumentos legales, como la
**Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
Racial**, hasta campañas de sensibilización como "Enfréntate al Racismo", el objetivo es
colectivamente construir una sociedad más avanzada. No obstante, los avances logrados
son manifiestamente insuficientes y es imperioso abordarlo desde perspectivas
educativas, legislativas y culturales.
El presente documento reflexiona sobre las raíces del racismo, sus formas
contemporáneas y sus métodos para acabar con la barbarie. A través de un análisis
pormenorizado, intenta contribuir a concienciar sobre la urgencia de erradicar el racismo
para garantizar el ánimo de todo derecho humano y construir un futuro con igualdad y
respeto a la diversidad.
El racismo
El racismo constituye una de las más fuertes y complejas problemáticas que enfrenta la
humanidad. Este conjunto de estrategias que atienden a las condiciones históricas,
sociales y políticas ha sido utilizado como método para justificar la diferencia y la
negación de la opresión de unos grupos humanos sobre otros en función de
características que tienen que ver con el color de la piel, el origen, la lengua y la cultura.
De acuerdo a las conclusiones del informe Negación de los derechos: Los efectos de la
discriminación sobre la infancia, el racismo va a tener un impacto directo sobre los
derechos fundamentales de millones de seres humanos, especialmente niños/as,
profundizando las profundas desigualdades estructurales y llevando a eso que afecta a
muchos, ejes de su vida cotidiana, el acceso a la educación, la salud, el trabajo, el acceso
a la justicia.
Impacto del racismo en la infancia y la juventud
La infancia como grupo vulnerable ante el racismo. Los niños y niñas que son objeto de
discriminación racial todavía son más excluidos/as y cuentan con menos oportunidades
de evolución. El mismo informe mencionado señala que, en países como Estados Unidos
de América, las políticas disciplinarias evidencian diferencias preocupantes: los niños
afroamericanos tienen cerca de tres veces más de probabilidades de sufrir expulsiones
temporales que los niños euroamericanos y tienen más de dos veces más de
probabilidades de ser detenidos por conductas escolares. Este tipo de discriminación
tiene un carácter perpetuo, ya que limita la educación, perpetúa la pobreza y limita las
oportunidades laborales en la vida adulta. Así mismo, los efectos del racismo en la
infancia no son sólo en términos económicos o educativos, sino también psicológicos. Los
niños que crecen en contextos donde experimentan rechazo escolar por su origen racial
padecen inseguridades, baja autoestima y en muchas ocasiones resentimiento, algo que
puede afectar a su futuro desarrollo social y emocional. Todo lo anterior da lugar a una
sociedad que se encuentra fragmentada, lo que hace que las brechas entre grupos
étnicos no sólo se mantengan, sino que se profundicen.
Diversidad de formas y manifestaciones del racismo
El racismo no es un fenómeno homogéneo, sino que adopta diversas formas y se
manifiesta en diferentes grados de intensidad. Existen tipos de racismo sutiles, como el
racismo aversivo, en el que las personas manifiestan actitudes discriminatorias mediante
frialdad o distancia emocional hacia otros grupos, aunque rechacen abiertamente el
racismo. También se encuentran formas más explícitas, como el racismo biológico, que
justifica la exclusión o eliminación de ciertos grupos basándose en una supuesta
superioridad genética. Un ejemplo histórico de este último fue el régimen nazi en el siglo
XX, que proclamó la supremacía de la raza aria como base para políticas genocidas.
El racismo etnocentrista, por otro lado, se fundamenta en la creencia de que una cultura o
grupo es superior al resto y debe imponer sus valores sobre los demás. Estas ideas no
solo perpetúan la exclusión social, sino que también alimentan conflictos culturales y
religiosos en un mundo cada vez más globalizado. A su vez, el racismo simbólico aboga
por la igualdad en teoría, pero limita los derechos de ciertos grupos en situaciones
específicas, lo que refuerza las segregaciones espaciales y sociales.
Racismo en el siglo XXI: Retos y realidades
A pesar de los avances logrados en materia de derechos humanos, el racismo sigue
siendo una realidad en el siglo XXI. En muchos casos, se ha adaptado a los contextos
contemporáneos, expresándose de formas más sutiles pero igualmente dañinas. En
Sudáfrica, por ejemplo, miles de personas han sido desplazadas de sus hogares debido a
la xenofobia y la discriminación racial, lo que refleja que, incluso en países que superaron
sistemas abiertamente racistas como el apartheid, los problemas persisten.
El racismo no solo afecta a individuos, sino que refuerza desigualdades estructurales que
limitan el progreso de sociedades enteras. Como señala Olivia Gall, la idea de raza,
aunque científicamente refutada, sigue siendo utilizada como base para justificar la
superioridad de unos grupos sobre otros. Este fenómeno se perpetúa a través de
estereotipos y prejuicios que fomentan actitudes discriminatorias y prácticas
segregacionistas.
Racismo en México: El legado del mestizaje
En el caso de México, el racismo presenta características específicas de acuerdo con su
relación al proceso histórico, poder y estructura. Al momento del siglo XIX, la identidad
nacional fue construida integrando la idea de un mestizaje perfecto entre las culturas que
se constituyeron en el México del siglo XIX: indígena y española. Empero, este relato
encubre un racismo estructural que perdura hasta la contemporaneidad. La discriminación
por razón de color de la piel y de origen étnico cobra especial destaque en lo relativo a las
comunidades indígenas y afrodescendientes quienes enfrentan serias barreras de acceso
a derechos fundamentales e irrenunciables como la educación; la salud; o el empleo.
Este racismo latente en México no es sólo un problema social, también es un problema
político y cultural. La falta de políticas públicas que puedan abordar la problemática de las
desigualdades raciales es un claro ejemplo de la indiferencia que refleja lo que se está
haciendo con respecto a la lucha por la igualdad. El combatirlo implica no sólo que se
reconozca su existencia, sino que se reformule el relato para deshacerse de un marco
que justifique la exclusión y en su lugar se adopte la forma política reflejada en un
enfoque de los derechos humanos.
Respuestas internacionales y estrategias de acción contra el racismo
Desde su fundación, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha desempeñado un
papel crucial en la lucha contra el racismo, estableciendo marcos legales como la
Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
Racial. Este instrumento, adoptado en 1965, define la discriminación racial y exige a los
Estados miembros tomar medidas concretas para combatirla. Sin embargo, la existencia
de leyes no garantiza por sí sola la erradicación del racismo. Es esencial complementar la
legislación con campañas educativas, programas de concienciación y la promoción de
valores inclusivos en todos los niveles de la sociedad.
En Europa, los avances legales han sido significativos, pero aún enfrentan desafíos en su
aplicación efectiva. La creación de órganos independientes dedicados exclusivamente a
combatir el racismo, así como la capacitación de funcionarios públicos, son pasos
fundamentales para garantizar el respeto por los derechos humanos. En el ámbito global,
organizaciones como Amnistía Internacional trabajan incansablemente para visibilizar los
efectos del racismo y abogar por la justicia y la igualdad.
Conclusion
Para finalizar, el racismo es una problemática que posee raíces históricas y que permea
todas las sociedades como un obstáculo para el desarrollo humano y la cohesión social.
Constituye un fenómeno de desigualdad histórica, cultural y estructural que ha sabido ser
justificación para llevar a cabo la opresión, la exclusión y la negación de derechos
fundamentales a millones de personas, en especial a personas que pertenecen a grupos
históricamente marginados. Desde la infancia hasta la adultez, las personas que sufren la
condición de víctimas del racismo se ven envueltas con limitaciones que se producen en
el acceso a las distintas dimensiones del bienestar social, la educación, la salud, el
empleo, la justicia, entre otras como pobreza, exclusión, discriminación, etc., lo que
propicia que exista una continuidad en la transmisión intergeneracional de estas
condiciones.
A su vez este impacto, especialmente en los niños y niñas que lo padecen, también
produce consecuencias psicológicas severas, además de las limitaciones económicas y
educativas que tienen que afrontar. El perjuicio social que resulta no solo afecta el
bienestar individual, sino que contribuye a generar fragmentación social; se incrementan
las diferencias entre grupos de diferentes grupos étnicos y culturales a partir de la
presencia de un racismo explícito o de otra forma como por ejemplo en el caso del
racismo simbólico o el racismo aversivo. Algunos estudios han puesto de manifiesto las
distintas formas que toma el racismo, desde las manifestaciones más directas, las más
evidentes como el racismo biológico, hasta consecuentes manifestaciones del tipo
simbólico que lejos de desaparecer, tal y como se ha buscado demostrar, adquiere formas
modernas que constituyen nuevas dinámicas que sostienen el racismo a través del tiempo
y las generaciones.
Bibliografía
Calderón, G. (24 de Febrero de 2024). Racismo. Obtenido de https://www.euston96.com/racismo/
Etecé, E. (24 de Octubre de 2024). Racismo. Obtenido de https://concepto.de/racismo/
García, M. G. (21 de Marzo de 2024). Obtenido de https://www.gaceta.unam.mx/racismo-crea-
fuertes-desigualdades/
García, M. G. (21 de Marzo de 2024). El racismo crea desigualdades y es muy difícil de erradicar.
Obtenido de https://www.gaceta.unam.mx/racismo-crea-fuertes-desigualdades/
UNHCRACNUR. (2024). ¿Qué es el racismo y qué tipos de racismo hay? Obtenido de
https://eacnur.org/es/blog/que-es-el-racismo-y-tipos-de-racismo
UNICEF. (17 de Noviembre de 2022). El racismo y la discriminación contra la infancia son prácticas
muy extendidas en algunos países. Obtenido de https://www.unicef.org/es/comunicados-
prensa/racismo-discriminacion-contra-infancia-practicas-extendidas-algunos-paises