IMITANDO A DIOS PARA ENTRAR AL CIELO
Willie A. Alvarenga
“Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Y andad en amor, como también Cristo no amó,
y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante” (Ef. 5:1-2).
EL apóstol Pablo exhorta a través de sus cartas a que los Cristianos sean imitadores de Dios como
hijos amados. Esto es algo que muchas veces como Cristianos se olvida y no se pone en práctica.
Dios desea lo mejor de Sus hijos, ya que Él nos da lo mejor.
Dios ha dado a Su único Hijo para que por medio de Él se pudiera obtener la vida eterna, “Y este es
el testimonio, que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en Su Hijo” (1 Jn. 5:11). Por esto es
de suma importancia que exista un esfuerzo máximo para siempre permanecer en Cristo ya que
separados de Él, nada se puede hacer (Jn. 15:5; Fil. 4:13). Muchas veces se vive la vida imitando a
este mundo y lo que él hace; sin embargo, se olvida que el Cristiano no pertenece a este mundo,
sino a Dios, quien le rescató del pecado que abunda en el mundo (1 P. 1:18-20).
El mundo y lo que en él hay no puede producir nada bueno que pueda ayudar a que el Cristiano
entre al cielo. Todo lo que está en el mundo es temporal y no permanecerá para siempre (1 Jn. 2:15-
17). Como hijos de Dios se debe hacer las cosas que le agradan, pero,
¿Cuáles son estas cosas? Las Escrituras enumeran varias cosas que se deben tener en cuenta y al
hacer esto, ayudará a que se pueda entrar al cielo.
1. El Cristiano debe imitar la santidad de Dios (1 P. 1:15-16; Heb. 12:14).
2. El Cristiano debe buscar primeramente el reino de Dios (Mt. 6:33).
3. El Cristiano debe estar siempre dispuesto a sufrir por Cristo (Hch. 14:22).
4. El Cristiano debe vivir una vida fiel hasta el fin (Ap. 2:10).
5. El Cristiano debe ocuparse en su salvación con temor y temblor (Fil. 2:12; 1 Cor. 9:27).
6. El Cristiano debe practicar el amor fraternal (Jn. 13:34-35; 1 Jn. 3:14-15).
7. El Cristiano debe trabajar arduamente en la obra del Señor (Ap. 14:13).
Estas son algunas de las cosas que se deben poner en práctica para lograr entrar al cielo.
Recordemos que Jesús, el Hijo de Dios, puso en práctica estas cosas. El Cristiano debe hacer lo
mismo. Por ende, se anima a todos los Cristianos a ser imitadores de Dios y vivir sus vidas de tal
manera que un día podamos estar en el cielo con Él. Dios les bendiga.