0% encontró este documento útil (0 votos)
14 vistas15 páginas

Marco Teorico

Cargado por

Yayo Alvara
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
14 vistas15 páginas

Marco Teorico

Cargado por

Yayo Alvara
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 15

1.

Empleo: Concepto y Dimensiones


El empleo se define como la relación laboral mediante la cual una persona
(trabajador) realiza una actividad a cambio de una compensación económica
(salario), bajo determinadas condiciones contractuales y legales (Organización
Internacional del Trabajo [OIT], 2023). Es un componente central en la vida adulta y
se asocia no solo con la subsistencia económica, sino también con la identidad, el
estatus social y el bienestar psicológico (Blustein, 2008).
1.1. Tipos de Empleo

● Formal: regulado por leyes laborales, con derechos y prestaciones.


● Informal: fuera del marco legal; sin protección ni estabilidad.
● Tiempo completo vs. tiempo parcial: según la carga horaria.
● Autónomo vs. dependiente: dependiendo de la subordinación jerárquica.

1.2 Características del Empleo

● Estabilidad laboral
● Salario justo
● Condiciones físicas y psicosociales
● Conciliación trabajo-vida personal
● Oportunidades de desarrollo profesional

Estas características determinan en gran medida la calidad del empleo, la cual


influye directamente en la salud mental, la satisfacción vital y la productividad
(Eurofound & OIT, 2019).
1.3 Implicaciones Psicosociales
El empleo influye en múltiples dimensiones de la vida de un individuo:

● Identidad personal y profesional (Erikson, 1968)


● Autoestima y sentido de eficacia (Bandura, 1997)
● Salud mental: el desempleo o los trabajos precarios se asocian a mayores
niveles de ansiedad y depresión (Paul & Moser, 2009).

1.4 Empleo Juvenil y Universitario


En estudiantes universitarios, el empleo puede representar una estrategia
económica, pero también un factor de estrés y posible interferencia con el
rendimiento académico (Salamonson et al., 2012). Las horas trabajadas, la
flexibilidad laboral y la carga académica son variables clave a considerar.

2.Estudiante: Concepto y Dimensiones


Un estudiante es una persona dedicada al proceso de aprendizaje formal,
generalmente en el contexto de una institución educativa. Los estudiantes están
involucrados en la adquisición de conocimientos, habilidades y actitudes necesarias
para su desarrollo personal y profesional, a través de un currículo estructurado que
responde a objetivos educativos específicos (Perry, 2009).
. 2.1Tipos de Estudiantes

● Estudiantes a tiempo completo: Aquellos que dedican su tiempo completo


al estudio.
● Estudiantes a tiempo parcial: Aquellos que combinan el estudio con otras
responsabilidades, como el trabajo o el cuidado familiar.
● Estudiantes presenciales vs. estudiantes en línea: Según la modalidad de
enseñanza.

2.2 Dimensiones del Estudiante


Las características que definen a un estudiante incluyen:
● Motivación: Un factor fundamental en el rendimiento académico. La
motivación intrínseca y extrínseca influye en el compromiso con los estudios
(Deci & Ryan, 2000).
● Compromiso académico: Involucra la dedicación a la tarea académica, la
organización del tiempo y la participación en actividades relacionadas con el
aprendizaje (Kuh, 2003).

● Desempeño académico: Refleja los resultados de los esfuerzos educativos,


como las calificaciones, el progreso en la materia y la adquisición de
habilidades cognitivas y no cognitivas (Schunk, Pintrich, & Meece, 2008).
● Estrés académico: El estrés asociado con la carga de trabajo, las
expectativas académicas y las presiones sociales. Este factor puede afectar
el bienestar y rendimiento de los estudiantes (Misra & McKean, 2000).
2.3 Dimensión Psicosocial del Estudiante
Los estudiantes no solo enfrentan desafíos académicos, sino también psicosociales.
La adaptación al entorno universitario, las relaciones interpersonales, y el equilibrio
entre la vida social y académica son esenciales para el bienestar general (Astin,
1993). Además, factores como la salud mental, el apoyo social y el sentido de
pertenencia tienen una influencia significativa en la experiencia universitaria
(Pascarella & Terenzini, 2005).
2.4 Influencias Externas
El desempeño y bienestar de los estudiantes están influenciados por factores
externos, como el empleo, la situación económica, el contexto familiar y las políticas
educativas (Kuh et al., 2006).
3. Desafíos de Identidad Profesional en Estudiantes de Psicología
Los estudiantes de psicología a menudo atraviesan un proceso de desarrollo
profesional y de identidad durante su formación. Esta etapa implica un tránsito
entre el estudiante académico y el futuro profesional, lo que puede generar
conflictos internos, especialmente en relación con los valores éticos y las
habilidades necesarias para trabajar en el campo. La construcción de una identidad
profesional sólida es fundamental, ya que influye en la forma en que se aproximan
a sus prácticas profesionales, su autonomía y sus interacciones con pacientes y
colegas (Hoge, Austin, & Pollack, 2007).
● Tensión entre la teoría y la práctica: La dificultad de integrar los
conocimientos teóricos con las prácticas clínicas puede generar una
sensación de desconexión o inseguridad. Los estudiantes de psicología,
especialmente en los primeros años, pueden sentirse abrumados por la
responsabilidad emocional al aplicar lo aprendido a situaciones reales
(Beutler et al., 2000).

3.1 La Influencia de las Experiencias Personales en el Aprendizaje


Es importante reconocer cómo las experiencias personales y la historia de vida
de los estudiantes de psicología impactan su aprendizaje y su enfoque hacia la
psicología. Los estudiantes que han tenido experiencias previas significativas con la
salud mental o con personas que padecen trastornos psicológicos pueden
desarrollar una perspectiva única o incluso un sesgo hacia ciertas áreas de la
psicología (Perry, 2009). Además, los estudiantes pueden enfrentarse a desafíos
emocionales derivados de traumas personales o problemas familiares que pueden
afectar su rendimiento académico y su bienestar psicológico (Chavez, 2017).
3.2 La Importancia de la Supervisión y el Apoyo Profesional
Dado el carácter intensivo de la formación en psicología, la supervisión clínica es
un componente esencial en la preparación de los estudiantes para el trabajo en el
campo. La supervisión no solo proporciona retroalimentación sobre la práctica
clínica, sino que también es crucial para el manejo de las emociones y la ética
profesional (Skovholt & Rønnestad, 2003). El apoyo emocional y académico por
parte de profesores y compañeros también juega un rol importante en la salud
mental de los estudiantes, ayudando a reducir el riesgo de agotamiento y estrés
(Hatcher & Reddy, 2006).
3.3 Impacto de la Diversidad y la Inclusión en el Aprendizaje
Los estudiantes de psicología deben estar expuestos a una amplia gama de teorías,
enfoques y metodologías que reflejan la diversidad cultural y social. Este aspecto
es fundamental para formar profesionales capacitados para trabajar con poblaciones
diversas. La formación inclusiva prepara a los estudiantes para abordar de
manera ética y efectiva las necesidades de diferentes grupos, incluidos aquellos con
antecedentes socioculturales distintos al propio (Sue et al., 2019).
3.4 Estrategias de Adaptación y Resiliencia
Los estudiantes de psicología, como cualquier otro grupo académico, deben
desarrollar estrategias de adaptación y resiliencia frente a los desafíos
emocionales y académicos. Los estudiantes que se enfrentan al estrés académico,
las exigencias emocionales de los estudios y los problemas personales deben
aprender a manejar estas dificultades para mantener su bienestar. Las
intervenciones en bienestar psicológico, como la mindfulness y la terapia cognitivo-
conductual (TCC), pueden ser herramientas útiles en su proceso de adaptación
(Bastian et al., 2016).

4. Teorías relacionadas al trabajo y su impacto


Diversas teorías explican la influencia del empleo en la vida de las personas:Teoría
del conflicto de roles: plantea que cuando una persona asume múltiples roles (por
ejemplo, estudiante y trabajador), puede experimentar conflictos si las demandas de
un rol interfieren con el cumplimiento del otro (Goode, 1960). Este conflicto puede
manifestarse en estrés, agotamiento, disminución del rendimiento o insatisfacción.

Teoría del uso de recursos (Resource Allocation Theory): sugiere que las personas
disponen de una cantidad limitada de recursos (tiempo, energía, atención) y que
cuando estos se distribuyen entre muchas actividades, la efectividad en una de ellas
(como el estudio) puede verse afectada (Jacobs & Winslow, 2004).

Teoría del capital humano: considera que el empleo puede ser beneficioso cuando
contribuye al desarrollo de habilidades, conocimientos o experiencias que potencien
el perfil profesional del estudiante (Becker, 1993).

4.1Impactos generales del empleo en las personas

El empleo puede tener tanto efectos positivos como negativos.


Entre los efectos positivos se encuentran:
Desarrollo de habilidades laborales y sociales.
Mayor sentido de responsabilidad y autonomía.
Mejora de la autoestima por independencia económica.

Sin embargo, los efectos negativos pueden incluir:


Estrés laboral y sobrecarga física/mental.
Alteraciones en los ritmos de sueño y descanso.Reducción del tiempo para otras
actividades personales, académicas o de autocuidado.
Problemas de salud física o emocional derivados del exceso de trabajo (Salas &
Tapia, 2019).

4.2 Empleo en población estudiantil


En el caso de estudiantes universitarios, la necesidad de trabajar es cada vez más
frecuente, especialmente en contextos donde el financiamiento público o familiar es
limitado. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI, 2022), al
menos el 40% de los estudiantes de nivel superior en México realizan alguna
actividad laboral.
4.2.1 El empleo estudiantil se puede clasificar según:
Carga horaria: tiempo parcial, medio tiempo, tiempo completo.Relación con la
carrera: empleos afines o no afines a la formación profesional. Condiciones
laborales: formalidad, flexibilidad, apoyo del empleador.

4.2.2 Repercusiones específicas del empleo en el ámbito académico


Diversas investigaciones han mostrado que el empleo puede tener repercusiones
significativas en el desempeño académico:
Disminución del rendimiento: trabajar muchas horas reduce el tiempo para estudiar,
asistir a clases o descansar adecuadamente (González & Díaz, 2020).
Ausentismo y retraso en tareas: los horarios laborales pueden entrar en conflicto
con el calendario académico.
Fatiga y estrés: afectan la concentración, la motivación y la capacidad cognitiva del
estudiante.
Deserción: en casos extremos, la carga laboral lleva al abandono temporal o
definitivo de los estudios (Mendoza & Juárez, 2022).
Sin embargo, cuando el empleo es de pocas horas, está relacionado con la carrera,
y ofrece condiciones favorables, puede tener un impacto neutro o incluso positivo en
la motivación y la madurez del estudiante (Romero & García, 2019).

4.2.3Factores moderadores
La magnitud de las repercusiones del empleo depende de varios factores:
Apoyo institucional: becas, tutorías, horarios flexibles.
Red de apoyo personal: familia, amigos, pareja.
Organización del tiempo y habilidades de autorregulación.
Salud mental y física del estudiante.

5. Desempeño Académico
El desempeño académico es un constructo ampliamente estudiado en el ámbito
educativo, y se refiere al nivel de logro o rendimiento que alcanza un estudiante en
sus actividades escolares o universitarias, comúnmente evaluado a través de
calificaciones, pruebas estandarizadas, y criterios de aprobación de cursos (Álvarez
& López, 2017).
Desde un enfoque psicológico, el desempeño académico no solo depende de las
capacidades cognitivas del estudiante, sino también de factores emocionales,
motivacionales, sociales y contextuales (Morales, 2019). Entre los determinantes
internos destacan la autoestima académica, el estilo de aprendizaje, la
autorregulación y las metas personales. Por otro lado, factores externos como el
entorno familiar, las condiciones socioeconómicas, la calidad docente y la carga
laboral también juegan un papel fundamental.

Según Tinto (1993), el compromiso académico, entendido como la implicación activa


del estudiante con sus estudios, es un predictor clave del éxito académico. A esto se
suma el modelo de Aprendizaje Autorregulado de Zimmerman (2000), que sostiene
que los estudiantes con habilidades para planificar, monitorear y evaluar su propio
aprendizaje tienden a lograr un mejor desempeño.

En el contexto universitario, el desempeño académico puede verse afectado por el


proceso de adaptación al nuevo entorno educativo, especialmente en los primeros
semestres. El estrés académico, la presión por mantener becas o el trabajo paralelo
a los estudios son factores que pueden interferir negativamente en el rendimiento
académico (González & Contreras, 2020).

En resumen, el desempeño académico es un fenómeno multifactorial que refleja la


interacción de variables personales y contextuales. Comprender sus componentes y
determinantes resulta esencial para diseñar estrategias de apoyo al estudiante
universitario.
6. Desempeño Académico en Estudiantes Universitarios

El desempeño académico en el nivel universitario es un indicador clave del progreso


y éxito estudiantil, y está influido por una combinación de factores individuales,
institucionales y sociales (Rodríguez & Mendoza, 2021). En esta etapa, el estudiante
asume una mayor responsabilidad sobre su proceso de aprendizaje, lo que requiere
habilidades de autorregulación, manejo del tiempo y adaptación al entorno
académico.

Para los estudiantes universitarios, el desempeño académico no solo se refleja en


las calificaciones obtenidas, sino también en la permanencia, la eficiencia terminal y
el grado de satisfacción con la experiencia educativa (Martínez & Pérez, 2018). Esta
población enfrenta diversos desafíos, como la transición a un sistema más
autónomo de aprendizaje, el incremento en la carga académica, y en muchos casos,
la necesidad de compaginar sus estudios con responsabilidades laborales o
familiares.

Investigaciones como las de Valle et al. (2015) señalan que variables como la
motivación académica, las expectativas personales, la percepción de autoeficacia y
el apoyo social influyen significativamente en el rendimiento universitario. Asimismo,
factores como el estrés académico, los hábitos de estudio inadecuados, y la falta de
recursos económicos pueden actuar como barreras importantes para un desempeño
óptimo.

Además, se ha observado que el contexto socioeconómico del estudiante puede


condicionar su acceso a herramientas tecnológicas, materiales de estudio, y tiempo
libre para el aprendizaje autónomo, lo que genera una brecha de rendimiento entre
distintos grupos sociales (González & López, 2020).

En el caso de los estudiantes de carreras como Psicología, donde el componente


práctico y el desarrollo personal son fundamentales, el desempeño académico
puede verse influido por factores como la vocación profesional, el sentido de
pertenencia a la carrera, y las habilidades socioemocionales. La capacidad para
reflexionar sobre la propia experiencia y manejar emociones es también crucial para

6.1 Teorías Psicológicas Relevantes

6.1.1 Teoría de la Autoeficacia de Bandura

Albert Bandura propuso que la autoeficacia, entendida como la creencia en la propia


capacidad para organizar y ejecutar las acciones requeridas para manejar
situaciones futuras, influye significativamente en el desempeño académico. Los
estudiantes con alta autoeficacia tienden a establecer metas más altas, emplear
más esfuerzo y persistir frente a las dificultades, lo que mejora su rendimiento
académico .

6.1.2 Teoría de la Expectativa-Valor

Esta teoría sugiere que el desempeño académico está determinado por las
expectativas de éxito de los estudiantes y el valor que asignan a las tareas
académicas. Las expectativas de éxito se refieren a la creencia de los estudiantes
sobre su capacidad para tener éxito en una tarea, mientras que el valor se refiere a
la importancia que le otorgan a la tarea. Ambas dimensiones interactúan para
predecir el esfuerzo y el rendimiento académico .
6.1.3Teoría de la Autodeterminación

La teoría de la autodeterminación enfatiza la importancia de la motivación intrínseca


en el aprendizaje. Según esta teoría, los estudiantes que sienten que sus acciones
son autónomas y alineadas con sus intereses personales están más motivados y
tienen un mejor desempeño académico. La satisfacción de las necesidades
psicológicas básicas de competencia, autonomía y relación es crucial para fomentar
la motivación intrínseca .

6.2.Factores Motivacionales y Psicológicos

6.2.1 Motivación de Logro

La motivación de logro se refiere al impulso interno de los estudiantes para alcanzar


el éxito académico. Factores como el esfuerzo, el interés en el aprendizaje y la
influencia del docente son determinantes clave en la motivación de logro.
Estudiantes con alta motivación de logro tienden a comprometerse más con sus
estudios y a obtener mejores resultados académicos .

6.2.2 Estrés Académico

El estrés académico puede tener un impacto negativo en el desempeño académico.


Situaciones de alta presión, como la carga de trabajo excesiva y las expectativas
académicas, pueden generar ansiedad y disminuir la capacidad de concentración y
rendimiento de los estudiantes. Es fundamental implementar estrategias de manejo
del estrés para mitigar sus efectos adversos .

6.2.3. Recursos Psicológicos

La disponibilidad de recursos psicológicos, como el apoyo social, la resiliencia y las


habilidades de afrontamiento, influye en la capacidad de los estudiantes para
manejar desafíos académicos. Estudiantes con altos niveles de recursos
psicológicos suelen mostrar un mejor desempeño académico, ya que pueden
adaptarse eficazmente a las demandas del entorno universitario .

6.3 Factores Sociales e Institucionales

6.3.1. Apoyo Social

El apoyo social de familiares, amigos y compañeros de clase proporciona un


sistema de respaldo emocional y práctico que puede aliviar el estrés y mejorar la
motivación. La percepción de pertenencia a una comunidad académica también es
un factor importante en el desempeño académico .

6.3.2. Calidad de la Enseñanza


La calidad de la enseñanza, incluyendo la competencia de los docentes, la claridad
en la comunicación y la relevancia del contenido, afecta directamente el desempeño
académico. Métodos de enseñanza interactivos y centrados en el estudiante pueden
mejorar el compromiso y el rendimiento académico .

6.3.3 Condiciones Institucionales

Las políticas universitarias, los recursos disponibles (como bibliotecas y tecnología)


y el ambiente físico del campus influyen en la experiencia académica de los
estudiantes. Instituciones que proporcionan un entorno de aprendizaje positivo y
recursos adecuados facilitan un mejor desempeño académico .

7. Desempeño Académico en Estudiantes Universitarios de Psicología que Trabajan

El desempeño académico en estudiantes universitarios representa un indicador


fundamental de éxito y progreso educativo, y en el caso particular de los estudiantes
de Psicología que trabajan, dicho desempeño se ve influido por una interacción
compleja entre factores académicos, laborales, personales y emocionales.

Los estudiantes de Psicología deben enfrentar una formación que integra tanto
contenidos teóricos como prácticos, que exigen habilidades reflexivas, autocríticas y
de gestión emocional (González & Martínez, 2021). Esto implica una alta demanda
cognitiva y afectiva, que puede verse comprometida cuando el estudiante también
asume responsabilidades laborales.

Diversos estudios señalan que compaginar trabajo y estudio puede tener efectos
ambivalentes en el rendimiento académico. Por un lado, el empleo puede fomentar
el desarrollo de habilidades como la gestión del tiempo, la responsabilidad y la
madurez personal, las cuales pueden incidir positivamente en el desempeño
académico (Salas & Rivas, 2018). Sin embargo, también puede generar sobrecarga,
fatiga, reducción del tiempo de estudio, dificultades para asistir a clases o realizar
prácticas, y aumento del estrés académico (Luna & Torres, 2020).
En carreras como Psicología, donde el proceso de formación implica no solo adquirir
conocimientos, sino también desarrollar competencias emocionales, interpersonales
y de análisis clínico, el trabajo externo puede interferir con la profundidad del
aprendizaje. Especialmente en asignaturas prácticas, se requiere disponibilidad
horaria, concentración y compromiso, los cuales pueden verse limitados por las
exigencias laborales.
Además, el trabajo puede influir en la motivación del estudiante. Aquellos que
trabajan por necesidad económica tienden a presentar mayores niveles de ansiedad
y menor rendimiento académico, en comparación con quienes lo hacen por
experiencia o desarrollo profesional (Mendoza & Carranza, 2019). Esto se relaciona
con el tipo de empleo, el número de horas trabajadas y la flexibilidad del mismo.

En este contexto, la autorregulación académica, el apoyo social, la planificación del


tiempo y las estrategias de afrontamiento cobran un papel central para lograr un
equilibrio entre el mundo laboral y académico. De acuerdo con Zimmerman (2000),
los estudiantes que logran autorregular su aprendizaje tienden a adaptarse mejor a
condiciones adversas, como el doble rol de trabajador-estudiante.

7.1. Factores Personales

2.1.1 Estrés Académico

El estrés académico es una respuesta emocional y fisiológica a las demandas


académicas. Estudiantes de Psicología que trabajan pueden experimentar niveles
elevados de estrés debido a la presión de cumplir con las responsabilidades
laborales y académicas. Un estudio realizado por Capa Luque y Vallejos Flores
(2019) encontró que el estrés académico se correlaciona negativamente con el
desempeño académico en estudiantes de Psicología, indicando que niveles más
altos de estrés están asociados con un menor rendimiento académico.

7.1.2. Motivación Académica

La motivación es un factor clave en el desempeño académico. Estudiantes que


trabajan pueden tener diferentes niveles de motivación, influenciados por sus metas
personales, expectativas laborales y el valor que asignan a su educación. La
motivación intrínseca, que se refiere al interés y satisfacción personal en la tarea, y
la motivación extrínseca, relacionada con recompensas externas, pueden
interactuar para influir en el rendimiento académico de estos estudiantes.

7.1.3 Habilidades de Autorregulación

Las habilidades de autorregulación, como la gestión del tiempo, la planificación y la


autormonitorización, son esenciales para equilibrar las demandas laborales y
académicas. Estudiantes con habilidades de autorregulación efectivas pueden
organizar su tiempo de manera eficiente, establecer metas claras y mantener el
enfoque en sus estudios, lo que contribuye a un mejor desempeño académico.

7.1.4. Bienestar Psicológico

El bienestar psicológico, que incluye aspectos como la satisfacción con la vida, la


autoestima y la resiliencia, influye en el desempeño académico. Estudiantes que
trabajan pueden experimentar desafíos emocionales que afectan su bienestar
psicológico, lo que a su vez puede impactar en su rendimiento académico. Es
fundamental promover el bienestar psicológico para mejorar el desempeño
académico de estos estudiantes.

7.2 Factores Contextuales

7.2.1. Apoyo Social

El apoyo social de familiares, amigos y compañeros de trabajo y estudio proporciona


un sistema de respaldo emocional y práctico que puede aliviar el estrés y mejorar la
motivación. Estudiantes que trabajan y reciben apoyo social adecuado tienden a
manejar mejor las demandas laborales y académicas, lo que favorece su
desempeño académico.

7.2.2 Clima Académico

El clima académico se refiere a las características del entorno educativo, incluyendo


la calidad de las relaciones entre estudiantes y docentes, la claridad en las
expectativas académicas y el ambiente físico de la institución. Un clima académico
positivo, caracterizado por relaciones respetuosas y un ambiente de apoyo, favorece
el desempeño académico de los estudiantes.

7.2.3. Flexibilidad Institucional

La flexibilidad en los horarios de clases, la disponibilidad de recursos en línea y la


comprensión por parte de los docentes respecto a las responsabilidades laborales
de los estudiantes pueden facilitar el equilibrio entre el trabajo y los estudios.
Instituciones que ofrecen flexibilidad y apoyo a los estudiantes que trabajan
contribuyen a mejorar su desempeño académico.

7.2.4. Condiciones Laborales

Las condiciones laborales, como la carga de trabajo, el tipo de empleo y el apoyo en


el lugar de trabajo, influyen en la capacidad de los estudiantes para cumplir con sus
responsabilidades académicas. Empleos que ofrecen horarios flexibles y un
ambiente de trabajo de apoyo permiten a los estudiantes equilibrar mejor sus
responsabilidades laborales y académicas.

7.3 Interacción entre Factores Personales y Contextuales

La interacción entre los factores personales y contextuales es fundamental para


comprender el desempeño académico de los estudiantes de Psicología que
trabajan. Por ejemplo, un estudiante con alta motivación y habilidades de
autorregulación puede manejar mejor el estrés asociado con el trabajo y los
estudios. Asimismo, un entorno académico y laboral de apoyo puede potenciar las
habilidades personales del estudiante, mejorando su rendimiento académico.

Referencias

● Bandura, A. (1997). Self-efficacy: The exercise of control. Freeman.


● Blustein, D. L. (2008). The role of work in psychological health and well-being:
A conceptual, historical, and public policy perspective. American Psychologist,
63(4), 228–240.
● Erikson, E. H. (1968). Identity: Youth and crisis. W. W. Norton.
● Eurofound & OIT. (2019). Working conditions in a global perspective.
Publications Office of the European Union.
● Organización Internacional del Trabajo. (2023). Informe mundial sobre
salarios 2022–2023.
● Paul, K. I., & Moser, K. (2009). Unemployment impairs mental health: Meta-
analyses. Journal of Vocational Behavior, 74(3), 264–282.
● Salamonson, Y., Everett, B., Koch, J., Andrew, S., & Davidson, P. M. (2012).
The impact of paid work on academic performance of nursing students: A
longitudinal study. International Journal of Nursing Studies, 49(5), 579–585.

● Astin, A. W. (1993). What matters in college: Four critical years revisited.


Jossey-Bass.
● Deci, E. L., & Ryan, R. M. (2000). The "What" and "Why" of goal pursuits:
Human needs and the self-determination of behavior. Psychological Inquiry,
11(4), 227–268.
● Kuh, G. D. (2003). Student success in college: Creating conditions that
matter. Jossey-Bass.
● Kuh, G. D., Kinzie, J., Schuh, J. H., & Whitt, E. J. (2006). Student success in
college: Creating conditions that matter. Jossey-Bass.
● Misra, R., & McKean, M. (2000). College students' academic stress and its
relation to their anxiety, time management, and leisure satisfaction. American
Journal of Health Studies, 16(1), 41–51.
● Pascarella, E. T., & Terenzini, P. T. (2005). How college affects students: A
third decade of research. Jossey-Bass.
● Perry, W. G. (2009). Forms of intellectual and ethical development in the
college years: A scheme. Jossey-Bass.
● Schunk, D. H., Pintrich, P. R., & Meece, J. L. (2008). Motivation and learning:
Bastian, V. A., Koval, P., & Kross, E. (2016). The effect of mindfulness on
mental health in students of psychology: A systematic review. Journal of
Contextual Behavioral Science, 5(3), 187-194.

● Beutler, L. E., Harwood, T. M., Alimohamed, S., & Berman, J. S. (2000).


Therapist variables and therapeutic outcomes. Oxford University Press.
● Chavez, L. R. (2017). Race, class, and the persistence of inequalities in
higher education: The student experience. Journal of College Student
Development, 58(4), 571-584.
● Hoge, M. A., Austin, J. K., & Pollack, S. (2007). The psychology internship: A
review of challenges and solutions. Journal of Clinical Psychology, 63(12),
1204-1215.
● Perry, W. G. (2009). Forms of intellectual and ethical development in the
college years: A scheme. Jossey-Bass.
● Skovholt, T. M., & Rønnestad, M. H. (2003). The developing practitioner:
Growth and stagnation of therapists and counselors. Routledge.
● Sue, S., Cheng, J. K. Y., Saad, R., & Orozco, M. (2019). Cultural competence
in psychology education and practice. American Psychologist, 74(5), 524–
538.

● Theory, research, and applications. Pearson.

Becker, G. S. (1993). Human Capital: A Theoretical and Empirical Analysis.


University of Chicago Press.
Goode, W. J. (1960). A theory of role strain. American Sociological Review, 25(4),
483–496.
González, R., & Díaz, M. (2020). Factores que influyen en el rendimiento académico
universitario. Educación y Desarrollo, 34(2), 145-160.
INEGI. (2022). Estadísticas de estudiantes que trabajan en México.
Jacobs, J. A., & Winslow, S. E. (2004). Overworked faculty: Job stresses and family
demands. The Annals of the American Academy of Political and Social Science,
596(1), 104–129.
Mendoza, R., & Juárez, L. (2022). Trabajo y rendimiento académico. Revista
Latinoamericana de Psicología Educativa, 19(2), 90-104.
OIT. (2020). Panorama laboral para América Latina y el Caribe.
Romero, S., & García, F. (2019). Rendimiento académico en contextos
universitarios. Educación y Sociedad, 40(148), 93-112.
Salas, C., & Tapia, M. (2019). Influencia del trabajo en el rendimiento académico.
Revista Educare, 23(3), 1-15.

● Bandura, A. (1993). Perceived self-efficacy in cognitive development and


functioning. Educational Psychologist, 28(2), 117–148.
https://doi.org/10.1207/s15326985ep2802_3

● Eccles, J. S., & Wigfield, A. (2002). Motivational beliefs, values, and goals.
Annual Review of Psychology, 53, 109–132.
https://doi.org/10.1146/annurev.psych.53.100901.135153

● Inkelas, K. K., Soldner, M., Longerbeam, S. D., & Leonard, J. B. (2008).


Differences in student outcomes by types of living–learning programs: The
development of an empirical typology. Research in Higher Education, 49(6),
495–512. https://doi.org/10.1007/s11162-008-9096-5

● McMillan, D. W., & Chavis, D. M. (1986). Sense of community: A definition


and theory. Journal of Community Psychology, 14(1), 6–23.
https://doi.org/10.1002/1520-6629(198601)14:1<6::AID-
JCOP2290140103>3.0.CO;2-I

● Pintrich, P. R. (1999). The role of motivation in promoting and sustaining self-


regulated learning. International Journal of Educational Psychology, 33(4),
559–570. https://doi.org/10.1016/S0022-2860(99)00015-4

● Torrano Montalvo, F. (2004). La motivación en el aprendizaje universitario.


Revista de Psicodidáctica, 9(1), 7–33. https://doi.org/10.1387/RevPsicodidact

n buen desarrollo académico y profesional (Fernández & Herrera, 2019).


Bandura, A. (1993). Perceived self-efficacy in cognitive development and
functioning. Educational Psychologist, 28(2), 117–148.
https://doi.org/10.1207/s15326985ep2802_3

Gutiérrez-Rodríguez, A., & Rodríguez-Mazariego, M. (2020). Factores personales,


contextuales y académicos asociados a la reprobación en educación superior: Una
muestra nacional mexicana. Redalyc.
https://www.redalyc.org/journal/140/14074127002/html/

Pérez-Ornelas, E. (2019). El apoyo familiar y su impacto en la motivación


académica de los estudiantes universitarios. Revista Mexicana de Psicología, 36(2),
123–135. https://doi.org/10.22201/fm.01873534.2019.36.2.280

Pozo, J. I. (1996). La psicología del aprendizaje escolar. Alianza Editorial.

Rodríguez Rodríguez, D., & Guzmán Rosquete, R. (2020). Rendimiento académico


y factores sociofamiliares de riesgo: Variables personales que moderan su
influencia. Perfiles Educativos, 42(168), 1–16.
https://doi.org/10.22201/iisue.01873525p.2020.168.58925

Trucchia, M. (2014). Hábitos, estrategias y estilos de aprendizaje en estudiantes


universitarios. Revista de Psicología, 32(2), 25–39.
https://doi.org/10.22201/fp.01873525p.2014.32.2.123

Capa Luque, W., & Vallejos Flores, M. (2019). Estrés como predictor del desempeño
académico en estudiantes de Psicología de una Universidad Nacional. Cátedra
Villarreal - Psicología, 7(1), 1–13. Recuperado de
https://revistas.unfv.edu.pe/CVFP/article/view/1373

Rodríguez Campuzano, M. de L. (2012). Competencias académicas, reporte de


estrés y salud en estudiantes universitarios. Revista Electrónica de Psicología
Iztacala, 15(2). Recuperado de
https://revistas.unam.mx/index.php/repi/article/view/32367

Hernández Ortíz, O. O., Polanco Castillo, J. C. E., Ríos Cruz, R. R., & Soto
Hernández, L. Á. (2014). Desempeño académico relacionado con factores
psicosociales en estudiantes de psicología de una Universidad Privada de
Inspiración Cristiana (UPIC). Repositorio Lasallista. Recuperado de
https://repositorio.lasalle.mx/handle/lasalle/1821

Barrera Hernández, L. F., Sotelo Castillo, M. A., Barrera Hernández, R. A., & Aceves
Sánchez, J. (2019). Bienestar psicológico y rendimiento académico en estudiantes
universitarios. Enseñanza e Investigación en Psicología, 1(2), 1–15. Recuperado de
https://revistacneipne.org/index.php/cneip/article/view/28

Castaño Castrillón, J. J., & Páez Cala, M. L. (2017). Inteligencia emocional y


rendimiento académico en estudiantes universitarios. Psicología desde el Caribe,
34(1), 1–15. Recuperado de
https://rcientificas.uninorte.edu.co/index.php/psicologia/article/view/5798

Arana, F. G., Galarregui, M. S., Miracco, M. C., Partarrieu, A. I., de Rosa, L., Lago,
A. E., Traiber, L. I., Nusshold, P. T., Rutsztein, G., & Keegan, E. G. (2014).
Perfeccionismo y desempeño académico en estudiantes universitarios de la ciudad
autónoma de Buenos Aires. Acta Colombiana de Psicología, 17

También podría gustarte