¿QUÉ ES LA
EUCARISTÍA?
CIC 1324:
La Eucaristía es "fuente y culmen de
toda la vida cristiana" (LG 11). "Los
demás
sacramentos, como también todos los
ministerios eclesiales y las obras de
apostolado, están unidos a la Eucaristía
y a ella se ordenan. La sagrada
Eucaristía, en efecto, contiene todo el
bien espiritual de la Iglesia, es decir,
Cristo mismo, nuestra Pascua" (PO 5).
NATURALEZA
La EUCARISTÍA es el sacramento en el cual,
bajo las especies de pan y vino, Jesucristo se
halla verdadera, real y substancialmente
presente, con su cuerpo, su sangre, su alma y
su divinidad.
ESTE SACRAMENTO SE DENOMINA DE
MUCHAS MANERAS DADA A SU RIQUEZA
INFINITA:
• Eucaristía, que significa acción de gracias a
Dios;
• Banquete del Señor, porque Cristo lo
instituyó el Jueves Santo en la última Cena;
•
SIGNO: MATERIA Y FORMA
Santo Sacrificio, porque actualiza el único
sacrificio de Cristo en la cruz; La materia es de pan y vino, el pan debe ser de trigo y
• Comunión, porque nos unimos al mismo el vino tiene que ser de uvas machacadas fermentadas
Cristo recibiendo su Cuerpo y su Sangre; naturalmente. (Trento)
• Santa Misa, porque cuando se despide a los La forma son las palabras que utilizó Cristo al instituir
fieles al terminar la liturgia eucarística, se les
envía ("missio") para que cumplan la el sacramento: ¨Este es mi Cuerpo ….Esta es mi
voluntad de Dios en su vida ordinaria. Sangre¨
INSTITUCIÓN
CIC 1337:
El Señor, habiendo amado a los
suyos, los amó hasta el fin.
Sabiendo que había llegado la
hora de partir de este mundo
para retornar a su Padre, en el
transcurso de una cena, les
lavó los pies y les dio el
mandamiento del amor
(Jn 13,1-17). Para dejarles una • Jesucristo instituyó la Eucaristía el Jueves
prenda de este amor, para no Santo en la última Cena.
alejarse nunca de los suyos y • Ya había anunciado a los discípulos en
hacerles partícipes de su Pascua, Cafarnaún (cfr. Juan, 6, 32-34-,51) que les
instituyó la Eucaristía como daría a comer su cuerpo y su sangre,
memorial de su muerte y de su cuando dice: ¨Yo soy el pan de vida. Si
uno come de este pan vivirá para
resurrección y ordenó a sus siempre, pues el pan que yo daré es
apóstoles celebrarlo hasta su mi carne, para la vida del mundo.¨
retorno, "constituyéndoles
entonces sacerdotes del Nuevo
EFECTOS
Cuando recibimos la EUCARISTÍA, son varios los efectos
que se producen en nuestra alma.
Unión íntima con Cristo: Al recibir el Cuerpo y la Sangre de
Cristo, nos unimos íntimamente con Él, fortaleciendo nuestra
relación personal y espiritual.
Aumento de la gracia santificante: La Eucaristía alimenta la
vida espiritual, aumenta la gracia en el alma y ayuda a crecer
en santidad. ALIMENTO DE VIDA ESPIRITUAL.
Perdón de los pecados veniales: Aunque no sustituye al
sacramento de la Reconciliación, la Eucaristía borra los
pecados veniales y ayuda a evitar futuros pecados.
Gracia sacramental: propia de este sacramento, llamada • La efectividad de la gracia, se mide por el
nutritiva, porque es el alimento de nuestra alma que conforta y grado de las disposiciones de quienes lo
vigoriza en ella la vida sobrenatural. reciben, y pueden llegar a frustrarse al poner
obstáculos voluntarios al recibir el
Nos hace mas santos y nos une más con Cristo: Todo esto sacramento.
es posible porque se recibe a Cristo mismo, que es el autor de • Para poder comulgar debemos estar en
la gracia. gracia, no podemos estar en estado de
pecado grave.
NECESIDAD
Para todos los bautizados que hayan llegado al
uso de su razón este sacramento es
indispensable.
• Es alimento espiritual: Así como el
cuerpo necesita comida para vivir, el alma
necesita la Eucaristía para fortalecerse y
mantenerse en gracia. Jesús dijo:
"El que come mi carne y bebe mi
sangre tiene vida eterna" (Juan 6, 54).
• Es un mandato de Jesús: Jesús mandó a
sus discípulos celebrar la Eucaristía y
participar en ella como fuente de vida. Se
recomienda comulgar con mucha
frecuencia, si es posible diariamente.
La Eucaristía no es solo un símbolo, es
una necesidad espiritual. Como católicos, la
necesitamos para vivir en gracia, crecer
en santidad, y mantenernos unidos a
Cristo y a la Iglesia.
MINISTRO Y SUJETO
Cristo instituyó la Eucaristía en la Última Cena, dando
autoridad a sus apóstoles para repetir ese acto: “Hagan
esto en conmemoración mía”– Lucas 22,19 Con esta
frase, Jesús no solo instituye la Eucaristía, sino también
el ministerio sacerdotal, pues da a sus apóstoles (los
primeros obispos) el mandato de celebrar este
sacramento. El diácono (puede distribuir, pero no
consagrar)
SUJETO: el sujeto de la Eucaristía se refiere a la
persona que puede recibirla válidamente y con fruto
espiritual.
El sujeto de la Eucaristía es todo bautizado católico
que:
• Ha alcanzado el uso de razón (normalmente desde
los 7 años).
• Está en estado de gracia, es decir, sin pecado
mortal.
• Ha recibido una adecuada preparación catequética.
MINISTRO: Únicamente el Sacerdote ordenado
puede consagrar, CONVERTIR EL PAN EL VINO EN • Observa el ayuno eucarístico, es decir, se abstiene
EL CUERPO Y LA SANGRE DE CRISTO. de comida y bebida al menos una hora antes de
comulgar (excepto agua o medicina).
PRESENCIA REAL DE
JESUCRISTO
LA EUCARISTÍA ES PRESENCIA REAL DE
CRISTO:
Para entender bien el sentido de la celebración
eucarística es necesario tener en cuenta la presencia
de Cristo y su acción en la misma.
DESPUES DE LA CONSAGRACIÓN, Jesús está
realmente presente en la EUCARISTÍA: Lo que
parece pan y vino es el cuerpo y la sangre de
CRISTO.
La Presencia Real significa que Jesucristo está
verdaderamente presente en la Eucaristía con su
Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad. No es un
símbolo, ni una simple representación: es Cristo
mismo.
LA TRANSUBSTANCIACIÓN
El dogma de la Transubstanciación significa el
cambio que sucede al pronunciar las palabras de
consagración en la Misa, por las cuales el pan y el
vino se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo.
“Esto es mi cuerpo... Esta es mi sangre.”– Mateo
26, 26-28
Jesús no dijo "esto representa", sino "esto ES",
afirmando que Él mismo está presente bajo esas
especies.
“El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida
eterna.”– Juan 6, 54
Cristo reafirma que su carne y su sangre deben ser
realmente recibidas, no simbólicamente.
FRUTOS Y OBLIGACIONES
El fruto principal de este sacramento es la unión
íntima y profunda con Cristo, al obtenerla, se
realiza una transformación en el alma de quien
lo recibe.
Cuando recibimos la eucaristía debemos estar
sumamente orgullosos de que Cristo haya
venido a nosotros, que no hemos hecho nada
para merecerlo.
La Eucaristía entraña un compromiso a favor de
los pobres.